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UNIVERSIDAD CATOLICA BLAS CAÑAS

DIRECCION DE INVESTIGACION SERIE DE INVESTIGACIONES N° 11

CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS

Verónica Valdivia Ortiz de Zárate

Santiago, 1996

UNIVERSIDAD CATOLICA BLAS CAÑAS DIRECCION DE INVESTIGACION

SERIE DE INVESTIGACIONES / N° 11

ISSN: 0717-1730 Inscripción: N°98.102

Esta Investigación financiada por la Universidad Católica Blas Cañas, es el resultado de un Proyecto elegido en concurso interno, mediante la evaluación de dos pares expertos y seleccionada por una Comisión Académica de la más alta jerarquía prelidida por el Sr. Vicerrector Académico e integrada por el cuerpo de Decanos de la Universidad.

Santiago, 1996

PRESENTACION SERIE DE RESULTADOS DE INVESTIGACION

La Universidad Católica Blas Cañas, fundada en 1990, heredera del Instituto de Educación Superior del mismo nombre, tiene como finalidad la búsqueda de la verdad y su trasmisión desinteresada a través de la docencia, la extensión y la investigación; consec uente con esta última, convoca anualmente a sus académicos a concursos de proyectos de investigación.

En esta oportunidad esta Universidad, tiene el agrado de presentar a la opinión pública, a los académicos y estudiantes, el undécimo número de esta serie de publicacio - nes, financiadas por nuestra institución, destinada a dar cuenta del resultado de una de las investigaciones realizada durante 1995.

El presente texto forma parte de una serie de investigaciones a cerca del naciona - lismo chileno que ha efectu ado la profesora Verónica Valdivia. En su primer trabaj o sobre el tema, (Serie de Investigación N° 3) estudió el período del Frente Popular; en el siguiente (Serie de Investigación N° 8) aborda el segundo gobierno de la administración de Carlos Ibáñez y e n este trabajo, Verónica Valdivia ofrece una mirada amplia, un , análisis profundo, sereno y ameno de un período reciente de nuestra historia que va de 1965 a 1973. A través de una lectura aguda, se puede explicar y comprender un proceso que culmina con la formulación de un proyecto nacionalista que asignaba a las Fuerzas Armadas una función preponderante en la institucionalidad chilena.

Con esta obra estamos cumpliendo uno de los requisitos básicos del ser Universi - dad; posibilitar el trabajo creativo, inn ovador, de reflexión de su cuerpo académico, además de ponerlo a disposición de la comunidad nacional; en particular con este tema que invita a la reflexión y a extraer lecciones en torno a los mecanismo de convivencia que han operado al interior de nuestra sociedad.

Dirección de Investigación

Este trabajo es el resultado del proyecto "Fe y Doctrina: el nacionalismo chileno en los años de la confrontación, 1966-1973", financiado por la Universidad Católica Blas Cañas; y también del proyecto Fondecyt N° 1950011 "De Ibáñez a Patria y Libertad: un estudio del nacionalismo en Chile. 1952-1975 ", que se desarrolla actualmente a cargo de la suscrita. El ha contado con el apoyo y la dedicación de los ayudantes de investigación del Proyec to Fondecyt, profesores Sres. Rolando Alvarez y Eduardo López, a quienes se agradece su colaboración.

INDICE

INTRODUCCION...... 5

I. LA ENCRUCIJADA NACIONALISTA EN LOS SESENTA ...... 9

II. LA PIEDRA ANGULAR: EL TACNAZO ...... 27

III. ¡EL NACIONALISMO ESTA VIVO!: A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS ...... 41

CONCLUSIONES ...... 64

FUENTES Y BIBLIOGRAFIA ...... 67

SERIE DE INVESTIGACIONES 5

INTRODUCCION

El golpe de Estado del 11 de sep tiembre un discurso novedoso respecto de ellas. Desde de 1973 puso fin a la aparente prescindencia mediados de los arios cuarenta el tema de las política de las fuerzas arma das en la vida fuerzas armadas ocupaba un lugar cada vez nacional, tras cuarenta arios de respeto formal más central entre los movimientos ala Constitución 1. A partir de ese momento, el nacionalistas de derecha 2. Si hasta mediados tema de la participación militar en la de los arios sesenta ese discurso tuvo poca contingencia empezó a ser repensado por gran resonancia socio-política, a partir de esa parte de la sociedad. Hoy día, a 25 arios del fecha y, en particular, con la experiencia de golpe militar, sigue siendo un tópico la Unidad Popular, lograría introducirse en fundamental del debate político y de la el ideario de importantes sectores, tanto democracia a forjar: la discusión acerca del políticos como gr emiales y universitarios, Tribunal Constitucional, del Consejo de obligando a amplios ámbitos de la sociedad a Seguridad Nacional o la Ley Orgánica de las cuestionar la no deliberación militar y el fuerzas armadas, entre otros, lo avalan, sometimiento estricto a la autoridad civil. haciendo de estos organismos un actor Una cuestión como ésta, que cruza hoy toda imposible de eludir. No obstante, el golpe y el la vida política nacional, hace necesaria una con siguiente régimen militar no fueron los mirada al pasado, una mirada histórica que responsables absolutos de ese cambio de ayude a explicar tal proceso. percepción acerca del papel que les corres - pondía jugar a dichas instituciones. Mucho La notable estabilidad que Chile exhibió antes del colapso violento de la democracia a lo largo del siglo XX —en especial hasta chilena en 1973, núcleos pequeños, casi siempre mediados de los sesenta—, se fundamentó, en marginales, a menudo tildados de "locos" o gran medida, en la capacidad de das co- "payasos", habían comenzado a repensar a las lectividades partidarias para aceptar las reglas fuerzas armadas elaborando lentamente del juego democrático y desarrollar sus pro-

1. El concepto de "constitucionalismo formal", para el caso de las fuerzas armadas chilenas, fue acuñado por el sociólogo Augusto Varas a comienzo de los arios ochenta. Según éste, la no intervención directa de los militares chilenos en política a partir de los arios treinta, no habría estado basada en la internalización de principios democráticos por parte de éstos que legitimaran la obediencia al poder civil, sino más bien en cuestion es corporativas, por lo que su respeto a la Constitución habría tenido un carácter meramente "formal". Esta tendencia de los oficiales a la no deliberación política habría estado sustentada, más bien, en la inexistencia de un basamento doctrinario respecto del rol que ellas debían cumplir en la sociedad contemporánea. La carencia de una doctrina que las insertara coherentemente en la sociedad, las habría dejado en una situación de orfandad doctrinaria que las indujo a un respeto formal de la institucionalid ad. Augusto Varas et al., Chile. Democracia. Fuerzas Armadas (Stgo.,1980). 2 Este estudio es la continuación de dos trabajos anteriores en los cuales se ha analizado al nacionalismo desde la perspectiva de movimiento político, tónica que éste mantiene. Por ello no se entrará en especificaciones conceptuales abordadas anteriormente y que sirven de sustrato al análisis que aquí se ofrecerá. Con todo, es pertinente señalar que este trabajo aborda al nacionalismo de derecha, de corte autoritari o y raigambre hispanista, pensamiento doctrinario que sirve de base para la elaboración de un proyecto político que pone énfasis en las jerarquías sociales, en el sentido de identidad hispánica y unidad espiritual dada por el catolicismo. En relación a la influencia del hispanismo en el pensamiento nacionalista

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puestas dentro del marco establecido, con - titucionales —la "Revolución en Libertad" — viviendo, aunque a veces con dificultad, con , una apuesta autoritaria nacionalista desde la sus opositores 3. Esta plasticidad política derecha y la construcción de una sociedad permitió dar legitimidad al ejercicio del poder socialista desde la izquierda. El carácter y proyectar a éste una imagen de cohesión o, al confrontacional que la lucha asumió fue menos, de "compromiso" entre todo el minando la capacidad de llegar a acuerdos y espectro partidario 4. Los problemas na - deteriorando la imagen de coherencia qu e el cionales eran debatidos dentro del orden sistema había mostrado hasta entonces. Lo institucional y sus resoluciones se adecuaban a que empezó a prevalecer fue el las posibilidades de generar un consenso fraccionamiento, la deslegitimación y un mínimo o ala factibilidad de construir alianzas desconocimiento generalizado a las normas que permitieran la mantención del orden de convivencia política. imperante. Los peligros de desacue rdos que Mientras lo predominante entre los derivaran en quiebres políticos serios, partidos fue la flexibilidad y el acomodo, el amenazando con un fraccionamiento recurso a la fuerza como mecanismo de sistémico, fueron neutralizados en pos de la resolución de conflictos no fue necesario. La defensa de la democracia política. existencia de grupos de representación para Las frustraciones, no obstante, que la defensa de los intereses de los distintos este tipo de quehacer político generó, de - se ctores, fortaleció la convicción en los hilos terminaron el replanteamiento de los distin - democráticos. En ese contexto, los intentos tos partidos y su modernización. La golpistas o deliberativos de algunos oficiales necesidad de buscar nuevas alternativas a un militares entre 1938 y 1969 tuvieron un sistema que se revelaba agotado —el modelo carácter más bien aislado y no involucraron de in dustrialización por sustitución de a ninguno de los actores políticos de más importaciones y el Estado de Compromiso — peso. En general ellos estuvieron asociados significaron, duran te la década de 1960, la a sectores marginales de la derecha no aparición de tres propuestas diferentes y democrática, con escasa influencia social. mutuamente excluyentes. Estas hacían alu - Esto, indudablemente, fue un factor de sión a una profundización de la democracia estabilidad. enrini v 1,0 bryil -frn . 11

chileno, véase Ricardo Pérez Montfort, Hispanismo y Falange, págs. 18-24, Verónica Valdivia O. de Z., El nacionalismo chileno en los arios del Frente Popular (1938-1952), págs. 34-38 y Renato Cristi y Carlos Ruiz, El pensamiento conservador en Chile, págs. 67-92. Respecto del nacionalismo véase Emest Gellner, Naciones y nacionalismo (1988), Eric J. Hobsbawm, Naciones y nacionalismo 1780 (1992), Federico Chabo scl, La idea de nación (1987), Kalman Silver Nacionalismo y políti , de desarrollo (1966) y Benedict Anderson, Comunidades imaginadas (1993). 3. Paul Drake, Socialismo y populismo en Chile 1936-1973 (1993), págs. 16-19; Manuel Antonio Garretón y Tomás Moulián, La Unidad Popular y el conflicto político en Chile (1993), págs. 28-31. 4. En el "Estado de Compromiso" ningún sector es capaz de ejercer su hegemonía sobre el re sto, lo cual la obliga a realizar transacciones con sus adversarios e integrar permanentemente nuevos grupos a la vida político-social para asegurar la estabilidad institucional. Tomás Moulián "La debilidad hegemónica de la derecha en el Estado de Compromiso", Flacso, 1981; Manuel Antonio Garretón, El proceso político chileno, págs.24-25. También Marcelo Cavarozzi "Populismos y partidos de clase media", Revista Mexicana de Sociología.

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Asimismo, la coherencia que parecía bierno de la Democracia Cristiana, las opciones acompañar a la toma de decisiones incidió que se presentaron, las escogidas y las para que las fuerzas armadas se mantuvie- variaciones producidas, tanto a nivel ran, en términos globales, en una postura de doctrinario como de praxis política, con respeto a la Constitución y de sometimiento relación a los arios cincuenta. Asimismo, al poder civil. Ellas respondían a un poder explicar el auge de los movimientos legí timo, lo cual también fue un elemento nacionalistas tras el triunfo de Salvador All ende estabilizador. Por ello los constantes llama- en la elección presi dencial de 1970 y su impacto dos de sectores minoritarios a un quiebre de en las fuerzas armadas durante la Unidad la no deliberación, sólo atrajeron a pequeñas Popular. El tema central que rodea este estudio fracciones militares que no pusieron en es la vincu lación entre el nacionalismo y las jaque la tendencia prevalente. La fuerza fuerzas armadas, especialmente el ejército. A todavía no lograba convertirse en un pesar que este trab ajo considera el período de la instrumento más y, posteriormente, clave de Unidad Popular, éste sólo se utilizará como la lucha política. telón de fondo para analizar la construcción de un ideario nacionalista con fuerte énfasis en el La reorientación del espectro político, papel político a jugar por las fuerzas armadas sin embargo, y el enfrentamiento que re- en tanto proyecto. emplazó a la convivencia, influyeron para que la obediencia militar al mando civil La hipótesis que g uía este estudio es comenzara a mostrar más abiertamente sus que si bien el nacionalismo, medido en fuerza debilidades y su carácter "formal", abrien do electoral e impacto de masas, siempre ha de plano el camino a la deliberación y al sido, y sigue siendo, un sector marginal de la golpe. Del mismo modo, aquellos grupos de política chilena, su peso político real debe ser la derecha nacionalista, hasta entonces analizado en función de las instituciones con marginales, encontraron un terreno más las cua les se vincula. Proponémos que el fértil para lanzar sus mensajes alas fuerzas nacionalismo autoritario de derecha, el ,cual armadas, ahora penetradas por la crisis este estudio aborda, ha ejercido una fuerte política y reflejo del fraccionamiento y influencia en la política chilena de los últimos agotamiento que aquejaba al sistema. Si treinta arios por su capacidad de penetrar a hasta entonces su prédica había tenido poca la derecha histórica en 1966 —atenuand o su resonancia, la lucha por un "orden nuevo" carácter institucionalista— e influir en las pers eguido por la izquierda y la derecha fuerzas armadas en relación al rol que ellas hacia fines de los sesenta, creaba al deben cumplir en la sociedad. Planteamos nacionalismo las condi ciones para un que fue precisamente la escasa influencia combate en una situación de mayor igualdad social del nacionalismo y, por tanto, su y llevaba su voz hasta los cuarteles militares. imposibilidad de realizar la revoluc ión nacionalista a través de un movimien to Este trabajo rastrea el camino reco rrido masivo o de una competencia equilibrada por el nacionalismo chileno desde mediados de con los partidos tradicionales, la razón que lo la década de 1960 hasta comienzos de la llevó tempranamente a mirar a las fuerzas siguiente; específicamente, entre 1965 y 1973. armadas como vehículo para la materiali- Su propósito es analizar el proceso de zación de su proyecto. Este acercamiento reconstrucción nacionalista bajo el go estuvo sustentado en el carácter nacionalista

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de las fuerzas armadas y en sus conceptos de momento para convertir a las fuerzas ar - orden, disciplina y jerarquía, tan dete- madas en una alternativa política más per - riorados en la sociedad chilena de los sesenta manente. Y es este, precisamente, el punto y principios de los setenta. El éxito de la central del análisis, en cuanto si bien hubo batalla contra el orden democrático-liberal, otros sectores que miraron a las fuerzas desgastado para la fecha en estudio, contra el armadas para resolver el conflicto político marxismo que se abría paso inevitable mente durante la Unidad Popular —tanto desde el y la implantación de un Estado naciona lista centro como de la propia izquierda—, su autoritario, dependía de la capacidad de los llamado sólo tenía fines golpistas, revolu - movimientos nacionalistas de involucrar a las cionarios o neutralizadores. La diferencia fuerzas armadas en la resolución del con . sustancial con la invocación a las fuerzas flicto. No pretendemos afirmar que al golpe armadas hecha por el nacionalismo es que sólo contribuyó el discurso y las presiones ella lo era como alternativa política per - ejercidas por estos grupos sobre las fuerzas manente y no meramente coyuntural o armadas; a él confluyó, sin duda, un abanico instrumental. Su aporte estuvo en lograr socio-político mucho más amplio. Con todo, argumentar a favor de unas fuerzas armadas los movimientos nacionalistas ofrecieron uno plena y permanentemente integradas a la de los argumentos más consolidados en ese vida nacional y a las decisiones políticas.

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LA ENCRUCIJADA NACIONALISTA EN LOS SESENTA

Si bien uno de los grandes logros de los esta forma, el pr ofesionalismo militar, arios del Frente Popular fue consolidar la entendido como no deliberación, se convertía democracia política, el cúmulo de frus - en una actitud vacía de contenido que no traciones que, al mismo tiempo, generó a respondía a principios definidos por el comienzos de los cincuenta, dio lugar a la conjunto de la sociedad civil. La "orfandad búsqueda de nuevas alternativas. Este des - doctrinaria" que esto significó, llevó a los encanto no se remitió, exclusivamente, a las militares a buscar independientemente un dificultades económicas producidas por la nuevo rol que les permitiera reubicarse y evidencia de los límites del modelo de sus - revalidarse so cialmente, recuperando su titución de importaciones o la inflación y el importancia en el desarrollo del país y revertir racionamien to, sino que se extendió a todos los esa sensación de decadencia que los afectaba. ámbitos de la vida nacional. La desconfianza Tan con fusos anhelos fueron satisfechos hacia los partidos tradiciona les y su estilo de durante los ar ios cincuenta con el desarrollo hacer política, los sectores sociales a costa de de la Guerra Fría y la aparición a nivel los cuales se había estructurado el crecimiento continental de una Doctrina de Seguridad económico y la redistribució n del ingreso, el Nacional, ofre ciendo el marco doctrinario que fracaso en lograr el desarrollo; en fin, una las fuerzas armadas estaban buscando. La sensación generalizada de ago tamiento. Era la defensa hemisférica las relegitimó en el época de los descontentos. contexto del enfrentamiento de occidente con la Unión Soviética, redefiniendo su función en Pero no eran sólo los actores sociales rela ción al comunismo y la insurgencia en que comúnmente se hacen oír los que se América Latina y Chile en este caso. La nueva hallaban inquietos: la inquietud también cosmo visión fusionó los conceptos de defensa invadía las filas militares. Después del hemisférica -como respuesta a una agresión repliegue obligado de las fuerzas armadas de extracontinental- con el de seguridad interior la arena política durante los arios treinta y en cada país, entregando a estas instituciones recuperado el espíritu de cuerpo, estas la misión de mantener la unidad nacional ante instituciones intentaban reinsertarse en la vida cualquier peligro de disgregación. En este civil. Dicho proceso, no obstante, se dificultaba sentido, la Doctrina de Seguridad Nacional pues, la sumisión lograda por los civiles se ofreció a las instituciones c astrenses una tradujo en un alejamiento de éstos hacia el revalorada visión de sí mismas como las mundo militar y la ausencia de una doctrina encargadas del destino de la nación, baluarte que definiera las tareas castrenses, permitién - de la unidad nacional, estimulándolas a doles vincularse con el mundo civil. De autoasignarse un rol mesiánico 5.

5. Augusto Varas et al. Chile. Democracia. Fuerzas Armadas. Genaro Arriagada y Manuel A. Garretón "América Latina a la hora de la Doctrina de Seguridad Nacional" en María A. Pérez (Ed.) Las fuerzas armadas en la sociedad civil (CISEC, 1978).

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En esta búsqueda de tareas a asumir, más estrechos con los militares para cumplir sin embargo, las fuerzas armadas no es - los objetivos de la "revolución pacífica" del tuvieron absolutamente solas en el contexto 4 de septiembre de 1952, y también el nacional. Al contrario, ellas contaron con los proyec to de su movimiento. Tal movimientos nacionalistas que en los arios acercamien to se verificó en la participación cuarenta y cincuenta se enfrentaban al hecho de Prat en el grupo conspirativo cívico - concreto de su incapacidad para convertirse militar de nominado Línea Recta formado a en un fenómeno de masas. Ya fuera que se fines de 1954 y que salió a la luz pública en tratara del nacionalismo católico —la marzo del año siguiente. cruzada— o del nacio nalismo más proyectual —el pratismo—, la experiencia ibañista Línea Recta pretendió dar al Presi - había resultado un fiasco para la revolución dente las herramientas de fuerza necesarias nacionalista, obligando a estas agrupaciones para salirse de los márgenes institucionales, a una intensa reflexión sobre su futuro cerrar el Congreso Nacional, clausurar los político. En el caso del Pratismo, proveniente partidos e iniciar una "verdadera política de de los estanquero s de mediados de los arios saneamiento nacional" que devolviera a Chile cuarenta, se cuestionó el rol asignado a las una posición expectable en el concierto fuerzas armadas y la situa ción de abandono latinoamericano sin los "obstáculos" de la en que ellas se encon traban, proponiendo una democracia. El rechazo de todos los sectores "solución integral", es decir, una políticos a dicho experimento, y también de reorganización de ellas de acuerdo a las un núcleo mayoritario al interior del ejército, exigencias del mun do surgido de la Segunda abortaron el complot rectista que contaba con Guerra Mundial. Tal pro puesta implicaba un la bendición, sino la conducción, del propio estudio de la cuestión de sueldos, presidente Ibáñez. La participación de Prat en asignaciones, gratificaciones y esos eventos parece haber estado relacionada remuneraciones en el exterior que garan - con la elaboración del Mani fiesto ideológico tizaran unas fuerzas armadas eficientes para del grupo, a comienzos de 1955, en el cual se la defensa externa; en segundo luga r, criticaba fuertemente a los partidos a quienes otorgarles la misión de ser las "supremas se culpaba de llevar al país a la decadencia y guardadoras de nuestra orgullosa tradición se instaba a los sectores "incontaminados" a constitucio nal republicana", al tiempo que se tomarse el poder. Sólo un grupo de jóvenes revitalizaba la imagen guerrera del pueblo —decía el Manifiesto— "decididos a chileno como imperativo del destino sacrificarse por la patria, con capacidad nacional. Estanqueros planteó la necesida d técnica ...pueden y deben con un plan de de extender las funciones castrenses a orientación, salvar al país conduciéndolo a la ámbitos ajenos a la defensa externa para prosperidad y a ocupar el lugar que le asignarles una misión cívico-educativa al corresponde en la comunidad de los pueblos interior de los cuarteles que sirviera a la - hermanos". patria por medio del trabajo". Las intenciones independentistas de Durante la segunda administración de Prat respecto de la hegemonía que Ibáñez Ibáñez, en la cual Jorge Prat colaboró como pretendía imponer en Línea Recta, parece n ministro de Hacienda (1954), el líder nacio - haber decidido al Presidente para deshacerse nalista-estanquero trató de establecer vínculos de su ex Ministro y destituirlo de la Pre-

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sidencia del Banco del Estado 6. A pesar del diente, combativo y católico, movido por la alejamiento estanquero de Ibáñez, la fuerza de la "fe". Por ello el grupo fue muy participació n de Jorge Prat en Línea Recta crítico de la vertiente estanquera-pratista, parece haberse mantenido clandestinamente muy similar a los partidos, que insistía en un durante todo el ario 1955 hasta que el plan proyecto "portaliano" contradictorio con la abortó definitivamente a comienzos de 1956. realidad de Chile a mitad del siglo XX. No obstante, esta fracción espiritual del En el caso del nacionalsindicalismo — nacionalismo tampoco logró crear un que hemos denominado "la cruzada"—, la movimiento masivo capaz de derrotar a las experiencia ibañist a también fue frustrante, en colectivi dades partidarias y superar la tanto Ibáñez no había sido capaz de encauzar la democracia liberal, debiendo rendirse ante la evidente desilusión social hacia los par tidos evidencia de su fracaso 7. para convertirla en una fuerza dispues ta a secundarlo en la transformación pro funda que, De este modo, nos encontramos hacia según su diagnóstico, el país necesitaba: la la década de 1960 con dos vertientes del revolución integral. Sin em bargo y a diferencia nacionalismo chileno que han fracasado en del nacionalismo pratista, la tentativa golpista su intento de materializar sus objetivos que el Presidente respaldó -Línea Recta - programáticos o espirituales, pero que se tampoco contó con el beneplácito del resistían a abandonar la arena política es- Movimiento Revolucionario Nacional pecia lmente en un momento de profundos Sindicalista, pues se impondría un régim en cambios a nivel nacional e internacional. La dictatorial " . . con hombres sin doctrina, Revolución Cubana planteó un nuevo desafio honrados y patriotas, pero carentes de ruta y de abs defensores de la tradición cuando ella objetivos definidos". Hasta mediados de la revitalizó a la izquierda latinoamericana y década de 1950, el nacionalismo es piritual por chilena con la lucha armada, al mismo el que abogaba esta tendencia no reconocía en tiempo qu e Estados Unidos con la Alianza las fuerzas armadas un actor fundamental para para el Progreso incentivaba a los gobiernos el triunfo de la revolución nacionalista tal como latinoamericanos a hacer profundas refor mas ellos la entendían, claramente espiritual. dentro del marco democrático. La ten dencia Todavía hacia fines de los arios cincuenta, el al cambio que se apoderaría del mundo y de nacionalsindicalismo seguía insistiendo en la Chile en esos arios obligaron al na cionalismo importancia de atraer a la juventud con un a retomar posiciones bajo la ex periencia de la nuevo "estilo", ar "Revolución en Libertad".

6. Sobre el nacionalismo estanquerista, véase Verónica Valdivia El nacionalismo chileno en los años del Frente Popular (1938-1952); para la experiencia de Prat y de su movimiento durante la segunda gestión de Ibáñez, incluído el caso de Línea Recta, Verónica Valdivia Nacionalismo e Ibañismo. Respecto de Línea Recta, véase Rolando Alvarez et al "De Ariosto Herrera al general Viaux, un e studio de los complots militares en Chile", UCBC , 1995; Arturo Olavarría Chile entre dos Alessandri, vol.11, págs.300-329, Mauricio Hidalgo "El Ariostazo, PUMA y Línea Recta. Una desviación del profesionalismo de las fuerzas armadas chilenas", Tesis inédita, PUC, 1994; Raúl Silva M. Camino al abismo, (Stgo.,1955). 7. Para el nacionalsindicalismo, Verónica Valdivia Nacionalismo e Ibañismo, págs.21-31 y 59-63. En ese trabajo se hace un análisis comparativo del nacionalismo más proyectual de la línea estanquera-pratista con respecto al nacionalismo espiritual, integrista del nacionalsindicalismo y sus experiencias bajo la

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Ya desde la campaña presidencial de nacionalsindicalismo a cerca de ésta, pues 1958, el nacionalismo chileno temía la olea da era evidente, a su entender, que tal sistema de cambios que se avizoraban en el futuro político sería incapaz de detener el triunfo cercano y que la sorpresiva votación ob tenida de la izquierda y le abriría las puertas para por el candidato socialista, , su propia destrucción. mostró en toda su crudeza. El nacionalsindicalismo tenía muy claro en ese Tales vaticinios se vieron confirma dos ario que la opción alessandrista no era una cuando el gobierno de Frei comenzó a realizar alternativa real al marxismo, dado el ca rácter las reformas prometidas durante la campaña del candidato y los objetivos de los partidos que de la "Patria Joven" en 1964, cuestionando el lo apoyaban: "el gobierno de Ales' sandri sistema de propiedad, or ganizando a vastos dividirá al país en dos bandos irreconciliables... sectores populares urbanos y masas Será un gobierno gerencia! -bueno o malo- que campesinas que se politizaron rápidamente 10 . permitirá crecer al marxismo y enfrentar las La doble intención de la "Revoluci ón en próximas elecciones como una fuerza que Libertad" de un desarrollo económico basado llegará casi al 40% del país' 8. en el reforzamiento de la estructura capitalista y su proyecto social determinaron un El diagnóstico hecho a la candidatura incremento sustantivo de las demandas, de Jorge Alessandri, s e complementó con la traducido en una movilización creciente que, percepción del grupo acerca de la entonces según la evaluación retrospectiva d e Radomiro naciente Democracia Cristiana, a la cual Tomic, acentuó las muchas contradicciones de visualizaba como una tendencia ingenua en la sociedad chilena. tanto "pretenderá ganarle sus banderas al comunismo con lo que marxistizará aún más La puesta en práctica de las políticas a Chile, destrozará sus d efensas y lo ofrecerá de promoción popular, por su parte, inquie - indefenso al golpe certero y violento de los taron a la izquierda, toda vez que con ella la rojos" 9. Así, la significativa cantidad de Democracia Cristiana le disputaba su sufragios lograda por la candidatura mar - hegemoní a sobre los sectores populares. La xista dentro del marco de la democracia intención de la "Revolución en Libertad" liberal confirmaba la incredulidad del de incorporar a los marginados urbanos a

segunda administración ibariista. Véase también, Erwin Robertson "Ideas nacionalistas chilenas", págs.261 - 284

8• Bandera Negra, N° 28, agosto de 1958. Esta percepción de la cercanía del triunfo de Allende en 1958 fue compartida posteriormente .por el líder del Frente Nacionalista Patria y Libertad, Pablo Rodriguez Grez, para quien el divisionismo de las fuerzas democráticas a fines de los arios cincuenta hacía "peligrar la supervivencia del régimen:Alessandri, Frei, Bossay y Antonio Zamorano...Allende fue el candidato único de socialistas y comunistas...por escasos treinta mil votos la candidatura Alessandri sobrepasó a la de Allende... Podría decirse que la democracia se salvó milagrosamente..". De acuerdo a su análisis, el ario 1958 "transformó al marxismo en alternativa de poder". Entre la democracia y la tiranía (Stgo.,1972), pág.12. 9. Bandera Negra, N°28, agosto de 1958. 10. Sobre el período de Frei Montalva, véase Jorge Nuñez "El gobierno demócratacristiano. 1964-1970", Andes, N°1, 1984; Julio Faúndez Izquierdas y democracia en Chile, 1932-1973, págs. 143-164.

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travé s de la organización de las bases, la reforma agraria, el alza de impuestos, la desatendidas hasta entonces por la izquierda agitació n social, la sindicalización tradicional, colocó a ésta frente al impe rativo campesina y la inflación. Todo lo cual los de retomar la bandera revolucionaria. El llevaba a concluir: "como hemos visto que impacto de la Revolución Cubana y la opción se pretende proletarizar, burocratizar y por la vía armada, otorgaron al socialismo de crear una clase sufragante mediados de los sesenta nuevas herra mientas económicamente de pendiente del Partido para encabezar la lucha por cambios de gobierno, tenemos que colegir que se estructurales y derrotar al "reformismo" pretende implantar un régimen comunista demócratacristiano. La opción del socialis mo cristiano; marxista en todo su quehacer chileno de 1967 por todas las formas de lucha socio-económico; internacionalista en su graficó claramente el nuevo escenario y el política de convi vencia; cristiano sólo en tipo de enfrentamiento ideológico-político aquello de no fusilar... "12. que se acercaba 11 . Sin embargo, tales prácticas no eran La opción de la derecha tradicional de del todo negativ as, toda vez que el caos por votar por Frei en 1964, haciendo evidente su ellas generadas "adelantaba el momento" del crisis existencial, y los caminos escogidos nacionalismo. Las reformas auspiciadas por por el socialismo, mostraron el agotamiento el gobierno de Frei habían tenido, desde su del sistema pol ítico imperante para seguir óptica, la virtud de producir un cambio conjugando armoniosamente las demandas importante: "el Chile de 1966 en adelante, de los distintos sectores sociales. Esta en- nada tiene qu e ver con el Chile que vegetaba crucijada ofreció al nacionalismo chileno la aletargado desde 1891. Para bien o para mal, oportunidad de replantear sus propuestas y alguien cambió todas las premisas; y los sus instrumentos de lucha. restos de ese Chile retardatario, sonámbulo y mediocre; se hunden sin remedio en las De acuerdo al análisis del nacio- arenas movedizas de la política actual". En nalsindicalismo, las reformas de la Demo- otras pa labras, su diagnóstico de ocho arios cracia Cristiana escondían su afán de igua- antes se convertía en realidad: el reformismo larse a la izquierda al apuntar explícitamente demócratacristiano envolvía ine vitablemente a la redención de un determinado sector una amenaza marxista. Pero eso lograba lo social, el proletariado: "Es decir, se pre tende que los nacionalistas habían estado gobernar para una clase determinada y esperando largamente; eran transfor- exclusiva, en detrimento de todas las demás. maciones que a nadie dejaban indiferentes, Esto se llama marxismo". El resultado de tal habían conseguido "despertar" a la nación política era el debilitamiento de las clases después de casi un siglo de sueño. Así, para el medias y de los sectores terratenientes con nacionalsindicalismo estos cambios cons-

11. Sobre la izquierda en el período, véase Fernando Casanueva y Manuel Fernández El Partido Socialista y la lucha de clases en Chile, Julio Cesar Jobet Historia del Partido Socialista de Chile, Paul Drake Socialismo y Populismo. Chile 1936-1973; Augusto Varas (Compilador) El Partido Comunista en Chile. Estudio Multidisciplinario, Juan C. Gómez "La rebeldía socialista", Flacso, N°82, 1993. 12. Bandera Negra, N°31, enero de 1966.

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tituí an un hecho positivo, no sólo para los por el reformismo y su identificación con la expresamente beneficiados, sino más aún Democracia Cristiana, asestando un duro para los perjudicados, para los "que hoy se golpe al conservaduri smo chileno que con ello sienten amenazados", pues se verían ne- perdió, además, buena parte de su electorado. cesariamente impelidos a reaccionar: "El La reforma agraria dio el golpe final al favor más grande que puede hacer el destino Partido Conservador al destruirle "parte a gente capaz, pero anquilosada por la co- esencial del universo simbólico de una elite modidad, es ponerla en trance violento de que desde el siglo XVIII había construido los sucumbir. Sólo les cabe responder de dos símbolos de prestigio social y de con tinuidad maneras al desafío: dejarse ejecutar o familiar en torno a la tierra" 14 . La derecha reaccionar psicológicamente... saltar económica temió que el reformismo audazmente ade lante y crear" . De ahí que la demócratacristiano se extendiera más allá del "Revolución en Li bertad" no hacía sino agro y afectara sus intereses, por lo cual cerró "cambiar el ambiente de sueño por el de filas en torno ala SNA haciendo fracasar los combate; des pertaron a todos los chilenos y pl anes del partido gobernante de una ruptura con ello abrieron la Caja de Pandora de intraderecha, al tiempo que buscaba un donde surgió el Espíritu Nacional" 13 . La camino alternativo para enfrentar el hora del fin del sistema democrático-liberal y cambiante escenario político 15 . del enfrentamiento, s e acercaban. La Democracia Cristiana se convertía en el En medio del sismo provocado por las "sepulturero del régimen de partidos". reformas del gobierno y el retroceso electoral sufrido por los parti dos Liberal y Por su parte, la implementación de la Conservador en la elecciones parlamentarias reforma agraria y de la sindicalización de 1965, la derecha histórica parecía in- campesina alienaron ala derecha en su conjunto, defectiblemente morir. Las formas del juego especialmente al Partido Conservado r, ya político democrático subsistentes hasta el afectado por los cambios en la Iglesia con el triunfo de la Patria Joven, ya no tenían cabida pontificado de Juan XXIII. Este instó a los en un espacio llenado cada vez más por la católicos a emprender cambios estruc turales palabra "cambio", democracia social, justicia para superar el atraso económico y alejarse del y libertad, donde la institucionalidad conservadurismo, predicamento que se empezaba a hacerse claramente estrecha para fortaleció tras el impacto de la Revolución satisfacer esos anhelos y eran otras las armas Cubana y la opción por proyectos de acción que comenzaban a cobrar importancia. Los social. Las cartas pastorales del episcopado partidos "creadores de la República" así lo nacional revelaron la elección eclesiástica entendieron y se sumaron a la ola

13. Bandera Negra, N°32, feb. 1966. 14. Sofía Correa "Iglesia y política: el colapso del Partido Conservador", Mapocho, N°.30, 1991; "La derecha en el Chile contemporáneo:la pérdida del control estatal", Revista de Ciencia Política, N°11,1989, Alan Angell De Alessandri a Pinochet, (Stgo.,1993),págs.47-60; Tomás Moulian La forja de ilusiones, págs. 125-144. 15. Tomás Moulián "Desarrollo político y Estado de compromiso. Desajuste y crisis estatal en Chile", Estudios Cieplán, No.8,1982; Julio Faúndez, op. cit., págs.156-157.

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transformadora, disolviendo sus antiguas masas..". De allí que la naciente colecti - colectividades partidarias para dar vida a vidad se planteara la urgencia de "reac - una nueva derecha. tualizar los principios..." para llenar un vacío en el panorama político y Tras los resultados electorales de 1965, representar a vastos sectores que, a su tanto los conservadores como los liberales juicio, no se sentían e xpresados por las 18 iniciaron un proceso de reflexión en torno al alternativas existentes . camino que la derecha debía seguir, concordando en la necesidad de la reno - Esta decisión de construir un partido vación 16 . Para el conservantismo estaba claro más amplio permitió el ingreso a la antigua que parte de los valores históricamente derecha de sectores hasta entonces margi nales sustentados por ellos, servirían de base para que, por sus planteamientos antide mocráticos, iniciar la "recuperación para mantener en la nunca habían tenido una cabida real en ella. El política nacional un partido dique de nuevo estilo de lucha política a mediados de los extremismos demagógicos... el conservan tismo sesenta, sin embargo, modificaba las quiere rem ozarse en su organización... " . percepciones y los conceptos tanto de Asimismo, los liberales "han comprendido que democracia como de las formas a utilizar para es necesario renovarse y llegar a la opinión perfeccionarla. Si el centro enfatizaba las pública... " 17 . Por ello sus Juntas Ejecutivas reformas socioeconómicas como medio decidieron crear un movimiento nuevo, ágil, irreemplazable para una sociedad más justa y moderno y dinámico que se convirtiera en u na parte importante de la izquierda se acercaba alternativa distinta capaz de enfrentarse al castrismo y propugnaba un orden socialista, exitosamente al falso dilema entre Democracia la nueva derecha también podía reevaluar los Cristiana y comunismo que amenazaba con postulados nacionalistas-cor porativos, ajenos decretar "el desapa recimiento de cualquiera hasta el momento a l as estrategias otra posición política" . La intención no era tradicionales de convivencia política. Esto crear un partido más sino uno que se adecuara explica la invitación hecha al grupo menos a los cambios del momento, con una estructura rupturista de los movimientos nacio nalistas del nueva. En palabras de Bernardo Larraín período—el pratismo—, para integrarse al "Hasta ahora la política se hacía naciente partido. principalmente en base a influencias locales o grupos. Nosotros hemos compren dido que Luego del fracaso de la gestión de Jorge ahora la política debe hacerse Prat como ministro de Hacienda durante el fundamentalmente a interpretar grandes segundo gobierno de Ibáñez, el ex líder

16. Tomás Moulián e Isabel Torres "La derecha en Chile: evolución histórica y proyecciones a futuro", EstudiosSociales, N°47, 1986, págs.82-83; también véase Sofí a Correa "La derecha en Chile contemporáneo:la pérdida del control estatal", Revista de Ciencia Política, N°1 1, 1989. En este artículo la autora relativiza la bullada derrota electoral de 1965 como un hecho clave para la desaparición de la derecha tradici onal, proponiendo que tal proceso se debió a una pérdida de confianza de los partidos Conservador y Liberal en si mismos. 17. El Diario Ilustrado 14.03. 1966, pág.4. 18. El Diario Ilustrado, 10.03. 1966, págs.1 y 2; 15.03. 1966, pág.3.

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nacionalista-estanquero participó tangencial - actuación apasionada y ciega de aquellos mente en la administración de Jorge Ales - hombres..." . Prat aceptaba la responsa- sandri, quien lo invitó a ser par te de la bilidad de la candidatura porque veía "en la comisión que estudiaría una reforma al unión de los independientes y de los hombres sistema previsional, después que los liberales de partidos, pero con criterio nacional y con ob jetaron su nombre para la cartera de tradición históric a, la posibilidad más seria de 19 Trabajo y Previsión Social . En un intento unir a los chilenos y de realizar en el gobierno por demostrar que hombres ajenos a un programa definitivo de progreso 21 cuestiones partidistas podí an asumir tareas de nacional" . gran envergadura, tal como su propia interven ción en la vida pública lo demostraba, La campaña de los "hombres libres" Prat retornaría a la arena política al implicaba un estilo nacional que se traducía presentarse el problema de la sucesión en energía, vigor y, en las palabras de presidencial de Alessandri. Como en ocasiones Ameno, e n vocación de servicio nacional. El anteriores, la nominación d e los posibles estilo era de combate en pos de la patria, candidatos fue determinada por los partidos, acción movida por los ímpetus de la raza y malogran do, desde la perspectiva de del pueblo invitado por Prat para "con Prat,"todo lo hecho, ... se (va) a detener el criterio nacional, edificar juntos el gran proceso de saneamiento comenzado (con) movimiento de fe, unidad y rescate de la Ibáñez y continuada en la suya. Consideré que patria" . D icha acción nacional necesitaba de los políticos traicionaban a l pueblo y ...le la juventud capaz de romper "este sistema volvían a endilgar el partidismo, las caduco", de destruir para crear, pues se anteojeras, el sentido sectario" 20 . De la trataba de una "rebelión constructiva". rebeldía que ese evento le produjo nació su candidatura presidencial como independiente Desde la perspectiva pratista, sólo en el período 1963-1964, levantada por un Portales, Prieto, Bulnes, Montt y Balmaceda grupo de "independientes" de Cautín. en el siglo XIX; A rturo Alessandri, Ibáñez y Encabezan do la "Rebelión del hombre libre' Jorge Alessandri en la actual centuria, podían ,Prat llamó a los "apolíticos", incontaminados ostentar "el estilo de gobierno nacional, y amantes del trabajo a cumplir un deber de asilado en la serena autoridad de la Ley e conciencia interviniendo en la contingencia y imponiéndola a todos; y el estilo de gobierno "dejar huellas perdurables y sólidas, erigiendo ejecutivo, creador... ", a diferencia de los una nueva imagen d e nación". La ceguera gobier nos en los que habrían dominado los partidaria inducía a una politización cre ciente, grupos económicos, sociales o los partidos. Tal augurando sólo estagnamiento y decadencia, situación había generado una crisis de razón por la cual era imperativo responder "mando", es decir de la política, la cual activamente: "Por eso los hom bres estaba cada vez más al servicio de grupos y no independientes nos hemos levantado... de la nación, faltando capacidad para proclamando nuestra decisión de detener la coordinar el esfuerzo nacional como pro-

19. Rodríguez Grez op. cit.,pág.16. 20. Tacna, N°.3,1971. 21. Mario Arnello Proceso a una democracia. El pensamiento político de Jorge Prat, págs.139-140.

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ducto de la decadencia de los partidos y del devolviéndoles su función social hacia la parlamento. Frente a este diagnóstico, Prat com unidad y reformando el ingreso a la propuso la eliminación de las agru paciones administración pública por criterios de provinciales para elegir senadores y una eficiencia y mérito. Por último, Prat creía en la Cámara de Diputados de origen regional; necesidad de retomar la' tradición portaliana" introducir apoyo técnico y asesoría legal en la de la reelección presidencial como "imperativo confección de las leyes, limitar las fa cultades de continuidad que... requiere el Es tado parlamentarias en materias econó micas, moderno". previsionales, de remuneraciones y beneficios, delegando en algunas oportuni - En otro terreno y manteniendo el dades la legislación al ejecutivo. Proponía, hispanismo estanquerista, Prat planteó el además, modificar los quorums para apro bar tema de una Iberoamérica unida proponien do ciertas leyes, establecer inhabilidades par - modificaciones al sistema interamericano ya lamentarias, otorgar dietas justas pero austeras durante la Conferencia de Caracas en 1954 y a los congresales, estableciendo la facultad posteriormente en la Reunión de Mi nistros de presidencial de llamar a plebiscito para Hacienda en Río de Janeiro en noviembre del dirimir un conflicto con el parlamento al mismo ario. Tales suge rencias se referían a tiempo de dotar al ejecutivo de la facultad de un común esfuerzo y estrategia disolver el Congreso y llamar a nuevas iberoamericana para superar el atraso elecciones si fuera necesario. económico a través de un sistema de financiamiento que se materializó en 1959 Tales desafios requerían de una serie con la cr eación del Banco Interamericano de de cambios, los cuales fueron formulados Desarrollo 22 . Invitado a una reunión del BID durante la campaña de Prat en 1963, en Río de Janeiro en 1961, Prat reafirmaba su constituyendo la base de su programa fe en las proyecciones del Banco, aunque no presidencial. Se h acía urgente un ejecutivo dejaba de temer que é ste fuera incapaz de eficaz, para lo cual era imprescindible " satisfacer las exigencias y terminara limpiar definitiva y totalmente el origen del convirtiéndose en un agente norteamericano Jefe del Estado de toda interferencia del perdiendo su sentido original "como un Congreso Nacional". Esto es, quitar al instrumento ..imaginado y propuesto por Parlamento la facultad de elegir entre las dos Chile para Latinoamérica". Estos temores más altas mayo rías relativas y convocar a una llevaban a Prat a enfatizar la nec esidad de segunda vuelta para que el pueblo dirimiera una unión propiamente iberoamericana, sin la entre ellas. En seguida, descentralizar adminis - tutoría de Estados Unidos. Analizando la trativamente el país dándole autonomía a las Alianza para el Progreso a mediados de 1963, regiones; despolitizar los municipios Prat dijo percibirla como una ins-

22. Sobre este tema se pueden encontrar más detalles en Valdivia, Nacionalismo e Ibañismo, págs.49- 51. La tendencia iberoamericanista de Prat y los estanqueros respondía a su opción hispanista, en tanto el "ser de América y Chile sólo se resolvía si se reconocía el vínculo indisoluble con España". El sentido de comunida d y patria espiritual que ofrecía el hispanismo reforzó el discurso iberoamericanista, pues la "reafirmación de la nacionalidad implicaba la defensa del principio de autodeterminación de los pueblos con raza y suelo común...". Véase Verónica Valdivia O. de Z. El nacionalismo chileno..., págs. 36-37.

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titución fruto de un proyecto norteamericano una gran marina mercante, pues esos eran que no era manejado mu ltilateralmente: "En "los imperativos que la Era del Pacífico nos cambio, pienso que el destino de América obliga a anticipar con decisión". En este Latina está en sus propias manos, en la sentido, el engrandecimiento nacional que capacidad de entendimiento que tengan sus esta nueva Era anticipaba engarzaba dirigentes, en la imaginación creadora y en la perfectamente con la unión americana, toda voluntad unitaria que demuestren" . Esto vez que la s tareas de superación interna debía traducirse en cuat ro tareas a las cuales permitirían una política internacional ibe- el continente debía abocarse: la defensa de roamericanista, como la señalada anterior- sus materias primas, de su valor y de sus mente, en la cual Chile podría indicar a sus términos de intercambio; la creación de un países hermanos los intereses que los unían mercado común latinoamericano; la plani- como continente. ficación de una integración latinoamericana y de un financiamien to interamericano tanto del La campaña también hizo referencia al desarrollo como del comercio entre estos problema social, desarrollado por Prat durante países. La coordinación de esta acción podría su participación en la comisión de estudios ser realizada por Estados Unidos, según Prat, previsionales bajo la presidencia de Alessandri y "tal vez la Alianza para el Progreso debiera Rodríguez. Haciendo mani fiesto que el cifrar en este aspecto su éxito". Prat anhelaba sistema de previsión vigente en la época era que esta unión iberoamericana derivara en una clara muestra de la injus ticia que vastos una atenuación de los conflictos fron terizos, sectores sociales su frían, Prat señaló el pues "el fruto de esa acción co lectiva será la imperativo de que la seguridad social paulatina deposición de las fronteras políticas cumpliera tres tareas es pecíficas: mantener las y de las rivalidades vecinales. Soy un condiciones de vida de los trabajadores o convencido de que el tiempo irá "activos", cubrir el estado de necesidad y construyendo... una unidad de tipo federal redistribuir las rentas. Desde su óptica, "una que... vuelva a encauzarlos en un mismo política nacional no puede aceptar camino y un común destino final.. " . El discriminaciones", razón por la cual debía hispanismo estanquero florecía en medio de darse una protección integral a todos los un escenario cada vez más afectado por los habitantes, incorporando ple namente al conflictos con la república Argentina que se trabajador a su empresa, al tiempo que la agudizarían a partir de esos arios. justicia prevalecería en la rel aciones laborales. Tales necesidades requerían de tres estrategias La recuperación del papel destacado claras: una modificación en el Código del que Chile había sabido construirse en el siglo Trabajo, la creación de Empresas pasado podía lograrse si se retomaba su Comunitarias y una reforma al sindicalismo. calidad de país marítimo "con la cara vuelta La primera apuntaba a la urgencia de hacia el Pacífico y sus vastos y promisorios establecer la "igualdad jurídica absoluta de dominios " . Esta misión nacional significaba todos los sectores. Ni empleados, ni obreros: explotar las riquezas marinas, desarrollar el sólo trabajadores"; la segunda al pago de sa- comercio marítimo internacional, espe- larios justos con mínimos por categoría y cialmente hacia el Pacífico, hacer del mar un actividad a partir de las cuales se especi ficara medio de transporte masivo librándolo de las "una participación efectiva y real del trabas legales y la "recreación" de trabajador en su empre sa, tanto en sus utilidades,

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en relación directa con su productividad, sino "desarrollar una tarea civil que les de como en la propiedad de aquella... a través aplicación a su trabajo fisico y mental y que de las acciones del trabajo y con formas de progreso a nuestro desarrollo' 23 .Por ello progresivas y sensatas de cogestió n" . En el debía ponerse fin a la tendencia pre- campo sindical, finalmente, se propendía a dominante a considerarlas inoficiosas, con su asegurar a cada trabajador "la protección y consecuente minimización, pues ello colaboración de un sindicato" sin importar convertía a la profesión militar en una su número, asegurándole responsabilidad en actividad pasiva que apagaba las energías y la producción y capacitándolo para incor - capacidades de los of iciales, negándoles el porarse "constitucionalmente" como ase - destino que, al decir de Prat, estaba sores en materias legislativas, de modo de reservado a los miembros de estas unir a trabajadores y poderes públicos sin la instituciones. Al contrario, Prat abogaba por intermediación de los partidos. Por último, su fortalecimiento técnico-instructivo y una en el terreno de la previsión social Prat alta conscripción pues " Creo que nuestras propuso bajar la tasa previsional y costearla, fuerzas armadas tienen un concepto muy no con imposiciones sino c on tributos que se vital de su misión, la que consiste... no sólo en pagarían después de recibir el sueldo o la defensa de la integridad territorial sino salario, con lo cual los asalariados verían que también de la integridad moral del país aumentar su rentabilidad en un "30,35 o y en la defensa de su organización interior y 40% sin mayor costo para el empresario, al de sus leyes" . Ello implicaba incorpo rarlas cual le da lo mismo pagar esa suma a la Caja al debate de los grandes temas de interés o directamente al empleado". nacional, ya indicados, desde que "en esta misión las fuerzas armadas no están, en la En otro plano y coincidiendo con esta vitrina y son, necesariamente, pen santes. No política de cambios que la nueva nación a crear podrían, por ejemplo, en su papel de significaba, Prat reafirmó su tradicio nal defender el territorio nacional, estar postura pro fuerzas armadas. Si desde los arios continua y permane ntemente al margen de cuarenta el caudillo estanquero proclamaba la las nego ciaciones que pudieran llevar a la urgencia de revalorar la func ión social de estas entrega de parte de él... Y en lo que se refiere instituciones, en los sesenta avanzó un poco a la defensa de nuestras instituciones y leyes, más: "Nuestras fuerzas armadas si ellas son atacadas, si ellas son puestas en incontaminadas por la política, servidas peligro , también tendrían que salir de la esencialmente por la vocación... son un vitrina" 24 . Así, se comenzaba a con figurar el verdadero baluarte para la chilenidad" . De fin del constitucionalismo formal. acuerdo a esa visión, el presupuest o asignado a la defensa nacional debía ser el adecuado para La amorfia del movimiento indepen - mantener unas fuerzas en reales condiciones de diente de Prat fue superada a fines de 1963, defender no sólo la soberanía del país cuando éste se organizó políticamente, naciendo

23. Prat se estaba refiriendo a una fórmula de integración militar a la vida civil como la practicada con el Servicio Militar del Trabajo, en el cual miembros de los institutos castrenses participaban en obras de infraestructura a lo largo del país y que comenzó a funcionar durante el segundo gobierno de Ibáñez. 24. El análisis de la plataforma política de Prat en 1963-1964 reseñada en los últimos párrafos, en Mario Arnello op. cit.

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el Partido Acción Nacional. Con su creación principios y su articulación con las exigen- Prat pretendía demostrar que podía surgir un cias propias de la tradición nacional 26 .En nuevo estilo partidario "un movimiento de este intento de conjugar renovación con Unidad Nacional..", ajeno a intereses tradición, estaría la raíz de una tendencia particularistas. El nuevo estilo depuraría los política ezquizofrénica que abrió paso a par tidos y los convertiría en verdaderos grupos autoritarios antidemocráticos frente instrumentos del engrandecimiento nacio nal: a otros más proclives a la mantención de "tenemos la obligación de mejorar las estrategias tradicionales de cohabita ción rápidamente el sistema. Y si nosotros, en política. esta obligación dejamos de lado las ctrinas...(sólo) me interesa que sirvan al Acción Nacional se mostró compla- Estado y a través de él a la comunidad". La cida con la invitación que le formulara los convicción de que sólo aceptando las reglas partidos Conservador y Liberal cuando del juego político existente, era posible decidieron e iniciaron su proceso de reno- participar y tratar de incidir en la modi ficación vación, pues veía en dicha opción el co mienzo del sistema, decidió al naciente movimiento a de un movimiento capaz de revivir "en el tener un partido con inscrip ción en los alma de los chilenos la fe y la confianza en su Regist ros Electorales, el cual fue reconocido propio destino". De acuerdo a la Declaración oficialmente en enero de 1 964 25 . emitida por el partido de Prat, percibían en los gestores de la iniciativa los mismos afanes Cuando se decidió la reestructuración patrióticos que habían con ducido a los de la derecha en 1965 se optó por un partido constructores de la nacionalidad chilena y de que reafirmara los principios democráticos y su anterior grandeza: "El Estado de derecho, que ostentara una raigambre nacional, en impersonal y nacional; la autoridad de la ley; oposición al internacionalismo marxista y el respeto a la libertad y dignidad de las demócratacristiano. El debería ponerse al personas; el ejempla r desarrollo cultural y servicio de los valores fundamentales del económico; y una política activa y vi sionaria". hombre y del ciudadano, al desarrollo de la Con todo, para enfrentar ese momento justicia social y de la iniciativa privada " histórico se necesitaba más, se requería sometida a las exigencias del bien común". "encender en el pueblo de Chile un nuevo En la confección de los estatutos y decla- entusiasmo y señalar una nueva tarea que ración de principios que guiarían a la nueva cumplir". El énfasis en la fe, propio del colectividad, podrían participar todos los irracionalismo nacionalista, y el sentido de sectores invitados, con igual responsabili dad, misión histórica, reivindicado largos años por cumpliendo con las. dos finalidades estos movimientos, salían a la arena política a centrales; esto es, la reactualización de los exigir su lugar.

25. Arnello, op. cit., págs.328-329. La Mesa Directiva Central del Partido, reconocida legalmente, estaba constituída como sigue: Presidente: Sergio Onofre Jarpa; primer Vicepresidente: Gonzalo Vial Correa; Secretario Gral.: Renato Maino Schiavetti; Tesorero Nacional: Luis Pérez S olari. Entre los vocales podemos mencionar a Mario Arnello, Gastón Acuña, Patricio Silva Silva, General (R) Eduardo Yañez y Eugenio Correa Montt, entre otros. Jorge Prat era el líder del partido. Diario Oficial 07.01.1964 y 11.02.1964 y El Diario Ilustrado, 07.01.1964, pág.4. 26. El Diario Ilustrado, 17.03. 1966, pág.2.

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Pese a la tradicional marginalidad los derechos ciudadanos y de las libertades política del nacionalismo, Acción Nacional condi- públicas, amagadas hoy por intentos colec- cionó su ingreso a la nueva agrupación tivistas y totalitarios". Por último, también se señaland o algunos puntos esenciales que la señalaba como un elemento importante el integración debía considerar. El nuevo otorgar a la clase media el status de estrato movimiento debía ser "Unitario y Nacionalista", fundamental de la sociedad chilena de modo con la clara finalidad de alcanzar el poder para que la nivelación económica y social se hiciera desde el gobierno hacer la "renovación en forma ascendente. Sólo un movimiento con nacional", planteando una política internacion al estas características permitiría "reem prender fuerte orientada hacia el Pacífico y acompañada la misión histórica interrumpida a fines del de una "Unidad latinoamericana" para la siglo pasado por la división interna y el defensa común de las materias primas y el debilitamiento y desorientación de nuestra perfeccionamiento de organismos regionales de política exterior. Un movimiento unitario y desarrollo. La defensa de la libertad de trabajo y nacionalista que trascienda los anticuados de la iniciativa privada p ara asegurar la conceptos de iz quierdas y derechas.."28. La expansión económica eran los otros imperativos derecha que surgiera de este acuerdo entre ineludibles, sobre la base de "la naciona lización fuerzas tradicionales y renovadoras tendría de la propiedad minera; una reforma agraria un carácter distinto a la derecha tradicional, adecuada a la realidad y a las necesidades del más combativo y de enfrentamiento, más país y la formulación de una política acorde a estos sectores nacionalistas. industrial de exportación 27 . La renovación implicaba, asimismo, reformas laborales en La invitación al pratismo tuvo, ade- materias como la participación de los más, otro efecto: la capacidad de unificar a gremios en la conducción del país, una dos líneas nacionalistas hasta entonces nueva legislación laboral y previsional y la antagónicas. Como hemos planteado en trabaj supe ración de la "etapa del sindicato en os anteriores, uno de los problemas del nacio- resis tencia (para) avanzar hacia la creación nalismo como movimiento político, ha sido su de cooperativas de producción, síntesis permanente fragmentación en un sinnú mero moderna del capital y el trabajo" . En de pequeños grupos competitivos entre sí cuyo materia política, las condiciones eran, fruto más claro, y negativo, fue su igualmente, el reflejo de la campaña pratista debilitamiento como alternativa política. La de 1963, desde que se insistía en la urgencia tendencia de cada uno de estos movimientos a de m odificar el sistema político saneando las reivindicarse como el legítimo exponente del instituciones democráticas y "organizar un nacionalismo, derivaba en deslegitima ción Estado eficiente y realizador, la defensa de mutua y en caminos distintos y con-

27. En relación a la nacionalización de la propiedad minera, Acción Nacional planteaba que debían señalarse plazos legales pa ra que las riquezas del subsuelo pasaran a manos de empresas chilenas, sin perjuicio de la presencia en ellas de inversionistas extranjeros. La reforma agraria propuesta era entendida como un conjunto de medidas que condujeran a un rápido incremento de la producción agropecuaria, "ex propiando y redistribuyendo las tierras improductivas", sin someter al agro chileno a "ensayos de teóricos que han fracasado en otros países". El Diario Ilustrado, 17.03. 1966, pág. 3. 28. "Declaración del Directorio Ejecutivo " de Acción Nacional sobre la creación de un nuevo movimiento unitario, El Diario Ilustrado, 17.03. 1966, pág. 3.

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tradictorios para el triunfo de la revolución Nacional, que no debe suponerse una fusión, propuesta por ellos. La constitución de un es un elemento digno de considerar pues movimiento nacionalista encabezado por permitió la llegada de las fracciones más Prat con posibilidades de éxito, sin embargo, extremas de la vertiente que se estudia a la sirvié) como mecanismo de unificación del configuración de la nueva derecha. Es decir, nacionalismo proyectual —el estanqueris mo a ella no confluyeron asépticamente los pratista— con el de cruzada —el núcleos estanqueros sino también ingre- nacionalsindicalismo— a más de otros saban, tal vez con menos protagonismos, sectores pro venientes del agrariolaborismo e otros sectores vinculados a líneas más indepen dientes, en el cambiante contexto de radicales, rupturistas y confrontacionales mediados de los sesenta. del nacio nalismo. Aunque el llamado a la estructu ración de una nueva colectividad A diferencia de arios anteriores, el derechista insistía en el reconocimiento de la nacionalsindicalismo abandon ó su crítica al demo cracia, la presencia de actores "nacionalismo que transa", como catalo gaba reticentes a, dicho sistema político al pratismo, para reconocerle su mérito de debilitaban su apego 3°. realizar "el milagro de unir al nacionalismo - siempre ineficaz por su desunión-en un sólo Las conversaciones entre los antiguos haz.. " . La invitación derechista al conservadores y liberales con Acció n Nacional nacionalismo para incorp orarse a la lucha rindieron frutos en abril de 1966, cuando los política desde un nuevo partido, le otorgaba a tres decidieron la disolución de sus respectivas éste la oportunidad para acercarse a los colectividades para formar el Partido Nacional. centros del poder e influir en el futuro a Aunque su primer presidente fue el dirigente construir, ofreciendo el campo propicio para liberal Víctor García Garcena, lo cual mostraba entrar en el debate: "proporcionando a los el mayor peso político de los antiguos miembros nacionalistas doctr inarios... un AQUI Y de la derecha, la Declaración de Principios, AHORA, que les permita injertar sus ideas elementos programáticos y objetivos del nuevo en el campo de lo real, en la contingencia partido ponían de manifiesto la influencia nacional, hasta ayer vedado a todo nacio- alcanzada por los sectores nacionalistas recién nalista ortodoxo". Prat se convertía, así, en integrados a la "gran política". un símbolo aglutinante a través de Acción Nacional que servía d e contacto para las En efecto, el Partido Nacional nacía distintas expresiones nacionalistas, dando con la clara convicción de vivir un cambio vida no a un partido más, sino a una fuerza de época, el "fin de un mundo, del mundo nueva, la herramienta legal necesaria para que nació con la Revolución Francesa y que entrar a la escena del combate 29 . La apa- ha culminado con la revolución comunista" rición de una tendencia unionista con Acción y que ya no respondía a los anhelos de un

29. Bandera Negra N°32, feb. de 1966. 30. De hecho, Acción Nacional era un movimiento tremendamente heterogéneo que incluyó sectores del más diverso espectro político. Es posible distinguir no sólo vertientes nacionalistas, sino también antiguos exponentes del ibafíismo (María de la Cruz, General (R) Eduardo Yaciez) o representantes del Movimiento Liberal Balmacedista como Enrique Campos Menéndez. Véase El Diario Ilustrado, 26.03.1964, pág.4 y ss.

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hombre deseoso de librarse del materialis mo. gánica" que protegiera al individuo de las Por ello, el nuevo mundo que se iniciaba era exigencias de las mayorías y de los deten- aquel de la búsqueda de la independencia, de tadores del poder, mientras reconocí a a todos la identidad, del afán de volver a "ser los chilenos tanto deberes como derechos 32 . La persona" y no cifra, de las necesidades poda y la construcción. espirituales, "del hombre que necesita seguridad para vivir, estabilidad para trabajar El nuevo partido pretendía "forjar un y li bertad para pensar". La naciente época, destino nacional" fundamentado en la por tanto, nacía de la "rebelión del hombre experiencia histórica chilena, que le permitiera libre", de una rebelión constructiva, en sacar el máximo provecho de sus recursos palabras de Jorge Prat: "Como rebeldes humanos y fisicos para convertirlo en un factor tenemos que destruir y luego tenemos que "dinámico de una vasta esfera de prosperidad reemplazar.. Destruir lo tergiversado, lo en esta zona del mundo". Este objetivo requería podrido, lo envejecido pero cuidando las de una reformulación de la política exterior, raíces, defendiendo el tronco del árbol que se entendida como la verdadera política de los poda, es lo contrario de morir: es renacer" 31 . pueblos por ser la única "medida re al... de la capacidad creadora y de la voluntad de ser de El momento, entonces, exigía instan - las naciones" y estar "en forma" para la cias modernas para realizar los cambios confrontación internacional. Rela ciones ne cesarios. De allí que la colectividad se exteriores nacionalistas implicaban un esfuerzo planteó como un movimiento renovador que por liberarse de dependencias foráneas, la buscaba restablecer la unidad nacional y el defensa de sus riquezas, una complementación estilo que, a su juicio, había forjado el alma de económica iberoamerica na que ensanchara las la chilenidad, por lo cual se hacía necesaria la posibilidades del país: "abrirse al Pacífico y modernización de las instituciones. Tra dición considerar... su importante posición geográfica y cambio eran las guías de la nueva era. en esta área.. " . Esta tendencia integracionista Entendía que la nacionalidad se fun damentaba era uña respuesta a las presiones de las grand es en "el pueblo, la tradición, el medio potencias que llevaban a la necesidad de un geográfico" y que su expresión política debía mayor acer camiento regional entre aquellos ser un Estado Nacional, guardador de la con común origen "en que cada país desarrolle herencia histórica y cultural , defensor de la aquellos rubros que esté en mejores soberanía y de las riquezas territoriales, condiciones de producir..", promoviendo el "realizador de las aspiraciones del pueblo e intercambio mediante una defensa conjunt a de impulsor de su capacidad creadora". Estas eran los pre cios, la recuperación de recursos las raíces que se debían cuidar. La tradicional naturales para el patrimonio nacional y la desconfianza nacionalista en la democracia - capitali zación del Banco Interamericano de liberal se hi zo evidente en la nueva Desa rrollo por el traspaso a él de todos los colectividad cuando ella definió su lucha "por fondos de ,gobiernos o particulares instaurar una democracia or latinoamerica-

31. Nueva República, N°1, oct. 1966 y Partido Nacional, Sergio O. Jarpa Temas políticos. 32. Partido Nacional "Introducción a la Declaración de Principios y Programa del Partido Nacional", en Sergio Onofre Jarpa Temas políticos.

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nos depositados en los Estados Unidos. Si la sistema previsional, t odo cuanto constituye política externa era la mejor expresión de la discriminación, privilegio e injusticia.. " . plenitud del ser nacional, Chile debía mirar Socialmente, enfatizaba la necesidad de for- el cami no señalado por O "Higgins, Portales talecer la clase media "como estrato fun- y Prat en el siglo pasado y retomar su damental de la sociedad chilena" impulsan- destino propio a través del Partido Nacional do al Estado a promover el ascenso de los que había nacido para luchar por él 33 . sectores proletari os a la clase media para nivelar ascendentemente. Políticamente, era imperativo impri - mir al gobierno un sentido nacional, esto es, Por último, y siguiendo al estanque ri hacer del Eje cutivo una expresión de la smo pratista, los nacionales planteaban el nación entera" y no de intereses de grupo, imperativo de incorporar alas fuerzas armadas dotándolo de las atribuciones necesarias para al desarrollo nacional "de modo que no sean realizar su gestión sin interferencias polí ticas sólo guardadoras permanentes de la esta bilidad o gremiales, e incluso liberándolo de la tutela fronteriza y de la soberanía nacional, sino que legalmente ejercía el Legislativo para factor dinámico efectivo del progreso que no "interfiera (su) labor". educacional, técnico y económico del país". Para ello debía dotárselas de todos los medios En materia cultural y social el Pro - necesarios para el cumplimiento de su misión grama consideraba, asimismo, el impulso a y poder acoger a la juve ntud en edad de hacer una educación destinada a formar el carácter y el servicio militar 34 . la personalidad de los chilenos asentados en los principios de esfuerzo y disci plina, al Si bien en los tópicos abordados es tiempo que desarrollar "el sentido na cional posible percibir la influencia del naciona- para ..ligar a las nuevas generaciones a las lismo, es claro que la formación del Partido tradiciones de la patria.. "; " la necesidad de Nacional no fue el resultado de la hegemoní a implementar una nueva política laboral que de ninguno de los actores que confluyeron en 35 ofreciera la oportunidad a los traba jadores él . En el terreno económico se puede para participar en e l desarrollo de las apreciar las contradicciones que cruzaban a empresas y renovar el sindicato como esta mixtura política, donde debían con vivir herramienta de "protección y colaboración"; sectores que se volvían cada vez más asegurar una previsión social eficiente, neoliberales, con otros más tradicionalist as "integral e igualitaria" que cubriera las que aún defendían algunas funciones im- necesidades del pueblo eliminando "del actual portantes para el Estado. Estas contradic-

33. Partido Nacional Fundamentos doctrinarios y programáticos (1966); Nueva República, N°2, nov- dic 1966; Partido Nacional, Sergio O. Jarpa Temas políticos y del mismo autor Creo en Chile, págs. 41-62 34. Partido Nacional Fundamentos doctrinarios y programáticos. 35. Andrés Benavente y Ricardo Sánchez La presencia libertaria en la derecha chilena, CISEC, 1978, págs.59-62. Este trabajo identifica dos tipos de nacionalistas en el Partido Nacional: aquellos ligados a dicha tendencia desde antiguo, vinculados al pensamiento autoritario y al ibatlismo, y un segundo núcleo formado por jóvenes que concibieron al nacionalismo como una opción i deológica de renovación, de robustecimiento democrático portaliano y de modernización económica.

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ciones no se resolverían sino con posterio- empresariales a los partidos políticos. El ridad a los arios en que la confrontación naciente proyecto de modernización neoli- alcanzó su punto máximo y que han hecho be ral sustentado por la derecha económica, de la derecha una tendencia fraccionada. no implicaba solamente un cambio de estrate- Con todo, y desde la óptica que interesa a gia de desarrollo sino una contraofensiva a la este estudio, el momento de definiciones que creciente participación social. En esa óptica, fueron los arios sesenta permitió por la opción por la democracia orgánica del primera vez en su historia una oportunidad Partido Nacional resultaba plenament e verdadera al nacionalismo como alternativa acorde con las aspiraciones de una derecha política. Su penetración en la derecha más liberal. Esta coincidencia fue lo que histórica les posibilitó insertarse en el debate permitió el nacimiento de una derecha político en una expectable posición que no renovada y en proceso de crecimiento. aban donarían fácilmente y que ha hecho de la democracia representativa un tema de Dado que en Acción Nacional no larga discusión. confluyó solamente el grupo pratista estan- quero, como ya se ha indicado, la parti- El ingreso del nacionalismo al Partido cipación del nacionalismo dentro del Partido Nacional, sin embargo, no debe ser visto Nacional no fue homogénea. A pesar que necesariamente como un sinónimo de de- Acción Nacional tuvo la virtud de unificar a bilidad de la derecha, en el sentido que su distintas tendencias del nacionalismo, ella no incapacidad de competir en mayor igualdad pudo mantener esa integración una vez de condiciones con un centro y una izquierda dentro de la nueva ex presión política de la po lítica en pleno cambio, la angustió y la derecha, razón por la cual los caminos incitó a un acercamiento con los núcleos seguidos fueron distintos. nacionalistas de raíz hispánica, escépticos de la democracia liberal, y a las fuerzas armadas El líder y símbolo de Acción Nacional, como un refugio. Al contrario, sugerimos que Jorge Prat, ingresó al Partido Nacional, pero la aceptación del nacionalismo en el Partido tempranamente se desilusionó de esa opción Nacional respondió más bien a un proceso de pues, según su testimonio, a los nacio nalistas renovación ideológica dentro de la derecha les habían bastado unos meses para que implicaba un replanteamiento del sistema comprender el inevitable fracaso de la político, como también a la mayor influencia estrategia: "..con la estructura parti daria que los sectores empresariales habían ido vigente y sobre todo con la estructura alcanzando 36 . La desconfia nza hacia la parlamentaria deformada existente en Chile, democracia liberal del nacionalismo dicha ilusión patriótica carecía de base". Po r conservador, hispanista y autoritario que este esa causa, Prat se alejó del Partido y volvió a trabajo está abordando, coincidía con la ácida su carácter de nacionalista puro e crítica de los núcleos independiente. No obstante, otros miem-

36. Sofía Correa, "La derecha en la política chilena de la década de 1950",Opciones, 1986. En este artículo, Sofí a Correa plantea el retroceso de la derecha política histórica y el surgimiento en los arios cincuenta de una derecha con bases sociales nuevas —clase media próspera— y con una gran influencia de los núcleos empresariales. Esta nueva derecha habría ido tendiendo cada vez más a una crítica a los partidos y a la política tradicional.

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bros de Acción Nacional decidieron que darse llenado a la larga por una de dos fuerzas en las filas de la derecha para desde allí decisivas: "l a internacional que representa el encabezar la lucha por el cambio y Partido Comunista, monolítico, prudente y ulteriormente contra el marxismo. Tal fue el premunido de un eficaz y probado plan de caso de Mario Arnello que provenía de las acción; o la nacionalista que ante la crisis huestes estanqueras, o de Sergio Onofre Jarpa partidista representan las fuerzas armadas proveniente d el Partido Agrario y, más tarde chilenas, unificatorias y también prepara- del agrariolaborismo, vinculado en los arios das" 37 . Prat intuía que este sería inevita- cuarenta a movimientos cercanos al blemente el camino. peronismo. Ambos fueron personajes sobre- salientes del Partido Nacional a finales de los ¿Pero cómo podrían las fuerzas ar- sesenta, especialmente el último, impri- madas chilenas volverse políticamente miéndole un sello que hasta hoy permanece. importantes si ellas estaban constitucional- mente subordinadas al poder civil?. Como en A pesar de la lejanía de Prat del partido, las otras transformaciones fundamentales d e éste no abandonó nunca del todo la vida los arios sesenta, la experiencia de la política. Es más, habiendo fracasado, desde su Democracia Cristiana y de la "Revolución en perspectiva, la opción partidaria, retomó otro Libertad" también tocó al mundo militar, de los más novedosos planteamientos abonando el terreno para que la no deli- estanqueros al que venía dando forma desde beración y la obediencia expresadas en el los arios cuarenta: el tema de las fuerzas "constitucionalismo formal" desde los arios armadas. Durante una entrevista en 1968 tre inta, comenzaran a hacerse trizas y abrieran expuso su "tesis del vacío de poder", según la caminos insospechados al nacionalismo y a las cual el vacío existente en Chile sería fuerzas armadas.

37. Tacna,

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II LA PIEDRA ANGULAR: EL TACNAZO

El sometimiento que los civiles lo - salvar a la institución de una amenaza de graron imponer alas fuerzas armadas disgregación como producto de su partici- durante la segunda gestión de Arturo pación en política. Más importante aún, era Alessandri, se fundamentó tanto en la imperativo en ese momento destruir la capacidad de los primeros para diseñar una posibilidad de una expansión del pensamiento política militar desde una posición de poder socialista en su interior, revelado como en la decisión castrense de marginarse aparentemente en la República de los Doce de la conting encia y encerrarse en sus tareas Días de Grove. Así, el apego al profesionales. La decisión de la sociedad civil constitucionalismo se trans formaba en una de no tolerar otra asonada permitió al especie de escudo protector para las fuerzas Presidente de la República manejar las armadas que las aislaría de los conflictos, relaciones cívico-militares sin grandes permitiéndoles reestructurarse y renacer. oposiciones, lo cual se tradujo en una serie de medidas que tendían a debilitar la de - Como ya se indicó al comienzo, una vez liberación de los oficiales. Por ello se pasó a lograda la marginación militar y asen tados retiro a todos aquellos militares respon sables institucionalmente los principios de no de los sucesos ocurridos entre 1924 y 1932, deliberación y obediencia a las autori dades rebajando el presupuesto que anualmente se legítimas y ala Constitución, la civilidad se les asignaba como también la cantidad de alejó también de los problemas e inquie tudes rec lutas. Se puso, además, especial cuidado que afectaban a esa corporación, en los nombramientos de los Comandantes produciéndose un abismo entre ambos en Jefe, colocando en el mando de cada rama mundos. El resultado fue la evolución sólo a oficiales de probada convicción separada de ellos, con casi total ignorancia constitucionalista, mientras paralelamente se civil acerca de lo que ocurría en las filas creaba el Ministerio de Defensa en militares. Con todo, desde el mismo momento reemplazo d el de Guerra a la cabeza de un del repliegue elementos aislados de la civil, imponiéndosele la pre sencia de una oficialidad, y luego de la suboficialidad, milicia armada amparada por el gobierno 38 . comenzaban a enviar señales de descontento Desde la perspectiva militar, el retiro a los que auguraban conflictos ulteriores. cuarteles permitiría recuperar la perdida unidad de cuerpo, la quebrantada disciplina En efecto, entre 1939 y 1969 se como ta mbién la verticalidad del mando; en produjeron una serie de conatos conspira tivos última instancia, se trataba de desde los cuadros castrenses que intentaban

38. Sobre este tema, véase Carlos Maldonado "Entre reacción civilista y constitucionalismo formal: las fuerzas armadas chilenas en el período 1931-1938", Hacso Dcto.No.55, 1988; Verónica Valdivia La Milicia Republicana. Los civiles en armas 1932-1936 (Stgo.,1992), caps. IV y V.

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amenazar el poder civil, aunque sin mucha por la civilidad que guiara la labor castrense fuerza. Por el lapso de veinte arios —hasta el vinculándola al acontecer nacional, dejó a final de su segunda administración—, estos estas cuerpos "al garete" en términos del rol a conatos casi invariablemente estuvieron cumplir, sin adecuarlo a la realidad de vinculados a la figura del general Carlos mediados de siglo. Esto produjo una honda Ibáñez quien desde el mismo momento del fi n frustración entre los militares, quienes se de su primer gobierno intentó volver al poder, percibían en una pendiente de decadencia sin ya fuera a través de tentativas golpistas o salida. Tales conflictos fueron utilizados por como candidato presidencial. Este afán Ibáñez para atraerse seguidores en sus ibañista logró atraer simpatizantes en las filas distintas actividades sediciosas, prometien do militares, pues su influencia e imagen eran solucionar esos problemas. Ibáñez atri buyó aún muy fuertes entre la oficia lidad, cansada dichos males a la mala gestión de los civiles de las represalias o de la despreo cupación de en la conducción del país como a la ineficacia los civiles. Por una parte, la estrechez del mismo sistema político y la necesidad de presupuestaria en materia de defensa se un régimen más autoritario. A su vez, los tradujo con los arios en un deterioro tanto de oficiales complotadores veían en Ibáñez la vía los sueldos de los oficiales como del material de canalización de sus demandas; por tanto no de guerra destinado al resguardo de la planteaban la toma del poder para las fuerzas soberanía nacional, afectando su armadas en cuanto insti tución, sino la mejoría profesionalismo e induciendo a los militares a de su realidad y de la conducción del país a hacer fuertes críticas a las autoridades por el través del caudillo que representaba tanto a estado "de postración" en que sumían a esas las fuerzas armadas como a la política 39 . No instituciones. Este problema generó, al mismo obstante, los mot ivos arriba indicados y que tiempo, graves cue stionamientos al Alto gatillarían movimien tos castrenses posteriores Mando, al cual se calificaba de inepto y sólo ya estuvieron presentes en "Línea Recta" pendiente de su buena acogida en las altas durante el ario 1955, anunciando lo que esferas de gobierno, olvidándose de los vendría. problemas de la corporación y no cumpliendo con sus funciones. Por otra parte, la En la década de los sesenta, y ya inexistencia de una doctrina elaborada desaparecida la figura de Ibáñez, los mo-

39. Sobre la orfandad doctrinaria, véase Varas Chile. Democracia. Fuerzas armadas, págs. 74-79. Los complots a los cuales se hace alusión en este párrafo, fueron el "Ariostazo" en 1939, encabezado por el general Ariosto Herrera, quién intentó en compañía de Ibáñez un movimiento cívico-militar contra el gobierno del Frente Popular; cl complot de "Las Patitas de Chancho" en 1948 contra Gabriel González Videla liderado por Ibáñez para imponer un gobierno similar al peronista argentino; PUMA (Por un Mañana Ausp icioso): grupo conspirativo de oficiales ibañistas, quienes se organizaron para asegurar la elección presidencial de aquel en 1952 en caso de no respetarse su mayoría relativa, y "Línea Recta" en 1955 durante el segundo gobierno ibañista. Como se sabe, fre nte al fracaso de su opción populista y en medio de una crisis económica general, Ibáñez intentó el recurso de la fuerza amparando a una organización sediciosa dentro del ejército —Línea Recta— que buscaba cambios a nivel nacional e institucional. Tanto en los casos de 1948 como de 1955, el tema de los bajos sueldos y la crítica al Alto Mando estuvieron presentes. Respecto a este terna, véase cita 3 y Leonidas Bravo Lo que supo un auditor de guerra (Stgo.,1955), Hugh I3icheno "Anti-parliamentary Themes in Chilean History:1920 - 1970", Goverment and Opposition, VI1,3,1972.

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vimientos del ejército fueron abandonando ese los sueldos "no alcanzaban a solventar ni los carácter personalista para hacerse más gastos más elementales. Era común ver a las complejos. La Doctrina de Seguridad Na - esposas de los oficiales recurrir a toda clase cional, como se señaló antes, renovó su de medios para ayudar al manteni miento del cosmovisión sobre nuevos principios vinien do hogar... muchos oficiales des empeñaban a llenar un vacío al asignarles nuevas tareas en labores como choferes de taxi a horas fuera de la vida nacional y, por ende, mejorando su servicio por la misma razón". Como se afirmó autoestima al sacarlos del marasmo en que se posteriormente : "los sueldo s de los oficiales habían sumido. La renaciente auto-percepción de ejército eran extrema damente bajos... el de constituir un segmento supe rior y distinto sueldo de un subteniente era tan bajo como el de la sociedad, en condiciones de asumir de los obreros comu nes... las dificultades mayores responsabilidades, ali mentó la económicas enfrenta das por el oficial, simiente deliberativa oculta por arios tras el especialmente en los rangos inferiores, no era respeto formal a la Constitución. cuestión de luj urias, sino de habitación y vestuario decentes y una educación para los La conjunción de sentimientos gene - niños" 4°. Tal realidad llevaba a los rados por el remezón que sacudía ala sociedad uniformados a buscar respon sables, siendo el chilena bajo la administración demócrata - primero de ellos el Alto Mando de la cristiana y los nuevos conceptos entregados por institución. Nuevamente como en 1955, la la Doctrina de Seguridad Nacional —nación - má s alta plana de la corporación fue señalada Estado, unidad nacional, poder nacional, como una de las principales culpables de esa geopolítica, guerra contrasubversiva—, hi cieron situación, pues no procu raba solucionar temblar los débiles cimientos en que se apoyaba realmente el problema sino que lo dilataba el constitucionalismo formal de las fuerzas una y otra vez producto de su dependencia e armadas. identificación con la autoridad civil q ue lo inducía a priorizar sus propio intereses en 41 Una honda sensación de frustración y lugar de los corporativas .Como plantearía el de haberse llegado a un punto límite invadía a general Viaux luego del Tacnazo, "la actitud los oficiales a mediados de los arios sesenta. reticente de un Alto Mando que siempre No sólo se tr ataba de la rebaja constante del manifiesta estar consciente de la gravedad del presupuesto asignado ala defensa nacional que problema económico, pero qu e nunca afectaba los salarios y pensiones de los encuentra sus soluciones, para acep tar uniformados, sino también la obsolescencia siempre arreglos parciales y acomoda ticios o cada vez más notoria de sus equipos bélicos. simplemente por no haber tenido la entereza Las remuneraciones, según el general Prats, se de planteárselo a V.E. en toda su magnitud encontraban en un nivel bastante inferior real..". Esta actitud tan dura para juzgar a los comparándolas con la de profesionales y altos mandos estaba relaci onada con el técnicos civiles de clase media. Asimismo, el funcionamiento propio de todo sistema general (R) recordaba que militar, en el cual éstos deben

40. Prats, op. cit., págs.103-104, Liisa North "Los militares en la política chilena"; Sergio Marras Confesiones, pág.123. 41. El Diario Ilustrado, 27.10.1969, citado por Alvarez et al., op. cit., pág.213.

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representar ante las autoridades del Estado las de los ejércitos para reforzar las defensas necesidades de esas entidades para que ellas ante una agresión externa; con posterioridad puedan mantener su profesionalismo, a 1959 y el período de izquierdización del eficiencia operativa, moral militar y disci- proceso cubano, los fondos fueron destina- plina. Sin embargo, esta función parece dos para equipamie nto contrainsurgencia y haberse visto dificultada desde que uno de los llegaron a los ejércitos latinoamericanos en mecanis mos de la civilidad para imponer la 1963: "Así en 1968, por ejemplo, el 76% de obe diencia a los militares fue nombrar en la la ayuda que el Dpto. de Defensa pidió para Comandancia en Jefe a oficiales de marcado América Latina era para ser gastada en sentido constitucionalista que aseguraran a las equipos y servicios relacionados con la autoridades la obediencia y el acalla-miento contrainsurgencia". E specíficamente en el de lo que pudiera consider arse una caso de Chile, entre 1953 y 1966 éste ocupó insubordinación. Los oficiales, al contrario, el segundo lugar como receptor de ayuda interpretaron dichas designaciones como una militar en cuanto a subvenciones militares y obsesión civil por "tener comandantes en jefe envío de excedentes; en una base per cápita, obsecuentes... nos llamaban los grandes recibió más asistencia militar que cualquier mudos porque no teníamos ni voz ni voto en otro país del ár ea, siendo el aporte total para ninguna parte. No podíamos r eclamar nuestras ese mismo período el 9.7% de los gastos necesidades" 42 .E1 alejamiento que totales de Chile en defensa 44 . caracterizaba las relaciones cívico-militares impedía una comunicación clara y franca,, A pesar de lo llamativas que estas cifras razón por la cual los problemas que aque jaban puedan parecer, en la práctica la asistencia al mundo castrense no fueron abor dados como norteamericana produjo más frustraciones que los uniformados deseaban, terminando por satisfacciones. Efect ivamente, si bien llegaba 43 afectar su moral . material bélico según el PAM, éste generalmente estaba en malas condiciones y era Las críticas militares también apun- muy antiguo; tal como lo ha testi moniado el taban a las deficiencias en materia de general (R) Medina Lois " ..lo que nos equipamiento que estaba viviendo la cor- entregaban eran elementos de desecho... en el poración. De acuerdo a las modificaciones caso del ejé rcito llegó, por ejemplo, un grupo de la política hemisférica posterior al fin de de exploración blindada, todo material usado y la 2a. Guerra Mundial, los pactos de ayuda que venía con la huella de los disparos de la militar fueron formalmente suscritos a Guerra de Corea y que había que reconstituirlo. través del PAM en 1953 que posibilitó el Con eso los gobiernos pen saban: las fuerzas traspaso de material bélico desdeEstados armadas no necesitan dinero para eq uipamiento Unidos y el entrenamiento de oficiales porque está la ayuda de Estados Unidos .. " . latinoamericanos en ese mismo país. Según Esta desilusionante realidad se agudizaba Liisa North, hasta la Rev olución Cubana la cuando los oficiales debían hacer cursos en ayuda estaba destinada a la modernización Estados Unidos contempla-

42. Marras, Confesiones, págs. 97 y ss.,"Declaración del General Nicanor Díaz". 43. Declaración del general (R) Horacio Toro en Sergio Marras Palabra de Soldado, pág.99. 44. Iiisa North, Los militares en la política chilena, pág.70.

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dos en el PAM, pues la comparación entre el con diversas excusas o se entregaba ..des- eq uipamiento norteamericano y el chileno era pués de considerables esfuerzos, trámites y inevitable y "..tenía que ser muy sólida la diligencias.." 47 . Estas dificultades, natu- moral para no sentirse tremendamente ralmente, se debían no sólo a la despreo- 45 frustrado" . Aún más, en 1967 el gobierno cupación civil ya tantas veces señalada, sino norteamericano consiguió la dictació n de la también a que los planes de reformas socio- Ley sobre Foreing Military Sales que eh- económicas globales que comen zaron a minaba las donaciones o préstamos de material plantearse durante los arios sesenta reque- de guerra, con lo cual la ayuda en armamento rían de un financiamiento acorde a sus se contrajo, quedando reducida al ámbito del ambiciones. La puesta en marcha de la. entrenamiento y asesoría técnica. Estas "Revolución en Libertad" hacía impres- cuestiones llevaron al surgimien to de cierto cindible dar prioridad a ciertas áreas que se resquemor entre la oficialidad ante el deseaba desarrollar y dejar en segundo plan o paternalismo" norteamericano y comenzó otras que, en apariencia, parecían menos a reclamarse la necesidad nacional de urgentes, como las fuerzas armadas. imponer doctrinas estratégicas propias que justifi caban los requerimientos por cambios En efecto, el gobierno que ha sido de equipamiento bélico, volviendo a mir ar a acusado como el culpable de haber condu cido Europa como fuente de aprovisionamiento 46 . a las fuerzas armadas al peor momento de su historia ha sido el de Frei Montalva, período En suma, es clara la existencia de que se recuerda entre los unifor mados como problemas objetivos que en apariencia pasaban "el de mayor crisis del ejér cito", produciendo fundamentalmente por el tema del presu puesto, una barrera casi infran queable con el que ni la ayuda norteamericana pudo gobierno". Se ha dicho que aquella fue la solucionar. Durante la segunda administración época de mayores problemas en de Ibáñez, hubo un intento de dotar a la remuneraciones y equipamient9 y malas defensa nacional de una cuota de recursos relaciones con la civi lidad; cuando menos se ajena al presupuesto constituida por una entendió la importancia de un aparato asignación anual de un porcentaje de las ventas defensivo nacional. Sabemos, sin embargo, del cobre, formalizada a través de una ley. Al que el recorte presupuestario en este ámbito decir del general (R) Gustavo Lei gh, ella sólo no fue privativo del gobierno de la Demo- funcionó bien durante la gestión ibañista cracia Cristiana, sino generalizado a todas las teniendo luego una "vida muy accidentada: los administraciones desde Arturo Alessan dri en gobernantes eran renuentes a cumplir con la ley adelante. Tal como lo explica el general (R) regularmente; se postergaba la entrega de Nicanor Díaz: "Esta reacción viene del fondos en forma sistemática momento en que Frei salió elegido Presidente en 1964, cuando el candidato de la derecha

45. Marras, Palabra de Soldado, págs.67-68.

46. Prats, op. cit., págs.100-101.

47. Sergio Marras, Confesiones, pág.124.

48. Declaración de Liliana Mahn en Sergio Marras, Confesiones, pág.41.

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se retiró por el "naranjazo" y la derecha, no militar, por tanto, se relacionaba con una queriéndolo„ tuvo que apoyar a Frei... El merma que no podía dejar de considerarse aceptó , pero sin condiciones. Eso nunca se separadamente del incremento de los ingre sos lo ha podido perdonar la extrema derecha a nacionales totales en esos años. la Democracia Cristiana. Entonces, todo el ataque...eso de que las fuerzas armadas Como es posible observar, el tema de la estuvieron abandonadas en tiempos de la asignación de recursos a la defensa era un Democracia Cristiana, tiene su origen en problema de larga data. La pregunta a este odio; s in embargo, nunca dijeron nada formular, por tanto, es por qué él estalló contra Alessandri, que también estuvo durante la administración de Frei Montalva. pisándonos el cordón del oxígeno" 49 . La ¿Qué ocurrió en esos turbulentos arios que misma impresión tiene el teniente-coronel lograron comenzar a hacer trizas el cons- Aldunate, quien analizando el período de la titucionalismo formal? ¿Fue acaso la "Caja de gestión de Jorge Alessandri dijo: " ..al igual Pandora" abierta con las reformas de la que en arios a nteriores, (los militares) "Revolución en Libertad"?. estuvieron dedicados a sus actividades profesionales en un ambiente extremada- Desde la óptica de este estudio, creemos mente delicado por esta situación económi- que el contexto histórico mundial y nacional de ca, siendo evidente el hecho que el los arios sesenta comenzó a preparar el camino gobierno de Alessandri no constituyó uno para que el constitucionalismo formal de las de los mejores períodos para los militares fuerzas armadas iniciara su ocaso definitivo. en este sentido" 50 . Sin duda, la tentativa demócra tacristiana de profundizar la democracia a través de una En los hechos, es claro que se había alteración de las relaciones sociales, la ido produciendo un estancamiento en la radicalización de la izquierda influida por la asignación del presupuesto destinado a la Revolución Cubana, el incremento de las Defensa Nacional. Durante el segundo demandas sociales, la crisis del populismo, las gobierno de Ibáñez, esto intentó ser revertido transformaciones qu e la administración aumentando el porcen taje dado a las fuerzas Kennedy introdujo en el manejo de la "Guerra armadas dentro del presupuesto general, el Fría" con la llamada "respuesta flexible" cual subió de un 14.43% en 1953 a un 21.94% alterando la función de las fuerzas armadas; en en 1958. Sin embargo, desde la administración fin, el marco antes analizado que ponía en Ales sandri Rodríguez éste volvió a caer: el jaque al sistema de dominación, jugaron su promedio entregado a esa repartición del papel en el cue stionamiento explícito que Estado en sus seis arios de gestión fue de advenía. Las desde antaño deterioradas 13.2%. Dicha tendencia a la baja se acentuó relaciones cívico-militares, inevitablemente se notablemente durante el gobierno de Frei vieron empeoradas en un momento como Montalva, el que asignó un promedio, entre aquel, donde el cambio social amenazaba con 1965 y 1969, de un 8.7% 51 • La molestia desbordar

49. Marras, Confesiones, pág.98. 50. Hduardo Aldunate II., El ejército de Chile 1603-1970. Actor y no espectador en la vida nacional, pág.292.

5 1 . Boletín de Sesiones de la Cámara de Senadores, 13.11.1969, pág.582.

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el sistema vigente. En palabras del general colocaría en la cabecera de los movimientos (R) Horacio Toro: "Esta tensión negativa castrenses a jóvenes oficiales: "En ausencia de entre el poder político civil y el sistema altos mandos dignos y valientes, los mandos militar hizo crisis durante la década de los 60, medios, siempre más vitales en el idealismo justamente en el momento en que nuestra profesional, han asumido en Chile, desde democracia estaba en la etapa culminant e de comienzos de siglo, el riesgo de representar su transformación de democracia política a colectivamente, por medios no violentos pero democracia social ... ese tránsito muy gradual ubicados en el límite entre la subordinación y ocurrido en los países desarrollados se vivió la insubordinación, el sentimiento insti tucional en Chile con una gran aceleración por la através de gestos simbólicos cargados de conjunción de fenómenos de alta conflic- contenido" 53 . Esta participación desta cada de tividad..". Estos se referían a lo que Toro los mandos medios en los movi mientos identificaba como un desajuste entre las deliberativos que ocurrieron, nue vamente nos demandas sociales y la capacidad del modelo lleva al tema del presupuesto. De acuerdo a las econó mico para absorberlas; el auge de los cifras entregadas en la Cámara de Senadores partidos de centro y de izquierda frente al en 1969, los grados más afectados por el notorio retroceso de la derecha como al deterioro en las re muneraciones eran aquellos traslado de los conflictos extern os de la de teniente a teniente-coronel, al igual que Guerra Fría a la realidad nacional. El aumento entre los sub oficiales, lo que en parte de la influencia de la Iglesia como elemento explicaría su mayor disposición a involucrarse moderador de las tensiones y la agudización en eventos reñi dos con los principios de de las relaciones cívico-militares también disciplina 54 . influyeron notablemente 52 .La incapacidad de responder satisfactori amente a estos desafios Estos comenzaron durante el primer y la existencia de Altos Mandos no dispues tos semestre de 1967 cuando se produjo en la a enfrentar a la civilidad como esperaban los Armada el movimiento denominado "Ma- oficiales más jóvenes, indujeron a éstos a nifiesto de los Tenientes". En él, 1Qs jóvenes encabezar la rebelión contra un sistema que ya oficiales hicieron notar la urgencia de introducir no podía ocultar su agotamiento. mejoras técnicas y aumentos salari ales en dicha rama castrense, acción por la cual fueron dados 55 Las expresiones abiertas de descon- de baja dos tenientes . A mediados del mismo tento que comenzaron a ocurrir a partir de ario, y por razones poco claras, el Comandante 1967 en casi todos los casos estuvieron pro- en Jefe del Ejército, General Bernardino tagonizadas por uniformados de rangos Parada, fue relevado de su cargo, siendo medios. En efecto, y tal como afirmaría el reemplazado por el general Luis Miqueles 56 . general (R) Horacio Toro, el quiebre paulatino Aquel ario culminaría con la declaración oficial producido entre la oficialidad y el Alto Mando gubernativa que no habría

52. Marras, Palabra de Soldado, pág.106. 53. Marras, Palabra de soldado, pág.100. 54. Boletín de Sesiones de la Cámara de Senadores, 10.11.1969, pág.317. 55. Alvarez, op. cit., pág.186. 56. Alvarez, op. cit., pág.186 y Prats, op. cit., pág.102.

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reajuste en el presupuesto para las fuerzas Aránguiz quien, a su vez, expuso la situación armadas pues, según explicaba el Ministro de al comandante en jefe, general Miqueles. Una Hacienda, tal medida tendría efectos vez que el gobierno fue informado, el inflacionarios, a pesar de lo cual el gobierno se presidente Frei destituyó a los titulares de comprometía a estudiar el tema 57 . defensa y comandancia en jefe de l ejército, reemplazándolos por el general (R) Tulio Las manifestaciones de descontento Marambio en la cartera de Defensa y al continuaron al ario siguiente cuando estalló el general Sergio Castillo Aránguiz al mando 59 caso de "las renuncias", protagonizado por un del ejército . alto número de alumnos de la Academia .de Guerra del ejército. Dado el creciente grado ¿Qué beneficios obtuvieron los ofi- de desazón, los oficiales sentían la necesidad ciales jóvenes con este movimiento? . En de manifestar públicamente "nuestro mal estar primer lugar, y dado que las razones argüidas de modo que pudiera ser percibido por el Alto para ejecutarlo eran compartidas por las altas Mando y el gobierno, y así encontrar un jerarquías institucionales y conocidas por el camino de salida..". La acción elegida sería la gobierno, el Alto Mando no tomó repre salias presentación individual de las renuncias de los contra estos uniformados y las re nuncias oficiales a los coman dantes de cuerpo o jefes fueron devueltas con el compromiso de de altas reparticiones, señalando la razón de solucionar los problemas. Más impor tante ella: "el argumento esgrimido es que no aún, el movimiento de las "renuncias" logró la pueden sostener sus hogares con sus exiguas aprobación de algunos oficiales de mayor remuneraciones y que la situación de graduación —generales— que se con virtieron decadencia institucional no les ofrece porvenir en impulsores de la idea, dándole un carácter en su carrera" 58 .Una vez diseñada la más institucional a la acción, aspecto clave estrategia, se procedió a "correr la flecha" en para dar fue rza a cualquier acto una especie de cadena para una vez logrado indisciplinario. Las frustraciones sa lariales y un grupo grande de adscriptores presentar el de equipamiento, punta de lanza de un problema a los mandos indicados. Las problema mucho más profundo como era la renuncias fueron presentadas simultáneamente existencia y participación de las fuerzas en Santiago, San Bernar do, Puente Alto, Los armadas en la vida nacional, comenzaba a Andes, San Felipe , Quillota, Viña del Mar y reunir lentamente a mando s y subordinados Valparaíso. Los comandantes que recibieron tras objetivos aún nebulosos. Como apunta el las renuncias intentaron ocultar lo ocurrido, general (R) Toro, ese pronunciamiento militar guardándo las. Sin embargo, el director de la y los que le siguieron hasta el Tacnazo no fue Academia de Guerra, coronel Gustavo considerado por sus protagonistas como una Dupuis, informó a su superior jerárquico, el insubordinación, pues se habí a tenido el comandante de Institutos Militares, general especial cuidado de escoger una acción que no Sergio Castillo quebrantara la instituciona-

57. Alvarez, op. cit.,pág.188. 58. Declaración del general (R) 11. Toro en Marras, Palabra de Soldado, pág.102; véase también Prats, op. cit., pág.110.

59. Declaración del general (R) 1-1. Toro en Marras, Palabra de Soldado, pág.102.

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lidad: "acuartelamiento sin exhibicionismo sur se activaron, como también la zona de armado ni caras pintadas. Ha habido una Laguna del Desierto que fue ocupada por constante en el sentido de utilizar la no tropas de ese país en el período demócra- violencia activa para presentar la necesidad de ta cristiano. Con respecto a Bolivia, el tema rectificaciones que sirvieran al interés de una salida al mar se retomó por esos días, institucional ... en el marco de un arrraigado viéndose la posibilidad de que Chile respeto a la Constitución" 60 . ¿De qué se estuviera "dispuesto a considerar la con- trataba entonces?. Al parecer todavía en esta cesión de un corredor para Bolivia al norte etapa, los movimie ntos no tenían otro objetivo de Chile" 62 . Tales preocupaciones castrenses que mostrar abiertamente la inquietud que los resultaban bastante importantes si se piensa invadía para hacer "entrar en razón" a las en la introducción de elementos de autoridades en términos del presupues to, pero geopolítica en los programas de estudio de también de su participación en ese bullente los oficiales como resultado del entrena- acontecer nacional del momento. Como ha miento norteamericano. La geopolítica re- recorda do la hija del general Alfredo Mahn, valorizó la noción de espacio o territorio "No era sólo un cuestionamiento por un incluye ndo a la geografía, los recursos mayor presupuesto o equipamiento, por un naturales, la población, entre otros, ofre- sueldo más digno o por mejores elementos ciendo argumentos a los militares para técnicos para mantenerse dentro de su incrementar su sentimiento de marginación profesión, sino que era una reivindicación por y desprecio civi1 63 . Ya desde principios de la participar y entroncarse mayormente en la di- década del sesenta, los planes de estudio de námica del desarrollo del país " 61 . la Acad emia Militar incluían asignaturas como fundamentos del derecho constitucio- En efecto, el punto de fondo estaba en nal, política y comercio exterior con la redefinir la función de los cuerpos armados en fmalidad de "dar a los militares mayores una sociedad cambiante. Estos conside raban elementos e instrumentos de análisis y que la marginación impuesta por los civiles discusión para que contribuyeran con alcanzaba te mas de interés castrense, tales efectividad al desarrollo del país" 64 . como las cuestiones de política exte rior. En 1964 se creó la Dirección de Fronteras y Otro tópico introducido por la Doc- Límites del Estado en la cual no se integró a trina de Seguridad Nacional que se expandió estas fuerzas, asunto que afectó vivamente a en la etapa de "crisis del desarrollismo", fue los uniformados pues hacia la fecha los el del enemigo interno. La radicalización del proble mas fronterizos con Argentina y Bolivia socialismo y la aparición del MIR después de se agudizaban. En relación a Argentina, las 1965, fortalecieron la percepción cas trense discusiones acerca de las islas al extremo de que ese enemigo estaba cerca y

60. Marras, Palabra de Soldado, pág.103.

61. Marras, Confesiones, pág.41.

62. Prats, op. cit., pág.99.

63. A. Varas, Chile. Democracia..., págs.123-124.

64. Alvarez, op. cit., pág.237.

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necesitaba ser controlado. Así lo afirmó el carácter secundario en materia presupues taria general (R) Nicanor Díaz al referirse al frente a áreas como la economía o los planes momento en que dicho tema comenzó a sociales, la radicalizada evolución del preocupar cada vez más a los uniformados: movimiento social y político, las reno vadas "Al final del período de Frei, cuando empezó teorías militares, se unieron para inducir a los el poder del MIR, Entonces empezó el uniformados a desear y exigir, dentro de los terrorismo ...ahí se despertó ya una sensación moldes de su profesión, que se los considerara de inseguridad y de responsabilidad frente a de manera menos circunstancial y más esta situación" 65 . El sentimiento estructurada. Tal confusión de sen timientos an ticomunista se fortaleció antes de la entre lo que parecían meras demandas ascensión de Allende al poder, cuando "..los gremiales y el agotamiento de un modo de comunistas empe zaron a ejercer (influencia) inserción castrense, volvió a revelarse en el sobre la comu nidad, los obreros, campesinos penúltimo ario de la gestión Frei a partir del y sobre todo orden de cosa" 66 . En la práctica, conflictivo mes de celebración de las glorias los conflictos socio-políticos desa tados del ejército. durante la experiencia de la "Revolución en Libertad" no hicieron sino madurar procesos A un ario del proceso de las "renun- antiguos -el miedo al comunismo - cias", el problema presupuestario no había expandiendo esa necesidad militar de sentirse sido resuelto como lo prometió el ministro de parte de una nación, útil a ella, frente a Defensa, general (R) Tulio Marambio, quien doctrinas atentatorias a la unidad naci onal. La aseguró su solución en "90 días" y sin dictación de la Ley de Seguridad Interior del "parches" 68 . La inquietud se acentuaba a Estado de 1958 de hecho ya estaba sirviendo medida que los meses transcurrían y no se al ejecutivo como instrumento para enfrentar presentaban nuevas alternativas. Los situaciones de crisis, ya fueran de carácter preparativos para la Parada Militar del 19 de natural o social. Ello se tradujo en la septiembre de ese ario, servi rían como canal utilización de las fuerzas armadas cada vez de comunicación entre una oficialidad que la autoridad lo consideró pertinente, como dispersa que encontró en esa práctica en ocasiones de huelgas que violaban la castrense la oportunidad de comentar tales normativa de esa ley, o "..cuando había una materias. De acuerdo a la versión del grupo 67 situación de desorden público muy grave.. " . nacio nalista Tacna, cinco oficiales de los allí Tales tareas los fueron ligando cada vez más a reunidos tomaron la decisión de convocar a la problemáti ca social del período y a una reunión para discutir "lo que andaba en desarrollar la necesidad de participar boca de todos: un posible remedio a los activamente. En suma, la falta de una males del ejército". Se realizaron un total de definición clara desde la civilidad acerca de ocho encuentros con una asistencia de 68 las funciones a cumplir por estas ins - oficiales, aproximadamente, en los cuales se tituciones, la percepción gubernativa de su abordaron temas como "la angustia

65. Marras Confesiones, pág.102, Alvarez et al., op. cit., pág.239.

66. Declaración del general Leigh en Marras, Confesiones, pág.126.

67. Declaración del general Nicanor Díaz en Manas, op. cit., pág.98.

68. Tacna, N°5.

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económica y la frustración profesional", sin Desde hacía algún tiempo, el general configurar delito de sedición ni delibe ración Viaux estaba encabezando un movimiento según el fiscal militar que luego investigó el tendiente a modificar la indiferencia del caso, general de Brigada Pablo Schaffhau ser. Alto Mando con respecto a las necesidades Lo que se discutió, en realidad, fue la manera del ejército en materia de armamento, mejo- de demostrar al gobierno el malestar que ramiento de remuneraciones y dotación de existía en el ejército, tanto entre la ofi - personal para atender eficientemente el cialidad, como la suboficialidad y la tropa. funcionamiento de las distintas unidades. El acuerdo tomado fue un "acuartelamiento Las pésimas condiciones en que, según voluntario" para el 19 de septiembre des pués Viaux, se desarrollaba la profesión, de- de la Parad a, al tiempo que se le haría llegar fraudaban a los oficiales quienes terminaban al Presidente un memorándum con sus abandonándola, lo que obligaba a su reem- demandas: salida del Ministro de Defensa y plazo por otros funcionarios de menor reestructuración general del ejército. La calidad. Tal situación era aún más grave representación del movimiento fue asumida entre la sub-oficialidad. por el mayor Arturo Marshall Marchesse. El movimiento, no obstante, fue conocido por el El corolario de todo esto era, a los Alto Mando y el gobierno, ordenando el ojos críticos del general Viaux, que el regreso de los regimientos involucrados — ejército se veía impedido de cumplir su "Yungay" y "Guardia Vieja"— a sus mis ión '...fundamental y primaria, cual es la respectivas provincias, la aprensión del de estar en condiciones de guardar la mayor Marshall y de los capitanes soberanía de la nación y formar e instruir sus FernandoNieraad y Eduardo Hantke ofi ciales reservas terrestres adecuadamente' 70. Este de esos regimientos. estado de cosas empeoró a finales de los arios sesenta porque el pacto de ayuda con En este caldeado ambiente comenza - Estados Unidos terminó y la adquisición de ron los trabajos de la Junta Calificadora material de guerra se hizo más dificil. De allí Anual, en la cual se llegó a la convicción de que en este período la crítica al Alto Mando la urgencia de atender el grave problema de se agudizara y la disciplina comenzara a 71 la inquietud indisciplinaria observada en las resquebrajarse notoriamente . Más todavía filas militares . Una vez terminada la si se considera que una vez ocurrido el caso clasificación y confeccionada la lista de de las "re nuncias", el compromiso hecho por eliminación, se reunió el Consejo de Ge - el nuevo Ministro de Defensa y por el nerales, el 16 de octubre, donde se le pidió Comandante en Jefe, de solucionar estos al general Roberto Viaux su expediente de problemas no había sido cumplido a pesar de retiro "ya que ha perdido su confianza por haber trans currido un ario, lo cual abrió un haber desarrollado actividades deli - abismo entre la oficialidad joven y sus jefes. berativas" 69 .

69. Prats, op. cit., pág. 122.

70. Florencia Varas, Conversaciones con Viaux, págs. 55-57.

71. Ibid., págs.57-58.

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Una vez que se le solicitó el retiro, se refiere a un aspe cto netamente militar Viaux volvió a Antofagasta, donde era profesional... reiteramos incansable y sere- comandante de la I División, y se resistió a namente al pueblo de Chile que nuestra entregar el mando, recibiendo el respaldo de la actuación es algo enteramente de orden oficialidad de la guarnición 72 . Obligado interno de la Institución..." 76 . Las deman das finalmente a hacerlo, se despidió de sus específicas del acuartelamiento eran las subalternos diciéndoles: " ...os hago presente medidas consideradas urg entes por los que la causa de mi retiro -según lo expresara el oficiales para que la institución cumpliera la señor Comandante en Jefe del ejército-se misión para la cual había sido creada; en debió a que tenía demasiado ascendiente entre otras palabras, el mejoramiento de las el personal de oficia les y cuadro permanente: remuneraciones y un cambio sustancial en el que era un líder. Este motivo me honra" 73 . De Alto Mando. Específicamente plantea ban vuelta en Santiago y ante un grupo de oficiales que: "...como garantía de disc iplina y de varios regimientos, el general Viaux aceptó cohesión del ejército, solicitamos al Sr. a las 2.30 hrs. de la madrugada del día 21 de Presidente, cambios en el Alto Mando por octubre en cabezar el acuartelamiento en el personas que cuenten con la confianza de los regimiento Tacna, "como medida suprema Oficiales y Cuadro Permanente, como para tratar de solucionar los problemas prenda segura en la obtención de estos militares existentes" 74 . Con anterioridad a su objetivos que dicen relación directa y ingreso, se había apresado al Comandante de deter minante con las instituciones armadas y esta unidad, para encabezar un con Chile mismo 77 . acuartelamiento que contaría con el respaldo de la Esc uela de Suboficiales, el Batallón Mientras tanto, el Presidente decretó Blindado N°2 y el Batallón de Transportes el Estado de Sitio, recibió el apoyo de casi N°2. Una vez conocido este hecho, recibió todos los sectores políticos y concentró en la también la adhesión de los alumnos de la elipse del Parque Cousirio a las siguientes Academia de Guerra y Politécnica del unidades: Regimiento Maipo, de Valparaí so; ejército 75 . Desde el comien zo del Reg. Yungay, de San Felipe; Reg. Guardia acuartelamiento, Viaux in sistió que éste sólo Vieja, de los Andes; Escuela de caballería, de respondía a cuestiones corporativas y no tenía Quillota, Reg. Ingenieros, de Tejas Verdes; motivaciones políticas. Informan do a la Reg. Colchagua, de San Fernando; Reg. Buin opinión pública, comunicó que: "La acción y Escuela de Infantería. Las conver saciones emprendida en la mañana por las diferentes del comandante de la guarnición de Santiago, unidades de la guarnición de Santiago Alfredo Mahn, por encargo de

72. Prats, op. cit., págs. H9-123. 73. Arturo Olavarría, Chile bajo la Democracia Cristiana, pág.175, tomo In.

74. Florencia Varas, op. cit., pág.100.

75. Prats, op. cit., págs.125-126.

76. Olavarría, op. cit., pág.180, tomo III. 77. Estas demandas estaban contenidas en la supuesta carta que Viaux envió al Presidente Frei a principios de octubre de 1969 y que, en teoría, éste nunca recibió. En Florencia Varas, op. cit., pág.67.

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Frei, con Viaux y la mediación final del me dio fuertemente agitado dentro y fuera de Subsecretario de Salud, Patricio Silva, las filas militares. pusieron fin al levantamiento en la madru - gada del 22 de octubre y la firma de un Acta El fin del acuartelamiento era, al mismo de acuerdo entre el gobierno y los tiempo, el inicio de la etapa final de des - amotinados 78 . Esta se logró, según la versión quiciamiento institucional comenzado hacía de Viaux, cuando el subsecretario Silva le más de treinta arios, que conduciría al ocaso mostró la renuncia firmada del Ministro de definitivo del "cons titucionalismo formal". A Defensa y le aseguró que las del Comandante pesar que hasta el día de hoy el general Viaux en Jefe y de otros generales se producirían en niega cualquiera intencionalidad política al el lapso de una semana 79 . levantamiento, lo cierto es que desde que su solicitud de retiro fue conocida públi camente, El "Acta del Tacna" estableció el él se convirtió en una especie de símbolo reconocimiento explícito del general Viaux pol ítico contra un régimen que iba teniendo a la autoridad del Presidente de la República cada vez más enemigos. Como planteó en sus y de los Poderes legítimamente constituidos, Memorias el general Prats, el "acuartelamiento la toma de conocimiento de la renuncia del del Tacna tenía una fi nalidad política clara, Ministro de Defensa y la promesa que el gestada en varios pasillos durante los meses problema econ ómico sería resuelto con inmediatamente precedentes. Oscu ros urgencia. Asimismo, el inicio de un proceso personajes civiles y uniforma dos se único a fin de verificar si hubo intento de preparaban para mover las piezas del tablero atentar contra la institucionalidad del Estado de ajedrez, usando a Viaux de peón de o no, conjuntamente con la responsabilidad partida" 81 . que pudiera caberle por los civiles caídos, y el reconocimiento gubernamental de "la ac - Una vez conocidos los hechos, la titud del Sr. General Viaux al facilitar la izquierda y el gobierno acusaron a la derecha solución del problema existente y de estar involucrada en ellos y de ser el reafirma(r) su confianza en los miembros del ,acuarte lamiento una tentativa de golpe de ejército" 80 . Estado. Aunque el Partido Nacional, obviamente, negó tales cargos, su defensa del Tras el "Tacnazo", fue nombrado general Viaux y las elaboraciones posteriores a Comandante en Jefe del ejército el general raíz de este asunto, revelan la comunidad de René Schneider, luego de extenderse la intereses entre algunos sectores de ambas solicitud de retiro a las cinco antigüedades entidades. Personeros de ese Partido —entre anteriores a él: generales Mahn; Cheyre; los que se contaba Sergio Onofre Jarpa, Mario Valdés; Carvajal y Rodríguez. Schneider Arnello y Engelberto Frías— fueron tendría la ingrata misión de intentar recu perar procesados por la Fiscalía Militar por tratar de la deteriorada disciplina militar en un plegar al "Tacnazo" al Grupo N"7 de

78. Olavarría, op. cit., págs.179-180, Alvarez et al., op.cit., pág.199.

79. Florencia Varas, op. cit., pág.106.

80. Ibid., pág.107.

81. Prats, op. cit., pág.127.

40 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS/ VEROMCA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE la FACH 82 . Los nacionales explicaron el Prat reconoció haber tenido contactos con movimiento militar como el resultado del Viaux antes del acuartelamiento del Tacna, tal abandono del gobierno de las tareas que le como el Comandante en Jefe del ejército tenía eran propias, llevando al país a la anarquía conocimiento, pero que "no lo estimuló en su y la subversión. Para esta colectividad, las aventura" 84 . fuerza s armadas representaban tanto la seguridad externa como una tradición de Con todo, en lo que a este estudio libertad y de nacionalidad, para lo cual respecta, el tema de si el "Tacnazo" fue una había que entregarle los medios necesarios. intentona golpista cívico-militar será En la alocución radial realizada por Jarpa, a abordado con una atención relativamente nombre del Partido, relacionó parte de los secundaria, por cuanto sus efectos ulteriores principi os de su colectividad con la fueron más determinantes. El "Tacnazo" urgencia de dar a los militares un papel más consolidó una tendencia política generada activo en la vida nacional en el contexto de vagamente en los arios cuarenta que hacía de "la Era del Pacífico" planteada por ellos, las fuerzas armadas un actor más destacado que fortalecía los principios geopolíticos de de lo que la institucionalidad vigente la Doctrina de Seguridad Nacional vigentes consignaba. Si los estanqueros eran una voz en los estudios militares de esos arios 83 . aislada en la política general, la experiencia del gobierno demócratacristiano y del De haberse logrado la adhesión de "Tacnazo" fortaleció tal discurso, más aún gran parte del Alto Mando al levantamiento cuando él ya había penetrado en la derecha, del "Tacna", privando al gobierno de abriendo el camino a una tendencia anti- capacidad defensiva alguna, el acuartela - democrática que al fin podría dar cuerpo a miento podría haber conducido al derroca - un proyecto político de largo alcance, con miento del Presidente constitucional, dando posibilidades de éxito. Las fuerzas armadas inicio a un proceso de desconocidas con - ya estaban cruzadas por hondas contradic- secuencias en el cual los civiles no habrían ciones para poder detener su proceso de- estado ausentes. De hecho, el general Prats liber ativo. El momento esperado por los afirmó que el nacionalista-estanquero Jorge nacionalistas había llegado.

82. Alvarez et al., op. cit., pág.199. 83. Ibid, págs.199-205. 84. Prats, op. cit., pág.171. Durante una entrevista con el General Viaux, se le pidió que se refiriera a Jorge Prat y su quehacer en la vida política desde los arios cuarenta en adelante. Su actitud fue más bien de reticencia y discreción, limitándose a decir: "Muy bueno, un hombre, un gran patriota, hombre inteligente, muy bien... .(era) nacionalista...". En entrevista concedida a la autora en noviembre de 1994.

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III ¡EL NACIONALISMO ESTA VIVO! : A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS

El período que se abre con el "Tac- tente en las filas militares, cohesionarlas en nazo", en octubre de 1969, y se cierra con la torno a ella e impulsarlas a accciones que ascensión de Salvador Allende a la excedí an el marco establecido por el orden presidencia de la República en noviembre de constitucional. Entre noviembre de 1969 y 1970, es quizás uno de los más críticos que el julio de 1970 se sucedieron por lo menos dos país haya vivido. La urgencia de los distintos complots tendientes a provocar un golpe sectores políticos de elegir un candi dato militar. El primero contó con la participa ción presidencial, la fuerte movilización social, la del suegro del general Viaux, coronel (R) inquietud reinante en las filas militares, la Ra úl Igualt y oficiales de distinto grado como presión que desde afuera se ejercería sobre mayores, capitanes, subtenientes, sub oficiales ella; en fin, un cúmulo de factores que harían y algunos miembros de la FACH, en lo que se de este ario uno muy especial. conoció como el "complot de la calle Gay". Tres meses más tarde, en marzo de 1970, el Si la "Revolución en Libertad", general(R) Horacio Gamboa lideró algunas seg ún la interpretación nacionalsindicalista, reuniones clandestinas con el objeto de abrió la "Caja de Pandora" y obligó a todos derrocar al gobierno e instaurar uno de corte los actores sociales a tomar posiciones, el dictatorial al mando del general Viaux. En "Tacnazo"sembró el ímpetu deliberativo este movimiento estuvieron además entre los miembros de los institutos armados comprometidos, entre otros, los ex o' ficiales transformándolos rápidamente en personajes Neiraad, pasado a retiro tras su parti cipa ción públicos, claves en la resolución del en el intento de acuartelamiento el 19 de conflicto político. La designación del septiembre de 1969 y el mayor Arturo general Schneider como Comandante en Jefe Marshall, también en retiro desde su "atra so" del ejército, con la misión específica de al Te Deum de ese mismo año 85 . poner fin a la insubordinación, tropezaría con la singularidad política asumida por Mientras, a través de la prensa que le Viaux y su constante entorpecimiento a la era adicta, Viaux usaba reiteradamente su tarea unificatoria que el general Schneider ascendie nte sobre la oficialidad para politizarla estaba intentando desarrollar. A diferencia aún más. Inició una campaña contra el general de movimientos castrenses anteriores, de los Schneider por no respetar los acuerdos de arios cuarenta y cincuenta, que no lograron "honor" hechos por el general Mahn y involucrar a una mayoría de la oficialidad ni violarlos al haber dado de baja a los oficiales del Alto Mando, el "Tacnazo" de Viaux que habían estado involucrados en el logró sintetizar la enorme frustración exis levantamiento de octubre, asegurando

85. Prats, op. cit., págs.135-137 y 147-149.

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contar con el apoyo de gran parte de la más su figura no sólo entre los uniformados oficialidad jóven del ejército "desde los sino también entre ciertos núcleos civiles 86 GC Mayores hacia abajo" . En el texto público ..por su hombría de bien, su valor moral y de defensa a esos oficiales, Viaux exponía su sacrificio por una causa que considera justa 88 que pesaba sobre él " . . el deber moral y patriótica" . Poco despué s, el general (R) ineludible de expresar mi protesta por esa Martínez Amaro ofreció una comida en su dec isión que no vacilo en calificar de honor en el Círculo Español donde el general irritantemente injusta, profunda y Viaux planteó el carácter progresista de las peligrosamente incon veniente y abiertamente fuerzas armadas como impulsoras de los violatoria de un compromiso de honor. Se grandes cambios ocurridos en Chile a lo largo corta la carrera a 'oficiales jóvenes y de su historia, expresi ón de su " ..posición, que distinguidos que no han cometido delito ni no debe interrumpirse jamás, de vigi lante hecho deshonroso alguno. El acuartelamiento severo de los intereses superiores de la del Tacna fue una expresión de patrióticas y patria" 89 . legítimas aspiraciones de toda la oficialidad del ejército..." 87 . Tal protagonismo de Viaux La publicación de este discurso y el hecho que apareciera encarnando los consolidó aún más su figura a nivel social, intereses corporativos desde fuera de la ins - constituyéndose un movimiento cívico-mi litar tit ución, no sólo acrecentaba su simbolismo con el objet ivo de instaurar un gobierno capaz al ser visto como el único que había tenido la de realizar los anhelos de bien común valentía de defenderlos, sino deslegitima ba señalados por Viaux en su alocución. El " cada día más la acción del Alto Mando que Movimiento viene Viaux", con claros signos aparecía ante los ojos militares como nacionalistas, llamaba a ingresar a él pues " La "entregado" a las autoridades políticas. De aurora de una Patria mejor debe alumbrar, hoy allí que el trato civil hacia él y los otros o mañana. No importa cuando. Salgá mosle al comprometidos en el "Tacnazo", no fuera encuentro con nuestra viril decisión de bien visto por los oficiales y se dispusieran a chilenos por sobre todo" 9°. defender a su naciente líder. Cuando la Corte Marcial hubo de analizar la modi ficación al Aquella crisis de liderazgo que desde el auto de reo que pesaba sobre Vi aux " ocaso de González Von Marees venía ..asistieron alrededor de 200 ofi ciales padeciendo el nacionalismo, fue en parte uniformados de la Guarnición de Santiago..". superado con el surgimiento de Viaux. El haciendo recordar aquel lejano "Ruido de propio líder estanquero Jorge Prat señaló a Sables". La negativa de la Corte para dar Viaux como la persona que podría reunir en sí libertad bajo fianza al general, fue las cualidades de esa fusión entre un Oliveira interpretada por los militares como una Salazar y un Portales, imagen ideal de persecusión en su contra, agigantando aún conductor político para Prat, que según

86. Prats, op. cit., págs.143-153. 87. Olavarría, op. cit., pág.230, tomo HL 88. Ibid., págs.199-201. 89. Ibid., pág.236. 90. Ibid., pág.239.

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él Chile necesitaba: "Un hombre de espad as, y se atienden como tales .." . De acuerdo al ese hombre acosado y digno que se ha diagnóstico de Viaux, dichas prácticas habían mostrado el general Viaux". El General pasaba derivado en una sociedad carente del sentido a, simbolizar la valentía, la audacia de denun - de autoridad y orden, presa de la demagogia de ciar a un régimen, desde la perspectiva los mediocres. El "Nuevo Régimen" a nacionalista, descompuesto moral y políti - instaurarse deberí a recuperar el "ejercicio camente, "porque no ha tenido el miedo d e severo de la autoridad", pues las reformas tantos otros militares a 'meterse en política', legales no bastaban, era preciso que se sintiera tomando las banderas que ha creído jus tas...". "la mano firme de un gobierno", tal como En pocas palabras, la ausencia de un político Ibáñez lo había hecho en su primera gestión. con las características propias del conductor Había llegado la hora de la "extirpación de venía a ser llenada por Viaux quien se esta lac ra que todo lo cubre", la hora de las convertía en una esperanza, en "la única grandes decisiones para construir un "Nuevo persona que en estos momentos podría Régimen" en el cual debería otorgarse más gobernar a Chile.. " 91 . participación "organizadamente a las fuerzas verdaderamente vivas del país en el trazado de Así, lo que había comenzado, en su destino.." 92 . En suma, las críticas a la teoría, como una mera reivindicación gremial, democracia-liberal que el nacionalismo se transformaba en una opción política: esto planteaba desde antaño, encon traban al fin es, las fuerzas armadas a través de la figura de nuevos portavoces que atenuarían su Viaux. Es te ponía en el tapete muchos de los tradicional marginalidad. temas que desde hacía cuarenta arios afligían a los nacionalistas, sólo que esta vez en un En efecto, si las autoridades y los contexto diferente y dichos por un General del partidos no supieron aquilatar en su real ejército. Sin decirlo abier tamente sino en un magnitud las expresiones de d escontento de lenguaje más bien castrense, Viaux planteó el los militares, y lo que ellas escondían, otros tema de lo erróneo de la democracia sectores sí lo hicieron. Aquellos desterrados representativa con su énfasis en los derechos desde siempre a los límites del sistema, de las personas. Al igual que el nacionalismo, marginales electoralmente pero cercanos a Viaux recordaba que los deberes eran tanto, o las fuerzas armadas de modo especial, más importantes que los derechos, pues ellos comprendieron claramente las implicancias obligaban a trabajar por valores superiores y del "Tacnazo" y de la figura de Viaux: en nacionales, en lugar de hacerlo por intereses ambos encontraron al fin el pilar al cual mezquinos. El fruto de una vida consagrada asirse. El triunfo de Salvador Allende en las abs deberes atenuaría esa tendencia prevalente elecciones presidenciales del 4 de sep - en las democracias liberales a vivir " . . en un tiembre de 1970 les otorgó el argumento ambiente de demandas constantes y crecientes, final para ratificar su mirada a las fuerzas que se hacen valer armadas, exigiendo para ellas un puesto

91. Tacna, N's 3 y 4. 92. Discurso de Viaux en la Quinta "El Rosedal", en Octubre, N'1, julio de 1970. Este periódico es nombrado en Tacna con Presencia como si fueran uno solo: Presencia de Octubre. Sin embargo y dado que ambos se han encontrado aparte, se los ha citado por separado, como periódicos distintos.

44 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIV IA ORTIZ DE ZARATE de avanzada en la lucha contra el marxismo y a él la presencia de los militares: a partir una nueva función en el orden a construir. de entonces, nacionalismo y fuerzas arma- das se volverían inseparables. El 4 de septiembre se hizo realidad el vaticinio nacionalsindicalista de cuatro arios El rol jugado por Viaux y el "Tac nazo" en antes: la "Revolución en Libertad" auguraba este proceso fue determinante. El inevitablemente el triunfo del marxismo. Los levantamiento del Tacna fue, para los "sesenta días" transcurri dos entre la elección nacionalistas, la reafirmación de los valores y el ascenso de la Unidad Popular al esenciales de la nación, la manifestación gobierno, definieron el carácter de la lucha. concreta de la crisis de mando de las El nacionalismo chileno encabezaría la instituciones. A partir de ese momento campaña para empujar a las fuerzas armadas comenzaron nuevos intentos por reagrupar al al golpe, prim ero en forma vaga e inorgánica nacionalis mo chileno, ahora reforzado por para, una vez consumada la victoria popular, esos oficiales y suboficiales que a costa de su estructurar una plata forma programática sacrificio personal dieron sentido patrió tico a 93 justificatoria no sólo de un golpe sino más una acción" . El idealismo y el sacrificio, aún, de un régimen militar. La línea de Jorge valores fundamentales para el nacionalismo, Prat vencía contundentemente por sobre fueron asociados a los "rebeldes" del Tacna, todas las otras tendencias doctrinarias y dinamizando a sus seguidores al entregarles pragmáticas del nacionalismo chileno: el una bandera de lucha que era encarnación de líder estanquero que desde los arios cuarenta la patria y de sus instituciones. Tal como estuviera reclaman do una posición distinta afirma ba un grupo de autodenominados para las fuerzas armadas, triunfaba sin jóvenes combatientes "El acuartelamiento del contrapeso por sobre la "cruzada" y la glorioso Regimiento Tacna nos hizo renacer Revolución esp iritual, el corporativismo las esperanzas. Ante nuestros ojos incré dulos autoritario y el iberoame ricanismo, que no surgió su figura.. " 94 . Un tercer impacto del habían logrado unir a los diferentes "Tacnazo" fue el haber sido una especie de movimientos . Así como la mayor parte del campanada, una señal para todos aquellos que nacionalismo chileno se volvió hispanista en deseaban un cambio profundo de todas las el período posterior ala Segunda Guerra estructuras nacionales, por vías distintas a las Mundial, el nacionali smo de fines de los ofrecidas y practicadas por la demo cracia sesenta y principios de los setenta hizo del liberal. Era "un impulso para re comenzar la rol político de las fuerzas armadas su búsqueda de nuevos rumbos para Chi le. Por principal proyecto, sin el cual no sería (ello), la gesta del Tacna (es) un símbolo de posible la revolución nacionalista. Si el arrojo y rebeldía que las juventudes militares nacionalismo había estado - hasta entonces y civiles, estamos ciertos, han recogido y que estrechamente unido a un proyecto corpo - posibilitará mañana un nuevo destino para la rativista de corte hispano, ahora se sumaba patria" 95 .

93. Testimonio de Mario A. Tapia, Director del periódico. Tacna, N°7.

94. Tacna, N"3.

95. Tacna, N°7.

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La explosión nacionalista tras el lac ionadas con la razón de existencia de unas "Tacnazo" no era, sin embargo, un hecho fuerzas que buscaban afanosamente inte grarse aislado. Curiosamente, tres meses antes de a la sociedad, para lo cual deberían traspasar producirse apareció el periódico Tizona, los límites impuestos por la ins titucionalidad preocupado reiterativamente del tema de las vigente. El autor de la crónica lo dejaba claro: fuerzas armadas. Resulta sintomático que los "Al ser depositarias de nuestras más nobles tópicos militares abordados por este órgano tradiciones, no sólo pueden sino que deben periodístico fueran exactamente los mismos defenderlas, teniendo presente un hecho que en octubre plantearía el Tacna. En su confirmado por la his toria: Chile es lo que es primer número se cuestionaban acerca de si gracias a sus fuerzas armadas y su futuro esos institutos estarían preparados para como nación depende de que ellas cumplan su defender con éxito la soberanía nacional; si función" 96 .Es interesante señalar, que este ellas debían cumplir, además, servicios de periódico fue distribuído al interior del bien público; si eran sólo cuerpos pro - ejército como medio de propaganda a través fesionales "¿...o tienen también responsa - de "algunos miem bros de la institución a su bilidades políticas?". Su posición al res pecto, mando". Los análisis hechos fueron por supuesto, era la de considerar que el ampliamente discu tidos por los oficiales presupuesto que se les asignaba era muy llegándose, incluso, a que un Alto Mando reducido y que debería ser el suficiente para debiera ordenar la, requisición de ella para que ellas pudieran cumplir el fin al cual mantener la disci plina. Cuando el general es taban destinadas, evitando " ..el retiro de Prats afirmaba que el "Tacnazo" había sido excelentes oficiales y personal de las preparado con civiles y objetivos políticos, no instituciones armadas". En un ambiente tan estaba errado. caldeado por la discusión política, como el de mediados de 1969, del cual los cuerpos De la misma forma, pocos meses antes armados no estaban ajenos del todo, se del "Tacnazo" nació la revista Forja, órgano refle xionaba en especial sobre los roles oficial del renaciente Movimiento Nacional correspondientes a estas fuerzas, "...pues Sindicalista con un discurso dirigido en buena puede caer en el equívoco de creer que son un parte a las fuerzas armadas, a través del mal necesario, o considerarlas en un papel desarrollo de la teoría de las Comunidades limitado a lo exclusivamente profesional. Las Básicas. En él, se encontraba parte de esa fuerzas armadas son la columna vertebral de generación incorporada tempranamente al la nación, son las que mantienen vivos los grupo, en plena juventud, adoctrinada y sentimientos de amor patrio, orden y preparada por Ramón Callís Arrigorriaga que, disciplina, honor y abnegación, eficiencia y ya para fines de los sesenta, siendo sentido del deber..." Tal como ocurriría. en el profesionales se aprestaban "para gobernar "Tacnazo", los problemas corpora tivos con él (MRNS) a Chile.. ." 97 . Hasta media dos escondían dudas más profundas re de los sesenta el nacionalsindicalismo

96. Tizona, N°1, julio de 1969; N°2, agosto de 1969 y N°4, octubre de 1969. El autor de tales editoriales era Andrés Widow, posteriormente comprometido en el asesinato del general Schneider. 97. Bandera Negra, N°30, enero-feb. 1965. De acuerdo a lo sostenido por el periódico, desde su fundación en 1952 el MRNS se había dedicado a formar una "pléyade" de jóvenes profesionales que estaban

46 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE siguió insistiendo en la importancia de la estructurando en torno a la acción cada vez revolución espiritual para realizar la revo- más politizada de Viaux, fueron dando vida lución nacionalista, a pesar de su respaldo a a este movimiento. Cada homenaje a Viaux Acció n Nacional y el Pratismo. Sin embargo, se convertía en una oportunidad para for - una vez producido el "Tacnazo" su cor- talecer su imagen y darle coherencia a su porativismo de Comunidades Nacionales lo discurso. En mayo de 1970 co n motivo de acercó más, aunque no lo confundió, al una reunión cívico-militar en el teatro planteamiento central del pratismo-estan- Continental en la cual habló Viaux, apa reció querista: un nuevo rol para las fuerzas el periódico Presencia como una expre sión armadas en la sociedad a crear. del "Tacna -símbolo de un despertar-..que explica en forma gráfica de tiempo y lugar Asimismo, sectores cercanos a Jorge nuestra posición. Su presencia el 21 de Prat fueron parte importante en otro mo- octubre es, desde hoy, nuestra pre sencia". vimiento nacionalista que recogía el sim- Presencia era la manifestación de una bolismo del levantamiento: el grupo TAC NA, chilenidad insatisfecha, de una inquietud y en el cual destacó la figura de Sergio Miranda alarma frente a la debilidad de la defensa Carrington, Subsecretario de Salud durante el nacional y de una generación que rechazaba segundo gobierno de Ibáñez mientras Prat era todas las estructuras añejas 99. Ministro de Hacienda y primer Secretario General del Partido Nacional . Como La incapacidad para imponer social - testimonió con posterioridad, el grupo recibió mente su propuesta corporativa-hispanista y el tal nombre como una "representa ción de los agotamiento de un modelo político —el Estado símbolos y elementos nacionales más de Compromiso— y económico —in - importantes de su época y de su pasado. Por dustrialización por sustitución de importa - un lado, Tacna era el regimiento que se había ciones— sellaron la opción del nacionalismo. El levantado y opuesto al régimen político de ocaso de esos modelos provocó un desborde Frei...por otro lado, era el recuerdo de una de social que amenazaba la supervivencia del las provincias 'irredentas', que había sido sistema de dominación, induciendo a un chilena pero que se habían devuelto al Perú, y nacionalismo arrinconado y asustado a aferrarse por último era una sigla que significaba a una solución militarista tanto del conflicto 'Tropa de acción nacionalista" ' . Al grupo social como de su propio proyecto. El traslado TACNA se integraron además antiguos de formas de vida propiamente castrenses al nacistas y la Ofensiva Nacionalista de mundo civil se convirtieron, a los ojos Liberación 98 . Si bien el grupo TACNA como nacionalistas, en la única salida a una crisis que tal surgió en 1971, los núcleos que se fueron no mostraba signos de resolución sino,

orgullosos de ser nacionalsindicalistas. Esta nueva generació n, entre la que sobresalían profesores, abogados, médicos, etc., dirigía el MRNS y copaba cada vez más espacios en la penumbra. 98. Según Patricio Quiroga, Enrique Arancibia Clavel, E. Robertson y Mario A. Tapia, todos involucrados en el caso Schneider, e ran miembros de la Ofensiva Nacionalista, agrupación desprendida del Partido Nacional. Véase Quiroga Dos casos de nacionalismo autoritario en Chile, pág.47. Respecto del testimonio de Miranda Carrington, la autora agradece a Claudio Barrientos el haberle f acilitado la entrevista concedida a él en 1993. 99. Presencia, N°1, mayo de 1970.

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contrariamente, ponía en evidencia el pro - mo". A diferencia de oportunidades ante - bable colapso del sistema. De allí que el riores, las tres candidaturas—Jorge Alessan - discurso militarista de Viaux f uera visto dri por la derecha, Radomiro Tomic por la como la "poción mágica" que solucionaría Democracia Cristiana y Salvador Allende los problemas y crearía un nuevo orden bajo por la Unidad Popular— compartían con el preceptos que enfatizaran la jerarquía y la nacionalismo la convicción de encontrarse en disciplina. Tal como Viaux señalaba en el un momento de crisis. No había consenso en Continental, era necesario reiterar "...nues - torno de la s razones de ella: para la derecha, tra fe en las virtudes milita res, hoy más que la crisis estaba en el plano moral, en la nunca necesarias.." Para los movimientos "politiquería", responsable de la des - nacionalistas como para muchos militares, en moralización; para los demócratacristianos, servicio activo y en retiro, era claro que la era el producto del debilitamiento del sen - civilidad tal como estaba organizada timiento de solidaridad y de unidad políticamente no sería capaz de enfrentar con nacional; para la Unidad Popular, ella se éxito la crisis del mome nto, razón por la cual expresaba en la "realidad concreta": malas las fuerzas armadas pasaban a constituir la condiciones socio-económicas, mala última reserva. Ya a principios de 1970, distribución de la riqueza, concentración del Viaux sistematizaba claramente este pen - poder económico, entre otros 101 . samiento: "Nunca nos ha cabido duda de que aún en las peores crisis, en los momentos más A pesar que la candidatura de Ales - aciagos que puedan sacudir a la nación, por sandri era la de la derecha, ella fue orga - postrado que esté su espíritu, siempre será nizada al margen de los partidos en lo que posible abrir un nuevo camino mientras se se conoció como el Movimiento Indepen - mantenga incólume esa reserva de moral y diente por Alessandri (MIA). Tras él con - eficiencia, de disciplina e integridad fluyó una masa heterogénea de personas y ciudadana que el pabellón de nuestras armas grupos que esperaban de la figura "apo - cobija 100 . En sí ntesis, los problemas de la lítica" del candidato, de su austeridad y de Defensa Nacional no eran sino un refleje) de su plataforma, el éxito electoral. El nacio - la supervivencia de estructuras ya in servibles nalismo no estuvo ausente de ella. que requerían ser superadas. Si los políticos ya no estaban en condiciones de hacerlo, "la El día 4 de septiembre de 1970, Allende última reserva" lo haría. El empujón ganó la presidencia al obtener el 36.2% de los siguien te sería dado por el triunfo de Allende sufragios frente al 34.9% obtenido por el 4 de septiembre de 1970. Alessandri. El triunfo legal de un candidato marxista, sin embargo, alienó a la derrotada derecha y, en particular, al renaciente La campaña presidencial de ese ario nacionalismo. Durante esos "sesenta días" que enfrentó dos grandes proyectos: la "Nueva transcurrirían hasta que el Congreso Pleno República" y la "Vía chilena al socialis ratificara la victoria, el nacionalismo,

100. Ibid. 101. Joan Garcés, La pugna por la presidencia, (Stgo.,1971), Flavio Cortés, "La derecha política chilena y su relación con el autoritarismo:1952-1970", ILADES,1983, págs.84-97.

48 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VEROMCA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE en general, se la jugarí a por todos los medios zozobra", el cual debería ser ocup ado en para evitar que el marxismo llegara al poder. Su evitar que el Congreso ratificara dicho triunfo angustia por lograr este objetivo, lo llevaría a y _se eligiera la segunda mayoría. No obstante, aferrarse con desesperación a su nuevo cinco días después de los comicios Ales sandri ícono:Viaux y las fuerzas armadas. anunció públicamente que de ser elegido Presidente de la República por el Parlamento La campaña de 1970 no había sido como el 24 de octubre renu nciaría al cargo, lo que las otras, la tensión d ominaba el ambiente y la daría lugar a una nueva elección. Tanto la violencia política jugaba un papel importante. victoria de Allende como el abandono de Aunque la victoria de Allende estaba dentro de Alessandri, determinarían el surgimiento de las probabilidades, la derecha y los sectores nuevas agrupaciones nacionalistas no gobiernistas parecían no imaginar que una vinculadas estrechamente alas fuerzas situación así pudiera ocurrir real mente. Los armadas, que intentarían nuev amente dar últ imos días de la campaña de Tomic éxito a su propuesta a través de la desbordaban optimismo, mientras que en la movilización social, pero que terminarían derecha se confiaba en la imagen de Alessandri. sumándose al camino de la opción militar. El A pesar de estas ilusiones, el candidato que 13 de septiembre de 1970 nació el Movimiento llevaba el No.3 en la papeleta de votación obtuvo Cívico Patria y Libertad con la finalidad de el triunfo. Este no alcanzó la mayoría absoluta promover una nueva elección " .. para que por lo cual el Congreso Pleno debería dirimir el fuera el pueblo de Chile el árbitro supremo conflicto; en pocas palabras, no todo estaba que dirimiera la disyuntiva entre marxismo y perdido para el candidato independiente, aún democracia" 103 . En este sentido, el restaban "sesenta días" por delante. nacionalismo se aprestaba a encabezar la lucha contra el marxismo. La primera reacción de los seguidores de Alessandri fue de total desal iento e incredulidad Sin embargo, el general Viaux tam- ante las cifras, no enfrentando el hecho. Así lo bién sondeaba opini ones, buscaba aliados y testimonió el entonces miembro del MIA y estaba decidido a impedir a cualquier costo posterior líder de uno de los movimientos la llegada de Allende y la Unidad Popular al nacionalistas que más notorie dad alcanzó en los poder. En este común objetivo, el últimos arios, Pablo Rodríguez Grez: "En un nacionalismo y algunos miembros de las comienzo n o sabíamos que hacer, estábamos fuerzas armadas, en retiro y servicio activo, desconcertados, y los políticos, diría yo, no complotaron para dar un golpe de Estado. emergían, probable mente tan estupefactos como nosotros mismos" 102. Para Rodríguez Grez, El tiempo transcurrido entre el 4 de como para todos los nacionalistas, lo ocurrido el septiembre y la decisión demócratacristiana 4 de septiembre era la derrota de la de mocracia de respaldar al candidato marxista a cambio liberal que abría un período de de un Estatuto de Garantías, correspondió a la implementació n casi generalizada de una estrategia legal para evitar su ascenso.

102. Pablo Rodríguez, op.cit., pág.28. 103. Ibid., pág.30.

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Sin embargo, una vez que se tuvo la certeza tiro; actos terroristas y del "secuestro". Entre que el partido de gobierno apoyaría a estos grupos podemos distinguir a la Ofensiva Allende, estos elementos conspiradores Nacionalista de Liberación enca bezada por abandonaron definitivamente dicha táctica, Enrique Arancibia Clavel, en cuyo domicilio optando por recurrir al uso de la violencia en se hicieron muchas reuniones con "grupos la resolución del conflicto. Por ello se políticos de índole nacionalista" en las cuales concertaron para, mediant e actos terroristas, participaban militantes como Erwin crear el ambiente necesario de caos e incitar a Robertson, Mario Alfonso Tapia, Guido Poli, las fuerzas armadas a tomarse el gobierno, ulteriormente miembros del grupo Tacna. En instaurando uno de corte nacionalista y el caso Schneider, los tres mencionados fuerte. Para esto tomaron contacto con tuvieron la misión de colocar dinamita e oficiales en servicio activo en las tres ramas de imprimir panfletos culpando de ello a un los cuerpos arm ados a fin de lograr el supuesto grupo de izquierda por lo que alzamiento de unidades del ejército y la fueron detenidos en el Parque Cousirio el 8 de Armada, mientras el general Viaux se octubre de 1970. Un segundo grupo acuartelaría en algún regimiento de Santiago nacionalista sedicioso estaba dirigido por el ex haciéndose de su mando, pro vocando con esto nacista Juan Diego Dávila Basterrica y una gran alteración ins titucional que nacionalistas vinculados a él. Dávila fue obligaría al gobierno de Frei a nombrar un contact ado por Viaux con la orden de hacerse gabinete militar. Luego de sucesivas cargo del "secuestro" de Schneider el día 22 reuniones, los conspiradores decidieron que el de octubre tras haber fracasado las tentativas hecho que desataría el proceso sería el del 19 y 21 del mismo mes, encargadas al secuestro del Comandante en Jefe del ejército, miembro del MIA, Luis Gallardo. general René Schneider Chereau, en lo que se denominó "Operación Al fa". Como es sabido, El Juez Militar, general cle División dicha acción ter minó con la muerte del Orlando Urbina y el Auditor del ejército, coronel general Schneider y el juzgamiento del de Justicia Francisco S aavedra Moreno, general (R) Roberto Viaux, como cabecilla de emitieron sentencia sobre el caso Schneider. El la conspiración; su suegro, el coronel (R) Raúl cabecilla de la conspiración, Roberto Viaux, fue Igualt; el general Camilo Valenzuela; el condenado a 20 arios de presidio en su grado almirante Hugo Tirado Barros y un máximo e inhabilitación perpetua para e jercer numeroso grupo de otros uniformados y cargos públicos y derechos políticos como autor civiles comprometidos en la conspiración. del delito de secuestro con resultado de daño grave en la persona de la víctima y a 5 arios por La participación del nacionalismo en estos atentar contra la seguridad del Estado. Los hechos, estuvo dada por la presencia de nacionalistas Robertson, Tapia y Poli, fueron miembros de distintos movimientos. De hallados culpab les del delitó de conspirar y acuerdo a la estrategia de Viaux, el "Plan atentar contra la seguridad interior del Estado, Alfa" debía contar con el apoyo de un grupo siendo condenados a dos arios de relegación de civiles que actuaron como "enlaces" o menor y suspendidos de sus derechos para cabecillas de grupo", los que se encar garon ejercer cargos públicos mientras durara la de diferentes tareas. Por ejemplo, la condena. Luego esta pena fue remitida adquisición de armas desde Argentina y condicional mente, quedando sujetos a vigilancia Paraguay; la realización de prácticas de del Patronato de reos.

50 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARA TE

En el caso de Dávila Basterrica, el delito fue debilitado por su participación en esos hechos, secuestro con resultado de grave daño, por lo que lo neutralizaron políticamente. De allí que cual fue condenado a diez años y un día de el nacionalismo, sin abandonarlo por cierto, presidio e inhabilitació n absoluta y perpetua dirigió su discurso político pro fuerzas para cargos públicos y derechos políticos. Por armadas a la institución, más que a una el cargo de atentar contra la seguridad interior personalidad en particular como lo había del Estado, se le dictó pena de extrañamiento estado haciendo en los meses anteriores. La de tres arios y un día. Suerte similar corrió tarea de grupos como Tacna, el Movimiento Mario Montes, Jorge Medina Arriaza y otros Nacional Sindicalista o Tizona, era terminar lig ados a Dávila. .Uno de los implicados de articul ar una propuesta que hiciera de los directamente en el atentado contra Schneider, cuerpos armados un actor social clave e Andrés Widow, sub-Director del periódico imprescindible en el conflicto político y Tizona y autor de los reportajes antes citados, lanzarlo a esas instituciones para que se encontraba prófugo como también Enrique decidieran romper abiertamente con 40 arios Arancibia Clavel 104 . de constitucionalismo formal.

La muerte del gene ral Schneider frustró Desde la óptica del naci onalismo, ellos eran los planes golpistas y enfrentó a las fuerzas el único camino posible para resolver el armadas y al nacionalismo a la toma del poder impasse político que se vivía, con la fórmula por parte de la Unidad Popular el 4 de ya señalada, el cual no podría ser enfrentado noviembre de aquel ario. El naciona lismo había con éxito por una Democracia Cristiana realizado la primera tentativa de resolver el ambigua" ni por una derecha "anquilo sada" conflicto político a través de la fuerza . A juicio del nacio nalsindicalismo, se estaba participando en la "Operación Alfa - . Su asistiendo al colapso del orden democrático - fracaso, no obstante, no lo desvió de su propósito liberal, proceso en el cual se rompía el de involucrar a los institutos castrenses en la equilibrio entre Nación-Pueblo Milicia. En tal lucha y derrota del mar xismo. Con todo, algo situación debía justificarse teóricamente el cambió. En efecto, si entre el "Tacnaz o" y el nuevo rol que tendrían las fuerzas armadas . asesinato de Schneider la principal plataforma La desaparición del Estado democrático - para lograr este objetivo era el general Viaux, liberal, liberaba a las fuerzas armadas de la convertido en una figura política, tras los subordinación que éste le imponía 105 . El sucesos de octubre de 1970 eso ya no sería nacionalismo, por tanto, re nacía como "una posible. El líder del "Tacnazo" se vio exigencia" de la hora, era una respuesta al fuertemente vacío "de quienes ansían cambios positivos, pero que no aceptan

104. Para estos eventos, véase El caso Schneider. Operación Alfa (Ed. Quimantú,s/f); Los documentos secretos de la ITT (Stgo., 1972), Florencia Varas, op. cit., págs.123-221. Respecto de Arancibia Clavel, algunas fuentes lo sindican como militante de "Patria y Libertad" al momento de su participación en el caso Schneider. Por sus actos terroristas Arancibia fue dejado libre, pero posteriormente se encontraron algunos explosivos en su domicilio sin podérsele ubicar, razón por la cual aparece como prófugo. Ver El Siglo 17.11.1970,pág. 7; Ercilla, No. 1847, 10.12.1970, págs. 18- 19; La Tercera de la Hora, 26.01.1996, Hoy N°966, 29.01.1996, pág.8 105. "Las fuerzas armadas en los períodos de desequilibrio", en Forja, N°19.

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subordinarlos a la pérdida de la libertad". Esta postura del grupo Tacna, Tacna se erigía, así, en un símbolo de com partida en buena medida por otros sectores resistencia a la caducidad de un esquema nacionalistas como el nacionalsindicalismo, partidario y, sobre todo, al marxismo en el revela, por una parte, una continuidad con poder, tarea para la cual se necesitaba de respecto a los planteamientos básicos del una juventud deseosa de justicia, de pureza y nacionalismo de épocas anteriores, expli cable eficiencia; de un espíritu de sacrificio y por la presencia de miembros de entid ades más heroísmo, características ausentes en los antiguas. El sentido jerárquico y elitista de militantes de los partidos. El agotamiento del quienes asumirían el proceso de cambio, propio Estad o de Compromiso observado por esta del nacionalismo chileno desde los arios treinta agrupación, que había derivado en el triunfo pero reforzado por los estan queros desde el fin marxista, revelaba la urgencia de un cambio de la Segunda Guerra Mundial y el auge del que no podía ser realizado por una oposición hispanismo, p ermite verificar una línea de movida preferentemente por "el odio, el continuidad doctri naria. En segundo término, antimarxismo"; se hacía im prescindible una manifiesta que si bien el grupo aparecía alt ernativa diferente. No se ocultaba al vinculado en su origen al "Tacnazo" y a la grupo Tacna que tras la adhesión lograda victoria de la Unidad Popular en 1970, su por Allende y la Unidad Popular en las sentido de existencia traspasaba la mera elecciones municipales de 1971, se escondía reacción anti marxista. Implicaba creación: un un gran anhelo social de "una revolución orden nuevo en el cual las virtudes indicadas contra la injusticia, el estancamiento y la ocuparan un lugar central con las fuerzas dependen cia..", cuestión que justificaba el armadas. La incor poración de este actor al fin de un orden incapaz de dar satisfacción a ideario nacionalista reforzó los conceptos ese deseo. Lo que se ameritaba era la acción heroicos, la yiolencia y la muerte en la acción, de una minoría extraña a los partidos y a sus introduciendo una variante en la apuesta mitos, que recogiera esas ansias estanquera. Como hemos indicado en trabajos revolucionarias del pueblo pero también los anteriores, lo predominante en el Pratismo era de orden de "los sectores burgueses" 106. el proyecto -hispanismo, corporativismo, Estado Por taliano, fuerzas armadas con un El "Nuevo Régimen" a crear era el nuevo rol social- más que la praxis; er a un Estado Militar en manos de las fuerzas naciona lismo distinto del sacrificial armadas y de orden, concebidos como "los nacionalsindi calista. Sin embargo, el contexto grandes protagonistas de la historia futura... creado por el "Tacnazo" y la elección de con ductoras permanentes de la Allende hicieron de la acción un factor nacionalidad". De allí que la juventud importante. De allí que el énfasis en tales nacionalista, incon taminada, que integraría atributos, propios de los militares, re vistiera sus cuadros, de bería tener respeto a los una pugna doctrinaria interna, leve, entre valores permanentes de la "estirpe", amaría proyecto (la línea estanquera-pratista) y el peligro, la lucha y la muerte "como cruzada (línea nacionalsindicalista y Ofensiva simples actos de servicio " 107 . Nacionalis-

106. Tacna, N°s 1 y 2 (marzo-abril de 1971). 107. Tacna, N°11, abril de 1972.

52 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARA TE ta de Liberación). A pesar de esto, creemos dencia, que en el hecho casi ha puesto en que lo prevalente fue el proyecto. Esto no peligro nuestra propia conservación c omo resulta extraño si se considera que la estrategia nación independiente". El diagnóstico violenta ya había demostrado su fracaso; apuntaba a un supuesto desequilibrio ar- mientras no lograran introducir en el pen - mamentistico en el Cono Sur del continente, samiento de los militares una justificación en el que Chile salía desfavorecido, en doctrinaria convincente para un protagonis mo especial frente a Argentina. La comparación político de ellas, el sacrificio y el heroísmo no con el país trasandino sirvió siempre como el serían suficie ntes. Su tarea, si querían mejor ejemplo para demostrar el abandono que realmente tener éxito en destruir el "Antiguo los gobiernos habían hecho del eficaz Régimen" y construir otro, era formular esa equipamiento de las fuerzas armadas, una de base doctrinaria. las principales demandas del "Tacnazo". El desahucio del Tratado de 1902 durante el Ella fue estructurada siguiendo los segundo ario de la Unidad Popular, no hacía lineamientos del "Tacnazo", esto es, ana - sino confirmar la política exterior en treguista lizando el tema de las fuerzas armadas desde de Chile y el expansionismo ar gentino que distintos ángulos para terminar elaborando sólo había servido para liba-rizar nuestro la teoría del Estado Militar que daría origen, territorio, limitando nuestras posibilidades al fin, a un gobierno de las fuerza armadas y futuras". La entrega de la resolución de los nacionalista. problemas fronterizos entre ambo s países a la Corte Internacional de La Haya según los El primer tópico era el de la defensa en acuerdos chileno-argen tinos de 1972 cuanto tal. Coincidente con el renacien te confirmaba, a su juicio, el diagnóstico anterior espíritu guerrero del grupo, éste partía pues dicho Tribunal había demostrado su rechazando cualquier utopía pacifista que ineficacia en los casos de Laos, Vietnam o postulara la eliminación de los cuerpos Corea desde que " . . el sistema nació armados como llave para una mejor muerto" 108. El énfasis colocado en las convivencia, como también la limitación de controversias limítrofes con Argentina tenía, armamentos, pues ambos derivaban en la naturalmente, el objetivo de presionar a las indefensión de los pueblos. De acuerdo con el fuerzas armadas para inducirlas a modificar nacionalismo expansionista preconizado por con la fuerza los recursos asig nados a la ellos, que pretendía colocar al país a la defensa, basada en una nueva con cepción de vanguardia de Latinoamérica, esta tendencia ella. No obstante, si se piensa que durante el chilena a encabezar dichas doctrinas debilitaba gobierno de Allende los presupuestos de nuestra capacidad defensiva exponiéndolo a Defensa se incrementaron, es posible pensar posi bles conquistas: " ...la despreocupación de que estas disquisiciones sobre nuestros gobernantes ha llegado a términos tan desarmamentismo o debilidad militar estaban exagerados en materia de desarme, sin buscar más bien relacionadas con la concepció n en sus vecinos la debida correspon última que Tacna tenía sobre las

108. Tacna, N°1 marzo de 1971; N°3, mayo de 1971; N°11, abril de 1972; N°12, mayo de 1972; N°14, julio-agosto de 1972.

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fuerzas armadas y su apuesta de un futuro ceguera y falta de perspectiva, insistiendo en Estado Militarl 109 .La agudizac ión de los otorgar abs cuerpos armados sus funciones conflictos a raíz de las disputas por el territorio tradicionales, lo que les autorizaba a no austral desde el período demócratacris tiano, reconocerles el derecho de imponer las reglas servían como pretexto para tales presiones. una vez consumada la derrota del marxismo. Siguiendo los anhelos participativos de los Un segundo objetivo para la ofensiva uniformados, ya puestos de manifiesto en y militarista de Tacna sobre las fuerzas armadas, desde el levantamiento de octubre de 1969, fue su exacerbació n del carácter nacionalista Tacna aceptaba que las fuerzas armadas consustancial al ser del ejército que lo hacía actuaran como árbitros en la lucha política y responsable ante el destino de la nación. Tal como como guardianes de la Constitución como planteaban sus colegas nacional-sindicalistas, las postulaba la oposición de centro, per o no fuerzas armadas eran "la expresión histórica de "como meros espectadores del despedaza- una tarea permanente: la creaci ón de la Patria miento del país por las facciones en lucha". A chilena", o en palabras de Viaux, en el ejército se ellas estaban destinadas misiones más dignas, aprendía "que cualquier sacrificio, y desde luego más altas, acordes con su identi ficación con la el de nuestras propias vidas, es mínimo frente al "Patria", pues "no están al servicio de la imperativo de hacer a Chile más fuerte, más institucionalidad, sino que de algo mucho respetado, más justo y más feliz 110 De allí que la más grande y trascendente: la nación". Tales estrategia legalista de la oposición hasta marzo de razones debían explicar por qué dichas 1973, que insistía en derrotar a la Unidad Popular fuerzas no podían estar subordinadas a través del sistema electoral o el Congreso, era absolutamente al poder civil dentro de la vista por Tacna como una falta de sentido de la institucionalidad vigente, en tendida por realidad, como un apego absurdo a un sistema Tacna como la supeditación a los par tidos qu e inevitablemente tendría que morir. Su políticos, toda vez que corres pondía a las análisis de la oposición se resumía en "¿, a qué y fuerzas armadas "una tarea plenamente para qué?", cuando ella demostraba más miedo y creadora 111. egoísmo que afanes de voluntad y renovación, imperativos de esa hora. En el interés de la La vinculación estrecha de las ins- oposición encabezada por la Democracia tituciones castrenses en su origen con la Cristiana, según Tacna, de querer salvar los creación de la nación chilena a comienzos resabios de un sistema político moribundo, ella del siglo XIX, servía de matriz expl icativa demostraba su para argumentar doctrinariamente la res- ponsabilidad que le cabía a estos cuerpos en la supervivencia de aquella 112 . Las ra zones de índole nacionalista esgrimidas por

109. Augusto Varas, Chile. Democracia..., págs.199-201 y del mismo autor Estado y fuerzas armadas, págs .75-76 110. Tacna, N°2, abril de 1971; N°s 5-6, sept.-oct. 1971. 111. Tacna, N's 5-6, sept.-oct. 1971; N°9, enero-feb. 1972. 112. Incluso se las vinculaba con períodos anteriores a la Independencia. En la Conquista habría nacido "una nación hecha por guerreros". La Independencia habría institucionalizado el estado y las fuerzas

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Tacna, encajaban a la perfección con los presenciando el fin del Esta do democrático postulados de la Doctrina de Seguridad liberal, el nacionalsindicalismo argumenta ba Nacional en lo atingente alas ideas de Unidad a favor de un "desequilibrio" de las fuerzas Nacional y Objetivos Nacionales. La pre sencia armadas en favor de la nación. Esta teoría del de un gobierno con una ideología "desequilibrio" significaba que en el proceso internacionalista, que privilegiaba los lazos de destrucción del Estado en vigencia, se polí ticos externos al engrandecimiento del disgregaban sus elementos constitutivos por país, -con una política exterior débil y que lo que se hacía necesaria. la acción de un estimulaba la lucha de clases, evidentemente cuerpo nacional que reintegrara es os ponía en peligro ambas cuestiones. El paso elementos en pugna y abriera el camino a la siguiente, a ojos de Tacna, era la crisis del construcción de un nuevo Estado que Poder Nacional que aseguraba la supervi- sustituyera al anterior: tal eran las fuerzas vencia de la nación. Tal como han planteado armadas. Esta opción teórica de un Arriagada y Garretón, el nacionalismo —en desequilibrio a favor de la nación se tanto movimiento político— ha aportado a la justificaba porque el ejército moderno tenía estructuración y consolidación de la Doctrina un caráct er nacional y no estatal; por lo de Seguridad Nacional el carácter sagrado y el tanto, la permanencia de la nación era su 113 sentido de nación, en cuanto pr incipio responsabilidad . unificador en la tradición que constituiría "el alma nacional". El peligro en que se encontraba la nación era evidente para Tacna desde que la Adhiriendo al pensamiento de José Unidad Popular había relajado los códigos Antonio Primo de Rivera, Tacna concebía la morales que regían a la sociedad. La mo ral nación como "una unidad en lo espiritual, común, según Tacna, era un elemento unidad de destino en lo universal" . La constitutivo del ser colectivo y "estímulo nación, por tanto, implic aba empresas tonificante" que daba unidad, solidaridad y colectivas que no dependían de unos pocos ni espíritu de servicio heroico en horas de peligro de muchos, pues tenía "sustantividad propia", para la unidad nacional. Por ello, de acuerdo a perma nente. Cuando lo permanente estaba en la percepción de este grupo, los "enemigos" de peligro, correspondía al ejército recobrarlo la "nación como entidad histórica y por medio de las armas. Este razonamiento trascendente", buscaban la destrucción de los hecho para la coyuntu ra española de 1934, valores espirituales a través de un énfasis fue extrapolado por Tacna a la situación en las ideologías "y sistemas ajenos chilena bajo la Unidad Popular, la cual al ser nacional" . La lucha contra la tradición atentaba contra la supervivencia de los :y la intención gobiernista de reemplazar la valores permanentes de la nación. Por su antigua moral por una "revolucionaria", no parte y siguiendo con su teoría de estar eran sino la prueba fehaciente del peligro

armadas como "gestadoras de la nacionalidad... ", tarea continuada por Portales, la Guerra de la Confederación y la Guerra del Pacífico que habrían dado a Chile un sello militar de heroísmo y grandeza. Tacna, N°17, abril de 1973. Sin duda, Tacna recogía la más pura tradición nacionalista chilena desde Alberto Edwards y Francisco A. Encina y continuada hasta el dí a de hoy en historiadores como Gonzalo Vial. 113. Forja, N°19.

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que acechaba a la patria 114 . La única forma riqueza moral de la nación y en ellas de salvarla era recurrir a la institución comi enza siempre el proceso de recuperación encarnadora de la nació n, depositaria de sus de un pueblo" 116. Más aún cuando el gobierno valores permanentes: las fuerzas arma das de Allende hacía uso reiterado de los Estados como "escuela moral". Este análisis era una de Emergencia que suspendían muchos de los de las bases del Estado Militar. atributos del democrático-liberal, lo que en la práctica impulsaba la acción gremi al, Pero las fuerzas armadas no sólo autonomizando a sus bases de la dirección debían tener una participación más activa partidaria. La actividad de estas instancias por una razón ética, sino también en fun ción intermedias, al decir de Tacna, encaminaban de la plataforma corporativa sustentada por hacia un "nuevo orden" en el cual todos ellos el nacionalismo. De acuerdo a su diagnóstico, alcanzarían una representatividad mayor, con la experiencia de la Unidad Popular se una vez producida la "Revolución Nacio - estaba asistiendo a la disolución del Estado nalista". democrático-liberal y, al mismo tiempo, a la resurrección de las instituciones interme dias, El carácter esencialista que el nacio - los gremios, considerados las verda deras nalismo atribuía a la nación y su proyecto fuerzas sanas de la nación. El ocaso de ese corporativo, fortalecido sin duda por la orden político no implicaba la des aparición experiencia histórica de la Unidad Popular, le de las comunidades básicas de la nación sino, otorgó las bases doctrinarias a partir de las al contrario, la recuperación de su sitial: cuales justificar su propu esta de un Estado "Con (la disolución del orden democrático- Militar. Recogiendo la importante herencia de liberal) surge diáfana la idea que ha Jorge Prat, adhirió a la tesis del "vacío de sustentado el nacionalismo en cuanto que la poder" formulada por éste en 1968. universidad, así como el municipio, el gremio, Analizando el carácter de la oposición, del las fuerzas armadas ..son anterio res al conservantismo y de la revolución, como las Estado" 115 . Las Comunidades Básicas, aporte opciones en juego, Ta cna concluía que las teó rico del nacionalsindicalismo a Tacna y a únicas con posibilidades de éxito eran aquellas la tesis del Estado Militar, eran entendidas que propiciaban un cambio pro fundo de las como las orientadoras de una redefinición de estructuras de la sociedad chilena: la izquierda la convivencia social y de la creación de un y las fuerzas armadas, tal como planteó Prat. nuevo Estado: el Estado Corporativo. La Tacna retomaba esa tesis cuando afirmaba perspectiva del interés, base del liber alismo, que "será la dictadura del pro letariado o será sería superada por la de los valores y del la construcción de un nuevo Estado, de respeto que las comunidades básicas tenían a substancia militar y sindical, que posibilite sus objetivos y fines naturales. De allí que el para la patria un gran destino en lo nacional e nacionalsindicalismo afir mara que "estas internacional 117 .Asimismo, el comunidades son la gran nacionalsindicalismo opuso a la revolu-

114. Tacna, N°13, junio de 1972. 115. Tacna, N°10, marzo de 1972. 116. Forja, N°2, Esta información se ha obtenido del recuento que la misma revista hizo de su trabajo después del golpe de septiembre, en el N°30. 117. Tacna, N°14, julio-agosto de 1972.

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ción marxista la Revolución Nacional porque Al argumentar doctrinariamente que "existe un vacío de poder que frente al las fuerzas armadas sólo respondían a la marxismo los partidos tradicionales no pueden nación y a su gobernante en t anto éste llenar desde sí mismos y desde un sistema que mantuviera esa "alma nacional" con objetivos murió" 118. y prin cipios suprasociales, Tacna sentó las bases de la autonomía de las fuerzas armadas A esta conclusión no había arribado frente al poder del Estado. La tesis de que los solamente como forma de derrotar ala Unidad gremios —en los cuales incluía a las fuerzas Popular sino redefiniendo la relación entre armadas— eran ante riores a aquel y que política y fuerzas armadas. Tacna partía de la debían ser fortalecidos, aseveraba premisa que la ra zón de ser de las fuerzas simultáneamente "su autonomía frente al armadas era 'eminentemente política'', esto Estado". Desde la óptica de Tacna, la gran es: "permitir al gobernante gobernar y movilización socio-política en las univer- asegurar, a costa de cualquier sacrificio la sidades, los gremios, entre otros, en su lucha existencia integral de la nación". En los contra la Unidad Popular, ha bían ido dándole a regímenes democráticos las fuerzas armadas ésta un carácter nacionalista-corporativo: la pasan a ser de la nación y dependen del lucha no la estaban haciendo realmente los gobernante que administra al Estado. Ellas se partidos sino las instancias intermedias, los someten a la conducción política del gremios. La Revolución a producirse estaba gobernante, según Tacna, pero sólo cuando siendo preludiada por la acción gremial, ella sea legítima en cuanto a sus fines. La aseguraba, pues és ta era también la lucha Unidad Popular, siguiendo su análisis, habría nacionalista por un orden nuevo que debería optado por un camino de exclusiones, fi jando contemplar institucionalmente la partici pación su representatividad en un solo sector político de esas comunidades nacionales. En palabras de inspiración foránea por lo cual ,, no puede de Sergio Miranda "un nuevo ordenamiento con legitimidad ser el conductor político de constitucional, libremente resuelto que las fuerzas armadas, pues está en negación contemple la pa rticipación resolutiva de permanente de la voluntad de la nació n que gremios y fuerzas armadas. Creo, por ejemplo, las fuerzas armadas deben asegurar en su que determinados cargos esenciales y 119 supervivencia" . La misión del Ministerios como podrían ser Interior, nacionalismo, por lo tanto, era lograr que los Defensa, Relaciones y Minas deberían "componentes de las comunidades reservarse constitucionalmente por derecho intermedias, tomen plena conciencia de sus propio a las fuerzas armadas.. "121 derechos y posibilidades de acción político - social pre cisamente en estos momentos del La inevitabilidad de una solución disolución del Estado demoliberal" 120 . A esa drástica al agotamiento del populismo y a tarea se abocó con fuerza durante los "mil la polarización de los últimos meses del días" de la Unidad Popular. gobierno de la Unidad Popular, hacían que

118. Forja, N°14 en recuento de N°30.

119. Tacna, N°16, oct-nov.1972.

120. Forja, N°30.

121. Tacna, N°18, junio de 1973.

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la propuesta de dar participación política a las quiera, sino las fuerzas armadas deben fuerzas armadas resultara, ya para esa fechas, venir a quedarse. poco chocante, parte del juego violento que se vivía. El compañ ero de Jorge Prat en la "Ya el sólo reconstruir lo destruido por experiencia ibaflista de los arios cincuenta y la Unidad Popular exige unos diez arios. fundador de Tacna, Sergio Miranda Tampoco esto —plazos más, plazos menos—es Carrington, lo definió escuetamente cuando se suficiente. Las fuerzas armadas deben venir... le interrogó sobre una solución posible al para ser gobierno indefinida mente. La problema político el momento: "Sólo las fundamentación de por qué el gobierno fuerzas armadas. No hay otra alternativa" 122. corresponde, por derecho propio, alas fuerzas armadas. Las fuerzas armadas son el pueblo en La tesis del Estado Militar, formulada armas, y como tal, en el nuevo orde namiento en 1972, daba vida al vacío de poder augurado jurídico que sucederá al caos actual, ha de por Prat en 1968 y vagamente avizorado por tomar la conducción política, econó mica y el estanquerismo muchos arios antes. Dicha cultural de la nación. A los civiles, propuesta se basaba en la convicción que el adecuadamente organizados, corresponderá orden democrático liberal debía morir para colaborar en la conducción el Estado, siem pre dar paso a ese nuevo régimen que sería el bajo la superior tuición de las fuerzas Estado Militar. ¿De qué se trataba?: 123 armadas" . "Hay que aventar al marxismo, políti ca, ideológica y culturalmente. Pero el Esta tesis del Estado Militar, a la que pro tagonista de los nuevos tiempos no *será doctrinariamente habí a colaborado el un. partido como el actual ni los conocidos Movimiento Nacional Sindicalista, sin par tidos políticos, sino, precisamente, las embargo, no contaba con la total compla - fuerzas armadas. cencia de este último grupo, tal cómo fue expuesta por Tacna. Efectivamente, las "Las fuerzas armadas deben venir diferencias entre Revolución Espiritual y no como cirujano que opera y va a limpiar proyecto no lograron solucionarse del t odo, la silla para que otra vez se instale un cual a pesar de la experiencia de la Unidad

122. Es importante señalar que estos nacionalistas no circunscribieron su planteamiento político militarista sólo a su propio núcleo, sino que lo difundieron a otros sectores, participando en ciertos grupos dedicados a analizar la realidad política de principios de los setenta. En 1969 se creó una entidad académica denominada "Instituto de Estudios Generales" que funcionaba en conjunto con la Editorial Portada, a la cabeza de Gonzalo Vial Correa. Ella se abocó a analizar el momento histórico que el país vivía y a estudiar a las fuerzas armadas y la seguridad nacional como partes de una reflexión sobre la necesidad de un cambio profundo en la sociedad chilena. Tales reflexiones fueron difundidas a través de la revista Portada y publicaciones diversas de la entidad. En este "Instituto" participaban intelectuales, pro fesionales y empresarios como por ejemplo Jaime Guzmán, Fernando Silva Vargas, Cristián Zegers, Hugo Tagle Martínez, Joaquín Villarino, Arturo Fontai ne, Hermógenes Pérez de Arce, Jorge Prat, Carlos Larraín Peña, Igor Saavedra, Tomás Mac Hale, Enrique Campos Menéndez, Pablo Barahona y Ricardo Claro, además del mismo Miranda Carrington. Una muestra de sus publicaciones fue el libro de Pablo Barahona et al. Fuerzas armadas y Seguridad Nacional, editado en 1973. Sobre este tema, véase Renato Cristi y Carlos Ruiz El Pensamiento Conservador en Chile, págs. 103-112. 123. Tacna, N°11, abril de 1972.

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Popular. Si bien el nacionalsindicalismo No obstante, este camino estrictamen - compartía la tesis del Estado de Comunidad te milit arista del nacionalismo, no fue el Nacional sustentado en las comunidades único. Patria y Libertad escapa a una postura básicas, entendí a la Revolución Nacional tan definida como la reseñada. En el caso del como una revolución "basada en los valores grupo de Pablo Rodríguez, creemos que hubo trascendentes del hombre; una revolución una duplicidad de tácticas que com binaban la iberoamericana, entroncada en la tradición movilización de masas y el llamado a las hispánica, ajena a toda clase de materia- fuerzas armadas. En otras palabras, no lismos. La verdadera revolución...(es) la adherimos plenamente a la idea que ellos se revolución del hombre , generadora de la remitieron a una tarea de crear un ambiente revplución social (de las comunidades de caos, con el único objetivo de derrocar al básicas), creadora del Nuevo Estado". La vía gobierno de la Unidad Popular, sino también de rea lización de esta Revolución Nacional como una expresión de nacionalismo. E ste es eran las corporaciones o cuerpos intermedios un aspecto importante, puesto que nuestra entre el hombre y el Estado. Pero "todas" las hipótesis parte de la idea que antes del 4 de comunidades básicas, no sólo una —las septiembre de 1970 la mayoría de estas fuerzas armadas—. Cuando el agrupaciones se convencieron de su derrota nacionalsindicalismo planteaba la urgencia en ese plano y ello explicaría en parte su que éstas tomaran conciencia de sus derechos, mirada hacia las fuerzas armadas. S in buscaba con ello la movilización social que, a embargo, "Patria y Libertad" fue un intento su juicio, "era más fuerte que la movilización de fortalecer al nacionalismo a través de una de masas. Es más: es movil ización del pueblo amplia base de apoyo. Desde un comienzo, a través de sus organizaciones básicas —que cuando el grupo aún desple gaba su acción son más amplias y representativas que las para presionar al Congreso, el objetivo era denomi nadas "bases" por los partidos organizar una oposición fuerte estab leciendo políticos—y por tanto, es la real movilización la necesidad de "la unidad de los chilenos nacional" 124. Sólo si se lograba ese tipo de (como lo) primordial" . Como planteaba movilización y se la jerarquizaba, se podría Rodríguez Grez, ellos no preten dían instaurar un gobierno al servicio de las arrebatarle militantes a los partidos, sino comunidades de la nación y la construcción de incorporar, "por ahora, a los indife rentes en un nuevo Estado. Si esa acción de las esta lucha...". Y en esa misión de in volucrar a comunidades básicas se logró durante la vastos sectores sociales en la lucha contra el lucha contra Allende y la Unidad Popular, el marxismo en el poder, es que es posible nacionalsindicalismo pensaba que ella debía percibir su diferencia con las otras ser organizada para poder realizar realmente agrupaciones nacionalistas que más bien la Revolución Nacional. ¿Era eso mismo lo apuntaban a un inmovilismo de las masas y que pensaba Tacna? ¿Es eso lo que se percibe sólo pretendían una movilización con én fasis de la Tesis del Estado Militar elaborado por en las fuerzas armadas. Esta opción doble de Tacna?. Patria y Libertad —llamado

124. Forja, N°20.

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a fuerzas armadas y movilización de base — N°2 de su Reglamento declaraba que el es la que ha hecho problemá tico su estudio, nacionalismo se definía "como adversario pues se ha tendido a recalcar su carácter irreconciliable de toda ideología internacio - sedicioso y terrorista 125 . A nuestro juicio, nal ...adversario irreconciliable de toda Patria y Libertad fue una expresión más ideología totalitaria.. " 126 .Por ello los lazos pura de nacionalismo al estilo del MNS de que unían a los militantes con la agrupación González Von Marées, en el sentido que se estaban basados en la lealtad, la fidelidad, no rescató tanto la praxis como la doctrina, pudiendo tener amistad "con los ene migos aunque ésta parezca secundaria, desde que el de Chile..". Esta postura de guerra sentido de heroísmo y sacrificio ocupaban un transformaba al enfrentamiento con la lugar mucho más importante en su Unidad Popular en un combate a muerte, tal quehacer. La operatividad que se advierte en come) establecía el Himno del Movimiento: la or ganización, lenguaje y accionar de "Ade lante los nacionalistas, la patria nos Patria y Libertad está llena de s entido de llama a combatir/ Opongamos a la traició n misión: la lucha contra la Unidad Popular o marxista/ la fuerza insurgente de un pueblo el comunismo en el poder. Proponemos, a viril... Al viento las banderas luchemos por la modo de hi pótesis tentativa, que el contexto patria... " 127 . La decisión de enfrentar al del triunfe) de la Unidad Popular en 1970 y marxismo creaba el marco más sublime para la expe riencia de sus "mil días" de un nacionalista cercano al fascismo, como existencia, proporcionaron el marco ideal creemos que fue el de Patria y Li bertad, la donde un mo vimiento nacionalista puede posibilidad del sacrificio. Así como rezaba la desarrollarse en plenitud. La llegada de Marcha del grupo: "Porque la patria no se Allende al gobierno, colocó al enemigo en el vende y la libertad no se transa/marche mos centro del poder dando origen a un cúmulo sin miedo a la muerte/con fe de soldados de sentimientos que traducían miedo y llevando esperanzas... porque Chile es una 128 amenaza. Se sabe que esta sensación es la espada... " • Las ideas d e combate y base de cualquier movimiento fascista en sus sacrificio contenidas en las citas indicadas, comienzos Maurrás y la Acción Francesa nos revelan el deseo de desarrollar en sus fueron una de sus primeras manifestaciones. militantes una fe intransable en el éxito de su El marxismo en las alturas ofreció el motivo misión; la lucha contra el comunismo era la del sacrificio, del renacer del heroísmo, de la lucha contra el mal, la suya era la lucha lucha sin cuartel; la derrota de la Unidad correcta. El anticomu nismo "histérico" que Popular era la misión-cruzada del el mismo Rodríguez Grez reconoció envolvía nacionalismo de Patria y Libertad. a muchos de sus militantes, tal vez haya sido exacerbado por el mismo discurso de sus di - Estos sentimientos pueden apreciar- rigentes. Se hacía mucho énfasis en este se en su Organización interna. En el art. tópico, caracterizando al enemigo con los

125. Patricio Quiroga Dos casos de nacionalismo autoritario en Chile, págs. 4-39 126. Citado por Abarca et. al., "El Frente Nacionalista Patria y Libertad (1970-1973)", U.C.B.C.,1995. 127. Patria y Libertad, N°23, 1973. 128. Ibid.

60 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE peores atributos; como señalaba un folleto de desplazar a los partidos y cambiar el del grupo: "La táctica desquiciadora del sistema político, echando tierra a esa forma comunismo internacional rinde sus mejores de convivencia. Si desde la década de 1930 el frutos y se av anza a la destrucción de los nacionalismo había estado esperando una valores esenciales de la civilización cristia na. oportunidad para destruir ese orden y no lo Poco falta para que nada ni a nadie se había logrado por la supervivencia del Esta do respete, a pretexto de realizar una re- de Compromiso, el enfrentamiento social volución que para triunfar necesita demo- entablado a partir de la administración de lerlo todo" 129 . En esa óptica, só lo una "fe" Frei Montalva y llevado a su más grave tan intransable como el marxismo podía expresión con la Unidad Popular, propor - derrotarlo; los partidos ni los mecanismos cionaba una ocasión casi única. Para nadie legales eran ya suficientes. De allí que, desde era un misterio que el sistema estaba en crisis el mismo nacimiento del grupo se adjudi- —los tres programas presidenciales partían caran " ..un puesto de vanguardia en la de esa premisa, como ya se indicó—, sólo se lucha contra el comunismo y no necesitaba darle el golpe final y abrir el ren unciaremos a él. Por el contrario, cada camino para contruir algo distinto: el Estado día redoblaremos el esfuerzo empeñado, Nacionalista: "junto con salvar al país de este hasta derrotar a los agentes internacionales peligroso trance, aspiramos a es tablecer el que combaten por alinear a Chile entre las primer Estado Nacionalista chileno, inspirado naciones sometidas al yugo soviético". El en el trabajo, en el deber, en la disciplina y en la justicia social. De nada valdría liberarnos comunismo sólo podía tener un adversario de la opresión marxista, si no tuviéramos otro real, según su visión, dispuesto a todo para destino.. no se trata, para nosotros, sólo de triunfar: el nacionalismo. sacu . - Este posicionamiento radical y la dirnos de las cadenas... se trata de construir un defensa del nacionalismo como la única nuevo Estado, un nuevo gobierno; un nuevo alternativa, estaba relacionada con su sentido de la nacionalidad.. "131 . Es decir, el fin percepció n de encontrarse ante un momento de ese orden tan despreciado implicaba una mi definitorio de la historia nacional: era el sión trascendente, de creación. colapso de un orden democrático falso. La "hora actual' era interpretada como la aurora Para cumplir esa misión trascenden te debía de un nuevo día, un fin y un comienzo: "No movilizarse a la sociedad. La derrota de la vivimos una etapa histórica más: vivimos una Unidad Popular no podía ser el resultado de fas e definitiva que sellará nuestro destino, la acción de cúpulas porque eso habría comprometiendo el futuro por muchas dé- significado caer en los mismos vicios del cadas " 130 . En ese plano, la lucha contra la régimen vigente. Había que involucrar a toda Unidad Popular tenía una doble impor tancia; la sociedad. De allí el hincapié que se hiciera era la derrota de su más odiado y temido en los independientes, pues la defensa contra enemigo, pero también la posibilidad el marxismo "descansa en la inmensa masa

129. Patria y Libertad, Manifiesto Nacionalista, pág.5.

130. ¡bid, pág. 4.

131. ¡bid, pág. 7.

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independiente de chilenos... en su organi - talmente con los partidos y cualquier co - zación, proyección, entusiasmo y compren - yuntura era útil para crear lazos de unión y sión, reside la única y definitiva esperanza de ampliar el frente de oposición al marxismo. que podamos mantenernos en un régimen Así ocurrió, por ejemplo, con la Democracia político de respeto por las libertades pú blicas Cristiana y el asesinato de Edmundo Pérez má s esenciales" . Esta insistencia en la Zujovic el cual sirvió para que "el Frente participación activa también tenía un incline sus banderas en serial de duelo y sustrato nacionalista, toda vez que si ella se declara que se mantendrá inalterable en lograba estaría explícitamente probando la defensa del sistema democrático y liberta rio, posibilidad real de unir a la gran mayoría de cuya vigencia es el úni co medio para evitar la sociedad en torno a un objetivo común. L a que Chile se siga cubriendo de sangre" 133 . A lucha social contra la Unidad Popular debía pesar de estar hablando de un concepto ser una tarea nacional, no sólo un "trabajo distinto de democracia, Patria y Libertad sucio", desestabilizador, terroris ta: " La priorizó el objetivo de unión, poniendo el defensa de la democracia (es) un impulso de acento en aquello que, en teoría, los unía y trascendencia para el futuro y una fuerza no en las diferencias. poderosa para reunificar a los chilenos.. " 132 . Una de las tres tareas del nacionalismo era, La masificación del movimiento, en precisamente, la reunifi cación de los chilenos esta etapa de la lucha, requería el adoc - divididos por la "prédica marxista", trinamiento de sus militantes. A partir de restaurando el sentimiento patrio y fines de 1 97 1, la organización comenzó a transformando el Estado. Esto explica el hacer Cursos de Adoctrinamiento en los énfasis de la organización en la propaganda, cuales se hacía una síntesis histórica del la difusión de folletos, las alocu ciones nacionali smo, una sinopsis del desarrollo del radiales y el trabajo callejero: había que movimiento social, entre otros, con el mostrar ser la vanguardia. propósito de "capacitar a nuevos adherentes y militantes para que cumplan labores de ac - Esta afán de unidad no excluía a los tivistas voluntarios en barrios o comunas, en partidos políticos a los que tanto se criticaba. sindicatos y otras organizaciones" 134 . El Dentro de las tácticas de lucha que dife - mismo tipo de organización interna, dise - renciaba n, "la lucha electoral" implicaba ñada para tomar decisiones rápidas sin actuar con dichas colectividades en "toda la interrupción si alguno de los jefes nacionales gama de la acción cívica", porque también o regionales estaba ausente; el mismo hecho era necesario obstaculizar en términos legales que existieran dichos frentes en las provin - las acciones de la Unidad Popular en materia cias, revela un afán masificador. Esta opció n de medidas tendientes a crear el área de por una amplia base social de apoyo, parece pr opiedad social y la defensa de ciertas haber sido fundamental en su concepción de libertades. Por eso, nunca rompieron to la lucha hasta el paro gremial de octubre

132. Las dos citas corresponden a Frente Nacionalista Patria y Libertad Ensayo programático. Cuaderno N°1, pág. 8. Este folleto fue facilitado a la autora por Luis Ortega. 133. Abarca, op. cit., pág.106. 134. Patria y Libertad, N°9, citado por Abarca, op. cit., pág.81.

62 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE de 1972. Según Abarca, la exitosa respuesta de cumplir con su tarea de defensa de la del gobierno y de sus adherentes al paro de patria, al tener que impedir una guerra civil transportistas habría convencido a Patria y o su destrucción por obra del marxismo. A Libertad de que pese a la movilización juicio de este movimiento, correspondía a lograda en dicho evento, ésta no había sido estas entidades la defensa de la soberanía cap az de concretar el derrocamiento de política y territorial, y la seguridad interior Allende. A partir de esa fecha, el discurso amenazada por ideologías foráneas que hacia las fuerzas armadas se habría acen- buscan comprometer a la patria con fines tuado. insospechados". Chile, seguía diciendo el documento, estaba siendo atacado desde el Desde su nacimiento, Patria y Liber- interior y exterior por agentes del comu - tad combinó su estrategia de masas con un nismo, los que no hacían sino "posponer la llamado a las fuerzas armadas. Para el sig nificación de la Patria y postergan sus altos grupo, ella s constituían "la gran reserva y sagrados intereses para satisfacer sus moral de la democracia chilena", por lo cual banderías y partidismos" 136 . Su aspi ración, la mantención de la patria era su deber. Su entonces, era incorporar a las fuerzas estrategia para convocarlas a dar un golpe armadas a un puesto de vanguardia en las de Estado estuvo diseñada para infundir tareas de la defensa nacional en un amplio temores y responsabilidades. Los primeros sentido, esto es, que respondieran por la tenían rela ción con los intentos del gobierno integridad territorial y velaran por la se - de reemplazarlas por milicias revoluciona- guridad interior del Estado "colocando a rias, atentando contra su existencia: Su salvo nuestro sistema institucional de la actual intranquilidad obedece... a la peligrosa ofensa de agentes internos o eventual desaparición de los institutos foráneos". Asimismo, debían integrarse a las armados y su sustitución por milicias o tarea s de desarrollo social y cultural, ejércitos populares , según la experiencia de asumiendo el control del país en situaciones todos los países controlados por el de catástrofe y contribuyendo al comunismo internacional" . perfeccionamiento cul tural y profesional del pueblo mediante el Servicio Militar del De la misma manera, se enfatizaba el Trabajo. La orientación y dirección de tareas agravio infundido a Viaux interpretándolo de discipli na social para que toda la población como una ofensa a la institución: "los respondiera a los requerimientos nacionales vejámenes de que ha sido víctima un General debía ser, igualmente, parte de sus tareas de l a República, procesado por delitos como el difundir las tradiciones patrias y políticos, cuyo ascendiente en la oficialidad preparar permanentemente la movilización jóven y las tropas es cada día más indus trial y humana del país para enfrentar significativo" 135 .Las responsabilidades se en forma eficiente cualquier peligro de gue - vinculaban al deber de los cuerpos armados rra 137 . En suma, se trataba de insertar a

135. La primera cita corresponde a Patria y Libertad, Cuaderno N°1, pág. 38, las siguientes al Manifiesto Nacionalista, pág. 6. 136. Patria y Libertad, Cuaderno N°1, pág.39 137. Ibid, págs,39-41.

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las fuerzas armadas plenamente al quehacer las fuerzas armadas no era la instalación de nacional, abandonando la prescindencia y un ré gimen militar como planteaba Tacna, la estrechez de la profesión militar y ad - sino un Régimen Militar nacionalista de tipo hiriendo a las ideas originales bá sicas del transitorio. Dicho gobierno no podría sus- estanquerismo pratista y, posteriormente, tentarse en los partidos políticos porque ello de la Doctrina de Seguridad Nacional. No crearía divisiones sociales, "sólo un mo- deja de ser interesante que se halla vimiento nacionalista fundado en el amor a retomado la idea del Servicio Militar del Ch ile y a su pueblo, de una clara ideología Trabajo, un experimento iniciado en los popular... puede sustentar un régimen tran- arios cincuenta con Ibáñez, que hacía sitorio, no político, que devuelva a Chile la 140 realid ad la propuesta de unir "la pala al tranquilidad, la confianza y la paz social' . fusil" hecha por los estanqueros 138 . La Sin duda, Patria y Libertad recogía más la defensa de la institucio nalidad nacional de herencia del MNS que los otros movimien- ideologías foráneas era la lucha contra el tos; para ellos la disyuntiva no era la tesis denominado "enemigo interno". del vacío de poder de Prat, sino Naciona- lismo vs. Marxismo, que era la disyuntiva A medida que la polarización y la del nacionalismo tradicional que aún no violencia se agudizaron y la movilización fijaba su atención en las fuerzas armadas. de masas mostró sus limitaciones, la pro - Patria y Libertad era un resabio de e se vocación a los cuerpos armados para de - nacionalismo. rrocar por la fuerza a la Unidad Popular cambió. En 1973, diseñaron el .Plan de En síntesis, los cambios propiciados por la Levantamiento Focalizado que suponía una Democracia Cristiana en los sesenta, el acción conjunta de militares y civiles, e n Tacnazo en 1969 y la experiencia de la este caso el Regimiento Blindado N°2, pues Unidad Popular entre 1970 y 1971 lograron la única alternativa era "el poder moral y unificar al nacionalismo tras un objetivo militar de las fuerzas armadas". Este plan se común. Ello, sin embargo, no si gnificó materializó el 29 de junio de 1973 en el anular las diferencias, ni atenuar los matices "Tanquetazo" cuando el Comandante entre esos distintos grupos. La estrategia de Souper ordenó el inicio de las operaciones Patria y Libertad y las di screpancias en 139 para dar un Golpe de Estado . El p.„ torno al sentido de las fuerzas armadas resultó un fracaso y a partir de entonces el demuestran que las diferencias grupo pierde la vanguardia en la lucha. permanecían y tal vez auguraron el fracaso del nacio nalismo una vez que las fuerzas Sin embargo, lo que Patria y Libertad armadas tomaron el poder. esperaba como resultado de la acción (Je

138. Sobre el Servicio Militar del Trabajo, véase Augusto Varas, "La intervención civil de las fuerzas armadas", pág .69 en Fruhling et al., Estado y fuerzas at lacias. También Cristián Garay El Partido Agrario Laborista, págs.106-109. 139. El Tancazo de ese 29 de junio, (Ed. Quimantú, 197 140. Patria y Libertad, Manifiesto Nacionalista náqs.30-31.

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CONCLUSIONES

Este estudio completa una trilogía propia institucionalidad liberal, se hizo acerca de la evolución ideológica y política manifiesta. Desde ese punto de vista, el ario del nacionalismo chileno de derecha entre 1958 fue un hito definitorio para las op ciones 1938 y 1973, iniciado hace tres arios atrá s. que el nacionalismo, como movimien to Desde un comienzo, el tema de la relación político, tomaría en el futuro, temores que entre los movimientos nacionalistas y las terminarían por confirmarse durante los arios fuerzas armadas estuvo presente como de la administración Frei Montalva y la elemento fundamental de análisis, a pesar elección presidencial de 1970. El abando no que en algunos casos y épocas aquella fuera de parte de todos los partidos al compromiso dificilmente perceptible. La íntima convic - que sostenía el juego político hasta mediados ció n de que ambos fenómenos estaban de los sesenta, puso de manifiesto los límites ligados y que era imposible entender el que la estable democracia política chilena camino seguido por el nacionalismo sin tenía y terminó de sembrar el terreno para estudiar, aunque fuera colateralmente, a las que una propuesta desconocedora absolu - fuerzas armadas —en particular al ejército — tamente del orden democrático liberal se se constituyó en la guía permanente de esta abriera paso, pudiendo acabar de madurar un aventura. T al como se planteó en la proyecto político militarista. introducción a este estudio, la ultraderecha nacionalista nunca ha sido considerada un A nivel del desarrollo programático o actor socio-político digno de tomarse en proyectual alcanzado durante los arios que ha cuenta, dado el reducido número de cubierto este trabajo, el nacionalis mo logró militantes que atrae y su escasa presencia en dar forma definida a una propuesta política la "gran política". Lo dicho en este texto, que amenazaba con minar por un largo plazo pretende debilitar esa convicción. la tradición institucionalista de Chile. La vaga mirada lanzada por Jorge Prat y los Mientras las grandes colectividades estanqueros a los militares en los arios partidarias se proponían cambiar la faz de cuarenta como actores sociales que debían Chile a mediados de los arios sesenta, incorporarse más activamente al quehacer siguiendo el ritmo que sacudía al mundo, y nacional, logró imponerse por sobre cualquier empuj arlo hacia la democracia social, los otra tendencia dentro del nacio nalismo chileno movimientos nacionalistas evaluaban con y darle un soporte progra mático a una "miedo" tales promesas pues ellas amenazaban corriente que nunca había conseguido hacer con so cavar los pilares y acuerdos básicos que ningún aporte ni cambio a la in stitucionalidad sostenían a la sociedad chilena. Su ancestral vigente. Enemigos casi irreconciliables del antiliberalismo y antimarxismo se agudizaro n orden democrático libe ral, siempre esperaron desde fines de los arios cincuenta, cuando la vencerlo con sus teorías de la democracia probabilidad de que un candidato marxista funcional, el corporativis mo, el portalianismo pudiera llegar a ser Presidente de la Re pública, o el propio patriotismo, sin lograr amenguar a través de los mecanismos de la en un ápice la fortaleza

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de la legitimidad que lo rodeaba. La ex- buscaban los nacionalistas. Involucrar a las periencia ibariista en los cincuenta los fuerzas armadas en la política implicaba terminó de convencer que necesitaban algo desarticular el aparato democrá tico liberal, más que la exaltación de sentimientos cumpliendo uno de los grandes anhelos de patrióticos o de marginales relaciones con estos movimientos. El fin del reinado de los algunos ofi ciales golpistas, si deseaban partidos, la representación, el sufragio y la transformar realmente la sociedad chilena e participación sería asegurado con un gobier - instalar un gobierno nacionalista. Los aún no militar que, indudablemente, restau raría desperfila dos llamados de Jorge Prat a los los principios de ord en, jerarquía, autoridad militares no cabían dentro de un orden que y disciplina, colocándolos por encima de la todos reconocían; sin emb argo, cuando la exacerbación en las demandas y la legiti midad de éste empezó a ser minada por movilización. La convicción nacionalista que un amplio abanico político, Prat pudo el sistema político debía ser cambiado, y por articular en mejor forma su originalmente ende destruido, los llevó a enfatizar los vaga, proposición. La experiencia conceptos de honorab ilidad, fuerza, sentido demócratacris tiana y la llegada de Allende del deber, compromiso, sacrificio y patrio - socavaron lo suficiente al sistema pa ra que la tismo propio del mundo militar como bases moción nacionalista de que las fuerzas para la destrucción del viejo orden y la armadas debían convertirse en protagonistas construcción de uno nuevo. En función de de la vida política nacional y tomar el control esos valores —consustanciales a la existencia del poder al canzara madurez y resonancia en de la institución— y su responsabilidad de un espec tro social bastante más amplio. La velar por la nación, los oficiales destruirían tesis del vacío de poder l ogró convertirse en lo que ya no servía, y a partir de ellos un proyecto común a todas las vertientes del mismos, enmendarían rumbos. La sociedad nacionalismo, a pesar de sus matices. a crear estaría imbuída de principios cas - trenses. La falta de un líder desde el centro o la derecha política que fuera capaz de La coincidencia valórica con el neutralizar el proyecto de la vía chilena al mundo militar permiti ó justificar el carácter socialismo, confirmó la tendencia naciona- de "última reserva" que el nacionalismo le lista a mirar a las fuerzas armadas como el reafirmó. Valores compartidos y críticas recurso definitivo para detener al mar xismo, comunes al sistema permitieron asignar a las iniciando un nuevo camino. Los problemas fuerzas armadas —"encarnación de la que aquej aban a las fuerzas armadas desde patria"— responsabilidades concretas res - los arios treinta, acentuados en los sesenta, pecto de la nación, aunqu e ello significara sirvieron de canal comu nicador y unificador abandonar el juramento de subordinación a de intereses. Ello llevó a hacer de la figura la autoridad civil. Su exigencia por mejoras del General Roberto Viaux un símbolo, toda económicas y de recursos, sólo buscaba, en vez que él se erigía en la expresión de anhelos teoría, cumplir con esa misión, tratándose, comunes: una rede finición de las relaciones por tanto, de un grito desde el alma de la entre el Estado y las fuerzas armadas, patria misma que luc haba por sobrevivir. El cuestión que p ermitía una mayor presencia ocaso del orden democrático liberal al cual de éstas en la toma de decisiones que era, se asistía urgía de sentimientos patrióticos, precisamente, lo que sacrificios y heroísmos. Sólo las fuerzas

66 CAMINO AL GOLPE: EL NACIONALISMO CHILENO A LA CAZA DE LAS FUERZAS ARMADAS / VERONICA VALDIVIA ORTIZ DE ZARATE armadas podrían defenderla de la guerra desde la óptica de la acción, ofrecieron una civil o del marxismo y construir algo mejor. disposición a la confrontación que la antigua Al producirse ese contacto entre naciona - derecha no tenía. Si bien es cierto que los listas y fuerzas armadas, el nacionalismo militantes nacionalistas no fueron el núcleo dejó de ser marginal. mayoritario que pasó a conformar la nueva derecha, de todas formas gr an parte del La articulación de esta solución programa político-presidencial de Jorge Prat militarista del conflicto fue, de todas maneras, de 1963 pasó a formar parte de los prin- uno de los más grandes logros programáticos cipios, objetivos y programa del Partido de estos movimientos. La introducción de los Nacional y, más aún, los líderes que lo militares a la vida política es hasta el día de dirigirían en la lucha contra el marxismo hoy, más de veinte arios después, un problema venían de las filas nacionalistas. El proyecto que somete todo s los días a la democracia nacionalista que hacía de las fuerzas ar- chilena a nuevas tensiones. madas el principal actor del futuro político del país, pasó a esa nueva derecha confron- Si la maduración de este proyecto ya tacionista. En ese momento el nacionalismo fue un éxito importante, su mayor logro, sin entró a la "gran política", a la que realmente duda, estuvo en el terreno político. Su gran ejerce influencia y dejó, por cierto, de ser problema, como tantas veces hemos marginal. reiterado, era su incapacidad de convert irse en una opción política con reales posibi - El desplazamiento de estos sectores lidades de éxito pues nunca consiguió tener durante el segundo ario del régimen militar una base electoral suficiente para ello, lo instaurado en 1973 y el triunfo de los cual se reflejaba en su exiguo peso social. neoliberales, no atenuó, sin embargo, lo Sin embargo, cuando la antigua derecha sustancial de su proyecto sino que pasó a histórica entró en su fase final de dec adencia ser defendido por aquellos mismos que los y de desconfianza en sí misma, abrió la habían vencido. El consenso que la parti- puerta a estos marginales. Las contradic - cipación política de las fuerzas armadas ciones, dudas y desazones que cruzaban la concitó entre los asesores y admiradores del reestructuración de la derecha ya entonces, gobierno militar, aseguró la permanencia de hicieron de ella una fuerza dividida entre sus esa propuesta. anhelos de unir tradición y renova ción. La urgencia de sumarse al cambio, de no llegar La recobrada instituciona lidad de a verse a si mismos desfasados con la época 1990 sufre todavía hoy los coletazos del y por ello incapacitados de respon der a sus éxito político del nacionalismo en los se- militantes y ofrecerles un rumbo nuevo, senta. La falta de consenso en el espectro creíble y posible, influyó para que aceptaran partidario respecto al rol que los institutos la presencia del nacionalism o autoritario y castrenses deben cumplir en la institucio- antidemocrático en sus filas. El revitalizó a nalidad vigente, lo confirma ampl iamente. la derecha tanto en términos ideológicos La ezquizofrenia que cruza a la derecha como de acción, al ofrecerle un proyecto democrática hoy y la fragilidad de la político novedoso que permitiría detener el democracia chilena obligan a repensar al proceso de acentuación de las demandas nacionalismo chileno y su peso en el futuro. populares y el desorden social;

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