De Pedrarias a Ortega
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1 DE PEDRARIAS A ORTEGA LA RUTA TORMENTOSA JUSTINIANO PÉREZ 2 DE PEDRARIAS A ORTEGA La Ruta Tormentosa Copyright J. Pérez, 2015 Publicaciones y Distribuciones ORBIS Diseño de portada: Idalmis Lisbeth Chévez 3 En memoria de todos los caídos en nuestras guerras y en reconocimiento a todos los soldados sobrevivientes de nuestros diferentes conflictos bélicos. 4 Los símbolos de la prosperidad son los símbolos de la dependencia. Se percibe la tecnología moderna como en el siglo pasado se percibieron los ferrocarriles, al servicio de los intereses extranjeros que modelan y remodelan el estatuto colonial de nuestros países. Nos ocurre lo que a un reloj que se atrasa y no es arreglado. Aunque sus manecillas sigan andando hacia adelante, la diferencia entre la hora que marque y la hora verdadera será creciente. MANUEL SADOSKY 5 ÍNDICE 1 PRÓLOGO 2 LIBRO UNO: LA NÉMESIS DE NICARAGUA 3 LIBRO DOS: BALA EN BOCA 4 LIBRO TRES: NICARAGUA, Retórica vs. Realidad 5 LIBRO CUATRO: POPULISMO SALVAJE 6 COMENTARIO FINAL 7 EPÍLOGO 6 PRÓLOGO Este compendio político es el corolario del compendio militar titulado El Ejército de los Somoza. Comprende las cuatro publicaciones que le siguieron a la serie militar de seis libros previamente editados. El texto original se ha mantenido intacto en los cuatro volúmenes publicados y solamente he agregado un comentario final y un epílogo para enfatizar el propósito elemental de cada volumen y las expectativas del esfuerzo total respectivamente. No soy historiador, ni sociólogo, ni político; sólo un observador estudioso de nuestro desarrollo cultural y social como nación. Mi preparación académica es netamente militar y el lenguaje usado en cada publicación, refleja tal preparación. Me gusta decir las cosas lacónicamente con sentido de responsabilidad pero en un marco crítico y autocrítico sin reparar en sentimentalismos y formulismos de conveniencia. No me siento obligado a callar por compromisos adquiridos en el presente ni en el pasado, porque no los tengo ni los tuve en mis años de servicio militar ya que, en el análisis correcto y final, trabajábamos para la patria, no para el partido o la familia gobernante. Por lo que sé, las críticas han sido amargas en las filas de la vieja guardia y el rechazo es evidente en sectores de antiguos adversarios. Unos acusan y otros niegan y en el fondo, estas reacciones han sido muy positivas para el esfuerzo total en este empeño personal que se ha convertido casi en una pasión. De todas maneras, como dijera el poeta y escritor francés Paul Tousaint Jules Valéry: Los libros tienen los mismos enemigos que los seres humanos: el fuego, la humedad, el tiempo y su propio contenido. Durante mis dos últimos años de servicio militar (1977-1979) a muy temprana edad y con mediano rango, se me dio responsabilidad y mando para tratar de rescatar una institución que estaba en decadencia; por eso pude saborear algo de poder en un ambiente tradicional de pleitesía y culto a la personalidad dentro de la Guardia Nacional de Nicaragua. Conocí interioridades y desenlaces operacionales que ya he descrito en la serie militar de estas publicaciones y también experimenté una introducción a la 7 interrelación político-militar que caracterizaba y aún caracteriza el ambiente de poder en Nicaragua. Por eso me he convertido en un enfermizo observador de nuestro panorama político actual y en un estudioso de nuestro pasado histórico en aras de contribuir al esfuerzo total con un grano de arena para esclarecer el horizonte, auspiciar opiniones, despertar inquietudes o abrir ventanas. No tengo nexos con organización política alguna y mis puntos de vista son completamente independientes, como los que expresaría cualquier ciudadano común que ha visto en su tiempo de vida, estancamiento económico, corrupción gubernamental y el ya enfatizado abuso de poder a nivel estatal. También estoy libre de resentimientos personales contra adversarios de otros tiempos y no le temo a reacciones provocadas por cualquiera de mis publicaciones. Todas las críticas positivas y negativas que he originado con esta actitud, las considero normales, son más bien estímulos que impulsan a un mayor esfuerzo. Tampoco tengo compromisos con casas editoriales y no busco beneficio económico alguno. Costeo mis propios gastos de impresión pero queda la gran satisfacción de poner un grano de arena con el único afán de despertar conciencia sobre el camino recorrido y el trecho por transitar en nuestro devenir político antes de llegar al esperado bienestar general que pueda sustentar una definitiva y perdurable democracia en nuestro país. El período histórico del somocismo en el cual nací, crecí y maduré es mi modelo base para comparación y retrospección. De ahí vuelco la mirada hacia el pasado y hacia el futuro. Es mi punto de referencia constante para calificar en mi humilde juicio, los grandes desenlaces que han moldeado nuestro destino. Por eso soy ante todo, crítico de mi propia base que a mi humilde juicio, abandonó el camino deseado; todo eso me da margen abundante para el análisis y la comparación. Con toda la probabilidad al descubierto y con todos los factores históricos sobre la mesa, aún es aceptable afirmar que no fuimos los mejores pero tampoco hemos sido los peores. 8 Es en este marco comparativo, que el enfoque total ha sido dirigido. Ahí está el tono autocrítico y el reclamo crítico que nuestros tiempos exigen. Se espera que cada generación supere a la anterior. Que cada nuevo gobierno sea mejor. Que las desigualdades vayan desapareciendo y el bienestar común emergiendo. Que aflore la cultura política para que los caudillos tradicionales sean temas de estudio y no se conviertan en modernos dictadores. Por fin, que la desdicha de millones sea menos intensa y que tengan la leve esperanza de un liderazgo consciente que vea hacia fuera y se identifique con su propia gente, sin engaños ni demagogia y más bien con sacrificio y trabajo constante. Ahí también está la gran esperanza que lleva un retraso de cinco siglos. El camino torcido y lleno de lodo que comenzó con Pedrarias y va por Ortega… y ahí el afán sublime de cambiar de camino para que todos los sacrificios experimentados no hayan sido en vano. Esa es la pasión que nos mueve en este empeño, un grano de arena en la playa o un simple candil en el oscuro bosque… y como decía el poeta Pablo Neruda: Yo no vengo a resolver nada, yo vine aquí para cantar y para que cantes conmigo. Cada libro en este compendio pertenece a su tiempo y es el ojo avizor y el oído atento en el devenir histórico de nuestra nación desde el punto de vista elemental y a vuelo de pájaro, a como lo interpretaría un ciudadano consciente de su pasado, presente y futuro. Es un intento por resumir cinco siglos de historia política en cinco centenas de páginas donde la parte contemporánea recibe mayor atención. Donde hubo participación hay autocrítica y donde hay observación hay crítica y señalamientos tomando en cuenta que no somos perfectos pero cuando se toma el timón de la nave, es responsabilidad del capitán, mantener el curso que lleve sanos y salvos a sus pasajeros a puerto seguro, sobre todo cuando las aguas se tornan turbulentas. Olvidando la época precolombina, la historia política de Nicaragua nos recibe con el gobernador Pedrarias Dávila y nos tiene en la actualidad con el presidente Daniel Ortega. Aquí llegamos después de tantas guerras y revoluciones y aquí 9 estamos sin llegar a donde deberíamos haber llegado. Parece una ruta llena de tormentos en un oscuro y espeso bosque, llena de lodo y grandes obstáculos pero que al fin, es nuestra ruta: de Pedrarias Dávila a Daniel Ortega, del Gran Justador al compañero guerrillero. 10 LIBRO UNO 11 12 LA NÉMESIS DE NICARAGUA PLATA, PALO, PLOMO Justiniano Pérez 13 Este libro está dedicado a mi hija mayor: Karla Ivonne. Ella nació lejos de la patria y creció en el ocaso de nuestro sistema político para eventualmente conocer y analizar el nuevo sistema, cuyo fracaso y malos recuerdos, aún perduran en su memoria y constituyen la base de este esfuerzo por ilustrar a las generaciones de su tiempo. 14 Me decían que eran necesarios unos muertos para llegar a un mundo donde no se mataría Albert Camus 15 ÍNDICE INTRODUCCIÓN 1 EL JUSTADOR Y SUS HEREDEROS 2 UN SIGLO ENTERO DE VIOLENCIA 3 DINASTÍA DE MEDIO SIGLO 4 UNA DÉCADA ROJINEGRA 5 TRES LUSTROS DE VERDE Y ROJO 6 DEL ROSADO CHICHA A LO MISMO 7 EPÍLOGO 8 BIBLIOGRAFÍA 16 INTRODUCCIÓN “La tiranía totalitaria no se edifica sobre las virtudes de los totalitarios sino sobre las faltas de los demócratas.” Esta frase del desaparecido y consagrado escritor francés Albert Camus puede servir para ilustrar la realidad política actual de Nicaragua. Para los nicaragüenses, entusiastas por cambios y ávidos de progreso material, hay como un permanente “mea culpa” por todo lo que fue y por lo que lamentablemente no ha podido ser. Llevamos en las venas la incómoda frustración de permanecer prolongadamente como el país más empobrecido de América Latina, apenas superado por Haití. La administración política ha sido usada y abusada casi sin piedad por los diferentes y múltiples administradores a través de sus cuestionados períodos de gobierno. Un pueblo trabajador, ingenioso y aventurero, ha comenzado a sobrevivir peligrosamente de las remesas que los familiares envían cotidianamente desde Estados Unidos y Costa Rica. Las interrogantes se acumulan día a día, mes a mes, año tras año y la respuesta parece ser siempre la misma, parece contestarse con otra interrogante: ¿A quién le echamos la culpa? En ese sentido, Camus tenía razón, la culpabilidad está en ambas partes, entre gobernantes y gobernados. Los que imponen y los que aceptan.