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La Palabra ISSN: 0121-8530 Universidad Pedagógica y Tecnológica de

Mahecha Arias, Jacqueline La consagración del escritor Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia* La Palabra, núm. 32, Enero-Junio, 2018, pp. 201-218 Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia

DOI: 10.19053/01218530.n32.2018.8174

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=451559654013

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Fecha de recepción: 10 de Enero de 2018 Fecha de aprobación: 15 de mayo de 2018

Resumen Jacqueline Mahecha Arias El primer cuarto del siglo XXI presenta nuevas dinámicas literarias vinculadas a los procesos de consagración de un autor ante la esca- Licenciada en Español y Filo- lada de las grandes editoriales. A partir de lo anterior, se hace nece- logía clásica, Universidad Na- sario entender cómo el autor sigue luchando por establecer su ideo- cional de Colombia. Magíster logía dentro de un sistema que exige estructuras específicas para en Literatura UPTC Tunja. Do- la producción de pensamiento, imaginación y publicaciones. Para cente de la Facultad de Educa- tal efecto, se tomará en cuenta la teoría de Jacques Dubois, con el ción. Universidad Santo Tomás. fin de identificar, de forma práctica, los agentes e instancias dentro VUAD Villavicencio. de la institución literaria colombiana que intervienen en el proceso Docente de Español y Literatu- de consagración del escritor Pablo Montoya, y la incidencia de los ra de secundaria en el colegio premios literarios que le han otorgado. Espíritu Santo de Villavicencio. [email protected] Palabras clave: literatura; institución literaria; consagración; litera- tura colombiana; premios literarios. * El presente artículo forma par- te de la investigación realizada para la tesis “La consagración del escritor. Una aproximación a la institución literaria del siglo XXI. El caso de Pablo Montoya Campuzano”, para optar por el Citar: Mahecha Arias, J. (enero-junio de 2018). La consagración del escritor Pablo título de Magíster en Literatura Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia. La de la UPTC de Tunja. Palabra,(32), 201–218. doi: https://doi.org/10.19053/01218530.n32.2018.8174.

201 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 The Consecration of the Writer Pablo Montoya Campuzano. A Glance at the Colombian Literary Institution Abstract

The first quarter of the XXIst century presents new literary dynamics linked to author consecration processes in the context of the boom of large publishing houses. In view of the above, it is necessary to understand how an author continues to struggle in order to establish his or her ideology within a system that requires specific structures for the production of thought, imagination and publications. For this purpose, we will use the theory of Jacques Dubois in order to identify the practical agents and instances within the Colombian literary institution involved in the consecration process of the writer Pablo Mon- toya, and the incidence of literary prizes that he has received.

Key words: Literature; Literary institution; Consecration; Colombian literature; Literary prizes. La consécration de l’écrivain Pablo Montoya Campuzano. Une approche de l’institution littéraire en Colombie Résumé

La première partie du XXIème siècle présente de nouvelles dynamiques littéraires liées aux processus de consécration d’un auteur face á l’escalade des grandes maisons d’édition. Ainsi, nous analyserons de quelle manière l’auteur lutte pour établir son idéologie dans un système qui exige des structures spéci- fiques pour la production de la pensée, de l’imagination et des publications. Nous utiliserons la théorie de Jacques Dubois áfin d’ identifier de manière pratique les agents et les instances de l’institution litté- raire colombienne qui interviennent dans le processus de consécration de l’ écrivain Pablo Montoya et les répercussions des prix littéraires qui lui ont décernés.

Mots-clés: littérature; institution littéraire; consécration; littérature colombienne; prix littéraires.

La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 202 La consagración del escritor Pablo Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia

¿Qué significa pintar? ¿Qué significa ser asesinado? ¿Qué significa la muerte -vio lenta y qué la representación de esa muerte? ¿Cómo aproximar los derramamientos de la sangre a nuestro diario vivir y hacer que ellos vulneren nuestra comodidad? En el fondo de mi hay algo que se niega a aceptar que un grabado logre expresar la cabal dimensión de un acontecimiento. La realidad siempre será más atroz y más sublime que sus diversas formas de mostrarla. Creo que todo intento de reproducir lo pasado está de antemano condenado al fracaso porque solo nos encargamos de plasmar vestigios, de iluminar sombras, de armar pedazos de vidas y muertes que ya fueron y cuya esencia es inasible. La belleza y siempre he ido tras ella así sea terrible y asquerosa, así sea nefasta y condenable así sea desmoralizadora y desver- gonzada no es más que un conjunto de fragmentos dispersos en telas en letras, en piedras, en sonidos que tratamos de configurar en vano. Pablo Montoya

En el primer cuarto del siglo recepción en los pares lectores o los libros frecuentados en la XXI, la publicación de obras y del momento. infancia, que se convierten en aparición de nuevos creadores un espacio material en donde literarios induce a pensar en los Trayectoria social y literaria pueden clasificarse y seleccio- mecanismos de consagración narse obras, motivando la ela- vigentes dentro de la institución Emergencia boración personal de un sistema literaria colombiana, desde los jerárquico de autores literarios que provienen del polo de gran La escritura literaria parte de la que condicionará, luego, el pro- producción y que otorgan fama creación individual, sin embar- grama ético y estético del escri- tor en el campo literario. (el top de ventas, la aparición go, según Dubois (2014) “todo en medios masivos de comuni- texto se compone a partir de una El escritor Pablo Montoya cación), hasta los considerados tradición y una norma, de suerte Campuzano nació en Barranca- institucionales, provenientes que ésta termina por reproducir bermeja en 1963. Es el noveno más del ámbito académico, y un gran texto” (p. 70). Al obser- var la sociedad y las maneras en de once hijos, de padres antio- que otorgan prestigio, reputa- queños; su padre, José de Jesús ción propiamente literaria (ho- que circula el capital simbólico, es poco probable preservar ese Montoya, nació en Copacabana; menajes, reconocimientos de carácter de individualidad, ya y su madre, Mariana Campuza- universidades, premios, crítica que la institución reconoce que no, en Yolombó. Cuatro años literaria especializada). Te- el producto literario “se cons- después de su nacimiento, su fa- niendo en cuenta lo anterior, tituye a partir de varias instan- milia regresó a Medellín, lugar el presente artículo analiza las cias” (p. 70). del que huyeron tiempo atrás relaciones e instancias de legi- por el fenómeno de la violencia. timación literaria que se esta- El escritor se ve condicionado Allí, Pablo fue a la escuela pú- blecen dentro del campo litera- durante su trayectoria por va- blica Juan María Céspedes para rio colombiano para otorgar la rias instituciones sociales: la hacer su primaria, realizó los consagración del autor Pablo primera es la familia, después estudios secundarios en el Liceo José Montoya Campuzano, a la sigue el colegio; estas infunden Antioqueño del cual recibió una vez, reflexionando acerca de la y transmiten códigos sociales, Beca por ser el mejor bachiller. función de la literatura colom- clasificadores, a través de obje- Ingresa a la carrera de Medicina biana como institución y de su tos como la biblioteca familiar en la Universidad de Antioquia como una forma de complacer

203 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 a su padre (médico); cursó cua- por la lectura con libros como tógrafo, según lo manifiesta el tro semestres y aprendió a tocar las fábulas de Rafael Pombo y mismo Pablo. la flauta. Luego, se separó de la los cuentos de Hans Christian medicina y decidió profundizar Andersen, e historias como la El perfil de escritor aficionado, sus estudios musicales en Tunja, Leyenda de San Julián el hos- el paso por la medicina, su esta- hecho que determinó alejarse de pitalario o Un corazón sen- tuto de estudiante de educación su familia. Como músico, llegó cillo, de Gustav Flaubert, que pública, la música en Tunja y su a conformar varias orquestas conformaron la colección Ariel posterior viaje a Francia, confi- sinfónicas en Colombia. En ese Juvenil Ilustrada. Durante su guran en Pablo José Montoya mismo periodo, estudió Filoso- juventud, su encuentro fue con Campuzano un prisma ideoló- fía y Letras en modalidad a dis- escritores como Herman Hesse gico para su posterior produc- tancia en la Universidad Santo y Albert Camus. Las diferentes ción literaria. El intercambio Tomás, durante el periodo 1987 etapas en la vida de Pablo, han cultural, su estadía en Francia a 1993; así, obtuvo su título de estado acompañadas además entre 1993 y 2012, y la visita pregrado. A los treinta años de de autores que han marcado su a diferentes ciudades europeas, edad, Pablo decidió emprender estilo literario, como: Margari- marcaron los pasos del escritor, un viaje hacia Rusia con el pro- te Yourcenar, Alejo Carpentier, y aunque en sus intervencio- pósito de seguir en la música, Julio Cortázar, Juan Rulfo, los nes no se percibe la historia del pero, por azares del destino, poetas latinos, entre ellos, el “buen salvaje”, sus inquietudes llegó a Francia, y como inmi- protagonista de Lejos de Roma, literarias nacionales y extranje- grante latino interpretó flauta Ovidio, entre otros. Pablo Mon- ras, y su pasión por la escritura; en el metro y sobrevivió desem- toya es un gran lector, por eso determinan, de manera categó- peñándose además en diversos tuvo interés en textos revolucio- rica, su formación y producción oficios, entre ellos, dictar clases narios, tesis filosóficas y reli- literarias. No en vano compuso de español. giosas. Lee a los autores colom- sus textos desde la posición de bianos de diferentes épocas y a escritor inmigrante con mensa- Realizó una Maestría en la Uni- sus contemporáneos del siglo jes divergentes. Estableció con- versidad Le Sorbonne-Nou- XX, como a García Márquez, tacto con diferentes revistas que velle, Paris III, entre 1993 y Álvaro Mutis, Germán Espi- publicaron sus escritos, cuenta 1995; y el doctorado, de 1996 nosa, , Héctor con más de cuarenta artículos a 2001, en la línea de Estudios Abad Faciolince, Piedad Bon- hasta el momento, en revistas Hispanoamericanos y Latinoa- nett, Juan Manuel Roca, Jorge especializadas, incursionando mericanos. Acontecimientos Franco. En el ámbito social, en de esta manera en el mercado que restablecieron su contacto la breve temporada dentro de la de bienes culturales. Los artícu- con la Academia. Durante este ideología de izquierda, hizo al- los que escribe son, en su gran periodo de crecimiento perso- gunos coqueteos con el EPL ha- mayoría, crítica de la literatu- nal y profesional, formación e ciendo pintas, pero decide reti- ra colombiana (sobre autores investigación, se fortalece su rarse del proceso. Este episodio como Gabriel García Márquez, curiosidad por producir obras lo tendrá en cuenta para su no- Álvaro Mutis, , de carácter histórico y de viajes. vela Los derrotados, que refleja Mario Escobar Velásquez, entre esos oficios y esas pasiones. El otros) o sobre la relación de la En su niñez, el contacto con la personaje del botánico escritor, literatura y la violencia. Por otro literatura fue a través de su ma- puede considerarse el alter ego lado, retoma a los escritores co- dre, quien tuvo gran fascinación del escritor, al igual que el fo- lombianos que no fueron tan por ella, y le enseñó el gusto visibles (como Roberto Burgos

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Cantor, por ejemplo), pero tie- El involucrar elementos como de ensayos Música de pájaros nen una trayectoria académica y la música, la pintura y la foto- (2005), el trabajo de la maestría poseen un valor estético en las grafía en sus obras, alimenta esa con su investigación Aproxima- diferentes obras que publican. herencia cultural con la diversi- ciones a la música de El perse- dad temática en medio de una guidor (1995); y luego, seguirá En esta fase de emergencia, el escena solitaria y apartada de siendo la música un tema en escritor Pablo Montoya elabora un círculo de amigos escritores, la tesis doctoral La música en una parte de su obra sin mante- y le permiten cargar de valor li- la obra de Alejo Carpentier ner relaciones con los círculos terario sus escritos. A propósito (2001). literarios parisinos, sin embar- de esa relación con la literatura, go, consolida una formación dirá Montoya: “Por la literatu- Por otra parte, el arte y la fo- literaria en Francia en una se- ra yo siento un gran cariño, un tografía se presentan de forma gunda lengua como inmigrante gran amor. Encuentro en los clara en su obra Tríptico de la latino. Evidentemente, su vida libros compañía, consuelo, un Infamia (2014), relación que en Francia estuvo acompañada permanente entusiasmo, siento despertó interés en Montoya de la austeridad; vivió allí con que los libros avivan profunda- desde 1995 al encontrar tres ar- su familia, su esposa y su pri- mente mi curiosidad por la vida, tistas del siglo XVI; ellos fue- mera hija. Sin embargo, el po- el pasado, el presente y las posi- ron tema de investigación por sicionamiento en la institución bilidades del futuro” (Montoya, más de 15 años, favoreciendo literaria no le corresponderá en entrevistado por Vergara, 18 de el proceso de maduración de su Francia, sino en Colombia. Du- febrero de 2016). obra, una constante en la obra rante su estadía, publica: Cuen- de Montoya, personajes relacio- tos de Niquía (París: Vericuetos, La relación interior que tienen nados con las artes: 1996), obra bilingüe en castella- la música y la literatura en las no-francés, y Habitantes (París: obras de Pablo Montoya, se Antes de Tríptico de la infa- Índigo, 1999); artículos y ensa- encuentra en su libro La sinfó- mia había escrito otra novela yos que se encuentran en revis- nica y otros cuentos musicales que se llama Los derrotados, tas colombianas y extranjeras, (1997), en el cuento “Madrigal” que es muy parecida a Trípti- además de la publicación de dos que fue el ganador del Premio co de la infamia porque tam- bién aborda unos procesos de sus obras de cuentos y una en Germán Vargas de la Fundación de violencia, de masacres y poesía en Colombia entre 1997 Alejo Carpentier y el periódico de guerra, pero a través de y 2003: La sinfónica y otros El Tiempo; Programa de mano otras disciplinas, de la foto- cuentos musicales (El propio (2014), prosa poética, dedicado grafía y de la botánica. Es bolsillo, Medellín, 1997), Viaje- a compositores de la ‘música como profundizar en esas ros (Universidad de Antioquia, clásica’, en él hace un recorri- raíces nuestras y sobre todo, Medellín, 1999), Razia (Eafit, do desde Venantius Fortunatos, en esas relaciones entre in- Medellín, 2001). himnodista y poeta latino del telectuales, artistas y mili- siglo VI, pasando por Enrique tancia revolucionaria, donde todo termina atacando al arte. De esta manera, Pablo se inscri- Granados, compositor y pianis- Los derrotados son los artis- ta español del siglo XIX, hasta bió en una literatura minoritaria, tas, los intelectuales, Los que provista de originalidad, privi- llegar a Leo Brower, compo- ganan son los guerreros. Hay legiando, desde la distancia, la sitor, guitarrista y director de entonces una continuidad en- adquisición de capital simbóli- orquesta cubano del siglo XX. tre esa novela y Tríptico de la co, por encima del económico Otras referencias sobre esta re- infamia, solo que Los derro- o social (de los que carecía). lación se encuentran en su libro tados es sobre Colombia en

205 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 particular, sobre sus procesos etapa de emergencia, buscó po- de la política editorial que con- de independencia (Carrizosa, sicionarse con nuevas propues- sistía entonces en retirar a un au- 21 de mayo de 2016). tas literarias: por un lado, con tor si sus libros no se vendían en un tipo de literatura “erudita” un periodo de seis meses. Esta Su labor educativa y su produc- para cierto grupo reducido de realidad editorial comercial le ción ensayística, abrieron un lectores (en contraste explícito lleva a Montoya con la Edito- camino en la institución litera- y directo frente a las masas que rial independiente Sílaba, que ria que se puede observar a tra- frecuentan otro tipo de narrati- publica sus libros Los derrota- vés de su participación en dife- va); y por otro, en la relación dos en el 2012 y Lejos de Roma rentes instituciones de carácter del autor con la temática que en el 2014, siendo Los derro- nacional: Red Nacional de Es- presenta, ya que toma distancia tados uno de los más vendidos critores RENATA (2008), coor- de la cotidianidad para referirse por la editorial, según lo afirma dinador de los Premios Nacio- a hechos del pasado histórico su editora Lucía Donadío, quien nales de Cultura (2006-2012), de Colombia exaltando el tema comentó sobre la responsabili- coordinador del Doctorado en de la violencia desde la época dad y la experiencia de publicar Literatura de la Universidad de de la Conquista alejándose de a escritores como Pablo: Antioquia (2005-2009), miem- la lectura directa que hacen los bro del consejo editorial de la escritores del momento frente a Trabajar con estos autores Revista Universidad de An- los fenómenos de las guerrillas, que no hacen parte del gran tioquia (2004-2009), profesor el paramilitarismo y el narco- mercado editorial es también e investigador de la literatura tráfico en la primera década del una forma de apoyar la cul- vinculado a la misma univer- siglo XXI. tura, de ejercer una resisten- sidad desde el 2002 y profesor cia social y un voto de con- invitado de literatura latinoa- fianza en obras cuyo valor De igual manera, la relación estético está por encima de mericana en las universidades de Montoya con las editoria- cualquier asunto comercial. de la Sorbonne Novelle-Paris 3 les tiene algunas aristas. En un Estos libros revelan muchas (2011) y la Universidad Mar de comienzo, sus primeros libros aristas de nuestro mundo que Plata de Argentina (2011). Esta fueron cuentos publicados con se expresan a través de la li- participación le permite estable- el propio bolsillo y en asocia- teratura, el periodismo y el cer relaciones con otros agentes ción con un grupo de escritores ensayo” […]. Sobre Los de- de la institución literaria en Co- latinoamericanos emergentes rrotados, de Pablo Montoya, hay que decir que es un libro lombia y fuera de ella. que lograron encontrarse en Pa- que llegó a nuestras manos rís. Posteriormente, en el 2002, casi limpio. Pablo es muy Este proceso de emergencia lle- regresa a Colombia y distribuye cuidadoso en su oficio. Quizá va implícito “la manera como el su libro Lejos de Roma, en edi- es precisamente ese tiempo autor define su originalidad res- toriales como Norma, Planeta, en que aparentemente estuvo pecto de otros autores ya sean Tusquets, Alfaguara y algunas en la sombra él que le favo- del pasado o del presente” (Za- editoriales de Argentina, pero reció para refinar su creación pata, 2011), es decir, la manera fue rechazada; finalmente, la estética en sus obras, factores como se presenta la oposición al acepta la editorial Alfaguara y que continúan siendo funda- movimiento literario estableci- la publica en el 2008. Montoya mentales en sus publicacio- nes (Donadío, entrevista en do que tiene acumulado capital envía sus posteriores originales simbólico, ya que beneficia al Castaño Guzmán, 06 de ene- a Alfaguara, pero sin una expli- ro de 2017). escritor o al grupo de escritores cación directa eran rechazados, emergente. Pablo Montoya en la esto debido al desconocimiento

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Los libros de cuentos El beso poder simbólico a su figura y blo Montoya, con veinte años de la noche y Adiós a los pró- a su obra, encauzar su objetivo de edad, comienza a ganar re- ceres, los aceptó Conrado Zu- de obtener una posición reco- conocimientos literarios en los luaga, editor de la editorial nocida dentro del campo litera- diferentes premios de cuento y Panamericana, en el año 2010; rio, y optando por una toma de convocatorias de investigación de él afirma Montoya: “Creyó posición que le otorgara auto- literaria, estos son: Premio na- en mis escritos y decidió publi- nomía, asumió un esquema de cional de cuento en 1993 “Ger- carlos” (Montoya, entrevista en representación simbólico que mán Vargas”, Premio Autores Detectives Salvajes, 05 de julio atendiera a temas contundentes Antioqueños en el año 2000, de 2016). El beso de la noche dentro de la sociedad colombia- Premio en modalidad de cuen- lo publica también Alberto Ra- na pero que además estuviera to Alcaldía de Medellín 2005, mírez en en el soportado en una producción Beca de Creación Alcaldía de mismo año, pero no publica Los estética altamente elaborada, Medellín en cuento 2007, Beca derrotados por el registro de desde el punto de vista literario. de investigación literaria Minis- ventas tan bajo. Vuelve a Sílaba El proceso de reconocimiento terio de cultura 2008, Beca de y reedita estos tres libros. In- de Pablo fue lento, en una for- creación literaria Alcaldía de cluso pensó en editar allí Tríp- ma de crescendo, afianzándose Medellín en Novela 2012. Los tico de la Infamia, pero en un mediante la continua búsqueda reconocimientos otorgados por encuentro con Gabriel Iriarte, de oportunidad para ser publi- entidades oficiales2 afianzan su editor de Random House, este cado en periódicos, su insis- legitimación como autor den- le apuesta al texto y lo publica tencia en enviar sus escritos a tro de la institución literaria en el 2014. diferentes revistas académicas colombiana, además de reafir- y editoriales, y concursos. A la mar su proceso de autonomía Reconocimiento vez, buscaba compaginar sus (cuidado de lo estético y no de temáticas con modelos clásicos la búsqueda de una fama de ín- Pablo decidió dejar la medicina y aprovechar la diversidad de dole comercial o económica). y la música para enfocar todo géneros literarios como poema, Desde 2012, Montoya eligió la su proceso creativo en la lite- ensayo, cuento, novela y crítica. editorial Sílaba (Medellín), de ratura: “Publiqué mis primeros carácter independiente, como cuentos en periódicos y revis- Las instancias de que cumplie- su casa de publicación, para no tas, gané mis primeros concur- ron una función determinante vincularse a las grandes edito- sos literarios. Eso me motivó a en la etapa de reconocimiento riales centradas en la literatura decidirme por la escritura. Imi- de este autor, le permitieron más comercial. taba a los autores que me gusta- legitimar un discurso autóno- ba” (Montoya, 05 de agosto de mo1. Los premios obtenidos El proceso de reconocimien- 2015). Conociendo el funciona- fueron de carácter académico to de un escritor en Colombia, miento de las instancias de legi- o de instituciones oficiales de que en la actualidad tiene cer- timación que podían adjudicar carácter nacional y cultural. Pa- ca de 25 concursos literarios3,

1 Para Dubois (2014), “cada una de las instancias puede representarse de manera esquemática, a partir de la jurisdicción que ejerce en un momento preciso de la trayectoria que le permite la entrada de una obra en la historia” (p.74), de modo que los premios funcionan como una acumulación progresiva de legitimación. 2 Los premios literarios y becas de investigación de carácter oficial tuvieron mayor presencia en el ámbito nacional a partir del Premio Nobel otorgado a Gabriel García Márquez, con una convocatoria más abierta a escritores de diferentes condi- ciones socio-económicas. 3 Según la página web Macondo Literario http://macondoliterario.blogspot.com.co/2017/02/premios-literario- en-colom- bia-2017.html, Premios Literarios en Colombia para el 2017, dónde se encuentran organizados por.

207 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 permite conocer nuevas voces se escribieron al respecto, que, to, erudito, donde el autor, sin en el ámbito nacional, pero con finalmente, agradecen por el es- amiguismos y haciendo gala frecuencia deja en el anonimato pacio que abre para la discusión de su amplia formación aca- a varios escritores. Para el caso en crítica literaria en Colombia: démica y su larga experiencia de Pablo, comienza su recono- intelectual y vital en Europa, dialoga sin contemplaciones Colombia ha tenido exce- cimiento en el ámbito regional, ni zalamerías con todas esas lentes críticos como Baldo- para luego abrirse al panorama obras que muestran la vitali- mero Sanín Cano, Ernesto nacional presentándose en dife- dad creativa colombiana del Volkening, Hernando Valen- rentes categorías de concursos y post- macondismo. (García, cia Goelkel, Antonio Curcio convocatorias. en Montoya, Pablo Montoya Altamar, Rafael Gutiérrez [Página web]). Girardot, R. H. Moreno Du- No solo en la creación literaria rán y Álvaro Pineda Botero, figura Montoya, también en la para sólo mencionar algu- El discurso literario de Pablo crítica literaria al publicar su nos, pero la frivolidad del Montoya frente a la crítica, es ensayo La novela histórica en medio ambiente cultural re- reconocido entonces por otro Colombia, 1988-2008: entre la ciente ha llevado al olvido metadiscurso. Esta relación en- pompa y el fracaso en el año sus aproximaciones, dejando tre autor de crítica y lector críti- 2009, haciendo una valoración el espacio al protagonismo co se consolida, en un momento crítica de las diferentes obras propagandístico de las edi- en que los críticos literarios co- toriales multinacionales que publicadas en un periodo de lombianos no iban más allá de inflan a dos o tres nombres Baldomero Sanín Cano, Rafael veinte años para presentar las y arrasan como un blitzkrieg tendencias dominantes como alemán con toda la otra pro- Gutiérrez Girardot, Hernando los temas de la Conquista, la ducción de los escritores Téllez y R.H. Moreno Durán. Colonia y el siglo XIX, en su colombianos. Por otro lado, El espacio para la polémica que gran mayoría. Para esa época, casi solitarios y quijotescos, abre Montoya frente a la críti- también publicó Pablo Mon- los críticos jóvenes actuales ca colombiana, constituye los toya La sed del ojo (2004) y deben ceñirse a los espacios mecanismos de reconocimien- otras novelas históricas. Entre cada vez más escasos para to, por medio de los cuales co- las novelas que figuran en su el análisis y sus trabajos se mienza a sentirse la voz de un pierden con rapidez en las ensayo, se encuentran obras de autor que pone en la palestra las hojas amarillentas de los pe- obras publicadas de autores que autores consagrados como El riódicos, los sitios internet o general en su laberinto (1989) las revistas confidenciales, al fueron aplaudidas por sus pares; de Gabriel García Márquez y carecer Colombia, a diferen- lo anterior se puede observar en Sinfonía desde el Nuevo Mun- cia de México, de la tradición artículos como “Tomás carras- do (1990) de Germán Espinosa, de recopilar en volúmenes quilla y los críticos colombia- La ceiba de la memoria (2007) las notas de esos entusiastas nos del siglo XX” (2008), pu- de Roberto Burgos Cantor, sin y marginales comentaristas blicado Revista de la Estudios olvidarse de novelas que son nuestros de las últimas dé- de Literatura Colombiana de promocionadas por grandes edi- cadas, que sería útil para ver la Universidad de Antioquia; claro entre la maraña. toriales y otras publicadas por “Fernando Vallejo: Demolicio- universidades o editoriales in- nes de un reaccionario” (2007), Por esta razón, el nuevo libro dependientes. Este ensayo abrió publicado en las revista Núme- de Pablo Montoya es saluda- de alguna manera un espacio ble porque se trata de un tra- ro; “Contornos de la crítica li- de “polémica crítica” como los bajo de largo aliento, serio, teraria en Colombia”, publicado señalan algunos artículos que mesurado, argumentado, jus- en la Revista Literatura: Teoría,

La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 208 La consagración del escritor Pablo Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia

Historia, Crítica de la Univer- de Estudios Latinoamericanos Durante estos 53 años de exis- sidad Nacional de Colombia y Rómulo Gallegos); fue creado tencia, han ganado cinco co- “La representación de la violen- en honor al gran novelista y po- lombianos el premio Rómulo cia en la reciente literatura co- lítico venezolano que vivió en- Gallegos: en 1972, Gabriel Gar- lombiana” (2000), publicado en tre 1884 y 1969, el 6 de agosto cía Márquez con su obra Cien la revista América Cahiers Du de 1964. Es considerado uno de años de soledad; en 1989, Ma- Criccla en Francia. los galardones más prestigiosos nuel Mejía Vallejo con su obra de la literatura hispanoameri- La casa de las dos palmas; en Consagración cana. En un comienzo fue cada el 2003, Fernando Vallejo con cinco años, pero desde 1987 es su obra El desbarrancadero; en En el caso de la consagración de bienal. El jurado estuvo confor- el 2009, William Ospina con su Pablo Montoya en el campo li- mado en un comienzo por 13 obra El país de la canela; y en terario, ocurren varias cosas que escritores con una trayectoria el 2015, Pablo Montoya con su llaman la atención. La primera consolidada, pero con el pasar obra Tríptico de la Infamia, una es que los espacios literarios de los años se fue reduciendo novela histórica en la cual mez- que lo consagran no son edito- hasta quedar en tres jurados, cla narradores y géneros litera- riales, aunque es innegable que incluido el ganador del año rios, y predomina el tono poé- la publicación de Tríptico de la anterior. Para el 2015, estuvo tico; de allí que, el autor insista infamia con Random House, es conformado por la venezola- en la importancia del proceso inseparable del premio otorga- na María Libertad Suárez, el de metaforización que contie- do por el gobierno venezolano, ecuatoriano Javier Váscones y ne su obra. Un autor maduro en pues fue la editorial la que en- el puertorriqueño su escritura, con veinte obras vió la novela al concurso. La se- (Ganador del Premio en el año publicadas, a quien la calidad gunda, es que sus obras no están 2014), quienes eligieron Trípti- literaria, creatividad y la di- enmarcadas en los temas de ac- co de la infamia como ‘el me- versificación de géneros le han tualidad que aborda la mayoría jor libro de habla castellana de interesado. La escritura de Tríp- de los autores colombianos. Y 2015’ dentro de 162 obras de tico de la infamia comienza con la tercera es su estilo particu- 17 países; según la información la Beca de creación que ganó lar de articular música, pintu- de los jurados, se presentaron de la Alcaldía de Medellín en ra, fotografía y literatura. Estos 60 novelas colombianas (entre 2012; luego, una beca en Ale- aspectos aportan el carácter de ellas, una de Piedad Bonnett mania que le permitió investigar construcción de una obra y de y otra deH. Abad Faciolince, en algunas ciudades de Europa; una trayectoria literaria autóno- ambas finalistas en el concur- para finalmente, ser publicada ma, es decir, sin dependencias so). Otros finalistas fueron el en el 2015 por la editorial Ran- (en demasía) del sector de gran costarricense Carlos Cortés con dom House. Gabriel Iriarte, el producción o de producción co- el libro Larga noche hacia mi editor, fue un gran apoyo para mercial del campo literario. madre, la chilena Diamela Eltit, Pablo, ya que debido al interés con su novela Fuerzas especia- que mostró en su libro, se dio La consagración de Pablo José les y el mexicano Dante Medina su posterior publicación en esta Montoya Campuzano llega con con Amor, cuídate de mí, escri- editorial reconocida, permitién- el Premio Internacional de no- tores con reconocidos en su país dole llegar a otros públicos. vela Rómulo Gallegos 2015 por por sus obras, estilo, trayectoria su obra Tríptico de la infamia. académica y formación (en el En el año siguiente, 2016, a El Premio Rómulo Gallegos lo exterior). sus 56 años recibió otro reco- organiza el CELARG (Centro nocimiento literario al ganarse

209 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 el Premio Iberoamericano de ciones estéticas y vivenciales Tríptico de la infamia, tiene Letras José Donoso (por toda opacadas por las exigencias el siguiente concepto del ju- su obra). Este premio es otorga- del mercado cultural. [...] Es rado: “Construye una fasci- do por la Universidad de Talca un maestro de la frase corta, nante, peculiar y polifónica en Chile desde el año 2001 a y de la descripción de sen- historia de los tiempos de la saciones y emociones. En la conquista de América, y al- la obra de un escritor en habla traza de las grandes figuras gunos de los singulares per- hispana y portuguesa con reco- de la escritura de América sonajes que tomaron parte de nocimientos dentro de la litera- Latina, nutre su tratamiento ella con una prosa cuidada tura. Es entregado en la Feria de temas nacionales con un y subyugante”. Este mismo del Libro de Talca cada año por generoso universalismo. Su premio fue otorgado a Ro- un jurado internacional con- escritura combina una des- drigo Burgos Cantor por su formado por un grupo de seis lumbrante erudición con un obra La ceiba de la memoria académicos y literatos de gran lenguaje depurado que esta- en el año 2009, al igual que trayectoria literaria; en el 2016, blece complicidades con el a con Blanco este grupo estuvo conformado lector. (Nitschack, en Utal- Nocturno en el 2012 y a Chi- ca.cl, 02 de septiembre de co Buarque en el 2013 con la por: Horst Nitschack, académi- 2016). obra Leche derramada.4 co de la U. de Chile, quien pre- sidió el jurado; Diana Kinger, Un tercer momento que De esta manera, tres instancias de la U. Federal Fluminense de acompaña la consagración de de indudable consagración en Brasil; Mónica Marinone, de la Pablo Montoya, es el Premio Latinoamérica otorgan la legiti- U. Nacional de la Plata, Argen- José María Arguedas tam- midad literaria a Pablo Monto- tina; Rory O´Bryen, de la U. de bién en el 2016, este premio, ya. No solo uno sino tres reco- Cambridge, de Reino Unido; y que desde el año 2000, Casa nocimientos en el transcurso de Raquel Arias, de la U. Autóno- de las Américas convoca con dos años aumentarán el grado una frecuencia anual en ho- ma de Madrid, España. Pablo es de reconocimiento no solo a ni- el primer colombiano en ganar menaje al escritor peruano que conformó el grupo de vel nacional y latinoamericano, este galardón; también lo han Casa de las Américas, con el sino también fuera de América recibido José Emilio Pacheco, fin de difundir literatura rele- Latina, pues a partir de estas Isabel Allende, Ricardo Piglia, vante denominada por la Casa distinciones se dispara la con- Javier Marías y Juan Villoro. como los ‘clásicos de hoy’. tratación de las traducciones de Los jurados de este reconoci- El jurado estuvo conformado la obra de Pablo Montoya. El miento concluyeron lo siguiente por Rey Andújar (República escritor desconocido (o conoci- respecto al escritor y su obra: Dominicana), Juan Cárde- do solo para unos cuantos lecto- nas (Colombia), Ana García res especializados) en su propio Tiene un carácter disruptivo Bergua (México), Ahmel país, de un momento a otro, es e innovador que no solo se Echeverría (Cuba). Este pre- reconocido en Colombia y fuera desvía de las corrientes de mio según Montoya le honra, de ella. la literatura colombiana de pues Arguedas es un autor a quien admira profundamente; las últimas dos décadas, sino Es importante insistir en la base que también ensancha el ima- recuerda de él la novela Los ríos profundos (1958). Este material de la obra construida ginario latinoamericano al por Pablo Montoya; si bien en- incorporar historias y tradi- premio otorgado a su obra

4 Es de aclarar que, en el momento en que Pablo gana el premio Casa de las Américas en Narrativa también lo obtuvo otro docente de la Universidad de Antioquia en el nivel de ensayo: Pedro Agudelo Rendón. Estos escritores que han surgido de las periferias, acuden a la academia como instancia de legitimación y privilegian la crítica académica para su reconocimien- to.

La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 210 La consagración del escritor Pablo Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia

tre 1996 y 2001 las obras de este hacia la consagración por parte mismo tiempo por la academia escritor son más producto de la de instancias de la región, res- y por los medios de comuni- autopublicación (ediciones pa- paldada por una obra que hace cación, en adelante, academia gadas de su “propio bolsillo”), evidente su defensa de una au- y mass media se separarían y es innegable que tras su vincu- tonomía ética y estética, y por la actuarían como instancias de le- lación como profesor de planta legitimación de instancias que, gitimación en ámbitos literarios en la Universidad de Antioquia, al provenir también del ámbito con distintos niveles de capital el escritor consigue una plata- académico, no hacen más que simbólico; a partir de ese mo- forma de independencia econó- ratificar esta autonomía como mento, el escritor debería deba- mica y de mayor capital simbó- una posición dominante dentro tirse entre ser reconocido por la 5 lico que le permitirá arriesgarse del campo literario . academia o por las editoriales y más fácilmente a publicar obras los medios masivos de comuni- que no buscan congraciarse con Relación de las etapas con las cación. En el caso de Montoya, las modas editoriales o con re- instancias de consagración el hecho de haber sido recono- conocimientos carentes de pres- cido primero por la academia y tigio literario. Estamos ante un Los procesos que se han abor- por la crítica literaria especia- escritor, docente, investigador dado respecto a la institución lizada, hace que el despliegue y crítico literario, quien se di- literaria6, hay que analizarlos en massmediático que sigue al ferencia así ostensiblemente de retrospectiva, pues la literatu- otorgamiento de los tres galar- los otros escritores en los cuales ra hispanoamericana del Boom prima la función de periodistas. dones no ponga en entredicho la dejó un legado a los escritores calidad estética de su obra.7 De posteriores. Estos escritores esta manera se comprueba que, La publicación de obras con obtuvieron sus reconocimien- editoriales universitarias e in- pese a que hoy las instancias tos a partir de la distinción del dependientes con algún grado de legitimación son diversas, valor estético y del compromi- de reconocimiento en el campo el respaldo de la academia y de so con la defensa de una posi- literario nacional, los premios y la crítica literaria especializada ción crítica frente a las formas distinciones del ámbito acadé- siguen siendo determinantes en mico, su trayectoria como aca- de violencia contra el territorio la consagración de un escritor; démico y la elección de un tema latinoamericano; esta herencia si bien esta puede provenir de que, desde un punto de vista crí- reaparece en el caso de Pablo la publicación en editoriales de tico, sintetiza la historia del sub- Montoya. Si en la época del gran prestigio o reconocimiento continente latinoamericano (la Boom, los escritores fueron literario, de premios editoriales Conquista) allanaron el camino reconocidos y consagrados al o de un despliegue en la prensa

5 Paula Marín, doctora en literatura, docente e investigadora en el área de la sociología de la literatura, escribiría en su artículo La sociología de literatura sobre el libro de Gisele Sapiro (2016) publicado por la revista La Palabra (2017), que no se puede desconocer que el mercado literario provee un espacio para reafirmar la autonomía pues le provee de una base económica, en el que los escritores luchan por creer en el valor de la literatura y del arte para la sociedad. 6 Dubois (2014) describe de la siguiente manera la dinámica de la institución basándose en la teoría de Pierre Bourdieu: Po- demos deducir hasta el momento tres mecanismos de la dinámica institucional. En primer lugar, diremos que el autor que entra en el campo literario y en su juego de concurrencia está obligado a adaptar su estrategia de emergencia a la relación que se establece entre su capital cultural y el conjunto estructurado de posiciones en el campo, propias de los agentes, los géneros y las instancias de consagración. (p. 48). 7 La trayectoria de Pablo Montoya continuará en un gran número de entrevistas e invitaciones que tendrá que aceptar aunque manifieste no querer figurar como una vedet. Sus compromisos con la editorial Random House y los premios otorgados que le permitieron salir de su anonimato, lo ponen como protagonista de diversos eventos culturales y de otras cuantas distin- ciones: miembro Correspondiente de la Academia de la Lengua el 21 de noviembre de 2016, Hijo Ilustre por la Alcaldía de Barrancabermeja e invitado a la Mesa por la Excelencia Educativa; participación en el Foro ‘SOS por el aire’ de la Universi- dad de Antioquia.

211 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 cultural, cuando así sucede pue- punto de apagarse, el arte es periferia de mi condición de de ponerse en duda más fácil- una de las maneras que exis- inmigrante latinoamericano mente, a falta del respaldo del ten para dignificar al hombre en Europa. Tal coyuntura la capital simbólico legítimo que en su capacidad de resisten- ha lanzado a unas zonas de solo parece otorgar la academia. cia y la más paradigmática silencio que me han parecido para mostrar su deterioro. ásperas pero también afortu- nadas. Distante de las ferias La herencia del boom en Pablo Y la verdad es que, aún sor- de las vanidades letradas, Montoya se percibe también prendido por este inmenso desdeñoso del poder cultural, en los discursos que ofreció al reconocimiento, debo ma- el ocultamiento me ha brinda- recibir los premios. En ellos, nifestar a los miembros del do la coraza de la autonomía. se identifica lo que plantea Du- jurado, al Celarg y a los ve- He escrito y seguiré hacién- bois: “La literatura exige del nezolanos mi entera gratitud. dolo con la conciencia de que escritor una inversión personal Su gesto, a la vez magnánimo escribir, como decía Albert total en ciertas ‘posturas’ (vo- y temerario, ya que se ha pre- Camus, es un acto solitario y solidario. Sabiendo que mi cación, llamado, compromiso) miado a un escritor comple- atalaya está sembrada en el que implican la identificación tamente desconocido en el panorama hispanoamericano, cotidiano ejercicio de la disi- y desempeño de un papel al in- me conmueve y me honra. dencia. Y teniendo en cuenta terior de la institución literaria” Y entiendo que el Rómulo que la única responsabilidad (Dubois, 2014, p. 48). La postu- Gallegos, el más prestigio- que tiene el escritor con sus ra asumida por Montoya se re- so en la narrativa en lengua lectores, es decir, cuando se laciona con su cuestionamiento española, se le ha otorgado sienta ante el azaroso vacío del papel de la literatura y de a un libro dueño de ciertas de la página en blanco, es la sociedad en América Latina; particularidades. Su fuerte trazar de la mejor manera la allí, ubicamos una función muy vínculo entre investigación escurridiza palabra. (Mon- toya, 2 de agosto de 2015 clara del escritor en la actuali- histórica e imaginativa re- [Fragmentos del discurso de dad, según lo plantea Montoya: creación del pasado. Su fac- tura estética que se la juega aceptación del Premio Ró- sin vacilaciones por los abra- mulo Gallegos]). ¿Por qué me he preocupado zos entre narración, ensayo y por tres pintores en cierta me- poesía. Un universo, en fin, Los fragmentos del discurso dida desconocidos? ¿Por qué, que ha bebido de Alejo Car- permiten entender la postura de en mis anteriores novelas, he pentier, Pablo Neruda y Ál- puesto como protagonistas a Pablo Montoya con relación a varo Mutis, mis maestros en la distancia con ´las vanidades un poeta romano libertino, los primeros años del apren- letradas´, que según el autor le a un fotógrafo francés ob- dizaje literario; y de Augusto sesionado por la desnudez Roa Bastos, Juan José Saer y brindan ´la coraza de la auto- humana y a un naturalista Manuel Mujica Láinez, otros nomía”. La novela histórica neogranadino extraviado en guías fundamentales de los que catapulta a Pablo Montoya las guerras de Independen- años de la madurez. hacia la consagración, Tríptico cia? La respuesta es sencilla: de la infamia, le permite legiti- ¿porque todos ellos intentan Mi obra, y así concluyo estas mar esta toma de posición. crear? los unos pinturas, el palabras, ha sido escrita des- otro poemas, el de más allá de hace más de veinte años daguerrotipos y el último Desde los otros desde una cierta periferia. herbarios- en medio de ámbi- La periferia que representan tos turbulentos y represivos. Los discursos literarios de la so- todas las ciudades colombia- Porque creo que, como una nas que no son Bogotá. La ciedad moderna han motivado a antorcha, que está siempre a

La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 212 La consagración del escritor Pablo Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia

sociólogos literarios como Ja- de la Rioja, la revista Persée de sabe cuál es el precio a pagar cques Dubois (1978), Domini- Francia o Aurora Boreal de Co- por ser escritor en Colombia que Maingueneau (1998, 2004) penhague). Las revistas anterio- y negarse a escribir sobre nar- y Jerome Meizoz (2007, 2011), res resaltan la labor de un autor cos y sicarios: la marginalidad a desarrollar un aparato con- cuyo fin es apostarle a la crea- (Maldonado, 7 de septiembre de ceptual para abordar el debate ción estética que enriquece con 2016). en torno a la construcción de una mirada innovadora las le- la figura autorial, pues en ella tras colombianas. Los artículos Por su parte, el periódico El no solo participa el autor, sino hacen referencia, por otro lado, País de España en su edición también agentes que confor- a las publicaciones hechas des- del 06 de junio de 2015, publica man, de una manera u otra, el de Tríptico de la infamia, como un artículo sobre Montoya con proceso de difusión y consagra- lo es Terceto (Random House el titular “El Rómulo Gallegos ción; entre estos, se encuentran 2016) y las reediciones de obras consagra al colombiano Pablo los editores, críticos, institucio- como Viajeros y Cuadernos de Montoya”, y en su contenido nes escolares y universitarias, París, y a la presentación de es- deja ver lo poco conocido que etc. Encontrar las instancias que tas obras y la obra en general de es el autor para los españoles: gestionan el discurso de Pablo Pablo exaltando la influencia de “Es un autor poco conocido Montoya, es encontrar a un au- las artes en su narrativa. En los porque no está inscrito en la tor que construye una distinción periódicos, se puede rastrear su tradición literaria vinculada al frente a otros autores dentro de presencia desde 2008 cuando problema de la violencia, muy la institución de la literatura co- comienza a publicar novela (el cultivada por los escritores de lombiana. Pero, ¿qué agentes género literario que le ha valido su país” (Sánchez, 06 de junio acompañan la imagen y postu- su consagración y al que aspira- de 2015). ra que Pablo ha logrado esta- ba a llegar desde la escritura de blecer? ¿Cómo es reconocido sus primeros cuentos y poemas) Publicaciones sobre Montoya en los medios? ¿Le reconocen y ha sido titular de los periódi- son más frecuentes en revistas como él quiere ser reconocido? cos de distribución nacional, académicas y especializadas. regional y periódicos interna- La crítica literaria colombiana Las referencias a Pablo Monto- cionales en Latinoamérica y Es- se acerca de manera respetuosa ya en los medios escritos, han paña, luego del premio Rómulo a sus obras. En el ámbito aca- ido en aumento desde el mo- Gallegos; todos coinciden en démico, ha sido bien recibido. mento en que gana el Premio registrar la noticia de un escri- La Universidad de Antioquia Rómulo Gallegos: artículos en tor “que hasta ahora permanecía ha sido la que más ha publica- revistas académicas (Revistas en el anonimato” y en resaltarlo do artículos de investigación de literatura de la Universidad como “autor de culto”, alejado sobre sus obras, que van desde de Antioquía, La Universi- de la ‘frivolidad’ de la literatura el tópico literario colombiano, dad Nacional de Colombia, La más comercial colombiana. pasando por la música, hasta la UPTC de Tunja en la revista La representación de la violencia. Palabra, La Pontificia Universi- En España, el diario El Español dad Javeriana, La Universidad publicó un artículo titulado “Pa- Escritores colombianos como de Los Andes), en revistas lite- blo Montoya, el mejor escritor Juan Manuel Roca, Piedad rarias (Número, Arcadia, Litera- colombiano que España despre- Bonnet, Roberto Burgos Cantor riedad, Libros y letras, Común cia”, en el cual se encuentra la y Julio Paredes, han hecho va- Presencia) y en algunas revistas siguiente entradilla: Pablo Mon- loraciones de sus obras. Los dos internacionales (Universidad toya (Barrancabermeja, 1963) últimos aparecen en las con-

213 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 traportadas de su libro El beso profundizan en contextualizar autónomo, en términos estéti- de la noche con las siguientes los personajes, artistas y fotó- cos e ideológicos, luego de casi apreciaciones: grafos, que fueron la fuente de veinte años de trayectoria y de Pablo para su creación. Los au- veinte obras publicadas. Así, Este libro de cuentos, de cui- tores coinciden en esa mirada Montoya establece una nueva dado rigor en el lenguaje, se al pasado desde la perspectiva postura de autor consagrado en acerca a las precisiones abier- crítica de sus narraciones y el Colombia, en el campo literario tas de la poesía y le ofrece al cambio de mirada del artista reciente: un escritor académi- lector la inmersión en dos europeo sobre los habitantes co8. mundos cuya semejanza sur- del continente americano y los ge de la extrañeza, quizá de lo insólito pero posible, algo pueblos aborígenes. Nótese Esta forma en la que separa su destella después de los logros además, que en los testimo- creación literaria de los otros autónomos de cada cuento. nios de estos autores, la exal- escritores (y sus premios de los Roberto Burgos Cantor. tación de la “prosa impecable” de los otros), ha sido replicada de Pablo Montoya, sus “logros en la crítica de divulgación cul- En los cuentos de El beso de autónomos” y las “cualidades tural y se ha empezado a difun- la noche de Pablo Montoya indiscutibles de la una verda- dir hasta el punto de encontrar el lector se encontrará con dera literatura de autor”, todas varios artículos con las mismas una voz poética inquietante son características, pues, de una referencias al autor colombiano y muy difícil de olvidar. Con literatura autónoma, distanciada consagrado desde el principio las cualidades indiscutibles de las modas y del interés eco- autónomo de la literatura: “En de la una verdadera literatura nómico dentro de la dinámica de autor, los presentes relatos el medio literario colombiano nos llevan de la mano de una de la institución literaria. desde el realismo mágico o ur- retórica impecable, no solo a bano, en medio del realismo su- los límites de la realidad co- Respecto a su producción en- cio, me parece que puedo apos- tidiana sino también a los de sayística, también ha sido bien tarle a propuestas más afincadas una fantasía con personajes recibido. Poco a poco, Pablo en lo artístico. En mis obras, que estremecen la imagina- Montoya comienza a ser citado invito al lector a adentrarse en ción de cualquiera. Julio Pa- por la academia y luego consa- un mundo en el que debe elegir redes. grado también por ella (en el si entra o no.” (Montoya, Entre- ámbito internacional). Dentro vista en Hoyos, 05 de julio de Estos autores encuentran en el del modelo actual del escri- 2016). escritor Pablo Montoya, una ri- tor-periodista que parece impe- queza literaria desde el mismo rar en el campo literario, según La consagración de Pablo Mon- tratamiento de los temas de las la percepción de muchos y del toya le abre el espacio en la obras, también se han intere- mismo Montoya, este logra Academia Colombiana de la sado por los personajes en sus ‘imponer’ su imagen de autor Lengua como miembro Corres- novelas históricas y sus críticas

8 Juan Zapata hace aproximaciones a la literatura colombiana y a la postura del autor en su texto La invención del autor. Nuevas aproximaciones al estudio sociológico y discursivo de la figura autorial: “Un poeta maldito en Colombia” El caso de José Asunción Silva”. Zapata analiza la postura del escritor maldito con todos su tópicos (la miseria, el desinterés, la perse- cución, la locura, el consumo de estimulantes) y escenas que construyen los mismos autores (el periplo bohemio en París, la visita al gran escritor, el retorno al país de origen, la consolidación de cenáculos vanguardistas y la creación de revistas, la agonía solitaria y el suicidio), ambos elementos esenciales en la batalla por la autonomización de las literaturas nacionales. Sin embargo, el mismo Montoya afirmaba (en la misma entrevista) el hecho de que eran las novelas más comerciales las que permitían que Random House pudiera publicar las de autores que no vendían tanto, es decir, confirmaba que la lógica literatura comercial vs. literatura autónoma era necesaria para el ‘buen’ funcionamiento del campo literario.

La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 214 La consagración del escritor Pablo Montoya Campuzano. Un acercamiento a la institución literaria en Colombia

pondiente. Su discurso fue pu- les públicos son interesantes literario está obligado a introdu- blicado por diferentes medios porque forma parte de la vida cir ese tercero que es la institu- de comunicación: “Español: del escritor, pero la obra lite- ción, de contestar esas unidades Lengua mía”. Este hecho le raria para que se consagre ne- ilusoriamente compactas que reafirma en el campo literario cesita la aceptación de varias son el creador o la sociedad: no generaciones de escritores autónomo; es un reconocimien- […]. Yo no sé qué va a pasar. con el fin de debilitar la parte de to más hecho por una instancia Cuántos escritores del tiempo la creación misma en nombre consagradora, proveniente (al pasado fueron aclamados y de los determinismos sociales, igual que los otros galardones) hoy no se sabe nada de ellos, sino con el fin de reintegrar la del ámbito académico, de gran no los han releído porque se obra a los territorios, a los ri- peso aún en la institución lite- marchitó su obra9. tos, a los roles que la hacen po- raria colombiana. Este recono- sible y que ella hace posibles” cimiento se otorga a filósofos, Lo dicho hasta aquí no significa (Maingueneau en Zapata, 2014, políticos, literatos y personajes que la trayectoria de Montoya p. 54). influyentes en la vida cultural lo haya llevado de manera ló- de Colombia; la Academia fue gica a la consagración, pero sí A la par que la institución li- fundada a finales del siglo XIX que su persistencia en el cam- teraria funciona cada vez más por reconocidos filólogos y lite- po literario por veinte años, la con una lógica manejada por ratos, como José María Verga- elección de los géneros litera- las grandes editoriales y por los ra y Vergara, Miguel Antonio rios que aparecen en sus obras, grandes grupos dueños de los Caro, José Manuel Marroquín, la elección de sus temáticas y medios de comunicación, sigue Rufino José Cuervo, entre otros. de su estilo, fueron las apuestas existiendo otra lógica ‘subterrá- de su escritura, acompañadas de nea’, menos visible, percepti- Desde la primera publicación a su decisión de presentar su obra ble a través de las revistas que nivel nacional que aparece so- a ciertos concursos y sus origi- están en las provincias, de las bre la obra de Pablo Montoya nales a ciertas editoriales, y de pequeñas editoriales que publi- (Magazín Dominical de El Es- participar en ciertos eventos li- can poesía, cuento, ensayo, en pectador, 1998), es posible en- terarios que lo fueron dotando las universidades, un universo tender cómo un grupo de escri- de un capital simbólico signi- literario palpitante del cual se tores, que no son reconocidos ficativo. La publicación de su conoce muy poco siempre y en el ámbito nacional pero sí re- obra en editoriales como Alfa- que va gestando, poco a poco, gional y académico, lectores de guara, Panamericana y Random propuestas, autores, obras que las publicaciones de Montoya, House, y el otorgamiento de los continúan haciéndole el necesa- resaltan la erudición, el cuidado premios Gallegos, Donoso y rio contrapeso a esa otra lógica por la estética, la hibridación de Arguedas, llegaron como una más comercial. El caso de Mon- géneros en sus composiciones manera de extender su público toya así lo demuestra. y la diversidad temática que lector y su reconocimiento, en acompaña su obra al finalizar el un momento en el que ese ca- Por supuesto, lo expuesto en siglo XX. pital simbólico construido no este artículo también deja va- podía ser puesto en duda. Así, rias puertas abiertas para seguir La verdadera consagración es pues, se demuestra que, como indagando en el caso de Pablo la que da el tiempo al escri- lo plantea Dominique Maingue- Montoya y en el de otros es- tor. Esos asuntos comercia- neau, “Un análisis del discurso critores colombianos contem-

9 En entrevista personal con la autora (abril de 2017). Pablo aclara cuál es el concepto de consagración para él mismo.

215 La Palabra No. 32 Tunja, enero - junio de 2018, ISSN 0121-8530 pp. 201-218 poráneos. Esta es, apenas, una el proceso literario de creación el subgénero de la novela his- introducción que permitirá más en este autor; asimismo, sería tórica, como Juan Gabriel Vás- adelante profundizar en el aná- necesario poner a Montoya en quez y William Ospina, solo por lisis de obras literarias especí- relación con otros escritores del mencionar a los más conocidos. ficas de Pablo Montoya, con momento, sobre todo, aquellos el fin observar detalladamente que hoy también se instalan en

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