La Musa Aprende a Escribir
Total Page:16
File Type:pdf, Size:1020Kb
Eric A. Havelock La musa aprende a escribir Reflexiones sobre oralidad y escritura desde la Antigüedad hasta el presente Prólogo de Antonio Alegre Gorri Título original: 7beMus.e Leams to Write. RefleetioTlS on Oraiityand Literacy from Antiquity to the Present Publicado en inglés por Yale Universiry Press, New Haven y Londres Traducción de Luis Bredlow Wenda Cubierta de Mario Eskenazi A Christine cultura Libre 1" edición, 19% Qu<da<> rigurosameol< p",bibi~ .in l••utorí..á"" <>erí« do, loo ';tuUreo dd .Copyrigbt.. bo.jo'"' ....cio...,. o<t>bloci<ho en '"' leyes, ....produaión tot.J o parei.J de <SI, ob... por cualqui= método o pro=limieoto, comp..odid", l>. repror;r.ofl. y el tr>.tanliento iolo,mitiro, y l>. distribnción de eiempl.,... de d" medi20re alquiler o préstamu públiro>. © 1986by Eric A. Havelock © de todas las ediciones en castellano, Ediciones Paidós Ibérica, S.A., Mariano Cubí, 92 - 08021 Barcelona y EditorialPaidós, SAICF, Defensa, 599 - Buenos Aires ISBN: 84-493-0286-2 Depósito legal: B-22.319·1996 Impreso en NovagrafIk, S.L., Puigceroa, 127 - 08019 Ban:elona Impreso en España" Peinred in Spain SUMARIO PRÓLOGO, Antonío Alegre Gorri 11 ACRADECf.MffiNTOS .....•.•..........•....•.•..... 17 1. Programarle investigación 19 2. Presentación de la musa...................... 41 3. El descubrimiento moderno de la oralidad ..... 47 4. La radio y el redescubrimiento de la retórica 55 5. Colisiones interculturales 61 6. ¿Puede hablar un texto? 73 7. El habla almacenada 85 8. La teoría general de la oralidad primaria 95 9. La teoría especial de la oralidad griega......... 113 10. La teoría especial de la escritura griega 135 11. Las teorías especiales y sus críticos............ 157 BIBUOGRAFÍA .......•.••...........••••......... 169 ÍNDICE ANAJinCO .....•••....................... 177 PRÓlOGO A 10 largo de los dos últimos decenios, la cuestión de las re laciones entre oralidad y escritura ha venido despertando un cre ciente interés entre los estudiosos de las disciplinas más diver sas: la antropología y la filología, la historia y la semiótica, la teoría literaria y las ciencias de la comunicación se entrecruzan en un nuevo terreno de investigación apenas explorado por las generaciones anteriores y que, sin embargo, siempre estaba ahí. Lugar común donde los haya es observar que la «invención» de la escritura o, dicho con más precisión, la transición de una so ciedad carente de escritura a otra en la que toda --o casi toda manifestación lingüística relevante se efectúa por medios escri tos supone una transformación radical de todos los aspectos de la vida social y del pensamiento: ni la religión ni la literatura, ni las ciencias ni elderecho, tal como los venimos entendiendo los «civilizados» desde hace más de dos mil años ---desde que hay propiamente ..historia», otro concepto indisociable de la ex presión escrita- serían concebibles sin la intervención de la es critura. Quizás haya sido precisamente lo aparentemente trivial de tal observación lo que durante siglos disuadió a los estudio sos de examinar con más detalle cuáles fueron exactamente las repercusiones que el nacimiento de la palabra escrita provocó en las maneras de concebir la naturaleza y las relaciones socia les, en la vida religiosa y en las formas de composición poética y literaria. 12 ANTONIO ALEGRE GORRI PIlÓLOGO 13 No cabe duda de que la experiencia de los modernos medios el capítulo 1 de la presente obra, resumiendo en escuetas pala electrónicos de transmisión de mensajes -radio y televisión• bras un fascinante recorrido intelectual que nos conduce a los sirvió de pujante estímulo (y aun de modelo paradigmático) a orígenes de nuestra civilización occidental, indisociable del fe las investigaciones sobre los efectos revolucionarios de otras «tec nómeno de la escritura alfabética, y a la pregunta por el funcio nologías de la comunicación» más añejas, como la imprenta o namiento de unas sociedades basadas en la tradición oral y, sin la escritura misma, que se desarrollaron a partir de los años se embargo, dotadas de una cultura rica y compleja, como fueron senta (como se atestigua en los capítulos 3 y 4 de este libro); y las sociedades helénicas de los tiempos de Homero, Hesíodo, Pío• podríamos añadir que el impacto de los más recientes medios daro y aun de los primeros filósofos presocráticos. informáticos no habrá sido del todo ajeno al hecho de que las Tal empresa, equivalente a introducir el caballo de Troya de cuestiones de la oralidad y la escritura se hayan convertido des una metodología interdisciplinar en el sagrado recinto de los es de entonces en poco menos que un tema de moda. tudios clásicos, no pudo menos de tropezar con la empecinada Dentro del cada vez más amplio ámbito de los estudios so resistencia de muchos especialistas. Havelock observa que para bre la historia de las técnicas de la comunicación, la contribu muchos estudiosos del mundo clásico ..su profesión constituye ción de E. A. Havelock, conocido, desde la década de los cin una especie de religión mistérica, accesible a los iniciados, pero cuenta, como renombrado estudioso de la Antigüedad griega, que debe ser protegida contra toda contaminación, sea por par ocupa un lugar en absoluto secundario respecto de las obras te de otras disciplinas, sea de lo que se intuye vagamente como mucho más conocidas, sin embargo- del canadiense Marshall el materialismo o el relativismo de la modernidad.. (véase cap. McLuhan. Preciso es subrayar que Havelock no es un «maclu 11). Contemplar la Hélade clásica con el ojo relativizador del haniano.. ni epígono de nadie, sino un pionero de pleno dere antropólogo, del sociólogo o del estudioso de la literatura com cho de los estudios sobre oralidad y escritura, un investigador parativa, parangonar el Olimpo a las mitologías ..primitivas- de que llegó por vía independiente, y aproximadamente por las mis África o América, comparar a Homero con los anónimos bar mas fechas, a unas conclusiones hasta cierto punto -y sólo has dos campesinos serbocroatas de nuestro siglo, parecía, hasta hace ta cierto punto- análogas a las del teórico canadiense. La pri pocos decenios, atentar contra la creencia en la absoluta unici mera aportación decisiva del erudito inglés a la comprensión de dad del fenómeno griego, vista a su vez como gahntía y prueba la ..revolución alfabética.. (precedida, empero, por varios artícu• de la supuesta superioridad de la civilización occidental. los que vieron la luz en revistas especializadas), Prefacio a Pla Pero este prejuicio resulta infundado, se mire por donde se tón. salió de las prensas en 1963, a los pocos meses de publicarse mire. Para empezar, oralidad no es sinónimo de primitivismo, La Galaxia Gutenberg, libro que, con todo, oficiaríade respaldo o -podríamos decir sin incurrir en excesiva simplificación- ser y acicate a las ulteriores investigaciones del filólogo de Cambridge. ágrafos en una sociedad ágrafa no equivale a ser analfabetos, en ..McLuhan había llamado la atención sobre los efectos psicoló• el sentido peyorativo que el término ha adquirido en el mundo gicos e intelectuales de la imprenta: yo estaba preparado para se alfabetizado. De hecho, muchas sociedades altamente civiliza guir el hilo hacia atrás, hasta llegar a algo que había empezado das, como la de los incas, subsistieron durante siglos sin el apo unos setecientos años antes de jesucristo», escribe Havelock en yo de la escritura. La explicación de este hecho radica, según el 14 ANTONIO ALEGRE GOIlRI PRÓLOGO 15 autor de este libro, en que la función de fijación de la memoria corno sagrado e inmutable, a una sociedad política que concibe s2lectiva (recuerdos de hechos pasados. normas de conducta, su propio ordenamiento como objeto de decisión consciente de creencias religiosas o saberes prácticos) que en nuestras socieda sus miembros y, por ende, de discusión racional. Sólo en este des incumbe a la escritura, en el mundo de la oralidad primaria horizonte pueden emerger las nociones de razón, sujeto y mo se realizaba por otros medios. Ante todo. el empleo del verso, ral (y, con ello, la filosofíay la política, la retórica y el derecho); con la estructura fija del metro y el apoyo de fórmulas y epíte• y sólo a partir de ahí la indagación del orden de la naturaleza tos recurrentes, como lo observamos en Homero, servía de po deja de ser privilegio de una casta sacerdotal y queda abierta a derosa ayuda a la memorización de cualquier contenido consi la especulación racional de cualquiera que esté capacitado para derado digno de ser retenido en la memoria colectiva, tratárase ello: he aquí lo que se ha designado, con cierto anacronismo, de las hazañas de los antepasados más notables, de doctrinas cos como el «nacimiento de la ciencia». mológicas o teogónicas o de máximasde sabiduría práctica: fun El empleo generalizado de la escritura alfabética fue para este ción mnemónica ésta del verso que aún subsistiría, mucho más proceso de transformación social no menos importante de 10 acá de los albores de la escritura, en la secular tradición de la que sería, dos milenios después, la imprenta para el nacimiento de la moderna sociedad burguesa: no sólo permitió una amplia poesíadidácticá. Todavía en elsigloXVI, fray Francisco de Ávila apunta que «el verso, a juicio de los que bien sienten y son de difusión de textos escritos (y, con ello, el surgimiento de los gé él capaces, es más sentencioso y compendioso, sabroso y apaci neros literarios en prosa, la historiografía, los tratados científi• cos y, mucho más tarde, la novela), sino ofre