DE . SECRETITOS Y “-Ella lo idolatró y Él la

. adoraba...

S A Y O B A R A L C -¿Se casaron al fin? - No, señor, Ella se casó con otro. -¿Y murió de sufrir? -No, señor, de un aborto. - ¿Y Él, el pobre, puso a su vida fin? - No, señor, se casó seis meses antes del matrimonio de Ella, y es feliz

José Miguel Nieto Olivar DE SECRETITOS Y CLARABOYAS: SEXUALIDAD Y DERECHOS EN LA LITERATURA DE AUTOREPRESENTACIÓN CON JÓVENES EN CONTEXTOS DE DESPLAZAMIENTO. Barrio La Reliquia, Villavicencio.

TRABAJO DE GRADO

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA MAESTRÍA DE LITERATURA

FONDO DE POBLACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS –COLOMBIA- PROYECTO “ATENCIÓN A LAS CONDICIONES DE GÉNERO Y SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA A LA POBLACIÓN DESPLAZADA POR LA VIOLENCIA, ÉNFASIS EN ADOLESCENTES.”

José Miguel Nieto Olivar Aspirante al título de Maestría Asesor en comunicación educativa en ssr, UNFPA (2003-2005). Directora: Betty Osorio PhD (PUJ) Asesores: Maryluz Mejía Gómez (UNFPA) Carlos Iván Pacheco Sánchez (UNFPA) Carol Pavajeu Delgado Apoyo de campo: Alicia Hazlytt Rivera (Nacatsi)

Bogotá, noviembre de 2005 “Confío en que el librito sea también útil para quien cree en la necesidad de que la imaginación tenga su puesto en la enseñanza; para quien tiene fe en la creatividad infantil; para quien sabe qué virtud liberadora puede tener la palabra. ‘Todos los usos de la palabra para todos’, me parece un lema bueno y con agradable sonido democrático. No para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo.” Gianni Rodari. “Preliminares.” Gramática de la Fantasía.

Porque hay peleas que ya nunca voy a dejar de tener, que serán cada vez más sólidas y radicales. La lucha por los derechos y el gozo, es tal vez la mayor de todas. AGRADECIMIENTOS 6

1. DE MIS RAZONES, CREENCIAS Y ESPERANZAS –pa’ comenzar- 7 MIS ESPERANZAS Y CREENCIAS 8 UN ALGUITO SOBRE LAS RAZONES 13

2. DE ARGUMENTOS, ESCALERAS, BURBUJAS Y PAÍSES –el campo de batalla de los conceptos y los contextos- 18 ESPEJOS PRIVADOS Y PANTALLAS DE LUZ: LA LITERATURA DE AUTOREPRESENTACIÓN 19 ENTRE MI SUDOR Y LAS SONRISAS DE TOD@S: LA SEXUALIDAD Y LOS DERECHOS HUMANOS (DHSR) 28 Mis sudores nocturnos 29 Bandera, chaleco y sigla pa’ las sonrisas de tod@s (DHSR) 31 ENTRE PAPELES BUROCRÁTICOS, TABLEROS DE JUEGO Y TRIPAS PALPITANTES: PROYECTO MARCO, CONTEXTO Y PARTICIPANTES 34 Burocracia de esperanzas extendidas: salud sexual y reproductiva en contextos de desplazamiento. 34 De Villavicencio a la Reliquia: el tablero donde esta vida se juega 35 Las tripas de quienes jugamos y palpitamos: el grupo SEXU-JOVEN y sus amig@s. 37

3. DE CÓMO FUERON GESTADOS Y DE CÓMO SE JUGUETEAN LOS SECRETITOS: -descripción metodológica, según dicen- 40 DE CÓMO FUERON GESTADOS: LOS TALLERES 42 El espejo del espejero: reflex sobre el pa’ qué del taller 42 Soplando, soplando… estirar y dejar enfriar. 43 Secretitos de hermanos mayores: los textos de provocación 49 DE CÓMO SE JUGUETEAN: EL CUERPO Y LOS MASAJES 53 El Cuerpo 53 Los Masajes. 57

4. Y EN FIN... DE SECRETITOS A CLARABOYAS –reconstrucción de la experiencia a partir de los textos y su análisis- 60 SECRETITOS QUE SON ESPEJOS 61 Espejos para la intimidad 62 Fiesta de espejos 79 CUANDO LOS ESPEJOS SON PANTALLAS 103 Pronunciaciones 104 Reclamos 108 Caricias 112 DE SECRETITOS A CLARABOYAS (CONCLUSIONES) 115 Claraboyas para respirar 116 Claraboyas para dejarse ver 125

5. LA LITERATURA Y LA VIDA –manifiesto y beso de despedida- 129

6. Taller para la exploración y reconocimiento de subjetividades alrededor de la sexualidad y los derechos, con el uso de la literatura. 133 1. OBJETIVOS 133 2. METODOLOGÍA PREVISTA 134 3. MEMORIA DEL TALLER (POR SESIONES) 136

BIBLIOGRAFÍA LITERARIA 152

BIBLIOGRAFÍA 153 D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

AGRADECIMIENTOS Agradecer y dedicar son insectos que vuelan siempre juntos sobre mi cabeza. Dedicar es agradecer y reconocer la existencia de alguien en mí… la fusión en el corazón, en la memoria, en la empanada que se mastica y en los mares que falten por zozobrar. Es sersiendo-somos. Entonces, por supuesto, a los y las jóvenes que participaron en este proyecto. Autores de textos y de vidas más grandes que los textos y las vidas… y a través de ellos y a los jóvenes con los que, en distintos niveles (desde San Pablo hasta el Politécnico), he compartido horas, sonrisas y secretos. Por su fe y su dedicación, por la confianza, por la fuerza incontenible que traspiran y que me han compartido, por su cariño… A los y las jóvenes y adultos desplazados que viven en condiciones de miseria y exclusión en este país, por esa extraña e infranqueable esperanza que los habita y que he aprendido a conocer en estos años… A la gente del UNFPA –Colombia, especialmente a Carlos Iván y a Mary, por todo el amor, la sabiduría y la fe de los años juntos. A Lucy y a Mrs. K por el respaldo sólido que me ofrecieron para realizar el trabajo de campo. 6 A Cristo… (jujujuju) Figueroa, por hacer de la Maestría un mundo flexible, participativo, tranquilo, con oportunidades para la creación y el juego… porque sí, Cristo, así es que se aprende, se crea y se construye teoría. A Alicia, Patricia y Gladis, de Nacatsi, también por la fe, la amistad ilimitada, el tiempo, los consejos. Por ese cariño tan plagado de joropo, mamona y llano… las noches de cerveza y felicidad en Villavo o Acacías. También, a través de ellas, a las mujeres oenegeras y obeceras (OBC’s, organizaciones de base comunitaria) con las que he trabajado, que tanto luchan por el placer, por la tranquilidad de sus cuerpos y por la equidad en sus relaciones y en sus honorarios. Derechos. A Minnie (María Cristina Olivar) por el tiempo navideño que destinó para ayudarme con la diagramación de estas páginas. A las mujeres que me aman… y que por supuesto amo. A mi mamá (por el respaldo, la casa, los mimos, el amor frentero, las discusiones y la comida), a Doris (por su amor mágico que todo lo acompaña), a Gloria L y todas las profes, enfermeras y odontólogas de Villavicencio –incluye a Jaime Ch- (por alimentarme el ego y enseñarme la fuerza y el amor adultos), a ClaritaV (por el gozo, las carcajadas, la lucidez impresionante y la compañía en las horas dolorosas y complicadas), a Carol -mi flaca- (por su infinita coherencia ética y política, por las mariposas en el estómago, por el amor eterno, los regaños y la claridad de su pensamiento), y por supuesto a LinaX –compañera de sueños y jugueteos- (por la siempre creciente capacidad de placer, de aprendizaje y de creación… por su amor brutal, por su compañía y consejos durante el trabajo de campo, la fascinación por la literatura, el arte y el erotismo vital y orgánico). A la Bocachica Gozoza: juego, esperanza, compañía y luz en tiempos de tanta tanta oscuridad. ¡Que sea éste un bocado para tu crecimiento! A Betty: mujer encantadora, propulsora de luchas, de invenciones y de locuras. 1 S A I C N E E R C una cancióndebrazosabiertos de corazonesesperanzados...

“...y voy escribirte

una canción de brazos abiertos “...y voyescribirte

de corazones esperanzados... E S P E R A N Z A S S A Z N A R E P S E S E N O Z A R D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

1. DE MIS RAZONES, CREENCIAS Y ESPERANZAS –pa’ comenzar-

“...y voy escribirte una canción de brazos abiertos de corazones esperanzados...” Presuntos Implicados1. Flores

MIS ESPERANZAS Y CREENCIAS En momentos como éste, en el que llevo más de una hora frente al computador saltando entre el msn, el Kaza-lite y la carpeta que se llama “tesis” sin poder escribir una insignificante letra que tenga sentido, me pregunto en qué momento decidí meterme en estas... ¿Por qué no un simple estudio bibliotecario comparado de dos obras de los nuevos escritores colombianos? ¿O la lectura desde la perspectiva de derechos sexuales y equidad de género que tanto quiero hacerle a Gabo, para encontrarlo de frente con la tradición reaccionaria? Pero la pregunta va más allá, atraviesa la frontera temática y llega al hecho mismo de hacer una tesis. ¿Para qué? Oh, el culto de los académicos, la misa irresistible y la alabanza a tu capacidad. Debería estar escribiendo un cuentito sencillo 8 y divertido en este momento. Lo cual tampoco sería cotidianamente divertido. Se trata entonces de develar el sentido.

Entonces, parafraseando al buen Julio Cortázar de cronopios y famas, descubro que “trabajo desde hace años en el UNFPA y otros organismos internacionales, pese a lo cual conservo algún sentido del humor y especialmente una notable capacidad de abstracción.” Y el uso de la palabra pese es perfecto. Siento que, o bien he logrado escapar a tentáculos fortísimos que en mi vida adulta he seducido y me han acogido dulcemente, o todos ellos me han atrapado y ahora somos un ser mutante bastante amorfo. El caso es que es éste, exactamente, el trabajo que más hubiera querido hacer. Ninguno otro. La posibilidad de mediar entre la rigidez creativa y la maleabilidad política de la cooperación internacional, el enfermizo ejercicio de leer los contextos políticos y sociales que hacemos los que trabajamos en temas de conflicto armado y derechos humanos, la muy autista obsesión académica de los literatos, y la facilidad de abstracción de los escritores, a veces lindante con la ingenuidad. Entonces, me dedico desde hace años a la literatura y otros juegos deslumbrantes, pese a lo cual conservo algún sentido del pragmatismo y especialmente una notable capacidad de realidad. ¿Y la tesis para qué?

Dicho esto, y en función del pragmatismo mencionado, no tengo más remedio que comenzar desde las esperanzas, aceptada droga alucinógena contra la depresión. Que además fueron ellas las que generaron este trabajo. Antes, una miradita alrededor que no pretende ser objetiva.

1 Grupo de pop español. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

En el momento en el que este documento se escribe (2005), Colombia pasa por un momento terrible en su historia. No sé si el más, pero es terrible. El conflicto armado sigue en aumento y toma cada vez formas más bárbaras que la sociedad civil, lejos de rechazar, va aceptando, alimentando, reEligiendo y tomando como suyas. Los grupos paramilitares, con complacencia del estado, extienden un control cerrado y excluyente en la mayoría de cabeceras municipales del país. Las guerrillas se esconden, diluyen o asumen métodos de guerra iguales de bárbaros a los de sus enemigos. El fenómeno del desplazamiento, objetivo de la guerra, sigue creciendo de manera angustiante mientras las cifras oficiales disminuyen. La colonización de tierras para los megaproyectos (carreteras, palma, ganadería extensiva, etc.) implica la colonización de las subjetividades y de los cuerpos. La apertura sexual ha resultado aquí en abandono pleno y en restricción cerrada: o se deja a los pobres reproducir y morir –en ambos casos abrumados por la culpa-, o se asesina a los infectados y se esteriliza a las mujeres, siempre y cuando sean pobres. Se llenan de ausencias grotescas y divertidas los medios de comunicación, se embriagan de conveniencias los artistas para ser reconocidos, se eliminan las resistencias con motosierra, aguardiente o juanes. Y, tal vez, nunca la industria editorial colombiana había tenido autores tan medianos y tan ingenuos frente a la guerra y la miseria (¿complacientes?). Doloroso clima de individualidad masificada, 9 de posmodernidad trasnochada, de comodidad y ausencia de real creatividad.

Entonces surgen las esperanzas que llenan de sentido los renglones y horas gastadas. Creo que el arte y la literatura deben jugar un papel protagónico en la transformación de las realidades subjetivas y objetivas que marcan las infelicidades de las personas. Antídoto anhelado contra la obediencia. No entiendo el arte por el arte más allá de un ejercicio de descanso y práctica de oficio, ni mucho menos la creación literaria, artística, complaciente con las estéticas de mercado y con las formas de poder autoritario que rigen el universo social del que surgen.

El espíritu del artista, si tal cosa existiera, debe ser capaz siempre de alimentar la fuerza de las oposiciones, de la creatividad práctica, de la ética, de la inteligencia y la sensibilidad, de la posibilidad de la libertad, de la vida humana. Pero que no se entienda esto como un culto al artista. Lugar lejano y absurdo para este trabajo. El “espíritu del artista” no puede ser excluido tampoco de las estructuras sociales de las que emerge, pero cada vez más debe luchar contra ellas (es inevitable recordar a Pablo Picasso, con su Guernica decidido contra la violencia de la guerra y de los bombardeos franquistas, pero destructor impasible de la tranquilidad emocional de las mujeres que lo rodeaban, o a Paul Gauguin y su genio creativo, liberador, rebelde contra la obediencia de la época, pero convertido él mismo en vector de transmisión de la sífilis entre las muchachitas tahitianas –reproducción de la colonia vertical-, y el ya nombrado Cortázar de Rayuela que se sale de todas las casillas excepto de la de su rígida, ilustrada y repugnante masculinidad... y así, siempre así). Ese artista, al que me refiero, no es otra persona que un cualquiera (como yo o usted, lector/a) que tiene la oportunidad de observar, expresar y reCrear la vida desde un otro lugar. El que Gianni Rodari identifica claramente como un no-esclavo en el textículo que inaugura este documento. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Una literatura cotidiana, abierta, franca, pública cada vez más, que nos cuente la vida del país complejo, que no sea eco de noticieros ni emisoras oficiales. Una literatura en Jla que importe un poco menos la figura del autor-obra y pesen más las voces múltiples y disonantes que la escribieron y las que la leen esta noche.

Creo en el buen sexo. En la sexualidad sin que nos joda. En el derecho a decidir sobre nuestro cuerpo sin que nadie nos imponga sus deseos. Creo en el gozo como concreción máxima de los derechos humanos. Que el gozo sea para todos sin exclusiones y sin que le abra las piernas al abuso. He tenido que ver en muchas ocasiones y en lugares diversos, los destrozos sobre el cuerpo y la sexualidad como una estrategia de guerra o un mecanismo de dominación no necesariamente conciente; en ambos casos, una destrucción de la dignidad humana. Me he vuelto testigo, por oficio, de los insoportables silencios que nos echamos al hombro: los abusos sistemáticos, los malos polvos, los golpes paternales, las traiciones asesinas, los deseos enconados como acné, las eyaculaciones precoces, los abortos clandestinos... Y así mismo sé bien del poder infinito de la sexualidad libre y tranquila, de las palabras que fluyen y limpian el alma, de las sonrisas francas de la docente el lunes por la mañana si durante el fin de semana los gemidos llegaron al cielo, de la solidaridad sin peros del hermano mayor 10 que protege a su hermanita del hambre de algún señor, de las palabras certeras de aquella persona que ha decidido... lo que haya decidido.

Me gusta pensar que es mejor crecer sin miedos a recoger el jabón, a quedarse solita en la casa, a tener otra vez las pesadillas vívidas del acoso; mejor llorar cuando uno se pega que tragarse el dolor, mejor no querer nunca romperle a alguien la nariz, peor entregarle la vida, la fe y la piel a alguien que ni siquiera sabe qué hacer con las de él, peor no decir dónde y cómo nos gustan los besos y las caricias. Sé, porque lo conozco más allá de los libros, que una buena relación con nuestros propios cuerpos nos cambia la vida, que el conocimiento y validación del otro/a y su sexualidad, como humano/a, permite entablar relaciones un poco más justas y tranquilas. De malas historias está llena nuestra sexualidad... los cuerpos colombianos, maltrechos, reducidos, torpes hasta el cansancio: difícil sonreír.

Ya he dejado abandonado el msn, alguna amante virtual, a propósito de placeres autoconcedidos. Las esperanzas son más fuertes, bullen en el centro del estómago, hacen siempre que las palabras sean insuficientes, dan luz... y profundas tristezas. Hasta soy capaz de saltarle por encima a un terrible dolor de amor que en este justo momento desgarra con saña el tórax…

Creo también en la fuerza vital e irracional de los y las jóvenes. No les rindo culto. Sólo creo en su firme, intuitiva, convicción de no dejar que la vida los arrolle. No hablo, por supuesto, de los jóvenes como un todo ni mucho menos de los jóvenes de escarapela, y sé que no todos los jóvenes del país tienen que luchar para mantenerse en pie. Los jóvenes que alimentan este trabajo, que me habitan, son los hombres y mujeres entre 14 y 19 años que viven en contextos de desplazamiento en nuestro país. Quiere decir D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

esto, personas que comienzan a tener la oportunidad de tomar decisiones sobre su vida y su sexualidad en medio de niveles variables de abandono del mundo adulto y, por supuesto, en condiciones de pobreza extrema. Personas que han conocido los lados más oscuros de este país desde antes de saber qué significa la palabra oscuro. Víctimas absolutas de muchas formas de violencia, como lo fueron sus padres y madres, pero que están en el filo del escalón que los conduce a ser, también, victimarios.

De ellos creo en la fuerza que hacen constantemente en sus piernas para seguir caminando a pesar del mundo todo que se hace obstáculo para su autonomía, su felicidad, sus posibilidades de disfrutar los más básicos derechos. Sin embargo, su corazón es tormenta en llamas, fuerza incontenible de gladiadores luchando contra sus propias limitaciones, contra mil leones y emperadores (la pelea final de Máximo en la película El Gladiador) ávidos de su sangre. Frágiles ante la fuerza de la costumbre, ante el tiempo, ante el infinito abandono y, sobretodo, ante el hambre. La esperanza acá consiste, al mismo tiempo, en la conciencia del deseo del gozo tranquilo que existe en ellos y en ellas, y en la potencia que pequeñas chispas de posibilidad tienen para su vida. Razones prácticas.

Así, entonces, parece posible la creación literaria fuera del círculo de la alta cultura, 11 como una voz de existencia frente a los silencios contundentes en los que vivimos. El arte como puerta de entrada a otros mundos posibles, dentro y fuera de nosotros mismos. Se trata, entonces, de abrir alguna tibia y pequeña brecha de posibilidad para verse, inventar, soñar, encontrar, expresar y discutir, que con tan sólo ese beso la literatura fluye por nuestros cuerpos. Los jóvenes que viven en contextos de desplazamiento (ya hablaremos en detalle), tienen que sobrevivir en condiciones de indigencia: no es la ausencia de musa la que impide la creación, es la falta de comida desde el útero, es la destrucción sistemática de la imaginación en medio de la guerra, es el agotamiento permanente de vivir al borde, es la ausencia o mediocridad del sistema educativo, es la desilusión que habita los ojos de sus referentes adultos. La Miseria del Mundo (las mayúsculas no son retóricas y definen, además, una de las luces guía de este trabajo: Pierre Bourdieu, pero ya más adelante nos pondremos ñoños).

Por supuesto, siguiendo todas las esperanzas previas, no se busca una escuela de escritores (arte-por-el-arte). Buscamos que el acercamiento y la creación literaria pueda servirles a estos jóvenes como una herramienta práctica para, por un lado, conocerse y comunicarse de mejor manera en lo referente a su sexualidad (decir un te amo o un te odio con mayor contundencia), y por otro lado tener un espacio para develar, discutir y re-imaginarse el cuerpo, el deseo, el amor... el mundo. Así mismo, creo que la literatura hecha por ellos y ellas nos servirá, al resto, para reconocer su existencia humana.

Este trabajo es parte de una lucha intensa por la asunción de compromisos políticos y humanos serios de parte de la literatura y los literatos. No como un deber excluyente, me refiero a ese compromiso, sino como una necesidad vital cuando la mierda nos aprieta el cuello. Y no sólo por razones altruistas de igualdad, también por razones sectarias de artista: si no nos alimentamos de comida, mundos y fe, nuestro arte, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

incluyendo la literatura, se encontrará en un sinsalida de mediocridad, copia y excesivo mercado (y el uso del nuestro me lleva al ejemplo perfecto: nuestra tele2). Una lucha, también, por el derecho a gozar de nuestras sexualidades y de nuestros derechos, por la construcción de universos de posibilidad que hagan para más lo que es hoy propiedad de menos. En fin, es, en sí mismo, una esperanza. Respuesta a muchas de mis preguntas, agudización de otras tantas… … hasta la música que tanto me distraje preparando dejó de sonar sin que me diera cuenta. Y por tanto el tono y el lenguaje. Infecto de autorepresentación, jugado entero como escritor, como comunicador educativo, como literato, como colombiano, como hombre joven y como persona. No hay, no habrá escisiones. Esta investigación es un documento que sobrevive sin mí, pero que posee parte de la fuerza y energía de la que soy capaz. Tampoco hay escisiones entre “forma” y “contenido”, no tanto por un mínimo de coherencia maniática, es que no puedo funcionar de otra manera. Fluyo entre la locura insana del mundo salubrista y oenegero internacional, y el placer máximo de ser, de creer y de crear. Este texto se construyó durante y después de la experiencia de campo, de la lectura sumergida de los espejos, las pantallas. Es claraboya para mí. Soy somos es 12 conclusión puesta literaria(que no quita lo científico)mente para quien lee y discute. Finalmente, para ponernos de acuerdo, la formalidad: el proyecto de investigación pretendía construir un Corpus de literatura de autorepresentación con adolescentes en contextos de desplazamiento, a través del cual se realizara un proceso formativo que tomara como base la evidencia y discusión de las subjetividades, así como brindara elementos investigativos a los y las acompañantes del proceso. Esta monografía da cuenta de la experiencia y lleva a cabo un análisis literario y antropológico de los textos literarios producidos por los y las jóvenes. Presento a continuación las premisas que dirigieron esta investigación y que definen el marco teórico, en ellas resuenan las voces de pensadores como Pierre Bourdieu, Terry Eagleton, Michel Focault, Susan Sontag, Paulo Freire, Regis Debray, Jürgen Habermas…:

1. La literatura, como arte, por sus características antropológicas, aporta en la construcción de la subjetividad y de la identidad colectiva e histórica. Aporta en la construcción de la conciencia individual, a partir de una función simbólica, de espejo.

2 La historia reciente de la televisión colombiana es un perfecto ejemplo de lo que puede suceder con la creación artística general. Durante finales de los años 80’s y la primera mitad de los 90’s, nuestra televisión alcanzó unos niveles altísimos de creatividad, de vínculos éticos, vitales y sociales que le permitió sostenerse económica y simbólicamente a nivel nacional e internacional (El caso Cenpro: Zoociedad, Quack, La alternativa del escorpión, De pies a cabeza, Tiempos difíciles. Y más atrás: Amar y vivir, Cambalache, Los Victorinos, por poner algunos ejemplos). Luego vino la privatización y r un resago mediocre de aquel esfuerzo (Hombres, Betty La Fea). La privatización implicó la ausencia de cualquier discurso divergente, tanto en lo creativo como en lo político, el control cerrado de los contenidos por parte de los grupos económicos y de poder más fuertes del país, el cierre de Punch-Cenpro-Jes, el asesinato de Jaime Garzón. La muerte absoluta de la libertad y de la creatividad. Las alianzas con Sony, Disney, Univisón, . Las mayores casas productoras de basura para el “mundo latino”. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

2. El arte, la literatura, permite la expresión fluida y menos obstaculizada de las subjetividades. Los sentimientos y estructuras internas brotan sin ser distraídas por los discursos más superficialmente aprendidos. 3. La creación e interpretación literaria pueden ser útiles para los procesos de movilización y transformación de las subjetividades, así como para las investigaciones alrededor de las subjetividades de las personas. La subjetividad y la conciencia, expresada en la literatura, da cuenta de la individualidad en juego con el contexto. 4. Es posible, a través de procesos como éste, restablecer la conexión entre la literatura (el arte) y el mundo de la vida que desde el renacimiento, y especialmente durante la modernidad se perdió. Placer urgente lejos de cualquier nostalgia.

UN ALGUITO SOBRE LAS RAZONES La sexualidad y la adolescencia son hoy en día objeto de estudio principal de las Ciencias Sociales y Humanas y no, exclusivamente, de la sicología y las ciencias biológicas (esta tendencia se inicia claramente con la aparición de la Historia de la 13 Sexualidad, de Focualt, al final de los años 70). Disciplinas como la antropología, la sociología, las ciencias políticas, historia, las bellas artes y la filosofía, han profundizado en estos temas. Las Ciencias Humanas y Sociales, en los últimos 15 años, han logrado los avances más importantes en la comprensión de la sexualidad humana y de la juventud como etapa vital válida en sí misma.

Problemas como la epidemia del SIDA y su comportamiento epidemiológico, la enorme violencia sexual y de género, la discriminación por razones de sexo y/o opción sexual, el creciente involucramiento de varones adolescentes en los ejércitos, y la estabilidad de las cifras altas de embarazos adolescentes no deseados en nuestros países, se han convertido en dolorosas pruebas de cómo la sexualidad es un asunto que va muchísimo más allá de la cama, para impactar todas las dimensiones de la vida humana individual y colectiva.

La sexualidad, entonces (en el marco de los DSR), se viene convirtiendo en uno de los temas más críticos y al mismo tiempo más prometedores en las apuestas por la transformación de la sociedad hacia la democracia, la libertad y la equidad.

En las múltiples conferencias internacionales relacionadas3, resultantes de luchas sociales y avances académicos, se comienza a ver que la transformación de la manera

3 Eventos internacionales de trascendencia histórica (Conferencia Internacional de Población y Desarrollo del Cairo 1994, Conferencia Mundial de la Mujer –Beijing, 1995), en sus declaraciones, planes de acción e informes han manifestado un acuerdo sobre estas ideas. En este proyecto son presentadas como parte del Mandato del Fondo de Población de las Naciones Unidas –UNFPA-, agencia del Sistema de Naciones Unidas encargada de los temas de Salud Reproductiva y Población y Desarrollo, y de sus aprendizajes en Colombia. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

como asumimos la sexualidad, como percibimos y usamos nuestro cuerpo, como nos construimos como hombres o mujeres, como entendemos y vivimos el erotismo y como nos relacionamos con nuestros derechos y con los derechos de los y las otras, es un camino certero para el cambio social y político general.

Ese camino va desde las estructuras económicas y políticas locales, regionales y globales, hasta procesos educativos, de salud y de protección coherentes y sostenidos; pero sobre todo, implica el acercamiento y conocimiento profundo de las realidades en las que los diversos grupos poblacionales tienen que negociar y apropiarse de sus derechos (Petchesky).

Es en ese lugar donde las Ciencias Sociales y las artes, incluyendo a la Literatura, tienen que aportar categorías y métodos de investigación, análisis, interpretación e intervención que permitan comprender las realidades en las que las personas viven su sexualidad y así mismo, ayudar a transformar o a reafirmar dichos contextos. Más aun, si se asume que los derechos ejercidos por las personas en su vida sexual y reproductiva no son siempre los mismos que están establecidos en la normatividad nacional e internacional (deductivos), sino algunos que han sido heredados como valores morales y culturales (inductivos).4 El aporte de las Ciencias Sociales implicará, por un lado, el 14 abordaje de realidades sociales concretas, de las estructuras de poder, de los contextos culturales, y también el mundo de los imaginarios, de las representaciones sociales y de los universos simbólicos de cada persona y de cada grupo.

Desde esta perspectiva, la Literatura (y las artes en general), dadas sus características comunicativas y simbólicas, y su capacidad de dilucidar los procesos de construcción de las subjetividades, cumple un papel muy importante en la constitución de la persona y en la construcción de sujetos-ciudadanos titulares de derechos. Los caminos son múltiples: - Como experiencia artística, la creación literaria remueve la individualidad de quien escribe para sacarla al descubierto y ofrecer así una posibilidad liberadora y de autoconocimiento, por cuanto para el autor-lector su obra funciona como un espejo (Goyes 89-92; Demetrio cap 3). Es en el arte, principalmente, donde se expresan los universos simbólicos que atraviesan determinantemente a las personas (Melich 17-56). - Como experiencia comunicativa, la literatura permite sacar a la luz realidades que no circulan en el discurso verbal ni en las agendas de comunicación masiva. Permite compartir mundos posibles, preguntas vitales, denunciar abusos indirectamente y mover las subjetividades de los lectores y lectoras (Monsiváis 113-130; Halliday 19- 51). Tal es la importancia de promover la

4 Los derechos deductivos son aquellos que pertenecen al consenso internacional y que están contenidos en la Declaración Internacional de los Derechos Humanos o en otras Conferencias internacionales. Los derechos inductivos, en cambio, son aquellos que la persona entiende y asume como derechos propios, sin importar que conozca los derechos deductivos (De Gaay Fortman citado por González). El derecho, para Fortman, se construye lentamente, en un proceso continuo, de manera difícil y penosa. Es un proceso vital complejo y extendido. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

escritura literaria (y no literaria) en las comunidades vulneradas o en riesgo. - De otro modo, la literatura en su dimensión científica, es decir los estudios literarios desde la mirada de la teoría cultural, también ofrece, por lo menos, dos aportes concretos: El análisis crítico de obras reconocidas, para desenmascarar procesos simbólicos de construcción de sentidos autoritarios, complacientes con la reproducción de estructuras sociales inequitativas (teoría cultural, crítica posmoderna, feminista, de género, etc.), y su relación con la política, la educación, etc. (Eagleton 2005, Hutcheon cap I). El esfuerzo por promover la construcción de corpus alternativos que permitan circular otros discursos distintos al dominante, que incluyan voces no mediadas de personas o grupos vulnerados (adolescentes marginales, por ejemplo), etc..

La academia, entonces, y en este caso las escuelas de pregrado y posgrado de Literatura, serán las encargadas de asumir la responsabilidad histórica y ética que les corresponde, y abordar sistemáticamente los asuntos relacionados con la sexualidad, la adolescencia, las relaciones de género, las vulneraciones a la dignidad humana y los derechos humanos sexuales y reproductivos. Generar estrategias, estudios, diálogos y 15 creaciones artísticas coherentes y respetuosas permitirá: ...incidir en la construcción de una propuesta de autonomía del cuerpo, de la sexualidad y la reproducción, que actúe positivamente sobre los elementos problemáticos de la salud sexual y reproductiva, pero además que permita construir sujetos de derechos que desde la democracia individual actúe sobre los espacios sociales y políticos. (Pacheco et al. 2)

De este modo, nos acercamos también a avanzar sobre la definición o redefinición de los géneros y subgéneros literarios, de los qués y los para qués de la literatura en el mundo contemporáneo y en nuestro contexto específico. En particular, este trabajo hace una reflexión global del concepto de literatura de autorepresentación, muy centrado en el culto al individuo, el yo de un genio creador. Este tipo de literatura ha sido validada como una herramienta para diferenciar al yo creador del mundo “masa”, para tratar de responder las preguntas sobre su extrema particularidad. Para este caso, se tratará de llegar a una comprensión de la literatura de autorepresentación desde una mirada que incluya y tense, en un juego, los mundos individuales, subjetivos, y las estructuras sociales, objetivas. Ruta hacia una comprensión activa de la literatura contemporánea y, de la mano con este ejercicio, del mundo que vivimos, como bien lo plantea Eagleton en su libro Después de la Teoría: La teoría cultural tiene por costumbre platear lo que podríamos llamar metapreguntas. En lugar de preguntar “¿Es este poema digno de elogio?”, pregunta: “¿Qué queremos decir cuando calificamos un poema de bueno o malo?” . (…) Los críticos analizan símbolos, mientras que los teóricos preguntan por medio de qué misterioso proceso una cosa puede acabar representando otra [de secretitos a claraboyas]. (98) D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Ahora bien, por el lado de la sexualidad y el trabajo pedagógico en salud sexual y reproductiva y derechos humanos, la situación adquiere sus propios matices y problemas. Se sabe bien, hoy en día, que la sexualidad es una dimensión que si bien tiene sus raíces en lo biológico, su existencia es exclusiva del mundo de las construcciones sociales y culturales (José Antonio Marina). Aprendemos a vivir la sexualidad, no la vivimos por instinto. Por otro lado, la vivencia y educación de los derechos humanos, especialmente en el plano de la intimidad, así como la recuperación de las víctimas de las violencias, son procesos complejos que tienen asiento principal en el mundo de los sentimientos, de las subjetividades, de la emocionalidad y no en el de la racionalidad y la cognición (este tema será ampliado más adelante), aunque por supuesto también se requiera de estas últimas. Estas premisas, además de la aplastante evidencia estadística y humana sobre la ineficacia de la mayoría de procesos de educación sexual y promoción y prevención en ssr, han obligado a que emerja una serie de preguntas por el sentido que siguen rondando las mentes de quienes trabajamos en este campo: ¿cómo hacer, entonces, una educación para la sexualidad efectiva, comprensiva, comprometida con las transformaciones subjetivas, culturales y sociales, y capaz de vincularse con procesos colectivos y políticos de reconocimiento de sí mismo y del otro? ¿Cómo distanciar radicalmente la domesticación médica y religiosa de la educación para la sexualidad? ¿Es posible separarla y obtener resultados efectivos? 16

Tratando de encontrar alternativas de respuesta, y reconociendo la función simbólica y “terapéutica” del arte, muchas personas y grupos han comenzado a usar las diversas expresiones artísticas como espacios pedagógicos en sexualidad y derechos. Sin embargo, estas experiencias siguen siendo pocas y, sobre todo, muy aisladas y etéreas. Como parte de esta ruta de indagación, la oficina para Colombia del Fondo de Población de Naciones Unidas, a través de un proyecto financiado por el gobierno de Bélgica –“Atención a las condiciones de género y salud sexual y reproductiva de la población desplazada por la violencia, énfasis en adolescentes”- decide involucrar el desarrollo de las artes como vía alucinada para la construcción de sujetos titulares de derechos humanos sexuales y reproductivos. El trabajo de campo y parte de la conceptualización de esta investigación hacen parte de dicho proyecto.

En el marco del uso de las artes como posibilidad transformadora, la literatura es la menos usada y aprovechada, tal vez por desconocimiento de sus potencialidades, tal vez por el mito de la “alta” literatura que hace pensar que para leer, comprender y escribir piezas literarias se requiere un nivel intelectual superior, tal vez por la realidad de analfabetismo y, seguramente, porque la tradición canónica de los y las escritoras y literatos –élites nacionales- indica un camino separado del trabajo social. Múltiples experiencias prácticas en estos temas, sistematizadas y estudiadas juiciosamente, existen para la música, el teatro, la danza y las artes plásticas: muy pocas para la literatura. Pues bien, son esas sistematizaciones y estudios los que permiten avanzar colectivamente, los que se ofrecen como bien abierto a quien necesite usarlo.

La literatura comparte con las otras artes las premisas básicas previstas en el apartado anterior, pero tiene también diferencias específicas: la lectura y la escritura. Aunque D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

puede plantearse la alternativa de la literatura oral, se entiende que, principalmente, para el acceso a la literatura se requiere saber leer y escribir. Saber comprender y saber construir oraciones, juegos de palabras, metáforas, ejercicios de economía del lenguaje, etc., posibles barreras en un país como Colombia. Sin embargo, esas características también implican una potencialidad que justifica enteramente su exploración, especialmente en poblaciones marginadas: la posibilidad de ganar herramientas prácticas para jugar de manera más efectiva y divertida dentro de un mundo letrado. Ganar, inventar y usar palabras y formas textuales –y verbales- que permitan a las personas superar las enormes dificultades expresivas que el contexto y sus historias personales han determinado.

Por otro lado, si se plantea la búsqueda de una literatura de la vida cotidiana, contextual, las dificultades de lectura y escritura son simples características de los y las autoras, retos que tanto autores como editores y teóricos tendremos que ser capaces de sortear y que deberemos tener en cuenta en el diseño metodológico de las intervenciones, de los acompañamientos, de las lecturas y, por supuesto, de las interpretaciones.

Estos últimos elementos hacen que la literatura adquiera todo el sentido en el marco 17 de las intervenciones educativas en sexualidad, salud sexual y reproductiva y derechos, ya que creemos (yo y muchos otros y otras) que en muchos sentidos le brinda a las personas la posibilidad de autoconstruirse y de generar herramientas para pararse frente al mundo de manera más firme y libre (sujetos de derechos). Menos disciplina y más autoconciencia. Se pretende, finalmente, realizar un aporte en la construcción de alternativas viables a la pregunta plateada anteriormente, esta vez, desde la literatura de autorepresentación. ARGUMENTOS

Cuando vine a Palenquito yo vi la vida en un hoyo S 2 E S me Í dedique A P con mis hijos a sacar arena del arroyo... ESCALERAS...Vamos mis hijos ya la creciente bajó vamos a sacar arena pa’ ganarnos pa’ el arroz

BURBUJAS D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

2. DE ARGUMENTOS, ESCALERAS, BURBUJAS Y PAÍSES –el campo de batalla de los conceptos y los contextos-

Cuando vine a Palenquito yo vi la vida en un hoyo me dedique con mis hijos a sacar arena del arroyo...... Vamos mis hijos ya la creciente bajó vamos a sacar arena pa’ ganarnos pa’ el arroz La vida vale la pena. Petrona Martínez5.

ESPEJOS PRIVADOS Y PANTALLAS DE LUZ: LA LITERATURA DE AUTOREPRESENTACIÓN Irremediablemente, en un trabajo como el presente se escurre, vuela y nos ataca de frente, como mariposa depredadora, la pregunta insoportable: ¿es esto literatura? ¿Qué es literatura? Una pregunta que emerge sólo en las rupturas. Nadie se haría esa pregunta si estuviéramos adelantando un estudio comparativo sobre Rayuela y Cien 19 años de soledad, ni mucho menos si de la obra de Cervantes, Shakespeare, Proust, Joyce, Homero... si de la obra de ellos estuviéramos elucubrando. Ni siquiera hace falta escribir los nombres completos ni una nota explicativa. Pero, ¿literatura puede ser aquello que unos muchachitos casi analfabetas escriben sobre sí mismos?

Y yo, que de gran teórico no me puedo preciar, decido no enredarme ni enre- dar al lector o lectora y resolver el asunto en unas pocas líneas, parado sobre los hombros de Eagleton, para decir sí, por supuesto que es literatura. Luego tendremos mejores gelatinas en las cuales revolcarnos (¿fue literaria esa frase?), porque: “No hay ni obras ni tradiciones literarias valederas, por sí mismas, independientemente de lo que sobre ellas se haya dicho o se vaya a decir” (Eagleton 1998, 23). Y recuerdo instantáneamente la hermosísima novela ¿? colombiana “El camino del caimán”, de Javier Echeverri Restrepo, ganadora del premio nacional de novela de Colcultura en el año 1996, que si hubiera sido presentada como investigación antropológica al ICAN, también hubiera ganado.

Por lo menos dos elementos que parecen fundamentales de “La Literatura” tendrán que ser puestos en consideración para el desarrollo del presente trabajo. Uno, esa sobrevalorada y supuesta vocación ficcional de la literatura, y dos, la refinada elaboración estética y estilística hija de las tendencias excluyentes de las élites (Guillén 77-86). Por fortuna, son parámetros que se vienen poniendo en duda, en nuestro contexto, desde finales del siglo XIX, como lo evidencia David Jiménez al referirse a la propuesta estética y política de Tomás Carrasquilla (Jiménez introducción).

5 Cantaora del caribe colombiano. Mujer de río. Palenquera, pilandera y mamá. Esta música es absolutamente autorepresentativa. Es uno de esos grandes ejemplos del arte conectado con la vida y con la urgencia expresiva. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La crítica colombiana tradicional suele entender, como verdad inefable, a la literatura (especialmente la narrativa) como el universo de lo ficcional. O por lo menos es allí donde se da el mayor peso en los análisis críticos. Incluso en la poesía, en la que por alguna razón mágica a diferencia de la narrativa se considera que sí existe un vínculo metafísico o sicológico entre la obra y el autor, se suele tener cuidado con aquello del yo poético y la distancia con la persona del autor. Angustia por la ficción. Un ejemplo son las obsesivas llamadas de atención de muchos modelos de análisis (especialmente los estructuralistas, con aquella ilusa autonomía absoluta del texto) para distanciar, excepto que la unión se haga explícita, la naturaleza del autor de la de los personajes6 y de la obra misma. De igual manera, se entiende la conformación del Canon Literario, en el que textos testimoniales, epistolares o autobiográficos difícilmente pueden entrar.

Salvase el santísimo san Agustín, quizá… o Sor Juana, mas silenciada no la quiere el que inteligente la hizo: excepciones divinas.

Y por supuesto aparece, a propósito del santo Agustín (que no puedo evitar agachar la cabeza y disponer mis labios para besar el anillo), la dificultad de borrar el límite entre la ficción y la realidad, innecesario, por demás, objetivamente imposible (Hutcheon, 20 47). ¿No podría ser acaso, para nuestra época, ficción pura Las Confesiones del mencionado santo? Ficción evangelizadora. Marketin’. ¿Qué pasó con el asunto de la autoría (testimonio o ficción) de las cartas portuguesas de Sor Mariana Alcanforado? Y qué tanto puede un autor separarse de sus creaciones si, como bien lo ha dicho el psicoanálisis y lo ha complementado la antropología contemporánea: uno sólo saca lo que tiene adentro. ¿O no ha ido asumiendo Miguel de Cervantes, en el paso de la historia, el rostro descrito por él para El Quijote? Y para concluir los ejemplos, siguiendo con Don Miguel, la segunda parte de su gran novela pone en crisis absoluta el límite entre ficción y realidad, en el momento en el que usa el reconocimiento público “real” de la primera parte para fundirla con el personaje “ficticio” y construir el universo de la segunda. ¿400 años después la discusión tiene sentido?

O bien, ¿no están demasiado cargados de ficción los acercamientos autobiográficos de Paul Valery? También estrategia de marketing para vender una imagen de él y del mundo que deslumbra a los más religiosos místicos y poetas. ¿Cómo saber si mi memoria no es ficción? La verdad no es decible, son puras Estrategias del Deseo, como el encaje negro o el perfume amargo, lo sabe bien la Peri Rossi.

Aunque claro, hay verdades que no son ficción: morir de hambre es una verdad, no un texto. Como se lo grita Susan Sontag, en Ante el dolor de los demás, a Jean Baudrillard y compañía:

6 Esa obsesiva división desconoce los procesos sicológicos y antropológicos que se llevan acabo durante la creación artística, y se limita a ver la obra como un producto terminado e impersonal. La crítica posmoderna y alguna crítica romántica es más envolvente e incluyen al lector y al autor como sujetos activos inmiscuidos en la obra. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La afirmación de que la realidad se está convirtiendo en un espectáculo [texto] es de un provincianismo pasmoso. Convierte en universales los hábitos visuales de una reducida población instruida que vive en una de las regiones más opulentas del mundo, donde las noticias han sido transformadas en entretenimiento (…) Insinúa, de modo perverso, a la ligera, que en el mundo no hay sufrimiento real. (127-128)

Por otro lado, está el asunto de la estética. ¿Cuándo algo es digno de llevar el rótulo de literario? La “correcta” manera de escribir, la belleza, el manejo cuidado del lenguaje, la casi invencible baraja de recursos literarios y de citas intertextuales con la alta cultura... a pesar de las vanguardias, aún hoy un gran sector de la academia, de los artistas y de los lectores-consumidores siguen izando esta bandera para moverse por las sendas de la literatura. Otro grupo, ha visto que la belleza tiene su fuerza en otro lugar, que la belleza es cada vez más un producto del mercado, una construcción social absolutamente manipulable y un bien subjetivo dependiente de valores culturales (Eagleton 1998 24-28).

¿Era tan hermosa La Iliada para sus contemporáneos como lo fue para los poetas 21 europeos del siglo XVII? Ya sabemos que la nostalgia es uno de los mejores embellecedores. ¿No es hoy un poco menos hermosa la Mona Lisa de lo que fue para los colombianos de mitad del s. XX? Siguiendo con los ejemplos de autor: ¿no se ha vuelto más hermosa, más obra de arte, para las clases medias occidentales, La Última Cena, de Leonardo Da Vinci, luego del éxito rotundo del libro El Código de Da Vinci? El Manifiesto Comunista es hermoso, pero ¿es literatura? Para Umberto Eco sí (Sobre la Literatura), para Eagleton, no; por supuesto.

Juzgar una obra literaria por su encumbrada elaboración estética y lingüística, en momentos como los que vive Colombia y América latina, no sólo es un anacronismo, sino una descontextualización peligrosa. No vivimos en la Colombia de hace 15 o 20 o 30 o 40 años ni en un país de la Europa occidental; nuestros sistemas educativos públicos son cada vez más deficientes, el analfabetismo funcional es altísimo, los medios de comunicación masivos (rapidísimos y coloquiales) han tomado el lugar de la escuela. Así, esa descontextualización deja de ser una postura teórica y estética y se convierte en una política sistemática de exclusión: ¿quién puede en Colombia escribir con refinación en el lenguaje, en la estética y en los mecanismos narrativos? ¿Quién puede leer un texto del que no entiende más que ciertas palabras? Esto restringe a la literatura a una élite de alta cultura. Sin embargo, han existido otras voces muy fuertes también: Tomás Carrasquilla con su crítica a los modernistas nacionales y sus aportes vitalistas y sociales a la literatura, Manuel Quintín Lame con el tema indígena, Arnoldo Palacios mostrando descarnadamente el mundo de los negros y negras colombianas, Zapata Olivella, Gabriel García Márquez, Elisa Mújica, Ana María Jaramillo y su novela de no-ficción Las Horas Secretas, Olga Behar con Noches de Humo, Alonso Salazar con la obra testimonial Mujeres de Fuego, y María Mercedes Carranza con su obra altamente influenciada por la cultura pop, entre otros. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La belleza no es una categoría deleznable, nunca, solo debe ser contextualizada y relativizada para que no se convierta en mecanismo de exclusión y suicidio. Volviendo atrás, Carrasquilla, por ejemplo, en el Apunte Autobiográfico de la compilación CUENTOS afirma: ...quería probar, solamente, que puede hacerse novela sobre el tema más vulgar y cotidiano. (...) De tener alguno, sería, probablemente, como documento literario, por ser ésa [Frutos de mi tierra] la primera novela prosaica que se ha escrito en Colombia, tomada directamente del natural, sin idealizar en nada la realidad de la vida... La labor del novelista que quiera reflejar en su obra la vida ambiente, es de suyo agria y espinosa; mayormente en ciudades reducidas. (6-7)

Más adelante, de manera contundente, y útil para mis propósitos en esta investigación, Carrasquilla declara que Las clases altas y civilizadas son más o menos lo mismo en toda la tierra de garbanzos. No constituyen, por tanto, el carácter diferencial de una nación o región determinada. Ese exponente habrá que buscarse en la clase media, si no en el pueblo. (8-9)

Para finalizar su ejercicio autobiográfico, en el que se manifiesta como un escritor 22 realista y popular,7 el autor declara: “No tengo escuelas ni predilectos. Como a cualquier hijo de vecino, me gusta lo bueno en cualquier ramo (...) Me refiero [en la literatura colombiana] al Indio Uribe y a José A. Silva” (9).

A pesar de que el sentido común y estudiosos avanzados en áreas de la comunicación y los estudios culturales (De Monsiváis a Eagleton) saben que ni la forma ni los contenidos ni los autores definen lo literario de lo no literario, en el mundo de la academia literaria siguen existiendo posiciones reaccionarias que se esfuerzan en clasificar, despreciar, nombrar y quemar con estas categorías inquisitorias. Así, lo que hasta ahora hemos descubierto no se reduce a ver que la literatura no existe en el mismo sentido en que puede decirse que los insectos existen, y que los juicios de valor que la constituyen son históricamente variables; hay que añadir que los propios juicios de valor se relacionan estrechamente con las ideologías sociales. (Eagleton 1998, 28)

Trato, entonces, de llegar al pragmatismo, a las preguntas estructurales (metapreguntas), a las posturas que permitan el desarrollo del arte, razones de más para ser quemado en la hoguera, lo sé: • Para este trabajo, las piezas que los autores o la crítica (léase yo y, en caso extremo, la directora de tesis) nombren como literario, será literatura. • Las piezas en las que los escritores hayan hecho un esfuerzo consiente para romper su lenguaje cotidiano y crear formas lingüísticas y de sentido novedosas para su contexto (elemento base del formalismo), serán consideradas como literatura. • Los textos que provoquen a los lectores y a los mismos escritores a construir

7 Y escritor de eso que más adelante se llamaría literatura de no-ficción. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

intertextual y vitalmente la complejidad del asunto tratado, valdrán como literatura (un poco de postestructuralismo y de fenomenología). • Importan el contexto, el producto, el proceso de producción-lectura y el autor -las estructuras objetivas y subjetivas-, de los textos escritos (enfoque hermenéutico, cercanísimo al postestructuralismo, más al de Focault que al de Derrida, más a los neomarxistas queridos8), para definir lo literario. Esto es literatura en este trabajo.

Así, se pretende un acercamiento decidido a la literatura que vale como un ejercicio de existencia, la que cuenta las identidades nacionales y populares, la que reconoce que hacer literatura –escribir- es un bien social e individual, y debe ser una tarea masiva, no de élite. “La literatura, al contribuir a formar la lengua, crea identidad y comunidad” (Eco, 11). Por eso, tomamos en principio, para desbordarlo luego, el concepto de Narrativa Documental que Julio Rodríguez-Luis desarrolla en su libro El Enfoque Documental en la Narrativa Hispanoamericana. Vale la pena aclarar que la decisión de tomar este texto de referencia es producto de un proceso de lectura y selección sistemático. Con respecto a obras como la de Francisco Teodosiadis, John Beverley, Margaret Randall, Doris Sommer, 23 etc., el trabajo de Rodríguez-Luis avanza en la concepción del testimonio como parte de la Narrativa Documental, presentándolo como un género literario que, sin desconocer su origen y función política, la supera.

Para el autor, la Narrativa Documental acoge las formas de literatura “no fingida” (continúa la angustia ficción-realidad), específicamente el Testimonio, la Autobiografía, la escritura autobiográfica y la novela de no-ficción. En estas formas literarias, según Rodríguez-Luis, el objetivo del autor es hacer un recuento de hechos reales, vividos personalmente o narrados por unos testigos. La literatura documental no busca transformar de manera estética o artística la realidad, por lo tanto, “desde el punto de vista de su intencionalidad, se sitúa en el polo opuesto al de la ficción y, en general, a lo que se acostumbra entender por literatura” (84).

La literatura documental busca aumentar el conocimiento de los lectores acerca de una realidad social dada. Lo hace presentando las voces de testigos y de protagonistas, lo más directamente posible, y apoyándose en documentos o evidencias que intentan probar el arraigo de la narración en la realidad. De esta manera, la literatura documental ilumina los lados oscuros de la luna y presenta “la luz de la pura verdad” (85).

Vista así, esta literatura presenta tres sesgos que para los objetivos del presente trabajo deben ser superados. Desde la perspectiva formal, Rodríguez-Luis y los otros teóricos referidos por él, se concentran casi exclusivamente en la narrativa (principalmente novela), dejando de lado la escritura automática, la poesía, las viñetas y casi parece ser que ignora los cuentos. Estos formatos, son los más usados en la cotidianidad de

8 Linda Hutheon, en su libro Politics of Posmodernism, incluye a todos estos como partes diferentes de las interpretaciones posmodernas del mundo. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

escritores principiantes, aficionados y de personas que no se dedican ni pretenden dedicarse a la escritura literaria. Hago referencia a “los pensamientos”, a los graffities, a las cartas e e-mails, a los diarios íntimos, a los cuadernitos secretos en los que de vez en cuando se escribe un cuento, a los poemas de amor, de desespero o de despecho, las fábulas... Lugares donde las personas (letradas o no) se construyen, se presentan al mundo y logran enfrentarse a ellas mismas y a sus distintas épocas.

Desde la perspectiva teórica, la propuesta del libro en mención se enmarca exclusivamente en las miradas sociológica y periodística tradicionales de herencia marxista. Lo que se documenta son experiencias sociales de estructuras objetivas o vidas de personas públicas, donde la subjetividad se objetiviza como lección o prueba; es, en el caso de la autobiografía, el “discurso de un escritor profesional o de alguien que se siente, en fin, seguro de su dominio de la lengua literaria” (Rodríguez-Luis 93). Esta postura puede desconocer las dimensiones subjetivas y simbólicas que atraviesan los procesos de creación de individuos comunes y corrientes. Y si bien la presente investigación tiene un marco general de tipo sociológico (la relación sexualidad y poder en los y las adolescentes), requiere de un enfoque más holístico que le aporte justamente en los campos donde la investigación social tradicional y la educación formal son más débiles. Los universos simbólicos, los procesos de subjetivación, las teorías de 24 acción de la sociología y antropología contemporáneas, el vínculo entre subjetividad y objetividad.

Por la misma vía se llega a develar un sesgo desde la perspectiva ética. Para Rodríguez- Luis, la literatura documental no busca transformar artísticamente el mundo, sólo aumentar el conocimiento sobre hechos puntuales. Sin embargo, como se planteaba en el párrafo anterior, la literatura de autorepresentación sí busca, claramente, transformar estética, simbólica y objetivamente el mundo de los autores. Su contexto más cercano. Es un espacio para ser, no para informar. Un vehículo para sacudir las emocionalidades, no sólo para acumular conocimientos.

Al margen de estos distanciamientos, existe una pregunta constante en la Narrativa Documental que permea la literatura de autorepresentación: ¿Cuál es el lugar del mediador? Es clara, evidente y característica la existencia del mediador en los testimonios, por ejemplo. Así también en la literatura epistolar, donde cumple una función vital distinta para el protagonista-autor. Pero en la literatura de autorepresentación, ¿dónde está la mediación? ¿Existe mediación? ¿Es posible un yo mediador del mismo autor? ¿Implica algún perjuicio la eventual mediación cuando se intenta autorepresentarse? ¿Pueden ser la intención, el contexto y el proceso de producción concebidos como mediadores? Estas preguntas rondan el trabajo de campo y los análisis de la investigación.

Por tales razones, a partir de este punto se desbordan los conceptos de Rodríguez- Luis, y se entra a profundizar en un concepto de literatura de autorepresentación acorde con posturas más reflexivas, éticas y contemporáneas. Como su nombre lo indica, este tipo de literatura hace referencia a los textos escritos que un autor D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

(escritor o no) produce explícitamente sobre sí mismo. Donde no se pretende una construcción ficcional externa al yo. Y vuelve el temita, por eso la ubicación del adjetivo “externa” es tan importante. Las ficciones internas –sobre sí mismo- son autorepresentación, ya que, vinculadas a la biografía y al contexto, develan posturas de la identidad. ¿Son ficciones las versiones de nuestra propia historia o hacen parte “real” de nuestra identidad? Desde este concepto el asunto de la intención de autorepresentarse, de ponerse en juego o no, es tal vez lo más contundente; implica un pacto de fe entre el autor, el texto y los lectores: creemos e interpretamos lo que se dice, bajo la forma del yo expuesto.

Si bien este tipo de literatura no ha estado muy cercana al gran canon literario, su tradición es igual o mayor a la de la literatura fantástica o enunciada como ficcional. Cuenta con una historia propia, igual o más importante que la historia canónica, ya que va de la mano con la historia de los amores, de la memoria y de las construcciones del yo: El sí mismo es algo de lo cual hay que escribir, tema u objeto (sujeto) de la actividad literaria. Esto no es una convención moderna procedente de la Reforma o del romanticismo: es una de las tradiciones occidentales más antiguas. Ya estaba establecida y profundamente enraizada cuando Agustín empezó sus Confesiones. (Focault 2, 62). 25

Más allá del producto terminado como obra artística, la literatura de autorepresentación, tiene su acento en el proceso de creación y recreación constante (en la lectura) que permite al autor acceder a lugares de sí que de otra manera le serían oscuras. Focault, en su libro Tecnologías del Yo, hace una revisión histórica de las técnicas con las que las personas en contextos de grandes civilizaciones han construido su identidad, su yo, especialmente alrededor de la sexualidad. En este estudio, se evidencia el lugar privilegiado de la escritura como un mecanismo de movilización íntima y de comunicación exterior de las subjetividades. Escribir, a partir de este libro, funciona o bien como un espejo en el cual la persona se observa reflexivamente, o como una válvula de escape de la propia identidad. En ambos casos, es una construcción del discurso sobre el yo que interviene sobre la identidad misma, o sobre la imagen que quiero que un otro tenga de mí.

Focault, hablando de una carta de Marco Aurelio (144 a.C.) a Fonto, evidencia los usos pragmáticos de este tipo de literatura y se devela claramente el juego entre la identidad y la imagen externa, más aún cuando, como afirma él, será este dispositivo el mismo que opera en la confesión cristiana: Por fin, en la última línea, hay una alusión al examen de conciencia del final del día. Aurelio se va a la cama y mira, en su cuaderno, lo que tenía intención de hacer y de qué modo coincide con lo que ha hecho. La carta es la trascripción de ese estado de conciencia. Enfatiza lo que se ha hecho y no lo que se ha pensado. (...) ...prefigura la confesión cristiana. (Focault 2, 65)

Del mismo modo se planeta, en un antecedente directo de este trabajo (el libro De Pieles Crudas9), la fuerte tensión y potencialidad que existe en la escritura de la D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

intimidad para ser leída. En la introducción, el editor presenta pistas para entender estas experiencias, que aquí llamamos literatura de autorepresentación, y que nos ayudan a ir ganando elementos para responder las preguntas sobre la mediación: La vida puesta al desnudo sobre un cerro, la intimidad preparada para ser leída, como cuando te masturbas frente a tu pareja... No es sólo un acto íntimo, es la re-creación de la intimidad compleja para que sea saboreada con radical complicidad. Eso es este libro. (Nieto 4) La autorepresentación está mediada por la existencia real y simbólica, en el autor, de los posibles lectores de los textos.

Paro y giro. Hasta este momento hemos hecho una mirada casi exclusiva a la autorepresentación como un ejercicio de individualidades inconexas, singulares y valederas por ellas mismas. Sin embrago, si bien el individuo es la base del ejercicio, las estructuras sociales, las relaciones con los otros y otras son las que, para este trabajo, le dan sentido real a la autorepresentación. Para comprender de mejor manera y desarrollar todo el potencial del concepto planteado, se hace necesario afirmar las posturas teóricas, pragmáticas y éticas desde las cuales se entiende al yo, al sujeto. 26 El análisis literario de autorepresentación no desconoce las dimensiones sociales y colectivas, sino que trata de indagar en la interioridad de los sujetos para alimentar la comprensión integral de los fenómenos sociales y culturales. Se sustenta teóricamente desde las posturas críticas posmodernas o neomarxistas que buscan desnaturalizar asuntos de la cultura que las fuerzas de la costumbre, la moral y el poder han pretendido convertir en naturales (Hutcheon cap1 y 2), o lo que para Bourdieu en La Dominación Masculina es la necesidad de develar los procesos y mecanismos históricos por los cuales las arbitrariedades culturales se convierten en naturales (7-15). También se sustenta desde la noción de literatura como acción vital, comunicativa e histórica (Focault 1990; Williams; Sontag 1991),10 ya expuesto anteriormente en torno a Tomás Carrasquilla para el caso colombiano.

Así, se adoptan los conceptos de habitus y campo, propuestos por Pierre Bourdieu a lo largo de su obra para entender la manera dinámica como los individuos y las subjetividades se relacionan de manera activa, inseparable, con las estructuras sociales objetivas. Para él el campo es el mundo de las estructuras objetivas, el espacio donde se juega, el de las instituciones formales, de las normas sociales que rigen el comportamiento de las culturas y de las personas. Es el entorno estructural, objetivo, concreto y simbólico, normatizado, en el que los sujetos nos movemos “libremente”.

9 Este es un libro publicado por el Programa de Desarrollo y Paz del Magdalena Medio, la Agencia Sueca de Cooperación CIVIS y la Red de Jóvenes del Magdalena Medio. En él se recopilan y publican los trabajos ganadores de un concurso regional de expresiones estéticas juveniles llamado ¿Me escribes? 10 Lo que hacen los dos autores y la autora en los libros referidos, es, a través de la literatura, hacer una revisión histórica de procesos de construcción de las subjetividades en contextos culturales, económicos, políticos y sociales específicos, para dar cuenta q de dichos contextos y de su relación determinante con la existencia humana. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

The Matrix, el mundo en el que existimos. Así, para la comprensión de la literatura de autorepresentación, no sólo basta la obra terminada, como un bien supraterrenal, sino la observación juiciosa de las estructuras objetivas en las que esa obra fue producida, para nuestro caso: las características de los jóvenes, su situación escolar, cultural, el conflicto armado, las condiciones de marginalidad, la intervención externa de una agencia de cooperación internacional, el tipo de estrategias usadas en el trabajo con ellos y ellas, etc.. Ésta es la parte heredada directamente del marxismo.

El Habitus, por su parte, está definido por Bourdieu como: ...los sistemas de disposiciones duraderas y transferibles, estructuras estructuradas predispuestas a funcionar como estructuras estructurantes, es decir como principios generadores y organizadores de prácticas y de representaciones que pueden estar objetivamente adaptadas a su fin sin suponer la búsqueda consciente de fines ni el dominio expreso de las operaciones necesarias para alcanzarlos, objetivamente ‘regladas’ y ‘regulares’ sin ser en nada el producto de la obediencia a reglas y, siendo todo esto, colectivamente orquestadas sin ser el producto de la acción organizadora de un director de orquesta. (Bourdieu 3, 1992)

Lo que el concepto de Habitus, como categoría de análisis-práxis, trae a la luz, es el 27 puente entre las tendencias más subjetivistas e individualistas de la interpretación social y antropológica, donde el entorno social desaparece y se convierte en un mero accidente o en el producto siempre maleable de la creatividad y la fortaleza de los individuos, y la escuela marxista de las estructuras determinantes donde la subjetividad se pierde. Así, el habitus define la manera como dentro de nuestras decisiones individuales, únicas, subjetivas, dentro de la manera en que vivimos nuestros cuerpos –la manera de caminar, por ejemplo- existen, incorporadas, las estructuras sociales objetivas de nuestra cultura en particular. Es allí donde se juegan las razones de la vida práctica que nos hacen pertenecer, no ser excéntricos, que no son consientes, y que por lo mismo, muchas veces parecen naturales.

Estos habitus no deben ser entendidos como una especie de condena de reproducción cultural, sino como la manera de entender el lugar y las características de las transformaciones subjetivas. Evidencia los mecanismos de la subjetividad y, por tanto, las dificultades para transformarla; sin embargo, se reconoce que cada historia de cada persona es distinta y a partir de ellas se pueden generar rupturas que transformen el campo.

Entonces, para el asunto que nos compete, el yo que se evidencia en la literatura de autorepresentación, es al mismo tiempo individualidad, historia vital y estructuras objetivas incorporadas. Dicho de otro modo, la auto-representación, es no sólo la representación de un autor singular y su versión sobre el mundo, sino, además, el mundo mismo operando a través de su versión de identidad individual. Y su obra integralmente –soportes físicos, formas y contenidos-evidenciará esto. Dicho por el mismo Bourdieu, en una cita obsequiada por la buena fortuna, que hace referencia exacta al tema de las producciones de los sujetos: D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

...el habitus es una capacidad infinita de engendrar en total libertad (controlada) productos –pensamientos, percepciones, expresiones, acciones- que tienen siempre como límites las condiciones de su producción, histórica y socialmente situadas. (Bourdieu 3, 96)

Cada uno de nosotros tenemos dentro la cultura en la que hemos nacido, nuestra historia familiar e individual y las derivaciones y variantes que tomemos “libremente”; así mismo nuestras creaciones son expresión de todo aquello. De este modo, lo que adquiere una gran importancia, es el proceso y el contexto de producción y lectura de estas obras. Principalmente, estos textos, especialmente en escritores y escritoras no- profesionales, implican un ejercicio de desnudez del yo, en el que de manera no muy conciente las personas sacan a flote realidades o fantasías que son constitutivas de sus subjetividad. Y ese yo, esas subjetividades, son a su vez construcción de sus historias personales en relación con las estructuras objetivas en las que han vivido; no son, y esto es importantísimo en términos pedagógicos y hermenéuticos, no son creaciones naturales, espontáneas, únicas ni inmodificables, son profundamente arraigadas en la cultura. 28 Finalmente, una arenga. Carrasquilla en su Homilía N° 2 responde sin conmiseraciones los reclamos de Max Grillo y aclara el camino sobre estas funciones sociales y vitales de la literatura: [En el juicio al arte,] ni la opinión pública, ni la de nadie, ni prejuicios de ningún linaje pueden atenderse... (...) No hay por qué concederle valor artístico a ninguna gramática ni a ninguna retórica. (...) Porque su cualidad suprema es la social. Esa es su característica, ese su significado, su fin, su objetivo, y esa su hermosura. (...) El arte, por su independencia y soberanía, es naturalmente zaratustriano. (...) He farfullado estos pereques por honrar el tuyo, porque me asiste el derecho de opinar y la obligación de disparatar. (Carrasquilla 673-689)

ENTRE MI SUDOR Y LAS SONRISAS DE TOD@S: LA SEXUALIDAD Y LOS DERECHOS HUMANOS (DHSR)

Busca este trabajo explorar, a partir de la producción de obras de literatura de autorepresentación, la manera como la literatura se convierte en vehículo para contactar, transformar y expresar la sexualidad y la vivencia y percepción de los derechos sexuales y reproductivos en adolescentes en contextos de desplazamiento. Así, es necesario realizar un acercamiento a dos conceptos básicos que constituyen una manera, demasiada humana, de ser en el mundo: Sexualidad y Derechos Humanos. Es decir, un enfoque. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Mis sudores nocturnos José Antonio Marina: “Llamo sexualidad al universo simbólico construido sobre una realidad biológica: el sexo” (31). Nacer con pene o con vagina es un hecho biológico; ser hombre o ser mujer, haber sido criado con ropa azul o rosada son construcciones simbólicas. Esas que Marina llama construcciones simbólicas son complejas construcciones culturales, sociales e individuales que se han hecho y se hacen en todos los grupos humanos y en cada ser humano durante toda su vida. Es la carga de significado, la carga de sentido que le vamos poniendo a nuestros cuerpos, a nuestros afectos, relaciones y al mundo que caminamos hora tras hora. Que un óvulo se fusione con un espermatozoide y que en el útero comience a formarse un nuevo miembro de la especie, es un hecho biológico. Que para algunos la muchachita embarazada sea el mayor símbolo de degradación social, que para el otro sea su descendencia y su apellido el que crece allí, que para unos más sea la materialización del amor y para mi vecino la peor desgracia que le pudo suceder... todas esas son las construcciones simbólicas de las que Marina habla. Todas ellas constituyen el mundo de la sexualidad.

Así, contrario a lo que muchos profesores asustados y entusiastas nos enseñaron en la escuela durante la adolescencia, no, la sexualidad no es una condena biológica, no 29 estamos sometidos a ella. Ni es un mandato divino de carácter universal. Tampoco es el bien absoluto ni la salvación de la humanidad. La sexualidad no es todo; ni las relaciones sexuales, cualquier tipo de relación que tengamos. No hacemos sexualidad, como solían decir, cuando saludamos al tendero y le pagamos una bolsa de leche. No son lo mismo relaciones sociales que relaciones sexuales. No evitemos el sexo ni lo glorifiquemos. Sin embargo, cada cosa que hacemos en la vida, durante toda la vida, está atravesada por la dimensión de la sexualidad. Por la manera como hemos vivido nuestra sexualidad y ésta, a su vez, por la manera como la sociedad a la que pertenecemos ha construido la sexualidad.

Jeffrey Weeks: ...debemos cobrar conciencia de que la sexualidad es algo que la sociedad produce de manera compleja. Es un resultado de distintas prácticas sociales que dan significado a las actividades humanas, de definiciones sociales y autodefiniciones, de luchas entre quienes tienen el poder para definir y reglamentar contra quienes se resisten. La sexualidad no es un hecho dado, es un producto de negociación, lucha y acción humanas. (30)

Está en juego nuestra sexualidad cuando jugamos un partido de fútbol. La manera de ser hombres, de relacionarnos con nuestros cuerpos, de expresar nuestros afectos cuando el balón entra a la red. Los argentinos se besan y se dan, sin problemas, una palmadita en la nalga. Los colombianos nos tiramos al piso y celebramos con rabia. Así mismo cuando vamos a misa. La relación que entablamos con la noción del pecado relacionado con el placer sexual, las palabras sobre la monogamia exclusiva y la castidad, el lugar donde ubicamos el ser mujeres de acuerdo con nuestra cultura, con nuestros hechos biológicos y con nuestras historias personales... Hacen parte, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

entonces, del mundo de la sexualidad, todos aquellos aspectos de la vida directamente relacionados con los hechos biológicos referentes al sexo y a lo sexual. Ahí su fuerza y su importancia. El placer, el amor, la vida, la reproducción, la muerte, la dominación, el cuerpo. Ejes fundamentales de la vivencia de la sexualidad: de la vida humana en su integralidad.

Se entiende que la sexualidad es un bien, que se sepa hasta el momento, exclusivamente humano. La capacidad de simbolizar es exclusiva de los seres humanos. Los demás seres vivos cumplen, casi sin posibilidad de evasión, con funciones reproductivas, nosotras y nosotros vivimos la sexualidad. De este modo, la manera en la que vivimos nuestra sexualidad afecta directamente la manera como vivimos la vida en todas sus dimensiones y la manera como nos relacionamos con los otros seres humanos. Así mismo, puede ser concebida, la sexualidad, como elemento marcador tanto de la manera como nos autorepresentamos en el mundo, como, desde una mirada hermenéutica, del mundo mismo incorporado en nosotros. Las decisiones y la vida reproductiva, por ejemplo, tienen sus raíces en la subjetividad más honda, en ese yo que con la ayuda de Bourdieu definíamos en el tema anterior; no en caprichos o “ignorancias”. 30 Focualt lo tenía clarito (Historia de la Sexualidad 1,2 y 3), así como Weeks (Sexualidad), Bourdieu (La Dominación Masculina y transversalmente en casi toda su obra) y de manera comparable, aunque opuesta en el sentido, el sacratísimo y recurrente san Agustín. Éste último, junto con los otros padres (debió ser otra fecundación milagrosa, incorpórea, de alguna angelita empantanada en los pasillo del monasterio) de la iglesia, sabía que el control sobre los cuerpos y las sexualidades de las personas daría herramientas suficientemente sólidas para la construcción de un imperio que socavaría desde las honduras más profundas al Romano. Las mujeres, identificadas con el placer y éste a su vez con el demonio debían ser enclaustradas para que los hombres pudieran concentrarse en labores más dignas: obedecer. El cuerpo es la cárcel del alma. También nuestros escritores latinoamericanos de finales del XIX y principios del XX que inmersos en luchas fundacionales nacionales, entendieron que la sexualidad jugaba un papel importante en las restricciones y transformaciones que se luchaban el mundo... pero eso es tema de otros trabajos11.

De este modo, entonces, cuando indagamos sobre la sexualidad de estos jóvenes a partir de sus textos, y cuando nos preguntamos si el ejercicio literario puede activar en ellos transformaciones de la subjetividad, nos preguntamos por una serie bastante amplia de asuntos. La manera como perciben, construyen y viven sus cuerpos; sus historias con respecto a la posibilidad de hacerse hombres o mujeres, sujetos de derechos, capaces de placer; las relaciones que entablan con sus pares, con las personas del otro sexo y con el mundo adulto; sus narraciones, necesidades, deseos, miedos acerca de la reproducción, de las enfermedades, del erotismo. Las relaciones

11 Doris Sommer, por ejemplo, realiza una exhaustiva investigación alrededor de este tema en su artículo “Irresistible romance: the foudational fictions of Latin America”, recopilado por Homi K. Bhabha en Nation and Narration. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

de estos aspectos con las normas sociales y culturales acerca de la sexualidad. Estas dimensiones de la sexualidad (cuerpo, identidad, reproducción, afectividad, derechos, erotismo, salud...) definen el acercamiento temático a los textos literarios producidos por ellos y ellas.

Finalmente, es importante destacar cómo el abordaje del mundo de la sexualidad no es simplemente un capricho temático vinculado con la mirada salubrista de la prevención del embarazo adolescente ni del VIH-SIDA. Es el abordaje de una de las dimensiones constituyentes de la condición humana, por tanto, uno de los aspectos cuya atención y transformación puede generar hondas transformaciones en las estructuras y relaciones sociales. Como de hecho ha sucedido. La sexualidad se aprende, se educa, se transforma, y para esto se hace necesario conocer críticamente (las ciencias, la sociedad, el estado y cada persona) las maneras como se ha construido, los dispositivos de poder que juegan al interior de nosotros, las estructuras sociales y su incorporación en nuestras subjetividades, las propias historias personales. Ya se sabe que la dimensión racional cognitiva y la acumulación y transferencia de información es una puerta, un soporte, pero no el eje de la educación de la sexualidad. Es en el mundo de las subjetividades hondas donde se enraíza y recrea la sexualidad, el mismo mundo que se expresa en la creación y reflexión literaria, tal vez por eso la literatura ha siempre 31 rondado estos linderos y pueda ser tan útil para los desafíos al yo, al control y a la domesticación.

Bandera, chaleco y sigla pa’ las sonrisas de tod@s (DHSR) Acercamiento conceptual, reflexivo, a los derechos humanos sexuales y reproductivos. Menor carreta posible. Se evitarán cronografías, mapas legales o discusiones de tipo jurisprudencial. Entonces, definir enfoque e implicaciones.

Tomo aire y respondo el examen: Los derechos humanos son bienes sociales, universalmente aceptados, que representan aspiraciones éticas de la humanidad, como colectivo, en su paso por la historia. Son principios reguladores de las relaciones entre hombres y mujeres, del Estado con sus ciudadanos, y entre las naciones y los diferentes pueblos. A través de su garantía y exigibilidad ante el estado y las demás personas, cada individuo puede potenciar su vida, sus deseos y desarrollarse como un ser humano en sus posibilidades máximas. (...) acogen a todos los seres humanos por el sólo hecho de existir, sin ninguna diferenciación de clase, sexo, etnia, religión, edad, etc.. Ser humano es ser sujeto de derechos, no se requiere ninguna condición adicional a esa para merecer el derecho a tener derechos. En eso consiste la universalidad (Londoño 7). Punto.

La cosa es así. O nos protegemos como especie, de nuestras propias brutalidades, o desaparecemos. Y no es el discursito insoportable, anacrónico y peligroso de la seguridad… es el de la promoción de las capacidades humanes. Promoción de la vida, de la equidad, de la libertad y la dignidad humana. Así, el ser humano se asume como D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

un ser digno de libertad para trazar el rumbo de su vida, para decidir que le gusta leer a María Mercedes Carranza sin que algún estudiante de Maestría lo golpee. Pero también para ser capaz de comprender los derechos de los Otros. Tengo, yo, José Miguel, que respetar hasta a los cultores de Borges, el bibliotecario. Lo que hace a los seres humanos semejantes es el hecho de que cada ser humano lleva en sí mismo la figura del otro. Entonces, “los otros” podrán tratarlo como congénere (Lyotard 137-138). Así mismo, en las reinterpretaciones más recientes, estos conceptos se aplican a las comunidades humanas y no sólo a los individuos. Los derechos humanos, entonces, protegen la dignidad de cada individuo, de los colectivos particulares y de la humanidad en general.

Los Derechos Humanos son una institución moderna, tal vez la más determinante para el acceso a la modernidad. Cruzan todas las dimensiones de la vida humana y no sólo las políticas como suele verse, ya que, filosóficamente, constituyen una manera compleja de entender al ser humano en su integralidad.

Para Mary Luz Mejía, asesora nacional en SSR del UNFPA –Colombia-, el derecho es el sentimiento que se opone al poder. Es, entonces, la posibilidad permanente de la transformación, el alimento a las luchas más fuertes por la dignidad, que todos los seres 32 humanos enfrentamos durante la vida. La oposición al poder irrestricto del padre, al poder violento de los grupos armados, al poder casi divino del marido, al poder del mundo adulto sobre la vivencia juvenil e infantil, al poder de la tradición que llevamos por dentro, al poder arrasador de las iglesias. Es un sentimiento, no una reflexión lógica. Es la rabia, el dolor frente a las injusticias, la alegría, la sonrisa inevitable cuando la vida se pone más tranquila, más de acuerdo. Aquello que nos da fuerza para luchar, para reclamar, para ser solidarios. Aquello que llamamos la dignidad.

Ahora bien, en el ámbito de la sexualidad y la reproducción, la aplicación de los derechos humanos va enfocada a proteger la vida, la igualdad, la libertad y la dignidad en lo concerniente a la vida sexual y reproductiva de las personas. Es decir los derechos humanos entre las piernas, bajo la lengua, en los servicios de salud, en las legislaciones al respecto, en la actitud del policía o el médico que recibe a una mujer abusada sexualmente, en los uniformes del colegio o en el derecho de la mujer a decidir sobre el embarazo, etc..

Si la sexualidad nos ronda la vida, reposa en las honduras de nuestra identidad y se expresa y negocia en cada pequeña cosa que hacemos en la vida; si la sexualidad es una dimensión determinante en la vida social y política de la humanidad; los derechos humanos sexuales y reproductivos parecen ser el horizonte que posibilita una vivencia más justa, equitativa, digna, placentera y libre de nuestra sexualidad y de nuestros cuerpos. Es decir, de la vida en general.

Sin embargo, de manera independiente al discurso filosófico y ético, la vivencia de los derechos sexuales y reproductivos es una construcción individual y colectiva, y es en el espacio de la intimidad, de la subjetividad más profunda y de las estructuras D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

sociales, políticas, económicas y simbólicas donde esto se juega. Los derechos, dicho anteriormente, son apuestas colectivas de la humanidad. Apuestas. Deseos. Horizontes. La realidad, lo sabemos, es otra. Así, para la vivencia de los derechos sexuales y reproductivos se requiere la construcción y mantenimiento de condiciones de posibilidad (Petchesky). Dichas condiciones se construyen, principalmente desde el Estado, en lo referido a la dimensión estructural (servicios de salud, educación, protección y justicia oportunos, de buena calidad, que respondan a los contextos; mecanismos serios, sistemáticos y coherentes para la superación de la pobreza, etc.), y también desde la intimidad y la subjetividad, desde la cama, desde el cuerpo, desde las palabras con que nombramos al novio, al usuario de diversos servicios, al amor, al sexo, etc..

Entonces, ¿cómo desarrollar procesos pedagógicos tendientes a la construcción de sujetos titulares de derechos, si sabemos que no por conocer nuestros derechos los respetamos y los hacemos valer? ¿Cómo conocer y develar las estructuras más profundas que sostienen y reproducen sistemáticamente vulneraciones de derechos sexuales (por ejemplo, el abuso sexual en Colombia es un ejercicio sostenido y validado por estructuras culturales fuertemente patriarcales, no es un asunto de enfermedades mentales, ni ignorancias)? La “naturalización” o “deshistorización” de los procesos 33 sociales de las que hablan tantos teóricos contemporáneos no afectan única ni principalmente la racionalidad, la manera como verbalizamos el mundo y a nosotros mismos (los pobres se mueren de hambre, es “natural”; los hombres tenemos mayores necesidades sexuales, es “natural”), sino que afecta y define, sobre todo, la manera como sentimos el mundo y como nos sentimos con respecto a la vida. Bourdieu los percibe en su definición de Habitus expresada anteriormente. Así que también a sentirnos frente al mundo lo aprendemos y lo podemos, con mayor o menor dificultad y efectividad, reaprender. Por supuesto, labor nada fácil: es más sencillo transformar la naturaleza que la identidad aprendida; es más fácil quitarse el pene y ponerse vagina que dejar de ser un macho dominante y violento.

¿Qué vínculos podría tener la literatura con todo este rollazo? Que le pregunten al Gabo de las putas tristes, que cómo no van a estar tristes las virgencitas costeñas que son compradas con jeans, mercados, licores y perico por ancianos hambrientos de carnecita fresca antes de la muerte. O a las millones de Magas a quienes sus pequeñitos Rocamadures se les mueren abandonados por la ilustradísima y ausente masculinidad de sus compañeros. La postura ética que implica promover, reflexionar y respetar la dignidad de cada ser humano. La literatura como polvillo mágico que visibiliza (y resiste o reproduce) las formas de la vulneración. La posibilidad de ser de otra manera, de soñarlo, de curar, de planearlo con el detalle de una novela policíaca o de un microcuento.

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ENTRE PAPELES BUROCRÁTICOS, TABLEROS DE JUEGO Y TRIPAS PALPITANTES: PROYECTO MARCO, CONTEXTO Y PARTICIPANTES

Burocracia de esperanzas extendidas: salud sexual y reproductiva en contextos de desplazamiento. Se hará a continuación una brevísima descripción de aspectos pertinentes del proyecto UNFPA INT00P9M “Atención a las condiciones de género y salud sexual y reproductiva de la población desplazada por la violencia, énfasis en adolescentes”. Los espejos y claraboyas surgen alimentadas, en parte, por este proyecto: una muestra pequeña de que la burocracia internacional también puede ser inteligente y útil (upss). Para mayor acercamiento al proyecto, puede consultarse el documento de sistematización, los resultados de la evaluación y las fuentes usadas, a través de la oficina del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Colombia (www.colombia.unfpa.org).

El enfoque del proyecto estaba determinado por los DHSR, y su objetivo era, en palabras del coordinador del Proyecto: ...promover la recuperación de la PDV como sujetos de derechos humanos sexuales y reproductivos y proveerla de servicios de salud sexual y reproductiva, 34 especialmente dirigidos a adolescentes, partiendo de un enfoque de derechos humanos y aprovechando las fortalezas institucionales construidas en el país a fin de lograr que algunos de los efectos secuenciales y catastróficos que siguen al desplazamiento no se den o por lo menos sean mitigados. (Pacheco, 2001)

Para lograr este objetivo, se trabajó en dos grandes áreas: el fortalecimiento institucional (a las instituciones del estado encargadas de garantizar los derechos a la población desplazada), y el fortalecimiento directo a la población en contextos de desplazamiento.12 Para el caso de las dos áreas de trabajo se plantea una premisa pedagógica y ética fundamental: el centro de las transformaciones y de la ganancia de autonomía es la subjetividad, no el discurso lógico-formal. Y dentro de la subjetividad, la emocionalidad juega un papel fundamental.

El proyecto, entonces, va descubriendo que El Arte y La Comunicación -entendida como acción dialógica, como proceso- ofrecen oportunidades privilegiadas para la transformación de las subjetividades, para la puesta en común de emocionalidades, de historias de vida, de valores, y para la discusión abierta de estas (Nieto 2005). Si los derechos humanos sexuales y reproductivos son el horizonte, el arte y la comunicación son la ruta y el morral.

12 Esta definición de “contextos de desplazamiento” implica el reconocimiento de que las personas receptoras de los y las desplazadas, tienen también historias contundentes de vulneración de derechos, pero además su vida se ve fuertemente afectada por la llegada de los otros. Por otro lado, busca abrir las puertas a las personas desplazadas que por distintas razones no quieren denunciarlo sino que prefieren mantener cierto anonimato. Es un concepto incluyente. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Una de las ciudades de trabajo fue Villavicencio, donde el proyecto posó sus alas (no de ángel; más de mamá gallina, a veces de vampiro y en muchos casos, de águila libertaria) paralelamente en dos asentamientos, La Nohora y La Reliquia (éste último, casa de nuestr@s autor@s). En Villavo se constituyó la, “autodenominada”, Alianza Placer, con la Asociación Sociocultural Nacatsi, la Fundación Restrepo Barco y Save the Chlidren uk, acompañantes de todo el proceso.

De Villavicencio a la Reliquia: el tablero donde esta vida se juega Villavicencio es la capital del departamento del Meta, queda a 90 minutos por tierra de Bogotá. La ciudad más importante de la bastísima región de los llanos orientales. Allí la historia del conflicto armado, es característica y determinante para la historia general de la guerra y de la exclusión en nuestro país. Han sucedido en esta zona (Meta, Arauca, Guaviare, Putumayo, Vichada) algunos de los peores eventos de violencia y abuso de poder que el país recuerda, así como el histórico desastre que significó la Zona de Distensión Pastrana-FARC. Actualmente sobre esta región opera una estrategia gubernamental llamada Plan Patriota (Colombia-USA), que pretende neutralizar a las guerrillas de la zona y tomar el control del territorio para su explotación comercial internacional. 35 En términos culturales, Villavicencio está fuertemente influenciada por la cultura y la producción simbólica de la región a la que pertenece, que comparte con Venezuela. La música llanera, las demostraciones de trabajo de llano, las exposiciones equinas y ganaderas son tal vez las muestras culturales más importantes de la región. Todas, tradiciones culturales relacionadas con la lógica de la ganadería extensiva, donde además florecen características bastante tradicionales y fuertes de la masculinidad. El llanero es un hombre recio, de palabra, aventurero, orgulloso, que se hace respetar. Sin embargo, en la música llanera, a diferencia de otras tradiciones musicales comparables en el país (los vallenatos, mucho de la música del Tolima Grande: músicas de vaquería, de hacienda, de campamentos ganaderos y campesinos), se ha presentado una participación bastante activa y fuerte de las mujeres, no solo en el canto y en la interpretación de los instrumentos, sino sobretodo en la composición de letras que reflexionan su lugar en la sociedad y en la pareja. Las mujeres llaneras han sido representadas como mujeres frenteras, luchadoras, misteriosamente eróticas...

Así pues, estas características determinan, por ejemplo, la vida política de Villavicencio. Es una práctica gamonal, clientelista, centrada en intereses económicos particulares y aliada permanente de la muerte y la represión. Una clase política que los llaneros reconocen como surgida del narcotráfico y del paramilitarismo, que se ha formado a partir de alianzas con mafias nacionales y cuyo vehículo principal de discusión es la compra de votos y el asesinato.13 Dos líneas paramilitares muy fuertes que luchan entre sí (y con la guerrilla) por el control de la región entera, son también quienes lideran dos de los movimientos políticos más fuertes de la ciudad y del departamento.

13 Descripción resultante de la observación y sobre todo de múltiples y largas conversaciones con habitantes de Villavicencio. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Las altas cifras de pobreza y de desempleo, así como las herencias de las mafias y del narcotráfico en conjunto con la alta corrupción política y la solidez del patriarcado, han convertido a Villavicencio en uno de esos destinos importantes de turismo sexual, así como ha generado una gigantesca industria del comercio sexual tanto de mujeres adultas como, especialmente, de adolescentes y niñas. Estos son negocios abiertos, crecientes y de los que las autoridades tienen pleno conocimiento. Por supuesto, las principales víctimas son las mujeres desde los 11 hasta los 19 años, en condiciones de abandono o de pobreza. Se han identificado redes de tráfico de jóvenes al interior de los colegios públicos de la ciudad, así como planes de turismo y de servicios sexuales que funcionan por internet y que, en la actualidad, están reclutando niñas.

Villavicencio es una ciudad joven, en la que no han existido procesos sostenidos de construcción de tejido social, donde los liderazgos democráticos y populares son eliminados rápidamente, y la participación comunitaria está sometida al miedo, a la resignación y al uso electoral de los candidatos de turno. La mayoría de su población es pobre, procedente de todos los municipios de los llanos, tiene pésimos servicios públicos (incluyendo salud y educación) y cada vez ofrece menos posibilidades de empleo y desarrollo para las personas. Posee una clase alta muy alta, producto de la ganadería, del narcotráfico, de la corrupción política y del petróleo. Para el país, 36 Villavicencio debe ser simplemente funcional: que no haya secuestros para que los hacendados puedan visitar sus fincas y sacar sus productos; que el petróleo salga bien, sin interferencia de sindicatos, guerrilleros o indígenas; que reciba una gran cantidad de población desplazada, y que nada impida la llegada de alimentos a Bogotá. Más que una ciudad es un campamento, una oficina a veces complicada de manejar.

Ahora bien, cerremos el zoom sobre el Barrio La Reliquia, casa de este proyecto. La Reliquia es un asentamiento de, principalmente, población desplazada, que queda a las afueras de la ciudad, en una vía que conduce a al complejo ganadero de Catama. Su existencia comienza en el año 2000, cuando más de 2.500 familias ocupan de hecho la finca homónima, de más de 54 hectáreas. El barrio ha avanzado significativamente en el proceso de legalización y titulación de las tierras, más no en el de dignificación de la vida. Hoy, con 2.700 habitantes aprox., es el segundo potencial electoral de Villavicencio, lo que significa: presencia permanente de paramilitares, corrupción de muchos líderes comunitarios, dificultad enorme para construir tejido social, mantenimiento de la exclusión (hasta de acceso físico: los habitantes de este barrio viven en cierto nivel de aislamiento, ya que siempre se necesita coger uno o dos buses para llegar a ciertas partes de Villavicencio, lo que implica un dinero que muchas veces la gente no tiene), de la pobreza y de la falta de educación, manoseos por parte de la alcaldía y sus dependencias, y, por supuesto, puentes donde no hay ríos.

La Reliquia es un barrio enorme, bastante alejado del centro de Villavicencio. Su geografía es plana, tiene varias vías internas (todas sin pavimentar) secundarias y una principal (también sin pavimento) por la que transitan busetas y taxis que cumplen rutas hacia el centro de la ciudad. Su actividad comercial es altísima a pesar de la extrema pobreza: misceláneas, billares, tabernas, panaderías, prostitución, servicios de telefonía, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

juegos de video, peluquerías, etc.. La mayoría de los dueños de los establecimientos comerciales no habitan La Reliquia. Tiene características muy fuertes que lo definen como un barrio popular urbano, a diferencia de otros asentamientos en Villavicencio y en el país que guardan características más rurales. Es decir, comparable, a escala, con Aguablanca en Cali, Mandela en Cartagena o Ciudad Bolívar en Bogotá.

La vida en La Reliquia es muy dura. Las condiciones económicas de la gran mayoría de sus habitantes son cercanas a la indigencia. Se respira bastante cansancio en el aire y en las narraciones de la cotidianidad. Allí llegaron las personas provenientes del Guaviare y de casi todos los municipios del Meta, pero también del Cauca, de Antioquia y de Cundinamarca. Y siguen llegando. Y siguen esperando irse a un lugar donde haya mejores posibilidades o donde puedan estar más tranquilos.

Como puede suponerse, todo el que tenga un “proyecto social” aterriza acá. La mayoría vinculados a gamonales o a campañas políticas; otros volátiles, pendientes de problemas puntuales; una gran cantidad pastoreados por ondas de evangelización casi sacratísimamente sanagustinianas, y muy pocos, o casi ninguno, apuntando a procesos de fortalecimiento organizativo, de desarrollo integral, etc.. La vida se pone en juego. 37

Las tripas de quienes jugamos y palpitamos: el grupo SEXU-JOVEN y sus amig@s. En llegando al centro del juego se pueden ver los carbones encendidos, palpitantes. Acá, bajo la bandera de Villavicencio y los techos frágiles, los y las autoras del corazón desta investigación. Aunque textual y narrativamente esta presentación es preliminar al momento del taller y del análisis de los textos, en la vida real sucedió de manera simultánea; es decir, este segmento es ya conclusivo… pero sólo un poquito, pa’ dejarlos antoja’os.

El grupo Sexu-Joven nació, con ese nombre, para las celebraciones del Día Mundial de la Lucha contra el Sida en el año 2004. Desarrollaron una feria en su asentamiento, en la que, a través de productos comunicativos y didácticos entablaron un diálogo pedagógico con la comunidad alrededor de los temas de VIH, sexualidad, salud sexual y reproductiva y derechos sexuales. Por la noche presentaron, en conjunto con el grupo del asentamiento La Nohora, dos hermosas puestas en escena de trabajo corporal sobre la sexualidad. Este evento fue la antesala a un concierto del grupo Kraken y fue visto y aplaudido por cerca de 5000 personas.

Las ferias y las puestas en escena fueron el resultado de actividades formativas bastante intensas lideradas por la Asociación Sociocultural Nacatsi. Cuando el taller de literatura comienza, los y las jóvenes de este grupo han tenido un proceso formativo importante, que ha incluido la revisión de sus subjetividades, pero ha tenido mayor fuerza en la adquisición de conocimientos útiles (no siempre) para su vida cotidiana y para la puesta en marcha de procesos pedagógicos con otros jóvenes, así como una experiencia en el campo de las artes y de la comunicación. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Sexu-Joven son hombres y mujeres jóvenes, entre los 13 y los 19 años, habitantes de este asentamiento y cuyos orígenes y posibilidades económicas son absolutamente diversas en medio de la pobreza. Hay desde condiciones de completo abandono e indigencia (mujer de 16 años que ha vivido en las calles, que fue violentada por su padre hasta el extremo de tenerla y que en el momento del taller vivía, escapada del ICBF, en casa de algunas amigas o primas), hasta algunas personas que habitan casas de bloque y cuyos papás tienen un salario mínimo estable. La mayoría habitan casas auto-construidas, de madera y plástico, con piso de tierra, sin infraestructura sanitaria.

Como elementos constantes en sus historias personales (en distinta escala), se encuentran: relaciones familiares dolorosas y enmarañadas, vulneraciones en el marco del conflicto armado y de la violencia cotidiana, altísima desescolarización, resistencias- concesiones y luchas con respecto a los mandatos culturales, ansiedad por las claraboyas y el angustiado deseo de no joderse la vida.

Otro elemento fundamental para comprender el contexto en el que se escribieron los textos que forman el corpus de esta investigación, es, también, el tipo de 38 acompañamiento que nuestr@s autor@s recibieron. Descripciones narrativas de estas personas, en las que estoy yo incluido, como facilitador del taller.

Como se ha mencionado anteriormente, el taller fue acompañado por las personas de la Asociación sociocultural Nactasi, especialmente por la sicóloga Alicia H. Rivera. Esta es una organización dedicada básicamente al trabajo teatral (teatro, cuentería, expresión corporal, títeres) y a sus posibilidades pedagógicas en proyectos sociales. Nacatsi generó espacios bastante interesantes de libertad y de compañía, en los que los y las jóvenes encontraron un espacio para jugar, para ser, para subvertir, para estar seguros y para sentirse apoyados. A pesar de rupturas significativas, la acción pedagógica que lideró Nacatsi tuvo bastante asiento en lo cognitivo racional desde una mirada de salud pública y salud mental. Alicia es, en carne viva, esta complejidad algo contradictoria.

Ella es una mujer llanera, de San Martín, que por su historia personal ha aprendido a poner en duda muchos de los valores más tradicionales de su cultura… pero es sicóloga. Ella es madre sola, de dos hijos que están terminando la adolescencia, cuyo padre, siempre un poco ausente y maltratador, fue desaparecido por los paramilitares hace más de 10 años. Alicia odia los comentarios que elogian el hecho de haber sacado adelante sola a sus hijos; le parecen perfectamente injustificados, ya que no siente que hacerlo con un macho al lado sea algo especialmente meritorio o gratificante. Cree profundamente en la libertad y en la justicia, en el derecho a disfrutar el cuerpo y a equivocarse.

Ella realizó (y realiza) con el grupo el acompañamiento psicosocial y la motivación para el aprendizaje en los temas, así como las gestiones para reconectar a los muchachos D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

con la escuela y generar el vínculo del proyecto con los padres y madres a través de intensivas visitas domiciliarias. Es muy querida y respetada por los jóvenes y por las familias. Como sicóloga, tiende a ser bastante tradicional en su enfoque educativo y a poner por delante objetivos salubristas, así sus tripas palpitantes le digan que por ahí no es la cosa.

Finalmente, yo. Espejo pa’ mí también. Aunque estuve cerca del grupo siempre, fue sólo a partir del inicio del taller de literatura cuando me vinculé de manera más fuerte a sus vidas y sentimientos. Mi presencia allí podría significar elementos para continuar abriendo esa claraboya que mencionaba antes. O para cerrarla. Soy un adulto joven, hombre, heterosexual, de pelo largo, con fuertes rupturas frente a la masculinidad tradicional y, en momentos críticos, con complacencias horribles y dolorosas. Realmente aprendí a disfrutar ser el tipo de hombre que soy y he aprendido a ser un hombre que pudiera disfrutar. Bogotano clase media alta, de herencia tolimense, con mucha influencia ya adulta de otras culturas del país. Soy profesional de una de las universidades privadas más prestigiosas del país, y trabajo (en el momento del taller) con una agencia de cooperación internacional. 39 Crecí en una familia de padres separados, criado por mi madre y mis dos hermanos mayores, estudié en un colegio privado católico y masculino. Aprendí a ser hombre, en mucho, en reacción al tipo de hombre que era mi papá y bajo la guía de mi madre, mis hermanos y, más adelante, de mis compañeras de universidad.

Me gusta la literatura que habla claro, que golpea la cara, que genera erecciones automáticas, que alimenta las luchas por la libertad y la dignidad. Yo no soy sólo un estudiante de la maestría de literatura haciendo una tesis que le permita avanzar en su carrera como crítico literario, soy escritor siempre en proceso; un escritor a quien le interesa el trabajo de campo y la promoción de la literatura, las artes, las capacidades expresivas y la comunicación, antes que el cultivo de grandes obras de arte.

(El resto es subtexto). C E S “Ya no quieres darme uso a la R palabra 3 S O T I T E cansada que GESTADte digaO másS mentiras no comprendes amor mío que tú me obligas que yo te mienta por cambiar tu rabia...” D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

3. DE CÓMO FUERON GESTADOS Y DE CÓMO SE JUGUETEAN LOS SECRETITOS: -descripción metodológica, según dicen-

“Ya no quieres darme uso a la palabra cansada que te diga más mentiras no comprendes amor mío que tú me obligas que yo te mienta por cambiar tu rabia...” Palabras (poema llanero). Rafael Martínez14

Esta investigación se entiende no como el análisis de unos textos literarios canónicos, preexistentes y validados por la crítica convencional, sino como la profundización en el mundo de la creación literaria como experiencia transformadora y como acto comunicativo y antropológico. Es absolutamente necesario conocer detalladamente las formas y herramientas con las que se propició la escritura literaria en jóvenes que, por su contexto, no tienen probabilidades de acercamiento a “La Literatura.” Las maneras como se intentó potenciar su fuerza transformadora y expresiva y las condiciones en las cuales, o a través de las cuales, se leyeron los textos finales para determinar cuáles 41 harían parte del “elegido” Corpus y cuáles no, son componentes de esta descripción metodológica. El tercer capítulo busca, entonces, hacer una lectura panorámica del Cómo usado en esta investigación.

Intento develar la estructura subyacente en las interpretaciones, ya que, como sabemos, y muy a pesar de las pretensiones puristas de las ciencias positivas y de algunas líneas de las ciencias sociales, las interpretaciones no están liberadas de los contextos ni de las subjetividades de los investigadores. No suceden en un mundo aislado de sentimientos, de sesgos políticos ni de limitaciones técnicas. Así mismo, es una especie de guía para la veeduría (y autoveeduría) y aplicación de la experiencia, ya que ésta ha sido concebida todo el tiempo como un ejercicio de experimentación y aprendizaje. Es decir, volviendo al comienzo, no sólo basta decir si un poema es bonito o feo o digno o indigno… hay que tratar de encontrar qué eso que está escrito, cómo fue escrito, qué sucede al escribir o leer ese “poema”.

Espero que las propuestas y reflexiones aquí planteadas puedan servir para el desarrollo de, por un lado, ejercicios artísticos y de creación que liberen al arte del ego de los artistas, del culto a la personalidad y de los mitos individualistas; y por el otro lado, para ser capaces de echar a andar procesos que permitan conectar mucho más los conocimientos con los sentimientos, el cuerpo con la palabra y las subjetividades de todos los participantes en los procesos pedagógicos (¿anti-pedagógicos?).

14 Compositor de canciones y poemas llaneros. La tradición musical llanera tiene una fuerza muy grande en la composición y grabación de poemas acompañados por música. El ejercicio de autorepresentación individual y cultural es evidente. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

DE CÓMO FUERON GESTADOS: LOS TALLERES Los textos que conforman el Corpus de análisis surgieron de un taller de literatura realizado durante los meses de marzo a mayo de 2005 en el Barrio La Reliquia de Villavicencio. Este taller se dividió por sesiones de 4 horas aproximadamente los días sábados. El número total de participantes fue de 20 jóvenes, con características bastante móviles y disímiles. El presente aparatado y su anexo (Memoria de las sesiones) buscan describir las principales características del taller, así como dar cuenta de las actividades y sesiones que lo conformaron. Por supuesto, el taller hizo parte integral de esta investigación, no fue un hecho aislado que luego se aprovechó para el análisis. Todo comenzó con el planteamiento de las premisas y los talleres, como parte de las búsquedas personales (profesionales, pasionales, estéticas, éticas) por vivir y hacer arte y literatura.

El espejo del espejero: reflex sobre el pa’ qué del taller Una mirada reflexiva sobre los objetivos y razones que movilizaron el taller. En el anexo correspondiente se encuentra detallado el diseño formal de objetivos y actividades y su división por sesiones, así como la memoria narrativa (diario de campo bastante 42 intimista) de cada una de ellas. Las actividades fueron y serán absolutamente variables, opcionales, susceptibles a cambios totales, por lo que no vale la pena incluir acá una doctrina sobre actividades tipo. En el capítulo cuarto (De Secretitos a Claraboyas) se encontrará ya la mirada analítica de la totalidad de la experiencia.

Para comenzar, para tenerlo presente y calientito, copy-paste desde el anexo. Objetivo General: Promover la exploración y el reconocimiento de las historias y subjetividades alrededor de la sexualidad y los derechos como punto de partida para la acción educativa, a partir de la movilización de lo sensorial, de la literatura como medio de autoencuentro y comunicación, y de la discusión grupal como mecanismo de reflexión y cohesión.

Como puede verse, el foco de los talleres no está puesto en la creación del corpus literario. Es decir, no se trata de hacer la tarea. Esta decisión, que implica una postura ética, aparentemente sería inadecuada para el desarrollo de una investigación para la Maestría en Literatura; sin embargo, como se ha dicho durante todas las páginas precedentes, el interés acá está puesto sobre las obras como parte de un proceso de producción y como productos de contextos y de historias personales específicas. No interesan obras desvinculadas, por tanto el objetivo no ubica en primer plano la construcción de un corpus –a como dé lugar-, sino el desarrollo de un proceso promovido, fertilizado, potenciado por la literatura, en el cual las personas participantes entren en contacto de manera reflexiva, crítica, con ellas mismas, con sus historias y con los mundos que las rodean y las estructuran.

Se abre así una posibilidad privilegiada de establecer contacto, en tiempo real y sin las extremas divagaciones metafísicas de muchas interpretaciones literarias, con D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

los momentos, las personas y los lugares en los que las obras están siendo escritas. Los sentimientos que se ponen en juego allí. Permite también poner en juego todas aquellas creencias que se tienen sobre las posibilidades vitales de la literatura, en cuanto a ser espejo, ventana, disculpa, máscara, escape, en personas que no tienen como oficio, costumbre ni fe este arte. Es decir, que para un escritor de oficio o religión, o para un teórico que dedica su vida a leer, analizar y glorificar literatura, este arte sea revelador de la subjetividad propia, del mundo y de la condición humana... es lógico; pero que alguien que no tiene acceso cotidiano y amable a libros o poemas, pueda de un momento a otro encontrar en ellos un espejo revelador o un túnel de catarsis... es tan sólo una hipótesis.

Otro subrayado. El lugar de la ética y de la coherencia interna con los principios y enfoques del proyecto en el que esta propuesta se enmarca. No es posible pensar que los y las jóvenes son simplemente conejillos de indias para la realización de una experiencia innovadora en literatura o en cualquier área del saber. Es necesario tener presente su lugar, sus deseos, sus necesidades y, sobre todo, sus derechos. De este modo, parte del sentido de los talleres anida en el establecimiento de una relación de la que los y las participantes puedan obtener provecho real: espacio para ser, para crear, para reflexionar, apostar y jugar. Es decir, hacer que el tiempo del taller sirva para que 43 su vida sexual, las relaciones con su cuerpo, con sus parejas y sus familias sean cada vez mejores. Que haya más sonrisas y menos dolores. Más decisiones y menos accidentes.

Se trata, entonces, de generar un espacio para existir en condiciones dignas, para jugar y crear, y que, a través de un proceso de vayivenga con la literatura, el cuerpo y la subjetividad, nos sirviera a todos para las cosas que creíamos que nos debería servir. ¿Y cómo?

Soplando, soplando… estirar y dejar enfriar. Se plantean actividades que respeten los derechos humanos de los participantes (es decir, en las que no se les vulnere, que no se ponga en riesgo su vida, que no los oprima o genere relaciones de dominación, que promueva la toma de decisiones, la igualdad de derechos y la dignidad), que tengan en cuenta sus diferencias, que promuevan su participación activa y creativa, que sean incluyentes en la diversidad –por género, por edad, por condición social, por creencias religiosas-, que muevan los sentimientos y sean provocadoras del pensamiento crítico –discusión-confrontación-, y en las que la prioridad sea la discusión y la creación a partir de las búsquedas personales y no el aprendizaje de conocimientos. Es importante, en procesos como éste y con poblaciones móviles, que las actividades y el proyecto mismo sean lo más elásticas posible, incluso, al punto de replantear los objetivos iniciales. Una característica particular de esta investigación es la puesta en marcha de actividades en las que la literatura fuera un elemento provocador de pensamientos y emociones.

Así, como una parte del objetivo es la creación y el otro la transformación subjetiva, se encuentra en la propuesta de Joan Carles Melich un sustento teórico bastante D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

importante para el diseño metodológico. En su libro Antropología Simbólica en la Acción Educativa, Melich reconoce la importancia de la vinculación a la acción educativa de los “Mundos de la Vida” habermasianos, los universos simbólicos en los que se juega la cotidianidad de las personas, sus decisiones. Esta propuesta desde la antropología simbólica ubica en lugar privilegiado los espacios de discusión cara- a-cara, en los que la intimidad aflora y todo el mundo del juego como espacio de normatividades autónomas donde la subjetividad se pone a flote. Espacios de exigencia máxima para la negociación, el respeto por el otro y la discusión (Melich).

Para este caso, entonces, se usa El taller. Metodología en la cual se hace posible llevar a la realidad el enfoque propuesto. Lugar por excelencia para la creación. Como ya se sabe, El taller es un espacio pedagógico en el que se intenta construir una relación de aprendizaje con la participación activa de todos los y las involucradas. El nombre proviene de la semejanza metafórica con los talleres de ebanistería, por ejemplo. En estos talleres se construyen cosas, se toman distintos materiales y la participación de varias personas y con la orientación de alguien se van elaborando productos tangibles. El taller del espejero, del claraboyero.

Trasportado al mundo de la pedagogía contemporánea, en El taller se busca que 44 la participación de cada persona sea máxima, que se respeten sus capacidades y necesidades personales y que para cada persona resulte del taller un producto tangible ajustado a su vida. No es una conferencia ni un panel ni una clase, no se trasmiten conocimientos unidireccionalmente ni se respetan de manera estricta códigos de poder ni de funcionamiento. El taller, manteniendo los mínimos de unidad y coherencia, debe ser mutante.

Por supuesto, existen miles de maneras de soplar, de estirar y de dejar enfriar… ¡he aquí las usadas! Las ideas que se presentan a continuación son presupuestos metodológicos reflexionados a la luz de la experiencia; es decir, son conclusiones:

• El valor de la libertad Como podrá apreciarse en todo el trayecto que llevamos, la libertad es tal vez el elemento ético que sirve de base para todo el diseño metodológico. Con el valor de la libertad, desde un enfoque de derechos humanos, descansan también los principios de Dignidad e Igualdad. La libertad no es abandono. Es decir, la libertad no significa dejar que cada cuál haga lo que se le antoje de manera espontánea, como si los seres humanos tuviéramos una base instintiva que nos permitiera, equitativamente, sobrevivir así. La espontaneidad es hija de la cultura, y la nuestra es una cultura abusiva.

Que este taller tenga asiento en el valor de la libertad como derecho, significa que el taller y su facilitador, deben promover el ejercicio de la autonomía creativa, del respeto mutuo y, en consecuencia, de la creación de límites con respecto al mundo, a los otros y a uno mismo. Debido a que la libertad requiere (a) de la voluntad, (b) de la posibilidad real de ejercer la voluntad, (c) de los conocimientos suficientes y D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

(d) del acompañamiento crítico, el taller debe brindar espacio para el desarrollo de los cuatro elementos. De este principio se desprenden los siguientes, y en ellos se materializa (Mejía).

• La validación del otro y las negociaciones El primer ejercicio de coherencia con los enfoques planteados, es el reconocimiento de los derechos del otro, y la posibilidad de negociar permanentemente los asuntos que definen nuestra vida cotidiana. Para El taller es absolutamente fundamental este principio, ya que posibilita la comprensión de los participantes como miembros de un colectivo. Un colectivo capaz de crear, de producir literatura, de transformarse a sí mismos y al contexto que los rodea.

Se negocian los tiempos, las metodologías, los aspectos logísticos, los ritmos y temas de trabajo. Se negocia la pertinencia misma del taller y de las sesiones.

• Historias y sentimientos como materia prima Ya que el taller busca la revisión individual, no se tienen como base curriculums preestablecidos para configurarlo, sino la vida misma de cada uno y cada una. Las historias y los sentimientos (pensamientos) de cada participante y de quien facilita 45 constituyen el alimento para el taller. Por otro lado, como se veía antes, la vivencia y el aprendizaje de la sexualidad y de los derechos habitan estas dimensiones. Así mismo, es posible que se garantice la participación válida de todas las personas, porque no hay historias ni sentimientos equivocados o menos válidos que otros.

Es tarea del espejero activar los recuerdos y la identificación de sentimientos, y garantizar un clima respetuoso para todos y todas. Son muchas las formas de poner en juego esta materia prima, así como muchas las barreras que las personas encontramos para no expresarlas... y para no atenderlas.

• El cuerpo como sensor. Cuando distintos autores de la antropología contemporánea (como el faro de esta investigación: Bourdieu), así como fenomenólogos de la línea de Bachelard, con distintas palabras hablan de la incorporación de la cultura, o de la construcción simbólica del cuerpo, o del cuerpo como construcción social, se refieren a eso que acá se llama el cuerpo como sensor. En el cuerpo de cada uno habita el mundo individual y la sociedad que habitamos... la sociedad que nos habita. In-corporado. Así, en este taller el cuerpo no sirve sólo para estar ahí sentado o para coger el esfero, sino que en él, en la memoria corporal, en la sensibilidad de la piel, en el uso que le damos relacionado con el daño o el bienestar... en él, íbamos, habita nuestra vida, nuestra fe, nuestra historia. Es necesario, entonces, establecer con él una relación más funcional, más cercana, más autónoma; es decir, ser capaces de escucharlo, de entender de qué es capaz, de cuidarlo, de acercarnos un poco más a la comprensión de nuestras historias personales, de saber que nuestro cuerpo es distinto al de los demás. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

En términos prácticos, entender al cuerpo como sensor, implica generar actividades en las que las participantes hagan consientes sus cuerpos. En las que traten de visualizarlo, de reconocer molestias, limitaciones, ignorancias y conocimientos sobre él. Así mismo, significa proponer el cuerpo como tema de creación y de discusión, y, en cuanto al facilitador, leer los cuerpos y accesorios de los participantes como una mirada etnográfica al contexto y a la cultura. Los cuerpos son, al mismo tiempo, sensores de las individualidades y del contexto.

… pero el cuerpo también es hambre y sueño y cansancio, por lo se requiere ayudar a satisfacer, en la medida de lo posible, estas NBI’s.

• La palabra como vehículo. La literatura es palabra. Si este fuera un taller a partir del teatro o de la pintura, los vehículos serían otros en vez de o además. Pero la literatura, además de subjetividad, es palabra.

Por otro lado, el vehículo de expresión más determinante para participar activamente en el mundo actual es la palabra. Oral o escrita, no importa. La palabra consigue alimento, protege de la lluvia, evita problemas, seduce buenas compañías 46 y elude golpes que vienen ya en el aire. Y cuando se hace la lectura del contexto de los muchachos y muchachas de La Reliquia, así como de muchas otras partes y edades en Colombia, se evidencia una dificultad expresiva enorme; objetivo conveniente (no efecto secundario) de la guerra, de la pobreza y la opresión. Allí, entonces, la palabra se abre como una luz de uso rápido.

Finalmente, se planeta en los objetivos el deseo de cuidar y mejorar constantemente la forma de los textos, para lo que, evidentemente, se necesita fortalecer y enriquecer el uso de las palabras. Ética, estética y política. Para esto entonces, se privilegia el lugar de la discusión oral, de la lectura de textos de provocación (haciendo todo el ejercicio desde el conocimiento básico de las palabras hasta la comprensión total del texto, pasando por la necesaria conversación sobre la forma elegida) que movilicen el pensamiento y que alimenten el léxico y los usos de las palabras.

• El juego como tono constante. A partir de las recomendaciones de Melich sobre el valor del juego en la educación y en el trabajo con jóvenes, se plantea que no sólo se trata de diseñar juegos durante el taller, sino que el taller mismo tenga un tono de juego. Todo él. La vida dentro de él.

Se trata, entonces, de generar un espacio no artificial que rompa por completo la cotidianidad de los y las participantes. El ejemplo perfecto del espacio artificial para una comunidad es la mansión que el traqueto o el futbolista le construye a su mamá en la mitad del barriecito marginal. Es artificial porque no pertenece, porque para el resto de los mortales es imposible alcanzar condiciones como aquellas. Espacio no artificial, entonces, es uno que provoque, que rompa, pero que sea factible de revivir D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

y alcanzar. El juego es eso; la huída del mundo que cobra a cada hora, la invención de personajes, de maneras de ser, de normas, de futuros.

Cada sesión del taller debe ser entonces una sesión de juego, en la que esté permitido reCrearse, negociar las reglas, ver de manera distinta las relaciones de poder, las miserias, los dolores... potenciar las felicidades y los amores. Es un ejercicio complejo para quien dinamiza, porque le implica, por supuesto, ser parte del juego, entregar su autoridad, destapar todas las cartas, divertirse, tolerar, pero tratar de que el taller no se diluya. Avivar el juego creador.

Esta idea tiene, además, un valor importantísimo cuando se piensa en sociedades donde para los jóvenes, incluso para los niños y niñas, jugar es un privilegio de difícil acceso. La Vida es Bella. Como se evidenció en los textos.

• La creación como centro. En un contexto de prohibiciones y de limitaciones sin límite, donde la realidad es tan contundente que suele atrofiar la imaginación, un principio de cualquier actividad educativa (no-adoctrinadora) debería ser siempre la potenciación de la creatividad. El centro anhelado del trabajo de campo, de cada actividad, consiste en desarrollar 47 las capacidades de estos jóvenes para crear. No para repetir, no para obedecer, no para asentir ni copiar fórmulas.

Entonces, por un lado del espejo se refleja la creación estética y literaria: ejercicio básico, disculpa para potenciar la imaginación, el pensamiento reflexivo, la infinidad de maneras de decir mamá, para soltar la cuerda de la cometa. La creación de mundos posibles, en la intimidad del espejo, es la posibilidad de imaginarse que el mundo, los mundos, pueden funcionar de otras maneras, que no necesariamente tienen que ser como han sido o bien, que puede seguir teniendo características del presente y otras nuevas. Y del lado de la mayor profundidad submarina, la creación del yo: espejito en el que la autorepresentación adquiere una de sus mayores potencias, ya que no es sólo la puesta en escena de un discurso descriptivo e interpretativo de lo que uno “realmente” es, sino que se incluye la posibilidad franca de inventarse lo que se quiere ser. La representación se descubre y se crea, sin que se sepan bien cuáles son los límites.

• La discusión (y la tensión con la investigación “pura”) El centro de toda la estrategia comunicativo-educativa del proyecto que sirve de marco a este trabajo (UNFPA-INT00P9M), es el concepto de Diálogo entendido desde Freire y Habermas. Ese diálogo, como un tipo de relación, se concreta en la generación de discusiones en las que los participantes ponen en juego sus creencias, conocimientos, valores y sentimientos respecto a determinados temas. Estas discusiones tienen su motor en la intimidad del yo y llegan a lugares masivos a través de actividades comunicativas o artísticas (Nieto, 2005 y Vega et al.).

El taller adquiere una dimensión claramente pedagógica (entendida como la hemos venido entendiendo), en la medida en que los participantes tienen la oportunidad D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

de discutir, de reflexionar, de preguntar y preguntarse sobre los distintos aspectos que atraviesan la vivencia de sus cuerpos, de sus sexualidades y de sus derechos. Es decir, tienen la oportunidad de guiar autónomamente su aprendizaje, sobre los temas, subtemas y matices que más les interesan. El facilitador tiene la misión de provocar y mantener la discusión libre, en lo posible, de coerciones y manipulaciones.

Una precisión ñoña pero necesaria: Al plantearse este trabajo como un ejercicio investigativo, puede interpretarse que la acción educativa que encarna anula la validez investigativa de la información resultante en los textos y en el trabajo de campo. Sin embargo, la pretendida pureza de la investigación formal es un mito de difícil sustento, ya que, como plantea Bourdieu en su texto Comprender, las metodologías de investigación siempre están mediadas por la estructura social objetiva y por estructuras simbólicas que sirven de campo a la investigación. Así no se busca anular dicha validez, sino develarla, aclararla y describirla para asumirla como una variable de v interpretación. Es decir, declarar que sí, que los textos escritos nos son generación espontánea de sujetos escogidos aleatoriamente, sino 48 resultado “en caliente” de procesos reflexivos de sujetos que hacen parte de un colectivo de formación (Bourdieu 2000, 536).

Se ahonda la tensión sobre el concepto de mediador en la literatura de autorepresentación. ¿Es posible pensarlo así cuando las obras son producto de un proceso de reflexión –mediación- de las subjetividades? ¿No es el facilitador, al ser un referente objetivo de poder, de un discurso específico, de posibilidades de bienestar, un mediador que no toca los textos? Pero, ¿es posible la autorepresentación en los términos tan absolutos en los que se la define?

• De espejero a clarividente No basta ser buen pedagogo ni un lector y escritor apasionado. Es necesario tener la capacidad de observar sistemáticamente el contexto, los cuerpos, las estructuras sociales, y relacionarlas interpretativamente, en tiempo real, con los textos que los participantes van escribiendo. Ejercicio etnográfico.

• La pausa y la soledad La pausa de las discusiones, de la oralidad y de los arrebatos de escritura, permite que los sentimientos, recuerdos e ideas se puedan asentar en las personas. Así mismo la soledad. Es un tiempo de filtrado, de descanso, de recapitulación, en el que las discusiones internas florecen y, posiblemente, se llenan de argumentos vitales (es decir, aquellos que surgen de la vida diaria, cotidiana) que pueden ser compartidos posteriormente.

Del mismo modo funciona para el proceso creativo. La pausa y la soledad en la escritura (expresada también en cierta distancia que es necesario generar con D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

los textos) permiten la revitalización estética, la posibilidad de mirar con otros ojos un mismo texto. Es otra concreción de la literatura como espejo: cuando el autor observa a través de un texto suyo al yo que lo escribió tiempo atrás o bajo condiciones específicas.

Secretitos de hermanos mayores: los textos de provocación Invocaba Cortázar al Che como su hermano mayor, faro, provocación. Así mismo, en este taller se pide auxilio a los y las hermanas mayores para que se convirtieran en espejos grandes, universales… gestos provocadores para disparar la producción de endorfinas y el golpeteo acelerado del corazón. No incluí al Che, por supuesto (aunque esté incluido en mi corazón)… porque alguien podía terminar muerto. Entonces, bondados@s lector@s, los textos de provocación, las razones por las que hicieron parte del taller y algún comentario adicional.

Tú me quieres blanca / Alma desnuda / Dolor. Alfonsina Storni Tu me quieres blanca es un poema que saca a flote uno de los juegos más inequitativos de las relaciones amorosas patriarcales. El derecho del hombre 49 a ser libre, “promiscuo”, externo, sumado a su derecho a juzgar y desear una virgen, casta, obediente, fiel e interna. Cachetada certera en nuestra poderosa y soberbia masculinidad. ¡Dios nos lo perdone! Un espejo para, como sucedió, evidenciar y dialogar asuntos y sentimientos que cruzan la cotidianidad de la vida amorosa de los muchachos… y del facilitador. Además, hermosísima carta, muestra de la potencia del lenguaje y sus juegos, acceso directo a las múltiples lecturas, a las metáforas, a la rima, etc..

Alma desnuda y Dolor, se degustaron en una misma sesión para, al igual que el Nocturno, explorar las posibilidades de la rima y del ritmo. Así mismo se habló del la literatura como máscara de oxígeno, como experiencia vital, más allá de cualquier discurso metafísico. La vida de la Storni, sus últimas noches de dolor y de angustia.

Se usaron versiones bajadas de Internet: http://members.tripod.com/Heron5/ poets/storni.htm

Alfonsina y el Mar. Ariel Ramírez y Félix Luna Simplemente como un ejemplo de los dichosos palimpsestos. Para terminar de redondear la historia de Alfonsina. Además como un bello poema en canción.

Diáspora. Cristina Peri Rossi De Diáspora leímos: “Podría escribir…” (78), Air Mail (68), “Esa mujer…” (58), “Cuando te digo…” (59), “Siempre hay algún…” (57), “En sus ojos acuosos…” (52), “No quisiera que lloviera…” (50), y “Penétrame / profunda y…” (29). Muchos insectos andando en mi corazón, de la vida de cada día, la suave Peri Rossi los remueve, los alienta, les reconoce el esfuerzo y les da agua cuando tienen sed. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Poemas cortos, fabricados con sentimientos vulgares y palabras de asiento de bus. Largas agujas que se internan en las heridas y los recuerdos, que remueven y hacen, ineludiblemente, llorar, sentirse mal, reírse nostálgicamente… Llegó, simplemente tratando de nivelar la densidad literaria de la Storni (el dolor, el suicidio, las palabras y referencias cultas), y se quedó como mamá alcahueta. Ya de esta obra hablaremos alrededor de los textos de los y las autoras. Peri Rossi libertaria.

Carta a un zapatero que compuso mal unos zapatos / Armisticio. Juan José Arreola En la primera sesión se exploraron sentimientos y recuerdos de la vida íntima que a muchos les generaron un terrible malestar. No fueron dolores etéreos, ni agradecimientos espirituales. Tenían rostro y olor, casi siempre cercano. Así que para la segunda sesión se propuso la escritura de cartas a la o las personas que habían aparecido o protagonizado sus recuerdos anteriores. Para abrir un poco la posibilidad de las cartas, entendiendo además que no todo era dolor terrible, se leyó y conversó la Carta de Arreola. Existía un discurso constante, que estuvo todo el tiempo: es posible decir las cosas de maneras más poderosas, es posible jugarle a la vida y a los sentimientos terminales. 50 De Armisticio, junto con otros textos de esta selección, se obtuvo la puerta de entrada a los dolores amorosos, a las pérdidas… Este texto de Arreola, significó además la posibilidad de jugar en el campo de las interpretaciones, lo que para muchos era una armisticio amoroso, para otros, claramente, fue una carta sobre la muerte…

Amanecer en el Valle del Sinú: antología poética. Raúl Gómez Jattin Primero fue Te quiero burrita. La razón inicial tuvo que ver con los estados de ánimo. Se trataba de levantar las miradas y dejar salir una pequeña sonrisa… aunque fuera pequeña. Se trataba de volver a mirar sobre el cuerpo y sobre la vida pero con otros ojos, de jugar un momento para sentirse un poco mejor. Por supuesto, Te quiero burrita, ofrece una versión bastante clara y completa de las prioridades y sentimientos que rondan la sexualidad masculina… así de, como se vio luego, sentimientos que de manera silenciosa también rondan la identidad de las mujeres.

Luego fueron A una vecina de buena familia (10), Desencuentros (24), Ellos y mi ser anónimo (40), Elogio de los alucinógenos (68), “…Donde duerme el doble sexo” (77) y Retrato (149). Jattin había develado su fuerza con la burrita y, durante la sesión tercera, alrededor de la identidad, él ofrecía muchas posibilidades para expresar poéticamente los sentimientos hacia los demás, y escribir frente al espejo. Los amores, los odios, , su propia identidad burlada y confundida, las preguntas que son ya posibilidad.

Al igual que la Peri Rossi, Jattin resultó de una fuerza liberadora impresionante. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Culinaria Poética (fragmento). Erica Jong Conocí este fragmento de poema sin saber absolutamente nada de la autora. Y me encantó. Está en un libro que compré usado en una librería de Teusaquillo. Existió para traer el erotismo femenino, para abrirle las puertas a otro tipo de expresión, para gozar… También para poner sobre la mesa el sexo, que suele distraerse cuando se habla de sexualidad. La oportunidad de imaginar y de jugar, de aprender también técnicas eróticas que pueden ser útiles para la vida práctica. Y de seguir escuchando y provocando las voces de las mujeres.

Nocturno. José Asunción Silva Por una parte, había muchachos y muchachas proclives a la rima… Muchos de sus ejercicios intentaban construir rimas, casi como trovas. Entonces, este Nocturno de Silva (Oh dulce…) se ofrecía como una oportunidad muy bonita de observar los ejercicios rítmicos, de rima y de selección de las palabras, en un tema también muy muy cercano a su experiencia. Por otra parte, el tema del erotismo venía tomando mucha fuerza. El Género, siempre constante. Entonces Silva, con sus burlas finísimas, con esa noche de sutil e irresistible erotismo, les ofrecía a los y las jóvenes nuevas preguntas éticas y estéticas. 51 Lástima que en ese momento no conocía mucho más de Silva, hubiera sido poderoso…

Mi ramo de flores para las rameras. Gonzalo Arango Canonicemos las putas. Jaime Sabines No mucho. Tema ejemplo: la prostitución. ¿Cómo verla? ¿Cómo entenderla? Dos miradas completamente distintas aunque ambas muy masculinas y románticas, que pretendían disparar las experiencias y las ideas al respecto. Mi ramo de flores… fue un absoluto fracaso, demasiadas palabras demasiado sacadas del diccionario. Sabines fue más cercano en el contacto, pero esa falta de fuerza que respira… En fin. Muy bonito, pero leamos otra cosa.

Elegía / Poema de amor. María Mercedes Carranza Cuando tuve mi taller de lírica, en el transcurso de la Maestría, descubrí a María Mercedes Carranza como la posibilidad más segura de acercarme al mundo de la poesía (siempre tenebroso para mí). Era simple, cercana, bonita, mujer, pop. Y era odiada (no, odiada no, menospreciada, casi olvidada: porque el odio, duele menos que el olvido…) y menospreciada por los cultores de la altas lenguas, lo que la hacía aun más atractiva. De ella, estos dos poemas son mis favoritos. Al taller llegaron para hablar de las metáforas, de las maneras otras de escribir y sentir, de la posibilidad del amor autoconcedido en todo el sentido de esa frase. Su poema de amor es un escupitajo para las dependencias amorosas que a veces nos enmarañan.

Me alegro de que el sol haya salido / Hay un modo… Jaime Sabines En la sesión donde se desarrolló la vida de Alfonsina Storni, el dolor fue una constante. El suicidio. Para cerrar, para tratar de equilibrar un poco la balanza D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

y contarles que también se podía escribir poesía y sonreír, leímos este poema. Porque en medio de las horas horribles que arañan sus vidas (nuestras), también a veces sale el sol y uno, simplemente, puede agradecer y sentirse instantáneamente feliz. Tal vez porque para eso no necesitan escribir poesía, sino simplemente vivir… tal vez por eso, o por los antecesores, éste no fue de sus textos favoritos.

Hay un modo…, en cambio, sí les encantó. Fue quizá el último texto leído en el taller. En la última sesión, se los llevé de regalo. Sólo para su deleite, ya no había energía para discutir.

Silencio (fragmento). José Miguel Nieto (o sea yo) En una sesión dedicada al erotismo, a narrar fantasías y primeras veces, el grupo pidió que yo también escribiera y contara al respecto… Entonces decidí leerles un fragmento de Silencio, que escribí cuando aún no había tenido relaciones sexuales. Luego les hablé sobre eso, sobre cómo en esos ejercicios de imaginar uno puede ir armando lo que quiere vivir más adelante…

¡Adiós, “Cordera”!. Leopoldo Alas, “Clarín” 52 En el capítulo cuarto de este trabajo aparecerá una declaración de amor y gratitud suficientemente clara sobre este cuento. Fue central en el taller. Poderoso.

Carta al padre. Franz Kafka Dos vías. La edición que usé de Carta al padre trae notas y cometarios de análisis sobre la obra y sobre la fuerza vital y representativa de este clásico. Entonces fue guía de estudio, comprensión y preparación para el taller y para la escritura de estas páginas. Padres muchos peores que el de K, mucho más jodidos y vulnerados por la cultura rondaron el taller. La vida de nuestr@s autor@s. Así la cosa, la obra de Kafka sirvió para algunos como espejo para verse mejor. Para sentir con mayor claridad. Para comprender e inspirarse.

No fue lectura masiva, sino píldora recetada.

Cartas I y V. Sor Mariana Alcanforado. Las cartas portuguesas, haciéndole el quite a la discusión sobre su autoría (¡nada más bonito que creer que sí fueron escritas por ella!), hacen una construcción sencilla y clarísima de los picos emocionales de las relaciones amorosas y pasionales, y de las construcciones simbólicas de las mujeres hijas de La Iglesia. Como ya se verá, muchas características continúan inmutables a pesar de los años y las revoluciones. Se trabajaron estas cartas en una sesión en la que sólo estuvieron dos hombres. Permite ver también cómo cambia el lenguaje cuando se expresan (o se quieren expresar) sentimientos distintos. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

DE CÓMO SE JUGUETEAN: EL CUERPO Y LOS MASAJES

El Cuerpo

¿Cómo es ese cuerpecito? El Corpus Literario de esta investigación está conformado por 28 textos cortos resultantes del taller. Escritos por 9 hombres y 5 mujeres (lo que representa la proporción de hombres y mujeres dentro del grupo), habitantes de La Reliquia, con edades entre los 13 y los 17 años. Ninguno de los autores ni autoras es bachiller. Están entre grado sexto y once. Cuatro de ellos no estaban estudiando, el resto, con excepción de un hombre que vive en un internado, ha tenido históricamentec una asistencia bastante irregular al colegio.

Todos los textos fueron escritos originalmente a mano, revisados y seleccionados durante el tiempo del taller. La ortografía y puntuación original es muestra exacta de las posibilidades educativas del contexto, así como de las diferencias y posibilidades individuales; por tal razón, en la trascripción se mantienen al máximo. La manera de escribir, de redactar, de puntuar y de usar la ortografía, devela además las posibilidades 53 de lectura oral fluida y comprensiva. Se hicieron arreglos mínimos en casos en los que la falta de algún signo o seña de puntuación impedía u obstruía completamente la lectura.

Temáticamente, el corpus obedece a los cursos trazados por el taller. Hay textos que hablan del cuerpo, de las familias, de la primera relación sexual (hecha, soñada, anhelada), de las tristezas, los dolores y las pérdidas; de la manera como los autores y autoras se perciben en el mundo, del deseo sexual y el erotismo. Sin embargo, hay temas explorados en el taller que no se encuentran en el corpus; por ejemplo, las violencias inflingidas contra y por ellos. No hay textos donde ellos sean protagonistas o víctimas directas (excepto uno) de las violencias, ni escritos que hablen explícitamente del hecho de ser hombres y ser mujeres, ni de la felicidad, ni de dios o de la espiritualidad. Esto puede explicarse un poco por la vida misma del taller, por la identidad del facilitador y por el proceso de selección del cuerpazo, pero también por otras razones que se evidenciarán en el análisis.

Ahora bien, si esas son las líneas temáticas gruesas en las que se mueven los textos, el Corpus tiene también una clasificación por Grupos de Sentido que permite la interpretación literaria, pedagógica, vital y comunicativa de la experiencia y de los textos. Justamente, se rompe con la división forma-tema, para organizar los textos de acuerdo con el sentido que tienen con relación a y para su contexto-autor. Estas categorías no son rígidas, los textos se muevan entre unas y otras permitiendo analizarlos con mayor riqueza. Para el diálogo que se propondrá con los textos, estos son forma y contenido y biografía y etnografía y confesión e invención, de maneras no separables.

Dichos Grupos surgen por la necesidad de dar respuesta a las hipótesis y premisas propuestas al inicio de la investigación. Es decir, tratar de responder si, como se D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

creía: a) La literatura, por su condición de arte, es un vehículo que facilita la formación de las subjetividad individual y del yo-colectivo –autoconciencia, función de espejo emocional del arte-; b) La literatura abre las puertas para la expresión directa de tales subjetividades, evadiendo discursos superficiales, y c) en conclusión, la literatura sirve como una herramienta pedagógica e investigativa en procesos de intervención social (la cuarta premisa, sobre la literatura y la vida, tendrá su lugar transversalmente y en el epílogo).

Se configuran, entonces, tres Unidades de Análisis derivadas de las premisas. Cada Unidad define a su interior los Grupos necesarios:

UNIDAD DE ANÁLISIS G1: ESPEJOS PARA LA INTIMIDAD Acercamiento a los procesos de construcción de la identidad individual. (premisa 1) Sg11: espejos de imagen nítida Sg12: pequeños espejos biselados LA LITERATURA COMO Acercamiento nítido y reflexivo a Textos automáticos, explosivos, VEHÍCULO PARA preguntas hondas de la identidad cargados de preguntas. FORMACIÓN DE LA G2: FIESTA DE ESPEJOS SUBJETIVIDAD Y DEL 54 YO-COLECTIVO Textos y procesos donde se evidencia la identidad colectiva del grupo. Dos SECRETITOS QUE SON temas principales atravesados por la categoría Género. ESPEJOS Sg21: espejos rebosantes de Sg22: agridulces espejuelos humedad Condición juvenil sentida, percibida Erotismo como aspecto prioritario y evidenciada en los textos. de la vida y de la sexualidad. (premisa 2) G3: PRONUNCIACIONES LA LITERATURA COMO extos en los que la función expresiva exterior ocupa un lugar principal, para EXPRESIÓN DE LA la definición de un lugar en el mundo (mirada histórica y contextual). SUBJETIVIDAD CUANDO LOS G4: RECLAMOS ESPEJOS SON Textos adoloridos, directos, con destinatario específico, que buscan PANTALLAS reivindicaciones claras (mirada histórica y contextual). G5: CARICIAS Expresiones de suavidad y dulzura que contrastan con la mayoría de los textos (mirada histórica y contextual). (premisa 3) Gc6: CLARABOYAS PARA RESPIRAR CONCLUSIONES: LA Conclusiones sobre el potencial pedagógico de la experiencia literaria LITERATURA COMO Sgc61: … y construir Sgc62: … y reparar HERRAMIENTA PEDAGÓGICA E Sobre el valor de la creatividad Sobre las posibilidades INVESTIGATIVA como motor de las transformaciones “terapéuticas” de la literatura. DE SECRETITOS A individuales y colectivas. Autoaprendizaje / “Autoanálisis”. CLARABOYAS Gc7: CLARABOYAS PARA DEJARSE VER Conclusiones sobre el potencial investigativo de la experiencia literaria D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Sobre la selección y armado del “suscrito” cuerpo A continuación se presenta el proceso de selección del Corpus, y las razones que se tuvieron en cuenta.

La primera razón –variable- que surge de la revisión histórica de este proceso, es la torpeza del facilitador. O para ser más benévolo, la ingenuidad. No, seamos justos, mi torpeza. Parte del diseño del taller incluía el ejercicio de conservación y alimentación constante, cotidiana, de los textos por parte de los autores. Se buscaba que cada uno diseñara una bitácora, una especie de diario de viaje en el que, además de incluir los textos producidos en el taller, se llevaría un diario personal y se consignarían reflexiones sobre el proceso.

La Bitácora, entonces, se perfilaba como el instrumento básico para la selección del Corpus.

Sin embargo, este instrumento que se veía tan maravilloso en el diseño del trabajo de campo, requería de ciertos mínimos para su buena existencia. Mínimos que, por supuesto, no se cumplieron. Para los y las jóvenes participantes (la mayoría de ellos 55 y la mayor parte del tiempo) escribir se convirtió, es cierto, en un ejercicio divertido y enriquecedor, pero siempre en el marco de las sesiones. Escribir por fuera del ambiente del taller podía oler a tarea del colegio o a peligro si los papás y las mamás leían “por accidente” lo que sus hijos escribían. Entonces la bitácora podía ser peligrosa o terriblemente aburrida. Por otro lado, si la costumbre de escribir es extraña, y la de la autorreflexión no es la más usual, pues la idea de llevar un diario era poco menos que desquiciada. Adicionalmente, esta bitácora, producto de la escuelarización a la que tienen acceso, era sentida por algunas como un cuaderno de tareas que sería revisado por el profesor más adelante y en cual no se podrían encontrar tachones ni reflexiones desordenadas ni evidenciar los procesos creativos. Por esta razón, escribían sus textos en hojitas sueltas de fácil evaporación que después, y sólo en pocos casos, pegaban o transcribían a la bitácora.

Entonces las bitácoras... o eran inconvenientes o no significaban nada realmente especial o eran demasiado importantes “disciplinariamente”. O no las llevaban a las sesiones del taller, o se quedaron siempre vacías o nunca existieron o eran una carpeta aséptica de orgullo paternal. Ninguna de las anteriores, útiles para la configuración del Corpus.

En consecuencia, la mayoría de los textos producidos por ellos y ellas al comienzo del taller, e incluso después, desaparecieron. Terminaron mojados y diluidos en una lluvia que traspasó el techo de la casa, desmaterializados misteriosamente de al ladito de la almohada, abandonados en alguna fiesta finca revolcón piscina.

Una vez evidenciada la torpeza, se optó entonces por guardarles los textos que iban escribiendo y las bitácoras, como una medida desesperada por salvar la materia prima para todas estas páginas. Se logró. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Otra variable fue, como es siempre, la voluntad del autor. Desde un principio se planteó la selección participativa del cuerpecito que gozaríamos y ofreceríamos al mundo, lo que implicaba que los y las autoras, en coherencia con los principios metodológicos, estarían en absoluta libertad de decidir qué querían hacer público y qué no, y cómo deseaban hacer público lo público. Es decir, durante el transcurso de todo el taller, en cada sesión, los y las autoras escribían textos que podían o no compartir con las otras personas participantes (incluido el facilitador, o sea yo), y tenían la opción de modificar textos privados para hacerlos públicos.

Paréntesis pedagógico dos puntos y seguido éste es además un ejercicio que sirve para hacer consientes distintos niveles de escritura, de comunicación y de expresión. Para reconocer los espacios de privacidad y de intimidad de uno mismo y para construir, de manera consiente, la imagen de sí que se quiere publicar y aquellos detalles que es mejor no contar. También alimenta el espíritu creador, ya que obliga a transformar un texto en otro, a codificar mensajes, a cambiar palabras, reducir ideas, encontrar núcleos sensoriales, emotivos o narrativos Se cierra el paréntesis Punto y aparte 56 Así, entonces, la selección participativa no fue una tarea final teniendo como base todo lo escrito, sino un trabajo que se hizo de manera constante y profundamente respetuosa. Hay textos que nunca vi. Hay textos que sólo se conocieron en sus versiones modificadas, públicas.

En cuanto al ejercicio de escritura de diarios, es necesario hacer un comentario adicional conclusivo. Sólo los artistas famosos o los que están en proceso de serlo; sólo los que saben, contractual o intuitivamente, que van a pasar a la historia de los grandes hombres y las mujeres rutilantes... sólo ellos, decía, escriben diarios íntimos pensando en su editor. Los otros, la gente que no ronda esos círculos, como los jóvenes participantes del taller, escriben diarios, cartas, pensamientos que son, de verdad, privados. Así, al llegar al final del taller, fueron muy pocos los que entregaron o compartieron sus diarios. Diarios, por demás, escritos como tarea, centrados en el taller. Diarios de afán, palabritas, anotaciones, que sólo tendrían interés para alguna revista de culto si quien los escribió llega un día a ser mmmmmmmuy famoso.

Finalmente, en las últimas sesiones de trabajo, se comenzaron a recoger los textos, a pedirles que ubicaran o reconstruyeran en lo posible las obras del inicio. Cada uno y cada una entregaron lo que consideraban pertinente de acuerdo con las discusiones y aprendizajes que habían vivido en el taller. Se buscaba así garantizar cierta pertenencia –autorepresentación- colectiva sin invalidar el derecho individual de los autores a definir su obra pública. En la última sesión, llegaron textos nuevos, reconstruidos, versiones corregidas y obras encontradas. Esa, sumada a los textos que se iban guardando sesión tras sesión, constituyó la primera selección: una muestra bastante robusta de las creaciones e identidades de las que los y las jóvenes de Sexu-Joven son capaces... Unos secretitos que, cada vez más, iban tomando forma de claraboyas-tragaluz-respiradero. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Luego, ejercicio de editor con variables. Y bueno, no es necesario decir todos aquellos lugares comunes, ciertos, acerca de lo difícil que resulta desprenderse de ciertos textos y limitar sin piedad alguna las búsquedas y las ideas.

Las variables son simples y pocas. Los textos escritos y preseleccionados por las participantes irían en el Corpus si: a) Son textos literarios (ver Marco teórico > Literatura de Autorepresentación > definición de lo literario para este trabajo). b) Lo que define su existencia es la autorepresentación: es decir, si en los textos y su proceso de escritura existe y existió la intención clara, explícita, de reflexión del yo y de escribir sobre sí mismas/os. No se incluyen textos de ficción explícita ni literatura fantástica así incorporen elementos de autorepresentación. Igualmente válidos, son otro tema. Es importante en este punto tener en cuenta la tensión descrita entre Autorepresentación y Mediación. c) Su existencia está mediada por el esfuerzo estético. Obras que muestren (en ellas mismas y en su proceso de creación) mayor ejercicio de la creatividad y de la técnica puesta al servicio de la expresión de la subjetividad. Para ser escuelero, que, conociendo al autor, no hayan sido escritas “por salir del paso”. d) En lecturas consecutivas tienen suficientes elementos para responder a las 57 premisas y a la hipótesis propuesta. Se priorizan las obras de mayor complejidad, que den pistas para la comprensión contextual y pedagógica del proceso. e) Tienen fuerza emocional y vital. Si son textos provocadores por progresistas o por reaccionarios, para usar la metáfora política. Si son ambiguos. Si no pretenden dejar lecciones o decir palabras políticamente correctas.

Producto de una primera aplicación de estas variables sobre los textos entregados, resultó un primer Cuerpo de 40 textos. Ese número se redujo al actual por la aplicación más estricta de las anteriores variables y por la aparición de una variable pragmática: f) Que la integridad de cada uno de los textos incluidos en el Corpus Final sea de absoluta utilidad para el proceso de análisis hermenéutico. Se evitan redundancias, repeticiones y textos de los que sería importante resaltar sólo una o dos frases.

Los Masajes. Un cuerpo puede recibir masajes de múltiples formas y tiempos. Puede ser terriblemente maltratado o mimado mientras se cree que es otro distante. Por supuesto, los masajes acá ofrecidas intentan ser lo más placenteros y provechosos posible. Que no quisiéramos ver a nuestro cuerpecito llorar por una mano áspera y torpe. Este apartado tiene como objetivo presentar las pautas usadas para el análisis del corpus, y destapar todas las cartas (muchas confesiones rondan esta tesis, razón tenía Focault) posibles para que el lector o lectora pueda saber exactamente qué esperar y qué no.

Lo que se propone es un diálogo sólido sobre cómo estos secretitos se convierten en claraboyas, y así llegar a responder las premisas e hipótesis que orientaron la investigación D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Partiendo de las razones y esperanzas, objetivos e hipótesis puestas en claro al iniciar este documento, se busca comprender la manera como el proceso creativo a través del cual se construyeron los textos, y los textos mismos (los secretitos), se convierten en dispositivos que generan posibilidades para ver, para ser, crear y creer (claraboyas).

Un diálogo sobre y con los textos mismos. Por diálogo, en este trabajo, se entiende un ejercicio analítico de los textos teniendo como marco y alimento el mundo propio de ellos. Es decir, el universo de análisis e interpretación es mayor que el texto puro, mayor que su autor, mayor que el contexto: es la unión y sus emergencias.

Esta manera de asumir el abordaje de los textos puede denominarse, siguiendo la clasificación que Roberto Castro hace para los estudios sociales en salud y reproducción, enfoque hermenéutico. Para Castro la hermenéutica es un intento por balancear las enseñanzas de la escuela marxista, estructuralista, en las que los sujetos están dominados (condenados o bendecidos) por las estructuras sociales; con los desarrollos de los enfoques individualistas en los que el sujeto es producto, sino exclusiva sí principalmente, de su capacidad creadora. …muestran que es el precario equilibrio entre las determinaciones sociales 58 y la creatividad individual donde se encuentran las claves para resolver el problema que nos ocupa: la explicación sistemática, desde una perspectiva socioantropológica, de la experiencia subjetiva de la salud-enfermedad [sexualidad y derechos], entendida simultáneamente como una activa construcción intersubjetiva sujeta, al mismo tiempo, a un cierto orden de determinantes estructurales. (140)

Este enfoque de análisis es materialista y formalista. De acuerdo con la propuesta epistemológica de Bourdieu para las ciencias sociales -unas ciencias sociales prácticas, comprensivas, amplias, sin la limitación de la dicotomía objetivismo-subjetivismo, con teorías y métodos fuertes, capaces de explicar suficientemente bien, y por sus propios medios, a los fenómenos sociales- (Córdova, Gutiérrez y García C) y con el reclamo algo pueril, en el campo general de las artes y de la literatura en particular, de Susan Sontag en Contra la Interpretación (que por fortuna pudo convertir en realidad en obras como La enfermedad y sus Metáforas y Ante el dolor de los demás), este diálogo no se sale de los límites impuestos por la materia y la forma de las obras de arte + sus autores + su proceso de producción + el contexto cultural –estructural- en el cuál fueron escritos. Elementos que a su vez tienen uniones íntimas entre sí. Esta manera de entender la hermenéutica puede distar un poco de concepciones más fenomenológicas, hijas del psicoanálisis (Escuela de Éranos-Jung>Durand - Bachelard).

(¿Es [¡qué cantidad –pero quien tuviera la medida justa para declarar cuando algo es excesivo en su cantidad o en sus decorados o en la profundidad de sus sentimientos o pensamientos de…- de paréntesis!] claro?)

Se plantea una cercanía al análisis textual usado en la literatura. Este enfoque, como decíamos, se centra en la forma del texto. Sin embargo, para esta investigación, no D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

será sólo textual, también contextual, biográfico y, la principal diferencia, procesal. Así, por ejemplo, si bien el análisis textual incluye elementos de la semántica, la sintaxis, la puntuación, la ortografía; para este ejercicio no se tendrán en cuenta elementos de puntuación ni de ortografía, ya que al hacer una lectura contextual se evidencia que los y las autoras no tienen mucha posibilidad de control sobre estas dos variables. Insisto, un ejemplo cercano son las obras de Susan Sontag citadas en el párrafo anterior.

Dicho proceso de interpretación, entonces, se realizará teniendo como base los textos del corpus organizados en Grupos de Sentido, ya que ellos develan la ruta para el paso de secretitos a claraboyas. La razón de existencia de estos grupos no está puesta en la búsqueda externa del sentido de los textos, sino en el reconocimiento, a partir del trabajo de campo (que no implicó una indagación político-antroposociológica profunda, pero sí una postura etnográfica permanente) y las historias personales (sin que haya reconstrucción sistemática de biografías, sino la información que emergía por las actividades mismas del taller), del sentido que cada texto tiene o puede tener para el autor-contexto-proceso de producción (creativo-pedagógico). Se usa dinámicamente la información proveniente de a) Textos, como fuente principal, detonante; b) Memorias de las sesiones; c) Datos biográficos, y d) Elementos de Contexto. Ver gráfico 1. 59 Existen también elementos transversales de análisis previstos en el marco teórico y contextual. Sexualidad-erotismo, género-dhsr, condición de juventud –en contexto-, Yo-subjetividad desde la noción de habitus, autorepresentación, literatura como arte- expresión-proceso, y transformación de la subjetividad como estrategia pedagógica de transformación cultural.

F E D . S A Y O B 4 A R A L C . A . S O T I T E R C E S “-Ella lo idolatró y Él la adoraba... -¿Se casaron al fin? - No, señor, Ella se casó con otro. -¿Y murió de sufrir? -No, señor, de un aborto. - ¿Y Él, el pobre, puso a su vida D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

4. Y EN FIN... DE SECRETITOS A CLARABOYAS -reconstrucción de la experiencia a partir de los textos y su análisis-

“-Ella lo idolatró y Él la adoraba... -¿Se casaron al fin? - No, señor, Ella se casó con otro. -¿Y murió de sufrir? -No, señor, de un aborto. - ¿Y Él, el pobre, puso a su vida fin? - No, señor, se casó seis meses antes del matrimonio de Ella, y es feliz.” Idilio. José Asunción Silva

“No morirá la flor de la palabra podrá morir el rostro oculto de quien la nombra hoy pero la palabra que nos vino desde el fondo de la historia y de la tierra no podrá se aplastada por la soberbia del poder” 4ta Declaración de la selva Lacandona. EZLN

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SECRETITOS QUE SON ESPEJOS Los secretitos que rondan cada página son espejos íntimos para el autor y para el grupo de autores, que forman ya una pequeña sociedad: un colectivo.

Sabía bien la madrastra de Blanca Nieves que las respuestas del espejo no eran una mera expresión aleatoria que pudiera eludir. Los espejos, ese y cualquiera de baño público, son oráculos que ayudan a definir la vida. Espejo identitario, espejo de verdades dolorosas, espejo que te muestra lo que estás dispuesto a ver y, muchas veces, lo que no. Espejo que nos ayuda a tomar decisiones, a hacernos preguntas difíciles de entender, a ponernos en duda. A ser.

Los espejos son los textos terminados que cualquiera puede leer, pero sobretodo el complejo proceso individual y colectivo de escritura, las reflexiones hondas, las provocaciones a la subjetividad, a la emocionalidad, que les aportaron a los individuos y a los colectivos en la construcción de su identidad. Autoconciencia. Las maneras, tecnologías según Focualt, en las que el yo se construye a partir del hecho casi mágico de intentar un poema o una carta que aún sale con las vísceras colgando. Y ese yo, sabemos, incluye la construcción de las subjetividad individual (espejos para la intimidad) y la posibilidad de la identidad colectiva (fiesta de espejos).

Los espejos son, también, los textos canónicos. Grandes espejos que se hacen universales al salir de las aulas de clase de los religiosos cultores y recorren las calles, las camas y las tristezas de cualquier barrio popular medio analfabeta. Píldoras que le mueven el alma y lo sacan a otro lugar suyo, hondo y complejo. No sé hasta qué D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

lugar sea capaz de llegar la literatura y las artes, pero descubro cada vez que el ego académico lejos de ser su fuerza, parece ser la terrible muerte...

Espejos para la intimidad Imagínate adolescente, acostada en tu cama o en la de los papás cuando no están, con un espejito de mano que compraste en la plaza de mercado. Imagínate en verano, con un vestidito de flores debajo del cual solo queda la piel, y el espejo entre las rodillas ascendiendo frío por entre tus muslos. Descubriendo los rastros de saliva, los vellitos oscuros, las rojedades de la carne viva y hambrienta. Imagina las preguntas, las respuestas, las fantasías, los miedos y las decisiones que se guardan en aquella íntima relación que difícilmente puedes nombrar pero que aún hoy, a esta edad, recuerdas.

Imagina ese espejito, tenlo presente, guárdalo bajo la almohada. Oráculo. Talismán.

Los textos escritos y vividos configuran dos tipos de espejos, oráculos, determinados por el proceso mediante el que fueron armados y por la manera como operan. Existen en el corpus (a) espejos a fuego lento, de imagen diáfana, y (b) pequeños 62 espejos surgidos de un estallido; rotos, biselados. Ambos, necesarios y útiles para la renombrada construcción del yo.

ESPEJOS DE IMAGEN NÍTIDA Estos espejos, oráculos, nacen de la profunda reflexión. De las preguntas sistemáticas sobre recuerdos, placeres o dolores. De cristal íntegro forjado a fuego lento. Oráculos claros, surgidos a fuerza propia, que dan respuestas concretas para la vida. Espejos que alivian, que sanan, que aplanan el camino. La emoción razonada para detectar con calma lo que no nos permite respirar y poderlo deconstruir y superar. Espejos que se fabrican con guía de armado, con conversaciones de preguntas certeras y escucha franca.

Se presentan a continuación cinco muestras de espejos de imagen nítida.

La mañana del 7 de mayo del 2005 una brigada “cívico-militar” del ejército hace presencia masiva en el barrio La Reliquia. Circo verde oliva, médicos con camuflado, vía principal cerrada, cabos y sargentos armados controlando el ingreso de los niños. Una verdadera maravilla, muestra absoluta de las buenas intenciones de nuestras fuerzas armadas colombianas. Los niños y niñas que salen de alguno de los espectáculos llevan una cinta camuflada en la cabeza y maquillaje de mimetización en sus mejillas. Sus mamás sonríen. A muchos los han peluqueado. A mí me carcome la rabia y la indignación mientras paso, por supuesto, sonriente, con la cabeza agachada y el pelo cogido. ¿No es esto acaso involucrar a los niños en el conflicto armado? ¿No es marcarlos con los signos terribles de la guerra? ¿No es comenzar a construirles la senda para el matadero? D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Entre el morral llevo un libro planeado para ser el propulsor de la sesión correspondiente. Es casualidad.

“Clarín” llegó a mí de la mano de Augusto Monterroso y Bárbara Jacobs. Acostado en mi cama, algunos meses antes de comenzar el taller, me comencé a sumergir sin posibilidad de fuga en el mundo hermosísimo de la vaca Cordera y sus pequeños pastorcitos. Al terminar, la tristeza fue infinita, frentera y también hermosa, me descubrí releyéndolo bastantes veces. Había algo en ¡Adiós, Cordera! que no sólo me gustaba, como hecho estético, sino que activaba en mí sentimientos de ternura, ira y amarga melancolía. De tanto releerlo, de tanto leérselo a familiares, amantes y amigos, supe qué era lo que sucedía.

¡Adiós, Cordera! contaba aquello que yo tenía que vivir todos los días en mi trabajo. Excitaba los miles de abandonos que llevamos dentro. Sentí que perfectamente conocía a esa vaca vieja y sabia como una ciénaga, que conocía a Rosa y a Pinín y que sabía exactamente en qué iban a gastar su juventud para conseguir comida y ropa, que tenía la desgracia de ver cada día a los dueños de los distintos mataderos. Sentí que este cuento era la historia de los niños y niñas y jóvenes que habitan cualquier lareliquia de este país. 63

“Pinín, con medio cuerpo afuera de una ventanilla, tendió los brazos a su hermana; casi se tocaron. Y Rosa pudo oír entre el estrépito de las ruedas y la gritería de los reclutas la voz distinta de su hermano, que sollozaba exclamando, como inspirado por un recuerdo de dolor lejano: - ¡Adiós, Rosa!... ¡Adiós, Cordera! - ¡Adiós, Pinín! ¡Pinín de mío alma!...

Allá iba, como la otra, como la vaca abuela. Se lo llevaba el mundo. Carne de vaca para los glotones, para los indianos; carne de su alma, carne de cañón para las locuras del mundo, para las ambiciones ajenas.”

Entonces, con el libro en mano y el circo de militares en la memoria reciente, las razones para leerlo y jugarlo en el taller se hicieron absolutas. No estuvieron todos.

Una vez terminada la lectura que los reunió a mí alrededor, les pedí que, sin decir nada, se sentaran a escribir sobre aquellos sentimientos o recuerdos que el texto les había generado. Yo también escribí. Los resultados, completamente diversos en las historias, tuvieron todos un encuentro: reflexión honda, emocional, subjetiva sobre algún puntito doloroso y el intento por resolverlos y encontrar respuestas. Espejos para la intimidad... con imagen nítida.

Recuerdo cuando yo estaba más pequeño vivia en Puerto Rico siempre que pasaba al pie del rio miraba las canoas y las lanchas donde mi mamá y mi papá se ivan y me dejaban donde mi tia me sentia muy triste porque se ivan se demoraban mucho tiempo hasta que una vez que se fueron los dos y al tiempo volvio mi mamá sola y llorando con el alma vuelta pedazos porque mi papá se puso a pelear con D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

un man y el man saco revolver y lo mato y le dijo a mi mamá que si no se desaparecia de alla también la mataba yo me senti muy mal y es una tristeza que nunca podre olvidar y con la lectura de hoy (Adiós, Cordera) me acorde como se fue mi papá y no me despedi de el y por poco se va mi mamá y quedo solo como aquella muchacha *

Papá no quisiera seguir tus pasos por ser traicionero pelion te paso eso a veces pienso que si pudiera vengar tu muerte lo haria no lo dudaria Pero pienso que si vengara tu muerte dejaría a otro hijo o a otra madre sin su papá o sin su marido y si lo hiciera me marcaria más la vida de lo que la tengo marcada lo unico que queda es decear que descanses en paz y perdonar al que lo hizo adios papá.

Pájaro.

Quizá fue la única vez que “Pájaro” estuvo tan concentrado y tan inmerso en una sesión. Él es un muchacho de 16 años, desplazado de distintos lugares, que tuvo que ser 64 testigo de las tomas guerrilleras y del ejército a Puerto Rico, Meta, a quien le encanta jugar fútbol, tener novias y tomar. Trabaja en un taller despinchando llantas, se retira y se incorpora al colegio cada rato. Es un hombre arrojado al mundo, valiente, divertido, charlatán, con profundos silencios al tocar temas hondos, homofóbico, deportista, protector. Un hombre hijo de su cultura, sin rupturas visibles frente a la masculinidad aprendida.

Luego de que les pedí que escribieran, “Pájaro” no hizo ningún chiste ni pronunció palabra, sus ojos estaban congestionados, su cara irradiaba una terrible tristeza. Tomó una hoja, un esfero y se sentó en un rincón, callado, frágil, a escribir. Después se acercó con el texto –la primera parte-, y me pidió que lo leyera... Hablamos largo, le sugerí que escribiera una segunda parte. A los 10 minutos volvió.

Muchas conversaciones tuvimos sobre su costumbre de estar metido en peleas callejeras. Su mejor amigo en el taller, compañero de conquistas y de peleas, fue amenazado por los paramilitares del barrio luego de un tropel.

Su texto me sacudió tanto como el de “Clarín”. Hay en él, y en el proceso de su escritura, profunda reflexión sobre un tema trascendental para la vida. Un espejo en el que se mira de frente a la luz de su padre y de su vida actual. Un texto en el que lúcidamente incorpora las vulneraciones de derechos que ha sufrido con las que ha gestado y las que pueden venir. Él como víctima absoluta de las “locuras del mundo”, él como generador actual y potencial de esas mismas locuras, de igual dolor: y la resistencia clara a ser un asesino, a sufrir y a morir.

Ese texto es para “Pájaro”, en términos de la construcción de su subjetividad, un avance enorme hacia las rupturas con el “destino” o la cultura. La posibilidad de entender por D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

qué es como es, qué consecuencias trae esto, y la decisión de romper, de ser distinto a su padre sin que eso signifique dejar de amarlo. Es una reflexión en vivo sobre las opciones y sobre sí mismo: “si pudiera vengar tu muerte lo haria no lo dudaria Pero pienso que si vengara tu muerte dejaría a otro hijo (...) y si lo hiciera me marcaria más la vida de lo que la tengo...”

No podría asegurar que él nunca volvió a pelear, el contexto lo exige con frecuencia, pero sé con absoluta certeza que comenzó a hacer un gran esfuerzo por evadir las peleas, por dejar de lado las actitudes de “alzadito” que tanto lo caracterizaban. Y eso es un golpe durísimo para la construcción de su masculinidad, porque perdonar y evadir la venganza y los golpes, implican, en el contexto, un cierto nivel de cobardía. Cosas nada masculinas: huir, sonreír, negociar.

Tiene, además, una fuerza terapéutica enorme, ya que le permite hablar directamente con el papá –uso de la segunda persona- para despedirse y cerrar un sentimiento que pareciera estar dolorosamente abierto. Este texto volverá a ser abordado más adelante.

Una fria tarde de un 16 de enero del 96 en los tranquilos montes del altiplano cundiboyacebce una 65 mujer la cual su cabello ya pintaba de un platiado ironico, su rostro arrugado por la insensates de la vida. Mojado por las saladas lágrimas de dolor. Lloraba porque sobre la frondosa yerba yacia la mejor y tal vez la unica res que ella abia querido. Hay arrodillada junto al cuerpo inerte, muerto, sin vida, del animal recordaba los años de alegria, las tardes frias solo escuchando el sonido que produce el muelle junto a su animal cariciandola, agradeciéndole por todo y maldiciendo al hombre el cual avia envenenado a su animal culpándolo sin darle derecho a defenderse. Después de varias horas solo cayo y reprimio todo su dolor muy adentro de su viejo corazon, y pidiendo un solo deseo que el cuerpo de su vieja amiga fuese arrojado al rio para que ella fuera por primera vez libre.

*

No llores, no sufras, no mojes tu rostro con la ausencia de la alegria, no lo agas no no te destroses en vida supera esta perdida, gran perdida pero la vida sigue aferrate a ella con toas tus fuerzas y no te sueltes se fuerte, que aunque tus cabellos lla blanqueen y tu rostro pierda la belleza estetica tu tienes mucha vida por delante, mucho por vivir mucho por qué vivir asi que “VIVE” disfruta tu vida y no te encierres en tu amargura y tu dolor

Robinson L. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Cuando la materia prima es la subjetividad y las historias personales, los rumbos son casi infinitamente amplios. Un mismo generador, tan amplio, hondo y universal, dispara al interior de las personas sentimientos y recuerdos terriblemente disímiles, pero siempre honestos, profundos, complejos.

La muerte violenta de una res que la abuela amaba revive crudamente en los ojos de La Cordera. El autor reconstruye inicialmente los sentimientos que recuerda, los organiza lírica y narrativamente para tenerlos otra vez a la mano, traerlos significa trasformarlos. La precisión con la que reconstruye los hechos y los sentimientos, el foco narrativo sugiere un testigo silencioso, impotente y sorprendentemente atento y sensible. Contrario completamente al yo que escribe a continuación.15

Leer la segunda parte nos devela un narrador poderosamente adulto, de espíritu fuerte, capaz de sostener a su abuela, de ayudarle a comprender la desgracia y de inyectarle de nuevo un soplo vital. Para nada silencioso ni impotente, más racional que sensible y, sin discusión, igualmente atento. Un narrador que mira a los ojos –segunda persona también- y le habla directamente, que no titubea ni se distrae en detalles. Que va exactamente al eje de la tormenta. “VIVE”, le grita... la sacude, le limpia las lágrimas, la acaricia, le ordena, pero también le suplica. 66

La muerte de la res se dio, según el texto, cuando él tenía 5 o 6 años. Difícilmente Robinson hubiera podido acercarse a ella y decir cualquiera de estas palabras. Por la descripción que hace, parece que la vio detalladamente, con el corazón arrugado, testigo mudo pero solidario ante el dolor de ella. Ahora, en el momento del taller, hubiera también parecido imposible que él decidiera acercarse a ella y decirle inmensas palabras de manera verbal. Él es el clásico buen muchacho. No habla mucho, es –era- terriblemente tímido, introvertido, aparentemente frágil –delgadito, sin fuerza, sin exhibiciones de masculinidad-. Sólo habla cuando se lo piden directamente y dice las palabras estrictamente necesarias. Sus 15 años –durante el taller- son tiernos, suaves, caseros, nada parecido a muchos de los otros muchachos del grupo y del barrio.

Entonces, este texto se constituye en un espejo revelador de su propia fuerza interior, una válvula de escape que le dice a él y al mundo quién es el Robinson que habita ese cuerpo menudito y de largos silencios, que se cocina sin afán, a fuego lento, pero con la absoluta certeza del resultado. El yo que circula por esas palabras tan llenas de luz y de amor, no es para nada un presente construido y claro, es la posibilidad de sí mismo, de un Robinson que puede convertirse en faro y cobija para sus adultos queridos. La respuesta necesaria para entender de qué se es capaz en la vida.

La segunda parte, donde está ubicado todo el potencial subjetivo, implica una decisión vital. La decisión de no victimizar ni lamentar más. La decisión de convertirse –así

15 Escrita también como una solicitud explícita de la metodología de la sesión; es decir, una vez revivido el sentimiento, había que reflexionarlo a la luz de la conversación tenida con cada uno y cada una. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

por ahora sea sólo en el papel- en fuerza movilizadora y no, como el testigo infantil, en acompañante mudo e impotente. Una decisión que si bien lo ayuda a forjarse y a autodefinirse, no implica cambios automáticos en actitudes presentes. Una actitud que, además, encarna una súplica.

Por otro lado, desde una mirada de género, también hay rupturas... y reproducciones: la ausencia de la violencia, de la venganza, de los sentimientos de rencor con quien mató a la res, y la existencia contundente de la comprensión y la ternura. Pero sobretodo existe un encuentro muy fuerte del hombre adolescente un tanto inseguro, con el hombre adulto que probablemente espera ser: hombre protector, racional, animador, que tiene la responsabilidad (no el derecho) de echarse a su familia a cuestas, de no estar solo. Lugar donde se ubica, entonces, fácilmente, ese extraño sentimiento que le concede el derecho de sacudir a la abuela (símbolo por excelencia de la sabiduría y el respeto).

Me recuerda quisas un hombre talvez que yo creía que lo podía tener siempre a mi lado. Pero no fue así porque se llego un dia en que lo perdí, siempre recordaba todos esos 67 momentos buenos y malos que vivimos pero al pasar el tiempo este gran hombre se encargo de acabar con mis buenos sentimientos. Solo beia cada dia que se alejaba mas y mas, con gran dolor me resigne a darle un adios para siempre Talvez con odio porque una mujer me arrebato mi hombre por eso le di un adios para siempre.

POEMA

Gran hombre no se que Te impulso a dejarme. Pero una cosa si te digo Es que hoy he dejado de amarte.

Quisas hoy quisiera amarte Decirte que eres fascinante Pero hoy estoy desidida ha Darte un adios para siempre

PAOLA

La autora de este texto, Paola, es una mujer de 16 años que vivió el taller al tiempo que una ruptura amorosa terrible con un muchacho también participante. Ella vive con su familia y no tuvo que sufrir experiencias de violencia y de pobreza tan extremas como la mayoría. Sus grandes dolores: el amor y la rigidez de su mamá. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Para ella Cordera es el mal de amor. El taller entero...

Este texto, espejo evidente de sus sentimientos y vaivenes, es también una oración a sí misma. Un ruego de autoconvencimiento para tener la fuerza necesaria para dejarlo y superar el dolor. La palabra HOY demarca claramente los límites de tiempo, los límites de sus sentimientos y la confusión que implica el mal de amor. Como un ejercicio terapéutico de hacer un alto en el camino y marcar un hito presente: “Es que HOY he dejado de amarte”, y luego “Quisas HOY quisiera amarte”, para terminar el poema con “Pero HOY estoy desidida ha / Darte un adios para siempre”.

Dejar de amar... ¿dónde es el límite? Cuando se siente quisiera amarte... ¿es signo de que definitivamente se ha dejado de amar y volver al sentimiento sería un anhelo imposible? O, todo lo contrario, ¿es una confesión velada del sentimiento y de la labor, racional, que lo trunca convenientemente? Puede que HOY el sentimiento esté, probablemente en medio de una lucha intensa, pero lo que es claro en el poema es la absoluta decisión actual –HOY- de dar un adiós para siempre. Y ya sabemos lo difícil de esas decisiones. Decidir dejar de amar, más de un poema o una carta se necesitan... Decisiones que en la vivencia del amor adolescente y, especialmente femenino adolescente de culturas fuertemente patriarcales, no resultan nada fáciles de tomar 68 ni de aceptar. Otra vez, subtexto recurrente en la totalidad del presente corpus, la ansiedad por el bienestar, por resolver el sufrimiento.

Igualmente que en los casos anteriores, la autora se sumerge en sus emociones (“siempre recordaba todos esos momentos buenos y malos que vivimos pero al pasar el tiempo este gran hombre se encargo de acabar con mis buenos sentimientos.”), trata de reflexionarlas y entenderlas y luego intenta una solución que comienza en el papel y busca trascender a la vida real. Son secretitos cantados al oído de sí mismos. Ella, en efecto lo dejó... pero el extrañamiento aún le sigue desgajando el corazón.

Por otro lado, cómo no recordar la quinta y última carta de Sor Mariana Alcanforado... Las cartas portuguesas, usadas también en el taller, no fueron leídas sino varias sesiones después de ésta, pero el encuentro es impresionante. También fueron varias las cartas de Paola a su amado, ésta, la última. ¿Magia? ¿Arquetipos? No, cultura. Paola es hija de la misma estructura cultural que Sor Mariana. Mujeres que se despiden y expulsan cuando él ya ni recuerda su olor (“Solo beia cada dia que se alejaba mas y mas, con gran dolor me resigne a darle un adios para siempre...”), que se construyen a partir de sus hombres y de las cartas íntimas que escriben.

“Esta es la última vez que le escribo y espero hacerle saber, por la diferencia de los términos y del trato de esta carta, que finalmente me convenció de que no me amaba y, por lo tanto, que debo dejar de amarlo. (...) Sé muy bien que todavía les presto mucha importancia a mis quejas y a su infidelidad; pero recuerde que me he prometido un estado D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

más tranquilo y que he de alcanzarlo, o que he de tomar contra mí alguna decisión desesperada, ¡que conocerá sin mucha pena! Pero de usted no quiero nada más. Soy una estúpida al repetirle las mismas cosas tantas veces. Es menester que lo deje y que no piense más en usted. Creo, así mismo, que no volveré a escribirle. ¿Acaso tengo alguna obligación de rendirle cuentas de mi vida?”

“Caminaba mirando el cielo Y me fui de narices. Ahora echo sangre por todas partes: Las rodillas, el aire, los recuerdos; Mi falda se desgarró Y perdí los aretes, la razón.

¿No hay en el alma Una manera otra 69 De vivir un desamor?” o Elegía. María Mercedes Carranza

En tonos completamente diferentes a los tres textos anteriores, y fruto de actividades y de provocaciones distintas, el texto que continúa sirve de cierre para este segmento de espejos íntimos de imagen nítida... Casi opuesto a los anteriores, ayuda a completar el complejo panorama de la identidad de los y las jóvenes, de su entramada vivencia de derechos que los mueve todo el tiempo entre el goce y el sufrimiento, entre exigir, padecer y quebrar los derechos propios y los de los y las otras. Una variedad infinita de procesos identitarios, de angustias, de temas, de preguntas, de dolores.

En el siguiente texto comienza a explorar toda la fuerza del erotismo que circula por el Corpus. Un erotismo cargado, por supuesto, de búsquedas de identidad, de angustias referentes a la sexualidad y de autodefinición –algo anhelada- como sujeto de derechos.

La imagino muy hermosa, con la mujer más linda y cariñosa, a la cual yo ame con todas las fuerzas de mi alma. Espero ansiosamente este momento mientras tanto me masturbo hasta saciar las ganas que me invaden todo el cuerpo, quiero que cuando pase, yo esté preparado y no desepcione a la mujer que espero por el contrario quiero satisfaserla y calamar sus ganas al igual las mias y ella me aclame.

Espero que sea en una cama grande en la que podamos disfrutar al máximo uno del otro, en una noche alumbrada solamente por la luna y las estrellas. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

COMO LA DESEO

Está acostada en la cama desnuda esperando que un hombre calme sus ancias y sus ganas, mientras tanto yo no me imagino lo que va a suceder esta noche con luna llena, de pronto siento algo que me llama a gritos, salgo corriendo sin saber para donde pero algo, un sentimiento muy raro me guía hacia donde está ella, que me dice: quiero un hombre que pueda hacerme sentir mujer, quieres intentarlo?

Empiezo a besar todo su cuerpo con unas ganas de nunca parar y solo pienzo en no decepcionarla y no dejarla con ganas. Habro sus piernas y empiezo a introducir mi pene entre su cuerpo y poder al fin sentir lo que siempre había soñado. No sabia que hacer me hacia preguntas y si no era como yo queria y si no me gustaba y si no le gustaba a ella como será mi primera vez?

Gabriel

El 16 de abril se llevó a cabo una de las sesiones más divertidas y decisivas del taller. La exploración erótica alrededor de aquello que ellos entendieran por “Mi primera vez”. Mi primera vez podía ser un anhelo, un buen recuerdo, un sentimiento terrible, un beso, 70 la penetración, un sueño.

La sesión se desarrolló inicialmente a partir de sus primeras impresiones y palabras. Posteriormente, hubo un espacio de introspección dirigida más honda que buscaba romper las barreras del discurso y la imaginería inicial. En esta ocasión como muchas de las sesiones, los textos se trabajaban una y otra vez, se repetían, se discutían, se corregían hasta alcanzar textos en los cuales se evidenciara mayor esfuerzo reflexivo y creativo. Al final de la sesión, por la promesa “obligada”, yo también leí algo referente a mi primera vez: un texto proveniente de ALEATORIEDADES, escrito algún tiempo antes de tener mis primeros contacto sexuales fuertes.

“Quiero un día embriagarme con el aceite de tu cuerpo, con el olor corrosivo que se vuelca enloquecido de entre tus piernas. Quiero sentir, en cada papila de mi ansiosa lengua, el sabor de U tu interior…” Los juegos de la sexualidad así como las fantasías eróticas son aspectos poderosos en la definición de la identidad, en la construcción del yo. Las fantasías son exactamente un ejercicio preliminar de planeación, un ejercicio en el que se sientan las bases subjetivas y emocionales de lo que se vaya a vivir –o a querer vivir- más adelante. Son, también, un producto de la cultura incorporada cruzada con la historia y las creaciones personales. Así, entonces, el ejercicio de fantasear y recrear fantasías es un ejercicio de pensamiento hacia el futuro, sobre las condiciones requeridas para alcanzarlas... además, por supuesto, del placer presente que implica el hecho de liberar la fantasía. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

En las fantasías de Gabriel (también tímido, juicioso, de pocas palabras) él se descubre como un hombre intensamente erótico, que no ha tenido su primera relación sexual y que disfruta de la masturbación como un ejercicio de espera; heterosexual, penetrador, tradicional, cargado de un fuerte romanticismo sexual. Es decir, no es un hombre que sólo espera penetrar... desea penetrar sí, es lo que más desea, se devela como alguna suerte de deber místico; penetrar... pero en una atmósfera nada vulgar ni cotidiana. El sexo es sexo (“mientras tanto me masturbo”, “Habro tus piernas y empiezo a introducir mi pene entre tu cuerpo...”), pero al tiempo es poesía (“...yo ame con todas las fuerzas de mi alma”, “...en una noche alumbrada solamente por la luna y las estrellas”, “de pronto siento algo que me llama a gritos, salgo corriendo sin saber para donde pero algo, un sentimiento muy raro me guía hacia donde está ella...”). El origen es su deseo y la invitación de esa mujer misteriosa. No es un hombre abusivo, ni violento.

Según Focault, la dimensión de las tecnologías del yo que más fuerza tiene en la historia de la humanidad es aquella de las confesiones sobre la sexualidad. Recuerdo con absoluta claridad el momento en el que el tiempo de escritura se termina y Gabriel pide permiso para leer su texto en voz alta. Extraña confesión. Su virginidad, su erotismo, el romanticismo total, su masturbación explícita. Extraña decisión aquella de no sólo escribir sino de querer publicar una intimidad que, en ese contexto, lo signa 71 fuertemente. Además del texto definirlo en su intimidad, lo define al interior de un colectivo, elemento fundante para la construcción de la identidad. “¡Pajuelo!” gritaron algunos en medio de la burla generalizada, lo que sirvió además como detonante de discusiones y conversaciones que además de protegerle su valor y su derecho, implicaban la posibilidad de tratar abiertamente el tema.

Por otro lado, el yo poético que protagoniza la segunda parte del texto –narrada en presente, como toda buena fantasía, como un guión cinematográfico-, al llegar al punto crítico del asunto, la penetración, se pierde. Y es lógico, cuándo la carga ha estado puesta sobre el hecho de, simplemente, introducir el pene en la vagina, no hay mayor información sobre el después. Entonces sólo le quedan a Gabriel preguntas para la reflexión íntima, para hacerse en ese espejito empañado de deseo que es su texto -“No sabia que hacer me hacia preguntas y si no era como yo queria y si no me gustaba y si no le gustaba a ella?”-, y, finalmente, para cerrar el círculo de confesiones, el yo poético se diluye absolutamente; el todopoderoso presente, mutado ya en pasado bastante avergonzado durante las preguntas, se transforma en futuro franco y aséptico: “como será mi primera vez?”

Este texto es también un espejo revelador de la identidad en cocción. De la subjetividad que sólo ronda el baño y la cama de Gabriel. De las preguntas y respuestas que marcan y orientan sobre uno de los temas más trascendentes en la vida juvenil: la iniciación sexual. Que lo marcan y lo orientan a él, vale aclarar. ¿Cómo conseguir una cama doble y la ansiada atmósfera romántica? ¿Y si no es la hermosa, linda y cariñosa mujer, cargada de misterio... pero sí una que se lo da? ¿Cómo estar preparado para sentirse bien y hacer sentir bien a la compañera? Orientan para el ejercicio de derechos, el sagrado derecho de hacer real las fantasías, de tener una vida sexual en condiciones de dignidad. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

PEQUEÑOS ESPEJOS BISELADOS No siempre los espejos son amplios, limpios, rectos. En ocasiones, al dar la vuelta en cualquier esquina del barrio o de tu casa, te topas irreconocible con un pedacito de espejo que alguien abandonó. Tu reflejo en un charco de aceite. O el rostro, milveces repetido, fragmentado, deformado y tuyo, cuando por estar jugando fútbol el espejo del baño se quiebra como una telaraña. Siguen siendo espejos, sigues siendo tú y aún, tal vez más, son oráculos de compleja sabiduría.

Hay espejos, entonces, que no son fáciles de descifrar, que se sienten acertijos porque los espejos mismos se miran al espejo para verse mejor. Hay chispazos de luz, de azar e ironía que aparecen cualquier mañana, sin estarlos buscando, y, entre sábanas y babas, rondan al yo para cuestionarlo y sugerirle. Porque no solo de argumentos claros y luces planas vive el hombre… ni la mujer, también entre sueños y ventanas veladas aprendemos a ser hombres, a ser mujeres, a ser adultos, a ser sociales.

A continuación se presentan cuatro de estos pequeños espejos biselados. No niego alguna intención de descifrarlos, pero tampoco la impotencia. Sería tonto decir que nunca sentí el deseo de “interpretarlos” con esas técnicas excesivas, fenomenológicas, 72 místicas, que todo lo vuelven magia y poesía simbólica, que mastican y regurgitan los contenidos hasta encontrar en cualquier texto la quintaesencia de la condición humana. Sentí el deseo, sí, pero el respeto por los textos, por los autores y por el enfoque de análisis es mayor. Entonces, se presentan acercamientos, reflexiones, hipótesis, preguntas y conclusiones sobre, igual que en el grupo anterior, las maneras como estos textos pudieron ayudar a al construcción de la subjetividad de sus autores.

AUTORRETRATO

Del valle del eden al valle del limbo Del cielo a la tierra Como una flor como una cemilla marchita Como la fruta que ancia ser comida Como el caballo fino como el potranco arrecho De la ciudad al campo De la costa a la montaña Como rico como pobre Del odio al amor r Al fin como queria pero no quise

Santafé

La identidad, como tema explícito, fue trabajada en la tercera sesión del taller. La guía inicial la realizó Alicia Rivera, sicóloga de la Asociación Nacatsi –institución contratada D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

para ser la ejecutora del proyecto con los y las jóvenes de Villavicencio-, quien además realizó el apoyo constante. Se avanzó en el reconocimiento sensible y subjetivo de la identidad a partir de la mismidad, de la unicidad y de la otredad. El trabajo de Identidad desde estos conceptos se unió también al esfuerzo por resolver una serie de problemas personales que estaban dificultando mucho la vida del grupo. Pensar al otro, pensar desde el otro, ayudaba a reducir las barreras en el conflicto. Pensarse a sí mismos, definirse, ayudaba a tener más elementos de argumentación, discusión y resistencia frente a las agresiones.

Luego de discusiones, agresiones verbales y simbólicas, la sesión se concentró en el ejercicio creativo y poético. La rabia, las diferencias, los odios, las agresiones que existían debían ser puestas en una serie de cartas y poemas anónimos que se leerían en voz alta. Surgieron textos durísimos, de descarga absoluta, golpes directos y soterrados; casi todos, con un importante valor literario. Espejos rotos y sangrantes. Escritura automática de alto octanaje. Como quedó confesado en el capítulo de selección del Corpus, la mayoría de los textos de las primeras sesiones desparecieron. Ésta, la tercera, no fue la excepción, sólo se salvó el presente, porque Santafé es un de esos pocos para quien la literatura tiene la opción de ser oficio. Es decir, siempre guardó celosamente sus textos. 73

Finalmente, después de las discusiones, reflexiones, regaños y conclusiones, Gómez Jattin ayudó a dilucidar elementos, a reírse unívocamente, a llegar a poemas tan hermosos como este AUTORRETRATO y a conclusiones tan lúcidas y sabias como la de Pájaro: “Yo aprendí que hasta del odio puede hacerse poesía” (A una vecina de buena familia: Lo más probable / es que seas como los otros / ignorante y mentirosa…). Esa frase, que para la academia puede sonar a lugar común, a cajón con telarañas, para el taller fue una aparición maravillosa. La poesía es un arma, es un salvavidas.

Varios fueron los poemas de Jattin, entre ellos, y vinculado directamente con nuestro espejito biselado, éste:

RETRATO Si quieres saber del Raúl que habita estas prisiones lee estos duros versos nacidos de la desolación Poemas amargos Poemas simples y soñados crecidos como crece la hierba entre el pavimento de las calles

En el AUTORRETRATO de Santafé respira Jattin. De manera tan inocente y creativa que la mimesis es borrosa. Él, muchachito de ojos claros y rostro abierto, futbolista, parrandero y mentiroso. El más creativo de todos y todas las participantes, el más enamorado de la escritura, el más inconstante. Santafé es el vaivén (¡qué palabra tan D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

hermosa!) de su poema. Es hierba crecida entre el pavimento, narrador de sueños e íntimas desolaciones. Santafé es humor agudo, fino, certero. Es “valle del eden” y “valle del limbo”, sin ninguna duda. Así la relación con su madre y su familia. Hijo golpeado brutalmente por su padre, respaldado por la mamá. Hijo mayor, compañero, solidario... escurridizo, agresivo, violento.

AUTORRETRATO, como texto surgido de aquella sesión, es una conclusión ineludible. La complejidad infinita de la identidad juvenil... perdón, del proceso incandescente de construcción y descubrimiento de la identidad. El documento que evidencia los sentimientos excitados en la sesión y que circulan el corazón del autor. Ese péndulo que habita un universo sin afán de irse ni de quedarse y que luego, sin nada de dramas, se siente comodísimo en el universo contrario. “Como la fruta que ancia ser comida / Como el caballo fino como el potranco arrecho”. La identidad que no sólo es móvil sino coloidal. Poema íntimo y universal.

En sus letras circula la evidencia de la vida. La evidencia de un desplazamiento geográfico que arrastra desplazamientos económicos, emocionales, contextuales. Un desplazamiento que además es definición de la vida. No se deja de ser desplazado. “De la ciudad al campo / De la costa a la montaña / Como rico como pobre / Del odio 74 al amor” Se es desarraigado, se guardan los recorridos y los vayvienes en la piel, en cada palabra en la manera de respirar y de caminar. Una vez se conoció la muerte nunca se olvida, igual que el cansancio y la esperanza. Y no hay ninguna contradicción. Sólo complejidad: “Como una flor como una cemilla marchita”.

La historia, las estructuras objetivas, el contexto, están allí presentes, es verdad. Pero atravesados por la poderosa fuerza de la creatividad individual, de la lucidez que es capaz de evidenciar y recomponer. Esa es la fuerza de la poesía que nos permite Jattin (Poemas simples y soñados / crecidos como crece la hierba / entre el pavimento de las calles) y que nombra Pájaro.

Y sí, como escritor siento envidia por este poema: “Al fin como queria pero no quise”. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

POEMA INSPIRADO A LOS OJOS

Dichosos los ojos que me ven, hermosos los ojos que veo, y unos ojos de esos es que yo deseo

Por eso quiero un novio con los ojos que deseo,

Quisiera tener los ojos que tienes, para sentir la misma mirada que me penetras desde lejos

Dichosos los ojos que tienes Dichosos los ojos que quiero g por eso amor mío es que te deseo 75 y dichosos los ojos que veo.

Leydi.

Desde que el texto llegó a mis manos, supe que no sólo iba a ser parte del Corpus, sino que sería un ejemplo sintético de la experiencia.

Tal vez fue la primera vez que vi a Leydi. Segunda sesión (12 de marzo), integrante nueva del grupo. Durante el transcurso de la sesión no pronunció palabra alguna. Se quedaba quieta, callada, con la mirada oscura y un tanto agachada bajo las cejas campesinas. No hablaba con ninguna otra de las niñas. Dos veces sonrió ante algún chiste que provocó las carcajadas del resto. Era temerosa de acercarse, terriblemente precavida. Fue así hasta el último día. Nunca faltó. Escribió textos que nunca nadie vio.

La sesión avanzó sobre los textos escritos en la anterior. Muchos dolores. Demasiadas tristezas. Amarguras que no tenía sentido desmenuzar acá. Muchas de las participantes se resistieron a que el taller tomara el curso de una terapia de grupo. Y ganaron. Así que se dio vuelta a la perilla y nos sumergimos en aguas sutiles y hermosas: Cristina Peri Rossi.

Diáspora existió como el mejor faro posible para nuestro taller. Ellos sabían sobre el abandono, sobre el amor, sobre el exilio, las tristezas y ese contundente e irónico erotismo que la Peri Rossi nos entrega. La poesía tenía una cara distinta, una posibilidad de ser cerquita de sus jabones y zapatos rotos. Caminamos por Diáspora largo rato, hablándolo, sintiéndolo, discutiendo y recordando amores en Copenhague, Villavo o Bogotá. Ella les encantó. Leydi tan sólo escuchaba, casi inexpresiva. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Para finalizar, el otro faro: Gómez Jattin. Este fue, cronológicamente, el primer acercamiento del grupo a este poeta. Su historia y sus poemas, al igual que los de la Peri Rossi, fueron actos liberadores absolutamente claves dentro del taller. Entendieron que allí se podía existir de cierta manera y que resultaba bien. Que una mujer podía tener en la primera estrofa de un poema la palabra Penétrame, y que un hombre podía confesar sus arrecheras devoradoras. “Te quiero burrita” fue la provocación final para escribir.

Les pedí, para cerrar, que nombraran sin pensarlo un parte del cuerpo. Todos nombraron, esperaban. Ahora escriban un poema sobre esa parte. Como quieran. Si esa parte es suya, es de otra persona, es la parte en general o la parte específica de una persona específica, si la aman, la odian, les es indiferente. Leydi, por supuesto, dijo los ojos. Se fue lejos del resto a escribir su poema.

A los pocos minutos comenzaron a entregar y ella no terminaba. Comencé a sospechar que no iba a hacer nada. Por esos prejuicios de la vida, yo no tenía mayor expectativa con el texto de ella. Nos reunimos a leerlos. Hubo de todo. Al final volvió ella, sonriente, estiró el brazo y puso ese papelito casi ilegible en mis manos. No lo iba a leer, pero quería que yo lo hiciera, fue lo que asintió con su cabeza. Una vez descifrada su extraña 76 letra, mi mandíbula se desencajó cual muñequito animado. Amé la poesía. Amé a la Peri Rossi y a Jattin, entendí todo el poder de este taller.

POEMA INSPIRADO A LOS OJOS es una obra bañada de simpleza, escrita en círculo. Perfectamente obediente de los principios de Cortázar y Monterroso para los cuentos cortos (la esfera, la economía del lenguaje, el ingreso verosímil a mundos o conclusiones inesperadas), y de Peri Rossi, Jattin y Silva para los poemas. Es el oráculo que permite ir de la corporeidad mía a la del otro para saber qué siente cuando me mira y volver a mí para disfrutarlo y recrearlo. No estoy haciendo metafísica, simplemente estoy leyendo el poema. “Dichosos los ojos que me ven / hermosos los ojos que veo”.

La identidad se construye en el sí mismo y en la búsqueda del lugar que yo ocupo en la vida del otro. Espejo explícito en el poema. “Quisiera tener los ojos / que tienes, para sentir la / misma mirada que me penetras / desde lejos.” Peri Rossi desnuda, depilada, bañada en vino y sonriente.

Esa mujer miraba sin ver a nadie porque sus ojos eran el espejo donde se miraba

Leydi intensamente sensible, de palabras precisas y hermosas, con las preguntas desbordando los silencios, con el deseo y el espejo construyéndole las noches. Mundo plagado de tranquilidad, de belleza, una sensación de bienestar tan intensamente distante de la presencia física de la autora... Un ego reconciliado que saluda diciendo D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

“Dichosos los ojos que me ven” y se despide con un “y dichosos los ojos que veo”, en cualquier caso, de ida o de vuelta, dichosos nosotros lectores y compañeros por tener su presencia. Insisto, yo poético que difícilmente coincide con la imagen inicial de la autora. La autorepresentación es así, ahí está el acertijo.

Ahora bien, para ella es evidente su capacidad de expresión, la postura que va cambiando sutilmente a lo largo del taller. Cambia su confianza, cambia la ropa, cambia la libertad para jugar y reír. Poco a poco, sutilmente. Pocas palabras habladas, pero una intención decidida de seguir ahí. POEMA INSPIRADO A LOS OJOS es un destello que encandila, evidente pero no obvio, que deja una estela indestructible en ella y en sus compañeros. Después de haber leído este poema en voz alta, Leydi ya no fue la misma para sus compañeros. Finalmente, dichosos los ojos que veían sus palabras.

Muchos días adelante. Con la mella en el taller producida por el cansancio y la volatilidad de sus mentes. El 21 de mayo se lleva a cabo la novena y última sesión del taller. Todos asisten. Al finalizar, un juego que siempre fue divertido y generador. Rápido, una parte del cuerpo. Muy bien, y ahora... rápido una sensación. Listo, a escribir un buen poema y entregarlo. Se hicieron lecturas individualizadas, discusiones, 77 provocaciones para ejercitar y soltar la creatividad.

Santafé una vez más. También Rubely. Y en mi cabeza, preguntas.

Cuando pasas me da una cosa un noseque Tus senos son dos toronjas que me quitan la sed Se me paran los pelos de las guevas Pero lo que me es que (simplemente) Rubely Eres un hombre.

Jhon Alexander Castro “Santafé”

Sólo algunos quisieron leer. Entre Rubely, por supuesto, no quiso leer. ellos él. Sonrojarse parece que fue Nunca leyó ninguno de sus textos. Lo inevitable. Luego se sentó y hubo entregó y ofreció la hermosa sonrisa algunos comentarios de burla. El texto de siempre. podría resultar del azar, un juego de palabras de alguien que, como él, ¿Quién es el narrador del poema? ¿Es demostró la habilidad... pero ¿por qué un yo poético masculino? leerlo en voz alta y con cara propia en ese contexto? ¿Tan abierto resultó el ¿Te refugias en un hombre para retar, espacio del taller? ¿Sucedían juegos para romper la norma femenina? subterráneos entre ellos que yo nunca ”Tus senos” ¿de quién? ¿Alguna vez conocí? alguien te lo dijo? ¿Es un recuerdo D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

de un piropo? ¿Es el anhelo de un Es automático, dado el contexto del piropo? taller, suponer que “se me paran los pelos de la güevas” tiene una ¿Es una confesión de deseos connotación de excitación sexual... Pero secretos? ¿sí? ¿No podría ser miedo o sospecha? ¿Algo así como un mal sentimiento por La metáfora es hermosísima, un hombre que pasa a su lado? completa. Una imagen poderosamente erótica que Y el simplemente. ¿Por qué entre ineludiblemente aviva los sentidos. ¿Y paréntesis? ¿Qué hay ahí? ¿Se trataba en ti? ¿Qué pasó en ti al escribirlo? de borrarlo? Sólo puedo decir una cosa. Rubely se reafirma en este texto, como en cada ¿Es realmente sexual este texto? O, escrito que compartió, como una hilando muy fino, ¿hace referencia a la mujer intensamente erótica y sexual. historia con su papá y tiene que ver más “Henamorada”, como dirá ella en su bien con el miedo y la redefinición del diario. papá como, (simplemente) un hombre? 78

Una vez más el espíritu de Jattin y de la Peri Rossi como padrinos liberadores. Ya habían pasado todos por sus cuerpos, cabezas y corazones. Arreola, Monterroso, Silva, Carranza, Jong, Storni...

La forma es medida, precisa en ambos textos. Están construidos en función de la narración y del suspenso. La sorpresa, el juego y los retos florecen vívidamente en estos dos textos.

Minicuentos-poemas-graffities-pensamiento-nota de diario-o mensaje en el cuaderno. Literatura viva escrita en una segunda persona íntima y personal.

¿Son juegos? ¿Retos en los que se rompe el contexto como un ejercicio vital... por el sólo hecho de retar y romper? ¿Son confesiones que se fugaron de cualquier prisión y necesitaban salir a la luz pública? ¿Tienen destinatario específico? ¿Mensajes cifrados, como literatura, para un solo lector/a?

Y si fueran juegos de palabras, ¿qué pasó con la autorepresentación? ¿Se autorepresentan metatextualmente como retadores y creadores? ¿Acaso el juego de la exigencia creativa les da esas licencias? ¿Licencias de confesión? ¿De creación? ¿De distancia? ¿De ambigüedad?

Sé que a ambos la literatura les abrió ventanas y les ofreció agarraderas. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Fiesta de espejos Hay una habitación en la que todos entramos y que para nada evita el sudor. Es nuestra habitación. Construida con los espejos que poco a poco o en accidentes inesperados vamos construyendo. Esos espejos son pantallas por las que pueden ver los que están afuera. Pero hay que entrar, para ver cómo se muestran los unos a los otros, como se van volviendo hermanos, miembros de una misma habitación. Para sentir el vaho que se desliza por la unión de los espejos.

Hay música y luz-medialuz con rayitos blancos que proyecta la misteriosa bola de espejos que cuelga del techo. Ella lo ve todo, nos reúne, nos ilumina. Cuando abres el plano y la intimidad se vuelve traje de noche, ves claramente lo que sucede. Esta es una fiesta de espejos. La posibilidad de construir identidades colectivas, de pertenecer, de transformar la subjetividad que circula entre los danzantes. Los espejos, entonces, ya no son sólo para mirarnos en la intimidad, yoconyo, sino para vernos la cara que como colectivo se tiene. Requerimos, entonces, una mirada más amplia sobre las intersecciones de los espejos que forman la habitación. Verlas no sólo nos permite conocer a los participantes de la fiesta, sino que implica una reflexión sobre cómo la

fiesta misma les permite a ellos y ellas construirse como colectivo. Virtud del arte. 79

De la lectura de los textos (y por supuesto del taller previsto) surgen dos temas que sirven de ejemplo para participar en la fiesta y analizar los procesos de configuración de identidades colectivas. Dos temas, además, base de la experiencia vital de nuestros autores. Como fiesta que se respete: el erotismo (espejos rebosantes de humedad) y la condición de juventud (agridulces espejuelos). Se cruzará, además, de manera explícita, la categoría de Género. Es decir, las niñas sentadas a un lado con sus peinados altos y las faldas cortas. Los niños, de pelo aplastado y pantalón manchado de pasto, en frente de ellas. En la mitad, la pista de baile. Y yo, la tía cuyo destino macabro es armar las parejas y prender la rumba.

ESPEJOS REBOSANTES DE HUMEDAD Si bien el taller que motivó la fiesta rondaba explícitamente el tema de la sexualidad desde una perspectiva de derechos humanos, hubo temas que resaltaron y otros que no, por el interés de los y las muchachas y la dinámica misma que cada sesión iba teniendo. El erotismo fue el tema que brotó con más fuerza desde el principio. Muchachitos y muchachitas viviendo y soñando las rutas del placer sexual. Un espacio bastante húmedo, que incluso empañaba los espejos. O los construía ya empañados. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Los espejos de ellos

Quiero sentir al despertarme el calor de tus Mi primera vez. caderas, el olor de tus pesones, el sabor ardiente de tus movimientos; que me alborotan las ormonas Mi primera vez coincide con una primera cuando estoy a punto de quién sabe que cosas. comunión Inocencia, Dulzura, Juegos, misa, familia, agua, Deseaba tus caderas cuando pasabas y no sabias susto, ignorancia, en fin lo ingredientes para una quién era Yo, las deseaba tanto, que ahora las Bandeja Paisa cargada de amor. Tan común como quiero provar las quiero sentir, las quiero dibujar el arroz, pero tan raro como la carne molida, a mi nuevamente, quiero sentir lo que sientes al me gusta la arepa a ella los huevos y el chorizo / exitarte, quiero llegar en el mismo instante en que a mi me invadió la ignorancia de saber comer una disfrutas tu orgasmo. simple y sensilla bandeja paisa, la inocencia y dulzura de una prima no tan santa que acababa Dumar. de hacer la primera comunión / por comer de afan y el temor de que alguien me quitara me atore mas de una vez comía como un niño chiquito cojía 80 todo lo que podia en fin mi primera Bandeja paisa me quedó grande.

Jhon Alexander Castro “Santafé”

MUSA Mi pipi tienen sed de tener una buena mujer Tu tenias sed de mi pipi Oye amor mío cuando yo te lo embutí escuchame un momento, déjame acercarme me dijiste para ahí y ni barreras, permíteme besarte. Mi pipi tenia sed anhelo besar hasta el último rincón de tu cuerpo pero al berlo con lizeth mientras desabrocho tu falda. Y descubro el se le quito la sed precioso tesoro, que guardas con tanto recelo para la MAURICIO llegada de ombre que todas las noches en tus sueños te ama con fuerza borás; ese hombre soy yo haora ya lo sabes, Permiteme introducir mi ideología D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

en tu sensual presencia. y llegar al gran extasis del que todo hablan y que quiero probar haora bien amor mio, ya sabes quien es el que respira por ti cuando tu no lo ases ya saves quien muere por ti y resucita solo si tu lo quieres solo si tu lo deseas permiteme “acercarme” Robinson L. O

Entonces, de este lado están ellos. Los hombres siempre fueron los protagonistas en el 81 taller. Ellos tienen incorporado el permiso de romper los límites. Hablaban cada vez que querían y cada vez que se les pedía, son hombres. Son los llamados a interrumpir las sesiones, a romper, gritar y cantar, a levantarse de la silla y sacar a bailar a la niña. Y por supuesto, el erotismo en ellos es un clásico –o eso creen la mayoría de estudios-, fluye de manera simple –o eso tienen programado para responder- y, sobre todo, como se refleja en sus espejos, es público –o... sí-.

No es necesario éste ni ningún estudio diferente a los miles existentes para decir que a los hombres adolescentes de La Reliquia o de casi cualquier lugar les gusta tirar. Y les gusta imaginar que tiran de mil formas. Y les gusta decir que tiran. Con niñas. Y que por tirar entienden penetrar. Y que eso los hace ser y sentirse hombres frente al espejo íntimo y sobre la pista de baile. Y que dicen que tirar es un saber que manejan muy bien, porque para ellos es “natural”. Para afirmar eso sin temor de dudas sólo se necesita un poquito de conocimiento sobre el tema.

Si yo no llevara trabajando en esto varios años, ni esta tesis fuera también fruto de una organización tan dedicada y juiciosa como el UNFPA, podría decir, como gran descubrimiento a partir del análisis de los textos, que los hombres del grupo se configuran como seres sexuales, cargados de deseos desbordados que sienten como necesidades. “...que me alborotan las ormonas cuando estoy a punto de quien sabe que cosas”. “Mi pipi tiene sed de tener una buena mujer”. “...y llegar al gran éxtasis del que todos hablan y que quiero probar”. “por comer de afán y el temor de que alguien me quietara me atoré mas de una vez...”. Pero decir eso en mi caso es una soberana estupidez. Sentirá mi jefe que perdió la platica que invirtió en este proyecto. Así que de alguna manera tengo que decir cosas brillantes. Parecer, y sólo parecer, inteligente. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Pues bien, comencemos.

1. “Tu tenías sed de mi pipí cuando yo te lo embutí me dijiste para ahí”

Y

“quiero sentir lo que sientes al exitarte, quiero llegar en el mismo instante en que disfrutas tu orgasmo.”

En el primer espejo, la cosa del erotismo es más o menos simple. Definida perfectamente por las palabras usadas y la simpleza de las estructuras. Pipí y embutí no solo riman en el poema, riman en la conciencia y en la vida cotidiana del autor. En la obediencia de la cultura. El habitus se evidencia de manera indiscutible. Esa es la famosa fuerza erótica de los varones jóvenes. Un erotismo centrado en la penetración genital. 82 Luego, en el espejo que descansa contra el primero, la uniformidad comienza a romperse. La penetración no aparece, como no aparece el pene ni ningún sustituto. La claridad y fuerza de las palabras de Dumar contrasta con la sutileza y ambigüedad de la imagen. Y la ambigüedad es algo poco permitido en el mundo masculino; sobre todo cuando no sólo existe sobre la pose sexual, sino sobre la identidad del varón: “quiero sentir lo que sientes al exitarte...” El hombre –sí, arrecho y desbordado- que no sólo ansía el placer de ella, sino reconocer hondamente las sensaciones y sentimientos que ocupan a su pareja.

Mauricio embute, Dumar siente, huele, degusta, prueba, dibuja y se sumerge en el/la otro/a. Mauricio es futbolista, Dumar gimnasta y bailarín. No es invento ni coincidencia.

2. Las conversaciones rondan siempre el tema de las malas experiencias en la iniciación sexual de las mujeres. De los hombres se dice, decimos los hombres, que la cosa casi siempre es simple, ¿qué problema puede haber en penetrar? ¿Verdad estudiada como en las mujeres? No, ignorancia absoluta. De la sexualidad masculina no sabemos casi nada.

Santafé, nuestro creativo y confesional escritor, no tiene problema en, una vez más, levantarse y leer: “...en fin mi primera Bandeja paisa me quedó grande.” Recuerdo también otro texto, de los que se perdieron en el camino, de Edisson Q, un poema corto y agudo en el que nombraba su primera vez como una experiencia absolutamente desagradable. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Vale la pena exponer acá cómo, seguramente esa conciencia masculina llanera y la fortaleza vital de Santafé, le permiten transformar una narración de fracaso y frustración, sin duda vergonzante, en una divertida e ingeniosa narración. La metáfora entre la prima paisa y la bandeja paisa y el juego entre la santidad y la primera comunión-primera vez son impresionantes. No se rebaja en ningún momento la torpeza del protagonista, incluso, logra el autor reflexionar sobre su experiencia y leerla críticamente desde la actualidad: “a mi me invadió la ignorancia de saber comer una simple y sensilla bandeja paisa, (...) por comer de afan y el temor de que alguien me quitara me atoré mas de una vez / comia como un niño chiquito cojía todo lo que podia...”

3. “mientras desabrocho tu falda. Y descubro el precioso tesoro, que guardas con tanto recelo para la llegada del ombre que todas las noches en tus sueños te ama con fuerza borás; ese hombre soy yo haora ya lo sabes, Permíteme introducir mi ideología en tu sensual presencia 83 (...) ... ya saves quien muere por ti y resucuita solo si tu lo quieres solo si tu lo deseas permiteme ‘acercarme’.” La caballerosidad es una expresión sutil del machismo. El amor romántico masculino en su máxima expresión. El tiempo pasa, pero en algunos lugares se suspende. ¿Joven adolescente a principios del siglo XXI? ¿Canción de caballería de la edad media? El texto se llama MUSA. La intrincada estructura de dispositivos gruesos y sutiles que sostienen las relaciones inequitativas entre hombres y mujeres. La relatividad del poder masculino.

Es decir, MUSA sería un piropo, pero define una relación de poder vertical en la que ella está al servicio de él. La musa, siempre mujer, le sirve a los poetas –hombres-. El lenguaje florido es una estrategia bastante conocida para acceder a los favores de la MUSA, porque de ella se dice que es quien tiene el verdadero poder (originalmente las ideas, en este caso la vagina). Así que hay que suplicarle, convencerla de que es ella la que está eligiendo, que no es su deber cultural, sino su elección. Permíteme, le ruega él. Y le dice las palabras exactas que quiere necesita oír para romper el candado del tesoro. Uno tesoro que no guarda para ella, para su propiedad, sino para el más ______(cualquier adjetivo cabe siempre y cuando sea el más de lo que se necesita) de los piratas-poetas-caballeros. Esas palabras, más adelante lo veremos, cuando sea mi labor de tía sacar a bailar a los niños y a las niñas, conjugan perfectamente con las necesidades de una de las bailarinas. Porque, claro, “introducir mi ideología” es bastante más bonito que embutir mi pipí. Y así sea exactamente el mismo hecho biológico con distintas palabras. Volviendo al Marco conceptual, la sexualidad es una construcción simbólica, y ahí las palabras hacen el mundo. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Pero ¿no es verdad que es ella quién tiene el poder, exceptuando por supuesto el abuso sexual, de abrir las piernas? El poder, decía una maestra alguna vez, de hacer con ustedes lo que se nos dé la gana. Quién engaña a quién, se pregunta Monterroso entre Penélope y Ulises. La musa elige al caballero que más le guste. El problema, claro, es que al convertirse en un premio por el cual se ha luchado tanto, el sentido de pertenencia se fortalece. Tú, Musa, eres MÍ, Musa... no dije e hice esa cantidad de estupideces para luego perderte tan fácilmente. Sería mejor entonces embutí que introduje: dejaría las cosas más claras.

4. En los cuatro espejos presentados nuestros hombres se ven de frente, sin quiebres ni velos. Esto se logra en todos a partir del tono y de las palabras usadas, relacionadas con el contexto cultural y la edad de los escritores. Al leerlos sin nombre varias personas los identificaron sin dudas como textos masculinos. En tres de ellos (“Mi pipí...”, MUSA y Mi primera vez) el yo poético es explícitamente masculino (“Mi pipí.....”, “ese hombre soy yo”, “...como un niño chiquito...”) y heterosexual absoluto (“...tener una buena mujer”, “mientras desabrocho tu falda”, a mí me gustaba la arepa a ella los huevos y el chorizo...”). 84

Parte de ser hombre implica ser reconocido abierta y explícitamente como tal. ‘Que no quepan dudas’, me decía mi papá. No basta con el sentimiento hondo de la identidad masculina, se requiere la aprobación pública. En esta fiesta, entonces, ser hombre es vestirse como tal, hacerse llamar como tal, comportarse masculinamente y, en consecuencia, conquistar. Y que todos vean tu conquista. Para luego que venga el sexo, penetrativo por supuesto, y que la gente se entere o lo sospeche. Con nombre propio.

Pero hay rupturas... Dumar no explicita su sexo ni el de su acompañante, que aunque se puedan deducir, diciente mucho es la diferencia con los otros hombres.

Los espejos de ellas

Hola: Cómo estás, son la 1:30 A y yo pensando O que lindos labios tienes que en ti, pensando en esa mirada de ternura que me parecen una piña madura para hace llegar al cielo, en esos días donde nuestros chuparlos cuerpos, se penetraban sudorosos se unen para ser uno solo, donde haciamos un muro de papel muy Rubely. duro de derrumbar, donde nuestros sueños y anhelos se juntan para ser uno solo, me acuerdo aquellas noches cuando recorrí tu cuerpo, y descubrí todo lo + que llebas dentro, en el alma, me combecieron esas palabras dulces y cinceras que recuerdo, tus ojos D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

son dos luceros que iluminan mi pobre sendero, tu Diario de Rubely boca es aquella fuente dulce que calma mi selo, mis 12-4-05 antojos, tus manos son dos palmas que recorren y cubren mi cuerpo, tu cuerpo es un abrigo que me Hoy conocí a un moacho muy lindo me dejo matada calienta cuando muero de frío... ¡Hoy e descubierto el mundo con todas las cosas Tiene unos ojos muy lindos también se manda un bellas que me has enseñado! Tal vez no te lo diga cuerpaso. todos los días pero no olvides que te amo, ¡Cada instante a tu lado merece una gran celebración! Al Lo único es que tiene un hermano igual a el, con fin al cabo somos humanos y cometemos errores también la arma de el es que los dos estan un y cuando uno ama perdona lo que sea ¡PERO! No bombon. olvides que pienso en ti en todo momento e instante de la vida... No llevan artos días en la cuadra pero estan todavía unos bombones. GRACIAS: por dejarme navegar en tus ojos, por dejarme disfrutar el dulce sabor de tu boca, por 15-4-05

dejarme estar un minuto en un pensamiento en 85 donde solo estamos tu y yo, por disfrutar todos En el dia de hoy jugamos con mis amigos a tus pequeños sueños, anhelos, alegrías tristezas, manoplas y el que quedara le tocaba pagar triunfos. penitencia dándole un beso en la boca al niño que nos desian y si no lo hasiamos nos daban calbasera GRACIAS: Por dejarme descubrir el amor, por de todos. dejarme sentir el frio de la noche, por dejarme disfrutar todo lo que piensas, sientes, sabes, Pero yo no tuve que me dieran calbasera me tocaba disfrutas, por enseñarme a reir en los momentos darle el beso a todos me los chupe no me falto faciles y difíciles de la vida, por brindarme esa nadies. sonrisa que te caracteriza y me hace sentir que yo pertenezco a ti y tu a mí. 7-05-05 TQM yo se que sin querer me henamore de ese mohacho. PAOLA El sabe que tiene que venir a la casa. Porque yo no lo voy ha buscar el bien sabia que cuando mi mamá no este yo voy lo busco de resto no.

llevo dos dias que no lo veo y siempre me hace falta j sus besos sus paracias, su sonrisa y sus bromas. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Poema de Cola y de Amor.

Quiero decirte Amor. Que cola tan suave que caricio con tanto amor.

Quisiera tener esa Cola que tu tienes Para yo sentirme Orgullosa y sentir Que alguien me diga Amor que cola tan suave tienes tu A quiero sentir tu amor con tu cola 86 de peluche.

Leydi.

Girando la cabeza 180° están ellas. Las silenciosas. Las de los amores dolorosos. Las que llenaron el taller con su desesperante pasividad y con perlas hermosas que brotaban cada cierto tiempo directamente desde sus privadísimas intimidades. Las del erotismo de clausura.

Copy-Paste diferencial: No es necesario éste ni ningún estudio diferente a los miles existentes para decir que a las mujeres adolescentes de La Reliquia o de cualquier lugar les gusta amar. Y les gusta imaginar que aman de formas hermosas. Y les gusta decir que aman. A algún niño. Y que por amar entienden entregar-se. Y que eso las hace ser y sentirse mujeres frente al espejo íntimo y sobre la pista de baile. Y que dicen que amar es un saber que manejan muy bien, porque para ellas es “natural”. Para afirmar eso sin temor de dudas sólo se necesita un poquito de conocimiento sobre el tema.

Si yo no llevara trabajando en esto... podría decir, como gran descubrimiento a partir del análisis de los textos, que las mujeres del grupo se configuran como seres amorosos, cargadas de deseos contenidos que vinculan sin opción con el amor. “... me acuerdo de aquellas noches cuando recorrí tu cuerpo, y descubrí todo lo que llevabas dentro, en el alma...”. “Que cola tan suave que acaricio con tanto amor”. “yo sé que sin querer me henamore de ese mohacho”. Pero decir eso en mi caso es una soberana... D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Ninguna de las tres autoras expuestas habla en las sesiones. Ninguna lee sus textos. Difícilmente discuten y proponen. Eso siempre me “rayó” en es grupo. ¿Eran ellas? ¿Era el grupo? ¿Era yo-hombre? Creo que fue todo. A ninguna de ellas tres se le facilitaba expresarse verbalmente, leer en voz alta, cuando no tenían escapatoria o heroicamente decidían, era muy difícil. En privado todas, excepto Leydi, hablaban conmigo y con otros sobre sus problemas, sus vidas, sus novios y deseos. De las tres, Rubely fue la que menos escribió; sólo falló a una sesión, por que se puso muy enferma.

1. Si algo me ha encantado siempre del trabajo que hago y de la literatura que leo y escribo, es el tema de la sexualidad y el erotismo femenino adolescente. Seguramente porque me satisface mi heterosexualidad fantasiosa, también porque me enseña. Pero sobre todo, y de eso estoy seguro, porque me seduce profundamente el nivel de subversión que implica en ellas el gozo. La cultura tambalea cuando ellas publican sus quejidos de placer, sus deseos crudos, sus derechos gozos. No por nada La Bocachica Gozoza. Los espejitos femeninos presentados excretan sensualidad, gozo y subversión por los poros. 87 O que lindos labios tienes que parecen una piña madura para chuparlos

Ese fue el primer texto que Rubely presentó en público. Segunda sesión: Peri Rossi y Jattin. Antes había llorado lágrimas ásperas por algún mal recuerdo que escribió y nunca quiso compartir. Pero al sábado siguiente, después de vencidos los dolores, explotó de gozo. “chuparlos” no hace parte del renglón anterior, no tiene otras palabras que le estorben, no está recostado sobre el margen izquierdo, está escrito en el centro de la hojita. ¡Y qué! Y ella tan sólo sonreía.

Rubely: “... a todos me los chupe no me falto nadies.” Vs. Paola: “[gracias] por dejarme disfrutar el dulce sabor de tu boca”. O el diario Vs. la carta.

La ruptura es absoluta. Su derecho individual al gozo existe por sí mismo. No hay acá dependencias románticas del amor ni del caballero de ensueño. Incluso, dadas las rigurosidades del contexto, podría parecer que el yo poético es masculino. Ante un lector absolutamente desprevenido, esos labios podrían parecer seguramente de una mujer, y el poeta, un varón. Es un discurso públicamente masculino. Públicamente, digo, porque lo que ella hace, sin resquemor y sin pensarlo mucho, es evidenciar las intimidades de sus conversaciones, de su erotismo permitido sólo en la celda de clausura. Nos ofrece una visión universal –sin género- del erotismo, y yo le agradezco.

“Tiene unos ojos muy lindos y también se manda un cuerpazo.

Lo único es que tiene un hermano igual a él (...) los dos están un bombon. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

No llevan artos días en la cuadra pero estan todavía unos bombones.”

Paola, en cambio, sí intenta mantener el celo: “...pensando en esa mirada de ternura que me hace llegar al cielo, en esos días donde nuestros cuerpos se penetraban sudorosos se unian para ser uno solo, (...) cuando recorrí tu cuerpo, y descubrí todo lo que llebas dentro, en el alma...” Ella es la misma autora del poema-carta que en Espejos de imagen nítida se encontró de frente con Sor Mariana. Hija de familia evangélica hiper-represiva, no tenía en su casa ninguna oportunidad de expresar sus inquietudes sexuales. Tenía prohibido bailar. Sus textos eran absolutamente secretos, encriptados: llego al cielo, pero es por su ternura; descubro todo lo que él lleva dentro, su alma; nuestros cuerpos se penetran para ser uno, no es que él la haya penetrado... no sean mal pensados. Su erotismo es más privado. Igual o más fuerte que el de Rubely, no se puede evidenciar ni publicar con tanta fuerza; en la inquisición esos pecados se pagan caros. Y no es una metáfora.

Leydi, en cambio... la infinita ternura. Su texto, escrito en la última sesión mientras Rubely le escribía a los senos que son toronjas y que le quitan la sed (ver Pequeños espejos biselados) construye un erotismo bañado de sutilidad, de pompas de jabón y manos de madre: “Que cola tan suave / que acaricio con tanto amor [pareciera un 88 poema a un bebé de comercial] (...) Amor que cola / tan suave tienes tu (...) quiero sentir / tu amor con tu cola / de peluche”. Acá no aparecen las penetraciones de Paola ni sus éxtasis divinos, tampoco los chupeteos juguetones y hambrientos del principio, pero no baja en ningún momento el disfrute sexual.

La infinita marca de la ternura erótica que se construye en las tres autoras de maneras distintas, se corona magistralmente con la inclusión de la palabra peluche al final de este poema, casi en el mismo lugar en el que respira el chuparlos de Rubely. Y sí, en la misma posición y con la misma función pero invertida (develar por transformación, no por refuerzo) de la blenorragia de Silva en “Enfermedades de la niñez”. Silva is in da house.

POEMA DE COLA Y DE AMOR es un texto impresionante que descubre otra vez su pensamiento circular. Por otra vía, con otro tono, el reclamo claro y sutil del derecho individual al gozo, tan ausente en nuestras mujeres colombianas: “quisiera tener esa / cola que tu tienes / Para yo sentirme / Orgullosa y sentir / que alguien me diga / Amor que cola / tan suave tienes tu”. El gozo y la coquetería como parte fundante de la identidad.

2. Rupturas y concesiones inevitables con los patrones culturales patriarcales. La clausura.

Rubely: “El sabe que tiene que venir a la casa. Porque yo no lo voy ha buscar el bien sabia que cuando mi mamá no este yo voy lo busco de resto no.” Concesiones pragmáticas que evitan problemas. Nadie se fuga impune del convento, porque eres tú quien debe venir a buscarme, así sea yo la que te chupetié. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

“...me combecieron esas palabras dulces y cinceras que recuerdo, tus ojos son dos luceros que iluminan mi pobre sendero... (...) ¡Hoy he descubierto el mundo con todas las cosas bellas que me has enseñado! (...) [gracias] por brindarme esa sonrisa que te caracteriza y me hace sentir que yo te pertenezco a ti y tú a mí.” ¿Recuerdan las palabras de nuestro caballeroso poeta Robinson en los espejos de ellos? Para mí siempre casaron acá perfectamente, como la llavecita mágica que abría el cofre. Palabras de memoria, fórmulas trasmitidas de unos a otros al interior de los clanes, códigos maestros para abrir piernas y permitir accesos. Para que la cultura funcione.

Y aquí ya comenzó el baile, la tía –yo- sale a halar del brazo a niños y niñas para que ocupen la pista. Ellas y ellos, mientras tanto, unen sus espejos y forman escudos y estandartes. Juegos de parejas, porque pa’ disparejas está la evidencia desbordante, pero las hojas no me alcanzarían. Paola: “...son la 1:30 A y yo pensando en ti, pensando en esta mirada de ternura que me hace llegar al cielo...” Gabriel (tomado del grupo anterior): “Está acostada en la cama desnuda esperando que un hombre calme sus ancias (...) de pronto siento algo que me llama a gritos, salgo corriendo sin saber para 89 donde pero algo (...) me guia hacia donde está ella...” La funcionalidad de los modelos culturales.

Otro juego sólo por jugar. O para todos hay su cada cual. Pero a veces, cuando la poesía se ha ausentado o nunca ha estado... las decisiones femeninas que protegen el gozo parecen sobrevivir. Mauricio: “Tu tenías sed de mi pipi / cuando yo te lo embutí / me dijiste para ahí” Rubely: “... yo no tuve que me dieran calbasera me tocaba darle el beso / a todos me los chupetie no me falto nadies”

Leydi: “Quisiera tener esa cola que tu tienes...” Dumar: “...quiero sentir lo que sientes al exitarte...”

Santafé: “la inocencia y dulzura de una prima no tan santa que acaba de hacer la primera comunión” Rubely: “O que lindos labios...” Leydi: “... de peluche” Paola: “... en el alma...” Silva: “¡oh dulce niña pálida!, di, ¿te resistirías?...”

Finalmente, las intersecciones. Espejos íntimos que se vuelven rutas colectivas para ser. Aprendizajes mutuos que circulan por entre sus días. El descubrimiento hermoso de que se puede ser hombre y pertenecer al grupo de los hombres y ser profundamente D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

erótico sin embutirlo. O de que embutiéndolo también existe la posibilidad de que lo chupetien.

O ser una mujer profundamente distinta a las otras. Pero ser mujer de Sexu-Joven. Y estar más o menos a gusto con su manera de vivir el sexo, no importa, siempre y cuando se descubriera, como sucedió, que era algo sobre lo cual se podía hablar, aprender y dudar.

Se evidencia acá cómo para nadie, en nuestra cultura, el erotismo es un derecho ganado. O bueno, si por erotismo se entiende algo más que funcionar. El erotismo acá es un ejercicio de ruptura. Un ejercicio que implica la potenciación de la creatividad y del reconocimiento de uno mismo y de la otra persona. Y pa’ rupturas están ellas mucho más que ellos, porque su misma existencia como sujetos sexuales es ya ruptura. Porque son hijas de una historia que les ha dado licencias de transformación. Ellos no. A La Reliquia las masculinidades emergentes no han llegado. Ser hombre, como consenso, es un monolito. Dumar está atravesado por fibras especiales: se hace sujeto social como líder residente del Colegio Bemposta en el Barrio La Nohora, lejos de la rumba pesada de las calles de La Reliquia, cerca de las artes, la gimnasia y un proyecto pedagógico integral más o menos democrático. 90

Con todo, las rupturas son evidentes. La sexualidad de nuestro grupo de hombres escritores es un mundo terriblemente complejo y diverso. Todos son matices distintos. Un erotismo terriblemente limitado por las exigencias sociales (que no son derechos sino obligaciones), marcado por la dificultad para crear y la excesiva discursividad y normatividad que alimenta la vida masculina. Y, al mismo tiempo, quiebres y fugas decisivas, contundentes, que ni esperan ni resuelven. La sensación de que muchos de estos hombres están esperando la menor oportunidad para transformar su espejo masculino. Para ablandarlo, alongarlo, quietarle el filo que le sale por los laditos.

Espejos incapaces de responder satisfactoriamente, en condiciones de libertad, a los reflejos incontrolables y fértiles de ellas. Y los de ellas con mucha claridad sobre sus gozos y deseos, pero sin ninguna sospecha de construir una ruta por la que ellos, sus anhelados parejos, puedan transformarse... pero la heterosexualidad se muestra inquebrantable aunque no lo sea. La cultura se reproduce porque la obediencia adulta termina matando los fulgores juveniles, ya lo veremos. Pero la insatisfacción es honda.

Mujeres de intensos gozos y arriesgadas rupturas. Hermosas. Ansiosas. Expectantes del mundo. Silenciadas. En el filo de perder la esperanza.

El erotismo palpita en cada palabra y cada gesto que se respira. Es cura para el abandono y las tristezas profundas que los poseen. Pero el erotismo es hijo de la cultura y de las posibilidades individuales, si no se alimenta muere en cualquier burda penetración. Existe en la humedad que cubre los espejos, un ansia erótica cargada de ternura y de ignorancias terribles. Tiernas, pero terribles. Distancia infinita con la violencia y la agresión (ni se nombra en los textos) tan presente en el mundo adulto. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Evidentemente no es su placer la sexualidad violenta, así la ejerzan o la vayan a, no es un asunto que el grupo haya querido traer al taller... éste fue, cada vez lo veo más claramente, un espacio de cosas bonitas –incluídas las tristezas-, mucho más en este tema. La violencia es incapacidad, es temor, es ausencia de posibilidades para ser de otra manera, es contexto hecho cuerpo… pero no es deseo ni opción.

Así, a través es los espejos reunidos, este grupo se reconoce como un colectivo sexual, donde lo erótico y la sexualidad tienen un espacio para existir, para ser de manera tranquila, divertida y respetuosa. Cosa que no sucede en ningún otro espacio físico o simbólico del barrio. Un colectivo donde se comparten historias, sentimientos y diferencias en torno a la manera de vivir y gozar la sexualidad. Al que se pertenece también por ser distinto. Por ser virgen o “promiscuo”. Por embutir o por introducir o por oler o por chupar o por anhelar el peluche o el sudor, la arepa o las toronjas.

AGRIDULCES ESPEJUELOS Hay un dulce típico del interior del país (Meta, Santander, Tolima) que se llama espejuelo. Está hecho a partir del dulce de guayaba y es verdaderamente dulce. Su 91 contextura es gelatinosa, se deforma con relativa facilidad. Ahora mezcla aquellas guayabas de pulpa roja y húmeda con unas gotas de raíz amarga (Juju, José A. Storni) y, entonces sí, prepara un espejuelo y obsérvate en él durante varios años. Un espejo que se deforma, que muta, espejo de feria. Espej-uelos que te alargan, te engordan te entristecen y te extasían el alma. Guayaba y raíz amarga.

En los corredores de esta fiesta, los que sostienen los pasos de cada danzante, existe un mundo que se juega a cada día. Lava burbujeante en la que se derrite la arena –materia prima de los espejos, pero en la que también se derrite, a veces, la esperanza. La juventud es una palabra tan frágil y maleable como los propios cuerpos de los autores.

Espejuelos de bozo y guayos rotos.

ESTO ES PARA MI ABUELA EDISSON Q. Es como la piedra en el camino es un obstáculo Oiga se acuerda cuando tenía 17 años cuando usted para mi ella es mi abuela abeces solo pienso se hiba para el colegio y esperaba que anocheciera en irme de la casa para siempre irme junto a mi para ponerse ropa bonita e ir se para la calle y madre en estar con ella y poder ser feliz descansar empezaba a buscar compañía y cuando la incontraba de todos los sufrimientos que yebo en la vida me hacia cosas muy chéveres y al otro dia hacia lo gustaria morir para poder ser feliz y no volver mismo y de pronto llegaba el fin de semana y usted a ver a mi abuela no soportarla mas ella se a se hiba a bailar con sus amigos y en los sabados por encargado de que yo la odie que no la quiera la mañana hiba a un curso donde la pasaba bien, cuando estoy en el colegio y con mis amigos yo soy claro hay veces salia peliando con sus compañeros muy feliz pero al yegar a casa me siento infeliz y pero eso no le importaba por que le daba lo mismo quisiera morirme intentar suicidarme y nunca mas lo importante era ir a conocer gente y aprender D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

volver a sufrir ella molesta por todo nada le gusta y usted le desia a la gente que queria ser alguien si tengo novia jode si tengo amigos jode si duermo importante y reconocido y lo mas vacano es que lo y como jode ella dice que mis amigos y yo somos logro y por eso estoy orgulloso de mi mismo. viciosos ratas mariguanos en fin Dios quiera que ella no se arrepienta muy tarde porque ya uno Arlenson. muerto no balen resos ni perdon ninguno.

Carlos Cordera Hola inbecil

Te acuerdas que tu tenías una letra grande y fea Nos damos cuenta de la realidad, de lo que está pues lla la mejore quiero decirte que tu deseo pasando no solo en nuestro país, sino en todo el de irte a la policia no se pudo realizar pues tu mundo. ermano el sargento te ayudo con la plata y te Esta guerra que estamos viviendo sin causa alguna, 92 esta pagando tus estudios en The Michigan por hombres que sin corazón matan, secuestran, Intitutions Tegnology y valio 500.000 euros violan, maltratan a personas inocentes, que por semestre y lla estas en el 7 semestre, lo que te sin culpa ninguna sufren con la muerte, con el vine a decir es que tubiste un hijo en Villavicencio secuestro de familiares, amigos. y lo dejaste alla abandonado, te acuerdas que no Miles de personas sufren, mueren a manos de te gustaba estudiar, hoy eres el mejor en sistemas personas desconocidas, sin saber por qué, por qué, Ah inventaste un robot que abla y camina y sino les han hecho nada, por qué. ganaste mucho dinero Ah y ese Jose Migel era un mentiroso puesto que si pudiste ir a marte gracias Tenemos que darnos cuenta que todos vamos a al dinero que ganaste con ese robot, las naciones sufrir esto cuando nos toque vamos a comprender ya se unieron y le dieron el puesto de rey a la bestia a las personas que han, que estan sufriendo por la al supuesto falso profeta y creo que no demorara falta de un ser amado, querido, añorado, muchas en aber una tercera guerra mundial, Ah y tienes veces no lo entendemos, no comprendemos. una enfermedad incurable y se llama FSH que es el SIDA del futuro, acuerdate que tienes que ir, Un día nuestros hijos iran a la guerra a luchar por a la luna antes que la destruyan Ah y también su pais mientras un presidente duerme, caluroso, tienes que ponerle un fusible en la parte izquierda dichozo en su cama, mientras tanto muchos y funcionará la máquina del pasado que no termine inocentes mueren por una guerra que armaron nos vemos porque no demoran en tirar otra bomba todo los que descanzan como reyes, en su casa con de Ántrax y tenemos que estar resguardados en todos los suyos, sin preocuparse por nada por el centro de la tierra Ah y al sol le an salido unas nadie. manchas que ya le recubren la mitad casi Ð y nos toca resguardarnos a las 5pm Nos vemos GABRIEL At2: CARLOS HARVEY future D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

1. El 14 de mayo, al final de la octava sesión, se intentó un ejercicio que fue terriblemente desgastante para todos. Se realizó un conversatorio que giraba entorno a la pregunta de cómo se ve en 10 años. Al principio, una dificultad absoluta para responder desde posibilidades verosímiles. Unos actos de fe casi sin ningún arraigo en la realidad. El contexto les sigue exigiendo las mismas respuestas que hace 10 o 20 o 100 años (estudiar, trabajar, ser exitosos, resolver los problemas mayores, viajar, gozar), pero les quita cualquier posibilidad real de cumplirlas (la pobreza absoluta, desmonte de programas educativos de buena calidad, desempleo creciente). Los hombres, especialmente, criados para ser exitosos, ganadores, para no dejarse vencer y para proveer de dinero y lucidez (así en la vida práctica no suceda), se llenan la boca de fantasías increíbles, de silencios expresivos y de juegos que retan la adultez. La masculinidad, hecha de palabras, se debe mantener intacta.

“quiero decirte que tu deseo de irte a la policia no se pudo realizar pues tu ermano el sargento te ayudo con la plata y te esta pagano tus estudios en The Michigan Institutions Tegnology y valio 500.000 euros por semestre (...) Ah inventaste un robot que abla y camina y ganaste mucho dinero (...) Ah y también tienes que ponerle un fusible 93 en la parte izquierda y funcionará la máquina del pasado que no terminé...”

La fantasía es ambigua. Por un lado, al no ser un bien natural que llega del cielo, sino que debe ser criada, alimentada, el texto de Carlos muestra las posibilidades que él ha tenido en su vida, de acceder a bienes culturales que alimentan la creatividad y la capacidad de fantasía. Es evidente el conocimiento de la cuna de la tecnología (MIT), de símbolos futuristas como el robot y la máquina del tiempo. Del mismo modo, es también evidente el acceso y la fascinación por la película “Volver al Futuro”, en la que un mismo personaje se envía mensajes técnicos y urgentes desde el futuro hacia el pasado. Por otro lado, la fantasía en este caso, es símbolo directo de la vulneración de derechos. Ser consciente de la ausencia de posibilidades para armar un futuro verosímil. Es una protección ante el dolor de la imposibilidad. Una protección que, también, puede generar inmovilidad. No hay nada, excepto un milagro, que pueda convertir en realidad las fantasías de Carlos.

Durante la sesión fui bombardeando con preguntas las afirmaciones de ellos. ¿Cómo lograrlo? ¿Eso es posible? ¿Por qué? Él, sencillamente, tenía puesta una barrera blindada que yo no quise vulnerar. Sé bien que las preguntas son crisálidas en sus cabezas y corazones: en una de las primeras sesiones Carlos, como casi todos, expresó su deseo decidido e innegociable por ser policía... yo, inevitablemente, expuse mil argumentos y preguntas para derrumbar esa idea. Ese “tu deseo de irte a la policia no se pudo realizar...” que aparece marcado en un discurso ficcional, se confirmó más tarde –más o menos a los dos meses de terminado el taller- cuando en un ensayo de Rap él, contó que estaba terminando el colegio porque para poder ser técnico en sistemas necesitaba graduarse pronto. Las fantasías abren la puerta a nuevas alternativas: del MIT a técnico en sistemas. Calvin & Hobbes, pero no policía. Ahí la ambigüedad. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Del otro lado está el silencio aplastante, que resuelve la vida, la adultez y la masculinidad. “...y usted le desia a la gente que queria ser alguien importante y reconocido y lo mas vacano es que lo logro y por eso estoy orgulloso de mi mismo.” ¿Alguien importante en qué? ¿Reconocido por qué razones? ¿Cómo lo logró? Ante el silencio no se dice nada, se deja ser.

Pero quizá la estrategia más fuerte en los dos textos, cuando en este marco se abre enfrente el pavoroso mundo del futuro y la adultez, es la evasión y la resistencia a partir del juego, el reto y el gozo.

En la carta de Arlenson la mayor parte del texto lo ocupa la narración de los disfrutes de la vida actual del escritor –pasada del narrador-. Son palabras claras que definen sus prioridades. Lo que es importante, real y posible, contra el mundo de las tinieblas: “... esperaba que anocheciera para ponerse ropa bonita e ir se para la calle y empezaba a buscar compañía y cuando la incontraba hacia cosas muy chéveres y al otro dia hacia lo mismo y de pronto llegaba el fin de semana y usted iba a bailar con sus amigos...” Este extracto es poderoso en su contenido: • Antes que nada está la noche. Espacio cómplice por excelencia. En La Reliquia la 94 noche es propiedad casi exclusiva de los jóvenes. Arlenson espera que llegue la noche, como punto de partida del disfrute de la vida. • La preocupación por la ropa bonita –no chévere, no vacana-. Bonita implica delicadeza, limpieza, seducción. La definición de un estilo nada masculino para el contexto de La Reliquia. Y sí, Arlenson tiene eso muy claro. Verlo vestido cada sesión es entender, perfectamente, el uso de “bonita”. • Por otro lado, la compañía, necesaria, anhelada, buscada, se encuentra en la calle. La compañía necesaria para hacer cosas chéveres. No para buscar tropeles ni meterse en problemas. Simplemente chéveres. No está en la casa ni en el colegio. • Finalmente el fin de semana y el baile. Fiesta de espejos. La descripción de una semana donde la rutina del día existe en función de la diversión nocturna y de la espera de la rumba del fin de semana. • La noche, la calle, los amigos, la ropa bonita y el baile: definición detallada del significado de ser joven. Declaración de prioridades.

Es un manifiesto individual por el gozo tranquilo. Un manifiesto por el presente en el que se puede jugar. Un cerrar los ojos ante el futuro de ojos cerrados.

Y Carlos, retador como ningún otro, hace de su carta, de la estructura misma de ella, del narrador y de los personajes y referencias, una contestación contundente a las preguntas, a la sesión, a mí y a la adultez: “Ah y ese Jose Migel era un mentiroso puesto que sí pudiste ir a marte gracias al dinero que ganaste con ese robot [en referencia a que en el inicio de la conversación él dijo que en 10 años se veía en marte y yo le dije que eso era imposible, que me dijera cómo; yo, símbolo de las preguntas adultas], las naciones ya se unieron y le dieron el puesto de rey a la bestia al supuesto falso profeta D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

[clara referencia crítica a las Naciones Unidas, bandera que me cubría] (...) Ah, y tienes una enfermedad incurable y se llama FSH que es el SIDA del futuro [reto a uno de los temas importantes del trabajo que el proyecto marco desarrollaba con ellos y que, por supuesto, yo representaba]”.

Finalmente, la identidad masculina protegida. Arlenson: “...alguien importante y reconocido (...) lo logró...”. Abrazado con Carlos: “...lo que te vine a decir es que tubiste un hijo en Villavicencio y lo dejaste alla abandonado [sin más comentarios]...”

2. Sin embargo, bajo ese sustrato, hay otros espejos que dibujan claritico, sin juegos ni silencios, el dolor y la imposibilidad. Espejos complementarios, que confirman la raíz amarga que los otros convierten en guayaba.

“Nos damos cuenta de la realidad, de lo que está pasando no solo en nuestro país, sino en todo el mundo.” Esa frase es una sentencia. Si el de Arlenson es una declaración individual de principios, este es un manifiesto colectivo en el que la primera persona del plural congrega a los jóvenes –hombres y mujeres- del grupo. No estamos ciegos, 95 ni somos estúpidos. Así nos divirtamos y a veces prefiramos evadir, como Carlos y Arlenson, nos damos cuenta...

De Gabriel ya hemos hablado. De la amada Cordera, también. Sin embargo, a diferencia de todos los demás textos, este es el único que explícitamente descubre la identidad colectiva. Gabriel, a diferencia de sus compañeros, no proyecta a La Cordera hacia el interior de sus recuerdos tristes, sino que reflexiona y elabora sistemáticamente una postura al respecto. No hay una postura intimista y privada, como tampoco un texto hiperpersonal que, sólo analizándolo se transporta al colectivo. Acá el yo es colectivo. Tan sólo se requiere leer. Manifiesto, insisto, pretendido como tal.

Brecht en La reliquia, sin que nunca hubiese si quiera rondado el taller: “Tenemos que darnos cuenta que todos vamos a sufrir esto cuando nos toque vamos a comprender a las personas...”. Vinieron por los obreros...

Un manifiesto masculino, joven, con reconocimiento de clase y libertario. “Un día [cuando adultos, pero también es cruda aceptación de lo que en muy poco años puede venir para él] nuestros hijos iran a la guerra [sólo los hombres van a la guerra] a luchar por su país mientras un presidente duerme, caluroso, dichozo en su cama [sólo los ricos duermen calurosos, dichozos, cosa que se confirma más adelante], mientras tanto muchos inocentes mueren por una guerra que armaron todos los que descanzan como reyes, en su casa con todos los suyos, sin preocuparse por nada [leído todo lo leído, ¿quién tiene estos privilegios?] por nadie [¿Y dónde la solidaridad escasea?].

Finalmente, este texto es también una prueba evidente de la manera como socialmente construimos la realidad, y de los elementos y discursos que en un muchacho como D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Gabriel entran en juego para dicha construcción. “Nos damos cuenta...” del mundo que vivimos, que vemos en los noticieros y que tenemos más cerca. En su texto, Gabriel prepara una extraña pero evidente combinación: la perspectiva del conflicto armado que sobresale estratégicamente en Villavicencio y en los medios de comunicación nacionales (el conflicto armado es el secuestro de inocentes a manos de hombres malos... sin ningún distingo de otra variable que no sea moral –buenos y malos-; con un lugar seguramente genérico para las masacres, desapariciones, bombardeos, etc.), con una postura política seguramente surgida del cuento de Leopoldo Alas (la lucha de clases, la guerra como un matadero de pobres sin opción creado por reyes). Ambas encuentran asidero en su subjetividad. ¿O una clara conciencia de que hay cosas de las que es mejor no hablar?

3. Por otro lado, en otro tono y con otras intenciones, Edisson Q. también nos recuerda las gotas amargas que reposan dentro. Especialmente dentro de la casa. ¡Ay, Silva, jamás imaginamos que estuvieras iluminando estos espejos!

“es un obstáculo para mi ella es mi abuela abeces solo pienso en irme de la casa para siempre irme junto a mi madre [muerta de tuberculosis cuando él era pequeño] en 96 estar con ella y poder ser feliz...”

El abandono es una constante en los jóvenes de este grupo. La mayoría de ellos fueron abandonados (por muerte o decisión) por ambos o uno de los padres, algunos, como Edisson, viven con . Pero el abandono no sólo se da por la ausencia física y permanente, sino por el rechazo cansado e ignorador de los mantenedores. Entonces, el colegio, la calle y, una vez más, el taller, se convierten en espacios de tranquilidad, de alegrías.

“cuando estoy en el colegio y con mis amigos yo soy muy feliz pero al yegar a casa me siento infeliz... ella molesta por todo nada le gusta si tengo novia jode si tengo amigos jode si duermo y como jode ella dice que mis amigos y yo somos viciosos rata mariguanos...”

La agresión que él describe no recae sólo contra él sino contra ese nosotros inquebrantable que son “mis amigos”. Agredir a los amigos y a la novia es peor que una agresión personal. Marca con más rencor la relación. El discurso juvenil que poco a poco irá mutando hasta reemplazar colegio por trabajo, novia por amigas y el implícito abuela por esposa. Parte de ser hombre es tener un círculo de amigos, algunas amiguitas-noviecitas, estar en la calle y tener una mujer que, fundamentalmente, joda pero mime y proteja. Parece que la abuela de Edisson sólo jode.

El círculo de agresiones y vulneraciones es sólido y coherente. Él es víctima indiscutible de la guerra, de la pobreza... de un sistema que excluye, condena y asesina a los más frágiles: “...quisiera morirme intentar suicidarme y nunca más volver a sufrir...” Se quedó sólo siendo un chiquito, vio morir a su mamá y salir corriendo a su papá, y creció D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

escuchando historias de rencor ponzoñoso contra él. Siempre fue claro para Edisson que la única opción era salir de la casa. Cada día la situación era peor, él avanzaba en el desespero y la tristeza. El suicidio, igual que para muchos, se convirtió en una posibilidad de huida. Una nada agradable ni preferida, recuerda el gozo.

Por lo tanto, se prepara para no dejarse joder más. Y eso significa convertirse en agresor. Inicialmente simbólico: “Dios quiera que ella no se arrepienta muy tarde porque ya uno muerto no balen resos ni perdon ninguno.” El dolor es así. Suicidarse acá no es un acto de autocompasión, no es exclusivamente una escapatoria de efectos individuales. Suicidarse, con ese tono literario, es una condena para ella, una bofetada. Este suicidio no es tanto un descanso como un castigo para los adultos abusivos y equívocos. Vulnerar como respuesta a la vulneración. Violencia simbólica, inicialmente... porque hubo rumores de agresiones físicas...

Espejuelos con blusitas pequeñas y senos recientes

Hola: soy leidi tengo 23 años y recuerdas que yo RECUERDOS DE MI PASADO 97 estudie para enfermera y tenia una amiga que estaba Hola Angélica ya tengo 25 años y recuerdas las estudiando para una carrera y por medio de ella travesuras que haciamos cuando tenía 15 años, distinguí, a un muchacho y nos isimos amigos y el iva recuerdas cuando te burlabas de todos los hombres que a visitarme y me llevava detalles y se los resivia. Y fue estaban enamorados de ti. pasando el tiempo y el me dijo que si lo accectava como Recuerdas cuando ibamos a bailar con nuestros amigos novio y lo accecte y poco a poco nos fuimos conociendo. y amigas y la pasábamos muy delicioso y la borrachera Hasta que llego un dia que teníamos al otro día que nos toco dormir todo ese y el me dijo ya que nos conocemos quiero que seamos día para que nos pasara el guayabo, por ejemplo cuando algo mas que novios y yo le conteste mira yo tambien le decíamos mentiras a mi mamá que nos íbamos para el quiero llevar algo mas que novios. colegio pero nos ibamos para otro lugar, ahora por solo I nos fuimos a vivir. Paso el tiempo y los dos queriamos un momento acuerdate de todo lo que haciamos juntas. tener relaciones sexuales y a mi no me llegava la Ahoara soy una mujer hecha y derecha me caspe a los meustracion y me ise la prueba de embaraso y salio 22 años me fuy de luna de miel estoy viviendo en los positivo y yo le conte a el y el se puso contento y yo estado unidos con un joven muy encantador y tube una pensava que me lo iva a negar. niña muy hermosa mi esposo es muy trabajador y me da Y no era haci y pasaron los 9 meses y me alente y nacio gusto en todo. un niño y le fuimos dando cariño y el me dijo que lo Gracias a Dios tengo una familia extraordinaria a la dejaramos en la sala cuna a cuidar mientras el llegava de cual quiero mucho porque son la parte de mi vida. trabajar y de yo llegar de la enfermeria. ATT Leidi Johana Att= Angélica. N D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

HOLA: Te contaré una parte de mi vida. PAPÁ Palabras en un mundo de tinieblas hoy te voy a contar Quiero decirle a mi algo triste Papá que a pesar Hay días en los cuales me levanto de la cama pensando de todos los que es un dia maravilloso, pero salgo del cuarto y problemas que an me doy cuenta que estoy rodeada de problemas con sucedido entre nosotros mi mamá, lejos de mis amigos, y mi sueño es seguir dos siempre cuente viniendo al taller, me acuesto en una cama o me siento con su hija aunque bajo la sombra de un árbol y miro los frutos de estos tú digas que yo arboles y imagino que este es el mundo y unos frutos para usted no soy mejores y más grandes que los otros así como tú, y su hija para mi entonces pienso que algún día estaré yo allí como la sigue siendo mi padre fruta más grande y mejor. y espero que nunca Pero mi fantasía termina cuando mi mamá dise que yebes ese rencor tan no me deja asistir más al taller siento que el corazón grande con su hija. se me parte en dos. Me levanto y pierdo horas en Cuanto me gustaría el televisor sabiendo que estoy desperdiciando el decirles a todos los tiempo y no lo podré recuperar sufro y siento miedo padres que un hijo 98 de saber que mi juventud se despuma poco a poco y no se compra con me pregunto que estoy haciendo con ella; acaso seré objetos ni palabras una persona más del montón no llegaré a hacer (ser) se compra con echos alguien en la vida. y brindándole todo En los momentos difíciles no tengo quien me escuche el amor apoyo ni me comprenda como un amigo incondicional, siempre YULIETH. anelo que llegue el sábado y que este sea eterno para compartir con mis amigos En donde solo río, gozo, disfruto y m olvido de los problemas eternos y de las peleas; allí encuentro un espacio de comprensión y de saber que es en rialidad la vida, de un joven. Tengo que aprovechar este tiempo y disfrutarlo olvidándome de los problemas porque se que la terminarse el domingo volveré a la misma rutina de siempre con problemas, peleas, conflictos y el aburrimiento como si se tratara de una triste novela que no tiene fin. Esta es una gran parte de MIVIDA PAOLA

1. En la misma sesión de los + 10, la tensión más grande para mí vino, tal vez, de parte de las mujeres. Algunas ni escribieron. Aunque es verdad que hacen rupturas, especialmente en sus búsquedas eróticas y en las dimensiones más visibles, la pregunta D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

sobre el futuro pone en evidencia la solidez del modelo patriarcal. Nada hay que pensar al respecto, la vida está resuelta. En ellas, a diferencia de los hombres, no existe esa sensación de huída y de frustración gambetiada que puede leerse en ellos. Aunque también hay vacíos y preguntas, su realización como mujeres adultas, en el contexto, no requiere de grandes condiciones. Parte del asunto, además, está incluido en su paquete biológico, en su propio cuerpo, no se necesita nada externo que no se pueda conseguir fácilmente con un abrir y cerrar de... hecho naturalizado por la cultura. Por otro lado, hay agregados culturales, simbólicos, individuales.

Nuestra Leydi de 13 años, la de los poemas bandera de la ternura erótica, dedica la totalidad de su carta a la narración de la historia, bastante simple, ingenua (son novios, luego viven juntos y luego del paso del tiempo entonces sí deciden tener relaciones sexuales), patriarcal (“él iva a visitarme y me llevava detalles y se los resivia”. “...y el me dijo que si lo accectava...”. “...y el me dijo ya que nos conocemos quiero que...”. “... y el me dijo que lo dejaramos en la sala cuna...” –son los hombres los que toman las decisiones, los que proponen-) y reproductiva (“Paso el tiempo y los dos queriamos tener relaciones sexuales y a mi no me llegava la meustración y me ise la prueba de embarazo y salio positivo) de su amor y su familia. 99 Parecería que la narración futura de esta mujer sólo adquiere sentido en esa historia. La esperanza de un esposo que no la abandone en el embarazo y que respete la variable deseo y no obligación a la hora de tener relaciones. Parecería, repito... Ella, con su simple y radical lucidez de siempre, nos abre las puertas de otro lugar. El texto comienza contando que cuando estudiaba enfermería conoció a un muchacho... es decir, a partir de la segunda línea comienza la narración amorosa y maternal que sigue presente hasta el final del texto. Pero Leydi piensa en círculo. La que en una lectura rápida podría ser una simple disculpa “...recuerdas que yo estudie para enfermera...” para ubicar un contexto verosímil en el cual conocer al muchacho, se termina convirtiendo en el marco de sentido en el que gira la historia: “...mientras el llegava de trabajar y de yo llegar de la enfermeria.” La última palabra transforma enteramente el sentido de la narración. La completa y complejiza. No hay renuncia al estudio, a la profesión ni al trabajo. Habrá que negociar para el cuidado del niño. Con esa palabra, conectada con el inicio, Leydi se cuenta a sí misma que durante todo ese noviazgo ella siguió estudiando, se graduó y consiguió trabajo. Así, entonces, sólo cuenta lo curioso, lo incierto... lo otro es una verdad a secas, quizá aburrida, pero cierta.

Aquí no hay gozo, no hay erotismo ni divertimento alguno, pero la integridad de los deseos y del proceso es sorprendente. Ambiente completamente diferente al generado por Angélica para su futuro. La de ella parece una versión feminizada de la carta de Arlenson. Repleta de gozos y de juegos, de compañía y tranquilidad presente, así como de la versión femenina del discurso dominante y de preguntas hondas sobre el proceso (cómos...). Es la juventud exaltada, pletórica de sí misma, de presente. “recuerdas cuando te burlabas de todos lo hombres... cuando ibamos a bailar... y la borrachera que teniamos... por ejemplo cuando le deciamos mentiras a mi mamá que nos íbamos para el colegio pero no ibamos para otro lugar...” D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La mitad del texto está dedicada a recordar los gozos enormes de cuando tenía 15 años, pero el aterrizaje es duro: “...ahora por solo un momento acuerdate de todo lo que haciamos juntas. // Ahora soy una mujer hecha y derecha me casé...” A partir de ahí comienza la flor del discurso normalizado de la mujer adulta. La reconciliación con la cultura. No se puede ser joven eternamente. Hay que gozar ahora porque después habrá que ser hechas y derechas. Mujeres exitosas: “...me casé a los 22 años me fuy de luna de miel estoy viviendo en estados unidos con un joven muy encantador y tube una niña muy hermosa mi esposo es muy trabajador y me da gusto en todo.” Me siento, con Angélica al lado, viendo un comercial de shampoo protagonizado por Paola Turbay.

Y finalmente, por supuesto, las “Gracias a Dios”, porque insisto, dado el contexto y las historias familiares, esta narración publicitaria parece un milagro. Dios resuelve todo cuando el futuro está oscuro. El viaje a Marte de Carlos.

2. ¡Ay!, las familias. El problema de las ficciones leídas es la distancia tan grande que tienen de los contextos reales. Se hace, virtualmente, imposible alcanzarlas. Ficciones televisivas, religiosas, populares. Es decir, verdades absolutas, “naturales”. Las familias son, como ya hemos venido viendo, uno de los componentes de la vida de 100 estos y estas jóvenes que más dolor y conflicto implican. No es sólo la eterna disputa entre los adolescentes y los adultos, la brecha generacional. Es que son familias destruidas por el hambre, por el abandono del estado, por las múltiples violencias, por la disfuncionalidad del mundo. Caldos de cultivo para la violencia y la exclusión. Papás que no sólo pertenecen a otra generación sino a una época –a un mundo- profundamente distinto. Y las hijas, en este caso, se debaten entre un lado y el otro.

Para sus papás y mamás los movimientos de liberación sexual no existieron o fueron el peor de los pecados. Nacieron antes o con el feminismo, pero no accedieron a él. En el campo, la modernidad ni siquiera era un discurso, la autoridad paterna era absoluta e inquebrantable, y el cuerpo, templo de dios (y del padre). Nacieron antes o fuera (en el campo) del boom neoliberal, del consumismo exacerbado. Ellas, en cambio, son hijas de una cultura global que surgió de estos movimientos y que se centra en la competencia para el acceso a las “infinitas” oportunidades. Y no tienen a nadie que las guíe.

El abandono, el ultraje y la represión son escenas constantes en ellas... y por supuesto, en sus espejos.

“Palabras en un mundo de tinieblas hoy te voy a contar algo triste” ¿Alguna duda? “Pero mi fantasía termina [para reafirmar todo lo dicho en estos espejuelos agridulces, síntesis perfecta] cuando mi mamá dise que no me deja asistir más al taller siento que el corazón se me parte en dos. Me levanto y pierdo horas en el televisor sabiendo que estoy desperdiciando el tiempo y no lo podré recuperar [autoconciencia crítica absoluta] sufro y siento miedo de saber que mi juventud se despuma poco a poco y me pregunto que estoy haciendo con ella [una mujer hecha y derecha]...” D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La lucidez de Paola en esta carta es impresionante. Carta escrita, además, fuera de las sesiones, en su casa, mientras la mamá la sermoneaba con algún pasaje bíblico. La Sor Mariana de este taller escribiendo desde la intimidad secreta, compartiendo sus dolores con su confesor (por si las dudas, sólo las palabras, no el agua bendita que emana del señor) a espaldas de la Madre... Superiora. Ella construye claramente, lejos de cualquier silencio y fantasía, una revisión sobre su vida actual y las posibles implicaciones para su vida futura. Elabora concientemente su soledad, sus alternativas y preferencias. Conoce perfectamente las puertas para salir del círculo “que no tiene fin”, que le pueden permitir ser alguien en la vida, pero también delata con nombre propio a los obstáculos que se lo impiden.

“...me levanto de la cama pensando que es un dia maravilloso, pero salgo del cuarto y me doy cuenta que estoy rodeada de problemas con mi mamá, lejos de mis amigos y mi sueño es seguir viniendo al taller, (...) ...acaso seré una persona más del montón no llegaré a ser alguien en la vida. // En los momentos difíciles no tengo nadie quien me escuche (...) Tengo que aprovechar este tiempo [el taller] y disfrutarlo olvidándome de los problemas porque se que al terminarse[,] el domingo volveré a la misma rutina de siempre con problemas, peleas, conflictos y el aburrimiento como si se tratara de una triste novela que no tiene fin.” 101

Finalmente, a Paola le prohibieron seguir asistiendo al grupo.

Por otro lado está Yulieth. Muchachita preciosa, violentada cuando pequeña por su padre. Abandonada a la suerte del ICBF, escapada de allí y habitante de los favores de quien la quisiera recibir en su casa... o en su cama. Hermosa, agresiva, sonriente, fuerte, coqueta sin peros.

“Quiero decirle a mi Papá que a pesar de todos los problemas que an sucedido entre nosotros dos siempre cuente con su hija aunque tú digas que yo para usted no soy su hija para mi sigue siendo mi padre...”

El dolor absoluto. La voluntad del perdón. O al menos, de hablar, de entablar un básico y mísero diálogo con su padre. Que sigue siendo su padre así el asuma lo contrario. El rencor camuflado: reclamos. Muchachita vulnerada en todos sus derechos, en sus principios básicos como persona. Palabras repetidas en más de un autor. Más de dos. Más de cinco. La impresionante postura adulta de comprender e intentar llegar a acuerdos, solucionar los problemas hondos del abandono... pero sus padres lo que D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

pueden manejar, justamente, es la distancia (ya lo veíamos antes: evasión y fantasía). Esa adultez a las patadas que la hace sumir un “entre nosotros” imposible: los hijos son hijos; los padres, responsables. Por supuesto, ella no habló de esto en público, no leyó. Inevitable... un regalo para ella y para otro muchacho del grupo (Edisson): Carta al Padre, de Kafka.

Finalmente, Yulieth intenta recomponer la historia con una moraleja bastante forzada e imprecisa para la complejidad de las tramas en juego, pero que revela unas necesidades simples y claras. “Cuanto me gustaria decirles a todos los padres que un hijo no se compra con objetos ni palabras se compra con echos y brindándole todo el amor apoyo.” ... cuentan algunas muchachas del grupo que ella anda por los lados de la prostitución en algunos pueblos llaneros... Paola: “...una triste novela que no tiene fin.” 102

Comentarios generales sobre la Fiesta de Espejos Por un lado están los espejos como pantallas, para ver de fuera. Estos espejos y sus intersecciones nos permiten ver el complejo juego entre las estructuras objetivas y las subjetividades de los y las muchachas. Las normas sociales incorporadas hondamente, pero también sus historias individuales. Ver que hasta este momento son hijos, simplemente, de sus historias y de su mundo, pero que ahora comienzan a hacerse protagonistas activos. Tienen la oportunidad y la están pensando. Pero el contexto y ese habitus de Bourdieu, son tan fuertes...

Por otro lado, por el lado de adentro, está el cuarto de espejos en el que es inevitable no mirarse y no verle la espalda, el frente y la entrepierna al compañero. El contacto con las subjetividades de los otros puestas de las maneras más honestas y sinceras es una experiencia transformadora. La pertenencia se hace real cuando existe una imagen colectiva en el espejo y unos espejos hechos para reflejarlos/las. La diferencia, a su vez, se hace real cuando descubro los espejos íntimos y logro entender emocionalmente lo que me hace individuo. El principio de la igualdad, dice Mary Luz Mejía, se explica matemáticamente así: A=A (todas las A’s y en ellas representadas todas las letras del alfabeto son idénticas en cuanto seres humanos y sujetos de derechos), A≈P (las A’s son semejantes a las P’s) y a≠W (cada a en su individualidad es profundamente diferente a cada W). En estos textos sus identidades, semejanzas y profundas diferencias son absolutamente evidentes para ellos y ellas. Se reconocen.

Los hombres también lloran. Les gusta que su mamá los mime y extrañan profundamente cuando no está. Realmente no disfrutan pelear ni irse para la guerra. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Son jóvenes, disfrutan serlo, saben que el mundo está jodido y que los lugares y exigencias que como hombres les vienen en su vida adulta no son nada agradables. Están empantanadas, poco visibles. Por eso aman los lugares y las actividades en los que se encuentran, en los que no tienen que recordar cosas feas o bien pueden resolverlas y superarlas. El placer sexual los seduce y desborda, casi tanto como la ignorancia y la ingenuidad. Han aprendido su sexualidad de una sola manera y les cuesta mucho salirse de ahí, sobre todo porque difícilmente alguien deja de aplaudirla... una manera práctica y útil, pero insuficiente para ellas y, por lo visto en las rupturas, también para ellos. Se dan cuenta, saben que son un colectivo, se entristecen y frustran, pero no tienen muchas herramientas para enfrentarlo, para salir adelante, para cambiar sus vidas y sus contextos inmediatos. La fantasía y el silencio los cobija con frecuencia.

A las ellas les gusta tirar. Y les gusta decirlo con palabras dulces y bonitas y también con metáforas fuertes que parezcan de hombres. Les ha tocado una parte terrible del mundo, la de la fragilidad extrema que significa ser joven y mujer y pobre. Y lo saben, lo reconocen y lo expresan. Han roto muchos discursos pero los más fuertes las siguen atando. Están convencidas de su derecho invulnerable a gozar, a jugar, a disfrutar y a sonreír, al menos mientras la juventud dura, que la vida adulta muestra otros dientes. Muchas de ellas se mueven usualmente entre la clausura o el abandono, difícilmente 103 logran respirar en mundos medios... variables que no les reducen la conciencia del bienestar. Algunas otras, tal vez por la historia de sus madres jóvenes y urbanas, han crecido en ambientes de frágil equilibro. Se ven en los espejos íntimos y sonríen, pero en los públicos, los de la Fiesta, prefieren no hablar mucho.

Si bien el grupo a su interior tuvo siempre una diferencia muy marcada en términos de Género, cosa que para ellos y para cualquier lector es absolutamente evidente, hubo asuntos que, a la luz de la intimidad y del contexto, se evidenciaron y construyeron como universales. Asuntos concernientes a las personas. La miseria y la violencia son círculos difíciles de romper. El erotismo es una meta de difícil acceso. Se hacen vulneradores poco a poco si no se develan los dispositivos y se construyen mecanismos concretos para transformarlos.

CUANDO LOS ESPEJOS SON PANTALLAS Estos espejos tienen una característica que hubiera enfadado muchísimo a la madrastra de la que ya hablamos. Pero que para Charly García o para Jattin o para la Storni es parte del sentido de sus vidas. Y de sus obras.

Decía Gauguin, ya sifilítico en Tahití, que él “pintaba con su pene”. La subjetividad revolcada y desnuda puesta en el lienzo. Su motivación era sexual. Igual que para el intermedio Raúl, para quien el sexo y la poesía eran la manera de vivir y de poner en crisis la doble moral de su cultura nativa (Jattin escribe y publica todos los patrones sexuales de su cultura –que todos siguen, saben y obedecen pero que a nadie se le ocurre argumentar ni elogiar-, él les rinde culto). Para la Alfonsina del mar, era el Dolor. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Entonces la subjetividad, a través de las obras de arte (cuando son obras de arte y no mensajes hipereducativos), tiene la posibilidad de hacerse pública, de zamparle una bofetada al mundo o simplemente de recordarle la existencia de otros, como sea... es expresión franca y honesta. Para quedarse pensando y discutir. Así se evidencia claramente en los espejos creados por nuestros autores jóvenes. En sus textos brota la subjetividad muy limpia de las palabras convenientes del juego social. Es un cable conectado directamente desde los espejos íntimos hasta las pantallas puestas a las afueras del estadio. No hay poses, hay tripas.

Por otro lado, expresar libera. No sólo desahoga, suelta las amarras. Cuando uno aprende a expresar, se da cuenta de que ya no tiene sentido guardar silencio.

De este cuerpo nuestro que tanto acariciamos y tanto queremos surgen claramente tres tipos de expresión. Tres usos de las pantallas definidos por el sentido y por los sentimientos con los que cada autor y autora se vio en y mimó sus espejos. Un grupo está marcado por la pronunciación abierta como juego y como reto. Pronunciaciones. Por otro lado, está el grupo de textos escritos desde el dolor. Espejos con láser rojo dirigido directamente a los ojos de un alguien específico. Manifiestos expresos de descontento, de tristeza, de angustia y de soledad. Reclamos claros y contundentes 104 contra las vulneraciones más hondas. Y, finalmente, están las Caricias. Pantallas revestidas de amor, besos dulces muy cerca de los labios.

Para la muestra de los tres grupos, se usaran principalmente textos que no han sido trabajados hasta el momento, pero también apoyos a partir de relecturas y profundizaciones de algunos textos ya usados.

Pronunciaciones Sentimientos tranquilos, intencionalidades lúdicas. Es el ejercicio de nombrar para hacer existir, para compartir, para burlarse tranquilamente. Cuando en las pantallas vemos reflejadas algunas de las muecas que hacemos en la intimidad, pero signadas con el nombre de literatura. La construcción de un lenguaje para ser, ya no en la identidad individual, sino para tener un lugar en el mundo cotidiano, un lugar propio. En eso consisten estos pequeños retos, en develar públicamente. Leer en voz alta.

La importancia de estas pronunciaciones es altísima si se tiene en cuenta el contexto en el que suceden. La Reliquia, como en general el país, es un lugar donde la expresión es censurada. No tanto como una restricción impuesta de un día para otro (también), sino principalmente como un mecanismo sistemáticamente incorporado en la cultura y en los individuos. No se educa para expresar, pronunciar es subversivo. Nuestros (colombianos) cuerpos, lenguajes, voces han sido criados para silenciar. Rostros inexpresivos, palabras escasas, rigideces. No exagero: Gaitán, Garzón, Galán (y no es que sea por la G...), la privatización de los canales, los silenciamientos a la filarmónica, la pobre producción editorial, las amenazas brutales a periodistas, la muerte de programas de teatro y música en las escuelas... D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

POEMA A LA NARIZ

De mi nariz sale un moco espeso y jugoso cuando me lo saco me siento orgulloso.

Angélica

Una vez más cobra importancia el principio pedagógico que anunciaba a las historias y sentimientos personales como materia prima. La variedad es absoluta. El cuerpo es potencial productor de cualquier tipo de sentimientos y de recuerdos. Frente a la intensidad dramática o erótica de algunos textos, es posible construir un discurso que simplemente rompe con la excesiva seriedad. Importaculista, diríamos en Bogotá. Esa es una primera lectura en términos de la expresión. El reconocimiento a las múltiples individualidades, y la posibilidad de dicho reconocimiento como ruptura estética.

Este poema surge como acto liberador en la segunda sesión, cuando se les pide nombrar una parte del cuerpo y... Angélica, nuestra poeta en cuestión, al igual que 105 Rubely (O que labios...) había tenido una experiencia muy fuerte y oscura en la primera sesión. Tampoco quiso ella compartir nada. Para las mujeres, como veíamos antes, el cuerpo y la sexualidad son espacios comúnmente ligados al dolor, a la vulneración. En un mundo patriarcal el cuerpo femenino es sinónimo de belleza, de deseo, de debilidad y de propiedad masculina. Es mío porque es sexy, porque es hermoso, porque no puede resistirse: es mujer.

Pero del cuerpo femenino también salen mocos, espesos y jugosos, que riman con el orgullo de podérselo sacar en voz alta. POEMA A LA NARIZ, entonces se enfrenta al discurso dominante de y sobre la feminidad, de y sobre el cuerpo femenino. Es una expresión pública de la intimidad, una declaración de derechos sobre el propio cuerpo. Un motor y resultado de la libertad que el taller iba construyendo. Del lado de la clausura fugada, este poema es una pantalla hecha, claramente, para ser pública, para exhibirse con alto volumen y para mantener siempre a su lado la cara satisfecha de la autora.

Las mujeres también son humanas.

Pero además, hay un elemento en el poema que refuerza el sentido de reto femenino. Al leerlo, sin tener en cuenta la firma del autor, se evidencia con absoluta contundencia un discurso masculino (insisto, de acuerdo al contexto). Fundamentalmente esta evidencia recae en el lenguaje usado, en las palabras seleccionadas, en el sentido de publicar una intimidad que “debería” ser vergonzante. Los hombres, como se hace evidente en todo el corpus, son los que retan de manera explícita. No es cualquier moco el que el yo poético se saca, es uno “espeso y jugoso”. Los adjetivos, juntos, categóricos, no son accidentales. Y luego refuerza que no fue que el moco se D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

saliera sólo, por accidente, sino que se lo sacó. Ahora, al concluir el poema, en la última palabra –siempre la última-, el yo poético se evidencia. El adverbio de modo “orgulloso” es clara y abiertamente masculino. El yo poético es un hombre. El juego doble de ruptura y de reproducción: ¿qué pasaría si terminara diciendo orgullosa? ¿Demasiado fuerte para el contexto? El derecho de sacarse públicamente un moco es tuyo, mi niña, si vienes vestida de hombre, porque sólo los hombres tienen esos derechos. Complejo juego.

Inevitablemente vuelven los dos pequeños poemas de Rubely presentados en momentos anteriores:

Tus senos son dos toronjas O que lindos labios tienes que que me quitan la sed. parecen una piña madura para chuparlos Rubely Rubely Ambos textos retadores desde el erotismo explícito y la penetrante sensualidad. El primero, senos, podría ser también leído como un poema absolutamente masculino. Un yo poético masculino desde una lectura obvia y desprevenida, que genera dudas 106 e interrogantes profundos cuando se lee el nombre de la autora. Un juego que en el público no deja de generar sorpresas, risas nerviosas o comentarios malintencionados. “Tus” y “me” definen una relación de intimidad directa entre el yo poético y una mujer (“senos”) específica; es decir, anula cualquier posibilidad de asexuar y despersonalizar el asunto. El segundo, más ambiguo en términos de sexo, lo que hace es publicar la intimidad femenina, declara también la condición de ser sexuado y erótico.

En todo caso, con o sin yo poético explícito y masculino, estos tres poemas recurren a estrategias masculinas para pronunciar su feminidad. Una vez más, el hecho de hacer público el cuerpo, en un sentido opuesto al de la instrumentalización para generar deseo en los hombres consumidores, es un bien que culturalmente les pertenece a los hombres. Cualquier jugador de fútbol se saca los mocos con su camiseta ante 60.000 espectadores y 10 cámaras de televisión.

La beo llegar. Le digo hola. Y pregunto por su nombre. Mientras pienso si es la adecuada. Ijueputa que inporta. Quiero librarme de este virgo.

Robinson L. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

El mismo autor del casi-romance caballeresco del “tesoro”, “la musa” y el permiso para “introducir su ideología...”. Robinson florece en su virginal masculinidad. Florece el desespero que en su texto MUSA se deja percibir entre ruegos. Florece la intimidad, la subjetividad más irritada de aquel que al otro lado intenta construirse como un caballero romántico capaz de pedir permiso para, eso sí entre comillas, acercarse (... solo si tu lo deseas permiteme “acercarme”).

Es uno de esos textos mincuento-poema-pensamiento que sin dar mayores explicaciones narra un sentimiento o una historia y nos deja salpicados de infinitas provocaciones.

A diferencia de los textos anteriores (Angélica y Rubely), en este texto no aparece ninguna intención o sentido de ruptura. El gran gol de la penetración, la cima de la masculinidad adolescente, no importa a quién ni cómo. Que sea mujer (“La beo llegar” “si es la adecuada”), pero incluso... Jattin: “Hasta que termina uno por dárselo a otro varón...” Pero si bien no hay ruptura explícita al discurso cultural, sí hace pública una tensión interna que, a su vez, devela una distancia vital –no de las palabras sino de la vida misma-, sobre la cultura. 107 Es decir. Desde la primera frase hasta “la adecuada”, el texto circula por un mundo cercano al de su texto MUSA, un mundo de permisos, de sentimientos hondos, de delicadezas vívidas en torno a la sexualidad y a la primera vez. La ve llegar, la saluda, le pregunta el nombre y piensa si es la adecuada: no cualquiera tiene acceso a su sexo. Pero después del punto florece la terrible ansiedad sexual y la presión social masculina al respecto. El texto se parte en dos de la manera más violenta. Con un autoinsulto, un recordatorio de la cultura, Robinson intenta poner en orden sus prioridades (“Ijueputa que / inporta. / Quiero librarme de / este virgo.”)

Entonces la primera parte devela una postura interiorizada tal vez por su familia durante la crianza (recordemos: muchachito de 14 años, juicioso, virgen, tímido, que vive con mamá y papá en una hogar sin violencia...), construida como una resistencia a las costumbres sexuales que un patriarcado tan fuerte manda para los hombres. Costumbres que soportan la segunda parte del texto. La virginidad es una condena, una maldición, algo con lo cual definitivamente no se debe vivir. Perderla es la prioridad, sacarse de encima ese estigma. La tensión, entonces, es tan fuerte que hace que el texto exista, si se hubiera vencido, el texto, obviamente, no existiría. Y eso es lo que se pronuncia acá: una postura personal de ruptura en tensión dolorosa con la presión social y el deseo –también socialmente construido-.

Finalmente, es importante incluir una experiencia que si bien no es parte del taller, sí es un derivado directo. El 28 de octubre de 2005, el grupo Sexu-Joven realizó una presentación artística frente a un público conformado por padres, madres, amigos, personas de la comunidad y jóvenes de otros sectores. En esta presentación Robinson leyó este texto. Micrófono en mano, luces, escenario. Más allá del efecto que pudo haber o no producido en los espectadores, está la decisión de hacer cada vez más D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

pública su tensión interna. Y fue evidente. La voluntad irrefrenable de expresar. La interpretación de la primera parte fue lenta, profunda. Luego del punto (insisto), al darse cuenta de lo que venía, antes de continuar la lectura, un tinte rojo se apoderó de su rostro y una risa delatora transformaron absolutamente el tono y el ritmo. La gente rió a carcajadas, incluso su mamá. La ternura erótica también tiene esos efectos.

Reclamos Estas pantallas tienen una etiqueta pegada en la parte superior que nombra al destinatario. Son pantallas de ojos rotos, de corazones frágiles lastimados de la peor manera. Acá la función expresiva es completamente distinta. No se trata solo de nombrar e intentar algún juego o ruptura, se trata de lograr una reivindicación. Son pantallas para la protesta, para quejarse ante dolores conocidos, para darse un nuevo lugar en la historia y en sus relaciones.

ESTA ES UNA CARTA PARA MI PADRE

108 Hola papá te escribo esta carta para decirte lo mucho que te quiero lo importante que eres para mi para decirte que estoy estudiando y para perdonarte por todo lo pasado por tener otra mujer y otros hijos tu tienes derecho a hacer lo que quieras con tu vida yo no soy nadie para jusgarte porque asi llueva truene relampaguie eres mi papá si tu tomaste la decisión de tener otra familia estás en todo tu derecho Yo solo soy tu hijo y nada más papá me gustaria poder hablar contigo un dia de estos y recordar un poco el pasado porque hay cosas que me gustaria poder hablar para poder entenderlas papá yo ya no soy un niño de ocho años yo tengo 17 años y ya entiendo las cosas nunca hemos tenido la oportunidad de sentarnos hablar de padre a hijo y ya es la hora de acerlo de centranos tu y yo no te he preguntado que te gusta de mi y que no te gusta y tu no me has preguntado si tengo novia si estoy enfermo

Yo más que tu hijo soy tu amigo soy una persona en la que puedes confiar completamente incluso con los hojos cerrados me gustaria que nos diéramos esa j oportunidad de hablar Papá te quiero Edisson tu hijo.

Esta historia está vinculada directamente con la carta a la abuela. La historia comienza con el abandono de su padre, de quien se dice que tienen otra familia, que era asesino a sueldo y que trabaja en Bogotá como taxista. Lo primero que Edisson escribió en el taller fue un pequeño y adolorido recuento de esta historia. Posteriormente lo fue ampliando, puliendo, modificando, para llegar, finalmente, por petición expresa mía, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

a escribirle una carta a su papá y a su abuela. Como mencionaba con anterioridad, el dolor de Edisson era cada vez mayor, hubo sesiones enteras en las que no se levantaba del piso... Una vez escritas las cartas, Edisson no volvió al taller. El colegio, era lo que decían sus compañeros.

Acá el destinatario es uno de los principales causantes de dolor y de vulneraciones a los niños, niñas y mujeres en nuestro país. El papá. Sujeto que difícilmente pide perdón, que, por el contrario debe ser recompensado por sus actos de daño o abandono. Y Edisson parece saberlo... una vez más la víctima haciendo un esfuerzo gigante, terapéutico, por tratar de entender al vulnerador, por ponerse en sus zapatos y tratar de encontrar una razón válida para lo que ha hecho: “...para perdonarte por todo lo pasado por tener otra mujer y otros hijos tu tienes derecho a hacer lo quieras con tu vida...” Le reconoce el derecho, como un acto altruista, adulto y comprensivo, pero inmediatamente después devela la manipulación, la estrategia del dolor: “...yo no soy nadie para jusgarte [y continúa, declarando una obediencia y sumisión de doble filo, porque es al tiempo un recordatorio de la responsabilidad inquebrantable que tiene con él] porque asi llueva truene relampaguie eres mi papá...” Otro ejemplo del mismo ejercicio de perdón-bofetada se encuentra al final de la oración anterior: “... si tomaste la decision de tener otra familia estás en todo tu derecho / Yo solo soy tu hijo y nada 109 más...” En 8 ocasiones está explicitada la relación padre-hijo, es una alarma encendida durante toda la carta, que, en consecuencia, termina de la manera más cruda, liberadora (para el autor) y dolorosa (para el destinatario): “Papá te quiero / Edisson tu hijo”. ¡Para que no se te olvide!

El reclamo continúa por dos vías. Por un lado, le reclama la confusión, la ignorancia absoluta de los hechos verdaderos (recordemos que todo lo que él sabe de su padre es por lo que le dicen, especialmente la abuela), el vacío que le genera la impotencia de ni siquiera saber, de no haber sido tenido en cuenta en las decisiones: “...me gustaría poder hablar contigo un dia de estos y recordar un poco el pasado porque hay cosas que me gustaria poder hablar para entenderlas papá yo ya no soy un niño de ocho año yo tengo 17 años y ya entiendo las cosas...”

Por el otro lado, reclama el no-reconocimiento de su existencia (de la de Edisson) en la vida del papá. “...no te he preguntado que te gusta de mi y que no te gusta y tu no me has preguntado si tengo novia si estoy enfermo.” Éste es un fragmento cargado de angustia; primero por intentar imaginarse que el papá piensa o sabe algo con respecto a él (¿cómo? ¿por qué debería?), segundo por la sensación de abandono tan contundente. Le recuerda que él también es persona, que se enamora, que se enferma, y que puede que en esos casos lo necesite a él, su papá. Es un grito por la existencia y por la compañía, por romper la soledad tan fuerte en la que vive (es importante recordar que la mamá de Edisson murió antes de la ida de su papá).

Inevitablemente la cabeza hace clic sobre un texto ya presentado: PAPÁ, de Yulieth. En este texto el procedimiento de reclamo es básicamente el mismo, aunque el perdón no es explícito, ella lo deja deducir: “...siempre cuente / con su hija...”. Sin embargo, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

la experiencia es mucho más dolorosa, al recordar que no sólo hubo abandono sino negación explícita, por parte del padre, de su condición de hija, pero que ella, al igual que Edisson, se encargan de recordar y de mantener viva (“...aunque / tú digas que yo / para usted no soy / su hija para mi / sigue siendo mi padre...), y una historia dura entre ellos, a partir de la que hace conciente los sentimientos que su padre tiene hacia ella (“...que a pesar / de todos los / problemas que an / sucedido entre nosotros (...) y espero que nunca / yebes ese rencor tan / grande con su hija.”). En este texto el dolor es terrible. Es mucho más conciente que la carta de Edisson, no guarda ninguna esperanza real de reencuentro, a pesar del deseo.

En un sentido similar, pero en condiciones distintas, está el reclamo que Pájaro hace en la segunda parte de su texto “Cordera”... también a su papá.

Papá no quisiera seguir tus pasos por ser traicionero pelion te paso eso a veces pienso que si pudiera vengar tu muerte lo haria no lo dudaria Pero pienso que si vengara tu muerte dejaría a otro hijo o a otra madre sin su papá o sin su marido y si lo hiciera me marcaria 110 más la vida de lo que la tengo marcada lo unico que queda es decear b que descanses en paz y perdonar al que lo hizo adios papá. Pájaro.

No importa la muerte para hacer un reclamo. Éste también es un abandono, también muy masculino, Pájaro lo sabe, y no se lo perdona: “Papá no quisiera seguir tus pasos por ser traicionero pelion...” Y se lo confirma nombrando el vacío que dejó (“...dejaría a otro hijo...”) y la marca que dejaron sus decisiones. Marca de muerte, de masculinidad peliona. Ahora bien, acá no hay posibilidades de reencuentro ni de nada, por eso no hay manipulación. Luego de la terrible bofetada (liberadora) el perdón es, también, terrible y sincero. Así que lo único que Pájaro puede hacer después del reclamo y la lección aprendida, es desearle a su papá que descanse en paz... y despedirse.

Ahora bien, para concluir los reclamos, es necesario traer el “Cordera” de Gabriel. El manifiesto conciente y colectivo contra la guerra, la ausencia y la pobreza. Todo el texto es un gran reclamo por una suerte de vida que a ellos, los jóvenes, les tocó vivir. El destinatario es el mundo adulto, los hombres guerreros (“Esta guerra que estamos viviendo sin causa alguna, por hombres que sin corazón matan...”), los hombres ricos y poderosos (“...muchos inocentes mueren por una guerra que armaron todos los que descanzan como reyes, en su casa con todos los suyos, sin preocuparse por nada...”) y, en otro nivel, todos nosotros los ausentes (“Tenemos que darnos cuenta que todos vamos a sufrir esto cuando nos toque vamos a comprender...”).

Acá no hay estrategias, ni perdones. Es una carta dirigida a todos los que nombra, a todos los que jugamos un papel en la guerra, a todos... Es un reclamo contundente, D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

fino, analítico, que abarca dimensiones muy hondas, que intenta acceder a la complejidad del asunto sin desconocer culpables directos: “...por una guerra que armaron todos los que...” Un reclamo inesperado, cuando todos quieren (¿querían? Ojalá) ser policías o milicos.

Estos textos, sumados a muchos otros que no hacen parte del corpus y a varios que no leí pero sospecho, constituyen un reclamo general por el abandono y las agresiones que estos jóvenes han tenido que padecer del mundo adulto y, especialmente, de sus familias y sus padres (varones). Sus patrones de crianza están mediados por la ausencia, por el dolor, por las barbaridades y torpezas del mundo adulto. Mediaciones que inevitablemente se tienden a naturalizar y, por lo tanto, a repetir.

Yo, a raíz de ¡Adiós, Cordera!: Se lleva el mundo lo mejor la guerra maldita la pobreza los caprichos de los cerdos 111 Odio cerrar los ojos y verlos de camuflado asesinos quemados, más el alma que el cuerpecito

Odio imaginar el vacío en el corazón la mera necesidad Esta hija de puta ausencia de posibilidades

Y odio, mujeres, verlas a ustedes en sus eternos silencios llevadas también por el mundo de cabeza al matadero del maltrato de la dependencia del ahogo que solas ustedes y ahora pudieran romper

Se lleva el mundo lo mejor pero quizá sólo quizá tengamos la fuerza D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

para desbocar el tren. Y talvez sólo tal vez Nos llevemos nosotros lo mejor.

Caricias Pero también hay pantallas en este corpus delineadas por ángulos suaves y contrastes tranquilos. Pantallas que permiten acceder a la dulzura que también habita los corazones y las historias de estos jóvenes. Suaves cuadros bajo el sol. Un sol que brilla desde ellos, a través de sus textos y que pretende iluminar a otros.

Carta de Amor.

Tengo dos luceros que me alumbran tus ojos una capa que me cubre tu cuerpo un diccionario amoroso tus palabras 112 Tengo dos telas suaves tus manos una fuente dulce tu boca algo que me protege tus brazos Tengo algo que me hace feliz tu censillez algo suave y brillante tu cabello un regalo lleno de sorpresas tus detalles Tengo algo puro y sereno tu amor Una persona a la que quiero eres tu...

Hola amor, debo confesarte que te quiero mucho y que ahora estás ocupando un lugar muy importante en mi vida, espero que tu pienses y sientas lo mismo que yo siento por ti.

Te quiero un resto.

Angélica.

Y si en algún momento las pantallas y los espejos han reflejado toda la complejidad de la identidad y de los sentimientos, pues este es un perfecto ejemplo. Angélica, la autora de este hermosísimo poema es la misma autora del POEMA A LA NARIZ y de la carta a sí misma en la que se acordaba de todos los hombres de los que se ha burlado.

Expresarse aquí es dar un beso hondo y apasionado al hombre amado. El mejor de los besos, el que fue calentadito con calma, el que se imaginó tantas noches y luego desplegó trozo por trozo. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La primera parte de la carta es un poema cuidadosamente tejido a partir de metáforas dedicadas a puntos específicos de su hombre. Algunas de ellas están basadas en la literatura popular (“Tengo dos luceros...”). En este poema Angélica hace, además, un ejercicio gráfico que permite leerlo de dos maneras, con o sin el significado de las metáforas, indicado por las flechas. Lo que ya marca la evidencia del ejercicio creativo- amoroso que realizó. Para más claridad, en el manuscrito original, ella uso dos tintas. Una de fuerte contraste con el papel, para el cuerpo principal del texto, y la otra, más débil, para las flechas y sus significados.

Es un poema de amor que devela el significado del otro en ella. Bastante femenino en su construcción evita cualquier tipo de ruptura, de duda, de jaque a la cultura o al hombre. Él es su luz, su protección, la persona a la que quiere. No podría ser distinto si con estas palabras pretende conquistarlo, como pareciera al final de la carta (“...espero que tu sientas lo mismo que yo siento por ti.”). Con los mocos y las burlas los hombres de su cultura se sentirían amenazados, desencantados, pero con este poema, en el que la declaración de amor roza una declaración de necesidad, el hombre recobra todo su poder y ella, podrá tenerlo cerca. Difícilmente, además, un hombre de su contexto recibirá una declaración de amor tan hermosa. 113 Por otro lado, el poema que funda la carta no sólo envía ese mensaje de amor dulce y romántico, sino que devela, de una vez, sin esperas ni preguntas, un erotismo sutil y tranquilo. “...una capa que me cubre (cuerpo) // Tengo dos telas suaves (manos) / una fuente dulce (boca)...” Este amor, entonces está centrado en el cuerpo, en el significado romántico del cuerpo, pero sobre todo en sus posibilidades de contacto, en la sensualidad. No es un amor etéreo ni espiritual, está hecho también de detalles y de palabras. Sólo hay dos cualidades inmateriales que caben dentro del poema: la sencillez y el amor.

Para cerrar el poema, Angélica devela entonces los sentimientos y el tono de su amor: “Tengo algo puro y sereno (tu amor) / Una persona a la que quiero (eres tu...)” Una vez más el uso de los adjetivos no sólo no es gratuito sino absolutamente preciso y revelador del poema entero. Puro y sereno, es algo que se podría decir del poema. No es un amor atormentado que la esté matando. Es un amor tranquilo, que la ayuda a ser feliz, a sentir rico y a escribir poemas hermosos.

La carta concluye con un texto bastante simple y prosaico, que redunda en sus sentimientos (“debo confesarte que te quiero mucho...” es absolutamente evidente) para develar la situación real, la esperanza. No es una declaración de amor sobre seguro, es una carta de conquista, por eso es tan importante la sutilidad del lenguaje, la configuración de la imagen de mujer un tanto erótica y necesitada de él. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

No llores, no sufras, no mojes tu rostro con la ausencia de la alegria, no lo agas no no te destroses en vida supera esta perdida, gran perdida pero la vida sigue aferrate a ella con toas tus fuerzas y no te sueltes se fuerte, que aunque tus cabellos lla blanqueen y tu rostro pierda la belleza estetica tu tienes mucha vida por delante, mucho por vivir mucho por qué vivir asi que “VIVE” disfruta tu vida y no te encierres en tu amargura y tu dolor

Robinson L.

Esta es la segunda parte del texto surgido de ¡Adiós, Cordera!, escrito por Robinson, 114 que fue analizado previamente. Espejo convertido en pantalla por la fuerza expresiva que tiene. Fuerza basada en la posibilidad -¿deber?- de transmitir ánimo y afecto a la abuela frágil. En esta pantalla, como en la anterior, todo el sentido del texto está puesto en el efecto que pueda tener en la o las personas receptoras. No es un texto que se afinque en la intimidad de su lectura.

Este texto es una caricia en el rostro de la abuela. Una caricia que limpia las lágrimas, que transmite fuerza y que le ruega que por favor no lo abandone. Es una caricia en la que Robinson le dice que ya es todo un hombre, capaz de consolarla y de sostenerla: “No llores, no sufras, no mojes tu rostro con la ausencia de la alegría...” Se logra ver su mano recogiendo las lágrimas con total delicadeza. La misma con la que está construida la imagen poética “con la ausencia de la alegría”.

Pero también es un apretón en el brazo o en la espalda, un abrazo que sacude y que despierta. La caricia se va convirtiendo en sacudida poco a poco: “...gran perdida pero la vida / sigue aferrate a ella con todas tus fuerzas /[y la sacudida se va poniendo más fuerte] y no te sueltes se fuerte... [hasta convertirse en el ya conocido grito y abrazo de ánimo solidario] ‘VIVE’ disfruta tu vida y no te / encierres en tu amargura y tu dolor”. Esa frase- repetición es una voz de ánimo, es cierto, pero también de la exigencia papá hijo en la competencia de gimnasia. El apenas compasivo “No llores...” muta como los sentimientos a lo largo del texto, hasta convertirse en el activo, exigente y crítico final.

Ésta, entonces, es una caricia que combina gradualmente –cosa muy paternal-, la absoluta dulzura y compasión para salir de la emergencia (llanto), con la fuerza y el impulso requerido para superar de una vez por todas la crisis. El hecho de que haya expresiones de fuerza y de exigencia en el texto, no anula las intenciones dulces. Sin embargo, sí devela una construcción cultural específica con respecto a la masculinidad. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Una característica exclusiva de este texto de Robinson, es que es el único, en todo el Corpus, que refleja una relación positiva, constructiva con su familia. La familia es ausencia o dolor en este grupo, ha sido evidente. Pero este texto, con su extraña fuerza, saca a la luz una relación de colaboración, de afecto solidaria, de responsabilidad del autor al interior de su núcleo familiar.

Para cerrar esta sesión de caricias múltiples, haré una breve mirada sobre el POEMA DE COLA Y DE AMOR, analizado en los espejos rebosantes de humedad. Caricia también, más suave que cualquiera, conserva una característica profundamente distinta. Leidy logra una caricia a sí misma, a partir del uso de un doble espejo. Sabemos que este poema tiene una estructura y una experiencia sensorial e identitaria circular: “Quisiera tener esa / cola que tu tienes / para yo sentirme / orgullosa y sentir / que alguien me diga / amor que cola / tan suave tienes tu”.

Pues el mismo efecto se logra con la caricia. La caricia va originalmente, y explícitamente, de ella a su amor (“Que cola tan suave / que acaricio con tanto / amor”), para luego devolverse y dársela, al menos en el deseo, a ella misma: “quiero sentir / tu amor con tu cola / de peluche”. Y vuelve y juega el peluche, por si a alguien le caben 115 dudas de la suavidad de esta caricia autoconcedida.

Si bien en todos los textos que conforman el Corpus no hay expresiones claras de violencia o de agresión protagonizada por ellos, tampoco es muy frecuente la dulzura y la suavidad. Absolutamente diferente a la ternura erótica que mencionábamos anteriormente (excepto el poema de Leidy), ya que esa es una dulzura que no tienen los textos en sí mismos, en su sentido y sentimientos, sino que se activan en uno como lector adulto y cercano. En este grupo de jóvenes y en su comunidad el trato es muy fuerte, brusco, incluso en las mujeres. Tiene que serlo, la vida cotidiana se los exige, es un entrenamiento. El lenguaje, los chistes, los saludos ponen en juego la fortaleza física y emocional del otro u otra. Sólo entre parejas de novios existen visiblemente caricias. Esa es la importancia de estos tres textos, que si bien son minoría absoluta, abren una posibilidad de expresión válida y necesaria.

DE SECRETITOS A CLARABOYAS (CONCLUSIONES) Hemos circulado un mundo amplio, complejo, cargado de dolores terribles y de hondas hermosuras. Fiestas, camas, ríos íntimos y espejos colectivos. Ahora podemos, también nosotros –la tía, las amigas y los lectores-, observar con mayor claridad a través de las pantallas y los secrtetitos. Claraboyas. Podemos brotar conclusiones que nos permitan, finalmente, organizar el entendedero sobre cómo esos textos literarios –y todo su universo de interpretación- se convierten en rutas de indagación y transformación de la subjetividad, y en herramientas prácticas para conocer y comprender. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

De los espejos mutados hay Claraboyas que sirven para respirar. Cuando el calor domina y el aire es denso y espeso, cuando el bus va lleno y se demora largoras en llegar… existe en el techo una ventanita que se abre para permitir el intercambio de aires y de gases. Claraboyas para respirar, bocatomas para no morir asfixiado, para no llorar pa’dentro hasta inundarse. Son, entonces, aquellas respuestas a la premisa sobre las posibilidades de la literatura (arte) como vehículo para develar y movilizar las subjetividades de las personas que se zambullen en procesos de creación artística.

También están las claraboyas que se ven desde afuera. Unas que nos permiten ser en el mundo sin ser ignorados, confundidos o desaparecidos. Que permiten reconocer al compañero de asiento o a la mujer que se acaba de subir. Son Claraboyas para dejarse ver. Porque dejarse, hacerse, ver es necesario. Y es forzoso que veamos y que tengamos siempre formas más útiles de ver y reConocer. Estas claraboyas hacen referencia directa al planteamiento de la premisa 2, en el que la que el arte y la literatura sirven como pantalla nítida de una época, de un contexto o de un grupo social. Imágenes del colectivo para el colectivo mismo y para el resto del mundo.

Claraboyas para respirar 116 Conclusiones sobre el potencial pedagógico y transformador de la experiencia, alrededor de las subjetividades en sexualidad y vivencia de los derechos.

A partir de las múltiples, alucinadas, mañaneras lecturas de los textos y de la experiencia, se evidencian claramente dos tipos de campos en los que las subjetividades se movilizan y se ponen en juego. Espacio para la reflexión, para el aprendizaje y para la transformación en las dimensiones de la sexualidad y de los derechos humanos. Uno de estos respiraderos es el relacionado con la potenciación de la creatividad; el otro, con las posibilidades reparadoras que encarna escribir en un proceso como el descrito previamente.

CLARABOYAS PARA RESPIRAR… Y CONSTRUIR

La creatividad no es tanto un don mágico, como sí el resultado de contextos y procesos vitales que favorecen la capacidad y el derecho de crear. (puede que sea, en algún nivel, pero ¿qué es un don? ¿Es el regalo de un dios que probablemente no exista? ¿Un golpe del azar? ¿Una pequeña, casi insignificante decisión de papá o mamá durante la gestación? ¿Un mariposa que hace 100 años, según la teoría del caos, se posó a la hora adecuada sobre una piedrita a punto de caer sobre el techo de la casa del bisabuelo? En cualquier caso el don es una exclusión, la definición de la élite “creativa” para autoprotegerse y ensalzarse con sus propias creaciones). Por tanto, es una capacidad latente que necesita de espacios para desarrollarse y florecer.

Nadie dijo que fuera fácil. Pero es posible. Ejercitar y promover la creatividad implica un esfuerzo grande de parte de todos y todas las interesadas. No es una palabra o D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

un silencio. Son muchas palabras y muchos silencios y muchos fracasos y otras tantas equivocaciones. Hay que darle cuerda, dedicarle tiempo y energía. Hay que alimentarse bien, descansar sin culpas, reconstruir (o mantener) y luchar por las ilusiones.

No es una fórmula aplicable al arte por el arte; existen ejemplos de los impresionantes procesos creativos propulsados por el hambre, por la ausencia del sueño, por el cansancio y la evasión de necesidades y quehaceres diarios (ir al colegio, trabajar, mimar a la mamá, cuidar al hermanito…). Pero miro al espejo y recuerdo que en esta propuesta el arte y los derechos –la dignidad humana-, no son bienes que nos interesen separar. Una cosa es “optar” por la marginalidad económica y social, por la muerte, por ejemplo, como Jattin –el decadente dandy sabanero- o Silva o Alfonsina o María Mercedes; y otra, estar condenado a ella.

El disfrute de los derechos básicos, así como la voluntad de lucha para alcanzarlos, son requisitos para la creatividad. La indigencia mata gradualmente -y muertos no hay creatividad que valga-; la pobreza, dificulta.

Quizá uno de los aciertos no-literarios más grandes del diseño del taller en esta experiencia fue el hecho de garantizar almuerzos de buena calidad nutricional para 117 todos y todas las participantes. No fue sólo un valor agregado ni mucho menos un chantaje de pornomiseria. Del mismo modo se entiende el hecho de haber dispuesto el taller como un espacio para descansar de las presiones cotidianas. Incluso para hacer relajación y dormir. A barriga llena corazón contento [o por lo menos activo], condiciones materiales que favorecen la disposición emocional y física para la creación artística y la escritura (si esto lo viera un médico me pediría “evidencia científica” para demostrar tales afirmaciones, y puede que sea necesario, pero no seré yo, por ahora, quien haga semejante tarea).

La dificultad de la creatividad, además de las razones materiales, concretas, también radica en los patrones de crianza, en la cultura y las historias personales. Entonces, la promoción de la creatividad entra en juego con los habitus que nos poseen y conforman. Un juego con muchos matices, aristas y filos.

Esas estructuras subyacentes, innombradas, prácticas, son al mismo tiempo limitantes y propulsoras para la creatividad. La manera como nuestros padres y madres nos criaron, como respondían ante nuestras preguntas, el colegio en el que estuvimos, la relación que mantenemos con los medios de comunicación… la guerra, las lógicas políticas y económicas del lugar que habitamos, los valores morales y culturales… De este modo, el habitus puede ser la mayor fuerza promotora para la creatividad y el peor de los limitantes. Sin embargo, en general, podría decirse que la creatividad (concepto bastante más grande que el ingenio, y hermano de la ética) es el ejercicio de transformación constante de lo que nos hace ser, pensar, soñar y producir de cierta manera; es decir, de los habitus mismos. Se expande ese universo, como una tela de látex, a veces no tan flexible. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Para el caso de nuestros autores, las estructuras que los conforman, no homogéneamente, están marcadas por ideologías autoritarias y conservadoras (moral campesina, escuela de pésimas condiciones físicas y técnicas, militarización de la ley, de la economía, de la política), por la obediencia vinculada con el castigo sobre el cuerpo (silencio, castigos físicos, prohibiciones sobre el gozo del cuerpo, desplazamiento, mutilaciones, muerte), pero también por la exaltación a la sexualidad emotiva, a la belleza, a los riesgos, a la espontaneidad. Difícilmente puede describirse como un caldo de cultivo para la creatividad y el arte. También aquí, entonces, radica el esfuerzo por crear. Construir el sentimiento (derecho) que les permite crear, decir, romper, desobedecer (no a las normas de la legalidad sino a las reglas implícitas de la sociedad en la que viven –temor, consumo, dinero, violencia, etc.-, del taller en el que participan –sexualidad, salud sexual y reproductiva, discurso de derechos, ambiente masculino-), es una lucha durísima contra sí mismos, contra su historia y su presente. Una lucha que, por supuesto, no siempre se gana.

Repito: no es fácil, pero es posible. 118 Aunque me imbade una tristeza, al ver tus piernas abiertas me enloquece otra sensación.

Aunque me encuentro sumergido en una gran tristeza por no tener tus piernas, tus brazos, tus ojos, todo tu cuerpo... me reanima el recordar los momentos que me llevo.

Solo, triste sentado en esta maldita silla, sin poder correr como cuando tenia, mis piernas. pararme.

Las veo, no lo creo, es imposible que mis piernas sean así, flacas cortas, no me gustan, quiero otras, triste por no poder cambiarlas, pero doy gracias a Dios por tener mis piernas sanas, o simplmente por tenerlas. GABRIEL l D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Este conjunto de textos muestra claramente el proceso creativo de Gabriel, durante la última sesión del taller, impulsado por el ejercicio de “parte del cuerpo (piernas) + sensación (tristeza)”.

En el primer intento, sucede lo obvio. Las piernas abiertas de ella le curan la tristeza. Obvio por el taller, obvio por la masculinidad, por la edad. Ante mi petición de intentar otra relación entre piernas y tristeza, el resultado fue casi un silogismo de la misma carta: la ausencia de tus piernas me entristece. Pero se complejiza, aparece el recuerdo.

Al hacerlo caer en cuenta de que, realmente, no está cambiando la relación, Gabriel hace un esfuerzo que le implica varios minutos y presenta el tercer texto. Todo cambia. Está sólo, algo muy grave ha pasado y ya no tiene piernas. Es otra tristeza, otras piernas, otra ausencia, otro personaje. Seguramente alguna víctima de las minas, ¿conocido?, ¿noticiero?

Yo, impulsor y aprovechado, al ver su capacidad, le propongo que intente otra relación más. Mover el foco implica comenzar a mover el mundo.

No hay ausencia. La tristeza es un poco nostalgia, un poco crueldad y un poco humor: 119 ironía. Se tienen las piernas, pero son terribles. Al ver con calma este proceso, al reconocer el esfuerzo de Gabriel, queda la percepción de que las estructuras comienzan a ceder, a estirarse y, si se le siguiera dando cuerda a la cometa, tenderían a fracturarse.

Poema a las manos

Son manitos tiernas manos cariñosas por eso cuando me tocan siento manos muy hermosas manos cariñosas quisiera decirte muchas cosas pero casi no tengo palabras, por eso sólo me queda decirles ustedes florecen como rosas por eso manos como ustedes solo se encuentran en un jardín lleno de rosas hermosas

Paola

Como veíamos antes, Paola escribió casi exclusivamente cartas que le permitían desahogarse de sus dolores y preguntas. Todo lo demás le costaba mucho trabajo. Este poema, escrito como parte del mismo ejercicio que los textos de Gabriel (manos+ternura) es el resultado de un agudo ejercicio de creación. Es importante resaltar que ésta fue la última sesión del taller. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Ella no encontraba ninguna posibilidad, porque en sus temas favoritos (familia o amor) no cabía la única relación planteada por ella: manos que provoquen u ofrezcan ternura no es algo que suceda en la casa ni es algo que se espere, realmente, del hombre amado (que sí podría ser manos y protección). Hubo entonces que provocarla para que saliera de dichos temas, o fuera capaz de plantear otra relación.

¿Las manos de quién?, fue la pregunta. Luego de pasar por distintos intentos, entre los que se encontraban las manos de un perrito, llegó al texto que finalmente entregó. Los bocetos los rompió. El texto es explícito en la escasez de palabras, pero evidencia muy bien cómo la cuerda se va soltando y ella avanza encadenando imagen tras imagen hasta tratar de cerrar circularmente.

La discusión y el acompañamiento crítico son indispensables para la creatividad. Es más difícil crear sin escuchar-se… sin espejos.

Del mismo modo, para alimentar el esfuerzo y estirar la cuerda, se necesita de las provocaciones. El papel de textos canónicos vitalistas, creativos, altamente emocionales y novedosos, es clave para impulsar los ejercicios de creación. Ya lo vimos previamente con Jattin y con Peri Rossi. 120

MUSA (fragmento) CULINARIA POÉTICA ... (fragmento) ese hombre soy yo Una vez que el pene ha sido introducido haora ya lo sabes, Permiteme introducir mi ideología en el poema, la poeta se baja hasta quedar en tu sensual presencia. sentada sobre el muso… ... Erica Jong Robinson

MUSA surge a la luz del ejercicio creativo que no sólo rondaba lo estético, sino también lo sexual; es decir, no sólo las palabras se ponían en juego, lo ingenioso, sino también las acciones, las estructuras representadas en los textos. Como parte de estas exploraciones y discusiones llegó el poema Culinaria Poética de Erica Jong, en el que se invierten una serie de elementos jerárquicos y simbólicos del patriarcado que se expresan en una relación sexual. Robinson los vuelve a su lugar tradicional para enriquecer, creativa, poética y patriarcalmente, su discurso romántico.

Los habitus no son cuerditas frágiles y fluorescentes que nos sugieren tristemente un camino; son rieles macizos, invisibles, sobre los que nos sentimos cómodos. No es fácil saber cuándo se rompen o se tuercen un poquitico, como no es nada fácil romperlos o torcerlos. Pero quizá lo más duro, es que no es nada confortable ni fácil estar descarrilado o conducir al tren por rutas inexploradas. He ahí las resistencias. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Las transformaciones suceden poco a poco, con tiempo; duelen, así el resultado llegue a ser gratificante; producen miedo, porque difícilmente se sabe lo que hay del otro lado… un buen arranque, es la estética, la imaginación, la fantasía.

Entonces. La creatividad no se alimenta desde la exclusión, ni la violencia, ni la disciplina férrea, se alimenta desde el juego, la equidad y la libertad. Espacios como el taller desarrollado ofrecen una puerta de entrada al mundo de la creación y de la ética. Hermanas, si se entiende a la ética como la posibilidad de hacer lo que quieras (el Fernando Savater de Ética para Amador, anterior al 11 de septiembre y su enrolamiento a los ejércitos anti- terroristas), en la reflexión de las emociones, en el incesante esfuerzo transformador. Cuestionar es incluir, cuestionarse es resistir.

La cotidianidad de nuestr@s autor@s es el abandono que la moral conservadora bautiza libertinaje.

Alimentar la creatividad y la expresión individual ayuda a nutrir la voluntad de crear- se de manera cada vez más autónoma (y la metáfora alimenticia no es casual, ya 121 lo sabemos). La pertenencia a colectivos de expresión y creación puede ayudar a reconocer las identidades, las diferencias, las semejanzas y las subjetividades de los otros y otras. Ayuda, entonces, a ganar en el respeto por los derechos y las sexualidades de los otros. Yo tengo derecho a ser y expresar, los otros también (los poemas de la silenciosa y refugiada Leydi, la lectura de poemas que algunos de ellos realizaron tiempo después ante su comunidad).

Ninguno de estos son procesos automáticos o “connaturales” al arte ni a la literatura. Dependen de las maneras como se haga arte, de los procesos de producción de la literatura. La historia está plagada de artistas, grandes creadores, idolatrados a pesar de –o justamente por- sus tiranías, sus exclusiones y sus muertes. Se requiere generar microcampos con reglas de juego distintas, negociables, explicitadas… mundos posibles en los que crear no sea una tiranía.

CLARABOYAS PARA RESPIRAR… Y REPARAR

Aunque seguramente hay excepciones, a los seres humanos no nos gusta hacernos daño, sentirnos prisioneros, vivir con la dignidad y la posibilidad rota; esa es la fuerza que permite las reparaciones del dolor. Y, como se exponía en el capítulo segundo, los jóvenes presentes en estas páginas luchan con las herramientas que tienen para ser cada día más felices, para gozar, para no sufrir. A veces, por supuesto, estas luchas son insuficientes y hasta contraproducentes. Lo que no significa que el deseo por el bienestar se diluya. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

El bienestar, en cambio, como sentimiento, como sospecha, sí se puede empañar, transformar, por las presiones de la cultura y de la propia historia. El bienestar puede ser dinero acumulado o mujeres acumuladas. Puede ser un beso del papá o la muerte de la abuela. Suele definirse por la costumbre. No se reflexiona comúnmente sobre él. Tampoco sobre el dolor. Mucho menos sobre las maneras de repararlo.

Así las cosas, la experiencia descrita en este trabajo abrió puertas para reflexionar sobre el bienestar y el dolor. El espejo ilumina… como una luna llena que es al tiempo sol. Permite verse, sentir, reconocer los sentimientos, reflexionarlos… permite intentar salidas, soluciones, rutas de acceso a momentos de mayor tranquilidad. La creación, volviendo a las claraboyas anteriores, ayuda a, una vez desnudos, seleccionar la ropa o las compresas.

Es necesario ver los desgarres y las heridas, las noches oscuras, para saber dónde aplicar el ungüento… y la luz.

El texto de Pájaro, por ejemplo. Una carta provocada por ¡Adiós, Cordera! dirigida a su padre asesinado. Escrita en dos tiempos mediados por una conversación. La segunda parte devela el proceso mental de autoconciencia, de reflexión de la historia personal 122 y del contexto. Construye una versión implícita sobre el bienestar y una ruta general e intuitiva para alcanzarlo y para sentirlo libre de culpas.

Papá no quisiera seguir tus pasos por ser traicionero pelion te paso eso a veces pienso que si pudiera vengar tu muerte lo haria no lo dudaria Pero pienso que si vengara tu muerte dejaría a otro hijo o a otra madre sin su papá o sin su marido y si lo hiciera me marcaria más la vida de lo que la tengo marcada lo unico que queda es decear que descanses en paz y perdonar al lo hizo adios papá

Otra vía para la reparación del dolor y la asunción de respuestas y de decisiones, que funciona de la mano con los momentos y procesos de autoconciencia y reflejo íntimo, es la, “simple”, expresión. Expresar es reflejo; oírse diciendo, inicio de la respuesta.

Las discusiones y cuestionamientos y reflexiones sobre las expresiones de la subjetividad ayudan a entender las maneras como funciona el campo de juego en el que vivimos y las maneras como nos relacionamos con él.

Un ejemplo concreto de esta vía es el paso de Edisson Q. por el taller. Retomo lo ya dicho, para enmarcar. Desde el momento en el que llegó, comenzó a escribir sobre su historia familiar dolorosa. Se fue sumergiendo cada vez más en ella y fue resultando en el planteamiento de unos sentimientos claros y “positivos” con respecto a su papá, y otros, opuestos, con respecto a su abuela. Un día, luego de haber discutido el tema recurrente del suicidio, luego de haberle pedido que escribiera sobre las razones por las cuales no había terminado con su vida a pesar de que afirmaba sesión tras sesión D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

que era su única salida, y luego de escribir un par de cartas para su papá y su abuela (que por supuesto no iban a ser entregadas a los destinatarios)… Luego de todo este proceso muy difícil de manejar, Edisson dejó de asistir. Un día, cerca del final, volvió, saludó con una gran sonrisa y dijo que quería ser escritor. Luego se fue y nunca volvió.

La experiencia literaria clarifica los sentimientos, las prioridades y permite dilucidar alternativas de solución o de fortalecimiento.

También por la vía de la expresión, para muchas personas se encuentra la posibilidad de ser en el mundo de manera que la oralidad no permite. Escribir ayuda a ocultar la cara, a existir con fuerza, creativamente, protegiendo los roles seguros socialmente requeridos. Participar en un espacio como este taller, pudo significar para nuestra muy querida y enigmática Leydi, la posibilidad de reparar heridas hondas en su amor propio, en su fuerza, en su titularidad de derechos. Heridas causadas por las múltiples violencias, por la sexualidad agredida, por la pobreza y el autoritarismo de su crianza.

Es posible liberar las babas antisépticas que brotan dentro y lamerse las heridas para que el ego vuelva a jugar y a tomar el sol… el primer recipiente es el papel. 123 El yo poético que fluye en sus poemas, como decíamos en su momento, es un personaje hermoso, seguro, demoledor, erótico y profundamente gozoso. Es una alternativa a sí misma, una curación vía caricias auto-obsequiadas. Como las babas de un gato. Quizá con más tiempo o de manera autónoma más adelante Leydi comience a expresarse oralmente con mayor fluidez y seguridad; quizá aprenda a ser en su intimidad como el yo que aletea en sus espejitos…

Por otro lado, la lectura pública de sus poemas y el reconocimiento de la calidad, el talento y el esfuerzo, así no hayan sido leídos por ella, favorece inmensamente su imagen pública. Cosa trascendental en la vida, aún más en la adolescencia.

Entonces. No es solo la literatura, ni cualquier literatura, la que permite reparar dolores y abrir rutas posibles de acceso a bienestares, también, posibles. Una vez más, no es un ejercicio automático. Es la compañía, la discusión a partir de la dilucidación de los sentimientos y las subjetividades. Es el respaldo, el cariño, el tiempo, el acompañamiento crítico. La Literatura es un espejo, un disparador, una bola vidente… pero también es el plano del mundo, el papel sobre el cual se puede comenzar a conocer, a remendar y a rediseñar. Cosas nada espontáneas.

Los procedimientos son innumerables. Desde la reflexión acompañada, constante, repetitiva; hasta los chispazos de luz, la imágenes cortas provocadas por estímulos diversos que clarifican un lado de la luna o permiten cuestionamientos que nunca antes. Para cada quien y en cada cuándo, puede funcionar de manera distinta, incluso es posible que para algunos, muchos, el proceso sea (haya sido) inútil. Divertido, pero inútil. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Así pues, Se visualizan claramente las potencialidades de la experiencia en lo referente al autoaprendizaje (aprender por uno mismo, en los tiempos, ritmos, lógicas y prioridades que cada cual siente y decide), comprendido como el ejercicio de “autoanálisis” que Bourdieu propone en Comprender:

Es indudable que puede hablarse entonces de autoanálisis provocado y acompañado: en más de un caso tuvimos la sensación de que la persona interrogada aprovechaba la oportunidad de interrogarse a sí misma que se le brindaba y la licitación o solicitación que le aseguraban nuestras preguntas y sugerencias para efectuar un trabajo de explicitación, gratificante y doloroso a la vez, y enunciar, a veces con una extraordinaria intensidad expresiva [y estética], experiencias y reflexiones reservadas o reprimidas durante largo tiempo. (536)

Se evidencia una alternativa viable, coherente y efectiva para plantear pedagogías para la vivencia de los Derechos Humanos, Sexuales y Reproductivos, basadas en 124 la visibilización y reCreación de las subjetividades (habitus y campos), así como en la comunicación de vidas, sentimientos, verdades que mantengan vivos esos “sentimientos de oposición al poder”.

Se propone a las personas que teorizan o trabajan en procesos de educación para la sexualidad, de promoción y prevención en salud sexual y reproductiva, de promoción y restitución de derechos humanos, que repiensen los enfoques educativos usados, a la luz de experiencias y teorías basadas en la libertad, en la dignidad, en la potenciación de la expresión y la comunicación, y en la creatividad.

El disciplina-miento por el que con tanta proclividad circulan los enfoques salubristas, no favorece la transformación honda, ni siquiera el cuestionamiento. Sí la obediencia, la memorización y el aburrimiento.

En este sentido, un fragmento de la carta que Arlenson se escribe a sí mismo 10 años después, nos ofrece el sentido que el taller tiene para ellos, también como espacio de gozo y de tranquilidad, un espacio en el que las peleas y amarguras de la vida cotidiana debían quedarse fuera, perdían importancia. Arlenson: “...y en los sabados por la mañana hiba a un curso donde la pasaba bien, claro hay veces salia peliando con sus compañeros pero eso no le importaba porque le daba lo mismo lo importante era ir a conocer gente y aprender...”

Del mismo modo, una de las cartas de Paola se constituye en una declaración de amor sobre el taller y la relación de éste con la vida (aunque ya expuesta, es necesario volverla a ver entera). D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

HOLA: Te contaré una parte de mi vida.

Palabras en un mundo de tinieblas hoy te voy a contar algo triste

Hay días en los cuales me levanto de la cama pensando que es un dia maravilloso, pero salgo del cuarto y me doy cuenta que estoy rodeada de problemas con mi mamá, lejos de mis amigos, y mi sueño es seguir viniendo al taller, me acuesto en una cama o me siento bajo la sombra de un árbol y miro los frutos de estos arboles y imagino que este es el mundo y unos frutos mejores y más grandes que los otros así como tú, y entonces pienso que algún día estaré yo allí como la fruta más grande y mejor. Pero mi fantasía termina cuando mi mamá dise que no me deja asistir más al taller siento que el corazón se me parte en dos. Me levanto y pierdo horas en el televisor sabiendo que estoy desperdiciando el tiempo y no lo podré recuperar sufro y siento miedo de saber que mi juventud se despuma poco a poco y me pregunto que estoy haciendo con ella; acaso seré una persona más del montón no llegaré a hacer (ser) alguien en la vida. En los momentos difíciles no tengo quien me escuche ni me comprenda como un amigo incondicional, siempre anelo que llegue el sábado y que este sea eterno para compartir 125 con mis amigos En donde solo río, gozo, disfruto y m olvido de los problemas eternos y de las peleas; allí encuentro un espacio de comprensión y de saber que es en rialidad la vida, de un joven. Tengo que aprovechar este tiempo y disfrutarlo olvidándome de los problemas porque se que la terminarse el domingo volveré a la misma rutina de siempre con problemas, peleas, conflictos y el aburrimiento como si se tratara de una triste novela que no tiene fin. Esta es una gran parte de MI VIDA

PAOLA

Claraboyas para dejarse ver Conclusiones sobre el potencial investigativo de la experiencia, para la comprensión de las subjetividades en sexualidad y vivencia de los derechos.

Tanto los textos finales como su proceso de producción, abren puertas y ventanas que facilitan la comprensión de los fenómenos sociales que atraviesan a los autores, al grupo y a una comunidad en general. En este caso, la dimensión amplísima e integradora de la sexualidad y los derechos humanos. Las rutas son múltiples.

En la experiencia el contexto cultural y social se hace evidente. Desde una mirada puramente formal, material, tanto análisis textual como observación etnográfica, se pueden reconocer las condiciones educativas, culturales y económicas de los autores. Se ubican, por un lado, las dificultades para la escritura y la lectura fluida, la D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

escasez de vocabulario, la impresionante ausencia de ortografía y puntuación, el hecho de no contar con dinero –falta de + prioridades distintas- para comprar un esfero o un cuaderno; pero también la facilidad para interpretar y comprender los textos cuando se leen despacio, varias veces, explicando palabras y metáforas, y haciendo preguntas vitales.

También está el contexto en sus cuerpos como sensores. El hambre y las malas condiciones de nutrición sumadas a sus roles: el deporte en ellos (esbeltos, de músculos marcados, demasiado delgados) y los oficios domésticos en ellas (delgadas porque las mujeres comen menos, pero con acumulaciones de grasa por cierta inactividad y la debida –futura- maternidad); las frecuentes enfermedades de la piel, del sistema digestivo, dolores de cabeza que no se curan… la ausencia de servicios de salud adecuados y suficientes para ellos y sus familias. La moda, el gusto por verse bonitos y bonitas así las condiciones económicas no ayuden. Los rostros que nunca esconden las emociones: ojos de trasnocho o de llanto pertinaz, brillos de felicidad en sus labios, evasiones o fijaciones de las miradas, quietudes sospechosas…

Del mismo modo, los textos, los cuestionamientos y las conversaciones, permiten dar cuenta de sus historias personales relacionadas con diversos temas. Evidencian la 126 historia y su relación con el presente. Sus interpretaciones acerca del mundo, de su familia, de los tiempos transcurridos y de los que están por venir. Por ejemplo, en este grupo la familia es una noción bastante oscura. Las familias están cargadas de dolor, de muerte, de abusos. Casi nunca son un referente de felicidad, de protección o de tranquilidad… Y dentro de las familias el lugar del padre, en términos generales, es el más nombrado. Nombrado como se nombra lo que más duele, lo que se recuerda mal, lo que se extraña, lo que jode la vida. Se nombra para tratar de asir lo más confuso, lo más etéreo. Así mismo, el juego, los retos y el erotismo parecen configurarse como la ruta de escape más efectiva y contundente para las presiones y dolores de la cotidianidad.

En los espejos y las sesiones florecen con cierta facilidad las subjetividades, lo que permite conocer los habitus que sostienen, por ejemplo, prácticas posibles de violencia sexual o que favorecen el uso o no de métodos anticonceptivos. Develar las subjetividades relacionadas con la sexualidad y los derechos, ayuda a plantear estrategias pedagógicas y de intervención social muchísimo más coherentes con los derechos y las características de una comunidad en particular. Por ejemplo, conocer las subjetividades femeninas con respecto al erotismo y a la afectividad, permite concluir, en este caso, que el problema fundamental de la maternidad adolescente no está ubicado en la ignorancia a cerca de los métodos anticonceptivos (aunque hay) ni en la falta de autoestima ni ninguno de esos discursitos asesinos, sino en vacíos de comprensión formal, compleja, de las posibilidades de la sexualidad, en un desconocimiento obligado de sus propios cuerpos, así como un poco en la estructura romántica de su amor (al hombre se le creen sus palabras elocuentes y hermosas); sin embargo, es totalmente claro que muchos de los posibles embarazos están, sobre todo, en la ausencia absoluta de servicios y métodos. Para todas, la maternidad es una D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

“posibilidad” futura. Afincada en la adultez y en la elección de pareja. Del mismo modo, para concluir el ejemplo, se reconoce que potenciando el explícito y gozoso erotismo no penetrativo que ellas proponen, pudieran evitarse infecciones y embarazos, así como prácticas sexuales no placenteras o abusivas.

La literatura permite la expresión y reflexión de las subjetividades, de las estructuras y construcciones simbólicas e invisibles; del mismo modo lo hace la conversación no disciplinar ni represiva.

De este modo entonces, tanto en los textos solitarios como en desarrollo del proceso, se pueden evidenciar las generalidades de la cultura presente en ellos y ellas, pero, sobre todo… y es éste un gran valor de la experiencia… las rupturas y particularidades que conforman un entramado muchísimo más complejo, rico y heterogéneo. Se veía, por ejemplo en el caso del erotismo o en la relación con las familias. Las rupturas que logran algunos hombres, a partir de sus historias personales, sobre la masculinidad patriarcal tan rígida. Las historias bastante significativas de presencia y solidaridad familiar, y la manera como marcan la escritura y la vida. En la investigación sobre sexualidad y derechos, además de las imprecisas generalizaciones (ya se ha generalizado lo suficiente en muchas áreas, otras a penas nacen –sexualidad masculina, 127 erotismo adolescente-) se trata de profundizar sobre universos particulares y rupturas que grupos sociales logran sobre la costumbre social. Conocer más sobre las dinámicas de poder, sobre las maneras como se logran ciertas transformaciones, sobre las estructuras materiales que favorecen la vivencia de los derechos y del placer.

Esta experiencia permite acceder a las particularidades más hondas y a las generalidades determinantes. ¡La literatura es así!

Finalmente, al favorecer y visibilizar el juego dinámico de subjetividad y objetividad, la experiencia desarrollada permite conocer a los sujetos sociales en universos relacionales. Es decir, no de manera aislada, sino en función de (con) los otros, el otro sexo, el mundo adulto, la intimidad, la clase social, los discursos debidos, los esfuerzos creativos, etc.. La mirada relacional favorece niveles de comprensión mayor, ya que permite acercarse a las movilidades de la identidad, por ejemplo, y a plantear hipótesis explicativas multicausales… como en verdad funciona la vida. La literatura no se centra en casillas forzadas por la lógica psicométrica, circula libremente por los diversos ámbitos del yo y toma de cada uno lo que cree que debe tomar para narrar, sentir, explicar…

Se conoce a los autores y a su contexto en la medida (y en tiempo real) en que se habla, se escribe, se ríe, se almuerza juntos, se visitan sus casas para pedir permiso, se discuten los sentimientos y se alaban las creaciones. Conocer, comprender, requiere tiempo y disposición, una voluntad ética que permita escuchar y respetar. 5 A R U T A R E T I L

“Si estas palabras te pudieran dar fe si esta armonía te ayudara a creer yo sería tan feliz tan feliz en el mundo que moriría arrodillado a tus pies... pero si insisto, yo sé muy bien que conseguiré” VIDA D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

5. LA LITERATURA Y LA VIDA –manifiesto y beso de despedida-

De y para la siempre amada Bocachica Gozoza –proyecto editorial-. Para las Vísceras y Bich@s Amig@s que la alimentan.

“Si estas palabras te pudieran dar fe si esta armonía te ayudara a creer yo sería tan feliz tan feliz en el mundo que moriría arrodillado a tus pies... pero si insisto, yo sé muy bien que conseguiré” Charly García, Cerca de la Revolución.

En Colombia el silencio y la muerte son valores estructurales de la moral tradicional y dominante. Crear es un pecado porque crear es desobedecer y, como decía el párroco de La Cuncia (corregimiento de Villavicencio), desobedecer es llevar dentro el espíritu del demonio. Los colombianos y colombianas, hijos e hijas de un país hacendatario y provincial, aprendimos que la creación y la disidencia nos lleva al juicio, a la exclusión y a la muerte. Entonces, acáhoy, crear y desobedecer es casi casi morir. Traición a la patria 129 en tiempos patrioteros.

Ésta nuestra, que comenzamos a llamar literatura gozoZa y libertaria y que, por supuesto, jamás llamaríamos La Literatura, cree que tiene la capacidad y la obligación de luchar contra la muerte, contra la pobreza, contra la mutilación del cuerpo y de la fe. La promoción de colectivos de creación y de reflexión literaria (que no se conviertan en círculos intelectualoides) en contextos no académicos, en grupos de personas vulneradas, puede constituirse en una ruta de evacuación del pozo séptico en el que nos ahogamos. Abrir el mundo, reconocerse y alimentar la capacidad de crear permite revalidar la existencia y la dignidad, construir maneras distintas de ser y de relacionarse, dudar sobre “la inefabilidad del Papa”, la divinidad de las confesiones de Agustín, las bondades del antiterrorismo y el placer de la dominación masculina.

La literatura de campo (como también la llama una víscera de bocachica), debe comenzar a ser reconocida y promovida por La Academia de Literatura, como un órgano básico para su existencia. Nadie vive mucho tiempo sin respirar. Nadie vive mucho tiempo y buena vida sin alimentarse. Tampoco lo hará el arte ni La Literatura. Es necesario que nuestros (colombianos) escritores y estudiosos se limpien los ojos de tanto ego y tanto trip para ver y escuchar las voces del mundo “inculto”. Para promover e interpretar la creación de quien no sabe que puede crear. Para llenar de vida viva los libros de letras muertas que compramos y vendemos en las librerías. Para que los críticos aprendan a ser realmente malpensantes y no idiotas útiles o publicistas de multinacional.

No es una confrontación lo que proponemos entre literatura “culta” y esta “literatura de campo”, es una complementariedad necesaria. Es un beso infecto. Es, sí, una lucha descarnada contra la injusticia, la estupidez, los egos asesinos y la exclusión. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

La academia, y los que nos dedicamos a escribir versos y ensayos, tendremos la obligación de generar métodos, categorías, conceptos, experiencias, estéticas y estrategias de difusión, que permitan la construcción de literaturas más incluyentes, inteligentes y útiles (y no me pesa usar esas palabras). No podemos permitirnos caer en de la autoreferencia, de los homenajes circulares, de la ceguera provocada por aquellos a quienes les ponemos las vendas. Ese círculo es la condena de mucho más que la literatura nacional. Es alimento para los programas que “ofrecen muerte y destrucción” a cambio de un puestito en la bolsa y un paseo en camioneta fina; es aromaterapia para los líderes asesinos, esclavos y esclavistas que nos rondan y gobiernan. Y luego de estos manchones de tinta no tendremos derecho de llamarnos inocentes… apolíticos, como les gusta a los artisticas posmodernos.

El arte, como la dignidad, es un cultivo frágil. Cultivos especiales que, con buen cuidado, superan cualquier problema del ambiente. Tallos y raíces capaces de recrear la tierra y las semillas. Al arte hay que regarlo, acariciarle las hojas, permitirle que se alimente del cuerpo de los antepasados, asistirlo en tiempos de crisis. No por el sueldo de los artistas (también), sí por lo que el arte hace en la vida de una nación. El arte como pauta de crianza, insisto, no como élite. Puede la dignidad romperse en cualquier momento, y en ella los esguinces se propagan con el viento. Un ejemplo pequeño: 130 Juanes es hoy en día, para los medios de comunicación y buena parte de nuestra esguinzada sociedad, el artista colombiano más sensible y activo frente a los gravísimos problemas sociales, políticos y militares que atravesamos. Tal es el tamaño de la mentira en la que vivimos; tal la ruta en la que caminamos a pasos agigantados.

Las formas más peligrosas del autoritarismo no provienen de las armas y el dolor; surgen de la tierra prometida, del establecimiento de la felicidad y, por supuesto, de la belleza. Comunitarismo. Literatura de auto-ayuda. Arte sin resistencia.

Ser literato de campo, escritor campero, gozoZo, es una forma de lucha política. Una demostración de amor por el arte en el que se vive. Una apuesta por el futuro y la dignidad. Un reconocimiento de la precariedad de los derechos propios y de la vulnerabilidad de los ajenos. Acción terapéutica egoísta: la construcción de una claraboya en la mitad del aire coagulado. Hacer literatura es mucho más que enlazar palabras y contar historias para satisfacer los pequeños gustos del editor de Soho o de Alfaguara. Hacer literatura es dudar, crear, luchar, existir…

Se ven en las aulas, los buses y las esquinas a los muchachitos angustiados preguntándose cómo harán para vivir de estos poemas que les escriben a sus novias. La pregunta viene, solamente, de quien puede optar (¿tendré con la literatura la posibilidad de comprarme la ropa que mi papá se compra?); los otro se lo preguntan cada día, con o sin literatura (¿será que hoy sí consigo pa’ un pedazo de carne o pa’ matricularme en el instituto técnico?). Filas interminables de sobres, papeles amarillos arrugados doblados pegados y marcados con el remitente de algún valiente que decidió creer que podía llamarse escritor; todos callados, guardando secretos innombrables, el alma o llena de esperanzas de algún mortal anónimo. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Del otro lado, el editor… o editora. Que ya conoce la rutina, que ya sabe por el olor o la tinta o el apellido o la dirección del remitente si vale o no la pena leer aquello.

Ya sabemos, en la lógica de mercado que vive Colombia (y el Mundo, según dicen), que no importa lo bueno o malo de una obra sino lo mucho o poco que pueda venderse. O lo mucho o poco que el autor(a) se haya acostado (o arrodillado, acuclillado o sentado) con (sobre, frente a, bajo) el editor o editora. Así funciona el sistema editorial. Se publica lo que se vende, se vende lo que se compra (no lo que se lee), se compra lo que se promociona, se promociona lo que seguro se va a vender… o lo que toca… o lo que es debido… A las casas editoriales, como a las grandes librerías –igual que a las grandes revistas-, no les interesa el arte, ni la dignidad ni el país. Sólo el dinero. Igual que con la salud. Si el hospital o la EPS no es rentable, se cierra… así para serlo tenga que dejar morir unos cuantos pacientes de alto costo. O de bajo costo.

De este modo, se entiende que parte de la lucha significa buscar alternativas nuevas (o viejas), para sobrevivir ante este sistema editorial. Para escribir y existir, para leer, para ser leídos, para compartir. Conseguir la leche pa’l bebé. Son esos los indicadores reales para la creatividad -de la que tanto nos preciamos los “artistas”-, no la combinación de soportes físicos sobre los cuales escribir o pintar o baliar, ni la manera como mezclamos 131 las palabras y rompemos los versos tradicionales…

¿Cómo se pueden generar circuitos de publicación y de distribución alternativos, no excluyentes? ¿Cómo se accede a la literatura vecinal, de campo, joven, anciana, grosera, inconveniente? ¿Cómo lograr que la literatura sirva para mantener o mejorar la calidad de vida, en términos económicos, sin renunciar a la autonomía y a la dignidad? En el sistema editorial se juegan cartas pesadas para la vitalidad del arte. Y para su aniquilación. Y, al igual que con los escritores y académicos, su inocencia ante la miseria y el futuro, no es una condición posible.

Exigimos de la academia la asunción de roles más activos y creativos con respecto a la manera como se relaciona con y se entiende al sistema editorial. No es posible que la fuerza y el poder del conocimiento y de la fe que circula por las universidades se quede en la lectura de fotocopias recién importadas. Es necesario que se movilice también hacia las estructuras económicas dominantes para que su aporte al mundo de la vida y al arte sea más real. Que promueva la investigación en estos campos; que exija respuestas, recursos y transformaciones de parte de las editoriales, revistas, distribuidoras y librerías. Que proponga la lectura abierta de letras nuevas y viejas.

No podemos evadir las responsabilidades políticas que tenemos al frente. No podemos seguir haciéndonos los tontos o los chistosos cuando miles de muchachitas están siendo abusadas por ancianos poderosos que como último sueño querían tener relaciones con una virgen. Decir que no es cierto es echarle la soga a alguien en el cuello. Sentir que no hay relación con la pobreza es robarle a éste el sueldo justo. Seguir creyendo que el arte y la literatura son un ejercicio de competencia meramente individual, no es sólo asesinar al arte y las posibilidades de alguien más, es estar poseído por la más nefasta y ridícula idiotez. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Estar acá, entonces, en este campo amplio y hermoso que llamamos arte y que estudiamos y gozamos, implica una responsabilidad política ineludible. Una responsabilidad ética como miembros de un colectivo que sin que le hayamos pedido permiso alimenta nuestras novelas, cuentos y poemas. No es la academia de literatura, ni de artes ni de ciencias sociales una escuela de militares, de asesinos, de empresarios hambrientos ni de abogados normálotras… no puede seguir siendo una escuela de eruditos para quienes el mundo crece, florece y se agota en los libros que los profesores recomiendan. Tiene que ser una escuela para la vida.

Escuelas capaces de entender que el arte y la política, como la política y la vida, son universos inseparables. Aulas plenas de creatividad estética y de reflexión ética. Conocimiento profundo de la individualidad creadora, de las turbulencias oníricas de un alma maldita y de las emociones humanas, y acercamiento visceral a la miseria provocada, al hambre, al abandono. Equipos de creadores y de investigadores capaces de entablar luchas decididas contra los que manosean y asesinan al arte y a las personas, capaces de reinventar el poder y no sólo de explicarlo citando a Focualt 30 años después o de evadirlo cabalgando alucinados sobre Baudrillard o Yajé.

La dignidad es un sentimiento que se cría. Y la literatura tiene la capacidad maravillosa 132 de ser huerto y proteína y lluvia y beso para los sentimientos. Aprendimos que nuestra dignidad, hoy como ayer, es un bien negociable, aburrido, denso. Un sentimiento que es mejor no tener, que da pereza. Porque, entre otras cosas, no hemos tenido literatura que nos lo alimente. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

6. Taller para la exploración y reconocimiento de subjetividades alrededor de la sexualidad y los derechos, con el uso de la literatura.

Fecha: Participantes: 15 adolescentes, hombres y mujeres, entre los 14 y los 19 años, que vivan en contextos de desplazamiento. Duración: Facilitador: José Miguel Nieto Olivar

1. OBJETIVOS

Objetivo General: Promover la exploración y el reconocimiento de las historias y subjetividades alrededor de la sexualidad y los derechos como punto de partida para la acción educativa, a partir de la movilización de lo sensorial, de la literatura como medio de autoencuentro y comunicación, y de la discusión grupal como mecanismo de reflexión y cohesión. 133

Objetivos específicos:

1. Realizar una exploración sensorial y de la memoria corporal para facilitar las vías de expresión y encuentro de las subjetividades en torno a la vivencia de la sexualidad y los derechos.

2. Llevar a cabo un proceso de producción de literatura de autorepresentación, como resultado de la exploración subjetiva y corporal, en el que la preocupación por la técnica (estilo, estética, redacción) y el contenido (subjetividad en sexualidad y derechos) sea creciente.

3. Lograr compartir, organizar y discutir los textos producidos por los y las participantes, tanto a nivel técnico como de contenidos.

4. Seleccionar participativamente los textos que conformarían el corpus teniendo en cuenta las discusiones previas, los avances individuales y la representatividad grupal.

5. Lograr que los y las participantes construyan sus propias conclusiones y apropien nuevos conocimientos a cerca de los temas desarrollados. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

2. METODOLOGÍA PREVISTA

Actividades por Objetivos en orden secuencial (idea preliminar):

Objetivo 1 2 4 5 7 8 Actividad Objetivo 1 Actividad de Contacto Observación Reflexión Conversatorio Acercamiento relajación y con el propio y contacto grupal, para la revisión subjetivo a mirada hacia cuerpo: a) con con el cuerpo encuentro conceptual y un tema (o adentro ojos cerrados del otro, de textos y contextual de experiencia) y vinculando reconocimiento experiencias. temas de ssr, particular: la memoria. b) de Conclusiones. sexualidad, dsr, a) guía de con espejos y sensaciones, a partir de 1.5 Preguntas para observación. de límites, etc.. profundización (incluye individual, b) reflexión por intercambio escrito -T1- y corporal y verbal si es sensorial. necesario) 134

Objetivo 2 3 6 9 11 13 14 Lectura crítica Primer Producción de Relectura y Lectura de En casa, (las lecturas acercamiento a dos nuevos revisión indi- textos literarios individual: críticas son textos literarios textos –implica vidual. Fuera canónicos de elaboración o voluntarias y canónicos una breve pre- del grupo y diversos temas, reelaboración pueden ser pertinentes sentación teó- con calma: épocas, estilos de textos anónimas) de –A1- rica de asuntos varios días. Se y autores. finales los T1, primera literarios-: solicitan: desde Comentarios. –TF-, según reelaboración uno automá- correciones Entrega de parámetros –T2- y puesta tico –T3- y el hasta reela- material -A2-. definidos en en común. segundo –T4- boraciones y conjunto.. con intenciona- producción de lidades claras nuevos textos y predefinidas –T#-. por cada cual (género, desti- no, tema).

Objetivo 3 3 10 12 15 Lectura crítica Lectura grupal Reencuentro: Entrega y (las lecturas crítica de T3 lectura de lectura de TF. críticas son y T4. textos T#, Organización y voluntarias y conversatorio comentarios. pueden ser sobre aspectos anónimas) de literarios los T1, primera y sobre reelaboración aspectos de la –T2- y puesta sexualidad. Y en común. la relación de ambos. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

Objetivo 4 0 15 16 Presentación Entrega y Consenso para de objetivos y lectura de TF. selección de metodología Organización y CORPUS según del proceso. comentarios. parámetros definidos. Objetivo 5 17 TRANSVERSAL Cierre con- ceptual y emocional de los temas y experiencias desarrolladas en el proceso. Autoafirmación de Derechos y construcción de pactos.

135 D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

3. MEMORIA DEL TALLER (por sesiones)

S Fecha Objetivo general Propuesta Desarrollo Resultados metodológica (logros/dificult) Insumos

1 5 de Presentación de la 1. Bienvenida El inicio de la actividad se Seducción y com- “Tu me marzo propuesta y presentación dio como estaba previsto. promiso decidido quieres 8-10am 1. Inducción general detallada de la Se le presentó al grupo por parte de los blanca” 11am- (primer acercamiento) propuesta. Se la propuesta, haciendo y las jóvenes del Alfonsina 1pm busca establecer claridad en la necesidad grupo. Storni. compromisos de comprometerse con un Mucho interés. fuertes a partir de proceso continuo, donde Contactos con sus la exposición de íbamos a leer sus textos y intimidades y de las características partes de sus vidas, donde estas vinculadas con y necesidades del se plantea la posible pu- un texto literario. taller. blicación de los textos y el Exploración de un 2. Exploración de trabajo de crítica literaria aspecto pequeño intereses alrede- desde la maestría de lite- de su historia sub- dor de los temas ratura, como parte de esta jetiva y expresión a DSR, sexualidad... tesis. partir de la escritura. y del acercamiento Posteriormente se expresa- a la literatura. ron sus intereses, preguntas, 3. Ejercicio de comentarios, etc... Algunos autocontacto de ellos y ellas expresaron 136 personal inicial, mucha ansiedad y deseo a partir de rela- de hacer parte del proce- jación y contacto so, otros fueron más bien físico individual, parcos y se unieron al sentir relacionado con general del grupo o no ex- sentimientos y presaron lo que pensaban. experiencias. En contravía a la propuesta 4. Producción de de esta primera sesión, que un texto íntimo a comenzaba con la explora- partir de la expe- ción interna y personal, se riencia. Lectura decidió, sobre la marcha personal de esos comenzar por el acerca- textos. miento más formal y exterior hacia la literatura, para poder ir abriendo caminos más propicios. La decisión estuvo dada por la distancia tan enorme que tienen ellos frente a la literatura, frente a la escritura... esto significa- ba, además, una dificultad grande de atención y con- centración para el hecho de escribir. Así, la primera ac- tividad formal del taller fue la lectura de “Tu me quieres blanca” de Alfonsina Storni. Se leyó varias, veces, por trozos, construyendo con ellos y ellas, poco a poco el sentido del poema... se evidenciaron vacíos grandes de comprensión de textos largos y de léxico, pero una gran capacidad para com- D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

prender el núcleo del poe- ma. El sentido mínimo. Posteriormente se vinculó este poema con la vida de la autora, se conversó sobre las razones por las cuales alguien escribiría un poema así y luego se les preguntó si ellos y ellas conocían hombres como los que se plantean en este poema... Se habló sobre eso, vin- culando el poema con su realidad. Fue este uno de los momentos más lindos de la sesión, ya que se ex- pusieron los puntos de vista al respecto y sirvió como detonante de acusaciones y de autorreflexiones... Luego hubo una visita ex- terna que implicó hacer un corte del taller. Posterior- mente se retomó haciendo 137 el ejercicio de relajación y retroceso a la infancia.... fue un poco difícil al principio por lo muchos ruidos del barrio y por cierta resis- tencia inicial de ellos para sumergirse... algunoas no lo hicieron. A partir de esto, proce- dieron a escribir un texto (cualquier texto) sobre cualquier cosa que quisie- ran vinculada al ejercicio que habíamos hecho... se hizo la claridad que ese texto no iba a ser leído en público ni por nadie si ellos así lo querían. Así fue. Durante más o menos 30 minutos (algunoas más) escribieron. Esos textos se los llevaron a sus casas con el compromiso de leerlos con cuidado y traerlos el siguiente sábado. Una vez terminada la sesión una niña, que había estado absolutamente silenciosa, se me acercó y me dijo más o menos que ella no había hablado porque no hubiera podido hacerlo sin llorar y sin ser absolutamente agresiva y rabona, porque ese poema le había defi- D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

nido perfectamente lo que era su novio (exnovio), que estaba allí presente... Que eso le hacía pensar que este taller le iba a gustar y le iba a ayudar a superar su mal de amor... (la historia del cierre de esta pareja se vivió entera en todo el taller y marcó en mucho la vida del grupo, muchos de los textos escritos por ella, sobretodo en las primeras sesiones, estuvieron referidos a esta historia).

2 12 de Releer y reelaborar los 1. Elaborar oral- La sesión comenzó como Se comienza a poner Diversos marzo 10 textos anteriores para mente lo sentido y estaba previsto. Se comenzó en juego sus histo- poemas del am – 2 ser presentados en vivido en la sesión a hablar sobre la sesión an- rias personales y sus libro “Diás- pm público. anterior. terior. Para muchos y muchas subjetividades, así pora” de Comenzar a explorar 2. Ampliar el cono- de ellas fue una experiencia como las relaciones Cristina Peri las formas y técnicas cimiento de textos agotadora, escribir sobre al interior del grupo. Rossi. literarias mínimas, al literarios de au- dolores profundos, traerlos al Se evidencian gran- “Carta a un tiempo que explorar torepresentación, presente, ponerles palabras des dolores relacio- zapatero 138 otras dimensiones de comenzar a encon- y nombres. nados con su niñez, que compu- su sexualidad. trar diferencias y Se leyeron algunos poemas con las violencias y so mal unos gustos. cortos de Cristina Peri Rossi, con los amores. zapatos” de 3. Reelaborar los tratando de construir algunas Comienza un pro- JJ Arreola. con el objeto de ser diferencias percibidas entre ceso muy lindo de “Te quiero leídos en público, el poema de la sesión pre- pulir el lenguaje y la burrita” a partir de las con- via y estos. Igualmente, se escritura. Raúl Gómez versaciones dadas conversó sobre los sentidos Producción de Jattin. en la actividad de aquellos poemas y la textos trabajados, anterior. relación con sus vidas parti- muy lindos, donde 4. Compartir los culares. Se aprovechó para se evidencian clara- textos y comentar plantear el problema del mente las influencias sobre lo escucha- lenguaje, de la economía y recientes, se espera do, tanto de fondo de la precisión en el lenguaje que al presentar como de forma. para expresar unas u otras muchas y trabajarlas 5. Comenzar la cosas. puedan ir adoptan- elaboración de las Posteriormente se les pidió do o adaptando sus Bitácoras indivi- que intentaran una versión propios lenguajes. duales que serán del texto anterior que la materia física quisieran leer al público. donde registrarán Algunas mujeres del grupo la experiencia. no quisieron hacerlo, el golpe emocional había sido muy fuerte. Se hizo apoyo. Otras personas aumentaron, otras pulieron elementos de la forma y otras, finalmente hicieron textos completa- mente distintos. La actividad siguiente, dadas las condiciones emocio- nales, consistió en escribir una carta a una persona o un grupo de personas que estuvieran vinculadas a los D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

sentimientos que habían surgido previamente. Esta carta podía ser de perdón, de reclamo, de gratitud, de re- cuerdo, etc... Tampoco iba a ser leída en público a menos que quisieran. Para facilitar un poco este ejercicio se les leyó “carta a un zapatero que compuso mal unos zapatos” de Arreola, y se les prometie- ron nuevas cartas. Luego las cartas se revisaron y potenciaron individualmente y ellos las compartieron con quienes quisieron. Para terminar y equilibrar un poco el ánimo del grupo, se les leyó un poema de Raúl Gómez Jattin (te quiero bu- rrita) y se les pidió que nom- braran una parte del cuerpo, cualquiera. Luego escribieron poemas dirigidos o inspira- 139 dos a esas partes del cuerpo. El ejercicio resultó bastante divertido e interesante. Fin de la sesión. Se dejó de tarea que avan- zaran en sus bitácoras y que pegaran en ellas los textos previamente escritos....

3 Abril 2 9 Enfocar el acercamien- 1. Trabajo conjunto Para el desarrollo de esta Esta sesión tuvo “A una am – to a los temas y las con una de las sesión se tenía previsto todo logros particular- vecina formas, desde la sensi- personas de Nacatsi el día y se pensó que sería mente interesantes, de buena bilidad individual. sobre los concep- óptimo realizarlo en un lugar por un lado, desde familia”, Trabajo de identidad, tos de mismidad y distinto al que se trabajaron la dinámica grupal, “Desen- desde los conceptos otredad las dos anteriores (casa de el trabajo sobre cuentros”, de otredad y mismidad 2. Ejercicio de auto- maryuri, una de las niñas la identidad y la “Ellos y al interior del grupo. reconocimoento, de del grupo), así que la ONG otredad fue exce- mi ser Fortalecer la conversa- pensarse así mismo pidió prestado un club... lente para cambiar Anónimo”, ción y discusión grupal a partir de otro sintraiss... se tenía previsto el la perspectiva del “Elogio de a la luz de los textos y no muy cercano, tema de identidad, desde la conflicto y construir los aluci- las temáticas. cmo disculpa para mismidad y la otredad, como alternativas con ellos nógenos”, Fortalecimiento de la el tema y para co- uno de los temas básicos y ellas. Por otro lado, “...Donde unidad grupal. menzar a intervenir de exploración... la sicóloga esta sesión fue un duerme sobre conflictos Alicia solicitó que ella quería punto de quiebre el doble grupales. hacer el taller sobre esos importantísimo para sexo...” y 3. Trabajo de forta- temas, de modo que se hizo la historia que edi- “Retrato”, lecimiento grupal a conjunto..... se aprovechó el son estaba viviendo de Raúl partir de la eviden- espacio y el tema para entrar con su abuela y con Gómez cia y agudización de a trabajar también sobre él mismo. Jattin. los conflictos, de las algunos problemas que había Desde una pers- diferencias y de las al interior del grupo...... tro- pectiva literaria similitudes peles, divisiones y agresiones obtuvimos un resul- 4. lectura y reflexión muy fuertes por razón del tado muy grande de algunos textos noviazgo terminado... y muy importante literarios, apoyos Bien, la sesión comenzó mal, y es fortalecer el individuales.... los pelaos llegaron tarde, vínculo que tiene D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

porque el club este si bien o que puede tener queda dentro del espacio en la literatura con la el que ellos se mueven, es un vida real y cotidiana poco alejado de sus casas..... de ellos... esta vez así que habíamos perdido desde sentimientos cerca de dos horas de taller como la rabia, el y tocó ajustarnos, adicional- odio, la desespe- mente el administrador del ranza, o situaciones club nos dijo que a la 1pm como el estigma.... había un partido de fútbol y almuerzo para la gente que venía... en resumen, que sólo podríamos trabajar hasta esa hora. Lo bueno: estuvieron todos los pela’os con muy buena disposición... Alicia comenzó a hablar y a explicar lo que implicaba y significaba el rollo de la iden- tidad desde la perspectiva ya plateada.... para representar- lo con más fuerza les pidió que, uno a uno, en una mis- ma hoja dibujaran la silueta 140 de su mano izquierda, una encima de la otra con mar- cadores de color distinto.... luego se reflexionó sobre lo que veían allí dibujado.... fue muy buena reflexión sobre la identidad, la igualdad, la diferencia, etc.... Posteriormente, les pedí que escogieran mentalmente a una persona del grupo... una a la que ellos no quisieran mucho, con la que tuvieran algún problema o que les cayera mal o no tan bien.... luego tenían que describir a esa persona en una hoja, y por eñl revés escribir, en dos columnas lo que los hacía iguales a esa persona y lo que los hacía diferentes.... finalmente, podía, los que quisieran escribir un pequeño poema sobre lo que habían descubierto..... el ejercicio de las columnas comparativas fue muy bueno, se eviden- ciaron, por un lado, todas las rabias y peleas.... y por otro lado, se evidenciaron, para ellos, también la complejidad de las personas y lo pare- cidos que podemos ser en muchas cosas a aquellos que nos caen mal..... Luego con D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

el ejercicio de los pequeños poemas, sólo unos cuantos hicieron el intento de escri- birlos y hubo par de cosas muy bonitas.... (que desafor- tunadamente se perdieron)... Finalmente hubo un ejercicio de reflexión grupal donde se discutió la tontería de esas peleas... ellos platearon que tenían que solucionarlas, que no tenían sentido... otros y otras simplemente guardaron silencio..... otros pidieron disculpas públicamente y un muchacho con mucho talento literario dijo: “yo aprendí que hasta del odio puede hacerse poesía”... refriéndose a los poemas que habían escrito... esa frase, que pude resultar tan boba y tan obvia dentro del mundo literario y dentro de 141 los canones... resultó ser un descubrimiento hermosísimo par él y para el grupo.... no sólo de las posibilidades de la literatura sino del derecho a expresar los sentimientos y a sentirlos...... Se leyeron algunos poe- mas de Jattin referidos a la identidad, al erotismo y a la rabia..... (ver títulos), y ver cómo desde el dolor y frente a la muerte, la literatura es ya creación... y esperanza y fuerza vital. Se tuvo que hacer un apoyo puntual y específico con un muchacho que venía teniendo problemas muy graves con su abuela... y depresiones muy hondas por problemas familiares que se evidenciaron todo el tiempo en el taller..... (el caso de edison es interesante en el transcurso de la totalidad de las sesiones) Con él se trabajo separada- mente para que escribiera sobre su abuela y sobre las motivaciones que tenía o no para suicidarse (venía hablando de que era su única opción). D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

4 Abril 9 Continuación del acer- 1. Iniciar la armada Sábado... viaje por avión... ¿Logros? Esta sesión no se hizo. camiento temático... a de las bitácoras, cuando llego a la reliquia fue realmente un Fragmento partir de construcción bajo el gusto de me encuentro con Alicia y desastre... no puedo de “Culina- de notas autobiográfi- cada cual Rubeily... me dicen que no identificar algún ria Poética”, cas y diarios. 2. Comenzar el pro- hay sesión porque los pelaos logro, a parte del di- de Erica Poemas con intencio- ceso de construc- tenían una inauguración de vertimento de ellos Jong. nes. ción de los diarios la sede de dame la mano.... y la ventana que se “Noctur- 3. Lograr un acer- y no trabajamos... nos fuimos abrió con el poema no”, de camiento reflexivo entonces con Alicia a hacer de Erica Jones. José Asun- a distintas formas visitas a las casas de algunos No se pudo hablar ción Silva. poéticas y algunas y a recorrer el ba- bastante a partir “Mi ramo rrio.... vuelve la depresión de de este poema, de flores siempre... por la noche llegó que hubiera sido para las lina, nos amamos largamente, bastante bueno, rameras”, dormimos deli y el domingo especialmente en el de Gonzalo se hizo una sesión chiqui- rol de una mujer ha- Arango. ta...... inicio diarios...... blando sobre esto y “Canonice- Leímos el poema “Culinaria desnudando su vida mos a las Poética” de Erica Jones, que sexual para ofrecer putas” de les encantó y a partir del cual una guía, divertida, Jaime Sabi- se reforzó el concepto de me- sobre el sexo. Pero nes. táfora... Se intentaba explorar y ahondar sobre el erotismo y sobre otros temas puntuales 142 de reflexión. Uno de esos era el tema de la prostituición y las diferentes miradas. Para esto, entonces, se leyeron dos poemas sobre prostitutas que representan visiones com- pletamente distintas (uno de Gonzalo Arango y el otro de Jaime Sabines) y se abrió la discusión y la reflexión, pero ellos no estaban muy conec- tados y se disolvió... Comenzó a llover. DESASTRE: diluvio..... se intentó leer Nocturno de José Asunción Silva pero por la lluvia no se logró.... ellos armaron su banda de música, nos reímos mucho..... jugaron un rato y luego almuerzo y chau...... Se hizo mucho énfasis en la construcción de los diarios, de hacer el intento de escribir to- das las noches, o los días... un ratico largo o corto, no impor- taba, pero tratar de escribir.... 5 Abril 16 Avanzar en la posi- 1. Rápida revisión Revisión de inicio de diarios, Un primer logro de “Elegía” bilidad autoreflexiva de avance de dia- muy marcados por el taller de esta sesión fue ver y “Poema presente en los diarios. rios, individual. Nara Meneses..... el interés un poco de Amor”, Revisar formas poé- 2. Revisión de lo Los pelaos estaban muy forzado, realmente, de María ticas. avanzado hasta acelerados, super dispersos, de ellos por hacer Mercedes Continuar con las ex- el momento, bús- inquietos.... yo estaba bastan- el diario... pero Carranza. ploraciones temáticas queda de huecos y te cansado y sin mucha posi- también el absoluto “Armisti- de sus subjetividades. pendientes bilidad de concentrarme..... desinterés de otros y cio”, de D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

3. Construcción no INTENTO DE TRINOMIO DE otras... Juan José intencionada de poe- AUTOREPRESENTACIÓN Sin embrago, a Arreola. mas y otros textos para Y FUE UN ROTUNDO FRA- pesar de pequeños “Alma lectura grupal. CASO... resultados puntuales desnuda” 4. Lectura de poemas La cosa se concentró más en (conocimiento de y “Dolor”, en verso, vínculo con leer y hablar sobre lo escu- otras formas poé- de Alfonsi- los autores y relectu- chado... para eso, entonces ticas, continuar el na Storni. ras... se vieron poemas de María acercamiento a la “Alfonsina y Mercedes Carranza, en lo metáfora, discusión el Mar”, de que se explora el asunto del sobre temas como el Ariel Ramí- amor, del erotismo, de la so- erotismo femenino, rez y Félix ledad.... y, por supuesto, las el amor como amor Luna. “Me metáforas (Elegía). Se conec- a sí mismo, etc..) alegro de tó de allí con Armisticio de logrados por inte- que el sol Arreola y con Sabines... para reses individuales, haya sali- ver las diferencias de senti- no logro tampoco do”, Jaime mientos... y se habló sobre identificar resultados Sabines. esto del amor y esas cosas..... importantes y con- Luego se retomó la lectura tundentes para el de los poemas en verso proceso general del (siguiendo un poco los in- taller. Estas dos se- tereses de algunos de ellos siones no resultaron -pájaro) y se leyó Nocturno, lo fuertes y contun- de Silva, despacio y muchas dentes que habrían 143 veces... para evidenciar la podido ser. rima y el contenido del poe- Decido entonces ma... también para explorar descansar un poco el asunto del amor romántico y revitalizar la cosa que muchos de ellos ex- para 4 sesiones que presan en sus poemas y las nos quedan. sutilezas y juegos del lengua- je para decir cosas simples. También se leyeron otros tipos de rima como los de la Storni (Dolor y Alma des- nuda)... en los que además se habló sobre la vida de la Storni, sobre el dolor, etc.... 6 Abril 23 Explorar el tema del 1. Revisión de la La sesión inicia con una El gran logro de esta “Culinaria erotismo, de las fanta- historia de las conversación sobre la puesta sesión fue demostrar Poética”, de sías, del goce. sesiones. en escena que tienen que la gran capacidad Erica Jong. Construir un espacio 2. Hablar sobre la presentar en 8 días... Algunos de creación literaria Fragmento de conversación sobre puesta en escena la tenían presente, otros no... que ellos tienen, así erótico de las puestas en escena que van a tener ya se habían evidenciado como la necesidad “Silencio”, que, paralelamente, que presentar 8 problemas graves en ella y al de alimentar y ejer- de José Mi- están preparando. días después. parecer no se habían asumido citar la imaginación, guel Nieto. 3. Tener un mo- con la suficiente fuerza, algu- la inteligencia y la mento reflexivo, nos de los participantes e han capacidad creadora... individual, para ido... entonces en general La manera como pensar sobre la los pela’os quedan un poco el ejercicio se hizo primera vez... asustados pero lo enfrentan consistió justamente sea imaginada, y ya... hay protestas sobre en presionar y buscar sea recordada, el papel del asesor de la el esfuerzo creador, no importa.... y ONG encargado del tema de y ellos respondieron escribir un poema teatro, porque no ha hecho perfectamente... relacionado. muy bien su trabajo... Se dice, Otro gran gran lo- finalmente, que eso significa gro fue la potencia que en 8 días no va a haber gigante del tema de sesión, y que la cosa continúa la primera vez como D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

dentro de 15 días... así, con- puerta de entrada a tando con la sesión perdida las construcciones en semana santa, más la de simbólicas de la hacía 15 días que práctica- sexualidad, del dere- mente no se había hecho (y cho y de sus historias sumándole yo internamente particulares.... que la anterior no había sido muy buena), había que reemplazar tres sesiones.... entonces después de esta, haríamos tres sesiones fina- les.... para pulir los textos, explorar otros temas, etc.. Una vez superado el asunto de la puesta en escena y todas aquellas cosas comen- zamos la sesión como tal.... el tema que me interesa explorar es el asunto de la primera vez, de la imagina- ción erótica, de los recuer- dos y contextos en los que sucedió su primera vez..... Así que tuvieron unos 144 minutos para hacer una introspección dirigida... hacia sensaciones, personas, momentos, etc... para luego intentar escribir un poema sobre algo o todo lo sentido y vivido... Aquí comenzaron una serie de ejercicios muy bonitos en los que se hacia reelaboración inmediata de los textos... en el que yo les pedía que abrieran más la puerta de sus sentimientos y emociones y que soltaran cada vez más el hilo de la cometa pa’ que volara y volara y no se quedara guar- dada en un garaje...... en- tonces ellos escribían y me mostraban y leíamos y yo les hacía comentarios y volvían a escribir y así hasta que ellos sintieran que listo, que la cosa ya estaba... volvía a aparecer el asunto de las metáforas.... fue una sesión muy linda porque ellos se esforzaron en conectarse más con su subjetividad, en dejar que la cosa fluyera quitando barreras.... Los poemas resultantes fueron luego leídos y comentados al interior del grupo.... resul- taron cosas superbonitas y D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

superduras (algunas perso- nas, mujeres, pidieron que no se leyeran los de ellas en público.... ) fue impresionan- te ver cómo estos poemas develaban perfectamente todo un universo simbólico presente y el contraste con la realidad.... (ya se hablará de esto...) muchos de estos poemas se perdieron... Por petición de ellos y ellas yo les conté sobre mi prime- ra vez y les leí un poema mí que está en Aleatoriedades (en SILENCIO) sobre cómo quería yo que fueran algunas cosas relacionadas con el sexo..... les gustó. Nos damos cuenta de que están botando los textos... las bitácoras... les pedimos entonces que no vayan a botar estas cosas y que por 145 favor ubiquen lo que está perdido y los vayan juntando. Me quedé con la sensación y el deseo de haber seguido dándole cuerda a este tema y a la escritura sobre él... me parece que es de los temas que más potencian la expre- sión, la discusión, la lectura de contextos... la observa- ción de las identidades y es un tema del que, además les encanta escribir... sea por chévere o por feo..... 7 Mayo 7 Explorar el tema de la Lectura de Adiós, (Edison, el muchacho que Al igual que la sesión “Adiós, Cor- violencia, de la guerra, Cordera. había planteado lo del suici- anterior, esta una dera”, de de la muerte, de los Escritura sobre las dio, aparece.... feliz, dice que de las sesiones más Leopoldo abandonos... sensaciones produ- quiere ser escritor y publicar bonitas del taller. Alas. “Carta cidas y conversa- un libro que si yo le voy a La elección de Adiós al padre”, ción sobre aquello. ayudar... le digo que sí, que Cordera fue super de Franz por supuesto, que es un tra- afortunada. El gran Kafka. bajo complicado y de escribir logro: remover, ex- mucho... dice que sí, que de presar y comenzar a una... se va y nunca vuelve). resolver asuntos tris- Ese día hay en la reliquia una tes de su historia, a brigada Cívico-militar del partir de la lectura de ejercito... cuando llego hay un cuento. Una vez en la cancha de fútbol una más, se evidencia la carpa con soldados payasos y potencia vital, sana- todo aquello y mucho mucho dora, re-creadora de camuflado y nos miran mal la literatura... y ellos y pero no dicen una palabra.... ellas lo reconocen. y cantidades de niñitos con cintas camufladas en la cabeza, balacas... y con las D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

caritas pintadas de verde y negro cogidos de las manos de sus papás y jugando a la guerra.... y yo me pregunto insistentemente si eso no es vincularlos a la guerra... y veo que no hay combates y me acuerdo que en la Reliquia habitan los paracos y que todo el mundo lo sabe.... qué curioso!!!!!!! Entonces llego al taller cargado de rabia.... trato de deshacerla pronto..... y les digo que les voy a leer un cuento superlindo, super triste, que yo sé que les va a encantar y que lo leo muy a propósito de la presencia de sus amigos del ejercito en la cancha de fútbol... y comien- zo... Les leo Adiós Cordera.... (la razón de leerle este cuento es que para mí, cuando lo leí, cada vez que lo leo, son ellos 146 quienes parecen en frente de las ojos... y se forma en mi estómago una sensación horrible... de fatalidad sin es- capatoria) cual abuelita leyén- doles historias a sus nietos.... todos los pela’os acostados en el piso y yo sentado en la mitad con semejante libro en las manos.... modulando la voz para lograr una interpreta- ción atractiva... sabiendo que a ellos se les vuela la cabeza facilito.... les pido que se concentren.,.. no están todos eso ayuda.... y ya la cosa se va bastante bastante bien.... les leo todo el cuento y les gusta.... al final se quedan en silencio un ratito... pensando, algunos con cara de afec- ción.... les pido entonces que sientan lo que ese cuento les genera.... que sientan muy adentro, en silencio, con los ojitos cerrados y que de una vez se vayan a escribir lo que salga, de la manera como salga, sin límite de forma ni nada...... Se quedan escribiendo un rato largo, super concen- trados, en silencio..... me acerco a algunos de ellos y ellas y están de verdad con- D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

gestionados... los toco, los acaricio.... sin palabras.... otros la resuelven simple..... no están mayormente afectados y era predecible porque lo que está saliendo en juego son sus historias vinculadas a la muerte al abandono, a la guerra etc.... Al final leemos algunas cosas, otras no, hablamos un poco sobre lo sentido... pero una vez terminan de escribir ya no quieren ha- blar mucho sobre el tema, eso me impresiona..... una de las niñas escribe su atroz historia con su padre... y le está escribiendo una carta y yo tengo a la mano a Kafka y se lo regalo... le cuento la historia y se lo regalo... y le pido que siga escribiendo esa carta con más y más 147 fuerza...... Nos damos cuenta que muchos textos se han per- dido... ese es un momento super triste para mí... me da mucha rabia...... mucha... interna, de camino a bo- gotá.... entonces con Alicia decidimos recoger de una vez estos trabajos últimos antes de que se pierdan de nuevo y devolvérselos después......

8 Mayo 14 Explorar el tema del 1. Leer las cartas La sesión comenzó con la Por razones de la Cartas I y V amor y los roles en las portuguesas... una definición de las tareas pen- suerte, esta sesión de las Cartas relaciones. selección y contar- dientes.... se prestó para tra- Portuguesas Explorar cartas. les la historia. Luego saqué el libro de las bajar con las niñas, de Sor Ma- 2. Hablar sobre el Cartas de Sor Mariana Alcan- sobre su construc- riana Alcan- amor, las relacio- forado, hubo poquitos parti- ción de feminidad forado. nes, los roles de cipantes, especialmente mu- y sobre las maneras los hombres y de jeres.... casi todas estuvieron, de vivir el amor. Y las mujeres en las de hombres sólo estuvieron sor Mariana logra relaciones. tres, luego llegó otro más.... una lección hermo- 3. Explorar un eso fue muy bonito para sísima, No Morirse poco las proyec- la lectura de estas cartas... de Amor. ciones de la vida porque fue como un espacio Sin embargo un adulta. de intimidad femenina... y de resultado es tam- pelea con los hombres...... bién la evidencia fue bonito y divertido.... leí- tan fuerte y tan mos las cartas entre varias... blindad de las yo las apoyaba... eso implicó construcciones de hacer varias lecturas y demo- género tan hondas rarnos una buena cantidad y tan tradicionales del tiempo sólo leyéndolas... que mantienen a D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

porque su nivel de lectura pesar de ciertos es increíblemente bajo.... el discursos y permi- de la mayoría.... y cuando sos externos... y la hablo de lectura no me vinculación de esas refiero a una lectura com- construcciones con pleja de interpretación o el contexto social reconocimiento de palabras y económico que complejas... sino a la simple tienen que vivir. encadenación de las síla- bas.... al desconocimiento de puntuación, etc.... Pero en fin, una vez leídas las cartas.... hablábamos sobre lo que sentían, si alguna vez habían sentido cosas así... y sobre todo, de cómo, a partir de la última carta, sor mariana es capaz de aban- donar sus sentimientos, de volverse a encontrar con ella y superar el abandono y la tragedia.... hacemos también una pequeña reflexión sobre el lenguaje 148 usado, sobre los cambos del lenguaje...... el asunto de las relaciones deriva en una confrontación de los hombres, del ser mujer, de lo que se espera de unas y otros, etc.... es interesante, muy interesante.... esa es una discusión que viene desde la primera sesión... Luego hablamos de cómo se ven ellos y ellas dentro de 10 años.... en dónde se ven, haciendo qué, con quién..... y se habla sobre el rollo de las familias, de las parejas, etc... y vuelve a ser impresionante la definición rígida de roles tradicionales de género... hay mucha dificultad para responder las preguntas de parte de las mujeres del grupo... mucha dificultad sobre todo para imaginarse la realidad o al menos jugar a la ficción..... muy difícil responder... en la mayoría de ellas.... se sen- tían un poco agredidas por esas preguntas, por tantas preguntas sobre porqués y entonces qué... y se entró como un rayo la evidencia otra vez de aquello de vivo mientras me consigo un D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

marido... es ese el objetivo, y aunque sé que todo esto las hace al menos pensar- lo... al menos pensar en en ellas y en otras opciones, pues la vida sigue por ahí y qué más van a hacer??? Y tienen acaso otras opciones reales??? Y algo ayuda a que no sea así????? y así que después de una intensa discusión sobre esto y sobre la probabilidad o no de sus deseos les pido que escriban una carta de ustedes en diez años dirigida a lo que son hoy en día...... a ver qué ha pasado, que tendrían que hacer, etc...... y así se cierra la sesión, con la lectura de estas cartas.... Salgo un poco en shock con el rollo del rol tradicional e inmutado de la feminidad... 149 es muy jodido.... claro, tam- bién el de los hombres, pero creo que ahí el sesgo me gana... y pienso que bueno, ellos se la juegan al mundo, crean, construyen son indi- viduos, finalmente...... tam- bién evaden y todo aque- llos.... y ellas todas (excepto una que me pareció sorpren- dente aunque no tanto) sólo se veían en función de un hombre y unos hijos... y si bien sé que eso no es malo... pues no deja de joderme un poco, no porque no sea esa una opción sino porque sabemos lo que en contextos como estos, como Colombia, lo que implica esa depen- dencia... por ahí entra el sida, la violencia de género... en fin... dolores infinitos..... Confirmamos que en 8 días es la última sesión y que por favor vengan y les digan a to- dos y todas que vengan......

9 Mayo 21 Sesión final. 1. Hablar sobre lo La sesión comenzó con la gra- Logramos hacer un “Hay un Un último ejercicio, sucedido en estos ta sorpresa, para mí, de verlos cierre bonito, con la modo…” cierre, lecturas, evalua- días. otra vez a todos y a todas... presencia de todos, de Jaime ción. 2. Escribir un último algunos que en las últimas se- con el reconocimien- Sabines texto muy en el or- siones no habían estado por to de los esfuerzos den del juego y del razones de unas actividades y logros generales ejercicio creativo programadas por los colegios del taller..... también D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

3. Escribir una los días sábados...... o por de los problemas carta de evalua- razones personales... o por que habíamos ción del taller cansancio ya del taller...... tenido..... Además completo. en fin... estuvieron casi to- se hizo un ejerci- dos/as. cio final bastante Una vez listos y listas co- digno de su capa- menzamos a hablar sobre lo cidad creadora y que había sido el taller para de su fuerza... otra ellos.... lo que significaba... vez darle cuerda a y lo que significaba también la imaginación y a para mí,.... y una vez repetí la inteligencia. que esta era la última sesión Las cartas de va- y hice un recuento de lo que luación del taller venía hacia delante; es decir: es otro logro de leer, seleccionar, organizar, la sesión, ya que analizar y, eventualmente, sin salirnos de las publicar..... formas usadas Hubo un rato de conversa- logramos desarro- ciones y de juego con los llar una evaluación que no habían estado en las que nos da infor- últimas veces.... y a ellos y a mación suficiente ellas se les entregó el paque- sobre ellos y sobre te de obras...... su percepción del Luego se hico el ejerció taller... por supues- 150 de las partes del cuerpo, to, es claro que de nuevo, preguntándoles finalmente ellos rápidamente, pero ahora, nos son personas vinculando esa parte del que por iniciativa cuerpo con una sensación propia se expresen que tenían que nombrar rá- mucho... y eso pidamente.... una sensación también se refleja o un sentimiento.... como en sus cartas. resultado de esto tenían que escribir un poema... un poe- ma en el que se vinculara, de cualquier manera, las dos palabras..... Lo que primero hicieron fue imaginar y escribir el vínculo más obvio que podría existir entre las dos palabras... de modo que terminaron rápi- do.... sin embargo les pedí (como en otras sesiones) que nos se conformaran con eso... que fueran capaces de pensar esa relación desde otro lugar... otra relación posible..... tuve que hacerlo uno por uno, trabajado y pensado con cada uno.... ayudándoles a romper las barreras tan fuertes que la “normalidad” construye... ayudándoles realmente a crear.... Así, se trabajo intensamen- te... algunos no lo hicieron, algunos realmente se permi- D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

tieron volar un poquito más alto y crear cosas distintas cada vez...... fue muy muy bonito...... Incluso hubo personas que no habían estado nunca, que sólo fueron a esa última sesión y también participaron del ejercicio con mucho entu- siasmo...... Una vez ellos y ellas en- tregaron sus creaciones, leímos algunas y pasamos a hacer la evaluación.... para esto les pasé una hoja en blanco y les pedí que por favor, tratando de ser lo más abiertos y extensos posi- bles escribieran una carta, a alguien conocido, en la que le contaban todo esto que había pasado durante el taller de literatura.... qué les parecía importante, qué 151 habían aprendido, qué les gustaba, etc...... así mismo, qué había pasado con la sexualidad de ellos y ellas en este tiempo...... si es que sentían que hubiera pasado algo.... algunos hicieron cartas super telegramáticas y les pedí que por favor las repitieran porque no servían para lo que se buscara... además porque sabía que era por pura pereza y no porque no tuvieran nada que decir..... así fue, algunos la s repitieron, otros son,.... otros prácticamente no las hicieron...... Luego se hizo un cierre en el que se explicó qué podría venir y cosas pendientes. D e . S e c r e t i t o s . y . C l a r a b o y a s

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