El Catálogo LAS CAJAS DE AÍDA

Total Page:16

File Type:pdf, Size:1020Kb

El Catálogo LAS CAJAS DE AÍDA LAS CAJAS DE AÍDA El catálogo LAS CAJAS DE AÍDA El catálogo Investigación, clasificación y realización: Silvana Di Francesco, productora de cine. Gabriela Tania Fantl, directora de casting. Patricia Molina, periodista. Teresa Téramo, profesora en Letras. Las cajas de Aída : el catálogo / Gabriela Tania Fantl... [et al.].- 1a ed.- Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Treintayseis, 2019. 248 p. ; 21 x 23 cm. ISBN 978-987-46500-6-1 1. Cine Argentino. I. Fantl, Gabriela Tania. CDD 778.5 Título: Las cajas de Aída. El catálogo Autores: Silvana Di Francesco, Gabriela Tania Fantl, Patricia Molina y Teresa Téramo. © Ediciones Treintayseis S.R.L Dirección editorial: Margarita Tambornino Edición y corrección: Carlos Zicanelli Fotografías: Margarita Tambornino Diseño de portada e interior: Donagh / Matulich ISBN: 978-987-46500-6-1 Impreso en Argentina Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723. Reservados todos los derechos. No se permite la reproducción total o parcial de esta obra, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros) sin autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de dichos derechos puede constituir un delito contra la propiedad intelectual. Esta edición de 300 ejemplares se terminó de imprimir en Elias Porter y Cia S.R.L., Buenos Aires, Argentina, en el mes de julio de 2019. Agradecemos a la familia de Aída Bortnik, especialmente a Agustín, Luciano y Marcelo Ferreira, por su confianza y disposición. A Fernando Castets y Juan Campanella, por su generosidad y por permitirnos conocer a la inmensa Aída. A Tomás Fantl y Axel Kuschevatzky, colaboradores en nuestro trabajo de catalogación. A Juan Carlos Nougues y Natalia Oreiro, por confiar en el proyecto. A Patricia Leonardi, por despejar dudas sobre obras, fechas y lugares. A Rolando Gallego, Fabiana Scherer y Martín Lucesole por alentarnos y difundir nuestro trabajo. A Nicolás Diodovich, Lidia de la Torre, Marisol Alonso y Teresita Riccitelli, por su colaboración. Y agradecemos finalmente a todos los escritores, autores, directores, productores, técnicos, alumnos, asistentes, amigos y artistas que fueron parte de su obra y están presentes en LAS CAJAS DE AÍDA. ÍNDICE PRÓLOGO I, por Fernando Castets . 9 PRÓLOGO II, por Juan Campanella . 13 INTRODUCCIÓN . 15 INICIOS [1963-1976] . 17 EXILIO [1976-1979] . 39 REGRESO [1979-2013] . 63 CAOS CREATIVO [1963-2009] . 217 SOBRE AÍDA [1938-2013] . 241 Fernando Castets, Aída Bortnik y Juan Campanella - Año 1982. Colección privada de Fernando Castets. PRÓLOGO I Cuando a Amos Oz, el escritor israelí, le preguntaron si escribía cuando le lle- gaba la inspiración, respondió: “Me siento cada mañana a escribir... o a esperar. Mi trabajo es parecido al de un tendero que abre su tienda cada mañana y espera a sus clientes. Si llegan, fue un buen día”. Pero mientras aguardaba a esos clientes, Oz trabajaba incansablemente. Escribía, investigaba, leía, corregía… Todo este caos creativo en alguien que escribe, como el de tantos artistas, se desarrolla principalmente en un lugar de trabajo: su cabeza. O su men- 9 te. Un sitio impreciso para definir pero al que podemos llamar el meollo del asunto. Si nos decidimos a pasar en limpio ese primordial caos, no hay muchas opciones posibles más que ponerse a escribir. Y a investigar. Documentarse, leer nuevos libros, releer libros queridos, hablar con la gente, escuchar a la gente, hacer preguntas, recor- dar respuestas, no olvidar ni unas ni otras. Tener recuerdos, tener memoria. Y todo EL CATÁLOGO eso, saber escribirlo. Con el correr del tiempo, las ideas se vuelven proyectos. Algunos se concretan y pasan a convertirse en obras: un monólogo teatral, una escena para un guion cinemato- gráfico, un personaje para un programa de televisión, un cuento para una revista. Todo lo que hacemos y vivimos es susceptible de ser parte de nuestras obras y, cuando la persona que tiene a la escritura como parte de su vida decide que su vida será parte de la escritura, las obras integran un todo más importante, eso que llamamos “la obra”. La obra de un artista comienza siempre de manera caótica pero nunca concluye así. Aída decidió que su tienda estuviera abarrotada del material que fue acumulando con sus diferentes proyectos. Para alguien que además de una prodigiosa memoria te- nía tantos recuerdos personales, esas herramientas de trabajo se fueron convirtiendo en una especie de hoja de ruta de su vida, porque para ella su cartografía profesional era también su derrotero personal. No se concibe uno sin la otra. Y esos archivos sin- gulares, únicos, ricos en información y necesarios para el trabajo, los fue ordenando dentro de cajas donde otro caos, el material, fuera algo contenido para que el caos creativo pudiera ocurrir a sus anchas. Esas son las cajas de Aída. Una foto Polaroid algo borrosa con unas notas suyas detrás de una prueba de peinado a un personaje en La isla. Un currículum respondiendo a una oferta de empleo del diario El País de España donde concluye que, “a pesar de llevar dos años residiendo en España, no he hecho el menor intento por trabajar en periodismo (…) una tarea para la que mi experiencia no me parecía la única condición indispensable”. Revistas de moda de la época en que sucede Noticia de un secuestro, la novela de García Márquez que Aída adaptara. Una entrevista hecha por Magdalena Ruiz Guiñazú donde menciona con ino- cultable orgullo (y no era para menos) que el prestigioso premio “Ennio Flaiano” 10 que recibiera por su trayectoria, anteriormente lo habían recibido Arthur Miller o Harold Pinter, entre otros. Por supuesto, las cajas están abarrotadas de distintas versiones de guiones de todo tipo, borradores, grabaciones de audio, descripciones de personajes, todo el material que suele acumular un escritor con el paso del tiempo. Pero también de documentos que son un registro de distintas etapas de su vida, que nos enseñan lo indispensable de LAS DE AÍDA CAJAS los recuerdos para saber de dónde venimos porque es la única manera de saber hacia dónde vamos. No hay vientos favorables si no sabemos nuestro rumbo. Para Aída las palabras tenían tanta importancia como las imágenes y los sueños, tanta como las ficciones. Acumuló todo ese material impreso aún en la época de las computadoras, a las que fue aceptando a regañadientes hasta que fueron parte de su vida. Pero nos enseñó a cuidarnos de ellas porque decía que todo se veía prolijo, seductor, bello. En mi caso personal, debo confesar que tuvo una enorme responsabilidad en haberme hecho muy infeliz desde el día que nos conocimos. Hasta ese momento, mi ignorancia sobre el mundo de la escritura (y el mundo en general) me hacía ver que todo era sencillo y atrevido. Aída decidió combatir esa ignorancia a su manera. Yo creía ser feliz, pero no conocía a Chéjov. Yo era atrevido, pero no había visto el cine de Wajda ni leído la prosa de Benedetti ni escuchado las arias de Verdi ni degustado sus galletitas con semillas de amapola. Era tan profunda mi ignorancia que yo no lo sabía. Y me enseñó a escribir, escribiendo. Fui alumno, discípulo, amigo. Cuando la conocí me trataba de usted, especialmente si era para criticarme algo que había es- crito. El último día que la vi, entre las pocas palabras que me dijo soltó un “¡No seas boludo!”. Entre un momento y otro, vivimos muchísimos momentos de gozosa ale- gría durante más de treinta años, porque para ella la risa era una exigencia ideológica más que una exigencia estética. Sabía reírse aunque motivos para no hacerlo tuvo de sobra. Ella no estuvo prohi- bida: la dejaron respirar, luchar contra sus enfermedades, enseñarnos sobre todo lo que sabía y lo que aún no había aprendido y amar lo que hacíamos. Prohibieron sus películas, sus obras de teatro, sus programas de televisión. Prohibieron lo que hacía, lo que decía y lo que a veces gritaba. Pero no pudieron evitar que nos dijera, a veces con un simple susurro, que existían personas reales por encima de las proscripciones, que había silencios que aturdían y órdenes que no teníamos por qué cumplirlas. Y a pesar de tanto daño infligido, no la hicieron callar. 11 Supo de sobornos, porque era insobornable. Fue rebelde ante las normas cuando se las querían imponer como unánimes. Fue dócil ante las palabras que acercaban. Nos enseñó a atravesar los tiempos difíciles para poder darle valor a los tiempos EL CATÁLOGO felices. Y cuando sintió que llegaba su fin, una vez más no justificó los medios. Quería que la cuidaran pero solo permitió aquellos cuidados que fuesen paliativos. Y lo es- cribió, con su firma. Dejó un testamento pero, mucho más importante, dejó un legado. Su obra es emotiva, atrevida, conmovedora, seductora y con altibajos, porque de no ser así no sería la obra de una artista. Pero más que nada es auténtica porque no hizo nada que no sintiera. Y si no pudo hacer todo lo que hubiera querido, quiso a todo lo que pudo hacer. Nos ha dejado una tienda preciosa que es puro caos, creación y producto del tra- bajo incansable de esa tendera que ha vivido como predicó. Y ahora, además de sus obras y su derrotero, esa tienda enorme sigue intacta desde su partida, aunque ahora tenemos una llave para entrar en ella, tenemos un inventario de toda la tienda. Este catálogo es esa llave, ese inventario. Es ella. Es Aída Bortnik. Fernando Castets Programa “Off-Corrientes”, primera obra de Juan Campanella y Fernando Castets estrenada el 15 de octubre de 1982 en el Teatro Popular de la Ciudad, Buenos Aires. PRÓLOGO II ¡Qué tesoro encontraron Gabriela, Patricia, Teresa y Silvana! Recuerdo mirar esas cajas en el estudio de Aída, apiladas meticulosamente, una sobre otra, durante las muchísimas horas que pasamos ahí, discutiendo todo lo que escribíamos, tanto ella, como nosotros (incluyo a Fernando Castets y Eduardo Sacheri en este “nosotros”).
Recommended publications
  • Amor Venga Sus Agravios
    José de Espronceda Amor venga sus agravios 2003 - Reservados todos los derechos Permitido el uso sin fines comerciales José de Espronceda Amor venga sus agravios Personajes: DOÑA CLARA DE TOLEDO (Marquesa de Palma) CONDE DUQUE DE OLIVARES ABADESA DON ÁLVARO DE MENDOZA TERESA, demandadera. CONDE DE PIEDRAHITA OTÁÑEZ DON PEDRO FIGUEROA FORTUNA PADRE RAFAEL BEATRIZ PACHECO DOROTEA ROBLEDA MARGARITA RENDONES CHAMOCHÍN y cuatro músicos que hablan MÚZQUIZ FELIPE IV, rey (a los dieciocho años) VIEJAS que hablan. DON PONCE y caballeros que hablan. Una criada, convidados, monjas, novicia, un ujier, una tapada. Acto primero Cuadro primero Escena primera El parque del Retiro, al pie de palacio; una calle de árboles. DAMAS que pasean; varios corrillos de GALANES; algunas TAPADAS, MENDOZA MENDOZA: (A unas TAPADAS.) A pesar de ir tan tapada, mal podéis encubrir vuestra hermosura. TAPADA: Galán sois, pero tened cuenta con lo que hacéis, y no sigáis más. (Vanse.) MENDOZA: Ni tenía tal intención. (PACHECO llega precipitado a MENDOZA y le abraza.) Pacheco, ¡cuánto me alegro de verte! PACHECO: No me alegro yo menos; y por cierto que te hacía en Flandes ocupado en domar aquellos perros herejes, y no creía tener tanta dicha esta mañana. MENDOZA: Pues no, amigo, no todo han de ser asaltos, duelos, ni alarmas, y alguna vez ha de trocar uno el lecho campal iluminado por las estrellas por la cama, aunque estrecha en comparación, más blanda y acomodada. Yo, por ahora, me he propuesto vestir seda en vez de hierro, beber vivo en lugar de cerveza, y ceñir la espada mejor que blandir la pica.
    [Show full text]
  • El Anacronópete (¿1881?) De Enrique Gaspar
    Facultad de Humanidades Sección de Filología Departamento de Filología Española UNA MÁQUINA DEL TIEMPO DENTRO DE UNA ZARZUELA. EDICIÓN Y ESTUDIO DE EL ANACRONÓPETE (¿1881?) DE ENRIQUE GASPAR. Trabajo Fin de Grado Grado en Español: Lengua y Literatura Virginia Martín Dávila Tutor Académico: Félix Ríos Torres La Laguna 2018 - 2019 ÍNDICE 1. Resumen 1 2. Introducción 2 2.1. Presentación y objetivos del trabajo 3 2.2. Justificación de los enfoques teóricos elegidos y de la 3 metodología empleada 3. Una máquina del tiempo dentro de una zarzuela. Edición y 5 estudio de El anacronópete (¿1881?) De Enrique Gaspar 3.1. Notas sobre la edición de El Anacronópete (¿1881?) Y 5 datación de las obras. 3.1.1. Ecdótica y notas sobre la edición de la obra 6 3.1.2 datación de las obras 7 3.2. Enrique Gaspar: vida y obra 9 3.2.1. El Anacronópete y la producción de Enrique Gaspar 11 3.3. Comentario sobre la zarzuela 14 3.4. Breve estudio comparativo entre la novela y la zarzuela 24 4. Conclusiones 29 5. Bibliografía 31 6. Anexos 33 Anexo 1: Muestra de hoja con texto añadido y suprimido 33 Anexo 2: Muestra de hoja que conllevó la interpretación del 34 orden del texto Anexo 3: Edición de la zarzuela 35 Anexo 4: Cronología de la vida y obra de Enrique Gaspar y 174 Rimbau según los datos aportados por Daniel Poyán (1957) y Juan Antonio Hormigón (1989) Anexo 5: Espacios donde se desarrolla la acción dramática 176 Anexo 6: Relación de personajes por escena 177 Anexo 7: Partes musicales 180 Anexo 8: Títulos de los cuadros y los capítulos 182 Anexo 9: Correspondencia entre capítulos y cuadros y lista de 184 capítulos que no se encuentran en la zarzuela 1.
    [Show full text]
  • ANA, LA DE INGLESIDE 6º Serie Ana De Las Tejas Verdes
    ANA, LA DE INGLESIDE 6º Serie Ana de las Tejas Verdes L. M. MONTGOMERY —¡Qué blanca está hoy la luz de la luna! —dijo Ana Blythe para sus adentros mientras recorría el sendero del jardín de la casa de Diana Wright, rumbo a la puerta del frente. Pequeños pétalos caían de los cerezos, desprendidos por la brisa marina. Se detuvo un momento para mirar las colinas y los bosques que había amado en otros tiempos y que aún amaba. ¡Querido Avonlea! Glen St. Mary era ahora su hogar y lo había sido ya durante muchos años, pero Avonlea tenía algo que Glen St. Mary no podría tener nunca. Fantasmas de sí misma la esperaban en cada rincón... los campos por los que había vagado le daban la bienvenida... los ecos no borrados de la dulce vida de antaño estaban alrededor... cada rincón tenía algún recuerdo querido. Aquí y allá había jardines encantados donde florecían todas las rosas del pasado. A Ana siempre le gustaba ir a Avonlea incluso cuando, como en esta ocasión, la razón de la visita era triste. Habían venido al funeral del padre de Gilbert y Ana iba a quedarse una semana más. Marilla y la señora Lynde no se resignaban a dejarla partir tan pronto. Su vieja habitación de la buhardilla seguía preparada para recibirla y, cuando Ana subió la noche de su llegada, se encontró con que la señora Lynde había puesto un gran ramo de primaverales flores silvestres en su honor... un ramo que, cuando Ana hundió la cara entre las flores, parecía haber guardado toda la fragancia de años nunca olvidados.
    [Show full text]
  • Cuentos-Fragiles.Pdf
    Cuentos frágiles Gutiérrez Nájera, Manuel Cuento Se reconocen los derechos morales de Gutiérrez Nájera, Manuel. Obra de dominio público. Distribución gratuita. Prohibida su venta y distribución en medios ajenos a la Fundación Carlos Slim. Fundación Carlos Slim Lago Zúrich. Plaza Carso II. Piso 5. Col. Ampliación Granada C. P. 11529, Ciudad de México. México. [email protected] 2 La balada de año nuevo En la alcoba silenciosa, muelle y acolchonada apenas se oye la suave respiración del enfermito. Las cortinas están echadas; la veladora esparce en derredor su luz discreta, y la bendita imagen de la Virgen vela a la cabecera de la cama. Bebé está malo, muy malo… Bebé se muere… El doctor ha auscultado el blanco pecho del enfermo; con sus manos gruesas toma las manecitas diminutas del pobre ángel, y, frunciendo el ceño, ve con tristeza al niño y a los padres. Pide un pedazo de papel; se acerca a la mesilla veladora, y con su pluma de oro escribe… escribe. Sólo se oye en la alcoba, como el pesado revoloteo de un moscardón, el ruido de la pluma corriendo sobre el papel, blanco y poroso. El niño duerme; no tiene fuerzas para abrir los ojos. Su cara, antes tan halagüeña y sonrosada, está más blanca y transparente que la cera: en sus sienes se perfila la red azulosa de las venas. Sus labios están pálidos, marchitos, despellejados por la enfermedad. Sus manecitas están frías como dos témpanos de hielo… Bebé está malo… Bebé está muy malo… Bebé se va a morir… Clara no llora; ya no tiene lágrimas.
    [Show full text]
  • !Mate Usted a Mi Mujer! : Juguete Cómico, Original, En Un Acto Y En
    Juguete cómico, original, en un acto y en verso, por D. Pelayo Castillo, para representarse en Madrid, el año de 1868. PERSONAJES. Cel. (Apostaría á que el pérfido le escribe ála vecinita de enfrente; hace mucho tiempo D. Homobono marido de que abrigo tales sospechas.. .) Doña Celestina Iíom. (Mi mujer!) D. Rogelio. Cel. Qué estás haciendo? Rita. Hom. Nada. Epoca actual. Cel. Conque nada, eh? Hom. Mira, si quieres... ACTO ÚNICO. Cel. No quiero. Yra sabes que yo acostumbro á respetar tus secretos. Hom. Mucho! Sala medianamente amueblada, pero respirando elegancia y Cel. Que no soy curiosa. ! buen gusto. A la izquierda un espejo de vestir de cuerpo en¬ tero; mesa de despacho con recado de escribir, y libros; puer¬ Hom. Cá! no. tas al foro y laterales, y á la derecha un balcón. Cel. Sin embargo, apuesto á que ese papel... Te atreves ESCENA primera. á enseñármelo? IIom. No debo D. Homobono, sentado á ¡a mesa y escribiendo. transigir con tus manías. Tres y cuatro, siete; y cinco Cel. Conque no quieres... doce, y ocho, veinte.—Cero, Iíom. Qué empeño!.. y van dos.—Dos y dos cuatro. Toma! (continúa sumando en voz baja.) Cel. (leyendo.) Garbanzos, catorce; Total, seis duros y medio.— almidón, veinte...— Qué es esto? Qué escándalo! Ya se vé, Iíom. Es la cuenta... aquí no hay ley, ni gobierno. .. Cel. Ya! (Respiro!) Si mi mujer fuera otra... Hom. Te has convencido? Laus Deo! pero le ha sorbido el seso Cel. Pero me ocurre una duda. esa maldita pasión, Hom. Una nada mas? que Dios confunda, los celos, Cel.
    [Show full text]
  • El Castigo De Los Ángeles(C.1)
    MARÍA VALLEJO-NÁGERA El castigo de los Ángeles ARGUMENTO: Clara vive a cien por hora. La impulsan tanto el éxito en su vida profesional, rodeada del glamour del mundo de la moda, como la facilidad para establecer nuevas relaciones sentimentales. Lleva siete años en Londres y todos los que la conocen creen que es una mujer afortunada… Todos menos ella misma, que sabe que su brillante carrera es, en el fondo, una huida. Pero ahora acaba de conocer a alguien a quien abrir su corazón, a quien contar su secreto. A su lado, Clara emprende el viaje más arriesgado pero también el más esperanzador de su vida. La autora inventa un personaje ficticio para meter en su piel la espantosa odisea que vivió durante un viaje a la antigua Yugoslavia, justo después de finalizar la guerra en dicho país. Los horrores de la guerra y los testimonios de los protagonistas impactaron profundamente a la autora, quien nunca anteriormente se había planteado lo que significaba un acto político de tan grandes dimensiones como lo es una guerra. El descubrimiento de la Fe católica a lo largo de este espinoso camino, es una constante entre las líneas de esta tremenda novela. SOBRE LA AUTORA María Vallejo-Nágera, (Madrid 1.964). Licenciada en Pedagogía por la Universidad Complutense de Madrid, comenzó su ascendente trayectoria en el mundo de las letras tras ser publicada su primera novela "El patio de los silencios", que quedó quinta entre las cuatrocientas novelas presentadas en el año 1999 al Premio Planeta. Con su octavo libro, la autora cambia su rumbo hacia el género infantil.
    [Show full text]
  • CALDERÓN Y BELTRÁN a Ninguna De Las Tres
    CALDERÓN Y BELTRÁN, FERNANDO (1809 – 1845) A NINGUNA DE LAS TRES (A su amigo José Ramón Pacheco, dedica el autor este ensayo cómico.) PERSONAJES: DON TIMOTEO DOÑA SERAPIA LEONOR MARÍA CLARA DON CARLOS DON JUAN DON ANTONIO (La escena pasa en México, 183..., en la casa de don TIMOTEO) ACTO PRIMERO (Sala decentemente amueblada.) ESCENA I (Don Timoteo, doña Serapia, ésta de gala.) DON TIMOTEO Vaya, Serapia, estás hoy muy elegante; ¡que bello! ¡qué rico vestido! ¡diablo! Si no fuera por tu pelo un poco blanco, y las rugas de tus mejillas, apuesto que ninguno te daría más de treinta y cinco. DOÑA SERAPIA ¿Cierto? ¿conque no parezco mal? DON TIMOTEO ¿Cómo mal? si poco menos estás hoy como aquel día que nos casamos: me acuerdo como si fuera hoy. DOÑA SERAPIA Con todo, treinta y dos años y medio hace que pasó. DON TIMOTEO Es verdad. ¡Qué pronto se pasa el tiempo! DOÑA SERAPIA Y qué tiempos! DON TIMOTEO Muy felices; no se parecen a éstos: ¡ay! hija, por más que digan los pisaverdes modernos, aquello era mucho, ¡mucho! ¿Te acuerdas con qué salero bailabas una "gavota"? DOÑA SERAPIA Y tú también, picaruelo, aquel "minuet de la corte". DON TIMOTEO Y el "calafat". DOÑA SERAPIA Y el bolero. DON TIMOTEO No; pero nada, Serapia, como el "campestre": me acuerdo que estaba yo como tonto, mirando tus movimientos; desde la primera parte, sentí dentro de mi pecho cierta inquietud... cierta cosa... lo que llaman los modernos simpatía; pero ¡vaya! cuando hizo tu pie derecho aquel molinete, entonces se me trastornó el cerebro.
    [Show full text]
  • Paraweb Quid 66.Pdf
    Año 10 | Número 66 OCTUBRE - NOVIEMBRE 2016 CONSEJO EDITORIAL Adolfo de Vincenzi Jorge González Luz Henríquez Antonio Dalto DIRECCIÓN Jorge González EDICIÓN Carla Pandolfo COORDINACIÓN Hugo Cayssials Melina Dorfman DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN Conci|Melnizki edd FOTOGRAFÍA Silvana Sergio CORRECCIÓN Esteban Bertola El honor y la lealtad eran los pilares principales sobre los que se desempeñaba la vida de un samurái. La traición era la vergüenza más abyecta y el código ético COLABORAN EN ESTE NÚMERO y moral con el cual se regían –el bushido– señalaba cómo seguir el camino del Fernanda Argüello, Laura Berti, Ana María honor hasta el final, con la práctica del seppuku. Cabanellas, Juan Cibeira, Horacio de Dios, El ritual determinaba que el guerrero debía practicar el seppuku si su señor Marina García, Martín Garrido, Nancy Giampaolo, Silvia Honpenhayn, Nadia Koval, perdía la batalla, en señal de lealtad. No practicarlo implicaba ser un traidor Roger Koza, Christian Kupchik, Felipe Pigna, y esa vergüenza recaía sobre su familia y las generaciones futuras, el despojo Gabriel Rolón, Lucila Rolón, Emilia Simison, de sus tierras y la segura muerte por inanición. Mónica Tracey, Maximiliano Tomas, Nando Para evitar la más leve sospecha de traición, el samurái preparaba su seppuku Varela Pagliaro, Sergio Varela y Agustina Zabaljáuregui. siguiendo cuidadosamente todos los pasos. Escribía un poema sobre su abanico de guerra, nombraba a un kaishaku –un hombre de confianza que se coloca- PUBLICIDAD Y REDACCIÓN ba a su derecha empuñando una espada, que luego utilizaría para cortarle la Tel.: 4943-8219/22 cabeza–, colocaba las mangas de su kimono blanco debajo de las rodillas (para, Patagones 2463 | C1282ACA | CABA al caer, no hacerlo hacia atrás, símbolo de doblez), tomaba su daga –yoroidoshi– Correo: [email protected] Web: yenny-elateneo.com / Sección Quid y se practicaba un corte en el vientre de izquierda a derecha.
    [Show full text]
  • Federal Register/Vol. 63, No. 20/Friday, January 30, 1998/Notices
    5142 Federal Register / Vol. 63, No. 20 / Friday, January 30, 1998 / Notices LIBRARY OF CONGRESS provided by the URAA, copyright work before December 8, 1994, the date protection was restored on January 1, the URAA was enacted. See 17 U.S.C. Copyright Office 1996, in certain works by foreign 104A(h)(4). Before a copyright owner [Docket No. 97±3C] nationals or domiciliaries of World can enforce a restored copyright against Trade Organization (WTO) or Berne a reliance party, the copyright owner Copyright Restoration of Works In countries that were not protected under must file a Notice of Intent (NIE) with Accordance With the Uruguay Round the copyright law for the reasons listed the Copyright Office or serve an NIE on Agreements Act; List Identifying below in (2). Specifically, for restoration such a party. Copyrights Restored Under the of copyright, a work must be an original An NIE may be filed in the Copyright Uruguay Round Agreements Act for work of authorship that: Office within 24 months of the date of Which Notices of Intent to Enforce (1) is not in the public domain in its restoration of copyright. Alternatively, Restored Copyrights Were Filed in the source country through expiration of an owner may serve an NIE on an Copyright Office term of protection; individual reliance party at any time (2) is in the public domain in the during the term of copyright; however, AGENCY: Copyright Office, Library of United States due to: such notices are effective only against Congress. (i) noncompliance with formalities the party served and those who have ACTION: Publication of Seventh List of imposed at any time by United States actual knowledge of the notice and its Notices of Intent to Enforce Copyrights copyright law, including failure of contents.
    [Show full text]
  • Joaquín Murrieta De Brígido Caro
    Joaquín Murrieta de Brígido Caro. Un drama inédito del legendario bandido Mario A. Rojas, editor. Joaquín Murrieta de Brígido Caro. Un drama inédito del legendario bandido Argus-a Artes y Humanidades / Arts and Humanities Buenos Aires - Los Ángeles 2020 Joaquín Murrieta de Brígido Caro. Un drama inédito del le- gendario bandido ISBN 978-1-944508-22-7 Ilustración de tapa: Foto del volante de la puesta en escena en el Teatro Mason tomada del archivo en la Library of Congress, Washington D.C. Diseño de tapa: Argus-a Artes y Humanidades/Arts & Humani- ties © 2020 Mario A. Rojas All rights reserved. This book or any portion thereof may not be repro- duced or used in any manner whatsoever without the express written per- mission of the publisher except for the use of brief quotations in a book re- view or scholarly journal. Editorial Argus-a 16944 Colchester Way, Hacienda Heights, California 91745 U.S.A. Calle 77 No. 1976 – Dto. C 1650 San Martín – Buenos Aires ARGENTINA [email protected] Joaquín Murrieta de Brígido Caro. Un drama inédito del legendario bandido INDICE Introducción 1 1. Sobre el manuscrito 1 2. Brígido Caro, periodista y dramaturgo 3 3. ¿Quién era Joaquín Murieta o Murrieta? 4 4. Joaquín Murrieta de Brígido Caro y el contexto sociocultural en Los Ángeles en tiempos de su puesta en escena 6 5. Joaquín Murrieta y su representación en el género dramático 7 6. Leyendas de bandidos mexicanos: Eraclio Bernal y el padre Jarauta 11 7. Edición del manuscrito 13 Joaquín Murrieta de Brígido Caro 15 Prólogo 21 Acto I 57 Acto II 83 Acto III 111 Joaquín Murrieta de Brígido Caro.
    [Show full text]
  • El Hombre De La Arena
    CUADROS NOCTURNOS Nachtstücke (1817) El hombre de la arena Der Sandmann (1815) DE NATANIEL A LOTARIO »Seguro que estaréis inquieto porque no escribo desde hace mucho, mucho tiempo. Mi madre estará enfadada y Clara pensará que hago aquí vida de loco y que olvido su imagen angelical que tengo grabada en mi mente, pero no es así. Diariamente os recuerdo a todos y contemplo la figura encantadora de Clara, con su candida sonrisa y sus ojos claros, igual que cuando regresaba a casa... Pero, ¡cómo podré escribiros en el estado en que me hallo!... ¡Me ha sucedido algo espantoso! Torvos presentimientos de un destino amenazador y fatal se ciernen sobre mí como negros nubarrones, impidiendo que penetre un rayo de sol... Sólo a ti voy a decirte lo que me ha sucedido. Me imagino que te reirás locamente cuando lo sepas... ¡Ah, mi querido Lotario! ¡Cómo te diré para que lo comprendas que lo que me ha sucedido hace algunos días ha trastornado realmente mi vida! Si estuvieras aquí, tú mismo podrías verlo, pero seguro que me consideras un visionario chiflado... En resumidas cuentas, el espantoso acontecimiento que me sucedió, y cuya tremenda impresión en vano me esfuerzo en olvidar, no es otra cosa sino que hace días, precisamente el 30 de octubre, a las doce del mediodía, un vendedor de barómetros entró en mi casa para ofrecerme la mercancía. No le compré nada, y le amenacé con tirarle escaleras abajo, cosa que no hice gracias a que él se retiró prudentemente. «Puedes suponerte que en algunos acontecimientos decisivos de mi vida tuvo influencia este suceso, pues fueron funestas mis relaciones con la persona de aquel malvado traficante.
    [Show full text]
  • Ielmex Detecta Aparatos Defectuosos El Número P''° Tilo Era De Uno Diario, Lo Cual ~ ~ ~ (Pasa a La Ültinia Pág
    M ENCIA DE BICICLETAS "EL AZTECA' I.e ofrece UIS'IRlisl-;iu(il{ todos los moiieloe de blcícletae y refacciones MOTOCICLETAS CARABELA Pague DE COLIMA firmando utilice su tarjeta de crédito . CALIDAD VISITEMOS ALDAMA 166 TELEF(t\() 2-34-44 ALARMA 170 TELEFONO 2-02-69 y 2-O66 l í011p \L\' -AÑO \ \I I Editor Director General Registrado en la Admoa. Il de Correos del 30 de Enero Coltnla, Col . Viernes de N'la)'o de 19 ? 5 Miembro de PU) Periodistas Unidos de América 'fa'in't Sárrrha: Silva Irltartual S~iaah . de la 41 . de 1954. Normal el Suministro de Energía Eléctrica en el País El personal técnico de la CFE subsanó las Falta de vigilancia es el Firma de Contrato del Fideicomiso fallas antes de lo programado motivo del incremento Je Centro de Adiestramiento Hotelero Desde el domingo anterior ~cii tralcs generadoras ) que obli accidentes viales locales Por la noche del martes pasado, en el despacho oficial se norillallzo el suiilliiistro cte fiaron a la Con is ;ón Federal de La falta tie s igilaucia y oricntaciríu adecua (-¡cl Licenciado Arturo Noriega Pizano, Gobernador Constitu fluido ckctrico a las cntidadcs Eicctricidad a Suprunir Ser\- 1- da a los conductores de vehículos de motor por ~iuna1 del Estado de Colima, enclavado en Palacio die Gooier que hablan resultado aECCtadaS 0105 por zonas en catorce (Nilda' parte del Departanumto de Tránsito del rstadu, no eta esta Capital, se llevó a efecto la firma de Contrato del put la descompostura de varias des federal además de la falta de precaución y responsahiÍi ¡vas ilcieltomlso Dora la creación del Centro de Adiestramiento pa dad de los autonrocilistas y conductores, son las canas principales del incremento de iris caldeo La medida de enmer;encía, n .~~t'vu inconformidades entre los urna 1 yue esta ciudad, ra la Industria 1lotele- üo, Col .
    [Show full text]