(4) en portada (5)

1951 Dos jóvenes se encuentran en el Café Varela de

Madrid Azcona y Clarimón Mingote,

2011 RAFAEL AZCONA por ANTONIO MINGOTE Antonio Mingote nos recuerda esos primeros

momentos junto a Rafael Azcona, dos figuras Texto Y FOTOGRAFÍAS: claves de la cultura española contemporánea Luis Alberto Cabezón García

Hace ya tres lustros que entramos en contacto con motivo de la organización de un Ciclo de Actividades sobre la Obra Literaria y Cinematográfica de Rafael Azcona que auspiciaba el Instituto de Estudios Riojanos y Fundación Caja Rioja. En esos momentos, y como coordinador del Ciclo, le solicité colaboración gráfica sobre su amigo Azcona. Mingote me envió unos cuantos dibujos gráficos que fueron incluidos en el libro Rafael Azcona, con perdón. A partir de ahí, han sido difundidos en otros medios de comunicación y por otros estudiosos de la ingente obra del logroñés Rafael Azcona. Azcona y Mingote (6) en portada Recuerdos: Rafael Azcona por Antonio Mingote (7)

Nos vemos en su piso madrileño de la Recuerdo un periodista muy simpático y calle Samaria desde donde tiene una gracioso llamado Álvaro Linares-Rivas que vista privilegiada de . El motivo: Quizás fuera su manera de expresarse estaba mucho con nosotros y que luego se recordar algunos pasajes de su vida y por sus ideas. Tenía un carácter, fue a vivir a León. Por cierto, en la novela Los junto al guionista a quien conoce al ilusos, Rafael habla mucho de Álvaro, eso sí, llegar a Madrid a finales del año 1951. un temperamento, muy afín a mí. con otro nombre. El recuerdo y cariño hacia su amigo Entonces, nos entendimos enseguida es permanente, tanto es así que en la Versos a Medianoche era el nombre que se entrada de su despacho tiene colgados daba a unos recitales poéticos concebidos dos dibujos que Azcona le regaló.

Mingote y Azcona, dos figuras relevantes de la cultura española contemporánea, dos emigrantes en el Madrid de los años 50, cruzan sus caminos en el Café Varela de la céntrica calle Preciados. A sus 92 años, el genial dibujante, escritor y académico de la lengua, hace esfuerzo Rafael Azcona, Carlos Clarimón y yo éramos por recordar esos primeros momentos. grandes amigos y estábamos siempre juntos. Y sí, nos presenta Carlos. Íbamos juntos a todos Baños de Grávalos. Grabado de Oliveras; ca. 1872 Háblame de tus primeros recuerdos junto los sitios: a comer, al café, al cine, a lo que fuera. a Rafael Azcona, ¿cómo le conociste? Os A comer, obviamente, lo poco que comíamos presenta Carlos Clarimón… en esos años. Existen muchas fotografías de Ha pasado mucho tiempo y el recuerdo, en los tres juntos, algunas de ellas publicadas. Mis algunos detalles, es vago, pero sí está claro que primeros recuerdos con Rafael son, por tanto, los de estar siempre juntos.

¿Cuáles fueron tus primeras impresiones de Azcona? Enseguida me hice amigo de él porque conectamos. Quizás fuera su manera de expresarse y por sus ideas. Tenía un carácter, un temperamento, muy afín a mí. Entonces, nos entendimos enseguida.

¿Quiénes os acompañaban en esos momentos, qué personas recuerdas? En aquellos momentos íbamos al Café Varela donde había muchos escritores, periodistas y poetas. Los viernes se celebraba un evento denominado Versos a Medianoche. Allí hablábamos, reíamos, escribíamos… vamos, todo lo que hacen los amigos. Era un ambiente intelectual de donde salió muchísima gente de la cultura, entre ellos Manuel Alcántara, Dibujo de Rafael Azcona Eduardo Alonso, o el propio Rafael Azcona. Dibujo de Rafael Azcona (8) en portada Recuerdos: Rafael Azcona por Antonio Mingote (9)

Prácticamente, vivíamos en las cafeterías, allí dibujábamos y escribíamos; no solo a mano, sino a veces incluso a máquina

Son estupendas novelas que están ahí para que las lea la gente y las valore. En esos años 50 tuvieron un éxito enorme, y enseguida algunas de ellas fueron adaptadas al cine. A través de las novelas, además, Rafael Azcona entró en el cine gracias al italiano .

Aparte de los cafés, tu piso de la calle Blasco de Garay era lugar de encuentro… Sí, mi casa era un centro de reunión, era la única casa organizada que existía. Allí nos reuníamos, hablábamos, merendábamos y todas esas cosas; lo normal en Ilustración de Mingote para la novela Los Ilusos unos amigos que se ven siempre. Portada de Los Ilusos Y compartíamos los libros, lecturas, ideas, ilustraciones, Programa de proyectos… todas esas cosas que Versos a Medianoche por el industrial Eduardo Alonso en cafeterías, allí dibujábamos y escribíamos; no se hacen cuando se es joven. Eso sí, aunque 1946. Estas veladas se celebraban cada solo a mano, sino a veces incluso a máquina. colaboramos alguna vez, ni Rafael ni yo viernes a las 23:30 horas en el citado Café ideamos ningún proyecto conjunto. Íbamos Varela. Bajo una tarima, un tropel de Por tanto, en esos años 50 hacíais vida por libre. Tono consiguió hacer uno que, en lugar versificadores declamaba sus rimas frente en los cafés: Varela, Comercial, Maraca, de planear, caía al suelo como si fuera a un enfervorizado público. Antonio Marlin, Gijón, etc… Azcona me ha contado anécdotas de plomo. Mingote hizo el dibujo que ilustraba los El Café Gijón lo frecuentábamos menos. El sucedidas en tu casa. Por ejemplo, Rafael tenía mejor memoria que yo, aunque sí programas. Varela sí, luego el Comercial y el Maraca. Este una temporada os dio por hacer tengo vaga idea de lo que me dices. último es en el que estuvimos más tiempo. Era monotipos, es decir, pintabais sobre un Ahí comienza tu relación con Rafael un bar muy pequeñito y allí estábamos siempre cristal y sobre él aplicabais una hoja ¿Recuerdas dónde comíais? Azcona. Fueron 10 años de amistad solos. de papel. Así rompisteis los cristales de En los últimos tiempos, íbamos a un restaurante continuada… bastantes ventanas. Otra anécdota es el económico llamado Riz, en la calle Apodaca. Sí, en esos años nos veíamos todos los días, Antes has citado que escribíais a máquina lanzamiento de aviones de papel por Allí comíamos bien. Y de ahí, pasábamos al a todas horas. Prácticamente, vivíamos en las en cafeterías. ¿Cómo eran esos escritos? la ventana y cómo el genial humorista Café Comercial, que está cerca. (10) en portada Recuerdos: Rafael Azcona por Antonio Mingote (11)

lo suficiente para hacer aquellos dibujos tan graciosos del repelente niño Vicente. A Rafael le gustaba dibujar. ¿Cómo definiríamos el humor que se hacía Yo le ayudaba con el dibujo. en La Codorniz? Burla las convenciones; destrucción del tópico, de la rutina, de Le daba ideas. Por ejemplo, lo establecido; contra la intransigencia el repelente niño Vicente le (a favor de la tolerancia), la violencia (a ayudé a dibujarlo favor del pacifismo, el diálogo), lo cursi (a favor de lo poético)… Era surrealista, poético, abstracto, subterráneamente crítico porque ponía en ridículo todo lo serio y respetable. Se burlaba Se refiere al discurso de ingreso en la Real de las normas. En el discurso que hice para Academia Española de 20 de noviembre la Academia está de 2008 titulado: Dos momentos del humor todo. español. Madrid Cómico - La Codorniz...

Volviendo al repelente niño Vicente… Es un personaje singular, un gran personaje del humor, una gran creación humorística. El repelente niño Vicente tenía una personalidad enorme. Como todo lo que hizo Rafael. Tenía un talento enorme e hizo cosas fantásticas. Podía haber hecho más, pero su éxito como guionista de cine Página del número 698 de La Codorniz impidió que fuera un gran escritor de publicada el 3 de abril de 1955 novelas.

Aparte de la citada Los ilusos, tiene novelas fantásticas como Los Colaboraciones de La Codorniz. Supongo que él tenía algunos europeos… Azcona trabajó en La Codorniz como textos y echamos a andar para allí. Le presenté Sí, es cierto, pero si solo hubiera sido redactor cada mañana y, como como amigo y todo fue muy natural; muy escritor, a lo mejor no hubiera tenido colaborador, un par de tardes a la semana. lógico: él valía, tenía mucho talento y, por lo tanto éxito como tuvo como guionista. Allí escribía, dibujaba y maquetaba junto tanto, conectó y lo aceptaron. Él se quedó Como guionista fue fantástico. La mitad al redactor jefe Fernando Perdiguero. a trabajar físicamente en las oficinas de La de la obra de Luis García Berlanga es de Más de 500 relatos y 300 chistes gráficos Codorniz pero yo no. Solamente pasaba por Rafael Azcona; la prueba está en que llevan su firma en los seis años que allí. A Rafael le gustaba dibujar. Yo le ayudaba cuando el cine de Berlanga no tiene a colaboró (1952-1958). con el dibujo. Le daba ideas. Por ejemplo, el Rafael, se resiente. Berlanga tenía talento repelente niño Vicente le ayudé a dibujarlo. y sabía hacer cine, pero sin Rafael no Azcona siempre te agradeció tu Estuve en esos primeros momentos de su hubiera hecho las grandes obras que generosidad al llevarle a la redacción de creación de lo cual, andado el tiempo, me realizó, como Plácido, El verdugo o La la revista de humor La Codorniz donde congratulo. Él tenía muchas ideas e hizo unos vaquilla. colaborabas… dibujos muy bonitos. Podía haber sido un gran No recuerdo exactamente cómo fue la primera dibujante, pero realmente no lo cultivaba. En Para finalizar, otra colaboración vez que Rafael vino conmigo a la redacción principio, su dibujo era muy elemental, pero El repelente niño Vicente, por Azcona vuestra poco conocida fue la (12) Recuerdos: Rafael Azcona por Antonio Mingote (13)

Sello en homenaje a Rafael Azcona

caligrafía de los textos de “El malvado Carabel”, adaptación de la novela de Cartel de Mingote para la película Wenceslao Fernández Flórez que llevaste Los muertos no se tocan, nene (2011) al cómic en La Codorniz. Además, fuiste su mentor en la revista Chicas… Sí, con respecto a El malvado Carabel, yo hacía En “El malvado Carabel”, yo hacía los dibujos y los textos los escribía él porque tenía una letra muy bonita. En cuanto a las los dibujos y los textos los escribía él colaboraciones con la revista Chicas le llevé a porque tenía una letra muy bonita la redacción y su buen hacer y talento hicieron el resto.

[ Colaboraciones Azcona-Mingote ] - Portadas de Los muertos no se tocan nene. Taurus Ediciones,1956 / Punto de Lectura, 2011. - Portada de . Novela de Amor e Inquilinato. Taurus Ediciones, 1957. - Prólogo de Rafael Azcona para Mingote, pequeño planeta, 1957. - Caligrafía textos “El malvado Carabel” en La Codorniz. - Portada e ilustraciones de Los ilusos. Ediciones Arión, 1958 / Ediciones del Viento, 2008. - Cartel película El pisito (1958).

- Press-book de (1960).

- Cartel película Los nuevos españoles (1974). - Artículo “Madrid, años cincuenta” de Rafael Azcona para el libro Retrato de Antonio Mingote. Círculo de Lectores S.A., 1987.

- Cartel de la película Los muertos no se tocan, nene (2011).