KOBIE (Serie Bellas Artes), Bilbao Bizkaiko Foru Aldundia-Diputación Foral de Bizkaia N Y XI, pp. 255-270, 1995/1997 ISSN 0214-7955

LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE

Maite Echart

RESUMEN

Un recorrido por Gipuzkoa, de la mano de la obra escultórica de Ricardo U garte de Zubiarraín, nos revela unos espacios tradicionales que, gracias a las nuevas formas de los lenguajes escultóricos del siglo XX, se trans­ fonnan para servir al público de una manera más directa y sin referencias glorificadoras.

SUMMARY

A journey through Gipuzkoa, under the guidance of Ricardo Ugarte de Zubiarraín's sculptures, shows us tra­ ditional spaces which, thanks to the new sculptoric shapes of XXth century, get altered to serve the spectators in a more direct way and without any glorifying references.

LABURPENA

Ricardo U garte Zubiarrainen eskulturlanaren eskutik Gipuzkoan zehar ibilaldi bat egin ezkero, XX. mende­ ko hizhuntza eskultorikoen mintzamoldeei esker gune tradizionalak ezaguterazten dizkigula ikus genezake, azken hauek, jendeari modu zuzenago batean eta erreferentzi glorifikatzailerik gabe zerbitzatu ahal izateko eral­ datuz. 156 MAITE ECHART

Los espacios públicos han estado frecuentemente partir de los años sesenta. Con independencia del tipo sembrados de obras escultóricas a lo largo de la his­ de obra de que se trate, puesto que las hay muy diver­ toria pero su función ha sido muy difere1~te según los sas. este aspecto denota un interés especial por la lugares y épocas. Unas veces han servido como ele­ escultura en gran parte debido a la influencia de gran­ mento decorativo de la arquitectura circundante, otras des maestros como Jorge Oteiza, Eduardo Chillida, han sido un homenaje personal reflejado en bustos, y Remigio Mendiburu, Néstor Basterrechea, etc. la mayoría monumentos artísticos destinados a ensal­ Ricardo Ugarte de Zubiarraín (Pasajes de San zar valores, mitos, etc. Pedro, Gipuzkoa, 1942) es el escultor que sin duda ha Sin embargo con el sigo XX las aportaciones a la dejado una impronta más profunda en el territorio escultura han sido enormes, tanto desde el punto de guipuzcoano, tanto por el numero de obras como por vista de su función urbana como de los lenguajes la novedad de fom1as y volúmenes que han dejado su empleados. En opinión de Javier Gonzalez ele Durana, hue11a en ambientes ciudadanos y rurales marcados los años sesenta y setenta supusieron una gran trans­ hasta ahora por líneas más tradicionales. Su quehacer formación en las concepciones y fonnas de la escultu­ escultórico se extiende por Gipuzkoa desde la capital ra. " .. .la reflexión centró uno de sus principales inte­ San Sebastián, pasando por su tierra natal Pasajes, reses especulativos en las maneras en que la integra­ Trintxerpe, Tolosa, Hernialde, , , la ción de la escultura actual en el espacio abierto huma­ Gipuzkoa profunda de Oñati, Azpeítia, , nizado puede ejercer más efectiva y positivamente su y otras localidades como Irún, y . función artística y social, así como en el estudio y des­ En este conjunto, se hallan dispersas catorce obras cripción de los tipos de lugares en los que el arte situadas en entornos públicos al aire libre, y tres obras público es objeto de instalación más o menos afortu­ en accesos o halles de instituciones públicas y priva­ nada ... A lo largo de la mencionada revisión quedó das. Cabe destacar asimismo el origen diverso de claro que no es lo mismo "arte público" que "arte en todo este trabajo: p1imer premio de la II Bienal de espacios públicos" y que 1a noción clásica de .. monu­ San Sebastian 1969, donaciones del artista, encargos mento artístico" ha pasado por un proceso de reactua­ de instituciones públicas (Diputación, Ayuntamien­ lización consistente en transformar lo adjetivo de tos). instituciones privadas (Kutxa), etc. entonces (el aite) y en sustituir lo temáticamente La obra de Ricardo Ugarte ha sido estudiada por monumental por lo democráticamente colectivo". ( l) distintos autores y en general se le sitúa en una línea Así, mientras se desarrollaba un lenguaje cuyos racionalista, vinculada al constructivismo y afín a los antecedentes se remontan a los grandes escultores de métodos arquitectónicos. Para José Marín-Medina, Ia vanguardia de principios de siglo y que ha dejado "El entendimiento de la propuesta que nos presenta sus huellas en un nuevo repertorio de líneas y formas, Ricardo Ugarte ... , así como el diálogo abie110 que nos la escultura se ha ido emancipando de las paredes y incita, deben establecerse desde esos perfiles ... de volúmenes arquitectónicos, integrándose en el entor­ escultura de nuevos planteamientos arquitectónicos, no urbanístico con un poder propio y que surge de sus pues ... siempre resu1ta afín a la arquitectura, tanto en relaciones con el espacio circundante, obligando a un su materia (preferentemente, el módulo de hierro recorrido, marcando desplazamientos, zonificando el industrializado) como en su técnica (soldadura eléc­ espacio, incluyendo obras o instalaciones que tienen trica), tanto en sus critetios compositivos (sistema en sí mismas su propio referente. Aunque las obras ortogonal) como en sus estructuraciones fonnales sean en muchos casos monumentales por su escala y (torres-estela), tanto en su enfoque (el objeto escultó• dimensiones, han perdido el carácter glorificador rico debe contemplarse necesariamente en una mane­ abrumante que las alzaba en un pedestal, para pasar a ra parcial, incompleta, yuxtapuesta, multiplicada y ser obras con las que el público tiene un contacto más sucesiva, en lugar de ofrecerse desde la visión frontal directo, tanto si se encuentran en exteriores -parques, tradicional, o sea, la centrada, estática, pe1manente) plazas, jardines, etc.-, como cuando se hallan en inte­ como en su valoración del espacio (prevalecimiento riores de libre acceso público, ya sea en instituciones de1 hueco como espacio medular de la escultura)". (2) públicas como privadas. Giralt-Miracle considera a Ugarte un escultor urbano Gipuzkoa es uno de los territorios del País Vasco que trabaja por las calles, plazas y autopistas y que que ofrece mayor número de obras en espacios públi­ identifica su obra con los procesos constructivos de la cos. Resulta sorprendente recorrer los kilómetros de arquitectura contemporánea, vinculada a la industria esta provincia y observar las huellas dejadas por escul­ y a los nuevos materiales. Según el autor, los espacios tores en estos últimos cincuenta años, especialmente a internos y externos se transforman en los protagonis-

( 1) Javier González de Durana. "El largo camino de la escultura (2) José Marín-Medina, "Ambito y estructura en la obra de Ricardo pública" en el catúlogo Concurso de esculturas-Esk11lt11ra lehia·· Ugarte", en el catálogo Ugarte, Casa de Cultura Oquenclo, 1990, keta. Europístas, Autopista Bilbao Behobia, 1992, s.p. s.p. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE GIPUZKOA 257

tas de su obra, que aunque no sea habitable en el sen­ Antes de su inuguración, Ugarte describía la obra tido físico, si lo es en el perceptivo, en el sensoríal y de la siguiente manera: "tiene 22 cuerpos de distinto en el visual. "Les seves peces són recintes, parets, tamaño y alcanzará una altura de 10 mts ... Sobre una caixes, espais interiors que s' obren a l' exterior i que cimentación de 15 Tm de hormigón armado, la escul­ ens permeten accedir a unes cavitats proporcional­ tura propiamente dicha, pesa dos toneladas y media. ment construidas i ben articulades, que responen a Aunque el eje vertical está muy bien definido hay que uns desdoblaments horizontals i verticals, flexibles i tener en cuenta el problema del viento. "Estela" tiene ordenats" (3). caras por todos los lados. Por ella penetra el viento y Sin embargo, un detenido recorrido por la geogra­ había que asegurar bien su base para que en ningún fía guipuzcoana nos pennite observar una evolución momento haya el temor de que se derrumbe. Es de estilística. Aunque dicha evolución tiene una estre­ hierro metalizado con cinc para evitar cualquier pro­ cha relación con la cronología de sus obras, existen blema corrosivo. Estoy dudando entre el gris oscuro y obras coetáneas y ,sin embargo, con distinto plantea­ el negro. Quizás sea una mezcla de los dos. Hay que miento. En cualquier caso y de un modo general, si en tener cuidado a la hora de elegir el color. Es impor­ la mayor parte de sus obras existen muchos referen­ tante con relación al medio ambiente. Tengo que con­ tes en la arquitectura -materiales industriales, estruc­ seguir que desde una perspectiva un poco amplia no turas con aberturas espaciales, construcción en vez de se funda completamente con lo que le rodea" (6). Se obra modelada- sobre todo en la década de los seten­ trata pues de una estructura vertical con planteamien­ ta y ochenta ("Estelas'', Huecos Habitables"), irá libe­ tos espaciales, construida con módulos cúbicos o rec­ rándose de las formas ortoganales generadoras de tangulares de diferente tamaño, utilizando la técnica estructuras espaciales para ir creando obras de formas de la soldadura eléctrica y el hierro laminado. más abiertas que tengan cada vez más en sí mismas Esta obra señala un momento de transición en la un elemento subjetivo, aun cuando siga empleando catTera del artista, aunque sea coetánea con otras de materiales elaborados por la industria como es eJ hie­ corte rectangularista; es eJ primer paso entre lo que el rro o acero laminado, y posterionnente llegará a for­ artista denomina "rectangularismo" y la futura defi­ mulaciones austeras y composiciones más sencillas nición del módulo de "cuarto de corte lateral" llama­ dentro de un espíritu más cercano al minimalismo, do por la crítica "módulo ugartiano". Con cierta pers­ sin referencia a espacios interiores. pectiva que nos pennite el tiempo, Ugarte nos comen­ La primera obra "Estela", ubicada en la Plaza del taba que en esta obra no existe todavía el módulo Centenario del barrio de Amara de la capital donos­ ugartiano puesto que se trata de módulos cúbicos con tiarra, data de 1969, y obtuvo el primer premio en la medidas diferentes y sin el cuarto de corte lateral. Sin II Bienal de Escultura de San Sebastián por su capa­ embargo, si existe ya una voluntad de crear espacios cidad de integración en el espacio. En opinión de M 11 interiores en una interrelación con el espacio exterior Soledad Alvarez, estudiosa de la escultura contempo­ (7), a diferencia de las obras rectangularistas en las ránea en Gipuzkoa, "El hecho de tener en cuenta el que sólo se pretendía ocupar el espacio. emplazamiento final de la obra es un factor funda­ De la fase "Rectangularismo" existe una muestra mental" (4) para la adjudicación del premio a esta en . La obra "Escultura 4" ( 1970) se obra. Ricardo Ugarte comentaba en aquella época al encuentra en la fachada del Banco Central Hispano respecto: "Cada terreno tiene sus problemas y el (Antes sede de la sucursal del Banco de San Sebas­ escultor debe planteárselos sobre esa base para poder tián). Tiene la peculiaridad de ser una escultura ado­ resolverlos. Observé que era necesario concebir una sada a la pared en sentido horizontal, un relieve mural obra con mucha verticalidad en cuanto que hay una de fomrns geométridas, con módulos de diferente serie de postes, cables de los trolebuses que reducían grosor, "fruto del desarrollo espacio-temporal en a la plaza y no le da una sensación abierta .... (La Pla­ anchura", (8) en el que puede apreciarse un trata­ za del Centenario) es el punto de arranque de una ciu­ miento espacial más cerrado que en la fase posterior dad en pleno desarrollo. Mis esculturas quieren refle­ (que asoma ya en la obra comentada previamente), y jar esa idea. Tienen una relación directa con las que tiende a ocupar el espacio. "El principal proble­ estructuras metálicas que se originan cuando la ciu­ ma que se plantea en esos momentos es el espacial, dad crece" (5). resuelto mediante placas rectangulares dispuestas en distintos planos que definen, por ocupación, el espa- (3) Daniel Giralt-Miracle, "Receptacles de la consciencia", en el catálogo Ugarte, Santa Coloma de Gramanet, 1994, s.p. (4) Mil Soledad Alvarez, Escultores Contemporá11eos de Guipuzcoa , Ed Caja de Ahorros Provincial de Guipúzcoa, 1983, Tomo lll, (6) en Sol Fuentes, "La colocación de Estela en la plaza del Cente­ pp. 634. nario", Unidad, San Sebastián, l O de enero, 1970. (5) en Sol Fuentes, "Ricardo Ugarte, cuatro maquetas para una Bie­ (7) Conversación con Ricardo Ugarte, noviembre, 1996. nal", Unidad. San Sebastián, 12 de septiembre, 1969. (8) M~ Soledad Alvarez, op. cit., pp.690 258 MAITE ECHART

cío infinito" (9). También entran otros planteamientos conmemorativa de la construcción de dichos parques. a formar parte de la concepción de la obra. Según el El artista comenta cómo decidió realizar una obra artista, se trata de un nexo o unión entre volúmenes, escultórica cuando le encargaron un simple soporte entre el arco de la derecha y el plano de la izquierda, para la placa. La obra consiste en una viga vertical en que queda acentuado por el distinto tratamiento de la doble T que sustenta tres modulas ugartianos o de textura de la pared de la izquierda y la que soporta la cuarto de corte lateral idénticos que se sitúan en dife­ obra. Este planteamiento respondía a una voluntad de rentes direcciones. Aunque todavía en un segundo no romper con la fisionomía de la plaza ( l 0). plano, en esta obra aparece ya la viga en doble T que En opinión de Soledad Alvarez, en estas esculturas más tarde adquirirá un mayor protagonismo (14). construidas con placas rectangulares de acero "la Tambien en el mismo año se coloca "Homenaje a dependencia del plano mural evidencia la existencia las Máquinas Antiguas" en el Hall de acceso a la de una actividad pictórica anterior" ( 11 ). Esta obra se Kutxa de Irún. Se trata de otra obra mural, que se diferencia de la señalada anterionnente fundamental­ íntegra en la arquitectura, alterando el espacio "Interior mente en el hecho de que tiene una relación directa al conferirle una multiplicidad gracias a los huecos y con el plano mural mientras que "Estela" y otras llenos del relieve mural. Es una obra marcada todavía obras posteriores serán obras para ser vistas desde por el "Rectangularismo" en sus aspectos espaciales todas las perpectivas y que inducirán a un desplaza­ "pero con una acentuación de la tendencia de apresar miento a su alrededor para poder contemplarlas. M ;! el espacio en el interior de la obra, y, ya no sólo de Soledad Alvarez comenta: señalarlo o delimitarlo, como en las obras del grupo anterior ("Rectangularismo") ... En parte puede exis­ "Las esculturas realizadas por Ugarte desde entonces tir. .. un lejano recuerdo del módulo rectangular en las son verdaderos edificios arquitectónicos, en virtud del caras planas de las banas de hierro, pero planteadas uso de un elemento estructural básico, el módulo ugar­ con un desarrollo en grosor que genera fomrns pris­ tiano, que en su cuarto de corte lateral (posterior a la máticas de cuatro caras iguales. Por otra parte, las "Estela" del concurso) permite una interrelación de banas se doblan y pliegan según formas cuadradas todos los espacios interiores de la construcción, y, a su que sugieren las aristas del cubo" ( 15). vez, de estos con los exteriores" ( 12). "Homenaje a los Gudaris" data de 1980 (la maqueta) pero la escultura se colocó en 1982 en la pla­ A mediados de la década de los setenta, U garte rea­ za del Gudari de Pasajes de Pedro. Es una obra sobre liza "Monolito" , en piedra (la única con un material un basamento de hormigón, en la que también puede que no sea el hierro o el acero corten) para un parque observarse la viga en doble T, aunque con aberturas, infantil del Barrio de Trintxerpe de San Sebastiün. que sostiene diversos módulos cúbicos con cuarto de Tanto por el material como por las formas, se trata de corte lateral, algunos de los cuales tienen una doble una obra experimental formada por un pedestal y un lámina de hierro plegado que anima el conjunto del cubo en el cual se abren vacíos rectangulares que se volumen, y de entre los que surge por un lado una baiTa encuentran y entrecruzan formando ya un espacio horizontal a modo de lanza. La maqueta de esta obra se interior dentro de la escultura. Según Ugarte, los pla­ realizó como un Homenaje al poeta Jorge Manrique y nos rectangulares y cuadrangulares toman profundi­ más tarde se llevó a cabo la obra en una fundición , dad y se unen entre si; se trata de un encuentro de pla­ dirigiendo los trabajos Ricardo U garte, por encargo y nos en profundidad ( 13 ). con la idea de dedicarla a todos los gudaris. En 1977, Ugarte dona su primer monolito en hierro A principios de la década de los ochenta, Ugarte laminado, "Monolito" , para el parque infantil de lleva a cabo tres réplicas de su primer monolito insta­ Aizarnazabal. Esta obra forma parte de una serie que lado en Aizamazabal que llevarán el mismo título se encuentra dispersa por distintas poblaciones de "Monolito" y que como aquel servirán como sopor­ Gipuzkoa, en jardines o parques infantiles subvencio­ te de placas conmemorativas de la creación de par­ nados por la Caja de Ahorros de San Sebastián ques en Hernialde (1980), Oñati (Aprox. 1982) y Ale­ (actual Kutxa). La obra sirve de soporte para la placa gia (1982 ó 1983). En cuanto a las fonnas, se trata siempre de una viga en doble T que soporta tres

(9) M~ Soledad Alvurez, op. cit., pp. 651 . módulos con el cuarto de corte lateral ugartiano que (10) Conversación con Ricardo Ugarte, ihidem le permite desanollar espacios dentro de la propia ( 11) Mil Soledad Alvarez, "Baterrechea y Ugarte en la escultura vas­ obra y en las que, como ya se ha señalado, la viga ca de vang:u¡1rdiu", Boletí11 de la RMI sociedad Bascongada de ocupa todavía un lugar subordinado. los Amigos del País, Vol. XLVIII , Tomos 3-4, Donostia-San Sebastiün, 1992, pp. 434. ( 12) l\P Soledad Alvarez, Esrnltores Co11te111porá11eos de Guipú:::coa. (14) Conversación con Ricardo Ugarte, ihidcm op. cit., pp.655. ( 15) M ~ Soledad Alvarez, Esrnltores Contemporáneos de G11ip1í=coa, (13) Conversación con Ricardo Ugarte, ihidem. op. cit., pp.689 y 692. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE GIPUZKOA 259

"Huecos Habitables" es una obra de 1985 y está nal, que parte de su mismo cuerpo del que van sur­ emplazada en el Hall interior de la Diputación Foral giendo hacia lo alto placas vibrantes, de hierro lami­ de Gipuzkoa. En opinión de M!! Soledad Alvarez, nado plegado, tamaños diversos, y ondulaciones que Ugarte recrea un verdadero espacio arquitectónico, se extienden hacia lo alto como movidas por el vien­ generando una estructura en la que los espacios inter­ to. nos se interrelacionan y creando por ende una ubica­ "El Aleteo del Mar" ( 1987) es una obra realizada ción dentro de Ia propia obra. Es lo contrario de lo por encargo para situarla en la zona lndustrialdea de que hemos podido observar en otras obras ("Estela", Zarautz. Se alza sobre un pedestal de madera en el "Monolitos" ... ) en las que el escultor tenía ante todo que se sustenta el cuerpo principal que partiendo de en cuenta el emplazamiento donde iba a ubicarse la una base formada por dos placas colocadas de forma obra. Pero si Ios espacios interiores ya habían hecho triangular, se ensancha en todas direcciones con su aparición anteriormente, sólo en esta serie "surge diversas láminas plegadas y coloreadas con tonos el concepto en eI sentido arquitectónico de dar priori­ ocres claros, y onduladas a modo de olas marinas. dad al estudio espacial y orientar el mismo al uso del Poco después, Ugarte comenzará a trabajar en la hombre. Podemos decir que en las series anteriores serie de "Gaztelus" en la que la viga en doble T, que U garte planteaba un espacio escultórico, mientras hasta ahora era un elemento secundario de apoyo, que en ésta de los "Huecos Habitables" el espacio se pasa a convertirse en el elemento principal, la prota­ convierte en arquitectónico" (16). Este planteamiento gonista de la obra (20). Una de estas obras, denomi­ es el mismo que mantiene Daniel Giralt-Miracle y nada "Monolito", se encuentra ubicada en la locali­ que ya hemos señalado anteriormente: la diferencia dad de Astigarraga. Otra obra de la misma serie, colo­ entre un espacio virtual y un espacio físico real ( 17). cada en 1994, "Castillo de Ja Memoria" se encuen­ Durante esta misma época U garte comienza a desa­ tra junto a la entrada del Archivo Provincial de Tolo­ rrollar un tipo de obra que supone otro paso en su tra­ sa. En ambas obras las referencias espaciales son yectoria. Se trata de los "Aleteos". Para Giralt-Mira­ mínimas a no ser por algunos vacíos abiertos en la cle son "vibraciones" ( 18), es decir entran en la obra parte superior que recuerdan las formas almenadas de elementos subjetivos en vez de los puramente racio­ los viejos castillos. "Para definir las formas, interpre­ nalistas utilizados hasta ahora. En opinión de Soledad tadas como elementos mínimos en la concreción Alvarez, "La libertad modular y estructural de los espacial, U garte elige un nuevo soporte matérico, el Aleteos es producto de una concesión al impulso poé­ perfil de acero en doble T, que apenas altera en su dis­ tico que subyace en toda su creación, que en el aspec­ posición industrial, y se apoya en las figuras geomé­ to plástico se traduce en una transfonnación del tricas más elementales para referenciar con sus perfi­ módulo. Así, a los módulos cúbicos de las primeras les espacios de expresividad contenida, desaparecien­ series, suceden ligeras aberturas modulares de Loreas do por un igual espacialismo arquitectónico y modu­ y Huecos, hasta su total despliegue abierto en los Ale­ laciones rítmicas" (21 ). Son obras con un marcado teos, sin que desaparezca por ello la referencia al sentido vertical, en las que la composición es prácti­ cuarto de corte lateral que viene a constituir el sello camente inexixtente, y la viga y el material son los de identidad del módulo ugartiano" (19). verdaderos protagonistas. Existen "Aleteos" en dos ámbitos urbanos de Giralt-Miracle se refiere a estas obras y a las que Gipuzkoa. El primero que data de 1986, "El Aleteo comentaremos posteriom1ente de la siguiente manera: del Fuego", es un homenaje a Jorge Oteiza y está "Ugarte es lliura a la realització d'unes experiences de emplazado en la Kutxa de la calle Getaria, en un tall minimalista en els quals prescindeix de tota gesti­ espacio-vitrina que hace que la obra haya entrado a culació per a assolir el més essencial de la fom1a, a tra­ formar parte de la imaginería urbana de dicha calle. vés d'una construcció que no fa cap concessió a la retb­ Aunque su ubicación no permite una visualización rica. La serie que consagra a la biga, o columna de ferro total de la obra en el sentido escultórico, puesto que, constru"ida amb doble T, n 'es un exemple evident. Els dadas las circunstancias, se expone de una manera criteris constructius basats en l'ortogonalitat més pura frontal, la fuerza del material, composición y tonos busquen la maxima nuesa fonnal; són unes estructures ocres hacen de ella un objeto impactante. Es una primarias, volgudament reduccionistes, elevades a la composición vertical con un claro sentido en diago- categoría de monument, amb vocació totemica i amb una radical voluntat de formar part del perfil paisatgís• tic de les nostres ciutats. D'aquestes bigues han sortit ( 16) rvP Soledad Alvarez. Esrnltores Co11temporá11eos de G11ipúzcoa, op.cit., pp 715. ( 17) Daniel Giralt-Miracle, op. cit., s.p. ( 18) Daniel Giralt-Miracle, op. cit., s.p. (20) Conversación con Ricargo Ugarte, ibidem. ( 19) M" Soledad Alvarez, "Basterrechea y Ugarte en la escultura vas­ (21) Mil Soledad Al varez, "Basterrechea y Ugarte en la escultura vas­ ca de vanguardia", op. cit., pp. 435. ca de vanguardia", op. cit., pp. 438. 260 MAITE ECHART

castells misteriosos, directament vinculats a aquesta comprender toda la carga de emotividad ligada a su racionalinat austera que combina el buit i el ple, el mur íntima aportación a este lugar al que siempre se ha i la finestra, el de dins i el de fora, en una precisa i sug­ sentido vinculado, aspecto que bien puede entenderse geridora definició del volums. Unes formes massisses, si nos fijamos en lo adecuado del tema, fonnas y rotundes, que ens conviden a penetrar en uns espais envergadura de la obra, que es hasta el momento la poetics, ignots, genu'inament vinculats a la tradició bas­ más grande producida por Ricardo U garte. ca" (22). La otra obra que completa el conjunto es "Castillo de Popa" ( 1994 ), también encargo de la Autoridad Especial referencia merecen dos obras ubicadas en Portuaria, situada en la zona portuaria pero esta vez la zona portuaria del Puerto de Pasajes en donde de Pasajes de San Juan. El propio U garte se refiere a Ugarte ha logrado crear un núcleo bien definido por ella señalando que "a través de sus dos ojos de buey, sus obras. Recordemos que ya existían dos obras establece una alineación visual con el ancla, cual anteriores en Trintxerpe y Pasajes de San Pedro, pero línea imaginaria que cruza y une la bahía" (25). ahora U garte se explaya para mostrar su vinculación "Castillo de Popa" es un desarrollo particular de la con la zona recreando "intrumentos y herramientas serie "Gaztelus"; la viga en forma de doble T se abre marineros como homenaje al tradicional abertzale aquí para formar un espacio cúbico interior al que vasco y al propio entorno marítimo de Euskadi" (23 ). puede accederse por un lado abierto, y que al igual "Ancla para un Puerto" (1991) emplazada en el que los "Gaztelus" presenta una terminación almena­ muelle avanzado norte de Pasajes Antxo, es una obra da en su parte superior. Las distintas perspectivas que mide 7 ,50 mts de altura y que con la escalinata sugeridas por los ojos de buey, y demás aberturas, le que le sirve de basamento supera los diez metros. confiere una gran carácter diáfano puesto que a través Además, el color rojo-señal de la pintura que recubre de la obra pueden divisarse diversas perpectivas del el hierro laminado hace que sea divisable desde dis­ entorno, además de generar un espacio interno y tintos ángulos del gran puerto de Pasajes. Con esta accesible permitiendo desplazamientos y recorridos obra y otras de pequeño tamaño de la misma serie, singulares. Ugarte hace una excepción en su trayectoria no imi­ Para terminar, nos referiremos a "La Vertical del tativa, ya que en ella recrea las fonnas de un ancla Sonido" de 1995, situada en la plaza del municipio aunque de una forma muy esquemática y subjetiva. de Zaldibia. Es un homenaje a Juan Ignacio Iztueta, U garte se expresa de la siguiente manera: "El Ancla, bertsolari, coreógrafo y escritor, en el 150 aniversario máximo exponente de esta serie dedicada al mundo de su muerte. Cabe señalar que el día de su inaugura­ del Mar, va a ser Ia figura emblemática que elijo ción, Ugarte optó por presentar la obra cubierta por como punto de partida para el estudio de esta obra. El una tela a modo de envoltorio lo cual confirió al acto Ancla, con toda su carga simbólica en el arribar a un clima de "performance" con un cierto misterio o buen puerto, después de una larga singladura. Largar sorpresa que fue desvelándose mientras el artista lo y fondear el ancla, amarrar la maroma al noray, es iba retirando. Se trata de un prisma cilíndrico vertical toda una liturgia que esta escultura, presidiendo la que presenta en su parte frontal seis espacios circula­ bahía, va desde hoy a simbolizar... La obra debe res y uno cuadrado en la parte superior, y en el dorso situarse en expresión de sí misma, con su carga de otro espacio circular. Aunque no puede decirse que la valores plásticos, y en íntima relación y equilibrio obra sea una representación de ningún objeto concre­ con el ámbito en que se sitC1a. El fondo inmediato y to, si pueden hallarse en ella referencias a elementos próximo de la escultura con su universo de grúas, musicales de viento tales como la flauta, el txistu u líneas y diagonales que dibujan el espacio, los fondos otros. Es una obra que sin alterar el paisaje del entor­ de las edificaciones y los containers, planos de color no, se integra en el espacio de una forma casi inad­ cambiantes, me llevaron a rematar la obra en color, en vertida por estar desprovista de ambages, con unas un "rojo señal" empleado también en algunos cascos líneas puras, sencillas, sintéticas y sin embargo car­ de algunos barcos. Cromatismo de constraste que, gadas de carácter. junto con la riqueza y variedad de expresiones geo­ Este paseo por la geografía guipuzcoana nos ha métricas que conlleva la obra, la luz, con su recorri­ revelado un U garte plural, pero austero y original en do, irá modelando y matizaudo cada angulación de sus planteamientos. Interesado por los nuevos materia­ ésta" (24). Estas palabras del artista nos sirven para les, como el hierrro o acero corten laminado elabora­ dos por la industria, U garte deja de lado el tratamiento restando material y por el contrario actúa por añadidu- (22) Daniel Giralt-Miracle, op. cit., s,p. (23) Mª Soledad Alvarez, "Basterrechea y Ugarte en la escultura vas­ ca de vanguardia", op. cit., pp. 438. (24) Ricardo Ugarte, "Ancla para un puerto", Hurhill, septiembre (25) Ricargo Ugarte, "Udal Aretoa o la llave cultural de San Pedro", 1991, San Sebastián. en el catálogo Ugarte, Ayuntamiento de Pasajes, 1994, s.p. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUB!ARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE G!PUZKOA 261

ra, sumando piezas o módulos, como muchos artistas Un elemento fundamental en sus obras de ámbitos actuales. Si en sus primeras fases se presentaba como urbanos, es el tener en cuenta el emplazamiento final un hacedor de estructuras espaciales, cercano a los de la obra. La escultura será unas veces el núcleo planteamientos racionalistas y constructivistas y, tam­ organizador del espacio ("Estela", "Ancla para un bién, a los vacíos oteizianos, pasará después a integrar Puerto", "Castillo de Popa"), otras, será un elemento en sus obras una parte más íntima y sensitiva, más ges­ para ocupar un espacio ("Escultura 4"), y en muchas tual y subjetiva que se reflejará en plegamentos y ocasiones se integrará de tal fonna en el entorno que ondulaciones, y seguirá su andadura tomando referen­ no alterará las características propias de éste ("Mono­ tes en la naturaleza (Llamas, olas, viento), en el mun­ litos", "Gaztelus", "Aleteos"). En cualquier caso, la do que nos rodea (Almenas, elementos humanos del obra estará siempre en un nivel directo con el públi­ universo marino) pero sin llegar nunca a una imitación, co, sin imponerse y manteniendo una relación de para centrarse en estos últimos tiempos en lo esencial escala humanizada, lejos de los grandes monumentos de la forma con sencillez y claridad. públicos glorificadores de otros tiempos. 262 MAITE ECHART

FICHA TECNICA DE LAS OBRAS ESTUDIADAS 5 mts. de altura 1982 (Fecha de colocación pero la maqueta data de 1 - "Estela" 1980) Hierro metalizado con cinc, pintado de negro en inte­ Plaza del Gudari rior, gris en exterior Pasajes de San Pedro 1O mts. de altura 10 - "Huecos Habitables" 1969 Hierro Plaza del Centenario 1,30x l ,00x82 mts. Donostia-San Sebastián 1985 2 - "Escultura 4" Hall de entrada a la Diputación Foral de Gipuzkoa Hierro Donostia-San Sebastián 3,50x0,40 mts. (largo x alto) 11- "El Aleteo del Fuego" (Homenaje a Jorge Otei­ 1970 za) Fachada del Banco Central Hispano (Antes Banco de Hierro con pátinas de color San Sebastián) 2,50x0,50xl,50 mts. Azpeitia 1986 3 - "Monolito" Vitrina exterior de la Kutxa, c/Getaria Piedra Donostia-San Sebastián 0,40x0,40x0,40 mts. cubo superior 12 - "El Aleteo del Mar" Ox30x0,30xl ,00 mts. pedestal Acero corten. Pedestal de madera 1974 ó 1975 2,50x 1,50x0,50 mts. Parque infantil 1987 Trintxerpe Industrialdea 4 - "Monolito" Zarautz Hierro 13 - "Monolito" 0,50x0,50x0,80 mts. Acero corten 1977 5 mts. de altura aprox. Herriko Emparantza 1987 ó 1988 Aizarnaza bal Travesera de Errekatxo 5 - "Homenaje a las Máquinas Antiguas" Astigarraga Hierro 14 - "Ancla para un Puerto" 5x2xl mts. (largo x alto x fondo) Hierro, soldadura y acabado en pintura roja 1977 5,30xl0,80x7,50 rnts. Hall de Acceso a la Kutxa 1991 Irún Muelle avanzado Norte. Recinto portuario. 6 - "Monolito" Pasajes Antxo Hierro 15 - "Castillo de Popa" 0,50x0,50x 1,00 mts. Acero corten 1980 4x2x2 rnts. Parque junto a Ayuntamiento 1994 Hernialde Plaza de San Roque. Zona portuaria. 7 - "Monolito" Pasajes de San Juan Hierro 16 - "Castillo de la Memoria" 0,50x0,50xl,74 mts. Hierro 1982 ó 1983 0,30x0,30x3 mts. Parque 1994 Alegia Entrada al Archivo Provincial 8 - "Monolito" To losa Hierro 17 - "La Vertical del Sonido" (Homenaje a Juan 0,50x0,50xl,80 mts. Ignacio Iztueta) 1982 ó 1983 Hien-o Parque Olakua Auzoa 4 rnts. de altura aprox. Oñati 1995 9 - "Homenaje a Gudaris" Plaza Hierro Zaldibia

( 1) Las medidas se leen largo x ancho x alto, salvo indicación contraria. (2) Las referencias numéricas son las mismas que figuran en el mapa de Gipuzkoa adjunto. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUB!ARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE G!PUZKOA 26J

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Estela. Donostia-San Sebastián.

Escu ltura 4. Azpeita. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE GIPUZKOA 265

Monolito. Alegia.

Monolito. Oñati. 266 MAITE ECHART

Homenaje a guclaris. Pasajes de San Pedro.

Huecos habitables. Donostia-San Sebastián. LA IMPRONTA DE RICARDO lJGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE GIPUZKOA 267

Aleteo d~I fuego. Donostia-San Sebastián.

Ancla para un puerto. Pasajes Antxo. MA!TE ECHA.RT

Casrillo de popa. Pasajes de San Juan. LA IMPRONTA DE RICARDO UGARTE DE ZUBIARRAIN EN ENTORNOS URBANOS DE GIPUZKOA 269

Castillo de la memoria. Tolosa

(Detalle). '.?70 MAITE EC HART

La vertical del sonido. Zaldibia. (Inauguración 25-5-95 ).

La vertical de l sonido. Zalcl ibia