Nosferatu. Revista de cine (Donostia Kultura)

Título: No diga bajo presupuesto, diga ... Roger Connan

Autor/es: Valencia, Manuel

Citar como: Valencia, M. (1994). No diga bajo presupuesto, diga ... Roger Connan. Nosferatu. Revista de cine. (14):79-89. Documento descargado de: http://hdl.handle.net/10251/40892

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Entidades colaboradoras:

Roger Corman

:rj c--~- ~ c• 4 e :) ·~ No diga bajo presupuesto, diga ... Roger Corman Manuel Valencia

í, bajo presupuesto, por­ céntimo, Ed. Laertes, Barcelona, los niveles de audiencia empeza­ que como bien explica el 1992), jamás realizó una pelícu­ ron a bajar, los estudios estimu­ Spropio Corman en su es­ la de serie B: "La serie B databa laban al público a ir al cine con pléndida y socarrona autobio­ de la Depresión, sólo fue un su­ el incentivo de los programas grafía (Cómo hice cien films en i·eso hasta principios de los años dobles, donde podían verse dos Hollywood y nunca perdí ni un cincuenta. En los treinta, cuando películas al precio de una. En las cintas A actuaban estrellas pilares de la extinta serie B, y si venzuelos que de otra forma lo como Clark Gable; las B se pro­ no que se lo pregunten a gente hubiesen tenido muy difícil. ducían deprisa y sin apenas gas­ como Bert l. Gordon, Edward L. También es cie110 que se mantu­ tos con artistas recién contrata­ Cahn, Jack Amold, Herbert L. vo al margen del prepotente Ho­ dos que buscaban el ascenso a Strock, Ed Wood, Kurt Neu­ llywood porque odiaba la buro­ las A, o bien estrellas maduras y mann y cientos más. Todos bara­ cracia allí dominante, le gustaba ya en declive (. .. ). El término B tos, veloces, apañados y hasta ser el único que decidiese sobre nunca fue usado en relación con -algunos inconscientemente­ el resultado final de sus creacio­ mis obras dentro de la industria creadores de tm estilo perfecta­ nes y controlar neuróticamente cinematográfica, donde cono­ mente reconocible. hasta el último centavo desem­ dan su. significado exacto. No bolsado, hasta el punto de llegar obstante, se popularizó a través Roger Cmman encam a al pro­ a amenazar a alguno de sus pro­ de los medios de comunicación. ductor/director independiente tegidos (concretame nte, Joe Recuerdo haber visto, en 1975, más incansable de todos los Dante en Píraña/Piranha, 1978) un artículo dedicado a mí en el tiempos, el más rápido y el más con suspender el rodaje por des­ New York Times Magazine. El eficiente. Ha dirigido más de bordar las previsiones económi­ autor se perdía en disquisiciones medio centenar de películas, ha cas a mitad de fi lmación en acerca de los filmes de serie B producido casi trescientas más, l 00.000 dólares. Demasiado que había realizado. No acabé edificó sus propias compañías conservador y tacaño, una faceta de leerlo. Si hay algo peor que (New World y Concorde), y ha también indisociable a la fasci­ ser etiquetado, es que te etique­ dado al público Jo que siempre nante leyenda que le rodea. Res­ ten equivocadamente". esperaba de él: acción, entreteni­ pecto al tema pecuniario, Cor­ miento y sensaciones fuertes. man se defiende: "Siempre he Así pues, aunque conceptual­ Pero Corman es mucho más que hecho peliculas muy baratas. No mente sería bastante discutible eso. Además de hacer pasar un me da miedo trabajar con gran­ ...... -. tal aseveración (está claro que buen rato a la gente, ha sabido des cantidades, lo que pasa, sim­ todos los estilemas de la serie B destilar en casi todas sus obras plemente, es que nunca he teni­ 'b se ajustan como un guante a la un pintoresco tono liberal, algo do dinero. Yo financio mis pro­ filosofía estética y creativa de bastante lógico por otra parte, ya pios filmes porque prefiero tra­ Corman), no seremos nosotros que navegando entre subgéneros bajar a mi aire, sin que nadie me T los que desprejuiciadamente y contando con presupuestos bá­ controle, por eso precisamente desmintamos al director de La sicos es bastante fácil perpetuar tengo que realizar películas de pequeña tienda de los horro­ obras contraculturales, ideológi• medio y bajo presupuesto". res (The Little Shop of Horrors, camente abiertas. Cuando menos curioso, y más [_) 1960). Y es que, si por algo se teniendo en cuenta que tan sólo ;,;;;;-. caracteriza, curiosamente, la dé­ Siempre mantuvo intacta su fa­ The Intruder (1961) le asestó ~ T, cada de los 50, es por ser el re­ chada de infranqueable indepen­ un descalabro en la taquilla, sig­ ducto inabordable de un buen diente, produciendo trabajos nificando el resto de su filmo­ :.:....:> puñado de realizadores artesa­ descartados por las majors y sa­ grafía ingresos cuantiosos y to­ nos, excéntricos, enloquecidos, cándolos adelante con cantida­ rrenciales, vendió la New World destajistas y hasta visionarios, des irrisorias de dinero, dando (ojo, sólo el nombre y la distri­ todos ellos considerados como oportunidades a numerosos jo- bución, ya que puso a buen re­ caudo todo el patrimonio fnmi­ co) por 16.500.000 dólares, y no se atrevió a embarcarse en una superproducción hasta que la 20th Century Fox no golpeó rei­ teradamente a su puerta con cliez millones y un plazo de dos me­ ses de rodaje para Frankenstein Unbound (1980). Tan colosal despilfarro jamás hubiese entra­ do en sus planes a no ser que otro se jugase el dinero.

Respecto a su labor de mecenas y Rodaje de ri'ranken stein Unb ound padrino de innumerables talentos 990). de Roger Corman (Peter Bogdanovich, Franc is PETER BEVERLY LEE GRAVES · GARLAND · VAN CLEEF

Ford Coppola, Monte Hellman, ler para atraer a la gente, engatu­ Fox. En 1948, y merced a su de­ Martín Scorsese, Jonathan Dem­ sar a algún crítico en Jos pases dicación, le ascienden a lector me... ), fue más que nada una pro­ privados ... Todo valía. de argumentos, aumentando vechosa in versión. Contratar a consecuentemente su sueldo y gente con ganas, inquieta y dis­ pasando de 32'50 dólares a 65 puesta a sacrificar parte de su Pequeño gran hombre por semana. sueldo a cambio de un empleo fue una de sus obsesiones, prag­ Roger Corman vino al mundo Su inquietud, su afán trotarnun­ mática filosofía que hay que con­ un cinco de abril de 1926 en el dista y su ansiedad por escribir templar bajo el infalible ojo clí• seno de una familia acomodada guiones le llevan a Oxford. Se :rj nico del maestro, capaz de encon­ de Detroit, hijo de William (un licencia en literatura inglesa • trar una aguja en un pajar, siem­ puntero ingeniero) y Ann, y con contemporánea y pasa una tem­ e J pre, claro está, que le ofreciesen un hermano que llegaría más porada en París hasta que se le e J unos dólares de recompensa por tarde, Gene. Entre la Gran De­ acaban los ahorros y decide re­ e ~ tan ciclópea tarea. Eso sí, todo presión del 29, el traslado a Cali­ gresar a las Américas. Se colo­ aquél que ha estado a sus órdenes fomia, los estudios de Ciencias y ca en la agencia literaria Jules ·~ no duda en tildarle de un genial Matemáticas y los primeros es­ Goldstone y la suerte no tarda negociante y de un cineasta ejem­ carceos con las féminas transcu­ en sonreírle cuando la Allied plar, aunque también eclipsan su ne su ajetreada juventud. Artists le compra el guión de condición liberal por la de em­ Highway Dragnet (Nathan Ju­ presario excesivamente meticu­ En 1943 tem1ina el bachillerato, ran, 1954) por 3.500 dólares. loso y avariento. La cara y la cruz se decide por la Ingeniería Aero­ Consigue colocarse en el rodaje de una misma moneda, que cada náutica y a mitad de curso aban­ y trabajar gratuitamente en la cual se aferre a aquella que menos dona los libros para apuntarse escenificación a cambio de fi­ le desagrade. voluntario a un programa de gurar en los créditos como es­ oficiales de la Marina. Se licen­ critor y productor asociado. También hay que recordar que cia en el 47 y regresa a casa con­ Corman nunca abandonó a su vencido de que lo suyo (tras afi­ El paso siguiente fue producir suerte ninguna de su películas. cionarse a las películas de los Monster from the Ocean Floor Si alguna de ellas no ganaba el grandes como Ford, Hitchcock o (Wyott Ordung, 1954 ), logro suficiente dinero como para Hawks) es el cine. Malgasta un que consiguió enredando a un amortizar costes hacía lo que año buscando empleo hasta que montón de amigos para reunir fuese para reflotarla: añadir to­ por fin , y gracias al padre de un los 12.000 dólares necesarios. La mas de viejas producciones, per­ amigo, consigue colocarse como película era Lma pocholada de geñar un nuevo y equívoco trai- recadero en la 20th Century ciencia-ficción descabellada: un monstruoso ser acuático aterro­ mucha idea de la técnica cine­ siempre había soñado. Sin em­ riza a los pescadores de la costa. matográfica, se embarcaría en su bargo, no me lo compré, reinver­ La idea sobrevino a Corroan le­ opera prima, Cinco pistolas tí el dinero y así pude afi·ontar yendo una noticia en el periódi• (Five Guns West), en 1955, un mis siguientes trabajos como di­ co (una de sus argucias habitua­ western bastante inocente. Cor­ rector: Apache Womau (1955) les para tontear con temas de man: "¿Que cómo pude llegar y Swamp Women (1955)". candente actualidad, como ocu­ a realizar mi primera película? rriese con War of the Satellites, Pues fue bastante fácil, o al Tras sus westerns de saldo, arre­ 1958, Los ángeles del infierno/ menos eso me pareció a mí. Con mete con su curu1a película, The The Wild Angels, 1966, y algu­ anterioridad había producido Day the World Ended (1956). nas más), acerca de un submari­ unas cuantas cintas de ciencia­ De su dish·ibución se encargaria no monoplaza con el cual se es­ ficción de presupuesto muy pe­ la, desde ya inseparable, Ameri­ taba experimentando. Ni corto queño, como Monster from the can International Pictures (tam­ ni perezoso, se puso en contac­ Ocean Floor o The Beast with bién conocida como la AIP, an­ to con la empresa que había pa­ 1.000.000 Eyes (David Kra­ teriormente American Releasing rido el armatoste y les conven­ mars/,y, 1955) a principios de Corporation) de Jim Nicholson ció de que le dejasen utilizarlo los 50. Con el dinero que gané y Samuel Z. Arkoff, fiuctífero en Monster from the Ocean con ellas y un guión que logré concubinato que se pronogaría Floor a cambio de la publicidad vender por 12.000 dólares llegué a lo largo de quince años, hasta que les proporcionarla la pelícu• a reunir un total de 60.000 (hoy que a finales de los 60 la produc­ la. Dicho y hecho, en menos de en día sería una cantidad equi­ tora, Nicholson a la cabeza, in­ una semana se rodó aquella lo­ valente a unos 160. 000), una fringiese algunos cortes a las úl­ cura, la Lippert Releasing Com­ suma bastante ridícula, p ero su­ timas y más ácidas obras del pany se encargó de distribuirla y ficiente como para rodar unos autor (como The Trip, 1967, Corroan se embolsó unos cuan­ metros de celuloide. La película Mamá sangrienta!Bioody Ma­ tos miles de dólares. A partir de no nos quedó del todo mal, así ma, 1970, o ¡Gas-s-s-s!, 1970) ahí todo iria bordado. que la coloqué fácilmente en la sin contar para nada con él. American Releasing Cmpora­ tion, y tras la distribución toda­ The Day the World Ended sir­ Los años más radiactivos vía gané algunos dólares más, vió para encumbrar a Corroan los stificientes para comprarme como uno de los reyezuelos de Ansioso por dirigir, aunque sin el Jaguar deportivo con el que las pujantes y resultonas cintas

ft Conquered tlte World 956), de Roger Corman ._ de S. F. de bajo presupuesto. No había dinero, así que se azuzaba la imaginación: tras una heca­ tombe atómica, y ante el acoso de unos mutantes, los supervi­ vientes se refugiaban en una ca­ baña. Corman especulaba un poco con esos personajes arque­ típicos que había presentado, los trazaba mínimamente y cuando la acción empezaba a resultar cargante la película concluía. Así de sencillo, una fórmula que siempre estaría a mano y que se­ ría puesta en práctica hasta la sa­ ciedad con regocijantes resulta­ dos. Había que proponer a los adolescentes unas historias un tanto descabelladas, imposibles y emocionantes, que les diese qué pensar durante una hora y cuarto escasa, plantear unos pro­ totipos humanos con los que po­ der arremeter/identificarse, ac­ ción en pequei'ias dosis y hasta algo de picante, ya estuviese jus­ e J tificado o no, todo siempre de L:rJ forma más que inocente. Unos ~~ sencillos ingredientes con los t'AYM~tlii\IIAih._ •f·tr ...l,(h ' li,."NAIIt o\N IIA/1 • I"AV\ ~~.\' lt.Ht J que Connan siempre contaría -...... e .. _ ··-"'.... h ...... ''. ' para sus recetas metagenéricas ...... \l4 0...... ,.-.... ".. ~""'" :::r--==- (otra de sus fijaciones, cultivar todos los géneros posibles) y amigos, las parejitas y los críos pidísimo, en gran parte porque :rj que mimaría con especial dedi­ empezaban a disfrutar y deglutir era bastante inflexible . La pre­ cación durante su etapa como atómicos programas dobles, y producción era para mí un as­ e J director de "malas" películas, entonces las "malas" películas sí pecto fundamental, un mes antes e J aproximadamente hasta la llega­ que encontraban un hueco para de empezar a rodar ya estába­ e ~ su distribución en salas cinema­ da del ciclo Poe a principios de mos con ella, pero antes incluso ~~ los sesenta. Connan: "En este tográficas, un lugar que actual­ ya teníamos en marcha los pre­ negocio nunca dejas de apren­ mente ha sido sustituido por el parativos y los más mínimos de­ der cosas nuevas, pero yo diria vídeo. talles. Una vez que comenzába­ que la primera película con la mos a filmar sabía exactamente que creí dominar el medio fue The Day the World Ended no lo que quería. Mientras otros dí• Machine Gun Kelly, en el 58, era una buena película, en todo rectores conceden un amplio un filme menor que rodé en diez caso muy demencial, con unos margen a la improvisación, yo días y con un actor por elltonces risibles engendros radiactivos, llegaba al plató con un estricto desconocido, Charles Bronson. una trama que enganchaba y plan de rodaje, muy estudiado. Hasta ahí se podría englobar personajes absurdamente atrac­ Esto no quiere decir que si al­ todo lo que había hecho con an­ ti vos, pero fue un filme que gus­ guien tenía una idea mejor no se terioridad, porque después lle­ tó a la chiquillería, Jo que petmi­ pudiera cambiar algo, pero ge­ garían las adaptaciones de Poe, tió a Connan seguir en la brecha neralmente siempre se rodaba lo y aquello ya significó un salto rodando a un ritmo frenético, previsto en el tiempo previsto". hacía delante muy significati­ nada menos que 29 largometra­ vo". jes en un insignificante margen Tras rodar otro par de westerns de seis años, desde 1955 a 1960. -Oklahoma Woman (1955), Tampoco hay que olvidar que se Una velocidad pasmosamente Gunslinger (1956)-, Roger vivían los albores de los autoci­ huracanada. Corman: "Sí, sin lu­ aborda el filón de las invasio­ nes, en donde las pandillas de gar a dudas era un director ra- nes alienígenas con It Conque- red the World (1956) y Not of especie de vampiro espacial ve­ de miedo salpicada de humor) es This Earth (1956), dos impres­ nía a estudiar la sanh'fe humana) Attack of the Crab Monsters cindibles títulos cienciaficcione­ se aligeraba mediante acertadas ( 1956), otra valiosa pieza de ros de lo más mitómano. La pri­ raciones de humor, una sabro­ museo, en donde se contaba mera es aquélla en la que un ve­ sa variante explotada posterior­ cómo unos gigantescos cangre­ nusino con forma de cucurucho mente con similar tino en A jos mutantes devoraban a un puesto al revés y con pinzas de Bucket of Blood ( 1959) y La equipo de estudiosos y asimila­ cangrejo prepara en la Tierra un pequeña tienda de los horro­ ban toda su sabiduría. Una bara­ desembarco masivo a los de su res. Lo mejor de Not of This tija de 70.000 dólares para la especie, contando para ello con Earth era la interpretación de Allied Artists, de nuevo en blan­ la ayuda de un científico no de­ Dick Miller (un secundario indi­ co y negro, y de una hora de du­ masiado cuerdo, Lee Van Cleef. soluble a la trayectoria iniciática ración no más. Otro perfecto Una menudencia financiada con del maestro), y la visión que se complemento de autocine en menos de 100.000 dólares, muy ofrecía sobre el chupasangres donde los jóvenes saboreaban de ortodoxa y con una imponente interestelar, misteriosa, violenta nuevo sensaciones de extrema Beverly Garland (una de las in­ y dócil a la vez. Además, la peli­ candencia (los experimentos nu­ numerables actrices que acabó culita, en blanco y negro, no es­ cleares y sus consecuencias des­ siendo novieta de Corman) al taba nada mal. Jamás con tan enfrenadas, un tema recun·ente frente. Más que nada, un chasca­ poco se pudo hacer algo tan dig­ hasta el hastío) y desvencüadas rrillo, involuntario a decir ver­ no, y ésa ha sido otra de las vir­ criatmas de cartón piedra, aun­ dad, aunque dudo mucho que tudes del incansable Corman, que eso, y más en los años 50, no Corman y los suyos se tomasen hacer repercutir hasta el último fue algo que importase demasia­ demasiado en serio toda esta centavo invertido en sus produc­ do. El filme tuvo una acogida suerte de impagables chapuci­ ciones, que todo el dinero se vie­ endiablada, recaudó más de un llas. se en el resultado final. millón y siguió alentando al avispado Corman a no descuidar También divertida, aunque cons­ De la misma época, y con algu­ esa lustrosa veta de la que ex­ cientemente, fue Not of This nas similitudes respecto a sus traía beneficios seguros, y si Earth, en donde el horror (una predecesoras (grotesca historia bien se desentendió momentá­ neamente de la dirección de fil­ mes pertenecientes al subgéne­ ro, sí que produjo varios de ellos, The Brain Eaters (Bru­ no VeSota, 1958), Attack of the Giant Leeches (Bernard Kowalski, 1959), Night of the Blood Beast (Bemard Kowals­ ki, 1959) o Beast from Haun­ ted Cave (Monte Hellman, 1959), alguna de ella tomada bastante en serio y rodada con gente de la casa.

Pasatiempos de diversa índole como She-Gods of Shark Reef (1956) y The Naked Paradise ( 1956) pocos apuntes interesan­ tes proponen, si acaso este últi­ mo sería algo más reseñable por ahondar de nuevo en un micro­ cosmos conformado por unos personajes mínimos y manidos. Además, aparecían tres habitua­ les cormanianos bastante ama­ bles, Dick Miller, Jonathan Haze y Beverly Garland. Teenage Caveman '1958). de Roger Corman Posteriormente, y tras The Un- dead ( 19 56) (un relato de bruj e­ Attae k oftir e Crab ría y reencamaciones), Corman Monsters (1956), de Ro¡:er Cmma11 arremete con un lote de cuatro películas eminentemente juveni­ les: Rock All Night ( 1956), Teenage Doll (1957), Carnival Rock (1957) y Sonority Girl (1957). En apariencia, todas de lo más convencional, pero escar­ bando un poco sobre su comer­ cial marchamo nos encontrába­ mos con unas extravagantes tra­ mas, asfixiantes hasta cierto punto, con unos caracteres que deambulan en un entomo hostil y agreste. Otro más de los ali­ cientes Connan.

Dejando al margen I, Mobster y Machine Gun Kelly, de 1958, destacan War of the Satellites (1958), The Viking Women and the Sea Serpent (1958) y Teenage Caveman (1958). La primera arraigó en la bulliciosa e :::2 mente de Conn an cuando los so­ 1 • viéticos pusieron en órbita al L:rJ Sputnik. Apenas tres semanas ·~ después Roger Corman ya había ~ rodado la película, incluyendo organizar toda la secuencia de­ a Teenage Werewolf (Gene e1 • los efectos especiales, filmados bido a que las transparencias Fowler,Jr., 1957)". :::&-- por separado. La historia era que se habían de utilizar eran un muy simp le, y los extraterres­ tanto patéticas. Pero los incon­ La película trataba de un cavemí• :rj tres, cual rojos perniciosos, po­ venientes se solucionaron en un cola bastante inconformista (de nían sobre aviso a los pacíficos periquete: se rueda el barco con nuevo un personaje que no acepta e :::2 c ~ :J norteamericanos para que cesa­ las chicas, se balancea violenta­ de buen grado las imposiciones 1 sen sus periplos interestelares. mente, se meten de fondo las que le vienen dictadas) que tras­ c.... - ...... > transparencias, se difuminan al pasa los límites de su tenitorio y The Viking Women and the máximo las imágenes y se obse­ se aventura en la zona prohibida. ·~ Sea Serpent fue otro título des­ quia a los actores con manguera­ Se rodó por sólo 70.000 dólares pachado en diez días escasos zos de agua atroche y moche. en diez días, tenía sorpresa fi­ para la AIP. La idea era de lo nal recuperada años después en más apetitosa (una tribu de mu­ De Teenage Caveman Corman El planeta de los simios (The jeres vikingas parten en busca de siempre ha refunfuñado lo mis­ Planet of the Apes, Franklin F. sus maridos, desaparecidos en el mo: "¡Yo nunca hice Teenage Schaffuer, 1968), y su moraleja mar hace mucho tiempo), y en el Caveman! Nosotros rodamos era tan sencilla como todo su fo ndo era una sencilla excusa Prehistoric World, y la película planteamiento. para regalar a los incondiciona­ inauguró el Festival de LosAnge­ les un buen número de chicas en les de aquel año. Al día siguiente, La penúltima aportación al géne­ bikini (Abbey Daton, Susan Ca­ la mayoría de los críticos se refi­ ro en la década de los 50 fue The boL.). Había titmo, actores que rieron a ella como Teenage Ca­ Wasp Woman (1959), un pasti­ interpretaban varios papeles a la veman, así que a la A!P no se le che engendrado a medio camino vez por aquello de abonarse la ocurrió nada mejor que dejarle entre La mosca (The Fly, Kurt paga de algunos extras, y la apa­ ese título, en parte también para Neumann, 1958) y ciertos pasajes rición final de la esperadísima aprovechar el filón que habían de How to Make a Monster serpiente marina no quedó del abierto con otros filmes como 1 (Herbert L. Strock, 1958), con todo mal, teniendo en cuenta Was a Teenage Frankenstein una atractiva joven convertida en que a última hora se tuvo que re- (HerbertL. Sn-ack, 1957) o l Was mujer-avispa por culpa de unos vanguardistas cosméticos no de­ legados por el establishment al suculentos beneficios, Corman masiado fiables. La chica era Su­ ostracismo, hasta que la fortuna sigue empeñado en obtener el san Cabot, y las recaudaciones los integra en él radicalmente. mayor rendimiento posible de volvieron, como siempre, a son­ Un turbio blanco y negro, los fe­ una inversión ya de por sí sonro­ reír a Corman. "Aquella película tiches Dick Miller y Jonathan jante. El mismo lo explica: "La era muy salvaje, y nos funcionó Haze, el "carneo" de Jack Ni­ cosa más salvaje que hice fue francamente bien. Estaba desti­ cholson (en La pequeña tienda hace mucho tiempo. Recuerdo nada a un público eminentemen­ de los horrores) y una narra­ que estábamos en Puerto Rico y te joven. La pena fue que dispusi­ ción que hacía del sinsentido su teníamos cuatro semanas para mos de muy poco dinero y no pu­ desbarajustada razón de ser, rodar dos filmes. Terminé con la dimos trabajar tanto como nos contribuían sobremanera a lle­ producción de The Battle of hubiese gustado los efectos espe­ var a estas oscuras bromas pesa­ Blood /sland (1 960) de Jo el ciales. La cosa quedó un tanto das a la cumbre de la desfacha­ Rapp y empezamos con The Last cutre, pero sin embargo ganamos tez cormaniana. Pero... ¿real­ Woman on Earlh (Roger Cor­ nucho dinero". mente se puede hacer una pelí• man, 1960). Entonces se me ocu­ cula en tan sólo dos días? "Sí, rrió que podríamos rodar un ter­ claro que sí, aunque aquello fue cer título en aquel mismo lugar Haciendo locuras una auténtica locura. Nos lo to­ sin gastarnos casi un centavo, ya mamos como una especie de de­ que teníamos las localizacio­ A Bucket ofBlood (1959) y La safio, era la única forma posible nes, decorados, actores y equipo pequeña tienda de los horro­ de hacerlo. Pudimos aprovechar técnico. Llamé a mi guionista res (1 960) son como dos gotas los decorados de otra película, Chuck Grifjith, le dí unas nocio­ de agua. Ambas fueron las que contraté a los actores para una nes básicas sobre una comedia se rodaron en un plazo de tiem­ semana, ensayamos de lunes a con toques de horror y le dije po más exiguo (cinco y dos dias viernes y elfin de semana empe­ que tenía diez días para apare­ respectivamente), están conside­ zamos y terminamos el rodaje". cer allí con el guión. Llegó justo radas hoy en día como películas cuando estábamos acabando de culto y en ellas se vuelve a No contento con reírse del fé­ The Last Woman on Earlh, un reincidir en esa explosiva quími• rreo Hollywood y sus superpro­ jueves. Esa misma noche discuti- ca enfermiza de humor negro y ducciones rodando elementales mos algunos detalles de casting terror desconcertante. Narraban peliculitas de baratillo en tan y demás y el fin de semana ya las peripecias de unos tipejos re- sólo unos días, y encima obtener estábamos listos para empezar ~ e ::> t;;;;?-':4 rr'l ::- :J

The Last Woman on Earth ( 1960), de Roger Corman .., Not of This Earth ~ ( 1956). de Ro¡.¡er Corman

con Creature from the H{lunted and the Pendulum, 1961), La Coppola, Monte Hellman y Jack e :J Sea (Roger Corman, 1960), una obsesión (The Premature Bu­ Hill. Al final, el único acredita­ LXJ película bastante curiosa, más ría!, 1962), Historias de te­ do fue Roger Corman. ~~ bien una especie de chiste''. rror (Tales of Terror, 1962), El :J cuervo (The Raven, 1962), The Hasta su retirada de la dirección e Haunted Palace (1963), La activa (un eufemismo, ya que ~ Sacralizando a Poe máscara de la muerte roja casi la totalidad de sus produc­ (The Masque of the Red Death, ciones llevan sus huellas bien :r:J Saturado de tanta golosina de 1964) y The Tomb of Ligeia marcadas), los grandes estudios consumo ultra-rápido, Com1an ( 1964). Todos ellos con colores le tientan para que capitanee al­ e :J se decide a dar el salto, aventu­ vivísimos, atiboiTados de poesía gún enjundioso proyecto, nego­ e :J rarse con presupuestos más hol­ decadente y con decorados y es­ ciaciones que cuajarían, por e J gados (¡casi 300.000 dólares!) y cenas reciclables. Corman se ejemplo, en Secreta invasión ~~ rodar para la AIP tma cinta en granjeó los beneplácitos de la (The Secret lnvasion, 1963) y El color de teiTor psicológico, La cdtica y ya nada volveda a ser Barón Rojo (The Red Baron, caída de la Casa Usher (The como antes. 1970) para la United Artists, La Fa// of the House of Usher, matanza del día de San Valen­ 1960), basándose en un relato de Esparcidas entre las diferentes tín (The St. Valentine's Day Edgar Allan Poe y con Vincent entregas poeanas, tampoco con­ Massacre, 1966) para la Fox o Price como estrella absoluta y viene olvidarse de maravillas La cabalgada de los malditos dando vida a frágiles seres ator­ como The Intruder (1962), su (A Time for Killing, 1967) para mentados, en realidad, un proto­ obra maestra, un crispante relato Columbia. A pesar de esto, nun­ tipo pulido de otros personajes sobre un racista (William Shat­ ca le hizo mucha gracia eso de de antaño, como el del extrate­ ner) que azuza a todo un pueblo integrarse en el laberíntico rrestre de Not of This Earth. sureño contra los ciudad~os de mainstream, siempre prefuió ser color; la fabulosa El hombre el tiránico responsable de sus La cosa funcionó de maravilla, con rayos X en los ojos (X-The creaciOnes. llovieron los dólares y no se Man with X-Ray Eyes, 1963), dudó un instante en pron·ogar con Ray Milland; y The Tenor Tras ser encumbrado rey del aquellas adaptaciones casi freu­ ( 1963 ), una curiosa cochambre cine pop por películas como dianas y necrofilicas de Poe a lo por la que desfilaron un potTón The Trip (1967) y ¡Gas-s-s-s! largo de siete títulos más: El de directores, desde Jack Nichol­ ( 1970), y tras dirigir · El Barón péndulo de la muerte (The Pit son a Bogdanovich, pasando por Rojo, decide tomarse tm desean- so, aunque el paréntesis vacacio­ ged Heat, 1976) y mil nombres pa de que Corroan se desprenda nal no duraría mucho tiempo. más. Son los tiempos en que se de su adorada New World. ¿Y decide importar cine de arte y después? ... Pues la irrupción de ensayo europeo, un circuito des­ la Concorde, otra fábrica de pe­ El Nuevo Mundo cuidado y que funcionó franca­ lículas baratas, su nueva y des­ mente bien: E l planeta salvaje pampanante compañía, fundada Corroan se casa, y de inmediato (Le Planete Sauvage, René La­ a mediados de los ochenta, una funda la New World, una com­ loux, 1973), El diario íntimo de perpetuación de todo el cine pañía independiente de produc­ Adela H. (L'histoire d'Adele H. , desenfrenado que facturó la ción y distribución que pronto Franc;ois Truffaut, 1975), Dersu New World. "Actualmente pro­ incendiaría las estanterías de los Uzala (Dersu Uzala, Akira Ku­ ducimos alrededor de una vein­ videoclubs de todo el globo te­ rosawa, 1974), Gritos y susu­ tena de filmes al año, y casi to­ rráqueo (el nuevo mercado, jun­ rros (Viskningar och Rop, Ing­ dos tienen éxito" -Com1an ex­ to al televisivo, a exprimir con­ mar Bergman, 1972), El tam­ plica-. "El éxito es moderado cienzudamente) merced a sus bor d e hojalata (Die Blech­ porque son películas de bajo exploitations, o sea, filmes de trommel, Volker Schlondorff, coste, pero amortizamos los gas­ cualquier género, casi en estado 1979), Sonata de otoño (Host­ tos sin esfuerzo alguno. Los pre­ puro: terror, acción, enfermeras, sonat, Ingmar Bergman, 1978) ... supuestos rondan el millón de ciencia-ficción, aventuras ... Fama, respeto y dinero gracias a dólares, pero siempre decimos Truffaut, Kurosawa, Bergman y algo más para que no parezca­ Los descollantes valores de la es­ muchos otros. mos tan pobretones. Las pelí• cuela Corroan empiezan a brotar culas baratas no bajan de los entonces hasta de debajo de las La New World se había conver­ 500.000, y las costosas salen por piedras: Martin Scorsese (Box­ tido en el negocio más boyante millón y medio. Nuestra más ear Bertha, 1972), Paul Bartel que Corroan jamás había tenido reciente creación, 'Los Cua­ (La carrera de la muerte del entre manos, pero sin embargo, tro Fantásticos', una adaptación a ño 2000/Death Race 2000, el tintineo del dinero es un soni­ del comic-book de la Mm-vel, 1975), Monte Hellman (Cock­ do celestial que siempre hipnoti­ nos va a salir por casi dos millo­ fighter, 1974), Joe Dante (Pira­ zó a nuestro hombre, y un con­ nes ". ña), Ron Howard (Grand sorcio de tres abogados le hace T heft Auto, 1978), Jonathan una oferta por la empresa, y Ahí está actualmente la Concor­ Demme (La cárcel caliente/Ca- 16.500.000 dólares tienen la cul- de, al tanto de aprovechar cual-

The Wasp Woman 959), de Roger Corman quier éxito popular de los gran­ la Fox (porque "además de in­ Nunca fue mi intención aban­ des estudios -Drácula de Bram sistirnze mucho me dieron unos donar la dirección, simplemen­ Stoker (Branz Stoker's Dracula, buenos honorarios y un control te ocurrió así". Y es que Cor­ Francis Ford Coppola, 1992), absoluto sobre la película"), Ro­ man todavía tiene cuerda para Parque Jurásico (Juras sic ger Corman, el caudillo del cine rato. Park, Steven Spielberg, 1993)-, más desvergonzado de toda la para lanzar al mercado sus clo­ historia, desmiente que su carre­ naciones de combate, una táctica ra como director haya recibido NOTA que siempre dió buen resultado el carpetazo definitivo: "Hoy en a las independientes. Un mundi­ día, mi primera actividad es la Todas las declaraciones que acompa­ llo en donde hoy en día mono­ de productor, eso lo tengo muy ñan este artículo están extraídas de la polizan señores como Lloyd claro, pero si se presentase el entrevista que se realizó a Roger Cor­ roan en el Festival Cinema Jove de Kauffman y su Troma y Charles proyecto adecuado o si una idea 1993 (Valencia). Los intrépidos re­ Band y su Full Moon. Corman muy atractiva se me pasase por porteros que abordaron al maestro también está ahí metido. "Las la cabeza, estoy seguro de que fueron Eduardo Guillot, Manuel películas Trama son bastante volvería a coger una cámara. Romo y Manuel Valencia. parecidas a las que yo hacía, aunque a la vez también son muy distintas. Su presidente, Lloyd Kauffman, es muy amigo mío, aprecio mucho su trabajo y creo que está bastante más loco de lo que yo lo estaba en mis ini­ cios. A la Full Moon tampoco le va nada mal, tienen bastantes seguidores en los videoclubs".

Ahora, en pleno 1994 y tras cua­ tro años de su inesperado regre­ Camosaur ( 1993 ). de Roger Cormun, so con el cibernético y trepidan­ "c/ouación de comhate" te Frankenstein Unbound para de Parque Jurásico