El PájaroN° 127 Mayo Cultural del 2019 Publicación del Noroeste Argentino $ 70

Pópulo Crucificado. Pintura al óleo de Mara Ruhl Empezamos a hablar de lite- amatorias. Ocurrió en 1908. Las letras del Tango y sus Poetas ratura tanguera a partir de MI Pero resulta por de- NOCHE TRISTE, famosa le- más sobrada la lista de auto- tra de , escrita res que han reconocido que PASCUAL CONTURSI para la música del tango Lita, de el tango-canción comienza de Samuel Castriota. forma definitiva con la letra (Chivilcoy, 1888-1932) Podría decirse que el tango, tras de Mi noche triste, estrenada caminar medio siglo, un día se en el Teatro Esmeralda (hoy Rafael Flores Montenegro puso a cantar. Tan convenci- Maipo) de . Es do de hacerlo que, de golpe, se entonces cuando aparece con Ilustrado por Nicolás Picatto llenaron los teatros para escu- el título de Mi noche triste, por nete compuesto con Maroni, a char sus primeras canciones. Y, sugerencias del propio Gardel cribió en 1919, otros dos tangos, Ivette y Flor de Fango, que tam- la vez que el texto para el tan- después, andando los años en que la grabó en el mismo año go La cumparsita que se estre- las famosas milongas donde se de su estreno -1917-, con la bién los grabó Gardel. Ensegui- da, Pascual Contursi se atrevió nó con el título Si supieras, aún baila siempre abrazado, las pa- guitarra de José Ricardo. Está hoy la letra más interpretada rejas suspendían por momentos en discos actualmente al al- a escribir en compañía de otros autores o en solitario, obras de del mismo; el también sainete el inefable baile y se agolpaban cance que quien desee encon- Los distinguidos reos, escrito con al pie del escenario para escu- trarla. Luego, en 1930, repitió teatro para el gran público. En ellas intercalaba la letra de un Arata-Morganti, y donde dio a char al cantor. Escuchar emocio- la grabación, embellecida por conocer el tango Lo he visto con nados el poema que aquel tipo la extraordinaria carrera del tango que solía identificar la pieza dramática. Tuvo aproba- otra. Después, el último Qué desgranaba, un poema no es- tango-canción que él mismo lindo es estar metido, escrito con crito para lectura sino para esa había inventado y pulido. ción en taquilla teatral durante su época, aunque en el curso Parra, y en el que estrenó un música envolvente, consustan- ¿Quién era Pascual Contursi? tango con el mismo título de la ciada con las palabras. Cuarenta Nacido en 1888, pro- de los años, mejor suerte han corrido sus canciones. Apenas obra la actriz Manolita Poli. o cincuenta años de tanteos, de venía de padres inmigrantes Los éxitos de público fueron abruptas letrillas que no daban italianos quienes, tras fracasar sobrepasan la veintena de títu- los, pero podría decirse que lle- numerosos, como las interpre- con un argumento se esfumaron en los cultivos del algodón en taciones y grabación de sus ante esa especie de confidencia El Chaco, se habían instalado vaban en sí mismas el camino del futuro del tango. Algunas tangos donde en casos la llave que traía entrada, desarrollo y en el pueblo bonaerense de es la ausencia de la mujer ama- desenlace. Que dejaba pensan- Chivilcoy. Su nombre, Pas- de ellas todavía se interpretan con fervor. da. En otros como Ventanita de do, auscultando sus notas since- cual, fue recuerdo-homenaje arrabal, está la solidaridad del ramente desgarradoras. a un solidario napolitano que Vivió Pascual Contursi relati- vamente poco, para los pará- poeta con la piba que “espe- Ocurrió en 1917, y aparte del los ayudó en esta segunda re- ra que vuelva el muchacho letrista Pascual Contursi, son sidencia. Después se instala- metros actuales, desde el 1888 hasta el 1932. Después del ha- aquel”. Tal vez hubo intimidad fundamentales ron en el barrio de San Cris- sexual porque las flores que que la estrenó y dio el tono de- tóbal, en la ciudad de Buenos llazgo de su clave letrística con Mi noche triste, dejó de ejercer ahora lucen secas en la venta- finitivo, y Manolita Poli, actriz Aires. Allí creció el niño des- na…lo insinúan. De ella segui- que noche a noche en la repre- puntando ciertas inclinacio- los “oficios varios” y se dedicó a ser autor. Tangos y sainetes mos teniendo noticias, pero no sentación del sainete Los dientes nes por el teatro con figuras de él, de quien solo intuimos o del perro, inflamaba al público de y personajes pergeñados por cada vez más afamados lo des- ahogaron de constantes estre- adivinamos su vida marcada entusiasmo con la canción. él mismo, para la inquieta por la ausencia. En alguno ex- La poderosa necesidad de dar población infantil en el patio checes económicas. Las críticas de la época coinciden en que la cepcional, celebra la vuelta de con la letra definitiva en el tango común del conventillo. De jo- la mujer que “había dejado el campaba por todos lados. El tea- ven ejerció oficios diversos, suya es una obra amena, con profundo conocimiento del am- bulín”. Especial mención me- tro popular ya había encontrado mientras avanzaba precaria- recería su último tema Bando- maneras originales de asumir la mente en tocar la guitarra y se biente que trata, capaz de pasar de lo sentimental a lo cómico neón arrabalero, escrito en 1928, vida del paisanaje porteño. Un ejercitaba en la versificación junto a Bachicha Deambrogio, subsuelo de cuplés, tonadillas repentista de los payadores. con facilidad. Agregaríamos que, con curiosa habilidad, uti- donde adjudica al instrumen- y otras formas de canto escéni- Improvisaba y fijaba letras en to la misma pena de abando- co pululaban en circos y espec- octosílabos que empezó luego lizó alternados la prosa y el ver- so en la escritura de sus obras. no que aqueja al protagonista táculos de varietés, pero era el uniendo a piezas conocidas conmovido con el son “de sus tango lo que más se bailaba. Se del repertorio musical tan- Desde el año 1919 se suceden una treintena, entre sainetes, notas doloridas”. le acoplaron letras que indu- guero. Las entonaba en rueda En buen momento de fortuna dablemente buscaban iluminar de amigos y luego durante comedias y revistas. Retrata- ba los ambientes frecuentados pudo cumplir su dorado sue- la figura de los pobladores de una larga temporada en caba- ño de viajar a París. La prime- la nueva ciudad multiplicada rets de Montevideo adonde se desde la infancia donde se agi- taba la vida de conventillos, hi- ra oportunidad fue durante el de inmigrantes y pujanza pro- había marchado por conflictos año 1921. Luego en 1927, con gresista. Tanteos más o menos de pareja con su mujer Hilda pódromos, cabarets y la colori- da calle porteña ahíta de etnias. la intención de una larga per- afortunados, aproximaciones a Briamo, cuando ya eran los manencia que debió interrum- lo que sería el tango-canción se padres del hijo único y tam- En la capital argentina había 1.500.000 de habitantes de los pirse por la aparición de sínto- advierten en autores conocidos bién famoso poeta José María mas de demencia inexcusable. como Villoldo, Mathon, Soria, Contursi. cuales la mitad eran extranje- ros llegados al país. Además, Sus amigos lo embarcaron Greco, el propio Contursi… En esas lides creadoras desde enajenado hacia Buenos Aires En tal sentido destacaremos la muy temprano se incorporó a se agregaban ya los contrastes campo-ciudad, muy activos donde fue ingresado en un magnífica entrada de una letra la vida artística en la concien- manicomio. Allí murió cuatro premonitoria escrita por Gonzá- cia de que, siendo pobre, aún en esos años de poderoso cre- cimiento urbano. Observaba años después. lez Castillo para su obra teatral podía definir algunos perfiles Su obra pionera ha po- “Entre bueyes no hay corna- de cosas que faltaban hacerse el autor en clave dramática no carente de humor, el mundo de dido con los cambios de época. das”. Allí realiza hábil uso de en las jóvenes repúblicas rio- Ejerce de modelo prácticamen- recursos provistos por el lunfar- platenses. clases en pugna irremediable. Mencionaremos títulos que es- te en toda la producción de los do donde el personaje Mamerto A poco tiempo del centenares de autores posterio- monologa sobre sus peripecias triunfo de su primer tema, es- tuvieron buenas temporadas en cartel y que modificaron la res. Dio temática, tratamien- economía de Pascual Contur- to y lenguaje propio al tango. si además de darle notoriedad Se le achacan repeticiones de importante, sobre todo para un argumentos, fatigas, a veces público específico en el que se- soluciones facilistas, junto a guramente pensaba cuando es- las innegables y encarnizadas cribía. Desde la primera revista búsquedas, inquietudes felices escénica La olla popular, escrita para lograr el interés de la gen- con Daglio-Morganti, recorda- te en sus creaciones. mos Un programa de cabaret, sai- Sus conocimientos sobre 4 El PájaroCultural tica popular, ha decidido qué celebra dichas del amor -fugi- hacer, por sí misma, sin tutela tivo, siempre-, alborozado en alguna. El hombre igual realiza el conventillo por el encuentro sus ritos propiciatorios, mien- con la mujer que condensa sus tras declina hacia el alcohol. Lo anhelos. Pulsa la guitarra o el único cierto es la tristeza por el bandoneón para convertir esas abandono, un dolor que inunda epifanías en hechos artísticos. el alma y hasta impregna los ob- Sus narraciones tienen de pro- jetos que acompañan su vida. tagonista el amor y sus fueros Muchos análisis se hicieron de que van y vienen, las contra- esta letra conformada en oracio- dicciones íntimas de las clases nes, sustantivos certeros, pensa- sociales tanto en el imaginario mientos y metáforas originales, como en la vida diaria, la mati- sin ningún derroche de adjeti- zada paleta de la urbe contem- vaciones. Sabiendo que eras mi poránea. alegría y mi sueño abrasador (lo Elegimos por gusto y justicia sabes porque lo sabes y porque de primera obra, Mi noche tris- te lo he confesado), la catrera se te, en la incomparable versión pone cabrera/ cuando no nos ve de Carlos Gardel y su conjunto a los dos (¡el insomnio, pibe, el de guitarras en la grabación de insomnio!, estoy contando...). 1930. ¿Cuándo ocurrió? Cuando es- taba enamorado, en mi mejor MI NOCHE TRISTE tiempo. (¡Que los autoritarios Percanta que me amuraste pasen a mejor vida, si así lo en lo mejor de mi vida, creen posible!). Trata de propi- dejándome el alma herida ciar el retorno dejando la puerta y espina en el corazón, entreabierta (para que entre sin sabiendo que te quería, llamar y sin siquiera accionar el que vos eras mi alegría picaporte). Tarde, después de y mi sueño abrasador, consolarse con la ilusión de su para mí ya no hay consuelo vuelta, la mera ilusión, advierte y por eso me encurdelo que está atravesando “la noche pa’olvidarme de tu amor. triste” del alma, oscura, tanto… que ni la lámpara del cuarto lo Cuando voy a mi cotorro la ecología social son vastos, en los argumentos. Más ade- quiere alumbrar. y lo veo desarreglado, pero nunca se sitúa por fuera de lante en el tiempo, Flores, Ca- Era el año 1917, cuando la Pri- todo triste, abandonado, una pertenencia a las llamadas dícamo, Discépolo, Manzi… mera Guerra Mundial destroza- me dan ganas de llorar; clases medias que llevaron a la transitaron los andenes de la ba ya por millones a guerreros me detengo largo rato presidencia a Hipólito Irigoyen escuela contursiana. en todos los frentes. Estados campaneando tu retrato en el año 1916. Contursi enu- Unidos entró en liza para par- pa poderme consolar. mera los fetiches de los ricos, Acerca del Tango MI NOCHE ticipar en los resultados de pre- Ya no hay en el bulín sus atracciones para algunos TRISTE, una memoria (1917) visibles finales. Allí, en el cono aquellos lindos frasquitos, sur de América, se estrena este sujetos de otras clases, pero en En la primera estrofa está plan- arreglados con moñitos tono irónico. No intenta identi- tango de profunda explosión lí- todos del mismo color. teado el tema, como en los leit- rica. Desde hace milenios más ficarse con un mundo que está motiv de Wagner. El hombre El espejo está empañado al otro lado de su repertorio de prestigio tienen los valores que y parece que ha llorado abandonado por la mujer que dan y empuñan las espadas. Las experiencias, como tampoco “era su alegría en lo mejor de por la ausencia de tu amor. busca a dios en ningún caso. Es contiendas del corazón, salvo la vida”. Ella no ha vuelto al en los tiempos del romanticis- De noche, cuando me acuesto un hombre del pueblo que ha nido que compartían y por eso elegido su modo de hablar, la mo, nunca fueron por delante. no puedo cerrar la puerta, el hombre se encurdela para Se las juzgaba parientes pobres, porque dejándola abierta sencillez en la forma y la expre- olvidar… No hay culpas, en sión directa de los sentimientos. hilachas del ser que sollozaba. me hago ilusión que volvés. ninguno. Tampoco reproches. El machismo imperante las sen- Siempre llevo bizcochitos Amistades que tuvo de diferen- Es la condición efímera de los tes ámbitos lo recordaron siem- tía debilidades irredentas. Pero pa tomar con matecitos asuntos del vivir aunque exis- el tango fue tenaz en ello, inclu- como si estuvieras vos, pre con un tipo simpático, con tamos fatalmente en un juego el don de entrar sin reservas sive a pesar de las diatribas de y si vieras la catrera inútil de permanencias conso- los intelectuales de sus propias cómo se pone cabrera en la confianza de los demás, ladoras. gozador de la vida, con mano latitudes. No pretendía trans- cuando no nos ve a los dos. Se movían con independencia formar el mundo, solo poner en La guitarra, en el ropero suelta para gastar y ayudar a mutua, porque era diferente sus colegas. Reía, derrochaba escena avatares de la subjetivi- todavía está colgada, el horario de trabajo, o lo que dad recíproca, semblanzas del nadie en ella canta nada ingenio y bromas, aunque a ve- sea. Había amor, cuidados ces lo poseía un fondo de extra- diario vivir sin subterfugios be- ni hace sus cuerdas vibrar. exquisitos en las maneras de licistas. Y la lámpara del cuarto ña circunspección. ella para adornar la pobreza, Tras de lo dicho en cuan- En Contursi se siente también tu ausencia ha sentido y de él en la forma de alegrar la proximidad de lo que escri- porque su luz no ha querido to a su condición de creador el tiempo con canciones en la del modelo sobre el que tran- be el poeta. No hay utilería. Sus mi noche triste alumbrar. guitarra. La mujer se fue, lle- trazos son ajustados y certeros. sitarían las letras de los tangos vó sus cosas, salvo un retrato posteriores, agregaríamos que Como en otros personajes de Letra : Pascual Contursi. Músi- suyo al que el protagonista sus tangos, Contursi parece es- ca : Samuel Castriota también dejó abierto el camino “campanea”, mira, desolado a diversas temáticas. Tal vez tar contando episodios carnales y lloroso. Le cuenta -a ella que de la vida, mastica abandonos, pudiéramos sintetizarlas en el no está, al Universo indiferen- abandono amoroso, los desgas- te, a nosotros…- los ritos de tes que deja el paso del tiempo, su soledad: la cama rabiosa, la la identificación de los sencillos guitarra callada, el espejo em- objetos cotidianos con las emo- pañado, la puerta entreabier- ciones del protagonista, el uso ta por si ella volviera. Como de la primera, segunda y terce- sabiendo que son ritos vanos ra persona en la versificación, ante la imponderable e indis- la sobria constancia subjetiva cutida libertad de ella que por como garantía de verosimilitud primera vez, quizás en la poé- 5 El PájaroCultural