La Función Textual Del Espacio Topográfico En the Plumed Serpent, De D
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LA FUNCIÓN TEXTUAL DEL ESPACIO TOPOGRÁFICO EN THE PLUMED SERPENT, DE D. H. LAWRENCE THE TEXTUAL FUNCTION OF TOPOGRAPHIC SPACE IN D.H. LAWRENCE’S THE PLUMED SERPENT Nora Marisa LEÓN-REAL MÉNDEZ Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) [email protected] Resumen: En este trabajo se presenta una lectura de la novela The Plumed Serpent (1926), de D. H. Lawrence, a partir de la construcción de signi!ca- do del espacio mexicano en la narración. En esta obra, las descripciones del espacio topográ!co no se limitan a mostrar un escenario de trasfondo. Por el contrario, Lawrence inviste de una carga signi!cativa a las marcas geo- grá!cas, construyendo un espacio narrativo propio a la vez que ligado con el México fuera del texto. La descripción del paisaje sirve como método de creación de mundo, como técnica de formación del espacio narrativo. Abstract: In this essay I present a reading of D.H. Lawrence’s The Plumed Serpent (1926) through the process of making meaning of Mexican space. In this novel, descriptions of topographic space are not limited to showing a background setting. On the contrary, Lawrence confers signi!cant meaning to the landmarks, constructing a narrative space that is particular as well as © UNED. Revista Signa 23 (2014), págs. 545-562 545 N!"# M#"$%# L&'(-R&#) M*(+&, linked to the Mexico outside the text. Landscape description is used then as a method for world-making, as a technique for creating narrative space. Palabras clave: Literatura inglesa. The Plumed Serpent. D. H. Lawrence. Espacio narrativo. México. Siglo veinte. Key words: English Literature. The Plumed Serpent. D. H. Lawrence. Narrati ve Space. Mexico. Twentieth Century. Las décadas de 1920 y 1930 constituyeron el epítome de la experiencia literaria inglesa fuera del Imperio Británico en el siglo --. Tras las aventu- ras del siglo -$- narradas por autores como Rudyard Kipling o Rider Hag- gard, el periodo entre las dos grandes guerras mundiales quedó marcado por los viajes realizados por los escritores ingleses fuera de su centro sociocul- tural. Así, estas décadas se destacan no solamente por la publicación de no- velas ubicadas en países lejanos y desconocidos para los lectores ingleses, sino también por la consolidación del concepto del autor-viajero que obser- va de primera mano los universos que anteriormente eran descritos única- mente por exploradores y conquistadores. A partir de ese momento, los te- rritorios menos conocidos del mapa están al alcance de individuos que, ya sea por el horror causado por la Gran Guerra y la inminencia de un segundo enfrentamiento bélico, o porque han dejado de encontrar en los tópicos de la cultura europea una fuente auténtica para explorar sus intereses literarios, deciden salir del universo cómodo y conocido del Imperio Británico y sus países vecinos para internarse en el Nuevo Mundo. Es en este contexto que, según apunta Paul Fussell en su libro Abroad, D. H. Lawrence «can be seen as the vanguard of the British Literary Dias- pora» (1980: 11), seguido casi de inmediato por otros escritores ingleses entre los que se encuentran Aldous Huxley, Evelyn Waugh, Graham Greene, Malcolm Lowry, Ralph Bates y Arthur Calder-Marshall. A pesar de su pre- caria salud, Lawrence conoce y escribe sobre cuatro continentes: Europa, África, Oceanía y, .nalmente, América. Para él como para ningún otro, la «sensación de lugar» se vuelve una idea elusiva que debe ser perseguida como una premisa esencial para la creación literaria. Más allá de las ideas, para Lawrence es necesario encontrar el espacio en el que estas ideas son válidas, y el contexto social inglés le parece más que opresivo, sofocante. Es por ello que Lawrence busca en otros espacios la sensación de lugar apta para escribir, y esto le lleva, en 1923, a México. Junto al Lago de Chapala, en Jalisco, Lawrence encuentra el lugar apro- piado para situar una novela, que se publica en 1926, bajo el título de The 546 © UNED. Revista Signa 23 (2014), págs. 545-562 L! "#$%&'$ ()*(#!+ ,)+ )-.!%&/ (/./012"&%/ )$ THE PLUMED... Plumed Serpent, sobre la vida espiritual de México1. Este país nunca ha formado parte del Imperio Británico, y se encuentra dentro del imaginario de la cultura inglesa principalmente a través de narraciones de fallidos intentos de exploración y conquista. Pero, a partir de la obra de Lawrence, el país se instala en las letras inglesas dentro del género de la novela. La obra funda- cional de este autor marca el primero de varios esfuerzos por utilizar Méxi- co como escenario de un debate espiritual que no tiene cabida en las islas británicas. En conjunto, Lawrence y quienes le siguieron formaron un cor- pus de literatura inglesa ubicada en México con el cual crearon un espacio narrativo, una construcción retórica de referencias topográ3cas que remiten al México que los propios autores han observado en sus viajes por el país. La búsqueda del lugar apropiado para la creación literaria se convirtió en tal grado en una obsesión para Lawrence que el autoexilio fue su forma de vida, especialmente en los últimos años. Incluso en sus primeras novelas, situadas todavía en Inglaterra, existe ya lo que John Worthen de3ne en D. H. Lawrence: The Life of an Outsider como «awareness of the landscape» (2005: 30). Para el momento de su viaje a México, esta conciencia del pai- saje se ha transformado ya, según a3rma Ronald Walker en Infernal Paradi- se: Mexico and the Modern English Novel, en «dependence upon place to embody his own ‘quests’» (1978: 103), hasta el punto de que en la posteri- dad se reconoce a Lawrence por «his acute, almost neurotic, sense of place» (Fussell, 1980: 145). El estilo de Lawrence está marcado por la importancia que tiene el lugar en sus obras, y el impacto que causa —la potente in4uen- cia del lugar en la trama— tiene su origen en el esfuerzo realizado por el autor en situarse a sí mismo en los espacios indicados para la creación del ambiente que busca en sus novelas. Aunque Lawrence hereda el bagaje literario del Imperio Británico, él decide buscar sus propios referentes espaciales de forma directa viajando a lugares que, si bien no son completamente desconocidos en la literatura in- glesa, no son tampoco clichés literarios del canon de su época. Así, Lawrence empieza recorriendo la campiña inglesa para salir luego de la isla rumbo al sur de Europa, en Italia, y embarcarse rumbo a África, Australia y, luego de años de planeación, a América. De acuerdo con Worthen, «New Mexico tur- ned out to be the place Lawrence had been looking for all his life» (2005: 273). Pero, a pesar de que el rancho en Taos se convertiría en el lugar ideal en su 1 Lawrence había ya encontrado esta «sensación de lugar» cerca del agua, escribiendo Sons and Lovers, junto al Lago di Garda en Italia; «The Sisters», junto al mar de Fiascherino; Women in Love, en la costa de Cornwall, y Kangaroo en el Pací3co australiano (Worthen, 2005: 288). © UNED. Revista Signa 23 (2014), págs. 545-562 547 N!"# M#"$%# L&'(-R&#) M*(+&, memoria, no es ahí donde decide situar su única novela en espacio america- no. No es sino hasta que cruza la frontera hacia lo que él mismo llamaba el Viejo México que encuentra el lugar ideal para la escritura. Walken justi-ca esta preferencia debido a que «Mexico was much more compelling as a sym- bol of psychic revolution» (2005: 77). La idea precede al espacio —Lawren- ce tenía ya en mente una obra sobre la revolución espiritual, por lo que se lanza en busca de un lugar apto para esta—, pero sin él, la novela es imposi- ble. Con esta idea sobre lo que debía ser su nueva obra, «Lawrence had nee- ded Chapala— with its frequent -estas, its abandoned villas and hotels, its quaint church (Iglesia de la Parróquia [sic]) and especially the lake —a sym- bolic setting» (Walken, 2005: 59). La historia puede existir una vez que Lawrence ha encontrado el lugar apropiado para ella. El siguiente paso es darle forma en su obra a través de su representación narrativa. El espacio narrativo mexicano se construye en The Plumed Serpent a partir de la descripción de los elementos geográ-cos ineludibles del paisaje que se incluyen como marca de que la novela sucede en este país y en nin- gún otro. Estos elementos son tanto demarcaciones geográ-cas naturales —lagos, costas, barrancas, montañas, volcanes— como construcciones co- munitarias que se han creado alrededor de ellas —villas, pueblos, ciuda- des—, partiendo de la premisa de que el escenario en el que se ubican es un espacio nuevo para la mayoría de los lectores que el propio autor tenía en mente en el momento de escribir su obra. Desde este ángulo de análisis, el paisaje es un concepto que permite analizar el espacio como parte de la construcción retórica que es la novela. El paisaje narrado, una imagen des- crita en palabras, remite a algo observable desde un punto fuera del mismo creando un fuerte impacto visual. Y es que, desde la inmensidad del país que visita Lawrence, la descripción del paisaje que va a utilizar en su novela es la técnica más efectiva de darle una forma concreta al espacio en blanco, vacío de signi-cado para muchos lectores. La descripción del paisaje convierte a México en una unidad diegética funcional dentro de sus obras: el espacio mexicano. De acuerdo con Ronald Barthes, en su introducción al Análisis estructural del relato, la función o la cualidad funcional es una de las unidades narrativas mínimas que cargan de sentido al relato (1996: 12). Así, cuando me re-ero al espacio mexicano como funcional, argumento que no se trata solo de un trasfondo, sino de una unidad signi-cativa «que se present[a] como el término de una correlación […] que madurará más tarde al mismo nivel» (Barthes, 1996: 12).