La Nueva Canción Chilena y la Enseñanza de la Historia Reciente

Perspectivas de los Docentes frente a la Nueva Canción Chilena como posibilitadora de la enseñanza de la Historia y la Memoria Social en el aula

Estudiantes: Javiera Ramírez Schoenfeldt Benjamín Valenzuela Pérez

Profesor Guía: Pedro Rosas Aravena Profesora Informante: Beatriz Areyuna Ibarra

Tesis Para Optar al Grado Licenciado en Educación

Tesis Para Optar al Título de Profesor de Enseñanza Media en Historia y Ciencias Sociales

Santiago, Julio 2018 AGRADECIMIENTOS

En primer lugar, queremos agradecer a la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, nuestra casa de estudios, por brindarnos la oportunidad de poder llevar a cabo nuestros sueños a partir de la formación docente que recibimos desde nuestra llegada en 2013. Institución que nos ha dotado no tan solo de saberes críticos y constructivos, sino que también de buen trato, lo que potencia aún más los saberes mencionados y que se demuestran día a día por las personas que conforman el equipo de la Carrera de Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales, dejando en claro que las transformaciones son posibles empezando por uno mismo. De este modo aprovechamos para agradecer a cada componente que formó parte de este proceso, comenzando por nuestro profesor guía Pedro Rosas Aravena, quien hizo posible la realización de este trabajo y gracias a su confianza y buen trato nos permite superar la etapa final de este proceso. Además, agradecer a los profesores y profesoras Beatriz Areyuna, Fabián González, Paulina Lozano y Felipe Zurita, quienes siempre mostraron a disposición de nosotros para resolver cualquier dificultad en el transcurso de la carrera y que estuvieron con nosotros desde el primer día de universidad hasta el último y por ser grandes preparadores de docentes, siendo siempre certeros en sus críticas constructivas y retroalimentando para mejorar la calidad de los futuros docentes. Consideramos que no podemos dejar de agradecer a la profesora Paloma Abett de la Torre Díaz, quien hizo encantarnos aún más de la carrera que elegimos, siendo transparente y un pilar fundamental en nuestra formación, transmitiéndonos valores como la humildad, el esfuerzo y el trabajo en equipo, los cuales acogemos y hacemos referencia día a día.

Finalmente agradecer a los profesores que nos permitieron poder llevar a cabo este trabajo colaborando con las entrevistas y su disposición hacia nosotros para cerrar este ciclo.

2

DEDICATORIA

Javiera Ramírez Schoenfeldt: Quiero partir primero que todo agradeciendo a la vida, por brindarme estos espacios, estas experiencias que se me han presentado desde el ingreso a la carrera, espero poder sembrar esa semillita de que la educación es la mejor arma para derribar a ésta sociedad desigual.

Por otra parte, los actores más importantes dentro de ésta rebeldía de querer estudiar Historia, es directamente a mis padres, quienes siempre estuvieron ahí, siempre me apoyaron, siempre tuvieron fe y confianza en mí, soy lo que soy gracias a ustedes, les agradezco por entregarme las herramientas y posibilidades para cumplir esta meta, les debo la vida y más. En segundo lugar, agradezco el apoyo de mis hermanos, quienes en su momento estuvieron en desacuerdo, pero que a su vez fueron los más fieles seguidores de este proceso.

Brindo mis agradecimientos infinitos por la paciencia, por cada palabra de aliento, por cada abrazo que contenía un “¡ánimo! Queda poco”, a mi compañero, que nos unió esta experiencia de la historia, de la educación, y principalmente la de la música, te agradezco por las eternas conversaciones, las caminatas y, no obstante, por éste trabajo que lo hicimos con todo el cariño y esfuerzo.

Y brindo por ti ¡viejita mía!

Gracias totales.

3

Benjamín Valenzuela Pérez: Quiero comenzar esta dedicatoria nombrando a las personas que considero fundamental desde niño hasta el cierre de este proceso que abre nuevos caminos como profesional. En primer lugar, a mi abuelita Doralisa Mora Morales, quien desde algún lugar me envía inspiración para seguir adelante y cumplir todas las metas propuestas, quien dejó de vivir meses antes de iniciar este proceso. En segundo lugar, a mi madre Mariela Pérez Rojas, quien ha apostado todo su esfuerzo de décadas en mis estudios, sintiéndome en deuda con ella, y a quien le dedico toda meta superada en este camino, ya vienen tiempos mejores. A mi padre Alejandro Valenzuela Mora, que me brindó su ayuda en momentos difíciles. A mis hermanos, Raúl y Alejandro Valenzuela Pérez, que a pesar de no tener un constante contacto con ellos siempre están en mi mente y me dan fuerzas para cumplir los objetivos. A mi hermana Paz Fernanda que con su apoyo constante me motiva a seguir adelante día a día y a mi sobrino Cristóbal que me ha hecho sentir un padre y un amigo a la vez, al cual quiero entregarle un mejor.

Finalmente quiero dedicar este trabajo a mi compañera de tesis, Javiera Ramírez Schoenfeldt, que desde primer año me dio el privilegio de ser su amigo y compañero, y que a pesar de los buenos momentos y dificultades que son inevitables es parte fundamental de este proceso, tanto en lo personal como en lo profesional, además de agradecerle por trabajar conmigo en por una mejor educación.

4

ÍNDICE CAPÍTULO I: MARCO INTRODUCTORIO ...... 7 1.1. INTRODUCCIÓN ...... 8 1.2. PRESENTACIÓN DEL TEMA ...... 10 1.3. PROBLEMATIZACIÓN ...... 12 1.4. PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN ...... 14 1.5. OBJETIVOS ...... 15 1.5.1. OBJETIVO GENERAL ...... 15 1.5.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS ...... 15 1.6. JUSTIFICACIÓN...... 16 CAPÍTULO II: MARCO TEÓRICO ...... 17 2. MARCO TEÓRICO ...... 18 2.1. INTRODUCCIÓN ...... 18 2.2. EJE HISTORIOGRÁFICO ...... 19 2.2.1. DEFINICIÓN DEL CONCEPTO: HISTORIA RECIENTE ...... 20 2.2.2. DISCUSIÓN SOBRE EL CONCEPTO: HISTORIA RECIENTE/HISTORIA DEL TIEMPO PRESENTE ...... 27 2.2.3. SOBRE LAS DURACIONES DEL TIEMPO HISTÓRICO ...... 29 2.2.4. LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE ...... 33 2.3. MEMORIA ...... 38 2.3.1. HACIA UNA CONCEPTUALIZACIÓN DE MEMORIA ...... 39 2.3.2. MEMORIAS COLECTIVAS ...... 43 2.3.3. LA MEMORIA SOCIAL...... 45 2.4. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA (NCCH) ...... 48 2.4.1. ORÍGENES Y CARACTERÍSTICAS DEL MOVIMIENTO ...... 49 2.4.2. DESARROLLO DEL MOVIMIENTO Y EL CANTO POPULAR COMO LA VOZ DIRIGENTE .... 53 CAPÍTULO III: MARCO METODOLÓGICO ...... 60 3. MARCO METODOLÓGICO ...... 61 3.1. ENFOQUE METODOLÓGICO ...... 61 3.2. DEFINICIÓN DE TÉCNICAS DE RECOLECCIÓN DE DATOS ...... 62 3.3. OBJETO DE ESTUDIO: LOS DOCENTES ENTREVISTADOS ...... 64 3.4. TÉCNICAS DE ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE LA INFORMACIÓN ...... 66

5

CAPÍTULO IV ...... 68 4. LA HISTORIA RECIENTE POR LOS Y LAS DOCENTES DE HISTORIA ...... 68 4.1. INTRODUCCIÓN ...... 68 4.2. LOS DOCENTES Y SU VISIÓN DE LA HISTORIA RECIENTE COMO CAMPO HISTORIOGRÁFICO ...... 70 4.3. LOS DOCENTES Y LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE ...... 79 4.4. CONCLUSIONES CAPÍTULO IV ...... 91 CAPÍTULO V ...... 94 5. LOS DOCENTES Y LA NUEVA CANCIÓN CHILENA ...... 94 5.1. INTRODUCCIÓN ...... 94 5.2. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA EN LA PERSPECTIVA DOCENTE ...... 95 5.3. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA EN LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE ...... 101 5.3.1. CANTO AL PROGRAMA: CONSTRUYENDO UNA MEMORIA SOCIAL ...... 106 5.4. CONCLUSIONES CAPÍTULO V ...... 115 CAPÍTULO VI ...... 118 6. LOS DOCENTES Y LA MEMORIA SOCIAL ...... 118 6.1. INTRODUCCIÓN ...... 118 6.2. LA MEMORIA SOCIAL Y LA NCCH EN LA ENSEÑANZA ...... 119 6.3. LA NCCH COMO RESISTENCIA AL OLVIDO ...... 124 7. CONCLUSIONES ...... 128 BIBLIOGRAFÍA ...... 135 ARTÍCULOS, TESIS Y MATERIAL AUDIOVISUAL ...... 138 ANEXOS ...... 141

6

CAPÍTULO I: MARCO INTRODUCTORIO 1.1 Introducción 1.2 Presentación del tema 1.3 Problematización 1.4 Pregunta de Investigación 1.5 Objetivos 1.6 Justificación

7

1.1. INTRODUCCIÓN

En el presente trabajo de investigación nos adentraremos en la enseñanza de la Historia Reciente en la escuela, teniendo como contexto histórico la creación del movimiento musical de la Nueva Canción Chilena. A partir de este marco plantearemos la problemática que hemos identificado, donde difícilmente se puede reconocer la memoria de tipo social que transmite, la cual trae al presente y que podría ser fundamental para el proceso de enseñanza de la Historia Reciente en la escuela. Además, debemos tener en cuenta que abarca un período que está dentro de los parámetros temporales que rigen a este campo de estudio, siendo una característica fundamental el carácter vigente de este proceso, y que a través del arte musical quiere impregnar su memoria hasta el presente.

Es a partir de la problemática señalada que formulamos nuestras preguntas de investigación, las cuales apuntan a saber: ¿Puede ser utilizada la Nueva Canción Chilena para enseñar la Historia Reciente de ? De esta forma podremos adentrarnos y saber De qué manera la Nueva Canción Chilena podría posibilitar este proceso de enseñanza. Y finalmente, una vez respondidas las interrogantes anteriores, podremos dar cuenta si la Nueva Canción Chilena permite la subsistencia de una memoria social.

Una vez formuladas las preguntas de nuestra investigación, planteamos y desarrollamos los objetivos del presente trabajo, en donde nos propusimos a trabajar dos específicos: Primero, identificar la Nueva Canción Chilena como posibilitadora del proceso de enseñanza de nuestra Historia Reciente. Y, en segundo lugar, identificar la Nueva Canción Chilena como una herramienta para la construcción de una memoria social. A partir de estos objetivos y el desarrollo de estos, podremos alcanzar nuestro objetivo general, el cual se orienta en analizar de qué manera la Nueva Canción Chilena posibilita la enseñanza de la Historia Reciente de Chile y, a su vez, la creación de una Memoria Social.

8

Esta investigación, además, se justifica debido a nuestro rol como docentes de Historia y Ciencias Sociales, más aún cuando se trata de un enfoque que ha tomado bastante fuerza dentro de la disciplina histórica y que tiene repercusiones directas en el proceso de enseñanza llevado a cabo por los y las profesores. Además, consideramos dentro de nuestro trabajo la importancia de posicionarnos desde una perspectiva crítica y constructiva, con el fin de aportar al mejoramiento de la calidad de educación partiendo por nosotros mismos y rompiendo así con ciertas tradiciones que son parte del día a día en la escuela. Es por esto que nuestra investigación considera elementos que, si bien han sido explorados, no se les ha dado la relevancia que merecen pero que intentaremos adentrarnos en las perspectivas de los docentes y qué importancia adquiere para ellos la Nueva Canción Chilena, la que pareciera no ser silenciada.

Por otro lado, dentro de los ejes teóricos que trabajaremos, desarrollaremos las diferentes concepciones que serán parte de nuestro trabajo y que se ajustan a la realidad a estudiar. Los enfoques teóricos que hemos considerado para poder llevar a cabo nuestra investigación son: El eje historiográfico, donde haremos referencia a la Historia Reciente, evidenciando sus aspectos fundamentales, además de las tensiones de las que se hace parte tanto en la historiografía más tradicionalista como al concepto en sí, y que tienen relación directa con el proceso de enseñanza que trabajaremos.

El segundo eje teórico que trabajaremos será la Memoria, la cual es parte del campo de estudio mencionado anteriormente, pero que analizaremos de forma apartada, según los objetivos que nos hemos propuesto conseguir, facilitando también la comprensión y las tensiones presentes en el contexto escolar.

El tercer eje teórico que desarrollaremos tiene que ver con el contexto histórico, el cual comprende más que un solo momento de la historia, ya que trasciende ese contexto y lo lleva a aparecer incluso hasta nuestros días, nos referimos a la Nueva Canción Chilena, que

9 se nos aparece como un movimiento que va más allá de los cultural, ya que influye tanto en lo social como en lo político, a partir de lo que significó para el proceso histórico chileno en la segunda mitad del siglo XX en relación a la polarización de la sociedad tras las coyunturas1 que fueron desarrollándose en el mundo y en el contexto de la Guerra Fría y que tuvo repercusiones en nuestro país, como por ejemplo la creación de la Asociación Chilena Anticomunista (ACHA) impulsada por el Presidente Gabriel González Videla, y que se materializó con la Ley de Defensa Permanente de la Democracia en 1948, también conocida como “Ley Maldita” que traería distintas consecuencias, por ejemplo en los movimientos sociales, la creación de la CUT, y adentrándonos en los sesenta la creación de este movimiento, que teniendo influencias de ritmos latinoamericanos fusionados con un fuerte contenido social, cimentó el discurso de una sociedad, que se configuraba de acuerdo a los procesos que se desarrollaban a nivel internacional. La misma Revolución Cubana significó un elemento cultural que se internó en la sociedad chilena, potenciando los efectos de la Guerra Fría en nuestro contexto. Es por esto que consideramos a la Nueva Canción Chilena un movimiento fundamental en nuestra Historia Reciente, ya que la memoria social que trasciende consideramos relevante enmarcar desde las perspectivas de los y las docentes para el proceso de enseñanza en la Escuela como una alternativa, así como daremos cuenta en la presente investigación.

1.2. PRESENTACIÓN DEL TEMA

Nuestro trabajo de investigación surge a partir de distintas motivaciones, de las cuales hemos querido hacer parte de este trabajo y otorgarle así la importancia, que creemos, merecen en el ámbito educativo. Estas motivaciones tienen que ver también con los intereses personales que tenemos cada uno y de acuerdo a las vivencias y experiencias de la formación académica, además de la recolección teórica que hemos llevado a cabo, la cual

1 Concepto utilizado por Fernand Braudel en su texto “La Historia y Las Ciencias Sociales” en alusión al tiempo histórico, siendo la coyuntura la mediana duración, lo que analizaremos más adelante en los próximos capítulos. 10 nos da indicios de la importancia en profundizar sobre estos temas que parecen ser investigados de forma superficial.

Creemos que considerar a la Nueva Canción Chilena en nuestro trabajo investigativo nos permite ampliar los márgenes respecto a las herramientas de la Historia Reciente, ya que podemos tener en cuenta uno o varios relatos de una generación que tiene influencia hasta nuestros días, y que en el contexto educativo no se percibe fácilmente.

Esto último puede deberse tanto a la acción docente como a los programas curriculares, ya que es el profesor en última instancia quien es el encargado de poner a disposición los contenidos a los y las estudiantes. Es por esto que hemos dejado como objeto de estudio a los docentes de historia, los que en este trabajo serán parte de diferentes contextos, para poder dar cuenta de distintas realidades respecto a la enseñanza de la Historia Reciente y de qué forma puede la Nueva Canción Chilena ser parte de este proceso llevado a cabo por los entrevistados. Además, estudiar lo anterior nos obliga a adentrarnos en el campo de estudio de la Historia Reciente, que aún es tema de constante debate en nuestro país, por lo tanto, las conclusiones que plantearemos no son definitivas, pero nos pueden ayudar a ilustrar el campo y los objetivos que nos hemos propuestos para esta investigación, que recogen elementos que poco a poco están siendo considerados por en el ámbito académico y que creemos son relevantes para la realidad a estudiar.

El cumplimiento de nuestros objetivos está sujeto a la metodología que implementaremos, ya que para la recolección de información utilizaremos entrevistas a los docentes para acercarnos a las realidades educativas. Además, nuestra investigación se planteará desde una perspectiva cualitativa, por lo que el análisis de cada testimonio será fundamental a la hora establecer nuestras respuestas y conclusiones del trabajo.

11

1.3. PROBLEMATIZACIÓN

Nuestro trabajo de investigación se enmarca, como hemos dicho en el apartado introductorio, en un contexto histórico propio de la enseñanza de la Historia, pero en donde identificamos un difuso reconocimiento, o ambiguas percepciones por parte de los docentes, sobre la enseñanza de la Historia Reciente y de la memoria social que podría construir la Nueva Canción Chilena en este proceso, lo que dificultaría la tarea de los y las profesores y no explicaría en gran medida el contexto que se vive en nuestro país momentos antes, durante y después, como señala Moulián, de la “Gran Fractura”.2

Otro factor que incide en la problemática señalada, tiene relación con el trabajo docente en el aula, respecto a cómo son abordados los contenidos que están dentro de la temporalidad de la Historia Reciente. Al tratarse de un campo de estudio relativamente nuevo, el cómo abordar la Historia Reciente en la escuela también se vuelve algo problemático, ya que habitualmente los contenidos son vistos de manera parcial y prácticamente anecdótica, o como señala Braudel, se da énfasis a la Historia de los “acontecimientos”3. En este sentido la Nueva Canción Chilena, para efectos de una enseñanza más tradicionalista, pasa a ser un simple acontecimiento que no tiene relación alguna con el presente y la realidad de los y las estudiantes, pasando por alto la memoria y las subjetividades de una sociedad que nos dice qué ocurre en nuestro país a través de actores sociales que la historiografía y educación tradicional no considera. Todo lo anterior pone en discusión el trabajo docente con la enseñanza del Siglo XX, tanto en Chile como en el mundo. Además, al tratarse de un campo historiográfico en constante construcción con actores que aún son parte de lo

2 Concepto utilizado por Tomás Moulián en su texto “Fracturas” para referirse al Golpe de Estado en Chile, marcando así un antes y un después en la historia de nuestro país, que para efectos de la presente investigación consideramos relevante para poder enmarcar a la Nueva Canción Chilena como un elemento de cambios y permanencias tras la fractura política. Por otro lado, nos permite explicar un contexto a nivel país y de cómo esta memoria trasciende hasta nuestros días en los distintos actores sociales. 3 Braudel hace referencia al “acontecimiento” como la corta duración del tiempo histórico, la cual es parte estructural de la historia tradicional, idea que desarrollaremos en nuestro marco teórico. 12 cotidiano, el enseñar Historia Reciente, como ahondaremos más adelante, también es problemático, de ahí su importancia, la que iremos trabajando en los futuros capítulos.

Para poder adentrarnos en la problemática debemos profundizar en el concepto de memoria, teniendo en cuenta el contexto que abordaremos y que se relaciona con el legado que la Nueva Canción Chilena transmite a las generaciones actuales. Respecto a la memoria podemos hacer referencia a Rivera y Mondaca, quienes tomando las afirmaciones de Nietzsche nos dicen:

“que el recordar y el olvidar son necesarios para que la luz alterne con la oscuridad y así generar un sentimiento que se manifieste de forma histórica (el recuerdo) y otras de forma ahistóricas (el olvido); con ello, la historia sería una vivencia entre el recuerdo y el olvido y una propuesta crítica frente al querer olvidar (…) En todas las sociedades humanas ambas dimensiones se hacen presentes y son ineludibles para el desarrollo de sujetos, individuos o colectivos, sin embargo, no puede suceder que el olvido supere a la memoria, porque el olvido lleva a lo ahistórico”4.

Es por esto último que nuestro objeto de estudio se centra en los mismos docentes, ya que hacemos referencia a las prácticas que llevan a cabo en el contexto de la Historia Reciente de nuestro país, y como señala Mario Carretero, es necesario analizar las prácticas, o concepciones docentes para poder avanzar en materia sobre la enseñanza de la Historia a partir de la estructura que está presente y el funcionamiento de la narrativa histórica5.

4 RIVERA, Patricio; MONDACA, Carlos. El aporte de la enseñanza de la Historia Reciente en Chile: Disensos y consensos desde la tradición política al siglo XXI. En: Estudios Pedagógicos, XXXIX, Nº 1: 393-401, 2013, p.394. 5 CARRETERO, Mario; VOSS, James. Aprender y Pensar la Historia. Ed. Amorrortu, Buenos Aires. 2004, p.101. 13

Este trabajo se llevará a partir de las perspectivas que distintos profesores de diferentes contextos del subsector de Historia y Ciencias Sociales, tienen sobre la Nueva Canción Chilena en la enseñanza de la Historia Reciente en el aula y la memoria que está en juego en ese proceso, teniendo así una visión socio-crítica a partir del análisis de la realidad que hemos descrito para estudiarla.

1.4. PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN

Explicitados los antecedentes y definido el problema de nuestra investigación, nos planteamos las siguientes preguntas que buscaremos resolver en el desarrollo de este trabajo:

 ¿Puede ser utilizada la Nueva Canción Chilena para la enseñanza de la Historia Reciente?  ¿De qué manera posibilita la Nueva Canción Chilena el proceso de enseñanza de la Historia Reciente?  ¿Es la Nueva Canción Chilena un medio para la subsistencia de una Memoria Social?

Estas preguntas que hemos planteado, serán respondidas a medida que se vayan logrando los objetivos propuestos, vinculándose directamente con el rol del docente respecto al proceso de enseñanza. Por lo tanto nuestras preguntas de investigación están en directa concordancia con los objetivos que plantearemos a continuación y con las metodologías a utilizar.

14

1.5. OBJETIVOS

1.5.1. OBJETIVO GENERAL

De acuerdo a nuestra problemática planteada anteriormente, y a las preguntas de investigación que hemos explicitado, podemos trazar nuestros objetivos, en donde el objetivo general de la investigación es: Analizar, desde las perspectivas docentes, de qué manera la Nueva Canción Chilena posibilita la enseñanza de la Historia Reciente de Chile y, a su vez, la creación de una Memoria Social.

1.5.2. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

Para poder lograr nuestro objetivo general, debemos también plantear objetivos específicos que nos permitan seguir un camino coherente y nos ayude también a responder nuestras preguntas. Estos objetivos específicos son:

 Identificar la Nueva Canción Chilena como posibilitadora del proceso de enseñanza, específicamente de la Historia Reciente de nuestro país.  Identificar la Nueva Canción Chilena como herramienta en la construcción de una memoria social.

15

1.6. JUSTIFICACIÓN

Como futuros docentes de Historia y Ciencias Sociales consideramos relevante y pertinente el presente trabajo debido, más aún cuando se trata de un enfoque que ha tomado bastante fuerza dentro de la disciplina histórica y que tiene repercusiones directas en el proceso de enseñanza llevado a cabo por los y las profesores. Además, consideramos dentro de nuestro trabajo la importancia de posicionarnos desde una perspectiva crítica y constructiva, con el fin de aportar al mejoramiento de la calidad de educación partiendo por nosotros mismos y rompiendo así con ciertas tradiciones que son parte del día a día en la escuela. Es por esto que nuestra investigación considera elementos que, si bien han sido explorados, son bastantes conflictivos, y tienen, por lo tanto, gran relevancia respecto a la contingencia que poseen, más aún en la construcción de la memoria social que la Nueva Canción Chilena parece tener y que puede mantenerse vigente en la enseñanza de la Historia Reciente de nuestro país.

Además, la relevancia de este trabajo radica en el enfoque historiográfico que tiene, ya que la Historia Reciente considera diferentes disciplinas de las ciencias sociales para la construcción del relato histórico, lo que enriquece el trabajo desarrollado. Si lo observamos en nuestra investigación, haremos referencia a la Historia Reciente a partir del movimiento de la Nueva Canción Chilena, que es analizada desde diferentes perspectivas ya que no fue tan solo un movimiento cultural, sino que también se impregnó de un discurso político e influyó en una sociedad movilizada y que hizo visible a los actores sociales que fueron silenciados por un sector represivo, más aún en el período de la dictadura cívico-militar. Esta incorporación de actores sociales se haría posible gracias a la Memoria que este movimiento hereda incluso a las generaciones actuales, entregando un mensaje que se mantiene vigente y que trabajaremos a continuación en nuestro marco teórico en relación a la enseñanza de la historia en las realidades que serán analizadas, a partir de una perspectiva socio-crítica.

16

CAPÍTULO II: MARCO TEÓRICO

17

2. MARCO TEÓRICO

2.1.INTRODUCCIÓN

Consideramos importante, para nuestra investigación y además para cumplir nuestros objetivos, construir un Marco Teórico que establezca los parámetros y los límites de todo lo relacionado a los conceptos que son parte de nuestra investigación. Además, nuestros ejes teóricos serán comprendidos y analizados desde una perspectiva pedagógica y crítica para los fines del presente trabajo.

De este modo dialogaremos con diferentes teóricos que utilizaremos para definir nuestros ejes, los cuales nos permitirán abordar específicamente el proceso de enseñanza como tal. En cuanto al contexto histórico, profundizaremos en la Historia Reciente como campo de estudio, siendo este elemento historiográfico nuestro primer eje teórico. Teniendo en cuenta esto último es que se hace necesario precisar otros dos elementos que pueden ser considerados necesarios para nuestra investigación, de los cuales desprendemos el concepto de Memoria, donde la construcción que hacemos referencia se hace desde una perspectiva social, que está vinculada directamente a un proceso que también será considerado como eje teórico, la Nueva Canción Chilena.

Una vez definidos estos elementos podremos ir desarrollando nuestros objetivos, responder las preguntas relacionadas a la investigación, y concluir con el resultado de nuestro análisis acerca de lo que nos hemos propuesto en el presente trabajo.

18

2.2. EJE HISTORIOGRÁFICO

En el presente apartado y posteriores capítulos, presentaremos los aspectos que conforman la Historia del Tiempo Presente, o Historia Reciente, como campo de estudio, que nos permitirá adentrarnos más adelante en el contexto de nuestro trabajo de investigación. En un principio abordaremos los aspectos que conforman este campo, las definiciones básicas y su distinción con la Historia Contemporánea.

Posteriormente abarcaremos la discusión que se desarrolla en cuanto a si se puede hablar de Historia del Tiempo Presente o Historia Reciente como conceptos diferenciados e independientes, o si podemos hacer uso de ambas concepciones para referirnos a un mismo objeto de estudio.

Además, evidenciaremos la importancia de la Historia Reciente y cómo este campo dialoga con otros elementos, específicamente, y para efectos de nuestra investigación y objetivos, con la memoria y que a través del movimiento de la Nueva Canción Chilena buscamos evidenciar las perspectivas docentes en la construcción histórica dentro del aula, dadas las características interdisciplinarias que posee el campo historiográfico, enriqueciendo así el proceso histórico que queremos abarcar y que es abordado por la Historia Reciente.

Consideramos relevante dejar en claro que al tratarse de un campo en estudio que es de origen reciente los cuestionamientos por parte de la historiografía más positivista y tradicional están muy presentes, pero que la discusión en cuanto a la legitimidad y a la construcción histórica que realiza este nuevo campo de estudio es de vital importancia para realzar a los actores históricos que muchas veces son silenciados por la historiografía tradicional. Por lo que nuestro posicionamiento en el presente trabajo se desarrollará de forma crítica, teniendo en cuenta las fortalezas y debilidades del campo de estudio en cuestión.

19

2.2.1. DEFINICIÓN DEL CONCEPTO: HISTORIA RECIENTE

Para referirnos a la Historia Reciente como campo de Estudio debemos acudir a los principales elementos que la componen, y que hemos visto a grandes rasgos al comienzo de esta investigación. A continuación, detallaremos tales elementos, qué además nos indicarán el por qué se considera un campo de estudio que se construye día a día, en funcionamiento con diferentes disciplinas que colaboran en la constitución de la Historia Reciente y que permite la diferenciación con la Historia Contemporánea, que suele ser representada, según la tradición historiográfica, como la Historia actual.

Para responder a la pregunta acerca de qué es la Historia del Tiempo Presente o Historia Reciente, consideramos las definiciones que establece François Bédarida, quien la entiende en contraste de la tradicional Historia Contemporánea, la cual ocupaba ese puesto, y que estaba:

“ligado además a los programas de estudios en la enseñanza secundaria y superior. Pero, justamente, haciendo comenzar la historia contemporánea mundial en la Revolución Francesa, en nombre de la ideología democrática y republicana y de la identidad nacional, el término perdía progresivamente su sentido original a medida que la duración de esta historia se alargaba y se separaba ya casi dos siglos de 1789. ¿Cómo sostener, pues, que nosotros éramos los contemporáneos de Robespierre o de Napoleón? De ahí la sustitución del término radicalmente ambiguo de historia contemporánea por la expresión tiempo presente que se ha impuesto e institucionalizado.”6

6 BÉDARIDA, François. Definición, método y práctica de la Historia del Tiempo Presente. Cuadernos de Historia Contemporánea, N°20, pp. 19-27. París: Instituto de Historia del Tiempo Presente. 1998, p. 21. 20

De esta forma, y según lo señalado por Bédarida, se dará inicio a un “gran cambio historiográfico”, que tendrá como objetivo desligarse de la idea de que la Historia Reciente es parte de la categoría historiográfica Contemporánea, la cual, además genera ambigüedades al momento de comprender el presente, ya que al construirse día a día y transcurrir como el tiempo, las distancias comienzan a ser más grandes, y éstas ambigüedades comienzan a ser más notorias. Siguiendo ésta arista, este nuevo campo de estudio, a diferencia de la Historia Contemporánea, se determinará principalmente por ser un:

“terreno movedizo, con periodizaciones más o menos elásticas, con aproximaciones variables, con adquisiciones sucesivas. Un campo caracterizado por el hecho de que existen testigos y una memoria viva de donde se desprende el papel específico de la historia oral”7.

Respecto a esto último es que la Historia Reciente, o la Historia del Pasado Presente, se expresa y desarrolla en un campo que es movedizo o versátil, respecto a lo temporal, ya que se activan otros elementos que dependerán del contexto y el fenómeno donde nos adentremos. Estos elementos están relacionados a las disciplinas que trabajan en conjunto con la Historia, y que se complementan para hacer del trabajo historiográfico un campo distintivo en relación a la Historia Contemporánea Tradicional. En la siguiente cita Rubio, precisa acerca de la investigación del pasado reciente, la cual:

“se ha ido constituyendo como un campo especifico de la historiografía. Al término de la Segunda Guerra Mundial y ante la necesidad de conceptualizar las experiencias de sufrimiento y exterminio vividas el recuerdo se fue perfilando como un objeto y fuente de conocimiento que daría paso a la

7 Ibíd., p.22. 21

historia oral y su propósito de recuperar las experiencias de sectores sociales silenciados”.8

De acuerdo a lo planteado por Rubio, podemos desprender como surge desde los mismos sectores sociales, la necesidad de plasmar sus relatos, su historia, por lo que la memoria cumple un rol fundamental en la parte investigativa de la historia reciente, adquiriendo mayor énfasis el relato oral, el cual se contrasta con la historiografía positivista, que adjudica a la historia contemporánea como parte del presente.

Por otro lado, y siguiendo la idea de Bédarida, se genera una activación de elementos propios de este campo de estudio, y que lo diferencian de la tradicional Historia Contemporánea, el cual se defiende argumentando que este campo no busca que los procesos estudiados sean trabajos periodísticos, que queden inamovibles en el trabajo historiográfico, sino todo lo contrario, un campo que dialoga constantemente con los actores, las otras disciplinas y no tan solo con los historiadores: La vitalidad que presenta y que se refleja en la existencia de testigos, los actores mismos de los procesos históricos que abarca cada contexto; además, esta vitalidad histórica, es parte un elemento que analizaremos más adelante, pero que debemos tener en cuenta, ya que es parte fundamental para el funcionamiento de este campo de estudio, nos referimos a la Memoria, que definiremos más adelante.

Respecto a lo planteado por Bédarida es que nos vemos en la obligación de acudir a las ideas de Jacques Le Goff, quien bajo esta misma arista o idea, plantea que: “la aceleración de la Historia hace insostenible la definición oficial de la Historia Contemporánea”9, marcándose así una gran diferenciación entre un campo y otro, dado el avance y

8 RUBIO, Graciela. Memoria, Política y Pedagogía. Los caminos hacia la enseñanza del pasado reciente en Chile. Santiago, Ed. LOM Ediciones/UMCE, 2013, p. 335. 9 LE GOFF, Jacques. Pensar la historia. Modernidad, presente, progreso. Barcelona, Ed. Paidós. 1997, p. 193. 22 construcción que se lleva a cabo día a día de la Historia, además de la tensión historiográfica que radica la distinción mencionada.

Además, y de acuerdo a las citas anteriores, si llevamos esta discusión al caso nacional difícilmente podamos hacer referencia a una contemporaneidad de subjetividades entre sujetos históricos que se encuentran tan distanciados temporalmente, como ocurre, por ejemplo, entre el movimiento desarrollado a mediados del siglo XIX conocido como la sociedad literaria, y el movimiento sociopolítico llevado a cabo por la Nueva Canción Chilena a mediados del Siglo XX. Por lo tanto, es esto lo que quiere evitar la Historia Reciente, que los sujetos históricos se encuentren muy distanciados en el plano temporal, por lo que en esta investigación hemos querido referirnos a un contexto que está latente y que facilitará la comprensión de los procesos llevados a cabo en nuestro país durante la segunda mitad del Siglo XX.

Para adentrarnos más en las concepciones básicas sobre la Historia Reciente haremos referencia al teórico español Julio Aróstegui, quien se refiere a los orígenes de este campo, planteando que se institucionaliza en Francia y que toma como referencia los procesos ocurridos tras la Segunda Guerra Mundial10. De acuerdo al momento histórico que se hace referencia al inicio de esta Historia Reciente, es que abordaremos lo dicho en un principio, y que guarda relación con el carácter de vitalidad que posee este campo, principalmente por quienes construyen esta historia, los testigos mismos de los procesos, los protagonistas, los que poseen una memoria y que permiten también esta diferenciación que hemos mencionado entre la Historia Reciente y la Historia Contemporánea. En palabras de Aróstegui: “La HTP (Historia del Tiempo Presente) ha pretendido, desde que se establecen

10 ARÓSTEGUI, Julio. Historia y Tiempo Presente. Un Nuevo Horizonte para la Historiografía Contemporaneista. Cuadernos de Historia Contemporánea, N°20, pp. 15-18. Madrid: Universidad Complutense Madrid (UCM). 1998. 23 sus primeros balbuceos, representar una historia de las gentes vivas, una historia escrita por sus propios protagonistas”11.

Esta cita nos muestra, como hemos dicho anteriormente, un elemento característico, fundamental y diferenciador respecto de la Historia Contemporánea, de que sus protagonistas son actores vivos, testigos de los procesos evidenciados y que transmiten su experiencia a través de su relato oral y/o la Memoria, haciendo de este campo un contacto y un diálogo intergeneracional activo, entre los que mantienen viva esa memoria colectiva, y quienes la van construyendo. En palabras de Pescader:

“En efecto, como se investigan acontecimientos cuyo recuerdo ha sido condensado en memorias colectivas, el período que interesa a la investigación estará dado, en cada caso, por la duración vital de los grupos generacionales portadores de los recuerdos –actores directos o simples testigos de los acontecimientos-. Paralelamente se estimula una indagación más profunda sobre los intrincados vínculos de la Historia con la memoria colectiva”12.

De aquí que se presenta la importancia que tendrá la Memoria para la pervivencia del relato histórico, el que se vincula además con el relato oral, siendo de gran importancia para el desarrollo de este campo ya que son los actores mismos de los procesos históricos que reconstruyen, junto con el historiador, la memoria colectiva que es transmitida. Respecto a la Memoria nos adentraremos más adelante, ya que se vincula directamente con nuestra investigación y los fines que ésta persigue, por lo que la definiremos en los siguientes capítulos además de establecer las relaciones pertinentes con la realidad a estudiar.

11 ARÓSTEGUI, op.cit., 1998, p. 17.

12 PESCADER, Carlos. Cuando el Pasado Reciente se hace Historia. En: Revista de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales. Universidad Nacional de Comahue. Año 8, n°9, pp. 115-128. Buenos Aires, . 2003, p. 120 y 121. 24

Por otro lado, según Mateos, nos señala otro rasgo característico de este campo de estudio, el cual hace referencia a la diversidad de perspectivas que confluyen en el estudio de los procesos históricos recientes. En palabras del autor:

“la historia del tiempo presente se interesa por los orígenes de ese tiempo presente desde diversas perspectivas no sólo la que atañe a lo político, entendido como algo más amplio, abierto al comportamiento y las representaciones, que la noción tradicional de la política”.13

Es importante, y de acuerdo a la cita anterior, recalcar que este nuevo campo de estudio posee un carácter multidisciplinario y, por sobre todo, interdisciplinario con las demás Ciencias Sociales, enriqueciendo, de esta forma, el análisis de los procesos históricos, por lo que entre las disciplinas se comparten teorías, metodologías y conocimientos en general, dejando de lado también lo esencialmente político.

Consideramos relevante, además, el enfoque que se le otorga en nuestro país al estudio de este campo, a pesar de que se encuentra en constante debate, las investigaciones sobre Historia Reciente se han profundizado, y además problematizan a la Historia Positivista que carece de un enfoque crítico y resiste a las demás ciencias sociales, que se han naturalizado en diversas instituciones académicas y que consideramos relevante repensarlas. Es por esto que la importancia que le otorgamos a este campo tiene relación con la que le otorga la Universidad Austral de Chile sobre el estudio de la Historia del Tiempo Presente: “el

13 MATEOS, Abdón. Historia, Memoria y Tiempo Presente. En: Hispania Nova: Revista de Historia Contemporánea, Universidad Nacional a Distancia (UNED), ISSN-e 1138-7319, N°1, p. 1-11. Madrid. 1998, p. 2. 25 estudioso del Tiempo Presente tiene una responsabilidad social y un compromiso ético y ciudadano en el desarrollo de su actividad”.14

Volviendo al origen del campo de la Historia Reciente, consideramos relevante presentar cómo se fue desarrollando, o cómo se evidencia la aparición de este campo de estudio en otros contextos, los cuales se remontan a Europa, y que ha tenido diferentes repercusiones entre los historiadores de los distintos países. Principalmente en Francia, como habíamos mencionado, donde surge, se ha desarrollado a partir de lo ocurrido tras la Segunda Guerra Mundial y al proceso de descolonización en África, siendo elementos que perduran fuertemente en la actualidad. En el caso español se considera la labor de este campo de estudio a partir de la Guerra Civil y el proceso llevado a cabo por Franco, siendo el punto de partida del análisis ibérico. Por otro lado, en Latinoamérica, este campo se ha visto mayoritariamente ligado a los procesos dictatoriales desde la segunda mitad del siglo XX y a las transiciones post-dictaduras a los gobiernos democráticos de hoy en día15.

Específicamente, en el presente trabajo, abordamos el contexto previo a la dictadura cívico- militar chilena, en pleno proceso de Guerra Fría, a partir de la aparición del movimiento político, social y cultural de la Nueva Canción Chilena en vinculación con la enseñanza de la Historia Reciente de nuestro país, la cual posee elementos propios que permiten ser parte de este campo de estudio y su análisis.

Recalcamos la importancia del desarrollo de la Historia Reciente, ya que ha trascendido, como hemos dicho en el presente capítulo, en toda la actividad Historiográfica. Podemos tener en cuenta lo dicho por Eric Hobsbawm, quien señalaba en su texto “Sobre la Historia”

14 Enfoque que le da la Universidad Austral de Chile (UACH) a partir de la presentación de su Magíster de la Historia del Tiempo Presente. Visto el 18/07/2013 en: http://humanidades.uach.cl/postgrados/magister-en- historia-del-tiempo-presente/ 15 PESCADER, op.cit., 2003. 26 el acelerado y revolucionario cambio que ha tenido la historia documentada en al menos cuarenta años, siendo esto un cambio profundo, dramático y extraordinario16.

Éste campo de estudio no se encuentra ajeno a problemáticas que surgen respecto a la metodología e investigación de la historia reciente. Disputas que autores consideran que son la columna vertebral del estudio del pasado reciente, el cual gira en torno a contextos políticos y con gran potencia discursiva.17

Una vez establecidas las diferencias conceptuales entre la Historia Reciente y la Historia Contemporánea, y teniendo en consideración los márgenes temporales de nuestra investigación, daremos paso a una discusión que se hace presente dentro de este campo de estudio, el cual tiene relación al concepto en sí. Por lo tanto, en el siguiente capítulo discutiremos si podemos hablar exclusivamente sobre la enseñanza de la Historia Reciente, o si podemos referirnos también al término: Historia del Tiempo Presente.

2.2.2. DISCUSIÓN SOBRE EL CONCEPTO: HISTORIA RECIENTE/HISTORIA DEL TIEMPO PRESENTE

A partir del surgimiento de la Historia Reciente, como nuevo campo de estudio, han aparecido también discusiones sobre su temporalidad, y que hemos problematizado en el capítulo anterior, en el debate que se tiene frente a la Historia Contemporánea. A continuación, nos adentraremos en una discusión que está presente en el campo mismo de la Historia Reciente, ya que algunos teóricos plantean que no es lo mismo hablar de Historia Reciente que hablar de Historia del Tiempo Presente. Como señala Mateos

16 HOBSBAWM, Eric. Sobre La Historia, Barcelona. Ed: Crítica. 1998, p. 234. 17 RUBIO, op.cit.,2013, p. 336 27

“Historia del Tiempo Presente no es equivalente a Historia del Pasado Reciente o Inmediato. A mi juicio, la Historia del Tiempo Presente, como el resto de especialidades historiográficas, estudia preferentes procesos históricos que, aunque sean recientes, están ya cerrados o para los que existe una mínima distancia cronológica. Esta distinción entre Tiempo Presente e Historia Inmediata no es compartida por el conjunto de los historiadores ‘presentistas’ pues si lo que se pretende es explicar es el presente, los orígenes de nuestros días, no se puede excluir el pasado más inmediato, coetáneo”18.

Si analizamos el párrafo anterior Mateos establece la diferenciación entre ambas concepciones expuestas, Historia del Tiempo Presente e Historia del Pasado Reciente, aunque nosotros consideramos que los procesos históricos no son cerrados del todo, tal como se señala al final de la cita, en donde no podemos excluir el pasado más inmediato si nuestras intenciones es estudiar y explicar el presente. Además, podemos ver que siempre se adhieren a otros procesos que confluyen en tal coyuntura, por lo que los procesos se hacen interdependientes unos de otros.

En relación a nuestro trabajo optamos por no establecer la separación o diferencias entre ambas acepciones, por lo tanto, se tratarán como elementos comunes, ya que el movimiento de la Nueva Canción Chilena, tuvo una fuerte influencia en la formación del pensamiento político durante los años sesenta en nuestro país, por lo que no se trata de un proceso aislado que quedó cerrado, dada la memoria que transmite y que perdura hasta nuestros días. Todo esto lo desarrollaremos en los capítulos y ejes teóricos posteriores.

18 MATEOS, op.cit., 1998, p. 1. 28

2.2.3. SOBRE LAS DURACIONES DEL TIEMPO HISTÓRICO

Para referirnos a la Historia Reciente, y su periodización histórica, no podemos dejar de lado a un reconocido historiador que plantea las diferencias temporales respecto a las duraciones del tiempo histórico. Nos referimos a Fernand Braudel, quien establece uno de los aportes más significativos a la historiografía en el siglo XX, y que guardan relación a los procesos históricos que la Historia Reciente considera para desarrollarse como disciplina.

Según Braudel, el tiempo histórico se compone de tres duraciones, que son la de Corta Duración, conocida también como Historia Episódica o de Acontecimientos; la de Mediana Duración, también llamada Historia Coyuntural y finalmente la de Larga Duración, la que también recibe el nombre de Historia Estructural. Para efectos de nuestra investigación, consideramos necesario el hacer las distinciones entre las duraciones mencionadas, para poder contextualizar de forma más clara el período que hacemos referencia, dando énfasis especialmente a la mediana duración la cual desarrollaremos más adelante.

En primer lugar, respecto a la corta duración, podemos hacer referencia a los acontecimientos, que son los que se encuentran normalmente en el subconsciente de las personas, además, y como señala Braudel, “La Historia Tradicional atenta al tiempo breve, al individuo y al acontecimiento, desde hace largo tiempo nos ha habituado a su relato precipitado, dramático, de corto aliento (…) el tiempo corto es la más caprichosa, la más engañosa de las duraciones”19

¿Por qué podría tratarse de las más “engañosa”? Pues porque son los acontecimientos los que fundamentan el funcionamiento de la Historia Tradicional, y los que el común de las persona reconoce con mayor facilidad, a pesar de que estos acontecimientos estén en un

19 BRAUDEL, Fernand. La Historia y las Ciencias Sociales. Madrid. Ed. Alianza. 1976, p. 64-66. 29 determinado momento es el que mayor importancia genera en la consciencia “Echa tanto humo que llena la conciencia de los contemporáneos”.20

Por lo tanto, y a partir de lo anterior, es que los acontecimientos muchas veces quedan aislados de los procesos históricos, lo que nos resulta una Historia segmentada y sin relación alguna entre el pasado y el presente, o también, desde una perspectiva pedagógica, se comprenden a partir de una linealidad en donde el tiempo histórico es sinónimo de tiempo cronológico, tal y como funciona el positivismo historiográfico decimonónico que entiende a la Historia a partir de un concepto lineal de hechos. Además, como señalamos anteriormente, la corta duración es el de más fácil reconocimiento entre las personas y podemos agregar que es el más recurrente en las aulas, ya que son los acontecimientos los que se enmarcan en el proceso de enseñanza de la historia más tradicionalista.

La Mediana Duración, o también conocida como Historia Coyuntural según Braudel, tiene relación con las estructuras sociales, las cuales se enmarcan en contextos económicos y además se encuentra entre los acontecimientos y la larga duración que Braudel define.

A partir de esto es que no vemos a la Nueva Canción Chilena como un simple acontecimiento aislado dentro de un proceso histórico, ya que consideramos trascendente no tan sólo el discurso con el cual impregna a la sociedad chilena, sino que también responde a diversos factores propios del contexto histórico, tanto a nivel nacional como internacional, teniendo como telón de fondo la Guerra Fría y la lucha de influencias entre los EE.UU. y la URSS. Además, el intervencionismo económico en América Latina y específicamente en Chile, generó diversas coyunturas, entre las cuales encontramos el fortalecimiento de los movimientos sociales y la creación de la Nueva Canción Chilena, que se manifestó a través de diversas expresiones culturales desde los años sesenta en adelante.

20 Ibíd., p. 65-67. 30

Finalmente, respecto al tiempo histórico y sus duraciones, Fernand Braudel hace referencia a la larga duración como la “Historia Estructural”, definiéndola como una historia que comprende períodos muy largos, “una historia lenta en deformarse y, por consiguiente, en ponerse de manifiesto a la observación”21, en donde, además: “Ciertas estructuras están dotadas de tan larga vida que se convierten en elementos estables de una infinidad de generaciones”22.

Por lo tanto, la definición de larga duración que lleva a cabo Braudel, se puede entender como los procesos en donde ocurren cambios, la mayoría de las veces, y en un contexto económico y social, imperceptibles. Un ejemplo de esto, puede ser la geografía o la misma geología, ya que sus procesos son analizados al largo plazo, tal como lo son las edades geológicas, que además contienen diversos cambios, como puede ser la fauna, flora, el clima, etc. En el caso del trabajo historiográfico, podemos establecer como ejemplo el que grafica la investigación sobre los discursos docentes frente a la enseñanza de la historia reciente en Chile, que señala:

“el desarrollo del latifundio en Chile, cuyo inicio puede encontrarse en la época colonial (siglos XVI y XVII), llegando a proyectarse, sin mayores cambios en cuanto a su estructura de conformación social y forma de producción económica hasta la Reforma Agraria impulsada durante la década de los ’60, ya en el siglo XX chileno”.23

21 Ibíd., p. 53. 22 Ibíd., p. 70. 23 ALVARADO, Voltaire; ARENAS, Hernán; TRIVIQUE, Beatriz. Los Discursos Docentes Frente a la Enseñanza de la Historia Reciente de Chile: Una Aproximación Didáctica desde la Temporalidad Histórica y el Tiempo Presente (Tesis de Pregrado). Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Santiago, 2010, p. 45. 31

Para efectos de nuestra investigación podemos hacer mención a la larga duración respecto a los movimientos sociales, los cuales se comienzan a desarrollar desde hace más de un siglo en nuestro país, y que responden a lógicas similares respecto a la estructura económica que ha estado presente desde su aparición, en este caso frente a “la cuestión social”, la que se presenta a través de diferentes formas en el siglo XX, o en términos de Braudel, a través de coyunturas, las que se han ido modificando en algunos aspectos y contextos. Es por esto que a partir de este ejemplo sobre el surgimiento de los movimientos sociales podemos comprender distintos elementos propios de la historia del siglo XX en nuestro país, y a qué procesos responden, las coyunturas que están presentes y cómo han influido en los movimientos sociales actuales.

En el contexto de la Historia Reciente, nos referimos a la Nueva Canción Chilena, que como desarrollaremos en los capítulos posteriores, aparece como una coyuntura que tendrá incidencia en los movimientos sociales llevados a cabo en los años sesenta, y que tiene repercusiones directas e indirectas en la sociedad actual, siendo fundamental para el proceso de enseñanza del contexto que hemos mencionado y que iremos profundizando más adelante. Siguiendo el ejemplo anterior, podemos analizar de “Cantata de Santa María de Iquique”24, donde se hace referencia a los primeros movimientos sociales, en este caso obrero, en nuestro país, teniendo como contexto “la cuestión social” de a principios del siglo XX en Chile, donde se pueden identificar distintos elementos propios de las duraciones del tiempo histórico. Y es que es aquí cuando damos énfasis a las coyunturas, como la Nueva Canción Chilena, dentro de la larga duración, que hace alusión a los movimientos sociales. En este sentido, comprendemos “la cuestión social” a partir de lo señalado por James O. Morris, en el análisis de Sergio Grez, quien la define como:

“la totalidad de (...) consecuencias sociales, laborales e ideológicas de la industrialización y urbanización nacientes: una nueva forma dependiente del

24 Compuesta por el artista chileno Luis Advis en 1969 e interpretada musicalmente por Quilapayún, siendo parte de su disco de 1970 “Santa María de Iquique”. 32

sistema de salarios, la aparición de problemas cada vez más complejos pertinentes a vivienda obrera, atención médica y salubridad; la constitución de organizaciones destinadas a defender los intereses del nuevo "proletariado"; huelgas y demostraciones callejeras, tal vez choques armados entre los trabajadores y la policía o los militares, y cierta popularidad de las ideas extremistas, con una consiguiente influencia sobre los dirigentes de los amonestados trabajadores”25.

A partir de lo anterior es que podemos evidenciar la importancia que puede significar la utilización de la Nueva Canción Chilena para poder contextualizar distintos momentos de nuestra Historia Reciente, a partir de estructuras económicas y/o sociales, y que influyen en la actualidad, teniendo elementos propios del campo historiográfico y que consideramos son fundamentales en el proceso de enseñanza. Por otro lado la importancia radica también en el trabajo del docente, y del historiador a la vez, ya que la misma historiografía, según señala Grez, son responsables en cierto grado, de facilitar las intenciones de una elite que busca acrecentar el “hoyo negro de la memoria histórica del país”, ya que no establecen relaciones activas entre el pasado y el presente, y por lo tanto, no restituyen “la intriga y el calor de la vida”26 como elementos propios, y para efectos de nuestra investigación, de la Historia Reciente y la Pedagogía crítica.

2.2.4. LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE

Hemos visto en los demás capítulos, el concepto de Historia Reciente, que es lo que abarca la historiografía al situarse desde éste eje temático. Es por esto, que nos cuestionamos como acercar a las escuelas la Historia Reciente, tomando en cuenta que en éste punto incide notablemente la tendencia política de quien lo exprese y/o se encargue en la elaboración de los programas de estudio de los establecimientos. En pocas palabras:

25 GREZ, Sergio. La cuestión social en Chile: Ideas y Debates Precursores (1804-1902). Santiago, Chile. DIBAM. 1997, p. 9. 26 Ibíd., p. 7. 33

“La historia reciente (…) de los países del Cono Sur en general tiene dificultades particulares, tanto para su investigación como para su enseñanza. Su carácter tan polémico y político hace que su ingreso a la escuela implique problemas delicados, pero justamente por el tipo de valores que involucra su enseñanza es urgente e imprescindible”.27

Atendiendo a la cita anterior es que hacemos énfasis en la urgencia de profundizar en el carácter polémico que envuelve la enseñanza de la Historia Reciente ya que, si pensamos en la Historia en general, desde los inicios de la enseñanza histórica, las políticas educativas buscan legitimar a los Estados, a través de una “historia oficial”. Pero ¿ocurre lo mismo con la enseñanza de la Historia Reciente? En primer lugar debemos retomar el concepto de Historia Reciente y enfatizar en algunas características, como por ejemplo “la convivencia del pasado con el presente: la supervivencia de actores y protagonistas del pasado en condiciones de dar su testimonio de lo vivido, la existencia de una memoria social sobre ese tiempo transcurrido.”28

Es así como la memoria estará fuertemente ligada a la Historia Reciente, ya que es la memoria la que permite definir las necesidades de la sociedad o sociedades actuales sobre la conservación de su pasado, ya sea por diferentes razones, y de esta forma lograr recomponer sus lazos y permanecer unida29.

27 FRANCO, Marina; LEVÍN, Florencia. La Historia Reciente en la Escuela. Nuevas Preguntas y Algunas Respuestas. En: Revista Novedades Educativas, N°202, Buenos Aires, Argentina, Octubre de 2007, p.1. 28 Ibíd., p. 3. 29 Ibíd. 34

Rubio hace un hincapié respecto a lo propuesto por el marco curricular, el cual es abordado desde una memoria caritativa con el sufrimiento, no desde una memoria ciudadana y política.30

Por ejemplo, mantener la memoria de una sociedad que a través de un movimiento artístico como la Nueva Canción Chilena pudo organizar a distintos sectores sociales y pasar de ser una voz de protesta a ser la voz principal del gobierno de la Unidad Popular, lo que es una forma de reconstruirnos como una sociedad capaz de organizarse a través de diversas herramientas democráticas.

Es a partir de lo anterior que nos enfocamos, en el presente capítulo, a revisar si existen tales herramientas para enseñar hoy en día la Historia Reciente que, como hemos dicho anteriormente, es un área problemática y compleja dada la vitalidad que poseen los elementos que son parte de ésta y que deben ser analizadas por los actores involucrados en el contexto escolar para así promover el pensamiento histórico en el proceso de enseñanza. En forma de paréntesis es que nos referimos al pensamiento histórico respecto a la enseñanza de la Historia, tal como señala Antoni Santisteban:

“Una de las finalidades más importantes de la enseñanza de la historia es formar el pensamiento histórico, con la intención de dotar al alumnado de una serie de instrumentos de análisis, de comprensión o de interpretación, que le permitan abordar el estudio de la historia con autonomía y construir su propia representación del pasado, al mismo tiempo que pueda ser capaz de contextualizar o juzgar los hechos históricos, consciente de la distancia que los separa del presente”31.

30 RUBIO, op.cit., 2013, p.355 31 SANTISTEBAN, Antoni. La formación de competencias de pensamiento histórico. En: Memoria Académica, N° 14, pp. 34-56. Buenos Aires, Universidad Nacional de la Plata. Ed: Clío & Asociados, 2010, p. 35. 35

De esta forma enseñar la Historia Reciente, posee diversas herramientas que permiten que el proceso de enseñanza genere el pensamiento histórico, y una de estas herramientas es: la Memoria, la cual:

“mantiene una estrecha vinculación con las inquietudes, preguntas y necesidades presentes y, por lo tanto, con el horizonte de expectativas futuras. En otros términos, esta perspectiva tiende a considerar que es en función de los problemas y cuestiones que atañen a un sujeto y a una sociedad que se elaboran y construyen sentidos del pasado”32.

En síntesis, la Historia Reciente es compleja desde su investigación y desarrollo como campo historiográfico, y también como parte de la enseñanza dada la vitalidad que posee entre las estructuras que se evidencian hasta nuestros días. El análisis en ambos casos estará condicionado por las herramientas que utilicemos, una de estas herramientas es la memoria, la cual permite adentrarnos en diversos contextos, aunque de un mismo proceso, teniendo así un relato complejo y muchas veces conflictivo, pero enriquecedor a la vez.

Sobre las herramientas a utilizar podemos pensar en los recursos que el docente dispone para formular el pensamiento histórico en los estudiantes, y es que el avance tecnológico también influye actualmente a la hora de considerar los recursos didácticos para enseñar a pensar históricamente. Carretero y Montanero clasifican estas herramientas en dos grupos, los que se basan principalmente en el texto, ya sea de tipo oral o escrito, y los que se basan en información icónica. De la primera encontramos el relato del profesor, que es el elemento más utilizado en el aula, y que ha ido escapando de las metodologías tradicionales

32 LEVÍN, Florencia. El Pasado Reciente en la Escuela, entre los dilemas de la Historia y la Memoria. En: Schujman G. y Siede I. (Coordinadores). Ciudadanía para armar. Apuntes para la formación ética y política, Buenos Aires, Ed. Aique, pp. 157-178, 2007, pp. 158-159. 36 enfocadas en promover habilidades exclusivamente descriptivas, dando paso a un relato que busca que los estudiantes analicen argumentos o interpretaciones sobre determinados procesos. “Una explicación tiene más posibilidades de potenciar el pensamiento histórico si demanda una participación activa del estudiante”33. Esta explicación se complementa de otro recurso verbal que aparece habitualmente en la escuela, como el texto, lo que permite desarrollar habilidades de análisis de fuentes o desarrollar el pensamiento crítico.

Pero lo que debemos considerar, y que guarda relación con la presente investigación, es la segunda clasificación que los autores hacen mención, la información de tipo icónica, que se relaciona con el lenguaje visual, elemento muy presente actualmente que ha sido facilitado por el desarrollo e incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC’s)34 en las aulas, siendo de uso habitual, incluso más que las mismas salidas a museos o la utilización de otros espacios fuera del aula.

“Desde hace tiempo los profesores utilizan también otros recursos icónicos de carácter dinámico, como los vídeos con materiales cinematográficos que recrean, ilustran o relatan fenómenos históricos… (Y también) … se han incorporado a las aulas materiales de tipo multimedia, de distribución comercial o disponibles en Internet. Además de ser elementos principalmente icónicos, aportan un valor interactivo y personalizado.”35

Es bajo esta lógica, que se adapta a las configuraciones de los contextos actuales del sistema escolar, que la Nueva Canción Chilena pensada como herramienta, tal cual señala Carretero y Montanero, puede tener un papel fundamental en el proceso de enseñanza de la Historia Reciente, lo que dependerá de las apreciaciones que los y las docentes hagan sobre

33 CARRETERO, M. y MONTANERO, M. Enseñanza y aprendizaje de la historia: aspectos cognitivos y culturales. Universidad Autónoma de Madrid. Ed. FLACSO (Argentina); Universidad de Extremadura, pp. 133- 142. 2008, pp. 137. 34 Ibíd., 2008. 35 Ibíd., 2008, pp. 138. 37 los elementos que hemos trabajado en el presente marco teórico y que analizaremos más adelante.

2.3. MEMORIA

Tras lo señalado en los capítulos anteriores, en relación al campo historiográfico, específicamente sobre la Historia Reciente, es que nos adentraremos en un elemento que trabaja de la mano con este campo, y que también cuenta con ciertas características propias de la Historia Reciente, y es que nos referimos a la Memoria.

Debemos precisar, como se ha señalado anteriormente que, para lograr los objetivos propuestos en nuestra investigación, trabajar el concepto de Memoria nos ayudará a adentrarnos de forma más ordenada y precisa a lo que tiene que ver con la Nueva Canción Chilena, y el último eje teórico donde abordaremos lo relacionado a lo pedagógico, más específicamente lo que tiene que ver con la enseñanza de la Historia Reciente.

El concepto de Memoria ha tomado una considerable relevancia en los estudios historiográficos desde la segunda mitad del Siglo XX, y es que la historia no es una sola, en palabras de Halbwachs: “junto a una historia escrita, se encuentra una historia viva que se perpetúa o se renueva a través del tiempo y donde es posible encontrar un gran número de esas corrientes antiguas que sólo aparentemente habían desaparecido”36. Por lo tanto, este tipo de Historia dista bastante de la metodología de la Historia Positivista decimonónica, incorporándose al trabajo de la Historia Reciente, es por esto que consideramos, tal como

36 HALBWACHS, Maurice. Memoria Colectiva. Zaragoza, España. Ed: Prensas Universitarias de Zaragoza, 2004. Cap. II: Memoria Colectiva y Memoria Histórica, p.66 38 señala Le Goff, que: “El concepto de memoria es un concepto crucial”37. ¿Por qué crucial? ¿Qué se entiende por este concepto? ¿Existe sólo un tipo de memoria o es un concepto más amplio que integra otros tipos de esta? ¿Es posible rescatar la memoria de un contexto histórico a través de coyunturas de tipo social? ¿Podemos considerar válida la memoria como parte del trabajo historiográfico y educativo? Son preguntas que iremos respondiendo en el presente capítulo y a medida que vayamos adentrándonos podremos ir conceptualizando en relación a los objetivos que nos hemos propuesto en este trabajo.

2.3.1. HACIA UNA CONCEPTUALIZACIÓN DE MEMORIA

Para comenzar a adentrarnos en esta conceptualización, abordaremos diferentes teóricos que definen memoria en relación a la historiografía. Como señalamos anteriormente, responderemos algunas interrogantes que nos ayudarán a delimitar el concepto y otorgarle la funcionalidad para lograr nuestros objetivos de la investigación.

En primer término ¿Qué entendemos por memoria? Desde que nos comprendemos como sujetos históricos, individual o colectivamente, que intervienen un determinado tiempo y espacio es que se puede concebir el ejercicio del recuerdo, la cual está compuesta de subjetividades o momentos que son guardados de forma selectiva por individuos o grupos de personas. A partir del ejercicio anterior, el recordar nos hace traer al presente elementos que van construyendo, o reconstruyendo, un registro que organiza el relato histórico según las características que hemos mencionado. De esta forma, y sumada a la relevancia otorgada por Le Goff, la memoria posee, según Jelin:

37 LE GOFF, Jacques. El Orden de la Memoria: El Tiempo Como Imaginario. Barcelona. Ed: Paidós, 1991, p. 131. 39

“…un papel altamente significativo, como mecanismo cultural para fortalecer el sentido de pertenencia a grupo o comunidades. A menudo especialmente en el caso de grupos oprimidos, silenciados y discriminados, la referencia a un pasado en común permite construir sentimientos de autovalorización y mayor confianza en uno/a mismo/a y en el grupo.”38.

A partir de lo anterior es que debemos esclarecer por qué la referencia a un pasado en común puede significar la construcción de tales relatos que generen confianza en un grupo determinado, y es que lo llamativo del trabajo de la memoria es que tales recuerdos e imágenes quizás no reproduzcan fielmente, o exactamente, lo ocurrido, debido a que en esa reconstitución pueden añadirse elementos reales y/o ficticios, aunque, como señala Betancourt:

“…es posible que los testimonios de otros sean exactos y que ellos corrijan y complementen mis recuerdos, al mismo tiempo que ellos se vayan incorporando a los nuestros, pues uno en uno y otro caso nuestra memoria no opera como una ‘tabla rasa’, de tal manera que los testimonios de los otros son impulsados a reconstruir nuestros recuerdos”39.

A partir de la cita anterior es que podemos dar cuenta del funcionamiento o la mecánica que opera en el ejercicio de recordar y evocar la memoria, la cual se complementa a medida que los diferentes testimonios o relatos configuran un mismo proceso histórico, el cual, aunque se construya en base a subjetividades, nos otorgan también elementos en común que otorgan validez tanto a nosotros como a la realidad o realidades que son parte del relato, a esto volveremos cuando hagamos referencia a la memoria colectiva.

38 JELIN, Elizabeth. Los Trabajos de la Memoria. Madrid, España Ed: Siglo XXI, 2002, pp. 9-10 39 BETANCOURT, Darío. Memoria Individual, Memoria Colectiva y Memoria Histórica: Lo Secreto y lo Escondido en la Narración y el Recuerdo. En: La Práctica Investigativa en Ciencias Sociales, Bogotá, Universidad Pedagógica Nacional (UPN), CLACSO. 2004, pp. 125. 40

Además, evidenciar otro elemento presente en la memoria, en donde señala Jelin: “Abordar la memoria involucra referirse a recuerdos y olvidos, narrativas y actos, silencios y gestos. Hay en juego saberes, pero también hay emociones. Y hay también huecos y fracturas”40. Esto nos indica que no debemos dejar fuera, como se aclara en la cita, lo que no es recordado, también conocido como el olvido. Ya que no es posible que la memoria sea completa, en el ejercicio de recordar también hay elementos que son olvidados, lo que se debe a diversos factores, ya sea porque nuestra memoria es selectiva, y muchas veces deja fuera elementos que no consideramos relevantes, lo que sí puede ser para otros/as. Es por esto que volvemos a mencionar la importancia que Le Goff otorga al estudio de la memoria, en este caso, y volviendo a lo anterior, a la memoria colectiva, principalmente porque:

“la memoria colectiva ha constituido un hito importante en la lucha por el poder conducida por las fuerzas sociales. Apoderarse de la memoria y del olvido es una de las máximas preocupaciones de las clases, de los grupos, de los individuos que han dominado y dominan las sociedades históricas. Los olvidos, los silencios de la historia son reveladores de estos mecanismos de manipulación de la memoria colectiva (…) El estudio de la memoria social es uno de los modos fundamentales para afrontar los problemas del tiempo y de la historia, en relación con lo cual la memoria se encuentra ya hacia atrás y ya más adelante”41.

A partir de la cita anterior hacemos referencia al rol de la memoria social, en la cual nos adentraremos más adelante, y que nos permite analizar la historia desde otra perspectiva, la que queda fuera por la historiografía tradicional, pero que es acogida por la historiografía crítica, donde encontramos a la Historia Reciente. Por otro lado, es fundamental el rol

40 JELIN, op.cit., 2002, p. 17. 41 LE GOFF, op.cit., 1991, p. 134. 41 pedagógico que aparece cuando nos referimos a la memoria, reflejada en la cita anterior, ya que, como futuros docentes, debemos hacer visibles a los grupos que conforman el relato histórico y que muchas veces han sido obviados por los actores tradicionales.

De aquí que la memoria nos parezca un elemento más colectivo que individual, ya que la reconstrucción del relato logra adentrarse aún más cuando las diferentes memorias se complementan y en cierto modo se corrigen, como señalábamos anteriormente.

En el caso de nuestra investigación, y agregando lo que hemos mencionado en los capítulos anteriores, la Nueva Canción Chilena aparece como coyuntura y como portadora de una memoria que significa, o bien puede resignificar, un proceso histórico y que nos puede ayudar de forma didáctica en la enseñanza de la Historia Reciente, sin dejar fuera, según lo que hemos señalado, al olvido que aparece como una amenaza a la identidad, o a los distintos componentes que están presentes en la memoria. Esto debido a que las diferentes memorias que confluyen en los relatos artísticos de este movimiento, nos muestran y configuran las subjetividades que se refieren a elementos no tan sólo políticos, ya que el movimiento como tal responde a cuestiones económicas propias de la segunda mitad del siglo XX en el mundo y nuestro país, y por sobretodo nace a partir de social, teniendo así una herramienta vigente, cercana y didáctica que nos ayudará, a través de la memoria que transmite, a reconstruir en conjunto con los y las estudiantes, los distintos relatos históricos que surgen.

Por lo tanto, y para dar paso a los siguientes capítulos, donde especificaremos respecto a algunos elementos del concepto de memoria, fijaremos nuestra atención en lo que se refiere a la memoria colectiva, para ir dando paso posteriormente a lo que se entiende por memoria social, de esta forma podremos definir en relación a nuestros objetivos, de mejor manera y vincularlo al movimiento llevado a cabo en nuestro país que hacemos referencia en nuestra investigación dentro del proceso de enseñanza.

42

2.3.2. MEMORIAS COLECTIVAS

Ya hemos mostrado algunos aspectos de la memoria histórica, entre ellos los que son propios de la memoria individual, pero iremos profundizando sobre la memoria colectiva, la que se acerca a los fines de nuestra investigación dadas las características que posee y que conceptualizaremos en el presente capítulo.

Para poder profundizar en la memoria colectiva, nos adentramos en el análisis de Halbwachs, respecto a las diferencias existentes entre la ésta memoria y la memoria individual. Aunque es importante dejar en claro, señala el autor, que aún “no nos hemos acostumbrados a hablar de memoria de un grupo (…) como si dicha facultad sólo pudiera existir y duraren la medida en qué esté asociada a un cuerpo o un cerebro individual”42

Lo anterior nos da cuenta de que todavía se vincula el concepto a lo esencialmente individual, cuando también deberíamos considerar a la memoria colectiva, principalmente por lo que hemos mencionado a grandes rasgos en el capítulo anterior, en lo que respecta a que la memoria colectiva nos permite tener un relato más cercano a la realidad rememorada, ya que la memoria individual es selectiva y así como está creada en base a subjetividades y emociones, es posible que hayan elementos que queden en el olvido. De esta forma, siguiendo la línea de Halbwachs, es que cada individuo, inmerso en un grupo, posee una memoria individual y colectiva, en donde la actitud de ésta última, dista y muchas veces y es contraria a la individual, debido principalmente a intereses personales o colectivos respectivamente.

A pesar de ser contrarias, la relación entre ambas memorias dependerá de cuál se interpone sobre la otra. Específicamente, según el autor: “La memoria colectiva, envuelve a las memorias individuales, pero no se confunde con ellas. Evoluciona según sus leyes, y si bien

42 Halbwachs, op.cit., 2004, p. 53. 43 algunos recuerdos individuales penetran también a veces en ella, cambian de rostro en cuanto vuelven a colocarse en un conjunto que ya no es una conciencia personal”43.

Es por esto que la memoria colectiva no posee las mismas limitaciones que la individual, ya que en la primera encontramos una tradición, la cual no ha sido vivida necesariamente, pero si se evoca a la memoria de los demás, como en el caso de nuestro trabajo, haremos referencia a un movimiento que es parte de una memoria colectiva, incluso nacional, la cual no vivimos, pero sí se nos ha presentado en archivos, canciones, expresiones artísticas, etc. Aunque estas memorias pueden ser reforzadas a través de otros mecanismos, como la investigación misma, por ejemplo, siguiendo la idea de Halbwachs, siguen siendo una tradición que es reflejada como una parte de la memoria nacional, la que es copiada por los sujetos y así quedando impregnada en el pensamiento colectivo que permea al individual.

En síntesis: “Cabría distinguir dos memorias, que podemos denominar, por ejemplo, una memoria interior o interna y otra exterior, o bien una memoria personal y otra social”44. En relación a lo planteado por Halbwachs, es que podemos distinguir la presencia de una o más memorias, las cuales expresan desde donde es posible situarse para hablar de la historia. Ante esto, como mencionamos anteriormente, nos situaremos desde la memoria colectiva, la cual ha quedado plasmada en libros, en documentos, pero también a lo que nos convoca, a expresiones artísticas como la Nueva Canción Chilena, la que tiene un estrecho vínculo con la Memoria Social que expondremos a continuación.

43 Ibíd., p. 54. 44 Ibíd., p. 55. 44

2.3.3. LA MEMORIA SOCIAL

Como hemos visto en los capítulos anteriores, para hablar de Historia Reciente, resulta necesario situarnos desde la memoria, de la cual podemos aludir:

“EI término memoria expresa una amplitud de significados y problemas: identidades personales y colectivas, herencias y saberes culturales, vacíos u olvidos de la historia, derechos, traumas colectivos, la violencia social y su representación”45

En relación a lo citado anteriormente, podemos desprender el estrecho vínculo que hay entre la historia y memoria, las cuales abarcan desde lo individual hasta lo colectivo, siendo en éste último punto donde profundizaremos su correlación con la construcción de una Memoria Social.

Para hablar de Memoria Social, es necesario situarnos en la visión general de los planteamientos Halbwachs, que no es posible hablar de una memoria sin que ésta sea de carácter social. Junto a lo expuesto, Baer respalda éste discurso, al que él llama “revolucionario”:

“Cada «yo» está conectado a un «nosotros» por lo que su recuerdo se forja en la interacción con el grupo o grupos de pertenencia (la familia, la comunidad escolar, la profesión). (…)En otras palabras, los individuos recuerdan o recrean el pasado en el marco grupal específico.”46

45 BAER, Alejandro. Memoria Social: Breve guía para perplejos. En: SUCASA, Alberto y ZAMORA, José. Memoria, Política, Justicia: En diálogos con Reyes Mate. Ed. Trotta, Madrid. 2010, p. 131. 46 BAER, Alejandro. Op.cit., 2010, p. 132. 45

De esto podemos coincidir, que la memoria personal encuentra sus bases en la memoria social, debido a que ésta última es de forma más general, en pocas palabras, logra llegar a un común de la sociedad. En el caso particular de la importancia que le hemos tomamos a la Nueva Canción Chilena, la cual tiene como principal fin, rescatar la memoria de actores y problemáticas sociales que surgían en un contexto sociopolítico de gran envergadura a mediados del siglo XX en nuestro país.

He aquí la importancia de la narración dentro de la Memoria Social, siendo esto la principal fuerza de comunicación en conjunto con la Historia Oral, como mecanismo de transmisión de historias, experiencias y vivencias, que permite reconstruir el/los relatos históricos. En relación a lo mencionado por Rubio:

“El pasado reciente evidencia la continuidad entre la narración y la experiencia temporal, tensionando la relación entre el discurso histórico, la memoria social y el contexto sociopolítico en que se produce el recuerdo”47.

Es por esto, que podemos deducir que la Memoria Social está en constante reconstrucción, en ella incide el contexto en el que se vea enfrentado la sociedad. De acuerdo a lo señalado, en la reconstrucción de la Memoria Social, existe una serie de factores que deben ser tomados en cuenta a la hora de rememorarla, lo cual podemos ejemplificar con el surgimiento de la Nueva Canción Chilena, dicho movimiento artístico, como ya mencionamos anteriormente, tiene sus cimientos en el contexto nacional a mediados del siglo XX.

47 RUBIO, Graciela. Memoria hegemónica y memoria social: Tensiones y desafíos pedagógicos en torno al pasado reciente en Chile. Revista Colombiana de Educación. 2016, p. 112. 46

Por qué nos situamos nuevamente en éste movimiento, si tomamos en cuenta lo que mencionado por Halbwachs con respecto a la Memoria Colectiva, la cual sería un nivel intermedio entre las memorias comunicativas y culturales. La primera hace referencia a lo que surge en la vida cotidiana de las sociedades, con gran importancia y relevancia a nivel emocional y que se encuentra directamente influenciada con la interacción provocada entre los individuos48, por ende, crea un vínculo con lo evocado por la Nueva Canción Chilena, el cual tiene como fin expresar desde un punto de vista denunciatorio la situación socio económica del país, específicamente lo sucedido con las clases obreras y trabajadoras49.

“Vivimos en una cultura volcada al pasado cuya máxima es la invocación permanente al deber de memoria. Pero si, corno parece evidente, la dialéctica entre recuerdo y olvido es una condición necesaria para la vida individual y social, ¿qué es lo que debemos recordar?”50

En relación a lo citado y mencionado anteriormente, para hablar de Memoria Social entonces, debemos situarnos en diversos factores, no obstante, dentro de su composición también surgen problemáticas, tales como lo mencionado en la cita ¿qué es lo que debemos recordar?, como también podemos cuestionarnos ¿Qué es lo que queremos olvidar? Es por esto que nuestro trabajo de investigación se basa en eso, en recordar desde la Nueva Canción Chilena los procesos que han ocurrido y ocurren en nuestro país, explicados desde un punto de vista artístico, el cual en más de alguna demostración evoca lo emocional, alegrías y tristezas, pero que, en cada soneto, deja un mensaje para el receptor, que queda muchas veces guardado en su memoria, la que construye a partir de otras.

48 Baer analiza lo expuesto por Aleida Assman, la cual alude al término de Memoria Colectiva trabajado por Halbwachs. En: BAER, op.cit., 2010, p. 133. 49 GODOY, Álvaro y GONZALEZ, Juan Pablo. Música Popular Chilena: 20 años (1970-1990). Departamento de Planes y Programas Culturales. División de Cultura. Ministerio de Educación. Santiago, Chile. 1995. 50 BAER, Alejandro. Memoria Social: Breve guía para perplejos. En: SUCASA, Alberto y ZAMORA, José. Memoria, Política, Justicia: En diálogos con Reyes Mate. Ed. Trotta, Madrid. 2010, p. 146. 47

2.4. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA (NCCH)

En el siguiente apartado nos centraremos en el surgimiento de la Nueva Canción Chilena y cómo ésta logra situarse en un determinado contexto social con la particular participación de diversos actores, entre ellos: artistas, trabajadores, obreros, mujeres, hombres, niños, estudiantes, los cuales poseen y evocan un potente mensaje a la sociedad, que trasciende más allá de lo político, tomando parte en las expresiones culturales de estos actores y que se evidencia en las composiciones de los y las propulsores de éste movimiento que surge en los 60’s en Chile.

En los siguientes capítulos profundizaremos respecto los orígenes, el rol y los principales elementos que conforman a la Nueva Canción Chilena, además de establecer las relaciones pertinentes con los tópicos que hemos abordado anteriormente, para finalmente vincularla a nuestros objetivos y dar paso al tópico educativo que trasciende a los que hemos desarrollado en la presente investigación.

Para referirnos a la Nueva Canción Chilena y definirla, debemos, en primer término, remitirnos al contexto donde este movimiento nace, ya que no se no se forja desde la nada, y como hemos hecho énfasis, no es un simple acontecimiento, sino que una coyuntura, que trasciende en el tiempo y el espacio dentro de nuestra Historia Reciente, repercutiendo hasta nuestros días. Por lo tanto es relevante enmarcar a la NCCh en un contexto local y global, teniendo en cuenta los procesos llevados a cabo en el mundo y Chile tras la Segunda Guerra Mundial, aunque en nuestro país perdurarán elementos que aparecen desde finales del Siglo XIX, como por ejemplo los primeros movimientos sociales que nacen en el marco de la cuestión social y que motiva el crecimiento de los movimientos sociales, en un primer momento a través de diferentes mecanismos, y ya en la segunda mitad del Siglo XX la NCCh será un medio de estos movimientos, o, en términos de Braudel, una coyuntura dentro de la larga duración que hacemos referencia.

48

2.4.1. ORÍGENES Y CARACTERÍSTICAS DEL MOVIMIENTO

El movimiento de la Nueva Canción Chilena, surge a raíz de la búsqueda de nuevas formas de expresar el arte, el cual tiene como principal influencia, marcar potencia con un gran contenido social y, además, rescatar ritmos más populares de las culturas latinoamericanas.

En el ámbito musical, es donde enfatizaremos en nuestra investigación, debido a la gran relevancia y conciencia social que hay en sus canciones:

“Los textos de muchas de sus canciones poseen un claro contenido social, denunciatorio de la situación socioeconómica de ciertas capas de la sociedad, particularmente la clase trabajadora obrera y campesina. Es decir, se trata de un movimiento que se quiere al servicio de las reivindicaciones de las clases más desposeídas.”51

Tomando en cuenta lo mencionado por Godoy y González, sus letras tenían conciencia de lo que sucedía en su entorno, sobre todo con aquellos actores sociales que no eran validados por la misma sociedad, es por esto que una de las grandes características que posee éste movimiento, tendría sentido el decir su vínculo con el relato oral que es parte fundamental de la memoria. De acuerdo a la definición del relato oral que utiliza María Laura Gili: “El relato oral ofrece la posibilidad de observar la estrecha relación existente entre experiencia y narración de los hechos. El relato es el registro de la experiencia que conjuga la elaboración con la transmisión de lo vivido”52.

51 GODOY y GONZALEZ, op.cit., 1995, p. 80. 52 GILI, María Laura. La Historia Oral y la Memoria Colectiva Como Herramientas Para el Registro del Pasado. En: MARTINI, Yoli; PÉREZ, Graciana; AGUILAR, Yanina (comps.) Las Sociedades de los Paisajes Áridos y Semi- áridos del Centro-oeste argentino. Ed: Río Cuarto, pp.443-448, Universidad Nacional de Río Cuarto, Córdoba, 2010, p.3. 49

De aquí que la memoria se vincule con el relato oral, además de hacerlo con el movimiento de la NCCh tanto en su origen como en su desarrollo, ya que:

“si hubiera que remitirse a un trasfondo histórico éste residiría (…) en las formas remotas de poesía y canto populares como la copla, la décima, la tonada y la , heredadas desde la Colonia de la antigua tradición oral y literaria del romancero español. A esto se agregaría a fines del siglo XIX, la lira popular, que llegaría a constituir un claro referente literario para la música folklórica chilena”53.

Teniendo en cuenta lo anterior es que el origen del movimiento posee elementos populares, heredando el ‘folklore’ como un elemento ligado al campo y que vio en Margot Loyola, Gabriela Pizarro y Violeta Parra, un origen a partir de sus investigaciones en las músicas populares y sonidos latinoamericanos. Además, el aporte y contribución a la cultura nacional, respecto a las obras y para efectos de esta investigación, es de carácter histórico ya que las artistas mencionadas, en el contenido de sus obras, no tan sólo describen las formas del folklore nacional, sino que se desprende el planteamiento de un descontento personal y social ante la precariedad y desigualdad de la época reflejada en sus diferentes expresiones artísticas, lo que nos lleva a pensarlas como el origen del movimiento de la NCCh.

Una de las principales propulsoras, señaladas anteriormente, y que dejó evidencia en sus cantos los descontentos sociales de la época fue Violeta Parra quien:

“vivió los mejores años de su vida junto a los pescadores, junto a los mineros, junto a los campesinos, junto a los artesanos, junto a los indígenas de la pre

53 SALAS, Fabio. La Primavera Terrestre: Cartografías del Rock Chileno y La Nueva Canción Chilena. Santiago, Chile. Ed: Cuarto Propio, 2003, p.55. 50

cordillera nortina, junto al chilote en el más extremo sur. Vivió con ellos, se hizo piel de ellos, se hizo sangre de ellos. Así solamente pudo Violeta crear canciones (…) que quedarán en la historia de nuestro país con el surgimiento de una canción nueva, musical y poéticamente valiosa, auténticamente popular. Ninguno de nosotros podía decir, cuando vivía, que Violeta era una artista del pueblo, nadie, ninguno de nosotros. Hasta cuestionábamos a Violeta Parra. Porque, quien va a ser artista del pueblo, el tiempo lo dirá, y el pueblo: porque él es, en definitiva, quien va a hacer la revolución de la cultura”54

De acuerdo a lo mencionado, será la conciencia social por parte de los y las principales exponentes de la Nueva Canción Chilena, lo que hará aún más característico éste movimiento. Esto lo podemos analizar con las letras de sus canciones, las cuales nos sirve para comprender diversos contextos sociales que sucedieron en Chile, por ende, la Nueva Canción Chilena, se puede considerar como una gran herramienta para abarcar hechos y/o sucesos históricos, como es el caso de Quilapayún con su canción ¿Qué culpa tiene el tomate? (Que la tortilla se vuelva), del cual podemos interpretar un breve extracto de ella:

“Los señores de la mina/han comprado una romana/los señores de la mina/han comprado una romana/para pesar el dinero que toditas las semanas le roban al pobre obrero/ para pesar el dinero que toditas las semanas le roban al pobre obrero.

Cuándo querrá el Dios del cielo/que la tortilla se vuelva/ Cuándo querrá el Dios del cielo/que la tortilla se vuelva/ que la tortilla se vuelva que los pobres coman pan y los ricos mierda, mierda/ que la tortilla se vuelva que los pobres coman pan y los ricos mierda, mierda”.55

54 Disponible en: http://fundacionvictorjara.org/victorjara/musica/ Visitado el 16/11/2017. 55 QUILAPAYUN, ¿Qué culpa tiene el tomate? (Que la tortilla se vuelva), del disco X-Vietnam de 1968. 51

Como podemos ver en el fragmento anterior, sus letras iban dirigidas a las clases sociales y la división de éstas que durante el siglo XX predominaba con mucha fuerza, canción que hace alusión a la Revolución Española. Acá vemos una gran representación de la idea principal que buscaba la Nueva Canción Chilena, el tomar en cuenta actores sociales que no eran validados, ni mucho menos contemplados en la historia tradicional chilena, o tomando las palabras de Quilapayún en una de sus canciones más icónicas “Señoras y señores, venimos a contar, aquello que la historia, no quiere recordar.”56

Por otra parte, tenemos canciones relacionadas con contextos sociales más concentrados en las manifestaciones de estudiantes, como es el caso de Víctor Jara con Movil oil Special, la cual desde un punto de vista más humorístico expresa el descontento de universitarios y secundarios en contra de las formas utilizadas por las fuerzas armadas para reprimir las movilizaciones.

“La política penetra todos los ámbitos de la vida nacional y la música no permanece ajena a ella. De este modo, el discurso sobre música se ensancha, vinculándose a los procesos sociales que vive el país. La música ha dejado de brindar solamente placer estético y diversión; ahora empieza a ser concebida como forjadora de conciencia y de cambio social.”57

Es importante precisar que la labor investigativa de las primeras autoras que hemos nombrado, y de los ejemplos mencionados anteriormente, traerá notables aportes culturales a la sociedad nacional, las cuales fueron rompiendo con tradiciones culturales, y que pueden ser rescatadas y analizadas de forma individual o colectiva a partir de la labor de las mujeres a mediados del siglo XX, como sujetos históricos activas. Por ejemplo, señala

56 Pregón, perteneciente a la Cantata Popular Santa María de Iquique. Escrita por Luis Advis, e interpretada por Quilapayún. 57 GONZALEZ, Juan Pablo; VARAS, José Miguel. En busca de la Música Chilena. Crónica y Antología de una historia sonora. Santiago, Chile. Ed. Catalonia, 2013, p.277. 52

Salas, Gabriela Pizarro “Artista e investigadora profundamente identificada con el carácter laico y progresista de la Universidad de Chile (…) inscribió su nombre con propiedad entre estas precursoras de la NCCh”.58

Este origen al que hacemos referencia, y que se ha personificado principalmente en la figura de Violeta Parra, se contextualiza hacia la segunda mitad de la década del cincuenta, a partir de las investigaciones que realiza sobre el folklore de la zona sur, fundando así en la Región del Biobío el Museo Nacional del Arte Folclórico Chileno de la Universidad de Concepción, y siguiendo así la búsqueda y recuperación de las músicas locales en diferentes zonas del país, componiendo e interpretando obras de distintos artistas, involucrándose además, con las artes visuales y plásticas. Ya en los años sesenta el sentido de sus interpretaciones evidencia la protesta del contexto rural.59, vinculado a los procesos que ocurren en el Chile durante la polarización de la sociedad mundial al desarrollarse el proceso de Guerra Fría, o como fue también el proceso de reforma agraria que se transformaría en una de las principales coyunturas, siendo un rasgo característico en la conformación del movimiento de la NCCh.

2.4.2. DESARROLLO DEL MOVIMIENTO Y EL CANTO POPULAR COMO LA VOZ DIRIGENTE

La Nueva Canción Chilena, surge en medio de un contexto mundial inmerso en diversos procesos de cambios y no obstante también de manifestaciones, ya sean en el ámbito de la moda, procesos políticos, artísticos que afectan directamente la forma de pensar de la sociedad, específicamente, incide en el pensar de los y las jóvenes de los 60’s. Éstas ideas traídas desde el otro continente, contagió a los y las jóvenes chilenos, quienes tenían como

58 SALAS, Fabio, op.cit., 2003, p.58. 59 PARRA, Isabel. Violeta Parra 100 Años. http://www.violetaparra100.cl/biografia/ (último acceso: 28 de Agosto de 2017). 53 confluencia no sólo reivindicar el Folklore, sino que también utilizar la música como un instrumento de lucha social.

En evidencia lo deja uno de los cantautores más influyentes en el movimiento, Ángel Parra, al expresar cual es el enfoque primordial que posee la Nueva Canción Chilena que “establece una relación directa con el hombre, el paisaje, la geografía y la sociedad en que vive”60, por ende, lo anteriormente citado es vislumbrado en las canciones que surgen durante el periodo y las cuales se consideran dentro de la Nueva Canción Chilena como un vínculo entre la sociedad y el medio. En relación a lo mencionado, podemos agregar y resaltar el rol protagónico que adquirió Violeta Parra en el surgimiento de éste movimiento musical, de acuerdo a lo señalado por Salas:

“aporta al menos tres elementos claves en el desarrollo de la NCCh: el rescate de la música folk de extracción campesina así como su versión transpuesta al medio urbano, el folklore musical de los arrabales citadinos; la aparición, a través de su persona, del arquetipo del cantautor, una figura no existente hasta entonces; y la premisa inédita de mensajes de contenido social y de crítica política en las letras de las canciones”61.

Por ende, Violeta Parra no sólo propone nuevos estilos musicales, sino que también nos entrega el gran contenido que poseen sus letras, potenciando no tan sólo lo musical y artístico, sino que también lo social, realizando una fuerte crítica a las problemáticas que surgían en la época, que permitiría el desarrollo del movimiento, que fueron evidenciadas con el pasar de los años, al igual que el registro musical de Violeta el cual se hizo visible posteriormente. Es por esto que hablamos de un legado por parte de la cantautora que

60 Documental “Canción Nacional: La Nueva Canción Chilena” 2005/2006. Min 11:55 61 SALAS, op.cit., 2003, p. 58. 54 aporta a la historia no tradicional de Chile, esa historia que toma en cuenta a actores sociales silenciados, que abarcaban mucha más población de la que se creía.

En palabras de los integrantes del grupo Illapu, en entrevista con la revista La Bicicleta y en el contexto de la dictadura, complementan la visión general que hemos evidenciado en el presente capítulo:

“…pensamos que éste movimiento, más que una forma de canción determinada, es una manera de ver la música. Más allá del fenómeno puramente música, busca convertirse en una expresión de éste conjunto llamado pueblo, crecer desde allí, permanecer allí, partiendo de allí mismo.”62

Cómo mencionamos anteriormente, la Nueva Canción Chilena, surge dentro de un contexto de diversos cambios a nivel mundial, pero principalmente local, esto no sólo se vio reflejado en aspectos políticos, sino que se refleja en distintas aristas, por ejemplo en la música, en el arte, en la sociedad, y sobre todo, en las formas de pensar, las cuales se encontraban influenciadas por los movimientos sociales que se potenciaron de manera progresiva a mediados de los años 60’s, en ésta ocasión, eran principalmente manifestadas por estudiantes con gran interés de cambiar el mundo, además de los sectores que se vieron identificados con los ideales que promovía el movimiento musical.

Estas nuevas influencias basadas en la búsqueda por recuperar la música folclórica traen consigo el surgimiento de diversos artistas con cánticos basados en las injusticias sociales y que, no obstante nace como respuesta a lo planteado por la industria capitalista musical de

62 Visto en: Revista La Bicicleta ¿Nuevos Ídolos Para la Juventud? Santiago: Sociedad Editorial Granizo, 1978- 1990 (Santiago: Taller de Comunicaciones Scout) 9 volúmenes, número 17, (noviembre 1981) p. 36. Disponible en: Memoria Chilena, Biblioteca Nacional de Chile: http://www.memoriachilena.cl/602/w3- article-54568.html. Accedido en 15/8/2017.

55 la época, la cual poseía un objetivo muy claro, la sumisión del pueblo, específicamente de la clase trabajadora.

Entre los artistas más relevantes de éste movimiento musical, se encuentra la ya mencionada Violeta Parra, la cual no sólo expresaba sus emociones y descontentos mediante la música, sino que también desde otros aspectos artísticos, como el arte, el bordado, la poesía, etc. Es dentro de estas manifestaciones artísticas, en dónde ella nos mostró sus percepciones de la realidad, de la situación y contexto en el que se desenvolvía la sociedad chilena en la década de los 60’s, tomando en cuenta el rol que poseía la mujer y las batallas que debía enfrentar ante una sociedad conservadora y que ideológicamente se iba polarizando dadas las condiciones que la Guerra Fría fue configurando en nuestro país.

Los cantos de Violeta, son fundamentalmente inspirados por el contexto en el que ella se desenvolvía, del cual cabe mencionar su origen desde la ciudad de Chillán, se plasman en sus palabras las visiones que tenían los campesinos de la zona, músicas y textos dejados en el olvido, debido a que no poseían ningún interés en llegar a la cima musical. Estos relatos, costumbres y otras manifestaciones orales, eran recopilados por Violeta y utilizados con el fin de mostrar sus percepciones de la realidad en la que desenvolvía y el rescate de las bases y orígenes de la verdadera concepción de “chilenidad” desde un sentido crítico- social.

Consideramos plantear el desarrollo de la Nueva Canción Chilena en dos momentos, el primer momento de desarrollo es la masificación que alcanza en nuestro país, donde la figura de artistas como Isabel Parra, Víctor Jara, Patricio Manns, Ángel Parra o Rolando Alarcón, o agrupaciones como Inti-Illimani, Quilapayún, alcanzan gran reconocimiento dentro de la población, ya que desarrollan en su música y obras la complejidad del contexto donde están inmersos, utilizando problemáticas sociales muy trascendentes de ese contexto

56 y adhiriéndose incluso al programa político de la Unidad Popular del gobierno de Salvador Allende. Varas y González nos explican el contexto:

“A fines de los años 50 y en los años 60, el subcontinente fue nuevamente estremecido por una conflictiva situación económico-social. Se reclamaba por más democracia y por una segunda independencia: la liberación económica de los países de la región, del imperio del norte. En 1959 triunfó la Revolución Cubana y el enfrentamiento se agudizó. Una de nacionalismo irrumpió en la escena artística latinoamericana. El arte regional (incluyendo Chile) se incorporó a esta gesta liberadora con sus propias armas”63

Estas armas utilizadas por la Nueva Canción Chilena serán principalmente los adeptos que conformarán los movimientos sociales, teniendo como lema el discurso que transmite el movimiento incluso a las nuevas generaciones a través de la Memoria Social.

El segundo momento del desarrollo de la Nueva Canción Chilena lo podemos comprender desde el exilio, tras el Golpe cívico-militar de 1973, que tuvo gran impacto en la sociedad durante la dictadura, donde la mayoría de los artistas que pudieron escapar de la represión dictatorial desarrollaron sus carreras en el extranjero, principalmente en Europa, como el caso de Quilapayún, Quelentaro, Inti-Illimani o Illapu, éste último ya adentrada la dictadura. “Entre muchas otras cosas, con el golpe militar también cambió radicalmente el mundo sonoro que rodeaba a los chilenos.”64

Este mundo sonoro que hacen alusión los autores, además de sufrir el exilio, la persecución y censura a lo largo del país, estuvo expuesto a sufrir su exterminio, aunque de todas formas el movimiento tuvo cabida en los sectores que resistieron esta represión,

63 GONZÁLEZ Y VARAS, op.cit., 2013, pp.101. 64 Ibíd., 2013, p. 109. 57 principalmente en poblaciones que el día de hoy son señaladas con calificativos de “poblaciones combativas” o “emblemáticas” dado su rol activo en el duro contexto nacional y donde la Memoria perdura hasta nuestros días.

El contexto de la Nueva Canción Chilena en dictadura se explica desde dos contextos, los exiliados y los que resistieron dentro del país la represión y persecución. Los exiliados como Inti-Illimani y Quilapayún, y posteriormente Illapu, fueron perfeccionándose en Europa, alcanzando gran popularidad y quedando como las agrupaciones más arraigadas al movimiento, al igual que el cantautor Patricio Manns, quien “escribió en los tiempos de exilio algunas de sus más extraordinarias canciones, entre ellas, una que refleja con enorme intensidad poética el dolor del exilio: Cuando me acuerdo de mi país”.65

Son obras como la recién mencionada, las que irán quedando impregnadas en la Memoria de quienes se vieron identificados, en este caso, con elementos de nostalgia y dolor. Pero no debemos dejar de mencionar el segundo contexto, que hace referencia a quienes se quedaron dentro de Chile en el período dictatorial escondiéndose en todo momento de la persecución política. Agrupaciones como Congreso, Sol y Lluvia, Schwenke y Nilo o Santiago del Nuevo Extremo, por mencionar algunas, serán las que mantendrán el legado de la Nueva Canción Chilena en nuestro país, demostrando su descontento social con el régimen político autoritario, y teniendo injerencia en los futuros músicos, que a su vez influenciaron, o influencian a los actuales. Bandas como Los Vinchuca (posteriormente conocidos como Los Prisioneros) o Fiskales ad-Hok representaron la voz más agresiva respecto a la música como arma de lucha en la dictadura, o la “Trova Chilena” que con la influencia de la trova cubana, se fue desarrollando de forma paralela y que en la actualidad podemos evidenciar este legado con distintos músicos que agregan una fuerte crítica social a sus composiciones frente a las problemáticas que atañen a la sociedad hoy en día.

65 Ibíd., 2013, p.112. 58

La memoria transmitida por la Nueva Canción Chilena es innegable, se evidencia en muchas formas, sobre todo las nuevas agrupaciones o artistas que se declaran estar influenciados por el movimiento y que trasciende en distintos géneros, como el punk, el rock, el hip-hop, la trova, el folk, etc., pero también trasciende en las personas, que ven en la música una forma de lucha, tal cual lo impregna la Nueva Canción Chilena, que podemos comprenderla finalmente como una coyuntura y no un simple acontecimiento cultural.

59

CAPÍTULO III: MARCO METODOLÓGICO

60

3. MARCO METODOLÓGICO

3.1. ENFOQUE METODOLÓGICO

El carácter de la presente investigación tiene un enfoque de naturaleza “cualitativa”, lo que deriva en una investigación que busca identificar la naturaleza profunda de la realidad o realidades estudiadas y las dinámicas que se encuentran en ella, por lo tanto, el vínculo entre el contexto estudiado y el proceso histórico al que hacemos referencia. En palabras de Taylor y Bogdan:

“En la metodología cualitativa el investigador ve al escenario y a las personas en una perspectiva holística; las personas, los escenarios o los grupos no son reducidos a variables, sino que son considerados como un todo. Estudia a las personas en el contexto de su pasado y de las situaciones en las que se hallan”66

Además, esta relación del contexto y el proceso histórico se lleva cabo a partir de las experiencias y conocimientos de los participantes en nuestra investigación, en este caso los mismos docentes, quienes nos permitirán dilucidar las dinámicas planteadas en los objetivos, que se relacionan directamente con la enseñanza de la Historia Reciente de Chile. Respecto a los participantes de la investigación, y a la metodología a utilizar, agregamos: “Si estudiamos a las personas cualitativamente, llegamos a conocerlas en los personal y a experimentar lo que ellas sienten en sus luchas cotidianas en la sociedad”67.

En cuanto al paradigma que es parte de la investigación, nos adentraremos desde un sentido crítico y constructivista, lo que nos permite adentrarnos de mejor manera al sentido

66 TAYLOR, S.J. y BOGDAN, R. Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación: La búsqueda de significados. Buenos Aires. Ed: Paidós, 1990, p.2. 67 Ibíd. 61 cualitativo del trabajo. Por lo tanto, el enfoque metodológico nos concede la oportunidad de conocer la realidad estudiada como la práctica misma, teniendo así una mirada socio-crítica de esta, y así lograr un análisis más acabado, de donde se extraen las diferentes interpretaciones de los participantes de la investigación, y de esta forma analizarlas en función de los objetivos planteados.

3.2. DEFINICIÓN DE TÉCNICAS DE RECOLECCIÓN DE DATOS

Para la recolección de datos debemos preguntarnos: ¿Qué instrumento utilizaremos para acceder a la información necesaria? Es por esto que se debe dejar en claro las fuentes y técnicas que nos permitirán adentrarnos en la realidad a estudiar. Según la tesis de Bernal tenemos acceso a fuentes primarias, de donde podemos acceder a la información de forma directa. Por otro lado, podemos acceder a fuentes secundarias, de las cuales la información no proviene de la fuente original.68

Por lo tanto, dentro de las técnicas a utilizar en la recopilación de información utilizaremos las fuentes primarias a través de la entrevista, ya que: “La entrevista de investigación pretende, a través de la recolección de un conjunto de saberes privados, la construcción de un sentido social de la conducta individual o de grupo de referencia de ese individuo”69.

A través de la recolección llevada a cabo por medio de la entrevista buscaremos adentrarnos en la visión y perspectivas que tienen los docentes participantes, de tal manera que el posterior análisis logre cumplir con los objetivos propuestos en nuestra investigación. Es por eso que tales entrevistas en la metodología serán semi-estructuradas, permitiéndoles así a los docentes que puedan abrirse en sus reflexiones para el enriquecimiento del posterior análisis.

68 BERNAL, César. Metodología de la Investigación. Ed. Pearson Educación, México D.F., 2006. 69 DELGADO, Juan Manuel y GUTIERREZ, Juan. Métodos y Técnicas cualitativas para la investigación en ciencias sociales. Ed: Síntesis S.A. 1995, p. 228. 62

De este modo es que, desde las técnicas de recolección de datos por parte de los participantes, existe una combinación entre la Historia de vida y el Relato Oral, los que interactúan en la conformación de sus relatos y reflexiones, tal cual cómo funciona la Memoria a la que hacemos referencia en el presente trabajo.

Por otro lado, en lo que respecta a la recolección de información para la articulación de nuestro Marco Teórico, llevaremos a cabo una revisión de diversas fuentes bibliográficas que nos permita definir y utilizar conceptos de manera pertinente al momento de analizar las entrevistas en la realidad estudiada. Las fuentes a utilizar para la recolección de datos sobre la Historia Reciente son de tipo escritas, en donde hemos ahondado en las nociones y concepciones básicas del campo historiográfico, además de las problemáticas disciplinares que son parte del análisis de los teóricos, finalizando con la relación entre la Historia Reciente y su enseñanza, las que son parte fundamental de la investigación. De esta forma damos los márgenes teóricos que nos permitirán hacer referencia a la Historia Reciente en la realidad estudiada.

Por otro lado, las referencias escritas nos ayudarán adentrarnos en los conceptos que son parte de la Memoria, en donde reconocemos el aporte de distintos autores que nos llevan hacia las definiciones básicas, permitiéndonos adentrarnos en la Memorias Colectiva y, posteriormente, en la Memoria Social. De esta forma, estas nociones desarrolladas nos ayudarán a enfocar de mejor manera el tema de la investigación, más aún en el contexto de la Historia Reciente, donde se relacionan de forma directa.

A partir de la utilización de fuentes como artículos periodísticos documentales y musicales, y ayuda de fuentes digitales y físicas, nos adentraremos en la Nueva Canción Chilena, desde lo conceptual y su contexto temporal. De esta forma, y teniendo en evidencia las principales características del movimiento, las cuales serán vinculadas con la Historia Reciente y la Memoria. Así, en los capítulos referentes al análisis de la realidad estudiada,

63 se presentarán las relaciones que hemos identificado de acuerdo a los objetivos que nos hemos propuesto.

3.3. OBJETO DE ESTUDIO: LOS DOCENTES ENTREVISTADOS

Una vez definida las técnicas de recolección de datos e información que serán recopiladas de las entrevistas nos enfocaremos en los entrevistados, que para efectos de nuestra investigación recaerán en los docentes como objeto de estudio. Específicamente a profesores del área de Historia y Ciencias Sociales, los que están a cargo del proceso de enseñanza y que nos darán sus percepciones de acuerdo al tema a investigar, respondiendo a nuestras preguntas para buscar dar cumplimiento a los objetivos que nos hemos planteado. De esta forma, el objeto de estudio será fundamental para el posterior análisis que llevaremos a cabo en los próximos capítulos.

Otro elemento que consideramos respecto a los docentes participantes, es que consideramos el contexto en donde ellos se desenvuelven, por lo que hemos definido según nuestros objetivos, a los entrevistados, lo que delimitará los márgenes del análisis del cual serán partícipes activos y fundamentales. Es por esto que en la selección de los entrevistados buscamos docentes de diferentes realidades y contextos escolares, de esta forma diversificar los resultados, pero sin dejar de lado el enfoque cualitativo que este presenta. Es por eso que nos apoyaremos en sus años de experiencia, que no superan los diez años como profesores de Historia y Ciencias Sociales, por lo tanto, nos enfocaremos en profesores que van construyendo de manera temprana su camino en el contexto escolar. Además, a partir de lo anterior, estableceremos los análisis respectivos de cada testimonio, y según los objetivos trazados plantearemos nuestras conclusiones.

64

Mediante la realización de entrevistas buscamos desprender los elementos de la Nueva Canción Chilena que los y las docentes consideran al momento de llevar a cabo la enseñanza de la Historia Reciente de nuestro país en el aula, el valor que le otorgan a la Memoria transmitida por esta y cuáles son los medios que utilizan y/o utilizarían para abarcar el contenido que comprende, de esta forma podremos analizarlas y responder las preguntas que hemos planteado para cumplir con los objetivos propuestos.

Las preguntas presentes en las entrevistas, serán anexadas en nuestra investigación, con el fin de demostrar la veracidad de la información recopilada, las que más tarde nos servirán para poder construir nuestros análisis y posteriormente las conclusiones con respecto a lo trabajado en la investigación.

En relación a las preguntas realizadas, serán intencionalmente abiertas, como hemos dicho anteriormente, para que nuestros entrevistados puedan extender y explicar de mejor forma sus planteamientos y reflexiones en cada pregunta, haciendo énfasis en los temas que hemos tratado hasta acá.

De esta forma las entrevistas estarán compuestas por las siguientes preguntas dirigidas a los docentes:

 Años de experiencia como docente  Desde una perspectiva historiográfica, escolar y considerando el contexto nacional e internacional ¿Qué es para ti la Historia Reciente?  En lo que respecta a la enseñanza de la Historia Reciente de Chile, y en contraste con la Historia Contemporánea ¿Qué elementos considerarías en el aula para motivar el desarrollo de habilidades?  En tu labor como docente ¿De qué forma vincularías la Nueva Canción Chilena con la Memoria para la enseñanza de la Historia Reciente en la escuela? Ejemplifica con algún contenido y/o recurso.

65

 ¿Es la Nueva Canción Chilena un medio para la subsistencia de una Memoria Social?

Las preguntas recientemente formuladas, tienen el fin de colaborar con la elaboración de nuestro proyecto de investigación, el cual se enfoca en el vínculo que surge entre la Historia Reciente, la Nueva Canción Chilena, la Memoria Social, y cómo ésta se conjuga con el proceso de enseñanza.

3.4.TÉCNICAS DE ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE LA INFORMACIÓN

Cuando la información y testimonios de los docentes sea recogida, a través de las técnicas que hemos descrito en el capítulo anterior, deberemos analizarlas a partir del enfoque cualitativo que enmarca a la presente investigación. En este caso, cada docente nos dará a conocer sus visiones y análisis frente a los tópicos presentes en cada pregunta, además de información adicional sobre su profesión, lo que nos permitirá identificar elementos representativos por encima de otros, y de esta forma podremos relacionar los elementos que él o la docente considera en el contexto donde está inmerso al momento de entregarnos sus testimonios. De esta forma podremos establecer contrastes y analogías con los datos recogidos, y que nos permitirá plantear más adelante nuestras conclusiones respecto a los objetivos planteados.

Por otro lado, los datos recogidos en las entrevistas también posibilitan adentrarnos en las actitudes, o más bien, en el lenguaje que va más allá de lo dicho por los docentes participantes, ya que al entregarnos sus respuestas también nos entregan parte de su experiencia, sus motivaciones y sus formas de entender la docencia, y de esta manera, el cómo llevan a cabo sus clases en el día a día. En palabras de Van Dijk todas las personas “usan el lenguaje para comunicar ideas o creencias (o para expresar emociones) (…)

66 además que los participantes ‘hacen’ algo, esto es, algo que va más allá, específicamente de usar el lenguaje o comunicar ideas o creencias: interactúan”70. Por lo tanto el análisis da cuenta de todos estos elementos que hacemos mención, en donde podemos identificar, por ejemplo, a algún docente que salga del marco de enseñanza tradicional de la Historia ya que sus percepciones frente a una forma de enseñar el contenido, en este caso Historia Reciente, así nos lo afirma al momento de hacer interactuar los relatos.

Finalmente, respecto al análisis en la recolección de la información y a modo de síntesis, frente a todo lo explicitado en estos capítulos de nuestro marco metodológico:

“nuestra finalidad es el conocimiento de un fenómeno en sí y por sí, la estrategia del muestreo teórico es el procedimiento más conveniente. En esta situación el número de casos carece de importancia, lo capital es el potencial de cada uno de ellos; es la propia investigación la que le dice al investigador en qué momento la información comienza a ser repetitiva o el fenómeno que se pretendía comprender está claro.”71

Teniendo los elementos metodológicos explicitados y ordenados, es que daremos paso al análisis de los testimonios recogidos a los docentes, de tal forma que los aspectos que hemos revisado y aclarado serán fundamentales en el presente trabajo que es de características analíticas y desde una perspectiva crítica.

70 Tomado del libro “El discurso como estructura y proceso”. De Teun A. van Dijk (Compilador). Ed. Gedisa, 2000, Barcelona. Traducido por Elena Marengo. 71 SANZ, María Alexia. Fuentes Orales y Documentales en la Investigación Social. E.U.G.S. TERUEL, Universidad de Zaragoza. 1995, p.222. 67

CAPÍTULO IV

“No basta solo el recuerdo, el canto no bastará”

(Luis Advis)

4. LA HISTORIA RECIENTE POR LOS Y LAS DOCENTES DE HISTORIA

4.1. INTRODUCCIÓN

En el presente capítulo introductorio, articularemos lo que será el análisis que llevaremos a cabo más adelante. De esta forma el contenido y los resultados que hemos obtenido tras la metodología aplicada quedarán estructurados de forma más ordenada para su mejor comprensión y de igual manera nuestras conclusiones al final de cada capítulo para finalizar con las conclusiones generales.

En un primer momento, para ir adentrándonos y acercándonos de mejor forma al cumplimiento de nuestros objetivos y al análisis, abordaremos los testimonios de los y las docentes a partir de las concepciones que tienen los frente a la Historia Reciente como campo historiográfico. Posteriormente nos acercaremos a la relación o relaciones que establecen en su actividad como profesores en el proceso de enseñanza de la Historia Reciente en su experiencia diaria. Por lo tanto, podremos adentrarnos en sus nociones y concepciones respecto a lo que es o significa para ellos/as enseñar la Historia Reciente hoy

68 en día. Lo interesante de este análisis es verificar si todos los docentes que fueron parte de las entrevistas poseen una base conceptual y práctica desarrollada o trabajada, o bien si existen ciertas ambigüedades frente a esta arista que buscamos analizar.

De esta forma podremos establecer diferentes relaciones en base a contrastes o comparaciones respecto a los testimonios que los y las docentes nos entregan y que hemos recogido a través de las entrevistas. Estas comparaciones y contrastes serán apoyadas, además de sus propias palabras, por elementos teóricos que nos permitan explicar y sustentar los fenómenos que surjan a medida que nuestro análisis se vaya configurando, de esta forma, plantearemos un camino más ordenado para los siguientes capítulos y las conclusiones de este trabajo.

Más adelante, y en relación al capítulo anterior, nos adentraremos en las percepciones de los docentes frente a la Nueva Canción Chilena, los usos que ellos le proporcionan de acuerdo a sus motivaciones e intereses de cada contexto escolar. Así, y al igual que en el capítulo referido a la Historia Reciente y su enseñanza, podremos establecer relaciones y/o comparaciones entre los testimonios, lo que será fundamental en el análisis.

Además, dentro de este análisis, será necesario profundizar en algunas temáticas que la Nueva Canción Chilena hace parte de su relato, y que los mismos docentes identifican y analizan desde su posicionamiento de profesor/a. Por lo tanto, y siguiendo con los testimonios recogidos, estableceremos un vínculo entre el relato y las canciones que se encuentran en las reflexiones de los docentes, de esta forma sus respuestas serán vinculadas directamente a cómo entienden ellos/as la enseñanza de la Historia Reciente a través de la Nueva Canción Chilena, sus principales características pedagógicas e importancia que le conceden al movimiento. De esta forma la información recogida será irá enriqueciendo en el ejercicio de evidenciar los relatos en vinculación con el movimiento musical, sus exponentes y creaciones. De esta forma el análisis nos permitirá identificar si la Nueva

69

Canción Chilena posibilita el proceso de enseñanza, más específicamente de la Historia Reciente.

Más adelante, y siguiendo los lineamientos de nuestra investigación, utilizaremos una vez más los testimonios de los y las docentes entrevistados, donde evidenciaremos sus perspectivas frente a la Memoria Social. Una vez recopilados los relatos, haremos referencia a lo que significa para los docentes enseñar a través de la Memoria, apoyados de lo trabajado en nuestros ejes teóricos donde hacemos referencia a esta. Así, nuestro análisis estará sujeto a nuestro objetivo específico, que busca identificar si la Nueva Canción Chilena posibilita la construcción de una Memoria Social.

4.2. LOS DOCENTES Y SU VISIÓN DE LA HISTORIA RECIENTE COMO CAMPO HISTORIOGRÁFICO

Como se ha adelantado en el apartado introductorio en el presente capítulo presentaremos, a partir de los testimonios de los docentes recogidos en las entrevistas, las perspectivas que estos sujetos tienen respecto a la Historia Reciente. De esta forma podremos introducirnos en sus experiencias previas sobre el campo historiográfico, lo que entienden por Historia Reciente como campo de estudio y cómo lo perciben desde su rol de profesores.

De esta forma observaremos de qué manera, los y las profesores de Historia participantes, comprenden al campo historiográfico y, a su vez, cómo lo materializan en el proceso de enseñanza en el día a día, o sea, hoy. Este análisis lo llevaremos a cabo en el capítulo posterior, una vez recogidos e interpretado los testimonios.

70

En primer término, los docentes participantes de esta investigación han respondido preguntas diseñadas para poder recolectar sus perspectivas y nociones que tienen de la Historia Reciente, esto nos introducirá más adelante en lo que refiere a la enseñanza de este campo historiográfico. Es de esta manera, que, para hablar de las referencias y nociones de los docentes sobre la Historia Reciente, se hace necesario precisar, en términos “ausubelianos”, que las ‘estructuras cognitivas’ que ellos poseen, las representaciones previas que han adquirido durante: su formación académica o su labor diaria como docentes, son planteadas en todo momento desde su experiencia. Por lo tanto, estas representaciones pueden ser similares o incluso contrapuestas.

El Profesor Informante N°172, en su respuesta a la pregunta: ¿Qué es para ti la Historia Reciente? nos relata: “La Historia Reciente la asocio a todos aquellos acontecimientos, fenómenos y coyunturas que se enmarcan dentro de los procesos históricos actuales o que tienen efectos directos en lo inmediato” (PI1). En esta primera declaración el Docente hace referencia a hechos que tienen consecuencias directas en la actualidad, a esto debemos agregar que el docente entiende que estos fenómenos son también ‘coyunturas’ lo que Braudel define como la mediana duración dentro de las duraciones del tiempo histórico, dadas las estructuras sociales que se pueden encontrar en ellas73. Además, agrega el Profesor: “Si somos rigurosos sería la Edad Contemporánea por la relevancia de las revoluciones burguesas en la configuración de la realidad actual.” (PI1). Aquí podemos evidenciar que el docente considera relaciones de pasado-presente en torno al contenido que es parte de la Historia Reciente, lo que podría materializarse al momento de llevar a cabo el proceso de enseñanza.

Desde una perspectiva más general podemos evidenciar que el PI1 valida los elementos que componen al campo historiográfico, ya que distingue las estructuras que son propias de la Historia Reciente, como la temporalidad que menciona en su relato, además identifica la

72 Haremos Referencia a los profesores informantes con las siglas PI y el número correspondiente para poder diferenciarlos y citar sus testimonios anexados y respaldados al final de este trabajo. 73 BRAUDEL, op.cit., 1976. 71 diversidad disciplinaria de la Historia y nos da indicios de que se posiciona desde una perspectiva crítica de la misma.

Revisemos ahora la respuesta de la Profesora Informante N°2 (PI2), ante la misma pregunta, donde plantea que la Historia Reciente, para ella: “hace referencia a toda etapa o proceso en actual desarrollo, ya sea en lo que respecta a lo nacional o mundial, y que considera desde los procesos llevados a cabo durante y después de la Guerra Fría.” (PI2). De aquí podemos desprender los márgenes temporales que la docente considera para referirse a la Historia Reciente, además de dotar al campo historiográfico de un contexto, como las implicancias de los procesos a nivel mundial y local, donde se especifica con la Guerra Fría, y las incidencias que tienen actualmente, argumentando que siguen desarrollándose estructuras similares en el presente.

Aunque también reconoce que la temporalidad del campo de estudio está en constante revisión y debate, en palabras de la entrevistada: “el análisis y el estudio de la Historia Reciente, desde un punto de vista académico, se encuentra en un constante proceso de reconocimiento, debido al debate existente sobre qué se considera lo reciente, por lo tanto, los márgenes temporales pueden ser variables.” (PI2). La variabilidad de la temporalidad, es relativa, en este caso, serán los propios docentes los que concedan los márgenes temporales. Por ejemplo, el PI1 considera a las Revoluciones Burguesas como parte de la Historia Reciente, debido a las implicancias que tienen en la actualidad y que pueden explicar, por lo tanto, los procesos fenómenos que ocurren hoy en día, aunque, de todas formas, a la Historia Reciente también: “la asociaría desde después de la Segunda Guerra Mundial y sobre todo tras la Guerra Fría y la proyección de la Globalización a fines de S. XX e inicios del S. XXI.” (PI1).

De esta forma, el PI1 reconoce que la Historia Reciente posee márgenes no definidos en lo que respecta a lo temporal, ya que identifica algunos elementos que la historiografía

72 tradicional clasifica en la Edad Contemporánea, como el caso de las revoluciones burguesas, que tendrían total incidencia en la actualidad, tal como señala el docente en su relato.

Ahora bien, también se hace necesario tener en cuenta las nociones de los demás docentes entrevistados, en este caso, el PI3, quien entiende y reconoce a la Historia Reciente como: “el resultado de las relaciones y fuerzas de poder existentes desde periodos previos, las cuales han manifestado las contradicciones entre los distintos sujetos y clases en función de las bases económicas que determinan las relaciones entre las mismas”. (PI3)

Podemos ver, en la respuesta que presenta el PI3, un análisis más profundo, en donde antes de ir o hacer referencia exclusivamente a lo temporal, que no deja de ser importante, toma en consideración aspectos que son relevantes a la hora de analizar en profundidad a este campo historiográfico, ya que analiza al campo como consecuencia de las diferentes “relaciones y fuerzas de poder” que confluyen en la idea de que desde el surgimiento es un campo bastante polémico y complejo en su labor investigativa, en definitiva, que se construye constantemente dentro del debate y análisis histórico.

Además, agrega que: “Estos períodos previos tienen total incidencia en la actualidad, ya sea por los procesos llevados a cabo después de la segunda mitad del Siglo XX, a partir de la Guerra Fría, o por los actores que son parte de tales procesos y que son portadores de un relato histórico” (PI3).

En relación a lo anterior, el PI3 nos da claridad sobre la temporalidad que le otorga al campo historiográfico, refiriéndose específicamente a la segunda mitad del Siglo XX, en el contexto de Guerra Fría, en donde los y las testigos de tales procesos poseen un relato propio a partir de sus experiencias individuales y/o colectivas. Sobre esto último, nos

73 cuenta el PI3: “también agregaría lo conflictivo de estos relatos, ya que se debaten constantemente estas nociones de la Historia Reciente” (PI3). Respecto a este último relato citado del PI3, podemos evidenciar una característica particular de este campo de estudio, y es que los relatos históricos, a los que hacemos alusión, generan un constante debate en la historiografía más tradicional, o para ser más exactos, en la historiografía positivista de origen decimonónico, ya que al ser los mismos actores, que a través de sus testimonios construyen, o van construyendo la historia, y al ser protagonistas y testigos de los procesos recientes, estos relatos pueden ser coincidentes o distintos, lo que se relaciona directamente con la Memoria, un elemento distintivo de la Historia Reciente, y que nos permite adentrarnos en las subjetividades de los protagonistas que relatan los procesos históricos, ayudando a posicionarnos desde perspectivas críticas de los relatos habituales. Por otro lado, la Memoria o las Memorias que están presentes, difieren en muchos casos por las subjetividades que están inmersas en ellas, aunque son los elementos de las memorias colectivas los que van aclarando y rectificando a las memorias individuales, al encontrar en ellas elementos comunes y en sus diferencias aclaraciones.74

Por lo tanto, la memoria y/o memorias serán los elementos conflictivos que el PI3 menciona en su testimonio, no en un sentido peyorativo, ya que permite un constante debate y análisis de los relatos de actores que no suelen ser considerados por la historiografía tradicional positivista.

De acuerdo al relato del PI4 y sus representaciones sobre la Historia Reciente nos relata:

“Para mí la Historia Reciente se refiere a todo proceso, o procesos históricos, que da cuenta del acontecer de los últimos años, o incluso, décadas, en los cuáles las distintas interpretaciones se encuentran permeadas por las subjetividades y experiencias personales de quienes han vivido tales procesos.

74 Referencia utilizada en nuestro Marco Teórico en las palabras de Betancourt sobre las memorias colectivas en relación a las memorias individuales. 74

De ahí su nombre que apunta más que nada a una historia del tiempo presente”. (PI4)

Del testimonio anterior, el PI4 deja en claro los márgenes temporales del campo historiográfico, aunque no de manera exacta, sino que se relativiza su origen hasta varias décadas atrás, incluyendo las características que hemos mencionado en los párrafos anteriores, en lo que respecta a los testimonios o relatos que están presentes en la construcción histórica, aludiendo a los sujetos históricos, portadores de “interpretaciones” que están permeadas por sus experiencias previas y en constante tensión con los otros relatos, o como hemos aclarado anteriormente, en otras memorias, dada su condición de subjetividad.

Respecto al último docente entrevistado, sus percepciones sobre el campo historiográfico serán distintas al resto, en cuanto al valor que le otorga y a la utilidad que puede tener en el contexto educativo. En palabras del PI5:

“La historia reciente para mí, se trata de un intento erróneo de acercar la disciplina del conocimiento histórico a la percepción cuasi inmediata. En el caso de la historia reciente en Chile, cae en el riesgo de transformarse en una herramienta tendenciosa, utilizada con fines ‘ideologizantes’ más que educativos. El problema que tiene esta categoría de estudio de la disciplina es que acerca peligrosamente el límite del objeto de estudio de la historia al de otras disciplinas como la Sociología, Economía, Ciencias Políticas, etc.” (PI5)

Respecto a las palabras del PI5 entrevistado podemos evidenciar una desconfianza al campo de la Historia Reciente y a su metodología, tanto en la disciplina misma como en la enseñanza de ésta, por lo tanto, posee notables contradicciones a lo expresado por los otros

75 profesores. Esto queda de manifiesto cuando el docente le otorga un sentido peyorativo al campo historiográfico que hemos aludido, en donde se refiere a la Historia Reciente como una manera ‘errónea’ de acercarla a las percepciones de quienes la estudian. Además, hace alusión a una característica de la Historia Reciente identificada por el docente, que tiene relación con la finalidad ‘ideologizante’ que podría adquirir en un contexto escolar.

Finalmente, podemos señalar que el PI5 percibe a la Historia como un campo de estudio que en su metodología no debería considerar a otras disciplinas de las ciencias sociales, lo que podría limitar el trabajo docente en el aula, debido a diversos factores que desarrollaremos en nuestras conclusiones.

Siguiendo el testimonio del PI5: “La historia no puede apreciarse a cabalidad cuando no se han desencadenado todas las consecuencias de los procesos o cuando no ha terminado de desarrollarse un paradigma” (PI5). Otro elemento que podemos identificar del PI5 es su desconfianza a la Historia Reciente, ya que considera que puede ser engañoso para el sujeto que estudia los procesos, pero, a nuestro juicio, el profesor entrevistado limita el análisis exclusivamente al acontecimiento, volviéndose, como diría Braudel, en un artículo periodístico que no tiene relación alguna con el presente, o que no permite un mayor análisis. Además, afirma:

“Debemos ser cautelosos al aproximar y acotar en el tiempo el análisis histórico, ya que es casi seguro que se producirá una confusión entre ‘res gestae’ y ‘rerum gestarum’. El primer concepto alude a los actos o hechos que constituyen nuestra cotidianeidad. El segundo nos lleva a la disciplina histórica que discrimina importancia de los hechos o procesos, analiza, interpreta y construye un relato a manos del historiador. El origen mismo del concepto desde Heródoto de Halicarnaso concibe la historia desde el ‘rerum gestarum’, es por ello que esta categoría de ‘reciente’ sería innecesaria ya que

76

la historia per se tiene distintos tiempos de análisis, tal como lo escribía Braudel” (PI5).

De aquí desprendemos, el carácter positivista de la Historia que comprende el PI5, según los argumentos que nos entrega, se apega a los acontecimientos, excluyendo las interpretaciones de las otras ciencias sociales que pueden estudiar los mismos fenómenos. Además, indica, respecto a los procesos recientes: “Es factible de establecer un análisis a corto tiempo, sin embargo, cuando el investigador es parte de la realidad que estudia es inevitable la presencia de sesgo en la construcción del conocimiento” (PI5). Esto porque la historia positivista, en la idea de Von Ranke, se comprende a partir de la idea:

“Las corrientes del día se esfuerzan siempre en imponerse al pasado y en interpretarlo con su propio sentido. La misión del historiador consiste en comprender y hacer que los demás comprendan el sentido de cada época por la época misma (y la finalidad de la historia) “la ha de abrir una política sana y certera disipando las sombras y los engaños que en estos tiempos en que

vivimos oscurecen y fascinan las mentes de los mejores hombres”75.

De la cita anterior, como complemento del testimonio del PI5, se evidencia su carácter polémico respecto a cómo comprende la Historia Reciente, ya que se apega a la Historia de corte tradicional y positivista, lo que puede decirnos bastante en cómo puede entender la enseñanza de la Historia en el aula, la cual debe acercarse a los mecanismos tradicionales de ésta, al limitar el análisis a la exclusiva lectura de fuentes “oficiales”. Cuestión que desarrollaremos en los próximos capítulos.

75 RODRÍGUEZ, A. y SÁNCHEZ, S. Leopold von Ranke: historiador del siglo XIX. En Marcha, Montevideo, N°470, pp. 14-15. 77

De acuerdo a los testimonios recogidos, los docentes entrevistados nos han entregado sus reflexiones sobre la Historia Reciente como campo historiográfico, a través de sus propias representaciones y experiencias previas, las cuales pueden hacer referencia a su formación académica o su trabajo día a día como docentes. Todo esto nos permite obtener algunos elementos que en el siguiente capítulo nos permitirá adentrarnos en sus prácticas docentes en el contexto de la enseñanza de la Historia Reciente.

Por lo tanto, podemos establecer los siguientes aspectos respecto a este primer punto: La temporalidad que los docentes otorgan a la Historia Reciente poseen márgenes similares, aunque existen ciertos matices respecto al contenido de estas temporalidades. En primer lugar, la temporalidad se concibe por los procesos históricos que tienen total incidencia en la actualidad, en las realidades que estamos inmersos y que podemos analizar a través de distintos relatos históricos de sujetos que, a través de sus experiencias, nos permiten establecer ciertas certezas en los procesos históricos que abarca esta tradición oral. Por otro lado, también existen discrepancias respecto a estas certezas que la Historia Reciente podría entregarnos, ya que entre los testimonios recogidos podemos evidenciar desconfianza por el campo de estudio que aludimos en la presente investigación, desconfianza que se justifica en el carácter interdisciplinario de la Historia Reciente, que podría alejarnos del objeto de estudio con otras interpretaciones, lo que transforma estas primeras respuestas de los entrevistados en un debate que se da tanto en la disciplina histórica como en las escuelas.

Por otro lado, creemos que los testimonios recogidos pueden ser vinculados a la Memoria, que analizaremos en los capítulos posteriores, pero que es fundamental en el trabajo investigativo de este campo, ya que como señalan la mayoría de los docentes en sus testimonios, el carácter conflictivo y polémico que genera el referirse a procesos de la Historia Reciente, permite un análisis y debate constante a estos procesos que se estudian, a partir de fuentes primarias, las que no están ajenas a ciertos errores de cada subjetividad, pero que a partir de la colectivización de estas memorias individuales, podemos, socializarlas y adentrarnos en distintos contextos o coyunturas del pasado reciente que

78 expliquen los fenómenos del presente. En el caso de nuestra investigación, y como analizaremos más adelante, lo relacionado a la Nueva Canción Chilena y a la enseñanza de este campo historiográfico.

De esta forma nos adentraremos, a continuación, a lo relacionado con los docentes y sus percepciones sobre la Historia Reciente en el contexto escolar. Más específicamente, en lo que refiere al proceso de enseñanza y de cómo abarcan desde su práctica docente este campo de estudio, las posibles herramientas que pueden utilizar, etc. De esta forma podremos acercarnos a nuestros objetivos cuando hagamos referencia a la Nueva Canción Chilena y de cómo ésta posibilita la enseñanza de la Historia Reciente en la escuela a partir de los relatos de los docentes entrevistados.

4.3. LOS DOCENTES Y LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE

En el presente capítulo haremos referencia a las representaciones de los docentes entrevistados sobre la enseñanza de la Historia Reciente, lo que va de la mano con sus percepciones y a cómo abarcan ellos este campo historiográfico desde el contexto escolar. De esta forma nos adentraremos en los elementos que constituyen parte importante del proceso de enseñanza que llevan a cabo los entrevistados y que nos ayudarán adentrarnos de mejor forma en lo que respecta, específicamente, a la enseñanza de la Historia Reciente.

Ya hemos evidenciado las percepciones de los y las docentes que han entregado sus testimonios respecto a lo que ellos entienden por Historia Reciente, donde le han otorgado márgenes temporales, sujetos históricos, problemas y debates propios del campo historiográfico, y hemos adelantado algunos elementos que conforman a esta disciplina y que iremos desarrollando en los capítulos posteriores, tales como la memoria o memorias que participan en la construcción del relato histórico, las fuentes primarias del relato oral

79 donde confluyen diferentes subjetividades que van conformando y recreando una memoria social, que es parte característica de otro elemento que desarrollaremos en el presente análisis, la Nueva Canción Chilena.

Es así como nos introducimos en las perspectivas que los y las docentes tienen sobre la enseñanza de la Historia Reciente. Debemos considerar que haremos referencia a los márgenes temporales señalados en los testimonios que se respaldan en nuestro marco teórico. En primer lugar, el PI1 nos había indicado sobre la temporalidad que le otorgaba al campo, en donde incluía las revoluciones burguesas que tienen, según él, total incidencia en la conformación de las sociedades actuales. Sin embargo, desde una perspectiva escolar, el docente establece un marco temporal aún más definido, comentando que para efectos educativos se puede comprender a los procesos ocurridos después de la Segunda Guerra Mundial, la Guerra Fría y lo que significó la Globalización en la configuración del presente.

En el caso de la Historia Reciente de nuestro país, el PI1 nos relata los márgenes temporales que considera en la escuela, explicando que:

“lo asociaría al período que comprende la década del 60, al Golpe de Estado y a la revolución Neoliberal implantada en el país, principalmente por las consecuencias explícitas e implícitas de aquellas transformaciones en la vida cotidiana de las personas, incluyendo los estudiantes, y que siguen estando presentes en constante tensión” (PI1).

De acuerdo al testimonio, identificamos que el PI1 al momento de enseñar la Historia Reciente, tanto en Chile como en la Historia Universal, establece constantemente la relación pasado-presente, teniendo en cuenta a los estudiantes que son finalmente los que analizan el o los relatos históricos entregados por el docente a partir de distintas

80 herramientas didácticas. Por otro lado, la temporalidad señalada contiene elementos en los que podemos adentrarnos directamente a partir de las fuentes primarias, tales como textos o los relatos orales que hemos hecho mención anteriormente, en donde la Memoria participa de manera muy activa.

Pero ¿De qué forma los y las estudiantes pueden analizar los relatos históricos que nos entrega el estudio de esta disciplina? El PI1 nos entrega algunos elementos que son relevantes en el proceso de enseñanza, y que deben ser parte de un proceso selectivo por parte del docente al momento de desempeñarse como profesional.

“Creo pertinente y muy relevante la utilización de fuentes audiovisuales, por la gran cantidad de material que genera el cine de ‘ficción’ como también el cine documental. Sin embargo, ese mismo fenómeno puede jugar en contra, por cuanto hay que saber seleccionar qué se consulta y la manera de utilizar dicho material para que sea provechoso en el aula (…) También el uso de fuentes orales considero que es fundamental, por cuanto los estudiantes pueden conocer de primera fuente, incluso dentro de su propia familia, y la percepción que tienen los adultos mayores, o adultos en general, respecto a los procesos históricos recientes, sobre todo lo que respecta a la historia de Chile y las Memorias que pueden transmitir a las nuevas generaciones, ya que todavía está presente una ‘disputa por la memoria’ dado el trauma que significa el Golpe de Estado y la posterior dictadura” (PI1).

En lo señalado por el PI1 da muestra de que es pertinente y relevante la utilización de fuentes primarias, además elementos como el avance tecnológico permite tener acceso a esas fuentes. Eso sí, puede llegar a ser perjudicial en la medida que el docente seleccione de manera arbitraria los materiales a analizar, y que estos materiales atiendan al contexto de los y las estudiantes, o más bien, respondan a las inquietudes de ellos y ellas. Por otro lado,

81 el docente debe procurar hacer un buen uso de los materiales, de esta forma, señala el profesor informante, se hace más provechosa en el aula.

Además, hace referencia a las fuentes orales, fuente primaria complementaria a la escrita que es parte fundamental de la Historia Reciente, ya que parte integral de la metodología de este campo recoge los testimonios otorgados por la memoria, pero podemos considerar otras fuentes orales, que también son constructoras de una memoria, como es el caso de la Nueva Canción Chilena, lo que puede ser de gran utilidad a la hora de definir las “disputas de la memoria” a las nuevas generaciones, como señala el PI1, que estructuran el período anterior y posterior, a la “Gran Fractura” en nuestro país y sus implicancias en la configuración actual de nuestra sociedad.

En el caso del PI2 se establece un vínculo entre el contenido y el contexto donde están inmersos los y las estudiantes. En palabras de la PI2:

“Desde una perspectiva escolar, diría que es un tanto desafiante el enseñar Historia Reciente, dada la vitalidad del contenido, que está lejos de no ser conflictivo, tanto para los docentes como para los estudiantes que viven con ella día a día y que dentro de sus mismos contextos son testigos de la Historia que hacemos referencia” (PI2).

De lo anterior se desprende nuevamente la vitalidad del contenido que hace mención la entrevistada, lo que genera en ella un desafío al momento de llevar a cabo la enseñanza de la Historia Reciente, más que nada por lo señalado en el capítulo anterior, donde los testigos portadores del relato histórico generan divergencias, aun cuando sean ellos/as mismos/as las fuentes primarias, en donde también se hace alusión a los y las estudiantes como parte de la Historia Reciente y como entes protagonistas en la construcción de la

82

Historia Reciente, lo que puede enriquecer el proceso de enseñanza y aprendizaje en el aula. Además, agrega: “Y a pesar de que el currículum considera el contenido, no hace una referencia a la corriente historiográfica como tal, como Historia Reciente”. (PI2)

Con esto último la docente entrevistada se refiere a las bases curriculares, las cuales no tratan de manera explícita a la Historia Reciente, ya sea en Chile, Latinoamérica o el mundo, sino que se hace referencia al siglo XX en general y sus implicancias en la actualidad, pero desde una perspectiva entendida desde una disciplina no tan vinculada a las demás ciencias sociales, que carece de un posicionamiento constructivista.

En lo que refiere a las herramientas que disponen los docentes la profesora nos dice:

“Con la ayuda que nos entrega la tecnología, porque no todo lo que viene de ella puede ser malo jajaja! podemos hacer uso y adentrarnos en fuentes primarias, pero no tan solo las fuentes escritas, sino que también en las audiovisuales que son fundamentales a la hora de la enseñanza en el contexto escolar actual.” (PI2)

Del testimonio anterior la PI2 hace alusión a la utilización de materiales didácticos que nos proporciona la tecnología, que además permite utilizar una gran diversidad de fuentes para analizarlas dentro del aula, ya sean primarias o secundarias. Aunque de todas maneras podemos acceder a los relatos propios de la memoria y contextos que describen y/o analizan los portadores de tales relatos, de tal manera que estos recursos o herramientas pedagógicas potencian el proceso de enseñanza y aprendizaje, ayudando a la labor de los y las docentes, ya que gran parte de los estudiantes perciben de mejor manera estos elementos, dadas las condiciones del contexto tecnológico actual, y como hemos señalado en nuestro marco teórico sobre las herramientas audiovisuales o información icónica que

83 menciona Carretero y Montanero, tiene total relación con los procesos que estudia la Historia Reciente, lo que podría dotar de grandes instrumentos a los docentes para promover el pensamiento histórico en el aula.

Para adentrarnos esto último, sobre la accesibilidad a estas fuentes primarias la docente entrevistada comenta:

“Como las temporalidades de la Historia Reciente, a diferencia de la Contemporánea, no son lejanas a nuestros días podemos acceder a una gran gama de fuentes audiovisuales, tales como documentales, cine, las artes, entre otras. La misma Memoria de los actores sociales que están vivos y que vivieron tales procesos a través de su relato es una fuente de inagotable riqueza histórica para el desarrollo de habilidades, principalmente en las relaciones pasado-presente” (PI2).

Pero ¿qué permite el uso de estos materiales? Según la PI2:

“Esto permite que los alumnos se adentren de mejor forma al contexto estudiado, ya que los recursos que hemos mencionado, motivan de mejor manera el aprendizaje de ellos. Así, las habilidades a desarrollar, como el análisis de fuentes, por ejemplo, permite debatir puntos de vista e ideas desde un mismo proceso o coyuntura, lo que hace desafiante enseñar la Historia Reciente, que como te decía anteriormente, de por sí es conflictiva su enseñanza”. (PI2)

84

De lo anterior la PI2 se describe de forma explícita las habilidades que pueden desarrollar los estudiantes al momento de analizar las fuentes, ya que considera que éstos materiales, de tipo audiovisual principalmente, “motivan de mejor manera” su proceso de aprendizaje, debido a la diversidad de los materiales al que se puede tener acceso, lo que permite contrastarlos y comprender el presente a través de las interpretaciones de los mismos estudiantes que construyen finalmente el aprendizaje.

Más específicamente, en términos de Carretero y Montanero, y considerando el uso de información icónica además de las tradicionales textuales y orales en la actualidad:

“la enseñanza de la Historia no se vertebra ya en torno a los personajes, las fechas y los eventos significativos del pasado. Se pretende que los estudiantes comprendan los procesos de cambio en el tiempo histórico y su influencia en el momento presente, es decir, que aprendan a pensar históricamente.”76

En este sentido, la utilización adecuada de la tecnología para analizar fuentes primarias permitirá desarrollar en los estudiantes el pensamiento histórico, siempre y cuando se apeguen a sus realidades, logrando responder sus inquietudes del presente a través del pasado, en concordancia con los objetivos propuestos por los y las docentes.

Los relatos de los PI1 y la PI2 que hemos analizado tienen total relación con lo dicho por el PI3 que en primer término nos ha hecho referencia a los márgenes temporales que considera para la enseñanza de la Historia Reciente, por otro lado: “agregaría lo conflictivo de estos relatos, ya que se debaten constantemente estas nociones de la Historia Reciente,

76 CARRETERO Y MONTANERO, op.cit., 2008, pp. 134-135 85 tanto en lo cotidiano como en lo académico, imagínate en la escuela lo que es hablar de Historia Reciente” (PI3).

Lo anterior nos presenta una problemática habitual entre los docentes de Historia, que hemos hecho mención anteriormente, al momento de enseñar la Historia Reciente, ya que los contenidos que son tratados tienen total relación con los contextos inmersos en la escuela. Esto puede ser desarrollado o no por los docentes, lo que dependerá de los objetivos que se han propuesto alcanzar. Por otro lado, podemos desprender que la dificultad de enseñar la Historia Reciente en la escuela, responde a que se podría confundir con imponer ciertos paradigmas a los estudiantes o demostrar un posicionamiento frente a ciertos temas, tal como lo señalaba el PI5 en su testimonio, lo que comúnmente ocurre en el contexto escolar, ya que difícilmente los y las docentes no intencionen los discursos o elementos a enseñar.

Respecto a los materiales a utilizar en la enseñanza de la Historia Reciente, el PI3 consideraría utilizar los recursos:

“multimediales (audiovisuales) y documentales, ya sean de la época o reconstrucciones actuales del pasado reciente. Estos elementos permiten adentrarnos en una perspectiva muchas veces crítica de la realidad actual, por lo que es muy útil a la hora de generar una discusión entre los estudiantes sobre aspectos sociales, políticos, económicos, entre otros, por lo que podemos desarrollar habilidades como el pensamiento crítico en las relaciones pasado-presente obtenidas de los recursos” (PI3).

Sobre este punto podemos evidenciar que coincide con PI1 y PI2, respecto al uso de los materiales, que pueden ser fundamentales para formular el pensamiento crítico en los y las

86 estudiantes. Además, le otorga una ventaja a la enseñanza de la Historia Reciente por sobre las demás clasificaciones temporales en lo que respecta a la utilización de materiales pedagógicos.

“Esa es una gran ventaja de la Historia Reciente, y que, a diferencia de la Historia Contemporánea, las fuentes primaras son mucho más accesibles, porque gran parte del material así lo permite, y que se potencia por el uso de tecnologías o las mismas habilidades de cada profesor.” (PI3).

Si bien del testimonio del PI3 encontramos similitudes con los demás docentes frente a la utilización de recursos tecnológicos, entendiendo el contexto actual de la tecnología y la accesibilidad que existe a estos materiales, deja en claro que dependerá en gran parte en las habilidades del docente para poder darle un buen uso a esos materiales que ha seleccionado para poder enseñar los contenidos y lograr desarrollar las habilidades del pensamiento histórico en los y las estudiantes.

Sobre el relato entregado por el PI4, podemos evidenciar su percepción temporal en relación a los materiales a utilizar en el aula, los cuales, según él, son inacabados. En palabras del docente:

“En cuanto a lo estrictamente académico o a interpretaciones historiográficas, éstas carecen de un carácter ‘acabado’, propiedad que le da temporalidad al largo plazo. Por lo mismo, a la hora de estudiar esta ‘historia del presente’, resulta muy interesante el poder trabajar con fuentes orales, que permitan diversificar las interpretaciones de cada proceso histórico” (PI4).

87

De hecho, el PI4 comenta que una vez hecha la diferenciación de las entre Historia Contemporánea e Historia Reciente:

“trabajaría con diversas fuentes que den cuenta de esta diferenciación, identificando interpretaciones ‘acabadas’ y ‘lejanas’ de cierto proceso histórico e interpretaciones ‘subjetivas’ y ‘cercanas’ de otros procesos históricos, lo que va enriqueciendo y permitiendo el desarrollo de estas habilidades en los alumnos, sobre todo desde una perspectiva crítica de los procesos en cuestión”. (PI4)

Respecto al testimonio anterior, el docente busca develar las diferencias entre lo que significa estudiar la Historia Reciente y la Historia Contemporánea, lo que nos permite decir que se posiciona desde una perspectiva crítica, validando el discurso de este nuevo campo historiográfico y los recursos que puede utilizar al momento de analizar los procesos que lo componen, con el fin de desarrollar en sus estudiantes las habilidades propias del pensar históricamente.

De acuerdo a lo anterior vinculamos el testimonio con una frase de Hanna Arendt: “La historia es un relato que no termina de comenzar pero que no cesa nunca”77. De aquí la relación que se establece entre la temporalidad y la posibilidad de trabajar con una gran diversidad de fuentes, las que están subordinadas al avance del tiempo, que nos entrega nuevas formas de comprender el tiempo presente, ya que tampoco deja de construirse día a día, y mucho menos en la escuela. Aunque se deben tener en cuenta los recursos y materiales icónicos que se utilizan. En este sentido el PI4 se refiere a las fuentes orales, las que permiten que el análisis que se lleve a cabo en el aula permita ligar los contenidos a las

77 Extraído del artículo del artículo de Florencia Levín “El pasado reciente en la escuela, entre los dilemas de la historia y la memoria” citado en el presente trabajo. 88 realidades y contextos de los sujetos que interpretan los materiales. Aunque hacemos hincapié respecto las habilidades del docente al momento de seleccionar los recursos y materiales, ya que la arbitrariedad en la selección limita el análisis que los y las estudiantes puedan desarrollar al no responder a los cuestionamientos que su propio contexto les genera día a día.

Bajo las perspectivas de los docentes que hemos identificado en los relatos expuestos, podemos encontrar características propias de profesores que ven a la disciplina histórica desde una perspectiva crítica-constructivista, la que dejan de manifiesto al adaptar este campo de estudio en el proceso de enseñanza, que se ve reflejado en la utilización de recursos que posibilitan el desarrollo de habilidades propias del pensamiento histórico en los y las estudiantes.

De forma distinta, y a modo de contraste, el PI5 ya nos había manifestado su desconfianza frente a la Historia Reciente y a cómo esta disciplina se va constituyendo gracias a las diferentes disciplinas de las ciencias sociales. En lo que respecta a la forma de enseñar la Historia Reciente, considerando los márgenes temporales que los mismos docentes han designado al campo de estudio, el PI5 señala: “me parece que existe la posibilidad de aprovechar las desventajas de este campo para desarrollar habilidades superiores”. (PI5) De lo anterior podemos ver que el docente entrevistado a pesar de su disconformidad con la Historia Reciente ve una posibilidad de desarrollar en sus estudiantes habilidades más complejas de acuerdo a los materiales o recursos que podemos acceder gracias a este campo.

Este camino que traza el PI5, para poder desarrollar estas habilidades más complejas es posible:

89

“A partir de la recuperación de testimonios de protagonistas de episodios o procesos históricos se puede acercar la labor del historiador al estudiantado, por lo que se debe llegar a un recorrido taxonómico completo desde las habilidades más básicas del conocer, terminando en análisis, evaluación de la subjetividad de los testimonios, y construcción de un relato histórico”. (PI5)

Este relato es fundamental para adentrarnos en el análisis que llevaremos a cabo en los próximos capítulos, debido a la relevancia que el docente, que independiente de estar en contra del campo de estudio, le otorga a la recolección y recuperación de los testimonios de los protagonistas de los procesos históricos que guardan relación con los márgenes establecidos por la Historia Reciente. Además, podemos observar ciertas contradicciones del PI5 al momento de comprender la metodología a utilizar en el aula, en contraste con la disciplina histórica, que en su mismo relato consideraba debía ser exclusivo del investigador o historiador. En este sentido vemos una disposición al desarrollo de habilidades propias del pensamiento histórico que hemos definido de acuerdo a lo planteado por Santisteban y Carretero, en donde los y las estudiantes conocen estas fuentes y construyen su aprendizaje en la medida que van analizando, contrastando e interpretando los relatos históricos, que son utilizados por los docentes.

De esta forma, evidenciamos también en el PI5 una disposición de utilizar fuentes distintas a las tradicionales, lo que vendría a ser la principal disociación respecto a sus primeras palabras frente al campo de estudio, por lo tanto, los relatos que pueden utilizar los docentes como herramientas o materiales para la enseñanza de la Historia, pueden ser analizados por los y las estudiantes para desarrollar habilidades propias del pensamiento histórico, pasando desde las más básicas, hacia las más complejas. Estos recursos pueden ser vinculados a los materiales descritos por los otros docentes entrevistados, con ayuda de las tecnologías actuales, la búsqueda de tales recursos nos permite adentrarnos de mejor forma a los contextos que la Historia Reciente considera para llevar a cabo el análisis,

90 aunque deben ser utilizados de forma pertinente por los y las docentes, evitando arbitrariedad en la selección de tales materiales.

4.4. CONCLUSIONES CAPÍTULO IV

De acuerdo al análisis establecido en este capítulo hemos podido identificar las percepciones de los y las docentes entrevistados frente a la Historia Reciente como campo historiográfico y de qué manera comprenden la disciplina histórica al momento de llevar a cabo el proceso de enseñanza en el aula. Es por esto que según los primeros testimonios que hemos analizado, plantearemos nuestras primeras conclusiones que tendrán directa relación a los objetivos propuestos, y que finalmente están en plena concordancia con los capítulos que desarrollaremos más adelante.

En síntesis, en este capítulo hemos distinguido dos puntos que consideramos relevantes para el desarrollo de nuestra investigación. En primer lugar, al introducirnos en las percepciones que los y las docentes entrevistados tienen respecto de la Historia Reciente, hemos encontrado similitudes y desacuerdos frente al campo de estudio y sus rasgos característicos. Estas concordancias y contrastes las hemos ordenado de la siguiente forma:

La temporalidad que los docentes consideran al momento de comprender la Historia Reciente posee ciertas similitudes, y a su vez matices, lo que permite establecer un consenso respecto a los procesos que este campo, según los entrevistados, considera en su análisis. Estas temporalidades guardan relación directa con los procesos ocurridos desde la segunda mitad del Siglo XX en la esfera internacional, y desde un plano local/nacional, podemos considerar los procesos ocurridos desde finales de los años cincuenta.

91

Por lo tanto, teniendo en cuenta las temporalidades que se han analizado consideramos que la Historia Reciente de Chile, según los testimonios de los y las docentes, se puede considerar desde la segunda mitad del Siglo XX, específicamente desde la fuerza que toman los movimientos sociales en la década del cincuenta y los objetivos que persiguen, que tienen total incidencia en los procesos posteriores, como la polarización de la sociedad, motivada por la Guerra Fría en el plano internacional; el triunfo de Allende en las elecciones, que marca un antes y un después en nuestra historia; el Golpe de Estado y la dictadura cívico-militar; y también los efectos de este proceso en la actualidad a través del Neoliberalismo plasmado en nuestra sociedad, donde los movimientos sociales toman muchos elementos de los descritos anteriormente y que no están ajenos al debate o a diferentes interpretaciones históricas.

De lo anterior, podemos añadir otros dos elementos que consideramos relevantes. En primer lugar, las y los actores que son parte importante de esta Historia Reciente, las fuentes mismas, sobre todo para la construcción del relato histórico. Y en segundo lugar, en concordancia con lo anterior, las subjetividades que están en estos relatos históricos, que considera a los testigos de tales procesos y sus interpretaciones como fuentes válidas para la construcción de estos relatos, que prevalecen gracias a la memoria de tipo social.

Es aquí donde nos adentramos en el segundo punto que hacíamos mención en los párrafos anteriores, en el carácter conflictivo de la Historia Reciente como disciplina y su enseñanza en el aula, teniendo en cuenta el uso de fuentes que respaldan la construcción del relato o los relatos históricos. Esto queda de manifiesto entre los docentes entrevistados, declaran que no es fácil enseñar Historia Reciente en la escuela, debido a que los procesos que considera, que finalmente son los contenidos, tienen directa relación con el presente, y por tanto, con las realidades y contextos de los y las estudiantes, teniendo los docentes un papel muy importante en la enseñanza.

92

Este rol de los docentes debe considerar la utilización de recursos y/o materiales adecuados y pertinentes a los contextos de los y las estudiantes, que evite imponer visiones personales de los y las profesores, pero que sí problematice los procesos estudiados, lo que permitirá desarrollar el pensamiento histórico en la medida que se desarrollen habilidades más complejas, siendo de gran utilidad para enseñar Historia. Además, estos recursos que la Historia Reciente nos ofrece, poseen ciertas particularidades que muchas veces no podemos encontrar en los otros campos historiográficos, ya que el avance de las tecnologías permite adentrarnos en un sinfín de fuentes escritas y orales, que pueden expresarse en material audiovisual, y facilitar el acceso, tanto por los y las docentes como por los y las estudiantes, a estas fuentes propias de la memoria.

Para efectos de esta investigación estos recursos podemos encontrarlos en una esfera que analizaremos en los próximos capítulos, y que se desprende de la música, pero que puede analizarse dese las ciencias sociales, tal como propone el estudio de la Historia Reciente, y es que nos referimos a la Nueva Canción Chilena, en donde analizaremos las implicancias que puede tener en la enseñanza de la Historia Reciente en el aula, a partir de su contenido y su relación con la memoria, desde las perspectivas de los docentes entrevistados en este trabajo. De esta forma buscaremos cumplir con los objetivos propuestos en nuestra investigación.

93

CAPÍTULO V

“Si hay que callar no callemos, pongámonos a cantar…”.

(Rubén Lena)

5. LOS DOCENTES Y LA NUEVA CANCIÓN CHILENA

5.1. INTRODUCCIÓN

En los siguientes capítulos nos adentraremos, desde los testimonios docentes, en lo que refiere a la Nueva Canción Chilena, específicamente en la relación del movimiento y cómo se expresa, o puede expresarse, en el aula al momento de enseñar la historia reciente, los componentes que pueden jugar a favor o en contra, las habilidades o competencias que pueden trabajarse con las herramientas que este movimiento nos otorga en relación a lo expuesto en nuestro marco teórico. Por lo que los relatos de los docentes son fundamentales para establecer esta relación entre estas aristas.

En un primer momento haremos referencia al movimiento, entendido desde la perspectiva docente, donde los testimonios de los entrevistados nos permitirán establecer un acercamiento entre la Nueva Canción Chilena y la escuela, o la realidad escolar, además de contextualizar históricamente el proceso con sus experiencias o conocimientos previos,

94 adentrándonos así en sus valoraciones que tienen frente al movimiento mencionado, sus elementos y a cómo lo enfrentan desde lo personal.

Más adelante, a través de los mismos relatos de los entrevistados, y una vez analizadas las perspectivas de los y las docentes, vincularemos la Nueva Canción Chilena con la enseñanza de la Historia Reciente, lo que nos permitirá dilucidar la forma en que los profesores comprenden y/o utilizan las herramientas que otorga el movimiento para el proceso de enseñanza, los elementos que podrían o no considerarse en el aula para el desarrollo del pensamiento histórico y habilidades que deberían alcanzar los y las estudiantes.

Una vez analizadas las relaciones entre las perspectivas de la Nueva Canción Chilena con el contexto escolar podremos identificar si el movimiento, entendido como una coyuntura, posibilita el proceso de enseñanza de la Historia Reciente de nuestro país. De esta forma estaremos esclareciendo el primer objetivo de nuestra investigación, para dar paso al próximo capítulo que guarda relación con la posibilidad de identificar si la Nueva Canción Chilena, posibilita como herramienta la construcción de una memoria social, desarrollando nuestro segundo objetivo específico.

5.2. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA EN LA PERSPECTIVA DOCENTE

Ya hemos adelantado a grandes rasgos, en los párrafos anteriores, el contenido del presente capítulo, y para adentrarnos y detallar el análisis de este, tendremos en consideración los conceptos trabajados en el marco teórico, ya que los profesores entrevistados nos presentarán sus perspectivas como docentes sobre el movimiento de la Nueva Canción Chilena, los juicios que emiten y por lo tanto sus aspectos positivos o negativos según las subjetividades de cada uno. De esta forma podremos ir introduciéndonos al contexto

95 educativo, específicamente en la relación: Nueva Canción Chilena y enseñanza de la Historia Reciente.

Hemos analizado también lo que significa, para los docentes entrevistados, la Historia Reciente y su enseñanza, los aspectos positivos y negativos del campo de estudio y de qué forma la comprenden desde el contexto escolar, en donde consideran las herramientas necesarias para el proceso de enseñanza-aprendizaje. Es por esto que nos adentraremos en una posible herramienta de la Historia Reciente, la cual hemos considerado y señalado como una coyuntura, la Nueva Canción Chilena, a partir de los testimonios recogidos.

Respecto a lo expuesto por el PI1, se hace referencia al contexto histórico y el marco temporal que abarca el movimiento.

“En primer lugar, el gran referente de la música chilena, sobre todo a nivel folclórico tiene sus bases en ese proceso gestado en la década de los años sesenta” (PI1) Además, agrega sobre su desarrollo en los siguientes años. “La música de protesta durante la Dictadura también resulta relevante, aun cuando me parece que es prudente contrastar esas expresiones artísticas de carácter sociopolítico con aquellas que tienen otra raíz y son más bien expresiones del pop pues pareciera interesante poner en tensión cuál es el rol del arte, en este caso con la música, y si es compromiso con la realidad o solamente un medio de expresión, distracción y/o entretención” (PI1).

De acuerdo al testimonio del PI1, podemos desprender que le otorga a la Nueva Canción Chilena un sentido de “música de protesta” antes y durante la Dictadura cívico-militar de nuestro país, la cual contrasta con otros movimientos artísticos que se desarrollaron en este

96 marco temporal en cuanto a las estructuras que los componían. Tal contraste lo encontramos, por ejemplo con La Nueva Ola, movimiento que al igual que la NCCh, generó una “revolución” artística durante los años sesenta, con influencia directa de los Estados Unidos, donde Pat Boone y Elvis Presley serían los personajes icónicos de la música anglo y que darían fuerza para que se desarrolle tal movimiento en el cono sur.78 Aunque el contraste principal al que hacemos referencia radica no tan sólo en el estilo e influencias, sino que también en el contenido, de ahí que el PI1 reconoce a la NCCh con el calificativo de “protesta”.

De lo anterior podemos desprender que este movimiento, según lo dicho por el docente citado, no se entienda como un simple acontecimiento dentro de nuestra Historia Reciente, ya que tiene mucha influencia en las coyunturas que guardan relación con nuestro presente, idea que seguiremos desarrollando más adelante a partir de la enseñanza, donde los docentes profundizarán con el movimiento aludido.

En lo que respecta a la PI2, bajo la primera idea, se refiere a la Nueva Canción Chilena desde una temporalidad bien demarcada:

“…la Nueva Canción Chilena recoge los procesos llevados a cabo en nuestro país desde los años sesenta aproximadamente, justamente lo que se considera Historia Reciente, haciendo referencia, por ejemplo: a la Reforma Agraria, a los movimientos estudiantiles, sociales y de los trabajadores, pasando por el gobierno de la Unidad Popular e incluso durante y post dictadura, además de la Historia del Siglo XX en América Latina” (PI2).

78 Visto en: Música Popular, Nueva Ola. http://www.musicapopular.cl/generos/nueva-ola/ Revisado el 15/01/2018. 97

Vemos que existe una vinculación entre el movimiento de la Nueva Canción Chilena y los procesos que la PI2 describe en su relato, ya que el contenido de las canciones hace referencia al contexto social donde se desarrolla el movimiento, que toma parte importante del pensamiento político de los sectores más populares y de los sectores políticos que los representaban, tal como menciona la PI2, la Unidad Popular.

Por lo tanto, podemos establecer el nexo entre el movimiento musical en un determinado marco temporal, con los procesos y/o coyunturas que abarca en su elaboración. A partir del relato, la docente comprende a la Nueva Canción Chilena como una forma de dejar en evidencia una construcción histórica que se llevaba a cabo al mismo tiempo que diversos procesos históricos, tales como: La Reforma Agraria o la Dictadura, por ejemplo, que se fueron desarrollando y que dan forma a nuestro presente. De ahí que la PI2 establezca una relación directa entre el movimiento musical con la Historia Reciente y los procesos que se relatan en ella.

O como también expresa el PI3, el cual toma la Nueva Canción Chilena para ejemplificar procesos referidos a la segunda mitad del Siglo XX, el cual no sólo lo vincula con lo sucedido en Chile, sino que, en el resto de América Latina, debido a que se vivieron procesos y coyunturas similares. En éste último punto, el docente destaca la diferencia que ocurrió particularmente en el caso chileno, tomando como ejemplo la elección presidencial de Allende el cual fue a través del voto y no por medio de las armas.

De hecho, el docente entrevistado toma un caso particular respecto a lo que abarca o puede significar la Nueva Canción Chilena en nuestra Historia Reciente, como lo es el “Canto al Programa”79 disco de Inti Illimani, que contextualiza el Chile de la década de los setenta y, principalmente el Proyecto de la Unidad Popular tras el triunfo de Salvador Allende en las elecciones de 1970, lo que en palabras del docente, “permite adentrarnos en el discurso

79 Álbum de estudio de la banda chilena Inti Illimani, publicado en 1970 tras el triunfo de Salvador Allende Gossens en las elecciones presidenciales de Septiembre del mismo año. 98 político de la UP y que promovía la Nueva Canción Chilena, que encontró en los sectores populares a los herederos de tal relato a través de la música”(PI3), lo que nos lleva a la conclusión de que los sectores populares son actores principales en éste relato que se evidencia de forma clara a través de la música como una forma democrática de tener voz y/o participación ciudadana activa.

Más adelante nos detendremos en el “Canto al Programa”, ya que es la materialización de cómo el movimiento de la Nueva Canción Chilena se enmarca en nuestra Historia Reciente, como una forma de unir al arte, y su rol social como señaló uno de los docentes, con los elementos políticos, económicos y por sobretodo sociales, configurando así una memoria que nos invita a conocer nuestro pasado reciente desde una perspectiva de los sectores populares, movimientos sociales y la sociedad chilena en general dentro del proceso de Guerra Fría.

Evidentemente no es el único componente capaz de materializar a través de la memoria, ya que la riqueza del movimiento es bastante amplia, lo que podría permitir a los y las docentes trabajar con una gran gama de materiales para trabajar los contenidos pertenecientes a la Historia Reciente, como ellos mismos lo señalan, pero nos hemos detenido en “Canto al Programa” ya que los PI3 y PI4 los han señalado como una demostración o un buen ejemplo de lo que la Nueva Canción Chilena puede lograr en la sociedad chilena de la segunda mitad del siglo XX, e incluso en nuestro día a día.

De hecho, el mismo PI3 nos presenta otros escenarios en nuestra Historia Reciente donde la NCCh tiene mucha influencia: “podemos ejemplificar con la producción en general desde el exilio en plena dictadura, como el caso de Inti-Illimani o Illapu por ejemplo” (PI3). De lo anterior podemos extraer el carácter activo de la NCCh en contextos que, como mencionamos en nuestro marco teórico, su influencia estuvo presente desde fuera del

99 continente americano, mostrando al mundo una visión de lo que ocurría en Chile tras el Golpe de Estado, lo que fortaleció al movimiento en general, y por sobretodo su legado.

Desde un posicionamiento más crítico del movimiento de la NCCh el PI5 plantea que puede ser utilizado como fuente de estudio, tanto para las ciencias sociales como su utilización en el aula, aunque: “debiese quedar aclarado desde un comienzo que esto representa la visión de una parte de la sociedad que, naturalmente habla desde su visión como víctima” (PI5). De lo anterior damos cuenta que el relato del docente posee una predisposición negativa, o peyorativa, de las fuentes orales e incluso de la Historia Reciente como campo de estudio, ya que él mismo prioriza los estudios más tradicionales de las ciencias sociales, donde cada una trabaja por separado, lo que se opone notoriamente a lo expresado por los demás docentes y al campo historiográfico que aludimos en nuestra investigación.

Consideramos que la Nueva Canción Chilena materializa muchos elementos que las ciencias sociales estudian, siendo una gran herramienta de análisis que pueden aportar en distintos contextos, uno de estos es el escolar, donde se pueden desarrollar diversas habilidades propias del pensamiento histórico. Tal como señala el PI4: “A fin de cuentas, la música, como experiencia cultural y popular es una de las expresiones culturales más democráticas, dando cuenta de diversos aspectos sociales, como la expresión política por ejemplo” (PI4). En el caso del ejemplo que nombra el PI4, en el aspecto político se da cuenta de los sectores populares, conformados por obreros y campesinos, jóvenes y trabajadores, y su conciencia política entendida como ciudadanos activos en una sociedad polarizada por el contexto internacional, pero la Nueva Canción Chilena también puede ahondar en aspectos económicos, sociales, geográficos y por sobretodo culturales, permitiendo un análisis más amplio de los procesos que hacemos referencia.

100

Es evidente que existen distintos posicionamientos frente a la NCCh por parte de los docentes, ya que en sus visiones también hay experiencias y conocimientos previos, una memoria de por medio, pero que a continuación llevaremos al contexto de la enseñanza, para adentrarnos en uno de los objetivos planteados, si el movimiento musical chileno de la Nueva Canción Chilena puede posibilitar la enseñanza de la Historia Reciente de Chile, entendiéndola como una de tantas formas de aportar al proceso de enseñanza y que analizaremos en los siguientes capítulos.

5.3. LA NUEVA CANCIÓN CHILENA EN LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA RECIENTE

Hasta ahora hemos evidenciado de qué forma los docentes comprenden el movimiento de la Nueva Canción Chilena en el contexto de la Historia Reciente que ellos mismos, a través de sus relatos, nos han expuesto sus perspectivas, que en la mayoría de los casos comparten rasgos característicos del campo de estudio, aunque también hemos podido identificar contrastes importantes que nos permitirán profundizar en el análisis en los próximos capítulos respecto a los objetivos propuestos en la presente investigación.

A continuación nos adentraremos en el análisis que surge entre la Nueva Canción Chilena al momento de enseñar la Historia Reciente, por lo tanto, los testimonios de los docentes serán a partir desde sus experiencias en el aula, lo que nos ayudará a adentrarnos y entender de mejor forma lo que ellos rescatan de la Nueva Canción Chilena en el proceso de enseñanza, de esta forma podremos evidenciar cómo trabajan o pueden trabajar las distintas habilidades que el pensamiento histórico permite desarrollar en los y las estudiantes y así dar cuenta si la NCCh posibilita de forma concreta la enseñanza de la Historia Reciente de Chile.

101

En primer lugar, los docentes entrevistados se refieren al uso y a las habilidades que la Nueva Canción Chilena permitiría trabajar en los estudiantes en el proceso de enseñanza de nuestra Historia Reciente. En este contexto, señala el PI1: “El uso del arte, y en este caso la música, como un vehículo de expresión social y compromiso político fue una acción intencionada y en virtud de esa creación radica su relevancia como también su uso pedagógico y didáctico para las nuevas generaciones” (PI1). Podemos evidenciar en el testimonio anterior que la relevancia otorgada al movimiento musical no es pasiva, o en otros términos, no se comprende como un simple acontecimiento en nuestra historia, sino que los docentes podemos comprenderla como una coyuntura que evidenció la perspectiva de un sector social que a través del arte, específicamente del canto, pudo visibilizarse como un actor influyente en la sociedad y en la historia, lo que puede potenciar su utilización en la escuela para las nuevas generaciones.

Adentrándose más en este análisis el docente indica qué habilidades podrían desarrollarse en el aula al momento de utilizar la NCCh como fuente histórica:

“En ese caso resulta importante desarrollar la habilidad de analizar la letra de las canciones e identificar cuál es el objetivo de una creación artística pues pareciera ser que muchos estudiantes les cuesta asociar que una creación tiene sentido por cuanto se inserta en un contexto histórico definido lo que dificulta una mayor comprensión del arte como vehículo de expresión social y no tan sólo centrado en lo estético” (PI1).

En esta relación observamos que el docente se interesa por desarrollar habilidades más complejas como lo es el análisis de fuentes, las composiciones mismas que explican más allá de simples hechos o acontecimientos, son procesos que se relacionan unos con otros y que dan vida a otros que tocan nuestro presente. Aunque deja en claro que los y las estudiantes muchas veces pasan por alto el contenido que el arte, o la música en este caso,

102 tiene en una sociedad determinada, quedándose simplemente con lo superficial y estético, lo que es una dificultad a trabajar por los docentes, ya que la NCCh posee una riqueza que muchas veces no es bien aprovechada por los y las docentes “como vehículo de expresión social”.

Desde la perspectiva del PI4 también podemos ver su intención de utilizar la NCCh para enseñar la Historia Reciente de Chile a través del análisis de fuentes por parte de sus estudiantes, elemento que converge con el relato del docente anterior. En sus propias palabras argumenta: “las interpretaciones en el análisis de fuentes históricas son, a mi parecer, esenciales para el trabajo de la historia, en especial cuando se logran interpretar fuentes actuales y permeadas por la subjetividad temporal” (PI4). En este aspecto la propuesta del docente es utilizar las fuentes actuales80 y enseñar a través de las propias interpretaciones que los y las estudiantes realicen del contenido, siendo la NCCh una herramienta bastante útil y provechosa para enseñar la Historia Reciente:

“Así, el trabajo con fuentes, entendiéndolas como piezas musicales y desarrollo histórico, de la Nueva Canción Chilena, responde a ese criterio, pues permiten dar cuenta de un proceso histórico-cultural propio de las década de los 60-70’s y su relación con los acontecimientos político-sociales del periodo, como la mayor participación social, la toma de conciencia política de los sectores populares, compuesta por obreros y campesinos principalmente, y de clases medias, la polarización política, la crisis UP-Dictadura, etc.” (PI4).

Todos los elementos mencionados anteriormente por el PI4, permiten analizar en parte lo que ocurría en Chile durante y después de la segunda mitad del Siglo XX en diversas

80 Se debe entender por “actuales” a las fuentes que tenemos acceso en nuestros días, donde la NCCh posee tal carácter, ya que el material es accesible y tanto los precursores del movimiento como los receptores que interpretan las composiciones, pueden dar testimonio aún de aquello. 103 esferas, lo que va esclareciendo que la NCCh posee gran importancia al momento de referirnos a nuestra Historia Reciente, y las habilidades que pueden desarrollar los y las estudiantes son diversas, ya que los mismos recursos que en su mayoría son audiovisuales, resultan ser más atractivos. Tal y como señalaba el PI5, citado en capítulos anteriores y que no considera la Historia Reciente como campo de estudio, si toma en cuenta utilizar la Nueva Canción Chilena para desarrollar habilidades más complejas en el proceso enseñanza-aprendizaje, ya que a través de los testimonios, canciones en este caso, se puede acercar el trabajo del investigador al estudiantado, yendo desde habilidades como el conocer, identificar hasta las más complejas como analizar y/o evaluar las subjetividades de los testimonios y relatos históricos.

A continuación, evidenciaremos un ejemplo que la PI2 señala, respecto a cómo puede operar la Nueva Canción Chilena en el contexto escolar, aunque con la particularidad de que podría funcionar con otros procesos históricos que se alejan de la temporalidad que hemos definido sobre la Historia Reciente. Por lo tanto, la NCCh: “También es utilizable en otros contextos históricos, incluso más lejanos. Por dar un ejemplo, cuando tratamos en Octavo Básico ‘la sociedad colonial’, utilizamos una versión de Víctor Jara de ‘Ingá’ (PI2). De hecho, la docente cita la canción para establecer el nexo correspondiente:

“Mi amito se ha ido pal campo y me deja a mi amita cuidando... desde ayer y cuando... desde ayer y cuando... cuando el amo sepa, lo que está pasando, va a hacer con el cuero del negrito… zapatito blando”.81

A partir de la canción citada por la entrevistada, explica el objetivo que utilizó, detallando además la problemática del contenido aludido anteriormente: “En esta canción trabajamos de qué forma la esclavitud en América fue considerada un derecho del hombre blanco, el africano y sus descendientes desposeídos de derecho alguno y reducidos a la condición de

81 JARA, Víctor. “Ingá”. Canto Libre. Odeón, Chile, 1970. 104 animales” (PI2). Por lo tanto, en primer lugar, la docente amplía la temporalidad que la Nueva Canción Chilena pueda abarcar al estudiar la Historia de Chile. Posteriormente: “los estudiantes trabajaron inferencias y se discutió grupalmente el sentido de la letra, la cual es una recopilación que interpreta Víctor Jara recogida del folklore afro-peruano, lo que puede vincularse de forma directa al uso de la memoria a través de esta canción” (PI2).

Así, la docente dio cuenta de cómo operó la Nueva Canción Chilena en su contexto escolar y de cómo puede funcionar al tratar contenidos distintos a la Historia Reciente. De todas formas, señala que sirve para tratar principalmente los procesos ocurridos en el Chile reciente, de hecho, utilizando la misma canción se pueden analizar elementos recientes y actuales: “ya que la trata de personas, lo que funciona de manera muy similar a la esclavitud sigue ocurriendo en sectores rurales de nuestro país, ya sea con extranjeros o campesinos de la hacienda” (PI2).

En los párrafos anteriores hemos visto cómo los docentes entrevistados se enfrentan a la Nueva Canción Chilena al momento de enseñar la Historia Reciente, incluso yendo a tiempos más lejanos, ampliando la temporalidad, y el uso, del movimiento musical aludido en el aula, con el fin de desarrollar diferentes habilidades, desde las más básicas hasta las más complejas. Aunque no tan sólo hemos evidenciado aspectos favorables del uso de la NCCh, ya que también están presente los que juegan en contra, tal como señalaba el PI1 que muchas veces al utilizar este tipo de fuentes lo superficial prima por sobre el trasfondo, en otras palabras, lo estético podría ser más fácil de reconocer que el contexto que se alude, aunque la NCCh, a diferencia de otras corrientes musicales parece ser la más explícita en cuanto a lo que transmite, por lo tanto los docentes dejan en claro que la NCCh es una gran herramienta para enseñar nuestra Historia del tiempo presente.

Para finalizar, en el presente capítulo hemos revisado un ejemplo que la PI2 nos planteó a partir de una canción del compositor chileno Víctor Jara, dejando en claro que la NCCh

105 también puede explicar otros procesos de nuestra historia, incluso los procesos ocurridos en el período de la Colonia, dejando en claro que también puede ampliar su marco temporal en contextos determinados. Pero en el próximo capítulo nos detendremos en otro ejemplo que hemos citado anteriormente en el relato del PI3 y que el PI4 también señaló para ilustrar el contexto de la NCCh en relación a nuestra Historia Reciente, de esta forma nos adentraremos en la Memoria que nos transmite el movimiento musical.

5.3.1. CANTO AL PROGRAMA: CONSTRUYENDO UNA MEMORIA SOCIAL

El análisis realizado hasta ahora gracias a las entrevistas que nos han brindado los docentes, nos ha permitido tomar diversas variables que se complementan, y que guardan relación con la Nueva Canción Chilena como un posible generador, o constructor, de memoria social. Lo anterior se visibiliza aún más cuando los y las estudiantes en contextos actuales ven con lejanía los procesos históricos, incluso los que son parte de la Historia Reciente, perdiendo toda conexión de nuestro pasado inmediato. Es por esto que a través de la música y la memoria creemos que existe una alternativa para unir el presente con nuestro pasado reciente.

Dentro de las entrevistas, los docentes han expresado en qué contenidos podrían utilizar o han utilizado la NCCh, agregando ejemplos, evidenciando las facilidades y dificultades de trabajar con este tipo de fuentes, las habilidades que se pueden desarrollar, entre otras. Según lo dicho al finalizar el capítulo anterior nos adentraremos en un ejemplo que el PI3 y el PI4 nos han planteado en sus testimonios, que guarda relación con el “Canto al Programa” disco del conjunto chileno Inti Illimani, que según el PI4 refleja la politización y polarización de la sociedad chilena a finales de los años sesenta, en el contexto de Guerra

106

Fría, y además: “da cuenta de la adherencia que tuvo la gran mayoría, si es que no todo el movimiento, al programa político de la UP” (PI4).

El “Canto al Programa”, surge como una iniciativa por parte de la Unidad Popular, los cuales solicitaron el aporte de Sergio Ortega, encargado de la Comisión de Cultura del Partido Comunista y también al músico ya conocido, Luis Advis, creador de la Cantata de Santa María. Ambos en colaboración con el grupo Inti Illimani, lograron mostrarnos de manera musicalizada el discurso político y programa de gobierno del Presidente electo Salvador Allende Gossens. En esta composición y discurso podemos vislumbrar el apoyo hacia los trabajadores, estudiantes y sobretodo se visualiza a través de la música el rol e importancia de la mujer en la lucha de los sectores populares, que se materializaron en los mismos movimientos sociales y que a través de la NCCh encontró su grito de lucha en las calles.

Respecto a la profundización e investigación del disco apuntaremos nuestro análisis hacia algunos fragmentos que podemos encontrar en las canciones del álbum, y que consideramos fundamentales para evidenciar lo que los docentes entrevistados nos han planteado en sus testimonios. Por lo tanto, quedará de manifiesto a través del Canto al Programa lo que la Nueva Canción Chilena dejó como legado en la memoria social de nuestro país y que posibilita, según los docentes, la enseñanza de nuestra Historia Reciente.

En primer lugar abordaremos el contexto histórico del álbum, el cual se crea en un ambiente polarizado y muy politizado socialmente a causa de la Guerra Fría que se desarrolla en gran parte del mundo, generando diversos conflictos ideológicos entre EE.UU. y la URSS los que no se dieron de forma directa entre ellos, pero que sí involucró a distintos países del mundo, a través de las armas, tal y como ocurrió en China, Cuba, la división de Corea, Vietnam, Centro América y los países del cono sur de América. Aunque en Chile la vía al socialismo ocurriría de una forma particular y a diferencia de los ejemplos

107 mencionados este sistema se instalaría mediante el voto, donde Salvador Allende Gossens alcanzaría la mayoría electoral, con ratificación del Congreso, para poder gobernar desde 1970.

En ese contexto que hemos descrito a grandes rasgos, el arte y la música también han estado presente, en donde la NCCh, así como lo han descrito los mismos docentes: “fue un movimiento musical muy marcado no tan solo en Chile, sino que, en gran parte de América Latina, la que además se nutrió de las ideas de izquierda y tomó como referente a las revoluciones recientes de este sector…” (PI2). Y esto queda de manifiesto aún más cuando observamos que la juventud, ya sean trabajadores y/o estudiantes, también poseía gran influencia en los movimientos sociales y culturales. Tal como se muestra en la contraportada del LP “Canto al Programa” y las palabras de las Juventudes Comunistas:

“Con el triunfo de la Unidad Popular, el 4 de Septiembre de 1970 se ha abierto para el pueblo de Chile, para los trabajadores, la posibilidad concreta de lograr cambios sociales profundos que le permitan pasar de objeto, a sujeto activo, creador y constructor de su propio destino, es decir, liberarse para siempre de la explotación de unos pocos sobre la mayoría, mediante la realización de un Gobierno verdaderamente popular que haga posible una revolución anti-imperialista (…) Para que esto sea posible se requiere de la más granítica unidad del pueblo (…) Esta Unidad será posible en la medida de que el pueblo tome conciencia de la coincidencia de sus intereses con los objetivos del Programa de Gobierno de la Unidad Popular y, por lo tanto, con el éxito del Gobierno del Compañero Presidente Salvador Allende. (…) Las Juventudes Comunistas conscientes de su responsabilidad y de la necesidad de usar todos los medios de comunicación a su alcance concibió la idea de difundir el Programa mediante un disco. Esta, se concretó gracias al aporte creador de Luis Advis y Sergio Ortega, en lo musical y Julio Rojas

108

en la adaptación poética del texto, quienes después de un arduo trabajo colectivo nos entregan este conjunto de canciones de CANTO AL PROGRAMA que toman las formas de nuestro folklore y que logran, en la interpretación del conjunto INTI ILLIMANI una gran calidad artística. (…) La JJCC saluda este aporte revolucionario de estos Compañeros Artistas y agradece a DICAP que con su organización y experiencia, cooperó para hacer posible este proyecto”.82

De esta forma podemos adentrarnos no tan sólo en el discurso de un sector político, sino que, de diferentes sectores sociales, que a través de la música buscan expresar su ideología, sus emociones, sus demandas como una forma de lucha y que permitirá la creación de una memoria que los docentes entrevistados, en su mayoría, considera revivir en el aula como una forma de entender el presente.

Considerando lo mencionado anteriormente, haremos un breve análisis de algunas canciones pertenecientes al álbum, las cuales creemos que versifica las propuestas de la Unidad Popular, y son las seleccionadas las que plasman con mayor claridad ésta visión:

Relato 1: (Julio Rojas)

“Si me miran en el campo, soy peón de cuerpo moreno,

Si me ven en la ciudad, puede ser cualquier obrero,

Si me buscan en la costa, me encuentran en los pesqueros,

Si van a buscarme al norte, voy vestido de minero

Así, desde Norte a Sur, aunque sea sin quererlo,

82 JJCC en 1970 agradeciendo en la contraportada del LP “Canto al Programa” por la elaboración del proyecto musical tras el triunfo del presidente Allende en 1970. 109

Me verán en todas partes, con el sudor en el cuerpo”

Seleccionamos el siguiente párrafo, con la finalidad de leer e interpretar uno de los grandes puntos que abarcaba el Gobierno de la Unidad Popular, la unificación del pueblo chileno, que dentro de él no existieran desigualdades, vislumbra el tan olvidado esfuerzo del trabajador, del obrero.

Canción del Poder Popular: (Julio Rojas- Luis Advis)

“Vamos a llevar las riendas de todos nuestros asuntos,

Y que de una vez entiendan, hombre y mujer todos juntos.

Porqué ésta vez no se trata de cambiar un presidente,

Será el pueblo quien construya un Chile bien diferente.”

De la siguiente estrofa, podemos realizar el primer énfasis, el considerar el rol e importancia de la mujer en la sociedad, y no obstante en la toma de decisiones, sobre todo de carácter político. Además, la composición nos hace un llamado a cambiar el país, todos y todas juntos, por ende, se manifiesta la búsqueda de la unificación del país, considerando el contexto polarizado de la época. Esto nos ayuda para evidenciar las prioridades que poseía el gobierno en relación a las necesidades de la sociedad en la época y que actualmente son temas de discusión.

110

El Vals de la Profundización de la Democracia:

(Julio Rojas- Sergio Ortega)

“Democracia ésta vez obtendremos,

Democracia nos sabremos dar,

Democracia del pueblo chileno,

Democracia de pelo y señal”

El término democracia surge con gran impulso durante éste periodo, tomando en cuenta que los gobiernos anteriores habían tenido carácter mayoritariamente conservador, por ende, uno de los principales planteamientos de la Unidad Popular, es garantizar el respeto y no obstante la voluntad del pueblo, como se menciona en estrofas de otras composiciones pertenecientes al programa, ahora será el pueblo quien construya un Chile bien diferente”. Por ende, si deseamos expresar con hechos más concretos el concepto de democracia, podemos tomar en cuenta el realizar un breve análisis a lo que nos desea expresar el Canto al Programa.

El Rin de la Nueva Constitución:

(Luis Advis)

“La constitución añeja, nueva la vamos hacer,

Y el pueblo se irá montando, a caballo en el poder,

A de ser buena medida, hacer que el viejo congreso,

Vaya cediendo lugar, a la asamblea del pueblo.”

111

Como hemos mencionado anteriormente, una de las principales importancias y finalidades de la Unidad Popular, era gobernar desde una perspectiva democrática, que fuera el mismo pueblo, quien eligiera a sus representantes. De lo expresado anteriormente, cabe señalar, que el Gobierno Socialista de Salvador Allende a diferencia de otros contextos a nivel mundial, ha sido el único elegido democráticamente, tomando en cuenta que otros fueron de carácter totalitarista y/o dictatoriales. Por otra parte, éste gobierno se encuentra marcado por el compromiso con la Mujer, específicamente por parte del Presidente, que a diferencia de los demás gobiernos. Esto incluso provocó malestares dentro de la misma Unidad Popular, quienes no se encontraban totalmente de acuerdo con la idea de Allende de crear el Ministerio de la Mujer. 83

Canción de la Propiedad Social y Privada:

(Luis Advis)

“Ya no serán los campos solo de algunos,

Pa’ recibir el pueblo todos los frutos.

Nacionalizaremos muchas riquezas,

Sistemas financieros, grandes empresas.”

Quisimos enfatizar en éste punto, porque una de las grandes políticas del Gobierno de la Unidad Popular, fue lo que Allende considera como la recuperación de la dignidad nacional, se enfoca en el futuro y en el devenir del país, Chile comienza su búsqueda por la

83 VITALE, Luis. “La Mujer en el Gobierno de Salvador Allende”. CEME, Archivo Chile. En: http://www.archivochile.com/Mov_sociales/mov_mujeres/MSmovmujeres0006.pdf Último acceso el 16/01/2018.

112 independencia económica y no obstante, política. Esto se logra por medio de la Nacionalización del Cobre en 1971.

También es importante destacar, no sólo a Salvador Allende, sino que también a Frei Montalva, ambos presidentes y su trabajo hacia una Reforma Agraria, logró que Chile pudiera entrar a un tipo de modernización en lo que respecta la exportación, la cual tomo un carácter mucho más competitivo dentro de la industria internacional. Es por esto que Chile logró un gran avance en el tema económico, lo cual toma como contra respuesta a lo que se piensa que pudo haber sido un gobierno socialista, sino, que iba en pro del desarrollo del país.

Vals de la Educación para todos:

(Luis Advis)

“Tendremos educación para todos nuestros hijos,

Y los alimentaremos para que crezcan sanitos.

(…) Pero no hay que conformarse solo con los niños chicos,

Porque ahora educaremos a los que son mayorcitos.

(…) Allí estudiaran los hijos del pueblo trabajador,

Para que la patria tenga, bien puesto su corazón.”

Según el fragmento del canto, podemos ver su gran cercanía con lo que respecta el ámbito educativo, de dónde cabe destacar, dentro de su mismo discurso, el presidente indica su inquietud por hacer posible una transformación de la educación, he inclusive expresaba realizar una reivindicación no tan solo al estudiantado, sino que también hacia los y las docentes.

113

Esto es más visible en la presentación de un proyecto, el cual se enfocaba principalmente en las tasas de analfabetismo en el país, por ende, su finalidad era promover la alfabetización campesina y obrera, de la cual, lamentablemente no obtuvo una gran respuesta ni mucho menos apoyo del parlamento, “indiscutiblemente que hay que destacar la importancia que tendrá la escuela y el maestro, sobre todo frente a las dificultades que tendremos porque hacer cambios, es herir intereses.”84

Ante esto, Allende buscaba poseer una ciudadanía participativa, y para que eso ocurriera, de forma democrática, se debía establecer la igualdad de posibilidades, o sea otorgar las mismas oportunidades.

Venceremos

(Sergio Ortega)

“Campesinos, soldados, mineros,

La mujer de la patria también,

Estudiantes, empleados y obreros,

Cumpliremos con nuestro deber.

Sembraremos las tierras de gloria,

Socialista será el porvenir,

Todos juntos seremos la historia.”

Decidimos utilizar la siguiente estrofa, ya que en primer lugar, es la canción que mejor refleja las propuestas planteadas por la Unidad Popular, y segundo, por la importancia de

84 ALLENDE, Salvador. La vía Chilena al Socialismo. Ediciones Espartaco. Santiago, 2014, p.7. 114 los actores sociales que son nombrados anteriormente, el cual se complementa con una de las grandes banderas de lucha del gobierno de Salvador Allende, la participación del pueblo, de los y las trabajadores, sobre todo abarca una temática que en la actualidad está en su apogeo, levantar la imagen y participación de la Mujer.

5.4. CONCLUSIONES CAPÍTULO V

En este capítulo ya nos hemos adentrado en el análisis que establecen los docentes frente a nuestras interrogantes, en donde han señalado elementos que nos permitirán ir cumpliendo con los objetivos propuestos. De hecho, la mayoría de los testimonios parecen tener gran cercanía con los temas investigados, y los que han mostrado sus diferencias de todas formas son conscientes de que no son ajenos a tales tópicos y elementos.

En primer término, los docentes nos han señalado que la Nueva Canción Chilena contiene gran parte de los elementos, si es que no todos, que podemos identificar en la Historia Reciente, ya que, desde lo temporal, nace dentro de este contexto y abarca procesos y temáticas muy diversas, haciendo posible que se visibilicen los actores sociales que la historiografía tradicional los entiende de forma superficial, características que son propias del campo de estudio que hacemos referencia. Además, en los testimonios recogidos se afirma que el legado de la NCCh perdura de gran forma actualmente gracias a la memoria que está presente. En segundo lugar, al hacer referencia a lo educativo, los docentes señalan que es una gran herramienta didáctica para el proceso de enseñanza, permitiendo desarrollar diversas habilidades que se alinean a las del pensamiento histórico.

Sobre esto último, podemos señalar que el material, o las fuentes que son parte de la Nueva Canción Chilena son bastante accesibles, y que gracias al avance tecnológico podemos acceder a una amplia gama de contenido, aunque los entrevistados señalan la

115 responsabilidad que está inmersa en la selección de estas fuentes, debido a que debemos evitar imponer visiones a los y las estudiantes, y que se deben otorgar tales herramientas para ampliar el debate o el campo de estudio, de esta forma se pueden contraponer estas ideas con las más “tradicionales”, haciendo del proceso educativo una instancia más democrática.

Por lo tanto, ante la pregunta si la Nueva Canción Chilena posibilita la enseñanza de nuestra Historia Reciente, la respuesta parece ser positiva, más aún cuando los docentes señalan ejemplos en los cuales se evidencia su carácter pedagógico, ya que el movimiento puede abarcar mucho más de lo cultural, por lo tanto, debemos comprenderla como una coyuntura en todas las esferas de las ciencias sociales que se mantiene vigente y no como un simple acontecimiento aislado en nuestra historia.

Finalmente, respecto al análisis y a la importancia que ha tenido el Canto al Programa, para los docentes entrevistados que la señalan y para nosotros, es que tomamos la decisión de recoger pequeños fragmentos de canciones que consideramos de gran relevancia para poder reflejar, mediante la música, los elementos que hemos descrito anteriormente y que permitirían la enseñanza de nuestra Historia Reciente.

Respecto al contenido y contexto del ejemplo analizado, el trasfondo que tuvo la Unidad Popular para dar vida al Canto al Programa, el cual se adhiere rotundamente a las propósitos que tenía el gobierno de Allende, era el de llegar a todo el pueblo chileno, tomando en cuenta que en la época las tasas de analfabetismo eran sumamente altas, por lo que decidieron explicar su gobierno de otra forma, no en base a escritos, sino que de una forma muchos más “didáctica” y llegar así a cada rincón, mediante la música y que es finalmente parte fundamental de nuestra investigación.

116

Volviendo a lo anteriormente mencionado, seleccionamos del Canto al Programa, ciertas estrofas que nos ayudarían no solo a vislumbrar los planteamientos de un gobierno, sino que también un ideal tanto político, como social e inclusive económico. Convencidos, pensamos que situándonos en un contexto escolar, sería una buena herramienta a considerar para poder abarcar ciertos contenidos inclusive contingentes o que son transversales, como lo son ciudadanía y los derechos humanos, los cuales harían éste vínculo histórico entre el pasado y el presente, pero centrándonos específicamente desde nuestro punto de inicio, la Nueva Canción Chilena la cual, cómo alude un docente entrevistado “encontró en los sectores populares a los herederos de tal relato a través de la música.” (PI3).

Para dar paso a los próximos capítulos es que aún debemos adentrarnos de qué forma, o cómo la Memoria, un elemento fundamental en la Historia Reciente, aparece en la Nueva Canción Chilena al momento de llevar a cabo el proceso de enseñanza. Por lo tanto, a partir de las respuestas de los docentes entrevistados podremos dar cuenta y responder a estas interrogantes, que al parecer tienen una muy estrecha relación al momento de enseñar nuestra historia reciente.

117

CAPÍTULO VI

“Un pueblo sin memoria es un pueblo sin futuro”.

6. LOS DOCENTES Y LA MEMORIA SOCIAL

6.1. INTRODUCCIÓN

De acuerdo a los datos recogidos y que han sido parte de nuestro análisis en los capítulos anteriores, profundizaremos en un elemento que consideramos fundamental, y que es consecuencia del trabajo docente con recursos como la Nueva Canción Chilena, tal como hemos evidenciado en la presente investigación, y es que hacemos referencia a la Memoria Social que este movimiento puede construir al momento de ser utilizada por los y las docentes en el aula durante el proceso de enseñanza.

Lo anterior quedará de manifiesto en los próximos capítulos, donde estableceremos los vínculos entre la enseñanza de la Historia Reciente a través de la Nueva Canción Chilena y el rol de la Memoria Social que se puede construir en este proceso educativo, a través de los profesores y sus testimonios que nos ayudarán a responder nuestras interrogantes que nos hemos planteado desde un comienzo, con el fin de ir cumpliendo los objetivos también propuestos en la génesis de este trabajo.

118

Es así como los siguientes apartados estarán constituidos, en primer lugar, desde la mirada de los docentes, y a partir de sus testimonios, sobre la Memoria Social en directa relación con el proceso de enseñanza que llevan a cabo. Debemos precisar que esta relación, entre el proceso de enseñanza y la Memoria que hacemos alusión, se vincula a lo que hemos trabajado anteriormente, por lo tanto, el contexto de esta relación se basa en la Nueva Canción Chilena como la coyuntura o proceso dentro de la Historia Reciente de nuestro país. De esta forma podremos identificar a través de las perspectivas de los docentes entrevistados si la Nueva Canción Chilena, en el marco de la enseñanza de la Historia, posibilita la creación de una Memoria Social en tal proceso educativo. Finalmente, teniendo en consideración todos los elementos trabajados en la presente investigación, presentaremos nuestras conclusiones, evidenciando las respuestas a las interrogantes planteadas al comienzo de nuestra investigación, y por lo tanto el cumplimiento de los objetivos trazados.

6.2. LA MEMORIA SOCIAL Y LA NCCH EN LA ENSEÑANZA

Cuando nos referíamos a la Memoria Social en nuestro marco teórico, abordamos los componentes de ésta y de cómo puede operar, de hecho, una idea fuerza de aquel capítulo es que no es posible hablar de una memoria sin que ésta sea de carácter social, debido a que tal construcción se configura con elementos comunes de otras memorias. Lo que en relación a la Nueva Canción Chilena identificamos un rol absolutamente social, reflejada en las composiciones, como la analizada en el capítulo anterior, que evidencian una memoria que perdura y que rememora de forma distinta y da vida el pensar de un sector social que no podía dejar registro en los libros, sino que en su relato o en la música que este movimiento permitió.

119

¿De qué forma podrá posibilitar el proceso de enseñanza la Nueva Canción Chilena según los docentes entrevistados? Ya hemos analizado los testimonios de los docentes respecto a su visión de la Nueva Canción Chilena y a cómo opera, o puede operar, en el proceso de enseñanza. En este ámbito nos inclinaremos hacia la Memoria, y en relación a la Memoria Social que se va construyendo a partir del movimiento musical, el PI1 señala de qué forma puede operar en el aula:

“el contenido de las letras y las representaciones de la cotidianidad (…) sirven para ejemplificar en el aula los procesos y coyunturas propias de nuestra Historia Reciente y que se vincula directamente con la transmisión de una memoria, pero de manera más didáctica” (PI1).

Esta “manera más didáctica” que el docente señala da cuenta de que la Nueva Canción Chilena puede tener un importante rol en el proceso de enseñanza, y que al momento de utilizarla éstos relatos musicalizados transmiten una memoria social. Además, actualmente podemos recopilar una amplia gama de documentos audiovisuales, propios de la NCCh y que hablan de nuestra Historia Reciente, y que los docentes entrevistados están en conocimiento de aquello al momento de enseñar Historia, tal como señala el PI1 en su testimonio:

“el propósito de la Nueva Canción Chilena justamente fue dejar testimonio de un período en que se estaban jugando proyectos de país divergentes y en ese caso el legado de ese movimiento artístico, sin duda, fue pensado para generar un legado artístico, social y político en las futuras generaciones” (PI1).

120

Tal legado, al cual se refiere el docente, es al que entendemos como una memoria que perdura, en donde se deja en evidencia muchos elementos de nuestra Historia Reciente, y en las diversas esferas que estudia la Historia y las Ciencias Sociales. De la misma forma la PI2 dice que:

“la Nueva Canción Chilena logra transmitir y mantener vigente esa Memoria Social, la cual considero urge que los estudiantes analicen a través de sus experiencias, porque nos dice de forma clara en el presente lo que, en un pasado reciente, o lejano, fue demandante para los sectores populares y los más desprotegidos, siendo el fiel reflejo de nuestra sociedad actual” (PI2).

De lo anterior la docente establece una relación más acabada desde la perspectiva pedagógica, en donde realza la importancia de la Memoria Social que la NCCh contiene en su estructura y que es de gran ayuda en el contexto escolar al momento de estudiar nuestra Historia Reciente. Esto se verá aún más reflejado en el testimonio del PI3, quien plantea que se puede visibilizar a los actores sociales que son parte de los procesos históricos, quienes muchas veces no son considerados por las fuentes escritas y más tradicionalistas de las ciencias sociales. En palabras del profesor, la NCCh como medio para la subsistencia de la memoria social:

“Sobre todo en lo que respecta a la memoria social desde el contexto popular de las poblaciones, un rescate a ese sujeto histórico muchas veces inexistente en la ‘Historia oficial’, y que muchas veces su relato no es considerado como fuente fiable, pero tiene mucho que decir en torno a su contexto y cómo vivieron hechos políticos y sociales recientes” (PI3).

121

A través del trabajo con este tipo de fuentes, el PI3 al considerar la Nueva Canción Chilena como el medio de estos sectores para ser visibilizados como sujetos históricos activos en las ciencias sociales principalmente, recalca que es tarea de los y las docentes llevar a cabo este trabajo, dejando en claro que no se puede pasar por alto a un sector de la sociedad tan importante que muchas veces es silenciado por las formas más tradicionales de las ciencias sociales.

El PI4 considera esta relación que evidentemente la NCCh posibilita la subsistencia de la Memoria en el proceso de enseñanza de la Historia Reciente, ya que:

“da cuenta de una expresión cultural y política de un periodo histórico determinado, latente aún en nuestro presente histórico, donde muchos de nuestros ‘viejos’ la reconocen como parte de su historia, para bien o para mal, reconociendo en ella mensajes claros de lo vivido y sentido en aquel momento, como el rescate de elementos culturales del bajo pueblo, las denuncias sociales del mundo popular, problemáticas sociales” (PI4).

Con los testimonios recogidos podemos dar cuenta de cómo los docentes reconocen desde su perspectiva personal el legado de la NCCh y de cómo puede percibirla un sector determinado, además de considerarlas, por lo anterior, un aporte a la enseñanza de la Historia Reciente de nuestro país, por lo que este tipo de fuentes son de suma importancia para el contexto escolar, donde podemos generar las instancias para que la memoria que está presente en la NCCh sea rememorada como una manera de comprender y analizar los procesos actuales que siguen en disputa.

Ahora bien, la validez historiográfica de tales recursos es la que se debate frente a la idea de si el movimiento musical aludido posibilita la enseñanza de la Historia Reciente a través de

122 la Memoria Social, esto porque el PI5, como evidenciamos en capítulos anteriores, considera a la NCCh como la visión de un sector que se “victimiza” frente a los procesos ocurridos en nuestra Historia Reciente, como por ejemplo en el caso de la Dictadura Cívico-Militar, por lo que se cuestiona el uso de la Memoria en el aula como fuente histórica. En palabras del docente, la Nueva Canción Chilena:

“sí constituye un recurso de subsistencia de ‘la memoria social’, pero tenemos que tener claro que la historia no la hacen los pueblos, si no que la hace el historiador. Al someterse al filtro crítico del investigador es que la historia pasa de una realidad vivida a un constructo académico válido” (PI5).

Del testimonio anterior que se tensione la funcionalidad de la NCCh en el ámbito educativo, de hecho, al no considerarla como un elemento coyuntural válido en nuestra Historia, entendiéndola como un legado que se hace presente en la actualidad dada la masividad que convoca a partir desde su origen, deja fuera todo lo que ello conlleva y las realidades que se configuran a partir del movimiento musical. Además, agrega: “hay que ser cauto en exaltar la memoria social, porque no representa necesariamente una realidad objetiva” (PI5). De lo anterior debemos ser cuidadosos, ya que, al aceptar la memoria para analizar la Historia, estamos aceptando las subjetividades que componen los relatos y la idea de que el relato histórico no es una verdad absoluta. De hecho, no debemos olvidar que el mismo PI5, en una de sus respuestas considera analizar la Historia, o algunos procesos que son parte de la Historia Reciente, a través de la Nueva Canción Chilena, obviamente dejando en claro que es una de tantas perspectivas de tales coyunturas o procesos que abarca el movimiento musical.

Al cerrar presente capítulo nos parece prudente pensar, de acuerdo a los testimonios analizados, que si queremos formar el pensamiento crítico en los y las estudiantes, debemos

123 repensar constantemente los procesos estudiados a través de los recursos que podamos acceder, haciendo del momento educativo una instancia democrática que vaya en contra de una enseñanza que imponga solamente un punto de vista o una sola forma de comprender la historia, de hecho, el mismo PI5 que tiene sus reparos frente a la NCCh como herramienta de la memoria en el aula señala que : “(no) podemos caer en el realismo ingenuo positivista de revivir la historia tal y como fue” (PI5). Por lo tanto, nos referimos a una instancia más democrática cuando diferentes puntos de vista, entre ellos la NCCh, permiten abrir un abanico de posibilidades para conocer y analizar nuestro presente a través de nuestra historia reciente, teniendo como desafío dejar de lado la enseñanza tradicional de la Historia que parece ayudar al olvido en vez de la memoria.

6.3. LA NCCH COMO RESISTENCIA AL OLVIDO

A través de la presente investigación hemos podido dar cuenta, dentro de la realidad de los docentes participantes, que la Nueva Canción Chilena en gran parte de su expresión, si es que no en toda, permite construir y rememorar una voz que sigue latente gracias a su legado, que ha sido reinterpretado por las nuevas generaciones en diferentes áreas de la música y las artes en general, otorgándole un sitial de prestigio a los diferentes sectores sociales que vieron en ella una oportunidad de dejar su voz plasmada y que resistieron al olvido que se ha alineado con la violencia y represión dictatorial de nuestra historia reciente.

“En nuestro tiempo seguimos luchando y construyendo los mismos sueños de justicia y libertad. Y para ello rescatamos la Memoria Histórica. Una Memoria que nos da fuerza ética y moral para luchar valientemente, porfiadamente por un presente y un futuro. Una memoria que sirva a todos los pueblos y juventudes para saber qué fue el Gobierno de Allende

124

y qué significó el golpe militar fascista y la intervención de EE.UU. Convertir la memoria en un arma de lucha”.85

Si bien en la cita anterior podemos evidenciar una posición política bien marcada, recalcamos el valor que se le otorga a la memoria, la cual puede ser un arma de lucha que los pueblos utilicen para no ser silenciados, o para que su memoria no sea olvidada. En el contexto de nuestra investigación, hemos podido dar cuenta, a través de los testimonios de los docentes, que la Nueva Canción Chilena puede ser una herramienta que posibilite la enseñanza de nuestra Historia Reciente, a partir del trabajo de la Memoria, que en ningún caso busca borrar otras formas o herramientas, ya que no aceptamos una verdad absoluta, sino que diferentes formas de comprender los diferentes procesos de nuestra historia, entendiendo así el proceso de enseñanza como la forma más democrática de lograr el pensamiento histórico. Además, tal como señala el PI3:

“A través de la Memoria Social, (las obras) perduran gracias al sentimiento de pertenencia que genera en la población que logra esa empatía o revelar su relato experiencial a través de la Nueva Canción Chilena. Inclusive, podemos encontrar estas referencias en los mismos contextos de nuestros estudiantes, lo que potencia de forma considerable la experiencia educativa” (PI3).

De la cita anterior, desprendemos la prudencia de la NCCh en la actualidad y en los diferentes contextos donde estamos inmersos, ya que las demandas sociales, por ejemplo, replicadas en las obras, pueden hacer sentido a más de un estudiante, o las mismas experiencias de sus cercanos con el movimiento musical, lo que posibilitaría frenar el olvido, que aparece como la principal amenaza de la memoria. Sobre esto último, creemos pertinentes las palabras de Mario Amorós, en su análisis de “Chile: la Memoria como

85 MARÍN, Gladys (2003). En: Allende vive. 30 años. Instituto de Ciencias Alejandro Lipschutz. Santiago de Chile, 2004. p. 31. 125 fuerza de la Historia” que se condicen con las limitantes de la sociedad chilena frente a lo que mencionábamos en el párrafo anterior, el olvido como una amenaza:

“A nuestro juicio, este despertar de la memoria también guarda una estrecha relación con una juventud chilena que nació y creció en la dictadura y que es víctima de un modelo neoliberal que le condena a una educación a precios exorbitantes y que le dispensa un futuro de precariedad. Y sobre todo una juventud que explora en viejos libros, en la música, en los testimonios de los supervivientes, en las luchas de los activistas de derechos humanos un pasado traumático que no es el que le contaron los periódicos y las televisiones, que en la escuela es marginado y que muchas familias recubren con el manto del olvido”.86

Nuestra investigación se ha inclinado hacia esas “víctimas”, como planteó en algún momento el PI5, y como se menciona en la cita anterior, aquellas generaciones que fueron perseguidas y no fueron escuchadas hasta décadas más tarde, y que vieron en los libros, relatos, artes, la música en este caso, una forma de plasmar una memoria que no quiere y no parece ser olvidada, dejando atrás experiencias traumáticas que la prensa o la misma educación quiso borrar de nuestra historia durante el proceso de dictadura.

De hecho, del ejemplo que los docentes entrevistados hicieron referencia, el “Canto al Programa” es un sobreviviente del olvido violento y represivo de la dictadura cívico- militar, ya que al estar en concordancia con los planteamientos socialistas del programa de Allende se prohibió y castigó su difusión entre la población, al igual que todo el material de la Nueva Canción Chilena, con la finalidad de “limpiar” la cultura de los lineamientos de la Unidad Popular, esto se vio reflejado en la censura que sufrió el Canto al Programa, desde

86 AMORÓS, Mario. Chile: la Memoria como fuerza de la Historia. El 30 de mayo de 2004 presentó esta ponencia en la asignatura “Memoria Histórica del Siglo XX”, impartida por el catedrático Julio Aróstegui en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de Madrid. 126 los casetes hasta las partituras, para que no se volviese a tocar de nuevo, por lo que se mantuvo exclusivamente en la memoria de quienes lo obtuvieron de forma clandestina o simplemente en el recuerdo de sus notas.

Aunque durante el año 2013, tras la conmemoración de los 40 años del Golpe Militar, un grupo de estudiantes pertenecientes a un colectivo musical “Canto Crisol”, y con ayuda de músicos tales como Max Berrú y Marcelo Coulon, decidieron nuevamente volver a grabarlo, y contextualizándolo con el presente, demostrando la importancia de rememorar y mantener vivo éste tipo de “obsequios” que nos va brindando la historia.

A pesar de que hoy se sigue escuchando el legado de la Nueva Canción Chilena, y las obras que han sobrevivido, tal como han señalado los docentes participantes, a través de este movimiento tenemos muchas posibilidades y oportunidades de enseñar nuestra Historia Reciente y de luchar contra este olvido represivo al que hacíamos mención.

127

7. CONCLUSIONES

A lo largo del presente trabajo hemos abordado diferentes tópicos frente a la problemática señalada al comienzo de nuestra investigación, los que están en concordancia y en función de los objetivos propuestos. Los docentes entrevistados y sus relatos han sido de gran ayuda para cumplir estos objetivos y responder a nuestras interrogantes, a modo de ir clarificando un terreno que, si bien es bastante conocido, parece ser aún más necesario adentrarse desde las prácticas docentes y del análisis historiográfico. En el caso de la enseñanza de la Historia, y de la historia reciente de Chile específicamente, la Nueva Canción Chilena pareciera tener mayor relevancia que la que se le da muchas veces en el cotidiano, en donde podemos adentrarnos a explorar y encontrar una gran riqueza para nuestra memoria en el contexto escolar y también fuera de él.

A continuación, en los siguientes párrafos, presentaremos las conclusiones de nuestro trabajo, con la intención de sintetizar las ideas de cada capítulo y, por ende, responder a las preguntas planteadas al comienzo, dando muestra del cumplimiento de los objetivos de esta investigación. Por otro lado, podremos evidenciar que las conclusiones señaladas no serán definitivas, dado el carácter cualitativo de este trabajo en el contexto metodológico, de esta forma intentaremos abrir el terreno para que se siga profundizando en la Nueva Canción Chilena, la memoria y por sobre todo el ámbito educativo que puede abarcar otras esferas que no se han desarrollado aquí.

En el primer análisis se ha esclarecido de qué forma los docentes entrevistados perciben y comprenden la Historia Reciente, como campo historiográfico y al momento de llevar a cabo el proceso de enseñanza. De lo anterior identificamos, en primer lugar, la temporalidad en donde existe un consenso entre los entrevistados, que abarca desde la segunda mitad del siglo XX, con un fuerte énfasis en los movimientos sociales, que influirán en los procesos y coyunturas posteriores, como por ejemplo: la polarización social propia de la Guerra Fría, el triunfo de Allende, el Golpe de Estado y la posterior dictadura

128 cívico-militar, y los efectos de tal proceso desde los años noventa hasta hoy, considerando también las implicancias hacia el futuro. Por otro lado, y de acuerdo a lo anterior, surgen actores sociales que son portadores de diferentes relatos históricos y subjetividades, que prevalecen gracias a la memoria plasmada en esta producción cultural que es la Nueva Canción Chilena.

En segundo lugar, los docentes fueron claros en dar cuenta del carácter conflictivo de la Historia Reciente como disciplina, en donde algunos lo consideran como un campo válido, pero también existe recelo en docentes que se apegan a la historia positivista y a las fuentes más tradicionales. Por lo tanto, enseñar la historia reciente en la actualidad no pareciera ser sencillo, principalmente por la cercanía temporal de los procesos y coyunturas que se trabajan en relación al presente, por la diversidad de interpretaciones y juicios que se puedan tener de los contenidos que se podrían abarcar y el constante cuestionamiento a las fuentes orales por parte de la tradición historiográfica.

De hecho, los docentes creen necesaria la utilización adecuada y pertinente de fuentes y materiales según el contexto escolar. Los cuales, como hemos dicho anteriormente, se pueden materializar en la Nueva Canción Chilena, que se expresa también como parte del relato oral y, por lo tanto, como una gran fuente portadora de diversos relatos y subjetividades, que funcionan como una memoria de tipo social, que al llevarlas al análisis se enfrentan, o convergen, y reescriben constantemente nuestro presente.

En ese sentido, los docentes apuntan a una enseñanza de la historia reciente en donde no se impongan visiones personales, ya que la cercanía temporal podría dificultar la utilización de este tipo de fuentes y, por lo tanto, la tarea de los profesores. Haciendo un buen uso de estos materiales, específicamente la Nueva Canción Chilena, se pueden desarrollar habilidades más complejas en los y las estudiantes, enriqueciendo el proceso de enseñanza/aprendizaje. Por lo tanto, ante la pregunta ¿Es la Nueva Canción Chilena una

129 posibilitadora de la enseñanza? Los entrevistados plantearon estar de acuerdo, ya que existen diversos factores que hacen o harían posible enseñar nuestra Historia Reciente a través de este movimiento musical.

Pero ¿qué particularidad tiene la Nueva Canción Chilena y cuáles son los factores posibilitarían la enseñanza de la Historia Reciente de Chile? Ya hemos divisado algunos elementos en párrafos anteriores, pero adentrándonos en esta materia debemos dejar en claro que para los entrevistados la Nueva Canción Chilena debe entenderse como una coyuntura dentro de nuestra Historia Reciente, que recoge gran parte de los procesos ocurridos desde la segunda mitad del siglo XX, y que al momento de enseñar historia permite situarse en los contextos que describe, de una forma clara y didáctica. Aunque los docentes dejan en claro que la visión histórica de la Nueva Canción Chilena corresponde a una de las tantas perspectivas que se conjugan y debaten en la disciplina, que en este caso corresponde a gran parte de la clase trabajadora/obrera con cercanía a la izquierda política, que vio en la música una forma de hacer visible sus demandas.

De acuerdo a lo anterior es necesario aclarar que la Nueva Canción Chilena, si bien puede estar en concordancia con ciertas características propias de la ideología de izquierda, como producción cultural parece abarcar mucho más de lo que se desprende del imaginario de los docentes entrevistados, quienes vinculan directamente el movimiento cultural al sector político. De hecho, la NCCh, de acuerdo a los antecedentes recogidos en nuestro marco teórico y los mismos relatos de los docentes, desarrollaría una conciencia social y política entre los sectores populares, y no necesariamente alineado a la izquierda política, sino que viendo en el cantautor y cantautora un actor social, demandante y políticamente activo. Por lo tanto, la Nueva Canción Chilena permitiría abarcar un campo más amplio dentro de la Historia Reciente teniendo en cuenta su capacidad de generar una ciudadanía ampliada, más activa, crítica y que se construye constantemente desde su origen hasta el presente potenciando la actividad docente.

130

Volviendo a lo anterior, al visibilizar a estos sectores de la sociedad, otra particularidad de la Nueva Canción Chilena que consideramos tras los testimonios, es su alineación con la Historia Reciente, ya que rompe con la tradición historiográfica, y el análisis del movimiento puede llevarse a cabo a través de las diferentes ciencias sociales; puede vincularse directamente con el presente por las temáticas que aborda, sobre todo por cómo se inició y desarrolló, y por la memoria que está presente en su relato, la que a través de sus composiciones se fue instalando como uno de los movimientos más influyentes de las futuras generaciones.

No debemos olvidar, que entre los testimonios recogidos existe una desconfianza con el campo historiográfico que hacemos referencia en nuestro trabajo, aunque se asume su desarrollo dentro de la disciplina y que la participación de testigos dentro de la historia reciente es importante para construirla. Ante esto, los y las docentes señalaban que, a través de la Nueva Canción Chilena el proceso de enseñanza puede verse beneficiado, ya que permite el desarrollo de diferentes habilidades propias del pensamiento histórico, desde las más básicas hasta las más complejas, haciendo hincapié en la idea de que si bien no podemos entender la memoria como una verdad objetiva o absoluta, esta sí genera instancias democráticas para comprender los procesos que hoy nos tocan y que se debaten constantemente, abriendo así el campo a otras esferas de las ciencias sociales.

Una de las condiciones para que se puedan desarrollar estas habilidades que señalábamos, según los docentes es que la Nueva Canción Chilena se trabaje más allá de lo superficial, y trascienda lo exclusivamente musical, tal como el campo de la Historia Reciente busca en su metodología, el análisis al ampliarse a otras esferas, necesariamente dejará de ver a la NCCh de forma anecdótica, ya que su mensaje, entendido como un medio para expresar la voz de un sector social desprotegido, es explícito “y en virtud de esa creación radica su relevancia como también su uso pedagógico y didáctico para las nuevas generaciones” (PI1).

131

De hecho en la actualidad, la posibilidad de utilizar la tecnología para acercar la Nueva Canción Chilena al contexto escolar parece ser una gran ventaja para adentrarnos de forma directa a esta parte de la historia, ya que existe una gran variedad de material multimedia y audiovisual (música, arte, documentales, etc.) que queda a disposición de los y las docentes, donde incluso los entrevistados han aludido a ejemplos que dan cuenta de que la NCCh posibilitaría la enseñanza de nuestra Historia Reciente a través de su relato y memoria que se mantienen vigente.

Por lo tanto, ante la pregunta si la Nueva Canción Chilena puede ser utilizada para la enseñanza de la Historia Reciente, la respuesta es sí, donde toman gran importancia los testimonios que los docentes nos han entregado y que hemos analizado. Ahora bien, ante la pregunta sobre la forma en que el movimiento posibilitaría la enseñanza, debemos considerar los factores que han señalado los entrevistados, entre los cuales destacan la cercanía temporal; su influencia en la actualidad; la gran cantidad de fuentes y materiales para desarrollar habilidades propias del pensamiento histórico frente a los procesos que son parte de nuestra Historia Reciente y finalmente la apertura del estudio a fuentes que visibilizan a diferentes actores sociales que tradicionalmente pasan desapercibidos por los historiadores, y que a través de la música vieron una oportunidad para expresar y alzar su voz frente a los procesos ocurridos en nuestro país, y así dejar un legado en nuestra memoria que sigue vigente, percibiéndose en distintas esferas sociales.

Para ejemplificar lo anterior, algunos docentes entrevistados señalaron al “Canto al Programa” de Inti Illimani como la forma en que la sociedad obrera y trabajadora se vinculó a la esfera política, para hacer visibles sus demandas, pero por sobre todo su apego al gobierno de la Unidad Popular, una muestra de cómo se podría relacionar la Nueva Canción Chilena y la enseñanza de la Historia Reciente. De hecho, al trabajar algunas canciones del álbum dimos cuenta de los procesos que se vivían en Chile a comienzos de los setenta, tras la victoria de la Unidad Popular y Salvador Allende en las elecciones presidenciales, siendo la NCCh un medio para dar a conocer su programa e integrar al

132 gobierno a las diferentes clases sociales, incentivando su participación como ciudadanos y ciudadanas activas.

Aspectos como la igualdad social, la ciudadanía ampliada, la igualdad de género, y temas que hoy en día se debaten en la esfera pública, son parte de estas composiciones, en donde su legado es una muestra clara de que trabajar esta memoria social en el aula ayudaría de gran manera al proceso educativo y, por lo tanto, al desarrollo de habilidades propias de la disciplina histórica por parte de los y las estudiantes.

Desde las perspectivas de los docentes entrevistados, como ya hemos adelantado, la memoria social de la Nueva Canción Chilena se traduce en el rol que esta tuvo para un sector social, la que perdura actualmente y que al momento de enseñar nuestra historia reciente permite abrir nuevas alternativas y así ampliar el análisis de forma más didáctica, en donde se puede hacer parte a los diferentes contextos y experiencias de los y las estudiantes. Por ejemplo, tal como señalaba uno de los entrevistados, el movimiento musical representa en gran parte a la memoria social de las poblaciones, rescatando a los sujetos históricos que están implicados, por lo que a través de la música se diversifica a los actores que la conforman y dan muestra de diferentes realidades en determinados procesos o coyunturas.

Es por esto, que consideramos que la Nueva Canción Chilena es un medio para que la memoria social de determinados sectores sociales se mantenga vigente, a través de un legado que los docentes consideran fundamental para enseñar nuestra Historia Reciente, y que al trabajar esta memoria podemos crear las condiciones para formular el pensamiento histórico y desarrollar estas habilidades como el desarrollo del pensamiento crítico, del pensamiento temporal-espacial, el análisis de fuentes y las habilidades comunicativas, además de abrir el estudio hacia otras áreas que se relacionan con nuestro presente, como es el caso de la formación ciudadana que señalamos anteriormente.

133

A modo de cierre de esta investigación, pero con la intención de ir abriendo nuevos caminos, señalamos la idea de la Nueva Canción Chilena como resistencia al olvido, ya que el movimiento que hemos analizado genera las condiciones para enseñar nuestra Historia Reciente y la subsistencia de una memoria social que a fin de cuentas no pretende borrar a las otras memorias, sino que en un acto democrático busca conjugarse y reconstruir constantemente nuestro presente, sin imponerse unos relatos a otros, los que constantemente, y desde hace largo tiempo, deben luchar contra la violencia y represión silenciadora del olvido. Por lo que el desafío como docentes es a ir ampliando los caminos de la memoria.

134

BIBLIOGRAFÍA

ALLENDE, Salvador (2014). La vía Chilena al Socialismo. Ediciones Espartaco, Santiago.

BAER, Alejandro (2010) Memoria Social: Breve guía para perplejos. En: SUCASA, Alberto y ZAMORA, José. Memoria, Política, Justicia: En diálogos con Reyes Mate. Ed. Trotta, Madrid.

BERNAL, César (2006). Metodología de la Investigación. Ed. Pearson Educación, Ciudad de México (D.F.).

BRAUDEL, Fernand (1976). La Historia y las Ciencias Sociales. Ed. Alianza, Madrid.

CARRETERO, Mario; VOSS, James (2004) Aprender y Pensar la Historia. Ed. Amorrortu, Buenos Aires.

DELGADO, Juan Manuel y GUTIERREZ, Juan. (1995) Métodos y Técnicas cualitativas para la investigación en ciencias sociales. Ed. Síntesis S.A, Madrid, España.

GILI, María Laura (2010) La Historia Oral y la Memoria Colectiva Como Herramientas Para el Registro del Pasado. En: MARTINI, Yoli; PÉREZ, Graciana; AGUILAR, Yanina (compiladores.) Las Sociedades de los Paisajes Áridos y Semi-áridos del Centro-Oeste Argentino. Ed: Río Cuarto, p.443-448, Universidad Nacional de Río Cuarto, Córdoba.

135

GODOY, Álvaro y GONZALEZ, Juan Pablo (1995). Música Popular Chilena: 20 años (1970-1990). Departamento de Planes y Programas Culturales. División de Cultura. Ministerio de Educación, Santiago, Chile.

GONZALEZ, Juan Pablo; VARAS, José Miguel (2013). En busca de la Música Chilena. Crónica y Antología de una historia sonora. Ed. Catalonia, Santiago, Chile.

GREZ, Sergio (1997). La cuestión social en Chile: Ideas y Debates Precursores (1804- 1902). DIBAM, Santiago, Chile.

HALBWACHS, Maurice (2004). Memoria Colectiva. Ed. Prensas Universitarias de Zaragoza, España.

HOBSBAWM, Eric (1998) Sobre La Historia. Ed. Crítica, Barcelona.

JELIN, Elizabeth. (2002) Los Trabajos de la Memoria. Ed. Siglo XXI, Madrid, España.

LE GOFF, Jacques (1991). El Orden de la Memoria: El Tiempo Como Imaginario. Ed. Paidós, Barcelona.

LE GOFF, Jacques (1997). Pensar la historia. Modernidad, presente, progreso. Ed. Paidós, Barcelona.

136

LEVÍN, Florencia (2007). El Pasado Reciente en la Escuela, entre los dilemas de la Historia y la Memoria. En: Schujman, J. y SIEDA, I. Ciudadanía para armar. Apuntes para la formación ética y política. Ed. Aique, Buenos Aires.

MATEOS, Abdón. (1998). Historia, Memoria y Tiempo Presente. En: Universidad Nacional a Distancia (UNED), Madrid.

SALAS, Fabio (2003). La Primavera Terrestre: Cartografías del Rock Chileno y La Nueva Canción Chilena. Ed: Cuarto Propio, Santiago, Chile.

RUBIO, Graciela (2013). Memoria, política y pedagogía: Los caminos hacia la enseñanza del pasado reciente en Chile. LOM Ediciones/UMCE, Santiago.

TAYLOR, S.J.; BOGDAN, R. (1990). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. Ed. Paidós, Buenos Aires.

137

ARTÍCULOS, TESIS Y MATERIAL AUDIOVISUAL

ALVARADO, Voltaire; ARENAS, Hernán; TRIVIQUE, Beatriz. (2010). Los Discursos Docentes Frente a la Enseñanza de la Historia Reciente de Chile: Una Aproximación Didáctica desde la Temporalidad Histórica y el Tiempo Presente (Tesis de Pregrado). Universidad Academia de Humanismo Cristiano (UAHC), Santiago, Chile.

AMORÓS, Mario (2004). Chile: la Memoria como fuerza de la Historia. En “Memoria Histórica del Siglo XX”. Julio Aróstegui, Facultad de Geografía e Historia, Universidad Complutense de Madrid.

ARÓSTEGUI, Julio (1998). Historia y Tiempo Presente. Un nuevo horizonte de la Historiografía Contemporaneista. Cuadernos de Historia Contemporánea, N°20, pp. 15-18. Madrid: Universidad Complutense Madrid (UCM).

BÉDARIDA, François (1998). Definición, método y práctica de la Historia del Tiempo Presente. Cuadernos de Historia Contemporánea, N°20, pp. 19-27. París: Instituto de Historia del Tiempo Presente.

BETANCOURT, Darío (2004). Memoria Individual, Memoria Colectiva y Memoria Histórica: Lo Secreto y lo Escondido en la Narración y el Recuerdo. En: La Práctica Investigativa en Ciencias Sociales, Bogotá, Universidad Pedagógica Nacional (UPN), CLACSO, pp. 125-134.

138

CARRETERO, M. y MONTANERO, M. (2008) Enseñanza y aprendizaje de la historia: aspectos cognitivos y culturales. Universidad Autónoma de Madrid. Ed. FLACSO (Argentina); Universidad de Extremadura, pp. 133-142.

Documental “Canción Nacional: La Nueva Canción Chilena” 2005/2006, Canal 13.

FRANCO, Marina; LEVÍN, Florencia (2007). La Historia Reciente en la Escuela. Nuevas Preguntas y algunas Respuestas. En: Novedades Educativas, N° 202, Buenos Aires.

GARCÍA, Ricardo (1973). La nueva canción chilena también vencerá. En: Revista Ramona. Sociedad Impresora Horizonte, (1971-1973), Santiago: Quimantú, 2v., n°27, 1 de Mayo de 1973, p. 27-31.

INTI ILLIMANI (1970). “Canto al Programa”, DICAP: Santiago, Chile.

¿Nuevos Ídolos Para la Juventud? En: Revista La Bicicleta, Sociedad Editorial Granizo, 1978-1990 (Santiago: Taller de Comunicaciones Scout) 9 volúmenes, N°17, (noviembre 1981).

JARA, Víctor Disponible en: http://fundacionvictorjara.org/victorjara/musica/ Visitado el 16/11/2017.

PARRA, Isabel. Violeta Parra 100 Años. http://www.violetaparra100.cl/biografia/ (último acceso: 28 de Agosto de 2017).

139

PESCADER, Carlos (2003). Cuando el Pasado Reciente se hace Historia. En: Revista de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales. Universidad Nacional de Comahue. Año 8, n°9, pp. 115-128. Buenos Aires, Argentina.

RIVERA, Patricio; MONDACA, Carlos. (2013) El aporte de la enseñanza de la Historia Reciente en Chile: Disensos y consensos desde la tradición política al siglo XXI. En: Estudios Pedagógicos, XXXIX, Nº1: 393-401.

RODRÍGUEZ, A. y SÁNCHEZ, S. Leopold von Ranke: historiador del siglo XIX. En Marcha, Montevideo, N°470

RUBIO, Graciela (2016). Memoria hegemónica y Memoria Social. Tensiones y desafíos pedagógicos en torno al pasado presente en Chile. En: Revista Colombiana de Educación. N°71: 109-135.

SANTISTEBAN, Antoni (2010). La Formación de Competencias de Pensamiento Histórico. En: Memoria Académica. Ed. Clío & Asociados, N°14, pp. 34-56.

SANZ, María Alexia (1995). Fuentes Orales y Documentales en la Investigación Social. E.U.G.S. TERUEL, Universidad de Zaragoza, pp. 217-230.

VITALE, Luis. La Mujer en el Gobierno de Salvador Allende, CEME, Archivo Chile. http://www.archivochile.com/Mov_sociales/mov_mujeres/MSmovmujeres0006.pdf (último acceso: 16 de Enero de 2018).

140

ANEXOS

141

Profesor Informante: N° 1 (PI1) Nicolás Forján Gallardo

Años de experiencia como docente: 7 Años

Preguntas Respuestas 1. Desde una perspectiva La Historia Reciente la asocio a todos historiográfica, escolar y aquellos acontecimientos, fenómenos y considerando el contexto nacional coyunturas que se enmarcan dentro de los e internacional ¿Qué es para ti la procesos históricos actuales o que tienen Historia Reciente? efectos directos en lo inmediato. Si somos rigurosos sería la Edad Contemporánea por la relevancia de las revoluciones burguesas en la configuración de la realidad actual. Sin embargo, para los estudiantes en el caso de la Historia "Universal", la asociaría desde después de la Segunda Guerra Mundial y sobre todo tras la Guerra Fría y la proyección de la Globalización a fines de S. XX e inicios del S. XXI.

En el caso de Chile lo asociaría al período que comprende la década del 60, al Golpe de Estado y a la revolución Neoliberal implantada en el país, principalmente por las consecuencias explícitas e implícitas de aquellas transformaciones en la vida cotidiana de las personas, incluyendo los estudiantes, y que siguen estando presentes en constante tensión.

142

2. En lo que respecta a la enseñanza Creo pertinente y muy relevante la de la Historia Reciente de Chile, y utilización de fuentes audiovisuales, por la en contraste con la Historia gran cantidad de material que genera el cine Contemporánea ¿Qué elementos de "ficción" como también el cine considerarías en el aula para documental. Sin embargo, ese mismo motivar el desarrollo de fenómeno puede jugar en contra, por cuanto habilidades? hay que saber seleccionar qué se consulta y la manera de utilizar dicho material para que sea provechoso en el aula.

También el uso de fuentes orales considero que es fundamental, por cuanto los estudiantes pueden conocer de primera fuente, incluso dentro de su propia familia, y la percepción que tienen los adultos mayores, o adultos en general, respecto a los procesos históricos recientes, sobre todo lo que respecta a la historia de Chile y las Memorias que pueden transmitir a las nuevas generaciones, ya que todavía está presente una "disputa por la memoria" dado el trauma que significa el Golpe de Estado y la posterior dictadura. 3. En tu labor como docente ¿De qué En primer lugar, el gran referente de la forma vincularías la Nueva música chilena, sobre todo a nivel folclórico Canción Chilena con la Memoria tiene sus bases en ese proceso gestado en la para la enseñanza de la Historia década de los años sesenta. Por otro lado, el Reciente en la escuela? contenido de las letras y las Ejemplifica con algún contenido representaciones de la cotidianidad, a partir y/o recurso. de ello, sirven para ejemplificar en el aula los procesos y coyunturas propias de

143

nuestra Historia Reciente y que se vincula directamente con la transmisión de una memoria, pero de manera más didáctica.

La música de protesta durante la Dictadura también resulta relevante, aun cuando me parece que es prudente contrastar esas expresiones artísticas de carácter sociopolítico con aquellas que tienen otra raíz y son más bien expresiones del pop pues pareciera interesante poner en tensión cuál es el rol del arte, en este caso con la música, y si es compromiso con la realidad o solamente un medio de expresión, distracción y/o entretención. 4. ¿Es la Nueva Canción Chilena un De hecho el propósito de la Nueva Canción medio para la subsistencia de una Chilena justamente fue dejar testimonio de Memoria Social? un período en que se estaban jugando proyectos de país divergentes y en ese caso el legado de ese movimiento artístico, sin duda, fue pensado para generar un legado artístico, social y político en las futuras generaciones, incluso, como decía anteriormente.

El uso del arte, y en este caso la música, como un vehículo de expresión social y compromiso político fue una acción intencionada y en virtud de esa creación radica su relevancia como también su uso pedagógico y didáctico para las nuevas

144 generaciones.

En ese caso resulta importante desarrollar la habilidad de analizar la letra de la canciones e identificar cuál es el objetivo de una creación artística pues pareciera ser que muchos estudiantes les cuesta asociar que una creación tiene sentido por cuanto se inserta en un contexto histórico definido lo que dificulta una mayor comprensión del arte como vehículo de expresión social y no tan sólo centrado en lo estético.

145

Profesor Informante: N° 2 (PI2) Francisca Sanzana.

Años de experiencia como docente: 6 años.

Preguntas Respuestas 1. Desde una perspectiva Para mí la Historia Reciente hace referencia historiográfica, escolar y a toda etapa o proceso en actual desarrollo, considerando el contexto nacional ya sea en lo que respecta a lo nacional y/o e internacional ¿Qué es para ti la mundial, y que considera desde los procesos Historia Reciente? llevados a cabo durante y después de la Guerra Fría.

Por otro lado, el análisis y el estudio de la Historia Reciente, desde un punto de vista académico, se encuentra en un constante proceso de reconocimiento, debido al debate existente sobre qué se considera lo reciente, por lo tanto los márgenes temporales pueden ser variables.

Desde una perspectiva escolar, diría que es un tanto desafiante el enseñar Historia Reciente, dada la vitalidad del contenido, que está lejos de no ser conflictivo, tanto para los docentes como para los estudiantes que viven con ella día a día y que dentro de sus mismos contextos son testigos de la Historia que hacemos referencia. Y a pesar de que el currículum considera el contenido,

146

no hace una referencia a la corriente historiográfica como tal, como Historia Reciente. 2. En lo que respecta a la enseñanza Con la ayuda que nos entrega la tecnología, de la Historia Reciente de Chile, y porque no todo lo que viene de ella puede en contraste con la Historia ser malo jajaja! podemos hacer uso y Contemporánea ¿Qué elementos adentrarnos en fuentes primarias, pero no considerarías en el aula para tan solo las fuentes escritas, sino que motivar el desarrollo de también en las audiovisuales que son habilidades? fundamentales a la hora de la enseñanza en el contexto escolar actual.

Como las temporalidades de la Historia Reciente, a diferencia de la Contemporánea, no son lejanas a nuestros días podemos acceder a una gran gama de fuentes audiovisuales, tales como documentales, cine, las artes, entre otras. La misma Memoria de los actores sociales que están vivos y que vivieron tales procesos a través de su relato es una fuente de inagotable riqueza histórica para el desarrollo de habilidades, principalmente en las relaciones pasado-presente. Esto permite que los alumnos se adentren de mejor forma al contexto estudiado, ya que los recursos que hemos mencionado, motivan de mejor manera el aprendizaje de ellos. Así, las habilidades que la Historia permite desarrollar, como el análisis de fuentes por ejemplo, permite debatir puntos de vista e

147

ideas desde un mismo proceso o coyuntura, lo que hace desafiante enseñar la Historia Reciente, que como te decía anteriormente, de por sí es conflictiva su enseñanza. 3. En tu labor como docente ¿De qué La he utilizado en mis clases, ya que la forma vincularías la Nueva Nueva Canción Chilena recoge los procesos Canción Chilena con la Memoria llevados a cabo en nuestro país desde los para la enseñanza de la Historia años sesenta aproximadamente, justamente Reciente en la escuela? lo que se considera Historia Reciente, Ejemplifica con algún contenido haciendo referencia, por ejemplo: a la y/o recurso. Reforma Agraria, a los movimientos estudiantiles, sociales y de los trabajadores, pasando por el gobierno de la Unidad Popular e incluso durante y post dictadura, además de la Historia del Siglo XX en América Latina y a formación ciudadana.

Pero también es utilizable en otros contextos históricos, incluso más lejanos. Por dar un ejemplo, cuando tratamos en Octavo Básico ‘la sociedad colonial’, utilizamos una versión de Víctor Jara de “Ingá”, en donde la letra textual dice:

“Mi amito se ha ido pal campo y me deja a mi amita cuidando... desde ayer y cuando... desde ayer y cuando... cuando el amo sepa, lo que está pasando, va a hacer con el cuero del negrito… zapatito blando”

En esta canción trabajamos de qué forma la

148

esclavitud en América fue considerada un derecho del hombre blanco, el africano y sus descendientes desposeídos de derecho alguno y reducidos a la condición de animales. Posteriormente los estudiantes trabajaron inferencias y se discutió grupalmente el sentido de la letra, la cual es una recopilación que interpreta Víctor Jara recogida del folklore afro-peruano, lo que puede vincularse de forma directa al uso de la memoria a través de esta canción.

Este contenido se puede analizar de igual forma desde elementos recientes, ya que la trata de personas, lo que funciona de manera muy similar a la esclavitud sigue ocurriendo en sectores rurales de nuestro país, ya sea con extranjeros o campesinos de la hacienda. 4. ¿Es la Nueva Canción Chilena un Me parece que de todas formas lo es, tanto medio para la subsistencia de una en su contenido como en los ritmos, ya que Memoria Social? fue un movimiento musical muy marcado no tan solo en Chile, sino que en gran parte de América Latina, la que además se nutrió de las ideas de izquierda y tomó como referente a las revoluciones recientes de este sector y más adelante en los procesos políticos en curso como las mismas dictaduras de derecha en nuestro continente durante la Guerra Fría. Pero principalmente, este movimiento cultural fue el medio para

149 que los sectores sociales más populares pudieran alzar su voz contra las injusticias y la represión a la que eran sometidos, tal y como te contaba con la canción de Víctor.

Por eso creo que la Nueva Canción Chilena logra transmitir y mantener vigente esa Memoria Social, la cual considero urge que los estudiantes analicen a través de sus experiencias, porque nos dice de forma clara en el presente lo que en un pasado reciente, o lejano, fue demandante para los sectores populares y los más desprotegidos, siendo el fiel reflejo de nuestra sociedad actual.

150

Profesor Informante: N°3 (PI3) Carlos Sepúlveda

Años de experiencia como docente: 8 años.

Preguntas Respuestas 1. Desde una perspectiva La Historia Reciente la reconozco como el historiográfica, escolar y resultado de las relaciones y fuerzas de considerando el contexto nacional poder existentes desde periodos previos, las e internacional ¿Qué es para ti la cuales han manifestado las contradicciones Historia Reciente? entre los distintos sujetos y clases en función de las bases económicas que determinan las relaciones entre las mismas.

Estos períodos previos tienen total incidencia en la actualidad, ya sea por los procesos llevados a cabo después de la segunda mitad del Siglo XX, a partir de la Guerra Fría, o por los actores que son parte de tales procesos y que son portadores de un relato histórico.

Sobre esto último también agregaría lo conflictivo de estos relatos, ya que se debaten constantemente estas nociones de la Historia Reciente, tanto en lo cotidiano como en lo académico, imagínate en la escuela lo que es hablar de Historia Reciente. 2. En lo que respecta a la enseñanza Un elemento que consideraría importante

151

de la Historia Reciente de Chile, y utilizar son los recursos “multimediales” en contraste con la Historia (audiovisuales) y documentales, ya sean de Contemporánea ¿Qué elementos la época o reconstrucciones actuales del considerarías en el aula para pasado reciente. Estos elementos permiten motivar el desarrollo de adentrarnos en una perspectiva muchas habilidades? veces crítica de la realidad actual, por lo que es muy útil a la hora de generar una discusión entre los estudiantes sobre aspectos sociales, políticos, económicos, entre otros, por lo que podemos desarrollar habilidades como el pensamiento crítico en las relaciones pasado-presente obtenidas de los recursos. Esa es una gran ventaja de la Historia Reciente, y que a diferencia de la Historia Contemporánea, las fuentes primaras son mucho más accesibles, porque gran parte del material así lo permite, y que se potencia por el uso de tecnologías o las mismas habilidades de cada profesor. 3. En tu labor como docente ¿De qué Podemos ejemplificar con los contenidos forma vincularías la Nueva referidos a la segunda mitad del Siglo XX Canción Chilena con la Memoria principalmente, tanto en Chile como el resto para la enseñanza de la Historia de América Latina, donde se vivieron Reciente en la escuela? procesos y coyunturas similares, a Ejemplifica con algún contenido diferencia de la elección de Allende a través y/o recurso. del voto y no a través de las armas.

Por ejemplo el “Canto al Programa”, para contextualizar con Chile en la década de los setentas y el proyecto de la Unidad Popular tras el triunfo de Salvador Allende, lo que

152

nos permite adentrarnos en el discurso político de la UP y que promovía la Nueva Canción Chilena, que encontró en los sectores populares a los herederos de tal relato a través de la música.

O también podemos ejemplificar con la producción en general desde el exilio en plena dictadura, como el caso de Inti- Illimani o Illapu por ejemplo, o las obras de Víctor Jara como una propuesta desde lo popular y que a través de la Memoria Social, como gran componente, perduran gracias al sentimiento de pertenencia que genera en la población que logra esa empatía o revelar su relato experiencial a través de la Nueva Canción Chilena. Inclusive, podemos encontrar estas referencias en los mismos contextos de nuestros estudiantes, lo que potencia de forma considerable la experiencia educativa. 4. ¿Es la Nueva Canción Chilena un Si, sobre todo en lo que respecta a la medio para la subsistencia de una memoria social desde el contexto popular Memoria Social? de las poblaciones, un rescate a ese sujeto histórico muchas veces inexistente en la “Historia oficial”, y que muchas veces su relato no es considerado como fuente fiable, pero tiene mucho que decir en torno a su contexto y cómo vivieron hechos políticos y sociales recientes.

153

Por eso creo que la Nueva Canción Chilena, respondiendo a tu pregunta, es el medio que tuvieron y tienen estos sectores para validarse como sujetos históricos activos, y de igual forma su pensar, su interpretación acerca de la Historia y visibilizarlos es tarea importante para los profesores.

154

Profesor Informante: N° 4 (PI4) Amaru Vásquez Lamatta

Años de experiencia como docente: 6 años.

Preguntas Respuestas 1. Desde una perspectiva Para mí la Historia Reciente se refiere a historiográfica, escolar y todo proceso, o procesos históricos, que da considerando el contexto nacional cuenta del acontecer de los últimos años, o e internacional ¿Qué es para ti la incluso, décadas, en los cuáles las Historia Reciente? interpretaciones se encuentran permeadas por las subjetividades y experiencias personales de quienes han vivido tales procesos. De ahí su nombre que apunta más que nada a una historia del tiempo presente.

En cuanto a lo estrictamente académico o a interpretaciones historiográficas, éstas carecen de un carácter “acabado”, propiedad que le da temporalidad al largo plazo. Por lo mismo, a la hora de estudiar esta ‘historia presente’, resulta muy interesante el poder trabajar con fuentes orales, que permitan diversificar las interpretaciones de cada proceso histórico. 2. En lo que respecta a la enseñanza Uno de los elementos, que creo yo, son de la Historia Reciente de Chile, y esenciales para trabajar las habilidades en contraste con la Historia históricas es el uso y análisis de fuentes. Contemporánea ¿Qué elementos considerarías en el aula para Ya habiendo diferenciado ‘Historia

155

motivar el desarrollo de Contemporánea’ de ‘Historia del tiempo habilidades? presente’, o Historia Reciente, trabajaría con diversas fuentes que den cuenta de esta diferenciación, identificando interpretaciones ‘acabadas’ y ‘lejanas’ de cierto proceso histórico e interpretaciones ‘subjetivas’ y ‘cercanas’ de otros procesos históricos, lo que va enriqueciendo y permitiendo el desarrollo de estas habilidades en los alumnos, sobre todo desde una perspectiva crítica de los procesos en cuestión. 3. En tu labor como docente ¿De qué Como se plantea en las respuestas forma vincularías la Nueva anteriores, las interpretaciones en el análisis Canción Chilena con la Memoria de fuentes históricas son, a mi parecer, para la enseñanza de la Historia esenciales para el trabajo de la historia, en Reciente en la escuela? especial cuando se logran interpretar fuentes Ejemplifica con algún contenido actuales y permeadas por la subjetividad y/o recurso. temporal.

Así, el trabajo con fuentes, entendiéndolas como piezas musicales y desarrollo histórico, de la Nueva Canción Chilena, responde a ese criterio, pues permiten dar cuenta de un proceso histórico-cultural propio de las década de los 60-70’s y su relación con los acontecimientos político- sociales del periodo, como la mayor participación social, la toma de conciencia política de los sectores populares, compuesta por obreros y campesinos

156

principalmente, y de clases medias, la polarización política, la crisis UP- Dictadura, etc.

Ejemplo de esto puede ser, en cuanto a la politización y polarización política, trabajar con “El canto al programa” de Inti-Illimani, pues da cuenta de la adherencia que tuvo la gran mayoría, si es que no todo el movimiento, al programa político de la UP. 4. ¿Es la Nueva Canción Chilena un Evidentemente, pues da cuenta de una medio para la subsistencia de una expresión cultural y política de un periodo Memoria Social? histórico determinado, latente aún en nuestro presente histórico, donde muchos de nuestros “viejos” la reconocen como parte de su historia, para bien o para mal, reconociendo en ella mensajes claros de lo vivido y sentido en aquel momento, como el rescate de elementos culturales del bajo pueblo, las denuncias sociales del mundo popular, problemáticas sociales.

A fin de cuentas, la música, como experiencia cultural y popular es una de las expresiones culturales más democráticas, dando cuenta de diversos aspectos sociales, como la expresión política por ejemplo, desde la perspectiva de Gramsci.

157

Profesor Informante: N° 5 (PI5) Freddy Acevedo Sánchez

Años de experiencia como docente: 3 Años

Preguntas Respuestas 1. Desde una perspectiva La historia reciente para mí, se trata de un historiográfica, escolar y intento erróneo de acercar la disciplina del considerando el contexto nacional conocimiento histórico a la percepción cuasi e internacional ¿Qué es para ti la inmediata. En el caso de la historia reciente Historia Reciente? en Chile, cae en el riesgo de transformarse en una herramienta tendenciosa, utilizada con fines ‘ideologizantes’ más que educativos. El problema que tiene esta categoría de estudio de la disciplina es que acerca peligrosamente el límite del objeto de estudio de la historia al de otras disciplinas como la Sociología, Economía, Ciencias Políticas, etc.

La historia no puede apreciarse a cabalidad cuando no se han desencadenado todas las consecuencias de los procesos o cuando no ha terminado de desarrollarse un paradigma, etc. Debemos ser cautelosos al aproximar y acotar en el tiempo el análisis histórico, ya que es casi seguro que se producirá una confusión entre ‘res gestae’ y ‘rerum gestarum’. El primer concepto alude a los actos o hechos que constituyen nuestra

158

cotidianeidad. El segundo nos lleva a la disciplina histórica que discrimina importancia de los hechos o procesos, analiza, interpreta y construye un relato a manos del historiador. El origen mismo del concepto desde Heródoto de Halicarnaso concibe la historia desde el ‘rerum gestarum’, es por ello que esta categoría de ‘reciente’ sería innecesaria ya que la historia per se tiene distintos tiempos de análisis, tal como lo escribía Braudel.

Es factible de establecer un análisis a corto tiempo, sin embargo cuando el investigador es parte de la realidad que estudia es inevitable la presencia de sesgo en la construcción del conocimiento. 2. En lo que respecta a la enseñanza Con los reparos y precauciones antes de la Historia Reciente de Chile, y manifestados, la historia reciente, me parece en contraste con la Historia que existe la posibilidad de aprovechar las Contemporánea ¿Qué elementos desventajas de este campo para desarrollar considerarías en el aula para habilidades superiores. motivar el desarrollo de habilidades? A partir de la recuperación de testimonios de protagonistas de episodios o procesos históricos se puede acercar la labor del historiador al estudiantado, por lo que se debe llegar a un recorrido taxonómico completo desde las habilidades más básicas del conocer, terminando en análisis, evaluación de la subjetividad de los

159

testimonios, y construcción de un relato histórico. 3. En tu labor como docente ¿De qué Sí es posible utilizar como fuente de estudio forma vincularías la Nueva la Nueva Canción chilena, sin embargo Canción Chilena con la Memoria debiese quedar aclarado desde un comienzo para la enseñanza de la Historia que esto representa la visión de una parte de Reciente en la escuela? la sociedad que, naturalmente habla desde Ejemplifica con algún contenido su visión como víctima. y/o recurso. 4. ¿Es la Nueva Canción Chilena un Nuevamente, sí constituye un recurso de medio para la subsistencia de una subsistencia de “la memoria social”, pero Memoria Social? tenemos que tener claro que la historia no la hacen los pueblos, si no que la hace el historiador. Al someterse al filtro crítico del investigador es que la historia pasa de una realidad vivida a un constructo académico válido.

Es por ello que hay que ser cauto en exaltar la memoria social, porque no representa necesariamente una realidad objetiva ni mucho menos podemos caer en el realismo ingenuo positivista de revivir la historia tal y como fue.

160