Revista de la UniveRsidad del noRte http://www.uninorte.edu.co/publicaciones/huellas/index.asp no 92 y 93

Consejo de direCCión CONTENIDO Jesús Ferro Bayona - Director 2 Jesús Ferro Bayona y la construcción de Vilma Gutiérrez de Piñeres - Editora la Ética en la Universidad del Norte Gustavo Bell Lemus alFredo marcos maría - Editor 5 Afinamiento de la universidad en el Caribe Consejo de redaCCión Jesús Ferro Bayona ramón illán Bacca 8 Manuel Rodríguez Torices y Barranquilla Pamela Flores Prieto Adelaida Sourdis Nájera adela de castro ruBén maldonado orteGa 21 El proceso de la independencia en Barranquilla munir KharFan de los reyes - Asesor diseño Jorge Villalón

Este número contó con la colaboración de 30 El presidente Rodríguez Torices, Álvaro Carrillo Barraza en diseño y diagramación. quien nos hizo “villanos” Rodolfo Zambrano Moreno Huellas es miembro de la 33 Soledad en el proceso de la independencia Asociación de Revistas Culturales Alexander Vega Lugo Colombianas, arcca. 41 Santo Tomás de Villanueva y su contribución a la independencia de la provincia de Cartagena y de José Isaías Lobo Romero

50 Problemas de más alta prioridad por solucionar en Colombia y Barranquilla (Nota introductoria: Antonino Vidal y Guissepe D’Amato) Karl C. Parrish Jr.

58 Himno de Barranquilla Amira de la Rosa

60 Del Ballet Folclórico del Atlántico al Ballet Nacional de Colombia “Sonia Osorio” Inca M. de Rumold

89 Inicios del Ballet de Colombia en Barranquilla Alexandra Garnica-Lamboglia

100 Filosofía y Geografía. Una aproximación a la biografía filosófica de Nietzsche cerca del mar Fernán Ramírez Meléndez Ilustración de la portada Manuel Rodríguez Torices en la plaza de San Nicolás (óleo sobre lienzo, 1.80 x 3.00 m) por Gabriel Atencio Ruiz. Nació en Cartagena, 1973. Se autoriza la reproducción citando la fuente. Los conceptos son Estudios de Artes Plásticas, Escuela Cristóbal Rojas, responsabilidad exclusiva de los autores. Licencia del MinGobierno , 1985. Arquitecto, Universidad del Atlántico, nº 001464, ISSN 0120-2537. Apartado Aéreo 1569, Barranquilla, Co- Barranquilla - Universidad José María Vargas, Cara- lombia. Impresión: Javegraf, Bogotá. e-mail: [email protected] cas (ver perfil del autor en la nota al pie, pág. 32). Meses de aparición: Abril (04) - Agosto (08) - Diciembre (12).

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 1 pp. 1-106. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 lanzamiento JFB: El goBiErno dEl FilósoFo

Jesús Ferro Bayona y la construcción de la Ética en la Universidad del Norte*

Gustavo Bell Lemus Exvicepresidente de la República de Colombia

Quiero expresar en primer lugar llamó para ser su gerente seccio- mis agradecimientos a los orga- nal, con lo cual mi vida giraría nizadores del homenaje que hoy hacia el sector público; pero esos se le rinde a nuestro rector, Je- fueron apenas unos hechos for- sús Ferro Bayona, por invitarme tuitos, porque la oportunidad de a participar en este acto. Pero, trabajar de cerca con el Dr. Ferro, ante todo, por conferirme el gra- conocer su visión de los estudios to honor de dirigirles a ustedes superiores, el compromiso de la estas palabras, que me permiten universidad con su entorno so- hacer público mi testimonio per- cial, su interés por la historia de sonal de gratitud y admiración a la región, fueron las cosas que quien tanto le debo en mi carre- verdaderamente influyeron en ra personal y profesional; como mí para que me decidiera a se- también por darme la oportuni- guir los estudios de postgrado dad de volver a recorrer los cam- que cursé en Inglaterra. pos y corredores de la universi- De regreso del Viejo Mundo dad donde inicié mi vida profesional académica, fui llamado por el Dr. Ferro a asumir la Secreta- a comienzos de agosto de 1981, y que nunca he ría General de la Universidad, lo que me permi- dejado de sentir como mi verdadera alma máter. tió ampliar mi conocimiento sobre la ciudad y la Y, al recordar esa fecha, no puedo dejar de agra- región, pero, ante todo, conocer más de cerca su decerle al destino que un mes antes el Dr. Ferro me pensamiento (que se recoge en la hermosa edición hubiese recibido en su apartamento de aquel en- del libro que hoy se presenta) y su espíritu de tra- tonces, y en medio de una fuerte gripa, para una bajo. En esos años vi cómo día tras día construía entrevista. Y lo digo porque ese mismo día había la ética del trabajo que caracteriza a esta univer- hecho un par de entrevistas en algunos de los sidad y cómo su autoridad se afianzaba no en sus gremios de la ciudad con el propósito de venirme decisiones, en sus clases o en sus escritos, sino a de Bogotá, donde trabajaba en un banco, y era través de la única forma como se enseña la ética: bastante probable que el Dr. Ferro no me pudiera con el ejemplo. Eso que hermosamente llama Ma- recibir por su estado de salud: así mi vida laboral ría Mercedes Botero: “El liderazgo transparente habría tomado un rumbo muy distinto al que al de Jesús Ferro Bayona”. final tomó. Y de veras que mi vida cambió a partir Tuve también la gran fortuna, gracias a la reno- de ese momento, y no precisamente para mal. vada confianza que depositaba en mí, de asumir Sería una perogrullada decir que estando aquí la dirección del naciente programa de Derecho; pude obtener una beca para seguir estudios doc- y digo fortuna porque a los primeros estudian- torales en historia en la Universidad de Oxford, tes les reiteraba el compromiso que debían tener o que estando aquí uno de aquellos gremios me con la región, tal como siempre lo señalaba el Dr. Ferro en las ceremonias de grado, de aportar lo * Texto leído por su autor en el lanzamiento del libro Je- mejor de sí para poder salir del subdesarrollo. sús Ferro Bayona: el gobierno del filósofo, Barranquilla, mar- Las vueltas de la vida me habrían de dar la opor- zo 15 de 2012. tunidad de hacerme acompañar en la Goberna-

2 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 2-4. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 en el contexto latinoamericano—, ha sido posible gracias a la consistente y lúcida visión de largo plazo que desde sus primeros años de rectoría, a comienzos de la década de los ochenta del siglo pasado, le imprimió Jesús Ferro Bayona. En efecto, en una región subdesarrollada como es el Caribe de Colombia, con tantas necesida- des materiales inmediatas por atender, muchas instituciones de educación concentran la totali- dad de sus recursos en objetivos de corto plazo, que si bien contribuyen en algo a solucionar los problemas más acuciantes del medio en que se desen vuelven, su incidencia en la solución de fondo de ellos no deja de ser menor. En ocasio- nes, la necesidad de garantizar su supervivencia económica les impone a esas instituciones unas Gustavo Bell Lemus. insuperables limitaciones que les impide planear sus horizontes de mediano y largo plazo. ción del Atlántico de varios de esos estudiantes, La virtud fundamental de la gestión de Ferro para entonces ya profesionales, y poder cumplir Bayona al frente de la Universidad del Norte ha conjuntamente con ellos las enseñanzas del Dr. sido precisamente la de elevarla por encima de Ferro. esas circunstancias del medio y proyectarla en el Fue justamente en el desempeño como go- futuro como una auténtica universidad que, sin bernador cuanto tuve la oportunidad de conocer dejar de atender las demandas inmediatas de la una publicación que hiciera la Gobernación en el región, piensa siempre sus objetivos en el largo año 1965, denominada un “Plan Socio-económi- plazo. No obstante, esa visión per se no habría co para el Atlántico”, un estudio sobre los prin- sido suficiente si ella no hubiese estado acom- cipales problemas de Barranquilla y el Atlántico, pañada por un claro derrotero institucional que con sus respectivas recomendaciones, a cargo del comprometiera a todos sus estamentos en su rea- reconocido economista Lauchlin Currie (1902- lización. Tal es la otra virtud que a lo largo de sus 1993), fundador de la planeación en Colombia y años como rector ha tenido Jesús Ferro Bayona: quien viniera a finales de la década de 1940 en trazar el camino y andarlo con paso firme y segu- una de las primeras misiones del Banco Mundial ro, construyendo al mismo tiempo las bases y el a Latinoamérica. edificio de lo que es hoy la Universidad del Norte. A lo largo del plan, el profesor Currie fue muy Asimismo, es preciso resaltar que la dimensión reiterativo en señalar la necesidad que tenía la humanística que tiene la Universidad se debe ciudad de formar un recurso humano altamente también a la particular sensibilidad que hacia ese capacitado, que se dedicara con rigor profesio- campo del saber tiene Ferro Bayona, muy propia, nal a estudiar y reflexionar, con una visión in- por lo demás, de su formación intelectual. De una tegral y de largo plazo, las diferentes fuerzas y institución que en la práctica, en sus primeros variables que incidían en nuestro subdesarrollo, años, era un politécnico orientado a la formación y a proponer soluciones posibles. Igualmente, les de profesionales para atender las demandas de pedía a los dirigentes cívicos e industriales de las empresas e industrias locales, Uninorte se Barranquilla dedicarle algún tiempo de sus ocu- fue transformando, de su mano, en la universi- paciones a esos mismos menesteres. Meses más dad que es hoy, donde al lado de las tradiciona- tarde de la publicación del citado plan, en enero les profesiones técnicas basadas en las ciencias de 1966, un grupo de empresarios locales creó la exactas, cuenta con aquellas que se inspiran en Fundación Universidad del Norte. las ciencias sociales y humanas. Su desarrollo Cuatro décadas después, la Universidad tiene en los últimos años se ha traducido en una me- hoy las características y elementos propios de las jor formación integral de sus egresados y, por lo mejores universidades del sub-continente y cum- mismo, en una mejor competencia para afrontar ple a cabalidad aquella tarea que el profesor Cu- los problemas del mundo contemporáneo. He ahí rrie le exigía a la ciudad. Haber logrado ese nivel también, en palabras de Pamela Flores, el legado en un tiempo relativamente corto —si lo situamos de civilidad de Jesús Ferro Bayona.

3 Esa visión integral de sus egresados, al igual tra, en un país como Colombia. Ante las grandes que el papel que una institución de educación desigualdades sociales y la pobreza extrema que superior debe tener con su entorno, ha hecho nos caracteriza, la Universidad del Norte debe que la Universidad sea, hoy por hoy, el principal ahondar aún más en su compromiso de poner al centro de pensamiento y de generación de pro- servicio de la sociedad todo su potencial de inci- puestas sobre el posible desarrollo de la región dencia en la superación de esas realidades. Caribe. En este sentido, la Universidad del Norte Sobre la proyección y vinculación de la Univer- debe estimular, promover y orientar la discusión sidad con su entorno geográfico, es preciso seña- pública sobre los temas más relevantes que ata- lar la disposición abierta que siempre ha tenido ñen a su presente y su futuro. Así como en su Jesús Ferro Bayona de respaldar todas aquellas momento lo planteara el profesor Currie, debe po- iniciativas que se orienten a mejorar el conoci- ner sus mejores mentes al estudio de la viabilidad miento de nuestra región. Al respecto, es impor- de aquellas instituciones que propendan por un tante destacar que, en buena hora, se le debe a su mayor y más rápido desarrollo de nuestros muni- sensibilidad el que los costeños hayamos vuelto cipios y departamentos. nuestras miradas al Gran Caribe en búsqueda de Ahora bien, sin duda uno de los logros más nuestra identidad cultural. En efecto, fue a par- encomiables de la labor de Jesús Ferro Bayona al tir de su discurso inaugural del Primer Encuen- frente de la Universidad, ha sido la de convertir tro Caribe —que tuvo lugar a finales de agosto de la educación superior que en ella se imparte en 1986, con ocasión de los veinte años de la funda- un importante factor de movilidad social en una ción de la Universidad— cuando la región empezó región con los más altos índices de desigualdad. a retomar el significado histórico y cultural de su Una rápida mirada a la distribución del estrato pertenencia a esa zona geográfica. Desde enton- de sus alumnos, nos revela un porcentaje bas- ces, es mucho lo que hemos recobrado y ahonda- tante significativo de estudiantes provenientes de do de nuestro ser Caribe, gracias al impulso que los más bajos, gracias a los múltiples programas en ese momento coyuntural le supo dar Jesús de ayuda y apoyo financiero que les ofrece la Uni- Ferro a una tarea que hacía décadas estábamos versidad. Así, cada año cientos de estudiantes de pendientes de abocar, y que se puede leer en la escasos recursos económicos —pero con buenos síntesis de Antonino Vidal y Roberto González, en récords académicos— obtienen su título profesio- el artículo “Una mirada hacia la región natural nal, lo que les permite acceder a buenos puestos frente al Caribe”. de trabajo por el sello de excelencia que represen- En este mismo sentido, debo expresar mis es- ta Uninorte, y con ello las posibilidades de una peciales sentimientos de gratitud por el apoyo mejora de sus condiciones sociales. que desde un comienzo me brindó para adelantar En tanto que vivimos de pleno en la era del mis estudios doctorales históricos sobre nuestra conocimiento, una educación de calidad como la región Caribe, y la cabida institucional que en lo que imparte la Universidad del Norte, accesible sucesivo tendría la Historia como disciplina aca- a quien tenga los méritos intelectuales indepen- démica en la Universidad. Para mí fue muy esti- dientemente de su origen social, es la mejor con- mulante contar con su respaldo, como también tribución que una institución puede hacer para la comprensión que en todo momento manifestó construir una sociedad más incluyente y demo- sobre su importancia y pertinencia para los fines crática. En este orden de ideas, podemos decir de la Universidad. que la Universidad del Norte ha hecho más que La constante actividad creadora que caracte- cualquier política pública en promover el desarro- riza la vida académica de la Universidad encuen- llo social y la igualdad en nuestro medio. tra en Jesús Ferro Bayona su principal fuente, no Al apreciar el papel que la Universidad ha solo por su permanente motivación, sino además desempeñado en la historia reciente del país, no por el decoroso ejemplo que le sabe imprimir al es difícil vislumbrar el que deberá tener en las cumplimiento de sus deberes como cabeza visible décadas venideras, en las que la ciencia y la tec- de la institución. La gran empresa educativa que nología marcarán cada vez más el destino de la hoy es la Universidad del Norte es la más feha- humanidad. Las universidades, como principales ciente prueba del liderazgo creativo de Jesús Fe- generadoras de ese saber científico y tecnológico, rro Bayona, que lo enorgullece a él, como a todos tendrán mayores responsabilidades en ese desti- quienes hemos tenido el honor de haber trabaja- no, y mayores aún en una región como la nues- do bajo sus directrices y enseñanzas.

4 lanzamiento JFB: El goBiErno dEl FilósoFo

Afinamiento de la universidad en el Caribe*

Jesús Ferro Bayona Rector de la Universidad del Norte

Cuando arribó a la universidad, hace más de 20 años, el piano Kawai de media cola, el mismo que se encuentra ahora en este recinto, supimos pronto que no podía ser estrenado de inmediato. Viniendo del norte más frío, debía ser sometido al tratamiento de tropicalización para protegerlo y adaptarlo a las condiciones de nuestro clima de calor y salitre. Proceso ineludible que le ha dado resistencia al teclado y a sus cuerdas, de donde han salido tantos y tan bellos sonidos.

Universidad, Universalidad en el Caribe plUral Si ustedes me permiten la comparación, quisiera expresar una idea sobre lo filosófico en la acade- Jesús Ferro Bayona. mia, partiendo del lugar donde uno habla y habi- ta, que es la universidad. pero, al tiempo, se la dotó de unos objetivos mi- Para ese efecto, diría, en primer lugar, que la sionales genuinamente anclados en el Caribe co- fundación de las universidades, desde la épo- lombiano, y con un alto compromiso en torno al ca colonial, en esta gran Cuenca del Caribe se desarrollo social, cultural y político de la región. asemejaba al tratamiento que reciben los pianos La historia tenía que ser así. El Caribe se defi- para que se acomoden a las circunstancias tan ne como un universo de la diferencia y la plurali- distintas a aquellas en donde nacieron: la Europa dad. En las incontables islas del Caribe se habla de hace más de un milenio. francés, inglés, español, holandés y papiamento, Al referirme a esa disposición del conocimiento sin desconocer otros microcosmos de inmigrantes y de la ciencia en nuestras tierras, no quiero decir venidos de diversos puntos del planeta. que nuestra civilización americana haya sido un El Caribe también contornea la Florida, llega receptor pasivo de la institucionalidad universi- a México, abarca los países de América Central y taria europea. Por el contrario, grandes univer- baña las costas nórdicas de Suramérica, en don- sidades del Caribe, como la de West Indies, para de nos encontramos los colombianos de la Costa. poner un ejemplo, que fueron concebidas siguien- Eso, en pocas palabras, es todo un universo. El do el modelo británico, se han transformado en Caribe de todo orden no es unívoco, es más uni- centros de estudios superiores con especificidad versal de lo que nos imaginamos sus habitantes. autónoma y regional. Desborda los conceptos provincianos sobre los Para no ir más lejos, la Universidad del Nor- valores, las ideas, y las costumbres, que a veces te fue creada siguiendo el paradigma anglosajón tomamos como exclusiva marca de lo caribeño. Tengamos en cuenta que la redefinición de la * Texto leído por su autor en el lanzamiento del libro Jesús conciencia sobre la universalidad del Caribe ha Ferro Bayona: el gobierno del filósofo, Barranquilla, marzo 15 de 2012. tomado siglos. Al comienzo, los españoles lo lla-

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 5 pp. 5-7. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 maron mar de los Sargazos, en la segunda mitad del siglo XVII los franceses lo denominaban mer des Antilles, los holandeses y británicos en su supremacía del siglo XVIII lo consideraron como parte del mar del Norte. Solo muy a comienzos del siglo XIX, fue pasan- do de mar de las Antillas a mar Caribe1. Empero, hay muchos todavía que lo denominan Atlántico. Por otro lado, fíjense que en la Carta de Ja- maica (1815), Simón Bolívar expresa muchos in- terrogantes sobre lo que hemos llegado a ser hoy, nosotros que fuimos el futuro para él, pues con- figurar toda idea relativa al porvenir le parecía al Jesús Ferro Bayona entrega a Karl C. Parrish Libertador en ese momento aventurada. Escribía: doctorado honoris causa en Ingeniería, 1989. Nosotros somos un pequeño género humano; poseemos un mundo aparte; cercado por dilatados mares, nuevo en casi todas las artes y ciencias aunque en cierto modo viejo en usos de la socie- dad civil. Dos siglos después que lo dijera el Libertador, nuestra mirada ha cambiado: en realidad, vivi- mos en un territorio que es universal, que no es aparte; estamos en un mundo que, por su histo- ria y su cultura, ya era globalizado avant la lettre. Éramos y somos universales antes de que se in- ventara la palabra globalización. Es cierto, por otra parte, que seguimos siendo un Mundo Nuevo, pero también hemos llegado a ser un mundo que posee su historia antigua, que Álvaro Jaramillo Vengoechea y Jesús Ferro Bayona, 2006. ha devenido historia clásica americana. Yo diría que somos premodernos, clásicos y postmoder- 2 nos: eso somos los americanos del Caribe. estrella de su porvenir . Yo pienso que Martí es un hombre del Caribe universal. Por esas razones, estoy seguro, sin temeri- dad, de que todos los que hemos frecuentado las Gobernar y edUCar desde la filosofía universidades europeas y norteamericanas, y de Cuando leí el título que mis amables oferentes, cualquier otra región, valga decirlo, hemos lleva- guiados por el decano José Amar, le pusieron al do en nuestro espíritu la cultura, la historia y la libro que porta mi nombre, “El gobierno del filóso- ciencia, cultivadas con autenticidad en las escue- fo”, pensé, como es apenas obvio, en Platón. Traje las y universidades de nuestro país. No hemos a mi memoria al autor de La República, pero tam- sido, por tanto, aprendices pasivos e inertes, sino bién al escritor de la Carta VII, en la que expresa, dialogantes sin descanso respecto de los cono- con temores y esperanzas, su proyecto de aplicar, cimientos y las culturas del otro, del extranjero. ya no solo en Atenas, sino también en la lejana Hemos crecido como habitantes de la diferencia. Siracusa, en la llamada entonces Magna Grecia, José Martí puede ser un referente para nuestro su idea del gobierno del filósofo mediante la pe- caso. En 1895, escribió sus Diarios en el trayecto dagogía de la persuasión, de la tolerancia, de la de regreso entre Nueva York y Cuba. Esos Dia- rigurosidad y del diálogo. rios son el descubrimiento táctil del desembarca- Ese Platón, que no solo reflexiona sobre la po- do, del recién venido, pero siempre del que sabe lítica buscando que el gobernante sea también un dónde se encuentran sus orígenes, dónde está la filósofo, intenta a su vez que el pensar sobre el gobierno de la República no se limite a un saber

1 Ver Antonino Vidal y Roberto González, “Una mirada hacia la región natural frente al Caribe”, en JFB: El gobierno 2 José Lezama Lima, La expresión americana, México: del filósofo, Barranquilla: Ediciones Uninorte, 2011, p. 110. FCE, 1993, p. 131.

6 teórico, o lo que es menos deseable, en mera con- templación sin compromiso con la vida, sino que pueda demostrar lo que sabe aplicándolo, convir- tiéndolo en techné, en arte de gobernar, en cami- no que conduce a los ciudadanos a la verdadera realidad que encuentra en el Estado y en las ins- tituciones su más apremiante expresión comuni- taria. Imitando quizás a Platón, quien recorrió su propio Mediterráneo, nosotros no hemos dejado nunca atrás el Caribe cuando fuimos a formar- nos en otras latitudes. Hemos hecho, a la inversa, nuestro propio recorrido intelectual y científico por el mundo, para volver aquí a realizar la idea Jesús Ferro Bayona, Gustavo Bell Lemus, de una república del saber en donde tengan ca- Alma Lucía Díaz Granados, vicerrectora administrativa, bida todos nuestros coterráneos sin distingos de y Alberto Roa Varelo, vicerrector académico. clase, de religión, de partidos o de género. Una república del conocimiento y de la cien- cia, una patria de la cultura; una donde podamos servir a los demás para que accedan a su mayoría de edad intelectual, a su autonomía, a los cono- cimientos que liberan de la ignorancia, a la equi- dad social que salda la deuda republicana con la igualdad. Eso es lo que entendemos por el gobier- no del filósofo. El gobierno de una universidad no se ejerce de manera solitaria, sino en equipo. La comuni- dad en la que nos encontramos es comunidad de directivos, de profesores, de investigadores, de estudiantes, de egresados. Es una comunidad José Amar Amar, editor del libro, Marcel Pariat, presidente de estamentos. La mayor virtud alcanzada, si la de Redford Internacional. hubiere, es la que proviene del diálogo, de la com- prensión, de la labor y responsabilidad común, del magisterio en el aula de clase. A ese propósito, me gustaría recalcar que co- rresponde al profesor, o si se quiere al maestro, ejercer la más importante tarea de gobierno, que es orientar, debatir y compartir el saber con los estudiantes. Me apoyo en una frase inspiradora de la car- ta que Simón Bolívar le escribió, el 19 de enero 1824, a su maestro Simón Rodríguez, trayendo a la memoria la visita que hicieron juntos al Mon- te Sacro en Roma para jurar sobre aquella tierra Concierto ofrecido por estudiantes de música de Uninorte. santa la libertad de la patria. Recordemos que, para ese momento, Bolívar Cuánto desearíamos oír repetidas en nuestros era el héroe de las mil batallas liberadoras de estudiantes esas felices palabras. Por mi parte, América, el superhombre, el semidiós. Sin em- termino las mías, diciendo: bargo, se vuelve a su maestro con humildad, para La universidad, que es el reino de la diversi- decirle: dad, está ahí, Alma Máter, para que nunca desis- Vuestra merced formó mi corazón para la liber- tamos del estudio, ni paremos de preguntar, ni tad, para la justicia, para lo grande, para lo her- dejemos de investigar. moso.

7 200 años dE ErEcción En villa

Manuel Rodríguez Torices y Barranquilla

Adelaida Sourdis Nájera*

El 11 de noviembre de 1811 Cartagena de Indias das de la Nueva Granada en asocio con Custodio declaró su independencia absoluta de España García Rovira y José Miguel Pey y vicepre- y creó el Estado “libre, sobe- sidente de la Unión bajo el rano e independiente”1 mandato de Camilo To- de Cartagena, el cual rres. Político, legislador, existió durante cuatro periodista, humanista y años y veinticuatro días hombre de acción, sus hasta que fue recon- ejecutorias sobre la or- quistado por la Corona ganización del Estado, española. Durante ese las relaciones exterio- corto período se rompió res y con la Iglesia y el el antiguo orden institu- manejo económico y ad- cional y se sentaron las ministrativo de Cartagena bases de un Estado moder- y de las Provincias Unidas no mediante el intenso trabajo son un legado que poco se ha legislativo y administrativo de explorado. Dieron fundamen- una elite ilustrada, frente a la to al nuevo orden republicano cual actuó un hombre de excep- basado en las ideas liberales ción: Manuel Rodríguez Torices y los derechos del hombre y del y Quiroz, figura señera de la Cos- ciudadano, y el cinco de octubre ta Caribe y uno de los hombres más de 1816, durante la época del terror, importantes y representativos de la junto con Camilo Torres lo llevaron Primera República. Hizo sus prime- Huellas reproduce a continuación diversas al cadalso cuando apenas contaba versiones del escudo de Barranquilla. ros estudios en su ciudad natal y 28 años. luego pasó al Colegio Mayor de Nuestra Señora Un testigo presencial narró la ejecución. Fusi- del Rosario en Santafé, donde estudió leyes. En lados y ahorcados sus cadáveres, fueron colgados su corta vida pública fue presidente del Estado en una horca levantada en uno de los extremos de de Cartagena, presidente de las Provincias Uni- la plaza de mercado en Santafé (hoy plaza de Bo- lívar), donde pendieron por varias horas. Al caer * Doctora en Ciencias Jurídicas, e Historiadora, Pontificia la tarde los verdugos descolgaron los cuerpos, les Universidad Javeriana; magíster en Investigación Social Inter- cortaron las cabezas y las colocaron en jaulas que disciplinaria, Universidad Distrital Francisco José de Caldas en convenio con el Archivo General de la Nación; miembro de luego exhibieron en distintos lugares de la ciudad número de la Academia Colombiana de Historia y correspon- donde permanecieron durante quince días, la de diente de las de Cartagena de Indias, Bogotá, Barranquilla y Torres en el camino que iba para San Diego y la Real Academia de Historia de España. de Torices en la pila de San Victorino. Este artículo fue escrito especialmente para Huellas.

8 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 8-20. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 …La profunda impresión que me causó tan tris­ ral de Arzobispado de Burgos, y de Doña María te y desagradable espectáculo, no se ha borra­ Trinidad Quiroz, natural de la ciudad de Santa do hasta hoy de mi memoria, por cuya razón Fe. Abuelos paternos Don Felipe Antonio Es­ recuerdo muy bien que el señor Torres pinosa y Doña María Josefa Rodríguez estaba vestido de pantalón y casaca del Dozal del dicho Arzobispado de de paño negro, corbata y chaleco Burgos; maternos: Don Manuel blancos, y que el señor Torices Francisco de Quiroz y Doña Fran­ estaba con pantalón, corbata y cisca Navarro y Acevedo, el pri­ chaleco blancos y un chaquetón mero de los Reinos de España de paño colorado con cuello y y la segunda de dicha ciudad. vueltas celestes, y calzado con Fueron sus padrinos Don Felipe botas de cuero de ante amarillo. Antonio Espinosa, Alguacil Ma­ Como al señor Torres le apun­ yor Executor de la Real Hacien­ taron a la cabeza le dañaron la da y su esposa Doña Francisca cara de tal modo que no se podía Quiroz, persona inteligente de la distinguir parte alguna de ella; mas obligación y parentesco espiritual no sucedió así con el señor Torices, que contraían. quien recibió balazos solamente en el pecho, Y lo firmé Dr. Gregorio Manuel Guillén3. pudiendo, por lo mismo, distinguirse perfecta­ Declarada la independencia, la Junta Supre- mente su hermosa y bella cara, cubierta de una ma de Gobierno convocó a los pueblos a una Con- tez blanca y de una barba negra y bien poblada vención Constituyente y Electoral que asumió el que contrastaba agradablemente con lo blanco gobierno con el fin de expedir la constitución po- de aquella… lítica del Estado. En desarrollo de ello, los parti- José Belver2 Había nacido Torices en Cartagena de Indias el 24 de mayo de 1788 en el hogar formado por el español Matías Rodríguez Torices, natural de Burgos, importante comerciante, miembro del Real Consula- do de Comercio, y María Trinidad Quiroz, dama santafereña. Su partida de bautis- mo dice: Yo, el Dr. Don Gregorio Manuel Guillén, Cura Teniente del Sagrario de esta Sta. Iglesia Catedral, en ella Maestro de Sa­ gradas Ceremonias y Revisor de Libros de Santo Oficio de la Inquisición, CER­ TIFICO: Que en uno de los parroquia­ les que son de mi cargo, en donde se apuntan las partidas de bautismos de españoles que se hacen en dicha San­ ta Iglesia, al folio 10 se halla un Capí­ tulo del tenor siguiente: En la Ciudad de Cartagena de Indias a 20 de Mayo de 1788 años: Yo, el Dr. Don Gregorio Manuel Guillén, Cura Teniente del Sa­ grario de esta Iglesia Catedral en ella Maestro de Sagradas Ceremonias y Re­ visor de Libros del Santo Oficio de la Inquisición, bauticé, puse óleo y Crisma a Manuel Juan Robustiano de los Do­ lores, que nació el día 24 del corriente, hijo legítimo de Don Matías Rodríguez Manuel Rodríguez Torices por Luis García Hevia, 1837. Torices, de los Reinos de España, natu­ [Óleo sobre lienzo, 64.3 x 87 cm, Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario].

9 dos y las parroquias eligieron sus representantes del Reino, la propiedad de otras islas formadas y el 22 de enero de 1812 se instaló la asamblea por el mismo Magdalena, y adjudicadas exclu­ constituyente. Como presidente de la corporación sivamente a una de las Provincias colindantes fue elegido José María del Real Hidalgo, doctor en por leyes hechas sin pleno conocimiento de cau­ leyes educado en el Colegio de San Bartolomé en sa, sin audiencia de partes, y tal vez contra las Santafé, cargo que ejerció por poco tiempo pues indicaciones de la naturaleza. Por el medio día, sufrió serios quebrantos de salud, por lo cual, el dicho río de San Bartolomé hasta sus cabe­ dado el peligro que se cernía sobre Cartagena, la ceras, la cresta de las montañas de Guamocó, Convención acordó el 25 de marzo que el poder una línea tirada desde ésta por los siete gra­ ejecutivo pasara al vicepresidente Manuel Rodrí- dos treinta minutos norte a las cabeceras del guez Torices, con la plenitud de facultades de un río Sucio, y este mismo río hasta su entrada al dictador. Lo acompañaría un consejo integrado Atrato; y por el poniente y mediodía el dicho río por: Germán Gutiérrez de Piñeres, Francisco García Atrato hasta su salida al mar en el golfo del del Fierro, Antonio Angulo, Ramón Ripoll, Gabriel Darién, y el golfo mismo, comprendiéndose la Gutiérrez de Piñeres y José Arrázola y Ugarte4. isla de Tortuguilla, la nombrada Fuerte, las de Torices gobernó desde esa fecha hasta octubre San Bernardo y del Rosario, situadas todas de 1814 cuando se separó del mando para asu- en las inmediaciones de la costa occidental de mir el gobierno colegiado de las Provincias Uni- este Estado: quedando así separado por el río das. Bajo su presidencia se organizó Cartagena Magdalena de las Provincias de Santa Marta, como una república democrática representativa Pamplona y Socorro, que están al oriente; por regida por una constitución que él mismo ayudó el de San Bartolomé, montaña de Guamocó y a redactar, aprobar y sancionar. Su obra de go- línea indicada, de la de Antioquia que está al bierno no puede entenderse sin referencia a este mediodía; por el río Sucio de la del Chocó, que estatuto fundamental que estructuró el Estado y está también por el sur; y por el Atrato de la del 5 estableció los principios y normas que regirían su Darién, que está al poniente. funcionamiento. La extensa consti- tución de Cartagena consagró los milicias de Barranquilla elementos constitutivos y prefiguró (Entre los años de 1777 y 1782) el Estado moderno creando insti- D. Antonio Vazquez [sic] por nombramiento Sargento Mayor tuciones y procedimientos de avan- del Excelentísimo Sr. Virrey Caballero zada en una época tan temprana como 1812: soberanía radicada en El Capitán Graduado D. Francisco Pérez Dávila, el pueblo, división del poder públi- Ayudante Mayor desde 11 de junio de 1777 por Real Título de 19 de febrero de dicho año co en legislativo, ejecutivo y judicial, comPañías inteGrantes derechos y garantías individuales del ciudadano, elección indirecta de los poderes, control constitucional y De blancos 2 libertad de prensa, entre otras insti- tuciones. Denota gran conocimiento Tenientes veteranos Capitanes Tenientes. Sub- tenientes Sargentos veteranos Cabos veteranos Sargentos Tambores Cabos Soldados del derecho público por parte de sus 1 2 2 2 2 4 6 2 24 167 redactores. Id. Caballería 1 1 1 1 1 2 2 8 61 el territorio Los límites del territorio cartagenero De todos colores 8 1 7 7 6 3 5 24 8 96 668 se fijaron con precisión: De pardos 2 1 2 2 2 1 3 6 2 24 168 El mar Atlántico por el norte y po- Id. Caballería de niente; por el oriente el río Magda­ 1 3 12 125 lena desde sus bocas hasta su baqueros 1 confluencia con el de San Barto­ De morenos 3 2 3 3 1 2 9 3 36 243 lomé, inclusive la isla de Morales formada por aquel, y la de Quim­ totales 4 14 16 13 8 16 50 15 200 1432 bay enfrente de la Villa de Mom­ pox, quedando para el examen y Gran total de milicias de Barranquilla 1768 declaración del Congreso general Fuente: A.G.N. Colonia, Historia civil, tomo 7 bis, fol. 300.

10 Aunque la Constitución no describe es- nombraba a doce electores, tres escogidos pecíficamente la división territorial por Barranquilla, tres por Santo To- del Estado, de su lectura se de- más, dos por Barrancas, tres por duce que ésta se componía por Mahates y uno por María, los Departamentos, divididos en cuales elegían a tres diputados Partidos, integrados por Ciu- capitulares que formarían par- dades, Villas, Parroquias y Cu- te de la Junta Suprema6. ratos. La junta Suprema había Cartagena, que ya no recibía creado cinco departamentos capi- el situado (trasferencias financie- tulares (donde funcionaban los ras) de las otras provincias para Cabildos existentes en la pro- defender el Caribe, hizo es- vincia): Cartagena, Mom- fuerzos por subsistir. El pox, Tolú, Simití y San Be- joven presidente promovió nito, que llevaban el nombre su financiación mediante de sus poblaciones cabecera. la apertura de nuevas opor- Eran ciudades Cartagena y Si- tunidades comerciales, expe- mití y las demás villas. Otras locali- dición de patentes de corso a mari- dades menores que no tenían esas catego- nos que reportaran ganancias al Estado, rías eran parroquias, podían ser Sitios de blancos imposición de tributos sobre tierras y rentas, y libres de todos los colores —como Barranquilla incautación de bienes y alhajas de los realistas y Sabanalarga, por ejemplo— o Pueblos de indios, expulsados, préstamos de particulares y mante- como Malambo o Galapa. En el régimen colonial nimiento del papel moneda creado por la Junta, algunos sitios tuvieron la categoría de Capitanías cuyos resultados fueron un fracaso y hubo que Aguerra por estar localizados en lugares vulnera- amortizarlo con metálico. Organizó el Gobierno bles a ataques de enemigos externos o de indíge- en cinco secretarías: guerra, hacienda, justicia, nas rebeldes, por lo cual su corregidor manejaba policía y gobierno. Reordenó la división territo- milicias y tomaba el nombre de Capitán Aguerra. rial en acuerdo con el Poder Legislativo, elevó a Esta categoría fue suprimida por la Constitución Mompox a la categoría de ciudad y a la de villas, de 1812. Los habitantes no sometidos a las au- con cabildos y alcaldes, a las poblaciones de Ba- toridades vivían apartados de los núcleos urba- rranquilla, Corozal, Lorica, El Carmen7, Mahates, nos en medio de la manigua, en Rochelas o en Chinú, Magangué, Soledad y Majagual8. El 31 Palenques si eran africanos insumisos o esclavos de mayo de 1813 el Poder Legislativo del Estado huidos de sus amos, conocidos ambos como ci- arregló la división territorial para celebración de marrones. elecciones en nueve departamentos: Cartagena, La estructura político-administrativa se ceñía Mompox, Barranquilla, Carmen, Corozal, Magan- a la división territorial. Las instrucciones para las gué, Chinú, Lorica y Mahates9. elecciones parroquiales, de partido y capitulares (de cabildos) para nombrar a los electores que es- la poblaCión cogerían a los diputados a la Junta Suprema, da- Las instrucciones para las elecciones estimaron das el 11 de diciembre de 1810, dan una idea de el número de habitantes del Estado en 200.000, la organización de la provincia. Indican que cada cifra que parece algo exagerada pues según el departamento capitular con jurisdicción sobre censo de población de 1777-1778, único oficial todo su distrito territorial se componía de un par- que se realizó en todo el virreinato, la Provincia de tido principal, uno foráneo (externo a la población Cartagena albergaba a 119.452 habitantes distri- cabecera del departamento), partidos menores, si buidos en 88 núcleos urbanos incluyendo a la ca- era el caso, y parroquias. El partido foráneo del pital. Esta albergaba a 13.630 personas y Mom- Departamento de Cartagena se componía de las pox, la segunda urbe en importancia, a 7.208. Le capitanías aguerra de Barranquilla, Santo Tomás, seguían en su orden: Lorica con 4.539 habitantes, Barrancas, Mahates y María. El de Tolú estaba San Andrés de Sotavento con 3.456, Barranquilla integrado sólo por Lorica. San Benito Abad tenía con 2.919, Real de la Cruz con 2.508, Sabana- tres capitanías aguerra: Corozal, Ayapel y Magan- larga con 2.474, Soledad con 2.209 y Sampués gué. El de Mompox comprendía las capitanías de con 2.047. Las restantes poblaciones no llegaban Loba y Pantanos y el de Simití las parroquias de a 2.000 personas10. Cartagena y Simití, que sólo Morales y Norosí. El partido foráneo de Cartagena contaba con 913 habitantes, tenían la categoría

11 de ciudades y Mompox, Tolú y Ayapel la de villas. ¿Qué posición tenía Barran- quilla y qué papel jugaba en el novel Estado de Cartagena? Para saberlo debemos remontarnos a épocas anteriores. Durante la colonia, Barranquilla era un Si- tio de blancos en la Provincia de Cartagena, en el partido de Tie- rradentro, que abarcaba el anti- guo delta del río Magdalena. Era una aldea de casas de bahareque con techos de paja, asentada en la orilla de un antiguo caño lla- mado de “Las Compañías”, en una zona anegadiza11 en la ribe- ra occidental de río, cercana a su desembocadura. Tierra de agri- cultores, ganaderos y fabrican- tes de canoas, proveía de carne a la Plaza Fuerte y cobró especial importancia como puerto termi- nal del Magdalena. Cabecera del partido de Tierradentro, a partir de las reformas militares de me- diados del siglo XVIII adquirió la categoría de Capitanía Aguerra, en razón de su situación en la desembocadura del río, cercana a la ensenada de Sabanilla, lugar preferido de contrabandistas y vulnerable en caso de una inva- sión a Cartagena. Por esta razón mantenía el mayor número de milicias del Estado después de Cartagena: 1768 hombres (Mom- pox solo contaba con 1138) que representarían cerca del 60% de su población si frontera fluvial. La república defendía su conexión comparamos el número de milicianos de 1777 con el interior a través de destacamentos de tropas y 1782 con las cifras del censo de 1777-78. Las y fuerzas sutiles situados en diferentes sitios a lo milicias adiestraron a los pobladores en las artes largo de la ribera entre Mompox y Barranquilla, en castrenses y fomentaron el espíritu y el valor mili- lo que se conoció como la “Línea del Magdalena”. tar de lo cual harían gala en época posterior. En las elecciones celebradas por la Convención de Poderes el 12 de junio de 1812, se eligió corre- GUerra Contra santa Marta gidor de Barranquilla a Eusebio María Canabal Constituido el estado cartagenero en 1811, Ba- y de Mompox a Vicente Celedonio Gutiérrez de rranquilla se convirtió en guardián del límite nor- Piñeres. te del río que marcaba la frontera con la Provincia En 1812 se desató la guerra entre Cartagena de Santa Marta, y en sitio donde Cartagena colocó y Santa Marta en la cual los habitantes de Ba- fuerzas sutiles (navales) para proteger su tránsito rranquilla y Tierradentro tuvieron importante fi- fluvial. Al sur, Mompox, principal puerto sobre el guración. La manzana de la discordia fue el de- Magdalena hacia el interior del país y segunda rrocamiento de la junta patriota en Santa Marta ciudad del Estado, completaba la protección de la y la negativa de los samarios a enviar diputado al

12 Facsímiles de un documento firmado por Manuel Rodríguez Torices, conservado en la Biblioteca Fernández de Madrid, Cartagena.

Torices recurrió entonces a contratar los servicios de varios venezolanos llegados en 1812 después de la derrota de Francisco de Miranda y la pérdida de la Primera Repúbli- ca venezolana, y del francés Pedro Labatut, oficial de los ejércitos napoleónicos venido a América con Miranda. Entraron al servicio del estado cartagenero, además del fran- cés, los hermanos Tomás y Mariano Mon- tilla, Manuel Cortés Campomanes, Miguel congreso de las Provincias Unidas. Para presio- y Fernando Carabaño y en los últimos meses del narlos, Cartagena empezó a apretarlos económi- año el coronel Simón Bolívar. Tres ofensivas mi- camente. Puso un impuesto ad valorem a todos litares se organizaron: la primera a cargo de La- los productos que entraban o salían de la provin- batut para luchar contra los samarios; bajo su cia y situó un retén de aduanas en Barranquilla mando quedó el coronel Simón Bolívar. Cortés con un número de embarcaciones armadas para Campomanes, el capitán Rebustillo y los herma- controlar la vía interna hacia Santa Marta. Re- nos Carabaño aplastaron a sangre y fuego la in- tén que fue una talanquera para el contrabando surrección de las sabanas. En Mompox, Torices que entraba por esta ciudad y, por Riohacha, se y el corregidor Gutiérrez de Piñeres armaron una transportaba a través de la Ciénaga Grande y sus expedición con tropas locales dirigidas por Panta- caños comunicantes hacia el Magdalena y allí se león de Germán Ribón, enfrentaron a Santa Mar- embarcaba para el interior del país. Ese mismo ta y ocuparon varias poblaciones de esa provincia año ocurrió la llamada ‘revolución de los curas’ para recuperar la navegabilidad del Magdalena, en las sabanas de Tolú. Los productores de mieles cortada por los samarios. Sería Bolívar, en 1813, y aguardientes destilados en alambiques ilegales quien despejaría el río en una brillante acción, co- burlaban el estanco y enviaban sus licores a San- nocida hoy como la campaña del bajo Magdalena. ta Marta, donde les pagaban en metálico cuando En la guerra contra Santa Marta el ejército en Cartagena circulaba el papel moneda de curso del Magdalena, comandado por Labatut, estaba forzoso. Los controles impuestos por el Gobierno integrado por fuerzas sutiles, bongos y piraguas en los caminos del contrabando perjudicaron a armados, y por tropas de Barranquilla y del parti- estos productores, quienes soliviantados por va- do de Tierradentro. Se distinguieron por su valor rios sacerdotes afectos al rey se insurreccionaron. y patriotismo, especialmente en los combates de Los pueblos de los departamentos de Tolú y de Sitio Nuevo, Remolino, Palmar de Varela, Santo San Benito Abad, entre ellos el puerto del Zapote, Tomás y el Guáymaro. La “Gazeta de Cartagena por donde se embarcaban los víveres de la región de Indias”14, periódico oficial del estado, da cuen- del Sinú que surtían a la Plaza Fuerte,12 juraron ta de las intrépidas acciones de los barranquille- fidelidad a Fernando VII13. ros, la gran estima que por ellos manifestaba su comandante y la violencia de los combates.

13 los valientes de barranqUilla fuego tan vivo a las dos baterías de Sitio vie- y tierradentro jo, y el Palmar, que dominaban la boca del caño Las noticias siguientes narran las acciones de de Sabana Grande, que los hizo abandonar de la Sitionuevo y del Guáymaro, que involucraron a tropa que los guarnecía, y no solo logró clavar varias localidades ribereñas situadas en lo que los cañones de a 8 y de a 12 de dichas dos ba­ sería el actual departamento del Atlántico. Igual- terías, sino que se trajo una falúa armada (la de mente muestran la violencia y procedimientos de Navarro) y dos bongos igualmente armados […]. los combates, los cuales podían culminar con el NOTA. Con motivo de victoria tan inesperada; incendio de la población vencida, y el botín y sa- muchos Ciudadanos han observado, que cierta­ queo por los soldados de las poblaciones derro- mente es lamentable el tiempo y los caudales tadas, que en muchas oportunidades era el pago que hasta ahora se han consumido inútilmente que recibían por su participación en la guerra. dando tiempo a que el enemigo se refuerce; pero GRAN VICTORIA. Parte llegado a las 7 de la no­ que debe la Patria darse la enhorabuena de la che con el “pormenor de la gloriosa acción de inestimable ventaja de haber descubierto, en toma de Sitionuevo”.15 “…Preparadas las tropas los últimos gloriosos acontecimientos, que nues­ de desembarco que no pasaron de 200 hombres tros Milicianos no son insuceptibles de dicipli­ (134 de ellos vecinos de Barranquilla) les hizo el na y aun de los nobles sentimientos de valor Comandante C[iudadano]. Pedro Labatur [sic] y entusiasmo por la defensa de la Patria: si no una arenga exhortándolos al valor e intrepidez ¿cómo con solos doscientos vecinos de los sitios en la acción que iban a emprender por tan justa de Barranquilla Santo Tomás y lugares inmedia­ causa. tos se habría tomado el punto mas fortificado de nuestros enemigos y que se suponía casi Para tomar la posición conveniente se embar­ inexpugnable sin un número tres veces mayor có la tropa y siguió río arriba la noche del día 6 de tropas? Este exemplo excitará a todos los hasta las diez que llegaron a la boca del Caño vecindarios a concurrir a participar de la gloria del Palmar de Balera [sic]. Al amanecer el 7 se y de la utilidad que pueden reportar cobrando halló la expedición frente a Remolino y el Co­ con usuras del enemigo los robos y perjuicios mandante hizo la intimación de rendirse al de inmensos que nos han causado…”16 Sitionuevo, y recibida la contestación tomó las medidas correspondientes tanto con las tropas parte ofiCial de la ConqUista de tierra como con las de agua cañoneras nú­ del GUáyMaro meros 5 y 6 y otros menores. EXCMO. SEÑOR. —Con oportunidad comuniqué Estaba dispuesto atacar por dos puntos la a V.E. que iba a dar el asalto al Guaymaro: así batería principal, pero el entusiasmo de la tropa lo executé a las tres de la tarde del 16 del co­ le dio ocasión al Comandante para emprender rriente haciendo reunir a nuestras fuerzas su­ un ataque directo y osado. Así se verificó em­ tiles los cinco Bongos de guerra y escucha que pezando su acertado cañoneo la batería de Sto. se aprehendieron al enemigo; y en 26 embarca­ Tomás bajo cuyos fuegos avanzaron los buques ciones de transporte, hice entrar 400 Soldados armados y los de transporte de tropas, hacien­ de Barranquilla y demás lugares convecinos: a las do un fuego vivo y acertado. quatro y media hice levar [anclas]; de suerte No pudo el enemigo, a pesar del número de que a las seis y media ya estábamos en el Río, sus cañones, resistir la intrepidez de nuestras siguiendo la ruta del lugar que iba a tomar: lle­ tropas, y apenas saltaron a tierra arrollaron a gamos a las doce de la noche cerca de la frente los que intentaron defenderse, y el mayor núme­ de la boca del brazuelo del Guaymaro en donde ro abandonó el puesto y se entregaron a la más nos sostuvimos toda la noche hasta amanecer vergonzosa fuga oficiales y tropa: a excepción el 17 siguiendo nuestra ruta: pero al pasar fren­ de tres hombres (uno español) que no tuvieron te a dicho Guaymaro nos hicieron 27 tiros sus lugar de huir y fueron hechos prisioneros; se baterías, con buena puntería; pero no lograron encontraron 17 muertos y no se pudo perseguir un tiro. a los fugitivos porque huyeron dispersos por di­ A las nueve de la mañana, ya dos leguas versos puntos que en el momento se ignoraron. arriba atravesé a la Isla que tapa el Guayma- Mientras de esta manera se asaltó y tomó a ro y desde allí envié la intimación que en copia Sitionuevo el C[iudadano]. Francisco Suárez con acompaño N. 1 y una exhortación al vecinda­ la obucera y dos bongos armados atacó con un rio por mano del Alcalde cuyas contestaciones

14 Plaza de San Nicolás, h. 1880. originales números 2 y 3 no regresaron hasta Despedidos nuestros muertos a Ponedera lo­ las quatro de la tarde hora incompetente para gré aprehender una culebrina de bronce de a emprender la acción con cuyo motivo hice levar 18 que estaban sacando al sitio: la famosa y y seguir una legua mas donde nos apostamos muy mentada Lancha con dos cañones de a 12 hasta el siguiente 18. y 8 con todos sus pertrechos, que hacía una ba­ A las seis de la mañana después de refres­ tería, tres mas de estas bien pertrechadas con car las tropas y tripulación, repartí mis órdenes, cañones de a 12, 8, 6 y violentos; 250 fusiles, y seguimos río abaxo con ánimo decidido de con los demás pertrechos de guerra que cons­ morir o vencer: al ver el primer buque en el lugar tan de la adjunta nota num. 4 y la bandera del señalado que rompió el fuego, mandé tocar a imaginario Fernando y su nación Española, de ataque, y fueron entrando en un fuego activo y la qual voy yo a ser el conductor. continuado hasta el frente de las baterías ene­ Entró la tropa a hacer el saqueo; pero aun­ migas, en donde se sostuvieron nuestras tropas que fue mayor que el de Sitionuevo, no corres­ con inaudito valor mas de hora y media, tanto pondió a la Población, cuyos vecinos ya tenían con la artillería como con fusilería, infundiéndo­ traspuestos la mayor parte de sus muebles, y se el valor de los que iban muriendo, a los que la Iglesia solo tenía dos aras, un sagrario, los quedaban vivos; […] Santos Oleos, y las campanas, todo lo cual se La vergonzosa fuga de los Comandantes ofi­ extraxo con veneración y se remitió al Cura de ciales y tropas obligó a seguir las nuestras en Barranquilla. su solicitud hasta el monte por los arrastres y Después de haber comido, y puestas en la sangre, pero luego se encontraron dentro del orden las tropas, embarcados los cañones agua logrando solo 6 prisioneros. Entre noso­ y pertrechos, se le dio fuego a todo el sitio, y tros ha habido 9 muertos y 19 heridos, aquellos nos levamos a Santo Tomás, trayendo la Caño­ se enterraron luego en la Iglesia de Ponedera, y nera referida, y presa la bandera Fernandina; estos siguieron a curarse al Hospital de Barran- dexando apostados en la boca del Renegado quilla, en donde se les asiste como corresponde nuestra cañonera N. 5 con dos bongos armados a su mérito. […] y 25 soldados, para impedir las entradas y sa­ lidas del enemigo por este conducto; con lo que

15 ya quedó desierto uno de los puntos fuertes de barranqUilla eriGida en villa la cordillera, y que a la verdad estaba mas forti­ CoMo preMio al patriotisMo ficado con diez o doce piezas de grueso calibre; En premio a su valor, mediante decreto del 3 de y mucha tropa, de la qual habían llegado el día abril de 1813 la Cámara de Representantes por anterior 175 ñopos y la culebrina. solicitud del presidente Torices le otorgó a Barran- Nada tengo que añadir en orden al valor y quilla el título de Villa, capital del departamen- entusiasmo de las tropas que parecen todas de to de Barlovento, creado por esa misma norma, línea y muy aguerridas, y repito lo que de ella con todas las prerrogativas establecidas en la ley, dije a V.E. en nueve de este mes cuando la toma y le diseñó escudo de armas. El decreto corres- de Sitionuevo. pondiente fue promulgado por el presidente en el La fuerza de mar obró como era debido, y Cuartel General del Ejército de Observación, en los oficiales de guerra cumplieron con su deber: Barranquilla el 7 de abril. el Ayudante C. José García del Fierro se portó ¿Qué significó para Barranquilla su erección en la acción como corresponde a su empleo en como villa? De acuerdo con las ordenanzas de po- la guerra; el C. Ventura Izquierdo más atrevido blamiento expedidas por Felipe II, los conquista- que nunca, hizo maniobrar su cañonera núm. dores que contrataban con la Corona la conquista 6, hasta dar el abordaje, sin aquel gusto que en y población de un territorio debían fundar pobla- Sitionuevo por no haber orejas que cortar. ciones, delimitar su territorio, repartir solares en- Lo oficiales heridos fueron el Capitán C. tre sus habitantes, nombrar las autoridades que Joaquín Palacios en la coyuntura de un hom­ habían de regirlas y establecer su categoría jurí- bro con un pedazo de metralla de que sanará; dica. Podían ser ciudades, villas o simples corre- lo mismo que el Teniente C. Amant Fleury de gimientos, según el criterio del fundador. La fun- un dedo de la mano, y el también Teniente C. dación era, pues, un acto jurídico-administrativo Nicolás Bazen le atravesó una bala la muñeca solemne. Las ordenanzas establecían precisos re- izquierda, que tal vez quedará manco: a estos quisitos para escoger el lugar de fundación, entre los recomiendo a V.E. mediante a que por mani­ ellos que tuviera acceso a fuentes de agua dulce festarse guerreros, y dar ejemplo a las tropas, y tierras aptas para el cultivo y el pastoreo. Solo han recibido muy gustosos estas heridas, y de­ las ciudades y las villas tenían cabildos, alcaldes sean otra ocasión para vengarse en la sangre y oficiales de real hacienda. Los alcaldes ejercían del enemigo. la función administrativa-judicial y el cabildo le- Por lo expuesto acabará V.E. de conocer que gislaba y co-gobernaba de acuerdo con las leyes las tropas de tierra adentro son capa­ generales —las de Indias para América— y ces de acabar con los insurgentes los decretos del alto gobierno —el vi- de Santa Marta para clavar rrey—, y el gobernador de la pro- en la plaza el pabellón nacio­ vincia. En la provincia de Carta- gena hasta 1812 hubo sólo dos nal que defienden: V.E. pue­ de premiarlos a proporción, ciudades: Cartagena y Simití, con el objeto de estimularlos y tres villas: Tolú, Mompox y San Benito Abad. Las demás po- a que no desmayen, y estén fir­ mes para de este modo satisfacer blaciones eran sitios de blancos o pueblos de indios regidos por un yo la confianza del Gobierno; y conozca el Estado de Carta­ corregidor. Muchos no tuvieron gena mi adhesión a la justa fundación española, sino que 17 se conformaron por asenta- causa que defiende. mientos espontáneos, como Es posible que Labatut exa- fue el caso de Barranquilla18. gerara sus actuaciones ante el presidente Torices para mostrar Los cabildos llevaban la repre- sus méritos, pero sus métodos violen- sentación de los pobladores y fueron tos fueron cuestionados y en alguna medida órganos relativamente populares. Cuando causaron la rebelión de Santa Marta contra Car- Cartagena se constituyó en Estado libre e inde- tagena y su adhesión a la Corona, no obstante, pendiente, la manera de legitimar su soberanía el valor y la intrepidez de los barranquilleros fue fue a través de la aceptación y garantía de sus incuestionable. habitantes. Pero solo cinco poblaciones tenían órganos que representaran legítimamente a sus

16 Facsímil de un documento en el que figuran las firmas de los prohombres cartageneros, entre ellos, García de Toledo, Germán Gutiérrez de Piñeres, Antonio Villavicencio, Miguel Diaz Granados y otros. Biblioteca Fernández de Madrid, Cartagena.

vecinos. ¿Qué hicieron entonces el Legislativo y el presidente Tori- ces para ampliar la cobertura de la representación ciudadana? En primer lugar declararon a una nue- va ciudad, “Mompox la valerosa”, en 181219, y posteriormente, entre 1813 y 1814, crearon nuevos cabil- dos y dos departamentos. Elevaron a la categoría de villas a ocho po- blaciones: Barranquilla, la primera, mediante el decreto de la Cámara antes mencionado, capital del nue- vo departamento de Barlovento20, y luego El Carmen, con su departa- mento de la Montaña de María21. Siguieron Ma- sa de nuestra Independencia de la dominación hates, Corozal, Lorica, Chinú y Magangué22. En Española, y bien certificada de las ventajosas 1814 el turno fue para Majagual23 y Soledad, dis- proposiciones, y de los distinguidos servicios del tinguida por su patriotismo con el sugestivo nom- Sitio de Barranquilla; y su territorio, que tanto en bre de “Villa de la Soledad de Colombia”24. la última guerra con la vecina Santa Marta, como El decreto de la Cámara de Representantes en su actual turbación, ha concurrido, eficazmen­ transcrito a continuación dispuso la nueva dig- te a las miras del Gobierno, y conforme a lo pro­ nidad de Barranquilla y sus principales prerro- puesto por el Presidente Gobernador del Estado, gativas. la Cámara desde luego en uso de sus facultades La Cámara de Representantes en Sesión del 3 erige al Sitio de Barranquilla en Villa Capital del del corriente ha dado los decretos siguientes Departamento de Barlovento, o tierra adentro, re­ sidencia ordinaria del Corregidor Letrado, y de Deseando la Cámara de Representantes ofrecer una Municipalidad arreglada a [la] Constitución, a los Pueblos del Estado una prueba de su aten­ asignándose por distrito los partidos de Barran­ ción, y cuidado en premiar el mérito de los que en quilla, y Santo Tomás, con los Sitios, y Pueblos de nuestra actual regeneración han dado pruebas su actual comprehensión; sin perjuicio del final mas visibles de su patriotismo, y amor a la cau­ arreglo de Departamentos en que en la actuali­

17 dad se ocupa la Cámara. En cuya consequencia tes se ha expedido en tres del corriente el Decreto podrá usar del mencionado título de Villa en sus que sigue: [Sigue el decreto de la Cámara arri- Actas, Despachos y demás documentos que has­ ba transcrito]. ta ahora se haya acostumbrado con expresa de­ …Y para que llegue a noticia de todos y ten­ claración de la autoridad, jurisdicción, privilegios ga su más exacto cumplimiento, se circulará y y exenciones que en las Leyes están declaradas publicará en todos los pueblos del Estado en la a las Villas, señalándose por Armas, y emblema forma acostumbrada. Dado en el Cuartel gene­ de su nueva dignidad un Escudo en que se ven ral del Ejército de Observación en Barranquilla, un Rio corriente donde navegan buques del tráfi­ a los siete días del mes de Abril de mil nove­ co interior, bajo la protección de una batería, con cientos trece años; tercero de nuestra indepen­ su asta bandera, en la que estará enarbolado el dencia. Pabellón nacional; establecida a sus márgenes, MANUEL RODRÍGUEZ TORICES, Presidente Gober­ y orlada con el mote Premio al Patriotismo el cual nador del Estado puede poner en sus Pendones, Estandartes, 26 Banderas, Escudos, Sellos, y en las de­ Simón Burgos, Secretario . más partes, y lugares que quisieren, reConqUista y fin y a bien tuvieren en la forma, y del estado de CartaGena disposición, que lo usan, y prac­ tican las Ciudades y Villas del La reconquista de la Nueva Estado. Y para que sirva de per­ Granada por el ejército expe- petuo honor, y gloria a la citada dicionario comandado por el Villa de Barranquilla, y de ejem­ general , se inició plo, y justo estímulo a los de­ con la ocupación del Esta- más pueblos del Estado, se do de Cartagena que se lle- publicará en ellos esta gra­ vó a cabo por tres frentes: cia, y se tomará razón en el uno organizado desde San- Libro Padrón de Leyes de la ta Marta por el gobernador Cámara, y en los Capitulares, y Capitán General del Reino y demás en que se registran con­ (el virreinato había sido supri- forme al reglamento de la mate­ mido por la regencia), Francisco ria. de Montalvo y Ambulodi, con- tra la línea del Magdalena y sus ­ Con el fin de que inmediata puertos cabeceras, Barranquilla mente se lleve a efecto la instalación y Mompox, y dos por el ejército expedicionario. de Villa del Sitio de Barranquilla ha acordado en El sitio fue una lucha dura y sin cuartel durante esta fecha la Cámara autorizar al Presidente Go­ un año, que sacrificó a un tercio de la población27 bernador del Estado para que nombre por esta de la provincia y a la mitad de los habitantes de vez, y hasta las primeras elecciones en calidad la ciudad, liquidó la clase dirigente, destruyó la de interinos los cuatro Regidores que congrega­ economía y dejó un saldo de desolación y miseria dos en Municipalidad presidida por el Corregidor causa principal de la decadencia posterior de la elegirán los dos Alcaldes ordinarios. región28. Tres expediciones que partieron por tie- Y para que sirva de perpetuo honor y gloria rra desde Santa Marta cruzaron el Magdalena en a la citada de Barranquilla, y de ejemplo y justo diferentes puntos y ocuparon todos los pueblos estímulo a los demás pueblos del Estado, se pu­ que hoy conforman los departamentos de Atlán- blicará en ellos esta gracia, y se tomará razón en tico, Bolívar, Córdoba y Sucre. Simultáneamente el libro Padrón de leyes de la Cámara y en los la escuadra española sitió a la capital por el mar. Capitulares y demás en que se registra conforme El sacrificio fue completo. al Reglamento de la materia. —Comuníquese al Poder Ejecutivo para que acuerde su cumplimen­ los saMarios se toMan la to y las demás providencias que sean necesarias línea del MaGdalena 25 para llevarse a efecto. […] Desde los primeros días de abril de 1815 Montalvo MANUEL RODRÍGUEZ TORICES, Presidente Go­ reunió un contingente de más de 400 hombres di- bernador del Estado de Cartagena de Indias, a rigido por 11 oficiales al mando del capitán Valen- todos los moradores, estantes y habitantes en él tín Capmani, cuyo objetivo fue “hacerse dueño de hago saber, que por la Cámara de Representan­ las aguas del expresado río Magdalena por fuerza

18 de armas, en términos que pierdan la superiori- dad que hasta este momento han mantenido en él los rebeldes con sus buques de guerra. Para con- seguirlo es preciso apresar o destruir sus fuerzas marítimas de cualquier modo y manera que sea posible”29. Capmani debía atravesar la Ciénaga Grande y adentrarse por el caño Clarín para sa- lir al Magdalena y bajar hacia Barranquilla, en la desembocadura del río. Las instrucciones eran tomarse la villa por sorpresa para apoderarse de los buques de la fuerza sutil, los cuales debía en- viar a Ciénaga o quemarlos en caso de que esto no fuera posible, “en términos que no les quede uno sobre el agua”30 Contraviniendo órdenes, el español no atacó por sorpresa, sino que se fondeó en las cercanías y envió tres parlamentos invitando a la rendición y ofreciendo el perdón, pensando tal vez que así lo- graría mejores resultados. Barranquilleros y sole- deños contestaron el primer mensaje con tácticas dilatorias alegando tener que consultar con el go- les y siguieron a Barranquilla y Soledad donde bierno y los siguientes con bala y metralla noche recibieron apoyo de sus moradores que se alista- y día, desde el 22 de abril. El 25 Capmani atacó ron en el ejército y les ofrecieron ayuda material. con toda su fuerza y después de nueve horas de Montilla nombró a Pedro Gual gobernador civil combate, en que los pobladores y las tropas de de la provincia de Cartagena y al coronel Ramón Bolívar que habían quedado en la provincia des- Ayala, gobernador militar. Hasta que fue liberada pués de que este partió para Jamaica lucharon la plaza fuerte de Cartagena, Barranquilla fun- calle por calle y casa por casa. Primero capturó gió como capital y centro de las operaciones de la el fuerte de Sabanilla y luego entró a saco en Ba- Costa32. rranquilla y la incendió hasta los cimientos. “Al ataque fue que acabó de manifestar este pueblo notas 1 su entusiasmo y decisión de sacrificarse por sus Acta de independencia de Cartagena, 11 de noviembre 31 de 1811. ideas” escribiría en su informe a Montalvo, no 2 Belver, José, en: Papel Periódico Ilustrado, “Fusilamien- sin cierta admiración por los bizarros defensores. to de Camilo Torres”. Edición facsimilar, , 1975. Carvajal, De Barranquilla, Capmani siguió a Barranca y p. 138-141. prosiguió a inutilizar el canal del Dique para im- 3 http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Rodríguez_Torices. Se corrigieron errores de la transcripción. pedir que saliera cualquier buque de Cartagena 4 Gazeta de Cartagena de Indias, n.° 1, jueves 16 de abril a auxiliar a Mompós, que había sido tomada por de 1812, p. 6. Ignacio de La Rus. La ciudad tuvo mejor suerte 5 Constitución de Cartagena. Art. 5º. que Barranquilla pues el español fue magnánimo 6 Instrucciones que deberá observarse en las elecciones pa­ rroquiales, en las de partido y en las capitulares para el nom­ con la ciudad y no la incendió. bramiento de Diputados en la Suprema Junta de la Provincia de El cinco de diciembre, al caer la tarde, los car- Cartagena. Archivo Restrepo. 7 tageneros diezmados por el hambre y las epide- Gutiérrez de Piñeres, Gabriel. Decreto de 6 de mayo de 1813, por medio del cual se erige al sitio del Carmen en vi­ mias evacuaron la capital antes que rendirse. El lla y capital del departamento de María. Biblioteca Luis Ángel seis, Morillo entró a la Plaza Fuerte convertida en Arango, Carpeta P-V 137, fol. 47. (Marzo de 1968, clasifica- una tumba abierta. Fue el fin del Estado libre e ción antigua). 8 independiente de Cartagena. Manuel Rodríguez Rodríguez Torices, Manuel. Decreto de 15 de de junio de 1813, por medio del cual se erigieron en villas cabeceras de Torices sería fusilado en Santafé junto con Ca- departamento los sitios de Mahates, Corozal, Lorica, Chinú y milo Torres el 5 de octubre de 1816 y Barranqui- Magangué. Biblioteca Luis Ángel Arango, Carpeta P-V 137, fol. lla permanecería sometida a los españoles hasta 33. (Marzo de 1968, clasificación antigua). 9 principios de junio de 1820 cuando las tropas co- Gutiérrez de Piñeres, Gabriel. Decreto de 31 de mayo de 1813 sobre elecciones. Archivo Restrepo. lombianas de mar y tierra comandadas por Ma- 10 Tovar, Hermes, et al. Convocatoria al Poder del Número: riano Montilla y José Padilla desembarcaron en Censos y estadísticas de la Nueva Granada 1750­1830. Bogo- Sabanilla, sometieron rápidamente a los españo- tá, 1994. Archivo General de la Nación, p. 501-503.

19 11 Hoy quedan de ella los caños del mercado. distrito capitular, y departamento de Barranquilla, y que su 12 Este comercio de cabotaje bordeaba la costa pues era población numerosa necesita ya un establecimiento Munici- más expedita la vía marítima que la terrestre. pal, y Jueces territoriales para su mayor decoro, pronta ad- 13 Arrázola, Roberto, Documentos para la historia de Car- ministración de Justicia, y arreglo de su policía interior; en tagena, 1810-1812. Cartagena, 1963. Concejo Municipal, edi- sesión de este día ha decretado y decreta lo siguiente. ción oficial. Carta de Gabriel Gutiérrez de Piñeres a Pantaleón “1. Que el sitio de Soledad actualmente del distrito capi- de Germán Ribón, p. 242-243. tular y departamento de Barranquilla sea condecorado con el 14 Ortografía original. título de Villa de la SOLEDAD DE COLOMBIA. 15 Se resaltan en negritas los nombres de los lugares que “2. Bajo este respecto se establezca en dicho Sitio todas las tienen relación con Tierradentro. corporaciones anexas al rango de Villas, con todos los fueros y 16 Gazeta de Cartagena de Indias, 31, noviembre 12 de prerrogativas que le corresponden por las leyes. 1812, p. 141-142. “3. El Escudo de armas de Villa de Soledad, será un cam- 17 Gazeta Extraordinaria. 20 de noviembre de 1812. “Gran po verde con cielo claro, orlado con una guirnalda de flores, conquista de la plaza del Guaymaro”, p. 1-4. y en el centro de dicho campo una columna blanca con esta 18 Sobre la formación de Barranquilla, ver: Blanco Barros, inscripción A LA CONSTANCIA EN LA DEFENSA DE LA INDEPEN- José Agustín, El norte de Tierradentro y los orígenes de Barran­ DENCIA AMERICANA. quilla. Bogotá, 1987. Banco de la República. “4. Entre tanto se lleva a cabo la organización interior de la 19 Decreto de Manuel Rodríguez Torices que, de acuerdo Villa de Soledad, no se hará innovación alguna en sus relacio- con la determinación de la Cámara de Representantes, en que nes administrativas y económicas con la capital del distrito. declara a la Villa de Mompox benemérita de la Patria y la eleva “5. Para que dicha organización interior se verifique con la a la categoría de Ciudad con el título de Valerosa, de que podrá solidez, y acierto correspondiente, el Supremo Poder Ejecutivo usar en sus actas, despachos y demás documentos. Cartage- nombrará entre los vecinos una comisión compuesta de doce na, 3 de noviembre de 1812. En: Corrales, Manuel Ezequiel, Ciudadanos Padres de Familia. Documentos para la Provincia de Cartagena de Indias hoy Es­ “6. El objeto de esta comisión será proponer al Gobierno tado Soberano de Bolívar en la Unión Colombiana. 2 v. Bogotá, los medios y arbitrios con que puede plantarse su adminis- 1884. Imprenta de Medardo Rivas. Tomo 1, p. 464. tración de policía interior, límites de su jurisdicción, y todo lo 20 Decreto de Manuel Rodríguez Torices que, de acuerdo demás que contribuya, a que para el primero del año venidero con lo determinado por la Cámara, erige al sitio de Barran­ de mil ochocientos quince, la Villa de Soledad de Colombia quilla en Villa capital del departamento de Barlovento o tierra goce en toda su extensión de sus peculiares derechos, fueros adentro. Cuartel general del Ejército de observación en Ba- y prerrogativas. rranquilla. Abril 7 de 1813. En: Archivo Restrepo, y Corra- “7. Los anteriores artículos no derogan el reglamento de les, Manuel Ezequiel, Efemérides y Anales del Estado de Bolívar. elecciones, ni el plan de división de Departamentos que que- Bogotá, 1889. Casa editorial de J.J. Pérez. Tomo II, p. 148-149. dan en su fuerza, y vigor”. 21 Decreto de Gabriel Gutiérrez de Piñeres, vicepresidente, 25 Gazeta de Cartagena de Indias, n.º 52, jueves 8 de abril sancionatorio de la determinación de la Cámara de Represen­ de 1813. tantes de elevar a Villa al Sitio del Carmen, y capital del Depar­ 26 En: Corrales, Manuel Ezequiel, Efemérides y Anales del tamento de la Montaña de María, por solicitud del Presidente Estado de Bolívar, op. cit. del Estado en razón de sus servicios al Estado cuando la rebe- 27 Sobre la población de Cartagena ver: Sourdis Nájera, lión de las sabanas. Cartagena, 6 de mayo de 1813. Biblioteca Adelaida, “El precio de la independencia en la Primera Repú- Luis Ángel Arango, Libros raros y manuscritos HSI 0622. blica neogranadina: la población de Cartagena de Indias (1814- 22 Decreto de Manuel Rodríguez Torices sobre la determi­ 1816)” en: Los procesos de Independencia en la América Espa­ nación de la Cámara de Representantes de erigir en Villas a los ñola, Memorias del IV Congreso Internacional, Bucaramanga sitios de Mahates, Corozal, Lorica, Chinú y Magangué. Carta­ 2006. Anuario de Historia Regional y de las Fronteras, vol. 12, gena, 15 de Junio de 1813. Ibíd. septiembre, 2007. Universidad Industrial de Santander, y en: 23 Se publicó por bando el 29 de octubre la Ley del 17 de Boletín de Historia y Antigüedades, Vol. XCIV, n.º 836, 2007. octubre de 1814, acordada por el Supremo Gobierno del Esta­ 28 Sobre el sitio de Cartagena ver: Sourdis, Adelaida, Car­ do de erigir en Villa el sitio o pueblo de Majagual. En: Corrales, tagena de Indias durante la Primera República 1810­1815. Bo- Manuel Ezequiel, Documentos para la Provincia de Cartagena gotá, 1988. Banco de la República. de Indias hoy Estado Soberano de Bolívar en la Unión Colom­ 29 Blanco, José Agustín, comp. Toma de Barranquilla, 25 biana. 2 v. Bogotá, 1884. Imprenta de Medardo Rivas. Tomo de abril de 1815. Comentarios y documentos. Inédito. Archivo 1, p. 662. General de la Nación, Anexo, Guerra y Marina, tomo 130, fol. 24 “Comunicado de Manuel Rodríguez Torices sobre lo san- 603. cionado por la Cámara de Representantes que eleva a Soledad 30 Ibíd. fol. 607. a la categoría de Villa de la Soledad de Colombia en premio 31 Ibíd. fols. 703-704. a sus servicios a la patria. Cartagena de Indias, 8 de marzo 32 Ver: Sourdis, Adelaida, “Ruptura del Estado colonial y de 1814”. Revolución de Cartagena, Santa Marta y Panamá. tránsito hacia la república”, en: Historia económica y social del Archivo Restrepo. Caribe colombiano. Adolfo Meisel, editor. Bogotá, 1994 Edicio- El CIUDADANO MANUEL RODRÍGUEZ TORICES, PRESIDENTE nes Uninorte - Ecoe ediciones. De la misma autora, “El proce- Gobernador del Estado de Cartagena de Indias a los habitan- so de independencia del Caribe colombiano”, en: El Nuevo Rei­ tes de él, de cualquiera clase y condición que sean, hago sa- no y sus Provincias: Crisis de la independencia y experiencias ber: Que el Supremo Poder Legislativo del Estado legalmente republicanas. Ramos, Aristides, Óscar Saldarriaga y Radamiro congregado ha sancionado lo siguiente: Gaviria, editores académicos. Bogotá, 2009. Universidad del “La Cámara de Representantes del Estado de Cartagena Rosario - Pontificia Universidad Javeriana; “Los últimos días de Indias, considerando los importantes servicios que en la del gobierno español en Colombia”, en: Boletín de la Academia presente guerra ha hecho a la Patria, el Sitio de Soledad al de Historia de Bogotá, Vol. VI, n.° 47, febrero-marzo de 2010.

20 El proceso de la independencia en Barranquilla

Jorge Villalón*

Interpretación gráfica en sus 150 años de haber sido erigida en villa. Fondo Prensa Diario del Caribe, abril 6-1963

introdUCCión a fines del siglo XX, en el cual se observan un Este trabajo pretende hacer un aporte a la recu- aumento del interés por la historia regional, que peración de la memoria histórica de la región Ca- llevó a la fundación de varias instituciones dedi- ribe y en particular de lo ocurrido en la ciudad cadas a la recuperación del pasado de la ciudad, de Barranquilla durante el proceso de la Indepen- y una cantidad apreciable de estudios y ensayos dencia. Este esfuerzo no es aislado, sino que se sobre temas de historia local. Este entusiasmo inscribe en un contexto más amplio que se inicia hizo posible que en 1991 se creara el primer ente académico dedicado a la historia en la Universi- * Nacido en Chile. Estudió Historia y Geografía en la dad del Atlántico, luego dos años más tarde en la Universidad de Chile. Magíster en Historia Contemporánea - en la Universidad de Tubinga, Alemania Federal. Reside en Universidad del Norte. Más allá del ámbito uni Barranquilla desde 1984. Junto a Alexander Vega, sostiene la versitario, se estableció en 1993 la Academia de asignatura Historia de Barranquilla desde 1994 en la Univer- la Historia de Barranquilla, bajo el liderazgo de sidad de Norte. Desde 2010 tiene el cargo de secretario de la don Juan Pablo Llinás Cuentas. También en es- Academia de Historia de Barranquilla. Ha publicado diversos artículos sobre historia de Barranquilla, los cuales se encuen- tos años varias personas intentaron organizar los tran en el blog Barranquillaenelmundo.blogspot.com archivos olvidados durante tanto tiempo, hasta

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 21 pp. 21-29. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 muy poco o casi nada de lo que ocurrió entre 1808 y 1821 en la región Caribe. Una explicación de esto es que la mayo- ría de los textos escolares, y en general los que escriben los libros de historia de Colombia, son personas de la capital de país quienes se han concentrado en los acontecimientos que ocurrieron en el cen- tro del virreinato de la Nueva Granada, dejando olvidados aquellos que tuvieron lugar en la costa del mar Caribe. En el caso de Barranquilla, las inves- tigaciones sobre la época de la Indepen- dencia tienen la limitación de las fuentes Plano n.º 1 que demuestra la Ysla de Salamanca en la actualidad con documentales de la época, las cuales no parte de D.n Felix de Palas desde Barra vieja hasta el Cobado, y la de existen en la ciudad debido al incendio los Naturales del Pueblo de la Cienega desde Barra vieja hasta Barra provocado por las tropas españolas en nueva q.e ambas están unidas por la casualidad de haberse cerrado la 1815, en donde se quemaron los docu- Barra vieja y abierto la nueva. mentos que hubieran podido existir. Los documentos más antiguos que se encuen- tran en la ciudad son de la época poste- rior a la guerra de la Independencia. Para poder reconstruir los procesos hay que recurrir a algunas crónicas escritas en la ciudad en el siglo XIX y además de algu- nos documentos encontrados en el Archi- vo General de la Nación en Bogotá. Las primeras crónicas fueron escritas por el abogado de origen cartagenero Domingo Malabet, escritas a fines del siglo XIX y publicadas en 1922. En los últimos años han sido transcritos algunos importantes documentos por el historiador José Agus- tín Blanco Barros, como también por Ade- Plano n.º 2 que demuestra la Ysla de Salamanca verdadera, propia de laida Sourdis, Carlos González Rubio y D.n Felix de Palas, á la que se ha unido la parte que pertenece á los Yn- dios de la Cienega por haberse cerrado la Barra que en él aparece que Sergio Paolo Solano. Gracias a esta tradi- llaman Barra vieja separado de Pueblo viejo p.r la abertura de la nueva ción, creemos que, con los materiales que Barra, cuya figura tendria seguramente en el año de 1717 quando se se han acumulado hasta ahora, es posible solicitó la Ysla de Salamanca que estaba valdia para unirla á la hacien- y necesario intentar reconstruir cómo se da de Pestagua. vivió el proceso de la Independencia entre que estos esfuerzos espontáneos condujeron a la 1811 y 1820 en la Barranquilla de esa época. creación del Archivo Histórico del Departamento 1. barranqUilla en el Contexto del iMperio del Atlántico. Antes de terminar el siglo XX, hubo español antes de la Crisis de la independenCia tres promociones de una maestría en Historia y Barranquilla y los pueblos ubicados en la ribera una carrera de pregrado en la universidad públi- occidental del río Magdalena fueron muy afecta- ca, y se han hecho varios encuentros de histo- dos durante la guerra de Independencia porque riadores y de archiveros en varias ciudades de la conformaron una línea defensiva en los límites región Caribe. de la provincia de Cartagena, en cuya capital El proceso de la Independencia en Colombia se fundó la primera república, lo que expuso a ha sido uno de los temas más estudiados por los estos pueblos ribereños a los ataques de Santa historiadores en los últimos doscientos años de Marta, que fue la ciudad en donde se estableció vida republicana. Por buenas o justificadas razo- el comando general de la reconquista española. nes, en estos libros de historia nacional aparece Barranquilla, Soledad Malambo, Santo Tomás y

22 La composición étnica general de la población de Tierradentro, que corresponde al actual depar- tamento del Atlántico, puede explicar el compor- tamiento que tuvo durante el proceso de la Inde- pendencia. Tenía un 80.9% de blancos y pardos, un 16% de indígenas y apenas un 2.8% de escla- vos negros. En Barranquilla, en una clasificación por los oficios de los habitantes, se da el siguiente resul- tado: Navegantes y bogas: 28; Zapateros: 24; Car- pinteros: 15; Mercaderes y traficantes: 15. Lo anterior indica que Barranquilla era un lu- gar diferente al resto de poblados, ya que predo- minaban los oficios propios de libres y vinculados al comercio y al transporte. En el censo solo fi- gura una persona en la categoría de estudiante Sabanalarga fueron al mismo tiempo los que más y se trata del hijo “del Notario Eclesiástico”, de lo aportaron a la causa de la Independencia, no solo que se puede inferir que el caserío no tenía una en aspectos materiales, sino además en el aporte escuela.3 Esta composición social de la población de contingente para las tropas. de Barranquilla explica el hecho de que no se pro- Entre estos pueblos se destaca Barranquilla, dujeran reuniones de notables para jurar lealtad que desde fines del siglo XVIII ya se proyecta- a la Corona española creando juntas de gobierno. ba con más fuerza y más posibilidades hacia el Los habitantes de Barranquilla eran gente senci- futuro. Todo estaba fluyendo hacia la antigua lla y se entusiasmaron bastante cuando supieron Barranca de San Nicolás y a fines de la época de la posibilidad de separarse de los españoles. colonial ya estaba por encima de las otras aglo- Desde tiempos remotos la soldadesca española meraciones humanas de Tierradentro. En el mar- los había tratado con mucha dureza, que casi no co de las diversas reformas administrativas que había vecino que no se sintiera ofendido por los realizaron los borbones en las colonias america- abusos de autoridad cuando regularmente visita- nas, Barranquilla se convirtió en una ‘capitanía ban el caserío.4 Según el historiador Sergio Paolo el comercio ilícito se convirtió en una de aguerra’ por su posición geográfica a orillas del Solano, las raíces de fondo que alentó la aspiración de In- río Magdalena y muy cerca a su desembocadura. Sabanalarga, fundada por el virrey Sebastián de dependencia de España y permite comprender la participación de Barranquilla en la gesta eman- Eslava en 1744, en pocos años había ganado im- cipadora5 portancia por su vinculación política y comercial . Como Barranquilla no tenía salida al con Cartagena, conectada por el llamado Camino mar Caribe, el contrabando se hacía en la bahía Real, por donde se llevaban los productos agro- de Sabanilla y a través de los caños que el mis- pecuarios a la capital de la provincia. Pero en el mo río Magdalena va creando y desarmando en primer censo oficial que se realizó en la provincia el transcurrir del tiempo. Una de estas vías fue el de Cartagena en 1777, Barranquilla tenía ya casi caño de la Piña, como también el caño de La Pla- el doble de habitantes que Sabanalarga, cuya ca- ya, ambas desaparecidas en el siglo XX por efecto becera tenía 1.635 habitantes, mientras que en de las obras civiles de las Bocas de Ceniza. Barranquilla vivían 2.633 personas.1 Según cál- En su condición de capitanía aguerra, Barran- culos realizados por José A. Blanco, existían en el quilla llegó a tener 1768 milicianos, un poco más momento que se realizó el censo unas 160 vivien- de la mitad de sus habitantes, los cuales eran das, con un promedio de 6.5 personas por cada entrenados para actuar militarmente. Cuando unidad habitacional. Como la ocupación inicial surgió la República de Cartagena, estas milicias del poblado que tuvo lugar desde principios del sirvieron a la causa de la Independencia. El na- siglo XVII se hizo de manera espontánea, la con- ciente estado republicano de Cartagena realizó figuración del espacio habitado no presentaba un elecciones el 12 de junio de 1812, por medio de aspecto lleno o compacto. Muchas cuadras esta- las cuales se estableció una Convención de Pode- ban prácticamente vacías y otras parecían ape- res. Durante este proceso se nombró como corre- nas ocupadas. Todas las casas eran de bahare- gidor de Barranquilla a Eusebio María Canabal, que con techumbres de palma o de enea2. probablemente la primera autoridad republicana

23 que culmina con la toma de Madrid y el cautive- rio del rey Fernando VII, produjo en la Península y en todo el continente americano diversas reac- ciones. En la Nueva Granada las actitudes más radicales se dieron en la región Caribe, y espe- cialmente en la ciudad de Cartagena, en donde el 22 de mayo de 1810 se organizó una Junta de Gobierno, y luego en otras ciudades de Nueva Granada8. Estas juntas siempre apoyaron al rey cautivo y juraron lealtad a la Corona española, aunque siempre existieron miembros y personas que ya venían pensando en abolir la monarquía, instaurar regímenes republicanos y separarse de la madre patria. Estos grupos no eran la mayoría al principio, pero paulatinamente fueron ganan- de la ciudad antes que se constituyera en ‘villa’ do adeptos y surgieron movimientos que procla- unos meses más tarde. maron la independencia absoluta de España. En Hasta ahora no se conoce de algún tipo de divi- la región Caribe se produjo por primera vez en sión de la población por asuntos políticos relacio- Mompós el 6 de agosto de 1810 y no tuvo éxito. nados con la organización de la ciudad durante el Fue reprimido por la Junta de Cartagena, celosa proceso independentista. Tampoco se sabe de la quizás con los prósperos y cultos comerciantes formación de partidos o grupos con opiniones dis- que podrían disputarle el liderazgo que tenía Car- 9 tintas sobre cómo y cuándo organizar las nuevas tagena en la región . instituciones republicanas. La misma sencillez Un año más tarde se comienzan a producir las de la vida de los pocos habitantes, la inexisten- llamadas declaraciones de independencia abso- cia de un grupo de personas con mucho dinero luta en todo el continente. La primera fue Cara- con cierta homogeneidad racial, no permitieron cas, el 5 de julio de 1811, donde se establece el el surgimiento de facciones, como fue el caso de primer gobierno totalmente independiente de his- Cartagena, en donde se formó una tensión en- panoamérica, y donde ya se destaca la figura de tre la dirigencia blanca, adinerada y culta, fren- Simón Bolívar. El 11 de noviembre del mismo año te a un grupo importante de mestizos, que ya en la Junta de Gobierno de la provincia de Cartage- aquella época recibieron el nombre de pardos, y na también se declara totalmente independiente la población esclava. En un momento decisivo, en de España y elige de presidente del naciente Es- 1815, cuando las tropas españolas se disponían a tado a Manuel Rodríguez Torices. atacar a Barranquilla, los grupos y facciones que Desde la declaración de independencia absolu- se disputaban el mando en Cartagena impidieron ta por parte de Cartagena, se produjo un distan- que se constituyera una retaguardia suficiente ciamiento de Santa Marta, ciudad que se convirtió para apoyar a los patriotas barranquilleros y so- en la sede del Gobierno español, y surgió un celo ledeños que estaban decididos a combatir por la y una cierta enemistad entre las dos ciudades co- patria naciente6. loniales de la costa del mar Caribe que duró mu- Una buena muestra del espíritu patriótico que chos años. Santa Marta fue el punto de reunión existió en Barranquilla, es el seguimiento de la de las fuerzas realistas y Cartagena el epicentro vida de una persona durante varios años a través de la revolución republicana10. La actitud de los de documentos, de nombre Blas de Barros, naci- grupos indígenas en contra de la independencia do en Barranquilla en 1777 y que se trasladó a reforzó la posición realista de Santa Marta. Los Cartagena a ponerse a las órdenes del presidente indios de Bonda, Mamatoco, Gaira, Taganga y Manuel del Castillo y se integró en el ejército en Ciénaga apoyaron la causa española. El pobla- calidad de cabo segundo, apenas un grado arriba do de Barranquilla quedó entre estas dos fuerzas de soldado raso7. confrontadas, pero como pertenecía por tradición y legalmente a la provincia de Cartagena, perma- 2. la Crisis española de 1808 y sUs neció fiel a su capital y apoyó la independencia reperCUsiones en la provinCia de CartaGena con entusiasmo. La noticia de la invasión de España por Napoleón, El 19 de marzo de 1812 se produjo un hecho de ocurrida en los primeros días de mayo de 1808, armas en Tenerife, en donde los realistas derro-

24 taron a las fuerzas cartageneras. El gobernador por tres buques de guerra venidos de Cuba y tro- Acosta logró después revolucionar a los pueblos pas venidas de la Península con provisiones y di- desde Ayapel hasta Tolú, creando una situación nero. El gobernador Acosta logró poner en armas de aislamiento de Cartagena. a 1500 soldados. El ambiente revolucionario en la nueva repú- 3. barranqUilla eriGida en villa - el 7 de abril de 1813 blica de Cartagena recibió el impulso de los pa triotas emigrados de Caracas en noviembre de Medio año después de la declaración de indepen- 1812, quienes buscaron refugio después que Ca- dencia absoluta de la ciudad de Cartagena de In- racas fue tomada por las tropas españolas. Entre dias, la Convención General del Estado de Carta- estos emigrados se destacaba ya la figura de Si- gena expidió una constitución liberal y el territorio món Bolívar. fue dividido en cinco departamentos con sus ca- A comienzos de enero de 1813, el patriota de beceras; además de Cartagena, estaban Mompox, origen francés Pedro Labatut, bajo órdenes de San Benito Abad, Tolú y Simití. La nueva consti- Cartagena, inicia operaciones militares en el bajo tución previó la posibilidad de la creación de ciu- río Magdalena con un cuartel en Santo Tomás. El dades y villas en el artículo 14 de la sección ter- 6 de enero se tomó Santa Marta mientras Simón cera; dice así: Perteneciendo al Poder Legislativo la creación de ciudades y villas en el territorio del Bolívar expulsaba a los españoles río arriba hasta Estado, cuidará la Legislatura de erigir en villas Ocaña. Labatut no logra dominar a Santa Marta y aquellos lugares cabezas de partido que por su po- debe retirarse el 5 de marzo de 1813. blación, situación, progresos y riquezas merezcan En este ambiente bélico, con victorias y de- esta representación, y cuya creación contribuya a rrotas, la Cámara de Representantes del Estado la mejor organización de Estado, economía del Go- de Cartagena creó el 3 de abril de 1813 un sex- bierno, orden, policía y adelantamiento de los pue- to departamento con el nombre de Barlovento y blos. El caserío de Barranquilla reunía varios de nombra a Barranquilla como su cabecera, la cual los requisitos anteriormente señalados, y a esto es elevada a la categoría de ‘villa’. El nuevo depar- se le sumó el interés de Cartagena por fortalecer tamento se constituye a su vez de dos partidos, los lazos con las poblaciones leales y con senti- el de Barranquilla y el de Santo Tomás. Al ser mientos libertarios. una villa, tiene derecho a un cabildo de cuatro miembros con un colegio electoral. La primera Desde mediados del año 1811, an- autoridad recibió el título de ‘corregi- tes de la ruptura con España, Carta- dor letrado’. También recibió un es- gena tuvo problemas con Santa Marta cudo de armas como reconocimien- por los intentos separatistas de Sitio- to a sus hazañas. Se puede suponer nuevo, Remolino y Guáimaro. Desde que las autoridades de Cartagena se Barranquilla se organizaron expedi- trasladaron hasta Barranquilla para ciones para defender a estos pueblos promulgar la nueva ley con Manuel sublevados contra la realista Santa Rodríguez Torices a la cabeza. Con Marta. Se creó en Barranquilla un base en los documentos que ha guar- Batallón de Patriotas y estaban com- dado la tradición y que se encuen- batiendo cuando se supo la noticia de tran también en el Archivo Nacional la separación definitiva de Cartagena de Colombia, se puede deducir que el el 11 de noviembre de 1811. Luis Brion documento oficial por el cual se eri- A fines de 1811 la Audiencia de gía en villa a Barranquilla fue leído el Cádiz envió como virrey de la Nueva día 7 de abril de 1813. El documen- Granada a Benito Pérez, quien pasó to dice solamente: Dado en el Cuartel a llamarse ‘capitán general’, máxima General del Ejército de Observación en autoridad española en ese momento. Barranquilla.11 Se puede suponer que Las fuerzas españolas ocuparon el río fue leído en el lugar en donde hoy se Magdalena y fortificaron los puertos encuentra la pequeña plaza en don- ribereños de Sitionuevo, Guáimaro, de está ubicada la estatua de Simón Cerro de San Antonio, Tenerife y El Bolívar en el costado occidental de la Banco, cortando así la comunicación carrera 44, llamada aún por los vie- de Cartagena con el río Magdalena. El jos barranquilleros como “Cuartel”. puerto de Santa Marta fue reforzado Mariano Montilla La tradición oral nos dice que el de-

25 creto fue leído en el balcón de la casa conocida tratando de utilizar la situación a su favor, le ofre- como Lacorazza, en el lado occidental de la plaza ció ayuda a Cartagena, ante lo cual Juan de Dios de San Nicolás, pero no existe un documento que Amador, gobernador en ese momento, la rechazó pueda corroborar esta versión. de manera categórica. Cuando Montalvo fracasó El señor gobernador del naciente Estado de en el intento de dividir a las fuerzas patrióticas, Cartagena, Manuel Rodríguez Torices, tenía a la tomó la decisión de atacar a Barranquilla con tro- sazón apenas 24 años, nacido en Cartagena en pas al mando de Valentín Capmani. La noticia 1788. Estudió abogacía en Bogotá y estuvo cer- de la llegada de Morillo a Venezuela, con 10 mil cano a Francisco José de Caldas. Fue uno de los hombres, acabó con las disputas en Cartagena, y firmantes del Acta de Independencia de Cartage- Bolívar se embarcó hacia Jamaica. Barranquilla na, y había sido nombrado gobernador el 12 de y los pueblos ribereños quedaron abandonados a marzo de 1812. El destino final de este benefac- su suerte. tor de Barranquilla fue muy dramático. En 1816 Las fuerzas patriotas en Barranquilla cerraron cayó prisionero de las fuerzas españolas dirigidas la boca del caño del Clarín que da al río, derriban- por Pablo Morillo y finalmente fue fusilado en la do los arboles de ambas orillas. Los españoles in- Plaza Mayor de Bogotá. Su cabeza fue expuesta al tentaron una negociación para que Barranquilla público en la calle 13, entre las carreras 19 y 20.12 se rindiera, pero no dio resultado y se prepararon para la guerra. La municipalidad de Barranquilla 4. la reConqUista de barranqUilla por envió una comunicación escrita a Capmani re- los españoles el 25 de abril de 1815 chazando la negociación de paz diciendo: - La expedición para tomarse Barranquilla se co Nosotros contamos con la fuerza de mas de dos menzó a preparar desde los primeros días de abril mil hombres habitantes de esta villa, la de Sole- de 1815 por el capitán general del Nuevo Reino de dad, y demás pueblos inmediatos, competente - Granada, don Francisco de Montal numero de Buques de Guerra, y un vo. Su propósito era apoderarse del respetable parque de Artillería, a un Bajo Magdalena, desde Barranquilla mismo tiempo que las disenciones de hasta Mompox, “limpiar” de fuerzas Bolívar y el gobierno habrán sido ya republicanas toda esa importante concluidas según las posteriores noti- área estratégica, y como consecuen- cias que tenemos de él15. cia cortarle a Cartagena toda comu- nicación con el interior del reino, La defensa de Barranquilla tenía además de suprimirle cualquier es- un cañón de 18 en el sitio llamado peranza de auxilios de esa proceden- de la Tenería, al final de la calle la cia. El capitán general Montalvo le preparaba así Paz (carrera 40)16 y otro sitio era el llamado Chu- una verdadera antesala alfombrada a la inminen- chal, hoy conocido como Veranillo. De este modo te expedición del general Pablo Morillo. Encargó se podía atacar a las embarcaciones que ingre- de la operación al coronel Valentín Capmani, mi- saran por la ciénaga. El vigía se encontraba en litar con experiencia en el Bajo Magdalena. Las la torre de la iglesia de San Nicolás, desde donde fuerzas españolas contaban con “400 infantes y 8 avisó el día 25 de abril que las tropas españolas barcos cañoneros”.13 se acercaban a la ciudad. En el año de 1815 salió Bolívar desde Bogo- Capmani atacó en tres frentes. Desembarcó tá al mando del Ejército de la Unión, de dos mil infantería en la Concepción, otros por al caño de hombres, hacia la Costa con el objetivo de liberar la Tablaza y se acercaban al caño con la flotilla. a Santa Marta con la ayuda de Cartagena. La diri- Desde el Chuchal se disparó el poderoso cañón, gencia de Cartagena le negó el apoyo y le prohibie- pero el segundo disparo produjo una tragedia ron a Bolívar que entrara con sus tropas. Se llegó porque el polvorín con las municiones se explotó al extremo de que las tropas de Bolívar sitiaran totalmente y la infantería española pudo avanzar. a Cartagena y ocurrieran cruentos enfrentamien- Desde los patios, por las ventanas, y por donde tos. La consecuencia de todo esto fue muy perju- era posible, se hacían disparos sobre el enemigo. dicial para Barranquilla y los pueblos ribereños, [...] El combate se hizo general en pocos instantes, los cuales quedaron expuestos al ataque del ejér- se peleaba en cada cuadra, en cada calle, dentro cito español concentrado en Santa Marta.14 de los patios, dentro de las casas. Los barranqui- lleros al ver la superioridad numérica de los espa- Francisco de Montalvo, máxima autoridad es- pañola en la Nueva Granada en ese momento, ñoles se fueron retirando formando pelotones como

26 guerrilla y se retiraron vía Soledad hasta Sabanalarga17. El personaje Blas de Barros nos dejó un interesante testimonio de la toma de Barranquilla. El 25 de abril se encontraba defendiendo una po- sición en La Loma. Es en este último fortín donde el personaje motivo de este escrito tiene que soportar el ata- que, casi definitivo, del capitán cata- lán Valentín Capmani. Del fortín de La Loma afirma Barros que: […] lo hizo hacer retirada al ha- verse hallado sin auxilio de tropa, porque todo el que tenía había de- Pablo Morillo Pedro Gual sertado. [Y] vístose solo corrió a ha- cerse cargo de la batería que sitaba (estaba si- el fuerte de Sabanilla defendido por 20 hombres y tuada) en la Tenería de la Villa de Barranquilla. cuatro cañones.18 Allí fue informado por el señor doctor Gómez, Casi un año después de la derrota de los es- clérigo, que: pañoles en la batalla de Boyacá el 7 de agosto de el enemigo abrumaba con fuerzas por la parte 1819, Barranquilla fue liberada de manera defini- [de] avajo; corrió en el momento a hacerse cargo tiva del dominio español el 12 de junio de 1820. de la Batería del Chuchal, donde se batió hasta Este glorioso acontecimiento marca el comienzo hacer retirar los enemigos; que estos lograron de la inmigración extranjera a Barranquilla, ya su empresa mucho abajo de la tal fortaleza y que en la entrada triunfal de las tropas al caserío jiraban sobre Barranquilla”. se notaba la presencia de tropas conformadas de Prosigue informando el oficial de artillería que: varias nacionalidades europeas. El comandante […] no fue posible seguir haciendo resistencia, de la jornada era Louis Brión en compañía de un porque sin saber cómo ni cómo no, se incendió legendario coronel, Francisco Burdett O’Connor, el arcón de la pólvora, por lo que en el momento y del caraqueño Pedro Gual, compañero de Bo- mandó clavar las piezas de artillería e hizo lívar en los inicios de las jornadas revoluciona- retirada al Sentro, donde se batió completamente rias en Caracas y luego en Cartagena. Pedro Gual hasta haverse hallado sin auxilio de tropa, pero debería figurar en la galería de los gobernantes ni aun de los avitantes del vecindario… de Barranquilla, porque fue nombrado como “go- bernador” del territorio conquistado, es decir, lo 5. la liberaCión definitiva de barranqUilla que era Tierradentro, y que un siglo después iba el 12 de jUnio de 1820 a ser el departamento del Atlántico. Barranquilla Mariano Montilla, acompañado de Pedro Luis se convirtió en el centro de operaciones militares Brión, llegó desde Venezuela al mando de cator- del Ejercito Libertador y, con Gual y Brion a la ce buques con unos 1300 hombres de infante- cabeza, la naciente ciudad comenzó a recuperar- ría. El 12 de marzo ya estaban en Riohacha, la se de los estragos de la reconquista. Los cronistas cual fue abandonada por lo españoles y Montilla afirman que contrajo matrimonio con la distin- tomó la plaza. Notables personalidades acompa- guida dama barranquillera María Paula Rodado y ñaban a Montilla: Pedro Gual y Francisco Paul, un año después continuó en su lucha al lado de de Venezuela, el canónigo chileno Cortés Mada- Bolívar. riaga, Joaquín Borrero, granadino, y el mejicano Los cronistas de la historia nos cuentan de Miguel Santamaría. En Riohacha se produjeron una legión de irlandeses con sus chaquetas rojas una serie de problemas con las tropas irlandesas en medio de la alegría popular bajo el repicar de y Montilla continuó su camino hacia Santa Marta las campanas de la iglesia de San Nicolás. Uno de con apenas unos 160 hombres de infantería. Se los primeros en llegar a Barranquilla fue James detuvo en Santa Marta pero no desembarcó, sino Duncan, quien compró una casa en la calle del que siguió hacia la desembocadura del río Mag- Comercio o de la Amargura, y el pueblo lo bauti- dalena. Anclaron en Sabanilla el 11 de junio de zó con el nombre de Santiago Duncan. Luego, en 1820. Cien hombres desembarcaron y se tomaron segundas nupcias, se casó con la dama barran-

27 quillera Nicolasa Miranda, hogar de donde surgie- en el Caribe colombiano (1717-1821). Bogotá: Banco de la Re- ron familias muy distinguidas. Su casa fue muy pública, 1998. 7 Blanco, op. cit., 2011, “Militares del Departamento del famosa porque fue allí donde se hospedó Simón Atlántico en la Independencia”. Bolívar a su paso por Barranquilla, recién libe- 8 En Cali el 3 de julio, en Pamplona el 4 de julio, en Soco- rada el 23 de agosto de 1820. La familia Duncan rro el 10, y en la capital del virreinato el 20 de julio de 1810. 9 conservó por largo tiempo los enseres que usa- Chust, Miguel. “La coyuntura de la crisis: España, Amé- rica”. En: UNESCO, Historia General de América Latina. Volu- ra el libertador durante su estadía. En la cena men V. París, 2003. ofrecida al Libertador se encontraban presentes 10 Alarcón, José. Compendio de historia del Departamento el conde sueco Federico Adlerkreutz, el alemán del Magdalena. Bogotá: Editorial El Voto Nacional, 1963. p. Felipe Braun y Juan Bernardo Elbers, bajo la 71. 11 El decreto firmado en Cartagena el 3 de abril se encuen- custodia de los lanceros irlandeses con sus visto- tra en la Gazeta de Cartagena de Indias del jueves 8 de abril sos trajes rojos. Esta recepción al jefe de la nueva de 1813. El texto completo del decreto se encuentra en: Ver- república puede ser considerada como la primera gara, José R. y Baena, Fernando, Barranquilla: su pasado y su actividad diplomática del naciente cuerpo con- presente. Barranquilla: Banco Dugand, 1922, p. 110. También en: De la Espriella, Alfredo. Imagen temporal de Barranquilla. sular de Barranquilla. Después de algunos años, Folleto publicado en los años sesenta del siglo XX por la Edi- esta famosa casa fue demolida en el proceso de torial Mejoras. expansión y crecimiento de la ciudad. En una cri- 12 Ropain, Claudio. “Rodríguez Torices en Barranquilla”. sis política en el año 1831, Duncan renunció a En: Barranquilla Gráfica, 1979; Montoya Márquez, J. “Barranquilla a través de la historia”. En: Revista Mejoras. Año su cargo militar al no estar de acuerdo con los V. Nº 52, diciembre de 1940, p. 35. nuevos gobernantes, y se marginó de la política. 13 Instrucciones reservadas que el capitán general del rei- En la misma época, y con el entusiasmo ro- no, don Francisco de Montalvo, dio al gobernador de Santa Marta, don Pedro Ruiz de Porras, para la expedición del capi- mántico por la libertad, llegaron los hermanos tán Valentín Capmani contra Barranquilla: Archivo Histórico John y Edward Glen provenientes de Canadá, Nacional. Guerra y Marina, Anexo, Tomo 130, Folios 603r a pero de origen escocés. Llegaron primero a Car- 603r. El texto completo, en: Blanco, 2011, op. cit., p. 317-318; tagena en 1809, al comienzo de las luchas po- Alarcón, José. Compendio de historia del Departamento del Magdalena. Bogotá: Editorial El Voto Nacional, 1963, p. 87. líticas de los criollos con los españoles. Ambos 14 Sourdis, Adelaida. Cartagena de Indias durante la pri- hermanos tenían la vocación del comercio y pre- mera república, 1810-1815. Bogotá: Banco de la República, firieron trasladarse a Barranquilla, en donde fun- 1988, p. 77 ss. 15 daron una casa comisionista conectada a Jamai- Respuesta de la Municipalidad de Barranquilla al Par- lamento del capitán Valentín Capmani, con el que los había ca y exportaban maderas de tinte y algodón. La conminado a rendirse. Archivo Histórico Nacional, Guerra y tradición nos dice que fueron los primeros ricos Marina, Anexo. Tomo 130. Folios 680r a 680v. El texto com- del caserío. En 1829 John Glen era dueño de 29 pleto, en: Blanco, 2011, op. cit., p. 321. 16 bongos, empleaba 100 barqueros y se había con- Según José A. Blanco, la tenería fue fundada por el ale- mán Juan Fester a fines del siglo XVIII para tratamiento de vertido en el patriarca del pueblo. Nunca se fue de telas y cueros. El sitio lo ocupa hoy la Cervecería Águila. Barranquilla y falleció en 1880. Su tumba se en- 17 Vergara y Baena, 1922, op. cit., p. 114 ss. cuentra en el Cementerio Universal de la ciudad. 18 Alarcón, 1963, op. cit., p. 95 ss.

notas doCUMentos 1 Blanco, José A. Obras completas. Tomo I. Barranquilla. Decreto por el cual la Cámara de Representantes del Estado Capítulo: El censo del Departamento del Atlántico (Partido de de Cartagena erige en Villa al Sitio de Barranquilla como Tierradentro) en el año 1777. Un estudio de geografía histórica. capital del Departamento de Barlovento. En: Gazeta de Barranquilla: Ediciones Uninorte, 2011, p. 275. Cartagena de Indias, Número 52 del jueves 8 de abril de 2 Blanco, 2011. Obras completas, p. 276-277. 1813. También se encuentra el texto oficial en: Vergara y 3 Blanco, José A. Obras completas. Tomo I. Barranquilla. Baena, 1922, p. 110-111. Capítulo: Militares del Departamento del Atlántico en la Inde- Blanco Barros, José A. En: Obras completas. Tomo I. pendencia. Barranquilla: Ediciones Uninorte, 2011, p. 275. Barranquilla. Toma de Barranquilla, 25 de abril de 1815. 4 Vergara, José Ramón y Baena, Fernando. Barranquilla: Serie de documentos transcritos del Archivo General de la su pasado y su presente. Barranquilla: Taller Tipografía del Nación de Colombia. Banco Dugand, 1922, p. 107. 1. Instrucciones reservadas que el Capitán General del 5 Solano, Sergio Paolo. “El Puerto de Sabanilla durante el Reino, Don Francisco de Montalvo, dio al gobernador de período colonial, I y II”. En: Huellas, Revista de la Universidad Santa Marta, don Pedro Ruiz de Porras, para la expedición del Norte, Nº 16 y 17. Barranquilla: Uninorte, 1986, p. 4. Véa- del Capitán Valentín Capmani contra Barranquilla. se también, Blanco, 2011. Obras completas, p. 282. Archivo Histórico Nacional. Guerra y Marina, Anexo, Tomo 6 Sobre las disensiones en Cartagena hay suficiente bi- 130, Folios 603r a 603r. bliografía: Sourdis, Adelaida. Cartagena de Indias durante la 2. Preámbulos de la toma de Barranquilla por el Capitán primera república, 1810.1815. Bogotá: Banco de la República, Valentin Capmani el 25 de abril de 1815. Archivo Histórico 1988; Calvo, H. y Meisel, A. (eds.) Cartagena de Indias y su Nacional. Guerra y Marina, Anexo. Tomo 130, Folio 678r. historia. Cartagena: Universidad Jorge Tadeo Lozano, 1998; 3. Respuesta de la Municipalidad de Barranquilla al Múnera, Alfonso. El fracaso de la nación: región, clase y raza Parlamento del Capitán Valentín Capmani, con el que los

28 Corrales, Manuel Ezequiel. Efemérides y Anales de Esta- do de Bolívar. Bogotá: Casa editorial de J.J. Pérez, 1889. 4 V. De la Espriella, Alfredo. Ima- gen temporal de Barranquilla. Folleto publicado en los años sesenta del siglo XX por la Editorial Mejoras. García Zamudio, Nicolás. “La división departamental y los orígenes del municipio en Colombia”. En: Boletín de Historia y Antigüedades. V. XX. Nr. 227. Bogotá: 1933. Gonzalez Rubio, Car- los. Ensayos bolivarianos. Barranquilla independiente. Barranquilla: Editorial Mejo- Simón Bolívar coronado de laureles. ras, 1980. ———“Combate e incen- había conminado a rendirse. Archivo Histórico Nacional, dio de Barranquilla”. En: Revista Barranquilla Gráfica. Guerra y Marina, Anexo, Tomo 130, Folios 680r a 680v. Barranquilla: 1979. 4. Parte de Victoria que el Capitán Valentín Capmaní dio Laffite Carles, Christiane. La Costa Colombiana del Caribe sobre la toma de Barranquilla, 25 de abril de 1815. Archi- (1810-1830). Bogotá: Banco de la República, 1995. vo Histórico Nacional, Guerra y Marina, Anexo. Tomo 130, Lemaitre, Eduardo. Breve historia de Cartagena, 1501-1901. Folios 703r a 704r. Bogotá: 1981. 5. Segundo y detallado parte de victoria dado por el Capitán Malabet, Domingo. Barranquilla y la guerra de Independencia. Valentín Capmaní con motivo de la toma de Barranquilla. “Relato del señor don Domingo Malabet” (1892. Inconclu- Archivo Histórico Nacional, Guerra y Marina, Anexo, Tomo so). En: Vergara y Baena. Barranquilla, su pasado y su 130, Folios 694r a 696v. presente. 1922, p. 105-109. Corrales, Manuel Ezequiel. Documentos para la historia de la Múnera, Alfonso. El fracaso de la nación: región, clase y raza Provincia de Cartagena de Indias hoy Estado Soberano de en el Caribe colombiano (1717-1821). Bogotá: Banco de la Bolívar en la Unión Colombiana. 2 v. Bogotá: Imprenta Me- República, 1998. dardo Rivas, 1883-1884. Páez Polo, Esteban. Simón Bolívar en Barranquilla. Vergara, Ramón y Baena, Fernando. Barranquilla, su pasado Barranquilla: Editorial Mejoras, 1980. y su presente. Barranquilla, Banco Dugand, 1922. Varios Pino, Elías. “Casos de continuidad y ruptura: la crisis de la Documentos oficiales. ”. En: UNESCO, Historia General de Améri- - Manuel Rodriguez Torices. Decreto del 7 de abril de ca Latina. Volumen V. París, 2003. 1813, p. 110-111. Restrepo, José Manuel. Historia de la Revolución de Colombia. - Virrey Francisco de Montalvo a su sucesor Juan de Sá- (1825) Medellín: Editorial Bedout, 1969. mano. Abril de 1815. Instrucción sobre el estado en que Román Bazurto, Enrique. El Caribe: mar de la Libertad. deja el Nuevo Reino de Granada, p. 119-120. Barranquilla: 1996. Ropain de Leon, Claudio. “Rodríguez Torices en Barranquilla”. biblioGrafía En: Revista Barranquilla Gráfica.Barranquilla: 1979. Alarcón, José. Compendio de historia del Departamento del ———“Bolívar, huésped de Barranquilla en dos ocasiones”. Magdalena. Bogotá: Editorial El Voto Nacional, 1963. En: Revista Barranquilla Gráfica. Barranquilla: 1979. Becerra J., Jorge. Historia de la Diócesis de Barranquilla. A Solano, Sergio Paolo. “El Puerto de Sabanilla durante el perío- través de la biografía del padre Pedro María Revollo. Bogo- do colonial, I y II”. En: Huellas, Revista de la Universidad tá: Banco de la República, 1993. del Norte, Nº 16 y 17. Barranquilla: Uninorte, 1986. Bell Lemus, Gustavo. Cartagena de Indias: de la Colonia a la Sourdis, Adelaida. Cartagena de Indias durante la primera re- República. Bogotá: Fundación Guberek, 1991. pública, 1810-1815. Bogotá: Banco de la República, 1988. Blanco Barros, José A. “Militares del Departamento del At- ———El Consejo de Guerra de los mártires de Cartagena en lántico en la Independencia”. En: Obras completas. Tomo 1916. Bogotá: Academia Colombiana de la Historia, 2009. I. Barranquilla. Barranquilla: Ediciones Uninorte, 2011. ———“Cinco libros sobre la Independencia de Cartagena”. En: ———“El censo del Departamento del Atlántico (Partido de Calvo, H. y Meisel, A. (eds.) Cartagena de Indias y su his- Tierradentro) en 1777”. En: Boletín de la Sociedad Geo- toria. Cartagena: Universidad Jorge Tadeo Lozano, 1998. gráfica de Colombia. Vol. XXVII, No 104. Bogotá, 1972. Tisnes, Roberto. La Independencia en la Costa Atlántica. Bogo- También en: Obras completas. Tomo I. Barranquilla. tá: Academia Colombiana de Historia. Biblioteca de Histo- Barranquilla: Ediciones Uninorte, 2011. ria Nacional. Editorial Kelly, 1976. Cerra, Gregorio. “Biografía del Almirante Padilla”. En: Gaceta Vergara, José Ramón y Baena, Fernando. Barranquilla: su de Bolívar, 11 de noviembre de 1871. El Carmen, 1871. pasado y su presente. Barranquilla: Taller Tipografía del Chust, Miguel. “La coyuntura de la crisis: España, América”. Banco Dugand, 1922. En: Unesco. Historia General de América Latina. Volumen Urueta, José P. El gran almirante José Padilla. Cartagena: Ti- V. París, 2003. pografía de Antonio Araújo, 1889.

29 El presidente Rodríguez Torices, quien nos hizo “villanos”

Rodolfo Zambrano Moreno*

Corría el año de 1813, en la Provin­ esos datos son puestos a la conside­ cia de Cartagena, cuando su pre­ ración de los educandos, para des­ sidente, D. Manuel Rodríguez To­ pertar su curiosidad o su amor por rices —y dictador, según palabras estos temas culturales. del historiador Eduardo Lemaitre Rodríguez Torices, al año de de­ Román—, decidió elevar a la cate­ clarar Villa a Barranquilla, fue ele­ goría de Villa, un 7 de abril, al sitio gido presidente del triunvirato que, de libres de Barranquilla, cercano en Santa Fe de Bogotá, junto con a Soledad y Malambo, y en tierras el payanés y pertenecientes anteriormente a la Custodio García Rovira, dirigió a las Encomienda de Galapa, de la fami­ Provincias Unidas de la Nueva Gra­ lia de D. Nicolás de Barros y Guerra. nada —es decir un presidente de la ¿Por qué Galapa era la sede de la república— dentro de una junta de encomienda? Pues porque allí había poder. indios mocanás para trabajar y para Algo así como cuando el Gral. evangelizar. El rey elevó a esa cate­ Manuel Rodríguez Torices Gabriel París, “primus inter pares”, goría a la Hacienda de San Nicolás presidió la Junta Militar que designó el Tte. Gral. por dos generaciones, para el goce de D. Nicolás , al resignar el mando y de Barros y de su hijo D. Pedro, según consta en abandonar el país rumbo a la España franquis­ el testamento recogido por José Agustín Blanco ta —otro Gobierno fuerte— para exiliarse; man­ Barros, en el tomo “Encomiendas, haciendas y do que fue ratificado constitucionalmente por un pueblos”, publicado por Ediciones Uninorte y la plebiscito que dio origen al denominado Frente Gobernación del Atlántico. Nacional, con 16 años de alternación en el poder, El dictador Rodríguez Torices, que en Ba­ por el partido Liberal, que lo inició con el bogo­ rranquilla pocos conocen, salvo el mundillo de tanísimo , y culminó con historiadores de las universidades que desarro­ el conservador huilense . llan estos programas, más contados aficionados, Vencedores los ejércitos de la reconquista es­ pues algunos solo recuerdan ese nombre por un pañola al mando del Gral. D. Pablo Morillo, des­ equipo de béisbol, el Torices, cuando los cartage­ pués del sitio y rendición de Cartagena por ham­ neros venían con ese equipo y el Kola, que llegaba bre, contra toda la opinión andina, estas fuerzas acompañado de “Quique Man”, su patrocinador, marcharon sobre Santa Fe de Bogotá, remontaron D. Henrique L. Román, para jugar con el Willard el río Magdalena y llegaron a la Sabana entrando de los Peláez. D. Mike Schmulsson, D. Chelo de por Zipaquirá. La élite santafereña les halaga re­ Castro y el Mono Peláez bien saben de eso. En cibiéndoles con arcos de flores, adulándolos, cosa las escuelas públicas, ni tampoco en las privadas, que el invasor desprecia, para terror de los crio­ llos que se habían pasado del bando del virrey * Miembro de la Acade mia de la Historia de Barranquilla; columnista de Diario del Caribe y El Heraldo, y comentarista en Sámano, a quien depusieron antes y junto con Telecaribe; actualmente es asesor de la Alcaldía de Barranquilla. la virreina habían encarcelado temporalmente,

30 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 30­32. 08/MMXII ­ 12/MMXII. ISSN 0120­2537 para pasarse hacia el partido independentista, y ya tomada y diezmada su población, esquilmados ahora intentaban congraciarse con los ejércitos los residentes supérstites y en manos del enemi­ de la reconquista. El entendible temor a las bayo­ go, así que se retiraron a las carreras hacia Po­ netas, y a las noticias de los fusilamientos de la payán, adonde entre los parientes de Torres y Te­ élite de Cartagena, más las expropiaciones, cuyos norio y la élite terrateniente y esclavista caucana, familiares en Santa Fe conocían muy bien, por todavía con sus fuerzas intactas, era más fácil los pedidos de ayuda de los nuevos pobres —sus encontrar amparo. Pero los intereses económicos parientes— de la Plaza Fuerte, abandonada por primero se defienden ellos, y Popayán acogió al ellos y vencida por la falta de apoyo para romper nuevo amo. Ambos copresidentes fueron captura­ el sitio. Un ataque por la retaguardia a las fuer­ dos junto con otros patriotas y remitidos a Santa zas del Pacificador, que en 106 días había sufri­ Fe de Bogotá, y luego de un rápido juicio por trai­ do las inclemencias del clima y las enfermedades ción a S.M. Fernando VII, al igual que sucedió en tropicales, pudo haber cambiado el equilibrio de Cartagena, también fueron fusilados. Algunos por la guerra. la espalda y después colgados de la horca. Igual­ El almirante Vernon, con una flota británica mente fue pasado por las armas D. Manuel Ro­ tres veces más grande, tuvo que abandonar el dríguez Torices por haber ejercido el mando como sitio, así hubiera semidestruido a cañonazos las presidente —el mal ejemplo independentista te­ fortalezas de San Fernando y San José de Boca­ nía que ser erradicado de manera ejemplarizante. chica, y maltratado el fuerte de San Sebastián del Solo se salvó D. Lino de Pombo O’Donnell, quien, Pastelillo, así como el lienzo de la muralla que de­ al conocer el Tribunal Supremo que era cercano fiende el arrabal de Getsemaní. Pero se tuvo que y protegido de una dama de la corte de la reina, ir con muy fuertes bajas que le ocasionaron los al leerse la sentencia, en el sitio de la ejecución, sitiados y las enfermedades tropicales que ayuda­ su nombre, misteriosamente, no apareció escrito. ron, por supuesto. Las medallas conmemorativas ¿El poder de la Secretaría? Siempre ha sido bue­ del rendimiento del irreductible jefe de la plaza, no contar con parientes o amigos (as) cercanos al D. Blas de Lezo, cojo, manco y tuerto, hincado Poder. ante el almirante Vernon se quedaron acuñadas Eso sí, lo mandaron custodiado al destierro vía y subsisten en colecciones de museos, como el Cartagena —qué cambio—; las amigas bien ubi­ triunfo que no fue... cadas son un tesoro: recomiendan y piden con Ese apoyo negado desde Santa Fe y Popayán pasión. Rodríguez Torices y Camilo Torres, des­ por celos de poder y confianza en la lejanía de un pués de ejecutados, sus cuerpos fueron descuar­ incómodo viaje para la infantería trepando hasta tizados y sus miembros exhibidos en la plazuela la meseta andina, atravesando unos inhóspitos de San Diego y en la hoy Estación del Tren de la caminos reales, los perdió, pero a todos. No había Sabana. Las cabezas clavadas en una pica para champanes para tantos soldados y caballos. terror y escarmiento general. Los copresiden­ tes Camilo Torres y Tenorio y el muy jo­ ven cartagenero José Fer nández de Ma­ drid, recién habían asumido el mando de la república, pues ante la llegada de los ejércitos españoles, más numerosos, na­ die lo quería ejercer previendo una de­ rrota por la gran dis­ paridad de fuerzas. Fernández Madrid no encontraría re­ fugio en su ciudad, Generoso Jaspe, Fusilamiento de los próceres de Cartagena, 24 feb., 1816. (Museo Nacional de Colombia)

31 Para la Villa de Barranquilla hay dos personajes del siglo XIX que incidie ron favorablemente en nuestro progreso. El presidente To­ rices, que nos dio estatus de “villa­ nos” y el Gral. To­ más Cipriano de Mosquera, cuatro veces presidente de Colombia y quien rompiendo el mono­ polio del comercio internacional por Cartagena, abrió la bahía de Sabanilla 7 de noviembre de 1830, por Gabriel atencio ruiz* (óleo sobre lienzo, 3.00 x 1.80 m). El Libertador llega en el coche de D. Pedro Juan Visbal, desde Soledad, a la casa de los Molinares (esq. del Cañón Verde, costado de la Iglesia de San Nico- a la carga impor­ lás), acompañado de su comitiva de generales Mariano Montilla y Juan Glen a caballo y una escolta de granaderos de a pie. tada. A partir de ese momento, se habilitó el canal de la Piña como cumentos, protocolos notariales, publicaciones y concesión para D. Ramón B. Jimeno y el Gral. colecciones de prensa de desaparecidos diarios Ramón Santo Domingo Vila, pudientes persona­ barranquilleros —como La Nación, de Moreno & jes quienes lo mantenían abierto y navegable y Consuegra; La Prensa, de los Martínez Aparicio; cobraban por ello un peaje; los cargamentos arri­ el Diario del Comercio, de los Carbonell Baena; Ri- baban a Barranquilla, la ciudad consumía lo suyo goletto, del Gral. Faraón Pertuz, y el Diario del Ca- y el resto, río Magdalena arriba, se internaba para ribe, de los Santo Domingo, los Santos, y también el abastecimiento nacional. Esa apertura multi­ de los señores Name, en su postrera etapa—, allí modal, como escala del transporte, enriqueció e se custodian. Allí me encontré una hermosa copia impulsó notoriamente la economía local. Tiempos caligrafiada de la Constitución de 1886, la llama­ después, se construye el muelle de Puerto Colom­ da Constitución de Núñez; pero como curiosidad bia y el tren de la Barranquilla Railway & Pier noté que está firmada su promulgación por otro Co. por el ingeniero cubano Francisco J. Cisne­ costeño, por el Gral. D. Juan Campo Serrano, ros, y el auge fue notorio. El imponente Edificio varias veces presidente del Estado Soberano del de la Aduana, construido por la administración Magdalena como encargado del poder ejecutivo del presidente Marco Fidel Suárez, es un testigo nacional. Uno de los designados de confianza del de mostrar. La bóveda adonde el administrador presidente Núñez, junto con D. Miguel Antonio D. Miguel Moreno Alba, que con el concurso del Caro, para ejercer oficialmente el mando mien­ arquitecto Leslie Airbouin levantó la imponen­ tras él y misiá Soledad Román, por telégrafo y en te construcción, guardaba celosamente el dine­ clave morse, movían los hilos del poder desde la ro de los impuestos aduaneros —la más grande terraza balcón de su quinta de El Cabrero. renta nacional de los años 20— del siglo pasado. ¿Cuándo será que volveremos a tener otros Ese sitio es hoy el despacho del director del Ar­ presidentes caribes...? chivo Histórico del Atlántico, adonde tantos do­

* Gabriel atencio ruiz. Desde que tiene memoria ha expresado las concluyó la arquitectura en la Universidad del Atlántico. Ha realizado ideas que le inquietan con dibujos. En 1984 la familia se traslada a Caracas, exposiciones individuales y colectivas en Venezuela y Colombia, donde donde ingresó a estudiar Artes Plásticas en la Escuela Cristóbal Rojas, en 1985. ha recibido encargos oficiales y privados sobre diversos temas históricos En 1989 emprendió un viaje de peregrinación a Bombay (India), en cuya ruta y religiosos. Su pintura es tanto figurativa como paisajista, con excelente debía hacer escala de dos semanas en Roma, donde tuvo la oportunidad de dominio de la figura humana y del tratamiento de la luz, fuertemente apreciar las maravillas de la Ciudad Eterna y el Vaticano, sitio este de sus influenciado por los maestros del impresionismo. Se observa en su trabajo añoranzas de adolescente, porque, desde que se inició en la senda del arte, su las leyes de la complementariedad y el contraste como resultado de la faro era el gran Miguel Ángel. Concibió, así, que el viaje tenía como objetivo composición de colores puros, expresados con trazo firme y limpio en la luz providencial resolver inquietudes espirituales, reafirmándose en su vocación coloreada obtenida de la pintura al aire libre. Pinta lo que ve y de la manera pictórica. Aún sin terminar sus estudios de pintura, quiso complementarlos como lo percibe; de tal forma que su intención es crear obras que capturen las con los de arquitectura, estudios que inició en la Universidad José María escenas cotidianas de la vida, en su contexto socio-cultural entremezclándolas Vargas de Caracas. En 1996, se residencia nuevamente en Colombia, donde con el paisaje natural y la atmósfera de nuestros pueblos latinos.

32 Soledad en el proceso de la independencia

Alexander Vega Lugo*

Fotos de Alfredo Marcos María

El ‘sitio de libres’ de la porquera de San en el edificio de la Facultad de Bellas Antonio de Padua de la Soledad, hoy So- Artes en Barranquilla, publicó en 1954 ledad, es el municipio más antiguo del un trabajo titulado Colecciones arqueo- territorio del departamento del Atlánti- lógicas superficiales de Barranquilla y co en cuanto a poblamiento hispánico Soledad.1 Este texto era el resultado se refiere. Investigaciones adelantadas de una exhaustiva investigación des- relativamente recientes demuestran de la arqueología sobre las evidencias que este municipio no fue fundado por de asentamientos de seres humanos Melchor Caro, como equivocadamente que se establecieron en el territorio señala la tradición, sino que surgió en de lo que actualmente es Soledad y forma espontánea como sitio de vecinos Barranquilla. Numerosas muestras de libres en los tiempos coloniales a partir cerámica, encontradas en diferentes es- del establecimiento de una porquera lla- tratos o capas del subsuelo, permitieron mada San Antonio, en honor al nombre de conocer sus características externas y las su propietario, el capitán Antonio Moreno de Es- técnicas de elaboración por parte de los antiguos tupiñán. pueblos de indios que poblaron lo que hoy es el departamento del Atlántico. El sitio excavado por el MUniCipio de soledad en sU historia el autor fue la Loma del Chuchal, localizado en la Poco se ha escrito sobre la historia del municipio parte meridional del municipio. La toponimia del de Soledad. Son escasos los trabajos rigurosos terreno se explica por la presencia significativa de que se han adelantado con las exigencias meto- conchas marinas (Ostra plumosa), que aparecen dológicas y conceptuales propias de la disciplina junto con la cerámica encontrada. La zona estu- histórica. El destacado profesor de arqueología diada es una planicie inclinada hacia la ciénaga Carlos Angulo Valdés, quien trabajó inicialmente del Mamonal, que en un remoto pasado era una con la Universidad del Atlántico, creador del Ins- importante reserva de pesca y de caza de aves tituto de Investigaciones Etnológicas y del Museo adaptadas a medios lacustres. El material lítico de Antropología que se encuentra actualmente encontrado sirvió como evidencia para demostrar que ha sido temprano el poblamiento en estas latitudes tropicales que gozaban de una riqueza Barranquilla, 1967. Licenciado en Ciencias Sociales y natural asombrosa. Ello le permitió concluir que Económicas de la Universidad del Atlántico (1992). Magíster en Estudios Político-Económicos de la Universidad del Nor- nuestra historia no comenzó con la llegada de los te (1998). Coeditor de las Obras completas de José Agustín españoles a suelo americano, sino que hunde sus Blanco Barros. Se desempeña como docente estatal de la Ins- raíces en una estructura de muy larga duración titución Educativa Inobasol, Soledad, Atl., desde 2006. Es en los tiempos precolombinos. docente catedrático de la Universidad del Norte, desde 1995, vinculado a los Departamentos de Humanidades y Filosofía; Los hallazgos realizados por Angulo Valdés Historia y Ciencias Sociales, y Ciencia Política y Gobierno. —fruto de sus pacientes investigaciones— ilu-

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 33 pp. 33-40. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 minan un horizonte temporal amplio que puede ser complementado con los diversos relatos que elaboraron los cronistas de Indias, como fray Pedro Aguado, fray Pedro Simón o Juan de Castellanos, quienes describieron el encuentro entre españoles y aboríge- nes en los tiempos de la conquista ibé- rica. Lo anterior nos permite afirmar previamente que nuestra historia lo- cal y regional es de larga duración, por cuanto se tiene documentado desde la arqueología que la presencia de seres humanos en la región del Caribe co- lombiano se estima aproximadamente en el año 10.000 a.C. —con los caza- dores recolectores— tal como lo reve- lan Angulo Valdés y Gerardo Reichel Dolmatoff en sus estudios de la época prehispá- pietario de una porqueriza o porquera establecida 2 nica . en el año de 1598, en el actual espacio geográfico Otro de los grandes académicos que ha rea- del municipio de Soledad. Lo anterior desmiente lizado un aporte inmenso al conocimiento de la entonces la versión de la supuesta fundación en historia del municipio de Soledad es el geógrafo manos de Melchor Caro, personaje que se men- e historiador José Agustín Blanco Barros, nacido ciona incluso en la letra del himno soledeño. La en 1922 en Sabanalarga, y durante mucho tiem- evolución histórica en tiempos hispánicos tiene po profesor de las universidades Nacional y Ponti- como centro de gravedad este establecimiento de ficia Javeriana de Bogotá. Su producción intelec- criadero de porcinos. Posteriormente, Blanco Ba- tual gira en torno a temas de geografía histórica rros logra también demostrar cómo lo que hoy es soportados documentalmente, donde describe Soledad se transformó en sitio de vecinos libres, minuciosamente los cambios espaciales y geo- es decir, de un asentamiento poblado por mes- gráfico-ambientales del antiguo Partido de Tierra- tizos o pardos quienes generaron una dinámica dentro —actual departamento del Atlántico— en en la economía y sociedad hispánica. Fue posible tiempos de la colonización hispánica. En su libro explicar estos cambios —en perspectiva históri- titulado El norte de Tierradentro y los orígenes de ca— gracias a los datos del primer censo que se Barranquilla, publicado en 1987 por el Banco de realizó en territorio granadino por iniciativa de la República, Blanco Barros, basándose en docu- la Justicia Mayor en Tierradentro, Juan García mentos de la época colonial encontrados en el Ar- Turín, en 1777. Padrón que fue solicitado por el chivo General de la Nación, logró demostrar que la gobierno de España en tiempos del gobierno de versión tradicional sobre los orígenes de Soledad los Borbones con propósitos fiscales y políticos. era falsa en términos históricos. Es decir, aque- La información recabada por esta autoridad se lla que sostiene que el municipio atlanticense fue tuvo en cuenta para tener presentes los cambios fundado por Melchor Caro en el año de 1610. Ha- en materia de reubicación demográfica y distribu- ciendo uso de sus conocimientos de paleografía, ción espacial de la población, como ocurrió en el el profesor Blanco Barros encontró un documen- gobierno del virrey Sebastián Eslava. De acuerdo to de capital importancia, sobre las visitas que con el empadronador, Soledad tenía 2.062 habi- realizaban los oidores y visitadores a las distintas tantes, de los cuales 1.006 eran de sexo mascu- encomiendas con el ánimo de constatar si había lino (48%) y 1.056 eran de sexo femenino (51%). abusos en contra de los aborígenes de parte de los Este trabajo donde aparecen los datos censales encomenderos. Un personaje de nombre Juan de goza de una significativa importancia histórica, Villabona Zubiaurre3 es clave para entender los por cuanto fue posible trazar un perfil de lo que orígenes coloniales de Soledad, porque gracias a era la Soledad colonial en sus actividades econó- su informe —cuya copia reposa en el Archivo Ge- micas, estructura social, vida cotidiana, compo- neral de la Nación— se pudo conocer al capitán sición demográfica, etc. Solo el 45% de la pobla- Antonio Moreno de Estupiñán, quien fuera el pro- ción era económicamente activa y, a diferencia de

34 cambios en la sociedad occi- dental. Algunos hechos de re- percusiones universales, como la independencia de las trece colonias americanas en julio de 1776 —ante el poder britá- nico—, impulsaron una oleada democrática inspirada en los principios e ideales del libera- lismo de John Locke, lo que será un importante suceso de vastas y fecundas consecuen- cias de orden político expan- diéndose por todo el mundo. La igualdad de condiciones, pro- pia de la democracia moder- na, será una fuerza histórica Casa de Pedro Juan Visbal, donde se hospedó el Libertador, y hoy funciona el Museo sin paralelo, circunstancia que Bolivariano. Fotos de Alfredo Marcos María. impresionó al genio político otros censos aplicados en otras regiones de lo que de Alexis de Tocqueville, un aristócrata francés, hoy es Colombia, no se discriminó sobre aquellas quien visitó los Estados Unidos de Norteamérica personas con algún tipo de discapacidad física o con el ánimo de estudiar las condiciones peniten- mental4. En la parte final de este trabajo elabo- ciarias de ese gran país del norte. Como resultado rado por Blanco Barros se cita a Juan José Nie- de esa experiencia logró escribir una de las más to, un personaje importante por su participación importantes obras de la literatura política, La de- a favor de la causa patriota quien escribió una mocracia en América (1835). obra titulada Geografía histórica y estadística de Un segundo suceso universal que influyó en la provincia de Cartagena hecha por cantones, pu- la conciencia revolucionaria de los criollos fue la blicada en 1839. En ella el autor afirma que: La Revolución francesa de 1789. A partir de ese mo- población de ambos sexos es tan laboriosa y acti- mento, en Francia se inicia un radical cambio en va que hasta los jóvenes de la primera sociedad se su ordenamiento sociopolítico, lo cual significó ocupan frecuentemente en tejidos finos y curiosos, un rechazo a la monarquía y al Antiguo Régimen como calzonarias y otros que se han adelantado instaurándose una república moderna, con pode- hasta la perfección. Hay una gran parte de los res públicos separados en un complejo sistema hombres ocupados en la pesca y de todos ellos se de contrapesos tal como lo fundamentó teórica- sacan soldados bizarros y valientes. La educación mente el barón de Montesquieu en su reconocida ha sido allí siempre bastante y se puede decir que obra El espíritu de las leyes (1748). Una de las Soledad es una [de las poblaciones] que aventajan más importantes consecuencias de orden políti- en esto a los demás lugares de la provincia [...]5 co de este suceso histórico fue la Declaración de En lo concerniente a la pirámide poblacional los Derechos del Hombre y del Ciudadano, docu- —elaborada por José Agustín Blanco Barros— mento que en la Nueva Granada fue traducido esta nos permite observar el perfil demográfico de al castellano por don Antonio Nariño, generando Soledad a fines del siglo XVIII, época clave para una mayor conciencia política favorable a la cau- comprender el proceso de independencia ante el sa independentista. Dentro de esta marea revolu- poder de la monarquía española, proceso político cionaria hay que destacar a Napoleón Bonapar- que alcanzaría su momento culminante cuando te, quien invadió a España en 1808, nombrando el vecino puerto de Cartagena de Indias declaró como gobernante a su hermano José Bonaparte, su emancipación el 11 de noviembre de 1811. generando una crisis política al separar de su cargo al monarca español Fernando VII. Una cir- soledad en tieMpos de la independenCia cunstancia como la anterior ocasionó un vacío de En materia política, ¿qué pasó en Soledad en poder que no fue plenamente aprovechado por los tiempos de la Independencia? Sobre este tema criollos en América; sin embargo, generó una de hay que tener en cuenta inicialmente el contexto las crisis más agudas en la relación de dominio de histórico de la época, caracterizada por grandes España ante sus colonias hispánicas.

35 La situación en la Nueva Granada, sensible a en tierras americanas. En este horizonte hay que estos cambios de orden universal, reflejaba un mencionar a Simón Bolívar, ese distinguido ca- creciente descontento y malestar de las élites raqueño que se convertirá en el más importante criollas que reclamaban sus derechos políticos dirigente revolucionario y artífice de la indepen- ante España. Todo esto refleja un hecho paradó- dencia de varias de las nacientes repúblicas crio- jico en la historia, y es que de Europa nos llegó llas. Es bien sabido que el Libertador estuvo en la inicialmente la conquista, la dominación, la im- Heroica y allí escribió El manifiesto de Cartagena, posición violenta de una historia y de un código una proclama revolucionaria en donde animaba a de valores ajenos al nuestro que terminó por ge- los criollos a levantarse en contra del poder his- nerar una cultura híbrida de rostro mestizo. Pero pánico. también de Europa nos llegó —a principios del En esta época de grandes transformaciones XIX— ese viento de libertad con los ideales de la políticas, es importante señalar el papel que ju- Ilustración, que se ve reflejado en la conciencia garon localidades vecinas en el proceso inde- y praxis revolucionaria de las élites pardas que pendentista. Barranquilla y Soledad, sitios que condujeron a una ruptura definitiva con el Im- conformaban la antigua provincia de Cartagena, perio español en 1819. Un antecedente clave en jugaron un papel activo y favorable a la causa de este horizonte fue la temprana declaración de in- la emancipación del poder español. Resultado de dependencia del puerto de Cartagena de Indias, ello, el gobernador don Manuel Rodríguez Torices el 11 de noviembre de 1811, el más importante le ofreció el título de ‘villa’ tanto a Barranquilla puerto esclavista de América del Sur y paso obli- como a Soledad, en el año de 1813 en los días 7 gado del metálico (oro) que era extraído en ricas de abril para la primera, y el 8 de marzo para la zonas auríferas que alimentaban el tesoro de la segunda en 1814, por su lealtad a la causa pa- realeza hispánica. Sobre el proceso de indepen- triota. El documento original reza así: dencia en el Caribe colombiano cabe destacar los El ciudadano Manuel Rodríguez Torices presi- trabajos de la distinguida historiadora Adelaida dente Gobernador del Estado de Cartagena de Sourdis Nájera, quien ha logrado contextualizar Indias á los habitantes de él, de qualquiera cla- la naturaleza de estos conflictos políticos y su se y condición que sean, hago saber: Que el Su- evolución en el tiempo. En ese sentido, invito al premo Poder Legislativo del Estado legalmente lector a consultar en la bibliografía de este trabajo congregado ha sancionado lo siguiente. La Cá- algunas de las obras de esta prestigiosa historia- mara de Representantes del Estado de Carta- dora costeña. gena de Indias, considerando los importantes Para nosotros los costeños, la fecha de la inde- servicios, que en la presente guerra ha hecho á pendencia de Cartagena de Indias es más impor- la Patria el Sitio de Soledad al distrito capitular, tante en términos históricos que el grito de independen- cia de Santa Fe de Bogo- tá del 20 de julio de 1810. Todo lo anterior terminó por convulsionar la estructura política de la Nueva Grana- da, que se vio azotada por la actitud violenta del Pa- cificador, don Pablo Mori- llo, logrando liquidar a los más distinguidos y eximios patriotas, como el sabio Francisco José de Caldas, la mayor conciencia cien- tífica neogranadina en el campo de la geografía física, brutalmente asesinado por las huestes españolas en un intento desesperado por restaurar el dominio regio

36 y departamento de Barranquilla, y que su población numerósa, necesita yá un establecimiento Municipal, y Jueces te- rritoriales para su mayor decoro, pronta administración de Justicia, y arreglo de su policía interior; en sesión de este dia há decretado, y decreta lo siguiente: 1. Que el Sitio de Soledad actual- mente del distrito capitular, y departa- mento de Barranquilla sea condecorado con el titulo de Villa de la SOLEDAD DE COLOMBIA. 2. Baxo este respecto se establezcan en dicho Sitio todas las corporaciones anexás al rango de Villas, con todos los fueros, y prerogativas que le correspon- den por las leyes. 3. El escudo de armas de Villa de So- ledad, será un campo verde con cielo claro, or- su vocación por la libertad correspondiente a su lado con una guirnalda de flores, y en el centro histórica condición de sitios de libres. de dicho campo una columna blanca con esta Curiosamente, en un estudio realizado por el inscripción A LA CONSTANCIA EN LA DEFENSA historiador José Lobo Romero se cuenta que es- DE LA INDEPENDENCIA AMERICANA… tas villas tuvieron ciertas deslealtades entre sí, En su conseqüencia ordéno, y mando á to- que ponen en evidencia los diferentes intereses dos los Tribunales, Géfes, y Autoridades así políticos que abrazaron las élites y familias dis- Civiles, como Militares, y Eclesiásticas que lo tinguidas que vivían en estas localidades. El per- obedezcan, y hagan obedecer cumplir, y execu- sonaje Pedro Juan Visbal, propietario de lo que tar en todas sus partes. Dado en el Palacio del actualmente es el Museo Bolivariano, localizado Suprémo Poder executivo del Estado de Carta- en la plaza de Soledad, lugar donde alojó al Liber- gena de Indias á ocho días del mes de Marzo tador en octubre de 1830, cuando Bolívar estuvo de mil ochocientos catorce, quarto de nuestra de paso por nuestro municipio poco antes de su Independencia. Manuel Rodríguez Torices, Pre- muerte, en verdad fue un traidor a la causa pa- sidente Gobernador del Estado. Luis Carrasqui- triota. Lobo Romero, con ese habitual rigor que lla, Oficial Mayor. Es copia, Carrasquilla. caracteriza sus estudios históricos, incorporó a De acuerdo con el Diccionario de la Real Aca- su trabajo un documento —proporcionado por demia Española, la palabra “villa” significa: Po- José Agustín Blanco— encontrado en el fondo blación que tiene algunos privilegios con que se Guerra y Marina en el Archivo General de la Na- distingue de las aldeas y lugares. Esto significó ción, demuestra que, quien le da posada a Bolí- un reconocimiento político importante que deter- var en sus últimos días, tuvo intereses favorables minará el destino de estas incipientes villas loca- a la restauración española y fue colaborador del lizadas en el norte de la provincia de Cartagena. régimen hispánico, siendo un enemigo de la cau- Hay que reconocer la acertada decisión política sa criolla6. En su reciente libro, este distinguido tomada por Rodríguez Torices, quien temien- historiador reafirma tal suceso: […] Pedro Juan, do posibles rivalidades de poder entre Cartage- quien denunció a varios patriotas soledeños ante na de Indias independiente y otros importantes el sanguinario Francisco Montalvo, a cambio del puertos o ciudades costeñas —como es el caso de privilegio del transporte que le dieron de Honda Mompox— quiso establecer unas lealtades entre hasta Barranquilla y Soledad, además del cargo 7 Barranquilla y Soledad en beneficio del antiguo de Alcalde Pedáneo de esta parroquia . puerto esclavista cartagenero. De igual manera, La estancia de Bolívar en la villa de Soledad ha con este reconocimiento hubo un ascenso de or- sido documentada por uno de los más destacados den administrativo en el sentido de que los cabil- historiadores y biógrafos del Libertador, me re- dos de estas jóvenes ciudades podían exigir tri- fiero al anglosajón John Lynch, quien publicó en butación a sus habitantes, y, además, confirma el año 2006 su obra titulada Simón Bolivar: una

37 vida. Señala el notable historia- dor que: José Palacios y unos pocos amigos lo trasladaron a Soledad en octubre de 1830, desde donde Wilson informa que lo vio “muy enfermo, muy destruido”, apenas con fuerzas para conseguir caminar de un lado a otro de su habitación y con el ánimo apesadumbrado8. En materia política no fue real- mente importante la presencia transitoria de Bolívar en Sole- dad. Como bien se conoce, fue- ron sus últimos días de vida y experimentaba un gran desen- canto ante ese vigoroso esfuerzo que implicó la guerra a muerte a España y sus estériles resul- tados en materia de libertad re- publicana, circunstancias que lo habían sumergido en una postración anímica realmente perturbadora. ayudaron a conducir, capitaneadas por varios ve- En otro orden de ideas, acerca de los estudios cinos de alguna significación hasta el improvisado 9 republicanos sobre Soledad, José Agustín Blanco fortín de El Chuchal [...] Barros, tiene dos trabajos inéditos donde desta- En un segundo trabajo, titulado Militares del ca cómo en el ejército patriota tuvieron presencia departamento del Atlántico en la Independencia”, destacados soldados y militares nacidos en este en el que basándose en fuentes documentales de municipio, y su importancia a favor de la inde- la Notaría Primera de Barranquilla y gracias al pendencia. El primero de esos trabajos se titula aporte del historiador (ya fallecido) Claudio Ro- Toma de Barranquilla en 1815 por el Capitán Va- paín de León, logró reconstruir la vida del militar lentin Capmani. Este capitán de guerra —de ori- costeño Blas Barros Oñoro, hijo legítimo de Se- gen catalán— cuyo apellido significa “cabezón” (de bastián de Barros, de oficio labrador, que en el cap = cabeza y mani = magno o grande) y quien censo de 1777 tenía 24 años de edad, casado con estuvo al servicio de Pablo Morillo, llegó a sofocar María Magdalena Oñoro de 18 años. Todas las cualquier brote patriota en Barranquilla y en el circunstancias y dificultades de este valiente mi- bajo Magdalena. Señala Blanco Barros el papel litar quedan demostradas en este impresionante de algunas mujeres soledeñas y barranquilleras trabajo de Blanco Barros en el que pone de relieve que ayudaron a transportar municiones en el for- su gran formación académica como historiador y tín de El Chuchal (Veranillo). Pone entonces en geógrafo. Allí también se refiere a la participación evidencia la participación de Soledad a favor de de militares soledeños a favor de la causa patrio- este proceso emancipatorio: Al día siguiente dos ta; particularmente menciona el caso del capitán bongos de la flotilla enemiga se movieron río arri- Gregorio Osorio, nacido en Soledad, de quien en- ba, subieron hasta frente a Soledad y allí pasaron contró datos valiosos en el Archivo Histórico Na- la noche; se supuso entonces y no sin fundamento, cional en el fondo de Hojas de Servicio, Tomo 33. que uno de los jefes realistas estuvo en tierra a re- En un fragmento dice el documento: Señor Juez coger de sus espías todos los informes convenien- 1º del cantón. Gregorio Osorio, Capitán efectivo de tes [...] en tanto que otras mujeres más varoniles ejército en uso de letras de retiro ante U. con el se habían quedado a presenciar el acontecimiento, debido respeto represento: Que conviene a mi de- ayudar y socorrer a sus esposos, hermanos y pa- recho a levantar información sobre mis servicios rientes comprometidos en la defensa. Muchas de hechos a la Patria. Y para lograr este objeto he de estas mujeres, antes del conflicto, transportaron merecer de U. se sirva llamar e interrogar al Ciuda- en sus hombros o en sus regazos, cantidades de dano Antonio Piedrahita sobre los puntos siguien- Pertrechos necesarios a los puntos convenientes y tes [...] A U. suplico se me entreguen originales por

38 ser de Justicia. En Cartagena a 23 de Noviembre Asociación Colombiana de Historiadores. Capítulo Atlántico. de 1837 (firmado) José Gregorio Osorio [...]10 Barranquilla, Colombia. 7 Lobo Romero, José (2012). Hitos históricos de los Finalmente, y tal como lo hemos visto, Soledad municipios de Santo Tomás y Palmar de Varela. Sibila Eds., jugó un papel determinante en el Caribe colom- Barranquilla, Colombia, p. 78. 8 biano favorable a los ideales patriotas y su histo- Lynch, John. (2006). Simón Bolívar. Editorial Crítica. Barcelona, España, p. 367. ria. Con motivo de la conmemoración del Bicen- 9 Blanco Barros, José Agustín (1994-2007). Toma de tenario de la Independencia, está por escribirse Barranquilla en 1815 por el capitán Valentín Capmani. ampliamente para generar una conciencia histó- (Manuscrito inédito). 10 rica que sirva a la vida, a fin de comprender su Blanco Barros, José Agustín (2007). Militares del departamento del Atlántico en la Independencia (Manuscrito presente y, de esa manera explorar, sus posibili- inédito). dades hacia el futuro. Que este trabajo —lo digo una vez más— sea entendido como una aproxi- biblioGrafía mación al tema de la apasionante historia de este Angulo Valdés, Carlos (1954). Colecciones arqueológicas superficiales municipio. de Barranquilla y Soledad. Universidad del Atlántico, Instituto de Investigación Etnológica. Barranquilla, Colombia. ——— (1981). La tradición Malambo. Fundación de Investigaciones Ar- notas queológicas Nacionales. Banco de la República, Bogotá.

1 ——— (1995). Modos de vida en la prehistoria de la llanura atlántica de Angulo Valdés, Carlos (1954). Colecciones arqueológicas Colombia. CERES, Universidad del Norte. Barranquilla. superficiales de Barranquilla y Soledad. Barranquilla: Uni- Blanco Barros, José Agustín (1972). “El censo del departamento del versidad del Atlántico, Instituto de Investigación Etnológica. Atlántico (Partido de Tierradentro)”. En: Boletín de la Sociedad Geo- Barranquilla. gráfica de Colombia.Vol. XXVII, No. 104. Bogotá. 2 Angulo Valdés, Carlos (1995). Modos de vida en la ——— (1987). El norte de Tierradentro y los orígenes de Barranquilla. prehistoria de la llanura Atlántica de Colombia. CERES, Ediciones Banco de la República. Bogotá, Colombia. ——— (1990). “Investigaciones acerca del primer censo en Colombia”. Universidad del Norte. Barranquilla. 3 En: Revista Colombiana de Estadística. Vols. 21-22. Bogotá. Archivo General de la Nación. Fondo: Visitas. Sección ——— (1994). Atlántico y Barranquilla en la época colonial. Ediciones Colonia. Subfondo: Visitas-Bolívar. Sección 62, 8. D. 1. Legajo Gobernación del Atlántico. Colección Historia, Barranquilla. 8. Diligencias de visitas (visita a iglesia, descripción de indios, ——— (1994-2007). Toma de Barranquilla en 1815 por el capitán Valen- elección de cacique, información secreta, auto de población, tín Capmani. (Manuscrito inédito). cargos y sentencia contra administradores practicadas por ——— (2007). Militares del departamento del Atlántico en la Indepen- el Visitador Juan de Villabona Zubiaurre en el pueblo de dencia. (Manuscrito inédito). Bohórquez, Martha (1998). Historia regional electiva 1. “El Taller del Paluato, encomendado en Gerónimo de Portugal y Córdoba. En Historiador”. Universidad del Magdalena, Instituto de Educación algunas probanzas se incluyen otros pueblos, como Cipacua Abierta y a Distancia. Santa Marta, Colombia. y Turbaco, pertenecientes a dicho encomendero (1610-1611). ——— (1999a). Historia regional II. “Cómo preparar un trabajo de Histo- Folios: 1-238. Folio en blanco 170. ria”. Universidad del Magdalena, Instituto de Educación Abierta y 4 Blanco Barros, José Agustín (1990). “Investigaciones a Distancia. Santa Marta, Colombia. acerca del primer censo en Colombia”. En: Revista Colombiana ——— (1999b). Historia regional III. “Métodos y Técnicas de Investiga- de Estadística. Vols., 21-22. Bogotá, Colombia. ción Cualitativa en Ciencias Sociales”. Universidad del Magdalena, Instituto de Educación Abierta y a Distancia. Santa Marta, Co- 5 Nieto, Juan José. (1839) Geografía Histórica y Estadística lombia. de la Provincia de Cartagena hecha por cantones. En: Blanco Castañeda García, Fernando (1995). Nuestra historia ilustrada. Talle- Barros, José Agustín (1990). “Investigaciones acerca del primer res Luz Impresores, Barranquilla. censo en Colombia”. Revista Colombiana de Estadística. Vols. ——— (s.f.) Soledad: Trazos e Historia. 21-22. Bogotá. Castro de la Torre, Elsy (2009). La presencia de la cultura bolivariana 6 Lobo Romero, José (1997). “Deslealtades republicanas en la historia de Barranquilla. Impresión Artes Gráficas Industria- en las incipientes villas de Barranquilla y Soledad”. En: les. Barranquilla, Colombia. Enciclopedia de Colombia. Volumen III. (s.f.) La República. Cronología. Revista Historia Caribe. Volumen I, Número 2. Revista de la Editorial Nueva Granada. Impreso en España. Escorcia Gravini, Gabriel. (s.f.) La gran miseria humana. Goenaga, Miguel (1953). Crónicas de mi vieja Barranquilla. Editorial Mejoras, Barranquilla. Gobernación del Atlántico (2006). “Atlántico: una plataforma para el desarrollo económico”. Anuario Estadístico del Atlántico 2005. Barranquilla, Colombia. Instituto Geográfico Agustín Codazzi, IGAC (1994). Atlántico: caracte- rísticas geográficas. Bogotá, Colombia. ——— (1996). “Soledad”. En: Diccionario Geográfico de Colombia. Tomo 4. Rabal-Zuzagua. 3ª ed. Impreso en Colombia. Lobo Romero, José (1995). “Barranquilla: de villa a ciudad”. En: Revis- ta Historia Caribe. Volumen 1, Número l. Revista de la Asociación Colombiana de Historiadores. Capítulo Atlántico. Barranquilla, Colombia. ——— (1997). “Deslealtades republicanas en las incipientes villas de Barranquilla y Soledad”. En: Revista Historia Caribe. Volumen 1, Número 2. Revista de la Asociación Colombiana de Historiadores. Capítulo Atlántico. Barranquilla, Colombia. ——— (2012). Hitos históricos de los municipios de Santo Tomás y Pal- mar de Varela. Sibila Eds., Barranquilla, Colombia. Lynch, John (2006). Simón Bolívar. Editorial Crítica. Barcelona, Es- paña.

39 Ministerio de Educación Nacional. (2009). so escrito al capitán de infantería Antonio Historia hoy: Aprendiendo con el bicen- Moreno de Estupiñán para que fundara tenario. 200 años, 200 preguntas. Bo- una porquera en la Barranca de Moreno, gotá, Colombia. la cual con el tiempo se transformó en So- ——— (2008). Altablero, No. 46. Bogotá. ledad. En este año se inician las activida- Nieto, Juan José (1994). Selección de tex- des propiamente dicha de la porquera de tos políticos, geográficos e históricos. San Antonio. Ediciones Gobernación del Atlántico. 1602: En Paluato cesó la administra- Colección Historia, Barranquilla. ción de la encomienda de parte de Antonio Ocampo López, Javier (1982). “El proceso de Moreno de Estupiñán. político, militar y social de la Indepen- 1603: La señora María Carrillo, viuda dencia”. En: Manual de Historia de Co- de Sancho de Guitar y Arce, asume perso- lombia. Tomo II. Procultura. Instituto nalmente la administración de esta enco- Colombiano de Cultura, 2ª ed. Bogotá. mienda (Paluato) hasta 1607. Páez Polo, Esteban (1974). Simón Bolívar 1650: En agosto se abrió el canal del en la villa de Soledad. Granamérica, Dique con el objetivo de comunicar el puer- Medellín, Colombia. to de Cartagena de Indias con el río Grande Revollo, Andrés M. B. (1909). Geografía de la Magdalena. del departamento de Barranquilla (y 1710: En Soledad algunas de las veci- divisiones naturales de la República nas tenían criadas o “concertadas” indíge- de Colombia), 1ª ed., Imprenta de La nas contratadas de Malambo. Luz, Bogotá. 1738: La consolidación del sitio de San Sourdis Nájera, Adelaida (1988). Cartage- Antonio de la Soledad se hizo evidente en el na de Indias durante la Primera Repú- hecho de que varios de sus vecinos, asocia- blica, 1810-1815. Banco de la Repú- dos con otros de Barranquilla (108), en to- blica, Bogotá. tal compraron en este año, a Alonso Téllez ——— (1994). “Ruptura del estado colo- y su esposa Antonia del Campo, las tierras nial y tránsito hacia la república”. En: de Carretal, que tenían una extensión de Meisel Roca, Adolfo (ed.) Historia eco- 14 caballerías. nómica y social del Caribe colombiano. 1743: Cuando gobernaba el virrey Se- Ediciones Uninorte - Ecoe Ediciones. bastián de Eslava, Soledad tenía alcalde ——— (2009). “El proceso de independencia en el Caribe colombia- “pedáneo”, que lo era también de Barranquilla. En este mismo año no”. En: Ramos, Aristides; Saldarriaga, Óscar, y Gaviria, Radamiro logra su categoría de ‘parroquia’. (eds.) El Nuevo Reino y sus provincias: crisis de la independencia. 1744: La escrituración de otras tierras rurales del vecindario de Universidad del Rosario - Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. Soledad era cuestión firme, como se resume de los documentos corres- ——— (2010). “La independencia del Caribe colombiano, 1810-1821: pondientes al litigio entre varios vecinos del lugar y el alcalde Francisco Cartagena, Santa Marta, Valledupar y Riohacha”. En: Revista Cre- Pérez de Vargas. dencial Historia. Biblioteca Luis Ángel Arango. Ed. 242, Bogotá, 1754: Fallece en Soledad, el 7 de mayo, el alcalde Francisco Pérez Colombia. de Vargas. Vergara, José Ramón y Baena, Fernando (1946). Barranquilla, su pasa- 1762: Gente de Barranquilla, Soledad y Tubará estaba metida en do y su presente, 2ª ed., Imprenta Bernal. Barranquilla, Colombia. la actividad matutera (contrabando). 1777: El censo adelantado por Juan García Turín (justicia mayor) fUentes doCUMentales en Tierradentro señala que Soledad tenía 2.062 almas y carecía de anexos o agregaciones: “Sitio y Feligresía de San Antonio de Padua de Archivo General de la Nación la Soledad, situado a orillas del Río de la Magdalena, distante legua y media de Barranquilla, donde hay Iglesia, Parroquia independiente de • y Marina, - que con- Fondo: Guerra Tomo 130f 680r. Documento un Cura Administrador”. tiene la de Molinares y otros de las firma Bartolomé concejales villas 1788: El 24 de mayo nace en Cartagena Manuel Rodríguez Torices. de y Soledad en el cual se recrimina - Barranquilla respectivamente va 1793: Alrededor del mes de diciembre, don Antonio Nariño tradujo lerosamente la decisión de Morales, lugarteniente de Pablo Francisco al castellano la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, Morillo, de tomar por la fuerza a Barranquilla. promulgada por la Asamblea Nacional Francesa de 1789. • Poblaciones Sección Colonia, Varias Código Fondo: . I. Grupo: . 1801: A raíz de cierta pretensión de algunos vecinos de Barranquilla S C Solicitud sobre erección en . 46-29. Legajo 10. Rollo No. 019/20. encabezados por José Antonio de Barros, contra el apoderado de di- parroquia en la Ermita de Soledad ( 1743). Folios 64-65. chas tierras Alejandro Vidales Blanco, la autoridad fijó definitivamente • Poblaciones Sección Colonia, Varias Código Fondo: . I. Grupo: . en la orilla septentrional del arroyo El Lindero los límites entre los S C remisoria del informe . 46-29. Legajo 10. Rollo No.019/20. Nota sitios de la Barranquilla de San Nicolás y de San Antonio de la Soledad. presentado por Andrés de Madariaga a su arribo al pueblo de Soledad, 1811: El 11 de noviembre la ciudad puerto de Cartagena de Indias sobre las otorgadas para el establecimiento de parroquia providencias declara su independencia de España. de dicho pueblo . Folios: 121. 1812: Manuel Rodríguez Torices presidió la Convención General • Poblaciones Sección Colonia Varias Código S Fondo: . I . Grupo: . . del Estado de Cartagena el 21 de enero. El 25 de marzo obtuvo las fa- C de tierras del sitio de 46-29. Legajo 10. Rollo No.019/20. Devolución cultades de dictador. Posteriormente fue elegido presidente del Estado Santa Cruz de San a la población de Soledad, de Carta- José provincia de Cartagena. gena, Folios 205-216. 1813: El 7 de abril don Manuel Rodríguez Torices erige en villa • Visitas Sección Colonia Subfondo Visitas- Sec- Fondo: . : Bolívar. a Barranquilla por su participación valerosa en favor de la causa de ción , de ( a iglesia, des- 62 8. D. 1. Legajo 8. Diligencias visitas visita independencia. cripción de indios, elección de cacique, información secreta, auto de 1814: Soledad es erigida en villa el 8 de marzo. población, cargos y sentencia contra administradores practicadas por 1815: El 25 de abril, Barranquilla es tomada por el capitán de el de Villabona Zubiaurre en el pueblo de Paluato, en- visitador Juan guerra Valentín Capmani. El 6 de septiembre Bolívar escribe la Carta comendado en de Portugal y Córdoba En algunas probanzas Gerónimo de Jamaica en Kingston. se incluyen otros pueblos, como Cipacua y , pertenecientes a Turbaco 1816: El 2 de octubre es ahorcado en Bogotá don Manuel Rodrí- dicho encomendero ( en blanco 1610-1611). Folios: 1-238. Folio 170. guez Torices, quien fuera el presidente del Estado de Cartagena. 1824: Soledad es cabecera del tercer cantón de la Provincia de CronoloGía Cartagena. 1830: El 15 de octubre estuvo de paso por Soledad el Libertador 1562: Felipe II autorizó a los indios de Malamboviejo para que el Simón Bolívar. El 17 de diciembre en una quinta del español Joaquín puerto correspondiente a dicha encomienda tuviera un mesón o casa de Mier, San Pedro Alejandrino en Santa Marta, fallece Bolivar en pre- de huéspedes. sencia de su médico el doctor Révérend y de los generales José María 1598: El licenciado Muñiz de Nava desde Cartagena dio permi- Carreño, José Laurencio Silva y Mariano Montilla.

40 Santo Tomás de Villanueva y su contribución a la independencia de la provincia de Cartagena y de Colombia

José Isaías Lobo Romero*

En el decreto mediante el cual el gobierno del Es- tradición colonial de cierta estimación histórica tado de Cartagena erige al sitio de Barranquilla en la división administrativa en la Provincia de en villa, el 7 de abril de 1813, capital del De- Cartagena, no investigada; no conocida. partamento de Barlovento, se le asignan a esta El sitio tomasino debió existir en 1666, si se entidad territorial “por distritos los Partidos de considera lo afirmado en un documento de 1747 Barranquilla y Santo Tomás, con los sitios referente a las medidas limítrofes de un y pueblos de su actual comprensión”1. sector de las 24 caballerías de tierras Lo del partido de Barranquilla me de merced del capitán de caballería era comprensible, por haber escri- Bartholomé de la Hoz, que por orden to para la revista Historia Caribe del virrey Eslava se le practicaron, “Barranquilla: de villa a ciudad”, en un proceso de adjudicación pero no la distinción que se hizo de tierras solicitada por el alférez de Santo Tomás, y más si repasa- Eufrasio Cabarcas, residenciado mos el texto que sostiene: “Deseando en el sitio de Sabanalarga. Según el la Cámara de Representantes de Car- documento, página 9, el capitán de la tagena ofrecer a los pueblos una prueba Hoz, al exigírsele mostrar papeles de le- de su atención y cuidado en premiar el mé- galidad de posesión del predio, mostró uno rito de los que en la actual regeneración han dado que “data del 10 de octubre de 1666”3. Las merce- pruebas más visibles de su patriotismo y amor a des de tierra se concedían a quienes durante diez la causa de nuestra independencia de la domina- años previos habían realizado colonización, es ción española; y bien certificada de las ventajosas decir, haber poblado, cultivado las tierras, intro- proporciones de los distinguidos servicios del sitio ducido y criado ganado. El documento identifica de Barranquilla y su territorio, que tanto en la últi- al sitio con el nombre de “las Barrancas de Santo ma guerra con la vecina provincia de Santa Marta, Tomás de Villanueva”4. como en la actual turbación, ha concurrido eficaz- En 1681 Santo Tomás de Villanueva ya figura mente a las miras del Gobierno”2. en un oficio colonial como parroquia, adminis- Si al sitio de Barranquilla lo certificaron por su trándola “Don Juan Gabriel de Carvajal”5. Es la lealtad y esfuerzos en favor de la independencia más antigua de Tierradentro. El linaje de los De de Cartagena, premiándola por su visible patrio- la Hoz, propietario de las 24 caballerías de tierra, tismo y “amor a la causa de nuestra independen- hasta 18666, fue, sin duda, el agente indispen- cia de la dominación española”, el sitio de Santo sable de la formación del sitio tomasino, y por Tomás, convertido en distrito del Departamento derecho patronal proponente de la parroquia. de Barlovento, se entiende, también fue premia- El fundamento pudo partir de una vieja usanza do. Pero, ¿por qué gesto patriótico visible? Es un del derecho eclesiástico español trasmitido a sus interrogante a resolver. ¿Cuáles eran el territorio colonias, con mayor razón, en la que correspon- y pueblos de su comprensión?, segunda inquie- diendo al gesto del terrateniente que construía tud. Se intuye que Santo Tomás debía tener una y amoblaba una iglesia, se le confería el estatus parroquial al sitio de su morada7. Ganaderos y * Historiador. Universidad del Atlántico. usufructuarios de la barranca o puerto que le

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 41 pp. 41-49. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 dio el nombre primigenio al lugar administraron de la independencia. Fueron, además, capitanes también la tierra de capellanía, dos caballerías, aguerra Pablo José Molina, 1768 y 1776, Jaime dedicadas al patrono santo Tomás de Villanueva; Visbal, nombrado en 1789, e Ildefonso Coronel, fueron párrocos don Pedro de la Hoz y Fernan- 179414. Las capitanías aguerra se establecieron do de la Hoz en 1768 y 1772, respectivamente; y en aquellos lugares que se consideraban no solo todavía más allá del medio siglo XIX disponía de estratégicos para la seguridad, sino que política ella el presbítero José Gregorio de la Hoz8. y administrativamente tuvieran real importancia. La importancia de esta parroquia en la provin- Un capitán aguerra era un justicia mayor.15 Exis- cia de Cartagena fue tan reconocida que en 1745 tieron en Tierradentro otras dos capitanías ague- su administrador lo fue “el Bachiller Don Joseph rra: la de Barranquilla-Soledad y la de Campo de Valentín Rodríguez, Cura Vicario, Juez Eclesiástico la Cruz, al sur16. En la Noticia Historial de Peredo, y de Diezmos y Comisario del Santo Oficio de la 1772, se lee: Inquisición en Todo este Partido de Tierradentro”9; “Santo Tomás: Feligresía de libres en las orillas y por lo acontecido en las festividades eclesiásti- de una ciénaga que forma el río de la Magdalena cas organizadas para la inauguración del segun- con sus crecientes que no habiéndolas carece del do templo, el 22 de septiembre de 1750, a las que inmediato comercio del río, cuyo puerto dista me- asistieron los rectores de las parroquias y feligre- dia legua. Tiene 209 familias con 772 almas de sías de la juridicidad eclesiástica de Santo Tomás; confesión y 22 esclavos”17. con el acompañamiento del delegado obispal, el Según el censo de 1777, tiene 741 habitantes sacristán mayor de Cartagena don Santiago Ca- y 136 casas18. Población joven, mulata esencial- margo. Hubo un fuerte enfrentamiento entre la mente, que, de cero a cuarenta años, correspon- jerarquía católica, presidida por Joseph Valentín, día al 88%, 655 personas. No se hizo hincapié so- directivo aún de la parroquia en esta fecha, y el bre la división social del trabajo. capitán aguerra Jacinto Polo del Águila y Canen- Al tiempo de la iniciación de las nuevas rela- cia, por la no asistencia de este a la entronización ciones con la Iglesia católica, emergió la reforma del Santísimo Sacramento, y quien concurrió, en militar para la defensa de las colonias hispanas; cambio, a las fiestas populares que incluyeron necesarias fueron la protección externa y, sobre comedias, entre otras actividades; y por haber todo, la interna luego del levantamiento de los co- soltado a un reo enviado a Santo Tomás, por el muneros en el Socorro en 1781; el contrabando, obispo de Cartagena, para que se le juzgara por otra de las grandes preocupaciones del gobier- cuestiones de matrimonio, desconociendo la jus- no español, se convirtió en el enemigo mayor del ticia eclesial y quebrantando el entendimiento en- fisco del Estado, había que contrarrestarlo. “El 10 tre las jerarquías clerical y civil . Jacinto Polo del factor crucial que modeló la historia de la reforma Águila fue destituido del cargo. Con la llegada de militar en la Nueva Granada fue el controversial la dinastía de los Borbones al poder metropolitano uso del ejército —aparte de sus responsabilidades español, las antiguas relaciones de la Iglesia ca- aceptadas en la defensa externa— como instru- tólica con la dinastía de los Austrias comenzaron mento para el sostenimiento de la autoridad real a cambiar; la nueva dinastía afrancesada, con su en áreas de política interna. El régimen ilustrado reforma colonial, fue afirmando su poder civil en de Carlos III, al tiempo que reducía su dependen- los territorios coloniales americanos. “Bajo el régi- cia de la Iglesia y expulsaba a la compañía de Je- men ilustrado de Carlos III, la posición tradicional sús de América, se aferraba a los militares para de la Iglesia como socio igualitario del Estado fue apuntalar su programa de reformas de la Nueva 11 reemplazada por la clara subordinación” . Granada”19. Toda parroquia debía tener un alcalde pedá- La creación de las milicias urbanas, 1787, neo, es decir, un juez de primera instancia, pero hizo parte importante de la reforma militar. En la tomasina funcionaba, además, como capitanía la provincia de Cartagena la cuarta compañía de aguerra con jurisdicción sobre las parroquias y Tierradentro se organizó en la población de San- feligresías de Sabanagrande, Palmar de Vare- to Tomás, con sus agregaciones de Juncalejo y la, Juncalejo, Ponedera, Polonuevo, Baranoa, Palmar de Varela; la integraron 164 individuos, 12 Candelaria, Sabanalarga y Santa Catalina . En 108 casados y 56 solteros. La mayoría mulatos 1682 la preside como capitán aguerra el capitán y agricultores. Hicieron parte don Miguel Lara, 13 de infantería don Juan Gabriel de Fontalba . El don Santos Castillo y don Juan Antonio Básquez; territorio tomasino con esta calidad administra- 13 milicianos eran blancos20. En Barranquilla se tiva, con el interregno de 1776, hasta el tiempo

42 mal a la Renta su salida (su cam- bio) a administración que encarga- dos de en todo el Partido (de Tie- rradentro) de 40 aquellos sitios a el que tiene de la de Tabacos sería acreditado por la experiencia: y yo desde luego no tengo en embarazo en asegurar aumento en los ramos de ambos partidos”23. Sabanagrande se constituyó en el centro de acopio de las ren- tas reales para toda Tierradentro, en la provincia de Cartagena; y el recaudo de las rentas del ta- baco se efectuaba por concesión, Iglesia de Santo Tomás. mientras que el administrador conformaron dieciséis compañías de infantería y de aduana real, señor Ignacio Cavero, y el ad- dos de caballería.21 ministrador de las rentas reales del aguardien- “El objetivo fundamental de la política de la mi- te, señor Ignacio Narváez de la Torre, deseaban licia disciplinada era desarrollar, mediante la com- que las rentas reales del tabaco pasaran al régi- binación de liderazgo efectivo, entrenamiento regu- men de administración provincial, que se creara lar y sentido de orgullo corporativo, un cuerpo de un ministerio principal real con las funciones de ciudadanos militarmente capaces que en tiempo un capitán aguerra, que recaudara otra rentas de crisis pudiera compartir el peso de la defensa. reales, y tuviera el nuevo funcionario su asiento La estructura de mando consistía en un equilibrio en Soledad y no Sabanagrande; con la finalidad de mando delicado entre el personal regular y el de controlar mejor el contrabando, que se había voluntario”.22 institucionalizado en el virreinato permitiendo la La formación de la milicia urbana fue un arma consolidación de los férreos lazos secretos que de doble filo porque, como se sostuvo en la justi- lleva consigo el delito compartido por la alta buro- ficación de dicha institución, “la combinación de cracia, según la opinión franca de don Francisco 24 liderazgo efectivo, entrenamiento regular y sentido Jurado . de orgullo corporativo”, adquiridos con el correr Sabanagrande y Santo Tomás constituyeron, del tiempo, estuvieron al servicio del orden de- hacia el final del siglo XVIII y comienzo del siglo seado por el gobierno virreinal; pero también al XIX, un circuito de poder: centro de acopio de las alcance y desarrollo de una conciencia, para sí, rentas reales el primero, del que dependía el se- del colectivo social de los criollos granadinos. gundo, y el segundo, capitanía aguerra del que Hacia el final del siglo XVIII, en los preludios dependía el primero. Situación favorable para el revolucionarios, Santo Tomás y Sabanagrande papel del círculo poblacional y económico en la cobraron un ascenso en las inquietudes del go- independencia de la provincia de Cartagena y de bierno de Cartagena. Veamos lo que sostuvo don la República de Colombia. Francisco Jurado, administrador de las Reales El sitio tomasino tuvo el privilegio de estar si- Rentas del Tabaco: tuado en un cruce de caminos que lo comunica- “Sabanagrande con su agregado Santo Tomás ron con Cartagena y Santa Marta, y otros sitios que dista una legua tienen un vecindario quasi destacados en las riberas del río Magdalena de equivalente a Soledad, y sin dejar de confesar que ambas administraciones coloniales desde anta- 25 este es un lugar de más giro (comercio) y de perso- ño; con Barranquilla y Soledad, siendo de prin- nas más acomodadas y surgidas en estos últimos cipalísimo interés el camino que desde la barran- tiempos, no dejan de tener los de Sabanagrande ca tomasina, en el río Magdalena, conectaba con su trato y en especies del país, y especialmente en el surgidero de Santa Verónica, en el mar Caribe; algodones que es el principal, tal vez para su aco- y el sendero de Matusalén, reconocida vía del con- pio de cosechas con mejor proporción que Soledad: trabando. En 1768 se le siguió un juicio a Pablo tienen sus prensas; hacen sus embarcos y en fin Molina, capitán aguerra de Santo Tomás, un pro- 26 tienen su giro: y su alcavala subsiste en arrenda- ceso judicial “por el delito de comercio prohibido” . miento tal vez algo equitativo, y quizás no estaría Pagó prisión en la Cárcel Real de Cartagena.

43 Los hechos expuestos en estas cuartillas son la crisis económica que este gobierno padecía32. una aproximación sintética del contenido histó- Los de la Federación, Sitionuevo, Tenerife y los rico colonial de la capitanía aguerra de Santo To- pueblos de las sabanas de Bolívar cayeron ante más, base, sin lugar a dudas, del segundo distrito las fuerzas armadas del gobierno de Santa Mar- integrante del departamento de Barlovento. ta. Al final de 1812, ante el estado asfixiante del De modo que al estallar los movimientos de gobierno cartagenero, el joven gobernante Torices independencia en Cartagena y Santa Marta, las organizó expediciones para recuperar las sabanas rivalidades entre estas capitales tenían que refle- de Bolívar y la de mayor importancia, la dirigida a jarse, necesariamente, en las poblaciones de fron- la toma de Santa Marta, muy apremiante, dirigi- teras del territorio ribereño sobre el río Grande de da por Pedro Labatut. “La ‘Gaceta de Cartagena’, la Magdalena. No. 31 del 12 de noviembre, de 1812, anota que En tres momentos decisivos figura Santo To- de los 200 granadinos que marcharon bajo las ór- más en el proceso de emancipación del colonia- denes de P. Labatut desde Santo Tomás, 180 eran 33 je español. En 1812, luego de que en Cartagena barranquilleros”. Los 20 restantes debieron per- los “piñeristas”, apoyados en la acción efectiva tenecer a la parroquia tomasina, en la que, desde revolucionaria de los artesanos de Getsemaní, 27 1787, 164 de sus pobladores adquirieron forma- lograron la proclamación de independencia de la ción de milicianos urbanos; entre estos pudieron metrópoli ibérica, no sin las contradicciones de estar milicianos de Palmar de Varela y de Junca- los “toledistas”. En contrapartida, la junta de go- lejo, agregaciones de Santo Tomás con igual expe- bierno separatista samaria constituida el 10 de riencia 25 años antes. agosto de 1810 —débil por su estructura antico- Camilo Riaño en Historia Militar I, relata: “así lonialista, sin la presencia de un partido como el inflamados aquellos 200 granadinos (180 de los de los aristócratas toledistas cartageneros, que se cuales eran barranquilleros, como se anota expre- plegaron al final, y carente de una dirigencia há- samente en la Gaceta No. 31 del 12 de noviembre bil y sin el apoyo popular, porque en el contexto de 1812, se embarcan y siguen río arriba hasta social samario era exiguo o no existía como en boca del caño de Palmar de Varela. El día 7 lle- Cartagena—, fue derrotada por la acción contra- gan frente a Remolino. El Comandante, Labatut, rrevolucionaria de los comerciantes catalanes en se lee en la Gaceta, hizo la intimación de rendirse diciembre del mismo año.28 Acción realista refor- en Sitio Nuevo y recibida la contestación tomó las zada por los emigrantes provenientes de la ciudad medidas correspondientes tanto con las tropas de de Heredia fieles a la monarquía. A la sazón, “las tierra como con las de agua, cañoneros números 5 poblaciones de las orillas del Magdalena tenían en y 6 y otros menores dispuestos34. su seno más fermentos revolucionarios que las que, Luego de aventurar su proclama de victoria como Santa Marta, se hallaban retiradas del paso en Santo Tomás, Labatut abatió a los realistas más comúnmente recorrido por las nuevas ideas; y situados en Sitionuevo el 10 de noviembre de estando estas poblaciones sujetas a una metrópo- 1812 y de inmediato venció a los acantonados li realista, sus sentimiento las llevaba necesaria- en Guáimaro. Resultando 6 prisioneros realistas mente a buscar una orientación hacia Cartagena o y 9 muertos; patriotas 19, enterrados los prime- Mompox, focos de la idea revolucionaria”29. ros en la iglesia de Ponedera y llevados los se- Orientación política que estuvo dirigida por gundos a Barranquilla para ser curados. Se deco- don Agustín Gutiérrez Moreno, nieto del insigne misaron objetos religiosos: dos aras, un sagrario, fiscal Moreno y Escandón, don Manuel Romay y santos óleos y campanas que fueron enviados a don Joaquín Navarro, “quienes en los pueblos de Barranquilla. Remolino, Piñón y Guáima- ro, soliviantaban los áni- mos en procura de la causa patriota”30. Líderes que lograron crear la “Federación de Pueblos del Magdalena”,31 que, no obstante el apoyo de Barranquilla, no logra- ron la ayuda definitiva del gobierno de Cartagena, por Palacio Municipal de Santo Tomás.

44 Labatut termina el informe sustentando: “por alternativa más dura. Si obedecía las órdenes del lo expuesto acabara, Vuestra Excelencia, de co- Jefe, no me hallaba en ninguna ocasión de com- nocer que las tropas de Tierradentro son capaces batir: si seguía mi natural impulso, me lisonjeaba de acabar con los insurgentes (realistas) de Santa de tomar la fortaleza de Tenerife, una de las más Marta para clavar en la plaza el pabellón que de- inexpugnables que hay en la América Meridional. fienden”35. Siendo vanas mis súplicas para obtener de aquel, Esta rápida acción iniciada desde el puerto to- me fiase la dirección de esta empresa, elegí arros- masino, el más cerca de Sitionuevo desde la ori- trar todos los peligros y resultados, y emprendí el lla occidental que cualquiera otro, desar- asalto al fuerte”37. mó estratégicamente el plan ofensivo Fueron circunstancias y tiempo de del gobierno realista samario sobre la fuertes emociones republicanas que provincia de Cartagena; se recuperó incrementaron esperanzas de in- un territorio pro republicano, de- dependencia, para la provincia de jando aislado al fuerte de Tenerife Cartagena y el virreinato de la de Santa Marta, sede del realismo, Nueva Granada, por añadidura, facilitando su toma un poco des- con el triunfo de Labatut sobre pués por el coronel Simón Bolívar, Santa Marta y el de Bolívar en Te- que había llegado en noviembre de nerife y Mompox; es comprensible, Curazao. entonces, la exaltación política que El cerco que los contrarrevolu- produjo en el gobierno del Estado cionarios habían impuesto sobre el de Cartagena el éxito militar rápido territorio del Estado de Cartagena, de logrado desde Santo Tomás, debiéndo- fines de 1811 a 1812, fue tan grave que se estimar mayormente por la carga sen- el recién llegado caraqueño en carta dirigida sible explícita en el informe de Pedro Labatut. a sir Richard Wellesley el 14 de enero de 1814 Por lo expuesto acabará Vuestra Excelencia de desde Caracas, le escribe manifestándole sobre conocer que las tropas de Tierradentro son capa- la salida suya de Caracas escapando de la tiranía ces de acabar con los insurgentes de Santa Marta atroz del español Francisco Monteverde: “Pasé a para clavar en la plaza el pabellón que defienden. Curazao, y de allí volé a Cartagena cuyo pueblo Un párrafo esperanzador de alcanzar pronto el generoso hacía esfuerzos por la independencia y triunfo proyectado sobre el realismo afirmado en por repeler las agresiones de los españoles. Era la provincia del Magdalena, que brindaba seguri- momento crítico para aquella ciudad; pues las dad espacial y firmeza política revolucionaria, a bandas enemigas, después de haber paseado por territorios y pueblos circunscritos a Cartagena, toda la provincia, se hallaban inmediatas a ella”36. provocando a sus órganos de gobierno a dictar el La caída del fuerte de Tenerife fue no solo sig- decreto de certificación de lealtad y premio para nificativa para Cartagena, sino, desde luego, para Barranquilla y Santo Tomás, desde luego, que es el coronel Simón Bolívar, quien, habiendo sufrido objeto de explicación resumida en estas páginas. los efectos de la derrota de la gesta emancipa- Santo Tomás está reseñado, además, en el pe- dora inicial de Venezuela, tuvo urgente afán de riodo histórico de la Reconquista española. En el una estrategia armada para poner en marcha Diario de Bolívar No. 1.254 de 1875, prensa ofi- su propuesta, del Manifiesto de Cartagena, a los cial del Estado federal, se encuentra un episodio neogranadinos desde aquel 15 de diciembre del a propósito de un héroe popular, de esos que no complicado 1812. Tan interesante para él que ex- tienen cabida en el conocimiento expuesto en los puso ante la “Asamblea celebrada en Caracas el manuales de historia; el maestro de escuela José día 2 de enero de 1814”, cuando ya se le recono- M. Ariano relató: “Hai un hecho que se me ha par- cía como Libertador de su patria: “ya en aquella ticipado después, por personas caracterizadas, i época —noviembre de 1812— era yo en Cartagena que en mi concepto debiera figurar en la historia coronel, inspector y consejero, y no obstante pedí especial de este distrito, como un rasgo de patrio- servicio en calidad de simple voluntario bajo las tismo nunca desmentido de sus hijos. Cuando en órdenes del coronel Labatut que marchaba contra 1815, el General Francisco Tomás Morales sitiaba Santa Marta. Yo desprecié los grados y distincio- a Malambo i pasaba después a Sabanagrande, nes. Aspiraba a un destino más honroso: derra- los tomasinos enviaron como de espía avanzado mar mi sangre por la libertad de mi patria. Fue en- a Laureano Bolaño para que les avisara todos los tonces que indignas rivalidades me redujeron a la movimientos de los enemigos de la Patria. Bolaño

45 aceptó sin vacilar la misión delicada que se le con- Palmar, Pueblo Nuevo (por Polonuevo) Sabanalar- fiaba, i no bien hubo emprendido su marcha, cuan- ga, Eusiacurí (por Usiacurí), Baranoa, Galapa, Ma- do en la loma de caño salado, a inmediaciones del lambo, Soledad y Barranquilla”41. distrito, fue sorprendido por las tropas españolas En septiembre otro oficio confirma y amplía la que venían; Bolaño fue detenido e interrogado se- “lista de los pueblos de la Provincia de Cartagena gún usansa militar i al grito de ¡Viva la Patria! su que han prestado juramento de fidelidad al Rey cuerpo rodó ensangrentado en tierra. Morales hizo Nuestro Señor Don Fernando VII. [...] Truana (Tur- cortar la cabeza i colocarla en una pica elevada bana), Galapa, Usiacurí, Soledad, Pueblo Nuevo, en la mitad del camino para terror de los demás, i Turbaco, San Estanislao, Baranoa, Manatí, San para su propio baldón. Enseguida marcha a Santo Benito, Malambo, Sabanagrande, Villanueva, Sa- Tomás con intención de incendiarlo pero a su llega- banalarga, Aguada de Paula, Santo Tomás, Can- da observó que en él se veneraba la misma imagen delaria, San Cayetano, Real de la Cruz (Campo de que en su patria Valencia, i el recuerdo de esto lo la Cruz), Barranca del Rey, Barranca Vieja, San detiene en su bárbaro propósito”38. Juan Nepomuceno, San Jacinto, Arjona, Mahates, Laureano Bolaño no es una ficción, está cen- Santa Catalina, Santa Rosa, Tetón, Barranquilla. sado en 1777 en Santo Tomás, tiene en este año [...] Torrecilla, 14 de septiembre de 1815”.42 25 de nacido, casado con Bernardina Silba, con Barranquilla cayó no sin resistencia el 25 de quien tuvo tres hijos llamados María, de cinco abril de 182543. No era posible una defensa exito- años, Ponciano, de tres, y Josef, de ocho meses. sa ante un ejército numeroso, bien equipado en Inscrito en el Cuarto Batallón de Milicias en 1787, armamentos, con recursos económicos suficien- como labrador, casado y pardo. tes, dirigido por oficiales de carrera profesional, La represión tiránica española contra los to- frente a soldados reclutas, oficiales sin la adecua- masinos, indeclinables en su espíritu de libertad, da instrucción castrense de esta tierra; porque quedó registrada en los papeles oficiales en junio las fuerzas armadas se erosionaron con la toma y de 1816. En uno de tales se señala a Santos de la pérdida de Santa Marta al comienzo de 1813, e in- Hoz como prisionero. Del linaje tomasino, activis- ternamente imperaban desacuerdos y posiciones ta social en la historia de su pueblo y de la región traicioneras, examinadas en “Deslealtades repu- Atlántica más allá del medio siglo XIX: “Relación blicanas en la incipientes villas de Barranquilla y de prisioneros que siguen en la Goleta Candelaria Soledad”, de mi autoría44. De manera que si las a cargo del capitán D. José Milans al puerto de tropas de Francisco Montalvo sometieron a la vi- Cartagena: D. Santos de la Hoz, D. Rito González, lla de Barranquilla, de mayor organización mili- D. Gilberto Sarmiento, D. Basilio Montes, D. Gi- tar, a las demás poblaciones de Tierradentro, de nés Padilla, D. Nicolás García, D. Andrés Laguna, menor desarrollo, les era imposible resistir con D. Antonio Muñoz. D. Ignacio Valenzuela, D. Ma- mejor destino. El Libertador Simón Bolívar en nuel Gordo, D. Estanislao Mendoza, D. Manuel 1815, en la Carta de Jamaica admitió: Plaza, D. Pedro Rojas, D. Pedro Soto. D. Pablo “Cuando los sucesos no están asegurados, Serrano [...] Portobelo, junio 18 de 1816. Carta- cuando el estado (revolucionario) es débil y cuan- gena 25 de junio de 1816. Firmado José María do las empresas son remotas, todos los hombres Ramírez”.39 vacilan, las opiniones se dividen, las pasiones las La lista de estos prisioneros constituía un nú- agitan y los enemigos las animan para triunfar por cleo distinguido, les antecedían con calificativo este fácil medio”45. de don; por lo menos uno de ellos era natural de Con relación a Soledad, Sabanagrande, Santo Mompox, D. Pedro Soto, tío bisabuelo del funda- Tomás y Palmar de Varela, conviene considerar dor de la Universidad del Atlántico, el filósofo Ju- quiénes se atrevieron a reconocer y jurar fidelidad lio Enrique Blanco de la Rosa40. al rey Fernando VII. Domingo Malabet nos puede El pueblo de los tradicionales flagelantes de dar la clave: “Este fue uno de los motivos, [los con- semana santa aparece inscrito en los siguientes flictos continuos entre criollos barranquilleros y papeles oficiales de la Reconquista española: españoles] por los cuales los gobernantes españo- La noticia oficial que aparece en el Boletín No. les no hicieron nada nunca a favor de esta ciudad 2 del ejército expedicionario, reconquistador, pu- [de Barranquilla]. Muy pocos de ellos establecie- blicado en el cuartel general de “Palenquilla” el ron aquí su domicilio; prefirieron establecerse en día 27 de agosto de 1815, notifica: “Los pueblos Soledad, Sabanagrande y Santo Tomás”46. que han reconocido al Rey y prestaron juramen- Con el advenimiento de la República de Co- to de fidelidad, son Sabanagrande, Santo Tomás, lombia, luego de los triunfos patriotas rotundos

46 sobre el ejército español en el Pantano de Vargas En este 1820 el Gobierno colombiano padecía y en el Puente de Boyacá el 25 de julio y el 7 de una penuria fiscal; el tesoro estaba exhausto, el agosto de 1819, respectivamente, Santo Tomás fin del proceso anticolonialista estaba muy lejos renace en los anales de la independencia de Co- en el tiempo y la administración debía pagar una lombia. Desde el 19 de agosto de 1820 recibió al nómina mayor; el nuevo Estado tenía una eco- ejército que comandó el tenien- nomía de guerra altamente exi- te coronel José María Córdova, gente en el gasto. después de sus conquistas en El Libertador Bolívar le es- la provincia de Antioquia, las cribe desde Ocaña al general sabanas de Bolívar, Bajo Mag- Santander en agosto de 1820, dalena, Mompox y Tenerife al cuando se dirige a Barranquilla, lado del general Maza; el rione- con demasiado apremio, para grino permaneció allí 16 días. la organización de las tomas El futuro héroe de Ayacucho de Santa Marta y Cartagena celebró emocionado el ingreso que aún las controlaban los de 160 reclutas tomasinos que tiranos españoles: “Usted está engrosaron las filas del brazo desesperado por falta de dine- armado que comandaba: “A ro, con excesiva razón, yo aña- pocos días después de bajar a do a este dolor la necesidad en la asamblea de Santo Tomás, que me pone esta carencia, de y [esa] si fue asamblea porque comprometer a Colombia en una allí encontré 160 reclutas del batalla, o de poner en agonía a país”47. Cundinamarca”51. El teniente coronel antio- Hermógenes Maza En otra le puntualiza: “Ani- queño había llegado al puer- me usted el comercio para que to militar alternativo tomasino, para participar haga expediciones al bajo Magdalena a comprar en la organización de la toma de Santa Marta y efectos extranjeros, que no faltarán: habrán mu- Cartagena, que comandaba el coronel Montilla, chas presas y comerciantes de Jamaica, Cura- quien en compañía del almirante Luis Brión y el zao y otras partes. El Almirante [se refiere a Luis capitán de navío José Prudencio Padilla rescató Brión] ha contraído inmensa deudas, que es preci- a Barranquilla para Colombia en junio de este so satisfacer al menos en parte para no desalentar mismo año48. Santo Tomás renovó, en esta oca- a los que nos prestan y quieren emprender”52. sión, su destino independentista de 1812, más El Libertador Simón Bolívar había enviado a relevante por encajar en el plan de la República Santa Ana, Venezuela, delegados para la negocia- de Colombia, de urgencia, del estratega Liberta- ción política con don Pablo Morillo, jefe del go- dor Simón Bolívar y con la presencia del teniente bierno español, para proponer la paz y exigir el coronel José María Córdova, uno de los jóvenes reconocimiento de la independencia de Colombia. activistas republicanos más distinguido, quien Una aventura política que solo a él le era entendi- había sido ayudante general del Estado Mayor del ble, por el territorio extenso que la tiranía monár- 49 ejército libertador triunfador en Boyacá. quica aún controlaba. Las instrucciones del Libertador para Maria- Las convicciones del Libertador, al respecto, no Montilla fueron determinantes: “La seguridad son claras cuando en carta al general Santander del Magdalena es el primer objeto de usted; el se- le escribe: “Que aunque es tan tierna la niña [Co- gundo, asegurar la ciudad de Santa Marta, y el lombia] ya está tratando de paz con los embaja- tercero, Bloquear a Cartagena. A estas tres miras dores extranjeros, y sabe tanto de política la niña debe usted subordinar sus operaciones y arreglar- como Maquiavelo; estoy esperando por momentos las por el mismo orden, siempre en la misma pro- y con mucha ansia el gran parto de nuestra madre porción y en la misma proporción de interés. [...] la revolución”53. Siguiendo este orden, atenderá de preferencia el Metafórico y pragmático, el Libertador le infor- aumento y conservación de las tropas sobre toda ma al gran aliado neogranadino Santander, el 8 otra cosa; segundo, a la organización administrati- de agosto, próximo a cumplirse el primer año de va de la hacienda, y tercero, a la organización civil la victoriosa gesta que encumbró a ambos en el 50 y política del país” . Puente de Boyacá, pensando en el itinerario que seguiría rumbo a Barranquilla con el fin de lograr

47 fuentes de apoyo económico, pertrechos de guerra obtenidos en Antioquia; la entrega de cien fusiles y organización de los ejércitos emplazados: “Mien- al Batallón Bajo Magdalena que organizó en Sa- tras que se reúnen las tropas [en Soledad y Santo banagrande, puesto al mando del teniente coro- Tomás] voy a dar una carrera como la de Aquiles, nel Cardiles. Desesperado por las enfermedades y a ver si con un vuelo me llevo a Cartagena, Santa que los agobia le informa “Al Señor Comandante Marta y Maracaibo en el mes de septiembre, escrí- en Jefe”: “Hoy he mandado al hospital G.C. [Ge- bame al Magdalena”54. neral Central] de Barranquilla cincuenta enfermos El teniente coronel Córdova, antes de su acan- del cuerpo de mi mando, porque más vale que se tonamiento en el territorio tomasino, estuvo el 4 destruya mi cuerpo contra las murallas de Carta- de agosto en Soledad recibiendo órdenes del ge- gena o Santa Marta con la esperanza de vencer, neral Mariano Montilla; de aquí partió a las sa- que no estando en inacción sin alguna esperanza banas de Bolívar obteniendo victorias contra los sea destruido en este sepulcro. Allá van cincuenta enemigos españoles y acumulando carne de ga- enfermos diez que antes allá había, son sesenta, nado vacuno para las tropas presentes en los dos cincuenta y seis que hay en Corozal y treinta y puertos militares escogidos para las acciones con- tres en Mompós hace todo el número de ciento cin- tra Santa Marta y Cartagena. Era muy necesario cuenta”56. proteger el puerto de este sitio, porque, como en El día 24 de agosto de 1820 —último de la 1812, era utilizado por los comandantes déspotas visita de menos de 48 horas del Libertador a hispánicos en las comunicaciones con sus filiales Barranquilla, había llegado el 23—, Córdova no contrarrevolucionarios; valga el siguiente ejemplo escribió ningún oficio; es entendible, ocupado de Botero Saldarriaga de ocurrencia en el mes de como debió estar en los arreglos de su batallón de junio de 1820: “El comandante realista Ignacio 350 soldados en espera de la breve visita del Pa- Romero, jefe de la columna en operaciones sobre dre de la Patria de paso a Turbaco a donde pensa- Montilla, comunica: recibí a las 11 del 28 por el Ca- ba llegar el día 26 a solicitarle a Gabriel Torres la pitán del Cuerpo don Rafael Cisneros su muy aten- entrega de la plaza de Cartagena. El caraqueño ya to oficio del 25 en que me avisaba debían unirse lo había saludado en la Arenosa poco después de 200 hombres que estaban en Sitio Nuevo, y para su llegada. Roberto Botero destaca el hecho: “En cuyo embalse tenía ya a fuerza de diligencia y di- efecto tuvo Córdova el inmenso placer de volver a nero las barquetas necesarias por Santo Tomás y ver al Libertador en Barranquilla, el 23 de ese mes, Ponedera, estando tan satisfecho como agradecido y de ser admirablemente tratado por aquel grande de las sabias disposiciones de V.E., que me comu- hombre que le profesó hondo cariño y admiración nicaba en su citado oficio, quando que des- constante”.57 de luego me prometía con solo este auxilio la Y por segunda vez en Santo Tomás, completa destrucción del enemigo”.55 según este mismo autor: “El Libertador El antioqueño escribió siete correspon- pasó revista a las tropas antioqueñas dencias en Santo Tomás; despachó dos el que mandaba Córdova en Santo To- 23, dos el 25, dos el 26 y una el 28 de agos- más”58. to, por consiguiente; seis cortas, pero pre- Estando este aguerrido joven en Tur- cisas de contenido organizativo, y la tercera baco, donde había llegado el 8 de sep- de mayor extensión dirigida “Al Señor Ayu- tiembre para dirigir el sitio a la plaza de dante General Encargado del Estado Mayor Cartagena, le pone en conocimiento a General Teniente General Gabriel Pérez”, es José Manuel Restrepo, ministro de Go- la firmada el 25, el día siguiente de la parti- bierno: “El Presidente estuvo por aquí, da del Libertador de Barranquilla. Trata en recorrió estos cuarteles y se ha ido para esta de recomendaciones de renovación de Cúcuta a comenzar ya obrar en firme”59 . cargos a algunos efectivos militares desco- El cuatro de setiembre, Córdova se llantes del batallón a su cargo y ascensos disponía a marchar de Santo Tomás a a otros; mejorando con el “cargo de Capitán de Soledad para obrar sobre Santa Marta, pero en un cuerpo de infantería al Teniente Manuel del Turbaco, el primero del mismo mes, el coman- Corral”, hijo del prócer momposino Juan del Co- dante coronel Ayala, venezolano, fue arrasado por rral y a su propio hermano subteniente Salvador los españoles emplazados en Cartagena60. Esta Córdoba a teniente. eventualidad hizo cambiar los planes al coman- En las otras, dirigidas al comandante Monti- dante Montilla, disponiendo inmediatamente el lla, le anuncia el envío a Soledad de $3.500, oro, traslado del joven antioqueño al desgraciado lu-

48 gar bolivarense. El general Santander recibió del 17 Citado por Becerra Jiménez, Jorge, en Historia de la Diócesis de Barranquilla. Banco de la República. Bogotá, 1993, p. 206. aún teniente coronel la noticia del viaje inespera- 18 A.G. de la N. T. 25 Fs. 712-713. do: “Pero estando todo listo para marchar contra 19 Kuethe, Allan, ob. cit., p. 48. 20 A.G. de la N. Milicias y Marina. T. 15. F. 100. los enemigos de Santa Marta, el día de marcha 21 Kuethe, Allan, ob. cit., p. 51. de Santo Tomás a Soledad, recibí contraorden de 22 Kuethe, Allan, ob. cit., p. 234. venir a marchas forzadas a este cuartel general 23 A.G. de la N. Empleados Públicos. T. IX. Fs. 385-386. 24 Ibíd., p. 392. de Turbaco. El 4 me puse en marcha y el 8 llegué 25 Sabanagrande y Santo Tomas, lo mismo que Soledad, por el aquí”.61 comercio señalado se comunicaban con Cartagena “tanto el camino de arriba que llaman de San Benito como el de abajo que es de Santa En el batallón que acompañó a Córdova a Tur- Catalina. Ibíd. P.F. 400. baco, no todos eran antioqueños, con él debieron 26 A.G. de la N. Empleados Públicos de Bolívar. T. XXVII. Fs. 73-74. En el tomo XXVI, folios 242 a 244 se compila las actuaciones de Pablo viajar tomasinos, de los que según su contabili- José Molina como capitán aguerra de Santo Tomás. dad el 19 de agosto de 1820 se le integraron en 27 Conde Calderón, Jorge. “Poder Local y Sentimiento Realista en la Independencia de Santa Marta”. En Historia Caribe No. 4. Barran- número de 160, con la perspectiva de mejorar las quilla, 1999, p. 81. filas de su ejército; sobre todo si se considera, 28 Ibíd., p. 80-81-82. 29 Núñez Molina, José María. Historia de la Villa de San Sebastián como él oficiara al comandante Mariano Montilla, de Tenerife. Fondo Rotatorio de la Contraloría Departamental. Cali, los enfermos del cuerpo a su mando, interioranos, 1920, p. 76. sumaron sesenta. Es probable que algunos de los 30 Ibíd., p. 77. 31 Gutiérrez Ponce, Ignacio. Vida de don Ignacio Gutiérrez Vergara. tomasinos enrolados en las huestes de Labatut se Londres. Imprenta de Bradbury Agnew & Co., 1900, p. 92-93. sumaran a los 160 de la asamblea que asombró 32 Lemaitre, Eduardo, ob. cit., p. 131. 33 Tisnés J., Roberto M. CMF. La Independencia en la Costa Atlánti- a Córdova. Héroes anónimos que se sacrificaron ca. Biblioteca de Historia Nacional. Publicaciones Academia Colombia- por la Patria Joven e hicieron acto de presencia el na de la Historia. Ed. Kelly. Bogotá, 1976, p. 120. 10 de octubre de 1821 al recibir Mariano Monti- 34 Riaño, Camilo. “Historia Militar I”. En Historia Extensa de Colom- bia. Editorial Lerner. Bogotá, 1976, p. 210-211. lla, de parte del comandante realista Gabriel To- 35 Ibíd., p. 209-210. rres, la entrega de la Ciudad Heroica. 36 Bolívar, Simón. Obras Completas. Colección Lecuna. T.I.E. Tiem- po Presente. Bogotá, 1978, p. 85. La inscripción de Santo Tomás en el decreto de 37 Lobo Romero, José. Bolívar, Libertador por la Nueva Granada. erección del sitio de Barranquilla en villa, como Uniatlántico. Barranquilla, 1991, p. 14. 38 El texto ha sido copiado con la ortografía original. uno de los distritos del efímero departamento de 39 Arrázola, Roberto. Documentos para la Historia de Cartagena. Barlovento, tuvo sus fundamentos objetivos, con- Tipografía Hernández. Cartagena, 1965, p. 99. 40 Lobo Romero, José. “Genealogía de Julio Enrique Blanco y Rafael diciones históricas de valía que se proyectaron, Núñez”. Revista Intermedio. Diario del Caribe, Barranquilla, domingo ocho años después, al servicio de la independen- 26 de junio de 1988. cia de Colombia. 41 Corrales. Manuel Ezequiel. Documentos para la Historia de la Pro- vincia de Cartagena. T.I. Imprenta de Medardo Rivas. Bogotá, 1883, p. 100. notas 42 Ibíd., p. 136. 1 Vergara, José Ramón y Baena, Fernando. Barranquilla, su pasado 43 Solano de las Aguas, Sergio. “Barranquilla durante la Recon- y su presente. Banco Dugand. Barranquilla, 1922, p. 110. quista, a través de los documentos de la Notaria Primera de esta ciu- 2 Ibíd., p. 110. dad”. Revista Intermedio del Diario del Caribe, 10 de abril 1988. Blan- 3 Archivo Histórico del Departamento del Atlántico. Fondo Notaría co Barros, José Agustín. Obras Completas. T. I, Ediciones Uninorte Primera. Protocolos Notariales de 1890. T. IV. Escritura No. 492, p. 9. - Gobernación del Atlántico. “Toma de Barranquilla 1815”; “Biografía 4 Ibíd., p. 2. del barranquillero teniente coronel de artillería Blas de Barros”, p. 315- 5 Archivo General de la Nación. Testamentarias de Bolívar. T. 20. 324-329-350. F. 323r. 44 Lobo Romero, José. “Deslealtades Republicanas en las Incipi- 6 Las 24 caballerías de tierra, unas 10.000 hectáreas, fueron com- entes Villas de Barranquilla y Soledad”. Revista Historia Caribe. Bar- pradas, en 1866, por los vecinos de Santo Tomás y Palmar de Varela ranquilla, 1996, p. 60-66. por un valor de $ 5.600 de ley, para el uso comunitario, figurando 45 Bolívar, Simón, ob. cit. T. I., p. 174. en la escritura con el nombre de “Tierras de la Fraternidad”. Archivo 46 Vergara y Baena, ob. cit., p. 108. Histórico del Departamento del Atlántico. Protocolos notariales de San- 47 Moreno de Ángel, Pilar. Correspondencia y Documentos del Gen- to Tomás. Tomo Único de 1866. eral José María Córdova. Ed. Kelly. Bogotá 1974, p. 270. 7 Beneyto Pérez, Juan. Instituciones de derecho histórico español. 48 Vergara, J. Ramón y Baena, Fernando, ob. cit., p. 124. Ronda de la Universidad, Barcelona. T. III, 1931, p. 169. 49 Botero Saldarriaga, Roberto. Córdova. Bedout. Medellín, 1970, 8 A.H. del A. Fondo de Notaría 1ª. Protocolos de 1859, T. I., p. 1ª. p. 145. 9 A.G. de la N. Tierras de Bolívar. T. 10. F. 327r-327v. 50 Bolívar, Simón, ob. cit., p. 477-478. 10 A.G. de la N. Empleados públicos de Bolívar. T. 21. F. 992v y r. 51 Ibíd., p. 490. Se llamaba Cundinamarca a todo el territorio ne- 11 Kuethe, Allan. Reforma Militar y Sociedad en la Nueva Granada, ogranadino. 1773-1808. Banco de la República, Bogotá, p. 287. 52 Ibíd., p. 474. 12 Blanco Barros, José Agustín. “El censo del Departamento del At- 53 Ibíd., p. 482. lántico (Partido de Tierradentro) en el año de 1777”. En Boletín de la 54 Ibíd., p. 488. Sociedad Geográfica de Colombia, p. 322. 55 Botero Saldarriaga, ob. cit., p. 217. 13 A.G. de la N. Testamentarias de Bolívar. T.20. F. 243 y 249r 56 Moreno de Ángel, Pilar, ob. cit., p. 260-270. 14 A.G. de la N. Empleados Públicos de Bolívar. T. XXVI. Fs. 242- 57 Botero Saldarriaga, ob. cit., p. 221. 244. T. XXVII. Fs. 76-80. T. XXIX. F. 344. 58 Ibíd., p. 222. 15 Mercado, Homero. Campo de la Cruz: un Acercamiento a su Real- 59 Moreno de Ángel, Pilar, ob. cit. idad Socio-Política. Ed. Antillas. Barranquilla, p. 79. 60 Botero Saldarriaga, ob. cit., p. 225. 16 Ibíd. 61 Moreno de Ángel Pilar, ob. cit., p. 266.

49 Problemas de más alta prioridad por solucionar en Colombia y Barranquilla*

Karl C. Parrish Jr.

nota introdUCtoria

La figura de Karl C. Pa- bien Parrish es resaltado en rrish Jr. permanece en la los anales como un urbanis- historiografía local ligada ta de gran importancia, es al crecimiento urbanístico clave mencionar que incur- de Barranquilla. Su padre, sionó en todo tipo de acti- Karl C. Parrish, creó un pre- vidades mercantiles que le cedente en Colombia con permitieron a su familia la la edificación del barrio el categoría de grandes empre- Prado que aún perdura en sarios. la memoria arquitectónica En la década de 1970 Co- regional. A este último se le lombia permaneció bajo un otorga la creación de un lazo estado de tensión que presa- financiero que facilitó prés- giaba un futuro turbio para tamos de la banca nortea- la economía nacional. La ge- mericana a esta ciudad. Así neración de empleos, el es- mismo la modernización de tablecimiento de negocios, la los servicios públicos loca- lucha contra la desigualdad les. En 1933 fallece Parrish social, etc., permanecían padre, por lo que su hijo Karl como una barrera para las C. Parrish Jr. se trasladó al reformas políticas naciona- año siguiente a una próspe- les. Bajo ese espacio el espí- ra Barranquilla. ritu emprendedor de Parrish La obra urbanística de Jr. buscó aportar ideas inno- Parrish Jr., junto al ejercicio vadoras que permitieran a la de su profesión como inge- política colombiana buscar niero civil en las vías de Colombia, le permitió rela- un rumbo diferente en el manejo del país. Así mis- cionarse con todo tipo de personajes notables en el mo, destacó algunos apuntes sobre Barranquilla, escenario nacional. En esta ocasión destacamos, ciudad en la que la familia Parrish había obtenido mediante una memoria documental, su figura. Si la categoría anterior. Antonino Vidal1 Guissepe D’Amato2

* Comunicado de Karl C Parrish Jr. a Carlos Sanz de 1 Universidad del Norte. Editor de Memorias: Revista Santamaría, exministro de Hacienda, 12 de marzo de 1976, Digital de Historia y Arqueología desde el Caribe. p. 3-17. Documentos que reposan en el repositorio documen- [email protected]. tal Karl C. Parrish. Archivos de la Biblioteca Karl C. Parrish. 2 Historiador de la Universidad del Atlántico. Fondo: Varios documentos. [email protected].

50 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 50-57. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 Vista panorámica de El Prado tomada desde la azotea del Colegio de Lourdes hacia el mar. I. a D.: M.J. de la Rosa, E.A. de la Rosa, Karl C. Parrish y Robert H. Parrish.

Ahora les voy a presentar mis ideas personales en el Limbo, preguntando cómo son las canchas sobre los diez problemas más urgentes y de más de golf en el Infierno, y Colombia haya duplicado alta prioridad que tienen que solucionar Uds. en su población de nuevo y alcance los 50.000.000 bien de Colombia en los próximos años. Cada de habitantes? punto podría dar lugar a un debate prolongadí- Yo creo sinceramente que no hay programas simo, por lo cual me voy a limitar a comentarios de gobierno, ni plan económico, ni ayuda externa muy brevemente. Me voy a dedicar más que todo que solucione los problemas planteados por otra a problemas económicos y prácticos, con una do- duplicación de población en una sola generación. sis de valores humanos. Si no podemos hoy con los 24.000.000 de colom- bianos, ¿como nos irá mañana con 50.000.000? 1. la explosión deMoGráfiCa Aunque no se ha oído el primer planteamiento Creo yo que no hay Gobierno democrático, ni eco- oficial claro y contundente sobre la necesidad y nomía libre, que resista la embestida de una ex- urgencia de la Planeación Familiar, espero que no plosión demográfica como la que experimenta Co- tarde. Los esfuerzos discretos hechos hasta ahora lombia. El país duró 400 años para alcanzar una por grupos particulares e institutos oficiales han población de 12.000.000. En apenas los últimos tenido resultados exitosos, pero insignificantes 25 años duplicamos la población a 24.000.000 y ante las gigantescas necesidades del país. nos sorprendemos porque el país está cojeando. Pero, ¿qué nos va a pasar cuando antes del año Uds. tienen que resolver si quieren declarar 2000, o sea en otros escasos 25 años, cuando una pausa de espera y estabilizar nuestro creci- Uds. estarán en los 45 años de edad, y yo estaré miento demográfico para lograr en el año 2000

51 que Colombia se convierta en una Suiza, o ¿quie- Al resolverse el problema demográfico, todos ren dejar que crezca la población alegremente los demás problemas que afronta el país se redu- para convertirnos en otra Bangladesh? Tenemos cen a proporciones manejables y solucionables. que tomar conciencia de que un país en este fin de siglo no vale por el número de sus habitan- 2. la asoCiaCión de Capitales CoMo Medio tes, sino por la calidad individual de cada uno de para foMentar eMpleo y prodUCCión ellos. Colombia no se va a destacar en el conjunto Mientras no se inicie el ataque de frente a la ex- de las naciones por el número de peladitos ba- plosión demográfica, el país tiene una labor gi- rrigones y analfabetos corriendo por los tugurios gantesca para darles trabajo a los 500.000 jóve- de Barranquilla, o por los pueblos del Atlántico, nes que aparecen cada año buscando su primer sino por el alto porcentaje de obreros, campesino empleo, y para producir la comida, la ropa, la y técnicos calificados y de profesionales prepara- vivienda y demás elementos que requieren para dos hasta el nivel de doctorado y magíster y PhD. el más modesto consumo y el más mínimo “stan- ¿Por qué no nos atrevemos a analizar el pro- dard” de vida. blema del desempleo o sub-empleo, no como una En un sistema de economía libre, o para usar falla del Gobierno o del sistema económico actual, un término bastante castigado, el “capitalista”, la sino como el resultado obvio de una sobrepobla- solución para conseguir empleo y producción es ción relámpago que ha cogido al país despreveni- la de crear empresas mediante la asociación de do y dormido? capitales del sector privado. Pero desafortunadamente aquí encontramos una de la serie de trabas artificiales que nos he- mos inventado por frenar el desarrollo. El siste- ma de empresa libre depende de la facilidad y del

Facsímil de un manuscrito de K.C.P.

52 atractivo de la asociación de capitales para fundar y acrecentar sociedades, a fin de lo- grar la producción que requiere un país mo- derno para competir en los mercados mun- diales. Pero aquí nos hemos empeñado en des- estimar la creación de empresas, más que todo la sociedad anónima, que es el instru- mento mundialmente conocido como el más perfecto para reunir grandes y pequeños ca- pitales en una sociedad abierta. Cuando una persona logra crear una pe- queña empresa y necesita más capital para desarrollarla, para lo cual busca un socio, encuentra que ya no paga un solo impuesto Almuerzo ofrecido por Parrish & Cía. a sus trabajadores, en el Restaurante como único dueño de la empresa, sino que Chop Suey, el día de las Bodas de Plata. tiene que pagar un impuesto en cabeza de la sociedad y otro impuesto sobre las utili- dades que recibe como socio. Así el concepto más sencillo de la unión de dos personas y dos pequeños capitales es castigado por el fisco. Si más tarde los dos socios requieren más capital y más socios, crean una socie- dad limitada, y pagan todavía más impues- tos (el 20%) en cabeza de la sociedad y sobre la participación de los socios en las utilida- des. Al volverse más sofisticada y grande la empresa cuando requiere todavía más capi- tal y más socios, se convierte en anónima y se le duplican los impuestos en cabeza de la Los empleados y trabajadores de Parrish & Cía. rinden un tributo en el sociedad del 20% al 40%, o sea, entre más mismo sitio del monumento a Karl C. Parrish, el día 12 de marzo de 1945. La produce y más beneficios le trae al país, más bandera de flores tenía dos caras, una con el pabellón de Colombia y una con el estandarte de los Estados Unidos. la gravan, llegando hasta el doblete. En 1974 se les quitó el último aliciente para la creación de sociedades al imponer el impuesto de ganancias ocasionales sobre la valoración de las acciones. Y nos preguntamos, ¿por qué están las acciones tan bajas en la Bolsa y por qué no se encuentran nuevos papeles cotizados? La respuesta es asustadora: porque no se es- tán creando nuevas empresas en la propor- ción que requiere el desarrollo del país. Colombia necesita una drástica revisión de las reglas del juego para la asociación de capitales. La inversión se ha desviado hacia los papeles de intereses altos que no conlle- van ningún riesgo o aquellos negocios que una persona o una familia puede manejar “El vicepresidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Sr. Henry sin pagar impuestos. Hay que darle diná- A. Wallace, conversando con el gobernador, D. Rafael Blanco de la mica de nuevo a la sociedad anónima para Rosa, el día de la colocación de la primera piedra al monumento a democratizar y popularizar la inversión en George Washington en el parque de este nombre. En el fondo se dis- tinguen el embajador norteamericano, Sr. Arthur Bliss Lane, y el Dr. sociedades abiertas. Darío Echandía, canciller de la república”.

53 El trato fiscal a la persona natural, quien a la vez sería el accionista de una sociedad, también requiere otra revi- sión drástica. Las tarifas ascendentes del impuesto a las rentas fijadas ori- ginalmente en 1960, y aumentadas en otros años siguientes, con la desvalori- zación institucionalizada del peso, han traído aumentos del 300% al 500% en los impuestos pagados en 1974 sobre la misma renta real de 1960. Entre muchas cosas habrá que “upaquizar” las tarifas del impuesto, las deprecia- ciones, las valorizaciones, etc. Colombia debe estudiar a fondo el caso brasilero, donde han “upaqui- Boulevard de la carrera 54 (antiguo Boulevard del Prado) con la calle 70. zado” toda la economía, y donde han incentivado la inversión en nuevas empresas, para ver qué es lo que po- dríamos aprender de este fenomenal experimento. Puede ser que no sim- paticemos con el sistema de gobierno de Brasilia, pero hay que preguntar- se ¿cómo han hecho para producir 850.000 vehículos al año, con un 95% de integración nacional? Se podría su- gerir una investigación objetiva por parte de la Andi y de Fedesarollo del caso brasilero para extraerle todo lo positivo.

3. Crisis enerGétiCa Colombia se encuentra hoy en la situa- ción poco envidiable de un país que, después de ser exportador importante de combustibles durante 50 años, se Parque Santander entre las carreras 54 y 58, con el Boulevard Central al fondo. convierte de la noche a la mañana en

El círculo de la intersección del Boulevard Central y la calle 3a en 1920. De I. a D., se encuentran don Manuel J. de la Rosa, don E. A. de la Rosa, don Julio Freund y Ricardo Gaitán.

54 Vista del Parque Santander, entre las Carreras 54 y 58, con la escultura del General Francisco de Paula Santander, del escultor francés Charles Raoul Verlet, fundida por Alexis Rudier en Francia. un país importador masivo de combustible. Es- tamos ante la perspectiva aterradora de que todo lo que hemos ganado con la lucha titánica de la diversificación de las exportaciones lo vamos a te- ner que gastar importando petróleo en los próxi- mos años. Nos encandilamos con la prematura naciona- lización de la industria petrolera, sin valorar las realidades de las reservas decadentes ni la parali- zación de la labor exploratoria. En Colombia la geología nos ha condenado hasta ahora a tener que perforar 20 pozos secos para encontrar un pozo productor. El país nece- sita por lo menos cinco pozos productores al año para autoabastecerse de petróleo, o sea que de- bemos perforar por lo menos 100 pozos nuevos al año. ¿Uds. saben cuántos equipos había per- forando hace un año en todo el país?: uno. ¿Por qué no se comenta este fenómeno en la prensa, la Monumento a la bandera. radio, la TV? ¿Cómo es posible que después de más de 30 años de estar estudiando las minas de carbón del Cerrejón en la Guajira, después de unos 10 años de estar negociando su explotación con firmas mundialmente reconocidas como idóneas, y des- pués de tres años de aparecer la crisis energética mundial, todavía no se ha sacado la primera pa- lada de carbón del Cerrejón? Igual cosa ha pasado con las minas de níquel de Cerromatoso en Córdoba. Fueron descubiertas por carambola a raíz de unas exploraciones pe- troleras hace veinte años, y todavía nada. Nos hemos conformado pensando cómodamen- te que Colombia tiene las reservas más grandes de carbón del continente, pero no hemos hecho has- ta ahora nada más que congelarlas. Estamos con- La Clínica Colombia en Bellavista, propiedad del Dr. Carlos Acosta García.

55 vencidos de que al crear otro instituto descentralizado como Carbocol para el carbón, o Ecominas para los minerales, hemos resuelto el problema, cuando la realidad es que no hemos conseguido más que burocratizar el problema, sin solucionarlo. No hemos querido admitir que un país, donde nos estamos dando el lujo de dejar correr esa bomba de tiempo que es la explosión demográfica, no puede esperar indefinidamente las so- luciones óptimas de sus problemas. El Monumento a los Mártires de la Aviación y el Boulevard Central, 1945. Tiene que aceptar alternativas inme- diatas que puedan resultar muy por debajo de lo ideal, pero que produzcan resultados ¡ya! La burocracia nació sin ningún con- cepto del valor del tiempo, ni de lo que representa un lucro cesante como el de un Cerrejón sin explotar. No oye el cla- mor de los 500.000 nuevos aspirantes anuales al trabajo en la puerta de las fábricas, las haciendas y las oficinas. […]

9. valores CUltUrales No todo en esta vida es el saldo de nues- tra cuenta bancaria, ni la compra de una casa nueva, o de un carro nuevo, o de una televisora. No debemos pensar únicamente en la posible mejoría de un sueldo o el ensanche de un nego- Pavimentando la primera cuadra de la Avenida E con carros de mula, 1920. cio. Esto es normal y necesario dentro En el fondo se ve la quinta de don Pedro Pérez. de una economía libre. Pero una vida completa debe redondearse con un avance per- manente en el nivel de humanidades que forman parte de los primeros años universitarios, aun de los profesionales, y no son sino una muestra de lo que debería ser una cultura personal a todo lo largo de la vida. A Barranquilla le hace falta muchos de los ele- mentos necesarios para que pueda ser una ciu- dad más culta y más amable. ¿Qué se han hecho la orquesta sinfónica y el grupo de ópera que fun- cionaba hace años? ¿Y los grupos teatrales? ¿Qué se va a hacer con el Teatro Municipal, si es que algún día logramos terminarlo? A Barranquilla le hace falta una biblioteca (pública) de primera con sucursales en todos los barrios. No existe pueblito de 5.000 habitantes en los EE.UU. que no tenga su buena biblioteca, Algunas de las residencias nuevas del Barrio Modelo de Santanita, muchas fundadas con donaciones del sector pri- urbanizado por Parrish & Cía., S.A. vado.

56 Barranquilla ha tenido desde hace años una magnifica Escuela de Bellas Artes que nos ha brindado una serie de artistas de fama nacional e internacio- nal. Pero la ciudad no se ha interesado en crear un Museo de Arte Contemporáneo a la altura de estos talentos locales. Les recomiendo que hagan una visita al Mu- seo de Arte Moderno La Tertulia en Cali, en su lindo edificio, que le presta servicio diario a Cali y ha servido para una serie de exhibiciones de arte que le han dado Vista de la hoy carrera 53 o avenida Colombia. a Cali fama de ser centro internacional de Cultura. La Tertulia fue creado por el sector privado como una contribución a la comunidad.

10. ConCienCia soCial Si nuestra democracia y nuestro sistema de economía libre van a sobrevivir entre las presiones extraordinarias de la explo- sión demográfica, las clases más acomo- dadas van a tener que hacer un esfuerzo también extraordinario para ayudar a las clases menos favorecidas a mejorar su “standard” de vida. Hablando con varios de los amigos que formaron parte del grupo de colom- bianos que visitaran a Cuba, me cuentan que todos regresaron a casa convencidos de que Colombia tiene que dedicarse a Casa de la familia Eckardt, hoy demolida, sobre la actual carrera 54. sacar de la pobreza absoluta a ese 20% de la población que vive en condiciones subhumanas. En Cuba han sacrificado las libertades, la economía del país, y el 80% de la población que os- tentaba el más alto nivel de vida de Latinoamérica (an- tes de 1959), para levantar ese 20% de abajo. Han he- cho mucho en la educación, donde toda la población ya puede leer Marx, y en la salud pública. Pregunta uno, ¿cualquier dictadura en 17 años no hace lo mismo? Colombia tiene que aplicarse a la misma meta, sin sacrificar su democracia, ni su economía libre. El Sr. Presidente de la Republica nos ha señalado un camino con su programa “Cerrar la brecha”. A cada uno de nosotros nos toca pensar qué con- tribución individual, qué sacrificio personal, podremos hacer en los años venideros para lograr este fin. Para que no nos pase lo que dijo el candidato repu- blicano Ronald Reagan de sus opositores en los EE.UU.: “Los demócratas me dicen que quieren voltear al país: no han podido curar la pobreza, pero sí han acabado con la riqueza”.

57 Himno de Barranquilla

Letra: Amira de la Rosa (Concurso de 1942) Música: Simón Urbina (Concurso de 1928)

Coro Barranquilla, procera e inmortal, El Aeropuerto. ceñida de agua y madurada al sol, savia joven del árbol nacional; del jubiloso porvenir crisol ilusión del Caribe blanco-azul, de Colombia tendida en el umbral, da su voz y su músculo al progreso, ¡Barranquilla, procera e inmortal! Coronada de firme amanecer te conduce a su espalda el porvenir: las sirenas de fábrica y taller Estatua de Bolívar; al fondo Edificio Palma. son rumor arterial de su existir. Barranquilla sabe cantar y sobre el yunque martillar. Tajamares de Bocas de Ceniza cuchillada del río sobre el mar al Caribe central colombianiza tu robusta aptitud de navegar.

La llanura dormida junto al mar, Fábrica de Tejidos Obregón con esquilas y silbos de pastor, ve en su entraña de virgen despertar una lengua, una sangre y una flor. Barrancas de San Nicolás con el Magdalena detrás. Sin caballos de guerra y sin hazaña, sin el indio tambor interrumpir, bajo el Cuarto Felipe, Rey de España, Escuela de Artes y Oficios. Pedro Vásquez ordena tu vivir. Prometida del mar casto y viril, profesora de esfuerzo y dignidad, hacen Patria tu gesto y tu perfil y tu alegre y fragante mocedad. Frente de América del Sur, pensamiento de buen augur. Luchando por Colombia libre y grande diste gajos de sangre y de valor. Acueducto Municipal.

58 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 58-59. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 Intendencia Fluvial del Puerto de Barranquilla.

Espolones de Bocas de Ceniza.

Tu bandera de luz sube y expande el sentir del triunfal Libertador. En el ímpetu verde y tropical de tus patios de mango y de jazmín es pasión el susurro nocturnal del follaje, del tiple y del flautín.

Barranquilla, trenza de ardor, Plaza de San Nicolás, desde el Paseo Bolívar. danza la vida, alrededor. Tus mujeres perfilan la alborada de la rosa, el donaire y el honor, por su gracia madura y recatada apresura sus pulsos el amor. Tierra madre, lujosa de matriz, que a tus hombres enseñas tu tesón, la honradez de la yuca y del maíz Cervecerías Barranquilla y Bolívar S.A.; hoy, Cervecería Aguila. y a llevar en la mano el corazón. Barranquilla clara y leal, con su ancha orilla de cristal. Generosa renuevas cada día cauce vivo de azul sinceridad: frente al mar tiene puesta tu hidalguía casa abierta y amistad.

Piscina del Hotel del Prado.

Capilla del Colegio Biffi. Edificio de la Exposición de Productos Nacionales; hoy, Escuela de Bellas Artes.

59 dossiEr i

Del Ballet Folclórico del Atlántico al Ballet Nacional de Colombia “Sonia Osorio”

Inca M. de Rumold, PhD*

A mis excompañeras del folclore, Alex Garnica y Doris Escobar, les agradezco su valiosa contribución de fotos y recuerdos a esta narrativa, y a mi amiga lingüista Liliana Dufour sus exce- lentes sugerencias y correcciones.

La ocasión de la publicación de En la década de los efervescen- un libro para honrar a Sonia tes 50, “la Sultana del Caribe” se Osorio, y los cincuenta años de había convertido, efectivamen- su fundación del Ballet Nacio- te, en la “Puerta de Oro” de Co- nal de Colombia, es también lombia, cuando figuras claves una ocasión personal para re- como Álvaro Cepeda Samudio, cordar mi participación como Alejandro Obregón y Sonia Oso- bailarina del ballet de Sonia rio de Obregón cambiaron para desde sus meros comienzos. siempre las artes colombianas, El máximo honor de la Re- sacándolas del estancamiento pública de Colombia, la Cruz académico. Un fuerte viento de Boyacá, acaba de serle modernista empezó a soplar otorgada en mayo del 2010 a cuando estos artistas regresa- Sonia Osorio, la célebre coreó- ron del exterior: los Obregón de grafa y directora de nuestro Francia, y Cepeda Samudio de Ballet Nacional, que ella fundó Nueva York. Mientras este úl- hace cincuenta años. De ahora timo revolucionó la literatura en adelante y para realzar los con su novela La casa grande honores a su fundadora, el ba- —publicada en 1962, el mis- llet llevará su nombre. No cabe duda de que se lo mo año en que el Grupo Folclórico del Atlántico merece, pues fue Sonia, la Terpsícore colombia- de Sonia Osorio ganó por segunda vez el máximo na, la responsable por los innumerables triunfos premio, el “Fuera de Concurso”, del IV Festival a nivel mundial que a través de los años cose- Folclórico de Ibagué—, Alejandro Obregón cambió charan los bailarines de nuestro ballet, cuando para siempre la pintura, y Sonia Osorio hizo otro hacían retumbar las tablas al compás de los ritmos tanto para la danza. Alumna de Martha Brunner, calientes de nuestra música, nuestro folclore. del ballet clásico de Viena, y la mundialmente fa- mosa coreógrafa de ballet moderno Martha Gra- los oríGenes ham, Sonia abrió su primera Academia de Ballet Los orígenes del ballet, sin embargo, no se dieron Moderno en Barranquilla, en 1957. en Bogotá, sino que se remontan a Barranquilla. los Carnavales de barranqUilla de 1957 Con estos carnavales comenzó a desplegarse la * Inge [Inca] Mulhan de Rumold es profesora de Español, Alemán y Literatura comparada en DePaul University, Chicago. carrera artística de Sonia: desde la creación de

60 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 60-88. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 El Conjunto Folclórico del Atlántico descansando en el Jardín de Bellas Artes. (I. a D., fondo): José Rafael Hernández y Héctor Aycardi con Giovanni (3), Fernando Fonnegra cargando a Doris Escobar, Héctor Stefanell, Carmela Arévalo, Nicolás Serje (debajo), Pedro Nel Montoya, Víctor Navarro, Álvaro Vendries; (I. a D., adelante): David Pinzón, Paco Sudea, Rodrigo Osorio (11), Inge Mulhan, Ester Damiani, Edgardo Borrás (detrás de Ester), Alexandra Garnica (delante de Ester), Dunnia Balcázar, Ilva Montoya, Myriam Ojeda, Beatriz Cotes. los bailes para la coronación de la reina del car- romántico bolero Contigo en la distancia, un ba- naval, su propia Academia de Ballet Moderno y llet moderno, superexpresivo, y, naturalmente, pasando luego por el triunfal Ballet Folclórico del del Cancán, el triunfal Grand finale, con el que Atlántico, hasta llegar a su anhelada meta con culminó nuestra presentación y durante el cual la la creación, en la capital, del Ballet Nacional de gente nos acompañó aplaudiendo al compás de la Colombia. música de Offenbach, mientras nosotras, quince ¡Me acuerdo como si hubiera sido ayer!, ¡qué y diecisiete-abrileñas, echábamos las piernas al aplausos!, ¡qué emoción! Íbamos a compartir la aire, moviendo las lujosas faldas de lado y lado. tarima con la reina del carnaval y a bailar para su La encendedora música, los espléndidos vestua- coronación. El Estadio Municipal de Barranquilla rios, la arrobadora coreografía, el efecto total fue Romelio Martínez estaba repleto. Y fue tal el triun- absolutamente espectacular. Ese primer éxito de fo de nuestras danzas —danzas que Sonia Osorio Sonia en 1957 la consagró de coreógrafa y en los de Obregón había coreografiado— que la gente no próximos 30 años seguiría como directora de ese cesaba de aplaudir. Me acuerdo sobre todo del gran evento que da comienzos a los ya legenda- rios carnavales de Barranquilla. Los bailarines Las bailarinas A la mañana siguiente después de ese rotundo - Héctor Aycardi Alexandra Garnica primer triunfo coreográfico de Sonia, me dirigí di rectamente a su casa porque, como nos habíamos Francisco Sudea Myriam Ojeda hecho buenas amigas durante los ensayos, yo le José Rafael Hernández Ester Damiani quería proponer algo que me tenía muy emocio- Nicolás Serje Ilva Consuegra nada y que no me había dejado dormir: que ella abriera su propia Academia de Ballet Moderno, Álvaro Vendries Leonor Acero porque las chicas que habíamos bailado para ella Héctor Stefanell Doris Escobar éramos todas de diferentes escuelas de ballet de la Darío Stefanell Dunnia Balcázar ciudad. Me movían dos razones muy convincen- Pedro Nel Montoya Inge Mulhan tes: que me encantaba su estilo de ballet moderno y que las clases de la anterior Escuela de Danza Víctor Navarro Elsa Mulhan Clásica coincidían con mis clases universitarias Edgardo Borrás Carmela Arévalo que yo había iniciado ese año. A pesar de que ya Fernando Fonnegra Lourdes Rojas era casi mediodía, la encontré aún en cama, di- David Pinzón Beatriz Cotes chosa, recordando los frenéticos aplausos de la noche anterior. Me dijo que justamente había es-

61 Ensayo general del Conjunto en el Teatro de Bellas Artes.

62 tado pensando en exactamente lo mismo que yo, y que no tendría ningún problema con ajustar las clases a mi horario universitario. Y así fue. En aquella época, Sonia estaba casada con el pintor Alejandro Obregón, que ya estaba en vías de ganar fama internacional. Los dos recién ha- bían regresado de una estadía de cinco años en París, donde Alejandro estudió pintura mientras Sonia dio a luz a sus dos hijos, Rodrigo y Silva- na. Pero además había ingresado en un grupo de danza de la argentina Cecilia Ingenieros, alumna a su vez de la coreógrafa de danza moderna Mar- tha Graham, como también en el ballet de ópera del célebre coreógrafo Serge Lifar. Desde su regre- so a Barranquilla, Sonia estaba impaciente por activar su vocación de coreógrafa. De ahí que la idea de crear su propia escue- la de ballet la llenara de entusiasmo. Y, efecti- vamente, a los pocos días la Academia de Ballet Moderno de Sonia Osorio abrió sus puertas, pues muchas chicas que habían bailado en la corona- ción volvieron con Sonia. Al principio, el comedor de su casa nos servía de salón de ballet, pero al poco rato se hizo necesario buscar un lugar más Marcha Fúnebre de Chopin: Inge Mulhan y Sonia Osorio.

63 amplio y nos mudamos al gimnasio del Colegio del Prado —que funcio- naba en la antigua sede del Colegio Alemán en la carrera 60, entre calle 68 y 70— cuyas clases diarias ya habían terminado cuando llegába- mos nosotras. Estos primeros años fueron inolvidables para mí. Fuera de las clases universitarias, para mí solo existía el ballet. Cuando se acercaba el final del año y los ensa- yos para la función final se hacían más y más frecuentes, muchas ve- ces Sonia me invitaba a pasar el fin de semana en su casita de la playa de Pradomar. Allí ensayábamos los bailes que íbamos a bailar juntas, ella y yo, como p. ej., el “Picasso” de la Expo- sición de cuadros de Musorgski, y la Marcha fúnebre de Chopin, con telones pintados por Alejandro. Para mí fueron años vividos de una intensidad extraordinaria, donde competían dos mundos opuestos: el ambiente intelectual universita- rio con el bohemio de los dos genios artísticos de Sonia y Alejo.

transiCión del ballet Moderno al folClóriCo En 1960 ocurrió el cambio del ba- llet moderno al ballet folclórico. Ese año, Julieta Davis, la representan- te del Atlántico para el Festival Fol- clórico de Ibagué, nombró a Sonia como coreógrafa de su comitiva. ¡Cómo serían de exitosos los bailes que ella ideó, que ganaron el pre- mio “Fuera de Concurso”, que sig- nifica mejor que el primer puesto! De modo que Julieta Davis resultó coronada Reina Nacional del Fol- clore para ese año. Ya de regreso a Barranquilla, obviamente Sonia quiso seguir con el grupo, pero se encontró con un problema insólito. Ellos no querían. Eran jóvenes del Country Club, la crema de la socie- dad barranquillera, quienes apa- rentemente no estaban interesados en entregarse de lleno a la danza, y menos a bailes folclóricos, que en esa época aún no estaban de moda.

64 Fueron justamente personas como Sonia Osorio, Diario del Caribe, sábado 28 de julio de 1962, en Barranquilla, y Delia Zapata Olivella, en Car- dedicada exclusivamente a “Sonia Osorio y su tagena, que a principios de los 60 impulsaron el Grupo Folclórico”, en letras muy grandes, donde interés, el amor, y, por ende, el respeto por nues- aparecen los nombres de todos los integrantes del tras danzas nacionales. ballet y varias fotos de nosotras. De ese antiguo Sin embargo, Sonia no se amilanó por ese fias- “tesoro” saco la siguiente información textual: co y buscó sus bailarines en otro lado, pues enseguida publicó el si- guiente clasificado en el Diario del Caribe: “Sonia Osorio invita a todas las personas con talento para la danza y sin discriminación alguna, a que se presenten para una prueba en la siguiente dirección: K 54 No. 53- 77”. No fue por casualidad que guar- dé en mi álbum de fotos de aque- lla remota época —ahora todo un “tesoro”— una página entera del

La mojana: Inge Mulhan y Paco Sudea.

65 El merecumbé. Hotel Caribe, Festival Internacional de Cine de Cartagena.

El bolero Contigo en la distancia El can-can

66 El merecumbé, en los estudios del Instituto Nacional de Radio y Televisión, Inravisión.

frenéticos ritmos en tiempo récord y ahí ya Sonia me aceptó sin reservas”. Aunque personalmente no formé parte del grupo de Julieta Davis, porque para ese año me había ganado una beca para estudiar en Mucha gente se rio de los términos de este clasifi- EE.UU., a mi regreso sí me integré enseguida al cado pero muchas más acudieron a las pruebas y nuevo conjunto. Lo curioso es que fui la única así se formó el entonces Grupo Folclórico del Atlán- alumna suya que hizo la transición del Ballet Mo- tico. “Yo fui de las que acudí a ese llamado”, dice derno al Conjunto Folclórico. Éramos todos jóve- Leonor Acero, rubia y delgada, quien al poco rato nes, chicos y chicas de la clase media que estu- ya tenía una sólida reputación de merecumbera. diábamos o trabajábamos y que nos unía nuestro “Por cierto que al entrar a la casa de Sonia la oí amor por la danza. Los ensayos eran de noche, gritar: ‘Odio los novios, no quiero ni verlos’. Me de- desde las 7 hasta la medianoche y muchas veces tuve asustada, pero mi deseo de bailar fue más hasta la una de la mañana. Primero en la sala fuerte y reuniéndome un poco dije con un hilo de de la casa de Sonia, diagonalmente frente al cine voz: Vengo para las pruebas. Desde entonces no Metro; después en muchos otros lugares, como la hago sino ensayar, ensayar y ensayar hasta ex- Casa de la Prensa, el Club Español, el Club He- tenuarme”. breo, Bellas Artes y el Jardín Águila. Este último Y continúa el artículo: lugar fue de lo más divertido para nosotros, pues Ese entusiasmo lo compar- venían a observarnos y a ten todas las juveniles inte- contribuir con sus críticas grantes del Ballet Folclórico. periodistas y amigos de So- Myriam Ojeda, profesora de nia y Alejandro, tales como kindergarten dice: “Me pa- la radioperiodista Miryam rece que no vivo sino cuan- de Flores Sierra, nuestra do estoy en el escenario, el futura animadora; Alejan- resto del tiempo me sien- dro Obregón y su gran ami- to como sonámbula”. Otra go el escritor Álvaro Cepe- anécdota que refleja ese da Samudio; el cultísimo y entusiasmo por los ritmos gran crítico Ricardo More- calientes de la Costa es la no; el escritor e intérprete de Alexandra Garnica que Bob Prieto, con su eterna recién había regresado de boina negra; Mario Fawse- sus estudios en California. tt, que le diseñaba a Sonia Ella cuenta: “A mí Sonia nuestros vestuarios, y, por primero me rechazó porque supuesto, cantidad de mu- decía que yo solo bailaba chachos que iban para ver a el twist y el rock’n roll y no las chicas que les interesa- los ritmos costeños. Pero me ban, entre ellos Toni Lam- puse a ensayar todos los boglia, que luego se casaría días con los chicos, que me De I. a D.: Doris Escobar, Beatriz Cotes, con Alexandra Garnica —¡y Alexandra Garnica, Leonor Acero, ayudaron mucho. Agarré los Ilva Consuegra e Inge Mulhan. aún siguen casados!— Pipe

67 68 Santo Domingo, Ricardo Mazzili, Vespasiano Ojeda y muchos otros. A veces también iba la famosa can- tante barranquillera Estercita Fo- rero, cuya canción “La mojana,” escrita especialmente para Sonia, fue un número muy aplaudido que bailamos al ritmo afro-cuba- no. Desgraciadamente solo lo bai- lamos en una única función en el Cine Metro de Barranquilla, por- que, según me aclara Alexandra, Estercita no quiso —y nunca supi- mos la razón de por qué— que So- nia lo incorporara a su repertorio. Fue una verdadera lástima porque tanto la coreografía como la letra y la música eran como un conjuro del ambiente del pescador costeño: Espíritu del agua, espíritu burlón [...] Tengo que abrirte, mi corazón [...] Envuélvela, con l’atarraya, y agárrala, con l’atarraya, y púyale los ojos con l’atarraya pa’ que me siga ’onde yo vaya, pa’ que nunca más se olvide de mí, pa’ que yo no tenga más que sufrí. Entusiasmadísimos estába- mos tanto por los ritmos afro-co- lombianos que noche tras noche nos movían hombros, caderas y piernas, como por las buenas críti- cas que recibíamos durante aque- llos ensayos. Sin embargo, algo nos mantenía en ascuas y era que nuestra participación en el IV Fes- tival Folclórico de Ibagué no estaba para nada asegurada. Faltaba pla- ta. Y según un artículo en El Heral- do, “la asistencia de la delegación folclórica del Atlántico [...] está su- jeta hoy a la buena voluntad del comercio y la industria barranqui- lleras [...] [ya que] la Alcaldía y la Gobernación miran con cierta indi- ferencia […] [mientras bailarines y directora] aún esperan que al final algo ocurra para solucionar la cri- sis”. En últimas, nunca pude averi- guar quién fue nuestro ángel de la guarda. El asunto es que, cuando finalmente vino julio, la tan anhe- lada fecha en que debíamos par-

69 70 tir para Ibagué, sí pudimos ir. Iba a ser una gira la apodaron “Folclorito”. ¡Indescriptible nuestra por Colombia que se iniciaría en Ibagué e inclui- emoción! Íbamos a presentarnos públicamente, y ría además Cali y Bogotá. El viaje mismo ya fue nada menos que en un festival nacional, donde toda una aventura para todos nosotros, pues la competiríamos con grupos folclóricos de todos los mayoría no habíamos salido de la Costa y no co- departamentos de la nación y donde el año an- nocíamos el Interior del país. Después de haber terior Sonia había cosechado el máximo premio volado a Bogotá nos fuimos por bus a Ibagué, Cali “Fuera de Concurso” con el grupo del Country y de regreso a Bogotá, cantando y de buenísimo Club. ¿Cómo nos recibiría el público del Interior, humor. Me quedó indeleble el recuerdo del so- y, sobre todo, los críticos? Para qué decir más. brecogedor paisaje de la cordillera Central y los La presentación del Conjunto del Atlántico fue abismos. Beatriz Cotes estaba muy enferma con triunfal. Por segunda y consecutiva vez ganamos fiebre y tenía frío, de modo que todo el mundo em- el codiciado “Fuera de Concurso” y, naturalmen- pezó a lanzarle ruanas, mantas, sombreros. Pare- te, Sonia no cabía en sí de la felicidad. Nuestra cía una mujer del campo y fue ahí que los chicos fama se difundió velozmente por todo el país. En

71 72 Cali nos pidieron tres presentaciones, por cierto muy aplaudidas, en el elegante Teatro Munici- pal y el Teatro Cristales. La última etapa de nuestra gira sería Bogo- tá. Ahí nada estaba asegurado ya que durante mucho tiempo Sonia había estado insistiendo infructuosamente para que su padre, el drama- turgo Luis Enrique Osorio, le prestara su teatro. Sin embargo, en el último minuto un deus ex machina en la persona de la directora del teatro Colón nos rescató de la incertidumbre. Ella nos vio bailar en Ibagué y enseguida invitó a Sonia a que presentara su conjunto una noche en el Colón. Repito, la oferta había sido de una única presentación. Pero lo que son las cosas de la vida que no podemos prever. Porque según el crítico Benigno Acosta Polo de La República, en respuesta a “Los aplausos de antenoche en el Colón, prolongados y largos, así como las repe- ticiones que la asistencia pidió, con estimulan- te clamoreo” tuvimos otras dos, además de una presentación por la TV nacional. El miércoles 4 de julio de 1962, aparece en el diario El Tiempo un artículo titulado “Música costeña hoy en el escenario del Colón”: Con ocasión de la presentación del Ballet de Sonia Osorio, hoy en el Teatro Colón, la destaca- da artista nos ha concedido las siguientes decla- raciones: “Lo que he creado es un ensayo de ‘balletifi- car’ y dar colorido y espectacularidad de revista al folclor de la Costa. No pretendo ser una fol- clorista en ningún momento. Tampoco me ciño a los cánones estrechos y severos de lo autóctono en su forma pura. Simplemente parto del folclor para llegar a la meta que quiero alcanzar, que es: hacer un buen espectáculo, se llame ballet, revista o como sea. Mis vestuarios son de gran colorido y de un gran lujo porque en el escenario soy partidaria del esplendor cuando de un con- junto de bailes se trata. “No soy partidaria del folclor en su forma pri- maria, porque considero que es monótono y opa- co en algunos de sus aspectos. La cumbia, por ejemplo, es simplemente una rueda que da vuel- tas interminablemente. Yo la he sacado de esa rueda que conservo en algunos momentos y le he dado coreografía, teatro y espectacularidad con mi desfile de Riquezas de Colombia. “El merecumbé y el porro, por primera vez en Colombia, suben a un escenario con arreglos co- reográficos. He conservado de ellos los pasos bá-

73 74 Archivo de Alexandra Garnica El mapalé. [Telón de Alejandro Obregón].

sicos, pero los he encerrado den- tro de una coreografía movida y moderna. “Como todo ensayo, este en- sayo mío lógicamente debe tener sus fallas. No me gusta tener un público que llega esperando la perfección de un ballet ruso y la coordinación de un profesio- nalismo largo tiempo entrenado. Mis muchachos son escogidos entre los mejores bailarines de Barranquilla, pero son bailari- nes natos, sin escuela de ballet. Bailan espontáneamente con un ritmo que es parte de su natu- raleza. “En nombre de mis alumnos y en el mío propio, queremos en- viar al pueblo de Barranquilla nuestro saludo cordial y expre- sarle nuestro deseo de que se- pan que este triunfo logrado en Ibagué es también de ellos y así se lo ofrecemos”. Archivo de Alexandra Garnica

La mojana.

75 El Congo.

76 el ballet de sonia en la opinión naCional La República Benigno Acosta Polo escribe: “Ardíamos en deseos de conocer este espectáculo de colorido costeño con fondo primordial- mente barranquillero. El hecho de que el grupo coreográfico alentado y dirigido por Sonia Osorio hubiera sido consecu- tivamente declarado “fuera de concurso” en los dos últimos festivales de Ibagué, hacía presumir su máxima calidad ar- tística […] Los aplausos de antenoche en el Colón, prolongados y largos, así como las repeticiones que la asistencia pidió, con estimulante clamoreo, es la mejor recomendación que se puede hacer al ballet de Sonia Osorio. Cuanto nosotros digamos al respecto siempre resultará corto en palabras justipreciadoras, por- que esa fiesta del color, de la música y del ritmo, que las motiva, está por enci- ma de toda ponderación.” Occidente “No podemos hablar de Sonia Osorio sin sentir de cerca el sabor de los cocoteros o el alegre dolor de la arena caliente en las plantas de los pies. Es una historia que tiene de marco musical el murmu- llo de las palmeras, la mansedumbre del arroyo y la furia destructora de un mar violento e inesperado”. La Nueva Prensa Con el titular de “Sonia Atlántico”, dice: “Con la presentación en Bogotá, culmi- naba una larga búsqueda, movida siem- pre por un loco amor a la propia tierra y a sus gentes. Era el momento solemne en que una vida —la vida de un artis- ta— se gana o se pierde. El Ballet del At- lántico iba a ser juzgado desde el punto de vista del arte. No es folclor puro ni ballet puro. Es un buen espectáculo. El porro y el merecumbé solo hasta ahora tienen coreografía. Aquel seduce con su gracia, este arrebata con su trepidante júbilo. La cumbia barranquillera impo- ne la digna y absorta actitud femenina. La danza del Congo, lujosamente vestida por Sonia, mezcla elementos de magia y lujuria. Pero nada como el frenético ma- palé, pavoroso trance erótico mediante

77 Mapalé. Archivo de Alexandra Garnica

Cumbia.

78 Archivo de Alexandra Garnica Coco de agua, pregones de mi tierra

Riquezas de Colombia

el cual los esclavos rompen sus amarras interio- res [...] fue impresionante ver cómo esa liberación del instinto, en el escenario, emancipaba también al público bogotano [énfasis mío] de su tiesura e impavidez característica. “En este escenario donde hemos festejado a elen- cos rusos y chinos, cubanos y mejicanos, nortea- mericanos y franceses ahora se atrevía a compa- recer Colombia, la innominable, la vergonzante, y entre el tablado y el público se establecía aquella misteriosa comunicación que solo se desprende de un arte pujante y veraz. Se lo debemos a una sola persona. A Sonia Atlántico”. El Tiempo “El ballet Folklórico de Sonia Osorio empieza a cobrar prestigio internacional después de haber alcanzado los primeros lugares en el ambiente nacional. Quienes asistieron como delegados al Festival Internacional de Cine de Cartagena, por países extranjeros, aseguraron unánimemente que la calidad del mencionado grupo, exhibida en todos sus números, está a la altura de los mejores y de mayor tradición del continente”. Riquezas de Colombia

79 Archivo de Alexandra Garnica

Las riquezas de Colombia, el banano, Myrian Ojeda y Álvaro Álvaro Vendrie El Mapalé,

El Mapalé, encabezan Doris Escobar y Edgardo Borrás.

80 Archivo de Alexandra Garnica Héctor Stefanell, Doris Escobar, Dario Stefanell, Ilva Consuegra, Alexandra Garnica, Edgardo Borrás, David Pinzón y Esther Simmonds, entre otros, en un ensayo en el Hotel Caribe de Cartagena

Y el jefe de la misión del Senegal que vio al grupo en Cali, lo invitó para que “se haga presente en el Festival Mundial de Arte Negro. El mapalé es un número que hace honor al arte Negro en su máxima calidad”.

de reGreso a barranqUilla La década de mediados de los cincuen- ta a los sesenta (1954-1963) fueron años maravillosos en que Barranquilla llegó a ser la meca colombiana de las artes mo- dernas. Sin embargo, es preciso aclarar aquí que, fuera del nacionalmente cono- cido “Grupo de Barranquilla” —integra- do, entre otros, por los grandes artistas que todos conocemos, como Alejandro Obregón, pintor de fama mundial, los periodistas y escritores José Félix y Al- fonso Fuenmayor, Germán Vargas, Ál- varo Cepeda Samudio y Gabriel García Márquez, y a cuyas discusiones acudían Elsa Mulhan e Inge Mulhan, en la Riña de Gallos.

81 Héctor Aycardi, Elsa Mulhan, Inge Mulhan y Paco Sudea, en la Riña de Gallos. Archivo de Alexandra Garnica

Alexandra Garnica, Inge Mulhan, Beatriz Cotes, David Pinzón, Leonor Acero, Nicolás Serge y Esther Simmonds, en la Cumbia.

82 reconocidos artistas e intelectua- les de Cali, Medellín y Bogotá— es igualmente importante destacar la contribución artística y cultural de las mujeres como Sonia y las bailarinas. Porque bailar en un escenario público mostrando pier- nas desnudas en esa época era muy controversial. Todas tuvimos que pelear con nuestros padres, sobre todo con los papás, para que nos permitieran bailar en el conjunto folclórico. De modo que para las mujeres, las jovencitas de aquel entonces, el Ballet Folclóri- co de Sonia Osorio desempeñó un papel primordial de apertura de la cultura, y este es el momento de insistir en el papel protagónico que desempeñó Sonia Osorio en la modernización de la mentalidad

Archivo de Alexandra Garnica costeña.

Héctor Aycardi, Esther Simmonds, Alexandara Garnica y Paco Sudea, en el Porro se va el Caimán. Archivo de Alexandra Garnica

Héctor Aycardi y Alexandra Garnica en el solo del Mapalé.

83 Archivo de Alexandra Garnica

El merecumbé. Esther Simmonds, Alexandra Garnica y Héctor Aycardi.

Víctor Navarro, Doris Escobar, Dunnia Balcázar y ???

84 Archivo de Alexandra Garnica

Ilva Consuegra, Leonor Acero, Alexandra Garnica, Inge Mulhan

evolUCión del ballet folClóriCo del atlántiCo Cabe preguntarse por qué no continuó este conjunto barranquillero después de haber obtenido tremendos éxitos por doquier que íbamos; después de Ibagué, Cali y Bogotá seguimos cosechando triunfos en el II Fes- tival Internacional de Cine de Cartagena, en la Fiesta del Mar de Santa Marta, y, por su- puesto, en Barranquilla. Por donde quiera que caminábamos por las calles de Barranquilla, la gente nos reconocía y nos felicitaba. Éra- mos las “estrellas” de aquella época. Estrellas que no ganaron ni un centavo, porque éramos amateurs, no profesionales. Habíamos bailado por amor al arte y lo que nos quedó fue eso: el gran entusiasmo por las danzas nativas, transformadas en fabulosos espectáculos por Archivo de Alexandra Garnica el arte coreográfico de Sonia Osorio, sin saber Alexandra Garnica, Inge Mulhan y Myriam Ojeda

85 El Porro de se va el caimán. Héctor Stefanell y Dunnia Balcázar

Edgardo Borrás y Alexandra Garnica. Myriam Ojeda y Alexandra Garnica

86 Myiriam Ojeda, Ilva Consuegra, Beatriz Cotes, Inge Mulhan, Doris Escobar, Alexandra Garnica, Dunnia Balcazar y Leonor Acero.

que lo nuestro sería tan solo el comienzo de algo que muy pronto adquiriría dimensiones insos- pechadas. Aunque a nosotros nos había parecido fabu- loso haber obtenido el reconocimiento nacional e inclusive internacional, todos éramos apegados al terruño caribeño, algunos de los muchachos ya habían formado sus familias o existían otras exigencias familiares, como cuando Sonia reci- bió una invitación para que nos presentáramos en Rusia. Comenta Carmela que su mamá se negó rotundamente cuando Sonia fue a su casa para rogarle que la dejara ir: “No, Sonia, ni si- quiera si me lo pides de rodillas. Mi hija no se va para Rusia”. Esa oposición no fue la única, y además —mucho más decisivo para los desig- nios de Sonia— no éramos profesionales. Sonia soñaba con llevar su ballet folclórico a tierras lejanas; transformar lo regional en algo verdaderamente grande y sublime con un elenco profesional para encandilar no solo a los colom- bianos, sino también al público internacional. Para ello era preciso establecer su Ballet Folcló- rico en el centro de la cultura nacional, Bogotá, y desde ahí llevar sus extraordinarias creacio- nes folclórico-artísticas a las grandes capitales Dunnia Balcázar

87 Archivo de Alexandra Garnica Edgardo Borrás, Alexandra Garnica, Inge Mulhan y Myriam Ojeda

de Europa, Asia, África y las Américas. Con la experiencia adquirida en su trabajo con los dos conjuntos barranquilleros y las excelentes crí- ticas que había obtenido, Sonia sabía que sus danzas eran un espectáculo a nivel mundial. De modo que se dio una evolución muy lógica del Caribe hacia la capital, donde ella tendría una selección bastante más grande de jóvenes para quienes la danza fuera su profesión. A pesar de que el Ballet Folclórico del Atlán- tico —fundado hace 50 años— dejó de existir después de aquellos años 1960-1963, es preciso recordar que, no obstante, fue el origen de aquel que, en mayo de 2010, luego de ser galardona- do con la Cruz de Boyacá, se denominaría en adelante el Ballet Nacional de Colombia “Sonia Osorio”. Diciembre 2010.

Dunnia Balcázar

88 dossiEr ii

Inicios del Ballet de Colombia en Barranquilla

Alexandra Garnica Mazzilli*

Mi primer encuentro con Sonia fue a finales de 1961, Recuerdo que Sonia estaba consiguiendo los en su casa de la esquina de la carrera 54 (Bulevar bailarines para conformar un grupo, que pudiera Sur) con la calle 53 (Caracas) en Barranquilla, a bailar en el espectáculo de coronación de la reina instancias de una tía que sabía de la convocatoria del carnaval del siguiente año. Julieta Devis Pe- y me llevó para una audición. Mi tía Ofelia Mazzi- reira ya había sido nombrada reina, después de lli de Ojeda era amiga de Sonia desde pequeña, regresar de Ibagué, donde se había alzado con la cuando ambas estudiaban en el Colegio Gabrie- corona del Festival del Folclore. la Mistral, de las educadoras barranquilleras las El grupo que acompañó a Julieta ese año, se hermanas Arrieta McGregor, había desintegrado y Sonia pretendía repetir, en la noche de coronación, los bailes que había lle- *Alexandra Garnica Mazzilli de Lamboglia nació en Ba- rranquilla. Estudió en el Colegio del Prado de Barranquilla, vado a Ibagué. Hasta ese entonces, las veladas y en Riverside Elementary School, Ada Merrit Junior High de coronación se hacían con música y temas ex- School, y Miami High School, Miami, Fla., USA. Reside actual- tranjeros pues no se consideraba chic llevar a los mente en Barranquilla. escenarios la música popular, y menos los ritmos Archivo de Pedro Nel Montoya

De I. a D.: José Rafael Hernández, Héctor Aycardi, Edgardo Borrás, Pedro Nel Montoya, Víctor Navarro Sonia, Álvaro Vendries, David Pinzón, Jaime Escobar, Héctor Stefanell, Nicolás Serge. Agachados, Álvaro Anillo y Paco Sudea.

Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla 89 pp. 89-99. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 Las riquezas de Colombia , Doris Escobar,

Ensayo en Bogotá. 90 Esther Simmonds, José Rafael Hernández y Myriam Ojeda.

del Caribe colombiano. Llegué puntual, como a las cuatro de la tarde, y, después de los saludos, Sonia me puso un disco con música autóctona, me dio algunas indicaciones y me dijo: “Bueno, baila esto”. Era un mapalé. Debo confesar que, a pesar de haber nacido aquí, nunca había oído hablar de ese ritmo. Mis padres habían emigrado cuatro años atrás a Es- tados Unidos, y yo con ellos. Totalmente ignoran- te en la materia, sabía más de rock n’ roll y twist que de mapalé. La audición fue un total desastre. Sonia, des- esperada, me daba instrucciones, pero yo no daba pie con bola. Así me fue poniendo: cumbia, me- recumbé, porro, y yo, nada. Decepcionada, Sonia me descalificó enseguida con estas palabras: “Lo siento, pero tú no me sirves, no sabes bailar. Pue- des venir a los ensayos y mirar, tratar de apren- der, pero no te garantizo nada”. Descorazonada, comencé a ir a los ensayos, y los muchachos que ya habían sido aceptados empezaron a enseñar- me a bailar. Tuve que aprender a mover las ca- deras y a practicar los pasos de la cumbia, que, para mí, fueron los más difíciles. Las jornadas de El Bambuco.

91 92 De I. a D. de arriba hacia abajo: Víctor Navarro, David Pinzón [sentado] Carmela Arévalo, Héctor Stefanell, Nicolás Serge, Héctor Aycardi, Giovanni Lanzoni, José Rafael Hernández, Ilva Consuegra, Pedro Nel Montoya, Ofelia Ojeda [invitada], Sonia Osorio, Rodrigo Obregón, Fernando Fonnegra [invitado], Doris Escobar, Álvaro Vendries, Inge Mulhan, Paco Sudea, Beatriz Cotes ‘Folclorito’, Alexandra Garnica, Myriam Ojeda, Dunnia Balcázar, Edgardo Borrás y Esther Simmonds.

ensayo eran agotadoras, pero yo asistía con tal de poder entrar en el grupo. Como era época de pre-carnaval, a la puerta de su casa llegaban los miembros de las cumbiam- bas populares a bailar. Recuerdo los de la Danza del Congo, que nos enseñaban los pasos. Ellos también me sirvieron de maestros de baile. Sonia ni me miraba. Yo seguía practicando, hasta que, por fin, un día en Bellas Artes hubo un ensayo general, y fue allí donde pude demostrar todo lo que había aprendido. Y donde ella finalmente dio su aprobación. Me tocaba hacer un solo con mi parejo en el número del Mapalé y me había esmerado mucho. Cuando me tocó el turno y bailé, Sonia lanzo un grito: “Pero, niña, ¿y cuándo aprendiste a bai- lar? Lo has hecho muy bien, considérate parte del grupo porque ya no puedo prescindir de ti”. Bueno, eso fue un gran alivio y alegría para mí,

93 La Mojana. Álvaro Vendries, Alexandra Garnica, Ilva Consuegra y Beatriz Cotes

El porro “Se va el caimán, se va el caimán, se va para Barranquilla…” I. a D.: Héctor Estefanel, Doris Escobar, Beatriz Cotes, Leonor Acero, Inge Mulhan.

94 que, a los quince años, solo pretendía pertenecer el grupo a Ibagué, Cali y Bogotá, siempre y cuan- al grupo y pasarla rico. do consiguiéramos teatro donde presentarnos. De Ibagué a Cali viajamos por carretera en bus. Toda Con Sonia estuve hasta finales de junio de ese una proeza. Pero éramos felices. año de 1962, cuando regresó Julieta a entregar la corona del Folclore y nuevamente llevamos el En Ibagué, el grupo fue declarado “fuera de repertorio, que constaba de cumbia, porro, me- concurso” por el profesionalismo que demostró recumbé, mapalé, y la danza del Congo, que So- durante el festival. Así pues, estando una tarde nia agregó al espectáculo. Esos fueron los inicios en Melgar, donde se presentaba el grupo, en el de lo que después se llamó el Ballet Nacional de Hotel Guadaira, la directora del Teatro Colón de Colombia, creado, montado y dirigido por Sonia Bogotá, que estaba allí, se acercó a Sonia para Osorio, nuestra gran coreógrafa. La idea era lle- ofrecerle el teatro para una sola presentación, tan var el Ballet a Bogotá, pero no teníamos teatro pronto regresáramos a la capital. Sonia tenía ya donde presentarnos. Luis Enrique Osorio, padre compromisos en Cali, donde nos presentamos en de Sonia, tenía teatro, pero no lo pudo prestar el teatro al aire libre Los Cristales, y también en el para esa presentación; sin embargo y a pesar de Teatro Municipal, ¡con rotundo éxito y lleno total! eso, no se arredró. Sonia emprendió el viaje con Pero al llegar a Bogotá, y presentarnos esa única

Ensayo en Bellas Artes.

95 96 Merecumbé. I. a D.: Doris Escobar, Beatriz Cotes, Carmela Arévalo, Leonor Acero, Ilva Montoya, Inge Mulhan, Alexandra Garnica (al fondo). noche en el Colón, las boletas se agotaron, y fue mente, ese número solo se presentó en esa oca- así como tocó repetir al día siguiente hasta com- sión, ya que Esther Forero, autora de la música, pletar tres noches, con el teatro repleto. solo dio permiso para que Sonia la presentara De regreso en Barranquilla, ese primer grupo una sola vez. Y para esa única presentación en se presentó nuevamente en el Teatro Metro, para el Metro, a Sonia, Alejandro Obregón le pintó los el público barranquillero, agregando al repertorio telones de fondo que se usaron en la escenogra- un nuevo número: “La Mojana”. Desafortunada- fía de La Mojana.

La Cumbia, ensayo.

97 98 Munir Kharfan

Entre mis recuerdos, uno en especial: cuando se inventó un pregón que nos mataba de la risa, íbamos con ella a La Cueva a buscar a Alejandro porque decía así: “Mondongo, mondongo, mon- Obregón para que le terminara los telones. Sonia dongo con pejejpá [pez espada] con arregolladura no contaba con vehículo en esos días, pero nunca en el pescuezo, cachucha y perendengue, ¡a peso faltaba alguien que se pusiera a sus órdenes para el plato!”. hacerle cualquier carrera. Rita Garcia, gran ami- ga de Sonia, tenía una camioneta Ford pick-up Otro pregón gracioso era el que le tocaba a - modelo 56, roja. Con ella fuimos varias veces a La Myriam Ojeda: los huevos de iguana. Ella los pre - Cueva a buscar a Alejandro, pues él no era muy gonaba así: “¡Huevo’e iguana, huevo iguana, fres cumplido: Sonia tenía que rogarle. Y esos encuen- cos, fresquitos, asoleaos al sol!” tros terminaban casi siempre en explosivas dis- El pregón mío era el de la señora que vendía co- cusiones, dada la frescura de Alejo para hacer lo cos de agua por las calles de la vieja Barranquilla. que ella le pedía, y la desesperación de Sonia, por Y aunque lo único que yo debía decir era: “Cooco que él le cumpliera. de agua, coooco de agua”, la parte graciosa la po- Algo que nos divertía mucho eran los prego- nían Nicolas Serje y Vendries, que me hacían con nes. Recuerdo que a Darío Stefanell le tocaba en sus cuerpos un burrito en el que yo me montaba, el número de Los pregones de mi tierra, previo al y ellos con gracia jochaban al burro, que corco- inicio de la Cumbia, el vendedor de mondongo. Él veaba, mientras yo pregonaba.

99 Filosofía y Geografía Una aproximación a la biografía filosófica de Nietzsche cerca del mar

Fernán Ramírez Meléndez*

a Manera de introdUCCión fábula del otro mundo’ y las investigaciones so- bre el giro espacial cursadas en la Especialización En una colección de ensayos sobre Nietzsche, re- en Filosofía Contemporánea de la Universidad del cogidos en la publicación La palabra en la músi- Norte. ca, Jesús Ferro Bayona ofrece una lectura vital e intelectual de Nietzsche en “Las estancias en * * * la Riviera, símbolo y geografía”, donde descubre, Leyendo el artículo histórico e intelectual so- sobre un sentido topográfico de mar y sur, el ger- bre Nietzsche Las estancias en la Riviera (Ferro, men de una nueva dimensión en 2009), me llené de emoción al la reflexión del filósofo alemán: percibir la intimidad revelada la elaboración de la obra filosófi- del filósofo; sentí que había en- ca de Nietzsche está hondamen- contrado una guía para com- te relacionada con la geografía. prender la profundidad de al- Luego de rastrear los concep- gunas de las sentencias de Más tos espaciales, en la conclusión allá del Bien y del Mal, que tal aparece una alusión a Richard vez me permitiría escudriñar Rorty sobre el abandono de las alguna explicación más convin- pretensiones universalistas de cente sobre el origen del eterno Nietzsche. El autor se abre ca- retorno, o, quizá, llegando al fi- mino por entre la suposición de nal del escrito —imaginé— me Rorty y señala la universalidad encontraría con la idea atrevi- de Nietzsche en el reclamo de un da de descubrir alguna relación sitio en la tierra. Tomando par- entre los aforismos crípticos de tido por una interpretación in- la obra de Nietzsche y el impac- clusiva del insumo biográfico en to que debió sentir este alemán la obra de un autor, este ensa- enfermo cuando conoció el mar. yo quiere encontrar un eslabón Me encontré con todo eso. Pero, entre la crítica de Nietzsche a ‘la cuando terminé de leer el ensa- yo, tuve que abrir nuevamente * Nació en Barranquilla, 1973. Estudió pregrado y pos- el libro porque mi mente volvía sobre un nombre, grado en filosofía en la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá. Adelantó la carrera religiosa y sacerdotal en la Orden una palabra y una frase. Leí ‘Rorty’, ‘geografía’ y de San Agustín y en el Seminario Mayor de Bogotá. Realizó la “la sensibilidad materializada en la topografía a la Especialización en Filosofía Contemporánea en la Universidad que mar y sur le dan contornos que el pensamien- del Norte. En la actualidad, se desempeña como docente de to occidental había evitado”. Me derrumbé sobre tiempo completo en la Corporación Universidad de la Costa, CUC, y asistente de investigación en el proyecto, financiado el prado, pensando en todas las posibilidades in- por Colciencias, “La poesía como recurso de la filosofía en Pla- cubadas en ese final. tón”, en la Universidad del Norte.

100 Huellas 92 y 93. Uninorte. Barranquilla pp. 100-105. 08/MMXII - 12/MMXII. ISSN 0120-2537 Friedrich Nietzsche / Génova MKh & AMM

Luego me encontré con la sospecha de Fink y que ese poeta reclamó, como uno de esos pri- (1976) en su guía de lectura sobre el culto fas- vilegios, “¿qué tiene que ver conmigo la validez tuoso tributado a la figura legendaria del filósofo. universal?” ¿Pudiéramos leer un autor incluyendo factores Abriéndonos camino por entre la suposición extra textuales como su vida, su locación y su de Rorty, nos respondemos que Nietzsche no época, o en cambio debiéramos restringirnos a dejó de ser filósofo universal en tanto que re- la autosuficiencia del texto? La pregunta ha sido clamaba un sitio de la tierra, y no un sistema recurrente cuando me acerco a san Agustín, el abstracto, para pensar y transmitir lo pensado. antípoda de Nietzsche en filosofía como señalaba MacIntyre (1992), o cuando repaso algunos capí- Nietzsche reclamaba el sur y el mar. Su pen- tulos de Kierkegaard, de la Escuela de Frankfurt samiento, la elaboración de su obra filosófica o de la Teología de la Liberación, ¿cómo deslin- y poética está hondamente relacionada con la dar los episodios acuciantes de la vida de estos geografía, con las condiciones del clima, con su pensadores cuando mucho de lo plasmado en sus estado de salud (salud/enfermedad); una obra obras es prácticamente una versión de sus expe- en la que el pensamiento guarda una propor- riencias vitales? ción ineludible con la sensibilidad, materializa- da en la topografía a la que el mar y el sur le Nuestra estrategia metodológica buscará des- dan contornos que el pensamiento occidental enrollar dos conclusiones finales del ensayo de había evitado en su ascenso hacia la abstrac- Ferro (2009), con el fin de explicitar esas “estima- ción más alta, retirada de todo lo que significa- ciones filosóficas de sentido” (p. 39), cuyo germen ra individualidad y concreción, lugar y tiempo de una nueva reflexión filosófica se halla presente (Ferro, 2009, p. 57-58). en la obra de Nietzsche. Para ello transcribiremos el pasaje final del ensayo y luego procederemos a Primera conclusión: Abriéndonos camino por en- analizar dos de sus tesis. tre la suposición de Rorty, nos respondemos que Nietzsche no dejó de ser filósofo universal en tanto El filósofo Richard Rorty (Ensayos sobre Hei- que reclamaba un sitio de la tierra, y no un siste- degger y otros pensadores contemporáneos, ma abstracto, para pensar y transmitir lo pensado. 1993) piensa que al contrario de los poetas, se supone que los filósofos son “racionales”, y se Con una hojeada al índice de nombres que cita supone que la racionalidad consiste en ser ca- Rorty (1993) en la edición española de su libro paz de mostrar la “validez universal de la pro- Ensayos sobre Heidegger y otros pensadores con- pia posición”. Nietzsche, piensa Rorty, fue un temporáneos, descubrimos que Nietzsche es el se- filósofo que reclamó los privilegios de un poeta gundo autor más citado. La influencia es notoria.

101 Michel Foucault.

El neopragmatismo norteamericano1 encontró en De mi Nietzsche como pragmatista patriota me Nietzsche un filósofo con desarrollos notables y gustaría que forme equipo con los norteameri- útiles para el programa de una crítica a la meta- canos de corazón: Emerson, James, Dewey. Mi física tradicional. Rorty (1991) procura converger Nietzsche ya en perspectiva comparte con sus las figuras del pragmatismo clásico, como Ja- compañeros de equipo una teoría pragmatista mes y Dewey2, con Nietzsche a la hora de supe- de la verdad así como un desprecio cordial por rar la epistemología tradicional, pero describe a la psicología moral primitiva de Platón y los lími- Nietzsche como un buen ejemplar de cómo puede tes de su imaginación política. […] Mi Nietzsche ser la perfección privada, mientras que Dewey es podría al fin de cuentas acercarse a lo que considerado como un autor más ejemplar debi- Bloom, con cierta repugnancia, denomina “esa do a su compromiso en un esfuerzo compartido, manera típicamente norteamericana de digerir social: el esfuerzo por hacer que nuestras insti- la desesperación continental: el nihilismo con tuciones y nuestras prácticas sean más justas final feliz”. Emerson, James y Dewey habrían y menos crueles (cf. p. 16). Con esta lectura de coincidido con mi Nietzsche en que la “democra- Rorty, Nietzsche queda desprovisto de cualquier cia es el cristianismo conforme a la naturaleza” oportunidad para ofrecer algo a la filosofía social3. (Rorty, 1994, p. 18). (El destacado es nuestro) Es manifiesto que la lectura de Nietzsche que En este escrito, Rorty distingue entre el elabora Rorty obedece a los intereses de su pro- Nietzsche de Bloom, el Nietzsche de Miller y su grama pragmatista: propia lectura de Nietzsche. El uso del posesivo, tan particular en el filósofo norteamericano, ma- 1 Una recopilación de autores sobresalientes del pragma- tiza el pensamiento del autor a quien se lo asigna tismo contemporáneo en Borradori (1996) Conversaciones y le imprime una interpretación desde una pers- filosóficas, el nuevo pensamiento norteamericano. Mejía, J. pectiva: los intereses del programa pragmatista. (Trad.). En Bogotá: Norma. En adelante, ‘pragmatismo’. Mi Nietzsche - 2 Las relaciones entre la filosofía europea postnietzscheana personifica a un filósofo contingen y la filosofía analítica postpositivista, a primera vista, podría te. Esta apropiación metodológica se ajusta a los ofender. Sin embargo, la relación es frecuente en varias obras intereses antimetafísicos, antifundacionalistas y de Rorty (1994, p. 18; 1991, p. 16), e inclusive dedica un artí- antiesencialistas de Rorty: “El contexto en el que culo a esas concordancias (Rorty, 1990). 3 “Cierto es que la versión del pragmatismo de Nietzsche mis ensayos sitúan la filosofía postnietzscheana nada tiene que ver con las esperanzas sociales características es el pragmatismo. Considero a Nietzsche como de James y Dewey. Su perspectivismo, su negativa a admitir la figura que más hizo por convencer a la intelec- la noción de una verdad desligada de intereses y necesidades tualidad europea de las doctrinas que formularon formaba parte de un afán de percepción privada, lo que para en Norteamérica James y Dewey” (Rorty, 1993, p. él significaba pureza espiritual. Nietzsche detestaba tanto a su país como a su siglo, por lo que la combinación emersioniana 16). Nietzsche es para Rorty otra expresión de las de confianza en sí mismo y patriotismo que encontramos en tesis producidas por James y Dewey. Y así debe- James y Dewey le es totalmente ajena.” (Rorty, 1993, p. 17). mos limitar el alcance de sus sentencias sobre el No obstante, la Escuela de Frankfurt reconocía a Nietzsche como “uno de los pocos después de Hegel que entendió la dia- autor alemán. léctica de la Ilustración”. Las reflexiones en torno a la biopo- ¿Qué hay del universalismo? La referencia a lítica hicieron parte de la obra de Nietzsche, nos los muestra, entre otros, la profesora Vanessa Lemm, de la Universidad Rorty en el artículo de Ferro (2009) se encuentra Diego Portales de Chile, en varios proyectos de investigación y en el capítulo titulado Identidad moral y autono- muchas publicaciones en el Cono Sur.

102 mía privada: el caso Foucault. Dice Rorty (1993) los demás o que existe una ‘humanidad común’ que el antiplatonismo radical y nietzscheano de que nos vincula con los demás (Cf. Rorty, 1993, Foucault prescinde de algo que pueda servir de p. 276). fundamento - , y por tanto infiere la ausencia de ne Aunque el título de ‘caballero de la autonomía’ cesidad de instituciones sociales. Foucault rela- lo haya concedido Rorty a Foucault, es preciso tiviza la justificación de las instituciones sociales entonces evitar identificar a Nietzsche como fun- y sus mecanismos de control, pero, al igual que dacionalista5. Decir con Nietzsche que Dios ha Nietzsche, no se ocupa de mostrar algo malo en muerto —dice Rorty— significa que los hombres las sociedades liberales (Cf. p. 275). Rorty elabora no sirven a propósitos más elevados. En otras pa- - una reflexión sobre Foucault y lo llama ‘caballe labras, el universalismo de Nietzsche realmente ro de la autonomía’, pero describe a Nietzsche (y muestra ‘un cambio en la forma de hablar’, reem- a Heidegger) sucumbiendo a la tentación de en- plazando la imagen de generaciones hambrientas contrar una contrapartida pública y política a la que se pisotean unas a otras por la imagen de búsqueda última y privada de la autonomía (Cf. una humanidad que se acerca cada vez más a Rorty, 1991, 273). Algo que no se encuentra en el la luz, sin agrupar a esas generaciones en una Foucault de Rorty. En consecuencia, Rorty asigna única especie natural llamada ‘humanidad’. (Cf. a su Nietzsche una autonomía relativa a lo públi- Rorty, 1991, p. 40). co y a lo político, sin duda una sentencia deseosa de profundización. “Nietzsche no dejó de ser filósofo universal en tanto que reclamaba un sitio en la tierra” (Fe- Además del privilegio de replicar con el poe- rro, 2009, p. 57). La universalidad que podemos - ta, y en último término con Nietzsche: ‘¿qué tie vislumbrar en Nietzsche es de condición y no de ne que ver conmigo 4, Rorty la verdad universal?’ pretensión. El reclamo es (1993) continúa diciendo: geográfico, espacial, pro- - “Creo que los filósofos tie pio de la condición de ser nen tanto derecho a este humano. Ningún hombre privilegio como los poetas, se desprende de su tejido y considero suficiente esta social, lo que no significa réplica” (p. 276). Por lo aspirar a la universalidad tanto, para el pragmatis- epistemológica de las pro- mo es claro que Nietzsche pias representaciones: a pertenece a los filósofos esto le han llamado pers- que abandonan preten- pectivismo. siones epistemológicas universalistas. Sin embar- Segunda conclusión: Nietz- go, caracterizando a Fou- sche reclamaba el sur y el cault, Rorty ve a Nietzsche mar. Su pensamiento, la preguntando a continua- elaboración de su obra fi- ción ‘¿qué tiene que ver losófica y poética está hon- conmigo el sufrimiento de damente relacionada con mis congéneres?’, con lo la geografía, con las con- cual, su inquietud refle- diciones del clima, con su jaría un vínculo práctico estado de salud (salud/ con una pretensión uni- enfermedad). versalista, la cual prescri- “Solo los poetas, sospe- be que es ‘racional’ intere- Paul Rée y Friedrich Nietzsche, con Lou Andreas Salomé, 1882. chaba Nietzsche, pueden sarse por el sufrimiento de apreciar verdaderamente la contingencia” (Rorty, 1991, p. 48). A cambio de 4 El proyecto filosófico de Rorty se vale de los conceptos conceptos estáticos, elaborados para transformar ironía y contingencia, la actitud del individuo cuando no pien- sa que su lenguaje se halla más cerca de la realidad que los demás: no habría un léxico privilegiado y universal volviendo 5 “Prefiero a mi Nietzsche de sus últimas voluntades —el conmensurables todos los demás relatos. La pretensión de co- de un pragmatismo pacífico— y aplaudo la sugerencia de una nocer la verdad absoluta pierde entonces el valor concedido ética que pueda liberarse de la metafísica y la epistemología” por la tradición epistemológica tradicional. Nietzsche, para (Rorty, 1994, p. 18). Es clara la intención de Rorty por inter- Rorty (1991), fue el primero en sugerir explícitamente la ex- pretar a un autor distinguiéndolo de otros, pero se debe acla- clusión de la idea de ‘conocer la verdad’ (p. 47). rar que el resultado no es la oposición entre ellos.

103 Richard Rorty. la realidad continua en discreta, Nietzsche recobra junto al elemento griego” (Vattimo, 1996, p. 159). la metáfora para sugerir, incitar y provocar. Una “Desde mediados de noviembre hasta finales de lectura geofilosófica6 de las imágenes del sur y del abril de 1881 permanece en Génova, ciudad por mar, proporcionan una guía para comprender el la que sentirá un gran afecto por el resto de su alcance universal del perspectivismo de Nietzsche. vida […] Su permanente búsqueda de un cielo sin nubes lleva a Nietzsche a la idea de ir a Tú- Con todo, también es posible ver en el mar, nez” (Nolte, 1995, p. 58). Se puede concluir que por ejemplo, la imagen del caudal borrascoso de la enfermedad y la búsqueda de un lugar mejor las relaciones humanas. Comentando un frag- donde sentirse marcaron estos años en la vida de mento de 1885, dice Cifuentes (2001): “La vida Nietzsche. es un mar de relaciones de fuerza en permanente cambio, nada en ella es estable ni puede ser de- No obstante, es obligatorio establecer márge- terminado como una esencia; este mundo es todo nes para la objeción de Fink (1976) al interpretar lo contrario de un mundo metafísico. […] Un per- a Nietzsche a partir del dato biográfico. Por un manente fluir de relaciones, eso es el mundo, la lado, Escobar (1995) afirma que una guía para descripción de una guerra permanente, una gue- el estudio de Nietzsche, y para cualquier autor, rra en la que se busca más poder y en la que nada acudirá a una serie de principios hermenéuticos, queda” (Cifuentes, 2001, p. 105). dentro de los cuales se encuentra el vínculo de la - Otros comentaristas han visto en la estancia vida del autor con su obra: con quién está polemi zando el autor, cuáles obras está leyendo en cada cercana al Mediterráneo la etapa de mayor feli- etapa de su vida, cuáles hechos ocurrieron en cidad en la vida de Nietzsche: “de nuevo, acepta su época y, en especial, con alegría la influen- cuáles tuvieron una in- cia de los genios demo- cidencia más directa níacos y de los lugares en él. Asimismo inclu- románticos: Chopin, ye dos principios espe- Venecia, Génova, Vene- cia, ciudad de hybris, cíficos para orientar al futuro lector de la obra Génova, ciudad del ro- - manticismo del mar, de de Nietzsche: la oposi ción salud/enfermedad las despedidas y de los en su vida y el espíritu recuerdos” (Cassirer, musical. (Cf. Escobar, 1972, p. 96); es la épo- 1995, p. 255-256). ca “de ‘Nietzsche solita- rio’, pero también la del De otra parte, Fink pensador que ha encon- (1976) afirma al inicio MKh & AMM trado su ‘espacio vital’: de su obra que estos en- la Alta Engadina, Venecia, Génova” (Nolte, 1995, foques no llegan a lo nuclear, no dan cuenta del p. 50), donde “el elemento nórdico se encontraría problema filosófico, pues el asunto fundamental es otro; la filosofía de Nietzsche ha sufrido ma- 6 “Deleuze y Guattari afirman en su obra ¿Qué es filoso- las interpretaciones, pues los factores periféricos fía? que la filosofía es una ‘geofilosofía’ de la misma forma en repetidamente se superponen a lo propio de su que la historia siempre es una geohistoria (Boyer, 2009, p. pensamiento. Al mezclar vida y obra se crea el 23). Las investigaciones de la profesora Amalia Boyer sitúan a artificio de una ‘leyenda’ (Cf. p. 12-15). Nietzsche cercano al concepto geofilosofía o razón geográfica.

104 Escobar responde preguntando gráficos como clave de lectura a la fi- si no se caería en el idealismo que losofía de Nietzsche. Podría ser objeto Nietzsche tanto criticaba, cuando de un estudio geofilosófico y biográ- pretendemos, por ejemplo, buscar el fico la composición del Zaratustra en valor de ‘la vida’, o de otros concep- Génova y Niza, aprovechando la bue- tos semejantes, haciendo abstrac- na recepción que ha tenido esta obra ción de esta vida concreta, resultado y las prolíficas proyecciones que vie- de la lucha salud/enfermedad, que nen junto con la lectura significativa fue la suya. (Cf. Escobar, 1995, p. de la imagen del mar dentro de las 272). Es más, la dualidad salud/en- obras compuestas durante la estan- fermedad es un principio fundamen- cia de Nietzsche en las costas italiana tal para interpretar la vida y la obra y francesa. La insistencia en el uso de Nietzsche, para lo cual hay múl- de mar y sur en la obra de Nietzsche tiples referencias, entre las que cita ofrece la perspectiva, el contorno que los ejemplos de Kaufman, Deleuze y la filosofía occidental había querido Janz (cf. p. 256). Podemos aventurar- evitar y que este Nietzsche contem- nos a proponer que la búsqueda y el poráneo sugestivamente ha vuelto a encuentro con un lugar mejor, la cer- poner en escena. canía al mar, representó un evento biblioGrafía importante que también podría ser la Boyer, A. (2009). Archipelia. Lugar de la rela- clave para lecturas afines a la razón ción entre (geo)estética y poética. Revista Nó- geográfica. madas 31 (1). Para el objetivo de nuestra investi- Cifuentes, L. (2001). Una sabiduría salvaje, el cuerpo inmanente a la vida en el Zaratustra de gación, nos afiliaremos a la búsqueda Nietzsche. En Meléndez, G. (Comp.). Nietzsche de Ferro (2009) en la línea de identifi- en perspectiva. Bogotá: Siglo del Hombre Edi- car, en el reiterado uso de categorías tores. Pontificia Universidad Javeriana y Uni- espaciales, más que un asunto topo- versidad Nacional de Colombia. Escobar, J. (1995). Salud, enfermedad, mú- gráfico, estimaciones filosóficas car- sica, reflexiones sobre la filosofía de Friedrich gadas de un sentido nuevo y germi- Nietzsche. En Montoya, J. (Comp.). Nietzsche nal para la historia del pensamiento. 150 años. Cali: Univalle. Ferro (2004). Nietzsche y el retorno de la metá- El Retorno de la metáfora veía en fora. Barranquilla: Uninorte. el mar la imagen ideal de una manera de pensar: Ferro, J. (2009). Las estancias en la Riviera: símbolo y geogra- “La aventura del pensamiento se presenta como fía. En La palabra en la música, ensayos sobre Nietzsche. Barranquilla: Uninorte. una exploración en torno de las costas de un ‘me- Fink, E. (1976). La filosofía de Nietzsche. Sánchez, A. (Trad.). diterráneo’ ideal” (Ferro, 2004, p. 46). Allí el mar En Madrid: Alianza. abierto es visto como la imagen de un punto de Lefebvre, H. (1972). Nietzsche. H de Gaos, A. (Trad.). En: Mé- - xico: Fondo de Cultura Económica. inflexión entre dos historias: la historia del olvi MacIntyre, A. (1992). Tres versiones rivales de la ética: enci- do de la metáfora y el inicio de otra historia, la clopedia, genealogía y tradición. Millán Puelles, A. (Trad.). del hombre superado7: “Con la imagen del mar En Madrid: Rialp. abierto, la abertura total, la ausencia de fondo, Nolte, E. (1995). Nietzsche y el nietzscheanismo. Rocha, T. terminamos la historia de un olvido y comenza- (Trad.). En Madrid: Alianza. Rorty, R. (1991). Contingencia, Ironía y Solidaridad. Vigil, J. mos la otra historia, esa que todavía no se ha es- (Trad.). En Barcelona: Paidós. crito: ‘no amo sino a la tierra desconocida, en la Rorty, R. (1994). Vattimo, Negri y Rorty, tres lecturas de más lejana mar’.” (Ferro, 2004, p. 48). La palabra Nietzsche. Oxman, C. y Galdeano, P. (Trads.). En Zona en la música decanta un vino nuevo, añejado en Erógena 20 (1). Recuperado de http://es.scribd.com/luis- do/d/22929000-Vattimo-G-Negri-T-y-Rorty-R-Tres-lectu- robles de investigación, viajes y reflexión. Harían ras-de-Nietzsche falta décadas para que las ideas antes guardadas Rorty, R. (1993). Ensayos sobre Heidegger y otros pensadores sirvieran ahora como hoja de ruta a los próximos contemporáneos, Escritos filosóficos 2, Vigil, J. (Trad.). En lectores de la obra de Nietzsche en el Caribe. Barcelona: Paidós. Rorty, R. (1990). Foucault/Dewey/Nietzsche. En Raritan: A Las estancias en la Riviera: símbolo y geografía Quarterly Review. 9 (4), 1-8. - Vattimo, G. (1996). Introducción a Nietzsche. Binagh, J. se ocupa de integrar los rasgos biográficos y topo (Trad.). En: Barcelona: Península.

7 Resaltamos la comodidad de la traducción filosófica ‘Hombre superado’ para Übermensch.

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