Anticoncepción : Por Qué No ? Prof
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Anticoncepción : Por Qué No ? Prof. Janet Smith La Dra. Janet Smith explica por qué la Iglesia Católica sigue insistiendo, en la cara de la oposición que sostiene la mayoría del resto del mundo moderno, que la anticoncepción es uno de los peores inventos de nuestro tiempo. El tema de hoy es la enseñanza de la Iglesia sobre anticoncepción y varios temas relacionados con la sexualidad. Como ustedes saben, vivimos en una cultura que piensa que la anticoncepción es uno de los más grandes inventos en la historia de la humanidad. Si ustedes le preguntaran a la gente, si quieren sacrificar su automóvil o su computadora o su método anticonceptivo, sería una decisión difícil de tomar. Realmente la anticoncepción se considera como algo que nos ha puesto de gran manera, en la era moderna y como uno de los grandes avances de la medicina en los tiempos modernos. Sin embargo, ahí está esa iglesia arcaica que nos dice que, realmente, éste es uno de los peores inventos de la humanidad. De acuerdo a la Iglesia, la anticoncepción es uno de los factores que nos está hundiendo en el desastre. La mayoría de la gente no sabe que todas las denominaciones cristianas hasta 1930, enseñaban que la anticoncepción era algo malo. Había una enseñanza universal contra la anticoncepción en las iglesias cristianas. Fue recién en 1930 que la Iglesia Anglicana rompió esa tradición y aprobó la anticoncepción en el matrimonio por razones serias. En 1930, el Papa Pío XI escribió la Encíclica: Casti Connubii, traducida como: Acerca del Matrimonio Cristiano, y ahí reiteró lo que había sido la enseñanza de la Iglesia desde siempre. Dentro de la Iglesia Católica no hubo prácticamente ningún debate sobre este tema hasta mediados de 1960. El debate se inicia en 1963. Había una gran aceptación por parte de la Iglesia, de sus miembros, de las enseñanzas de la Iglesia. En 1960, un 66% de los católicos vivían de acuerdo a las normas de la Iglesia. ¡Sesenta y seis por ciento! Ahora se dice que cerca de un 80% de los católicos practican la anticoncepción. Treinta por ciento de los católicos se han esterilizado, lo cual es el mismo porcentaje del resto de la población. Sólo un 4% de los católicos usan la Planificación Familiar Natural. Personalmente creo que el número podría ser menor. Entonces, ¿cómo hemos pasado en los últimos 30 años de una obediencia del 66% a una de un 4% como máximo? Una razón es que antes de los años 60 no habían anticonceptivos muy buenos. La píldora no estaba aún en el mercado, recién se estaba comenzando a desarrollar. La mayoría de los anticonceptivos eran ilegales en casi todos los estados, por lo menos para compra interestatal. Las leyes que hicieron ilegales a los anticonceptivos fueron escritas por legisladores protestantes. La anticoncepción era vista como una fuente de gran libertinaje sexual en la sociedad y era considerada como algo que una sociedad moralmente recta prohibía. Pero como todos ustedes saben, debido a la doctrina del "derecho a la privacidad" encontrada en la "penumbra" de la Constitución, esas leyes fueron revocadas a principio de los 60. La decisión de la Corte Suprema, que desechó las leyes en contra de la venta interest al de anticonceptivos, fue realmente la precursora del caso Roe vs. Wade. El derecho a la privacidad está presente en el caso Griswold vs. el Estado de Connecticut y luego reiterado en el caso Roe vs. Wade, que legalizó el aborto. Fue también en ese tiempo, cuando para los católicos al menos, la obediencia era considerada como una virtud y no como una condición patológica. Así que los católicos estaban dispuestos a aceptar lo que la Iglesia les enseñara simplemente por ser una enseñanza de la Iglesia, sin importar si la entendieran o no. En los años 60 la píldora se puso a disposición y es cuando comenzó realmente la revolución de los anticonceptivos. Se consideró a la píldora como la gran salvación de la humanidad por varias razones. En ese tiempo, la gente empezaba a pensar que íbamos rumbo al desastre en lo referente a la población. De hecho, cuando yo estaba en la secundaria, teníamos afiches del mundo con los seres humanos cayéndose de él debido a la sobrepoblación. Pero, realmente no han habido dos personas más equivocadas que Malthus y Paul Ehrlich, quienes predijeron una gran hambruna y guerras enormes debido a la población. No tengo tiempo de ahondar en los “mitos” acerca de sobrepoblación, pero puedo recomendarles algunos libros: uno de Julian Simon y otro de Ben Wattenburg. Y hay muchos otros como Jacqueline Kasun, quien ha hecho una critica al trabajo de estos dos demógrafos. Malthus decía que la población se incrementaría geométricamente, mientras que los alimentos lo harían, en el mejor de los casos, aritméticamente. Es verdad que la población ha aumentado enormemente, pero eso no es necesariamente una mala noticia. Es simplemente un hecho: ha aumentado enormemente. La buena noticia es que el suministro de alimentos es muchísimo mejor de lo que Malthus soñó alguna vez. Los Estados Unidos podrían fácilmente suministrar alimento al resto del mundo. Eso no es un problema. Las técnicas agrícolas modernas han aumentado exponencialmente nuestro suministro de alimentos. Y dicen que ni siquiera hemos comenzado a explotar los recursos del océano en busca de alimentos. En lo que se refiere a los limitados recursos minerales, Malthus pensó que el carbón, cobre y metales preciosos se acabarían, pero en la actualidad tenemos más cobre y carbón por persona en la tierra de lo que Malthus pensó que teníamos en su época. Hemos descubierto más recursos y los necesitamos menos, porque se han descubierto fuentes de energía como la energía atómica. Repito, no estoy aquí para discutir el temor a la sobrepoblación. Sólo estoy aquí para decirles que hay buenas razones para dudar de que esto sea un problema. Sin embargo, podrían preguntarse por qué vemos esos rostros demacrados de niños desnutridos en la televisión. Es fácil pensar que es porque estamos sobrepoblados, miren a estos niños muriéndose de hambre. Pero, a decir verdad, eso tiene poco que ver con la sobrepoblación. Tiene mucho que ver con una tribu o grupo étnico que odia y deja morir de hambre a otra tribu o grupo étnico. Tiene mucho que ver con gobiernos corruptos y con la falla en la distribución de alimentos. Tiene mucho que ver con desastres naturales, sobre los cuales tenemos muy poco control. De todas maneras, la preocupación por la sobrepoblación ha sido una de las razones para pensar que la píldora ha sido un gran avance para la humanidad. El feminismo también ha contribuido al entusiasmo por los anticonceptivos. Las feministas creían que debíamos tener anticonceptivos porque las mujeres no podían entrar al mundo del trabajo y realizarse, a no ser que tuvieran menos bebés; y que la única manera en que podían tener menos bebés era usando mejores anticonceptivos. También se creyó que los anticonceptivos, especialmente la píldora, ayudarían a tener matrimonios mucho mejores. ¡Matrimonios mucho mejores! Porque, claro, la gente podría usar anticonceptivos dentro del matrimonio y librarse así del temor de los embarazos que estaban dañando el gozo y la espontaneidad de la vida sexual que los esposos esperaban tener. La píldora eliminaría la tensión en la vida sexual causada por el temor al embarazo. No tomó mucho tiempo para que la gente se diera cuenta de algo. Vaya, si se podía quitar el miedo de un embarazo teniendo sexo dentro del matrimonio, también se podría quitar el miedo de un embarazo teniendo sexo antes del matrimonio, y ciertamente, entonces tendría sentido tener sexo antes del matrimonio. Yo era adolescente en los años 60 y esto se convirtió en la sabiduría de esos tiempos. De hecho, ninguno de ustedes compraría un automóvil sin probarlo antes. Es igualmente tonto, por supuesto, casarse sin haber tenido relaciones sexuales con la posible pareja. Y ninguno de ustedes realmente compraría un automóvil sin haber probado varios antes, ¿verdad? Eso también sería tonto. Ustedes quieren encontrar el modelo que les guste. Quieren experimentar cómo se siente cuando lo manejan. Fue lo mismo en los años 60. Esto era sabiduría en esos tiempos. Para las generaciones anteriores, era muy desafortunado que ellos tuvieran que reprimirse antes del matrimonio y casi meterse en el matrimonio porque estaban desesperados por tener sexo. Ahora podríamos estar libres de esa clase de desesperación teniendo relaciones sexuales antes del matrimonio y así podríamos hacer una evaluación más calmada, más serena, más sosegada de nuestro futuro cónyuge. También llegamos a pensar que con el uso de los anticonceptivos disminuirían significativamente los embarazos no deseados. Sin duda la anticoncepción ayudaría a la gente a no quedar embarazada cuando no quería quedar embarazada. Y al mismo tiempo que disminuirían los embarazos no deseados, disminuirían los abortos. Estas eran las expectativas para la píldora anticonceptiva en los años 60. Pienso que ninguna de éstas expectativas era estúpida. Pese a todo el sarcasmo en mis palabras, a primera impresión me parece que hay una gran cantidad de lógica en estas expectativas. Pero la Iglesia Católica en ese tiempo dijo que no, que ese no era el caso. El Papa Pablo VI escribió Humanae Vitae en 1968. Si alguno de ustedes vivió en aquel entonces y tenía uso de razón, tal vez recuerde que eso cayó como una bomba en la Iglesia y en el resto de la sociedad. Fue un golpe para todos, que la Iglesia Católica reiterara su enseñanza constante contra la anticoncepción. El Papa Pablo VI, en la Sección 17 del Humanae Vitae, hizo varias predicciones sobre lo que sucedería en el mundo si los anticonceptivos se hicieran accesibles a todos y si llegaran a usarse ampliamente en la sociedad.