Tu Que Puedes Padre, Tu Que Puedes Aparta De Mi El
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TU QUE PUEDES PADRE, TU QUE PUEDES APARTA DE MI EL DOLOR DE MI DESTINO SE QUE PARA ESO VINE Y YO LO ACEPTO SE QUE EN MI SE CUMPLIRA LO ESCRITO SE QUE SU REDENCION ESTA EN MIS MANOS Y QUE ENTREGAR MI VIDA ES EL CAMINO YO COMO HIJO ALABARÉ TU NOMBRE Y POR SALVARLOS SERÁ MI SACRIFICIO MAS COMO HOMBRE EL MIEDO ME ATENAZA Y SIENTO LA PASIÓN COMO UN ABISMO QUE SUFRO EN EL SILENCO RESIGNADO DE SABER QUE ESE FIN ES MI DESTINO BIEN SE QUE EL DOLOR, JESUS, TE ASUSTA PERO TU ENTREGA TRAERÁ LA LUZ AL MUNDO TU SANGRE DERRAMADA Y HUMILLADA SANGRE DEL REDENTOR, PASTOR DIVINO REGARA LOS CONFINES DE LA TIERRA COMO HIJO DE DIOS Y AMADO MIO PERO EN ALGO SI PUEDO CONSOLARTE DE TU PASIÓN ELEGIRÉ YO EL SITIO EL MARCO DONDE TODO SE CONSUMA ES UN LUGAR DE LUZ Y AMOR BENDITO CON AROMAS A BRISA DE RIVERA DONDE SE PARA EL TIEMPO EN UN SUSPIRO DE CAMPIÑAS PREÑADAS DE LA HISTORIA DE SUAVES LOMAS BAÑADAS POR UN RIO ES UNA TIERRA DE BODEGAS Y CONVENTOS Y BOTAS ENTERRADAS DE BUEN VINO DONDE EL AZUCAR ES GLORIA ENTRE LAS MANOS DE MADRES BUENAS, LLENITAS DE CARIÑO QUE EN BANDEJAS DE AMOR Y LOZA VIEJA PONEN SABOR A HORNAZOS Y PESTIÑOS HISTORIA DE LA FE Y DESCUBRIDORA DE LA NIÑA VALIENTE QUE DIOS QUISO LLEVARA EL EVANGELIO HASTA ULTRARMAR Y DEJO SEMBRADA ALLI LA VOZ CRISTO REINA DE LA POESIA BLANCA Y PURA FORTIN DE JUAN RAMON Y SU DELIRIO ESPEJO DONDE EL AGUA CRISTALINA HUELE A AZAHAR Y A UVAS EN RAZIMO A FRESA FRESCA Y A MANOS ENCALLADAS 2 Y A ETERNO ATARDECERES INFINITOS TERRUÑO DE MARIA MADRE DE DIOS QUE EN SU TIEMPO PREGONA CON ORGULLO SUEÑOS DE ROMERIAS EN PRIMAVERA ENTRE VERDES PINARES ELEGIDOS PARA GUARDAR LA JOYA DE ESTA TIERRA REINA MONTEMAYOR MADRE Y REFUGIO CONSUELO DE MI GENTE Y DE LOS MIOS PUEBLO DE GENTE BUENA HASTA JARTARSE DONDE AL LLEGAR TE SIENTES ACOGIDO COMO UNO MAS QUE VIVE EN ESTAS CALLES Y NO HUBIERAS NACIDO EN OTRO SITIO ENTRE BLANCAS PAREDES REMOZADAS POR MAÑANAS BAÑADAS DE ROCIO CON AIRES SEÑORIALES DE CIUDAD Y ARTE EN CADA RICON A DONDE MIRO Y QUE LUGAR ES ESE QUE TE DIGO? EL MARCO DONDE TODO SE CONSUMA ES UN LUGAR DE LUZ Y AMOR BENDITO BENDECIDA EN LA GLORIA DE LA GRACIA LA TIERRA DONDE SOL DEJA SU BRILLO EN LA PLAZA EL MARQUES O DE LAS MONJAS 3 JERUSALEM DEL SUR DE LOS SUSPIROS UN CALVARIO DE CALLES ENCALADAS SUEÑO DE AMOR COFRADE, LUZ Y TESTIGO DE DIOS MISMO PASANDO POR SUS CALLES DE LA PASION Y MUERTE DE MI HIJO El LUGAR ELEGIDO POR LOS CIELOS TIENE QUE SER MOGUER, ESTE ES EL SITIO Cuando llega el día y la hora, en este incomparable y sagrado lugar del convento de Santa Clara, en el que asumo el enorme honor de pregonar al mundo, la semana mayor de esta tierra bendita de Moguer, permitidme que lo primero que pase por mi mente sea solicitar humildemente vuestro perdón. Yo no nací en esta tierra tocada por la mano de Dios con la luz que contiene el tiempo dentro, mis padres y mis abuelos son de otra tierra hermana donde a la madre de Dios se la llama Cinta y que comparte con esta, la fe en esa otra advocación que amamos por igual como Rocío. Yo no he crecido a los pies de Padre Jesus ni me he admirado con la cara de su madre, no he vestido el habito de Vera Cruz, no he sentido el remedio de su mirada en un lunes santo ,ni he abrazado una palma en una mágica mañana de un domingo de ramos de esta tierra. 4 Mi raíz esta bañada por dos ríos que abrazan mi casa, un lugar de cabezos y de esteros que resplandecen a la luz de la tarde con el reflejo de la sal en la otra orilla. Por tanto os pido perdón y apelo a vuestra misericordia por atreverme a subirme en este atril, por intentar trasmitiros la grandeza de algo que conocéis de sobra porque es vuestro, por pretender que llegue a vuestra nariz el olor a incienso y azahar en cualquiera de vuestras plazas, palpéis el silencio profundo de nuestro señor en una calle estrecha, que veáis el dolor de Dios mismo pasando por vuestras calles en una tarde cualquiera, que os enamoréis de las lágrimas de una madre siguiendo a su hijo hasta el calvario de su crucifixión… por querer al fin y al cabo, sentir el orgullo de ser cofrade de Moguer, al menos un día en mi vida. Y de algo si estoy seguro, desde mi humildad y profundo respeto, es que vengo aquí con el corazón puesto en cada palabra, el alma en cada verso y dispuesto a dejarme la vida en proclamarlo para vosotros, y permitidme por tanto, que como mariano que soy, en las manos de vuestra madre de Montemayor y en María Santísima del Rocío encomiende la lectura de este pregón. Reverendo señor Don Jose Manuel Raposo, Alcalde presidente del ilustrísimo ayuntamiento de Moguer Don Gustavo Cuellar, Querido Presidente y 5 junta de gobierno del Consejo parroquial de Hermandades de esta tierra, Don Antonio Gonzalez, Presidente del consejo de cofradías de mi Huelva, cofrades de todas y cada una de las cofradías que con vuestro esfuerzo, tesón y entrega hacéis única esta semana santa, queridos amigos, señoras y señores… Decía Don Francisco de Quevedo que el agradecimiento es la parte principal de un hombre de bien, no sé si la parte de hombre de bien puede aplicárseme, pero al menos no puedo ni quiero dejar pasar la otra parte de la frase. Llevo a gala en mi vida atesorar personas a las que aprecio y quiero y me devuelven con creces esos sentimientos, aun cuando muchas veces no creo merecerlo. Mi presentador de esta noche, es una de esas personas. Mientras pensaba quien sería el elegido, a mi entender, ideal para encargarle la presentación de este pregón, se me planteaban dos posibilidades; Una persona de estrecha relación con la ciudad de Moguer o alguien que no siendo de aquí, me conociera lo suficientemente bien para poder dejarles a ustedes al menos un esbozo de mi persona. De forma arriesgada gano la segunda opción. Francisco Jose Fernandez Panchi, es amigo mío desde hace ya no pocos años, cumple todos los requisitos necesario para precederme en este atril por su preparación, su don de palabra y su capacidad de comunicar, además de eso, me conoce, me aprecia y es también en un hombre de hermandad y de cofradía 6 con un sentido de servicio de los que conozco a pocos, al fin y al cabo, para mí un auténtico placer que aceptara este embolao, como el mismo lo definió, por lo comprometido de la cita y una elección, en la que además, como han podido apreciar, no me he equivocado. Solo les ruego no tengan en consideración sus mejores palabras, nuestra amistad le ha llevado a exagerar mis méritos, que no son tanto, y hasta la suerte del cariño que me dispensa, se le debe a él más que a mí. Panchi, por aceptar este reto, por superar tus iniciales reparos, por esas palabras que ni de lejos merezco, por enseñarme mil veces el valor de la sensatez y la hombría de bien al servicio de la vida, o de una hermandad, de cualquiera de las tuyas y sobre todo por regalarme siempre tu aprecio y tu amistad que guardo en lo más profundo de mi alma, con todo mi corazón gracias. Cuando desde la soledad de mi estudio empezaba a embozar las primeras líneas de este pregón, una vez asumida la desfachatez esperanzada de aceptar este reto, mil ideas vinieron a mi cabeza sobre la forma de enfocarlo y darle forma, desde las más arriesgadas a las más clásicas entre las posibles, y os confieso además, que he mantenido durante este tiempo la luminosa prosa lirica de Juan Ramón como lectura de cabecera en un vano y torpe intento de intentar que se me pegara algo, pero como 7 seguramente podréis apreciar, la grandeza de su pluma, en mi caso, seguramente haya pasado de largo. Si tuve claro desde el inicio, que no quería preñar este pregón con una larga clase de historia sobre vuestra semana santa, esa la conocéis vosotros bastante mejor que yo y no es tan largo el tiempo, como para que os repita lo que ya sabéis. Cuando las letras empiezan a fluir desde mis manos tengo una exagerada tendencia a buscar aquello que no puede encontrarse en los libros, que ningún articulo puede enseñarte, ni puedes adivinar en ninguna imagen. Mi mayor deseo es impregnarme, en cada poro de mi piel, de esa capacidad que tiene esta semana mágica de hacer sentir, de entrar por cada uno de los sentidos y llenarme de eso que nace del alma de cada uno de los hombres y mujeres, que dejan su corazón prendido en el paso de sus amores cuando se acerca este tiempo, de llenarme con sus vivencias y a mi manera, transformarlas en palabras que lleguen al alma del que las escucha. En ocasiones tanta reflexión y tanta búsqueda del método y la forma te hacen perder perspectiva, no apreciar lo que tienes delante de los ojos y olvidas la raíz y la pureza, la grandeza de lo sencillo, o como decía el mismo Juan Ramón “No la toques ya más que así es la rosa”.