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DRAMAS DEL TERROR

DON JUAN I~NUEL DE RO~A~

ESCRno PARA "LA PATRIA ARGENTINA"

1'(11:

EDUARDO GUTIERREZ

( SIN CORRbiCClOl-i ObiL AUTOR)

LIBRO 11.

BUENOS AIRES .. lMPRENTA DE 4:LA PATRIA AROENTINA~, CALLE BOLIVAR, N" 92 ~ 1882

LIBRO SEGUNDO

{ , -

Un Porteño

BnenOl Aires, la esCorzada y gloriosa Blle· quien nos hemos de ocupar mas tal'de, nos 4irea, puaba por la situacion mas mi' R0888, disgustado con el estbdo de eoeai' senble de su vida, OOD escepoion de la pre. cansRdo un poco del ssrvinio, ó dese8n~o en" lente, p." entonoes conBervaba Idquiera 8tl tregarso con mas libertad a sus neg06!Os. y integridad territorial que le han arrebatado tal vez á sus miras politic8e, renun:nó 8U hoy. ompleo de comandante general de 181 milicias Gouba de po, ea cierto, con algunas de del Sud, pidiendo ademáB. oomo ooronel. SU8 hermaDu, pero era una paz vergonzo· 8U sepal"Bcion del servicio de las armas. 8Il para ella, pues era comprada y pagada á El gobierno hizo decir ~ Rosas que retira" peso de oro: ra aquellas solicitudes pero como el goCe de Buenos Airee pagaba a. Sant."Fé para no los colorados insistiera en ellas, le fueron ser i~Tadi~a, 'como pagaba IÍ. Córdoba '1 á. los aceptadas, con una concesion honorifl~a. O~Udlll08 ~lolente8 y bandld.oa que le. ha El gobibrno lo mandaba 81;1 separaclon, del bIan ensenoreado en Entre Rloa y Cornen- servicio con el goce del unIforme y los ho' tea. _ " Dores y prerogat1vsS de un gefe de 8U cIua R.amllez, el temble Ramlrez, v~ncedor del en serdcio. Ar,tIgss, era el .que mas sobreaaha por 8U 1 R09a~ se encerró entonces en los Cerrill~ ódio á Bue~oa Aires y , sua vaoas Bobr~ todo asegurando que iba ti. llevar sus cstablec~· que se habla propueata hacer 8uyas a toda mientos á un pié, fabuloso de adelanto y rl- costa. . '. queza. Eat~ os el caud.lllo que mas, sa~gre ha cos' Temia un avanza de los indü>s en vengan· tado ti. Buonos Anes, que al fin. VIÓ 811 csbez.a za de su última lJabl0::lb, por lo que eouer· mandad,a ~e regalo como un objeto de tern' v6 en los Cerrillos, pronto para formar al pri" ble CUllosldad, _._ mer grito, 8U8 terribles colorados cU1a fama llu adelante narraremos, la. l!\Uerte orlJl' habia p:>.sado á toda lu República, nal, de este hombre, tan CflIDI?al y ta.u Rosas empezó entonces, por primera vez, eX8¡Jeradamente .bra.vo, que llegó a combat1~ á ICl' el blanco de algunas intrigas y malas BOlo contr~ un eJérCIto! por ~efe~~e~ :t su her ~oeo. que e1Iparcian algunos envidioBos do BU motIa querIda que .habla caldo prl8lonera. ,prosperidad siempre creoiente ó mal intencio" ~l, general Ro_dngnez, det!~ue~ de 8U des, Inados y enemigos enoarnizados je todo aquel s;r CIada campana contra los ln~1~9, llevada a I que se levapta 80ble 168 demás, sÍll mlla ayu" cabo ~ontra el. torrente. de la OpIlllon de Rosas i da qua sus solas fuerlas. y su fatal retuada, VIno apresuradamente á ¡ • , • formor un cuerpo de ejército pllra situarlo I -Hosa~ se sep-u8. del,senJelo, deOJan unos en el Anoyo del Medio, en prevision de UD: para deslIgarse de.l gobIerno y poder obrar golpe de maDO de Ramirez, que venia segun I por fU oUl"'nta el dla menos pensado.

él, á apoderarae de Buenos Aires. I - Es un ambicioso díscolo, decian otros, El mando de esta columna tia vanguardia, que yi á preparar los gtandes elementos de fué confiado al entonces coronel La Madrid que dispone en 1110 campaña, rara dar UD g. 01" el valien~ y legendario La lIJdrid, d¿ pe de mano y apoderarse de gobierno,. -4- -RosAS DO ha tenido nunca buenas ioten- formaba la vanguardia, pero rué rechazado ciones, lÚladia algun otro. vigorosamente, teniendo que bUlcar su iDcor- El dia que él adquiera una complet,a fé en poracio,n a lHs re&e~vas. , en el poder de sus elementos, esl.' dla verán RamJrtlz en seguIda hab1&. acuchillado UDa recien quien es Rosas. " .. fuerte division de cab~lleri~ con que el go' ROSRS. escuchó COD paCIenCIa, prImero, las ~ernador !AI.pez ,le habla sahdo al. palO, diri' refereDclas de eatos rumorea que llegaban Jlóndose háCll\ Córdoba, á cuyas IDmediacio' hasta los Cerrillos.. ' . n~s. creia e~cootr~r á Carrera con alguna di' Primero no les dló ImportanCia y los escu· VISlon de prImer orden. chó con despreci<" pero parece que mas taro Incorporados 108 dos caudillos, liguieron de empezaron a mortificarlo y á despertar en la séfie de triunfos. que debian terminar de él una cólera sorda que debia producir al- Una manera harto fatal. gun mal estallido. . . Buenos ~íres miraba con cierte? terror esta ·... Habituado á domInarse no le fué posible marcha trIUnfal de sus dos enemigos ,mas en' hacerlo entonces/y.. consultó con su amigo oarnizados, temiendo el dia no lejano, en que Maza, cuya inteligencia tenia en gran con· vinieran á asolar nuestra campaña y golpear sidera!lion, el camino que debía tomar ante tal vez las puertas de nuestra ciudad. calumnias tan groseras y(malvadas, El gobernador Lolpez, cuya audacia y ". El resultado de esta conferencia fué un lor ya conocemos, habia recibido el impor' manifiesto que dió al pueblo, Ilues ya sus tante refuerzo de los regimientos de Blanden· enemigos empezaban á .darlo como aliado con gues :s: dragones, a. órde~es de La M:~drid enemigos de Buenos Aues. re~olvlendo ofrecer y O~!lgar á aceptar aRa' En eete manifiesto Rosas se mostró un muez, una batalla deCISiva. porteño de corazon y un hijo de Buenos Ai' El 26 de Mayo a. la madrugada se encoo' res ante todas cosas. tró Ramirez con que el gobernador Lopes ten­ &on unos hermosos párrafos en los que pue' diü una línea de batalla, envial\do alguDU, den leerse conceptos como este: guerrillas que lo hostilizaron. ~~:M:i persona no ha sido ni es de nadie si- No era Ramirez hombre que se hiciera re' nó de mi pr!>vincia mad~e: ,~ " petir dos veces una invitaci~n semejante. Luego haCia ~a eapOSlClon de los. serviCIOS Engreido ccn la série de trlunfol que habia que á ella habla presta~o y conclula asegu- venido conquistando, y en la confianza de rando que para ella :serlan todos sus esfuer: arrollar aquel ejército que miró con des(lre' zos del futuro. (¡io, Ramirez tendió rápidamente su línGa de E!l ese~mapifiestt? esponia claramente. los batalla, des pues de apagar los faego, á lu motivos que lo hablan arra~trado a pe4n su guerrillas de Lopez. baja: el deseo d~ I'econstrun . s~ fortuna y Este, como lo hemos manifestado )'a, no aten~er sus vahosos, e~tableclmlentos, que era un tactico distinguido, ni un militar que Bufrlan grandes perdIdas con su aban, pudiera sobresalir de BUS compaileros. dono. .' ., Pero era un hombre sumamente astuto Bste documento :cuya redacClon atrIbuyen supliendo muchas veces con esta calidad, IU á Maza alg~nos. causó profllnda sensaclO~, falta de estratégia militar. mata!l~o ~Sl en su cuna, todas estas habh, Así Lopez, aquel dia, antes de tender su nas e I~tr¡gas. "línea. habia emboscado IUS mejores tropBS, Ramllez, entre tant~, se habul ve~ldo h.BS· entre las ,que estaban los dragones y Blanden' ta el Arroyo del M~dlO" .donde habla batId~ gueR, . al coronel .La MadrId, dIspersándole su esea De eata manera, si Ramuez lo arrollaba, !la caballerla. , . como no era difícil, despues de diaputado UD El gobernador Lopez, fiel á ,su compromiso poco el terreDO vendria á rehacene detl'uI estaba del lado de Boenos Aires y. prepa}'a· de aquellas troP~IJ, donde se ensartana IU ene' ba elementos para caer sobre Ramuez, qUien migo victol'ioso. segun toda creencia. con numelosas tropas ,Re preparaba á pclel\r Sucedió exactameute todo, como Lopez lo con todo el que ~e saliera al frente: habia previsto, Contaba por ah~do al famoso chileno, C~r. , . e ~ '. I'era que estaba Internado por las prOVinCIas ~t c~o~~e fue ':lO!enb yel. la.ego de ,asl del Norte y venia buscando su incorpora' lerla nvmmo y SlD,~nterrupClon por ambas cion partes, L~B elementos de Ramirez eran tantos, que Los soldados de Lopez, que sabian tenían hasta llegó á temerse pudiera dominar con cubierta la espalda, disputaban el terreno con ellos el resto de la República. una bravura iucomparable. . La Madrid volvió á. atacarlo una segunda Como tí la. hora de este combate encarnlZ vrz coa una fllerte divisioll que á ¡;tu mando do, Ramirez fastidiado con aquella J'tsisten(,' -G- con que no contaba, trajo personalmente una Este, pOi' el contrario tenia el semblant,e carga eon toda su:cabalJeria. ~esfigurado por el horror de aquella sito.cion El choque fué espantoso. lDesperada y desesperante. Aquellas soldados que parecian de bronce Miraba tambien de cuando en cuando á. la eml'ezaron á arrollar el frente y el ala i~quier' mujer, y se le oia murmurar: da de Lopez, impetuosamente, iniciándose en' -Animo, ánimo por Cristo y levanta el tonces una retirada que sin aquella reserva, caballo. habria sido fatal y desastrosa. Aún no estamos perdidos. Los regimientos de Ramires, una vez que En medio de aquella retirada deBastroza y vieron suya la victoria, no se preocuparon mas cuando esta empezó á hacerse mas snave pOI' de formacioD. ni escucharon las voces de el cansancio de los que pe!'Beguian Bin des­ mando_ canso hacia mas de una hora, Ramirez pu' Se lanzaron a. la .,ersecuci~~ ~vidos de ac~' do j~~. unos quinientos ~ombres" con .loa chillar ¡»orcompleto aquella dlvlslon que habla que SlgulO por la costa del rlO en dlrecclon combatido de una manera tan bizarra. a Córdoba. Las fUelz .. de Lopez alejliron así a las de Estaba salvo por el momento. Ramirez, en la confusion del entuBiasmo, La mujer que Je acompañaba y que grao nasta que 188 enBartaron en aquella fuerte di' cias a IU valor sah'aba con él, no era otra vision de cabaJleria, á cuya cabeza, en árden que la conocida por doña Delfina, BU aman' de batalla y sable en mano, se hallaban los te, oon quien vivia hacia ya muohos Dragones y 131anden{ueB, años. _ . . Aterrados en el prImer momento por tan Dona Delfina era una hel'mosa mUjer dlg' inesperado contra·tiempo, los Boldados aqueo na del corazon de aqllel oaudillo heróico. 1Ios dieron media vuelta y echaron á dis"a· Hermosa, muy hermosa, con sus ojos de rar en mayor confusion de la que habian¡ tOl'menta y actitud altiva y bravía, se le veia traido. siempre al lado de Ramirez, á quien no aban' El sable de los Blandengues y Dragones donaba ni aún en lo mas récio del fuego. dió principio a la carniceria que mas tardel Siempre a su lado, como si hubiera que' terminó el cuchillo de los santafecinos. :rido ser su ángel de salvacion, se la veia Desesperado Ramirez, reunió su infanteriaicruzarse delante del caballo de su amante, y alguna otra tropa que habia~:quedado unlcllando el fuego era réeio, para recibir ella la el campo, con la que hizo á Lopez una resis·, bala que le estuviera destinada. " tencia tremenda. . Era tal su valor, sereno y e Jmunlcativo Pero era preciso cedel' ya el campo á UD siempre, que los soldados se habian habitoa' enemigo mas fuerte, mas¡.;.impetuoso y que do á respetarla como á su mejor gefe. venia de refresco. Ramirez por BU parte, tenia por aquella muo Con el semblante desti.gurado;por la deses' jer una idolatria ciega. peracion y la ira, el valiente caudillo entre· Al principio 8e le veia desesperado, correr riano se puso á la cabeza de aquella terrible en todas direcciones tratando de conjurar retirada, donde el uble de los Dragones y cualquier peligro, que amenazará á su Delo el cuchillo de los ~satltafecinos no daban fina. cuartel. Pero habia concluido por acostumbrarse Las tropas de Lopez se apercibieron enton° al estremo de verla, impasible envuelta por ces de algo en que hasta entonces no habian una nube de balas y de humo. reparad,o. :".' Es que doña Delfiua con su \'Blor de loba, Esto era que Ramil'ez;marehaba acompaDao se habia impuesto al espíritu de Ramirez, ña.do, de una hermosísima., '.mujer que' habia cuyos l&bios no habian tenido jamas nn n{, asIstIdo á toda la batalla. para con ella, Rodeados ambos de una escolta pequeña, Esta es la hermosa Delfina, á quien hemoR pero decidida, la mujer aquella no dejaba hallado oon su amante, corriendo la sue.rf;~ ver en su semblante ningona espresion por de aquella retirada funesta, y salvándose de la que pudiem entreverse el miedo 6 la Ole' uDa manera tan milagrosa. nor desesperacion. Ramil"ez, cuyo e"piritu altivo no habia HIl' De cuando en cuando en cuando daba vuel' queado P9r este contraste, buscó asf la incor' ta su graciosa cabeza para contemplar á sus poracion del ejército de Carrera, incorpora" perseguidores, quenu se caD8aban de ma' cion que efectuó pocos dias despues. taro Así mal"charonjuntos para batir 11 BUBtOR En:tonces BU boca sonreia tranquilamente y apodel"arse de SIlS elementos y aootra-mar' su mIrada buscaba la de Ramirez, como si ch8l' a batir á Lopez. ' esperara encontrar en ella (\1 consuelo de Pero la suerte de las armas ll"s babia da' aquella !lituacion terrible. .rio la espalda decididamente, -1-

BOItos so fortificó como pudo en la Crnzlcombate que tenía que ooncluir por BU IDU Alta, donde rechazó con suma bis.rria el espantosa derroto. ataque desesperado que le trajeron Ramiros Apenas empezó á hablar B.amirez, la ber- ., Carrera. mo.a mujer le interrumpió diciendo: Algo desmoralizadoe llor este controflte, -No to canses, ni te diju, que YO lile eontramarchoron hasta Fraile Muerto, d~'~de q~edo aquf. 108 dos aliados le separaron,. convencIdos Dónde voy' estar me.s Eegura. c¡ue ~ ta que por el momento no habla nada. que lado? hacer. -Impo9ibl0, JDi querida, re¡:uso el enamo- Solo C()ntaban ontre los dOI COD unos ocho- rido caudillo. cientol hombree desmorálizados, y con esto Esto combate me va i\ ser fatal, inevitable- era inútil tentar la menor empresa. mente fatal. Carrera 8e foé con IU mlla !Dúsic~ hacia No~ van a acuchillar y. es necesario pensat las provincial de Ouyo, y Ramuez, siempre con tiempo en salvar mI tesoro. acompañado de doña Delfina tomó por el. -Por lo mismo, me quedo. Norte el camino de Bntre-Rios. Si iu sobrevives a\ la batalla, ya me salva- El valiente caudillo creia poder reorglni· rl. tu mejor que nldie. ,.ar elementos eofioient.. para batir á Lopoz, Si Buoumbes en ella, qué diablos quieres que era el mas temibl. de BUI enemigos. que haga con mi vida? Ks~e, que po,: .Bustos, inco~pora~o Ó. 8U Llorarte? yo no he; na~ido para llo~ar. VeD· ~jérclto tuvo. notiCIas . de la dlrecClo~ que garte? deshecho tu eJércnto ~o tendrla como. llevaba Ramu81, se puso en marcha lOme- Me quedo entonces á eegulr tu suerte 1 no diatamente para concluirJo. hablemos mas del asunto. . :BustOI y Llimadrid emprendieron. la perseo Ramirez insistió y rogó todo lo que l. cucíon de Carrera, á quien creian alcanzar y premura del tiempo le permitier~, sin reslI1- tomar muy pronto. tado alguno. Ramirez fué alcanzado el diez de Julio y Quiso enojarse y mandar, pero no fu6-ni oblIgado á batirse como nadie lo ha hecho creído ni obedecido. - jamia. Por último recurrió á la ternura misma pll· El coronel :Hedoya, que con uoa - fuerte ra obligar á aquella mujer á abandonarlo, pm' division de eaballeda formaba la vanguardia lo- que parece que el caudillo aún no conocia del ~ército de Lope1-, le dió alcanoe cerca del a fondo aquel tremendo carácter. rio Beco, y empezó a. hostilizarlo pidndole - Es necesario que te vayas, le dijo, por el la retaguardia. mismo cariilo qu~ m~ tienes~ Ramirez calculó que aquella era la van· La derrota es lDevltnble 1 la persecucion guardia. de Lopez, ? a~nqu~ trcs Vec~1 Il!as sera. dura. numerosa que su eJ~rc!to II es que ejérCito Quédandote aquí, puedes ser un aério ¡a­ pueden llamarse seiSCientos hombres, resol- conveniente para mi misma salvacion "rió batirla.. _ Ya sabea que huyendo yo solo en ~i S;¡U- -~al vez tenga tiempo da deshacerlos, lejo no hay qui~n me agarre. . penso, antes que ll('gu~ Lop.ez. Hllyendo contlgo, el resultado seria que lOit y sobre. todo, agrego, .mlrando á su her- dos caeríamos eo poder del enel,ligo que se mosa querida, es neCelarlO que yo salve e8te divertuia en cortarme 180 cabeza á tu vista. pedazo de mi corazoo. - He d;cho que quiero correr tu IlIerte y Ramirez desplegó su regimiento, puede no hablemos mas. decirse,_ en una larga guerrilla y esperó la Ya sabes que mi comadre es tambien lijera acometIda. .. . como tu azulejo, añadió acariciando el pes­ ~ntre ta.nto, ba~la elegido él mumo, un cuezo de la yegua que montaba. o.ficlal y !elDte y .ClU_CO Bo!d.ados, para con· Quiero ayudarte con todos mis esfaerz08 narles la m~1 dehcal1a ,:omlslon: . en este trance apurado y si caes caer COI!." Era precIso que mientras el conteDl8 al ti o ~, enemigo, con sus guerrillas, aquellos soldados g. _ . . .- le pOAieran en - marcha precipitada bacia No ea tan Inmmente el pel!gro, por otra Entre·Rios, escoltando á doña Deltioa. parte. . . El oficial que la;:mandaba, a quien no en. Yo to he Visto ~atl~ con ma10res d«;l8venta· vano eligió el caudillo, le asoguró que la Jas quo hoy, y sshr siempre trlUnfente. 8~ora llegaria ilesa á 8U destino,: aun perc-' Por quó dudas hoy del triun~o? clendo él mismo. .• 1 Los combates 80n gauados 81~mpre por J~ Pero. f~l~ba to maB dlfíCll de todo, quc¡entraii!ls del ;;efe que Jos manoa y 09 por era deCIdIr II dona Dolfina , ponerse .en 8a1vol'81 núrn_ero de ~08 8olda~os que combate•• y abandonar á su amante en mediO de UIl R'lcmez se Iba entuslas!Dando poco á poco) bajo el prestijio de la palabra ardiente de su Pero el ooronel Bed01& era un lefe poco hermo88 qoeridfl. _ esperto. Pero quiBo tentar un dlUmo esfuerzo y reo Confiaba demasiado en su podér Dum~ico, puso: y queria. tomar aquel pucho de eJéroito sin -Es que nunca me he batido en una des- que escapara uIL 11010 hombre. propol'C)ion tnn ~ae. Ramirez, entusiumado. lleg6 en 8US C8r- n.tn\a de ese ejéraito viene otro mas Dume· gas hasta donde eitaba el mismo Bedon, roso 8IÍn, fresco y bien armado. asombramdolo con'\1 arrojo, y recibiendo Yo no téD80 mas que esos seiscientos leo· todo el flM'go que le hacian , pié firme, calgu­ nee., mal armados, deshechos por las fatigaa nos escuadrones desm01liadOl. de las últimas batallas, y montados en cabao Y BUS soldados miraban estssiado., sin sa' Uos que' penlls pueden tenerse en p\é, á cau' ber de que asombrarse mas, ti del brillo de 81\ de la última retirada, tan ,'iolenta y tan aquel valor sobrehumatto, ó de la hermosura penosa. -. IY corazoD. de aquella mujer. que no se lepa- No tenemos municioñes y las mismas armas raba un momento deL. eaforzado eaudi­ de fuego escasean ¿qué quieres que se ha· lio. ga 881? Como Delfina andaba siempre cubierta de -Tenemos sables ycuchillos yeso balta, joyas a. gran valor,108 soldados no la per­ conteltó dolla Delfina con un ncento incon° dian un momento de ,.ilta. traatable. Y no eran solo los soldadoa, Bin6 10801l.cia- Basta, pues, de temores indignos en un les, por que el que tomara aquella rica pri- hombre que se llama Ramirel. sionara, habría tomado UDa. fortuna en j0111, Fé en tus propias fuerzas y adelante. sin contar lo que pudiera llevar en 118 baUjas Ram}rez !legó "perder la cabeza ante aqueO que no debian .andar lejo8. • )la aotltud Imponente. _ y ella pareela comprenderlos, dommando Sea como tu quieras, dijo, tal vez tengas 8US miradas de oodicia con los.· rayos ele sus razono . h;ermoso.s ojos, que les envia~8n la upre· y seguldo de 8U amante lué;\ tomar el Slon del mas profundo despre61o. . mando de la divisi\ln de aquel combatel que Debia. ser realmente magnifica aquella muo se habia empefiado ya hacia mas de cinco jer, en situacion semejante. miDnto~ con fuertes guerrillas que hizoavan Los seIscientos hombrea de Ramirez, ms· zar Bedoya. minuidoa en oien bajas, por lo menos, m.· :Pero como le habia dicho Ramil'ez, no te- niobrabaD con una exactitud y una rapides nian mUDicion para los pocos soldados que asombrosas. consernban tercerollll. 'ran pronto se d8S1Wlrramaban por el came Los eaca50S soldados qus conservaban al- po, no ofreciendo el menor flancQ, (lomo S8 g'I1DOB tirog, los g88"'ron bien proDto en la juntaban en cotapafiiu ó escuadrones, segun primera guerrilla.' se. les mandaba, dmdo cargas brillanUsi­ . Fué preciso apelar 'al sllble y no pensar mas. mal en esa arma. De pronto negaron al campo de batalla dos Ramir~ que habia recupe:'sdo toda 6uregimientos con Que Lopez. refOrzaba 1\ Bedo· ~ fria y la terrible bra\'ura que vió yo, lo que demostraba que aquel píe de­ v~ilar un momento Bate el pelipo que po- bis éstar muy próximo. dia correr 8u amada, Be pUBO 111 frente de so. Bedoya Be deoidió entonces á terminar el elO1ladroD, y cayó sobre UDa guerrilla que combate, .,.ra recibir 'Lopes con UD buen avaDzaba lIobre su izquierda cluaAndole algu- oúmc:ro de prisioneros. entre los que figara­ DH beju. rian en primera linea, aquellos dos aDllllltes BI emp~je de aquella. carga fué irresistible legendarios. . y la guerr~lJa tuvo que replegarse despues de -Ya no ha, espereza nmgunl, murmuró ha!~r .~iQo g~nde~ pérclids s. Ramirez al oido de .u amante, desde que,-16 .IlnI~, pnmer VictorIa eDttlSiaamó á la tropa, lle.lar el refuerso. 'l,!-~ no ea. ella un augurio del triWlfo doñ.. Es preciso qne pos prepare'mo. , l. huida. Altivo. • -Fero DO ser' tia hacer el último ..fnr e y RamlfE~z ~ ~a cabeza -de este 6 aq~el 1:01 pregunto esta.. - eacubel~ron'.rlDdl8bJ.l.tame.te, ·"mpczó, arrollar Y& lo creo C¡1I8 1W.lepUlO el caudillo. y 01 Jg~" ,toda. la. guwri Uaa de &doy." Poco habr' qu lulcer, puu ,.. le ..... rep'legarse n centro. enoima.· Pero aq&ello DO 'podiD dal "Ir. En efecto. Bedola habia iendiflo una ti. 11 U.Da 'feZ que Dedo,,- desl llegara B11 caba- neA de batalla diez veces mal numeron qu J~ '1 oa:¡¡¡r, OOD .lla, ~o do ei3tariaoOD~ la necesaria, 'VeDia cargando 81 to,ue de t,Ql... O, desüIllo, - i-·

Al ver á su gefe firme y 80Drie~tc, 108 s~l: Uno de los Boldados habia boleado la ye' dados permanecieron firmes tamble!! Y Bufrle guade su amante, que cayó arrutrindola y ron como pudieron el primer empuje deaque' los I~ldados se habian . lanzado sobre ella. Ila carga terrible. . o deacmdando la perseCUClOn de Ramirez, por y cedieron por que no era posl~le otra co deanudarlamas pronto de IUI alhajal. aa, abandonando el campo acuchillados por Al ver esto, el valiente caudillo, haciendo aquellas tropas frescas, Y envalentonadas por ..larde de un corazon por dem6s generoso dió BU superioridad numéric!,. , vuelta bridas y se vino como una torm~nta -Ahora es preciso ~ulr á todo lo que den sobre aq~el peloto~. los caballos dijo RamIrez á Delfina, por que Al valiente caudIllo no se le e80apaba que no hay nad~ que hacer aquí y dentro de poco aquello el'a volar á la muerte, puel nada po­ el campo lerá una cOllfusioD sin Balida. dria él hacer contra los cincuenta hombres -Fues huyamos entoncos, contestó aquella que rodeaban ~ Sil amante, á la que empeza- mujer de raro temple. ban ya ~ despOjar de sus ropu. Ya tomada un desquite digno de tí. -Atrás! gritó el eaudillo, atrás y levantó y bajando las riendas á 108 caballos se lao' BU sable sobre aquellas cincuenta cabezaa luon á.la carrera, . ., dej~ndol0 caer sobre la de unan.. , . . El mismo capitan que mandaba aquel es' . El azuleJolde Ra~lrez, como el lo habla clladron, le cortó la cabeza, que ató de 108 dIcho ~ra un caballo ma~canz!lble. . . cabellos á los tientos del recado. <;oma con una veloe~dad lncrelble, SIendo Era aquella cabeza langrienta el trofeo que glll&dC? con gran maestrla. pensaba llevar al gobernador Lopel. SabIdo es que coando se huye, la verdadera La hermosa Delfina no sufrió mejor suero habilidad del ~inete está en saber conservar te, 8U caballo, sin. apurarlo mas de. lo debido,) Despues de despojada de 101 alhajas .y ro­ levantándolo IIempre sobre la. nenda. pas y ser 'VÍctima de todo género de vejame- ,La comadr~, po~ su part,e, era una yegll8 nes, foé tambien degollada y atada su cabe" dignade IU pnete,tan rá~lda era .8U canera za á los tientos de otro recado. como el uUJelo; pero ..no tan bien gober- BI gobernador Lopez, al recibir aquelloR nada. , . ., trofeos manseabundos, los remitió á Santa· Bmpezo á fatlgane prImero y a quedarse un Fé, con 6rden de colocarles en una jaula de pocoAatrás¡- pora, apura.I 1a dO.IJO Ram'rezl. g ue aun' fierro,pal en exhibicion en la plaza princi- que·no nos persiguen aún, pueden hacerlo. • ,. . Ninguno de los dos habían notado que Este fue el fin de aque!los dos héroes. eran rerseguidos tan de cerea, preocupados Aunque en ~ada se .refiere esto á Rosas, con e afan de ponerse en salvo. IQ. he~os querIdo consIgOar, por que ~s un De pronto RBmirez sintió un grito de an' epIsodio ~e nu~stras lochas, poco conOCIdo y gustia lanzado por doña Delfina. lleno de Interes. ' . . Sin dejar de coner dió vuelta el semblante En cuanto , Carrera, pudo llegar hasta y sinti6 gae la aDl11itia hacia desfallecer su YendoBa, donde ·fa4 fll8i1ado sobre ta- eorUOD. bIas. -9-

En los Cerrillos

Ajeno á todo lo que no era el negocio de Entonces. 01?tervaba c~n su gran perspic.· campo ó sus miras personales, Rosas vió su· cla el.movlmtento p~lttlco y se volvla a SUI cederse tranquilamente todos aquellos acon· estancIas donde seguI~ el desarrollo. ~e 8UI tecimientos que ensangrentaban el pais y otros planes y la conservaOlon de IU prestigIo. que debian hundirlo en la ruina. S~la~ente COn .Ia~ peonadal de sUI.est.· Las luchas civiles no lograron sacarlo de bleclmlentos, po.duA Rosas formar un eJ~rci • los Cerrill03 donde se hallaba desde que to no despreCIable para aquellos tIem· obtuvo su li~paracion del servicio. pos.. . _ . El movimiento que regeneró el pais en la Su prestigio bab:a creCIdo de tal D!.ane· segunda mitad dol Gobierno de Rodriguez, ra que en los pueblos de t~da .la campana se bajo In inioiativa del espíritu poderoso de daban fiestas. en su honor,lnvlhlRdolo•. Rivadavia su ministro, no logró tampoco . El que ~enla un retrato de Rosal, p~dla de· arrancar su atencion de Jos n'~gocios ele Ol.l" qU~' ter!J:! una fortuna, pl;les .no habla fiesta campo y de los grundes planes poJícos que Ul b~I1.ft a dondo no fuera lOvltadll, con la combinaba ayudado por su amigo el doc· condlclon de llevar el retrato del patrono tor lIazo, que veia el prestigio imponde- Este retrato era colocado en el sitio de ho· fable de que gozaba aquel hombre con ver· Dor, y engalanado con cintas de vivos colo· dadero asombro. res y las flore", que habia en la casa. -Con este, le dccia frecuentemente, usted Y so bailuba á su alrededor, no faltando puede dQminar el vais el dia q1le quierll. p~isll!Jo que le dedicara sus décimas mas ins· -Déjeme dI' eeas cosu, r~spond¡8. Juan pIradas y sus proclamas mas graciosas. Manuel tratando de domiuar la alegria que Se puede decir que toda la campaña ~ud"1 le causaban aquellas palabraa. Oeste, se movia á la voz de Rosas sin faltar' Lo que yo quiero dominar son muchas un hombre. vacas y muchas legUAS de sembrado. Y era increible el respeto y temor que le No me gusta la política y creo que todo el tenian los gauchos! poder del man10 no vale la pena de dar un De cuando en cuando y para qne lo tuvie· galope ha¡;ta Buenos Aires. ran siempre presente, dab~ una carne COD y Maza, creyendo de bUflna fé en nquellas CUflro y baile. palabras, tratoba dt~ convellcerlo que no de· Y Itunque muchas veces en elites fiesn. bia perd~r lo que 8IJudlvs blemtlntos podrillD 109 cUDlIurrentes lI.. glibiD y pasaban el DÚ· brindarle. Iml'ro f'le mil, jlim's sucedía coaa desagrad.· Pero con un desprenoimiento inimüubleil>lt>. le aseguraba·que no qUt'f1l1 mliR gloria quel El Que a. Jlp""r de sus etlfllerzos p)r DO ha· ver todolt sus campQS C'.lbi"rt09 de vaca... ,ePI lo se pllnteab " iba Il encon.tttrse t!'ntre loa y á la par que prc~tllh" UDa att'OCIfID pre-¡Árboles o eolre IHs matas, para que 01 {»atroll ferente a sus ya valiosh.imos interel'es. no no lo viera. por esto 8ban~()nó un momento su cont~~ua. Ni por broma se oia hablar ¡Je uDa pelea correspondenCIa c0!l ~opez y o.tros caudllloslde consecuencia ni de robos de prendas ó fuertes de l~s prOVinCIa!" á quumes S8 gana Ipingos entre la concurrencia. ba por medIO de regalos de un buen va· Es verdad que 'os paisanos conocían á lo que 101'. •• • . ¡esponian sus cuer~os cometiendo cl:alquiera Todas las estancias baJO aquella admlnls·¡de aquellas tres faltas, sobre todo la últi" tracion. especial, multiplicaron su capital en mil. poco tiempo. I Rosas tenia un aborrecimiento innato por La fortuna de aquella sociedad era así fa' IOil ladrones. ' bulosa. . . _El que .era pillado robando., caia de Sil grao Cada puesto contaoa con UIl gran capItal y CI!:l y pf)dla contar por seguro que le le aplica· cada ,cosecha de cereales le:l dejaba una ga· ,·ia un cl18tigo crudo por mano de los colo· naOCla pingüe. ,·adol!. Rosas, no olvidaba iJ su familia quo vivia Así 6S Que ninguno de ell08 hubiera afron· con opulencia...... tado. el castigo, ni menoa la pérdida de la Cada tanto tiempo ,·ama á VISitar u. doña graCIa del patrono Encarnacioo, con quien pasaba algul:l01J dias. Las fiestas Bquellas duraban todo el &iempo - 10- que duraba la bobida que Rosas hacia lIc' visitar él mismo, acompafíado do una buena varo escolta de colorados. Cuando no habia ya con que mojar el ga' Asf borró de la memoria do 101 indios aqueo ñote, cada cual se retiraba á BU carqpo IÍ. des' Ile. famosa sableada, persuadiéndotos que él cribir la fiesta' los muy contados paisftnos DO habia podido conjurar el mal ni atejar la que, por acontecimientos imprevistos no ha' voluntad del Gobierno. bilUl podido il:" Y volvió á gozar entre el108 de su antigaa. In~on~s agaena fiesta dura~1l otra sema' ~lluQnciG y á d~PQner de 8US mejores lanzas ~a, a~umlendo 'Jo c"raoter dlam,etralme.nte SlO reservo. de Dlogona clase. opuesto ul ae¡uido halta entcmcefI. y eran los Cerrillos y 8UI oampos el caar' Los que no tenian IllnguD quehacer urgen' tel general de aquellos h01Qbres, 80ldad08 te y ~údaba.n con ~lg~:o.Q8 pesos en el tir"dor1 Casi toilos del regimiento 5 Q de eaballerio. se deepartamaban por las pulperias a referir Rosas mandó invitar al caudl.l1o Il\ntafeei­ todos los detalles de la carne con cuero y del no, que viniero. á visitv sus calbpcllt y eh-ji!; bailQ, asegurfUldo <¡uo en $Odo lo dea~ubierto de algunos animales. " Jq;"tiGffl, DO habi. tUl hombre que pudiera Queria sprprendcrlo con la vista de todo su Jt~ar ~ 1i! esp;ueJa del p.Uon. p!>der y ~queza y do ~u gran prestijio, sin El 0l1SD10 _,aplegO ~~""ha. uo. maula cora' e.¡ercer ~lngun C8r$0 oficial. p.r,~ 000. ROlas, y m.ula que estaba en el Lopez aceptó la lnvitacion y se vino con -pader por que á" este 0.0 lIe le "tojaba sacar' una gran comitiva1 aiendo tiatsdo con UDa ío de lu orejaa. es~lendidez verdaaeramente réjia:. ~y ~uitSn ha hecho el gobierno que tene' Lppez quedó aso'lObrado del órden ¡uUe- mos última'lOente? rabie de aquel establecimiento colosal. como BI patron que se metió con SUB milieo! en de la influencia que tenia su amigo sobre el la misma plaza grande, mandando que le paisanaje. . entregaran el PQeato. Le hizo hace~ los honores con aquenos Pues de la 'IOisma manera se hará. él Go- mismos colorados que lo derrotaron en Pa' biemo cUlUldo le dé la ga~8 y se le an- von. y mand6 que avisaran en toaas1as pul" tó~. . perias cercanas, que en la estancia babia ~ara eso nos tiene a nosotros que nos fiesta. hemos de deslomar por él. .Era el modo mlls oómodo que tenia RolOs y la adoracioD creeia de un modo incal- de reunir gente, cuando la necesitaba con eulable. apuro. Xl que hubiera diclJ,o entonces una palabra Siendo la pulperia. el punto de reunion oontra Rosas, habris sido despedazado. de todos. á 10J dos ó tres elial de enviada y esta adoracion á pesar del tiempo y de la noticia, la conooia toda •• oampaña y 101 loa acontecimientos so conserva hasta hoy paisanos empezaron" caer con tropilla ó ca" millAo en los gauchos de esa. época. que aún bailo de tiro, segun la distancia que tenian viven. que recorrer para llegar á. 108 Cerrillos. Cuando agarran una tranca de no "te mue- A los tres dia de estar allí Lopel, se ha~ va. como el)oE dic'.m, el primer grito que bian juntado mas de mil hombres. _ se les ocurre para e3presar BU alegria, es el - Y de esta manera los reUDe tamblen par&­ de: viva Rosas! . ponerse en eampaiia? preguntaba Lopez en No hay hombre del pueblo, de aquellos el colmo del asombro. tiempos, que no emplee la -mejor parte de -De esta misma manera, respondió ROBa~" 8U borrachera en haCer la apologia de aquel Lo que hay es que cuando les hago deCIr hombre.. que los necesito, se apuran mas, y no tardan Ka que Roaaa habia BobtepueBto a sus pai' tanto. Bauoa lobre 101 hombres decentes á quienes Entonces los reuno en horas solamente. tr~ba eOIl las frasel mal de8preciativas y Lopez estaba mar!lvillado. _ .. _ hUlDlllantes. No sabia que admIrar 'IOal, SI el preatiJlo 8118 negociaoiOJle& de aDliatad eon los indios de aquel hombre que !l.o inyestia aargo pú- DO eron abandonadas un solo dia. blico alguno, la magmfioeDCla ~ D1Í~ero de Co~~iDuamellte ~nviaba á los caciques mas BllueJl~s haci~ndas Ó I~. estenslon lOm~DS~ preatiJIOI08 comisIones oompuestas" de 108 '1 el orden lDalterable del gran estableel- mismos iDdio. que *-ni. em.pleados en 108 miento. _ Cerrillos, con que lel enviaba presentes ya Todo allí se movia como un raloj, CG)'O de 'YieiOl ele entretenimiento, ,a de hacien" gran mecanismo .. movido por la vol..... d da. 6 ropaa y ptendu. '1 tino asombroso de aquel hombre. Otras veces, y cuando Babia que tal ó eaa} -Esto representa UDa foriUlu\ como .oha· caoiqu amigo lUyo audaba Gerea, lo iba é bri otra, esolam6 Lopez. -11-

Vale mas que toda Santa.-Fé. pez, cuyO!! piés parecian qllerer displltar 8U -y sin embargo, replicó ROlal sonriendo agilidad pasmos. 11 los ded,08 con:que puntea· de orguUo, todo eata aqul ~ su disposicion. ba aquel gran guitarrero. Yo sabe queyo no reservo nada para mis El mismo Rosas se entusiasmaba de ver amigos, y que ullted est' en primera Unea. bailar aqueUa páreja, quea su vez se enarde" El caudillo abriÓ los ojos deimesuradamen· cia. sintiendo aquel p11Dteo soberano. te, ante aquel hombre que disponia de tan Un inmenso alarido salió de todas laslk)­ enorme fomma y la ponia" disposicion de cas, y una verdldé~ tempestad de aplau.sÓl 8US amigos, como si se tratara de cuatro atronó los aires. reales. El gobernador López habla terminado el El b.. il~ q~e tuvo lugar, fué una fiesta gato con uná figura (le. pttnta ,. taluD., qu~ digna de los Cerrillos. rué la novedad de 'quelllas memorables FWa del salon lmpro"faado en el ga1ron fiéstaa. PUl la gente de cumplhpiento, se habia tU- - ROBQ!. que como siempre, ~eria lobre"· reg~~, " campo, otro de lo mas pintoresco lú en ~odo. echó tambien ~ mat.~ «fue fué y orIginal. II~ adouracion de todo8, y espectalmente dé Con cueraaa te~didaB de 'rbol en árbol, y. LoRez, que deolaró que jam's habia visto una gran cantidad de ponchos, se improvisó bailar de aquella manera, ni Cepillar con mas el techo de aquel sitio, Iluminado con pro- graQja y orijinaUdad. . fusion de candiles de todos tamaños. El baile con~luy6 por fin, por ~Ue la mi· Todo el rededor del espacioso sitio, estaba ñana estaba muy adelantada y el dis, segun atlornado con eabeJas de vaca, y todo géne- pareoe, est~ rellido con aquella di venion, ro de poyos donde debía tomar asiento la con· sin que S8 sepa hasta ahora la razon de este currenoia. fenómeno. Se nombró bastonero' R08.BS, y el baile Por qué no se baila de dia? empez6 al acorde de las cincuenta guitarras Al decir que se acab6 el baile, coinéte~o¡a que componjan la orquesta. una inexactitud, pues llqu.eUo fué una suspcn" Aguel primer baile fué un gran pericon sion plua espetar sin dada la noche, en que que Organizó Rosae, elijíendo los IDas travie" continuó con mas entusiasmo S(lO qUe el dia sos paisanos de la reunion ~ los mas aparen- anterior. tes para este baile qua él mISmo mandó con Esta espera fué o.menize.da COlA una corrida una gracia como cosquíllas. de sortija en que todos, sin escopcion toma· En seguida del pericon hizo traer su guitar- ron parte. ra, y despues de buscar una pareja digna de Se corrieron cien sortijáB qu.e H.0I1S habia su huésped, se pllBO á puntear un gato capaz preparado, todas ellas riC88~ hllbiéndo muchlls de haoer bailar á un papa. con piedras finas. -Sírvase amigo, qué para usted es, lo dijo La 6.1tima rué un hermoso brillaate ~ue 'Lopez, que rOp',ntia su adrriiracion entre el usaba Rosas en el dedo anular. punteo de Rosas y )a soberbia hermosura de En esta sortija solo corderan veinte gine· la pareja que este le nombró. tes, apalabrados tod01l ellos por RonB para El paisanaje estrechó el círculo, sospechan· que dejaran á Lope. saearse la sortifa, úniCA do que que iba á presenoiar algo que no se manera de que esto sucediera, pues era tah· repetiria e.n muchos ~ños. " cb,llmbOD, que en toda la manaDa DO hiso ni En el pnmer escobIlleo, Lopez se habla siouiera una buena euada. revelado un bailado de primera fuerza, inte- Aquel '.!.DiIlo 8010, bien podia valer quiaien­ ~ando la atenCi?ll ~el paisanaje que apla. tos patacones, lo que puso ~ Lopez en el eal- dio con un estrép1liO Infernal. mo del entusiasmo y adoraclOD por Rosu. Empezaron á sucedel"se unas á otras las ~3te, oomo en toda las Closas, habia sobt"O­ figuras, y los gauchos empeza~on á. soltar 9alido en la corrida, saoando veinte sortijas, aquellas espr~siones criollas y picantes, con que volvi6 a colocar para que las ssearan que cstan hab~tuados á demostrar su asombro sus pElones. y complacencia. Pero lo quc mas asombró á Lopez fué los L!1 c,?~paiiel"a de L?l!ez, la Nicolasa, pai. oaballos en que í eorrió -~Rosas, y la manera sa1?1La.loven y hezmoslslma, ouya fama como como guiaba aquellos animales oSoberanos. ball~na de gato era t~l, que DO le llama- Un tordillo negro .obre to¡¡o, «luya. fama ban SJ.Dó la colorada. !leg6 hasta PalerQlo filé el que hizo eetre- Como ROSal! al nomhl'~~la le hiz~_ una guío meoer de codiciainl' santafecino. ilada que ella comprendlo muy bien, . á la1 :-Es lo único que me reservo, ~iS.o, esol~­ segunda-figura eel;taba el resto, en Dledlo de roo Rosas, yeso llor que es de mi mUJer. la. algaI~b~ mas Infernal y estrepitosa. J Sinó, le dida como oon lOí> otros: elija el Esto tue lo qUQ acabó de entuBiasmar á LQ- qU~1 mas le guste. - 12- :S.ta no era mu que una mentira con que Y empezó el bail'.) como .i de quince dias Rosal salvaba su gran caballo, pues bien sa- atrás ninguno hubiera movido UDa piernll bia que OpéD8S se lo hubiera ofrecido, Lopez Lopez, habii.uado á 8UB tropas y al mi~mo lo habria aceptado. paisano de Santa·Fé, ouo es g~nte peco su- Obligado así á renunciar al tordillo, Lopez bordiDaoB y respetuosa, estaba maravillado que para les bueDos cabal!os era peor que de aquel órden asombroso. indio, elijió de entre los que habia corrido . Apeesr de circular el vino, la cafta y la ROBaB aC}uel-di8~ un pangaré que era una pin- ginebra, en jarl'08, no hullo un solo paisano tura y de una lijereza poco comun. no digo que se divirtiera, pero ni auo que s~ y tan lo quiso asegurar que le mandó po punteara. ~er su recado, no sac;ándoselo hasta que no Y como esto es i~poaible entre tantos, pa­ fué , ponerse en camlDo. :eee que el quo tema la desgracia de mamar· .&.s1 como la Il(>gada del dia habia termina- se, se reti,'aba tan sigilosamente y tan a tiem­ do el baile, la presencia de la siesta, con BU po, que nadie lo notaba. sol rajante, puso término á la sortija y á. algu· Lo que \lruebael profundo respeto que nas carreras que habían empezado á cor- aquellos hombres tonian al patrono rerse. .A. pesar de la fAmiliaridad asombrosa con Pocos momentos despues todos dormian, que este trataba ~ su·s paisanos, no 8e le veia pareciendo aquel vasto campo, un campa· acercarso iI. un fogon, sin que todos, al mo· mento militar entregado al reposo de la bata' mento, estuvieran de pié y con el sombrero lla despues de UDa victoria. en la mano. A la caida de la tarde la gran campana de Ellos obligaba. á sentarse, pero no se les los Cerrillos llamó á comer. veia oonerse el sombrero hasta que el patron y como lanzados de la cama por una mano no se habia retirado un buen trecho. invisible, todo el mundo estuvo de ~ié, siendo No se guarda mas respeto por 8U gefe, ni en la primera operacion de cada uno, enrollar el el mas Bubordinndo de nuestros regimientos recado ó levantar las pilchas que le habian de linea • • enido para echar aquella morruda siesta. Aquellas fie¡:,tas duraron ocho d!88, duran' Se carneó en un momento, y al brillo de te los cuales no se hizo mas trabalo que el los alegres fogones, se sucedió la presencialde la I'ocojida mañana y tarde. • de Jos enormes asadores, con su correspon- Solo una vez se paró rodeo, para que eI diente pedazo ensartado. ¡Gobernador Lopez pudiera tener una idea de Los jarros de buen vino empezaron á cont;( I~ c.IJ."; de todo su~empeño por no ceder el Rosas hizo. agregar al pangaré algunos otros campo. caballos de 8US tropillas, con lo que hubiera La defensa del sable conta'a la lanzo. estaba c:>ncluido de ganarselo si 00 lo tuviera bien tan bien estudiada Y comprendida, que cn gallada de mucho tiempo atrás. cste último simulacro, muy' pocos soldados La vuelta de Lopez aSanta'Fé, fué la de cayeron del caballo. [un general en gefe despues de obtener ruido' y ya se sabe que 0.1 bote de UDa lanz8, por SO!! triunfus. Jeve que sea, no hay ginete que 00 caiga. I Lo acompallaba el mismo Rosss, y Haza La misma conmocioo nerviosa que Be es· ¡que habia estado en 109 últimos dias de la perimeota al ser tocado, y la mayor ó menor: fiesta. \'elocidad con qu~ vá el csballo, son fuerz:lsl Detrás de el!os marchaban Jas pC!.8,onas que !8Can al glnete de so(:¡re él, con toda I que Lop~z habla lI~v~do en IIU ~ompan!a, y limpieza, len 8egulda UD regImiento de pal8anos que Viéndose 108 iodio!! vencidos de todas mll- [lurecili. uo ejército. neras, empezaron á perder la paciencia y á¡ No qued6 ni un paisano que DO sa.liera á enardecerse poco á. poco, al estrcmo de qUtlllU;ompañar al patl'on y ayu(1!ule é. despedir alguno8 empezaron á echar mano de las bo- su~ amigos. J88. y mar~habon Qllemand,) cohetes, corrien- RO!as cooooió en la cara do sus colorad':'8 do carreras y echando uno Cjue otro trago que aquel 8imu lacro podia degenerar en un dtl caDa, combate verdadero, 10 dió por terminado, Pero todo en un órden escepcional. consolando el amor propio de los iodios Cllb No so oyó una sola palabra que no. estuvie- algunos jarros de aguardiente. ,I'a sujeta al mas estricto respeto. No ahorraba él aquel combate ventajo!!o I Lopez se despidió da Rosas, encantado con para 8U gente, por_ ahorrar u~ e!lpectácul(~ila fiesta que se habia he.cho en su honor, y de sangre que habrla gustado a Lopez, nl¡asoillbrndo del poder y nque'ta de at{uel her­ por impedir una ó mas muertes que poco le¡mOSo caudillo. suponian. -No olvidaré, le dijo, y cuando usted ne- Es que aún le convenia efltar bien con los cuite el apoyo de mi provincia, sabra uste d ioflios y r.oOllervar el prestijio que·sohre eltos Icuanto lo estimamos yo y mis santafe- habia vuelto" adquirir. . I cinos_ De otro modo, él mismo\hubiera alenta(}(1 á Por que Lopez trataba á ~;tos corno Ulla 8UB colorados para que, como "quien noquiore pmpiedad indisputable, la cosa, hubieran hecho.del:~simulacro:llna -Lo mismo le digo yo, replicó Rosas, es' VErdadera batalla. trcchándole ambas manos. COD esta diversion rarísima en aquellos Eo los Cerrillos lIiempl'c habl" un raocho tiempos eo que se batallaba dinl'iamenre y para el amigo y en par de mil hombres pa­ estaban de más los simulacros, terminó 'qUtl' rn f'l "liado. q,. larga fiesta, que. dursnte sus ocho dias y: Ya sabe usted que yo DO tengo dos pa' tres mas que ·tomaron de repOllO los paisllnoll, la hras. los hacflndados estuvieron dados al d¡ablo. I Y tao entusiasmado Be retiró, que en aquel No tenian ni siquiera mujere;¡ con que ha- momento hubiera sido capaz de deponerso el cer la recojida, porque todo el paisanajp se mi!lmo, r,lira. cotn'gar á Rosas el gobierno hallal'a en la. fiesta de 108 Cel'rillos. de Ssota-Fé. f'ara moralizar csta~ largas fliitadas, los El caudillo porteño, el mas temible y pres­ capataces y patrones no tonian IW;IIj que el tigio8o que haya tenido nunCll la provincia pobre recurso de descontarles el jornal. dA Buenos Aires. se retiró a los Cerrillos á Si los despedian, que es 10 mas que puede saborear 8U triunfo y á seguir en SIB maqui- ~acerse en ca15tigo de UD jornalero, no lesl' 08CJOneS polítiC8S. . Importaba absolutamente nada. - Hahia por otrA. parte que prestar una gran Iban á. los Cerrillos donde se le8 daba .atencion á las frontera!ll, por que 108 iodios trabajo inmediatllmente, siempre G11e 1ft ClluslAlsolian dar su'! avances d0 consideracion aUIl' de la despedida no fuera Ot.'8 quo la de ha-Ique á l. lijora. ber clltado de jartn.:a ::eo los Cerrillos, fultando Ellos temao muy buen cuidado de no ha­ al concbavo. cer 8US avances por los campos de su her- Af!í, no habia medio de trmer seguros á los mano Juan llaouel, oi perjudicar las ha· peo,nes en )as estancias, y los haceodados 00 ciendos de bste, teDlan mas remedio que conformarse. Pel'O las lDvasiones eran tOIl frecueotes, Lopez anunció por fiu que regre$aba Il que el gobierno se resolvió á hacer una nue­ Sa'ltll'Fé, plenamente agradecido ó aquel ro' va salit1a. -14- Enfoneel la frontera alcanzaba basta Ro' Llevaré otros paisano. Jl8ra l,al'''' que YI~ ju, 6 dende llpga.ban Ills avanzadas, del re· yan aprendiendo oí hacer la perra. ¡imiento do Húsares, cámpado en el Salto. y la línea de frontera fué tomada por él .teste rp~imiento mandaba 8U8 desoubiertas . lo que campos. leD.tia respondiendo: El gobernador, ti. la cabeza. de elta tropa, -Jamtb por mi gálto leré Gobernador. recorrió toda lo".Unea de frontera y campó Demasiado en que romperme los eaacoaten· en el Taódil, donde hizo liD. fortin espléndi- go en mi gobierno de 101 Ceuillos! do, bien artillado y guarnecido con una como Veo que el mlndo eB muy aurgo paro. que pañia de cazadores, un elouadron de milicias yo lo ambicione. y 108 doscientos indios, guunif\ion que dejó Mala" meia de. buena fé esta... ,palabras ., allí regl'esando á la ciudad. veia con dolor rotas sus esperantall., Oon esto creia dejar perfectamente asegu- Por qne él habia estrechado su bUilllldad rada la frontera •.,' oon el prestijioso caudillo, pues quetia me~ Escusamos decir que entre aquellaa mili-Idrar á su sombra y siendo Ros18 el 'Gobaroa­ cias dejadas en el Tandil, DO habia un Bolo Idor, se ñgurabaque él seria el verdadero ge· hombre de 108 colorados. fe del poder pOlO el ascendiente que sobre él Batos habian quedado en Jos Cerrillos, pues habia sabido adquirir su profundo tolento de Rosas los tenia ptua 188 grandes aca8Íones, intrigante,' y no le gustaba, segun decia, hacerlos ve- . Ah! si tl4aza' hubiera podido leer eatonees nir de espunta-pájJ.ros, ni queria fatigarlos el fondo del COfaZOD de Rosasl en campañas ulútiles. Con cuanta preeipitacion huhlem .huido -.8sto~ son p::\seos militares, decis; mis co' de los Cerrillos para no .oh'er t\ ver fín 1:1 100-ados DO saben pasear. vida u su terrible propietario!

La guerra del Dl-ssll

No está en nueatros propósitos hacer una algo se 'refieren ~ Rosaa elliol (lcontecimien' historia polítioa de aquella época, historia tos trascendentales, poco conocidos aún. que seria pesada y pooo interesante para la La misma batalla de Ituzaingó es poco CO" generalidad de los 1ectol'es de esta secciono nocida en ciertos detalles interesantísimos, Eiltamoa haciendo la historia de Rosas, y que esplican aquel triunfo brillante de un poco ó nada tenemos que decir, de aquellos ejército mallltendido y peq'leño, sobre un suceS08' que á. él no se refieran. enemigo die~ veces mas numeroso y que con" El que necesite consultar la historia polí·¡taba con cuerpos de primer órdell, entre los tic a de aquellas épocas, irá 'á buscar la del que figurabau tres mil aleman.es, 110r de ejér· general Mitre, pluma mas 8IJtOl'izada que la cito. ' ' nuo.tra, ó la de 'Cualquiera de los'cuos, segun Aunque desde su pJ1Dcipio, tomaremos es" sus simpatias. que Bobre 0110 han oscrito_ tos acontecimientos a grandes rasgos y lijera' Nosotros v.mos a hacer lallistoria de Ro· mellte para no fatigar al lector. SBS y es ú ella que se concreta nuestril aten" El 9 d5 Mayo do 1824, cstaudo el coropel cion. Rosas en lus ~r¡'¡llos, desarrollando sua Sin emhargo, nos vemos- en la nec~sidad de grandes planes, se recibi6 del gobierno do eBcriLir UD par de capítulos sobre la guertll Buenos Aires el general Josó Gregorio Laa Jel Brasil y ln, botalla de Ituzaingó, pues en HI,"'atl, uno oc los hombres mas paros de - lb- aquella épocú dt\sventufada y uno do los mi' de Portugal, conatituyondo UD. impel'io de que litares mas esclarecidos con que oontaba la él, Pedro 1 era el gefe. patria argentina. Esta declaracion la cumplió, 8~reltando que Las Refas tomó ]8 adminillttacjon 1\ su ~ar' la Provincia m.platina (Montevideo) que.daba go, dc;clarando que seguiria la s~nda mal'CS' l~~ando parte del nuevo imperio que oonll' da por su aut60f8~r, lionda lumIDosa de la titUlO. . . , . que no se ft¡N!riatJa un momento. Don Pedro mandó elDls&rlOS a todas partes. El general Las Heras hizo todo género de pidiondo se le reconociera OQmo tal PedrG 1 empefios para que lo acompafiara en este Emperador del Brasil, lo rt l1ft DO le flié difioil propó¡¡ito el génio fecundo de Bivadavia, outener. pero esAe se negó Y, 5.010 ~ceptó u.na mision No suc~dió lo r,nismo co~ el 'J0bierno de ú Europa que tan utll fqo á su plUS, don Martm Rodn~uez que declaro no recano' Xl IIlor rey do Porlugal y del Brasil, don ceria al ftamante Emperador, mientras este J uaa VI, aprovechandG nuClStras divisiones y no se sirviera davol ver á la :N ImoD Argan' D.Destras eternas guerras, Ile habia declarado ~ina la provincia usurpada. dudo do Montevideo, iricorporándolo a su El cuerpo de ejército que ocupaba· a Mon· reiDo de Portugal, bsjo el nombre diProvin- tevldeo, se encontró dividido por este ano.nte· vio. Clisplatin8, la que ocupó con un ejército cimienw inesperado. de primer órden.· Se obedecían 101 órdeol?8 del nuevo Empe" Las provincias argentinas en s~grienta rador, ó se esper~ban las del rey de Podu' lucha unas con otras y todas Ó 8U mayor gal? parte contra Buenos Aires, eran impotentes El gefe principal declaró que aquello esta­ para contra restar la invasion portuguesa y ba bejo Ja dOlDlD3cion portuguesfi y qUtt era batir 01 poderoso ejéroito que ocupaba Mon' i VI á qu\en se debía obe- teyideo. diencia. Devorado por el caudillaje, p.obre y mise· Pero la mayoria de 108 gefes y tropa se rabl~ Montevideo aceptó aquella imposicion pronunciaron por don Pedro 1, lo que hizo que lo libraba .de las llagas que lo roie.n.· temer Que eutre aquel ejército se produjera Sil Cabildo y la mayor parte de sus hijos un oonfti6to sangriento, con:8.icto qua habria aplaudieron el hecho, sin darse cuenta tal l·edundado en beneficio. de la Nacion Ar­ vu de 1&8 consecuencias que mQS tllrde podría gentína. engendrar. El general Leeor, baron de la La~una,· El Gobierno Argentino tenia. ocllpados sus que comandaba. mas f\le~ trató de impo­ hombres y 8US dineros en !lUB luchas internaaner la autoridad de don Pedro 1 al general y se limitó á aceptar aquella dominacion dOtl Alvaro da Coala que declaraba perlOa­ comopro'Visoria y eapere.r tiempos menos nooeria leol á don JuaD, atrincherándose en aciagos para reclamarla con las Armas ea la la plaza de Montevideo por si Lecor hacia m,no. . . efectivas sus amenalo de reQucirlo por la. Las tropas brasil oras formaron é impusie' fuerza. . ron un Oongreso, de los partidarios de aque' Mas fnerta y deeididQ quo su antiguo com' 11a rapiña., cuyo Congreso declafó solemoe' 1,aD.ero el gilDeral Lecor, ie la fué eDci~ á !Dente, que la rrovincia Oriental quedaba don .&ITaro da Coata fija.ado ail por medio da Incorporada voluntariamente al re.ino de las azm8s, la domiuaúion de don Pedro 1 en Portugal, cuya corte re.aidia en Río Ju' el Estado Oriental. neiro. Los patriotas orientales, emigrados en Bue Pero el famoso don Juan VI, que así se DOS Aires, p.-ediC!Wan la guerra contra el apoderaba de una provincia, no se 8ospe' Brasil, arrastrando la aPl1lJ!atía de elte gene- chaba el golpe que lo iba á privar de la roso pueblo. . mitad de su reino. Pero el gobierno arg4tntino era impotente Habiéndose ausentado a Buropa dejó nI para llevarla y creia couseguir pOl" medio de frente de su reino a su hijo Pedro 1, quien la diplomacia lo que tal vez no conseguiria enC9lltró el (luesto do Bm~erador- propietario pOl" las armas. , mucho mas cómodo y provechoso que el de El Brasil teni. adem~ tendencias á las rC'J ~tuino. ... que no era posible permanecer indife· AIl .. que aprovechando la 'Dsencia de 8'-' reo te. seilor patie, resolvió echarle como le echó. Las tropas brasileras invadían con frecuen­ l. mas famosa zancadilla que haya memoria ia la provincia de Entre-Rios, y se 'Veia ela­ ea l~ hIStoria de los gobienlos elejidOl por ra la te~~ia de IIIl~derane de est~ Due- 11 II)ISmos. va pl'OVlac¡a, que podla ler muy b1eD. el . ~ Ftltlro I en 18~J declarÓ que. el Bra' prineipio'de uoa aérie deconquiatlll!l. 111 'luedaba completamente eeparado de) reiDo El gflDeral )(8D8iJl., cOronel .atoa.. , , - 16-

gobernador do Entre·Rios, era un .obltácul(l apoyados que.eatuvieran cn Bentus y BUS fa' tremendo que se oponia á las muas con' mosos escuadrones, quietado rae del Brasil. . _ .Mansilla se puso 6n;maraha oon su peque' El general MaDsilla cuyo gran aecendlente na oolumna, alcanzando al famoso Espino en sobre 108 dem4s gefes no se escapaba ti. Lecor Gená,:yendo!de retil'ada, y respetable además por sus dotes. militares Al ver la pequeña columna con que Maosi' é jntelectuales, v~nia á ser un tewble ene' 1I.a. se les, iba al humo, Espino hizo alto y ten' migo para el BraSIl, en caso probable do una dio una llnca, desplegando los brasileros en invasion argentina por ~l Vruguay, gl;ler!illa, pues le prometian hacer prodi- -Es necosario destrUIr a Mansllla y sacar glos.de valor, lo de Entre Rioe, pensó el general brasi· El'coronel Mansil!a. con su habitual bra' 1ero. vura, arrolló laa guerrillas y 8e fué al grue' y desde ese momento puso toda su aten' so de las fuerzas de Espino, 1.. que acuchi' cion y esfuerzo para Ilegal' ti. este fin,. lIó y pel'Biguió tenazmente hasta l. costa del Entre Rios, en manos de hombres adletos Uruguay, ' . á. la oílupacion brasilero, seria un aliado tre- Los basileros llevaron la peOl' parte, pues mendo, pues á mas del rechazo de cualquier la gente fIue llevaba lrlansilla, paisanos en IIU invasion, podria tener siempre, en jaque al mayor ~arte, .no les tuvier(ln ningun género gobernador Lope~ de S~n~~.Fe". de cons.1deracloo, , .. El general brasllero envIO hábIles agentes CuchIllo en mano 103 acometieron y les hi. á. Entl'e Ríos, pera que redujeran á algunos cieron bajas en UDa {il'oporcion de veiote y gefes á. hacer una revolucion contra lhosi' CInco por ciento. lIa, ofreciéndoles todo el diner;> que uecelli' f:lil comandante Espino que habia salvado tal'an y el fuerte apoyo del c.1ronel Bentus del combate á uñas de buen rocino seguido de ::Manuel, que se hallaba en el Salto con un unos ochenta hombres. quiso pasar al Estado fuerte regimiento de caballeria, de mas de Orientlil. . seiscientas plazas. l· Pero sus amigos los brasileros no se Jo per' Lo que tal vez no hubiera hecho la fuel" mieron, temiendo que esto hiciera sospechar Jla lo hizo el dinero y dos comandantes, Pe' á Mansilla, á quien teminn, que ~18 subleva' dro Espino y Eusebio Ereñu, se C:lmprome' cion del regimiento brasilero no habia sido tieron 11 hacer un movimiento contra Man' mas que ulla treta, silla, siempre que la caballeria de Bentu8 El coronel;Mansillc, despues de recorrer Manuel. los p;·ot(ljiera franca y decidida' los departamentos de la costa oriental, mente. volvió al Paraná, dejando la provincia com' Las tnJpas brasileras no podian entrar ú. ter" ¡pletameote pacificada" ritorío argentino, lo que importaria una decla Los brasiler08 comprendieron que no era el taCioD ne guerra tácita, pero se echó mano de momento oportuno de tentar un movimiento un eapediente por dt:más travieso é inge' por aquel lado y se llamaron á silencio. nioso. . El Congreso formado por diputaciones de La cabalIe"ia d~ Bentus Manuel simUlaria¡'todas las provincia!!. sancionó la unioo de too una sublevadon. pudielldo de esta manera ,das f:!lIall,. ~ncargaDdo al ~ener~l Las ~er.e pasar a territorio entre"riano sin dar nadn que:de,l f'JerClClo del Peder ~Jeou,tlv~ NaulOnal. sospechar, apoyando asi en un caso dado, i",!lent!~S 8e formaba la Conlltltuelon que de" mezclada a los revoluéibnarios, el movimieo"¡ bla reJulas mas tarde. ., . to contra Mansilla,' I EI-pueblo entre tanto 5eguU\ JHdlendo la E -E . 1 t ,!guerra de tal manera, que el Gobierno empe" . renu y !l~1DO, con e p.l!len ~9que reuDleron!ZlJha U. quedar en un ridículo eS!)Snt080, e~ Paysandu y e~ comblD~~.lon ccn u!l tal ~ No es que Los Heras no comprendiera Jo PIta, hombre de algu~ pres,tl)IO y el celebre justo y necesario de aquella guel'ra. Bentas, I!evaron UDa lDvaSlOD por el arroyo! Pero veia los dificultades insuperables con de l. ChIDa. , ,¡=l ue tendda que luchar por el estado precario El co!onel Barrenechea, annque teDla fuer Idel pais, y la guerra en aquellos momentos za sufiCiente, esta Il? se hallaba ~n estado no podia Ber sinó un nuevo descalabro. de contrares~a,r la ~rJ~lante caballerlade Beo: Los orientales emigrados como hemos dicho tUtl, y se retl[o l~re~lpltad::tmente al Paraná.. a eniD los mas empeñados en que l. guerra se pODer en c0l!0clmlento del coronel Mansllla llevara adelante, ayudados por la muyoría Jo que 8ucedla, de (os hijos de Buenos Aires, y aún dtl toda la Mansilla organizó tan brevemente como le Nacion. fuéposible, una columna de seis ti ocho' Mientras Las Reras s~guia haciénd08t! el cientos bombres,-con lo que creyó tenia bas' Bordo y buscando una salIda á aquella Sltus' tante para batir á los revoltOlO8, por mas cion desesperante, se produjo el hecho tri' -17 - glntellco '1 grandl080 que di~ principio á la (é, no hubo ya difioultad que no a8 atrevieran emancipacion del Eslado Oriental. a. venCf'r, El dia 11 de Abril de 1825, dio. memorable Es lI:.bido que los orientales ea una de lu y gloriOllo para. la historia dt'l n1lestra ~ermana razas mlt!' vahentes. ~e. toda la A.máriC}l, y Montevideo trein'a y tres héroes gUIados por roRS hahltuada , dlnmu todu IUI cueltionea ellegendari~ LavaUl'ja, se embarcaron en la por. medio de las arma~ •. ooata de Buenoll Aires, llevando algunas ar· SI lIe une á ellta condlclon de raza el en­ mas y pertreohos juntados entre varios ami' tusiasmo que produoia en ellos la caUla de gos de la gUMra contra el Brasil. aquella guerra, le comprender' que aunque Adónde iba aquel puñado de hombr~s va' pequeño, aquel ej~rcito era temible. lientes y arrojados,. en cuyas Bsono.mlas s~ .El. soldado brasllero ,el un modelo de 111- podia ver el brIllo de una chispa di' frlmlento para el fuego. vina? Es capaz uo cuerpo de ejército brallilero, Iban a libertar la patria. que gemia bajo la de sufrir el mas terrible fuego de fusileria, planta brasi1era! á pié firme hasta que caiga el último oficial Eran 801ameote treinta y tres hombrea, y el último soldado. cuyos nombres guarda la historia como otrap Pero en los combates al arma blanca, el tantas reliquias, pero treiota y tres hombrep soldado brasilero no tiene brios ni entu­ en cuyos corazones arllia el sagrado amor' l. sia~mo. . patria y en cuyo espíritu iba una resolucioo y preCisamente en el arma blanoa, lO' tan temeraria y grande conao sagrada. bre todo , cuchillo. cuando el lable inco' Diez dias despues estos treinta y tres hé' moda, es donde descollaba la gente de La' roes desembarcaban en el suelo pátrio y aoto valleja. c~ntínuo se ocupaban en reunir la gente ne' Ya esto era una ventaja que demostraron cesaria para abrir sus operaciones. nuestr08 vecinos y hermanos, en IUs prime- En BIleoo8 Aires creian que aquella em' ros encuentros. preBa era descabellada, por que era imposi· El Rlncon de las Gallinu, Coquimbo y ble llevarla , cabo con elementos tan josig' Sarandi, fueran las primeras victorias que nificantes. coronaron los inmensol sacrificiol de aqueo El ejército que ocupaba Montevideo era 1108 hombres. fuerte, con buena artilleria y gefes de primer Y siempre adelante., adelante, fueron e·n· órden. grosando BUS filas y de tliunfo en triunfo Se podía e8perar algo de un enemigo que basta reducir á 101 brasilerol á tina posicioD le ponia en campaña con treinta y tres hom' bastante critica y apurada. bres y unas cuantas docenas de fU3iles, En treB Ó cuatros mesel de combatel dia' sables? ríos, aquellos denodados patriota pusieron Pues á peaar de todo eato, se puede decir al enemigo, despues de acuchillarlo en toda que bien pronto aquel puñado de hombrell la campaíla, en la necesidad de atrincherar' atrajo sobre sí la mirada de toda la A.mó· ie en los plazas de}[ontevideo y la Coa rica. lonia. Apenas hubieron reunido doscientos hom' Todo8 estoB triunfos entusiasmaban á l. brea, que armaron malam~ote, pues las cir· poblacion de Buenol Aires, que pedia la cunstancias no permitian otra cosa, se ¡;usie· guerra con un ardor indesoriptible_ ron en movimiento y abrieron campailll con· Pero el Gobierno no la juzgaba prudente tra el Braail. todavía. El gent:ral Rivero, seducido por aquel Y aunque por la prensa y en ~odos 101 ~ír- ra~go helólco y alguoas cartas de LavaUeja, culos se levantaba contra su actitud preSClD· se les unió con un regimiento que mandabi1 .iente una grita inmensa, juzgaba qne era y las operaciones fueron entonces mas 8éri8~ "rudente esperar mas todavia, para reunir 'JI m~ rápidas, por que en la rapidez estab~ todos los elementos bélicos que le fueran el éXito de a1~ella campaña. posible á tin de hacer una guerra que no fue' En ocho Ó dIez dlas mas aquellos hombre~ ra un ridículo fiasco. denodados recorrieron grao parte de la cam La cosa llegó al punto de formarae eD Bue' paña llamaodo' las armaa • 8US compatriota!- oos Airea un partido de la guerra. q'.l~ ocurrieron presurosos á punerse al ser La comision directiva de este partido, que VIC10, de la. patria. . . llegó' ser poder08o, empez6 con gran aeti- A~l reUUleron qUInientos hombres primero vidad uoa série de trabajos tendentes a pro· y mil deapues, COn lo que ya pudieron 8se· vocar la guerra, de manera que el Gobiel'llo gurar que tenían ejército, aunque biaoñu DO pudiera eludirla. y mal armado, . Se compraban armas y pertrechos de perra Para elto8 patrIOtas abnegado. y lIenol de que eraD enviados' tlonte,ideo, para el 108- -11-

..... del valeroso ejéreito•• Imabaa l"\OrlariOl oUJO teato q'Ut enoolltraQlOI en la oDIa del que hostilizaban en el mar de tl)dol Modo" doctor .BilbaG. deci. alf: á, 101 baj~l .. br.. il.r08. J haciAD ...nife"a· -Habiendo el Oobiprno •• la. J)fO'Yinc1&S oien.. "úbllca8coDt~a el i~perio. del B.·a.H, Uoid ...ff.el Rio .t. la Pla'a prao&iOlldo aetos deou,.. maDlfettaeiooet e jDjur~a. reolamó 'te hoa'lhdad COD". file Imperie, ,iD P'"O­ aDte el Gobierno el a,eote polfuco de aqu,,' caeioa y ain preceder deelaraeioD ttlprella de n.oolte, que re-idia eo Buen- Air".lfoerra, prelcindieado de lal fOllOa. reeibidu Pero el Gobierno tUYO quehaoer••• l IOr40 6n\re l •• olcioo81 ei,m •• da., coa9¡ ... , la aula aquellal real.macioDu, como ea hleia

Con elte número Ja reepetable, 108 ~efes vidad fabulosa y on valor legendario empezó del ejército oamparon, tratando de organizar' I¡. alacar la8 nave8 brasil eral obljg~ndola. lo y disciplinarlo lo mu.[rápidamente que les siempre' retroceder, despuea' de combates fuera posible. terribles y encarnizados. Al Gobierno del gener!') Las Her~s ha~ia Eo ooos poco~ meses habla hec~o levantar sucedido el fecundo Gobleroo de Rlvadavla. e.1 bloqu~o, habla recuperado la lila de Mar· que ae dedicó en cuerpo 1 alma á la guerra tan OarC1a, de~truyeodo veiote de las mejo· contra el Bruil y que fu el que nombró í res oaves brasllerasy tomaodo otraa tantaA Alver para que 'acelerara las operaciones. embarcaciooes men08 importantes, con la8 '· que engrosó 8U pequeña pero heróica escua- L 01 leSU 1ta d os que d uran t e t o d o ese tlem drilla po le habi~n obtenido en el mar, fueron muo Los·brasileros, batidos y aniquilados por cho m8S bnllantes Y provechosos. . Brown, abandonaron SUI empeiios de bloqueo El coronel Browo, desplegando una actl" y fueron retirándose poco á poco.

La batalla de Ituzaiogo Siempre ser' la batalla de Ituzaingo uoalarmal espléndido, con datoeque recojemo!'l de las mal grandes glorias del ejército aro de boca de los mismos que tuvieron el hODor rentioo. de formar parte del ejército victorioso. Al geoeral Alvear podr6n hacérsele todos Empezemos por los combstea parciales que 108 cargos que se quierao sobre hechos que prel1araroo aquella grao joroada. no es del ca~o ocuparse ni nos incumbe Organizado el E'jército de Alvear y fuerte aclarar. de mas de seis mil hombres, tomó la ofen- Pero como veocedor de Ituzaiogo, oadie sin, y marchó al eocuentro del fuerte ejér­ podr' disipar la nube de II:loria que envuelve cito de 12,000 hombree que mandaba el marqués IU memoria re8pE'table y augueta. que debia incorporarse á una fuerte divieion La batalla de ltuzaiogo liene muchos Jlun· de Barhacena, mandada por el general Braün. tOI de conta..cto con la batalla de Wa- Al!í Alvear se propuso batidos eo . detalle terloo. Y destruir aquellos dos cuerpos de ejército, Así como Napoleon 1 =obligó á Weliog· los mas importantes con que contaba el im· ton It Teoir a batirse á Waterloo, Alvear perio. obligó al ejército bruilero á batirse en las B.lbacena tenia á su lado al célebre Ben' lomas de ltuzaingo, terreoo que habia estu' tus Manuel y a un general Lúess Teodoro. diado y donde babia elejido ya las posicio famoso guerrillero, habilísimo en Ja guerrtt Des que debia tomar. de recursos y ~efe que gozaba de uo gran Las cargal escalonadas de la~ caballaria 8r· prestijio en el ejército, g8Dtina, 800 se~ejantes é: las. mis!Das dadas Comprendiendo tal vez el hilbil plan de por la l~eDdarla guardia Imperial, tanto Alve~r. Bt1rb8c~!la trató ~e buscar la iocor' por 8;1 brillo y bravura, ~omo por los gran poraClon de Braun. aún a costa de un com­ de" resultados que ellas dieron. . bate que creia fácil, vista su gran superiori' ~ ol~ el fioal de eetas dos grandes aCCIones dad en el oúmero y calidad de sus tropas, fué diferente, pues las armas de Alvear que entre las que se co.otaba una division de in' ~aron ocupando el c~mpo de ba~alla,. feste· fanteria de tres mil alemanes elejid08 entre Jandol~ ma8 ~spléndlda de l~s vlctoraas •. , los mejores cuerpos de aquel ejército • . La mIs.m. retuada d~ ltuzalngo por el E'Jer· Estando campado en Tacuarembó el ejér­ cato brasllero, en medio. de las sombras de cito .republicaoo, el enemigo pr~ndió fuego La noohe donde no se vela mas que e~ lam- 111 campo, operacion dillhólica que llevó á ca" po de lo~ .ables que daban la muerte. SlO des- bo el guerrillero LÚ31s Ttlodoro, lo que casI caoso, tiene algo anILlogo coo la ret~r8da de aC8sionó la pérdida total del ejército. Napoleoo en Waterloo, aquella retuada fa . tal y maldecida, qlle arrancó en uoa uoch,' El general Alvear ~I~O levaDt~r el.oam· , la Francia, la leyenda heróica coo que p~mento con gran aCbvldad, metiendo In~('!~ la dotara el génio incomparable del gran No ¡bat.• mente el parque en el arroyo para 1m poleon. pedir de esta mioera que volara. Vallloa a dar UDa idea de aquel hecho de Parte del ej6rcito se dedioó a apapr (tJ hl> - 2l - oendio, en lo que se inutilizaron oaBi todasleBte movimiento, se pondrla en IU persecu' laB montural cion abandonando así sus primeras posicio· El ejército siguió su marcha en busca de nes.' los braaileros que se habian refujiado en las Cuando la noche hubo cerrado complet~. Sierras de Camacué. haoiendo imposible todo mente, el general Alvear contramarch6 SI· ataque. • lenci08amente y recostAndose un poc~ á la Alvear viendo que todo ataque seria des· derecha, calculando encontrar al enem.lgo en ventajoso para él, empezó a simular una falo el terreno desventajoso que le habla ele' sa retirada que eDgañó al enemigo hasta el gi(io. punto de abandonar aquella posicion y poner' Todo salió exaotamente como Alvear lo hR· se en su Irguimiento. bia previsto. En los primeros dias de Febrero el ejérci· EL ejército brasil ero abandonó las alturas to illJperi~1 campó en tan Gabriel. y se puso en marcha, engañado con la falaa Pocos dlu despues,. el coronel La vr.lle, retirada, calculando haber pasado el arro~o a que marchaba con UDa division á vanguu' la. maflana siguiente, ó batir a Alvear Sl e~' dia, cubriendo la marcha de flanco que ha· te no babia concluido de pasarlo, en poSI" oia el ejército, descubrió una division brasi· cion sumamente ventajosa. lera como de seiscientos hombres, mandada Alvear habia. hecho abandonar a IU tropa por Bentus Gonzalez yel guerrillero Lúcas en la costa del arroyo el convoy y todo el Teodoro. equipo para alivianula en lo posible, pu~s El coronel Lavalle batió por completo es· para él era indudable que la batalla tendrIlI. ta fuerza, acuchillándola hasta dispersarla. IU/lar en la madrugada siguiente. Despues de este triunfo que llenó de entu· En la madrugada del 20, el general Alvea,. siasmo al ejército, batida bizarramente en el sorprendió al ejército brasilero cuando este Ombú otra divísion brasilera, mandada por menos lo esperaba, teniendo apenas el tiempo Bentus ~anoel, quien se vió obligado á pa· necesario para tender su linea. su el Iblcuf, en completa derrota. El enemigo formó su línea de batalla, te' Aquello fué una Ilérie de triunf08 que, niendo en el centro 8US arti1terias~apoyada8 aunque pequeños, servían para alentar a por la infanteria alemana. nuestras tropas y dar al enemigo una idea Su izquierda y su derecha esta~a apoyada de la clase de hombres con que iba a como en numerosas fuerza! de caballerla. batir. Solamente en infanteria el poemigo tenia El COronel Lavalle con ese raro brio mas de seis mil hombres, mientras el ~jérc!' que acentuaba su car8.0ter, batia poct.s dias to republicano 8010 contaba con unus mll qUl' despues otra divi.ion brasilera, en la8 mllr' nientos. . . genes del Bacacay, y se tomaba por a9alto Era tal la: confianza que el nemlgo tenll\ el pueblo de Valles. en el triunfo, que formó sus numerosas re· El gen~ral Alvear marchó entonces sobre servas como quien cumple una obligacion inú· San G.b~lel, tra,tando de empujar á Barba' til 1 y se (:uso á contemplar con todo descanso cena hllcla ltuzalDgo, terreno que habia ele· .úo con desprecio, como el general Alvear do para la gran batalla. tendia su lfDea entusiasta. El ejército brasiJero como si Quisiera Mientras Alvear cuidaba: personalmente ~a ay.odar los ,lanes de Alvear, salió de San 60 coloeacion de los diverscs cuerpOll, le sentIl\ brIel y fué a campar en las lomas de Ituzain' la gran algazara del ejército brasi.le~o, que /;0, el 19 de Febrero. cre1a paslU' unas horas d~ ~DtreteDlmle~to., Pocas. horas despues y cuando ya el ene mi· Tal era la gl'ansuperlorldad dal ejérCito go domlDaba las alturas, el ejército republi' Imperial. caDO p~saba tranquilamente el arroyo de San· La Hoea de-l general Al ve¡¡,r ~. estaba forma· ta MarIa. , da del modo siguiente: Pero era precIso desalojar a Barbace¡¡a de Cuatro batedas movibles de 'cuatro piezf¡s sus altas posiciones, cada una. . A este resu~ta~o pUlO Alvear todos los rc' Estas cuatro baterias estaban mandadas por cursos dc ,8U lOdlsputable génio militar. eJ mayor Areogre y "apitanes Nozar, Che' 'éA ~a calda, de la tarde y á la vista del nau y Chillibert, batel'ias :.servidas por cin' el NIto brssJlero, Alvear hizo que Lavalle cuenta soldados cada una. r1epasIU'a el ~rroyo con sus coraceros, simulan' El resto de la artilleria, con 10s~~ capitanes (O una r~t1rada. Pirán y Borges, estaba mandada:por el coronel y él mIsmo se puso en marcha aJ princi pio Iriarte, cuyas baterias, eraD protejidas por!lu de la nO,eh.e, como si quisiera seguir el mis· derecha, por 108 batallones 50 Y 3°, á las ór mo mOVIlDJento de retirada, ¡deneS de los coroneles OlazabaJ y GarzoD, y Calculaba que el enomigo eogaflado por por la izquierda por 101 batallones ] ° Y 2° -22- maodac108 por lo. coroneles Correa:J VI. miento 'un cuadro de iataatería q.e le ha' delA. liaba al frente. Tuda la oaballeria le form6 en batalla, fS· Brandzen c11"l6 elealonando .u regim.iento, OIloD.da por rf'gimientoa y protejida por arO con un entusla8mo her6ico. tilleria, la infantería que quedaba. Kl iba 1\ ostreUdrs8 contra un caRdro Estando el ejército en eflte orden, el jntré·.~ dos mil inf8ntes¡ no escapando 'Id pene· pido Alvear recordó 1, Un~a alentando 108 tracion que era c~s imposible. romperlo. soldados con su palabra entusIasta y saludando A mas de la mitad del camino Brand.eu.e a 101 gefel amistosamente. encontró con un arroJo a8co, que era lmpo· Inmetiiatamente pri!lclpi6 1!L batalla con 101 eible pllllar en el momento. disparos de 18a baterlas mOVIble.. Al pararse Bnte aquel oblt'culo, el enaml. Olida uno de '0:1 comandantes se disputaba ~o rompió sobre el regimiento un terrIble sonriendo 1, glorIa de 101 mejores y mas cero fuego de fusileria, que sembró entrll 11111 filas teros tira.. la muerte y el es~.nto. Pero este honor lo n.yÓ delde el primer Un grito terrible dominó por ua aomeuto disparo el capitan Ntazar, cuyol tiros hacian el fragor del combate. en el enemigo estragos terriblell. Acababan de rodar muertos, al frente del Bra incomparable la tranquilidad COD que primer 810810n, el corol\8l Brandzen, IU. a,.u." aquel bravo oUeial hizolus puoterias durante dante Lavalle, hermano del coronel y el ca- toda batall~ 10 que le valió el grado de sar· pitllu Marcó. . gento mayor, antes del 8aC8nlO general que El regimiento le aterró, .8 hizo un ovillo 8e dió al ejército. bajo aquella lIuvill de bala. y dl6 vuelta ca· Deapues de lin nutrido '1 bien dirilidO fue- ras en medio del mayor des6rden. KO de artillería, .,mpeló á moverse la caba· Habia perdido 34 soldados. lIeria. . Pel'o aquellos vali~nt8l, bajo el terrible La division oriental tuvo el honor de ]a fuego enemigo, 8e rehicieron 'l. voz del primera carca, que fué brillante aunque po· comandante Vega que tomó inmediatamente co afortunada. el mando. LOI r('¡imientos orientales 8e encontraron Toda nuestra izquierda 88 lhovi6 entoncCB, con la fuerte divisíon de Bentus Manuel, dOB llegando al arroyo, sembrado 1a de cadhe­ veces mal Dumerosa y mejor montada. res, el coronel Pat al frente del regimien- Despues de dos ó tres minutos de combate to 2, avido de· entrar en combate. á Bable, 101 orien~ale. fueron rechazados y DU8 escalonea veDiaD en seguida, 108 cor." obligados a. re~roceder hasta el primer 8a ceros de Lavalle y el regimiento 9, der coro· oaJoo. Del Oribe. AlU se rehicieron con un denuedo incaleu- El frAgor del combate erA imponderable, no lab!e .1 volvieroo á. cargar apoyado. por el escuchá.ndo88 mu voz que la de ¡cilrrea 101 regimiento 16 del bUlarro y hermoso Cbronel c19r08! cierren los claros! 0I"v8~ria. En aquel momento loa fl1('gol de la .ti- Toco IIU turno de retrooeder al denodad(. lIeria enemiga cODverjieroD sobre aquella Bentu8 Mlnud. p3ro de Unll manera tan des· grao mas:. de caballerio oausando Dumero." graciada. q~ fué l~rol1ado e.ncarDizadlimoote sIR bajas. ' . baBta las mismas plezlls braBlleras que bar· Uoa bala de "afion dió muerte al comao­ rian nueltras fiJas con ~~s metrallaB, á quema dante Besares, llevándole la caber.a, mieuO ropa. .' traa algunos oñoial81 caian tambíen dando E.l fuego Be hiZO general en . tO~B.lll lfn~a entusiastaB vivas á la patria. h~cléndo.e notl,!-ble desde eJ prlDClplO la dlB· El coronel Paz envi6 entonces al teniente Clp loa y maneJo. ~~ la tropa al~mana, ~ el Paunero á pedir autorizacion al general Al· denuedo de la dlv1810n del guerllllero Luca~ vear para cargar al enemigo, qlle apeyaba. su~ Teodorob· . . . . r,erribles cuadros en la espléndida eaballeria Se hft la c0!Db~t1do por e8pacl~ de 1).[18 ho del guerrillero Lúeas Teodoro. !a y lo .. dos eJérCitos B~ .m8nteman firmes é La viotoria empelló entonces •.•onreir ,1 InamOVibles en sus pOSIC10netl. . '···t r ti o La eSC81a infantería ar~entina no podia hll' t'Je Cl o ~ gen n •. ' cer competeocia á aquella brillante infateria El teDl~nte Paunero re~reso con la órden alemana, cUy08 fllegos cruzados eran ter. de ~al'gar, y aql1~1l08 escalones que habian ribles. sufrIdo un f!lego lmpoD~erable, S8 laozaro~ Bl general Alvear, Tiendo que era precio 6. ~a oarga, slendo el prImer escalon el ftgl so dar UD golpe Bério , la infanteria aleroa· miento 2, 8. las 6rdenes del coronel P••• na, fué él mismo adonde estaba el coronel El 2 dió una brU,lante c81'ga Bobre. ~ÚC8S Brandzen, y le ordenó cargara con 8U regi Teodoro, y regrea6 a ocupar BU8 pos1CloDee. - 2J- con la pérdida de cuatro de IIlI mejores ofi' nuedo que hOllr.r~ IJiempr. á l •• hopas bra' dales y 50 iDdividuos de tropa. ail.t'ras. Lo, eacalenes siguieron la carga sucesiva Pero roco de.pues de chocar tuvo que ce' con mayor facilidad, .pu" el arr010 ('staba der el campo y dsr la elpalda, puea .1 vigor entonc. Ueno de cad,h"el y heridos, ~obr" de aquella carga formidable ora irrl8istible. loa cual. pasaban a'luellol heróicos '01. Btln,;us Gonzalell\ rué sableado sio cQmpa' dad.. slnn halta la retaBuudia de la Hnea braBi" Ni lal cabaJlu¡" a. Lúe.s 'I'eodoro Di 101 lera. cuadros de iQfan",¡a alemana, plldlerOIl rp.8i. Allí LavalJe, con IUI ooraceroslegendarios, tir el empuje y vIolencia d. aquella oafga IU' tomó el parque brasilefO y .. lgunal piezal de cesiva, artillería que eran def'Jutída. eon terrible en" La divilion ae Lú08' Tendoro fué .encida y caroizamiento. acuchillada hasta Jos cuadros de inranteria El coronel Olavarria Con .u lucido reli' que fuuoa lOtos '1,-\elpedaz8dos. miflnto núm, 16 y el general Lavalleja con La derecha enemiga quedaba TODcida J com 1~8 .fuer... de 811 mando, habian heeho pro· ple&.lItente despedaaada. ' dJglos de v~lllr. . . .ReciBO entono. elgfolral Ba.rbaeeDa eom' Pocal deblan ser la8 esperauza, del ejérCito prendió cuén equivocado estuvo al aotioipar" braailero, J sin embargo, defendia l •• poe .. s. al resultado de la batalla. pOlieionel qoe cODlervabat con una iatrepidu Un epilOdio conmovedor habia tenido lu' dilna de mejor 8uerte, gar al ser cargada la diviaioD del guerrillero Pero el resultado fatal no tenia remedio, Lúeas Teodoro, Acababa de morir como mUerGD )osleoDes., El re¡¡imieoto 9 de orientales, al mando el distinguido general Abreu y pOOG quedaba del coronel Oribe, fué doblado J obli.ado' que hacer, no para gauar Ja batalla.. Pero li prest'ntar la espalda. para hacer la retirada aeDOS de8811~ro.a. Inútiles fueron loa ..fuenol de aquel ge' 1:'1 general Barbaoena ordenó la retirada, !lO fe heróico para contener 8US soldados. en cuadro, por que las infanterias que qutlda· El 9 huía en dispel'8ion, buscRndo para cu' ban en pié estaban aterradas ante el fuego brirse, l. espalda de los escalones que venia n de artilleria que seguia haciéndllseles, pero detrás. si de frente y tratando de conservar el mayol' Desesperado Oribe de contenerlos, y ano' órden posible. nadado por la verguenza en que lo sumia su Todas las caballerias rodearon \:!ntonces al tropa, ~chó pié á ~ierra, J arrojando al suelo ejércilo yencido y empezó una Jersecucion y BU kepl, se arranco las cbarretera~ y emll.8zó carniceria indesoriptibles, dándose cuartel so· a patea~las de una manera frené~lcs, mlen' lo al que se rendia. t-ras grltaba: El ej~rcito braailero dejó ea el oampo de - Cobardea! esto es 10 uatedes ,!,er~cenr batalla dos banderas, diez piezas de artille. Aquello fué ,?OIllO "11 golpe eleculco ~ara ria, todo el ,arque, gran e.ntidad de vhere! la tropa que hUla pro\'ocando ~quella aCClOD, secos y oemomil tr"cieoto. cadherei. Ea el ac~ todas las comptlñlas rodearon al Los heridos. Que se· recojieron fueroD muy ~orooel OrIbe, ~ormando denodadamente bao poOOI' conaecuencia de un .ncelO terrible. JO nn fuego terrible. S· d 1.1 - Olibe ssltó entonces' caballo, empuilando len. o e campo u~ ba~all. una oenad~ don· IUS dos eharretera. como una espada, orga' de habla un gran paJODfU~ eate se pre.DdJó fue: nu 80 eacatoa '1 c.rgt con un brillo que ar· go con, lo~ tacos de los canont's, teolendo lu raBeó lln grito de admiracion al miSMO gene' gar el ultImo ac~ de ~qoelJ. gran batalla., ral Alvear presente en lo mas récio del e . 8Obr~ O!l campo IncendJado, . bate. ' om A~l el que la mayor pUM .e 101 herIdos, Oribe te estrelló totonDeS contra una bao mUrieron q~emado~, . . tena de dos piezas y la arrolló Gomo todo lo Loa br~llero8 deJaroD ~n maDo. ~el eJ~~CJ· que le epulO " IU p880, to republIoaDo, de oehoclentos a\ mil Pl'ISIO- lIi'lt&ru la izquierda ..mi,a era .....oida neros, , y aDonadada, la jereeha ••fria ta.biea un 8e hu~ier. pO~IC'O h.• cer m.ls, pero en la golpe eSe muerte. perseouclon era lmpoluble CUIdar 't'ntol y El eoroael Lavalle al fre.ote de IlIa Of)r.' los I~fes h.bian dado la 6rden de que todos ceroa J') uorootl Vide la, , la eab~ZIl de 8U los dIspersos del enemigo que 18 tomaraD. ~egimieDt.o. cargaron por órden de Alvear del fuer~n desarmados solamente, dejáodo181es lDtrédJdo Alvear,' la division de Be~tu. ~D libertad. O"•• ,lel, di9iai!»a fuerte., en la que et&ab. La pérdida del ejército reputlioauo, eDire .~Jada ~a. i~qulerd.: lQuertol l herido~.8 y oficiales •••eodió ~ diV1llOll lIQfrió el ob"JUO 00Il UIl d... , un too.l ele 0Db fIOB Y. pi«), oifra .... -24- me 81 8e quiere, vista la pequeñez relativa, aho de aquel guerrero lal medaU.. que lo en el número de su lropa, honraban y , 1.. que él honnba á IU vez Los muertos fueron quemados sobre el cam" 1.. que guard6 con religioso respeto. ' po de batalla y los heridos conducidos al Cuando dijeron que su hermano el ayu' pueblo de Valles, donde S!! les atendió de la dante Laval,le habia ~a,ido ~!Dbien, se le vió mejor manera que fué pOSible. cerrar los aJos como SI qUlllera ocultar las La penecuoion duró dos dias y dos noches lágrimas que lo abogaban, cerró la. espuelas cODsecutivas. a. su caballo, y se le vió disparar sobre el U na persecncion teDaz y terrible. campo de batalla como nn demente por es' Por fin aquel ejército tan soberbio y altivo pacio de dos minutos. ' dos diaa antes d"speda~ado, es~enu,ado por Pero desP,ues llegaba' ,la cabeza de sua co' el hambre y e1 cansanCIO, r~ducldo a. uo nú' rae,eros. páhdo'1 conmoVIdo, pero mu fiero '1 mero miserable, ganó lu 8le-:ras de Cama. altiVO que. nunca•. cuá donde cesó la persecuelon, pues era Otro lncldente dlgoo de mencion fué el tam'bien necesario dar descanso á los vence· del coronel Olazabal, que, estando el bata" dores. 1I0n 6° de su mando, peleando en guerrilla, Bo lo mas récio del combate el coronel hizo calentar agua con IU asistente y ae pUlO Lavalle sufrió dos golpel que hubieran he'" tomar mate, con . la miama tranquilidad cho vacilar el carácter mejor templado y que que lo hu~iera ~echo eo el patio de su cuar' él supo lobrellevar con un valor moral á tel, al mismo. tl~mpo que mandaba y obler' toda prueba. . vaha los mOVimientos de sus guerrillas. Cuando supo Que su compañero y amIgo Esta tué la memorable batalla de Itunin' el coronel Brandzen habia muerto, se vió go, en la que se combatió durante seis hora. pisar UD vértigo por sus ojos nobles. sin tregua ni descaDso. Se acercó al cadaver de su amigo, y lo es- Antas de puar adelante,d.,scubrimono8 un treohó entre 8US brazos; desprendió del pe- momento ante aquellas sombras aagustu.

El caso

Qué era entre tanto de don Juan llanuel paeatigio y destruirian por consiguiente too Rosu? doa 8US planea de ambicion, Por qué no coDtribuia , la sangrienta guer' Si se encerraba en 101 Cerrillos sin pre8tar ra que sostenia su patria contra el Imperio la menor cooperacion a la guerra, se manteo del Brasil? nia , la espectati va, con sus elementos Por qué no se ~abia visto brillar en l~s ilesos. campos de Ituz8lDgo el sable del 5° regl- Bl ejército que operaba contra el Brasil miento, vencedor en Pavon yen las calles de ellcaso de elementos y falto hasta de alimen! Buenos Aires? . . . tos y ropas, tenia que concluirse mas ó menos Cómo podia esplicarse la ausenCIa del gran tarde y verse obligado el gobierno a hacer caudillo del· 8ur, en el teatro donde los la paz. gefes mas ins~gnificantes ~e disputaban el Entonces, con SU8 elementos sanos y freso honor de monr p~r la pa~rla? • cos, podrja él imponerse nI pais·'1 dictarle Es que el 80mbrlO caudIllo empez~~a á mos sus condiciones. trar la hilaza de la profunda amblClon que R b á t t d 1 le dominaba. ,osas empeza a mos rars~ ~n o a a re' -Contribuyendo á la guerra del BrasIl con pu~nante des.nudez .de su amb.clon de mando mis elementos, pensaba, (contribuyo á anan' y de 8U espirlt~ eg0l8ta y vul.gar •. zar el prestigio del gobierno y la gloria de Para.meJor dIstraer al Gobierno de sos p~a· los gefes que en esa campaila se han.de le' n~s rUines l~ propuso. haeer la paz con l,os ~n' vaDtar. diOS y ~loDlzar con ell08 grandes terrItonOl y como á 8U penetracion no escapaba qur fronterIZOS. 8U papel tenia que ser muy secundario alIado El Gobierno, visto el estado terrible del de hombres como LavaJle y Soler en el ejér .lais, no va , pode~ atender á la seguridad de cito y. Rivadavia y Las Heras en el gobierno, las fronteras, deol •• aquellos yotros mas, harian IOmbra á su Y por medio de la paz, hecha COD I08fia, -~- 38 \lut::de destruir por cowp¡eto este eterno 'Itívo ~e las que, iba tor}Dan~o con cuanto dañioo elemento. . c81J.hllo 8pareCla. en el, J~terlor. El Gobierno Be ~ejó .eduOIr y BosIIS rué I .,De elite modo el no hm,ltaba ~u. grall preB­ nombrado en comlllon p3ra trUllr nueva flJIO al r ud (fe Bupoos Aires, 1100 que lo el- linea de fronteras, mas afuera del Tandíl. teodía por toda la Rt'J!ública entera. Allí se puso Rosas eo contl.lcto cJn 1011 Par. pilo contRba con el fanloso LnpIZ de caciques ml\S ;D81J1e!lt~s de,lI. pampa, rt:aDU Santa·Fé, que era la trompela de 8U fama en pan do con UOOI BU VIf'J" am1stori y formánd,o torio el ioterior y litoral. la est.rechameote con los qUt! .úo no conocl~ I y.,s que R08R!iI DO lim;taba !la poder á ~I r!3l1ultaodo de esto fué una gran coloDl~ Imandar 110,10 en Buenos ~ire8. sinñ 4>0 toda de lDdlOS que formó ,en 108, cllmp08 de !o~ Cer ,la Rppúbllcft entera y auo en Montevid,Q rinos, coloDia que hizo subir 8U prt>st,lglO en' j si era posible. tre los plvojell, de uoa manera prod'glOl.Ia. I L fi d 1 &d' • No solo 10B Cerrillos slnó todo el Sur dt. as estas e 8. campRila ~e eue 18D IIID BueoOl Aires, pra un pai!l aparte., puede de' 'nlerrupc~on unas 11 otrall, "u~ndosele tomar , d I R 'ún' o obit!rno y are parte a.dua en torlas ellAS. el.rse, e que 08. era le g y mit'ntras el paie se hHCh pedazos 1)ora bJ~f' aucha'e j noraba por completo ~i e;.. \tl'nder á ,todos sus ,c«:'Dfl 'ct08, en el Sur, ~e Las ¡erlR ó lti:"davill ó el diablo, el Preei' ::.1n09 AlCes se "lVla eo la mayor fehcl- annte 6 Gubern8dor. A'W 11 t t' 'd 1 EIl no tenia lue hacer sinó con Rosas .. 1 e en re ema pODJeo o en e maB amar- os , n ( de mando que la d~ IN ridíf'ulo 1" pol'fnca seguida por el Gohler· no rf'conOCJan mas voz < h' d 'd f d 1 h . d R d R vi ian ., poco les impor' no y IlClen o ep-rVJf e mo a e g~lJc aje eb °dsllsl' de «!S88 v J i Inri,,!! los hombree'l cosal que pod.an ser t.. a e o emu8, I h f1 ' Era Ros8s quieo 108 habia de sacar dt- e os 1 es. • ' cualquier apuro y quien atendía á sus mayo' y acostumbro al gaucho á despt:8cJar y res necesidades. I!urlarse rle todo aquello q'le DO eman~ba de No conocjln, pues, mas Gobierno que Ro' ~l, y. sobre todo á lo~ hl'l~bre8 de lA cl';Jdad. ~, ni oreiaD eo otro poder mayor que el del" qUUlnt'8 daha 108 callftcatlyos mOA hum!lIBn­ patron de los Cerrillos. ~es, eon gran al~"z'\'a , chAcota del paRaoa' El ocupaba en 8U8 estancias tribus entera~ 19 que lo escuchaba como un oráculo, de iudios haciéndolos labrar la tierra sem' La Ilutortdad en la campaña era uos cosa brar y todo los demá.i tl'abajos consiguientet' 'lUP.. el pailllJno no comprendia, por que nada l\ uo establecimiento tan iml)Ortliote. temR que ~acer con ella. . Las mismas mujereR 8e ocupaban eo esqui' Qué IE'R Importaba caer en ~eflgraCJa con ~l lar las eDormee maja/16s, y It>jt'r con parte' d .. ,J ut'Z de Paz, ó q1le e8te l~ h1CJe r a perllPg~lJr la lana ponchos cojinill08 y demá8 plleh8~ nor haber rlado UDa punalada ó cualquleJ: por el estIlo, q~e ,veodlao. á los peOtle9 CI'IR otro dt'lito? '¡Inos y á 108 mismoB iodios })Of pret,¡ios in Poco IpA suponia aquella pet"8ecucion que lJigniticlIn teft. ¡Ior lo ~"nf'ral valia a la autoridad la mas EntoDoes Is JoDa DO tenia ]os precios rabu ~811~rienta bl:rhl del p4>rlleguido. 101108 á que 'hoy 8e vP',nde, y poco le impul' Todo I'U sfan era ganar los Cerrillos y pO' taba al .~tuto CRudillo regalar á h.18 chlLlI!' Of'rlle al h>lbls con pI patrono g"lU parte de la tI'alquila. Una \'ezal\í y h·,jll el amparo de Rosas, sa' En .,sta Jabor constante y bien dirijida, hioD que no h¡;bl9. poder humaDO' bastante á ROfas h1zo subir sue ca;,úoltll3 á una cifrto '1rrllncarlos, 4tDorme, lIf'gando á. obtener eo UnU ei\taciOD y R\'!HI.8 (>scucbaba el relato de la aVElntu' ~13) el 'lrod:lcto que antea conGeguia en mal-' ra que h~hia motIvado la persecueioD, 8ieu' 'le dos a!iQs. rlo tll pri mero en b Irlarse del .1 uez de Paz ~t\) lo pUlO en 8ituaeion de podf'r ser m'l~ '~ue la habia reclamado. iJeaprendi40 con los indios, á quienes colma' Muchll!'! veceFl habilln ido á los Cerrillos co' ba de fl'galos iosignificaotes si se quiert>, misiones de este Ó oquel JUflZ de PAZ. pidien' ate~dlda 8U gl'lJn fortuoa, pero con los qu~ do IR panoDa del crimiDal.m ooulto. 108 Indio8 quedaban deelumbrados. Pero ¡'el~ibiao por toda eootestaoion alguna , !?o prp.stijio I\Pgó iI. t~1 eslrtlmo entre 108 sal far!':8 insolente, mandada hacer por R0888 vaJ~. que esto. empezaron" llamarle el gran mi"mo, cI.'lClqo~. llegaDdo dia t'D qllt', {t FU' solo Ila Y Ai itl!listian ElD la entrega del hnmbro ~Ildo fonllaron mas df:l ochncit-nll!I'! lanzlI!!, 'ltW babi.D ido á bU80sr, entoDces lea hacia. ,llt:pu~!!!taa 6 marchar doude él llis 11(>'\"8ra. ochar 108 perros y todo qued.::.bn 118i CODO Además de e~to, Roslls no aJandOnl1oba UD clmdo. IOQlDcnt.Q BUS rcl.ciooes ecu l .....)llez '1 el cu~: QuéJl4cz (k l'",,, ~o bubiora. metido iÍ ma: -21- '0'81 palabras co. el gate de 101 coloradoa, nir trepas pira UDa guerra tu.'(lopular COIlO comandante general de ca.paila'! aquella? Ni por brOlDa, puel demasiado lo cono· El noblo bual'ero pensaba entri¡;lecido 10- ci&il. . bro la causa de aquella deserCioD. inmotivaaa Alguno de ellos recurrió lil. GO~JerDO para pero n~ podía atinar en ella. q.,ejarAeóe aqutJl proo.der lDoahfioable, pe· HaCia mas de un naes que eataba 80 el ro tll Gobierno hiao vidos .de m8road~r. M.on~e, y .. penus coDBenaba el escuadton que Necesitaba á Ro888, o~ela que su lDflllen' llevo de plantel para forma.r el recilDiento. "ia en la campaDa. era IDcon.tr•• table,. y DO Desesperado Suarea, lloQlbró UOI cQ.aiaion queria di!'RUltado por la q\leJ8 d.e un Jue. de compuesta de IUS m~jore" oficiale., para que p~ que ". fin y al ""bo pocha no tener de u'na manel'a sigilosa '1 poDie~do en jueJO raZOD. . todos 101 medios pOBibles, tratuan de pene~ El Gobierno por oh'a. part~ vela clarameQte kar la caula de aquel fenórp"'DO. to~o el poder d.s que dlSPOUla. el coronel Ro· Y ta~t!> anduvieron aque~lo. o1lQalea yeOD 8a8 y hasta temll~ pogerse m .. l con él. . tanto f.I)gtlo obraron, que bIen pronto gued6 Cutlodo sobrevioq la guerra con el H*11 aclarado el misterio que el coronel Suar¡'~ J el Gobierno de Rivadavil. ROIos puso tc?' no habia podido penetrar. 40810. medios á IIU alcal?ce para despreltI· Una tal dolia. Yagd&11e". dueña de una pul­ jiar una cosa y otr~, critIcando de uua mane' peria inme~iata al siti,o donde eaJllpaba. 8u­ ra amarg.. teda meibda que emanara de aquel rez, era qUien daba dUlero y haBta caballos GobiernO ejemplar J' ~atrio'a. á 108 Boldados que se desertabau. . y hablaba á l~. palsanoa en ul.l leng~aje D.isfrazado~ de soldados, do. de aquellos tenia que prodUCIr en ellos honda ImpreSIOD. ofimales traViesos, formaron parte de un 0011- -La guerla con .el Brasil, les deoia,8a la ti!l~ente y concur,rieron ",la noche' oolllpar ruina de nuestro pals. ' VICIOS á la pulporla de doña Kar.daIenl. Qué nos importa que á Montevideo se lo Yen el acto esta les ofreció dinero y ca· Ueve ó no le lo lleve la trampa? ballos para que se de&ertaraD~ • una provincia infame que DO necesita' -Es que si nos .garran nos nn á fusilar mOl y que n08 presta el flaco servicio de, dijo uno de ellos. ser la manzsna de lA. discordi",. I - Y quién 108 va á sacar del lado del coro- E pail va. á quedar pobre " miserable. Inel Rosas? repuso entonces la pulpera. Las haoiendas no van a valer un centavo I ,Váyanle allá, que es el coronel quien los y no habrá. quien el'; dos reales por tQclas las;hace llamar "1 estando á su lado ni 8.1 mis­ haciendu de la campaña. Imo Gobierno aed, capaz dQ meterle eoa Ull- :El Gobierno f"lto de dinero y pobre de re- tedes. . CUNClS, va á. toner que echar mano de la cam Indignado SUBrez, envió do, Soldados y un p.ma. oficial disfrazados de paieaDos para· qua vie~ y el patron con SUB capitales que serán ran si en los Cerrillos habia alga desertor. pcuI08 '1 el paiaan.je con BU sangre que será y la verdad quedó de manifieste. eeBIISa, tendrán que ler 101 pavos de seme- Aquel oficial volvió diciendo que habia jante boda. visto en la estancia de ROBas, ep unlB cha- Los paisanof: estuchaban aterrados la pre· eras de Chaves, de que era él administrado~ c1iccion de un porvenir tan sombrio, y es' la. mayor parte de 101 desertores, veatidos aún clamaban 8ntristeoidos: COD las -prendas militares que les habioll da- -Ah! si el 'PatroD fuera Gobierno! do al ser dados de alta en el regimiento. Bsclamacion que escuchaba Rosas COD una Estos datos de que ha hecho U80 tambien frllieioD arrobadora. plles era aqJ1el mismo el senor River. IDdarte, están perfectamente elemento el que habia de llevarlo al poder corroborados. '. y , un poder como él habia loñado, terrible Fueron las primeras perfidias come'idu por é incontrastable. Rosas, en dai'lo de la patria que habia eJe ••0· Coando el Doble coronel Suarez empezó á lar mas tarde con 8U bá.rbara tirqiá de V8intQ formar en el Norte BU famoso regimiento año'!. 17, pudQ notarse todo el pre@tigio de R0818 El coronel Suarez montó elllCuadron, .que '1 toda la maldad de sus sentimientos. habia llevado y mllfcl~ó 89brt 101 Cerr.Uos Por mu altas que recibiera Buarez, la do- con ánimo de caetipr ...ablaJOl aquel crío ael"cion era tan terrible, que apenas podia men inaudito, cometido por un coronel del reunir un )ar de'· tlscoadronee, cuando de ejército. P'f!!1to se quedaba ain UD Boldado. Pero temió ano el Gobierno desaplOltara BIl qué podia con.istir aquella desercion su conducta dé DllalDaRera levara,,, .. de­ sin precedente en la' provincia de Buenos tavo á la mUad del camino. Aires, muoho mas eUlndó 18 trataba do reo· AlU formó DQ prolijO lumario que. romiti6 -2:- 11 Gohierno, quien le mand6 la 6rde~ de vol" ba al ~~eral Rivern, un ~r8~ banquete al ver &11 ciudad con la tlJ~. que tUVIera. que aSIstieron todos 109 prmclpaJes peteonl· E'sto prueba que el Gobierno ~elDil á Rosns, jes político~. . . ., no qDeria atroe&rar la enollllstad del cau' Rosu aSll!ttÓ , él, compr9ndlehdo que alli dillo. Re hablaria política, lo bastante fata hacer· Rosas venia 80D frecuencia '. la oiudad,' le pulsar el verdadet"o estado de 111 situacion, informarse por 81 mismo del eltallo de la pO' de la ,ue ya conocia muoho. por lo que litica y medid.. que le tomabao referentes le habla sonlacado ~ su :flamlnte amigo en á la guerra del Brasil. lIUS ratol de espaDlllon. Entonces habia trasladado IU familia .. la A. mitad de comida plineipiatoo los brillO que el a4n clUla de Gobierno de la Provincia, dis, alusivos' la prelleneÍa del general Rl· donde nvia oon los Escurra, como le Rabe. vera, .tema de todo! ellol. Y. el cretino Juan Manuel, como namaba Invitado tambiel1 11 brindar ROBla, Tscil6 a su hijo, de800Uaba por ~a eatrechez de m~' un momeut? pero se de~idió al fin, y tOIM 1108, y Manuelita, que apen.. contaba dIe. la copa pODléndose de pié. ait08 daba indicios de una sagacidad que nOI y eOD aquel ademan travieso,! edadlantil desmintió mas tarde '1 de una hermosura que le fuá característico en su juveotad, r"­ pl6eida y delicada. corri6 la mesa COD una mirada penettbte, -Este 6S el crédito de mi raza decia Ro- tijo: IU acarici'ndole la cabeza, pues de este im' -Señorea, yo brindo complaoidó "la no. bécil no hey nada que esperar. lud del gaucho Rivera! Con el pretesto de estar al lado de su fa- Es el maa impOrtante de 108 «ef. orien- milia. Rosas pl!sabll en su casa temporadas tal". . mas ó menoa largas, que dedicaba, como he- Rivera 'aplaudió frenétioo 3quel brindita, mos dioho , observar el movimiento político que era el que mus le habia, gustado, retri­ y á mantél1er mas vi.. qUé nunca, su coro buyéndolo .oon UDas décimas inspiradas .. 11 respolldenoi* ton el general LOl'ez en 8an- honor del gran caudillo del Sur. ta·Fé. ABí quedó cODsagrada la amistad de HORds Sus relaciones COD sus padrep. permaneeian qon el que mas tatde hlbia de llamar él p(1;'. friaa, lo gue no impedia que les hiciera una dijon Riyera. ó dos ,.ieitaa durante 8U permanencia en la El Gobierno empezó R sosuechar del gene- ciudad. ni Rivera. - En uno de estos .IAjes, l1eoft6 'Buenos Aj- 'Se temia qJle este gafe, llevado por rea el general don Fructuoso Ri'\l'era, que co- su ambicioB de mando, hieiera a/gun aérin mo hemOI indicado en el capitulo anterior, lboTimiento en l~ provinela de 1l0nte,.ideo. VIInia.' presentarse al Goblernot d~agU8tado que .pu8iera en peligro todos IO!i planes dt>l por que su colega Lavalleja, habla SIdo nomo GobIerno .. bracio gobernador y capitan general de Mon' Para impedir este desoalabro, III! ntllolvió tevideo, puesto que él había acariciado y que" tomar á Rivera y no dejarlo mover dI! Buenos ria para sf. , , Aires, inut,ilizlndo ast 8U in.thlencia pernicio- Rosal que no perdia oportunidad de acer- sa y su poder personal. car~e á tod~ hODlbi~ que repres~nt~r8 alga' Pero Rosal que en todo eet~b8, penetró eso oa mfluSnC¡a,8e luso preeentar a Rivera, el te plan y lo pUSll on coneClmierftO de su !rechando desde el primer momento una amie' amigo. ~d franca y desinteresada en la apariencia. Inmediatamente le ausentó ton él 1) 101 Rivera, que en el fondo !lO era mas que Cerrillos, sin que Dadie lo supiera, dt»nile pa­ un pobre paisDo, de poca inteligencia J de'" 86 los mas alegres mas de su vida, eomo q\11 lUlllbrado pQnu 'POlicion. quedó dcantado estaba en su propio elemento. de aquel rico J liermoso amigo qoe )e lIovia Allí hizo cOlhpetencia á Rosas el1 8118 mal del eialo. tan franco, tan cordial y tln lleno difíciles ejercicios, pero siendo fliempre ven' de ofrecimientos. cjdo por este. , Rosas por so parte lo caló desde el primer Foé en Jos Cerrillos que Rivera concertó ~omuto J no Tió en é~ mal!l que un baeu con Rosal! su JamORO pJan de mOTer 111 CRm­ JD~tra_ato de que po,b. uou grandea no' paña oriental, donde tel1ia tanto pteétijio (~O· taJlls. IDO Rosas en el Sur, y sublevarla en 511 Los d08 amigos simpatizaron fuertemente favor. de~e el pti•• 1 momento.. . De esta manera se apoderada del Gubier- Rlvera, con toda BU inocenclft y b~D~8d no de Monte9ideo y podría. ponerse coa natural, R~88S. con ~da la falaía yr1l1adad gran~es elementos, de estorbo para la con'¡' ,18ft eep(~ltA par'81tldo 1a. DuaClOD de la guerra con el Bra.U. . Poeo8 dlU deeplle., d01l 'Pa!w.ual Cest. da, ROllas dió á DiJera uua trIO cdotidad de dinero y elementos para el logro de S\lA proo,tidO un C',lHubate, .,1 gran toRnDo habia nta. pÓ"itOB. . , c~cto diez y nl.leve de 1811 mejores uaves bru' y lo envIó COD una gran escolta á f"anto .... lleral'l, eu el rlO Uruguay. fé, donde df!~i. pllne':8e óe acuerdo cnn Lo I A'luel ('Ilmha.te fue ta~fo mas terrible, ruan' pes, l"U8 qUIt'n le dló R",sas dict&ces cartlA'l lo que lo=, ma;.rm08 brarulero8 dil'putBban el de recomeodllCIOO. triunfo de UDa manel·. hravia y desellperada. Em;JeSHb .. á desarrollar RosRs su flimoso Una de la" naves habia ::;ido abordada y y admirable plan de la liga ~e gooern.t.1urclI Itlli, sobre la ~ns.ngrentoda cubierta, Be há' tluprf'ma muestra de su astucl:& eo 'Iue h~n bIa combatido R hacha J á pllñ!&L hasta que tratado de imitarlo actuf&lmeDle., con demaslIl' no quedó a hordo quieo di8putara. la aociOD do baen rellultad¡>, pordel'gracIa. !le ennrbolar eo el buque braeilero el pabe, Rivera fué a Sa.¡ta Fé y le puso de acuer' lIon celellte y bhtnco, que tantas y recientes do con Lopes, pero no pudo realizar 8U8 pro· glorias simholizaba, pÓlitos. . La artillería barria lu cubiertu de Uo&, Perseguido tenazmente por el GobIerno, otra fiarte, tIñendo de eangre las manlas 8'~aS le fué Jmposible peoetra.r á la bandll ori~o -itll Uruguay. ., • tal, ~ t~\'o que refu~.iane y escondene eo IBto Los brafoi~erOIl di"p,itllron por varil" horas prOVinCias ~~I Ioterlor. .. la glOria de &ql1el trinofo, con una bravura La miseria en que e~tllba, el ejérCito qu(' '4 U P. siempr9 les hara honor. o¡:era~a coo~r8 el Brasil, no e8capab~ '.Da, Pero combatian COD aquello8 viejos Jobos ,he, ni al m!s~o Ros8s, como es conslgulen de mar, mandados por Brown, marino de te, que la miraba co~ 8~mo placE'r, tf'mp'e heróico, y era inútil diaputarlea UI1 De cllte.mudo el eJérc~to. de línea á qut' triuofo qne podria retardárselell, pero no es. tanto temla por la 8uperlorldll.d que ~odrla te" caparse. uer lIobre 8US gauchos, se anlqullarlll y con' fl' lb, '1 cluiria por quedar reducido á la impo- La obl 8 J aSI era, eateuuada, dsspedaz!'· tencia. cia por la metralla y el hacha del 8bordaJ~ Con el éxito de afJuena~ cruol campaila, empezó a fl"quear y á ceder el terreno, has prosperaba el unitariemo so&tenido por Riv8' t,a, que lo abandonó. por completo, 8010 en uu davia, y este era un verdadero golpe de muer' numero de tres D~VIOS. • re dado l 108 federales, de quienes era cam' , De los otros. dlPz y 8e18, 0l!ce quedabau e~ , peon en primua Hnea don Juan Manuel J poder de ~a e8('~adra. Argenhn~, COD e.l res en seguida el corooel Dorrego, no por - qUt te:- de la tI:1PU l~ClOD que DO habla pereeJ~o. y este valiera menos que aquel, lJUe8 era un!! ·:I[lI!O habHtD Sido, compl,etameote _~t'6trlJldos~ persona de maa imporl!locia intelectua,l, per. ,Elite combllte !ué tia 'oa mas reuldoR y 8Bn que no dispooía de los graodt'8 elementos dt ~rl(~nto8 !lue tUVJeran la8 dos escuadras en 'don Juan Manuél, que como hemos dicho 110' lorlo t>ll'Il'":P.~ qu~ duró .I~ guerra. " dia pooer sa un ejérCito de CUlltro Ó cin", Elltas oot Clas t'J nn rt'Clbl~as en Buenos Al mil gauchos, con upa v30g ,ardia de ocho' re8 con U11 verdadt>fo fr~ne81. cientas laozas, al mando de 108 mas presti' Graodes g~upos reeorrl~n las cal.l~ y pIs.' ji0808 caciques de la pampa. - za.s danti.o VIVall al Gob~er~o y pIdle!?do l.1l Así es que el triunfo de ltuzaingo fué un prollecum0D; de aquella g,orlosa cllmp.. na. rudo golpe dado á aquel carácter miserttble. ,Pero habla 'fue venct'r uoa ddiclI.ltad ter' que 8010 vió en él la prppondllraDcia de Ri"s' rlble, pue8 por el momeDto no habla como davia y del partIdo unItario, á qui~u m8~ -ubsanarla. .. tarde habia de hacer el blaDco ;..del fseon d~ El general Alt"caJ", al mlllmo taempo que en' SUB peones. .iaba el parte de 8U Tictoria, aounciaba quf'l La Dotieia de aquel triunfo fué rt>cibidlt ~e internaba en tE'rritoriu brssilero, pero que Qon un regocijo que rayaba eD.el delirio. para seguuir la campaña con éXIto, necesita' Tudo etao fi.es~as y regociJus Ilopullires en ba UD refuerzo de inf'¡lDteria y por lo meno Bueno/l Aires. '10 nnij"ll'me con quo cubrir la8 carnes de El nombre de Alvear circulaba de boca eo sus heróicos soldlldo~. , boca, unido al de Lapalle, Brandzeo, Ola' Adema~ de €I'to, el' Gobierno comprendia varri .. y tanto8 Otl'08 héroes ~de aquella bao 'lue teni& que cnvillr pertre"hos de gu~rra y talla magnifica. Itlgun dinero paracoDtentBr aquel ejército ¡m· y tOl' t'estt'j-IR eran tanto mayores, cuauto pego de tllOto (lela DO. que al triulJfu de Ituzaiogo Ct>iDCidill con olru Pero dB dónde sacar estos reourso8 impr.. - obleoitlo dlaa der.pues, I'or... cl ettfurZ&ldu almi· cindiblh? rante BIOWD. Cómo hacerse de dinero? Con trece de 808 buque., número con que Cómo reunir siquieJ'a quiniento8 infante& mnguo al n. :rantefrancés hubiera ¿comprome' ¡paro. lleDar el justo pedido del geneml A" -2!l-

ft8r cuyo ~jércilo 50 componia en Sil mayorl En BomejanlCfl condiciones el Gobierno ('ra p.rt~ de tropas de caballeria? iososte:Jible, &ta era In dificultad que el gobi('mo se Para colmo do desvent.uras la ~9.cuadra BU· consideraba impoteote para vencer. rr¡q UD contraste, en el que pordlU 8UB trt'S No habia mas remedio que esperar, y la es mejores oavios. . pera eD semejante situ8cion podia.. ser, la Tui· Creyendo q~(\ no hn.b~a mas salvaclo.~ qUt' Da y la pérdida de todo lo adqulfldo á cost" la paz, para librar al pala de uoa v~rg~enz8, de tan inmensos sacrificiOfl. ti i vadavia en VIÓ á dOD Mllnllel Garela a tra' El caudillaje alzaba el poncho en el inte' tarla en Rio Jaaeiro. rior y habia que ocunir á todse partes sin Pero fué tal la algazara que al'ma~nn lú! poder atender á. una 80la como era debi.do. partidarios de la guerra, y ~l la rechlfl~ qUt' El caos y la anarquia empezaba á 8somar dieron á Ri vada viII y á Garcur, que el Gublerno por todas partes su cabeza .,spalltllble. tuvo que tirar un dereto inme~iat8meDte. El ,alieate espíritll de Rindavia e ..p82ó IDelleiando que rechazaba lo capltalado con a ",acilar '1 ti comprende!' que para 8a1Tar el Garcia y qlle la guerra seguiria CaD mas em" país era Decesario una paz honrosa ~ero in peño que nUDca. , mediata. Dias deslJues de este decreto el VirtuOSO Pero entooces se eehuia eDcima el parti- Rivadavia presentaba su renuncia de la Pro' d(l de lo guerra, que era inmenso y entusiss' sidencia, pucs no podia gobernar el pais en 18 en Buenos Aires y que podia no solo ha' el estado por que pasaba. elr vacilar, pero aún precipitar al Gobierno Veamos entre tanto que habia sido y que en una ruidosa caida. ,era del ejército vencedor f'n Ttozajngo.

SielD.pre sangre

Al gobierno de RiTadavia habia sucedido Una de las tantas manifestaeiloell que tlC e~ del doctor Lopez, autor del Himno Na- le hioieron, t'ué un gran baile que ~e,preps' olooal, '1 á este el del coronel don Manuel ró en 8U honor y en el de sus ofiCIales, f'. Dorrego, gefe del partido federsl, qno todos ellos fueron invitados. El "Jército ",eocedor de Ituzaingo, sin ele- 'rauto el gefe como los oficiales !le prepara' meotos para operar, 8ufriR coo UDa resigno.' rOIl á asistir á ·aquella .fiesta. eion asombrosa est08 cambios de Gobierno, ¡ Jóvenes todos ellos, que hacia m8S de un q~ lo cO~oCaball en una situ8cion harto (lre· ¡año 00 tenian otra distr8cci.on que el fragor {'anay miserable. Idel combate ni mas persl'ectlva que la muerte. Antes de la. gran batalla habia perdiao ~u ac('jierou aquella noticia é invitacion con 011 t;0!lvoy, arreb9tado por fuerzas del inllignf'!ljúllllo iucalcula(:\le. . ~ locaosable ~entus Gonzalv(\s., quedaDdo! Todos ellos, sin fliltar el mas humIlde ca· lo~,efe. y ofiCiales. e!llu maY.,or .desnudez. ¡df'l6, asistieron á aquel bliile, rlonde se pro· ~ odo lo que reclblan del Goblel'no era una! ponian passl' lo. noche mas ~lada ,.. de Sil nolOO d~ ~aroe flaca y o~ra. de fariña, sien-' yi(la, . " do !os VICIOS de entr~~t(mll~len.t,o cosa d(i>@co-; Cu~n ajenos t>stlablln d~ pcn~ar que el ti nocllta de aquel glorIOSO eJércIto. In:ü de aqueHa fiesta habla de .• ser tan san' Despues de la batalla y en I~ conviocioJl l,griE'uto como bullicioso fuó su pt'i[)cipio, de que por p.I momento no habla. operacion El acti\'o Lúcas Teodoro ha.bia logrado que empr~Dder. e~ co~ooel dOD Jgnacio Uri'jCOIOCarse á á. uua corlajornada de Oribe, sin be &e retiró del eJérCito. con el regimiento ser seotido. de dr~gOD4'S que m8r¡,~ab8" I E8pera~6 el momento oportullo de caerle El 10~a08able gu~rr~lIero J.. uca8 Teodoro'lencima, SID que escapora uno solo, prome· .perolbldo del mOVImiento, se emboscó doci' tiéll.d086 un ruidoso desquite de todas sus dido. a:darle golpe. derrotas • .orIbe 8e r~t~ró. al Cerro Largo, donde 0810- Los bomberos" de aquel gefe, seg1ln 1811 ins' po COO 8U l'~glmleDto. truccionee que tenian, filaron á ~Ievarle el La pobla~lo.u do aquel punto, como era I1V;80, cuando 1.:18 gefes y oficiales (le flleron D.atura!, reClbl(1 COD muestras de la mayor lil balle, dejaodo el regimiento enh'egado al "lmpatla al gefe que tan brillante papal aMo . rep080, en poder de 108 sargentos. btlba de des(llmpeñu8n lo gran batalla, T.lícas Toodoro se puso iDmedi&tamonte en -:.el. .- meraba ailencrion. 0011 toda IU di"i.ioo, Ue' eoo todo su eatlldo m.,or, ,1 l'e~imiellto .1a gando al campamento de Oribe cuando la !lftilleria y 108 batallones 10, 3° y5~. fiel. 18gba en su IDaJ'Ol' apojeo. El 20 hizO olmpamnto .. la 008\11 dell El e!ltrnendo del ürotao hilO comprender arrOJo, con todas la_ caballeriu. al coronel Oribe de lo que sucedia, pero tu· Bn el arroyo de las Cdas. eatableoió an de, muy tarde ya. c•• po la guardia, compuesta de una compa· La e.m donde tenia lugar el baile habia di. de artilleria y dos regimientos ele caba' sido rodeada por DumelOsas troput cuyos lleria, fuerzas que le releTabln todos los gefes les intimaban se rindieHD bajo pena d. meles. . Ja "ida. De elt. fue"a entró á formar parte un. b.· Aquellos oficiales bnvoly pundonoroso", talloD d. tapes misioneros, que con BU solMa" con .u temibl!, pfe.~ l. oabeza, intentaron Dador , la cabcsza, se presentó al genera! una relÍsteoeJa baroJe,a. Alvenr para ayudarlo en l. nUeTa eampafts Pero qa' podian ha08l' 8Ontr. una diy¡" que 88 decia iba , abrine, Bion de eoballeria? De este modo quedó ~l ejél'eito aentonado ~'ueron todos ellos hechos prisioneros '1' UI1 poco tranquilo, mieotrae en Blleoos Ai­ conducidos , IInnoeia de LÚOIa Teoiloto, res tenian lugar 108 cambios de GobietDo (\ que 108 remitió al cuartel gtmeral coo UDa que hemos hecho referencia anteriormentp.. fuerte escolta. La mueria del ejército ora terrible, Entre tanto el regimiento habia .ido IOr· Los soldado. no tenian ya aillÓ harapos con prendido fID medio de IU sueño m.. pl'- que oubrir BUB carnes, y el alimento no bas· cido. taba ni aún para matarles el hamhre. Aquellos leales y bravos soldados empuña' Con intérvalo de pocos dias, bajaron á la ron sus armas é hicieron una resi.tencia de· ciudad, bajo el pretesto de conferenciar, con aeaperada. el Gobierno, los generales, Alvear, Soler y Pero esto no hizo mas que enconar :í loa Mansilla. vencedores. Dorrego entonces entregó el mando del Al cuarto de hora de una lucha .aDlrian· ejército al general Lavall~ja, el mas inepto ta é imposible, el noble regimiento sucumbia par~ m!lndarlo, pues careCla de todas las do· bajo el sable de aquella fuerza diez veces tes lDdlspens.ables par~ ello, al estremo de mu Dumerosa. vene el gobler:no obbgado, mas ttude,_ de - d" tel . ponerle a. su lado al general don EnrIque Loa brasllerea no JarOD 0118.' ,no ""1. Martinos para que lo dirijiera. petaron nada, bucearon "1 a~uchlllaroo JOlen El nombramiento de LavaUeja diigustó. tras hubo u,!- s?.1dado oon VIda. Illofundamente a. los deml\l gefes, tan aptos No escapo DI uno 8O~O de, 8BOB bravos: '1 meritorios par:l. desempeñarlo. !lunque aqu~~la carnicerl. c08to machlls ba Es que Dorrego no tenia confianza en ellos, J3S á lo. ~i~JSIOD de Ldollll Teodoro. " como en Lavalle por que era unitatiQ, y 00" ~á nobela de este dee.astre causó profun mo queria conservar el poder de sQllol ejér" da lmpresioD en el ejdl'elto, que pocos dias cito único con que podria cOfltrarestor los despues levantó c~.mpamento y se puso en ele~entos de ROsas, de quien de.tconfiab" marcha. no queria entregarlo sinó en manos do nfi Sostenía la retirada el general Lavalleja, gefe completamente BUyO. con llna fuerte diviaion. . .A los pocos dlas de estar Lavallejaal ften' Alg,unos tegim~entos .de ~ballel'ia marcha" te del ejército, Buftió este uno de su. mas ban a vanguardIa, reconociendo el campo a sério8 contrasteB. derecha é izquierda. El incansable Lúcas Teodoro, lÍo pesar de El desastre de Oribe habla vuelto á los SUB derrotas era el gefe que bostilizaba sielD- gefes previeores basta la cftajeracion. pre nuestras fuerzas, esperando y e.piando Durmte la !Darcha hubierol! algun

Juan Lavalle

A flnel del mes de Noviembre tenia lugal' una maDera que hacia tcmblar el corazaD. una fielta conmovedora en Buenos Aires. Sus rostros altivos y ennegrecidos por el El pueblo en masa, sin faltar un solo hom" sol y el humo de las batallas, cstaban flacos bre, un solo chiquillo, se habia echad,> á. la y desfallecidos" calle con el Cotazon rebosando de alegria. - EI'an un t so lo pogat por que el Gobierno de t8s veces se habia estrellado d enemigo co' Dorrcgo, hl\ c1cspilfall"(1(1o en otras cosas el mo en una muralla de muelle, eran rotas por dinero con que debia haberte daeto de comed el pueblo, que abrazaba á SUB sc],bdos cu' ~e le hobia (lieho a\ l'jército, _ brjéndo101 de flores y -de caricias, 1 No 8(' tu cubren la~ carnes, DI se to ~lan Aqut'llos CUerl)O~ volvian :,\ @U!" heglU"e8 delr.llbiorto dur:mtc un oiio, por llUO t:1 OoIHt'I" -'36 -

110 de .oorrego hf\ dilapidado .ll\s rontas del/ Sus a~jgos, homb,"C!S hábi~e& y ~flpertOI tln país en la politica que debH\ asegurar el Il~s manoJos do la pohbca ha~lan Ba~ldo .perluo.· triunfo del partido federal. ¡dn á LavaBo que en el partIdo unltllrlO esta· , El Gobierno de Dorrego tiene la, culpa do ba la vordadera salvacion de la patria, y La' tu hambre de tu sed y do todas 18S desven·/valle se habia hecho unital'io con toda la 1'0· turas por que b81 pasa~o. , ¡tencia d~ su alD?a ardiente. . El ejército habia Oldo. t~do esto, lo ha· P~ra el la rUIna de la patrI8 estaba en el bia creido como un evanJeho, y por ellto partIdo que encarnaba Dorrego,. detrás del le presentaba IOmbdo y amenazador. ,cunl asomaba la pálida cabeza deRosas. Estaba ávido do ve~ llegar la hora. ~n .que ¡ Era necesario entonces derrocar a ~orrelto pudiera tomar desqUIte do tantas 1OlqUlda· ,y \'ol~er a l!e~ar al poder .0. BernardlQo Ri· des ' .. adavla, el llOlCO que podru¡ 'salvar al pai s P~r es'o es que preocupado con su hambre Idel ellos á quo lo precipitaban. y coo sus I?rivaeionesp~co .caso hacia !1e las/ Lava\le estaba conv:ef!.ci~o profundamente maoifestaClones de admll'aClon, y alegria con! de esta verdad y vol VIS Irritado contra Dorre· (lue el pueblo 10 recibia. ,go, por aquella célebre eleccion de que he· • El pueblo ageno á todas las miserias ofi: ¡OlOS hecho referencia en los anteriores capt· ciales y. ciego adm~rador del ed'ucJ'zo con ¡tul os. ., que hablan combatido aquellos soleados, ,Por el!to se 1~ vela sombno y amenazador A la csbeza de cetos vetoranos, tan sombrío Irecorrer las calles de Buenos Aires al fren° y amenazador como ellos, venia como hemos Ité de ~IlS :veteranos. dicho, el general Juan Lavallc, el soldado!. El eJ.éJ'~lto deAfiló y fué a acuartelarse mas brillanto de su época. ¡mmedlaCIones de la Recolet3, donde todo .e Lavalle era un patriota en toda la csten· hahia preparado al efecto. sion de la palabra. ' .', ,;:.",'f;:~ '.~ : y mientras los cuerpos se entregaban alas Su sangre habia estado siempro dispuesta ifaellas de establecersc en aquel campamento á derramarse por el honor nacional, y con Iprovisorio, los gefes y oficiales vinieron al ella habia ganado uno ú. uno todos sus gra-¡Fucrte a saludar al Gobernador Dorrego. dos militares.' En el Fuerte los esperaba la fiesta ó recep' Teniente de aquellos famosos granaderos á Icion oficial. ' caballo que son cal·no de nuelltra gloria, hizo: El coronel Dorrego que era un militar va su estreno en la Banda Oriental en 108 r~do¡;¡Ji~nte y un. homilre de cora.zon, estaba conmo" combates que BOBtuvo Dorrego contra. Artigas,! vlfl0 a la vista de aquellos Jóvenes de rostros el terrible Artigas flue tomaba cañones á ¡tostados, que venian do acometer acciones a lazo. ,cual de ellss mas heróicas. Chacabuco y Mllipú vieron lucir su espada: Despues de felicitarlos cordialmente, lea valiente, conquistando en In primera ac<:ion :anunció que iba a tomar todas las medidas el grado de eapitan y llegando á sargento; tendent.es aque se les pagaran algunos me· maYor en la segunda. :ses de bUS haberes, y los invitó al gran ban·' Espedicionsndo con el legendario San Mar-/quoto que para ellos habia hecho preparar en tin en el alto Perú, y batiéndoso heróicamonte ,los cuarteles de la Recoleta. en todos los combates y luciendo su valor se· Pero el colector de rentas no tenia dinero reno desde Pisco hasta :richincha, llegó á te· ini de donde sacarlo. niente coronel. ! Buenos Aires tenia dinoro para pagar tri· Mas tarde, en los desastres de Jovata y Mo-!butos miserables a Santa·Fé y otras' provin­ queguá, alcanzó el grado de coronol, J'e.gre· ¡CiIlS, trihutos quo fOl'maLan UD sério total, 8ando á Mendozfl cuyo Gobiel'no renuDció pa·! pero no tenia con que cubrir algunos meses de ra venir á tomar parte en la guerra del Brasil.¡i8ueldos debidos á aquellos mel'itorios 801· y la comportacion del heróie~ gefe en Rque· ,dados! I}a compaña le valió su bien merocido as~enso i Esto lo hacian. e:>rrcr los ~unitarios que agenera~ d~pue~ de la batalla. de ItuzalDgo, iP~ep~r:tban !a . c~lda. de Dorrego, ent~8 el LosuDltarlos VIeron en Lavalle el hOmbl'e¡eJérclto, cuya Jrl"ltaclon contra el Gobierno á propósito par9. ponorlo frente á Dorrego y los crecia por momentos. caudillos federales que S6 lovantaban y loar·' Cuando la cooferencia de Dorrego y aqueo rastraron poniéndolo a. su cabeza. ¡ Hos gafes hubo terminado, estos se retiraron Rivad~via, el gran Rivadavia se habia ret¡·la RUS alojamientos. rado nI silencio del hOgllT, y los UD itarios creian V cniRn ávido8 de deflcan80 y deseosos dtl '1ue era necesario destruir á la fAderali~8ciolll reHosar tranquilos. que ~e apoyabaen Dorrl'go, e!l Rosas yenel¡ .LBvalle filé en el acto rodeado pOI" los cuclillo Lopez. (':!lembros mas iniluyentes del partido unito· Juan LavaUe era rollS coroz'.'n que cabeza"no, ~ue empezaron á prepararlo pal-a el mo' -M- villlieDto que secun 61101 DO se debia re- penona. que fueron a verle. pero DO creyó tardar, . ea el movimiento que se le anunciaba. u'I'aUe eeiaba OObt'01'1D8 eo todo, y dlS' Era terquedad de Dorrego 6 era un C011- P'UEllto ~ .hacer el movímie~~ oon aquell_ vencimiento cil'go de- que LavaUe DO rw.e Íl'OJla (,¡ue babia anudo veDU' al\ descaoso.. CIl~U do derroca~lo? ROS~8, desde que llelÓ La~.Ue, DO perdl." . Dorrt'.go no qU18lO tomar medida al&,unl ele una pise da de loil que conOOla ~omo on8ml' preoauclon. goa ~el .partido fedelal y de Dorrego, por . P8r~ part! latilfacciou de aqueJlOl ,.e ha· cODslguleate. bIso Ido a verle, 1(18 prometl6 cODCereuciar Ka el acbo foé 'Terse 000. este, par. con· con el general L4ivalle al li.uiente di•• jarar elpl80 de aquellos y oon,eocerlo de Tarde de la noche, volvieron a ver , 'D4r, que 89 trstaha de arre~atarle el m~odo. tego amigos in:O.uyentes, con una noticia ma. Pero Dorrego, como Siempre, lonrló de oqlle rra.,e. nOl temores ~lIjustificad08, y volvió á. ~eg!lr, ~ - La revolucioD. le dijeroo, ea el postre su emil3 'T ahado ¡as .rtoas que oste lDlllstlO que lot gefes 5~ preparan para la termina' 811 pedirle para mover la eabapaí1. y apoyarlo cion del baoquete que les ha dado V. E. con ~Ia. coco ocho años aate. habia apoyado CODolu.id~ este, vaa á. salir 'la calle, y' al gobierno de RodriglJez. dirijirse 8 la rlaza de la Victoria. Dor~go tenia .118 miedo y mis descon' El partido unitario, Qlle ea el autor ael fi.naa de Roen" que de aquellos gefes cuyas 1D0tio, los apoya con todoe BOl elementos. manos lE:ales habia estrechado mllmeoto8 Sio oreer todavia Dorrego lo que S8 le decia, antes. pero por agazajo á lar. personas que le lleva- Adeaul.s el Gobierno AO estaba dsn01para' ban la noticia, llamó á uno de los Ilyudantes de do y á merced del priser lIlovimienw roYo' senip.io, á quien dló la comiswn BirnieDt~.: Juoionario que estallara. - Vaya usted ahora mismo á te Recoleta, Tenia un cuerpo de línea compuc!lto ae sr diga al gafe de mas graduaoÍDn de los que cuatrooientos hombree, J a1,u0.88 otras fuerzas están en el banquete, Que le presente abora útiles y bUeG8So mismo en el Fuerte, pues el Gobiemo tiene Ya nemo. dicho por otta parte que Dorre' algo urgente que comunicarle. go era un gefe valiente y ademá!!, ni creia ni El ayudante partió y Dorrego despidió a queri. ereerque el ejército dal Brasil miere I!IUI amigos diciéndoles: al derrocarlo. Dentro de un par de horas podré demOle No pudiendo ooDvencet'lo y vie.do que la trar á u.stedes ue aU8 temores no ·tienen fune ciega conSan2l& de Dor~o iba U. ler la per dq.mento alguno. dicion de todos, el patrOB de 108 Certi Ilos Podrá ser que los unitários cOlispiren, pe· cambió oon él alguntis palabl-as duras, y 11' 1'0 ounca 8erán apoyados por . las tropas del retiró, dispuesto lin 8mbargo á iúsiatir hasto Brasil, que le dieran las armas que pedía. En el baoquete de la Recoleta sucedia La conjur:Acion entre tanto aceleraba too otra cosa muy diversa. doa 8UII babajos, pues el movimiento no de- El general Lavalle, rodeado de laspel'eOD88 bis l'etardarsL mas io1iu,entelil del partido unitario, espera· Podía apercibir.e de ello Dorrego y en ton' ba ~olo la hora de la diaDa pua ponerse e-n ces no poder hacerlo de la mauera tranquila marcha. . ypacÍnca que eetaba convenido. Arreglaban los últimos detalles del mO~l· Al... dia siguiente, á la tarde debiu. tener miento, cuaodo Be p1"elflntó en el Bawa. ~l lugar el banquete anuneiallio. ayudante del gobernador Dorrego y tráuSIDl- Estaba convenido coa que a. la termillacioD tió la Órdea. d .. que era p<.rtador. de aquel bsnquete, L8valle se poodria al El general Lavalle al escucharla, se pU80 frente de sus tropas, é iria á anunciar á Dolr' pálido Gomo uo padáver, y levin1iéndo8e de rego qne -podia retirarse á su easa, puesto la mesa, contestó al ~ticial con acento breo 'lue su. Gobierno habia eadllcado. ve y daro: La !>~piraeio. estaba taa bieo :preparadlt¡ Dirá usted al gohe1'llldor ,D.orrego de que á ultIma hora no trataban ya de 06ul' J18rte· del general Lavalle, que rdéntro de un tada. par de horas i,é al l.uette, pero que ser' .A Bosal lIlandó 8Dtoncea un anóoimo 1\ Dr' .acarlo de las orejas del ¡obiwllO de un paJI 1'ego, anunciandole lo que sdcedia. ,¡que ha deshonrado. Al ..islDO tiempo se ~.ia con 801 .mjgo~ Klly 1uieu soatiene que 18s palabras te mas iD:O.uyente~,. para q11e ealos fueraD a1 LavalJe fllel'oll mas gr!l"fu, pero nOlotros F~e, '.,CODvetJOleran , Dorrego de lo Que 008 atenemos a esta vsr810Q que oreem08lD~ pasaba y lo hicrieraa tomar pruota81 meclid.I.t')[acta y mas en armonia con .. ~ ~8l \IV Douego RCij)ió el aDÓQiIQG, elC'll.ehó IÍ 181 J..a.valle. -¡f'" Hl aJ1ll!laDte ~ retiró afuldido C4?D aQuel!a Do!l'ewG ae lenntó pteoipit&damente 1 fué contestaeioD mientras el general que la habla 11 abrir ra puerta del desp"cbo. dado ablndC:naba el baaqaete y baoia echar Rosas S8 lenDtó '1 lo siguió. diaDa, 'preparándolo ludo para ponerae en Los moment~s eraa solemnes y aqllellu mar" espuelas anunCIaban para él el eatallido del El coronel Olavarria salió t&mbien a ponerse movimiento qua tanto temía. al frente de IIGItemid~ .lancerol, coDlp~me- Ape~H hubo o Dorrego abierto la puer~ tidlO a seguir el aovlIDleDto de IU 8blJ¡O y apareol~ en su dlotel el ayudante que habia compañero de armas. conduCIdo la órden. Se ace..-ban Jos SUCIIOI terribles. En el aspecto del jÓTeD podía CODocerse á El coronel Dorrego esperaba en eu deepa o primera vista que era portador d. algo muy cbo la contes~acion d. la órden que habia¡grave. dado , que luponia Hria la presen6ia del j6 I Su semblante lívido hasta lo cadaTérioo, neral L.valle ó del eoronel Olaverria que era acusaba una emocion que no trataba de d ..,..1 de aquel, el gefe mio. caraoterizado. ocultar '1 en la fatiga de S11 respiracion se Btiu que aoechaba los aGQIlteoimielltofl comprendía que habia hecho una jomada vio­ como el tigre que acecha UDa proaa. volvió al lentísima. . Fuerte asi que IUpO que Dorrego habia man -Qué hay? qué ea lo que sucede? pre- dado lJamar al gefe mas caracterizado. gunt6 Dorrego sin darle tiempo" Dada. -Todavia el tiempo, Beño! Gobernador, le Qué han respondido á usted? di~. El oficial balbuceó un momento, secó el l'odemos irnos con 101 elementos necesa sudor que corría por su frente, 'Y mirando " rios juntos para orgllnilar UD cuerpo de ejér- todas partes, dijo: . cito y venirnos sobre la ciudad. -Me es imposible repetir lo que me han Dentt"o-de dOI hora quil' será yo. dema- dicho, repu@o. por SOl términos groseros, pe' liado tard." porque e.taremos prisioneros de ro S8 puede afirmar por ello, que desconooen LaTan.. la autoridad del Gobiemo. -Yo no deserto mi puesto, señor general -Pero qué han respondido á usted? con Roeu, leplicó Dorrego con la loberbia do un cuál de los gefes ha hablado? preguntó Dor- soldado a quien se propone una capitulaeion rego tie una manora imperiosa. . 1I0eb... nOla. . -Ya queel sefior Gobernador lo manda. no Soy el Gobernador '1 Capitan Genetal de l. trepido en obedecer, replicó el ol.cial, balba- Provincia de Buenos Aires, y sabré mantener ciente aún. . mi puesto á pesar de todos y de todo. Hé aquí las propias palabras, salvo un tér- -Es q"•• in ejél'Oitoe no se sostienen pues' miDO insolente. tos, y desgraciadamente Lavalle tiene una di· - Diga uste

suceder., ., . 11 ~len~e, ~ que se hall~ba allí parado, tuvo una Se fué a pIe hasta su casa do la eSI}uma lDSpJrllClOn que crúyo sal vadola. Moreno y Bolívar. y montando sobre un ca· -Batallon 5°, gritó con una voz llena de bailo que babia en la puerta ya prep~rado, energia y de autoridad: batallon, 50! flanco se puso á escape, seguido de cuatro ó seIs sol" izquiel"do! marchen! dados de su regimiento que lo esperaban. ¡ Empozaba la cabeza del batallon ~ obede· DOl'lego quedó en 01 FuerLe rodeado de suslcer aquella voz de mando del gobernador, amigos y Ministros que había mandado lIa· cuando el segundo gafe que venia en el cen­ mar con anticipacion, Y se puso á tomar aqlJ\": tro" con-ióse:i. la cabeza gritando: Has medidas indispeDsables palea salvar la sr ·-Batllllon! por el flanco derecho! guia á iuadon. la derecha! marchen! Se mandó llamar al Fuerte el batallon de El batallon osciló un momento y siguió cuatrocientas plazas quo C()nstituia la guarni· aquella última. voz de mando. cion de Buenos Air~s, y se preparó á todo Para Dorrego todo 3Btaba entonces pero e-veoto. dido_ . Su caballo de confianza quedaba listo en El ejército venia decidido á obededer á sus la puerta .del Socorro, en prevision de cual· gefes y estos dispuestos á derrocarl~. . quíer aCCIdente fatal. En el Fuerte además, no se hablan podIdo Dorrego se dejaba franca aquella salida, reunir aun todos los elementos de que podian dispue!lto á incorporarse á RO¡:ias y venir con disponer y ya era inútil esperados. las armas en la mano á pedirle cuenta á. La· La columoa dió frente á la casa de Go· valle de aquel crimen político, segun la apre· bierno y Lavalle IDandó un ayudante UIClen­ ciacion de los federales. do que, ó se le entregaba el Fuerte ó lo bu· El canto alegro y bullicioso de las golon· ria c(\n sus ~ropas" drinas empezaba á anuncial' rocien el ama· -El GobIerno de Donego ha caducado, necer 'del primero de Díciembre. aiíadiC, ha ~aduca.d~ y cae bajo su propia ver· (;uánto suceso no iba á a1umbrar la luz de ~uenza Y la IgnomID1a q~e representa los trata, I\queUa IÍlañana magnifica! GOS d~ paz. CO!!, el BraSIl. . , . . RecIen SlDtlO Dorrego toda la amargUl"a En el ~u.erte los. oÍlClales reCO!rlan ~us de su Rituacion, sintiendo no haber hecho caso puestos, a~ldos de Olr sonar el primer tirO á los temores de Rosas y su urgencia de pO· que anuncIara e~ c~mbate_ ner sobre las armas á las milicias d~l Sud. De pront~ se ~lDtlÓ" un c~amoreo. espantoso, Así el Gobernadol' Dorrego, convencido que mezclado !,l .ruIdo producIdo. por la marcha la resistencia en la ciudad era una, quimera, de un r~glmlentc de. caballerla. se dirijió ~ la puerta del So~ol'ro, don do mon­ Los grItos de ¡abajO Dorrego! muerR el tó á caballo despues de.decll· á los que quc­ ~rasiJ! viva Lavo.lle! vivan ~OR. uni.tarios! lIe' daban: garon al Fuerte iO una confUSlOn Imponente -Pueden coutest&l IÍ Lavalle, qua yu mo A 16 columna en marcha del general La· voy por quo a@í me conviene. valle se habían agregado miles. de partida' Que 01 hecho d~ abandona.. · el Fuerte, lW n08 exaltados y otros tantos curlOSOtl, de esos importa abandonarle un GobIerno que ocupt./ que poco le Itls supone ~sponer el pellejo, legalmente y pOl' la voluutad del pueblo. -~- Que dentro fle pOco me pODdró ftenio ~ l~l, lo ofre(lio, pero el grnn estadista, como le no desouidado y confiado como me ha toma' hnn llamado dcspucs, fu6 inflexible. do esta !loche sinú con un ejército ton bue: ~e J?-egó de unn manera que no dej6 á los 110 como el suyo, y que entonces veremoll Po) umtarlOS la monor Esperanza, !loy Ó no soy el Gobernador y eapitan General -Rivndavia es 1I~ egoista, dijeron, 'lue do la PI'oviucia de Buenos Aires. ¡abandona á RU partido en el trance mRIS y montando á caballo salió solo en direc- ,amargo! cion á Santa Catalina, donde le habia dudo, No pensemos mas eu él, pues se niega por cita el general Rosos. falta de valOl' para arrostrar la situacioD.

Dos ó tres oficiales ~ él adictos, lo siguieron 1: Aquel eorazon noble y recto, no era com' dillpuesto8 á cor:er BU suerte. prendido por sus correligionarios, quo tan li' Los demás se plegaron á Lavalle ó se ro' Jeramente lo juzgaban. tirAron" sus casas, Una gran reunion tuvo lugar entonces en Lu.Ue se dirijió á la plaza de la Victorill 8an Francisco, cuya reunion, compuesta de despnes de ocupar· el Fuerte, y anunció al los hombres mas notables, nombró á Lavalle pueblo que el Gobierno de Dorrcgo babia gobernador provisorio do la provincia de Bue· caducado y huido. nos Aires, con encargo especial de terminar Que convocaba al pueblo á una nueva elec' en la campaña la obra empezada en la cion, recomendándole desde ya al gran ciu· ciudad. tiadaDo don Bel'nardino Rivud;lvia. El general Lavalle aceptó el Gobierno y UDa comision compuesta· de los miembros nombró al doctor don VlÍlentin Alsina su mas caractel':Ízados del partido unitario, fué Ministro general, que debia autorizar todas I'n busca de este noble patricio comunicán- los resoluciones que fueran del C8S0, las 'lue dole ú nombre del pueblo lo que habia suce por 01 momento, y en virtud del estado de dido y pidiéndole que ocupara el·Gobierno' 1118 cosas, tendrían que ser violentas y cnt~r' Pero so estrellaron con el gl'on caructer de gicas. aquel homb¡e incorruptible. A. LavalIe, como á 108 hombl'es que lo ro- -Jam~s, contestó Rivadavia ocuparé un deaban, no se les escapaba que Dorrego había Gobierno conquistado por las bayonetas sobre ido á buscar la incorporacion de Rosss, con la sangre del pueblo. Icuyo prestigio y elementos propios podía foro Los Gobiernos que nacen en las revolucio·. Dlar .un cuerpo de ejército, nes, son Gobierllos malditos que no vueden Era DeceS8rio 8nular por cou.pleto ú. Dor' dar á sus pueblos mas que sinsabores y ver· rego, y quitarle hasta el reC'lrso de levantar guenza. la campañ& contra la ciudad • . -Su presencia eu el Gobieruo es la salva -Arrastrado por Rosas, decían, Dorrego no Clon del part.ido unitario y la paz pública. ¡se parará en medios, por vergonzosos que Desecharlo es un egoismo, pues e;; el pue-,s6ao. . blo quien á. usted llama. . Buscarán la alianza de todos los caudillos -~ues decid al pueblo que yo DO puedo miserahles enemigos de Buenos Aues, y se seryulo en esta ocasion, porque mi Gobierno vendrán á ayudarlos al triunfo l,ara saquear serla un Gobierno implantado pOI' ht fllerza lal!- e!ltallcias. ;\ un Go.bierno conÍ/'a Il'y y todo del'echo. Lopez, Bustos, Quiroga, y tanto otro ban' Ah! SI nuestros mandatarios y cuciques pre' dido, volarán á la pel·spectiva del saqueo y sentes penearan del mismo modo! aniquilamiento du Buenos Airas, que no co' No los veríamcs subir al podet· sobre 108 mete mas crimen que pagal'les subvenciones cadáveres de los mE'jores hijos de la patria. para que no lo invadan. y!lobre la ruina de todo principio, de lo da Y Lavalle no se equivocaba. ley,? de to~a moral politicn, Sil ódio contra el caudillaje barbaro que se RlvadnvlIl fué incorruptible, ¡lovantaba en aquellR. época, ecalln ódio ter· . No hubo reflexion bastante ni razon 8ufi.·jrible. mente para hacerle aceptar lo que él ClaSifiea'¡ Temblaba al recordar que las provincia!! ba de una. v.erguenzll. eran gobernadas por aquel demento biubaro Los comiSIonados volvieron á la plaza a y se estremecia de cort1je ni peUS81' que á d~y cuenta do I<"! '1 no sucedi~. y Laval!e se i Buenos Ai~es p,!~ia cabe.rle igual suerte. VIO e.n I!, necesldbd do asum1\" el GobIerno l' Lavalle dlsolvlO la LegIslatura y todo po' fI;OVl1orlO, mientras el pueblo nombra.b8,de~ que emanara de Rosas, toda autoridad (:.1 que nias confianza y simpati:1S le mt'l'e'!que emanora de Dorrego, '1 !!lC preparó á ClPra. . salir c. campnila, I.as comllliones volvi~ron á vel· á Rivado visi -Primaro concluiré con Itosos y Dorrego, aquella, noche, ~on. n~evlls instancias para/ Ll uesaquele8elcaudillo que quierctreparao80, que 8l;4C (ltsm el (yoblNnn 1111(' el pUf~hlo bre Buenos Aires con el elemento mas bárbaro. -40- E1l seguida cO!ltinullÑ cbn todos lo. Otrol, Por 'Que La'V.lle ademt.. del Mio plofun­ hlsta concluir la 'IInta etUzada qde contra do que por eet08 sentia.. tenia el mayor de." e1lns me he propuesto seguir, precio por eea. m08ltS de Raacb08 ,. proyin' EIl08 DO podrAn nUDca reunir mas quo ban- ciaDos,.a. quieDes oonsideraba iD19rviblea 00" dldo8 '1 mcmtaraces. mo mi 1011111 y macho mal oomo milicias sin y vive Dio. que C01l un 88culdron de oo' o~g8nizacioD ni dilOiplioa, raceros.. ó con el regimieuto de lanceros del El general Ju.. LavaUe se Pleptirllba, bravo 'Jlavarria, hay para pasear toda la pues, a una gran campafia. pero qae erei. Repdblica y concluir ccn los caudillos. fácil y de rápida terminacioB.

La s&n¡;re de Dorre¡;o

Adónde habia ¡do Dorrego en su fuga pro' DorreA'Q oreia contar e01l1& lealtaa de aqueo cipitada? na tropa, pu.. el úoico elemento de du... " Oon el alma ne!la eJe amargura y amena fianza que babia 8Iltre ella era el eor01lel ,&odo de muerte al que llamaba un ingrato, Rauch, a quien el mismo Dorrego aaparó del dillpar" buscando la direecion de Santa Ca mando poco tiempo aotes de esoa IUcesOB. talios donde creia encontrar á ROSIII. Rosas no partioipaba de Mts creencia de Pero ROlas no elltaba aUí.. Oorrego pues &ostenia, que aunque separado Habia seguido hasta al Monte y pueblo de Rauch, los oficial81 y la misma tropa, serian Lobos, donde tenia grandes elementos que leales a aquel gefe, 6 irian donde él leslla" reu nir. mara. De am habia enviado 8US chaques a 108 Pera mayor confiaDA, Donego habia nomo Cerrillos, mandando que le incorpor~ra~ IUS¡bradO gefe de aquel cuerp~ I!l corone~ AplJ~1 bravlJs oolorados y 101 numerosos IndIOS de Pacheco, cuya lealtad creJa lneorroptible. que dispollia. . Be mandó, pues, aviso & ~8e gere, para que Rosas temía, y con razoo, en campo abier' 8e incorporara con 101 Húsares al grueao del to, a 18S tropas aguerrid.. y habituad.... al ejército. triunfo, de qUf' disponia LanUe. Dorrego llegó a Santa Catalioa, donda 110 Solo reuoiendo muchos miles de gauchos halló a Rosls como lo e.peraba. po.:fria disputar el terreno a Lavalle, si este, Pero en cambio eocolltró una esooltaque como lo presumia salia a perseguir a Dorrego le habia dejado don Juan Manuel, cayo ofi· y obti~8rlo a la batalla. dal le et:1plicó 108 trabAjos que aquel habia Con Dorrego Rosas jugaba allí su última ido a emprender al lrlonte y al partido de carta, todo su trabajo de veinte añol al ser' Lobos, vicio de su 8U ~ñol! de ambiciono Dorrego ya hemos djeho que era un mili" Trhmfante Lavulle y 3JM)yado en el ejérci' tar bravo y do un carácter firme.­ to del Brasil, el partido federal quedaba de' Habia salido de Buenos Aires dispuesto a espitado, . . mover la campaña para disputar el Gobiemo Por estas razones y con una Ictividad pasa á Lavalle. mosa, ROlas se multiplicaba p.;ra reunir 8US Teoia, pues, que proceder con cautela p'ra gauchos y sus iDiio. y esperar á Dorrego con no caer en manos de la reTOllicion. un ejército numeroso. Para no llamar la ateaoion despach6 .que" El auxilio de 8aDts'Pé en aquellos mo· na escolia, coo órden de iocoporaee a Ro· mentos· amargos podia tener una influencÍa sas, y prevenirle que pronto eetaria a su decisiva, y Rosas mandó chasques de toda su latlo. confianza al general Lopez, para que se pu' En seguida se dil,jjió al rancho de unos siera sobre las armas é invadiera a Buenos paisanos que conocja, para meditlll tranquilao Aires en apoyo de Dorrego. mente su plan de cam{)aña. lnvadioodo SantaoFé por el Norte, LavaUe En Santa Catalina "no se conocia aún el tendria que fracoionar 8U ejército, y debilitar· movimiento que habia estallado en la ciudad, se por consiguiente. así es que á. DorJ'ego le fué fácil inventar ED Areco estaba además de guamicion e] uo pretesto para disfrazarse yesperar la !lO- regimiento de Húsares, formado y maodado uhe, • por el legendario fJoronel Rauch, de quiuo 1! o se~ja e8t1'8ft~ que algunas partida. tevo­ DOI ocuparemos mas adelante, 1uOtOnarl8s recorneran Jos pueblos de cam- -41- piña, 11118 ~mediatos y era preciso evitar Era indudable que el caudillo Lopez de por 100m.diol posible., eaooDtrane con una 3anta·1!'é, vendria en apoyo de ROI88 '1 flBta ae enl.. certeza nenaba de placer al bravo Lavalle, Cuando las primerll sombras de la noche pues le brindaba la oCQi~n ~e conoluir.u& se utendieron por el campo, el general Dor· vez por todas con JOI prlDClpalel oauddl08 rego, disfrazado de pobre paisano y complet~· a Quie~es por prinoiplo detestab!i. mente solo, montó á caballo y tomó la di Y mIentras hacia IUS preparativos de mar· ncion de Cdllelas, donde contaba con algu· cha, se le oia repetir su fraae favorita de: nos elementos. -Con quinientol de mil ooraceroe conolu· Eu Cañuelaa, donde lleg6 '.1 dia siguiente, yo yo en UD dia oon todos 101 oaudillos de ya mas tranquilo y solo conocido de algunos la República, si se me p~8ent8n juntos. parciales que lo rodearon, escribió al caudi· El general Lavalle mandó órden al gene- 110 sutlfemno Lopez, dandole cuenta de lo ral Paz para que se moviera lobre Buenos sucedido,y á la sala de Representantes, anun- Airel con el segundo cuerpo de ej'roito que ciando que iba á levantar toda la campaña a sus 6rdenes habia quedado en Montevideo. para venIr á castigar aquel crimen político. E~ lepida delegó el mlndo eu la. pedOna El general Rosas, agregaba, est' ya al del almirante Brown, '1 el dia 1) salló de l. frente de un numeroso ejércitos así es que ciudad, con 8U divillion oompllelta de mll dentro de pocos diae tendré á mi lado mas quinientos hombres•. de cinco mil hombres. De esta division formaban parte loa u.- Deyorando el despecho ~ue sentia y domi· cientos lanceros que formaban el bizarro re­ nando su sed de ven gaza, Dorrego descansó gimiento 16 del eoronel OlavarrÍA, loa eua­ un momento en Cañuelas, y de allí S8 diri· trocientos colorados de las Conchas manda­ ji6 al campamento de Rosas. dos por el coronel Videla y un escuadron de Solo entonces permitió que lo acompaña· cien hombres a las órdenes del coronel Ola' ran las miliciaa que se hablan reunido á su zabal, Manuel. llamado. Todas estas fuorzas eran de caballeo•• Cnando Dorrego llegó, ya Rosas tenia reu· Tres dias despues de este, marcha, Lavalle nidos UDOS do!! mil hombre;!, esperando que tuvo conocimiento de la sitoacion del enemi­ en dos 6 tres dias mas Si le incorporarian sus go, y de los refuel'zos que este esperaba del colorados en número (le cuatrociento8 á. mil, Norte por Slnta·¡té y de los Hnsares de y como quinientos indios de pelea que tenia Areco. . reunidos en los Cerrillos.. A estos últimos en~ó un chasque en 110m· Era la primer vez qne ROlas mostraba en bre del coronel Rauch, para que S8 incorpo- todo su apogeo el gran prestigio que tenia rara a ellos. . en la eampaña. Este chasque debja ponerse en contacto con Inoorporado Dorrego, Rosas le entregó to- el comandante Escribano yel mayor Acha, du las fuerzas de que disponia, empezando segundos gefes del cuerpo y leales al coro­ a cambiar ideas sobre el plan' seguirse. nel Rauch. Rosas era de 9pinion que, inmediatamen- El general LavalJe marchó ~Dtonces á co' te de efectuarse la incorporacion de las de· tocarse en el pn.nto medio entro el Node 'y ro's fnerzas, 8e corrierao al Norte, donde Dorrego, cortando aeí a este su~ comunica­ quedaban maa próximo. para recibir el au- ciemes mas importantes y hostiliundolo pira xUio que traeria Lopez en persona. obligarlo á la batalla. Dorrego era de opinion de mandar suble- Sio embargo, Lavalle quiso haC)8r el úlU" var el Norte coo algun gefe pJ:estigioso, el mo esfuerzo para evitar que se demu:ia"a coronel Izquierdo por ejemplo, dejar 1\ Ro- sangre, y al efecto envió un comiaion.aQ al saUn el Sud, y tomar él el centro. campamento de Dorrego. &te no era un mal plan de campaña, por Este comisionado que era el her6ico coro­ que cualquiera de estas tres divisiones que nel La Madrid, llPTaba instruccioues de o&e· e~contrara. Lavalle, podia hacerse perseguir cer plenas garantías a Donego 1 8ua trop~ mIentras la mas fuerte de las dos se dirijia si se rendiliB a discreoiou. . a ocupar la ciudad. De otra manera, Joa atacariia coa iodo 8U Dorrego estableci6 en Lobos Sil cuartel ejército al dia speate. gen~ral, esperando mas fuerzas, y los acoo· Dorrego y ROlas teaian mas de tres mil temlentos que no podian tardar. hombres y una vusuarclia de indio, de pri- Impu88to .1 general Lavalle de los plaQes mer órden. de Dorrego por .la. misma nota. que este pasó Aunque las ~opq de Lavalle erao gur­ a la .Cámara, deCIdi6 po~erse en campaña io· ridas y bravas, oreyeron que tenian ,WiDicm: medlatamellte~ para batIr a Donego y Rons tes elementos para resi,tirlu y aúD vep- antes que pud:erau reunir maa gente. cedas. . -~- AlJi ee que Dorrego reapondió á aquellas Hombro Tivo y gaucho, habia lu~cho Dlon­ propOlicion~9 con toda la arrogaDoia que le tar ~quellos soldados ,. todo evento, en loa era IU8C8ptlble: me.lores caballos del ejército. -Bs él ellublevado, dijo, y él quien tiene Así iba seguro de poder ponene en salvo que pedir induljencia al Gobierno legal con' 6n caso UlUY Jlosible de un mal encuentro. ' tra el cual le tia levantado. Lavalle, Megnn calculo8 debia haber mar- Esto pasaba el dia 8 a la Doche. chado á Lobos, pero. podia habia dejado allí Terminada su comision, La Madrid regre' algunas fuertes parttdas que ocuparan á Na- só al campo de Lav,Jle, pues nada le que' varro. . daba que hacer allí. No tardó mucho en tener noticial ciertu Bosas le proporoioDó un baqueano, baquea' del general L,,:valle. DO que tenia órden de perderlo pues de A penas habla andado dos leguas preparin­ este modo retardaba sa. llegada y ganlban dosa á ,:ontram~rchar en la seguridad de que tiempo. no habla enemJgos, cuando se enlartó, con la &Ias y Dorrego combinaron el plan que oolumoa del genenl LavaBe, que venIa for creyeroD mu seguro que fué correrse al zando la marcha. y. á cuya cabeza marchaban Norte, bUlcando la in~orporaoion de Lopez, 108 lancero~ de Ol,avarria. que se8un su respuellta .debia ya hallarse en L~va\le lecon~cló en el acto la tropa, y marcha." e~v~ó á Olavlt.rna con unescuadron de su re' . " glmlento para que los batiera y descubriera . y aquella mllma noche se corrIeron precl el campo mas adelante. p~tadamente a Navarro, donde llegaron el El entre tanto con el resto de la columna dJe 9. • siguió 0n marcha forzada, presumiendo que De este mOdo creian evitar la batalla, pues el ~jétcito de Dorrego no podia estar lejoB. era seguro que Lavalle, al recibir la res' Cuando Ros8s divisó esta columna hizo al" puesta 9ue al dia Biguiente le diera LI Ma' to, y convencido de que era todo el ejército drid, irJa a enoontrarloB a Lobos. de LavalJe, mandó dar media vuelta, y se Pero esto o~louio Icssalió fallido, pues el puso en completa fuga. objetivo del general Lava1le era precisamente . Olavarria, con su entusiasta 8acuadron, impedirles el paso al Norte. . cruzó sobro su espalda· como una tormenta, y Bn cuanto 8e le incorporó La Madrid en 1., empezó a. lancear la descubierta, con todo el mailana del 9, pues la noche anterior anduve> brillo de aquella tropa 80bresaliente. perdido, La\ alle decidió marchar á Navarro, Cuaodo Douego vió Uépr tí Rosas en para ocupar el pueblo sacando algunol ele' aquel espantoso e8tado de dispersion, formó mentol y enviar dcscubiertas en todas direc' sobre tablal una línea de batalla, pues el ciones para asegurarse del punto preciso combate era ineludible. que constituia el campamento del coronel Segun observ6. la fuerza que lo peneguia Dorrego. no podía ser otra que una avanzada, y antes Dorrego empleó en Navarro todo el dia que llegara el ejército de Lavalle, tendria 9, en dar tleSC:lDilO a 8U tropa, y carnear en tiempo de prepararse. abundancia, puel las marchas que pensabtl Dorrego tendió su línea en los campQ8 de emprender al dia siguiente iban á ser pe' Navarro, dando las espaldas a UDa laguna, DOS88. la izquierda y apoyada la deracha en un Lo casual de estas dos maniobras, iban á ~r8n talar Ínmediato á la estancia de Al­ hacer que los dos enemigos se encontraran meida. cuando meuos lo elperasen. Componían la izquierda de la linea. cuatro- Al .. manecer. del 10, Dorrego despreDdió "ientos indios chilenos del cacique Venan­ una fuerte deBcubierta que debia mandar Ro' cio, doscientos cincuenta pampas de Mariano SIS en persona. Rusa8 y ¡)arte de 108 colorados, toda esta Penlaba moverse en el acto y como buen fuerza á las órdenr.s de ROlas. militar queria teDer la certeza d'e que el ca' Al centro habia dos piezas que so habian mino se hallaba espedito. traido de la froat.era, servidas por cincuenta lIientras s.liaRosas, se quedó Dorrego oro tWlllbras á las órdenes del teniente Parodio ganizando la marcha y h.ciendo montar los. La dt'u~ch8, mandada por el coronel Dor­ cuerpos, con caballo de tiro, regÍ), la fOl'maban ciento cincuenta ~Ianden· De este modo al ~egreso de Ro"s, ¡:odria gues, maodados po~ ,e! mayor EsplDola, el pODerle en marcha Inmediatamente. n'gimiento 10 de mdlCJa8, de 800 pl~z.8, ., Bosas llevaba cien hombres elejido~ de t"1 20 qe 900, por los coroDel~s IzqUIerdo '1 8UI mvjorel colorados y cincuenta iodio!! Pinedo. , baqueanoa ., con 108 que podía contar ciega- Lavalle se presentlSba y!', traDqutlament.e~ ..nte ea.un momento de peligro. 80n su bizarra Hnea allí dIspuesta. ,.- 43 "..

A l' izquíerda 108 regimIentos 10, 3~ j' Entre tanto,. la dereoha de Dorrego. al dar 4t:>, mandados por 108 coroneles Vega, Arta· vuelta, 8e habla ~Qoontrado con el talar lla yeta y \ledina. e81!0lda, que ddicoltaba completamente la A la derecha ti\. regimiento 17. del coro- hUIda. Del Suuez, que' se le habia incorpo!ado, el ~lIí empezó. en.tontea .la verdadera caraio brillante r('lgimieoto 16 de Olavaw8 y Jos certa, nna carnlcerla J:1orrlble. eonell'Oll de La"aUe. . Dorrego, comprendIendo que todo era iaú- Eo el centrO Y un poco á retsgllardia ve' &11 por aq!1ellado, ~Dd.i6 IU mu.da. deselpe· man 108 colozados de las Conchas maDdadoR rado y VJÓ que la l2:qulerda le sosteDia aUD por el Coronel Videlo, que en número de con eltra~? brio. Quinientos hombres formaban la reserva. . Se como á aquel lado, aunque compreDo Lavalle viendo que Dorrego tenia formada Ihendo que todo e8taba perdido, é invitó' IU línea, signió marchando sin alterar el ócd~n B08as qu~ se retirara á 'as Sa~ada8, donde de la SU,8, y como a cuatro cuadras de dls' aun podrlan rehacerse con la nlcorporaeioD tancia. lanz6 su izquierda lobre la derecha de los húsares, que no debian tardar. del coronel Dorrego, que mandaba personal' -Es ~ejor huir á Santa·Pé , buscar la iu· meate. corporaCJon de Lopez que debe tener un fuer' Bl choque fué rudo y terrible. . . te ejército reunido. En vano el valiente Dorrego se muUJph -Yo no puedf> abandonar la Provincia de caba. en vano alentaba a sus soldados con la q1le soy Goberoador, contestó Dorrego, OOD palabra y la accion, en vano hacia esfllerzos Ilna altoneria illfinita. desesperados, no pudo contener el empuje de -Me reharé con los húsares '1 triunfare 6 aquello8 cuerpos, que chocaron de un" mane' caeré con ellol y lerá lo que DIOI quiera. ra terrible. -No tengo mucha conñanza eo 101 hÚ881'88 Su derecha fué envueUa, despedazada y porque Rauch e8tá con ell08, dijo Bosal con obligada. a dar la espalda. su mcreible sagacidad. Las.dos pi8'1Jl8 de artillería jugaban entre· Ele cuerpo pertenece á Rauch, hasta el ta<o con un éxito feliz. lobre la derecha de último soldado, como mis colorados á mi. avalle. . Si usted se va entre ellos, mucho me temo Viendo esto el denodado general, resolVIÓ que lo vendan y lo entreguen como á nD cargar lobre las piezas y lobre Rosas, para Cristo. de este modo apagar los fuegos de ·las piezas, -Tengo conñanza en BscribaLo, y sobre é impedir que Rotas protejiese a Dorrego~ todo en Pacheco. . Con este propósito lanz6 su a"recha sobre - En Pacheco no digo que no. pero Pacheco la izquierda que mandaba ROlas y cincuenta nada podrá. El mandd el cuerpo aparente' corlceros sobre aquellas dos piezas de arti' mente porque esso gefe-pero en un caso de Ileria. conflicto, los húsares seguirán mas á IUS vie' El teniente Parodi 8e sostuvo mas de cinco 'os oñciales.. . minutos haciendo una resiltenoia heróica y -Bon quinientos 101dadOl de primer 6rdea, disputanflo al sable de los corftcerott aquell08 que es mas de lo que necelitamol para formar dOI cañones que tanta r.lta hacian para el otro ejército. é~ito de la batalla. -Pero son loldados que en una circunst&n· Ptiro, cómo disputar el triunfo Él soldados ei_ darl" S8 pueden convertir en otro' taotol ensoberbecidos con su valor y RUS triunfos? t!nemigos. Las d08 piezas cayeron en poder de aqu~' -Suceda lo que Dios quiera, cstoy resuelto llos leones, y flleron arrast.radas h3':1tB el a hacerlo asi. centro de la reRerva, _ -Pues ¡O me voy 8 SRnta Fé, dijo Rosal~ .Olavarria y 80arez cargaron sobre las 10' de donde vendré 8 protejerlo CUD,. un 8jército diadas de RosllS con aquel brío y denuedo fuerte y bien orgnni~ado. que dan la confianza segura del triunfo. Me felicitaré de IIt-ger 8 tiempo y de qce 1011 ~08 indios chilenol ech~ron pié á tierra, hÚllares no lo hayan v~ndido antel. mIentras que 101 de Mariano Ros8s y los Dorr~o sonrió bondadosamente ante tanta colorados se eltendian en una larga ála, ag j' de!lConfi8nzB yeltrechó la w;nano de R08as. zando todo el ingenio de IU estrat4§gia. Este que tenia preparada con anlicipaoioD ~Dé aqot. donde se trabó el combate mas so tropilla, en prevision de UDI desgracia, rjelo y refiido. montó 8U mejor caballo y ~uido de ... Ol'lvarria '1 Su.rez se multiplicaban en 01 grupo de soldAdos tomó háala BOj~ bullOaB­ elltre"ero~ atendiendo á donde el combate do el c:lmino de Saa N-ioolá .. .,. 8C?Stel!jd~ con menos vigor. pero aquellos Dorrego se retiró del OlImpo de batalla, ocm ~,tditoe lDdl08 cerraban 8US eoormel ctU1'09, lJa eompailia de Blandengues, en nmbo , dl'!JIUt5E1tdR á no alJsodotrar t'l terren0. .las Satadas, cmn'tTe estaba thJ hl.fr11T&lft) dft -44- Lu.i8 y dondo IUPOI"I '1 , Facheeo oon 101 Ambos eataban pálidos, trém~ como hÚla1'll. dominados por una impruion fuerte y ea­ El coronel Dorrego iba ~lleno de vergüenza traíla. y .margu....· -Qué es eso? preguntó Fac1atco, polliéa- Humillado:como GoberllHOr de BUlnos Ai- dOle de pié. r":' como cefe del ojéroiflo. babia sido .ban -Qué sucede? esclam6 Doaeco. ~üa.' dondo por quitA Gr81"6 .haata ent6nOfls 110 dOte, demasiado tarde, de 101 _orea de amiao mal leal. &0181. Y~apresur.ba la marcha hiciala casa dl.u -Sucede, oont.. t6 iOlOlentemeate &crío hUlRano, busoando un doble consuelo. I$ano. que son usted..... priaionlrCMI ., qUI UD peo.no noble y cariflOlO donde derramar no deben haoer r ..il~cia. la)pe8a.... que lo ahogaba, '1 1Ul auerpo que Dorrego y Pacheco eoharoa. mano' 1118 podi. aer el plantel de un ej4Srcito triunfante. e8padu. pero Escribano saltO basta el mDtel EllO llelÓ el Gobernador Dorrego "la es' de la puerta, donde se dOhlTO diciendo: taDcia do 811 herm'D~ donde tom6 algun des' -In6til es toda resistencia. eaDlO 7 .. alJun eoJlluolo. Si ustedes no se entregan los' hago fu. A las dlez de la noche se IJIISO nuevameut silar. " ea marcha. aoompailado de su hermano. y mOltró del lado de afnera de la puena bananao la ineorporacion de Facheco que cinouenta húares formados ' DO debia andar lejos. Cúmplase 1 ... 1 "..... aO D:-" d·· D Efectivamente, al poco andar, 108 dos her- - a o unWIU e IV"! IJO or- manOl Ilaoiu altea ..te el numeroso '1 aguer- rego. _ rido regiaaiento de húsares, que era toda su Rosas ~eDla razon, y yo v.ania Ii enaartarme e.peroa. e!ltre traIdores, cua!ldo crela venir entre oa- Regresaron' lo de dOD Luis y alli tuvie" claIes de honor y c11~1lO8. ron una QODferG!lcia con el ooronel Pso -Entr~arse es ll' la muerte! repuso 01 checoo cor~nel F8cheoo. -En los hÚBlrel ..~ tI'li Rlvacion, dijo -Sea Jo que Dios quiera. esclamó, diri- Dorrego. gi~Ddo.e a. Escribano y á Aaha. Tiene ulted plena confianza en ellos? Señor. traidores.. 801 8tI priaiOllOlO. -.Es tropa IDa, bien disoiplinada 1 muy y entregó IU espacIa. moral, respondió aquel gefe. El coronel Facheeo lo imitó y los d~ ~erao. contar con ellG~ como cuenta bajo segura custodia, flleroD OOD.daeidOl al cOllmllo V. E. campamento de loa húsarea, desde dónde el Estaban eombinudo el púóto , doude de' coronel Escriba!l.G mand6 , Lanlle á darle bin dlrijiree, ollando entraron á la pieza cuenta de lo que habia sucedido, para onm· donde estaball convel'lando, el comandante plir las órdenes que dé aquel gefe recie E80ribano y el malor Ach.. biera. '

buando DOHégo ., ~OI~ Be retiraron del pira abando~ar el campo lo mu enteros que campo do bataU. la lZglllerda ele Dorrego les fllera pOSible. alln se. sostenia, luchando Con un encarniza' Lavalle. al verl.oa fiaquear 101 hizo cargar miento salváje. vigorosa ., decididamerate por doscientos ocr LOII indiol w.puiaban el terreno con in' raceres, que 108 echaron á la lIIuDa, donde creible brayura; pié tÍ tierra F diflpuesu, , los esterminaron por completo. ' no .. bandouar el eamI '.' haata DO haber caldo Loa indios de V.811.oio iJu~aron toclal el 1WtiGlo. .11f, enrojeciendo las' -aguas fangoBU C!Ie la Pero euaado echaron de meDOS la voz del laguna. caudillo, cuando OOlDprenCÜeroll que Rosas Loa de :ManaDO ~_ mas .ivos , .. habia huido 6 eaido entre loa cadáve'l'8I, eme p.qu~.n08 del campo, .1I~que con BUa••• ped .. apoderane de elloa nlla gran d08lllGra' pérdidas, loparoII dlHlBtD8l'11e y ...... c1er lisacion. _ la fuga~ . Trataron entonee! de combatir en l'etirada, El trlunfo no podla ser mas oompleto. ; Lavalle quedaba dueño del. campo, "9 habia que Lavallc •. s.o~reponién.dose 8. todo. dec!dió destruido aquel primer ejérCIto, .qued~ndole hacer. el sacrlficlO que le lmpOllla ~. PAriuio, la conviccion do que toda l~ realstAJnola que alumlendo toda Sil negra respoDlablluI~. podiao oponerle eataba yenclda allí. Porque J uag Lavalle era un eapir..tu tao Campó con sus fuerzas en el mismo oampo g.ran~e y Doble, qu"e quena descargar a la oon­ de batalla, y 4e1preodi6 'Olavarria p~a q.ue CIenCIa. de sus aUlIloB, de nn acto que él mi.­ lo recorriera averiguando lo que habla Ildo mo cahficaba de moD.trU080. de Ro88s y Dorrego. Lavalle despachó un chalqne para ql1e liD. Pero ,. Rosaa estaba á muohas leguae de ¡lérd!da de tiempo alcaDlUa al coqaaudaate distancia, y Dorrego ya sabemos la 8uerte EscrIbano y le ordeDara cODirllllarchll' halta funelta que le habia cabido. su campamento de Navarro. Ka - la madrugada del dia 11, el general Cuando ~l ~oronel Dorrego le apercibió de Lavalle reeibió la comunicacion-en que se le aquell!l0vlmlento da contramarchsl no tuvo anwaoiUa la prllion de Dorrego. duda n~ngl1na del fin que le eap-.•• -Que marche inmediatamente á Buenos -Qu~eren mancharse con mi "Dgre, dijo. Aires, ordenó y lo entreguen al GolKlrnador Lo llanto p'or ellol, porque DO p6dria. le­ d61~do. vantar el cahftoativo de asesinos con qae loa BlCribano y Acha, con 105 pri.ionero. y marcara la historia. seguidos de los húaares, e~prendieron i~me' ~soribano forzó la~ha euáato le fa6 diatamente su marcha hác19. Bueno. AIree. pOlllble y , la Madl1l26da del 13 se hallaba Luelle, cuando dió eal 6rden, envió. di- en el clm~~ento d61 general Lavalle, 0011 fel"8lltes chasques, anunciando a sus amIgos liS tres priSIOneros. y cabezas del partido unitario, que la guerra ~l ¡ud.. iba , recibir los treinta dÚleros de civil habia tocado á su ftn, oon el triunfo de su lDfamial Navarro que habia oOllBiortado la dispenion Al sentir Lavane 1& preaancia de Dorrego del ejército, y la toma de Dorrego, que qui· en su campo, se conmovió fuertemente_ taba á los federales todo pretesto de hacer Aún mantenia el1 8U espíritu la fuede lu- la guerra. Icha de lo que él creia un deber ineludible La cabeza de Lavalle era un dos. :contra 808 sentimientos. No le atrevia a tomar por sí determinacion '\ Se negó " -verlo y 10 mand6 condCleir al alguna, y enviaba 8U prisionero , Brown, cuerpo de guardia de los lallcert)l de Olavar' para que este, como Go~ern~ulor delegado1ría, obrara segun su recta ooneumCla. . Su hermano rué puesto en libertad ca. la En cuuto se supo ~ .Buenos AIres. por órd8n de alejarse de alli, lo mismo que el aquellos chasques IR: p~sIon de porrego, los ctronel Paoheoo, , quien le intim6 bajar in· g~fe~ del partIdo .unl~arlo se pllBleton en me- Jl\ediatamente -á BlleD~ Aires. Vlmlento y en agltacI~n. LllvaUe ahogó SUB séntfmientos, 8e lobre· ~ara ellos era preCISO 9ue Dorrego desapa- pUllO B. BU cornon y mand6 un ayudante COD reClera de la elten. polf~ca_ .. . el funesto menlaje. De otra ma~era el partido !1nitarlO ~e .vena -Dice el general Lanlle que se prepate amebar.a40 s18lDpre., tendria que 'VIVIr lu· ustecl para ser fuailado dentro de dos hora. chall~o eternam~te. Dorrego ni se conmovió siquiera. A.aí lo comunIcaron.' Lavalle,. dánd.ole. a Esperaba aquel acontecimiento, dude que enteD4er que la ..lvacIOD. del partido unItario foé preso, '1 la noticia DO lo sGrprenclia. estaba en la muerte de Dorrego. p t d l 1 L all _ Brror, funesto error de que mas tarde ten~ -. regunte us e a .genera ay e, res· drlan que arrepentirse! pondló con una seremdad de espiritu que LavaUe empezó a reci bir primero estan co. probaba elocueDte~ente el herm080 nlo! de mwcacioues, ~ la visita maa tarde de 101 que estaba dotado, mi.mos que tle las remitian. . Pregunte usted al general L .... a.lle, que si el Su cabeza era u~ vol can donde se revoh'Jab l~perto de las 1~1es ha muerto ellla ~rovin­ por un lado sus deberes como miembro del Ola de Buenos Alfes. partido .q,,:e le pedia la cabeza de Dorrego J Lavalle- sintió _toda Id. .rudeza de aquellas 8US aentnmentos nobles., cabaUerescoa. palabras, pero IU reeot.uctton era inquebran- El aspecto del ~obeÍ'bio general LavaJle, table, y no era con palabras, eOmo aquella no era 8ntoUeeB el aspecto de un general con lo que babia de cambiane, mas ooodo vencedor. S8 hallaba rodeado de personas qoe lo em­ :Parecia mas bien un militar bajo el peso pujaban en aquella fatal pendiente. de una derrota, ó un hombre golpeade por Donego, trataudo de aprovechar aquel pla. la mas cmel desventura. zo fatal que se le daba, pidió útil., de escri­ Tanto le hablaroo "1 tanto le escribieroD, bir y redactó algunas cartas, entre eU .. una - il1 ~ uUlo contt'nido cS verdaderamente conmo· oticial á vendarle los ojos, pero el coronel vedor. Dorrego lo rechlz6 oon un adem'n sereno y Es una tierna olejia, cuyo original se con hasta cariñoso. 8cr\"8 aún entre 811 familia, y que hacem08 -Es inútil seilor ofioial, le dijo. conocer hoy de nues~08 lectores, como una Los hombrea como yo no tememos &. la prueba de aquel espintu sereno: muerte. "Mi querida Angelita, d.ecia. Quiero mirar vuestr08 rostrol hasta el últi- En este mClmento me IDtlmau que dentro mo momento. de una hora debo morir. . . .. La tropa estaba. conmovida y en los miamol Ignoro por qué; mas la Provlde~~la dIVI- soldadoa que debl8n cumplir la órden le na, en la cual confio en este momento erítico, notaba un estremecimiento enterneoedor.' asflo hl querido. ~e comprendia que los ~iradorea trataban d. Perdono " todos mis enemigos y suplico' eVitar el encontrarse con IU mirada Be­ nüa amigos que no dén raso alguno en de- renR. lag~vio de lo recibido por mí. Un momento despueB, se retiró La Hadrid 'Mi vida: educa a es. amablel criaturaE. ~e~pue9 de .hacer cambiado con Dorrego IU Sé feliz ya que no lo has podido Ber en ulbma lonn8a. compañia del desgraciado. y ,:1 ponene el sol de aqu~lla tarde del.'" De 108 cien mil pe808 que me adeuda el de DiCiembre, se pUBO tamblen para la nas Estado en fondo. públicoa, 8010 recibir'. las del ooronel Dorrego. . .. dos tercerlUl partes y el reato lo dejaraf! al 80nó la voz de fuego á la que lIgUU? u~. Estado. de8carga, y !,quel hombre de eatraordlDarlo ....:"d ' el h f 1 temple cayo para no vol vene á levantar JILl '!l a: !Dan ame acer IUlCfS es. y que mu. aean BID .f~UBtO: otra prueba de que muere Lavalle quedó aturdido. en la rebg¡on de IUB padres Parecia que la vida de Dorrego al apagar- Tu- se. hubiera llevado consigo algo de BU propia Manuel Dorrego. ~~ lexistencia. En seguida de concluir su correspondencia, ~ Sin embargo y ,con aquella &:landeza de y viendo que el momento fatRI 8e aproxim8·.sl~a que era en el un dC?te espeCIal, y l?ar8 ba, mandó lt.llaf!lar á s~ Bn~uo amigo el levItar que ca1~rasobre nInguno de SUB aDUgoI coronel La Madnd, á qwen pidió lal diatri- la reBp~n~blhdad de ~quel acto, se s.el!tó á buyera por la direccitn de I08lObres. 8U e8cn~ono de c8!DP~a y paaó al lbnlstro -Deseo, agregó. que lea usted quien me de Goble.rno la Ilgule~te nota, q~e es ,un acompañe hasta el lugar de la ejecucion. compendIO de aquella Jornada terrIble. Aquella foé una dura prueba para· el no- Hé aquí su testo: ble militar, que estaba ligado ~ Dorrego por us ñ M·' tro· una antigua amistad y un aprecio jamás al- e Ol 1018 • terado. Participo al Gobierno Delegado que el co- A I~ hora señalada se presentó un oficial, r~nel don ~anuel Dorrego, acaba de ~er. fa­ anuncIándole que el momento Bolemne ha- sIlado por mI órden. al f~~t~ de 101 regtmleD" bia llegado. tos que componen ~8ta dIVIBIOD. Al mismo tiempo le rogaba subiese' UD La historja.. señor }[ini8tro~ juzgaré impar­ carruaje que lo esperaba ,para conducirlo al cialmente si el corouel Dorrego ha debido siti~ destinado al último Bcto-de aquella trae 6 DÓ morir~ y si al sacrificarlo a la Mnqui­ gedla conmovedora. lidad de un pueblo enlutado por él, paedo -El inútil, dijo Dorrego, aiempresonriente, haber eBtado.pos~i~o .de otro sBDtimimieuto y emprendiú 8U marcha á pié, con paso fir· que el del bien pubhoo. me, ade~án altivo. Qlliera pe1'8uadirle eltpueblo de Buenos Aj' . No podla sospecharle que aquel hombre rea, que la muerte del coronel Dorrego, es el fuera un condenado :So muerte! sacrificio mayor que puedo hacer en BU obaeo El ejército de Lavalle Be hallaba formado quio. f:D ~uad:ro, esperando al reo caJa ejeoueiOn Saludo al aeiior MiJliatro COD toda aten- debla preseJlClar. cion. Llepc10 .1 sitio fUDedo. pe le aeere6 un' JI6CJ,. Ltwtalle,H - El coronel Raneh

El cONoel dou Federico Rauch, era unleus órdenes, al vedo en alguno de aquellos diatinguido oficial del batallon 10 que habia¡forroidables entreveros. venido emigrado junto con otros frauceses de Pero se habiaelloontrado aquí con diticul' 'Suma distincion. tildes insuperables para otro hombre de menos Deeeando trabajar para hacene UDa posi-1carácttif que alsoyo. CiOD,')efué al campo, aprovecbando una boe· l En primer lugar tenia c¡ue prestar SUB ser' na propuesta que 8e le ofreció. vicios ea unaarma desconocida par. él: la ca" L~os de la ciudad, librada como estaba la balleria. campaña al malon impune de los indios, los Si <:81& ca~al1~ria. hubiera sido como la ca' pobladores tenian qae hacer la defensa de baIlerla de LlgDl y \Vaterloo menos mal. las fronteras para que los indios no arreba· Pero se encontró con gauchos que tenian taran IUS intereses. para el manejo del caballo una destreza Así empezó á figurar Rauch y á crear preso práctica y un valor incalculable. tigio en la campaña, por la manera' con que Que peleaban por que sí y por que debía adiestraba SUB peones para estos combates vencer el mas guapo. tan desiguales. La táctica y la discipliua era C08a desco' Rauch empezó a practicar así la especial nocida para ollos, y lo que cs peor, innecco guerra contra los iodios, hasta que llegó á sarias. 8er el gefe mas caracterizado y competente, El facon ó el Bable eran armas insuperables Ros88 habia mirado con celos muchas ve' y no necesitaban Baber nada, porque con ser ces la preponderancia que tomada Rauch, pe- guapos, que todos lo t!raD, creian haber NI' ro habia guardado ailencio, esperando la suelto el problema de la guerra. oportunidad de echarle alguna zancadilla. Rauch tuvo que dedicarse á. hacer un pro' Porque mientras ROBas contemporizaba con fundo estudio del tipo que tooia que mandar, )01 indios tratando de atraérselos; mientras para darle on seguida una or,~anizacion es' él les servia de intermediario para tratar con peciol. el Gobiemo y ~os alojaba en los CerrilloB, Era preciso sacar partido de ele conjunto Ra~c~ les haCIA la guerra de la manera mas dehermosas prendas que forman la penonal¡' dec!dida, _ . , . , dad de un gaucho, para imprimirles espirito Sm pedlf nunca ~uxtli08 al GobIerno, teDla de cuerpo, amor al servicio y confianza f'n l. el placer deorganlzar Iiolgunos pe~nes que, buena organizacion. aumentados por otros gauchos comedidos, 80' , . , , lian subir á. un número de cincuenta ó so· Ve.n~lendo estas dificultades poco a poc~, lenta. '. el ofiCIal francés se encont;ró con q~e t~n)a y cuando teoia preparada esa especie de que luchar c!ln un enemIgo, ,espcclal!slll!0' tropa, espiaba los malones, saliéndoles al en' de que no te~lIa la mili remo~a I,dea: ellDdlo. cueDtro y dbdoIes golpes récios en lucidus Este ene~lIgo, d~ una astuclll Insuperable y combates, de una, táctIca cDdlabl~da, no sospechada por Estas relevante. condiciones de gefe de él, haCia IU desf)speraclO~. , frontera, llamaron la atencion del Gobierno, Porq~e Rauch no p~dl!l habItuarse á )a bo­ que )0 llam6 al servicio en clase de comao' la perdIda, á los mOVllll1en~08 fuera d~ todo dante de milieias dándole á cuidar una parte cálc~lC!, y á aquellos desphegues, répldo~ y de la frontera ' habllfslmos, que burlaban la maDlobra mejor Rauch habia conquistado así lo que mas preparada. ambicionaba. Sin embargo, siempre perseverante y con Una poeieion militar frente á un enemigo una paciencia q,ue no ,:l8 muy general en 108 l8JIaz y uetivísimo. francBles, estudIÓ l. guerra de 108 indios, al ~auch era un distinguido ofioial de ¡Di'ao· e5tr~mo de que era el gefe ,que rnejor la co' terla, capar. de sacar ~un buen soldado del OOOUI. hombre ~enos apropósito. Otra dificultad que oreyó realmente iusu· ~ Se habla formado en la escuela del gran perAble. \)ero que suplió huta venoerla, fuC; ~dpole~n. J á una iDstrucc~on militar esquisi' la cuestion del caballo. ta, reuma UD. valor temerano. Rauch, que en Europa era un ginete regu' -:-Este naclon ea mas guapo que l8s armas! lar, Be encontró con que en A.mérica era el sollan eacIamar Jo~ paisanol'l que combatían 'mas detestable de los maturrango", -48- Era otra escuela de. montar, otros caballos, Billar un oscuro brioaiaimo que le habian re' y otro campo de manlobru. galado pocos dias antea, los pai8anos Be mira- A pesar de 8U9 enormes esfl1erzost -rara ron llenos de asombro. Ira la vez que 80 mucarron no lo cavaba -Este hombre es loco y no le tiene consio dI cabeza. . deraaion lit 80 cuero, dijeron un08. De esta ma~er~ e~ impOSIble hacer ~ .:-Este hombre ea maa guapo que las armas, guerra á 108 IndiOS, Blendo el caballo el prr dijeron otros~ y es muy c~paz de salirse con .eI' elemen too . la suya! A fuerza de golp'es ae hace el gineta, ~~ Ouando Rauch tuvo eaaillado Sil caballo y dijo un dia UD pailll:l'0, Y Rauch se, deild!o lista la tropa, recien ViDO a revelarla 811 á pon. ID prUebea aquella rllliSlllla es· plan temerario, con una accion que demos' ooela. traba balta donde iba IU valor. DIIde aquel dia abandolló BUS habituales Se hizo amarrar bien con uno& maneaderea ., pacfflcos lDallearroa.,., Y empezó , montar sobre el caballo y S8 pu~o a la eabeza de la cualquier caballo, aunque fuera un potro lo tropa. "8 bravO. , De esta manera estaba seguro de ~o caer Paro con eIto.lOlo logró haoerae un qUlDtal del caballo y poder nombatir oon tofla como' de chichones y una buena cantidad de recalca· d¡dad.. . duru y sacadas de huelO, am.e de varios Los gauchos abrieron tamaiia boca y com­ porrazoB que lo poetraron en oama. prendieron reolen la elale de hombre que los No habia ganado UD átomo en el aria de mandaba. la equitacion. . , Rauch, amarradct Bobre IU caballo, '1 oon A eBa altora ...u~ prog~ hfpI' solo sesenta ó setenta hombres, chocó oon 008, le pre~en~ u~a lD~allOn de Importan· mas de ciento cincuenta indios, loa puso en cia, para el, que dlBpoDla de muy escaSOI ele· fuga, y lea arrebató parte del arreo hació- mentOl. doles mIs de veinte prisioneros. Dejar de batirlOl era eosa que no podia Durante el combate, aquel hombre desper- ser. tó la adlllfracion de sus milicianos, infandién· Pero batirlOl y lIlir , S\I enouentro aiendo doles un respeto que jam~ hablan sentido tan maturrango, era. UDa bellaqueria ineali· por gefe alguno. fleable, pues DO teadria otro relultado que Por que Rauch se metia en lo mal fuerte ..r IsnMado, Ó arrojado por el caballo y dél entrevero, diltribu)'endo cada mandoble heoho prisionero. que ni mandado hacer, segun los gauchos, Oómo preeen'.rso t8IDPOOO al combate mon° Y estas escenas y combates se repitieron talio en un manf.,O lIlanoarroa de aquelloB con tanta frecuencia, que el nombre de Baueh C)ue .. penal pueden con la OlalQellta, úni' llegó a ser el terror de los indios y la ele­ co caballo que podia IQOntar sin peligro de ga admiracion de los paisanos. caerse? Aquellos jama. invadian por el Norte, Bato era lo miamo que presentarse de blan' donde estaba Raach, y sas milicianos tenian co a la lanza de 101 indios_ una confianza sin limitell en su valO!' y es- y ataba resuelto a salir a pelearlos periencia, aunqlle faera d~ a pié ,ó a las ancas de un A iall órdenes de Raueh hubieran peleado toldado. uno con veinte, plenamente convencidos de -No vaya señor Baacho! le decian los su triunfo. paisanos. Fué reconocido á tan brillantes servicios, Mire qoe :88 uated !Iluy DlaturllDgo y lo que el Gobierno le confirió el empleo de eo' ,.an a carnear los m.alonet! ronel y lo autorizó a formar el célebre No es para todos la bota de potro y no regimiento de húsares, notable por su eB¡>fri" se puede pelear con 101 indios ain ler de a tu de cuerpo y IIU ejemplar disciplina. caballo! Rsuch logró hacerse de esta manera un re" Lejos de acobardarse por estas risueñas guiar ginete y el terror de los indios~ que reflexiones, Rauch ainti6 picado BU amor pro· decidiel'on no iundir jamás por 101 puntos pio y deciaió de una !llanera irrevocable bao que él cubria eon sa regimiento. ' tir a lo. indios, a to~o trance. Ma~ tarde Doneg0.1e quitó el mau.do, de Preocupado con la Idea de n3 hacer un los husares que habla fotmado, por lDtrlgls ~apelridiculo ante los paisanos, se puso a me' de Rosas, dándolo al coronel Pacheoo. aiar lobre su situaoion. . Pero los oticiales y soldados que él haltia y tanto pensó)' aguzó su ingénio, que vi· formado y educado, le perteDecian mal que no á resolver la situaaion de la manera mSslal mismo Gobierno que les quitaba su g~feJ inesperada. como lo demostraron la noche de la prislOD Cuando otpnizó sos gauchos 1 mandó en· de DOl"rE'go J J.>acheco. -(9-

nadol eatos antocedontes ebre el persona' como de loa Jos movimiellto~ que hncitnl 18R je qus entra en escena· para desapareoer de indiadas de Rosas en la catDvafla do Buenos una manera tan dl'am4tioa, sigamos el hilQ A.ires. a. DU8ltra narrftGion necesariamente inter· Se le iba 1 ofrecer la oport~nidad que tan' nmpido. to habia deaeadp, de encontrarse fient~ á todo8 los ealldillos de la República, Jlapo haoerlo8 lancear por un escuadran de sus Rosas se haJ.ill ausentado a 8aota'Fé, par!\ coYaceros. ponerse en ooaibioacion caD Lopez, y lev811' Lo mas urgente de ~9do era impt:ldir la tar contra )Juenos Aires to~& el caudillaje formacioo de un grueso ejército en el in~e- 4el interior, como Qllh'Qga, Bustos. etc. rior, y batir (:n detalle' ó en oQnjunto á too A Rosas coltvenia ladeeftparicion de Dor" dOR 109 caudilloR. rego de la eseeua poUtioa, por que ella lo L~ operaeil)ues en la. ca~p~ña de Buenos clej.;ia duefto del caDlpo y oabeza del parti' Aires era raeH sofocarlas' cdU . cualquier rf}" de federal. . gimíento de linea, pllell él se ~eparablÍ á Sin embargo, él lIeg6 a Sants,'Fé, con el marchar 80b~e ~antll-Fé, centro de óp~lQ" fume propó!ito de apurar , Lopez para n!!8 ~el caudlll~Je y donde S{l formaba el que ouanto antes volaso en apoyo del Gober" ejérCIto mal sérlo. nador derl'Ocádo. Para contener el movillli~~tQ de la olmo Dos cUas despues de I'U llegada, y cURndo paño, el seneral LavaIJe nomb,ó al cOrGul Lope?: se movía con RU E'jército, 108 sorpren' Rauch con sus hússres, V á. un coroDol M," dió la notrcía. del fusilamiento del coronel din~, que ~an4"bª el 49 re¡iqlientQ. Dorrego. :RI ge~"ral Paz. con ,1). C\1erpo do t,i6rcita, -L.. V&Il~ es UD miserable! esclamó Lopez recibió órdcn do moverl!e IlQbri Córdoba Yba' y es preoiso tlstermioarlo. .. tir tocl!l ml\l elemento q\1" ,,, h, uuierll ~l , -EstermiDémoslo, repuso R051U!, «¡ue en la frente, destruyendo iguIlmonte j .Buab y á muerte do -Dorrego veia su absoluta prepoll' Qu,iroga. derancia. ~~I lile re~ervaba. la c~mpaiill .obre SantA­ . Lopes suspendió su marcha y envió ehas· Fó, dond~ e8tllb~ ,1 nido llrinoipl\l, CQIL LQ' ques y pliegos para los caudillos Bustos y pez y Rosas á la cabeza. . . Quiroga. DIl e~te ~odQ se Pl'Op()nla Lavf1IlQ dar 110 La muerte de Dorrego, fusilado por Ulla gOlpe dI' muerte il los QllldillQS, ID eterna simplo órden militar.. le haoia c01Ilprender pesadill .. , , que lea esperaba igual euerte si llegaban 8 P"rl 1011 ~efes qll6 1l0BlQ agente. de Raaas daeren manos del general Juan LavaUe. reCOffisll la CIllDpaiia, J la8 (UtU'U8 qUQ elt- Bra aqnel un reto a muerte lanzado al ban- tOI PQ!Han reuair, bal1taba QQQ el pader que dalaje, por un militar cuya fibra era d!!ma- rep-.:esentaban el oQronel J-lauch J iUIl hú" .lado conocida.' 8"es, . Al unirse todos contra. Lavallo no haciln nlf,ueb se puso en calDpaña inIQ8diatamoo-' mas q,ue defender BU cabeza, y propar.arsa de te. y en pcrsecucion de los grupos qua lIor la mejor manera ti. sostener la guerra 81n cuar' "todas partea se levantaban. tel que les traeria indudablemente el vale El célebre Arbolito al frente de unos ClUU IOFlO militar. cuenta gauchos y otro!'! tantOI iodios, lacar- y mientrall Lopez tomaba sus medidas por ri" la c.mp~ña bus0aDdo la iocorpprapion de el interior. Rosas despachó e~isarios de too gr~po" JQ.8yQr~ y cop¡etienQo todo lé~,ro 4a 111 confianza para qlle se I)Ufolerau en con' de miquidadea. taeto coo 108 caudillejoB que él habia forma' for otros puntos. y capi~ne~do oQof.rll­ do en el Sur de Bueuos Aires, y levanter8n PPi mas 6 menosnumerOSOR. c.mpeab8~ PQ~ ~d,a la c.aU!Pp,iia ~olltr!l Lavalle, cuyo preso MUS respetos, el cOD,ocido ~anch~ jI ~ato r tlglO 'Ie hmItaba a !8: ClUd:ld y :iola gente de un mayor del ejérCito de linea. ManQel Me'· vcm\adera respetabilIdad, ~a, que habiendo segQido lea ba,llderas dC' Fué. entonces que RIzaron "11 poncho, el fa' Dorrego, se iDcol'poró .. ~osa8 y vino COQlO mos~ A-rbolito, Pancho el ÑatOvY otros de agente suyo a formar un cuerpo de caballe' ll!- mJl~ma catadura, €m combiD8eioD cou HIJ.· l'ia en el partido de: 'Monte,' . .fI8DO Rosas y otros capit&nejos y caciques. El mayor Meza filé des~raciado. ,En aque~lo8 momellto~ ,llegaba á Buenos Su m!lnton~ra fué batida y'dispersa!!a, que· Aucs el dIgno y benemerlto g~neral Paz, al dando el prl¡\lOQCI'O entre loshús3res. - freDt~ del.l~gundo cuerpo do f'Jéroito. fuerte El coronel Rauch lo remiti6. Bueno, Aj· de mil qUlDlento~ veter8n~!I: , res, dondo se le formó un consejo do fllerra, Laval\e 11': hl1bl8 npermtJldo tRnlo ~e l~ hoque lo conlieu() lA roer (iel;r:a~ado y 118S~do JlOl' ga da caudlUO'!I IllJe so hl¡Cta en d lUterlOr,¡lufl armas, . -60-

Dos diu dOlpues el sargento mayor Me~ guiéndolos, saldrian 101 indios ilanqu_ndo' des pues de ser deshonrado ante las tropas los y tomándolos por retaguardia. que oomponían la guarnicioll de la ciudad, Así, cuando la confusion de la lorpreaa ea fué fusilado, apodera.ra de las tl'opas, ello. darian enton' La noticia de este nuevo fusilamiento, lIe' cel medl~ vuelta y 188 oargarian de uoa ma' vó á los gobernadores de la liga, célebre nera terrlule, como que entonces tenian BO' liga que le ha tratado de parodiar mal tarde, gura la victoria. el convencimiento de la suerte funesta que Este fa~oso plan de batalla que deslom' les Ell'peraba.. bró á }(arlfiDo Ros .., fué puesto en ejecucion -Hay que defender ahora huta la cabeza inmediatamente. dijo Rosu á Lopez, y reuní.r todoiJ ,los elo' Se emboscaron ~~s. indios en el pajooal y mentos posibles para destrull esta dIctadura 108 dragones y mIlICIas tomaron su 0\)100&' funesta, Icion en el centro del camino. y mandó emisarioa con órdenes termiaan" ~esdo los primeros pasos aquel plan dia' tes á sUS montoneros, de que se. reunieran y bóhco empezó á dar 108 mojares reaul' atacaran á Rauch de una manera eficaz y tadoll, decidida. Al saber Rauch que todos lo. montoneros Derrotado Rauch, el partido federal podia 8e hall~b~n junto8 en las Biscacheru, se pUlO fácilmente apoderarse de Buenos Aires, mien' en preCl¡lltad~ marcha sobre ellos. . tras el general Lavalle se internaba en la Lo acompanaban ,el comandante Mellan y rovincia de Santa' Fé. el comandante Medina. . ',. P L 'f d R 'd ' El total de su tropa era como de f¡lllnleDtos os corl eo~ e osas reunl os el:'- numero hombres. de unos se~ecIentos. matreros, se lDcorpora' Al ver aproximarse al temido ~efe, los ron a~ ~aclquE? }[~mano Rosas, que al frente montoneros se prepararon al combllte, ocu' de qW:D.lent08 IndIOS, merodeaba por su cueD' pando la izquierza los grupos del comandrnte ta ~ rIesgo, campeando por sus r~spetos. . Gonzalez y Arbolito, el centro JOI de 1Ia- E~ta columna, que se compOnIa ya de mIl chado, Castro y Aguilera y la derecha 108 dOSCIentos hombres, se puso en marcha ~D blandengue.. de Almeida y las milicias de demanda del coronel Rauch, que no querIa Paucho el :&ato. ' otra cosa" Los indios se perdieron entre el pajoDal de Sus cabezas eran ~8nano Rosas, el ~oro' tal modo, que no los hubiera sospechado alli Del Gonzalez, Arb~hto, Yachado, Agullera, el ojo mas perspicaz. comand~nte Alm(.Jda y .PaDcho ,el :&ato. , Cuando Rauch vió que el enemilo 18 Almelda comanda~a CIento veinte blanden preparaba como si aceptara el combate, Bolt6 gues, que era Jo mejor de ~quellas tropas, una alegre carcajada. y prometió a. sus tropu Hombres VIYOS y b~q~eanlSJm08 eD la guel' el mas entretenido de todos sus dias. '. ra _de Mont~vldeo.· hICIeron su plan de cam' Sobre la marcha no mas despleg6 en bata' llana, comblDando UDa tr~mpa que para que lIa la mitad de sus húsares, Bacalonando el Rauch escapara de ella, tenIa que ser mas que re~to por mitades. gaucho. ' , . y se lanzó á la carga de la manera decidi' En el -ca.m po e ')nocldo por la~ BI~cacheras, da y brava que sabia hacerlo, __ hallaron. el elementol.necesano a aquella Apenas habian chot}ado, 108 montoneros trampa lnfemal. dieron una rapida media vuelta y lile pusie' En aquel campo hab.a un gran cañadon y ron en precipitada fuga, pajonal, donde podian ocultarse pert'ectamen' -A ellos y á cuchillo! gritó Rauch, ponién te mil ó mil quinientos hombres. dose á la cabeZa de 10 qu" creyó una perseo Por el centro de este pajonal, babia un CUCiOD. camino bastante ancho para dar acceso á va' Cuán cara habia de costar le su confianza! rios regimientos. Apenas pIUlÓ por el sitio donde Be hallaban Los montoneros resolvieron formar sus tro' emboscados los indios, salieron ~tos '1 lo pas en el centro de aquel camino, emboscao' fl~nquearon ~om~n~oJe la retaguardIa en me' do los indios de Mariano Rosas, entre el dIO de una grIterla mfernal. , . . pajonal:~lI.mboslados .• del camIDO, , AnLe aquella tormenta que se les venIa en' En esta disposicion hllrian saber a Rauch clm~ cuand.o meno:, lQ ~speraban~ las tropas que se eDcontraban allí, vacJlaron .so~prendidas y.se detuvler,?n, ConocidaCi,la impetuosidad de aquel gefe, ,Co~prendlelldo el pelIgro y ~omlDando la era. fuera de duda que 108 cargaria en cuanto sl~uaclOn p~r comple~o, el vahente Rauch les echara la visLa encima. hIZO un rápIdo cambIO de frente sobre sus Entonct:s ellos buirian como en derrota y tlancos y retaguardia, trabándose un combate y al plUSar 108 hús~re8 por el eaolino, persi' sangriento. - 61- Los montonerOIl que no esperaban mas que bolazo terrible dado en la cabeza, lo aturdiÓ esto dieron media vuelta y 181es vinieron sao por completo, privÍlndolo de toda acciono ble ~n mano, por lo que venia a ser un :flan' Entonces los in~ios dieron rienda suelta á 00 darecho. sus instintos salvajes. No habia lugar' alimentar la menor es' Lo lancearon de tal ~anera, que cinco mi' perano. nutos despnes no se vela en 8U cuerpo un Aquello era un desastre, y un desastre ter' centimetro cuadrado que no tuviera una lan· ribla. zada. Rauch estaba oompletamente envuelto '1 en· Acababa de cerrar 101 ojol el valiente sol' nelto por un enemigo que le habia prepa· dado, cuando los indios prestaron atencion á rado aqueUa situaoion. una gran algazara que se sentia á su de­ La carniceria mas espantosa empezó en' reeha. toncea sin cuartel ni compasion. • Era el coronel Nicolás Medina, que corria Rauch, dueño de si mismo y de la situa· igual Buerte. cion, 11 pesar del rudo golpe que recibia, como Los indios abandonaron el cadher de prendi6 que no habia mas salvacion que la Rauch, para tomar parte en la nueva car- retirada, y una retir.ada rapida é inme· nicerle. . dista. Entonces la china Luisa, célebre despues, Organiz6como pudo los escuadrones, é in· que habia asistido a la accion, echó pié a teutó forzar el paso, logrando hacerlo, aun· tierra y ayudada por un indio completó la que á costa de grandes pérdidas, con los dos obra de sangre. primeros escuadrones. Raueh rué degollado y despojado de todas Oon ellos se puso á escape tratando de IIUS prendas de vestir. organizarlos sobre la marcha, para volver La persona que nos ha dado estos datos, en seguida a. la carga, pero su tentativa fué hombre de 68 años de edad, la viú muchas inútil. veces a la china Luisa usar el gorrete hordado Los indios se )es fa,eron atr~s, lanceando de oro, un lujoso poli, de la forma que lo a su complsta eleccion, en medio de desafo· usaban los soldados de su regimiento. ndos alaridos. Pocos fueron los soldados qae lograron es- Rauch apur6 entonces la carrera del exe' capar á aquella terrible carniceria, lente caballo que montaba. Con este triunfo inesperado, 10R montoneros Se trataba de salvar el pellejo y era una adquirieron un prestigio fabuloso. ton~a.fiarl«? y sacrificarlo á la Janza de Grandes partidas se les incorporaban dia" 1011 IndiOs. sin el menor provecho. riamente, y 8U8 grupos se acercaban cada vez Su. caballo era sobresaliente y muy capaz mas a la ciudad. en donde habia mucho ele- de salvarlo. mento hóstil a Lavalle, que empezó á plegár· Pero el indio tiene mil recursos para con' seles. . I tener la marcha del caballo que quiere al· Arbolito fué el encarga.do de llevar a Ro­ canNzar.. . Ras el parte verbal del ruidollo triunfo de las o .habla comdo Rauch tres cuadras, cuan· BiRcacheras. d~ Veinte pare~ de bolas zumbaron en el Rosas decidió entonces venir a ponerse al ane. y su caballo rodó atado de las cuatro frente de los grupos y levantar en la campañll patu, arrástr~ndolo en su caida. un poderoso ejército. Rauch se Vló rodeado de indios inmedia- Entre taoto Lopez onLretl"odria '" Lava"e, tam.ente q~e se disputaban el derecho de para dar titlmpo a que Rosas pusiera sitio a la henr!o prImero. ciudad y la tomara si era pOSIble, á cuyo QUISO hacer WlO de su sable y una pistola efecto se le incorporaría con el ejército san­ que llevaba en la mano izquil3rda, pero un tafecino. - 5:.1-

El Puente de .~Inl"<.. uez

Lanlle elltre tanto, r ~icntt·a.!1 Paz opol'aba ma manera quo habiaD 8lHtrcclilo, y li DO !ts lIjórcito que decíali Aquella era una 8ituflciOll d8flcsperad.t ..de habill.rcunido, .., .... no ~odja seguir ~ingr.n perjuicio del ejét. 'f~hla u~, ciega co'IJhanz3. en su tropa y pa' ci~o H~ B~eqos Atre_t que no cOftlia, 110 .&i\. ra. el el trIunfo solo estaba en uhocar con el oba, DI f31qUlera marchaba á IU entera ,..-11" enamigo. faceion. , ltilitár de escuela y apto, despreciaba esas LavaUe ,decidió entonces apresurar SUI malV milicias .reclutadas de lag estancias, sindisci' chas todo lo que se 10 permitieran 8ns el. plina y teniá la convicoion pi'ofQ.nda de que nuadas caballadas, para caer sobre Lopltl no hliobia ejército formado con aquellos ele· obligándolo al comba'e eolito a DomilO, mentos, por nUJIlerOBO que fueTfJ, capaz de re' aniquilarlo •. sist.~r una .~rga cI~. BUB coracer08, Ó ele loa lu· • Al cabo de dos dias de COD,ÜDUa ., .nror&(' zeros de OlavarflfJ, . bcante marcha. el general LaQUe 8ntltó al Per,o de~de qu.e pisó la provinoif! de Sa~~' ejércitQ de 10pez Clue e8taba tranquil'&1llettl Fé, ~mpezo a sentir los efectos ~8esperan' oolDpadl¡>. . tes Cle lli guerra de montoneros, efectol que Lavalle tendió su línea sobre la marcha '1 no eonocill pricticsmente. avanzó para obligarlo .. la batalla. be pronto hallaba sobre su fttinco derecho ~'ero el plan d·a ,Lopez era muy diveno. Ó j~quierdo. ün~. cOl~'!lnl\ de mil ó 1I'aa8 hom' El queria ani9uilar. y destruir el g8Aetlll bres, que pareelB veOlr a ftanquaarlo. Lavalle, pero sm, an:¡esga~ un. batalla. Lsvalle deSprendiaentonces a BU eorace' Para esto lo habia hecho DostiüBarClllthu,.' ros Ú 01avarria COD. 8U8 l&DCeroS, paro al cho' mente, con el ~bjeto ae arruinarle "1 fatlgaf car, la cplumna se dividia en mitades, gru· sus, caballol'!, . pos y pelotones, y uesaparecia en diapelsioD Hombre ViTO y prlÍeti«o sabia que 1A.. lle .in que pndiera.. aarle alcance. em nn militar distinguido, reconociendo '6 y ~uana.o Olavarria volvia OOI1trariado por gl"Bn superioridad de las fuerzas que IHndsbl. aquella fuga qué le habia burlodo una bri" U na batalla entre súe paisano&, aunque ru' liante carga~ aquella misma ca,lumna ú otra gueados, con 108 veterauos dl)l Brasil, tenia análoga aparecia por por el otr'o Ranco, ú hos que serie fatal forzosamente. tilizllndo la retaguardia. Siendo de caballeria la mayor parte de hiA Lavalle vol via a desprender otra frun'za á trop$s que mandaba Lavalle, Lopa tolllÓ Cotl hatirlos, pero f ucef:ia lo mismo que con la empeño el plaa de aniquilarle lu -cabaUadd anteriot. Y reducirlo así á un miserable estado de El enemigo se dispersaba antes de chocar, lDmovilidad. volviendo a aparecer pOt: otro 'ado, siempre. En estas condiciones.podría entonooB nl'ri.' en Ion de carga y preparado .3. la fuga en ca' gar una batalla, puesto que en caso de ser 80 ae Ber cargado.. derrotado qo podria Ber pereegaido. Los gefes empezaron a .perde¡' la paciencia, Lopez, ~esde 911\'1 co~prendió que Laftlld y a espiar las columnaB enemiga.s con una se le venui enCima, obligándolo al combate, especie de ft'enesí. formó SUB tropas en columna de marcha y se Poro nunca logrando el placer de poder pUflO en retirada rápida. darles la mas insignificante carga. Lavalle desprendió partidas lijeras que le y esto no era nada, porque solo se referia picaran la retaguardia de un mod,o tenaz, a 11\8 marchas, rompiendo su mon.otoDÍo. creycn-doque de este mod,) lo obHgaria a dar Habia. otra cosa peor, capaz de poner en su vuelta. .. colmo, la misma tlaciencia del bu:cen Job. Pero aunQue en esta persecucton perdió al" Apenas campaba. el ejército llar; 1 reposar gonos hombres, Lopez continuó su retirada las largas marchas, y carncar, las columnas apurando sus caballadas R riesgo de pos- enemigas empezaban. a presentarse por .todas trarlas, , , ., direcciones, como llalJdas de la madI 'e berra. LavaUe filO Internándose lDsenslblemente Si las cargaban, se hacían humo d, e la mis' en la provincia de Sllnta·Fé, halagado siempre - 63- eOll 11 eapetllDza. de dar aloance a Lopez y A pt'ineipjol del mes de Abril se le incorpo· obligarle 'la bldaUa. rú el general Paz, para abandonarlo en ... Cob pH1eria esqui sita, Lopez ló l)ev6 a. un gnida, eom~."tl~o Uh nuevo pIe de oamp.. • campo de pasto datlO8O, d~iIpare'elendo en fia f1~e die!ré meloMl resultados; , . seg11ídl como ei lo hubiera tragado la l\11entra9 el Itenéral Lavalle 'VeDl. á proteo tiéi'ra. jer la campafia de Buenos Aires, tnltando de Lavane caftlpó alli parn dar descaulIo i deshacer ei ejército de Rosas y Lopes~ el tropa y caballos, eonvencido que para' ven' general ,~al debia marchar 9iJbre CórdOba ce~ á Lopet .eria necesario sorprenderlo y para dar en tierra .ctln el podltr de HU8~" aDiquilarlo. , . . que no. era ~e8precü\bJt'I~ y m8l"char.ell segul' Fero tql1él deséanso fue fatal para su eJér' pa al mterIOl' donde Facundo QUlroga le" cito, pues !'as caballadsa que se Boltaron .nntaba BUS masas de U aniatal y puntanos. aqnellá noehe pan q' comieran á discrecion, contra el partido unitario '1 ea sOltén de se enfermaron con aquel pasto terrible, per R08aS. weodo muy cerca de la 'mitad. LavlllIe so separó de Paz, seguro del éxito Para colmo de desventuras, cuando trata' ql1e obtendtla e!!te en el intel'Íor y 'iguió IU ba ae ponerse "n retirada, i sn ve!, recibió violent6 retirada hacia Buenos lires, donde ufta noticia qoe hizo cambiar radicalmente llegó eoii Bu ejétcito m.uy f\\tigndO y comple- su plan de camp.ila, ta!J1enta1i1ente 8. pié. Esta noticia no era otra que el de!utte Pero Lavalle no eta gafe de permaneoef de las Biscachéras y la de~troccjon de las en inactividad, cuando cruzaba por monu... • fuerzas que ~~'D.d,ba el 'ValIente Rauch. tos tan iolelnne8. . Permanecer en Santa"Fé deSamparando!l Ee cuanto pi~ó tierra. lJorteiía, en"fió emi" BUtlnos Aiñl, era uoa locura que deaaliado sarios pata que hablaran cob. lOS dirEletGteI la comprendifl L6valle. del partido '1 ~stos le Prt)llo~io!l.ar8b. ~aba.· El caudilla¡e aealJOderaria 6 estaria apo' 11015 donde hacer rnofi~r la t\'Opa Mmulda. rado de la cam'pa!a de Buenos Aires. La campaiia Norte no él'a tan partidaria de Rosas en persona habria ido " levantar Rosas eOIfiO la campana del Sur, todo el gauchaje, ,)a primer tnedidl1 que Be podia sacat de ella hombre. h6stUea 8. adoptaria seg"tttamente, seria interceptár lá R08i~ Y !!Iobre todo elemeíttllUl de mo\'ilidll.d~ comunicacion eon la capital, centro de tobos t!ue era lo que mas urg~llte~tn;;e ~ d~· 8U8 elementos. sitaba. Era preciso volar en socorro de Bllenos Entre la gente de posicioti. y de fottolli, Aires, antes que el cataclismo temido fueS'e era sobre todó dondé!le contaban mas ene.. á realizarse. migos de Roria. y tenia que andar muy listo para llegar á Los pobladores del NOr~ tCllSa,bU. Sí Ro' tiempo. • sas de fomenta~ las frecuentes ibt~iou811 Rosas, a. quien Lopez habia nombrado que de Santa'Fé leA ttaia. topez, '1 vetaD. mayor general de su ejército, levantó en un en Lavnllt", él podét que debía eonchiir coh momento mas de diez mil gauchos que acu' aquel cotn~adra~go innoble y áVido ds asal" dian á incorporársele de todas partes, con tar el poder y la r!ql1eza pública. caballo de tifO y hasta con trlJpillas. . Ad es que Lavnlle se vió rodeado bi~ñ Lopez, con las mejores ti'opas se pre~araba pronto, no solo de lil gente de blSI valtlr de , incorporársele, invadiendo la provincia de la l!ampnña Norte, sb16 de mt1gnífieoll el"" Buenos Aires, ta.n ptonto como Lavalle hu mentos de movilidad. biera salido del territorio de Santa'Fé. No solo mentó sus sold::tdos en eaballos de El digno gefe de aquellos veteranos, enno- primer órdeD, sinó que en un pllr de diat blecído por las victorias alcan~adas 80b,re el juntó la mas marrnífioll Mballad& que ja­ Brasil; se puso en marcha con tal precipita' más hubiera posoido el ejército. cion. qué parecia aquella una tropa q\h) huia Esto tenia la doble ventaja de qd no solo .le un enemigo ve!lcedor.. ~8l:alle se ~deaba de magníficoS elemeDtos~ . t Lopez, querIendo destruIr1,? lo mas po' SIDO ~e qql~~a estos' Lape7., quien segura· 81ble, empezo á desprender partIdas que, co' mente lnvadIrla pOT aquella parte de la pro­ mo á su llegada, principiaron á hostilizado vincia, de una manera terrible, obligandolo á hacer Disponiendo ile estos brillantes .Óxiliot cubrir lit. retagllardia por sus mejores tropas. Laval1e se corrió allSur itunediatamente 1 Ü y como muchas veces trataran de arreba' puso entre Rosas y la ciudad, lo que era ,. tarle sus cahalladas de reserva, tuvo que ha' mny importante. cer p'u3f estall ..al centro de la columna dE: l~l)sas habia levantad.o un fJércifri lii1!i}cu­ marchal p~oteJléndo'as de esta manera, coó' ,,8bl~, (>ues habitA ll~~do háBta i'iM~:i.t tri cualqUIer avance. contmgentes por que juzgaba que l!'tfIIM -64-

p0dria n('oositar tanta gente comO la que te' Con ese iotento movioron IUS grandes ma­ nia reunida. .. 818 sobre el Puente de MArqnes, decididos , Cuando LavaUe evacuó el terrlr.0~lo de San- ahogar la8 esC?asas fuerzl8 de LaT811e, con lO ta-Fé. Lopez le pUlO en IU .egul~ento, hos- eoorme superIOridad numérica. tilizandole 1\ su ~ez la . retaguardl~, lo que Traian como diez y ocho mil hombres, mien' hizo verdaderamente aCIaga la retirada del tras que el general Lavalle salo tenia a SOl bravo general. órdenes los mil veteranos formadol por los y preparándole a correrle bUlcando la cue.-pOl que el lector conoce. iocorporacion de ROlal. despachó .tr~8 chal- Supo c~n anti~ipacion que 101' dos caodillos ques poniendo a Bustos. en conOCImiento de se le veDJan enCIma, y lin arredrarse y perder lo que pasaba, y aou0.cl~odole que el gen~- un áto~o de IU confianza en el triuDfo, se neral Paz quedaba alh alslad~, y. que ser!a preparo á la batalla, anoncilindolo 1\ sus vete· muy facil deltrozar.lo, mas auo, II le ponla ranos con 8U palabra~nquila y lIeoa de fé. de acuerdo cou QUlroga para un ataque ge- -Dentro de dOI horas, les decia echare­ neral. mos djana sobre los despojos de ese' gaucha' De modo que cuando Lavalle llegó á Ro' je ~ de esa indiada. jas, L~l!ez se inolinó maB al Norte y de alli L8.~alle habia recibido un refllerzo de mas Be corrlO al Sur, buscando su mayor general. de mil hombres, en elmomento que menos ROlas tenia ya una soberbia columna de lo esperaba, y la joroad. cambiaba ya de doce mil ó mas gauchos "!1 un par de mil in' aspecto. dios que componian BU vanguardia. Iban á tener 9ue combatir trea contra diez Lopez Be le incorporaba con dos mil qui· ~y ocho, pero aSI mismo, para Lavalle la ba­ nientos hombres, milicianos pero adieBtradí' talla era ganada por su parte. limos y bien fogueadoB en las contfnuas A la aproximacion de aquel ejército, La­ oorrerias del caudillo santafecino. valle tendió su escasa línea como está mar- Con tanta tropa reunida, no era dificil cado en el plano que publicamos ayer, con que las de Lavalle, en una desproporcion de un dennedo que hubiera hecho honor á 10B quince por uno, sufrieran un contraste. mejores soldados del mundo. Laval1e tuvo noticias exactas de 1.. fller- Dejó solo un par de regimientol de reser­ Z&I de que disponian Lopez y Rosaa, pero va y echó el reato de sus magnificas caba­ DO por elto S8 arredró. Uadfll, un poco á la izquierda y á la reta- Por el contrario, alegrándose de tomarlos gUardia. reunidos para concluir con ellos, se corrió De este este modo aquellas no podrían de hasta el Puente '~e Marquez, campos de Al- ninguna manera embarazar sus movimientos. varez, donde se situó esperando conocer R08as echó sobre Lavalle una vanguardIa de exactamente la posicioo del enemigo. dos mil indios, al mando de varios caciques, Toda la fllerza de los caudiHos, como la de quedando con Lopez para organizar la pri- Lavalle mismo, eran de caballeria. mera línea de batalla. Este último, como militar de escuela com~ Con tropas como las que mandaba La valle, prendió que, apoyando sus mil veteranos en un primer,rechazo no er!l cosa asombrola, unos quinientcs infantes, el triunfo estaba asi es que habian formado tres líneas de ba­ de so parte. tall~ siendo la del centro compuesta de las Aquella iDfanteria podia recibir entre sus mejores tropas.­ fuegos cruzados las masu de caballerla ene' En ella figuraban 10B colorados del Sur y miga y obligarlas á dar vue~ta. y la flor de las tropas santafecinu. Entonces solo quedaria á sus caballerias el Debilitado, aunque venciera á la primera trabajo de perseguirlas en su media vuelta linea, Lavalle se estrellaria en la segunda, y laDcearlas por la espalda. á la que no podria doblar. Con este propósito mandó pedir al almi· La línea de Lavalle recibió la arremetida rante Brown las fllerzas de infanteria que se de los indios coo un "rigor asombroBo. hallaban en la ciudad, esperando su incor- A los cincominut08 de récio y encarniza­ poracion para moverse sobre el enemigo. do combate, tuvieron que volver caras bajo Pero Lavalle tenia que luchar con Lopez el sal;'¡e inaguantable de aquel~os guer· que era la astocia personificada y 000 Rosas reros. que, á la par de una sagacidad asombrosa, Olavarria se puso á SIlS espaldas con sus reuDia una audacia imponderable., memorables lanceros, y los salvajes fueron Loa caodillos viendo que Lavalle no se á guarecerse en la primera línea, dejando el movia del Puente de Marquez, sospecharon trayecto sembrado por maa de doscientoll que f!8peraria alguo refuerzo de la ciudad, y eadaveres. resolñeron atacarlo antell que ese refllerlo Olavarria', obedeciendo las órdenell de La· llegara. valle, volvió á replegarse á la Unea, siendo - 65- aeguido por tres ó cuatro regimientos, que Pero aquellos dos regimientos fueron segui. no se atrevieron á aproximarse mucho. dos por OU8S dos, y mientras los primeros Estos vinieron ~ estrellarse con los cora· entretenian á l. relerva con un sangriento ceros que para cargar solo esperaban que entrevero, los segundos arrt'bataron las ca· OJav;rria concluyera su movimientg. balladas, dejando a aquel ejércIto eD su si· El choque rué terrible. tuacion mas crítica. Los cor&ceros, habituados á vencer desde Cuando Lavalle envió el primer escuadron el primer momento cualquier obstáculo, ini· á mudar caballos y 8UpO lo que habia Buce· tados con l. resillteucia que encontraron en dido, em¡,ezó á comprender que seguir la bao 108 regimientos que cargaban, se entrevera- talla seria sacrifioar SUB tropas, sin otro pro· ron y empezó la matanza Bin trégua ni des, v~cho que matar mil hombrbs maB al ene· canso. . mIgo. La batalla, sangrienta batalla, se hizo en· Vió que este tenia fuerzas para seguir eom" ton ces general en toda la línea. batiendo con tropas de refr~sco huta el otro Nuevos cuerpos envió· Lopez a reforzar a dia y resolvió retirarse del campo de bat.lla. los que primero cargaron, y en apoyo de 1011 Cada sold.do habia combatido COIOO un coraceros concurrió tod" el ejército del gene' héroe, y los que habian caido, habian caido ral Lavalle. sí, pero despues de postrar enemigos en DÚ· Ante ante aquellos soldados espléndidos mero bastante para rodear sus cuerpos. los cuerp08 santafecinos primero y los mili· El general Lavalle Jeunió los restos de su cianos de Rosas despuetl, cedian el campo, ejérCIto y empezó á retirarse del campo do con claros enormell abiertos por el sable de batalla de una manera imponente. aquellos. Aquellos soldad08 que habian combatido . Pero nuevos y uuevos cuerpos eran en, durante cinco horas sin desmayar UD 1'0· vlados al combate, y aunque vencedores, lo momento, abandonaban 61 campo de bala· los BoJda~os ~e Lavalle se encontraban. con 11a con sus r.entes erguid.s hasta la iosoleo· un enemIgo ~Iempre Igual en número, slem- cia, y con el sable siempre en actitud de pre,tenaz y SIempre de refresco. herir Lopez y Rosa88e·~ encont~aban algo alejados y ;quell08 dignos gefes de tales soldados, del campo de bat~lIa, haCIendo avanzar los emprendieron la marcha detrás de sus res· cu~rpos que deblan reemplazar ~ l,!s que pectiTos regimientos, como si quisieran tener hUlan, y observando todas las perlpeclos del el honor de cubrirsuretagual'<'.iaen la retirada. combate.. Los soldados de Rosas y Lopez no se atre-- Es~ban ell08 mIsmos deslumbrados por la vieron á seguirl08, como si el respeto que ins· magmficenCla de las tropa8 de Lavalle, y el piraba aquel valor sobrehumano los hubiera valor magestu?So de aquel gefe denodádo. privado de toda acciono Lavalle noto con dolor que las ct.balladas M . ,. , ., de sus tropas estaban postradas y que era - e parece Inutal hacerlos persegult, diJO urgente hacerlas montar caballos de re- Lopez á. Rosas. . . besco. V an dlezma~o~, desmorahzados y á pIé. Aprovecharía la primer ventaja para mane , En s':1s condlclo~es, no tardarán en ceder dar á sus regimientos uno á uno, que prac. a la prImer .tentatIva de paz. . . tic.ran aquella difícil operacion ante enemi. ~ perse,gulrlos ~hora es obllgarlo~ á s~ go tan numeroso. gUlf b.tadando mlt:ntras quede en pIé el ul· Pero desgraciadamente aquella necesidad tImo de eUos. .. de IU tropa habia sido prevista por el Astuto Parece que esos hombres son de fieno po. Lopez que no perdia una sola faz de la bao ra el combate. " talla. ' El general Lavalle pudo, pues, retirarse sIn Haci~ ya cerca de cuatro horas que estaban 8er molestado. " combatIendo al arma blanca, y. por mejor que La bravu~a de sus soldados J;tabul. conte~l­ fuese la caballada de aquel ejército, era in· do al enemIgo en una pers~c~clOn que debió dudable que al cabo de este tiempo debia emprender, dadas las eon~lclones tremendas hallarae postrada. en que se 'efectuaba aquella retirada. Para quitar á Lavalle el recurso de IUS Cll· De S!l8 soldados no, conservaba mas que bal1adaa de ref~esco, ya que no podía hacer tres 1011 y de !t'tos mIsmos, ra!o era el. sol· desmayar el ánImo de 8US tropas, corrió dos dado y el ofiCIal que no estuviera herido. de SUB regimientos á que las arrebataran. Los c~ballos completamente postrados, apeo ~quel movimiento fué obrervado por el nas podlan Bostener 8U ginete. gefe d~ la e~as~ reserva, qui~n la hizo corO Hacerlos salir del paso era emprela im· rer ~ácla la lZq1llerda para evltar el audaz y posible. hábil golpe de manoo El genoralLavalledejaba as! en aquel camo -66- pG de batalla, ~mo trescientos hGmbres Al dia 8i~iento de 1, derrota, el 31 de .uertos y seiscientol heridos. Abl'il, reoibib Lavalle un pliego de Lopt15, El fÜéroit.o enemigo habia pcrdido el triple de que era portador don DOlDilllO de U..f'l. de cata oifra, mIS .tal vez, pero poco le su' En él so hacian propOliciol181 do PQ IQ· ~ia. . ltlamente ventajosas. Solo habia lanzado al combate como siete Se le acordaban todo género de prantias mil hombrea, quedando mal de ooho mil, para él v sus brava., que camo Lopez y Ros~, .solo fu\U'on espenta' Pero j uon Lavalle era un caractet kQJP1~· dorea das la aaogrienta \>Q.tllla.. do vigorosamente. ' DejlUldo 'Lavalle que se rO\ltata trllnquila' Pensar que él aceRtaría oondiciouea de paz mante, e1101 trataron salo de aproximllrae í. impuestal por Lopas, era un sueño oompl6W­ la ciudad par. interceptar sus comunicacio' mente irrealizable. n_, y ponerle estreoh,o. ,-itio Dlas t_~d." y En cuaoto leyó el pliego, lo devolvió al rodirla de esta DaIlera al DQ l. podlsn to' señor de Oro dioié~dole: mar por u.l$o. . -Puede usted asegurar al caudillo Lopez La ciudad habia recibido la noticiado aquel de Santa-Fé, que el Gobierno de Buenaa delaltra, y S6 preparó á defenderso. Aires no puede ni debe aceptar proposiciones El Gobier~o la PUIK) en eatadn de asamblea de paz, mucho menos las suyas, mientras obligando á servir huta loa estregaros, 1 pise con tropas armadas el :territorio de la qae motivó Ull ~onfliato COD el ministrofran' provincia. - cés, con.flioto que dió por rasultado el Oro "olvió con aquella respuesta. hidnl'3. apresamiento de alguDos buques. Hay que notar que LavaU8~abia quedado Tal vez si hubiera sido Rosaa SQlo el Que en los Tapiales cQn mucha menos ttopa que se bubiel'a levantado contra el poder de La' la que salvó del Puente de Marqu6z, puet al yalle, la resistencia no hubiera siqo tan i:l' aproximarse á San José de ~'loru, mandó que tranaijente. se incorporaran á la ciudad las infanterías Fero era el Gobernador de Santa· Fé, eter' y cuerpos que de allí habian venido á pro­ no enomigo de Buenos Aires el que manda' tejerlo. ba aquel ejército, eran tropall s~ntaf6cin8s Si el ejército de Rosas y Lopoz ponian si· que habian s"quoado siem¡>re nllelJtra catnpa· tio a la ciudad, quedaria sin podene oomu· la, y cUJa PP. le p.abia tenid~ que comprar nicar con ~lla •. l!ulÚLdole alQ. crecutll mensu.ahdad. Pero cuando Olavarria 601gun otro le ha,. Oómo ~~ ~ues, posible tQ¡J;lsijir cQn sc~e' cia notar este peligro, respondia con un orgu· jante e:o.e¡qigo, l'Elpre,senta~te del banda- 110 in.tinito: . 'ele? -y para qué llevo mis couceros! . La ciudad se preparó entooQ.e1l á la defena& Cinouenta de elloll bastarlan ·para llovar J'.~a defensa v!g~ros3., t'ormando ell su guar' mis comunicaoiones á la ciudad, ó adonde yo nunon hasta el ultImo Jóven. los maode, La eiudGd, en combinacion con :Lavalle en Este ba sido un oontraste, pero un contras­ la campaila, aunque estenuado y vencido. po' te que tiene remedio, mediante Dios y Duea· dia hacer mucho. . tros soldados. Luego, de \ln momento á otro podia pre- Y es que Lavalle tenia en sus COraC8rGl1 aentane el general Paz, y malograrles todas una confianza igual Q la Que tenia Napoleon las veotajats cooqu.istadas con a'lueUa vico 1 en su célebre Guardia Imperial. toria. . Cuando Lopez recibió la respuesta que a -Es necesario atropellar a Lavalle, dijo 8US proposioiones daba LavaUe, petdió 108 Lopez á Rosas, á ver que partido 8~camos estribos, pero 16 nalmó al punto y se fuá U. de su eituacion. ' conferenciar con Rosas. y de acuerdo resolvieron hacerle proPQsi' Lo~es no er!l' tan bruto como han pre~eodi' manes de paz. do pIntarlo Rlvera Iudade y otros esentores Lavallehabia 8e~uido eu retirada costeando apasionados. _ el ri~ de llatanlas, ha8~a que no pudiendo Er~. un caud iIlo, sí, pero. un 1.caQd~llo muy seguIr maR adelante por falta absoluta de ca' perspIcaz y de una naturalmtedgencla, muy ballos, camp6 y tomó posiciones, en el pltrs· sQperior, fuera de duela, lÍo la de los hombres je denominado entonces flor los Tapiales que han gobernado últiQ1ame~to 'r lobre todo Altolaguirre, hoy Ramos Mejís, segun cree' al que va á gobernar la prOVlDCIa d~ San· m08. ta-Fé_ . . Allí se entregó á meditar sobro el partido -Usted, dijo á ROSBB. tiene baltantea ele· qae dehi" leguir para hacerRe de reCUllOS Y mentol para sofocar-á Lavlille por li .ol~. á saborear la amargura· de afluel uCflutre Yo, no lolamellte no lo h~go falta, SlD'~ inl"lperldo. 'lue debo retirarme. - 67- Primero, por Que con mi presencia al frente Los dial' iban pasando y Lavalle empezaba del ej~rcito y mis santafecinos, avivo la re' 8i falltidiarso de su campamento forzado en sistencia de los porteños de la ciudad, ena' los Tapialell. jenándoJe IÍ. usted siml'latías, pdéIÍ ellos no sé Cortado cotd'pletamente de la ciudad, mlln" entregarán jamás al Gobierno de una provin' tenia sus comunicllcionefl, de tarde en tarde, cia que mil'lln como cstrangera, de la manera que habia di~ho al bravo Ola" Luego, S!lnta'Fé ha quedado sola, yel gc' v8nia. " :A~h11 PaZ áiidH poi' allí, Enviabrt crncdenta cor{)'cétoB (lon o1l 66." Es neceslrió, pues, ponerse l cubíeHo de ciar, a 4ue forzaran Iao Uñeas de Rasas, un g'olpe de m!ino-, pOI" que P~lZ puede arl'o' y aunque pertiióran niuch~s vece'~ la teto' lI~r á ~UB~.sen COI:¡job~; ,Y fl!á~da,~ tom"fn.9. cera partedo lu tüerza, llevaban {j1 pliego y re·' Stlnt:l'l!é itlléDtrJis el IJboc Cl1 Juque á QUl' "'resaban con la coutestacioo. roga' ' " , " H.' t J'. " l' l' , ' Pero esta virfa Mueva para un ,nilit"r de la , o~as C'QCOD t,) que su U 111G.O tetua sobra· nctividad y el fuego del general Juan Lavau'c dll taton· . b El podia obrrtr (ldr si !rola, y ádemá9, ,el era, lDSoplll'ta l~. , . . ~ . apoyo de Sflntá'~'é ()ñ1~ezaM ~ convertirse lia:· , Empezaba a ftl.s~ldIar~8 horrlbl~men~e, y • )';1 él ea UD!í tutela i¡ot dl:més fl.&stidiosa 'S bUBear ~ aquella, 8ltnaclon desesper.nte .UDo. petlluia, , $alida dlgnu: (!e e~ y ele 1314 tropáe que tenia la LOpt'Z tu~o qUA r(jtir8r~6 de unA mnneru Inmensa 38tlst"eclon de comandat.,., '._ mUR precipit,atla Ift\ lo que hfibis peJ]~ado, El e)ército, dt; a.08~S, como hamo. dICho1 En ellos dUla llegú la noticil\ que el ~~lDefIlJ engrosa~a d~ c¡ha en ~h~l. , '.,~ Paz! con BUS vetEltilllo!l de' Brasil,. 110 Rolo No SOlamente feClbill Dum:er()~OII .;CI18bn ha~l!~ Bnollado Ú llufltos obligándolo fi tomar gcnt~8 y elemento~ de la CIUI?J¡811ti, 8~UQ, «lU~ P!lII1ClOJleS en la ~iudad, Binó 'ltlC hahiá "ten' contInua~~nte V<;lIlan lle 111 Ol.~do.d, CIU~lld'l c.ldO en desigQ({l eómb8te-, despedfltánd• .,le ríOS ,y oflcIales mIsmos, a nhattU50 en sua ~ua tropafl, al terrible Mudillo el Tigro de bandel'us., , " loa ~Lla!l08 •. ~l ,8enguiflllrio g~il.e"ral Quirags, 11]1 p.rtido federal ios aumentándo de una ~o er~ d!flcll que Paz se apoderara de matléra: lmttofiente, , Santa' ~e J:!sra mautenei' por aqnel lado sfJs La8 mismas masas unitnrialJ 1Ulbidll perdid'o COD'JutucaelOues con el gimeral Láváne de el ruDibo. qv.ien no Jl~dia t~nei noticias. .' Veian qné LávaIté eAtáb'á flot;ttado t uei Stl Aquella liga degobeI"DBdol'cstlo~to .msé ~f.m' te"fli (fe Pát la menór :D.o'H~A~ , , ~re D. B!lenos -!1ires, pél'O 111, fl.tovlnCllt m:adl'~ Wf pa'rtidd vab"ilabti y ~lícÓ'iI'tra1:id(Ne Ji~' \lenlleryo 1118S IDtegrid~ J fUe Ma8 venturo era prudent;o ~ro,vocar la~ iras cr~ aqu'elti mil" la q~e en -l!- 8elrund~ hga de pillbs, camo Id sa de veinte! cinco mi( hmiibr'tl~ 'qh.c, por lamo el Sellor SarmIento, lo menos sitiábiill á tlúenós Aires Con la retirada de Lope~, IIlR tilas de Ro' Paz po~ BU narte permanecili e'n C6r(foll-i l1al! emIlez8ron a engronar 00 tol o)"ne' r'.. q e' N' ,~' , " ' .. " • " , , . '''o ...", ,CA, el,. U adasabIIl. de Litvallo' pero comprendia y ti. (:ste- DO tenlll, DI como UlnfOrlillirlos DI CO' Ljue su puesto era allí.' , Irto armarlos, Ab de; d b d' i" . Al Gobi 'r o M B } l.' d'''')' an onar a 01' o a era ec ararse en , en. rllwp laula. s~ce ~(lo. e del'rota • •lel getierál RIJ'~rlg~ez) cuyos mlClstrOB etan . , el ~enel'al Alve:tr V el :::11', del Carril. y e";ltoncea .(~Ql~Oga. y todO.8 I~ caudillo!! El vendedor de ItuzaIngo empezaba". A. cm' de la liga d"lulterlOr,. velldrlRD 11 golpear 18a pftilar .R~lJ~lo~i8, pOI' lB aOl biCiCih do p,odcr que puertas de Buenos Aires. reclamando cad. lo domInó ¡¡lempre, cDal BU huesO'. El ~rigdfiBbil 111 ~ll1'lido unitario pfl!'larldo Asi Jo comprendió el general Pdi, y lÍún ria p~t iI~o Be ~n" ,thi,einbl:o!l 1nll!! coDspícuos. ten,er noticias de Lavalle, re801 vitl e8'pEIt61'ld ~.(1l1tr8S mant..~l1J~t relaCIOne!! S cbttesponlteu' ,a/l,1 a toda costa, (N'ttl (:O'IJ ~us~~, qUIen lo lI~nihró l\litlistro eu' ~az y Lnvalie se BOfltenian [IU('S eiperan· IIrfi'l·Amét¡tl\ f!olldl:l nltlr IÚ. 'zIdos el uno en cd cifro," , - ':s-

El gran cornzon

El gencml Laval1u, ~ufril!nd() todo génerOlgro fiara. 188 comunicaciones de que eran po,. de sinsabores, se 80!lteDj~ en su impro~jsado tador8~. tenían órden de pelear, y esto, 8010 campamento de los Tl&plllles, comprendIendo en retirada" que era, preciso tomar una r1l801ucion defl." Entre 108 dosejércitos no habia además aquel nitiva.. . ódi~ natuI"a1 entre dos enemigo. que han como ,'"' 081lS "segula aglomerando elementos flobre. batIdo rudamente y COllservan las arml\8 PD la la ciudad, 8sh·echando cada. V8Z malil un sitio mano, preparados á DUelOS COmbate8. en toda regla. Mas ~dio hay hOy" entre 101 partidos que Llegó un momento en que la ciudad empe· cOl;llb.atleron e~. JunIO, .q.ue el qlle entonces so tl vacilar, fastidiada de a~uei\o y conven· eX18tJa entro s1tlad08 y sItIadores. cida de qua Lavalle nada. podía contra el ~orque entonce~, no se trataba de una COD­ elemento d~ Rosas. Q.ul8ta humillante y vergODZOsa, ainó de par· E8te segula ecupando su campamento en el udos que trataban de buacar el bien de la Pino 1 ya en el mes de Junio empezó a pre· patria, de uno ó de otro modo. pararse para dar una nueva batalla a Lava· El mismo RosRs, no era aún el miserable \le y operar al mismo tiempo sobre la que se manchó despuei con todo género de plaza" crímenes. El paiA no podia seguir en tal estado de Era un ambiciollo que quería subir al poder espectativa, con todo paraliz .. do y en como porque se veia sOitenido por UD gran partido pleto estado de desorganizacion. pero que amaba el orgullo de su . país y de Las resistl'ncia8 que Rosa. tenia en la ciu' 8U provincia madre, como lo demostró mal dad eran pocas, desde que Lopez se habia re· tarde y siempre. tírado a Sl&nta·F~. En medio de flU misma época funesta, Ro- No se le veia llegar como un enemigo irre· las mantuvo el hOlior nacional agrau altura concilillble, y 8u8l,a8ados servicios eran re· J la preponderancia de Buenos Airf's, sobre cordados en la plaza, avivados con bastante todos y todo. " habIlidad por IJS amigol políticos que pero Pero esto vendra á su tiempo. maneciaD adentro. Por ahora nos limitaremos á 1011 lIucesOl Pella Lavalle como hemos dicho ya, no e8· que dierun por resultado un Gobierno, que taban compltltamente cerradas la!:' comulJica· el pais saludó con cierto júbilo y regooijo. ciones con la cludad. A mediado8 de Junio Jasituacion era ya Cada ocho ó diez dias preparaba un escua· insostenible. dron dl' corac~ros, y)o enviaba con pliegus, O se daba una nueva batalla BiD probabi­ El pasaje erlio d ¡fíci!, }lero aquellos vahen· lidades, Ó se hacia una paz honrosa para ~s est.bblAu habituados tí este género de em· ambos. ..- presas. . En la ciudad no se tenian [noticias del ge· Como 8ombra., se deslizaban en medio de neral Paz, pues Lopez int,erceptaba todas 1&8 la noche, por eutre los dormidos centinelas comunicaciones y ni siquiel"a se conocian 8UB sorprendiendo su pesada vigilancia. t."junt'o8 sobre Bustos y QuiroglA"_ lSi eran sentidos, peleaban siempre en reti· Lavalle creyó ya imposible toda incorpora­ rada hatltli &I&lvar los pliegos, no siendo nun· cion con su viejo camarada, y se decidió á ca sus pérdidas de gl"an consider&cion. llevar á. cabo un RCto verdaderamente grande. lIuchas veces pudieron llegar á. su campo En las condiciones en que el paia se halla· conduciendo centinelas y aún oficiales que ba, una nueva batalla no podia importar otra habiaD sorprendido durmiendo, pero Lavalle cosa que un par de mil cadáveres maa, sin el no queda irritar '* Rosas, pues 1abia pulsa· menor resu!tado practico. . do la situacion de una manera muy inteJi· Lavalle pes6 la situacion y se decidió á ha· gente. .cer la paz. . . A"i es que cuando despachaba sus coracoros, Es que J uao LavBlIe era QD verdadero pa' les recomeJldab~ no h08tili~al: al enemigo, Yltri~ta, cuyas c~nvenienci88 personalea era lo limitarse al estricto cumphmlento de su 00" úlumo que teOla en cuenta. mision.· . Habia tomado con pesion la causa del pa Solo enel C!II!¡j de eer atacad". y de poli" tido unitario, por que cI·ei. que aquel siate -í~ _

Ma era el único capaz de salvar á la patria creia que [(oBas fUel'o. cap8Z de cometerlos, del abismo en que rodaba. -Soy un general que va á la c~pa de su Por eso se habia levantado contra Dorre- enl'migo. solo, y á tratar rle paz-mI persona gOl fusilándolo, porque habia creído fusilar espara él sagrada, lo como seria la suya para en él al caudillaje emponzoñado. mi. Su persona y conveniencias era lo último A Lavalle ni siquiera se le hgbia ocurrido que miraba, eeto, si alguna vez .aquel graIl que podian vengar en ól.1~ muerte ne Dorre­ patriota deteo;a en si su Doble mirada. go ó detenerlo como prmonero para lograr Hsbia ocupado el Go~ierno~ porqu~ así se un'a capitulacion sin condiciones. . lo habia exijidO su partido, y se.h8bla pues C.on ánimo tranquile y corszon sereno, SI' to en campAña contra 10B caudl.llos. porqu.e guió avanzando de una manera r~suelt8 y de' creia que ellos eran para la patna un pell- cidida, Mcia el paraje donde sabIa que Rosas gro de muerte. _ tenia 8U cuartel general, sin preocuparse de Así eB que desde el m~mento que pensil qtra cosa que de las nobles ideas que llena' en la paz, pensó en ella con toda la fuer' ban su imagin8cion patriota. za de su alma pura,~ se dedicó . en cuerpo El cuartel general de Rosas I!e hallaba lÍo )' alma á. llevarla a buen térm1Do,. con 1.8 unal' seis leguas escssaB del campamento de mayor honra y provecho para el partido UOl' los Tapiales, dish1ncia que tuvo que 8ndar &ario. _ bajo un frio terribll", como que era la' noche No tenia á su lado con8ejeros pérfidos y del 16 de Junio, y helaba por castigo. podia obrar con toda libert8d_ . De pronto. y próximo ya al campamento El tenia á Rosas por un caudIllo, pero no de Rosas, Lavalle tropezó cou unOB 25 bom'" por IIn bandido. bres cuyo sargento le hizo hacer alto, pre' Lo conoeptuaba lomejor que habia enbe guniándole quien era y donde iba. los caudillos, que se habian levantado con' Aquellos eran milicianos poco practieos en tra él y suponia que tal vez fuera capas de el servicio y sus formas. hacer la felicidad del pais, sostenido por La cue~tion pIna ellos era cumplir la con' aquel gran partido que lo rodeaba, apoylin - signa reoibida, poco importaba el como. dolo con to~o género. de .elementos. . Aquel rondin, "5n embargo, venia mandado y elio mJsmo partIdo Iba á ser la pnme' por un oficial de hnea. ra v{ctima de sn ídolo. . El general Lavalle DO. creyó 0l'ortuno. 0.1"11" De todos modos aquel acto no tema nads cunrirse al sargento é hIZO Ill\mar al oticl-ll. de mortifioante para el amor propio del gene- E~te al "er que solo se tratAba /lA dna fal Juan Lavalle. . personas, se aproximó en el acto y cedió a. la Iba á tratar con un caudillo pinteño, y BOS' indicacion que aquel le hacia, de apartarse un te~ido en resumid~ cuentas, por toda l~ cam' poco de la lropa. pan!, de B.lleno" .AIres y parte. d.e.la CIudad. -Qué se ofrece lÍ usted? SI ~I pals lIofna al~un perJUICIO en ello, -Deseo saber cual es el alojamiento del ge· d.e !llngu~ ~odo .podrIa culparse. á Laval.le, neral Rosas, pues alli me dirijo. 8!nO á la J~dIBcutt~le ma~orla de la provln' -El alojamiento del general Rosas? Cla qu.e .881 )!> habla querIdo. Pero quién es usted para hacerme esa. pre· DecIdido a hacer cesar aquella eterna ba' gunta y qué se le ofr('t'o con el genera:l? talla; el g~neral don Juan Lavalle, despuet'l -Esa no es cuestit)1I suya, señul' ofiCIal. de pasar hsta de retreta e~ su campamento, En Cllanto á qtúen 1;Oy, 80Y el general Juan llamó al coronel Ola\'8rrJa y le encargó el Layalle-y yoltpó al decir esto ('1 embazo de su mando de. aquellos bravos, mientras duraba capa. BU ausencIa con facultades de obrar segun -- 1" 1 1 f 8U inspiraci~n, si duranle ella sucedia al n Esta J"e~-ela('Jon luzo en e ofiCIa e e ecto acontecimiento estraordinario. gu de un ~UlletaZ? en p~ena boca de estómago. -Yo voy de incógnito, agregó, a. recorrer Quedo atm'dldo y Slll saber lo que le pa­ el campo por mí mismo pnes tengo gan d saha. hacer algo. ' aB ,e-Guie usted jó.ve.ll, guie us~e~. dijo LavalJe: y embozandose en BU capa, pues el frio t~atilndo dtl hacer 'i olver al ofiCial de su atur era eaceBivo, y acompañado de un asistente dllluento. _ de toda 811 confianza, se dirijió decididamente ,Tengo prm~ en ha?lar COll el ge~el'al r ade- .1 campamento de Rosas. mas hace aqUl un frlO (le todos los mfiernos. Esta sola accion demostraba toda la gran' El oficial dominado aún por la S{)rpresu, y sin d~za ~e alma de aquel hombre estraor' poder todavia darse cuenta de lo que hacia, dUlano. . . f'lllp8~Ó á. guiar al ilustre visitante, hl\sta el a10- In~aP!l7. d. un hecho lDDoble ó de un~ vi' jamiento de don Juan Manuel. U.IUB, Juzgaba 101 demb pClr si mismo 1 no Es que Laval18 era considerado CO.hl UIA - (in -

.aliente el~ (:1 ~~j~l'cito de Ho::;:,.~, y reputado de· -Lo (llIe yo llelli:\ harer conti,~o era fUóilar• UJl~ auda.t:Ja~lHmlt~blc. te; ¡u.'f"0 t.,! )lcrd~no, or~cnándl)10 'ltlO antes dé iill I>rc!>eucu¡. &lh, solo, y cuallllo Jl.)enos, SB le trRllscurmlas vl'mle y euatro horas te encu ít~ eapuab_, ~Cllia ~uc GII.lUij),r ul!1l. grij.n 8tmsa.~iQn, U'cs Cucr:t do esta provinein, para IJIW Ya~¡l!:~ Qué poma. querer La,\"allo u a,tluellas hQras y tIc rontaJ' J.o que te ha pasado L~ los 'lile te rnan~ a.quella. manera? lIaron. '. .., Vcndria. detrás elo él nJgun pocleros,? cjérc~to -l>asado ('~te i'lcillrutc y cuaudo Rosa' 'c' quo no esperaba. mas llUU algullll. so¡¡.al cOllve- en marcha )101" ,,1 l::lal"I·I,·llo f·I·I(~·' 1 b' S ) lUQ, 'd ? . .. " " 1 cscu lerto ~ ro ~ , ., , . _ negro 9.uc llevaba la l,li~Pl~ 111ision dci e fué -Lo que .&e&. sonuá, d)~o al fin el ofiCJa~, Ue descubIerto l'n el Ro~arI~. . qu gan40 ~l a.ioJaDllcnto do H.?::¡a.¡¡ '1 Bama.ndo a uno Pero esto fué fu!Sila.uo· !Sohro l 'h " de s~s etlecanci, que ~a~l tle,ló caer cll1lato al l';sto es lo '!HU 11alJi¡~ vúólto· 41~ ij).:wc ~ ~r .QUW-ll en. I!.'l~el V1iiltanh:~'1 1, 1 . fiallo, h::ci(onuolc· rodears·~ tl~ mil Q~)~'~.cau¡;~:::; .EI ~nJ3lal Rosa~ no se .... JJ,uQ, en su a. OJB. de spgul')(la!l. .., .. ~ nuent?. . . • y !em.ieri~D 'lile hasta 1,l h'~il!i(ln pllIJ.jcr Actn'o y preV1sor como pocos, bMUa. sahd? el fl,climatarso en sus tilas,·' (,1 lIli~luorccorfia.·1 ~ perstmalme~ á. recQrrer los pl1,eSt,OS, y rOD~IRe~, pues~s avanzados y lQ::i diferentes CU¿rpOll ~ á pesa.r dclfco tie la noche, pttra tencr la segun- guardhi. "...... tla.cl de que to'dos cumplian con Sll dcj.)et, ó rcp¡e- Lav 11 ' . wa.rinmewatamente .a.lgWl Plílol ó irregula.ridad q.IlO a. e 110 se mostr6 muy contranauo coo. i.& notara.. . ~SCJ).cH\o IlP PlrOliíLll. - Ros~ fMimpás se hn.bi~ vucltQ ~csoon~ado y =S¿¡~ng? que DQ 4rd~ ~n vp}ycr, dijo. pr.ec:avíio, ~ consecuencIa do dos te.nta,tlvas d.tJ Bl ~Cl~Cl sabe, .g~n(W.al, l"c~~c4 tlledee8Jl. aSflSlnato mtentws contra su }}N"Sona y eYI7 . g mI Rosas ~uando sale d~ D.Q,ooe I.uele tadas de una. manera milagrosa. ' no ~~;lcr h::uo~a l~. ~I¡¡':¡la, i}(Jl'O YIl l'uy al mandar El señor doctor Bilba.o narra estas dos tcntati- ~1JS D Q ~Ol a nUSR}Q. vas de asesiIiato que le refirió el cowa.ndante -:-.. C Illp.~un¡¡, m~nQrll:- altn. hn.ra, Ilonuc c<:te yo no t J • Chavarna,. . de 1.. '.... manera sIgUIcnte: .r· .,.,...... '<, y J . e l,!lO nmguÜ& "Estando Rosas en el Rosario, recibió nI ofi- P~'fS¡¡', ~!!ndoll).o lUilifcrcuto esper.arlQ hista 1& :..-a .1 __ Be .J 111 . . .1_.1 1 dIana. . Cuu __ r.n:u:l:lo ~ lavarna, 1llnnlüUlO pQr e , / doctor Vicente Maza, de Buenos Aires~ para des- ,¡¡.so sí, ~ll ruego. ro? int¡:~dltzca á. su pkza, y cnbrirle UD Pi4n qU,e se habia acol'.3ado, d.e lur.- de colocaclO11 á ~111 aSIstente co~ á los ll~sto. . LavaJle empezó por encontra.t la causa de Ro. El individuo se presentó á Hosas. sas muy b1;lcna y concluyó por <:p.contrarse él mlli- Rosas lo recibió con toda. amahilidad, ag'l'¡iule- In!) d.em~m~o cansado. .. . ci¿Qdole la adh.esi~n que manifestaba por su ·ca·u- RetiexlOuo que el genc.t·al nosas podría tardar ~a y ofreciéndole un::i colo.cacion á su lado. envolver, puos ·pocale scria la nodIe pru:a rucQ!''' El agente se mostró s~isfecho. . . ¡;er totlala línea ydecülió rccos4trso -en la cama.

RQsas lo mandó jr á descansar. p:ara eSI>el'itl"lo de una ~anera ma!il CÓlJ!.o4a.·· yo Cuando elluunbte habia. andado unos vein1.c ~ava.Ue estalla matenal~entc postrado por tá pasos, a,nel le -.dié un grito pnr la. eSlllilua,Ha- fatlga.. . .' ... . mándolopor s~ no~e propm, y el agente po- . A(luella cama lo atr~ua de ~lJ,l.a manera ll"l"eSI~. C9 llábil, volyió la· cara sorprendido. I tIbIe. R?s.as lo llamó. entonces y lo apostro.fó pOI~ ~t¡ COllcI~lyÓ elm[1,to q~e le ba~ia. ;:t.lC:\llZa, aquel infl'liz, lile adn'~'sario, (le quiet~ JlH.i)= f!¡~n Dl?qia ~::illefa,r . -Pe,r.~ p.(),,~~ brl~tol hombre Il~ n~9S.!-Q.q. ~a h?l'l'lhle rPl)]·es[l,l~a. .. , lunQ nt qué pIDO te ba.luall de haber dallo! . Que e;-a lo flue ha).Jla. ll.eYl1:

Con lUotiJ(o de su lI~g:\(la, ~. cuartel g~p.~r!tl ~;l p~.e~ .c()mJlrel~üil,i iJ1.W.e.• ~i4t~~~t!i pI ~F.; ~~a ~ll.gfan agit..'\cion. .' • ror d;,l ge~eral y ~!} íWp:sq.ro ¡jo 4pf1f· Los edecltnes de Rosas )b¡:tll }I ,:e~uq.l1 ts~e- --:!io ~~ PW! Ipl ifcp.er(ll, no ~,~so.~ ~~Ile- ra.n«lo su vuelta., ))lillJ!.,tr¡¡'!I JQs llr~IlC1R~~~!¡ ~.etes ro.! Lavp.lJq est~ Ij.(Luá~ "~l JU ..'t¡) ~~ér.cij;q JMl# AH se acel'cah:m :í. iI).Íoimarsp 40 lo ql,le S1,lcedIa. aSistente. :Singuuo atina~a pon 1~ P9'll~a ~ne hf1bi~ ~Qti- --:-Aqyí, pll mi~ojf!.IllipJ1to? pl'eg~tp. JOJlI1S Y~Q áqtwIló1. illc~p.era~a YlSlta, ~m p~l1laQ d\l.l'se pah,declCIHlo: _ , cuenta ue su Ohi~t9. l'l?t~ll est:L souamln. Yal conoQef ti ~~a.nqueza CQIlqJJ~ rl UQ1ll~ mi- . -~ ~ seií?r, mi ~ellEl~¡J.l, ,el I;CllCra.l LI!-YaU~ ~~~ Jitar so habia. tendlilo cnla. Cl¡\~ de Ro~a:;; á ~k:;¡- &,Q.a.9-Ul ba¡:a !res Q ~t~;Q ~oJ:l!-" Y. á ~q llm}ido cansar de sus fatigas, no podli\n 4l1J'se cuen,tQ. de fuc mtrodlll'lUO a) dormItono. . todq aqu,eRQ, . . C~q.p.a..q fq.eroll q, pt:re~rle JW 'maw, le l1ªUa- ~o lWdi~ ~r CDs~ cllllveni«l::,. ~pn eH g~p.eral ron sobre, ~Jl .c~ma ~ .. .ofuna~!'lpt~ ,io~ •. Rosas, P~!lsto q"~ UQ le l~b~tHl ~i4Q t,Ul~ p~ljl.brll )' rem-1Q ~1]. J!tl~nllg~, .en s.~ :m~o~e~ dp~~e.s, al respecto. . . lo que ~ah~a suceuluo desde Ia~~sMl", P¡¡l gó,,: ES'p~;m4o ell'egFoSA? .de C5t~ p.3ra llOl1pr ~tal' l1:cra1,aijl1«;tI;1llIp p.~r s.Ul,lwstQ, Ip~ c~~t~qta. cabos y soltar sarg~ntos, s~ Pl!-SICf,0U .á tomar !JUl.- 1'l.o~q~te jln~ so h~b~a~ hecho. te y ~cer l~ PR-sPtOSQ.il c01peutar¡o~ ~cl su- -:-F'l!J ~E}t~. #~~~a uo que esto. e~~W~ ~ cellp. tralCHlp y:q..o ~.en" dp Jll!'s p¡:qllOfarilc. AlguUQs pen~J.¡au. qM el gp~r~l J,llli~qrio l¡C Rosas '~uedó ,~an pensll:tiy() 9JI,C~ ~ll:f~ ,qj}Y babia vuelto loco, y no faltaba qUIen asegur¡mt CJ~ ~eINapch,~ pl¡1l11 d(l~ e¡;tJ;)p.Q.. aqloJ.ello debio. ~¡: l.lIJf1 ~ .. ~~i.o~. . • . Que poília 'llcvar á Lavalle á s~ FIJí\rtS! S~T ~Laya.Ue ~~fá AAW,,!sc¡¡'~R 1iP. ~er9--tQ J:GrCa n..cri!J~ . Ile aqlú, ueclan, y bauravemdQ H- ACI;i~U:ld!c1r aige" .. -EI.gCl~era~ Lavallo es un noble sol4(1q, nl.)ral co~ ;.Wgun~.e¡¡~ f> trA:."l!a. «li~Q t\l ~. f!' ...., segun t¡eue!le ~p )lny pe,cpr!~~. PP~o.P,cf.lfO ~ tOlllar ~da. costumbre. .. jaJguna. -~o nllo)' q,ue tl¡¡,rse !l~l gCJ,le.r~ 4'l,aJ!.e, ~~i LavaBe y Ros~ 4.cbi~ .~.~s~ ifiH~- cia.n otros.. . . I t~1 c.Il!lrJ,ldpp.~t;,e~o ~hri~p. I~ f11c,n0l' ~Slj@- Es. ~~gu.~p~q~ ~ar.J,l,lll~., ln~ ~~~ª~ ~~lfianz.arcspcc.toáaqucl y cU~.~~·lRr iP~~ Jlll zOfro viejo. . gaba. ~l )l1:\;'IU'.aoot~~º suc4~, PIloJ9 .~~ ~p.aQ ~'u Feh~lJ.~ JlI 1mb:Qn 110 se 1Ua.~ el iJ"edo, y cn,emj';¡-o.· . mas que g¡¡.~chq ha. aQ 'lcr' 0,1. que lo cQ.~! y cn' efecto, aqll(ül~~ .dQ~ Q~~'"I) ~ EstablUl eulo mejor ue 1M l~oxne\l~iQs, ~~- sidQ. ~igo.s enliAA WJm.Cr.Q)f ~~, y ;4i~4Jcual iJ,o 641li:>P~e.ci9 en s~ ,J.oj~~ic:Q.~ ~ geD.c¡'~l. no- saUia PCff~c~a~e~t~ 913,.~0 'm~ 1# q!rQ ~~ ftiP~. !>aS, segwdo~e su~ ¡.¡.yudautes. • Rq~s nUlpdA, Qq~ ~~v.rit u~1 av¡y¡.~~lji,-á Yec!lr- Inundablcl\W»,te lo que Ip.a~ leJQ!i .s.c ~Iaba de \'e\' el campo, hasta. dos leguas á vangu~ r su espíritt, em q~e .el! Sll ml¡;nl~ .cruua y dormigo so preparó ~ .~b;af 4!1~ c\1.MtO. profUllcla.mentc ~ á h¡¡,llar alV.eDcedor de Na- Aq~pl 'bolllbr!'l~ Q.U~H ~q ~iP.IW-te, Jle· varro. . .. cesitó Hlil-¡l IIQ uie;G miJlJ.Jto~ p~ ¡l~1U' ~u agi- -)11 gene~~, tillo ~~o ~e WS ~e~cs á pcnas tacion y prepararse á arrostrar la scr~~ JW. ]lllho Rosas eclJado pié á tierra; de .J~llll) Lq.}'~U~. Mi gener~, l!-ijadió ~Oll ~xajer~ agjtacion, el Al cahp 4e e~t~ tier~~ so !iªcllw4 J1iRJf3~- gcne¡:al La.valJe. • • . . mente c,QlllO S¡l,uell ~ba W tQmar UQ~ l.'e~Yllt- -Qué haX con el g~er~ L:wallc? lll~egUlltó cioD, a.briÓ lO). i>~er~il de la pieza I,l~md~ .iqnWl\ R9~ SQ.rpte.u~idp, y creyclldo que S~ trata.lJa. 4,e Lay~.l.lc y cukó de ~ lllaDCrlj.cJec,iIij~~ algun peligro,' lijegun Üt Q.gi.ta~ion del c«1eClj.ll. . El gCJl~rli.I 4.v~Je .d,9r,m¡a. ~~ .up;t mu.efIJ. -}t~1 general Lavall!J cst;í. ahí. . plá~idQ. Y tf~fllJil¡l, (:QlliQ ~olo d~f~C!~ w¡¡¡ AA1,Il- c~ ll-oS3S no POWIf, ni ,sitluicra. BO~lqi:llal' de b,res ~uya :COllcicpcia, p.o tiene Jiga 1R~4 a.;wiQJl la relJ.li.,d de lo que S~!led.i~, Clltellilió q~e el qlie rcprocharse y los que no tienen pQrqlJA ~~~ dich,o.~ estar LlJ.vallc alú, signw.caba. IIuo .el (lIJ.e- 1)1011 un ~esp(}l'tI!r )'io~~f..o. , lui~o estalla. enci~a, y. q~le de \l~ n.lOlne.llto á otro Itosas ~e· ¡~CPf<;'ó, 4}~ ~10 Y por lll~ ll@ 1-", Vf'nan llegar sus terrIbles . l"eglIlllo~t~l:i salJJ~ ~u costara, so CO,l,lVcnclO por fin de que aqlJC1JtJI,C­ mano, . ño no era fu.!j¡ij9, sipp PMf~t~¡¡lJllt~ n,¿qfJl. -y lQ lm~c!l.colWcido? pl'oguntó, .,.oh"J~l),dQ IÍ, 'fropC<"Q ~n l1díl m"c1!lpJ~s¡9.fu~rt~m~e,1te- tomar el cstn}w p~a. l)).()utar nUBvRlwmW. r.o LavaBo no despertÓ. I!)c J,;ll,he ~Oll c~ta. gente .cst~ ahí? . Qué lmeua'debia Ui~!~c~dc .a.qu~»~ CMla! I'ronto, TijiS 1J>.Y~nttlsl á. (}\'uenar .. Jos !lilfll\"- ltQs~¡¡ tw¡pqlle ¡W~I:,:!W'",e ;í. I@, L~Ill~ J mo' SO~ C~I'~1J1:I Ima·j3JIsille¡. y ~st'¡¡ll pl'Cpfl.ral\Q¡¡ 4Il . ~,'t'flC) fuertemeute. ". . . pnmt:ra (,/1'«11::'11. ~l g~~Ji;j J..ªyk/Jl~ ~~~l'ij) cQUII IIIif"D&. turalidad, ¡;iu l'I l:iobres¡tltli que era de t!sperar-- esfuerzos, y da.r tín lÍo este tlteruo derralJlii- 80 y Ni~ la menor.. estrañezn., . miento de sangre, sangre estéril y basta mmi­ SonrIó cuando VIO 'Rosas a su lado, y sentan- nalmento derramadlL. llose sobro la cama. y echando fuera. las piernas Lo f'neontrlU"é á. usted en esto camino, ó me como para lenmtarse dijo: hahré f'ngañatlo lastimosamente? --Pt'rd~n genernl, JUil perdones por la. ('on' ,Ro¡;a~ bajó la cabeza nnto la penetrante mí' lianza y libertad que me he tomado. . r~da dC1 Lamlle y reflexionó un buen rato, atur- ,r_ero era tan blHHHL. e~tl\ ('ama y tanto 1111 dido Jlor. aqllt'lIas nobles palabras. ~meno que no pudt' resIstir. HablarllL La\"alle de cora7oon, Ó le tendería RosAS lo contmo fiara impedirle que su levan- algun lazo miseralJle'? tara y repuso:. Rosas se lmhia comllovido. -Ha bel"ho lIstPll.lUuy luen y le agradezco ~Il corazon, que aún no ha.hía perdido toda!'> ('sta prueba de confil\nza, que muestra que us- sus nobles prendas, se sintió eonmovido ante ted me hacia el bonor de ereerse bajo el techo aquella. palabrll. noble y cediendo á un impnl- de un Cltballero. so que no pudo dominar, repuso: Le ruego que permanezca recostado y m~ in- -En el camino que usted me muestra, me d.iqutl el asunto que lo ha. trl\ido lÍo mi ca.mpo, encontrará ~iempre llispuesto. como hablarilt ('on ~u mejor y mas viejo amigo. Si me encuentro nI frente de nn ejército, e¡.; --Sabia que \"enia á buscar 'un hombre de porque á ello me ha. impulsado un partido pode- corazon, replicó. Lavalle. . roso, que creia. que la. guerra era. el camino (le Por eso traté dt· vengarme en la. espera, tan- salvaciQn. t,a. mala noche. Si no es aií, si responde Ii. ahorrar sangre Cal'amba! y que sobl"l'bia habia sido esta y sacrificios, formule sus bases, general y pon- cama! gámonos á la obra. -Es que usted la compara con el suelo donde Rosas no daba esta respuesta. á. pesar de la probablemente ha.brá dormido estas noches. impresion que en su espíritu hicieron • las pala- - Desde el PUf\nte de Marqucz no he tenido bras tic Lavalle, sin dejarse una salida salva:- ulla. bora. de \"Crdadero reposo. dora. Pero en fin, esto es lo de menos. Si las bases de Lava.lle 110 le cOllvenian, !lO Lo que aquí me trae es la. tra.nquilidad y el seria. él quien podria. decidir; por eso se habi9. reposo de la patria. declarado impul~ado por un partido poderoso. Ante eso desaparecen mi!! propias fatigas y Yl' se sabia que él era el árbitrb en aquella. y siento que en mí germina una fuerza que me situacion, pero no queria darlo á entend~r asI. agiganta. cuandl se trata de ella. I"avalle estuvo meditando algunos minutos, al - En ese camino me encontrará usted siem' cabo de los cuales habló allí: pre accesible, respondió Rosas, sin comprender! -Mi personalidad es lo l1Itimo en este asunto. aún ('1 alcance del pensamiento del general Yo no tengo am}Jicion de mando, pues otros Lavalll'. son los rumbos de mi vida y carrera. Hable, y hable con toda la franqueza. de que Acepté el Gobierno porque Rivadavia lo rebu- .~s usted susceptib1e, y que yo me merezco. só y era necesario que alguien gobet"tlara, -Pues bien, dijo Lavalle con una magnífica mientras el pueblo elegia. solemnidad. -Creo que con usted, general, sucede mas" ó Estamos desgarrando las entrañas de la patria, menos lo mismo. y sacrificando sus mejores hijos, en una lucha' El fin de nuestra lucha, sea cua.l fuere el ven­ estéril y que tal vez no dé 1m resultado práctico cedor, será que el pueblo eli~1I. libremente el El pais se atrasa y se empobrece para sostener Gobierno que ha. de venir. dos ejércitos, do~, ejércitos de hermanos que, Si este mismo fin lo podemos logar sin luch¡t tal vez sin el menor rencor ni owosidad van 'I Y sin S!Ulgre ¿por qué no hacerlo? desgarrarse mañana en una batalla inútil, puesto Se me ocurre lo siguiente: . que no seria la última y mas sangrienta que las, Vamos á. baeerun armisticio y á. convocar á. anteriores. eleeciones á la pro\incio. de Buenos Aires y ga- Unidos los tlos, podemos contribuir á su en- rantiendo usted en la campaña y yo en la ciu­ grandecimiento y de"'olverle una paz que tanto¡dad. de que la eleccion ha de hacerse perfec- necesita. .tamente legal. .. Yono tengo ambiciones personales. Al Gobierno que resulte electo, de esta ma- He obrado como, obré, por que creía que con nera legal, lo acatamos ambos honradamente. ello hacia su felicidad. poniendo á. sus órdenes los ejércitos que co-- Hoy solo creo lo contrario. mandamos, le hacemos entrega de todos los ele Esta guerra es su ruina. y el abismo donde mentos bélicos y nosotros mismos s~remo8 los podemo¡;: hacerla rodar. ' primeros en hacer respetar y cumplir toda ór· PnrlAQlOS bacer su felicidad aunando nuestros d'en que d. aquel Gdbíerno dimanase. - 1;3-

E~h' f'S mi plan, general Rosas, a.hora, pupde - Tiene ra:lO 11 , dijo al1l.n, n~ted observarlo y modith)arlo dela mallera 'lu!' Hasta para lamejoJ' rt'daccion dpl U'atado, p, lo estime mas digno y conveniente, I'om'enientt> refrescar las idt>al-i. Rosas volviú :i haiai- la caheza, vencido por Temo únicamente qlW usted :o,e fastidie de estar a.quel noble I:orazon, " solo junto á un hombre dormido, }<~I si tenia ambicioll, una de~medida amhJ('lOn --N o tema eso en manel'n, alguna, plles á pe- ,le mando. ,sar de lo que dicen ,le mi carácter, soy tambien Hacia quince años que venia preparando su de l:al'ne J hue80 como l'ualquier hijo rlP n'­ Gobierno, y no podia eu un solo momento re- cino. Ilulll'iar á todos su!> 8ueiios é ilusiones.' Pienso hacer traer aqui otra ('ama~' desean' Sin embar¡ro, accplipr á la propuesta de La- sal' á la par suya: \':,l\t>, no era renuneiar al Gohierno que aeia Como lo hahj¡\ dicho Rosas, He hizo llevar un ~e~uro. catre y se recostó tranquilamente frente al hoor Sin hacer la menor indicacion en una elee- bre con quien horas antes era irreconcilia hit' "ion libre, él seri:t siem,Prt> el que triunfara blc enemigo. ' dado su inmenso llrestigio. Un cua.rto de hora uespnes, el general La"aJ!f> -Se pntiende, afladió Lavalle,'lne tal vez "ió :m dormía mas tranquilamente aún que cuando Ro­ pensamicl}to, que Diugnno oe lM'dos aceptará se sas lo habia despertado. lemnte Sil l'allllidatllra.' Este, al verlo dormir asi y vencido tambien por Esta última c1áu~ulfl mellio descOIlI'ertó :í el cansancio, lo imitó, quedáudOf;e profundamell' Rosas. te donnido. Sin emhargo, dominándose hil.ll pronto, se :El toque de asamblea los despertó cuando nl/'­ sobrepuso á todo ~'tpndiendo Sil mano :i La- jor dormian. valle le dijo: Al verse uno, frente ti otro r(>"ordaron la 1'11' --Sn pian. ~II idpa PS nohle y grande, general tre\'Ísta de la madrugada ¡Ulterior ~ sonrieron Lavalle. amigablemente. Yo acepto sus bases sin la menor ohserva- Tomaron mate ocupándose en conversar cosa~ cion,)' estoy dispuesto á empezar á trabajar des- indiferentes, hasta que por indicacion de La\'alk ,le ya, en esa obra noble y grandiosa. :trataron de concluir los arreglos y bases con qup Se entiende que no hemos de consultar á nues'l se hahian de redactar 10iS tratados que dieron 11JI Iros panidarios, docde hay IlllH'ho¡; que ~(tlo con-'I con aquella guerra sangrienta. ),ultarian su ambiciono La gente de Rosas andaba mas alborotada qu~ Creo que este es un arreglo 'lue l)odemos Iuna (~olmena en tiempo de sa.car la miel. hacer Jos gefes delos dos ejércitos, sin conSUl.! Habian o,ido el rnmorde la~ conversaciones, tal' el parecer de llinJ.,'1lno. pero no lJodian darse cuenta de lo que pasaba Rosas empezó á malliob.rar con toda la saga- '¡entre lO!; dos generales. ddad que le era característica, para ,pllVolver á Estaban sorlmmdidos de la gran cordialidad Layalle y obtener en el arreglo la:; mayores que reinaba entre ellos, segun las referencias del ventajaiS que pudiera sacar. Ila~istente que" acarreaba" el mate, y mas aún. LavRIle que procedia de buena fé J con toda al saber que habian dormillo juntos como do¡; lit fuerza de su corazon noble, no sospechó si- buenes amigos. qmera el cálculo· ~on que o~raba. Rosas, fledi-I A9.ue110 olía á paz desdp una legua de dis­ ('ando su fuerza mtelectual a meditar las hast>s tancla. d~1 arreglo que habian de llevar á caho aquel Pero qué gímero de paz'? f'n qué condi- ,ha. I ciones? R,osas mandó que trajeran mate, y se prepa-I Para ellos era inuUlbl,le que Lavalle se habia ró a la batalla moral que indudablemente iha á entregado áRosas,y no esperahan ~as que. ver­ tt'-ner que entrar. los salir afuera para leer en ambas fisonomlas el --Convenidos en lo princ~pal, dijo Rosas, le rastro de laconversacion. :uego que descanse tranq\lllo, que no es pU' Los dos generales se hallaban entre tanto en­ nalada de picaro. tregados á la confeccion del pacto que habia de Para Ja grande obra que vamos á llevar á ca- devolver la paz á la provincia de Buenos Aires y 1.0, un .par de h~ras poco si~ifican. á la República entera, pu~s era lógico esperar Ya VIene amaClendo y el dia no se ha de per- que convenidos Lavalle y Itosas, el general pa¡( der por eso. . ' regresaria con 8U ejército á Buenos Aires, por- Lav~lle estaba te!l'lblemente fatigado, de cu- que su mision quedaba terminada de hecho. ~ a f~tiga 5e resentia un poco su misma iuteli' Al \'erlla abnegaJion aparente con que Rosa~ gencla turbada por el insomnio. accedia á todas sus indicaciones, La\'alle lo crey'-' Además aquella cama endiablada era terri- de corazon en aquel camino y por nada se 80S­ blemente tentadora, hasta el estremo de bacer pechó que podia haber tllltrado dI' mala f6 y ron elltrecerrar SUB párpado~. cál"ulos innobles. - 64 -

Asf es qn~. cay"ó c~mo \lb ~horl(j. ~eitfih,se lIj- lJavil.l1o y cománilantil g ti .;1 tl j.~ . 1to" . 1 ce, entre_ las mlluosas rélles fIno lü tt'Íidió su Ro¡;'1.<''. ", I'~<,"" so·m-.-c· tc· ra'n 1a.'s· rel\er.1.!U; .. erl!-! (e1" su.... an 1I'1I1l11 ~ualnll~ o ene,ml~~ .. '1 _, . '. ,. ..J ' . t .. _ . ' fíO }<~I Gobierno ele 11\ lJro~iiícilt fi:\co)ioceri ' A. l""dil,l'( e l trata- En fé ll~ 10 cital y p:u:a hacer constar ~uestro dt# ll~b1 Mil ~& geÍIétéles sdlicron á COmer a.cue~do, '. fi,rrnamos y ratlficaillos la ¡-¡resente CQri­ un,churrasco. ' venclOll que consta (le siete articulos en dos En íólJ(ll1~del' ditt hnlfi"ñ toi'rü\(}o' 1IIfrte so]n- ejemJlIll¡r~s tle .nn t,enor, en. ~~s, Cru1uel~s, est~ri­ m~nte, co~o rsalsa.á aq~~l ~rat¡l.tlo. quo fUlín,n p:ol- cIa de... l'bller, a \'eI.nt~y.cuatro. {l~l1Ue~ u~ .TÚl~io pe de m'tI~He pata (1)1 partldo Umfánoj qua com- del ano de nuestro RCllor, ele lUIl 'lcTlOClentog vem- Jlre1idiG al momento'tOdo el ftlcmtcp. y U. red en te y nueve>. , que habia caído el Gobierno l)rovisoi'lo., JurlT/ Lat'o.lle, Hé ~titd }Ss ~Iáitsn}as da aquel tratado: . • • . .Juan ~fanltct Rosas." *EJgenetal D. Juan Lavallc, Gobernndór"t El solo ,3:r~lCulo que. cnce,rralla el convenio i>~i­ Cápitltti GenetaJ pravisorio de la provinciA. de Bl1e- vado, vema ~ t~ner mayor atcanco y!mas fun'esto' J!rJá kires;y el CO'l'nalidante Generltl lte Campa- para ,los umtarlOs: ,.. ' '. • na: ~. Juan ~l1;nuoI .R~tn\'I1, á efecto (te })olÍer .Por ~ste ('onvel1l~ partIcular, ~Java.n~ .se . com­ t~~i1id .. }~ dlstntbl()$ que han afligido á la pro-, pIomeba á hacer trlUnfa~ en la CIUdad ,l.os UllSlll.OS vmCla ,y, ré!ttHl>1ecet ~il en,. e16rden y trallquili- represe~t~ntes que tema B.u~nos AIres 3,Jltes d~;a~8glltclá.'d~ru:e:bte ,peytutbdcloBj han con've- <1c~:r;novmllent(l, del 10 de DIC1em~re., ... ,. máos en los a:t lculo!:! íngliieiltEis: El general R?sus se comp~om~tla por· Sl~ par- 10 Cesarán las hostilidades, y quedarán r~s- t.e" á hacer eleJu' por la ca.mpaua, los nusmos t~'bíecitkg desde la feehá. de la -eonvehciOn to- representantes. . dt\1I.litii Í'el&Ci~e8 ~nté l.a. cin(]8J c,ntusI:\smo ,]lor sü causa, y mas touavía permaneute, el gQlJl>ru\\\lor pronsol'lo don .Tua.n pOlO su [!Puel'al ('ll gefe-.- 0·0 (1;. -

1]0 suicidio civil.

En· cuanto LavalleIlegóa la ciud~d, acuarteló. zarla de lIDa Dmnera que no dejaba lugar ádudars SUt:l tropas v dió tla publicidad ~l tratado que co-' sohre sus intenciones. ., noren ya. nuestros lectores. I Los federales habian emiado tRosas cÓpía. de A.quel documento ca.yó eomo una descarga eléc-; aquella lista, significándole que del tratauo l>e ha- frica entre 108 lIDitarios. . büt hecho una búrla grotescao Los mas exaltados fueron á conferenciar eon ROllas se alteró, hizo pcdazot:l aquella lista y se Lavalle, tratando de demostrárle la trampa en que dispuso á ponerse en eampaña nuevamente. habia caido. No podía pasar pacíticanwnte por aquella. burla y su sorpresa. v su dolor eran aún mayores, inmotivada. cuando conocieron la lista. que La.valle recomen- Y escribió á Lavalle una cart¡t estrañando aquel daba para que sus partidarios la hicieran tritmfar proceder poco sérío y signitieándole lIUO no que­ en la ciuda.d. ría pasar por semejante farsa, ajena á su carác- Allí LavaIle había caído en gran despl.'estijio, ter y á su modo de ser. á causa de los últimos acontecimientos. Rosas habia convenido en la paz COl! L.avalle, Los unitarios eran pocos relativamente á los porque las condiciones del tratado le prometian federales que eran toda la campaña y parte de el mas pacífico yespléndido triunfo de sus aspi- la ciudad. raciones. Era indudablep&.raelIos que Rosas haciaelejir De otro modo y con la representacion unita· representantes suyos, que unidos á los dorre- ría recien electa, venian á anulars(l sus quince gnistas euyo triunfo recomendaba Lava.lle en la años de constante trabajo, las grandes sumal dudad, darían fin y remate con el ya vacilante par- gastadas por él en el mantenimiento de parte de &ido unitario. Iaquel ejército y veia muertos tal vez para siempre Los mas exalta.dos, viendo ladecision de Lava- todos sus sueños de mando y grandeuo He por el triunfo de aquella. lista, decidieron con- La guerra. civil volvería, á estalli'r, los triunfos tn.riar su voluntad y trabajar por otra, sin que es- del general Paz que no eran un misterio para él te lo supiera. . vendrian á dar nuevo aliento y vigor á IO!l uni- .\1 efecto, el Gobierno delegado dictó una dispo- tarios, que esperarían de él lo que no hahia po­ sicion porola cual todos los estranJeros que habian ,tido conseguir LávaHe, y estos dos gefes arma­ tomado armas eula ciudad, quedaban habilitados dos darie.n á In polítiea. (>1 giro que quisieran, para vota.ry hacer uso de todós los derechos que ·-Es precilSo entonces ganar tiempo y ganad" gozaban los nacionales. activaDlente, dijo Rosas {t sm: parciales y puso en De esta manera las filas nnitaria.s se engrosa- movimiento parte del ejército que habia licen- ron de tal modo, que en vi:.!tade ello los federales ciado ya. . de ~a ciudad se. abstuvieron de votar, en la se- Pero no tuvo que e~l'''l'lu: mucho tiempo la. ¡unda.d ~ue senan ahogados por el número de contestacíon de LavftU,'. los umtarlOS. E", á 1 11 di .1 1 Fué necesario a lazarla eIeccion en vista de, ste l'ar cter ca, '<~ ere,~cu. ~gu:;htuo I?o~. a, un oficio que envió lRosas 6. Lavalle,' comunicán_ltalSo papel q~' soe le .querJahaeel'Jugar, eSCl'lhlO .3. dole que la campañaaÚD no estaha dispuesta pa- Rosas,dándole mmu,clOsoS detalles de lo.quehabu!, ra.concurrir á la eleccion. sucedido, y a¡;;egnrandol~ que estaua dispuesto a, y este plazo de ocho dia.s sirvió á los unitarios hacl'r reBpctar el I:onvemo pOI' los mediOS a su para. uniformar sus trabajos y h.acer triunfar una alc::mc~, " . lista de inüviduos de aquel color político ptlsara .\1 efecto le pedia una conferenCIa. en el punto IÍ. quien pesan.. ' que él indicara, para oestablecell ln,s ba:;ctl mas os~- ~:l dia. de 1& eleccionllegó por fin, y la lista uni- gm·a o.; 11~~ hacel" efectiVO oel conn.·ruo tlue ¡;lIS anu- tarla obtuvo un triunfo canónico. gos hahlun tratado de vlólar. Pero Lavalle ante todo ·era un hombre de Al lef'r esta carta, la fisonomia de Rosas res· honor. ' plandeció de satisfac('ion. Habia empeñado con Rosas su pala.bra y l!U tir- - Ya del'Ía yo, esclamó, que Lamlle era un ma, y estaba dispuesto á cumplirlas á pesar de to- caballero. doelos partidos del mundo. Lo mejor seri:\ ql\{' t'lItre Jos dos C101nbremo'; o~do tu,vo .conocimiento de la lista. que habia el JEobernador á. f]ne JWIlIOS de someternos y tnllllflLdo,se mdi¡nóprimero y eoncluyó porret:ha- allí no hahrá lugar á trl\mp"~ 11 .. Tl!lrticiarin~, qHt~ - 6ft -

111) Il1Iipl'l'lI (OlJlpl'ClIcll'l' Ill\<; :;())1l0~l lu:> ál'ltitroll que, ltlllHIlH' ¡le "l'ngru'311 11m!; 1<11'11c "ihrahan do );1 :;itnacioJl. todavia. Yo Jlodré entonces inflnir 1'<11'n. l)t1fl .,¡ nom- El no hahia. Ilcsperdiciado sacrilicios contra­ l'rmniento recaigl~ cn uu amigo y todo :se. ha- riando su mismo gél1io é inclinaciones, 'para ha. brá. gamlllo. C{l '\: Rtrsas liblU111a. cOn un lllacer llúinito al afun noble de sacarlo 811'080 en sus empresas. }leñSfLr que lOi> federales no podían. ~ostener Ellos no averiguahan si estas eran buena. 6 otro hombte 'It\e él, porque er. quien mas ga.. maJa.s, ni tlíqniera ta.DlpOCO la. ra.r.on que 10 De­ rantias de paz r~presentaba, y el único que podia vaho. á letant.a.r el paiB oomo Ullsolo hombre. apoyarse pn nn Pftt1ido fuerte y numeroso. Los llam9b .. el patron y concutrian al COmbate y 1\ en él ejército Se habian hecho algunas roa- ~. á la fatiga. con la misma. alegria. y buOIl8. ,"OIun· nifesta.ciones que deinostrallan mal era el honl· tl\d, con que concurrían á las boleadas v fiestas eu bre de sus simpatías. IOfi <:erriUos. • -No qu.e~mtls mas Gobierno que nuesu'o ge-, R01>a8, dueilo ab6oluto .le aque! potleraso eJe .. l1~ral, habu\n cUcho. . mento !- ~o~lo en 108 indios que lo miaban co. Lo hemos de llevar al poller :J.unquc ~a ¡;~ m~ un gran ~ciqlte y !le eSptU'ltaMll de su po­ ln~ las bllS'o'l'l.et~s, .~rq~e uosotroll lWlllOS el \-e.r. der, comprenl!ia que tenia en lill puñ? al país y dad.~ pueblo ~ aSIlo ~!-,~'<:'JUOB; 'll~ no I>e hacia. lo que no fUe1re su -eBtnc1a. volUn- y R()Sas ht.bu\ 3'ecOJldo en el fondo .de tiU ce- tad. . l·azo~ a.quellas palahras -que el·a.n la v~ader& es- En ,·Ü,;ta. de esto, qué temor poditm in.spirarl'" 11l~S10ñ ~e la ,,,l~t~d de la Clt~lJaü,,\.. . latl intrigas lIl' CÍrculos illferiores al suyo? Delllas)adQ .saIJla 1l1qlie no llama n6Ces¡aatltle Con tul t&lf'nto a~,iba de roda l'onderILc::i,Dl1, su- luchar pa.'ra llevarlo al poder. po OiCtdtar la Qmblc~n de nUtllllo qué le de- N'O se lé eSC8.pába quo Ln"aUe lUl.bia ~Ilo im· H)rabs. J)~sad:o al P8S?"qU'e dió .P~ su.misw& impotéu- y est~ arte de disimular 10 llevó hasta. rClHW. Cla. ~alU?l~l con l'Os fonuiiJ.au.Les elettlentos 'Ciar a! Gohiel'no, cuando sallia Ilue ~u fWllilU:ia 'Iue ~t.h~bll' e!anta~~. . no ~rJa aceptada. ~ qlle le llabian de rQgu-}tOC1l ~:d~as, SUbI?, pOlSltivamen!e que en la Cittdad menos Iltte ll~ ródi1las porque siguiera 1 Go- toma tanto.parhdo. como el mISDlO •Lavalle. _ ' biern'o. en e _Al b \"ea. C6~b.~OS 'Sn~ tra03;j~s d~ qwnc~ Pero no anticipemos los suce~os de ClSta -épu. :tuos por la real zaClOn de so. .~mblclOU suprema: ca orirnnal é incomparable . .,;er gobernador 'd~ Buenes Aires, y mas tl.tl'de ,. ? . de la. na.ci-on entera. ' FIJand~se él lrusm~ el plan qu,e debia do aepir Las 1loIIeiquino.a.e fl'i'ow8.'eit. d~apa.reeerial1 ~.:t coutmwu' engQ1lallll~ á LavaUe y espltltall- 1lien pronto llpiastM08 e: ~e'1', y Buenos do s,u huella fp, se preparo á te.uer la I)uen ell- Airea veria, bajo 1m Go· '." tlesaparecer lns trtmstn .q~e el general le p~a., _ contribilciones vergonzosas que estaba paga.ndo Rosa~, ~on un cue.rpo de t',lercito qllB hatlua. b@­ por41ueno la inva.tliemll, y fIleI'Ía.1e. :pro~;t!cia ('8. c110,allrOXlmar tÍ.la.elUdlil~1 e\ll8..DdolllpO ,que ~e lleza de 111. Repúbl.icn, á Ht. que f:le tmmetet'iaD las' ha,illa fn-.l!:.t(lo al l'om-en,lO, se t~I1:~la~ó i Barr.. demás. CIi;;:. ~loJa.m~0s.: ea Ja..qum.ta de Piii.ft-(). Por que es preciso cO!\venlr quo ~aB era, un Desde alh hIZO ,~! .... La.'f,!-Ue qlle lo '<.-'8tJ@­ Jlorteño mtn.llsigeute, "lne toda .gjoria. y toda r~ll~ en ~quel . punto ~'& realizar nl~'-t\-8.6 n.- granpeza eran pocas para la Jll'ovincia. mMI-..e. ('11luone,,_ Esa gI"tildife.rencia. hay efttre lOl:l felleoral-es tUl" Af~uí el 1taJ.'tido lIllitario ¡;e fltH5~ t'fi C1U11ptf\a tiguos y lo!':! federa.les moderno!;, malos i!'lita.dnteJi ~1l (·~tupeQda eu~ p*l~ Q',tcfi<.>rdc r..,lJe ue tUl t>l'Íginal odioso. qUl' t-ig:uien, la l'eiiistenrlA. j~l I:pll!bllo ,lH111cJJf) !JO lo h~lJillo ]JI'1'tit]o() t*., I'(iro l$jf' ¡jO negó á IUloCc.... lfl~ ,,,,¡m,.,,, p~n1'Gt' DO .\úu l¡¡~bia éu bU (,'01\1.<:011 lilltJl-nali lil.~Q»iblc:; I t.(;~Ü¡\ dt.-mei:l1.g.s pan.l'~üit¡r y l'.lega:n.do, pOT qUE; _ 67-

h:tbla. empe:ña.tlo:S\l 11f\,lllhra. íle hon(ll' y el'~ vta'ldeben tla~' e~ ejemplo ,le I:¡ ~DlOd8RI,(;ion y del ~Iso cnmpfu'l\l. ' desprendImIento; L,walla se trasl;¡,¡}ó á Bltl'l'acas, llande. tU\'O lu· "Qu.e lHU' la. Convencion (lel 24 de Junio, re- ~ la sElgqI1da. eopferencia. . tienen ambos uno. autoridlul iupenor, JlUlult,N' Lavalle propuso q1J~ se 4icierp. nueva elecciOD UO exjat~ una. ~llji¡¡1atura provinllial; garantiendo que triunfaría. la lista convenida. "y últimamente: que convau.;idos da ql1e f!l y que si esto no bahja sucedido, agregó, fué voto púhlico es dI) que se npliq\len de beeho por lIDa traieion de sus partidarios, á la que e,sta· los u;teilios massa,urolY entaceR, pa.r~ qtJP ba cOlllpk~ente Meno. los cIUdadanos llUedlUl volver a.1 f?jerci('jo dB Ro~;n; hizo ó finjió ltaeer á su palabra el (h~· sus l)rimeros Ilereehos para constitnÍl' tma an· hi,lo hOl1Or, no Ilullando un momento de lo que toridad legal; decia. I "Han decidido lle cOfllnu acuerdo, nombrar\" Pero'oon nna hahilitl8.11 esqnisita,lo trajo iusen.¡reconocer,-colllo. á Hobel'l1ador Provisorio de la ~n¡lemente al terreno qUf\ t1e~f\aba. Provi~ci:t, á un dnda.dallo escojido de entre log -Estas eleeeione!:: son iIl.Útiles porqne Se llarál mas d¡stiuguidos del pais, con el fin tde que tra· ('n ellas el mi8mo juego anterior. baje en ,consolidar la l1ítz,~ inspirar confianza., y Ij{ls unitarios creen que ese convenio importa prt;parar el restablecimiento de nuestras insti· para ellos una. derrota que no existe y no quieren tucwllea: y en consecnencia, han conveDidQ en ¡Jpjal'se vencer. lo. ¡¡,rtículol'J siguientes, que tendrán la. mis." lllsi:ttirán, pues, y trnha.jartn de manera:t da'tfller~& y:valor que si t'llesen insertos en 16 ('ou- iíltP ))naBtra arcion hfUlétiet\ y patriótica. venClOn de 24 de Junio. Sentemos otro medio. Art. 10 El actlla.l Gobernador y ('o_mdaml' -y.,:uIlOS r,uál es. GenerM de CMlpaña, llorubrarán nn Gobema- -Nomhremos los dOA dt'! Nlnlnn sruerdn un llor Provisorio, cuyas facnltad~s &el'án no 84\10 las gobetnl1dor provisorio, hasta que el pais se baile qne ordinariamente oor-respondB á los Gobar· PQ estado de elejir. llIulores de PrO\incin., IiÍnó llls esttQ.Ordill&l'ias J.Rvalle que era tan PPs1¡RO político, é ¡noren- q~e s6conlidel'en necesariaJ¡ al fiel e~mpli­ ta como lmen militltry patriota de corazon, cayó,nueuto de Im¡ ,articulo s de e8~, Conl'en~lt)n, y en el ga.rlito delll.stuto gaucho, y firmó el famoso á 1a con~6eaon do IA.il1Ulq~ihdad públic~. tratado por el enal se entregllba á. Rosas ata.do Art2 Par~ tfl,ma,r ptlllB810n dal mando, el tla' pirs y manos, "~oberll1ulor Pr~vlitmO ,llll'B,~ ~ mal.o. dell'r~- Hé aquí est> fl\JIloso tlocumento que creemOS sIdente de la C~mal'a d~ J Il8tiOla, y t!n, present:la' uo df\her dejar de }mlll¡cl\r.' de 1""8 ,corporaclone~, e,18ellt8l\CUm~lir, y hacer J.o transcril¡imos por su im¡lOrt:.tnda, siendo el cumplir la. nonv811~Q.n del24 dI! J0J?-IO y IDs 1»'8- Í1himo que pup1icárp nlOS' sE'cntes artf.rnIos adiCIonales, proteJ6l' los aare. ";. ,... . ehos de libel'tad, propiedad y ~rida.d de lo. ~o:¡u¡~d~r1\.ndo !lllt} el ~bjeto P,1'1l1~1}l(l1 de!~ ('iududa.nol\, promover por todf)8 los medios PI)_ conH'nClon del 2-1 ¡le Juruo del t:orr¡eJ¡te a.llojs'bles alt hl • 'to da) 'tit' . filé ll:l;('.flf volver al luUS :~ sus anti'!!uasilll¡titucio. lIt'" '1 res ~ B~lbmifen . t l' as, 11\1 UCltQDdtlEi, . '1 ' " d" 1 1 'len Ivar a paz y nena me IgenCla con o OJ,¡ nes, ¡;JI) \'IQ enCla y SIJI ¡¡acu ,JIlllento, (,ant o ~E;l los pueblos !le 10. Repúblicl). dese - los á todas las clases lle la, ~oC1euad las garüntías demás deheres ,le su· cargo.' y ~ (1 116 solo puetlt.'ll tranqUl)¡zar completameme lo;;, lO !\,l't 80 D sd l' r tr :íni!n·ps. y ¡'establecer. In, fonfian)\¡~' v 1", ('on.' - .,' 1 1 e 'dO el IllhIUO(~ laben qadue I'D 9 ~n ('oru'a' ~ pOSet;lOn (e mall o l! IlUO\'O rO ocn 01", S8 pon· .. 1 '. eIrá ít. su diipOiliciulI jurándole obediencia, to,. 9ne el result~tl~ m('omrl~to, alarmante y das las fllerz&s ue tierra y de mar qU6 cad& lUlO fl'lUlVOCO de las ultimas ele('c~onl!s tie Beprf'- de lo,; respectivos gefe<.; tiene :l sus órdon0Jil, ,. !>~ntantf's, se opone á la rm\J1lOli lle un!l Le· la autoridad del nuevo Gobernador quedarA pe en.. gldatnl'a; nocüla f'll todo el tNrjtOlio tIe 111. Pr-ovinci... IoQ,¡e por numerít alguna el; l'ol\venientf' r:f)lll- "Art, 4:> El nuevo Gobernador p1'pcederá rrOlll~Ulr ~(>!:Ilnrln. vez lit digllichlll aH aqUf·1 ~rl\n.:inrnetlj¡l.tamtmte ¡¡J 1l0mbra.lUiento ,te IlUi núnis­ d" a,'to, (lue pi pstarlo actual US l'laita¡-ion y tros. nn!.iella.ilno' pr.rmitp celehrar )'01' nbur;; ""Ali, 50 :':'erlÍ pbliga.dolJ" del nua"o. Goharnl\-' "Quo la. l)rololljtal'ion dt' un Oobip1'llo nisllulo tlúr nmnir 'en eImanol' tiempo poliiWe, un Sen~ .. Ibil,t esencialmpnte al cl'pAilo, :t los intf'l'flses v á !lo consultivo de l'ei:Qte " cuatro Ílúlividuo51 el".. la pl:oslIeridad al} la jll'o\'iwü\ eu gQllaraI, y' de jidol> entro lo~ lilaS no~h(e¡¡ ,lel pl\i¡;, en \a¡¡eW6IS l~s ('ll\d:ulan,o~ fj~ 1)l1l'ti¡'~uar: y ,llllt} rm c,nrácte .. 1de lo:~ militiU'es, edf\siástlcos, haCellllados y CQ- ,llletal(l~'laI ni Iuspll'a cOlltianLft, 1Il le pern.nta dlll' .llltll'l'¡antel!. .

ga~'tnua,¡,; ,1 ".\.l't., ti:> Sonln lllitlll\\'¡ros nato~ del S"Q~lo QUt~ 10:0 qll~ lj.¡¡.n tomado las IU"Jll1lS nQ dehen con:;uItlVo: a",l\irar ~'a á lo¡¡ t¡.fectoi!l (le 1111 tFi~fu, ni lÍ. tt'r.¡ }<~I Presidente de la ('¡¡mafa de ,TII~tici¡l. linDar pOI' ~u mellio l:l 11\1'11;\, y 'lne ~ns fl(\fc~: J',J (te.rlt'ral lIlilS I\nti.!!u(>, ;',1 1'1'p:-;iJenlt- 111">1 ~(1U~\lI(I "1'lp;lÍ:'I~tl('I", . "En "t'. ~I~ 1.. l'ua.l, y lIara. hatf'r ('onlltar nUI:'Ii- El Golwrnador del ohi6Jlnllo, t~o COm,,?lO, fi;nlaIDos,los presentes articulos adi- El l'rior dell'onsnlíldo, clon~le" a. ~¡t (onvenclOn del 24.le .Junio del :\l·t. 7. 0 Las atribuciones del Senado c,:m- Cornf'nt .. ano, fin dos f'jpmplares dI:' un teJ10r :mltIvo s; detallarán pn un regl,a~ento especIal, lln,la rnárge.~ l~l:'recha del Rio de Barracas, en l~ 11.ue ¡;era ])~es:ntado por Jo;; mtll1stroR á. In apro- qumta d.· I'metro, á los veinte y cuatro dias dpl .'Ion 11el holllerno. ·me!'; df' A¡rosto dpl año del Señor 1829 "Art. 8 0 (¿ueda nombrado el señor general ' . don .luan Jos!> Viamont. gollP.rnador prfnisorio .Tua.n I.f'l'/xl.ne, dI' lil provinrin .11' Bllenos Airf's. .luan 1J1fl1f'Uf'l Rn.~·tl/'"

El general Viamont se recibió del Gobierno I Al ilustro argentino le.. faltab/\ aún apurar una dos dias desplles de firmado aquel convenio, que amarga copa de veneno. hahia importll:d6 ~l suicidio, .civil del general La- Verse v:ilipendiado y calumniado por aquello8 valle, noble y !lelicado espmtu.. que mas ligados á él se eneontrab3Jl pn~~ IOR incli- Desde el día siguiente~ por las medidas que solubles lazos de la gratitud. ' tomó el Gobierno, se Plldo conocer que era un Lavalle fné culpado de halwr entre~Qdo el país Gobierno rosista, y'que no baria otra cosa que!á, Rosas y de babl"r pprdido al partido unitario aquello que conviniera á don .luan Manuel. !por su ineptitud y sus torpl"!'l caprichos. Guido, Escalada y Gareia, partidarios df1cirlidos i Estos cargos eran hecholl por sus amigos. al de Rosas fueron llamados áformar parte del Go-imislllo tiempo que los pnemigos, los rosistas lo bierno, como ministros; era till:t garantia qnel'SeñaIaban romo pI único responsahle y culp~bJf" Viamont daba al futuro héroe del desierto. de los rrínwnesl cometidos por el 'motin mi- El ejérc\to de línea fué licenciado inmediata-¡' litar. • mente, para matar al partido unitario el último.' Ll\vallE', quP .era la fortaleza de espíritu per­ element!> con que podia.coptar, y comn si est~ I Bonificada, no tuvo valor para resistir la ingrati­ no bastara, fueron deatitUldas todas las alltorl-¡tud de los suyos y la maldad de Jos advp.rsari08 dades puestas pu Lavalle, reponiendo á las I que Iy se retiró á Montevideo. ~l'3taban antes del. 10 de Di~ie",lbre, Ó nomhran.!¡ Pell~aria ~l ~eneral. Lavallf' que lo¡;¡ que en­ do otra.s que el Ullsmo Rosas mdicó. .tonces lo ajaban hablan de buscarlo años des- , NQ habia, pues, que soñar en la menor re-ipueR para que los guiara :tIa hatalla contra ~l vuelta, puesto que todo era hóstil al partido ven-! mismo Rosas? ddo. ! N o creyendo que lo hecho ya era bastante pa- Lavalle emprzó :l. comprender que habia sidolra humillar á los unitario". el Ci-obierno de ViR- miserablementl t'nf!aña

ruarlo:.í. hLS pnlp .. rj¡l'" 01 .. lit. vec·iudad. tllvj¡""an lÍ r,¡ueedil"ron 1l1l(J~ á Oh'Uli, ,¡ nml lila·:; ~spléndidll ," míi:on qUf' pagarlo, yanimado. y pohre del pll1lwro que SI:' re,.,ü;fia! Uosas a.:;i~tilí á todos ellos, no de~cuidando 1m: ~o hahia heJ'<'jía que no j'olllct.Íeran con él! de las orillas, para tlUtl su Jll'estijio I'lItn' ,,1 IHU'­ Rosas mi~l\Io no trató, corno diez ailOS :\.OteR, blo no decayera un átomo, lit' haeerlt>S ¡rual'dar 101. circunsp!'eeion ~. l'l rp!,- Aunque no por cumplir 110 ,leher tle ronden· peto tlehidos. ' cia, pUf'S Rosas ya habia perdido tOllo l'ariñn á Profundamente proo('.upado ron los ulanejos 10 que no fUC1'a. su perRona, se rpconcilir. .le la política que d dil'ijia, no tenia tieu¡po ni con SUb padres y estrechó relaciou l'on sus her­ aún pam al'orJar~t' ,lela prt>stmr.ia d.. IIII!; mi· manos Prudendo y Gervasio, pre\il'mlo 11'11' PII- Ji.'i:mos. rlian serIe de alguna utilidad mas tarde. El lava.llista que c:Ú¡. en tre dIo!;, eQIllO U¡,- Concluidas las fielJtas populareiS, Rosas se re­ mahan':5, los Ilnita.rio~, era burlado de todos tiró á Santa Catalina, poniéndllRP al frpntp 11" modos. ~. mnrha-s ""r!'8 ,"f'jallo y psr.ame- su fuerte divi¡;ion. I'ido. ' Dpsde Idlí vijilaria la capital y al, Gohierno, y tale~ algarahias)' f'St~en8S infcrnaleR arma- hasta que lo nombrara.n á él, acontedmiflnto 1'(1If" ron aq\lelIos desalmados, que d.on .Juan :i\Ia- se pl'oponia acelerar en lo posihlt·. 1II1el l'oUlprendiú la npcesidad de hacerlos sa- El Gobierno le habia renovado Sil nombrlWlien­ lir. pues los mismo¡; f .. derales, empezaron á to de Cemandallttl General de ('ampaiia, posicion encontrar aquello fuertcm("llf,' irregular. que unida á su gran prestijio, le pennitia poner El Gobierno, á. indil'a.cíon (Iel mismo Rosa!!, en arlllas á toda la campaña en el momento qllf' qul:' no IIUl:'ria, Ileja\' tr¡i~l\lcir Sil influcnt:.Ía di- lo hubiera deseado ó convenido. rel~ta, ordenó que aqlU'1 .·j.íreitó se retirara á No se hacia nada. en el Gobierno, que no fue­ descansar IIp sm¡ f'n.ti¡m", ~' antes dI' dar curn- ro. consultado COl1 Rosa8 ~. que tI', h'lhi.w:t nll-'­ plimiplIto á la IÍrlit'lI \ 1'011 autoriz3cion .lel reeido Sil ¡;ant:.Íon solemne. ",li~mo _ Gobip~o, 1'1 Com;mdante Ge~~ral de Desde el nombramiento di' la ~omisi()n 'In,· t. ampaua. le IlJZO dltr UD gran pll.!ra meyt~abll.'. porque RORas. era 1~ um- para. holgarse régiamente en la campaña. na persona ~rel!tíglosa.y lllll'lola qne dJl'lporua del· Rosas proclamó á sus tropas antes de despa. apoyo material del p1U8. • charlas. y se quedó en la. ciudad, prometipD!loles La actitud del general Paz y sus operaclonN' fine pronto iriaa reunirsl' :í. sus Jeone!! dp) Sl\J', felices sobre 1'1 ~audi11aje del.interior, mantenia ~ á sus tigrp,s del resto Ile la eampaña, ¡tún el Ilf\rvio del Jl/l.rtiilo unitario, lo hastante pa· l'or 10 pronto displl;;o 'qu" dneo mil )¡omhrN; ra hal'prlo ttllnible, allnque l!'! faltasfl 1"1 brazo \"11- I~I' sus mf'jores tropas queda..;;en en Santa Cata- li!'!nt .. rlel gf'l1eral L~\ all... . hpfI. donde se les reuniría muy pronto. ,'iamont comprendió que .HU G?~lel'DO era cor- Rosas no tenia lUlIl. ciega confianza. en Via. to )' transitorio, y qUf' Sil úmcll. nUBlon en él, SfI monto reducia, á entregar al general Rosas el podp,r Temia clue una \'ez ale.iado él de la. capital que habiarecihitlo de manos «le Lavalle. flstallase algun movimiento unitario que lo der~ Aeeptó entonces I:'sta mision pacifica y se re- rocara.· signó á. ella. Estando él próximo á. la ciudad, con cinco mil Este ascendiente sobre el Gobierno ensober. homb.re~ d~ bue~as tropas, podía. veni~ en SOcor· lleció á. Rosas de lo que ya.1o estaba, y cansado ro .del GO~lerno mml>lhata.ml'ntB): (~DJurar cual- dC) A'obemar· desde Santa Catolina, quiso gobf'r­ qlU~r pelIgro. '. nar .«leslle el Fuerte mismo, como (iobl'rnallol' y. H Gobernador ver~ladero vema á ser Rosas y y C'apitan General de la Provincia primero y eo- "\ lamout una. eSpl:'Cle dC) pantalla puesta allí roo Presidente dt' la Nacion mas tardf'!. HIlo }la~'a el1~egarle el l1land~. Se hacia necesario por otrA. partl:', mete(mann . Lo:. • egoC\Jos en toda la cllldad eran esplén· en h\ guerra civil de las provinciaAy conduh' con dld~s.. Paz. ~o se le.\l Ocurrió da! cervAza en lapla~a. Vic- Pero esta operacion queria.ha.eerla. Rosas co' tona al rflspetahle p6bhco, pero los brules le mo GobernAdor de Buenos Aire!!, pUefl ya ,be· -. ,. - mos dieho no telliA. confianza. plena ni OJl ViR- Iihre voto al p"rtitlo ""neiuo I'In ,,1 Pnentf. dí' J!loot Di en persona. alguna. Marqul·y., Los amigos que l~ "¡sitahan e11 Ranta. .('atali- -Mt' parece in(ltiJ, (le tollo ponto int\til, replirú na, adoradores servdes de su persona, sabIa,. ue- Rosas, convocar á nuevas tlleceione);. cirle que este pais era ingobel"l1a.ble y que no La Legislatura '(lue ca.yó en DiciHmbrt'l no ha podio. vivir mocho tiempo en paZ', &Jo que él re- conrlnido aún el periodo por que fnó ele~t". plicaba: ' Creo IlllO lo ma.s justo y espeditivo es convo- -Que venga. al Gobj~mo un líombre fuerte car á sesiones á aquella Legislatura y '}UO iligl\. y dI'! energía, y verán SI á todos esos revoltosos CUml)liemlo Sil numdato. Jos mete en un ~apat() y los tapa COft otro! ('omo las inllieacÍoneH de HmU\8 eran 6rdeops¡ -Lo que necesita el país no es nad:\ tle {'so, el Uohif'l'llo 110 necesitó oir mas y aero contf~ concluian entonces los atlulones. nuo convocó á sesiones á la LegislatUI'A de Dor- Que lo elijan á usted Gobierno y Vflremos que re~o. ha.cf'n entonces los perturbntIores \le! órden. ROSflfl no parecia, ,mes. U11 ComanllantA Gen",. Rosas Se se:n.tia eIBbria~ado por d -¡..o~er qlH', I"M (le ('at,npR.Ú6,8imí un ~I.,.fe Mtiador, que impo­ lA causaban estas palabras, pero dislD1ll1t1ndolo niala.s eOIl(l:icione~ milis humillantes al Oobel"lllt­ d~ba. á entender que ntUtcl!. aceptaria ese ,nesto dor de la lllaxll. sitifula, dittcil. Pero qll~ hacer'? -~eeesito~tender mís intereses abamlonados .EI genernl Yiamontera nn homln'e de carál'. por la patria. hace tanto tiempo, agregaba, y ade- ter Ilébil y además, no quena indis(lonerst'l ('on mAs yo no soy hombre político sin6 de atlminis- el que, indurlah1emcnteiba á. sneederlc en el Go- tracion. bienlO.' Me sacriflcaPé siempre por mantener el imlwrio La Legislatura se I'emúó precisamente ello ,le las leyes cuando sea. alterado, . pero no 'luie- tIe Diclemhre, es (lecit', al cumplir el año de los ro que jamá!¡, se me trate de ambicioso. sucesos que dieron con ella en tierrA.. y era tal el talento con que obraba. en este Rosas los illcit6 Ú. lJ,ue cumplieran con el Sil.' sentido, que sus pal'tidar:ios creían de todo llOra- grado tlebel' de honrar lA. memoria' de DOFl'e,ICo, ?on que aquel era. un noble patriota. sin arnhi- aquella ilnstre rÍctim:.l tIel movimiento, mandar don alguna., á quien el mayor sacrificio que pudie- hacerle funerales y decretar el pa~o á. S11 viuda. impQnérsele era la aceptacion del Gobierno. ron ii y organiza el pais conclulendo con la maldecida consultar á Rosas sobre este importante punto: fraccion unitaria, quitándole esa última. esper¡.tnza A quién elejian como Gobernador !lll'opietnl'io. de vida que aún tiene, fiada en los triundo~ del -Queremos un hombre que encarne la políti• ~eneraJ Paz. C:1. de DOl'rego, ,Ilecian y solos, no queremos asu- y grandes trabajos.se ha,cian en ese sentillo, mir la respollsahilídall de nn nombramiento qnp. tratando de ocultárselos á Rosas, que los eono- traicione estos prop6sitos y sea funesto n,l »ais. cía mejor que ninguno. Rosa~ temblaba de elllocion sintieRao (lue sn Por fin el ca,m1illo del Sur se decidió á Ilar!lu nOJuhrf' se f'scapab:t de sus labios. AltilW\ lD~no y el gran golpe sobre sus quince Yero 1ll1.ciendo un e!'inlertO sohrt>bumano St' do. años de continuo trahajo. minaha y res)lontlift.queriendo haél'l' gala c!e indi- Disuelta la Legislatura por el movimiento dell o difprpllcia. .. de Diciembre, el país estabaacéfal0 de lloderle- Ustedes &allel1 mejor que yo lo (lile llobeo gislativo y era. necesario proceder :í la eleccion hacer. . consiguiente. ' ::;igan 811 inspiradon que ('s la ill1ena. Como. el Gobierno de Via.mont, segun lo ~wmos Yo entiendo mucho. de org.... 'l,nizar estanci8.& r dicho, no hacia ,nada sjn la aprouaeion de· ROS:1S,\tleDlá8 1ra.bajos llPo campo, ll~~l"() t:oIlfie.s(~ qll~ 1.'11 10 consultó de qné manera. yen qué forma (lellia. la. ol'g'unizltcion d(' HI! )laiS ]11 elrtlemlo 111 bacera\) ,1\llUelll\flecciou, y ~i se dl'jalin. Ó no el ¡esto. - 71 -

y hacitt sónal'gt'acioHUlleutc la uña. cllh't' lo~ UlWtitl'Or, dia:;¡. y det:)llI"J,ndlllo Restaurador da la.~ di.ntes, leyes y protector de la. Illllt'l'endenda. Amen· -Pues lo ('flW ('8 nosotros, dijo uno 1.1(1 ('I\as, cana, tan Cl'eemos lo contrario, que hemos pcnsado .1'olu'e patria! nombrarlo á u~ted. Quipn le hub.ie:t';t dicho que mluel iba' ser d -A mi? l'sclamó Rosas palideciendo y haden- prinltÍpio de sus veinte afios m.as negrol y lu&;­ do BOnar fuertemmaw BUS nazarenas al ponerse ItuoSOS! tle "pié. El primer acto de aquella I~egislatura, acto Ni se le. pon8l' porque no 10 aceptuia. que crey~ron de verdadero patriotismo, fué' el ~i sirvo pll'a. ello ni quiero serlo. lIombrailllento de don Juan Manuel Rosas, como :\lis alWltos me llam8Jl además urgentelhellte Gohernador de BuenQs Aires, íL la. camlJ&Ú8. 'El 8 de Diciembre de 1829, Rosas se recibi6 Los legisladores, Mc.andaJiz!\(loB de tanta ,mo- del mando y prestó juramento en medio del re­ Ileatio" qws.i~~on convcneer)o de q~e su Gobier-Igo~ijo maJ:¡ ,imp?uente de qut: haya sido teatro ja. l1J) serIa 10 t\nico que sa.lvana. al pB.lS en aquell.a.s mas la. estingulda. Buenos Airas. circunstancias. El paso de aquel hombre tan hermow como Pero' Rosas, sabiendo qúe no le hacian caso, perverso mas tarde, era seguido por millares de les Dotificó terminantemente tlue no lo llombra- Iwmbreil del pueblo que lo victoriaban "1 10 acla­ ran porque noacept9.l'ia.. maban con un entusiasmo que raya.ba en t'rll- y aquellos hombres, creyend. de buena. r" que nesí. haciéndolo prestaban á la. patria el tlervicio mas Nunca. Gohierno alguno, entre nosotros, hUfa. señalado, decidieron nombrar al general Roso.s subido al poder con mayores deDJ-ostracione¡¡ de Gobernador~' Capitan General de la. Pro,incio. de cariño por el puelJlo ql\e estaba llamado á 10- :BUCDO\; Aires, hacjéndol() brigaflliJr, como en bernar.

Los cuerVOe de la l.latrla

La. ciuwul fuú una. eSI,I~ll\lida fiesta, tlllr:mte de bandido repugnante, había. sido aphtlliado pof 1015 8 primeros días. el hábil táctico. en sangriento combate. Todo eran músicas, b,tilcs y todo género de A este paso, el general Paz concluiria por mal.r fiestas populures. , todo el elemento bárbaro de las .Pre'finCllI.S y ven- La. ciudad festejaba. JOllue llamaba. U11 ,'erda- dria. en seguida á destronar al paisano que se dero triunfo, nllE:ntras en la. campaña se paseaba habia sentado sobre 1'1 lomo de la 'patria. cll'etrato del nuevo Gobel'Dador, de pueblo en Esta era. la sombr:t que se levantaba. en ~l plleblo y de estancia en estancia. camirio de Rosas, y que este quería. destrqir Rosas cst,aba radiante de alegria, pues asistia antes de ser destruido por ella. á tm triunfo que no habia olltenítlo balita. en- Pero aún no }labia por que apurnrse. tOllCe2 hombre público alguno. El tremendo Quiroga a}lrontaba nuens leglo. Pero &llí en el horiwnte se levantaba Wla. nu- nes pM'a l\tacar al general Paz y restaurar en Ilti:l 1lOt lIMbe incómoda y 14lm.bna, que amenllol&ba. :'0-!Provincias del Interior el imperio de los bArba- f9C&l' aquel pla.cer naciente. '¡ros que él representaba. ~sta Dulte er& el general Paz, ~uyo¡¡ tl'iunfos Rosas empezó á ~ersel:u¡r á los nnitarios da l'!l~doSOI dalntu aliento al l)llrtido uuita.l·io, llt!-' Huenos Ail'e!>, con diferentes pretestos, i'altandD t.:14~1e entre.er tiempos llias bonaaciblea y Iinicuamente á IOl:! tl'.'ltados hechos COll el general íclices. . .' 1La.vaIl!:'. , El ,general Pa~ 0011 nna hranu'a ~'talento llÜ- A })l'etesto ele lDovimientDo rc\'OluCÍOll&l.'iCHi, ltt~l' mcomp~hlel!l, h~bi~ n:ucidoá IklJ>to~ y a:;u-1iDlIIOsihltll> de c\itar sin obru con gl'an eacr.' lUIdo t'l Gob~I'1l0 d., Cót·(loua. Igill, pidió tí. lu ('áJ.uarn lai fa.culta.des el$traol'diu- 1)000 d~l!~s halIia tialiuo ('\1 lJl.I¡;ca. del tJ.'~-lrÚ1i'l. qUll f!:;ía le 300rdÓ, con CAqto de w' cu.aatu. mwiu QIU1'.... ,.a\uoUtt fll!\'a :-;~pre :wdient'll~y micDft'a.¡&: duraba. el recclo de clla. de ti augl'C , y el tigt'e *10" ll;wo¡" ill{ueJl& t:.llpc¡:iel Y con ,u.¡; ~Ill(\ maJ,l.o wá liore c.IU1iU ~ la l'urrit'lItt' lit' "Ut; útliOti y lUe:l;llUUliil> VCIlgW1ZIIoti del Todas la.s liherlltdc8, touodel'f'chó y toda /1'\', tOllo gmero. rué pisado entre l!US hotas de potro y d,,¡¡garr&d~s Lo ilCOlll}lulll\ban e.omo ministros, los gClleraloblentre S\l~ e~puelas. ' fi\li_lo y Bal~a.t'ce y ~l, doctor (jarcia., i. l<'né ~1I volunta~ salvaje y 8aIlguinaria lo qUl' Para, 1't>¡Wlyar el lidio do los uorrcgmsta.. l1e-IID1}lcrú, ", .. ,,'un lo Iremos Ilcruostrando con nue~- _'r_'~ú g,r~m~HS fllJlI'raJi~ti al ~or,onel Dorrego. ;tro gran acopio de hecho!'!, l<,l t',lt'I'Clto y el)JUl'hlo, aSlstwron en ma~a á es-I Qnerí(!mlo Iti'allar las dmnostmciones do ale­ I,a ~.ci'Jta im)lonentt! que prl'!sidia el mismo Rosa:'¡ll~/ria p~r lo.,; 1!i.lmfos del ~cneral,l'~, que su~ a.d­ nll.lH'ollo el dolor JlUI~ l'ollUlovedOl', versaJ'lotl ]lohtJcos t:iolo se átrevlan á hacer C011 Exalhl_ltN:l .lo~ ¡ínimos por estos h,eellOs calell-¡ la lIlirnda, Rosa¡;, abrió para ello!; la.s puertas de I~\llos, l'mpt'ZU It enct'Dllerliic el ÓdlO contra 10sj lar,; clircl'les y los puente:.; de los pontone!!. unitariot:i., Eu Negtúdlt le parel'ió fIue uel,ia amordaza¡':i ('oncluHla. lttlUella fÚlwhre tit~Nt;~, grupo~ cxal-la. prensa independiente yespidió el famoso de­ tallos tl(' fell('rales recorrieroll las I'alles, da.ndo creto del la de Marzo dl- 1830, primera. puñaladll. Ct'llCtlrnldas en las casas de los unitarios mas que dió á las libertades llúblicas. COJ!o~idot:i y comet~t.'ndo todo g~nero tle es~~sos, Por aquel decreto disilUso las siguientel:l iniqui- h08a.S COUl}lrendIa que esta dase de malllfesta-Illatles: l'iouet; podia inuisponerlo con ~ comercio es- "Art, 10 Todo el,!l\c sea. considerado COIllO traJljero y minar Sil erMito como GOlJiernol autor púhlicament.e, factor ó cómplice... del loJUce-. -le úrden'. Iso del 10 de Diciembre, ó de alguno de ]OR .\.sí, en el acto las dl'¡;aprobó de la manera fIlusl gramles atentados cometidos contra las lcyel:l, por ~cvera, l'rohihiendo por todos los medios fL su al- el fTobierno intruso que se erijió ,en esta ciudad cancl', que )le volvieran á repetir. en aquel mismo ma, y que no hubierl,\ da,do ni tlie­ ]'ara contentar por otra parte á SU¡; a.lia.dos, se de hoy en adelante pruebas positivas é i~­ I~JUpl':l;Ó á persegtúr á. los unitarios de una mane- quívocas de quenlira con abominacíon tale¡; atell- I·'~ coharllc l' injusta. tados, será castigado como reo de rebelioI1. Tewill allemás tlue el partido caido en el Puen- ~l'::- Será castigado del mismo modo, todo el le de :\Iarquez pndiera lev¡tnlarsc bajo el csfuer- 'lue tle palabra; por escrito, ó de cualqlúer manc­ zo del general Pa.z, y queria anularlo, postrarol ra, se manifieste adicto al espresado motín del lO en tm~ t:abeza~ principales, de Diciembre, ú á (:ualquiera de los grallt.lc~ ateu­ .¡'~l célebre !tIm:a, lIon Vicente, su consejero in~ I tadoll de que habla el articulo anterior." rlll~o y depositario ,le todos SU!; secretos, eral Este decreto, tendente á. amordazar la l,rt:llbli. 'llUen lo ayuda1'a en esta empresa de per:>ecn-Ifué a.tnpliado de h ma.tlera Higtúente: . don y de injusta" \"ellganzas, , I Prohibió t.amhien la venta, de armas, á todas h.s La. prensa libre, daba publicidad 'á las noticias casas que con ella,¡; comerciaban, mandando reCo­ 'Iue llegaban, sobre 108 trinnfos del general Paz. 'jer por la patria, todas laH que los particulares tu­ manteniendo a.sí viva la fibl'a del partido unita- vieran en su poder. rio, 11ue lo esperaba todo de aquel ejércitovic- A todoslós estra.njeroH que habían tomado par­ t01'Í080. te en log sucesos del año anterior, y por cuyo mo- Rosas no J Ollia tOlerar esto y empezó á gober- tivo se les habia da~o carta. de ciudadanía, les nal' el pais,lIe lit misma manera lIue ]labia go- anuló esta por decreto especial.. hemado sus estancias. Y así como la Cámara. en un momento de ' co- Remol! oido decir á gQnte séria é imparcial de bardia le hahia dado los plenos poderes, ~él auto­ aquel tiempo, que el prime.r Gobierno de Rosas, rizó á don Gervasio Rosas, que estaba. al trente fu,. un Oohierno de órden y lldministrativo, en de las estancias de don .Leon y lo re~resentaba t~uyo período el pais no tuvo que llorar desven- en el Sur, para (tue aplle.ase penas, mcluso la tura alguna. t de muerte. " .,' "'f'>~, Esto no es exacto, 110 tieue para. 1101:l0trOI:l Y como d01l Gervasio á su vez delegaba.: posi- Ulas que 1I1lu esplica"cion, (lue es esta: • ciones en los ca.pataces, amigos, ó peones de su Fué tal \' tan sombrio el segundo Gobierno de confianza, resq,ltó que cada. cual apaleaba, mata­ aquel Lombre, que á su la.do, el primero fué un ha ó fusilaba si era autoridad militar, sin que hu- Gohierno de bÍf~naventuranza. bicl'a quien se preocltpase de la c~sa. . POr/lue en sus primeros años de Gobierno, Ro- Para cualquier caso apurado que pudwra so­ ~as empezó á discñarllc como un bandido Jfions- brevenirle, mantenia un buen número de trOpa.iI truoso, cuya verdaderatfsonomia mora.! se descu- en Santa Catalina, tropas (lue solo se ol'upaban brió en su segundo Gobierno con los hechos bár- en merodear por los alrededores seguros de la baros y vergonzosos que enllangrentar{)D al entera impunidad con qlle contauan. pais. Como no sabia 10 que pudiera sucedel' en. las Desdt> «Jue él subió al poder, soure todo lo Provincias, establ~ció en el arroyo de Pav~D ~n nohrtl y 11) grande' que babia en el pa.is. pume- CUl'rpo de ejército que ,hacia maniobrar diaru. ron ""lnb4'se 1&1 triSlles letras Q. E. P. D, ente. y disciplinar por huenOti fJtkia.1el:!. - 71 - Lavalle le babia enseñado lo que vale una. bue- La policía. secreta babia sido lQaestramente ins­ na tropa y Rosas aprovechab.& la. Ieccion, con- talada., y de ella. se sen'ia Rosas con preferencia vencido de la gran supremacía. de las tropas re- parala persecueion de los unitarios. guIares. . ,. Toda denuncia era atendida sin averiguar so En lID caBo de apuro, este cuerpo .de eJt!rclto origen ni la causa que la provocaha. podria. incorporarse al de Lopez, último baluarte Venia de un federal v esto bastaba. de la. ~arb~ie en que 8~ estrell~ria el general Los unitarios empez:U:-on á emigrar á l\Iontevi­ Paz, SI segUla en su carmno de trIUnfos. deo buscando roJear á IJavalle v seducirlo para. Y parece que )a. cosa . apuraba .por . aquellos la- que'. se pUSIera á la cabeza d e • un mOVimiento. . dos segun las notiCias que se reClblan. é . De los cuerpos de Laval1e que se habian licen- s no. . ciado por el Gobierno de Viamont, Rosas entre- D.ado~ los trIUnfos de} ge»;eral Paz y el fuer­ sacó las.nlejores clases, enviándolas á Pavon, te I.',Jérclto de que este dlspoma, no er~ una cosa con el objeto de dar instruccion y táctica á los Jescabellada esperar el dla del desqUite. regimiento que a.lli formaban.' I LavaIle se decillió entonces á moverse, y tra· Rosas, pues, queria hacerse á todo trance, de I tar de convulsionar el Entre-Ríos y Corrientes. un ejército de linea capaz de contrarestar á l Rosas babia faltado miserablemente á lo paco cua.lquier otro. tado. Es~ era la situac~on de la pobre y mís~ra Bue- La ley de olvido habia sido convertida por él DOS Aires en los pnmeros meses del Gobierno fe- en ley de venganzas v persecuciones. deral apoyado en los elementos bárb:u-os. • • . Como era natural, Rosas no tenia el coraje de . En nada faltaba él entonces á sus compromiSOS, hacer á un lado átodos los hombres perjudiciales SI toma~alas armas nuevamente, pa~a derrocar que lo rodeaban, por que aún le eran necesarios un GobIerno que pesaba sobre el pals como una '1 no quena descontentarlos. ¡verguenza. Así es que cada comandantiUo era una potencia, Lavalle se puso entonces en campaña, con too y una potencia terrible, puesto que no habia ley dala vehemencia y el ardor que le eran carac· que' ello. alcanzara. lñsticos.

El t.lgre de 10.- IIno08

Facundo Quir~ga, el terrible Facundo Quiroga, que le obedecian,' fuerza de crueldades de to­ cnya ferocidad no conocia límites, habia formado do género y de hechos de una bravura fantlla­ .os ejércitos para vencer á Paz, de acuerdo con tica. Rosas y Lopez. Se habiaimpuesto á 1.1<; masas del interior, que Pero las dos veces que se habia puesto delante le seguian electrizadas donde él queria Ilevarlr,s. deaquel lucido general, habia sido aniqUilado¡ En la batalla, Quiroga era algo fantástico é in· buta el estremo de salvar él milagrosamente con fernal. UD grupo de soldados, es decir, de los bandidos Incapaz de estar parado un solo momento, se que distinguia con aquel nombre. le veia. recorrer su larga linea de batalla, de un Facundo Quiroga era un hombre 1'ulgarisimo y estremo á. otro, con la lanza en l:t. mano, y dete. completamente destituido de todo lo que pudiera uiéndose siempre donde el combate erll. mas ré· llamarse un sentimiento noble. do, para tener el placer de dar dos ó tres la.n. Bra.vo basta el delirio en el combate, era co- zadas.. ' barde y sanguinario despues de la victoria. Era ,incansable para la lucha y tenia el don de El degüello delos prisioneros mas distinguidos ~omu~lcar á. su tropa todo el valor de su alma ~ra su oc~pacion favorita despues de la batalla. mdómlta. Esto dió lugar" represalias terribles, que hi- Despues del combate, y con mas razon si la vic­ cieron de aquella guerra la mas sangrienta de toria le era propicia, su gran placer era. sentarse cuantas luc~s civiles Be hayan producido en en el cadáver de un enemigo y hacer degollar á su suelo argentino. vista la mayor parte de los prisioneros que hu- Qruro¡a ae babia leV&Dt&do sobre los bArbuos ~biera hocho. aielldo preferidos para tot;arZu el,:ío- /in tod~)~ aquellos. t'uqui~uelS úblulllbraua. uJgo \le '\SiOMl'O. curró }1Ui ".pue1u é. hU &i~é1llbdo caea­ tl~eftCIA «) educanon. mo " He perdl6 por e.nire la¡.¡ Sl&1'l'I8 coñ el OdiaM 1& iftnerfe al honlllrl~ fh;1izadó, porque '4ttimo myo del 1101 do la. t ...de. dtJCü" que era e~e él dem~ntll bárbaro clH t'stoilll :\ tlí.nde iha. el tigre de lo!! nano~ cOlTienc1o dt: paises. 1Iollul'1Ia nlUllel'a'~ Quil'oga reUDÍ6 cu~to ~('üudo y IRIsel'ahI@, ('ulÍlt's pr!dríall sel' has propóai.to~ ll~spue. f!e pudo redutar en Santiago, Catamarca y demás babel' penh¡]() Il.ftyel numeroso ~érClto "1 dejar pro~incias dominadas por él. en poder del en6lnit;o todas ipuesta. Este fuá el primer ue8cucunto del altivo Quí- ' Aquellos montaraces que no se hubieran mo' roga.. vido 1101' nada de este mundo, de donde se ha- En vano se multiplicó aquel dia, en vano hizo bian tendido. á tomar el sol, saltaban como á im­ personalmente p"odijios ue valor, haciendo eo- pulso ue un golpe cléch;co, con la fisonomia in­ meter á sus greñudos mil ferocidaues. noble iluminada por la codicia, al gl1to de venir El frio yelt'gante táctico le salia siempre al¡contra. Bueno!) Aires, á lmquCtll' Sllii eStancias y encuentro con su tropa incomparable, aprove- ~UR almacenes. . . chando sus torpeztts, y despedazando su línea 1.. 08 greñudos y montaraces de ~antiago, Cata­ en los lados que la veía demasiado débil. arca, (~tc., volaban á rodear á Quiroga. cuando El tigre de los llanos mordia RU lanza y hacia vi-. sintieron sonar su grito de guerra y ester· sajes terribles y conducia á la pelea sus masas de !minio. caballería., hacieudo gala fte.na lIIlWln'a de fiera. I Y ptt>t para los qUé 110 fO~ ~J!UAl'arOD- 'acu· PeroslIs waus erlUl! siempre teehamda por!dfp i ser voz, porqae 8Obt'e ~nOS ~Jó 10M 61~Mto n.quenos viejos veteranos de incansable brazo- ylilllplacable del t~ero~bmdido. . /' ~OD sereno. I En la ~ioja, donde fué primero 'Samt gsme Despues de peleat;-hasta per~ la mitad do l!U :paltt. Mlllante1 d8 su uevD ejército, no ~lo bizo gellte sm ~ be.wo gJtWdelJ (\e$tMozos en el·i'usilaF y 'l.lat8l' á. palo8 á l.,s 900' MldnVlerOn :re­ enemigo;·· orisos, gin6 qn.e élmÍ&mo degoll6 unM r,u1lMOfl Despueil de, hacer todo gé;nero de prOlilllJ.8). has- po.r S1l inaltO', dejaadtJ "Sus cachtverelJ pM'a qUe Ié­ la. dar una carge.de ponclluos 8Gbre los caDOJ.les brt' ellos pasara.IIIl"..a9I1Ueria. del enomigo1 Quiroga.so ~nvelldó qlJ.'e: toda. ten. Deja Rioja paI& á-Mendéza, donde 8If amige el taiÍVaI1e tnúnt'o se-rm UBaquimera. frffile AM8() lo S~ftrió eOIl eua.nto- élemeDtó té- Quiio reilia.rse en úrden, pel'~ ni esto- DlÍSlftOlll.ia disponible. ., pudo conseguir. La! cas8IlS de comel'ei o morGD paeata8 á laeo LQa.re~eJltos ué l)M habian doblado sU ala y Quiroga salió de MemloA en IÍID de ~~ jXfjoierlla. eehánd&la sObr0 el reIltro en ttmiM9 aombre!!, para f~r 1Obr- ellos W1 padélbso ..~onfusion, y allí fué 114 matanza mas num~ ejército. El ala derecha. Be aterró, y á. pesar de las to- Las pl·o.ineias restMl!tmí illfl~cm qae Jll8a!' cE!S de Quil'lJga, llas pob... " provincias que temblaban Quiroga no tenia solamente fuerzas de caba­ á. su contacto, como las hojas de los grandes ác- Iléria. boles al contact., del huracaB. El frru1e Aldao le habia dado alguna infanteria. y Quirot& ee 1eI$ habia imllUest.o personalmente r a.l1lUtS con que fOrma.I'lllleVOS cuerpos. sin tenel' JJ,UDe& que echar mlUlos del gran. pOller Ademá.s. Uenl.ba cuatro pie citas de a.rtiUeria con (Iue disponia. su correslwndiente dotación. _"- ln.li4ea ó puelJlo que andaba remiso en pa- Cuando el general Paz supo qUe Quil'oga. ve­ !!:lr las 'COntribuciones que él imponía, ó entregar nia en su busca ton uufuerte ejéJ'cito, abandonó el contingente que habia pedido, entraba él solo, 1:1 ciudad de (~órlloba para. salir en su busca y es- hacieDdo un deilrO?.o in~lcltlable. carmentarlo de una manera ejemplar. El apaleaba, apuñaleaba, y penetraba á las ('·a- El hábil táctico e'3ta,ba convenddo de que, anu­ sas á. cabR.llo, azotando ti. todo cll.lue su le poma que Quiroga. trajera veinto mil hombrea,· cop. iDS p.r ielante. fuera niña, ,iejo ó mujer. tropas regulart:s r eu mIl\¡ hatalla campal lo bacia Eo una pequeña l)oblacion de Zumampa, ha- pedazos. . bít.ada. por pobres diablos y gente infeliz, ul3jó Demflsiadosabia él 'lue a.unque bravías,aqueUa.s impre1lo todo el génio de su ferocidad. tropas eran completamente lijeras y f,"clles de Por no ha.llerle dudo (le comer ta.n pronto co- vencer, por consiguiente. mo á ~l le pareció que debia. I'er, 1ft, emprendió' Quiroga era un lcon en la pelea es verd.'td, pe­ pllitaladas con sus habitantes, tM!terminándol08 1'0 prescindiendo de él mismo, taDlbien contaba. de tal manera, que cuando 86 C"nSÓ de matar p<>r paz con leones como La Madrirl y otrOf'. 811 propia mano, ma.dó á su escolta que conclu- Cuando Quiroga supo que el general Paz ha.biA )"era aquella obr:t infame. salido de Cilrdoba con toda su troJla, hizo un roo- Esto que á. primera ,"ista paroctll"á. exajeracion, yimiento á lo indio . . no lo es tanto, si se tiene presente el terror de Contramarchó rápidamente aproveeha.ndo la. qoe Quiroga. habia rodeado tiU nombre, y lo 8er- oscuridad de la. noche, y puso sitio á Córdoba. viles qlte :ha.n sido siempre los babitantes de aoque- que tuvo que l"endirso al día aíguientc por falta. llos pueblitos miserables, babituados á ser trata.- de defensores y de elementos de rpsistencia. dos á lomo de sable, desde Quiroga hasta 8andes y La ciudad estaba hábilmente ZbJ."ljeada, pero no desde &rules hasta el presente. tenia mas guarnicion que trescientos hombrc$, De aquella maaera. logró Quirolf,l. formar un que fueron sin emhargo bastantes para. rechazar ejército de seis á. ocho mil hombres, con el que se el primer ataque. de todas las tropas de Qtü. puso nuevamente en campaña y en demanda. del, roga. general Paz. . j Este ocupó la ciudad, dejando en eIlg una fuer- En aquel e.jército de bandoIa'Os, no habia. ma.s te guarnicion de infantería. y dos piezas y se ley ni ma.s ordenRllZa que la. \'olUlltad de -aquel retiró con el resto.de su ejército, fner!\. de ella, innoble montara!', erijido en gefe supremo. en elllUuto llamado la. Ta.blada, clecidido á. .espe­ Porque el orijen de Quiroga era. tan ruin CODiO rar allí al general Paz que indudablemente no.de- sus hechos. bia tardar. Perteneció á. las últimas capas soci&les y desde El general Paz tm " conocimiento de lo sucedi- 6~1~ subió hasta fier el árbitro de aqllellas pro- do por los soldatlo.s de la. guardicion vencida. y vmCUlS. contramarchó :i. l:óf(\oba, donde llegó el 22 4.e I..as flUtas no se cRstiga..ban alli por l"ol1sejos de .Junio, encontrando á Qniroga en las posieion.8i gt\en·a, Ó aplicacion de ordenanza:;. que hemos indi("ado. . El oficial que faltaba. era castigado por el mis- A la proximitla.tl de aquel, esw teudió Sil impo­ IDO Quiroga, ya á lmnta de palos Ó 3 punta de nente linea y esperó el a.taque. lansa, segun la gravedad de la falta ó el humor El montonero se encontraba nuevamente con mai.Ó menos llegTO con que amanecia. aqlleldi¡t SU¡; salvajes bravíos y decididos, frente al brillaD- Ahora, el cfl,stigo á los soldados em muy dife-lte estra.téjica ~·lucido genera1, que atacó sobre la. rente. . marcha, despues de apreciar con su mirada inteli· El qu~ no re~ihia otro c¡\Bti~o. que ¡,¡,el' degOlla-\gCnte al enl3w.igo y el terreno en que iba. á COIU. do, podla conSIderarse por 1ehz, porque gene- batir- - r~Ulente a~el castigo V(mi~ desJlues tIe una sé~ Las Il1"imp..ras cargas fueroD dlulAs y l'eclbidas fl(l lb Indeclhles monstruOlmtadeR de toda el\p¡~-·.('on tul denuedo y UD vruor admirablc!!. c~e, liUO Quir.)ga. prel-lenciabu. con inli.nita. frtti-\ Los g'l'eñudos 'de Qlliroga capitaneados por 1S1O~1. . Aldll.o, Urizuela.y otro.s lobos por el estilo, 116Dlr- Al' trajoaqlJ.el ejército, que ma.s SQ po migo hacia una El general Paz, entre la. confumon d., la. pelea resistencia mas tenaz. . organizó SIlS l'uerpos y acudió á la reta!ruudia Quiroga. veia. qut'! luchaba con WI f'nt'!migo I:iU- á restahlecer el combate. '" perior en todo, menos ton número; no se conven- Las tropas de Quiroga ataca.ban coa tal brio cia quejos mas pudiesen ser vencidos por los me que nadie hubiera sospechado que aqneUu e~ nos, y se le veiarecorrer enfurecido t.oda la. linea tropas que habian combatido de una manera ter­ de batalla, Jlevando el contingente de su lanza ribIe todo fll diaanterior. allí donde lo ereia necesario, y conduciendo á pa- Las cargas se sucedian una8 á otraa, con i«'lal los al combate, 108 regimientos que parecian no valor. iener ganas de tomar parte inmedia.ta. Quiroga se hacia. pedazos. Quiroga hizo verdaderas proezas de valor duo Su voz airada (lominaba el fragor del combate, rante la batalla. incitando á sus tropas de una manera deaes- Su fuerte lanza postró muchas víctimas en Ju. perada. cha brazo á brazo, pero los veteranos de Paz em· Estas fueron decayendo poco 'poco fatigadu pezarou bien pronto á imponerse y á mostrar su Y convencidas de que el enemigo con que lurllaba in~ontestable·é incontrastable superioridad. era de fierro. Se habia peleado mas de seis horas cuerpo á Dieron dos ó tres cargas desesperadas. y re­ cuerpo, y haciendo muy poco uso de las armas de chazadas á filo de sable, presen~on la. espalda fue~o. completamente acollardados. El centro de Quircga, rué el priDlero que cedió Quiroga aún quiso contenerlo!!, insultándolo. pero de una manera. decidida para no ,'olver ma~ Y apaleándolos con su lanza, pero lué envuelto al :ombate. por los fugitivos y obligado á disparar con En aquel mismo momento el heróico La Madrid, ellos. aquel qUA cargó 8010 contra un cuadro de infan- El segundo acto dA aquel sangriento combate teria. española, pocos años antes, cayó como una estaba terminl\do. tormenta de muerte sobre el ala izquierda. El general Paz destacó en su persecucion do.ll En vano fueron allí Quiroga y Aldao " resta:. regimientos, para aniquilarlo por completo y mar- blecer el cODihate· chó á Córdoba, llevando mas de ochocientoa gre- En vano hideron esfuerzos sobrehumanos por ñudos prisioneros. . contener á la tropa, esta dió vuelta. presa del En los dos combates, entre muertos, herido. mas inven( ible terror. Y prisioneros, el enemigo habia perdido dos mil Envueltos unos escuadrones en otros, se fue- seiscientos hombres. ron sohre .el ala derecha, arrastrándola en la El general Paz puso sitio á la dudad, y envió derrota. un oficial y un ¡argento, avisando que si no le La jornada habia terminado. rendian á discrecion, atacarla vigorosamente. El enemigo, huh dejando sobre el campo de ba- La guarnicion por toda respuesta fusiló á loa talla· mas de seh cientos cadáveres. dos enviados. La persecucion fué corta V solo se hizo hasta El general pudo haber tomado algunas repre- la caida de la tarde.' salias entre. los prisioneros que llevaba. El enemigo iba en horrible eonfllsion, y Paz Per? s~ carácter noble reprobaba esos actos. esta.ha seguro que no se rebaceria mas. Se lImItó á mandar un ataque general sobre la Por otra parte no queria postrar á su tropa, plaza. ullÍeudo que al dia si.~iente lo esperaba un Los defensores comprendieron el peligro qlU" nupvo com~,ate á las puertas de la ciudad. corrian y se entregaron á discrecion. El enem1go era terco y duro en la pelea. De esta manera el general Paz concluyó con e) Se I"e velldl'ia pronto, pero no seria sin algu. caudillaje del interior. na fatiga. Mendoza, la Rioja, San Luis, San Juan y San· El general Paz !lió esa noche un buen desean- tiagol fueron ocupadas por tropas qu~ el general 10 á su tropa, y el 23 por la mañana marchó so· paz aesprendió de su ejército, á órdenes de ge· bre la ciudad. fes esperimentados y de confianza. A penas se habia movido en' aquella direccion, Era la Dlanera mas eficaz de concluir con le, cuando le llegó U11 parte de la retaguardia anun. cauelillos que se habian enseñoreados en el iate­ ciáuclole que otro ejército tan llumeroso como rior, manejando á sus habitantes como majadas el primerl), los atacaba por aquel punto y por el de cabras ó manadas de burros. fla11co derecho. El general paz no tenia nada que temer por eie Era el mismo Quiroga. que en la noche anterior lado y podia fijar tranquilamenta su vilta lobre habia rehecho SUJ tropa. J lin dar tiempo á na. SlI.nta..Fé y Buenos Aires, que eran. loa puntos - '77 - amena.uultes y donde estaba fin ebUlliCion. la ni-\aConteCirníentoll que dahlilll 'iurjir dl.l eatos puu dada fed(lral. to:> y que DO tar,laroJJ y así prepara.do esperó tranquilamentt> los

Quiroga, fugith'o del campo de batalla, sigl1ió lm-I DI uerta, por el únÍl:o militar ~ ~fJ porua arrebatar- yendo en dir~ccion á Catamarca" _ 'Ies el pOller, dll:das sus condJClOlle~ peno~a1elS! y Solo lo acompañaban unos ,emte gnmuuos de- la enorme cantlllad de elementol> de l/.ue dispow~ 88l'mado~, pues en la per¡,ecucion habian arrojado La inaccion era el suil;idio, allí lo ~olllprendió las armas 'tue la~ recojió el ejército del gE'ueral Rosas al eonferenciar con aquel bandido. qut" lo Paz. impuso detalladamente de la crítica. situacion en Quiroga iha tan desesperado,tan, irritado con que que.daban 111:8 provincias, sít~aci0!l bien críti- aquella derroía que anulaha para siempre Sil po- La por Cierto, ba,Jo el punto de nsb ~ederaL , der, que no teniendo en quienes ,descarga¡' su~ Los federales aprovecharon la.vellida ~e Qw­ iras lo hizo con los pohres montaraces que le roga para desatarse contra el partIdo umtarlO. ,!Uf, pf'r:nanecian fieles. al parecer ha.bia sido !litIo puesto fuera lb -Cobardes, canallas! esclamó, yo les voy á en- la ley. señar á dar vueltal , Ellos fueron insultados y aún el>tropeados por A todos, átodos, á toditos los ~ue han to~a- grupas de federales que salieron á recorrer lll:s do parte en esta batalla y han hwdo como he- calles dando fW'iosos vivas á Rosá i y á QUI- bres, los voy lÍo degollar. ro"a. y enristró sobre e nos su terrihle lanza. Las casas de las familias unitarias eran asalta- Los gr~ñudo¡¡ que lo que menos sospechaban das y las señoras y niñas que las habitaban ul­ ~ra semejante ataque, dieron vue~ta sus mulos trajadas de la manera mas sah'aje. y ganar.on el monte con tanta rapldell: como les Rosas comprendió que aquellas escenas salva­ fué pOSIble. ., jes le hacian daño, rlesprestijiando su Gobierno Uno de ellos no pud? andar tan. h.lero, . qua no ante la gente sérin del pais. \ 10 alcanzara aquella hiena y lo baJara dellllaeho, Condenó enérgicamente aquellos escándalos de un gol~e de l~z~_,. y manifestaciones, ordenando lÍo la Policia tom9:'" En l:SegUlda echo pIé á llerra, y a pesar de los se las medidas necesarias para. (11lP no se fepl. ruegos de aquel desventurado, lo degolló y ató la tieran. cabeza por el. pe}o á la cola del mulo, quo espan- Para salvar su respo'babilidad, dijo que aq~e­ tó para que slgwera por el monte. llos ~¡¡cándaIo!; habian ~ido hechos por el mls- . Est~ era una ferocidad compl~tanléntll inútiL mo partido unitario, para incitar al ~esprecio ,de SlU ob.Jeto a.lguno, pero que refoc1laba el alma de su Gobierno y amenazando al dICho partido aquel ~andido, para quien la sangre era ya una con terrible~ represalias si los hechos. á. pesar beeesldad. de las medida!; policiales, volvian á repetirse. ComprenuÍlmdo Quiroga que nad~tenia ya cIue Los unitarios(porlsu:parte,\:sufrieroIl con pa­ hacer en las Provincias, pues vió los destacamell- ciencia todos aquellos vejámenes. \08 que á ellas cnviaba. el general Paz, cambió dé Los triunfos del general Paz les hacian tener es· rumbo, atra.vesó la Sierra de Don Diego y se vino peranzas suficientes en el porvenir, para sobre­ á Buenos Aires. llevar los maTes que aquellos mismos triunfos bi- Rosas le habia escrito anteriormente y enviá.- cioron caer sobre ellos. dole emisarios.' Numerosas comisiones partieron sigilosamente Luego Rosas lo necesitaba y no le negaria su para Montevideo, á influirCcon Lavalle para. que apoyo, por la. cuenta que le tenia.. tomara una. actitnd decidida y sublevara el En- La llega.da. del general Quiroga., vencido y redu- tre-RioB y Corrientes, para hacerse de un fuerte cido á la Impotencia, fué un aconteeimi&nto que ejéreito con.que ayudar eficazmente al general causó tremenda Bensa.cion en el avispero fe- Paz. 4eral. Rosas se apercibió del movimiento que trat&lla Rosas y su partido estaban amenazado. de de hacersey quiso matarlo eo su cuos. - iS -

Al efecto envió á su 'Vez eOlUÍsiones a la Bon-' Il1uial~6 y degolló otros cuatro de 108 Preaid&ries, da Oriental, para. recabar del general Rivera la Así concluyó de mostrarles 118 ascendiente in­ entrega de los que allí conspirahan contra 811 (Jo- contrastable. bierno. Sumisa aquella canalla al hombre que los ha- Rosas le pediaademás que persiguiera sin tré- bia de mandar mI lo sucesivo, sin mas ley que su gua en Montevideo, todo movimiento tenllente esclusiva voluntad, Quiroga marchó á Santa-}<'é á á alterar el estado de cosas en Buenos Aires. rel'ibil'lip, lle otro contingente de las cMeeles \" (le Rivera s~ negó á pretension ~an descabella~a, a!lí sigu}ó viaje tr~nquilamen~e hasta las provin. y Rosas, furlOso, no solo lo calificó dl' pardPJon Clas de Cuyo, que bIen pronto Iban á sentir de Dne .. Rivera, Binó que desde aquel momento empezó á vo el filo de su puñal. maniobrar para que el general Lavallsja derroca- Rosas, cuando]o supo, festejó con grande. ri. ra á Rivera, y si hiciese señor de Montevideo, co- sar; ('} procedimiento que habia empleado QUll'Op mo él se babia hecho de Buenos Aires. par:t someter aquella chusma ingobernablc_ Fué desde este momento que empezó la E'ne- --Es la llniea manera de hacerse respetar en mistad entre estos dos caudillos, enemistad que estos pai.&ei, dijo. llevó á Rosas hasta. hacer quemar 108 judas Y el tiempo se encarg6 de proba.r de que DI&­ de Semana Santa., bajo el calificativo del parde- nera y hasta. qué punto la habia. encontrado jon Rivera. . buena. Lavalle por su parte, apreció lit situacioll, com- Despachado Quirogo, Rosas le llecidiú " prendió que los momentos eran preciosos y pasó marchar á campaña. C6D lm grftJl grupo al territorio argentino, para Delegó el mando en sua ministros y dió á su sublevar ftl Entre-Rios yGordentes, elonde conta- hcmumo don Prudencia el mando de la fuerza q\.W be con apoyo y partidarios. quedaha en al Retiro, y marchó á Pavlm., dondo Rosas decidió entonces obrar con energia. y ra- se disciplinabael ejército de línea que estaba. for- pidez, poniéndose de acuerdo con el cauelillo Lo- mando. . pez de Santa-Fé, para formar un fuerte ejército AHí mostró claramente el camino que se halla. y ponerse en oampaiia contra el general Paz, ba dispuesto á seguir parR. dominar al paii flOr pl'imero- y contra el general Lavalle en 8e .. completo. guida. . Los unitarios qua debian secundar á LavaDa Para que Quir"ga pudiera rehacerse, puso á en Buenos Aires, comenzaron á conspirar tan SU dispolicion los elementos de que l}odia sacar abiertamente como les era. posible. p&rtido el feru:>: bandido. En esta conspiracion, entró por mal de 8US Al efecto sacó de la.s cárcelelil (loscientos foraji .. pecados, un sargento mayor Montero que se ha.. Boa de la peor especie y se los entregó á Quiro- llaba guarneciendo á Babia. Blanca., con su desta· ra, como base del ejército que debía. formar. camento de caballeria.. . Acto con~~uo puso bandera de . enganche, . á La famosa policia secreta que habia crea.do Ro. la que acudio cuanto ave}lturero habla. en el pals, sas, reclutándola entre las última..c; capas sociales, porque Re Jes p'1.gaha. bIen y se les prometla el se puso bien pronto a.l cabo de la. conspiracion, hore saqueo. pasa.ndo aviso de lo que sucedía, al campamento Con quinientos hombres crenidad de su alma. bien t~m· jiéndose muy agradecido de la distincion. . lllada,.. '. • . -Llevará usted este J>liego á don PrudenclO Pronto nu sangre uruda a la de las otras "lcll­ Rosa~ en el cuartel del Retiro, concluyó d lio- mas les subirá al cuello. l)er~~dor. S~li~it6 luego de don Prll(~~ncio le permitiera. El entregará. á usted dos escuadrones de ca- f's~~b~r l~na carta para su famIlia, pero este se 1~ · 1 e presentará usted sin pér- n('.~o, lD\'ocando la órden tle no perder un JDl- b a llena, con os que s , ¡nuto dido de tiempo e~ este campamen~o. El' .ióven salió al patio "tI el cnartel, respirando .Montero se retiró y aquella nusm& uochtl s~ valor y soberbia, se puso de pié mirando al pi­ puso en Dareha, pensando. qU.6 en su nueva pO~I- ql1f'te, y crU2!Ó los brazos fiobte el altivo pecho. don iba t poder ser mas útil a. los de la. conJu- Dos minutos despues SOBó una de8C8l'g&, y el raciono mayor Montero rodó por el suelo para DO allll- En Cdanto l1eltÓ á Buenos Aires, se presentó á, se mas. don Pridentio :Rosas, en el cuartel del Retiro, á¡ Aquel hecho bárbaro y brutal, rpor J1IAII que se quJen encareció el pronto despacho de la órden quiso ocultar, bien pronto fué conoeidG del pue- que contenía el,Pliego. hIo de Bnetlós Alres. _ DonProdencJo salió ~ dale algunas órdenes, ro- Aquello no era. mas que la muestra de lo qtte ;tRcléle JI) esperara tul Instante. tendrían que esperar de un Gobierno cnyos pri- Etectívamente, al poeo tiempo regt'e!l~, a.segu- meros pasos Jos d¡tbtt sobre cadávere's. l'4ndole que á. los pocos momentos sena. despa- Si el mayor l\Iontero como militar era reo de (hado, para. cuyo et'ecto habia. dado las érdénes alta traicion, ¿pOI' qué no Sé le fol'lDÓ un conas- necesarias. . . o de guera, almqU«;I fuera verbal? - y ust~d slI.be la 6rden que me M tratdo? Es que Rosas no se preOcupaba '-a ni siquiera. "añadió. de guardar las formas, y hacía. el nao 'lue mas le -Si seüor-una órden de entregarme dos es- convenía de sus fámósas fácnlt"des estl'llor4l­ cuadrones de eaballeria. para. que me presente .narias. con enos al campamento del señor Gobentador. Ante el hech? del mayot :Montet'"o los mismms Don Prtldelldo Quedó Cl!-llado lrutando cofl ee-¡ que se las dleron lil~" atatt~()n y O¡pCl'~t1 trs;ñets.la franca fisonoDua. del jóven. ~temótorosos 10i hechos sa.ngtleIitos qtte tendtim l'oc08 momentos despues se presentó en el aloe I que seguÍl' á. aquel. jatieato UD piquete de infantería mandado flor El sistema dEl QuirogapAsabll á lil r el 8iatl1Ua UD capitan. del Gobierno de Bueno. Aires, ql18 }IO 8010 lo e.­ La órden que Montero habia traido ai. don Pra- contro.ba exelente, sinó «¡ne así lo declaró y cea ~ se reducia. á las aiguientes terribles líneas: Montero empegó".J>

E! ;!ent'~all.a\";,t1\P . 1St' habia movido :i, le~:mtar¡ POli .JUaJl Manuel. e~pozó & formar á. gran.. pI j<~ntrt'-RlOs y (,orrlente8, donde úmpl"7.ó:Io reU-¡PrIsa su poderoso ejércIto en el Arroyo del Me­ nir partidarios tlee}d.idos á corre~ aquella nueva dio y Pavon, para engrosar con él las fila!> del '~aravana. en ht'fletil·.)o do la patrIa. que ya tenia su poderoso aliado de Santa-Fé de La (·amp~.flll ~e presentaba ruda y penosa,laquel ejército que dan~o en tierra con Paz, 'por p('r~, poco l',1lportab~. . u~a . de aquellas ~ailualidades IDesplicables, de ~l porverur sonreUl y el fin de la ,lomada bla Implantar el sistema de la federacion y el l"Ompellsaria todas las amal'gllras que p,n ellA. !Se puñal. apuraran. " ' ~I) queriendo perder un dia de tiempo pues Los a.J{t~lltt>S de Rosas em~er~o~ ~ntonces a sabia. que el general paz 8e le venia e~cima., perse~r á muerte nI partIdo urutarlO de BUC-¡mandÓ incorporarse á Lopez su primer cuerpo nos Aires. , de ejército, á las órdenes del coronel Pacheco Ya no se les desterraba ó ~e llenahan con compuesto de las siguientes tropas: ' t'llos las eárc~lfls y ponton~s, I El regimiento de Patricios mandado or el co- Se les despoJaba de ",us bwnes y ~e!lpues de !ronpl Gervasio Espinosa y el escuadron 3 de molerles 1l~ poco los huesos, eran e~V1ados 3. en-¡linea, que mandaba. don Mariano Espinosa, hcr- grosar las tilas. de los batallon~s de lIDea. ,mano de aquel. Don GervaslO en la campana y don Prudt>n-l Ello 120 .. cio en la ciudad, eran los encargados de velar y e . regImIento, mandados por lo&: por el santo nombre de la federacion. comandantes Millan y Gonza.l~z, 108 escuadrones Para. Rosas la federacion era. una palabra de Estramuros de Baenos Aires, á órdenes del bueca cayo alcance no comprendiay si lo com- comandante Correa, el 4° e8cuadron de línea. prendia DO se le importaba. de él un poroto. y dos Mesc~adrone.s mas mandados por el coronel Para él la cuestlon era. asegurar su Gobie~ José arl~ CortIDas. .. . no c03tara lo que costara y cayera. el que ca- Es pre~l~o ten~r presente que cada regumen- 'a to de miliCIas, tema un escuadaon de linea, que yer . 1 h b' 'd d b Odiaba á lo~ unitarios, no por sus ideas polf- e a ID. servl o e ase_ . ticas, oscuras para él, sinó porque eran enemi- El coronel ~acheco se IDcorporó al general gos de 8U Gobierno, y lo querian voltear. L?pez que tema prontos para marchar el regi- Y como entonces tenian poderosos elementos mIento de D~agones, de ~ea, ~ y t~ntos D!ilicia. para hacerlo, queria esterminarlos antes que lo nos santafecmos y trescIentos IDdios GUaIcUl"ás hicieran saltar de un Gobierno que habia adqui- que formaban su escolta, en su campamento iel rido, gracia~ á ql'ince años de desvelos y de lu- arroyo de los Desmochados. chas, de sa,~ritiidos de todo género y de lIDa Con ~oda esa fuerza se movió de ese punto perseverancia sin límites. el caudillo Lopez, despues de haberse hecho-re- Aunque la actitud de Lavalle y el poder del conocer como gener~l en, gefe. general Paz lo inquietaban visiblemente, conta- ElgeneraJ Paz ha~la s.alido .ya deCór~o~a y se ha con su poderoso aliadO'de Santa-Fé el gene- ~reparaba para veDl~ ámvadir las prOVIDCI&8 de ra.l Lopez, la importante cooperacion que debía Santa-Fé y Buenos Aires. prestarle Quiroga, y los veinte mil soldados que Habia tenido Miso del movimiento que prepa­ podia sacar de Buenos .rures en cualquier mo" raba el general Lavalle y no dudaba que el mento. mas espléndido triunfo coronaria sus armas. Si no esta.ba seguro del triunfo, por lo menos Rosas se quedó en el arroyo de Pavon, prepa­ miraba como problemático el del partido uní- rando el ejército de "reserva, para el caso on tario. que la!:! armas de Lopez sufrieran un con- Esta. fué la inauguracion del famoso primer traste. Gobierno de Rosas, que se ha dado en decir En seguida llamó á los generales Balcarce '1 que no fué tan malo, á. pesar de las libertade8 Martinez, nombrando 'á Balcarce general en ge­ suprimidas, las leyes pisoteadas y las cabezas fe de la reserva y á Martinez gefe del Estado 8eparada~ del tronco de loa que cayeron en Mayor. Itqllella vrimeraépoca. Este ejército ]0 componían los batallones Río de Vt'aDlOS los acontecimientos qUf> siguieron al la Plata, áJas órdenes de Olazábal, el regimien- "u1t>lnato de 1l000000o. ' ro 20 de cívicos, coronel Rodriguez, el bMallOlt - SI -

8an~i('olás coronel Olleros~' el batallon Guardia cíon, dejamlo una fncl'zaá MIlenes del ('01'011('1 Argentina (;oroll('1 Rolon. . Espinosa, para protcjerla division del Rio 3° que Además' de estos cuerpos, hahía la. artillería mamlaha el comanrlante Lopez, amenazAda por las manda,la por rl coronel Biedma y las caballerias fuerzas de Rio 4° que mandaha el coronel Clla­ mandados por Jon PrmlenC'io Rosas, que .er~n el varria, cuyas avanzadas sepresentaron dos días cscuadl'on 13° c.omalldante Machado, regtmIento des}lues. Qnihue8, :\Ialluel Puirredon r un, escu~dron ue El coronel E.sI>,inolilt hizo tOlllar cal'allo de .~iro liliIicía~, I'oínandnnte llcrnallllt·z (Eufenllo). ~·llIal'chó precI1Jltallamente en hll~l.'a de {ha- LOJl"z se movió 8ohl'e Córdoba buscando Jed- \'alTia. clitlalllcntl~ al l!eneral Paz, acampallo en la posta ~illticndo fati,!rallas sus caballadas, las 'lllulo en de las llarrauca". el punto conocido por la esquina de Ballestel'Oll La "anguardilt tl~,1 e.krdto del general Paz,ly biguió á gt'¡~n ¡!'lllope hasta el paso de ht Herra­ que mandaba el valiente ('oronel Pedernera, qU'~'1 ,lm'a, en el RIO 3°, doude campó. se hallalHt en ('1 Fraile )lue~~, se movió rápida- ('onol'ÍeUl~? el coro11el Clmyarria este lllO\'i~nien­ mente cuando supo la proxn111dad de Lopez, y SR- to, le pareclO hueno el partltlo, y á. la medIa 110- lió á calupar :í trua gran ahra que habia entre ('1 "he llevó una sorpresa. en toda regla sohro el monte. eampamento del comandante Loppz, que aún no Allí pensaha el coronel Pedernem f'sperar al se habia retirado C01ll0 se lo ordenó Espinosa. enemigo para hatirlo, y ocuItándose con el olljl'to Las tropas de Chavarria entraroll al campamen­ de \a('('rlo por el flanco izquierdo y :\. rütagllar- to de Lopez, cuando las ¡le este estahan entre­ dia, pues ~al)ia que Lopez se presentaba con todo gadas al sueño sin la menor precaucion, y la. car- su ejército. . niceria fué en regla. Todo estaha preparado para dar á Lopez un Para salvar la "ida, el lI1ismo Lopez tLITO que buen golpe, pues este caeria en la emboscada, arrojarse alrio, entre la matanza ~. la 'onfusion, pero la fatalida.d dispuso las cosas de una manera salvando milagrosamente. bien· diversa. Su wvision fué aniquilada por completo, dis- Lopez marchaha ciegamente, ignorando don- persállllose los que escapaban á la rilatanza. de se hallaba la vanguardia de Paz, cuando sus Pero estaba de Dios que á Chavarria. le llabia. avanzadas descubrieron un muchachon que hicie-de tocar su parte. ron prisionero y remitieron á Lopez, suponien- Espinosa, que veuia haciendo marchas fOl"Za­ do que podria suministrar da.tos. . . (lísimas; se encontró con él al di" siguiente El muchachon aquel que acababa de salir del de la sorpresa y cuando este aún sn.boreaba su monte donde queclaba Pedernel'R, impusa.al ene- triunfo. migo de la peligrosa trampa donde iba á caer. _. - El c()Inbate fué reilldo y sangriento, pero aco- Sin pérdida de tiempo Lopez formó su ejército s:\llas las tropas de Chavarria dieron la espalda y en lútea de batalla y desplegó á su frente dos Espinosa pudo tomar un buen desquite, lan­ grandes guerrillas que debian iniciar el com- I ceándolas hasta la cañada de las tres Cruces .. bate. . Entre tanto el general Paz marchaba con todo Algo sorprendido el coronel Pedernera con ver su ejército al encuentro del enemigo y ávido de descuhierta su emboscada, y olvidando que el ene- dar la bata.lla. migo traia fuerzas cuatro veces mas numerosas Al contemplar el entusiAsmo de sus tropas ~ la que las suyas, tocó á la. carga. y se les fué enci- gran superioridad de sus brillantes soldados, para ma con un entusiasmo heróico. Paz no habia la menor .lllda del triunfo. Los patricios, que constaban de cuatrocienta.s Aquello, para él er,\ una simple cuestion de lle­ plazas y otros dos regimientos mas fueron arro- gar y obligar al enemigo á. batirse. nados á fiJo de sable hasta la iufanteria. Pero l"a hemos dicho que la. fatalidad estaba en Semejante temeridad debía ser pagada cara. su contra, en aquella campaña que hin brilante- El ejército de Lopez rompió un violento y vigo- mente h.'\bia empl'za(lo. roso fuego que sembró la mas desgraciada con- Sabiendo qu') elgrut>so del ejército de Lopez fusion entrl~ los regimientos de Pedernera. SI'. hallaba campado en el arroyo de las 1~Ioja}'ras A su vez estos fueron doblados y acuchillados aUi se diriijió desprendiendo avanzaclas bastante hasta e1lHlelJlito. fuertes para repeler cualquier agresion. Allí se protejieron en la infanteria., que iha En marcha, ellO de Mayo, S6 sintió á van- en retirada por la orilla del monte. ~l1ardia )' por donde lIebían andar las avanzadas, Gracias á. ella, esta y lo·s·regimientof$ pudieron \1n fuerte tiroteo. franquear el paso lIel río. El general paz maqdó apresurar la. marcha y Una vez del otro lado, el Lizarro coronel Pedel"-, se (lesprendió para inspecciona.r él mismo 10 nera t~~ó reuni~n ~ se p~lSO. á organizar sus tro: ¡qne pasaba, adelantándose á. gran galope con pas á vbtadel e.lérclto trIUnfante, y eml,ren,110 IUll ayudante, UIl h'ompa y Ull hllqneano. IIU retirada luida C.ór.loba. : Como el tiroteo ¡;;j"uicm cadu vez Illas nutri,lo El cjél'eito de Lopez mai't:hú C11:m pel'ticul-.d gcnural l'az 'luis; cortal' l'ampo para 1I .• gar - ~~-

1W\1J ~nto Ii. lAs a.v~ailas, lll'l'~ el Laqueano Xo o(¡:eeil;llllole,s In. cosa. él menor pelígrQ, perdio el rwnbo y tuvIeron qlltl glUar~e por ell'u·aflucU08 mercenarIO!! d{'sataron al general Pa;,; mor del fu.ego 1 'lue cada. vez 8e hacIa mas sos· IUua. que á. su Vf'Z tomara. Rlgun descau!io, tenido, y cnddos por la fatiga, aqnellos bomlJl'es se CIl- Marchando á media rienda, el genera,l wvisó tregaron al meÍlo. una trol'lII que por la diviso. creyó pertenecía á . I'J animoso guorrero, vientlo quo h&&t .. d cen. Su ejército, pero DlUy Cl'l'ca de ella reconoció que tinela flue lo I.'lIstodiaha se halla"a. caLeteallllo se eran enemigos y, temiendo cael: prision~r,o y ver- le aproximó I'on ca.utela, y arrehatándole la l'i~'n. del' la a.ccion por esta causa, dió una. rapllla rlen- (la del caballo, 1¡IlC tenia en la. mano (lUiSO saltar da á SIl espléndido ca.ballo y ('clló IÍ. correr en la en él y huir. ' direcclon que debía. traer su ejército. Inútil teutatiYa~ lJ enemigo se la.nz~ en su ptlrse~ucion. Fllé sentido á tiempo y á los gritos del ceutine.- El gefe lo reconOCIó por su .umforme y Ha- la, toda la tropa se puso orque sus matll.Dgos fa.tigados, no cal" á. paz para convencerse que aquello no era. podian competir con el caballo de batalla del un sueño. La pris.ion del General paz importa.ba. general paz.. in't'vocalJlemente la derrota de su ejército, que Antes que perder tan illlsb:e prisioDero, llicie· quedaha sin cabez:.l> que lo dirijiera con provecho ron la. última. tentatiTa y el ¡¡efe de la fuelT.l. para sus armas yaturdido por aquel golpe tau desprendió en su persecucion cua.tro ooleadores casual como inesperado. dando á uno de ellos su propio ca.baU~ q\1e era Lopez, para aprovcclu\l' la. postradon del ene· el mejOl'. migo, resolvió opera}' sobre tablas. Aquella. eltratajema. illfcmal dió el mojor re- Euvió Líen 'ellcoltado á.. Santa-Fé a.l ilu¡,¡trl:l pri- ImItado. sionero, y se l>USO en marcha solll.'o el ejército El caballo dd general Paz, qua uo hubiera l:ii- tlue iba" CJH:ontral' sin llircccíoll y cump10tamítll• do aIca.naado en manera algWla, rolló COD las po.- te tlesmoralizado. tas atadas)or un certero tiro (le bolas, anas- Era. indutla.lJle lllua d que La. l\latlrid babia. trando e11 su caida;á su noble ginete. tomatlo el mando, por ser el gcfe mas <:al·a,cteri· Este, a.pretado por su cabalgadura, ni siquiera zado, pero esto no le infundia á Lopez el menor pw10 sacar del cinto una pistola. para defen- temor. derse.· El General La. Madrid era. uno de los gefes Aquellos dt sca.ruisadm> cayeron sobre él, atáu- mas bravos del ejército argentino, pero esa mis­ dolo con. sus wag,ead.ores t.omo á. 1Ul bandido y ms bravura que sus enemigos eran los primep>s echándolo '- las anca.s- en reconocerle, le hacia. cometer mil desa.ciertos y en el acto se pusiet:o~ en fuga, pues lesya. pa- imper(lonlltbles en un gefe de Su larga. pl'áctica, recia sentir al ejér~ito que. llegaba al feBcatar el pues llesde la guerra de las republiquetas, como prisionero. oficial subalterno, ha.bia hecho siempre una figura Su ayudante y tromp&de órdenes fueron muer- lucidísima y héroica mucha¡¡ veces, atrayendo tos á su lado. . sobre si la. atencion del pais. Aunque atado como un.forajidD- &.quella. cana- Lopez se dirigió, pues, á marchas forzadas so­ lla gUJ.LtdablL al ilustre prisionero todos los respe· bre el ejército del General Paz, que debía estar t08 de que era susceptible. muy llróxÍlIlo, segun el paraje en ql,l8 aoquel C¡)yó SiéndolesimpOBible incorporarse a<¡uella no- prisionero, che el ejércitopor el cansancio de sus. ca.ballos, Véamos entre tanto 10 que sucellia en aquel resolvieroll campar para. darles descanso y seguir ejército y el fin desa.stroso que le imprimió la la marcha á la madrugada siguieute. pérdida de Pa~. ~_. 93 -

La lUtllgre de IOIii\ mártl.-es

Al saber qu~ su gefe habia caido prisionero, el rilmenttl. I ('on este plantel de presidarios y enO"l\J1clta.dos; Ala. aproximaf"ion tle Lopez ell\"id sus parla-¡ d terrilJle QlIiroga marchó á Mend6z~ ocupadá. m(~ntos, ajnstando una ca}litlllacion tan hOlll"o~a: por 1111 cOI'one! Yidela Casiillo, con uno. l'egular como l? fué llOsihle conseguir. i,livision. . . .l~or ella .se convenia fJlie ningun cilldatlano ó\ Qniroga lo hatió, lo deshizo y con 10 que salvo n11l1tar seru\ molesta,lo en manera alguna, pOl'l de la matanza, engrosó las filas clf' slis ban­ sus opiniones políticas alHeriores al tratado y l1ue' di:los. se re~petaria. la vida de totlOIl los que huhier:inl Ya estaba en campaña, y de una manera terri. prpstatlo sns senicio¡¡ bajo las lJan,lcrilB del gene-: I¡le el tigre de 10811an08. mI Paz., I Campo.do en Mendoza, dOlllle le propuso for. ,f.:l lfenrral J.0IlP.Z orup6 á (,líl"tlob~ df'sp1\f''1 ' 1l':W un gran e.j~rdto, dl>sparM sus cavitaR,.jos 1\ S{\1ltiltgo tleJ Estero)' la Riojn, IÍ r('jl1ntar sus un· fuman, C()tl la firme conviction d(' I]l1e iha IÍ. aní. tiguos greilllllos. ,¡uilar al W'lIf'ral La. Mallrid. A la aproximadon del lJlllltlitlo ~ . .'1 .la notil"ia . Otra Vt'i'. iha tÍ ponen.e alfrent.e tlt' aqlwl ejér. de su l}¡ll1~ado, :tquellati pob~·~'~. pronlltlas telllLla- Cito á. llun till~tas ,ganas tie w'ncer tenia, pam ven- 1'011 y se dlspmneron al Sal'l'lliclO. g'Arse en el tnunfo (le sus pasadas derrotus. Sahillu que toda l'('siSIt'lll'ill ('1'1\ inútil, y qur' l\lnrdli111110 dia y norhe y arrel>atan,lo "lIanto solo logrru:ian con ella irritar á Ql1il'oga, que \'t'll- Itl'l'f'O Iwlhd,n :11 paso, eu lIIenos de un Ole~ Qui- drin. entonrt'S á redlltnrlOt; á lanz.ll )' l:uehillo. rOg'1t su PII);O ti la ,·i!>t.a de TucUluHn. ' Ya sabian por e~perit'lH:ia qlH' em iuútil resis- Hullel1ol' La:\Ta de La engrosar las filas de sns greilUdos. Madrid. Estando en San Juan y con un ejército Fontaner cargó esealonallo soll1'e aqueli¡t fucr­ que pasa.ha ya de cinco mil homl,res, supo Qui- za, eOIl tan buen éxito, que tlespul's (le un corto rogn. que el gen('ral La Madriil se hallaha en Tu- aUllq ne terrible combate, la dohló y IlUSO E'n pre-­ cuman C011 los restos del eji!rcito del general eipitada fuga antes de que pUlliera redbit'la me­ Paz, que tan despiadamente lo babia batido dos nor proteccion. veces, arrebatándole tollo su poder y condená.n- Creyellllo haber c\lwplido las órdenes recibi­ dolo, se pllt~d , (lel ir, á la mendicidatl de elemen- da.s se plegó sobre el ejército, tiroteado ]Ior tos bélicos. alguuas guen'illas de infantería que poco daño le Ante esta noticia, la. mirada somhria del balllli- hicieron. ,,' do, se numinó de una manera siniestra, pues se le Irritado Quiroga con 1'1 regreso (le Fontaner, presentaha la oportunillad de tomar un desquite salió á su encuentro, lanza en ristre, llregim- en tOlla. regla.· tántlole: Quiroga. tenia un ódioá muerte á La Madrid, -Con órden de quiénharegresatlo usted, coro· desde que este gefe, por órden de Paz habia OCll- nel de porqueria? pado á ~Iendoza, haciéndole alglill08 prisioneros Sohrecojido el coronel Fontaner, con tal recio y fusilándole algunos greñudos. himiento al frente de su ,li"ision trÍlmfante, re- Quiróga no temía á La Madrid, como no temia plicó ron soherbia: á nadie. - Ue n'gresado por'llHl no tenia mas enell1igos Ree.onoda la superioridad (lel general Paz, pe- al fl'('ute y hahia Clllll1llillo la órdeu que se me ro fuera de este, creil\ que no habia general capaz dio. ' . de resistirle, al frente ,le sus montaraces. -Si yo le dí 6rtlen d9.cargar y

La tl'opa quedó at(,l'rat~a con est~ hecho brutal \ ,\1 COllOCt'\'~ allí la. derrota tie La ~Iadl'id, la Los llemás g('fes lo atl'lhuyeron l\ un sacrificio pohlacíol! \ sohrf>cojió lle espanto. que por el triunfo hacia Quiroga. Qllir0t'a era allí demasia,flo con?cil~o por lo ('ol1\'encÍllo lle que su tropa solo por el terror ¡que halmt lte~·.!lO en las ~Iellla.s. prOV1l1Clall, par:\ pOllia sostenerse en el campo tic batalla con~\1t !n., (!lIllnr que 1 ucumltn tuera ft"I'ozmelltL' 8al:l'l- lle La l\Iallrid, pensar~n, ha )1(>,.]10 f'st.e sa.cI'lnclll.ncu,tlo.. . llarA. aterrorizarla. . I 1-.1 t1g-re se preparaba aquel lita sn lJlas SUll- El " o gener·'1 QU\'I'oO'a se puso á la cabel. !\.I tnoso banquete (le sangre. nU81l1 ". <:,' I 11 l' 1 I l' . ' , de la lli\'ision que hahia lh'j[ulo sin gefe, y ruetiéll-¡ ;1, 11:\ lec 10 lilas ( e qlllDltmto-. pn810111'I'OS, en- dose d mismo en lo mll", l'llcal'llizallo de la lncha, I tre, los sfut'l'Zf1s: ] lesll .. aquel campamento !lf1nlh, hahia puesto desespera,los, pero mutiles, luna tienda de campaña hecha con cueros de po- Las cargat! de caballeria se sucedian sin tl'égna, 11'0, Quiro,~a dictó su primer bando, ban,lo fIII(' y la artilleda hlt\li;t a]ll1.!!,atlo Y;\ sut! fue~os. contl'istó á. tOllas las familias lIiell c!llocadas. Acosalla la infanteriay sofocR-tla por aquel ene- Por el !sI' illtimahn á tOllos los ha,hitantes _en migo siempre de refresco, empezó á desbandarse quienes se suponia al¡rllllil fortuu[l. y ti los dlleuo~ en tOtlas direcciones, arrojando la~ armas. de negocios, llevaran ;,: ""'n,'ionallo potre,ro,cllan- ACIUí empezó lamatanza, to tuvieran en dinero, uajo pena de ser tnslhl.llos Las tropas

Quiroga illRm16 qUé se los llevaran todos nl De pronto pntro á SIl t' d . d cuartel genera] 's d . á f . fi' IPD ;), lIna eSpetlfl e ,e CClf SUllotrero, parn USI· o ClaJ, ele gran melena y cullierto d(' manchas de larlos ji t.o~os. sangre, aÍln frescR. ),os pnslOneroslde la ~R:tll.lla fueron .aumenta. -Ya está, señor, elijo, ylos "muchachos piden dos con algunos que se llJcH~ron en la cllHlad, su· que les entrc'guen los otros. - mando entre todos un total ele noventa y tres. -Por hoy basta contestó Quiroga 1 . el Cuando se supo esto en la ciudad, los habitan· sUs gruf'sos 'labios, ~omo el tigre cu'Uld~n~~~b: tes concluyer~n ele aterr~~se, pensan(lo que, á tIe comer. faqnelpaso, Qmroga concluma pOl' manelarle llegar Deciles que para mañana veremos, qllil ahora. uego. pUE'den dC'scansar. Como la mayor pRl·te de aquellos prisioneros Y en segui(la, elirijiéndose á las señoras con- pertenecian á la mejor sociedad de Tucuman las tínuó: ' d.am.as, oh·i.dando el peligro que ellas mismas'cor. ,-Pueden ir ustecles tranquilas á. recibirse cada. I'Jan, ~esolvleron presentar~e~ (~uirogn, para im'l ena! de la perSO!la que le interese. ploraI el pendon tle 101 marhres. }... ~te lleva la orden de hltcer la entre~a. Aquí se presentaba á aquel asesino, la oportuni. - De l~s prisioneros que .e~tári ahí, diJo á &que­ ua~ de goza~ de un placer que no hahi¡\ imagina.¡lla ~speue de a~'udante, dll'as que ~ntreguen en do, la agowa moral de aquellas desventul'atlas Iel acto á las senoras, los que ellas pidan. ml!j.eres. . ¡ y ~011 !alllatur~lidad dió esta. órtlen, que aque- .Iodo?ltaba dispuesto para la ejecurion, el\lla~ ,JI~fe\¡ces volVIeron á C1'eer en la piec1ad de IDlsmo_dla que las nobles damas)legaron al po.:Qu~~o"a .. trero. \ Este sahó detrás de ellas para no perder el me- Esta ejecucion era decretada en 10rma tIe ma.lnor detall~ tIel cuadro que se .habia preparado. tanza, pues no podia hacerse tle otro modo. Las selloras fl~eron.collducldas á un descam- Los que no murieran en las primeras descar- pac1o.' d~nde habla tenlllo lugar aquella bárbara "Ras, serian muertos á lanza y cuchilo. carrucerla. Quiroga recibió á aquellas señoras finjiendo IJos oficiales y gefes, atados codo con codo, é una. amabilidad que llamaremos gatuna. ignorantes de lo que iba á suceder, habian sido Les manifestó que estaba dispuesto á aeceder ~ondllcidos allí, segun se les .llijo, para tom~rles , sus nlegos, y que esperaran allí, que él mall,h\. Juramento de que nunca halllan ele volver .t to­ na tráer los prisil'neros para irlos la/'gando uno mar las armas. A. uno. En cuanto llegaron se les formó en ala, y VII,- Las Iileñora~ no podian'creer en semejante mall'. rios pelotones de cahalleria desmontada avanza­ nanimidad, y desde el fÓllllo de sus corazon~s r@ll sobre ellos haciéndoles fuego á di.screcion: empezaban á perdonarle todo el mal que les ha- Estas fueron las descargas que hablan sentido bia causado en aquellos amargos tres dias que las señoras. hacia. ocupaba á Tucuman. I En seguida aquellos bandidos arrojaron al ame- Quiroga observaba la alegria que iluminaba elllo l~s ~rmas de fuego que tan antipáticas les eraR semblante d~ RfJ.uellas señoras, saboreando el!Y slgllleron la matanza á lanza y facon, placer que ~;e proparaba. Aq.uello~ desventura(los morian ~e ~na manera. De pronto se sintió un fuego graneado, segui. horrIble, sm. tener el consuelo S1flU1el'a lle de- do de alaridos salvajes y:gritos !le dolor. ¡rentIer sus.mlas. Un vértigo de muerte pasó por el corazon lle\ Algunos que hahian lograllo ú costa tle enor~ aquellas desgraciadas, alglmas de las. qne se Imes esfuerzos sacar una mano de las fuertes Ji­ atrevieron á preglUltat: qué sucedia. !gadUraS que se las amarrahan á. la espalda, la -No es nada, gruñó el tigre, son los mucha· llevaban al cuello, ofreciendo aquella. débil d.e- chos que se entretienen en)acer salvas. ¡;'. fensll. Pero los gritos de desesperacion y los ayes las I Pero las tropas de Quirogn, sin cuitIarse de convencieron muy pronto de que se trataba de apartar aquel estorbo, eOliaban primero la mano alguna. matanza, pero nunca se figuraron que las separando los eledos y seguían despues con la víctimas pudieran ser)os prisioneros por quienes Igarganta. habian ido á pedir. - .\quello era ya.nausealmudo. De repente cesó el fuego de fusileria, 8iell(lo I Los mismos hanui. La :;\lallrill .lmhía ,1~jaclo allí al. (;ohe1'n(l(lorl. J<~ra además e~emigo de las matanzas. inútiles, Frngl.leiro. IllIJen quedo. eOIllIIl·omt'h~o.á de~ell- ~ (le?de. que. la cIUdad se .le entregaba Sin resis­ der la dudad. eOIl dos hatalloues de mfuutena y I tpnCla, Juzgo que no hnlHa motivo pilra ejercer tres l'euilllíentos de cahalleria. Ivenganzas, ui era. político entrar á snllÍrre y La c~baneria haI,ía sido formada fuera lle la fuego. . '" ciudad, la que fortificó. con gralllles zanjas~' ~'o- ('onsecu~ll.te con estas ideas. despachó los par­ sos, tlet'enllitlos llor la mfantcl'ia y un llar tle ple- lamentos, diCiéndoles qne estaba conforme con zas de mOlltaUa. aquellas bases. Pero por el resulta(lo tic aquella llefensa. se vió Que si de la ciuda(l no se hacia fuego l:iobre fine mas era. el número de partidarios. fellerales sus tropas, él respetaria la vida de los capitula­ allí existentes, que amigos (le La l\Iatlrul. llos, .decretando el pe~do~ para los que habian Aterrada la poblacion con el abandon? que .tle servIdo ~n las filas umtanas-además, aseguraba Córtloba bahia hecho el general La.l\Jadrld, qUISO que h!,-rla res~~tar á sus tropaEl la propiedad y 108 influir con Fragueiro para que caplhdara, á lo que nel~ocIOs de (ordoba. este respondió liue no tuvieran cuidado, 9,ue él l}na hora. despues aquella. razonahle capitu" sacaria el mejor pa11ido posible de la situaclOn. lacIOn ~ra firmaba po~ .clgeneral ~ el Gobernador Cuando las cahallerias situadas afuera de la Fraguen'o, \' laguarmclOn de la CIudad entregaba ciudad vieron que el ejército felleral se apr~xi- sus ~as .sin haber disparado un tiro. maba, sin que sus avanzadas hicieran un solo tiro, . El ejérCIto de. L~pez pene.tró entonces á la lIe replegaron á las trineheras buscando el am~ cI~da~, en el mejor orden pOSIble, y por la calle paro tIe las infanterias. . prlpclpal.· ." Entonces empezaron á verse enlaCllida!l, enar- To(las las azoteas se \"1eron. mmedlatamente holar en las a2 lteas de las casas, gran cantidad de U.enas de banderas y coronadas. de cabezas son- banderas., en seña] de regocijo. rIentes. Eran los federales (iue se preparaban á reCÍ- De las ventanas y puertas de las .casas se un'oja­ •• ir sus aliados y los halJitalltes mas timidos que ban flores sobre las tropa.s vlvándolas á su finjian serlo, para evitarse por est~ m~dio el mal paso.. . " '. . que p\Hliera hacerles el ejército que mdudable- CÓI~loba no I~clbIa á MIuel eJe~clto como"!1 mente iba á ocupar á Córdoba. c?nqwstador, smó como á un lIbertador codi- . . '. Ciado. Cuando 105 p;nmeros regImientos se pres~nta- El general Lopez repartió sns tropas en/los ron sobre las trll~cheras, en son de carga, salieron cuarteles de la ciudad yempezó á tomar fodas de ellas dos ofiCiales con bandera de parlamento, las medidas. del caso, puespensaua regresar cuan- huscando al general López. to antes á Santa-Fé. Este hizo suspender. el alaque hasta hablar con A pesar de su gran amistad, Lopez no tema ellos. '.. tan clega confianza en Rosas, que no temiera de- Aquellos d.o~ ofiCIales veman en 110mbre d~l jarlo á sus espaldas Con un tan formidable ejér­ Gobernador Fragueiro á proponer una capI- cito. tulltrio~. ... . Todos los gefes y oficiales que formaban parte . La. CIUdad se ent.regal'l~ mmediatarpente sm de la gllarnicion, fueron declarados prisioneros disparar un solo t~ro, Siempre q~e el general de guerra y remitidos al cuartel general. Lo~ez respetara la VIda y las propIedades de los Entre estos prisioneros figuraban los tenientes capItulados. . _ . coroneles Luis Carbonell, Pedro Campero, !A.ngel ~La po~Ia.~lOn como el Gobe~nador anadian, Altamira y un comandante Montenegro, junto no es .h6stIl ID al general Rosas m al general Lo- con los sargentos mayores Pedro Cuevas y Pedro pez DI á sus tropas. Cuello. Pedian aquella garantia por trlUlquilizar á la po- Además, y Como los prisioneros mas importan­ blacion indiferente, pues no habiendo allí enemi- tes, fueron tomados el coronelI,uis Videla, Go- gos de la federaci~n, nalia haNa que temer. hernador' (le San Luis y un seúor Duran, pro- El gelleral Lopez no era un bandido. veedol' del ejército 'lel general Paz. • - ~" - El Gobernador Fl'¡l~lleil'o r~dlun(, Ite Lopf'z crificio y qucri¡l, evitar nI tierno niilo la \'ist:l ell" l~ aquellos prisioneros y'demás oticiales, s~steni?n- ma~anza...... • do que con arreglo á las bases lle ht capltuJaClon 1 ero el. ndio ~o rC~lsho con toda la. gracIa; de I'JU no los debia Ileyar. l"olunta.d mfantil. Lopez le di6 todo género dI'! segurida.des sobre ..-Déjelo usted. comanuante que lo acompáiíe, sus vidas, agregando que si los llevaba á. Santa- dIJO Lopez, .que sIempre ~erá un.~ consuelo J'ara. :Fé, era para ponerlos junto con el general Paz, usteu tener a. su la,do ese hemo runo. allí prisionero y asegurarse de que no intemtarian -~s. que temo, co.ntestó Montenegro, que nnes­ otro movimiento para carubiar ~l órden de cosas 11'0 "lUJe sea. demasIado la,rgo y tenga que ",olvar por él establecido. solo. . . Lopez notnbró de Gobernador provisorio á. su I~opez comprendió todo el a.lca.nce de aqllellas tocayo el comandante (Ion l\Ianuel Lopez, que pal~hras, dichas con intinita amargnra, y se apre- gnarneciá el Rio a~ ~. se preparó :í. marchar á suro á. agregar;. • 8anta-Fé. , ,--He empenadolJn palabray nu ftrma. de ~!;. Por mas que Lopez q ni80 impedir que su ej él'- petar la.s \'ir!l1,oso mur, i'flmo ue ('atorce ailOs, gim'te en nn pullo ocultar la inJllem::t alegl'i:L que 10 dominÓ. lWfl."lfO. ... 1Irmdú echartlianas por toclllS la.s bandas ,lel , trl\ el hlJII~ 1Il:1yor dd ('omamluntl" ::\Iontllne- ,'¡lInpamellto, ~ hizo á Buenos Aires, sin pprdidl\ ~rr~, l¡ue le m!\'Jalta !:i,n P.bpOsa. para i'lUt~ lo arom- ti" tiempo, d03 cll:\SIJlIl'S montados On sus mejn- p:'lloU'a y lu tuera útIl en Sil c~\uti\'crio. \"('s .'abaU.s. _ ' , ~,a buen!!. ¡¡eiLOra. C1.l\'ial.a. auemá" aqnel nirlo, .\UI'IIIÚS 11(' Ilal' rlll'llta, de su vicloria, orclnna­ I 0.110. nn :m!lel cus~ru~,a 11" su esposo, ¡lla. 'liJe loclas las call1}l:ma.s de la riudall fupran . ~.lUén ~e atrc\'el'la. a matarlo ('Oll ahogado lan I ed¡atlas á. \'lICIo, eH f.!,.;tejo¡J.e Sil triunfo, que se- lJ.~1 dO .(- J.~1t~!esante~ l.!!11I1 n, iJlJIJOI't:\ba. par:\ In, Uepúblkl\. ent"I':i. "J im- 11111I1el:l. ',1110 precISO rcJleg'al' para creerlo, .ll': ¡"'I·jo de las.ley~s por Iiluehos aúos. tOII~. "eutlUlIcllto llUUlano. I --·Los cl\udillosihn.n'eaidop~a no IcvantnrsfI ( Ul\~l.UO f", ~omandante Mont.·negro \'ió ll,'gar~~'l¡;, l,onch,ua diCif'ndo~era preciiiamente en el :i !'.:l hlJ~. ql\l.~? hacerlo vol\'t'r. Itlf'llIPO que 1051 tres mas formidables de entre el~tls 1 ara. d ('1':\ Jl!lludable qUE' lo~ llenhan al sa-, se h:¡l)ianapoderado tI",1 pai~. -- !lit -

Uo~:\s manUl'I ql\(~ ¡,;e J'f'til'l\l':1Jl IÍ sns ('\\Artcl('s\'hienllo "11 ('!In!; E,I mifilno motivo, ~1I!, \·¡.ll\s no dl'Huenos Aires la.mayoriacle las tropas,)' sepre- peligran. paró P:tra iral Rosario, á. fl'liei~ar })crsonRlmentej }lrolmso Pllfouees á. Rosas darle 1'11 cambio- del á su ahatIo 11 01' aquel rran trumfo tle la (~aU8a general á los gefps cuya. lista. hemos apuntado ya. ff:'d~ral. . 1)' .otra cantidad d~ aquellos prisionero~ que ve- )'.!;tí' f'l'a solo el pl'etPsto, )mes ('1 mó,,¡) \'(,I't1a~'m¡Ul á retagllartba. tlf'r? t~f'1 tirano era 1I1\1~ distmto. '" I Rosas insistió agotantlo tolla su astucia. porque 1 t'llIa en sus mallos las facultades estraorthlla-, le entre"ara la persona de Paz pero convencido rias. y ~ueria hacer lIn uso de elln¡.; digno tIc sUBlde que todo ~sfuerzo serí!" .ínút'n. por el mOIll~n­ aSpll'aClODt's. - f.o, se eontento (~onlos pnSlOneros que le ofrecla, Cenocia las últimas hazaüas de \luiroga y DO IreservlUldo hacer llespue1l nuevas insto'l.ncias. queria quetlarse atrás. "" 1'~1 general Paz era el mayor enemigo que Rosas Habia llebutad~ ya con ~l fnBI.la~~ento tle un temia, pues lo c~nsi~eraba el únil'O militar c-apaz sargento 111a,yor sm formaclOn de JUlC10, y eucon-I dtl levantar un ejérCito y dar en tierm con la fe­ traba muy cómoda esta manera de lihrars(' de sus deracion, cosa que no habia hecho ya, por la enemigos. Icasualidad de haber caido prisionero r.uanrlo me- A pesar de todos sus triunfos, Rosas temia. le nos se esperaba. minaran H poder, y despues de probar el llresidio Así es 'que aunque no 10 decia, tenia \"i,"os de- y el destierro, con sus enemigos, le habia pareci- seos de concluir con él. '. do el procediOliento JIlas rápido y seguro, la 1I1uer- Como á Lopez 110 le con\"enia. romper con Ro­ te inmediata. sas, á este no le convenia tampoco romper con Así Rosas empezó á seducir áLopez, como si le Lopez, así es que aparentó conformarse, despnes fuera. una cosa indiferente, para que le entrega- tlf' hacer estilo declaracion: ra al general Paz y demás llrisioneros flue haLia -Francamente queria llevarme á. }laz, porque hecho.en Córdoba. . . deseo trat'rlo á nuestras tilas y estoy seguro -Quiero lucirlos en Buenos AII'es, le decla. lograrlo. ~o estoy animado contra ellos Ilpl menor sen- Es el único hombre de valer que tienen los timiento de venganza. enemigos, y en vez de inutililizarlo para tQdós, es Paz, y los gefes yoficiales df'l t'jército, serán 01' -atraerlo hácia nosotros. perfectamente' tratados. • -El estar en Santa-Fé no obsta para que se En cuanto álos otros, en el ejército de Bue- hagan esos trabajos, replicó Lopez sin querer de­ nos Aires estarán mas seguros engrosando sus jarse persuadir de las Imenas y cristianas inten- tilas. • ciones de su aliado. De Santa-}. é se le van á escapar el dia me- Por ahora lleve los otros prisioneros, -que tiem­ nos pensado, y de seguro que tentarán algun mo- po tenemos de pensar en Paz, que está bien se­ vimiento contra el órden público, incitados por guro.' los caudillos que no están en nuestro poder. Rosas tragó su despecho, dejando hrillal' un Lopez uesconfiaba de Rosas, conocia la per- rayo de ira en sus hermosos ojos, y Jna1Uló al ca-' versidad que empezaba á dominarlo, leia en su pitan Clavero, que lo acompañaba, se retihiera. mirada azuhda fll~o de terrilJle y no se animaba de los prisioneros que le entregaran. á pntregarlt los prisioneros. Cuando estos estuvieron en S11 poder, se des- -Lo mismo están aquí que allí, le de cia. pidió de Lopez, prometiéndole volver muy pron- A qué se va á hacer cargo ele tanto picaro? to á conferenciar con el general Paz. Van á darle 11n trabajo endemoniado sin fruto El uno se puso en viaje para Santa-Fé, y el de ninguna especie. otro regresó á su campamento dt' Pavono Dejémelos nomás. Rosa~ venia lleno

y. e.sto no le tenia cuenta bajo níngun prin- COI1W se ve el coronel Ravelo no tenia ningu- ClplO. . . . na. ~omplicid~d en ~ue.l as~sin~to. . ElItre tanto Rosas se preparaba a dar a la. fe- hra un gete del eJerCIto, a q\Uen el Goherna­ deracion el espectá.culo que lo ha.bia de hacer dor legal y Ca~itan General de la Provincia le célebre inauO'urando una, era de sangre y de lá- ma.llllaba cUDlplir una órden, á la cual no admitia grimas.' lo • m~s contestacion, ~ajo pena lle la vida, que el Desde Pavon y sin querer hablar con rungu- aVIso de haberle ejecutado. no de ellos remitió los prisioneros á San Nicolás Al escuchar la lectura de la inicua sentencia. de los Al'r~yos, donde :;0 hallaba el coronel Ra- los J.>risioneros :;e sintieron profundamente con- velo. movidos. Una vez llegados allí, fueron alojados en el Presentian que serian sacrificados, sí, pero en cuartel y separados en dos grupos, uno que ~ebia otra ~orma, disfrazada siquiera con 101:1 viso:; de la ser remitido á Buenos Aires, y otro que debla ser legalidad. allí pasado por las armas. . . Ji~l coron~l Videla, .Gobernador de San Luis, En este !!Tupo.estabán las personas cuya hsta hombre vahente á qUIen la muerte no podiaimpo­ hemos hecho ya, y que eran las de mayor signiti- ner .bajo .níng~~a forma, fué el pr.imero en dominar cacion política y social. la sltuaclOn dICleD<~O á Ravelo: En la nota de remision firma4a por Rosas, y -Es que esto osmícuo y cobarde, el Gobierno refiriéndose á estas personas decia: de Buenos Aires no tiene ninguna razon ni dere- IlA estos los ejecutará usted á las dos horas de cho para condenarnos á muerte, pues ni siquiera leerles la sentencia que acompailO, no admite nin- somos sus prisioneros de guerra. guna peticionni súplica del pueblo, ni: otra con- El general Lopez, Gobernador de ~anta-Fé, testacion, que el aviso de haber cumplid~ con ella; ha pactado con nosotros, y hay que re~petar las bajo pena de ser usted sacrificado con Igual pre- bases y la firma de este pacto. • cipitacion". . y en prueba de lo que decia, mostró un salvo- ~o se podia dar una. órden mas perentoria y conducto para él y sus compañeros, que el refe- tremenda. rido general Lopez !e habia dado, firmado y se- Así al coronel Ravelo se le cerraban todas las liado, para que pudieran regresar al interior. puertas,obligándosele á cumplir de la manera El coronel Ravelo se hallaba en una posicion mas perentoria, aquella órden brutal y salvaj e. terriblemente violenta. Rosas, como se vé, hacia uso de las facultades No desconocia la razon que para .'spresarse estraordinarias, revelándose en su mas repug- así tenia el Gobernador de San Luí"!, pero él no nante desnudez. podia hacer nada. Qué poella esperar el pueblo de un mónstruo Así lo manifestó, enseñando nuevamente el semejante, que se inauguraba violando un pacto párrafo que conocen nuestros lectores. y derramando sangre para darse el placer de . -Esto es sencillamente infame! es clamó nue­ verla correr, ni mas ni menos que un tigre vamente Videla. harto?,· . . . En no~nbre (~e la civilizacion, de tOlla ley y de Pero a Rosas poco se le Importaba. de lo que la. humarudad misma, nosotros protestamos enér- pensaría el pueblo. gicamente de este asesinato alevoso llevado á Tenia las facultades estraordinarias de que cabo con todo lujo de cobardi,t y ferocidad. . habia sido investido y un pretesto que invocar. E:I coronel Ravelo se retire) de alli conmovido y Los manes tIe Dorrego, qlle aunque su muer- avergonzado, á dispoll('r todo lo coucerciente á. te le alegraba en el fondo por la posicion que le aquella ejecucion infamo. habia dado, le servían de pantalla á todos sus cri- El vecindario de :':ian Nicolás q ne se babia echa­ menes, para. que los atribuyeran á· un esceso de do ála calle,ávido de curiosidad por ver los presos piadoso cariño. regresó á sus casas, sin sospechar siquiera la tra~ En la plaza principal se bahia hecho desocu- jedia que poco despues iba á tener por teatro la par una casa, donde se improvisó un altar que plaza principal. debía servirles de capilla, durante las pocas ho- Los demás p1'e80;;, conformes con lo que ras que tardarian en ser sacrificados. había dicho su compailero de martirio el Goherna- Allí.el coronel. Ravelo les leyó él mismo el dor de San Luis, se resignaron á. correr su suer­ oficio con que Rosas se los habia remitido y el te con totIo el valor y energia de que p.ran sus- terrible párrafo que lo remataba. ceptihles. . Ravelo nada podio. hacer en favor de la.s víc- De pronto, y poco despues de la'salida de Ra- timas y así se los maniftlstó. velo, un estremecimiento de horror y de espanto -Sin embargo, agregó, ust~d.es pueden a~rov~- se apod~ró d~ todo~. ellos, al apercibirse de la c~ar estas dos horas en escrll)!r algunas dISpOSI- presencia alh del milO hijo del CJ)mandante 1\1on­ clO~e" Ó cartas fa~iliares. . . _ .\tenogro, qU? estaua al lado tIo su pallrc mirán­ F.sto no me ha Sido llrolullldo, y yo empellO Dll dolo al traves de un raudal de lágTÍlnall. palaLra tlu hat:crlas llegar ásu destino. . -Es nec;<.:sario bacer salir lIt:: :il!ui aL e~tlJ uiñu, -" n -

dijeron, pues no qucreUlos qll~ la. fl.lrorill~ tic lIa.ma.r 0.111 al ... ecino don C. i.i.r1oil Brauizan, Pt.:J'"o­ ('stos homhr('s, lleglle hasta. haeerlt.: presenCiar lo. 1111. ~p. respeto y de I\l~una illt1nenda, Iluifln con­ cjecueiou de bU llaure. l'urrHí 1'f)~1l15 1II0Ull'l1tO!l tlcsPUC:l al Ha.uHulo qttu y acercándose al l:omll/lllallll.l l\IolltcnegI'o le se]o hacia. bidarl!ll prtis~ut,o que lIehj¡\ ha~crlo:saJir.. CURl1llo J:ranizall, 'lile de tlltlo l~blal.a i¡;norall- . A nm~uno de ollos so le baIna. c~uzado.la I/lea,_ tl', ¡mpo de lo ~IIW be tratl\~'a, se sintió _profuuda.­ nI rCDlotamentl', de que Itquella. crIatura mOcen- Ulente ('Ol\lllorl(10 y horrom'!atlo. t.e y bella, pudiera. formal' parte de los a:sesi- . Como t,ollo;; l~s vecinos dl' San Xicolá.s nada. sa­ llados, ... . ~1~, Y bU IlUprOSlon (Ira. mayor, puesto que la. 110- El comandante l\'Iontencgro, afhJlllo flor ,su do- tIcIa lo tomaha l.1e ROl'Jlrcsa. lor acerho, abrazó á su bijo con un cariño impo- ---Bsto~ asesinatos no se pueden permitir! (!~_ llente, diciéndole fuera á. esperarlo al hotel, don- clamó y SI Uayclo no tedo, yo levantaré á l:;an ~i- ele él lo iria á buscar. co]ál::i en m a:, 1\. -No voy, dijo el niño, porque te van á matar -Será inútil, rcplir6 nIela, puesto 'lue Itoalla ¡yo quiero morirá tu lado. está enl'~vou con todo su ejército. Todos quisieron pen;uadirlo 1.10 que la senten- Lo único que I;on esto lograda, seria, r:¡in su.h"ttr cía. no tenia nada que ver con Montenegro, quien nos, aumentar el número de las víctimas, se quedaba. a.llí solo por acompañarlos. -Pero esto es cobal'de! es un asesinato en FJ niño les ionrió mansamente y con ~una..en- masa. tereza de ánimo asombrosa en su corta edad, re- - y que le hemos Je bacOi'! pitió sus palabras aJia.diendo. Lo que lU'gO ahora, es salva,rá. ese niílO ino- -He dicho que quiero mOl'u: al lado de mi cen~e, que ha venido á aCOulpaiar á. }Iontencgl'o, padre. . enVIado por su el::iposa. . No se podio. (;onsentir aquello, . Sumuertc seria ¡,lgo de horrible que es preci:so El coronel Videla. manüestó entoncas qUtl era evitar. pl'eciso sacarlo á la fuerza y así se acordó. -Usteu, amigo HUO, no dé, paso alguno por Jo:ntre este y su J08gra~iado }ladre toma.ron al l:Ialvarnos, agregó Villela, por 'lue este asesina.to niño y ~uplicaron al oficial de guardia que lo en- en mal.ia lo han de conSWDtU' á. posar de todo, v cerrase siquiera. en algun lHu'aje, pa.ra aholTar ya. iligo á. usteu, seria aumentar el número de lis este inútil y (loble martirio moral. \ictillla.~, sin llenar el objeto. }J oticiaJ l.1e ~uarilia manifestó que nada. POllia. l'ero asesinen á los hombres y no á los niúol! llacer por sí, w pernlitir que a.quel niño saliera mocl'ntcs, que l1ingwla participacion pueden te- de allí. Der en nuestras ·acciones, Pero que a(ná riesgo de eSPQnerse á un cas- ~l niilO l\Iontcnegro no es ni prisionero. ui bi­ tigo, iba á. pedir instrucciones al coronel Ra.- qUIera tomado e.n la ciuuad capltuladll. velo. . . Branizan salió 1.12 allí profunl.1amente conmovido Cuál no seria la. sorpresa yel espanto de a.que- y en union l.1e las personas mas respetables á in- 1101 desdichados, al conocer la . respuesta. que hi\- tluyentes de San ~ico}¡ís, fueron á ve_IÍ. Ravelo. bia dado Ravelo, á saber: TOllos ellos era.n rosistas reconocidos, que Jo Que no podia. ¡alir de alU el niÍLo MontcDegro habian ayudauo (lurante su perDlanenciaalli y que porque forma.ba '3D la lista. de los condenadosi no podian Sflr acusados de 'I;omplicidad. Aquello era el colmo de la' ferocidad! Rayelo,con harto sentimiento les manifestó Parecía que Rosa.s habia -querido superar al quenada podia hacer en su obsequio, almque él mismo Quiroga, y á cuanto bandido se ha.bia he- mismo era. el primero en reconocer ]0 injusto y cho conocer hasta entonces por algun rasgo de terrible de aquella sentencia. crueldad. --Pero ese es un niño inocente 'lile no puello El comandante MOllteDegro sintió que todo estar corilprcqdido en la lista! esclamaron a.quellos su valor lo abando~ba, se abrazó de sn bijo y sin- hombres, nrnlEllUente l.1eddidos á salir tri un­ tió sus tostadas y varoniles mejillas. llob:rasadas fantes. por dos lágrimas de fuego. Xosotros y tOllo San Xicolás nos opondremos. ---Ese miserable debe estar loco! grit6.--HarlÍn mal, pOl'que á. pesar de todo se cumplí• Pero esta. monstruosil1all no pueqe oonsentils-e, rá In. terrible sentencia, 'para lo ~ual !engo órden antes que me despedazan!' Uf' proceder contra el JIllSIUO vecmda.rlO, -~o to .aflijas. padre mio, repuso el 'niño, con Y en su deSCal"go, Ravelo mostró ú. aquellos su acento lDfantll ca.da. vez IDas melodioso, homhres indi~nados la lista d onde tig-llI'~,bt\ tl] co- AllfmoriremosjWltitos y 110 ttllllh'é yo qUt) \"01- tlHUllbnt{: :\Ioilll'Uegro y ~I.l hijo:r alluel}>á.rraJ'u ter t casa á. llevar la. truto noticia. tel'Tible " lIO le adlnite otra. 1;0nte¡,t¡u;ioD que el .-Pero el men~ster hacer algol e:iclam¡) el ge- aVÍiw ue Imbel' cumplido I:on ella, bajo IleDa dti n~roao coronel Vulela. $er usted ~¡tn'iticado con i~uall)l1:ciJ1i~cioJl". No s.' p~ede CQllstutÍr en ~:;ta iniquidad! Toua. illú~te!1cÍl1 venía á t;t'r iuútil. }lar;¡, meJor 10ara1' ~I noble Gbjeto, hicieron ,.\;,i lo CtlmprJllldió la. ('Offilitio" rrelihlilla. por ~13 --

Branizan y se retiró prOflUIUallH:'lltc indiguaua, y¡ "Pell!\ de }¡~ -"ida al 'iue IlOl/llll'e á cualquiera. arrepentidos sus miembros de haber formado. por ue 108 l:eos. . . .. un momento enlas tilas de los partidarios tic se- Al fludo de laH cajas y las muslcas, tOllo el mejanto lUó~~tnlO. yccilltlarlo ~alió LÍ. la ealle, mostrando la. mayor --Pobre Jjueno~ Aires~ es¡;lamó Braniz8u Ulla COlIsternaClOn al ~aber de lo 'lHe se trataba. \'('7. que c~tuvo en la calle. -' Los prisioúoros entraron al cua~lro con la ma· \ sllJO. . . El desgraciado MOlltcllcgro ,estaba completa-! --NI, slqmcra som?" }J1'ISIOneros ,le guerra, mente rendido al dolor. i esrlamo d coronel \ ldela, pues nos hemos en· Tenia entre sus manos la hermosa caheza de sn'tregado hajo la fé de lIn tratado hecho con to­ tierno Y cariñoso hijo, quo tuhria de lágrimas y da formalidad! de besos. . y paro. m quisi.eron hacerse oir todavill, les (leooás compa.iieros no pensaban siqu.iera en pero el pueblo solo VIÓ sus adl)m8Jles. dignofi la propia desventura. Y reposados. Segun el procello criminal seguido al b8JlIli- Lo~ que mas profunJ~ente comll0v,ia hasta á. do Juan Man.uel Rosas, que tenemos á la vista, los nusmos soldados que Iban á hacer fuego, era. "el diez y seis c).e Octubre de 1831, á las cuatro el cuadro formado porel comandante ~Iontene­ de la tarde, salieron en direccion al patíbulo los gro abrazado á su hijo. condenatlos, asistidos por dos sacerQales". El niílO estaha sombriamente sereno, y empa- Se nos ohidaba un incidente digno. de ser lidecido por las heridas que se habia inferido po· conocido. co antes. . Cuando el comandante Montenegro tenia abra- El ,-aliente militar lloraba de LUla manera si­ zadala callCza de su hijo, este pennanecilt con la lencÍosa y conmovedora, tratando de cubrir con vista. fija en el suelo, que solo levlOltaha para el suyo, el cuerpo del hijo querido. irradiar sobre el rostro de su desgraciado padre, Déjame, padre mio, se le oyó decir en un rno- 1000 el amor que afluia á su mirada. mento que cesaron las mÚ8icas-mi pecho es tan Estando en esta posiciono el niüo ,·ió en el bueno como cualquier otro. suelu lUlO de aquellos antiguos clavo!!, largos y neja que lile peguen en él, porque así morir" fon cuatro filos hastante pronunciado;>. mas pronto y concluiré de penar. , El ni.iio lq levantó con presteza y y enterrán- La parte de concurrencia que oyó estas tierRM dolo con gran coraje en su pecho pOI" dos veces, palahras , se conmovió hasta el llanto. esclamó: A pesar del terrible halll\o que se habia leido, en -Xo les he de dal' el gusto de ver morÍr á los estremos del cuadro empezaron á. oírse VOCC::I mi padre, bárharos, ni ·de matarme á nút de protesta... Cuando su padre le arrancó el clavo, m el ni- -Esto es Ull nÍlllcn! decian algullos alelltadoa ilO se habia inferido las dos heri,las, de las Ijlle por las pocas fllcl'lo:as que formaban el cuadro. brotaba poca sangre, corno sucede e11 totl¡;,s -Es un asesinato! repetian otros, qu.o man· las caUliadas por armas de ¡¡([uella forma. chará el partido tla una manera indeleble. De modo I!Ue cuando el niÍlo fué sacado pa- -Podre nilio~ !a ser condUCIdo al banquillo, yn, llevaha en su --Poure niüo! se oia decir por todas part8i. mteresante. rostro las huellas de la. muerte, que El coronel l{avelo comprtlndió que demora!" muchos atribuyeron á temor. Jila~ la cjecITl';On era. (,¡¡pDnerSe á un sério poli- El coronel l~avclo habia fOl'madu HU cuadro g-ro y malHlú ortknar al oticial que mandsba el de llocas y cll'Jidas ll'oJla~,' tillO él lIÚ~1ll0 man- pelol01l, quo ctull}llif'l'a con su deber. t1all.a. ~OI1Ó entollcosell'uido liceo y ptlcuJiar "do lalll bu lUl) cu"'ru ángulos como C~ ue llrli.ctira 1-'11 armas al ::ler mout;tua!;, y á esto siguió el nwr- 1::'>0:; . tl'l~Jea casos, 6e haCl<1 leer un lJaudo· mullo de los Gat:cl'dotcs que acompañaban a l•• rC111111l.10 por Rm;a;5 a Rarelo y f.'tinito d(' sn Il'enteneiad('l~.. . pUilO ~r letra.' \ Ln c!tremerimi'mto n€l'vín$o rrcorrió .1 cuer- 1':1>8 hanao solo d@CI\\ 10 ¡;IZlli~t~: !ll) dA a'luelhu I1'JQj,',; víMimu, ~ I'ri~rae -!H .- que el gcutll'al Rosas arrojl\lla. al l'o:sh'o del par- ;,;,~ paUt'I', y Ijobr~ su Jlcchu noblu iuclinó la ,iuve. tido unitario y dela. sol'iedad argentina, mI calleZI\, de!:ltrozada I'ot' las balas, A una señal del oficial. los soldados bajaron Horrorizado Ravelo con ¡\flUel crimen infame las armas y muchos lle ellos celTaron los IÍ., qu~ s~ bahia llrest~o Lajo amenaza de la. vida; ojos. sm slqwer~ hacer de8til~r las tropas por llelante Era la ruanifesta.c:·ioJl mUlla de la repugnancia de los c~davcres, se retIró con ellas ~ los cnar- que aquel crimen les causabl\. teles, dejando los eU,crpos de las victunas allan- '\ d 1\.¡ . . d donados, }. coman al~t~ :", ontenegl'O ~e .. t:strelllec~o e Así pllrmal~eciel'Oll ha8h\ eloh'O tlia en 'iue nyevo t1~ una manua I~as pOlI?10ISa, una espre- fueron conducIdos en un carro al cementerio. slon. ~e Illmcnsa ag"o~la ,~rllzo su sembl~nte ~ Allí se les arrojó á la fos¡t comun, sin silluiera !oly:¡o á es~re~h~r á. Sil hIJO de uua manela lllalS ('ubrirlos lo suficiente para lihrarlos de los ani­ Intima, ~llas tlema, . males carnívoros que en el osario sacialmn!:iu Puecla que con sus brazos creia ofrecerle un hambre, escu?o ~ontra la llluert,e. , . La potllacion de San ~icolás quedó aterra.da El pnmcr peloton hIZO fuego ~. avanzo, IDllle- con aquellas matanzas sin ejemplo. watamente el segundo, que descargó tamInen sus La muerte de aquel niño, sohre todo, la habia armas, conmovido tIe una. manera il141ecihlc, El coronel Villela y el comandante l'ampero, .En fiué nombre se hal,ían t'ometído? cayeron para no levantarse JIl$S. Con qué protesto se hahiaullevado ~í cal.o? ¡labian recibido varios ba.lazos en la cabeza, Cuál era la disculpa que podia darso ála mner- l'arllOnell, Altamira V MonteilOgro, cayeron tillll te d~ aquel niño inoce~te? , bien pero volvieron á "levantal"Se tambaleando y ~Illg~na. ma~ que la tCI'otlllal~ de u~ hOll~bre sin poder ponerse de pié. '" que,l~abla ql~endo hacerse superIor los a l,amltdos Estaban heridos en la caja del cuerpo, mas mf~mes. . Cnens Cuello vel niño Montenegro si"'uieron Los nusmos f,~erales que. antes cr~lan en Ro: d 'é" o Isas como end umco remeclto que pOllta oponerse e pi , . , : ála anarquÍ:l, se sintieron indign ados, Las Jos descargas ~()I) habl8JI respetado, slDl y aquel e!'píl'itu mise't'ahle lllÚSO acallar la con- causarles la menor h~rlda. ., ciencia públÍl:a y tal vez la propia, COll :m eterna Montenegro agoruz~do, ~as por el mart~~~ y jesuítica fra,se: mora:l. que por las h~r~das, estlró una mano ,haCIa -Es precísovengar el asesinato de DOl'l'ego, su hiJO, que se prC::lpItó sobre él y lo abrazo be-. euyos manes claman sang-l'e, sándolo en la lloca. I Buenos Aires recibió la Botida de aquellas ma- Los sohlados entonces, á la voz del oficial, em- ta.nzas, como una. puñalada asestada al medio del pezaroll á. hacer un fuego graneado, tan pausauo: corazon, que para concluir con la matanza, necesitaron rnasj' Y aún le faltaba mucho mas que ver todavia. de cinco minllt·os. 1 Aquello no era sinó un ensayo (le las ferocida- El niño Montenegro·cayó sobre el cuerpo (b des que habian de seguir,

Las n!levas victimas llama~on sobre sí la ate~ I Cuando la fatiga lle la marcha lÍ. llié l~s hacia. de­ cion de la aterrada poblaclOn de Buenos Al- tenerse, ó echarse al suelo, eran oblIgados á le­ res.· . . Ivantarse, á palos, ó á fuerza ue pequeñas he- Estas eran los sargentos mayores Cuadra y.ridas, Tarragon~, que conducidos por el coro~el Her-¡ y estos, como 10::1 otros. no eran. ni 8iquiera naudez, celebre edecan de Rosas, de q~en noslPriSibneros de guerra, sinó simples capitulados h~mos ocupado en nuest~a obra Juan Cuello, de- en Córdoba bajo ptome~ de respeto á. la villa é blau ser eJecutados tamblen despues de haber su- intereses ' . frido los tormentos mas espantosos. " ,. Con estos se habia ensañado mas la, federacion ,El coronellIel'Jl~dez (i lIC haIlla ca.lado el (!IlPl­ infiriéndoles las torturas mas ¡ amargas, pues rltll de Hosas y que~lendo hacerse como .otros con ellos se habia recurrido desde la pequeúa he' muchos ~l dQl& prect.So de aquel h?IUbl'e en) o po­ rida hecha con la. punta. l1.el sable, ha.sta. el ham- del' crecI~ por momentos, se 1~a.~Ja encargado !le bre, la sed y el cansancio. la concluslOu d,aqucllas dos vlctulla:s, ·- !I;, -

y por halagar (~l amor propio d.f',llJtl!/'oli. I(',,! - r c'lI:il ,'). ('SI' fl~lllerlio? preglwtó Iler- proporcionaba todo género lle nlorhÍlCal·I01Hl~,. 1I:u~;lez, , A;illpI viaje al pn,tílmlo. ]lnl'a los ma>'ores ~ lIa- f,s Ilreclso rlU~ lo digas'para saber si es bue- dl'a y Tarr~olla. fUI> IUUl \'('rtlaller~ . Vla-Cr!lr~s. no Ó n,ul.lo. . . .. , En 10do t'¡ camino uose les perlmbó subir a ca- ~-El rem~dlO conSiste, ~hJo el soldado, dámlose hallo lIU solo minuto, y lIU otic.lal que 1'01' ~o.m- la 11llportancl3 de I1n mMlco que revelara una pa~ioll )¡,s ofl"p('iú el :;lI~'O, fuco ('asti~ado, ohll:.!':m-l'el:l'\¡t sal\'1«101'a. closele tambi"11 á mnrl'h:1.r :i pitó. , J:1 renH'llio 1'0l1s,iste en 'rollenr al empacado de El cansancio hahia postl':111o por' ('omplf'to al lIua huen.'\ l'antida,d de leila SBea, y ponerle ál08 llla~'OI' l'uadl'3, I\ntelo> ele llegar lÍ. Sn,u 'sicolás. pié s desnudos, un buen fuego de urasas. :'IllIcho mas MhillJue Sil rompañero ya estenun- En seguida se le pega fuego á la leiiita y se rano, interrumpió el Es un remedio que usa mucho el genel'8.1 Qui- oficial á. cuya guardia venia. roga. cuando un cristiano se empaca. Tod~ se ha. de hacer" su tiempo, sin que usted Hasta áhora. no le ha salido 1m\!. se apure, porque 'nadie nos corre. - %-

Si,,';\ lit tlll\whn nomás, si no rlnit'l'f' (Jllt' \'oha- -lmlll':(,ile¡,! 110 !l(' faligut'll inútilm~ntP, pnes mos á thu'le otro huw:tl.o. . por mas !ll!e 'rllf~ golpéen, con esto no \'án á bor- E~tll. salidl\ de tono. volvió á pro\"OC'llr la f¡ila rar ue 1111 hoca la Il¡{radable sen!'lltcion del dI' la ~oldadesca. Ug'l1t1.• --Un esfuerzo mas, compailero, le grit«'i entón- . y despues de hauer ilufrillo tolla clase de gol­ ees Tarrago~a, para Il~gru' pronto al lugar de pes r v~'jámen~s, filé qlle dirijió 1& palahra á su lluestro destmo, qm' sera el de nuestro dPscnn. SO¡(.~OJ. npallero, RlIllllanuol", para que tu'liera ánimo cterno! I ' única manera de llegar mas ]lronto al lugar dej A turbar esa paz de la tnmna no alcanztl nadIe- descanso eterno. pur lilas ROBas que seal ~ Pero en vano ('ltadra f]uillO segtúr aquel saln- ·EI mayor Ta.rragona:era nnanat.l1raleza. rohlls- dahle consejo. ta y soberbio carácter, qne no hablan podltlo 110- Por mas esfuerzos (jlt!:' hacia y golpes que re­ hlegar las peum"!as lle aquella llH~.rcba: dhipl'll., yA. sus piel'llas !:W npgahan absolutamente Sabia. que iba á !Ilorír ~ no ~]Uerla de.J~r. C?llOCer á describir un paso. á. SUB Yerdllgos l~ Intensldí'.~l de sus su1ru.1l1entos. Fné entonces pue Ilernanrlez lo hizo cargar en ('on una son~lsa .d~ 1;lroftmdo l~eSpre~H? y un ancas, convencido que aquella naturaleza habia ndewan de lá.stuua Inllllltabl~, hallJfl. re(~I\ndo los dado ya cuanto podia. palos que muchas veces le dier~n por el placer de De otra manera habria muerto y no se hulJieran oirlo quejarse, ólPor hacerle gntarcim Rosas. podido cumplir las terminantes Óruenes del bri- -Mientra.s yo tenga la cabeza soure los hom- gaclier Rosas. bros, tl~cia desdeñosamente, no II'\Y. palo ~apaz y es~as~órdenes eSJlresaban que los dos mayo. (~e ohligarme á. h~lcer 1,0 q~le yo no (]lUer~, m cas- re~ delnan sel' conducidos al Salto, y ejecnta(los tlgo que me obligue a gntar lo que no s~ento. alh, por ser al¡uella poh'arion \lila. de las mas re- -~o grito viva Rosas, porque lo consIdero uu beldes al partido federal. bandido ma.s miserable que ustedes ,mi~~08. En los altos quc, hacia la tropa del coronel Aquí cesaban los palos, pero prInclplahan las lIernantlez,los presos eran privados de todo des- bofetadas, los insultos mas groseros y las tiradas cn.nso. . de barha, al estremo de no ilejarlf' 1\IUt hehril. de Tarragona solia llormirse de pié, porque no se cabello. . . le permitia sentarse y entonces era despertado Ta.rragona suf~la todo es~o SIn apagar ~le sus con un par de rebencazos ó cosa parecida, que 1ábios a.quellairrltante sonl'lsa de desprrclO eon recihia alpa.recei· complacido, lo que irritahn ú. que los anonadaba. .' sus veruugos de una manerfi. tremenda. Viendo que con lus golpes nada pOllna.ll, recu~- ('nando los milicos churrasqueaban, algunos, fieron á los tor1'lent08 del hambre y de la ¡sNI, sm por divertirse, les arrojahan zoquetes dé carne pGder doblegar a.quella naturaleza de bronce. revolcados en la. ceniza. -Prueben otros medios, les decía, ¡lIIes estos Creian 'LjUe esta injuria debia ser intolerable, plÚ'ami son inútiles. sobre todo paro, el altivo Tan.agolla, pero se en- Aguantaré elhambre todo lo queme Sea posible. contrallan con que esterecihia los zoquetes muy Cuando ya no pueda mas, entonces comer¡'~ un complacido y los devoralJiI. agraueciéndoles el pedazo dei que esté mas cerca de mi. '. obsequio con Sil sonrisa mas despreciatí\'a. La sed, sin emhelrgO, habia llegado ~í, hacérsele -,A este pillo no Ila)' con qué darle! decian los insoportable. . " . mili,cos.. ,.' Ya su fisonomía hahla empezado a atlqutnr lUla Es lá.stlma que no sea de nuestro partido~ espresion terrible, y la p'a~abl'a,se hacia. dificulto- Si fuéram(js á dar los detalles minuciosos de 53 en su boca seca. _ este martirio, nuestro lihro seria interminable. El día del incidente del fuego, con su clesventu- X ecesitariamos un volúmen entero para cada una rado compañero, Tarragona aprovechó una opor- ue las infinitas \ictiUlas que vamos lÍ. presentar :lla. tunidad que le depar~ la suerte. ('gcena. Todos estaban distraid'os con los tnrmentos 'lile Cuadra y Tarragona, en su trayecto del RQ- aplicaban á Cuadra, hasta el ptmto de halHH'Jo 01- 3M'io al Salto, sufrieron lo que no es creible. vidado por completo. . . ('uando llegaron á este punto, el coro~eI lIer- Tarragona. entonces se precipitó sobre una pa- nalluez mandó preparar touo lo necesarIO para ba llena de agua cristalina que hahia cerca de é,l, que la ejecnciou fuera mas sol&lml¡l. y se puso ~ bebel: ~on un deleitein¡}e~ihle<_M ('?n 10T~ fn~ilallrientos .tIlle hahi!"n teni,lo lTugar Cuando lo apercllneron, no solo )¡abul. saemao en San ~Icolas, todas las .poblaclOlIps tI,·1 ~orte su sed por completo, sínó que tomal'a ya por el estaua~ ater~all::t~... . placer de sentir el contacto uel agua. La trISte hist~f1a del DlIlO M01~tel~egro! habul. En el acto le arrancaron la paha de 11Is ma- h"';mtatlo nn gnto de horror y de mUlgnaclOll en nosy 10 golpearon de unamaner~ terrihle. . torl?S lo,s' habitantes de la Rep~blil'a., . " . Pero Tarragona, en vez,de (lne.Jur¡;e, les dl'elil. ~olo a aqnellosJederales sel"\"ll('~, tj kllll,ln ... en- trant!uiJ¡\lllpntp: - ¡li,lo al nobi':'l"llo w concienl'ia por un 1Il,'n,lm~0 - 97- del prrsupuesto, se les oyeron" palabras de Itpro· . El cuerpo está. caido, postrado, pues moti" .. hacion. ., tiene para ello, pero el espiritu está mas fuerte Era la consigna que de Pavon habian reCibido que nunca. y que trataban de cumplir aJpié de la letra. No tenga recelo alguno de qu.e yo haga un -Está. venO'ando á Dorrego! dijeron-muy bien mal papel. hecho! '" La ejecucion se habia, puell, demorado cinco Ojalá. no dejará un unitario en todo lo Ilescu- dias, por las causa~ que hemos espuesto. lllerto de la. tierra! Al cuarto las víctimas fueron notIficadas de que . Así Hernandez no tuvo en la. plaza. del Salto la á las 24 horas seriaD pasados por las armas. concurrencia. que esperaba para que presencia- -Bravo! gritó Tarragona, así que concluyeron ra tamaña hazaña. " de hacerles la terrible notificacion. Era tal el estado en que se hallaba el mayor Cua- Señores bandidos, añadi9 sin cambiar de tono: lIra que tuvo que suspenderse la ejecucionporque Hoy se me antoja hacer cuatro comidas. tle ~tro modo huhiera sido fusilado un cadáver. Si no me las dán, les.garanto por mi ánimo y por temor de que sucediera lo mismo con que mañana amanezco muerto y si se descuida~ T:arragona, se hicieron s!;Js,Ilender los malos tr~- hasta enterrado. .' . tos y se mandó atendérseles, en cuanto al ah- El buen humor halntual y la fortaleza de es­ mento. piritu, habia valido á Tarragona la simpatía de -Se nos quiere matar gordos, esclamó Tarra- aquellos oficiales mas decentes que con él se ha­ gona que no perdia su lmen humor y que al través llaban en contacto. de la buena. comida, comprendió de lo que se tra- Sentian su muerte y apreciaban la. injusticia. que taba. con ellos se cometía, lo que les habia ahorrado De torIos ¡modos siempre llevaremos eso ads- muchas pequeñas miserias. lantallo para el otro mundo.· Al dio. siguiente y desde la diana, se hallaba -Señores bandidos! yo quiero hacer tres co- formado en la plaza del Salto, un cuadró de in­ midas por dia, sinó me dejo morir de haIl;lbre, pa- fanteria, reforzado con un escuadron (le caba- ra no darles el gusto de que me fusilen. . lleria. Algtmos desalmados de aquellos milicos SE; reían Los paisanos del Salto, patriotas y unitarios casi furiosamente de este espontáneo buen humor. todos, se hallaban ausentes de la plaza en su Otros se admiraban de aquel valor sereno y mayor parte. clU'ácter inquebrantable, que no se doblegaba Habian montado á caballo la tarde anterior, y ante nada. . -. se h~b}an. ido á otros pagos, para no presenciar - Veremos SI le duran hasta el fin esas postu- la eJeCUClOn de los dos niños. ras! esclamaba Hernandez. De entre los mismos federalell, la mitad se que;. Estos botar)lotea, por lo general, llegan todos daron en sus casas, de modo que la 'concurren- al banquillo mas muertos que vivos. cia, que Hernandez suponia fuera numerosa, se Ya veremos en que pára. todo este buen humor. componia de muy poca gente. El mayor Cuadra, con el descanso y el buen Curiosoll, estranjeros y gente perdida, aumen- nlimento, se habia repuesto.algo. . tada con los presos que, para hacer nmnero ·fue- Ya se ponía de pié, aunque no podiadarun paso. ron puestos en libertad. . ~arragona.10 animaba siempre con _su palabra Cuadra y Tarragona habian sido sacados de la JOVlaty enérgIC~. . . _ improvisáda capilla y llevados hasta el cuadro - YI.' estamos en la ultima posta, companero, en compañia de un frailecito que se prestó á llar~ le de cIa. . 1 d I 1es 1os últ'Imos coneue Jos ·d e 1are li' glOn. GUIU' d e e 1 á rumo que e que e, para azotar P' ...•. ron él el rostro de estos millerahles. - or mI ~? se moleste ~go DUO, le dijo Tar- EstoMo son militares que vienen á cumplir ragona, haclendole un carl~o sobre el hombro. la órden ineludible de su superior por bárbara Lo que yo tengo que demr en esta ho~ supre­ que sea. ' ma., se reduce á muy poco y lo puede Olr cual- Son asesinos cobardQs, cómplices del gefe de qUIera. . . . la ga,,;lla, que para quedar hien con él ponen En mi conCienCIa ~o har una mancha ni una de su parte todas las iniquidades posibles. sombra. que pueda Impedirme morir tranquilo: . Las torturas que hemos pasado, no han po- .N!l he hecho m~l á ~adie en todo el curso de dldo s.er ordenadas porque no habia para hacer DU !Ida y muero.sll:'-ó~IOS .. lo obJeto alguno. N o detE!"sio n.1 .slqwera á los asesinos que vio- .Guardemos, pues, el ánimo, camarada, para lando una l~y dlVIna ~e arrebatan la vida. afrentar. desd~ el banquillo á eS08 miserables. . Para (~ec~r esto á, DIOS, creo que no se necesita • ~I ámm~ de Cuadra que habia decaido en estos mter~lediar¡Q. ultlmos mas, volvió ~í levantarse con la actitutl Yo mismo se lo dirt'i si es cierto que compare- de Sl1 ~ompañero. . .. cemos á su presencia á dar cuenta del l'mplll,o -~o crea que me he rendido, le diJO. de nuestra vida. -91- V", pue~, pa.dre , bU eomp&.ñoro que tal ve'2 Hemos tomado lo.s armas cOlltra,la tederaelon- heccsite. la Illertc nos fué adversa "1 eapitulamoB. Con t3.l1ta dulzllr& y mansedumbre fu~roD di- Sin embargo, esa capituJacion no se respf'!ta y chss eltas palabras, que el sacerdote se dió Vl1e l~ se n08 manda fusilar, porque aú es la, \'alantad ta bácia Cuadra, y lo invitó á ponerse bien COII Je Juan Manuel Rosa,s. Dios. .,. .. Se ordenó 1\ To.rra.gona. baj~ del hl\Jlqni- -N~nca estuve. mal con él, replicó el Jóven.! qur 110, pero este elominó al oficial con un fl,rWman hab~a OIUO las, últim~s palabtas de BU co~pallero. lleno ele imperio y agregó: .8ID embargo, quisJCra que usted cambIara con- _ Yu hablé con el público-ahora con d O 1 1 b d 1 nste O~. ID1g~ a gunas pa a ras e cons~e o. y se dirijió á Hemandez. Como pecador no las neceSlto, pero como hom- - _ . I . , bre me bacen falta. -:Sen.~re8 l)andülos. grlt~ c~n voz. sanora, con- Yo voy á dejar por. aqüí en el mundo, una :no.~'l~a hJerame~te f,or la IDdlgnaclOn. . madre y una hermana. que no tienen IDas biene& Senores ban~ldoT8. van ustedes {i. cumIJl1l' \lna. do fortuna que mis manos. lórden del ase.lill1O ... ~lan ,Manuel Rosas, l\fi muerte las va á sumir en la miseria. y esto Yo los elScuP.o en la ea!a, ~omo prueba. del pro­ me quita todo el ánimo que necesito en mi último fundo des}?reclo que. me IDp!ran. momento. I y al declJ' esto unIó la. aCClon á l~ palabr~ El frailecito, en su tosca. inteligencia y como Fuego sobre ellos! gntó Hernandez, terwendo Dios lo ayudó, trató de consolar aquel espfritul qu~ T~rr8;gon.a hablara ~a8. iitribulado, comprometiendo llevar á aquellol:i dos l á mdic&Clon del OfiCIal los eoldados prepa- aéres queridos su última palabra. raron las armas. . Era lo mas que podia hacer y lo único á. que Tarl'ago~a se sentó y ten~ó á. su compafiero Cuadra aspiraba. la mano, qUien la estrechó lIllrándolo dulcemente. \" as! acompaiíados de aquel' frailecito. ambos El frailecitnempezó á. murmw'ar su plegaria, y marcharon al banquillo con 1':\sO firme y ánimol:las arm!,s se apuntaro~.., .. sereno. -Senores cobarlas. gntó entonces Tarragona, Ca.da cual se sentó en el que le estaba destina- Y esclal'o8 de un asesino-llJllí. arriha. nos verC1. do y despues de haber rechazaclo cortesmente la 'iDOS 1~8 caras-veremos entonce!t cUflles son 101 venda que se. les ofreció, hundieron la mirada. que tiemblan! , en la concurrencia y buscaron ep seguida á Her- Estas fueron sus última!) palabras: and ez, gete del asellirrato, puesto que ninguna. .. Una dellcargq, cerrada. les ~ortó la palilbr& y 1, ley, ni consejo de gop.rra mandaba aquellas muer- Vida. , tes, violft.Ddo hasta. 10.8 simples leyes de la hu- La tropa se retiró fuertemente impresi01lllda. manidad. Parecía que las palabras de Tarragonaltll hu- -"Pena de la ,'ida ni que tan 8010 nombre d. bieran caldo como una maldicion. 109 reol", se gritó en las esquinas del cuadro, y Los concurrentel á la plaza quedaron mucho las cajas tocaron su fúnebre redoble. tiempo con la vista fija en aquellos dos cad'nrea En un movimiento rápido, Tarragona se trepó sonrientes, y sin atinar á move1'ge. sobre el banquillo y tendió sus manos como Pidien-I Al otro dia, no solo en el Salto sinó en todos do silencio. . los pueblos del Sorte, seconocian las palabras La multitud. enmudeció y el mismo tambor de-lIlue en el banquillo dijo el mayor Tarragona, pa­ jó de tocar, impuesto por a.quel ademan fiolem- labras que llegaron á Rosas, costando á Heman- ne y dominante. dez una ronca soberana. - Señores de la plaza! gritó. -Al primero que permita á un reo de muerte No somos reos de ningun -delito, somos dosjha.blar con el público, le dijo, lo fu~i1o en seguí- militares puros y honra.dos. da sobre el mismo banquillo.

El preDl.io del . crimen

~To~os eatoB fusilamie.tos bárh~ro8, cje~utadoB raron avergonzadas, DO queriendo participar de pufi~ientelibertad ~lal' al bri~~~l!liel' geuer¡~l don Juan, Manuel ..da para hacerlo aSl, emigran a al estraDJero, no vol- Rosas, en plena propl\3dad para él, sus hiJOS ñéndose á o,cupa: de .su ~atria, ma~ que para la- y sucesorcs, sesenta legU!:s cuadx:ad!ls, en ter­ mentar la tmito sltuaclon ji que habla llegado. reno!! de pastoreo de propIedad publica, en 101:; Rosas entre mnto observaba desde Pavon el, puntos de la..CUlDllaña. do es'ta. Provincia que ~I efecto que ~ausahan las qu~ él llamaba sns me. elijiel'a. di~B ené~gJcai!J para prodUCIr el órden inaltera· COIDO se vEl, el gran Restaurador de la.s leyeE, ble del p8.18. no descuidaba la restauracion de sus bolsillos. ~ ello!!! ee les !ie~ l!\ Cll.l,lI¡a.I'0r el jMz crpihle ~nt;lrgia pidiero"n d CI';''t;1;! d.} lll'! f!\cult ... - - 100- del estrao.rdi.narias, de que tan sangriento uso se podido levantar la. enorme fortuna. que amasaron babia hecho. con cueros ajenos. Sus Ministros Garcia y Anchoren" le indicaron Don Leon veía tOllo esto, com'Prendia el alJismo renunciara. álas estraordinarias, per" tuvieron que á. que rodaba su hijo, pero no se atrevia á hacer. renunciar sus carteras y retirarse tildados de 10- le ninguwt observacion. mos negros sospechosos. Sahia lo rencoroso y perverso que se habia. Las resistencias (Iue entre los mismoSl federa- hecho este, ytemia que rompiera con ellos. les levantaron los hechos bárbaros que hemos Doña Agustina por su parte, solia esela. narrado, empezaron á asomar en la prensa. mar : El Cometa y El Nuevo Tribuno, empezaron á -Le han dado las estraordinarias, como yo con hacerle aJgunas críticas, pero pronto tuvieron que mis estancias. enmudecer. Ya verán la buena cuenta que vá dar de la ha.- . d' Por una órden terminante mandó suspender los cle~ ~ . .. . . dos dianos, prohibiéndoles su reaparicion bajo ~ompletamente fauuhanzado con el c~men y ninglm otro nombre ni en ninguna otra forma. la ln;tpUrez~, se rodeaba de gente mercenana, que Con esto la gente empezó á convencerse de que podla s8r'Vll'l~ par.a todo lo mal~. . se les habia echado encima. un poder del que no Pancho. el nato era 11:Da.. autondad te~hle en se libranan á dos tirones. la campana, p~rque tema facultad para SI y ante Asi, aquel hombre que habia subido al gobier- si, como ArbolIto y muchos otros.· . no como una garantia de paz y con las simpatias de Consecuente con no eonfia! á n~dle sus .secre· todos, empezaba á hacerse odioso y terrible. tos, e~a ~or el momen~o . dona ~ncarn~clOn la. Rosas, no sabiendo hacerlo de otro modo, por de~osltarIa de sus mas.mtlIJ;l.Os. que no tenia para ello ningtma ))reparacion, Era esta su .secretano prIvado ~omo mas tarde habia tomado ála provincia como una gran estan- lo fué ManuelI~a, personas de qUIenes elStaba se· cia, y como tal queria. administrarla y gober- guro no lo hablan de vender. narla. . Desconfiado como todo criminal, no dejaba la. . menor constancia de sus mas graves órdenes. Para ~l el.pue~lo era l,? Il~S~O .qu~ el ganado, Las daba verbales y así mismo, á los corifeo:> del que p0d!a disponer sm. h~.ltaclOn~alguna, cue- en quienes mayor'confianza t~nia. reando lo. mservlble á su JlUCIO y reservando el Los unitarios fueron perseguidos de todas llar­ resto. .' . tes y de todos modos, hasta el punto de ser esta Las autondades fuenores las con~lderaba como opinion política uno de los crúnenes mas .graves sus peones, de (lue.era~ una. esp~cle de capata- que podían cometer. ces los poderes legislatIvo y J!ldlclal.. Con una especie de marca ó seiial, para distin. Pero todo este gran ?le~am.smo sometIdo ~ pa- guir su hacienda, tiró su famoso decreto de prin. !ron, cuya voluntad estaba arrIba de todos, SIendo cipios del año 32, por el cual mandaba. terminan- ma.pelable. . . temente el uso de la cinta punzó. Sus hermanos ~rud~nclo y Gerya,slO, eranl.os Por aquel decreto se obligaba á todo individuo capat~ces q.ue habla dejado en la campa.:I?-a, ~we- que.recibiera sueldo del Estado, comprendidos los Des dlspoman á, sn vez de todo lo que cala baJO el eclesiásticos mismos, se colocaran aquel di;;­ peso de su autorldall. tintivo en el lado del corazon bien visible sobl'e Ellos castigaban las faltas poniendo todo género el pecho, con, el lema li'ederdcioll, de penas. . . La clase militar quedaba tambien obligada al Pero enlo que mas se afana.ban, sobre todo llon uso del mismo distintivo, de la misma manera, Prud~ncio, era en cuerel\l' c.uan~o les caía á mano. con la soladiferenciaque el lema seria .. por ellos HOJeanclo papeles y publicaCIOnes de aquella alterado con esta forma: época, nos hemos encontrado con una publica- Fedemcion ó muel'te, cion que hizo el señor Rotet, referente á los ro- Las penas que en ese decreto se establecian bos de don Prudencio, de cuya publicacion hemos para los que no lo cumplieran, era. la !pérdida del de ocuparoos mas adelante. empleo para los civiles ó eclesiásticos ~y el con· Una vez instalado en la ciudad y temido tIe todos sejo de guel'r¡L para los militares. . suspendió momentáneamente todo acto de crueldad Pero la mas grave de todas era aquella qile no y de rigor, dedicándose á gobernar la gran estancia. estaba consignada. . . Sus hermanos, sobretodo el general don Pru- La clasific:ac.ion de unita.rio, que importaba. una dencio, fueron armados de· un - gran poder con- dersecucion terrible y sin cuartel. tra el gaucliaje, elemento poderoso que él no Aquel decreto de marca, fué acatado por todos quería dejar de mano. . sin la lllenor observacíon. El robo en lacampaiia era perseguido á. sa.n. Los que eran federales lo llevaban con· el na­ gre y fuego, porque los agraciados no querían te. toral placer y vanagloria. n.r competidores. . El partido enemigro lo llevó tambien, como Si todos hubieran hecho lo mismo, DO habrían medio lÍllico de salvar la cabeza. -. - 101 - y las emigraciones á Montevideo empezaron Rosas que ya habilt hecho de ellas todo el uso con mas fuerrA que nunca. quequeria y necesitada, lo hizo así por medio Algunos (iUC no pertenecían á nm¡una (le la:s d~ ~a larga nota llena de consideraciones ima­ clases citadas en el decreto, no se creyeron obli- gmanas. gallos á usar el cintillo, ~ero fuer~n vi.ctimas. de . La paz estaba as~gurada, decia, y en el poco su temeridad y por propIa converuencla obliga- hempo que de ~oblemo.}e quedaba, quería go­ dos H.llevarlo. . bernar con suavIdad, cméndose en un todo al La. chusma ensoberbecida por el apoyo que testo de las leyes. encontraba contra la gente decente, empezó la. Pero esta devolucion fué como las demás re­ llrimera cruzada federal. nuncias que hacia el célebre Restaurador de las Todo .c.aballero que por su condicion indepen- leyes. diente °no se creia incluido en el decreto y salia Aparato para engañar al pueblo inocente. á la calle sin cintillo, era insultado y muchas ve- El mismo dia que pasaba la nota. devolviéndo­ ces golpeado por la plebe insolente, á la que se las, prevenía IÍ. sus siervos de la Cámara que no aleccionaba al efecto. ,se las aceptasen. Los empleados de Policia, desde el gefe hasta Trabajo inútil, pues por temor de no disgustar el último sereno, tenian órden de no prestar au- al gran Rosas, sus camaristas no se habrian atre- xilios á las víctimas de estos desmanes y asaltos, vido á aceptarlas. . y en general, á toda denuncia ó queja hecha por Despues de cinco meses de estudio, la Cámara. persona que no usase divisa. n~ sQl~ no las .aceptó, sinó que se las dió mas ám- En vista de esto todos aceptaron el uso del pbas, SI es pOSIble, en un documento que tenemos cintillo, siendo de notarse que aquellos que mas á la. vista y que seria pesado transcribir. grande lo llevaban, eran los mas enemigos de la Rosas hizo.d~ ellas todo el uso de que era. federacion. . capaz. Esto pronunció mas la '!ivi~on treme~& que . Mirando hácia el.porvenir, y faltándole ya poco existia entre federales y urutanos, prodUCIendo á tiempo para conclUIr su'periodo; Rosas quiso altI. cadaipaso luchas á mano armada, que exaspe- gurar su poder eterno, y con su sagacidad c:aiae- raban los ánimos de una. manera terrible. terística empezó á. trabajar en esa sentido. La persona que salia. á la calle sin divisa, no La oposicion habia..empezado á. gannr terreno regresaba á su casa sin haber provocado por lo hasta el mismo recinto de la Cámara, donde se menos esta frase: lava~tó la palabra ardiente y digna del Diputado Perro sin collar se mata. MartInez, contra las facultades estraordinarias. Frase que por el tono con que era dicha,y los mo- En este sentido Martinez era apoyado por Ar­ tivos que la dictaban, era una verdadera amenaza gerich, Vidal y otros. de muerte. Rosas empezó su gran batalla. Los efectos de aquel decreto fueron tales, que Si le quitaban las facultades estraordinariasno el mismo Rosas empezó á alarmarse. podria seguir manejando el pais como una' es- A:lgunos estranjeros acriollados habian . sido tancia, sin dar cuenta á nadie de sus manejos. . "'ictunas de asaltos. de lo que mas tarde habla de Obligado á dar cuenta de sus actos tendria que llamarse mazorca, lo que trajo Lreclamos y per- dejar el Gobierno, como dejó la admi:Ustracion de tw'haci"'les. la fortuna paterna, por huir de aquel requisito que Rosal> no queria perderlas simpatias que cal- no estaba con su carácter. culaba tener entre el comercio estranjero, pero Todo cuanto valia y podía, lo puso enjuago pa.­ tampoco queria revocar el decreto causa.nte de ra la conservacion de las facultades estraordi- aquella situacion escepciona.l. narias. y los . escándalo~ ~e repetian diariamente, sin Llamó á su casa á los Diputados y lesindicó que que nadie los reprlDuera. queria conservarlas á todo trance y quién iba tampoco á reprimirlos? . . . • En las luchas nocturnas de gente con cintillo Pero la OposIcIon h~bla g~ado ya mucho ter­ contra g~nte sin él, los serenos se ponían ¡nevi- re~o, terreno ~~e habla perdido Rosas con 6US tablemente del hldo de los primeros, ayudándoles rw~osos erro~ es. . , á. golpear los segundos.· En el mes d~ ~ oVlembre, la Cámara terminó de El Gobernador consultó ]JOI' primera vez á. ilUS tratar la cuestio:.;t, y !otó el cese delas famosas fa­ :!\iiru¡:;tros lo que debia hacer en tan grave emer- cultad~s estrordmanas,por doce votos de mayoria. gencia, y estos, para llenar el principal objeto El tIgre acababa de ser privado de sus colmi: de inspirar mas confianza al comercio, le aconse- llos y sus garras. jaron la devolucion de las facultades estraor- No podria seguir destrozando la: sociedad como clinarias. hasta entonces. - 102-

Doñu EnC8I-Uaclon politlc8

ltosas recibió neno de ira la noticia de aquella.' pié de guerra, sin recurrir al Gouierno, Rosa.s de- derrota que lo privaba de todo su poder. cretó la. formacion de unparque en la Guardia Qué haria él teniendo que ceñirse 'lÍo las leyes. del Monte donde aglomeró todos los elementos que no conocía ni por las tapas? bélicos de la. Provincia. Rosas juró entre sí, que los lomos negros le ka- AlU fueron la.s armas de toda especie que po. llian de pag:tr aquello de unll manera. t.eITijJle y ::leia. Buenos Aires, y todos BUíl elementos do empe¡r,ó 1\ prepararsC\ para el futuro. guerra. Terminado el período tle :iU Gobierno, lo su;e'" De este modo el COIrmnuantl' General de call!- ; deria en el mando UDO q.ue no pollria :>osteneJ:'Sf:! pa.íia.,J'eaidente en el Monttl, ..;eria siempre un po­ entre lalucltade 108 partidoa, der superior al del Gohierno, que depe.doria de Conservando él siempre ·el inmenso poder de él y á quien ahogaría en un caso necesario. la campaña, podía ser el árbitro (le la situarion, Persistimos en estos detalles, para que el pUl'­ I~ iDlpom'r~t' de uue\"u como el homlll·e JUt1.8 nece- blo pueda comprender él poder en que se ap/)vó l>ltrio. aquella tjraui¡~ sangrienta, que envolvió á la Re- A o SI (\ fin dedicó los último):: müses de bU 00- pública en una noche de veinte años, cuyas tinie- ltÍarno el tlamante brigadier Rosas.' bla~ cruzan aún, de cuan -O' d ,ejército y ponerlo en un buen pié de guerra. ~u \esttw"l~ ~ "u sue o es eran entre.,a os Mal! adelante veremos cual fué elte pretesto. «':011_ lwa exacfltud asombrosa. Estando por vencerse el período de tres años .' .~ d~ ~uaDd~O'~n c~a.ndo, co~o una r~cODlpenSo. para que Rosas habia sido elegido, la Legislatura .L :serVICIOS fm.,.,lllanos, el GobIerno les daba una se reunió para nombrar el que debia sucederle. t'a~(,! con cuero Ó •~os~ por ~l estil~. . Fueron estos, dias de terrible angustia para. el u: dar? que el eJer~lto a~l trstau?, tewa que puebio de la. oposicion que lo eran los unitarios y sost.cller lt. to~o trance al ÓlpCO _GObIerno que lo lomos negros. ' habla, atendido, desde el auo 10 hasta en· Algunos decian que la Legislat.nra iba á rceJe. tonces. ,.,' _ . gir á Rosas, notidaque cayó com? una. bomba. e~- Las mílICH\S de campana, . que servlan en, la tre los que miraban á aquel GobIerno como la la­ frontera,~~an tratadas dela mIsma mane!a, temen- pitIa de su sepulcro. do sus Jluhcos., como una compensaclon extra, Aunque IOIi fedcrales pa¡;eaban las calles ;j, son nlgun.as Ctl.becltas de ga~ado, que de alguna par:. de Uluslea, para demostrar una. alegria. que esta­ te. sallan, mellOS, se entiende, de los ('stablcc¡- ba lejos de existir el aspecto d'e la Cludad erA. llmmto~ do Rosa3 y Terrero. triste..,. sombrío. . Uosa~, como LatolTc, sin que eomparemolil es- Paree:::. una ciudad amenazada por alguna des· to:; dos hOJ?hres, pues ~l pr!mero fué lma fiera gradlt ine.'itable, ' . y 1I.cgó :í disponer del eJércIto á su antojo. . La Legislatura BO reunia t te do orgullo y seguridad.· . mismo Rosas, 1& Legislatura Re halna prepnrado Demasiado sabia él todo 10 que habla de su- á librar una verdadera. hatalla. ceder. Rosas, con su sagacidad fecundisima. queria. , Despues de ATAndes discusiones á. pnerto: ep.~.· dar al pais el espcet'c~o r:"ro de un hombr~ que rada, despues de devanarse ~os sesos y fu~dlr se resist& á. aceptar un Golnerno que le qweren el magin en intrincadas cavilaclones, la Legisla· 'dlU' á vira fuerza.. . . tura dió por fin con el único hombre capaz de Do este !mo(lo queria reeup~rar ~as slmpatl8.s de suceder en el mando al gran Rosas. perdidas, mostrando que n? tema. nmguna amhl. ROilas mismo! . cion de mando, al mismo tiempo que. armaba de- La Legislatura vol\"ió á elegirlo por tres años, ba.io del poncho, el plan q!le lo habla dI) llevar al sancionando uDa minuta por la cual se le rogaba, Gobierno por mas largo tiempo. fln nombre de la. patria en peligro, a.cept.~8c aquel Hosas volvió á. renunciar el Gobierno á que con nUe\'o s&(rificio. tanta insiswncia se le llamaba: . Los honorables legisladores concluian esperan· La patria tiene hijoll mas . esclarecIdo., que do no ser desairados en su demanda, porque la pa- yo decia, "! además mi saJud no me permIte se­ tria tenia el derecho de exijirle aquella. nueva guÍr en la labor administrativa, prueba de amor y de abneg3.cion profunda. Tengo que recuperar la salud perdida. La. noticia de la reeleccion lle Rosas, resonó en La Cámara no aceptó la renuncia y volvió " in- medio de los coheteR v músicas. sistir en el nombramiento, haciendo notar al pue. Parecia que se trata~e de un triunfo patrio! blo que Rosas habia pel:di~o su salud pOl' ~erYir Lo~ federales recomeron las cl\lles con bandas á la patria y que el sacnficlO que se le pedía.. era. de música durante el dia, y sendas serenatas· de tal vez el de la. vidá.. . guitarra durante la lloc.be. Tres \"eces insistió h Cámara eu suplicar á, Las casall de los unitarios. conocidos 6 S08pt'!- Rosas que aceptara el Gobierno por un nuevo pp­ ('hados, fueron víctimas de furfosaslcencerradas y riodo, y tres -receS el supremo Restaurado!' de las tte gI'lUldes gritos de amenaza lanzados por la leyes rechazó el nombramiento. chusma federal, que se veia. entronilada. por tres Se le en\-iaron emisarios do l(>gislndol'es '1 ~e años mas. amigos inftu't'entes, pero todo fué en vano. Los unitarios á quienes se calificaba. de lavallis- Era preciao convencerse de que Rosas realmet;!" tas, recibieron la noticia como una. sentencia. de te rechazaba el nombramiento, no por haLer¡¡e ¡oo· muene, preparAndose á emigrar " lIonte\-ideo, gar para aceptarlo desp\les, amó, p lrque no lQ pUl" ereian que en el segundo periodo, ROIIS quería. decididp.mente. 4aria rimela suelta , 11\\ reroridad, Nin~no '1ospe('hó el verdadero móvil de ,,"tu Al cl1a IlplenteRollB pasó' las Calmaras UD renlUlciaJl, . otleio, c1idendo que renunciaba. el honor que lO Porque ROSAl DO confiaba. iU' pIADe; .. natUe. le queria haoer, porque el ••tad.o delicado de su '! ,ulilecretario ¡nivado era 8\\ JJl1lma conAortl talud 210 le permitia aceptar, ao6& EDcarna.cloD. . . . ROJU ~u1ere que le rueguen, r hacerse el don Los unitarios y los mismos lomos negros I~ precilo, dijeron, as1 ea queni se'alteraron por es· hacían cruces de aquella conducta, llegando' 10 las flestas federares, ni cesaron las amenazas á prt'guntarse: 10'l llDitarios y lomos negros. - Roalmento estnrá Ro"n ~ delicadQ (te f:1alnd? No habia mas defensa, para gozar dí' cierta Solo una enfermedad !<,"ri:u puedo hacurle re· tranquilidad en IR calle, que atarse una gran cint.1. nunciar a lo que ha ambieiollll.do tOlla la ,-ida y por punzó, segun el decreto. que nuestros lectores co-'Io que ha. trabajado quince años consecutil'os, sin nocen y pa'lar confundIdos entre los nuruerosos trégua ni descanso. • ~pos de federales que andaban de música. y de Y ninguno, ni sus confidenter¡ JIlas íntimos al. Jarana. . canzaban á. penetrar.su secreto. . La Ca.ma.ra como todos lo esperaban, no aceptó -Yo senil'ó al paJs do cualqUler otro modo, )a renuncia, é insi!!tió en el nombramiento, pa· d.ecia. sando á Rosas una nota llena de serviles rogativas AhorlL necesito descanso y l'ospir:u: ('1 aiTl' pu- I'n que se le pedía que aceptara el gran sacrificio ro ucl campo. . ' t.!e gobernar otros tres años. Si allí puedo servir á la patria, 10 bar~ (;011 mi La támara fué entonces el oldeto de tollas las habitual desinterti¡;. . llllllifestaciones federales. La Legislatura. se vió cntónces CIlla necesidad -: Es necesario salvar el país do la anarquia, se de :lceptar la última l'enuncia., y reunirse nuel'a· decl8., y Bolo Rosas puede hacerlo. mente para elegir el BuceSOl·. ' LaCá.mara debe insistir'hasta quemar el41timo A indicacion y sérios empeños del mismo Rosa• ....artncho por la. feUcidadde la. patria, pues al dn L'l. Legislatura. nombró para 8ucederle al general el gra.n RO,sas .no se Ilegllr-.l al I1ltimo 81lcritleio Balcarce, que mas 8ua.vemente, no seria. "tr!\ CO~" :qtlC le le r!de. I que el continuador deDil {lol1dca. .... 104 -

RosEts dominaba." Balcarce Ror muchas ra.zone~, dad de hacienda que, como hotin Ile gnerra, seria entre otras, porque el nuevo Gobierno compren- repartido. entre ellos. dio. que todasu base de apoyo y tIe poder, estaba en Acostumbrados loe milicos á que nunca les hu­ el COllllUldante General de campafia, puesto que, biera faltado Rosas á sus promesas, no veian el como se sabe, se habia r.eservado Rosas como ba- momento !le ponerse en campaña, para 'ir á arre- se de sus futuras operaCIones. . batar á los indios sus espléndidos rolleos. Al efecto, pasó ála Legislat~~ un . pro:v:ect.o, Los indi~s iban á Ber victimaa de su aliado, C!>D por el cual proponia una. espediQon al deSierto, ~da alevosla, ~ues de~de q.ue él e~taba ~n .el Go­ en combinacion y de 8:cuerdo con los demás go- ~rno, no halJU~ trwdo nmgu~a.lnvaslon Impor­ bemadores de provincia. tq.nte, que autonzara una espeilicloD como la pro- En ese proyecto el brigadier Rosas mostraba yec~atla. .. . la necesidad vital que habia en asegurar las. 1 ero. que pOlha Importarle á. Rosas llevar el fronteras, pues los indips ya avanzahan una. can- IDcendi? y el saqueo á los los toldos de 10B tidad de poblaciones que quedaban desamparadas pall!Pl\s? . . . . . por el abandono que se habia. hecho de tan im- N. o lo habla hecho en el centro ele la clVlhzaclon portante cuestiono haCle~do matalizas en masa y todo género de La provincia de Buenos Aires, decia, gUIarla atrOCidades? . .. unas cuantas leguas mas de tierra, como loS que .' ~ntonces el degüello ~e mUlos pampfl.s no po­ concurran á la espedicion, y la frontera quedaría dla Importarle repugnan~Ia alguna, mucho m~~os asegurada, pues entonces su defensa podria. ha.- cu~do este era un m~dlO de lograr sus amblclo- cerse con un puñado de hombres. n.es y traer Ji los CerrIllos algunos. rodeos de ha- . clenda vacuna, de aquellos espléndidos de un 8010 La LegIslatur&.~o solo aprobó el proyecto e~ pelo que tienen los indios. todas sus partes, smó que vot? la ~uma de un ml- Arreglado esto, RosllS se puso á da.r los úttimos lIon de pesos, para que el· brIgad!er Rosas aten- toques á su Gobierno antes de entregarlo al gene­ diera los gastos ~~ la espedicion que iba á dirijir ral Balcarce. en peRsona, movilizando la fuerza que fuera ne- Su último decreto fué para esplotar una vez TilaS ces:ma para la mejor y mas rápicla reali- la sombra de Dorrego. 81C10n. En l!l aniversario de su muerte, decretó luto pl1- El pretesto para formar un ejército y ponerlo blico, ~ hizo decir grandes misas por el descanso en pié de guerra, no podia ser mejor. de su alma. Con cinco mil ó mas soldados, si era necesario Eran las últimas lágrimas de cococlrilo que de él se haria. el árbitro absoluto de la situacion,pe- jaba correr el brigadier Rosas para enga.íiar me- sando con la amenaza de 'su ejército sobre el jor al populacho. - Gobierno, li acaso Balcarce se le daba vuelta. El17 de Diciembre de 1832, se recihi6 del man- Rosas entonces almacenó en el Monte grandes (lo el general Balcarce, abriendo una nueva era provisiones de boca y de todos aquellos artícu' de esperanzas y de paz. . los necesarios á. la comodidad y bienestar de la Rosas quedó en observacion. tropa. N o queria ausentarse á. su espedicion, sin de- No queria qne esta careciese de nada absolu- jar bien aleccionad?al que. creia un ciego ins­ tauumte, no s(\lo para que soportara con alegría el t~umento de su pohtIca y de sus bárbaras pa­ nuevo servicio á. que iba á. someterla, cuanto pOI' 8lOnes. nO perder en un átomo el a.scendiente que sobre Veremos mas adelante las eonsecueneias de ella tema. esta tutela forzosa, de ·la cual le sería. imposible Ya. habia hecho correr la voz entre los milicos, emanciparse, por 1.,. clase de poder con :que con- 4e que en los toldos se l{abia. de tomar gran canti- ta.ba.

Doña Enearnaeion revolucionaria • Delpues de dará. Balearce las ideas generales Ha. espedicion el ctU'4cter que .aabia prome- que debian servirle de norma para. su Gobierno, tiao. . Rosas se decidió. á. salir á campaña para preparar Amigo lle todas .las indiadas, ~olltaba con su su famosa espediclon al Colorado. contingente poderoso, y no quer!:l rompel' ('011 Ni por un momento, pensó Rosas dar á aque- ellas. . - HI.1 -

('on lR.s trollas qUé Jl~dia re,uníl', tenia llara ba- ~at~as OcupiU'on lHle¡,¡tos. públicos y 'los unita.­ tir tOlla la pampa \'entl\Josamente, pero e:r;ttonces rlO~ dejaron de. Ber per.se~lIldo!'l á. muerte. se privaba de un gran elemento, pues. sabido era. El uso del celebre cmtillo paso de moda, ha::;ta q Ul' en un 1ll0UH'nto dado, Rosas reunla una van- el punto que solo lo llevaban los fedcl'alel! rosü¡• guardia de mas de dos mil lanzas, como 10 bizo QJl tas, aquellos ~as ~x.altados que. estaban vio~entos la. guerra. de Santa-¡.'é. . ,. porq~e los fusIlamleutos se. habla-!l s!1spendido, y Su objeto único era levantar un ejercito con se dejaba en paz' los malditos ullltal'IOS. • que imponer-á Balcarce, y conque poder oeumr La policía atendia sus deberes y los atropellos victoriosamente á. sofocar cualquier movimiento nnitarios á personas que wdaban en la calle siu unitario que pudiera sobrevenir. cintillo eran rigurosamente castigados. Rosas se ausentó ála Gu.ardia del Monte, deja.n- Los emigrados en Montevideo empezaron á vol­ 'do en Buenos Aires el mejor agente imaginable. ver á sus hogares, convencidos de _que la influen­ por su lealtad y su perspicacia educado por él. cia de Rosas habia cesado en el Gobierno y qUl\ Este agente no era otro que su consorte doüa las vidas é intereses estaban garantidos por la au- Enca.rnacion Ezcurra. " toridad. Doña l.'ncarnacion amaba. á Rosas de una rua- Así empezó el Gobierno de Balcarce á hacer­ nera entrañable, tal vez con un amor aumentado se de opinion, y á ser sostenido por el elemento por el abandono en que la tenia. decente y de órden. . La belleza artística de Rosas la subyugaba, y el Doña Encarnacion no descuidaba de transmitíl' gran respeto y cariño que le profesaba, hacían de á Rosas todos estos detalles, por conductos segu- ella. un instrumento ciego que él manejaba IÍ. su ros y fieles. , a.ntoio. -Si sigue af>í la marcha del gobierno de BaJ- Admirahlemente aleccionada. por él, doñ¡t En- carse, (lecia, Jos enemigos se van tí apoderal' del carnacion (IUedó encargada de darle una cuenta pais, haciéndote perder todas las veJltajas que eOIl l)recisa V minuciosa de la marcha (lel Gobierno, tanto trabajo has conquistado para la causa de h~ y de todo lo que sucediera en la ciudad durante federacion~ ~u ausencia. Rosas. trémulo de ira por lo que dlh\lUaba lit Sus cartas de instrucciones debian ser apren- perfidia y traicion de Balcaree, ~e ele· Rosas, por la distancia que los sepa.raba y los tra- mento s federala!!' se pusieron en campaña. bajos que á aquel debian preocupar, estaba lilas Don l' edro (le Angelis en la pren~;¡t y los de­ vcndido que nunca. más corifeos en la Legislatura yen los corríllo~, No daba un solo paso'que no lo conociera. en empezaron á censurar la. marcha del Gobic1'l1o, el ado el Restaurador de las le"es. calificánuolo de traido!' , ,exajerados hasta el es. de una manera espléndida y repartirles como suelo e,ámlalo, ('on supuestos triunfos, empezaron á do a.dela.ntado una buena. parto (lelmilloll votado llegar, y In oposicioll comenzó en su tarea de mi- por la Legislatura. nar al GolJierno. La tropa estaba deseosa de entrar en campaiía, Don Pedro ¡\ngelis, en lit (/(1('etr:r.1I1ercantil era. para demostrar á su cnudillo el carruo Ilue lle quien llevaua 'la uatuta de estf' manejo. profesaba. .\. Bal~arcc se le arusaba ~púhlicamcnte de hu- Las milicias del Sur fueron llamadas, y !os paisa';' herso a]¡ado, no ya á los enemigos de la Santa DOS, como hiempre, se apresuraron ti. ocurrir á. Federacicm, sinó álos enemigos de nosas, lo que su llamado con todos 8US elementos de guerra, es era mas grave. . decir con sus caballos de tiro, Ó !lU tropilla, se- Daba la \'oz de alarma á Jos verdaderol!l fe­ guo sus medios. ' d~rale8 y llegaba ya basta amenazar al Go- En pocos dias, Rosas reunió una division mag- lllemo. l1ifica, llena de eutusiasmoy de brioso ,. Liure ue UO:oíRSy BÍn saber que era él quien te. Para que nada faltara y que!Íendo tambien im- Jm t04~ ~sta tram!!:, BaJ,ca.rce~uiso ser rigido y ponerse por el teITor, Uosas luzo, antes de despa· empezo a persegtul' y aun castrgar á los mas inso- char las divjsiones espedicionarias, una matanza ·lentes. , terrible en los potreros de! mismo general Bal· Por intermedio de dorta, . }<~ncal'llacion, I~OSa.R carce. Impo todo esto, y decidió regresar 31 Monte, para No se sabe por qué hubo nnn, ·especie de mo- preparar lA. eaidade Balcarce, porque Ili esto sc. tin en lUl escuadron del regimiento de patriCios,lguia así, iua:í. ser el sepulturero del rosismo. • que mandaba el coronel Espinosa, que babia pa· Ambicioso y cruel, estaba ávido de volver á too sado á Lobos en c'lmision. I mar el mando, para 'i\3ngarse de los lomos negros Este escuadron acababa' de llegar de CórdobalY \'OIVer á perseguir á los unitarios, que eran sus donde habia sUlIido infinidad de penurias. 1mortales enemigos. ., . Sabiendo que sobre el pucho de elitas iban á En su campafia al desiel'to, hahia l>ometido 301- entrar en nueva campaña, los sóldados descon· gnnas indiadas, halagándolas con dádivas y ha­ tentos, y cansados de sufrir, se amotinaron en- ciéndolas ver con los caci'lues que lo acompa.ña­ cabézados por los sargentos yeauos. han como un,\ garantía, que cumpliría lo que les Rosas hizo sofocar el motin y fusiló á. todos prometia.. . los cabecillaf!, La frontera 'luedaba a~egurn!la por medio de En seguida lúzo formar el escuadron y se limo una paz, susceptible de ser rota cada vez que pío de cada cuatro uno. los indios quisieran, segun vieja táctica,' Acto continuo proclamó al ejércit., haciendo Pero la cuestion era aparentar haber hecho Baber á la. tropa que el IIne se portara bien ten- mucho, aunque en realidad nada res:.lltase heeho. dría su buena recompensa; pero el que andu· El gellerall>acheco, átodo evento, fluedaba. en biera maiíereando le haria pegar cuatro tiros. el Colorado con linafuerte di..-ision. Esta matanza 'produjo tal efecto, que en toda. 1,m; triunfos del gran Rosas lm'antaron en Buf" , la. ca.mpafia no hubo 1m solo desertor. nos Aire8 gran tumulto entre los federales: rosis· , Rosas dejó en 'fapalqué un fuerte destacamen- tas que los ponian por las nullBs. f,O de infameria y caballeria para quedarse como El Gobiemo temeroso ¡le illdispont'lrse con reserva y auxiliase el convoy, poniéndose en Rosas, le pasaba oficio tras oficio,espresálldolt! marcha con el resto del ejército. el reconocirr,iento del pais y del Go¡)ierno, mieu- Este destacamento era mandado por varios tras 'la Legilllatllra lo nombraba. héro~ del dl"- gefes, siendo cabeza de ellos un coronel cono- sierto. l .. cido por el Colombiano, cuyo nombre no hemos Es curioso el servilismo con 11ue fi'lueUa bono­ podido averiguar. I'ahle Sala de Representantes. decretó para. Rosas, Rosas dejaba todas !lIlS órdenes bien d¡¡¡puestas todo qéllcro u~ bonores y dádivas. • , en Buenos Aires. Se sancionó una ley mandando regalar al eran La m¡.1Hr& como se ha.bia. te seguir ha.

R(' le mandaba así mismo regalar \lna C'!lpada hia cel~hrarse en la plaza dA la. Vietoria un .. es­ gunmecüla. de oro, gravódos.e po~' ~n lado ele su pocie de rellnion, á. pretestode [un juicio de fin­ guarnicion las armas de la ProvlDCla orladas de prenta, entre federales y lomos negroll. lanrel v por el otro ]a siguiente inllcripcion:.. Cuando la concurrencia fuera. numerosa. y los "L~ ·provincia. de Buenos Aires .grat.a. á. ]os ser- eabp,ci11a~ estuVÍ!'l'Rn en.sus puestos, ~e~ia empe­ \'icios de su ilustre defenso,r, bngadler general zar el baIle al grIto de ¡VIVa. Rosas! abaJO loslo.mos D. Juan llanuel de Rosas". • negros!' y como si todo esto no fuera. bastante, se le El primer gran grupo que llegó á 18, plazA., era :tcOl'daba una me llalla de oro y brillantes que de- compuesto porlos personajes tristemente célebres lIja usar pendiente al cuello y con unlt. banda es- despues, (,iriacn Cuitiño, Benavento, Parra, Tron- \'arlata cruzada llel homhrn dl'rfll'ho al costado iz- coso y Alegre, . puierdo.· . I Poco mas tarde, y con aspecto misterioso llegó . Rosas, ql~e no se mamaba .el dedo. devolvI6 la el s~gundo grupo, 'que lo fomaban un gallego Isla, propomendo SI' le -cambIara por una esten- Maestro famoBo .Juez de Paz de'Monserrat l\{(l­ sian igual de terreno á su e~ecci?n, a.unque fue- reira, los hermanos Paleta, el carretillero A;ba.lIo, ran terrenos dados I'n entíteusIs, lo que se le Salomon, el temido Sa.lomon, y otros cuya lista se- aeor~6 al momento. . ria larga y fastidiosa . . Dejemos á un lallo estos vergonz~sos Renl- Los federales de cierta posicion y valer no eR­ hSlU08 que empez3.r~n á. degradar alp:us, y tnme- tallan en el movimientn, 6 no querían «ar la DIOS nuestra narraClOn en 81;1 punto mteresante, cara, . Los prep~ratiyos que hI,Lcla Ros~s p~a su. se- Todos los cabecillas de grnpos reclutatJ,os en­ gundo Gohle~o, qu~ hab~a de durar diez y sIete tre la. gente de. hacha y tiza, habian salido dp ca­ :lii~¡;. romo diez y sIete SIglos de atraso y de bar- Sil. de doña Encamaeion, donde recibieron las lÍl- hane. timas órdenes Doña Encamacíon habia recibido instruccio- _ '. ... n61l que repartia entre SUll corifeos de segundo pona EncarnaclOn quehaln8. SIdo sIempre una. "'rtlen para precipitar la caida del freneral Bal- senora mansa y suave, se hallaba transfigurada. ('are!'.' ~ Con una eI,ltereza ,asombrosa f un valor ~e qUE' R.osas desde el Montemanejaba toda la trama, no s~ la hulllera cre~do susceptl~le, :epartla las que resolvia aquí con un raro talento doña. ·Encar- annas, procla:manJo 11. los cau~illeJol! Cf)~ pa.htbras nacion, á quien los federales miraban como si llenas de paslo~ y veheme~Cla, . fuera. el mismo don Juan Manuel, pues la. mayor . -Es. ne?6SarlO hacerse d!gnos d-: la f~deraClon, parte creia que aquella dama,por inspiracion pro. les habla dicho, y del ~p1'eclo del ~rlgadler Rosas. )lía, trataba de salvar la federacíon y restaurar El que no tenga ámmo de ~oflr por tan santlL "11 imperio. ,causa, q~e se quede .en su casa, que yo lo rf'em- Doña Agustina y Ilon l,eon, creyendo que aque- plazaré SI es necesarIO. 110 podría traer sérios perjuicios para la fami· Con semejantes proclamas los gefes de grupo' lia,lp decian que no se mezclara en p olít.i ca, pe- líabian s.alido templados y dispuestos. á. echar (11 ro ella los echó á rodar. diciéndoles que lo que Iresto por la santa causa de la federaclon. "l/a. h'Rcia. era salrar á su esposo y sn gran par- Ni los. monigotes de la inquisic.ion se yieron j.1- liilo más ~.mmados de ardor semeJante, ru mayore! La casa de doña Encamacion era pI cuartel de: deseos de que empezara la matanza.. In!: con~piradores. el Gobierno lo sabia, ppro no I R~unidos en la plaza y "'salié!l~o.se de l~ vaina" se atreVla á tomar la menor medida. los federales no aguardaron el Jl1JCIO de lmpren­ Cómo metersp- con la eRllOSroe del De-Ita ni la señal convenid'L. ~ierto? I.lútiño y 1'roncoso fueron los primeros en gri- Quién SI' atrevia á atraerse "obre si el Mjo de, tnr ¡viva. Rosas! armándose el motin!á las voces Rosas, pro,-oeando al gr8Jl (d,;rl'ito á sus 61'.1 (le muera Balcarce, a.compañadas por el afilar tl0 lIf'lles'¡ .. 1108 facones en las piedras de las calles. . Halcarce sp hallaba en una. situac:ion t.elTiblfl, --Muera el traidor Balcalce! viva Rosas! ahnll6 ,Ip h"t.que no sahia. eómoollalir. . ;aquella jaur'ia federal y se lanv¡ó cuchillo ó garrote La. Gaceta J.[ercmztil era calla vez mas vehe-l en Inann en lnri'!ccion á Quilmf's, punto 'tle ren­ m!"~te en sus ataques, y ya.. se hablaba á cara des- nion. ('ublerta. de "Yolte~r ~ Halcaree si no delterrall.a y I Talla era ¡:rente~ de lÍ. caballo y la. .jornada no Twr~.t:'~"I11a á 1011 umtarlO<; y lomf)s negros. I poclia ser penosa, Balcarce !ué debíl y. no se atrevió tomar la Los de á. pié,gente cruda y aí. "lo que te criaste K 1l\P~or ~edltla. pr~cauCl.onal. se desparramó por la. ciu(lad á. ha.cer . de las Su cluda fué decretada. por Rosas y anunciada suvas. por do~a ~neamaeion con gl'an sigilo. lAS personas mas conocidas por u~itarios 6 ~t' fiJÓ para el movimiento. 11n .flia en que de· lomos negros, fuero. apaleadas pOl' las "aUn '1 - IIIs - saq~tPadas sus casas, sobre todo si eran de ne- gritar con eU.os sus diferentes vivas ó mueras •. gOCIO. y desgracla(lo del que no les obedecía por. Lá ~ente <1ecent~, que era la. nsí clasifica.da., se que 6.tenia. que ceder obliga~o por 108 ,aJ.os, 6 clefendia como mejor le era poslblo, lle donde re- los dejaban en un estado lastunOBo si es que no snltaron no pocos muertos y un buen número le hacian alguna 11Ia,iada de facon. • th~ heridos. Los a.lmacenes de 108 alrededores fueron sa- l", casa de doña Encnrnacion, que era la que queados en sus bebidas, de modo fiue á la ora­ es hoy del Gobiemo de la Provincia estaba rodea- cion, los grupos que rodeaban la. casa de Rosa.s da. de grupos enfurecillos, que atronaban los af- estabah ébrios á no poder permanecer en pié. ' res con sns gritos de muerte y sus ,;vas á Rosas Doña Encarnacion tuvo el buen tino 11e dos­ y doiia1 Encarnacion. acharlos á Qnilmes, punto de reunion de los Aquellos que acertaban Q pasar por allí en las revolucionarios, quedándose con "I:'inte hornhrf's primera!! boras, eran lletenidos y ohligados á cIl'l la mayor confianza.

La t.~uida de D~lcarce

El Jnez de paz (le Qnilmes, .~iel'il. ~iq8iel'a á una razon cualquiera. . creia poder contar. E~'a nna. revoluc.ion personal, para ent,r~niza.ri Pero este, que estaha indeciso, "ienllo lo qUfO la drctadura. mas rmserahle que haya 811f1'1l10 lalhabiahecho,"""J su amirro Pinedo salió por el ba.io esa Am érica. ., misma. tarde, con su batallon al paso dt' trotc.a, (Taet~ ó GaLa.n, habia reunÍllo el l"scuadron Ipara plegarse á. la revoluciono . •le Quilmes q~\e mandaha el mayor .José :l\'Iolltes, I Todos estos gefesestaban vistos y compl'omp­ y á .\1 se hahUl.ll pleg~do touos ]os grupos (le la:tidos de antemano con los agentes de Rosa.s, á ,·indall y de la campf\lla. ¡nombre de doña Eucarnacion. AI dio. siguiente se ha:lahil. reltni~o ~obre ell Rolon lle.iaha preso en el cuartel á ·su seglm,lo Pnpnte de Barracas n~ ,e~ll(\(~ero e.1E:'rClto.. d d 11"1 comandantf' Pieres, pues sahia que este era Los lomos n~~ros ) un}tanos de la c.m a 'Ifiel al Gollierno " que lo pondría (>11 sérios con­ f'staban con 1,n JII l,on mayusculo, plle~ bIen sa-I flielos respecto :i la tropa. bian quo aquello .todo. era ob~a de dona. Enear-, ...... ~ )lacio1\, ob\>deciendo mstrncclOnes de Uosas. ~~an(lo H.\lc~ce .supo que Pmedo ). holon}o A pesar tle lo fra.nc~ y decidiflo del movimien- n:ruclon.ab~n, qUlSO tomal". entonces medulas e.Dl:'r- 10, Balca.rce no se ~ahia atrevido á tomar nin- glcas, slglllen~o el c:ons~eJ~ ql.le desde el pl"l~llE'r gl1na medida enérglCfI,. momento le dIeron sus ... WlgOS, pero demaSIado Desconfiaba de sus elementos, temia no ser tarde y~. . ohetlecido por las mismas tropas que habia en lA. Reumó las l\ni~as fuerzas que le quedaha.n, que cinda.d y prefirió tentnr primero los medios pací- era el batallon RIO de la Plata, n~andado por el ticos . y conciliatorios. coronel Olazabal y las caballerlas lle Estr;\- :EI Gohernador Balcarce llamó al general Pi- muros. nello encomendándole fuese al Puente de BalTa- En seguicla. ofició por medio de chasques á los (~aR y ordenase á 108 revolucionarios abandoüa- Juecas de Paz y comandantes réunieran sus res­ sen Slt actitud amenazadora y se retiraran á sus pectivas milicias y "iniesen á la ciudad forzando r.asas, I:'n]a seguritlad que si así lo hacian el Go- lal! marchas y gananilo el mayor tiempo po- l,iflmo los indultaba.. . sible. . gl general Pinedo llegó al Puente, donde se Así mismo envió comisionados al general Qui­ habian agregado á la revolucion IIna buena can- roga, para que concurriese tí. sObtener Sil auto- tülad de milicias, formando un ejército suficiente ridad. . (ti ,.." nQmol'O pl\rG cl\mbiar el órden I.le COI"'.· Loa comauda.ntee militares y .lu~ces de:Paz reno I.q lft!l1~ra.l fné recibidlJ _con '¡Vil. "'ntu~fl\1tM nitren i!!med!"tt\!I!IDirJ lftfi mltid"",) ''''Il') Ilf!lt''i - 1119 -

árdenaba, pero fué parA, plegarse con ellas :l la Y si no lo elegía, para qué ~staba allí su ej~r. revoluciono cito espedicionario? Qniroga se puso pn marcha con su famoso re- euaOllo tuvo conocimiento por su esposa,de qUII ~miento de auxiliares, que Se~1l11 recordará. el¡Balcru'ce estaba sit.iado por las fuerzas de la cllm­ lector era aquel cuya base fueron los h.'tbitantes paña. y pasadas de la ciudad, reunió en el acto de la.s rárcelps de Bnenos Airps. Iá todos los gefes de su ejército. Pero este contingente no podría llegar en tiem-! y con aire <;pntristado y lamentándolo profuu- po oportuno. . 'damente, díó cuenta de todo lo que sucedía. Toda la Provincia se levantahl1. contra Balear- -En Buenos Aires ha estallado una revolu- ('P, y este no tenia nin,gnn elemento, ni siquiera cion contra el Gobierno, que está sitiándolo. para sostenerse. (omo es natural que muchos de ustedes quie- Los regimientos quellcndian .le todos los pun-:ran presentarse á. ofrecer sus importantes ser­ tos de la rampaña, con Sllii comandantes :í la ca- yicios, el qlle desee hacerlo, puede decírmelo heza, pusieron sitio á la ciuda.l, intimando á Bal- ahora. mismo, para. estenderle Sil paaaporte, pues caree presentará su renuncia.. . es preciso que el que quiera llogar oportnnrunentl" Por considerarlo completamente inútil, Balear- no piertIa tiempo. ce no habia pedí do amJlio á Rosa~, el único ql\e A pesar de la benevolencia aparente con que hubiera. podido dárselo. estas palabras eran pronunciadas, habia en Sil Comprendia que Rosas llehia. estar furioso con fondo tallamenaza, que f'1"an nn equÍmlente :í. él y no queria esponerse á alguna sátira san- estas otras: grienta de las que aquel usaba con frecuencia. '-El que no quiera provocar nú \·enganr.a qUE' Viendo In. inutilidad de toda resistencia y con- no se mueva tIe mi lado. \"f'ncido que al fin tendria que caer, decidiú aban-¡ Yasí lo entendieron todos aquellos gefes .. •lonar el malHlo, y pre"pntó SI\ renuncia á la Cá--Yo no me apresuro á. cumplir esp deher. mara. concluyó, porque alÍn no he terminado Ia campaiia }<;sta, cuya mayoria tle miembros estaha en ellY debo esperar órdenes del Gobierno. cOlllplot, la aceptó en el acto, nombrando para Los gefes se apresuraron á haoerle mil 1)l'0- reemplazarlo en el mando y como G.obernador in- testas de fidelidad y lealtad estrema. terino, al general Viamont, que ya conocia la ma- -Xosotros, dijeron, no reconocemos mas gefe nera de pasar el mando á Rosas. que V. E., ni mas deber que cumplir las órdenes Yiamontse recibió del Gobierno 'y el general que se sü;va darnos. Ralcarce, acompañado del generallUart¡nez, Ola- Nadie se moverá de aquí sin lIDa órden espre­ zabal y los pocos gefes que le habiansído leales, sa de V. E. pasaron ála Banda Oriental, para no participar La tropa por su parte se entregó á. todo género .le la verguenza y luto en que iba á. ser envuelto de manifestaciones y vivas al gran Rosas, quien Buenos Aires primero, y la República entera. quedó conyencido una vez mas, que podía contal" lilas tarde. con aquel ejército, para obrar segun sus míra no hahia rna~ hé­ cuanto hallaron al' paso. I roe que doña Encarnacíon, á quienes los feder:t­ ('ua:ndo llegó Quiroga ya todo habia condui.lo.lles, por un exeso de suprema adulacion, pro­ El tIgre de los llanos qne habia volado olfa- clamaban como la (mira antora de aquel movi­ teando sangre, tUYO que contentarse con eseu: miento ql\e les habia hedlo perder todo temor dlt '("ha! las noticias de lo que habia sucedido. tilla caida ruidosa. ~~ era ya necesaria la íntervencion de su lan- Dicen que el general Yiamont consultaba /'0" za DI el facon de sus greñudos. ella todos sus actos de Gohierno, no haeienllo na- El (!ohierno d.espuef; de agradecer ~ll lealtad, da sin que ella no estuviera conforme. le cedIÓ los \:Uarteles del Retiro para que alojara Bastaba un simple recado trasmitido pOI' b Sil tropa, I.a que .se mandó tratar ít cuerpo de rey. persona interesíl.rla. para qUfl esta ollTllviem lo , Aquellos han.ll,dos qUe h~bian abandonado las Ique pretendia. ' c:trcelfls para. sahr de la ~'lIldad, ~olvian á ",Ua. y }{osas des.de sn c~mpalllento y, por interme.­ "011 t?UO el alre y. pretensIOnes de hbertaclores. dio de dOlla Enc¡u·nacJOn, trazaba la marcha '1 lil' (,llU~Oga re80lvlO descansar. en Buenos Aires debia llevar aquel Gobierno. h 1atlgas ue la marcha, esperando al amigo Comprendiendo por su parte (·1 geneml Yiol­ .lllan Manuel para charlar largamente antes de !nont, que su mision se reducia como la vez prim/'.. \'olvel: entre sus grelludos y montaraces. ra. á conservar y entregar á Rosas el mando, pn- ~o~as entre tanto estaba. entregado á. saborear co ó nada (j~acupaba de administracíon. el tellz resllltado de sus manejos. ~o quería. indisponerse ni con él ni cIJa 811 con~\ltidl Q ~l inlterinato de Vil\P1.ont,6, qnidn. mal terrihle Pa.rtido¡ cuya ferocidad fl~pel':alH\ p' á ~ue tJ¡ e, e e!1!'!(\ i\ (,#'mMa? ¡f!,A,dncir~6 en e crt()~ !\ctO'l dtll popuh.cho _ 110-

1.& JlPI'sP'C11rion á los 1lllitnriM rl'rrllllfl('Íó, pronlptillo. In. fll'rvil T.p~lQ,hll'll fpIl('1'ft.l de BUf'nos llat'i~ndos(l osta \'''1. I'stpnsif'a halitA. los lomoR Aires. negros. . ,Estos reron.p.cimientos fueron anunciados en y unos y otros E'D1pe~lU'on á. eTmgl'~ nuevll- pomposas notas, de las 'que se tir() una edit'ion mente iiI Montevideo, para. no hall,,·rsp. ('In Rnf'ln08 especialqllc se J1Í~o ('¡rrntar basta lit t'lltima pnlpe- Aires á la vuelta. de Rosas. , ria de cumpaiia. . "'~l célebre cintillo volvió á usarsE\, y los que no . ],1\ tal Le.~8latura, no encontrando ya califica­ lo llevaban empezaron nuevamente ti. ser 01 \llan- tIvo ('on que adornarlo, creó el empleo de gran co (le los atropellos y palizas del populacho fe- IUarist~a), como so verá mas adelante titulo J que al der!l-l.1 altmtlldn por la glltrial inr1¡ff'rf'nt~il\ de la mismo ~osas le ¡liñ verguenza (le a~eptar, repng­ Policla. nado :'.111 (1!lIla dI' arllle) SPl"v!lísmo tan mise. La vida, pues, se hacia insosteniltle (Htl1t )o~ rab!f" . miembros de aquellos partidos. . J<,l plazo de VlRmont se aeercl\ba. y era. pl't'tCiso Rosas encargaba ¡lue se persignif'rl\ sohrn todo pp.nsar E'n f'!1 CJohemaflor propietttrio 'lU~ dehia. ti. los lomos negros. slIcNlerlp. -A estos, decia. no se les pllelle perdona.!' A p~sllr ele lo IJlte Rosas queria. hacerles en J~ ninguna ml\nf>ra, porque han :'litIo trl\irlol'Ps y tende~, !,-Igunas tribus no encontraron llien la. renegados. eSpp¡lICIOll. y em~zar0!l ' hO!'!tilizar y pelear Que caigl\ 8obrf' ellos tollo t') Mio y f'!) 'dp~pre- Ifts tropas C'l}ledlclonanas. do de la s8;l1ta feder~ci.on. . . . Pero qu~ podian hacer .los pobres salv¡¡,je~ con El ejército espedlclonarlO. segLUa adlmro.ble- su rhuza y sus boln.s, teruendo que comhntircon mente tratado, para que olvidara, tí fnerza ele he- tropas pl:'rt'ectf\meure armadas. y diez vece!; supe­ neficios, los sufrimientos (le aquella rampaita ('s- ri01'es en número? téril y penosa. ' . Cada vez que vinieron al combate fueron batj. Viamont no retardaba un momento 1') despa- dos ~'esterminaclos. oon una ferocida.d que no cho de todos los pedidos de Rosas, de mollo 'lite habrian us~!lo los mismos salvajes. 1'1 pjército estalla sobrado de dinero, pOrtIllA no _\qlli empezaron los partes, tratando de des­ tenia donde gastar el que habia recibido, rico M pertar 1.-1. ndmiracion pública, con hechos herói. buenos y nllllDllnntesvíveres. ~ rOIl ropa hllf'T1:t y eo<; que 110 hahian existülo jamás. abllndIIlIt1", (:oltrhU fla la matanza de ll\s pocas tribus (lue se Así se esplica .el cariño entraüahle quP. al1 i1pl resistieron •. Rosas hizo retirarsn ejército del Co· f'jército habia el brado á Rosas. lorado. l.as faltas eran castigadas con todo riA'or y mu- I"prmó un l'l'gimiento de mil plazas, refundiendo chas de ellas con toda la ferocidad de que ROSll.S en este otros Dlas pequeños 110 (lió IÍ mandar al era susceptihle de modo que por temor y por célehre Pancho el ñato, bajo la denominadon (le conveniencia cada cual trataha Il{'! portarse lo regimiento de Bragone!'!. . mejor que le era posible. Este euerpo (/uedó en Bahia Blanea, guarne- Doña Encarnacion.seguia. en su papel de he- eieDllo la frontera por la. parte Sur. róina, é intermediaria enh;e Rosas ) SIIS par('in- El resto dpl t>júcito fué traído á inmedia.ciones les de la ci ud&ll. . tie la ciudall, en prevision de lo que pudiera. su- C~n ninguno de ellos bahiá.quel'ido entendp,rse (:('(ler. ..- clirectamente y cuando alguno se dirijia ti. d 1101' Puesto en rontacto con los miembros mns intiu· m~o de ~arta Ó not~~ aunque fu~ra el Gohierno ventes de'laSala de'Representantes, quedó' acor· mUIIIlO, haCIa que dona E!learnaclOn lf' eontesta- :lado su nomhramiento para suceder sí. Viamont. rlloverbalmente. Pero Rosas noqneriagobernar sinó, conla~1\· . ~si concluyó .esta. por har.ersl;J 11nll. polí!ica..t! mil. del Jlod~r 111Í.hlico ~ queriahacérselo dar sin IIltrignnte de pnmera fuerza,auDque una mfehz tener que pe¡lirlo. f'n el. fondo. Para esto contaba no solo con el senilj¡;mo, si- El Gobierno de Viamont se acercaha á ..:\1 fi1l nó con el temol' qllE" le tenían los perlomt.jes que y pra. necesario que Rosas regresara. por su influencia hahiall11e~ado ¡¡·qeupar el JlUf'~to El héroe del desierto dió por concluida su es- de representante'i, muchos le los cuales se ha.lman pedicion y se vino á San Jose de Flores llara·espe- estasiaclo ante lm nombramiento de t('niente al· rar los acontecimientos que no habían tIe tardar callle de la campail:l. en suced,er. •. Rosas pretenclia además libt:arse tie todos aque- Desde alli empezó á mamobrar, apoyMlllolle en Hos l'auc1illos feroces que podian hacerle ~ombra el ~ ejército á sus órdenes, para domin~J' Ó. 3m I y qne no habia pGdido d?mar, flor que cada uno CaudIllos. • I el! !\lIS dominios pretendia ser otro Rosas. La mayor parte' de los gobernadores )0 habian I Entre estos fignrabf\ en pritn;ra Unea do~ Fa­ reconocidolen su grado de brigadier general.lclmtlo QuiN)g&' que era á q!-uen mas tE"mll pOI' cediendo' 108 tra.bajos que hizC!. como lo, habi a. Sil poc1er~' su valor lElg<"nllnrlo. - 111 - Fué este el primero que cayó bajo el puü:.ülque SOl'prendióá.I~E! federalC, S del interior,y ater· de la. federacion. rú á lo::; caudmoSJgualc~. Véamos'cómo tuvo lugar este acontecimiepto '.,

La lDuert,e de UI1 t,igre ..

Aunquemuy ligeramente, hemos bosquejauo al frase::; que habrian la.stimauo al mas 'veterano d6 geueral Quiroga lo bastante, pa~a que el lector se sus milicos. .'. . lié cventa de lo que era este hombre feroz y I El día lo empleaba. en dormIr como un: bIen bravo. ' a venturado, pasando las noches en p~rfecto jaleo El Bolo mereceria un libro aparte, pero habién- \y algazara, de aquellas que nuestros compadritos dose ocupado de él escritores eminentes, cree- calitlcan pintorescamente ue no te muecas. mos que nada importante podríamos decir des-: Habia por aquellos tiempos, detrás de la M~ pues de lo que ellos han consignado. ' !ceu, lilla casaincaliticable, por sus parroquianos y Corno dijimos antes, Quiroga habia venido á la clase de escenas que al!í tenían I~ar. Buenos Aires con su regimiento de presidarios, á: l'~sta tal casa era conocllla por la :Jugada de la ::;ostener al Gohernauor Balcarce. . I Fiq¡teroa. Este solo hecho, que importaba im acto de: A esta jugada concurria lo mas sélio de la 80- insolente rebelion cometido por el caudillo rioja-' ciedad, en ambos sexos, ocupándose en pelarse no contra el caudillo porteño, hizo que este lo harta ei último centa.vo y armando cada tremolina tomara entre ojos, y decidiera destruirlo á toda que hacian ruborizar hasta los mismos hábito:» du costa. :Ios piadosos habitantes de la Merced. ,B~carce ~abia tra.icionado ;á la federacion del A estajugada,collcul'ria,?-oche ánoche el ge­ clutillo y punal, y Qmroga, al venir á sostenerlo neral don Juan Facundo QUlroga. 'cometia delito ue lomo negro y por consiguient~' Hombre de campamento y habituado a todo gé­ tie hacia acreedor al ódio de Rosas y como es I nero de jugadas bue~as y malas, era ra:r¡¡, la natural, reo. de muerte. ¡noche quese retirabasm una buena gananCl~. Como. QUlroga. permaneciera en Buenos Aires De allí salia al amanecer, se entraba al prImer ruando regresó Rosas del Colorado, fué á visitar fondin que encontraba abierto, y se entregaba al á su amigo en su residencia de Flores. placer de regalar sus piadosos intestinos. La e~tre~sta fué cordial, porque á Rosas no le En seguida, y seg1.Ul el humor que llevaua,:;o cunverua dejar entrever su ódio al general Qui- retiraba á dormir á su alojamiento ó al cuartel, l'O¡';a.. . Ide sus presiuarios, que le quedaba mas próximo. _ Era el tigre de los llanos demasiado bravo, pa- En la taljugada de la Figueroa, Quiroga solía ra que el tigre de fo!! pajonaleslo provocara lealJcometer sus avanctt\ y genialidaues. . mente. I Pero quién se metia. entonces con el ~eneral • Illa ser una lucha de tigre lÍo tigre, en lit lIue Quiroga, cuyo valorlegclld:llio era la Il.dlDlracion indudablemente triunfaria el mas cobarde. : ue todos? . Quiroga no, creia haber cometido delito con ve-: Muchos eran los desplumados por él que le te­ mr á.ap!>yar a. Balcarce~_hechura d~ RoslI:s, y por1n!an ganas, pero se con~entaban c~n t~nerlas,pues conm.gwente no desconfiaba de las mtenclOnes de' nmguna de ellos se hubIera atrevluo- a coparle la aquel. _, : banca, ni aún en pandilla. . . Accedl(~ entonces· á. pasar una temporada enl Quiroga era adem!s muy RuugO Ile ronC11.1'nr:t Buenoli Aires, antes de regresar á la eterna vida los baile citos v reuniones alegres de la gente 11f'1 d~l púchero de l~óveja que se haciá en las provin-1pueblo. . /'las por élllomu].adas. \ Allí solio. ar/Jwrse de laDlejor moza. que habifl. Quiroga era un gran calavera, pero un calave-' sin averiguar quién era BU m~rido Ó su ~om~ra .. ra br~~al, como p0?-ia serlo UD hombre da 8usI . y cu~l era el que se hubIera atreVIdo a qm­ c;ondlclone8 y habituado :t los centro~ misera,-. tar8ela~ l,¡les que habiahabitado siempre. ! "Ni por un quellO!" Para él cuaJqui~1' mujer de medio pelo y aún: . Los compadres mas bravoli le tenían recelo y n'~ de pelo entero, esta.ba colocada. en las misma, I se animaban. condici

lAs echa.~ un req'lnebro come un bote d.e laA-Iea hada. bueno el particlo j y q,ue Ia.abiau rolU~o za yres,on'tf:& á un de'Sden e.n una. animada. a. limpiárselo en lJ. p¡imera. ocasiOll buena. --11:~ - El>los eran tertulianos Je la jugaua tic la Fi- Su figura quedaba. iluminada du lleno po; lalut gueroa, y reputados como hombres de alma atra~ mortecina del reverbero. '"csada. . Los tres compadres creycron bucno el momentu Causados de que Qnirog'1\ l~~ ganara SIempre y ayallz:aron de una manora resuelta. hasta. el resuello,habian declllIdo desbancarlo. y_ ~ Pero al llegar á Quiroga, acaricia.ndo la empu~ ~i no podian, quitarle en la calle 10 que les hullle- nadura ~le las dagas, se cnc?n~raron con aquella. ra. gallado. fison.onlla fuertemente varoDl! Iluminada por una La empresa era dificil pero no illlposilJle, jun- sonn~a de supremo desprecIO. tLt terrible C(l11 mucho dinero para poder pelar en regla á mll'ada. Quiroga, y este que queria ganarles cuanto lleva- ~quell.os se encontraron dominados sin poder- mn, habia. concurrido con buenos pesotes. lo l,emediax:. Era tal el aspecto d81a jugada, que el catire se ~e detUVIeron !ln par de segundos, y pasaron habia agrandado en relacion tÍ lo que el coimero por delante de 1< acunllo, balbuceando un débil creia deber recibir. "buenas noches general." ::El principio de lajugaua fué malo para Quiroga Fu~ entonces Quirog3:9.uien l~s detuvo.' que, ó habia entrado en lamala, ó les dH,ba soga -1 r~ncamente? les diJO, me vIenen ustedes co- para agalTarlos mas confiados. mo ,Bo,:dos del CIelo. Una buena cantidad de sus on:,;as pasó tÍ poder l onfieso. que .estas dos bolsas pesan mas de lo de sus antagonistas, que cI'eyeron entonces poder que yo crela, ,Y me temo que con ellas no voy á. lIeval'lo de calle. poder llegar a casa. Poco les duró aquella ilusioll. ,Hagan, pue~, ustedes el favor de llevármelas. La suerte inconmovible de aquel hOlllure es- Ante tal salida lo!; compadres se repusieron al­ traorllinario empezó á aparecer, y todo el oro y go y tratar~:m de resistirse con d~hiles disculpas. papel de la mesa empezó tambien á pasar á su Pero Qwroga acababa de amartIllar las pisto- pouer. las',lo que no d~ba lugar á réplica. .. "h b' "d d 1 d" CarO"aron hmml.:lemente las taleg"s v -levoI'all- \. mClha JuO'ada a la recoJI" o to o t: mero o u.: , e l:l"hú al poncho nuel, que empezaba á. deshacerse de todos aque. ~obre el hombre derecho, ucjaudo \'el' la culata. de llos que importaban para él un fuerte estorho. dos pistolas de gran calibre. Con este motivo llamó llosa.s tí Ql1iroga, dándo. ,." lo una. importautccollUlSion sobre los pUtlblos clUe/dO }UI.l'& clw11'1ir' los .lcacos ue íto~¡¡. y CllVlal, '11.11 él dominaba. . una partida, bajo las órdenes (le UD-oficial Santos -Los unitarios uan empezado con Huidobro y Perez, con órden de esperarlo en Barranca Lla.- Heredia., le dijo, y si siguen en elSe camino, con- no y ~latarlo allí.. , duirá.n tambien con nosotros. Qwroga era un bandIdo puesto tuera de I¡~ Es preciso dar la. voz de alarma y con.trarestar ley por s~s m!smos. crímenes, de modo que su aquellos crímenes y los que puedan verur. muerte, a nadIe pod¡a repugnar, Nadie mejor que usted para tomar las mediela.s Quiroga,ageno á toda esta trama, salió de San del caso. Luis apresuradamente, dé regreso á Buenos Aires, Es preciso marchar ganando tiempo, para. que siempre acompaüado, de su secretario el gene­ no caiga otro de los nuestros antes de llegar ral Ortiz. usted: , :EI Gouerllatlol' }Ji~o montar unll eotnpaüia. dH •. Qwroga; tr~o el anzu~lo y cr~yendo de buena buenos soldados para que le sirviera. de escolta. te lo que su aliado le decla, se , dispuso á marchar pero Quiroga la. rechazó. en el ~to. . . ,Tenia la conciencia; que no habia mejor es- --SI voy COll el reguwento, la marcha. sera mas colta que el prestigio de su nombre, y ademá~. len~.,. , _ . , en su valor soberbio, no creia. que hubiera gente "oy lt dejarlo aqni, anadió. porque 'plenso pe- capaz de asesinarlo, sobre todo alli, en medio ele ~:tr la vuelta p!-\ra que no::! pongamos de .acue,rd~ todo su poder y prestigio. ' "o~l'e las Dle,hdas que hemo!:! de tomar Silos llDl- Viajaba en llDll. especie de galerin, rudadn in" IMIQ:; rHapareeell.. _ ¡definible, tirado por fuertes Dlula.~~. Por lo prouto ~·o voy lt lancear a. cuanto::! en- Cuando lIe,~ó á la posta. 'lue está á In. en fradfl, (.uenl~e al IlUSO. , Idel monte donde lo esperaban los qllu Jwbian d~~ --"aya,. tranqUIlo, que y,0 ~l1e encargo de llenar matarlo, el dueño de ella le ofreció unós cuantos la.s nece~ldades ~e sureglDlle~to. ., Ipeones para que lo escoltaran hasta Córdoba. Rosas concluyo de .eng?losmar a QUU:0~;tCO? Pero Quiroga los relmsó, COIDO habia rehusado bendC?~ planes ~e dommaclon y . s~ despldlO .de el la escolta. que le ofreció el Gobernador de Han ofreClendole dmero para su VIaJe, que QUlroga Luis rehusó pues la jugada de la Figueroa. ~babia sido '", .., " > paraél una especie de Banco. -:-~o none\;e~1to~~as e::;c~~ta. clue mI nomun, ~ Al otro día el general Quiroga se puso en mar_len ultImo caso DIlS pIst?las, diJo: "" '., fha, acompaüado del general Ortiz como secre- El de la. posta puso ~ volantm '1m mCJotc_:; JD.I~­ ta.rio- ,las,y despues ~e las m~l ~L?l1lonerlas quo le llISP¡' Ouirog.. l. pasó ti. Catamarca. Rioja SaD. Luis Jll'aha e~ temor. se despHho de los do:; gl'lle!"~lc:" ~a~ Juan desde donde mandó uar á' Rosas cuen-' 1\ledla horu..t1espues entraban al mo~tf' tatal ll10 de 10 que habia hecho anunciándole su :pron.! E~ un pasaje nuts estredlO ~lIC ~ab¡a" como ti, to regreso.' 11a lllltad! estaba. alJOstaua la partIda. él. ambo::> lado: Es voz general y cosa probada, que Rosas ha.1 del cammo., _, .. . ,lIia mandado sus instrucciones ti. Córdoba, paral Un .raro pre~entlUllellto ~alJla a.s~tado al ~e­ que á su regrese quitaran de en medio al temido Icre,tarlo de QUlroga desde que sa]¡eron de :-tan general Quiroga. ' \LlllS. Era e:ntQnces Gouemador de Córdoba, el ues- Los caminos no estah!tll -i!guros y la insistencitJ. graciado Reynafé, víctima mas tarde, como sulcon:que Quiroga rechazal,,~ Il1.s escoltas que le hermano, de la ferocidad de Rosas. 1 ofrecian, no le daba h1lena espina. Las órdenes de Rosa.s fueron trasDÚtidas por. -1\1e pa:rec~, .tleci~ el genel'al Ortiz, que es lllliL el Gobernador, á su bermano que era t:omandan- ImprudenCia Viajar SIn escolta., sobre todo, cuan- te General de la Provincia. do se tienen enemigos, como usted los tiene. Eran tales y tantos los clilllenes y actos fero- -El miedo que nle:tiell~n me libraria d(l ces co~etidos por Quiroga en las provincias, que cualquier atent,ado, repuso Qwroga, convencÍllo no habla un 1 solo hombre que no deseara su de lo que de CIa. • muerte. • ~i vo viajase con escolta. les cIaria á entendln" Lo servian y obeuecian en fuerza del terror que ei-a posible .iugarUle lwa uut!¡¡, partida, y esto q ne les inspiraba y porque sabia». que el que no en llingllD easo es buen~ acatase sus órdenes, perdia la. .cabeza, irremedía- Pierda usted todo recelo que nada nos IIa de blemente. suceder. La muerte de Quiroga era eosasanta para aque- ---Xo es que JO tenga recelo, repuso Ortiz, no Ha. buena gente, pero quién se atreveria á. he- queriendo confesar su presentimiento: observo l'irlo! una imprudencia y nada mas . . Temerían morir antes ellos bajo su mirada de Los unitarios son muy traidores, ellos le tie­ tiera. _ nen:l usted un ódio á. mnerte yel! preciso ler I.O!l uermanos Rey:na.f'M, se pusieron de acuer- precavidos. - 11'_ f..!uirog¡t :;Ollrió creyclltlu '111L1 .su COUlllañcro desclLl'g-ti Sllk l¡j¡stola. ," 6tH'tI .. u 1'láíal, :S&bto~ 1"'- tenia miooo y le pidió un cigalTo. rez no se sintió imprel:lionado. «:ntralJIUl ~l c&Jl~ino mas estrecho del lDo~te. Tenia, }lor delante, para él, llll "lJlllhre Igual ... :Sa.cabaOrtiz el CIgarro y lo al~anza~a á Qwroga, los demas, ya se llama.se ~lúroga, ya de cualquier cua.uUo sonó una descarga terrible, a ambos la.- otra manera. dos del camino. El gelleral Urtiz habia !>alido ,tamblCu de la vo- Uno de los caballos y el que guiaba la. volan- la.nta. y con la. espa.da. en la mano permanecia. iu. ta. rodaron al suelo. " movil, sin saher lo que dehia de hacer. De los dos lados del c¡t1umo siloiieron 1011 quo :-li no era su persona lo que se buscaba ('reía. formaban la partida que mandaba Santos Perez, que no :il'l'ia (~onYeniente provocar á lo~ ase- creyendo estQ que todo elltaba conclu.ido. sino s. Quiroga como un verdadero ~igre, saltó al ~a- -No se acobal·de maula~ gritóle entonces Qui­ mino por la. portezue}¡\ a.martIllando sus plS- roga.. y avanzó sollre :Santos Perez que lo miraba tolas. sonnente. -Alto ahí cana.lla.!! ladrolles les d~io. La fisonolllia. tie tJuiroga Itltbia. tulllallo ese as- No sab'On que)"o soy el gen~rnl Quiroga'! pecto fer~z y sombrio que ad'luiria en los momen- -Ponso mismo, replicó Santos Perez, es que tos de pehgro. , te voy á matar, para librar (t los pueblos de se· Indudablemente,sl llegaba á Pel't~z, el:lte era lIlejante bandido. homb:t:e muerto, por mas bravo y agiJ que fuera. Entre tanto 108 soldados habian \'llelto lÍo car- . El tIgre de loslla:nos era ~a tiera,pero una gar las armas y permanecian atentos ál/\ voz del tiera serena-en medio del peligro, dueña de todos oficial.' _ su:;~ecu~rso~ y plenamente convencida de qua no Quiroga comprendiú l'ecien (jue se trataba de habla ,qUl!3~ tl1~ra (':a.p~ de arrancarle la ,ida. asesinarlo. -F ueg?, grlt~ :Santos. ~.erez y la segunda det;. -Ah! hijo de mala. madre! gritó y se lanzó sobre carg~ sono terrIble, ropluen,dose su éco entre Santos Perez descargando su!=! pistolas. los arboles 'seculares qlle formaban el tupido y como estas ya le eran inútiles, las alTojó sa- monte. cando con presteza un puñal que llevaba siempre :El general Ortiz rodó entfe las ruedas ,uel car- en la cintura. ri-coche, dolorosamente herido, El tigre pareda dispuesto á vender cara su vida, Habia recibido dos balazos en rel pecho v lUlO y aÚD creia imponer á los asesinos con su valor en la. espalda. • sobrehumano. Quiroga se detu\"o ti. mitadlle camino. lanzan- Perez por su parte era un oticial bravísimo, y do una maldicion digna de él. . el único tal vez capaz de aCODleter aquella. em- ---Hijo de. mala madre! agregó. ltcércate á. mí presa. ¡pa.ra siquiera tener el gnsto de darte una pu- Indudablemente Quiroga era un hombre tIe IDI ñal~da,! , , vaJornovelesco, y de una tibra. eseepcional. Santos Perez solto ulla cllol'caJada escla- Su solo nomhre infundia temor y respeto, al mando: , ,. .. , cstremo de qu~ en todo el interior no se hubien -La p~rra, y que 11oJo habla Sido el tigre de encontrado un hombre capa.z de salirle al en- los ll~os, .' cueDtro para matarlo. Qw~oga q~.so avanzal·, pero no pUdo., Los mismos que 'á' su lado ha.cian verdaderas Habla 'r~Clbld~ UQ. balazo que le fracturo el huc· proezas en un C&DlpO de batalla, se sentian domi- so de la pIerna a. la altura del muslo. nado s por él, hasta. 'el estremo de tener miedo - Vamos á. ver puerco! agregó Perez, ya que cnando le veían enoja.do. eres tan malo y tan bandido, como te compones No se hubieran atrevido fue!a de duda, ni si- en este trance~ '1uiera á defenderse atacados por él. Quiroga lanzaba lIIalllicío,ne,,; terrjllles, y en ~us 1>or eso es que para acometer la empresase pupilas negrísimas habia. algo como un infierno. habia buscado un hombre de un valor á toda Sus láhios trémulos dejllban('scapar ¡mil p.o;:. prueba, y--que conociera poco al hombre que se puma bhmquecina. fra~ba de matar., ' A 111m mirada de l'i¡¡,llTo.:.lJtlre~. "'&l,'; ~olrla.Jo~ ~,' S~nto.~ P~ez: pum., aC~J):o ~l. encargue do lila: lan¡.ra.ron sobre la~ ,'c:Íctim¡ls, cuc~illo en mano. . tar a. Q.wroga! como hulllet.~ .tt;eptado tll tÍo ma El generalOrtlz y I'l que gumk~ t'I ca.rri-co- lar al diablo.,.. , , . . che se revolcaban aún en un charco de sangn'. ~o conocla. a. QUlroga DI ha.bm tClUd~ OCaslOll Aquello fué obra de un minuto. ue \'tlrlo eu lUugun c~mpo de bataJIa, dlsputando La:; calH'7.a~ de aquellos desgl·¡¡.,'jatlo!f fueron ~t:1'Sona.lmeQ.ttf la. V!ctorla. I.Ol! la punta. ile su bepiil'ada:. del tronco, C1>U UllJo l"d.pid«!: vertl­ l :l!l,;:a., 6 tUIr..a.!fdo á ponc.ha.zos a..l üellt~ do SUi.ljjnoca_ "r'3:iiJl:l~s.:o:; ca:i.o::e2 e~;j:cligc::. Al pa.s;;s por (\1, h~o de Qlli.rp~a. lUlO de lo;; lot eso cUln¡;¡o E-lg~neralQI1'trt:'ga ~" nclnht, s~LhdoE, ~q¡l~}, (!¡:,mmanJo- d dIO!:)!" de la he - 11:, - río, lo sujetó Ilel chirip:í. ron m~no hprc(tIPn. y Las -pro\,jncias qnedahnn ~jbres upl bnnnÍlln 1", abrió el estómago de tmn. puualadn.. ma~ feroy. qut'!.!le haya. conoc~do en ellas. . }C~I soldado rodó :í. !'Jus piés pRl"ft. no levnntarsp Esto no pmba. lIamars(' 1lI n. crímen, nI I1n mas. (lolito. Quirogalevantó elpuñaJ, blandién~o!o de una Quir~ga ha~ia sido .I~n b~~dido, rontra el. qllf' manera. feroz r miró á Perez como ~clendo: . no ,habla habIdo ley 111 .JUStIr.lIl. - Ya VI'S miserable que atín !\o~' F acunrlo Qm- Sus crímenes lo habum puest.o fUAra dl'l toda IAy 1'0170.' Y el que lo matara, cometia. una accion humaní- ferez se lanzó sobre él. taria, puesto que libraba á puehloll enteros del Algunos soldados quisieron ayurlarlp, Jlero pI puñal de un bárbaro, que no tenia, para distin- los contuvo con un ademan. guirse de la fiera, mas que la figura de hombre. Queria medirse con (~uiroga. . ' Sumu'tl~e. fué, pues, festejada en todas aqu~- )Jerez tenia la enorme ventaja de que Su ene- llas pro\'mClas que habla asolado de todos mo­ migo tenia,embarazado todo movimiento por la dos, matando :í. sus hij9s y escarneciendo sus mu- herida de la pierna. jere!!. Pero en .honor dP lA. ye~dad; era capaz de ha- 'Ninguno se atrevia ¡,j. manifestar en I.úblico la ¡,Ierse medIdo con ~1I \,ctima, aún con Ilesventa- alegria que dominaba. á 1ft generalida, porqlll'! .l¡1. para él. hul,iAra cometido delito de lesa-federacion. Aquello fufS una esperanzil para, el tigre de Pero en la. intimidad del hogar, la muerte de Jo') Banos. Quiroga fué festejada de todos mOdo.ll. Luchando con su asesino, estaba seguro de, Ya no podriael tigre hacer uso de sas garras ma.tarl e y entonces le seria fácil dominar á los y ferocidad, soldados con sn sola voz y prestigio. Quiroga, en su fiereza no han)enido si mil. Si aquellos ;se habian atrevido á. agredirlo, era El coronel Bandes es el único que ha llegado á. indudablemente por respeto y temor á su oficial. aproximársele, pero nunca á. igualarlo. Pero muerto este, Quiroga se les imponrlria por La huella de sus pasos está marcada en las a.quel mismo acto.' provincias de Cuyo, por (',entenares de monte- La lucha era terrible y encarnizada. citos que indican tal ó ('ual matanza, por elIoR Concluido el degüello de los otros dos, los sol- cometida. ,lados contemplaban at,errados, la lucha de aque- Hoy mismo, en los llanos de la Riojn, los pni- lIas, dQs fieras. . . '. 8{1J10S tiemblan al oir pronunciar su nombre. F ac~do haCIa. lo pOSIble por. ultImar a su Parece que su recuerdo y su sombra fueran á rontrano,. qlle habla logrado ya. henr en. un bra- traerles nuevos cataclismos y matlUlJas. 7.0,. pel'o mdudahlemente su hora habla sona- Santos Perez, con la mllerte de Quiroga se hi­ do n'a. zo una especie de héroe, sobre todo, por ]a ma- L.'\ fractura de la pierna lo hacia. sufrir de una nera bravia con qu~ la habia ejecutado. manera tremenda, imposihilitando tOlla 8U a('rion Reynafé mandó dar cuenta. á Rosas de la muer­ ,1(, ataque. . te de Quiroga, quien inmedia.tamente la atribuyó Sa.ntos Perez le partió la rabeza rle un ha- en documentos públicos á los unitarios, qua solo . ("hazo. _ querían ensangrentar al pais, privándole do Sl1!Il Quiroga cayó. envuelta ya su mirada en 1m tor-1homhres ma.s culminantes. rpnte de sangre. . Quedaba á. Rosas otros manes que inyoca.r, y -A.sí, le gritó Perez, tomándole del pelo; otra muerte que vengar. f'1I personas inocentes, Así, bandido, ('omo has muerto y hecho morir puesto que era él el únit'o responsable de ella. :í. tantos! . y los Reynafé vinieron á. pagar mas tarde con . Quiroga hizo un esfuerzo supremo paro desa- su vid~, aquel s~rvicio q.ue h~bian hecho á la Clrse de aquel enemigo implacable, pero aQ1l81\hu.marudad, por mtermedIO ~e.Santo9 Perez. e~fuerzo no }>jzo sinó debilitarlo mas, !I{¡\s tarde y con poder s.ufiClcnte para ello, Ro- Un momento despues, rendia la vida; DO si.l¡ S~B hizo le.vantar un.sumarlo 80hre el cobarde aSE!­ habel', antes, como última injuria, escupido á la ca- ~ smato del Ilustre (~Ull'Oga. fa de su matador, con una baba sanguinolenta.! Traídos 3(luellos á. Buenos Aires y despues de ,~!;í murió el ti~e de los llanos, el asesino de- permanecer en 01 hospital, curándose una en­ sapIado y cmel, bn:jo cuya. palabra habian sido SR- ~ t'eJ'mcdad fiue- los martirios les habian hecho con­ cl'lficados tantos Inocentes como los venridos en' traol' fueron condenados á. muerte y fusilados T1Icuman. ' frente al arco del Cahildo. Los soldados I'e entregaron en seguida. nI sa- De psta nueva matanza nos ocuparemos á 811 ,!nAo dI' los cadáveres. tiempo. de una manera detallada. :'iantos P.erez se apoderó del cam-coche, y.en\' Tomemos, pues, el hilo de nuestra. narracion, pI ,rt'~resó a ~~l'doba Ú. dar' "11pnta. 111' hahE'\' f11m- que entra. á su pa.rte dramáuea y mas conmoye­ ¡ollilo ;;11 1'f!101S1on. . llora. en la n~rrarion dI' 10<; rrímM1E!~ que han -:Ilt. be,'ho I!la.ldit~e~te célebre In., tiranio. tlel mille-, Todos ehOS crímenes compren1lp.rán (11 mntp. mhl!' t'llya 11Istona narra,mOl! It grandes rasgos. rial de nnpstro lihro t,.rcpro.

Los preludiol!!t

('omo hemos di~ho, Juan Manuel d~ Ro~' San José de Flores," reci),ir 6rdeneR f'Obl'l' prepllraba dflsde Ji lores la. noche. de vemte anos lo que debía bacerse. (Jue, como un manto .de lUuerte Iba á caer sobre -No se puede ser fiobernador Pon (opora tun a República Argentma. arastranl10 en Sil vorA- difícil, dijo Rosas. lOf~ It la valient.e Re]lliblica llruguR.yll, como lógi- El pais se viene abajo y para comener ('\ tler. ,'a. "on,securmcia de la. ti~ania. ... ,. r.umbe, se necesita una mano de fi('rro y pleua \'11. ~poca de lo¡.; "aullidos crJ,lldos 1'11 f folner- hhertad de aecion. )los iha. ¡¡ comenzar recien. Es mucha respom~abilidad para mi fJIlU QP. tI'- 1';1, Rh'Pl'o, aqup,l quP inspiraha el brisllis "hrin- suelto retirarme á la vida tranquila ~ y al m:mt'jll ,lo por pI gancho Rivero", habia caido bajo el de mí~ estancias ahandonadas. . , .'aJitiMti\"o de pardejon, por haberse negado á en- 1.08 ilustres representantes adivinaron rl llNI' 11'pgarle las personas dejos emigrados nnitu.rios samiento tlel patron, insistiendo en ('1 nombm. :,¡,llf asilaclo:-. miento, qne se r{~mit.ió con una nota, lleo!\. rle ala. La p"puflla y pI ~nlJle de los calHIíllos nms bár- banzaR y a1l1llaeiones. . hn.ro", iba á. t:>ncRl'garse (l~ dol.lar la (~f'r:\"j;r. de aql~el -El pa.i!l P9ppra estH. nuela prueha de patl'iotis. lItlróico pueblo, el mas bravo tal vez de todo el roo y amor, de tn:n ilustre y escla.recido dudada • •~ontinente americano, y el retilgio de los infAti-lno, le decian, y todos esperamos que R8 digna.­ ces señalados por el dedo inflexible de la ma- rá. aceptar este nuevo sacrificio que lA impone Ja ¡¡orca. patria. Estando por terminar el Gohi€'nlo provisorio Pero el ilnstre Restaurador volvió " arrojarle~ dpl general Viamont, la. Sala <1f' Representantes por la cara con el nombramiento, manifestando se rounió sol~mnemente, para. elejir p,l Gobema- que esta.ba. decidido á. no aceptar el Gobierno dp dor propietario que debia suC'ederle. . pais tan ingobernable. \"a hemos "isto' como estaba (lispllesta la vo- Aq ui fueron las pellej erías y apuros de los ho- 1arion federal de línea. I norables Representantes. . ' Despnps (It I'len.las discusiones, tendentes álli- (!uatro veces insisüprQn en el nombramiento ~.ilnllliU· el inkuo enjuague, la Sala de Represell-¡Y cnatro veces lo rechazlÍ Rosas, amenazando oon f¡mtp~ eligió GObernador a.1 ilustre hrigadier ge- 'remlDciar hasta t11 cargo ¡}H Com&mlante Genp­ neTal don .hmn Manuel .le . Rosas, n,p,stanrador ral de Campaña, siempre pretestando el tener .te las I Aj'es )' héroe larl u(,sif'rto y de la indepen- que ntend~r sus int~re8es, y l:iiempre persiguif>lI' ,l(lncia americana. do su ideal. l~pr() se encontraron con que el ilustre Restau- La suma del poder públic.o deposit.ada Vil lIIIS. rador le 'voh iú e l nombramiento, por no ~mcon- manos perversas y criminales. ? trarse capaz de llesem])f'ñar el . cal'go en ~poca Aquí empezaron los empeños, las comisiODt"iS y Tan dificil. los 1l0riqll~OS de todos lados. Todos comprendieron que aquello no era ma. Cumplido el plazo!I\ra. que 'habia sido electo flué un& farsa del héroe d1l Santos I.ugares, pa- Viamont, y quedando el puesto acéfalo porque ra. mejor lograr su ob,ieto, engaJiando al puehlo llosas no aceptaba, se hizo cargo del Hobiemo, que a(m no lo conocia bien.. basta elegir el propietario, el Presi.dente dE" la Rosas quería el Gobierno, puesto que bahía si· Sala., don Manuel Vicente dfl Maza. dI) la ambicion de toda BU vida. Este era el hombre en qtúen Rosl\S tenia lit'- Pero quería un Gobierno sin leyes qué reSpe· positada toda su confianza. , lar 'Sin límites de nccion y sin censura de nin- Consejero privndo desde Dluchos años. esta­ ~~ género. ba al cabo de todlts las intrigas y rrímt'nes, en . Queriarecibirse del Gobierno como de una es- los que le habia ayudado con tolla Sil 11odl"rOl!11 tanda sin mas autorillad que la suya, para eue- inteligencia. . . rear, ~atar y destrozar á. su antojo, Rin que na- El Gobierno de Maza era el Gobierno un Ro­ tlie le tomara cuenta de ello. sas, puesto que este no era matS tllle ",1<11 subru'- }~8to era no solamente mas cómodo, Binó la dinado. t1nica. manera de perpetuarse en el poder, como SU8 actos iblW á pasar primero por HU ceu8nt'8 Jo bahía penaado. . como que·era él eleDcargado de hactlr 101) traba­ A oto la. renuncia. de &1&8,1& Sala. ele Repte. JOI par... que /lO 1. nombrAi'1i. G.tjh"1'"lj.d~r, ~.¡.". ~.~~~tl,!ll.·~ !\b,.!~ 1!\.111~A bnr..) y un", !,.!)~i~l'!' ,J~t' to~'~ ~\\ 'H!!!1.ft ~e! !'Cl(ll'l' ",mJJ.1c~; -- )Ji -

Los uuitarios y lomos negros, coruprendiehdo Que la. pa.tria esteuuatla. cayerl!- d~8JlUe,,' en 1111 que Maza iba lÍo caer sohre ellos como una. ma7.a charct de sangre, poco les supoDla. verdadera] y en la c.erteza de que el Gobierno de :-liemprfl los judas son los mismos. Rosas, en la forma que él deseaba saria una cosa No hay ma!! que nn solo molde para VR- 'lue no podin. tardar, empezaron nueumente ti Iciarlos. . ('migrar á Montevideo, liquidando ~tlS intereses,. -.~ ustedes, dijo entone.es ttoila A.gustina, v.0y no solo para sah-arlos de la raJliiía ff'deral. sinó :i rIarles un consejo para. que (:on pO<:I1. fa.tiga para. tent>r recursos de "ida dUl':lnte la época del vean colmados sns deseos. flestierro, que iba á ser larga, f\1l'ra de toda. duda. ]~os comisionados se volvieron puro oidos, co- Bajo la Tflleneia. de Maza, los federa]f\s exalta- me se dice, para no perder una sola palabra el.! dos se sintieron apoyados por la antoridad y em- aquel consejo. I !l0zaron nlleyamente á perseguir por su sola l'l1en~' -Si ustedes quieren que mi hijo acept.tl el Go­ l:t :ilos unim.rics ó clasificados de talf's. bierno, dénle las fítCldtades estraordinarias para LOit'mpeños para que ROS8.S aceptara el Ho- que gobierno el país como gobernaha mi~ estan­ hiemo, asumian f'Iltre tan11) un t'RJ.'lírtl'l' epidé~ cias, Y'l\cel'tari"~ en el arto, Ilúeo. Ahora, f'l dia que ustedAs le pidan cuentá Doña Encarnacion, qu~ era miratla l'ODlO una de ellas como lo bieo yo, les volverá. el l~obiernll (·~pecie de Restauradora, /!le ,'eia :tsediada de to- como me \'olvilÍ la administrn.cion ¡to las f'S- .Iall partf'S, para que influyera ron su consorte _le tancias. . . manera fiue aceptara el Gobif'rno vacante. Aeluella comision se retiró entonces sin atrf'· Or.ras comisiones salieron á Flores, á la quin- ~'el'se á adoptar por lo llrCmto aquel consejo. fa de Terrero, donde paraba Rosas, para. rogarle Ya se sabia práctimamente del uso (fue .'hada do l'odillas que aceptara el nombra.miento ele (Te- Hosas de las facultades estraordinarias y no tI"­ Ilprnador, sin obtenel'lma resplleSht categórica.. nian el suticiellte \'a!orparn I1ro~tr~\J.· ti'tIO<"l.iIH. rF.:-· Rosa.s quería qUf' Ip rogara.n. ponllahilidad. Creyendo que dofia. Agustina fuera una buena Sin embargo,era preciso decidirse á. todo trance. influencia, se apersonó 'ella una. comision com- La situacion se hacia. caQa vez mas tirante y si Tme!lta de 108 miembros mas importantes de la. Rosas demoraba en ocupar el Gollierno, el par­ Legialatura. tido unitario podria organizar rugllD golpe de -Es preciso que usted aconseje á su hijo acep- mano. . . te el Gobierno, le deCÍan atlijidisimos, porqne de La Sala de Representantes, bajo ht 1,residenC1l1, ello depende la'salvacion de la patria. de don Manuel.J. Pinto,por estar i.1aza de Gobcr• . -y qué puedo )'0 aconsejarle? respondi~ son- nador provisorio, decidió hacer aceptar á. Rosa·" nendo la buena. señora. el Gobierno, á. cualquier precio. Mi hijo no admite mas consejo que el de su so.- Al efedo se reunió y sancionó una h·'y, {(ne Sfl ~rada voltmtad, y es inútil que yo me empeñe. apresur6 á comunicar al Gobernador provisorio, .lll~ Manuel no admite con.sejos y mucho me- y cuyos artículos mas importantes decian: nos 1UI0S, que poca ó ninguna influencia tengo "10 Queda uomhrado Gohernador y ('a.pitan "1\ su espíritu rebelde. . General de la l)rovincia, por término 11(1 '('inro 1'0rqllo aunque. Rosas aparentemente estilha años, el bl;l!:ahier general don Juan Maunf·l dI'! h¡(m con sus padres, doña Agustina que lo cono~ Rosas. . ('ia á. foO(10, sabia que no le perdonaba y tal vez 20 Se deposita toda la sllmadel poder púhlico no le p.erdonaria nunca ]a historia aquelll' tle sus de la Provincia, en la persona. de] brigadier sene.- estancias. ra! don Juan Manuel de nosas. -:Pnes interpon~~ su influencia con don Leon, 30 El ejercicio de este pod~r. ~straordin~o decla aqtlella.~cOml810n, lluemando su. último car- durará por todo el tiempo que á ollUCIO (lel Gohler· tucho. no electo fuere necesario". Ta~ vez (·1 pueda persuadirlo y logre con su I.a provincia de Ruenos Ait'es podia m:md:lf autondad pat('rna, mas que nosou'os COll todos construir su ataud. nu~st;os ruegos. Pero poco suponía esto. . Senora, agregahan en el colmo de la. a.fliccíon El briga.dier Rosas subia al poder, y los trl"lota ~. JJenet~a~~s de un santo amor patrio notable- dineros se aseguraban á perpetuidatl. 10l'1.i (l ... J~II trtiD- Todo era bulUclo')' alauar& terrlbli,. .' .;\ "!"~T'\~ T ' 'It'l er" le vr!no1pp,t. ,~ !!'l~nt ••~ t~'1 ~~í1I'1I'~~ rll) ~(lr..te fll.1 t.!'!l~!~ - 'l1k

.aban fL la casa del ihlsh'e Restnurador á hef;a.rlfl A'oste no Sf\ lo sacan Ile f'\ncimlt en tolla sn ,-icIa. la.lIlallo, el populacho felleralllll.8l'aua pOI' las ca- ¡tosas tuvo conocimiento (\p, ('<:t6 dicllo. '¡Uf" Ilt"s el retl'ato de So E., á. son de músit'a, cohetes y valió ¡j, Miguens tOllo género de pPTsecurionell ~. Iltltemplados vivas lA la federacion. ¡;;in8abores. La misma divisa fué voluntari~~nte tl'ansfor-¡ El partido IInitario podia darse por muerto ~. mn.da en leyenda, de la mam'ra 8Ig11l p nh': !Anterratlo. Vit'a la Co"r~dn(/('ionAl:fJel/f'i"rr.' !. Sus mÍcmbros andaban dispersos y emigrados 21llfeNN los .w,'ra.ie.~ "/lit('frio.~.' i eare('iendo por el momento, aún de los f\1f'!mp.nto~ I neeesarios para dar señales de vida. y era talla. ex.altacion federal, q ne el .J ue1. lit) .\nte8 de entrar al tereer libro, que abrazará Pu de la. parroquia de Monserrat, llispuso que, la ('poca mas dramática. de la tiranía, vamos á nar­ toda persona que entrara al juzgado. por cualquier rar á nuestros lectores la manera curiosa. cilmo eueation, antes que el saludo dir~iillo al mi~mo ~c formó el Imeblo dol Azul. ' .Juez, debia descubrirse y gritar: i }:¡.¡ un hecho casi desconocido que no debemos Viva Rosas! ... !pasar por alto, porque en ~I está estereotipado ~I Sin este reqwSlto esencIal, 110 liolo l1D eral carácter liia~ rIt· no nf' R.osl\S y fnenp hllcennatlo dA l Sud. ~antos Lll~are!l (le Rosas.

La forOla.~ion del ~~zul

Muchas veces Rosas, cediendo IÍ. in¡.;tancia~ delen usted como la personR mas apropósito )'\:\r:\ amigos áquienes ('omplacer, IlRhia Ilpcidirlo for.!,ayudarme. mar UD pueblo en el Azul. .: --Señor, replicó Burgos, que era puro almíbar .P~ro por mas qne habia aguzado su magin, no 'uelante del Restaurador, estoy á las órdenes habla. alcanzado el medio de realizar su idea. 'de V. E. -:-V. ~. no df'be bajar del poder, le dedan )os! -Muy bien-Re vá usted f'nton"('es n\ AZ11l amIgos mteresados de lleyar á caLo aquella idpa ¡mañana mismo. durante el tiempo de su primer Gobierno; : En cuanto llegue, se dedica sin pérdidA. lit' V. E. no debe bajar del poder' sin haber dota- ¡tiempo á la fórmacion del puehlo y mp dá ('uenta do á. la provincia de su nacimiento, con un nuevo ¡en cuanto ha~'1Io terminauo su trahajo. pueblo que tanta. falta hace en el Azul. El coronel Burgos declaró que no se sentía D~ ~sta manera las tierras tomarán mas impor-! con la inteligen~i.a necesaria para el uespmrwüo tancla allí, la fron~era quedará mas resguardada: de aquella COIDlSlon, agregando: y el paistendrá un nuevo motivo de agrafleci-¡ -y con qu~ gente he de formarlo? /" miento hácia la esclarecida persona de Y. E. áj Hombres no digo que falten, si V. K me l:Ol'-¡ duclendo alrefendo capltan y la carga que el lo tes (le rancho v llembrado muchas chacritas. intlique. Los milieos que temblaban de emocion aute '1 Pedriel t:Olllpltltalllente ignorante de lo que h\ l)erSpecti\'~ de que iban á ser propietarios de se trataba y creyendo Illle esta fuera una simple un rancho y una Chacra, trabajaban con un ma- b~oma d.e la::; .l{lW aeOf:¡tUl~braba dar Rosas, se l'avillosO empeilo. .llispuso a partll' pura cumplir las órdenes que le -Solo nos falta, Ilecian picarescamente, Uila ha.bian dallo. costilla con quien partir tanta grandeza. -Exijirá H,tf'd rutiLo al capitan Garmendia, al . -Caramba! esclamaban, y como se luciria pié de la lista q \le de esas damas se. formará an- aqui una matrona. como Dios manda. tes d~ la entrega, concluyú Rosas, despachando á. Se iba á. dar mas tono y mas mfulas que una 1'ed1'1e1- autoridad de pueblo! . Esa. misumlloche á la~i~z la ciqp~d era lor- Concluidos los elementos que se le hablan da- prendida por lUl aconteCllllJento estr'lLfio. do. y con un plantel de quinientos ranchos y Dos patrullas de soldados, con un sargento á. chácras, bajó á Buenos Afres, á dar .cuenta del la cabeza, arrestaban y conducian á la Policia, á. desempeño de su conúsion, al her6ico defensor toda mujer que andaba solapor la calle.· de la América.· Era una noche de invierno, fri:t como untém- -Lo que es el pueblo está ya . formado, E~mo. pano de hielo. l)eñor, decia. Los transeuntes andaban por la calle tapados Pero el milicaje se queja de la falta. de muja- hastr el punto de dejarse ver apenas la punta de res. la nariz. Creen que para mejor llenar loa deseos de V. Las mujeres que alegres y leves transitaban E. necesitarían casarse cuanto antes.' á aquella hora por la calle, eran algunas mucha- -Que no se aflijan esos pillos, que yo ~s he de chas que, acompañadas de la. tia Ú (ltra parienta, proveer de todo. se retiraban de alguna reunion ó visita de bar.. En su perra vida se las han de haber visto tan rio, envueltas en sus l\brigos. gordas. . AlglUlas otraslhn.. eres de vida Dlas Ó menos Al dia siguiente Rosas hizo llamar á don Gena- dudosa, c1'm:aban las calles solas ó acompañadas, 1"0 Chavea, dueño, de lUla tropa de carretas, que pero de una manera mas pesada. pa.raba en la plaza de la Concepcion. Eran dueñas de su tiempo, no tenían 4 quien -Mañana,le dijo, espera usted con su tropa dar cuenta de haberse ó no retardador les era. lIc carretas, en la plaza de la Concepcion, sin indiferente llegar á sus respectivl)s casas una. hora faltar una, las órdenes que le trasmitirá el gefe de antes 6 despues. policia, las que-obedecerá usted al pié de la letra. Con ruenos abrigo, y UeSafi8Jldo el frio de la. Don Genaro Chaves, que perdia con este motivo noche con el calor del IIstómago, cruzaban tam­ una buena ganancia, pues ya. tenia fletadas sus bien las calles, mucho lilas pesadas y vacilantes. carretas, se retir6 dado á los diablos, pero con las mujeres que, sin otra mision 'en la vida qda buen euitlado de no dejar traslucir su mal humor. ; la de ado.rar á. Baco, salian de la pulperia, porque Quién era el guapo que se atrevia á protestar era la hora de cerrar y las habian echado á la de una órden de~osas, aÚll con la mirad.. t? calle. Don, Juan MaIillel mandó en seguida lla.mar IÍ. Este tipo original y travieso, lleno de 'vicio y don Gregorio Pedríel, gefe de Policia, á quien dió desverguenza, no ha faltado jamás de nuestras lall originales órdenes que siguen: calles, á altas horas da la. noche, buscando d· -Esta noble álas diez en punto, enviul'lÍ usted sitio donde han de atorrar con toda tranquilidad. Jos levas que delwn recorrer toda la ciudad. En estos tres gremios bizo prnsa la Poliria Estas ¡(was tomará.n presa y conducirán á \a aquella. nOOOfJ memorable, IIcYándolas i nntas y 1'11 Policía. toda mujer que despues de esa hora, tran· jhorrible confusion al IIotel del Gallo. . . • ,,;tP. por las calle!:!, sin cl)mpQ,wa de hombre. El llanto de la \'ergonzOSll. ChiruSll., se mezcla- . -Habrá que hacer al6Una escepcion? pregun-ba á la insolente discusion de las perdidas, mieu- TI) Pe~~iel, sin saber de lo que se trataba. tms laa humildes y tragantes muchachas honestas • . ~lUgUlla, absolllt¡~mellte ninguna, rcpliC'ó se cubrian 10H ojos y oidos, para no ver ni esci.l- ho'.a.;.;. t:har :\clueIlos horroreH . . ~i ~ proph hija. ~.l!d;¡'31)~ll.l:'Or h. t:i.lle. I.t lu- Cu

y aseguran que una de eUas venia. Je ~.na. aVCll-\naJ, ac 'luojIUOi$ Jel peinetero tura. amorosa, aventura que se descubrt,opor es- Masculmo: . la P.straña prision. '. I R?SRS rIÓ como un tlesaforq.do, tomlÍ.ndose la. Al día siguiente, bien de madrugada., la cIUdad \barriga. con ambas manos COmo si temiera. faera. á. era un conflicto.. reventarle. Quien huscaba. :í. su hija, qníen lmsealH]. :í Esta. risa teniA. completamente desconcertado'J ~Il consorte y quien en fin, á la. herl~an