Palimpsestos Sonoros: Reflexiones Sobre La Nueva Canción Chilena
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Compiladores: Eileen Karmy Colección Ensayo y Martín Farías Palimpsestos SONOROS Estigmatización 14 ¿Rüf kan koyla illamtuchen? Palimpsestos Reflexiones sobre la Nueva Canción Chilena SONOROS Ismali Palma S Reflexiones sobre Canto de las estrellas: la Nueva Canción Chilena Un homenaje a Víctor Jara Moisés Chaparro, José Seves, y David Spener SONORO Colección Ensayo La balanza de poder Las razones del equilibrio SESTOS P Eileen Karmy Bolton del sistema internacional Nada más oportuno para titular un libro sobre Socióloga, música e investigadora. Ma- Sergio Rodríguez Gelfenstein la Nueva Canción que la palabra “palimpsesto” PALIM gíster en Artes mención Musicología de / –que se refiere a un manuscrito antiguo que la Universidad de Chile. Teología práctica de liberación conserva huellas de una escritura anterior bo- en el Chile de Salvador Allende rrada artificialmente– pues la importancia de artín Farías Yves Carrier la Nueva Canción en América Latina se debe, M en primera instancia, a ese carácter intertextual Las batallas por la Alameda con que ha vinculado tan diversas tradiciones. Consolidada bajo la tutela del gobierno socia- Arteria del Chile demoliberal lista de Salvador Allende, la Nueva Canción se hizo notoria como un movimiento artístico Francisco Marín Naritelli musical que pretendía acortar la brecha que separaba al arte de la política. Recogiendo las ex- periencias del folk norteamericano y las tradiciones musicales subalternas del subcontinente, Dónde está y para diversos cantautores y músicos chilenos viraron su interés hacia tradiciones sonoras rurales, ileen Karmy y E Eileen Karmy y Martín Farías dónde va nuestra salud en un trabajo cuasi arqueológico, para conformar un canto nuevo de esperanza, vinculado a Ilusionismo y verdad en salud. Chile 2010-2014 las aspiraciones libertarias de una tierra injustamente condenada al sacrificio. Carlos Montoya-Aguilar El libro que usted tiene en las manos, estimado lector o estimada lectora, reconsidera la Nue- va Canción como movimiento artístico musical, mas sin desmerecer el enorme significado Chile: por un nuevo político que ésta tuvo, factor indispensable para la creación de nuevos espacios sociales en Martin Farías Zúñiga modelo económico los cuales articular la resistencia, el imaginario chileno y el futuro del mundo. Compiladores: Músico e investigador. Magíster en Ar- Para una sociedad democrática, Celebro este libro que nos habla desde diversos puntos de vista de la Nueva Canción y de tes mención Musicología de la Univer- sus repercusiones en la música de ayer y en la que se está produciendo hoy, no sólo en Chile, Compiladores: solidaria y sustentable sidad de Chile. sino en muchas partes de nuestra tierra latinoamericana. Germán Urrea Julio Mendívil Center for World Music. Universidad de Hildesheim Colección Ensayo [email protected] www.ceiboproducciones.cl Palimpsestos Sonoros Reflexiones sobre la Nueva Canción Chilena (ensayo) Santiago de Chile, 2014 Palimpsestos Sonoros Reflexiones sobre la Nueva Canción Chilena Compiladores: Eileen Karmy y Martín Farías © Eileen Karmy y Martín Farías 1º edición, agosto 2014, Santiago-Chile Ceibo Ediciones Teléfono: 2-25020782 www.ceiboproducciones.cl Ilustración de portada: Sebastián Lillo Ávila Edición: Dauno Tótoro T. Diseño: Eugenia Prado B. Producción Editorial: Italo Retamal E. I.S.B.N.: 978-956-9071-84-3 Impreso por Productora ANDROS Ltda. Santiago de Chile, 2014 Prólogo Martín Farías y Eileen Karmy, dos jóvenes colegas a quienes tengo una grande estima, me han pedido que prologue el libro Pa- limpsestos sonoros: Reflexiones sobre la Nueva Canción Chilena, editado por ellos. Ha sido imposible que me negara a hacerlo. Siento una enor- me simpatía por los editores de este volumen; pero más allá de ello, tengo además una enorme deuda con la Nueva Canción Chilena. Así que, pese a convergir con Borges en lo tedioso que resultan los prólogos por obstruir el acceso directo del lector al texto, voy a aventurar algunas líneas, esperando que estas sean de provecho para quien inicia la lectura este compendio. Nada más oportuno para titular un libro sobre la Nueva Canción que la palabra “palimpsesto”, la cual, según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, se refiere a un manuscrito antiguo que conserva huellas de una escritura anterior borrada artificialmen- te. Intuyo aquí la sombra del filólogo francés Gerard Genette en la elección del término, pues, ya sea como “postexto” de formas musi- cales anteriores o como “pretexto” de experiencias más novedosas, la importancia de la Nueva Canción en América Latina se debe, en primera instancia, a ese carácter intertextual con que ha vinculado tan diversas tradiciones. ¿Qué es la Nueva Canción realmente? 7 Consolidada bajo la tutela del gobierno socialista de Salvador El libro que usted tiene en las manos, estimado lector o estimada Allende, la Nueva Canción se hizo notoria como un movimiento ar- lectora, reconsidera la Nueva Canción como movimiento artístico tístico musical que pretendía acortar la brecha que separaba al arte de musical, mas sin desmerecer el enorme significado político que ésta la política. Recogiendo las experiencias del folk norteamericano y las tuvo. Pero ¿cómo revalorar la Nueva Canción sin reducirla a sus tradiciones musicales subalternas del subcontinente, diversos cantau- connotaciones públicas? Los editores han tenido la idea feliz de re- tores y músicos chilenos viraron su interés hacia tradiciones sonoras currir al concepto de “palimpsesto” para intentarlo. Y lo han logra- rurales, en un trabajo cuasi arqueológico, para conformar un canto do con creces. ¿Qué se quiere significar al unir la Nueva Canción nuevo de esperanza, vinculado a las aspiraciones libertarias de una tie- Chilena con dicho vocablo? rra injustamente condenada al sacrificio. Ya aquí encontramos los ejes El concepto de palimpsesto, según Gerard Genette, manifiesta centrales de la propuesta con que irrumpió la Nueva Canción en el una relación de diálogo o interdependencia entre, al menos, dos tex- ambiente artístico del continente: una vuelta a las raíces, pero no para tos diferentes. Efectivamente, creo que la Nueva Canción construyó reproducirlas acríticamente, sino para proyectarlas hacia un futuro vínculos con movimientos artísticos musicales dentro y fuera de Chile inspirado en los vientos progresistas que se vivían en América Latina y que, por tanto, fue un factor indispensable para la creación de nue- desde el arribo de los legendarios barbudos a las calles de La Habana. vos espacios sociales en los cuales articular la resistencia, el imaginario Violeta Parra, Víctor Jara, Quilapayún, Inti-Illimani o Rolando Alar- chileno y el futuro del mundo. Como postexto, la Nueva Canción cón concibieron un canto renovador que, aunque diverso, se unificaba muestra, por ejemplo, una viva añoranza por un pasado musical man- en la terca utopía de un futuro igualitario y justiciero, un canto en el cillado por la opresión y, por tanto, propenso a la denuncia. Así, lo que confluyeron la denuncia, la sátira social y el canto esperanzador mapuche en Violeta Parra o lo andino en Inti-Illimani, se muestran que vislumbraba el mañana. como “pretextos” idóneos para crear un nuevo lenguaje musical con El mañana, sin embargo, fue nefasto. El golpe militar de Augusto afanes internacionalistas, mientras que en Quilapayún son los cantos Pinochet, sucedido el 11 de septiembre de 1973, y la inmolación de revolucionarios de la España republicana los que hacen de materia Víctor Jara en el Estadio Chile convirtieron a la Nueva Canción en el prima para la creación de nuevos lenguajes. canto de protesta, en la voz dolida de los chilenos en el exilio y en un Pero no se crea que es este el único tipo de diálogo que fomentó símbolo de la lucha por la libertad en América Latina y en el mundo. la Nueva Canción Chilena. Ya sea con Mercedes Sosa o Atahualpa Evidentemente, grupos como Quilapayún, Illapu o Inti-Illimani juga- Yupanqui en Argentina, con Chico Buarque y Milton Nascimento ron un rol primordial en la resistencia chilena del exilio, sobre todo en Brasil, con Daniel Viglietti o Alfredo Zitarrosa en Uruguay, o desde Europa, donde se habían afincado. La importancia de la Nueva con Silvio Rodríguez y Pablo Milanés en Cuba, la Nueva Canción Canción como movimiento, empero, no se restringe a su labor políti- se inspiró en e inspiró a numerosos grupos de cantautores y músi- ca contra la infausta dictadura de Pinochet. Por el contrario. No creo cos a lo largo de todo el continente americano. Dos aspectos se me aventurado afirmar que el éxito político de la Nueva Canción ha ido antojan como dignos de mención: la temática política, mas poética, en desmedro de su importancia como movimiento artístico, aunque de los textos y el apego a tradiciones musicales entendidas como en los últimos años la mirada académica haya centrado su atención subalternas. en éste. 8 9 Otro aporte de la Nueva Canción, musicalmente hablando, ha Se trataba de un grupo limeño tipo Kjarkas que volteaba la mirada sido su rol como pretexto para la conformación de un pop made hacia los Andes, pero a través de los lentes del país sureño: Vientos in Chile. De este modo, a partir de las tímidas experiencias de Los del Pueblo. No obstante, ese grupo cambió mi vida. Los grupos Blops, que acompañaron las grabaciones de Víctor Jara para su ál- latinoamericanos habían contribuido a una aceptación mayor de los bum El derecho de vivir en paz, se fue formando un sentimiento musi- instrumentos y géneros indígenas en contextos urbanos, abriendo cal progresista que más tarde permitiría a grupos como Los Jaivas y nuevos espacios para grupos más tradicionales. Yo, un muchacho Congreso incorporar en su repertorio instrumentos o formas musi- limeño clase media, no tardé en involucrarme con la Nueva Can- cales de los Andes o mapuche para producir música urbana subcul- ción Ayacuchana, un colectivo de artistas que rescataban el discurso tural en Santiago, Valparaíso o París. político de la Nueva Canción para denunciar, valiéndose de formas No menor han sido las escaramuzas libradas por la Nueva Can- musicales tradicionales como el huayno y el yaraví, las atrocidades ción en el terreno de la llamada música erudita.