El camino de : la ruta del sol, una cosmogonía de la psique. Encuentro y desarrollo del sí mismo desde la vivencia transpersonal del saber ancestral indígena de la cultura

Mhuysqa en , Suramérica.

Auxiliares de investigación:

Jeison Andrés Lavao Hincapié

Viviana Carolina Pérez Andrade

Yedy Tatiana Sánchez González

Investigador principal:

Luis Eduardo León Romero

Co-investigadora:

Paola Andrea Pérez Gil

Línea de investigación:

Psicología ancestral indígena

Grupo Boulumai

Bogotá, 8 de abril

Programa de psicología

Facultad de ciencias sociales y humanas

Universidad cooperativa de Colombia

2016 El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 4

Resumen

La gran tradición Mhuysqa, fecundada en los territorios sagrados de Iguaque, Bacatá,

Hunza, Iza, Suamox, y en general en todo el altiplano cundi boyacense colombiano, la cultura poblada por la madre Bachue y civilizada por Bochica. Una tradición cosmogónica ancestral, que reside en el corazón de la existencia de los seres humanos provenientes de estas tierras, es así como el mito, la palabra dulce y el corazón bonito, de los que pretenden ser gente (Mhuysqas) engloban la investigación académica, fenomenológica y seriamente trascendental, en el ejercicio de indagación y profunda búsqueda para la transformación y el desarrollo de la práctica psicológica.

El ejercicio de caminar el territorio, propone un empoderamiento e integración de las prácticas ancestrales propias, éstas tomadas como herramientas y técnicas terapéuticas para la

Psicología Ancestral Indígena que aquí se propone, una psicología que concuerda con la raíz y con el origen propio.

En este sentido, caminar la tierra guiados por la sabiduría espiritual de nuestros abuelos y en compañía de las prácticas ancestrales y rituales Mhuysqas, se convierte en el puente hacia el descubrimiento del sanador interno que reside en cada uno y reconocer nuestra naturaleza indígena.

Palabras Clave:

Mhuysqa, Mito, cosmogonía, prácticas ancestrales.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 5

Abstract

The great Mhuysqa tradition, fertilized in the sacred territories of Iguaque, Bacatá,

Hunza, Iza, Suamox, and in general in all the cundi boyacense alti plane colombian, the populated culture by Bachue mother and civilized by Bochica. The cosmogonic ancestral tradition, residing in the existence heart of the humans from these lands, that is as the legend, the word sweet and the beautiful heart, of the that intended be people (Mhuysqas) encompass research, phenomenological and transcendental seriously, in the exercise of Inquest and profound search for the transformation and the development of the psychological practice.

The exercise of walking the territory, proposes a empowerment and integration the own psychological practices, these It proposes an empowerment and integration of ancestral practices themselves, taken as tools and techniques therapies for the indigenous ancestral psychology proposed, a psychology that matches the riaz and the own origin.

In this sense, walk the earth guided by the spiritual wisdom of our grandparents and in the company of ancestral practices and rituals Mhuysqas, becomes the bridge to the discovery of the inner healer who resides in each and recognize our indigenous nature.

keywords:

Mhuysqas, myth, cosmogony, ancestral practices.

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TABLA DE CONTENIDO

INTRODUCCIÓN. 8

Bases para una realidad posible. 10

REFLEXIONES INICIALES 13

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 16

OBJETIVO GENERAL DEL PROYECTO DE LÍNEA 19

Objetivos Específicos del Proyecto de Línea 19

METODOLOGÍA 21

FOCO POBLACIONAL 24

PRESENTACIÓN TAREA DE INVESTIGACIÓN 26

Narrativas 28

CATEGORÍAS DE COMPRENSIÓN 249

PROCEDIMIENTO (MOMENTOS DEL CAMINO) 644

RESULTADOS Y DISCUSIÓN. 648

Espiritualidad. 650

Divinidad 671

Cosmogonía: 697

Ley de origen 706

Bioética 721 Pathos-amor 721

Vida 739

Comunidad 753

Identidad 757 Otredad 757 El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 7

Mismidad 776

El mito 784

Rituales 792

Descripciones de Ritualidad 798

Abuelos 802

Plantas sagradas 806

Lugares sagrados 811

Psicoterapia Ancestral y sus categoriales terapéuticos: 823 Las prácticas místicas de la expresión terapéutica Mhuysqa 837 Ego: 846 Perdón. 850 Fe 852 Cuidado: 855

Sanación: Madre Tierra como sinónimo de sanación 858

BIBLIOGRAFÍA 864

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Introducción.

Para comenzar es preciso mencionar en términos de la experiencia de la línea de investigación, que después de una primera intención señalada como " Chamanismo ancestral indígena en la conciencia del Sí mismo" y de una segunda denominada, "Cosmogonía Kogui en el encuentro y desarrollo del Sí mismo" se hace necesario seguir profundizando e integrando los conocimientos, sabidurías más propias, con el anhelo de construcción de una psicología ancestral radicada (raíz), en la exploración y comprensión de la esencia psíquica del sí mismo que reposa en lo nuestro, en la fuente que es el origen, en lo trascendente.

Es así como nuevamente surge la intención investigativa, fenomenológica y trascendental de crecimiento, planteada en el encuentro y desarrollo del sí mismo desde la exploración, vivencia y práctica cosmogónica de la sabiduría ancestral Mhuysqa, que se espera, soportados en años de investigación y en el planteamiento de la presente, otorgará las bases de desarrollo para una práctica psico-ancestral que permita el crecimiento del individuo, la sanación de la vida psíquica y el desarrollo humano.

La recuperación misma de la gran tradición Mhuysqa, de nuestro mito de origen, parte de nuestra fuente energética representada en palabra, historia, símbolo, ritual y con el poder latente en su saber filosófico y cosmogónico de transformarnos (terapia) en su vivencia como seres humanos. Cualquier mito fundante tiene el mismo valor para sus descendientes sí se permite, pero el nuestro es también el Mhuysqa. No se trata de recitar las historias y las leyendas, y recrear pautas subculturales de identificación, es una búsqueda más profunda, para el abuelo es el valor de permitir en Mi lo total, de allí mi-to…, el sí mismo es el sí al mito y en este sentido justificamos la necesidad de caminar este territorio sagrado de los mhuysqas, como investigadores, caminar hacia nuestros propios corazones y develar lo que los saberes y prácticas El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 9 ancestrales tengan para compartir, lo que los abuelos físicos y espirituales tengan que aconsejar para vivir mejor.

De esta manera, la presente investigación se fundamenta en el mito Mhuysqa del padre civilizador Bochica, para llegar a la comprensión de la psique humana, relacionando categorías fundantes de comprensión del sí mismo, como lo son la cosmogonía y ley de origen ancestral que nos sustenta, la espiritualidad, la divinidad, la mística, bioética, vida, comunidad, mito, lugares sagrados, otredad y en esa misma lógica una categoría emergente de mismidad, sólo con la única intención de gestar un entendimiento de la identidad propia desde la ancestralidad

Mhuysqa.

La emergencia no es en sí misma la innovación o la producción teórica, sin desmeritar el trabajo que se adelanta en la academia, es ir más allá, es reencontrarse con lo previamente trabajado, porque la semilla aguarda en el interior del grupo de investigación, desde allí la evolución y necesidad del proyecto no está afuera, está en la reconciliación con los abuelos, en la comprensión del dolor y la transformación del oprobio en perdón, oscila en la lógica corazonante que entrevé al otro antes que nada, desde la mirada profunda hacia el interior y sólo entonces, levanta su mirada y propone un nuevo camino, porque comprende y comprendimos que el camino no está fuera, está en el trabajo espiritual de nosotros mismos como seres y parte fundante de la Madre.

Esta comprensión alterna del paradigma psicológico solo se puede dar en la medida en que los niveles de apertura, el proceso sociocultural del mestizaje y la práctica psicológica moderna hagan las paces con la raíz india que llevamos dentro. Es en esta lógica, en que se busca una práctica psico ancestral que fundamentada en usos y costumbres indígenas, sirva de camino a la liberación psíquica de quien se estanca en sus procesos de evolución de conciencia. No se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 10 pretende perpetuar la pelea con lo moderno y lo postmoderno, lo que se busca es una recuperación del lenguaje propio, aquella voz que los pueblos andinos carecen u olvidan por inmiscuirse en la modernidad actual. Es tiempo de aceptar que desde América del Sur, también se construye ciencia, que las voces de nuestros abuelos son una importante, bonita y sabía fuente de conocimiento de la gran Madre tierra, de los sentidos comunitarios y por ende del sí mismo

Porque la tierra al igual que nosotros no olvida, si pudiésemos entender su lenguaje místico, la pregunta muy seguramente sería ¿Qué les ha pasado? La exploración y la confusión por no saber estar ni ser en el estar, ha suprimido el conocimiento autóctono, la idealización es atrevida y por tanto, la solución no parece tener cabida en la raíz de estas tierras, porque ver hacia afuera, mirar hacia arriba y delegar la responsabilidad de lo que nos mantiene enfermos es más sencillo, quién no ha mirado al otro con desdén o quién no se ha dejado sumergir en el inmediatismo de la lógica funcionalista y los resultados superficiales y ¿es acaso la psique un elemento de observación y medición, acaso el amor se mide?

Probablemente la cordura no nos permita entender lo que la locura grita, es entonces cuando se propone adentrarse en el camino, sentir con la lectura la posibilidad de lo imposible, imaginar lo intangible en lo dulce de la palabra y ver como la fe ilumina la montaña y danza con ella en una noche de luna clara.

Bases para una realidad posible.

Nos seguimos preguntando, después de tres grandes recorridos ¿Se puede llegar a pensar en una psicología ancestral indígena la cual nazca como alternativa de curación y sanación a la ya gastada idea occidental de las ciencias humanas donde se diagnostica, se formula y se interviene para una adecuada salud mental? El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 11

Una psicología ancestral que no es pensada ni basada en la lógica de la linealidad y practicidad vacía. En este sentido lo que acá se propone es desde lo que somos como indígenas, con la sabiduría de nuestra cultura Mhuysqa recrear un lenguaje propio, una práctica científica, nacida desde América del sur, que, basándose en los mitos, la cosmogonía, los usos y las costumbres indígenas lleven a la sanación y a una práctica psico ancestral.

Actualmente tenemos una humanidad enferma y agonizante la cual busca una solución desesperada para sus crecientes malestares psicosomáticos; la alternativa que se propone a la psicología moderna para llegar al bienestar desde lo ancestral, es sentida y redescubierta bajo una lógica fenomenológica de equilibrio equivalente del sentir, aceptar, soltar, reconocer y por sobre todo de camino (entendiendo que es este el que nos hace aprender).

La psicología ancestral retoma el conocimiento más sabio y más antiguo del mundo, el mito. El cuál es la base de toda civilización humana, no existe cultura en el planeta tierra que surja sin mito, pues en él se encuentran los principios básicos en los que se rige el mundo, teniendo éste una fuerte conexión con la cosmogonía de nuestros pueblos ancestrales. Esto es algo que en algún momento del desarrollo de nuestra humanidad se olvidó y se dejó de lado, obviando la importancia epistemológica que el mito representa en la naturaleza del hombre en la tierra.

¡Qué miedo tan grande al mito! negación del padre y la madre. Y qué decir de una ciencia y un pueblo fraccionado de su raíz filosófica, saber ignorante de su origen, desconectado del mismo y por eso peligrosamente del delirio pragmático y funcionalista. ¡Filosofía sin raíz! sobretodo cierto en América.

Acaso, algo puede sobrevivir sin ella, una psicología, algo humano puede ser y existir sin ese rizoma cuántico y emergente de la vida. No son pocas las confusas provocaciones, sin El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 12 embargo, la expresión del saber humano como devenir filosófico nunca ha sido ajena al principio vital de hacer gente del hombre, de moldearlo verdaderamente humano, tal cual una hermosa vasija de barro, la historia de nuestros abuelos siempre ha querido tejerlo en coherencia con su alma y con el gran espíritu, con su psique y en la universalidad del ser, llámese filosofía o ciencia. Problema cultural del poder del uno sobre el otro, ¡tenemos alma racional! Todavía, victimarios y víctimas, nos creemos la controversia de Valladolid, por esto, solo es posible un pensamiento filosófico occidental, por lo mismo se insiste, con todo y el conflicto político, lo indígena es filosofía, es ciencia, y el problema no es el nombre para que nos acepte el otro, el asunto es que nosotros mismos lo aceptemos como hijos y nietos de este saber. Y planteada esta necesidad de resolución de la culpa, la vergüenza y la aceptación, empezar a entrever nuestras propias expresiones de lo filosófico, lo ontológico, lo científico y lo psicológico, y éste es el preludio de reflexión inconmensurada que proposita esta intención.

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Reflexiones iniciales

Se plantea la investigación tras la necesidad de dar continuidad al proceso que se ha venido adelantando por años, en plena concordancia con ello se sigue la construcción desde la vivencia etnográfica, transpersonal y fenomenológica que alimenta la incesante búsqueda de transformación a nivel físico y psíquico, así como el descubrimiento simultáneo de caminos adyacentes que den otros caminos de curación a los ya propuestos por la ciencia psicológica racionalista.

En este orden de ideas, el nivel de compresión que presupone en sí misma la investigación y no sólo para los investigadores, sino también para aquél que se acerca a la lectura con los prejuicios indiscriminados de la razón y la incipiente modernidad en la que se inmiscuye su existencia, se plantea desde la apertura, la reconstrucción y el reconocimiento para llegar a una posibilidad de curación, desde los niveles más profundos de la conciencia, la corporeidad y así mismo la totalidad humana. Tal vez dentro de la locura radique el centro de lo aquí propuesto, una psicología pensada, vívida y de alto impacto terapéutico desde las costumbres milenarias que preceden la cultura Mhuysqa, porque en sí es la intención, reconstruir el camino de los sabedores propios de esta Tierra, reconstruir el remedio y dejar de alimentar la enfermedad, tomar valor y evitar la huida tras la inmediatez del medicamento y las terapias rígidas.

Traspasar la concepción evolucionista que predomina desde la ilustración, volver a lo intuitivo del conocimiento, a pensarse y sentirse en las lógicas integrativas del ser humano, aquellas que lejos de la división concentran su mirada en la complejidad de verse en lo profundo y desde allí, construir lo que no está afuera, la que se reconoce como parte fundamental de la

Madre Tierra, porque ha entendido que el interior es el reflejo de la realidad que se yuxtaponen El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 14 de forma incomprensible y reduccionista, este es el mínimo grado de compresión, el que deja entrever una conexión latente entre lo que somos, en base a una realidad que en ocasiones parece enajenar y mitigar lo autóctono del conocimiento ancestral que tan guardado está en nuestra naturaleza andina ancestral.

También es la difícil tarea de interiorizar lo aprendido, de no ver qué son ellos o nosotros, de comprender más allá del dolor que ha dejado la barbarie y la colonización, de conciliar en las lógicas del perdón y entonces, encontrar allí la raíz que nos sujeta, para así aprender a oír, a ver y sentir, a oler y saborear. ¡A conocer!

Es importante aferrarse al propósito, porque somos un paisaje, en los tiempos de lluvia neblina, lágrimas y candela en el corazón ocultamos nuestra belleza, perdemos el camino y sólo en la media en la que decidimos amorosamente darnos cuenta de lo que pasa al interior, es que vivenciamos la verdad mítica que nos aguarda “el abuelo soy yo mismo” esta es la emergencia de plantear una investigación desde aquí, desde el oprobio milenario de dolor y sangre, desde la confusión del mestizo hijo de nadie, descorazonado, racional y enajenado de sí.

Es la condición ineludible para el grupo de investigación, mirarse en lo profundo, mirar el contexto social, comprender con dulzura la realidad, ver los límites que enmarcan la historia y entonces concientizarse del olvido, reconstruir la magia, estar en los rituales, acercarse a las plantas, andar los lugares sagrados y, finalmente, atravesar el miedo y la burla; plantear la construcción de lo vivido como un camino de acercamiento a los procesos psíquicos propios, entendiendo el contexto real pero asimismo, atravesando sus múltiples limitaciones.

De este modo, el ejercicio investigativo evoca una nueva necesidad epistémica, requiere una base conceptual que no tema observar y diferir entre limitaciones, por cuanto se centra en el reconocimiento geográfico, etnográfico y significativo de la experiencia y el lugar sagrado, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 15 presupone el puenteo entre occidente y América Latina, entre el abuelo español y el abuelo

Mhuysqa permitiendo una filosofía fenomenológica, critica y vivencial.

Se rescata la confusión identitaria del mestizo como el nivel de comprensión que fluctúa la integralidad del ser; razón-corazón se vuelven uno, la idea del pensamiento corazonante permite vislumbrar en lo profundo del sí mismo, allí lo perpetuo no está dado por el positivismo occidental, tampoco por lo cultural deshumanizante, el método es relegado a un papel menos esencial por cuanto el sentir, la experiencia, y el conocimiento sensitivo recobran el lugar que no debieron haber perdido dentro de la ciencia y la investigación.

Se parte de la idea conformista que ha encubierto la producción desproporcional de saberes repetitivos y circulares, es allí donde aporta nuestra investigación, a la insoportable pasividad que se ha mantenido por años en el campo de la psicología, a ese limbo posmodernista que aniquila la comprensión real de lo psíquico, cayendo en pensamientos egoicos e inmediatistas que se alejan cada vez más de la transformación.

Por lo previamente dicho hasta ahora, el intento tras la explotación de la cultura Mhuysqa se postula como el camino que acerca conscientemente al individuo al sí mismo, y a su vez, al sí mismo colectivo que se mueve de forma inconsciente en este entorno social incomprensible, permite así, ahondar en aspectos espirituales, físicos y psíquicos que contribuyen al descubrimiento de un proceso paulatino y concienzudo de transformación de nosotros como parte de ese contexto real y adolorido.

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Planteamiento del Problema

¿Qué significa y cómo recrear una cosmogonía de la psique desde la comprensión y promoción del encuentro y desarrollo del Sí mismo en la vivencia transpersonal del saber ancestral Mhuysqa en Colombia?

Esta investigación parte de la inconformidad de los procesos psicológicos en los que el hombre occidental se encuentra actualmente inmerso, siendo el reduccionismo moderno la manera creíble o más óptima para abordar al ser humano, en lo que respecta a la curación y sanación interna y psíquica, las áreas de la salud y las ciencias humanas no generan un bienestar duradero y profundo en el ser humano.

Es una necesidad actual, encontrar nuevas alternativas de abordaje y comprensión del sí mismo, pretendiendo entonces abrir el espectro de visión del ser humano para de este modo, llegar a plantear y promover una nueva posibilidad que dé solución a esa inconformidad que se tiene frente a la manera de comprender la relación con el sí mismo y que afecta directamente la forma de pensar, sentir, actuar, ver y relacionarse en el mundo. Por medio de las prácticas ancestrales mhuysqas como, por ejemplo: los círculos de palabra (trasnochos), pagamentos y el arte de andar la tierra, se espera comenzar a construir un conocimiento propio que nace del sentir espiritual y del contacto con nuestras tradiciones indígenas.

Entonces, preguntar sobre el valor de construir conocimientos diferentes, pero igualmente válidos, es reconocer que nuestra propia identidad es un proceso del cual no podemos enajenarnos, es un duro movimiento de liberación integral que pide descubrir el valor de la común unidad, del hombre y del espíritu ancestral que tanto meditan y cultivan los abuelos en las

Malocas, es un camino de conocimiento profundo transpersonal e integral sobre el encuentro y desarrollo del sí mismo que pide humanizarse, y por lo mismo puede ser un proceso de todos y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 17 para todos los que compartan la reconstrucción y revaloración del mito Mhuysqa, (todos son el mismo), en el pesimista contexto de lo real aparente y contemporáneo.

En general se despliega un ejercicio científico de la recolección de información a través de la vivencia transpersonal, rituales y prácticas ancestrales Mhuysqas, que para nosotros como investigadores, son la herramienta que da cuenta del porqué se hace necesaria la búsqueda incesante del estado en el que cada uno de nosotros se encuentra, proceso que dentro de la investigación se ha de llamar el encuentro y desarrollo del sí mismo. Wilber indica que “En el psiquismo humano, la evolución holística de la naturaleza que produce por doquier totalidades cada vez más inclusivas se manifiesta como desarrollo” (1980, pág 15); en este orden de ideas, se busca dotar de significado a esos rituales de trasnocho indígena, vistos como la herramienta y el camino que guía la vivencia transpersonal y que permite dar cuenta de esa evolución holística a la que hace referencia Wilber o la psicología transpersonal. Se pretende a su vez integrar el ser, de modo tal que cada uno de los componentes del sí mismo se encuentren integrados y en armonía.

La ciencia tradicional o psicología científica, fragmenta al ser humano reduciendo tanto los síntomas, la misma vivencia al concepto único de enfermedad, de patología. Tratando sus

“enfermedades”, “problemas” o “trastornos”, de manera superficial, interviniendo sólo factores triviales que al ser humano no le generan una sanación y curación de hondura, dejando a la persona la inhóspita sensación de un vacío que no es posible llenar con “medicamentos ni recetas mágicas” lo cual lleva al individuo a buscar nuevas alternativas que llenen a profundidad los factores que la ciencia no quiere ver, es decir su esfera espiritual , mística y divina como forma de comprensión propia. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 18

Como indica (Tauler, 1980) “Todas las criaturas buscan la unidad, toda la multiplicidad lucha por alcanzarla; la meta universal de toda forma de vida es siempre esta unidad”.

Finalmente, lo anterior, conecta con el propósito que persigue la investigación, una terapia en donde las prácticas ancestrales Mhuysqas como herramientas principales otorguen la compresión y la base para un tratamiento desde lo corpóreo, lo emocional, lo psíquico y lo espiritual del ser humano (totalidad) para sanar.

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Objetivo General del Proyecto de Línea

Promover una exploración conceptual de las categorías fundamentales de cosmogonía, mito Mhuysqa y Sí mismo desde la comprensión hermenéutica de estudios ancestrales, filosóficos, antropológicos y psicológicos.

Objetivos Específicos del Proyecto de Línea

1. Promover una exploración conceptual de las categorías fundamentales de

cosmogonía, mito Mhuysqa y Sí mismo desde la comprensión hermenéutica de estudios

ancestrales, filosóficos, antropológicos y psicológicos.

2. Explorar las perspectivas de encuentro con el Si mismo desde el desarrollo del

ejercicio vivencial y ancestral reconocido como el camino de Bochica, la ruta del sol.

3. Manifestar las experiencias etnográficas, fenomenológicas y trascendentales en el

encuentro con las ritualidades, usos, costumbres y mitos de la cultura Mhuysqa.

4. Recuperar la esencia del mito ancestral Mhuysqa desde las vivencias ancestrales.

5. Constatar el proceso de evolución integral humano implícito en el encuentro y

desarrollo del Sí Mismo desde las experiencias cosmogónicas de pensamiento, medicina y

mito Mhuysqa.

6. Evidenciar las vivencias míticas y rituales como una práctica cosmogónica y

psicoterapéutica ancestral de descubrimiento y evolución humana.

Objetivos de la Tarea de investigación

1. Explorar las perspectivas de encuentro con el Sí mismo desde el desarrollo

del ejercicio vivencial y ancestral reconocido como el camino de Bochica, la ruta del sol. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 20

2. Manifestar las experiencias etnográficas, fenomenológicas y trascendentales en el encuentro con las ritualidades, usos, costumbres y mitos de la cultura Mhuysqa.

3. Recuperar la esencia del mito ancestral Mhuysqa desde las vivencias ancestrales.

4. Constatar el proceso de evolución integral humano implícito en el encuentro y desarrollo del Sí Mismo desde las experiencias cosmogónicas de pensamiento, medicina y mito Mhuysqa.

5. Evidenciar las vivencias míticas y rituales como una práctica cosmogónica y psicoterapéutica ancestral de descubrimiento y evolución humana.

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Metodología

En un primer momento el camino es etnográfico, pero se busca ir más allá. Por esto presupone, que aún antes de los criterios metodológicos académicos, resultan relevantes consideraciones éticas e identitarias en la construcción o recuperación de los saberes.

Entonces, las herramientas ancestrales toman fuerza y con su gran profundidad y aplicabilidad investigativa permiten conceptualizar, desarrollar y comprender el camino. El trasnocho, el círculo de palabra y todos aquellos rituales manifestados desde la palabra dulce con corazón, serán los momentos metodológicos en los que se confía la tarea del ejercicio vivencial

Mhuysqa.

No obstante, la investigación se propone en un interés hermenéutico, crítico social y trascendente de consecuente desarrollo cualitativo-descriptivo, un interés donde lo fundamental es generar posibilidades reales y concretas de conocimiento que se basen en alternativas de reparación y desarrollo identitario consciente en niveles prepersonales, interpersonales, sociales, ecológicos y trascendentes.

Consecuente con lo anterior, la presente investigación se concibe metodológicamente en un nivel descriptivo de profundos componentes vivenciales en su desarrollo; siempre considerando lo poco estudiado del tema en cuanto al carácter innovador de la forma metódica y temática dentro de la disciplina psicológica.

De manera complementaria se inscribe en una complejidad de estudio etnográfico sentado en su vertiente más clásica como lo es la observación participación con grupos étnicos, esto atendiendo a un estratégico sentido fenomenológico y vivencial de comprensión de una realidad que aunque propia y enajenada por circunstancias históricas, se asume desde la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 22 experiencia subjetiva e íntima como el camino psicológico que desde el mito Mhuysqa posibilita el encuentro del Sí mismo.

Para la presente investigación la cultura Mhuysqa y su comprensión desde el sentido de su cosmogonía, tradiciones, rituales y sobre todo su mitología; esto a través de la vivencia e interacción con los abuelos, sitios sagrados y sabedores del territorio. En este sentido el grupo de investigación que se conforma se adentró en las prácticas propias de la cultura Mhuysqa

(siembra, círculos de palabra, trasnochos, danzas, rituales, entre otros) como búsqueda y evidencia de reconocimiento y trascendencia espiritual.

Solo resta plantear a manera de síntesis que las narrativas como herramienta conceptual y de transmisión de las vivencias son una posibilidad importante de conexión entre lo occidental y lo ancestral; en estas se describe el conocimiento adquirido acerca de la sabiduría que nos es transmitida por nuestros abuelos en los círculos de palabra, trasnochos y en los lugares sagrados.

De acuerdo al plan de análisis de datos cualitativos el ejercicio de interpretación que se presenta, no es una mirada fraccionada del análisis categorial particular, o del análisis temático de contenido por categorías concebido tradicionalmente, por el contrario, optamos por un razonamiento narrativo o un análisis crítico del discurso (Fischer, 1989. Pag. 219), “que funcione por medio de una colección de casos individuales en que de uno se pase a otro, y no de un caso a una generalización”. La preocupación no es identificar cada caso bajo una categoría general; el conocimiento procede por analogía, donde un individuo puede o no puede ser similar a otros. Lo que importa son los mundos vividos por los entrevistados, los sentidos singulares que expresan y las lógicas particulares de argumentación que despliegan.

Tendríamos la posibilidad metodológica de concluir el trabajo de buena forma, presentando las narrativas en esa hilaridad singular particular de la subjetividad narrada, con El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 23 confianza de despliegue argumentativo y suficiencia conclusiva. Sin embargo, en nuestra convicción integracionista queremos probar una mixtura de abordaje siempre cualitativo por excelencia, es decir, insistimos de todas formas en recrear una manera de análisis temático de contenido categorial, que en su dinámica englobe o meta categorice (generalice) los contenidos de los relatos.

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Foco poblacional

Para la presente investigación existen dos elementos de vital y trascendente importancia: el primero, la cultura Mhuysqa y su comprensión desde el sentido de su cosmogonía, tradiciones, rituales y sobre todo su mitología; esto a través de la vivencia e interacción con los abuelos, sitios sagrados y sabedores del territorio. En este sentido, el grupo de investigación se incorporó en las prácticas propias de la cultura Mhuysqa (círculos de palabra, trasnochos, camino a los lugares sagrados, pagamentos, rituales, entre otros) como búsqueda y evidencia de reconocimiento y trascendencia espiritual. En este sentido hay un elemento etnográfico de mediación radicado en la exploración y comprensión que hay en la tradición indígena, en los descendientes campesinos y en los habitantes mestizos de las trochas y los poblados, así como de las organizaciones de base con sensibilidad al origen y a la necesidad de integración de los saberes ancestrales como forma central de una pervivencia más digna y totalizante en términos de un real desarrollo humano allende las lógicas consumistas e integrado a conciencias bioéticas y telúricas del origen indígena.

Desde aquí y como un segundo elemento poblacional estamos nosotros los investigadores, sujetos investigados, hijos de occidente, hijos de África, hijos de oriente e hijos de indígenas, inmersos en la cultura definida, el pueblo Mhuysqa y su saber ancestral, nosotros mismos en el origen, unidos como una representación certera y vivencial de interés para la investigación. Es en nuestra experiencia fenomenológica y trascendente y en la práctica de las tradiciones de nuestros abuelos en ley que se manifiesta el conocimiento pretendido.

En lo correspondiente al estudio psicológico, se presenta un ejercicio investigativo que reconoce la necesidad sensible de manifestar procesos complejos que trascienden lo racional y conciben una realización de tipo vivencial, por lo que se intenta otorgar garantía de descripción y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 25 riqueza subjetiva, tanto psíquica como espiritual referenciada a la construcción de la realidad narrada solo con posterioridad al toque trascendente de la práctica ancestral. Por ello, por medio de las narrativas logramos constatar el conocimiento, describir el contexto etnográfico y fenomenológico, que permitió parcialmente narrar y reconocer un discernimiento del camino recorrido, ya que no podemos obviar su excelencia y exigencia racional, lo cual dificulta la total expresión de la transformación interior y el sí mismo en palabras que comprendan las experiencias más profundas y esenciales.

En este mismo desarrollo del fundamento metódico se propone como criterio central y como herramientas de investigación principales, las técnicas de exploración textual y el sentido filosófico y psicológico hermenéutico y fenomenológico documental y vivencial de una realidad ancestral mítica, mística y sagrada. Esto debido a la flexibilidad y coherencia que otorgan como mejores formas de recolección de la información si se tiene en cuenta que las experiencias de conocimiento serán las fuentes y los textos existentes, pero también, las evidencias personales de iniciales experiencias estéticas, religiosas y ancestrales como rituales extáticos, experiencias de conciencia acrecentada y vivencias transpersonales y trascendentes.

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PRESENTACIÓN TAREA DE INVESTIGACIÓN

La continuidad vivencial del aprendizaje que contribuye a ese punteo entre nosotros y occidente, permite vislumbrar la multiculturalidad de la cual somos y hacemos parte, también reconoce en lo espiritual la base fundamental de desarrollo del sí mismo y de ese colectivo que se rige por las lógicas epistemológicas y metodológicas rígidas y circulares; es por ello, que la descripción de la tarea, oscila en la integración de dichos factores, alejándose de la hermeticidad de la investigación cuantitativa y los enfoque de escasa comprensión fenomenológica.

Bajo las lógicas de la metodología y lo hasta ahora planteado, vuelve a ser reiterativa la necesidad de progresar en la búsqueda epistémica del nuevo camino, una propuesta integral que acople las dicotomías en las que se quedan inmersas algunas investigaciones, de este modo, permitirse ahondar en el psiquismo humano viendo ésta como la fuente del conocimiento propio y comprendiendo el camino ancestral como la enseñanza milenaria de sanación.

En concordancia, se propone las narrativas como una herramienta de acercamiento a la experiencia vivencial, el ejercicio analítico y las reflexiones que ha dejado el camino investigativo de andar la tierra; la lectura, así como desde su planteamiento inicial fue la escritura, permite entrever el trabajo individual a nivel físico y psicológico, mostrando así la significación subjetiva de los diferentes momentos que hicieron parte de la construcción de lo que sería el camino de Bochica.

La lectura pretende hilar el trabajo investigativo singular al que han estado expuestos los caminantes de la investigación, para ello, el orden metodológico de camino va desde las narrativas hasta el conjunto de meta-categorías en un despliegue argumentativo categorial y poético, finalmente termina con la suficiencia argumentativa de cierre y a su vez, de apertura frente a los procesos por devenir; la forma de abordaje entonces tiene que ser diferente, amplia y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 27 de apertura a la subjetividad comprensiva y fenomenológica, siempre en los marcos del paradigma cualitativo.

No sólo es una herramienta, la narrativa es el ejercicio valiosamente sustancial que conserva la apropiación de las reflexiones subjetivas basadas en lo experiencial, son hechas por el mismo caminante, por tanto, dialoga y concluye su trabajo, construyendo la comprensión del fenómeno psíquico desde esa mirada integral de haberlo vivenciado, dotando de dulzura los significados rígidos de la psicología que se alejan del fenómeno de psiquis.

El ejercicio investigativo es finalmente la esencia de la narrativa, la narración colectiva del fenómeno que se ha explorado en el camino ancestral y que se expresa retomando varios elementos, teóricos y rituales mostrando así en conclusión la autenticidad del ejercicio.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 28

Narrativas

Las siguientes narrativas son la expresión literaria de cada caminante de la investigación presente, en ellas se relata el camino, el proceso espiritual, emocional y la vivencia ancestral que tuvo cada uno de los investigadores. En cada escrito se evidencian diferencias en la forma y el estilo literario, pues estos textos lo que buscan es tener una base escrita de lo vivenciado ancestralmente en el territorio, dando cuenta de una fenomenología trascendental en relación a lo místico, espiritual y lo divino de nuestros usos, costumbres y rituales Mhuysqas.

Las narrativas se presentan en orden cronológico, en el que se realizaron las salidas de campo por el territorio cundiboyacense. A medida que se avanzaba en la investigación, se solicitaba apertura en relación a la expresión escrita de las vivencias, con el fin de que éstas dieran cuenta de un trabajo desde el sí mismo, en conexión con una transformación personal llevada a un nivel de sanación y curación más allá del ojo racional de occidente.

LAS AGUAS

Jeisson Lavao

Hoy me levante muy temprano, dispuesto a subir Monserrate con el profesor Luis

Eduardo y el grupo de ancestral; me siento muy emocionado de estar viviendo este tipo de experiencias, sinceramente creo que en mi está despertando un interés y un gusto profundo por este tema.

Al llegar a la estación de Transmilenio “las aguas” me encontré con la mayoría del grupo de investigación de ancestral, con el profesor Luis Eduardo, la profesora Andrea y el mamo

Roberto, quien por cierto era la primera vez que lo veía; la primera impresión que tuve de él fue el de una persona seria, amable, sabia y que de alguna manera inspiraba tranquilidad, era del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 29 tipo de persona que prefería aguardar en tranquilidad y silencio, las palabras correctas para decirlas en el momento adecuado, por lo cual debería estar atento a cada cosa que quisiera compartir con nosotros.

El profesor Luis Eduardo nos informó que ese día no se podría subir a Monserrate así que nos dispusimos a recibir una charla del mamo Roberto, en un pequeño río llamado Bichaca cercano a la montaña sagrada de Tenzaca (Monserrate), en donde todos nos sentamos a escuchar atentamente todo lo que el mamo tenia para decirnos, hablo acerca de la madre tierra y de cómo deberíamos aprender de ella a través de los sabios “abuelos”, honrando siempre su memoria y reconociendo la importancia de ellos en nuestras vidas, ya que esto era algo que actualmente la sociedad había olvidado, nos dijo también que al olvidarnos de la Madre tierra nosotros descuidábamos lo que ella sagradamente nos brindaba, hermosos tesoros como el agua, aquel liquido esencial sinónimo de vida y de vital importancia para nosotros, era desperdiciado sin tener el menor cuidado, el mamo nos señaló el rio que bajaba frente a nuestros ojos y nos dijo: esto es un hermoso tesoro escondido en esta gran ciudad, muchos de los que viven en ella no saben lo importancia de este rio, pues este rio alimenta a toda la ciudad y le da vida; todos nosotros somos privilegiados por estar frente a este gran regalo de la madre… pero para eso el

Mamo estaba allí, para enseñarnos el valor de la tierra y de cómo podíamos honrar y agradecer por lo que la Madre tierra nos brinda, nos dijo que esa era un tarea que los mismos Abuelos le habían encomendado a él , enseñarle a los hijos de la tierra a reconocer a sus padres olvidados, además de esto nos dijo que al estar allí estábamos acudiendo al llamado de la Madre Tierra, a iniciar un largo camino de aprendizaje de la mano de las montañas, los abuelos, los ancestros y sus sagradas enseñanzas. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 30

Luego nos fuimos al museo del oro al cual por cierto también iba por primera vez, de verdad que cualquier persona queda maravillada con tanta belleza que nuestra cultura indígena tiene para mostrar al mundo; para mí fue muy impresionante ver aquellas piezas talladas a mano con tal delicadeza que yo debía percatarme de cada detalle de aquella pieza del pasado, para así intentar lograr comprender ese fragmento de historia que en ella había quedado impregnado a través de tantos años, y que por alguna razón llegaban a mí a través de una grupo de investigación ancestral ( coincidencia , no lo creo ). Recorrimos la mayor parte del museo admirando aquellas piezas sala tras sala, para mí siempre había alguna pieza que cautivaba mi mirada, al terminar de recorrer casi todo el museo el profesor nos dirigió unas palabras culminando así la actividad de aquel día.

MONSERRATE

Jeisson Lavao

Comienza el día muy temprano a las 4: 00 am con sol radiante y una gran expectativa en el corazón, me levante lleno de energía pues aquel día me tenía preparado muchas emociones y vivencias.

Llegue a la estación de “las aguas” en donde el profesor Luis Eduardo y la Profesora

Andrea nos esperaban junto al grupo de ancestral, para subir a Monserrate como parte de una tarea que el abuelo Fernando nos había encomendado, al llegar todos nos saludamos amablemente después de casi un mes de ausencia, charlamos y cada uno narro lo que le había sucedido en ese mes de vacaciones; luego nos dirigimos al inicio del camino donde comenzaríamos nuestro ascenso a la montaña sagrada de Tenzaca (Monserrate), al llegar allí el profesor Luis Eduardo se dirigió a nosotros para explicarnos que subiríamos en grupo y que no El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 31 era obligación llegar hasta la cima de la montaña, pues llegaríamos hasta donde se nos permitiera como grupo.

Comenzamos el ascenso a la montaña con una compañera que al parecer presentaría dificultades para subir hasta la cima, por lo que cada uno le brindó su apoyo de alguna manera para que se llenara de confianza y lograra hacerlo, así que cada 15 minutos nos deteníamos para que todos tomáramos aire recuperáramos fuerzas y continuáramos el ascenso , mientras subíamos surgieron charlas de temas muy diversos ( charlas para distraer la mente y que el ascenso fuera menos notable), por mi parte mientras subía la montaña sentía una presión en mi corazón como si con cada paso que daba fuese creciendo, tenía muchas ganas de llegar a la cima aunque realmente no sabía por qué, así que con paso firme y con muchas entereza seguí caminando por casi una hora y media, hasta que de repente me encontré con la cima de la montaña, esto me lleno de mucha emoción era como si quisiera saltar de alegría, era la alegría de ver que todos habíamos logrado llegar a la cima como grupo .

Al llegar nos separamos por unos 5 minutos para luego volver a reunirnos y dirigirnos hacia un sitio al que profesor Luis Eduardo nos dijo era la mitad en la cima de la montaña; el profesor inicio con una charla en la que saludaba a la madre tierra , a las zonas cercanas y a los ancestros, nos dijo que cada uno debería pedir permiso a los ancestros y a la montaña

(permaneciendo en silencio durante 30 minutos, pensando en la montaña y diciéndole a ella, el por qué queríamos comenzar a caminar por el camino de lo ancestral).

Para pedir permiso yo me dirigí a unas rocas en donde esperaba sentirme cómodo para lograr tener tranquilidad y cumplir el objetivo de saber si la montaña nos daba o no el permiso, tome una piedra de cuarzo entre mis manos y en silencio empecé a pensar en muchas cosas como en, ¿cómo sabré si la montaña me dará o no permiso? , ¿Estaré escuchando de la manera correcta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 32 para saber lo que la montaña tiene para decirme? , ¿Al ser mi motivación e interés el aprender la montaña me dará permiso?; cerrando mis ojos le dije a la montaña que me permitiera a través de lo indígena llenarme de sabiduría, y de conocimiento, ya que mi corazón se sentía atraído por el tema ancestral y latía con fuerza desde la subida a la montaña, además de estar fascinado por empezar a caminar el sendero mhuysqa.

Intente poner en mi mente mucho dinero para entregar a la montaña en forma de pago por el permiso y el aprendizaje que esperaba que de ella, en mi cabeza lo imagine como un intercambio, por lo cual pensé en una cifra de diez millones de pesos (no sé por qué esa cantidad en específico, pero la creí adecuada), mientras pensaba en estas cosas frotaba entre mis manos mi cuarzo como si fuese alguna especia de conexión entre la montaña y yo, al terminar de imaginarme el intercambio con la montaña, dirigí mi mirada a la roca que estaba enfrente mío , no sé cómo explicarlo pero sentí ganas de jugar con mi cuarzo y con aquella roca hasta de que un momento a otro un pedazo de la roca se desprendió, la verdad no supe que hacer por un buen rato, mi mente empezó a divagar y pensaba en como la montaña me podría hablar, de si mis oídos eran lo suficientemente buenos para escucharla, o de que haría si de repente la montaña me hablara, ¿Me asustaría? , ¿Me hablaría a través del viento o los arboles?; mientras todas estas preguntas rondaban mi cabeza yo seguía acomodando la roca de nuevo, como si esta no se hubiera caído; en realidad no sabía que hacer luego sin saber por qué volví a dejar la roca tal y como estaba, sin darme cuenta del tiempo que había trascurrido el profesor nos dijo que el tiempo había terminado, por lo que me levante y con mucha tranquilidad arroje mi cuarzo con todas mis fuerzas dentro de la montaña (colocando en el todos esos pensamientos que había tenido), para que llegara lo más lejos de posible y así la montaña lograra escuchar mis pensamientos. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 33

EL HOMBRE QUE PODRÍA SER Y NO SOY.

Jeisson Lavao

Nos reunimos en cota que en idioma , quiere decir «crespo» o «encrespado». De acuerdo a la mitología muisca, Cota figura en el itinerario de Bochica, quien desde la cueva del mohán, en la colina de Cetime, predicó el culto al sol y enseñó a cultivar la tierra y a tejer algodón. Cota está situada en la Sabana de , sobre el Altiplano Cundi-boyacense

(Cordillera Oriental de los ).

Estaba toda la de la línea de investigación allí reunida con un viejo amigo que hacía mucho tiempo no veíamos, esto le daba a la noche un ambiente de tranquilidad y afectividad, aunque por dentro sentía que mi alma cargaba con un mundo de inseguridades y miedos.

Al llegar al sitio de trasnocho y pagamento con el “abuelo” Fernando, yo me sentía muy impaciente y con un enorme sentimiento de vacío dentro, para lo cual la madre respondió con un trasnocho casi que al aire libre; con una noche tan fría como nunca antes había sentido en todas las ocasiones en que había trasnochado con el abuelo Fernando. La noche estaba fría y helada, la brisa era implacable pues hacia que todos los que estábamos allí, buscáramos refugio y calor colocándonos una , una cobija o incluso acercándonos, a la persona que tuviéramos cerca para reconfortarnos un poco ante la implacable noche; no se la razón o el por qué pero mi cuerpo esa noche no sintió frio, no quise buscar algo que me abrigara ni quise si quiera acércame a las personas que tenía cerca para sentir su calor, no lo hice porque mi alma se encontraba tan fría como la noche y la madre me lo estaba mostrando, me sentía cómodo con aquel sereno que me permitía permanecer con una postura rígida para soportar el peso del mundo que tenía en mis espaldas(el peso de los problemas por los que mi familia estaba pasando); observe como los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 34 demás sentían frio, como sus cuerpos temblaban y como su aliento saliendo de su pecho formaban una nube de humo.

Me sentí responsable por aquella noche fría ya que era como si mis compañeros estuvieran sintiendo el frio interior y la desolación que yo sentía, por esta razón quise compartir mi ruana con aquel viejo amigo que venía a visitarnos y con mi pareja, a la cual le brinde mi cobija para que se abrigara y sintiera un poco de calor, calor que esa noche yo podía no brindar ya que en mi solo había frialdad, oscuridad, y vacío “era mi hora oscura” luego de prestar abrigo a los demás me sentí un poco más tranquilo, por lo que pude centrar toda mi atención en el abuelo Fernando y en las palabras que la madre me iba a decir a través de aquel sabio Abuelo.

Recuerdo muy bien que esa noche el abuelo Fernando menciono como nosotros los hombres deberíamos ser y señalo algunos de los ideales que deberíamos tener como personas, ideales como la humildad, la sencillez, la honestidad y la nobleza. Estas palabras me impactaron demasiado porque la verdad en mi vida he intentado ser esa persona y no lo he logrado, he visto en la humildad algo muy grande y casi que a todas las personas con las que hablo trato de mostrar mi humildad y sencillez, pero muchas veces el ego entra con mucho orgullo y el resultado esto es la arrogancia que sé que no necesito, pero que muchas veces habla por mí; la honestidad es algo muy complicado porque la verdad muchas veces me he valido de la mentira y el engaño para conseguir o hacer cosas, no es algo de lo que enorgullezca pero es la verdad, muchas veces el ser honesto se torna tan complicado y difícil que la mentira se muestra como una salida fácil; por último la nobleza aunque sé que es una de mis virtudes, es algo que con el pasar del tiempo y las experiencias con las demás personas se daña, ya que muchas veces se aprovechan de ella extinguiendo esta virtud casi por completo. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 35

Aunque me sentía incompleto y vacío el abuelo Fernando nos dijo que no debíamos sentirnos mal, que también debía haber espacio para el humor y la alegría así que él conto algunos chistes, esto me hizo sentir mejor era como si la Madre me diera una voz de aliento y me dijera: no se rinda inténtelo a pesar de la adversidad y lo difícil que pueda ser, usted puede ser mejor persona; puede ser un buen hombre…

La noche seguía fría al igual que yo; mi compañera se intentaba acercar a brindarme un poco de calor, pero yo seguía frio y vacío, de repente el abuelo Fernando hablo acerca de las parejas de hoy en día, y de cómo las personas estaban juntas sin en realidad estarlo, de como el hombre y la mujer estaban supuestamente juntos sin sentir un verdadero compromiso el uno al otro, sin saber y entender que la mujer es el complemento del hombre (es vida), de como el hombre debería cuidar y proteger a la mujer; todo esto era un mensaje de la Madre que cuestionaba la clase de hombre que en ese momento yo estaba siendo, entendí que aunque mi alma estuviera sintiendo el peso del mundo (problemas económicos de mi familia), y de que aunque por dentro yo solo sintiera un vacío enorme y una frialdad implacable, solo la Madre y solo ella seria quien lograría sacar de mí un poco de calor, de llenar mis vacíos con su cariño y afecto, y hacer que aquel peso del mundo que sentía, se hiciera más fácil de soportar cuando ella estuviera en mí.

Quise sonreír, quise escuchar, quise sentir, quise estar... pero era el hombre que era y no el que quería ser…

EL COMIENZO DE UN LARGO CAMINO.

Jeisson Lavao

Martes 24 de junio de 2014 fue el día en el cual con el grupo de investigación ancestral nos disponíamos a realizar nuestra experiencia más decisiva, en la cual sabríamos si la Madre y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 36 nuestros Ancestros nos darían permiso para comenzar a caminar en esta gran experiencia de búsqueda, descubrimiento de lo propio y de sanación profunda. Nos dirigíamos hacia Silvania municipio de Cundinamarca (Colombia), ubicado en la provincia del Sumapaz. En la época de la conquista se conocía como Subia o Uzathama y era habitado por los Suturaos. Allí en Silvana nos encontraríamos con el Mamo Roberto para trasnochar durante 2 noches; yo sentía gran expectativa por lo que los nuestros Ancestros nos pudieran decir esas noches, de si tal vez si nos darían el permiso para comenzar a recorrer la ruta civilizadora de Bochica o no.

Aquel día comenzaría con una breve escala en la casa del profesor Luis Eduardo en donde la mayoría del grupo de investigación se reuniría para recoger todos los equipos necesarios para acampar durante 2 noches, luego de esta breve escala tomamos camino hacia nuestra primer parada que sería Sibate, en donde haríamos mercado para nuestra alimentación de esos 2 días. Luego de almorzar tomamos transporte hacia Silvania (la frontera) el cual era nuestro destino, al empezar a descender por el camino nos percatamos de que aquel equipaje que llevábamos estaba un poco pesado, y que llevarlo hasta la casa del Mamo sería algo engorroso, de alguna manera acomodamos el equipaje para llevar las cargas y así lograr llegar a nuestro destino. El camino era una carretera destapada por donde todos bajamos muy alegres charlando a la expectativa de lo que serían esas 2 noches; caminamos durante casi 45 minutos hasta llegar a encontrarnos con los hijos del Mamo, quienes nos guiarían por el último tramo de camino en donde después de algunos tropiezos, dificultades y caídas, llegaríamos a la casa del Mamo quien nos acogería con una calidez enorme.

Después de descansar un poco nos pusimos en la tarea de armar nuestra carpa, y de ubicarnos de tal manera que todos nosotros quedáramos cómodos, al acabar esto tomamos una El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 37 breve siesta para luego recibir la cena, y disponernos para la que sería nuestra primer noche de trasnocho en el bohío del Mamo Roberto.

La noche empezó y el Mamo se dirigió a todos nosotros con gran humildad en sus palabras, nos dijo que aquella noche nosotros no estaríamos solos pues en aquel bohío estarían nuestros abuelos y ancestros, y lo que ocurriera esa noche ellos los escucharían y que a partir de la voluntad de la madre, se sabría si nos darían permiso o no para empezar nuestro camino (la ruta civilizadora de Bochica), al escuchar estas palabras la incertidumbre invadió mi corazón y la preguntas empezaron a llegar a mi cabeza ¿Estoy listo para esto? , ¿Los ancestros me darán permiso? ; A pesar de esto tenía la inexplicable sensación de sentirme bien al saber que mis ancestros me observaban.

Luego la hija de Mamo Roberto, Susana se dirigió a nosotros con palabra dulce, cálida, llena de fuerza y firmeza; al escucharla mi atención se centró totalmente y mis oídos se focalizaron en sus palabras, las cuales proponían una actividad en donde todos nosotros deberíamos limpiar todo el negativo (son todos aquellos pensamientos que nos llenan de malestar como el malgenio, la rabia, el dolor y la tristeza), de nosotros mismos con dos hilitos blancos. Al empezar a hacer este proceso de limpieza en mi cuerpo, yo sentía como la piel se me erizaba y empezaba a salir aire de mi cuerpo como si fuese vapor, me sorprendí pero por miedo a la reacción de los demás no manifesté nada en absoluto, aunque yo sabía en mi interior que lo estaba sintiendo era aquella limpieza. Luego de terminar esta limpieza nos pidieron salir de bohío, para estar enfrente de una pequeña laguna (representación de la Madre), allí Susana se dirigió a nosotros con la misma calidez y dulzura para preguntarnos:

● ¿Con que objetivo hacíamos este proyecto?

● ¿En una palabra describir lo queríamos hacer en estos sitios sagrados? El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 38

● ¿Qué le llevaríamos a estos sitios sagrados?

● ¿Qué vestimenta llevaríamos a estos sitios sagrados?

● ¿Recordábamos desde cuando habíamos empezado a caminar este sendero

indígena?

Todas estas preguntas deberíamos contestárselas a aquella laguna (representación de la

Madre), quien estaba esa noche dispuesta a escucharnos, por lo que todos nos concentramos en ella durante 30 minutos, respondiendo todas estas preguntas desde el corazón para que así la

Madre, nos brindara su apoyo para comenzar a caminar por el sendero indígena, de la mano de ella y de nuestros ancestros. Por mi parte lo que le conteste a la Madre fue que yo hacia este proyecto para llenarme de conocimiento y sabiduría, (aunque luego a través de ella misma, yo entendería que hacia esto con el único propósito de sanación), al responder la siguiente pregunta la palabra que escogí para describir lo que quería hacer en los sitios sagrados fue llenar, llenarme de experiencias, vivencias, conocimiento y tranquilidad; luego le respondí a la laguna que lo que llevaría a los sitios sagrados seria amor, para que de la misma forma los sitios sagrados me llenaran de él, luego pensé en la ropa que llevaría a los lugares (en base a lo que nos habían dicho el Mamo y Susana), pensé en ropa blanca y limpia para así presentarme de la mejor manera a los lugares sagrados, por ultimo recordé desde cuando había empezado a caminar en el sendero indígena, y recordé como gracias al profesor Luis Eduardo, mi interés surgió en una actividad en la que debíamos subir a Tenzaca (Monserrate), como parte de un ejercicio para escuchar a la montaña de la clase de epistemología. Al terminar de responder las preguntas me sentí aliviado sin comprender por qué; luego Susana nos dijo que la Madre nos daría respuesta al día siguiente; así que después de volver todos nos fuimos a dormir aquella noche. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 39

Nos despertaríamos al día siguiente a las 6 de la mañana para realizar una actividad de limpieza con el Mamo Roberto, con una pequeña bolsita blanca (supuse yo, que aquella bolista se había tejido con los hilitos blancos que la noche anterior habíamos trabajado nosotros en la limpieza), el Mamo nos hablo acerca de nuestros sueños y de cómo muchas veces eran señales de lo que debíamos hacer, también nos hizo una limpieza con el chirrinchi para luego pedirnos mucha concentración durante el día, ya que esa noche recibiríamos respuesta a nuestra petición.

El día transcurrió con algunas actividades como lo fue el partir leña, salir a caminar con el Mamo durante un rato, mientras las mujeres se quedaban en casa implementado el tejido, caminando por un terreno empinado llegó un pensamiento a mi cabeza. Aquel pensamiento fue que mi vida giraba en torno a una constante inestabilidad la cual me costaba demasiado, siempre veía a los demás, más estables y con herramientas para afrontar los problemas, pero a pesar ello yo intentaba seguir adelante con caídas y tropiezos, costándome cada paso que daba ya que muchas veces los pasos que yo creía dar con firmeza, me hacían retroceder mientras yo luchaba por no hacerlo e ir hacia adelanté, me percate que muchas veces el retroceder un poco, y tomarte el tiempo para ver el terreno te permite pensar y calcular mejor el siguiente paso que vas a dar, entendí que por más de que la vida cueste, hay que caminar con mucha fuerza en el corazón para lograr dejar huella en el sendero recorrido.

Llego la noche y con ella la incertidumbre de lo que vendría, esa noche sabríamos si la

Madre nos daría o no el permiso de seguir por este camino, el Mamo comenzó diciendo que nos quería escuchar a nosotros, así que algunos de mis compañeros hablaron, luego de escucharnos atentamente la respuesta llego fue de un Si, un si lleno de mucha responsabilidad y respeto, por el cual el Mamo decidió prepáranos explicándonos como deberíamos brindar alimento a los lugares sagrados, luego nos mostró como a través de danzas podríamos ayudar a los sitios , El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 40 danzamos con mucho gusto y alegría durante la noche con tonadas del profesor Luis Eduardo y el Mamo Roberto, el Mamo nos indicaba la manera correcta de hacerlo, pues este mismo ritual lo deberíamos hacer en cada sitio al sagrado al que fuéramos, nos enseñó a hacer pagamento

(arrodillándonos y colocando en pensamiento alimentos, plantas, frutos, oro y semillas) para dejarlos en los sitios como agradecimiento. Yo me sentía realmente feliz pues la Madre Tierra me había dado permiso para empezar a caminar, así que durante toda la noche estuve muy atento a lo que decía al Mamo, para así yo poderlo de la manera correcta en todos los lugares en que estuviera, para mí esta experiencia fue muy especial porque pude sentir una gran conexión como grupo, conexión que sería la base para este nuevo largo camino.

FACATATIVÁ

Jeison Lavao

Nos dirigimos a el parque de Facatativá a la universidad de conocimiento sagrado de nuestros ancestros, en donde tendríamos uno de nuestros primeros trasnochos sin la compañía del

Abuelo o del Mamo. Al llegar al parque un amigo del profesor Luis Eduardo nos ubicó muy amablemente en una cueva. Con la llegada de la noche nos dispusimos a comenzar nuestro trasnocho donde haríamos pagamento, como se nos había encomendado en Silvana en la casa del

Mamo Roberto, así que iniciamos con mucha timidez e inseguridad pero con la claridad en nuestros corazones de lo haríamos allí.

Allí estábamos a la merced de la noche del silencio, de la oscuridad, del frio, del miedo y de la incomodidad, que a cada uno de nosotros nos llegaba de forma particular, estas sensaciones nos intentaban hacer flaquear ante nuestro propósito de pagamento; yo por mi parte tenía un extraño sentimiento de desamparo el miedo invadía mi mente y mi cuerpo, aunque no quise manifestar nada de esto a los compañeros para no demostrar debilidad, ya que como lo había El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 41 dicho Susana en la casa del Mamo “ No deben haber dudas, deben tener claridad” , el hecho de que yo tuviera miedo no me dejaba sentir tranquilo; el profesor Luis Eduardo me brindo un poco de hayo (planta sagrada para sentar pensamiento), el cual para mí es como un aliado de poder que al masticarlo y tomar su jugo, me brinda la fuerza necesaria para estar y pensar, es como si rumiara las palabras y los pensamientos para me llenarme de fuerza, esa noche más que nunca agradecí que el profesor me brindara un poco de hayo (aclaro mis pensamientos).

Luego de unos minutos en silencio mi compañera Viviana comento que le había llegado el pensamiento de que debíamos estar en silencio y a oscuras, esto realmente me lleno de temor pues no me sentía preparado para estar en la oscuridad, luego de esto el profesor manifestó que a

él también le había llegado el mismo pensamiento, por lo que decidimos apagar las dos velas que mantenían la pequeña luz de la cueva, al llegar la oscuridad inmediatamente sujete la mano de mi compañera Tatiana con fuerza, pidiendo como un niño asustado que no me dejaran solo, al llegar la oscuridad también llego el silencio, un silencio con mucho ruido que provenía de mí interior, de mis pensamientos, y de mis temores que se escuchaban con mayor fuerza en aquella oscuridad silenciosa( era el negativo que se manifestaba como temor en mi), así que para sentirme seguro intente buscar luz y claridad pero lo único que pude encontrar fue la luz de la luna que estaba a la entrada de la cueva, la luna iluminaba una pequeña roca que estaba ubicada exactamente a la entrada, por algún motivo sentí que esa roquita era como una especie de guardián que cuidaba la cueva , por varios minutos la observe pensando en que ella era nuestra protectora, esto logro tranquilizarme un poco hasta que el profesor de nuevo prendió las velas y luz de nuevo ilumino la cueva, ilumino mi oscuridad.

El profesor Luis Eduardo al inicio del trasnocho había comentado la idea de compartir un tabaquito con todos nosotros esa noche, por lo que después del momento de silencio dijo que lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 42 compartiríamos, nos explicó como rapear de la misma forma en que a él se lo habían enseñado, nos explicó que siempre se cogía hacia arriba el tabaco, primero con la mano derecha y después con la izquierda ya que en nuestro hombro derecho estaban nuestros ancestros y en nuestro hombro izquierdo nuestros abuelos de linaje, nos mostró también los movimientos de limpieza que podríamos hacer sobre nuestro cuerpo; luego el profesor cogiendo el tabaco entre su manos le canto una muy linda canción al tabáquico, para endulzarlo y ponerle propósito bonito.

Luego de que el profesor encendiera el tabaco y lo compartiera a la profe Andrea el tabáquico llego a mí, yo lo tome con mucho respeto y siguiendo las instrucciones del profesor empecé a trabajar con el tabáquico por todo mi cuerpo a manera de limpieza y de fuerza, yo sentía que el humo que me rodeaba me ayudaría con el miedo así que con ese pensamiento lo trabaje, tocándome el hombro izquierdo recordando a mi abuelo y en el hombro derecho honrando a mis ancestros; después de unos minutos compartí el tabáquico con mi compañera

Viviana que a su vez lo trabajo y lo compartió los demás compañeros, hasta que llego de nuevo a mí, al tomarlo entre mis manos sentí que ese tabáquico era dulce, y me brindaba tranquilidad de la dulzura que manifestaba el femenino de la profesora Andrea, era cálido y me hacía sentir tan tranquilo que sentí que ese femenino era la fuerza de la Madre, la cual siempre nos calma y tranquiliza cuando algo no está bien. Luego de terminar con el tabáquico el profesor empezó a tocar la armónica, los demás compañeros empezaron a acompañar la melodía con algunos instrumentos que el profesor había llevado, yo tome la tambora y cerrando los ojos empecé a tocar intentando seguir la melodía, cerré los ojos hasta que escuche que la música se detuvo.

Después de esto el profesor nos dijo que deberíamos dejar el alimento que habíamos llevado y deberíamos hacerlo de la manera en que el Mamo nos había ensañado en su casa, así que salimos de la cueva, y luego arrodillándonos colocamos en pensamiento el bohío del Abuelo Fernando y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 43 el estantillo de la casa del Mamo para dejar el alimento espiritual, por mi mente paso todo lo que había comido durante la semana lentejas, arroz, carne, papa, plátano, mora, huevo, leche, chocolate, agua y panela, luego puse en pensamiento 10 lingotes de oro que se acomodaban uno sobre otro, luego puse en pensamiento 2 millones de pesos en un bolsa de dinero, también pensé en todas las semillas que conocía semillas de naranja, mandarina, cacao, café, ciruela, melón, papaya, y de manzana depositándolas en una vasijita de barro para la tierra en un estantillo; al terminar de hacer el pagamento entramos a la cueva para descansar.

CONFIESO EN SILVANIA.

Jeisson Lavao

Luego de nuestro trasnocho en las piedras de Facatativá, nos dirigimos a la casa del

Mamo Roberto en silvania, para cumplir con la promesa de volver al chunzua de la casa del

Mamo luego de visitar cualquier lugar sagrado, para así contarle a los abuelos lo que había ocurrido en cada lugar al que habíamos ido, ya que en ese acuerdo habíamos quedado la vez que allí en el chunzua, les habíamos pedido permiso a los abuelos para comenzar nuestro camino en los lugares sagrados.

Luego de instalarnos en el chunzua comenzamos nuestro trasnocho con el Mamo

Roberto, el cual nos dijo que deberíamos contarle todo lo que había sucedió la noche de trasnocho en Facatativá, todo lo que habíamos sentido lo que habíamos pensado lo que habíamos oído o imaginado, todo eso deberíamos contárselo esa noche a él y a los mismos abuelos que nos habían dado permiso la última vez que habíamos estado allí, además de esto el Mamo nos dijo que esa noche cada uno de nosotros debería poner palabra y debería hablar para ser escuchado por nuestros ancestros, el primero en hablar fue el profesor Luis Eduardo quien manifestó que la noche de aquel trasnocho sintió que como grupo nos faltaba fuerza y fe, dijo que esa noche hubo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 44 cierta incertidumbre acerca de la manera adecuada de realizar nuestro pagamento; luego yo comencé a confesar lo que esa noche había sentido dije que esa noche había sentido miedo e incertidumbre, pues hubo un momento en el que en el trasnocho de silvania decidimos apagar la luz y quedarnos a oscuras durante un tiempo, manifesté que esto me lleno de mucho miedo y desconcierto además de que esa noche había sentido que me faltaba algo para poder sentarme a trasnochar y pagarle a los ancestros, luego mis compañeras dijeron que por el contrario ellas no habían sentido miedo, incluso mi compañera Viviana manifestó que aquella noche ella sintió que el lugar sagrado le pedía que estuviéramos a oscuras, y cuando se apagaron las luces ella estuvo muy cómoda; cada uno de nosotros conto lo que sintió y pensó esa noche de trasnocho en

Facatativá, para cada uno de nosotros la experiencia tuvo significados diferentes, pero todos sentimos que nos faltaba algo y ese algo era lo que confesábamos esa noche a los abuelos para que nos ayudaran a encontrarlo como grupo, y de manera individual a cada uno. El Mamo nos escuchó atentamente al igual que su hija marianita y luego de que terminamos de hablar, marianita se dirigió a nosotros y nos dijo: “no se preocupen no está mal lo que están sintiendo, lo que les ha pasado es normal ya que ustedes están comenzando a andar por el camino de lo indígena y es natural que sientan miedo o incertidumbre”, por esa misma razón los abuelos les pidieron en aquella noche que pedían permiso, que después de ir a cada sitio vinieran acá a confesar lo que pasaba para ayudarlos y guiarlos en el camino correcto, para que puedan seguir andando en este camino tan bonito que es el de nuestros ancestros y la Tierra. El mamo Roberto hizo énfasis en que era normal sentir miedo cuando se empieza a andar un camino totalmente diferente al que estamos acostumbrados, ya que el camino de lo espiritual te lleva a encontrarte contigo mismo y con la madre, por lo que es normal muchas veces sentir miedo, pero que el miedo no es malo, por el contrario muchas veces es necesario caminar de la mano con el miedo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 45 para aprender de él. Luego el Mamo Roberto nos relató una historia de cuando él era joven, en donde nos contaba que a él también le había dado miedo estar a oscuras, que una vez lo habían mandado a caminar de noche solo por un camino con una linterna, y que el cada vez que daba un paso sentía más y más miedo, y pensaba ¿y si se me apaga la linterna yo que hago?, y de repente se le había apagado la linterna y nos decía “ a mí me dio más miedo” , pero seguí caminando porque cuando uno tiene miedo, de nada sirve la linterna porque el miedo siempre le gana a uno; pero el caminar a oscuras le ayuda a uno a ver con otros ojos, porque los ojos normales no sirven para ver en la oscuridad, y por eso es que da tanto miedo, pero es mientras aprenden a ver con otros ojos.

Realmente me lleno de mucho alivio escuchar al MAMO decir que él también sentía miedo, además contando esa historia yo realmente entendí la reflexión y se me hizo muy bonita su forma de darnos seguridad y de explicarnos paso a paso lo que podríamos sentir por este camino, lo hizo con mucha calma y entendiendo a cada uno de nosotros.

LA LUZ EN LA MONTAÑA.

Jeison Lavao

Nos dirigíamos al municipio de Cota uno de los 116 municipios del departamento de

Cundinamarca (Colombia). Se encuentra ubicado en la provincia de la Sabana a 26km de

Bogotá; La palabra “Cota”, actualmente tiene el sentido de lo propio y de lo patronímico, con el cual la comunidad indígena del resguardo se identifica a nivel local, allí en Cota realizaríamos nuestro trasnocho con el abuelo Fernando, donde aquella noche haríamos ritual de pagamento y confieso, contándole al abuelo Fernando lo ocurrido en nuestra experiencia de trasnocho en

Facatativá, también esa noche le pediríamos fuerza a los abuelos, para realizar nuestro viaje por el municipio de Boyacá. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 46

Al comenzar la noche dimos inicio al trasnocho el abuelo Fernando nos preguntó ¿cómo nos había ido en Facatativá?, a lo que todos respondimos tenuemente con un “bien”, el profesor

Luis Eduardo tomo la vocería y le relato al abuelo Fernando, lo ocurrido en aquella noche de trasnocho en Facatativá, expresándole un sentimiento de falta de fuerza y unión como grupo en el experiencia vivencial, él profesor también dijo haber sentido que nos faltaba fé, comentario que sentí yo era cierto porque de alguna manera sentía que me faltaba fe para sentir a los abuelos, a los ancestros, a la tierra y la Madre. El abuelo Fernando escucho atentamente el relato del profesor Luis Eduardo y luego que de que el profesor termino de hablar, el abuelo nos dijo: acá atrás en la montaña existe una fuerza muy grande, una fuerza que está conectada con el chunzua, así que ahora vamos a salir y se van a estar un rato afuera, a ver qué es lo que cada uno de ustedes logra ver en la montaña… , por lo que todos salimos y nos dirigimos a la parte de atrás del chunzua, allí el abuelo nos dijo que debíamos concentrarnos y mirar hacia la montaña, luego de esto el abuelo se fue.

Todos nosotros quedamos mirando hacia la montaña en medio de la noche y de un silencio muy acogedor, empecé a llenarme de miedo de dudas y de preguntas... ¿Y si no veo nada? … ¿Y si el resto si logra ver algo en la montaña y yo no?... ¿qué pasa si el resto logra ver algo y yo no, que significaría esto?, mientras todos estos pensamientos pasaban por mi mente y miraba la montaña, logre ver como una pequeña luz en la mitad de la montaña brillaba, una luz tenue que apenas se lograba percibir, mi mente inmediatamente lo intento racionalizar y la respuesta que me llego fue que esa luz podría era un reflejo de otra luz y eso era lo que se veía en la montaña, luego escuche que una compañera le decía a otro compañero ¿la vez?… es como una luz”, a lo que el compañero le decía “si, si la veo”… , entonces pensé (estoy viendo lo que los demás ven), me sentí muy aliviado pues ese miedo de no tener lo necesario y de no tener la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 47 suficiente fe, había desaparecido ya que si lograba ver en esa montaña una pequeña luz, era señal de que en mi si existía algo de fe, después de obsérvala un par de minutos sentí que esa luz representaba fuerza, la fuerza que yo necesitaba para creer que si tenía lo necesario para seguir en este camino.

Mientras miraba aquella luz las preguntas, las dudas y el miedo desaparecieron, en su lugar surgió un sentimiento de plenitud, el ver esa luz me hacía sentir lleno de fuerza y ganas para seguir caminando, era increíble ver como aquella luz se alzaba en medio de una montaña y brillaba en medio de la noche solo para nosotros, diciéndonos “aquí estoy… mírenme siéntanme... crean”, algunos de mi compañeros veían que la luz estaba danzando en la montaña, yo solo veía brillar pasivamente la luz; mientras la noche continuaba decidí pedirle a aquella luz que me llenara de fuerza para lograr descubrir a mis ancestros, de la misma manera en que esa noche yo había podido descubrir la luz en la montaña, cerrando mis ojos e intentando con toda mi fuerza conectarme con la montaña, le pedí a aquella luz que permaneciera dentro de mi ser para que en las situaciones en que mi corazón se nublara de oscuridad y negativo, esa luz me guiara en el camino correcto hacia la Madre Tierra.

El abuelo llego y nos dijo que si estábamos listos entráramos al chunzua, todos entramos al chunzua el abuelo nos preguntó: ¿que vieron?, y todos respondimos una “luz en la montaña” cada uno conto lo que vio, algunos decían haber visto más de una luz en la montaña, otros decían que la luz danzaba yo por mi parte guarde silencio, no creí necesario contar lo que había sentido ya que aquella luz y los abuelos sabían a la perfección lo que mi corazón sentía; para mí la luz que cada uno de nosotros vimos esa noche, representaba nuestra fe interior; gracias al abuelo

Fernando ese día logre encontrar la fe y sé que aunque de manera tenue brille en mí, de ella puedo tomar fuerzas para acércame cada vez más a la Madre. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 48

RINDIENDO CUENTAS A LOS MAYORES.

Jeisson Lavao

Llegábamos a la casa del Mamo después de meses sin ir, por lo que cuando llegamos allí el Mamo no dijo: se me sientan allí en ese lugar van a pensar en todo lo que han hecho desde la

última vez que estuvieron aquí, también van a pensar en todos esos pensamiento negativos que han tenido. Lo primero que pensé fue ¿El Mamo sabe todo lo que hemos hecho sin estar aquí?, por lo que me puse en la tarea para concentrarme y pensar en todo lo que había hecho desde la

última vez que estuve allí, eran muchas cosas pero poco a poco las fui ordenando en mi cabeza, luego pensé en lo negativo las peleas que había tenido con mis papás, con mi pareja, con mi amigos, con los compañeros de la universidad, con todo lo relacionado con la universidad, y al terminar me di cuenta que realmente estaba cargado de mucho negativo; luego el Mamo nos indicó como limpiar todo ese negativo de nuestros cuerpos haciendo círculos con nuestras manos comenzando por los pies hasta la cabeza, cada uno de nosotros lo hizo, luego el Mamo nos llevó a otro lugar a pensar el propósito por el que estábamos allí, el mismo propósito que meses atrás les habíamos mostrado a los abuelos en el trasnocho en el que les pedíamos permiso para comenzar nuestro proyecto, así que cada uno de nosotros se concentró en silencio pensando en aquel propósito, por mi parte aquel propósito seguía muy claro era el propósito de conocer y entender, quería entender muchas cosas y de a poco en el camino de lo muhysqa lo estaba logrando, y no desde entender si no desde el sentir, una fuerza más grande que estaba conociendo de a pocos por este camino. Luego de esto el Mamo nos dijo que comiéramos algo suave para dirigirnos al chunzua y hacer nuestro trasnocho, luego de comer subimos rápidamente al chunzua para comenzar nuestro trasnocho. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 49

Se dio comienzo al trasnocho con las palabras del profesor Luis Eduardo quien comento nuestra experiencia por los sitios sagrados que recorrimos en nuestro viaje por Boyacá, el profesor comento las principales dificultades que habíamos manifestado en el viaje entre las que estaban las falta de fuerza como grupo, el profesor también comento el mal estado en el que algunos sitios sagrados estaban, las dificultades que se nos habían presentado para estar allí entre las dificultades estaba el frio que muchas veces nos invadía en la mayoría de los sitios, el Mamo escuchó atentamente a todo lo que el profesor decía y luego de que el profesor término, el Mamo hablo con su hija marianita y luego marianita nos dijo: esto es un camino por el cual cada uno de nosotros va andando, por el camino siempre se encuentra obstáculos, es como cuando uno sube una montaña uno se cansa y a veces no quiere seguir, y dice no puedo y no invade el negativo llegan los pensamiento malos y uno se pone a pelear, todos nosotros tenemos nuestro mal genio que muchas veces nos hace discutir con nuestros papás y con nosotros mismos, pero nosotros no debemos dejar que ese negativo nos gane, porque nosotros vamos a llegar a la cima de la montaña a la punta de la montaña, para allá vamos todos al encuentro con la madre… cuando marianita termino sus palabras el Mamo nos dijo, tiene mucha razón lo que dice la niña lo que les ha pasado a ustedes es que se les ha presentado el negativo, el frio que sentían era el negativo que se presenta para hacerlos sentir mal, cuando no se sienten cómodos con la piedra o el tronco en donde están sentados, ese es el negativo que los quiere hacer levantar, pero ustedes deben persistir y pedirle fuerza a la madre para estar y para no dejar que el negativo les gane, una de la mejores formas de hacer pagamento es danzando, danzando no llega el frio se les va el sueño , además de que a la madre y a los sitios les gusta mucho que les canten.

Luego se levantó del sitio en el que estaba sentado y nos dijo, levántense quítense los zapatos que les voy a enseñar una danza hoy vamos a trasnochar danzándole a la madre, saco de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 50 su mochila su armónica y empezó a tocar mientras danzaba alrededor del chunzua, nos mostró como se debía hacer y luego nos dijo que empezáramos a danzar alrededor del tamuy, poco a poco tímidamente empezamos a danzar, luego el profesor Luis Eduardo saco su armónica para acompañar al abuelo en la canción, por momentos la canción se aceleraba un poco nuestros pasos también lo hacían, la marcha de nuestros pies al caminar estremecía la tierra, y el Mamo nos decía “ así, así” luego él se sentó, y nos vio danzar por casi una hora cansados y sudando el

Mamo nos dijo descansemos, así que todos nos sentamos.

El Mamo nos dijo bueno parece que ya aprendieron para que así mismo le dancen a los sitios sagrados, ¿cómo se sienten están bien? A lo que todos respondimos “sí señor”, el Mamo nos dijo que esta era la mejor manera de pagarle a los sitios sagrados, danzando se llena de buena energía y de alegría al sitio sagrado, y que además existen muchas canciones que se le pueden cantar a los lugares sagrados, poco a poco iríamos conociendo cual era la canción adecuada para cada cosa pero que por el momento íbamos bien. Esta sería forma en que no dejaríamos que el negativo nos invadiera de nuevo, el contacto con de nuestros pies con la tierra y el latir corazón al unísono con el viento, nos mantendrían fuertes para nuestra siguiente vivencia.

RUMBO A LA LAGUNA SAGRADA DE IGUAQUE

Jeisson Lavao

Comenzamos nuestro viaje rumbo a la laguna de Iguaque, con nuestra primer parada en la Iglesia de Sutatausa Monumento Nacional, es una de las pocas iglesias doctrineras de la época de la colonia, que aún conserva sus cuatro capillas posas, donde según nos contaba un guía, allí los niños que hacían su preparación para la primera comunión, iban pasando de una capilla a la otra, también nos decía que allí los españoles convertían con sacrificios a los nativos que no querían hacer parte de las nuevas creencias religiosas. Además de estas pequeñas capillas, dentro El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 51 de la iglesia se guardan varias pinturas mural, en donde se encuentra la imagen de una cacica que en sus manos tiene un rosario y aparentemente está rezando con él, el guía nos explicaba que ese gran mural era usado para que los indígenas, por medio de las imágenes pintadas en el mural, adoptaran la religión católica y abandonaran sus tradiciones indígenas; toda esta serie de pinturas que muy seguramente adoctrinaron a cientos de indígenas, datan del siglo XVIII.

Una de las cosas más impresionantes y lúgubres que en aquella iglesia encontramos, fueron dos mazmorras que estaban ubicadas debajo de los atrios en donde se da la misa, estás mazmorras eran pequeños cuartos diseñados para la tortura de los indígenas que se negaban a adoptar la religión católica, allí se entraba al indígena que iba ser torturado en donde le serian amarradas y posteriormente estiradas su extremidades al punto del desmembramiento, afuera de la mazmorra era ubicado otro indígena, para que escuchara los dolorosos gritos de su hermano; con esto se lograba que lo indígenas estuvieran llenos de miedo y terror si no se convertían a la religión católica.

Estando allí en aquellos pequeños cuartos de tortura se sentía un frio, que estremecía hasta la última parte del cuerpo, en aquellas mazmorras existía un ambiente más frio que en cualquier otra parte de la iglesia, y era claro él porque, la frialdad con la que habían torturado y matado a cientos de indígenas, se mantenía en el tiempo y aquella recamara lo manifestaba con el frio que se conservaba, esta frialdad que trasciende los años llega a los corazones de cada de los hijos de la tierra, generando malestar, dolor, tristeza e incluso un sentimiento de inconformidad y de no olvido, frente los desastres de la colonización en nuestros ancestros indígenas; mientras observaba la mazmorra y miraba la estructura de madera que estaba diseñada para la tortura, por mi cabeza pasaron imágenes fugaces donde imaginaba ver, a lo indígenas El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 52 pasar por el dolor de la tortura, soportando aquel dolor impresionante, la verdad era una sensación muy fuerte de negativo, de muerte, de tristeza y dolor.

Darme cuenta por lo que nuestros ancestros indígenas han tenido que sufrir, por un absurdo tecnicismo de la religión, en donde se inculca desde pequeños en cual Dios se debe creer, aquella adoctrinacion que nuestros ancestros soportaron aún existe y la implementan con cada uno de nosotros desde nuestro nacimiento, con cada uno de los sacramentos como el

“bautizo” nos imponen un Dios sin saber por qué, solo lo hacen por ser lo culturalmente aceptado, entiendo hoy que la Madre es el mismo sentir por Dios es la fe que elijo para mí, la fuerza que me guiara por la vida y los diferentes caminos que me encuentre ella, es la Madre tierra la que llena mi corazón y calma mi alma, cuando subo la montaña, cuando sus aguas mojan mi cuerpo y cuando su aire refresca mi ser, pero para pueblo occidental de hoy al igual que lo fue para los colonizadores es muy difícil de entender, puesto que han olvidado sus raíces.

Continuando con nuestro viaje en la ruta civilizadora de Bochica llegamos a la laguna de fúquene (lugar en donde Bochica estuvo para luego dirigirse al pueblo de Susa), es un cuerpo de agua dulce situado en el territorio de Fúquene, entre los departamentos de Cundinamarca y

Boyacá, esta laguna es increíblemente grande según nos comentaba la gente del lugar, era tan grande que su envergadura llegaba hasta laguna de Tota, al preguntarle a las personas cercanas nos comentaron, que recordaban historias acerca del Dios Fu que cuidaba la laguna, además les habían contado los abuelos, que allí en la laguna los indígenas hacían algunos rituales y adoraban al Dios Fu; es decir las personas sabían de la importancia y de la existencia de lo indígena en aquella laguna.

Al aproximarnos a la laguna, observamos que estaba muy deteriorada, parecía estarse secando a causa de una planta acuática conocida popularmente como buchón que invadía gran El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 53 parte del agua, al ver esto cada uno de nosotros tuvo cierto recelo a la idea de quedarnos a acampar allí esa noche, debido al aparente mal estado de la laguna, y al ambiente incomprensible que sentimos al verla consumida por la maleza, decidimos entonces ir al pueblo de Susa y pasar la noche en un hotel, para en la mañana ir a hacer nuestro trabajo de pagamento a la laguna.

Al día siguiente, al llegar en las horas de la mañana nos encontramos con una gran sorpresa, la laguna se nos mostraba con una belleza indescriptible, el sol brillante se reflejaba en sus aguas claras , la maleza parecía insignificante al lado de sus imponentes aguas, el ambiente ahora se sentía diferente, era tranquilo y muy reconfortante, el aire corría con una brisa muy cálida, cada uno de nosotros no podía apartar la mirada y sentir una agradable energía, que desde la laguna llegaba; mientras impactado observaba, de repente me llegó un pensamiento de lo que representaba la laguna como la MADRE, ese ser esencial en cada uno nosotros, me quede mirando fijamente la laguna esperando llegar a sentirla y lograr una conexión con ella, mientras tanto el profesor Luis Eduardo daba inicio al ritual de pagamento dando el saludo a nuestros ancestros y a nuestro linaje, cuando el profesor terminó de hacer el agradecimiento, le pregunté si podía decir algunas palabras de lo que en ese momento estaba sintiendo, a lo que el profesor me dijo que sí, mis palabras en ese momento fueron:

Las matas acuáticas, que están encima de la laguna son como cada uno de nosotros, que estamos en la madre, (como lo era el agua en la laguna), pero al igual que estas plantas acuáticas, nosotros tan solo flotamos yendo de un lugar para otro, a la merced del viento...sin encontrar un lugar en la tierra, en la MADRE, para lograr echar raíces y encontrarnos realmente con ella...

Como nos pasó a primera vista con la laguna, cada uno de nosotros, muchas veces nos dejamos llevar por lo que nuestros ojos ven, no somos capaces de sentir, ni de ver más allá, por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 54 eso, tan solo vimos la maleza y no la laguna...Nos faltó sentirnos parte de la tierra, sentir nuestra raíz, sentir la laguna y ver más, con esto me sentí realmente inseguro me falta más Fe, para lograr ver con los ojos del corazón y no con los ojos de la razón que aunque este muy acostumbrados a ellos, no me permiten ver y sentir a la Madre Tierra ....

Al terminar mis palabras dimos inicio al ritual de pagamento en donde cada uno de nosotros se concentraría en todos los alimentos semillas, y plantas para entregarlos a la laguna, los alimentos que entregué fueron alimentos como arroz, lenteja, habichuela, carne, pollo, zanahoria, papa, yuca, plátano, garbanzo, también entregué en pensamiento semillas de mandarina, mango, uva, ciruela, naranja, coco y lulo, las plantas que logre recordar en ese momento para entregarlas a la laguna fueron la planta de coca, el cilantro cimarrón, el árbol de cacao, la mata de café, el árbol de ciruela, y la palma de coco; ya tenía todo listo en mi pensamiento, para entregar al sitio sagrado, así que lo hice, lo entregue con gran cariño y apertura a la laguna, al entregar todos estos alimentos sentí que aquella laguna es lugar de Raíz,

(puesto que para mí es sitio donde se encuentra la conexión con las raíces, sentirnos parte de los lugares sagrados, de estar en y con la Tierra), luego de esto el profesor Luis Eduardo empezó a tocar una tonada con su armónica, cantándole a la laguna, poco a poco el profesor nos entregó un instrumento a cada uno de nosotros para cantarle a la laguna como grupo, cada vez la tonada sonaba más bonita, y cada vez me sentía más lleno de energía, así que me levante y mientras tocaba la armónica, empezamos a danzar todos, danzamos alrededor de unos 15 minutos, fue un momento muy bonito, lleno de energía en la que todos nos conectamos y le cantamos y le danzamos a la laguna con mucha alegría y agrado.

Así fue como terminamos nuestro pagamento en la laguna de Fúquene, para luego dirigirnos a nuestro próximo destino, el cual sería Villa de Leyva en donde realizamos una El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 55 parada, debido a que un compañero mostro molestias físicas, además de presentarse inconvenientes en la convivencia de grupo, por distintas diferencias en los gustos y pasiones por las que cada uno de nosotros siente y vive día a día; siendo así y luego de descansar durante día, partimos al pueblo de San Pedro de Iguaque, en donde acamparíamos para luego subir a la montaña, y llegar a la laguna sagrada de Iguaque.

Al llegar al pueblo de San Pedro de Iguaque junto con mis compañeros, nos dispusimos a recolectar información acerca de lo que la gente del pueblo sabia sobre la laguna sagrada de

Iguaque, por lo que empezamos a recorrer el pueblo preguntándole a las personas que íbamos encontrando en el camino, sobre su conocimiento acerca de la laguna de Iguaque y de su tradición indígena.

Una de las cosas que más me impacto al preguntarle a una señora del lugar, fue que nos dijo: la laguna está viva tienen que tener cuidado con ella, no se vayan a meter a la laguna por que no vuelven a salir… era increíble que las personas dijeran que la laguna estaba viva y que sentía, otro comentario que también me impacto, fue cuando un señor nos dijo: tienen que tener cuidado cuando suben allá a la montaña, porque la montaña se pone brava y les manda el agua y se les pone a llover, tienen que subir con respeto y con cuidado, ah y por nada del mundo se vayan a meter a la laguna, porque la laguna se los chupa y se los lleva. Fue impresionante que todas las personas entendieran que la laguna y la montaña estaban vivas, fue difícil realmente no sentir miedo al escuchar lo que las personas me habían dicho, a pesar de tener clara la razón y motivo por el cual me bañaría en la laguna, esto de nuevo me indico mi falta de Fe, algo que no me debilito debido a que en mi corazón, mi propósito estaba muy vivo y claro por tal razón la

Madre Tierra no haría daño ni me lastimaría, por el contrario me cuidaría y me sanaría enfriando la candela de mi corazón. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 56

Entre las muchas personas a las que les preguntamos acerca de la laguna, los comentarios que más resaltaron fueron los de una señora que nos decía que cuando la montaña se ponía brava, en la cima del páramo llovía fuerte y caían rayos que se podían sentir en el pueblo, podían sentir como la tierra se movía por los truenos desde la montaña, además de nos dijo que cuando las personas subían la montaña haciendo ruido, diciendo groserías y llegaban a la laguna a arrojar piedras, a molestarla o se ponían fumar, la montaña se ponía muy brava y hacia que las personas se perdieran en el camino de la montaña, les mandaba un duro aguacero para que no lograran bajar.

Luego de hablar con casi todas las personas del pueblo, fuimos al sitio donde nos estábamos alojando para al día siguiente muy temprano, comenzar el ascenso a la montaña.

Al día siguiente a las 6 de la mañana muy temprano, nos levantamos para comenzar el ascenso el cual nos tomaría alrededor de unas 4 horas, en compañía un señor que sería nuestro guía en el largo camino por la montaña, al llegar al lugar en donde comenzaríamos a subir por la montaña, todos nosotros quedamos impresionados por la magnitud de aquella montaña sagrada, pero con mucha fuerza y entereza comenzamos nuestro ascenso. Al principio a todos nosotros nos costó mucho seguirle el paso a nuestro guía, puesto que él estaba acostumbrado a subir montañas y caminar mucho, su ritmo era un poco acelerado para nosotros, ya que nosotros no teníamos tanta practica a la hora de subir montaña, pero poco a poco el guía se fue adaptando a nuestro paso y nosotros al de él, así que paso a paso caminando, pisando fuerte, respirando aire puro, admirando el paisaje y con mucha energía en el corazón subimos la montaña; nos tomó alrededor de unas 4 horas caminando, pero con mucha fuerza logramos llegar a la cima, llegamos todos, como grupo unidos, cansados, agotados, pero llenos de fuerza con nuestro propósito como semillero y con la fuerza de muchos otros compañeros. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 57

Al llegar nos encontramos con una imagen realmente indescriptible, era realmente hermosa la laguna, e increíblemente aunque estábamos en la cima de una montaña, donde hay paramo, yo no sentía frio, era como una sensación de estar en casa, realmente muy agradable y muy tranquilo, un ambiente de paz y quietud, un paisaje para quedarse toda una vida admirándolo en silencio, a la orilla de la laguna.

Nos sentamos como grupo en silencio, a admirar la laguna y hacer nuestro trabajo de pagamento, cada uno de nosotros se concentró en silencio, admirando la laguna, pensando el propósito del por qué se estaba allí, en un sitio tan sagrado como lo era la cuna de la civilización mhuysqa, por lo que sentí que la única manera de hacerle saber a la laguna del por qué estaba allí, era abriendo mi corazón para que la laguna entrara en él y buscara si mi propósito era bueno, y ella misma me juzgara, ya que mi propósito era el de conocer y entender, muchas de las cosas de la vida, porque yo sabía que en realidad uno en esta vida recorre un camino el cual creé correcto a través de los años hasta morir sin saber por qué, un camino que hace sentir a las personas vacías y que sus vidas no tienen sentido, ya que desconocemos nuestras raíces y antepasados, sin saber de dónde venimos, sin escuchar y sentir la tierra siempre estaremos perdidos en la vida, viviendo en la aparente globalización, que cada vez deshumaniza más a las personas y las convierte en entes dominados por la tecnología. En el camino de lo mhuysqa el camino del sentir, por el contrario se honra y se reconoce nuestras raíces haciéndolas parte de nuestro vivir, para que de la mano con la Madre Tierra logremos cada día ser más humanos y encontrar el equilibrio que nos llenara de paz.

Mientras pensaba en mi propósito el profesor me miro y me dijo: Ya es hora, ya te puedes meter a la laguna, si no te quieres meter hazte a la orilla de la laguna y báñate con el agua de la laguna. Aspire profundamente y me prepare para hacerlo, debo admitir que los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 58 comentarios de la gente del pueblo, me intrigaban un poco, pero me sentía realmente bien y seguro de del propósito en mi corazón, así que me quite la mayor parte de mi ropa, quedando solo con mi pantalón, luego me dirigí a una piedra que estaba a la orilla de la laguna, puse mis pies firmemente en ella y moje mi cabeza con el agua de la laguna, y de inmediato sentí que entre en la laguna, era como si pudiera sentir todo lo que tenía a mi alrededor, estaba conectado al todo, estaba con la madre, sentía que debajo de las plantas de mis pies, habían raíces que se extendían por toda la montaña, era capaz de ver lo que pasaba sin necesidad de usar mis ojos , los ojos de la racionalidad por un momento se apagaron y con un fuerte latir desde mi interior los ojos del corazón se abrieron para mostrarme la inigualable belleza y magia de la tierra.

Era algo fuera de la imaginación, cerré mis ojos y podía ver claramente lo que pasaba a mis espaldas sin necesidad de voltear a ver, realmente yo era la montaña, yo estaba en la montaña y las raíces de mis pies conectaban con el todo, me permitían sentir y llenarme de todo, de todo lo que había. No sé realmente como expresarlo en palabras, pero creo poderlo comparar con lo que un bebe siente en el vientre de su madre estando conectado por el cordón umbilical

(un vínculo de vida, en el que se alimenta se cura y se cuida); estuve allí conectado con la madre tierra un par de minutos, volví al inicio de la civilización mhuysqa y me encontré en el inicio de mi vida.

Fue una sensación mágica que se vio abruptamente interrumpida por unos turistas que habían llegado a fumar marihuana, esto realmente perturbó a la madre, fue lo último que sentí antes de perder la conexión. Luego salí muy tranquilamente para colocarme la ropa y para terminar nuestro ritual de pagamento dejándole a la laguna algunas semillas, cuarzos y plumas que llevábamos, luego de esto partimos, dejando detrás de nosotros la laguna sagrada de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 59

Iguaque, dejando detrás a la madre, dejando a mi madre, después de darme a luz en aquel momento en que salí de sus aguas.

Como era de esperarse mientras, bajábamos la montaña, la lluvia se apoderó de nuestro camino haciendo más difícil el descenso , todo esto era resultado del mal comportamiento de aquellos turistas que perturbaron la paz de la madre, por esta razón un fuerte aguacero nos acompañó todo el camino de descenso con fuertes truenos y una lluvia torrencial, que no paro en las 4 horas de camino, no fue hasta luego de llegar al final de la montaña donde terminamos el descenso, donde la montaña detuvo su lluvia; la montaña está viva me lleno de vida, esa fue la reflexión que ese día la madre me dio.

VOLVIENDO A CASA

Jeisson Lavao

Luego del recorrido previamente conocido hasta san pedro de Iguaque y haber compartido una conversación con el Abuelo Fernando , en donde me relató cómo su pasión por curar, nació desde niño ya que recordaba como de pequeño cargaba un morralito de cuero, en donde llevaba frascos y plantas para curar, y decir que era médico, es bonito poder cumplir con los sueños que tenemos desde niños, me dijo el abuelo; luego de esto y de algunas horas de viaje por carretera, llegamos a la hacienda Versalles seguimos la indicación del abuelo de empezar a trasnochar, para de este modo, llegar de una manera adecuada y tranquila al lugar sagrado, comenzó a plantear su discurso diciendo que en la actualidad estábamos vendiendo nuestra esencia y en este sentido a nosotros mismos, somos aire, agua, tierra y fuego y dichos elementos han venido siendo embotellados y vendidos sin ninguna restricción, siendo así una limitación al momento de honrar esos elementos en la Madre Tierra, nos estábamos vendiendo, en cierto modo a nosotros mismos; el abuelo se sentó junto a una chimenea que había en el lugar, procedió El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 60 a darnos medicina(un poco de tabaco en polvo, que se inhala por la nariz, con el fin limpiar el cuerpo y el negativo, el negativo son todos aquellos pensamientos que llenan de malestar a la persona), esto según mi impresión hizo que mis compañeros de trasnocho se llenarán de fuerza de abuelos y comenzarán a honrar en sí la fuerza que les provenía de ellos, en mi caso guarde silencio, la fuerza de mi abuelo físico estaba recientemente vulnerada, la exhumación de su cuerpo me hizo recordarlo claramente, pero me limitó al momento de ponerlo en palabra durante el ritual.

El ritual(el cual consiste en un saludo de mucho respeto, a nuestro territorio a nuestros ancestros, a nuestros linajes, a nuestras familias, y en especial a la madre tierra, de esta manera y honrándolos nos sentamos en torno al fuego, para compartir palabra, la cual sirve como confesión que limpia y descarga nuestros corazones, de esta manera la palabra que se comparte en torno al fuego es palabra de sanación y sabiduría),en este ritual surgió el tema de la muerte, el abuelo Fernando decía que la muerte no era algo negativo, ya que las personas que mueren se van a descansar, ellos se van a descansar a la tierra, nosotros los que quedamos en vida somos los que nos los dejamos descansar, pues nos aferramos demasiado a la persona, a veces tanto que no somos capaces de aceptar su muerte, hay que aprender a desprenderse, y dejarlos ir a descansar decía el abuelo, mientras en mí seguía fijo el pensamiento en mi abuelo, su recuerdo se hacía vivo en mí, sin mantenerse estático por el contrario, el pensamiento mantenía su imagen en mi mente. En mi corazón esta palabra se sintió muy fuerte, debido a que yo no he dejado partir a mi abuelo, su recuerdo sigue vivo y cada vez que se acerca la fecha de aniversario en la que él murió, en mi el dolor se hace presente con mucha fuerza. Por tal razón guarde silencio durante toda noche, intentando de todo corazón entregar el sentimiento de muerte y dolor a la tierra, para así sanar una herida que lleva haciendo daño desde hace muchos años; la noche El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 61 transcurrió de esta forma hasta que el abuelo dio por terminado el ritual, para que descansamos, pues lo que nos esperaba era un camino largo. La mañana siguiente muy temprano nos dispusimos a subir la montaña hacia la laguna de san pedro de Iguaque, el ritual de la noche anterior me hizo pensar y sentir en carne viva la presencia guía y compañía incondicional de abuelos, el ropaje físico y espiritual había sido limpiado la noche anterior, la tranquilidad era cada vez más latente.

Desde la planta baja de la montaña sentí una diferencia leve en esta nueva oportunidad que subía, comenzar el ascenso fue sentir nuevamente la fuerza de Madre(la fuerza inigualable e inexplicable que sentimos, cuando nuestras madres biológicas nos acogen y nos cuidan, aquel amor que recompone y nos renueva); la diferencia radica en una concentración tan fuerte que anulaba el tiempo, el cansancio, el frío y toda las sensaciones del cuerpo, era como si durante el viaje el negativo estuviese fuera, era la sensación de estar en casa, libre y tranquilo sin cargas encima, pensé que haber limpiado las vestiduras la noche anterior y haber realizado el ritual de trasnocho era la causa de las sensaciones agradables que estaba experimentando.

El abuelo desde el principio del ascenso nos dijo que mientras subiéramos la montaña, fuéramos limpiando el negativo de a pocos, es decir todos aquellos pensamientos de rabia y malgenio los iríamos dejando en las plantas, (nos parábamos frente a una planta, la tocábamos pensado en esos momentos de rabia y de ira, ya que de esta manera trasmitíamos esos pensamientos a la planta, para que la tierra los sanara). Durante el acenso, en silencio y con mucha calma, fui dejando el negativo en las plantas, no sentí que el tiempo pasara, mis compañeros manifestaban un cansancio constante mientras que para mí, la larga caminata y el transcurso consecutivo de las horas no era más que minutos, el descargar el negativo me hacía ver que el camino estaba menos empinado, el cansancio era increíble y absolutamente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 62 inexistente, recorrer dos horas montaña arriba, fue media hora para mí; entendí que lo que nos dijo el abuelo al comenzar el ascenso a la montaña, fue para que la madre nos llenara de fuerza mientras sanábamos el negativo, pues al dejarlo en la tierra nuestro ser podría caminar libremente sintiendo la tierra, sin la idea occidental del cansancio (tal vez, es por esta razón que nuestros abuelos pueden recorrer largos caminos, pues el tiempo, la experiencia y la sabiduría les han ensañado a caminar en paz), de este modo y sin darme cuenta llegamos a la Laguna

Sagrada de San Pedro de Iguaque, muy tranquilo sereno y sin pensamientos negativos me fui acercando paulatinamente a la laguna, en mi corazón sentía como los latidos de mi pecho iban creciendo y se hacían más y más intensos.

Recuerdo la imagen inicial que tuve al momento de acercarme a la laguna, el Abuelo

Fernando de pie frente a la Laguna. En mi impresión era ver y sentir que él hablaba con ella,(era sentir como por medio de algunos canticos y silbidos, le preguntaba a la Madre ¿cómo estaba?,

¿que necesitaba?, que le podíamos brindar), se comunicaba de una forma tan natural y fantástica que sentía como el vínculo entre ellos era muy estrecho, me asombró tanto dicho suceso que solo me mantuve mirando fijamente aquella escena; los minutos siguientes fueron de silencio y admiración frente al abuelo; él por su parte se mantenía frente a la laguna pronunciando diferentes palabras, era como una conversación, una oración de honra y respeto hacia ella y el lugar sagrado en general, en ese momento pensé y se despertó dentro de mí una infinita curiosidad acerca de lo que podría esta vez decirme la laguna, era haberme presentado de nuevo y aguardar bajo una expectativa latente de saber y entender lo que pasaría durante mi estadía en el lugar.

Después que el Abuelo terminó nos dirigimos hacia la orilla de la Laguna, nos sentamos a recibir el mensaje que el abuelo nos trucaría, en un lenguaje en que lográramos entender, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 63 comenzó su discurso diciendo que la Laguna no estaba en un muy buen estado, la profundidad de agua había bajado en una alta proporción y la montaña en general permanecía más seca de lo esperado para él y para la naturaleza normal de las cosas, al parecer la tecnología era una de las causantes principales de aquel daño, requería de fuerza pues carecía de ella y era justo con lo que teníamos que llegar a ella para de este modo nutrirla, alimentarla y mantenerla a salvo de la contaminación espiritual y física.

Minutos más tarde el abuelo se dirigió hacia la roca desde donde en mi caso sentía con más intensidad la conexión con la Madre Tierra,( la tierra al igual que nuestras madres biológicas, nos dan todo lo que necesitamos para convertirnos en un ser humano, nos alimentan, nos cuidan y nos dan fuerza, en los momentos en que necesitamos de ella; es por esta razón que la considero Madre), el Abuelo abriendo sus brazos en forma de arco grito con ímpetu “¡fuerza

Madre fuerza, levántese madre fuerza, fuerza!” seguido de esto desde lo alto del cielo y entre las montañas las nubes comenzaron a descender, era como si el Abuelo las estuviese llamando y condensando hacia el centro de la Laguna, fue así como de manera pausada las nubes bajaron hasta tocar el agua de la Laguna, el cielo para mí, estaba haciendo parte integradora de la Laguna y entre esas dos entidades se movían fuertes energías de fuerza. Al ver esto, de inmediato recordé los relatos de los libros de Castañeda, y sintiendo el corazón latiendo con fuerza y rapidez, dentro de mí ser me dije ¡Esto es real! Existe una fuerza inexplicable para mí, una fuerza que tan solo la he podido imaginar en libros, lo estoy viendo ahora, juepucha... Es increíble mi cuerpo está totalmente inmóvil ya que está presenciando algo mágico. Presenciar la magia de un Abuelo, la magia de la naturaleza que no es magia, sino más bien la esencia de lo VIVO, que se convierte para nuestros ojos en algo mágico, es la fuerza, energía y esencia que mueve la tierra. Y yo, con El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 64 mis propios ojos que aun inmaduros, no ven más allá de lo “racionalmente real”, pude ver y sentir un evento Universal, la naturaleza de la esencia de la tierra.

El abuelo nos tradujo lo que nuestros ojos veían de forma bonita y clara, mis pensamientos no habían estado tan errados, las nubes estaban alimentando la laguna y nutriendo su esencia, en mi caso particular pensaba fijamente en mi Mamá, fue un pensamiento repentino que fue apareciendo más intensamente, había una sensación de ausencia, me hacía una falta inexplicable en ese preciso momento, pensé que era necesario para mí y tal vez incluso para ella acercarnos más, entablar una relación más estrecha basada en la confianza. Paralelo a mi pensamiento, el Abuelo se dirigió a nosotros y nos indicó una flor que había entre los arbustos, uno a uno fuimos hacia el lugar señalado, cada uno con la indicación previa de poner pensamiento bonito, y de escuchar el mensaje que la Madre nos transmitiera, cuando llegué al lugar y estuve frente a la flor percibí la sensación de tener a mi Mamá en frente, el sentimiento fue más grande y lo que empezó a llegar a mi pensamiento y a mi cuerpo era la sensación de su compañía, mi mente se movía en recuerdos de lo vivido junto a ella durante mi niñez y mi adolescencia, días especiales para ella y para mí, cumpleaños, celebraciones protocolarias y tardes a solas. Por tanto, el pensamiento dulce y bonito que mantuve fue el de tenerla conmigo, acercarme con un abrazo fuerte y volver a ese vínculo fuerte y bonito de Madre e hijo(a aquella conexión vital que se tiene al inicio de la vida, donde 2 seres existen unidos por un lazo inseparable, un lazo que continua a lo largo de la vida, mientras la madre alimenta y cuida pero esto, en algún punto se olvida, dejando de lado aquel lazo vital, el vínculo de Madre e Hijo).

Nuevamente nos volvimos a sentar para recibir la medicina de tabaco que el Abuelo quería brindarnos, durante el proceso sentí como sí la medicina fuera el alimento que me daba la

Madre para llenarme de fuerza y curación(curación que necesitaba pues sentía que, últimamente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 65 yo me encontraba muy alejado de mi madre biológica, esto me llenaba de tristeza, inseguridades, miedo y dolor, necesitaba del consuelo de la Madre, de su sanación),para de este modo poder volver a ella, y retribuirle lo que en la naturaleza de la medicina me estaba transmitiendo, era recordar cómo en su momento mi Madre había alimentado mi cuerpo frágil y con su ayuda me había mantenido a salvo, en esta ocasión me encontraba desvalido pero a nivel espiritual y era lo que la Madre Tierra en su saber y su curación estaba sanando, así que sentía que a ambas debía devolver de sus cuidados y su amor.

Para finalizar el recorrido dimos fin al ritual dejando las semillas y los cuarzos que habíamos llevado como símbolo de ofrenda, entregándole a la Madre un poco de lo mucho que ella nos brinda en alimento y curación, de esta manera se le intenta agradecer, el recibir de la tierra los beneficios tanto físicos como espirituales que nos brinda sin pedir nada a cambio.(en pensamiento se imagina, oro, dinero, plata y cristales, que de manera mental se dejan en el lugar, a manera de agradecimiento desde lo que el corazón, sienta necesario dejar como pagamento),mientras descendía la montaña seguía con el pensamiento de mi Madre en la cabeza, fue entonces que comprendí que la representación y el mensaje que me había dado la laguna y del que estaba tan ansioso en un principio no era más que la expresión de una Madre, pues la primer vez que fui a la laguna y entre a sus aguas, sentí como la laguna me alimento desde la tierra, sentí como me conecto a ella para luego dejarme ir como un recién nacido, de sus aguas a caminar como un ser nuevo, fue volver a nacer desde la Madre tierra, así como Madre biológica logro darme la vida, que día a día vivo a través de ella.

Al día siguiente había programada una salida hacia un lugar llamado la chorrera, importante para nosotros porque era una de las caídas de agua que provenía de la laguna sagrada, además, según nos dijo el abuelo, en ella había una parte en específico en la que el agua era muy El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 66 curativa para los problemas de visión, tema que de plano me emocionó mucho debido a mis múltiples dificultades visuales, de camino al lugar el abuelo encontró una serie de plantas, recuerdo que se topó con una planta de moras silvestres, fue entonces que comenzó a decirnos que de no ser por la falta de fe de nosotros hacia las plantas sagradas de la Madre, podríamos obtener la cura a muchas enfermedades, que incluso con esta planta junto con la panela era posible curar el cáncer puesto que la cura finalmente estaba en la intensidad de la fe que cada uno de nosotros tuviese, por mí parte sé que aún me falta mucha fe, y mucho camino por recorrer para llenarme de sabiduría, y de la fe necesaria para seguir en este camino ancestral en cual siempre se está, en un propio proceso de autodescubrimiento.

Mientras seguíamos caminando para el Abuelo era el encuentro con una planta sagrada y en este sentido era encontrarse con la cura a una enfermedad o molestia del cuerpo, dentro de las que nombro estaba el Aliso (planta para curar el mal olor en los pies), cordoncillo, calicho y chipaca, plantas que sirven para curar dolores de cabeza y algunos otros malestares. Al llegar a la chorrera fue como entrar a un mundo fantástico, las montañas estaban divididas por una caída de agua y un pozo pequeño, la pureza del paisaje hacía de éste un lugar realmente hermoso. El abuelo en seguida de que llegamos al lugar se fue dirigiendo hacia un pequeño sitio al lado del pozo, desde donde yo estaba vi como él iba limpiando y escudriñando en la tierra, muy tranquilamente limpiando el agua acompañándose siempre del silbido de una melodía bonita y tranquila, al terminar y verla clara se dirigió nuevamente hacia ella con una botella donde depositó un poco de agua.

Después de esto nos llamó uno a uno para hacer una pregunta muy precisa, “¿qué propósito pondríamos en el agua que íbamos a llevar para nuestras casas?” En mi caso como propósito específico estuvo el de la unión familiar, el Abuelo me miró y me indicó como debería El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 67 suministrar el remedio dentro de mi familia para cumplir con mi propósito (debía echarle un copita de agua a cada comida que se prepara en mi hogar), luego me pidió que mirara hacia un helecho en la parte de arriba, mientras él acompañado de su melodía llenaba la botella de agua; al terminar, me entregó la botella y me retiré para que pasara mi compañero siguiente. Durante el tiempo siguiente pensé en el porqué de la indicación del Abuelo de mirar hacia el helecho, fue entonces que me di cuenta que a esta planta le llegaba poca agua y sin embargo, se mantenía muy vivo, así que pensé y más allá de eso sentí, que era la concentración en ese vigor y en esa vida expresada en la planta con lo que se iba a nutrir y fortalecer mi familia, pues en la botella llevaba es esencia de vida.

Al terminar con esta actividad nos retiramos del lugar y mientras iba por el sendero, el

Abuelo narraba la historia del río que años atrás por allí mismo pasaba, adicional a esto quiso decirnos unas palabras: “de ustedes va a depender lo que desde este momento en adelante logren para la Madre Tierra, los Abuelos como yo y los antecesores a mí lo que hemos dicho ha quedado ya plasmado aquí, ahora su trabajo es vivir pues finalmente la historia es lo escrito, el mito es vivir… , ahora tendrán que vivir y recorrer el Mito, vivir, y para ello, es que están ustedes aquí” seguimos el camino hasta el pueblo con comentarios ocasionales.

Después de la hora del almuerzo nos dirigimos hacia un pueblo cercano llamado

Chiquiza, que según los habitantes del San Pedro de Iguaque tenían una tradición latente en lo indígena y su cultura en general, al llegar al pueblo caminamos junto al Abuelo, después de un par de minutos él mismo refirió su presunta suposición acerca de la posibilidad de ser Chiquiza el lugar de asentamiento de un indígena muy importante, seguidamente nos dirigimos hacia la iglesia durante el camino pudimos notar en el suelo una serie de piedras fosilizadas; el

Abuelo tomó dos piedras y mirándolas muy detalladamente nos habló acerca de una historia que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 68 databa la serie de mundos que había existido en la Tierra y, que muy seguramente estaban impresas en esas piedras, decía que en ellas se guardaba mucha información, en cada grieta estaba impresa información sumamente importante y que ojalá pudiésemos nosotros mismos ser quienes la descubriéramos.

Los habitantes del lugar nos contaron una historia acerca de la montaña que teníamos en frente, ésta era usada por los indígenas para transportarse hasta Villa de Leyva a través de un túnel que al día de hoy ya no estaba, se había cerrado debido a los derrumbes. Le pregunte al abuelo, que si esos túneles se pudieran volver a abrir, nosotros podríamos entrar, a lo que el abuelo me respondió lo túneles están pero la cuestión no es lo físico de abrirlos, el problema es si la tierra nos dejara entrar, pues fue ella quien cerro esa entrada…Ya habiendo llegado nuevamente al pueblo nos dispusimos a descansar para poder madrugar al día siguiente y hablar con la Mamá de Don Nicanor, un señor que ha estado acompañándonos de manera muy amable durante las visitas y recorridos en San Pedro de Iguaque, el objetivo inicial era el de indagar acerca de los saberes de aquella señora frente al mito de la Laguna de Iguaque y al conocimiento de sobandera que nos habían dicho, manejaba muy bien; nos vimos en la casa de su hijo y allí comenzamos a conversar.

Al inicio de la conversación comenzó a narrarnos acerca de la primera vez que había subido a la Laguna de Iguaque, lo hizo durante su juventud, se situó en la campana de la montaña, allí había habido un derrumbe, escudriñando en él encontró una piedra llamada

“tortero” piedra con grabados que es utilizada para hilar lana, también encontró una muñeca pequeña de juguete que hasta el día de nuestra visita conservaba y decidió mostrarnos; adicional a esto nos comentó de la “peña del gallo” lugar en el que a determinada hora de la noche se escuchaba cantar a un gallo y se presumía de la existencia de un tesoro indígena muy grande El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 69 lleno de vasijas y ollas de barro; dentro de su relato resaltó la imposibilidad de llegar a aquél lugar debido a que al momento de las personas subir la montaña simplemente se cerraba de manera inexplicable sin permitir el ingreso de personas. Sin embargo, un hombre tuvo la oportunidad o quizá la fortuna de ingresar hasta el lugar del tesoro y al ver esta serie de instrumentos simplemente ignoró su valor y las rompió. Luego le preguntamos aquella anciana, si a partir de sus relatos ella se consideraba indígena, con risa nerviosa y con pena nos respondió que no, que esas cosas eran de los que habían vivido antes, pero que ella no lo era; teniendo una historia de vida muy cercana a lo indígena, y a pesar de vivir en esta tierra se siente ajena a lo indígena, mi hizo pensar que si desde lo occidental, no se reconoce lo indígena como algo propio, existe un problema de identidad, ya que ni siquiera la gente nacida en tierra indígena lo siente, mucho menos lo hará la lógica occidental.

En sus recuerdos estaban también unos cristales que al ponerlos a la luz del sol se podía ver claramente los colores del arco iris, pero que lamentablemente con el tiempo había perdido, después de estar escuchando atentamente la historia de la señora llegó el Abuelo Fernando, luego de enseñarle a él los elementos que había encontrado la señora en la montaña dijo que él durante su estadía en aquél lugar había podido ver esa misma niña en la Laguna, situación que me dejó sumamente impresionado y fascinado con el poder de conexión y concentración que tenía el

Abuelo, terminamos la conversación cambiando de tema pero mi impresión de lo que un abuelo puede llegar a ver, oír y sentir me hizo despertar un gran respeto hacia él. Luego de la enriquecedora charla, descansamos toda la tarde y nos preparamos para nuestro siguiente destino, el cual sería iza un municipio ubicado en la provincia de en el departamento de

Boyacá. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 70

Al día siguiente luego de un largo recorrido y varias horas de viaje llegamos al territorio de iza, lugar donde nos encontraríamos con un sitio de mucha fuerza de Abuelos. Luego de llegar nos colocamos en la tarea de buscar información acerca de la piedra de Bochica, en esta búsqueda nos encontramos con la señora Lina quien nos dijo acerca de unas pinturas muy antiguas que pertenecían a la cultura Muhysqa, las cuales habían pasado en diversas ocasiones por investigaciones de otras universidades y visitantes, quienes decían sentir energías muy fuertes al estar en aquel lugar, inmediatamente hizo que se despertará nuestro interés y nos acercamos al lugar.

Ya habiendo llegado a los petroglifos mis compañeros dijeron haber sentido una gran afinidad con el lugar y una sensación fuerte de querer pasar más tiempo allí, en mi caso no pude experimentar mayores sensaciones pues tuve que retirarme; sin embargo, si despertaba en mí una gran curiosidad, pues sentí que detrás de los petroglifos en unas grandes rocas estaban abuelos y ancestros, como si fueran guardianes encargados de cuidar el lugar, en mi mente casi que se podían dibujar el rostro de ellos mirándonos fijamente, en ese momento fui por un par de semillas y al volver el profesor ya con seguridad dijo haber experimentado una gran fuerza, fue entonces cuando sugirió volver al día siguiente para mediante un ritual de pagamento honrar el lugar.

Esa misma tarde luego de volver al pueblo nos dirigimos a hablar con unos abuelos habitantes y residentes del lugar, don Segundo y la señora Blanca, en primer lugar tuvimos la oportunidad de hablar con don Segundo un anciano de unos 72 años aproximadamente, nos contó acerca de su conocimiento sobre Bochica, comenzó su relato contando como los indígenas

Muhyscas habían llegado al pueblo de Iza, más exactamente a la cueva del diablo o de Bochica, los indígenas de entonces habían llegado luego de haber sido sacados de su territorio por los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 71 españoles, huyendo luego de aquel destierro se dirigieron a la cueva de Bochica donde éste en presencia misma les enseñó el arte de hilar la lana haciendo uso de las piedras conocidas como torteros y adicional a ello, también les enseñó la forma adecuada de cosechar la tierra, incluso les dio pautas claras acerca de cómo convivir entre ellos(en paz y armonía de la mano de la tierra, cuidando de ella y de esta misma forma ella cuidando de ellos), finalmente después de tiempo de enseñanzas los llevo a la laguna y poniendo sus pies sobre una piedra se sumergió en ella para desaparecer, según la historia en la piedra donde Bochica puso su pie por última vez quedó marcada su huella, pero en la actualidad lamentablemente se ha perdido debido a un robo. A don

Segundo se le pregunto de si él se consideraba indígena, a lo que respondió con un sí, justificando que todo el pueblo de iza era muisca, porque todo lo que hacen es el legado que sus antecesores aprendieron de los indígenas; esto me hizo pensar si acaso el sentirse indígena es cuestión de seguir antiguas tradiciones, y que a partir de ellas se logre una identidad como muisca.

Después nos dispusimos a escuchar la intervención de la señora Transito, ella comenzó a decir que luego de llegar los indígenas, al lugar donde estaba Bochica éste se encargó de enseñarles las ovejas y la utilidad de su lana, así como la manera adecuada de tejer con los torteros, su historia en cierto modo tenía plena concordancia con lo dicho por don Segundo, en cuanto a la historia de la piedra y las huellas de Bochica impresas en ella, también hubo oportunidad para que tocara una canción con su armónica.

Al otro día temprano en la mañana y siguiendo la noción del profesor nos dirigimos a los petroglifos de Iza, al llegar al lugar sentimos que era necesario sentarse a limpiar nuestra ropa espiritual (sentir una fuerza tan grande y tan pura que hace sentir necesaria, una preparación de limpieza, de estar en el mejor estado posible, para colocarse ante aquel lugar) ,por tal razón antes El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 72 de llegar a las piedras sagradas donde estaban ubicados los petroglifos , nos sentamos en un sitio cercano en donde rapeando un tabaco hicimos, limpieza del negativo (existen varias formas de limpiar el negativo, pues es algo que existe en la naturaleza del hombre, este debe ser curado y entregado a su origen, la tierra, por medio de sí misma como lo es la planta de tabaco) , y con algunos instrumentos entonamos canciones para agradecer, honrar y pagar con melodías a la

Madre Tierra. Sentí que también era una manera de presentarnos ante el lugar sagrado, por tal razón y como desde la última vez que tomé el instrumento de la armónica me esforcé y me entregué a la Madre(abriendo mi corazón, para ella vea en que mis sentimientos hacia ella, son sentimientos de agradecimiento, respeto y mucha horna), después de un par de minutos en este ritual, de quitarme el negativo, limpiar mi ropaje alcance la tranquilidad en el corazón que en un inicio llegue a buscar, para dar inicio con el ritual cada uno tomó ubicación en el lugar en el que se sintió más cómodo, después de un par de minutos cada uno comenzó su trabajo espiritual en absoluto silencio, así pasaron un par de horas, en mi caso me mantuve concentrado en el recorrido que hasta allí había hecho, se pasaban imágenes por mi cabeza de los anteriores lugares en los que había estado, los puse en mi mente con una sensación de cariño y gratitud, así fui fijando mi mente hacia un par de árboles que se estremecían detrás de las piedras uno con más fuerza que otro, de manera representativa y sentí a un Abuelo y un hijo, un abuelo y un aprendiz, mientras el más alto de ellos, al parecer el más viejo se mantenía firme el otro más pequeño se movía con la brisa y el viento, entendí que así pasa conmigo y en general con nosotros, pues mientras la falta de fe o la fuerza del negativo nos estremece y, en mi caso particular me estremece con fuerza y me desorienta del camino espiritual, el padre espiritual, los sabedores y guías ancestrales se mantienen firmes a mi lado para guiarme y dar apoyo; la sensación que por ese momento recorría mi cuerpo, era la de mantener la cabeza abajo como si no se tuviera el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 73 permiso de levantarla, pues estaba frente a algo tan grande que era mejor presentarse con humildad, con temblor en el cuerpo y no el temblor que surge a partir del miedo, un temblor que en mi genero respeto ante el lugar. En ese momento tuve dos frases presentes en mi mente, el reconocerme como una persona incompleta, que aún es muy maleable ante los obstáculos, por tal razón reconocer la fuerza de los ancestros y abuelos ya que ellos, a través de su sabiduría tienen su espíritu enraizado en la madre tierra, de allí proviene su fuerza, y eso es lo que como humano necesito para llegar a estar completo como un ser terrestre.

Dimos fin al ritual agradeciendo y en el caso particular arrodillados frente a la roca, dimos gracias dejando semillas y cuarzos en el lugar luego de haber recibido las enseñanzas previas, así nos marchamos y dimos fin al ritual para al otro día marchar hacia nuestro último destino Gameza, el nombre de Gámeza corresponde al nombre del cacique chibcha Gamza, gobernante en la zona, cuyo significado procede de una expresión compuesta de dos palabras: Ga que significa «Siervo del sol y del diablo» y Za que significa «Noche». Habiendo llegado al pueblo de Gameza nos dispusimos a ir en busca de un lugar la impresión que me llevé de aquél lugar fue realmente fantástica, mientras realizaba la búsqueda quede anonadado con la belleza del lugar, era un lugar que incitaba a la fantasía el bosque, lo verde de los árboles altos y frondosos, las cuevas, peñas y techo cubierto de ramas, era sublime y hermoso. Finalmente en mi búsqueda pude llegar al lugar y así guiar al resto de mis compañeros, para sentarnos en silencio, por mi parte estaba lleno de mucha paz pues me sentí, parte de este sitio mi cuerpo quería seguir moviéndose, caminar e ir descubriendo con cada paso algo maravilloso, imaginaba como en el pasado había sido un sitio importante para nuestros antepasados, podía casi ver los caminos, las cuevas y las rocas como parte de una gran civilización, mi corazón era la brújula que dirigía mis pies y les decía hacia donde moverse, mi cuerpo total control en realidad yo no pensaba por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 74 dónde ir, la razón se hizo a un lado para que la fuerza del corazón guiara mis acciones, el resultado de esto, fue sentirme realmente arraigado a este sitio, lleno de un gran acogimiento y amor por este lugar sagrado, hubiese deseado seguir inmerso en ese mundo fantástico, el silencio y la esencia del lugar lo hizo muy especial para mí.

Finalmente en durante el último día encontramos un grupo de jóvenes muy apasionados por la Madre Tierra, quienes entonaban canciones y melodías en su honor y bajo un profundo respeto y pasión, a aquellos muchachos se les pregunto si se creían y si se sentían músicas, respondieron “Si”, con mucha seguridad, ya que al interpretar música por medio de sus instrumentos, reconocían a sus ancestros, a su tierra, y a sus tradiciones, situación que me impresionó bastante pues demarca una iniciativa que se mueve paralela a nuestra investigación relacionado con el tema ancestral; los muchachos me preguntaron a mi ¿usted se siente muisca? , pregunta que me tomo por sorpresa, inmediatamente recordé las palabras del Abuelo Fernando, cuando le pregunten si usted es muisca, diga que sí, claro que es muisca ¡todos somos ! , por lo cual respondí a la pregunta Si soy muisca, soy muisca por qué al igual que mis ancestros intento caminar por este sendero ,este camino que es de FE, fe que muchas veces se ve opacada por el negativo, pero como dijo el Abuelo el mito soy yo, yo soy el camino que recorro, yo soy mis ancestros, yo soy la tierra, yo soy muisca, y en la medida en que aprenda a cuidarme, a entenderme, a escucharme y a quererme , lo podré hacer así mismo con la tierra, con mi madre.

ACERCAMIENTO A LO ESENCIAL

Viviana Pérez

La mañana estaba propicia y soleada, pero yo no, la noche anterior no había dormido nada pensando en la imposibilidad que tendría para subir a Monserrate, estaba absolutamente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 75 cegada creyendo que el acercamiento iba a ser solo físico, pero en realidad era enorme mi ignorancia con lo que me iba a encontrar en el ascenso y en la cima.

Yo me acerqué a la montaña con un miedo absoluto, en verdad visualizaba a la montaña como un monstruo que me iba a absorber, que me iba a impedir el paso, tenía la concepción de que la madre tierra me iba a rechazar, que iba a decir o de alguna forma hacerme ver y entender que mi propósito era quedarme en la parte baja de la montaña hasta que no tuviera la preparación física y la resistencia corporal que se requería para ejercer un trabajo de esta magnitud. Al estar en frente de las escaleras, las piernas me temblaban, el corazón palpitaba acelerado y el sudor de nervios, de cansancio y tal vez un poco de calor estaba por todo mi rostro. Ahí comprendí que la subida sería complejísima, y que lo mejor sería centrarme en mi misma y apartarme en pensamiento de mis compañeros. Decidí subir en completo y absoluto silencio, mencionaba palabras solo en las paradas. Los sentimientos anteriores de qué andaba mal conmigo, de qué tenía que sanar, de cuándo iba a empezar ese camino de aceptación a mí misma, y de enorgullecerme de mi raíz estaban iniciando.

Entre escalones, paisaje bogotano, con el contraste de árboles y ciudad contaminada iba acercándome a la cima. El pensamiento negativo con el que había iniciado, de no poder subir, de preguntarme para qué hacía eso, qué ganancia tendría, porque yo iba convencida de que en realidad yo no estaba hecha para esas cosas que tuvieran tanta demanda del cuerpo, además de sentir que mi equipaje emocional y físico era tan pesado que yo lo arrastraba por cada escalón de la montaña y eso sí que me jalaba la fuerza haciendo más compleja la subida, llevándose el positivo y todas las creencias bonitas que podía tener en mí; todos estos pensamientos abrumadores disminuían con cada escalón avanzado y aunque me sentía sumamente exhausta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 76 hubo ese despertar, ese nacer que adolecía mi espíritu, que me incentivaron a seguir dando pequeños pero fuertes pasos.

Cuando llegué a la cima sentía mi pecho brincar de emoción, en realidad se me cruzaron muchas emociones al tiempo, porque por un lado quería llorar, me sentía cansada, pero por el otro ya estaba arriba y no sabía cómo lo había logrado, miré hacia abajo por un buen tiempo para convencerme qué trayecto era el que había recorrido y estaba completamente estupefacta de ver como las cosas en mi vida podrían empezar a cambiar, porque el solo hecho de romper el paradigma de haber vuelto a la Montaña, aún con el miedo enorme que eso me causaba fue un acercamiento fuerte a lo esencial que tanto carecía. Porque tampoco comprendía la sacralidad de aquella montaña emblemática y simbólica de Bogotá, por mi cabeza nunca había rondado la idea de que allí hubiesen malocas o algo similar, solo sabía que allí había una iglesia católica y en realidad no le encontraba sentido a la ubicación de un templo en una montaña.

Luego escuché que en donde habían iglesias católicas, los lugares habían sido centros sagrados indígenas y después de experimentar toda la fuerza que extraje de mí y de la montaña pude ver que sigue siendo tan sagrada como en tiempos anteriores.

Estando en la cima, mi sentir era distinto, estaba volátil, y extrañamente feliz. Lo que yo sabía era que íbamos a hacer un ritual llamado pagamento, en éste se le paga a la madre naturaleza tanto en físico con semillas, cuarzo, plumas, agua, alimentos como los que ella nos da a diario para sobrevivir; como en espíritu se pone en pensamiento bonito, dinero espiritual, agua, se puede añorar la libertad de los ancestros que fueron esclavos, se puede pedir por la sanación de los territorios, todo lo imaginable que sea en pro de los lugares y de los abuelos se puede poner en pensamiento para pagar. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 77

Luego de realizar esto por primera vez, sentía una sensación como de reivindicación conmigo misma y con la naturaleza, pues a veces suelo ser muy desagradecida con lo tengo, con mi vida, con la misma naturaleza que a veces olvido y saco de mi pensar y sentir. La indicación en ese instante fue concentración plena en lo que hacía y con mucha fe, me detuve a observar a una mosca que volaba sobre mis manos, fue increíble cómo captó mi atención, sentí un conectarme profundo con la mosca, tanto así que me sentía mosca, era tan grande la conexión que si hablaba sentía que mis palabras salían como zumbidos, como en su lenguaje.

Estaba maravillada de eso y seguí observándola con todo detalle posible, me di cuenta que era pequeña, que no se estaba quieta y tampoco dejaba de hacer ruido; por lo que me sentí plenamente identificada con ella, porque así soy yo, pequeña, inquieta y no dejo de hacer ruido, porque en algunas ocasiones hablo más de lo que escucho a los otros y por eso me sentí un poco mal. Luego me invadió el pensamiento de que sin importar lo externo yo era tan grande como la montaña que tenía en frente, que no es necesario hacer ruido para que me vean, para que me sientan, porque yo soy un ser completo y lleno de virtudes que, aunque sea pequeña por fuera soy enorme y bella por dentro.

Observando al rededor, las montañas, las nubes, mis compañeros, entendí que eso era lo que tanto había estado buscando para sentirme conforme conmigo misma, para estar bien y la reivindicación bonita con la tierra que tan inconsciente y dormida estaba adentro de mí. La espiritualidad enraizada que andaba añorando todas esas cosas fundamentales y esenciales estaban llegando a mi vida, y llegaron porque yo me hice partícipe de eso, porque con una fuerza interna que desconocía completamente, logré alcanzar esa experiencia desde mi sentir.

Luego entendí que ese rechazo que sentí al empezar la subida solo me lo había dado yo misma. Desvalorándome, creyéndome la más débil de todos. En el ascenso fui comprendiendo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 78 que cada uno tiene su fuerza y la mía en particular fue probada ese día de la manera más extrema en que mi cuerpo y mi pensamiento pudieran contemplar

Bajamos al son de buenas conversaciones, de risas y con una fuerza grupal que empezaba a crecer, fue durísimo bajar, creo que más que subir, pues la fuerza ejercida en las piernas es mayor, además que iba pensando cómo le iba a contar a mis compañeros lo que había sentido allí arriba, y de manera tal que no se pusiera mi salud mental en duda. Sin embargo ya no era tiempo de detenerme pues me encontraba en la mitad de la montaña por lo que cansada y sin fuerzas externas para seguir me convencí que la única salida que tenía en ese momento era seguir bajando.

12 DE FEBRERO

PIEDRAS DEL .

Viviana Pérez

Lo más importante es que el espíritu esté en paz con lo que la mente quiera hacer.

Sigo en el juego de soltar tanta razón, porque fácilmente podría decir que es imaginación o producto del pensamiento, pero lo que pasa cuando mi cuerpo y mi alma entran en conexión con la naturaleza es tan real, que sería mentirme, negar el funcionamiento de mis ojos, mis oídos y mi piel las cuales, al estar desligadas de razón, siempre perciben y aceptan las cosas primero que mi espíritu.

La dualidad es la que llena al mundo, lo une y lo desune también; estas fuerzas tienen que aprenderse a apreciar juntas o separadas. A veces me cuesta trabajo saber si la esencia de las cosas, las montañas, los árboles, el viento, si su fuerza reside en lo femenino o lo masculino, y encuentro el error que cometo pensando que todo está lleno de una sola fuerza, cuando lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 79 fundamental está en la unión, la comunión e integración de todo, de lo bueno, de lo que se cree no es tan bueno, las cosas inherentes a mí, mis luces y mis sombras

Sentí el llamado de la dualidad, como lo nombre anteriormente ese fue uno de los mensajes que me dio la tierra, creadora de vida, fuerte, nutritiva, presente para recordarle a sus hijos que la fuerza de la maternidad está con ellos a donde quiera que vayan. Los árboles con sus raíces profundas, largas, sobresalientes orgullosos de arraigarse a su madre siempre y cada día con más fuerza, sin importar cuánto vivan hacen el mismo ciclo, vuelven a la madre, a la tierra y esas hojas en descomposición, secas o como quiera llamársele, son tierra, pedazos de ella que han volado alto y las raíces esperan con los brazos abiertos a sus hermanas, a sus entrañas, para que renazcan, se fundan y recuerden nuevamente que son tierra, vida y alimento.

Seguidamente, todo lo que ocurrió cuando me entregue en corazón al pagamento me confundió un poco, los árboles me atraían energéticamente hacía su abrigo, su sombra y su paz;

Sin embargo del otro lado, las piedras y la selva empezaron a hacer lo mismo, con el extraño sentimiento de que los árboles me empujaban hacía allá también, no podía dejar de mirar y vi un abuelo, vestido de blanco, la verdad hasta el día de hoy sigo cuestionando si mis ojos percibieron eso, aunque he llegado a entender que estas experiencias se deben mirar con los ojos del corazón, eliminar y hacer a un lado tanto exceso de información occidental que la única función que cumple es deshumanizarme, alejarme cada vez más de mi origen, por eso creo que me ha costado tanto trabajo escribir esta reseña, igualmente reconozco que por ser tan real, siento como si todo lo relatado hubiese pasado esta mañana.

Cuando vi al abuelo, pensé que eran efectos del sol, de la luz, explicaciones netamente racionales, pero volvió a aparecer. Sentí como que él era parte de mí y aunque normalmente me molesta mucho hacerme bajo el rayo del sol, en ese momento mi cuerpo se levantó, caminó hasta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 80 que llegué a unas rocas, en las cuales el protagonista era el sol, estaba absolutamente cómoda, feliz y entregada. Las vibraciones del viento emitían sonidos, que sé algo quería comunicar pero estaba preguntando y entregando tantas cosas que no pude entender, luego creo que el mensaje fue claro entre todo ese mar de cosas que sentí y vi ese día, encontré que los abuelos pedían ayuda, como si tuvieran una sed infinita de libertad, de amor y respeto.

También pedí permiso para continuar con este camino, la respuesta fue que si iba a irme por ese camino, el corazón en las manos, los pies en la tierra y la cabeza en el cielo, libre de egos, como base del andar, erradicar o soltar los miedos infundados que llenan la cabeza, el corazón y el espíritu de basura, impidiendo su avance. Y en el caso, de que estos estén presentes sea capaz de agarrarlos, hacerlos mis amigos para alcanzar en un día no muy lejano la claridad.

Mi ritual estuvo basado en entregarle a la madre todo lo que yo no quiero tener más acomodado en mi alma y mi cuerpo, tristezas, duelos y dolores físicos, y fue como una relación reciproca porque ella me daba fuerza y vida tanto que sentía la palpitación de la tierra subir desde la planta de mi pie, hasta la cabeza.

Fue un remolino, que me envolvió de manera real e inocua. Todo el encuentro sentí el poder de lo femenino inundando todo el lugar. Por otro lado, me quedó un poco más claro que este andar es paso a paso, pero entre más se avanza, menos miedo tengo y más feliz me siento.

Me siento aliviada, porque siento todas estas experiencias holísticamente y cuando las cosas están claras en el interior, no me importa que para el resto parezcan ser prácticas ajenas, ridículas, o de aparente locura, ya que para mí la realidad, la magia, lo ancestral y todas las cosas que tienen que ver con la existencia humana, se deben entender de adentro hacia afuera, para en un futuro poderlo proyectar, enseñar y difundir de todas las maneras posibles, con la plena confianza para que el mensaje llegará solo a los oídos indicados. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 81

TRASNOCHO DEL 12 DE ABRIL DE 2014

EN EL CABILDO MUISCA DE COTA.

Viviana Pérez

Actualmente, la extinción de los Mhuysqas se da como un hecho cumplido, pero aún es posible reconocer entre el campesinado de la región, algunas permanencias étnicas y culturales.

El caso más notable lo constituyen las comunidades indígenas de Resguardo que subsisten en las municipalidades de Cota, Chía, Tenjo, Suba, Engativá, Tocancipá, Gachancipá y Ubaté. La conservación en la actualidad de estos resguardos encierra una gran significación cultural, no sólo como testimonio de una forma de vida en el pasado, sino por su concreción en el presente.

Su persistencia resulta extraña en un área de acentuada transformación demográfica y cultural del país, dentro de un contexto de acelerado desarrollo capitalista. La cultura Muisca, después de la Conquista, se sumergió en el proceso de formación colonial de la sociedad “blanca”

(colombiana). Los cacicazgos, antes de su desaparición, se transformaron en “resguardos”, pero

éstos conservaron algunos rasgos de su organización ancestral, ante la imposibilidad de romper totalmente sus relaciones sociales tradicionales sin producir la extinción física y cultural de la población. El caso del resguardo de Cota permite comprender la dinámica etnohistórica subyacente en su supervivencia e ilustrar el proceso de transformación vivido por la población indígena de la región. (Gracia, 2000)

Nosotros, como grupo de investigación de la Universidad Cooperativa de Colombia, acudimos al trasnocho como uno de los métodos de la búsqueda de nosotros como seres humanos. Para esto caminamos de la mano del abuelo Fernando, con los oídos abiertos a su palabra, para interiorizar y poder obtener psicoterapia individual desde lo ancestral indígena. Por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 82 esto, para ser partícipes de esta práctica nos dirigirnos a nuestra casa, el resguardo indígena de

Cota.

El resguardo se encuentra ubicado en el municipio de Cota, enclavado en el centro del

área geográfica que ocupa el altiplano de la Sabana de Bogotá, en el departamento de

Cundinamarca, sobre un tramo montañoso del cerro de “Manjuy” que se desplaza, con diredón sur-oeste, norte-este, a dos kilómetros de distancia de la cabecera municipal. Esta se loca liza en los 4° 49’ latitud norte y 74° 06’ longitud oeste del meridiano de Greenwich. (Gracia, 2000).

La noche del trasnocho del día 12 de abril estaba muy fría, al llegar al resguardo el abuelo no se encontraba; después de esperar vario tiempo lo más posible era que no iba a haber trasnocho, pero finalmente el abuelo Fernando llegó y se excusó por la tardanza. Como no había preparado previamente el Tchunsua, el trasnocho se realizó frente al fuego en otro lugar del resguardo. El abuelo mostraba una verdadera aflicción por lo sucedido y resaltó estar verdaderamente arrepentido, pidiendo disculpas desde el corazón a nosotros.

Inmediatamente, empezó a poner palabra, pero antes de iniciar se le entregó en sus manos una botella de chirrinchi traída desde Supatá, Cundinamarca; por esto empezó a hablar de su padre y de cómo él también hacía esta bebida medicinal, la probó y afirmó que ésta tenía el mismo sabor a la de su papá. Mencionó la conexión que tenía aquel pueblo con Cota, con su vida y con su linaje, por lo tanto hablo de varios sitios sagrados.

Prosiguió cuestionando a la compañera que llevó la bebida, le dio palabra haciéndole entender que, ella era de donde eran sus papás, que el día de su nacimiento era el mismo que el de sus papás, también le dijo que era una mujer fuerte y le cuestionó por qué no explotaba esa fortaleza, si ella era abuela, madre, hermana, tía y sobre todas las cosas mujer. Mencionó, acerca de cómo los seres humanos buscamos perdernos o de alguna forma encontrarnos estando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 83 inmersos y perdidos en la bebida, la conciencia de que esta bebida (refiriéndose al chirrinchi) me va a limpiar y es medicinal no permite que me emborrache y me pierda, porque el descontrol y el desorden solo me alejan más de mí.

La única manera de encontrarse a sí mismo, es siendo honesto, humilde, sencillo y noble.

Habló de la honestidad que debe tener el ser humano consigo mismo, para poder estar bien, la sinceridad y lo importante que es abolir la mentira de la vida y del corazón; porque lo verdaderamente difícil es cuando el ser humano se cree sus propias mentiras y más allá de engañar al resto se auto engaña.

La conciencia de enfermedad que es importante tener para estar curado, ya que las pastillas no van a sanar, la enfermedad no existe es psicológica y en el momento en el que el ser humano detecta el por qué se encuentra de determinada forma está curado en su totalidad.

Según el abuelo Fernando, somos unos robots que estamos marcados por la tecnología, lo

único que hace es alejarnos más de lo que pretendemos ser, manejamos computadores, celulares, televisores; pero ignoramos plenamente a la madre, a la que en realidad es la que nos mantiene en este mundo y aunque esté dolida con sus hijos el amor es más grande que sigue brindándonos alimento diario, como papa, yuca, arracacha… No estamos separados de la vida, del viento y del clima. Somos parte de la creación y debemos disculparnos ante ella, asumir la responsabilidad de nuestra actitud y de nuestros actos. Hemos de entrar conscientemente en la próxima era, reconociendo nuestros errores. Sólo entonces podremos honrarla y escucharla plenamente. Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que no demos este paso. De que, como niños obstinados, no reconozcamos el dolor que le hemos infligido a nuestra madre, y no recuperemos la totalidad que ella encarna. Entonces permaneceremos en la oscuridad que está comenzando a devorar nuestras almas: las promesas vanas del materialismo, el mundo fracturado del fanatismo. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 84

Dar un paso a la madurez siempre implica reconocer nuestros errores, el mal que hemos causado.

(Vaughan-Lee., 2013) Siguiendo el hilo de la madre y la conexión con sus hijos, habló de la importancia del cordón umbilical, éste además de darle un contacto permanente al ser con su madre biológica, lo ata energéticamente al universo y al cosmos, con respecto a la placenta de los bebés es la que sostiene, guarda y da refugio durante los nueve meses por eso es importante honrarla para que esta le dé energía al bebé y buena salud por el resto de su vida.

Mientras avanzaba la noche, dijo que la mujer era todo, era lo más importante y que para que ésta pudiera reafirmarse en su papel tenía principalmente ordenar su ciclo menstrual, con la luna. Recíprocamente, mencionó el papel del hombre diciendo que éste era la semilla, conectado al sol dando vida que se acopla con la mujer, así creando una sintonía perfecta entre hombre y mujer.

Inesperadamente miró la hora y dijo que ya eran suficientes los regaños, que ya había pasado la media noche; el paso de negativo a positivo inicia después de la media noche, dándole una gran importancia a la felicidad, a la risa y a la vida. Por eso contó relatos a manera de chiste, para entrar en calor y sonreír así fuera solo por un rato, de esta manera finalizó la noche se despidió y todos fuimos a dormir.

Mi experiencia personal en este trasnocho fue extraña, pues sentía como muchos de esos regaños iban directo hacía mí, o de manera contraria me fui dando cuenta que hay cosas en la vida que estoy empezando a hacer bien, con sintonía y de la mano de madre, como la regulación del ciclo menstrual. La parte en que el abuelo mencionó las cuatro cosas que nos hacen humanos, humildad, sencillez, nobleza y honestidad, para ser sincera no comprendí muy bien a qué se refería exactamente con cada palabra, pero tristemente no me siento ubicada en ninguna de ellas, luego comprendí que es con paciencia y amor que llegaré a ser de esa manera algún día. Por otro El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 85 lado, lo que más me afectó fue lo de la conciencia de la enfermedad, puesto que tengo migraña hace 3 años aproximadamente, y tomo a diario muchos medicamentos para sentirme bien, por esto sentí que el abuelo había entrado totalmente en mis pensamientos, mi corazón y mi cuerpo, y así detectó mi malestar; ahora empiezo a interiorizar y cavilar de manera excesiva cuál puede ser la causa de esos dolores de cabeza, tal vez pensar negativamente todo el tiempo, vivir encerrada en un duelo inconcluso y la desaprobación a mí misma sean esas causas.

También me dio un golpe a la razón, a la salud, a la medicina moderna, porque yo siento el malestar vívido, que me aqueja a diario y me genera un malestar muy significativo en mi vida, por eso la razón psicológica que me genera esto debe ser muy grande y honda, acá es el verdadero inicio de mi investigación encontrar la cura, mi propia cura.

Lo que percibí en el abuelo fue una grandeza de corazón, para aceptar la vida como es, los errores que se cometen a diario y principalmente a nosotros mismos como seres humanos, porque hay que hacerle frente al presente, honrar el pasado y dejar de pelear con los ancestros y los padres para ser feliz.

SALIDA A SILVANIA 24 DE JUNIO DE 2014.

APRENDIENDO DEL NEGATIVO

Viviana Pérez

Tengo que admitir que al comienzo del día estaba muy intrigada y con ganas de ir, con ganas de llegar. Pero cuando llegamos a Sibaté esto cambió un poco porque alguien me dijo que tocaba caminar aproximadamente una hora para llegar a la casa del mamo la cual era nuestro destino; ahí empecé a sentir miedo, se manifestó con cansancio el cual era ilógico porque la noche anterior había descansado bien, además sentía una gran debilidad mental lo que me llenó de pensamientos negativos y creí que no iba a poder, que la maleta estaba muy pesada, que si El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 86 llovía, que si hacía sol…. En fin, una mano de peros que lo único que lograron fue aterrarme y hacerme caminar con pensamientos de inutilidad, de inferioridad y de tristeza. Pero lo que he aprendido gracias a este trabajo introspectivo y de corazón, es que al miedo hay que darle la mano y caminar junto a él, para así entender que de la compañía de este puede fortalecer el espíritu y avanzar más de lo que se ha pensado alguna vez. Sin importar que la maleta estaba más pesada de lo que puedo cargar, sin importar que el camino se veía interminable y además que hasta ahora comenzaba, decidí seguir llenándome de fuerza y convenciéndome el por qué estaba allí; en el camino llovió mucho lo que se me hizo una ventaja porque me daba aire al caminar, de repente el camino se me hizo muy hermoso, ver los frutos floreciendo en los árboles me inundó de una paz y dulzura inexplicables, olvidé que estaba cansada, olvidé el peso del bolso y entré con la mejor disposición del caso. Ver a la familia del mamo me hizo comprender que esto apenas comenzaba y el miedo volvió a aparecer.

Antes de que empezara el trasnocho del primer día, me llené de expectativas de qué pasaría, qué descubriría desde mi corazón.

El mamo Roberto agradeció por nuestra visita, luego su hija Susana se dispuso a hablar con la fuerza, determinación y balanza impresionantes, nos entregaron unos algodones los cuales en el ritual quitarían el negativo de cada uno. Yo hice todo con mucha convicción y fe tal como lo explicó Susana e inmediatamente descubrí que tenía mucho negativo en mí ser, tanto que llegué a ver que yo completa era más negativo que cualquier otra cosa, lo que me produjo mucho dolor y las lágrimas inundaron mi rostro, pero este no era un simple llanto de dolor, era un llanto sufrido, gota a gota me acercaba a mí y me liberaba.

Empezaron a surgir cuestionamientos y el primero fue ¿Cuál es mi positivo? No tuve respuesta y me confundí aún más; después de tanto llanto me sentí vacía, como arrojada en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 87 noche y con paz. Las preguntas seguían surgiendo ¿Yo qué soy, quién soy, si lo que he sido los

últimos años es negativo y hay que dejarlo de lado?; también cuestioné, pero ¿si ese dolor que me produce el negativo me hace ser quien soy, cómo diferenciar hasta donde es suficiente vaciar?. Estaba confundida y dolorida, sin embargo mi energía se había hecho suave y volátil.

Inmediatamente salimos a la laguna que estaba al frente del bohío, Susana dijo que le contáramos a la madre el por qué queríamos hacer la investigación, que dijéramos en una palabra qué era lo que íbamos a hacer, cómo iríamos vestidos, qué le llevaríamos; yo como acaba de pasar por esa catarsis de dolor lo primero que pensé fue sanación, para mi ser espiritual y físico; después pensé en perdón, pedirle perdón a la madre por lo mala hija que he sido y justo ahí surgieron otras dos: Reivindicación y amor. Estas enfocadas a que si yo pido perdón es importante hacerlo de palabra y acto, en los actos estará la reivindicación con la madre, cuando haga eso y como ella me ama mucho porque soy su hija, me perdonará y me dará todo su amor incondicional que siempre he tenido, pero no lo he admitido por andar encerrada en mi egoísmo humano. Junto con eso le dije a la madre que escuchara mi corazón que solo ahí sabría oír mis verdaderos propósitos alejados de ego.

Pensé que iría vestida con amor, humildad y mucho respeto, que trataría todos y cada uno de mis días limpiar mi espíritu, mi corazón, dietar pensamientos negativos para servirle a ella e intentar irradiar amor hacia mí y hacía los demás; también que le llevaría primero todo mi negativo, para luego poder hacer pagamento de positivo espiritual.

Ahí culminó mi charla con ella y el resto de la noche estuvo inundado por las palabras del mamo diciendo que tendríamos respuesta a todo el otro día

Al día siguiente me acerque a Susana pues estaba tejiendo y pensé que ese sería el momento perfecto para aprender esa clase de tejido, creí que sería fácil porque en crochet; El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 88 pero al contrario de lo que pensé me estrellé mucho porque tenía tanto afán por avanzar que en algún momento tejí en el sentido contrario, entendí que para poder seguir adelante tengo que sanar mi pasado, dejarlo ahí, pero siempre honrándolo y reconociendo que eso me hace ser lo que soy hoy.

También me ocurrió que avanzaba pero no pasaba el hilo, entonces el tejido no crecía por lo que avanzaba sin avanzar y tenía que devolverme de nuevo; aplicando esto a mi vida y con lo que ha venido pasándome, si he hecho eso avanzar solo por hacerlo, sin propósitos verdaderos andando vacía, creo que esas dos respuestas fueron fundamentales para lo que pregunté la noche anterior acerca del negativo, porque yo no puedo soltar todo como lo pregunté la noche anterior, lo mejor es honrar lo que fue y lo que estuvo con todo el amor posible, para que el avanzar no duela y deje de sentirme un ser que es solo negativo.

En la noche tuvimos el trasnocho donde nos dirían por medio de Susana la respuesta de la madre, yo tenía miedo además era una noche de luna nueva y pienso que en este tipo de fase en especial las decisiones que se tomen me harán renacer en cierto sentido.

Entré muy asustada al bohío, pero hubo dos presencias que me tranquilizaron y sobre todo una que se posaba a mi derecha, que me decía que yo iba bien, que las cosas las estaba haciendo de corazón; la luz que veía entrar por la puerta en medio de una noche tan oscura me dejó de parecer tenebrosa. Nos dieron respuesta positiva a lo que pedíamos, pero siempre y cuando lo hiciéramos todo de corazón y con respeto, que no pelearemos entre nosotros.

Susana nos pidió que habláramos y yo pregunté acerca de mi negativo a lo que ella contestó que todo de a poco se podía; a Tatiana le contestó que para ponerle ojos a la investigación había que creer en otras realidades posibles y acercarse a ellas, o al menos así lo entendí. El resto de la noche danzamos y por fin me atreví a cantar lo cual es un paso muy El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 89 grande para mí, porque en otras ocasiones me invaden tantas cosas, tantos miedos y lo racionalizo tanto, que siempre termino pensando que lo hago mal, pero esa noche no fue así, pude hacerlo y me sentí bien.

Amanecí con esa sensación de que me faltaba algo por lo que casi no hablé; estaba en paz pero al mismo tiempo ajena a mí, por lo que vi que el camino sería largo y no el de volver a casa, el de la investigación que apenas comenzaba. Cuando salí el camino se me hizo muy complicado era como si tuviera muchas maletas encima hasta quería llorar, pero luego pensé ese peso lo tengo que ir soltando de a poco en cada camino.

Trasnocho en las piedras del tunjo, Facatativá 2 de julio.

MAJESTUOSA OSCURIDAD

Viviana Pérez

El Parque Arqueológico de Facatativá, conocido también como las Piedras del Tunjo, está ubicado en el departamento de Cundinamarca, a tan sólo 40 km de Bogotá. El Parque tiene la superficie de 29 hectáreas, en las cuales se pueden encontrar abrigos rocosos, pintura rupestre y maravillosos paisajes.

En el Parque se encuentran inmensas rocas metamórficas, resultado de la intensa presión de la tierra que, con el desarrollo de la litosfera, terminaron el piso de un gran lago que probablemente cubría la Sabana de Bogotá. Los sesenta murales están esparcidos irregularmente por todo el parque de Facatativá. Este parque también ha recibido nombres como “Piedras de

Tunja”, “Cercado de los Zipas”, “Cementerio del Zipa”.

También la “cueva de las abuelas”, se dice que esta piedra fue usada por los muiscas para hacer ritos, los muiscas en el centro hacían una fogata, bailaban alrededor y fumaban la pipa en homenaje a las tres almas de las abuelas que siempre están protegiendo esta cueva. Hay un rito El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 90 para ingresar a la cueva: saludar a las tres abuelas dando tres golpes en la puerta, caminar de espaldas, agachado, hasta llegar a los troncos utilizados como sillas.

Estas piedras también fueron utilizadas como implemento de cocina, como la Piedra de la

Chicha. El árbol que está al lado se llama el borrachero, utilizado para la fermentación de la , en el centro de esta gigantesca roca hay un hueco de aproximadamente unos 180 metros de profundidad y los muiscas la utilizaban para preparar la chicha que le daban a todo el pueblo, la fila podía llegar hasta donde la vista alcanzara”.

Así llegamos con toda la actitud, respeto y amor que merece este lugar sagrado, entramos a la cueva de las tres viejas, donde tenía la organización como de un tchunsuá, con troncos acomodados en círculo, con la simulación de fogata lo digo porque por seguridad del parque arqueológico no se puede prender fuego allí; un representante muisca de Faca, nos comentó que la forma de esa piedra era hecha por maquinas ya que unos hombres rompieron pensando que allí había oro u otros metales preciosos, pues este es un lugar donde se ha realizado pagamento desde mucho tiempo atrás. Yo iba con mucha calma en mi ser, antes de empezar me dispuse a observar cómo atardecía, se hizo noche y por fin lo que yo quería llegó la oscuridad, la inmensidad y grandiosidad de la noche estaban allí, acompañados de una luna creciente lo que hacía que la noche no estuviera muy iluminada.

Nos dispusimos a trasnochar, con todo el respeto y las indicaciones del mamo, pero esta vez era distinto, no teníamos fuego y solo éramos alumbrados por dos velas, las cuales no tenían una llama muy intensa o no nos brindaban la seguridad del abuelo fuego como en todos los trasnochos anteriores, también hacía mucho frío, por lo que se tornó un poco incómodo el comienzo del ritual. Comenzamos con palabras de todos, como siempre hubo la balanza de femenino y masculino entre Luis y Andrea, el primero hablando de manera tan empoderada y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 91 respetuosa que yo lo veía como un abuelo; la segunda con la dulzura que transmite siempre en sus palabras, Jeisson habló de celebrar la vida del profesor pues era su cumpleaños, gracias a esto el profesor confesó que tenía un hermano al cual honraba así no estuviera en este mundo.

Cuando yo hablé, sentía necesario decir lo que ese sitio significó desde la primera vez que fui, allí descubrí una totalidad, porque la dulzura de la madre me abrazaba dándome paz y el calor del padre sol me fortalecían de manera mágica. Yo sentía que el fuego no estaba allí por alguna razón, que al fin había llegado el momento de iluminar el sitio con nuestros corazones, con nuestra energía y con la humildad que abarca el ir a hacer trasnocho; de la misma manera sentía que el silencio era el abuelo esa noche, que ese silencio nos haría escuchar lo que está y no está, en otras palabras la realidad alterna que empezamos a aceptar desde el comienzo de este caminar con la madre, así que pedí oscuridad, pedí silencio por unos minutos; aunque yo sentía y quería que esto fuera toda la noche, en ese momento vi a Jeisson lleno de pavor, lo que me causó curiosidad y hasta risa porque pensé, este es el momento propicio para ponerle los ojos y los oídos a la investigación. De manera sorprendente cuando apagamos las velas, vi más claro el lugar, me sentía como observada por muchas personas, pero no tenía miedo alguno de estar allí, sin embargo en un momento vi como el vestido de una mujer indígena y eso me aterró, por lo que tuve que encender la linterna para corroborar con la razón que algo había allí, cuando la encendí no había nada, lo que me causo gracia puesto que entendí que antes había podido ver porque estaba entregada al propósito de la noche, a estar con corazón dulce sentada allí y dejé de preocuparme por eso, entre tanta oscuridad cerré los ojos y tuve una fugaz visión de que estábamos sentados en la mitad de un coliseo dorado, y en cada una de sus sillas estaban las autoridades espirituales indígenas escuchando nuestras peticiones. Para no sentirme en plena oscuridad llamé a mis abuelos de linaje, para que me dieran la fuerza para estar ahí. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 92

Después de tiempo prendimos las velas de nuevo y el profesor sacó un tabaco, nos contó cómo había aprendido, dónde lo había hecho, cómo se debía usar esta medicina y la diferencia que tenía de fumar no debía ser pasado hasta los pulmones, dijo para todo lo que servía, pero solo se me quedó que servía para la tristeza y las depresiones tal vez porque los últimos días he estado algo triste y el caer en depresión es uno de mis mayores miedos. Ahí si tuve miedo, porque él dijo que a veces causaba ciertos malestares como vómitos y mareos, cuando uno estaba muy mal la limpieza también era física; yo me asusté porque en realidad he estado mal emocionalmente y creí que sería yo la que tendría esa reacción; era la primera vez que hacía esto por lo que observé con detenida atención como lo hacían los que estaban antes de mí, cuando llegó hice todo igual y con fe exuberante de que me iba a sanar de tanta tristeza, de tanto dolor por sucesos que hasta ahora empiezo a aceptar y sanar, por duelos que he llevado a cuestas por vario tiempo, estoy empezando a soltar. El tabaco dio dos vueltas, y en la segunda estaba absolutamente cargado de energías, no sé hasta qué momento pesadas, pero después de hacer este ritual con amor encendido en mi alma, quedé con mucha paz interior, y por fin después de tanto tiempo pude ver algún orden en mi sentir y en mi emoción.

Después hicimos pagamento, yo le di a la madre, a mis abuelos a los de quinta generación específicamente puesto que el abuelo Fernando en un trasnocho me dijo que la base de la migraña estaba ahí, puse oro para que puedan liberarse, puse agua, puse todo mi negativo, mi dolor. Después pagamos en positivo, tocamos instrumentos, pero no tuve ganas de danzar, el profesor dijo que se le asimiló mucho a un velorio, a muerte; yo antes de empezar había hablado de eso, pero es que a mí no me aterra la muerte, me causa más malestar aceptar la vida que la muerte, seguido esto puse un cuarzo con toda mi energía y maíz para la sanación del lugar. El El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 93 resto de la noche seguí sintiendo energías, pero todas buenas, pude ver que el espacio en los troncos estaba ahí para los abuelos del territorio.

La noche siguiente al trasnocho, soñé con el coliseo lleno de indígenas de la visión que tuve en la noche, era un centro de poder muy iluminado, las paredes eran como de oro y nosotros estábamos sentados en la mitad, recibiendo toda la fuerza de los espectadores.

PRIMER CONFIESO SILVANIA.

CONTANDO EL SENTIR…

Viviana Pérez

Interiormente iba mucho más tranquila que la vez anterior, tenía emoción por ver al mamo y su familia; esa casa, ese calor de hogar representan para mí el autoconocimiento y amor con los que es importante andar a diario, la palabra dulce de la mujer, la representación y asunción de madre, de tierra, de luna encarnadas en vida son la muestra y el ejemplo a seguir para mí, para encontrar la sanación que anhelo día a día.

El trasnocho estuvo encaminado a contar como nos había ido en la realización de la tarea que fue asignada la vez anterior, ésta hacía referencia a trasnochar en las piedras del Tunjo en

Faca, con el fin de pedir autorización a los abuelos y a la madre para las salidas de campo posteriores de la investigación.

Todos los compañeros empezaron a contar la experiencia tanto individual como colectiva. Fue clara la importancia que tuvo el silencio y la oscuridad esa noche, también ciertas emociones como el miedo, la incertidumbre y el frío nocturno asociado a la muerte.

Personalmente cuando me tocó confesar todo lo que había sentido en aquel trasnocho, sentí un poco de miedo, pues empecé a sudar y además el pálpito de mi corazón se aceleró El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 94 notablemente. Dije que la petición de la oscuridad había sido de mi parte, conté la tranquilidad que experimenté cuando el silencio y la oscuridad eran la totalidad de ese instante, yo hice esa petición porque tenía la fuerte necesidad de estar en la noche, también de ver que yo no soy solo negativo, solo miedo y que la noche tiene su belleza por ser oscura y silenciosa.

Comenté que en el momento de rapear el tabaco, tenía muchísimo miedo de que los demás compañeros se dieran cuenta de lo triste que estaba, ya que se nos explicó que cuando uno está mal internamente, cuando estas borracho emocionalmente, se experimenta en el cuerpo, causando diarreas, vómitos, mareos, desmayos o llanto inconsolable, esto es conocido como chuma; la verdad ese era mi mayor temor, sin embargo lo hice de la forma más respetuosa y rogando que el tabaco entrara en mi cuerpo y mi espíritu solo para curarme, fui bastante explicita en lo que comenté en el trasnocho; igualmente hice referencia a lo bien que me sentí después del ritual, que a pesar del frío, de la oscuridad y del miedo que pudiera tener el resultado fue de querer ser mejor hija, de ser mujer, de ser vida. Porque para mí se ha vuelto fundamental agradecer los pasos que voy dando, porque esos pasos los puedo dar gracias a la madre tierra que me sostiene los pies a diario, dándome la fuerza que necesito. Ser vida, porque es momento de soltarle la mano a la muerte y entender que yo soy la mujer y ésta encarna a la vida de manera implícita y hermosa.

CONFIESO DE LAS PIEDRAS DEL TUNJO EN COTA.

INTERIORIZANDO LA LUZ

Viviana Pérez

Nos disponíamos a trasnochar en Cota una vez más, juntos y a la expectativa entramos al tchunsua. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 95

Tenía muchas preguntas y más con respecto al dolor de cabeza que me aqueja hace tanto tiempo, el abuelo me había dado un remedio la vez anterior yo lo hice como él dijo, pero su efecto duró solo unos cuantos días, por lo que iba con el propósito de preguntar qué otra cosa podía hacer para ese dolor, mágicamente y como siempre sentí como si él hubiera leído mi mente, porque empezó hablando justo de ese tema, la enfermedad, los remedios y la cura; Dijo que no existía remedio alguno que sirviera si yo no hacía conciencia de que la cura era yo misma, que yo era el remedio y de la misma manera la enfermedad, entonces después de esas palabras llegué al mismo punto, tengo que encontrar qué es lo que está sucediendo en mí para que yo misma esté produciéndome tanto malestar físico; ya que cuando tengo tanto malestar físico se arrastra de manera impresionante mi estabilidad emocional y espiritual, porque me siento perturbada y rota en todos los aspectos de mi vida cuando estoy enferma.

Siguiendo el hilo del trasnocho, el abuelo Fernando nos contó como el hombre contemporáneo se está dando cuenta de las fallas que ha tenido la industria farmacéutica y de la salud con los medicamentos, puesto que solo dan soluciones dependientes y poco duraderas para el hombre, por esto se ha despertado nuevamente el interés en el uso de las plantas para la curación; él mencionó unos cursos que se están dictando para el conocimiento de las plantas y sus efectos curativos en el hombre, pero volvió y repitió lo mismo, la cura soy yo, la enfermedad no existe.

Luego, Luis se dispuso a contarle los detalles importantes del trasnocho que habíamos hecho en las piedras del Tunjo, por supuesto que se mencionó a la oscuridad que nos abrigó esa noche, del frío, de la sensación de ¿qué hacemos ahora?.

A lo que el abuelo contestó que era importante ver siempre la luz en la oscuridad, nos hizo levantar, salir del tchunsua, y mirar fijo hacía una montaña hizo la observación de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 96 concentración que se necesitaba para poder ver; inmediatamente él volvió al tchunsua y nosotros nos quedamos observando aquellas luces que habían en la montaña, eran tres luces, se movían entre ellas y además arriba de la montaña habían unas siluetas que se movían y parecían danzar o algo parecido, tengo que admitir que la razón entró a jugar un papel determinante en ese momento y pensé miles de cosas que podrían explicar ese movimiento pero ninguna era coherente con lo que yo veía, luego imagine que era un pueblo o una especie de ciudad indígena situados en esa parte.

Yo sentí que era hora de regresar y volví, no estaba ni asustada, ni confundida todo lo contrario estaba serena, me sentía tranquila y el calor del tchunsua me acogió de manera amorosa. Inmediatamente entramos y el abuelo dijo que siempre había que buscar la luz que hay dentro de nosotros, que allí había abuelas danzando, lo que me respondió de la manera más clara a qué se debía el movimiento que veía minutos atrás.

La enseñanza determinante fue que en los momentos de plena oscuridad y no solo la física, no solo el estar arrojados en la mitad de la noche, si no en los momentos en donde pareciera que uno se apaga hay que echar mano de esa luz, que siempre está lista en el corazón para salir. Porque la oscuridad de algún momento no indica precisamente que sea peligroso o malo, pienso que esos momentos sirven para mirar hacia dentro, sentir más allá, sentir el aire y estar conectados con nosotros mismos de manera total.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 97

(PRIMERA SALIDA A BOYACA, , SOGAMOSO, IZA):

CONOCIENDO LA TIERRA DE MANTAS

Viviana Pérez

La primera visita a un lugar siempre me llena de intriga el espíritu, acerca de las

costumbres, de los paisajes, de los climas y de las personas. Con toda la humildad y el respeto

posible puse mis pies en el hermoso territorio de Boyacá.

Antes de la llegada de los españoles, los habitantes de Bojacá que significa "Tierra de mantas o Manto Real" (de este vocablo se derivó el actual Boyacá) eran las tribus chibchas o muiscas. Su estructura se dividía en tres cacicazgos o especies de confederaciones así: Zaque

"Hunza" (del cual se deriva el Nombre de Tunja), el cual poseía mayor extensión de tierra y poder político sobre los otros dos que correspondían a Cacique ""(del cual se deriva

Duitama) y Cacique Suamox (del cual se deriva Sogamoso). Las tribus que moraban el territorio boyacense trabajaban la tierra y la artesanía, el Maíz era su principal producto del cual derivaban sus alimentos (el pan, la arepa y la chicha).También trabajaron el oro con gran habilidad. Su vivienda eran chozas armadas de bareque y bejucos de caña. En 1537, llegó a este territorio

Gonzalo Jiménez de Quesada para ocupar las tierras, distribuir los indígenas en encomiendas, obtener recursos y poblar. Este proceso se enmarco en medio de batallas dadas por los indígenas para evitar el dominio español. En 1539, Gonzalo Suárez Rendón fundó Tunja y otras poblaciones ocupadas por los antiguos caseríos indígenas. (Agencia Tierra Colombiana, 2006).

Igualmente, hablar de indígenas y del territorio de Boyacá, es hablar de alimentos. Productos de la tierra como maíz, papa, habas, cubios e hibias... preparaciones tradicionales como la chicha, el mute.... envuelto de maíz, sopa de maíz; la chicha la hacían los indígenas masticando y escupiendo el maíz (Miñana, 2003) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 98

La bienvenida del territorio de Boyacá fue helada, pues Tunja tenia una mañana bastante fría, lo cual me recordó las palabras del abuelo Fernándo de Cota en donde decía que la madre nos manda los mensajes muy claros, así que supuse que algo debía enfriar, entendí que el fuego interno me hace moverme, la luz que ilumina mi interior, pero en exceso me quema, como el mal genio y la ira, me destruyen y me ciegan a las cosas dulces del diario vivir.

Así con un cambio de clima bastante diferente al de Bogotá, llegamos a la UPTC. Entre los espacios que se pueden destacar dentro de la universidad están las dependencias que se encuentran en la parte inferior de la biblioteca, donde funciona el museo de antropología de la

UPTC, constituido con diversos materiales recogidos de las tumbas de nuestros antecesores, allí se destacan los cráneos, las tumbas, los implementos con los que eran enterrados, niños chibchas, además de literatura relacionada con esta cultura. Otro lugar histórico es el pozo de hunzahúa, llamado pozo de Donato. La leyenda dice que el Cacique Hunzahúa quien pretendía el amor de

Noncetá, una de sus hermanas, decidió un día, con el fin de escapar de la vigilancia de su madre, llevar a su hermana a la provincia de los chipataes para comprar algodón. Allí la sedujo y al regresar, al notar la madre que el vientre y pechos de su hija crecían, montó en cólera y arremetió contra ella con la ana (palo para agitar la chicha), pero la muchacha se ocultó tras el recipiente en el que se preparaba el licor, y éste, al ser golpeado se quebró, dejando derramar la chicha contenida en él, formando un pozo que se convirtió en agua. Posteriormente, en tiempos de la conquista, , temiendo que los españoles se apoderaran de su oro, ordenó a su pueblo que arrojaran todas sus riquezas al pozo para que jamás pudieran recuperarlo. El capitán español Saturniano Donato de Rojas, intentó, en el siglo XVII, desecar la laguna sin obtener

éxito alguno. De ahí que se le conozca como Pozo de Donato. (UPTC) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 99

En el Pozo de Donato como tal se nota como se le han realizado "mejoras" por parte del alcaldía municipal de Tunja, sin embargo éste se reduce a un parqué como para pasar una tarde, el problema central es que se está obviando la espiritualidad de lo indígena en estos sitios sagrados y de poder lo cual reduce únicamente a los restos arqueológicos, por lo que es un poco complicado llegar a conectarse de manera trascendente en este lugar. Por otro lado cuenta la historia que en ese lugar iba a ser construido el templo del sol de , el cuál iba a ser tan enorme como el de Suamox, pero debido a la conquista estos planes se fueron abajo y el templo quedó solo con las bases o pilares de lo que iba a ser, de primera mirada pareciera que estas bases están colocadas de una forma estratégica, matemática o lógica; es lo normal porque aunque se hagan las pases de ambos abuelos el español sigue con el intento de pisotear al indígena, de negarlo o invalidarlo. A manera personal, sentí que esté lugar tenía muchos pagamentos realizados en la bahía del pozo. Al ubicarme en frente del poste más alto, me sentí pequeña y de nuevo en deuda con la madre, aunque yo llegué con buena ropa y limpieza espiritual, sentí que no era suficiente, pues me ha faltado reinvindicarme más con ella; el proceso de devolver el negativo a su origen se me ha hecho un propósito, un camino y algo complejo de cumplir, a modo personal el encuentro conmigo y la sanación ha tenido lugar por medio del tejido, el cual me ha ayudado a llegar a análisis propios de lo que soy, de lo que debo aceptar de mí misma y qué es lo que no me sirve, como lo es el avanzar con calma, honrar mi pasado porque de una u otra manera así haya dolor éste es el que me hace grande, él que me ayuda a crecer en espíritu.

Dentro de la universidad también hay otro monumento que se llama el templo de

Goranchacha. Hace muchos años, el Sol quiso reencarnar en una mujer chibcha, por lo cual, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 100 todas las mañanas las mujeres desnudas esperaban la concepción a través de los rayos del astro rey.

Sin embargo, los indígenas conocieron luego, que el sol quería enviar sus rayos a una doncella del pueblo de Guachetá, quien habría de parir lo que concibiese de los rayos divinos, quedando virgen.

En toda la región se conoció la noticia, la cual fue acatada por las dos hijas doncellas del cacique de Guachetá, deseosas ambas de que sucediese el milagro. Todos los días a la alborada, las hijas del cacique se salían del bohío de su casa y se subían a un cerro cerca del pueblo para esperar la salida del sol por el oriente. Ellas se acostaban desnudas frente al sol, esperando que las pudiese fecundar con sus rayos.

Una de las doncellas de Guachetá apareció embarazada y al cabo de nueve meses parió una esmeralda muy grande y muy rica. La princesa la tomó y la envolvió en unos algodones, la puso entre los pechos durante varios días, hasta que al fin, la esmeralda se convirtió en un niño él que llamó Goranchacha, hijo del sol.

Cuando cumplió sus 24 años, el hijo del sol se dedicó a recorrer el territorio chibcha predicando las sabias enseñanzas de Bochica y convirtiéndose en profeta. En la corte de

Ramiriquí, en Sogamoso y demás pueblos del altiplano Boyacense, Goranchacha era recibido como hijo del sol y predicador religioso.

Cuando el hijo del sol tuvo conocimiento del castigo que el cacique de Ramiriquí le había infligido a uno de sus acompañantes, regresó a la entonces capital de los Zaques, le dio muerte al

Cacique y asentó allí su corte, tomándose el poder por la fuerza. Escogió los criados para su servicio y entre ellos al pregonero, un indio con una gran cola, que se convirtió en la segunda persona del pueblo. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 101

Goranchacha gobernó con un gran rigor; tenía castigos, aún para cosas muy leves.

Cambió en forma definitiva la capital de los Zaques, que inicialmente era Ramiriquí, por Hunza.

Se transformó en un verdadero dictador, el primero en estas tierras aborígenes.

El hijo del Sol mandó construir en Hunza un templo para rendirle culto a su padre; para ello mandó traer piedras y columnas de los lugares más distantes de sus dominios. Contaban los

Hunzas que nunca pudieron ver las caras de quienes traían las piedras, por llegar con ellas de noche.

Goranchacha hacía venerar muy frecuentemente al sol en su templo de piedra y cuentan las tradiciones que hacía fiestas especiales con procesiones desde el cercado de Quimuinza hasta el templo del sol. La procesión seguía un camino tapizado con mantas finas y pintadas. Duraba tres días de ida, tres días de oración y tres días de regreso.

Un día el pregonero reunió a todos los Hunzas en un lugar, e hizo que Goranchacha les hablara de la esclavitud que tendrían en el futuro, pues vendría gente fuerte y feroz que les habría de maltratar y afligir con sujeciones y trabajos. El gran Chacha se despidió de los Hunzas y les dijo que se iba para no verlos padecer, y después de muchos años volvería a verlos. El Zaque entró al cercado y desapareció en forma definitiva, pues nunca más lo vieron. El pregonero con cola de león, delante de todos, estalló y se convirtió en humo hediondo, dando así la última despedida.

Sin embargo con toda esa grandeza y superioridad que tuvo para los pueblos indígenas,

éste lugar está muy abandonado. Al estar ahí presente tenía cierto choque de emociones, de una manera me sentía bien porque lo que quiso ser un templo seguía allí, pero de otra postura la forma cómo estaba, esas piedras que olvidadas por todos sus hijos, gritaban auxilio y dolor, el día estaba sumamente frío y creo que el clima es así, por tanto odio que quedó en la tierra, tanta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 102 sangre de mis abuelos derramada. En este lugar fue un poco más fácil conectarme con la madrecita, simplemente me acerqué dando toda mi fuerza, mi amor y como siempre mi negativo, así que el mensaje fue claro, agradecer, mi vida, mi aire, todo, porque la pacha me da todos los días la raíz para levantarme, porque así como ha protegido a este templo excluyendo las características físicas que hacen que se vea en deterioro y abandono, me refiero a protección espiritual y de fuerza; eso me lo da a mí, porque entendí que la fuerza que no puedo explicar de dónde sale en los peores días de mi vida, cuando ni mi corazón, ni mi cuerpo responden a las demandas de hoy, cuando entro en desorden emocional y de alguna otra forma, tengo tantas cosas adentro que en realidad no sé cómo interpretar esa fuerza y ese tesón que dudo tener; todo eso me lo dijo la madrecita ahí, eso que no explico es ella ayudándome, dándome ímpetu y amor espiritual. Yo llevaba un maíz cargado de toda mi fuerza y vi que a ese lugar le faltaba por lo cual, lo dejé al lado de una piedrita de esas, me despedí del lugar, agradecí y entendí un poco más de mi misma que soy una mujer en la que la fuerza habita, de esa forma me levanté sonriéndole al lugar.

Seguido esto salimos para las Moyas de San Ricardo las cuales se hallan situadas en la ribera occidental del Río La Vega, en el área que se denomina San Ricardo. “Las Escudillas”,

“Las Moyas”, localizadas en Puente Restrepo tradicionalmente se dice que allí comían los dioses de los antiguos Muiscas. La antropóloga de la UPTC, refirió que en este tipo de sitios vertían la chicha, para curarla al sol, pasando de hoyo en hoyo, para finalmente llegar a la boca de alguno de la tribu. También escuchamos en el museo de la UPTC que esos orificios no están hechos naturalmente, por lo que se sabe por el rastro arqueológico que fueron realizados por seres humanos. Los abuelos dicen que este lugar es un sitio de fuerte conexión espiritual, algunos compañeros refirieron verle forma de pájaro a los huecos, al mirarlos de forma global, yo en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 103 realidad no pude ver nada de eso, en este sitio especialmente el frío era absoluto. Yo me senté saludando a la pacha mama, contándole como solo a ella puedo mi estado emocional, la tristeza constante con la que ando y el estado físico actual, lleno de dolores constantes y de sentir el carecimiento de empuje para seguir y levantarme. Esta vez pregunté concretamente qué era sanación y cómo iba a sanar; la respuesta fue que yo voy a estar sanada el día en que acepte mi totalidad, pero además de eso la ame y en el momento de intentar transformarla lo haga abandonando todo el egoísmo posible, aceptar que el dolor es bello porque es un gran maestro. Y en mi vida sí que ha sido el mayor profesor, no solo el dolor físico porque éste acarrea el emocional, lo que hace que esté triste reiterativamente. Al descubrir todo esto sentí una conexión enorme con la tierra y aunque no he empezado ese proceso del todo, pude ver una luz en el camino oscuro en el que me sentía.

Seguido esto, llegamos a los (Tunja) en primer lugar, es hablar de lugares misteriosos y de difícil acceso que casi nadie ha visitado o visto, pero sobre los que todos repiten algunas historias; o de pequeños vestigios cercanos sobre los que se construyen pasados de oro, esplendor y magnificencia. (Miñana 2003) Pudimos tener acercamiento a esto, por los argumentos de las personas, preguntando qué eran los lugares, que se hacia allí, en el que según historia popular, eran sacrificados niños al sol; increíblemente y en contraposición al mito en aquel lugar se respiraba y sentía unión, al estar allí tuve visión de ciudad indígena, de pueblo muisca, se puede ver que el hombre de hoy y el gobierno de la ciudad no ha intervenido mucho, a pesar de que estaba muy arriba, casi llegando a montaña páramo, allí había calor de hogar, de amor, de unión. Visualicé mujeres y hombres tejiendo, también interpreté que algunas de estas piedras eran de moler y de cocinar maíz. Lastimosamente se ha perdido el significado espiritual, encanto y misterio cosmogónico, de conformación del mundo, del ser humano debido al olvido El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 104 al que nos conduce la modernidad; la ubicación etnográfica es compleja, ya que este se encuentra en un barrio popular e inseguro, fue imposible hacer ritual y pagamento, cuando este lugar era merecedor de estar y de sentir, pues daba paz y alivio, yo por mi parte dejé mucho de mi negativo al ver toda la unión narrada precedentemente, esto me sirvió para comprender que otra de las cosas que me enriquecen, son las personas, la unión y trabajo colectivo hacen crecer mi ser.

Llegamos a Sogamoso; Sogamoso en chibcha significa: morada del sol. Y Sogamoso es la ciudad del sol y del acero. Se encuentra tal vez la representación más evidente de la cultura muisca, el monumento al sol, fundado por el científico, doctor Eliécer Silva Celis, hace 55 años, y que es donde se erigía este monumento que, según dice la historia, los españoles lo incendiaron y eran tales las dimensiones del templo, que ardió durante seis años seguidos, sin que lo apagaran las torrenciales lluvias. El templo tiene una altura de 18 metros. En su interior ya no cuelgan las piezas de oro que despertaron codicia, pero la estructura sorprende con su imponencia.

Las pequeñas ventanas sirven de calendario: cada 22 de diciembre el sol se proyecta perfectamente sobre el robusto pilote central, dentro del templo circular. Así, los muiscas celebraban el cambio de año, adorando a Sua. Alrededor del templo se encuentra un cementerio que contiene los cuerpos momificados de todas las generaciones muiscas. Además, está el museo, que alberga centenares de piezas prehistóricas, como un fragmento de mandíbula de mastodonte.

El tronco central del templo es de guayacán que sostiene a toda la estructura, diámetro de aproximadamente cuatro metros y unos 18 metros de alto. Lo más impresionante de esta edificación es que este tronco se trajo desde la Orinoquía, pues es allí donde realmente existía El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 105 este tipo de maderas, y lo trajeron con sola fuerza humana y desde tan lejanas tierras a pie.

(UPTC)

En todo el lugar, me entró dolor en el pecho, sentí ganas de llorar y angustia desesperante, porque el ver cómo eran mis ancestros, cómo vivían, la riqueza cultural tan enorme y la sabiduría del corazón dulce, del pensamiento bonito, fueron abolidos bajo las máscaras del abuelo fuego, a pesar de que el trágico hecho fue ocasionado hace mucho tiempo el césped todavía crece con dolor, quemado y seco, lo cual me pareció sumamente impresionante, pues la madre tierra está hablando, se comunica por medio de ello, haciéndole ver obviamente a los que intentan, pueden y quieren ver más allá, qué pasó ahí; que ese sitio no es un museo como puede ser contemplado por otras personas, este es un sitio sagrado, de riqueza y poder ancestral, en este sitio respiré tristeza, dolor, sangre y masacre, y todo causado por mi otro linaje, mi otra corriente ancestral, la española. Cabe resaltar que es un intento bonito, pero se elude la espiritualidad propia del pueblo.

"La ceremonia confiere historicidad a sitios que no representan hechos del pasado por ellos mismos. El ritual expande, así, la franja de espacio y tiempo en el presente, de tal forma que

éste también incluya el pasado." (Rappaport 2000:191), por lo mismo este es un sitio de peregrinación indígena actualmente, en donde todavía se hacen las practicas buscando el equilibrio interior que tanto se ha promovido.

En el pagamento, en el templo del sol de Suamox al inicio tenía sueño, pero en la mitad de la ceremonia empecé a experimentar un fuerte mareo, en realidad me sentía desorientada, flotando en un espacio en el cuál mi cuerpo, mi mente y mi corazón se hacían más volátiles con el pasar de los minutos, en ese mismo instante sentí desprenderme bastante del negativo que me venía aquejando tiempo atrás, el pensar de manera obsesiva cómo serían las cosas, si pasaran a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 106 mi acomodo, cómo sería si yo fuera…, en fin la serie de pensamientos e ideas que contaminan mi espíritu, se habían bajado de manera considerablemente alta. Así, me dispuse a tejer en pensamiento y corazón qué era lo que necesitaba por encima de lo que quería; inmediatamente volvió a aparecer la palabra sanación y no solo física, no solo eliminar mis dolores de cabeza, sino poder encontrar la raíz de mis males, el poder aceptar tanta tristeza que se posa en mi cabeza y mi corazón. Así sin importar que en ese lugar se respirará tanto dolor, fue un centro de fuerza que no pensé sentir o experimentar, además que hubo un momento que me sentí como en especie de trance, me dio mareo y visualicé muchas personas corriendo, huyendo y gritando con dolor; pero aun así con toda esa masacre la esencia es lo que importa, porque debido a la vida que llevaron, la conexión y el respeto con la pacha mama, se puede sentir que son viento, son tierra, piedras y que están presentes por siempre en todo el lugar y yo que soy hija de ambos ancestros por eso la tarea es aceptarlos a juntos en mi interior, en realidad siento que me falta tanto por entender, por aprender a escucharle a la madre sigo sintiéndome la mala hija, pero el consuelo que tengo es que estoy haciendo algo por sanarme y me ha servido muchísimo ya que desde niña no me siento así de fuerte como ahora.

Después nos dirigimos hacia Tota, La laguna no siempre existió, antes de que las masas de agua cubrieran amplios terrenos, el lugar no era más que un hueco árido en el que no crecía yerba alguna.

Una bola de fuego la recorría en las noches para luego hundirse en lo más profundo y llegaba a la morada de Busiraco, dios de los infiernos.

En ese tiempo llegó Bochica, profeta y hombre sabio, venerado por los muiscas, quien enseñó a la gente del poblado el arte de la cerámica y el uso de dos plantas quijisa (algodón) y chihize (fique) para hilar y hacer diversos tejidos. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 107

Bochica también infundió en los indígenas el respeto y comunicación con los dioses, por eso escogió a un sacerdote que debería ser el mediador entre los dioses y la gente y el líder de las comunidades. Este sacerdote recibió del profeta una piedra verde y clara (esmeralda), que se convertiría en el símbolo de pureza y suprema majestad, esta piedra la debían portar todos los sacerdotes que sucedieran al primero.

Pasaron varios años y el hueco árido albergó no sólo al malvado Busiraco, sino también a una serpiente negra, guardiana del lugar. La aridez del inmenso hueco se fue trasladando a los poblados. La escasez, la sequía, el hambre, la sed y las enfermedades mataban a animales y a humanos.

El sacerdote de ese momento, se llamaba Monetá y al ver la terrible situación de su pueblo, decidió ponerse en penitencia, ayuno y oración continua para que los dioses lo escucharan y ayudara a la gente. Sin embargo, la situación era cada día peor y ni una sola gota de agua tocaba la tierra. Cuando aparecían nubes, los ojos esperanzados de los indígenas las admiraban, mientras desde el hueco Busiraco lanzaba un viento con polvo que las disipaba.

Un día, el sacerdote Monetá convocó a toda la gente en Suamox, ciudad sagrada, llegaron allí de todas las poblaciones cercanas, gente mal nutrida y cansada. El líder se pronunció al a multitud con sólo una túnica blanca y la piedra verde en el pecho, les dijo que sus plegarias habían sido escuchadas por , quien le dijo que reuniera a la gente e hiciera una peregrinación hasta la cúspide de la roca que quedaba cerca al hueco árido y que allí hicieran homenaje a Bachué, diosa que representa lo femenino, las aguas y la fertilidad.

El pueblo siguió a Monetá hasta la roca y varios hicieron pinturas, ofrecieron a la diosa avecillas y luego todos se sentaron para el baile ceremonial. Mientras los tambores sonaban y los bailarines danzaban, la serpiente negra se retorcía y hacía ruidos de dolor y descontento, cuando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 108 el grupo finalizó su baile, entró en escena la bailarina principal usando una máscara negra y roja, bailó pegándole fuerte al piso, mientras la serpiente chillaba, luego ofreció a Bachué un disco de oro y lo lanzó al hueco árido, hiriendo de muerte a la serpiente negra. Todos celebraron el éxito y se repartió la comida, quedando ínfimas porciones para cada uno. Mientras todos comían y dormían, el sacerdote oraba a los dioses. Al día siguiente presentó a su pueblo una nueva revelación. Arrancó de su pecho la piedra que había dado Bochica en antaño y la lanzó sobre el cadáver de la serpiente. De allí surgieron las aguas verdeazuladas que llenan el Lago de Tota.

Así se dio fin al hambre y la sed en la región. Las islas que sobresalen son algunas de las partes petrificadas de la serpiente muerta. (Celis, 1970 ).

Personalmente, este fue el lugar más hermoso de toda la experiencia de campo; el agua cristalina y limpia, el atardecer hermoso acompañado de un arcoíris majestuoso, en realidad el paisaje era supremamente imponente. Al caer la noche, ese paisaje no varió mucho, el cielo estaba iluminado parecía un lienzo en el cuál con el avanzar de los minutos se dibujaban más estrellas sobre él. Así con este hermoso regalo de la pacha mama, nos dispusimos a trasnochar, es de resaltar que este es el segundo trasnocho en el que estamos solos, cuando digo solos me refiero a estar trasnochando con abuelos físicos; ésta por ser la segunda experiencia fue mucho mejor, en la cual yo estuve muy tranquila y confiada dispuesta a escuchar al silencio, al crujir de la madera mientras se consumía en la mitad del fuego, los leves sonidos del agua que mis oídos alcanzaban a divisar. Este si fue el momento oportuno para sacar mi tejido y aunque no veía mucho, para llevarlo a la práctica, lo expuse como ofrenda, como carta de presentación extra, junto con mi ropa espiritual y mi corazón; así tal vez la madrecita me diría en un lenguaje más claro quién soy. Estuve todo el tiempo con calma en mi ser, ya habíamos enfrentado estar a oscuras adentro de la cueva de las tres viejas en Faca, por lo que iba con mi luz interior recargada El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 109 por si necesitaba en algún instante valerme de ella, sin embargo como nombre anteriormente la noche estaba hermosa, además que por el cielo no dejaban de pasar estrellas fugaces un verdadero espectáculo. Por lo que entendí, que nosotros como grupo de investigación jugamos el papel de esas estrellas en el cielo; pero el papel lo ocupamos en la tierra, sin las estrellas el cielo en la noche está oscuro y falto de vida; eso le pasaría a la tierra sin nosotros los seres humanos con conciencia y ganas de ver más allá o más bien de ver lo fundamental, nosotros como hijos iluminamos los territorios, y los Dioses son las estrellas fugaces, brillan más, recorren más espacio, pero no todos pueden verlas. A parte de eso, estuve muy a gusto sentada allí, le entregué un cuarzo a la laguna, con mis propósitos de la línea, el fundamental, sanar y el académico; poder tener las palabras y la sabiduría para hacer el puente entre los dos mundos, de esta forma culminó nuestro trasnocho de la manera más hermosa y trascendental para mí.

Al otro día en la mañana, fuimos a bañarnos en la laguna; dejando de lado la temperatura del agua que era un poco helada, nada más se interpuso para que yo me sumergiera en estas aguas de poder curativo. Antes de entrar al agua, charlé un poco con la laguna, le dije que tenía todo el derecho de llevarse cualquier equipaje que estuviera obstaculizando mi trascendencia, en momentos este charlar me costó trabajo ya que la experiencia contemplativa que tuve del lugar no dejó de suceder hasta el momento en que no lo vi más. Cuando decidí entrar estaba helada, por lo que salí nuevamente; así hice varios intentos hasta que pude sumergir todo mi ser en esas aguas míticas y cristalinas, dejando todo en manos de la corriente. Todavía no sé, qué tantas cosas tengo que enfriar y de pronto es ese el error, que no he hecho conciencia de qué es lo que me contamina mi ser, aunque con sinceridad eso no me preocupa ahora porque debo ir paso a paso; o tal vez la respuesta sea fuerte y por ahora no tenga el desarrollo para aceptarla. Fue contundente para mí entender que esta laguna es para enfriar el exceso de fuego, de mal genio de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 110 dolor en mí, es una laguna que limpia llevándose el negativo de manera impresionante. Puesto que después de salir del agua, sentía como los sentimientos malhumorados habían desaparecido.

El siguiente destino fue Iza, en el cuál iríamos a la piedra de Bochica, tiene ese nombre porque según el adagio popular fue el último lugar donde estuvo Bochica antes de transcender, también es llamada la piedra del diablo. Acerca de Bochica la leyenda, cuenta que en época de los Chibchas, durante días y noches llovió tanto que se arruinaron los cultivos; las casas se vinieron al suelo, y se mojaron tanto que lo mismo servía tener techo de palma o no.

El Zipa, quien comandaba todo el imperio Chibcha, y los , que eran como los capitanes o gobernadores de los poblados de la sabana, se reunieron para buscar una solución, pues no sabían qué hacer y el agua seguía cayendo del cielo en torrentes. Se acordaron entonces de Bochica, un anciano que no era de su tribu y quien había aparecido de repente en un cerro de la sabana.

Dicen que era alto y de piel colorada, con ojos claros, barba blanca y muy larga que le llegaba hasta la cintura. Vestía una túnica también larga, sandalias, y usaba un bastón para apoyarse. Él les había enseñado a sembrar y cultivar en las tierras bajas que quedaban próximas a la sabana y a orar. Cuando se iniciaron las lluvias, Bochica estaba visitando el poblado de

Sugamuxi (hoy Sogamoso), en donde había un templo dedicado al Sol.

Los chibchas decidieron llamarlo, porque pensaron que Bochica era un hombre bueno que podría ayudarlos, o todo el imperio se acabaría a causa de la gigantesca inundación. El anciano dialogó con dificultad con los caciques, pues no dominaba su lengua, pero se hacía entender y le comprendían bastante. Se retiró a un rincón del bohío que tenía por habitación, rezó a su dios, que decía era uno solo. Luego salió y señaló hacia el suroccidente de la sabana. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 111

Cuentan además, que cientos de indios organizaron una especie de peregrinación con él.

Se detuvieron después de varios días en el sitio exacto en donde la sabana terminaba, pero las aguas se agolpaban furiosas ante un cerco de rocas. Los árboles enormes y la vegetación selvática frenaban la furia del agua.

Bochica, con su bastón, miró al cielo y tocó con el palo las imponentes rocas. Ante la sorpresa y admiración de unos y la incredulidad de todos, las rocas se abrieron como si fueran de harina. El agua se volcó por las paredes, formando un hermoso salto de abundante espuma, con rugidos bestiales y dando origen a una catarata de más de 150 metros de altura. La sabana, poco a poco, volvió a su estado normal. Y allí quedó el "Salto del ". Dicen que Bochica, tiempo después, desapareció silenciosamente como había venido. (Secretaria de cultura, recreación y deporte., 2011).

El llegar a este lugar no era algo de cinco minutos, pues la piedra ni siquiera se alcanzaba a divisar desde abajo, además que el terreno era más bien desértico. El camino empezó y ahí me di cuenta que iba a ser un trabajo duro, por lo que decidí irme caminando a mi ritmo sin importar quedarme atrás de todos, esto con el fin de no sentirme presionada, porque he entendido que yo no puedo andar al ritmo de las demás personas, porque el asumir el papel de la normalidad, más cuando yo no encajo ahí es lo que me ha venido enfermando a lo largo de los años; así con todo este pensamiento acompañándome mientras daba cada paso lento pero seguro, fue absolutamente imposible para mí no llenarme de negativo y más cuando notaba que yo estaba en desventaja física frente a los demás, esto no ha sido algo que me haya acomplejado durante mi vida; pero en ese momento sí. Es que yo no entendía cómo no iba a llegar cansada, si caminar, aprender a hacerlo y de una manera no tan desadaptativa para el mundo, siempre ha sido parte de mi lucha;

No fue fácil para mí caminar todo eso, cuando yo me cansaba tan rápido en trayectos más cortos; El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 112 todo esto me inundó de muchísima tristeza porque empecé a cuestionar muchas cosas, como

¿qué tan grande tiene que ser mi espíritu y mi alma, para que compensen todo mi malestar físico? y de alguna u otra forma la desventaja con la que iba. No era mal genio, ni pereza, ni falta de disposición, esta vez tampoco estaba el miedo presente; esta vez fue darle la cara a la realidad, a mi realidad de la que llevo huyendo tanto, sentirme absolutamente rota subiendo esa montaña, y le preguntaba a la madre ¿cómo voy a llegar bien vestida espiritualmente, cuando desde afuera estoy tan mal?. Sin importar todo eso, emprendí el ascenso con todos esos pensamientos y realidades rondando en mi interior, de los cuales estaba segura y estoy desde ese momento, que de ellos no puedo huir, no puedo escapar. En el camino vi una serpiente, normalmente les tengo muchísimo pavor a estos animales, pero al verla lo que hice fue dar mi paso más firme, continuar sin gritar, sin llorar y con más fuerza este camino. Finalmente llegamos a la piedra, el paisaje era verdaderamente bello, nos dispusimos a hacer pagamento en ese momento la madre empezó a cuestionarme la forma en la que había llegado, por lo que me sentí muy triste y rompí en llanto, la verdad es que no quería que mis compañeros me vieran o me sintieran llorar, por lo que cuando todos dispusieron de su palabra de agradecimiento más que de cualquier otra, yo no pude decir algo diferente a perdón; porque aunque he sanado muchas cosas con lo que he venido haciendo en este camino espiritual, de reivindicación y perdón; todavía hay dolor, me falta aceptación de la vida, de mí y de los demás. Lo que me ayudó a calmar el llanto fue el viento, que se posaba en mi solo me bastó dejarme abrazar por el viento, darle el permiso para que secara mis lágrimas y enfriara un poco mi cabeza de tanto pensamiento negativo en toda la subida a la montaña.

Después de experimentar todo eso, quedé muy confundida y en realidad no sabía qué decir, o cómo actuar, por lo que bajé en completo silencio e intenté estar así el resto del camino, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 113 pues no quería actuar de manera errada con mis compañeros del grupo, debido al choque tan fuerte que había tenido conmigo misma en el ascenso.

CAMBIANDO DE ROPAJE ESPIRITUAL

Viviana Pérez

Antes de llegar al territorio de Silvania, hice un trabajo interior de pensar qué había sido lo más significativo y por qué de la visita a Boyacá, además estaba intentando tener bastante apertura para el momento que tocara confesar lo vivido, lo sentido y lo visto…

Al llegar al hogar del mamo y su familia la primer indicación fue soltar el negativo; pensar solo en positivo y dejar de lado todos los momentos negativos sucedidos en esos días de ausencia a este territorio. En realidad en el tiempo al que se hacía referencia me sucedieron cosas que llegaron a desestabilizarme bastante, pasé por una tristeza muy grande, peleé con una amiga muy importante lo cual creí que nunca iba a suceder y una vez más volví a sentirme sola, mala persona, además de estar muy enferma físicamente lo que me impedía hasta caminar bien por momentos, porque el dolor en mis rodillas era tan fuerte que se me entumía una pierna dolorosamente.

Así las cosas cuando me senté en ese lugar, me dediqué a soltar, puse en pensamiento todas las cosas anteriores, me sentí un poco más libre, lo supe porque ya no tenía ese peso en el pecho o esas ganas de llorar constantes, por el contrario quería reír, reírme a carcajadas pero por respeto al ritual y a mis acompañantes no lo hice. Después nos posamos frente a unos árboles, allí el sentido era cambiar de ropa espiritual, pues según la tradición ancestral al bohío se entra limpio de espíritu, con pensamientos, sentimientos positivos y dulces. Ese cambiar de ropa es un poco complejo para mí porque es como quitarme la chaqueta o los zapatos viejos que tanto me gustan, a los que me he adaptado, así me ocurre con el negativo y con esa coraza espiritual El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 114 contaminada que me invade. Siento como si descontaminara mi alma, lo hago imaginándome en un rio en el que su cauce se mueve mucho, yo ingreso allí, me baño y cuando salgo hay en las piedras un vestido blanco que al ponérmelo se adhiere a mi piel y se desvanece dejándome desnuda otra vez, sin embargo no siento la desnudez porque mi espíritu está limpio y protegido con el vestido que me he acabado de poner, además de sentirme en paz.

Yo entendí que no era solo yo la que iba sucia, sino todos, tanto que el mamo Roberto, nos indicó de forma reiterativa que la idea era andar limpios todo el tiempo, limpios de corazón y espíritu.

En realidad este confieso, no fue como un ritual de confieso normal en el que le contamos al mamo y a los abuelos del territorio que vimos, que sentimos, que hicimos. Por lo que referí anteriormente, el grupo en general iba tan lleno de negativo que en eso se enfocó la noche; un compañero refirió un poco de lo que había sido la salida, pero en realidad la atención no estuvo enfocada en ese relato, precisamente nos sentamos en frente de la laguna, el confieso sería hacia ella, contándole a ella que había pasado, yo por mi parte le conté que había estado rodeada de tristeza, de peleas, pedí perdón por eso; pero también le conté que desde el día que subí la montaña de Iza en donde se encuentra la piedra de Bochica, había estado un poco mejor pues debido al enfrentamiento tan complejo que tuve conmigo misma pude aceptar cosas mías que venía negando, tales como querer igualarme a los demás cuando notoriamente estoy en una condición física distinta; pero eso no me hace inferior porque lo que no puedo hacer con mi cuerpo mi espíritu lo hace por mí, en definitiva conté eso, que lloré con mucho dolor por sentirme mal con quien yo soy, cosa que ahora está dejando de pasar después de bajar de allí, recuerdo que estando en Silvania escuché que la madre nunca se va a negar a sus hijos por lo que se puede subir cualquier montaña, estar en cualquier territorio, porque ella nunca va decir “tú no El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 115 puedes”, eso me tranquilizó bastante. Luego agradecí por poder estar allí y pedí permiso para lo que falta.

Antes de finalizar el trasnocho danzamos, con el fin de soltar negativo, de saludar a los abuelos y de poder sanarnos. En ese instante sentí como mi ser estaba renovado, pues estaba muy feliz, cómoda y llena de esperanzas en mi vida.

ABRIENDO MIS OJOS A LAS MONTAÑAS

Viviana Pérez

Sin saberlo iba para la casa de mi abuela, iba a visitar las tumbas de mis ancestros, y fundamentalmente iba a tener un encuentro conmigo misma Fue despertar, abrir mis ojos más allá de lo que ven siempre, fue sentir a la madre tierra en mi cuerpo, en mi corazón, fue sentirme vida.

Sutatausa posee uno de los conjuntos de patrimonio cultural más ricos y desconocidos del departamento. Allí se conjugan vestigios de la época precolombina, la Conquista y la Colonia.

Numerosas rocas con arte rupestre, un excepcional conjunto doctrinero y una antigua tradición cultural en torno a los tejidos, dejan entrever un trasfondo cultural, cargado de sincretismo, que evidencia la complejidad del “encuentro de dos mundos”, como suele llamarse al proceso de invasión europea en América. (Celis, 2008)

La primer visita fue el conjunto doctrinero de indígenas San Juan Bautista ubicada en

Sutatausa Cundinamarca. Al ingresar a ese lugar sentí intriga, debido a la palabra “adoctrinadora o doctrinera”, esto me trajo a la mente imágenes de mucho sufrimiento y pisoteo de lo indígena.

Para empezar y hablando en términos estructurales y arquitectónicos, el lugar es grande, es una iglesia que se encuentra rodeada de iglesias pequeñas, por la forma en que están pareciera que allí hubiesen habido malocas en algún momento; al frente de sus puertas están los farallones de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 116

Sutatausa, sitio de conexión con la madre tierra de los antiguos pobladores indígenas del lugar.

La creencia del abuelo español es que ellos se arrojaban al vacío para suicidarse e huirle a la esclavitud. Sin embargo, estos sitios son puentes de conexión en donde se cruza espiritualmente a otra realidad.

Al hacer el recorrido dentro de la iglesia, se puede ver como de alguna forma se mantiene la historia del lugar, las pinturas que adornan las paredes son de pigmentos naturales, pero las imágenes son bastante fuertes en el sentido que era la forma como la iglesia convertía a los indígenas al catolicismo, en estas pictografías se nota como pisotearon y apagaron la llama indígena, porque con este medio le hicieron creer a mis ancestros que sus fes eran malditas, que estaban errados y para poder salvarse al momento de morir debían ser de la religión católica.

Dentro del templo hay un orden específico en el que están las imágenes, éstas fueron una de las formas de evangelizar a mis ancestros indígenas. La imagen que más me impactó, además de estar ubicada de forma relevante en la parte delantera del templo. Es nombrada la cacica, el cuadro plasma una mujer indígena vestida con una sotana católica finamente pintada con diseños indígenas y adornada con un rosario, basado en la historia esta es la imagen más importante del lugar, debido que es una especie de unión entre la creencia católica y la indígena.

El fin de la iglesia católica en este territorio fue acabar lo indígena para imponer las creencias religiosas católicas, lo cual no tiene ningún tipo de unión ni balance entre creencias y prácticas; de hecho eso es lo que nos hace falta, unir las dos cosas, pero sin que ninguna opaque a la otra, que dancen en armonía perfecta, porque si se mira en profundidad nosotros que somos el mestizaje vivo y por ello tenemos ambas tradiciones inmersas en nuestro ser.

Por otro lado, lo que sentí en este lugar fue una verdadera impotencia, puesto que el sitio lo muestran como un orgullo nacional cuando hubo tantas muertes y masacres. En las mazmorras El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 117 de este templo se encuentra aún y en perfecto estado un potro de tortura en donde se daba fin a la vida de los indígenas, también tiene agujeros en donde según el guía por allí se arrojaba la comida a las personas que estaban siendo torturadas de manera cruel y sangrienta si no se convertían al catolicismo.

Seguimos el recorrido entre montañas verdes y vivas, vislumbrando hermosos paisajes, andando por nuestra casa Cundinamarca, llegamos a Susa, y luego por fin estaba frente a nuestros ojos la laguna de Fuquene, el propósito era trasnochar en el lugar, pero las condiciones en las que se encuentran las laderas de la laguna son deplorables. El mito dice que allí es la residencia del Dios Fu, se cuenta la leyenda que trasladó las rocas para no dejar pasar el tren que se encuentra en el borde de la misma.

Tal vez por falta de aceptación, miedo de no estar en la zona de confort, de que la carpa se hundiera, decidimos hacer pagamento en la mañana del día siguiente, el cambio de la vista, del recibimiento y de sentir fue abrupto, absolutamente distinto que el de la tarde anterior, la laguna inspiraba limpieza y acogimiento, además que a diferencia de la primera vista parecía que la laguna estaba bien, que tenía vida. De todas formas, me concentré, para soltar y para pagar, la más compleja para mí, siempre ha sido soltar; ya que como he referido en textos anteriores, soy una persona fantasiosa que vive añorando el pasado, además que me he acostumbrado a vivir en las huellas del ayer, así llevo alimentando por vario tiempo cosas que fueron y me hicieron crecer pero ya no están, he aprendido a comprender que soltar es una de las partes más valiosas del crecimiento espiritual, solo soltando llegaré a estar sana; tampoco hago referencia a olvidar porque de eso no se trata la cosa es aceptar y contemplar la vida como el tejido, uno crece, se hace fuerte desde que el principio se honre sin importar que esté sea débil, tenga nudos, o algún El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 118 hilo en desorden, porque solo con la conciencia de lo que tengo atrás, puedo avanzar hacía un positivo bonito.

En el pagamento me concentré en todas esas cosas, en rituales anteriores yo lo había nombrado negativo pero esta vez no fue así, porque entendí que la tristeza que me invade el alma recurrentemente es un exceso de pasado en mi vida, alguna vez escribí que avanzaba sin avanzar y en parte eso es lo que he estado haciendo por unos años; inconscientemente lo sé y allí está la raíz de mi tristeza, así las cosas decidí decirle a la laguna que se llevara, que limpiara mi espíritu como siempre lo hace, como siempre lo intento, pero como cual niño jugando en el barro regreso a la madrecita sucia una y otra vez, pero de eso se trata este andar, de limpiar y soltar cada día un poco, porque entre más limpio y suelto mi espíritu más cosas salen para sanar, para limpiar, para soltar, el hecho está en andar con corazón y vida para que en la mitad no me canse.

Otro de los mensajes que llegó a mí en la actividad, contemplativa y meditativa de pagamento fue que yo soy como la abuela laguna, unos días esplendida a los ojos y al corazón de los demás; otros deplorable, cansada y triste, sin embargo eso me hace ser quien soy; la enseñanza de la laguna fue contundente, me falta aceptación conmigo misma, es como la maleza del agua de la laguna que asusta, lo mismo que mis miedos y tristezas; a diferencia de la laguna de Tota que era para enfriar el corazón, los dolores, el mal genio. Ésta era para la aceptación y conciencia de mi misma, que aunque exista maleza lo único que se puede hacer con ésta es crecer con ella y a pesar de ella.

Nos dirigimos al territorio que nos había recibido antes Boyacá, con la expectativa de que

íbamos a ver y a sentir. La primer estación fue Villa de Leyva, allí el propósito era conocer los vestigios indígenas que quedan en el lugar (), es muy claro ver la internacionalización del sitio, es extraño no ver campesinos en la plaza central del pueblo, no ver El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 119 una hilandera, o un señor con bultos a sus espaldas, en verdad éste no parece un territorio

Colombiano, un compañero refirió esta es una pequeña España y así también lo sentí yo, sin haber estado en las tierras ibéricas. Sin embargo ocurrió un evento inesperado que nos hizo detenernos en el territorio, un compañero se lesionó un pie fuertemente y la recomendación médica fue guardar reposo y como somos un grupo todos estuvimos al pendiente de la lesión de nuestro compañero. En esta parada se fortaleció la relación grupal y se hicieron notorias las diferencias individuales también, en gustos gastronómicos, pasatiempos, gustos. Pienso que esta parada fue un mensaje del territorio y del camino, puesto que íbamos corriendo mucho, con un cronograma apretado y un afán exuberante, íbamos caminando sin raíz, por eso la parada allí, fue para respirar, coger fuerza y raíz.

Después de haber hecho conciencia, que la madre tierra no se anda corriendo, de haber cogido un respiro, rodeamos las enormes y majestuosas montañas que acogen a las siete lagunas entre ellas Iguaque, llegamos al pueblo San Pedro de Iguaque, previo a la ascensión que conduce a la laguna, el trabajo de campo fue el protagonista del resto de la tarde, esto con aras de conocer el saber popular acerca del mito. Las preguntas que se formularon a distintas personas fueron

¿Dónde quedaba la laguna? ¿Cuál era el mito de este lugar? ¿Qué recomendaciones tenían?, en general las respuestas de la gente fueron encaminadas hacía el respeto con el que hay que subir la montaña, de la furia de la madre porque hicieron referencia que cuando había irrespeto allí empezaba a llover de manera tal que las personas dejaran el lugar en paz.

Acerca del mito, dicen los lugareños que esta es la morada de Bachue y su hijo Labaque, donde fue a parar después de poblar la humanidad, que habitan la laguna en forma de serpientes; esto es lo que hace que la laguna esté viva. La Serpiente es ampliamente representada en relación con la tierra, el agua y los poderes fecundadores, es la fuerza creadora de vida. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 120

La Medicina de Serpiente es conocimiento, regeneración, paz, salud, eternidad. La

Serpiente es maestra de todo lo femenino, detenta poder y sabiduría, y es la mejor instructora en todo lo relacionado con el agua, con lo fluido y con el cambio.

El hecho de que la Serpiente mude su piel al crecer se acepta como una metáfora de la manera en que el ser humano muda viejos hábitos y antiguas pautas de pensamiento para crecer y alcanzar un nivel superior de energía y de consciencia. Es la transmutación. Invita a realizar un profundo cambio evolutivo que nos regenerará totalmente para ascender hacia el Uno.

Otra de las referencias de los habitantes es la conexión que tiene con el pozo de Donato de Tunja, pues según un señor residente del pueblo dice que esa laguna nutre al pozo de

Huzahua. Hubo canciones y hasta relatos del alcalde del pueblo, sin embargo este ultimo a pesar de tener todo el conocimiento acerca de los mitos de Bachue, de la luna la cuál nombró una deidad mala y por eso salía solo en las noches a manera de castigo, terminó invalidando todo, diciendo que los indígenas eran muy inteligentes y que eso era una analogía a la forma en cómo la laguna y la montaña nutrían de agua a todo el lugar; y por eso la tierra era considerada una deidad para ellos, absolutamente desapropiado del mito en definitiva no lo siente, ni lo aplica para su vida.

Con respecto a la población joven, sí hay conocimiento del mito, de la laguna, pero es más grande la vergüenza que causa ser indígena, ser del pueblo, es más el afán de tener un celular en mano que contar orgullosamente sus historias. Ellos conocen su territorio y las historias populares, además también refirieron recibir este conocimiento en el colegio, pero tristemente los abuelos y los padres ya no quieren transmitir los mitos, las historias y las costumbres a sus hijos, lo unico que se transmite es la vergüenza y el desconocimiento de ser indígena. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 121

Cuando se indagó acerca de la población indígena, una señora dijo que allí iban unos natales de Tunja, el resto de personas refirieron no tener conocimiento acerca de la relación que hay entre la laguna y los indígenas, no hay resguardo, ni alguna familia proclamada como tal, la

única respuesta fue que en los pueblos vecinos se podía evidenciar esto en las facciones de las personas.

Después de hacer esto, se acercaba la hora de subir la montaña; de visitar el corazón de la madre que transporta el agua entre lagunas, la casa de Bachue, a la abuela que no se puede mentir porque sabe como estoy de pies a cabeza, de adentro hacia afuera. Días previos yo había hecho una limpieza de palabras y de sentimientos sin importar los que fueran, pues yo quería subir transparente y serena, estaba cansada de que el mal genio y el dolor que siempre me dan se adueñaran de mí en todos los rituales, después de pensar por qué me aquejan estos malestares entendí que la madre me habla, y yo no acepto lo que me está diciendo y por eso me pongo así.

Esta esta vez el miedo de no poder subir, de quedarme en la mitad del camino no estaba conmigo como algunas veces atrás, subí la montaña de la mano de cuarzo rosado, necesitaba subir con amor a la madre, sentir el amor y respirarlo con cada paso que iba dando.

Cuando estuve de frente a la majestuosidad de aquellas montañas en realidad quedé sin palabras, empezó el ascenso y como había aprendido en la subida a la montaña de Iza, no me afane por alcanzar a alguno de mis compañeros, esta vez quería subir bien no es justo con la madre ni conmigo que siempre termine llegando chocada a los lugares sagrados, tal vez allí esté el aprendizaje; pero ahora siento que el aprendizaje es desde el amor hacía mi misma, de aceptarme y de amar a la madrecita para fortalecerme un poco más. Porque cargar en las espaldas un duelo es algo desgastante, experimentar morirme por dentro, que el amor hacia mí misma se fuera junto con el cuerpo de alguien a quien amé, sentirme una mujer frágil y débil es El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 122 cosa del ayer. Yo iba direccionada a sanar, a soltar porque necesito volver a encontrar mi propia fuerza, mi propio amor y que estos sean verdaderos, sentidos y trascendentes para que en una situación compleja no se vayan, para que me den el soporte de mi misma.

Como es normal no bastaron cinco minutos para que estuviese sola subiendo la montaña, en la primera ocasión que sucedió esto pensé que había perdido de vista a mi grupo y fue inevitable sentirme asustada, luego pensé el camino ha de ser uno y a la laguna se llega subiendo, por lo que seguí subiendo serenamente y no sé por qué escogí el camino del lado derecho y no el izquierdo, afortunadamente éste era el correcto; de la experiencia de soledad debo decir que es fuerte saber que se está en la mitad de una montaña tan grande y que la compañía con la se cuenta es grandiosa, estar rodeada de arbustos, piedras, arboles, me hizo comprender que tengo la fuerza suficiente en mi corazón para hacer cualquier cosa.

En el ascenso recibí hayo, en realidad era la primera vez que esta planta sagrada estaba enseñándome. Lo que yo sabía era que esta es una planta para tener palabra dulce, lo cual no es necesario para las mujeres, por eso no entendía el por qué estaba recibiéndola, la respuesta que me fue dada, fue que era para la fuerza. Inicialmente, el sabor no era nada parecido a lo que yo había imaginado, como esta es una planta para la dulzura yo creía que su sabor era igual, pero no me supo así, todo lo contrario; la sentí amarga en mi boca por lo que pensé que como ella ingresaba a mí con el propósito de dar fuerza por eso su sabor era así, agreste y amargo haciéndome entender que así iba a ser el resto de la montaña, la verdad después de cada pequeño mambeo sentía una energía recorrer desde mi estomago hasta mis pies, algo que nunca había sentido, era una especie de empuje que me ayudaba a subir. Yo sentía mi cuerpo como cuando consumo bocadillo en los ascensos a otras montañas, fuerza y ausencia de mareo, en realidad era coger energía. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 123

Tengo que confesar que en la mitad de la montaña llegaron a mi mente los pensamientos de siempre, ese negativo que es tan mío como las facciones de mi rostro; eran esas voces rondando dentro de mi cabeza ¡tú no puedes! ¡Hasta acá llegaste!; cuando eso me ocurrió decidí hacer una pausa para contemplar el paisaje y para descansar, en una de esas pausas comprendí que todos los libros que había leído, todas las lecciones que había aprobado, los autores que había seguido no me habían enseñado lo que estaba aprendiendo en esos instantes, no hay mejor biblioteca que la montaña, porque esta es la única en donde los estantes van a hablarme de lo que tengo por mejorar y aprender de la vida, y más que cualquier otra cosa sanar mi espíritu perdido en la vorágine.

Con la fuerza del hayo, con la fuerza de mi corazón y la poca resistencia de mis piernas y mi cuerpo, decidí seguir adelante y no rendirme, porque en realidad había anhelado tanto que llegara el día de probarme a mí misma, a mi cuerpo que no podía flaquear habiendo avanzado casi una hora de camino. El resto del ascenso le puse todo el corazón posible y así mismo me recibió la montaña, con dulzura y fortaleza. Finalmente allí estaba, la laguna sagrada de Iguaque, después de un camino de casi cuatro horas la tenía en frente de mis ojos. Lo primero que hice fue saludarla, y darle las gracias por haberme permitido llegar hasta ahí, también le dije que iba con todo el respeto y que me mostrara hasta donde yo estuviera lista para aceptar y para ver.

Así las cosas me quité los zapatos para que sus laderas me llenaran de energía desde las plantas de los pies. Me dispuse con todo mi ser a contemplarla, a decirle que antes de llegar allí había intentado ser mejor persona, ser más dulce y transparente con los demás y sobre todo conmigo misma, tenía mis cuarzos rosados en la mano y los puse en el suelo para que se invadieran del esplendor del lugar, todo eso diciéndole precedentemente a la laguna con qué fin lo hacía, el fin es tener una vida gobernada por el amor y no hablo del amor de pareja, hago El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 124 referencia a tener una vida en la que se respire amor y sanación. Porque en este momento de mi vida, siento la necesidad fundamental de ser mujer de tierra, tener la aceptación y las fuerzas suficientes para estar feliz conmigo misma y sobre todo tranquila, porque es agotador estar inmersa en la tristeza todo el tiempo, es momento de decirle no más y cerrarle las puertas a aquella maestra que me ha acompañado por tanto tiempo. Ese gobierno de amor sería un mundo en donde los prejuicios, lo carnal, lo banal y lo efímero no fueran lo más importante, en donde los ojos del alma y el corazón me guiaran a mí y los demás siempre, así mi vida sería mucho más armoniosa.

Luego de eso, decidí ingresar al borde de la laguna para lavarme los pies, las manos, y la cabeza con esa agua pura, le pedí sanación para mi cuerpo, para mis rodillas, para mi cabeza.

Luego me senté a observar la majestuosidad de sus aguas, y noté como hacia formas en el agua, las cuales se desvanecían con el pasar de unos minutos, al instante volvían a aparecer pero con formas distintas, no logré entender que decía, pero lo que sí vi y sentí es que ésta laguna está más viva que cualquier otra laguna que haya visitado, esto con el respeto que se merecen las otras.

Para despedirnos de la abuela decidimos tocarle música, de todas formas estábamos haciendo pagamento, en ese instante salió un sol resplandeciente y hermoso, la expresión que yo utilicé fue “traemos el sol con nosotros”. Pero tristemente de un momento a otro empezó a llover por lo que era hora de volver, me despedí de la laguna, agradecí, pagué, puse la pluma dentro de una piedra dejando el propósito grupal de encontrar la sanación, el amor, y la fuerza necesaria para seguir; ésta última que parece no estar en algunos instantes.

La bajada fue durísima para mí, en esta si dije muchísimas veces que no podía, me senté a llorar en medio de la montaña y creía que el clima, la montaña y la laguna estaban tan tristes y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 125 cansados como yo, por eso ambos llorábamos al tiempo. Luego no sé cómo tuve el ímpetu para seguir, sin importar las inclemencias y cuando bajé lo único que pensé fue ¡soy fuerte!

SAN PEDRO DE IGUAQUE, CHIQUIZA, IZA, SOGAMOSO

VUELTA A IGUAQUE

Viviana Pérez

El camino y la necesidad de curación, hicieron que volviéramos al , al territorio sagrado de Chiquiza, específicamente San Pedro de Iguaque. El propósito de esta visita era volver al corazón de la tierra, a la abuela Iguaque, aquella laguna trascendente, mítica y curativa, con las ansias de poder sentir aquel despertar que nos lleve por senderos de dulzura, respeto y conciencia, con la madre tierra y con nosotros mismos. Así cada visita a un lugar de esta sacralidad, se convierte en una terapia holística para mí, debido a que lo psíquico, lo físico y lo emocional, están involucrados todo el tiempo. Cuando logro la bonita conexión con la tierra es como si realizara un autoexamen, debido a que una meditación basada desde el respeto y la escucha activa a la tierra, sirven como una medicina para mí de manera total.

Al llegar al territorio las palabras del abuelo Fernando, hicieron referencia a que las puertas de la madre también se cierran y era muy claro ver que a la montaña no podríamos subir si al día siguiente estaba la misma neblina. Por esto nos dispusimos a trasnochar a las faldas de la abuela Iguaque, esto con el fin de limpiarnos espiritualmente previamente y de pedirle permiso a la laguna y a la montaña para que nos permitiera un ascenso bonito. En el círculo de palabra surgió la muerte, el duelo y la lucha que llevamos los seres humanos por la partida de un cercano. Las palabras del abuelo eran emitidas de manera general a todos los del grupo, sin embargo yo me sentía sumamente afectada, identificada; puesto que cada frase me caracterizaba El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 126 tanto, que era como si cada una de las palabras fueran dirigidas hacia mí. Esta identificación la sentí porque fui pésima aceptando la muerte de un cercano, porque luché todos y cada uno de mis días pensando y sintiendo que mi cuerpo, mi alma y mi corazón no daban más de la tristeza tan enorme que sentía por aquella partida. Ese suceso devastador de mi vida, se llevó consigo cosas mías como la seguridad, el amor propio y como es obvio mi felicidad.

Las palabras siguieron siendo la medicina de la noche y otra de las enseñanzas fue que hay que eliminar los apegos que sentimos hacia las personas, hay que dejarlos ir; la aceptación completa de la muerte sería una celebración alegre ya que ésta representa el descanso de una vida fuerte, dura y llena de altibajos que ha llevado cada uno. Para mí fue inevitable sentirme mal después de esta enseñanza, puesto que yo no he celebrado la muerte, no la he honrado, ni tampoco he estado alegre por ello, llegué a ver que mi dolor era por un fuerte apego emocional que tenía hacia esa persona y que tal vez era momento de soltarlo y de una vez por todas aceptar esa partida, esa muerte de manera feliz y tranquila.

Inmediatamente, recibí medicina, cuando ella estuvo en mi cuerpo como maestra fue hermoso, puesto que en mí surgieron los sentimientos de dejar ir, de soltar, esas ganas de seguir viviendo tras una máscara negativa se fueron desvaneciendo, logré entender y con mucho dolor aceptar que la causante de mi malestar emocional soy yo, aunque haya factores externos, a parte de la vida que me otorgan mis padres filiales, y los sagrados; soy yo y mi forma de actuar es la que va a preceder mi esencia. Por eso si todo el tiempo pienso en tristeza y dolor, así me voy a sentir, tengo que confesar que en un momento me sentí mal, porque me hace falta conciencia en los momentos de la vida cotidiana para saber que esos pensamientos, esa mirada pesimista de la vida no me hace bien. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 127

Pusimos los propósitos de cada uno en un cuarzo, el mío fue poder estar sana, tanto física como emocionalmente y si esa curación iba a ser dada, que pudiera subir a Iguaque con toda la fuerza que tiendo a añorar a diario, con la sutilidad que siempre le acompaña, pero no me abandona, esa fuerza de madre con la que cuento todos los días y a veces no me doy ni cuenta.

Al día siguiente me levante con ansias de ver a la abuela laguna, por eso dispuse mi corazón y mi mente; para que la tristeza, los dolores y los pensamientos abrumadores que contaminan mi espíritu, se quedaran abajo o arriba, pero que no me acompañaran en la subida.

Sin embargo, esto no ocurrió, a pesar de que el camino por el cual íbamos subiendo estaba menos empinado que el anterior, yo sentía más peso que nunca, ahí comprendí que sí de verdad quiero estar sana no puedo huir, y mucho menos de lo que llevo adentro, lo que pienso, lo que siento, pero sí lo puedo cambiar, lo puedo transformar a una dulzura y a un positivo que me lleven a la estabilidad que necesito y anhelo.

Así entendí que la mejor manera de soltar la negatividad es estando en tierra. Yo recordaba en la subida, las palabras del abuelo, las cuales eran: vamos para la casa de la mamá, por eso hay que subir bien, recoger la basura que tiene ella en sus caminos, pero esto no era basura física, era basura nuestra acumulada por años, el dolor de la madre por el abandono de sus hijos, eso era lo que ayudaría a limpiar en mi subida. El comienzo fue bueno para mí, porque en realidad estaba descansada y con el propósito en mente de dejar ir mis dolencias físicas, tales como dolor en cabeza, espalda y piernas, es paradójico entender que al hacer tanto esfuerzo físico uno pueda bajar sano con respecto al cuerpo, pero esa es la verdadera naturaleza de sanación y el poder amoroso de la madre tierra.

Es notorio que yo no subo con la misma destreza que mis acompañantes, que el esfuerzo físico que hago es tan grande que a los ojos de mis compañeros parece que yo no pudiera dar un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 128 paso más y cuando siento eso, lo único que hago es llenarme de motivos para continuar, los motivos que me levantan a diario, mi vida, mi salud; la añoranza de un encuentro bonito con la madre tierra. Porque aunque he cambiado muchos pensamientos que tenía antes de iniciar este proceso, tales como creer que la madre tierra me haría daño, que me negaría la entrada a sitios sagrados de difícil alcance o con largos trechos así como Monserrate, Iguaque o la piedra de Iza; a medida de las visitas he comprendido que esos pensamientos egoístas son netamente humanos, porque los abuelos siempre van a querer que sus nietos e hijos los visiten. Por eso la añoranza de estar con los pies en la tierra es el motivo más grande que me da la fuerza para seguir, porque en otras ocasiones la mejor salida era evadir mi realidad, pero cuando volvía de ese evadir me encontraba con que las cosas, independientemente de lo que fueran, estaban peor y seguían allí.

A raíz de eso comprendí que a estos sitios se sube o se ingresa con los pies firmes, con el corazón abierto sin importar si es dolor lo que se está sintiendo y con la mente liviana, moviéndose en pensamientos bonitos y positivos, que vibren con la fuerza del lugar.

En la mitad del camino recibí una hoja de Romero la cual era el alimento físico que mandaba la montaña para nosotros, puesto que el ritual de subir lo hacíamos en ayunas, yo sentí que el ritual se hacía así, porque cuando uno va subiendo lo que va consiguiendo es alimento espiritual como fuerza, vibración y vida; por eso no hace falta consumir algo previamente, sin embargo tal vez nos faltaba un poco de conexión para sentir todo lo espiritual que tiene para mostrar la montaña; por eso mandó desayuno físico, porque por mi parte yo sentí coger aire, como si mi mamá me estuviera alimentando, como si fuera un bebé y mi madre me estuviera dando pecho. Continúe subiendo entre rocas, arbustos, raíces serpenteantes y con el hermoso paisaje de la montaña del frente, la cual para mí tiene grabados en forma de estantes de biblioteca, y las piedras de otro color son libros, supongo que es una forma bastante racional que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 129 le he otorgado a los grabados de la montaña, pero también sé que es el mensaje claro y contundente que no hay mejor biblioteca, mejor internet para conocerme a mí misma y a los demás que las montañas, porque allí está grabada la memoria de mi raíz, de mi linaje, porque estando en medio de tales monumentos, en medio del silencio me es posible escuchar lo que tiene que decir mi corazón y mi cuerpo, en la ciudad en medio de afanes, ruidos, multitudes solo escucho los murmullos de los demás, que hacen que no pueda tampoco entender los míos o que me convierta en sorda a los sonidos implícitos y trascendentes míos y de los otros; por eso aunque sabía que me faltaba muchísimo por subir estaba feliz de haber entendido porque a veces me es tan difícil entender a otras personas tanto como a mí. Al llegar a la laguna, tuve la oportunidad de poder conectarme plenamente con ella, le conté que no viví con el amor que había pedido la anterior vez, el que ella con tanta dulzura me había dado, que tal vez subía más sucia espiritualmente que la anterior visita, ya que esta oportunidad no hice las mismas limpiezas que la vez pasada, antes había dietado en pensamiento negativo, además de acompañarlo con baño de sal marina, para esta ocasión las situaciones que viví, por más de que intenté no pensar negativo, vivir en negativo, no pude, el baño que me hice no fue suficiente; porque aunque a veces tenga la añoranza de estar bien, el contexto sobrepasa mi fuerza en algunas ocasiones, por eso iba chocada conmigo misma todo el camino, porque sentía, como en repetidas ocasiones, que había dañado todo el avance que llevaba. Sin embargo la sensación de bienvenida de la laguna, el respirar ese oxigeno que me hizo sentir viva por dentro, me ayudó a cambiar de pensamiento, porque este andar no es algo que se hace una vez y se acabó el malestar que se experimenta, es entenderme a mí y a mi malestar, a mi dolor, a mis duelos, de manera multidimensional, desde todas las enseñanzas que tiene la madre. Porque una de las cosas que pude comprender a raíz de contarle eso a la laguna con toda la sinceridad que ella merece, es que yo estoy más allá del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 130 dolor, más allá del negativo, eso no lo voy a poder eliminar de todo de mi vida, pues soy un ser humano, lo que necesito es un ojo amoroso por parte mía, que vea lo fundamental mío, como mi humanidad, mi fuerza, mi dulzura, mi amor, y muchas otras cosas que en este momento no veo, las circunstancias son inevitables en algunas ocasiones, pero lo importante es que ellas no me transformen a mí de manera tal que olvide quién soy.

Mientras cada uno estaba conectado de manera personal con la abuela Iguaque, el abuelo recorrió las laderas de la laguna, yo supongo saludando, hablando con todo el lugar, contándole que habíamos llegado de forma dulce y así volvió junto a nosotros y entonó un silbido para después de eso decirle a la laguna: “Levántese madre, perdónenos por abandonarla tanto tiempo, levántese madre, coja fuerza otra vez, la necesitamos fuerte para que nosotros lo estemos también”. Sorprendentemente, el cielo dejó de estar nublado, el frío se disipó de manera tal que no parecía que el clima fuera de páramo, salió el sol por unos minutos, un sol tenue y caluroso haciéndonos entender que la fuerza del padre también estaba presente con nosotros a pesar del fuerte frío que se siente en este lugar, que en los momentos nublados de la vida el padre está en el fondo dando el piso y la fortaleza para sobrevivir a la neblina, al frío y a la lluvia. Recibir medicina en frente de la laguna fue una experiencia magnifica, pues sentí la grandeza de mi fuerza femenina, como todas y cada una de las mujeres encarnamos a Bachue de la forma más sutil y divina, quería arrojarme al agua, sentía que yo era agua, intenté visualizar que pasaría si en verdad me arrojara allí, las explicaciones racionales fueron las primeras en aparecer, pensé que me ahogaría; pero entonces cuando le puse corazón a esa visualización sentí, que si pudiera estar en el fondo del agua sería amor, y agradecimiento.

Al pensar como estaba de cerca a esto en mi vida común, vi que en realidad me faltaba muchísimo, pero entonces comprendí mi propósito de estar ahí sentada en frente de tal El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 131 magnificencia, estaba allí y estoy aquí porque necesito amor hacía mí, hacia la vida, hacia los demás y fundamentalmente agradecimiento por mi vida, por mis padres, porque a pesar de no tener la salud y sanación que añoro tengo el ímpetu y la fuerza suficiente día a día de madre y padre que me hacen ser la mujer guerrera que soy.

Luego por petición del Abuelo Fernando le enseñamos a una planta con flores violeta, nuestros buenos propósitos, el positivo de cada uno. En realidad lo primero que pensé acerca de mí, fue que yo soy la vida, soy similar a las plantas que crecen en la laguna de Fuquene; la muestra que a pesar de las cosas adversas y no tan buenas a los ojos de otros como ser diferente, surge la belleza de poder vivir con amor y dulzura y eso soy yo. Reiteradamente, supe que yo era la madre, porque toda mi energía fluye en el ritmo del amor.

Después de estar admirando las formas que se hacían en el agua, cada vez que el abuelo pronunciaba palabra, mojé mi cabeza con un poco de agua de la laguna, mis compañeros hicieron lo mismo pero con distintas partes de su cuerpo, como sumergir los pies, las manos, todo desde el respeto a la madrecita que nos permitía estar allí. El lugar se empezó a nublar nuevamente, por lo que entendimos que era hora de partir, estaba muchísimo más ligera que en la subida, pero la bajada se me hizo más compleja, tal vez porque es el verdadero poner los pies en la tierra, aplicar lo que aprendí de mí estando arriba, a mi vida, a mi diario vivir. En verdad tener un aprendizaje significativo de lo que me mostró la montaña y sus caminos con numerosas raíces en forma de serpiente, la laguna y sus nubes. Porque cuando vuelvo a la ciudad y las cosas no son así de bonitas como en la naturaleza, es el momento de entender para qué y por qué estuve en la montaña, porque así como soy capaz de poner los pies en la tierra, elevar mi corazón y pensar bonito al frente de la laguna, es fundamental que lo aprenda a hacer en la ciudad, en mi casa, con mi familia. Lo difícil es dejar de lado el miedo que siento al volver, porque vivir en torno del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 132 negativo me tiene agotada y por eso cuando es el momento de bajar, el alma y el cuerpo ponen resistencia. El sol estuvo alumbrando nuestros corazones en toda la bajada, ya que la anterior vez fue en compañía de una lluvia torrencial que parecía no cesar, según el mito cuando se irrespeta a la montaña llueve y llueve de manera tal que las personas dejen el sitio en paz.; esa fue una de las cosas que me hizo comprender que arriba habíamos hecho las cosas bien; no quiere decir que antes no hayamos subido con buenos propósitos, pero siento que esta vez todos y cada uno de los que subíamos, fuimos conscientes de la fuerza que teníamos solos y como grupo, de que el corazón que nutre las aguas de estos territorios necesita amor, sinceridad y mucha, mucha fuerza.

Al bajar agradecidos con el territorio decidimos acercarnos a las personas del pueblo, esto con el fin de comenten qué saben del mito, cómo lo viven y como lo sienten, para así enriquecer nuestra experiencia. Así las cosas, una anciana del pueblo compartió su conocimiento acerca de los mitos del pueblo, ella entregó un tortero y una muñeca pequeña, que había encontrado en un derrumbe de un camino que llevaba hacia Iguaque, el abuelo Fernando refirió haber visto a esta muñeca en el agua de la laguna de Iguaque; habló de cómo el tejido y el hilado eran trasmitido de generación en generación, pero que en ésta se estaba perdiendo. El abuelo sacó un cuarzo masculino y dijo que el ser humano debía ser como éste, transparente para poder estar bien. Además, recalcó nuevamente la importancia de ser Honesto, Humilde, sencillo y noble como las cuatro cosas para ser un humano de la tierra.

La siguiente parada fue “la chorrera” ésta, según los habitantes de San Pedro de Iguaque es una cascada en donde baja el agua de la laguna de Iguaque, después de escuchar eso el abuelo

Fernando comentó que allí, en esta naciente de agua había un lugar especifico en donde se concentraba era para la sanación de los ojos, para afinar la visión, además recalcó el inmenso El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 133 poder curativo que tenía en general el resto de agua que caía allí, pues él al igual que los habitantes del pueblo afirmaba que está agua era de la Laguna de Iguaque.

Mientras nos acercábamos al lugar, en la caminata en medio de la naturaleza él iba explicando para qué servían las plantas, los frutos y las hojas que nos íbamos encontrando por el camino; lo primero que dijo fue que las moras silvestres son la cura para el cáncer, estas tomadas todos los días con panela eran la cura que la humanidad tanto espera en estos tiempos, así fue señalando otras plantas como el cordoncillo y el aliso, sin embargo en dicho momento me quedé un poco atrás por lo que no pude escuchar el nombre de una planta que sirve para la hinchazón de los pies, la enseñanza de andar de la mano con un médico tradicional en medio de la naturaleza fue muy grande, porque algo tan bonito y tan importante como conocer la madre puede llevarlo a uno a la sanación, sin embargo sin la conciencia suficiente (FE) de que la medicina está en cada uno de nosotros no podrá haber cura sin importar cuantas plantas conozca el hombre.

Al llegar, el sonido me hizo palpitar el corazón muy rápido, en verdad me sentía feliz, estaba emocionada de visitar aquel lugar pues, es magnífico estar de pie en medio de tal esplendor, ver el agua caer tan pura y limpia, al llegar el abuelo se quedó mirando un punto fijo del agua, supuse que éste era del que había comentado antes de llegar al lugar, la parte que sana los ojos; yo me esperé a que él terminara su ritual, es muy complejo entender qué habla, que ve, cuando la conciencia y la visión están tan limitadas por la modernidad y el cuestionamiento sobre mi fe. Aun me falta creer en mí, sentir que yo soy un universo entero que encarna a la madre, a la mujer dulce, al indígena fuerte.

Cada uno de mis compañeros le dijo al abuelo el propósito con el cual llevaba el agua para la casa; en mi caso, el propósito del agua era para eliminar el dolor de cabeza y espalda que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 134 me aquejan a diario; el abuelo recogió agua pero adicional a eso me dijo que dejara el dolor en ese lugar, pues estaba en la madre y ese dolor entregado como medicina le haría tanto bien a la madre, como a mí. Luego me dijo que buscara una cabeza, en medio de las piedras, pues este lugar es la representación completa del cuerpo humano y cuando la encontrara dejara ahí el dolor, porque no es mío y lo mejor que puedo hacer es dejarlo en forma medicinal y dulce, en realidad hice esta entrega con mucho fervor, luego me explicó que nosotros éramos una simple replica de la madre y que en ese lugar estaba claro, señalo una piedra y en ella habían poros

(como los de la piel, encima de esos poros había musgo verde, en el fluía agua todo el tiempo

(como las venas y las arterias), así sucesivamente con los demás órganos, en ese momento no hizo más paralelos de ese tipo, pero a mí me quedó completamente claro que yo vivo en la tierra y ella vive en mí.

En el camino de vuelta, se hizo énfasis en que la tecnología y la ciencia, avanzan y avanzan pero en falacias, porque en realidad los logros, que no son tan logros como creen, son una búsqueda del ego que solo aleja más al hombre de la verdadera humanidad, así terminó el trabajo realizado en San Pedro, el siguiente destino fue Chiquiza, que según el vocablo chibcha

Chequiza, significa campo pelado.

Este es un pueblo que conserva su infraestructura indígena, el piso es empedrado y cada una de las piedras son fósiles, con pictografías y formas que en realidad sorprenden, en este lugar una de las tantas piedras del suelo tenía forma de espiral, por lo que el abuelo dijo que eso era la vida, …

Otra tenía una especie de puntos, los cuales explicaban al hombre, él recogió dos piedras, una que tenía nueve rayitas y manifestó que eso era la conformación del mundo, además de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 135 decirnos que el lugar había sido quemado, que allí había mucho fuego, la otra piedra tenía unas figuras que por lo dicho por el abuelo era lengua indígena, pero que él no alcanzaba a entender.

Mi experiencia personal, fue como estar en frente de un cementerio, la desolación que sentí en aquel lugar era como andar en medio de muertos. Sin embargo, con la desolación del lugar el aire que se siente es distinto, es como en otros lugares de origen indígena, en donde se percibe la esencia de ellos y una vez más corroboro, que esa es la verdadera humanidad, el verdadero estar en tierra, porque así físicamente no estén, su esencia está en las piedras, en al aire, en toda la naturaleza, son hombres de tierra. Otra referencia del abuelo, es que allí era el hogar de un Chiqui muy importante y que las personas que vivían a su alrededor, cuidaban de él.

Igualmente me pareció importante entender que la iglesia no pudo ser del todo convertida por los españoles, además que a la entrada de la misma en el suelo hay una flecha que indica hacía el norte, es una brújula tallada que por su aspecto parece ser muy antigua.

Continuando con la salida, la siguiente parada fue Iza, al llegar decidimos hacer trabajo de campo acerca de la piedra de Bochica , y del conocimiento que tenían las personas acerca de esto, así decidimos visitar a los ancianos del pueblo, por esto llegamos a la casa de Don Segundo

Preciado y su esposa Blanca, ellos tenían el pleno conocimiento del mito, además de haberlo experimentado en su niñez y juventud. El señor contó que Bochica había sido el poblador y la persona que les había enseñado el tejido y el manejo de los telares a sus ancestros, dijo que las mujeres hilaban y los hombres manejaban los telares, además dijo que la forma como desapareció y fue visto por última vez en Iza, fue en una caminata acompañado de indígenas hacia por las aguas de aquel lugar, que piso una piedra y ésta se hundió, y ahí quedó su huella.

Por otro lado, contó que los muiscas vivían en la montaña y ellos hacían sus propios torteros con piedras y las agujas con palos, que lo que hoy es conocido como la cueva de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 136

Bochica era el hogar de los muiscas. Una de las cosas más bonitas es que estas personas afirmaron ser muiscas y estar orgullosos de serlo. Luego fuimos a la casa de la señora Transito, una de las cosas por las que hicimos la visita hasta su hogar fue porque ella tocaba la riolina o en otras palabras la armónica, ella también nos contó su vivencia acerca de estas piedras míticas que se encuentran en Iza, como la famosa piedra del diablo, ella contó cómo fue su experiencia en su niñez, haciendo referencia a que no podía pasar sola después de las cinco de la tarde, porque según lo abuelos algo malo le pasaría; también que ella era oriunda de una vereda cercana a la montaña en donde vivían los muiscas, acerca de Bochica dijo que gracias a él ellos hilaban y tejían , también dijo que ella era muisca, que hacia chicha y que la fermentaba todos los días con melado de panela, que esa es una costumbre que aprendió de su mamá. Para finalizar, tocó una melodía con su riolina .

Después de eso, contactamos una guía turística que nos habló de los lugares sagrados de allí, entre todos los que dijo nos llamó la atención un lugar hermoso, las pictografías, por lo que decidimos ir hasta allá, este lugar es muy impactante es una ciudad de piedra y en el centro hay unas pictografías de hombres de forma paralela, es todo un centro, con escaleras y paredes armadas de forma perfecta para hacer sentir la fuerza de padre que nos faltaba sentir en toda la salida, por eso decidimos sentarnos a pagar en la mañana en este sitio, pero antes hicimos limpieza de nuestro interior con el abuelo tabaco, soltamos todas las cargas emocionales y físicas, siempre que el tabaco ingresa en mí, es como si de alguna forma soltara por la boca todas las tristezas, todo lo que no es mío, que no debo cargar más. Así después de este ritual de limpieza nos acercamos al lugar, es impresionante ver como la fuerza del padre, fuerza masculina está inmersa en todo este espacio; yo me senté en un lugar donde me sentí cómoda, y empecé a hablarle al padre algo que no había experimentado desde las piedras del tunjo, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 137 visualice a mi papá, a mis amigos y a todos los hombres que por un momento han hecho parte de mi vida, después de esto sentí mucho fuego, dolor, siento que este lugar fue quemado por su sacralidad al igual que muchos otros centros indígenas importantes, es extraño haber sentido eso en tres lugares diferentes, el templo del sol, en Chiquiza y ahora allí sentía lo mismo otra vez, el fuego es un abuelo importante que nos enseña muchas cosas, ver la luz, tener el calor suficiente en el interior para seguir, pero entonces ¿esto que tenía que ver con aquellos tres lugares?

Después de pensarlo mucho, creo que en donde siento más fuego y más calor es donde ha habido más lucha, más resistencia y ese dolor enraizado no se puede borrar a través del tiempo, nuevamente volví a vivenciar aquella esencia de valentía y corazón dulce…, yo sentía que debía quedarme ahí por más tiempo, recibir la fuerza porque a veces olvido que también merezco recibir y en este proceso solo me había dedicado a soltar, pero ese momento fue el de recargar mi energía, mi ser, mi luz que siento apagarse por momentos. Al final, de rodillas con la frente en la madre tierra, con el corazón humilde e intentado ser noble, honesta y sencilla, le hable al lugar, pedí perdón, en ese instante sentí desorientación y vi una comunidad, esto era un centro de reunión bastante importante y nos permitieron estar allí; Yo estaba absolutamente agradecida por poder estar, por poder sentir, porque gracias a este tipo de experiencias me doy cuenta que estoy en el camino correcto hacía lo que deseo, ser una mujer de la tierra, sana y dulce.

El siguiente lugar fue Gameza, según la historia el cacique de allí se llamaba Gamza lo que significa Siervo del sol o del diablo y éste fue el primer lugar en donde fue acogido Bochica, nosotros íbamos buscando las cuevas en donde él moraba, así que nos dirigimos a la vereda de

Satoba, la hija del cacique se llamaba Siatoba de allí el nombre de la vereda. En el lugar hay una quebrada muy bonita, con piedras rojas y el agua fluyendo; pero eso no era lo que buscábamos, caminamos y encontramos una laguna pequeña debajo de una roca gigante y en esa roca habían El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 138 otras pictografías, seguimos recorriendo el lugar y había muchas piedras que indicaban asentamiento indígena, innumerables cuevas, forradas en musgo verde y vivo, encontramos una cueva arriba, pero según el Guía allí no se podía subir por un derrumbe que había pasado hace tiempo, sin embargo, el tenía conocimiento de alguien que había subido hasta allí y contaba que allí aún están las ollas de barro, este lugar inspira completa paz, en realidad es el mejor destino que puede tener una ciudad indígena, una persona del lugar que tiene dentro su finca una parte de este territorio, creyó que íbamos en busca de una guaca y por eso no nos quiso contar nada acerca de la historia de allí, no tuvimos mucho tiempo para estar, de todas formas sentí paz y totalidad.

El último destino fue Sogamoso, la ciudad del sol, allí encontramos una tropa de sikuris, esto es un grupo musical andino en el que se toca la ira o el arca, la explicación que dieron acerca del trabajo que hacían tocando aquellos instrumentos fue que era fundamental escuchar al otro, porque solo con esa escucha se podía responder y de esa respuesta depende el ritmo y la rapidez de la melodía, los jóvenes afirmaron no sentirse muiscas pues reconocen la ignorancia que poseen frente a sus propias tierras, no saben la conexión entre lagunas, templos, entre otras cosas, pero dicen que llevan el indígena en el corazón y eso es lo importante.

La agrupación se llama tierra de mantas, porque según el vocablo chibcha, eso significa

Boyacá. Les pedimos que tocaran sus melodías, son aproximadamente veinte integrantes todos jóvenes, con el propósito de rescatar ese sentir indígena desde lo musical. Danzamos con ellos, de manera sincronizada y hermosa esta música es un completo ritual cargado de emoción y vida.

Ellos sienten orgullo de lo que son, de su chicha, de sus tejidos, de su música, así nos cruzamos con otro grupo de jóvenes que le cantaban a la tierra, a la laguna y las montañas, con bastante información y gran detalle de lo que es el territorio del sol; esta fue la mejor despedida que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 139 pudimos haber tenido, fue una gran enseñanza para mí de recobrar aquella pasión característica de la juventud que a veces olvido, fue saber que hay más personas aportando un granito de arena a la madre tierra, además es absolutamente bonito encontrarse con personas jóvenes, llenas de amor y curiosidad por sus raíces.

LA UTOPÍA DE SENTIRSE VIVOS

Tatiana Sánchez

Para mí el día no comienza a partir del saludo con mis compañeros, la ansiedad de no saber qué encontraría durante la reunión, la curiosidad por saber algo más acerca del tema ancestral, el desconsuelo al sentir ajeno el conocimiento autóctono y propio de mi tierra fueron limitando el sueño durante la noche previa. Mi mente se pasó gran parte de la noche concentrada en pensamientos donde la razón y el sentir, discutían entre imágenes inconclusas que sólo aumentaban la incertidumbre de aún no saber ciertamente lo que me esperaba al día siguiente.

Por un lado, la razón acérrima a la lógica clásica sustentada por la ciencia, la tecnología y la modernidad me hacía pensar en lo simple de la reunión y eliminaba un posible trasfondo en ello; por otro lado, el sentir, la pasión por descubrir que en mí se mantiene innata y constante junto con la curiosidad que despertaba sensaciones de alegría, me hizo confiar en que encontraría grandes sorpresas durante el encuentro.

Llegó la mañana, sonó el despertador y comenzaron a surgir una serie de inconvenientes, la rutina de vacaciones, requería modificarse si quería asistir a la cita con los compañeros de semillero. Tuve que tomar decisiones y a pesar de tener la opción de ir a otros planes el interés se mantenía intacto, de todas maneras, iba a reunirme con mis compañeros y amigos, así que de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 140 igual forma la pasaría bien, me motivé y salí hacia la estación de las aguas en el centro de

Bogotá, desde allí comenzaríamos a subir la gran montaña de Monserrate.

En el transcurso de ida recordaba las conversaciones que había mantenido con mi compañera Viviana, en ambas había un miedo por no poder subir, ella temía que su cuerpo no le respondiera y aunque a su vez creía que yo subiría fácilmente, yo temía profundamente no poder hacerlo, fumaba aproximadamente un paquete de cigarrillos diario y me agotaba con facilidad haciendo cualquier esfuerzo físico. Sin embargo, en su momento, sentí el deber de apoyar al menos moralmente a mi compañera y amiga, diciéndole que subiríamos juntas y que todo estaría bien, eso hizo que ya mi mente comenzara a imaginar el agotamiento posterior lo que aumento la incertidumbre, no quería encontrarme de frente con el daño que por decisión propia le estaba haciendo a mis pulmones. También recordaba que, en ambas, había un temor de lo que podría pasarnos a nivel espiritual, ella me había preguntado de mi primera experiencia subiendo con el profesor Luis Eduardo, pues incluso en esa oportunidad ella prefirió no subir por su constantes dolores físicos e internos. Yo, al recordar esa experiencia, le dije que no había sentido mayor cansancio y que en lo espiritual, sólo había tenido tiempo para pensar, ya que en esa oportunidad la compañía no era de mi agrado, y sólo me concentré en el paisaje que permitía e incluso incitaba a pensar en uno mismo. Eso me relajo un poco, sabía desde mi razón, que probablemente durante el recorrido pensaría en mí y la idea no me molestaba en lo absoluto.

Aunque en un inicio me inclinaba mucho por adentrarme en la investigación y sus temas de interés, sentía como yo misma y mis pensamientos, habían puesto a prueba la convicción y el amor que se despertaba en mi interior por ese pequeño sueño que hasta ahora comenzaba. Sin embargo, cuando se quiere y se tiene viva la pasión frente a algo, todo dentro de sí se vuelve El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 141 fuerza y equilibrio para lograr lo que uno quiere, en otras ocasiones había experimentado que de esta manera era que podía crecer el amor hacia algo, así que era cuestión de ir y conocer, para saber si en ello había algo que despertara dentro de mí esas ganas y esa pasión para seguir allí.

Además, creo que se requiere de fuerza para decidir estar en algún lugar, bajo alguna convicción y sentirse a gusto con ello; también se requiere de equilibrio para darle tiempo a cada cosa, de modo tal que yo misma me permita conocer y vivir las experiencias, sin que esto implique poner en desorden el resto de mi vida.

Al llegar, vi a mis amigos comenzamos a charlar y hacer unas preguntas casuales acerca de cómo iban nuestras vidas, todo iba bien, me sentía más tranquila, era como estar en una cita casual con amigos, fue solo cuando vi a mi compañera Viviana que volvió la ansiedad, ella insistía en no poder subir y yo recordaba lo que había estado pensando antes de llegar allí, de todas formas, me mostré tranquila.

Seguido de esto y tras unos minutos, surgió nuevamente esa lucha interna entre la razón y el sentir que había experimentado la noche anterior y que me acompañó durante todo el recorrido, esa lucha por querer obligar a la razón a guardar un poco de silencio y así dejar que el sonido del corazón guiara los pensamientos y los pasos que se iban dando, acallar ese zumbido que indica que el cuerpo parece no dar más, que el aire se agota, que es mejor huir. Quería por un minuto aguardar un poco en esa experiencia, esperar con calma y dejar que las sensaciones bonitas del sentir, guiaran mis pensamientos y la manera en la que miraba el paisaje, finalmente ellos parecían estar guiados más por el sentir que por la lógica del pensamiento y eso era bastante novedoso para mí, incluso casi que totalmente opuesto a mi manera de ver y hacer las cosas. Por tanto, para mí, resultaba ser era una ardua y difícil tarea, fue sólo en la medida en la que decidí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 142 alejarme de la ambición y la prisa por querer llegar lo que permitió un poco de calma en mi interior, me di cuenta paso a paso y sobre todo al llegar a la entrada de la montaña, que el objetivo no era llegar hasta la cima, la misión nunca fue esa.

Al llegar junto con el profesor, mis compañeros y el Mamo Roberto nos dimos cuenta que los martes la vía no estaba abierta para visitantes, por un momento pensé que el Mamo viniendo desde tan lejos se molestaría o algo parecido, pero, por el contrario, éste fue el que más tranquilo se mostró, afirmó lo que yo estaba pensando y dijo que finalmente esa no era la meta, el llegar no era el fin, el verdadero recorrido requiere concentración, dedicación, así que no había afán. El profesor nos propuso ir a un arroyo cercano por donde pasaba todavía pura el agua del rio Bogotá, lo que me pareció increíble y atractivo.

Nos fuimos hacia el lugar, unos agradecidos, otros con algo de desilusión por no poder subir y yo intentando asimilar el cambio, pues entre todo lo que había pensado, no se me había pasado por la mente no poder subir por una circunstancia de ese tipo. Me sentía cansada, sólo con haber subido las escaleras pude sentir que al menos esa mañana no hubiese sido capaz de subir, mis pulmones no daban más, me sentía sin aire y como algo absurdo de la sensación, sentía ganas de sentarme tranquila y prender un cigarrillo más. Veía a dos de mis compañeros en muy buen estado físico y sentía algo de susto al ver un esbozo de lo deteriorado que estaba mi cuerpo en ese aspecto, no puse mayor atención a ello y me concentré en ver de manera minuciosa el lugar hacia el cual avanzábamos.

Pensaba que de surgir en mí un interés mayor por éste grupo de trabajo y el tema en general, tendría que hacer varios cambios pues necesitaba compromiso, disciplina y dedicación, virtudes que hasta ese momento no habían sido mi fuerte. No iba a poder ir unos días y otros no El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 143 como solía hacer con el resto de las cosas en las que estaba, pues incluso el no hacer nada

(aparentemente) ya me estaba mostrando vagamente las implicaciones de algunas cosas en mi cuerpo, estar allí era un proceso de disciplina y dedicación, pues para mí el sólo hecho de subir la montaña lo requería, si el Mamo había dicho que el llegar no era la meta, entonces finalmente qué lo era, ya con esa pregunta iba a tener que dedicar bastante tiempo para poder contestarla.

Llegar a descubrir y conocer ese “algo” que sostiene con firmeza el sueño, indiscutiblemente en alguna medida vaga si no era que, en una muy alta, requería de disciplina, compromiso, pasión y amor indiscriminado por ello. Cada una de estas cosas la veía reflejada tanto en el Mamo como en el profesor, lo que me hacía sentir una enorme admiración, más que por el tema, por la pasión que reflejaban y que, en lo personal, no creo hubiese surgido frente a algo cualquiera, era algo profundo y hermoso lo que estaba allí, pues aún después del tiempo, se mantenían caminando con seguridad ante lo que hasta ahora para mí era desconocido.

Para mí se volvía todo un enigma que sólo podía sostenerse con convicción y fe, se vuelve simple y complejo a la vez entender el llamado de la madre tierra; pues dentro del discurso del Mamo, él argumentaba el porqué de nuestra reunión como la consecuencia a la sensibilidad de nuestros oídos y nuestro sentir, pues habíamos escuchado atentamente de manera directa o indirecta el llamado de la Madre Tierra, madre que según palabras dichas por el Mamo, no solía equivocarse, según él, el estar nosotros allí era porque había en nosotros una preparación, una sensibilidad o una disposición previa a recorrer dicho camino; ya habían llegado unos que iban y no volvían, otros que decidían quedarse por años y otros, que apenas comenzaban, todos para mí tenían en común ese amor que los mantenía unidos en ello, ese algo que como dije antes, para mí resultaba desconocido y extraño. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 144

Por mi parte sentía emoción al saber que nuevamente podría empezar a ser parte de algo que me estremeciera y me hiciera sentir amor por ello, se volvía un reto poder conocer y auto- conocerme durante el proceso. Ese llamado como hasta ahora me era posible nombrar dicha experiencia, para todos no se presentaba del mismo modo, pero según veía, las diferencias no importaban, estábamos todos allí parados frente a ello, pues sentía que la esencia del trabajo estaba en entender la naturaleza, para algún día estar ante su grandeza con esa unión inteligible y fuerte, que provenía muy seguramente de tiempos inimaginables.

Sin embargo, con el pasar del tiempo es casi inevitable que en cierto modo el recorrido se vaya convirtiendo en una carrera por ir a encontrar respuestas ambiciosas a preguntas que aún no han terminado de plantearse de forma clara, pienso que cuando uno se acerca a algo desconocido es porque va en busca de aquello que hasta el momento no encuentra dentro de sí, en mi caso sentía de manera superficial que sólo estaba conociendo algo nuevo, sin embargo, en mi interior sentía de forma inexplicable que allí era justo el lugar en el que quería estar, era una sensación de bienestar y tranquilidad, escuchar las palabras del Mamo me hacía sentir que era una niña escuchando a su abuelo y esto me llenaba de alegría y profunda admiración. Por tanto, las preguntas de ¿Por qué? ¿Para qué? O ¿Qué sentido tenía estar allí? Fueron desapareciendo, no sé si fue por centrar mi atención en el lugar o en el Mamo, pero la relevancia de éstas con el tiempo fue siendo cada vez menor.

Mis ganas seguían latentes, en cierto modo luego de haber visto el lugar tan sucio y descuidado sentía odio hacia la ciudad, la tecnología y su contaminación absurda y autodestructiva, quise despertar en un cielo diferente, respirando aire puro, sintiendo la frescura y la estabilidad de un ambiente despejado, lejos de la ciudad, escuchando la caída del agua, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 145 sintiendo la brisa cálida y la comodidad de estar recostada en el pasto, la unión de dichas sensaciones me transportó a un lugar al que suelo visitar con frecuencia y que tiene bastante parecido con el arroyo en el que estaba, en él la contaminación visual y auditiva es mínima, creo que hasta ese día le di la importancia que merecía, pues lo extrañé más de lo acostumbrado y quise estar allí inmediatamente.

El Mamo había estado describiendo los elementos que habían a nuestro alrededor, el transcurso del agua, la fuerza del viento, el cantar de las aves y el movimiento de las plantas, yo fui yendo al ritmo de sus palabras, al observar a mi alrededor veía como sus palabras también tenían sentido para mí, mientras él lo iba describiendo yo veía como todos estos elementos formaban un conjunto realmente hermoso, me transportaron casi que a otro lugar, bastaba con observar un trozo de naturaleza y concentrarse en ella para descubrir cosas increíbles, fue entonces que pensé que al estar allí podría algún día ver mi interior de la misma manera, acorde y hermoso, tal vez esa era la respuesta que sin saber estaba buscando, un camino para ver todo de mí de la misma manera como estaba apreciando el exterior.

Quería abrir la posibilidad de encontrarme a mí misma, conocerme desde lo simple hasta lo más profundo, para verme tan hermosa como en ese momento había visto la naturaleza, observando cada parte en esencia, para luego verlas como un todo que se integra y se construye constantemente y no de manera abrupta como hasta ahora lo creía. La experiencia incitaba a despertar la sensibilidad del espíritu, quería sentirlo acorde y unido a este cuerpo que

últimamente es tan esquivo al ambiente natural. Allí surgían las ganas de ver, sentir y creer en algo diferente a las lógicas de la razón, pues hasta el momento estando en ellas no había logrado experimentar sensaciones parecidas. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 146

Pero mantenerse en esa búsqueda sujetada únicamente por sentir para mí aún no era suficiente, tener fe y acompañarse del sentimiento al momento de pensar, caminar, hacer y decidir rompe con las costumbres y la comodidad que por estos días me envuelve y me gusta tanto, es por esa razón que pensé que los asistentes, los participantes y los que se atrevían a impulsar éste tipo de conocimiento eran tan reducidos en número, dejarse guiar por el sentir hace que el camino se vuelva menos transitado y aparentemente más difícil de andar. Sin embargo, por lo general se mantienen más las ganas y el amor por lo que se construye poco a poco y con esfuerzo, que por aquello que se consigue fácilmente y sin un compromiso aparente.

Al fin entre tanto disparate uno logra levantarse en alma y cuerpo frente a ese paraíso de sonidos, imágenes, brisa, olor y sabor, estar allí agudiza los sentidos; la sensibilidad, los recuerdos y las sensaciones hicieron que mi alma se despertara, se pusiera atenta y surgieran sentimientos en mí interior, por su parte el cuerpo se iba dejando llevar experimentando sensaciones de bienestar, mi corazón latía sin ninguna prisa, la respiración se me facilitaba y su paso iba aquietando mis movimientos. Se permite uno mismo caer en el asombro y la maravilla, dejándose envolver por la belleza, el amor y la fuerza que trasmite estar a los pies de la montaña.

Es posible ver como la naturaleza o la Madre Tierra en su infinita sabiduría, dibuja claramente entre paisajes las lecciones que aún nadie ha logrado plasmar en libros, dibujar en lienzos o escribir en versos, según el Mamo, en ella estaba la sabiduría suficiente, pues cada uno de sus elementos hablaba por sí solo, en ese momento pasó un ave, el Mamo sonrió y dijo que quizá él nos estaba diciendo algo, pero que nuestros sentidos aún no nos permitían saber lo que había dicho, observaba el agua y decía que en la fuerza del caudal y en general en el orden de la naturaleza estaban impresas las lecciones que podrían disminuir tanta destrucción y permitiría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 147 ordenarnos a nosotros mismos. Entendí que todas esas lecciones estaban allí, en la simpleza de la mañana y la complejidad de la naturaleza, que se mostraban sin ninguna restricción frente a los ojos del más incrédulo, susurrando en los oídos del sordo palabras bonitas, llenando el espacio de una paz indescriptible que recorre el cuerpo del más rígido, dejando esa sensación de extrañeza y a la vez de familiaridad en el corazón del más rudo.

Éstas son de esas pocas experiencias que con sólo la razón jamás nadie alcanzará a comprender, porque los interrogantes aumentan a cada instante, parece que el correr del reloj hace que dichos interrogantes estén un poco más completos pero inevitablemente la respuesta ya no está cerca, se vuelve más y más profunda con el pasar del tiempo, pues en la complejidad de la naturaleza es que se enclaustran las respuestas y la razón no se mueve en ese tipo de espacios, por el contrario se incomoda, pues uno mismo va poniendo en tela de juicio lo ésta le ha afirmado por años.

Mis pensamientos se iban entrelazando en lo simple del caudal del río, en la compañía de las aves que adornaban el lugar, en la brisa que arrasa las hojas secas y mantiene fresco el ambiente, me dediqué a observar cada cosa para así saber si incluso desde mi ignorancia y mi rigidez, podría entrever las cosas que había dicho el Mamo. En resumen, de un momento a otro y de forma pausada, incluso el molesto sonido de los autos, las sirenas y toda la ciudad, se volvía un perfecto complemento, ya no me molestaba el estruendo, todo hacía parte del lugar, pues éste por sí solo limitaba sus fronteras, dividiendo bien el espacio entre la ciudad y él, aunque para mí en un inicio era digno de silencio este parecía conservar su belleza pese a la contaminación.

Era de esos lugares que se mantienen ocultos, pero que logra conservar el campo dentro de la ciudad; la unión entre la naturaleza y la tecnología, la pureza y la contaminación, permite, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 148 aporta y construye la unión del pensamiento con la complejidad de la vida misma, el tiempo allí había hecho eso conmigo, unir la simpleza de la razón y el pensamiento con lo complejo del entendimiento desde el sentir, viendo el movimiento la naturaleza fue que ambas se chocaron, quería integrarlas pero parecían opuestas. Ahora podía imaginar lo que implicaba tener equilibrio, que en un inicio fue la duda que sentí tener que descubrir y que por ahora era encontrar el punto central entre razón y sentimiento.

Comencé a sentirme incomoda en el lugar donde estaba sentada, había perdido un poco la concentración, pero sabía que seguramente en el pasado los indígenas hubiesen permanecido horas en el mismo lugar, sólo admirando su belleza o en niveles aún mayores entendiendo su belleza. Pero la ropa, las modas y las costumbres a las que ahora uno está tan aferrado han enajenado la naturaleza de lo propiamente humano; por tanto, uno mismo se impide perderse en lo simple, concentrarse y pensarse de una manera mejor, diferente y más completa.

Desconociendo por completo a lo que uno podría llegar, quizá a experimentar lo inimaginable, a encontrar plenitud mientras se aprende y se siente de una forma totalmente diferente a la adquisición clásica de conocimiento por medio de libros, discursos y pruebas tangibles.

Me había despojado paulatinamente de los prejuicios, había visto el todo y al mismo tiempo me había visto como parte de ese todo, el Mamo dijo que en nosotros estaban también esas lecciones, pues la naturaleza era el reflejo de los seres humanos, quise poder comprender la vida desde dentro para así poder conectarme con las lecciones que enseña el caudal del río, la brisa, las plantas y el orden general de las cosas.

Además, el objetivo para mí era aprender a caminar sin la incomodidad de las armaduras y las máscaras que cada mañana me acompañan, para así ser más sensible y atenta al instinto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 149 natural que habla desde dentro y se manifiesta por medio de mi cuerpo. Llenarme de experiencia y sabiduría para recorrer lugares como Monserrate, poder subir y bajar con aprendizajes nuevos, compartir el conocimiento para así ir aumentando ese amor bonito, leal y despreocupado entre familiares, compañeros y amigos, pues pensé que en la medida en que surgieran cambios en mí surgirían a la vez cambios entre las personas que quiero. De este modo, podría marcar con fuerza y valor un camino de cambio, sacrificio y consciencia, partiendo de esa mirada de mí misma como un todo y del mundo como parte de mí.

Después de un par de horas nos retiramos del lugar, caminando despacio nuevamente hacia la salida sentía como si hubiese iniciado algo, el camino apenas comenzaba para mí y este primer acercamiento era sólo el abre bocas a esta nueva experiencia que recorrería desde dentro y con paciencia. Aún faltaban muchas tardes de sol por compartir, muchos amaneceres por ver, muchos sueños por construir y mucho camino por andar.

TEMSACÁ, SINÓNIMO DE VIDA, SINÓNIMO DE ENCUENTRO

Tatiana Sánchez

Es increíble darse cuenta de la capacidad que tenemos los seres humanos para sentir, sentimos el aire, el frio, el calor, las texturas suaves, los sabores y en otros niveles más abstractos algunos tienen la posibilidad de sentir todas esas sensaciones hermosas que invitan a auto descubrirse, que llenan ese espacio hecho para la espiritualidad y le comprueban a uno mismo la importancia que tenemos los seres humanos en la tierra, pues aun habiendo dichas sensaciones, de no estar nosotros para experimentarlas inmediatamente desaparecerían. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 150

Cuando uno se adentra en ese proceso de autodescubrimiento no sólo se permite ver sensaciones hermosas, pues también entrevé una serie de fallas, errores y falencias que en algún momento cometió y que después de un tiempo, no precisamente determinado, comienza a entender uno mismo que quizá no debió hacerlo de esa manera.

Apoyada por la necesidad de auto conocimiento decidí unirme junto con unos compañeros al semillero de ancestral de la universidad, la primera invitación tuvo lugar en la estación de las Aguas en el centro de Bogotá, desde allí subiríamos el gran cerro de Monserrate, y ya habiendo llegado a la cima realizaríamos desde nuestro conocimiento vago un ritual de pagamento a la montaña.

El camino se tornó distinto a muchas veces anteriores. Un silencio que solo se veía interrumpido por el cantar de los pájaros y el sonido de los arboles cuando retozaban sus hojas, a pesar del incesante rugir que la ciudad, que a pasos lentos y tranquilos íbamos dejando abajo, se sentía un aire de unión e identidad, pese a que no conocía bien el objetivo de la actividad ni a todos mis compañeros.

Hicimos un par de pausas, que para mí fueron teniendo un significado claro, parar para recapacitar y darse cuenta de lo mucho que había caminado, ver que el trayecto de mi vida había sido mucho más largo y tortuoso de lo que yo misma imaginé, veía la ciudad cada vez más pequeña y en contraposición la montaña cada vez más grande, pensaba cuantas personas, familiares e incluso antepasados habían construido ambas majestuosidades, dividiéndolas a tal punto de verlas ahora totalmente opuestas, siendo que en algún punto de la historia, muy seguramente fueron una sola.

Pese al cansancio y al esfuerzo físico que implica arrancar nuevamente, quería subir y apreciar desde arriba la belleza de la ciudad y el cerro, comenzó a existir en mi interior un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 151 impulso que me invitaba a no decaer, quizá subir podría mostrarme de forma clara la vivencia de la que estaba haciendo parte y a su vez la riqueza que esos dos eventos me regalan para el aprendizaje y la capacidad de adaptación que desarrollamos.

Una de las imágenes más impactantes y que recuerdo claramente, surge mientras miraba hacia mi ciudad, ésta ya no me generaba sorpresa al ver su grandeza, me impresionaba el resultado bárbaro y cruel de la contaminación, de tanta destrucción y supuesto "avance y desarrollo".

Es muy paradójico y además se presta mucho para la interpretación en mi vida cotidiana.

Soy hija de la tierra y en la medida en que he venido creciendo, ha sido la evolución y las diferentes situaciones de la vida lo que ha determinado, así como en la ciudad, la construcción de grandes edificaciones en mí interior, formadas a partir de experiencias dañinas que fueron formando mi criterio como mujer. Es inevitable dejar que lo malo repose en mí, y que eso tan malo a su vez coloque encima una nube negra de errores que contaminan y no me deja ver la maravilla que está más allá de la nubosidad, algo que existe pero que mi constante incertidumbre y mi ceguera espiritual no me permite ver.

Llegar a la cumbre, iniciar un ritual de pagamento indígena, me permitió ingresar a mí de la manera más noble y humilde que me fue posible en ese momento, pues no sabría lo que encontraría, sabía que debía pensar en cosas positivas y al finalizar pagar con todo aquello que de manera consciente y desinteresada estaba dispuesta a dejar en aquél lugar, sabía que era tierra y que el hecho de ser indígena, me invitaba a la reconciliación mi ser para de este modo permitirme iniciar un cambio en los demás.

Luego de un par de horas dimos fin al ritual y procedimos a entregar ya en físico lo que habíamos llevado, para así ser coherente con lo que se estaba en condición de darle a la Madre si El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 152 cuarzos o semillas, yo tomé un par de semillas de la bolsa y las arrojé hacia la montaña, cada semilla entregada a la Madre, cada ofrenda, hace parte de un humilde agradecimiento, ella me brinda de forma desinteresada.

Con cada ofrenda se iba aquello que me aquejaba, que sentía y quería que se fuera, quise en ese momento dejar atrás los paradigmas, lo que mal me hacía sentir. Pensaba que esa semilla que había arrojado crecería y simbolizaría el crecimiento que quería tener como personas, colmada de paciencia y siempre observando hacia arriba.

Además de esto, el por primera vez realizar un pagamento, algo que, aunque no deja las cuentas saldas, motiva e invita a seguirlo haciendo, pues, así como nos da tanto nuestra madre, nosotros como sus hijos debemos ofrecer a ella lo que somos en esencia y la espiritualidad que sus surcos y ríos nos brindan, pues no hay nada más maravilloso que sentirse abrazado por tu madre.

TEJIENDO CAMINOS ENTRE LA RAZÓN Y CORAZÓN

Tatiana Sánchez

Cada visita a los lugares significativos para la comunidad indígena, me implica irme desprendiendo de la razón y la lógica que me hace creer que las cosas que siente y escucha mi alma, son solo parte de la imaginación o producto de la excavación del pensamiento mismo. No es trabajo sencillo, para mí desde un principio no lo ha sido, siempre hay algo que aparece en el pensamiento que limita mi sentir, alguna idea o la desconcentración misma.

Sentir, oír, observar y viajar lejos dentro de sí, es un proceso que se me ha venido dando de manera paulatina, siento que en cierto modo la idea no es irse del todo, es sentir y vivir aquí y allá, aquí con el cuerpo y allá, en los espacios más profundos de mi ser, con el latido del corazón. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 153

La reunión esta vez tendría lugar en el Parque Arqueológico las Piedras del Tunjo en el municipio de Facatativá Cundinamarca, conocido también como Piedras de Tunja; Cercado de los Zipas o Santuario de la Rana, queda aproximadamente a unos 40 minutos de la ciudad de

Bogotá. Yo había pasado de paso y con frecuencia por este municipio, pero no había estado en el parque, durante el trayecto mis papás me contaban que años anteriores iban con frecuencia allí y que era un lugar bastante hermoso, llegué y tuve que esperar aproximadamente dos horas mientras mis compañeros llegaban, ya después de que llegaron ingresamos juntos al parque para realizar el ritual de pagamento.

Nos sentamos encima de una roca en la cual solían ir a realizar los rituales el semillero de ancestral, el profesor hizo el saludo a la Madre Tierra, las plantas sagradas y también a las familias de cada uno de nosotros junto con los territorios de dónde provenía cada uno, pensaba que en ninguna reunión a la que había asistido daban tal importancia a saludar a las personas que de forma física no estaban, me pareció un bonito acto así que en pensamiento me uní a él.

Cada uno tomó un lugar para sentarse en el que estuviese cómodo y a gusto, lo siguiente que haríamos era pensar en cómo estaba cada uno de nosotros, sentir el lugar y experimentar por nosotros mismos lo que significaba estar participando activamente en un ritual de pagamento, comencé por cerrar mis ojos pues suelo distraerme con facilidad, sentía un poco de sueño y bastante frío, por fortuna el sol comenzó a salir y eso me mantuvo muy cómoda durante todo el tiempo allí, pues me encanta estar bajo el calor del sol.

Fui sintiendo el sol, el viento y la tierra trabajando en conjunto, mi pensamiento se dirigía a otro universo, así que me mantuve quieta y concentrada. Sentía que cada cosa que pasaba hacía parte de un orden perfecto, se daba en el momento justo para lentamente ir entendiendo aquella lección que se construía poco a poco. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 154

El cuarzo en mis manos, el viento refrescando mi cuerpo y traspasándome la piel, la roca en la que me recosté siempre fría y trasmitiendo sensaciones inexplicables, era como si al recostarme sobre ella me vibrara el cuerpo, con los ojos cerrados veía colores y me llenaba de energía, mis compañeros desde su concentración y su trabajo individual me hacían sentir tranquila y en casa, todo a mi alrededor fue haciendo parte de las respuestas que mi pensamiento buscaba, sin saber aún cuales eran, se mantenía inquieto como cuando se está buscando algo pero a la vez sentía que le resultaba complicado descubrirlo por sí solo.

Al comienzo focalizar mi atención hacia un lugar fue difícil; nunca sé en qué momento despego, no he hallado el punto exacto en que mi concentración se vuelve más que un pensamiento rígido. Esta vez mi atención sintió la necesidad de mirar fijamente el cuarzo y al observarlo detenidamente pude hallar varias cosas en él; en su diseño desgastado había trasparencia, sin embargo, por más que intenté ver a través de él no pude, fue entonces cuando supe que los secretos y el misterio que en él guarda los protege bajo su aparente trasparencia. Me vi en él, era el reflejo de mí misma plasmado en un objeto, sus marcas parecían mis cicatrices, sus partes oxidadas el cansancio que llevaba mi cuerpo, las manchas eran los dolores, el apego y la tristeza de mí ser que aún no logro integrar y sentir como propio. Era por si solo el reflejo de lo complejo que me resulta la vida plasmado en lo aparentemente simple de su figura

“imperfecta” sentía que en él se guardaba luz, secretos y guía.

De repente llegan frases al pensamiento unas claras otras no lo suficiente. Sin embargo, llegan. Una de ellas fue: “Es inevitable contagiarse de la ira y la tensión que está contaminado el exterior, pero el control de sí, siempre es posible tenerlo desde dentro”. Entendí en ese momento que, aunque el medio se torne agotador y desgastante, a tal punto de llevarme a la deserción, soy El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 155

únicamente yo la dueña de esa decisión, de adentrar esa ira y esa tensión que me lastiman o por el contrario hacer de ese exterior un puente de limpieza y aprendizaje.

Luego de la nada cayó de mis manos el cuarzo y en la premura de buscarlo nuevamente encontré sobre mi pecho una araña, insecto que creía haberle temido siempre, de haberse presentado en otro instante pude haber corrido y gritado de ella, pero era el momento justo para observarla quería hacerlo pues en ese momento me hizo recordar que en varias ocasiones había escuchado la importancia del tejido en la mujer dentro de las comunidades indígenas, vi como la araña hace uso de lo mismo para caminar en lo invisible, da vueltas en el aire sin parecer tener destino fijo, gira y gira hasta que nuevamente encuentra lo que ha tejido, aferrándose fuertemente a ello para no decaer y por el contrario poder seguir. Las vueltas son como la confusión y la sensación de ir sin rumbo que a veces me atrapa y me abruma, caminar en lo invisible es el camino que aún no puedo recorrer, porque temo estar en la incertidumbre y de repente adentrarme en cosas que desconozco. Sin embargo; luego de dar vueltas hay la posibilidad de encontrar algo firme a que aferrarse en medio de la incertidumbre y lo desconocido, tomar de la mano el miedo, la tristeza e incluso el dolor para aprender y seguir con ello sin que me implique una carga o una incomodidad, pues estoy cargando de mí.

También pensaba que la mujer indígena hacía uso del tejido para encontrarse en él, para verse y entender por ella misma lo que cuesta seguir por un camino aparentemente desconocido, llevando de la mano lo que alguna vez temió tomar de sí, yo aún temía tomar algunas de mí, pues sentía que no me conocía del todo aún, pero comenzar a tejer no era para mí una opción en ese momento, recordaba que nunca antes me había inclinado por las artesanías ni el tejido pese a que en varias ocasiones tuve la oportunidad de aprender, pues era impaciente y acelerada y tejer me significaba hacer todo lo contrario. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 156

Redirigí mi mirada hacia mi pecho y me detuve justo en mi corazón, me vino una sensación de extrañeza frente a algo que de por sí hace parte de mí, desconozco los latidos de mi corazón, mi lado izquierdo se encontraba rígido, acorazado y sumamente temeroso; creí que allí se encontraba escondido el miedo que me impedía ver con claridad la unión de lo que desconocía. Lo sentía como una parte adormecida que sólo aparentemente hace parte de mi cuerpo, pero no está en mí, es inexperto y eso hizo que subestimara su sabiduría y decidiera silenciarlo durante años.

De igual manera, nunca es tarde para despertar en ese momento así lo sentí. Al creer terminado de escuchar mi corazón y como coincidencia o quizá no, quise mirar el lado derecho de mi pecho. Apresurada y entusiasta fue mi razón rígida en pensamiento quien comenzó a hablar; estaba agotada, desgastada y sin fuerza para cargar el peso de las decisiones por sí sola, requería con urgencia de esa unión para comenzar a ver y sentir con el corazón, para dejar de lado la prioridad de usar los ojos y la piel.

Comprendí que viéndome a mí misma durante los tiempos de silencio en los rituales es que surgen las lecciones que posteriormente se guardaran en mí y que luego me brindan la paz, seguridad, confianza y fuerza para entregarme por completo en una lección próxima.

Entonces viene nuevamente una frase para cerrar “No hay que buscar el corazón o el amor, ellos están justo donde deben estar, para cuando decida volver poder aprender y escuchar lo que tienen por contar. Ver no es requisito para creer, la fe que se construye sin ver es aún más fuerte”. Aunque el mundo y en cierto modo cada uno de nosotros viva tras mentiras y corazas, siempre en lo profundo, de esa parte oscura emerge la vida, así como pasa en las partes del suelo que parece no crecer la hierba, muy en lo profundo se guarda lo más fértil; son como nuestras El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 157 raíces que afianzadas en la madre tierra nos dan permiso de crecer y volar entre el viento con la fuerza del sol.

Dimos fin al ritual de pagamento agradeciendo entre todos por lo aprendido durante la jornada, era ya medio día y según el profesor el ritual de pagamento era bien llevado hasta esa hora, así lo enseñaban los sabedores y abuelos indígenas, me levanté y en mi mente agradecí al lugar por haberme permitido estar en mí y escucharme de esa forma tan clara.

DESCUBRIENDO EL EQUILIBRIO INTERNO. HOMBRE Y MUJER

EMPODERADOS COMO EL ORDEN NATURAL.

Tatiana Sánchez

Nuevamente la sensación nerviosa e incierta que invade mi cuerpo cada que se acerca un encuentro con el abuelo, con el paso del tiempo, he comenzado a creer que en cada encuentro la palabra, aunque de vueltas siempre va a tener algo por contarme, algo que traiga claridad en el pensamiento, tranquilidad al corazón o que simplemente me centre en una realidad que lejos de aquél lugar no soy capaz de ver, enfrentar o hacer parte de mí vida. Nos encontraríamos como de costumbre en la plaza central del municipio de Cota a las 8:00 pm.

Esa noche decidí ir caminando hasta el lugar donde queda la maloca, quería antes de entrar relajar mi mente y mi cuerpo, la semana había estado llena de afanes y preocupaciones en la universidad, así que quería dejar todo eso mientras caminaba, con el cuerpo cansado pero el espíritu atento y a la expectativa, fui caminando paso a paso y sin afán, tenía la mente dispersa y el pensamiento confuso así que sólo quería estar tranquila. En general, esta semana no se postulaba como la mejor de todas; sin embargo, el propósito de ir en busca de tranquilidad y calma en mí misma se mantenía latente y vivo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 158

Ya habiendo llegado, nos sentamos junto con unos compañeros en la cocina del lugar para esperar al abuelo, el frío era casi insoportable, sentía frío hasta mis huesos, intentamos cobijarnos entre todos, pero era muy difícil mantener el calor, después de un par de horas llegó el abuelo, encendimos el fuego en ese lugar y allí permanecimos el resto de la noche, no sé precisamente por qué, pues yo tenía ganas de ir a un lugar más cálido.

Aunque el trasnocho no fuera en el lugar habitual y con los parámetros de costumbre, la palabra se abrió paso y logró al menos en mí, una conexión bastante fuerte; en algún momento llegaron mis pensamientos a florecer de manera inexplicable en la palabra del abuelo, pero a su vez poco a poco fueron encontrando camino, claridad y respuesta con el transcurso de la noche.

Partiendo de esto, intentaré contar según la jerarquía de prioridades en la que la palabra tuvo fuerza y significado para mí.

El abuelo en su palabra fuerte y dulce junto con la humildad de su sabiduría innata, durante el trasnocho ha sabido diferenciar y definir lo que implica hacer del alcohol una herramienta de confusión a una herramienta de cura y sanación interior, para referirse a la primera manera dijo que bajo sus efectos, es que los seres humanos camuflamos el dolor y disfrazamos la embriaguez del pensamiento en esa sensación de borrachera, decía que de ser más conscientes y estar más empoderados de nosotros mismos, podríamos ver sin necesidad de caer en lo fácil del licor. Establece una enorme diferencia al definir lo que implica embriagarse en conocimiento con medicina como el chirrincho, (bebida fabricada de forma artesanal) a hacerlo con botellas de aguardiente y cerveza.

La primera bebida el chirrincho, brinda una oportunidad de ensimismamiento positivo, donde nos descubrimos en la forma más natural y agreste, pero es una posibilidad que por el miedo a enfrentarnos incluso a nosotros mismos, se desvanece y el miedo se hace más fuerte que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 159 nuestro deseo de cambiar y conocer mediante su bebida. Por su parte, el alcohol provenía de ambientes en los que se maneja un pensamiento negativo visto como: celos, envidias, competencia, rabia etc… es por eso, según el abuelo, que esta bebida deja como secuela una sensación de embriaguez, confusión y amargura.

Diferente de la medicina del chirrincho, ya que ésta provenía de un proceso que tiene siempre el objetivo claro de limpiar y sanar; manejando así una energía positiva, desinteresada, sin ánimo de lucro, sin ambición, ni codicia, es por eso que propone desde su mismo proceso de hechura la tranquilidad, la dulzura, la paciencia y el descubrir un conocimiento más profundo de nosotros mismos y, en ese sentido, del mundo en su estado más natural, para que en caso tal de llegar a la embriaguez, ésta sea para quien lo toma, una embriaguez de conocimiento y sabiduría de sí mismo y del mundo que lo rodea. En general, entendí que limpiarnos con medicina implica descubrirnos en lo positivo y lo negativo, por tanto, requiere valor, verdad, entrega y amor.

Al entregársele la botella de chirrincho al abuelo éste inició por preguntar el origen de esta bebida, así que con voz temblorosa y tímida comencé a relatarle lo poco que sabía y sin poder decir mucho, en mi mente logré dibujar los paisajes del lugar. Supatá Cundinamarca, un municipio pequeño entre San Francisco y Pacho, posee aproximadamente 18 veredas y una gran cantidad de hermosos lugares, entre ellos las montañas, lagunas, ríos y cascadas que florecen y fluyen por el campo sin ninguna restricción arquitectónica. Se encuentra alojado a las afueras de

Bogotá por la salida de la calle 80, a unas tres horas de camino aproximadamente. Es el lugar de donde proviene no sólo la bebida, si no también parte importante de mi origen. Mi familia.

Se me hizo inevitable a medida que el abuelo avanzaba en su relato traer a mi mente el recuerdo de mi padre y el significado de ese lugar para mi vida, no más escuchar el procedimiento de hechura de la bebida me hacía recordar cómo años atrás, mi padre me contaba El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 160 con el mismo fervor que el abuelo, las tardes que pasaba acompañando a su padre a realizar este mismo proceso. Recoger la caña en compañía de su padre y un par de mulas mansas que ayudaban con el proceso de carga, dejar la caña junta en una especie de establo para que por medio de máquinas extrajesen su jugo, que sería depositado en recipientes de vidrio donde por medio del calor saliera el vapor que a su vez, se iría condensando hasta caer nuevamente gota a gota en los envases para posteriormente endulzarlo con plantas dulces y frutas.

Siguiendo la noche supe que el enfrentarse no era un proceso sencillo, esa noche enfrenté un poco mi verdad y mi origen. Luego que el abuelo botó sobre el fuego un poco de medicina, mi ser se reflejó en el fuego así sentí que había pasado, éste se comenzó a mover con fuerza y aumentó su intensidad, lo que para mí aún no significaba algo en específico, pero en seguida el abuelo me miró a los ojos y comenzó por preguntar mi nombre, miró nuevamente el fuego, el cielo, la bebida y por último terminó diciendo “tiene mucha fuerza, ojalá la transformara en fuerza espiritual” era como si el fuego le hubiese transmitido lo que en mi pensamiento daba vueltas hacía horas. Así que comencé por mí misma a profundizar en ello, luego que el abuelo abriese en mí el camino hacia esa posibilidad.

Encontré que debía apaciguar el fuego que hay en mi corazón, dejar de lado la mentira, el engaño, el resentimiento y el miedo comenzando desde mis propias raíces, debía comenzar con dulzura y calma; entendí que antes de engañar al mundo con una máscara que refleja lo que no soy, me estoy engañando a mí misma, que en la reconciliación conmigo, con mi padre, mi madre y mi verdad, podría estar el poder que últimamente está tergiversado o incluso me es ausente.

El abuelo prosiguió con su discurso diciendo “nuestra naturaleza no se ha perdido, se nos ha olvidado que es diferente” y a mi modo de ver tiene mucha razón, hemos olvidado como sembrar, como cuidar, como entendernos a nosotros mismos e incluso como estar en las El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 161 montañas; él lo iba argumentando a partir de la fuerte cercanía que en la actualidad tenemos todos con los aparatos electrónicos, aferrándonos así a la cuidad y tomando distancia del ambiente, decía que esas fuerzas deshumanizadoras iban a terminar por ordenarnos a su acomodo, ya que nosotros con el paso del tiempo hemos desaprovechado el poder de hacerlo por sí solos. De este modo planteaba como surgía la necesidad de volver al orden natural de las cosas y al equilibrio, respetando los principios y fomentando las costumbres.

En primera instancia el abuelo explicaba la importancia de la fuerza de lo femenino expresada en la tierra, la luna, la vida. La mujer. Ella es quien tiene en sí misma al ordenar su menstruación, el poder de ordenar la semilla y en este sentido, al hombre, fuerza masculina, portador de semilla, quien es sol, siembra, labranza y construcción. Sentía escuchando sus palabras que al juntar ambas fuerzas se daba el trabajo como pareja, pues mientras la mujer guarda la espalda, aconseja, cuida, orienta y guía al hombre, va creciendo y se permite a sí misma hacer uso de su poder de adivinanza como madre y compañera, desarrollando su instinto y sabiduría propia. Por su parte, el hombre al estar cumpliendo con las características y papeles descritos por el abuelo, logra portar y sembrar la semilla que sólo a él le es concedida, realizando a su vez otras labores propias de su fuerza masculina como las de la trasmitir palabra, establecer unión con lo sagrado, lo femenino, las platas y la tierra misma quien está representada en su mujer compañera.

Según el abuelo al cumplirse dicha labor es posible limpiar la semilla y volver al orden natural, donde tanto el hombre como la mujer se empoderan de su misión y sus virtudes, alcanzando plenitud y equilibrio no sólo para ellos mismos, sino que también para su relación como pareja. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 162

Aunque el volver a nuestras raíces, requiere más que el equilibrio entre lo femenino y lo masculino, según contaba el abuelo el plantar en la tierra nuestra placenta, para que de éste modo nos conectemos con fuerza y sintamos el arraigo a la tierra y a su vez, a las constelaciones del cielo, pues el cordón umbilical que mantenemos de forma invisible nos estaría conectando al cielo y a lo sagrado, mientras la placenta guardada en tierra nos daría la fuerza y el autoconocimiento, para saber en de qué lugar partimos y así se le daría más fuerza, convicción y seguridad a nuestro caminar. Yo no tenía ni idea donde había quedado mi placenta, por tanto, me asuste y me sentí algo perdida, aunque luego me calmé pensando que tal vez estar en el camino indígena comenzaría a darme indicios de donde estaría sembrada de ahora en adelante.

El ritual de sembrar la placenta previamente descrito, es otro de los principios que se han perdido, ese primer vestido que nos dio abrigo, alimento y bienestar, por estos días se desecha, así como si nada, pues muchos desconocemos la importancia y lo que significa llevar en práctica este ritual.

Luego el abuelo nos hizo recordar que nacemos en el momento que nacen nuestros padres, pero incluso esa raíz genética también se ha perdido, los lugares de donde provienen nuestros antepasados nos resultan ajenos y extraños, ignoramos que son parte de lo que ahora somos. Yo estaba de acuerdo con él pues en ese momento recordaba la sensación de felicidad que sentía al estar en el lugar donde habían crecido mis padres, compartir con sus amigos, escuchar sus historias y caminar por los lugares que ellos caminaron de niños me hacía sentir su cuna como la mía propia, con el paso del tiempo al igual que ellos lo habían convertido en mi hogar.

El abuelo siguió su relato diciendo que los valores que debían guiar nuestro caminar eran la humildad, la sencillez, la nobleza y la honestidad, según él éstos eran la base que facilitaría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 163 nuestro relacionamiento con el otro, con lo sagrado, con el ambiente y en este sentido con nosotros mismos. Yo pensando en cada uno de ellos veía como justo esos valores habían perdido importancia en mi caso particular carecía de nobleza y honestidad; pues no me podía mirarme a mí misma con nobleza y al no hacerlo no estaba siendo honesta ni conmigo ni con los que me rodeaban.

Partiendo de todo esto, me di cuenta como la influencia del poder y la ambición de poseer algo o alguien, crean en uno mismo la falsa necesidad de querer caminar a prisa y solo por el gusto de ser más que otros, a mi modo de ver, ésta falsa necesidad es lo que en cierto modo impide el equilibrio como pareja que había descrito el abuelo precedentemente y que en mi caso, limitaba el proceso de ver y comprender lo que se expone ante mí y desde mi interior. Para mí en ese momento el amor era palabra dulce y reguladora de poder, capaz de sacar lo positivo de mí y así poder construir mi camino sin egoísmos, fortaleciendo el desarrollo de la fuerza interna que llevo de forma innata, para algún día llegar a verla, entenderla y hacerla parte de mí.

Ese poder de dominar tanto lo interno como lo externo era esa fuerza que iba a permitirme integrar todo como la única fuerza espiritual, que en un principio e incluso en palabras del abuelo en mí solo estaba como una fuerza.

Fue así como la media noche vino trayendo con el paso del tiempo una palabra fuerte, pero también tuvo tiempo para terminar con claridad en el pensamiento sino para todos al menos en el mío propio, hubo tranquilidad, respiración profunda, risas y el propósito de nuevos objetivos por llevar a cabo, ya el frío era más intenso y se acercaba el momento de ir a descansar, después de tanto trabajo en sí mismos, faltaba dar gracias y tomar todo aquello que en esa noche fue claridad y confusión para de este modo poder seguir tejiendo la vida poco a poco.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 164

LIMPIANDO EL CUERPO DESDE DENTRO. UN VIAJE POR COMENZAR

Tatiana Sánchez

Con el transcurso del tiempo se da uno cuenta que sólo a través del sentir puede entender como trasnocho a trasnocho se adelanta el procesos de sanación personal, surgen nuevas respuestas y con ellas nuevas tareas y propósitos por llevar a cabo; la naturaleza de nosotros como seres humanos radica en ir en una búsqueda permanente e implacable por adentrarse en la perplejidad de intentar conoce como ser humano, como ese ser de vida que se mueven en la dualidad del mundo, en el día y la noche, entre lo positivo y lo negativo de sí. Así son los impulsos que alimentan la curiosidad del cuerpo y nos mantienen en constante movimiento por los diferentes caminos, caminos como lo indígena, a donde probablemente vamos en busca de respuestas a preguntas que surgen con el tiempo y por sí solas desde lo más profundo del ser.

La cita ésta vez era en el Municipio de Sibaté, desde allí partiríamos junto con los compañeros de semillero hacia la casa del Mamo Roberto y su familia, ubicada en la carretera que iba de Sibaté a Silvania, mis papás me llevaron como es costumbre pues la maleta era bastante pesada y por esos días se habían intensificado mis constantes dolores de espalda, junto con mis compañeros hicimos el mercado y las compras para llevar, tomamos un bus y nos dirigimos a la vereda la Frontera, al llegar tuvimos que bajar aproximadamente 1 hora a pie, cargar mi maleta comenzó a generarme un fuerte dolor pero ya mis compañeros llevaban suficiente peso para yo convertirme en uno más, así que lo ignoré y seguí hasta llegar a casa del

Mamo quien nos recibió con amabilidad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 165

Cocinamos, se hizo de noche y nos dispusimos a trasnochar, al inicio del trasnocho el mamo nos dijo que dentro del Bohío estarían, abuelos y sabedores espirituales, que escucharían todo lo que en nuestros corazones había y que alimentaba nuestro propósito de recorrer el camino de Bochica.

En trasnochos anteriores y mediante iban avanzando las cosas escuche reiterativamente el permiso que había que pedir a los altos mandos, ancestros y abuelos del territorio que nos disponíamos a recorrer en nuestras salidas posteriores, sin llegar a entenderlo del todo seguí con la simpleza y a su vez la complejidad que me implicaba estar allí, permitiéndome sentir, vivir y oír por mi propia cuenta de que trataba aquél tramite.

Poco a poco y de forma paulatina fueron apareciendo con dulzura en las palabras del

Mamo algunas pautas que había que asumir y que, a su vez, iban guiando mi pensamiento inquieto; cada cosa implicaba seriedad, compromiso y esfuerzo, había que ir afrontando cada situación del recorrido como se enfrentan los grandes desafíos, con entrega, pasión, pensamiento y corazón dulce.

El significado de dichas palabras puede tornarse diferente para cada uno, pero la connotación que ha tenido en mí es directamente impactante, para mí se trataba de entrar y hacer parte de mí cada cosa que en el estado más natural aparece como fragmentada y ajena, siendo que por sí misma parte de lo más profundo de mi ser, era encontrarme con la ira, el rencor, el odio, el dolor, la tristeza, la inseguridad, el miedo, la carencia de amor, la embriaguez de pensamiento e incluso el mismo ego, pues era lo que intensificaba el afán innecesario de ir a toda velocidad, aun sabiendo que carecía de claridad y de dirección por lo cual se me impedía llegar a ese proceso de aceptación y sanación. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 166

Integrarme y verme a mí misma en lo más oscuro de la noche, mientras el silencio ahondaba mi corazón, es el proceso que terminaba por explotar en lágrimas, sonrisas y recuerdos desagradables, pues iba recordando todo lo que había hecho antes de llegar allí, surgían recuerdos de peleas, problemas y desilusiones. Sin embargo, tenía que ir rompiendo corazas, ir capa por capa desenredando desde lo más superficial hasta lo más profundo de mí ser, es así y es allí donde encuentro el punto de equilibrio exacto en el que se desata con fuerza la tranquilidad del corazón, pues es allí donde aguarda la verdad que en otros lugares o momentos no puedo ver.

Con el paso del tiempo es así como he venido aprendiendo que nada surge porque sí o por simple casualidad, todo llega en el momento justo y luego de darse un debido proceso, es por eso que la ida a trasnochar esas dos noches toma más fuerza e incluso más lógica, si es así que quiere y se necesita entenderse en algún otro espacio como lo es la academia. En palabras del

Mamo Roberto sonaba lo suficientemente claro “Si van a hacer cualquier proceso o quieren dirigirse a cualquier autoridad, debe haber claridad entre ustedes y desde ustedes, para saber exactamente qué es lo que quieren y buscan”. Entendí entonces que debíamos ser más que la superficialidad del cuerpo físico, yo misma quería construir algo más allá que la unión simple entre compañeros, pues para mí era la unión de nosotros mismos como verdad lo que se nos pedía aquella noche, creía firmemente que había que empezar a caminar con honestidad en el corazón, diferente de aquella que se muestra en las máscaras de aparente bienestar.

De este modo, caminaríamos seguros, confiados, con claridad y con un propósito construido a partir del corazón y del cuerpo, despertando conciencia suficiente en nosotros mismos como para llegar con respeto y haciendo caso de los valores enseñados por el Abuelo

Fernando días atrás: honestidad, nobleza, humildad y sencillez. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 167

Para mí estar en estos lugares se ha convertido en un proceso de estudio que implica escudriñar dentro de sí mediante un proceso meditativo, con la voluntad y el deseo de rescatar aquello que algunos creen es historia, pero que para mí no es del todo así, esta cultura no es algo que pasó y quedó atrás, no es ajeno ni distante a la propia naturaleza de mi ser, pues siento que es comenzando desde mí donde es posible aprender (estudiar) la vida (la historia), porque es lo que hubo y hay aún aquí. Vida.

El aprendizaje ha venido cambiando y según palabras del Mamo así seguiría, ese es el orden de las cosas y es la manera adecuada para que continúe construyéndose el conocimiento.

Como guías espirituales siempre estarán los abuelos, el Padre, la Madre, los elementales y las plantas de curación, así nos han venido enseñando trasnocho a trasnocho los guías. También había surgido dentro de la palabra y el consejo que dan los abuelos tener en pensamiento nuestros linajes, los pueblos de donde provenimos y todos aquellos saberes que están esperando dentro de nosotros para ser escuchados y acogidos, porque eso somos también y es partiendo desde allí, donde cada uno puede construir algo nuevo sin desprenderse de la lección y el pensamiento escuchado, sentido e interpretado precedentemente por abuelos, ese que ahora nos es entregado, para que en nosotros crezca y se fortalezca, ya que se nos permite nuevamente aportar y ayudar a construir ese conocimiento, dejando la esencia de nuestros antepasados impregnada en la historia con algo de la novedad que nos acompaña.

Por tanto, creo que aunque los saberes y las costumbres de lo indígena se mantengan aparentemente en el olvido, no es un conocimiento que tienda a desparecer ya que, ni el sembrador ni la semilla desaparecen, por el contrario permanecen en sincronía y movimiento, lo que hace de su esencia algo denso y profundo que fluye por sí solo dentro de aquellos que como yo intentamos acercarnos a su naturaleza, la tarea se me ha venido haciendo más difícil pero a su El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 168 vez se ha vuelto cada vez más hermosa y es la intensidad de su belleza la que cubre y me da la suficiente fuerza para que esto que hoy llamo complejo, se convierta en algo igualmente hermoso por descubrir e integrar.

Sin embargo, no deja de ser un largo proceso y en este sentido se debe adquirir un compromiso para cumplir a dichas autoridades y primeramente a uno mismo; las palabras dichas por el Mamo me hizo entender que tendría que quitar el espacio para las mentiras y el engaño, pues no podría descubrir nada de mí en ello, por el contrario iría a lugares dentro de mí totalmente extraños a lo que son en realidad, mientras que de ir paso a paso de la mano de lo positivo y lo negativo a la vez, me iba permitir ahondar dentro de mí, para al fin nombrar lo que hasta ahora para mí no existe en palabras y que siento me está dado por el negativo.

Durante la noche todos permanecimos sentados alrededor del fuego, pero luego de la intervención del Mamo, su hija Susanita comenzó a hablar, su voz me mantuvo atenta a sus peticiones ella dijo que teníamos que limpiarnos y al hacerlo la Madre sabría si podía o no darnos permiso para recorrer el camino que vendría. El proceso implicaba tomar un hilo blanco que ella nos había dado en cada mano y con ellos recorrer todo nuestro cuerpo a medida que

íbamos soltando todo lo negativo: pesadillas, sentimientos como la ira, el dolor, la tristeza y recuerdos. Después de todos haber dicho terminar la limpieza nos pidieron salir del Bohío, nos situamos en un pozo de agua ubicado frente a la puerta del Bohío, ella nos dijo que allí estaba representada la Madre y que diciéndole todo a ella, el resto de lugares sagrados que visitaríamos sabrían y nos recibirían. Situó nuestro pensamiento en 5 preguntas:

¿Con que objetivo hacíamos este proyecto? ¿Podríamos decir en una palabra lo que queríamos ir a buscar en los sitios sagrados? ¿Qué llevaríamos a éstos sitios sagrados? ¿Con qué vestiduras iríamos? ¿Desde cuándo habíamos empezado a caminar éste sendero indígena? El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 169

La primera tarea fue limpiarnos e ir descubriendo el grado en el que nuestro bienestar era real, pensando con calma, meditando tranquilamente y entregando a un par de algodones lo negativo, pero más allá del simbolismo del ritual, era la exhaustiva labor de mirar el estado en el que cada uno se encontraba y la manera en la que había estado lidiando, apaciguando o alimentado ese negativo, sin demeritar lo complejo de lo que implica mirar y reconocerlo la real tarea a mi modo de ver, era ir soltando en los algodones todos aquellos sueños, sentimientos, emociones, pensamientos y acciones en los que posiblemente se reflejaban o se escondían nuestros miedos, para mí era como bañarme desde dentro. Después de estar toda esa energía pesada frente a mí, lo siguiente que quería hacer era ordenar nuevamente cada cosa en su lugar y en su debida proporción, porque el negativo como dice el Mamo también es profesor, de él también hay que aprender y dejarse llevar sin que eso implique extraviarse en el proceso. En ese momento entendí la insistencia de realizar esta tarea con calma, tranquilidad y dulzura, aceptando cada cosa, mirándola minuciosamente y, por último, entregándola para que al volver fuese más sencillo darle lugar y dirección.

Durante mi experiencia personal sentí que pude mantener la calma, fui dejando que las cosas fluyeran y surgiera poco a poco lo que en su momento debía surgir. Fui escribiendo mentalmente para de este modo ir trayendo al pensamiento la palabra que surge en los trasnochos, era inevitable que en mí se proyectaran con gran velocidad imágenes de experiencias pasadas, pero quise darle pausa a mi mente y a mi corazón, tratar con amor cada recuerdo que me iba enfrentando a ese peso adolorido que se mantuvo dormido bastante tiempo.

Pensé en cual había sido la manera en la que había venido alimentando ese negativo, las repercusiones que tuvo en su momento y así fue sencillo identificar mi núcleo familiar como algo que a pesar de encontrarse fuera, son el principal agente proveedor de la fuerza que me El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 170 acompaña permanentemente. Entonces pude ver que sin antes sanar lo más cercano y lo más propio como es Padre y Madre, se vuelve casi imposible llegar a los lugares e intentar sanarlos, supe que sin claridad en el propósito que me acompaña lo que está más pronto es la confusión.

Para continuar con la noche se nos sugirió salir, como parte del proceso era necesario estar frente a un pequeño nacedero de agua ubicado a pocos pasos del Bohío, fue desde allí desde donde escuchamos la respuesta que iba a guiar los pensamientos que cada uno de forma individual y en absoluto silencio había venido trabajando hacia unas horas, las palabras de la hija mayor del Mamo fueron muy claras, aprobó el proyecto que por años se ha venido adelantando mediante el esfuerzo y la dedicación de cada uno de los que han intervenido desde la línea y desde el semillero, noto y resaltó la nobleza que se encuentra implícita en el proyecto, pero con fuerza y dulzura dijo que faltaba más cosas aún, ahora nuestros pensamientos y acciones deberían estar guiadas por la fe, la seguridad, el amor, la valentía y un corazón noble y dulce para que de este modo, se construyera algo más que un plan individual, siendo éste algo importante y fundamental, era momento de construir entre todos un proyecto que nos unificara más allá de lo físico, para así mantener la claridad y la fuerza; fue reiterativa en nuestra tarea de alimentar y nutrir el alma y el espíritu para así poder caminar con humildad, nobleza y sencillez.

En ese instante para mí no había porqué dudar, era necesario escuchar con atención y fe la traducción que estaban haciendo para cada uno de nosotros, fue así que el silencio de la noche acompañó perfectamente la lección y la terea que se nos estaba entregando.

A su vez la tierra también nos estaba escuchando, ese pequeño nacedero de agua era la vocera y la representación más cercana que transmitiría a todas las lagunas y lugares sagrados que queríamos recorrer, todo aquello que cada uno de nosotros mentalmente estaba confesando, contando o pidiendo como herramienta para emprender nuestro viaje. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 171

Durante algunos minutos no recuerdo exactamente qué tantos estuvimos en ese proceso meditativo, frente a la laguna, bajo el cielo, iluminados por el brillo de las estrellas y con la compañía de todos nuestros ancestros. Ese momento presentarme era a la vez presentar mi familia, mis raíces, mi pasado, mi presente y mis sueños a futuro; recorrer despacio cómo había sido el llamado que me tenía aquella noche en ese precioso lugar, estar de la mano de lo bueno y lo no tan bueno, sólo así vería como de forma paulatina mi verdad más inmediata.

Ahora la pregunta estaba todo el tiempo rodeando mi mente y, sin tener aun completamente superada esa primera pregunta de ¿Para qué iría a los lugares sagrados? Se venía el ¿Cómo? ¿Cómo llevar alimento para nutrir en espíritu la Tierra? ¿Cómo presentarse? ¿Cómo caminar, ver y sentir en cada lugar? La palabra sabia que en ese momento surgió de mí fue tranquilidad, tranquilidad en su expresión más pura y natural sería lo que guiaría mi camino, sin caer en el orgullo o la arrogancia de haber culminado la tarea y sólo sentirse aparentemente tranquilo; por el contrario, significaba adentrarme en la sinceridad, la serenidad y la calma de ir aceptando y haciendo parte de sí lo que con el transcurso del proyecto iría fluyendo de mí, mis compañeros y los lugares sagrados.

Para mí había que curar y apaciguar el fuego interno antes de poder ir de viaje; aún faltaban ojos que miraran más allá, que vieran en la oscuridad, en el interior y con dulzura, para así permanecer atenta estando frente a la inmensidad y el poder de cada lugar. Manos para sembrar, construir y cuidar de mí misma y a su vez de los lugares que fuera visitando. Pies para caminar con paso firme, conectada a la tierra y al territorio que me enseña y me pertenece.

Sueños y la manera en la que en ellos se plasmaría lo positivo y lo negativo de mí ser, sentía que a ellos también había que alimentarlos, fortalecerlos, no dejar que se estancaran, para que con el paso del tiempo los viera firmemente reflejados en mi realidad más inmediata. Todo eso junto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 172 iba a impedir que alguno perdiera el objetivo y terminara con cargas más pesadas de la que podíamos cargar, o para mí me significaba el camino adecuado para no perder el rumbo, sentía que cada cosa en su debida proporción daría dirección al proyecto. No siendo más por la noche y después de una plática casual dentro del Bohío cada uno de nosotros fue a dormir.

La mañana siguiente, muy temprano el Mamo nos llevó a un lugar cercano a la casa, allí nos sentamos todos y comenzamos seguidos por su instrucción a pensar en cosas positivas, sueños, sentimientos y sensaciones, nos dio de tomar un poco de chirrincho, luego rodeando el cuerpo de cada uno de nosotros fue salpicándonos con dicha bebida y por ultimo dijo que enjuagáramos nuestra boca con ella. El ritual no me dio tiempo de pensar en muchas cosas, solo estaba concentrada en lo que había venido pasando, en lo personal me impresionaba la cantidad de usos que tenía ésta bebida, sentía que todo este proceso había sido para de alguna manera bendecirnos, bañarnos y limpiarnos con lo que para ellos era sagrado y que de forma inexplicable para mí también lo era, pues sentía con cada gota que me caía como se limpiaba mi cuerpo, me estremecí y sentía escalofrío, con lo de la noche anterior y esa mañana había logrado limpiarme desde dentro.

Luego de esto me sentí inquieta y quería permanecer en silencio y sola para pensar bien lo que había sentido la noche anterior, quería estar segura de que aquellas respuestas que tenía en mente seguían siendo las adecuadas. Mientras mis compañeros hacían diversas tareas yo me quedé dentro de la maloca para escribir, mientras lo hacía creía comprender vagamente la difícil tarea del mamo al intentar traducir al español lo que en su lengua le comunicaban a él durante el ritual de trasnocho previo incluso él había dicho: “Sería más fácil si nosotros habláramos su idioma, que aunque siendo uno solo, no es igual como suena en español, a veces creemos que sabemos hablarlo pero la verdad no es esa y llegar a ello requiere de años”. Intentar transcribir lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 173 que el corazón entiende se vuelve como intentar llevar a cabo la misma tarea que desempeñaba esa noche el mamo y su hija, pasar un sentimiento que surge en la tranquilidad del bohío, acompañado de los sonidos de la naturaleza al papel y en unas simples letras, a veces se convierte en la tarea en la que se tergiversa el verdadero significado que por naturaleza surge, pero que se complica al explicarse, ya que las palabras que existen no satisfacen la dimensión que implica esa sensación bonita de encontrarse con uno mismo.

Se había llegado la tarde y todos mis compañeros habían empezado a llegar nuevamente al bohío, yo me sentía más tranquila al poner de forma clara todo lo que había experimentado durante la noche anterior, nos dirigimos nuevamente al Bohío todos en grupo para recibir tan esperada noticia, el Mamo y Susanita comenzaron a hablar en un tono amable que me daba la impresión de que habrían buenas noticias, efectivamente dijeron que la Madre había escuchado la sinceridad de nuestro propósito y junto con los abuelos habían aprobado nuestro viaje, aunque como petición estaría la de volver allí a confieso cada que visitáramos uno de los lugares sagrados, pensaba que en cierto modo siendo ellos nuestros guías tendrían que estar al tanto del proceso que llevábamos como grupo.

Dijeron que había que evitar las peleas, los altercados y discusiones entre nosotros, pues pese a que las cosas se tornaran difíciles para cada uno, era la fuerza y el pensamiento bonito que llevaba el proyecto lo que nos mantendría unidos. Por otro lado y algo que tomé muy personal fue cuando dijeron que la pareja que había dentro del grupo, tenía que permanecer unida, pues durante el camino podrían surgir altercados pero había que evitar los malos genios y las discusiones, esto permitiría llevarnos y dejar lo mejor de sí en cada lugar sagrado. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 174

Dimos fin a la noche pues pocos de nosotros hablamos, así que ya cada uno con la noticia de aprobación se quedó en silencio, el Mamo y su familia se fueron a descansar y nosotros permanecimos un par de horas charlando hasta cada uno ir a dormir, en ese momento me sentí fuerte y limpia, sentía que así como lo había dicho la hija del Mamo en el grupo estaría la unión y la fuerza que en caso tal pudiese faltarnos como individuos.

LA OSCURIDAD Y LA NOCHE COMO LA GUÍA FEMENINA ESPIRITUAL.

Tatiana Sánchez

La salida da inicio en las horas de la tarde en el municipio de Facatativá Cundinamarca, en un lugar llamado las piedras del tunjo, ya habíamos asistido unos meses atrás a un ritual de pagamento, sin embargo, ésta vez era diferente, la salida estaba prevista para realizar un ritual de trasnocho, partiendo de esto y sabiendo que nunca antes dentro del grupo de investigación y semillero se había realizado dicha actividad en éste lugar, fue inevitable comenzar a experimentar una serie de sensaciones que oscilaban entre angustia, miedo e incertidumbre, puesto que no habían referentes acerca de lo que podría contarnos ese lugar en la noche.

Por otro lado, la fe en el propósito de estar y caminar éste camino ancestral, mantuvo mi cuerpo tranquilo y sereno, aunque los afanes de la ciudad entre trancones y diligencias me tenían algo agotada, llegué al lugar en compañía de mi Padre, veníamos de un viaje y él como es costumbre me llevó hasta el parque, ambos entre las ocupaciones y el cansancio no tuvimos tiempo ni de comer, sin embargo, el acampar en aquél lugar me emocionaba muchísimo así que el hambre podía esperar.

Luego de la llegada a la cueva en la que íbamos a permanecer el resto de la noche, acomodar las cosas y cenar algo cada quien tuvo espacio para relajarse un poco, espacio que en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 175 lo personal necesitaba bastante; yo decidí salir a recorrer el lugar junto con un compañero, caía la tarde y poco a poco el lugar iba quedando vacío, eso nos permitió contemplar con más calma el hermoso paisaje que se dibujaba en el cielo, sin haber estado antes allí el lugar me resultaba familiar, eso hizo que la calma fuese aún mayor, pude concentrarme en lo maravilloso del éste y pensar en la experiencia que se acercaba; pronto llegó la noche, tan clara, tan hermosa, el cielo ya oscuro se fue iluminando con las muchas estrellas que comenzaron a aparecer, yo sólo quería ver el cielo me daba tranquilidad y una sensación de paz, me recosté un par de minutos antes de comenzar con la actividad, tenía una sensación de amor que iba reduciendo la nostalgia previa por estar lejos de casa, así que pensé que ese lugar podría convertirse en mi morada para esa noche.

Pensé que la libertad de los seres humanos por momentos se les convierte en simples deseos por querer andar solos. Pero realmente divisar la responsabilidad y el valor que la tarea en sí misma tiene, requiere de un esfuerzo tanto espiritual como físico, para mí todo este tiempo lo había requerido. La guía y el acompañamiento de los abuelos, de Padre y Madre, por años e incluso desde la tradición, creo que es lo que ha evitado que después del choque que dejan los grandes tropiezos se limite mi fuerza y la entereza por seguir adelante. Las heridas profundas y los desconsuelos de la mano del amor, se me han convertido en las más grandes lecciones, que sólo desde la vivencia me fue posible hacerlas parte de mí, para aprenderlas y convertirlas en una fortaleza.

Mirando el cielo recordaba un par de lecciones que había aprendido durante todo el proceso, ahora sabía que todo es alimento, las cosas dentro de mí se nutren mutuamente, la fe como el conocimiento en lo meditativo de la concentración, se había vuelto la producción armoniosa que me permitía conocer en qué estado me encontraba, así mi sabiduría se nutría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 176 constantemente, entre lo positivo y lo negativo, así había forjado la base que ahora constituía mi conocimiento individual.

Siempre habíamos estado en la compañía del Mamo o del Abuelo en el transcurso de los diferentes trasnochos. Por tanto, en esta oportunidad la ausencia de su compañía al menos física, dio un giro algo diferente en el transcurso de la noche; en mi cabeza esta situación se parecía al deseo de un padre por dejar ir a su hijo a aprender por sí mismo, dejar que éste descubriera por sí solo dentro de sí la capacidad que todos tenemos de ser hombres, mujeres, padres, abuelos y niños. De esta manera, al unir una experiencia con otra, la diferencia nos daría el inicio de una importante lección.

Por el momento me sentía como una niña pequeña en busca del aprendizaje, estaba andando por primera vez sola; me recordaba a la sensación que se sentía cuando mi padre había quitado las ruedas de apoyo de la bicicleta, él depositaba su confianza en mis conocimientos y habilidades, había decidido soltarme a andar y descubrir por mí misma las enseñanzas del camino. Pensaba que quizá el Mamo y el Abuelo en su infinito conocimiento, habían depositado su confianza en nosotros para que recorriéramos los lugares sagrados, con el conocimiento que nos habían proveído junto con el que cada uno de nosotros tenía de manera innata. Seguramente confiaban más en nosotros de lo que nosotros mismos lo hacíamos o al menos yo lo hacía.

Mientras apreciaba las constelaciones del cielo, aumentaba el frío de la noche y la oscuridad se hacía más densa. Era momento de iniciar la preparación cotidiana previa antes de un trasnocho; alistar el fuego, abrigarse un poco, ir en busca de silencio y concentración para de este modo enfocar el pensamiento hacia el propósito individual y el colectivo. Yo quise agudizar mi vista y mi oído para no estar con arrogancia o distraerme con facilidad durante el ritual; en primera instancia eran los requerimientos básicos que se me ocurrían para iniciar. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 177

Iniciar con un saludo a todas las autoridades, las energías y las fuerzas que nos acompañan se ha convertido más que un requisito, una necesidad de agradecer y al tiempo retomar la fuerza que a veces pareciera ausente; hacerlo de corazón, desde el pensamiento o la palabra, pero siempre con la intención de absoluto respeto y honra. Cada quien a su manera cada quien desde donde su experticia le permita, no importa desde que se haga con corazón dulce e intención bonita de honrar ancestros, de enaltecer su labor y agradecer su guía espiritual y física.

Nos sentamos en círculo y comenzamos con el saludo habitual, saludar a la madre y al padre tanto espirituales como físicos, a los elementales, las plantas sagradas, los linajes de cada uno de nosotros, los miedos, las virtudes y las fortalezas; entendí que esa era la manera justa y adecuada de retomar la fuerza, la fe y la entereza en los propósitos individuales y como grupo, tenía la mente algo dispersa, durante el inicio de la noche no pude concentrarme por completo, sentía que faltaba algo, era una sensación de extrañeza inexplicable, fui observando con calma el porqué de esa sensación hasta sentirme cómoda, recordaba el calor de los abrazos de mi madre, la serenidad que me brindan sus caricias y la seguridad que siento al estar con ella; fue entonces que el sentimiento de soledad y desamparo fueron desapareciendo; finalmente según las indicaciones del mamo y en los sentimientos propios iba en busca de la Madre, en busca de estar y sentir junto con ella.

Así fue llegando el momento en que la inexperiencia de andar solos se mostró de la manera más cruel, para mí se camuflaba en el miedo que caracteriza estar en la oscuridad de la noche, en la extrañeza que me surge ante un lugar que no conozco, en el afán por querer salir de la incertidumbre e ir por un camino controlado y conocido como lo es para mí la ciudad, en la nostalgia de recordar que a pesar de gozar de una aparente compañía estaba completamente sola. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 178

Poco a poco las condiciones se fueron dando por sí solas, casi que la noche misma nos hablaba con señales e iba pidiendo lo que quería, sentí que era silencio, admiración y oscuridad.

Tal vez la intención de la noche misma estaba guiada por el silencio y la oscuridad, en lo personal así era para mí. Pedía al viento que la suavidad de la brisa apaciguara el fuego en mi interior, mi corazón y mi mente estaban ardiendo entre pensamientos y sentimientos confusos, era momento de frenar.

A petición de una compañera fue apagado el fuego, mantenerse en calma y puro para nutrir el espíritu de los lugares sagrados evidentemente requería de valor, unión y fortaleza como grupo, tarea que para mí se trabaja dentro y fuera de los lugares sagrados, en el cotidiano vivir y en la práctica de la vida misma pero que allí tendría que estar con mucha fuerza. Fue pasando por mi pensamiento los propósitos y las tareas prometidas en Silvania respecto a lo personal y como parte de un equipo de trabajo, en este proceso encontré que me faltaba mucho por dar antes de empezar a recibir, faltaba mucho por trabajar dentro, para ver reflejado en mis acciones aquellos resultados que con ansia deseaba.

Indudablemente la guía por parte de los sabedores me daba soporte, y ese día sin la guía física por parte de los ellos perderme era el primer obstáculo. Aunque el abuelo me hubiese dicho que dentro de mí había un abuelo, un hermano, un guía y un aprendiz, diferenciarlos y apoderarse de su fuerza esa noche no me resultó ser una tarea sencilla, habría que ir agudizando los sentidos internos como externos, era como caminar por una delgada línea entre realidades opuestas, cualquier cosa podía ser tan cierta o tan imaginada como mi fe me permitiera considerar.

Entonces recordé el mensaje que había recibido en Silvania, enfriarnos y dejar a un lado las dudas, quizá ese era el silencio que se me imponía, sin querer apagar el fuego obligaba a cada El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 179 uno de nosotros a encontrar algo en la oscuridad, algo en la noche, el lugar y en estar concentrados en las reacciones internas y externas de nosotros mismos. En la oscuridad encontré el amor, en la noche encontré la luz en mí interior y en el lugar encontré el valor.

Esto comenzaba a ser una experiencia sumamente significativa, el grado de dificultad iba aumentando, era nuestro primer trasnocho sin la compañía de algún sabedor indígena, sólo estábamos nosotros como grupo y enfrentar la oscuridad se convirtió en el primer obstáculo que ponía el miedo, sentí que mi compañero del lado experimentaba algo de temor e inquietud con

éste cambio, así que tomé su mano intentando darle un poco de la tranquilidad de la que en ese instante tenía, concentre mi mirada hacia el ingreso a la cueva pues era por donde se filtraba la luz de la noche hacia el interior de la cueva y de manera paulatina fui sintiendo cambios en mi cuerpo, mis pensamientos y mi sentir.

Después de un par de minutos la sensación de frio se había disminuido en un porcentaje muy alto, sentía como el temblor disminuía, comencé a sentir el miedo y la incomodidad en mi compañero del lado sin ver podía tener la sensación de estarlo viendo, más allá de ver un cuerpo frente a mis ojos sabía que él estaba allí y casi que percibía su respiración acelerada y sus movimientos, luego dirigí la vista al resto de mis compañeros y entre sombras escasas sólo pude comenzar a creer en que estaban allí, experimentando, viviendo y sintiendo conmigo las enseñanzas de la oscuridad, de mi lado izquierdo se encontraba la profesora y prestando atención a encontrarla, encontré tranquilidad y confianza.

Mis pensamientos eran más tranquilos y dulces, deje los malos recuerdos, los miedos y arrepentimientos, casi que ellos por sí solos se movieron a algo totalmente opuesto, la sensación de no poder ver nada en el exterior, me brindó la oportunidad de ver y sentir con mi corazón, empezaron a aparecer recuerdos de las personas que me inspiran amor, seguridad y confianza, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 180 fue entonces que me sentí más liviana y más fuerte, sentía como el amor fluía con fuerza, la pureza de dicho sentimiento desinteresado me hizo creer en que junto a esa fuerza indescriptible sería posible seguir.

Para mí se nos pedía ver con los ojos cerrados, ver más allá de la guía que se tiene en los momentos de luz, vislumbrar en la intensidad de la oscuridad algo más allá de lo negativo de mis miedos. Comencé a sentir la suavidad del viento con las manos frígidas, a acariciar la tierra que antes me producía incomodidad y sentirla propia, a cobijarme del frío para saber que en mi interior también hay un lugar sereno capaz de calmar y apaciguar la vibración de los sentimientos negativos, a soltar con cada latido de mi pecho una fracción de dolor, a dejar emerger de lo más profundo de mi mente los esbozos del recuerdo que entristecen mi alma e inundan de fuego mi corazón, contaminando mi vida y en ese sentido también a aquél lugar sagrado.

Por un momento la velocidad de la mente y el afán por querer tener, antes que querer aprender, me llevó a pasar mil pensamientos que confundían e impedían la posibilidad de mantener una vida tranquila; pero incluso ahí descubrí que no soy sólo eso, hay más que memorias, lógicas y sentimientos; mi ser también sería capaz de equilibrar en su debida proporción cada cosa, capaz de mantenerme con nobleza, humildad, honestidad y sencillez que son hasta el momento la guía que acompaña nuestra tarea y la que quizá pueda sopesar mis cargas hasta alcanzar el equilibrio.

Por momentos emergía de mí esa ausencia de conexión, ese afán de búsqueda limitaba mi fe, pero también desde la fuerza colectiva se alimenta lo individual así que nos mantuvimos unidos durante gran parte de la noche y algunas horas de la madrugada. Teníamos la tarea clara de nutrir los lugares sagrados a través de la danza y el canto, pero la quietud, la timidez o incluso El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 181 el frío fueron el reflejo de la desconexión y el desapego a costumbres y rituales propios de este territorio, el caso es que sólo danzaron por un par de minutos ambos profesores, en mi caso prefería aguardar en silencio, así me sentía bien yo y también al lugar. En ese momento para mí la verdadera tarea estaba en ver minuciosamente a partir de donde radicaba el desapego, para de este modo, arraigar mi corazón en lo que allí me resultara ajeno.

La desconexión de la Tierra, los rituales, las costumbres y el arraigo a lo propio trae evidentes repercusiones en la identidad de nosotros como seres humanos pertenecientes a este territorio, así que perderse en éstos rituales resulta más sencillo de lo que parece. Además, la costumbre de estar en la “comodidad” de la ciudad, que por cierto conocía desde niña y en cierto modo sabía manejar de forma natural, impedía que la idea de escuchar la historia que estaba impresa en el lugar se perdiera fácilmente. Pensé que lo femenino se había convertido en el capricho por mantenerse igual a lo masculino, dejando de lado lo maravilloso de ser y empoderarse de la verdadera fuerza femenina. Era tan evidente el desarraigo en ese momento para mí, pues estaba en mis días de ciclo y esto pese a las enseñanzas de los abuelos me hacía sentir cierta incomodidad, recordaba que para muchas este hecho hermoso era sinónimo de desprecio pues les generaba una especie de enfermedad grave.

No quería sentirme así, quería centrarme en la oportunidad clara que se me había otorgado como mujer para renacer, limpiar y armonizar mi ser con lo inexplicable de la vida.

Pues ya el mundo estaba lejos de reconocerlo como el ritual de limpieza más propio de la mujer, y en este sentido, como la principal virtud y fortaleza que nos acompaña a cada una de forma natural, es el momento en el que se me permite entrar en sincronía con mi cuerpo, ver cómo está y apreciar el porqué de los dolores que me aquejan y me quebrantan; es la ocasión adecuada para El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 182 iniciar a cuidarme, analizarme y desenvolverme detenidamente hasta ver con claridad qué produce tanto desorden o descontento como para turbar en orden natural del ciclo.

Recordaba las palabras dichas por el abuelo en uno de los trasnochos y sentía que no debía olvidar que al limpiar la Madre, la Tierra, la Mujer, es como surge la posibilidad de encaminarnos hacia la sanación ya que a su vez se está limpiando, ordenando y armonizando al

Padre, a la Semilla y al Hombre.

Sentía que era tanta la fuerza que se despertaba dentro de la mujer en sus días de ciclo que no necesitaba relacionarme con las plantas sagradas, en mí estaba la fuerza y la claridad del entendimiento para ver tal cual me encontraba, luego de pensarlo tanto el profesor Luis como la profesora Andrea lo afirmaron, pues iban a hacer uso de la planta sagrada del Tabaco y debido a mi estado de Luna, esa noche no podría acompañar a mis compañeros en su ritual de relacionamiento con la planta sagrada, ritual que en lo personal me atemorizaba, ya estaba en un proceso desde mi corazón para dejar de fumar y no me sentía capaz de hacerlo en ese momento.

Para mi razón y mi lógica impedía entender cómo la nicotina que nos mantiene adictos, en su raíz más pura que es la planta de Tabaco, se convierte en la mediadora que me ayudaría a emprender por sí misma el camino que realmente limpia y cura, sin que esto me implicara contaminar mi espíritu o el funcionamiento de mi cuerpo. En ocasiones, puede más esa sensación que inunda de miedo el pensamiento, que la convicción de estar en el camino correcto, pero es sólo durante el cese a la agitación de ideas rumiantes que es posible ver y entender las lógicas desde el sentir del corazón: la diferencia de la planta procesada que nos vuelve adictos, a aquella pura y limpia, radica en la intención que lleva implícita cada una en su esencia. En una, se encuentra la codicia y el poder por acumular y gobernar, lleva en sí misma una energía pesada y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 183 oscura, mientras que, en la raíz de la esencia pura de la planta, se encuentra la dulzura y la fuerza de enfrentarse y fortalecerse incluso desde lo más profundo de la tristeza y el dolor.

Finalmente, no hubo más que salir a pagar y agradecer por las lecciones que se habían reflejado para cada uno de nosotros, elegir el lugar adecuado en el que las ofrendas de cada uno iban a permanecer, dar infinitas gracias y deslumbrarse por última vez en esa noche de ese cielo claro y espectacular que nos brindaba la noche, bastó un abrazo para ir a descansar tranquilamente.

UNA LUZ QUE AGUARDA EN MI INTERIOR PARA CURARME.

Tatiana Sánchez

La palabra que surge cada trasnocho es diferente, uno llega diferente y de hecho ya me atrevo a pensar que el objetivo de ir es salir totalmente diferente a como se llegó. Aunque cabe resaltar que esta serie de cambios no implican una incongruencia con el trasnocho anterior.

Nos reuniríamos junto con los compañeros de semillero de ancestral en el Municipio de

Cota para ir a trasnochar nuevamente con el Abuelo Fernando, llegamos y entramos inmediatamente al Bohío para iniciar con el ritual, dentro de los compañeros había uno nuevo que últimamente según nos contó el abuelo venía adelantando programas dentro de la comunidad

Mhuysca de ese territorio, luego él mismo comenzó a hablar explicando la labor que realizaba allí, a modo general entendí que estaba allí para rescatar la sabiduría de la medicina tradicional, pues sus estudios científicos sentía que no habían avanzado lo suficiente.

El concepto de enfermedad se ha mantenido años y años; desde todas las culturas, países y tradiciones se ha venido intentando dar respuesta al concepto, aplicando métodos provenientes de los diferentes campos, unos apuestan por la medicina oriental, por la occidental y otros pocos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 184 por la Chamanica ancestral. Cada uno con sus métodos y sus formas, cada uno viendo el origen de la enfermedad desde un inicio totalmente opuesto al otro. Basada en ello y desde una creencia netamente personal, veo que lo indígena encierra en gran parte a los demás, da explicación tanto al inicio, como al transcurso y al mantenimiento de la enfermedad en el sujeto, la consciencia que cada uno tiene de sí mismo en cuanto a la relación entre cuerpo y alma toma una fuerte relevancia en la medicina natural indígena y para mí es una manera adecuada de ver y analizar tanto el concepto como sus consecuencias.

A partir de ésta premisa fue surgiendo dentro del círculo de palabra el concepto de enfermedad, yo guardé silencio y mantuve mis opiniones en mi mente, sin embargo, eso no impidió que a su vez fueran surgiendo dentro del círculo.

Creía que incluso en el pensamiento cotidiano era sencillo identificar la enfermedad como algo ajeno y extraño que proviene de fuera. Sin embargo, aunque se considera impropia al ser, tampoco se tiene explicación de dónde proviene y del por qué se mantiene adherida a cada uno de nosotros, desgastando a su paso la fuerza individual de sanación que creo yo cada uno posee de manera innata, pienso que el verdadero problema de estar enfermos radica en el desarraigo anta la naturaleza propia del ser humano, su naturaleza y sus raíces pues últimamente veo que el mundo a mi alrededor e incluso yo misma me he convertido en un espécimen reproductor de trabajo y capital. Lo que como consecuencia hace que olvidemos la sabiduría de abuelos y ancestros.

Si se situara la enfermedad como algo externo y ajeno a la naturaleza del propio ser, pienso que se estaría limitando la posibilidad de explotar el poder natural que cada uno tiene para sanarse. Hay que ver la relación que existe entre el estilo de vida, el cuidado, la atención y la armonía que tenemos con nosotros mismos para así determinar el causal que mantiene la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 185 enfermedad, en lo personal los malestares que me aquejan soy consciente que son el resultado de mis descuidos. Sé que en mí no hay una concordancia en el pensar, hacer y sentir al momento de interpretar el lenguaje de mi cuerpo ya que incluso ese lenguaje, se ha deteriorado al punto de resultarme extraño y casi inconcebible, poner atención a ello no ha sido de mi interés sin importar que tan fuerte se presente la molestia.

El concepto de curación para mí existe sí y sólo sí hay un despertar en la consciencia individual de cada uno de nosotros ante la enfermedad, en mi caso sabía que hay un porqué, un inicio y un proceso que alimentaba diario y, ésta relación era lo que mantenía la enfermedad adherida y apoderada de mí. Para empezar recordé mis dolencias: dolor de espalda, cabeza y dificultad al respirar o realizar algún ejercicio físico, recordando cada una de ellas inmediatamente aparecía lo que hacía para mantener la enfermedad, había dejado el gimnasio el cual mantenía mi dolor de espalada neutralizado, no comía ni dormía bien lo que aumentaba la frecuencia de mi migraña y por último, fumaba constantemente. Entonces pensé definitivamente nadie mejor que yo misma para hacerme daño.

Por años se ha venido creyendo que la medicina que cura lo hace a partir de medicamentos y pastillas, pero en ese transcurso de tiempo la inconformidad ha intercedido, los medicamentos no dan una respuesta satisfactoria a las enfermedades que nos aquejan, para el compañero no las había dado y según manifestaba el Abuelo para él tampoco era así, según él era tanto medicamento lo que nos mantenía dependientes y cada vez más enfermos, decía que no bastaba con solo la ciencia y la tecnología, pues verse ahogado entre cables y artefactos mecánicos no sólo contaminan la tierra, sino que además son el verdadero origen de las enfermedades modernas: los fuertes dolores de cabeza, el estrés e incluso la embriaguez El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 186 espiritual y del cuerpo parten de ese abuso de artefactos, ya no hay tiempo para la vida, no hay momento para el amor y mucho menos hay espacio para el crecimiento espiritual.

Yo lo escuchaba atentamente y sentía que tenía mucha razón, sus palabras salían como con tristeza y desilusión, supuse que el dentro de sus amplios conocimientos de medicina tradicional aun sabiendo la cura a las enfermedades que nos aquejaban se veía impedido al momento de brindarla, pues al igual que como yo pensaba él había dicho que la solución dependía de cada uno de nosotros.

Prosiguió diciendo que la rutina ha hecho del SER HUMANO un “ser” mecánico dominado por el dinero y el poder, yo sentía como había olvidado la medicina tradicional y había dejado de lado el poder de las plantas y su infinita sabiduría, sentí que todos concordábamos en silencio con algún gesto que los remedios de la abuela se habían convertido en un chiste de salón, una solución de explicita emergencia o un método exclusivo para campesinos, personas de bajos recursos, indígenas o en el pensamiento más ignorante, para brujos. Era triste experimentar esa sensación de ignorancia, pues sentía que como mujer debería saber más de remedios puesto que venía de una familia criada en espacios rurales donde la medicina de primera y única mano era esa.

El abuelo con un tono de voz empoderado y como intentando darnos animo dijo que para volver a la tierra se debe tener un interés por el saber tradicional, pues las plantas son tan nuestras como lo es la enfermedad, había que desarrollar un conocimiento que permitiera ahondar más, apreciar más, agradecer más y desperdiciar menos; entendí entonces que no podía ser posible que cruzáramos por un bosque cortando plantas que curan y protegen, había que empoderarse del conocimiento de este territorio y hacerlo parte de la cotidianidad, así como El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 187 hemos afianzado la relación con las cosas que nos ocasionan tanta contaminación y enfermedad como los aparatos electrónicos.

El abuelo decía que para ello era necesario desprender la idea de acumulación de capital, del poder y la avaricia, pues esto permitiría quitar la venda de los ojos, ir más allá de esa constante necesidad de conseguir y poseer bienes materiales, quitar del pensamiento la codicia y la ceguera que nos mantiene únicamente en busca de poder, reducir el valor que tiene el dinero en nuestra vida, quitar las máscaras y las vestiduras que cubren la realidad del ser humano y al fin, rescatar a ese ser humano en su sentido más amplio y profundo. Yo me sentía como regañada, pues mis objetivos e ideales hasta ahora habían estado direccionado a cosas que requerían de dinero, capital y acumulación, pero nunca había cuestionado la utilidad de esas cosas en mi vida así como lo hice esa noche, por un momento sentí que todo lo que había conseguido no eran más que vacíos representados en dinero.

Ahora el reto para mí era ir más allá de lo tangible para ver la verdadera fuerza espiritual, esa que guiaría de una mejor manera mi camino, al entender lo que realmente es el sacrificio, aquella capaz de dar origen a las más grandes lecciones, la que fortalecería mi fe y con humildad dejaría ver lo diminuto de mi conocimiento en comparación con la infinita sabiduría de la naturaleza, la que aumentaría mi esperanza y dirigiría mis acciones en busca del verdadero y profundo valor de las cosas. En conclusión, esa fuerza que cada uno de nosotros tiene dentro de sí y por momentos olvida su importancia.

Despertar esa consciencia hizo que me fuese posible entender que la Tierra no se alimenta con billetes morados, el aire no se limpia con tanques de oxígeno, la semilla no crece con la luz artificial, el cauce del río no sube con el agua embotellada y las plantas no se riegan con químicos. La Tierra necesitaba de un verdadero alimento para dar abasto a tanta demanda de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 188 seres vivos, no somos los únicos pertenecientes a este territorio, somos una pequeña parte que abusa de su poder de raciocinio para exterminar todo aquello que imposibilite su proyecto insaciable. Los recursos también se agotan, los lugares sagrados debían necesitar en ese momento de curación y alimento, como en cualquier relación se debe sopesar las cargas, debe existir reciprocidad y equilibrio para mantener ambas partes estables, pero con la Tierra sentía que habíamos fallado.

El abuelo decía que pocos agradecían por la comida que se cultivaba y se cosechaba para el alimento, ya no estábamos teniendo en cuenta los cambios de clima que estaban dañando las plantas; para mí esto fue muy fuerte yo solía ser desagradecida con los alimentos en muchas ocasiones, sentí que era tanta la desconexión que en ocasiones resultaba más sencillo respirar en la ciudad que en los espacios naturales, situación que en lo personal me resulta absurda pero sumamente posible y aterrizada a la realidad.

Seguido de esto el Abuelo preguntó acerca de cómo nos había ido durante el trasnocho en

Facatativá, yo temía que llegara esa pregunta pues dentro del grupo no lo habíamos conversado antes y no sabía que responder, en vista del silencio el profesor Luis Eduardo le comentó a modo general al Abuelo que había experimentado desunión, falta de fuerza y fe como grupo.

Yo pensé que el abuelo se enojaría o algo parecido, pero por el contrario nos miró a todos y en un tono muy amable nos dijo que tras el Chunzua se encontraba una fuerza muy grande y significativa para todo ese territorio, que saliéramos a verla, todos nos levantamos y salimos del

Chunzua, nos situamos al lado derecho de éste y desde allí nos indicó que miráramos hacia el centro de la montaña que estaba frente a nosotros, dirigí la mirada hacia allí y entonces comencé a ver una luz justo en el centro. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 189

Sentí unas ganas incontrolables de agradecer pese a que sabía que el proceso de agradecer no es tan sencillo como decir gracias; sin embargo, la intención de agradecimiento y cuidado venía desde mi corazón, mirando fijamente la montaña y más específicamente la luz entendí que no es prometer para luego dejar de lado las promesas, se debe cumplir con los propósitos y las tareas a las que cada uno por sí sólo se ha comprometido. Yo tendría que ir a la montaña sagrada de Monserrate, cuidar un poco más de mí e intentar reducir la fuerza del negativo controlando el mal genio, la ira y el descontrol; pero hasta ese día estaba aún corta para lograrlo.

Había olvidado que aunque caminara despacio había que tener en cuenta que cada paso es un nuevo objetivo por cumplir, nada era tan metódico como parece; mantenerme en el proceso de búsqueda requería claridad en el propósito, por simple lógica no iba a ser posible encontrar aquello que aún me resultaba confuso, mi compromiso no podría ser un suceso intermitente que se pudiese apagar y prender según el lugar o el momento en el que resulte provechoso, entendí que comprometerse con algo requería no olvidar, ser disciplinada y realizando las tareas con amor y no como algo a lo que estaba en la obligación de cumplir. Si trabajaba con amor los resultados bien fuesen provenientes del negativo o del positivo, se convertirán en lecciones que llenarían de sabiduría y conocimiento profundo luego de haber adquirido de corazón el compromiso.

Hoy entiendo que caminar este camino requiere valentía y firmeza, pues ver y sentir en carne propia como surgen dentro de sí el miedo, el ego, la soberbia, la arrogancia y en general tantos sentimientos negativos dificultan la labor, por momentos se sesga la mente y se endurece el corazón; uno mismo va entorpeciendo el trabajo espiritual y por tanto el objetivo de fortalecerse fácilmente se confunde en el ego, la inseguridad, la incredibilidad y la comodidad de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 190 mantenerse bajo control. Adentrarse en el trabajo individual para mí era la tarea de creer en lo intangible, confiar en lo invisible e ir más allá de las lógicas que encierra la razón, así quizás comprendería qué era la luz en la montaña.

Una luz en la mitad de la montaña podría ser el simbolismo o la magia que se despierta dentro de cada uno de nosotros como respuesta a la búsqueda que iniciamos como grupo, era el momento de permitirse ver y descubrir lo tenue del brillo que llevamos dentro para mí así lo fue, pues vislumbre mi luz interior, me logré empoderar de mi fuerza intenté reflejar lo positivo que tenía dentro y, de este modo alimentar en igual proporción tanto a la Tierra como ella lo había venido haciendo conmigo.

Ahora de la forma más clara sentía que la guía, el maestro y el poder de sanación provenían de allí, de esa luz que la codicia ha venido apagando pero que aún se mantiene brillante irradiando su luz durante esos cortos momentos de entrega y fe. Esa luz que no sólo estaba en la montaña, sino que también estaba dentro de mí. Aquella capaz de aquietar el fuego interno, de detener el incendio que quema lo positivo y acrecienta el negativo en mi interior, de direccionar la inseguridad y el miedo que surge luego de ver cercana la posibilidad de descubrirme en la profundidad que encierra mi verdad.

Tanta mascara, tantos trajes aparentemente limpios y nuevos han disfrazado tan bien mis demonios internos que verlos invade mi pensamiento de confusión, mi cuerpo de enfermedad y mi alma de oscuridad, limitando la totalidad de mi ser a la quietud y el temor fraccionado que experimento a veces.

Cada experiencia individual es diferente, cada mensaje acorde a quién lo recibe toma un significado para su vida y su realidad inmediata. Los miedos se reflejan en cada persona en

ámbitos, tiempos y lugares diferentes, pero para mí lo bonito del camino es que se me permite ir El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 191 a mi ritmo, ir construyendo la claridad del propósito durante la búsqueda que inicié y que a la vez va a resultar fortaleciendo la búsqueda que mantengo dentro del grupo.

Así las cosas y tras haber pasado aproximadamente una hora fuera del Chunzua volví dentro junto con mis compañeros, así dimos fin al ritual y cada uno fue acomodándose para dormir.

LA OSCURIDAD DE MIS MIEDOS.

Tatiana Sánchez

Más que una visita, era cumplir con el compromiso previo con el Mamo, su familia y los grandes espíritus ancestrales que aguardaban en el lugar, íbamos para contar lo que había pasado durante nuestra primera visita a Facatativá, el ritual de confieso tendría lugar dentro del bohío en el que con meses de anterioridad nos habían dado permiso para partir; además del compromiso con el ritual mismo, yo pensaba en lo que sería confesar mi experiencia desde lo más profundo del ser a esas autoridades de respeto, sabiduría y honra.

Ya habiendo llegado al bohío los nervios me invadían escuchando las palabras del

Mamo, pues sus indicaciones, aunque hechas con palabra dulce, eran fuertes y claras, había que hacer confieso ante las autoridades que nos habían permitido ir, pues a pesar de en ese momento ellos estar acompañándonos era en el proceso de hablar y sentir, lo que permitiría darnos cuenta de todo aquello que había pasado por nuestro cuerpo, mente y corazón aquella noche.

En un principio el silencio fue más que incomodo, ni mis compañeros ni yo dijimos palabra alguna, a pesar de la indicación del Mamo, en mí no era falta de atención o de interés, sentía que no era el momento, el lugar ni la manera en la que daría rienda suelta a lo que aquella El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 192 noche había experimentado, faltaba confianza en mí y en mis compañeros así que el temor me hizo callar.

El primero en comenzar a narrar lo que había pasado aquella noche fue el profesor Luis quien decía que la sensación de muerte había llegado a él constantemente durante el trasnocho, al igual que la falta de fuerza y fe en nosotros como grupo, preguntaba al Mamo y al lugar mismo si era normal que esto pasara, si estábamos listos y haciendo las cosas bien.

Luego tanto el Mamo como Marianita nos reconfortaron de fuerza y tranquilidad, decían que el camino de lo indígena es sumamente largo y aunque en ocasiones se revistiera de temor e incertidumbre, luego dejaría ver su lado más bonito al descubrir en nosotros mismos lo hermoso del camino de la espiritualidad, que pensáramos que cada confieso era una manera de recibir guía y concejo por parte de los grandes sabedores que aguardan y cuidan de nosotros, pues eran ellos quien estaban con nosotros en la tarea que habíamos emprendido, que ellos allí sólo eran unos traductores del lenguaje que nosotros aun no estábamos en la capacidad de entender, que al igual, los abuelos estaban a disposición de nuestras dudas y miedos, incluso esa era la esencia de ir a confieso, reconfortarse en compañía de abuelos y ancestros.

Su discurso me dio un alivio enorme, saber que al igual que nosotros en algún momento incluso el Mamo requería guía, fuerza y valor; así como su hija necesitaba paciencia y dulzura me hizo entender que el miedo es también una manera de ser fuerte y descubrir un nivel más profundo de mí.

En ese momento todos seguíamos en silencio, así que el Mamo se retiró con su familia a dormir e hizo la advertencia de que si en algún momento decidíamos cantar o hablar dentro del bohío eso también estaría bien. Tiempo después de su partida comenzamos a charlar entre nosotros Viviana decía no haber tenido miedo aquella noche, la oscuridad le hizo sentirse El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 193 cómoda y le hizo ver y sentir muchas cosas, Andrés por su parte si había experimentado esa sensación y recordé haberlo percibido claramente aquella noche; por último, yo dije haberme sentido bien y tranquila pues lo que recordaba de aquella noche era el amor en su expresión más dulce y bonita.

Comencé a concentrarme poco a poco en esas sensaciones previas que habían modificado casi todo dentro de mí aquella noche en faca, intentaba comenzar mi ejercicio de confieso desde la claridad de mi pensamiento y la profundidad de mi sentir, empecé pensando que al igual que aquella noche, ésta también era una noche corta, sus horas de oscuridad eran pocas en comparación con lo que podría enseñar la profundidad de esos momentos oscuros habían imágenes, recuerdos, vidas, sueños...mil sensaciones por segundo iban surgiendo al momento de estar en el silencio absoluto, el exterior y el ruido desaparecieron, sólo quedaban las vibraciones que se manifestaban en mi pensamiento luego de haber experimentado la incómoda satisfacción de encontrarme conmigo misma.

Verme y sentirme en medio de la absoluta oscuridad que absorbe el ruido, la fe, la valentía e intenta apagar mi luz interior era el camino que ya no estaba dispuesta a tomar, desvanecer e ignorar la fuerza y la sensibilidad emocional que percibía no era una opción ahora; pues dependía de cada uno de nosotros apagar o darle fuerza a esa luz y, al igual que me había ocurrido en Cota, yo quería darle fuerza a mi luz interior, de mi dependía acabar su último destello o iniciar un incendio con ese rayo interno de amor, esperanza y fe que sentía iba creciendo en mí interior.

Pensaba que el mundo a mi alrededor se había encargado de ir robando un trozo de luz, pero me sentía como la guardiana de lo profundo que se escondía tras lágrimas y sonrisas, pues más allá del exterior estaba yo para señalar o defender aquella fuerza que iba sintiendo tan El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 194 propia, no importa que de fuera vengan dosis de miedo y que intenten como siempre arrebatar mi fe, haciéndome creer que nada va a exterminar la oscuridad. Sentía que si iba a ser el miedo quien dominara, la sensación de estar dentro de mí se convertiría en un momento confuso y por momentos absurdo; pero si por el contrario era el amor y la fe quien terminara por ganar esa la batalla, me iba a ser posible experimentar y saciarme de un momento sumamente sublime, significativo y nutritivo para mi ser.

Era estar en compañía de los ángeles y demonios que se encuentran dentro, el miedo aguarda y el amor parecía desquebrajarse de a pocos, pero justo tras ese momento fue la noche misma quien mostró su bondad, iluminando con la luz de la luna y las estrellas aquel horizonte extraño que en un inicio me parecía tan desierto, siendo entonces ahora ese desierto el reflejo de lo que estaba dentro y no fuera, sentía que había sacado el vacío del temor y ahora, era más fuerte al mirarlo de frente.

Esa misma noche tuve la oportunidad de soltar el miedo y buscar dentro de mí algo más allá de la oscuridad que mis ojos databan, pude sentir con más cautela el aire, la tierra, el amor, la esperanza en un nuevo renacer; aunque en su esencia misma la sensación resulta inexplicable, he de compararla con aquellos faltos de sentido óptico quienes luego de sufrir y casi llegar a ahogarse en las consecuencias de la carencia es que surgen con fuerza para aprender de ello y ver que en la esencia de ese algo hay algo por descubrir que les resulta aún más esencial, ahora se dan la oportunidad de caminar más lento, equivocarse más seguido y aprender de los errores, exactamente así lo sentía. La valentía de enfrentarme a ello hace que se fortalezca mi ser y es entonces cuando el autodescubrimiento acerca de mí misma se extiende y se profundiza enormemente. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 195

Luego de ello fui a descansar sintiendo que al menos por ahora era mi manera de confesar al bohío y a los abuelos lo que había sentido, pues había podido clarificar satisfactoriamente en mi pensamiento, todo aquello que había experimentado durante mi trasnocho en las piedras del tunjo.

APRENDIENDO A PAGAR EN POSITIVO

Tatiana Sánchez

Después de un proceso minucioso de preparación que implicaba dietar de algunas cosas como: el sexo, los excesos de carne, alcohol, pensamientos negativos, malas palabras y por supuesto sustancias psicoactivas y además de realizar algunos baños con plantas dulces la semana previa a la salida, finalmente llegó el día, ya con ayuda de los rituales de trasnocho y de confieso la calma del corazón, las vestiduras, los propósitos y las tareas previas que se habían venido trabajando de forma individual y colectiva, estaban en el punto exacto como para enfrentar con dulzura, amor y entendimiento los lugares sagrados, para así poder escuchar, ver y sentir cada cosa con el espíritu atento.

Dar y recibir en su debida proporción y de manera ordenada, se convertiría en el equilibrio que determinaba el resultado obtenido del propósito con qué se inicié la labor; adentrarme en el proceso y darme cuenta cuán adherida o qué tan distante estaba del camino, requería seguir de una serie de pasos, que al llevarse con dedicación y disciplina tanto del alma como del cuerpo, me iba a permitir el renacer de una conciencia más sensible a los espectros propios de la naturaleza.

Cuando dicha conciencia sale a flor de piel, me basta al menos algunas fracciones de segundo para reducir las distracciones en una proporción enorme, es entonces cuando la dulzura mi corazón se aferra al ser y me permite fijar la atención en lo particular de las cosas; la vida en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 196 los animales, el oxígeno en las plantas, la sombra de los árboles, la suavidad de la brisa, la inmensidad del cielo, los secretos que se sumergen en la profundidad de la laguna, las pureza de los caminos entre montañas, el frío del viento, la tibieza de un abrazo y la inminente compañía de la tierra, que abre sus brazos para recibir todo aquello que en pago quieran darle.

Sin embargo, entender nuevamente los lenguajes propios de la Tierra, es una tarea que se me dificulta constantemente al reconocer la cantidad de años en los que me he mantenido ciega y sorda, es por eso que en el proceso de darme cuenta de ese trasfondo inmenso que se dibuja entre paraísos naturales, me surge la sensación de despertar a la vida que me permite construir nuevos caminos de veracidad; el ensimismamiento y la concentración profunda me implica ver y sentir dicho lenguaje como algo nuevo, pero la sensación incontrolable de sentirse ajeno y reducirlo a simples asociaciones del pensamiento disminuye la grandeza comprensiva y armónica del ser y la Tierra; sin embargo, es la devoción y la fe lo que me permite llenar de significado la experiencia subjetiva de contacto conmigo misma y con la naturaleza.

Entonces me surge la posibilidad de verme y sentirme mientras estoy en un estado de plenitud, serenidad y calma; puesto que hay un despertar frente al mundo, las perspectivas que hasta ahora manejaba comienzan a volverse débiles, mientras otras como el amor y la fe se fortalecen indescriptiblemente.

Hay sin duda la posibilidad de tomar cada sensación en su debida proporción, ir ordenando cada cosa en su lugar, pero con una enorme diferencia, ya no son únicamente las condiciones externas al ser las que ordenan y direccionan las emociones, pensamientos y creencias, es uno mismo quien se convierte en el guía interno, capaz de establecer el significado tan profundo y la dirección de donde proviene cada cosa. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 197

Se me abre el paradigma y deja de ser un reclamo permanente del "¿Por qué sí? ¿Por qué no? ¿Por qué a mí?" Hay una modificación importante en esos cuestionamientos base ya que, ahora coexiste la extensión del pensamiento acorde al sentimiento y es entonces, cuando me surge la posibilidad de trabajar esas cuestiones internas que me aquejan; hay una evidente trasformación que parte desde la manera en que se asume y se cuestiona la existencia, hasta la aparente simpleza del comportamiento cotidiano; ahora es el ¿Para qué? Y el ¿Cómo? Lo que entra a ser relevante durante el proceso.

Ya habiendo ampliado la perspectiva en cuanto al significado de la experiencia, queda comenzar a observar paso a paso y lugar a lugar las implicaciones del ejercicio: la primera visita tuvo lugar en la Universidad Pedagógica Tecnológica de Colombia sede central de Tunja-

Boyacá-Colombia. Allí era importante conocer y observar la "Laguna de Hunzahua (pozo de

Donato)” debido a su riqueza arquitectónica, histórica y cultural, a la entrada del pozo se encuentra una escritura que rescata un poco el significado cultural y que da apertura ente aquellos que desconocen su historia: "Laguna de Hunzahua (pozo de Donato) Cuenta la leyenda que el zaque de Hunzahua. Fundador del pueblo Hunza (Tunja) se enamoró de su hermana

Noceta, hermosa doncella muy querida por su pueblo. Los hermanos incestuosos en busca de algodón para las telas y arcilla para las cerámicas, viajaron para Chipatae en donde en un arrebato de inmenso amor se hicieron esposos. Faravita, la Cacica madre, al tener conocimiento del grande pecado de sus hijos quiso castigar a Nocenta con el palo de revolver la chicha, este se rompió la vasija y la chicha se fue regando abundantemente hasta formar el gran pozo o lago llamado hoy pozo de Hunzahua o pozo de Donato.” CAMARA DE COMERCIO. U.P.T.C.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 198

Ya teniendo este punto de partida es posible inferir en cuanto a varios aspectos: en la descripción física del lugar cabe resaltar que denota un mínimo interés hacia la historia, hay monumentos y leyendas que evidencian un poco las tradiciones, raíces, hábitos y costumbres de la cultura indígena. Sin embargo, deja un sin sabor darse cuenta del desarraigo cultural que coexiste; la limpieza, el respeto y el afecto por los lugares sagrados no es un aspecto que sobresalga de forma positiva. Por otra parte, independiente a las implicaciones ambientales el lugar si permite experimentar diversas sensaciones, en lo personal la sensación que ha dejado en mí es de desconsuelo y tristeza, no hay explicación de aquél desarraigo cultural, la tergiversación de las palabras en cuanto a la descripción histórica que está impresa en este lugar sagrado no satisface las expectativas que surgen al acercarse al mito y a la esencia de éste lugar sagrado.

El reduccionismo ha llegado a un nivel brutal y ofensivo para nosotros como habitantes de este territorio o al menos para mí. Desde mi perspectiva las letras que se plasman en el monumento son limitadas y aunque rescata un poco el concepto de patrimonio cultural y en parte honra lo sagrado del mito no compensa ni se acerca al significado del suceso. Las historias no eran congruentes con lo que se evidencia en la actualidad, ya que se describía todo un sistema de gobierno entre culturas indígenas del que hoy ya no tienen el derecho de practicar y promover, había una organización muy funcional dentro de estos pueblos aborigen que de igual manera ha venido desapareciendo, su claridad en cuanto lo económico, político, religioso y social fue extinguido casi por completo. Así que no comprendía hasta donde llegaba su sentido de honrar

éstas comunidades.

En general para mí el lugar deja una sensación de tranquilidad y a su vez de fuerza, el asombro surge inmediatamente luego de pararse frente a las piedras maravillosas en su tamaño forma y significado; aunque no hay un orden aparente entre una y otra, para mí era claro que si El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 199 había una sincronía energética entre ellas, pues recorrer las rocas una a una me dejo la sensación de un proceso sistemático de labores y funciones que luego resultaría en la integración conjunta de cada persona y a su vez, de toda la comunidad.

Seguidamente nos dirigimos al museo, desde donde pudimos evidenciar en los términos clásicos de la ciencia, la definición de los pueblos indígenas en cuanto a usos, costumbres y rituales mágico-religiosos; para mí era demasiado corta la descripción de cada proceso en cuanto a su significado, hay una descripción gráfica de las viviendas y su estructura pero es pobre en la definición indígena que pueda tener dicha estructura y categorización. Para mí había un montón de limitaciones en cuanto a ¿Quiénes son los Muiscas? Pues el empobrecimiento en dichas investigaciones ha llevado todo a simples descripciones físicas o netamente basados en lo etnográfico, lingüístico o antropológico, dejando de lado la importancia en la concordancia y la relación entre cada aspecto.

Por otro lado, dichas descripciones si constatan, aunque de otro modo, las palabras dulces expresadas por abuelos, como el de a continuación: “CUERPO Y TERRITORIO. La Tierra nuestra Madre, es un ser viviente y está atada con hilos invisibles de oro al universo. Es lo mismo que nosotros, cuando nuestra madre nos lleva en su vientre, estamos a ella unidos por el cordón del ombligo. En ella somos pequeños como lo es la célula en nosotros. Yo soy la Tierra y la tierra soy yo. Soy hijo de la gran memoria, soy hijo de la gran Tchiminigaghoa, soy hijo de la gran sabiduría.

La gran madre, la naturaleza, nos da su lecho que es el agua, nos da su piel que es la tierra y nos da su amor reflejado en las cosechas, en el viento, en el calor, en el frío, en el verde de sus montañas, las piedras, los ríos, las lagunas, las nubes y la niebla... Mi cuerpo es una tierra pequeña, tiene todos los reinos de la naturaleza, es la casa sagrada de mi padre Tchiminigagua. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 200

Los senos son réplica de las montañas que tiene agua y nos dan su leche, para quitarnos el hambre. Mis brazos son fuertes y me ayudan con las manos a acariciar la piel de la madre en tiempos de labranza y ella con amor nos da sus flores y sus frutos. Tengo ojos para mirar a la madre que me parió. Autoridad Acestral Indígena Muisca de Boyacá.”

Dentro de este escrito se plasman las sensaciones que desde lo vivencial alcancé a experimentar en una toma de medicina, en una noche de trasnocho, en una observación minuciosa a la noche, en una mañana de pagamento o mientras subía a la sagrada montaña de

Monserrate (Tensacá), ya que es desde la vivencia personal me ha surgido la comprensión amplia frente a lo que de por sí es propio, pero que sigue en silencio, aguardando ese despertar.

Es el amor indescriptible que me llega luego de sentirme perdida y enajenada ante un universo desinteresado y deshumanizador, es una preocupación innata de cuidado a la Tierra, una conciencia de gratitud que sólo aquél que se permite la cercanía a lo sagrado tendrá la posibilidad de ver, sentir y vivenciar las implicaciones de realizar desde dentro una investigación, pues así he sentido que he venido haciendo con el proyecto.

Durante el transcurso y el avance del camino se ha hecho reiterativa la necesidad de sanación en los diferentes rituales, en lo personal para mí con el tiempo enfrentarme con el dolor físico y los sentimientos como la duda, la nostalgia, la ira, el ego, el miedo y en general el conocimiento de mí misma ha hecho que el concepto de enfermedad se transforme en cuanto a su significado y que la historia del malestar reflejado comience a ser una manifestación de algún aprendizaje incompleto que he dejado atrás, así lo he venido comprendiendo, para mí escudriñar en cada manifestación y llegar al punto coyuntural que irrumpió con la armonía de mi ser se convierte en un camino prolongado, difícil y desconocido. Además, va convirtiendo cada sensación de manera individual en un camino igual de denso y a su vez desde lo colectivo lo va El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 201 convirtiendo en una relación constante que le da significado a la manera en la que veo, siento, percibo y actúo frente a mis compañeros.

La labor para mí no es sencilla requiere de atención sensibilidad al consejo y el cambio natural de mí y de mi entorno; sin embargo, siempre hay un camino que me guía en el proceso y en éste caso lo vi reflejado en lo técnico de un nuevo escrito: “CUERPO, SALUD Y

EQUILIBRIO. Los muiscas, como las comunidades amerindias trataron la salud, la enfermedad dentro del orden del universo, a través del Chamanismo.

El trabajo del médico, jeque, sacerdote, o chamán es mucho más que actuar sobre el enfermo, es poner orden. El chamán o Chyquis entre los muiscas es el sabio que toda sociedad requiere para que le diga

- ¿Cómo es el mundo?

- ¿De dónde se viene?

- ¿Cómo eran las cosas?

- ¿Para donde se va?

- ¿En dónde se está?

Es el conocedor que tiene el mapa del mundo y el tiempo, para que las comunidades tengan un lugar y un momento en el universo. (basado en el texto de Guillermo Paramo, La lógica Paraconsciente y el Mito Chamánico el CHAMANISMO´ICANH 2004”. Es claro ver que desde las diferentes investigaciones se plasma lo que con el tiempo he venido intentando comprender, el orden que cada uno tenga de sus procesos internos, va a ser un fuerte determinante al momento de afrontar un desequilibrio, pero dicho afrontamiento no viene de la nada, viene de auto cuestionarse permanentemente y no sólo por una necesidad de identificación con un patrimonio cultural o un desacuerdo con el mismo, sino por un entendimiento integral y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 202 amplio acerca de sí, lo que en va a entrar a jugar un papel fundamental al momento de desarrollar un concepto propio de ser humano sano.

El siguiente lugar para visitar fue el TEMPLO DE GORANCHACHA, en este lugar no logré conectarme demasiado, podía imaginar este lugar años atrás, veía en el imaginario de mis pensamientos abuelos sentados compartiendo palabra y pidiendo consejo, trasnochando y esperando al Padre Sol (XUE) en los días de solsticio, abuelas tejiendo y por qué no niños danzando. Las posiciones de las piedras marcaban una figura en espiral y sentí un lugar en el que crecía vida, felicidad y conocimiento constante, pero abrir los ojos y ver todo lo contrario era desconcertante, la realidad era ver unas rocas descuidadas, sentir una energía apaciguada, y un olvido imperioso.

Es evidente que más allá del trabajo investigativo en cuanto a cronología o historia lo que los lugares sagrados y éste en específico necesita es de trabajo espiritual dedicado y paciente, ajeno a presiones ambientales o intereses de algún tipo, aunque no es exclusivamente necesario sentarse allá y trabajar allá, sentí necesario trabajar el fortalecimiento de esa energía apaciguada, desde el pensamiento individual y colectivo que se construye desde las malocas y bohíos cercanos a nosotros.

Sin darle mucho tiempo al lugar y la experiencia de estar allí y con la innata sensación de aguardar un poco más, hubo que dirigirse al próximo lugar LOS COJINES DEL ZAQUE

"Adoratorio y observatorio del Pueblo Nación-Muisca Chibcha" Orgullo y símbolo de nuestra cultura indígena. En vocablo indígena XUE PUYQUY (Corazón del Sol), es uno de los calendarios solares de las culturas americanas originarias, tallado en dos piedras circulares en esta gran roca de la montaña tutelar TCHUNZA-TUNJA. Lugar se observatorio de la salida y recorrido del sol en el horizonte, proporcionando las cuadratura del ZOCAM- (año solar), donde El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 203 se evidencia los equinoccios y los solsticios que en el calendario natural definen los ciclos de siembra y cosecha de la madre tierra- HYCHA GUAIA.

Sitio de peregrinaciones ancestrales de los Muisca de ofrendas sagradas y paramentos, para agradecer al astro Rey -(XUE); el sol y a TCHIMINIGAGUA el espíritu creador fecundador de vida. E no ceremonia, los TCHYQUYS, (guías espirituales y parte del pueblo indígena, cada amanecer, provenientes del FARFACA (hoy, tras del alto), en procesión con música, danzas, cantos y oraciones recibían al Padre Solar para agradecer sus beneficios. Agosto de 2010.

Alcaldía Mayor de Tunja, Secretaria de Cultura y Turismo; Academia Boyacense de Historia;

CABILDO MAYOR MUISCA CHIBCHA DE TCHUNZA.”

A diferencia de lo metódico de la descripción presentada previamente y traída justo de la entrada al lugar sagrado, la sensación que surge en mí es de grandeza, más que del control anual de fechas, sin demeritar ésta primera función, es la grandeza de una ciudad, entendida de forma diferente a lo que significa una ciudad actualmente, para mí era más como el lugar de desarrollo espiritual y de pensamiento, lugar de arduas labores y observación minuciosa, más que de los ciclos, de sí mismos en sincronía a esos ciclos, me sentí en un lugar de ensimismamiento y trabajo espiritual, que en la calidez y el resguardo permanece la esencia de un ritual propiamente indígena, la estructura embellecedora de piedras hermosas y cálidas que guardan en sus paredes lo puro de la creencia y la fe indígena. Me sobraron ganas de seguir sintiendo el lugar, pero el tiempo en el lugar debía ser limitado debido a cuestiones de seguridad, y no debiera ser, no debiera tener que el hijo de la madre huir de su lugar sagrado por factores externos; el lugar aparte de la limpieza de basuras para mí requería tiempo de sentarse y sentir su esencia.

Luego visitamos LAS MOYAS, a diferencia del lugar anterior el frío en este lugar era sumamente penetrante, La sensación de ruptura era clara, el paisaje que debió verse años atrás El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 204 desde esa misma montaña no era nada similar al que tuvimos que apreciar, para mí era el reflejo de una división de lo hermoso para occidente y lo hermoso para los pueblos indígenas, nos sentamos sobre una piedra en la que en su superficie se pueden ver 14 hoyos, los cuales con el paso del tiempo han venido siendo dotados de un significado más profundo que su estructura, yo sentía que cada hoyo era un centro de conexión que desde la lógica racional es imposible comprender, pero para mí cada uno plasmaba el reflejo de un lugar del cielo que se conectaba directamente con esa parte de la tierra y que de seguro en un estado de conciencia más amplio y sensible se hubiese podido interiorizar la lección de ese lenguaje dialéctico que yo veía entre el cielo y la tierra; la sensación del frío me causaba incomodidad era imposible ignorar la sensación, pero al apartarme de la superficialidad del cuerpo y sin quitarle importancia, sentía que la lección estaba más allá de ello, sin haber una aparente sincronía entre hoyo y hoyo para mí estaba claro que había una comunicación entre lugares sagrados, aunque el abandono del lugar y la des información acerca del mismo acercarse poco importa,.

Fui mirando el lugar detenidamente, la montaña de mi lado derecho, atrás de la estructura arquitectónica de las viviendas me expresaba una conexión entre ella y la montaña en la que yo me encontraba, es entonces cuando me surge esa inminente sensación de conexión, de conectarme en las sensaciones pausadas, silenciosas y prudentes de la madre naturaleza y así ir descubriendo en el silencio y mediante la concentración la posibilidad de lenguajes nuevos.

El lugar más que otros, me inspiraba pagar con agua mucha agua cristalina y pura, agua fluyera entre las rocas, mi interés no fue hallar una forma lógica a su estructura física sin embargo pude ver por un instante una fuente de vida y reposo, para mí era como una recarga de hidratación tanto de pensamiento como de forma física, sabíamos que por allí pasaban múltiples procesiones durante los rituales indígenas por tanto creía que aquél lugar había sido esa fuente de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 205 oxigenación y reivindicación con el propósito que durante las procesiones los indígenas llevaban, incluso para mí en ese momento lo fue, sentía que estar allí regeneraba mi propósito y me daba cierta hidratación espiritual para seguir el camino.

Pero fue triste verlo en un estado tan deplorable, su carecía de agua me implicaba verme en la exigencia de pagar con agua, de limpiar con lo positivo de mi espíritu y lo puro de mi propósito, para de este modo alimentar y dejar impregnado de vida ese lugar. Porque para mí la hermosura no está en ordenar el caudal del río y monopolizar la naturaleza, así como lo habían hecho los ingenieros que habían construido viviendas en ese lugar, para mí la hermosura estaría dada al ir entendiendo los cambios del caudal y dejando que se desencadenen maravillas durante el camino. Pero sólo en la medida en que el agua fluya y encuentre su propia fuerza sin tener que obligarla a aguardar o adelantarse por algún lugar indebido para el orden natural. Además, quien más si no nosotros hijos de este territorio ensangrentado y herido para rescatar el valor de los lugares sagrados, la fe y la seguridad en el fortalecimiento de la raíz que hasta ahora parece extraña y sensible de juicio.

Es entonces cuando me surge el compromiso de no olvidar, de mantener pese a la distancia fuertes lazos que vinculen constantemente mi vida con lo que en ese lugar había, mantener la misma entrega, disposición de limpieza y compromiso con cada lugar sagrado, ya que partiendo del hecho que es a una Madre la que se va como hijo a pedir perdón, consejo, sanación y cuidado es esa figura maternal a la que se le debe tratar de igual manera con cuidando, agradeciendo, recordando, limpiando y amando, para mí se convertía en un compromiso irrompible ya que al buscar la sincronía de los procesos internos también hay que fortalecer los vínculos y la fuerza entre lugares sagrados, sin desligar uno del otro, sin apartar la enseñanza y sin dividir el sentimiento, pues el compromiso en sí mismo es uno sólo por tanto, la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 206 comunicación y la enseñanza entre un lugar y otro debe mantenerse en constante relación y secuencia para que de éste modo lo que surja en los procesos meditativos y de cercanía con la

Tierra se vuelvan un trabajo de desarrollo unido y constante.

Por ese día acabaron las visitas y nos dirigimos al día siguiente al MUSEO ELIECER

SILVA CELIS allí el sinsabor fue aún mayor, el reduccionismo era llevado a tal punto que todo aquello que para mis oídos sonaba atractivo, significativo y mágico en las palabras plasmadas en los cuadros se convertían en silogismos que ejemplifican lo que los mitos y costumbres aportan

“científicamente”. No se le estaba dando el trasfondo que en su esencia lleva toda la cultura indígena, para mí era evidente el desarraigo e incluso la vergüenza y el despotismo que aún invade a estos pueblos, pues se estaba fijando la atención en la creencia única hacia lo tangible, medible y verificable, el resto perdía valor y aunque los datos alimentan la investigación claramente no son el centro de ella. Los trabajos de campo permiten direccionar el sentido y el significado personal que cada uno experimenta de manera individual y posteriormente tiene la oportunidad de compartir.

El museo, aunque en su esencia busca resaltar aspectos netamente científicos e históricos, en otros permite vislumbrar aspectos que contribuyen con el entendimiento de la situación actual, estableciendo relaciones entre tiempo y significado. A nivel general es evidente la organización de estos pueblos, en lo económico resaltaba la variedad en la agricultura, variedad que se ha deteriorado en calidad, diversidad y cantidad; mientras nuestros ancestros por medio del trueque y el trabajo mantenían en constante movimiento tanto la economía como la productividad, nosotros evadimos las labores avergonzándonos de nuestra esencia indígena y campesina. Denota un cambio enorme al momento de ver los procesos de siembra y cosecha frente a los actuales, la concepción indígena no resalta por el desperdicio o el abuso de la tierra, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 207 resalta por el cuidado y el buen manejo de la productividad, para ellos era más que comida, era más que la vida del animal y la necesidad de alimentarse, es la conexión con la Tierra y el fortalecimiento de una relación recíproca mediante la cual se obtienen enormes beneficios desde lo espiritual a lo físico.

Por otro lado, dentro de las comunidades indígenas se conserva una clara organización social, que lejos de intentar castigar a los habitantes de la comunidad, busca por medio del amor y la palabra dulce establecer una serie de compromisos que finalmente son lo que sustentan la particularidad del pueblo, permitiendo el crecimiento espiritual e individual y en este sentido el colectivo, en las leyendas del lugar tradujeron ésta intención a algo más acorde al mundo occidental, por tanto es expresado y muy seguramente entendido como una serie de normas y leyes que de ser infringidas serían la causa de un castigo proporcional a la falta. A mi modo de ver, aunque la organización social estaba basada en modo de jerarquía, ésta tenía un significado y unas connotaciones absolutamente diferentes a lo que ahora es; Hunza o Tchunza que significa varón poderoso o prudente, era el Zaque de éste territorio y no era precisamente un reflejo de castigo, era más un ser que buscaba el crecimiento y la estabilidad de su pueblo.

Además yo tampoco veía necesario un asalto y una imposición de tipo religiosa, las culturas indígenas tenían creencias propias, las que eran absolutamente acordes tanto en su divulgación como en su práctica, Chiminigagua, Xue (Sol), Chia (Luna)

Bachue (Madre) eran y son sus dioses, a los que desde siempre han realizado constantes cultos, ofrendas, consultas, tributos y rituales de procesión que requieren de una preparación similar a la que tomamos inicialmente antes de caminar y estar en los lugares sagrados. Es entonces cuando la preparación cobra importancia, si nuestros antepasados cuya conciencia estaba más sensible al lenguaje de la naturaleza, recorrían montañas, trasnochaban, realizaban El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 208 pagamentos y acudían a los grandes espíritus en busca de consejo y guía, cómo no hacerlo nosotros que aún somos niños en busca de seguir el camino. Aunque se mantuviese en mi interior encendida la llama de fe, la duda y el ego tientan y nublan el camino, pero es allí donde quien ha preparado su cuerpo y su espíritu es capaz de re direccionar el ego y fortalecer la fe, yo me sentía fuerte y preparada así que me seguía emocionando saber que estaba llevando todo como en su momento mis ancestros lo habían hecho.

Dentro de los recorridos que realizaban los pueblos indígenas estaban: Quiminizaque, actual Parque Pinzón; Templo del Sol, actual Universidad Pedagógica Tecnológica de Colombia y finalmente los Cojines del Zaque, actual Alto de San Lázaro; lugares que al igual que ellos y pese a la inexperiencia decidimos recorrer. En primera instancia surge la pregunta de ¿por qué se modifican los nombres de los lugares sagrados? Y es justo allí donde uno se da cuenta del atropello cultural en el que estamos inmersos.

La quema del templo por Jimenez de Quesada tiene más que un simple significado historico y cronológico, es la ruptura física de creencias propias y en la leyenda misma que muestra el museo es evidente “el templo del sol que todos recordamos con cariño y con respeto, simboliza lo más puro y digno de la cultura Muisca. Su edificación fue concebida y realizada con propósitos de eternidad, por ello emplearon el Guayacán madera sagrada y mítica, y dispusieron esclavos vivos bajo sus pilares de arquitectura.

La exótica belleza del templo del sol hizo decir al cronista Fry , que entre “los otros templos de (Suamox) Había uno de extraña grandeza y ornato.” Con la llegada fe los conquistadores tan célebre santuario fue reducido a cenizas en agosto de 1537. Ahora, después de 465 años de haber apagado este faro de pensamiento aborigen; lo estamos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 209 reconstruyendo, queremos, así, salvar uno de los más valioso y sentidos monumentos históricos de Colombia.

El espacio y ambiente físico que se reconstruye, “in situ” con elementos y formas de valor religioso, mágico y mítico corresponde, según pensamos a la dimensión del alma Chibcha, que hemos querido entender en los delicados trabajos de mencionada reconstrucción que adelantamos. E. Silvio Celis.

Es importante para mí partir de éste suceso para entender las sensaciones posteriores que surgen al estar en el lugar sagrado, el atropello fue bárbaro, despiadado e inescrupuloso por tanto, la sanación del lugar y en este sentido de nosotros mismos pende de la conciencia con la que cada uno se sienta a apreciar el lugar, pues estaría contrastando constantemente los datos materiales a los que se tienen acceso, con las creencias propias que surgen al mantenerse en una escucha activa con los abuelos y lugares. Salir de un lugar que limita las arquitecturas a palabras y definiciones bien estructuradas para estar en un lugar que por sí solo hace una apertura al conocimiento intangible, se me convertía en un desequilibrio a nivel del pensamiento y la emoción, dificultaba mi concentración ya que al inicio sentía como se fortalecía la dualidad interna que a su vez deterioraba mi concentración, mi calma y mi fe.

Procedí a sentarme en los cimientos del templo solar lo que fue direccionando mi pensamiento, el lenguaje propio se iba abriendo paso y es entonces cuando la comprensión del suceso comenzaba a esclarecerse para mí.

El ritual de pagamento me permite ver qué es lo que tenía por dar y en qué búsqueda me encontraba, en ese análisis proporcional de mí mismo es que me fue posible entenderme, escucharme y verme a mí misma antes de mirar al exterior; cada cosa tenía una funcionalidad específica y no por eso se desligaba de la constante relación interna en la que se mantenían mis El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 210 pensamientos, el sentir y la acción, quería entenderlos con tranquilidad, para así saber lo que tenía, este empoderamiento iba a fijar el límite de hasta dónde llegará mi conciencia.

Durante el ritual se personalizan las lecciones, cada persona recibe y entiende cosas diferentes, porque somos en sí mismos universos diferentes que actúan, hablan, sienten y ven diferente. En lo personal hubo bastantes interferencias negativas antes de centrarme en el ejercicio, la sensación de no estar preparada aún, se iba fortaleciendo, pero fue entonces que remití mi pensamiento a la base de mi fuerza, puse en pensamiento a mi familia y sólo así pude ir acallando la razón, recordando la guía con la que había partido de Bogotá y llevando a cabo las labores y compromisos que tenía conmigo misma antes de comenzar a caminar, verme a mí mismo y reordenar las cosas de modo tal que lo negativo se equilibrara, que el ego volviera a su lugar y en su debida proporción mientras por su parte el positivo surgiera para así cerrar positivamente, fue el proceso paulatino que fui llevando durante el transcurso del ritual.

En lo negativo encontré nostalgia, desamor, impaciencia, carencia de fe, negación y miedo; sin embargo pude entender con el trascurso del tiempo que en las carencias está ese faro de luz que debe fortalecerse, que en la carencia de fe también hay fe, en el amor débil y distante hay amor, en el ego de la soberbia y la imposición hay herramientas que permiten conocer en esencia lo que soy y lo que temo ser, es así que las labores a trabajar surgen; está en tomar cada cosa con tranquilidad para de este modo direccionarlas e ir rompiendo barreras que ha construido el ego para transformar mi esencia, ir entendiendo que al ser carente de algo es imposible quedar en deuda intentando dar eso mismo a alguien, incluso reconocerlo cuando llega a nosotros mismos también resulta imposible, sentía que debía fortalecer las cosas desde su raíz para de este modo, poder pagar con lo mismo que había venido a buscar. Entendí que sin tener amor, es El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 211 imposible dar amor y por tanto al ser esto una sensación poco perceptible por mí misma, limita la posibilidad de recibirlo.

Finalizamos el ritual a medio día, cada uno se levantó del lugar en el que estaba y procedió a dejar sus semillas donde creyera conveniente, en mi caso las dejé en el lugar donde primero había percibido que caía el sol, pues al haber visto esto recordé a mi padre y además al haberme parado sentía que ese lugar necesitaba alimento.

Al día siguiente nos dirigimos hacia la LAGUNA DE TOTA allí procederíamos a hacer un ritual de trasnocho, por poco y no encontramos un lugar para acampara, pues la playa principal se encontraba en mantenimiento y la entrada para visitantes no estaba permitida, esto me desilusionó muchísimo pues en el camino se podía ver la inmensidad de sus aguas y yo estaba encantada con la divinidad de aquel paisaje, entre tanto se acercó una señora habitante del lugar y nos indicó una cabaña cercana donde podríamos alojarnos, inmediatamente nos dirigimos hacia ella y efectivamente encontramos el lugar para pasar la noche.

El inicio de la noche dibujaba en el cielo un buen augurio, estaba despejado y lleno de constelaciones brillantes, era por sí solo un paraíso infinito de luces y magia, la tranquilidad se abrió paso en mi pecho, mis ojos transmitían una sensación de asombro, la inmensidad del paisaje y su belleza indescriptible me hacía sentir una sensación de la que nunca antes fui dueña, el azul penetrante del cielo se mesclaba con la superficie del agua y se combinaba bien con la silueta de las montañas. Hubo tiempo para observar detenidamente el paisaje, entender la maravilla de las pequeñas cosas, las estrellas en el cielo, el sonido de las aves, el movimiento de los árboles, los reflejos en el agua, lo tenue del fuego y la brisa fría; era un paisaje digno de admiración y respeto por el significado que yo les tenía a aquellos lugares que conservan lo puro de su esencia. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 212

Para mí comenzar con el trasnocho fue el momento de romper la manera en la que venía pagando, en la laguna la posibilidad de seguir partiendo del negativo no era mi objetivo y, aunque la sensación de nostalgia era cada vez mayor entendí que el amor se fortalece desde dentro y se siente por encima del dolor el hastío y la distancia.

Así que comencé a centrar mi atención, evitando recaer en sensaciones del ego, fue entonces cuando sentí la necesidad de agradecer, de compartirle a ese lugar sagrado el trabajo que en mí se había venido forjando tiempo atrás, estuve en constante evaluación frente a los compromisos que previamente había adquirido conmigo misma, mentir y olvidar no era una excusa que pudiese creer, no hablaba con nadie externo, no era nadie diferente a mí misma quien estaba en esa minuciosa observación. Sin embargo, hubo momentos que la rabia dominó mi manera de ver y sentir, un desequilibrio dentro de mí hizo que viera únicamente desde el ego la sucesión de hechos que venían ocurriendo dentro del grupo, se manifestó la insatisfacción y fue difícil centrarme de nuevo en agradecer, pensar en mi familia en el amor y empezar a pagar de nuevo. Me fue difícil ir fortaleciendo mi espíritu en pro de apaciguar la nostalgia y la ira.

En el cielo estaban las respuestas que con cautela había venido buscando ya no era una sola luz lejana y tenue al igual que en Cota la que reflejaba la luz que había en mi interior era todo el cielo que enriquecía con su esplendor la luz de la que repetidamente hablo tanto el

Abuelo Fernando como el Mamo Roberto, la tranquilidad finalmente colma mi ser y me mantuve simplemente anonadada en sentimientos y dispuesta de pensamiento frente a lo que proviniese de mí interior. Muchas luces danzaban frente a mis ojos, quizá estrellas fugaces quizá abuelas danzando sobre las montañas, quizá exista una explicación racional, pero desde mi sentir eran los cientos de caminos y posibilidades que hay en mi interior, cada uno iluminando en su debida El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 213 proporción, entendí que era cuestión de hacer las cosas paso a paso y observando la profundidad de los detalles que refleja la naturaleza para así encontrar el camino hacia uno mismo.

A la mitad de la noche creció la necesidad de beber un poco de medicina, fue entonces que mi pensamiento tuvo que remitirse al lugar de origen de esa bebida sagrada, agradecí por permitirme tener en el pensamiento el procedimiento exacto de su hechura, saber y sentir que traía un sentimiento desinteresado y de profundo respeto, honre las familias y las manos que siempre de manera humilde y amorosa permiten que tome dicha bebida, agradecí a ese territorio y a partir de él tuve más cosas dentro de mí para pagar en positivo, para dar gracias por el agua, los frutos, la comida, la gente, la sabiduría de los abuelos, los lugares, las cascadas, los páramos, los nacimientos de agua, los caminos, los atardeceres, las puestas de sol, las noches de luna llena, la felicidad, el amor y la infinita calidez que siempre tiene ese territorio para mí.

Durante toda la noche mantuve las semillas en mis manos, eran un trabajo que había venido realizando hacia un tiempo en compañía de mi familia, pero más que la semilla en sí era lo que iba a pedir de ello y a su vez, lo que iba dejando con ello, las personas que amo acompañaban mi viaje en lo simbólico de las semillas, ya que había decidido vincularlos con dicha tarea, el cuidado la devoción y la entrega que ponía en ellas era un trabajo de mente, corazón y cuerpo. Finalmente, y luego de arrojar las semillas a la laguna acabó el trasnocho y cada uno fue a descansar, yo seguía tranquila y en paz.

Al día siguiente fuimos frente a la laguna a pedir permiso para bañarnos y limpiar un poco los males que en lo físico o en lo interno ocasionaba algún malestar. Inicialmente más que los impedimentos físicos fue el miedo interno que impidió que decidiera entrar, pero luego sentía que el permiso estaba dado, que la laguna me llamaba y sin dudar un segundo más me llene de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 214 pensamientos positivos, sueños, anhelos, esperanzas, propósitos, amor por mí y por quienes complementan mi entorno, para ingresar a ella con un profundo sentimiento de alegría.

Al entrar al agua parecía que el frío desaparecía en vez de aumentar y aunque no había un sol radiante ni un clima templado, me sentía tibia por dentro y por fuera, pude experimentar equilibrio y plenitud, la laguna me había colmado de una dulce sensación de bienestar, sentía como fluía desde dentro la fuerza y el calor, solo quería sumergirme y seguir experimentando esa dulce sensación de limpieza, por un momento desaparecían mis dolores, mi pensamiento al igual que mi cuerpo estaban llenos, la nostalgia desapareció, me sentía radiante y vi la vida como un camino largo pero atractivo para recorrer, las cargas se alivianaron y sólo entonces y por primera vez durante todo el viaje pude sentir algo de calor.

Ahora la euforia que se siente en los momentos de plenitud cubría mis ojos y vestían la vida más amable y dulce, la calma y el adentrarse de cuerpo, mente y corazón en los ejercicios estaban para mí siendo recompensados. En general, no sentí de la laguna abandono hacia ella, por el contrario, sentí un lugar que aguarda y se conserva fuerte pese a la contaminación. De ésta experiencia en adelante, mi estado de ánimo se mantenía estable, no quería que nada lo dañara así que lo que siguió después fue más sencillo vivenciarlo. En la tarde tuvimos la grata compañía de un escultor del territorio quien aboga desde su arte por rescatar el patrimonio cultural y la historia de éste territorio, recorrimos el pueblo acompañados por él, notaba pasión en su labor y lo que promovía a través de su arte, se identificaba con la costumbres indígenas y nos explicó el estado de Tota con respecto a esa identidad y apropiación de lo indígena, pero era triste notar que el desarraigo era generalizado, los pueblos se han contaminado de occidente dejando de lado las prácticas propias. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 215

Al final de la tarde mientras tomaba unas fotografías y recorría el lugar, recibí una noticia inesperada que alcanzó a desequilibrarme; sin embargo, bastó fijar la atención en el recuerdo de la sensación que me acompañaba desde que salí de la laguna junto con la calidez de un abrazo oportuno, para saber que si había hecho las cosas con devoción y fe en cuestión de tiempo todo estaría bien de nuevo, entendí que el trabajo de largos días no podía desvanecerse en un instante, pensé con el corazón antes de actuar con la razón y fue sólo entonces cuando pude aquietar el pensamiento automático y ver las cosas positivamente. En unas cuantas horas, aunque la situación externa no mejoró del todo, sí pude mantener la calma, disfrutar de una noche preciosa, descansar y soñar.

La mañana siguiente nos disponíamos a caminar hacia la montaña donde se encontraba la piedra de Bochica, la expectativa era uno de los factores que más inundaba mi ser, para mí la experiencia se dio bien, no tuvimos que caminar mucho, no me sentía cansada ni indispuesta, el cansancio no era el protagonista, sentía que era justo el lugar para hacer el cierre de nuestro recorrido, el camino aunque seco, mostraba unos paisajes indescriptibles en cuando a belleza e inmensidad, durante el recorrido, me surgían las ganas de tocar, cantar o danzar, la felicidad provenía de mi interior, era desbordante, necesitaba sentir que mi cuerpo se ocupaba en algo, mi mente iba deprisa y ésta vez alejada de sensaciones negativas, sentí que la necesidad de practicar algún tipo de arte se hizo colectiva, hicimos una serie de paradas activas en las que cualquiera del grupo tomaba un instrumento y hacía el esfuerzo de corazón por poder tocar, mi objetivo era agradecer de una manera más tangible todo lo que me estaba llevando, por un momento imaginé una procesión de abuelos realizando ésta misma labor, en mi mente no dejaban de danzar y admirar el territorio y mi intención se iba dirigiendo cada vez más hacia ese ideal. Pregunté por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 216 un instrumento con el que sentí una enorme conexión su sonido me parecía apasionante, imaginaba poder tocarlo en un futuro y era una sensación muy agradable.

Sentía cierta tensión entre mis compañeros pero interpretar el lenguaje del cuerpo es una tarea compleja a la que aún no le apuesto lo suficiente como para dar un juicio, finalmente cada uno va en un trabajo interno del que sólo es capaz de comprender por sí solo, así que no le di mayor importancia, me sentía tan plena que no quería distracciones que tergiversaran mi sensación y reconociendo lo egoísta de hacerlo así, me limite a compartir con quien quisiera hacerlo, para así no sentir desplazamiento o exponerme a una mala reacción.

Finalmente llegamos arriba de la piedra, el profesor se encargó de hacer una introducción que resaltaba aspectos históricos de aquél lugar, sin dejar de lado o quitarle importancia al significado que tenía tanto para la línea, como para el semillero e incluso para él mismo, cada uno centrado en sí mismo fue escudriñando dentro de sí o eso creí luego de escuchar las palabras que cada uno expresó antes de acabar el ritual, en mi lugar me centré en sentar los propósitos que había venido recibiendo en los diferentes lugares, ubicando en tiempo y espacio las tareas que iba interiorizando poco a poco, concentrada nuevamente en la falta que me hacía mi familia, las infinitas ganas que tenía de tenerlos a mi lado y abrazarlos fuerte, pero ésta vez no con la nostalgia de quien extraña a otro alguien, sino con el amor infinito que se mantiene incondicional, fije mi atención en cada uno de ellos y entendí que durante todo el viaje tanto ellos como el territorio de donde provengo habían estado acompañándome, que el reflejo de lo que soy en el exterior y en el interior, no es más que el reflejo de la relación que construyo con ellos día tras día.

Dentro de las tareas a nivel general restablecí compromisos que había dejado de lado y que casi que por sí solos fueron volviendo a mi memoria, supe que la montaña sagrada de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 217

Monserrate (Tensacá) me estaba llamando debido a una promesa previa, que la medicina del chirrinchi necesitaba algo más de atención afecto y respeto, que era momento de romper el miedo y explotar el arte que aguardaba en mi interior y enseguida quise tocar un instrumento para luego agradecer a la Madre con una conexión más armónica entre ella y mis sensaciones, sentí que ya era momento de empezar a tejer ya que en momentos pasados el miedo limitó mi interés, sentía que luego del viaje tenía una tranquilidad suficiente para comenzar a ver más allá de la superficialidad de reconocer las sensaciones, era momento de hacer uso de otras estrategias que me permitieran reorganizar las cosas con un poco de paciencia.

Finalmente, el profesor pidió unas palabras por parte de cada uno, el saludo regular a las grandes autoridades Madre y Padre espiritual, los elementales, las plantas, los seres queridos y los maestros como el ego y el amor, escuché atentamente a mis compañeros y en mí se mantenía la sensación de infinita gratitud, porque había recibido grandes lecciones de la manera más vivencial y dulce. Ya habiendo todos participado en palabra del ejercicio quedaba hacer el cierre, una brazo así como lo había indicado el Mamo era la manera más adecuada y en lo personal la más precisa, cada abrazo era como la fuerza que cada uno tenía después de atravesar una largo camino y saber que hasta ahora iniciaba, sé que a todos mis compañeros de seguro les costó igual o quizá mucho más que a mí vivenciar cada experiencia, pero ese abrazo era saber que a pesar de las dificultades somos un equipo de compañeros dispuestos a mantenerse firmes durante el proceso que cada día se va personalizando más. Recordaba a la hija de Mamo cuando decía que al faltar la fuerza dentro de alguno de nosotros ésta se vería reflejada en la fuerza que deberíamos tener como grupo.

El regreso a Bogotá desde antes de arrancar en carretera fue un latente de ansiedad, las ganas de ver, abrazar, sentir y estar en el calor de mi hogar se manifestaba cada vez más, hubiese El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 218 querido llevar un trozo de cada lugar para que de manera intacta pudiesen dimensionar el significado de la experiencia, pero los detalles materiales no son ni la quinta parte de ello. Por otro lado, volvería yo, con cada uno de los mensajes que había recibido, con cada lección aprendida y con cada propósito latente para ser cumplido. Finalmente, el camino apenas iniciaba y éste era sólo el primer acercamiento.

RECOBRANDO LA FUERZA CON AGUA DE LA MADRE.

Tatiana Sánchez

¿Más allá? ¿Más allá es dónde? ¿Más allá de que o quiénes? Ir más allá implica haberse sentido satisfecho y conocedor de lo que está antes que eso, pero ¿es en realidad eso posible? Me siento capaz de ir más allá aun sabiendo las confusiones infinitas que me implica descubrirme aquí y ahora; en el ir y venir no puedo más que aceptar lo que en esa medida voy conociendo, es por eso que ahora entiendo que, aunque el anhelo sea ir más allá, este proceso no se hará en la medida en la que el ego gobierne mi camino, se hará si y sólo si soy capaz de verme, escucharme, sentirme y aceptarme en el aquí.

Conforme van pasando los días mis caminos parecen movilizarse, los intereses y los propósitos aumentan o disminuyen en importancia; sin embargo, es en éste ir y venir en el que yo misma voy conociendo las prioridades por las que rijo mi vida, algunos eligen el amor, otros la familia y muchos el dinero y el poder, aunque también hay unos pocos que en la insatisfacción que les implica elegir y fraccionar su vida eligen un largo, complejo y hermoso camino en el que las prioridades no son unas ni otras, son todas en conjunto; el amor, la familia, el ser, la espiritualidad, la vida misma en su esencia más profunda y particular, ese es el camino que por designios, suerte, destino o incluso necesidad, me encuentro decidí y me encuentro intentando caminar. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 219

Con el paso del tiempo y a través de las diferentes experiencias durante las salidas, rituales e incluso experiencias propias, he podido ir diferenciando las prioridades que tenía, de aquellas cosas que dejaba de lado, en un principio el rechazo por unas y otras se tornaba confuso, finalmente nada parecía del todo bueno o del todo malo, puesto que nada encajaba exactamente en el lugar que decidía dejarlo; el tiempo me fue enseñando poco a poco que ese no era el ideal en el cual se mueven adecuadamente las cosas, entendí que la proporción de una y otra son igual de importantes para mi vida, lo que no encajaba en lo malo era porque efectivamente no era del todo malo, era simplemente una nueva manera de enseñar y ver el mundo, así como lo bueno no era tan bueno y debía considerar su proporción para reordenarlo nuevamente, más sin embargo todo esto me resultaba ser una lección provechosa de cómo potenciar las sensaciones positivas como el amor, la felicidad, la claridad y la plenitud.

Por momentos, y por instantes de segundo verme equilibrada o con solo descubrir qué cosa pertenece a qué lugar es que se cubre mi cuerpo y mi alma de plenitud, el auto descubrimiento de mis ángeles y demonios me ha llevado a ese punto indescriptible en el que las voces de la vida o quizá mi propia voz refugiada en el sentir, es la que habla y dirige mi proceder, son esbozos de quien soy, que me dicen a donde pertenezco, que amo, que me duele y que me hace feliz, son esbozos que ni en la concentración más profunda alcanzaría de no ser por elegir el camino de la espiritualidad.

Es una fuerza incesante que se mantiene en constante lucha con la parte de mí que aún no entiende, que es sorda y no comprende el lenguaje de la madre y el concejo de los abuelos. Es entonces cuando emprender el camino se convierte un proceso que parece volver a su punto de partida una y otra vez, las sensaciones no desaparecen pues al igual que las dudas se han venido El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 220 fortaleciendo, asistir ya es un acto de compromiso y fe conmigo misma antes que con la aparente obligación de la academia.

Entre tantos pensamientos y sensaciones las horas pasaron y evitaba pensar en las nuevas posibilidades que iban a surgir en el encuentro con el Mamo Roberto y su familia, intentaba no caer indiscriminadamente en la predisposición y la lógica carente de credibilidad, quería ir con el corazón puro y libre, para de este modo ver, escuchar y sentir desde ahora lo que en la cotidianidad me resulta imposible descubrir; esperaba se fuese dando paulatinamente y en el momento preciso, hasta el momento sólo sentía la disposición y compromiso por parte de un equipo igualmente ansioso de conocimiento y fe.

Al llegar a la casa del Mamo aumentaba la ansiedad y los recuerdos de lo que había hecho después de mi última visita crecían en detalle, dejamos las maletas y unos minutos después fuimos llamados por el Mamo a un lugar en el que antes habíamos estado, unas piedras situadas a las afueras de la casa, nos sentamos en semicírculo como es de costumbre y nos dispusimos a escuchar sus indicaciones. Comenzó por saludarnos y expresar su felicidad de tenernos nuevamente en su casa, posteriormente, dio las pautas que iban a regir nuestra estadía y el trabajo por realizar, había que pensar en el negativo que había llegado a nosotros durante todo este tiempo sueños, tristezas, ira, peleas, desilusiones, carencia de fe, pensamientos y sentimientos, era entrar en una exhaustiva revisión de todo lo aparentemente malo que había estado dentro de cada uno de nosotros, hacia énfasis en que en nuestra última visita habíamos salido limpios, fuertes y llenos de positivo así que había que encontrar todos esos momentos en que esa armonía se fluctuó.

Ese par de minutos fue recorrer un montón de días, intentaba no revolver los recuerdos y tener claramente el punto exacto en el que esa fuerza había sido disminuida o quebrantada, un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 221 par de desórdenes pasaron por mi cabeza, más allá de sentirme culpable o experimentar arrepentimiento, me sentía débil de corazón, había caído en excesos de manera indiscriminada, y había dejado que el negativo debilitara cosas que había fortalecido la última vez como el miedo, la luz en mi interior y mí fuerza innata.

Al pasar un par de minutos el Mamo nos llevó hacia otro lugar cerca a su casa, un árbol enorme plantado a la derecha de su casa, parados frente a él había que mirarlo y pensar en que queríamos ser, que modificaciones nuevas yo quería de ahora en adelante, cómo quería seguir, que ropa necesitaba cambiar y qué planes pondría en marcha para lograr mantener esos cambios que yo misma iba a proponerme.

Inicié realizando un recorrido de todo mi cuerpo, pasando desde mis pies hasta mi cabeza, con detalle pude ver que ya no tenía el paso firme y decidido, mis piernas flaqueaban al tomar ciertos caminos, mi abdomen ya no tenía el mismo valor y significado, no era ese símbolo de feminidad, fertilidad y vida, mi corazón estaba confuso entre corazas de refugio y mentira, la sensibilidad a los sentimientos se había escondido demasiado profundo, mis brazos les faltaba vuelo, necesitaban estirarse, sentir el aire, sentir el amor de un abrazo sincero que los añadiese nuevamente a mi pecho, mis oídos habían perdido comprensión, mi boca dulzura y verdad, mis ojos veían únicamente, parecían callados y nublados, incapaces de ver más allá o expresar un poco de lo que había dentro.

Luego me concentré en pensar en los sueños, planes y proyectos por cumplir, fue entonces que encontré lo que aún no había sido modificado, dentro de ellos estaba nuevamente mi familia, fortalecer el amor, la sabiduría, la amistad y el conocimiento de mí misma, darle valor a cada cosa que me ha hecho fuerte y hacer reciproco el sentir. El tiempo se agotó rápidamente, pero la indicación del Mamo no era frenar allí, era solo cambiar de lugar, realizar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 222 las tareas rutinarias mientras no apartáramos nuestra mente y corazón de esos proyectos y sueños junto con todo aquél recuerdo que fuese llegando, eso permitiría ampliar el conocimiento de sí mismos para de este modo saber y entender cómo habíamos llegado a ésta visita y cómo pretendíamos emprender el nuevo viaje.

Cada uno se desplazó a un lugar diferente, la tarea, aunque para todos era la misma, el proceso de realizarla para cada uno de nosotros se tornaba absolutamente diferente; reflexionar y pensar todo lo negativo que había vivido hasta el momento fue bastante complejo, hay cosas que más allá de cometerlas lo complejo es guardarlas en la memoria, muchas para mí y por gusto propio ya habían desaparecido; sin embargo, intenté ir fecha a fecha recordando lo que hasta el momento había pasado.

Durante el proceso no sentía ganas de estar cerca a nadie, la sensibilidad aumentaba con el paso de los recuerdos, por tanto, decidí apartarme un poco para pensar tranquila, me gusta mirar el cielo en las noches y como muchas otras el cielo de aquella noche estaba lleno de estrellas y luz, me mantuve recostada junto con un compañero a las afueras de la cocina del

Mamo desde donde se veía perfectamente el cielo, estaba sólo dejando que todo pasara, tranquila y asumiendo cada cosa como una nueva manera de aprender, sintiendo como la felicidad y el amor se fortalecían. Mirar el cielo me hacía sentir que finalmente siempre habrá luz allí y por consiguiente también en mí.

Después de una par de horas entramos al bohío a escuchar la palabra del mamo, luego de su intervención el Mamo le dio paso a las palabras de Susanita de quien me quedaron tres palabras repicando durante bastante tiempo: paciencia, amor y fe; lo expresó en un ejemplo de cómo era posible mantener una relación, decía que siempre hay alguien más tranquilo que el otro y que esto permitía equilibrar la balanza y complementar a la pareja, finalmente y sin ir buscando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 223 aquél mensaje, había pasado como pasaba con el Abuelo Fernando, que sin buscar preguntas o respuestas exactas es en la profundidad de sus discursos que yo podía encontrar justo lo que necesitaba.

Luego de esto salimos al nacimiento de agua, según la explicación que nos dio el Mamo lo que íbamos a hacer era una especie de confesión a la Madre, pues en ese nacedero de agua se quedarían todas nuestras confesiones junto con la verdad de cómo se había realizado el recorrido en Boyacá y cómo estábamos después de ello, era una manera de devolverle a éste lugar la fuerza que nos había dado para partir, en mi mente se fue dibujando todo el recorrido nuevamente, casi como si lo estuviese viviendo de nuevo, ignoré todo a mi alrededor y recordé cada cosa del viaje, cada lugar, sentimiento y pensamiento que hasta ese día había olvidado, pero que al estar frente a ese lugar se esclarecía en imágenes, pase por sentimientos de ira, incertidumbre, nostalgia, amor, esperanza, vida y fe, pues era recorrer nuevamente todo aquello que había experimentado allí; después de esto pude nuevamente volver al lugar en el que estaba en ese momento no tuve más que agradecerle a la Madre con una sonrisa, por todo aquello que me había brindado hasta ahora, sentí su calor y protección, su aprobación y su perdón para seguir.

De vuelta al bohío comenzamos a danzar, en ese momento, sentía algo de quietud exterior, era como si mi cuerpo no pudiese moverse diferente a lo que pasaba en mí interior, no me sentía libre y plena mientras realizaba las danzas; sin embargo, con el paso del tiempo y escuchando al Mamo sus explicaciones de cómo hacerlo de manera correcta, me fui relajando e imaginando que en la aparente sencillez de dicho ritual estaba la maravilla de la celebración y la cura, las plegarias y los agradecimientos a las grandes autoridades espirituales. En ese sentido, valía la pena esmerarse y danzar con el corazón abierto y dulce en honor a la tarea implícita que quería realizar con la danza, él en los entremeses nos iba contando de cómo en su momento había El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 224 realizado este mismo ritual en compañía de otros sabedores y su familia, su expresión era de absoluta felicidad y orgullo, llegar a contagiarse de su energía fue lo que me impulso a danzar sin pensar tanto en lo que pudiese pasar por mi cabeza.

Durante los cantos del Mamo la reflexión se dirigió hacia mi familia, mi compañero y mis amistades más cercanas, experimenté una sensación de amor incondicional y seguridad, el haber estado toda la noche recordando momentos positivos y negativos, hizo que de manera simultánea fuera recordando a aquellas personas que habían formado parte de esos recuerdos y lecciones aprendidas, fue entonces que entendí que en la constancia y el fortalecimiento del positivo es que el negativo va siendo encaminado y va tomando un papel sumamente importante dentro de mi vida, es cuestión de aferrarme a las cosas y momentos que le ha dado satisfacción y bienestar a mis días buenos y malos, para de este modo, permanecer fuerte frente a la adversidad, la confusión y los instantes de oscuridad y miedo, estaba en mí cuidar y dotar de significado cada experiencia.

El ritual cerró con algo que algunos ya habíamos olvidado, pero que en lo personal me gusta, me llena de fuerza, seguridad y confianza en mí y en mis compañeros, el Mamo dijo que sería bueno abrazarnos, con cada abrazo sentía como se fortalecía mi ser y el de la persona que iba abrazando, era una manera de decirle que a pesar de lo difícil que hubiese sido la noche, allí estaría nuevamente de pie y con la fuerza suficiente para seguir, es felicitar y honrar por lo que cada uno ha pasado, lidiar asperezas y reafirmar lo positivo que cada uno tiene por ofrecer al grupo.

Creo que debe haber abrazos más llenos de fuerza que otros, la razón no la sé, quizá con quien necesitas reconciliar o superar situaciones es con quien el abrazo se prolonga, aunque también pensé que la particularidad de los abrazos la determina la intensidad de amor que haya El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 225 frente a ese ser, sean éstas o cualesquiera las razones, es justo ese abrazo sincero y lleno de calor el que reconforta mi interior, reconstruye lo que ha sido dañado y une nuevamente lo que había sido quebrantado. En general para mí es una manera de entre todos entregar y llenarnos de positivo.

La mañana siguiente, a pesar de haber experimentado una noche tan grata amanecí algo indispuesta, el cansancio era mucho, no había logrado conciliar el sueño durante toda la noche; sin embargo, intenté reencontrar en mí las sensaciones positivas de las que me había colmado la noche anterior, entre tanto, el Mamo volvió a llamarnos, ahora cada uno de nosotros tenía que acercarse al nacedero de agua y como él mismo había indicado la noche anterior, debíamos bañarnos con esa agua, imaginaba que era un baño completo pero solo mojó mi cabeza y mi pecho, sentí un alivio enorme, como que el agua sigue refrescando tanto mi cuerpo como mis pensamientos y sentimientos.

La última vez que fuimos a casa del Mamo, por recomendaciones de su hija había que dejar que ella o su Madre me diera un masaje, esto me ayudaría a mantener mi cuerpo sano y en buen estado, esa vez sentí un alivio enorme luego de ese masaje, sentí como progresivamente se iban aliviando los dolores que me aquejaban tanto en mi espalda, como en mi cabeza y mis manos, así que en ésta nueva oportunidad iba aún más emocionada de que pudiesen sobarme de nuevo, efectivamente al sentir el masaje fui sintiendo nuevamente como mi cuerpo estaba fraccionado, todo mi cuerpo sonaba y dolía, supe que había descuidado de él y esos quebrantos y dolores no eran más que el reflejo de ese descuido, al finalizar con el masaje me sentí un poco mejor y me dispuse a armar maletas y partir nuevamente a casa.

En el camino de salida sentía una nueva disposición mía y de mis compañeros, toda la noche y todo lo que habíamos vivido allí era como un baño de dentro hacia afuera, baño que nos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 226 había dejado preparados, nuevos y dispuestos, ya con el permiso para seguir caminando, limpios y con el corazón fortalecido para enfrentar todo lo que vendría en la próxima salida.

PADRE Y MADRE, UN VIAJE HACIA EL AMOR

Tatiana Sanchez

La salida tuvo inicio luego de un par de semanas de descanso, ya fuera de las actividades rutinarias propias de la universidad, había la disponibilidad para iniciar con el arduo trabajo de campo; en un inicio no conocía los destinos ni los tiempos que iba a permanecer en cada uno de los lugares, sólo sabía que partiría el lunes temprano. Los preparativos rutinarios toman cada vez menos tiempo, o tal vez no quise complicarme en detalles y pequeñeces, en el fondo no quería apartarme de mi hogar, mi mente y mi cuerpo se aferraba a ello, pues antes no me había costado tanto despedirme. La preparación a nivel espiritual parece nunca estar del todo lista, aunque quise llevar limpia mi ropa espiritual, sentía como la tristeza iba entorpeciendo esa labor.

Mis padres a modo de fortalecer mi viaje y de brindar su compañía y calor incondicional estuvieron ayudándome mientras alistaba un poco desanimada las maletas, solo quedaba madrugar e ir hacia la casa del profesor Luis Eduardo, durante el trayecto de ida topamos un accidente fuerte que demoró el viaje y que además me puso a pensar aún más lo que pasaría con mis padres durante mi ausencia, iban a estar solos por el periodo de tiempo en el que me marcharía, era plena época decembrina y a diferencia de otros años no estaría para realizar los planes de costumbre, pese a todo me mostré fuerte, quería que tanto ellos como yo sintiéramos que todo iba a estar bien. Luego de un abrazo fuerte, un par de lágrimas en los ojos y una promesa de que todo estaría bien, nos despedimos e ingresé al edificio. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 227

Mostrándome tranquila y sin ninguna emoción aparente saludé a mis compañeros, intentaba centrar mi atención en el viaje, aun sabiendo que las cosas en mi interior no estaban del todo bien, viajar siempre ha sido una de las pasiones que me colma de energía y felicidad, conocer sentir y vivir en diversos paisajes naturales colma mi vida de sentido, así me fui relajando hasta poner en mí un chip diferente al que traía antes de ver a mis compañeros, me llené de su energía y durante el trayecto del viaje encontré sensaciones hermosas que me recordaban las experiencias gratas que me había brindado la Madre Tierra.

Así las cosas, llegamos a nuestro primer destino, la iglesia doctrinera del municipio de

Sutatausa. Al llegar encontré unas montañas hermosas, el clima era cálido, la iglesia estaba rodeada por montañas y por otras 4 capillas pequeñas, en un principio según la explicación del guía éstas se usaban para dar lugar al ritual de primera comunión de los niños quienes iban pasando de una en una. En general era una iglesia en la que los españoles habían pisoteado las creencias de los indígenas y en su lugar, habían puesto unas nuevas, las que ahora conocemos como católicas.

La estructura en su interior estaba bien conservada y se notaba que era bastante antigua, las esculturas dentro de la misma databan ser de muchos años atrás, pero cada una con su significado e historia intacta para la religión católica, habían imágenes de sacrificios, milagros e historias lo que en su momento permitía a los españoles enseñar la base de la religión católica a las comunidades indígenas; en contraposición a ello los escasos lugares dentro de ella que reflejaban la presencia de ancestros indígenas carecían de historia, significado e importancia, el guía sólo los nombraba como el límite que dividían a los que tenían alma de los que no.

En el recorrido pasamos hacia un lugar estrecho y oscuro llamado potro de torturas, era una mazmorra en la que adoctrinaban a las comunidades indígenas para que abandonaras sus El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 228 creencias autóctonas y comenzaran a creer en la religión católica y sus costumbres, en el lugar había una estructura de madera en la cual se le realizaba a los indígenas un estiramiento del cuerpo hasta fracturar los huesos, a modo de castigo o tortura. El guía en un inicio describió el instrumento de tortura bajo una funcionalidad aparentemente desconocida, puesto que clérigos y sacerdotes negaban que éste fuese usado como instrumento de tortura a hombres y mujeres indígenas, argumentan una funcionalidad netamente mecánica, para ayudas de los trabajos pesados requeridos por la parroquia.

Estando allí pude percibir algo de miedo y nostalgia, era increíble estar en un lugar en el que por años estuvo torturándose gente inocente, gente de mi sangre, mi raza y mi fuerza, imaginaba a ancianos y niños aferrados a sus creencias, respetando sus costumbres siendo terriblemente torturados e humillados por ello; incluso el guía de esa mañana que contaba la historia tenía un tono de voz enajenado, no mostraba mayor reacción o interés por aquello que sabía había pasado en ese lugar, para él era contar una historia más. Pero sus palabras me daban escalofrío y despertaban mi sensibilidad, me parecía un suceso terrible.

Nos dirigimos al templo central de la iglesia, en este se veían grandes murales en un inicio pensé que era pintura desgastada, pero que luego tras escuchar la historia de la construcción de la iglesia supe que era extracto de plantas y sangre, los dibujos como lo dije antes hacían honor a la historia de la religión católica, en su tiempo era una manera de enseñar a las culturas indígenas la base de su nueva fe, una fe obligada, carente de amor, pues no podía concebir que una fe basada en el amor, permitiera sucesos de tortura tan atroces, para mí había sido algo impuesto a la fuerza por los grandes españoles.

Dentro de las pinturas se encontraba un indígena con un rosario entre las manos y su vestidura propiamente indígena, dentro de la explicación del guía ésta pintura era sumamente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 229 importante para el mundo entero pues era la única que databa a una cacica uniendo ambas creencias, historia que contó vagamente luego de nosotros mostrar interés hacia ella, de lo contrario creo que muy seguramente lo habría pasado como una pintura más. Para mí era impresionante ver los alcances de la manipulación impuesta por los españoles, pues, aunque aparentemente era un dibujo en el que se plasmaba la unión de ambas creencias, creería yo que esa unión no hubiese tenido lugar en ese momento, pues como precedente a la fe, estaba el derramamiento cruel de sangre inocente.

Al terminar el recorrido por la parroquia tuvimos tiempo para hablar con los que estaban a cargo de ella, el guía, un muchacho y una señora ya de edad, preguntamos acerca de lugares indígenas cercanos, en un inicio la señora sólo nos hablaba del obispo y el padre, de su amabilidad y su solidaridad, por mi parte me concentre en lo que estaba diciendo el guía, señalaba dos grandes montañas ubicadas al respaldo de la parroquia, allí encontraríamos una ruta que nos llevaría por diversos lugares en los que habían historias de recorridos hechos por indígenas, era un recorrido a pie de aproximadamente 6 horas entre montañas, arroyos y caminos vírgenes, voltee mi vista hacia el lugar, lo veía tan distante y tan lejos pero a la vez tan hermoso, quise haber ido a recorrerlo, pues he sentido caminando en las montañas que la tranquilidad, la paz y el encuentro conmigo se acerca un poco más. Sin embargo, no fuimos, era tarde y había que seguir con el cronograma de viaje que hasta ahora seguía sin conocer.

Después de ésta visita nos dirigimos hacia la laguna de Fuquene, ésta laguna es un cuerpo de agua dulce situado en la localidad de Fuquene, departamento de Cundinamarca, al este de los Andes colombianos, a una altitud de 2.540 metros, y a una distancia de unos 80 km de la ciudad de Bogotá. Posee numerosas islas, una de ellas fue santuario de los muiscas; además, existían varios adoratorios atendidos por cien sacerdotes, así como un templo que seguramente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 230 fue erigido a Fu, un dios con cabeza, cola de zorro y figura humana, que personificaba al demonio. Según cuenta la leyenda, oculto bajo las aguas y dispuesto a defender de los muzos, sus dominios en el valle de Ubaté y Chiquinquirá, permanece Fu, el dios tutelar de las aguas de esta laguna. (Lagos vivos de Colombia)

Lo primero fue llegar a visitarla, ver si podríamos acampar en aquel lugar, la impresión al verla fue bastante desconsoladora, era inevitable compararla con la laguna de Tota puesto que había sido la última laguna que había visitado; aunque el tamaño de la laguna de Fuquene era mucho más grande en comparación a Tota, su belleza había sido opacada por un montón de máquinas y malaria que la rodeaban, según una habitante de aquél lugar, esa malaria eran unos islotes flotantes que habían surgido con el tiempo y que cada vez habían ido reduciendo la laguna, era un paisaje entristecedor, desolado y algo sucio, fue simplemente desconcertante ver la majestuosidad de un lugar que considerábamos sagrado reducido a un lugar descuidado.

Caminamos un par de metros intentando alejarnos del ruido y la vista de la máquinas que rodeaban la orilla de la laguna, un compañero, el profesor Luis y yo intentábamos buscar piso firme donde se pudiese acampar juntos, pues la idea inicial de nuestra visita era realizar un ritual de trasnocho, el lugar no tenía las condiciones en su estructura para acampar allí, pero en lo personal creo que no fue eso lo que impidió nuestra estadía, para mí, fue más la tristeza que me implicaba ver la laguna en ese estado de descuido, me sentí cobarde y sin fuerza, pues no había sido capaz de tan siquiera insinuar quedarnos esa noche allí, pese a que si sentía que necesitábamos quedarnos; ya habíamos visto otros lugares sagrados en mal estado y luego de haber huido de ellos por causas recurrentes, nos habíamos arrepentido, recordaba específicamente los cojines de zaque en Tunja, lugar en el que por cuestiones de seguridad se nos impidió permanecer más tiempo, pero a diferencia de esa circunstancia esta vez era una falta de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 231 fuerza lo que impedía quedarnos. Aunque en mi impresión éste más que cualquier otro requería de alimento, fuerza y compañía, preferí callar, quizá la decisión intuitiva de mi grupo era lo correcto por ahora.

Decidimos seguir e ir a buscar hospedaje al pueblo más cercano, para así volver a la laguna al día siguiente a hacer el debido ritual de pagamento.

La mañana siguiente fuimos nuevamente a visitarla, pero era una vista totalmente diferente, pensé que falta de nosotros la Madre Tierra por sí sola se había colmado de fuerza pues ahora el paisaje era sumamente hermoso, el sol se reflejaba en el agua y parecía tan clara como ninguna otra, los rayos de luz sobre ella iban iluminándola poco a poco, el sol parecía acompañar y aguardar en silencio su belleza cada mañana, el lugar era ahora más tranquilo, parecía que esta vez sí le estaba dando gusto tenernos allí.

Procedimos a iniciar con el ritual de pagamento, como es de costumbre, primero saludar al Padre, la Madre, los elementales, las plantas sagradas, los linajes de cada uno de nosotros, los sabedores indígenas que nos guían y acompañan nuestro camino, los lugares sagrados que hemos visitado y los lugares de donde provienen nuestras familias, buscar primero la fuerza en ellos antes de iniciar siempre es una buena manera para comenzar el ritual.

Cuando hacemos esto siento como al ir recordando cada cosa me lleno de sensaciones bonitas, me pierdo en los abrazos de mis padres en las travesuras con mi hermana y en la inmensa felicidad que me hace sentir mí sobrina, siento la bondad y la nobleza de mi Madre, la fuerza imponente y la protección incondicional de mi Padre; se van agudizando mis sentidos a los elementos de la tierra, siento la frescura de la brisa fría, la firmeza de la tierra en la que poso mi cuerpo, el fuego que se agita en mi interior y recorre todo dentro de mí, escucho caídas de agua y siento como ésta corre por mis venas; luego voy recordando mis abuelos, mi familia, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 232 intento hacerlo con cariño y gratitud, fijo en mi mente sus cualidades y defectos e intento volverlos propios, para hacer aún más mía su fortaleza; voy pasando imágenes y sentimientos de los lugares a los que he visitado y más aun de los que provengo, para finalizar ya cuando hacen referencia a los linajes de mis compañeros doy gracias a ellos por haberlos puesto en mi camino.

Siento que de esa manera entro con más disposición y entrega al ritual.

Con el pasar del tiempo el silencio se abrió paso entre nosotros, solo quedaba la conversación que cada uno de manera silenciosa decidiera iniciar con la laguna, en mi caso, ya habiendo traído a ese lugar a mis seres queridos, mis ancestros, mi fuerza y mi debilidad no tuve más que presentarme, comencé a pensar en quien era en ese instante y que podía ofrecer a cambio de poder apreciar tan hermoso paisaje, dentro de mí no había mucho, los problemas del exterior que creía había dejado en Bogotá comenzaron a tomar fuerza, la tristeza reapareció, no sabía bien que estaría pasando en casa, pensar en ellos me hacía sentir nostalgia, en pocos días ni mi hermana ni mi sobrina estarían en la ciudad y ese distanciamiento no se había dado antes bajo ninguna circunstancia.

Por otro lado los trabajos incompletos que había dejado en la ciudad antes de partir se reflejaban con más y más fuerza, sentía que debía haber limpiado más mis vestiduras antes de llegar ante la Madre Tierra, inmediatamente pensé que no quería estar en un lugar diferente que fuese en el regazo de los brazos de mi madre, la concentración por momentos se hizo escasa, no sabía que pensar o sentir diferente a la preocupación y la nostalgia, ni siquiera me sentía capaz de ver ese lugar sagrado y puro, pues parte de la tarea de ir a visitarlos es sanarlos y entregar positivo para fortalecer su esencia y en este sentido mi alma carecía de fuerza.

El transcurso del tiempo y la compañía incondicional de un compañero hizo que levantara la cara y mirara hacia uno de los costados de la laguna, viéndola fijamente, mirando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 233 como la luz del sol se extendía sobre ella, pude tomar algo de fuerza y mantenerme fija mirando, parecía que fuese otro lugar diferente al que había visto la tarde anterior, ahora la bondad y la calidez dominaban el lugar, sentía el amor de madre que en ese momento me era escaso, la compañía que me resultaba inexistente, pues la sensación de soledad de manera inexplicable se acrecentaba, pude en ese instante sentir la fuerza de la que necesitaba tanto.

No quise tomar esa fuerza de forma apresurada así que poco a poco y mirando de manera paulatina desde el costado hacia el centro de la laguna pude enfocar nuevamente mi mirada a un punto fijo, el sol, la sensación de calor que necesitaba, la sensación de estar con un Padre, sentía que necesitaba de su protección y su guía y en eso se convirtió, una protección indescriptible que cobijaba mi cuerpo, una luz de guía y esperanza que esclarecía los pensamientos más oscuros, ya no pensaba en soledad, tristeza nostalgia ni preocupación había recibido durante ese tiempo el abrazo que sólo un Padre puede dar en momentos de desconsuelo.

Entonces, recordé ese amor, protección y fortaleza que sólo en los brazos de mi Padre podía encontrar desde que era una niña, lo sentí tan cerca que la distancia se desvaneció, volví a sentarme en sus piernas y recostarme en su pecho mientras el sol seguía cubriendo mi cuerpo, era una imagen tan real que por poco y no logro diferenciarla de lo real, abrí mis ojos y me dispuse de corazón y mente a seguir escuchando lo que venía de mi interior, abrace con fuerza a mi compañero del lado como símbolo de que volvería cuando acabara de escuchar y aprender, volvería luego de encontrar en la laguna lo que hasta ahora no encontraba en mí, pues en compañía de ella surgió sensación previa.

Luego de levantarme recordé que los abrazos como nos dijo el Mamo en Silvania, eran una muestra de positivo, amor y fuerza y era justo lo que en ese instante podría reconfortarme, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 234 me dirigí hacia el borde que apuntaba hacia la laguna donde no estaba otra cosa a mi vista más que la laguna y el sol, allí me senté durante el tiempo siguiente.

Minutos después la propuesta del profesor fue comenzar con recordar desde nuestra infancia hasta el día de hoy todo aquello que en ese momento sintiéramos que era pertinente y adecuado entregar a la laguna, todo aquello que de corazón y con absoluta consciencia podríamos soltar.

Al principio aparecieron como una avalancha imágenes de mi infancia, me asusté y en mi interior dije ¡alto! quería recordar mi infancia pero más despacio, aunque fue triste ver que mi memoria no era algo que jugara a mi favor, más que recuerdos encontré baches en ellos, no logré recordar más allá de un par de cosas que era consciente que habían casi acabado conmigo, encontré un par de momentos fluctuantes que empobrecían la fuerza y el amor de mi corazón, pero éstos no pertenecían propiamente a mi infancia, eran recuerdos de mi adolescencia rebelde, el cigarrillo, los amores fortuitos y algunas noches de descontrol. Me negaba a no encontrar cosas de mi infancia, pero al concentrarme un poco más pude llegar a ella, nuevamente apareció mi familia, como mi motor y mi mayor felicidad, no había un día en mi memoria en el que deseara cambiar, mis padres siempre habían dado todo de sí para hacer de mis sueños una realidad, me habían llevado de la realidad a la fantasía y recordarlo me hacía inmensamente feliz.

Finalmente descubrí que ni siquiera los “malos” momentos, quería soltarlos del todo, pues estaría soltando la esencia de mi ser y prefiero el equilibrio entre lo que fui de niña, lo que me convertí en la adolescencia y lo que quiero ser ahora (sin precisar específicamente que será) a soltar y olvidar lo que en efecto me hizo crecer como mujer, hija, hermana, madre y amiga. Ya habiendo hecho esa aclaración en mi interior comencé a dejar el trozo de sensación que creía era El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 235 capaz de soltar en ese momento y me quedé consciente de que tendría que trabajar con lo que sobrara de ella en mi interior.

Por momentos y manteniendo la vista fija en la laguna vi como el sol y la laguna eran siempre uno, así como en su momento Padre y Madre son uno en la guía y la enseñanza de sus hijos, la maleza no era otra cosa que el reflejo de aquello que en mi mente había ido soltando, en cierto modo era una parte de mí éstos islotes de maleza con el paso del tiempo se mueven hacia los costados, del mismo modo que las cosas que en ese momento estaba soltando se harían a un lado, formando parte del paisaje, de mí paisaje para así permitirme volver a tomar la mano de

Padre y Madre y, de este modo seguir adelante, pues entendí que la guía y la luz de ellos nunca es intermitente si la dulzura del corazón domina el interior, la soledad no existe, si hay un lugar para el amor, la fe y la vida todo se convertirá en lecciones y agradecimiento.

Sentada en la roca y con la vista fija al frente cerré mis ojos lentamente y pedí que las bendiciones y la fuerza del Padre tanto espiritual como físico siguieran guiando y acompañando mi camino, en pensamiento me bañé con la luz del sol, me limpie con su luz y le di claridad a esos rincones oscuros que habían dentro de mí, era una sensación hermosa, era sentir en carne y hueso la fuerza y la sabiduría que sólo encuentro en mi Padre, sentir como me reconciliaba no sólo con él, sino con la parte masculina que aguarda en mi interior pues en viajes anteriores no había experimentado esa fuerza tan latente como hasta esa mañana. Para mí esa laguna me había mostrado la unión de padre y madre pero predominaba la energía de Padre protector.

Seguimos con la danza y la interpretación de las canciones que nos había enseñado el

Mamo durante nuestro trasnocho en Silvania, danzamos para mí, como muestra de agradecimiento ante todo lo que ese lugar había dejado en nosotros, al terminar tomé las semillas las entregue con toda la devoción mientras pensaba en cada cosa que había pasado en ese lugar, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 236 las dejé en el lugar en el que había pasado toda la mañana y me dirigí nuevamente por un abrazo para cerrar agradeciendo a la fuerza que me permitió iniciar.

Después de esta visita nos dirigimos hacia un pueblo llamado san pedro de Iguaque, allí nos dispondríamos a averiguar y profundizar acerca de la Laguna de Iguaque, de donde proviene el mito de Bachue, comenzamos por iniciarnos en el trabajo de campo, hablar con la gente, indagar acerca del mito y la laguna, no fue tarea sencilla, pero casi que cada uno de mis compañeros tenía una fortaleza por experimentar, complementamos fortalezas y encontramos discursos de gente mayor y joven que daba su punto de vista acerca del mito, incluso hasta canciones y trovas tuvimos la oportunidad de hallar.

Dentro de las indagaciones que se realizaron la que más me impacto y me gustó fue ver a unos señores tocando guitarra y cantando trovas acerca del Mito, escucharlos me hizo recordar que de aquella tierra Boyacense provenían mis raíces, el resonar de las guitarras y el cuatro me llenaba de energía, como cuando a un joven le ponen canciones que escuchaba de niño, sentía una fuerte familiaridad y me agradaba mucho escucharlos.

Para la mañana siguiente estaba programada la subida a la montaña de Iguaque, según los habitantes del pueblo era una caminata de aproximadamente 2 horas; pero ya antes había escuchado comentarios de ese tipo y luego resultaba más del doble recorriendo los lugares, así que comencé a hacerme consciente que sería muy lejos y complejo subir, al menos a nivel físico, aun no sabía que tanto le costaría a mi espíritu enfrentar éste nuevo lugar sagrado.

Unos minutos antes de salir, tuve que volver a reencontrarme con la nostalgia y la limitación de encontrarme lejos de casa, no me sentía bien así que comencé a guardar silencio y refugiarme en un par de sonrisas fingidas, no quería que otro intentara entender algo que apenas y estaba entendiendo, mi compañía incondicional junto con la fe y la creencia en el propósito de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 237 que todo tendría una función positiva, se convertía en lo que fortalecía mi cuerpo, la montaña por momentos parecía todo un reto subirla; sin embargo, el ritmo al que subimos le dio tiempo a mi cabeza de frenar un poco tomar aire y recuperar lo positivo, los sueños, planes, cambios, proyectos y sacrificios que habían precedido mi vida camino antes de llegar allí.

En ocasiones perdí la fuerza casi que por completo, sentía mareos y calambres en las piernas, el profesor ofreció un poco de ayu para todos, pero no quise tomarlo, quería como llegar a un punto en que sintiese que debería tomarlo, pedir permiso pues nunca antes la había recibido, tras una hora aproximadamente, ya con los síntomas precedentes pedí un poco, la tomé y con mucha fe y respeto la eche en mi boca, al principio sentí un sabor amargo y fuerte, luego más y más suave, cuando acabé me sentía reconfortada y capaz de seguir, así que seguí realizando lo mismo cada vez que sentía que el cansancio era mayor que mis ganas de subir.

Al llegar a la laguna sentí una sensación de buen recibimiento y bondad con nosotros, era como si parte de ella nos hubiese estado mirando desde que comenzamos a subir hasta ese instante, el agua estaba quieta y tranquila, el lugar era algo frío, a su alrededor estaban unas montañas que bordeaban y guardaban la laguna, me sentía maravillada al ver tan precios lugar; sin embargo, pensar el mito mismo me resultaba confuso, pues aún no hallaba la esencia de aquel lugar y la explicación teórica no me llenaba del todo, quería sentirla y sumergirme junto con ella en su sabiduría.

Finalmente la ausencia intermitente de no poder encontrar el lugar al que realmente pertenezco y soy parte, se ha venido convirtiendo en el proceso de sentir uno y otro lugar, observar desde lo superficial y en lo profundo todo lo que implica estar largas o en ocasiones cortas horas en ellos, dejar que el esplendor de los paisajes e incluso el clima desborden las sensaciones que aguardan constantemente para salir a flote, hasta que pueda llegar a otros niveles El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 238 de concentración para no sólo ver el lugar sino que entender, escuchar y sentir la esencia de éste, cada lugar es diferente, se vuelve particular según lo que se siente en cada uno de ellos, o eso ha sido lo que podido diferenciar hasta ahora.

Al iniciar con el ritual de pagamento comencé a pensar en todas las carencias con las que había iniciado el viaje, por alguna razón no sentía el permiso para bañarme en la laguna, después de un par de minutos la laguna comenzó a moverse, el viento seguramente movía el agua hacia el costado derecho, pareciera que quisiera contarnos algo, pero estábamos en la ignorancia e inocencia que tienen los niños durante el proceso de aprendizaje, sentía que ella pedía un poco más de tiempo, más limpieza y fe dentro de mí; después de esto comencé a confesar el porqué de la tristeza, la ira, la inseguridad y la constante sensación de desamparo que seguramente ella había percibido de mí durante el proceso de arribar la montaña, la explicación de aquél confieso con ella en palabras no es posible contar, era a punta de imágenes y recuerdos que le contaba quien era, cómo y por qué había llegado hasta allí aquella tarde.

Luego y por una indicación previa dada por el Mamo y el Abuelo un compañero procedió a bañarse con el agua de la laguna, siguiendo los consejos de ambos sabedores tendría que hacerlo en cada una de las lagunas que visitáramos y ésta no iba a ser la excepción, pese a las advertencias peyorativas que habían hecho los habitantes del pueblo, él mantenía su emoción mientras que a mí en un inicio me daba algo de temor, ya había escuchado en otros lugares como las lagunas desaparecían a personas que llegaran a molestar su tranquilidad, así que con la sensación previa que estaba experimentando me concentre a encontrar en mí la manera de pedir permiso, tal cual lo venía haciendo, añadiendo devoción, ternura, amor y entrega. Finalmente, con el permiso previo, todos debíamos hacerlo en caso de querer y sentirlo así, iba a limpiarnos tanto el alma como el cuerpo, tanto las enfermedades de la mente como las físicas y las del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 239 corazón, iba a calmar la candela del corazón e iba a fortalecer la fe y el espíritu. Recordaba que eso habían venido diciendo el abuelo y el Mamo en los diferentes encuentros, yo quería que así fuera para todos, pero aún no me sentía lista. Había algo más...

Sentía que había perdido todo, que la voluntad, la fuerza y la fe se habían desvanecido, arranqué las corazas de mi pecho y enfrenté la verdad de lo que había venido negando por años, no me quedaba más que el reflejo de esa tristeza e inconformidad saliendo entre lágrimas, ya nada parecía suficiente, pues es en la nada donde había vivido al mentirme a mí misma acerca de mi estado, sentí como había agredido desde lo superficial hasta lo profundo de mi ser, enfrenté un desborde de sensaciones, había perdido el valor de la feminidad, la fertilidad y la vida, que en esencia llevo dentro; la inocencia y la astucia de la infancia se ha ido entre promesas insulsas y vacías de una plenitud engañosa, de una plenitud que solo había saciado mi cuerpo, había caído en placeres y excesos de una vida aparentemente prometedora y saber que no era así era quedar desvalida frente a la verdad, frente a esa verdad que se refugió en corazas y que esa tarde frente a la laguna pude ver claramente.

Vi miedos, temía más de lo que recordaba haber enfrentado alguna vez; vi engaños que en su momento se disfrazaron de verdad, vi mentiras crueles que para mí algún día fueron una travesura inocente, vi tristezas que no dejé salir en lágrimas y que con el tiempo aguardaron en sonrisas, vi las cargas que oprimen mi cuerpo y me causan dolor, aquellas que había tomado sin ser mías y aquellas que había olvidado que sí lo eran. Me escuche desde dentro, afligida y gritando; finalmente estaba frente a mí, la laguna en su implacable quietud me tenía de vuelta en mí, escudriñando dentro, capa por capa, dolor por dolor, mirando fijamente lo que había hecho de mí, en conclusión, los recuerdos que había visto como baches en la laguna de Fuquene junto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 240 con todo aquello que allí intenté guardar para enfrentar luego, estaba revelándose entre lágrimas y temblor incontrolable.

Comprendí que para todo hay un momento, un lugar y un sentimiento, hasta ese día no había sentido que un lugar me frenara de tal forma, en medio de tanta sensibilidad y emoción dentro de mí, también hubo espacio para creer y confiar, salir un poco de mí para pedir por alguien más, para que en su tarea y desde su fe junto con la mía, se le se le diera toda la fuerza, el cuidado, la protección, la sabiduría, la calma y el amor que le hiciera falta, en mi mente fui dibujando su cuerpo detalle a detalle pidiendo que el frío del viento cobijase su corazón de paz, tranquilidad y perdón, que el agua limpia apaciguara sus dolores, que el dulce y la pureza de ella endulzara sus pensamientos para mantener la nobleza de su ser intacta, que en la profundidad del pozo se guardara todos sus secretos y equivocaciones, para que en ella estuviese su verdad, pedía con devoción y fe que sus pies se conectaran con el amor y la bondad del lugar para que así, su sentir fuese en concordancia con ella por el resto del camino.

Sin darme cuenta y al ver a mi compañero radiante y tranquilo, pude ver que hablaba con la laguna, sentía como ella me escuchaba, las ondas en el centro del pozo quizá eran respuesta a lo que a manera de confieso y plegaria le había dicho en pensamiento, el salir de mí y concentrarme en agradecer por él, hizo que sintiera una conexión con la Tierra que nunca antes había experimentado, había conseguido, sentido y visto la dulzura de mi corazón y la sinceridad de mi alma, el amor en su más pura expresión, pues sentía que el amor de la Madre Tierra hacia nosotros es el camino que nos permite ir más allá del ego y amar a otros, encontré en ella el amor y la fuerza vaga que mi cuerpo no tenía.

La bondad de la Tierra, de la Madre Tierra se compara a la bondad que toda Madre tiene con sus hijos, le bastó ver un poco de sinceridad y arrepentimiento en mí corazón terco y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 241 desobediente, para rebozarme nuevamente de fuerza y amor, para hacerme sentir que todo tarde o temprano volverá a estar bien, porque comprendí que bajo su compañía y su amor infinito siempre habrá espacio para el perdón, para la cura y para iniciar de nuevo con un paso más firme; pues uno como hijo jamás se aleja del vientre de su madre, esa será eternamente su morada y su resguardo en cuanto quiera ir y revestirse de vida, éste estará a su disposición, sin importar la ropa, el dolor o la felicidad que lleve consigo, volver a ella es sinónimo de volver a la verdad, el amor y la vida, estar en su vientre y desde el pensamiento en lo profundo de sus aguas, fue experimentar el amor en su esencia más pura, sentirlo parte del mundo y parte de mí mientras al tiempo me sentía parte de él.

El viaje continuaba la esperanza no había muerto a pesar que mi espíritu se tornara un poco más débil. Aunque seguía sin sentir permiso para bañarme, sentía que faltaba poco, que había algo más de lo que debía darme cuenta y confesar, era como algo incontrolable que estaba por salir dentro de mí, subimos a una roca que dejaba ver el esplendor, la claridad y la belleza natural de la laguna, yo sólo cerré mis ojos, pedí perdón y espere con paciencia sentir que podía bajar a bañarme; pasaron un par de minutos y fue entonces cuando recordé lo que había aprendido en la laguna de Fúquene, Padre y Madre son uno, deben estar juntos para así guiar y enseñar al hijo, fue entonces cuando comencé a sentir un poco de calor, un rayo de sol iluminaba mi espalda y siguió saliendo hasta que sentí como daba calor a todo mi cuerpo, era una sensación de calidez que sólo siento en casa, ahí supe que esa era mi casa, que sólo con la compañía y habiendo pedido perdón y permiso a Padre y Madre era posible bañarme, así que baje, lave mi rostro pidiendo claridad para mis ojos ciegos, dulzura para mi boca amarga y comprensión para mis oídos sordos; lave mi cabeza para limpiar recuerdos y pensamientos negativos; luego, lave mi abdomen pidiendo recuperar el valor y el significado de la feminidad, fertilidad y vida que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 242 había desconocido; por último, lave mi pecho honrando las emociones y sentimientos que se me había permitido experimentar y pidiendo pureza para amar siempre como sentí que la laguna lo había hecho conmigo ese día.

Agradecida con el sol, la tierra y la vida misma por guiar mi camino y cuidar de mí, me dispuse a cerrar el ritual junto con mis compañeros, la laguna se había cerrado no la sentía igual, el irrespeto de unos visitantes hizo que la energía cambiara o eso sentí, comenzó a lloviznar y sentí que ya no era momento de estar allí, así que como ahora es costumbre para mí, abrace fuerte a mi compañero intentando cerrar con positivo aquella experiencia y luego nos dispusimos a bajar, no pude abrazar a todos, aunque quise hacerlo, sentía que ellos percibían algo diferente de mí, así que permanecí quieta y en silencio, mientras lo hacía iba despidiéndome con una gratitud infinita de ese lugar sagrado, para mí era sagrado, su lección y el tiempo que me permitió estar allí lo fue. Así que aferrándome a lo que había vivido y sentido allí para no despegarlo de mis recuerdos gratos y positivos me dispuse a bajar con mis compañeros

Efectivamente la llovizna nos alcanzó así que nos mojamos bastante, pero para mí no era una muestra de haber hecho las cosas mal, por el contrario sentí que la laguna mandaba su agua para bañarnos por completo y enviarnos con el corazón más fuerte y limpio, aunque también pensaba que era una manera de manifestar su molestia a los visitantes que habían estado consumiendo marihuana durante su estadía.

Finalmente cesó la lluvia, fuimos bajando despacio mis dos compañeros hombres, la profesora y mi compañera, por momentos creía que nos perderíamos en el descenso, pues tanto el guía como el profesor iban a un paso más rápido, pensé en no afanarme, el cansancio había desaparecido en comparación al que sentía durante el ascenso, no quería bajáramos desunidos, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 243 pues iba agradeciendo a cada uno de mis compañeros por aún sin saberlo haber estado conmigo durante la experiencia tan maravillosa que había vivido.

Llegamos nuevamente a la hacienda ya sólo quedaba descansar el resto de la noche para viajar a la mañana siguiente de nuevo a la ciudad de Bogotá, noticia que me reconfortaba aún más, quería llegar a abrazar con fuerza a mis padres físicos que durante todo el trayecto con su energía de Padre y Madre guiaron mi camino.

RECOBRANDO EL SENTIDO DEL CAMINO PROPIO.

Tatiana Sánchez

Cada subida a una montaña es hacer el recorrido en un propósito fijo o, en ocasiones en un propósito invisible que a medida del camino va apareciendo con más fuerza, sea cual sea la manera, es ésta la forma en la que he entendido que es posible que la montaña hable, sienta y transmita para cada uno de nosotros lo que escucha del interior del corazón, que en palabras es poco frecuente expresar de manera precisa. La consciencia de subir una montaña sagrada como lo es Tensacá (Monserrate) no viene de otro lugar diferente a mi fe en el propósito de curación, subir ha sido hacerme responsable de encontrar o no respuestas en mí misma, no en ella, aunque sin ella el camino hacia mí, hacia mi enfermedad o mi cura sería aún más nubloso.

La mayoría de las mañanas que había subido la montaña de Tensacá (Monserrate) iba con un propósito invisible que en el andar iba descubriendo, sumado claramente al propósito general de pedir permiso para los recorridos, las salidas de campo y el trabajo espiritual en los lugares sagrados; esta vez, diferente a aquellas otras veces, las ideas en mi pensamiento iban lo suficientemente claras, quería subir para cumplir la promesa de hacerlo, iba en búsqueda de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 244 tranquilidad y la luz que en un principio sentía y que ahora no encontraba, también iba a fortalecer el vínculo con mi familia y en general mi unión con Padre y Madre tanto físicos como espirituales, puesto que me sentía en constante deuda. Sin embargo, estos propósitos no detuvieron el que surgieran cosas adicionales durante el recorrido.

En primer lugar, días atrás había recordado con bastante fuerza un par de promesas que había hecho a la Madre Tierra y a mí misma en oportunidades anteriores como durante los trasnochos, viajes y pagamentos en lugares sagrados, en ellos durante algún instante me surgía la idea de subir junto con mis padres, sentía que al ser Tensacá el sitio sagrado más cercano que tenía y luego de haber recibido tanto de los otros con respecto al vínculo con mis padres y los cambios en mi familia, ésta sería una buena manera de agradecer a la madre por vincularlos y mantener su energía fraternal conmigo.

Aunque éstas ideas o impulsos se habían pasado continuadamente por mi mente y hasta ese día no las había convertido en una realidad, así que para empezar fue éste el primer pensamiento que fije en mi mente y mi corazón como un modo de pagar y agradecer a la Madre, pues en aquel recuerdo estaba impreso esa sensación de tener que presentarlos y comenzar un propósito más completo y con más fuerza bajo su compañía. Para mí era lógico hacerlo, pues había estado recibiendo lecciones a partir de esa energía y ese calor que me provee mi Padre y mi

Madre sobre todo durante mi última salida a la laguna de Iguaque. En ellos siempre había visto reflejado la fuerza de lo masculino y la nobleza de lo femenino y sentía que de ellos me habían provenido ambas sabidurías que, aunque entorpecidas intentaba practicar y llevar siempre conmigo.

Durante los días previos a subir estuve nuevamente recolectando un par de semillas de las cosas que comía, incluso pedí ayuda de mis padres para entre todos recolectarlas, así como lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 245 hice antes de realizar el primer viaje sola, sentía que de ir, tenía que subir con disposición y con ofrendas para que éstas, al igual que mi claro propósito de agradecer, le redimieran a la Madre la bondad con la que ella misma y también el resto de los lugares sagrados me habían recibido durante mis viajes.

Quería agradecer por los deseos cumplidos y los que por sí solos con el tiempo se habían puesto en marcha, pues en este camino hasta ahora había descubierto el amor, había soltado el miedo, había encontrado momentos sumamente sublimes y hermosos al mirarme en lo profundo, había dejado el cigarrillo en una proporción tan enorme como en un principio no imaginé alcanzar, había visitado lugares hermosos donde el sol y las lagunas me habían brindado las más gratas lecciones y sobre todo había valorado tanto la sabiduría de la fuerza masculina y femenina como no hubiese podido haberlo hecho en ninguna otra parte.

Además, quería pedir claridad y luz en mi camino para no perder de vista lo que en un inicio me había puesto en marcha en ese auto-descubrimiento constante de lo ancestral indígena.

Pues sentía que por alguna razón y sin haber encontrado el punto fluctuante mi pasión por ello se había desvanecido junto con mi tolerancia hacia algunos de mis compañeros.

Al llegar, a diferencia de las otras veces no había la sensación de nervios o incertidumbre habitual, era un descanso en el fondo de mi ser que me hacía pensar y sentir estabilidad y bienestar pues finalmente me estaba y lee estaba cumpliendo a la Madre lo que en diversas oportunidades le había prometido; el clima al inicio estaba un tanto frio, pero era sólo el inicio de la mañana, a paso lento y charlado fuimos arribando la gran montaña, en mi mano siempre mantuve las semillas mientras pensaba y entregaba todo aquello que en sueños, trasnochos y pagamentos había recibido de la Madre Tierra, por un momento, comprendí que ese lugar al que le había pedido permiso, lo había olvidado para ir a agradecerle, a él no le había contado los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 246 detalles de mi viaje y ante él era donde había iniciado el camino por tanto, me sentía en deuda.

Sentía que había estado llamándome muchas veces sin recibir una respuesta física de mi parte, pero que a su vez en lugar de rechazo, aún en él había disposición para recibirme junto con mi familia.

Por momentos la montaña intentaba cerrarse pues sentía que no podía subir más, me daba cuenta que estaba dejando entrar molestias inútiles en mi pensamiento así que frenaba un poco, miraba a mis padres fijamente, pues a diferencia del resto de lugares que había estado recorriendo, ésta vez no tenía que imaginarlos a mi lado, ni tampoco imaginar la fuerza que me proveen, ésta vez ellos estaban allí físicamente para inyectarme nuevamente de esa fuerza que de manera natural me brindan y, que en otras ocasiones necesité para llegar a estar tranquila y concentrada en los diferentes lugares sagrados; hicimos algunas paradas a tomar agua, pues había intentado hacer una breve explicación de mi intención de subir y ofrecer el ayuno de todos en el claro pensamiento de unión, claridad, amor y vida.

Al llegar a la cima entramos a la parroquia, por mi parte hice en mi cabeza la unión que el Mamo siempre dice, el Padre y la Madre espiritual también son Dios y la Virgen, honré su esencia de esa parte religiosa y creyente dentro de mí y nos dirigimos hacia el lugar que acostumbramos visitar para los rituales de pagamento con mis compañeros de semillero, las preguntas por parte de mis padres no se hicieron esperar, así que sólo pude hacerme las mismas preguntas a mí misma al tiempo que ellos creían que yo ya sabría la respuesta.

¿Qué hacíamos allí? ¿Qué significaba para los indígenas y más aún para nosotros subir la montaña? Y finalmente ¿Si el subir para los indígenas y para nosotros seguía significando lo mismo que para los católicos?... en su momento no tuve como contestarles ni contestarme. Me remití a lo que había pensado al llegar a la parroquia e intenté ver lo indígena y lo católico como El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 247 dos procesos que permiten ir hacia lo profundo de sí mismos, desde diferentes prácticas, costumbres y significados.

En ese orden de ideas pude descifrar que las maneras de acercarse a un Dios, al Padre y a la Madre, aunque parezca ser diferente de creencia a creencia, en la raíz de esa búsqueda resulta siendo bastante similar, se trata de acercarse con el corazón abierto a lo sagrado y a las divinidades que de creencia a creencia se establecen, para desde allí encontrar en uno mismo una parte de esa inmensidad sagrada que en un principio me parecía distante y ajena.

Pude entender que la vida misma se va moviendo al ritmo del ciclo de los seres humanos, y en el proceso obtengo lo que en un principio no se sabía que quería, pues los propósitos en el ir y venir del camino se me han venido esclareciendo y en éste sentido, han venido cambiando su intensidad y su dirección no creí empezar a caminar para encontrar amor, tampoco pensaba que encontraría más miedos que verdades al adentrarme en mí y sólo en la medida en la que seguí fue que fui encontrando dirección para cada cosa.

Mientras caminaba observaba el lugar fui pasando por mi mente el ciclo de mi vida hasta ahora, en algún momento fui una bebé, torpe intentado gatear, caminar y hablar aferrada siempre a Padre y Madre; luego me vi de niña ansiosa por descubrir una y mil cosas por mi propia cuenta; después durante mi adolescencia, rebelde, sorda, desobediente y a la vez, creativa y poseedora de una fuerza desmesurada que quería saberlo todo en un instante; ahora estaba en el proceso de convertirme en adulta y aún esa faceta me resultaba imposible de definir; recordaba al

Mamo diciéndome que algún día sería madre pero para ello debía aprender a ser paciente, guía y acompañante incondicional; así sentí que el que finalmente llega a ser abuelo, sabedor o guía es porque con paciencia ha sabido acompañar, guiar y heredar su amplio conocimiento a quien decida con amor y fe adoptarlo, hijos, nietos o a alguien como yo en lo indígena. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 248

Concluí que el conocimiento, el descubrimiento y la sabiduría son caminos de paciencia a los que se llega únicamente a través de adentrarse en uno mismo y allí reordenar sensaciones, pensamientos y sentimientos poco a poco, para de este modo, poder determinar con humildad una manera dulce de ver, sentir y aprender del mundo, de la Madre y el Padre tanto espirituales como físicos.

Después de un rato nos fuimos a desayunar y comenzamos nuevamente a bajar, ésta vez más lento de lo que habitualmente lo hago, el esfuerzo físico para la rodillas es mayor y era mejor bajar con cuidado, me despedí de la montaña intentando en mi imaginación abrazarla, cobijarme con la brisa y sentir que ella de igual manera nos despedía con un abrazo, di las gracias por haberme permitido a mí misma cumplir y cumplirme, en este camino puede uno encontrarse cosas maravillosas y demasiado agradables, así como otras que generan choque e inestabilidad de todo tipo, pero es el único camino hasta hoy, que me permite ver y aprender de ambas circunstancias.

Creo que es cuestión de compromiso con la valentía, la paciencia y la humildad, lo que me permite sacar fuerzas para enfrentar con dulzura la verdad que en mi interior aguarda, después de todo, el camino me sigue llevando a reconciliarme con el Padre y a afianzar el amor por la Madre, en el sentido profundo de lo espiritual y significativo de la realidad impresa en lo físico.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 249

CATEGORÍAS DE COMPRENSIÓN

Desde el inicio, el ejercicio de categorización surge como la ayuda epistémica de

comprensión, evidencia que el sentir se ejecuta como la base de la necesidad científica

corazonante, capaz de englobar de forma poética los elementos de investigación encontrados en

el camino vivencial, etnográfico y terapéutico.

La división se hace bajo la lógica de ahondar en los significados, mas no en el

entendimiento bipartido de conceptos, es más la comprensión colectiva fenomenológica de los

elementos ancestrales que juegan un papel fundamental en la construcción del camino, se

muestra la investigación en todos sus niveles de comprensión y construcción, éste momento meta

categorial por ejemplo, se muestra como la tarea de entendimiento circular integrativo

poéticamente, destacando nuevamente los estilos literarios de singularidad y las experiencias

particulares.

Categorización Tatiana Sánchez

La utopía de sentirse vivos

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

El transcurso del agua, la fuerza del viento, Caminando por los

el cantar de las aves y el movimiento de las lugares de la tierra,

plantas, yo fui yendo al ritmo de sus caminando hacia mi

palabras, al observar a mi alrededor veía interior y mi verdad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 250

como sus palabras también tenían sentido para mí, mientras él lo iba describiendo yo Guiada por los veía como todos estos elementos formaban elementales vislumbro mi un conjunto realmente hermoso, me interior transportaron casi que a otro lugar, bastaba con observar un trozo de naturaleza y concentrarse en ella para descubrir cosas increíbles, fue entonces que pensé que al estar allí podría algún día ver mi interior de la misma manera, acorde y hermoso, tal vez esa era la respuesta que sin saber estaba buscando, un camino para ver todo de mí de la misma manera como estaba apreciando el exterior.

La experiencia incitaba a despertar la Puente entre el cuerpo y sensibilidad del espíritu, quería sentirlo el espíritu que sensibiliza acorde y unido a este cuerpo que la razón y la lógica

últimamente es tan esquivo al ambiente natural. Allí surgían las ganas de ver, sentir y creer en algo diferente a las lógicas de la razón, pues hasta el momento estando en ellas no había logrado experimentar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 251

sensaciones parecidas.

Es posible ver como la naturaleza o la

Madre Tierra en su infinita sabiduría, dibuja claramente entre paisajes las lecciones que aún nadie ha logrado plasmar en libros, dibujar en lienzos o escribir en versos, según el Mamo, en ella estaba la sabiduría suficiente, pues cada uno de sus elementos hablaba por sí solo, en ese momento pasó un ave, el Mamo sonrió y dijo que quizá él nos estaba diciendo algo, pero que nuestros sentidos aún no nos permitían saber lo que había dicho, observaba el agua y decía que en la fuerza del caudal y en general en el orden de la naturaleza estaban impresas las lecciones que podrían disminuir tanta destrucción y permitiría ordenarnos a nosotros mismos. Entendí que todas esas lecciones estaban allí, en la simpleza de la mañana y la complejidad de la naturaleza, que se mostraban sin ninguna restricción El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 252

frente a los ojos del más incrédulo, susurrando en los oídos del sordo palabras bonitas, llenando el espacio de una paz indescriptible que recorre el cuerpo del más rígido, dejando esa sensación de extrañeza y a la vez de familiaridad en el corazón del más rudo.

Era de esos lugares que se mantienen ocultos, pero que logra conservar el campo dentro de la ciudad; la unión entre la naturaleza y la tecnología, la pureza y la contaminación, permite, aporta y construye la unión del pensamiento con la complejidad de la vida misma, el tiempo allí había hecho eso conmigo, unir la simpleza de la razón y el pensamiento con lo complejo del entendimiento desde el sentir, viendo el movimiento la naturaleza fue que ambas se chocaron, quería integrarlas pero parecían opuestas. Ahora podía imaginar lo que implicaba tener equilibrio, que en un inicio fue la duda que sentí tener que descubrir y que por ahora El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 253

era encontrar el punto central entre razón y sentimiento.

El camino se tornó distinto a muchas veces anteriores. Un silencio que solo se veía interrumpido por el cantar de los pájaros y el sonido de los arboles cuando retozaban sus hojas, a pesar del incesante rugir que la ciudad, que a pasos lentos y tranquilos

íbamos dejando abajo, se sentía un aire de unión e identidad, pese a que no conocía bien el objetivo de la actividad ni a todos mis compañeros.

Una de las imágenes más impactantes y que recuerdo claramente, surge mientras miraba hacia mi ciudad, ésta ya no me generaba sorpresa al ver su grandeza, me impresionaba el resultado bárbaro y cruel de la contaminación, de tanta destrucción y supuesto "avance y desarrollo". Es muy paradójico y además se presta mucho para la interpretación en mi vida cotidiana. Soy hija de la tierra y en la medida en que he venido creciendo, ha sido la evolución y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 254

las diferentes situaciones de la vida lo que ha determinado así como en la ciudad, la construcción de grandes edificaciones en mí interior, formadas a partir de experiencias dañinas que fueron formando mi criterio como mujer. Es inevitable dejar que lo malo repose en mí, y que eso tan malo a su vez coloque encima una nube negra de errores que contaminan y no me deja ver la maravilla que está más allá de la nubosidad, algo que existe pero que mi constante incertidumbre y mi ceguera espiritual no me permite ver.

Divinidad

Al fin entre tanto disparate uno logra Estar a los pies de la levantarse en alma y cuerpo frente a ese montaña es la fuerza que paraíso de sonidos, imágenes, brisa, olor y envuelve y permite caer sabor, estar allí agudiza los sentidos; la en el asombro, la sensibilidad, los recuerdos y las maravilla y el significado sensaciones hicieron que mi alma se profundo del amor en una despertara, se pusiera atenta y surgieran experiencia divina. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 255

sentimientos en mí interior, por su parte el cuerpo se iba dejando llevar experimentando sensaciones de bienestar, mi corazón latía sin ninguna prisa, la respiración se me facilitaba y su paso iba aquietando mis movimientos. Se permite uno mismo caer en el asombro y la maravilla, dejándose envolver por la belleza, el amor y la fuerza que trasmite estar a los pies de la montaña.

Mística

Surgió nuevamente esa lucha interna entre La lucha permanente la razón y el sentir que había entre silencios de la razón experimentado la noche anterior y que me y el corazón, guía el acompañó durante todo el recorrido, esa mensaje de la Madre. lucha por querer obligar a la razón a guardar un poco de silencio y así dejar que El cuerpo parece el sonido del corazón guiara los desfallecer pero la Madre pensamientos y los pasos que se iban da luz e ilumina el dando, acallar ese zumbido que indica que camino de nuevo al el cuerpo parece no dar más, que el aire se interior agota, que es mejor huir. Quería por un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 256

minuto aguardar un poco en esa experiencia, esperar con calma y dejar que las sensaciones bonitas del sentir, guiaran mis pensamientos y la manera en la que miraba el paisaje.

Me sentía cansada, sólo con haber subido Cuando el cuerpo colapsa las escaleras pude sentir que al menos esa y parece adolorido es un mañana no hubiese sido capaz de subir, acercamiento al mensaje mis pulmones no daban más, me sentía sin interno aire y como algo absurdo de la sensación, sentía ganas de sentarme tranquila y prender un cigarrillo más. Veía a dos de mis compañeros en muy buen estado físico y sentía algo de susto al ver un esbozo de lo deteriorado que estaba mi cuerpo en ese aspecto.

Las preguntas de ¿Por qué? ¿Para qué? O El sentido inexplicable e

¿Qué sentido tenía estar allí? Fueron intangible de reconocer la desapareciendo, no sé si fue por centrar mi propia existencia centra el atención en el lugar o en el Mamo pero la pensamiento relevancia de éstas con el tiempo fue siendo cada vez menor. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 257

Mis pensamientos se iban entrelazando en Los mensajes de la Madre

lo simple del caudal del río, en la atraviesan los densos

compañía de las aves que adornaban el muros de rigidez que

lugar, en la brisa que arrasa las hojas secas entre corazas reviste el

y mantiene fresco el ambiente, me dediqué entendimiento

a observar cada cosa para así saber si

incluso desde mi ignorancia y mi rigidez,

podría entrever las cosas que había dicho

el Mamo.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso… El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 258

Abuelo y sabedor

El Mamo fue el que más tranquilo se Guía y abuelo colmado de mostró, afirmó lo que yo estaba pensando paciencia y entendimiento y dijo que finalmente esa no era la meta, el llegar no era el fin, el verdadero recorrido requiere concentración, dedicación, así que no había afán.

Todo se volvía un enigma que sólo podía La comprensión de la sostenerse con convicción y fe, se vuelve Madre refleja en la fe de simple y complejo a la vez entender el los grandes sabedores llamado de la madre tierra; pues dentro del indígenas. discurso del Mamo, él argumentaba el porqué de nuestra reunión como la El llamado de la Madre es consecuencia a la sensibilidad de nuestros el despertar interno de la oídos y nuestro sentir, pues habíamos sensibilidad propia como escuchado atentamente de manera directa o el caminante que sigue al indirecta el llamado de la Madre Tierra, Abuelo mayor madre que según palabras dichas por el

Mamo, no solía equivocarse, según él, el estar nosotros allí era porque había en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 259

nosotros una preparación, una sensibilidad o una disposición previa a recorrer dicho camino.

El Mamo había estado describiendo los Los elementos del paisaje elementos que habían a nuestro alrededor, son el lenguaje que dado el transcurso del agua, la fuerza del viento, en las palabras del el cantar de las aves y el movimiento de las sabedor comienzan a plantas, yo fui yendo al ritmo de sus tener sentido para uno palabras, al observar a mi alrededor veía mismo como sus palabras también tenían sentido para mí, mientras él lo iba describiendo yo Un trozo de naturaleza es veía como todos estos elementos formaban el reflejo implícito del un conjunto realmente hermoso, me estado o el anhelo del transportaron casi que a otro lugar, bastaba psiquismo propio con observar un trozo de naturaleza y concentrarse en ella para descubrir cosas increíbles, fue entonces que pensé que al estar allí podría algún día ver mi interior de la misma manera, acorde y hermoso, tal vez esa era la respuesta que sin saber estaba buscando, un camino para ver todo de mí de la misma manera como estaba El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 260

apreciando el exterior.

Me había despojado paulatinamente de los El todo es la comprensión

prejuicios, había visto el todo y al mismo del universo en uno

tiempo me había visto como parte de ese mismo y de la naturaleza

todo, el Mamo dijo que en nosotros en su esencia más plena.

estaban también esas lecciones, pues la La conexión entre la tierra

naturaleza era el reflejo de los seres y nosotros la provee la

humanos, entonces quise poder sabiduría del abuelo y su

comprender la vida desde dentro para así infinita comprensión

poder conectarme con las lecciones que

enseña el caudal del río, la brisa, las

plantas y el orden general de las cosas.

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 261

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 262

Mismidad

Categorización

Temsacá, sinonimo de vida, sinonimo de encuentro

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística Metacategorías

Hicimos un par de pausas, que para mí El camino es el mensaje

fueron teniendo un significado claro, parar que se construye entre él

para recapacitar y darse cuenta de lo y uno mismo

mucho que había caminado, ver que el

trayecto de mi vida había sido mucho más La división entre lugares El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 263

largo y tortuoso de lo que yo misma solo son el reflejo vívido

imaginé, veía la ciudad cada vez más de las fluctuaciones del

pequeña y en contraposición la montaña psiquismo propio.

cada vez más grande, pensaba cuantas

personas, familiares e incluso antepasados

habían construido ambas majestuosidades,

dividiéndolas a tal punto de verlas ahora

totalmente opuestas, siendo que en algún

punto de la historia, muy seguramente

fueron una sola.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 264

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Llegar a la cumbre, iniciar un ritual de El pagamento es el ritual

pagamento indígena, me permitió ingresar de reconciliación que

a mí de la manera más noble y humilde equilibra tanto el cuerpo

que me fue posible en ese momento, pues como el espíritu propio y

no sabría lo que encontraría, sabía que de la Madre

debía pensar en cosas positivas y al

finalizar pagar con todo aquello que de

manera consciente y desinteresada estaba

dispuesta a dejar en aquél lugar, sabía que

era tierra y que el hecho de ser indígena,

me invitaba a la reconciliación mi ser para

de este modo permitirme iniciar un cambio

en los demás.

Como indígena parte de

Luego de un par de horas dimos fin al este territorio mi negativo

ritual y procedimos a entregar ya en físico y mi positivo hacen parte El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 265

lo que habíamos llevado, para así ser de la Madre y a ella han coherente con lo que se estaba en de ser devueltos con condición de darle a la Madre si cuarzos o semillas y cuarzos semillas, yo tomé un par de semillas de la Yo me planto en la Madre bolsa y las arrojé hacia la montaña, cada en devoción y semilla entregada a la Madre, cada sentimiento, así aliviano ofrenda, hace parte de un humilde la fuerza inminente del agradecimiento, ella me brinda de forma negativo. desinteresada. Con cada ofrenda se iba aquello que me aquejaba, que sentía y quería que se fuera, quise en ese momento Las ofrendas son el dejar atrás los paradigmas, lo que mal me simbolismo de la parte hacía sentir. propiamente interna que

queda sembrada como la

Pensaba que esa semilla que había muestra física del arrojado crecería y simbolizaría el compromiso de crecimiento que quería tener como retribución espiritual a la personas, colmada de paciencia y siempre Madre observando hacia arriba. Además de esto, el por primera vez realizar un pagamento, algo que aunque no deja las cuentas saldas, motiva e invita a seguirlo haciendo, pues así como nos da tanto nuestra madre, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 266

nosotros como sus hijos debemos ofrecer a

ella lo que somos en esencia y la

espiritualidad que sus surcos y ríos nos

brindan, pues no hay nada más maravilloso

que sentirse abrazado por tu madre

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 267

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 268

Categorización

Tejiendo caminos entre la razón y el corazón

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Fui sintiendo el sol, el viento y la tierra El ensimismamiento surge

trabajando en conjunto, mi pensamiento se tras la conexión con el

dirigía a otro universo, así que me mantuve lugar sagrado

quieta y concentrada. Sentía que cada cosa

que pasaba hacía parte de un orden

perfecto, se daba en el momento justo para

lentamente ir entendiendo aquella lección

que se construía poco a poco.

Divinidad

Mística

Sentir, oír, observar y viajar lejos dentro Mantener los pies en la

de sí, es un proceso que se me ha venido tierra mientras el espíritu El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 269

dando de manera paulatina, siento que en vuela dentro de sí siempre cierto modo la idea no es irse del todo, es de la mano de la Madre sentir y vivir aquí y allá, aquí con el cuerpo y allá, en los espacios más profundos de mi ser, con el latido del corazón El secreto y el misterio

que aguarda la

Esta vez mi atención sintió la necesidad de profundidad del ser se mirar fijamente el cuarzo y al observarlo mantiene en un espacio detenidamente pude hallar varias cosas en intangible e impenetrable

él; en su diseño desgastado había por la razón trasparencia, sin embargo por más que Los elementos sagrados intenté ver a través de él no pude, fue son tras su entrega, el entonces cuando supe que los secretos y el reflejo propio de lo que misterio que en él guarda los protege bajo son en el interior de quien su aparente trasparencia. Me vi en él, era el hace uso de ellos. reflejo de mí misma plasmado en un Las ofrendas son la objeto, sus marcas parecían mis cicatrices, entrega física que en su sus partes oxidadas el cansancio que interior guardan el llevaba mi cuerpo, las manchas eran los misterio y el secreto de dolores, el apego y la tristeza de mí ser que quien los deja en el ritual aún no logro integrar y sentir como propio. pues una parte de ellos se

Era por si solo el reflejo de lo complejo queda con él. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 270

que me resulta la vida plasmado en lo El control de sí, siempre aparentemente simple de su figura es posible tenerlo desde

“imperfecta” sentía que en él se guardaba dentro, allí el guía es el luz, secretos y guía. corazón

La división del camino

De repente llegan frases al pensamiento radica en adentrar el unas claras otras no lo suficiente. Sin negativo o hacer tanto del embargo, llegan. Una de ellas fue: “Es interior como del exterior inevitable contagiarse de la ira y la tensión un puente de limpieza y que está contaminado el exterior, pero el aprendizaje control de sí, siempre es posible tenerlo desde dentro”. Entendí en ese momento que aunque el medio se torne agotador y desgastante, a tal punto de llevarme a la Caminar en lo invisible es deserción, soy únicamente yo la dueña de el acto de fe que suelta el esa decisión, de adentrar esa ira y esa cuerpo de la sensación de tensión que me lastiman o por el contrario confusión y bruma hacer de ese exterior un puente de limpieza El miedo nubla el camino y aprendizaje. de la fe pero a su vez en

su enseñanza que se

Tras ver el tejido en la araña pude aprende a cargar de uno comprender que las vueltas son como la mismo confusión y la sensación de ir sin rumbo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 271

que a veces me atrapa y me abruma, caminar en lo invisible es el camino que aún no puedo recorrer, porque temo estar en la incertidumbre y de repente adentrarme en cosas que desconozco. Sin El corazón tras ser callado embargo; luego de dar vueltas hay la por la razón pierde posibilidad de encontrar algo firme a que experticia pues se ha aferrarse en medio de la incertidumbre y lo subestimado su infinita desconocido, tomar de la mano el miedo, sabiduría la tristeza e incluso el dolor para aprender y seguir con ello sin que me implique una carga o una incomodidad, pues estoy cargando de mí.

Redirigí mi mirada hacia mi pecho y me detuve justo en mi corazón, me vino una sensación de extrañeza frente a algo que de por sí hace parte de mí, desconozco los latidos de mi corazón, mi lado izquierdo se encontraba rígido, acorazado y sumamente temeroso; creí que allí se encontraba Incluso la fuerza racional escondido el miedo que me impedía ver se agota pues su con claridad la unión de lo que desconocía. conocimiento es limitado El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 272

Lo sentía como una parte adormecida que a los sentidos

sólo aparentemente hace parte de mi

cuerpo pero no está en mí, es inexperto y

eso hizo que subestimara su sabiduría y

decidiera silenciarlo durante años. De igual

manera, nunca es tarde para despertar en

ese momento así lo sentí.

Al creer terminado de escuchar mi corazón

y como coincidencia o quizá no, quise

mirar el lado derecho de mi pecho.

Apresurada y entusiasta fue mi razón

rígida en pensamiento quien comenzó a

hablar; estaba agotada, desgastada y sin

fuerza para cargar el peso de las decisiones

por sí sola, requería con urgencia de esa

unión para comenzar a ver y sentir con el

corazón, para dejar de lado la prioridad de

usar los ojos y la piel.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 273

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Nos sentamos encima de una roca en la Los rituales nos conectan

cual solían ir a realizar los rituales el con la fuerza que aguarda

semillero de ancestral ahí en el municipio en los ancestros para ser

de Facatativa, el profesor hizo el saludo a tomada por nosotros

la Madre Tierra, las plantas sagradas y

también a las familias de cada uno de

nosotros junto con los territorios de dónde

provenía cada uno, pensaba que en

ninguna reunión a la que había asistido El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 274

daban tal importancia a saludar a las peronas que de forma física no estaban, me pareció un bonito acto así que en pensamiento me uní a él. El tejido es el camino que

se construye entre lo

conocido y lo

Pensaba que la mujer indígena hacía uso desconocido de sí mima del tejido para encontrarse en él, para verse El tejido es un acto de y entender por ella misma lo que cuesta valor y reconocimiento seguir por un camino aparentemente propio desconocido, llevando de la mano lo que alguna vez temió tomar de sí, yo aún temía tomar algunas de mí, pues sentía que no me conocía del todo aún, pero comenzar a tejer no era para mí una opción en ese momento, recordaba que nunca antes me había inclinado por las artesanías ni el tejido pese a que en varias ocasiones tuve la oportunidad de aprender, pues era impaciente y acelerada y tejer me significaba hacer todo lo contrario.

Comprendí que viéndome a mí misma El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 275

durante los tiempos de silencio en los rituales es que surgen las lecciones que Tejer es caminar en lo posteriormente se guardaran en mí y que invisible, dar vueltas en el luego me brindan la paz, seguridad, aire sin parecer tener confianza y fuerza para entregarme por destino fijo, girar y girar completo en una lección próxima. hasta que nuevamente se

encuentra lo que ha tejido

Luego de la nada cayó de mis manos el lo que hasta el momento cuarzo y en la premura de buscarlo se ha construido. nuevamente encontré sobre mi pecho una Aferrarse fuertemente al araña, insecto que creía haberle temido ritual para no decaer y por siempre, de haberse presentado en otro el contrario poder seguir instante pude haber corrido y gritado de adelante. ella, pero era el momento justo para observarla quería hacerlo pues en ese momento me hizo recordar que en varias ocasiones había escuchado la importancia del tejido en la mujer dentro de las comunidades indígenas, vi como la araña hace uso de lo mismo para caminar en lo invisible, da vueltas en el aire sin parecer tener destino fijo, gira y gira hasta que nuevamente encuentra lo que ha tejido, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 276

aferrándose fuertemente a ello para no

decaer y por el contrario poder seguir

adelante.

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Aunque el mundo y en cierto modo cada Somos el reflejo intacto

uno de nosotros viva tras mentiras y de la fertilidad y la vida

corazas, siempre en lo profundo, de esa así como lo es la Tierra

parte oscura emerge la vida, así como pasa negra en el suelo

en las partes del suelo que parece no crecer La vida crece y se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 277

la hierba, muy en lo profundo se guarda lo fortalece de la mano de

más fértil; son como nuestras raíces que los elementales, el sol y la

afianzadas en la madre tierra nos dan Madre.

permiso de crecer y volar entre el viento y

con la fuerza del sol.

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

“No hay que buscar el corazón o el amor, Ver no es requisito para

ellos están justo donde deben estar, para creer, la fe que se

cuando decida volver poder aprender y construye sin ver es aún

escuchar lo que tienen por contar. Ver no más fuerte

es requisito para creer, la fe que se

construye sin ver es aún más fuerte”. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 278

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Categorización

Descubriendo el equilibrio interno, hombre y mujer como orden natural

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 279

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Encontré que debía apaciguar el fuego que El fuego es la energía que

hay en mi corazón, dejar de lado la arde y quema los

mentira, el engaño, el resentimiento y el sentimientos innatos del

miedo comenzando desde mis propias corazón

raíces, debía comenzar con dulzura y En la raíz esta la esencia

calma; entendí que antes de engañar al pura del negativo que

mundo con una máscara que refleja lo que aliviana la sensación de

no soy, me estoy engañando a mí misma, extrañeza de mí

que en la reconciliación conmigo, con mi El engaño encubre la

padre, mi madre y mi verdad, podría estar parte de mí que temo

el poder que últimamente está tergiversado hacer parte

o incluso me es ausente.

Metacategorías El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 280

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Se me hizo inevitable a medida que el Padre y Madre son la

abuelo avanzaba en su relato traer a mi energía vital y vívida que

mente el recuerdo de mi padre y el acompañan

significado de ese lugar para mi vida, no permanentemente mi

más escuchar el procedimiento de hechura camino

de la bebida me hacía recordar cómo años La sabiduría del padre es

atrás, mi padre me contaba con el mismo aquella que guía, protege

fervor que el abuelo, las tardes que pasaba y acompaña

acompañando a su padre a realizar este

mismo proceso. nuestra naturaleza no se

ha perdido, se nos ha

El abuelo prosiguió con su discurso olvidado que es diferente

diciendo “nuestra naturaleza no se ha las fuerzas

perdido, se nos ha olvidado que es deshumanizadoras y

diferente” y a mi modo de ver tiene mucha corrientes han separado al El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 281

razón, hemos olvidado como sembrar, hijo de los brazos de su como cuidar, como entendernos a nosotros Madre y las enseñanzas mismos e incluso como estar en las de su Padre montañas; él lo iba argumentando a partir de la fuerte cercanía que en la actualidad tenemos todos con los aparatos electrónicos, aferrándonos así a la cuidad y tomando distancia del ambiente, decía que esas fuerzas deshumanizadoras iban a terminar por ordenarnos a su acomodo, ya que nosotros con el paso del tiempo hemos desaprovechado el poder de hacerlo por sí solos. De este modo planteaba como surgía Fuerza femenina de vida, la necesidad de volver al orden natural de limpieza, las cosas y al equilibrio, respetando los acompañamiento y principios y fomentando las costumbres. curación

En primera instancia el abuelo explicaba la La mujer como ente de importancia de la fuerza de lo femenino fuerza suprema que expresada en la tierra, la luna, la vida. La ordena la fuerza mujer. Ella es quien tiene en sí misma al masculina para darle ordenar su menstruación, el poder de equilibrio al principio de ordenar la semilla y en este sentido, al la vida hombre, fuerza masculina, portador de La pareja como un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 282

semilla, quien es sol, siembra, labranza y autodescubrimiento de construcción. empoderamiento propio

de raíz a cumbre

Hombre y mujer como la

Sentía escuchando sus palabras que al construcción y el juntar ambas fuerzas se daba el trabajo complemento vivo de lo como pareja, pues mientras la mujer sagrado guarda la espalda, aconseja, cuida, orienta Es el empoderamiento de y guía al hombre, va creciendo y se la fuerza masculina y permite a sí misma hacer uso de su poder femenina el principio y el de adivinanza como madre y compañera, orden de la vida desarrollando su instinto y sabiduría propia. Por su parte, el hombre al estar cumpliendo con las características y papeles descritos por el abuelo, logra portar y sembrar la semilla que sólo a él le es concedida, realizando a su vez otras labores propias de su fuerza masculina como las de la trasmitir palabra, establecer unión con lo sagrado, lo femenino, las platas y la tierra misma quien está representada en su mujer compañera.

Según el abuelo al cumplirse dicha labor es La placenta es el hilo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 283

posible limpiar la semilla y volver al orden invisible que nos conecta natural, donde tanto el hombre como la con el arraigo a la tierra, mujer se empoderan de su misión y sus las constelaciones del virtudes, alcanzando plenitud y equilibrio cielo y lo sagrado no sólo para ellos mismos sino que también para su relación como pareja.

Aunque el volver a nuestras raíces, requiere más que el equilibrio entre lo femenino y lo masculino, según contaba el abuelo el plantar en la tierra nuestra placenta, para que de éste modo nos conectemos con fuerza y sintamos el arraigo a la tierra y a su vez, a las constelaciones del cielo, pues el cordón umbilical que mantenemos de forma invisible nos estaría conectando al cielo y a lo sagrado, mientras la placenta guardada en tierra nos daría la fuerza y el autoconocimiento, para saber en de qué lugar partimos y así se le daría más fuerza, convicción y seguridad a nuestro caminar.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 284

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

he comenzado a creer que en cada La palabra como ritual de

encuentro la palabra aunque de vueltas encuentro y claridad de

siempre va a tener algo por contarme, algo pensamiento

que traiga claridad en el pensamiento,

tranquilidad al corazón o que simplemente

me centre en una realidad que lejos de

aquél lugar no soy capaz de ver, enfrentar

o hacer parte de mí vida.

Aunque el trasnocho no fuera en el lugar La palabra como la fuerza

habitual y con los parámetros de de conexión propia y

costumbre, la palabra se abrió paso y logró autosuficiente con uno

al menos en mí, una conexión bastante mismo, con el abuelo y la

fuerte; en algún momento llegaron mis Madre Tierra

pensamientos a florecer de manera El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 285

inexplicable en la palabra del abuelo, pero a su vez poco a poco fueron encontrando camino, claridad y respuesta con el transcurso de la noche.

El ritual de sembrar la placenta, es otro de los principios que se han perdido, ese primer vestido que nos dio abrigo, alimento y bienestar, por estos días se Arraigo y conexión desecha así como si nada, pues muchos desconocemos la importancia y lo que significa llevar en práctica este ritual.

Abuelo y sabedor

Siguiendo la noche supe que el enfrentarse Guía y sabedor que no era un proceso sencillo, esa noche comprende los lenguajes enfrenté un poco mi verdad y mi origen. internos en concordancia

Luego que el abuelo botó sobre el fuego un con las manifestaciones poco de medicina, mi ser se reflejó en el de la Madre. fuego así sentí que había pasado, éste se Fuego como elemento de comenzó a mover con fuerza y aumentó su fuerza y poder intensidad, lo que para mí aún no La conexión de los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 286

significaba algo en específico, pero en elementales el cielo y el seguida el abuelo me miró a los ojos y abuelo son magia, comenzó por preguntar mi nombre, miró conocimiento y sabiduría nuevamente el fuego, el cielo, la bebida y por último terminó diciendo “tiene mucha fuerza, ojalá la transformara en fuerza espiritual” era como si el fuego le hubiese transmitido lo que en mi pensamiento daba vueltas hacía horas. Así que comencé por mí misma a profundizar en ello, luego que el abuelo abriese en mí el camino hacia esa Humildad, sencillez, posibilidad. nobleza y honestidad

El abuelo siguió su relato diciendo que los como el camino hacia lo valores que debían guiar nuestro caminar sagrado eran la humildad, la sencillez, la nobleza y la honestidad, según él éstos eran la base que facilitaría nuestro relacionamiento con el otro, con lo sagrado, con el ambiente y en este sentido con nosotros mismos.

Plantas

El abuelo en su palabra fuerte y dulce Medicina natural de poder junto con la humildad de su sabiduría que fortalece el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 287

innata, durante el trasnocho ha sabido autoconocimiento de sí y diferenciar y definir lo que implica hacer de la Madre Tierra, del alcohol una herramienta de confusión a elemento de sanación, una herramienta de cura y sanación verdad y valor interior, para referirse a la primera manera Herramienta de limpieza, dijo que bajo sus efectos, es que los seres aceptación y humanos camuflamos el dolor y reconocimiento disfrazamos la embriaguez del Embriaguez de pensamiento en esa sensación de conocimiento como el borrachera, decía que de ser más acercamiento a la verdad conscientes y estar más empoderados de de sí nosotros mismos, podríamos ver sin necesidad de caer en lo fácil del licor.

Establece una enorme diferencia al definir lo que implica embriagarse en conocimiento con medicina como el chirrincho, (bebida fabricada de forma artesanal) a hacerlo con botellas de aguardiente y cerveza.

La primera bebida el chirrincho, brinda El miedo limita nuestra una oportunidad de ensimismamiento capacidad innata de positivo, donde nos descubrimos en la afrontamiento forma más natural y agreste, pero es una Herramienta con una El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 288

posibilidad que por el miedo a enfrentarnos energía de origen positivo incluso a nosotros mismos, se desvanece y y curativo el miedo se hace más fuerte que nuestro Elemento que ínsita a la deseo de cambiar y conocer mediante su tranquilidad, la dulzura y bebida. La medicina del chirrincho, la paciencia antes de proviene de un proceso que tiene siempre conocernos el objetivo claro de limpiar y sanar; manejando así una energía positiva, desinteresada, sin ánimo de lucro, sin ambición, ni codicia, es por eso que propone desde su mismo proceso de hechura la tranquilidad, la dulzura, la paciencia y el descubrir un conocimiento más profundo de nosotros mismos y, en ese sentido, del mundo en su estado más natural, para que en caso tal de llegar a la embriaguez, ésta sea para quien lo toma, una embriaguez de conocimiento y sabiduría de sí mismo y del mundo que lo rodea. Limpiarnos con medicina

implica descubrirnos en

En general, entendí que limpiarnos con lo positivo y lo negativo, medicina implica descubrirnos en lo por tanto requiere valor, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 289

positivo y lo negativo, por tanto requiere verdad, entrega y amor.

valor, verdad, entrega y amor. Recoger la

caña en compañía de su padre y un par de

mulas mansas que ayudaban con el proceso

de carga, dejar la caña junta en un especie

de establo para que por medio de máquinas

extrajesen su jugo, que sería depositado en

recipientes de vidrio donde por medio del

calor saliera el vapor que a su vez, se iría

condensando hasta caer nuevamente gota a

gota en los envases para posteriormente

endulzarlo con plantas dulces y frutas.

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Para mí en ese momento el amor era Amor como palabra y

palabra dulce y reguladora de poder, capaz acto dulce regulador de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 290

de sacar lo positivo de mí y así poder poder

construir mi camino sin egoísmos, Fuerza integradora,

fortaleciendo el desarrollo de la fuerza reflejo de la energía

interna que llevo de forma innata, para espiritual

algún día llegar a verla, entenderla y

hacerla parte de mí. Ese poder de dominar

tanto lo interno como lo externo era esa

fuerza que iba a permitirme integrar todo

como la única fuerza espiritual, que en un

principio e incluso en palabras del abuelo

en mí solo estaba como una fuerza.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 291

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Categorización

Limpiando el cuerpo desde dentro un viaje por comenzar

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 292

Mística

El significado de las palabras puede Refundirse en lo más tornarse diferente para cada uno, pero la profundo de sí es connotación que ha tenido en mí es encontrar el camino que directamente impactante, para mí se cura trataba de entrar y hacer parte de mí cada Es el acto valiente de cosa que en el estado más natural aparece escuchar y sentir todo como fragmentada y ajena, siendo que por aquello que en el silencio sí misma parte de lo más profundo de mi quiera darse ser, era encontrarme con la ira, el rencor, Direcciona y centra el el odio, el dolor, la tristeza, la inseguridad, pensamiento el miedo, la carencia de amor, la embriaguez de pensamiento e incluso el mismo ego, pues era lo que intensificaba el afán innecesario de ir a toda velocidad, aun sabiendo que carecía de claridad y de dirección por lo cual se me impedía llegar a ese proceso de aceptación y sanación.

La unión intangible de las

Para mí había que curar y apaciguar el capacidades ajenas a lo fuego interno antes de poder ir de viaje; tangible por el hombre El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 293

aún faltaban ojos que miraran más allá, La integracicón de los

que vieran en la oscuridad, en el interior y sentidos como el

con dulzura, para así permanecer atenta desarrollo constante de

estando frente a la inmensidad y el poder interacción y

de cada lugar. Manos para sembrar, conocimiento de sí y del

construir y cuidar de mí misma y a su vez lugar sagrado

de los lugares que fuera visitando. Pies Fortalecer el lugar es

para caminar con paso firme, conectada a tomar su fuerza e

la tierra y al territorio que me enseña y me impregnar en ellos la

pertenece. Sueños y la manera en la que en fuerza innata

ellos se plasmaría lo positivo y lo negativo

de mí ser, sentía que a ellos también había

que alimentarlos, fortalecerlos, no dejar

que se estancaran, para que con el paso del

tiempo los viera firmemente reflejados en

mi realidad más inmediata.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 294

convivenciales con la madre, los otros y uno mismo).

El aprendizaje ha venido cambiando y La guía espiritual es dada según palabras del Mamo así seguiría, ese siempre por padre, madre, es el orden de las cosas y es la manera los sabedores y los adecuada para que continúe elementales construyéndose el conocimiento. Como guías espirituales siempre estarán los abuelos, el Padre, la Madre, los elementales y las plantas de curación, así nos han venido enseñando trasnocho a trasnocho los guías. El linaje como la parte

También había surgido dentro de la fundamental que da palabra y el consejo que dan los abuelos fuerza y conocimiento tener en pensamiento nuestros linajes, los que a su vez alimenta y pueblos de donde provenimos y todos acompaña el crecimiento aquellos saberes que están esperando del lugar sagrado. dentro de nosotros para ser escuchados y acogidos, porque eso somos también y es partiendo desde allí, donde cada uno puede construir algo nuevo sin desprenderse de la lección y el pensamiento escuchado, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 295

sentido e interpretado precedentemente por

abuelos, ese que ahora nos es entregado,

para que en nosotros crezca y se fortalezca,

ya que se nos permite nuevamente aportar

y ayudar a construir ese conocimiento,

dejando la esencia de nuestros antepasados

impregnada en la historia con algo de la

novedad que nos acompaña.

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Susanita comenzó a hablar, su voz me Limpiarse desde dentro es

mantuvo atenta a sus peticiones ella dijo verse en la verdad que

que teníamos que limpiarnos y al hacerlo aguarda constantemente

la Madre sabría si podía o no darnos en la densa oscuridad del

permiso para recorrer el camino que miedo

vendría. El proceso implicaba tomar un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 296

hilo blanco que ella nos había dado en cada mano y con ellos recorrer todo nuestro cuerpo a medida que íbamos soltando todo lo negativo: pesadillas, sentimientos como la ira, el dolor, la Hablar con la laguna es tristeza y recuerdos. hablar y ser escuchado

por una fuerza femenina

Después de todos haber dicho terminar la materna limpieza nos pidieron salir del Bohío, nos situamos en un pozo de agua ubicado frente a la puerta del Bohío, ella nos dijo que allí estaba representada la Madre y que diciéndole todo a ella, el resto de lugares El negativo recibe sagrados que visitaríamos sabrían y nos alimento constantemente recibirían. y es bañado en la amorosa

observación interna de sí

La primera tarea fue limpiarnos e ir La enseñanza está dada descubriendo el grado en el que nuestro tanto desde el negativo bienestar era real, pensando con calma, como desde el positivo es meditando tranquilamente y entregando a así que es posible verse un par de algodones lo negativo, pero más por completo allá del simbolismo del ritual, era la exhaustiva labor de mirar el estado en el La calma, la tranquilidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 297

que cada uno se encontraba y la manera en y la dulzura, es ir la que había estado lidiando, apaciguando aceptando cada cosa, o alimentado ese negativo, sin demeritar verla y entregarla para lo complejo de lo que implica mirar y que vuelva a tomar su reconocerlo la real tarea a mi modo de ver, lugar era ir soltando en los algodones todos aquellos sueños, sentimientos, emociones, pensamientos y acciones en los que posiblemente se reflejaban o se escondían nuestros miedos, para mí era como bañarme desde dentro. Después de estar toda esa energía pesada frente a mí, lo siguiente que quería hacer era ordenar nuevamente cada cosa en su lugar y en su debida proporción, porque el negativo como dice el Mamo también es profesor, de él también hay que aprender y dejarse llevar sin que eso implique extraviarse en cada gota de medicina que el proceso. En ese momento entendí la cae y cura limpiaba mi insistencia de realizar esta tarea con calma, cuerpo, me estremece y tranquilidad y dulzura, aceptando cada me hace sentir en paz cosa, mirándola minuciosamente y por

último, entregándola para que al volver El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 298

fuese más sencillo darle lugar y dirección.

La mañana siguiente, muy temprano el

Mamo nos llevó a un lugar cercano a la casa, allí nos sentamos todos y comenzamos seguidos por su instrucción a pensar en cosas positivas, sueños, sentimientos y sensaciones, nos dio de tomar un poco de chirrincho, luego rodeando el cuerpo de cada uno de nosotros fue salpicándonos con dicha bebida y por ultimo dijo que enjuagáramos nuestra boca con ella. El ritual no me dio tiempo de pensar en muchas cosas, solo estaba concentrada en lo que había venido pasando, en lo personal me impresionaba la cantidad de usos que tenía ésta bebida, sentía que todo este proceso había sido para de alguna manera bendecirnos, bañarnos y limpiarnos con lo que para ellos era sagrado y que de forma inexplicable para mí también lo era, pues sentía con cada gota que me caía como se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 299

limpiaba mi cuerpo, me estremecí y sentía escalofrío, con lo de la noche anterior y esa mañana había logrado limpiarme desde dentro.

Abuelo y sabedor

Fueron apareciendo con dulzura en las Aquietan en el palabras del Mamo algunas pautas que pensamiento con palabras había que asumir y que a su vez, iban dulces guiando mi pensamiento inquieto; cada cosa implicaba seriedad, compromiso y esfuerzo, había que ir afrontando cada situación del recorrido como se enfrentan los grandes desafíos, con entrega, pasión, pensamiento y corazón dulce.

“Si van a hacer cualquier proceso o La claridad propia debe quieren dirigirse a cualquier autoridad, estar entre nosotros desde debe haber claridad entre ustedes y desde nosotros, para nosotros ustedes, para saber exactamente qué es lo para así no perder lo que que quieren y buscan”. Fueron apareciendo se quiere y busca con dulzura en las palabras del Mamo algunas pautas que había que asumir y que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 300

a su vez, iban guiando mi pensamiento

inquieto; cada cosa implicaba seriedad,

compromiso y esfuerzo, había que ir

afrontando cada situación del recorrido

como se enfrentan los grandes desafíos,

con entrega, pasión, pensamiento y

corazón dulce.

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Para mí estar en estos lugares se ha La historia se encuentra

convertido en un proceso de estudio que impregnada en la vivencia

implica escudriñar dentro de sí mediante y la esencia del lugar

un proceso meditativo, con la voluntad y el mismo

deseo de rescatar aquello que algunos

creen es historia, pero que para mí no es Comenzando desde mí es

del todo así, esta cultura no es algo que donde es posible aprender

pasó y quedó atrás, no es ajeno ni distante (estudiar) la vida (la

a la propia naturaleza de mi ser, pues historia), porque es lo que

siento que es comenzando desde mí donde hubo y hay aún aquí. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 301

es posible aprender (estudiar) la vida (la Vida.

historia), porque es lo que hubo y hay aún

aquí. Vida. Los lugares no son

fraccionados en lecciones

A su vez la tierra también nos estaba y enseñanzas pues una

escuchando, ese pequeño nacedero de agua sola Madre a la que

era la vocera y la representación más acudimos para sanarnos

cercana que transmitiría a todas las lagunas

y lugares sagrados que queríamos recorrer,

todo aquello que cada uno de nosotros

mentalmente estaba confesando, contando

o pidiendo como herramienta para

emprender nuestro viaje.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 302

Comunidad ahora nuestros pensamientos y acciones La fuerza impresa en el deberían estar guiadas por la fe, la grupo es lo que a su vez seguridad, el amor, la valentía y un permite el fortalecimiento corazón noble y dulce para que de este individual y del lugar modo, se construyera algo más que un plan individual, siendo éste algo importante y fundamental, era momento de construir entre todos un proyecto que nos unificara más allá de lo físico, para así mantener la claridad y la fuerza; fue reiterativa en nuestra tarea de alimentar y nutrir el alma y el espíritu para así poder caminar con La comunidad es el humildad, nobleza y sencillez. refugio y el principio del

Tanto el Mamo como su hija mayor propósito

Susanita dijeron que había que evitar las peleas, los altercados y discusiones entre nosotros, pues pese a que las cosas se tornaran difíciles para cada uno, era la fuerza y el pensamiento bonito que llevaba el proyecto lo que nos mantendría unidos y fuertes. Sentía que así como lo había dicho El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 303

la hija del Mamo en el grupo estaría la

unión y la fuerza que en caso tal pudiese

faltarnos como individuos.

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Con el transcurso del tiempo se da uno Es un propósito forjado

cuenta que sólo a través del sentir puede constantemente que

entender como trasnocho a trasnocho se alimenta tanto las

adelanta el procesos de sanación personal, preguntas como las dudas

surgen nuevas respuestas y con ellas La sanación se mueve

nuevas tareas y propósitos por llevar a junto con las dualidades

cabo; la naturaleza de nosotros como seres en las que decide uno El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 304

humanos radica en ir en una búsqueda mismo fraccionarse permanente e implacable por adentrarse en El camino indígena es un la perplejidad de intentar conoce como ser camino hacia uno mismo humano, como ese ser de vida que se antes que hacia el exterior mueven en la dualidad del mundo, en el día y la noche, entre lo positivo y lo negativo de sí. Así son los impulsos que alimentan la curiosidad del cuerpo y nos mantienen en constante movimiento por los diferentes caminos, caminos como lo indígena, a donde probablemente vamos en La oscuridad es tan densa busca de respuestas a preguntas que surgen como en el interior se con el tiempo y por sí solas desde lo más encuentre la fuerza del profundo del ser. espíritu

Ir tras la fuerza y el

Integrarme y verme a mí misma en lo más equilibrio es ir tras Padre oscuro de la noche, mientras el silencio y Madre tanto físicos ahondaba mi corazón, es el proceso que como espirituales terminaba por explotar en lágrimas, sonrisas y recuerdos desagradables, pues iba recordando todo lo que había hecho antes de llegar allí, surgían recuerdos de peleas, problemas y desilusiones. Sin El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 305

embargo, tenía que ir rompiendo corazas, ir capa por capa desenredando desde lo más superficial hasta lo más profundo de mí ser, es así y es allí donde encuentro el Ahondar en unos mismo punto de equilibrio exacto en el que se es permitirse caminar bajo desata con fuerza la tranquilidad del espacios desconocidos e corazón, pues es allí donde aguarda la inimaginables teniendo la verdad que en otros lugares o momentos consciencia de que en no puedo ver. ellos también se aprende

Sin embargo, no deja de ser un largo proceso y en este sentido se debe adquirir un compromiso para cumplir a dichas autoridades y primeramente a uno mismo; las palabras dichas por el Mamo me hizo entender que tendría que quitar el espacio para las mentiras y el engaño, pues no podría descubrir nada de mí en ello, por el Sanar es un ejercicio contrario iría a lugares dentro de mí desinteresado de totalmente extraños a lo que son en reconstrucción interna a realidad, mientras que de ir paso a paso de nivel físico, sentimental y la mano de lo positivo y lo negativo a la espiritual. vez, me iba permitir ahondar dentro de mí, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 306

para al fin nombrar lo que hasta ahora para mí no existe en palabras y que siento me está dado por el negativo.

Pensé en cual había sido la manera en la que había venido alimentando ese negativo, las repercusiones que tuvo en su momento y así fue sencillo identificar mi núcleo familiar como algo que a pesar de encontrarse fuera, son el principal agente proveedor de la fuerza que me acompaña permanentemente. Entonces pude ver que sin antes sanar lo más cercano y lo más propio como es Padre y Madre, se vuelve casi imposible llegar a los lugares e intentar sanarlos, supe que sin claridad en el propósito que me acompaña lo que está más pronto es la confusión.

La palabra sabia que en ese momento surgió de mí fue tranquilidad, tranquilidad en su expresión más pura y natural sería lo que guiaría mi camino, sin caer en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 307

orgullo o la arrogancia de haber

culminado la tarea y sólo sentirse

aparentemente tranquilo; por el contrario,

significaba adentrarme en la sinceridad, la

serenidad y la calma de ir aceptando y

haciendo parte de sí lo que con el

transcurso del proyecto iría fluyendo de

mí, mis compañeros y los lugares

sagrados.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Categorización

La oscuridad y la noche como la guía femenina espiritual El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 308

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística Metacategorías

Mirando el cielo recordaba un par de las cosas dentro de mí se

lecciones que había aprendido durante todo nutren mutuamente, la fe

el proceso, ahora sabía que todo es como el conocimiento

alimento, las cosas dentro de mí se nutren dado en lo meditativo de

mutuamente, la fe como el conocimiento la concentración, es la

en lo meditativo de la concentración, se producción armoniosa

había vuelto la producción armoniosa que que me permite saber

me permitía conocer en qué estado me ¿cómo estoy?

encontraba, así mi sabiduría se nutría

constantemente, entre lo positivo y lo

negativo, así había forjado la base que

ahora constituía mi conocimiento La ausencia del abuelo

individual. permite arraigarse en un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 309

sentimiento de fe

Siempre habíamos estado en la compañía indescriptible del Mamo o del Abuelo en el transcurso de los diferentes trasnochos. Por tanto, en esta oportunidad la ausencia de su compañía al menos física, dio un giro algo diferente en el transcurso de la noche; en mi cabeza esta situación se parecía al deseo de un padre por dejar ir a su hijo a aprender por sí mismo, dejar que éste descubriera por sí El camino espiritual lo solo dentro de sí la capacidad que todos construimos paso a paso y tenemos de ser hombres, mujeres, padres, en compañía de los abuelos y niños. padres

Por el momento me sentía como una niña pequeña en busca del aprendizaje, estaba andando por primera vez sola; me recordaba a la sensación que se sentía cuando mi padre había quitado las ruedas de apoyo de la bicicleta, él depositaba su confianza en mis conocimientos y habilidades, había decidido soltarme a andar y descubrir por mí misma las enseñanzas del camino. Pensaba que quizá El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 310

el Mamo y el Abuelo en su infinito conocimiento, habían depositado su confianza en nosotros para que recorriéramos los lugares sagrados, con el conocimiento que nos habían proveído Ver más allá es junto con el que cada uno de nosotros tenía vislumbrar en la de manera innata. Seguramente confiaban intensidad de la oscuridad más en nosotros de lo que nosotros mismos algo más allá de lo lo hacíamos o al menos yo lo hacía. negativo de mis miedos.

Para mí se nos pedía ver con los ojos en mi interior hay una cerrados, ver más allá de la guía que se energía fuerte capaz de tiene en los momentos de luz, vislumbrar apaciguar la vibración de en la intensidad de la oscuridad algo más los sentimientos allá de lo negativo de mis miedos. negativos

Comencé a sentir la suavidad del viento con las manos frígidas, a acariciar la tierra que antes me producía incomodidad y sentirla propia, a cobijarme del frío para saber que en mi interior también hay un lugar sereno capaz de calmar y apaciguar la vibración de los sentimientos negativos, a soltar con cada latido de mi pecho una El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 311

fracción de dolor, a dejar emerger de lo

más profundo de mi mente los esbozos del

recuerdo que entristecen mi alma e

inundan de fuego mi corazón,

contaminando mi vida y en ese sentido

también a aquél lugar sagrado

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Sentía que faltaba algo, era una sensación Cuando se está perdido es

de extrañeza inexplicable, fui observando la Madre quien va a

con calma el porqué de esa sensación hasta brindad luz y abrigo

sentirme cómoda, recordaba el calor de los

abrazos de mi madre, la serenidad que me

brindan sus caricias y la seguridad que

siento al estar con ella; fue entonces que el

sentimiento de soledad y desamparo fueron

desapareciendo; finalmente según las El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 312

indicaciones del mamo y en los

sentimientos propios iba en busca de la

Madre, en busca de estar y sentir junto con

ella.

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Iniciar con un saludo a todas las Retornar a los linajes es

autoridades, las energías y las fuerzas que tomar la fuerza que de

nos acompañan se ha convertido más que forma natural se nos

un requisito, una necesidad de agradecer y quiere ser entregada

al tiempo retomar la fuerza que a veces

pareciera ausente; hacerlo de corazón,

desde el pensamiento o la palabra, pero

siempre con la intención de absoluto

respeto y honra. Cada quien a su manera

cada quien desde donde su experticia le

permita, no importa desde que se haga con

corazón dulce e intención bonita de honrar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 313

ancestros, de enaltecer su labor y agradecer su guía espiritual y física.

Nos sentamos en círculo y comenzamos con el saludo habitual, saludar a la madre y al padre tanto espirituales como físicos, a los elementales, las plantas sagradas, los linajes de cada uno de nosotros, los miedos, las virtudes y las fortalezas; entendí que esa era la manera justa y adecuada de retomar la fuerza, la fe y la entereza en los propósitos individuales y como grupo.

No quería sentirme así, quería centrarme en la oportunidad clara que se me había otorgado como mujer para renacer, limpiar y armonizar mi ser con lo inexplicable de la vida. Pues ya el mundo estaba lejos de reconocerlo como el ritual de limpieza más propio de la mujer, y en este sentido, como El ritual permite la la principal virtud y fortaleza que nos sincronía entre la Tierra, acompaña a cada una de forma natural, es las constelaciones y la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 314

el momento en el que se me permite entrar verdad propia en sincronía con mi cuerpo, ver cómo está y apreciar el porqué de los dolores que me aquejan y me quebrantan; es la ocasión adecuada para iniciar a cuidarme, analizarme y desenvolverme detenidamente hasta ver con claridad qué produce tanto desorden o descontento como para turbar en orden natural del ciclo.

Recordaba las palabras dichas por el abuelo en uno de los trasnochos y sentía que no debía olvidar que al limpiar la

Madre, la Tierra, la Mujer, es como surge la posibilidad de encaminarnos hacia la sanación ya que a su vez se está limpiando, ordenando y armonizando al Padre, a la

Semilla y al Hombre. Sentía que era tanta la fuerza que se despertaba dentro de la mujer en sus días de ciclo que no necesitaba relacionarme con las plantas sagradas, en mí estaba la fuerza y la claridad del entendimiento para ver tal cual El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 315

me encontraba

Abuelo y sabedor

Plantas

Planta de Tabaco:

Para mi razón y mi lógica impedía entender cómo la nicotina que nos mantiene adictos, en su raíz más pura que es la planta de Tabaco, se convierte en la mediadora que me ayudaría a emprender por sí misma el camino que realmente limpia y cura, sin que esto me implicara El miedo se nutre del contaminar mi espíritu o el funcionamiento pensamiento racional que de mi cuerpo. En ocasiones, puede más esa a su vez me aleja de las sensación que inunda de miedo el costumbres de mi Tierra pensamiento, que la convicción de estar en Tomar la planta es el camino correcto, pero es sólo durante el descubrir y fortalecerse cese a la agitación de ideas rumiantes que bajo su manera de es posible ver y entender las lógicas desde enseñanza el sentir del corazón: la diferencia de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 316

planta procesada que nos vuelve adictos, a

aquella pura y limpia, radica en la

intención que lleva implícita cada una en

su esencia. En una, se encuentra la codicia

y el poder por acumular y gobernar, lleva

en sí misma una energía pesada y oscura,

mientras que en la raíz de la esencia pura

de la planta, se encuentra la dulzura y la

fuerza de enfrentarse y fortalecerse incluso

desde lo más profundo de la tristeza y el

dolor.

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados La salida da inicio en las horas de la tarde Lo incierto atemoriza el

en el municipio de facatativa ser y pone a prueba la fe

Cundinamarca, en un lugar llamado las

piedras del tunjo, ya habíamos asistido

unos meses atrás a un ritual de pagamento,

sin embargo, ésta vez era diferente, la

salida estaba prevista para realizar un ritual

de trasnocho, partiendo de esto y sabiendo

que nunca antes dentro del grupo de

investigación y semillero se había El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 317

realizado dicha actividad en éste lugar, fue inevitable comenzar a experimentar una serie de sensaciones que oscilaban entre angustia, miedo e incertidumbre, puesto que no habían referentes acerca de lo que podría contarnos ese lugar en la noche. En el silencio y la

oscuridad se apacigua el

Piedras del Tunjo: Poco a poco las fuego interno del corazón condiciones se fueron dando por sí solas, casi que la noche misma nos hablaba con señales e iba pidiendo lo que quería, sentí que era silencio, admiración y oscuridad.

Tal vez la intención de la noche misma estaba guiada por el silencio y la oscuridad, en lo personal así era para mí.

Pedía al viento que la suavidad de la brisa apaciguara el fuego en mi interior, mi La noche se impone con corazón y mi mente estaban ardiendo entre fuerza y desde dentro, pensamientos y sentimientos confusos, era guiada por el miedo momento de frenar. congela el corazón el

Entonces recordé el mensaje que había sentimiento, el valor y la recibido en Silvania, enfriarnos y dejar a fe un lado las dudas, quizá ese era el silencio El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 318

que se me imponía, sin querer apagar el Bajo un acto de fe la

fuego obligaba a cada uno de nosotros a noche endulza el corazón

encontrar algo en la oscuridad, algo en la e ilumina el interior

noche, el lugar y en estar concentrados en

las reacciones internas y externas de

nosotros mismos. En la oscuridad encontré

el amor, en la noche encontré la luz en mí

interior y en el lugar encontré el valor.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

yo decidí salir a recorrer el lugar junto con

un compañero, caía la tarde y poco a poco

el lugar iba quedando vacío, eso nos

permitió contemplar con más calma el

hermoso paisaje que se dibujaba en el

cielo, sin haber estado antes allí el lugar

me resultaba familiar, eso hizo que la

calma fuese aún mayor, pude concentrarme El amor desvanece el

en lo maravilloso del éste y pensar en la miedo, aclara la oscuridad

experiencia que se acercaba; pronto llegó y despeja el pensamiento

la noche, tan clara, tan hermosa, el cielo ya negativo

oscuro se fue iluminando con las muchas El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 319

estrellas que comenzaron a aparecer, yo sólo quería ver el cielo me daba tranquilidad y una sensación de paz, me recosté un par de minutos antes de comenzar con la actividad, tenía una sensación de amor que iba reduciendo la El amor se fortalece en la nostalgia previa por estar lejos de casa, así vivencia constante de que pensé que ese lugar podría convertirse entrega desinteresada en mi morada para esa noche.

Las heridas profundas y los desconsuelos de la mano del amor, se me han convertido en las más grandes lecciones, que sólo En la oscuridad encontré desde la vivencia me fue posible hacerlas el amor, en la noche parte de mí, para aprenderlas y convertirlas encontré la luz en mí en una fortaleza. interior y en el lugar

En la oscuridad encontré el amor, en la encontré el valor. noche encontré la luz en mí interior y en el lugar encontré el valor.

Mis pensamientos eran más tranquilos y dulces, deje los malos recuerdos, los miedos y arrepentimientos, casi que ellos por sí solos se movieron a algo totalmente opuesto, la sensación de no poder ver nada El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 320

en el exterior, me brindó la oportunidad de ver y sentir con mi corazón, empezaron a aparecer recuerdos de las personas que me inspiran amor, seguridad y confianza, fue entonces que me sentí más liviana y más fuerte, sentía como el amor fluía con fuerza, la pureza de dicho sentimiento desinteresado me hizo creer en que junto a esa fuerza indescriptible sería posible seguir.

Vida

Comunidad

Esto comenzaba a ser una experiencia Tomar tanto las fortalezas sumamente significativa, el grado de como los miedos del otro dificultad iba aumentando, era nuestro para desde mí primer trasnocho sin la compañía de algún engrandecerlos, sabedor indígena, sólo estábamos nosotros acompañarlos o como grupo y enfrentar la oscuridad se disminuirlos convirtió en el primer obstáculo que ponía el miedo, sentí que mi compañero del lado En la comunidad está la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 321

experimentaba algo de temor e inquietud fuerza y el valor con éste cambio, así que tomé su mano intentando darle un poco de la tranquilidad de la que en ese instante tenía, recordaba continuamente que en la esencia del grupo encontraríamos la fuerza y el valor, concentre mi mirada hacia el ingreso de la cueva, desde allí se filtraba la luz hacia el interior de la cueva, de manera paulatina fui sintiendo cambios en mi cuerpo, mis pensamientos y mi sentir, así como seguramente todos mis compañeros lo estaban experimentando.

Después de un par de minutos la sensación de frio se había disminuido en un porcentaje muy alto, sentía como el temblor disminuía, comencé a sentir el miedo y la incomodidad en mi compañero del lado sin ver podía tener la sensación de estarlo viendo, más allá de ver un cuerpo frente a mis ojos sabía que él estaba allí y casi que percibía su respiración acelerada y sus movimientos, luego dirigí la vista al El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 322

resto de mis compañeros y entre sombras

escasas sólo pude comenzar a creer en que

estaban allí, experimentando, viviendo y

sintiendo conmigo las enseñanzas de la

oscuridad, de mi lado izquierdo se

encontraba la profesora y prestando

atención a encontrarla, encontré

tranquilidad y confianza. Todos seguíamos

allí, uno para el otro.

Psicoterapia Ego ancestral Así fue llegando el momento en que la Los trajes del ego son

inexperiencia de andar solos se mostró de sumamente variados y

la manera más cruel, para mí se camuflaba diversos, de su mano

en el miedo que caracteriza estar en la perderse es muy sencillo

oscuridad de la noche, en la extrañeza que

me surge ante un lugar que no conozco, en

el afán por querer salir de la incertidumbre

e ir por un camino controlado y conocido

como lo es para mí la ciudad, en la

nostalgia de recordar que a pesar de gozar

de una aparente compañía estaba

completamente sola. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 323

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Por momentos emergía de mí esa ausencia El propósito jutno de conexión, ese afán de búsqueda limitaba fortalece la fe en el mi fe, pero también desde la fuerza propósito colectiva se alimenta lo individual así que nos mantuvimos unidos durante gran parte de la noche y algunas horas de la madrugada, creyendo tanto en nosotros como en el propósito manifiesto.

Cuidado

Sanación

Fue pasando por mi pensamiento los Entregar antes que recibir propósitos y las tareas prometidas en sanación

Silvania respecto a lo personal y como El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 324

parte de un equipo de trabajo, en este proceso encontré que me faltaba mucho por dar antes de empezar a recibir, faltaba mucho por trabajar dentro, para ver reflejado en mis acciones aquellos resultados que con ansia deseaba.

Por un momento la velocidad de la mente y el afán por querer tener, antes que querer aprender, me llevó a pasar mil pensamientos que confundían e impedían la posibilidad de mantener una vida tranquila; pero incluso ahí descubrí que no soy sólo eso, hay más que memorias, lógicas y sentimientos; mi ser también sería capaz de equilibrar en su debida proporción cada cosa, capaz de mantenerme con nobleza, humildad, honestidad y sencillez que son hasta el momento la guía que acompaña nuestra tarea y la que quizá pueda sopesar mis cargas hasta alcanzar el equilibrio.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 325

Identidad Otredad

Mismidad Teníamos la tarea clara de nutrir los El desarraigo impide ver

lugares sagrados a través de la danza y el el camino en su infinita

canto, pero la quietud, la timidez o incluso inmensidad.

el frío fueron el reflejo de la desconexión y

el desapego a costumbres y rituales propios Aquieta el cuerpo pierde

de este territorio, el caso es que sólo la fe y demerita el ritual

danzaron por un par de minutos ambos

profesores, en mi caso prefería aguardar en

silencio, así me sentía bien yo y también al

lugar. En ese momento para mí la La desconexión de la

verdadera tarea estaba en ver Tierra, los rituales, las

minuciosamente a partir de donde radicaba costumbres y el arraigo a

el desapego, para de este modo, arraigar mi lo propio trae evidentes

corazón en lo que allí me resultara ajeno. repercusiones en la

La desconexión de la Tierra, los rituales, identidad

las costumbres y el arraigo a lo propio trae

evidentes repercusiones en la identidad de

nosotros como seres humanos

pertenecientes a este territorio, así que

perderse en éstos rituales resulta más La falta de apropiación

sencillo de lo que parece. limita al ser y su poder El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 326

curativo.

Pensé que lo femenino se había convertido

en el capricho por mantenerse igual a lo

masculino, dejando de lado lo maravilloso

de ser y empoderarse de la verdadera

fuerza femenina. Era tan evidente el

desarraigo en ese momento para mí, pues

estaba en mis días de ciclo y esto pese a las

enseñanzas de los abuelos me hacía sentir

cierta incomodidad, recordaba que para

muchas este hecho hermoso era sinónimo

de desprecio pues les generaba una especie

de enfermedad grave.

Categorización

Una luz que aguarda en mi interior para sanarme

Narrativa Meta Categoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 327

Espiritualidad Espiritualidad

Una luz en la mitad de la montaña podría momento en que la magia

ser el simbolismo o la magia que se quien cobra

despierta dentro de cada uno de nosotros protagonismo.

como respuesta a la búsqueda que

iniciamos como grupo, era el momento de

permitirse ver y descubrir lo tenue del

brillo que llevamos dentro para mí así lo

fue, pues vislumbre mi luz interior, me

logré empoderar de mi fuerza intenté

reflejar lo positivo que tenía dentro y, de

este modo alimentar en igual proporción

tanto a la Tierra como ella lo había venido

haciendo conmigo.

Divinidad

Mística Metacategorías

Ahora el reto para mí era ir más allá de lo La fuerza interna pierde

tangible para ver la verdadera fuerza fuerza cuando se olvida

espiritual, esa que guiaría de una mejor su existencia y su luz El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 328

manera mi camino, al entender lo que realmente es el sacrificio, aquella capaz de dar origen a las más grandes lecciones, la que fortalecería mi fe y con humildad dejaría ver lo diminuto de mi conocimiento en comparación con la infinita sabiduría de la naturaleza, la que aumentaría mi esperanza y dirigiría mis acciones en busca del verdadero y profundo valor de las cosas. En conclusión esa fuerza que cada uno de nosotros tiene dentro de sí y por momentos olvida su importancia.

Despertar esa consciencia hizo que me fuese posible entender que la Tierra no se alimenta con billetes morados, el aire no se limpia con tanques de oxígeno, la semilla no crece con la luz artificial, el cauce del río no sube con el agua embotellada y las plantas no se riegan con químicos. La

Tierra necesitaba de un verdadero alimento para dar abasto a tanta demanda de seres vivos, no somos los únicos pertenecientes El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 329

a este territorio, somos una pequeña parte

que abusa de su poder de raciocinio para

exterminar todo aquello que imposibilite

su proyecto insaciable. Los recursos

también se agotan, los lugares sagrados

debía necesitar en ese momento de

curación y alimento, como en cualquier

relación se debe sopesar las cargas, debe

existir reciprocidad y equilibrio para

mantener ambas partes estables, pero con

la Tierra sentía que habíamos fallado

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 330

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Yo pensé que el abuelo se enojaría o algo Una luz en la montaña

parecido, pero por el contrario nos miró a una luz que me recuerda

todos y en un tono muy amable nos dijo que en mí también existe

que tras el chunzua se encontraba una la claridad y el brillo

fuerza muy grande y significativa para

todo ese territorio, que saliéramos a verla,

todos nos levantamos y salimos del

chunzua, nos situamos al lado derecho de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 331

éste y desde allí nos indicó que miráramos hacia el centro de la montaña que estaba frente a nosotros, dirigí la mirada hacia allí y entonces comencé a ver una luz justo en Agradecer como el el centro. principio del perdon

Sentí unas ganas incontrolables de agradecer pese a que sabía que el proceso de agradecer no es tan sencillo como decir gracias; sin embargo, la intención de agradecimiento y cuidado venía desde mi corazón, mirando fijamente la montaña y más específicamente la luz entendí que no es prometer para luego dejar de lado las promesas, se debe cumplir con los propósitos y las tareas a las que cada uno por sí sólo se ha comprometido. Yo tendría que ir a la montaña sagrada de Monserrate, cuidar un poco más de mí e intentar reducir la fuerza del negativo controlando el mal genio, la ira y el descontrol; pero hasta ese La luz interna se fortalece día estaba aún corta para lograrlo. con la entrega, el

agradecimiento, el amor y

Ahora de la forma más clara sentía que la la fe El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 332

guía, el maestro y el poder de sanación

provenían de allí, de esa luz que la codicia

ha venido apagando pero que aún se

mantiene brillante irradiando su luz

durante esos cortos momentos de entrega y

fe. Esa luz que no sólo estaba en la

montaña sino que también estaba dentro de

mí. Aquella capaz de aquietar el fuego

interno, de detener el incendio que quema

lo positivo y acrecienta el negativo en mi

interior, de direccionar la inseguridad y el

miedo que surge luego de ver cercana la

posibilidad de descubrirme en la

profundidad que encierra mi verdad.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Si trabajaba con amor los resultados bien Teniendo el corazón

fuesen provenientes del negativo o del comprometido las

positivo, se convertirán en lecciones que lecciones toman dulzura

llenarían de sabiduría y conocimiento

profundo luego de haber adquirido de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 333

corazón el compromiso.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral Hoy entiendo que caminar este camino Nubosidad mental y

requiere valentía y firmeza, pues ver y endurecimiento del

sentir en carne propia como surgen dentro corazón

de sí el miedo, el ego, la soberbia, la

arrogancia y en general tantos sentimientos

negativos dificultan la labor, por

momentos se sesga la mente y se endurece

el corazón; uno mismo va entorpeciendo el

trabajo espiritual y por tanto el objetivo de

fortalecerse fácilmente se confunde en el

ego, la inseguridad, la incredibilidad y la

comodidad de mantenerse bajo control.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 334

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Adentrarse en el trabajo individual para mí creer en lo intangible, era la tarea de creer en lo intangible, confiar en lo invisible e ir confiar en lo invisible e ir más allá de las más allá de las lógicas lógicas que encierra la razón, así quizás que encierra la razón comprendería qué era la luz en la montaña.

Pues sólo mediante un acto de fe surgiría el suceso maravilloso de creer y confiar en lo que me estaba pasando.

Cuidado

Si se situara la enfermedad como algo Es la coherencia entre el externo y ajeno a la naturaleza del propio hacer, pensar y sentir que ser, pienso que se estaría limitando la permite mantener en un posibilidad de explotar el poder natural que estado de bienestar tanto cada uno tiene para sanarse. Hay que ver la el cuerpo como el lugar relación que existe entre el estilo de vida, sagrado el cuidado, la atención y la armonía que tenemos con nosotros mismos para así El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 335

determinar el causal que mantiene la enfermedad, en lo personal los malestares que me aquejan soy consciente que son el resultado de mis descuidos. Sé que en mí no hay una concordancia en el pensar, hacer y sentir al momento de interpretar el lenguaje de mi cuerpo ya que incluso ese lenguaje, se ha deteriorado al punto de resultarme extraño y casi inconcebible, poner atención a ello no ha sido de mi interés sin importar que tan fuerte se presente la molestia.

Sanación

El concepto de curación para mí existe sí y El poder curativo esta sólo sí hay un despertar en la consciencia dado por la fe y la individual de cada uno de nosotros ante la convicción de poder enfermedad, en mi caso sabía que hay un hacerlo más que por el porqué, un inicio y un proceso que grado de dolor alimentaba diario y, ésta relación era lo que mantenía la enfermedad adherida y apoderada de mí. Para empezar recordé El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 336

mis dolencias: dolor de espalda, cabeza y dificultad al respirar o realizar algún ejercicio físico, recordando cada una de ellas inmediatamente aparecía lo que hacía para mantener la enfermedad, había dejado el gimnasio el cual mantenía mi dolor de espalada neutralizado, no comía ni dormía Sin tiempo ara el bien lo que aumentaba la frecuencia de mi crecimiento espiritual y el migraña y por último, fumaba conocimiento autóctono constantemente. Entonces pensé indígena la enfermedad se definitivamente nadie mejor que yo misma convierte en un estilo de para hacerme daño. vida

Por años se ha venido creyendo que la medicina que cura lo hace a partir de medicamentos y pastillas, pero en ese transcurso de tiempo la inconformidad ha intercedido, los medicamentos no dan una respuesta satisfactoria a las enfermedades que nos aquejan, para el compañero no las había dado y según manifestaba el Abuelo para él tampoco era así, según él era tanto medicamento lo que nos mantenía El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 337

dependientes y cada vez más enfermos,

decía que no bastaba con solo la ciencia y

la tecnología, pues verse ahogado entre

cables y artefactos mecánicos no sólo

contaminan la tierra, sino que además son

el verdadero origen de las enfermedades

modernas: los fuertes dolores de cabeza, el

estrés e incluso la embriaguez espiritual y

del cuerpo parten de ese abuso de

artefactos, ya no hay tiempo para la vida,

no hay momento para el amor y mucho

menos hay espacio para el crecimiento

espiritual.

Identidad Otredad

Mismidad Creía que incluso en el pensamiento La enfermedad como

cotidiano era sencillo identificar la camino de auto

enfermedad como algo ajeno y extraño que reconocimiento y no

proviene de fuera. Sin embargo, aunque se destructivo

considera impropia al ser, tampoco se tiene

explicación de dónde proviene y del por El ser es el primer

qué se mantiene adherida a cada uno de maestro de poder curativo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 338

nosotros, desgastando a su paso la fuerza individual de sanación que creo yo cada uno posee de manera innata, pienso que el verdadero problema de estar enfermos radica en el desarraigo anta la naturaleza propia del ser humano, su naturaleza y sus raíces pues últimamente veo que el mundo a mi alrededor e incluso yo misma me he convertido en un espécimen reproductor de trabajo y capital. Lo que como consecuencia hace que olvidemos la sabiduría de abuelos y ancestros. El mecanicismo absurdo

de querer ser y no

Prosiguió diciendo que la rutina ha hecho entender ser del SER HUMANO un “ser” mecánico dominado por el dinero y el poder, yo sentía como había olvidado la medicina tradicional y había dejado de lado el poder de las plantas y su infinita sabiduría, sentí que todos concordábamos en silencio con algún gesto que los remedios de la abuela se habían convertido en un chiste de salón, una solución de explicita emergencia o un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 339

método exclusivo para campesinos,

personas de bajos recursos, indígenas o en

el pensamiento más ignorante, para brujos.

Era triste experimentar esa sensación de

ignorancia, pues sentía que como mujer

debería saber más de remedios puesto que

venía de una familia criada en espacios

rurales donde la medicina de primera y

única mano era esa.

Categorización

La oscuridad de mis miedos

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Esa misma noche tuve la oportunidad de Descubrir resulta más

soltar el miedo y buscar dentro de mí algo esencial y la experiencia El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 340

más allá de la oscuridad que mis ojos sublime toma una fuerza databan, pude sentir con más cautela el indescriptible aire, la tierra, el amor, la esperanza en un nuevo renacer; aunque en su esencia misma la sensación resulta inexplicable, he de compararla con aquellos faltos de sentido óptico quienes luego de sufrir y casi llegar a ahogarse en las consecuencias de la carencia es que surgen con fuerza para aprender de ello y ver que en la esencia de ese algo hay algo por descubrir que les resulta aún más esencial, ahora se dan la oportunidad de caminar más lento, equivocarse más seguido y aprender de los errores, exactamente así lo sentía. La valentía de enfrentarme a ello hace que se fortalezca mi ser y es entonces cuando el autodescubrimiento acerca de mí misma se extiende y se profundiza enormemente.

Mística El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 341

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

El Mamo le dio paso a las palabras de fuerza energética

Susanita de quien me quedaron tres mediante la cual se

palabras repicando durante bastante ordena, se le da lugar y

tiempo: paciencia, amor y fe. lo expresó en significado a los

un ejemplo de cómo era posible mantener elementos y miembros de

una relación, decía que siempre hay la cultura indígena

alguien más tranquilo que el otro y que

esto permitía equilibrar la balanza y convivencia y el

complementar a la pareja. conocimiento en ella lo

que permite el

acercamiento de los seres

humanos al camino El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 342

indígena; es un modo de

pensar, vivir, sentir y

actuar en el mundo

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Más que una visita, era cumplir con el honra a los miembros

compromiso previo con el Mamo, su tanto físicos como

familia y los grandes espíritus ancestrales espirituales para de este

que aguardaban en el lugar, íbamos para modo tomar su fuerza y

contar lo que había pasado durante nuestra hacerla cada vez más

primera visita a facatativa, el ritual de parte de uno mismo y en

confieso tendría lugar dentro del bohío en este sentido también

el que con meses de anterioridad nos hacerse uno mismo parte

habían dado permiso para partir; además de ellas

del compromiso con el ritual mismo, yo

pensaba en lo que sería confesar mi

experiencia desde lo más profundo del ser

a esas autoridades de respeto, sabiduría y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 343

honra. lenguaje y la forma que

tenemos como seres en

Las indicaciones del Mamo aunque hechas proceso de aprendizaje con palabra dulce, eran fuertes y claras, para conectarnos con lo había que hacer confieso ante las sagrado autoridades que nos habían permitido ir, pues a pesar de en ese momento ellos estar acompañándonos era en el proceso de hablar y sentir, lo que permitiría darnos cuenta de todo aquello que había pasado por nuestro cuerpo, mente y corazón aquella noche. Luego tanto el Mamo como

Susanita nos reconfortaron de fuerza y tranquilidad, decían que el camino de lo indígena es sumamente largo y aunque en ocasiones se revistiera de temor e incertidumbre, luego dejaría ver su lado más bonito al descubrir en nosotros mismos lo hermoso del camino de la espiritualidad, que pensáramos que cada confieso era una manera de recibir guía y concejo por parte de los grandes sabedores que aguardan y cuidan de nosotros, pues El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 344

eran ellos quien estaban con nosotros en la

tarea que habíamos emprendido, que ellos

allí sólo eran unos traductores del lenguaje

que nosotros aun no estábamos en la

capacidad de entender, que al igual, los

abuelos estaban a disposición de nuestras

dudas y miedos, incluso esa era la esencia

de ir a confieso, reconfortarse en compañía

de abuelos y ancestros.

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Sentía que si iba a ser el miedo quien fuerza integradora que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 345

dominara, la sensación de estar dentro de forja el espíritu de valor, mí se convertiría en un momento confuso y que permite la perplejidad por momentos absurdo; pero si por el de lo simple y la belleza contrario era el amor y la fe quien de lo ausente terminara por ganar esa la batalla, me iba a ser posible experimentar y saciarme de un momento sumamente sublime, significativo y nutritivo para mi ser. enseñanza de él está en

Era estar en compañía de los ángeles y los actos de despojo de la demonios que se encuentran dentro, el razón y el pensamiento miedo aguarda y el amor parecía excluyente y temeroso. desquebrajarse de a pocos pero justo tras ese momento fue la noche misma quien mostró su bondad, iluminando con la luz de la luna y las estrellas aquel horizonte extraño que en un inicio me parecía tan desierto, siendo entonces ahora ese desierto el reflejo de lo que estaba dentro y no fuera, sentía que había sacado el vacío del temor y ahora, era más fuerte al mirarlo de frente, sentía la fuerza del amor en mí y eso me haría fuerte ante cualquier adversidad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 346

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Comencé a concentrarme poco a poco en proceso paulatino que da

esas sensaciones previas que habían herramientas para la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 347

modificado casi todo dentro de mí aquella aceptación y el auto

noche en faca, intentaba comenzar mi reconocimiento de sí

ejercicio de confieso desde la claridad de mismos, para el

mi pensamiento y la profundidad de mi encuentro con la verdad

sentir, empecé pensando que al igual que de sí

aquella noche, ésta también era una noche

corta, sus horas de oscuridad eran pocas en

comparación con lo que podría enseñar la

profundidad de esos momentos oscuros

habían imágenes, recuerdos, vidas,

sueños...mil sensaciones por segundo iban

surgiendo al momento de estar en el

silencio absoluto, el exterior y el ruido

desaparecieron, sólo quedaban las

vibraciones que se manifestaban en mi

pensamiento luego de haber experimentado

la incómoda satisfacción de encontrarme

conmigo misma.

Identidad Otredad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 348

Mismidad

Categorización

Aprendiendo a pagar en positivo

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Muchas luces danzaban frente a mis ojos, Lenguaje restringido para

quizá estrellas fugaces quizá abuelas los seres inflexibles de

danzando sobre las montañas, quizá exista corazón

una explicación racional, pero desde mi

sentir eran los cientos de caminos y

posibilidades que hay en mi interior, cada

uno iluminando en su debida proporción,

entendí que era cuestión de hacer las cosas

paso a paso y observando la profundidad

de los detalles que refleja la naturaleza

para así encontrar el camino hacia uno El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 349

mismo.

Divinidad

Entonces me surge la posibilidad de verme Momento cumbre en el y sentirme mientras estoy en un estado de que la razón pierde su plenitud, serenidad y calma; puesto que lugar estático e hay un despertar frente al mundo, las inamovible perspectivas que hasta ahora manejaba comienzan a volverse débiles, mientras otras como el amor y la fe se fortalecen indescriptiblemente.

Mística Metacategorías

Es entonces cuando me surge el mensaje que se revela compromiso de no olvidar, de mantener entre procesos internos pese a la distancia fuertes lazos que tras una experiencia vinculen constantemente mi vida con lo vivencial que en ese lugar había, mantener la misma entrega, disposición de limpieza y Momento de claridad en compromiso con cada lugar sagrado, ya el sentir, el pensar y el que partiendo del hecho que es a una actuar que permite la guía

Madre la que se va como hijo a pedir y el aterrizaje de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 350

perdón, consejo, sanación y cuidado es esa misma verdad, pues es la

figura maternal a la que se le debe tratar de verdad de sí y del lugar la

igual manera con cuidando, agradeciendo, que en ese momento se

recordando, limpiando y amando, para mí revela

se convertía en un compromiso irrompible

ya que al buscar la sincronía de los

procesos internos también hay que

fortalecer los vínculos y la fuerza entre

lugares sagrados, sin desligar uno del otro,

sin apartar la enseñanza y sin dividir el

sentimiento, pues el compromiso en sí

mismo es uno sólo por tanto, la

comunicación y la enseñanza entre un

lugar y otro debe mantenerse en constante

relación y secuencia para que de éste modo

lo que surja en los procesos meditativos y

de cercanía con la Tierra se vuelvan un

trabajo de desarrollo unido y constante.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 351

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

El ritual de pagamento me permite ver qué Entrega constante y

es lo que tenía por dar y en qué búsqueda consciente de sí mismo

me encontraba, en ese análisis proporcional

de mí mismo es que me fue posible El ritual como

entenderme, escucharme y verme a mí herramienta de

misma antes de mirar al exterior; cada cosa organización individual

tenía una funcionalidad específica y no por

eso se desligaba de la constante relación

interna en la que se mantenían mis El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 352

pensamientos, el sentir y la acción, quería entenderlos con tranquilidad, para así saber lo que tenía, este empoderamiento iba a fijar el límite de hasta dónde llegará mi conciencia. Durante el ritual se personalizan las lecciones, cada persona recibe y entiende cosas diferentes, porque somos en sí mismos universos diferentes que actúan, hablan, sienten y ven diferente.

Las ofrendas son una

Durante toda la noche mantuve las semillas entrega consciente de mí en mis manos, eran un trabajo que había misma y mi linaje venido realizando hacia un tiempo en compañía de mi familia, pero más que la Proceso de cuidado, semilla en sí era lo que iba a pedir de ello y devoción y entrega a su vez, lo que iba dejando con ello, las desinteresada que integra personas que amo acompañaban mi viaje la mente el cuerpo y el en lo simbólico de las semillas, ya que corazón había decidido vincularlos con dicha tarea, el cuidado la devoción y la entrega que ponía en ellas era un trabajo de mente, corazón y cuerpo. Finalmente y luego de arrojar las semillas a la laguna acabó el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 353

trasnocho y cada uno fue a descansar

La esencia de los lugares

la piedra de Bochica sagrados permiten

sentía que era justo el lugar para hacer el vislumbrar la fuerza y lo

cierre de nuestro recorrido, el camino sagrados del ritual

aunque seco, mostraba unos paisajes

indescriptibles en cuando a belleza e Los lugares guardan una

inmensidad, durante el recorrido, me energía desbordante en

surgían las ganas de tocar, cantar o danzar, sentimiento

la felicidad provenía de mi interior, era

desbordante, necesitaba sentir que mi

cuerpo se ocupaba en algo, mi mente iba

deprisa y ésta vez alejada de sensaciones

negativas

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Universidad Pedagógica Tecnológica de La sensación de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 354

Colombia sede central de Tunja-Boyacá- desconsuelo y tristeza

Colombia. Allí era importante conocer y inminente por el olvido observar la "Laguna de Hunzahua (pozo de junto con la imposibilidad

Donato)” debido a su riqueza de remediar el agravio y arquitectónica, histórica y cultural, a la el atropello cultural de lo entrada del pozo se encuentra una escritura indígena frente a lo que rescata un poco el significado cultural español y que da apertura ente aquellos que desconocen su historia: "Laguna de

Hunzahua (pozo de Donato) Cuenta la leyenda que el zaque de Hunzahua.

Fundador del pueblo Hunza (Tunja) se enamoró de su hermana Noceta, hermosa doncella muy querida por su pueblo. Los hermanos incestuosos en busca de algodón para las telas y arcilla para las cerámicas, viajaron para Chipatae en donde en un arrebato de inmenso amor se hicieron esposos. Faravita, la Cacica madre, al tener conocimiento del grande pecado de sus hijos quiso castigar a Nocenta con el palo de revolver la chicha, este se rompió la vasija y la chicha se fue regando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 355

abundantemente hasta formar el gran pozo o lago llamado hoy pozo de Hunzahua o pozo de Donato.” CAMARA DE

COMERCIO. U.P.T.C. Ya teniendo este punto de partida es posible inferir en cuanto a varios aspectos: en la descripción física del lugar cabe resaltar que denota un mínimo interés hacia la historia, hay monumentos y leyendas que evidencian un poco las tradiciones, raíces, hábitos y costumbres de la cultura indígena. Sin embargo, deja un sin sabor darse cuenta del desarraigo cultural que coexiste; la limpieza, el respeto y el afecto por los lugares sagrados no es un aspecto que sobresalga de forma positiva. Por otra parte, independiente a las implicaciones ambientales el lugar si permite experimentar diversas sensaciones, en lo personal la sensación que ha dejado en mí es de desconsuelo y tristeza, no hay explicación de aquél desarraigo cultural, la tergiversación de las palabras en cuanto a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 356

la descripción histórica que está impresa en Sincronía energética entre este lugar sagrado no satisface las elementos del lugar expectativas que surgen al acercarse al sagrado forjan la energía mito y a la esencia de éste lugar sagrado. general del mismo

En general para mí el lugar deja una sensación de tranquilidad y a su vez de fuerza, el asombro surge inmediatamente luego de pararse frente a las piedras maravillosas en su tamaño forma y significado; aunque no hay un orden aparente entre una y otra, para mí era claro que si había una sincronía energética entre En ellos están las ellas, pues recorrer las rocas una a una me historias y la esencialidad dejo la sensación de un proceso sistemático mitica que para nosotros de labores y funciones que luego resultaría indígenas caminantes en la integración conjunta de cada persona toma valor y suma y a su vez, de toda la comunidad. importancia

El siguiente lugar para visitar fue el Al estar en ellos Crece la

TEMPLO DE GORANCHACHA, en este vida como crece la lugar no logré conectarme demasiado, costumbre y la tradición podía imaginar este lugar años atrás, veía de estar en ellos en el imaginario de mis pensamientos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 357

abuelos sentados compartiendo palabra y La energía se apacigua pidiendo consejo, trasnochando y debido al imperante esperando al Padre Sol (XUE) en los días olvido de solsticio, abuelas tejiendo y por qué no niños danzando. Las posiciones de las piedras marcaban una figura en espiral y sentí un lugar en el que crecía vida, felicidad y conocimiento constante, pero abrir los ojos y ver todo lo contrario era desconcertante, la realidad era ver unas rocas descuidadas, sentir una energía apaciguada, y un olvido imperioso.

éste en específico necesita es de trabajo Las limitaciones espiritual dedicado y paciente, ajeno a antropológicas cubren los presiones ambientales o intereses de algún horizontes y limitan la tipo, aunque no es exclusivamente profundidad en la necesario sentarse allá y trabajar allá, sentí naturaleza del lugar como necesario trabajar el fortalecimiento de esa fuente de conocimiento energía apaciguada, desde el pensamiento individual y colectivo que se construye desde las malocas y bohíos cercanos a nosotros.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 358

LOS COJINES DEL ZAQUE "Adoratorio y observatorio del Pueblo Nación-Muisca

Chibcha" Orgullo y símbolo de nuestra cultura indígena. En vocablo indígena

XUE PUYQUY (Corazón del Sol), es uno de los calendarios solares de las culturas americanas originarias, tallado en dos piedras circulares en esta gran roca de la montaña tutelar TCHUNZA-TUNJA.

Lugar se observatorio de la salida y recorrido del sol en el horizonte, proporcionando las cuadratura del

ZOCAM-(año solar), donde se evidencia los equinoccios y los solsticios que en el calendario natural definen los ciclos de siembra y cosecha de la madre tierra-

HYCHA GUAIA.

Sitio de peregrinaciones ancestrales de los

Muisca de ofrendas sagradas y paramentos, La grandeza de una para agradecer al astro Rey -(XUE); el sol ciudad escondida y a TCHIMINIGAGUA el espíritu creador prevalece en las cenizas fecundador de vida. E no ceremonia, los del lugar y en el recuerdo

TCHYQUYS, (guías espirituales y parte de quienes avivan su El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 359

del pueblo indígena, cada amanecer, fuerza provenientes del FARFACA (hoy, tras del alto), en procesión con música, danzas, La calidez y el resguardo cantos y oraciones recibían al Padre Solar para el nuevo visitante para agradecer sus beneficios. Agosto de permanece intacto si este

2010. Alcaldía Mayor de Tunja, Secretaria viene limpio de corazón y de Cultura y Turismo; Academia pensamiento

Boyacense de Historia; CABILDO

MAYOR MUISCA CHIBCHA DE La pureza de su fe

TCHUNZA.” aguarda en la sensibilidad

, la sensación que surge en mí es de del corazón grandeza, más que del control anual de fechas, sin demeritar ésta primera función, El despojo obligatorio ha es la grandeza de una ciudad, entendida de hecho que el hijo lamente forma diferente a lo que significa una profundamente el daño ciudad actualmente, para mí era más como continuo que se le ha el lugar de desarrollo espiritual y de hecho a su Madre pensamiento, lugar de arduas labores y observación minuciosa, más que de los La contraposición de frío ciclos, de sí mismos en sincronía a esos es relacionada con la ciclos, me sentí en un lugar de tibieza de un abrazo y la ensimismamiento y trabajo espiritual, que desolación del olvido, así en la calidez y el resguardo permanece la mismo pasa en los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 360

esencia de un ritual propiamente indígena, lugares sagrados la estructura embellecedora de piedras hermosas y cálidas que guardan en sus La revelación de lo paredes lo puro de la creencia y la fe sagrado en los lugares indígena. Me sobraron ganas de seguir depende del grado de sintiendo el lugar pero el tiempo en el lugar conexión que la fe debía ser limitado debido a cuestiones de permita establecer seguridad, y no debiera ser, no debiera tener que el hijo de la madre huir de su Un lenguaje dialectico lugar sagrado por factores externos; el que permanece entre el lugar aparte de la limpieza de basuras para cielo y la tierra devela la mí requería tiempo de sentarse y sentir su magia del lugar sagrado esencia.

LAS MOYAS, a diferencia del lugar anterior el frío en este lugar era sumamente penetrante, La sensación de ruptura era clara, el paisaje que debió verse años atrás desde esa misma montaña no era nada similar al que tuvimos que apreciar, para mí era el reflejo de una división de lo hermoso para occidente y lo hermoso para los pueblos indígenas, nos sentamos sobre El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 361

una piedra en la que en su superficie se pueden ver 14 hoyos, los cuales con el Los lenguajes nuevos paso del tiempo han venido siendo dotados vienen dados por de un significado más profundo que su sensaciones pausadas y estructura, yo sentía que cada hoyo era un silenciosas en el que el centro de conexión que desde la lógica murmullo de la Madre se racional es imposible comprender, pero convierte en un grito para mí cada uno plasmaba el reflejo de un incesante lugar del cielo que se conectaba directamente con esa parte de la tierra y que de seguro en un estado de conciencia más amplio y sensible se hubiese podido interiorizar la lección de ese lenguaje dialéctico que yo veía entre el cielo y la Los lugares sagrados tierra; la sensación del frío me causaba impregnad de vida al ser, incomodidad era imposible ignorar la le brindan claridad y sensación, pero al apartarme de la distensión para los superficialidad del cuerpo y sin quitarle sentimientos más rígidos importancia, sentía que la lección estaba y aparentemente aislados más allá de ello, sin haber una aparente sincronía entre hoyo y hoyo para mí estaba Ir a los lugares es una claro que había una comunicación entre manera de honrar y lugares sagrados, aunque el abandono del sentirse parte de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 362

lugar y la des información acerca del comunidad indígena mismo acercarse poco importa,.

Fui mirando el lugar detenidamente, la montaña de mi lado derecho, atrás de la estructura arquitectónica de las viviendas me expresaba un conexión entre ella y la Las ofrendas para la montaña en la que yo me encontraba, es Madre no han de bastar o entonces cuando me surge esa inminente ser suficientes para quien sensación de conexión, de conectarme en de corazón desea curarle las sensaciones pausadas, silenciosas y prudentes de la madre naturaleza y así ir descubriendo en el silencio y mediante la concentración la posibilidad de lenguajes nuevos.

La belleza el lugar esta

El lugar más que otros, me inspiraba pagar dada por los cambios, la con agua mucha agua cristalina y pura, fluidez y la fuerza de su agua fluyera entre las rocas, mi interés no energía vital fue hallar una forma lógica a su estructura física sin embargo pude ver por un instante Los hijos de este una fuente de vida y reposo, para mí era territorio ensangrentado y como una recarga de hidratación tanto de herido rescatan el valor El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 363

pensamiento como de forma física, de los lugares sagrados, la sabíamos que por allí pasaban múltiples fe y la seguridad en el procesiones durante los rituales indígenas fortalecimiento de la raíz por tanto creía que aquél lugar había sido que hasta ahora parece esa fuente de oxigenación y reivindicación extraña y sensible de con el propósito que durante las juicio. procesiones los indígenas llevaban, incluso para mí en ese momento lo fue, sentía que estar allí regeneraba mi propósito y me daba cierta hidratación espiritual para seguir el camino.

Pero fue triste verlo en un estado tan deplorable, su carecia de agua me La preparación y la implicaba verme en la exigencia de pagar limpieza previa son una con agua, de limpiar con lo positivo de mi manera de honrar y espíritu y lo puro de mi propósito, para de reconocer tanto al lugar este modo alimentar y dejar impregnado de como a los ancestros vida ese lugar. Porque para mí la hermosura no está en ordenar el caudal del río y monopolizar la naturaleza así como lo habían hecho los ingenieros que habían construido viviendas en ese lugar, para mí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 364

la hermosura estaría dada al ir entendiendo los cambios del caudal y dejando que se desencadenen maravillas durante el camino. Pero sólo en la medida en que el agua fluya y encuentre su propia fuerza sin tener que obligarla a aguardar o adelantarse por algún lugar indebido para el orden natural. Además quien más si no nosotros hijos de este territorio ensangrentado y herido para rescatar el valor de los lugares sagrados, la fe y la seguridad en el fortalecimiento de la raíz que hasta ahora parece extraña y sensible de juicio.

poder y vida que aguarda la preparación cobra importancia, si en la vivencia nuestros antepasados cuya conciencia estaba más sensible al lenguaje de la naturaleza, recorrían montañas, surge el entendimiento trasnochaban, realizaban pagamentos y del lenguaje que en ellos acudían a los grandes espíritus en busca de se encuentra plasmado, consejo y guía, cómo no hacerlo nosotros que aún somos niños en busca de seguir el digno de respeto y camino. Aunque se mantuviese en mi profunda admiración por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 365

interior encendida la llama de fe, la duda y la pureza de su esencia el ego tientan y nublan el camino pero es allí donde quien ha preparado su cuerpo y su espíritu es capaz de re direccionar el ego y fortalecer la fe, yo me sentía fuerte y preparada así que me seguía emocionando saber que estaba llevando todo como en su momento mis ancestros lo habían hecho.

Dentro de los recorridos que realizaban los La laguna habla dentro de pueblos indígenas estaban: Quiminizaque, mí y desde allí soy parte actual Parque Pinzón; Templo del Sol, de ella y ella se vuelve actual Universidad Pedagógica parte de mí

Tecnológica de Colombia y finalmente los

Cojines del Zaque, actual Alto de San Una sensación de abrigo

Lázaro; lugares que al igual que ellos y y calidez que colma de pese a la inexperiencia decidimos recorrer. energía a ser, es una

En primera instancia surge la pregunta de Madre acogiendo mi

¿por qué se modifican los nombres de los cuerpo en su regazo lugares sagrados? Y es justo allí donde uno se da cuenta del atropello cultural en el que estamos inmersos.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 366

LAGUNA DE TOTA allí procederíamos a hacer un ritual de trasnocho, era por sí solo Sumergirse en la Madre y un paraíso infinito de luces y magia, la sentir como los dolores tranquilidad se abrió paso en mi pecho, mis desaparecen tras ojos transmitían una sensación de asombro, experimentar su bondad y la inmensidad del paisaje y su belleza su dulzura indescriptible me hacía sentir una sensación de la que nunca antes fui dueña, el azul penetrante del cielo se mesclaba con la superficie del agua y se combinaba bien con la silueta de las montañas. Hubo tiempo para observar detenidamente el paisaje, entender la maravilla de las pequeñas cosas, las estrellas en el cielo, el sonido de las aves, el movimiento de los

árboles, los reflejos en el agua, lo tenue del fuego y la brisa fría; era un paisaje digno de admiración y respeto por el significado que yo le tenía a aquellos lugares que conservan lo puro de su esencia.

La laguna me llamaba y sin dudar un segundo más me llene de pensamientos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 367

positivos, sueños, anhelos, esperanzas, propósitos, amor por mí y por quienes complementan mi entorno, para ingresar a ella con un profundo sentimiento de alegría. Al entrar al agua parecía que el frío desaparecía en vez de aumentar y aunque no había un sol radiante ni un clima templado, me sentía tibia por dentro y por fuera, pude experimentar equilibrio y plenitud, la laguna me había colmado de una dulce sensación de bienestar, sentía como fluía desde dentro la fuerza y el calor, solo quería sumergirme y seguir experimentando esa dulce sensación de limpieza, por un momento desaparecían mis dolores, mi pensamiento al igual que mi cuerpo estaban llenos, la nostalgia desapareció, me sentía radiante y vi la vida como un camino largo pero atractivo para recorrer, las cargas se alivianaron y sólo entonces y por primera vez durante todo el viaje pude sentir algo de calor. No sentí de la laguna abandono hacia ella, por el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 368

contrario sentí un lugar que aguarda y se

conserva fuerte pese a la contaminación.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Cuando dicha conciencia sale a flor de El amor se encuentra en

piel, me basta al menos algunas fracciones la particularidad de las

de segundo para reducir las distracciones cosas que dejaron de

en una proporción enorme, es entonces causarnos asombro

cuando la dulzura mi corazón se aferra al

ser y me permite fijar la atención en lo El amor en la Madre

particular de las cosas; la vida en los permanece intacto e

animales, el oxígeno en las plantas, la inamovible pues es ella la

sombra de los árboles, la suavidad de la fuente que rehabilita

brisa, la inmensidad del cielo, los secretos nuestro corazón

que se sumergen en la profundidad de la acorazado y herido

laguna, las pureza de los caminos entre

montañas, el frío del viento, la tibieza de

un abrazo y la inminente compañía de la

tierra, que abre sus brazos para recibir todo

aquello que en pago quieran darle.

Vida El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 369

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral En lo negativo encontré nostalgia, En la enseñanza del ego

desamor, impaciencia, carencia de fe, están los maestros

negación y miedo; sin embargo pude negativos que debilitan y

entender con el trascurso del tiempo que en enseñan con mano fuerte

las carencias está ese faro de luz que debe es por eso que

fortalecerse, que en la carencia de fe reconocerlo va más allá

también hay fe, en el amor débil y distante de juzgar y criticar la

hay amor, en el ego de la soberbia y la manera en que devela su

imposición hay herramientas que permiten verdad.

conocer en esencia lo que soy y lo que

temo ser, es así que las labores a trabajar En las carencias esta la

surgen; está en tomar cada cosa con fuerza que domina la

tranquilidad para de este modo carencia misma, pues la

direccionarlas e ir rompiendo barreras que falta de reconocimiento

ha construido el ego para transformar mi imposibilita que surja por

esencia, ir entendiendo que al ser carente si sola

de algo es imposible quedar en deuda El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 370

intentando dar eso mismo a alguien, Cuando es imposible dar incluso reconocerlo cuando llega a amor y la sensación es nosotros mismos también resulta poco perceptible, se imposible, sentía que debía fortalecer las limita la posibilidad de cosas desde su raíz para de este modo, recibirlo en esencia poder pagar con lo mismo que había De la mano del negativo venido a buscar. Entendí que sin tener, es me es difícil ir imposible dar amor y por tanto al ser esto fortaleciendo mi espíritu una sensación poco perceptible por mí en pro de apaciguar la misma, limita la posibilidad de recibirlo. nostalgia y la ira.

. El negativo se equilibra,

el ego retorna a su lugar

en su debida proporción

mientras por su parte el

positivo surgirá para así

cerrar tranquilamente

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

La sensación incontrolable de sentirse la devoción y la fe lo que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 371

ajeno y reducirlo a simples asociaciones me permite llenar de del pensamiento disminuye la grandeza significado la experiencia comprensiva y armónica del ser y la Tierra; sin embargo, es la devoción y la fe lo que me permite llenar de significado la experiencia subjetiva de contacto conmigo misma y con la naturaleza.

Cuidado

Sanación

Hay sin duda la posibilidad de tomar cada Uno mismo es quien se sensación en su debida proporción, ir convierte en el guía ordenando cada cosa en su lugar, pero con interno, capaz de una enorme diferencia, ya no son establecer el significado y

únicamente las condiciones externas al ser la dirección de donde las que ordenan y direccionan las proviene cada cosa. emociones, pensamientos y creencias, es uno mismo quien se convierte en el guía interno, capaz de establecer el significado tan profundo y la dirección de donde coexiste la extensión del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 372

proviene cada cosa. pensamiento acorde al

Se abre el paradigma y deja de ser un sentimiento ahora es el reclamo permanente del "¿Por qué sí? ¿Por ¿Para qué? el ¿Cómo? qué no? ¿Por qué a mí?" Hay una Lo que entra a ser modificación importante en esos relevante cuestionamientos base ya que, ahora coexiste la extensión del pensamiento acorde al sentimiento y es entonces, cuando me surge la posibilidad de trabajar esas cuestiones internas que me aquejan; hay una evidente trasformación que parte desde la manera en que se asume y se cuestiona la existencia, hasta la aparente simpleza del comportamiento cotidiano; ahora es el ¿Para qué? Y el ¿Cómo? Lo que entra a ser relevante durante el proceso.

Durante el transcurso y el avance del camino se ha hecho reiterativa la necesidad de sanación en los diferentes rituales, en lo personal para mí con el tiempo enfrentarme con el dolor físico y los sentimientos como El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 373

la duda, la nostalgia, la ira, el ego, el miedo

y en general el conocimiento de mí misma

ha hecho que el concepto de enfermedad se

transforme en cuanto a su significado y que

la historia del malestar reflejado comience

a ser una manifestación de algún

aprendizaje incompleto que he dejado

atrás, así lo he venido comprendiendo, para

mí escudriñar en cada manifestación y

llegar al punto coyuntural que irrumpió con

la armonía de mi ser se convierte en un

camino prolongado, difícil y desconocido.

Además va convirtiendo cada sensación de

manera individual en un camino igual de

denso y a su vez desde lo colectivo lo va

convirtiendo en una relación constante que

le da significado a la manera en la que veo,

siento, percibo y actúo frente a mis

compañeros.

Identidad Otredad

Mismidad El reduccionismo ha llegado a un nivel El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 374

brutal y ofensivo para nosotros como habitantes de este territorio o al menos para mí. Desde mi perspectiva las letras que se plasman en el monumento son limitadas y aunque rescata un poco el concepto de patrimonio cultural y en parte honra lo sagrado del mito no compensa ni se acerca al significado del suceso. Las historias no eran congruentes con lo que se evidencia en la actualidad, ya que se describía todo un sistema de gobierno entre culturas indígenas del que hoy ya no tienen el derecho de practicar y promover, había una organización muy funcional dentro de estos pueblos aborigen que de igual manera ha venido desapareciendo, su claridad en cuanto lo económico, político, religioso y social fue extinguido casi por completo.

Así que no comprendía hasta donde llegaba su sentido de honrar éstas comunidades

Para mí había un montón de limitaciones en cuanto a ¿Quiénes son los Muiscas? El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 375

Pues el empobrecimiento en dichas investigaciones ha llevado todo a simples descripciones físicas o netamente basados en lo etnográfico, lingüístico o antropológico, dejando de lado la importancia en la concordancia y la relación entre cada aspecto.

MUSEO ELIECER SILVA CELIS allí el sinsabor fue aún mayor, el reduccionismo era llevado a tal punto que todo aquello que para mis oídos sonaba atractivo, significativo y mágico en las palabras plasmadas en los cuadros se convertían en silogismos que ejemplifican lo que los mitos y costumbres aportan

“científicamente”. No se le estaba dando el trasfondo que en su esencia lleva toda la cultura indígena, para mí era evidente el desarraigo e incluso la vergüenza y el despotismo que aún invade a estos pueblos, pues se estaba fijando la atención en la creencia única hacia lo tangible, medible y verificable, el resto perdía valor y aunque El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 376

los datos alimentan la investigación claramente no son el centro de ella.

Por ese día acabaron las visitas y nos dirigimos al día siguiente al MUSEO

ELIECER SILVA CELIS allí el sinsabor fue aún mayor, el reduccionismo era llevado a tal punto que todo aquello que para mis oídos sonaba atractivo, significativo y mágico en las palabras plasmadas en los cuadros se convertían en silogismos que ejemplifican lo que los mitos y costumbres aportan

“científicamente”. No se le estaba dando el trasfondo que en su esencia lleva toda la cultura indígena, para mí era evidente el desarraigo e incluso la vergüenza y el despotismo que aún invade a estos pueblos, pues se estaba fijando la atención en la creencia única hacia lo tangible, medible y verificable, el resto perdía valor y aunque los datos alimentan la investigación claramente no son el centro de ella. Los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 377

trabajos de campo permiten direccionar el sentido y el significado personal que cada uno experimenta de manera individual y posteriormente tiene la oportunidad de compartir.

El museo aunque en su esencia busca resaltar aspectos netamente científicos e históricos, en otros permite vislumbrar aspectos que contribuyen con el entendimiento de la situación actual, estableciendo relaciones entre tiempo y significado. A nivel general es evidente la organización de estos pueblos, en lo económico resaltaba la variedad en la agricultura, variedad que se ha deteriorado en calidad, diversidad y cantidad; mientras nuestros ancestros por medio del trueque y el trabajo mantenían en constante movimiento tanto la economía como la productividad, nosotros evadimos las labores avergonzándonos de nuestra esencia indígena y campesina. Denota un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 378

cambio enorme al momento de ver los procesos de siembra y cosecha frente a los actuales, la concepción indígena no resalta por el desperdicio o el abuso de la tierra, resalta por el cuidado y el buen manejo de la productividad, para ellos era más que comida, era más que la vida del animal y la necesidad de alimentarse, es la conexión con la Tierra y el fortalecimiento de una relación recíproca mediante la cual se obtienen enormes beneficios desde lo espiritual a lo físico.

Por otro lado, dentro de las comunidades indígenas se conserva una clara organización social, que lejos de intentar castigar a los habitantes de la comunidad, busca por medio del amor y la palabra dulce establecer una serie de compromisos que finalmente son lo que sustentan la particularidad del pueblo, permitiendo el crecimiento espiritual e individual y en este sentido el colectivo, en las leyendas del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 379

lugar tradujeron ésta intención a algo más acorde al mundo occidental, por tanto es expresado y muy seguramente entendido como una serie de normas y leyes que de ser infringidas serían la causa de un castigo proporcional a la falta. A mi modo de ver aunque la organización social estaba basada en modo de jerarquía, ésta tenía un significado y unas connotaciones absolutamente diferentes a lo que ahora es;

Hunza o Tchunza que significa varón poderoso o prudente, era el Zaque de éste territorio y no era precisamente un reflejo de castigo, era más un ser que buscaba el crecimiento y la estabilidad de su pueblo.

La quema del templo por Jimenez de

Quesada tiene más que un simple significado historico y cronológico, es la ruptura física de creencias propias y en la leyenda misma que muestra el museo es evidente “el templo del sol que todos recordamos con cariño y con respeto, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 380

simboliza lo más puro y digno de la cultura

Muisca. Su edificación fue concebida y realizada con propósitos de eternidad, por ello emplearon el Guayacán madera sagrada y mítica, y dispusieron esclavos vivos bajo su pilares de arquitectura.

La exótica belleza del templo del sol hizo decir al cronista Fry Pedro de Aguado, que entre “los otros templos de (Suamox)

Había uno de extraña grandeza y ornato.”

Con la llegada fe los conquistadores tan célebre santuario fue reducido a cenizas en

Agosto de 1537. Ahora, después de 465 años de haber apagado este faro de pensamiento aborigen; lo estamos reconstruyendo, queremos, así, salvar uno de los más valioso y sentidos monumentos históricos de Colombia.

El espacio y ambiente físico que se reconstruye, “in situ” con elementos y formas de valor religioso, mágico y mítico corresponde, según pensamos a la dimensión del alma Chibcha, que hemos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 381

querido entender en los delicados trabajos de mencionada reconstrucción que adelantamos. E. Silvio Celis.

Dentro de las pinturas se encontraba un indígena con un rosario entre las manos y su vestidura propiamente indígena, dentro de la explicación del guía ésta pintura era sumamente importante para el mundo entero pues era la única que databa a una cacica uniendo ambas creencias, historia que contó vagamente luego de nosotros mostrar interés hacia ella, de lo contrario creo que muy seguramente lo habría pasado como una pintura más. Para mí era impresionante ver los alcances de la manipulación impuesta por los españoles, pues aunque aparentemente era un dibujo en el que se plasmaba la unión de ambas creencias, creería yo que esa unión no hubiese tenido lugar en ese momento, pues como precedente a la fe, estaba el derramamiento cruel de sangre inocente. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 382

Categorización

Recobrando la fuerza con el agua de la Madre

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística Metacategorías

Por momentos, y por instantes de segundo Una voz interna dirige

verme equilibrada o con solo descubrir qué proceder y me dice quién

cosa pertenece a qué lugar es que se cubre soy

mi cuerpo y mi alma de plenitud, el auto

descubrimiento de mis ángeles y demonios

me ha llevado a ese punto indescriptible en

el que las voces de la vida o quizá mi

propia voz refugiada en el sentir, es la que

habla y dirige mi proceder, son esbozos de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 383

quien soy, que me dicen a donde pertenezco, que amo, que me duele y que me hace feliz, son esbozos que ni en la concentración más profunda alcanzaría de no ser por elegir el camino de la espiritualidad. Escuchar el cuerpo

es darse cuenta que tanto

Inicié realizando un recorrido de todo mi daño se le ha hecho, el cuerpo, pasando desde mis pies hasta mi refugio y la mentira cabeza, con detalle pude ver que ya no encubren cualquier herida tenía el paso firme y decidido, mis piernas flaqueaban al tomar ciertos caminos, mi abdomen ya no tenía el mismo valor y significado, no era ese símbolo de el amor es la fuerza feminidad, fertilidad y vida, mi corazón rehabilitadora que me estaba confuso entre corazas de refugio y permite escuchar y sanar mentira, la sensibilidad a los sentimientos mi cuerpo se había escondido demasiado profundo, mis brazos les faltaba vuelo, necesitaban estirarse, sentir el aire, sentir el amor de un abrazo sincero que los añadiese nuevamente a mi pecho, mis oídos habían perdido comprensión, mi boca dulzura y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 384

verdad, mis ojos veían únicamente,

parecían callados y nublados, incapaces de

ver más allá o expresar un poco de lo que

había dentro.

Luego me concentre en pensar en los

sueños, planes y proyectos por cumplir, fue

entonces que encontré lo que aún no había

sido modificado, dentro de ellos estaba

nuevamente mi familia, fortalecer el amor,

la sabiduría, la amistad y el conocimiento

de mí misma, darle valor a cada cosa que

me ha hecho fuerte y hacer reciproco el

sentir.

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 385

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Comenzó por saludarnos y expresar su Daño tras daño se va

felicidad de tenernos nuevamente en su fluctuando la integración

casa, posteriormente, dio las pautas que que tras la limpieza

iban a regir nuestra estadía y el trabajo por parecía impenetrable

realizar, había que pensar en el negativo

que había llegado a nosotros durante todo

este tiempo sueños, tristezas, ira, peleas,

desilusiones, carencia de fe, pensamientos

y sentimientos, era entrar en una

exhaustiva revisión de todo lo

aparentemente malo que había estado

dentro de cada uno de nosotros, hacia

énfasis en que en nuestra última visita

habíamos salido limpios, fuertes y llenos

de positivo así que había que encontrar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 386

todos esos momentos en que esa armonía Confesar a la Madre es se fluctuó. hacer reciproca su entrega

indiscriminada de amor y

Luego de esto salimos al nacimiento de comprensión agua, según la explicación que nos dio el

Mamo lo que íbamos a hacer era una especie de confesión a la Madre, pues en ese nacedero de agua se quedarían todas nuestras confesiones junto con la verdad de cómo se había realizado el recorrido en

Boyacá y cómo estábamos después de ello, era una manera de devolverle a éste lugar El ritual de la danza el la fuerza que nos había dado para partir. canto y las tonadas de

acordes permite agradecer con el paso del tiempo y escuchando al y honrar a los ancestros y

Mamo sus explicaciones de cómo hacerlo sabedores de manera correcta, me fui relajando e imaginando que en la aparente sencillez de dicho ritual estaba la maravilla de la celebración y la cura, las plegarias y los agradecimientos a las grandes autoridades espirituales. En ese sentido, valía la pena esmerarse y danzar con el corazón abierto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 387

y dulce en honor a la tarea implícita que quería realizar con la danza, él en los entremeses nos iba contando de cómo en su momento había realizado este mismo ritual en compañía de otros sabedores y su familia, su expresión era de absoluta felicidad y orgullo, llegar a contagiarse de El acompañamiento de su energía fue lo que me impulso a danzar los seres queridos esta sin pensar tanto en lo que pudiese pasar impresos en los recuerdos por mi cabeza. y las vivencias

Durante los cantos del Mamo la reflexión se dirigió hacia mi familia, mi compañero y mis amistades más cercanas, experimenté una sensación de amor incondicional y seguridad, el haber estado toda la noche recordando momentos positivos y negativos, hizo que de manera simultánea fuera recordando a aquellas personas que habían formado parte de esos recuerdos y lecciones aprendidas, fue entonces que entendí que en la constancia y el fortalecimiento del positivo es que el El amor en el ritual negativo va siendo encaminado y va permite dotar de mucho El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 388

tomando un papel sumamente importante valor la experiencia

dentro de mi vida, es cuestión de aferrarme

a las cosas y momentos que le ha dado

satisfacción y bienestar a mis días buenos

y malos, para de este modo, permanecer

fuerte frente a la adversidad, la confusión y

los instantes de oscuridad y miedo, estaba

en mí cuidar y dotar de significado cada

experiencia, pues el amor estaba

impregnado en ellas, en las personas, en la

experiencia con la Madre y en mí.

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 389

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

el Mamo dijo que sería bueno abrazarnos, Los abrazos en

con cada abrazo sentía como se fortalecía comunidad son la muestra

mi ser y el de la persona que iba física del amor que a su

abrazando, era una manera de decirle que a vez reafirma el positivo.

pesar de lo difícil que hubiese sido la

noche, allí estaría nuevamente de pie y con

la fuerza suficiente para seguir, es felicitar

y honrar por lo que cada uno ha pasado,

lidiar asperezas y reafirmar lo positivo que

cada uno tiene por ofrecer al grupo.

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 390

Fe

Es entonces cuando emprender el camino La fe se construye en el ir

se convierte un proceso que parece volver y venir del caminante,

a su punto de partida una y otra vez, las pues da tanto del positivo

sensaciones no desaparecen pues al igual como del negativo

que las dudas se han venido fortaleciendo,

asistir ya es un acto de compromiso y fe

conmigo misma antes que con la aparente

obligación de la academia.

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 391

Categorización

Padre y Madre, un viaje hacia el amor

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Por momentos y manteniendo la vista fija deleite de experiencias

en la laguna vi como el sol y la laguna eran sublimes y hermosas que

siempre uno, así como en su momento sensibilizan la razón,

Padre y Madre son uno en la guía y la

enseñanza de sus hijos, la maleza no era sentir y perderse bajo la

otra cosa que el reflejo de aquello que en premura del querer estar

mi mente había ido soltando, en cierto más allá de lo intangible e

modo era una parte de mí éstos islotes de incomprensible para el

maleza con el paso del tiempo se mueven cuerpo,

hacia los costados, del mismo modo que

las cosas que en ese momento estaba

soltando se harían a un lado, formando

parte del paisaje, de mí paisaje para así Es la conexión cumbre

permitirme volver a tomar la mano de entre nosotros como seres

Padre y Madre y, de este modo seguir vivientes y la Madre

adelante, pues entendí que la guía y la luz Tierra como ente que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 392

de ellos nunca es intermitente si la dulzura provee la vida, del corazón domina el interior, la soledad no existe, si hay un lugar para el amor, la conmueven fuerzas fe y la vida todo se convertirá en lecciones específicas de la emoción y agradecimiento. y el sentimiento, para así

perforar en la severidad

Estando allí pude percibir algo de miedo y de un mensaje encubierto. nostalgia, era increíble estar en un lugar en el que por años estuvo torturándose gente inocente, gente de mi sangre, mi raza y mi fuerza, imaginaba a ancianos y niños aferrados a sus creencias, respetando sus costumbres siendo terriblemente torturados e humillados por ello; incluso el guía de esa mañana que contaba la historia tenía un tono de voz enajenado, no mostraba mayor reacción o interés por aquello que sabía había pasado en ese lugar, para él era contar una historia más. Pero sus palabras me daban escalofrío y despertaban mi sensibilidad, me parecía un suceso terrible.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 393

Divinidad

Sentada en la roca y con la vista fija al el cuerpo es colmado de

frente cerré mis ojos lentamente y pedí que sensaciones que dejan

las bendiciones y la fuerza del Padre tanto perplejo al más astuto; las

espiritual como físico siguieran guiando y fragancias, los colores y

acompañando mi camino, en pensamiento sabores agudizan los

me bañé con la luz del sol, me limpie con sentidos, todo dentro de sí

su luz y le di claridad a esos rincones guarda silencio,

oscuros que habían dentro de mí, era una

sensación hermosa, era sentir en carne y Es un conocimiento

hueso la fuerza y la sabiduría que sólo profundo de sí y del lugar

encuentro en mi Padre, sentir como me que en ese momento me

reconciliaba no sólo con él, sino con la rodea, es volver a la vida

parte masculina que aguarda en mi interior sin haberse marchado de

pues en viajes anteriores no había ella aún

experimentado esa fuerza tan latente como

hasta esa mañana.

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 394

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Cuando hacemos el saludo voy recordando Acercamiento a las

cada cosa me lleno de sensaciones bonitas, experiencias de máxima

me pierdo en los abrazos de mis padres en profundidad. Invita al

las travesuras con mi hermana y en la sacrificio, al

inmensa felicidad que me hace sentir mí agradecimiento y a la

sobrina, siento la bondad y la nobleza de reconciliación mediante

mi Madre, la fuerza imponente y la la entrega sincera y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 395

protección incondicional de mi Padre; se desinteresada de lo que van agudizando mis sentidos a los hemos recibido elementos de la tierra, siento la frescura de la brisa fría, la firmeza de la tierra en la que poso mi cuerpo, el fuego que se agita en mi interior y recorre todo dentro de mí, escucho caídas de agua y siento como ésta corre por mis venas; luego voy recordando mis abuelos, mi familia, intento hacerlo con cariño y gratitud, fijo en mi mente sus cualidades y defectos e intento volverlos propios, para hacer aún más mía su fortaleza; voy pasando imágenes y sentimientos de los lugares a los que he visitado y más aun de los que provengo, para finalizar ya cuando hacen referencia a los linajes de mis compañeros doy gracias a ellos por haberlos puesto en mi camino.

Siento que de esa manera entro con más agradecimiento por los disposición y entrega al ritual. conocimientos, deseos,

sueños, mensajes o danzamos para mí, como muestra de lecciones agradecimiento ante todo lo que ese lugar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 396

había dejado en nosotros, al terminar tomé las semillas las entregue con toda la devoción mientras pensaba en cada cosa que había pasado en ese lugar, las dejé en el lugar en el que había pasado toda la mañana y me dirigí nuevamente por un abrazo para cerrar agradeciendo a la fuerza El camino devela el que me permitió iniciar. verdadero estado del ser

pero en compañía de la no me sentía bien así que comencé a Madre es también un guardar silencio y refugiarme en un par de proceso de auto sonrisas fingidas, no quería que otro descubrimiento hermoso intentara entender algo que apenas y estaba entendiendo, mi compañía incondicional junto con la fe y la creencia en el propósito de que todo tendría una función positiva, se convertía en lo que fortalecía mi cuerpo, la montaña por momentos parecía todo un reto subirla; sin embargo, el ritmo al que subimos le dio tiempo a mi cabeza de frenar un poco tomar aire y recuperar lo positivo, los sueños, planes, cambios, Búsqueda del equilibrio y proyectos y sacrificios que habían la sanación tanto de sí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 397

precedido mi vida camino antes de llegar como del lugar allí. dejar en ellos una parte de

sí que ya estamos en sentía que la laguna pedía un poco más de capacidad de entregar con tiempo, más limpieza y fe dentro de mí; amor y bondad después de esto comencé a confesar el Proceso cíclico y circular porqué de la tristeza, la ira, la inseguridad en el que todo lo que se y la constante sensación de desamparo que nos fue entregado vuelve seguramente ella había percibido de mí a su lugar de origen y en durante el proceso de arribar la montaña, la su debida proporción. explicación de aquél confieso con ella en palabras no es posible contar, era a punta de imágenes y recuerdos que le contaba quien era, cómo y por qué había llegado hasta allí aquella tarde.

Abuelo y sabedor

Plantas

Planta de Ayu: En ocasiones perdí la Fuerza que reconforta y fuerza casi que por completo, sentía centra el pensamiento El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 398

mareos y calambres en las piernas, el

profesor ofreció un poco de ayu para todos,

pero no quise tomarlo, quería como llegar

a un punto en que sintiese que debería

tomarlo, pedir permiso pues nunca antes la

había recibido, tras una hora

aproximadamente, ya con los síntomas

precedentes pedí un poco, la tomé y con

mucha fe y respeto la eche en mi boca, al

principio sentí un sabor amargo y fuerte,

luego más y más suave, cuando acabé me

sentía reconfortada y capaz de seguir, así

que seguí realizando lo mismo cada vez

que sentía que el cansancio era mayor que

mis ganas de subir.

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados la iglesia doctrinera del municipio de Dolor y ausencia de

Sutatausa. Al llegar encontré unas Madre y Padre, pues el

montañas hermosas, el clima era cálido, la despojo deja el lugar

iglesia estaba rodeada por montañas y por infestado de enfermedad

otras 4 capillas pequeñas, en un principio El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 399

según la explicación del guía éstas se usaban para dar lugar al ritual de primera comunión de los niños quienes iban pasando de una en una. En general era una iglesia en la que los españoles habían pisoteado las creencias de los indígenas y en su lugar, habían puesto unas nuevas, las que ahora conocemos como católicas.

la esencia, la vida y la

La estructura en su interior estaba bien historia de la cultura conservada y se notaba que era bastante indígena, es tanto el poder antigua, las esculturas dentro de la misma y la vida que los aguarda databan ser de muchos años atrás, pero cada una con su significado e historia intacta para la religión católica, habían imágenes de sacrificios, milagros e historias lo que en su momento permitía a los españoles enseñar la base de la religión católica a las comunidades indígenas; en contraposición a ello los escasos lugares dentro de ella que reflejaban la presencia de ancestros indígenas carecían de historia, significado e importancia, el guía sólo los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 400

nombraba como el límite que dividían a los ente de curación que que tenían alma de los que no. devela la fuerza y la guía

de padre la laguna de Fuquene, ésta laguna es un cuerpo de agua dulce situado en la localidad de Fúquene, departamento de

Cundinamarca, al este de los Andes colombianos, a una altitud de 2.540 metros, y a una distancia de unos 80 km de la ciudad de Bogotá. Posee numerosas islas, una de ellas fue santuario de los muiscas; además, existían varios adoratorios atendidos por cien sacerdotes, así como un templo que seguramente fue erigido a Fu, un dios con cabeza, cola de zorro y figura humana, que personificaba al demonio. Según cuenta la leyenda, oculto bajo las aguas y dispuesto a defender de los muzos, sus dominios en el valle de Ubaté y Chiquinquirá, permanece

Fu, el dios tutelar de las aguas de esta laguna. (Lagos vivos de Colombia)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 401

su belleza había sido opacada por un montón de máquinas y malaria que la rodeaban, según una habitante de aquél lugar, esa malaria eran unos islotes flotantes que habían surgido con el tiempo y que cada vez habían ido reduciendo la laguna, era un paisaje entristecedor, en la vivencia surge el desolado y algo sucio, fue simplemente entendimiento del desconcertante ver la majestuosidad de un lenguaje que en ellos se lugar que considerábamos sagrado encuentra plasmado, es en reducido a un lugar descuidado. sí mismo la enseñanza

constante y el la idea inicial de nuestra visita era realizar conocimiento intacto de un ritual de trasnocho, el lugar no tenía las la Madre condiciones en su estructura para acampar allí, pero en lo personal creo que no fue eso lo que impidió nuestra estadía, para mí, fue más la tristeza que me implicaba ver la laguna en ese estado de descuido, me sentí cobarde y sin fuerza, pues no había sido capaz de tan siquiera insinuar quedarnos esa noche allí, pese a que si sentía que necesitábamos quedarnos; ya habíamos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 402

visto otros lugares sagrados en mal estado El renacer de nuestros y luego de haber huido de ellos por causas ojos frente a la recurrentes maravillosa e innata en mi impresión éste más que cualquier fuerza de la Madre otro requería de alimento, fuerza y compañía, preferí callar, quizá la decisión intuitiva de mi grupo era lo correcto por ahora.

La mañana siguiente fuimos nuevamente a visitarla, pero era una vista totalmente diferente, pensé que falta de nosotros la

Madre Tierra por sí sola se había colmado de fuerza pues ahora el paisaje era sumamente hermoso, el sol se reflejaba en La soledad acopara el el agua y parecía tan clara como ninguna sentimiento de grandeza y otra, los rayos de luz sobre ella iban de amor indiscriminado iluminándola poco a poco, el sol parecía por parte de la Madre acompañar y aguardar en silencio su belleza cada mañana, el lugar era ahora más tranquilo, parecía que esta vez sí le estaba dando gusto tenernos allí.

levantara la cara y mirara hacia uno de los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 403

costados de la laguna, viéndola fijamente, mirando como la luz del sol se extendía sobre ella, pude tomar algo de fuerza y Padre como la fuerza mantenerme fija mirando, parecía que protectora que guía y da fuese otro lugar diferente al que había visto claridad en el la tarde anterior, ahora la bondad y la pensamiento calidez dominaban el lugar, sentía el amor de madre que en ese momento me era Padre como la energía escaso, la compañía que me resultaba que acoge y da fuerza y inexistente, pues la sensación de soledad esperanza al hijo de manera inexplicable se acrecentaba, pude en ese instante sentir la fuerza de la que necesitaba tanto.

No quise tomar esa fuerza de forma apresurada así que poco a poco y mirando de manera paulatina desde el costado hacia el centro de la laguna pude enfocar nuevamente mi mirada a un punto fijo, el Un llamado de luz sol, la sensación de calor que necesitaba, la protección y guía sensación de estar con un Padre, sentía que necesitaba de su protección y su guía y en eso se convirtió, una protección indescriptible que cobijaba mi cuerpo, una El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 404

luz de guía y esperanza que esclarecía los pensamientos más oscuros, ya no pensaba en soledad, tristeza nostalgia ni preocupación había recibido durante ese tiempo el abrazo que sólo un Padre puede dar en momentos de desconsuelo.

Entonces, recordé ese amor, protección y fortaleza que sólo en los brazos de mi

Padre podía encontrar desde que era una niña, lo sentí tan cerca que la distancia se desvaneció, volví a sentarme en sus Padre y madre como la piernas y recostarme en su pecho mientras fuerza vital de guía y el sol seguía cubriendo mi cuerpo, era una sanación imagen tan real que por poco y no logro diferenciarla de lo real, abrí mis ojos y me dispuse de corazón y mente a seguir escuchando lo que venía de mi interior, abrace con fuerza a mi compañero del lado como símbolo de que volvería cuando acabara de escuchar y aprender, volvería luego de encontrar en la laguna lo que hasta ahora no encontraba en mí, pues en compañía de ella surgió sensación previa. Un reencuentro con la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 405

Luego de levantarme recordé que los verdad de mí, una verdad abrazos como nos dijo el Mamo en revelada en la

Silvania, eran una muestra de positivo, transparencia de la laguna amor y fuerza y era justo lo que en ese madre instante podría reconfortarme, me dirigí hacia el borde que apuntaba hacia la laguna donde no estaba otra cosa a mi vista más que la laguna y el sol, allí me senté durante el tiempo siguiente. Para mí esa laguna me había mostrado la unión de padre y madre pero predominaba la energía Un baño de luz que acaba de Padre protector. con la oscuridad y me

permite ver el negativo en

Laguna de san pedro de Iguaque: Al llegar su mas clara expresión a la laguna sentí una sensación de buen recibimiento y bondad con nosotros, era como si parte de ella nos hubiese estado mirando desde que comenzamos a subir hasta ese instante, el agua estaba quieta y tranquila, el lugar era algo frío, a su alrededor estaban unas montañas que bordeaban y guardaban la laguna, me sentía maravillada al ver tan precios lugar; El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 406

iba despidiéndome con una gratitud

infinita de ese lugar sagrado, para mí era

sagrado, su lección y el tiempo que me

permitió estar allí lo fue. Así que

aferrándome a lo que había vivido y

sentido allí para no despegarlo de mis

recuerdos gratos y positivos me dispuse a

bajar con mis compañeros

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

hubo espacio para creer y confiar, salir un Es la fuente incesante de

poco de mí para pedir por alguien más, fuerza y vida, que devela

para que en su tarea y desde su fe junto con los momentos más

la mía, se le diera toda la fuerza, el sublimes de entrega

cuidado, la protección, la sabiduría, la

calma y el amor que le hiciera falta y que

incluso en mí ya no estaba, en mi mente fui

dibujando su cuerpo detalle a detalle

pidiendo que el frío del viento cobijase su

corazón de paz, tranquilidad y perdón, que

el agua limpia apaciguara sus dolores, que el poder y las energías

el dulce y la pureza de ella endulzara sus negativas toman rumbo, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 407

pensamientos para mantener la nobleza de es el punto cumbre de su ser intacta, que en la profundidad del claridad desde donde se pozo se guardara todos sus secretos y reordena todo en su equivocaciones, para que en ella estuviese debida proporción su verdad, pedía con devoción y fe que sus pies se conectaran con el amor y la bondad del lugar para que así, su sentir fuese en concordancia con ella por el resto del sentimiento más puro y camino. desinteresado que

estremece el corazón, el

Sin darme cuenta y al ver a mi compañero alma y el cuerpo radiante y tranquilo, pude ver que hablaba con la laguna, sentía como ella me escuchaba, las ondas en el centro del pozo quizá eran respuesta a lo que a manera de confieso y plegaria le había dicho en pensamiento, el salir de mí y concentrarme en agradecer por él, hizo que sintiera una conexión con la Tierra que nunca antes había experimentado, había conseguido, sentido y visto la dulzura de mi corazón y la sinceridad de mi alma, el amor en su más pura expresión, pues sentía que el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 408

amor de la Madre Tierra hacia nosotros es el camino que nos permite ir más allá del ego y amar a otros, encontré en ella el amor y la fuerza vaga que mi cuerpo no tenía. el abrazo materno en el

que la Madre devela su

La bondad de la Tierra, de la Madre Tierra perdón se compara a la bondad que toda Madre tiene con sus hijos, le bastó ver un poco de sinceridad y arrepentimiento en mí corazón terco y desobediente, para rebozarme nuevamente de fuerza y amor, para hacerme sentir que todo tarde o temprano volverá a estar bien, porque comprendí que bajo su compañía y su amor infinito siempre habrá espacio para el perdón, para la cura y para iniciar de nuevo con un paso más firme; pues uno como hijo jamás se aleja del vientre de su madre, esa será eternamente su morada y su resguardo en cuanto quiera ir y revestirse de vida, éste estará a su disposición, sin importar la ropa, el dolor o la felicidad que lleve El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 409

consigo, volver a ella es sinónimo de

volver a la verdad, el amor y la vida, estar

en su vientre y desde el pensamiento en lo

profundo de sus aguas, fue experimentar el

amor en su esencia más pura, sentirlo parte

del mundo y parte de mí mientras al

tiempo me sentía parte de él.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral Vi miedos, temía más de lo que recordaba Es una experiencia

haber enfrentado alguna vez; vi engaños nostálgica y de

que en su momento se disfrazaron de reconocimiento puro en la

verdad, vi mentiras crueles que para mí que se ve claramente el

algún día fueron un travesura inocente, vi daño que se ha causado a

tristezas que no dejé salir en lágrimas y sí mismo

que con el tiempo aguardaron en sonrisas, Es el maestro cruel y

vi las cargas que oprimen mi cuerpo y me nebuloso que da sus El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 410

causan dolor, aquellas que había tomado lecciones, en los sin ser mías y aquellas que había olvidado momentos en los que que sí lo eran. Me escuche desde dentro, parece uno sentirse afligida y gritando; finalmente estaba absolutamente perdido frente a mí, la laguna en su implacable quietud me tenía de vuelta en mí, escudriñando dentro, capa por capa, dolor por dolor, mirando fijamente lo que había hecho de mí, en conclusión los recuerdos que había visto como baches en la laguna de Fuquene junto con todo aquello que allí intenté guardar para enfrentar luego, estaba revelándose entre lágrimas y temblor incontrolable.

Perdón (culpa, lo siento) yo sólo cerré mis ojos, pedí perdón y Sentir como el corazón se espere con paciencia sentir que podía bajar hace migajas y el amparo a bañarme; pasaron un par de minutos y es el camino de vuelta a fue entonces cuando recordé lo que había Padre y Madre aprendido en la laguna de Fúquene, Padre y Madre son uno, deben estar juntos para El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 411

así guiar y enseñar al hijo, fue entonces cuando comencé a sentir un poco de calor, un rayo de sol iluminaba mi espalda y siguió saliendo hasta que sentí como daba calor a todo mi cuerpo, era una sensación de calidez que sólo siento en casa, ahí supe que esa era mi casa, que sólo con la compañía y habiendo pedido perdón y permiso a Padre y Madre era posible bañarme, así que baje, lave mi rostro Honrar y agradecer con pidiendo claridad para mis ojos ciegos, precaución y dulzura el dulzura para mi boca amarga y momento en el que se comprensión para mis oídos sordos; lave nubló el entendimiento y mi cabeza para limpiar recuerdos y se cayó en desdenes pensamientos negativos; luego, lave mi abdomen pidiendo recuperar el valor y el significado de la feminidad, fertilidad y vida que había desconocido; por último, lave mi pecho honrando las emociones y sentimientos que se me había permitido experimentar y pidiendo pureza para amar siempre como sentí que la laguna lo había hecho conmigo ese día. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 412

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Categorización

Padre y Madre, un viaje hacia el amor

Narrativa Meta Categoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 413

Espiritualidad Espiritualidad

Por momentos y manteniendo la vista fija deleite de experiencias

en la laguna vi como el sol y la laguna eran sublimes y hermosas que

siempre uno, así como en su momento sensibilizan la razón,

Padre y Madre son uno en la guía y la

enseñanza de sus hijos, la maleza no era sentir y perderse bajo la

otra cosa que el reflejo de aquello que en premura del querer estar

mi mente había ido soltando, en cierto más allá de lo intangible e

modo era una parte de mí éstos islotes de incomprensible para el

maleza con el paso del tiempo se mueven cuerpo,

hacia los costados, del mismo modo que

las cosas que en ese momento estaba

soltando se harían a un lado, formando

parte del paisaje, de mí paisaje para así Es la conexión cumbre

permitirme volver a tomar la mano de entre nosotros como seres

Padre y Madre y, de este modo seguir vivientes y la Madre

adelante, pues entendí que la guía y la luz Tierra como ente que

de ellos nunca es intermitente si la dulzura provee la vida,

del corazón domina el interior, la soledad

no existe, si hay un lugar para el amor, la conmueven fuerzas

fe y la vida todo se convertirá en lecciones específicas de la emoción

y agradecimiento. y el sentimiento, para así El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 414

perforar en la severidad

Estando allí pude percibir algo de miedo y de un mensaje encubierto. nostalgia, era increíble estar en un lugar en el que por años estuvo torturándose gente inocente, gente de mi sangre, mi raza y mi fuerza, imaginaba a ancianos y niños aferrados a sus creencias, respetando sus costumbres siendo terriblemente torturados e humillados por ello; incluso el guía de esa mañana que contaba la historia tenía un tono de voz enajenado, no mostraba mayor reacción o interés por aquello que sabía había pasado en ese lugar, para él era contar una historia más. Pero sus palabras me daban escalofrío y despertaban mi sensibilidad, me parecía un suceso terrible.

Divinidad

Sentada en la roca y con la vista fija al el cuerpo es colmado de frente cerré mis ojos lentamente y pedí que sensaciones que dejan las bendiciones y la fuerza del Padre tanto perplejo al más astuto; las espiritual como físico siguieran guiando y fragancias, los colores y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 415

acompañando mi camino, en pensamiento sabores agudizan los

me bañé con la luz del sol, me limpie con sentidos, todo dentro de sí

su luz y le di claridad a esos rincones guarda silencio,

oscuros que habían dentro de mí, era una

sensación hermosa, era sentir en carne y Es un conocimiento

hueso la fuerza y la sabiduría que sólo profundo de sí y del lugar

encuentro en mi Padre, sentir como me que en ese momento me

reconciliaba no sólo con él, sino con la rodea, es volver a la vida

parte masculina que aguarda en mi interior sin haberse marchado de

pues en viajes anteriores no había ella aún

experimentado esa fuerza tan latente como

hasta esa mañana.

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 416

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Cuando hacemos el saludo voy recordando Acercamiento a las

cada cosa me lleno de sensaciones bonitas, experiencias de máxima

me pierdo en los abrazos de mis padres en profundidad. Invita al

las travesuras con mi hermana y en la sacrificio, al

inmensa felicidad que me hace sentir mí agradecimiento y a la

sobrina, siento la bondad y la nobleza de reconciliación mediante

mi Madre, la fuerza imponente y la la entrega sincera y

protección incondicional de mi Padre; se desinteresada de lo que

van agudizando mis sentidos a los hemos recibido

elementos de la tierra, siento la frescura de

la brisa fría, la firmeza de la tierra en la

que poso mi cuerpo, el fuego que se agita El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 417

en mi interior y recorre todo dentro de mí, escucho caídas de agua y siento como ésta corre por mis venas; luego voy recordando mis abuelos, mi familia, intento hacerlo con cariño y gratitud, fijo en mi mente sus cualidades y defectos e intento volverlos propios, para hacer aún más mía su fortaleza; voy pasando imágenes y sentimientos de los lugares a los que he visitado y más aun de los que provengo, para finalizar ya cuando hacen referencia a los linajes de mis compañeros doy gracias a ellos por haberlos puesto en mi camino.

Siento que de esa manera entro con más agradecimiento por los disposición y entrega al ritual. conocimientos, deseos,

sueños, mensajes o danzamos para mí, como muestra de lecciones agradecimiento ante todo lo que ese lugar había dejado en nosotros, al terminar tomé las semillas las entregue con toda la devoción mientras pensaba en cada cosa que había pasado en ese lugar, las dejé en el lugar en el que había pasado toda la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 418

mañana y me dirigí nuevamente por un abrazo para cerrar agradeciendo a la fuerza El camino devela el que me permitió iniciar. verdadero estado del ser

pero en compañía de la no me sentía bien así que comencé a Madre es también un guardar silencio y refugiarme en un par de proceso de auto sonrisas fingidas, no quería que otro descubrimiento hermoso intentara entender algo que apenas y estaba entendiendo, mi compañía incondicional junto con la fe y la creencia en el propósito de que todo tendría una función positiva, se convertía en lo que fortalecía mi cuerpo, la montaña por momentos parecía todo un reto subirla; sin embargo, el ritmo al que subimos le dio tiempo a mi cabeza de frenar un poco tomar aire y recuperar lo positivo, los sueños, planes, cambios, Búsqueda del equilibrio y proyectos y sacrificios que habían la sanación tanto de sí precedido mi vida camino antes de llegar como del lugar allí. dejar en ellos una parte de

sí que ya estamos en sentía que la laguna pedía un poco más de capacidad de entregar con tiempo, más limpieza y fe dentro de mí; amor y bondad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 419

después de esto comencé a confesar el Proceso cíclico y circular porqué de la tristeza, la ira, la inseguridad en el que todo lo que se y la constante sensación de desamparo que nos fue entregado vuelve seguramente ella había percibido de mí a su lugar de origen y en durante el proceso de arribar la montaña, la su debida proporción. explicación de aquél confieso con ella en palabras no es posible contar, era a punta de imágenes y recuerdos que le contaba quien era, cómo y por qué había llegado hasta allí aquella tarde.

Abuelo y sabedor

Plantas

Planta de Ayu: En ocasiones perdí la Fuerza que reconforta y fuerza casi que por completo, sentía centra el pensamiento mareos y calambres en las piernas, el profesor ofreció un poco de ayu para todos, pero no quise tomarlo, quería como llegar a un punto en que sintiese que debería tomarlo, pedir permiso pues nunca antes la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 420

había recibido, tras una hora

aproximadamente, ya con los síntomas

precedentes pedí un poco, la tomé y con

mucha fe y respeto la eche en mi boca, al

principio sentí un sabor amargo y fuerte,

luego más y más suave, cuando acabé me

sentía reconfortada y capaz de seguir, así

que seguí realizando lo mismo cada vez

que sentía que el cansancio era mayor que

mis ganas de subir.

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados la iglesia doctrinera del municipio de Dolor y ausencia de

Sutatausa. Al llegar encontré unas Madre y Padre, pues el

montañas hermosas, el clima era cálido, la despojo deja el lugar

iglesia estaba rodeada por montañas y por infestado de enfermedad

otras 4 capillas pequeñas, en un principio

según la explicación del guía éstas se

usaban para dar lugar al ritual de primera

comunión de los niños quienes iban

pasando de una en una. En general era una

iglesia en la que los españoles habían El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 421

pisoteado las creencias de los indígenas y en su lugar, habían puesto unas nuevas, las que ahora conocemos como católicas.

la esencia, la vida y la

La estructura en su interior estaba bien historia de la cultura conservada y se notaba que era bastante indígena, es tanto el poder antigua, las esculturas dentro de la misma y la vida que los aguarda databan ser de muchos años atrás, pero cada una con su significado e historia intacta para la religión católica, habían imágenes de sacrificios, milagros e historias lo que en su momento permitía a los españoles enseñar la base de la religión católica a las comunidades indígenas; en contraposición a ello los escasos lugares dentro de ella que reflejaban la presencia de ancestros indígenas carecían de historia, significado e importancia, el guía sólo los nombraba como el límite que dividían a los ente de curación que que tenían alma de los que no. devela la fuerza y la guía

de padre la laguna de Fuquene, ésta laguna es un cuerpo de agua dulce situado en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 422

localidad de Fúquene, departamento de

Cundinamarca, al este de los Andes colombianos, a una altitud de 2.540 metros, y a una distancia de unos 80 km de la ciudad de Bogotá. Posee numerosas islas, una de ellas fue santuario de los muiscas; además, existían varios adoratorios atendidos por cien sacerdotes, así como un templo que seguramente fue erigido a Fu, un dios con cabeza, cola de zorro y figura humana, que personificaba al demonio. Según cuenta la leyenda, oculto bajo las aguas y dispuesto a defender de los muzos, sus dominios en el valle de Ubaté y Chiquinquirá, permanece

Fu, el dios tutelar de las aguas de esta laguna. (Lagos vivos de Colombia)

su belleza había sido opacada por un montón de máquinas y malaria que la rodeaban, según una habitante de aquél lugar, esa malaria eran unos islotes flotantes que habían surgido con el tiempo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 423

y que cada vez habían ido reduciendo la laguna, era un paisaje entristecedor, en la vivencia surge el desolado y algo sucio, fue simplemente entendimiento del desconcertante ver la majestuosidad de un lenguaje que en ellos se lugar que considerábamos sagrado encuentra plasmado, es en reducido a un lugar descuidado. sí mismo la enseñanza

constante y el la idea inicial de nuestra visita era realizar conocimiento intacto de un ritual de trasnocho, el lugar no tenía las la Madre condiciones en su estructura para acampar allí, pero en lo personal creo que no fue eso lo que impidió nuestra estadía, para mí, fue más la tristeza que me implicaba ver la laguna en ese estado de descuido, me sentí cobarde y sin fuerza, pues no había sido capaz de tan siquiera insinuar quedarnos esa noche allí, pese a que si sentía que necesitábamos quedarnos; ya habíamos visto otros lugares sagrados en mal estado El renacer de nuestros y luego de haber huido de ellos por causas ojos frente a la recurrentes maravillosa e innata en mi impresión éste más que cualquier fuerza de la Madre otro requería de alimento, fuerza y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 424

compañía, preferí callar, quizá la decisión intuitiva de mi grupo era lo correcto por ahora.

La mañana siguiente fuimos nuevamente a visitarla, pero era una vista totalmente diferente, pensé que falta de nosotros la

Madre Tierra por sí sola se había colmado de fuerza pues ahora el paisaje era sumamente hermoso, el sol se reflejaba en La soledad acopara el el agua y parecía tan clara como ninguna sentimiento de grandeza y otra, los rayos de luz sobre ella iban de amor indiscriminado iluminándola poco a poco, el sol parecía por parte de la Madre acompañar y aguardar en silencio su belleza cada mañana, el lugar era ahora más tranquilo, parecía que esta vez sí le estaba dando gusto tenernos allí.

levantara la cara y mirara hacia uno de los costados de la laguna, viéndola fijamente, mirando como la luz del sol se extendía sobre ella, pude tomar algo de fuerza y Padre como la fuerza mantenerme fija mirando, parecía que protectora que guía y da fuese otro lugar diferente al que había visto claridad en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 425

la tarde anterior, ahora la bondad y la pensamiento calidez dominaban el lugar, sentía el amor de madre que en ese momento me era Padre como la energía escaso, la compañía que me resultaba que acoge y da fuerza y inexistente, pues la sensación de soledad esperanza al hijo de manera inexplicable se acrecentaba, pude en ese instante sentir la fuerza de la que necesitaba tanto.

No quise tomar esa fuerza de forma apresurada así que poco a poco y mirando de manera paulatina desde el costado hacia el centro de la laguna pude enfocar nuevamente mi mirada a un punto fijo, el Un llamado de luz sol, la sensación de calor que necesitaba, la protección y guía sensación de estar con un Padre, sentía que necesitaba de su protección y su guía y en eso se convirtió, una protección indescriptible que cobijaba mi cuerpo, una luz de guía y esperanza que esclarecía los pensamientos más oscuros, ya no pensaba en soledad, tristeza nostalgia ni preocupación había recibido durante ese tiempo el abrazo que sólo un Padre puede El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 426

dar en momentos de desconsuelo.

Entonces, recordé ese amor, protección y fortaleza que sólo en los brazos de mi

Padre podía encontrar desde que era una niña, lo sentí tan cerca que la distancia se desvaneció, volví a sentarme en sus Padre y madre como la piernas y recostarme en su pecho mientras fuerza vital de guía y el sol seguía cubriendo mi cuerpo, era una sanación imagen tan real que por poco y no logro diferenciarla de lo real, abrí mis ojos y me dispuse de corazón y mente a seguir escuchando lo que venía de mi interior, abrace con fuerza a mi compañero del lado como símbolo de que volvería cuando acabara de escuchar y aprender, volvería luego de encontrar en la laguna lo que hasta ahora no encontraba en mí, pues en compañía de ella surgió sensación previa. Un reencuentro con la

Luego de levantarme recordé que los verdad de mí, una verdad abrazos como nos dijo el Mamo en revelada en la

Silvania, eran una muestra de positivo, transparencia de la laguna amor y fuerza y era justo lo que en ese madre instante podría reconfortarme, me dirigí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 427

hacia el borde que apuntaba hacia la laguna donde no estaba otra cosa a mi vista más que la laguna y el sol, allí me senté durante el tiempo siguiente. Para mí esa laguna me había mostrado la unión de padre y madre pero predominaba la energía Un baño de luz que acaba de Padre protector. con la oscuridad y me

permite ver el negativo en

Laguna de san pedro de Iguaque: Al llegar su mas clara expresión a la laguna sentí una sensación de buen recibimiento y bondad con nosotros, era como si parte de ella nos hubiese estado mirando desde que comenzamos a subir hasta ese instante, el agua estaba quieta y tranquila, el lugar era algo frío, a su alrededor estaban unas montañas que bordeaban y guardaban la laguna, me sentía maravillada al ver tan precios lugar;

iba despidiéndome con una gratitud infinita de ese lugar sagrado, para mí era sagrado, su lección y el tiempo que me permitió estar allí lo fue. Así que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 428

aferrándome a lo que había vivido y

sentido allí para no despegarlo de mis

recuerdos gratos y positivos me dispuse a

bajar con mis compañeros

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

hubo espacio para creer y confiar, salir un Es la fuente incesante de

poco de mí para pedir por alguien más, fuerza y vida, que devela

para que en su tarea y desde su fe junto con los momentos más

la mía, se le diera toda la fuerza, el sublimes de entrega

cuidado, la protección, la sabiduría, la

calma y el amor que le hiciera falta y que

incluso en mí ya no estaba, en mi mente fui

dibujando su cuerpo detalle a detalle

pidiendo que el frío del viento cobijase su

corazón de paz, tranquilidad y perdón, que

el agua limpia apaciguara sus dolores, que el poder y las energías

el dulce y la pureza de ella endulzara sus negativas toman rumbo,

pensamientos para mantener la nobleza de es el punto cumbre de

su ser intacta, que en la profundidad del claridad desde donde se

pozo se guardara todos sus secretos y reordena todo en su

equivocaciones, para que en ella estuviese debida proporción

su verdad, pedía con devoción y fe que sus El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 429

pies se conectaran con el amor y la bondad del lugar para que así, su sentir fuese en concordancia con ella por el resto del sentimiento más puro y camino. desinteresado que

estremece el corazón, el

Sin darme cuenta y al ver a mi compañero alma y el cuerpo radiante y tranquilo, pude ver que hablaba con la laguna, sentía como ella me escuchaba, las ondas en el centro del pozo quizá eran respuesta a lo que a manera de confieso y plegaria le había dicho en pensamiento, el salir de mí y concentrarme en agradecer por él, hizo que sintiera una conexión con la Tierra que nunca antes había experimentado, había conseguido, sentido y visto la dulzura de mi corazón y la sinceridad de mi alma, el amor en su más pura expresión, pues sentía que el amor de la Madre Tierra hacia nosotros es el camino que nos permite ir más allá del ego y amar a otros, encontré en ella el amor y la fuerza vaga que mi cuerpo no tenía. el abrazo materno en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 430

que la Madre devela su

La bondad de la Tierra, de la Madre Tierra perdón se compara a la bondad que toda Madre tiene con sus hijos, le bastó ver un poco de sinceridad y arrepentimiento en mí corazón terco y desobediente, para rebozarme nuevamente de fuerza y amor, para hacerme sentir que todo tarde o temprano volverá a estar bien, porque comprendí que bajo su compañía y su amor infinito siempre habrá espacio para el perdón, para la cura y para iniciar de nuevo con un paso más firme; pues uno como hijo jamás se aleja del vientre de su madre, esa será eternamente su morada y su resguardo en cuanto quiera ir y revestirse de vida, éste estará a su disposición, sin importar la ropa, el dolor o la felicidad que lleve consigo, volver a ella es sinónimo de volver a la verdad, el amor y la vida, estar en su vientre y desde el pensamiento en lo profundo de sus aguas, fue experimentar el amor en su esencia más pura, sentirlo parte El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 431

del mundo y parte de mí mientras al

tiempo me sentía parte de él.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral Vi miedos, temía más de lo que recordaba Es una experiencia

haber enfrentado alguna vez; vi engaños nostálgica y de

que en su momento se disfrazaron de reconocimiento puro en la

verdad, vi mentiras crueles que para mí que se ve claramente el

algún día fueron un travesura inocente, vi daño que se ha causado a

tristezas que no dejé salir en lágrimas y sí mismo

que con el tiempo aguardaron en sonrisas, Es el maestro cruel y

vi las cargas que oprimen mi cuerpo y me nebuloso que da sus

causan dolor, aquellas que había tomado lecciones, en los

sin ser mías y aquellas que había olvidado momentos en los que

que sí lo eran. Me escuche desde dentro, parece uno sentirse

afligida y gritando; finalmente estaba absolutamente perdido

frente a mí, la laguna en su implacable El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 432

quietud me tenía de vuelta en mí, escudriñando dentro, capa por capa, dolor por dolor, mirando fijamente lo que había hecho de mí, en conclusión los recuerdos que había visto como baches en la laguna de Fuquene junto con todo aquello que allí intenté guardar para enfrentar luego, estaba revelándose entre lágrimas y temblor incontrolable.

Perdón (culpa, lo siento) yo sólo cerré mis ojos, pedí perdón y Sentir como el corazón se espere con paciencia sentir que podía bajar hace migajas y el amparo a bañarme; pasaron un par de minutos y es el camino de vuelta a fue entonces cuando recordé lo que había Padre y Madre aprendido en la laguna de Fúquene, Padre y Madre son uno, deben estar juntos para así guiar y enseñar al hijo, fue entonces cuando comencé a sentir un poco de calor, un rayo de sol iluminaba mi espalda y siguió saliendo hasta que sentí como daba calor a todo mi cuerpo, era una sensación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 433

de calidez que sólo siento en casa, ahí supe que esa era mi casa, que sólo con la compañía y habiendo pedido perdón y permiso a Padre y Madre era posible bañarme, así que baje, lave mi rostro Honrar y agradecer con pidiendo claridad para mis ojos ciegos, precaución y dulzura el dulzura para mi boca amarga y momento en el que se comprensión para mis oídos sordos; lave nubló el entendimiento y mi cabeza para limpiar recuerdos y se cayó en desdenes pensamientos negativos; luego, lave mi abdomen pidiendo recuperar el valor y el significado de la feminidad, fertilidad y vida que había desconocido; por último, lave mi pecho honrando las emociones y sentimientos que se me había permitido experimentar y pidiendo pureza para amar siempre como sentí que la laguna lo había hecho conmigo ese día.

Fe

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 434

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Categorización Viviana Pérez

ACERCAMIENTO A LO ESENCIAL, MONSERRATE.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 435

El pensamiento negativo con el que había Cambio en el sentir y iniciado, de no poder subir, de pensar preguntarme para qué hacía eso, qué Fuerza que trasciende al ganancia tendría, porque yo iba convencida corazón. de que en realidad yo no estaba hecha para Una actuación de esas cosas que tuvieran tanta demanda del completo amor hacia mí. cuerpo, además de sentir que mi equipaje Aceptación total de la emocional y físico era tan pesado que yo lo sombra interior. arrastraba por cada escalón de la montaña Despertar el corazón en la y eso sí que me jalaba la fuerza haciendo vida. más compleja la subida, llevándose el Conciencia de empezar positivo y todas las creencias bonitas que un nuevo camino. podía tener en mí; todos estos La respuesta al pensamientos abrumadores disminuían con cuestionamiento interior. cada escalón avanzado y aunque me sentía Encontrar seguridad en el sumamente exhausta hubo ese despertar, andar. ese nacer que adolecía mi espíritu, que me Raíz. incentivaron a seguir dando pequeños pero Pies en la tierra, corazón fuertes pasos. en las manos.

Pensar claro.

Subir las montañas

El sonido de la montaña El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 436

Cuando llegué a la cima sentía mi pecho hace vibrar mi corazón de brincar de emoción, en realidad se me manera tal que el cambio cruzaron muchas emociones al tiempo, en mi ser es de completa porque por un lado quería llorar, me sentía entrega, perdón y fe hacia cansada, pero por el otro ya estaba arriba y la madre tierra, no sabía cómo lo había logrado, miré hacia ayudándome a crear abajo por un buen tiempo para conciencia del camino convencerme qué trayecto era el que había que tengo por andar. recorrido y estaba completamente Mirar atrás sin detenerse. estupefacta de ver como las cosas en mi Honrar los pasos dados. vida podrían empezar a cambiar, porque el Entregarme a la montaña solo hecho de romper el paradigma de haber vuelto a la Montaña, aún con el miedo enorme que eso me causaba fue un acercamiento fuerte a lo esencial que tanto carecía.

Un acto de amor y

Observando al rededor, las montañas, las entrega hacia la madre nubes, mis compañeros, entendí que eso tierra y hacia mi misma. era lo que tanto había estado buscando Reconocimiento de mis para sentirme conforme conmigo misma, pasos. para estar bien y la reivindicación bonita Escuchar el canto que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 437

con la tierra que tan inconsciente y entona mi interior junto dormida estaba adentro de mí. La con la montaña. espiritualidad enraizada que andaba añorando todas esas cosas fundamentales y esenciales estaban llegando a mi vida, y llegaron porque yo me hice participe de eso, porque con una fuerza interna que desconocía completamente, logré alcanzar ese experiencia desde mi sentir.

Divinidad

La indicación en ese instante fue Encontrar mi propia concentración plena en lo que hacía y con verdad. mucha fe, me detuve a observar a una La senda que me lleva al mosca que volaba sobre mis manos, fue autoconocimiento por increíble como captó mi atención, sentí un medio de Dios conectarme profundo con la mosca, tanto así que me sentía mosca, era tan grande la conexión que si hablaba sentía que mis palabras salían como zumbidos, como en su lenguaje. Estaba maravillada de eso y seguí observándola con todo detalle El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 438

posible, me di cuenta que era pequeña, que no se estaba quieta y tampoco dejaba de hacer ruido; por lo que me sentí plenamente identificada con ella, porque así soy yo, pequeña, inquieta y no dejo de hacer ruido, porque en algunas ocasiones hablo más de lo que escucho a los otros y por eso me sentí un poco mal. Luego me invadió el pensamiento de que sin importar lo externo yo era tan grande como la montaña que tenía en frente, que no es necesario hacer ruido para que me vean, para que me sientan, porque yo soy un ser completo y lleno de virtudes que aunque sea pequeña por fuera soy enorme y bella por dentro.

Mística

La indicación en ese instante fue - * Lo importante no concentración plena en lo que hacía y con es el tallo, sino la raíz que mucha fe, me detuve a observar a una lo sujeta, entre más mosca que volaba sobre mis manos, fue grande es ésta, más fuerte El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 439

increíble como captó mi atención, sentí un será sin importar la altura conectarme profundo con la mosca, tanto de la planta. así que me sentía mosca, era tan grande la - Identificación conexión que si hablaba sentía que mis completa con los seres palabras salían como zumbidos, como en vivos. su lenguaje. Estaba maravillada de eso y - Enseñanza seguí observándola con todo detalle contundente desde la posible, me di cuenta que era pequeña, que experiencia no se estaba quieta y tampoco dejaba de - Recobrar la hacer ruido; por lo que me sentí esperanza en mi misma plenamente identificada con ella, porque - Encontrarle así soy yo, pequeña, inquieta y no dejo de sentido al vivir hacer ruido, porque en algunas ocasiones hablo más de lo que escucho a los otros y por eso me sentí un poco mal. Luego me invadió el pensamiento de que sin importar lo externo yo era tan grande como la montaña que tenía en frente, que no es necesario hacer ruido para que me vean, para que me sientan, porque yo soy un ser completo y lleno de virtudes que aunque sea pequeña por fuera soy enorme y bella por dentro. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 440

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Alimentar a mi madre.

Estando en la cima, mi sentir era distinto, Devolver la nutrición que

estaba volátil, y extrañamente feliz. Lo que me ha sido dada. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 441

yo sabía era que íbamos a hacer un ritual Agradecer la vida y el llamado pagamento, en éste se le paga a la alimento diario madre naturaleza tanto en físico con Honrar el origen de la semillas, cuarzo, plumas, agua, alimentos vida. como los que ella nos da a diario para sobrevivir; como en espíritu se pone en pensamiento bonito, dinero espiritual, agua, se puede añorar la libertad de los ancestros que fueron esclavos, se puede pedir por la sanación de los territorios, todo lo imaginable que sea en pro de los lugares y de los abuelos se puede poner en pensamiento para pagar.

Abuelo y sabedor

Plantas

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 442

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Yo me acerqué a la montaña con un miedo La majestuosidad del

absoluto, en verdad la visualizaba como un lugar sagrado despierta la

monstro que me iba a absorber, que me iba conciencia del existir y

a impedir el paso, tenía la concepción de del ser de los humanos.

que la madre tierra me iba a rechazar, que

iba a decir o de alguna forma hacerme ver

y entender que mi propósito era quedarme El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 443

en la parte baja de la montaña hasta que no tuviera la preparación física y la resistencia corporal que se requería para ejercer un trabajo de esta magnitud.

tampoco comprendía la sacralidad de Visualizar la propia aquella montaña emblemática y simbólica sacralidad es de Bogotá, por mi cabeza nunca había fundamental, para ver la rondado la idea de que allí hubiesen del mundo. malocas o algo similar, solo sabía que allí había una iglesia católica y en realidad no le encontraba sentido a la ubicación de un templo en una montaña. Luego escuché que en donde habían iglesias católicas, los lugares habían sido centros sagrados indígenas y después de experimentar toda la fuerza que extraje de mí y de la montaña pude ver que sigue siendo tan sagrada como en tiempos anteriores.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 444

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Ego

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

El pensamiento negativo con el que había Abrir los brazos a la vida.

iniciado, de no poder subir, de Permitir que el viento se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 445

preguntarme para qué hacía eso, qué lleve el polvo del cuerpo ganancia tendría, porque yo iba convencida Hacer conciencia de la de que en realidad yo no estaba hecha para propia fuerza esas cosas que tuvieran tanta demanda del Despertar el espíritu y el cuerpo, además de sentir que mi equipaje corazón. emocional y físico era tan pesado que yo lo arrastraba por cada escalón de la montaña y eso sí que me jalaba la fuerza haciendo más compleja la subida, llevándose el positivo y todas las creencias bonitas que podía tener en mí; todos estos pensamientos abrumadores disminuían con cada escalón avanzado y aunque me sentía sumamente exhausta hubo ese despertar, ese nacer que adolecía mi espíritu, que me incentivaron a seguir dando pequeños pero fuertes pasos.

Estar en paz conmigo y

Observando al rededor, las montañas, las con mi raíz. nubes, mis compañeros, entendí que eso Decirle al inconciente que era lo que tanto había estado buscando hable. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 446

para sentirme conforme conmigo misma, Una búsqueda constante

para estar bien y la reivindicación bonita del ser.

con la tierra que tan inconsciente y

dormida estaba adentro de mí. La

espiritualidad enraizada que andaba

añorando todas esas cosas fundamentales y

esenciales estaban llegando a mi vida, y

llegaron porque yo me hice participe de

eso, porque con una fuerza interna que

desconocía completamente, logré alcanzar

ese experiencia desde mi sentir.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Luego entendí que ese rechazo que sentí al Aceptación de la totalidad

empezar la subida solo me lo había dado de mi alma

yo misma. Desvalorándome, creyéndome Influenciada un poco por

la más débil de todos. En el ascenso fui el ego, la visualización de

comprendiendo que cada uno tiene su mi misma

fuerza y la mía en particular fue probada El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 447

ese día de la manera más extrema en que

mi cuerpo y mi pensamiento pudieran

contemplar

SALIDA A SILVANIA 24 DE JUNIO DE 2014.

APRENDIENDO DEL NEGATIVO

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Entré muy asustada al bohío, pero hubo Madre Tierra, tiene una

dos presencias que me tranquilizaron y fuerza que trasciende lo

sobre todo una que se posaba a mi terrenal, para llenar de

derecha, que me decía que yo iba bien, vida y luz el interior,

que las cosas las estaba haciendo de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 448

corazón; la luz que veía entrar por la

puerta en medio de una noche tan oscura

me dejó de parecer tenebrosa

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 449

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

El mamo Roberto agradeció por nuestra Masculino y feminino

visita, luego su hija Susana se dispuso a opuestos complementarios

hablar con la fuerza, determinación y que danzan para formar la

balanza impresionantes, nos entregaron totalidad de la mochila

unos algodones los cuales en el ritual (vida)

quitarían el negativo de cada uno. Yo hice

todo con mucha convicción y fe tal como

lo explicó Susana e inmediatamente

descubrí que tenía mucho negativo en mí

ser, tanto que llegué a ver que yo

completa era más negativo que cualquier

otra cosa, lo que me produjo mucho dolor

y las lágrimas inundaron mi rostro, pero

este no era un simple llanto de dolor, era

un llanto sufrido, gota a gota me acercaba

a mí y me liberaba.

Me acerque a Susana pues estaba tejiendo La mujer teje la vida como

y pensé que ese sería el momento perfecto la araña. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 450

para aprender esa clase de tejido, creí que El tejido encuentra a la sería fácil porque tejo en crochet; pero al mujer con la realidad contrario de lo que pensé me estrellé latente propia y para la mucho porque tenía tanto afán por persona que vaya la avanzar que en algún momento tejí en el mochila. sentido contrario, entendí que para poder Avanzar conscientemente, seguir adelante tengo que sanar mi con corazón vida y pasado, dejarlo ahí, pero siempre espíritu. honrándolo y reconociendo que eso me hace ser lo que soy hoy.

También me ocurrió que avanzaba pero no pasaba el hilo, entonces el tejido no crecía por lo que avanzaba sin avanzar y tenía que devolverme de nuevo; aplicando esto a mi vida y con lo que ha venido pasándome, si he hecho eso avanzar solo por hacerlo, sin propósitos verdaderos andando vacía, creo que esas dos respuestas fueron fundamentales para lo que pregunté la noche anterior acerca del negativo, porque yo no puedo soltar todo como lo pregunté la noche anterior, lo mejor es honrar lo que fue y lo que estuvo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 451

con todo el amor posible, para que el avanzar no duela y deje de sentirme un ser que es solo negativo.

Abuelo y sabedor

Plantas

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 452

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Pensé que iría vestida con amor, La mejor prenda de vestir

humildad y mucho respeto, que trataría espiritual es el amor.

todos y cada uno de mis días limpiar mi Limpiar exteriormente

espíritu, mi corazón, dietar pensamientos para sanar la enfermedad

negativos para servirle a ella e intentar física externa.

irradiar amor hacia mí y hacía los demás;

también que le llevaría primero todo mi

negativo, para luego poder hacer

pagamento de positivo espiritual.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 453

ancestral Al miedo hay que darle la mano y caminar Hacer la paz con la

junto a él, para así entender que de la sombra del ego para

compañía de este puede fortalecer el adquirir fuerza.

espíritu y avanzar más de lo que se ha

pensado alguna vez.

El mamo Roberto agradeció por nuestra Aprender del negativo,

visita, luego su hija Susana se dispuso a una tarea de verdadero

hablar con la fuerza, determinación y conocimiento espiritual.

balanza impresionantes, nos entregaron

unos algodones los cuales en el ritual

quitarían el negativo de cada uno. Yo hice

todo con mucha convicción y fe tal como

lo explicó Susana e inmediatamente

descubrí que tenía mucho negativo en mí

ser, tanto que llegué a ver que yo

completa era más negativo que cualquier

otra cosa, lo que me produjo mucho dolor

y las lágrimas inundaron mi rostro, pero

este no era un simple llanto de dolor, era

un llanto sufrido, gota a gota me acercaba

a mí y me liberaba.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 454

Amanecí con esa sensación de que me El ego es el maestro que faltaba algo por lo que casi no hablé; invita al interior a estar en estaba en paz pero al mismo tiempo ajena constante búsqueda de paz a mí, por lo que vi que el camino sería y limpieza interna. largo y no el de volver a casa…

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

También me ocurrió que avanzaba pero La conciencia del camino, no pasaba el hilo, entonces el tejido no me pone de frente con la crecía por lo que avanzaba sin avanzar y sanación. tenía que devolverme de nuevo; aplicando Honrar el pasado, proceso El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 455

esto a mi vida y con lo que ha venido fundamental para vivir el

pasándome, si he hecho eso avanzar solo presente.

por hacerlo, sin propósitos verdaderos

andando vacía, creo que esas dos

respuestas fueron fundamentales para lo

que pregunté la noche anterior acerca del

negativo, porque yo no puedo soltar todo

como lo pregunté, lo mejor es honrar lo

que fue y lo que estuvo con todo el amor

posible, para que el avanzar no duela y

deje de sentirme un ser que es solo

negativo.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Empezaron a surgir cuestionamientos y el Entender mi totalidad, es

primero fue ¿Cuál es mi positivo? No tuve la respuesta al

respuesta y me confundí aún más; después cuestionamiento interno

de tanto llanto me sentí vacía, como que emerge con el camino

arrojada en la noche y con paz. Las ancestral.

preguntas seguían surgiendo ¿Yo qué soy, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 456

quién soy, si lo que he sido los últimos

años es negativo y hay que dejarlo de

lado?; también cuestioné, pero ¿si ese

dolor que me produce el negativo me hace

ser quien soy, cómo diferenciar hasta

donde es suficiente vaciar?.

En el proceso de entender

Lo mejor es honrar lo que fue y lo que quién soy, debo honrar el

estuvo con todo el amor posible, para que pasado pues este es el piso

el avanzar no duela y deje de sentirme un que me sostiene desde

ser que es solo negativo. antes.

TRASNOCHO EN LAS PIEDRAS DEL TUNJO, FACATATIVÁ 2 DE JULIO.

MAJESTUOSA OSCURIDAD

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 457

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Comenzamos con palabras de todos, como El femenino y el

siempre hubo la balanza de femenino y masculino siempre como

masculino entre Luis y Andrea, el primero partes fundamentales del

hablando de manera tan empoderada y origen cosmogónico.

respetuosa que yo lo veía como un abuelo;

la segunda con la dulzura que trasmite

siempre en sus palabras, honrando la

energía femenina con su hablar.

Usos y Mito Metacategorías El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 458

costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Nos dispusimos a trasnochar, con todo el Trasnochar para entender

respeto y las indicaciones del mamo, pero los malestares psíquicos

esta vez era distinto, no teníamos fuego y negados o no aceptados

solo éramos alumbrados por dos velas, las por el ser mismo.

cuales no tenían una llama muy intensa o

no nos brindaban la seguridad del abuelo

fuego como en todos los trasnochos

anteriores, también hacía mucho frío, por

lo que se tornó un poco incómodo el

comienzo del ritual.

El ritual enseña que el

Yo sentía que el fuego no estaba allí por fuego no solo es externo,

alguna razón, que al fin había llegado el sino interno también y

momento de iluminar el sitio con nuestros este siempre está

corazones, con nuestra energía y con la presente.

humildad que abarca el ir a hacer El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 459

trasnocho; de la misma manera sentía que el silencio era el abuelo esa noche, que ese silencio nos haría escuchar lo que está y no está, en otras palabras la realidad alterna que empezamos a aceptar desde el comienzo de este caminar con la madre, así que pedí oscuridad, pedí silencio por unos minutos; aunque yo sentía y quería que esto fuera toda la noche

Madre tierra en su orden

Un compañero sacó un tabaco, nos contó natural, tiene todas las cómo había aprendido, dónde lo había plantas para el bienestar hecho, cómo se debía usar esta medicina y humano. la diferencia que tenía de fumar no debía Tabaco, medicina de ser pasado hasta los pulmones, dijo para curación para la tristeza. todo lo que servía, pero solo se me quedó que servía para la tristeza y las depresiones tal vez porque los últimos días he estado algo triste y el caer en depresión es uno de mis mayores miedos. Ahí si tuve miedo, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 460

porque él dijo que a veces causaba ciertos malestares como vómitos y mareos, cuando uno estaba muy mal la limpieza también era física; yo me asusté porque en realidad he estado mal emocionalmente y creí que sería yo la que tendría esa reacción; era la primera vez que hacía esto por lo que observé con detenida atención como lo hacían los que estaban antes de mí, cuando llegó hice todo igual y con fe exuberante de que me iba a sanar de tanta tristeza, de tanto dolor por sucesos que hasta ahora empiezo a aceptar y sanar, por duelos que he llevado a cuestas por vario tiempo, estoy empezando a soltar.

Pagar lo que se tiene,

Después hicimos pagamento, yo le di a la honrar y liberar a los madre, a mis abuelos a los de quinta ancestros del dolor, generación específicamente puesto que el principio básico de abuelo Fernando en un trasnocho me dijo liberación y curación que la base de la migraña estaba ahí, puse propias. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 461

oro para que puedan liberarse, puse agua, puse todo mi negativo, mi dolor. Después pagamos en positivo, tocamos instrumentos pero no tuve ganas de danzar, el profesor dijo que se le asimiló mucho a un velorio, a muerte; yo antes de empezar había hablado de eso, pero es que a mí no me aterra la muerte, me causa más malestar aceptar la vida que la muerte, seguido esto puse un cuarzo con toda mi energía y maíz para la sanación del lugar.

El resto de la noche seguí sintiendo energías, pero todas buenas, pude ver que el espacio en los troncos estaba ahí para los abuelos del territorio.

Abuelo y sabedor sentía que el silencio era el abuelo esa Los abuelos siempre están El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 462

noche, que ese silencio nos haría escuchar a nuestro lado bien sea lo que está y no está, en otras palabras, la físicos o espirituales, el realidad alterna que empezamos a aceptar todo está en tener la desde el comienzo de este caminar con la humildad suficiente para madre, así que pedí oscuridad, pedí escucharlos. silencio por unos minutos.

Plantas

Un compañero sacó un tabaco, nos contó Nuestras plantas cómo había aprendido, dónde lo había medicinales, también hecho, cómo se debía usar esta medicina y curan los malestares la diferencia que tenía de fumar no debía emocionales. ser pasado hasta los pulmones, dijo para todo lo que servía, pero solo se me quedó que servía para la tristeza y las depresiones tal vez porque los últimos días he estado algo triste y el caer en depresión es uno de mis mayores miedos. Ahí si tuve miedo, porque él dijo que a veces causaba ciertos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 463

malestares como vómitos y mareos, cuando uno estaba muy mal la limpieza también era física; yo me asusté porque en realidad he estado mal emocionalmente y creí que sería yo la que tendría esa reacción; era la primera vez que hacía esto por lo que observé con detenida atención como lo hacían los que estaban antes de mí, cuando llegó hice todo igual y con fe exuberante de que me iba a sanar de tanta tristeza, de tanto dolor por sucesos que hasta ahora empiezo a aceptar y sanar, por duelos que he llevado a cuestas por vario tiempo, estoy empezando a soltar.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 464

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Sentía necesario decir lo que ese sitio El espiritu del lugar

significó desde la primera vez que fui, allí sagrado danza con el

descubrí una totalidad, porque la dulzura espiritu humano, para

de la madre me abrazaba dándome paz y el brindarle paz y

calor del padre sol me fortalecían de entendimiento propio.

manera mágica.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 465

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 466

PRIMER CONFIESO SILVANIA.

CONTANDO EL SENTIR…

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad

Se ha vuelto fundamental agradecer los Agradecimiento del

pasos que voy dando, porque esos pasos pasado, tarea de

los puedo dar gracias a la madre tierra que discernimiento espiritual.

me sostiene los pies a diario, dándome la Espiritualidad como

fuerza que necesito. Ser vida, porque es conocimiento de quien

momento de soltarle la mano a la muerte y soy.

entender que yo soy la mujer y ésta

encarna a la vida de manera implícita y

hermosa.

Divinidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 467

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

tenía emoción por ver al mamo y su *Cuando me reconocí

familia; esa casa, ese calor de hogar como madre, como luna,

representan para mí el autoconocimiento y asumí la dulzura de mi

amor con los que es importante andar a existencia.

diario, la palabra dulce de la mujer, la

representación y asunción de madre, de

tierra, de luna encarnadas en vida son la

muestra y el ejemplo a seguir para mí, para

encontrar la sanación que anhelo día a día.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 468

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

cuando me tocó confesar todo lo que había Confesar lo vivido y lo

sentido en aquel trasnocho, sentí un poco sentido hace que se ande

de miedo, pues empecé a sudar y además el con un peso menos en la

pálpito de mi corazón se aceleró cotidianidad.

notablemente. Dije que la petición de la Contar lo vivido, genera

oscuridad había sido de mi parte, conté la liberación interior.

tranquilidad que experimenté cuando el

silencio y la oscuridad eran la totalidad de

ese instante, yo hice esa petición porque

tenía la fuerte necesidad de estar en la

noche, también de ver que yo no soy solo

negativo, solo miedo y que la noche tiene

su belleza por ser oscura y silenciosa.

Comenté que en el momento de rapear el

tabaco, tenía muchísimo miedo de que los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 469

demás compañeros se dieran cuenta de lo triste que estaba, ya que se nos explicó que cuando uno está mal internamente, cuando estas borracho emocionalmente, se experimenta en el cuerpo, causando diarreas, vómitos, mareos, desmayos o llanto inconsolable, esto es conocido como chuma; la verdad ese era mi mayor temor, sin embargo lo hice de la forma más respetuosa y rogando que el tabaco entrara en mi cuerpo y mi espíritu solo para curarme, fui bastante explicita en lo que comenté en el trasnocho; igualmente hice referencia a lo bien que me sentí después del ritual, que a pesar del frío, de la oscuridad y del miedo que pudiera tener el resultado fue de querer ser mejor hija, de ser mujer, de ser vida.

Abuelo y sabedor

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 470

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 471

cuando tengo tanto malestar físico se La relación que existe

arrastra de manera impresionante mi entre la enfermedad y el

estabilidad emocional y espiritual, porque amor, es tan grande que a

me siento perturbada y rota en todos los veces parecer similares.

aspectos de mi vida.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral Comenté que en el momento de rapear el La mascara que me

tabaco, tenía muchísimo miedo de que los impide mostrarme como

demás compañeros se dieran cuenta de lo soy.

triste que estaba, ya que se nos explicó que La pared que me aleja de

cuando uno está mal internamente, cuando los demás y asi mismo de

estas borracho emocionalmente, se la mi propia sanación.

experimenta en el cuerpo, causando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 472

diarreas, vómitos, mareos, desmayos o

llanto inconsolable, esto es conocido como

chuma; la verdad ese era mi mayor temor

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

hice referencia a lo bien que me sentí Madre tierra, es la mejor

después del ritual de rapear tabaco, que a medician para todas las

pesar del frío, de la oscuridad y del miedo enfermedades, físicas o

que pudiera tener el resultado fue de querer emocionales.

ser mejor hija, de ser mujer, de ser vida.

Identidad Otredad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 473

Mismidad

INTERIORIZANDO LA LUZ

CONFIESO EN COTA, TRASNOCHO PIEDRAS DEL TUNJO

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 474

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Abuelo y sabedor

el abuelo me había dado un remedio la vez

anterior yo lo hice como él dijo, pero su

efecto duró solo unos cuantos días, por lo El maestro que con

que iba con el propósito de preguntar qué humildad siempre me

otra cosa podía hacer para ese dolor, brinda las herramientas El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 475

mágicamente y como siempre sentí como para la curación. si él hubiera leído mi mente, porque empezó hablando justo de ese tema, la enfermedad, los remedios y la cura; Dijo que no existía remedio alguno que sirviera si yo no hacía conciencia de que la cura era yo misma, que yo era el remedio y de la misma manera la enfermedad, entonces después de esas palabras llegué al mismo punto, tengo que encontrar qué es lo que está sucediendo en mí para que yo misma esté produciéndome tanto malestar físico; ya que cuando tengo tanto malestar físico se arrastra de manera impresionante mi estabilidad emocional y espiritual, porque me siento perturbada y rota en todos los aspectos de mi vida cuando estoy enferma.

Plantas

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 476

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 477

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

El abuelo dijo que no existía remedio *El día en que el ser

alguno que sirviera si yo no hacía humano se dé cuenta de

conciencia de que la cura era yo misma, que es medicina, no

que yo era el remedio y de la misma necesitará pastillas

manera la enfermedad, entonces después

de esas palabras llegué al mismo punto,

tengo que encontrar qué es lo que está El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 478

sucediendo en mí para que yo misma esté

produciéndome tanto malestar físico.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

El abuelo dijo que no existía remedio *La falta de aceptación

alguno que sirviera si yo no hacía enferma al ser.

conciencia de que la cura era yo misma,

que yo era el remedio y de la misma

manera la enfermedad, entonces después

de esas palabras llegué al mismo punto,

tengo que encontrar qué es lo que está

sucediendo en mí para que yo misma esté

produciéndome tanto malestar físico

CONOCIENDO LA TIERRA DE MANTAS

TUNJA, SOGAMOSO, IZA

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 479

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

El proceso de devolver el negativo a su Nuestra forma original de

origen se me ha hecho un propósito, un vivir, enseña a pagar tanto

camino y algo complejo de cumplir. en negativo y positivo a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 480

madre tierra, para estar en

paz.

Usos y Mito Metacategorías costumbres Fue contundente para mí entender que esta *Las aguas sagradas (Mitos) laguna (Tota) es para enfriar el exceso de alivian la candela del

fuego, de mal genio de dolor en mí, es una corazón.

laguna que limpia llevándose el negativo *El agua de la laguna

de manera impresionante. Puesto que limpia el espíritu de todo

después de salir del agua, sentía como los dolor y mal genio.

sentimientos malhumorados habían

desaparecido.

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

El encuentro conmigo y la sanación ha La mujer que aprende a

tenido tejer su vida, despierta la

abuela sanadora que tiene

lugar por medio del tejido, el cual me ha adentro.

ayudado a llegar a análisis propios de lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 481

que soy, de lo que debo aceptar de mí misma y qué es lo que no me sirve, como lo es el avanzar con calma, honrar mi pasado porque de una u otra manera así haya dolor éste es el que me hace grande,

él que me ayuda a crecer en espíritu.

Pagar con convicción a

Yo llevaba un maíz cargado de toda mi madre tierra, para que ella fuerza y vi que a ese lugar le faltaba por lo recobre fuerza. cual, lo dejé al lado de una piedrita de esas, me despedí del lugar, agradecí y entendí un poco más de mi misma que soy una mujer en la que la fuerza habita, de esa forma me levanté sonriéndole al lugar.

Los rituales conectan el

En el pagamento, en el templo del sol de pasado con el presente.

Suamox al inicio tenía sueño, pero en la mitad de la ceremonia empecé a Convicción, entrega y experimentar un fuerte mareo, en realidad corazón son las cosas que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 482

me sentía desorientada, flotando en un se necesitan para conectar espacio en el cuál mi cuerpo, mi mente y con lo profundo del lugar mi corazón se hacían más volátiles con el sagrado y lo propio. pasar de los minutos, en ese mismo instante sentí desprenderme bastante del negativo que me venía aquejando tiempo atrás, el pensar de manera obsesiva cómo serían las cosas, si pasaran a mi acomodo, cómo sería si yo fuera…, en fin la serie de pensamientos e ideas que contaminan mi espíritu, se habían bajado de manera considerablemente alta. Así, me dispuse a tejer en pensamiento y corazón qué era lo que necesitaba por encima de lo que quería; inmediatamente volvió a aparecer la palabra sanación y no solo física, no solo eliminar mis dolores de cabeza, sino poder encontrar la raíz de

mis males, el poder aceptar tanta tristeza que se posa en mi cabeza y mi corazón.

Así sin importar que en ese lugar se respirará tanto dolor, fue un centro de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 483

fuerza que no pensé sentir o experimentar, además que hubo un momento que me sentí como en especie de trance, me dio mareo y visualicé muchas personas corriendo, huyendo y gritando con dolor

Nos dispusimos a trasnochar en frente de la laguna de Tota… estuve muy tranquila y confiada dispuesta a escuchar al silencio, al crujir de la madera mientras se consumía en la mitad del fuego, los leves sonidos del agua que mis oídos alcanzaban a divisar.

Este si fue el momento oportuno para sacar mi tejido y aunque no veía mucho, para llevarlo a la práctica, lo expuse como ofrenda, como carta de presentación extra, junto con mi ropa espiritual y mi corazón; así tal vez la madrecita me diría en un lenguaje más claro quién soy

Aprender a escuchar la

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 484

nos dispusimos a hacer pagamento en la noche, para obtener piedra de Bochica en ese momento la conocimiento de si madre empezó a cuestionarme la forma en mismo. la que había llegado, por lo que me sentí Círculos donde se muy triste y rompí en llanto, la verdad es conectan los hilos de la que no quería que mis compañeros me otredad y la mismidad vieran o me sintieran llorar, por lo que para sanar. cuando todos dispusieron de su palabra de agradecimiento más que de cualquier otra, yo no pude decir algo diferente a perdón; porque aunque he sanado muchas cosas con lo que he venido haciendo en este camino espiritual, de reivindicación y perdón; todavía hay dolor, me falta aceptación de la vida, de mí y de los demás.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 485

Pagar con humildad, no

con obligación.

Perdonar y perdonarnos.

Abuelo y sabedor

La bienvenida del territorio de Boyacá fue Quien enseña acerca de helada, pues Tunja tenía una mañana los mensajes místicos que bastante fría, lo cual me recordó las envía la madre tierra. palabras del abuelo Fernando de Cota en donde decía que la madre nos manda los mensajes muy claros, así que supuse que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 486

algo debía enfriar, entendí que el fuego

interno me hace moverme, la luz que

ilumina mi interior, pero en exceso me

quema, como el mal genio y la ira, me

destruyen y me ciegan a las cosas dulces

del diario vivir.

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados En el Pozo de Donato como tal se nota Sitios que mantienen el

como se le han realizado "mejoras" por poder, a pesar de la vacía

parte del alcaldía municipal de Tunja, sin modernidad.

embargo éste se reduce a un parqué como

para pasar una tarde, el problema central es

que se está obviando la espiritualidad de lo

indígena en estos sitios sagrados y de

poder lo cual reduce únicamente a los

restos arqueológicos, por lo que es un poco El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 487

complicado llegar a conectarse de manera trascendente en este lugar

Sitios en donde por

En las piedras de Goranchacha fue un poco encima de la apariencia, más fácil conectarme con la madrecita, predomina la fuerza simplemente me acerqué dando toda mi espiritual. fuerza, mi amor y como siempre mi negativo, así que el mensaje fue claro, agradecer, mi vida, mi aire, todo, porque la pacha me da todos los días la raíz para levantarme, porque así como ha protegido a este templo excluyendo las características físicas que hacen que se vea en deterioro y abandono, me refiero a protección espiritual y de fuerza; eso me lo da a mí, porque entendí que la fuerza que no puedo explicar de dónde sale en los peores días de mi vida, cuando ni mi corazón, ni mi cuerpo responden a las demandas de hoy, cuando entro en desorden emocional y de alguna otra El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 488

forma, tengo tantas cosas adentro que en realidad no sé cómo interpretar esa fuerza y ese tesón que dudo tener; todo eso me lo dijo la madrecita ahí, eso que no explico es ella ayudándome, dándome ímpetu y amor espiritual

La memoria histórica,

El templo del sol es un sitio sagrado, de contenida en un lugar. riqueza y poder ancestral, en este sitio respiré tristeza, dolor, sangre y masacre, y todo causado por mi otro linaje, mi otra corriente ancestral, la española. Cabe resaltar que es un intento bonito pero se elude la espiritualidad propia del pueblo.

Al otro día en la mañana, fuimos a Sitio de limpieza bañarnos en la laguna de Tota; dejando de espiritual, emocional y lado la temperatura del agua que era un física (total). poco helada, nada más se interpuso para que yo me sumergiera en estas aguas de Lugares para entender lo poder curativo. Antes de entrar al agua, que se debe sanar. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 489

charlé un poco con la laguna, le dije que tenía todo el derecho de llevarse cualquier equipaje que estuviera obstaculizando mi trascendencia, en momentos este charlar me costó trabajo ya que la experiencia contemplativa que tuve del lugar no dejó de suceder hasta el momento en que no lo vi más. Cuando decidí entrar estaba helada, por lo que salí nuevamente; así hice varios intentos hasta que pude sumergir todo mi ser en esas aguas míticas y cristalinas, dejando todo en manos de la corriente.

Todavía no sé, qué tantas cosas tengo que enfriar y de pronto es ese el error, que no he hecho conciencia de qué es lo que me contamina mi ser, aunque con sinceridad eso no me preocupa ahora porque debo ir paso a paso; o tal vez la respuesta sea fuerte y por ahora no tenga el desarrollo para aceptarla nos dispusimos a hacer pagamento en la Lugares que enseñan a piedra de Bochica en ese momento la tener humildad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 490

madre empezó a cuestionarme la forma en Sitios de conexión con el

la que había llegado, por lo que me sentí perdón hacia mi misma y

muy triste y rompí en llanto, la verdad es hacia la comunidad.

que no quería que mis compañeros me

vieran o me sintieran llorar, por lo que

cuando todos dispusieron de su palabra de

agradecimiento más que de cualquier otra,

yo no pude decir algo diferente a perdón;

porque aunque he sanado muchas cosas

con lo que he venido haciendo en este

camino espiritual, de reivindicación y

perdón; todavía hay dolor, me falta

aceptación de la vida, de mí y de los

demás.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

En todo el lugar, me entró dolor en el El amor profundo dormita

pecho, sentí ganas de llorar y angustia en las partes recónditas

desesperante, porque el ver cómo eran mis del interior humano, pero

ancestros, cómo vivían, la riqueza cultural su cara amarga enseña

tan enorme y la sabiduría del corazón que honrar es parte

dulce, del pensamiento bonito, fueron fundamental del proceso

abolidos bajo las máscaras del abuelo doloroso. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 491

fuego

La emocionalidad un

No fue fácil para mí caminar todo eso, aspecto básico humano, cuando yo me cansaba tan rápido en que abarca la estabilidad trayectos más cortos; todo esto me inundó física y espiritual. de muchísima tristeza porque empecé a cuestionar muchas cosas, como ¿qué tan grande tiene que ser mi espíritu y mi alma, para que compensen todo mi malestar físico? y de alguna u otra forma la desventaja con la que iba. No era mal genio, ni pereza, ni falta de disposición, esta vez tampoco estaba el miedo presente; esta vez fue darle la cara a la realidad, a mi realidad de la que llevo huyendo tanto, sentirme absolutamente rota subiendo esa montaña, y le preguntaba a la madre

¿cómo voy a llegar bien vestida espiritualmente, cuando desde afuera estoy tan mal?.

Vida El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 492

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral el asumir el papel de la normalidad, más Lo que aleja de la propia

cuando yo no encajo ahí es lo que me ha realidad, ignorándola e

venido enfermando a lo largo de los años incluso olvidándola.

La máscara que duele,

con el negativo acompañándome mientras pero que a la vez enseña a

daba cada paso lento pero seguro, fue tener fuerza y asumir un

absolutamente imposible para mí no papel en relación a los

llenarme de negativo y más cuando notaba demás.

que yo estaba en desventaja física frente a

los demás, esto no ha sido algo que me

haya acomplejado durante mi vida; pero en

ese momento sí. Es que yo no entendía

cómo no iba a llegar cansada, si caminar,

aprender a hacerlo y de una manera no tan

desadaptativa para el mundo, siempre ha

sido parte de mi lucha El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 493

Perdón (culpa, lo siento)

Al ubicarme en frente del poste más alto, Hincarse y no solo en me sentí pequeña y de nuevo en deuda con sentido físico, sino en la madre, aunque yo llegué con buena ropa espiritu, para presentarse y limpieza espiritual, sentí que no era al lugar sagrado y Madre suficiente, pues me ha faltado tierra. reinvindicarme más con ella.

Fe

Cuidado

Sanación

Pregunté concretamente qué era sanación y El camino a la aceptación cómo iba a sanar; la respuesta fue que yo y el amor propio. voy a estar sanada el día en que acepte mi El camino del amor. totalidad, pero además de eso la ame y en La puerta de la salud y el el momento de intentar transformarla lo bienestar. haga abandonando todo el egoísmo posible, aceptar que el dolor es bello porque es un gran maestro. Y en mi vida sí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 494

que ha sido el mayor profesor, no solo el dolor físico porque éste acarrea el emocional, lo que hace que esté triste reiterativamente.

El agua sana, limpia y

Fue contundente para mí entender que esta encuentra al ser humano laguna (Tota) es para enfriar el exceso de con su realidad abnegada. fuego, de mal genio de dolor en mí, es una laguna que limpia llevándose el negativo de manera impresionante. Puesto que después de salir del agua, sentía como los sentimientos malhumorados habían desaparecido.

Entender que la totalidad

Empecé a cuestionar muchas cosas, como presente es suficiente para

¿qué tan grande tiene que ser mi espíritu y sanar. mi alma, para que compensen todo mi malestar físico? y de alguna u otra forma la desventaja con la que iba. No era mal genio, ni pereza, ni falta de disposición, esta vez tampoco estaba el miedo presente; El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 495

esta vez fue darle la cara a la realidad, a mi

realidad de la que llevo huyendo tanto,

sentirme absolutamente rota subiendo esa

montaña, y le preguntaba a la madre

¿cómo voy a llegar bien vestida

espiritualmente, cuando desde afuera estoy

tan mal?.

Lo que me ayudó a calmar el llanto fue el Los mensajes místicos de

viento, que se posaba en mi solo me bastó la naturaleza están allí

dejarme abrazar por el viento, darle el para sanarnos.

permiso para que secara mis lágrimas y

enfriara un poco mi cabeza de tanto

pensamiento negativo en toda la subida a

la montaña.

Identidad Otredad

Mismidad comprendí que otra de las cosas que me Cuando entiendo que el

enriquecen, son las personas, la unión y otro soy yo, aprendo a

trabajo colectivo hacen crecer mi ser. vivir en comunidad.

Mismidad

Pregunté concretamente qué era sanación y Buscar mi identidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 496

cómo iba a sanar; la respuesta fue que yo individual, mediante la voy a estar sanada el día en que acepte mi sanación y aceptación de totalidad, pero además de eso la ame y en la sombra. el momento de intentar transformarla lo haga abandonando todo el egoísmo posible, aceptar que el dolor es bello porque es un gran maestro. Y en mi vida sí que ha sido el mayor profesor, no solo el dolor físico porque éste acarrea el emocional, lo que hace que esté triste reiterativamente.

. El camino empezó y ahí me di cuenta que Aprender cuál es la forma iba a ser un trabajo duro, por lo que decidí correcta de andar con uno irme caminando a mi ritmo sin importar mismo, en búsqueda de la quedarme atrás de todos, esto con el fin de sanación. no sentirme presionada, porque he entendido que yo no puedo andar al ritmo de las demás personas, porque el asumir el papel de la normalidad, más cuando yo no encajo ahí es lo que me ha venido enfermando a lo largo de los años

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 497

CONFIESO DE BOYACA EN SILVANIA

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 498

uno mismo).

Según la tradición ancestral al bohío se Cuando se va a hablar con

entra limpio de espíritu, con pensamientos, los ancestros, se hace

sentimientos positivos y dulces. limpio de espiritu y

corazón.

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Al llegar al hogar del mamo y su familia la Contarle a Madre tierra

primer indicación fue soltar el negativo; de la forma mas humilde

pensar solo en positivo y dejar de lado los actos mal hechos.

todos los momentos negativos sucedidos

en esos días de ausencia a este territorio

Cargar con equipaje

me dediqué a soltar, puse en pensamiento extra, siempre hará que el

todo lo que me desestabilizó y me inundó ser mismo se canse, por

de negativo así, me sentí un poco más lo que siempre se debe El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 499

libre, lo supe porque ya no tenía ese peso solta. en el pecho o esas ganas de llorar constantes, por el contrario quería reír, reírme a carcajadas pero por respeto al ritual y a mis acompañantes no lo hice.

Después nos posamos frente a unos

árboles, allí el sentido era cambiar de ropa espiritual, pues según la tradición ancestral al bohío se entra limpio de espíritu, con pensamientos, sentimientos positivos y dulces

En realidad este confieso, no fue como un En el ritual no solo se ritual de confieso normal en el que le habla con los abuelos contamos al mamo y a los abuelos del físicos presentes, sino con territorio que vimos, que sentimos, que los ancestros del lugar. hicimos. Por lo que referí anteriormente, el grupo en general iba tan lleno de negativo que en eso se enfocó la noche; un compañero refirió un poco de lo que había sido la salida, pero en realidad la atención no estuvo enfocada en ese relato, precisamente nos sentamos en frente de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 500

laguna, el confieso sería hacia ella, contándole a ella que había pasado, yo por mi parte le conté que había estado rodeada de tristeza, de peleas, pedí perdón por eso; pero también le conté que desde el día que subí la montaña de Iza en donde se encuentra la piedra de Bochica, había estado un poco mejor pues debido al enfrentamiento tan complejo que tuve conmigo misma pude aceptar cosas mías que venía negando, tales como querer igualarme a los demás cuando notoriamente estoy en una condición física distinta; pero eso no me hace inferior porque lo que no puedo hacer con mi cuerpo mi espíritu lo hace por mí, en definitiva conté eso, que lloré con mucho dolor por sentirme mal con quien yo soy

Antes de finalizar el trasnocho danzamos, Danza y felicidad para con el fin de soltar negativo, de saludar a cerrar de manera positiva los abuelos y de poder sanarnos. En ese el ritual. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 501

instante sentí como mi ser estaba renovado, pues estaba muy feliz, cómoda y llena de esperanzas en mi vida.

Abuelo y sabedor

Plantas

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 502

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Recuerdo que estando en Silvania escuché Todos los lugares son la

que la madre nunca se va a negar a sus representación de la gran

hijos por lo que se puede subir cualquier madre naturaleza, la cual

montaña, estar en cualquier territorio, siempre está esperando

porque ella nunca va decir “tú no puedes” nuestra visita.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Yo entendí que no era solo yo la que iba El malestar individual,

sucia, sino todos, tanto que el mamo pasa a ser comunitario en

Roberto, nos indicó de forma reiterativa muchas ocasiones.

que la idea era andar limpios todo el

tiempo, limpios de corazón y espíritu.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 503

Psicoterapia Ego ancestral El cambiar de ropa espiritual es un poco Abandonar lo que

complejo para mí porque es como enferma, lo negativo, lo

quitarme la chaqueta o los zapatos viejos que duele es una tarea de

que tanto me gustan, a los que me he la humildad y la sencillez.

adaptado, así me ocurre con el negativo y

con esa coraza espiritual contaminada que

me invade.

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 504

Sanación

Ese cambiar de ropa es un poco complejo Conciencia de lo que

para mí porque es como quitarme la enferma.

chaqueta o los zapatos viejos que tanto me Soltar viejas creencias.

gustan, a los que me he adaptado, así me Liberar el niño interior.

ocurre con el negativo y con esa coraza Sanar el alma

espiritual contaminada que me invade.

Siento como si descontaminara mi alma, lo

hago imaginándome en un rio en el que su

cauce se mueve mucho, yo ingreso allí, me

baño y cuando salgo hay en las piedras un

vestido blanco que al ponérmelo se adhiere

a mi piel y se desvanece dejándome

desnuda otra vez, sin embargo no siento la

desnudez porque mi espíritu está limpio y

protegido con el vestido que me he

acabado de poner, además de sentirme en

paz.

Identidad Otredad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 505

Mismidad Yo entendí que no era solo yo la que iba El otro es un solo un

sucia, sino todos, tanto que el mamo espejo de mí

Roberto, nos indicó de forma reiterativa

que la idea era andar limpios todo el

tiempo, limpios de corazón y espíritu.

Mismidad

Desde el día que subí la montaña de Iza en La identidad propia

donde se encuentra la piedra de Bochica, sentida desde el espíritu,

había estado un poco mejor pues debido al con aceptación y amor.

enfrentamiento tan complejo que tuve

conmigo misma pude aceptar cosas mías

que venía negando, tales como querer

igualarme a los demás cuando

notoriamente estoy en una condición física

distinta; pero eso no me hace inferior

porque lo que no puedo hacer con mi

cuerpo mi espíritu lo hace por mí, en

definitiva conté eso, que lloré con mucho

dolor por sentirme mal con quien yo soy,

cosa que ahora está dejando de pasar

después de bajar de all El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 506

TRASNOCHO DEL 12 DE ABRIL DE 2014 EN EL CABILDO MUISCA DE COTA.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

… Siguiendo el hilo de la madre y la El ser humano esta

conexión con sus hijos, habló de la conectado

importancia del cordón umbilical, éste energéticamente con el

además de darle un contacto permanente al universo.

ser con su madre biológica, lo ata El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 507

energéticamente al universo y al cosmos, con respecto a la placenta de los bebés es la que sostiene, guarda y da refugio durante los nueve meses por eso es importante honrarla para que esta le dé energía al bebé y buena salud por el resto de su vida.

Ley de origen (principios éticos y convivenciales con la madre, los otros y uno mismo).

Prosiguió cuestionando a la compañera que Principio que enseña a llevó la bebida, le dio palabra haciéndole honrar la vida de los entender que, ella era de donde eran sus padres, abuelos y papás, que el día de su nacimiento era el ancestros antes que la mismo que el de sus papás, también le dijo propia. que era una mujer fuerte y le cuestionó por qué no explotaba esa fortaleza, si ella era abuela, madre, hermana, tía y sobre todas las cosas mujer

La única manera de encontrarse a sí Los cuatro principios El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 508

mismo, es siendo honesto, humilde, básicos para ser gente. sencillo y noble. Habló de la honestidad que debe tener el ser humano consigo mismo, para poder estar bien, la sinceridad y lo importante que es abolir la mentira de la vida y del corazón; porque lo verdaderamente difícil es cuando el ser humano se cree sus propias mentiras y más allá de engañar al resto se auto engaña.

Mientras avanzaba la noche, dijo que la La mujer es agua y mujer era todo, era lo más importante y sanación cíclica. que para que ésta pudiera reafirmarse en su papel tenía principalmente ordenar su ciclo menstrual, con la luna. Recíprocamente, mencionó el papel del hombre diciendo que éste era la semilla, conectado al sol dando vida que se acopla con la mujer, así creando una sintonía perfecta entre hombre y mujer.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 509

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de

palabra, confieso…

Como no había preparado previamente el La rigurosidad del ritual

Tchunsua, el trasnocho se realizó frente al esta mas en lo profundo y

fuego en otro lugar del resguardo. El en lo espiritual, lo externo

abuelo mostraba una verdadera aflicción está en un segundo plano.

por lo sucedido y resaltó estar

verdaderamente arrepentido, pidiendo

disculpas desde el corazón a nosotros.

Inmediatamente, empezó a poner palabra,

pero antes de iniciar se le entregó en sus

manos una botella de chirrinchi traída

desde Supatá, Cundinamarca

Abuelo y sabedor

Lo que percibí en el abuelo fue una Persona humilde que

grandeza de corazón, para aceptar la vida conecta con el plano El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 510

como es, los errores que se cometen a espiritual de madre tierra. diario y principalmente a nosotros mismos como seres humanos, porque hay que hacerle frente al presente, honrar el pasado y dejar de pelear con los ancestros y los padres para ser feliz.

Plantas la conciencia de que esta bebida El consumo consciente de

(refiriéndose al chirrinchi) me va a limpiar plantas sana. y es medicinal no permite que me emborrache y me pierda, porque el descontrol y el desorden solo me alejan más de mí.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 511

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral La conciencia de enfermedad que es Dejar de regocijar el

importante tener para estar curado, ya que dolor. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 512

las pastillas no van a sanar, la enfermedad Trascender los niveles de no existe es psicológica y en el momento dolor para soltarlos de en el que el ser humano detecta el por qué manera profunda se encuentra de determinada forma está curado en su totalidad.

Perdón (culpa, lo siento)

No estamos separados de la vida, del Sentir con el corazón el viento y del clima. Somos parte de la perdón que se le pide a creación y debemos disculparnos ante ella, madre. asumir la responsabilidad de nuestra actitud y de nuestros actos. Hemos de entrar conscientemente en la próxima era, reconociendo nuestros errores. Sólo entonces podremos honrarla y escucharla plenamente. Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que no demos este paso. De que, como niños obstinados, no reconozcamos el dolor que le hemos infligido a nuestra madre, y no recuperemos la totalidad que ella encarna.

Entonces permaneceremos en la oscuridad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 513

que está comenzando a devorar nuestras almas: las promesas vanas del materialismo, el mundo fracturado del fanatismo. Dar un paso a la madurez siempre implica reconocer nuestros errores, el mal que hemos causado.

Fe

Cuidado

Sanación lo que más me afectó fue lo de la Despojar apegos conciencia de la enfermedad, puesto que emocionales. tengo migraña hace 3 años Aceptar la realidad. aproximadamente, y tomo a diario muchos Aceptar la corporalidad. medicamentos para sentirme bien, por esto sentí que el abuelo había entrado totalmente en mis pensamientos, mi corazón y mi cuerpo, y así detectó mi malestar; ahora empiezo a interiorizar y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 514

cavilar de manera excesiva cuál puede ser

la causa de esos dolores de cabeza, tal vez

pensar negativamente todo el tiempo, vivir

encerrada en un duelo inconcluso y la

desaprobación a mí misma sean esas

causas.

También me dio un golpe a la razón, a la Entrar en el psiquismo

salud, a la medicina moderna, porque yo para sanar la enfermedad.

siento el malestar vívido, que me aqueja a

diario y me genera un malestar muy

significativo en mi vida, por eso la razón

psicológica que me genera esto debe ser

muy grande y honda, acá es el verdadero

inicio de mi investigación encontrar la

cura, mi propia cura.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 515

ABRIENDO MIS OJOS A LAS MONTAÑAS

IGUAQUE 1

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Sin saberlo iba para la casa de mi abuela, Conexión plena con la

iba a visitar las tumbas de mis ancestros, y naturaleza para

fundamentalmente iba a tener un encontrarme conmigo

encuentro conmigo misma. Fue despertar, mismo.

abrir mis ojos más allá de lo que ven El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 516

siempre, fue sentir a la madre tierra en mi

cuerpo, en mi corazón, fue sentirme vida

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres Otro de los mensajes que llegó a mí en la *El verdadero mito está (Mitos) actividad, contemplativa y meditativa de cuando en base a él

pagamento fue que yo soy como la abuela sucede una contundente

laguna, unos días esplendida a los ojos y al transformación espiritual

corazón de los demás; otros deplorable, en mi vida.

cansada y triste, sin embargo eso me hace * Lo que el lugar sagrado

ser quien soy; la enseñanza de la laguna tiene por decirme y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 517

fue contundente, me falta aceptación mostrarme. conmigo misma, es como la maleza del agua de la laguna que asusta, lo mismo que mis miedos y tristezas; a diferencia de la laguna de Tota que era para enfriar el corazón, los dolores, el mal genio. Ésta era para la aceptación y conciencia de mi misma, que aunque exista maleza lo único que se puede hacer con ésta es crecer con ella y a pesar de ella

Historia de origen de un

poblado.

Acerca del mito, dicen los lugareños que esta es la morada de Bachue y su hijo

Labaque, donde fue a parar después de poblar la humanidad, que habitan la laguna en forma de serpientes; esto es lo que hace que la laguna esté viva. La Serpiente es ampliamente representada en relación con la tierra, el agua y los poderes fecundadores, es la fuerza creadora de vida. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 518

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso… me concentré, para soltar y para pagar la En ocasiones el ser más compleja para mí, siempre ha sido humano se aferra tanto al soltar; ya que como he referido en textos pasado que éste se anteriores, soy una persona fantasiosa que adhiere a los poros de su vive añorando el pasado, además que me piel. he acostumbrado a vivir en las huellas del ayer, así llevo alimentando por vario tiempo cosas que fueron y me hicieron crecer pero ya no están, he aprendido a comprender que soltar es una de las partes más valiosas del crecimiento espiritual, solo soltando llegaré a estar sana; tampoco hago referencia a olvidar porque de eso no se trata la cosa es aceptar y contemplar la vida como el tejido, uno crece, se hace El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 519

fuerte desde que el principio se honre sin importar que esté sea débil, tenga nudos, o algún hilo en desorden, porque solo con la conciencia de lo que tengo atrás, puedo avanzar hacía un positivo bonito.

En el pagamento me concentré en todo lo Aprender de la sombra es que me abrumada en rituales anteriores yo encontrar la verdadera lo había nombrado negativo pero esta vez sanación. no fue así, porque entendí que la tristeza que me invade el alma recurrentemente es un exceso de pasado en mi vida, alguna vez escribí que avanzaba sin avanzar y en parte eso es lo que he estado haciendo por unos años; inconscientemente lo sé y allí está la raíz de mi tristeza, así las cosas decidí decirle a la laguna que se llevara, que limpiara mi espíritu como siempre lo hace, como siempre lo intento, pero como cual niño jugando en el barro regreso a la madrecita sucia una y otra vez, pero de eso se trata este andar, de limpiar y soltar cada día un poco, porque entre más limpio y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 520

suelto mi espíritu más cosas salen para sanar, para limpiar, para soltar, el hecho está en andar con corazón y vida para que en la mitad no me canse.

me quité los zapatos para que sus laderas Madre Tierra cura con su me llenaran de energía desde las plantas de magia. los pies. Me dispuse con todo mi ser a La laguna tiene poder de contemplarla, a decirle que antes de llegar curación total. allí había intentado ser mejor persona, ser más dulce y transparente con los demás y sobre todo conmigo misma, tenía mis cuarzos rosados en la mano y los puse en el suelo para que se invadieran del esplendor del lugar, todo eso diciéndole precedentemente a la laguna con qué fin lo hacía, el fin es tener una vida gobernada por el amor y no hablo del amor de pareja, hago referencia a tener una vida en la que se respire amor y sanación. Porque en este momento de mi vida, siento la necesidad fundamental de ser mujer de tierra, tener la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 521

aceptación y las fuerzas suficientes para estar feliz conmigo misma y sobre todo tranquila, porque es agotador estar inmersa en la tristeza todo el tiempo, es momento de decirle no más y cerrarle las puertas a aquella maestra que me ha acompañado por tanto tiempo. Ese gobierno de amor sería un mundo en donde los prejuicios, lo carnal, lo banal y lo efímero no fueran lo más importante, en donde los ojos del alma y el corazón me guiaran a mí y los demás siempre, así mi vida sería mucho más armoniosa. Decidí ingresar al borde de la laguna para lavarme los pies, las manos, y la cabeza con esa agua pura, le pedí sanación para mi cuerpo, para mis rodillas, para mi cabeza. Luego me senté a observar la majestuosidad de sus aguas, y noté como hacia formas en el agua, las cuales se desvanecían con el pasar de unos minutos, al instante volvían a aparecer, pero con formas distintas, no logré entender que decía, pero lo que sí vi y sentí es que ésta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 522

laguna está más viva que cualquier otra laguna que haya visitado, esto con el respeto que se merecen las otras.

Abuelo y sabedor

Plantas

En el ascenso recibí hayo, en realidad era Hayo no solo centra el la primera vez que esta planta sagrada pensamiento y da palabra estaba enseñándome. Lo que yo sabía era dulce, ella también da que esta es una planta para tener palabra fuerza para emprender el dulce, lo cual no es necesario para las ascenso de las montañas. mujeres, por eso no entendía el por qué estaba recibiéndola, la respuesta que me fue dada, fue que era para la fuerza.

Inicialmente, el sabor no era nada parecido a lo que yo había imaginado, como esta es una planta para la dulzura yo creía que su sabor era igual, pero no me supo así, todo lo contrario; la sentí amarga en mi boca por lo que pensé que como ella ingresaba a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 523

mí con el propósito de dar fuerza por eso su sabor era así, agreste y amargo haciéndome entender que así iba a ser el resto de la montaña, la verdad después de cada pequeño mambeo sentía una energía recorrer desde mi estómago hasta mis pies, algo que nunca había sentido, era una especie de empuje que me ayudaba a subir.

Yo sentía mi cuerpo como cuando consumo bocadillo en los ascensos a otras montañas, fuerza y ausencia de mareo, en realidad era coger energía.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 524

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados por fin estaba frente a nuestros ojos la El lugar enseña con toda

laguna de Fuquene, el propósito era su totalidad al hombre.

trasnochar en el lugar, pero las condiciones La espiritualidad y el

en las que se encuentran las laderas de la aprendizaje no siempre

laguna son deplorables. El mito dice que son perfectos.

allí es la residencia del Dios Fu, se cuenta

la leyenda que trasladó las rocas para no

dejar pasar el tren que se encuentra en el

borde de la misma.

se acercaba la hora de subir la montaña; de La raíz de la existencia

visitar el corazón de la madre que Mhuysqa.

transporta el agua entre lagunas, la casa de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 525

Bachue, a la abuela que no se puede mentir El corazón de Madre porque sabe como estoy de pies a cabeza, tierra. de adentro hacia afuera. Días previos yo había hecho una limpieza de palabras y de Reivindicación con la sentimientos sin importar los que fueran, madre interna y la pues yo quería subir transparente y serena, externa. estaba cansada de que el mal genio y el dolor que siempre me dan se adueñaran de mí en todos los rituales, después de pensar por qué me aquejan estos malestares entendí que la madre me habla, y yo no acepto lo que me está diciendo y por eso me pongo así. Esta esta vez el miedo de no poder subir, de quedarme en la mitad del camino no estaba conmigo como algunas veces atrás, subí la montaña de la mano de cuarzo rosado, necesitaba subir con amor a la madre, sentir el amor y respirarlo con cada paso que iba dando.

Cuando estuve de frente a la majestuosidad Las montañas son los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 526

de aquellas montañas en realidad quedé sin espejos que ayudan a ver palabras, empezó el ascenso y como había quién se es en realidad. aprendido en la subida a la montaña de Iza, no me afane por alcanzar a alguno de mis compañeros, esta vez quería subir bien no es justo con la madre ni conmigo que siempre termine llegando chocada a los lugares sagrados, tal vez allí esté el aprendizaje; pero ahora siento que el aprendizaje es desde el amor hacía mi misma, de aceptarme y de amar a la madrecita para fortalecerme un poco más.

Porque cargar en las espaldas un duelo es algo desgastante, experimentar morirme por dentro, que el amor hacia mí misma se fuera junto con el cuerpo de alguien a quien amé, sentirme una mujer frágil y débil es cosa del ayer. Yo iba direccionada a sanar, a soltar porque necesito volver a encontrar mi propia fuerza, mi propio amor y que estos sean verdaderos, sentidos y trascendentes para que en una situación compleja no se vayan, para que me den el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 527

soporte de mi misma.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 528

Sanación

porque entendí que la tristeza que me Entender lo vivido,

invade el alma recurrentemente es un herramienta fundamental

exceso de pasado en mi vida, alguna vez de curación del presente.

escribí que avanzaba sin avanzar y en parte

eso es lo que he estado haciendo por unos

años; inconscientemente lo sé y allí está la

raíz de mi tristeza, así las cosas decidí

decirle a la laguna que se llevara, que

limpiara mi espíritu como siempre lo hace,

como siempre lo intento, pero como cual

niño jugando en el barro regreso a la

madrecita sucia una y otra vez, pero de eso

se trata este andar, de limpiar y soltar cada

día un poco, porque entre más limpio y

suelto mi espíritu más cosas salen para

sanar, para limpiar, para soltar, el hecho

está en andar con corazón y vida para que

en la mitad no me canse.

Identidad Otredad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 529

Mismidad Tal vez por falta de aceptación, miedo de El sentir individual,

no estar en la zona de confort, de que la termina manifestándose

carpa se hundiera, decidimos hacer colectivo.

pagamento en la mañana del día siguiente,

el cambio de la vista, del recibimiento y de

sentir fue abrupto, absolutamente distinto

que el de la tarde anterior, la laguna

inspiraba limpieza y acogimiento, además

que a diferencia de la primera vista parecía

que la laguna (Fuquene) estaba bien, que

tenía vida

un compañero se lesionó un pie Cuando sé que soy el otro

fuertemente y la recomendación médica comprendo su malestar y

fue guardar reposo y como somos un grupo el mío

todos estuvimos al pendiente de la lesión

de nuestro compañero. En esta

parada se fortaleció la relación grupal y se

hicieron notorias las diferencias

individuales también, en gustos

gastronómicos, pasatiempos.

Pienso que esta parada fue un mensaje del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 530

territorio y del camino, puesto que íbamos

corriendo mucho, con un cronograma

apretado y un afán exuberante, íbamos

caminando sin raíz, por eso la parada allí,

fue para respirar, coger fuerza y raíz.

Mismidad

VUELTA A IGUAQUE

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Luego por petición del Abuelo Fernando Conectar con el mensaje El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 531

le enseñamos a una planta con flores de las plantas

violeta, nuestros buenos propósitos, el

positivo de cada uno. En realidad lo

primero que pensé acerca de mí, fue que

yo soy la vida, soy similar a las plantas

que crecen en la laguna de Fuquene; la

muestra que a pesar de las cosas adversas

y no tan buenas a los ojos de otros como

ser diferente, surge la belleza de poder

vivir con amor y dulzura y eso soy yo.

Reiteradamente, supe que yo era la madre,

porque toda mi energía fluye en el ritmo

del amor.

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y

convivenciales con la madre, los otros y

uno mismo). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 532

Recibir medicina en frente de la laguna fue Entender la naturaleza una experiencia magnifica, pues sentí la femenina del existir. grandeza de mi fuerza femenina, como La mujer es agua, es todas y cada una de las mujeres limpieza y restauración. encarnamos a Bachue de la forma más sutil y divina, quería arrojarme al agua, sentía que yo era agua.

Luego por petición del Abuelo Fernando Estar en conexión con le enseñamos a una planta con flores todos los seres que violeta, nuestros buenos propósitos, el componen la naturaleza. positivo de cada uno. En realidad lo primero que pensé acerca de mí, fue que yo soy la vida, soy similar a las plantas que crecen en la laguna de Fuquene; la muestra que a pesar de las cosas adversas y no tan buenas a los ojos de otros como ser diferente, surge la belleza de poder vivir con amor y dulzura y eso soy yo.

Reiteradamente, supe que yo era la madre, porque toda mi energía fluye en el ritmo del amor.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 533

El hombre se debe

El abuelo sacó un cuarzo masculino y dijo mostrar sin barreras.

que el ser humano debía ser como éste,

transparente para poder estar bien

Usos y Mito Metacategorías costumbres Recibir medicina en frente de la laguna fue La mujer encarna a la (Mitos) una experiencia magnifica, pues sentí la divinidad de la Madre

grandeza de mi fuerza femenina, como Bachue.

todas y cada una de las mujeres

encarnamos a Bachue de la forma más

sutil y divina, quería arrojarme al agua,

sentía que yo era agua, intenté visualizar

que pasaría si en verdad me arrojara allí,

las explicaciones racionales fueron las

primeras en aparecer, pensé que me

ahogaría; pero entonces cuando le puse

corazón a esa visualización sentí, que si

pudiera estar en el fondo del agua sería

amor, y agradecimiento.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 534

Don Segundo Preciado y su esposa El mito la memoria

Blanca, ellos tenían el pleno conocimiento histórica de un pueblo. del mito, además de haberlo experimentado en su niñez y juventud. El Historia de identificación señor contó que Bochica había sido el con la comunidad. poblador y la persona que les había enseñado el tejido y el manejo de los telares a sus ancestros, dijo que las mujeres hilaban y los hombres manejaban los telares

, además dijo que la forma como desapareció y fue visto por última vez en

Iza, fue en una caminata acompañado de indígenas hacia por las aguas de aquel lugar, que piso una piedra y ésta se hundió, y ahí quedó su huella.

Por otro lado, contó que los muiscas vivían en la montaña y ellos hacían sus propios torteros con piedras y las agujas con palos, que lo que hoy es conocido como la cueva de Bochica era el hogar de los muiscas. Una de las cosas más bonitas es que estas personas afirmaron ser El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 535

muiscas y estar orgullosos de serlo. Luego fuimos a la casa de la señora Transito, una de las cosas por las que hicimos la visita hasta su hogar fue porque ella tocaba la riolina o en otras palabras la armónica, ella también nos contó su vivencia acerca de estas piedras míticas que se encuentran en

Iza, como la famosa piedra del diablo, ella contó cómo fue su experiencia en su niñez, haciendo referencia a que no podía pasar sola después de las cinco de la tarde, porque según lo abuelos algo malo le pasaría; también que ella era oriunda de una vereda cercana a la montaña en donde vivían los muiscas, acerca de Bochica dijo que gracias a él ellos hilaban y tejían ruanas, también dijo que ella era muisca, que hacia chicha y que la fermentaba todos los días con melado de panela, que esa es una costumbre que aprendió de su mamá.

Para finalizar, tocó una melodía con su riolina .

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 536

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso…

Entendí que la mejor manera de soltar la Caminar la tierra permite negatividad es estando en tierra. Yo la conexión con mi recordaba en la subida, las palabras del sanación. abuelo, las cuales eran: vamos para la casa de la mamá, por eso hay que subir bien, recoger la basura que tiene ella en sus caminos, pero esto no era basura física, era basura nuestra acumulada por años, el dolor de la madre por el abandono de sus hijos, eso era lo que ayudaría a limpiar en mi subida

Abuelo y sabedor

Al llegar al territorio las palabras del La persona que conecta abuelo Fernando, hicieron referencia a que con madre tierra. las puertas de la madre también se cierran El que interpreta los y era muy claro ver que a la montaña no mensajes de madre. podríamos subir si al día siguiente estaba la misma neblina. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 537

nos dispusimos a trasnochar a las faldas de El que enseña a aceptar la la abuela Iguaque, esto con el fin de vida, la muerte y la limpiarnos espiritualmente previamente y realidad con humildad y de pedirle permiso a la laguna y a la amor. montaña para que nos permitiera un ascenso bonito. En el círculo de palabra surgió la muerte, el duelo y la lucha que llevamos los seres humanos por la partida de un cercano. Las palabras del abuelo eran emitidas de manera general a todos los del grupo, sin embargo yo me sentía sumamente afectada, identificada; puesto que cada frase me caracterizaba tanto, que era como si cada una de las palabras fueran dirigidas hacia mí. Esta identificación la sentí porque fui pésima aceptando la muerte de un cercano, porque luché todos y cada uno de mis días pensando y sintiendo que mi cuerpo, mi alma y mi corazón no daban más de la tristeza tan enorme que sentía por aquella El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 538

partida. Ese suceso devastador de mi vida, se llevó consigo cosas mías como la seguridad, el amor propio y como es obvio mi felicidad.

La mejor biblioteca es la

Continúe subiendo entre rocas, arbustos, montaña. raíces serpenteantes y con el hermoso paisaje de la montaña del frente, la cual para mí tiene grabados en forma de estantes de biblioteca, y las piedras de otro color son libros, supongo que es una forma bastante racional que le he otorgado a los grabados de la montaña, pero también sé que es el mensaje claro y contundente que no hay mejor biblioteca, mejor internet para conocerme a mí misma y a los demás que las montañas, porque allí está grabada la memoria de mi raíz, de mi linaje, porque estando en medio de tales monumentos, en medio del silencio Caminar la tierra brinda me es posible escuchar lo que tiene que entendimiento de los otros El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 539

decir mi corazón y mi cuerpo, en la ciudad y de si mismo. en medio de afanes, ruidos, multitudes solo escucho los murmullos de los demás, que hacen que no pueda tampoco entender los míos o que me convierta en sorda a los sonidos implícitos y trascendentes míos y de los otros; por eso aunque sabía que me faltaba muchísimo por subir estaba feliz de haber entendido porque a veces me es tan difícil entender a otras personas tanto como a mí

Mientras cada uno estaba conectado de manera personal con la abuela Iguaque, el abuelo recorrió las laderas de la laguna, yo supongo saludando, hablando con todo el - La ineludible lugar, contándole que habíamos llegado de magia de la naturaleza en forma dulce y así volvió junto a nosotros y esencia. entonó un silbido para después de eso - Las laguna hablan El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 540

decirle a la laguna: “Levántese madre, con los abuelos, perdónenos por abandonarla tanto tiempo, - Solo mediante el levántese madre, coja fuerza otra vez, la perdón se obtiene la necesitamos fuerte para que nosotros lo fuerza. estemos también”. Sorprendentemente, el - El abuelo le enseña cielo dejó de estar nublado, el frío se a sus nietos el lenguaje de disipó de manera tal que no parecía que el la madre. clima fuera de páramo, salió el sol por - PERDÓN. unos minutos, un sol tenue y caluroso Reconocimiento del haciéndonos entender que la fuerza del origen, para continuar padre también estaba presente con viviendo. nosotros a pesar del fuerte frío que se siente en este lugar, que en los momentos nublados de la vida el padre está en el fondo dando el piso y la fortaleza para sobrevivir a la neblina, al frío y a la lluvia.

Volver a la realidad, sin la bajada se me hizo más compleja, tal vez abandonar la magia porque es el verdadero poner los pies en la Abrir los ojos en un tierra, aplicar lo que aprendí de mí estando mundo perdido. arriba, a mi vida, a mi diario vivir. En verdad tener un aprendizaje significativo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 541

de lo que me mostró la montaña y sus caminos con numerosas raíces en forma de serpiente, la laguna y sus nubes. Porque cuando vuelvo a la ciudad y las cosas no son así de bonitas como en la naturaleza, es el momento de entender para qué y por qué estuve en la montaña, porque así como soy capaz de poner los pies en la tierra, elevar mi corazón y pensar bonito al frente de la laguna, es fundamental que lo aprenda a hacer en la ciudad, en mi casa, con mi familia. Lo difícil es dejar de lado el miedo que siento al volver, porque vivir en torno del negativo me tiene agotada y por eso cuando es el momento de bajar, el alma y el cuerpo ponen resistencia.

Mientras nos acercábamos al lugar, en la caminata en medio de la naturaleza él iba explicando para qué servían las plantas, los frutos y las hojas que nos íbamos La magia curativa de las El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 542

encontrando por el camino; lo primero que plantas. dijo fue que las moras silvestres son la cura para el cáncer, estas tomadas todos los días con panela eran la cura que la humanidad tanto espera en estos tiempos, así fue señalando otras plantas como el cordoncillo y el aliso, sin embargo en dicho momento me quedé un poco atrás por lo que no pude escuchar el nombre de una planta que sirve para la hinchazón de los pies, la enseñanza de andar de la mano con un médico tradicional en medio de la naturaleza fue muy grande, porque algo tan bonito y tan importante como conocer la madre puede llevarlo a uno a la sanación, sin embargo sin la conciencia suficiente (FE) de que la medicina está en cada uno de nosotros no podrá haber cura sin importar cuantas plantas conozca el hombre.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 543

Plantas

Inmediatamente, recibí medicina (hosca Maestras del dolor por la nariz) cuando ella estuvo en mi Las que llevan a entender cuerpo como maestra fue hermoso, puesto la realidad. que en mí surgieron los sentimientos de dejar ir, de soltar, esas ganas de seguir viviendo tras una máscara negativa se fueron desvaneciendo, logré entender y con mucho dolor aceptar que la causante de mi malestar emocional soy yo, aunque haya factores externos, a parte de la vida que me otorgan mis padres filiales, y los sagrados; soy yo y mi forma de actuar es la que va a preceder mi esencia. Por eso si todo el tiempo pienso en tristeza y dolor, así me voy a sentir, tengo que confesar que en un momento me sentí mal, porque me hace falta conciencia en los momentos de la vida cotidiana para saber que esos pensamientos, esa mirada pesimista de la vida no me hace bien. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 544

En la mitad del camino recibí una hoja de La fuerza para seguir

Romero la cual era el alimento físico que caminando. mandaba la montaña para nosotros, puesto que el ritual de subir lo hacíamos en ayunas, yo sentí que el ritual se hacía así, porque cuando uno va subiendo lo que va consiguiendo es alimento espiritual como fuerza, vibración y vida; por eso no hace falta consumir algo previamente, sin embargo tal vez nos faltaba un poco de conexión para sentir todo lo espiritual que tiene para mostrar la montaña; por eso mandó desayuno físico, porque por mi parte yo sentí coger aire, como si mi mamá me estuviera alimentando, como si fuera un bebé y mi madre me estuviera dando pecho.

Recibir medicina en frente de la laguna fue Reconectarme con lo que una experiencia magnifica, pues sentí la soy. grandeza de mi fuerza femenina, como todas y cada una de las mujeres El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 545

encarnamos a Bachue de la forma más sutil y divina, quería arrojarme al agua, sentía que yo era agua, intenté visualizar que pasaría si en verdad me arrojara allí, las explicaciones racionales fueron las primeras en aparecer, pensé que me ahogaría; pero entonces cuando le puse corazón a esa visualización sentí, que si pudiera estar en el fondo del agua sería amor, y agradecimiento.

Al pensar como estaba de cerca a esto en mi vida común, vi que en realidad me faltaba muchísimo, pero entonces comprendí mi propósito de estar ahí sentada en frente de tal magnificencia, estaba allí y estoy aquí porque necesito amor hacía mí, hacia la vida, hacia los demás y fundamentalmente agradecimiento por mi vida, por mis padres, porque a pesar de no tener la salud y sanación que añoro tengo el ímpetu y la fuerza suficiente día a día de madre y padre que me hacen ser la mujer guerrera El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 546

que soy.

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados . Al llegar a la laguna, tuve la oportunidad El lugar que comprende el

de poder conectarme plenamente con ella, proceso humano de

le conté que no viví con el amor que había recaer.

pedido la anterior vez, el que ella con tanta

dulzura me había dado, que tal vez subía

más sucia espiritualmente que la anterior

visita, ya que esta oportunidad no hice las

mismas limpiezas que la vez pasada, antes El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 547

había dietado en pensamiento negativo, además de acompañarlo con baño de sal marina, para esta ocasión las situaciones que viví, por más de que intenté no pensar negativo, vivir en negativo, no pude, el baño que me hice no fue suficiente; porque aunque a veces tenga la añoranza de estar bien, el contexto sobrepasa mi fuerza en algunas ocasiones, por eso iba chocada conmigo misma todo el camino, porque sentía, como en repetidas ocasiones, que había dañado todo el avance que llevaba

La sensación de bienvenida de la laguna, La sensación ineludible de el respirar ese oxigeno que me hizo sentir sanación. viva por dentro, me ayudó a cambiar de pensamiento, porque este andar no es algo que se hace una vez y se acabó el malestar que se experimenta, es entenderme a mí y a mi malestar, a mi dolor, a mis duelos, de manera multidimensional, desde todas las enseñanzas que tiene la madre. Porque una de las cosas que pude comprender a raíz de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 548

contarle eso a la laguna con toda la

sinceridad que ella merece, es que yo estoy

más allá del dolor, más allá del negativo,

eso no lo voy a poder eliminar de todo de

mi vida, pues soy un ser humano, lo que

necesito es un ojo amoroso por parte mía,

que vea lo fundamental mío, como mi

humanidad, mi fuerza, mi dulzura, mi

amor, y muchas otras cosas que en este

momento no veo, las circunstancias son

inevitables en algunas ocasiones, pero lo

importante es que ellas no me transformen

a mí de manera tal que olvide quién soy.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Luego por petición del Abuelo Fernando Mujer encarnas la

le enseñamos a una planta con flores grandeza del existir en tu

violeta, nuestros buenos propósitos, el ser.

positivo de cada uno. En realidad lo El amor, la vida y el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 549

primero que pensé acerca de mí, fue que corazón las bases

yo soy la vida, soy similar a las plantas existenciales de la fuerza

que crecen en la laguna de Fuquene; la femenina.

muestra que a pesar de las cosas adversas

y no tan buenas a los ojos de otros como

ser diferente, surge la belleza de poder

vivir con amor y dulzura y eso soy yo.

Reiteradamente, supe que yo era la madre,

porque toda mi energía fluye en el ritmo

del amor.

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Las palabras siguieron siendo la medicina Perdonarse a si mismo por

de la noche y otra de las enseñanzas fue los apegos egoístas.

que hay que eliminar los apegos que

sentimos hacia las personas, hay que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 550

dejarlos ir; la aceptación completa de la muerte sería una celebración alegre ya que

ésta representa el descanso de una vida fuerte, dura y llena de altibajos que ha llevado cada uno. Para mí fue inevitable sentirme mal después de esta enseñanza, puesto que yo no he celebrado la muerte, no la he honrado, ni tampoco he estado alegre por ello, llegué a ver que mi dolor era por un fuerte apego emocional que tenía hacia esa persona y que tal vez era momento de soltarlo y de una vez por todas aceptar esa partida, esa muerte de manera feliz y tranquila.

Fe

Cuidado

Sanación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 551

El camino y la necesidad de curación, Despertar de la conciencia hicieron que volviéramos al altiplano para reconectar con la cundiboyacense, al territorio sagrado de naturaleza humana de

Chiquiza, específicamente San Pedro de sanación.

Iguaque. El propósito de esta visita era volver al corazón de la tierra, a la abuela

Iguaque, aquella laguna trascendente, mítica y curativa, con las ansias de poder sentir aquel despertar que nos lleve por senderos de dulzura, respeto y conciencia, con la madre tierra y con nosotros mismos.

Así cada visita a un lugar de esta sacralidad, se convierte en una terapia holística para mí, debido a que lo psíquico, lo físico y lo emocional, están involucrados todo el tiempo. Cuando logro la bonita conexión con la tierra es como si realizara un autoexamen, debido a que una meditación basada desde el respeto y la escucha activa a la tierra, sirven como una medicina para mí de manera total.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 552

es paradójico entender que al hacer tanto

esfuerzo físico uno pueda bajar sano con

respecto al cuerpo, pero esa es la

verdadera naturaleza de sanación y el

poder amoroso de la madre tierra.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Es notorio que yo no subo con la misma Aceptar la totalidad de la

destreza que mis acompañantes, que el propia existencia.

esfuerzo físico que hago es tan grande que

a los ojos de mis compañeros parece que Enraizarse en uno mismo.

yo no pudiera dar un paso más y cuando

siento eso, lo único que hago es llenarme Ponerle la cara a la

de motivos para continuar, los motivos que realidad.

me levantan a diario, mi vida, mi salud; la

añoranza de un encuentro bonito con la

madre tierra. Porque aunque he cambiado El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 553

muchos pensamientos que tenía antes de iniciar este proceso, tales como creer que la madre tierra me haría daño, que me negaría la entrada a sitios sagrados de difícil alcance o con largos trechos así como Monserrate, Iguaque o la piedra de

Iza; a medida de las visitas he comprendido que esos pensamientos egoístas son netamente humanos, porque los abuelos siempre van a querer que sus nietos e hijos los visiten. Por eso la añoranza de estar con los pies en la tierra es el motivo más grande que me da la fuerza para seguir, porque en otras ocasiones la mejor salida era evadir mi realidad, pero cuando volvía de ese evadir me encontraba con que las cosas, independientemente de lo que fueran, estaban peor y seguían allí. A raíz de eso comprendí que a estos sitios se sube o se ingresa con los pies firmes, con el corazón abierto sin importar si es dolor lo que se está sintiendo y con la mente liviana, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 554

moviéndose en pensamientos bonitos y positivos, que vibren con la fuerza del lugar.

porque este andar no es algo que se hace Comprensión del una vez y se acabó el malestar que se malestar. experimenta, es entenderme a mí y a mi malestar, a mi dolor, a mis duelos, de manera multidimensional, desde todas las enseñanzas que tiene la madre. Porque una de las cosas que pude comprender a raíz de contarle eso a la laguna con toda la sinceridad que ella merece, es que yo estoy más allá del dolor, más allá del negativo, eso no lo voy a poder eliminar de todo de mi vida, pues soy un ser humano, lo que necesito es un ojo amoroso por parte mía, que vea lo fundamental mío, como mi humanidad, mi fuerza, mi dulzura, mi amor, y muchas otras cosas que en este momento no veo, las circunstancias son inevitables en algunas ocasiones, pero lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 555

importante es que ellas no me transformen

a mí de manera tal que olvide quién soy.

1.Categorización Jeisson.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Sin darme cuenta del tiempo que había trascurrido Depositar los más

el profesor nos dijo que el tiempo había terminado, profundos

por lo que me levante y con mucha tranquilidad sentimientos en

arroje mi cuarzo con todas mis fuerzas dentro de la cuarzo, para que

montaña (colocando en el todos esos luego al entregarlos

pensamientos que había tenido), para que llegara a la montaña la

lo más lejos de posible y así la montaña lograra madre tierra los

escuchar mis pensamientos. escuchara.

Intente poner en mi mente mucho dinero para Lograr conexión

entregar a la montaña en forma de pago por el con la montaña a

permiso y el aprendizaje que esperaba de ella, en través de objetos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 556

mi cabeza lo imagine como un intercambio, por lo sagrados como el

cual pensé en una cifra de diez millones de pesos cuarzo.

(no sé por qué esa cantidad en específico, pero la Trabajar con

creí adecuada), mientras pensaba en estas cosas pensamiento bonito.

frotaba entre mis manos mi cuarzo como si fuese

alguna especia de conexión entre la montaña y yo

Divinidad

Mística

por mi parte mientras subía la montaña sentía una La emoción de

presión en mi corazón como si con cada paso que recorrer los

daba fuese creciendo, tenía muchas ganas de llegar caminos de la

a la cima aunque realmente no sabía por qué, así madre, subiendo

que con paso firme y con muchas entereza seguí montaña

caminando por casi una hora y media, hasta que enalteciendo el

de repente me encontré con la cima de la montaña, espíritu.

esto me lleno de mucha emoción era como si

quisiera saltar de alegría

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 557

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

nos dijo que cada uno debería pedir permiso a los La nobleza de pedir

ancestros y a la montaña (permaneciendo en permiso antes de

silencio durante 30 minutos, pensando en la actuar frente ante la

montaña y diciéndole a ella, el por qué queríamos majestuosidad del

comenzar a caminar por el camino de lo ancestral). camino ancestral

Para pedir permiso yo me dirigí a unas rocas en mhuysqa.

donde esperaba sentirme cómodo para lograr tener Las ganas

tranquilidad y cumplir el objetivo de saber si la impresionantes de

montaña nos daba o no el permiso, tome una empezar a caminar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 558

piedra de cuarzo entre mis manos y en silencio lo mhuysqa y empecé a pensar en muchas cosas como en, ¿cómo descubrir los sabré si la montaña me dará o no permiso? , milenarios saberes

¿Estaré escuchando de la manera correcta para ancestrales. saber lo que la montaña tiene para decirme? , ¿Al Como un niño ser mi motivación e interés el aprender la ansioso quería montaña me dará permiso?; cerrando mis ojos le empezar a caminar dije a la montaña que me permitiera a través de lo lo senderos indígena llenarme de sabiduría, y de ancestrales conocimiento, ya que mi corazón se sentía atraído mhuysqas, el por el tema ancestral y latía con fuerza desde la corazón seria la subida a la montaña, además de estar fascinado por fuerza que me empezar a caminar el sendero mhuysqa. guiaría a través de

Intente poner en mi mente mucho dinero para ellos. entregar a la montaña en forma de pago por el permiso y el aprendizaje que esperaba de ella, en mi cabeza lo imagine como un intercambio, por lo cual pensé en una cifra de diez millones de pesos

(no sé por qué esa cantidad en específico, pero la creí adecuada), mientras pensaba en estas cosas frotaba entre mis manos mi cuarzo como si fuese alguna especia de conexión entre la montaña y yo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 559

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 560

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 561

Mismidad

Mismidad

2.Categorización Jeisson.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 562

con la madre, los otros y uno mismo).

en donde todos nos sentamos a escuchar Honrar y reconocer

atentamente todo lo que el mamo tenia para para vivir y

decirnos, hablo acerca de la madre tierra y de trasncender.

cómo deberíamos aprender de ella a través de los

sabios “abuelos”, honrando siempre su memoria y

reconociendo la importancia de ellos en nuestras

vidas, ya que esto era algo que actualmente la

sociedad había olvidado,

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

Abuelo y sabedor

el mamo Roberto, quien por cierto era la primera La serenidad que

vez que lo veía; la primera impresión que tuve de brinda la sabiduría

él fue el de una persona seria, amable, sabia y que de quien vive en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 563

de alguna manera inspiraba tranquilidad, era del tierra, es sublime. tipo de persona que prefería aguardar en el agua hermoso tranquilidad y silencio, las palabras correctas tesoro liquido para decirlas en el momento adecuado, por lo cual esencial sinónimo debería estar atento a cada cosa que quisiera de vida y de vital compartir con nosotros. importancia para

, el mamo nos señaló el rio que bajaba frente a todo ser vivo en la nuestros ojos y nos dijo: esto es un hermoso tesoro tierra. escondido en esta gran ciudad, muchos de los que La enseñanza de viven en ella no saben lo importancia de este rio, vida trasmitida por pues este rio alimenta a toda la ciudad y le da un abuelo es un vida; todos nosotros somos privilegiados por estar tesoro, frente a este gran regalo de la madre… privilegiados

… pero para eso el Mamo estaba allí, para quienes aprenden enseñarnos el valor de la tierra y de cómo de un abuelo o podíamos honrar y agradecer por lo que la Madre sabedor ancestral. tierra nos brinda, nos dijo que esa era un tarea que los mismos Abuelos le habían encomendado a él , enseñarle a los hijos de la tierra a reconocer a sus padres olvidados, además de esto nos dijo que al estar allí estábamos acudiendo al llamado de la

Madre Tierra, a iniciar un largo camino de aprendizaje de la mano de las montañas, los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 564

abuelos, los ancestros y sus sagradas enseñanzas.

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 565

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 566

Mismidad

3.El hombre que podría ser y no soy

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

entendí que aunque mi alma estuviera sintiendo el En la medida en

peso del mundo (problemas económicos de mi que el hombre

familia), y de que aunque por dentro yo solo permita que la

sintiera un vacío enorme y una frialdad madre entre en él,

implacable, solo la Madre y solo ella seria quien dejara de sentir al

lograría sacar de mí un poco de calor, de llenar mis mundo como una

vacíos con su cariño y afecto, y hacer que aquel carga.

peso del mundo que sentía, se hiciera más fácil de

soportar cuando ella estuviera en mí.

Divinidad

Mística

Al llegar al sitio de trasnocho y pagamento con el La frialdad de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 567

“abuelo” Fernando, yo me sentía muy impaciente noche es medicina.

y con un enorme sentimiento de vacío dentro, para La madre envió la

lo cual la madre respondió con un trasnocho casi noche fría como

que al aire libre; con una noche tan fría como mensaje para

nunca antes había sentido en todas las ocasiones en apagar la candela

que había trasnochado con el abuelo Fernando. del corazón.

no se la razón o el por qué pero mi cuerpo esa La rabia se

noche no sintió frio, no quise buscar algo que me transforma en

abrigara ni quise si quiera acércame a las personas candela.

que tenía cerca para sentir su calor, no lo hice El refrescante frio

porque mi alma se encontraba tan fría como la de la madre

noche y la madre me lo estaba mostrando, me apacigua al hombre,

sentía cómodo con aquel sereno que me permitía para ser curado.

permanecer con una postura rígida para soportar el

peso del mundo que tenía en mis espaldas

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 568

esto me hizo sentir mejor era como si la Madre me Madre tiene un

diera una voz de aliento y me dijera: no se rinda amor incondicional

inténtelo a pesar de la adversidad y lo difícil que por su hijo, siempre

pueda ser, usted puede ser mejor persona; puede cree en él a pesar de

ser un buen hombre… todo.

Usos y Mito Metacategorías costumbres Nos reunimos en cota que en idioma muisca, Conocimientos (Mitos) quiere decir «crespo» o «encrespado». De acuerdo ancestrales

a la mitología muisca, Cota figura en el itinerario trasmitidos por

de Bochica, quien desde la cueva del mohán, en la Bochica acerca de

colina de Cetime, predicó el culto al sol y enseño a la tierra que aun

cultivar la tierra y a tejer algodón. hoy en día están

presentes.

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

Recuerdo muy bien que esa noche el abuelo En el círculo de

Fernando menciono como nosotros los hombres palabra surgen las

deberíamos ser y señalo algunos de los ideales que virtudes del hombre

deberíamos tener como personas, ideales como la ideal. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 569

humildad, la sencillez, la honestidad y la nobleza.

Abuelo y sabedor

Recuerdo muy bien que esa noche el abuelo el consejo de

Fernando menciono como nosotros los hombres abuelo forma a su deberíamos ser y señalo algunos de los ideales que nieto como hombre deberíamos tener como personas, ideales como la de bien. humildad, la sencillez, la honestidad y la nobleza.

Plantas

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 570

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

de repente el abuelo Fernando hablo acerca de las La mujer siempre

parejas de hoy en día, y de cómo las personas será la

estaban juntas sin en realidad estarlo, de como el representación de

hombre y la mujer estaban supuestamente juntos vida.

sin sentir un verdadero compromiso el uno al otro, Agua, tierra, aire,

sin saber y entender que la mujer es el sol y luna

complemento del hombre (es vida), comunidad de vida.

La unión entre lo

masculino y lo

femenino, crean

vida.

Comunidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 571

Psicoterapia Ego ancestral he visto en la humildad algo muy grande y casi El ego manifiesta

que a todas las personas con las que hablo trato de en las rabias y

mostrar mi humildad y sencillez, pero muchas malas palabras, de

veces el ego entra con mucho orgullo y el las que después la

resultado esto es la arrogancia que sé que no persona se

necesito, pero que muchas veces habla por mí arrepiente haber

dicho.

Orgullo absurdo

lleno de vacío y

soledad.

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 572

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

Quise sonreír, quise escuchar, quise sentir, quise El vacío se no saber

estar... pero era el hombre que era y no el que quién soy.

quería ser…

4.Categorización Jeisson.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Caminando por un terreno empinado llego un Con paso firme y

pensamiento a mi cabeza. Aquel pensamiento fue fuerza en el corazón

que mi vida giraba en torno a una constante se logra subir la

inestabilidad la cual me costaba demasiado, montaña.

siempre veía a los demás, más estables y con Las caídas

herramientas para afrontar los problemas, pero a tropiezos y

pesar ello yo intentaba seguir adelante con caídas obstáculos son

y tropiezos, costándome cada paso que daba ya enseñanzas que el

que muchas veces los pasos que yo creía dar con camino brinda, y de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 573

firmeza, me hacían retroceder mientras yo luchaba las cuales debemos

por no hacerlo e ir hacia adelanté, me percate que aprender.

muchas veces el retroceder un poco, y tomarte el

tiempo para ver el terreno te permite pensar y

calcular mejor el siguiente paso que vas a dar,

entendí que por más de que la vida cueste, hay

que caminar con mucha fuerza en el corazón para

lograr dejar huella en el sendero recorrido.

Divinidad

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 574

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

La noche empezó y el Mamo se dirigió a todos Por medio del ritual

nosotros con gran humildad en sus palabras, nos se pide permiso

dijo que aquella noche nosotros no estaríamos para acercarse de

solos pues en aquel bohío estarían nuestros manera humilde a

abuelos y ancestros, y lo que ocurriera esa noche lo sagrado y a la

ellos los escucharían y que a partir de la voluntad madre.

de la madre, se sabría si nos darían permiso o no El negativo se

para empezar nuestro camino (la ruta civilizadora manifiesta en el

de Bochica), cuerpo de las

Luego la hija de Mamo Roberto, Susana se dirigió personas como

a nosotros con palabra dulce, cálida, llena de candela.

fuerza y firmeza; al escucharla mi atención se La palabra dulce

centró totalmente y mis oídos se focalizaron en sus expulsa el negativo

palabras, las cuales proponían una actividad en del cuerpo,

donde todos nosotros deberíamos limpiar todo el cuidadosamente El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 575

negativo (son todos aquellos pensamientos que nos recibiendo una llenan de malestar como el malgenio, la rabia, el sanación dolor y la tristeza), de nosotros mismos con dos estremecedora. hilitos blancos. Al empezar a hacer este proceso de Las tradiciones limpieza en mi cuerpo, yo sentía como la piel se enseñanzas por me erizaba y empezaba a salir aire de mi cuerpo abuelos, es la mejor como si fuese vapor, me sorprendí pero por miedo forma de aprender a la reacción de los demás no manifesté nada en de manera práctica absoluto, aunque yo sabía en mi interior que lo lo ritual. estaba sintiendo era aquella limpieza. el Mamo nos indicaba la manera correcta de hacerlo, pues este mismo ritual lo deberíamos hacer en cada sitio al sagrado al que fuéramos, nos enseñó a hacer pagamento (arrodillándonos y colocando en pensamiento alimentos, plantas, frutos, oro y semillas) para dejarlos en los sitios como agradecimiento.

Abuelo y sabedor el Mamo nos hablo acerca de nuestros sueños y de Lo sueños como cómo muchas veces eran señales de lo que grandes maestros de debíamos hacer, los que debemos

aprender. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 576

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 577

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

respondiendo todas estas preguntas desde el Se halla con el

corazón para que así la Madre, nos brindara su encuentro entre el

apoyo para comenzar a caminar por el sendero hombre y la madre

indígena, de la mano de ella y de nuestros tierra.

ancestros. Por mi parte lo que le conteste a la Al encontrarse, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 578

Madre fue que yo hacia este proyecto para reconocerse y

llenarme de conocimiento y sabiduría, (aunque aceptarse, se puede

luego a través de ella misma, yo entendería que sanar.

hacia esto con el único propósito de sanación), La fuerza de madre,

las plantas de la

montaña y el agua

de las lagunas

brindan este

milagro.

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

5.Categorización Jeisson.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Luego de unos minutos en silencio mi compañera En la oscuridad el

Viviana comento que le había llegado el miedo invade el ser

pensamiento de que debíamos estar en silencio y a llenándolo de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 579

oscuras, esto realmente me lleno de temor pues no negativo. me sentía preparado para estar en la oscuridad, Cuando se luego de esto el profesor manifestó que a él encuentra en la total también le había llegado el mismo pensamiento, penumbra, se debe por lo que decidimos apagar las dos velas que acudir a la luz que mantenían la pequeña luz de la cueva, al llegar la brilla en nuestros oscuridad inmediatamente sujete la mano de mi corazones. compañera Tatiana con fuerza, pidiendo como un niño asustado que no me dejaran solo, al llegar la oscuridad también llego el silencio, un silencio con mucho ruido que provenía de mí interior, de mis pensamientos, y de mis temores que se escuchaban con mayor fuerza en aquella oscuridad silenciosa( era el negativo que se manifestaba como temor en mi)

Divinidad

Mística

, la luna iluminaba una pequeña roca que estaba Cuando me invade ubicada exactamente a la entrada, por algún el negativo soy cual motivo sentí que esa roquita era como una especie niño asustado, en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 580

de guardián que cuidaba la cueva, por varios busca de protección

minutos la observe pensando en que ella era de la oscuridad.

nuestra protectora, esto logro tranquilizarme un

poco hasta que el profesor de nuevo prendió las

velas y luz de nuevo ilumino la cueva, ilumino mi

oscuridad.

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso… El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 581

Luego de que el profesor encendiera el tabaco y Colocando lo compartiera a la profe Andrea el tabáquico llego propósito en la a mí, yo lo tome con mucho respeto y siguiendo ritual con el tabaco, las instrucciones del profesor empecé a trabajar se logra limpiar y con el tabáquico por todo mi cuerpo a manera de expulsar el negativo limpieza y de fuerza, yo sentía que el humo que del cuerpo. me rodeaba me ayudaría con el miedo así que con ese pensamiento lo trabaje,

Abuelo y sabedor

Plantas el profesor Luis Eduardo me brindo un poco de El ayu como aliado ayu (planta sagrada para sentar pensamiento), el de poder que cual para mí es como un aliado de poder que al permite repensar la masticarlo y tomar su jugo, me brinda la fuerza palabra y trasmitirla necesaria para estar y pensar, es como si rumiara en pensamientos las palabras y los pensamientos para me llenarme profundos. de fuerza, esa noche más que nunca agradecí que el profesor me brindara un poco de ayu (aclaro mis pensamientos).

El profesor Luis Eduardo al inicio del trasnocho El tabaco te enseña El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 582

había comentado la idea de compartir un tabaquito la verdad sobre ti con todos nosotros esa noche, por lo que después mismo. del momento de silencio dijo que lo Por medio de la compartiríamos, nos explicó como rapear de la Chuma (malestar misma forma en que a él se lo habían enseñado, en el cuerpo nos explicó que siempre se cogía hacia arriba el parecido al mareo y tabaco, primero con la mano derecha y después la nauseas), el con la izquierda ya que en nuestro hombro derecho tabaco te dice que estaban nuestros ancestros y en nuestro hombro debes hacer aunque izquierdo nuestros abuelos de linaje, nos mostró no lo quieras también los movimientos de limpieza que aceptar. podríamos hacer sobre nuestro cuerpo; luego el profesor cogiendo el tabaco entre su manos le canto una muy linda canción al tabáquico, para endulzarlo y ponerle propósito bonito.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 583

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Nos dirigimos a el parque de Facatativá a la Conocimientos

universidad de conocimiento sagrado de nuestros infinitos grabados

ancestros, en la rocas,

conformando una

universidad de

saberes ancestrales.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 584

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

6.Luz en la montaña

Narrativa Meta Categoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 585

Espiritualidad Espiritualidad

Mientras miraba aquella luz las preguntas, las -Es el resultado de

dudas y el miedo desaparecieron, en su lugar la unión entre lo

surgió un sentimiento de plenitud, el ver esa luz que el cuerpo recibe

me hacía sentir lleno de fuerza y ganas para seguir y lo que el alma

caminando, era increíble ver como aquella luz se siente.

alzaba en medio de una montaña y brillaba en -Luz que

medio de la noche solo para nosotros, diciéndonos reconforta, luz que

“aquí estoy… mírenme siéntanme... crean”, llena, luz que vive,

mientras la noche continuaba decidí pedirle a luz de montaña.

aquella luz que me llenara de fuerza para lograr -Fuerza

descubrir a mis ancestros, de la misma manera en inexplicable e

que esa noche yo había podido descubrir la luz en ineludible que nace

la montaña, cerrando mis ojos e intentando con del corazón para

toda mi fuerza conectarme con la montaña, le pedí conectar con lo

a aquella luz que permaneciera dentro de mi ser sagrado.

para que en las situaciones en que mi corazón se Luz que ilumina en

nublara de oscuridad y negativo, esa luz me guiara la noche más oscura

en el camino correcto hacia la Madre Tierra. siempre guiara

mostrando el

camino hacia

madre. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 586

La luz de montaña

ilumina el corazón

y hace

resplandecer el

pensamiento bonito.

Divinidad

Mística algunos decían haber visto más de una luz en la Aunque débil y de montaña, otros decían que la luz danzaba yo por manera tenue brille mi parte guarde silencio, no creí necesario contar mi luz interior, sé lo que había sentido ya que aquella luz y los que la montaña abuelos sabían a la perfección lo que mi corazón vive en mí. sentía; para mí la luz que cada uno de nosotros La montaña está vimos esa noche, representaba nuestra fe interior; llena de vitalidad gracias al abuelo Fernando ese día logre encontrar ilumina la noche la fe y sé que aunque de manera tenue brille en con destellos de mí, de ella puedo tomar fuerzas para acércame vida. cada vez más a la Madre.

Metacategorías El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 587

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 588

sagrados Nos dirigíamos al municipio de Cota uno de los Cota sinónimo de

116 municipios del departamento de hogar, de abuelo, de

Cundinamarca (Colombia). Se encuentra ubicado trasnocho y

en la provincia de la Sabana a 26km de Bogotá; La consejo.

palabra “Cota”, actualmente tiene el sentido de lo Lugares donde se

propio y de lo patronímico, con el cual la mueven fuerzas que

comunidad indígena del resguardo se identifica a aún son

nivel local, incompresibles para

El abuelo Fernando escucho atentamente el relato la mente del

del profesor Luis Eduardo y luego que de que el hombre, el indígena

profesor termino de hablar, el abuelo nos dijo: acá las entiende, las

atrás en la montaña existe una fuerza muy grande, comprende y las

una fuerza que está conectada con el chunzua, así siente.

que ahora vamos a salir y se van a estar un rato

afuera, haber que es lo que cada uno de ustedes

logra ver en la montaña…

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 589

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

algunos decían haber visto más de una luz en la La fe no solo

montaña, otros decían que la luz danzaba yo por mueve montañas

mi parte guarde silencio, no creí necesario contar también las

lo que había sentido ya que aquella luz y los ilumina.

abuelos sabían a la perfección lo que mi corazón La fe es una fuerza

sentía; para mí la luz que cada uno de nosotros increíble e

vimos esa noche, representaba nuestra fe interior; imperceptible, que

gracias al abuelo Fernando ese día logre encontrar mueve los

la fe y sé que aunque de manera tenue brille en corazones de las

mí, de ella puedo tomar fuerzas para acércame personas hacia la

cada vez más a la Madre. pureza de la madre

tierra.

Cuidado El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 590

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

7. Confieso en silvania. (Después de piedras de tunjo).

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

cada uno de nosotros conto lo que sintió y pensó Cuando se está en

esa noche de trasnocho en Facatativá, para cada grupo la conciencia

uno de nosotros la experiencia tuvo significados se une en una sola,

diferentes, pero todos sentimos que nos faltaba y se expresa en un

algo y ese algo era lo que confesábamos esa noche mismo sentir.

a los abuelos para que nos ayudaran a encontrarlo

como grupo, y de manera individual a cada uno.

Divinidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 591

Mística

luego yo comencé a confesar lo que esa noche El miedo y la

había sentido dije que esa noche había sentido incertidumbre no

miedo e incertidumbre, pues hubo un momento en permite sentar lo

el que en el trasnocho de silvania decidimos pies en la tierra para

apagar la luz y quedarnos a oscuras durante un sentir a los

tiempo, manifesté que esto me lleno de mucho ancestros.

miedo y desconcierto además de que esa noche

había sentido que me faltaba algo para poder

sentarme a trasnochar y pagarle a los ancestros

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 592

Usos y Mito Metacategorías costumbres Luego el Mamo Roberto nos relató una historia de Relatos llenos de (Mitos) cuando él era joven, en donde nos contaba que a él dulzura que

también le había dado miedo estar a oscuras, que muestran al hombre

una vez lo habían mandado a caminar de noche nuevas formas de

solo por un camino con una linterna, y que el cada compresión del

vez que daba un paso sentía más y más miedo, y mundo y la vida.

pensaba ¿y si se me apaga la linterna yo que El miedo guía y

hago?, y de repente se le había apagado la linterna enseña, por medio

y nos decía “ a mí me dio más miedo” , pero seguí de él se logra

caminando porque cuando uno tiene miedo, de encontrar la

nada sirve la linterna porque el miedo siempre le fortaleza.

gana a uno; pero el caminar a oscuras le ayuda a Las historias

uno a ver con otros ojos, porque los ojos normales contadas por los

no sirven para ver en la oscuridad, y por eso es que abuelos trasmiten

da tanto miedo, pero es mientras aprenden a ver conocimientos de

con otros ojos dijo el abuelo. manera más

Realmente me lleno de mucho alivio escuchar al sencilla, que

Mamo decir que él también sentía miedo, además cualquier libro de

contando esa historia yo realmente entendí la texto.

reflexión y se me hizo muy bonita su forma de Las enseñanzas

darnos seguridad y de explicarnos paso a paso lo expresadas en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 593

que podríamos sentir por este camino, lo hizo con lenguaje del amor y mucha calma y entendiendo a cada uno de la compresión son nosotros. las que más se

recuerdan.

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso…

Luego de instalarnos en el chunzua comenzamos Por medio del nuestro trasnocho con el Mamo Roberto, el cual confieso se entrega nos dijo que deberíamos contarle todo lo que había el negativo (malos sucedió la noche de trasnocho en Facatativá, todo pensamientos, lo que habíamos sentido lo que habíamos pensado rabias, tristezas, lo que habíamos oído o imaginado, todo eso temores y dolores), deberíamos contárselo esa noche a él y a los y se descarga el mismos abuelos que nos habían dado permiso la cuerpo.

última vez que habíamos estado allí, además de El confieso escucha esto el Mamo nos dijo que esa noche cada uno de de manera apacible nosotros debería poner palabra y debería hablar sin juzgar a quien para ser escuchado por nuestros ancestros acude a él.

Abuelo y sabedor

El Mamo nos escuchó atentamente al igual que su El consejo que llega El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 594

hija marianita y luego de que terminamos de por medio de la hablar, marianita se dirigió a nosotros y nos dijo: escucha paciente y

“no se preocupen no está mal lo que están tranquila, se sintiendo, lo que les ha pasado es normal ya que convierte en palabra ustedes están comenzando a andar por el camino dulce. de lo indígena y es natural que sientan miedo o La enseñanza de incertidumbre”, por esa misma razón los abuelos abuelo la les pidieron en aquella noche que pedían permiso, comprende el nieto que después de ir a cada sitio vinieran acá a al saber que el confesar lo que pasaba para ayudarlos y guiarlos abuelo lo quiere y en el camino correcto, para que puedan seguir busca lo mejor para andando en este camino tan bonito que es el de él. nuestros ancestros y la Tierra La experiencia de

El mamo Roberto hizo énfasis en que era normal abuelo habla para sentir miedo cuando se empieza a andar un camino enseñar y guiar, a totalmente diferente al que estamos quien apenas está acostumbrados, ya que el camino de lo espiritual empezando a te lleva a encontrarte contigo mismo y con la caminar. madre, por lo que es normal muchas veces sentir Cuando dejas que el miedo, pero que el miedo no es malo, por el miedo entre en ti, contrario muchas veces es necesario caminar de la quedas a oscuras. mano con el miedo para aprender de él. Los ojos que ven en

Luego el Mamo Roberto nos relató una historia de la oscuridad están El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 595

cuando él era joven, en donde nos contaba que a él guiados por el también le había dado miedo estar a oscuras, que corazón. una vez lo habían mandado a caminar de noche El regaño hace solo por un camino con una linterna, y que el cada aceptar, la escucha vez que daba un paso sentía más y más miedo, y permite pensaba ¿y si se me apaga la linterna yo que comprender, el hago?, y de repente se le había apagado la linterna abuelo inspira y y nos decía “ a mí me dio más miedo” , pero seguí hace reflexionar. caminando porque cuando uno tiene miedo, de nada sirve la linterna porque el miedo siempre le gana a uno; pero el caminar a oscuras le ayuda a uno a ver con otros ojos, porque los ojos normales no sirven para ver en la oscuridad, y por eso es que da tanto miedo, pero es mientras aprenden a ver con otros ojos.

Realmente me lleno de mucho alivio escuchar al

Mamo decir que él también sentía miedo, además contando esa historia yo realmente entendí la reflexión y se me hizo muy bonita su forma de darnos seguridad y de explicarnos paso a paso lo que podríamos sentir por este camino, lo hizo con mucha calma y entendiendo a cada uno de nosotros. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 596

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 597

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

8.Categorización Jeisson. (Tota)

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Nos sentamos alrededor de las piedras, yo La madre tierra

inmediatamente me senté frente a una piedra, sentí representa al ser

una calidez enorme que provenía de mi lado humano en los

derecho, era como si todo el viento frio que corría elementos de la

por esas horas en Tunja desapareciera apenas me naturaleza, para que

sentaba en frente de aquella piedra, me concentre el hombre haga

viendo fijamente aquella piedra, intentaba conciencia de sí El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 598

encontrar cual era mi conexión con aquella roca y mismo. la calidez que sentía, después de un par de minutos Al observar de observarla fijamente, note que a la piedra le detenidamente y faltaba un pedazo y parecía maltratada por el estando inmensos tiempo, a lo que la relacione inmediatamente en la tierra, se conmigo y con aquellas heridas que con el tiempo manifiestan los con cada persona adquiere, malestares del decidí entonces en enfocarme en esa imagen de hombre. aquella ave que se dibujaba con aquellas moyas y Cuando la razón haciendo esto fue que sentí como aquella piedra perturba el espíritu, pedía silencio y tranquilidad, un sitio tan sagrado el sentir pide de conexión estaba olvidado y muy descuidado, en silencio para lograr sus Moyas había agua sucia y empozada, escuchar el manchaban las alas de aquella ave que mis ojos corazón. veían, esa agua sucia no le permitía volar, Para lograr estar en

Fue admirar la majestuosidad de un sitio de mucha paz y tranquilidad fuerza, fuerza que se necesitaba para lograr estar se debe en aquel sitio, la inseguridad que sentíamos junto desprenderse de lo a mis compañeros de grupo, era la prueba que material. aquel sitio nos estaba colocando, para luego Lograr conectar con mostrarnos y llenarnos de la gran fuerza que este las fuerzas de sitio tiene, pero muchas veces el arriesgar, se torna nuestros como un salto de fe y dar ese salto cuesta mucho, antepasados, cuesta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 599

porque nosotros estamos apegados a cosas vacías tanto debido que de las cuales no queremos alejarnos y nos da hoy en día somos miedo llegar a perderlas, y ese miedo fue el que no ajenos a ellos. nos permitió seguir en aquel lugar.

Divinidad

Mística por lo que entré a la laguna a darme un baño, al Las aguas sagradas entrar a la laguna sentí, como el agua apagaba el de la madre tierra magma del volcán que yo tenía en mi corazón, extinguen las aunque el agua solo me daba en la rodillas, sentía llamas de dolor del como desde mis pies se apagaba un incendio de corazón. rabia y enojo, esta sensación recorría todo mi La madre tierra cuerpo, y la reemplazaba con un frío lleno de acoge el negativo frescura y alivio, en el suave arrullo sentí que era momento de sumergirme de sus aguas para completamente, luego de tomar aire sanarlo. profundamente, me sumergí por un par de Al entregar el segundos, al salir del agua tuve una extraña negativo el cuerpo sensación, era como si una capa se desprendiera descansa y corazón mientras iba saliendo del agua, como si esa capa logra latir más El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 600

fuera quedando en el agua de la laguna, profundo.

inmediatamente supe que era de lo que me estaba La rabia es el ancla

desprendiendo, era toda la rabia con la cual que le impide al

cargaba la mayor parte del tiempo, hombre moverse en

Como sentía todo esto me sumergí un par de veces lo sagrado.

más sacando esa rabia y ese negativo de mi

cuerpo, lavándome a mí mismo, descargando la

maleta que estaba tan llena de rabia, luego de un

par de minutos me sentí bien, sentí mi cuerpo más

liviano, cómodo, tranquilo, así que poco a poco

empecé a salir del agua, dejando atrás la rabia que

tanto me costaba cargar siempre, al salir me senté

en la playa a pensar en todas esas ocasiones en las

que había sentido lo mismo y en cómo me sentía

ahora y, me propuse sentirme siempre como me

sentía en ese momento tan tranquilo y lleno de paz,

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 601

con la madre, los otros y uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres Llegaríamos primero al municipio de Tunja para ir Muestra la realidad (Mitos) al pozo de Hunzahúa , Según cuenta la leyenda, el de un antiguo

Cacique Hunzahúa quien pretendía el amor de mundo fantástico,

Noncetá, una de sus hermanas, decidió un día, con lleno de vida y

el fin de escapar de la vigilancia de su madre, magia que hacen

llevar a su hermana a la provincia de los chipataes soñar al hombre

para comprar algodón. Allí la sedujo y al regresar, “moderno”.

al notar la madre que el vientre y pechos de su hija Permite entender el

crecían, se enfureció y con toda su ira cogió un mundo desde lo que

palo para golpearla, pero la muchacha se ocultó nuestros antiguos

tras el recipiente en el que se preparaba el licor, y ancestros vivieron y

éste, al ser golpeado se quebró, dejando derramar sintieron.

la chicha contenida en él formando un pozo que se Historias que con el

convirtió en agua. pasar del tiempo, la

Luego de esto partimos a un lugar conocido como urbanización y la

los Cojines del Zaque, un lugar indígena situado globalización se

en la comuna sexta de Tunja, construido por el pierden en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 602

pueblo Muisca como centro de adoración al sol, tiempo. astro rey y donde se celebraba una ceremonia Lo que cuenta las procesional en la época prehispánica. La estructura historias es un está conformada por dos grandes monolitos en sueño que hoy es forma de cojín a un costado del cerro de San casi imposible de

Lázaro en el occidente de la ciudad. Era uno de los imaginar para el principales sitios del cacicazgo de Hunza hombre común.

Al día siguiente nos dirigimos a Sogamoso, al museo arqueológico en donde se encuentra el histórico Templo Del Sol. El término "Sogamoso" proviene del vocablo chibcha "suamox", que significa "morada del sol". El lugar fue elegido por

Bochica como sede de los sumos sacerdotes; allí se encontraba "El Templo del Sol", que por su suntuosidad y las riquezas que contenía, era el mayor centro religioso de los Muiscas. Desde los

Cojines del Zaque, en los altos de San Lázaro, el cacique y los sacerdotes se arrodillaban mirando hacia el lugar.

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso… El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 603

Luego de esto nos concentramos como grupo en Por medio del ritual silencio, para darle paso a nuestro trabajo se sana al hombre y encomendado, en el bohío por los abuelos en la a la madre tierra, casa del Mamo Roberto, el cual consistía en compartiendo sentarnos en cada lugar sagrado en silencio a hacer mutuamente sus

“pagamento”, es decir a colocar desde nuestro cargas. corazón y pensamiento cosas para que aquel sitio El ritual permite este mejor, allí tendríamos que hacer lo que en limpiar los ropajes aquella noche de trasnocho en la casa del Mamo se al hombre, para que nos había enseñado por parte de los abuelos y el de esta manera

Mamo Roberto, aquella enseñanza estaba dirigida llegue lo más puro a la forma adecuada en que deberíamos llegar a los y trasparente sitios sagrados, con una vestimenta limpia, es decir posible a la tierra. sin peleas, sin rabias, sin mal genios, con un El ritual es un objetivo y propósito claro en nuestra mente, con proceso reciproco unión y fuerza como grupo, sin miedo y con en donde la Tierra mucha entrega para dejar aquellos pensamientos me ayuda a sanar negativos, que siempre hacen sentir un gran peso mientras yo la sobre nosotros ayudo a ella. luego al darme cuenta de ello sentí que esta La conexión que piedra necesitaba un poco de ayuda y cuidado, así brinda el ritual que centrándome en aquella roca empecé a poner permite que el pensamiento, esos pensamientos negativos que hombre vea su El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 604

hasta ese momento me habían llegado durante el esencia viaje, pensamientos como el cansancio, pereza, representada en una aburrimiento, todas estas cosas las entregaba al roca. sitio para descargar mi mochila, para que esta roca Para pagar siempre sanara, habían pasado tal vez un par de minutos hay que entregar el cuando de repente a mi cabeza llegó la imagen, de negativo, pues es que yo era esa roca, y que era yo, el que estaba hay allí donde la madre parado, esa roca me representaba a mí, y lo que tierra lo trasforma. estaba haciendo yo, era de alguna manera sanarme, sanándome a mí mismo; aquella roca me estaba ayudando a sanar esos pensamientos negativos que hasta el momento habían llegado a mí; tal vez por eso sentí su calidez cuando llegué a ese sitio, tal vez aquella piedra me dirigió a ella porque sabía que al igual que ella yo también necesitaba ayuda y necesitaba sanar, los dos necesitábamos sanar así que en silencio nos dispusimos a concentrarnos y a entregar pensamiento negativo, es decir todos esos pensamientos llenos de malestar que podríamos haber sentido, como sentimientos de rabia, cansancio, tristeza y soledad, todos estos pensamientos los entregaríamos, allí al lugar para hacer nuestro pagamento El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 605

Abuelo y sabedor

Plantas

Antes de comenzar el profesor Luis Eduardo me El Ayu calla los brindó un poco de ayu, el cual recibí con mucho pensamientos y respeto y mentalmente diciendo “ ayitu por favor centra al hombre ayúdame y bríndame un poco de tu gran sabiduría, para que hable el para lograr acercarme a ti y la Madre tierra”, luego espíritu. lo tome entre mis manos para ponerlo en mi boca y El Ayu frena la empezar con el momento de silencio en donde carrera de cada uno de nosotros haría pagamento, mientras pensamientos que masticaba al ayu, sentía el sabor amargo de la tiene el hombre en planta que bajaba por mi garganta, un sabor que en la cabeza, para un principio no es agradable, mientras sentía ese darle un respiro. sabor amargo en mi boca, mi cuerpo se llenaba de serenidad, mis pensamientos lograban centrarse, de alguna manera el ayu me ayudo a que silenciar mi cabeza para que el corazón fuese capaz de sentir luego el profesor Luis Eduardo me brindó un poco Ambil endulza el de ambil o también llamada miel de tabaco,(el pensamiento para El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 606

tabaco es una planta que da la claridad de que el hombre

pensamiento y la palabra); el profesor me explicó pueda encontrar las

que debería tomarlo con las dos manos y palabras adecuadas

presentarme ante él, diciendo mi nombre completo para hablar.

a lo cual hice caso. Me presenté y luego tomé un El ambil aclara el

poco de la tapita de la que el profesor me estaba pensamiento.

ofreciendo, al probarlo inmediatamente sentí como

el hambre y la debilidad que estaba sintiendo

(debido a que ese día estábamos ayunando, que es

una forma de también hacer pagamento), fue como

si el ambil me hubiera llenado de fuerza y

vitalidad

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Allí nos encontramos con unos grandes pilares Permiten la

hechos de roca, eran gigantes, de unos 6 metros de conexión al

largo, y se veían de manera muy imponente, para universo de los

mí fue inevitable no pensar en cómo nuestros ancestros.

antepasados habían logrado hacer estas grandes En ellos se

rocas y con qué objetivo las habían construido, encuentran los

recorrí todo el lugar intentado descifrar el porqué secretos del mundo.

de estas grandes rocas, quise pensar como mis Son el puente entre

antepasados y con toda mi concentración quise ver el plano físico y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 607

las mil maneras en que estas rocas estaban racional, al plano ubicadas y así encontrar un patrón de donde consciente estabas situadas espiritual.

, me levante y lentamente caminando le di una Allí se mueven vuelta a las 7 piedras que en forma de circulo fuerzas tan solo conformaban el Templo de Goranchacha, allí percibidas por los donde una vez aquel hijo del sol predijo la hombres de corazón esclavitud que su pueblo tendría que sufrir en un consciente. futuro cercano, para luego desaparecer , así mismo Es la manera en que nosotros nos despedíamos de aquel sitio. la naturaleza le

Luego de terminar allí nos dirigiríamos a las trasmite al hombre

Moyas de Farfacá; una gran piedra cuya parte sus conocimientos superior plana presenta unos agujeros redondos de Cojines del zaque aproximadamente 25 y 30 cm de diámetro. Según lugar de imponente las personas de la región, se trata de una piedra fuerza, donde antigua, es decir, indígena. Según lo que el nuestros ancestros profesor nos había explicado este sitio sería un con mano firme punto muy importante de conexión entre el mundo gobernaron. de lo visible y el mundo de lo visible, en palabras Lugar de fuego, que del profesor Luis Eduardo “como si fueran puertos permite soñar con de conexión de internet espiritual” un lugar muy la belleza de un sagrado y de mucho respeto templo que alza

Luego de esto partimos a un lugar conocido como entre las cenizas de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 608

los Cojines del Zaque, un lugar indígena situado un pasado cruel. en la comuna sexta de Tunja, construido por el pueblo Muisca como centro de adoración al sol, astro rey y donde se celebraba una ceremonia procesional en la época prehispánica. La estructura está conformada por dos grandes monolitos en forma de cojín a un costado del cerro de San

Lázaro en el occidente de la ciudad. Era uno de los principales sitios del cacicazgo de Hunza luego de recorrer todo el lugar nos dirigimos al deslumbrante e imponente templo del sol, era increíblemente grande y hermoso, cada tejido y cada cosa que había dentro y fuera, estaba muy bien hecha y construida de manera detallada, (me alcancé a imaginar cómo había sido el templo original, pues si este que era una reconstrucción del original y era hermoso, como podría haber sido aquel templo del sol del que relataban en los escritos como una maravilla indescriptible), grandes pilares de oro, que sostenían un techo lleno de palmas que tocaban el cielo, una estructura llena de colores, con paredes entre tejidas de un color amarillo marrón y detrás de esta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 609

maravilla un cielo azul pintando con un arco iris;

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 610

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

9.Rumbo a la laguna Sagrada de Iguaque

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

Estando allí en aquellos pequeños cuartos de El dolor de la

tortura se sentía un frio, que estremecía hasta la injusticia prevalece

última parte del cuerpo, en aquellas mazmorras por años, trasciende

existía un ambiente más frio que en cualquier otra la muerte y es

parte de la iglesia, y era claro él porque, la percibido por sus

frialdad con la que habían torturado y matado a descendientes.

cientos de indígenas, se mantenía en el tiempo y El sufrimiento el

aquella recamara lo manifestaba con el frio que se dolor y el horror se

conservaba, esta frialdad que trasciende los años manifiestan en el

llega a los corazones de cada de los hijos de la cuerpo como un

tierra, generando malestar, dolor, tristeza e incluso frio inmovilizador. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 611

un sentimiento de inconformidad y de no olvido, El agua es el al llegar en las horas de la mañana nos atributo más puro encontramos con una gran sorpresa, la laguna se que la madre tierra nos mostraba con una belleza indescriptible, el sol le brinda al ser brillante se reflejaba en sus aguas claras , la humano. maleza parecía insignificante al lado de sus La razón y el imponentes aguas, el ambiente ahora se sentía negativo muchas diferente, era tranquilo y muy reconfortante, el aire veces ciegan los corría con una brisa muy cálida, cada uno de ojos impidiendo ver nosotros no podía apartar la mirada y sentir una la belleza con que agradable energía, que desde la laguna llegaba; se muestra la madre mientras impactado observaba, de repente me tierra. llegó un pensamiento de lo que representaba la Es el resultado de la laguna como la Madre, ese ser esencial en cada unión entre lo que uno nosotros el cuerpo recibe y

Las matas acuáticas, que están encima de la lo que el alma laguna son como cada uno de nosotros, que siente. estamos en la madre, (como lo era el agua en la Fuerza inexplicable laguna), pero al igual que estas plantas acuáticas, e ineludible que nosotros tan solo flotamos yendo de un lugar para nace del corazón otro, a la merced del viento...sin encontrar un para conectar con lo lugar en la tierra, en la MADRE, para lograr sagrado echar raíces y encontrarnos realmente con ella... La fuerza que nos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 612

Como nos pasó a primera vista con la laguna, mantiene firmes en cada uno de nosotros, muchas veces nos dejamos la tierra, es la llevar por lo que nuestros ojos ven, no somos fuerza de nuestros capaces de sentir, ni de ver más allá, por eso, tan ancestros, la fuerza solo vimos la maleza y no la laguna...Nos faltó de nuestra madre, sentirnos parte de la tierra, sentir nuestra raíz, nuestra raíz. sentir la laguna y ver más, con esto me sentí La fuerza que nos realmente inseguro me falta más Fe, para lograr permite sentir ver con los ojos del corazón y no con los ojos de la nuestras raíces razón que aunque este muy acostumbrados a ellos, como propias, se no me permiten ver y sentir a la Madre Tierra .... encuentra inmersas

en las aguas turbias

de nuestra fe.

Divinidad

Aspire profundamente y me prepare para hacerlo, Lo más puro que un debo admitir que los comentarios de la gente del hombre puede pueblo, me intrigaban un poco, pero me sentía llegar a descubrir, realmente bien y seguro de del propósito en mi sentir y percibir en corazón, así que me quite la mayor parte de mi conexión con la ropa, quedando solo con mi pantalón, luego me esencia de la vida. dirigí a una piedra que estaba a la orilla de la La representación laguna, puse mis pies firmemente en ella y moje de Dios en la tierra. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 613

mi cabeza con el agua de la laguna, y de inmediato Llega a lo más sentí que entre en la laguna, era como si pudiera profundo de una sentir todo lo que tenía a mi alrededor, estaba persona para conectado al todo, estaba con la madre, sentía que mostrarle y hacerle debajo de las plantas de mis pies, habían raíces que sentir el universo en se extendían por toda la montaña, era capaz de ver un suspiro, la vida lo que pasaba sin necesidad de usar mis ojos , los en parpadeo, y a ojos de la racionalidad por un momento se Madre en un latir apagaron y con un fuerte latir desde mi interior los profundo. ojos del corazón se abrieron para mostrarme la Volver a nacer inigualable belleza y magia de la tierra. desde las aguas de

Era algo fuera de la imaginación, cerré mis ojos y la madre tierra, podía ver claramente lo que pasaba a mis espaldas volver al inicio de sin necesidad de voltear a ver, realmente yo era la la vida tomar montaña, yo estaba en la montaña y las raíces de conciencia y sentir. mis pies conectaban con el todo, me permitían sentir y llenarme de todo, de todo lo que había. No sé realmente como expresarlo en palabras, pero creo poderlo comparar con lo que un bebe siente en el vientre de su madre estando conectado por el cordón umbilical (un vínculo de vida, en el que se alimenta se cura y se cuida); estuve allí conectado con la madre tierra un par de minutos, volví al El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 614

inicio de la civilización mhuysqa y me encontré en el inicio de mi vida.

Mística

Al llegar nos encontramos con una imagen Volver al inicio de realmente indescriptible, era realmente hermosa la la civilización es laguna, e increíblemente aunque estábamos en la volver a nuestro cima de una montaña, donde hay paramo, yo no hogar. sentía frio, era como una sensación de estar en El hogar jamás se casa, realmente muy agradable y muy tranquilo, un olvida y como hijos ambiente de paz y quietud, un paisaje para siempre lo quedarse toda una vida admirándolo en silencio, a recordamos, aunque la orilla de la laguna. a veces no lo cada uno de nosotros se concentró en silencio, reconozcamos. admirando la laguna, pensando el propósito del por Abrir el corazón qué se estaba allí, en un sitio tan sagrado como lo para que la madre era la cuna de la civilización mhuysqa, por lo que Tierra entre a sentí que la única manera de hacerle saber a la sembrar en él. laguna del por qué estaba allí, era abriendo mi corazón para que la laguna entrara en él y buscara si mi propósito era bueno, y ella misma me juzgara, ya que mi propósito era el de conocer y entender El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 615

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

entiendo hoy que la Madre es el mismo sentir por La madre como

Dios es la fe que elijo para mí, la fuerza que me principio

guiara por la vida y los diferentes caminos que me fundamental de

encuentre ella, es la Madre tierra la que llena mi vida y de origen.

corazón y calma mi alma, cuando subo la montaña, La madre tierra nos

cuando sus aguas mojan mi cuerpo y cuando su llena de fuerza por

aire refresca mi ser, pero para pueblo occidental de medio de los

hoy al igual que lo fue para los colonizadores es elementos de la

muy difícil de entender, puesto que han olvidado naturaleza.

sus raíces. Los caminos

porque yo sabía que en realidad uno en esta vida guiados por la

recorre un camino el cual creé correcto a través de razón dejan un

los años hasta morir sin saber por qué, un camino sentimiento de

que hace sentir a las personas vacías y que sus vacío interior.

vidas no tienen sentido, ya que desconocemos Reconocer a la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 616

nuestras raíces y antepasados, sin saber de dónde tierra como inicio

venimos, sin escuchar y sentir la tierra siempre de todo, permite

estaremos perdidos en la vida, viviendo en la desarrollar la vida a

aparente globalización, que cada vez deshumaniza partir de ella.

más a las personas y las convierte en entes Sentir la tierra es

dominados por la tecnología. En el camino de lo volver a ella.

mhuysqa el camino del sentir, por el contrario se

honra y se reconoce nuestras raíces haciéndolas

parte de nuestro vivir, para que de la mano con la

Madre Tierra logremos cada día ser más humanos

y encontrar el equilibrio que nos llenara de paz.

Usos y Mito Metacategorías costumbres Continuando con nuestro viaje en la ruta Por medio del mito (Mitos) civilizadora de Bochica llegamos a la laguna de se mantiene el

fúquene (lugar en donde Bochica estuvo para conocimiento más

luego dirigirse al pueblo de Susa), es un cuerpo de antiguo del mundo.

agua dulce situado en el territorio de Fúquene, Las historias

entre los departamentos de Cundinamarca y contadas por los

Boyacá, esta laguna es increíblemente grande abuelos a sus nietos

según nos comentaba la gente del lugar, era tan construyen El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 617

grande que su envergadura llegaba hasta laguna de perduran en el

Tota, al preguntarle a las personas cercanas nos tiempo y comentaron, que recordaban historias acerca del construyen el mito.

Dios Fu que cuidaba la laguna, además les habían Las historias contado los abuelos, que allí en la laguna los contadas por los indígenas hacían algunos rituales y adoraban al abuelos generan

Dios Fu respeto en sus

Una de las cosas que más me impacto al nietos y miedo en preguntarle a una señora del lugar, fue que nos quien no dijo: la laguna está viva tienen que tener cuidado comprende. con ella, no se vayan a meter a la laguna por que no vuelven a salir… era increíble que las personas dijeran que la laguna estaba viva y que sentía

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso…

Al terminar mis palabras dimos inicio al ritual de Entregar y pagar en pagamento en donde cada uno de nosotros se espiritual es concentraría en todos los alimentos semillas, y agradecer y plantas para entregarlos a la laguna, los alimentos reconocer a la que entregué fueron alimentos como arroz, lenteja, madre tierra por los habichuela, carne, pollo, zanahoria, papa, yuca, alimentos que ella El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 618

plátano, garbanzo, también entregué en brinda. pensamiento semillas de mandarina, mango, uva, Entregar es ciruela, naranja, coco y lulo, las plantas que logre devolver a su recordar en ese momento para entregarlas a la origen los laguna fueron la planta de coca, el cilantro elementos cimarrón, el árbol de cacao, la mata de café, el espirituales de los

árbol de ciruela, y la palma de coco; ya tenía todo que hemos hecho listo en mi pensamiento, para entregar al sitio uso, para que sean sagrado, así que lo hice, lo entregue con gran sanados por madre cariño y apertura a la laguna, al entregar todos tierra. estos alimentos sentí que aquella laguna es lugar Al danzar se logra de Raíz, una conexión con la el profesor Luis Eduardo empezó a tocar una madre tierra, ya que tonada con su armónica, cantándole a la laguna, el corazón se poco a poco el profesor nos entregó un conecta a la tierra a instrumento a cada uno de nosotros para cantarle a través de los pies. la laguna como grupo, cada vez la tonada sonaba El agua de la laguna más bonita, y cada vez me sentía más lleno de danza por medio de energía, así que me levante y mientras tocaba la la melodía sentida armónica, empezamos a danzar todos, danzamos desde el corazón de alrededor de unos 15 minutos, fue un momento una armónica. muy bonito, lleno de energía en la que todos nos conectamos y le cantamos y le danzamos a la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 619

laguna con mucha alegría y agrado.

Abuelo y sabedor

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Continuando con nuestro viaje en la ruta Las grandes lagunas

civilizadora de Bochica llegamos a la laguna de son mantas suaves

fúquene (lugar en donde Bochica estuvo para y cristalinas que

luego dirigirse al pueblo de Susa), es un cuerpo de alimentan las raíces

agua dulce situado en el territorio de Fúquene, de la tierra.

entre los departamentos de Cundinamarca y La laguna es un mar

Boyacá, esta laguna es increíblemente grande que oculta misterios

según nos comentaba la gente del lugar, era tan e historias en sus

grande que su envergadura llegaba hasta laguna de dulces aguas.

Tota, al preguntarle a las personas cercanas nos Por medio de ellos

comentaron, que recordaban historias acerca del la madre Tierra se

Dios Fu que cuidaba la laguna, además les habían manifiesta para que

contado los abuelos, que allí en la laguna los el hombre la logre

indígenas hacían algunos rituales y adoraban al sentir. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 620

Dios Fu Sitios donde la

Nos sentamos como grupo en silencio, a admirar la naturaleza se

laguna y hacer nuestro trabajo de pagamento, cada muestra como un

uno de nosotros se concentró en silencio, ser viviente.

admirando la laguna, pensando el propósito del por

qué se estaba allí, en un sitio tan sagrado como lo

era la cuna de la civilización mhuysqa,

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 621

Fe

Entiendo hoy que la Madre es el mismo sentir por La fuerza que guía

Dios es la fe que elijo para mí, la fuerza que me mi corazón hacia la guiara por la vida y los diferentes caminos que me madre tierra, encuentre ella, es la Madre tierra la que llena mi haciendo que sus corazón y calma mi alma, cuando subo la montaña, aguas me sanen. cuando sus aguas mojan mi cuerpo y cuando su La fe me permite aire refresca mi ser, pero para pueblo occidental de hallar la curación hoy al igual que lo fue para los colonizadores es en las aguas de la muy difícil de entender, puesto que han olvidado laguna, la sus raíces. tranquilidad en el

aire que respiro y la

fuerza para

continuar

caminando por la

tierra.

Cuidado

Sanación

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 622

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

10.Categorización

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

la larga caminata y el transcurso consecutivo de las Caminar de la mano

horas no era más que minutos, el descargar el con la madre tierra

negativo me hacía ver que el camino estaba menos es como dejarse

empinado, el cansancio era increíble y llevar por las

absolutamente inexistente, recorrer dos horas corrientes del mar.

montaña arriba, fue media hora para mí; entendí Caminar siempre de

que lo que nos dijo el abuelo al comenzar el la mano con de

ascenso a la montaña, fue para que la madre nos Madre Tierra.

llenara de fuerza mientras sanábamos el negativo, El mensaje más

pues al dejarlo en la tierra nuestro ser podría bonito y puro que

caminar libremente sintiendo la tierra, sin la idea se puede recibir es

occidental del cansancio el de madre. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 623

el Abuelo se dirigió a nosotros y nos indicó una La madre lo es flor que había entre los arbustos, uno a uno fuimos todo, ella vive en hacia el lugar señalado, cada uno con la indicación mí y yo vivo previa de poner pensamiento bonito, y de escuchar gracias a ella. el mensaje que la Madre nos transmitiera, cuando La firmeza de la llegué al lugar y estuve frente a la flor percibí la experiencia frente a sensación de tener a mi Mamá en frente, el la inestabilidad de sentimiento fue más grande y lo que empezó a quien aprende a llegar a mi pensamiento y a mi cuerpo era la caminar. sensación de su compañía, mi mente se movía en recuerdos de lo vivido junto a ella durante mi niñez y mi adolescencia, días especiales para ella y para mí así fui fijando mi mente hacia un par de árboles que se estremecían detrás de las piedras uno con más fuerza que otro, de manera representativa y sentí a un Abuelo y un hijo, un abuelo y un aprendiz, mientras el más alto de ellos, al parecer el más viejo se mantenía firme el otro más pequeño se movía con la brisa y el viento, entendí que así pasa conmigo y en general con nosotros, pues mientras la falta de fe o la fuerza del negativo nos estremece El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 624

Divinidad el Abuelo abriendo sus brazos en forma de arco Las nubes grito con ímpetu “¡fuerza Madre fuerza, levántese descendieron del madre fuerza, fuerza!” seguido de esto desde lo cielo para alimentar alto del cielo y entre las montañas las nubes las aguas sagradas comenzaron a descender, era como si el Abuelo las de la laguna. estuviese llamando y condensando hacia el centro El cielo y la tierra de la Laguna, fue así como de manera pausada las unidos en el vínculo nubes bajaron hasta tocar el agua de la Laguna, el primordial de cielo para mí, estaba siendo parte integradora de la madre.

Laguna y entre esas dos entidades se movían La magia de la fuertes energías de fuerza naturaleza no puede

¡Esto es real! Existe una fuerza inexplicable para ser expresada en mí, una fuerza que tan solo la he podido imaginar palabras. en libros, lo estoy viendo ahora. Es increíble mi La magia que no es cuerpo está totalmente inmóvil ya que está magia, lo invisible presenciando algo mágico. Presenciar la magia de hecho visible. un Abuelo, la magia de la naturaleza que no es Las fuerzas del magia, sino más bien la esencia de lo VIVO, que universo se unen en se convierte para nuestros ojos en algo mágico, es un único acto de la fuerza, energía y esencia que mueve la tierra. Y belleza, yo, con mis propios ojos que aun inmaduros, no deslumbramiento y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 625

ven más allá de lo “racionalmente real”, pude ver y perplejidad. sentir un evento Universal, la naturaleza de la esencia de la tierra.

Mística al llegar al lugar sentimos que era necesario La grandeza que sentarse a limpiar nuestra ropa espiritual (sentir impone respeto, al una fuerza tan grande y tan pura que hace sentir quererse presentar necesaria, una preparación de limpieza, de estar en de la mejor manera el mejor estado posible, para colocarse ante aquel ante tal entidad lugar) espiritual. el padre espiritual, los sabedores y guías Reconocer de la ancestrales se mantienen firmes a mi lado para manera más guiarme y dar apoyo; la sensación que por ese humilde la fuerza momento recorría mi cuerpo, era la de mantener la de abuelo cabeza abajo como si no se tuviera el permiso de agachando la levantarla, pues estaba frente a algo tan grande que cabeza ante él. era mejor presentarse con humildad, con temblor en el cuerpo y no el temblor que surge a partir del miedo, un temblor que en mi genero respeto ante el lugar.

Metacategorías El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 626

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

el Abuelo tomó dos piedras y mirándolas muy El origen del

detalladamente nos habló acerca de una historia mundo a partir de

que databa la serie de mundos que había existido una pequeña roca.

en la Tierra y, que muy seguramente estaban La historia del

impresas en esas piedras, decía que en ellas se universo contada

guardaba mucha información, en cada grieta plasmada en las

estaba impresa información sumamente importante grietas de una

y que ojalá pudiésemos nosotros mismos ser pequeña roca.

quienes la descubriéramos.

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

Desde la planta baja de la montaña sentí una (Madre)Vinculo

diferencia leve en esta nueva oportunidad que esencial de vida que

subía, comenzar el ascenso fue sentir nuevamente jamás termina, pues

la fuerza de Madre(la fuerza inigualable e continúa más allá

inexplicable que sentimos, cuando nuestras madres del plano físico y la

biológicas nos acogen y nos cuidan, aquel amor muerte.

que recompone y nos renueva); Lazo primordial

la tierra al igual que nuestras madres biológicas, que llena de fuerza El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 627

nos dan todo lo que necesitamos para convertirnos el alma, reconforta

en un ser humano, nos alimentan, nos cuidan y nos el espíritu y llena de

dan fuerza, en los momentos en que necesitamos esperanza a la

de ella; es por esta razón que la considero Madre), realidad vacía y

Por tanto, el pensamiento dulce y bonito que lógica.

mantuve fue el de tenerla conmigo, acercarme con El sentimiento más

un abrazo fuerte y volver a ese vínculo fuerte y profundo y puro

bonito de Madre e hijo(a aquella conexión vital que cualquier ser en

que se tiene al inicio de la vida, donde 2 seres la tierra jamás

existen unidos por un lazo inseparable, un lazo que podrá sentir por

continua a lo largo de la vida, mientras la madre otra persona

alimenta y cuida pero esto, en algún punto se diferente a Madre.

olvida, dejando de lado aquel lazo vital, el vínculo

de Madre e Hijo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres , el Abuelo narraba la historia del río que años La historia es lo (Mitos) atrás por allí mismo pasaba, adicional a esto quiso escrito, el mito es

decirnos unas palabras: “de ustedes va a depender vivir.

lo que desde este momento en adelante logren para Vivir el mito es

la Madre Tierra, los Abuelos como yo y los vivir una realidad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 628

antecesores a mí lo que hemos dicho ha quedado que se asemeja a un ya plasmado aquí, ahora su trabajo es vivir pues sueño. finalmente la historia es lo escrito, el mito es Bochica como vivir… , ahora tendrán que vivir y recorrer el Mito, héroe civilizador, vivir, y para ello, es que están ustedes aquí” quien guio y enseño don Segundo y la señora Blanca, en primer lugar las tradiciones hoy tuvimos la oportunidad de hablar con don Segundo arraigadas al pueblo un anciano de unos 72 años aproximadamente, nos boyacense. contó acerca de su conocimiento sobre Bochica, comenzó su relato contando como los indígenas

Muhyscas habían llegado al pueblo de Iza, más exactamente a la cueva del diablo o de Bochica, los indígenas de entonces habían llegado luego de haber sido sacados de su territorio por los españoles, huyendo luego de aquel destierro se dirigieron a la cueva de Bochica donde éste en presencia misma les enseñó el arte de hilar la lana haciendo uso de las piedras conocidas como torteros y adicional a ello, también les enseñó la forma adecuada de cosechar la tierra, incluso les dio pautas claras acerca de cómo convivir entre ellos(en paz y armonía de la mano de la tierra, cuidando de ella y de esta misma forma ella El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 629

cuidando de ellos), finalmente después de tiempo de enseñanzas los llevo a la laguna y poniendo sus pies sobre una piedra se sumergió en ella para desaparecer, según la historia en la piedra donde

Bochica puso su pie por última vez quedó marcada su huella,

Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra, confieso… llegamos a la hacienda Versalles seguimos la Por medio de la indicación del abuelo de empezar a trasnochar, palabra que surge para de este modo, llegar de una manera adecuada del trasnocho se y tranquila al lugar sagrado, comenzó a plantear su limpia el ser. discurso diciendo que en la actualidad estábamos Para presentarse a vendiendo nuestra esencia y en este sentido a un lugar sagrado es nosotros mismos, somos aire, agua, tierra y fuego necesario limpiar y dichos elementos han venido siendo los ropajes por embotellados y vendidos sin ninguna restricción, medio del círculo siendo así una limitación al momento de honrar de palabra. esos elementos en la Madre Tierra, nos estábamos El ritual es la vendiendo, en cierto modo a nosotros mismos; preparación

El ritual(el cual consiste en un saludo de mucho necesaria que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 630

respeto, a nuestro territorio a nuestros ancestros, necesita el espíritu a nuestros linajes, a nuestras familias, y en para conectar con la especial a la madre tierra, de esta manera y madre tierra. honrándolos nos sentamos entorno al fuego, para Agradecer de compartir palabra, la cual sirve como confesión manera espiritual es que limpia y descarga nuestros corazones, de esta la mejor manera de manera la palabra que se comparte entorno al agradecer, por todo fuego es palabra de sanación y sabiduría) lo recibido por la

(en pensamiento se imagina, oro, dinero, plata y vida. cristales, que de manera mental se dejan en el lugar, a manera de agradecimiento desde lo que el corazón, sienta necesario dejar como pagamento),

Abuelo y sabedor el abuelo Fernando decía que la muerte no era algo Aceptar la muerte negativo, ya que las personas que mueren se van a es tal demasiado descansar, ellos se van a descansar a la tierra, complicado, pues nosotros los que quedamos en vida somos los que nunca logramos nos los dejamos descansar, pues nos aferramos desprendemos del demasiado a la persona, a veces tanto que no ser querido. somos capaces de aceptar su muerte, hay que El amor es egoísta y aprender a desprenderse, y dejarlos ir a descansar trasciende la muerte

El abuelo desde el principio del ascenso nos dijo impidiendo que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 631

que mientras subiéramos la montaña, fuéramos alguien se vaya. limpiando el negativo de a pocos, es decir todos El abuelo siempre aquellos pensamientos de rabia y malgenio los intenta que las iríamos dejando en las plantas, (nos parábamos cargas que tiene su frente a una planta, la tocábamos pensado en esos nieto, se hagan momentos de rabia y de ira, ya que de esta manera menos pesadas al trasmitíamos esos pensamientos a la planta, para caminar. que la tierra los sanara). el abuelo es la

(tal vez, es por esta razón que nuestros abuelos experiencia andante pueden recorrer largos caminos, pues el tiempo, la de la vida. experiencia y la sabiduría les han ensañado a El abuelo se caminar en paz), comunica a través

Recuerdo la imagen inicial que tuve al momento del lenguaje de acercarme a la laguna, el Abuelo Fernando de obtenido a través de pie frente a la Laguna. En mi impresión era ver y la experiencia y una sentir que él hablaba con ella,(era sentir como por infinita sabiduría. medio de algunos canticos y silbidos, le El abuelo es un ser preguntaba a la Madre ¿cómo estaba?, ¿que de infinito necesitaba?, que le podíamos brindar), se conocimiento capaz comunicaba de una forma tan natural y fantástica de mover el mundo. que sentía como el vínculo entre ellos era muy La sabiduría que un estrecho abuelo posee, se

¡Esto es real! Existe una fuerza inexplicable para convierte en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 632

mí, una fuerza que tan solo la he podido imaginar poderes mágicos. en libros, lo estoy viendo ahora. Es increíble mi cuerpo está totalmente inmóvil ya que está presenciando algo mágico. Presenciar la magia de un Abuelo, la magia de la naturaleza que no es magia, sino más bien la esencia de lo VIVO, que se convierte para nuestros ojos en algo mágico, es la fuerza, energía y esencia que mueve la tierra. Y yo, con mis propios ojos que aun inmaduros, no ven más allá de lo “racionalmente real”, pude ver y sentir un evento Universal, la naturaleza de la esencia de la tierra.

Plantas el abuelo se sentó junto a una chimenea que había Limpia y llena de en el lugar, procedió a darnos medicina(un poco de fuerza el cuerpo. tabaco en polvo, que se inhala por la nariz, con el Expulsa el negativo fin limpiar el cuerpo y el negativo, el negativo son y en su lugar colma todos aquellos pensamientos que llenan de al cuerpo de energía malestar a la persona) y concentración.

Nuevamente nos volvimos a sentar para recibir la La medicina no se medicina de tabaco que el Abuelo quería limita a curar o a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 633

brindarnos, durante el proceso sentí como sí la sanar, también medicina fuera el alimento que me daba la Madre alimenta y llena de para llenarme de fuerza y curación(curación que fuerza. necesitaba pues sentía que, últimamente yo me encontraba muy alejado de mi madre biológica, esto me llenaba de tristeza, inseguridades, miedo y dolor, necesitaba del consuelo de la Madre, de su sanación) de camino al lugar el abuelo encontró una serie de Regalos de la plantas, recuerdo que se topó con una planta de madre tierra. moras silvestres, fue entonces que comenzó a Ejemplos de vida y decirnos que de no ser por la falta de fe de pureza. nosotros hacia las plantas sagradas de la Madre, Belleza inigualable podríamos obtener la cura a muchas enfermedades, que cuida y protege que incluso con esta planta junto con la panela era al hombre. posible curar el cáncer puesto que la cura La respuesta que el finalmente estaba en la intensidad de la fe que hombre ha buscado cada uno de nosotros tuviese, por años.

Mientras seguíamos caminando para el Abuelo era Alimento, vida, el encuentro con una planta sagrada y en este purificación y sentido era encontrarse con la cura a una curación. enfermedad o molestia del cuerpo, dentro de las El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 634

que nombro estaba el Aliso (planta para curar el

mal olor en los pies), cordoncillo, calicho y

chipaca, plantas que sirven para curar dolores de

cabeza y algunos otros malestares.

nos sentamos en un sitio cercano en donde Tabaco un gran

rapeando un tabaco hicimos, limpieza del negativo maestro que enseña

(existen varias formas de limpiar el negativo, pues de manera fuerte,

es algo que existe en la naturaleza del hombre, este con mareo limpia y

debe ser curado y entregado a su origen, la tierra, saca el negativo.

por medio de sí misma como lo es la planta de

tabaco)

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados Al día siguiente había programada una salida hacia Lugar sagrado

un lugar llamado la chorrera, importante para como sitio de

nosotros porque era una de las caídas de agua que curación profunda

provenía de la laguna sagrada, además, según nos Agua como

dijo el abuelo, en ella había una parte en específico principio de vida.

en la que el agua era muy curativa para los Laguna sagrada de

problemas de visión, Iguaque, vientre de

Después de esto nos llamó uno a uno para hacer madre gestante. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 635

una pregunta muy precisa, “¿qué propósito

pondríamos en el agua que íbamos a llevar para

nuestras casas?” En mi caso como propósito

específico estuvo el de la unión familiar, el Abuelo

me miró y me indicó como debería suministrar el

remedio dentro de mi familia para cumplir con mi

propósito (debía echarle un copita de agua a cada

comida que se prepara en mi hogar), luego me

pidió que mirara hacia un helecho en la parte de

arriba, mientras él acompañado de su melodía

llenaba la botella de agua;

de este modo y sin darme cuenta llegamos a la

Laguna Sagrada de San Pedro de Iguaque, muy

tranquilo sereno y sin pensamientos negativos me

fui acercando paulatinamente a la laguna, en mi

corazón sentía como los latidos de mi pecho iban

creciendo y se hacían más y más intensos.

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

era recordar cómo en su momento mi Madre había Reconocer y

alimentado mi cuerpo frágil y con su ayuda me entregar el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 636

había mantenido a salvo, en esta ocasión me sentimiento más

encontraba desvalido pero a nivel espiritual y era bonito del corazón,

lo que la Madre Tierra en su saber y su curación el amor de madre.

estaba sanando, así que sentía que a ambas debía

devolver de sus cuidados y su amor.

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 637

Identidad Otredad

Mismidad

Mismidad

11.Rindiendo cuentas a los mayores.

Narrativa Meta Categoría

Espiritualidad Espiritualidad

así que cada uno de nosotros se concentró en El entendimiento

silencio pensando en aquel propósito, por mi parte guiado por el

aquel propósito seguía muy claro era el propósito corazón da como

de conocer y entender, quería entender muchas resultado un ser

cosas y de a poco en el camino de lo muhysqa lo consciente.

estaba logrando, y no desde entender si no desde el Por qué el corazón

sentir, una fuerza más grande que estaba vence, donde la

conociendo de a pocos por este camino razón no entiende.

Divinidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 638

Mística

Metacategorías

Cosmogonía Cosmogonía ( origen del mundo)

Ley de origen (principios éticos y convivenciales

con la madre, los otros y uno mismo).

Usos y Mito Metacategorías costumbres

(Mitos) Rituales, herramientas y practicas

(Palabra, camino, trasnocho, circulo de palabra,

confieso…

el Mamo nos dijo, tiene mucha razón lo que dice la Cuando se danza se

niña lo que les ha pasado a ustedes es que se les llena de dulzura el

ha presentado el negativo, el frio que sentían era el cuerpo y se quita el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 639

negativo que se presenta para hacerlos sentir mal, negativo. cuando no se sienten cómodos con la piedra o el Cuando el corazón tronco en donde están sentados, ese es el negativo está lleno de calor y que los quiere hacer levantar, pero ustedes deben energía no queda persistir y pedirle fuerza a la madre para estar y espacio para que el para no dejar que el negativo les gane, una de la negativo llegue al mejores formas de hacer pagamento es danzando, cuerpo. danzando no llega el frio se les va el sueño , Danzar es uno de además de que a la madre y a los sitios les gusta los mejores mucho que les canten. pagamentos, ya que

Luego se levantó del sitio en el que estaba sentado al son de la música y nos dijo, levántense quítense los zapatos que les los pies hacen voy a enseñar una danza hoy vamos a trasnochar vibrar la tierra. danzándole a la madre, saco de su mochila su Existen danzas que armónica y empezó a tocar mientras danzaba le trasmiten alrededor del chunzua, nos mostró como se debía diferentes mensajes hacer y luego nos dijo que empezáramos a danzar y energías a la alrededor del tamuy, poco a poco tímidamente tierra. empezamos a danzar, luego el profesor Luis La alegría que se

Eduardo saco su armónica para acompañar al alcanza al danzar abuelo en la canción, por momentos la canción se durante horas aceleraba un poco nuestros pasos también lo extingue el hacían, la marcha de nuestros pies al caminar cansancio del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 640

estremecía la tierra, y el Mamo nos decía “ así, cuerpo y el corazón. así” luego él se sentó, y nos vio danzar por casi La melodía de la una hora cansados y sudando el Mamo nos dijo armónica de un descansemos, así que todos nos sentamos. sabedor (o Abuelo),

desaparece la

timidez y la

vergüenza, que

impide al hombre

moverse con

libertad.

Abuelo y sabedor el Mamo hablo con su hija marianita y luego El camino mhuysqa marianita nos dijo: esto es un camino por el cual se conoce cada uno de nosotros va andando, por el camino recorriendo el siempre se encuentra obstáculos, es como cuando territorio subiendo uno sube una montaña uno se cansa y a veces no montaña, cargando quiere seguir, y dice no puedo y lo invade el maleta y luchando negativo llegan los pensamiento malos y uno se contra sí mismos. pone a pelear, todos nosotros tenemos nuestro El recorrido del mal genio que muchas veces nos hace discutir con camino enseña más nuestros papás y con nosotros mismos, pero que el mismo nosotros no debemos dejar que ese negativo nos sentido de llegar a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 641

gane, porque nosotros vamos a llegar a la cima de la cima de la

la montaña a la punta de la montaña, para allá montaña.

vamos todos al encuentro con la madre… El que escucha

el Mamo nos dijo, tiene mucha razón lo que dice la consejo de abuelo

niña lo que les ha pasado a ustedes es que se les encontrara la

ha presentado el negativo, el frio que sentían era el sabiduría.

negativo que se presenta para hacerlos sentir mal, El que envejece

cuando no se sienten cómodos con la piedra o el aconsejando,

tronco en donde están sentados, ese es el negativo envejece

que los quiere hacer levantar, pero ustedes deben sembrando.

persistir y pedirle fuerza a la madre para estar y

para no dejar que el negativo les gane, una de la

mejores formas de hacer pagamento es danzando,

danzando no llega el frio se les va el sueño ,

además de que a la madre y a los sitios les gusta

mucho que les canten.

Plantas

Lugares Lugares sagrados Metacategoría sagrados

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 642

Bioetica Pathos – Amor Metacategoría

Vida

Comunidad

Psicoterapia Ego ancestral

Perdón (culpa, lo siento)

Fe

Cuidado

Sanación

Identidad Otredad El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 643

Mismidad

Mismidad

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 644

Procedimiento (momentos del camino)

Investigar y acercarse al conocimiento es el riesgo de situarse en uno o más niveles.

Adentrarse en el camino de la pretensión que supone la Psicología Ancestral Indígena, implica ver con los ojos del corazón, sentir con la vibración del cuerpo, tocar con lo intangible del ser, entender que no se está afuera más que para sobrevivir, pues el interior provee el conocimiento y la sapiencia que aguarda en la complejidad de la psique humana. Es el inicio de una búsqueda incesante, agotada tras el tiempo y la frustración de no obtener resultados en la inmediatez de la ciencia y el pensamiento lógico-racionalista, que divide el conocimiento y a su paso, fracciona la integración del camino, dejando así una mirada a blanco y negro frente a la maravilla de vida que llamamos Tierra.

Para hablar de un paso a paso hay que hablar poéticamente de esos pasos, pues el amor y la vida, son la esencia que devela el aprendizaje que ahora aceptamos con dulzura; lo plasmado aquí es un camino que se vincula con las prácticas del indígena, de los abuelos y de nosotros mismos como parte vivencial de la experiencia. Se plasma la perspectiva psicológica integral y transpersonal del sí mismo, influenciados por la fenomenología y la etnografía participativa y lo trascendente, tras la vivencia, se devela como la luz que enmarca el objetivo y el propósito consciente, activo y enraizado en el andar de la investigación.

En un inicio las narrativas son el elemento que da cuenta de la vivencia, narra rituales de trasnocho, pagamento, círculos de palabra, danzas, confiesos, proyecciones de tabaco, mambeo de coca, solsticios y equinoccios, camino entre lugares sagrados, trabajo etnográfico participativo y, la singularidad de la experiencia contada por escritos, los cuales, llevan impregnado el sentimiento, la emoción, la contemplación y los momentos más fructíferos para la construcción El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 645 del caminante. De este modo, se despliega el trabajo metodológico en el que diarios de campo, discusiones grupales y narrativas, comienzan a ser la base de la construcción teórica posterior.

El camino mismo va integrando cada parte del ser, por ello, el trabajo no radica en la producción, la indagación o el requisito por culminar un trabajo netamente académico, todo lo contrario, el trabajo es estar en la construcción de ese camino, trabajar desde lo espiritual, físico, psíquico, consciente e inconsciente el ejercicio terapéutico que, sin saber, se va dando en simultáneo con la investigación. La evidencia del trabajo es el viaje en lo profundo, es la exploración que da cuenta el proceso mismo de sanación escrito procesualmente en las narrativas, allí, los pensamientos, sueños, emociones y recuerdos, redirigen el sentido y orientan ese precioso descubrimiento de estar consigo mismo.

En síntesis, el camino resulta un compartir de momentos, experiencias y vivencias subjetivas del acercamiento a las prácticas y rituales propias de la comunidad Mhuysqa, para ello se toma el permiso de las autoridades sabedoras, con respeto y profunda convicción, se inicia el viaje, se anda por lugares sagrados que contribuyen a la construcción del saber. Para este momento de la investigación se tuvo en cuenta los siguientes lugares:

El pozo de Donato (Tunja, Boyacá) 2014

El templo de Goranchacha (UPTC, Tunja, Boyacá) 2014

Los cojines del Zaque (Tunja, Boyacá) 2014

Las Moyas (Tunja, Boyacá) 2014

Templo del sol de la cultura Mhuysqa. (Sogamoso, Boyacá) 2014

Laguna Sagrada de Fúquene, (Cundinamarca) 2014

Laguna Sagrada de Tota, (Tota, Boyacá) 2014

Piedra de Bochica (Iza, Boyacá) 2014 El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 646

Iglesia doctrinera (Sutatausa, Cundinamarca) 2014

Territorio de San Pedro de Iguaque, (Boyacá) 2014- 2015

Laguna Sagrada de Iguaque, origen de la cultura Muisca, lugar de nacimiento de Bachué

2014 – 2015

Territorio de Chiquiza, (Boyacá) 2015

Las piedras partidas (Iza, Boyacá) 2015

Territorio de Iza, (Boyacá) 2015

Territorio de Gameza, (Boyacá) 2015

Cueva de Toya (Gameza, Boyacá) 2015

Adicional a ello, estas grandes salidas vivenciales se fortalecen de las experiencias previas de personas que hicieron y siguen haciendo parte activa de la investigación macro, lo cual, muestra un crecimiento gradual del grupo de investigación y sus temas aquí planteados, referentes al mundo ancestral indígena. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 647

Imagen tomada de: http://suamena.blogspot.com.co/2008/04/mapa-de-la-ruta-de-bochica.html

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 648

RESULTADOS Y DISCUSIÓN.

Palabra final

En síntesis, lo evidenciado es el debate de la posibilidad teórica de un saber propio y en este mismo sentido una psicología propia, fundamentada en raíz, la cual no sólo se basa en la traducción del ojo eurocéntrico de la realidad humana, sino que tiene en cuenta la vibrante fluidez argumentativa de un lenguaje místico, espiritual y trascendental que en sentido fenoménico se devela como discurso de puenteos comunicativos integrales, los cuales evidencian que en lo indígena existe una base filosófica y cosmogónica capaz de sustentar una nueva alternativa o psicología ancestral, que dé cuenta de un camino de aprendizaje, aceptación y reencuentro consigo mismo, para que en última instancia toda esta complejidad de nuestra raíz ancestral lleve a una profunda de curación de lo humano.

No es un capricho por la palabra, es el derecho a entender que sí se tiene nombre propio es fundamental reconstruir las bases estructurales que ya fueron dadas, a través del mito como forma de conocimiento y sabiduría ineludible del mundo, es de vital importancia llegar al nivel de conciencia espiritual que permita el reencuentro con el sí mismo y con la raíz epistémica del ser humano en la tierra.

Ahora entendemos y proponemos la necesidad de vivir el mito, vivir la vida y el sentido de lo Mhuysqa, y para tal, promovemos la fundante intención geográfica y espiritual de recorrer y recoger la enseñanza del denominado “padre civilizador” Bochica, el maestro que entrega a los

Mhuysqas su conocimiento ancestral para la vida.

Así la cosmogonía de la psique se mueve en una serie de principios vitales que se constituyen en el logos de una psicología cosmogónica en donde el propósito fundamental es llegar a la comprensión del psiquismo desde lo que los mitos indígenas mhuysqas plantean que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 649 es el psiquismo. Bajo esta vivencia espectral evolucionaria encontramos una psicología del

Majui (si mismo), del darse cuenta, un encuentro con sí mismo, con el fuego, espíritu sabedor y testigo interno, la esencia de aprendizaje y creación de la vida, comprensión de lo que somos a través de la mirada espiritual.

Realmente en las lógicas de la investigación más que una palabra final es una palabra de apertura al planteamiento que deviene en este bonito, pero difícil camino de la ancestralidad, se hace concluye el trabajo y asimismo se entendien los alcances del proceso vivencial, teórico y espiritual. En palabra del abuelo Mhuysqa Fernando Castillo “no es un camino fácil, pero les aseguro que es un camino muy bonito” es entonces que la palabra conclusiva que acá se presenta no es más que la descripción del momento actual, es detenerse en la descripción sentida de aquella contribución que retomará no sólo la investigación, sino los caminantes provenientes.

En este sentido el camino no sólo ha sido largo, para nosotros ha sido un reto propio, una investigación acerca de lo psíquico desde la comprensión de lo individual, la interacción con la tierra desde la convivencia con los compañeros que, aunque difícil, ahora es el aprendizaje del otro y de nosotros mismos como la construcción telúrica de identidad. Todo ha sido un proceso paulatino y de difícil comprensión, por cuanto se realiza un intento de integración frente aspectos académicos, rituales, disciplinarios y de ensimismamiento que hacen parte fundamental e inteligible de la investigación.

La recuperación es el tejido entre lo histórico, etnográfico, cultural, antropológico, vivencial y fenomenológico de la experiencia ancestral indígena desde la cual se entienden procesos de la psicología que no se escriben ni se explican aún. En este sentido se presentan las conclusiones de las categorías de comprensión planteadas desde el inicio de la investigación, en las cuales el entendimiento va más allá de lo teórico, pues éste se presenta en un tejido con la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 650 vivencia fenoménica de ancestralidad, por lo que el peso de lo vivido por el camino prescrito planteado antes, nos otorga la certeza conclusiva que se presenta a continuación.

Espiritualidad.

"Ser espiritual no es pasar días y horas en silencio mirándote el ombligo. Al

contrario; Ser espiritual es danzar, bailar, cantar, sonreír, reírse de uno mismo, tener

siempre sentido del humor, y sobre todo, no permitir ningún indicio de infelicidad, ira,

envidia, odio o rencor en nuestro ser...

Ser espiritual es alimentar al corazón solo de cosas bellas, bonitas y que

regocijan al alma, como los bellos sentimientos, un abrazo, una caricia, un beso, un te

quiero, un gesto claro de amor. Pues sabemos que el corazón es como un cofre del

tesoro, Entonces ¿Para qué albergar cosas innecesarias en él? Esto es poder ver más

allá, es disfrutar de las cosas sencillas de la vida, pues es ahí donde reside la magia de

la existencia, en las cosas simples, que ocurren en el presente, aquí y ahora.

Ser espiritual es saber pedir perdón, y más importante aún saber perdonar, sin

remordimientos... y sobre todas las cosas aprender a perdonarse a uno mismo...

Ser espiritual es tratar a todo como "espíritu", como esencia pura, que es amor y

no cómo materia. Ser espiritual es hablarle a un árbol, y "sentir" su respuesta.

Abrazarlo, y "sentir" en el corazón como éste nos responde con el lenguaje del amor...

Es abrazar la vida y sentir que nosotros ocupamos un lugar milagroso en ésta

mágica existencia, y sin nosotros al mundo le faltaría algo, estaría incompleto, no sería

el mismo. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 651

Ser espiritual es comprender que nunca, jamás, existió alguien como tú, y tampoco existirá, eso es lo que te hace especial, la existencia y la belleza del universo no sería la misma si tu no estuvieras aquí....

Ser espiritual, es fluir con la vida, respetándote y amándote a ti mismo y a los demás, disfrutando y aprendiendo de las experiencias que aparecen en tu camino, con alegría, entusiasmo, sabiduría, aceptación y amor...

Ser espiritual es vivir en constante agradecimiento con el universo, por regalarnos un día más para respirar y deleitarnos con la vasta belleza que nos ofrece todos los días, la belleza que los ojos mortales no logran ver, esa que sólo puede percibirse con los ojos del corazón...

Ser espiritual es empezar a dejar de querer tener razón, y empezar a tener paz.

Es dejar de pensar, y comenzar a sentir... Es estar en paz con uno mismo, sin estar pendiente de lo que hagan o digan los demás...

Ser espiritual es empezar a tener actitud con la vida, es abrirle los brazos agradecidos al universo y dejar que él tome lo mejor de ti. Ser espiritual sobre todo es comenzar a guiar a tus hermanos con el ejemplo, y no con la palabra...

Ser espiritual, es quitarte todas las máscaras que te pusiste a lo largo de toda tu vida, y enfrentarte de una vez por todas con tu autentico ser

Es ser libre de las opiniones ajenas, y percibir que eres algo mucho más inmenso que todo lo que jamás imaginaste...

Ser espiritual, es dejar de ser todo aquello que creías que eras, y comenzar a ser, lo que realmente eres:

Aquello que NO puedes dejar de ser... El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 652

Una creación divina del universo,

Un alma que brilla en la luz,

Encarnada en un cuerpo,

Vibrando en amor,

Durante un rato en el planeta...

(Facundo Galati.)

Para la presente investigación y para la psicología y la ciencia y la filosofía es importante tener en cuenta la espiritualidad, el algo fundante que va más allá de lo teológico y religioso, es decir, tal vez la herramienta base para el conocimiento y crecimiento propio. A lo largo de los años la espiritualidad ha sido tema de estudio, pues ésta es propia de la existencia del ser humano, por esto, hay que tenerla en cuenta y romper el paradigma de que este tema le compete solo a los religiosos, pues a medida que la civilización ha ido cambiando se ha ido reconociendo que una persona espiritual no es precisamente religiosa y viceversa. En este orden de ideas, es importante entender que:

“Se viven múltiples expresiones de la espiritualidad, desde las formas propias de algunas culturas y religiones hasta las particularidades que cada ser humano, en virtud de su mismidad, le otorga. Hay una gran demanda y necesidad de lo trascendente en las personas, más allá de la religión. De hecho, todo ser humano, independientemente de su cultura, confesión religiosa y condición social, por el solo hecho de su humanidad, posee la sensibilidad para identificar y seguir aquello que está en su esencia como ánimo, vigor, brío, espíritu, que le invita y le llama a vivir. En otras palabras, todo ser humano posee una vida espiritual, una espiritualidad que, dada su condición de totalidad, no se puede separar de su corporalidad. Es una espiritualidad que lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 653 pone en relación con el mundo, con los demás y le plantea la apertura a Dios”. Cáceres, Hoyos,

Navarro, Sierra (2008, Pg. 384).

Ahondamos en aquel tema, puesto que reconocemos concluyente es una cualidad y necesidad propia de la humanidad tener un camino que sirva de senda a la trascendencia, que le ayude al ser humano a encontrarse con aquel ser supremo creador, dotador de vida y fundamentalmente tener un camino propio que lleve al encuentro con el psiquismo humano, con el sí mismo, porque para la profesión de la psicología en la época moderna, se ha vuelto cada vez más complejo llegar a aquel psiquismo, prestar una terapia del cuidado de la psique y del ser mismo a los hombres. Tenemos en cuenta que la Psicología en algunas ocasiones ha obviado este aspecto inherente al ser humano, por eso lo retomamos para llegar a la humilde y bonita creación de una terapia humanizada, ancestralizada y profunda.

Se contempla ésta junto con las precedentes categorías como fundamentales para la teoría de la Psicología Ancestral Indígena. Pues es de suma importancia que los seres humanos, vuelvan a hacer conciencia, regresen y se apoyen en la raíz indígena, pues; “mientras no examinemos las raíces de nuestra existencia humana no podremos empezar a comprendernos y cambiar… para conocernos verdaderamente debemos regresar a la semilla…” Strano (2000, pg.

48). Igualmente es fundamental vivir apoyados en los principios que cimentaron el mundo, intentando así minimizar la clínica patológica, y que en verdad la terapia psicológica produzca una transformación individual a cada uno, ya que sí hay espiritualidad y conocimiento de sí mismo, la enfermedad psicológica no será más la protagonista de los hombres modernos.

En este sentido, somos conscientes que:

“En las circunstancias del mundo en que vivimos, un mundo profundamente complejo en el cual el ser humano se ve bombardeado permanentemente por variedad de fuerzas: económicas, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 654 políticas, sociales, morales, religiosas, entre otras, el asunto de la espiritualidad ha pasado progresivamente de ser un tema en torno del cual se discute, se escribe y se critica en algunos círculos teológicos, o de ser un asunto exclusivo de ciertos miembros de la Iglesia, a constituirse en parte del acontecer de sociedades, instituciones, comunidades y personas”. Cáceres, Hoyos,

Navarro, Sierra (2008, Pg. 384).

Debido a la modernidad que acaba el interior a diario, que calla las voces internas, surge la necesidad de encontrar una espiritualidad que lleve a la humanidad a vislumbrar el horizonte claro y el camino de calma, vida y corazón que se adolesce hoy. Ya que por esa lejanía que se tiene con el propio interior surgen las enfermedades enraizadas al psiquismo humano, adicionalmente, hay que sumarle el problema identitario propio del pueblo, que dificulta muchísimo el encuentro con esa espiritualidad y la divinidad que sirven de soporte para la vida diaria. Nuestra experiencia concuerda con el autor Octavio Paz (1998), lamentablemente el mestizo no desea volver al origen; pero tampoco quiere igualar la apariencia del norteamericano, del español entre otros; Por eso es que en nosotros los latinoamericanos, todo es impulso que se niega a sí mis-mo, somos un nudo de contradicciones, un verdadero enigma. (Pg. 3).

Por esto surge el malestar interno, porque no se sabe que camino agarrar, no se sabe lo que es propio, lo que es profundo. Así como afirma Lowen (1972., Pg. 187) “Han perdido la fe en las tradiciones de su propia civilización; y hablando de nuestra civilización el declive no es técnico sino espiritual” Por eso mismo, lo que acá se plantea es volver al origen, pero no desde lo físico y el uso del taparrabo, sino de verle la cara al ancestro interno, a la raíz espiritual que nos sustenta y da la fuerza para vivir la vida. Aquel regresar es desde la recuperación del mito, del ritual, de la vida y por ende del hombre mismo y de la humanidad en su origen telúrico; es así El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 655 como esta Psicología va encaminada a la recuperación, apropiación y sanación del hombre desde sus fuerzas constitutivas y arraigantes.

Está en el baúl memorístico del pueblo que el abuelo español direccionó la creencia más racional y controlada en un Dios moderno y en la ritualidad y la espiritualidad más conveniente, antropocéntrica y superficial que éste abarcaba, opacando y convirtiendo en sinónimo de vergüenza nuestra propia raíz indígena, en palabras de Lowen (1972):

“La sustitución del animismo por la creencia en un Dios único y todopoderoso fue

gradual, a medida que se fue eliminando el misterio de aquellos aspectos de la naturaleza

que originalmente habían llenado al hombre porque su funcionamiento le era

incomprensible” (Pg. 260).

A través de la colonia, la espiritualidad de casi todos nuestros ancestros fue opacada, señalada e inclusive fruto de pena de muerte, imponiendo como justa causa y de forma bélica la creencia católica; debido a esto se torna tan confuso tomar una postura frente a este aspecto, sin embargo todavía se puede volver a aquella forma de vivir desde nuestra espiritualidad indígena, en conexión con la naturaleza, con respeto a ella.

Yendo más allá de mero ambientalismo moderno, se propone el ejercicio de contemplar y vivir la naturaleza para poder contemplarnos a nosotros mismos como seres totales, logrando con ello la construcción de una psicología profunda, de conexión y recuperación de lo humano desde lo aparentemente otro como mismidad telúrica ambiental. Esto se devela así como se expresa en el siguiente fragmento de narrativa: “… no hay mejor biblioteca que la montaña, porque ésta es la única en donde los estantes van a hablarme de lo que tengo por mejorar y aprender de la vida, y más que cualquier otra cosa sanar mi espíritu perdido en la vorágine…” (Comunicación personal, 2015). Como dice el abuelo Mhuysqa de Cota Fernando Castillo, “la naturaleza es el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 656

único sitio donde todo es real, donde no hay mentiras, ni fantasías, donde verdaderamente me puedo encontrar conmigo mismo” (2014).

Desde esta postura, se plantea que para poder reencontrarse con esa espiritualidad bonita y sentida, además de autóctona de estas tierras, hay que empezar por aceptar el mestizaje y al sí mismo. Darle el protagonismo al indio que vive en nosotros y reavivar nuestra memoria ancestral, apaciguar un poco a la razón y darle la mano a la apertura tanto corpórea, emocional, espiritual, y en integralidad de nuevo racional. Estos niveles de apertura no se podrían llevar a cabo sin la fe (de la cual se tratará más adelante), Por ahora lo que se reconoce es la dificultad para llegar a conectar con lo profundo de la naturaleza de los lugares sagrados y la hondura propia, pues “el hombre moderno no reconoce ya una autoridad suprema. Cree que la naturaleza se rige por leyes físicas, y si se pueden descifrar esas leyes se puede comprender la naturaleza” (Lowen, 1972, Pg. 191).

Con lo aquí nombrado se encuentra qué contemplar la sacralidad tanto propia como del territorio ancestral es importante para lograr conectar con ese sentir del espíritu humano, de la montaña, la laguna, y así encontrarnos con ese ser espiritual que somos. Como lo plantea el autor estudioso de Raja Yoga, miembro de la Universidad Espiritual Brahma Kumaris de Brasil,

Anthony Strano, “…en la búsqueda de mi [LE3] identidad, decido ir “adentro” para encontrarme, la sabiduría y las soluciones están ahí esperándome. Sólo necesito recordar” (2009. Pg. 45).

Desde esta perspectiva de lo ancestral reminiscente como encuentro propio se conecta con el ritual indígena de pagamento como propósito terapéutico de sanación de la tierra, es decir, sanando la tierra me sano a mí mismo. Esto contemplado desde los usos y costumbres Mhuysqas implica el sentido energético de agradecer, dar, recibir y tomar como propósito armonizante y equilibrado de la relación multidimensional con uno mismo y con la madre tierra. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 657

Para comprender la espiritualidad, se considera importante entender qué es el espíritu, para luego ahondar en el tema; esa energía pareciera almífica que mueve al ser interno, aquella fuerza que aún la ciencia no puede explicar, el espíritu. Ese soplo que llena de vida al ser, aquella psique, esa mariposa viviente y corazonante que otorga la unicidad a los seres, esa fuerza energética que se siente cuando se señala el pecho y el corazón, esa que está más allá de lo que los ojos comunes pueden ver.

El autor Leonardo Boff en su artículo espíritu creador (2003) lo explica así:

“Spiritus para los latinos, pneuma para los griegos, ruah para los hebreos, mana

para los melanesios, axé para los iorubá y nagô de Africa y sus descendientes en las

Américas, wakan para los indígenas dacotas, ki para los pueblos de Asia nororiental, qì

para los chinos, poco importan los nombres, nos referimos siempre a una energía

originaria que pasa a través de todo, que hace del universo un inconmensurable

organismo y se manifiesta como realidad emergente, fluctuante y abierta a lo nuevo. En

una palabra, como vida y espíritu” (Boff, Pág. 1, 2003).

Teniendo en cuenta la referencia del autor y nuestra vivencia fenoménica de ancestralidad se infiere que el espíritu es aquel brío o soplo inherente a cualquier organismo viviente, puesto que no solo los seres humanos contamos con esta energía, la naturaleza también…. “el espíritu no es exclusivo del ser humano ni puede ser desconectado del proceso evolutivo. Pertenece al cuadro cosmológico. Es la expresión más alta de la vida, sustentada a su vez por el resto del universo” (Boff, 14). Hay certeza en decir que gracias a las salidas de campo por el territorio Mhuysqa se ha podido experimentar que las montañas, las lagunas, los árboles y toda la naturaleza sagrada como expresión de la gran madre Physis también tienen espíritu. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 658

Se ha vivenciado cuando se anda en medio de la montaña, que el interior del caminante entona una canción, una conversación con ese espíritu logrando una perfecta armonía con la naturaleza. Así como expresa este fragmento de narrativa, en donde específicamente se habla del ascenso a la laguna sagrada de Iguaque, “El espíritu de la montaña hace vibrar el corazón de manera tal que el cambio en el ser de lo humano es de completa entrega, perdón y fe hacia la madre tierra, ayudándolo a crear conciencia del camino que debe andar” (comunicación personal, 2015).

Se comprende que aquella entrega, perdón y fe que hacen vibrar el corazón son fundamentales en la terapia del cuidado que aquí se propone, puesto que somos conscientes que en muchos de los casos de las personas que asisten a psicología van en busca de un cambio, de un orden para su propio camino que les permita ver más allá de lo superficial, ver más que conducta. Es por esto que el territorio y el camino con nuestras comunidades indígenas nos dan la sabiduría para afirmar qué; hay que sanar internamente aquellos procesos inconscientes que no permiten apropiarse de la espiritualidad y por ende del ser mismo, aquí sí se contempla la vida como los caminos del caracol de nuestra cultura Indígena Inga, se comprende que para poder llegar afuera se debe iniciar por el centro, por lo profundo.

Entendemos y sentimos que el espíritu de la naturaleza es aquel que hace vibrar al ser humano, que lo hace sentir parte del lugar y aún más importante, aquel que lo pone de frente con su realidad, con su sombra y su verdad de sanación. Así como expresa el siguiente fragmento de narrativa, “…la enseñanza de la laguna fue contundente, me falta aceptación conmigo misma, es como la maleza del agua de la laguna que asusta, lo mismo que mis miedos y tristezas…”

(Comunicación personal, 2015). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 659

En palabras del autor Leonardo Boff se comprende así, “En cierto grado, todos los seres participan del espíritu. La diferencia entre el espíritu de la montaña y el del ser humano no es de principio sino de grado. El principio funciona en ambos, pero de forma diferente…” (Boff, 14).

Como se mencionó anteriormente y gracias al consejo del abuelo Mhuysqa de Cota, se comprende que “la madre tierra, es decir la naturaleza, es la única realidad más real en medio de este mundo tecnológico y fantasioso” (Abuelo Fernando, 2015). Vivir en torno al espíritu de la naturaleza no pretende que el ser humano viva en las nubes, huyendo de la realidad o que se aísle, todo lo contrario, busca que haya un arraigo importante en la esencialidad mística y divina de la tierra. Como se esbozó antes, el arraigo está en volver al origen, ese plantarse en la tierra, hace referencia a contemplar desde el interior qué es lo que en plano físico nos sustenta, habrá asfalto, habrán edificios, pero siempre de hondo está la Madre Tierra, aquella que aporta el agua, el alimento, el aire; aquél arraigo planteado es desde la honra a la vida, a la existencia propia y fundamentalmente a la realidad.

A lo largo del territorio se vivencian las energías espirituales de fuerza, de dolor, de amor, de sanación en los lugares sagrados visitados: Tota, Fuquene, Iguaque, Suamox, Hunza,

Iza, Gamza entre otros. Se refiere de esta manera pues cuando se está en medio de los lugares como por ejemplo las piedras partidas ubicadas en Iza, Boyacá, el espíritu de este lugar invita y mueve el pensamiento, la energía y el cuerpo en torno a la espiritualidad del masculino, a su honra, a la representación del papá, del abuelo, es un lugar para adquirir fuerza. El espíritu es principio sin importar de qué entidad haga parte, (hombre, laguna, montaña), es la fuerza y el movimiento que hace estremecer al interior, al ser en su totalidad. Además, es importante resaltar que todos los lugares no manifiestan el espíritu de igual forma, es decir hay un problema de graduación. El espíritu como lo primero acá planteado es total, es una energía compuesta por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 660 fuerzas complementarias, es decir la danza perfecta entre masculino y femenino. Lo mágico, lo hermoso y tal vez un poco incomprensible para la razón, sin embargo, lo otorgado por la vivencia, es que dependiendo del lugar en el espíritu predomina alguna de estas dos fuerzas. Por ejemplo, el de Iguaque es femenino, invita a la fertilidad, al amor y a la reivindicación con la madre espiritual y por supuesto la humana.

Por otro lado, desde la Filosofía Hegeliana y su extrañesa de comprensión del espíritu humano como absoluta racionalización se evidencia qué:

“…el espíritu, en su verdad, no es un ser abstracto separado de la realidad exterior, sino que está encerrado en lo finito que contiene su esencia, se aprehende a sí mismo, y por ello deviene él mismo absoluto. El primer modo de manifestación por el cual lo absoluto se aprehende a sí mismo es la percepción sensible [arte]; el segundo la representación interna en la conciencia [religión]; en fin, el tercero el pensamiento libre [filosofía]…” (Hegel, 1946, Pg. 60 –

63).

El camino ha enseñado que el espíritu absoluto, finito, cognoscente, que se aprehende a sí mismo en la filosofía de Hegel (1946) no lleva al ser humano a conocerse en profundidad y en tal instancia no es incluso cercano al espíritu de la ancestralidad, pues desde nuestra postura, es solo un ciclo de pensamiento que no resulta tan absoluto como su egoica pretensión de centralidad.

Según la cosmogonía indígena el espíritu tanto propio como exterior, viene a ser sentido y conocido desde el corazón, desde una vida movida por esa fuerza profunda, un pensamiento bonito de conexión y honra con los ancestros y no radicado solamente en la razón, en lo pensante, es decir que para tener la conciencia, el conocimiento y el contacto con el espíritu no es necesario el “pensar del pensar” para validar su existencia, porque desde la postura hegeliana, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 661 el espíritu por ser absoluto se convierte en concepto, en idea, en conocimiento y en procesos racionales. Es un postulado de Hegel que el pensamiento humano es la forma más propia del contenido espiritual absoluto, además que éste es el único que puede definir y llegar a una comprensión clara del mismo, en lo que presentamos discrepancia .

Entonces, desde nuestra postura la compresión del espíritu y de la espiritualidad no es ausente de razón, sino que en esta vivencia se presenta como algo incompresible para la linealidad de la misma, ya que al sobrepasar el pensar y el sentir se genera ese choque en el sí mismo, es decir como lo expresa éste fragmento de narrativa “cuando la razón perturba el interior y el sentir, se necesita silencio para lograr escuchar el corazón y encontrarse con el espíritu supremo sanador” (Comunicación personal, 2014).

Entonces el espíritu aquí planteado,

“…es subjetividad que se abre al otro, se comunica y así se auto trasciende, gestando una comunión abierta, hasta con la suprema Alteridad. Definiendo: vida consciente, abierta al

Todo, libre, creativa, marcada por la amorosidad y el cuidado, eso es concretamente el espíritu humano” … (Boff, 14).

Además es sentido y profundo, es decir que va más allá de la razón, porque para lograr percibir el espíritu de la naturaleza y el propio hay que permitir que el cuerpo, el corazón y la mente, (en un segundo plano), se hagan participes de este proceso, porque en esta modernidad esa razón autorreflexiva planteada por Hegel es lo que no deja que conozcamos el espíritu en esencia.

Es así como hay que entender y tener la fe suficiente para aprender a creer en lo que el interior está dispuesto a decir, pero primero se necesita la plena conciencia de que és el espíritu El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 662 interno el que habla para asimilar y entender, lo que en verdad hay que caminar, soltar y sanar, lo que en otros términos sería verse de frente con esa necesidad profunda de sanación.

Con este referente se afirma fundamentalmente, que el ser humano es espíritu, es importante entender que a medida que se recorre el territorio se vivencian experiencias sentidas desde el interior, hasta el cuerpo. Éstas llevan a un encuentro trascendente y de cambio consigo mismo, que fortalecen y hacen consciente el andar del guerrero en la espiral de la vida. Así como lo expresa este fragmento de narrativa: “…Sin saberlo iba para la casa de mi abuela, iba a visitar las tumbas de mis ancestros y fundamentalmente iba a tener un encuentro conmigo misma. Fue despertar, abrir mis ojos más allá de lo que ven siempre, fue sentir a la madre tierra en mi cuerpo, en mi corazón, fue sentirme vida…” (Comunicación personal, 2014 ).

Con lo recopilado anteriormente, se afirma que el espíritu es aquella energía dotada de fuerza y amor que brinda sentido a la existencia humana, ésta misma es la que lo invita a vivir y a sentirse parte y en comunión con el Chiminigagua .

Entrando en materia, según la postura del doctor en teología, monje y sacerdote Alemán

Anselm Grün, la espiritualidad es “Vivir desde el Espíritu”, “vivir de la fuente del Espíritu”

(2013, Pg. 9), y como ésta no es algo que le competa netamente a lo material o a lo inmaterial sino es una totalidad de la existencia, que va más allá, la espiritualidad es vivir lo humano, experimentarlo y sentir la conexión con la divinidad.

Gracias a la posible certeza de lo vivencial, se considera principalmente la espiritualidad como un camino, como la vida misma fluyendo, porque este andar no es algo momentáneo sino que desde el momento en que se es consciente de la necesidad de vivir del espíritu, se sabe que será un trecho que estará consigo hasta el fin de la vida. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 663

Entendemos que espiritualidad, es reconocer los pasos que se han dado y los que quedan por dar, ese caminar empieza a convertirse en un puente entre el cuerpo y el espíritu que sensibiliza la razón y a la lógica para encontrar seguridad en la vida, entonces desde esta perspectiva la espiritualidad ayuda a sanar las cosas pasadas que no permiten el avance interior, ayudándole al ser humano a mirar atrás sin detenerse, sin sentir dolor y es así como se crea la

“conciencia de empezar un nuevo camino, habiendo reconocido y honrado los pasos dados”

(Comunicación personal, 2014).

Entonces, cuando el humano se encuentra en ese punto se da cuenta de que gracias a su corazón, a su fuerza y fundamentalmente al todo que lo sostiene (madre tierra), el camino le otorga la firmeza para aprender a caminar, un fragmento de narrativa lo explica así: “en medio de cansancio y lágrimas, la naturaleza da la fuerza para emprender el descenso de la montaña”

(Comunicación personal, 2014). En otras palabras a hacer conciencia de empezar de nuevo, a entender la vida desde otra postura y comprender que vivir es mucho más de lo que se ha sentido y experimentado hasta allí. “comprendí que soy más que negativo y que con calma puedo experimentar la paz” (Comunicación personal, 2015).

Continuando con las perspectivas de la espiritualidad encontradas en la investigación, la espiritualidad también es:

“Aquella por la que el ser humano se siente ligado al todo, por la que percibe el hilo

conductor que liga y religa todas las cosas para formar un cosmos. Esta experiencia le

permite al ser humano poner nombre a este hilo conductor, dialogar y entrar en

comunión con él, pues lo percibe en cada detalle de lo real. Lo llama con mil nombres

distintos, fuente originaria de todas las cosas, Misterio del mundo o simplemente

Dios” (Boff, 2001, Pág. 90). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 664

La espiritualidad como puente de integración y conexión consigo mismo y con la madre tierra. Desde este punto vista la espiritualidad pasa a ser el puente que permite al ser humano integrarse con ese ser supremo dotado de vida (Chiminigagua) y entender que ésta es la creadora de todo, la que sostiene la vida, la fuente del amor, hace que el individuo se dé cuenta y experimente cómo la madre tierra es todo, como ella vive adentro de cada uno. Como lo expresa un fragmento de narrativa, “después de caminar el territorio pude entender que los lugares sagrados están en mi” (Comunicación personal, 2015).

Adicionalmente, la vida desde la espiritualidad permite que el ser humano entre en un estado de paz y tranquilidad tal como lo expresa un fragmento de narrativa, “gracias al desprendimiento de lo material que la conexión otorga, inmediatamente se siente el ensimismamiento, todo esto gracias al protagonismo que han tomado la magia, los seres vivientes y la Madre Tierra como proveedores de la vida” (Comunicación personal, 2015).

La espiritualidad ayuda a dejar de lado las máscaras, las apariencias y banalidades que enferman. Comprendemos también gracias al consejo del abuelo Mhyusqa de Cota que “ser espiritual es ser honesto, humilde, noble y sencillo, ya que es la única forma de encontrarse a sí mismo, dejar de vivir en mundos de fantasía y dejar de creernos nuestras propias mentiras, esto es lo fundamental para vivir bien” (Comunicación personal, 2015).

Cuando se camina por el territorio, la espiritualidad ayuda a que el ser humano se sienta parte del mismo, se entregue a él con los pies en la tierra y con el corazón en las manos”, el asunto es la búsqueda de esa raíz que lo haga llegar a la profundidad del silencio interior, para por fin escuchar el canto que entona su espíritu con la montaña. Es como si el ser humano se dejara llevar por las corrientes energéticas del agua y su fuerza trascendente, escuchar el mensaje bonito y puro que puede recibir de ella. El camino espiritual ayuda a despertar la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 665 conciencia del camino propio, la espiritualidad proyecta al ser humano en los elementos de la naturaleza como el aire, la tierra, el fuego y el agua para que haga conciencia de sí mismo. En palabras del abuelo Fernando de Cota, “Yo debo ser agua, mi pensamiento, mi actuar y mi sentir deben ser transparentes y fluidos”.

Para la autora Holandesa Agneta Schreurs, reconocida por la integración de la teología y la espiritualidad en la psicoterapia.

“la espiritualidad es la relación personal con el ser transcendente, que se puede dar con el desarrollo de enseñanzas propias, tales como sacramentos, formas de adoración, oración, meditación o rituales; esta gama de oportunidades de desarrollo espiritual permite al ser encontrar la forma de relacionarse con el Ser transcendente o Dios” (Schreurs, 2004, Pág. 41).

Se infiere que cuando la espiritualidad es el puente integrador con la madre tierra, se convierte en una manera de acercamiento a la entidad divina, llegando incluso a gestar una comunicación entre humano y tierra; y de la misma manera llegando hablar en otros lenguajes, es decir: “depositar los más profundos sentimientos en cuarzo, para que al entregarlos a la montaña, la madre tierra los escuche y ayude al ser humano a encontrar las respuestas a lo que le está preguntando o contando a la tierra” (Comunicación personal, 2014).

Ese contarle a la montaña es un hablar desde el ritual de pagamento como agradecimiento y compensación a la tierra por todo lo que ha sido otorgado (alimento y vida entre otros), aquel ritual se da de forma personal, completamente desde el interior, desde el corazón, por eso es que produce un cambio y una sanación psicológica contundente, pues al poder expresar con la completa naturalidad, gracias a la conexión con la tierra, el ser humano encuentra la capacidad de ver y así mismo soltar lo que lo está asido en enfermedad, se encuentra que la espiritualidad desde el ritual también se convierte en una medicina sanadora para el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 666 interior. La espiritualidad que surge a partir de la conexión con el pagamento, trasnocho o en el simple camino, es aquella que enseña a vislumbrar los males propios del cuerpo y el alma.

“Cuando emprendí el ascenso me inundó el mal genio, el dolor y la tristeza, pero al llegar al final del camino, comprendí que para sanar debía aceptar mi realidad y mismidad” (Comunicación personal, 2014).

Por otro lado, en palabras del autor Leonardo Boff, en su artículo ¿qué es el espíritu? Se puede comprender que “Por el espíritu nos sentimos insertados en el Todo a partir de una parte que es el cuerpo animado y, por eso, portador de la mente” (2014). Así, es más fácil entender porque la conexión con la naturaleza presenta experiencias de tipo místico, que hacen que el ser humano recupere esa identidad e individualidad y totalidad con el mundo circundante y cósmico.

La espiritualidad es una fuerza interior

Desde esta visión, la espiritualidad es esa misma realidad que permite en potencia el movimiento de la vida, la que ayuda andar la montaña, cuando en términos físicos es complejo, es esa pujanza que llena de firmeza el paso, que permite en sentido de templanza “sentir las raíces del mestizo como propias, aquellas que se encuentran inmersas y pérdidas en las aguas turbias de la fe contaminada y moderna” (Comunicación personal, 2014). En el momento en el que el ser humano hace conciencia de esa fuerza, sus pasos toman firmeza; es en esas experiencias en donde la fuerza de los ancestros, la de mamá y papá originarios se convierten en algo propio, en donde los hilos ancestrales y cosmogónicos están sustentando la vida para seguir.

Otra de las cosas que se ha descubierto en este camino es que la espiritualidad, además de ser todo lo nombrado anteriormente, también ayuda al ser humano a encontrarse con el autodescubrimiento constante. Para llegar a este autoconocimiento y descubrimiento es importante apoyarse en la fe tanto propia como de la divinidad, es decir “Las hojas de curuba con El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 667 manzanilla matricaria en infusión curan la migraña, pero sin la fe suficiente de que yo misma soy la cura, estas no servirán, adicionalmente es importante aprender a conocer qué es lo que me enferma para tener una sanación total” (Comunicación personal, 2015). Desde esta vista, se tiene en cuenta que el conocer esas cosas tan inmersas en el sí mismo son parte fundamental de la espiritualidad y actualmente tarea de la Psicología, la aceptación total de la sombra interior, la respuesta al cuestionamiento interno, la visión completa de lo que es el ser humano, de sus realidades duales, del femenino y el masculino danzando en un solo ser en evolución.

La espiritualidad es toda actitud y actividad que favorece la relación, la vida, la comunión, la subjetividad y la trascendencia rumbo a horizontes cada vez más abiertos. Al final, espiritualidad no es pensar en Dios sino sentir a Dios como el Vínculo que pasa a través de todos los seres, interconectándolos y constituyéndonos, a nosotros y al cosmos (Boff, Pág. 1, 2003).

Y solo entonces a partir de la experiencia vivida de Dios o de tierra, surge una búsqueda de claridad en el sentir, que ayuda a tener una compresión de la vida gracias al conocimiento de sí mismo, porque la espiritualidad desde esta perspectiva es la mirada consciente y telúrica de lo que son los seres humanos en relación como divinidad emergente.

La espiritualidad también es una luz que guía en el camino

“Esa que ilumina en la noche más oscura, la que siempre guía hacia la madre, hacia el interior” (Comunicación personal, 2014). Porque cuando el ser humano toma la conciencia que la espiritualidad es el puente a la liberación del dolor, de la tristeza, del sufrimiento, no tendrá miedo de andar a oscuras, porque como expresa este fragmento de narrativa “la luz del espíritu de la montaña ilumina el corazón y hace resplandecer el pensamiento bonito” (Comunicación personal, 2014). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 668

Por eso es fundamental entender que la espiritualidad es esa luz que reconforta, que llena, que da vida, es la luz que pone de cara al ser con su verdadera naturaleza, la de andar iluminado por su propia existencia, por su propio ser trascendente, porque solo en ese momento la oscuridad deja de aterrar, el negativo de apoderarse de cada uno y se hace consciencia que la vida es un encenderse y apagarse constantemente; la existencia humana tiene el propósito de encontrarse con el ser interior, y desde estos preceptos se empieza a cimentar la terapia de la

Psicología Ancestral Indígena.

Hablar de espiritualidad es contemplar al ser humano de manera holística, por esto hay que evitar encasillar el término a solamente una limitación de creencia religiosa, pues en esta también están inmersos aspectos de la vida interior del individuo como lo son sus ideales, actitudes, pensamientos, sentimientos, oraciones a la Divinidad y el modo de como expresa todos estos elementos en la cotidianidad.

“Desde esta perspectiva espiritual, se nos presenta la alternativa de concebir y vivir la

vida como un espiral en ascenso, que, desde la aceptación vital de lo concreto y real

que somos y desde nuestra situación particular de vida, nos invite a recorrer nuestros

pasos, como búsqueda personal de las raíces desde el fondo de nuestro ser. Allí, en su

centro, se va poniendo en evidencia la acción transformadora de Dios y la presencia

liberadora de lo divino. Sólo así es posible superar las dependencias y esclavitudes

que nos pueden envolver en medio de nuestra condición humana. En este sentido, la

espiritualidad se hace profundamente liberadora; primero, de la persona en particular,

para constituirla luego en promotora de liberación hacia otros” (Cáceres y otros, 2008,

Pág. 385). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 669

Concluimos a partir de la experiencia, que la espiritualidad es la vida misma fluyendo y danzando gracias a la fuerza interior y grupal que trasciende al corazón para un cambio en la vida, es integrarse con la tierra y la naturaleza. La espiritualidad, es el camino que permite el conocimiento de sí mismo, y éste es dado gracias a la honra de los pasos, al reconocimiento de la raíz y la semilla que nos sostiene, ésta en ocasiones se torna incomprensible para la razón, es esa luz ineludible que ilumina en la oscuridad, es sentir y dejar estar la vida para lograr un verdadero cambio en el sí mismo. Además, no es algo que sea completamente del interior, es una actitud hacia la vida, hacia los demás y claramente hacia sí mismo, que tiene como objetivo ascender, avanzar y trascender en ella desde el reconocimiento del todo que nos sostiene. Como se afirma anteriormente, la expresión de la espiritualidad se da de diversas maneras, teniendo como referente lo que se ha venido planteando; la espiritualidad es honrar los pasos para iniciar un nuevo camino, es además el puente integrador con la madre tierra que permite el reconocimiento propio, gracias a los elementos constituyentes de la naturaleza en sus diversas manifestaciones de conciencia y realidad (agua, aire, tierra, fuego).

La espiritualidad elemento fundamental de curación en la psicoterapia ancestral.

Gracias a lo recorrido por el territorio, tenemos la certeza que la expresión de espiritualidad de nuestros ancestros indígenas Mhuysqas se da de diferentes maneras,

(pagamentos, círculos de palabra, sembrar la tierra, labores comunitarias, caminar el territorio); nuestros pueblos indígenas a diferencia del mundo occidental, están basados no solo en el mundo terrenal, sino también en un mundo alterno y más total (el espiritual), es decir que todos los actos de la comunidad están guiados por lo espiritual y también por la cosmogonía y la ley de origen de cada pueblo, es una suerte de pensamiento transpersonal de naturaleza lógica mítica y corazonante. Actualmente, es común andar obnubilado por las diferentes expresiones de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 670 espiritualidad que se tienen en el mundo poseso de indolencia mercantil y egoica, pues es sabido que, dependiendo del lugar de nacimiento, la expresión y ritualidad de la espiritualidad varían.

La vivencia nos otorga el peso para entender que la conexión con la divinidad, y la espiritualidad brindan un entendimiento profundo del malestar psíquico, de esta forma la espiritualidad se convierte en el espejo que ayuda al ser humano a entender los diferentes malestares que puede sentir a lo largo de su vida, bien sean de índole emocional, somática, interpersonal, intrapersonal, familiar, de pareja y todas las situaciones que de alguna u otra forma son detonantes de malestares psicológicos. Un fragmento de narrativa explica lo mencionado así:

“Porque la oscuridad de algún momento no indica precisamente que sea peligroso o malo, pienso que esos momentos sirven para mirar hacia dentro, sentir más allá, sentir el aire y estar conectados con nosotros mismos de manera total” (Comunicación personal, 2014). Es por esto, que una de las cosas primordiales en esta psicoterapia del cuidado es la espiritualidad; ya que cuando se logra conectar de manera profunda y bonita con el sí mismo se aprende a vivir y se aprende a sanar; por eso en la Psicoterapia Ancestral Indígena es importante saber la relación con lo espiritual que tiene cada individuo, soportados en esa expresión tan personal se logra crear la consciencia de enfermedad y así mismo de curación psíquica, incluso, así sea esta misma la ausencia de espiritualidad.

Así lo expresa este fragmento de narrativa “…El abuelo dijo que no existía remedio alguno que sirviera si yo no hacía conciencia de que la cura era yo misma, que yo era el remedio y de la misma manera la enfermedad, entonces después de esas palabras llegué al mismo punto, tengo que encontrar qué es lo que está sucediendo en mí para que yo misma esté produciéndome tanto malestar físico…” (Comunicación personal, 2014). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 671

Así, el primer paso para soltar y sanar alguna enfermedad psicológica, es entender y comprender conscientemente el origen del malestar, la fuerza como principio vital es una de las herramientas para llegar a aquel entendimiento sobre la espiritualidad y la expresión que en virtud de la mismidad individual de cada persona le otorgan como posibilidad de aceptación y evolución sobre la detención o el malestar, también tenemos la certeza que este proceso no es exclusivo de grandes maestros y abuelos espirituales, nuestra naturaleza humana e indígena, nos da todo para llegar a aquella comprensión de la enfermedad psicológica y física de manera amorosa y profunda.

Divinidad

Cuando somos conscientes que no estamos solos en el mundo, que no somos arrojados al vacío, cuando nos sentimos parte fundamental de la esencia creadora de vida, la honramos, la respetamos y reconocemos estamos en comunión con la divinidad universal.

En palabras de Huxley (1947), la divinidad es “…una naturaleza, perfecta y penetrante, que circula en todas las naturalezas; una realidad, que todo lo abarca, contiene en sí todas las realidades” (Pg. 17).

Desde esta premisa, entendemos necesario para la vida, el reconocimiento de aquella naturaleza divina externa y propia, en estos términos no hablamos de un Dios, o de un término netamente religioso, se contempla la posibilidad de lo humano, lo unitivo, lo no dividido; se reitera la idea de aquella necesidad de revivir el mito, de reencontrarse con la totalidad interna, con la divinidad, con la madre, con la abuela sanadora para encontrarnos, curarnos espiritual y psicológicamente a nosotros mismos y en esa analógica al otro humano, vegetal, mineral y planetario. Es así como se comprende que la divinidad es el piso que otorga la seguridad y el carácter brioso del espíritu para seguir adelante de forma bonita, en este sentido cuando hay El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 672 encuentro con la divinidad ancestral emerge una fortaleza propia del espíritu, ayuda de valoración sobre la vida profunda, sentida, netamente humana que tanto carecemos, reencontrando el sentido terapéutico y de cuidado tan refundido en la psicología moderna.

Entonces desde esta perspectiva, surge la pregunta, ¿por qué contemplar la divinidad en la Psicología Ancestral Indígena? Posiblemente la respuesta está en orden principalmente con ese todo que lo sostiene, ordenarse en los principios como integración divina propone la tarea de la tierra, sin embargo, reiteramos una vez más que no es neto ambientalismo light y postmodernista como autocritica moderna de los postmoderno, pues efectivamente sí hablamos aquí de cuidado y respeto a la naturaleza pero con sentido memorístico y telúrico de lo maternal u originario, pero no solo en el nivel físico de la tradicional physis, sino también en las honduras a veces sombrías y exigentes del encuentro y desarrollo espiritual.

Nuestras leyes de origen hablan de una forma de actuar humana ordenada, haciendo referencia a la honra del gran entramado ancestral sagrado del que somos parte (divinidad), se paga, se alimenta, se sana y se vive en la tierra; teniendo como fin estas acciones que el ser humano tenga un orden interno, psíquico profundo y de corazón para reconectarse con la naturaleza divina de madre tierra y la propia. Un fragmento de narrativa concuerda con lo anterior así: “…estaba completamente sorprendida de ver como las cosas en mi vida podrían empezar a cambiar, porque el solo hecho de romper el paradigma de haber vuelto a la Montaña, aún con el miedo enorme que eso me causaba fue un acercamiento fuerte a lo esencial que tanto carecía. Porque tampoco comprendía la sacralidad de aquella montaña emblemática y simbólica de Bogotá…” (Comunicación personal, 2015).

En otras palabras, “deja que tu mente ascienda a Dios. En la naturaleza, las plantas crecen cuando les alcanzan los rayos de sol. El potencial divino sólo puede liberarse cuando la luz de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 673

Dios lo despierta. Recibes paz y amor y así desde esta altura espiritual, tu amor y tu paz se derraman” Strano (2009, Pág. 50). La vivencia nos otorga la importante comprensión que en la medida que se reconoce el poder divino de madre tierra y la fuerza que ésta anida, se desata una significación perenne del sí mismo, de los demás y del malestar, y un crecimiento espiritual profundo que emerge con el reconocimiento de la divinidad. El siguiente fragmento de narrativa lo expresa así: “Luego me invadió el pensamiento de que sin importar lo externo yo era tan grande como la montaña que tenía en frente” (Comunicación personal, 2015).

Comprendemos gracias a la experiencia fenomenológica y trascendente que ha otorgado el trabajo de campo, que la divinidad siempre se va a ver reflejada desde la vivencia del ser humano. En este sentido, el filósofo Huxley reconoce la divinidad así:

“existe una divinidad, un fundamento, brahmán, clara luz del vacío que es el principio no manifiesto de todas las manifestaciones; que este fundamento que cimienta al ser es a un tiempo trascendente e inminente; que es posible que los seres humanos amen, conozcan y a partir de la virtualidad, lleguen a ser idénticos al fundamento divino; que lograr ese conocimiento unitivo de la divinidad es la finalidad y el propósito de la existencia humana. Que hay una ley o

Dharma que ha de ser obedecida, un Tao o camino que ha de ser recorrido si los hombres han de alcanzar esa finalidad. Que cuanto más haya del yo menos habrá de la divinidad; que el Tao es por consiguiente una vía de humildad y de amor, el Dharma una ley viviente de mortificación y de conciencia auto trascendente” (1999 Pg. 25).

Un fragmento de narrativa explica la divinidad como ese algo que se agarra (tomar) en las circunstancias difíciles de la vida así: “en los momentos en donde pareciera que uno se apaga hay que echar mano de esa luz, que siempre está lista en el corazón para salir”. (Comunicación personal, 2015). De la misma manera es fundamental comprender que para encontrar y tener El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 674 contacto con la divinidad, el Tao como lo llama Huxley, es la espiritualidad, porque solo en ese camino consciente de respeto hacia la sacralidad territorial en la que estamos inmersos hemos de ser conscientes de la humildad que se necesita para aprender a escuchar a los abuelos, a las montañas, a la madre misma (divinidad) en medio del camino. Es decir, honrar los pasos y los ancestros es para el hombre el encuentro de frente con lo divino que sustenta la vida, en esta sinergia el autor, Strano (2000) plantea qué:

“Para moverme realmente en dirección a la divinidad, primero tengo que llevar mis pensamientos más allá del mundo físico. De modo que, volviéndome hacia dentro, aparto mis pensamientos del mundo exterior, incluido el cuerpo, y me concentro en mi identidad interna, espiritual” (Pág. 40).

En relación a lo planteado líneas antes por el autor e integrado a las salidas de campo por el territorio Mhuysqa presentamos dos posturas frente al caso; La primera, en la que se concuerda con lo que plantea el autor, qué en ocasiones sí es necesario concentrarse, ensimismarse, intentar entrar en uno mismo y callar un poco la razón que a veces dificulta el proceso de contacto con lo divino. La segunda postura frente a lo planteado discrepa con el autor, puesto que estaríamos entrando en el mismo juego en donde la espiritualidad y los caminos de sanación y encuentro consigo mismo solo pueden suceder en un campo de perfección, y el contacto con lo divino y lo profundo está dado en este mismo sentido, es decir en un salón lleno de olores armonizantes para el cuerpo, con telas bellas, en completo silencio; la experiencia nos da el soporte para afirmar que el contacto con lo divino también está en los lugares y en las situaciones que no parecen tan perfectas y silenciosas como se cree que se necesitaría, además porque la realidad no es perfecta, en esta hay que aceptar las sombras constantes de la vida, lo feo, lo que duele y es precisamente en este sentido y por este que emerge un contacto real con lo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 675 divino para que el hombre mismo cambie, sane y haga conciencia. Es decir, al final la divinidad integrada del uni-verso es en su desorden también perfecta armonía de potencia ordenadora.

Para entender lo planteado antes, el fragmento de narrativa en una salida a la laguna sagrada de Fuquene lo explica así: “…el propósito era trasnochar en el lugar, pero las condiciones en las que se encuentran las laderas de la laguna son deplorables. Tal vez por falta de aceptación, miedo de no estar en la zona de confort, de que la carpa se hundiera, decidimos hacer pagamento en la mañana del día siguiente, el cambio de la vista, del recibimiento y de sentir fue abrupto, absolutamente distinto que el de la tarde anterior, la laguna inspiraba limpieza y acogimiento, además que a diferencia de la primera vista parecía que la laguna estaba bien, que tenía vida”. (Comunicación personal, 2015)

A partir de la experiencia de campo, afirmamos que la divinidad es aquella que le otorga al hombre una fuerza suprema que se posa más allá del ser mismo, además ésta le provee conocimiento y pequeños momentos de plenitud y de total presencia que le permiten abrirse a la espiritualidad y a la mística, es decir, estar a los pies de la montaña, dejarse envolver y caer en el asombro, la maravilla y el significado profundo del amor en una experiencia divina, dotada de sentido gracias al descubrimiento de la posibilidad humana de divinidad.

Entonces “Una vez el hombre es alcanzado por la gracia Divina, en cuanto es amado de una forma particular por Dios, el hombre adquiere una nueva relación con la divinidad. Ya no se religa con Él como de efecto a causa, sino como de persona amada a persona que le ama, como de amigo a amigo”. Tomás, A. (2001 Pg.417). Así se infiere que desde la mirada Mhuysqa indígena del amor, el pensamiento bonito y la palabra dulce, el sentido de la común unidad permiten sentir la divinidad. Pues desde el momento en que se acepta la pequeñez de la existencia humana bajo una mirada de la amorosidad de lo más total, se comprende cómo la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 676 divinidad de la montaña y la laguna se experimentan de forma similar en lo espiritual, el asunto es el de la suficiencia de entrega (fe) en el camino espiritual y la experiencia mística y divina en su naturaleza.

En este tiempo los seres humanos carecemos de amor y la divinidad inmanente viene a ayudar a devolver ese principio al ser, esta fuerza profunda del amor se tiende a perder en las mareas de la modernidad, la experiencia nos da el peso fenomenológico para decir que la divinidad se proyecta de la forma más amorosa posible así como lo expresa el siguiente fragmento de narrativa, “Aquella planta rosa que crecía en las laderas de Iguaque me dijo que la esencia de mi existencia era amor” (Comunicación personal, 2015). Inclusive sustentamos lo dicho con el autor Strano (2000, Pág. 42),

“Comienzo a comprender lo que realmente significa el verdadero amor como una forma de ser más que como un deseo. Sintiendo la alegría y la fuerza de ese amor, veo con toda claridad el contraste con el ego y el apego. Me doy cuenta de la diferencia entre verdad y falsedad. El único deseo profundo que queda en mí es el deseo de llegar a ser totalmente sincero por dentro, de alcanzar la verdad; ese deseo arde en mi interior como una llama. A medida que esa llama se intensifica, purifica el alma y elimina las tendencias negativas. Eso se consigue mediante la relación y la conexión con Dios, como si Dios fuera un orfebre que elimina las aleaciones del alma”

La divinidad ayuda a ordenar el caos interior, es propiciadora del conocimiento interno, por esto, llegar a certezas de mismidad ayuda a descubrir la forma más esencial de la propia existencia y la de los otros en divinidad. Comprendemos, como ésta se convierte en un pilar para el autoconocimiento, puesto que cuando se está en búsqueda de aquel ser supremo y divino, se termina encontrando la propia verdad, porque ese buscar empieza a convertirse en la senda El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 677 abierta que lleva al ser humano a conocerse gracias a la divinidad y es allí cuando entendemos que la interrelación profunda con lo divino brinda un conocimiento profundo de la esencia propia, en otras palabras, otorga una comprensión del sí mismo. De la misma manera, cuando se sabe que todas las expresiones de madre tierra tienen su propia divinidad, éstas sirven como espejo al ser humano bien sea para auto reconocerse, sanarse o ver la sombra interior, entendiendo que la divinidad es la que me ayuda a encontrar mi verdad.

En ese orden de ideas, Strano plantea que (2000),

A medida que me acerco cada vez más a Dios, es como si el Supremo, como un joyero, me guiase para ver los defectos que quedan y cómo deshacerme de ellos. Hay una corriente de comunicación muy sutil, pero poderosa. El amor que recibo de Dios es como la luz, que me llena de verdadero amor propio y realización personal, desplazando los defectos que ha creado el ego.

El objetivo, entonces, es ser una joya perfecta, engarzada en el oro puro de mis cualidades originales y mi naturaleza, que irradie los pensamientos y los sentimientos más puros y totalmente valiosos” (Pág. 44).

“La divinidad es un encuentro con la verdad, entendiendo la verdad como Dios. Se debe fundar y establecer desde la fe y la confianza de que el hombre es la senda abierta que permite llegar a conectarse con lo divino o con Dios” (San Agustin, Pág. 310, 2001). La divinidad es un vínculo con el universo que se da por las fuerzas del cosmos que se unen en un único acto de belleza, deslumbramiento y perplejidad. También es volver a nacer desde las aguas de la madre tierra, volver al inicio de la vida para tomar conciencia y sentir. Por esto, se puede ver en los lugares Sagrados, en Iguaque las nubes descendieron del cielo para alimentar las aguas sagradas de la laguna, el cielo y la tierra unidos en el vínculo primordial de madre, forman una de las representaciones más sublimes de Dios en la tierra, la totalidad del espíritu. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 678

Se infiere por divinidad, a la fuerza holística de pureza en la que se expresa la montaña como lenguaje estético y trascendente, es la fuerza y experiencia de lo no dividido, de lo total como puente integrado de sentido mítico y de sabiduría. La expresión de lo sencillo como majestuosidad sagrada (numinoso). El soporte micro cósmico y macro cósmico que sostiene. Lo invisible que se visibiliza en comunión. Manifestación misma que refleja lo esencial. La experiencia y vivencia sagrada de espiritualidad en donde se siente al Dios de Dios y se manifiesta la esencia de lo real para sentir la energía de poder que lleva a la comunión danzante de amor y manifestación.

Para Santo Tomás de Aquino en su obra La Suma Teológica, la divinidad es entendida de forma completa. Principalmente la toma como “lo que está en todo, en todas partes permanentemente” (2001 Pág. 148). Para enlazar esta definición con lo indígena se entiende como divino o divinidad al mundo entero, a las montañas, a las nubes, al aire, al agua, al sol, a la luna, entre otros, siendo estos el puente o el camino de conexión de los humanos con la divinidad. Pues estos manifiestan de forma etérea y efímera constantemente su fuerza a los hombres que tienen la fe, el corazón y la disposición para escuchar, leer o sentir los mensajes de lo divino, es para los mayores lo invisible como opción integra de espiritualidad.

“La divinidad no es el principio y fin de todo, asequible a la metafísica, sino que es el

Dios vivo que se conoce y se revela a sí mismo”, (Santo Tomás, A. Pág. 82, 2001) por medio de los hombres. Para el autor la “palabra Dios indica el que tiene divinidad”. (Santo Tomás, A,

2001, Pág 380), entonces se infiere que “Divinidad es Dios y Dios es Divinidad, ya que ambos significados encarnan el mismo principio tri- personal divino de padre, hijo y espíritu. La naturaleza humana fue hecha participe de todo bien, ya que la divinidad es la plenitud del bien” El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 679

(Santo Tomás, A, 2001 Pág. 831). Sin embargo, en el sentido indígena, el principio sería Madre,

Padre e hijo y todos encarnan un espíritu único y con su propia fuerza característica de amor, de fuerza, de obstinación respectivamente.

Tenemos presente que Dios es una representación simbólica de lo divino, etimológicamente hablando, procede del latín “Deus”, “Divus” o del griego “theos” y ésta más ligada a conceptos religiosos, pero todas con algo en común que es el significado de: “luz, brillo, o ser de luz”. Por otro lado, la divinidad se percibe gracias a sus representaciones como se ha mencionado líneas previas, de amor, de autoconocimiento, de encuentros con la verdad propia, de los otros y del entorno. La divinidad es algo mágico, es decir cuando el ego acepta que la grandeza de la naturaleza es más que él, aquella belleza que pareciera inefable no puede ser expresada en palabras comunes, para eso se hace mejor uso del bien sentido estético de poesías, de bailes o del misticismo sagrado de adoraciones a la divinidad que intentan esbozar como se siente aquella magia, lo invisible hecho visible, comprensible y real incluso como empíria en el ser humano.

En otras palabras, cuando el hombre se encuentra en medio de la montaña, en pleno ascenso se da cuenta que hay muchísimo para sanar y cambiar, la divinidad hace pequeños reflejos y esbozos en el hombre para corroborar su existencia. Así como expresa el siguiente fragmento de narrativa “…entre más limpio y suelto mi espíritu más cosas salen para sanar, para limpiar, para soltar…” (Comunicación personal, 2015) Así es como cada uno se da cuenta, que el camino espiritual no es solo por un momento, sino que para tener esos encuentros divinos, místicos y espirituales se debe tomar cómo una forma de vivir la vida.

Entonces la divinidad se convierte en la pureza que el ser humano percibe desde el corazón, pues esta llega a lo más profundo de sí, para mostrar y hacer sentir el universo en un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 680 suspiro, la vida en parpadeo, y a Madre en un latir profundo. Además de ser lo más puro que un hombre puede llegar a descubrir, sentir y percibir en conexión con la esencia de la vida, ya que en el momento en que se tiene la conciencia de que esa pureza la puede percibir en el corazón porque esta hace parte de la totalidad de la existencia de la vida se emprende el camino a la liberación psíquica y emocional humana. Porque como lo dicen nuestros abuelos No estamos aquí para cumplir con las expectativas de nadie. Ni incluso con las nuestras. Tan sólo las que nos susurra el espíritu de la naturaleza.

Mística

En ocasiones, sentimos y vivimos experiencias que terminan siendo un completo enigma, cuando lo que se experimenta va más allá, cuando se convierte en una fuerza mágica que acoge la totalidad de la existencia humana estamos hablando de mística. Según lo recogido en las experiencias vividas por el territorio ancestral encontramos que el camino otorga esa sensación mística, de la que estamos seguros ningún ser humano es obviado.

Los caminos espirituales, los encuentros con la divinidad, no se podrían dar sin la experimentación de la mística, ésta es una experiencia humanamente común, entender estos aspectos que son inherentes a la existencia del ser mismo abre el paso para comprender la profundidad misma de la existencia humana y los malestares que acaecen a la misma.

Entrando en materia, el autor Leonardo Boff, en su artículo Mística y religión, la define así:

“Mística deriva de misterio. Y misterio no es el límite del conocimiento, sino lo ilimitado del conocimiento. Conocer más y más, entrar en comunión cada vez más profunda con la realidad que nos envuelve, ir más allá de cualquier horizonte es hacer la experiencia del misterio…” (2004) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 681

Desde nuestra postura, entendemos que ese misterio en muchas ocasiones es bastante complejo de nombrar, describir y contar a los demás. Porque como afirma Capra (1992, Pág. 65)

“La experiencia mística directa de la realidad es un acontecimiento momentáneo que hace tambalear los mismos fundamentos de la visión de uno del mundo”. Cuando se camina el territorio acompañado de abuelos tanto físicos como internos, cuando se anda la tierra con humildad, sencillez, nobleza y honestidad, la experiencia mística se convierte en la realidad del caminante; Boff afirma que esta experiencia se torna como un “completo misterio”, sin embargo es fundamental entender que el misterio es para lo moderno, para lo occidental, para la razón misma, puesto que en nuestras culturas ancestrales indígenas Mhuysqas, no se tiene miedo a hablar y a sentir lo mágico, lo divino y lo espiritual pues estas son la evidencia empírica de lo invisible que hacen parte de la realidad humana, por consiguiente estas experiencias no son misterio, son mensajes del entramado natural por develar del que hacemos parte los seres humanos.

Caminar ancestralmente con los abuelos y la fuerza de linaje, implica humildad para lograr entender que en el camino se llega al conocimiento, que la mística ancestral de transracionalidad es esa fuerza que va más allá, e inclusive sobrepasa hablar, nombrar y mencionar lo que se experimentó, pues al ser una experiencia que se siente desde el cuerpo hacia adentro como estética trascendente es más complejo para la razón comprender la causalidad del sentir experimentado. Gracias a la vivencia ancestral se ha llegado a advertir que en medio de la experimentación de la mística es posible entender que más allá del misterio Y a través del sentido epistémico de lo corporeo, la mística posibilita el entendimiento del psiquismo humano; en otras palabras, éstas experiencias otorgan la apertura o el acercamiento para llegar a la comprensión de procesos internos que ocasionan malestar de alguna u otra forma. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 682

Es importante comprender que, aunque los sentidos son los puentes que permiten vivenciar la mística, ésta experiencia no está fundamentada únicamente en estos. En palabras de

Capra;

“…La experiencia mística de la realidad es esencialmente una experiencia no-sensorial.

Cuando los místicos orientales hablan de <>, se refieren a un modo de percepción que tal vez incluya la percepción visual, pero que siempre y esencialmente trasciende para llegar a ser una experiencia insensorial de la realidad” (1992, Pág, 46).

Entonces esta experiencia se convierte en un momento en el que el sentir, el pensar y el estar enseñan y develan lo que el lugar sagrado quiere mostrar, quiere comunicar, en este sentido es la verdad de sí y del lugar la que en ese momento se revela, por eso es importante integrar los sentidos constantemente con el lugar sagrado. Como lo expresa el siguiente fragmento de narrativa: “…Tunja tenía una mañana bastante fría, lo cual me recordó las palabras del abuelo

Fernando de Cota en donde decía que la madre nos manda los mensajes muy claros, así que supuse que algo debía enfriar, entendí que el fuego interno me hace moverme, la luz que ilumina mi interior, pero en exceso me quema, como el mal genio y la ira, me destruyen y me ciegan a las cosas dulces del diario vivir” (Comunicación personal, 2015).

“La experiencia mística es humanamente común, algo común a todo ser humano. Es accesible y posible de la misma manera para todos los seres humanos” (Hellinger, 2008, Pág. 4).

De la misma manera la mística es el mensaje de la madre tierra transmitido por la naturaleza en el cuerpo del hombre, o vivenciado en el camino que se está recorriendo, por ejemplo, cuando el cuerpo siente mucho frio (lo extremo de no recibir amor), el mensaje –según los abuelos- es que hay apagar la candela del corazón, o en otras palabras que algo hay que enfriar, tal vez el mal genio o el dolor. En otro sentido la mística es volverse uno con el todo divino de la existencia, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 683 ser uno con la naturaleza, con la montaña y los lugares sagrados, todo desde la conciencia que ese unir y conectar aproxima al ser humano a experiencias místicas de transformación individual.

Lo percatado es que de esta certeza se empezó a vivir con criterio místico, sin embargo existe la conciencia de la compleja hondura por recorrer.

En este apartado y su dificultad para lo racional se contempla la influencia de la filosofía cartesiana en la humanidad, sin desconocer la importancia que tuvo en la creación de la física clásica, ha sido un rubro para la estructuración del pensamiento humano moderno, llegando incluso a influir en la forma como los hombres se conciben a sí mismos, y como perciben la mística; así como afirma Capra:

“La famosa frase de Descartes, <> (pienso, luego existo), ha

conducido al hombre occidental a considerar su identidad con su mente, en vez de con

la totalidad de su organismo. Como consecuencia de la división cartesiana, la mayoría

de los individuos tienen conciencia de sí mismos como egos aislados existiendo

<> de sus cuerpos” (1992, Pág. 30).

Es una realidad que el pueblo mestizo de este territorio ha sido influenciado con estas corrientes filosóficas, llegando a estructurar formas incluso inconscientes de ver, sentir y vivir la vida; negando de manera constante el origen indígena y la totalidad corpórea que se tiene por naturalidad. En este sentido, es donde se ha perdido la relación con la madre tierra y se ha llegado a negar el mensaje que tiene ella para brindar al hombre; aquella fragmentación de la mente y el cuerpo, solo ha hecho al cuerpo torpe, dejando incluso que la mente, la razón y el ego, tomen las riendas del ser mismo, convirtiendo al ser humano en una especie de marioneta moderna de sus rumiantes pensamientos. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 684

Con base en la argumentación precedente, es más fácil comprender, por qué actualmente los seres humanos se alienan de una u otra forma de las experiencias místicas, bien sea por ego, por exceso de razón o por el mismo afán de la modernidad que ni siquiera permite vivir y sentir.

También hay que contemplar la memoria histórica y los procesos de identidad de los habitantes de este territorio, pues en algún momento esta forma de ser conscientes frente a la realidad fue pena de muerte, causa de torturas y casi extinción de un pueblo aún hoy se manifiesta como huella interna de dolor, por lo que no es fácil evocar algo tan sombrío para el linaje.

Es por esto que sugerimos debe realizarse entre todos, un proceso de acercamiento, aceptación, honra, sanación y perdón con el ancestro indígena, español y negro, problema donde lo único cierto para los abuelos es que la gran fuerza de la solución más allá de lo humano está en el espíritu de la tierra. La consecuencia de la integración como curación fortalecerá además la mística del conocimiento propio como evolución con mayor tranquilidad, naturalidad y pensamiento pensante y bonito.

Nuestros ancestros y grandes abuelos pensadores, chamanes, mamos y taitas, no poseen este tipo de fragmentación con respecto a una experiencia tan humanamente común, para ellos, lo místico, lo espiritual y lo divino hace parte del gran entramado cosmogónico, cosmológico y originario de nuestros pueblos indígenas como reservorio de su saber tambié filosófico y científico.

En lo nuestro ancestral la conexión mística como contemplación de la vida se relaciona con la escuela filosófica mística de los milesios, pues ellos “ni siquiera tenían una palabra para la materia, pues veían todas las formas de existencia como manifestaciones de la <>, dotadas de vida y espiritualidad” (Capra, 1992, Pág. 27). Los abuelos Mhuysqas imparten siempre la enseñanza de respeto hacia la naturaleza, ella es madre tierra, creadora de vida, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 685 proveedora de alimentos, sanadora y el sustento espiritual para los hombres; en otras palabras una forma perenne de concebir la vida e impartir el mito a sus nietos. Nuestros abuelos conciben la vida de forma total y real, en palabras de Capra (1992, Pg, 37)

“El mundo natural…, es un mundo de infinitas variedades y complejidades, un mundo multidimensional que no contiene líneas rectas o formas completamente regulares, donde las cosas no suceden en secuencias, sino todas juntas, un mundo –como nos dice la física moderna- donde incluso el espacio vacío es curvo”.

Desde esta perspectiva es donde se comprende que la mística es subjetividad, complejidad, humanidad. Es claro que la visión mecánica de pensamiento para la que hemos sido educados en la academia no permite concebir lo humano, el mundo e inclusive la terapia psicológica como un tejido que se conecte con lo real y lo profundo, sustentado en espiritualidad, mística y divinidad para sanar.

Es por esto que nos agarramos de aquellos fundamentos originarios, y de algo tan común como lo es la mística para fundamentar una Psicología ancestral Indígena, pues ésta es la que conecta al ser humano no solo con su interior sino con el mundo circundante, aquella relación corpórea que no se da netamente desde lo sensorial ni solo desde lo egoico, sino desde la profundidad almifica en integración sensitiva y en relación con el territorio como vislumbre de claridad, sanación y curación psicológica humana.

Es aquí donde se presenta las alternativas a la psicología moderna, puesto que las intervenciones terapéuticas que se realizan están completamente alejadas de la realidad interna del ser que acude a terapia, del ser que está perdido en su propia psique. Es momento de contemplar la realidad, el sufrimiento y la existencia humana con raíces internas profundas, ya que, desde el ego racional moderno, la psicología es científica, y fundamentada por aquel método El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 686 que reduce la practica psicológica a un mecanicismo vacío, reductible y enajenado de la humanidad. Todo por el miedo de ver lo invisible o de no poder verlo, de sentir, de amar, de encontrar las respuestas desde el cuerpo y desde lo místico, de aprender a ser uno con el todo de la existencia material, vegetal, telúrica, y de sentir lo espiritual y divino en cada uno sin prejuicio o excesivo juicio, sin el pensamiento de que es una superstición, pues éstas también son sendas

(métodos) para el autoconocimiento y la sanación.

Se ha enseñado a creer únicamente lo que se ve, y ni siquiera ver desde la observación profunda, sino que nos hemos limitado a ver únicamente con el órgano sensorial visual, andamos con una venda que no permite ver la naturaleza para vernos a nosotros mismos. Necesitamos prácticas psicoterapéuticas que contemplen los aspectos que nos hacen humanos, prácticas místicas que nos reivindiquen con nuestra identidad indígena y mestiza para lograr llegar a la profundidad de la conciencia, de la emocionalidad y claramente del malestar; la experiencia ancestral da cuenta que la mística, no solo es algo de lo que es complejo hablar, sino que también es el mensaje que encuentra el ser humano en su interior, el mensaje que envía la naturaleza para obtener claridad en el pensar, para que el ser mismo aprenda a cerrar los círculos que le ocasionan dolor, duelos, malestares emocionales, un ser que se encuentra en búsqueda de la comprensión de la vida misma, a la auto comprensión y de la sanación.

Es fundamental entender que recorrer el territorio Cundiboyacense (el camino de

Bochica), fue una tarea de resentir como cura y de: “… re-pensar el territorio que implicó vivir la experiencia de un tejido de la vida, sustentado en vivencias de lo comunitario y de comunión con el orden natural” (Daza, Morales y Santos, 2013, Pág. 12).

El mensaje místico de los lugares sagrados. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 687

Nuestro territorio es principalmente un tejido de agua, de lagunas, paramos, lluvia y ahí está contenido el corazón y la raíz de nuestra existencia Mhuysqa, es decir:

“Este territorio se mueve básicamente a través de los circuitos del agua, que se constituyen en un entramado de rizomas que movilizan las energías cósmicas, las fuerzas terrenales, las administra y extiende en un circuito que viene desde el páramo, un lugar donde se produce y recoge el agua, agua que se mueve en escorrentías a través de riachuelos, quebradas y ríos que van hasta el mar. A la vez, el agua se mueve por el rocío, por la llovizna, por la nube.

Conforma un circuito que mueve la energía contenida en el agua desde la montaña, desde los

Andes hasta la mar y de allí se devuelve como nube, nube que se enamora de la montaña para generar vida en el páramo” (Daza, Morales y Santos, 2013 Pág. 17).

Debido a esto, el recorrido del territorio ha sido fundamentado desde la cosmogonía y ley de origen de nuestro pueblo Mhuysqa, recorriendo desde el agua hacia la tierra; todos lugares sagrados de conexión cósmica y cosmológica. Las experiencias místicas dadas por cada uno de los lugares son únicas en esencia, por ser Mhuysqas el orden a trabajar es el nombrado precedentemente.

Lagunas Sagradas (Fuquene, Iguaque, Tota)

Las aguas sagradas de nuestro territorio son la representación misma de la Madre Tierra, la amorosidad, el crecimiento y trascendencia espiritual. Las aguas sagradas son la morada de nuestras serpientes, las cuales renacen gracias al poder curativo que allí se anida. Aguas que nutren, que sanan y liberan espiritualmente a nuestros ancestros y a nosotros mismos.

La laguna Sagrada de Fuquene

Experimentar la mística, gracias a la laguna de Fuquene, hace que el sentir se convierta en un maestro interior para aceptar la sombra, el aspecto físico deplorable de esta laguna enseña, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 688 que la mística, la espiritualidad y la vida misma no siempre son perfectas, bonitas, limpias y fluidas, este lugar enseña con maleza para aprender a aceptar la vida. Haciendo un paralelo con el interior humano se comprende que lo feo, lo duro, lo triste y agreste de la vida no se debe negar, de ello se debe aprender y junto a estos aspectos seguir viviendo, porque cuando se comprende que debajo de todas esas capas de maleza tanto física, como espiritual que cargan los seres humanos, está la bonita existencia de un ser dotado de vida, de la gente de tierra que somos, la paz interior aparece. Éste lugar también enseña que sin raíz el ser humano no es más que superficialidad contaminante para la vida, por lo que a partir de estar allí, este sitio crea la profunda necesidad de encontrar aquella raíz que se siente inexistente. Fuquene es encontrarse con el poder transformador del negativo y de la mirada superficial de la modernidad sobre los seres que habitan el planeta; también es encontrarse con que a pesar de la apariencia, la fuerza y la verdad son el espíritu, así como lo expresa una narrativa: “…la enseñanza de la laguna fue contundente, me falta aceptación conmigo misma…” El mensaje místico de este lugar enseña al que la visita a verse a sí mismo en totalidad como un balance entre lo bonito, lo viviente con la sombra y la maleza interna para vivir la vida en relación amorosa con la naturaleza y consigo mismo.

Después de haberse visto al espejo en este lugar, finalmente se entiende que Fuquene es un “baño de luz que proviene del padre sol”, que tiene como objetivo iluminar aquellos rincones negados por la conciencia, es otro llamado a la razón alterna que se ha negado desde la colonia en este territorio para aceptar la identidad indígena.

La laguna Sagrada de Iguaque.

Allí, es como volver a casa, es el vientre gestante del mundo, como ser alimentado por la mamá; cuando se hace la conciencia que este alimento no es físico sino espiritual, ese que tanto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 689 carece el ser humano, se vivencia el amor, específicamente de madre en toda su expresión, es todo un sentir que regocija a los sentidos, al alma, a ese corazón herido que se tiene a causa de lo moderno y su desastre también emocional y psíquico. Iguaque les enseña a sus nietos que el fin de la vida es tener un gobierno por el amor, vivir una vida en la que se respire amor y sanación.

Además también hace que todos los seres que estén allí sean conscientes de honrar el femenino, de honrar a la madre, a la hermana, a la compañera, pues cada una de ellas representa a Bachue en el sentido más completo y divino del existir como den de vida.

La laguna Sagrada de Tota

Limpiar el ser interno que está muy contaminado por la fantasía moderna, éste lugar es el sitio donde la madre tierra está limpiando el negativo del ser humano que la visita. “Las aguas sagradas de la madre tierra extinguen las llamas de dolor del corazón”. Aquellas aguas míticas, heladas y curativas tienen como fin apagar el dolor, el odio, la ira que enceguece la mirada dulce del corazón. Entonces la mística se convierte en un puente entre el cuerpo y el espíritu, ya que a partir de estar allí se siente la necesidad fundamental de abandonar como dicen los abuelos esa candela excesiva que quema al interior, que acaba el pensamiento bonito y dulce, las aguas de

Tota son limpieza, al igual que la mujer, gracias a los ciclos menstruales la mujer tiene la forma de limpiarse y regenerarse a sí misma debido a las aguas sagradas de su interior.

Cuando recorrimos todos estos lugares nos dimos cuenta que “Todas las cosas tienen su otro lado. Captar el otro lado de las cosas y darse cuenta de que lo visible es parte de lo invisible es obra de la mística” Boff. (2004). Reiteramos una vez más que la apertura es el pilar básico para llegar a este tipo de encuentros místicos, espirituales y divinos que acercan al ser humano a su interior, “La mente debe estar en una apertura tal que debe permitir hilar esos hilos de pensamiento, ser capaz de realizar lecturas complejas que superan lo evidente, lo explicito, todo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 690 acontecimiento literal…” Daza, Morales y Santos (2013, pág 16). Insistiendo en Boff, la mística es misterio, pero éste no es el final de las cosas, si no el comienzo de la alteridad y la realidad posible sentida interiormente, es decir que es importante ver no solo con los ojos de la razón, sino dar rienda suelta al sentir y al existir para que la mística invada la existencia.

El mensaje místico de los Territorios Sagrados

Sogamoso, específicamente el Templo del sol, es un lugar de fuego, de hierro, en el que el dolor se respira. En este lugar la esencia del indio (del padre y la madre) se siente en el aire, en el andar, aunque con tanto fuego y dolor, la humanidad está allí implícita. Es como regresar a las ruinas de la propia casa, la morada del ser en comunión, unas ruinas reconstruidas solo exteriormente, porque más allá todo esta desbaratado y roto. Es encontrarse con que no importan los cambios que se realicen afuera, si primero no se hacen adentro, pues de un templo bonito

(ego, cuerpo) no se vive. En otros términos, comprendemos que la mística y la espiritualidad están en profunda conexión, ya que éste lugar invita a que los cambios, las remodelaciones más importantes que se deben hacer son en el interior. De cualquier modo, ¿qué importa si la cascara de la fruta es bonita, cuando el interior está en descomposición? Es posible una aplicación de la transformación interna desde aquí, una advertencia sobre la invitación hedonista de la modernidad y su perpetua fijación de lo exteriorizante como vacuidad profunda del esencial espíritu, y en tal ausencia de sí el asunto radical del perdido sentido como causa de la enfermedad psíquica.

En el territorio de Hunza se reconoce la principalidad de los cojines del zaque, éstos litos

(piedras) son en evidencia un lugar de fuerza, donde se percibe la imponencia del pensar grupal de la raza indígena y de la autoridad del pensamiento como tejido de unión con la que es indispensable andar siempre, es decir saber que el otro enriquece la vida individual permite el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 691 crecimiento tanto propio como colectivo, este sitio invita a pensar la vida y en los demás como parte fundamental de la propia existencia. Sabemos que actualmente solo se quiere actuar de forma individual, en competencia con el otro. Para recuperarnos a nosotros mismos como seres humanos, es fundamental volver a nuestras leyes de origen y uno de los elementos vitales refiere la necesidad de contemplar la otredad como principio básico de la vida, en palabras coloquiales, volver a la común- unidad (comunidad).

En el mismo territorio, la ubicación de las moyas (de San Ricardo) representan todo un reto a la razón, pues aquellos agujeros son un completo misterio para el ojo humano de pensamiento. En palabras de Boff:

“El misterio no se nos presenta aterrador, como un abismo sin fondo. Irrumpe como voz que convida a escuchar más y más el mensaje que viene de todas partes, como llamada seductora que nos mueve más y más en dirección al corazón de cada cosa. El misterio nos mantiene siempre entre la admiración y la fascinación, entre la sorpresa y la exaltación” (Pág.

2, 2004).

Concordando fuertemente con el autor, somos conscientes que en el lugar de las moyas el misterio es tan grande que el tener los ojos abiertos no es suficiente para intentar captar todos los mensajes místicos de los lugares sagrados que guardan aquellos agujeros.

En palabras del abuelo Mhyusqa de Cota Fernando Castillo, éste sitio es un puente importante de conexión cosmogónica. Es un reto a la razón, porque cuando se está en aras de contemplación de aquellos agujeros que la componen, el mensaje que se transmite es totalmente místico, va más allá y se siente vivencialmente en el cuerpo; limpieza, concentración y firmeza encaminadas hacia el sí mismo, el campo fenoménico del lugar da cabida para encontrarse con el verdadero ruido del interior de cada visitante, ayudándolo a conocer los indicios de su malestar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 692 psicológico, emocional y físico; aquél lugar sirve de vislumbramiento interno inicial para el que lo visita. Es además un lugar de conciencia sobre el abandono en el que se encuentran nuestros sitios sagrados.

En los Petroglifos de Usamena (Iza – Boyacá). Principalmente lo imponente del paisaje, las piedras partidas, puestas cada una en un lugar específico manifiestan la perplejidad mística y fascinación de lo existente cuando se está de frente a ellas. Su composición de figuras de hombres talladas (quién sabe de cuántos años atrás), dan a entender que el lugar ha sido un sitio de peregrinación bastante importante para nuestros ancestros indígenas. En la perfecta danza del femenino y masculino que se vivenció en las salidas, en este sitio se experimentó la fuerza masculina de una manera impresionante, es decir, desde la estructura física tan grande, tan presente y tan fuerte en autoridad se hacía sentir más allá que lo que habitaba como signo era la energía de un gran y sabio padre.

Las representaciones de masculino y femenino son diferentes, puesto que la primera siempre se siente de una forma fuerte en evidencia de imponencia y acción, mientras la segunda no necesariamente tiene que imponerse para sentirse, es decir está fuerza va más directa a la emocionalidad y la otra a la acción, siendo estás dos fuerzas opuestas y complementarias para conformar la totalidad humana. Entonces, estando presentes en aquél lugar la fuerza hacia que se sintiera al padre, como estar de la mano de él, acompañados de un abuelo escuchando consejo, esto se sentía tanto que fue necesario que unos se hincaran, otros agacharan su cabeza, y otros se acomodaran con la frente en el suelo para poder recibir ese mensaje de respeto y reconocimiento ante ese ser superior que estaba allí. Cuando hay conexión plena con el lugar sagrado, surge el ensimismamiento de comunicación mística y se vislumbra el camino espiritual, éste se construye paso a paso y en compañía de los ancestros físicos y espirituales. Son lugares de mayor poder y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 693 de pensamiento de curación, están allí como evidencia del pensamiento del planeta e invitan a la toma de la fuerza espiritual y física.

Siguiendo el recorrido por el altiplano Cundiboyacense se encuentra el poblado de

Gamza, (Gameza, Bóy.), lugar recorrido específicamente en el camino a la búsqueda de la cueva de Toya (según el mito, la primera morada de Bochica) y territorio muy cercano a Suamox. Este es un lugar absolutamente frondoso, lleno de vida, con agua fluyendo. El mensaje de allí es de luz, esperanza, magia y alegría como formas bonitas de vivir la vida, pues la circunstancia contemporánea del afán hace que los seres humanos se nieguen a este tipo de realidades, este es un lugar que permite soñar, a pesar de lo que el mundo de la razón limitada y económica ha hecho de él. Además, también es bastante claro observar que entre menos presencia e intervención del hombre en estos templos sagrados, mejor se conservaran en su fuerza. Queda como enseñanza que no se necesitan adornos de simbología religiosa o cultural para encontrarse a uno mismo, que la mística es encontrarse con la magia, la dulzura, la alegría y la vida misma que la gran madre physis devela en todo su esplendor.

La división entre lugares solo es el reflejo vívido de las fluctuaciones del psiquismo propio, ya que como se especificó precedentemente, cada lugar transmite una experiencia mística diferente, la conexión entre lo que viene del lugar o del camino es la re significación para cada uno, pues la minuciosa observación es particular y sumamente real, ya que como se ha mencionado previamente, el camino es el mensaje que reconstruye, enseña y alimenta al sí mismo. Como afirma Capra:

El entorno natural es tratado como si se compusiese de partes separadas para ser

explotadas por diferentes grupos de interés. La conciencia fragmentada se extiende

más a la sociedad que está dividida en diferentes naciones, razas, grupos religiosos y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 694

políticos. La creencia de que todos esos fragmentos – en nosotros mismos, en nuestro

entorno, y en nuestra sociedad- están realmente separados, puede verse como la razón

esencial de la actual crisis social, ecológica y cultural (1992, Pág. 30).

Este tipo de encuentros y sentires, crean la conciencia de que lo que se recibe de la madre tierra a través del lugar sagrado se convierte en una fuente de enseñanza propia, donde, como se ha mencionado reiteradamente se encuentra que la montaña, la laguna, el camino el territorio completo están llenos de vitalidad.

Por otro lado, la mística también se siente e identifica al ser humano con los animales, pues éstos se convierten en el puente y en el espejo para vivenciar a la naturaleza, la grandeza y la divinidad en el sí mismo. Es decir, en varias salidas de campo los asistentes de investigación sintieron la mística de esta forma, por ejemplo a uno el mensaje le fue dado por medio de una araña en el que el propósito de la experiencia mística era aprender a tejer la vida, así como estos animales hacen las telarañas. A otro el mensaje fue dado por una mosca, haciéndole entender que la grandeza interior no tenía nada que ver con la exterior. Cabe aclarar que estas experiencias han surgido de la meditación y la conexión a los lugares, no se han necesitado elementales de las plantas de poder que ayuden a vislumbrar aquellas enseñanzas por medio de los animales.

La mística también se convierte en una forma en que la madre tierra acoge y cura el negativo, y por esto se presenta junto con la divinidad y la espiritualidad como el puente a la sanación. En este sentido la expresión, atiende al negativo en el suave arrullo de sus aguas para sanarlo, hace la salvedad sobre la experiencia de negatividad solo liberable en la sensación, percepción y grandeza de la presencia de la divinidad en su vida, el movimiento de la madre tierra sobre la limpieza de la mente y el corazón como libertad de la conciencia y de la psique. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 695

Cuando se entrega ese negativo, el cuerpo descansa y el corazón logra latir más profundo, en realidad se es posible volver a respirar. Cuando el negativo invade al ser humano,

éste se convierte como un niño asustado en busca de protección de la oscuridad, entonces se crea un apego, y se arraiga la creencia fuerte que el negativo es la casa que lo acoge a uno, la que brinda la seguridad que tanto se carece.

La mística también es un encuentro ferviente y de aceptación consigo mismo, la cual hace comprender que lo importante no es el tallo, es la raíz, entre más grande es ésta, más fuerte será sin importar la altura de la planta. Los seres experimentan una lucha permanente entre silencios de la razón y el corazón, puesto que los mensajes de la Madre atraviesan los densos muros de rigidez que entre corazas revisten el entendimiento racional. Es ahí cuando la mirada mecanicista falla y se empieza a vivir la verdadera humanidad. Entonces a partir de la mística surge una enseñanza contundente desde la experiencia, que se es grande, en donde se siente la propia divinidad, se recobra la esperanza en uno mismo y se le encuentra sentido al diario vivir, gracias al descubrimiento de la divinidad propia, esa que crece en cada uno, cuando el ser humano siente a la madre y a la fuerza en el interior, donde se llega también a la concepción de que se es tan grande como ese todo que lo sostiene, porque se siente en el corazón y en el cuerpo

En ocasiones el cuerpo parece desfallecer pero la Madre da luz e ilumina el camino de nuevo al interior para siempre mantener los pies en la tierra, el cuerpo se mueve, el sentimiento no calla y tras esa tormenta inexplicable se devela de forma enigmática un momento real de bienestar, tranquilidad y ensimismamiento. Porque cuando el ser humano colapsa y parece adolorido la mística sirve como un acercamiento al mensaje interno de respuesta curativa. Se llega entonces a la conclusión que Las cosas dentro de mí se nutren mutuamente, la fe como el conocimiento dado en lo meditativo de la concentración, es la producción armoniosa que me El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 696 permite saber ¿cómo estoy? El mismo ser se da cuenta que ver más allá es vislumbrar en la intensidad (también consciente) de la oscuridad lo negativo de los miedos, porque en esa raíz esta la esencia pura del negativo que aliviana la sensación de extrañeza interna y el mensaje que se revela tras una experiencia vivencial. El mirarse en profundo enseña que el equilibrio de sí, siempre es posible tenerlo desde dentro, allí el guía es el corazón consciente porque cuando caso contrario éste es subestimado por la razón, se pierde experticia de conocimiento inmanente sobre su infinita sabiduría y la fuerza interna y externa se acaba.

Los rituales conectan al ser humano con la vida mística. Es decir, la sacralidad y la fe que mueven y hacen posibles estos rituales en muchas ocasiones no serían dadas sin elementales sagrados de significado misterioso, por ejemplo la siembra, el camino, el tejido o la hosca en polvo por la nariz son de esta naturaleza, ya que cuando se recibe en frente de la laguna sagrada de Iguaque, o en un trasnocho, ella funge como puente para encontrar lo que se es interiormente también sagrado. Por otro lado, también se hace la conciencia que las ofrendas y el pago a la existencia por la vida que se tiene, guardan el misterio característico de la mística transhumana, pues en su interior, los cuarzos, las semillas y el agua contienen el secreto de agradecimiento de quien los deja en el ritual llevando una chispa de esencialidad en mismidad y propósito de entrega y de comunicación con lo total.

En conclusión, la mística es el reflejo de la existencia humana despojada de la razón, entregada a los sentidos y a vivir la vida, es decir, entender el lenguaje de las montañas, las lagunas, los lugares sagrados y además contemplar aquél misterio tan natural y común del que estamos inmersos todos los seres humanos. En palabras de Boff es una herramienta fundamental que sirve para: El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 697

…Vivir aquello que escribió el poeta inglés William Blake (1827):"ver el mundo en un grano de arena, el cielo estrellado en una flor silvestre, tener el infinito en la palma de la mano y la eternidad en una hora. He aquí la gloria: sumergirse en esa Energía bienhechora que nos llena de sentido y de alegría (Pág. 2, 2004).

Hacemos conciencia de lo fundamental que es el reconocimiento de la mística y de la experiencia mística como tal para una ciencia humana. Porque como se cita en Capra (1975, Pg.

65) Según “D. T. Suzuki, la mística es “el más sorprendente acontecimiento que jamás pudiera suceder en el reino de la conciencia humana… alterando toda la forma de experiencia estandarizada”. Entendiendo que este tipo de sentires son la raíz de la vida misma para el ser humano. Es sabido sobre la crisis de esta época que ese encuentro con la mística le va servir no solo para encontrar sentido, sino también para encontrarse a sí mismo, al otro y a la tierra como fundamento del mismo, para reconocer esa fuerza interior que todo ser humano posee, y finalmente ese misterio como lo llama Boff y todo el tiempo lo dicen los mayores de nuestra ancestralidad termina siendo una realidad total para el ser, puesto que gracias a éste se inician búsquedas, caminos espirituales y de conciencia que permiten sanación y sobre todo respuestas de sentido en el camino humano como evolución (metampsicosis socrática).

Cosmogonía:

La cosmogonía es aquella que funda y explica la creación del cosmos universal, ésta es el principio que siendo vital y total recrea y sostiene lo esencial y substancial de las culturas indígenas. Es aquella construcción del universo ancestral, la organización de la vida y por ende el origen místico de la misma, ésta es una explicación sentida y sagrada de cada pueblo en donde se relacionan todas las manifestaciones de la vida humana y nuestros saberes ancestrales son El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 698 entonces la explicación minuciosa y radical de esta sabia Cosmogonía como potencia filosofante y de cientificidad.

En ese mismo marco Cochoy y Tzapinel (2005) van a plantear que:

Nuestra Cosmogonía es el sustento más profundo que nuestras abuelas y nuestros

abuelos crearon para explicarnos el origen de la vida, el origen y el desenvolvimiento

del Universo. Es nuestra forma propia de ver, entender y vivir el sentido de la vida.

Nuestra espiritualidad y nuestras ciencias son la explicación minuciosa de esta

Cosmogonía. Nuestros rituales sagrados, códices, inscripciones en piedra,

ideogramas, tecnología, arte, tejido, música, tradición oral, organización, normas de

convivencia son la vivencia personal, familiar y social que como descendientes

milenarios aún mantenemos vigente. (Pág. 19)

De la misma manera, la vivencia fenoménica de ancestralidad que ha otorgado la investigación presente, nos da la certeza para afirmar que la cosmogonía es aquella que brinda una fundante y fuerte comprensión del origen del cosmos y del sí mismo. Igualmente es un soporte mítico, que armoniza con lo divino y el todo de las culturas. Es decir, una relación equilibrada y mágica de lo humano y lo no-humano (ríos, lagunas, montañas, piedras, plantas, animales) en una danza con lo eterno y con la raíz ancestral.

El siguiente fragmento de narrativa lo expresa así: “la sensación de bienvenida de la laguna, el respirar ese oxigeno que me hizo sentir viva por dentro, me ayudó a cambiar de pensamiento, porque este andar no es algo que se hace una vez y se acabó el malestar que se experimenta, es entenderme a mí, a mi malestar, a mi dolor, a mis duelos, de manera multidimensional, desde todas las enseñanzas que tiene la madre Tierra” (Comunicación personal, 2015). De esta manera armonizar con lo divino, con el todo y concebir la creación, la existencia y el sustento humano El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 699 desde la cosmogonía, ayuda a tener un entendimiento del todo que sostiene, de los demás y del sí mismo, entonces el contemplar la vida como un tejido relacional en el que todo está sustentado y conectado con las leyes de origen, las divinidades, la espiritualidad, la mística, los usos y costumbres de una cultura, y el mito va a permitir que la cosmogonía coexista con la mismidad y la identidad propia.

En este mismo sentido, Ibarra (1997) en su texto Cosmogonía y mitología indígena americana plantea que, “la cosmogonía se refiere a la creación del mundo en el sentido antiguo de la palabra del cosmos, que existió desde siempre, se formó de por si en un proceso natural, o bien fue creado mediante hechos por uno o más demiurgos (Divinidades)”. A medida que se recorre la tierra ancestral se puede dar cuenta que la cosmogonía es el origen como alimento de la memoria histórica del mito, por ejemplo las visitas a la laguna sagrada de Iguaque enseñan que el origen Mhuysqa, en ese sentido del cosmos reside en aquellas aguas, es decir, la historia ancestral cuenta que Bachue salió con su hijo a poblar la humanidad y a enseñar leyes de origen de relación telúrica desde aquella laguna, cuando logró su obra de civilización se sumergió nuevamente en aquellas aguas míticas, ancestrales y fecundas.

En relación a lo planteado líneas antes Ibarra va a definir la cosmogonía, “como el origen y la creación de un todo, la cual permite comprender la naturaleza de lo cósmico y mitológico; es entendida como la historia mitológica de los dioses en relación con la creación del mundo y su posición en relación con los hechos de los hombres posteriores y actuales” (1997). Por esto, la cosmogonía es aquel orden de origen que funda y crea el mundo, pero no solo por el mito narrado por lugareños, abuelos y propios Mhuysqas, sino porque en el momento meditativo del estar en la laguna, lo que se vivencia es que aquel dueño de las aguas heladas, las nubes y todo el paisaje en relación acogen como a una madre a su hijo, lo abrigan en su dimensión de divinidad, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 700 en otras palabras, el estar místico es un volver a casa, al vientre materno, sentarse en las laderas de Iguaque es conectar con el cordón umbilical de la existencia y así soy consciente de mi origen (comunicación personal, 2014).

América del sur es un entramado de tierras que se conectan no solo por la proximidad de sus latifundios, sino por la cultura andina, ancestral e indígena de los mismos. En este sentido nuestros hallazgos permiten proponer una similitud bastante cercana con otros sentidos cosmogónicos en cuanto a la definición de la misma, “…la cosmogonía también explica la forma de percibir la construcción del mundo desde la cultura, la simbolización a través de signos tomados de la naturaleza para la representación de un sistema de valores propios, ligados profundamente a su conocimiento” (Mejía, 2012, Pág. 6).

El estudio del tema cosmogónico y religioso ha variado mucho en los últimos decenios sobre lo que aún aparece en algunas obras populares y que son resabios del siglo pasado y principios del presente. Desde mediados del siglo pasado (partiendo de una posición atea sobre el caso), Ibarra (1997) presenta la tesis interpretativa de Tylor, E., poeta fundador del romanticismo en Inglaterra, quien planteaba que la religión había tenido un primer punto de partida en el animismo, en la idea de que la naturaleza estaba toda animada en el sentido de que las cosas existentes tenían todas un espíritu que las animaba, incluso las cosas aparentemente inertes como las montañas, los ríos, el aire y el fuego.

El animismo, representa una forma de vida basada en la entrega y el respeto a la

naturaleza. Desde la edad de piedra, el hombre no tenía ni los medios, ni el poder

para controlar las fuerzas naturales; su supervivencia dependía de su adaptación a

ella, y esto lo conseguía a través de una identificación con el fenómeno de la

naturaleza. El hombre primitivo sentía que formaba parte de las fuerzas naturales El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 701

igual que ellas formaban parte de su propio ser, poseían un profundo respeto

espiritual por la naturaleza, por ejemplo, daban una ofrenda a un árbol cuando lo

tenían que cortar. Ibarra (1997)

Conectar la vivencia con la actitud animista para interpretar la fe planteada por el autor anterior, nos sujetaría a nosotros y a nuestros pueblos indígenas en esa postura, desde lo

Mhuysqa la entendemos como una definición que engloba la consciencia hacia la majestuosidad de la naturaleza, el espíritu y la fuerza de los territorios sagrados y por ende del entendimiento cosmogónico y ancestral autóctono nuestro, tenemos el ferviente entendimiento, de que estamos aquí gracias a la naturaleza, porque nosotros somos naturaleza, lo salvaje está en querer perdernos en la vorágine existencial y moderna, que nos aleja cada día de lo que debemos ser y somos en raíz ancestral. Parafraseando un fragmento de narrativa y para comprender que la naturaleza tiene espíritu, inteligencia y fuerza propia, que no está como un algo inerte, sino que siempre está con los seres humanos de manera total se entiende lo planteado antes así: “…el abuelo nos hizo levantar, salir del chunsua, y mirar fijo hacía una montaña, nosotros nos quedamos observando aquellas luces que habían en la montaña, eran tres luces, se movían entre ellas, tengo que admitir que la razón entró a jugar un papel determinante en ese momento y pensé miles de cosas que podrían explicar ese movimiento pero ninguna era coherente con lo que yo veía… entramos y el abuelo dijo que siempre había que buscar la luz que hay dentro de nosotros, que allí había abuelas danzando…” (Comunicación Personal, 2014).

En este sentido, Alexander Lowen refiere en sus escritos de analítica bioenergética que el hombre en la edad de piedra era en cierto modo como un niño. Vivía en términos de su cuerpo, estaba profundamente inmerso en el presente y era muy sensible a todos los matices del sentimiento; su ego estaba aún identificado con su cuerpo y sus sentimientos. El hombre El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 702 primitivo vivía a un nivel tan subjetivo como vive un niño. La subjetividad lo llevaba a creer en espíritus y en magia, lo que el sofisticado hombre actual no puede aceptar ni entender. El hombre de hoy considera que eso es pensamiento irreal, cree que una actitud objetiva, basada en el distanciamiento, que emplea el pensamiento lógico y que confía en la experimentación y el control, es el único enfoque valido de la realidad. (1972, Pág. 258).

Así que nuevamente la invitación es a ser libres en instancia de primigenidad (el niño), simples y conscientes del cuerpo, de los sentimientos y de la mamá como sentido real y también metafórico del origen. Ahora solo vivimos esclavos del ego, fortaleciendo y enriqueciendo la tristeza y el dolor como regocijo. En sentido animista hay que aprender a creer en la magia, lo eterno y lo total como realidades que se pueden vivir para la fortaleza espiritual humana.

En semejanza con lo que se quiere plantear Lowen 1972, dice que: “El hombre logró incrementar su poder sobre la naturaleza y sus congéneres, este poder le llevó a un cambio en su forma de pensar y en sus relaciones con el mundo. Contemplando desde el punto de vista del individuo, el cambio representó conocimiento en control e individualidad”. (Pág. 258). Tal pretensión egoica y falsa de creer que se tiene el control de la naturaleza, ha representado una ruptura en el conocimiento de la historia animista, que da una explicación a la aparición, creación y existencia actual de la gente Mhuysqa, el desconocimiento de lo cosmogónico, el pensamiento moderno e individualista y anti comunitario ha alienado por años a la sociedad de mestizos de este territorio, sin embargo las salidas de campo dan cuenta de manera bonita que los lugareños de algunos poblados como San Pedro de Iguaque, aún recuerdan, se identifican y explican su existencia con el mito cosmogónico de creación de Bachue, incluso aún mantienen el respeto frente a la forma en que se sube a laguna Sagrada de Iguaque, todavía reconocen la fuerte acción liberadora que genera conocer y fortalecer su raíz ancestral, siendo conscientes que en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 703 medida en que se mantiene el reconocimiento de la cosmogonía como certeza originaria de la vida, las raíces ancestrales se mantienen fuertes y la comprensión de la existencia desde lo comunitario, lo divino y lo total recobran el sentido de la fe, para entender y sentir la naturaleza sanadora de Madre Tierra.

En este mismo sentido Cochoy y Tzapinel (2005) van a plantear que aquel ver, sentir y explicar la vida, en otros términos, la cosmovisión,

Inicia en sintonía personal, familiar y comunitaria con la existencia en todas sus

manifestaciones. Es una genial creación espiritual científica (astronómica, matemática,

ecológica, geológica, orgánica), que posibilita florecimiento y madurez de conciencia

humana para su convivencia cotidiana con la totalidad. Es espacio cósmico de encuentro

que genera procesos colectivos. Es la auténtica Educación Maya con vida para la vida. En

ella se aprende la dignidad y la libertad espiritual; se educa con la vivencia, se enseña y se

aprende a través del comportamiento; alrededor del fuego ceremonial desaparece la

individualidad, emerge lo trascendente como nueva oportunidad para el desarrollo y

expansión de la conciencia. (Pág.14)

Relacionando lo planteado por los autores con la ciencia psicológica y con la actual e incipiente modernidad, es como se comprende que una cosmogonía de la psique, posibilitaría el entendimiento profundo y la apertura para ejercer una mirada perenne de la vida, en donde todas las manifestaciones de la expresión humana y reconociendo siempre a Madre Tierra, estén en sinergia con la constante evolución de la conciencia humana para el entendimiento de la vida misma y por consiguiente de la enfermedad psicológica. “Así, el sustento cosmogónico permite comprender “cómo nació la vida, comprendemos cómo florece cíclicamente la vida, visualizamos el camino de la vida. Esta compresión y visualización nos ayuda a tomar y respetar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 704 nuestra libertad de seres humanos en comunión con el amor y la dignidad de la Madre Naturaleza y el Cosmos”. Cochoy y Tzapinel (2005, Pág. 16)

Continuando con lo esbozado Mejía, 2012 va a plantear que “la cosmovisión de los pueblos originarios y los demás de práctica ancestral, mira el territorio como algo sagrado y, por lo tanto, no únicamente para las actividades comerciales o de servicio humano, sino busca la integralidad entre el fluir humano-humano, humano-territorio, territorio-cosmos y territorio- humano-cosmos” (Pág. 5). En este sentido, podría concluirse, que este entendimiento cosmogónico de la psique al que se llega desde la cosmovisión, es fundamental para la terapia ancestralizada y humana que proposita esta intención, pues desde esta postura el sí mismo se conecta con lo total, con lo humano y lo cósmico, llegando incluso a la comprensión de la situación presente y pasada, soltando y sanando todo aquello que genera malestar o una detención en aquella evolución de la consciencia que acá se planeta, aquel entendimiento emerge gracias a la colectividad del ritual, de la comunidad y del andar la tierra, es así como la cosmogonía aplicada a las relaciones y al interior humano, posibilita el entendimiento propio, convirtiéndose en una alternativa para la práctica psicológica actual. De esta manera, el concepto cosmogónico implicaría realizar “nuestra vida en toda su plenitud”. “Mediante la ciencia, la tecnología, la estética y la espiritualidad creadas milenariamente, entramos en comunión con la naturaleza y el universo para construir nuestra plenitud”. Cochoy y Tzapinel (2005, Pág. 13).

Lo anterior se plantea en la instancia de liberación psíquica, colectiva y espiritual para llegar a la comprensión de la psique y por ende del ser humano desde la psicología, estas liberaciones pueden ser posibles desde esa mirada telúrica de la realidad actual que brinda la cosmovisión, en este mismo sentido es como Mejia 2012, esboza que:

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 705

“Todos los pueblos originarios conciben la vida, al universo de manera distinta al

pensamiento antropocéntrico. Afirmará que este pensamiento y práctica empieza a

vigorizarse porque la conciencia colectiva sugiere que esta es la manera en que, no solo

puede fortalecerse el vínculo mujer-hombre, si no, además las prácticas de respeto a la

naturaleza, los valores espirituales, pero también, una salida a la destrucción que está

generando el otro modo de vida”. (Pág. 4).

Es así como se presenta la alternativa a las actuales practicas psicológicas para la comprensión y el fortalecimiento de los vínculos humanos planteados por el autor anterior, el pensamiento bonito, la palabra dulce, lo comunitario, lo espiritual y lo divino, son las bases para entender lo humano y estas comprensiones no podrían ser dadas sin la cosmovisión de nuestro pueblo indígena.

También y en sinergia con lo ya planteado hasta aquí, otro termino de vital importancia para la comprensión del universo ancestral es el de Mitología, el cual refiere sobre la historia de los dioses, esta tiene en cuenta la creación del mundo, y su posición en relación con los hechos de los hombres posteriores y actuales. Es así como Fischer 1989, en su libro La persistencia de los valores religiosos tradicionales entre los Kagaba de la Sierra Nevada de Santa Marta va a plantear que:

Hay una gran variedad de mitos cosmogónicos. Sin embargo pueden clasificarse de la

siguiente manera: a) creación ex nivilo (un ser supremo crea el mundo mediante el

pensamiento, la palabra, o calentándose a sí mismo en una choza con vapor, por

ejemplo); el motivo del buceador terrestre (un Dios que envía pájaros acuáticos, o

animales anfibios, o se sumerge el mismo en las profundidades del océano primordial

para rescatar partículas de tierra de la que surgirá todo el mundo); b) la creación El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 706

dividiendo en dos una unidad primordial (se distinguen tres variantes; separación del

cielo y tierra, es decir de los padres de la tierra; separación de una masa amorfa

original, el “caos”; partición en dos partes de un huevo cosmogónico), creación por el

desmembramiento de un ser primordial, ya sea una víctima voluntaria antropomórfica

y c) la creencia en el poder de la mente racional y el pensamiento, es decir, el hombre

como suprema autoridad (Pág. 222)

La mitología cosmogónica Mhuysqa podría concluirse con base en este planteamiento es de naturaleza ex nivilo puesto que el mito narra que Bachue se sumerge en las aguas de la laguna sagrada de Iguaque, en donde sale a la superficie con su hijo Labaque y allí forman la humanidad. De manera similar el mito propone la continuidad cíclica sobre un regreso en transformación evolutiva de unas serpientes que vuelven al agua recreando el punto universal de origen y regreso.

Finalmente, para la ancestralidad Mhuysqa la cosmogonía es aquella fuerza que creo el todo, en otras palabras, aquella que la colonización intentó negar con las concepciones catolicistas, filosóficas y científicas de la creación del mundo, la concepción del hombre y de los demás, inclusive se han tomado esas concepciones cosmogónicas en su mayoría eurocéntricas como propias cuando la ancestralidad, la raíz y la configuración social de nuestro territorio no son solo propias de éstas. Lo primordial es dejar de lado la vergüenza que ocasiona el ser indígena, aprender a creer en el mito como logos de cientificidad de los ancestros y entender que el camino de Bochica, es el camino de encontrarse consigo mismo.

Ley de origen

Es el hilo que une con la Madre y Padre Espiritual, es una relación psíquica de principios externos e internos bioéticos considerados como leyes propias aplicados en la comunidad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 707

Descubrir y tejer el hilo espiritual, para que al mismo tiempo el camino esté en concordancia con la espiral cosmológica es un entendimiento que otorga esta ley. “Este entendimiento introduce la aceptación de la unicidad, la igualdad y la armonía con el entorno biofísico, como principios inspiradores de una organización social erigida sobre una base comunitaria o colectivista que rige todas sus relaciones” Pedraza (2009, Pág. 9). Es una regla de armonización entre lo prepersonal, lo personal y lo transpersonal, además de ser un modo de vivir, de ordenar y de caminar la vida, englobando los aspectos particulares de las tradiciones culturales.

Daza comparte que la Ley de Origen es “la ley del principio, la ley de la unidad, la ley natural. La ley a través de lo cual la vida existe, pues todo existe en relación, en relación de unidad, en relación de amor” (2013, pág. 24). Desde nuestra experiencia fenomenológica de campo, reconocemos concluyente y fundamental retomar estas leyes y aplicarlas en la vida de hoy, pues en este tiempo los seres humanos se encuentran arrojados a la vorágine, perdidos en un sin número de estímulos y banalidades que lo alejan día a día de la esencialidad del sí mismo.

Por lo cual, sí se habla de una Psicología Ancestral Indígena, de una ciencia humana, es esencial que los seres humanos comprendan la profundidad y la importancia de la ley de origen de nuestros pueblos ancestrales para vivir en mayor armonía tanto individual como colectiva. En este sentido somos sumamente conscientes, que puede ser complejo identificarse tanto psíquica, espiritual y culturalmente con un principio que ha sido negado desde la barbarie de la colonización, por lo cual se propone tomar aquellos aspectos como paradigmas epistémicos que sirvan en pro de lo humano, de la recuperación de aquella naturaleza bonita, dulce y sentida de la cual estamos hechos.

De la misma manera, Roberto Santos comparte lo que ha ocurrido en nuestra relación con la Ley de Origen: El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 708

No hemos entendido que la Ley de Origen que rige el orden del universo, está para

comprenderla y no para transgredirla. Así mismo el territorio tiene un orden natural en

correspondencia con el cosmos y nosotros estamos inmersos en ese contexto territorio-

cosmos. Es pretencioso creer que podemos ordenar el territorio, cuando es el territorio

quien nos ordena a nosotros, ir en contra de este principio esencial de entendimiento de

orden natural es la causa del deterioro generalizado que estamos viviendo (2013, Pág.

226).

Desde este sentido, es más claro y fácil encontrar la raíz de la patología psicológica moderna, el universo es un tejido en el que todo está relacionado, conectado cosmológica y espiritualmente. Consideramos gracias al camino recorrido en la investigación y según palabras de abuelos, el problema surge cuando el ser humano se proclama el líder del pensamiento y del mundo, la evidencia de la tendencia post darwinista, olvidando por completo que es una pequeña parte del todo, tendencia egoica del antropocentrismo desenraizado que consecuente irrespeta la naturaleza, los seres vivos, las plantas, al otro y fundamentalmente a sí mismo.

Por su parte Pedraza 2009, afirma que en: “la Ley de Origen se fundan la identidad ancestral, la fuerza para sobreponerse a las circunstancias adversas y la sabiduría para descifrar el sentido de la vida. La Ley incluye: principios de vida (código de valores), organización social, soporte instrumental, linaje (filiación por clanes), idioma, territorio, ritual, elementos sagrados, arte y mitos” (Pág. 9).

Recordando la palabra de los Mamos “el territorio tiene un orden desde la creación: las formas de uso y ocupación del espacio, así como la utilización y aprovechamiento de los recursos naturales está regido y tiene su fundamento en la Ley de Origen” Santos (Pág. 243). En términos del camino prescrito el acercamiento a la naturaleza, a las lagunas, y a la posibilidad de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 709 consejo de los elementales tiene una finalidad de orden en el sentido de la ley. “La Naturaleza sagrada da inmensamente para que la humanidad viva, por ello necesita correspondencia humana, respeto, comunicación, protección y reverencia a su vida. Es importante relacionarse con el agua, la tierra, los animales, las plantas, mediante la palabra y relación espiritual”. Recinos

(2005). Pensar, Sentir y Actuar constituyen el movimiento en el que lo vivo se ordena y no se niega. Hay que comprender que la naturaleza tiene su forma de ordenarse a sí misma, pues ella como gran inteligencia es la creadora de todo y la que otorga el alimento para seguir viviendo, sin embargo, debido a la modernidad y a las costumbres actuales, esta forma de ordenarse se ha vuelto más lenta, por lo cual nosotros debemos intervenir, pagando, honrando y respetando como manera de la recuperación del orden sagrado de la madre tierra.

Por su parte Alirio Pedraza 2013, comparte y explica los principios ancestrales de los pueblos indígenas o la Ley de Origen, los cuales tienen una base espiritual que conecta al espíritu creador Madre Tierra, al universo en general y al humano en una relación bonita de amor y palabra dulce, palabra de vida. Es así como explica la Unión el primer componente de la Ley:

“Lo que nos une es verdad, lo que nos separa es ilusorio”. Aquellos que se unen a sus

hermanos y a la Madre Tierra saben que su identidad radica en el Espíritu, no en el

Ego, que es el que crea las ilusiones. Cuando en un conjunto social, de manera libre y

natural, priman los intereses colectivos sobre los individuales, hay Comunidad. La

Comunidad entonces se sitúa en un nivel superior al del individualismo, porque

prima la unión, que es un atributo del amor. La unión, por su parte, es una cualidad

que se alcanza en el nivel de la mente. Para lograrla y preservarla, es indispensable

que la mente esté libre de pensamientos del Ego que propician la separación, tales

como los juicios, la crítica, la condena, el miedo, la ira, el odio, el resentimiento, la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 710

depresión, etc. Todos ellos conducen al conflicto o al aislamiento y son ilusiones de

la mente, porque no tienen nada que ver con la realidad de la unión.

Conectando la investigación y la vivencia trascendente con el principio ancestral de

Unión y su fuerza de interrelación con el amor, el pensamiento bonito y lo comunitario, somos conscientes que, en el camino las cargas internas emocionales, psíquicas y espirituales e incluso el mismo Ego que a veces enjuicia, separa, critica y condena, da la vuelta a la espiral y se convierte en el maestro para obtener el entendimiento de situaciones pasadas o presentes que enferman o afectan de una u otra manera el psiquismo de quién camina los territorios o vivencia el ritual ancestral de curación. Así se comprende que es también fundamental aprender del ego, que éste es grande, su existencia es también ley de la curación como necesidad evolutiva, aunque también feo, es bonito, la neblina también hace parte del paisaje, se logra entender que es un gran maestro, igualmente con el miedo, solo cuando camino de la mano del miedo, encuentro la fuerza en mis pasos. Consideramos concluyente y pertinente reconocer que las experiencias de soledad en las montañas, también brindan entendimiento propio y de los demás, porque es en ese momento en el que caminar la montaña se vuelve una comunicación trascedente entre el espíritu humano y el de la naturaleza para la afirmación de la identidad física y psíquica de quien camina y es en esa comunicación espiritual que surge la sanación. Es así como se contempla que de todas esas cosas humanas que alejan de la espiritualidad, de la raíz, de estar con uno mismo y fundamentalmente con los demás es que también paradójicamente surge lo más humano. Solo cuando el ser humano es capaz de pensarse en otredad va a llegar a comprender un poco que adentro de cada ser la mismidad otorga grandeza bioética de relación y eso es una característica fundamental de nuestra ley de origen indígena y su poder convocante de comunión. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 711

Retomamos la enseñanza de Pedraza 2013 con el segundo componente de la Ley de

Origen, la comunidad:

La comunidad es un atributo social que exige el cumplimiento de dos requisitos: La

comunicación y la unión. La auténtica comunicación es la base del entendimiento.

Solo es posible lograrla cuando se emprende para buscar la unión, hecho que

convoca la dimensión espiritual. Por tal razón la comunicación se propicia en rituales

y eventos sagrados. La comunicación propicia la paz mental y por ende la paz en las

relaciones. La organización social comunitaria es un don, que implica esencialmente

calidad de las relaciones humanas y una sincronía con la naturaleza.

La experiencia de campo se llevó a cabo bajo el principio originario de comunidad como sentido de conexión ancestral, la tendencia colectiva a la tierra, a lo ancestral, a la sanación es lo que nos une. Encontramos concluyente que las experiencias de comunidad, otorgan el entendimiento de que cada uno es una parte fundamental, única y diferente de la totalidad.

Trasladando esta relación a la vivencia, se encuentra que así como todos los seres humanos son

únicos en esencia, así caminan el territorio, bien sea por características físicas, psíquicas o espirituales, un fragmento extraído de una narrativa expresa “…no fue fácil para mí caminar todo eso, cuando yo me cansaba tan rápido en trayectos más cortos; todo esto me inundó de muchísima tristeza…” (Comunicación personal, 2014), es en este tipo de experiencias en que la comunidad entra a fortalecer al que se siente débil tanto física como internamente, la comunidad no solo brinda compañía externa, ésta además otorga la fuerza profunda de corazón, de compañía para seguir en pie, así que en caso de ser necesario la comunidad camina al mismo ritmo del que lo necesita y no solo en el plano físico sino también se danza sinérgicamente en el sentido espiritual con los demás, es en este sentido que se comprende que la comunidad es un tejido que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 712 se fortalece con cada vivencia común, cuando sé que soy un hilo de ese tejido, soy consciente de la importancia de mi existencia, de la existencia del otro. Lo que también se ha encontrado es que la sombra en ocasiones hace que se torne muy complejo actuar en el sentido comunitario, el caminar la tierra brinda un entendimiento de sí mismo, que a veces no es tan agradable para el que lo siente, siendo este la develación de la certeza interna de cada uno, por lo que surge un choque interno que provoca actitudes más modernas y menos comunitarias hacía los otros, la experiencia ancestral nos ha hecho entender que para formar parte de esa mochila (comunidad) es necesario realizar el balance entre esas dos cosas, la luz y la sombra, lo que se es y lo que la comunidad implica.

En relación al componente de Comunidad, de la ley de origen existen ciertos soportes que sustentan la vida comunitaria, los cuales Pedraza 2013, va a explicar así:

La tenencia colectiva de la tierra: No existe propiedad privada. Prima el interés

colectivo sobre el individual o familiar. Equidad en la organización del trabajo y en

la distribución de los beneficios: Entre más auténtica sea la vivencia en comunidad,

en el sentido del predominio del interés colectivo sobre el individual, más equidad

existe en la organización del trabajo, y los beneficios obtenidos del mismo, son

distribuidos con criterios de igualdad.

De esta manera logramos concluir que el primer soporte de la vida comunitaria, tendencia colectiva a la tierra y como se esbozó líneas antes es lo que en plano físico y espiritual nos hace una comunidad. Esta tendencia no es en el único plano moderno de ambientalismo, sino que como la ley de origen lo plantea es una comunión danzante y sinérgica con el entorno natural biofísico, para entendernos a nosotros como seres totales y de esa forma obtener la comprensión comunitaria del otro. Por otro lado, la comprensión de que en el camino ancestral debe primar la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 713 equidad en la organización del trabajo y la organización de beneficios, hace que la mismidad de cada ser que anda la tierra o vivencia el ritual se fortalezca, porque en la medida en que se es consciente de lo que cada uno debe hacer, porque es su propósito, porque es lo que su grandeza de existencia le otorga, se disminuyen las interpretaciones de inferioridad de alguno con relación al grupo, por lo que la repartición de tareas se torna muy útil en lo que concierne a la comunidad.

Sin embargo, el actual pensamiento moderno no está muy relacionado con este principio, las salidas de campo dan cuenta que a veces surgen pensamientos negativos en contra de quien tiene que hacer un trabajo diferente debido a su naturaleza de mismidad y totalidad, estos pensamientos emergen por la falta de empatía hacia el otro, por solo pensar en uno mismo y en la carga que se lleva, la modernidad ha enseñado a solo pensar en el yo, olvidando por completo el otro y por ende dificultando mucho que el principio de equidad se lleve a cabo sin resentimiento.

Continuando con los soportes para la vida comunitaria explicados por Pedraza 2013 encontramos:

El Gobierno de la Sabiduría: El Gobierno, según la tradición ancestral, está a cargo

de personas de reconocida sabiduría. En cada generación emergen los sabios que

reciben el conocimiento de sus antecesores. Es más sabio quien mejor sirve a los

intereses de la comunidad. Los Ancianos: Es un término para referirse al

conocimiento, no a la edad. En los pueblos indígenas son los ancianos quienes, por

su sabiduría, tienen la responsabilidad de la formación personal y social de la gente

de su comunidad. Los Guías o Ancianos de conocimiento siempre están dispuestos a

enseñar el camino. Solamente una persona sencilla, humilde y de mucha paciencia,

puede formar, guiar, aconsejar y dirigir adecuadamente a una comunidad. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 714

Reconocemos concluyente que ambos soportes de la vida comunitaria, planteados por nuestra ley, los hemos encontrado en nuestros guías espirituales, maestros y sabedores de lo indígena, el abuelo Mhuysqa Fernando Castillo y en el mamo Kogui de la sierra nevada de Santa

Marta Roberto Nacogui, pues estos con su sabiduría ancestral, humildad y experiencia en relación a la madre tierra, a lo comunitario y a la sanación del sí mismo, fueron importantes guías tanto en términos del camino prescrito (lo etnográfico), como de la forma espiritual en la que debíamos acercarnos a los territorios sagrados y de los rituales que se debían hacer en cada uno de los sitios donde llegábamos. Consideramos conclusiva y una de las enseñanzas más importantes que nos han trasmitido en torno a nosotros mismos, es que la espiritualidad y la sanación van de la mano en la medida en que el actuar, el pensar y el sentir estén en relación con la humildad, la sencillez, la nobleza y la honestidad. Retomamos la vivenciada palabra del abuelo Mhuysqa de Cota Fernando Castillo, “La naturaleza, es el único sitio donde no hay mentiras, donde no hay fantasías, no hay dolor, está es la única real en medio de éste mundo tecnológico, es la única que me permite encontrarme conmigo mismo, con mi propio camino de vida” (2014).

Es así como se conecta lo planteado antes con otro principio que sustenta la vida comunitaria: “La Comunicación: Mantener el sentido colectivo exige una comunicación continua en la que se transmiten y cuidan los principios que garantizan la unión. Por esto la comunicación, la palabra, se cultiva en eventos rituales, como el mambeo, curaciones, iniciaciones, consejo, ceremonias... Mediante la comunicación se alcanza la dimensión Espiritual de la vida” (Pedraza,

2013), las enseñanzas impartidas por los sabedores nombrados antes, se dieron generalmente en alguno de los eventos (los rituales), siempre en sinergia con la común unidad, recordándonos que somos parte de su comunidad y por ende los principios originarios de la ley de origen también El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 715 debían regirnos, es así como siempre se recalcó la unión y la fuerza con la debíamos andar la madre tierra, sin peleas entre nosotros y siempre contemplando al otro, intentando tener palabra dulce y pensamiento bonito con los compañeros para cultivar una buena comunicación ancestral.

Conectamos entonces con el otro principio que sustenta la vida comunitaria el consejo:

…es un recurso básico de la comunicación y se enfoca en todas las edades y

situaciones inherentes a la comunidad. El Consejo es orientado por una autoridad

espiritual o Anciano (Chamán, Taita, Mamo) e implica recibir la inspiración de la

Fuente Creadora de la Vida. A través de la palabra que circula en la comunidad, de lo

que ocurre en el trabajo y, en general, de la manera como operan las relaciones, el

Anciano infiere cuál es el estado de los individuos y de su comunidad, percibe las

debilidades, e inspira el Consejo que se requiere. Este Consejo puede provenir de su

experiencia, de un mito, o de la palabra revelada, conllevando así palabra de vida que

ilumina las decisiones correctas. (Pedraza, 2013)

Gracias a la vivencia que se ha tenido con los sabedores y su sabio consejo, es que ha surgido el entendimiento de que al realizar un paralelo con la actual ciencia psicológica moderna, el Abuelo, el Mamo, el Taita o el Chaman cumplen la tarea originaria de un psicólogo en su comunidad, la de sanar el interior, la de guiar la vida de los demás y en este sentido llevar al otro a una buena decisión frente a los aspectos cotidianos de su vida, la de escuchar para entender las debilidades, enfermedades y malestares. Todo esto es dado por la comunicación que surge entre el sabedor y quien escucha el consejo, entendiendo que “La comunicación es la coherencia entre pensamiento, corazón, palabra y obra que se debe guardar en las relaciones humanas y respecto al trabajo. El pensamiento se lleva al corazón para imprimirle amor, luego se expresa con palabra dulce y debe expresarse en obras y actos de servicio a la comunidad” (Pedraza, 2013) Somos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 716 conscientes que nuestros sabedores indígenas, no tienen el estudio académico de psicología o ciencias similares para llegar a tales comprensiones profundas del ser humano y brindarles una curación a sus comunidades, estos entendimientos son otorgados por la comprensión fuerte y profunda que tienen del mito, la cosmogonía, la ley de origen y la fuente creadora de vida

(Madre Tierra), entonces es así como nuevamente podemos afirmar, gracias a nuestra experiencia y vivencia de la tradición oral y ancestral Mhuysqa, que en Latinoamérica ya teníamos psicología, desde el origen de nuestra humanidad, por esto se llega a la conclusión que se debe recordar y retomar la fuerza y el saber ancestral para sanar la enfermedad psicológica y emocional, que la incipiente modernidad causa.

De esta manera continuamos con los principios que soportan la vida comunitaria planteados por Pedraza 2013, tejemos lo planteado antes con el importante ritual de palabra el cual es explicado así:

El Ritual de la Palabra se realiza en las Maloka o templo ceremonial. En él se

propicia la dimensión espiritual, como parte de la formación del Ser. En él se permite

hablar libremente de la vida desde la vida misma y llegar a la unidad de propósito

que es imprescindible en cualquier trabajo colectivo. La palabra de Vida que

simultáneamente promueve el crecimiento personal, la armonía social y la

integración con la naturaleza.

Gracias al camino vivenciado, se logra entender, comprender y respetar profundamente el ritual de palabra (trasnocho), el cual es el momento propicio en que la ley de origen, la ancestralidad y la existencia de los abuelos y mamos presentes, junto con los espirituales del territorio y en compañía de las plantas elementales, (hayu, tabaco, hosca, tijiki) están dispuestos en una comunión danzante y sinérgica para favorecer el desarrollo humano y no solo en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 717 terreno espiritual, sino en los demás campos que sumergen al ser humano, tales como social, de salud, la emoción. Conectado lo presentado antes con la oralidad de nuestro pueblo ancestral se entiende que: “Existen cuatro categorías de la Palabra: revelada: la que inspira el Espíritu del

Padre Creador en los ancianos de conocimiento; hablada: la que se usa en el diálogo ritual habitual de la comunidad; cantada: propia de los bailes y de algunos momentos del ritual; rezada: la que se utiliza en la parte final del ritual o en los momentos de curación”

(Pedraza, 2013). Lo cierto como vivencia, es que lo ancestral implica un sentido del orden que los mayores simbolizan como poiesis mística y de puenteo entre la individualidad trascendente con sentido de tierra y la colectividad en analógico sentido de lo telúrico como el todo del tejido comunero. Dentro de esta comunicación de la ley de origen también están los rituales como mambeo, curación y ceremonias, siendo estos, centro de la vida en comunidad, la fuerza de la vida Espiritual y medios de trascendencia que conectan con la Fuente Creadora. En este sentido, se comprende como nuestros rituales indígenas “Son el núcleo de la cultura, la clave de la vida en comunidad y la fuerza de la vida espiritual; es el medio de trascender las cosas mundanas para conectar con el Espíritu de la fuente creadora. En los rituales son básicos los elementos sagrados como son las Plantas Sagradas: tabaco, coca, yopo, yage. Los instrumentos musicales: tambores, flautas, dulzainas... y otros elementos tomados de la tierra como cuarzos” (Pedraza, 2013)

De esta manera y recordando la oralidad de nuestro pueblo ancestral, Pedraza 2013 explica la importancia de la palabra:

La palabra es un sistema conformado por cinco grandes subsistemas: Palabra de

Vida, de Consejo, de Trabajo, de Abundancia, y de Comunidad o de Gobierno.

Cuando se pierde la tradición oral, se derrumba la cultura y se marchita la vida. La

Maloka: Es el templo donde se cultiva la vida. Es el escenario donde se imparten los El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 718

conocimientos para formar el Ser a imagen de su Creador. Es sitio de oración y

curación; de alimentación espiritual y material. Allí los vivos descansan en paz y los

muertos viven en la palabra de la tradición. Allí sobre el pecho de la Madre Tierra, se

realizan los bailes, eventos sagrados de unión, alegría y gratitud.

Concluyendo la experiencia con lo ya planteado hasta aquí, encontramos que la palabra ha sido otorgada al ser humano no solo por efectos de la comunicación entre hombres, sino también por el sentido y poder curativo que estas ejercen sobre la existencia humana. Entender el poder de la palabra en torno a la curación es una tarea de la psicología, la cual ha delegado a las salidas facilistas y farmacéuticas de ciertos malestares, nuestras culturas indígenas han comprendido la palabra en toda su dimensión curativa y esta se ha mantenido por la tradición oral ancestral, pues esta “Es el arte mediante el cual, por la voz de los ancianos, se transmiten los conocimientos por sucesivas generaciones Es el tejido colectivo de la palabra en torno la Ley de

Origen. Mantiene centrada la cultura en los principios de vida entregados por el Padre Creador”

(Pedraza, 2013)

Para finalizar, esbozamos los demás principios de la ley de origen, la agricultura en la que la comunidad se integra con la chagra (cultivo) de forma espiritual y material, para agradecer la amorosidad de Madre Tierra por brindar alimento a sus hijos; ésta a su vez se conecta con el calendario ecológico en donde está inmerso el “quehacer social y cultural a los ciclos de la naturaleza: estaciones, fases lunares, dinámica biológica de plantas y animales. El tiempo de los pueblos ancestrales, al igual que el tiempo cósmico se extiende circularmente, más en función del presente, que es el tiempo de la vida” (Pedraza, 2013), ese manejo sinérgico, amoroso y respetuoso de los recursos naturales, armonizado con lo espiritual y comunitario es lo que lleva a las comunidades indígenas a tener un desarrollo sostenible de ellos mismos, del entorno natural y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 719 a realizar todas sus actividades sociales en torno al calendario, “de allí la íntima relación entre palabra y territorio, que se traduce en sabiduría, armonía, abundancia, paz, amor y plenitud

(Pedraza, 2013).

Por otro lado, encontramos las Plantas Sagradas elemento fundamental de la Ley que se conecta con el otro principio La Salud. Las plantas sagradas son el alimento espiritual que envía

Madre Tierra a sus hijos, por esto son consumidas siempre en acción ritual o de curación, las cuales conectan el espíritu humano con el espíritu de Madre Tierra, para obtener entendimiento, salud y curación frente a la vida. “Para los mambeadores, el tabaco es el Espíritu y la coca la

Palabra. El fruto del primero tiene forma de corazón y en su interior guarda numerosas semillas del tamaño de la punta de un alfiler; simboliza un pueblo con corazón. La hoja de la coca tiene forma de lengua, simboliza la palabra. Tabaco y coca usados rituales como ambil y mambe, denotan entonces la palabra de un pueblo con espíritu, con corazón y con amor. Con esa palabra es que se forman el Ser y la comunidad, y se mantiene el equilibrio con la naturaleza” (Pedraza,

2013).

La salud por su parte desde el entendimiento ancestral, está dada por los pensamientos bonitos y la palabra dulce del indio, esta nace gracias a la danza mental que se establece con la unión y lo comunitario, “las relaciones de armonía con la naturaleza y entre los seres humanos son la fuente de la salud” (Pedraza, 2013). Se dice entonces, que cuando la mente se encuentra en desorden, con pensamientos que no están en relación con la ley de origen y la cosmogonía ancestral, cuando el ser humano se deja llevar por los pensamientos vanos, ilusorios, egoístas de nuestro tiempo, la salud decae. Y es allí cuando los Abuelos, Taitas, Chamanes establecen que para recobrar el malestar que está experimentando el cuerpo: “La curación habrá que hacerla en la mente, mediante la Confesión, el Consejo, el, Pagamento, la conjura y la aseguranza, usando El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 720 complementariamente extractos de plantas, animales u otros elementos de la naturaleza, cuyo espíritu contribuye a la sanación” (Pedraza, 2013).

Consideramos concluyente, este entendimiento de salud, para nuestra ciencia psicológica es de esta manera y gracias a lo vivenciado que se encuentra la práctica psicoancestral de curación psíquica, la cual reconoce la importancia de Madre Tierra (plantas y animales) y recobra la fuerza del ritual ancestral indígena y su poder convocante de bienestar y salud. La conexión con todos estos principios es la clave para un entendimiento profundo del interior humano, ese entendimiento que es propio de nuestros abuelos.

Por último, está la importancia del Conocimiento Experiencial, tradición oral y territorio son la “biblioteca” ancestral.: “Las lecciones de sabiduría de la naturaleza se toman mediante la experiencia profunda de la contemplación, reviviendo el mito o en cumplimiento de las actividades productivas. En la comunidad se enseña con el ejemplo, bien sea en el comportamiento, las actitudes o la realización de obras materiales. En las culturas ancestrales se enseña a vivir... ¡viviendo! La tradición oral y el conocimiento experiencial, no han requerido de la palabra escrita para mantener su vigencia cultural con toda su solidez y riqueza. Dicen los ancianos que la palabra escrita es a la palabra oral, lo que una tabla es a un árbol, porque al escribir se pierde el espíritu. (Pedraza, 2013).

En relación a lo planteado líneas antes, nuestra vivencia fenoménica de ancestralidad concuerda con el conocimiento experiencial planteado por nuestra ley de origen, puesto que el propósito era entender el mito del civilizador Bochica y a su vez la cosmogonía Mhuysqa para obtener un entendimiento de nosotros mismos y por ende de la psique humana. Estos entendimientos fueron otorgados gracias a lo vivido, a la recreación de la ruta de Bochica y por ende del mito mismo, inmiscuirnos en las practicas ancestrales comunitarias Mhuysqas nos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 721 otorgan la fuerza y la certeza para afirmar que desde nuestras prácticas (rituales), podemos brindar una curación psicológica de hondura. Por otro lado, en lo que al conocimiento experiencial concierne y lo planteado por la ley de origen que “al escribir se pierde el espíritu” , presentamos discrepancia, puesto que actualmente necesitamos recordar y recuperar nuestro saber ancestral, no desconocemos la importancia de la tradición oral de nuestros pueblos y nos inmiscuimos en ella sin discusión, sin embargo lo que se pretende aquí es que nuestra voz también sea válida y escuchada en todos los espacios del mundo moderno y en el académico, la sabiduría indígena es tan grande que no tiene problema en expresarse de la forma que acá se presenta, el propósito aquí es el del puenteo epistémico de saberes, no queremos perder el espíritu indígena y por eso es que lo escribimos desde la vivencia profunda de lo ancestral, lo amoroso y lo ritual. Es por eso que escribimos de manera respetuosa, sentida y fenomológica lo que la vivencia y en concordancia con nuestros abuelos indígenas dicen que es el espíritu tanto humano y el espíritu de la Madre Tierra. Incluso nuestra vivencia ancestral por el territorio

Mhuysqa, nos ha dado la bonita experiencia de que los abuelos y Mamos reconozcan y realicen la amorosa y bonita petición de que se escriba (siempre con respeto y cuidado de nuestro saber) este conocimiento vasto y profundo para que no se pierda.

Bioética

Pathos-amor

“Fuente de equilibrio, valor y poder”

“En «EL BANQUETE», de Platón, dice Sócrates: El hombre que practique los misterios del amor entrará en contacto no con un reflejo, sino con la verdad en sí. No hay mejor ayuda que el amor para alcanzar esta bendición de la naturaleza humana.” (Osho, 2009) El amor para la psicología ancestral, en concordancia con la recopilación que hace Osho de los tiempos de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 722

Platón, es la verdad que aguarda dentro del ser, es el camino que nos acerca a nosotros mismos, pues mediante la entrega a dicho descubrimiento, le surge al ser humano caminante los destellos que le permiten ahondar en la naturaleza de su vida y a su vez, de la vida que lo rodea.

Recopilando la experiencia vivencial de estar en y con la Madre, es que surge el amor como esa fuerza integradora de la vida que se encuentra impregnada en la esencia tanto de la naturaleza, como del ser humano, estar en ella es el momento de calma física y de movimiento espiritual del alma, el cuerpo se aquieta y la mente de la mano del corazón, comienza a hacer un viaje mediante el cual le será revelado al caminante la verdad que aguarda en su interior; estar en ella es el acto meditativo en el que el cuerpo pasa a ser una conciencia más pasiva, más femenina, se mantiene atento a la conversación que iniciará consigo mismo en compañía de la

Madre, pues estar en ella es sentir el agua, el viento, el fuego y la tierra y, por medio de ellos, encontrar las lecciones que el ego entorpece.

Por otro lado, estar con ella es ver su estado tanto físico como espiritual, estar con ella es escucharla, sentirla desde dentro y en el acto más humilde que permite la fe, creer que en ella aguarda la vida y las leyes por las cuales se rige el universo. El sentimiento más noble y puro de amor, se manifiesta en la Madre, “El amor es un sentimiento natural en determinadas relaciones en que todas las madres naturalmente aman a sus hijos y que todos los hijos aman a sus madres”

(Lowen, 1994)

Para tomar al amor como uno de los componentes conclusivos de la investigación, se tiene en cuenta en cierta medida el concepto que desarrolla Boff, quien lo retoma desde el pathos definido como “la capacidad de sentir, de ser afectado y de afectar” (2001, pág. 72), en este orden de ideas nosotros no sólo estamos siendo afectados por las constantes influencias internas, también está la Madre Tierra como la energía suprema de amor y vida, conciencia que permite El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 723 mediante el acto contemplativo de estar en y con ella, el amor como ese sentimiento noble y puro en el que se le reconoce y se reconoce la sensación maternal como la fuente inagotable que abriga y reconforta al ser humano, primer acercamiento al cual es sometido el hombre y constante silenciosa de la amorosidad como afectación oscilante del cuerpo físico y espiritual en su totalidad.

“Este amor que se puede convertir en un contacto con la propia verdad es algo que sólo surge de tu conciencia; no de tu cuerpo, sino de lo más profundo de tu ser. El deseo surge de tu cuerpo; el amor surge de tu conciencia. Pero la gente desconoce su conciencia, y de esta manera se perpetúa el malentendido: confunden el deseo carnal con el amor” (Osho, 2009). A estas alturas de la evolución las personas pasan apresuradamente por el amor, componen canciones, versos, dibujos y todo es amor, amor por su pareja, su hogar, su profesión, su perro y sus bienes materiales, comúnmente se ha dicho que si se hacen las cosas con amor todo saldrá bien, pero en ese afán es eso mismo lo que se ha perdido, el amor. Éste ha perdido sentido al nosotros querer encontrarle significado y lógica, como anteriormente dice Osho, la conciencia de estar amando, de saber amar perece, pues no hemos amado nuestro propio ser, nuestra verdad y tampoco hemos amado con conciencia. Todo esto conlleva a un problema directamente de la raíz, amar a quién, si nuestra raíz para muchos carece de sentido y conexión con lo que somos ahora.

Ha de ser necesario reconocer en el proceso reconstructivo del amor en esencia, que “el amor no encuentra su sentido en el ansia de cosas ya hechas, completas y terminadas, sino en el impulso a participar de su construcción. El amor está muy cercano a la trascendencia; es tan sólo otro nombre del impulso creativo y, por lo tanto, está cargado de riesgos, ya que toda creación ignora siempre cuál será su producto final” (Bauman, 2005, pág. 21). En concordancia al argumento previo, el abuelo Fernando en su incalculable sabiduría nos ha hecho partícipes El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 724 mediante el ritual de palabra, la construcción y el trabajo espiritual de las bases que fortalecen el amor, ese amor que no se apega a lo material, al mecanicismo dependiente de mirar afuera, más bien aquel como herramienta que aguarda en el interior de cada uno para ser alimentar y ser alimentada.

Sin embargo, la tarea no es sencilla, fortalecer todos y cada uno de nuestros sentidos de forma tal que se agudice el espíritu sensitivo, reconstructor, capaz de diferenciar el amor en esencia del falso amor, es la falla que aún causa malestar en la mayoría de los seres humanos

¿cómo amar si hay “amor” en todas partes? “…la literatura amorosa nos ha inundado. Poesía, novela, tragedia, cuentos y hasta chistes se incrustan en la pasión enamorada; para glorificarla, denigrarla, llorar o reír. Todo ello niega esa máxima según la cual los enamorados no están capacitados para hablar del amor.” (Sadaba, 2010, pág. 14) en este punto es importante discutir esa capacidad a la cual el escritor Sadaba hace mención, porque el camino de lo indígena hasta ahora recorrido, permite decir con seguridad que la capacidad del amor es la fuerza del corazón que se cultiva poco a poco, que se descubre en la tibieza del ser amado, en el abrigo de la Madre

Tierra y en la sabiduría de los abuelos, armonía del espíritu como acción transformadora que llama al psiquismo en posibilidad integra.

Resulta lamentable leer acerca del amor, tanta literatura escrita es incoherente frente a la carencia, la confusión y lo contradictorio de aquello tan profundamente significativo llamado amor, los elementos teóricos parecen escasos. “El discurso amoroso es hoy una extrema soledad.

Es un discurso hablado por miles de personas pero al que nadie sostiene; está completamente abandonado por los lenguajes circundantes; o ignorado, despreciado, o escarnecido por ellos, separado no solamente del poder sino también de sus mecanismos (ciencias, conocimientos y artes)” (Barthes, 1989). Empero, es en base a esos lenguajes circundantes y confusos donde El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 725 radica la necesidad de reencontrar la esencialidad del amor, pues en la racionalidad no existe ciencia que permita que el hombre se acerque, sigue siendo el asunto mítico más que lógico de un esencial femenino de psiquismo en movimiento por el motor erótico de la amorosidad.

Parte del camino ancestral sin ser en sí un objetivo meticulosamente consciente hace emerger al amor como parte del recorrido bonito de andar la tierra. Implica descentralizar al amor como la expresión única del te amo y no es esto demeritar la expresión, es por el contrario ampliar la mirada y los alcances vibratorios del amor en esencia; el abuelo Fernando con palabra dulce y bonita ha dicho que no sabemos amar, pues en el afán del seguir la impulsividad del cuerpo, del placer y el dominio, no hemos sabido comprender el amor, amar es amarlo todo y nosotros aún no hemos sabido como amarnos a nosotros mismos, puesto que en la tarea de reordenar y alimentar la tierra aún nos quedamos cortos, falta cosechar más en la esencia del ser humano lo que conlleva a actuar con humildad, nobleza, sencillez y honestidad.

Este largo camino por el altiplano Cundiboyacense, como se ha dicho antes, ha sido un reencuentro con el amor, pues estar en los lugares sagrados de nuestros indígenas Muhysqas, y ahora luego de la experiencia también de nosotros, es el camino de reencuentro consciente con la raíz, pues allí se despierta el amor de uno como hijo y caminante de este territorio; como dice el maestro Osho “Una vez que entras en contacto con tu alma, tu amor se convierte no en una relación sino, sencillamente, en tu sombra. Dondequiera que vayas, con quienquiera que vayas, estás amando.” (2009, pág. 5). La experiencia directa para nuestro abuelo Fernando también es así, pues él nos ha enseñado que el amor viene de adentro, nada de lo que buscamos en el exterior es realmente nuestro y sólo en la medida en la que encontramos el amor en el interior, es que podemos decir y sentir que amamos algo realmente.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 726

Es una virtud del ser humano amar y entregarse desinteresadamente por ello, una virtud lamentablemente olvidada entre el egoísmo, la dominación y el poder, pero pese a ello aún está, si abrimos el corazón como humilde verdad de lo cognocible veremos el amor más grande y la realidad más real de lo que antes habremos sentido con el corazón cubierto de egoísmos “Un camino sin corazón nunca es disfrutable. Hay que trabajar duro tan sólo para tomarlo. En cambio, un camino con corazón es fácil: no te hace trabajar por tomarle gusto… Y, luego, el camino sin corazón se vuelve contra los hombres y los destruye. ” (Castaneda, 1974, pág. 170).

Este proyecto se concluye como un camino de amor, un método de amor y una ciencia del mismo orden, es un camino de un ser humanizado y corazonante, que vibra y se siente en completa concordancia con la Madre Tierra, que acepta la dificultad de ver hacia el interior, como la experiencia más bonita y de conocimiento que haya vivido antes.

Sin embargo, es importante distinguir los caminos y significados del amor “El amor corriente pretende muchas cosas. El amor auténtico no es pretencioso; simplemente, es. El amor corriente es casi enfermizo, empalagoso, afectado, lo que llamas amorcito es enfermizo, es como una especie de malestar. El amor auténtico es un alimento, refuerza tu alma. El amor corriente alimenta tu ego; no tu yo real, sino tu falso yo. Lo falso sólo alimenta lo falso, recuerda, y lo real, lo real” (Osho, 2009, pág. 6). Para el abuelo Fernando, el acto desinteresado de ese amor auténtico está impreso en el ritual de pagamento y, tras la experiencia de caminar realizando conscientemente dicho ritual, para nosotros el amor auténtico de psiquismo ancestral se presenta en la fuente incesante de fuerza y vida que devela los momentos más sublimes de entrega al origen propio de la cosmogónica raíz. “El amor se fortalece en la vivencia constante de entrega desinteresada mediante el ritual de pagamento”. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 727

Por otro lado, el amor corriente en nuestro contexto, sería ese amor superficial del que se profesa sin conciencia y sin un acto previo de entrega, ese que se convierte en apego (ap-ego) y finalmente en la máscara tras la cual ocultamos la verdad de nuestro ser, ese que se camufla de forma inherente a la manera de actuar, pensar y sentir que tiene el ser humano moderno o postmoderno, ese afligido enmascarado de promiscuidad, el descuido, el dominio y el placer, ese disfraz adaptativo ante la verdad de su estado real que en cambio profesa su carencia como su mayor conocimiento, ese que sí logró superficiar la atroz estética de lo superfluo y encubrir la ciencia racional.

En cierta medida, sino es que en una muy grande, todos y cada uno de nosotros hemos olvidado lo que es el amor, la esencia del amor está refundida entre las mil y una interpretaciones a las que ha sido sujeto el término, este hecho impacta directamente nuestro contexto. “El amor es el alimento del alma. Así como la comida lo es para el cuerpo, el amor lo es para el alma. Sin alimento el cuerpo está débil; sin amor el alma está débil.” (Osho, 2009, pág. 7). La experiencia de los abuelos, de las malokas, de las lagunas, caminos y rituales, trasnocho a trasnocho en lo cálido del fuego sagrado, a veces con palabra fuerte y muchas otras con palabra dulce, nos ha venido enseñando lo mismo que plasma el saber más divino de la filosofía ancestral oriental, el amor alimenta el espíritu, nos regocija el alma de positivo, sueños, unión con la familia, la pareja y los compañeros; sin amor el cuerpo no sólo se debilita, se enferma, para él la raíz de las enfermedades está explicada por los excesos de ego, de fu-ego y el frio como candela de las carencias de amor, el exceso de fuego en corazón y falta de frío en los pensamientos.

Ya tiempo atrás había sido plasmado por Sócrates, “La mayor parte de los hombres ignoran la esencia de las cosas, y en su ignorancia, de la que apenas se dan cuenta, desprecian desde el principio plantear la cuestión del amor. Así es que, avanzando en la discusión, les El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 728 sucede necesariamente no entenderse, ni con los demás, ni consigo mismos” (1992, pág. 194), vaya problema, si bien no estamos en la capacidad sensitiva de reconocer en la profundidad de nuestro propio ser la ignorancia o, en este caso la carencia de la cual somos dueños, cómo podría haberse escrito, negado y confundido tanto al amor. En ocasiones durante el ritual de trasnocho todos y cada uno de nosotros hemos quedado en absoluto silencio y ese es el lenguaje más amorosamente respetuoso, que enseña, permite la comprensión y la vivencia que se requiere para no saber de amor, sino ser amor y de este modo comprender tanto a nosotros mismos como a los demás.

Ya habiendo reconocido que el amor es el alimento del alma, es muy difícil enfrentar que al alma no se le ha alimentado por años y, por tal razón, nos hemos venido auto privando del amor creyendo que está en todos lados y haciendo que esté verdaderamente más ausente que lo que estuvo en un inicio. El maestro Osho dice que “El cuerpo ha recibido alimento, por eso sigue viviendo, pero el alma no ha recibido alimento así que está muerta, o todavía no ha nacido, o está siempre en su lecho de muerte” (2009, pág. 10). Que lamentable resulta para nosotros como hijos de este territorio carecer de ese alimento, siendo que para nuestros ancestros y abuelos no existe ese problema, sufren por nosotros, pero para ellos el amor es claro, lo han cultivado mítica y psíquicamente dentro de sí por años, han cuidado de él cautelosamente y han mantenido el ego, el poder y la razón lejos de poder dañar lo que han venido cosechando dentro de sí, es su fuente de poder, es su camino. Además es lo que los mantiene en constante conexión con lo sagrado, para ellos el amor es la Madre, es acercarse a ella mediante las plantas y los rituales, es saber que ella vive tanto en ellos, en su sagrado corazón de conciencia (Puyky) como ellos viven en ella.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 729

Es importante tener en cuenta el sentimiento y el compromiso como la base que hace parte del amor en todos sus niveles de comprensión “La necesidad biológica de contacto y la cercanía con la otra persona subyacen a la emoción de amor. Este contacto estimula y excita nuestros cuerpos; sin él tienden a enfriarse y a endurecerse. La necesidad en sí se percibe como un sentimiento de anhelo, que bioenergéticamente se asemeja al hambre cuando necesitamos alimentarnos. El anhelo, al igual que el hambre, se intensifica cuando la persona se ve privada de su satisfacción” (Lowen, 1994). Al final toda adicción, a lo que sea, es de fondo, siempre hambre, ausencia de espiritualidad, hambre y necesidad de amor. Una mayor cercanía física y espiritual con la Madre devela siempre al hijo desvalido buscando su fuente de bienestar, es el anhelo de estar en y con ella y de este modo estar en la experiencia grata de sentir y ser amor, la fuerza de la vida.

El Mexicano Solana plantea lo siguiente: “Si la carencia de amor es una de las causas de desarmonía del ser, como ya se mencionó, hay que tratarlo con remedios que incidan ahí, en el origen, pero mientras sólo alcancemos a corregir lo ontogénico, o sea, lo aprendido a través de la evolución personal, sin contemplar los aspectos filogenéticos relativos a la evolución de las especies, estaremos en la olla. Y nuestros enfermos en el hoyo” (Solana & Senties, 2009). Para la psicología ancestral indígena el amor es la herramienta que cura el negativo y apacigua el fuego interior, es desde allí donde se cura, desde el origen mismo de la enfermedad; para aquellos quienes están alejados del profundo sentimiento está la madre en quien permanece el amor intacto e inamovible, ella es la fuente que rehabilita el corazón acorazado y herido, abraza maternalmente develando su perdón, realmente nos acoge con amor y nos cura. Además, durante el retorno a ella, el poder de las energías negativas toman rumbo, el amor allí es el punto cumbre El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 730 de claridad que permite reordenarlo todo en su debida proporción y llevarlo al lugar que pertenecen.

Para hablar de cura desde la psicología ancestral indígena es amorosamente obligante y respetuoso hablar de las plantas sagradas, sin querer ahondar en un recetario o un instructivo de uso es de suma importancia agradecer y reconocer que las plantas sagradas son ese elemento de amor natural que ayudan al fortalecimiento del ser, a rehabilitar el corazón herido y a reordenar los desequilibrios, “Desde muy pequeño el niño comienza con el conocimiento de las plantas y las hierbas, de los árboles de todo lo que nos rodea, de sus nombres. Empezamos por las plantas porque de ellas depende la vida, el alimento y la curación de las enfermedades. Este aprendizaje va desde niño nace y dura toda la vida. Uno mismo va conociendo, va realizando, aprendiendo, ayudado por los ancianos y el yagé” (Identidad, Tecnología, Amazonas, & Putumayo, 2001, pág. 32)

Resulta trágico haber realizado este recorrido y ahora comprender que la sabiduría de los abuelos y el conocimiento que ha pasado por nuestros linajes se ha refundido, y con ellos la verdadera cura de muchas enfermedades que hoy nos aquejan incesantemente, posiblemente todas ellas la ausencia de amor, de padre y de madre, de positivo y del conocimiento mítico que lo heredaba, tanto es así en el fraccionamiento, que incluso para muchos sembrar la tierra es un procedimiento extraño, exclusivo para campesinos y abuelos, esto ha generado que la siembra del amor en nosotros mismos también se haya visto entorpecida.

La importancia de volver a sentir como camino epistémico del amor radica en la recuperación natural de hacerlo desde el interior corazonante (co-razonante), de esta manera transegoica se repara el puenteo esencial a la amorosidad del universo y de la madre tierra como sagrada materialización de esta conciencia en el propio ser de lo humano. “El hombre que se ama El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 731 a sí mismo descubre que no tiene ego. El ego surge al amar a los demás sin amarte a ti mismo, al intentar amar a otros” (Osho, 2009, pág. 8). Por eso desde las enseñanzas de abuelos que han sido plasmadas en naturales saberes de psicología ancestral, no existe la inmediatez de amar a los demás, para qué, que clase de amor podría entregar alguien que carece de él, estaría enfermándose a sí mismo y su vez enfermando al otro; para el abuelo dicho sentimiento se obtiene tras el arduo trabajo de la honestidad, la sencillez, la humildad y la nobleza, al tener estas virtudes el hombre comenzará a amar y ese amor para nosotros se presenta como la herramienta que cura el negativo y apacigua el fuego interior. El amor desvanece el miedo, aclara la oscuridad y despeja el pensamiento negativo. Es la fuerza integradora que forja el espíritu de valor, que permite la perplejidad de lo simple y la belleza de lo ausente (comunicación personal,

2015).

Frente a la carencia del amor como un factor causal de la enfermedad, estos conceptos oscilan bajo definiciones como el desamor o el odio, sin embargo “El amor y el odio son un conocido par de opuestos. No es difícil comprender la polaridad si advertimos que el odio es amor congelado, es decir, un amor que se ha enfriado” (Lowen, 1994). Para la experiencia ancestral en sí no es la ausencia del amor lo que afecte el espíritu, pues éste nunca ha quedado sin una gota de amor, es por el contrario un tema de frío y caliente, una situación ligada a los excesos por presencia o ausencia, control o vacío de amorosidad en el cuidado de la vida, por esto es de vital importancia mantener el equilibrio ancestral e interno que no permita que coexistan esa serie de enfermedades, de difíciles temperamentos. Llegamos inacabados y con una gran necesidad de que sea mantenida la temperatura cálida y tierna del alma, necesitados de los representantes y cuidadores de la vida desde la fuerza ancestral de un padre y una madre que asumieron su capacidad de siembra, cualquier desorden de esta semilla reflejará el frio o el calor El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 732 temperado en el flujo vibrante de la energía o en el obstáculo resentido y depresor de la vitalidad por exceso o ausencia.

Por otro lado “el amor desgraciado se aflige, porque no excita la compasión de nadie; pero cuando es dichoso, todo le parece encantador, hasta las cosas más indiferentes. El amor es mucho menos digno de envidia que de compasión” (Ilisias, 1992, pág. 189). En esta instancia, la carencia del amor está en el relacionamiento con la esencia del otro, en el que la carencia es la fuerza innata del amor en crecimiento, hay que remitirse a lo previamente planteado frente al amor congelado, es decir, si la comprensión en el relacionamiento con el otro perpetúa la carencia como una ausencia vital, se fluctúa la posibilidad de cosechar un amor que se encuentra en crecimiento, es por eso que la comprensión del amor consigo mismo y con los otros, ha resultado tan aparentemente compleja, ya que no ha sido vista como la fuerza innata que se alimenta, construye y fortalece, sino como la ausencia que perpetua el desamor y por tanto la enfermedad.

Hay innumerables maneras de confundir el amor “El que está poseído por un deseo y dominado por el deleite, debe necesariamente buscar el en el objeto de su amor, el mayor placer posible” (Sócrates, 1992, pág. 195), de otro modo no sería amor, no para él, al llevar este argumento a una instancia más real es posible decir que el espíritu enfermo está enfermo porque su fuente de gozo está en el placer que obtiene tras los caprichos de su enfermedad, es nuevamente aquél ser que se regocija en la ausencia del amor; el abuelo Fernando lo ha expresado así “la enfermedad no existe, es uno mismo quien la invita a pasar, se lleva la idea en la mente de estar enfermo y atiende tan bien a la enfermedad que ésta decide quedarse” qué pasaría si se incomodara su estadía, si esa dificultad, esa ausencia aparente tuviese su lugar en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 733 balanza… probablemente no sólo lo físico sino también lo espiritual estaría más sano, tan sano como para amar.

Hay miedo por estar sanos, hay miedo de ingresar al interior y enfrentar lo que hay allí dentro, hay nostalgia, llanto, dolor y sufrimiento pero antes que nada hay miedo de reencontrarse con lo que alguna vez fuimos, en este caso hemos de percibir todo esto de forma diferente “No hay nada de malo en tener miedo. Cuando uno teme ve las cosas de forma distinta” (Castaneda,

1974, pág. 42), la forma en la que se percibe el amor desde la psicología indígena es transformadora y trascendente, es la herramienta que como se ha dicho antes, cura, sana, alivia y regocija el ser de tranquilidad, el miedo según nos ha enseñado este camino y como dice el abuelo Fernando “está y habrá que tomarlo de la mano e invitarlo a andar, llevarlo a la Madre y hallar la fuerza que hay en él para seguir adelante” (2014).

Todo esto quiere decir que no hay porqué temer ante el miedo “… los temores son naturales; todos los sentimos y no podemos evitarlo. Pero por otra parte, pese a lo atemorizante que sea el aprender, es más terrible pensar en un hombre sin aliado o sin conocimientos”

(Castaneda, 1974, pág. 48). Hay algo más allá en la vivencia de sentir y entregar, resulta grato haberse resistido al miedo, haber andado en la oscuridad creyendo firmemente que la luz de una montaña guiaría nuestro camino o que quizás esa luz iría en el interior, es un acto de fe aceptarlo, uno de amor tomarlo y es un acto de convicción seguir pese y junto a su presencia.

Dentro de la psicología ancestral indígena, la psicopatología se remite a un control lógico del alma sintiente desde el alma racional, a la búsqueda incesante del equilibrio interno, al trabajo espiritual continuo que permita ahondar en lo que Sócrates llamó delirio y que ahora de forma indiscriminada se le apoda enfermedad, pero que para nosotros es la libertad de la expresión y el descubrimiento del amor, en sí es una balanza que se mantiene cautelosamente en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 734 peligro a la desproporción, pero que tras el trabajo, la fuerza y la comprensión del delirio se convierte en la parte del pathos que se denominó amor y que durante la experiencia dio luz a nuestro andar. Por ello, casi que toda psicología ancestral es una patología del alma, donde el pathos devela la instancia corazonante y amorosa desde un logos de divinidad, mística y mítica como camino metódico del ser humanizado en conciencia telúrica de su origen cosmogónico.

Existen muchas tergiversaciones frente a la manera en la que el hombre debería acercarse a su verdad, a sus malestares, su conocimiento y su sentir. “Sócrates dice: «Conócete a ti mismo». Buda dice: «Ámate a ti mismo». La frase de Buda es mucho más correcta, porque a menos que te ames a ti mismo, nunca te conocerás; el conocimiento viene en segundo lugar. El amor prepara el terreno. El amor es la posibilidad de conocerse a uno mismo; el amor es el camino adecuado para conocerse a uno mismo.” (Osho, 2009, pág. 11). Estando de la mano del amor incluso en tiempos de oscuridad, se desvanece el miedo y se aclara el pensamiento, se conoce lo que hay dentro de sí, dicha fuerza para los abuelos que han guiado nuestro camino, es la manera de acercarse adecuadamente y con humildad al espíritu, es el camino que lleva al conocimiento propio, a la paciencia de la comprensión y la compasión, al verdadero conocimiento de la vida. El acto evolutivo de la conciencia psíquica, asombrarse por lo simple y contemplar amorosamente la belleza de lo que aún permanece ausente implica al amor como el maestro consciente de orientación, transformación y fuerza mística del universo que va tejiendo poco a poco dentro de cada uno de nosotros ese camino reminiscente del alma al alma, del alma al espíritu, de la esencia material a la esencia ideal pensante y a la esencia espiritual como entrega del alma. La vida como tejido de vidas, como camino evolutivo evidenciado junto con la mariposa Griega en la culebra mística y la rana metamórfica ancestral de lo que siempre está más El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 735 allá, no la idea del futuro, la inmanencia de la presencia eterna, de la cambiante posibilidad almifica de evolución, del vuelo espectral del alma desde lo que es hasta lo que es.

Como se ha venido repitiendo el amor no es una manifestación externa al sí mismo, sino que también es como lo dice Boff “…un fenómeno cósmico y biológico. Al alcanzar el nivel humano, el amor se manifiesta como un proyecto de libertad como una gran fuerza de cohesión, de simpatía y de solidaridad.” (2002, pág. 89), para nosotros la manifestación del amor aunque también oscila como un proyecto de libertad, es entender que la libertad vendrá luego de creer sinceramente que la fuerza del corazón y del amor, son la guía hacia el verdadero camino, lo humanizante, pues se reconoce y se honra al amor, sabiendo que es la necesidad universal tras la cual se mantiene nebuloso y confuso el camino. En psicología ancestral se convierte en la fuente de equilibrio, valor y poder, es el amor lo que nos permite el acercamiento con la Madre, el

Padre, los ancestros y las fuentes de vida.

Boff nuevamente lo expresa diciendo que es “El proyecto de la libertad que acoge conscientemente al otro y crea condiciones para que el amor se instaure como el más alto valor de la vida” (2002, pág. 88). Entender que mi ser es la sincronía armónica dulce y perfecta, me hará ser consciente del amor que hay en mí, pues el amor es el signo y acto dulce regulador del poder que hay en mi interior”, allí está la libertad, en el acto valiente de amarse a uno mismo con todo lo que esto implica.

En la actualidad nos resulta inconcebible pensar en el amor como algo más allá del clásico romance o de la naturalidad de amar a los padres, pero ¿es eso realmente amor? Es momento de cuestionarse ¿Allí está el amor en libertad? O está en tantos lugares que finalmente nunca está, Osho dice que “Hay mucha gente involucrada en la industria de ayudar a las personas a entender qué es el amor, pero, a pesar de ello, sigue siendo un fenómeno desconocido. Y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 736 debería ser uno de los más conocidos” (2009, pág. 10). Por tal razón, se antepone la necesidad de construir nuevamente al amor como esa fuerza inteligible que nos une y con el otro, con la

Madre y con el territorio; corazón y razón, corazón y cerebro, pensamiento y sentimiento, alma y cuerpo, ciencia y conciencia, una cadena, o mejor aún, un tejido evolutivo e integrativo del ser en bendición holística de total posibilidad. Así lo entendían nuestros abuelos y ancestros, pues para ellos el amor era y sigue siendo el principio tras el cual se rige la vida, no requiere interpretaciones externas, requiere sentirse desde el interior, pues de allí vendrá el verdadero amor. Una ascendencia trans (transcendencia) reminiscente e inmanente como entrega en el amor a la fuerza del espíritu (fe), pues solo cuando amo me entrego en confianza a lo que es, al ser de totalidad, a la gran madre como camino del padre, al alma psíquica de femeneidad en transito integrativo al espíritu masculino y en integratividad al gran espíritu de totalidad.

Finalmente es importante resaltar directamente al amor como una fuente de conocimiento absolutamente válida, esa debería ser nuestra lucha constante si es que al conocimiento verdadero queremos acercarnos. “El amor es el mayor experimento en la vida, y aquellos que viven sin experimentar con la energía del amor nunca sabrán lo que es la vida. Sólo se quedarán en la superficie, sin profundizar en ella” (Osho, 2009, pág. 7). Esto no parece vida, no es conocimiento, ni ciencia, qué es cada una de ellas si precedentemente se ha dicho que para abordarlas se requiere conocer a profundidad al ser humano y ¿cómo se conoce al ser humano si

éste por sí solo no ha logrado conocerse? Si el hombre no tiene la ciencia de lo que es serlo.

Frente al desconcierto de lo real como tragedia de la ignorancia actual hay que darle la importancia que el amor merece y llamarlo en los campos que se requiera, pues esta psicología científica de hoy no entiende aún desde el lugar de su logos que es lo humano ni el alma de lo humano, ya no quiere indigesta de ego racio-técnico preguntarse por el ser de su telos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 737 epistémico, ya no puede sentir y menos amar como logos de divinidad mítica en la conciencia conocedora de la profunda esencialidad de la experiencia trascendente que estudia y conoce.

Se está ante una difícil tarea, entraremos a rescatar algo que no reconocemos del todo pero como dice Osho “Yo no puedo definir lo que es amor porque no existe una definición de amor. Es una de esas cosas indefinibles como el nacimiento, como la muerte, como Dios, como la meditación. Es una de esas cosas indefinibles; yo no puedo definirlo. No puedo decir << esto es el amor >>. No puedo mostrártelo. No es un fenómeno visible. No se puede diseccionar, no se puede analizar; solo se puede experimentar, y únicamente a través de la experiencia puedes saber qué es” (2009).

Lo que intenta entender entonces esta psicología ancestral como amorosidad concientifica del saber propio es reconocer, centralizar, universalizar y descubrir como lugar de conocimiento y desde la apertura de las propias almas y tras la experiencia vívida de caminar los lugares, tomar de las plantas sagradas, trasnochar en las malocas y adentrarse en los rituales, que las personas viven y vivan en amor, sientan dentro de sí el amor, lo descubran y sepan que también es parte de ellos, pues contar, mostrar o escribir de él no es la manera adecuada de decir que se está siendo amor. Una recuperación del saber propio como elevación vibratoria de la conciencia individual, colectiva y télurica divi-na (no dividida), una terapia del amor..

Es como Sócrates lo ha dicho “Ama, pues, pero no sabe qué; no comprende lo que experimenta, ni tampoco podría decirlo; se parece al hombre que por haberse contemplado por mucho tiempo en otros ojos enfermos, sintiese que su vista se oscurecía; no conoce la causa de su turbación, y no se da cuenta de que se ve en su amante como un espejo” (Sócrates, 1992, pág.

210). Por tal motivo, no se instruye el amor, no se vive por otros la experiencia bonita de amar, se vive y se siente tras haber caminado con la conciencia plena de reconocer dentro de sí la gran El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 738 puerta de humanidad como obra de divinidad en una totalidad siempre divina, se insiste en la necesidad de volver en la entrega a este tipo armonizador del orden.

La ciencia se ha encargado de limitar los caminos que llevan al hombre al conocimiento, evidentemente el amor no es reconocido como una de sus maneras, ha estado estigmatizado y el objetivo de esta investigación es rescatar de allí el concepto, para nosotros el conocimiento que de allí surge es la palabra del abuelo, el mensaje de los lugares sagrados, las plantas y las conexiones que adquirimos con la Madre Tierra, éstas son dadas por la apertura que hay en nuestro cuerpo, por el desarrollo espiritual como conciencia que se ha venido trabajando y eso sólo es posible en la ardua y profunda interpretación que se hace tras conocerse uno mismo.

“Los científicos suelen pensar que nuestros ojos, oídos, nariz, el resto de los sentidos y la mente no son sino puertas a la realidad, puentes hacia la realidad. Pero ahora ha cambiado toda la interpretación. Ahora dicen que nuestros sentidos y nuestra mente no son realmente puertas a la realidad, sino guardianes contra ella. Sólo un dos por ciento de esa realidad logra burlar a esos guardianes y llegar a ti; el noventa y ocho por ciento de la realidad se queda fuera. El dos por ciento que llega a ti y a tu ser ya no sigue siendo el mismo. Ha tenido que traspasar tantas barreras, se ha tenido que adaptar a tantos esquemas mentales, que cuando llega a ti ya no sigue siendo el mismo” (Osho, 2009, pág. 13).

Sólo al tener total y absoluto sentido de la entrega al conocimiento de nosotros mismos tendremos esa realidad tan naturalizada como está allí fuera o dentro, incluso tendremos nuestra propia realidad tal cual es, no habrá barreras, tergiversaciones, malos entendidos o un conocimiento parcial y fraccionado, tendremos la realidad tal cual está dada, tan solo recordar la expresión Husseriana de su filosofía llevada a la psicología, toda psicología es mi psicología, posibilidad más sentida de la ciencia, ya que está siendo recibida sin tantos requisitos, sin tanta El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 739 distancia reductiva; el opuesto positivo de cientificidad es aquél que no ha querido ver en sí la esencia innata del amor, pues lo desconocido le asusta, el descontrol lo enloquece y el miedo a la muerte de lo impredicible e incondicionable lo recrea en el sueño colectivo y un tanto ignorante de la ciencia desarrollista y tecnológica, al margen el amor perece y la tibieza de su corazón poco a poco se desvanece. El humano cyber o zombie como caricatura de su encubierta grandeza.

El amor, en cualquiera de sus expresiones, es un tema profundo y prodigioso, a estas alturas del desastre es imposible prescindir de él, ya es momento de reconocer que de ser un factor de influencia innocua, no sería el hilo conductor al corazón del mundo, sus caminos nos llevan a la unión, la comprensión, el conocimiento y la entrega; aunque hoy nos resulte desconocido, sus destellos de luz, quizás en el reflejo de una montaña, podrían enseñar más de lo que hasta ahora nos ha enseñado la ciencia racional. “Para que nos diéramos por vencidos por sus razones, sería preciso que nos demostrara que los dioses que inspiran el amor no quieren el mayor bien, ni para el amante, ni para el amado. Nosotros probaremos, por el contrario, que los dioses nos envían esta especie de delirio para nuestra mayor felicidad. Nuestras pruebas excitarán el desdén de los falsos sabios, pero habrán de convencer a los sabios verdaderos”

(Sócrates, 1992, pág. 201).

Vida

Más allá de la división entre lo femenino y lo masculino, entre el cuerpo y la mente, está lo macro que nos hace ser y existir, está la vida, de ella venimos y de ella somos parte, con lo enigmático del nacimiento y lo desconocido de la muerte aún se rescata el indomable poder de la vida, ella florece, está como está el agua en las plantas, como está la Madre Tierra en nosotros, con una fuerza inteligible que en cierto modo nos define como seres humanos. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 740

Entonces ¿Cómo atreverse a plantear una nueva fuente de conocimiento si no es a partir de lo incomprensible de la vida? La importancia está dada casi que por sí sola, cualquier trabajo investigativo que intente profundizar en la esencialidad del ser humano, tiene que partir de la comprensión en una medida, por lo menos vaga, de lo que implica estar vivos como seres humanos, para la ciencia no es obvia ésta razón inteligible, ha buscado sus razones cuantificables o de biologismo mecanicista para explicar el fenómeno de la vida al que teme por su naturaleza inexplicable, dicho esto, se sugiere a la racionalidad tomar el riesgo de sentir con nosotros la vida, sin adentrarse en la lógica cuantificable, más bien con la dichosa sensación de llevar el sujeto de estudio impreso en su propia naturaleza de existir como ser bio y humano.

La vida es la inspiración que hace que cada uno de nosotros pueda respirar, existir, caminar, seguir, es la vida la que sostiene toda aquella creación maravillosa que antes y ahora haya podido ver el hombre, no se trata aquí de plantear una sola manera de ver la vida, por el contrario se trata de ahondar en perspectivas que aportan al planteamiento general de lo que dentro del proyecto de psicología ancestral y en compañía de los sabedores indígenas se construye como vida.

La construcción en las culturas indígenas no provienen de libros, es tras la vivencia sensitiva del ritual, las costumbres, los elementales, los ancestros y abuelos mediante los cuales se permite un mayor acercamiento a la vida “Si Uzuma, el Anciano, porta y difunde en su comunidad la palabra de tabaco y coca que ha realizado con su obra y que transmite como legado, es el estado de Naarede/ embarazo/, Namozig’ o/ la mujer embarazada/ Namoking’o/ mujer con otro ser/ con la fecundación y el embarazo produce la semilla de tabaco que ella y el hombre deberían regar -como el tabaco después de la quema-, para que esa vida que nace sea fértil, suave, para que no se caliente” (Identidad, Tecnología, Amazonas, & Putumayo, 2001). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 741

Nada es irrelevante, la importancia en la coherencia del pensar, el sentir y el actuar son la luz que amorosamente guía el sendero, en su esencia pura está un ciclo que permite el fortalecimiento continuo del ser físico y espiritual.

Habrá que visibilizar desde lo indígena la discusión acerca de la vida “El comienzo de una vida nueva… para el Uitoto es el inicio del retorno a los abuelos primordiales, pues el camino del desarrollo humano no es otro que el sendero del dominio de la Palabra primordial de la verdadera esencia de las cosas” (Identidad, Tecnología, Amazonas, & Putumayo, 2001, pág.

30). En un inicio se dijo de una mirada aparentemente novedosa y he aquí la novedad, por años las personas han pensado y sentido la vida desde la evolución, el desarrollo, el “echar palante” y no, la vida está en el camino de vuelta a los abuelos a su infinita sabiduría, hacia el conocimiento autóctono y primordial, donde el conocimiento y la sabiduría se responde tras la mirada introspectiva y ancestral de uno mismo.

El ritual de pagamento que durante el camino hemos realizado de forma amorosamente consiente y entregada se ve reflejado en cierta medida frente a lo que desde hace años planteó

Sócrates “La virtud de las alas consiste en llevar lo que es pesado hacia las regiones superiores, donde habita la raza de los dioses, siendo ellas participantes de lo que es divino más que todas las cosas corporales. Es divino todo lo que es bello, bueno, verdadero, y todo lo que posee cualidades análogas, y también lo es lo que nutre y fortifica las alas del alma; y todas las cualidades contrarias como la fealdad, el mal, las ajan y las echan a perder” (1992, pág. 202). Se plantea la complejidad de lo que para nosotros parece dual y dividido y que por tanto limita la comprensión de la divinidad, de la vida.

La similitud entre ambas perspectivas radica en la esencia que inspira su mirada a lo aparentemente dividido y que a su vez pese a la división hacen parte de la vida; durante el ritual El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 742 de pagamento se realiza un intento consiente de entrega, llevar a los sabedores Padre y Madre espiritual tanto lo positivo como lo negativo, para que ellos a su vez le den regreso a su lugar de origen y en su debida proporción, es el trabajo de reordenar y unir lo que para nosotros como seres humanos en un inicio parecía dividido, pero que durante el ritual se convierte en la unidad que fortalece la vida. Por otro lado, en el planteamiento que hace Sócrates lo positivo y lo negativo son cualidades contrariadas que de igual forma hacen parte de lo bello y lo divino del alma, pero así como lo negativo en lo indígena nos enferma, lo feo para Sócrates nos aja las alas del alma.

Es importante comprender que la vida es la unidad perfecta que conforma el ser, pero los desequilibrios limitan el camino de comprensión de dicha unidad, y no sólo eso, Sócrates planteaba una serie de almas, comprendidas según su acercamiento a lo divino, asimismo pasa en lo indígena y no se entienda esto como una categorización de la vida, por el contrario es el nivel de conocimiento y apertura al mismo, lo que determina el grado de acercamiento no sólo a lo divino, sino que también a la adecuada manera de ver, pensar y sentir la vida, es decir, bajo los cuatro principios que han guiado nuestro camino dentro de la experiencia indígena; la sencillez, la nobleza, la honestidad y la humildad.

En términos de la verdad y la ciencia, la vida ha tomado diversos matices sin embargo no ha logrado comprender que la inteligencia se alimenta de la ciencia como el alma anhelante se alimenta de la esencia divina de sentir la vida, “La esencia sin color, sin forma, impalpable, no puede contemplarse sino por la guía del alma, la inteligencia; en torno de la esencia está la estancia de la ciencia perfecta que abraza la verdad toda entera” (Sócrates, 1992, pág. 203). Uno necesita del otro para crecer, la contemplación de la sabiduría es el placer de adentrarse en la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 743 ininteligible construcción de un ser complejo que se fortalece tras el amor y la vida, en su esencia de divina pureza.

La ley de origen simboliza el reordenamiento del movimiento circular y continuo que permite la conformación de esa vida, es la satisfacción de saciarse del conocimiento mientras se escucha la palabra de los abuelos, es el acercamiento a la vida y a la ciencia en un mismo momento de contemplación donde las lecciones encuentran cabida en la sabiduría que aguarda en el interior del ser, allí se percibe la vida como propia, se investiga la vida tras la exploración continua de uno mismo.

Tal complejidad implica que la vida gira entorno a explicaciones inconclusas de las cuales ya ni somos dueños, la ha intentado definir la biología, la filosofía y de manera reduccionista y arrogante también la ciencia racional, pero la vida desde el sentir y desde el ser parte de ella es un argumento que aún se construye poco a poco y con dificultad, para nosotros como investigadores del proyecto, la vida ha tornado un significado más amplio de lo tangible y perceptible por el ojo racional del hombre, para nosotros la vida surge tras el despertar del ojo contemplativo que entiende bajo otras miradas de tipo más sensitivo y espiritual y esto es lo que hasta ahora se ha intentado plasmar.

La vida en cierta medida se trata de una cuestión de movimiento, no un movimiento que provenga de fuera y que obligue al ser a parecer estar vivo, por el contrario, es el movimiento interno lo que determina la vida “… todo cuerpo que es movido por un impulso extraño, es inanimado, todo cuerpo que recibe el movimiento de un principio interior, es animado; tal es la naturaleza del alma. Si es cierto que lo que se mueve por sí mismo no es otra cosa que el alma, se sigue necesariamente que el alma no tiene ni principio ni fin. Pero basta ya sobre su inmortalidad” (Sócrates, 1992, pág. 202). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 744

La danza durante los rituales por ejemplo, no es sólo el movimiento corporal evidente, es el reflejo de una danza interior, de un movimiento que proviene de las entrañas, de una imagen bonita que se dibuja en la mente, es una manifestación de sentir la vida e inmortalizarla desde dentro, pues es uno de los movimientos que dejan el elemento de lo corporal en un segundo plano.

En la recopilación que hace Galindo en su libro de bioética global plantea algo de suma importancia “En el fondo de la pregunta de la lógica de la vida yace nuestro deseo de apropiarnos de ella hasta obtener la inmortalidad. Porque nos incomoda y odiamos terriblemente envejecer, enfermarnos y morir. También porque queremos expiar nuestros sentimientos de culpa ocasionados por tanta muerte y destrucción que infringimos en nuestro entorno” (Galindo,

2007, pág. 183). Para nosotros estas palabras estarían expresadas en términos de ego, pues sólo

él como fuerza dominante, quiere colmarse de poder tener antes que de poder apreciar, de obtener esa inmortalidad como un triunfo mas no como una experiencia divina.

Sin embargo y como en diferentes ocasiones nos han planteado el abuelo, del ego también se aprende y de él hemos podido aprender a concebir la vida desde una mirada bien distinta, aquí el envejecer es sinónimo de vida y sabiduría, la muerte es la posibilidad de trascender y el entorno es la Madre, la Tierra, la grandeza de la cual tomamos porque de ella somos parte, porque ella está en nosotros, nosotros en ella y en esa cercana relación se encuentra la esencia inteligible de la vida.

Pero aquí también se ha dejado entrevisto un aspecto sumamente relevante, la muerte y con ella el duelo, ¿cómo es posible apreciar tanto la vida y luego enfrentarse ante la ineludible determinación del ciclo regular de las cosas?, el abuelo Fernando en su inmensa sabiduría ha sabido expresarlo bien, la muerte es el momento en el que debemos dejar de lado el egoísmo, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 745 pues sólo mediante el amor y la alegría, es que la persona encuentra la fiesta espiritual tras el importante ritual de la muerte, ha partido, pero ha de encontrar su lugar y reposar en paz, ha terminado su vida en la tierra más no su desarrollo a nivel espiritual, se han terminado sus dolores, ha dejado atrás todos esos esfuerzos que no dieron fruto y ha partido dejando en nosotros la fuerza que debemos llevar con honor y valor, esto es a groso modo la muerte, una oportunidad de trascender y amar con libertad tras la despedida.

Hablar de muerte implica regocijarse de felicidad tras haber disfrutado la vida tan bonita como es “Partiremos de este principio: toda alma es inmortal, porque todo lo que se mueve en movimiento continuo es inmortal” (Sócrates, 1992, pág. 201). La percepción del abuelo frente a ello es que no existe la muerte, tal y como afirma Sócrates, en cierta medida lo es para nuestro sabedor, tras el momento transitorio de la muerte el espíritu descansa, trasciende y se posa en un lugar mejor junto a ancestros y abuelos, es el movimiento circular de la ley de origen, es retornar a su sabiduría y desde allí acompañar a los que siguen en tierra.

El duelo es según el abuelo un sentimiento egoísta de apego y eso no es amar a quien se va, es atarlo a nosotros como si fuese nuestro, impidiendo que éste transcienda y encuentre libertad, por eso es tan importante amarnos con ese amor autentico, libre y con la consciencia de habernos amado primero a nosotros mismos antes que a los demás. Desde una mirada indígena

“La muerte (yu) significa el “principio vital” del individuo ha desaparecido

definitivamente, pero se considera que ha sido “capturado”. En consecuencia, el

“corazón” (ma-une), sede de la sangre, colocado <

dejado de funcionar… Fuera de los adeptos a los movimientos proféticos, algunos

hablan de un viaje que permite reunirse con los Inmortales que están cerca y que

viven con Joi, el mayor de los gemelos míticos… Otros hablan de una vuelta del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 746

“principio vital” al universo (na-ane) después que haya pasado una serie de

obstáculos (Goulard, 2009, pág. 180).

Por tal razón, la muerte no implica abandonar la maravilla de vivir, la consciencia de saber de la muerte es por el contrario ahondar más en la vida, cuidar el cuerpo, la mente, el corazón y el espíritu, así estaremos vivos, “… ¡aunque finalmente todos estemos abocados a la muerte, la salud no deja, por ello, entretanto de ser una buena cosa! Es posible decir “sí” a la vida sin, por ello, dejar de despertar a aquello que trasciende la muerte, una forma de inclusividad que muestra la clara impronta del quehacer integral.” (Wilber, Patten, Leonard, & Morelli, 2010, pág.

319). Esto permite entender que el círculo de vida y muerte, pese a que la segunda se convierta en la disolución de muchas cosas de vida, también significa la trascendencia de la misma, el abuelo nos ha hecho importarnos por el cuidado de nosotros mismos, del otro, de la Madre

Tierra, la comunidad y las plantas puesto que son el conjunto del cual nos deviene el amor y el sentimiento de plenitud.

Para nuestros ancestros Muhysqas es Iguaque el origen de la vida, en sus aguas está lo sagrado y lo que debe honrarse como tal, pero no con un sentimiento de obligatoriedad sino más bien con el sentimiento puro de reconocer que pertenecemos allí, habrá entonces que pedirle perdón a la vida, perdón al origen y perdón a la muerte, puesto que sin la consciencia de habernos reconocido como parte del mito sagrado, resulta imposible bañarse con las aguas de la

Madre, del perdón y la vida, esto bajo los parámetros del amor auténtico podrá alimentar y revivir la fuerza que en sus aguas aguarda, ya que la modernidad nos tiene tanto a ella como a nosotros sumamente devastados.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 747

“Es evidente que, cuando la entrega es apropiada, no socava el compromiso y permite que nos dejemos dejarnos llevar pasivamente por las corrientes de la vida. Cuando el esfuerzo es apropiado, no remplaza ni soslaya nuestra capacidad de abrirnos a fuerzas mayores, reconociendo que no podemos controlar ni permanecer en contacto con el momento presente”

(Wilber, Patten, Leonard, & Morelli, 2010 , pág. 320). Cuando nos entregamos al ritual nos estamos abriendo evidentemente a fuerzas mayores, las reconocemos como tal, pues a todos y cada uno de nosotros nos ha llegado la vida a través de ellas, su fuerza penetra nuestros huesos y nuestro sentir, aquí la imposición ni la obligatoriedad existe, estar como vitalidad consciente es el acto obligante de sentir que se quiere y se necesita profundamente de estar allí, estar en la experiencia suprema y sublime de vivir.

La tierra y los elementos son entonces la fuente de conexión a la sutileza de estar vivos, las mujeres por ejemplo son el reflejo intacto de la fertilidad y el hombre de la semilla, es aquí donde la división de femenino y masculino desaparece, éstas dos fuerzas se entrelazan en el acto de hacerse vida, sembrar la vida y cuidar la vida de allí en adelante, qué otro ejemplo podría darse si no en el hecho mismo de tener un hijo, de sembrar la vida, en ello está el amor, el cuidado y el maravilloso ritual de entrega, ambos se entregan a sí mismos y en un grado equivalente se están entregando al otro. Por esta razón la vida en la cultura indígena Mhuysqa tiene tanta relevancia, es la unión terrenal de lo sagrado; (sin decir que coexiste en el mundo occidental un desprecio por la muerte), puesto que aquí se toma más bien como la separación de ambos rituales, que tras el trabajo espiritual se vuelven uno solo. La razón no lo entiende, pero en ambos está impresa la esencia natural de la vida, pues en ellos está el hilo invisible del amor y

éste, es el que conecta el circuito por el cual se regenera la tierra y se siembra nuevamente en ella El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 748 el alimento que seguirá entregando vida. El padre y la madre que toman la vida de los abuelos da la vida al hijo.

Hay lugares sagrados especiales para la siembra, a los bebés se les realiza el ritual de siembra de la placenta en la maloca en la que sus padres han permanecido, pues él al igual que ellos comenzará a ser parte de allí, según el abuelo este ritual permitirá que el niño(a) agarre raíz, se oriente en su vida y crezca sabiendo siempre al lugar al que pertenece, ya que ese hilo invisible lo estará conectando tanto con la Tierra como con lo sagrado del cielo. También se realiza como pago espiritual a la Madre, se está sembrando vida y ella de eso recibe alimento en positivo.

La tarea no termina allí, las mujeres y los hombres se vinculan con la vida con otro tipo de rituales, la mujer debe apoderarse y sentirse orgullosa de ser mujer, aprender lo propio para lo que está hecha, y que no se entienda esto como una orden suprema de rechazo o exclusión, es todo lo contrario, es sentirse bien con lo maravilloso de ser mujer, tejer, vincularse con el ciclo menstrual, con la luna, cuidar del hogar y de sí, esto le permitirá sentirse bien con ella misma y evitar la enfermedad. “A pesar del temor de ser mujer, todas saben en su cuerpo que sólo a través de la satisfacción de su naturaleza femenina pueden experimentar la alegría de vivir.” (Lowen,

1994)

Desde una mirada más indígena la mujer incluso en su proceso de desarrollo está siendo vida, “Se encuentra en un estado de gran fragilidad que se parece, siguiendo la metáfora vegetal, al del embrión floral, llamado también <

“esbozos” que deben pasar de un estado vegetativo a un estado reproductor. La finalidad del ritual, con la metáfora de la formación de las piezas sexuales en la flor, corresponde a la iniciación floral de la joven. Esta semejanza con el vegetal está contenida en las palabras que la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 749 madre dirige a su hija: <

El hombre por su parte es semilla, como sembrador y cuidador busca vincularse con lo femenino mediante las plantas como el ayu y así juntos complementan la energía dual que el mundo occidentalizado aún no logra comprender, su pelea constante lo limita y aquí el poder no importa, somos más que la división, somos vida. “… la pareja que espera un hijo deberá preparar su palabra, que es semilla en potencia que predeterminará la existencia futura del nuevo ser”

(Identidad, Tecnología, Amazonas, & Putumayo, 2001), ambos trabajan juntos desde sus cualidades, desde sus miedos y fortalezas en la construcción de ese ser que al igual que ellos durante su crianza tendrá el acompañamiento de Padre y Madre espiritual, de abuelos, ancestros y sabedores.

Juntos como pareja, Padre y Madre están para ser, estar y existir, por ello el camino que se construye entre lugares sagrados es el encuentro con la vida, con las enseñanzas del padre sol y de la Madre tierra. Desde la psicología ancestral indígena se busca la vida mediante la conexión con la Madre tierra, pues al estar conectado con ella, el ser humano da cuenta que también es y tiene la vida como esencia del psiquismo y de lo humano, “La mente, el espíritu y el alma son aspectos de todo cuerpo viviente. Un cadáver no tiene mente, ha perdido el espíritu y se le ha ido el alma, Ahora bien, si tú eres tu cuerpo y tu cuerpo eres tú, este expresa quién eres.

Es tu modo de ser en el mundo. Cuanto más vida tenga tu cuerpo, más estas en el mundo”

(Lowen, 2011, pág. 51).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 750

En este sentido es la unión entre lo femenino y masculino lo que crea la vida y los elementales y las plantas se mueven en dicha integración, en ellos simplemente aguardan diferentes lecciones para que hombres y mujeres encuentren el complemento de su energía dual y experimenten la plenitud de tener conciencia de ser hombre y mujer, abuelo y aprendiz, hijo y padre. Siendo la mujer quien encarna la grandeza del existir, y siendo el hombre la semilla y la protección de la misma mujer, no queda más que echar raíz, tomar la tierra como parte de nosotros, sentirla, amarla y cuidarla, pues después de tanto habremos de saber que sin ella la vida simplemente perece.

¿Qué es de lo humano si no hay vida en ello? ¿Qué es del psiquismo sin el fundamento esencial del amor? Hay que plantar la vida, como dice el abuelo, hay que volver a la siembra, tanto en la tierra como en nosotros, en la tierra hay que sembrar el alimento, saber de las plantas y sus beneficios, apoderarnos de ese conocimiento milenario que viene de abuelos y ancestros, despertar la conciencia para saber lo que nos mantiene enfermos y entonces, darle importancia y tomar la salud y la vida.

Para ahondar en esta precisión hay que tener en cuenta que la vida tiene una estrecha relación con el concepto de bioética, desde la raíz griega alude a dos magnitudes de notable consideración: bios (vida) y (ética). “Desde esta perspectiva, el propósito general de la bioética será lograr la adecuada "relación" entre esas dos realidades: la vida y la ética; una relación, que no sea una yuxtaposición, sino auténtica interacción.” (Potter 2000, pàg. 150.). Se plantea entonces como la fuerza integradora de la vida, que se encuentra impregnada en la esencia tanto de la naturaleza como del ser humano, una corriente que de forma natural recorre el cuerpo, una sensación atrayente que vibra fuertemente dentro de sí, una herencia del propósito divino de humanización y de la conciencia tanto telúrica como universal. El punto coyuntural en el que la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 751 razón y el sentimiento unen sus ímpetus para formar el equilibrio, algo hermoso creado por ambos que se aleja de la ambición prematura por alcanzar un poderío inexistente, convirtiéndose en una parte fundamental e integradora que promueve el orden natural de las cosas.

La vida como sustenta Galindo es el principio y fundamento de la existencia, “La vida no es un pensamiento estático, un discurso conceptual lógico, tampoco un ser per se que existe por fuera de sus concreciones en seres vivientes a los cuales les daría forma, siguiendo el hilemorfismo aristotélico o también el mundo de las ideas perennes de la propuesta platónica”

(Galindo, 2007, pág. 184). Aquí la vida está en los elementales: el agua, la tierra, el aire, el sol y la luna, ellos son el movimiento constante que determinan la lógica bajo la cual se rige la vida, son dinámicos y cambiantes debido a las diferentes percepciones bajo las cuales son recibidos, pero en su esencia más pura tienen la lección adecuada para cada uno de nosotros; el agua limpia y es lo que calma el fuego interno del corazón, el fuego es la luz que guía, la tierra es la fertilidad, la luna es el poder de lo femenino y el sol es el padre protector.

Desde una perspectiva más de tipo biológica cabe destacar al ingeniero agrónomo Juan

Ramón Lacadena, quien sostiene que la bioética es “el estudio que intenta relacionar nuestra naturaleza biológica y el conocimiento realista del mundo biológico con la formulación de políticas encaminadas a promover el bien social. La bioética, consiste en el diálogo interdisciplinar entre vida (bios) y ética (ethos)” (Lacadena, 2002, págs. 2-26). Este autor reafirma desde su campo la importancia del bien social, destacando componentes netamente biológicos tanto de nosotros como del ambiente en el que nos movemos constantemente, pues sólo en la medida en que se entiende la integración y la dependencia de uno y otro, es posible construir políticas de interacción y comprensión de cada uno y de ambos como conjunto integrador. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 752

En este sentido la pretensión de la investigación de psicología ancestral indígena desde la cultura indígena Mhuysqa apunta al descubrimiento y la comprensión de esta constante interacción, que de forma paulatina ha pasado a un antagonismo cruel, pues la división de ideales y creencias, ha fijado a unos y otros en un solo campo de abordaje a dicha comprensión, fraccionando así la verdadera intención de los compontes dados por la bioética, que en su significado permiten una mayor comprensión de la vida.

“Cualquier investigación que emprendamos acerca de la naturaleza de la vida se

encuentra enrarecida porque tanto el objeto estudiado como el investigador son seres

vivientes, inmersos ambos en una misma realidad que los liga y desliga y a ambos

desborda, que desdibuja las fronteras entre el sujeto y el objeto, entre el observador y el

observado, pues más allá de la puntualidad de los dos como seres vivientes concretos, lo

que entra en juego como tema de estudio es la vida como una cadena, un fluir, una

dinámica, un estar ahí y en todas partes, sin agotarse en ninguna de ellas y mutuamente a

todas. Por consiguiente, lo que se diga acerca de la lógica de la vida solamente existe

simbólicamente en la mente, como pensamiento pensado, pero la realidad de la vida es

resbaladiza al intelecto humano y cualquier cosa que se averigüe de ella ya la supone,

pues todos somos eso, vida. La vida es anterior a nosotros, nos constituye y nos proyecta.

En todo empeño que hagamos por conocer la vida, lo mejor que podemos hacer es re-

conocerla y re-conocernos dejándonos maravillar por su grandeza” (Galindo, 2007, pág.

185).

Pero… ¿y ahora? ¿Dónde está la fe del siglo XXI, acaso los instrumentos tecnológicos han de devolvernos la vida que nos han quitado, el conocimiento autóctono que han truncado; se irán con todo el espíritu de muerte y soledad que han traído consigo? Habrá que cuestionarse El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 753 para entender ese síndrome de descuido que coexiste con la enfermedad y las almas muertas; no puede seguir yéndose el espíritu junto con la muerte del cuerpo físico.

Ya le pasó antes a nuestros ancestros españoles, acabaron la vida, despreciaron la tierra y quemaron con crueldad y barbarie el templo sagrado de sol, sin caer en el oprobio, hay que reconocer que nos hemos equivocado siguiendo los pasos sin bondad de nuestros ancestros occidentales, pese a las múltiples manifestaciones de la Madre Tierra: los incendios, las inundaciones, los temblores, la contaminación de aire y otros malestares, seguimos aquí, despiadados e inconscientes, pese al recuerdo de lo que sucedió en el templo, olvidamos como renació la vida en nuestros ancestros indígenas, ellos se levantaron, florecieron entre escombros pues su fe nunca pereció, de su fe nadie pudo desprenderlos.

Entonces investigar la vida es inmediatamente investigarnos a nosotros mismos, como se ha venido repitiendo hasta ahora, en nosotros hombres y mujeres está la vida, conectados o desconectados ella está constantemente en nosotros, pues somos la prueba inquebrantable de que existe un origen, y éste es constantemente interconectado, no hay porqué ver la tierra, las plantas o los elementales como algo ajeno a nosotros y a nuestra esencia, el abuelo lo ha dicho, cada uno de nosotros somos hombre y mujer, madre y padre, abuelo y aprendiz. Por tanto, cada cosa que encontremos en nosotros mismos tras el ritual, será el reflejo de lo que hemos encontrado acerca de la vida. Así mismo maravillarnos de ella es maravillarse de la esencia más pura que aguarda en nuestro interior.

Comunidad

Agua, tierra, aire, sol, luna, gente. Comunidad de vida, comunidad de encuentro. La cultura Muhysqa es una común unidad, somos todos siendo uno, reconocemos nuestros dolores, alegrías, recuerdos y vivencias en el ritual, en la entrega, en compañía de los sabedores físicos y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 754 espirituales, somos una comunidad que no se define, se siente porque vibra dentro de cada uno de nosotros como un sentimiento indescriptible de unión y vida. La comunidad como la fuerza que une y conecta con la Tierra.

Trabajamos las direcciones, los vientos, la lluvia. Hay que ordenar los animales y las

plantas para trabajar en el lugar del padre espiritual de cada cosa. Lo masculino y lo

femenino traerlo y ponerlo en su sitio, lo va trayendo, lo va trabajando, lo va puliendo.

Cuando está ordenado, fácilmente se entiende nuestro ordenamiento territorial. Así, en el

territorio material en algunas partes no podemos socolar, en lo plano vamos a socolar un

pedacito no más, vamos a sembrar y vamos a proteger. De pronto en algún lugar nació

maleza, si tuvo que tumbarla, eso también hay que ordenar. Podemos hablar bonito de

hacer conservación pero conservando y ordenando materialmente y en Aluna cada

pedacito que nos corresponde. LEY SE” (Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 45).

En el acto desinteresado de entrega, escucha y concentración durante el ritual “La apelación al amor está destinada a reducir la concentración de la persona y su ego y a restablecer la conciencia, al menos momentáneamente, de su relación con los demás y con su comunidad.”

(Lowen, 1994). Es una mirada que proviene desde el interior y va hacia los otros, pero no con el interés de buscar en otro lo que desde allí no encuentro, sino como una mirada comprensiva del proceso que no sólo yo, sino como comunidad se ha venido caminando, es una conciencia plena en el que soy parte de mí y a la vez de algo más grande que yo, la comunidad.

Para Boff es expresado como una cuestión de cuidado, “los humanos ponen y han de poner cuidado en todo: cuidado por la vida, por el cuerpo, por el espíritu, por la naturaleza, por la salud, por la persona amada, por el que sufre y por la casa. Sin cuidado, la vida perece” (2001, pág. 74). Desde aquí hemos podido darnos cuenta que el sentir individual se convierte en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 755 colectivo sin percibirlo de manera consciente; bajo el cuidado inherente por el otro, la experiencia de mismidad se vuelve tan otredad como si incluso en realidad lo fuera, subir la montaña, sentir el lugar y ver el refugio incondicional en el otro, forma y une la comunidad.

La fe del espíritu construye sus cimientos en la base de la comunidad, en ese punto en el que todos se vuelven uno, en el ritual, en la danza, en el confieso y en el pagamento, allí se construye comunidad, allí está el abuelo, la medicina, la luna, el sol, el fuego, el frío, nosotros, allí en las malocas y en los lugares sagrados somos comunidad. Para Huxley está planteada como interrupción a esa excitación emotiva que el ser individuado por sí solo no logra vislumbrar, para

él “La excitación emotiva, cualquiera que sea su causa o su carácter, es siempre excitación de ese yo individuado para el cual ha de morir quien aspire a vivir para la realidad divina” (1947, pág.

253), por tanto, la realidad divina así como él mismo la plantea, es para nosotros concedida tras la entrega de sí al otro en los rituales, que de la mano de los compañeros fluyen y se construyen con corazón, entrega y sufrimiento.

Para Boff “Fundamentalmente es estar con y no sobre las cosas, es un convivir dentro de una totalidad aún no diferenciada” (Boff, 2001, pág. 72). Pues en la totalidad estamos de manera individual, pero también como parte de una comunidad, que a su vez, es parte de nosotros, es no negar la parte de nosotros que pertenece a algo más grande, pues nuestro ser individuado estará para desligarse de su ego en el momento en el que decida ser parte de algo más allá de sus limitaciones, en el momento en el que con su verdad decida construir comunidad en compañía de otros, esa es la totalidad, la comunidad, nosotros y la Madre, pues todo engloba una misma fuerza, una misma energía de amor y poder espiritual.

“El individuo, la persona, el yo, no existe ni se concibe como uno autosuficiente, sino existe y se concibe como parte de una integralidad existencial; se concibe en el marco de la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 756 definición filosófica “nosotros”: nosotros la naturaleza, nosotros el ser humano, la sociedad, el hombre, la mujer, los niños, los ancianos; nosotros la tierra, nosotros el cosmos” (Menchu, EL

AGUA Y LA HUMANIDAD, UNA EXISTENCIA RECÍPROCA., 2008). Con el “desarrollo” tecnológico actual del mundo las personas interactúan menos unas con otras, se está perdiendo el sentido de comunidad, pues hoy el contacto con el otro se limita a lo que la tecnología permite, esto hace que la persona piense en que no necesita más que la tecnología para llevar una vida plena; dejando de lado nuestra identidad como hijos de Madre tierra y como parte hermanada de una cultura ancestral indígena, una cultura capaz de reconocerse en su proceso como individuo algo totalizado y de esta forma pensar en el fortalecimiento de la comunidad como parte fundamental de sí.

También habría que reconocerse en la dinámica cosmogónica de la ancestralidad que:

“además la enfermedad es fundamental para educar las comunidades en el cumplimiento del orden personal, colectivo y territorial” (Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 48). No se trata pues de un castigo, es más el constante acercamiento con la verdad y la cura, es lo que aún hace que la comunidad en lo indígena se mantenga como el hilo que une a cada uno de nosotros al corazón del mundo, pese a que la insistencia siga en defender la medicina moderna, la comprensión profunda de estos tres niveles de la enfermedad permitiría acrecentar la conexión con lo común.

El trabajo en comunidad es un trabajo que vincula tanto la vida como el amor, en la medida en la que el individuo no sólo pone atención en sí mismo sino que su amor ha llegado a tan nivel como para dirigir su mirada a la comunidad ha alcanzado un nivel de lo propiamente humano. “Al alcanzar el nivel humano, el amor se manifiesta como un proyecto de libertad como una gran fuerza de cohesión, de simpatía y de solidaridad.” (Boff, 2002, pág. 89), entonces, la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 757 solidaridad por el otro es expresada en el acompañamiento continuo que en silencio cada uno de nosotros ha realizado durante los rituales.

La comunidad no se trata tampoco de ahondar en la particularidad, tomando como punto de partida la diferencia, por el contrario es bajo los parámetros de la unidad entre unos y otros que hombres y mujeres hacen parte de lo que son y crecen acorde al complemento que ofrecen a la comunidad “La mujer y el hombre somos hijas e hijos de la Madre Tierra, y esa identidad se comprende al asumirnos parte de la naturaleza e interdependientes con el movimiento cósmico.

El problema ontológico planteado exige la profunda certeza del ejercicio identitario, consciente e inconsciente de esa construcción plural, puesto que la relación interpersonal y la relación del ser entre sus distintas expresiones define el contenido del nosotros”. (Menchu, 2008)

“Si nos organizamos y cumplimos, entonces los seres en aluna también se van ordenando; la tierra también se va organizando, toda la naturaleza se va organizando, porque nosotros somos la naturaleza y la naturaleza son personas; entonces cuando nosotros nos organizamos, en aluna se organizan ellos también; cuando nosotros estamos sin organizar, sin orden, entonces lo espiritual y la naturaleza también están sin orden LEY SE” (Arbeláez

Albornoz, 2005, pág. 45).

Identidad

Otredad

“¿Qué entendemos por identidad nacional o cultural? Su etimología viene de identitas y

ésta de idem, que significa lo mismo, esto es, igual a sí mismo o semejante a sí mismo. Es un término muy expresivo; identidad es, ante todo, tu ser mismo, lo que te hace ser lo que eres

Aguilar, (2013, pág 50)”. Desde la psicología ancestral indígena se plantea la identidad como una construcción entre el fenómeno de la otredad y la mismidad, se permite dicha construcción El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 758 desde una mirada hacia el sí mismo y hacia el otro, quien a su vez juega un papel fundamental en el concepto que desarrolla el ser humano de sí y del entorno que lo rodea.

Ver el mundo de hoy es en cierta medida un acto de valentía, un acto alarmante pero también un acto amoroso; ver el mundo de hoy es abrir los ojos del corazón y saber que existe el otro y que ese otro, cuenta las historias adoloridas de su pasado y su presente, el hombre ha estado inmerso en mil y un niveles y de cada uno ha tomado algo para convertirlo en parte de sí, de su familia y de su historia, eso ha construido la diversidad de la que hoy somos hijos. Por esto, mirar alrededor es el acto mínimo que puede hacer alguien por tratar de entender lo incomprensible del universo, pues mirar a nuestro alrededor es ver la cara del indio adolorido, del negro trabajador, del campesino español y del mestizo confundido.

Y es que el contexto donde se desarrolla el crecimiento del sí mismo está amorosamente sumergido en elementos diversos, no todos nosotros hemos llegado a encontrarnos yendo por los mismos caminos, en este paso a paso de estar caminando lo indígena se devela que las mismas personas hacen la comunidad y de ella surge un espacio fraterno, hermosamente simple y familiar, allí se reconoce al otro percibiendo su esencia más pura, escuchando su sentir y entendiendo su llegada como el complemento de lo que construimos en nosotros mismos.

Esto a groso modo es lo concluible desarrollado. En definitiva, hablar de identidad, es saber de un proceso paulatino que se construye poco a poco a través de la historia y mediante la experiencia vívida de los diferentes sucesos que marcan un pasado ensangrentado que aún le duele a la cultura y que además nos mantiene alejados de un conocimiento hermoso, el cual deja ver la parte de esa Tierra adolorida que está dentro de nosotros y a su vez esa parte de nosotros que está en ella. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 759

La identidad desde lo indígena no se construye, se recuerda, reencuentra y reconstruye, esto hace referencia a recuperar todo aquello que de forma particular nos pertenece y hace parte inseparable de nosotros como habitantes de este territorio; seres con raíz indígena, negra, mestiza y española, seres capaces de ver al otro y reconocer la importancia de su presencia; Sin ello, la identidad no será más que una mala mezcla, un revuelto de sensaciones y emociones que con el tiempo, se convertirán en un verdadero malestar social.

Desde el inicio de la conquista al ancestro español le ha costado ver al otro, saber que en

él hay alma, espíritu y que dentro de la lógica de la absurda homogeneidad, el otro también era y es un ser igual a él, sin embargo la conveniencia del orden social establece cómo mirar al otro, se cambian de lugar como fichas de juego en conveniencia siempre del bienestar propio, por ejemplo “los últimos negros habían sido promovidos al rango de “monumento histórico” de la nación porque ya no amenazaban la homogeneidad blanca del orden social” (Quijada, Bernand,

& Schneider, 2000, pág. 140).

Durante la conquista, en Argentina hubo un proceso de despojo en el que la cultura aborigen, que parecía un problema, quedó rezagada en la historia tras un gesto heroico militar, quizá hubo la misma necesidad de erradicar el conocimiento autóctono que hubo en Colombia, basta mirar la consecuencia de la educación y de la ciencia en la conquista y la colonia y tras ese irreparable hecho sólo queda pareciera el recuerdo.

“… el convencimiento en la existencia de un “exterminio” físico que provocó la

extinción de la población aborigen parece formar parte del espeso velo que oculta al

elemento indígena en la configuración nacional argentina. Bajo esas premisas

ideológicas, la Conquista del Desierto habría hecho desaparecer el “problema del indio” -

y de paso al propio indio – dejando expedito el camino para que una población de pura El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 760

“raza blanca” y cultura europea ocupase las tierras “vacías” en nombre de la

civilización.” (Quijada, Bernand, & Schneider, 2000, pág. 92)

La dimensión del agravio que llega hasta el mestizo se ve en el dolor del negro y del indio, eso para iniciar, aquí es de suma importancia resaltarlo y no para acometer con rabia hacia el suceso, más bien es una forma de entrever la situación de dolor del mestizo y de nosotros como mestizos porque en este caso no es otro, somos nosotros, quienes llevamos en la historia el dolor de muchos y no como seres individuales sino como parte ineludible de esa colectividad racial, donde incluso la raza blanca también corre por nuestras venas.

Generalmente en todo hecho de barbarie quedan diversas versiones, sería una lección bonita en esa lógica comprensiva del otro, ver como el ancestro español escucha la historia extraoficial del indio que lejos de odiarlo lo que hace es concentrar su trabajo espiritual en pagar y reordenar por lo que su hermano menor cometió y sigue cometiendo, por otro lado los esfuerzos de ese hermano menor se concentran en obtener un alivio tras la creación de una historia oficial, esa que: “nos invita a visitar un museo de momias. Así no hay peligro: se puede estudiar a los indios que murieron hace siglos y a la vez se puede despreciar o ignorar a los indios que viven ahora” (Galeano, 2010, pág. 13).

Con el tiempo y tras haber escuchado y visto sólo una parte de lo otro, hemos contribuido a la inminente y burlesca construcción del recuento histórico oficial, ojalá la mirada noble, sencilla, honesta y humilde que tienen los Abuelos hiciesen parte de esa versión para así comprender con el corazón lo que le sucedió al otro y de este modo no caer de forma casi irremediable al daño posterior que ha causado en el recuerdo colectivo que sigue siendo la base de nuestra identidad. “Es la élite de la ciudad la que inaugura una memoria historiográfica oficial, que pretende convertirse en una memoria colectiva” (Halbwachs, 2004). Actualmente se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 761 engrandecen las ciudades, los pastos se marchitan por el químico del pavimento, la ciudad es quien abraza las montañas y no siendo esto suficiente en compañía de los rascacielos vamos nosotros fomentando el recuerdo hiriente que construye una identidad basada en el dolor y la indignación o peor, en el olvido.

Resulta entristecedor darse cuenta como desde niños hemos visto al otro de esa forma,

“desde que nacemos, nos entrenan para no ver más que pedacitos. La cultura dominante, cultura del desvínculo, rompe la historia pasada como rompe la realidad; y prohíbe armar el rompecabezas (Galeano, 2010, pág. 5). Esa mirada dividida va ocasionando estragos tanto en lo físico como en lo espiritual, desvirtúa de conocimiento al sabio, aumenta la candela del que aún lleva consigo la mirada de desprecio y negación; esto no es más que la manifestación intangible de haber dejado algo sin arreglar, de sentir que pese a los esfuerzos el rompecabezas sigue incompleto.

De este modo y tras la vaga comprensión del dolor en el otro hemos de llegar al mestizaje, a esa mezcolanza de razas de la cual hacemos parte pero que graciosamente no tenemos ni idea a que hace referencia, es una zona de falso confort que genera fuertes dificultades para el mestizo, su estado de plenitud no es occidente pero su raíz tampoco es indígena, su cuerpo no es negro pero su piel no es aria, vaya problema, ¿Quién es entonces el mestizo? Octavio Paz tras el análisis que realiza en México dice al respecto que: “Hay un malestar que surge en los pachucos, porque se tornan Incapaces de asimilar una civilización que, por lo demás, los rechaza, los pachucos no han encontrado más respuesta a la hostilidad ambiente que esta exasperada afirmación de su personalidad” (1998. Pg.3). Para nosotros también es posible que haya dicho malestar, pues como se dijo antes, no hay una identificación amorosa con nuestra raíz, hay desprecio, vergüenza o una exacerbación de respeto que disfraza el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 762 miedo de encontrarnos con la parte indígena que aguarda en nuestro interior, por tal motivo no será reconocida como propia, se disfrazará tras la huida continua del indígena, aparentemente muerto, sinónimo de vergüenza, de pobreza, de dolor, pobrecito el indígena, pobres de nosotros que no somos ellos .

También hay que tener en cuenta que con el daño físico y la combinación de rasgos, vino la mixtura de creencias y junto con ello, la pérdida parcial del espíritu que prevalecía en este territorio, ahora coexisten algunas costumbres, los rasgos siguen siendo evidentes e incluso llegan a causar un gran impacto en las calles de la capital, pero y el espíritu ¿Dónde quedó el espíritu de esta tierra? en el contexto propiamente colombiano predomina el orden católico, en este sentido, la espiritualidad del ser humano toma un significado particular y hay que apreciar cómo se toma la espiritualidad desde la mirada indígena, pues quien se acerca a ambas logra vislumbrar que por más que haya un fin aparentemente común, no son precisamente lo mismo

La principal entidad que comunicaba lo indígena con lo español eran las iglesias doctrineras, que difícil tarea habrá sido, proteger a quien se le ha usurpado la esencia de vivir. La religión católica lleva en su historia la sangre que tomó de un pueblo inocente, la normatividad restringe y margina a aquél que estando en ella se incomoda y la crítica, el pecado es el suministro que alimenta el espíritu, lo castiga hasta hacerlo sentir culpable de lo que ni siquiera el ser humano ha logrado entender del todo, nace y es culpable, ora y es culpable, en realidad ¿a eso puede llamársele alimento?, para Octavio Paz “es posible que lo que llamamos pecado no sea sino la expresión mítica de la conciencia de nosotros mismos, de nuestra soledad” (1998. Pg.8).

Entonces el paradigma sería otro, la conciencia de haberse encontrado consigo mismo sería la libertad de auto descubrir lo profundo del ser, de encontrarse con el valor de comprender lo que eso significa, pues sin haber estado dentro es casi imposible construir raíz afuera, no tendría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 763 sentido si el interior de nosotros mismos sigue escuálido y perdido, porque la desconexión de la

Tierra, los rituales, las costumbres y el arraigo a lo propio trae evidentes repercusiones en la identidad.

El mestizaje se convirtió en un problema social que alejaba la raza blanca de su concepto de hombre perfecto, “El panorama étnico pronto resultó complejo: de español e india nació el mestizo, la mezcla más significativa; de español y negra, el mulato; de indio y africano, el zambo. De los cruces entre estas variaciones surgieron otras mezclas que los eruditos del siglo

XVIII trataron de clasificar hasta la exageración” (Jiménez, 2006, pág. 51). La diferencia es el miedo latente en el otro, ese otro que teme verse a los ojos y desconocer su propia esencia, aunque también es un miedo nuestro, visto desde la inseguridad al decir soy indígena, Mhuysqa y mestizo.

Cuesta trabajo apropiarse del mestizaje, porque duele creer que no se es hijo de aquí, ni de ninguna parte, porque honrar nuestra raíz en cierta medida es voltear la vista atrás, mirar de frente lo indígena, mirar el oprobio, sentir el despojo de la tierra y el olvido del ritual; sentir las cadenas, respirar el olor a sangre y levantar la cabeza tras reconocer el dolor de la muerte.

“Porque el mestizo, siempre…está lejos, lejos del mundo, y de los demás. Lejos, también de sí mismo” (Paz, 1998. Pg.10). Pero pese a ello, no hay que caer en la confusión, no hay porqué quedarse allí, lejos, construir la identidad es partir de esa lejanía para volver a la raíz, a casa, es emprender el viaje y entregarse a la difícil tarea de perdonar, de reconocer que ese otro que lastima y hiere también soy yo.

El lenguaje ha jugado un papel definitorio para lo que significa el otro y, en esa lógica lo que implica en nuestra identidad mestiza, “la distinción étnica entre blancos e indios se mantuvo con diferente intensidad hasta 1844 siguiendo los términos utilizados: “indio tributario”, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 764

“reservado” y “natural” hasta 1770; “indio forastero” hasta 1782; “blanco” hasta 1824; “mestizo y esclavo” hasta 1826; “español” hasta 1828; “indio” hasta 1837; “vecino” hasta 1842”;

“indígena” hasta 1843 y “natural” hasta 1844. De 1845 en adelante entran en uso los eufemismos

“de esta feligresía”, “de este vecindario” y “vecino de esta parroquia” (Instituto Colombiano de

Cultura Hispánica, 2000). La evolución del lenguaje es una metáfora de ignominia, el paso del tiempo ha dejado implicaciones deterministas que encasillan al otro, a ese otro olvidado que se lleva la parte de cada uno de nosotros que también está siendo olvidada.

En este sentido se presenta entonces una identidad del lenguaje como obligatoriedad de adaptar la lengua del otro como el idioma propio y en consecuencia la desaparición de la lengua

Mhuysqa y la burla española del mismo mediante la vulgarización a la terminología más coloquial y despreciada que nos hizo olvidar por ejemplo que “los Muiscas se consideraban a sí mismos “gente”, “hombre” o “persona”; tal parece haber sido el significado del término apelativo. Los demás pueblos por oposición eran: extranjeros, forasteros o advenedizos y los nombraban: “gueba”, “sunguia y “sue”. Los cronistas españoles escribieron el término Muisca con diferente ortografía: muyzcas, moscas, muscas, moxcas, muexcas, muiskas” (Instituto

Colombiano de Cultura Hispánica, 2000).

La mirada del otro hacia el indio es pobre desde entonces y no ha tenido un claro concepto frente a lo que implica y es ser indígena, nativo o aborigen, “El indio era débil de carácter, prisionero de su ignorancia y de las malas artes del demonio. Mientras durasen esas circunstancias, los indígenas debían recibir un trato diferente, hasta el punto de ser reducidos, o congregados, en pueblos de nueva planta donde no podían residir los españoles” (Jiménez, 2006, pág. 49). La confusión del conocimiento es atrevida, acaso el carácter del indio es definido por la cantidad de muertos y el irrespeto en comparación al ancestro español, la negación de esas mal El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 765 llamadas “malas artes” no es más que la cura del enfermo que no reconoce su enfermedad por estar esperando la solución que le provee el otro, es lamentable que el trato diferente sea reducido a la exclusión, desde entonces viene el concepto respetuoso de resguardo, una manipulación implícita de la congregación obligatoria a la que ha sido reducida la sabiduría del indígena.

“Desde los primeros tiempos fue principio general en la América española la segregación del indio. Se pretendía proteger a los naturales de los abusos de los españoles, y muy pronto de los mestizos. Bajo la consideración de que los indios eran débiles, como niños, se desarrolló una actitud paternalista materializada en la política de “reducción” o “congregación en pueblos exclusivamente de indios” (Jiménez, 2006, pág. 360). La protección que el indio requería no era por su falta de conocimiento, su ignorancia o su vulnerabilidad, todo lo contrario, la debilidad era del ancestro español, quien en su mirada reduccionista no veía en el indio la sabiduría que a él le hacía tanta falta; en los pueblos exclusivamente indios en contraposición, no está sólo el indio, incluso allí hay espacio para considerar al otro, ver sus equivocaciones y con respeto reordenar amorosamente el camino del hermano menor, del verdadero niño dentro de la metáfora de debilidad planteada.

Se debe reconocer que cada uno de los elementos tan diversos que han influenciado nuestra identidad, han sido parte fundamental y única en nuestro crecimiento a nivel individual y como comunidad, las costumbres pluriculturales y diversas que maneja y tiene la fortuna de poseer este territorio, han facilitado el crecimiento en cuanto a personas y costumbres; sin embargo, es esta diversidad la que también ha ocasionado que el ser humano se pierda en el arduo trabajo de hallar sentido y significado a su origen, su raíz, su historia y por consiguiente, su vida de ahí en adelante. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 766

Debido a todo ese malestar que nos implica el auto reconocimiento de nosotros y del otro, se empieza a ver lo propio desde una mirada que pareciera ajena, pues la enajenación a la que ha sido sometido este pueblo, sólo es evidente en la medida en la que se está en las costumbres propias, en los brazos de la Madre y aun así termina uno sintiéndose extraño, el desarraigo impide ver el camino en su infinita inmensidad. Aquieta el cuerpo, pierde la fe y demerita el ritual, (Comunicación personal, 2015). Por tanto surge concluyente y radical la inminente necesidad de reconstruir la identidad desde la raíz, la siembra, los rituales y el conocimiento de los abuelos, surge la necesidad de la vida, de la tierra, del reconocimiento de lo otro encubierto como lo propio.

La mayoría de nuestras comunidades indígenas en el país fueron acabadas por la avanzada del dominio eurocentrico, entonces la identidad del Mhuysqa, de la persona residente del centro del país, quedó reducida a una modernidad promisoria de realidades materiales, el mestizo en este caso empieza a verse perdido en dos polos del existir, del ser, ¿Quién es, si no es uno? ¿Quién es, si tampoco puede ser ambos? ¿Quién es, si no es por sí solo? Nos hemos mantenido en esa constante lucha. En México Octavio Paz dice que “El pachuco ha perdido toda su herencia: lengua, religión, costumbres, creencias. Sólo le queda un cuerpo y un alma a la intemperie, inerme ante todas las miradas. Su disfraz lo protege y, al mismo tiempo, lo destaca y aísla: lo oculta y lo exhibe” (1998, pág. 3). Entonces el problema empieza a surgir cuando el mestizo se da cuenta que tiene un poco ambos, pero que no es ninguno de los dos o tres en totalidad, lo que le genera ese constante choque del que ningún mestizo es ajeno.

Asumir los usos y costumbres de un pueblo, puede llegar a confundir el origen, la

Cuestión es ver los grados en el que cada una de esas partes influye en la otra, generando que una sola predomine e impidiendo la integración y de forma simultánea el perdón. “El hibridismo del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 767 lenguaje y de su porte son indudable reflejo de una oscilación psíquica entre dos mundos irreductibles y que vanamente quiere conciliar y superar” (Paz, 1998. Pág. 4). La identidad de este pueblo está peleada, porque hay dos identidades en el psiquismo, y resulta confuso hacerle caso a ambas, cuando las dos son aparentemente tan diferentes y contradictorias. “Los indios, víctimas del más gigantesco despojo de la historia universal, siguen sufriendo la usurpación de los últimos restos de sus tierras, y siguen condenados a la negación de su identidad diferente”

(Galeano, 2010, pág. 17).

Para ello es necesario redirigirse críticamente a la unidad del hombre tal cual la iluminada posición de centro, “La ilustración concebía desde luego al hombre en su unidad con la naturaleza con la cual compartía la general uniformidad de composición que habían descubierto las ciencias naturales (…) Según esto, la naturaleza humana está tan regularmente organizada, es tan invariable y tan maravillosamente simple (querrán decir homegenizada?) como el universo de Newton. Quizás algunas de sus leyes sean diferentes, pero hay leyes; quizás algo de su carácter inmutable quede oscurecido por los aderezos de modas locales, pero la naturaleza humana es inmutable” (Geertz, 2003). La importancia del pensamiento humanista de la ilustración destaca casi que por sí sola, la condición de dominio sobre el hombre en cuanto a pensamiento, palabra y acción, para nosotros en contemporaneidad casi como el manifiesto de la enfermedad y la falta de reconocimiento propio como de la naturaleza de la cual hace parte. La ciencia ha reconocido que la naturaleza tanto del cuerpo como del territorio es invariable, pretensión delirante de lo controlable, por tanto las leyes que rigen lo indígena serían fundamento que guía y permite mirar lo otro variable y diferente con nobleza y amoroso respeto.

“Porque el pasado está vivo, aunque haya sido enterrado por error o infamia, y porque el divorcio del pasado y el presente es tan jodido como el divorcio del alma y el cuerpo, la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 768 conciencia y el acto, la razón y el corazón” (Galeano, 2010, pág. 6). La división es solo un síntoma del olvido, dejar de lado la historia es tratar de extraer los órganos vitales del cuerpo y aun así pretender que la vida siga su curso, no volver la vista hacia el otro es el mismo acto de invariabilidad, es separarse de esa unidad pluriversa que se entreteje con el hilo invisible del amor colectivo, ese que permite mirar al otro como una parte del sí mismo que contribuye al reconocimiento propio.

Asumir el oprobio no es tarea sencilla, es verse inmerso en una diversidad cultural vagamente compresible tras el desarrollo, “… la evolución llevó a la adquisición de la cultura, así como reconocemos que la cultura ha actuado sobre los mecanismos de la evolución transformando su dirección, sus dinámicas y su sentidos” (Ardila, 2005, pág. 63) Es por esta razón que la comprensión del otro es aún más compleja y evolutiva, la diversidad cultural de la que formamos parte causa un impacto en el trato que tenemos entre unos y otros, ¿y por qué tendría que ser diferente? El miedo inminente de estar en y con el otro hace que lo propio se desvanezca en total y el etiquetaje diferencial pase a un segundo plano, pues bajo una mirada contemplativa la interculturalidad pierde sentido en cuanto la identidad se desliga de los exclusivos parámetros de identificarse con.

En la candela del pensamiento, en el agitado palpitar y en la indignación de esos seres que aún nos duelen está el apego a ese pasado doloroso, “Lo que se olvida y se recuerda no son los hechos mismos, tal como se han desarrollado, sino la impresión, el sello que han dejado en la memoria” (Augé, 1998, pág. 22). Sin embargo el Abuelo Fernando lo ha dicho el pasado está atrás y son ustedes los que lo traen hasta aquí, pese a ello, la memoria colectiva es uno de los factores que impiden dejar ese pasado atrás y subsanar el hecho, desde el dolor es aún más complejo, el acercamiento es con las plantas de la dulzura pues la mirada hacia el otro es El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 769 limitada bajo los parámetros rígidos que han olvidado la esencia de lo que fue. Por ejemplo, “En

Cartagena la historia y la memoria se influencian y se refuerzan; por mucho tiempo, la historia estuvo al mando de la memoria colectiva” (Wachtel, 1999, pág. 77)

Hay una mirada por encima de nosotros, una mirada de nosotros como seres extraños, una mirada que establece lo justo, lo correcto y lo absurdo de no estar de acuerdo pese al concepto general, “El concepto de consensus gentiwn (consenso de humanidad) – la noción de que hay cosas sobre las cuales todos los hombres convendrán en que son correctas, reales, justas o atractivas y que esas cosas son por lo tanto, en efecto, correctas, reales justas o atractivas – estaba ya en la Ilustración y probablemente estuviera presente en una forma u otra en todas las edades y en todos los climas” (Geertz, 2003). Quien ha dicho que lo correcto dentro de toda esta confusión no es el camino de lo indígena, que esa mirada hacia el otro ancestral es lo adecuado, lo bonito y lo vital, habrá que plantear entonces un consenso de identidad diferente.

Galeano hace un análisis de estos dos fenómenos de la memoria, desde allí es posible ver la concordancia que mantiene el hecho histórico que nos identifica, desde una comprensión integral que vincula el otro como parte de una comunidad, “Una memoria, la memoria individual, vulnerable al tiempo y a la pasión, condenada, como nosotros, a morir; y otra memoria; la memoria colectiva, destinada, como nosotros, a sobrevivir” (2010, pág. 13), aquí el asunto es entonces sobrevivir en el agravio y el olvido, ó, vivir en el descubrimiento de lo propio.

Colombia no es el único país en el que ha sucedido esta conveniente confusión de la identidad, al parecer en otros países el proyecto de identidad colectiva y homogenizada fue muy importante para la manera de mirar al otro, “… por ser una identidad a la que todos los habitantes de este proyecto de nación ideado por la élite en el poder, que en gran medida sirvió para convertir a México en un país lleno de paradojas, ya que postularon una sociedad de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 770 individuos, cuando estaba constituida por actores colectivos” (Chávez, 2003, pág. 22). Entonces la formulación de lo univoco central hizo que la gran América de ancestralidad viviera el panorama identitario de silenciamiento de los colectivos, negros, indios y mulatos. Por ello todos fuimos despojados de la esencia y con ella de la historia y la memoria como raíz.

La homogeneidad es un factor determinante en el encubrimiento del otro, la investigación científica cuantitativa agota sus esfuerzos en esta labor, “En el plano de la investigación concreta y del análisis específico, esta gran estrategia se dedicó primero a buscar en la cultura principios universales y uniformidades empíricas que, frente a la diversidad de las costumbres en todo el mundo y en diferentes épocas, pudieran encontrarse en todas partes y aproximadamente en la misma forma, y segundo, hizo el esfuerzo de relacionar tales principios universales, una vez encontrados, con las constantes establecidas de la biología humana, de la psicología y de la organización social” (Geertz, 2003). La historia de nuestros abuelos y la memoria de algunos de nuestros sitios sagrados evidencian los actos de desconocimiento y barbarie que han hecho en sí un intento por esa homogeneidad, por la huida sin regreso al reconocimiento del otro. Año tras año y con tantas herramientas que tiene la evolución y el sentido de lo ancestral, cada día estamos más cerca, primero para nosotros mismos de la inminente conciencia sobre la unidad y la diversidad.

De este modo, la identidad homogeneizadora irrumpe y obstaculiza el crecimiento de las costumbres, el conocimiento y los rituales propios de los otros colectivos que coexisten bajo el concepto de identidad generalizadora, en tal sentido la intención siempre ha sido como lo menciona Chávez, “…conformar una sola nación con una identidad igual para todos sus habitantes, que para imponerse debía eliminar todas aquellas identidades que obstaculizaran su El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 771 desarrollo” (2003, pág. 21), hay un desarrollo macro que es prioridad, por tanto las demás miradas son reducidas al falso reconocimiento de la tan bien llamada “historia oficial”.

No se está diciendo que coexista una doble identidad, doble cara o una hipocresía, porque la raíz del malestar surge en que ninguna de las dos está apropiándose de la existencia en totalidad y es allí cuando se toman salidas violentas y hostiles hacia el exterior, es allí cuando todo lo que venga de afuera se recibe sin importar lo que sea, pero el interior sigue estando revuelto, vacío, en malestar y sobre cargado de cosas simples y superficiales, cosas materiales, nos hemos alejado de la sincronía armónica que permanece intacta en la ley de origen de nuestros mal olvidados abuelos Mhuysqas, por ello se hace el intento de reconexión con la raíz, las costumbres, la tierra y el ritual. Al final el problema de la identidad es el asunto espiritual de los abuelos que se miran en reconocimiento, abuelos de aquí y de allá, pero sobre todo en la otredad manifiesta de saber que más allá lo que nos integra está en el siguiente nivel, aquí el de algún gran espíritu de reconciliación, una moral de lo propio y en lo mestizo varias morales todas propias que se armonizan como eticidad del ser humano en universal. La idea integrada y viable sobre la posibilidad de un Taita Jesus, o de una ciencia chamanica.

Reconocer el territorio como la cuna de las costumbres indígenas es el proceso de reconexión a la Tierra, pues la desconexión con lo sagrado ancestral indígena se ha vuelto ofensiva, limita la experiencia, reduce la búsqueda de significado y sentido, a un proceso que permanece fluctuante y dividido, se pasa por alto el impacto que tiene la identidad como el fenómeno individual y social que es en realidad. Desde la colonización, el indígena y el criollo tienen una huella mnémica de vergüenza, la espiritualidad tomada desde lo indígena, desde esa riqueza, desde la conexión con la madre tierra, ha pasado a ser burla, además de ser vista como superstición, brujería, hipismo y en términos más modernos aparente locura. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 772

Por esto es que resulta complejo asumirse indígena, sabiendo que ha sido motivo de vergüenza desde que el español piso estas tierras, hay que tener en cuenta que el ser humano es sumamente moldeable en lo social y que necesita de constante aprobación de los demás, entonces tiene que haber una fuerza enorme del corazón, del sentir y del ser para lograr asumir con propiedad este mestizaje que tanto nos avergüenza, intentamos disolvernos en una modernidad, ser híbridos y globales en el nomadismo planetario, pero no podemos, porque la raíz jala más de lo que se cree, no debería estar esa pelea interna constante con lo que somos, con la raíz, ni tampoco con lo que no somos o hemos dejado de ser.

Para dar continuidad a ello, se comienza a plantear la mirada del otro desde lo indígena, donde el territorio, la comunidad, los elementales y cada uno de nosotros hacemos parte de la construcción de la identidad, “Preservar la naturaleza es la condición esencial para que se cumplan los derechos del hombre a favor de aquéllos donde la vida humana se desliza junto a una naturaleza que se derrumba. El derecho a la vida de una gran parte de la humanidad se preserva con el derecho natural de la tierra: en ese punto se bisagra la vida del hombre y la vida de la tierra” (Garmendia, 2004, pág. 224). Los rituales, las costumbres y el verdadero arraigo a lo propio permiten una mayor conexión con la tierra, pues el camino de lo indígena se postula como el camino que vislumbra en un grado muy alto, si no es que en uno total, lo que en un momento fueron, hicieron y significaron nuestros ancestros, a la vez que da cuenta del proceso que lleva cada uno en la actualidad ¿quién es? ¿Qué se es? Y ¿cómo está? Y de este modo, no caer en el estancamiento vacío de no saber quién soy. Para ello se requiere establecer relaciones entre tiempo, significado y silencio, puesto que actualmente el automatismo de querer tener, ha desligado el espíritu de querer entender para ser y no ser para luego si entender. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 773

La fuerza de una comunidad no sólo permite el desarrollo y el avance, por el contrario va a dar cuenta del aprendizaje reflejado de la identidad propia, pues en el grupo de compañeros está el esfuerzo, el ego, el amor, la fuerza y el compromiso con el propósito de reconstrucción; cuando estoy más en la capacidad de ver al otro también adquiero la capacidad de verme a mí mismo, pues en el proceso en el que intento sentir y ver más allá al otro estoy reconociendo en él la parte de mí que también sufre y disfruta la experiencia, en ese orden se camina al lado del compañero, junto con él y su sombra, encontrando refugio reciproco entre él como individuo y a su vez como parte fundamental de la comunidad. En este sentido, nosotros somos la esencia fundamental que guarda y forma la identidad de esta memoria compartida, sin embargo cuando se sabe que lo que se camina es la tierra madre además nosotros somos también la identidad del territorio.

La expresión de sentir en el camino, es el claro reflejo de la identidad de este pueblo, la cual como se ha venido diciendo, sigue peleada por ignorancia de su posibilidad cósmica, hay las identidades en el psiquismo y resulta confuso escucharles en su aparente diferencia y contradicción. Para nosotros como partícipes de la psicología ancestral indígena la identidad se reconstruye en la medida en la que se conecta uno con el ritual y el lugar sagrado, haciendo propia la esencia y la energía del mismo, pese a que éste cuente algunas veces la nostálgica historia que dejó impregnado de sangre y cenizas el acto bárbaro de la colonización. Estando en ellos no sólo se hace un intento por reconstruir el sentido del monumento histórico sino que se intenta fortalecer el faro de pensamiento aborigen que fue apagado años atrás. En este sentido y habiendo valorado previamente el acto inescrupuloso y despiadado, lo que busca esta nueva identidad no es quedarnos en el oprobio hacia la colonización, sino más bien honrar aquél hecho mediante la entrega de sí en el ritual. Pues nuestra identidad es el resultado de lo que el lugar por El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 774 sí mismo cuenta y guarda como la historia que han escrito ancestros y abuelos. Es decir, nuestra real identidad es la tierra en hondura y ella en esa máxima de la sapiencia es integrativa no fraccionante, es la tierra una y toda ella madre de todos.

El presidente de la sociedad colombiana de filosofía dice que “El reconocimiento mutuo es la dimensión fundamentadora no simplemente de la identidad sino de la formación de la conciencia en la recíproca afirmación que se despliega en relaciones de amor, de respeto legal y moral y de pertenencia” (Gutierrez, 2005, pág. 8). La Relación en los diferentes niveles en los que se percibe al otro, permite el reconocimiento de una identidad que se construye desde la base. Manifiesta también la necesidad de reconocerse en el otro como la base de la construcción de la identidad propia. El reconocimiento en el otro resulta ser la ineludible asociación entre unos y otros.

El “otro” en lo indígena, está desligado de la división entre el cuerpo y la mente, el

Mhuysqa quiere ver en su interior como en su físico la misma unidad “En el pensamiento ancestral americano cuerpo y territorio constituyen una unidad indisoluble. El cuerpo humano es un territorio y el territorio tiene forma corporal” (Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 47). La base importante de la identidad en la cultura Mhuysqa reconoce que saber y entender al otro es parte fundamental de sí, otredad de humanidad, pero también botánica, espiritual, elemental, mineral, en fin de integralidad, por tal razón, la tierra es parte de ellos, no es otro ni otra, son ellos, los ríos son como la sangre que corre por sus venas, el aire es como su respiración, las montañas su cuerpo y la Tierra toda su vida.

Coincidimos en que “es posible que el proceso de urbanización y homogeneización cultural crecientes haya conseguido dividirnos, arrancarnos y desarraigarnos de la tierra”

(Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 47), la incomodidad de ver y reconocer al otro, es la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 775 imposibilidad de la tarea misma de haber volteado la vista hacia el interior; la crítica moderna ha caído en los desdenes de creer que ya nada es posible y, en cierto grado tienen razón, aunque las causas son fácilmente diferenciadas, no es una caída lo que allí sucede, es por el contrario, una elevación lo que mantiene nuestros pies lejos de la Madre Tierra, lejos del principio, las costumbres y el conocimiento autóctono que vitaliza el espíritu y fortalece la identidad de lo común.

El abuelo Fernando nos ha dicho que “el Mhuysqa es un guerrero, ser Mhuysqa es ser guerrero pero de espíritu, en un pasado anduvimos con flechas, pero ahora no es tiempo para ello, es tiempo de fortalecer el espíritu” (2015), eso nos dice mucho acerca de la identidad de lo que fuimos y ahora somos, asimismo lo han dicho las culturas de la Sierra nevada, “…nuestros pueblos inermes y amantes de la paz se han forjado para la resistencia. Llevamos cinco siglos resistiendo la brutalidad en contra nuestra. Nuestro destino es perdurar. Sabemos que nuestra fortaleza se fundamenta en los conocimientos que guardan nuestros mayores y que sólo sus decisiones pueden orientar acertadamente nuestro comportamiento personal y colectivo”

(Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 51).

Aquí está el fuego de la razón que se tempera en el argumento cierto y de fuerza pero solo como oprobio, “negaron toda la influencia de la cultura del indio de su tiempo por representarles el atraso del país, los tres siglos de dominación española y la forma de vida diferente a la europea” (Chávez, 2003, pág. 26). Sin embargo, odiar al otro hasta donde implica odiarme a mí mismo, acaso la sangre del abuelo español no es también la mía y tan mía como la india o la negra. La otredad es una nueva manera de mirar el agravio en la contundencia de reconocer mi propia negación de lo que soy y lo que tengo, el valor psíquico y reconciliado de ver a los ojos internos, del otro en mí y del yo como lo otro y saber que es mejor construir El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 776 nobleza, sencillez, humildad y honestidad, que una guerra que llena de candela el corazón me ata como víctima a la misma circunstancia de colonialidad.

Mismidad

La identidad dada desde el reconocimiento como hijos de la tierra y como tal, hermanos de cada ser viviente que habita en ella es el lazo telúrico que entiende lógicas inquebrantables del psiquismo colectivo visto desde mí; al ser parte de tan grande comunidad, cada persona debe comprender que “Somos parte de la Madre Tierra, le pertenecemos porque somos parte de ella y de los equilibrios que hacen posible la vida en su seno; la Madre Tierra nos da energías, vivimos de ella y convivimos con ella”. (Menchu, 2008). Es por medio de este reconocimiento que las personas pueden tener conciencia de sí mismos, como parte de un sistema vivo, de una comunidad y de sí mismos como la base de conocimiento de la identidad fundada afuera.

En la actual modernidad el hombre se ha alejado de su esencia, convirtiéndose en un

“extra-terrestre”, pues con el pasar del tiempo es más ajeno a su propia tierra, es un ser des- humanizado que lleva una vida vacía en la razón lógica de una ciencia, que no reconoce a la tierra como principio de conocimiento y sabiduría. Pero como hace referencia Rigoberta Menchu es en el saber de nuestras antiguas culturas donde encontramos nuestra identidad,

“Hoy, contundentemente, podemos afirmar que nuestros pueblos llamados indígenas

asumen el ejercicio de la identidad según sus percepciones primeras y según sus propias

valoraciones evolutivas. Esa identidad se dibuja fuera del contexto tradicional del

individuo, y se dibuja dentro de la definición y la integración de los elementos del “Yo

colectivo”, encontrando significado a todo lo que produce conocimiento y en todo cuanto

le rodea por encima del “Yo individual”. (Menchu, 2008) El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 777

Hace énfasis en lo colectivo pues somos seres que viven en comunidad y que al igual que nuestros indígenas, deberíamos entender lo que esto significa, pues es el equilibrio en el que los animales, plantas, montañas y ríos han convivido para preservar la vida. Su evolución no es ni un poco parecida a lo que ha entendido occidente, el mundo evoluciona para lo indígena en la medida en la que se preserva la vida y se mantienen las leyes naturales, el ciclo y el cuidado que la vida en esencia exige, un equilibrio en el que el colectivo surja en la medida en la que el individual se fortalece.

Es un crecimiento armónico entre el otro y el sí mismo, pues bajo la significación ancestral de mismidad, se comprenden que ese otro soy yo mismo, entonces la necesidad de mirar afuera se convierte en la indetenible necesidad de ahondar en el interior, de redirigir la mirada, de encontrar el ego, el miedo, la soledad, el dolor, la tristeza. La candela en el corazón y así, ver en lo profundo a ese otro que también duele, ese otro que en lo insondable del ser, también soy, ese otro que observa todo aquello que he sido, soy y quiero ser y no se entienda está bajo las lógicas de la proyección procesual y hermética de metas por alcanzar, sino en el trabajo bonito de encontrar el abuelo interno y el conocimiento autóctono que nos da la posibilidad de entrelazarnos con la Madre Tierra, que elimina la vergüenza y permite bailar cómodamente durante el ritual.

Sin embargo, este proceso no se da fácil y progresivamente desde aquí, se reconoce que somos humanos, mentalmente débiles, víctimas de la modernidad, hijos de la confusión nihilista postmodernista que nosotros mismos hemos creado, egoicos e insensibles, espiritualmente analfabetas, aparentemente condenados a buscar el significado, el valor y la profundidad afuera, somos insoportables hasta para nosotros mismos, pues nos perdimos de lo que somos, del ser, un día nos desconectamos de nuestro origen, con una incipiente identidad confusa y sordos al El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 778 llamado de la madre tierra, peor aún, sordos al llamado divino de nuestro espíritu en nuestro corazón.

El recorrido histórico da cuenta de sucesos insufribles, hechos que estremecen el corazón más fuerte y que dejan huellas que limitan el significado de identidad, en ello se han quedado algunos, pero ¿Qué soy yo en esa identidad? En mi interior también ha lugares vacíos?

¿Adoloridos? ¿En llamas? O por el contrario, hay cantimploras de agua fresca, lingotes de oro, costales llenos de alimento, ares con semillas y un corazón dulce de ello depende el fortalecimiento de la raíz, ver en sí mismo la riqueza, la fortaleza y la dulzura con la que la

Madre Tierra nos mira, pues tras el perdón la candela disminuye y el entendimiento recorre concienzudamente la verdadera identidad.

Al no haber un reconocimiento propio de lo que hay en el interior, no se da la apropiación del conocimiento autóctono tanto de sí como de la cultura indígena, desde la psicología ancestral indígena se propone caminar con la cabeza en alto, sin importar que falte mucho trecho por recorrer, pues el camino no es hacia afuera, es hacia dentro, hacia la profundidad vibrante de sí mismo, pues en la diferencia de reconocernos a nosotros mismos está la fuerza de la identidad.

Se parte de la definición, pero eso no da más que el indicio de que incluso el concepto nos resulta ajeno, ya que la identidad, no es algo que vincule únicamente al ser, sino que lo vincula a éste con algo más allá de sí y del mundo al cual pertenece, de la vida a la que hace parte.

“La identidad nacional o identidad cultural hacen referencia a una nación, un pueblo, una

colectividad o comunidad humana. ¿Qué hace que un pueblo, una sociedad, sean lo que

son y no otra cosa? Ya los griegos, en medio de la inacabable diversidad de culturas de su

entorno, se referían al ethos como el patrimonio intangible que todo hombre carga desde El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 779

su niñez. El ethos es todo: la herencia cultural, forma de ser, pensar, hablar, vestir, de

plasmar el arte, que deriva de las formas culturales que cada persona ha aprehendido y

que no pueden ocultarse.” (Chiu, s.f.)

Desde aquí es posible plantear que las costumbres y la combinación de culturas al que ha sido sometido este territorio, permite la diversidad entre nosotros y la interiorización de tantas costumbres como se nos ha sido posible, pero también se convierte en el lineamiento que rige la manera en la que nos relacionamos con el mundo y esto es un punto determinante para construir la identidad. Ya que en la medida en la que se construye el sí mismo, se construyen cimientos de la identidad colectiva, pues en la medida en la que sé quién soy, sabré lo que es ese mundo que está allá afuera.

Entonces más allá, es el vínculo entre comprensiones supra integrativas, en ellas el sí mismo se aleja de la banalidad egóica de poseer, tener y ser parte, ya no quiere identificarse, su intención se dirige a la comprensión de su naturaleza y su malestar, ya no es la cura lo que orienta su trabajo y su camino, es la búsqueda de su origen que tiende al dolor, es la comprensión multidimensional de su ser y lo que le atañe como ser; su psiquismo es su fuente y no se enlaza con el individualismo, más bien se acerca a la comunidad en la que su raíz es la fuerza, su abuelo es su guía, las plantas son su medicina y los lugares sagrados el pilar de su saber.

Para reconstruir la identidad indígena, ya sabiendo de la diversidad de la que somos parte, hay que retomar lo que somos nosotros mismos y en este sentido, lo que hay de ellos en nosotros, pues allí también hay parte de lo que somos como hijos de este territorio. En este orden de ideas los indígenas son rituales, lugares sagrados, abuelos, ancestros, elementales, plantas y sanación; por esta razón, ser indígena es adentrarse en la evaluación minuciosa de estar al y desde allí recobrar la fuerza de ser o, por el contrario reafirmarse en ser individuos “Llegar a ser humano es El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 780 llegar a ser un individuo y llegamos a ser individuos guiados por esquemas culturales, por sistemas de significación históricamente creados en virtud de los cuales formamos, ordenamos, sustentamos y dirigimos nuestras vidas” (Geertz, 2003) cada uno de nosotros ha decidido formar parte de un sistema o un esquema cultural, no es la necesidad, sin embargo, es lo que colma el vació de reconocimiento propio, el camino fácil que limita la comprensión integrativa que observa esos sistemas históricamente culturales y sigue hacia el interior.

Gandhi, por su parte, concebía la idea del amor y la fe depositada en un agente externo a

él como primer acercamiento al trabajo interno para la comprensión de otros, la humanidad como la construcción de la unicidad de los hombres aparentemente divididos, la fuerza suprema como ente integrador podría permitir una identidad conjunta de él con esa humanidad y en ese sentido de esa humanidad como parte, pues para él “Si creemos en Dios, no sólo con nuestro entendimiento, sino con todo nuestro ser, nos esforzaremos en amar a toda la humanidad sin distinción de razas o de clases, de nación o de religión. Entonces trabajaremos por la unidad de los hombres. «Todas mis acciones tienen su fuente en mi amor inalterable a la humanidad»”

(1988, pág. 81) el trabajo desde lo indígena refleja un amor inquebrantable no sólo hacia el otro, sino a la tierra como el vínculo que mantiene la humanidad unida y en otro nivel, dividida por supremacías y poderíos que defienden una identidad realmente inoficiosa. El amor es la fuente que integra, une y redirige a los seres a un camino de trabajo y comprensión, pero sólo en la medida en la que éste haya ido con fe por el camino largo y difícil de conocerse a sí mismo, es que va a comprender lo que es amar a otro y esto, se convierte en parte de la base del planteamiento llamado mismidad.

Caminar por las calles de Bogotá, por las montañas Cundinamarqueses y Boyacenses deja la extrañeza a un lado, el rostro de pómulos rosados, la combinación racial y amerindia aún El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 781 perdura en las calles colombianas y en un ámbito más cercano se mantiene aún en mi sangre, mi pensamiento y mi raíz, para Gandhi era claro “Todos los hombres son hermanos y ningún ser humano puede sernos extraño”. (1988, pág. 81) Es lo que desde mi perspectiva intenta construir el pensamiento indígena para el concepto de identidad, pues la extrañeza no debe estar dada por la apariencia y la imagen, sino por el continuo palpitar del corazón que vibra con lo indígena.

Si se quisiera cuestionar los procesos macro en los que la discriminación se vuelve bárbara y atrevida, habría que ver el principio fundamental para Gandhi, quien defiende que el amor por la humanidad requiere de “la adopción de la no-violencia como el mejor medio para resolver todos los problemas de orden nacional e internacional” (1988, pág. 81). Desde esta perspectiva se infiere que los actos de no-violencia permite la disminución de los conflictos y en este sentido de distinción entre unos y otros. Para él «La no-violencia es la ley de nuestra especie, lo mismo que la violencia es la ley de los brutos. El espíritu dormita en el bruto, que no conoce más ley que la de la fuerza física. La dignidad del hombre exige obedecer a una ley superior: a la fuerza del espíritu» (Gandhi, 1988, pág. 81) desde la perspectiva de la psicología ancestral indígena, la ley bruta es la que insiste en la identificación, la división y la dejadez del trabajo espiritual, mientras que la ley superior, es la ley de origen, ella brinda los lineamientos de sanación, guía en la oscuridad y la confusión que se experimenta en algunos momentos del camino, aquella que integra y devela las razones internas del malestar pero también, bajo la cual se comprende el funcionamiento inconsciente del que todos deberíamos hacer parte para preservar la vida en Madre Tierra.

Por eso en la lucha que se intenta construir desde el pensamiento indígena se parte de la unicidad, la integración, la espiritualidad el reconocimiento de sí, del otro y de la Tierra como los componentes civilizadores e identitarios de este territorio, “En la lucha por la independencia de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 782 la India, insistía continuamente en que adoptásemos esos métodos de hombres civilizados, que son la no-violencia y el sacrificio propio” (Gandhi, 1988) Aquí en congruencia con el pensamiento de Gandhi desde el pensamiento indígena no se apoya la violencia así como tampoco las individualidades, pues el sacrificio aquí es el compromiso con la Tierra y con el otro. “Para mí, patriotismo rima con humanidad. Soy patriota porque soy hombre y humano”

(Gandhi, 1988)

Entonces mirarse es reconocer desde el interior la compleja explicación del ser “En lugar de explicarlas, yo me observo a mí mismo; quiero saber si soy un monstruo más complicado y más furioso que Tifón, o un animal más dulce, más sencillo, a quien la naturaleza le ha dado parte de una chispa divina de sabiduría” (Ilisias, 1992, pág. 187) que monstruo es al que enfrento, qué armoniza y gobierna mi interior si no soy yo mismo. “Porque toda situación es símbolo de muchas, lo grande habla a través de lo chiquito y el universo se ve por el ojo de la cerradura” (Galeano, 2010, pág. 7) como ver el otro si no he visto el ser pequeño que soy frente a la madre tierra, si en mí no está implícita la comprensión de la infinita grandeza y majestuosidad de la Madre.

Por su parte la Comunidad como parte fundamental de la construcción del mí mismo retoma en alguna medida la culturalidad “Las culturas indígenas de la salud formaron un tejido social complejo que con gran rigor y consistencia de pensamiento establece que la salud sólo es posible cuando los individuos y las colectividades logran vivir en una relación de armonía y respeto hacia todos los seres en su entorno natural, conservando el orden ancestral de la naturaleza y manteniendo un orden colectivo y un comportamiento personal correspondientes, los cuales fueron determinados en la Ley de Origen desde el comienzo de los tiempos.”

(Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 43) resalta la ley de origen, tal cual nos ha sido enseñado a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 783 nosotros y de la misma manera en la que hemos venido siendo reiterativos, pues la supervivencia en sociedad no armoniza el camino de lo común, es en la comprensión extensiva del fenómeno que nos hace aparentemente diferentes donde se entiende y se vuelve parte de lo común, lo contrario desequilibra el orden natural estableciendo normas y poderíos en torno a lo imposible de poseer la Madre Tierra. “Si queremos vivir en armonía con los demás seres vivos del planeta debemos aprender a pensar cómo piensa la naturaleza. El pensamiento cuantitativo occidental es en verdad contrario al orden natural. Y en la medida en que somos un proceso espiritual, debemos suponer que el mundo natural ha de mostrar idénticas características de espiritualidad"

(Bateson, 1993)

Finalmente se toma como elemento de conocimiento la misma enfermedad, pues ya se ha dicho que revisar el interior es permitirse ver, estar allí y entonces tomar valor para comprender antes que curar y para curar antes de proclamarse como sano, “…para el pensamiento ancestral americano la salud y la enfermedad son elementos que forman parte de un discurso general sobre las relaciones entre el territorio, el orden colectivo y el comportamiento personal. Pues esta es la manera en que se determina la construcción de sus viviendas, sus tejidos, el uso de los recursos del entorno, sus artes, así como las ceremonias de prevención y tratamiento de las enfermedades y las que acompañan los eventos vitales significativos: el nacimiento, el inicio de la vida adulta, la sexualidad y la muerte.” (Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 44) Sus costumbres son como la base fundamental en la construcción de lo que hemos de llamar mismidad, pues cada uno de estos procesos culturales tienen un significado sumamente relevante a nivel individual y colectivo, el grado de significancia determina en cierto modo, el nivel en el que sé de mí y me conozco, aunque de igual forma se vincula con el nivel de conexión que hay entre mi ser y la comunidad de la que soy parte El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 784

Reconocer la comunidad es parte fundamental del reconocimiento del mí mismo, el respeto por la ley de origen junto con lo sagrado es el acercamiento paulatino a la construcción de esa identidad perdida en el exterior, en la esencia está lo necesario para la comprensión y el relacionamiento entre los seres humanos “Cada sitio del territorio, las piedras, las lagunas, los arroyos y todos los seres que lo conformamos somos parte de una historia que representa y simboliza el ordenamiento original que establecieron los padres espirituales para que nosotros lo conserváramos y cuidáramos. Los padres espirituales dejaron ciertos lugares para cumplir las ceremonias que garantizan su conservación y su cuidado integral. Esos lugares, llamados lugares sagrados, tienen todos los nombres propios y funciones relacionadas con la conservación del orden espiritual, colectivo y material. Un lugar aislado no puede proteger al corazón del mundo, son sus relaciones las que permiten entender la integridad de nuestro territorio, nuestra sociedad y nuestro pensamiento. LEY SE” (Arbeláez Albornoz, 2005, pág. 45) es un trabajo del cual hicimos y hacemos parte, como la construcción vivencial y activa del mito, como la comprensión majestuosa de los mensajes místicos, como la ardua labor que nos permitió un acercamiento noble y desinteresado al amor, en el que la fe fue la fuerza y la luz que dirigió nuestro trabajo de encuentro y desarrollo. Fue la comprensión integrativa del camino y sus desvíos lo que nos hizo plantear una supra integratividad la cual toma elementos propios como el nivel en el que la identificación se aísla y entonces la simpleza se vuelve supremamente sustancial para entender.

El mito

“Bochica que según la leyenda apareció por el oriente, entrando por Pasca, de edad provecta, crecida barba, largos cabellos que le llegaban a la cintura, sacerdote que habría sido maestro y civilizador” (Cuellar, 1998, pág. 9). Este mito se presenta como la historia en la cual

Bochica entra en la cultura indígena, a predicar y a enseñar a los indígenas la forma en la cual se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 785 debía cultivar y cuidar la tierra para obtener alimento, les enseñó a hilar la lana de las ovejas para tejer ruanas y mantos. Estas enseñanzas con el pasar de los años aún perduran en algunas personas y pueblos por donde Bochica tuvo paso en su trabajo como civilizador Mhuysqa; pueblos como San Pedro de Iguaque, Iza, Gameza, Chiquiza, la laguna de Fúquene y el gran pueblo de Suamox son lugares que en la actual investigación han demostrado mantener vivas sus raíces indígenas, allí existen personas que realizan el antiguo arte de hilar la lana de manera tradicional, es decir con “torteros”, (pequeñas piedras que sirven como herramienta ancestral para hilar la lana), estas personas aún conservan este milenario arte y reconocen a Bochica como aquel personaje mítico quien enseñó esto a sus ancestros. Aquí un pequeño fragmento de narrativa de la actual investigación:

…en primer lugar tuvimos la oportunidad de hablar con don Segundo un anciano de unos

72 años aproximadamente, nos contó acerca de su conocimiento sobre Bochica, comenzó

su relato contando como los indígenas Mhuyscas habían llegado al pueblo de Iza, más

exactamente a la cueva del diablo o de Bochica, en donde éste en presencia misma les

enseñó el arte de hilar la lana haciendo uso de las piedras conocidas como torteros y

adicional a ello, también les enseñó la forma adecuada de cosechar la tierra, incluso les

dio pautas claras acerca de cómo convivir entre ellos (en paz y armonía de la mano de la

tierra, cuidando de ella y de esta misma forma ella cuidando de ellos), finalmente después

de tiempo de enseñanzas los llevo a la laguna y poniendo sus pies sobre una piedra se

sumergió en ella para desaparecer (Comunicación personal, 2015).

El mito es la forma en la cual nuestros abuelos y ancestros nos transmiten el conocimiento de lo propio, conocimiento que a través del tiempo, la colonización y la actual globalización se ha perdido; es la forma en la que podemos retomar nuestras tradiciones y raíces El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 786 reencontrándonos con nuestra cultura. Es lo que mantiene viva nuestra historia como indígenas

Mhuysqas, además de conservar viva la fe y la identidad de las antiguas civilizaciones. Es de vital importancia resaltar que aún existan pueblos en los que se recuerden antiguos mitos y se conserven tradiciones ancestrales, pues como diría Jung:

La historia antigua del hombre se está significativamente redescubriendo hoy día

en las imágenes simbólicas y mitos que han sobrevivido al hombre antiguo.

Cuando los arqueólogos excavan el pasado, no son los sucesos del tiempo histórico

los que aprendemos a atesorar sino estatuas, dibujos, templos y lenguas que nos

hablan de antiguas creencias. Los filólogos y los historiadores de la religión nos

revelan otros símbolos y nos pueden traducir esas creencias en inteligibles

conceptos modernos. Estos, a su vez, son revividos por los antropólogos de la

cultura. Nos pueden mostrar que los mismos modelos simbólicos es posible

encontrarlos en los rituales o mitos de pequeñas sociedades tribales aún existentes,

inmutables durante siglos, en los márgenes de la civilización (1995, pág. 106).

Este conocimiento ancestral se está perdiendo en la modernidad del mundo actual, lo que nos desliga de nuestra historia como parte de la cultura indígena, y nos lleva a crear una imagen de persona occidental con total desconocimiento de sus raíces y su origen, lo que puede generar fuertes sentimientos de vacío existencial, malestares, padecimientos y lo que occidente plantearía como patologías. En el mundo moderno el mito no es nada más que una historia de fantasía y magia, que se limita al espectro de lo irreal alejado de la lógica de la razón, lógica en la cual se mueve actualmente nuestro mundo, por tal motivo no se le da el verdadero valor histórico que se encuentra escondido en él; para Jung “Leemos los mitos de los antiguos griegos o las narraciones El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 787 populares de los indios americanos, pero no somos capaces de ver ninguna relación entre ellos y nuestra actitud respecto a los “héroes” o los sucesos dramáticos de hoy día. Sin embargo, hay relación. Y los símbolos que la representan no han perdido su importancia para la humanidad”

(1995, pág. 106). Es por eso que desde la psicología ancestral indígena se propone y reencuentra el mito como la primera, fundante y verdadera forma de conocimiento del mundo, tal cual lo plantea el abuelo Fernando y se recoge en el siguiente fragmento de narrativa… “Al terminar con esta actividad nos retiramos del lugar y caminamos por un sendero, luego el Abuelo comenzó a narrar la historia de un río que años atrás por allí mismo pasaba, adicional a esto quiso decirnos unas palabras: -de ustedes va a depender lo que desde este momento en adelante logren para la

Madre Tierra, lo que hemos dicho los Abuelos como yo y los antecesores a mí ha quedado aquí ya plasmado, ahora su trabajo es vivir, pues finalmente la historia es lo escrito, el mito es vivir… , ahora tendrán que vivir y recorrer el Mito, vivir, y para ello, es que están ustedes aquí”

(Comunicación personal, 2015).

El valor del que se dota el mito en las culturas indígenas es algo que representa un reto para el mundo actual, pues llegar a entender y sentir el significado de estas antiguas historias es realmente complejo, ya que la modernidad se mantiene bajo el velo de la ciencia y la racionalidad, siendo el mito la forma más antigua de conocimiento científico, Gadamer plantea una pregunta que no parece tener respuesta racional aún para el mundo moderno, dice que:

Aunque vivamos aparentemente en la «época de la razón», no es menos cierto que

las cuestiones sobre lo religioso, lo mítico y lo ritual interesan ahora más que

nunca. Pero tratar hoy del mito implica necesariamente confrontarlo con el

pensamiento racional, con la ciencia y la técnica, con el logos. Así, una filosofía El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 788

del mito debe necesariamente abordar la pregunta siguiente: ¿qué papel desempeña

el mito en una sociedad dominada por la razón científica? (1997, pág. 9).

Para nosotros el papel que desempeña el mito al nivel de una ciencia propia si así quiere verse, es el de puente epistémico de aboriginalidad, pues es la forma en la cual la persona ancestral puede reencontrarse con su origen como logos propio y significativo, volver al mito significaría entonces volver a la raíz como comprensión, retornar a la verdadera identidad en la que todos somos hijos de la tierra y formamos parte de ella, esto es algo que tras años de confusión y la falsa creencia de evolución occidental se ha perdido y en su lugar se ha implantado la idea de un hombre globalizado, lleno de la superficialidad del desarrollismo. Sin mito somos personas ciegas de espíritu que jamás serán un ser consciente capaz de un verdadero sentir, como el Abuelo Fernando diría el mito es vida… ejemplo de ello se muestra en el siguiente fragmento de narrativa:

…Las plantas acuáticas, que están encima de la laguna son como cada uno de

nosotros, que estamos en la madre, (como lo era el agua en la laguna), pero al igual

que estas plantas acuáticas, nosotros tan solo flotamos yendo de un lugar para otro,

a la merced del viento... sin encontrar un lugar en la tierra, en la madre, para lograr

echar raíces y encontrarnos realmente con ella... Como nos pasó a primera vista

con la laguna, cada uno de nosotros, muchas veces nos dejamos llevar por lo que

nuestros ojos ven, no somos capaces de sentir, ni de ver más allá, por eso, tan solo

vimos la maleza y no la laguna...Nos faltó sentirnos parte de la tierra, sentir nuestra

raíz, sentir la laguna y ver más, con esto me sentí realmente inseguro, me falta más

fe para lograr ver con los ojos del corazón y no con los ojos de la razón, que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 789

aunque este muy acostumbrado a ellos, no me permiten ver y sentir a la Madre

Tierra (comunicación personal, 2015).

Según Jung, “estas figuras semejantes a dioses son, de hecho representantes simbólicos de la totalidad de la psique, la mayor identidad y más abarcadora que proporciona la fuerza de que carece el ego personal. Su cometido específico indica que la función esencial del mito del héroe es desarrollar la consciencia del ego individual” (1995, pág. 110).

Volver al mito es reencontrarse consigo mismo, retomar la identidad ancestral y milenaria de ser hijos de la tierra, encontrar la fuerza psíquica de la mismidad más esencial que permita reconocerse como indígena, y a partir de allí forjar un camino en el cual occidente logre comprender los saberes ancestrales, como parte fundante e ineludible del mundo que también es camino y propósito transpersonal de espiritualidad.

Desde lo ancestral indígena, el mito recobra poder y significado en un sentido bastante amplio, al ser el mito la palabra transmitida por la vivencia y por los abuelos, es también la mejor forma en la que se puede conocer la historia del territorio y sus tradiciones autóctonas; para nosotros es el principio bajo el cual se rige la vida psíquica en propiedad (mismidad), pues en ellos se encuentra impresa la forma adecuada de acercarse a lo que somos, las costumbres, el tejido, el hilado y el camino hacia la espiritualidad; pues sólo en la medida en que se permite un acercamiento al mito, es que surge el entendimiento profundo de la forma como vivían abuelos y ancestros y a su vez, de cómo deberíamos ser nosotros como hijos de esta tierra.

Por eso aquí, en lo indígena ancestral, se entiende a la Tierra como la representación psíquica de totalidad en lo humano, pues es solo a partir de la profunda conexión que el hombre logre con el “centro” (Tierra interna), en que podrá llegar a una sanación de su humanidad y su tras-humanidad en un nivel de conciencia elevado. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 790

El mito de manera simbólica es el puente que une la mirada occidental con la indígena, a partir de allí es posible plantear que también es la herramienta mediante la cual uno mismo establece conexiones del exterior a lo profundo del sentir palpitante del corazón, con base en ello sucede una contundente transformación en la vida espiritual. El mito es la composición ancestral de zumo poder que se muestra en la experiencia vívida de sí y de uno mismo, en este sentido es la revelación de la verdad que se desconoce al permanecer en el exterior de una realidad vacía, pareciera entonces, en la convicción de retomar el debate más adelante, que el mito se afirma en el acto de fe y fuerza de la divinidad que da cuenta integrativa de lo que es y aún puede ser como potencia psíquica.

Para los Mhuysqas el mito no necesita de una explicación, pues el mito mismo resulta siendo la total explicación del origen, del mundo y las normas bajo las cuales se rige la vida que para los científicos aún resulta desconocido e inexplicable, en palabras de Gadamer “el mito tiene su propia riqueza y credibilidad. Es una tarea propiamente filosófica hacer justicia a esta dimensión de lo mítico y de lo ritual.” (1997, pág. 10). El mito no necesita ser explicado en la lógica de la ciencia o la racionalidad, debido a que el mismo mito está dotado de su propia

“lógica” o fuerza, y es tarea del mundo actual llegar a entender y sentir su verdadero significado, así como lo han hecho nuestros antiguos ancestros Mhuysqas que del valor mítico han formulado filosofía y ciencia como saber de vida y curación.

En la actual investigación el propósito epistémico trata de volver al mito, pero ¿que implica volver al mito? Tal vez, recorrer el territorio de ancestralidad recolectando información como alimento, volviendo a los lugares sagrados a hacer ritual de pagamento, a trasnochar, a entregar para limpiar el espíritu, el propio y el telúrico, y siempre a sentir con hondura como valor de episteme, pues es de esta manera como se entiende el desarrollo ancestral del mito. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 791

Recorrer metódico de prácticas, experiencias y prescripciones que por medio de los valles, montañas, ríos, lagunas, rocas, lugares, personas y sabedores guían el camino, permitiendo el retorno a la tierra y orientando al hijo (también mestizo) como aquel hombre hijo de nadie y de todos, quien es extranjero en su propia tierra, sin tener un lugar al cual defender como hogar y sin sentirse parte de él. Solo en la medida en que las personas se tomen el trabajo de recorrer la tierra, subiendo la montaña, sentándose en las lagunas, trasnochando en los valles, descubriendo la riqueza de nuestra cultura y sintiendo su fuerza de la misma manera que nuestros ancestros lo hicieron, en el antiguo arte de andar la tierra, es que se siembra y se vive el mito como lugar epistémico de certeza nuevamente.

El lograr esta tarea significa volver a los saberes ancestrales de nuestros indígenas y abuelos, ya que son ellos quienes comprenden el valor del mito en la vida actual como base de la existencia de todo ser vivo en la tierra, como bien Gadamer lo menciona “no hay cultura sin horizonte mítico, es necesario situar al mito en la época de la ciencia, porque sin el mito resulta imposible comprender la complejidad del mundo contemporáneo” (1997, pág. 11).

Esta es la razón por la cual hoy el mundo se encuentra en decadencia, pues al no entender al mito como parte fundamental de la vida no se logra comprender a la tierra, y esto a su vez propicia que las personas poco a poco acaben con ella construyendo ciudades de cemento, explotándola, viéndola como un ser inerte el cual debe entregar todos sus secretos ante la superioridad del ingenio humano de lo denominado por Frances Bacon como el positivo, estas prácticas cada día deterioran más a la tierra y esto a su vez acaba poco a poco con la vida; lo que lleva a una realidad actual en la que no existen más que desastres naturales y enfermedades incomprensibles casi intratables. Sí el hombre moderno se tomara el trabajo de sentir la tierra El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 792 entendería que es un ser lleno de vida y magia, que en ella se encuentra la respuesta y la cura a todas las enfermedades del mundo.

Por eso, “el mito se convierte en portador de una verdad propia, inalcanzable para la explicación racional del mundo. En vez de ser ridiculizado como mentira de curas o como cuento de viejas, el mito tiene, en relación con la verdad, el valor de ser la voz de un tiempo originario más sabio” (Gadamer 1997, pág. 16). Siendo el mito una de las primeras formas de conocimiento, la ciencia del mundo moderno podría dejar de centrarse en encontrar respuestas en teorías que cada vez des-humanizan más al hombre, volver al mito implicaría encontrar lo que la ciencia no ha podido hasta ahora, la naturaleza… espiritual y trascendente en la vida del hombre.

El mito Mhuysqa muestra cómo las antiguas culturas vivían en equilibrio con la vida, vivían gracias a ella, aprendiendo de sus enseñanzas se convirtieron en seres llenos de sabiduría y conocimientos, lo que hoy el hombre moderno hace a diario con la ciencia es caminar hacia el incierto mañana poseso de tecnología, sin comprender la majestuosidad del verdadero conocimiento que deja en el pasado, en el mito como verdad universal del cosmos y la vida, de la razón y el co-razón, de la filosofía y la ciencia.

Rituales

El ritual es un saludo de mucho respeto a nuestro territorio, a nuestros ancestros, a

nuestros linajes, a nuestras familias y en especial a la madre tierra, de esta manera y

honrándolos nos sentamos en torno al fuego para compartir palabra, la cual sirve como

confesión que limpia y descarga nuestros corazones, de esta manera la palabra que se

comparte es palabra de sanación y sabiduría… (Comunicación personal, 2015). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 793

Los rituales preparan a las personas para tener acercamiento a lo sagrado, a través de los rituales el cuerpo y el espíritu se preparan para recibir las enseñanzas de los ancestros y los lugares sagrados. Los rituales permiten que la razón y la conciencia vayan más allá del plano físico, para lograr sentir la naturaleza pura de la tierra y el ser, es la forma en la que el psíquismo se mueve hacia lo sagrado; como lo diría Gadamer “En primer lugar, el rito no es una forma de hablar, sino una forma de actuar. Donde se procede ritualmente, el hablar se convierte en una acción.” (1997, pág. 91).

El Ritual ancestral Mhuysqa es entonces una acción que desde el interior de cada persona hacia el exterior permite trabajar el ego y el negativo, prepara al corazón para recibir el entendimiento que la razón no comprende, el ritual lleva al hombre a hacer conciencia de sí mismo a manera de psicoterapia, sanándolo en la medida en que logra la conexión con la tierra.

En estas prácticas ancestrales del cuidado la persona despierta cómo ser consciente de lo humano; entendiendo que lo indígena es entonces primero ciencia de curación y luego sabiduría de sanación, de fondo siempre sabiduría, ya que lo suyo es un saber practico de acción y de co- razón.

Los rituales conectan a las personas al mundo antiguo de los ancestros y por medio de ellos se logran mantener vivas sus tradiciones como alimento mítico del psiquismo, los rituales nos conectan con la fuerza que aguarda en los ancestros, esto implica retornar a los antiguos saberes de nuestros abuelos y mayores, pues son ellos quienes mantienen vivas aquellas prácticas milenarias. La práctica ritual es una fuente colectiva para tomar fuerza, pues como lo propone

Gadamer “…la dimensión en que se realiza lo ritual es, sin embargo, siempre un comportamiento colectivo. Los modos de comportamiento ritual no refieren al individuo ni El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 794 tampoco a las diferencias entre un individuo y otro, sino a la colectividad formada por todos los que, juntos, acometen la acción ritual” (1997, pág. 91).

Esto se evidencia en las prácticas ancestrales Mhuysqas, las cuales se desarrollan mayoritariamente reuniéndose en círculos de palabra y comunitarismo de trabajo (construcción de conocimiento y despliegue de la vida por medio del diálogo alrededor de una hoguera y del trabajo alrededor de un propósito), en donde el grupo de personas que están allí, entienden que el conocimiento se construye en comunidad, por medio de lo que cada cual tiene para aportar a la vida de sí mismo y de los otros, es mediante este diálogo de confianza, de comunión entre las plantas sagradas, los elementales, los abuelos, los usos y costumbres, las tradiciones y nuestros ancestros que se llega al entendimiento de lo que el ritual brinda en significado trascendental para el individuo, el ritual es una acción como labor de crecimiento del alma, bien sea de uno o de todos.

Gadamer aborda al ritual como una forma de comprensión, entendiendo entre el ethos y el logos un espacio que permite el desarrollo de dos conceptos que tienden a dividir al hombre en estructuras básicas, de pensamiento, razón, emoción y sentimientos, remitiendo la complejidad de lo humano a esos niveles …“Por su aspecto normativo-racional, he expresado el entrelazamiento entre ethos y logos precisamente mediante el concepto de ritual, cuya observancia y cumplimiento lo caracteriza como «correcto»” (Gadamer, 1997, pág. 130). Lo ritual entonces permite vislumbrar la esencialidad ética del ser humano en totalidad como parte y forma de un ecosistema vivo, que tiene manifestaciones racionales pero más allá, divinas, místicas y espirítales que complementan el equilibrio entre la tierra y la persona.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 795

El ritual como proceso de transformación es concebido desde la fuerza y la fe que la persona posea durante el mismo, es la forma en que el Abuelo logra hallar en el paisaje de la cumbre de una montaña la fuerza para no decaer, esta fuerza es percibida por el Abuelo porque su corazón vibra en las energías de la Madre tierra, Abadio Green muestra el ritual como un proceso de transformación logrado desde el corazón:

En el ritual amazónico del YURUPARI, los hombres toman las fuerzas, el color, la

piel, la capacidad de volar o vivir bajo la tierra, de lo que representa la máscara

que utilizan. Aquí la máscara no es para ocultarse, sino para ser el otro, en este

caso, los antepasados. Lo que hace que el ritual no sea una representación sino una

transformación, lo que permite que un hombre se haga realmente anaconda, o

águila no reside en la perfección de la máscara, ni en seguir los pasos adecuados;

aunque eso sea muy importante, lo que permite esta transformación, ser el otro,

está en el corazón. Si no es desde y con el corazón, la máscara no transformaría al

hombre en el “abuelo anaconda” sino que sería un mero disfraz y haría de un

hombre un comediante (2001, pág. 1)

El corazón como instrumento fundamental para lograr comprender la dimensión ritual en el hombre, indica que desde la mirada occidental de la razón el ritual no lograría ser entendido, pues ante los ojos de la ciencia el ritual no es más que una serie de acciones que llevan a la adoración de algún ente espiritual o divino; la actual investigación rescata al ritual como un proceso de cuidado, devoción, curación, reencuentro y entrega desinteresada, que integra la mente, el cuerpo y el corazón.

El ritual es una herramienta de organización individual en donde la persona logra llegar a profundos cuestionamientos sobre sí mismo, los cuales afrontamos tomando la fuerza, sabiduría El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 796 y experiencia de los ancestros para continuar de la mano de ellos y de esta manera tomar control sobre nuestra propia vida. El Hate Kulchavita diría que es una revisión personal de la realidad:

Sentarnos en la palabra, entonces, es sustentarnos en los principios de la vida que

nos llevan a la salud, a la sabiduría y a la integración con el otro y con lo otro.

Distinguimos el mal, como todo aquello que se opone a lo anterior y nos lleva a la

pérdida de la paz interior que nos desconecta con el sistema relacional que es la

vida. Por esta razón, revisamos cómo ha sido nuestro pensamiento, cómo han sido

nuestras emociones, cómo han sido nuestras palabras, cómo han sido nuestras

acciones. Esta revisión personal está ligada de manera inmediata a otra del tejido

relacional en el que el individuo se desenvuelve, es decir, al acto de revisar la

realidad de las relaciones que establece con otros, mirar las dificultades que

existen en la colectividad para avanzar permanentemente a cuidar la comunidad, a

cuidar la experiencia de común-unión (Daza, 2013, pág. 14).

Luego de una profunda revisión personal deviene un proceso de curación, y es lo ritual como proceso de curación lo que permite al hombre desprenderse de cargas negativas, ideas irracionales y falsas creencias. Por medio de rituales por ejemplo cómo el círculo de palabra, las personas siembran su pensamiento alrededor del fuego como una tarea de limpieza del psiquismo, cada uno escucha y pone palabra y de esta manera se teje el conocimiento y la sanación, como plantea el Hate Kulchavita (Antonio Daza) respecto a la potencia del ritual…

Con el tejido de la noche al lado del fogón no se piensa ni se planea lo que se va a

decir si no que hay una entrega para que surja espontáneamente el pensamiento

con la confianza y la seguridad que la disposición es correcta, ese pensamiento se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 797

expresa en la palabra del espíritu, esa palabra es anciano mayor de tejido,

promoviendo el tejido, cuidando el tejido y alertando en los momentos que hay

distracción o desatención. El fuego va cuidando el tejido, el fuego va extendiendo

el pensamiento, para poder escuchar debemos hacer silencio; para escuchar la

palabra debemos atrapar silencio, atrapando silencio aparece el pensamiento. El

pensamiento primero se siente y después se piensa. La palabra primero se siente y

después se piensa (Daza, 2013, pág. 16).

Es por medio de esta ritualidad manifiesta ancestralmente que se logra una limpieza interior para sanar al hombre, se toma la fuerza de la palabra que surge en el grupo desde la fuente espiritual, se aprende de él, como si fuese una especie de terapia grupal en donde los ancestros y los Abuelos con su infinita sabiduría, guían y aconsejan al espíritu interno para que el hombre encuentre paz y tranquilidad en su ser.

Al recibir la sanación de la madre Tierra el hombre se permite agradecer por todo lo recibido, de allí surge el ritual de pagamento en donde el hombre agradece por las enseñanzas, consejos, alimento y curación recibidos de ella, por tal razón el ritual de pagamento emerge como una forma de agradecimiento espiritual, Zapata lo expresa como un relación simbólica, potenciada por el ritual, que se manifiesta en los usos y costumbres de los pueblos indígenas.

Los símbolos representan los dominios ancestrales, los seres espirituales que

permanentemente interactúan con el universo y los humanos, que se manifiestan en

los espacios geográficos sagrados (montañas, valles, lagunas, piedras, árboles,

pozo de los ríos), estos, orientan los procesos de supervivencia y de cuya

permanencia dependen la existencia de los distintos seres. Dichas relaciones El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 798

simbólicas configuran la ritualidad como un proceso espiritual de “pagar” por los

beneficios recibidos, estos se manifiestan en los mitos, costumbres y tradiciones,

que se trasmiten de generación en generación expresando la razón de ser y existir

de los pueblos indígenas y sus territorios (2010, pág. 6).

Para los Mhuysqas la madre tierra configura un todo, un signo de potencia terapéutico conformado por una serie de lugares en los cuales existen fuertes energías que mueven al mundo, los Mhuysqas como hijos de la tierra le pagan a la madre y a los lugares sagrados en alimento espiritual, por medio de rituales de pagamento se retribuye a la tierra todo lo que ella brinda sin reservas a toda la humanidad; estos rituales se realizan con el fin de mantener un equilibrio entre lo que se da y lo que se recibe.

Descripciones de Ritualidad

Existen diferentes tipos de rituales que se usan para situaciones y lugares específicos, uno de los más bellos rituales es el de la danza y el canto, allí el hombre logra una conexión con la madre tierra, ya que el corazón se conecta a su origen ancestral a través de los pies mientras danza, este ritual es una forma de pagamento que le transmite diferentes mensajes y energías a la tierra, el Hate Kulchavita dice que es una sintonía entre sutiles fuerzas energéticas,

Cada canto contiene la vibración de las fuerzas con las cuales se va a hacer

acuerdo; cada danza contiene la pulsación que se sintoniza con las fuerzas que

están contenidas en el lugar. Podríamos decir que es una acción de alta cirugía,

actos quirúrgicos energéticos que están potenciados por el pensamiento humano en

una cultura donde los seres, desde antes del nacimiento, han sido formados para

cuidar y potenciar la mente, porque ese es el origen y principio de todo lo que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 799

existe. Es así como el gran sistema originó la vida, la gran inteligencia, Madre-

Padre, Bagüe-Tchyminigagua, Batchue-Botchiqa (Daza, 2013, pág. 15).

Este ritual permite llenar de fuerza y energía a los lugares sagrados, es una fuente de vitalidad que enaltece el espíritu y reconforta el cuerpo, pues en aquellos cantos se encuentran frases ocultas que solo el corazón percibe haciéndolo vibrar y bailar por medio de los movimientos realizados por el cuerpo del hombre mientras danza, se realiza una especie de procedimiento catártico, donde existe desprendimiento corporal que poco a poco libera las tensiones y purifica al hombre. En el siguiente fragmento el Mamo Roberto explica el valor de la danza…

Luego se levantó del sitio en el que estaba sentado y nos dijo, levántense quítense

los zapatos que les voy a enseñar una danza, hoy vamos a trasnochar danzándole a

la madre, sacó de su mochila su armónica y empezó a tocar mientras danzaba

alrededor del chunzua, nos mostró como se debía hacer y luego nos dijo que

empezáramos a danzar alrededor del tamuy, poco a poco tímidamente empezamos

a danzar, luego otros sacaron su armónica para acompañar al abuelo en la canción,

por momentos la canción se aceleraba y un poco nuestros pasos también lo hacían,

la marcha de nuestros pies al caminar estremecía la tierra, luego él mayor se sentó

y nos vio danzar por casi una hora, cansados y sudando el Mamo nos dijo

descansemos, así que todos nos sentamos… el Mamo nos dijo que esta era la

mejor manera de pagarle a los sitios sagrados, danzando se llena de buena energía

y de alegría al sitio sagrado(Nacoguí, ritual de trasnocho, 2014).

Al llegar a un lugar sagrado uno de los principales rituales que se llevan a cabo es el saludo (un diálogo interno de conciencia pura) en el que la persona se presenta ante los ancestros El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 800 y ante madre Tierra pidiendo permiso para estar allí, reconociendo a los ancestros como entidades superiores al hombre terrenal, motivo por el cual el hombre con humildad se presenta ante ellos, el Hate Kulchavita lo describe como una presentación en donde se le explica el propósito de estar en aquel lugar , “Allí se conversó, se cantó y se estableció una comunicación mental con el territorio para anunciar el propósito y, a la vez se realizó una presentación personal de cada miembro del equipo, asumiendo así un protocolo de relacionamiento con un espíritu o sistema vivo. La acción de auto-organización y revisión personal se profundiza y se hace aún más específica y detallada con la guía de los abuelos sabedores.” (Daza, 2013, pág. 13).

Presentarse al territorio es reconocerlo como un sistema vivo que siente y percibe como cualquier ser vivo, el hombre como un ser viviente se debe relacionar con él con humildad, entendiendo que es por medio de la tierra que surge la vida y se mantiene en el mundo. Esto se evidencia en el siguiente fragmento de narrativa…

La noche empezó y el Mamo se dirigió a todos nosotros con gran humildad en sus

palabras, nos dijo que aquella noche nosotros no estaríamos solos pues en aquel

bohío estarían nuestros abuelos y ancestros, y lo que ocurriera esa noche ellos los

escucharían y que a partir de la voluntad de la madre, se sabría si nos darían

permiso o no para empezar nuestro camino (la ruta civilizadora de Bochica), al

escuchar estas palabras la incertidumbre invadió mi corazón y las preguntas

empezaron a llegar a mi cabeza ¿Estoy listo para esto?, ¿Los ancestros me darán

permiso?... A pesar de esto tenía la inexplicable sensación de sentirme bien al

saber que mis ancestros me observaban (Comunicación personal, 2014).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 801

Lo ritual es entonces un accionar espiritual, una acción no solo física, es un movimiento simbólico en sintonía con la tierra hacia la sanación, es la manera en la cual tengo un acercamiento consciente a la madre Tierra y los ancestros, es un dialogo que le permite al hombre encontrarse con su centro, con su sí mismo, con su esencia; Gadamer lo expresa como un entendimiento mutuo… “Hemos visto que el hablar puede incluso tener el carácter de un ritual.

No es, pues, que la mera realización de los significados de las palabras, como se encuentran en los enunciados, sea ya el auténtico hablar. Si no se da, la intención de entenderse mutuamente hablando” (Gadamer, 1997, pág. 89).

El ritual no solo se remite a la acción física de hacer mediante la acción motriz de subir la montaña, o de ir a la laguna, o de sentarse en una piedra sagrada, esta acción por sí sola no devela toda la fuerza que el ritual contiene dentro de sí, es por esto que para occidente el ritual no implica una alternativa terapéutica, pues no logran comprender que el ritual es una tarea de contaste preparación y apertura de corazón, donde el hombre a diario se enfrentará a procesos de aceptación, de entrega, de soltar y de equilibrio espiritual, lo cual conlleva a una fuerte confrontación al hombre en relación a su vida, su historia y a su actuar como persona.

Gadamer expresa, “podemos estar seguros de que detrás de los textos que conocemos hay todo un trasfondo de cantos que se representaban en los rituales de las fiestas del culto y de la cosecha…” (Gadamer, 1997, pág. 110). Lo ritual transciende al acto mismo de la realización de unas prácticas culturales antiguas, pues de lo ritual se logra extraer experiencias y vivencias de lo humano lo cual permite una estructuración de una sabiduría ancestral, es decir un conocimiento que se devela a partir de una praxis en común-unión entre lo humano, lo místico, lo divino y lo espiritual; de allí que muchas de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 802 las bases estructurales de la filosofía y la ciencia devengan de prácticas rituales en las que se generó aprendizaje y posteriormente conocimiento, de esta manera lo ritual se sitúa como una posible base filosófica y científica desde lo indígena como una sabiduría de lo

Humano y lo trans-humano.

Abuelos

Los ancianos dicen; "El camino más largo que vas a tener que caminar es de aquí hasta aquí. Desde la cabeza hasta tu Corazón. Pero también dicen que no se puede hablar a la gente como un líder a menos que haya realizado el viaje de regreso. Desde la parte posterior del

Corazón a la cabeza" (Pensamiento ancestral).

Los abuelos conservan en su ser ancestral las vivencias de un mundo más sabio, el abuelo logra ver la realidad con más calma y claridad, es por eso que guían y aconsejan por cual camino se debe transitar, para el Abuelo no existe el afán de correr hacia ningún lado, por tal razón siempre medita lo que va a hacer, de un Abuelo se aprende demasiado si se aprende a escucharlo. En este sentido, Zapata describe de manera poética la forma en que un abuelo percibe y siente:

...el abuelo desde su banco y se ensimisma depositando en su corazón los

problemas apalabrados. Los medita ubicándolos. Visualiza su corazón y lo deja

vacío de voces. Siente su cuerpo rodeando su corazón. Siente su cuerpo en el

campo iluminado por el candil. Siente ese campo. Siente los rincones oscuros de la

maloca y su encumbrada techumbre. Él es la maloca. La maloca es su cuerpo. Es la

antena de su pensar. En su sentir sale de la maloca y se extiende en derredor. Su

pensamiento-cuerpo, como una sensible red de araña, se va entretejiendo con los

huertos, con los terrenos de caza, con el río, hasta hacerse uno solo con el territorio El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 803

de su tribu. Y todo desde su “banco de contar historias” La red de pensamiento del

Sabedor toca otras redes. Él sabe que a esas horas en otros lugares otros

pensadores indígenas hacen lo mismo. Sienten el Gran Árbol. Enmarcan en él, la

cotidianidad, lo piensan, lo cuidan. Para eso son jefes” (2010, pág. 6).

El Abuelo es entonces la experiencia andante de la vida pues es quien logra sentir la tierra con su corazón y ver más allá, por eso el abuelo está colmado de paciencia y entendimiento para lograr comprender los secretos del universo.

Un Abuelo aconseja y guía con dulzura a quien lo necesita por medio de la palabra, el pensamiento y el corazón, el abuelo logra hacerle ver al hombre qué debe arreglar en su interior a través de la palabra dulce, el instrumento terapéutico más efectivo que tiene un abuelo en su repertorio como sanador, pues con ella ayuda a hacer conciencia de qué se está haciendo mal, lo que se debe soltar, lo que se debe sanar y lo que se debe aceptar, como diría Gonzáles la palabra en la cultura indígena está dotada con un poder mágico capaz de cualquier cosa, “La palabra para las culturas indígenas es un instrumento mágico: puede crear o destruir. En los mambeaderos

(círculos de sanación donde se teje la palabra de vida, la palabra de consejo) se aprende a cuidar la palabra y a ser conscientes de su efecto en los otros y en nosotros mismos. Un Abuelo dice que la palabra del mambeadero es palabra dulce, palabra con espíritu, palabra de vida, que nace del corazón y no de la cabeza. No es palabra picante, no es palabra ají, no es palabra tigre” (2008, pág. 34).

El Abuelo piensa con el corazón y no con la cabeza, la razón no guía sus actos, su actos son guiados por la experiencia que a través del tiempo ha recogido, esto le permite comprender los lenguajes internos en concordancia con las manifestaciones de la Madre. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 804

El abuelo primero siente y luego piensa, después recrea ese pensamiento desde su quietud y tranquilidad, para que finalmente su actuar sea guiado por toda la sabiduría de miles de ancestros que le indican a la perfección cual es forma correcta de proceder frente una situación problema, logra sintonía total con la madre tierra manifestando el sentimiento de cuidado y amor que solo una madre conoce y siente por su hijo.

La experiencia de abuelo habla para enseñar y guiar a quien apenas está empezando a caminar, por esta razón el Abuelo cumple un papel importante en las comunidades, pues es en quien recae la responsabilidad de los demás, pues todos confían en su consejo y hacen lo que él diga (quien oye consejos llega a viejo se ¡vuelve gente!), para los Mhuysqas el Abuelo es de vital importancia en sus comunidades desde tiempos inmemoriales, así es como lo plantean en el texto de Gonzáles:

“El abuelo se constituye en el eje de los mundos y de los tiempos, es el pontífice

entre las fuerzas del hombre y las fuerzas cósmicas (la de otros seres), y en este

sentido, al conformarse como señor del diálogo, genera no sólo la armonía social,

sino la armonía cósmica, indispensable para que la comunidad mande, por cuanto

la vida es fundamentalmente alianza en todos los niveles. El abuelo conduce la

gente tanto en los ritos como en el trabajo comunitario cotidiano. Sus acuerdos son

sellados mediante la ceremonia en que se ingieren ritualmente plantas de poder”

(2008, pág. 29).

En estos sabedores se encuentran humanamente los secretos que la vida devela a través del tiempo, pues ellos son quienes han logrado superar las vicisitudes de los años, de esta manera es que logran aconsejar de forma tan acertada a los demás, pues cuando habla un Abuelo habla su experiencia de vida, a través de él habla la madre Tierra, “en muchas ocasiones el Mamo El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 805

Roberto cuando se va expresar ante nosotros en los rituales de trasnocho siempre nos dice, que no es él quien nos va a hablar, sino más bien la madre tierra, pues él como sabedor es un canal de comunicación entre lo sagrado, lo visible y lo invisible” (Mamo Roberto Nacogui, 2014).

Los abuelos se convierten en el canal de comunicación a través del cual hablan entes superiores como los ancestros y lo elementales, esto es logrado gracias a que los abuelos guardan en su ser un corazón dulce y una mente clara, que ha sido preparada a través de años y años de reflexión, pagamento, trasnochos, aceptación y apertura de alma por medio de plantas sagradas, lugares sagrados y un camino de aprendizaje lleno de (conciencia humana); los abuelos trabajan diariamente en su condición de ser gente, un ser humano humilde, lleno de nobleza, sencillez y honestidad, caso contrario a la idea occidental de buscar día tras día la felicidad afuera en el exterior mediante objetivos materiales y simbólicos.

Estos sabedores ancestrales logran desarrollar grandes habilidades a través del tiempo, habilidades de curación mediante la palabra logrando un procedimiento terapéutico, en el cual la palabra o consejo logra ingresar en la psique de la persona reconfortando su esencia, Gonzáles reconoce el valor de esta habilidad diciendo que “La palabra dulce sana, ella contiene una propiedad medicinal que disuelve las fronteras y que cohesiona los corazones de sus oyentes en un solo corazón: En las sociedades herederas de Occidente se ha perdido en gran medida el poder original de la palabra” (2008, pág. 34).

Cómo lo reconoce Gonzáles hoy en día se ha perdido el poder del que está dotada la palabra, el hombre moderno al alejarse de su cultura ha olvidado el poder que en ella existe, por tal razón ya no acude a ella, por el contrario se dirige a la ciencia quien no es capaz de sanar las enfermedades del alma, el corazón y la psique, ya que la razón no vence donde el corazón no siente, los problemas del ser son sanados por y desde el sentir; hoy no hay ser humano en el El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 806 mundo actual que sienta más que un Abuelo o un mayor espiritual, es él quien enseña que la madre sana al hombre a través de las plantas y la conexión con la tierra.

La palabra dulce nace del corazón pensante de un abuelo como representación de la sanación de madre Tierra, ésta logra llegar directamente a la psique de la persona enferma llevando un mensaje de curación, vida y cuidado, al ser palabra dulce (blanca y pura) toca inmediatamente a la esencia de la persona quien se siente movida internamente, con manifestaciones de conciencia corporea tales como un palpitar lento y una respiración profunda seguidas de un sentimiento de pasividad y tranquilidad, lo cual devela la potencia sanadora que esta palabra contiene dentro sí misma como vibración, es fuerza amorosa de protección y bienestar manifestada en sonidos que conforman letras, frases u oraciones, las cuales logran ser comprendidas por el hombre que ha sido enseñado a entender solo este nivel de compresión para así poder ser sanado.

De la palabra dulce deviene la palabra de poder la que surge de la combinación entre la razón y el corazón, es palabra mágica, palabra poética, como dice Gonzáles “la Palabra Poder es capaz incluso de llegar al corazón del mundo (el corazón de uno mismo) y regresar con el discurso inicial que permitió que el Gran Chamán formará el cielo y la tierra” (2008, pág. 35). El abuelo tiene la serenidad que brinda la sabiduría de quien vive en la tierra, es sublime y sutil, pues de allí surge la palabra de poder que puede llegar a cualquier persona, no diferencia entre clases sociales, religión, o país, es palabra universal, palabra de corazón desde la hondura de la tierra.

Plantas sagradas

La Tierra, nuestro hogar, está viva con una comunidad singular de vida. Las fuerzas de la naturaleza promueven a que la existencia sea una aventura exigente e incierta, pero la Tierra ha El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 807 brindado las condiciones esenciales para la evolución de la vida. La capacidad de recuperación de la comunidad de vida y el bienestar de la humanidad dependen de la preservación de una biosfera saludable, con todos sus sistemas ecológicos, una rica variedad de plantas y animales, tierras fértiles, aguas puras y aire limpio. El medio ambiente global, con sus recursos finitos, es una preocupación común para todos los pueblos. La protección de la vitalidad, la diversidad y la belleza de la Tierra es un deber sagrado (UNESCO, 2000, pág. 1).

Las plantas sagradas son elementales los cuales nacen de la tierra, de las montañas, ríos y campos, en ellas se encuentra la cura a todas las enfermedades y malestares que el mundo occidental hoy día padece, por medio de ellas se obtiene la fuerza y el alimento que la Madre

Tierra brinda a los humanos. Si en ellas se deposita fe (aspecto que se retoma más adelante) se puede obtener fortaleza, tranquilidad, paz, dulzura, amor, alimento, concentración, diferentes tipos de facultades que ayudan al hombre en las distintas etapas de la vida. A través de una planta sagrada las personas pueden obtener respuestas y aclarar el corazón; son la representación misma de la sanación en el hombre.

Existen diferentes tipos de plantas sagradas que al ser recibidas con respeto brindan una verdadera naturaleza de sanación, los Abuelos nos enseñan cómo debemos tomarlas, sus nombres y sus facultades como alimento espiritual, entre las plantas más usadas en los pueblos

Mhuysqas se encuentra el ayu (Abi maya o Coca), planta sagrada que permite repensar la palabra y transmitirla en pensamientos profundos, es medicina natural que fortalece el autoconocimiento de sí mismo y de la Madre Tierra, es elemento de sanación, de verdad y valor; el Hate Kulchavita explica que el ayu:

…ayuda a hacer más intensa la disposición interior para la tarea que hacemos en la

noche al lado del fogón de atrapar pensamiento. Para atrapar pensamiento tenemos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 808

que atrapar silencio, es decir que la conexión básica es establecer un estado de

quietud, de silencio interior que permita una conexión, un estado mental superior a

través del cual aparece la claridad, la visión, el consejo de sabiduría y las razones

profundas del qué hacer. (Daza, 2013, pág. 15).

Desde la vivencia y la experiencia adquirida durante el proceso de investigación se logra comprender que el ayu es planta sagrada, un aliado para la sabiduría pues permite acallar los pensamientos y centrar al hombre para que hable su espíritu en representación del corazón y el sentir, es pensamiento de corazón aquel capaz de superar la barrera del mundo visible de la razón, para llegar al estado de conciencia donde se encuentra lo invisible, también vista como un aliado en el siguiente fragmento de narrativa… se me brindo un poco de ayu (planta sagrada para asentar pensamiento), el cual para mí es como un aliado de poder que al masticarlo y tomar su jugo, me brinda la fuerza necesaria para estar y pensar, es como si mambeara las palabras y los pensamientos para llenarme de fuerza, esa noche más que nunca agradecí que me compartieran un poco de ayu (aclaro mis pensamientos) (Comunicación personal, 2014).

“si no hay corazón dice Eudocio Becerra, profesor indígena uitoto—, no funciona la articulación de las palabras ni la organización de las ideas en el cerebro. El corazón tiene que funcionar para que funcione la cabeza. Pensar con el corazón es sacar nuestras ideas y nuestros sueños desde el corazón al resto del cuerpo y a la cabeza, y no al revés” (James & Becerra citados por Daza, 2003, Pág. 31). La gran facultad de pensar con el corazón (corazonar) es alcanzada gracias a las plantas sagradas como el ayu y el ambil quienes tienen dentro de sí mismas, elementos que sintonizan e inspiran a la tranquilidad, la dulzura y la paciencia.

Facultades usadas constantemente por los Abuelos en la tarea curativa de brindar consejo y sanación. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 809

La planta de tabaco es un gran maestro que enseña de manera fuerte con mareo, náuseas y dolor de cabeza, limpia y saca el negativo del cuerpo mediante una liberación profunda de emociones, donde la chuma (manifestada con reacciones fisiológicas de mareo, vómito, y debilidad en el cuerpo), genera un proceso de aceptación interno en donde la persona debe reconocer que el malestar del cual está sufriendo, hace parte de su estructura egoica, lo cual paradógicamente dificulta e impulsa el proceso de sanación, pues al manifestarse en forma de ego, las personas no contemplan a ese malestar como algo negativo que deban soltar y dejar ir de sus vidas; el tabaco logra esa fuerte confrontación entre el ego y la razón, para que la persona logre llegar a una verdadera sanación desde dentro, desde la esencialidad de la psique del malestar.

Tener un proceso de curación con una planta sagrada implica descubrirnos en lo positivo y lo negativo, por tanto requiere de valor, verdad, entrega y amor. El tabaco es entonces y de manera conclusiva una planta de respeto que al ser trabajada de manera correcta, puede llenar de tranquilidad y dulzura a quien la toma, así lo evidencia el siguiente fragmento de narrativa: …

Luego que el profesor encendiera el tabaco y lo compartiera a la profe Andrea el tabáquico llego a mí, yo lo tome con mucho respeto y siguiendo las instrucciones lo empecé a sentir por todo mi cuerpo a manera de limpieza y de fuerza, yo sentía que el humo que me rodeaba me ayudaría con el miedo, así que con ese pensamiento lo trabajé, tocando mi hombro izquierdo, recordando a mi abuelo y en el hombro derecho honrando a mis ancestros; después de unos minutos compartí el tabáquico con mi compañera Viviana que a su vez lo trabajo y lo compartió a los demás compañeros, hasta que llego de nuevo a mí, al tomarlo entre mis manos sentí que era dulce, y me brindaba tranquilidad de la dulzura que manifestaba el femenino de la profesora Andrea, era El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 810 cálido y me hacía estar tan tranquilo que sentí que ese femenino era la fuerza de la Madre, la cual siempre nos calma y tranquiliza cuando algo no está bien (Comunicación personal, 2014).

Otra de las medicinas que se usa tanto para el proceso de curación como de limpieza es el

Chirrinche (bebida artesanal destilada a base del jugo que se obtiene al moler la caña), una herramienta de limpieza, aceptación y reconocimiento, en la cual los Abuelos encuentran un elixir de conocimiento que funciona para el acercamiento a la verdad de sí mismos. En la investigación del encuentro y desarrollo del sí mismo desde la cosmogonía Kogui se hace un acercamiento a esta ancestral bebida, la describen “como ayuda para visualizar el camino a la curación, el chirrinche nos permite cuestionarnos para darnos cuenta de la realidad en la que vivimos. El chirrinche desnuda mi mentira y me cuestiona sobre mi conciencia indígena” (León,

2011, pág. 437).

El chirrinche es una bebida sagrada poco conocida por occidente (o abusada como bebida alcohólica), es usada especialmente por los indígenas para limpiar y soltar, es una bebida que logra calentar al cuerpo y la mente para que por medio de esta calidez se logre sacar todo lo que está adentro haciendo daño, es un como terapéutico de curación a través de la aceptación y la conciencia de sí mismo (querer ser sanado); si no es tomada bajo esta conciencia el chirrinche puede hacer perder a la persona en un vacío de embriaguez y confusión como lo hace el efecto del Alcohol “El chirrinche es la medicina que calienta dando vida” (León, 2011, pág. 537).

Lograr ver en las plantas una fuerza de alimentación, curación, claridad, reflexión o simplemente belleza, es algo que occidente pasa por alto al estar centrados en la medicina artificial, aquella que busca enfermar más a las personas para que sigan el ciclo de consumismo, terapéutica de llenado químico que en nada benefician, como lo dice Solana y Senties quienes hablan de un redescubrimiento de las plantas de poder, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 811

Redescubrir las Plantas de Poder de ninguna manera me vuelve un científico, creo

que debo agradecérselo a mi inconformidad e insatisfacción con el orden actual en

que vivimos, donde se exalta lo material y se ignora y menoscaba al mundo del

espíritu, donde se da culto al cuerpo y se envenena a la mente, donde se gastan

millones de dólares en sustancias artificiales para combatir las enfermedades y se

finge ceguera para no ver la infinidad de recursos prácticamente gratuitos que nos

brinda la naturaleza y que además no son venenos-antiveneno, sino regalos de un

Ser Creador que nunca ha dejado de ver por nosotros y que nos puso en este

planeta acompañados desde siempre por los fungus, la flora, la fauna y los

minerales, pero mejor aún nos dio un yo interno que siempre nos acompaña, que

jamás se aleja, que tiene comunicación directa con Él y que lo único que tenemos

que hacer es despertarlo” (2009, pág. 35).

Este redescubrimiento es lo que poco a poco se está dando por parte de occidente al sentir que la medicina química no está siendo efectiva para las enfermedades que se presentan hoy en día, por tal motivo la ciencia está recurriendo a los saberes ancestrales de los indígenas, para buscar las respuestas que los químicos no han logrado resolver, y para ello quieren estudiar las propiedades de las plantas.

Lugares sagrados

Son sitios donde se mueven fuerzas que no son perceptibles para los sentidos guiados por la razón, en estos lugares el corazón y el sentir son las principales herramientas para lograr conexiones espirituales con los ancestros, lugar donde se nutre el alma y el espíritu de las personas que los honran. Los lugares sagrados pueden transmitir diferentes tipos de mensajes a El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 812 las personas (mensajes de fuerza, de amor o de unión…) estos lugares tienen un nivel de significancia que se evidencian desde la dimensión corporal, lugar de la conciencia en donde la persona despierta una serie de sensaciones como (frío, mareo, náuseas…) que en un estado gradual de la apertura hacen entender que la naturaleza vive y vibra a través de él.

Una experiencia inigualable y fuera de la imaginación es lo que se logra sentir en un lugar sagrado, ejemplo de ello se muestra en el siguiente fragmento de narrativa...

…Luego me dirigí a una piedra que estaba a la orilla de la laguna, puse mis pies

firmemente en ella y mojé mi cabeza, de inmediato sentí como entraba en la laguna, era

como si pudiera sentir todo lo que tenía a mi alrededor, estaba conectado al todo, estaba

con la madre; al instante sentí que debajo de mis pies crecían raíces que se extendían por

toda la montaña y me permitían ver todo lo que pasaba sin necesidad de usar mis ojos, la

visión de la racionalidad por un momento se apagó y con un fuerte latir desde mi interior,

los ojos del corazón se abrieron para mostrarme la inigualable belleza y magia de la tierra

(Comunicación personal, 2014).

Lugares tan sagrados como la laguna de Iguaque son sitios en donde se perciben y se mueven fuerzas ancestrales que ocultan secretos universales, los cuales se abren en sintonía a la apertura humana sobretodo evidenciada por los Abuelos y los indígenas, como lo expresa el Hate

Kulchavita en su texto retornando por el camino de los antiguos…

Los lugares son sagrados no por una simple construcción simbólica, sino por el

conocimiento que se estableció desde el principio, desde el origen, de que hay

unos puntos que concentran energía y que son la expresión del gran sistema

territorial. Así, se acude a los lugares que son lagunas, cerros o cierto tipo de

grandes piedras porque en ellos está contenida una gran cantidad de información El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 813

vinculada a ese gran entramado. Esos son los lugares para hacer sewá, es decir,

para hacer acuerdo. En esos sitios buscamos la información, ahí están las causas de

la expresión biofísica de la vida, animales, plantas, ciclos de la lluvia, ritmos

naturales (Daza, 2013, pág. 15).

Son el puente entre el mundo físico y racional y el plano consciente espiritual, pues guardan un infinito conocimiento del cosmos, los Mhuysqas son guardianes de aquellos sagrados saberes los cuales les permiten ver, sentir y escuchar a los elementos de la naturaleza que para el hombre occidental no son más que objetos y accidentes inertes.

Los lugares sagrados impregnan de vida al ser, le brindan claridad y distensión a los sentimientos más rígidos y aparentemente aislados, estos sentimientos son tomados por la madre tierra en una reconfortante energía la cual logra llevar a la persona a un proceso de transformación, de aceptación y de entrega, asunto que de fondo devendrá en un proceso de transcendencia y curación que finalmente le permitirá al ser terrestre una conexión profunda al universo de los ancestros.

Por medio de una total entrega y apertura de pensamiento en sintonía con la tierra se logra llegar a una experiencia cumbre de realización total. Esta gran hazaña de realización trascendente se alcanza a partir de un reencuentro con la raíz y de una entrega espiritual hacia los ancestros de territorialidad, honrándolos y reconociéndolos como entes superiores llenos de sabiduría y conocimiento acerca del universo. Se insiste que a partir de allí se comienza un camino en donde el sentir (corazón-pathos) es la principal herramienta (método investigativo) para recorrer el mundo, desde allí se conectará con la fuerza que mueve (Madre Tierra) quien sanará, limpiará, guiará, alimentará y llevará al hombre a encontrar su esencia almifica en un estado de realización total con el universo. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 814

Los Mhuysqas viven en constante diálogo con la madre tierra por medio de los lugares sagrados, en ellos logran conectarse a dimensiones superiores que elevan su espíritu y su conciencia más allá de la realidad y la razón, esto ha sido una virtud que a pesar de la brutal colonialidad eurocéntrica se ha logrado conservar a través de los años; estos lugares guardan la armonía del mundo, contienen en su interior los secretos del universo y el espíritu de cada ser vivo que habita en la tierra. Están conectados entre sí y cumplen la función de equilibrio planetario, son la conexión de la tierra con las dimensiones místicas y espirituales superiores, así como con lo humano, actuando como receptores y distribuidores de puenteos cosmogónicos. En el siguiente fragmento de narrativa se evidencia como el Abuelo Fernando logra una perfecta e increíble conexión con el lugar sagrado…

Recuerdo la imagen inicial que tuve al momento de acercarme a la laguna, el

Abuelo Fernando de pie frente a Iguaque. En mi impresión era ver y sentir que él

hablaba con ella,(era sentir como por medio de algunos canticos y silbidos, le

preguntaba a la Madre ¿cómo estaba?, ¿qué necesitaba?, qué le podíamos

brindar?), se comunicaba de una forma tan natural y fantástica que sentía como el

vínculo entre ellos era muy estrecho, me asombró tanto dicho suceso que solo me

mantuve mirando fijamente aquella escena; los minutos siguientes fueron de

silencio y admiración frente al abuelo; él por su parte se mantenía frente a la

laguna pronunciando diferentes palabras, era como una conversación, una oración

de honra y respeto hacia ella y el lugar sagrado en general…(Comunicación

personal, 2014).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 815

El lugar sagrado se comunicó directamente con el Abuelo Fernando quien en ese momento actuaba como traductor, pues era quien lograba escuchar y entender a la perfección a la laguna mediante lenguajes imperceptibles, para luego decirnos a nosotros en un lenguaje comprensible lo que manifestaba ese ser místico; el lugar sagrado comprende cuando un abuelo está allí y de inmediato se manifiesta mediante los elementos de la naturaleza (lluvia, viento, sol y tierra), de hecho, percibir esta comunicación deja comprender que estos lugares viven. De fondo es un asunto de silencio, de escucha y comprensión en un nivel más alto del pathos cósmico. El Hate Kulchavita dice que la conexión que se logra con la tierra permite conocer el estado actual del territorio y sus necesidades, sin embargo es evidencia de esta investigación que también permite comprender el mensaje terapéutico del cuidado propio como sanación:

Cada lugar sagrado del territorio, nos permite entender lo profundo de la vida,

cada lugar sagrado contiene fuerzas cósmicas-teluricas, de tal manera que

cuándo nos ligamos allí, potenciamos condiciones inmanentes en los seres

humanos, esto nos permite contar una primera aproximación, a los contenidos

profundos del territorio, sugiere una manera de acercarnos a ellos, recomienda un

tiempo propicio para visitarlos, aconseja unas prácticas para alimentar la tierra y

establecer una actitud para replicar la madre, retornar VIDA (Daza, 2013, pág.

26).

A través de las manifestaciones corporales como instancia epistémica del conocimiento ancestral es como se le posibilita al ser humano consiente acercarse y conocer el estado real del lugar sagrado, sentido místico de una comunicación que posibilita entender en esta otra lógica sí el lugar necesita ser sanado, alimentado y cuidado; es a partir de allí que el hombre busca la forma en la que pueda reestablecer el equilibrio natural de la tierra y el suyo propio en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 816 resonancia, los rituales de pagamento buscan en mayor medida alimentar y sanar el territorio espiritualmente. El Hate Kulchavita hablaría de un sistema de vida y de complementariedad entre los seres vivos:

En correspondencia con el sistema de pensamiento, el territorio es un múltiple

entramado. En lo evidente, es un conjunto de movimientos de la tierra expresado en

montañas, lagunas, valles, ríos, cuencas, altiplanicies y, junto con ello, una expresión

diversa de la vida: una comunidad de plantas, árboles, comunidades múltiples de

animales que se mueven por el suelo, el agua, el aire y otros dentro de la tierra. Ellos

conforman una gran comunidad, un sistema que funciona en interdependencia y en

relación de complementariedad (Daza, 2013, pág. 31).

El lugar sagrado es un ser lleno de infinitos conocimientos, sabiduría e inteligencia, a partir de él devienen todos los principios naturales de los cuales se rige y depende el hombre.

El principal mensaje de esta geografía sagrada trasmitido por la Madre a través de los abuelos del territorio es el de volver a nuestra raíz a encontrarnos con nuestro origen, a sembrar de nuevo en la tierra y a su vez en nosotros como seres humanos, a partir de allí es de donde nace esta investigación como forma de volver al mito, un recreo del sentido antigüo del orden, reencuentro de nuestra identidad como Mhuysqas, desde este argumento de la sensibilidad como certeza de conocimiento superior hemos sido formados como semillero de personas, de amigos, de familia, de fuerza y de espíritu que poco a poco crece obteniendo conocimientos de abuelos, montañas, valles, ríos y plantas.

Las montañas, lagunas, rocas, bosques y campos transmiten miles de mensajes que a diario son ignorados por la humanidad, estos mensajes de la tierra no logran ser escuchados debido a que el oído que hoy las personas tienen solo sirve para escuchar un mundo de El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 817 materialidad superficial de la razón técnica de la ciencia y su desarrollismo tecnológico. Los

Mhuysqas por el contrario hayan en la tierra las respuestas que componen y configuran el cosmos, al estar inmersos en el ambiente natural se hallan en totalidad de estancia de ser y logran conectar con el origen de la existencia, la madre, en palabras de Zapata…

La aparición de los sitios sagrados vislumbra la ruptura de la homogeneidad del

espacio, que permite el tránsito de una región cósmica a otra, a través de procesos

propios de comunicación (Eliade 1957) que establecen los humanos con el medio

natural que los rodea. Así las montañas, los árboles, las piedras, el agua y los

caminos se convierten en símbolos y lenguajes que expresan el vínculo entre el

mundo de los espíritus y el mundo terrenal (2010, pág. 2).

En un lugar sagrado se logra callar las voces de la razón y la lógica abriendo paso a una unidad más pura de entendimiento, la co-razón, el pathos, “el sentir”, en donde el cuerpo y el corazón como símbolo de la conciencia corpórea se transforman en receptores de la energía de la tierra que trasmutan esa energía en alimento para el alma.

Estos espacios mantienen unas relaciones que permiten no solo, mantener el

equilibrio de las energías, si no que regulan las acciones y reacciones de los

humanos en el territorio, validado a través del pensamiento ancestral como

principio básico de una dinámica y unas lógicas inmersas en la diversidad. En tal

sentido, muchas de las culturas consideran las montañas como imágenes que

expresan un vínculo entre los dioses y los humanos, razón por la cual, representan

espacios (vivienda) a imagen y semejanza de la naturaleza (Zapata, 2010, pág. 3).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 818

En los lugares sagrados se logra curar los padecimientos que el alma de las personas sufren a partir de una entrega del negativo a la tierra, (sentimientos de malestar como tristeza, rabia e ira), allí se realiza un proceso de aceptación donde se reconoce al negativo como un maestro que enseña desde el dolor, de esta manera se desliga al malestar de su estructura egoica generando un proceso de sanación a nivel psíquico. Luego de aceptar y reconocer al negativo con humildad se procede a entregar a la naturaleza a manera de descarga. El sentido del pago es en forma de alimento espiritual (o en positivo tal cual lo llaman los indígenas), esto permite devolver ese negativo como transacción energética de la relación sagrada, una especie de economía truecada de la relación mística en donde se descargan y liberan del cuerpo tensiones de valía negativa que enferman internamente ocasionando por bloqueo lo comúnmente llamado como enfermedad mental.

Lo anterior implica la comprensión de la physis como espectro natura de componentes

Psico-terapéuticos de sanación. La majestuosidad del lugar sagrado despierta la conciencia del existir, del estar y del ser de los humanos, permite pasar del mundo de lo visible al mundo de lo invisible a través de los telares o hilos energéticos que se mueven en la espiritualidad de la madre

Tierra, es una especie de evidenciación de lo otrora inexistente por incapacidad epistémica corazonante, lo que el Hate Kulchavita explica del territorio como una memoria viva la cual guarda grandes misterios y sentimientos de madre (femenino):

El territorio es a la vez una memoria, es recuerdo, recuerdo de los tránsitos

realizados en el devenir humano, vínculos afectivos, vínculos emocionales que

tejen la afectividad humana en los lugares donde se ha transitado, donde se ha

vivido, donde se siembra, donde se camina, donde se festeja. El territorio es

territorio de recuerdo y vínculo emocional, pero a la vez es un territorio de lugares El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 819

sagrados, de lugares de conexión y comunicación con el misterio, territorio de

ritualidad, territorio de ceremonia, de comunicación trascendente, de vínculo

espiritual y en especial, el territorio es un inmenso y polifacético entramado de

circuitos de energía en el orden molecular. Circuitos invisibles de pensamiento que

conectan una gran telaraña en las que se destacan ciertas montañas, lagunas y

piedras, pues allí están contenidos nodos energéticos que ligan el mundo invisible

con el visible, son los lugares donde actuamos, donde incidimos, donde incidimos

desde el pensamiento humano para alimentar la tierra, donde actuamos en el orden

energético de la mente de la naturaleza (Daza, 2013, pág. 32).

La revelación de lo sagrado en los lugares depende del grado de conexión que la fe como procedimiento de la confianza permita establecer entre el corazón y la tierra, pues es aquel vínculo lo que permite que la esencia, la vida, y la historia de la cultura indígena, sea develada en su naturaleza de poder y vida.

La certeza de nuestro camino permite expresar que existen lugares en los que se mueven fuerzas masculinas y femeninas, lugares de padre y madre, los cuales representan entidades de curación y respeto, en los lugares percibidos con fuerza femenina (fuerza de Madre) se experimentan sensaciones de abrigo y calidez que colman de energía lo humano, estos lugares

(Lagunas, ríos, pozos y mares) son fuente de curación en donde las lagunas se transforman en mantas suaves y cristalinas que alimentan las raíces de la tierra, en sus aguas ocultan grandes misterios y están colmadas de propiedades que renuevan el espíritu, en ellas se encuentra el origen de la vida (el agua), son el vientre gestante del mundo.

Los lugares en los que se siente el femenino y la fuerza de madre son territorios en los cuales se percibe una atmosfera de amor que cobija y reconforta al ser humano, trasmitiendo un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 820 mensaje de amor y unión familiar (madre-hijo). Lugares como la montaña de Temsaca y la laguna sagrada de Iguaque trasmiten estas sensaciones de divinidad en lenguaje místico a las personas, puesto que en ellos vibran fuerzas vitales de amor, cuidado y sanación. En el siguiente fragmento de narrativa queda plasmada una experiencia de reencuentro con la fuerza de madre…

Era algo fuera de la imaginación, cerré mis ojos y podía ver claramente lo que

pasaba a mis espaldas sin necesidad de voltear a ver, realmente yo era la montaña,

yo estaba en la montaña y las raíces de mis pies conectaban con el todo, me

permitían sentir y llenarme de todo, de todo lo que había. No sé realmente como

expresarlo en palabras, pero creo poderlo comparar con lo que un bebé siente en el

vientre de su madre estando conectado por el cordón umbilical (un vínculo de vida,

en el que se alimenta, se cura y se cuida); estuve allí conectado con la madre tierra

un par de minutos, volví al inicio de la civilización Mhuysqa y me encontré en el

inicio de mi vida (Comunicación personal, 2014).

En sentido complementario, los lugares con fuerza de padre (templo sagrado de Suamox y los petroglifos de Iza) son sitios donde se recibe guía y consejo de fortaleza en lo vital, son lugares de mucho respeto, pues allí el hombre logra llegar a reflexiones fuertes sobre su propia vida, padre como la fuerza protectora que guía y da claridad en el pensamiento que surge en montañas, valles, rocas y peñas, allí la fuerza del lugar acoge al hombre bajo fuerzas espirituales de guía y protección, de claridad y consejo, de esperanza y sanación.

El consejo que brinda un lugar con fuerza de padre se convierte en curación, pues a través de él la persona planea su camino hacia el futuro. En la vereda de Usamena por ejemplo se encuentran ubicadas unas rocas conocidas como petroglifos, en las cuales se halla depositada una gran fuerza masculina de padre, en la actual investigación se tuvo la oportunidad de visitar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 821 aquellas rocas y encontrar una increíble experiencia evidenciada en el siguiente fragmento de narrativa que demuestra cómo se percibe la fuerza de padre en un lugar sagrado…

…así fui fijando mi mente hacia un par de árboles que se estremecían detrás de las

piedras, uno con más fuerza que otro, de manera representativa sentí a un Abuelo y

un hijo, un abuelo y un aprendiz, mientras el más alto de ellos, al parecer el más

viejo se mantenía firme, el otro más pequeño se movía con la brisa y el viento,

entendí que así pasa conmigo y en general con nosotros, pues mientras la falta de

fe o la fuerza del negativo nos estremece y en mi caso particular me estremece con

fuerza y me desorienta del camino espiritual, el padre espiritual, los sabedores y

guías ancestrales se mantienen firmes a mi lado para guiarme y dar apoyo; la

sensación que por ese momento recorría mi cuerpo, era la de mantener la cabeza

abajo como si no se tuviera el permiso de levantarla, pues estaba frente a algo tan

grande que era mejor presentarse con humildad, con temblor en el cuerpo y no el

temblor que surge a partir del miedo, un temblor que en mi generó respeto ante el

lugar (Comunicación personal, 2015).

Es relevante resaltar la importancia de los lugares sagrados hoy en día, por que como dice Zapata configuran la estructura de nuestro mundo, esto es algo que nuestros ancestros (hijos de la tierra) respetaron y entendieron, pero que para el hombre (hijo de occidente) es casi imposible entender ya que solo ve en la tierra una forma, la más posesa, de ganar dinero, antinatura del dominio humano del mundo que enferma a la madre como lugar que sitúa lo planetario. Como resultado de esto tenemos miles de ejemplos de las manifestaciones de malestar de la tierra: temblores, cambios climáticos, lluvias y sequias, es trabajo del mundo actual volver a la tierra y reconocerla como fuente de origen. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 822

El territorio sagrado es un concepto que ha prevalecido en la simbolización

territorial indígena, su incidencia en la organización del uso y manejo del territorio

ha permitido caracterizar las relaciones de las comunidades con la tierra, donde el

tiempo configura la realidad que se asemeja con un tejido que se une al cordón

umbilical a través de la mezcla de hilos de colores que aparece sobre el territorio

con una sucesión de nombres, figuras y lugares familiares, lugares que tienen

nombres y significados, que explican las características, usos, historias y memorias

de los acontecimientos con él relacionados. En tal sentido esta sabiduría tiene

vigencia en la actualidad para resolver tensiones territoriales entre las distintas

entidades, configurando unidades y diversidades, que reflejan el mundo en su

complejidad. Así cada piedra es diferente de cualquier otra, cada región es

diferente a otra y se articulan a través de semejanzas que constituyen un sistema de

relaciones integrados al pensamiento ancestral (Zapata, 2010, pág. 13).

La sanación encontrada a lo largo del proceso de investigación da cuenta de un nivel de profundidad y de superioridad en comparación con la curación, entendiendo que la curación busca tan solo la extinción de la enfermedad y el malestar teniéndolos como su único objetivo, al realizar dicha acción la curación cumple con su función como categoría básica de atención de necesidades inmediatas del cuerpo físico, es decir la curación trabaja la enfermedad a través del cuerpo de la persona para eliminarla una vez realizada la acción.

En complemento, la sanación no busca simplemente eliminar la enfermedad fisiológica del cuerpo, en la sanación se encuentran componentes de cuidado y bienestar los cuales reconfortan y reintegran lo corpóreo y el corazón como esencia del ser humano, en ella se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 823 encuentra inmerso lo categórico del amor (amor de madre) un fuerte sentimiento de protección, el cual alimenta el corazón del hombre llenándolo de tranquilidad y serenidad, este nivel de sanación tan sagrado es alcanzado en lugares donde la fuerza del femenino y de madre tierra se sienten con fuerza. Lugares como la laguna sagrada de Iguaque son capaces de remitir al hombre al sentido integrado de lo ventral como morada y principio de madre, experiencia primera y fundante vital desde la esencialidad real del cuidado y la protección, telos primordial de la prescripción psicoterapéutica. La sanación entonces busca el bienestar en totalidad del ser humano y mediante el cuidado y el amor se logra alcanzar un estado de plenitud y tranquilidad psíquica como evidencia.

Psicoterapia Ancestral y sus categoriales terapéuticos:

La psicoterapia es una concepción sobre todo occidental y lógica de los procesos científicos que definen e intervienen en los intereses de acción alrededor de las transformaciones humanas en su dimensión psíquica y como problematización de la dimensión de la salud en correspondencia con los presupuestos socioculturales de la vida. En términos del hallazgo de focos hermenéuticos vitales para la comprensión, conviene proponer que el asunto central en una metalógica integral obedece a un propósito del cuidado, (del griego therapeuein: cuidar), la terapia como un asunto de poner cuidado al psiquismo humano en su amplia concepción tautológica del sentido de la vida como evolución de la conciencia hacia la divina experiencia de ser, es decir, la aún vital y más allá, urgente apuesta de armonía, constante y último sentido del mito de psique en su manifestación de metampsicosis (evolución del alma) esencial.

La psicoterapia en un sentido ancestral como prescripción sagrada de los lenguajes misticos de la indianidad, implica desde la manifestación más descriptiva el método de camino ancestral, por esto la sanación se otorga como sacro oficio (sacrificio de la curación) mientras se El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 824 sube la montaña, se trabaja el pensamiento y se resiste la enseñanza humilde del cansancio como acción liberadora y e-terna (sin tiempo) de la metamorfa, condición orugante del sentido del desarrollo propio, suerte de crisálida de lo liberador que da paso a lo humanizante como certeza de lo divino (no dividido) y experiencia de encuentro en sí mismo. El signo núminoso de lo materno ancestral como lenguaje místico de eternidad habla con el silencio y desde allí vibra en manifestación cuántica de resonancia corporal de bien-estar o mal-estar. Es la instancia meditativa de la concentración de conexión fenoménica y trascendente con calidad de radicalidad

(raíz) el logro de sentido pathico que en comunión con la sabiduría de la telúrica divinidad promueve los benditos halos de sanación que como consejos del alma planetaria en instancia profunda de comunicación con el alma propia destellan la fuerza de origen necesaria para curar.

Al final el movimiento de sanación es desde el ego en instancia de humildad que se entrega como conciencia a los movimientos de la vida.

La psicoterapia ancestral como método de tratamiento es una terapia de humanización, es entonces el sentido de una curación del alma como cuidado amoroso y camino evolutivo en sí mismo. Implica el ejercicio de soltarse al sí de las fuerzas de la evolución, la voluntad de integrarse en flujo al río energizante del theos de amorosidad en la metafísica de Aristóteles visto similarmente como el amor, denominado Thyzhy en lo Mhuysqa.

Tal camino, para el indio, de volverse gente, de adentrarse en el sendero de encuentro contenido en la formulación de lo Mhuysqa, del PSY humano universal y ancestral, implica comprender y promover que:

Hemos sido convencidos de que el alma viene incorporada al ser humano desde su

nacimiento. Nada más falso. El hombre no viene completo a este mundo. Procedente de

las capas más bajas de la naturaleza, en su evolución biológica ha llegado a adquirir la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 825

forma humana, pero está lejos de ser un hombre concluido, insan camil, un hombre

perfecto, como dicen los musulmanes. Esa es precisamente la misión que debe cumplir

todo proyecto de hombre recién llegado a este planeta, perfeccionarse a sí mismo. Es algo

que debe lograr por un esfuerzo continuado de su voluntad (también Transpersonal). Y en

ese esfuerzo (de lo terapéutico), radica la única posibilidad que tiene de ser realmente

dueño de sus actos y de su destino, (Rebetez, 2000, pág. 11).

Lo evidenciado es el poder tríadico de un psiquismo que evoluciona en su misión humanizante de omnipotencia, omniciencia y eternidad. El chispazo creador humanizado que fecundado desde el Puyky como la sabiduría del corazón propone la tarea de cuidado, tratado

(tratamiento) y curación, se insiste, sólo esta tarea en sus multiples manifestaciones y compensaciones como logos sagrado de pensamiento mítico, pathico y de divinidad, asomará al hombre al momento constante aquiesencial de la integralidad de un humano séptuple, pues es de reconocer que Mhuysqa tiene siete letras, siete ideogramas, siete esencias en su camino totalizante.

La psicoterapia es entonces el camino (método-meta/odos), de Y, mhu Y sqa, (i…..o), entre la substancia y la esencia, punto de inflexión de la materia al espíritu, de lo animal a lo humano en sí, del negativo deshumanizado como circunstancia egóica y sombría del dolor y humanamente límitado, que maravillosamente sin embargo en su maestría integrativa de aceptación se moviliza al positivo consciente humanizante, positivo de padre y madre, de ser mhuysqa en propiedad, del As Guy Mhuysqa (el ser mhuysqa). La categorización de gente en la vida, la evolución en los ojos del conocimiento que en mismidad ancestral, en principio de

éticidad indígena también corresponde a una cadena mística de ser desde la apertura y cuidado El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 826 propio que permanece inmanente y emana cuánticamente en la voluntad divina y confiada (fe: confianza) del estar.

Un estar telúrico, mismidad de tierra y caminante de mitos, de usos y costumbres, de prácticas indígenas que recrean en su potencia mítica colectiva y del indivisible individuo lo actualizante de los saberes de la liberación espiritual para la curación prepersonal, hierofanía y sacralidad de conciencia evolutiva, de la sensibilidad corpórea conciente y del pathos que perdona, la integración como gran aceptación personal y la evolución aquiesencial y eterna de lo transpersonal. Un movimiento de la fuerza de los ancestros como empuje del alma (cuerpo y alma) que en potencia despliega su misión de curación propia, naturaleza de su gran tarea de perfección.

En este sentido conviene aclarar:

…que el hombre posee un principio inmortal, llamado alma, que sobrevive a la muerte

del cuerpo: pero esto es muy vago y conviene desechar esta vagedad para comprender

que aunque esta afirmación fuese verdadera resulta una transposición de la realidad, pues

nadie ha de decir: creo que tengo un alma, sino sé que soy un alma. Porque en verdad el

hombre es un alma que tiene cuerpo… Hemos de convencernos de que somos un ser

inmortal de esencia divina, una chispa del fuego de Dios, que ha vivido durante siglos

antes de envolverse en esta vestidura llamada cuerpo y que vivirá innumerables edades

después de que éste se reduzca a polvo… Lo que la mayor parte de los hombres les

parece toda la vida es tan solo un día de la verdadera vida del alma… (Leadbeater, 2009,

págs. 3-4).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 827

Entonces la comprensión de lo psicoterapéutico en esta translógica propone una ontología del fenómeno en comprensiones ampliamente trascendentes y que en su esfuerzo incluso de recuperación de la esencialidad ancestral occidental signifique la resiembra por la manera filosófica de nominación, el alma, pues allí está el valor radical con excelencia y totalidad, valía sólo manifiesta en el mito de psique, y en este, una integración del saber perenne universal que de cuenta integral del qué y solo allí proposite las maneras vivenciales, metódicas y terapéuticas, aquí ancestrales indígenas, sobre el cómo.

Pero además, desde el sentido antropológico de esta concepción psicoterapéutica que se presenta, el hombre que se devela se asume allende a la subjetividad eurocéntrica de la razón, y se nos muestra tal cual el pensamiento indígena como hijo de la tierra, es decir, independiente de la centralidad de un concepto como la subjetividad, aquí la vida psíquica se establece como orden ancestral de sujeción a la tierra pues solo se es sujeto sembrado en el planeta en relación agrícola con la madre de origen telúrico y desde ella, estando en ella, una fuerza de raíz que de suyo planetaria se recrea en la siembra de linajes que en la multiplicidad de abuelos, padres y nietos se dinamiza como animosidad psiquista de vitalidad.

Este hombre que se entiende desde el ejercicio terapéutico de la ancestralidad asiste hoy a un poderoso retorno a la naturaleza y a un logos universal, integral y trascendente pensado desde las ciencias de la tierra, la ecología y las diversas posibilidades espirituales. Así, esta nueva cosmología supera la natura de los medievales y modernos y en mayor proximidad a la physis, pero aún más allá, concibe la naturaleza como conjunto articulado de todas las energías cósmicas, desde el vacío cuántico a la complejidad de la materia y su acción poiética develante de un logos universal y cósmico que se expresa en la vida e historia del sujeto arraigado y produce cultura, significación filosófica, psicológica y espiritualidad como aboriginalidad propia. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 828

Abadio Green del pueblo Thule (Cuna) de Colombia va a plantear al respecto:

Para ser todos los pueblos del mundo, los abuelos, nos han dicho que no basta la máscara de las palabras; debemos preparar también el cuerpo, las manos, los ojos, la boca, los oídos.

Pero para ver al otro no bastan tampoco los ojos, no basta tener el cuerpo y el corazón preparados, debemos seguir cuidando que la mezquindad no nos engañe, que la vanidad nos los ciegue, porque entonces los abuelos anaconda y los abuelos águila no habitarán en nosotros. Ir al otro y volver del otro no es un problema intelectual, es del corazón. Yo puedo estudiar al otro, además es un deber hacerlo, pero comprenderlo es distinto. Conocer la vida de los pueblos, hacer la pregunta necesaria que conduzca al saber (¿filosofía?), no sale del conocimiento del científico, sino del corazón del hermano, de la hermana. Sólo así es posible que las personas puedan salir de su mundo y entrar en los otros mundos; de lo contrario es posible que vayan y regresen pero sin comprender, pisando las hierbas que dan vida porque imaginan que son maleza, profanando la tierra porque la ven como negocio, violando el agua con su indiferencia. Se podrá ir a muchos mundos pero si no se tiene el corazón preparado, no veremos nada, pero esta es una forma de ir y venir: la del mundo que se hace persona, la de todos que se hacen UNO. Para que el corazón de cada hombre le permita volar, es necesario que todos los hombres se hagan UNO. Los rituales solo se pueden hacer si hay comunidad, sin comunidad el ritual es vacío. Sin comunidad universal no es posible sostener el mundo. Nuestras leyes de origen, nuestro derecho mayor, asumen la responsabilidad con todos los pueblos del mundo. Es un derecho de nosotros y para nosotros, no son unas leyes subterráneas, sino del centro de la tierra; son leyes que atienden a los animales y las yerbas indefensas, son leyes para la vida y para después de la vida (Green, 2003, pág. 53). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 829

El acceso a esta epistémica del ethos más allá del logos instrumental analítico, se da

“principalmente a través del pathos (estructura de la sensibilidad), del cuidado, del eros

(estructura del deseo), por medio de la intuición, de lo simbólico y sacramental” (Boff, 2001,

Pág. 34). Es la idea del hombre que cuida y que se cuida, y que está dentro como parte de la naturaleza, no solo frente a ella, una psicoterapia de la entrega del ego y el logos a la physis, el hombre que parte de la naturaleza e interviene en ella, bajo la mirada dialéctica de tener un integral y mutuo destino compartido de tranformación. En esta relación se halla una totalidad de sentido con dirección de complejidad capaz de regeneración basada en la convivencia, adaptación, tolerancia y solidaridad de la naturaleza como fuerza para la vida personal, comunitaria y social.

Por muy subjetividad libre y autónoma que sea (de frente a la naturaleza), el ser humano se encuentra arraigado, como un ser en el mundo, junto a otros y dentro de la naturaleza (es parte de ella)… la autonomía de los sujetos ha de tener en cuenta aquello que se adecua y conviene a los condicionamientos objetivos de la naturaleza humana y se articula con ellos. Esto sería ético.

Esta vida humana apunta a opciones de sentido y a valores que constituyen el buen vivir y estructuran el bien estar de la casa humana, es decir, del ethos. En este sentido, tiene razón

Heráclito al afirmar: el ethos es el daimon (es decir, el genio protector) del ser humano (Boff,

2001, Pág. 50).

El humano terrícola, se constata, es un ser que está ahí, en evolución pero todavía naciendo como proyecto infinito, de allí su sensación de autotrascendencia, igual, es un ser de relaciones ilimitadas junto a otros en el mundo y en el cosmos, no olvidar consigo mismo. “Es un en sí. Pero un en sí original, pues solo se realiza como en sí en la medida que es para los demás, El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 830 en la medida en que sale de sí y se relaciona con los otros. Así pues, es un en sí relacionado”

(Boff, 2001, Pág. 52). Un indio solo como viable sanación en la mismidad de la otredad, en comunidad.

Tal vez, uno de los elementos más emergentes de este diferente sentido terapéutico en el hombre está en la construcción de un ethos mundial que se centra en la posible respuesta a la perpetuidad occidental del logos griego y el cogito cartesiano. Por esto, la tan sola aceptación de relativizar la razón como el centro, la abre en perspectiva hacia abajo y hacia arriba. “Hacia abajo emerge de algo más antiguo, profundo y elemental, la afectividad, el cuidado esencial y el pathos. Hacia arriba se abre a la experiencia espiritual, que consiste en el descubrimiento del yo abierto a la totalidad y el descubrimiento de la totalidad presente en el yo, la interconectividad de todo con todo” (Boff, 2001, Pág. 71).

El planteamiento básico, es el del sentimiento, el afecto y el cuidado como la experiencia básica de la vida humana. No el logos sino el pathos, siento luego existo como principio fundamental. El Lebenswelt, articulación existencial concreta y protoprimaria del ser humano.

Comprender el problema humano de que la existencia nunca es pura, es coexistencia y siempre sentida y afectada por la emocionalidad tan cuestionada del fundamento griego. Ser en el mundo como un existencial, como experiencia constitutiva, básica y axial de lo humano. Por eso, el pathos como la forma más básica de conocimiento, aunque de diferente naturaleza, englobando y desbordando a la razón, gira en torno al sentimiento, “a la afectividad, el cuidado, el eros, la pasión, la compasión, el deseo, la ternura, la simpatía, el arte y el amor. Este sentimiento básico no es simplemente una moción de la psique, desde ella es mucho más; es una cualidad existencial, un modo de ser esencial, la estructuración ontica del ser humano” (Boff, 2001, Pág.

72). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 831

Primero siente el corazón y solo después reacciona el pensamiento, en este sentido del orden epistémico de la ciencia propia, hoy día se sabe que gran parte de las células que componen el corazón humano son de naturaleza neuronal. Por esto, desde el pathos se da la sim- pathia de identificación con lo real, antes de la hegemonía de la razón y se recuerda que el hombre vivía en unión mystique con todo, sintiéndose visceralmente ligado a ellas, “participaba de la naturaleza de las cosas y las cosas participaban de su naturaleza. Sentía que las piedras, las plantas y los animales pertenecían a su propia historia, aunque se perdiese en la sombra de los tiempos antiguos. Por eso, el sentimiento de pertenencia y de parentesco universal permitía una integración adecuada de la existencia humana; se mostraba respeto y veneración hacia todos los elementos, especialmente los seres vivos y la tierra, venerada como la gran madre” (Boff, 2001,

Pág. 73).

La más pura tradición del filosofar ancestral indígena como estructurante psicológico, un pathos místico, que al ser, devela un logos vibrante de ética universal. Se resalta, intacto en su esencia a pesar de siglos colonizadores de imposición racional de modernidad, es además, aún posible y urgente, a pesar de que el olvido cayó sobre todo esto tan necesario más que nunca. Por esto, es relevante poner el pathos como proyecto histórico a la que se integre la tradición del logos. Pathos y logos, tal cual la psicología de la transpersonalidad, o la filosofía perenne integral, deben darse la mano. Así como lo habían dicho las filosofías indígenas y orientales tan aplastadas e indiferenciadas por la arrogancia del logos occidental, cabeza y corazón se tienen que redescubrir como dimensiones de un mismo cuerpo, el diálogo pacífico y budista de la mano derecha con la mano izquierda. De aquí, como unificación nacerá el cuidado (Heidegger en ser y tiempo) como esencia concreta del ser humano. A propósito, dice el mamo Roberto Nacogui El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 832

(2012) de la Sierra Nevada nosotros somos los guardianes y protectores de la tierra, tenemos el mensaje de la vida desde el corazón del mundo. Refiere el abuelo Mhuysqa Fernando Castillo

(2009), la madre puso a su hijo indígena para que la cuidara. Para Leonardo Boff:

El ser humano es fundamentalmente un ser de cuidado más que un ser de razón o de

voluntad. El cuidado es una relación amorosa para con la realidad cuyo objetivo es

garantizar su subsistencia y abrir el espacio necesario para el desarrollo. Los humanos

ponen y han de poner cuidado en todo: cuidado por la vida, por el cuerpo, por el espíritu,

por la naturaleza, por la salud, por la persona amada, por el que sufre y por la casa. Sin

cuidado la vida perece (Boff, 2001, Pág. 74).

El hombre se ha descuidado y se ha dejado de él y ha dejado el planeta, condición de dejadez como amenaza sobre la biosfera y el destino humano. Por tal motivo, solo un ethos de esta condición ética posa de imperativo frente a la urgencia de los excluidos, la crisis estructural del trabajo, y el impase ecológico. Sin embargo, la sola razón, y la nueva comprensión de la ecología como cosmología no tienen suficiencia de fuerza y fundamento para prevalecer los imperativos categóricos y su prescripción a pesar de la amenaza de destrucción humana; el asunto del demens humano de la razón y su absurdo. Boff, en este sentido toma mano teológica transcultural para sostener que solo la suprema realidad puede fundar algo supremo.

Por no saber quién somos, por no advertir que el Reino del Cielo está en nosotros, nos conducimos del modo generalmente tonto, a menudo insano, a veces criminal, tan característicamente humano. Somos salvados, somos libertados e iluminados, al percibir la hasta entonces inadvertida bondad que está ya en nosotros, al volver a nuestra eterna base para quedarnos donde, sin saberlo, hemos estado siempre. Platón se expresa en el mismo sentido cuando dice en la República, que "la virtud de la sabiduría contiene, más que otra cosa, un El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 833 elemento divino que permanece siempre". Y en el Theaetetus saca la conclusión, en que tan a menudo insisten los que practicaron la religión espiritual, de que sólo haciéndonos semejantes a

Dios podemos conocerlo —y hacerse semejante a Dios es identificarse con el elemento divino que, en el hecho, constituye nuestra naturaleza esencial, pero que preferimos no advertir en nuestra ignorancia, involuntaria en su mayor parte (Huxley, 1999, pág. 22)

Por esto, en términos perennes y bioéticos solo desde el pathos como método puede emerger la dimensión espiritual como profundidad humana y universal y en ella la mística como saber

Dicho brevemente:

Podemos decir que la espiritualidad es aquella actitud por la que el ser humano se

siente ligado al todo, por la que percibe el hilo conductor que liga y religa todas las

cosas para formar un cosmos. Esta experiencia le permite al ser humano poner

nombre a este hilo conductor, dialogar y entrar en comunión con él, pues lo percibe

en cada detalle de lo real. Lo llama con mil nombres distintos, fuente originaria de

todas las cosas, misterio del mundo o simplemente Dios. Y la mística es aquella

forma de ser y de sentir que acoge e interioriza experiencialmente ese misterio sin

nombre y permite que impregne toda la existencia. No es el saber sobre Dios, sino el

sentir a Dios lo que funda lo místico (Boff, 2001, Pág. 90).

Sin la espiritualidad y la mística, la ética es de frialdad de códigos y la moral un control social de domesticación cultural. En síntesis para Leonardo Boff, “la ética como práctica concreta, remite a una atmósfera más profunda, a aquel conjunto de visiones, sueños, utopías y valores incuestionables que se compendian en la mística y en la espiritualidad. Son como el aura sin la cual ninguna estrella brilla. Hacen que la ética tenga que ver más con la sabiduría que con El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 834 la razón, más con el vivir bien que con el juzgar bien y más con las virtudes que con las ideas”

(Boff, 2001, Pág. 91).

Lo contrario, el desarrollo filosófico de un hombre cada vez más amante de sí en su voluntad de dominio, pero a la vez escindido en sí y de la naturaleza misma que lo engendra. Un hombre que si bien puede no negar su propia espiritualidad y racionalidad, si rechaza la del otro o lo otro. La sustitución de la fe animista a la creencia en su solo Dios y luego a la abstracción racional del mismo proyectada desde él hombre y su alma solo mental, la gran razón, el gran ego conquiro o ego cogito, la muerte de Dios por el control racional humano. En este sentido, “Dios se manifiesta en todos los demás aspectos de la creación, éstos solo obtienen su significación espiritual de su relación con el hombre. El doble orden que surge de esta visión, es la contraposición de lo espiritual contra lo material. Todo aquello a lo que se niega la espiritualidad se convierte en un orden inferior de cosas, sin ninguna clase de derechos. Por ejemplo, hoy día nadie rezaría una oración antes de talar un árbol o roturar un terreno; y si se hiciera, iría dirigida al señor por haber puesto allí el árbol, pero nunca al árbol cuya vida va a destruir” (Lowen, 1972, pág. 260).

En el espíritu no solamente tenemos, sino que somos el conocimiento unitivo de la Base divina. Análogamente, Dios en el tiempo se basa en el eterno ahora de la Divinidad sin modo.

Es en la Divinidad donde las cosas, vidas y mentes tienen su ser; a través de Dios tienen su devenir, un devenir cuya meta y designio es volver a la eternidad de la Base. En consecuencia, la

Divinidad no es nunca, para el expositor de la Filosofía Perenne, el mero Absoluto de la metafísica académica, sino algo más puramente perfecto, que debe ser adorado más reverentemente todavía que el Dios personal o su encarnación humana. (Huxley, 1999, Pág. 31). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 835

En la sanación se encuentran componentes de cuidado y bienestar los cuales reconfortan el cuerpo, el corazón y la esencia del ser humano, en ella se encuentra inmersa la categoría de amor (amor de madre) un fuerte sentimiento de protección, el cual alimenta el corazón del hombre llenándolo de tranquilidad y serenidad, este nivel de sanación tan sagrado es alcanzado en lugares donde la fuerza del femenino y de Madre tierra se sienten con fuerza, lugares como la laguna sagrada de Iguaque son capaces de remitir al hombre al inicio de su origen, al vientre de madre donde no existe otra sensación más que la de cuidado y protección. La sanación entonces busca el bienestar en totalidad del ser humano y mediante el cuidado y el amor se logra alcanzar un estado de plenitud y tranquilidad psíquica.

Para continuar y completar la sinergia ancestral, nos encontramos con la Salud, principio fundamental del camino, donde el Amor es esencia de la creación, sinónimo de vida, condición de paz, una paz que es cultivada en el interior de cada persona, cada grupo o comunidad. Un

Amor basado en el perdón, consciente de que el miedo lleva al juicio, odio o resentimiento, un amor que no se limita a lo humano y se abre al cobijo y abundancia de la Pacha Mama, considerándola un ser vivo que inspira alimento, cuidado y protección, por tal razón se responde a ella respetando sus entrañas, tomando lo necesario, devolviendo su amor. Las relaciones de armonía con la naturaleza y entre los seres humanos son la fuente de la salud, por ello enfermamos cuando nuestro pensamiento no corresponde a la fuente creadora, es ilusorio o trasgrede la ley de la Madre Tierra, en este sentido se cura cuando se ordena la mente, se cura mediante la confesión, el consejo, el pagamento, las plantas y todo cuyo espíritu contribuya a la sanación

Por eso, urge para suramérica una vivencia terapéutica reafirmada en el conocimiento ancestral indígena, en ese mito reconocido por Jung (1995) donde "el hombre necesita ideas y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 836 convicciones generales que le den sentido a su vida, y le permitan encontrar su lugar en el universo" (Jung citado en León, 2012, Pág. 860), un mito que conecta con lo profundo, con la fuente que integra la racionalidad y reconoce esa posible filosofía olvidada y tal vez oscurecida por las sombras históricas colonialistas. Un mito qué, por ejemplo, visto en la mirada de

Benjamín Walter (las tesis de la historia), propone la necesidad de la existencia, de la vida frente al vacío de una filosofía eurocéntrista y racionalista. Entonces una metafilosofía de la vida y del ser, de paso una filosofía no desprovista de “las astillas del tiempo mesiánico” (Benjamin, 2003, pág. 187) de las tan anheladas astillas de divinidad. ¿Por qué no? nuestras astillas tan inmemoriales como memoriales de Pacha Mama, Hitcha Guaia, Chiminigagua, Bochica, o

Bachué .

En este sentido, el propio Benjamín supone que la filosofía “podrá habérselas sin más ni más con cualquiera, si toma a su servicio a la teología qué, como es sabido, es hoy pequeña y fea y no debe dejarse ver en modo alguno” (Benjamín, Pág. 2/11). De todas formas, se presenta un sencillo concepto de religión (el cual no se podría profundizar aquí, dada la complejidad) como apoyo a la importancia del debate teológico inmerso en Benjamín y su proyección sobre las tendencias filosóficas de la mística y la espiritualidad, y éste es precisamente el de concebirla simple y profundamente como “la fuerza individualmente más poderosa para generar sentido”

(Wilber k. , 1998, pág. 15).

La propuesta reflexiva es hacia la emergencia creativa de ese sentido que implica la divinidad humana del ser, el sí mismo, que sin dejar lo humano reconoce y se apropia de la totalidad, una postura indígena que integra dicho conocimiento a su cosmogónica y lingüística manera, proponiendo así desde su perspectiva de comprensión del ser (de lo total) también una filosofía y cosmovisión hacia la construcción y afirmación de un saber propio. Significa otorgar El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 837 valor a un saber que recurriendo a Benjamín invierte los términos revolucionarios del marxismo

“Marx dijo que las revoluciones son la locomotora de la historia mundial. Pero tal vez las cosas se presenten de muy distinta manera. Puede ser que las revoluciones sean el acto por el cual la humanidad que viaja en ese tren aplica los frenos de emergencia” (Benjamín, 2003, Pág. 108). Y reconstruir esas nominadas practicas indígenas desde el planteamiento de sabiduría más perenne y propio suramericano, bien sea de las vivencias místicas ancestrales, o de las practicas del estar, específicamente del estar Mhuysqa, puede ser metafóricamente, el freno, al ausente sentido desde la loco-motora occidentalidad.

Las prácticas místicas de la expresión terapéutica Mhuysqa

De pronto, el asunto sea aceptar la posibilidad de incluir y puentear (a manera de la conocida metáfora de la bisagra) la aparente e inagotable tarea de las categorías eurocéntricas y ponerlas a circular y dialogar humildemente con el saber ancestral mismo y con las evidencias que sólo las practicas perennes o del estar como otra realidad filosófica posible permiten al debate sobre nosotros mismos como humanos, gente de América, hermanos del árbol y del río e hijos de la tierra, en nuestra cercanía trascendente al ser y como descendientes vivos de los

Muiscas y su sabiduría.

Por supuesto que debe haber una construcción sociocultural del conocimiento aportante necesario para la consolidación de éste tan solo preludio de le reflexividad (y emocionalidad) implícita y necesaria para encontrar de nuevo esta mística de la sabiduría en lo muisca, sin embargo, hay una pretensión más profunda y es evidenciar que nuestros abuelos y nuestro saber ya lo decían, y con mayor conciencia y desde hace miles de años y profundidades anteriores lo sabían, no es una respuesta del oprobio, es el derecho y el coraje de recrear lo propio para recrearnos en su aceptación. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 838

Pero, se ha hablado de prácticas, y conviene aquí, antes de culminar en el filosofar, proponer qué pueden ser. Si lo que nos ocupa es un asunto tan ontológico, trascendente y místico no resultaría un contrasentido proponerlo al alcance de lo práctico, tal vez positivo y funcional. Pues no, se aclara que de la que se habla aquí como práctica, es la de la humildad y la entrega, no la del dominio técnico, es la práctica del anhelo trascendente primero a la tierra, sin la trampa de la pureza racionalista, es querer:

…develar nuestra identidad desde nuestro ser más propio, autentico, queremos

desprendernos de lo que nos mantiene siendo, queremos desprendernos de lo que

estamos asidos (y como atados), al igual que la manzana, no para dejar de ser, ni para

no ser, ¡todo lo contrario!, buscamos desprendernos para reintegrarnos a la

originalidad de ser, sin menosprecio por el suelo, por la tierra, o por lo vegetal. Si

negamos nuestras propias raíces, jamás podremos develar nuestro ser, nuestra

identidad (Cepeda, 2009, pág. 66).

Conviene evidenciar el debate que John Dewey desnuda en el prologo al libro ya mencionado de Radin y señalar desde su agudo y critico apunte y en un trasfondo del origen filosófico el tan solo y refutable lugar secundario de los usos y creencias sobrenaturales y mágicos en conexión con las realizaciones prácticas de los pueblos primitivos. Frente al cual va a definir qué: “el hombre primitivo era, en verdad, más realista y de mayor sentido práctico para encarar los hechos de lo que comúnmente se cree” (Radin, 1960, pág. 16) . Es decir, para estos respetados filósofos, existe un criterio de practicidad resaltable en el contenido trascendental de las prácticas primitivas que lejos del prejuicio occidental al considerarlas en su segundo nivel, son de primerísimo lugar en el sentido filosófico de estos pueblos originarios. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 839

Igualmente, para el también respetado sabedor (filósofo) mayor Daniel Maestre del

Pueblo Kankuamo de la sierra nevada, “la espiritualidad es una práctica, -así como estamos somos incapaces de conocer el gran espíritu, no es pensando, tan solo somos humanos y gracias a

Dios somos imperfectos y nos podemos equivocar, por eso tranquilo, practique, eso es lo espiritual, caminar y caminar la tierra como unidad, lo que se camina es el espíritu; si es comiendo es comiendo, si es cultivando, es cultivando, si es espiritual es mambeando, pensando bonito, confesando, trasnochando, esos son nuestros usos y costumbres, nuestras vivencias ancestrales-” (Palabra en trasnocho indígena, 2010).

Se recuerda al respecto y en términos de la filosofía perenne que de manera sincrónica con el practicar ancestral, ésta se ocupa principalmente de la Realidad una, divina, inherente al múltiple mundo de las cosas, vidas y mentes. Se evidencia como relacional una manera de lo filosófico más allá de lo especulativo y además demandante de un camino trans-lógico de experimentación.

Pero la naturaleza de estas realidades tal que no puede ser directa e inmediatamente aprehendida sino por aquellos que han decidido cumplir ciertas condiciones haciéndose amantes, puros de corazón y pobres de espíritu. ¿Por qué ha de ser así? No lo sabemos. Es uno de esos hechos que hay que aceptar, gústenos o no, y por implausibles e improbables que parezcan.

Nada, en nuestra experiencia diaria, nos da razón alguna para suponer que el agua está compuesta de hidrógeno y oxígeno; sin embargo, cuando sometemos el agua a cierto tratamiento harto duro, se pone de manifiesto el carácter de sus elementos constitutivos. Análogamente, nada, en nuestra experiencia diaria, nos da mucha razón de suponer que la mente del hombre sensual medio posea, como uno de sus ingredientes, algo que se parezca a la Realidad inherente al múltiple mundo o que sea idéntico a ella; sin embargo, cuando esa mente es sometida a cierto El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 840 tratamiento harto duro, el divino elemento, de que, por lo menos en parte, está compuesta, se pone de manifiesto, no sólo para la mente misma sino también, por su reflejo en la conducta externa, para otras mentes. Sólo haciendo experimentos físicos podemos descubrir la naturaleza

íntima de la materia y su poder latente. Y sólo haciendo experimentos psicológicos y morales podemos descubrir la naturaleza íntima del espíritu y su poder latente. En las circunstancias ordinarias de la vida sensual media, este poder continúa latente, no manifestado. Si queremos despertarlo, debemos cumplir ciertas condiciones y obedecer a ciertas reglas, cuya validez ha demostrado empíricamente la experiencia (Huxley, 1999, Pág. 7).

Igualmente, y a manera de apoyo al pretendido concepto, en la filosofía integral de autores como Ken Wilber, Walsh y Vaughan se plantea al respecto de las prácticas trascendentales lo siguiente:

Las personas se encuentran con vivencias extraordinariamente intensas de diversos estados de conciencia totalmente externos al ámbito del vivir cotidiano o a cualquier cosa que hasta entonces hubiera reconocido occidente. Para algunos, estas vivencias incluían experiencias trascendentales que históricamente solo se habían dado como acontecimientos espontáneos, excepcionales y de corta duración o -más raras veces aún- como un cambio gradual de la conciencia en individuos que dedicaban una parte importante de su vida a prácticas contemplativas, meditativas o religiosas… Para algunos individuos la posibilidad de alcanzar de manera perdurable un estado de ser tal como el que se vislumbra en momentos de meditación profunda o se encuentra en las descripciones de diversas disciplinas no occidentales, ofrece un atractivo tremendo (Wilber K. , 1992, pág. 22).

De nuevo Huxley desde su texto de filosofía perenne (1947) va a coincidir en que:

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 841

…en cada época ha habido algunos hombres y mujeres que han querido cumplir las

únicas condiciones bajo las cuales, según lo demuestra la cruda experiencia, puede

lograrse tal conocimiento inmediato, y algunos de ellos han dejado noticia de la

Realidad que así pudieron aprehender, y han intentado relacionar en un amplio

sistema de pensamiento los datos de esta experiencia con los datos de sus demás

experiencias. A tales expositores, de primera mano, de la Filosofía Perenne, los que

los conocieron les daban generalmente el nombre de "santo" o "profeta", "sabio" o

"iluminado". Y principalmente a éstos, porque hay buena razón para suponer que

sabían de lo que hablaban, y no a los filósofos o literatos profesionales, he acudido

para mis selecciones (1999, Pág. 9).

Entonces, las prácticas ancestrales Mhuysqas son evidentemente horizontes cosmogónicos dispuestos por linajes de sabiduría que centrados en los usos y costumbres como prácticas, vivencias o experimentaciones también filosóficas, antropológicas, psicológicas, teológicas y espirituales, develan el misterio de penetración intuitiva, sensitiva y sagrada hacía lo más profundo y total. Si se sigue el consejo de los abuelos, ¿cómo diluirse pues en la experiencia trascendente del ser? Pareciera, estando, y estando con totalidad en la tierra. Estar y ser no se dan cognitivamente de sopetón, sin emergencia cuántica de la substancial energía que cósmicamente todo lo recrea, tan sólo la maestría de la entrega posibilita diluirse en ser, pero, como dice el amigo Kankuamo, así como estamos es muy difícil, por eso se practica, pero aquí, es la práctica de la conciencia eterna, la práctica del silencio, la doxa ancestral, el filosofar interpelado desde el ser y mediado con los elementales, el agua, el fuego, el aire, la tierra, intervenido por los jefes o espíritus mayores, llevado por los abuelos espirituales y el consejo de los abuelos internos, el abuelo corazón, la palabra dulce del tabaco, del tihiqui, del chunsua, del El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 842 poporo, del mambeo y la calidad y sapiencia sagrada de rituales y símbolos cosmogónicos que acercan a las primeras causas y los primeros principios definidos por los indígenas y en especial por los ancianos desde las malocas como la ley de origen , la ley del espíritu, la ley de Dios.

Entonces, “es un hecho, confirmado y reconfirmado durante dos o tres mil años de historia religiosa, que la Realidad última no es clara e inmediatamente aprehendida sino por aquellos que se hicieron amantes, puros de corazón y pobres de espíritu. (…) Análogamente, ninguna teorización acerca de los indicios que puedan oscuramente atisbarse dentro de la experiencia ordinaria, no regenerada, del múltiple mundo puede decirnos tanto acerca de la divina Realidad como puede aprehender directamente un espíritu en estado de desprendimiento, caridad y humildad (Huxley, 1999, Pág 11).

El trasfondo filosófico y porque no ontológico de esta ley de origen se evidencia en la siguiente cita del investigador mexicano Adrian Recinos:

Los seres humanos tenemos que descubrir y cultivar la conciencia plena para hacernos uno con ella. Esto fue lo que hicieron los ancestros milenarios y entonces crearon sistemas de vida cosmogónicos. El fruto de la relación tridimensional es el reconocimiento, la correspondencia, la paz, la alegría y la felicidad con la vida; es la armonía entre los pueblos. La conciencia cósmica siente, intuye, escucha, habla, observa. Su expresión es ilimitada. La humanidad ha heredado cualidades de la conciencia cósmica, del creador formador, pero debe cultivarla más allá de los organismos que le posibilitan, debe cultivar la existencia espiritual

(Recinos, 1984, pág. 116).

Esta ley de origen, en cuya raíz están los usos y costumbres, las prácticas para estar en unidad con la conciencia mayor se vuelven base de las culturas indígenas para fundamentar su identidad ancestral y la fuerza para sobreponerse a las circunstancias adversas. “Esta ley incluye El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 843 principios de vida (código de valores), linajes (filiación por clanes), idioma, territorio, rituales, elementos sagrados, mitos y arte entre otros. Este acervo se organiza en un sistema cultural claramente delimitado, marca el rumbo de su dinámica a lo largo del tiempo y es transmitido de generación en generación, mediante la tradición oral” (Principios Ancestrales de los Pueblos

Indígenas, 2011, Pág. 82).

Ahora, quisiera traer la siguiente expresión “la palabra filosofía habla ahora en Griego.

La palabra griega es, en cuanto palabra griega, un camino” (Heidegger, 2004, pág. 34) Es un camino que en últimas va a develar la palabra más vibrante del ser y evidenciar el sentido que posa en el chispazo universal óntico que nos anima. La palabra filosofía como sabiduría, (tal cual Aristóteles), puede hablar en Muisca. Muisca es, hay que aceptar que también es, en cuánto palabra muisca, un camino (Suna). Pero más allá de ser solo un camino de palabra y pensamiento, es un camino de gente (Muisca significa gente) y para ser gente están los usos y costumbres, las practicas, pero solo siendo gente se es tierra y siendo tierra se es espíritu, eso enseña la ley de origen, ser uno con la madre, ser uno con el padre y tal vez a eso se refiere

Kusch cuando propone que en lo indígena se encuentra, aún después de tanto (historia, dolor, colonia), “el estar siendo”.

Fue Rodolfo Kusch el principal iniciador del empleo filosófico de la diferencia entre ser y estar, propia de nuestra lengua, para designar algo propio –aunque no exclusivo, sino universal- de la que él llama “América profunda” (que él, en sus trabajos antropológicos encuentra en las culturas indígenas, sobre todo andinas, y en la cultura popular).

En el interjuego de las tres dimensiones (estar ser y acontecer) se puede comprender (en abstracto) la existencia de los pueblos y de los hombres como un “estar-siendo-así” (Scannone,

1983, pág. 133). El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 844

Entonces en lo Mhuysqa, el filósofo (por llamarlo así) es el que quiere ser gente y escucha, aprende y practica la ley de origen, el sabedor es el que quiere ser gente, dice el abuelo

“a este camino uno es llamado por la madre espiritual, la madre tierra, y la ley de origen y los usos y costumbres son necesarios, porque estamos muy enfermos de razón y ego, muy alejados del espíritu”. Ya se mencionó atrás que para Heidegger hay que ir más allá de la razón técnica, pero he aquí un elemento más de nuestra propia sabiduría traducida a filosofía en mención del mismo llamado:

Establecido pues que los filósofos son interpelados por el ser del ente para que digan qué es el ente en cuanto que es, nuestro diálogo con los filósofos también tiene que sentirse interpelado por el ser del ente. Nosotros mismos, a través de nuestros pensamientos, debemos salir al encuentro de aquello hacía lo que camina la filosofía. Nuestro hablar debe estar en correspondencia con aquello que ha interpelado a los filósofos (Heidegger, 2004, pág. 35).

Esto mismo traducido a términos perennes y por perennes filosóficamente ancestrales, implica el reconocimiento de caminos de trascendencia que siendo ontológicos develan en la mayoría de tradiciones del mundo, incluida la occidental, pero allende o perenne al occidente moderno, el reconocimiento de una justa mística de lo emergente que una tradicional filosofía precisamente perenne integra así:

…la naturaleza de la Realidad una debe conocerse por la clara percepción espiritual de uno mismo; no puede conocerse mediante un pandit (hombre docto). Análogamente, la forma de la luna sólo puede conocerse por los ojos de uno mismo. ¿Cómo podría conocerse por otro?

¿Quién, sino el Atman (chispa de la totalidad en el hombre), es capaz de quitar las ligaduras de la ignorancia, la pasión y la acción egoísta? La liberación no puede alcanzarse sino por la El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 845 percepción de la identidad del espíritu individual con el Espíritu universal... La enfermedad no se cura pronunciando el nombre de medicina, sino tomando medicina. El Atman es el Testimonio del espíritu individual y de su obrar. Es el conocimiento absoluto (…) La Filosofía Perenne enseña que es deseable y aún necesario conocer la base espiritual de todas las cosas, no sólo en el interior del alma, sino también fuera, en el mundo, y, más allá del mundo y el alma, en su alteridad trascendente —"en el cielo". Puede empezar dirigiendo la mirada hacia adentro, a su tú particular y, por un proceso de "morir para el yo" —yo en el raciocinio, yo en la voluntad, yo en el sentimiento— llegar por fin al conocimiento del Yo, el interno Reino de Dios. O bien puede empezar con los tús que existen fuera de él e intentar advertir su esencial unidad con Dios y,

Dios mediante, uno con otro y con su propio ser. O, finalmente (y ésta es sin duda la mejor manera), puede procurar abordar el Eso último desde dentro y desde fuera, de modo que llegue experimentalmente al advertimiento de Dios como a la vez el principio de su propio tú y de todos los demás tús, animados e inanimados. El ser humano completamente iluminado sabe, con Law, que Dios "está presente en la parte; más honda y más central de su alma"; pero es también, y al mismo tiempo, uno de aquellos que, en las palabras de Plotino, ven todas las cosas, no en proceso de devenir, sino en el Ser, y se ven a sí mismos en el otro. Cada ser contiene en sí mismo todo el mundo inteligible. De ahí que Todo está en todas partes. Cada uno es Todo, y Todo es cada uno. El hombre, tal cual es ahora, ha cesado de ser el Todo. Pero cuando deja de ser un individuo, se eleva de nuevo y penetra el mundo entero (Huxley, 1999, Págs. 11-15).

Con todo y por último, incluido el aparataje y modelaje logocéntrico, se concreta; es importante y muy bonito el intento de visionar critico (teoría), de despertar del sueño de la realidad aparente, desear con intención la coexistencia del yo, el otro y lo esencial, del americanismo, lo pluricultural y el universalismo, y en ésta, el recuerdo, porque no, de otra ética El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 846 de principios, otra ciencia, otra ecología, otra estética en el vuelo sagrado de la conciencia, vuelo espectral del condor, la responsabilidad de afecto y razón, de energía vital en la búsqueda de mundos posibles dignos y justos, entonces otra política y economía, pero sobretodo una sabiduría también universal, mas fundante en el origen, en la tierra, en lo vegetal, “pues habla de lo divino del espíritu que se muestra hipostásicamente en el ser humano” (Cepeda, 2009, pág. 13) una sabiduría filosófica en la que subyacen respuestas por el ser y por las primeras causas y principios, para los muiscas y en muisca as guy mhuysqa, el ser muisca, otro filosofar, solo que el propio, no solo un problema lingüístico de traducibilidad de la palabra ser a una lengua extraña, más bien la evidencia de una filosofía tal cual la universal, de una palabra que en el fondo es silenciosa esencia y que desde el corazón humano y espiritual piensa y siente como y por el sentido total de la vida.

Entonces, por qué no un filosofar ancestral indígena Mhuysqa, si todo afirma por el sí.

¡Por encima de cualquier miedo! y parafraseando a Kierkegaard en un poema que soplo la vida… Arriesgarse produce ansiedad, pero no hacerlo significa perderse uno mismo. Y arriesgarse en el sentido supremo, es precisamente tomar conciencia de uno mismo.

Ego:

El ego es un iceberg. Fúndelo. Fúndelo en las profundidades del amor para que desaparezca y tú pases a formar parte del océano (Osho, 2004).

La comprensión del ego es una enseñanza vital y como gran maestro dominante que nubla y enseña, implica el descubrimiento de corazas en las personas y la tarea vital de darse cuenta de las máscaras que maneja el hombre haciéndose daño a sí mismo. En la enseñanza del ego están los maestros negativos que debilitan y educan con mano fuerte, es por eso que El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 847 reconocerlo va más allá de juzgar y criticar la manera en que devela su verdad, es la constante pelea que Jung expresa entre el ego y la sombra…

…señalo que la sombra lanzada por la mente inconsciente del individuo

contiene aspectos escondidos, reprimidos y desfavorables (o execrables) de la

personalidad. Pero esa oscuridad no es exactamente lo contrario del ego

consciente. Así como el ego contiene actitudes desfavorables y destructivas, la

sombra tiene buenas cualidades; instintos normales e impulsos creadores. Ego

y sombra, desde luego, aunque separados, están inextricablemente ligados en

forma muy parecida a como se relacionan entre sí pensamiento y sensación

(1964, pág. 118).

El reconocer el negativo o lo que Jung llamaría sombra es un trabajo que implica entrega, apertura de pensamiento y de corazón hacia la tierra. En la medida en que el hombre reconozca que parte de su raíz y psiquismo también surgen de allí, podrá entender que el negativo maneja estructuras del ego que le resultan adaptativas como posibilidades ocultas en la psique, esta liga estructural como dualidad paradógica del ego no deja dar cuenta y menos aceptación sobre el negativo y su tarea tanto destructiva (nublante) como pedagógica (luminosa) desde el daño. El no percatarse de ello bloquea la conciencia de reconocimiento sobre el trabajo terapéutico de soltar y dejar ir, impedimento del lugar de la sanación y el bienestar psíquico.

Un proceso psicoterapéutico de reconocimiento, aceptación y entrega de negativo se realiza en la comunión dulce de fuerzas y potencias ancestrales conocidos como Abuelos, sabedores, Mamos, ancestros, lugares sagrados o la Madre tierra. Mediante ellos se realiza un proceso de sanación ritual como descarga energética del negativo y reencuentro del esencial de sanación, bienestar, cuidado, amor, equilibrio y renovación espiritual. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 848

El ego positivo es una experiencia profunda que tras su presencia devela la fuerza rehabilitadora de lo positivo como pensamiento de curación, la consecuencia de su cuidado es la experiencia nostálgica de reconocimiento puro en la que se ve claramente el daño que se ha causado a sí mismo; es así que el negativo se equilibra para que el ego retorne a su lugar en los hilos energéticos de la Madre tierra, mientras por su parte el positivo emerge en la descarga y reconocimiento del negativo. El abuelo Fernando lo interpreta como “una entrega del negativo al origen para que la inteligencia de la madre tierra lo transforme en su grandiosa posibilidad sanadora” (2015, comunicación personal).

Osho diría que el “ego tiene toda clase de deseos y ambiciones, quiere estar siempre por encima de todo. Ese ego se aprovecha de ti y no permite ni que vislumbres tu auténtico ser, cuando tu vida está precisamente ahí, en la autenticidad” (Osho, 2004, pág. 15). El Abuelo

Fernando y los sabedores de lo ancestral constantemente recalcan en cada trasnocho la importancia de trabajar el ego, realizando a diario un proceso de revisión o des pulgue en el cual debemos reconocer y aceptar que en la mayor parte de nuestras vidas es el ego quien habla por nosotros, haciendo daño y haciéndonos daño a nosotros mismos, por tal motivo debemos en primer medida reconocer cuando es que está hablando el ego por nosotros, para luego poder desprendernos de él y lograr hablar con humildad desde el corazón.

Es el ego un gran maestro de enseñanza que nos permite realizar el proceso terapéutico en la psicología ancestral, ya que como lo reconoce Jung:

Es el ego el que proporciona luz a todo el sistema, permitiéndole convertirse

en consciente y, por tanto, realizarse. Si, por ejemplo, tenemos un talento

artístico del cual no es consciente el ego, nada le ocurriría. Incluso el don

puede llegar a no existir. Solo si nuestro ego se da cuenta de él, podemos El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 849

llevarlo a la realidad. La innata pero oculta totalidad de la psique no es la

misma cosa que una totalidad que es plenamente conocida y vivida” (1964,

pág. 162).

El ego es un conocimiento arduo del estado de sí mismo donde se muestran los miedos; una tarea evolutiva y consciente de la humildad y la aceptación como curación de aquello que se oculta tras la máscara del negativo; el ego es entonces un gran maestro de evolución hacia la consciencia por medio del cual el hombre puede llegar a un verdadero desarrollo, diría Jung en este sentido “que cada ser humano tiene originariamente una sensación de totalidad, una sensación poderosa y completa de sí mismo y del sí mismo- la totalidad de la psique- el individualizado ego-consciencia emerge cuando se desarrolla el individuo” (1964, pág. 128).

Tras la máscara del ego y en su inclusión se encuentra el verdadero ser de humanización psíquica el cual puede ser alcanzando a través de un largo camino de aprendizaje espiritual, este es un arduo proceso de conocimiento, confusión, ira, llanto, cuidado, alegría, amor y tristeza

(evidencia de la dinámica sabía del pathos), el cual permite finalmente llegar al nivel de aceptación donde la persona habrá de reconocerse como un ser incompleto y con vacío, que debe abrir su corazón para que madre entre en él y devele su ser, un alma en alimento de amor como telos totalizante. En este sentido el ritual de andar la tierra (o la montaña) puede evidenciar el fuerte conflicto del encuentro con el sí mismo, pues esto representa una carga de la alta densidad psíquica al cuerpo humano, el cual manifiesta esto como tensión, debilidad y bloqueo, dificultando así mismo cada paso que se da en el camino hacia a la trascendencia, este andar como sentido de caminar propio, del ego al corazón (la conciencia), y de la posibilidad de soltar negativos como practica de liberación.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 850

Se recuerda aquí la premisa ancestral del contacto con lo sagrado como conexión telúrica y espiritual de sanación. La aceptación de la angustia y del choque en mismidad en la montaña pone de fondo la posibilidad de lo esencial como aquello que esta después del valor de mirar lo egoico en dulzura de silencio. Osho dice que “Al desaparecer el ego, incluso en un estado de profunda inconsciencia, se nos concede la idea de dios” (Osho, 2004, pág. 23). Con un corazón lleno de humildad Madre entrará en mí para sanarme, alimentarme y cuidarme.

Perdón.

El perdón es el camino a la fuente (León, 2011, pág. 515)

El perdón desde aquí se plantea como una herramienta de reconexión con la madre tierra y en un grado muy alto con nosotros mismos, hemos de volver al origen de las cosas, de la vida, de Madre y Padre como lugares y realidades de sabiduría; en la medida en la que podamos reencontrarnos con la verdad, encontraremos el camino de vuelta, pues el perdón es la fuerza que enseña a retornar con paciencia y corazón dulce al lugar o al recuerdo del que partimos con negativo, la tristeza, el rencor, la ira o en palabra de abuelos, la candela del corazón como fuente de ese negativo, allí el perdón enseña a apaciguar ese fuego interno que quema, lastima y no permite que el ser humano sea en su telos de evolución.

Al sumergirse en el sentimiento profundo de desamparo es que se acrecienta la necesidad de volver a Padre y Madre como los movimientos generacionales de acogida, protección y perdón, allí está la enseñanza sensible y solicita del perdón redentor en su expresión más clara, pues en los brazos amorosos (pathos) de la Madre y bajo la luz del Padre se camina pausadamente sanando las heridas que ha dejado el malestar inconcluso. “El perdonar de corazón nos engrandece” (León, 2011, pág. 515).

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 851

Para llegar a esto primero debemos ver a la cara del dolor, reconocerlo y entender el por qué se encuentra presente, soltar y permitir que el flujo espiritual de la Madre entre en nosotros a sanarnos. El logro consecuente es el asomo a la posibilidad del perdón a nosotros mismos y por esta vía la emergencia de la redención con lo demás y los demás. Hay que aprender a tener en cuenta que siempre va a costar reconocer que es lo que nos cuesta perdonar, pues el negativo, el ego y el dolor hacen creer a la persona en un juego del control psíquico que necesita de ellos para vivir, siendo por ejemplo la expresión “perdono pero no olvido” una de las más usadas por el orgullo resentido de las personas, un falso y poderoso sentimiento egoico que en nada beneficia al ser humano y que logra acorazarlo en una fantasía de ego que no le permitirá ser total como lugar de encuentro con esencialidades de mismidad.

La enseñanza del perdón surge al reconocer con dulzura el momento de la historia personal en el que el pensamiento y el sentir se vieron nublados por el negativo, pues solo entonces, la terapéutica de lo ancestral como emergencia de las fuerzas sacras de lo esencial curativo dimensionan lo humano en la conciencia de entender el grado en el que estamos conectados al pasado de una forma inadecuada, atados a cargas pesadas que en muchas ocasiones no son nuestras, por eso pedir perdón como manifestación de la sensación de arrepentimiento es un proceso de reivindicación con la tierra como vientre, con padre y madre como siembra de la vida en el vientre y consigo mismo como mismidad evolutiva, es inclinarse hacia la Madre exponiendo lo más puro del corazón, pensamiento bonito y corazonante como confieso de la existencia nublante de negativo en el psiquismo, pues la intención honda de esta psicología nativa como tradición del cuidado del alma es mantenernos sanos y limpios espiritualmente.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 852

“La humildad está en reconocer y pedir perdón por los errores cometidos”

(Comunicación personal, 2014) los heredados y los de la historia más reciente, siendo así la experiencia redentora, una síntesis de las cuatro facultades que el abuelo Fernando recalca cada ser humano debería tener humildad, nobleza, honestidad y sencillez, allí se encuentra universal y transversalmente el perdón como forma de llegar a la tranquilidad y la paz interior. Se plantea el perdón entonces como la energía vital y fuente de equilibrio interno del psiquismo humano, se propone como un verdadero reconocimiento de sí, que enlaza positivamente al ser humano con su presente y su pasado, pues el perdón es el acto de entrega en el que se retoma la fuerza que parecía haberse perdido en los tránsitos y movimientos infinitos y generacionales de los puentes ancestrales de la vida desde los muy antiguos abuelos hasta hoy.

Perdonar es aceptar (mirando el dolor sin identificarse, agradeciéndole por su

enseñanza), confesar (las rabias, envidias, hostilidades, rencores) entregar (en

algún ritual a la Madre Tierra), dejar (soltando lo que ya no sirve, pues ya se

ha aprendido de eso), enterrar, fluir (aprendiendo de nuevo), volar y volver a

la fuente, donde está la esencia, donde se vuelve a creer. (León, 2011, pág.

912)

Fe

La fe ha sido planteada como el acto de creer sin necesidad de ver o, como el acto que por sí solo muestra a los hombres aquellos milagros que en algún momento consideraron inconcebibles, en lo indígena se convierte en algo más significativo y profundo, para los abuelos la fe no proviene de afuera, la fe es la potencia de la fuerza espiritual que el hombre necesita para curarse y ver con los ojos cerrados, subir la montaña es sentir como florece del interior la fuerza necesaria para estar y creer en ella como fuente de sanación natural. La fe mueve montañas y El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 853 también las hace brillar en la oscuridad de la noche, movimiento de la divinidad y de la mística del pathos como translógica mítica y ancestral de la ciencia perenne:

Mientras miraba aquella luz las preguntas, las dudas y el miedo

desaparecieron, en su lugar surgió un sentimiento de plenitud, el ver esa luz

me hacía sentir lleno de fuerza y ganas para seguir caminando, era increíble

ver como aquella luz se alzaba en medio de una montaña y brillaba en medio

de la noche solo para nosotros, diciéndonos “aquí estoy… mírenme

siéntanme... crean”, algunos de mi compañeros veían que la luz estaba

danzando en la montaña, yo solo veía brillar pasivamente la luz; mientras la

noche continuaba decidí pedirle a aquella luz que me llenara de fuerza para

lograr descubrir a mis ancestros, de la misma manera en que esa noche yo

había podido descubrir la luz en la montaña, cerrando mis ojos e intentando

con toda mi fuerza conectarme con la montaña, le pedí a aquella luz que

permaneciera dentro de mi ser para que en las situaciones en que mi corazón

se nublara de oscuridad y negativo, ella me guiara en el camino correcto

hacia la Madre Tierra. (Comunicación Personal, 2014).

La fe no se piensa, no se razona, ella existe en lo profundo del corazón y aunque por momentos parezca que perece y se convierta imperceptible por nosotros su fuerza se mantiene, su lenguaje también es transmitido por el lugar sagrado como corazón esencial del mundo, en él, sus montañas, sus plantas y sus aguas tienen el innato poder de curación del que la humanidad necesita con tanta urgencia. “La fe es condición previa de todo conocimiento sistemático, de todo obrar intencionado y de todo vivir decente.” (Huxley,

1999, pág. 232). El abuelo Fernando al igual que Huxley piensa que la fe es primordial El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 854 para el caminar ancestral, pues sin fe no se podrá desarrollar el sentir que le permite a la

Madre entrar a sanar, cuidar, alimentar y aconsejar, el cuidado del hombre por medio de las montañas, las lagunas, los abuelos y los ancestros; la fe como fuerza amorosa de los grandes espíritus y de los antiguos abuelos es el motor que impulsa el alma del ser humano hacia el reencuentro con el origen en la tierra.

Es acercarse con pasión y entereza a lo sagrado, es mantenerse presente en el camino sin dudar en ningún momento del propósito. Las practicas terapéuticas de la ancestralidad y sus bellos e intensos rituales de trasnocho y pagamento despiertan esta condición de la entrega en confianza (fe) de vuelta a la Madre. Ella, como origen, como toda madre o abuela vital de amor fortalece al desvalido e ilumina al que se mantiene en la oscuridad, los elementales son la fuente directa de curación y su poder está tanto en ellos como en nosotros mismos. Huxley dice que:

Debe, por supuesto, haber fe en su condición de confianza —pues la

confianza en el prójimo es el principio de la caridad para con los hombres, y

la confianza, no sólo en la fiabilidad material del universo, sino también en su

fiabilidad moral y espiritual, es el principio de la caridad o amor-

conocimiento para con Dios (1999, pág. 234).

Como se ha planteando desde un inicio, la fe no cabe en las lógicas racionales de

Occidente, pues su lógica no está dada por el sentir, desde allí surge la devoción y el sentimiento desinteresado de entrega, porque la fe se fortalece en mísmidad, en la medida en la que logro hacerla parte de mi ser y la reconozco como propia, es entender que para creer no es necesario ver en lo tangible, por el contrario la fe que se construye sin ver como metáfora de la entrega a las otras y otroras practicas premodernas del conocer logran un vínculo inquebrantable de fuerza y amor. Ratificando así las palabras de Huxley al decir que: El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 855

La fe en la existencia y poder de cualquier entidad sobrenatural que sea menos

que la Realidad espiritual última, y en cualquier forma de adoración que no

alcance el anonadamiento de sí mismo, producirá sin duda, si el objeto de la fe

es intrínsecamente bueno, un mejoramiento del carácter, y probablemente la

supervivencia póstuma de la mejorada personalidad en condiciones

"celestiales" (Huxley, 1999, pág. 234).

Los caminos, las montañas y las lagunas colman al caminante de infinitas experiencias que lo enfrentarán con el poder de su fe, de su vacío y confusión y de fondo siempre su fe, tal cual su alma, honda, interna y emergente, pues la lucha interna entre la razón y el sentimiento es el principal obstáculo, pero incluso en sus lechos encontramos la enseñanza del negativo y en él, también está la fe, porque surge translógica y transdireccionalmente entre mí y el lugar sagrado, surge de la Madre como mensaje intangible para mí y, en ese orden el acto incalculable de entregarme me permite la sanación, pues solo la fe cura la locura.

Cuidado:

“Cuidar es más que un acto; es una actitud. Por lo tanto abarca más que un momento de atención, de celo y desvelo” (Boff, El cuidado Esencial , 2002)

Bajo el concepto que se construye de sanación, surge la conciencia de cuidado, que desde los principios indígenas frente a la connotación que tiene sanarse, considera fundamental el cuidado de la tierra, la comunidad, el cuerpo y el espíritu desde diferentes miradas debido a que el cuidado es una herramienta fundamental de conservación de amor y vida, pues es desde allí donde surgen los más puros sentimientos de protección hacia lo vivo como mismidad o como otredad. Como lo diría Boff: El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 856

Esto significa que el cuidado se encuentra en la raíz primera del ser humano,

antes de que haga nada. Y todo cuanto haga ira siempre acompañado de

cuidado e impregnado de cuidado. Significa reconocer que el cuidado es un

modo-de-ser esencial, siempre presente e irreductible a otra realidad anterior.

Es una dimensión fontal, originaria, ontológica, imposible de desvirtuar

totalmente (Boff, El cuidado Esencial , 2002, pág. 30).

Bajo los principios indígenas la coherencia entre el hacer, pensar y sentir es lo que permite mantener en un estado de bienestar tanto el cuerpo como el lugar sagrado, pues en la medida en la que limpiamos nuestras vestiduras podremos cuidar, alimentar y sanar al lugar sagrado. Se entiende entonces que el cuidado se vuelve un trabajo recíprocamente construido en el que cada uno de nosotros es el agente protector que cuida de sí, de la comunidad y de la Madre

Tierra, dicho equilibrio es entonces la base que mantiene el flujo constante de energía positiva capaz de sanar de manera integral y completa.

La madre tierra a través de los lugares sagrados, los elementales y los ancestros nos trasmite mensajes de cuidado hacia nosotros mismos, hacia los demás y hacia la tierra. En el siguiente fragmento de narrativa se evidencia que la comprensión de la naturaleza del ser humano está en la idea de cuidar y ser cuidado.

Me sentí responsable por aquella noche fría ya que era como si mis

compañeros estuvieran sintiendo el frio interior y la desolación que yo sentía,

por esta razón quise compartir mi ruana con aquel viejo amigo que venía a

visitarnos y con mi pareja, a la cual le brinde mi cobija para que se abrigara

y sintiera un poco de calor, calor que esa noche yo podía no brindar, ya que en El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 857

mi solo había frialdad, oscuridad, y vacío “era mi hora oscura” luego de

prestar abrigo a los demás me sentí un poco más tranquilo, por lo que pude

centrar toda mi atención en el abuelo Fernando y en las palabras que la madre

me iba a decir a través de aquel sabio Abuelo.(comunicación personal, 2014).

Como diría Leonardo Boff “el ser humano es un ser de cuidado; más aún, su esencia se encuentra en el cuidado” (2002, p.32). El cuidado permite desde el inicio de la vida que ésta pueda florecer, sin los cuidados amorosos de una madre el niño no podría vivir, de esta misma manera es como desde lo ancestral se ve a la madre tierra, sin los cuidados y sin los beneficios que ella nos brinda a los seres humanos nosotros no podríamos existir, esto es algo que hoy día en la mentalidad de occidente no parece importar, pues ven a la tierra como un ente a explotar y destruir para ganar falsas riquezas y poder (la más fuerte tradición positivista del control y la riqueza); en lugar de sentirla como un ser vivo al que debemos cuidar y preservar, para encontrar en ello una coexistencia de vida de perfecta armonía.

Boff explica que “el cuidado solo surge cuando la existencia de alguien tiene importancia para mí. Paso entonces a dedicarme a él; me dispongo a participar de su destino, de sus búsquedas, de sus sufrimientos y de sus éxitos, en definitiva, de su vida.” (2002, pág. 73)Esto es algo que por miles de años han hecho nuestros indígenas por la Tierra, pues para ellos no existe nada más importante que la Madre tierra y sus vidas que giran en torno a ella y ella en ellos, nosotros los mestizos aun no poseemos una identidad arraigada, que nos permita llegar a conectar con la Tierra de forma directa pues ya olvidamos como hacerlo. Por esto, desde la

Psicología Ancestral y la actual investigación se intenta plantear un camino por el cual, la persona mestiza hija de occidente y de América, logre reencontrarse y conectarse con la tierra por medio de un camino de cuidado, sanación, identidad, perdón y amor. El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 858

Sanación: Madre Tierra como sinónimo de sanación

El abuelo Fernando dice que la sanación viene desde adentro del ser hacia afuera, la persona es quien abre su cuerpo para que la madre Tierra o bien sea quien entre allí a sanar o se evidencie como interioridad de origen, es la Madre tierra como inteligencia la conciencia de camino quien a través de prácticas míticas y ritualisticas, usos y costumbres aprendidos por sus hijos en humanización, logra llevar la verdadera sanación al cuerpo humano. La sanación desde lo ancestral y desde las tradiciones Mhuysqas viene dada desde la fe que las personas depositan en la Madre tierra, ya que desde allí las plantas ancestrales y el agua milenaria de una montaña sagrada por ejemplo logran el increíble milagro de sanar a un ser humano que conecta y se ordena de nuevo en los principios universales que como ley de origen le otorgan la posibilidad de la sanación.

El concepto que el mundo occidental maneja acerca de la sanación se relaciona con prácticas de la farmacopea como predicción y control de ciertos dolores, una pastilla de concentrados químicos que se supone sana a las personas, a esto es lo que la ciencia llama desarrollo, una serie de compuestos químicos que dicen sanar y curar enfermedades; como dice

Dethledsent Y Dahlke la falla de la medicina moderna radica en que cada vez se implementa una medicina más inhumana:

La medicina moderna no falla por falta de posibilidades de actuación sino por

el concepto sobre el que —a menudo implícita e irreflexivamente— basa su

actuación. La medicina falla por su filosofía o, más exactamente, por su falta

de filosofía. Hasta ahora, la actuación de la medicina responde sólo a criterios

de funcionalidad y eficacia; la falta de un fondo le ha valido el calificativo de

«inhumana». Si bien esta inhumanidad se manifiesta en muchas situaciones El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 859

concretas y externas, no es un defecto que pueda remediarse con simples

modificaciones funcionales. Muchos síntomas indican que la medicina está

enferma. Y tampoco está «paciente» puede curarse a base de tratar los

síntomas. Sin embargo, la mayoría de críticos de la medicina académica y

propagandistas de formas de curación alternativas asumen automáticamente el

criterio de la medicina académica y concentran todas sus energías en la

modificación de las formas (métodos). (1983, pág. 3).

Una verdadera sanación significa un camino de búsqueda, encuentro consciente y de constante autodescubrimiento en el que se halla el equilibrio entre el hombre y la madre tierra, donde la sanación se mueve junto con las dualidades entre la conciencia y la razón, entre alma y cuerpo, entre madre e hijo. Sanar es un ejercicio desinteresado de reconstrucción interna a nivel físico, sentimental y espiritual donde uno mismo es quien se convierte en el guía interno, capaz de establecer el significado y la dirección de donde proviene cada cosa que enferma y llena de malestar; para Dethlefsent y Dahlke:

Curación significa redención, aproximación a esa plenitud de la conciencia

que también se llama iluminación. La curación se consigue incorporando lo

que falta y, por lo tanto, no es posible sin una expansión de la conciencia.

Enfermedad y curación son conceptos que pertenecen exclusivamente a la

conciencia, por lo que no pueden aplicarse al cuerpo, pues un cuerpo no está

enfermo ni sano. En él sólo se reflejan, en cada caso, estados de la conciencia.

(1983, pág. 5).

La sanación como estado de conciencia implica entender que el hombre es más que malestares físicos y emocionales, el hombre es un ser espiritual que se mueve en dimensiones El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 860 psíquicas profundas las cuales occidente aún no comprende, el hombre como protagonista de su sanación puede caminar en pro de su bienestar mediante los caminos que la Tierra le aconseja, debe abandonar lo que le causa dolor y quedarse con lo que le hace bien emprendiendo un camino de entrega y cuidado, encontrar el propósito bonito y dulce de la vida para el encuentro con la instancia psíquica esencial del sí mismo.

La sanación viene dada de la madre tierra por medio de los elementos naturales: plantas, montañas, y lagunas, allí el hombre encuentra a través de rituales y la conexión con la tierra una profunda curación del malestar, del cual también se aprende y como tal debe ser honrado

Dethlefsent y Dahlke no se equivocan al decir que

El camino del individuo va de lo insano a lo sano, de la enfermedad a la salud

y a la salvación. La enfermedad no es un obstáculo que se cruza en el camino,

sino que la enfermedad en sí es el camino por el que el individuo va hacia la

curación. Cuanto más conscientemente contemplemos el camino, mejor podrá

cumplir su cometido. Nuestro propósito no es combatir la enfermedad, sino

servirnos de ella; para conseguir esto tenemos que ampliar nuestro horizonte.

(1983, pág. 6).

Agradecer a los maestros dolor, tristeza, aflicción, ira y llanto por enseñarle al hombre a tener consciencia de ellos como camino de curación, entregar antes que recibir sanación implica sacar del cuerpo y el corazón todo aquello que no permite que la sanación entre en él, de allí la importancia de hacer consciencia del negativo y de todo aquello que carga al cuerpo de malestar, mientras la esencia del ser humano se encuentre llena de negativo como acorazamiento del alma la sanación no podrá entrar, ya que no existirá lugar en el corazón ni acceso a su hondura divina El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 861 para que este reciba la palabra dulce, la cual finalmente se transformará en palabra de sanación, generando un cambio trascendental en el ser humano.

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 862

Aportes a la Comunidad Científica.

Ponencias Encuentro y desarrollo del Sí mismo desde

la vivencia transpersonal, en el ritual de

trasnocho en la cultura indígena Mhuysqa

en el Municipio de Cota. II CONGRESO

PSICOLOGÍA, INTERVENCIÓN

SOCIAL Y PRÁCTICAS LIBERADORAS

Pasto – Colombia/ 23 y 24 de Abril de

2015

"El Camino de Bochica, La Ruta del Sol". Una

cosmogonía de la psique. Encuentro y desarrollo

del Sí mismo desde la vivencia transpersonal del

saber Ancestral indígena de la cultura Mhuysqa en

Colombia. VII ENCUENTRO

INTERINSTITUCIONAL DE SEMILLEROS DE

INVESTIGACIÓN

23 y 24 de septiembre del 2015, Fundación

Universitaria del Área Andina, Bogotá.

Documental audiovisual. “El camino de Bochica, una cosmogonía de la

psique. Encuentro y desarrollo del Sí mismo, desde

la vivencia transpersonal del saber ancestral El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 863

indígena de la cultura Mhuysqa en Colombia”

https://www.youtube.com/watch?v=rnNiLRB896w

El Camino de Bochica, La Ruta del Sol una Cosmogonía de la Psique. 864

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