NÚMERO MONOGRÁFICO CONMEMORATIVO DEL XIII CENTENARIO DEL DESEMBARCO ÁRABO-BEREBER DEL 711

Cierro y ventana en M» Antonia Toledo, 12

CIERROS Y BALCONES AljarandaAljaranda Año XXI Núm. 81 Segundo Trimestre. Junio 2011 aliados, el conde Julián y los parientes de Witiza, solo podían lograr sus respectivos objetivos mediante la derrota y derrocamiento del rey Rodrigo. Y resulta también claro que esto solo sería posible tras los asedios y tomas de la ciudad Aljaranda 81 (2011) de Córdoba (capital de la Bética) y de Toledo (capital del estado visigodo). La simple observación del mapa físico de la Península Ibérica nos descubre de forma inmediata que la única vía posible de penetración de las tropas de Tarik hacia esos objetivos habría de ser a través del valle del Guadalquivir. Las sierras béticas y penibéticas eran obstáculos insalvables para un rápido avance por cualquier trayecto diferente.

De hecho, tras la victoria de los árabes XIII Centenario desembarco árabo-bereber y sus aliados en la batalla de la laguna de la Janda, los soldados de Tarik fueron conquistando sucesivamente las poblaciones de Medina Sidonia, Morón, Carmona, Sevilla, Écija y finalmente Córdoba y Toledo. Surge por tanto la hipótesis de que, una vez realizado el desembarco inicial en Gibraltar, lugar de fácil defensa, y dominada la situación en el entorno de la bahía, se produjeran nuevos desembarcos - durante los meses de junio y julio del 711- en los caladeros de (lugar ya conocido por haber sido invadido y saqueado por Tarif ibn Mallik en julio del 710) o de la ensenada de Barbate. En estos desembarcos habrían llegado los 5.000 soldados enviados como refuerzo por el emir Musa. Además, conocida y demostrada la Imagen 2.- Busto de Muza en Tudela. penetración de las tropas árabes victoriosas por el valle del Guadalquivir, varios argumentos pueden apoyar esta idea de los desembarcos en Tarifa y Barbate: por un monte llamado después Yébel Tarik, 1.- El grueso de la tropas invasoras situado entre Ceuta y España. procedía de Tánger. Por los muchos años transcurridos entre 2.- El lugar donde acamparon las tropas los hechos y su relato, parece evidente que ambas árabes, previamente a la decisiva batalla contra crónicas y las que posteriormente se escribieron, las fuerzas del rey Rodrigo, fue la orilla sur de resultaron imprecisas, cuando no contradictorias, la laguna de la Janda, zona muy cercana y de respecto a los detalles de la invasión. Datos tales fácil comunicación con los indicados puertos o como el número de soldados y caballos caladeros naturales de Tarifa y Barbate. transportados, la clase y número de las 3.- La aceptación posible de lo expuesto embarcaciones utilizadas, los puertos de ayudaría a despejar los actuales puntos difíciles desembarco, la duración de las travesías y los y oscuros que se presentan al tratar de explicar días empleados, las fechas reales de cada satisfactoriamente la versión más aceptada de situación, etc. fueron obviados o reflejados solo que la invasión pudo realizarse por Gibraltar con de forma aproximada y poco fidedigna por tanto. solo cuatro embarcaciones de comercio. La deseada y rigurosa reconstrucción de la 4.- Es posible reforzar los supuestos invasión árabe de las tierras hispánicas en el año anteriores si se tiene en cuenta que la primera 711, un muy interesante y decisivo episodio de crónica que se refiere a la invasión árabe de la nuestra historia, puede decirse que no será Península – la llamada Crónica mozárabe – se empeño fácil. escribió en el año 754, pasados 43 años desde que los hechos ocurrieron. En la misma no se menciona ningún lugar de desembarco. J. Cestino es autor de los libros “ESTRECHO La siguiente crónica escrita en el año 860 por DE GIBRALTAR- Costas y Ciudades” y Ibn Abd al-Hakam describe el paso del Estrecho “EL ESTRECHO- Treinta siglos de Historia en Gibraltar, Tánger, Tarifa, Ceuta y

2 67 Sumario Aljaranda número 81 segundo trimestre 2011

4 Presentación Carlos Ruiz-Bravo ALJARANDA: número extraordinario monográfico conmemorativo del XIII Centenario del desembarco árabo- bereber en la costa del Campo de Gibraltar. Revista de Estudios Tarifeños 6 Prólogo ALJARANDA Año XXI - Número 81 - 2º trimestre Wenceslao Segura González Junio de 2011 Prólogo monográfico de ALJARANDA. Edita Servicio de Publicaciones del 8 Excmo. Ayuntamiento de Tarifa. María Jesús Viguera Molins Delegación Municipal de Cultura. La conquista de al-Andalus según Ibn al-Qutiyya (siglo X).

Consejo de Redacción Juan Andrés Gil García 14 Manuel Reiné Jiménez José Beneroso Santos Manuel Liaño Rivera Breve análisis del embarque y del desembarco de los árabo- bereberes de Tariq Ibn-Ziyad en la península Ibérica en Carlos Ruiz Bravo 711. Francisco Ruiz Giráldez Francisco Terán Reyes 28 Mari Carmen Tizón Bernabé Esther Sánchez Medina Comité científico Reflexiones en torno al 711 José Antonio Castillo Rodríguez Problemas, metodologías y posibles avances. José Carlos García Gómez 37 Iván García Jiménez Víctor Heredia Flores Enrique Gozalves Cravioto Juan Antonio Martín Ruiz El paso del Estrecho:las fuentes. Virgilio Martínez Enamorado Alejandro Pérez-Malumbres Landa 43 José Ramos Muñoz. Ángel J. Sáez Rodríguez Coordinación, ¡Allah akbar! La conquista del paraíso. Distribución y suscripciones Delegación Municipal de Cultura [email protected] 54 Dirección postal José Luis Gómez Barceló Aljaranda La aventura transfretana del 711. Casa de la Cultura C/Amor de Dios, 3 11380 Tarifa 56 Tfno. 956 68 46 89 Manuel López Fernández Dirección electrónica Aproximación al desembarco beréber en Gibraltar el año [email protected] 711. Edición digital 64 www.aytotarifa.com Joaquín Cestino Depósito legal Comentarios a diversas cuestiones relativas a la invasión CA-157/91 árabe del año 711. ISSN 1130-7986 Imprime La Portada Tipografía La Nueva S. C.A. Manuel Reiné nos ilustra la portada de este número con un Arapiles, 11 - 11380 Tarifa dibujo donde se recrea la llegada del ejército árabo-bereber a nuestras costas.

3 Aljaranda 81 (2011) PRESENTACIÓN

Imagen 1.- Gumia árabe.

ALJARANDA: número extraordinario monográfico conmemorativo del XIII Centenario del desembarco árabo-bereber en la costa del Campo de Gibraltar

Carlos Ruiz-Bravo

rimavera-verano del año 711. Un ejército embarque como de desembarque. formado por guerreros norteafricanos, Ni cómo cruzó la fuerza expedicionaria P dirigido por oficiales árabes y acaudillado el Estrecho. Ni qué barcos utilizó. ¿Cuántas por el walí Tarik Ibn Ziyad irrumpió por sorpresa oleadas y viajes de ida y vuelta hicieron falta? en una estrecha banda de la costa más meridional ¿Con qué resistencia nativa se topó?. de la península Ibérica. Fue el origen de una Muy singular y curiosamente, en la primavera- invasión militar que se hizo trascendente en la verano del 2011 confluyen cuatro circunstancias historia de la futura España. especiales: Tanto la fulgurante expansion previa 1»--se cumple el XIII Centenario del desembarco, islámica por el norte de Africa como la fogosa 2»--Tarifa ocupa geoestratégicamente una muy situación política reinante en el Magreb en el clara ubicación en la banda de costa que recibió 711 que pudieron propiciar las ansias de invadir el desembarco, 3ª--la implicación que Tarifa Hispania, son tratadas en este número tiene en la Historia Medieval del Estrecho conmemorativo de ALJARANDA con gran siempre ha tenido un valioso órgano de expresión: autoridad histórica. la revista de estudios tarifeños ALJARANDA Y se produjo el desembarco de un ejército y 4ª--una reactivación de la vieja inquietud de invasor que inició una conquista,. la cual está los historiadores por dar rigor a la narración del ampliamente descrita y pormenorizada en desembarco conque se inició la invasión del 711 multitud de libros, documentos, crónicas y y de su porqué. artículos de Historia de España. La consideracion de todo el anterior No ocurre lo mismo con el suceso estricto planteamiento nos lleva de la mano, y de forma y concreto con el que se inició la invasión casi ineludible, a conmemorar el 1.300 islámica. Las crónicas y libros de historia se aniversario del desembarco del 711 publicando limitan simplemente a consignar de forma un número extraordinario de ALJARANDA que lacónica el desembarco de un ejército que cruzó recoja y analice los pormenores de este suceso el Estrecho y que procedía del Norte de y el clima que lo propició. La publicación Africa.Una laguna histórica envuelve de esta edición monográfica tiene una desconcertantemente este lance tan trascendente intencionalidad muy bien definida: por un lado, y caracterizado. Efectivamente, no hay establecer Ðen la medida de lo posible,-- certeza unanimidad sobre la composición de los efectivos y rigor histórico en aquellos datos que, a fecha desembarcados, ni sobre los puntos tanto de de hoy, todavía no tienen definición concreta; y

4 por otro, emitir hipótesis sólidamente y prestigioso grupo de historiadores, expertos en fundamentadas sobre aquellas cuestiones que, el tema, para que analicen y den contestación a por falta de referencias y suficientes estudios, las citadas cuestiones. Sus versiones personales, se resisten a la concreción histórica. Tiempo cordialmente agradecidas por ALJARANDA, habrá para contrastar las diferentes versiones e dan contenido a este número extraordinario de hipótesis emitidas. la revista al rememorar y recrear, dejándolo más La presente propuesta para conmemorar definido, un suceso que trasladó su relevancia el XIII Centenario del desembarco musulmán en la historia del Estrecho y de la costa del en España conlleva la invitación a un reducido Campo de Gibraltar a la Historia de España. Aljaranda 81 (2011) PRESENTACIÓN

Imagen 2.- Destinos y distancias de las posibles travesías.

ALJARANDA en Internet En la dirección http://www.aytotarifa.com pueden consultar todos los ejemplares publicados hasta ahora de la revista, además de otras actividades e información de la Concejalía de Cultura.

ALJARANDA es una revista abierta a cuantas personas dedican parte de su tiempo al estudio del municipio de Tarifa en sus más diversas vertientes: Historia, Geografía, Patrimonio, Arte, Tradiciones, Creación literaria y otros. Los artículos pueden ser remitidos al Consejo de Redacción bien por correo postal (Revista Aljaranda Excmo. Ayuntamiento de Tarifa. Calle Amor de Dios, 3 11380 Tarifa) o electrónico ([email protected]).

5 PRÓLOGO 6 Aljaranda 81 (2011) 1 6 5 4 3 2 3 2 1 SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: “Elcomienzodelaconquistamusulmana deEspaña”,AlQantir11 (2011) 92-1 Historia 10(1984)21-74. SÁNCHEZ ALBORNOZ, Claudio:“ItinerariosdelaconquistaEspañapor los musulmanes”,Cuadernosde Contrasta estedispersiónde fechasconlaunanimidadsobrefechaenquedesembarcó Tarif: juliode710. con al-Yazira alJadrasignificanlacomarcadel nortedelEstrechoynosololapoblaciónde Algeciras, continentales. Añadir que enlosprimerosautoresárabesquetratandelaconquista de España,parecemásbienque no hacenreferenciaalasislas quehayfrenteasuscostas(isldelasPalomaseisla Verde) sinoalaspoblaciones confuso, porque Tarifa noes unaisla,comotampocoloesal-Yazira alJadra(Isla Verde, Algeciras). Estosnombres Tarifa fueconocidadurante ladominaciónmusulmanacomo Yazirat Tarif (Islade Tarif). Unnombreuntanto 11 (2011) 36-55. UnabiografíadeestepersonajeseencuentraenSEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: “Tarif ibnMallik”,AlQantir du Maghreb etdel'Espagne,traducciónE.Fagnan, Alger, 1989,p.33. PareceserqueelprimerdesembarcomusulmánenEspaña fueenMallorcaelaño707,IBN AL-ATHIR, Annales de abrilafinalesjulio,aunquelamayoría dan muchasotrasfechas,quevandesdefinales de abrildelaño711. Peroloshistoriadores árabes probable paraeldesembarcode Tariq esafinales TARIFA2010. organizada porlaasociaciónProyecto culturales apoyaronestaefeméride,quefue a laciudad. Tampoco lasadministraciones ibn Mallikal-Maafiri,personajequedionombre musulmana alaPenínsulacapitaneadapor Tarif mil trecientosañosdelaprimeraincursión de Tariq ibnZiyad. número monográficodedicadoaldesembarco estudios tarifeñosALJARANDA deeditareste acoge conagradoladecisiónderevista parte delasautoridadesculturales.Porestose nacional, noharecibidoatenciónalgunapor acontecimientos másimportantesdelahistoria deEspaña. Aún siendounodelos E comienzodeladominaciónmusulmana Prólogo monográficode ALJARANDA Imagen 1.-Ejército musulmán. Wenceslao SeguraGonzález La fechaqueseapuntacomomás En el2010seconmemoróen Tarifa los ste añosecumplentrecesiglosdel 4,5 conocimiento delgobernadordeIfriquiya,oal bereberes de Tariq, queparecefuerealizadosin fortuita, resultadodeldesembarcodelos dan aentenderquelaconquistadeEspañafue aún sinpretenderlo,lasantiguascrónicasárabes bereberes. protagonismo árabeendetrimentodelos intención manipuladora,tratandoderealzarel historia musulmana,quemuestraunaclara Ziyad. Al menosestoesloquenoshatrasmitidola destacamento tangerinoqueacaudillaba Tariq ibn programaron laconquista,utilizandoparaelloel los árabes,encabezadosporMusaibnNusair, profundidad. Todo sehaquedadoenconsiderarque musulmana nohansidotratadosconladebida Los primerosmomentosdelainvasión dado piealaedicióndeestemonográfico. año 1.300posterioraesteepisodio,loqueha mayo aproximadamente).Estamospues,enel dan enelmesderajab(del24abrilal23 6 Ya hemosseñaladoenotrolugarque, 8 7 8 7 por losbereberesde Tariq, SAAVEDRA, Eduardo:Estudiosobre lainvasión árabedeEspaña,1892. municipio de Tarifa, paraimpedirquelastropasvisigodas alcanzasenlabahíade Algeciras, tierrayaconquistada batalla delSalado,loqueapunta hacialateoríadeque,haberocurrido,elenfrentamiento habríasidoenel conquista musulmanadeEspaña”, ob.cit. También hemos notadoelparecidoentrelabatalladelGuadalete y la a producirseconsecuencia de ladeserciónenelejércitovisigodo, Wenceslao Segura González,“Elcomienzodela Almoraima 36(2008)129-137.Nosotros hemos apuntadonuestrasospechadequelabatalla delGuadaletenollegó entrada delosarabo-bereberes enlapenínsulaibéricaelaño711: hipótesis,ucronía, yrealidadhistórica”, Beneroso apuntaquelabatallaseprodujoenbahía de Algeciras, BENEROSOSANTOS, José:“Acercadela Actas delICongreso InternacionaldelEstrecho deGibraltar,Madrid-Ceuta,1988,tomoII,pp.73-99.José BERNABÉSALGUEIRO, Alberto: “LabatalladelGuadalete, aproximaciónasurealidadhistóricayarqueológica”, la invasiónárabedeEspaña,AlQantir10(2009)1-135. de EstudiosRiojanos,1995,pp.35-50.Pornuestraparte hemosreunidolascrónicascristianasyárabesen“Iniciode establecimiento delosmusulmanesenSpaniaÐ Al-Andalus”, V SemanadeestudiosmedievalesNájera,Instituto Unanálisisdelascrónicasárabesquenosinteresan seencuentraen VIGUERA MOLINS,MaríaJesús:“El mil trescientosaños. que ocurrióennuestratierrahaceahoraexactamente de ALJARANDA, contribuyendoaesclarecerlo hacen suaportaciónenestenúmeroextraordinario Sánchez Medina,JoséBenerosoyJoaquínCestino, Luis GómezBarceló,MaríaJesús Vigueras, Esther Ángel Sáez,EnriqueGozálbes,ManuelLópez,José historia denuestracomarcay Tarifa enparticular. historiadores, buenosconocedorestodosellosdela de losasuntosqueanalizanochoprestigiosos Ceuta, lasituacióndelreinovisigodo,sonalgunos la operacióndeldesembarco,elprotagonismode que sehandesarrolladoenellitoralnortedelEstrecho. a unodelosepisodiosmassignificaciónhistórica componen estemonográfico,queaportannuevaluz A cubrirestevacíoapuntanlosochoartículosque prefiere delaconquista)esuntemahistóricoabierto. que losprimerosmomentosdelainvasión(osise militar paraaveriguarellugardondeseprodujo. conmemoramos, dondesehautilizadolalógica batalla delGuadalete,quetambiénesteaño ahora trecesiglos.Estoesloquehapasadoconla vean obligadosaespecularsobreloqueocurrióhace tendrá queseguirsiendo,loshistoriadoresse escribieron unsiglodespués.Hasidohabitual,ylo son escasasylasprimerascrónicasárabesse análisis deliniciodelainvasión.Lasfuenteshistóricas en laconquistadeuninmensoreino. envergadura quelade Tarif, terminaraconvirtiéndose tal vezsolopretendíaserunaalgaradademayor reino visigodocontribuyóaqueunaoperaciónque, menos sinsuapoyoexplícito.Ladebilidaddel dificultad enelanálisisdelinicio Los historiadoresencuentran El estudiodelasfuentes,losmediosnavales, Lo queacabamosdeexponernosmuestra Los historiadoresencuentrandificultadenel de lainvasión Imagen 2.-Guerrero magrebí. Wikipedia. 7 PRÓLOGO Aljaranda 81 (2011) Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Alfanje árabe.

La conquista de al-Andalus según Ibn al-Qutiyya (siglo X)

María Jesús Viguera Molins

uentes sobre la conquista de al-Andalus. de los avances del conocimiento histórico e Sobre la conquista de al-Andalus no historiográfico. F carecemos de noticias en las fuentes Entre las fuentes árabes relativas a la musulmanas y cristianas, aunque tales noticias conquista, me he ocupado en ocasiones1 de las suelen ser incompletas, contradictorias, y aportaciones y situación de las crónicas, tipo de desfiguradas por intereses personales o fuente textual muy definido dentro del ámbito colectivos, muchas veces producidos desde filtros araboislámico, y que en modo alguno son ni se ideológicos, con recursos a tópicos y leyendas consideran como exclusivas canteras informativas, que cada bando forjó por propaganda, estrategia, pues las noticias de la expansión islámica no sólo justificación... Entre lo así reunido, apenas los se hallan, como bien se sabe, en tales Crónicas, datos llegan a responder sobre cómo ocurrió la sino en obras geográficas (por citar algunos conquista, y quedan por esclarecer cuestiones geógrafos, que ofrecen importantes testimonios de tiempo y espacio, de personalidad, intención, sobre el tema de la expansión islámica: Ibn jerarquía y actuación de los protagonistas, o su Jurradbih, al-Yacqubi, y al-Bakri, por no alargar número y proporción, en cuántos casos más la lista, siendo tan interesantes las referencias dominaron por las armas o por pacto, cómo escuetas de los más antiguos, como un reflejo de establecieron su Estado y se relacionaron con la cronística del s. IX2); jurídicas (recordemos las los autóctonos... observaciones de R. Brunschvig acerca de la Ante esta situación, un recurso notable presencia de lo jurídico en aquellos considerable es el del análisis de las fuentes episodios y en su elaboración3; o los tratados de disponibles para nuestro conocimiento, volviendo la organización fiscal de la expansión, y entre a editar y traducir las que lo requieren a partir ellos toda la serie de kutub al-amwal y de kutub al-

1 VIGUERA MOLINS María Jesús , “Fuentes árabes para el estudio de al-Andalus”, Xelb 9 “O Gharb no al-Andalus: sínteses e perspectivas de estudo” ( 2010) 29-37;. GARCÍA MORENO L. A y. VIGUERA MOLINS M. J, eds.: Del Nilo al Ebro. I. Estudios sobre las fuentes de la conquista islámica, Alcalá de Henares, 2010. 2 CORNU G. , "Les géographes orientaux des IXe et Xe siècles et al-Andalus", Sharq al-Andalus III (l986) ll-l8. c 3 BRUNSCHVIG Robert, "Ibn Abd al-Hakam et la conquête de l'Afrique du Nord par les Arabes. Étude critique", Annales de l'Institut d'Études Orientales d'Alger VI (l942-l947),lO8-l55; Al-Andalus XL (l975) l29-l79.

8 jaray4); los repertorios biográficos (con obras contribuciones sucesivas de la investigación, tan informativas sobre nuestro tema como las de bien planteadas tanto en el marco general de la Ibn Harit al-Jus anî, Ibn al-Faradi, al-Maliki y historia de España en el siglo VIII7, como en el al-Dabbag5); o de bellas letras (en las que los marco concreto relativo a Ibn al-Qutiyya, su episodios de la expansión se adornan con las familia de ilustres antepasados, entre ellos los Aljaranda 81 (2011) galas literarias, no exentas de la habitual carga witizanos, y su personalidad cultural, carácter y ideológica, tan notable6). situación de su obra histórica8, acerca de este característico sabio andalusí, nacido quizás en Sevilla o ya en Córdoba, en la última decena seguramente del siglo IX, y que murió en Córdoba en 367 de la Hégira 977 d. C. Los hechos referidos por En mi siguiente traducción, entre Ibn al-Qutiyya se corchetes numero y doy título a los epígrafes encuentran contrastados y relativos con los sucesivos temas que aparecen en esta obra de Ibn al-Qutiyya, la “Historia de aprovechados por la conquista de España”, obra así llamada, aunque XIII Centenario desembarco árabo-bereber contribuciones sucesivas sólo dedique sus primeras páginas a esa de la investigación

Ante tan amplio panorama, prefiero centrarme ahora en ofrecer mi traducción de los pasajes de esta conocida “compilación de noticias” que tratan sobre la conquista de al- Andalus, compilación seguramente puesta por escrito a mediados del siglo X, a la que se aplica el título de “Historia de la conquista de al- Andalus” (Tarij Iftitah al-Andalus), recogiendo transmisiones procedentes del gramático, poeta y narrador Muhammad Ibn al-Qutiyya: (“el hijo de la Goda”) Abu Bakr b. cUmar b. cAbd al- cAziz b. Ibrahim b. cIsa b. Muzahim, que llevó también -como algunos de sus antecesores y descendientes- ese apelativo de el hijo de la Goda, otorgado a los hijos del primer matrimonio de Sara la Goda (al-Qutiyya) con cIsa b. Muzahim (m. 136 H./755 d. C.), en principio para distinguirlos de la descendencia de Sara y su segundo marido. Los hechos referidos por Ibn al-Qutiyya Imagen 2.- Cerámica árabe encontrada en Tarifa. Foto A. Pérez se encuentran contrastados y aprovechados por Malumbres.

4 Muy bien inventariados por Muhammad cImarat en su estudio introductorio a su edición del Kitab al-amwal de Abu cUbayd al-Qasim b. Sallam, Beirut, l989, pp. lO-l6. 5 ˇ Como el libro de al-Jusani, Ajbar al-fuqaha' wa-l-muadditin (Historia de los alfaquíes y tradicionistas de al-Andalus), ed. M». Luisa Avila y Luis Molina, Madrid, l992. 6 Significativo es que hazañas de la expansión islámica lleguen a la literatura popular, y que el nombre de Musà b. Nusayr, por ejemplo, se aplique a un héroe de Las Mil y Una Noches : Mia I. Gerhardt, The Art of Story-Telling, Leiden, l963, l98-235; y sobre la literaturización del tema, en general: Mahmud cAli Makki, "al-Asatir wa-l-hikayat al-sacbiyya al- mutacalliqa bi-fath al-Andalus" [ãLas leyendas y relatos populares relativas a la conquista de al-Andalus¥], Revista del Instituto Egipcio de Estudios Islámicos en Madrid XXIII (l985-6) 27-5O; RUBIERA Mª Jesús, "Estructura de 'Cantar de Gesta' en uno de los relatos de la conquista de al-Andalus", ibidem, 63-73. 7 Remito a las exposiciones de DêAZ Y DêAZ M.C., GARCêA MORENO L.A., RUIZ TRAPERO M. y ORLANDIS J., Las invasiones. Las sociedades. La iglesia, en Historia de España Menéndez Pidal. España visigoda, III-1, Madrid, 1991. 8 FIERRO M., «La obra histórica de Ibn al-Qutiyya», Al-Qantara X (1989) 485-511; y JAMES D., Early Islamic Spain. The History of Ibn al-Qutiyya, Londres-Nueva York, 2009.

9 cuestión. Señalaré el comienzo de cada página p. 30]. Y [Rodrigo] salió hacia ellos. en las ediciones de Pascual de Gayangos9 (donde Luego marcharon al encuentro de Tariq. los relatos sobre la conquista de al-Andalus Cuando estaban los dos bandos frente a frente, ocupan las páginas 2-11), tras indicar G- y en la acordaron Olmundo y sus hermanos traicionar Aljaranda 81 (2011) edición de al-Ibyari –como Ib- (donde se extiende a Rodrigo, y aquella noche enviaron mensajeros entre las pp. 29-37)10. a Tariq, para informarle que Rodrigo había sido un perro de los perros de su padre, de su séquito, y le pedían el amán, si ellos partían al día siguiente Traducción del texto sobre la conquista de al- junto a él, y él les asignaba los fundos de su Andalus en el Iftitah al-Andalus de Ibn al- padre, que eran tres mil fundos, después de eso Qutiyya llamadas “la parte escogida de los reyes”. Cuando amaneció, ellos y los que estaban con ellos se agregaron a Tariq, y fueron la causa [1.- Preámbulo: transmisión de noticias] de la victoria. XIII Centenario desembarco árabo-bereber [G, p. 2; Ib, p. 29] En el nombre de Dios, [3.- Pactos entre los hijos de Witiza y los Clemente y Misericordioso, Dios bendiga y salve musulmanes] a nuestro señor Muhammad y a sus Compañeros. Nos transmitió Abu Bakr Muhammad b. Cuando llegaron a él, le dijeron: “¿eres cUmar b. cAbd al-cAziz [Ibn al-Qutiyya], que emir tu mismo o sobre ti hay [G, p. 4] un emir?”, dijo: Nos contaron más de uno de nuestros les dijo: “sí, sobre mí hay un emir y sobre este maestros, entre ellos el maestro Muhammad b. emir hay un emir”, y les autorizó a encontrarse cUmar b. Lubaba, y Muhammad b. Sacid b. con Musa b. Nusayr en Ifriqiya para que les Muhammad al-Muradi y Muhammad b. cAbd consolidara [el vínculo de ellos con él. Ellos le al-Malik b. Ayman y Muhammad b. Zakariyya pidieron que le escribiera [a Musa] sobre el al-Tanyiyya al-Isbili, tenga Dios misericordia de asunto de ellos con él y sobre el compromiso ellos, que lo tenían de sus maestros, diciendo que él [Tariq] les había dado. Asi hizo, y ellos que: fueron a Musa, y le encontraron en su marcha hacia al-Andalus], cerca del territorio de los [2.- Witiza y sus hijos: participación en la beréberes, con el escrito de Tariq acerca de cómo conquista de al-Andalus] ellos habían aceptado la sumisión, y la condición que con ellos había establecido. Witiza, el último de los reyes de los godos Musa b. Nusayr les dirigió [al califa] al- de al-Andalus, murió dejando tres hijos, el mayor Walid b. cAbd al-Malik, y llegaron ante él, que Olmundo, luego Aquila y luego Ardabasto, que les formalizó el compromiso de Tariq b. Ziyad, eran pequeños a la muerte de su padre, y su y con aquello garantizó a cada uno de ellos un madre mantuvo para ellos el reino de su padre acta, y en sus actas estaba: “que no se pondrían en Toledo. Rodrigo, que era un general del rey, de pie ante nadie que entrara a su presencia ni su padre, se apartó con los hombres de guerra saliera”. que le rodeaban, y ocupó Córdoba. Cuando [G, p. 3] entró Tariq b. Ziyad en [4.- Sara la Goda; su viaje a Damasco; al-Andalus, en tiempos de al-Walid b. cAbd al- casamientos y descendientes en al-Andalus] Malik, escribió Rodrigo a los hijos del rey [Witiza], que ya eran jóvenes y montaban a Y llegaron a al-Andalus, y siguieron en caballo, pidiéndoles ayuda y que sus manos se esta situación hasta que murió Olmundo, dejando unieran frente contra el enemigo. Ellos una hija que era Sara la Goda (al-Qutiyya) y dos movilizaron tropas en la frontera [de Toledo], hijos pequeños, uno de ellos [Ib., p. 31] el avanzaron y acamparon en Secunda, pues no se arzobispo de Sevilla y [el otro] Oppas, muerto fiaban de Rodrigo para entrar en Córdoba [Ib, en Yilliqiyya. Entonces, Ardabasto extendió [su

9 Edición del texto árabe por P. de Gayangos, con colaboración de E. Saavedra y F. Codera, Madrid, 1868, publicada junto con la traducción completa, por J. Ribera, Historia de la conquista de España de Abenalcotía El Cordobés, Madrid, 1926. 10 AL-IBYARI I., Tarij Iftitah al-Andalus, El Cairo-Beirut, 1982, 158 pp.; 2» ed., 1989; reimpr. 2003.

10 mano] a los fundos de ellos y los agregó a los Madhiyi y cUmayr b. Sacid al-Lajmi, [pero suyos, en los comienzos del cargo [como califa] Taclaba b. cUbayd al-Yudami se interesó por de Hisam b. cAbd al-Malik [724-743]. cUmayr b. Sacid ante cAbd al-Rahman [I] b.

[Sara la Goda] hizo construir [G., p. 5] Mucawiyya], que le casó con ella, dándole un Aljaranda 81 (2011) un barco en Sevilla, ya que su padre Olmundo hijo, Habib b. cUmayr, antepasado de los Banu había elegido como residencia Sevilla, pues Sayyid [al-Nas], y de los Banu Hayyay, y de los fueron para él mil fundos en el Occidente de al- Banu Maslama, y de los Banu [Hayz] al-Yurz. Andalus, y para Ardabasto igual en el centro de Tales son los nobles descendientes de al-Andalus, y se quedó a vivir en Córdoba. Entre cUmayr en Sevilla, pues tuvo hijos con otra sus descendientes está Abu Sacid al-qumis (“el [mujer], que no alcanzaron la distinción de conde”). aquellos. Esta noticia, o su mayor parte, está en Hay de Ardabasto noticias juiciosas, el libro de cAbd al-Malik b. Habib sobre la ocurridas entre él, cAbd al-Rahman b. conquista de al-Andalus y en el “poema en metro Mucawiyya y los sirios que entraron [a al-rayaz” (uryuza) de Tammam b. cAlqama. Andalus] con los omeyas y [otros] árabes, que XIII Centenario desembarco árabo-bereber transmitimos de los sabios y mencionaremos en [5.- Victoria del Guadalete; leyendas sobre su lugar, si Dios quiere. Para Aquila fueron mil Toledo] fundos en el Oriente de al-Andalus, y se quedó a vivir en Toledo. Entre sus descendientes está [G., 7; Ib., 33] El encuentro de Tariq y Hafs b. Albar [Álvaro], juez de los “cristianos”. Rodrigo fue en el Wadi Laka / Lako (Guadalete) Luego, [Sara la Goda] se dirigió con sus [del distrito] de Sidonia, y Dios procuró la derrota hermanos a Siria en un barco, hasta desembarcar a Rodrigo, cuyas armas le pesaban, y se arrojó en Ascalón, [Ib, p. 32] y se encaminó hasta parar al Wadi Laka, y ya no se le encontró. en la puerta [de la residencia] de Hisam b. cAbd Se dice que los reyes godos tenían en al-Malik, haciendo llegar su noticia y la del Toledo una casa, donde había un arca, y en el compromiso contraído con su padre [Olmundo] arca los cuatro Evangelios, sobre los que por [el califa] al-Walid [I], quejándose de la prestaban juramento. Estimaban mucho aquella injusticia de su tío Ardabasto. casa, y no la abrían. Cuando moría su rey, se [El califa Hisam] la hizo llegar ante él, escribía allí su nombre. y ella vio ante él al joven cAbd al-Rahman b. Al alcanzar el reino Rodrigo, se llevó la Mucawiyya. cAbd al-Rahman [I] le recordaba corona, y los cristianos censuraron eso. Luego, esto a ella en al-Andalus, pues, cuando [Sara] abrió la casa y el cofre, después de que los iba a Córdoba, le permitía entrar al alcázar [a cristianos le prohibieron abrirlo, y halló allí visitar] a la familia [omeya]. figuras de árabes, con sus arcos en bandolera y Y [el califa] Hisam escribió a favor de sus turbantes sobre sus cabezas. En la parte ella a Hanzala b. Safwan al-Kalbi, gobernador inferior de las maderas estaba escrito: “cuando de Ifriqiya [742-747], sobre el cumplimiento se abra esta casa y se saquen estas figuras entrará [G., 6] del compromiso de al-Walid b. cAbd al- en al-Andalus gente con esa imagen, y la Malik, [...]11 y ordenándole aquello a su dominarán”. gobernador [en al-Andalus] Husam b. Dirar - que es Abu l-Jattab al-Kalbi-, que cumplió todo [6.- Julián y Rodrigo; venida y campañas de para ella. [Y el califa Hisam la casó] con cIsa b. Tariq b. Ziyad] Muzahim, que marchó con ella a al-Andalus y recuperó los fundos de ella. Es el antepasado de La entrada de Tariq en al-Andalus ocurrió los al-Qutiyya. en ramadán del año 92 [de la Hégira]. La causa De ella tuvo dos hijos, Ibrahim e Ishaq, de su entrada en al-Andalus fue que uno de los y murió en el año [136/755 d. C.] en que entró comerciantes no árabes (cayam), llamado Julián a al-Andalus cAbd al-Rahman [I] b. Mucawiyya, (Yulyan), que solía ir de al-Andalus al territorio y por ella porfiaron Haywa b. Malamis al- de los beréberes, y Tánger [...]12 estaba

11 Laguna en el manuscrito. 12 Laguna en el texto árabe.

11 sobre ella, [Ib., p. 34] y la gente de Tánger [G., Tariq b. Ziyad, y se dirigió al lugar llamado p. 8] eran cristianos [...]13, y [Julián] llevaba a “Puerto de Musa” (Marsa Musa), dejando el Rodrigo caballos de raza y halcones de aquella camino de Tariq y cogiendo la costa de Sidonia. parte. Murió la mujer del comerciante, dejándole Su entrada fue un año después que la de Tariq. Aljaranda 81 (2011) una hermosa hija. [Rodrigo] le ordenó ir al litoral [Llegó a Sidonia, luego] a Sevilla, y la conquistó, [del norte de África], y se excusó con la muerte luego se dirigió desde Sevilla a Fuente de Cantos de su esposa y por no tener a nadie con quien (Laqant), al “Desfiladero de Musa” dejar a su hija. (Fayy Musa), al principio [del camino] de Fuente [Rodrigo] ordenó llevarla a palacio, y se de Cantos a Mérida. [Alguno de los sabios ha dicho] fijó en ella, le gustó y la consiguió. Ella informó que las gentes [G., p. 10] de Mérida capitularon y a su padre de aquello, cuando él regresó, y le que no los dominaron por la fuerza. dijo a Rodrigo: “he dejado [allá] caballos y [Musa] siguió adelante y entró en Yilliqiya halcones como no se han visto iguales”, y por el Desfiladero al que dio nombre, y la cruzó por [Rodrigo] le dio permiso para ir a por ellos, donde [Tariq] había entrado, y [Ib, p. 36] se encontró enviando con él dinero. [Julián] se dirigió junto con Tariq en Astorga (Asturqa / ¿Asturiqa?). Luego a Tariq b. Ziyad, y le hizo apetecer al-Andalus, les llegó el documento (cahd) de[l califa] al-Walid XIII Centenario desembarco árabo-bereber mencionándole su nobleza y la debilidad de sus [I] b. cAbd al-Malik para que se marcharan [de al- gentes, que no eran valientes. Tariq escribió a Musa b. Nusayr para Andalus], y se marcharon ambos, tras haber ocurrido informarle de aquello, y él le ordenó entrar [en entre ellos algún desacuerdo. la Península], y Tariq reunió tropas. c c Tras entrar a los barcos, con quienes le [8.- Marcha de Musa; su hijo Abd al- Aziz le sucede] acompañaban, se quedó dormido, y en su sueño vio al Profeta, Dios le bendiga y salve, y a su Reforzó Musa los castillos (husun) de al- Andalus, nombró como sucesor suyo en al-Andalus alrededor los que con él marcharon [desde La c c Meca a Medina] y los que allí le defendieron a su hijo Abd al- Aziz, instalándole en Sevilla, y dejó con él a Habib b. Abi cUbayda b. cUqba b. (al-Ansar), con las espadas ceñidas y los arcos c c en bandolera; al pasar el Profeta, la paz sobre él, Nafic al-Fihri. Abd al- Aziz emprendió la conquista junto a Tariq, le decía: ¡adelante en tu asunto!, de las ciudades de al-Andalus que quedaban. y Tariq vio en sueños al Profeta y a sus Musa se puso en camino, y con él Compañeros hasta que entraron en al-Andalus, cuatrocientos entre los hijos de los reyes de los no considerándolo buen presagio y dando albricias árabes (cayam), llevando sobre sus cabezas coronas a quienes le acompañaban. de oro y en sus talles cinturones de oro. Cuando se [Ib, p. 35] [Cuando cruzó] Tariq y marchó acercaba a Siria, [el califa] al-Walid [I] enfermó del por la litoral de al-Andalus, lo primero que mal del que murió. conquistó [G., 9] fue la ciudad de Carteya Y [su próximo sucesor, el califa] Sulayman (Qartayanna), en la cora de Algeciras (al-Yazira). le ordenó: “detén la marcha para que llegues en mis Ordenó a sus compañeros cortar a los prisioneros días [de califato], pues mi hermano está como está”. que habían matado y cocer su carne en ollas, y Y Musa, que poseía firmeza, y estaba agradecido a encargó soltar a los prisioneros que quedaban los favores [de al-Walid], dijo a su mensajero: “por para que los liberados notificaran eso a quienes Dios, no lo haré; mi opinión es que seguiré mi encontraran, y llenara Dios sus corazones de marcha, y si el destino decreta la muerte de mi temor. benefactor [G., 11] antes de llegar a él, sea lo que Avanzó luego y tuvo el encuentro con [Sulayman] quiera”.Y [Musa] llegó antes de la muerte Rodrigo, ocurriendo lo que antes se mencionó. de al-Walid [el 23 febrero 715]. A continuación avanzó hasta Écija y Córdoba, Cuando Sulayman tuvo el poder, encarceló luego a Toledo, luego al desfiladero conocido a Musa b. Nusayr y le impuso una multa. Ordenó a como “Desfiladero de Tariq”, desde el cual entró cinco destacados árabes de al-Andalus que mataran en Yilliqiya, que cruzó hasta alcanzar Astorga a su hijo cAbd al-cAziz; entre ellos estaban Habib (Asturqa / ¿Asturiqa?). b. Abi cUbayda al-Fihri y Ziyad b. al-Nabiga al- Tamimi, que fueron hacia él [...]14. [7.- Venida y campañas de Musa b. Nusayr] [9.- Asesinato en Sevilla de cAbd al-cAziz, hijo de Cuando Musa b. Nusayr tuvo noticia de Musa] lo fácil que le resultó [la expedición a Tariq], le tuvo envidia y avanzó con numeroso ejército Al amanecer, marchó [cAbd al-cAziz] hacia [...], y cuando estuvo en la costa del litoral, una mezquita, se puso en el mihrab y leyó la [primera desechó la entrada por la que había penetrado azora] Fatiha del Libro y la azora [número 56] al-Waqica,

13 Otra laguna en el texto árabe. 14 Laguna en el texto.

12 y los del grupo alzaron sus espadas contra él de un tajo, [El califa] Sulayman, cuando le llegó la y cogieron su cabeza y se la enviaron a Sulayman. [Ib, cabeza, hizo traer a Musa b. Nusayr, y se la mostró p. 37] Aquello ocurrió [en marzo 716] en la mezquita de en un recipiente, y Musa le dijo: “por Dios, le has Rufina [Rubina / Rufina ?], que daba sobre el Prado de hecho matar cuando ayunaba y cumplía [la oración]”. Aljaranda 81 (2011) Sevilla, pues [cAbd al-cAziz] vivía en la iglesia de Rufina De Sulayman, durante su califato, no se repite ni se [Rubina / Rufina ?]. señala sino lo que hizo con Musa. Su muerte ocurrió Cuando casó con una mujer de los godos, c c a finales del año 98 [de la Hégira/verano 717 d. C.]. llamada Umm Asim (“Madre de Asim”), vivía con Pasaron años sin que les uniera [G., p. 12] ella en esta iglesia, junto a la cual construyó la ningún gobernador, aunque los beréberes nombraron mezquita en la que fue muerto, y en ella había [restos de] su sangre hasta tiempos recientes. sobre ellos mismos a Ayyub b. Habib al-Lajmi, hijo de la hermana de Musa b. Nusayr [...]15. XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 3.- Ejercito magrebí.

Imagen 4.- Grafía árabe de Al-Andalus.

15 Y sigue el Kitab Iftitah al-Andalus de Ibn al-Qutiyya, ocupándose del resto de la historia de al-Andalus hasta comienzos del siglo X.

13 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Cimitarra árabe.

Breve análisis del embarque y del desembarco de los árabo-bereberes de Tariq Ibn-Ziyad en la península Ibérica en 711

José Beneroso Santos

o es tarea fácil realizar un análisis, Expansivo, porque se está produciendo, aunque se intente hacerlo de forma breve desde hace ya algún tiempo, el progreso de los N y poco profunda, de un asunto tan grupos arabo-musulmanes en dirección Este-Oeste, complejo como es el paso del Estrecho de dominando toda la franja litoral norteafricana, desde Gibraltar de las tropas de en 711 Egipto hasta el Magreb. Este avance parece que alcanza y que desencadenó un hecho histórico tan su culminación con la ocupación, hasta cierto punto trascendental como es el inicio de la invasión premeditada y de forma perdurable, de la península arabo-bereber de la península Ibérica. Ibérica. Esta acción hay que enmarcarla dentro Migratorio, porque en última instancia lo que de lo que ha sido denominada Segunda Oleada verdaderamente provoca el cambio y la de Conquista y tiene su origen más inmediato disolución del régimen hispano-visigodo es un en la ocupación del norte de África completada movimiento demográfico, es decir el trasvase de por Musa Ibn Nusayr. Asimismo, en este proceso un número importante de población civil bereber histórico que conlleva que la península Ibérica norteafricana que pronto se yuxtapone con la pase a ser parte de una nueva entidad político- población peninsular, considerando desde un punto de vista riguroso que al-Andalus fue colonizada por social, económica y cultural conocida como al- numerosas tribus bereberes que reproducen sus Andalus, debemos considerar tres aspectos o tradicionales pautas de asentamiento y que el nuevo componentes que deben ser claramente sistema económico-social musulmán va a propiciar diferenciados: el conquistador o invasor, el la desarticulación del sistema de organización de tipo 1 expansivo y el migratorio . esclavista visigodo. Conquistador o invasor, por cuanto es Para encontrar un posible móvil que un contingente militar o paramilitar el que se explique este proceso conquistador-expansivo enfrenta y vence al ejército hispano-visigodo, migratorio árabo-musulmán debemos indagar en con la directa participación de un estado, los distintos planos, político, militar, social, musulmán, el Califato de Damasco, que ataca a económico, ideológico, etc., en el que dicho proceso otro estado, cristiano, el reino de Toledo. se desarrolla, de tal manera que pueden ser

1 BENEROSO SANTOS, José: La entrada de los árabo-bereberes en la península Ibérica. Los inicios de al-Andalus en la zona del estrecho de Gibraltar (711-714). (En prensa).

14 señalados varios. Nosotros los condensaríamos comes Julián. fundamentalmente en dos, aunque todos están Los contingentes bereberes estaban de alguna manera en parte relacionados. integrados por una amalgama de guerreros de En primer lugar destacamos el ideológico, distintas tribus entre los que se encontraban en el Islam, como idea-fuerza, materializado en calidad de rehenes-amigos, los hijos de muchos Aljaranda 81 (2011) la yihad, que provoca, justifica y sostiene por sí de los jefes tribales y gente importante de los solo la creación de un dominio musulmán, distintos clanes sometidos. convirtiéndose en el vehículo propagador de esta Dos hechos son importantes de señalar, civilización, que acarrea entre otras cosas la el carácter de yihad que desde un primer arabización e islamización de los pueblos momento concede Tariq a la campaña y el sometidos. esfuerzo llevado a cabo para islamizar a los grupos bereberes y asociarlos así a dicha yihad. Esto es fundamental porque los muqatila, los guerreros de la fe, solo podían ser musulmanes, es decir la conversión al Islam era un requisito

indispensable para ser registrados en el diwan y XIII Centenario desembarco árabo-bereber Los contingentes bereberes tener así derecho a percibir la soldada, ‘ata, estaban integrados por una del ejército regular árabe y a participar en el reparto del botín, que entre los bereberes se amalgama de guerreros de distintas tribus

En segundo lugar, el económico, como medio-fin, factor que provoca el avance conquistador buscando esencialmente botín y tributos2, es decir mediante la anexión de territorios con una masa social que posibilite y soporte el establecimiento de un sistema productivo tributario, como será esencialmente el andalusí3. Bien, teniendo en cuenta todo lo anterior, podremos obtener una percepción más ajustada del significado de la operación militar en sí y de la trascendencia histórica que conlleva la acción de Tariq ibn Ziyad. Una vez acabadas las campañas militares magrebíes, las tropas bereberes quedaron acuarteladas e inactivas en Tánger bajo el mando de su recién nombrado gobernador, Tariq ibn Ziyad, y esto suponía una amenaza para el control de la zona4, de hecho ya se habían producido algunos altercados con sus habitantes, ghumaras, bereberes de confesión cristiana, mawali del Imagen 2.- Navío árabe.

2 De la misma forma que en otras zonas bajo dominio musulmán, el sistema impositivo de al-Andalus fue confesional. 3 ˇ Al-Andalus puede ser calificado, sin lugar a dudas y tal como muchos autores lo han hecho, como una formación social tributaria, pues queda establecido preferentemente el modo de producción tributario, aunque para muchos autores sería más correcto y completo considerarla tributario-mercantil, opinión que compartimos en parte, pero que nosotros definiríamos más concretamente, según nuestro criterio, modo de producción andalusí o islámico occidental, al presentar a su vez unas peculiaridades propias que le hacen ser un subtipo o variante de este modelo tributario. 4 La situación era complicada porque acostumbrados a la lucha y a la adquisición de botín, ahora estaban asentados, asignándoseles una soldada a la que están poco acostumbrados y que siempre sería insuficiente en comparación con los beneficios que obtenían habitualmente en las campañas militares.

15 realizaba de forma colectiva, por grupos, y no señor de Ceuta, debiéndose considerar su de forma individual, excluyendo a los familiares participación como indispensable y decisiva. y herederos del combatiente caído5. Estos grupos Cruzar el Estrecho nunca es fácil, siempre bereberes son inscritos y distribuidos en liwa’, es una operación que implica un riesgo por las Aljaranda 81 (2011) banderas, adaptándolos así a la organización fortísimas corrientes existentes y las cambiantes militar omeya, teniendo en cuenta su condiciones meteorológicas del mismo6. estructuración tribal, y de este modo serán Por esta razón la acción se adelanta, embarcados para la Península. aprovechando la mejor situación que ofrecen los Al regreso de Tarif, tras su exitosa meses de mayo y junio7 (desde época romana incursión, se confirma la fiabilidad del pacto durante los meses de noviembre a marzo se realizado con Julián y de la viabilidad del consideraba mare clausum y se suspendía la planificado desembarco ante la debilidad de las navegación) y también porque se conoce que la defensas visigodas en el arco de la Bahía. Tras zona de la Bahía se halla desguarnecida de tropas, dicho pacto se escondía la necesidad de los arabo- al estar Rodrigo sofocando una rebelión en el musulmanes de pasar a la Península para seguir norte peninsular. obteniendo recursos económicos y el deseo de XIII Centenario desembarco árabo-bereber Ante esta situación, Tariq toma la Julián de recuperar sus anteriores posesiones iniciativa de comenzar la operación, e informa peninsulares, principalmente Iulia Traducta, que a Musa, pero sabiendo que cuando a éste le llegue le fueron arrebatadas tras la elección de Rodrigo, la noticia y dé su contestación, él ya estará o al menos el control económico de la zona del inmerso en la campaña. Es decir, inicia el paso Estrecho. Todo esto con independencia y sin descartar que la entrada de los árabo-bereberes sin esperar repuesta, amparándose en el permiso obedeciera, como a menudo se ha justificado, a implícito que le otorgaba el que Musa conocía una posible intervención en la larvada guerra los planes previstos, por lo que debemos suponer civil visigoda entre los partidarios de Witiza y que su actuación es voluntaria y bastante de Rodrigo. meditada. El paso de Tariq a la Península estaba En cuanto al número de combatientes, previsto y creemos que Musa estuvo al corriente repasemos esta cuestión pues existen profundas de ello, al igual que de la incursión protagonizada discrepancias entre las fuentes. Si partimos del por Tarif. Y como elemento dinamizador de toda número de hombres que Musa acuartela en esta serie de acciones aparece el comes Julián,

Imagen 3.- Jinetes bereberes.

5 La emisión de monedas de bronce, fulus en los que aparecían inscritos referencias a la yihad, durante los años 709, 710 y 711 en Tánger tenían como finalidad pagar estas soldadas. 6 Pensamos que la fecha prevista debía ser la misma elegida por Tarif en su incursión de 710. 7 Además esta época coincidiría con la cosecha de cereal, lo que facilitaría el avituallamiento de sus tropas, pues habitualmente en Andalucía y en particular en la zona del Campo de Gibraltar, se adelanta casi un mes, concretamente a partir de San Juan, a la del resto de la Península, que comienza a recolectarse desde mediados de julio.

16 Tánger a las órdenes de Tariq, según al-Maqqari8 ascendía a diecinueve mil bereberes, y si tenemos en cuenta que Tariq, contando con esta importante cantidad de guerreros, no fue capaz de someter completamente a Julián y su principal Aljaranda 81 (2011) enclave, Ceuta, por la fuerza de las armas, podemos deducir, con bastante probabilidad de estar en lo cierto, que debía de existir un Çequilibrio de fuerzasÈ entre ambos contendientes, o al menos un número muy considerable de guerreros ghumaras a las ordenes de Julián, suficiente para contrarrestar esa fuerza y que propiciara ese ÇequilibrioÈ. Todo esto teniendo presente que en los ejércitos califales era costumbre dividir sus efectivos al realizar una campaña, movilizando una parte de la tropa que acudía al combate, XIII Centenario desembarco árabo-bereber mientras la otra quedaba de reserva en la retaguardia. Esta medida árabe fue adoptada por las tropas bereberes auxiliares conforme quedaron incorporadas en los ejércitos musulmanes. De lo que deducimos que el ejército de Tariq, tanto el que pasó a la Península, que calculamos en unos siete mil efectivos, como el que quedó en Tánger, de similar cuantía, Imagen 4.- Tipo bereber. alcanzaría un total de catorce mil hombres a los que se deberían sumar los esclavos que tuvieron que ser numerosos. los godos se atemorizaron al ver tales figurasÈ9. En cuanto al contingente de Julián que participó directamente en la campaña lo cuantificamos en cinco mil hombres10, y si aceptamos que quedó Estos grupos bereberes son en la zona de Ceuta una cifra similar sus fuerzas distribuidos en banderas, liwas, estarían compuestas por unos diez mil hombres, teniendo en cuenta su sin contabilizar tampoco, claro está, los esclavos. estructuración tribal, y de este Por lo tanto el potencial del ejército de conquista de la Península pudo llegar a ser como modo, serán embarcados para mínimo de veinticuatro mil hombres, muqatila libres, la Península que por supuesto ni se llegó a utilizar en su totalidad ni coincidieron todos sus efectivos en la Península. Las fuentes resaltan esa condición de combatientes libres. Ibn al-Kardabus señala al respecto, Existen algunas referencias al empleo de «De todo lo que se consiguió como botín, esclavos negros en varias obras como es el tomó Tariq el quinto para el tesoro público y caso del Dikr bilad al-Andalus en el que aparece, distribuyó las cuatro quintas partes [restantes] entre Ç A estos [esclavos negros] los colocó [Tariq], los combatientes libres [musulmanes y una vez en tierra, en la vanguardia de las 11 tropas con un aspecto aterrador, de modo que cristianos] que asistieron al combate [con Rodrigo]È .

8 Por la facilidad en su consulta véase, AL-MAQQARI: Nafh al-tib min gusn al-Andalus al-ratib, en SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: «Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes Documentales», Al-Qantir 10 (2010) 103. 9Ibídem, 90. 10 Defendemos que la petición de ayuda realizada por Tariq en vísperas de su encuentro con Rodrigo es socorrida por Julián, y no por Musa, que envía un cuerpo de ejército de cinco mil hombres. 11 Hemos extraído y refundido este párrafo de las traducciones de la obra de Ibn Kardabus, realizadas por A.M. AL-ABBADI (Ed.): ÇTarih al-Adalus li-Ibn al-KardabusÈ, RIEIM, XIII (1966), y MAêLLO F.: Ibn Kardabus, Historia de al-Andalus, Madrid, Akal, 1993 (2ª edición).

17 Un hecho clave que no debemos pasar por alto es el referente a las autorías y secuencias de la acción, para esto resulta muy significativo citar el texto extraído de al-Maqqari12, en el que aparece en

Aljaranda 81 (2011) palabras de Ibn Jaldún que, « […] antes de comenzar la expedición Tarik (se refiere a Tarik ibn Ziyad) dividió su ejército en dos cuerpos, él mismo tomó el mando de uno, colocando en el otro bajo las órdenes inmediatas de Tarif n-najaí (se refiere a Tarif ibn Malik) con sus hombres, desembarcó al pie de la roca ahora llamada Jebalu-l-fatah [el monte de la entrada]13 y que entonces recibió su nombre, y fue llamada Jebal- Tarik [montaña de Tarik] mientras su compañero Tarif desembarcaba sobre la isla después llamada de él Jezirah-Tarif [isla de Tarif]. En orden a dar seguridad para sus respectivos ejércitos, ambos

XIII Centenario desembarco árabo-bereber generales seleccionaron, poco después de sus desembarcos, un buen campamento, que rodearon con muros y trincheras, porque apenas tuvieron noticias del desembarco los ejércitos de los godos14 comenzaron a marchar contra Imagen 6.- Timón de dos palas largas, sin codaste; vela cuadra; ellos desde todos los lados. [...]È 40-50 remeros.

Sin duda aquí el autor confunde las dos acciones (años 710 y 711), pero sí creemos que esta en lo cierto al afirmar que Tariq Ibn Ziyad dividió sus tropas en dos cuerpos de ejército. Uno, al mando de Tarif ibn Malik como vanguardia que intentó desembarcar en las playas dentro de la Bahía y que al ser rechazado se posiciona en Gibraltar, pero eligiendo como lugar de desembarco del resto de sus tropas la zona de Guadalquitón, pasada punta Mala de Levante, donde finalmente acamparon. Mientras, Tariq Ibn Ziyad al frente de otro cuerpo comienza a desembarcar directamente en la Península15, en esta zona ya citada y que debía estar ya acondicionada, una vez tomadas algunas precauciones estratégicas, de vigilancia y protección, como la construcción o reutilización de Sur al-Arab16 un recinto fortificado o línea defensiva citada por las fuentes17, en el propio Gibraltar. Según las fuentes, Tariq llegó con el último envío cuando las posesiones estaban consolidadas y Carteia conquistada por Tarif ibn Malik. La estrategia es la misma que la del año anterior, es decir un reducido grupo que por sorpresa tome una posición que servirá para planificar y facilitar el trasbordo del grueso de las tropas. Por esto se habla de cuatro barcos Imagen 5.- Gibraltar, lugar de concentración de las tropas mercantes, que tanto por su número como por sus bereberes que en el 711 pasaron el Estrecho.

12 AL-MAQQARI: Nafh al-tib min gusn al-Andalus al-ratib, ob. cit., p. 109. 13Creemos que mejor traducción sería «Monte de la VictoriaÈ. 14Se refiere a las incursiones del sobrino de Rodrigo, Sancho, que veremos más adelante, y no como aparece en este mismo texto obra de Tudmir, « […] tan pronto como Tarik puso su pie en al- Andalus fue atacado por un godo de nombre Tudmir, a quien Roderico le había mandado defender la frontera [...] È, en AL-MAQQARI: Nafh al-tib min gusn al-Andalus al-ratib, ob. cit., p 109. 15En el texto anterior de al-Maqqari, al-Yazirat debe referirse a la Península y no concretamente a al-Yazirat Tarif de aquí gran parte de la confusión. 16Del término bereber Tsur, recinto fortificado, resguardo rocoso. 17Tal como señalamos ( BENEROSO SANTOS J.: “La incursión de Tarif ibn Malif en 710. Preludio de una invasión”, Al-Qantir 11 (2010) 82-83.), podría corresponderse con la conocida por las fuentes como Torre del Tuerto, haciendo referencia a la anomalía física de Tariq Ibn Ziyad,

18 características pudiesen pasar desapercibidos y calafateadores, (muy apreciados pues el calafateo no alertar a la población de la Bahía desde un junto al carenado, la limpieza de escaramujos del primer momento. casco, eran imprescindibles para el buen Con Tarif Ibn Malik vienen las tropas, funcionamiento de estas embarcaciones), tripulantes, en su mayoría bergwata, y exploradores etc., debieron escasear en la zona del Estrecho. Aljaranda 81 (2011) hispanovisigodos, hombres de Julián, que le Esta plena dedicación a la fabricación de habían acompañado en la incursión del año naves de guerra durante algunos años estancó anterior. Su número debió ser muy parecido, en cierto modo a la marina mercante, privándola cuatrocientos hombres y un escuadrón de de un probable mayor crecimiento. De tal caballería, que nosotros estimamos en torno a manera disminuyó el trasiego comercial entre los cien jinetes. siglos VII y VIII19 que apenas se han localizados registros arqueológicos en los fondos marinos de naves mercantes por la práctica ausencia de naufragios en esas fechas. Sin embargo, Julián contaba con sus propios recursos. Con total seguridad y a pesar del requerimiento de naves que Musa había hecho para XIII Centenario desembarco árabo-bereber Las tropas fueron agrupadas la flota con base en Túnez, debía poseer todavía para el embarque en Ceuta algún dromon de tipo bizantino20 o monere21. Suponemos que al menos contaría con una

Las tropas fueron agrupadas para el embarque en Ceuta, el mejor lugar para cruzar si se tiene como destino el interior de la Bahía, aunque también se disponía de otros puntos muy cercanos como, Balyanash18 y Wad-Marsa principalmente. A pesar de la insistencia en las fuentes en señalar que fueron cuatro los barcos utilizados y cedidos por Julián, debieron ser algunos más. Creemos interesante señalar que, desde finales del siglo VII, se venía produciendo una intensificación en la construcción de naves de guerra por parte árabe, como consecuencia de la lucha por la supremacía del Mediterráneo mantenida con los bizantinos. De hecho, Musa contaba con una flota que tenía su base en Túnez y que desde 703 estaba hostigando sistemáticamente las zonas de Sicilia, Cerdeña e incluso llegan a las Baleares en 707, pero que no participa en la operación de Tariq. Es lógico suponer que la mayor parte de los recursos navales de las zonas de Ifriqiya y del Magreb, fueran destinados a engrosar esta flota por eso tanto la materia prima (maderos, velamen, maromas, etc.) como el personal cualificado como carpinteros (tal como señala algún autor muchos fueron traídos desde Egipto), Imagen 7.- Guerrero bereber.

18 Durante la época invernal, y en distintos períodos históricos, esta zona fue utilizada como varadero de galeras que eran cubiertas para reservarlas de las inclemencias del tiempo, así se lograba alargarles la vida. 19 Esta reducción tuvo su culminación con la derrota naval árabe en 718 que paralizó durante algún tiempo todo el comercio marítimo en la zona norte africana. 20 Nosotros pensamos que al menos debía tener un par de ellos. 21 Aunque las referencias existentes suelen ser posteriores, estas moneres, pequeñas galeras de una única fila de remos, tripuladas por cuarenta o cincuenta hombres, podían estar ya disponibles.

19 dromones los que participan activamente en el traslado del grueso del ejército de Tariq trascurridos los primeros momentos de la operación y tras haberse esfumado el factor Aljaranda 81 (2011) sorpresa. Entra dentro de lo lógico que estos dromones tuvieran capacidad para transportar a varias decenas de combatientes (suponemos que entre setenta y noventa combatientes en cada viaje) dependiendo de las condiciones climatológicas, que podían influir en la disposición y cantidad de la carga. Igualmente por esta causa y sus repercusiones en el estado del mar (que puede variar en cuestión de horas) sería imprevisible la duración del recorrido entre XIII Centenario desembarco árabo-bereber Ceuta y la Península, pero podemos considerar como promedio de duración media jornada y para un recorrido completo (ida y vuelta) se emplearían dos días, pues es probable que no hicieran el regreso a continuación. Se debe tener Imagen 8.- Tarik Ibn Ziyad. en cuenta que habría días en que podría realizarse el trayecto incluso dos veces, siempre contando triada de galeras. Estas naves eran de dimensiones con tripulaciones de reserva, y otros días, ninguna más reducidas que las anteriores, menos de vez, circunstancia que durante el desarrollo de cincuenta toneladas, pues desde hacía ya algún la operación se daría en más de una ocasión. tiempo se diseñaban más pequeñas, buscando que fuesen más ligeras y rápidas22. Generalmente tenían de treinta y cinco a cuarenta metros de eslora y siete u ocho metros de manga, con una sola hilera de remeros23, bancada ajustada, y un solo mástil, aparejada con vela latina24, lo que Entra dentro de lo lógico que la hacía muy maniobrable. Utilizar velas latinas los dromones pudieran para navegar de bolina, es decir ciñéndose al viento, aproando en su contra y realizando transportar varias decenas bordadas regulares y equidistantes, corrigiendo de combatientes las derivas para no abandonar el rumbo trazado, etc., aunque requiere de la pericia de navegantes expertos por su dificultad y de un gran esfuerzo de la tripulación25, era y es todavía una práctica muy frecuente en la navegación del También es necesario señalar que tanto las Estrecho pues posibilita avanzar de forma más entradas como las salidas de los fondeaderos, y segura y en menos tiempo. al entrar en combate, se hacían a golpe de remo Estas naves de combate eran las y luego se intentaban desplegar las velas. La encargadas de vigilar y defender las posiciones carga y descarga de la impedimenta supondría algún norteafricanas de Julián, siendo algunas de ellas tiempo más. Teniendo en cuenta todo lo anterior utilizadas, como parecen señalar las fuentes, calculamos que la operación duró como mínimo cuando Ceuta es asediada por Musa y recibe la unos cuarenta y cinco días aunque cabe la posibilidad ayuda de Witiza desde la Península. Y son estos de que se alargase hasta los dos meses.

22 Posteriormente se invirtió de nuevo la tendencia constructiva realizando naves de muchísimo mayor tamaño. 23 Solían ir en total cincuenta y un remeros. 24 La vela latina estaba más difundida en el Mediterráneo occidental durante los siglos VII y VIII que en la zona oriental. 25 La participación de la marinería cedida por Julián fue imprescindible en el paso de las tropas.

20 En cuanto a las cuatro embarcaciones y siempre con rumbo a Gibraltar, existía otro que inician el trasbordo26, que en algunas fuentes que, a su vez, se dividía según el punto exacto aparecen como barcazas o almadias, creemos, de arribada, si hacia el interior de la Bahía o para teniendo en cuenta las características de las aguas continuar trayecto costeando dirección noreste, del Estrecho y el transporte que solían realizar, muy utilizados por naves mercantes. Aljaranda 81 (2011) que bien podrían tratarse de taridas o usari27, si Si seguimos a al-Hakam, se puede no todas, al menos algunas de ellas. Estas naves observar, siempre refiriéndose al cruce del eran bajas, es decir de poco puntal, de manga Estrecho, ancha y poco calado y posiblemente de popa que aparecen dos majaz29, pasos o rutas, lugares redonda. Solían tener una pequeña tripulación de desembarco30, dos posibles entradas de unos ocho o diez hombres. Eran utilizadas «naturales» a la península Ibérica desde Ceuta31, para el suministro y transporte de todo tipo de y entre ambas se encontraba Gibraltar. mercancías, pero especialmente estaban ÇY había entre los dos majaz una montaña que acondicionadas para el de animales, de tal manera hoy es llamada Djabal Tarik, entre Septa que al poder adaptar una especie de pasarela en y al-AndalusÈ32. la popa facilitaba su desembarco, haciéndolo Es decir, lo que implicaría que Gibraltar, directamente en la zona de playa. La poca y esto es importante destacarlo, no era punto XIII Centenario desembarco árabo-bereber caballería que acompañó a Tariq debió de ser de arribada en ninguna de las dos rutas. Además, transportada en estos barcos. desembarcar en Gibraltar sin ser vistos, Para cruzar el Estrecho se utilizaban, teniendo en cuenta su atalaya, es bastante complicado. dependiendo del lugar de destino, distintos pasos Por supuesto un contingente de tropas como nos o rutas28. Así el de Tánger a Tarifa, el occidental, refieren las fuentes es difícil de concebir y fue el usado por Tarif ibn Malik. Desde Ceuta, materialmente imposible de mantener y

Imagen 9.- Tarik quema las naves del desembarco.

26Es de suponer que estas naves mercantes también seguirían transportando gente en un número comprendido entre treinta y cincuenta personas. 27Este tipo de embarcación de origen árabe fue muy empleada para el transporte de caballos. 28 De hecho todavía son conocidos por los pescadores de la zona. 29 Es denominado como al-mayazayn, Çlos dos pasosÈ. 30 Así lo traduce John Harris Jones, (IBN 'ABD AL-HAKAM: History of the Conquest of Spain, trans. JONES J. H., Gottingen: W. Fr. Kaestner, 1858, pp. 18-22., localizada esta obra en Internet Medieval Source Book, 1996, www.fordham.edu/halsall/source/conqspain.html.), “But there was a mountain called the mountain of Tariq between the two landing places, that is, between Septa and al-Andalus”. 31La elección de una ruta u otra dependía del estado de las aguas, es decir si el viento soplaba de poniente, junto a la fuerza de la corriente entrante, la atlántica, que actuaba sobre la amura de babor de la embarcación, podría facilitar el cruce desde Ceuta poniendo proa al viento y rumbo a Gibraltar, hacia la costa mediterránea peninsular. Si predominaba el viento de levante y aprovechando la vaciante se prestaría mejor el paso al interior de la Bahía. 32Hemos acudido indistintamente a las traducciones de Eliseo Vidal Beltrán, Emilio Lafuente y Alcántara y de John Harris Jones de la Conquista de África del Norte y de España de al-Hakam.

21 utilizada, la situamos en el litoral mediterráneo, donde existían varios lugares excelentes para el fondeo y el desembarco, como las playas de la Atunara, de Sobrevela, de La Hacienda, pero

Aljaranda 81 (2011) particularmente, una vez pasada la Piedra del Hombre, se encuentra una amplia zona en la que destaca el estuario del Borondo-Guadalquitón, que llega hasta la desembocadura del Guadiaro, navegable sin problema durante un importante tramo. En toda esta línea de costa han abundado los puntos de aguadas que han sido utilizados insistentemente a lo largo de la historia para arribar y aprovisionar. XIII Centenario desembarco árabo-bereber La primera entrada y la más usada era por la Bahía, independientemente del lugar exacto de arribada

Imagen 10.- Grabado donde se representa una carga árabe, (detalle). Bien, creemos que inicialmente el paso o majaz elegido fue hacia el interior de la Bahía, «[…]Muça envió a Tarif [debe referirse a Tariq] con esta gente [un cuerpo expedicionario], e abastecer con los propios recursos del lugar. como tenía muchas fustas33 e la traviesa es Gibraltar además de presentar una dificultosa pequeña embarcaron todos a ora de vísperas34 orografía e inexistencia de tierras de pastos y en Ceuta, e como fue la noche dieron vela35 e leña, ha sido y es deficitaria en agua*. Por lo arribaron en Algezira36 […]»37. tanto, el desembarco aquí realizado debió de ser Las cuatros naves mercantes pusieron de un reducido grupo y por la zona de Punta rumbo a Iulia Traducta para en un último Europa o en los acantilados próximos, siempre momento plegar velas y a golpe de remo, virar, con la intención de neutralizar la atalaya, dirigiéndose, ya anocheciendo, a un lugar probablemente una antigua torre de vigilancia próximo a Carteia, pero evitando las cercanas y de Carteia, desde la que se visualizaba la Bahía temidas piedras del Gallo, la cual debía y la línea de costa de levante. conservar aún algún tipo de líneas defensivas y La primera entrada y la más usada era estaba separada de Iulia Traducta, principal por la Bahía, independientemente del lugar núcleo poblacional de los alrededores, por dos exacto de arribada: Iulia Traducta, Portus Albus, ríos, el Palmones y el Guadarranque que Carteia o las playas de Getares, Guadarranque- facilitarían su defensa ante un eventual ataque Puente Mayorga, El Campamento, Arenas visigodo. Esta zona de la Bahía, por sus Coloradas, o el propio istmo de Gibraltar. excelentes condiciones, ha sido a lo largo de la La segunda entrada, menos conocida y historia escenario de otros desembarcos.

33 Utilizada como genérico para todo tipo de embarcación durante la Edad Media. 34 Se refiere el autor a las Vísperas, el momento de la oración que se celebra por la tarde, cuando ya declina el día y que debió de coincidir con el montante de marea, momento idóneo para iniciar la navegación en las aguas del Estrecho. 35 Con la expresión “dar vela”nos indica el uso de las velas amparándose en la poca visibilidad desde la costa peninsular en el momento en que se realizaba el trayecto. 36 Aquí el término al-Yazirat debe interpretarse como Península y no a la ciudad de al-Yazirat al-Hadra 37 DE CORRAL P.: Crónica del Rey don Rodrigo. Postrimero Rey de los godos, en SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: “Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes Documentales”, Al-Qantir 10 (2010)96.

22 Pero al acercarse a la línea de playa son realizó en varios lugares de la costa, incluida la sorprendidos por un grupo de cristianos que montaña de Gibraltar, pero que este no fue ni el alertados le esperan apostados e impiden que único ni el principal punto de arribada. tomen tierra. Así, el pretendido desembarco Acondicionado para resistir inicialmente un sorpresa en la zona de Carteia fracasó, y se posible ataque visigodo, quizás fue lugar de Aljaranda 81 (2011) trastocaron los planes previstos. Viendo que la concentración y punto de partida para las noche se acercaba y la dificultad que conlleva incursiones de forrajeo hacia el interior. salir de la Bahía cuando no existen las Si tenemos en cuenta el factor sorpresa condiciones idóneas, tuvieron que arribar en un y sobre todo la realización de forma oculta que sitio muy cercano. Este lugar abrupto, al que se parece ser condición esencial de los primeros retiran tras la abortada acción, es identificado contingentes al desembarcar38, operación militar en la mayoría de las fuentes con Gibraltar, siempre arriesgada, nos inclinamos, como ya Ahora bien, la consideración de Gibraltar hemos señalado, por la zona comprendida tras como principal punto de desembarco, tal superar punta Mala de Levante, saliente que como muchas fuentes antiguas y la historiografía interrumpe el trazado rectilíneo de la costa y moderna suelen señalar, debe contemplarse prácticamente escondido desde sierra dentro de un contexto operativo, pues desde la Carbonera39, por los alrededores del Borondo- XIII Centenario desembarco árabo-bereber óptica castrense es necesario asignar la ubicación Guadalquitón (concretamente pensamos en la geográfica más exacta posible donde se desarrolla desembocadura del Guadalquitón para el la acción militar, si bien Gibraltar, ni táctica desembarco del grueso de las tropas), como nos ni logísticamente, sea el mejor sitio para tomar lo parecen confirmar algunos topónimos40 que tierra y llevar a cabo una operación de esta pueden estar relacionados con este suceso, y sitio magnitud. que reúne dos importantes peculiaridades: Nosotros creemos que el desembarco se fácil avituallamiento41 y total discreción42.

Imagen 11.- Detalle de un escudo de guerrero árabe.

38 “ […] ocultándose los soldados por la costa española durante el día [...]”, en Al-HAKAM, Conquista de África del Norte y de España, Intro., trad., notas e índices Eliseo Vidal Beltrán. Valencia, Anubar, 1966, p 42. 39 Tras la incursión de Tarif se había establecido una estrecha vigilancia de la costa con probables puntos de observación o atalayas ubicadas en Gibraltar y sierra Carbonera, por lo que la elección de esta zona, no visible desde la Bahía ni desde sus inmediaciones, evitaba que fuesen alertadas las poblaciones de Carteia y de Iulia Traducta. 40 Como el propio topónimo Guadalquitón, Wadi-l-Qytun, “río o valle de la Acampada”; Borondo; Barquitón, al-Barbar-l-Qytun; Loma del Rey, etc. 41 “Aquí, en las proximidades del Borondo y del Guadalquitón, existían las condiciones necesarias para el establecimiento, aunque temporal, de un gran contingente de tropas: pastos, agua potable, tierras cultivables, caza y pesca y sobre todo abundancia de leña por tener frondosos bosques que aún son apreciables”, en BENEROSO SANTOS J.: “Acerca de la entrada de los arabo-bereberes en la Península Ibérica en el año 711. Hipótesis, ucronía, y realidad histórica”, Almoraima 36 (2008), nota a pie de página número 19. 42 Incluso cabe la posibilidad que se produjese en el Guadiaro aunque este río queda ya un poco más alejado del destino inicial de arribada de las tropas bereberes.

23 Este enclave estaba comunicado con un antiguo ramal romano que nosotros identificamos con el tramo que aparece en el Itinerario de Antonino, que desde Barbariana, es decir Aljaranda 81 (2011) Barbérsula, donde era fácil vadear el Guadiaro, seguía la línea de costa, pasando por Borondo hasta Gibraltar y Carteia, la estación Calpe- Carteiam que aparece en el texto, para luego continuar hacia Portus Albus, etc. Ahora bien, el primer enfrentamiento importante, en el que vemos un intento de obstaculizar los desembarcos, se produce entre las tropas visigodas guiadas por Sancho43, sobrino de Rodrigo, y los bereberes de Tarif ibn Malik. Nos lo narra al-Razi: Ç[...] E quando el rrey Rodrigo sopo la XIII Centenario desembarco árabo-bereber traycion cayo en el engaño que le fizo el conde, e luego embio a llamar a Sancho que era ome muy fuerte e muy valiente e muy ossado e de mucho para las lides […] junto [Sancho] la mas gente que pudo, e andubo tanto por sus jornadas fasta que llego cerca de do estaban los moros [...] È44.

Imagen 12.- Playa de Guadalquitón, al fondo el peñon Un intento de obstaculizar los de Gibraltar. desembarcos, se produce entre las tropas visigodas para tratar de impedir que prosiguiera el desembarco piensa solo en las tropas bereberes guiadas por Sancho posicionadas allí y son sorprendidos por los efectivos ya desembarcados en la zona de Guadalquitón, cayendo en una emboscada. Para nosotros este o estos enfrentamientos, o al menos algunos de ellos, tuvieron lugar en las inmediaciones de Gibraltar, posiblemente en los arenales del propio istmo, «[…] de él descendió (de un lugar Es muy probable que a pesar de tener abrupto45) al campo abierto, mientras ellos [los Rodrigo noticias del lugar donde estaba cristianos] no lo sabían. En ese punto lanzó una acampado Tarif (opinamos que Tariq no había algara contra ellos46 y cayéndoles encima los desembarcado todavía), del estado de sus hizo su presa [...]È . defensas y de los efectivos que disponía, Sancho A partir de la victoria sobre Sancho es no conociese, o no calibrase realmente, la cuando se produce la conquista y posicionamiento magnitud del ejército bereber, pues suponemos estratégico de Carteia. Parece ser que Iulia que sólo tendría noticias de las fuerzas Traducta también es neutralizada en este posesionadas en Gibraltar al abrigo de las momento aunque no hubo acción de armas. Más defensas levantadas, ignorando las acampadas bien nos inclinamos a creer que ante la derrota en la línea de costa de levante. de Sancho y debido a la persistente insistencia Por eso al acercarse Sancho a Gibraltar de Julián, que como hemos señalado

43 En otras fuentes aparece como Enneco, Iñigo, etc. Incluso se le atribuye esta acción a Tudmir. 44 AL-RAZI: Crónica del moro Rasis, Ed., Diego Catalán y Mª Soledad de Andrés, Madrid, Editorial Gredos, 1975, p.347. 45 Siempre se ha considerado que este lugar es Gibraltar, pero podría referirse también a las estribaciones de la cercana Sierra Carbonera. 46 IBN AL-KARDABUS: Historia de Al-Andalus, Ed., Felipe Maíllo Salgado, Madrid Akal S.A., 1993 (2»ed.), p.60.

24 anteriormente debía tener todavía una gran Carteia a Tariq ibn Ziyad, cuando realmente fue influencia en esa población, obligaron a sus efectuada por Tarif ibn Malif al-Ma’afiri51 habitantes a entregar la ciudad y pactar con Es interesante señalar con respecto a esta Tariq47. conquista lo siguiente, «[…] una vez que se hubieron Ç[...] Tariq, going along with his Aljaranda 81 (2011) pertrechado [debe referirse a las tropas de Tarif companions, marched over a bridge of mountains ibn Malif], salió de la montaña y se precipitó to a town called Cartagena [...]È52 hacia el llano haciendo algaras, hasta conquistar La expresión Çbridge of mountainsÈ 48 Carteya y llegar a la Laguna [...]È . puede hacer referencia a «paso de las montañas», Esta laguna, pensamos que mejor traducción es decir puerto sobre, o para cruzar, las montañas sería marisma, a que hace mención este y no «puente de la montaña (singular)» como autor no debe ser confundida ni con la de la Janda ni con la propia Bahía49 sino que debe habitualmente se ha venido traduciendo. Por otro referirse a una existente entre los ríos lado las grafías en árabe de ambas palabras Guadarranque y Palmones y que quedaba unida pueden ser fácilmente confundibles. Nosotros con un enorme estuario, originado por la identificamos este ÇpasoÈ con los Puertos y los confluencia de otro río, el Madre Vieja, en la Portichuelos entre la zona de Guadalquitón y XIII Centenario desembarco árabo-bereber misma entrada del puerto de Carteia. Es la que Carteia. parece indicar el geógrafo al-Udri cuando señala Con Gibraltar, Carteia y Iulia Traducta que en el litoral de Algeciras existe un lugar en poder de Tariq, quedaban establecidas las denominado como mar de la Caza del Ave50. posiciones árabo-bereberes ante el enfrentamiento Las fuentes adjudican la conquista de decisivo con Rodrigo.

Imagen 13.- Billete de cinco libras donde se reproduce un grabado de Tarik.

47 Al-HAKAM señala al respecto, «Julián y los mercaderes que estaban con él [ya se había producido la llegada de Tariq] quedaron en Algeciras para animar a sus compañeros y a la gente de la ciudadÈ, en SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: «Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes Documentales», ob.cit. p.8. 48 Ibídem, p. 42. 49 Entre otros trabajos véase BENEROSO SANTOS J.: «Acerca de la entrada de los árabobereberes en la Península Ibérica en el año 711. Hipótesis, ucronía, y realidad histórica.», ob.cit., p.135. 50 Este lugar es señalado por Lorenzo Valverde, (VALVERDE, Lorenzo: Carta histórica y situación de la ciudad de San Roque […], Textos recopilados y anotados por F. E. Cano Villalta, Trascripción de E. Cano Villalta. Algeciras, IECG, 2003, p. 76), « […] cuando traen estos dos ríos [Palmones y Guadarranque] las avenidas mui grandes se juntan en aquella playa y arenal que hay entre uno y otro, las dos aguas y nos parece […] que el mar se ha subido y a inundado aquel parage [...]È. 51 Véase entre otros trabajos el de CHALMETA Pedro, Invasión e Islamización, en Colección al- Andalus. Madrid, Editorial Mapfre, 1994, pp.164-168 y los de BENEROSO José, «La incursión de Tarif Ibn Malik en 710. Preludio de una invasión», ob.cit, p.80, y «La suplantación amirí. ¿Tentativa de cambio dinástico o nueva forma de gobierno?», Actas III Congreso Internacional Almanzor y su época, (Algeciras), (noviembre-diciembre 2002). 52 En J. HARRIS JONES: History of the Conquest of Spain, ob.cit.

25 A modo de conclusión -Corpus Scriptorum Muzarabicum, Ed. Consideramos oportuno más que unas por Juan Gil. Madrid, Instituto Antonio de conclusiones, que serían todavía provisionales Lebrija, 1973 - Crónica mozárabe de 754, Ed. y crítica Aljaranda 81 (2011) debido a que las investigaciones siguen abiertas, algunas aclaraciones. Se trata ante todo de una de José Eduardo López Pereira, en Textos Medievales, 58. Zaragoza, Anubar Ediciones, operación bereber, en la que participan gente 1980. visigoda de Julián y un insignificante número -Dhikr bilad al-Andalus (Una descripción de árabes, que aún estando enmarcada en el anónima de al-Andalus), Ed. Y Trad. por proceso de conquista árabe, presenta algunos Luis Molina. Madrid, CSIC, 1983. factores locales y ajenos a la política dictada por -IBN IDARI AL-MARRAKUSI: Damasco y Qayrawan. Historia de al-Ándalus, Traducción y Estudio La acción de Tariq tiene como objetivo, Histórico-Crítico de Francisco Fernández cercano e inmediato, la recuperación de las González. Málaga, Ediciones Aljaima, 1999. posiciones peninsulares arrebatadas a Julián, -IBN AL- KARDABUS: Kitab al-Iktifa

XIII Centenario desembarco árabo-bereber hecho que podría justificar el tamaño de su ejército y la práctica ausencia de caballería. (Historia de Al-Andalus), Estudio y notas por Posteriormente tras la derrota de Rodrigo y ante Felipe Maíllo. Madrid, Akal, 1993. -JIMÉNEZ DE RADA, Rodrigo: De la perspectiva favorable, Tariq decide, ahora sí, Rebus Hispaniae, ed. Fernández Valverde, Corpus la conquista de Toledo y el dominio del país. Christianorum, Continuatio Medievales, 72, R. Por último, es obligado señalar en torno Ximenii, Turnhout, Brepols Publishers, 1987. a las líneas de investigación que la arqueología -AHMED, Rachib Raha (Editor): no ha dicho todavía su última palabra y queda Imazighem del Magreb entre Occidente y Oriente mucha documentación inédita y dispersa por (Introducción a los bereberes), Granada, La rastrear, sobre todo en archivos del actual reino Gioconda, 1994. de Marruecos. Muchas fuentes están siendo otra - AL-ABBADI A.M (Ed.): ÇTarih al- vez traducidas, y estudiadas, por lo que debemos Adalus li-Ibn al-KardabusÈ, RIEIM, XIII (1966) confiar en que aportarán nuevos datos. En el -BENEROSO SANTOS, José: La campo de la numismática también se están entrada de los arabo-bereberes en la Península llevando a cabo diversos estudios. La toponimia, Ibérica. Los inicios de al-Andalus 711-714. (En sobre todo, la menor, también puede deparar más prensa). de una sorpresa. En definitiva, debemos ser -ÍD.: «La suplantación amirí. ¿Tentativa optimistas con respecto al avance en la de cambio dinástico o nueva forma de investigación de los primeros momentos de la gobierno?È, Actas III Congreso Internacional entrada de los grupos arabo-bereberes. Almanzor y su época, (Algeciras), (noviembre diciembre 2002). -êD.: ÇAcerca de la entrada de los arabo- bereberes en la Península Ibérica en el año 711. Fuentes y Bibliografía Hipótesis, ucronía, y realidad histórica.», Ante la imposibilidad de exponer aquí todas las Almoraima 36 ( 2008) 129-137. obras utilizadas, hemos creído interesante -êD.: ÇLos primeros tramos de los seleccionar al menos algunas de ellas. itinerarios seguidos por Tariq y Musa. Una -AL-HAKAM: Conquista de África del cuestión sin resolver.È, Almoraima 38 ( 2009) Norte y de España, Intro., Trad., Notas e 45-55. êndices Eliseo Vidal Beltrán. Valencia, Anubar, -ÍD.: «Aproximación al proceso de 1966. sedentarización de los primeros grupos -êD.: Dikr Futuh al-Ándalus, Trad. John árabobereberes y su importancia en la formación Harris Jones, New Cork, B. Franklin, 1969. de al-Andalus. La toponimia menor como -êD.: The History of the conquest of material de estudio.È, Actas XI Jornadas de Egypt, North Africa and Spain, Ed. Charles C. Historia del Campo de Gibraltar, (Jimena), Torrey. New Haven, Yale University Press, 1922. (octubre 2010). (Reimpresión de 1980). ÍD.:«La incursión de Tarif ibn Malif en -AL-RAZI: Crónica del moro Rasis, Ed., 710. Preludio de una invasión», Al-Qantir, 11 Diego Catalán y Mª Soledad de Andrés, (2010) 82-83. Madrid, Editorial Gredos, 1975, p.347. -CHALMETA, Pedro: Invasión e -Ajbar Maymu’a fi fath al-Andalus wa Islamización, En Colección al-Andalus. Madrid, dikr umara’iha, Trad. Emilio Lafuente. Madrid, Editorial Mapfre, 1994. Guillermo Blázquez, 1984. - GARCêA MORENO, L: ÇCeuta y el Estrecho de Gibraltar durante la Antigüedad

26 tardía (siglos V-VIII)È, en Congreso Internacional -TERÉS SÁDABA, E.: Materiales para ÇEl Estrecho de GibraltarÈ (n. 3), pp. 1095- el estudio de la toponimia hispanoárabe: 1114. Nómina fluvial, t.I, Madrid, CSIC, 1986. -GUICHARD Pierre: Al-Andalus. -VALLVÉ, J.: ÇNuevas ideas sobre la Estructura antropológica de una sociedad Aljaranda 81 (2011) islámica en Occidente, Granada, Universidad de conquista árabe de España: Toponimia y Granada, 1998. (2»ed.) Onomástica», Madrid, Real Academia de -LÓPEZ DE AYALA, I.: Historia de Historia, 1989. Gibraltar, Madrid, Ed. Antonio de Sancha, 1782. -VILLAVERDE VEGA, NOÉ: Tingitana Edición facsímil de la Caja de Ahorros de Jerez en la antigüedad tardía (siglos III-VII): de 1982. -SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: auctonía y romanidad en el extremo occidente «Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes Mediterráneo, Madrid, Real Academia de la documentalesÈ, Al-Qantir 10 (2010). Historia, 2001. XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 14.- Desembarco de tropas árabes.

27 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Detalle de una miniatura de Tarik. Reflexiones en torno al 711 Problemas, metodologías y posibles avances

Esther Sánchez Medina

ste artículo pretende realizar una consagré mi Tesis doctoral1 y los posteriores rápida reflexión sobre la importancia estudios que dentro del proyecto y grupo del que E de la conquista árabe de la península formo parte he venido realizando2. Debido a Ibérica, tanto del acontecimiento histórico en mi participación en este proyecto y el interés que sí mismo, como de su reflejo en la las investigaciones llevadas a cabo en su historiografía árabe y mozárabe e incluso en marco por los diversos miembros del grupo la mentalidad de la población hasta nuestros provocaron en el equipo editor de la revista días. Se trató, sin duda, de un momento clave ALJARANDA, hace unos meses, recibí la amable de la historia hispana que tendrá gran invitación de don Carlos Ruiz-Bravo incidencia en el posterior desarrollo histórico -miembro de su consejo de redacción- para de los diversos territorios peninsulares. Este participar en un número especial dedicado a la estudio aborda pues los principales problemas conquista islámica de la península Ibérica en el a los que ha de hacer frente la investigación décimo tercer centenario de la efeméride. Se actual, así como también las nuevas trataba de ofrecer una visión personal de la metodologías aplicadas a su estudio y los misma, lo cual resultaba enormemente sugerente. avances logrados gracias a ellas. Agradezco dicha invitación desde estas líneas, no sin señalar que las siguientes páginas son Introducción sobre todo el resultado de mi entusiasmo por el Desde hace años dedico mis investigaciones a la que creo un episodio vital de la historia historia del norte de África durante la peninsular, y no el de mi especialización en el Antigüedad tardía. A este lugar y cronología tema que va a ocuparlas. Aún así intentaremos

1 Fideles et rebelles: Africanos y Romanos en conflicto con el poder imperial durante la primera mitad del siglo VI d. C., UAH 2009, que será publicada próximamente por el CEBNCh de Granada. 2 “La expansión del Imperio árabe-islámico en el Norte de África y España (siglos VII-VIII) según las fuentes no-islámicas”, dirigido por el Dr. García Moreno. I+D+I Ref.: S2007/HUM-0487. Este proyecto de investigación internacional tiene por objetivo la recopilación y análisis de todos los documentos, literarios y arqueológicos, no islámicos contemporáneos a la expansión del primer imperio árabe islámico por el norte de áfrica (Egipto y el Magreb) y la península Ibérica. La reconstrucción integradora de los procesos históricos que tuvieron lugar, y el contraste de sus conclusiones y resultados con la historiografía árabe-islámica sobre los mismos, ayuda también a comprender mejor la génesis especial de esta última. Agradecemos a L. Fernández la corrección de las transcripciones de los términos y nombres propios árabes, así como a O. Herrero la amable revisión y actualización bibliográfica de nuestro manuscrito original.

28 reflexionar sobre aquellos problemas que puedan resultar útiles a los lectores para la interpretación del proceso, así como las nuevas metodologías de análisis posibles para el estudio de la evolución histórica de tan intrincado periodo y los actuales Aljaranda 81 (2011) avances recientemente alcanzados por la investigación.

En torno al 711 La llegada del ejército árabo-bereber a la Península en el 711 estuvo precedida de un apasionante viaje que tuvo su origen en las importantes ciudades de las arenas de Arabia y que durante cerca de cien años estremeció casi la totalidad del Mediterráneo, especialmente en sus territorios orientales y meridionales. El mundo XIII Centenario desembarco árabo-bereber en el que surgió el Islam contaba con dos gigantes de pies de barro en constante lucha: Bizancio y la Persia sasánida, entre los cuales supo hacerse un sitio un nuevo monoteísmo y sobre todo, un nuevo poder político en auge. Las tempranas victorias militares y el ingente botín obtenido en las ricas ciudades de Oriente motivaron una rápida expansión del nuevo credo más allá de la península Arábiga. Su ancestral relación con las rutas caravaneras que recorrían Imagen 2.- Mano de Fátima. el Oriente y el Magreb facilitó enormemente su expansión, al igual que la prontitud con que sumó adeptos especialmente en el norte de África. expedicionarias y/o militares fuera de los recintos Este territorio jugó un papel fundamental como urbanos, la imposición de tributos moderados lugar de reclutamiento y refuerzo de posiciones siempre adaptados a las condiciones de sumisión3, en su conquista del Mediterráneo y su avance y sobre todo, y de manera crucial, el hacia los territorios occidentales. mantenimiento de los sistemas administrativos previos a la conquista así como de sus administradores autóctonos. A ello habríamos de sumar que los constantes conflictos religiosos El mundo en el que surgió el relacionados con la naturaleza de Cristo habían Islam contaba con dos minado desde hacía siglos la fe de los orientales y les habían predispuesto a abandonar sus gigantes de pies de barro en creencias a cambio de una estabilidad económica constante lucha: Bizancio y la y social que los nuevos poderes árabes parecían Persia sasánida dispuestos a garantizar. Las conquistas se sucedieron una tras otra4: Damasco en el 635, Jerusalén en el 638, Cesaréa en el 6405, las islas de Chipre y Sicilia A favor del éxito jugó también el respeto en el 649 y 652 respectivamente, los principales a la vida y las propiedades de las poblaciones núcleos de Egipto en el 656, Cartago en el 692 conquistadas, la instalación de las fuerzas y un largo etcétera, que les facilitará el avance

3 Recordemos que la tributación estaba en estrecha relación con las condiciones bajo las cuales las poblaciones conquistadas hubieran pasado a formar parte de la nueva entidad política, dependiendo de si se había tratado de una capitulación o de una derrota militar, en cuyo caso las condiciones se endurecían notablemente. Véase: GARCÍA SANJUAN, A., “Formas de sumisión del territorio y tratamiento de los vencidos en el derecho islámico clásico”, en M. Fierro - F. García Fitz (eds.), El cuerpo derrotado: cómo trataban musulmanes y cristianos a los enemigos vencidos (Península Ibérica, ss. VIII- XIII), Madrid, 2008, 61-111. 4 Sobre estas conquistas, véase: KAEGI, W.E., Byzantium and the Early Islamic Conquests, Cambridge, 1994. 5 Estas primeras conquistas dejaban además gran parte de las embarcaciones comerciales y militares bizantinas a su merced, facilitando su expansión ultramarina posterior.

29 por el norte de África hacia su zona más estudiada como para ofrecernos una visión clara occidental y, más tarde, a la Península y sur de de las tensiones que debieron existir entre ambos la antigua Galia. Sin embargo, todo ello no debe grupos y que se traducen a partir de las fuentes darnos la equivocada idea de que las conquistas árabes relacionadas con la conquista de Spania, Aljaranda 81 (2011) fueron indoloras, bien al contrario. En el caso tal y como tendremos ocasión de ver más norteafricano, con el que estamos más adelante. Mientras que el papel jugado por las familiarizados, debemos señalar la irregular fuerzas sirias y egipcias parece decisivo en las progresión de los avances debido tanto a la primeras tentativas de control sobre Ifriqiya - resistencia bizantina como a la propia de la nombre árabe de la antigua África menor- y los población autóctona. Si en un primer momento ensayos de toma de su capital Cartago, la inclusión de elementos beréberes, a partir de la la conquista de la Pentápolis pretendió tan sólo 7 la protección del flanco occidental de Egipto, actuación de ‘Uqba en Barqa, ha sido analizada con menor detalle. La fundación de Qairawan con posterioridad, y viéndose ampliada hacia la en el 670 supuso la consolidación del control Tripolitania y el África menor, cobró sentido en del Magreb central, pero sobre todo la base sí misma, jalonada siempre, eso sí, de avances para las futuras expediciones a Argelia y y retrocesos entre los que mediaron numerosas XIII Centenario desembarco árabo-bereber Marruecos. pausas cronológicas6. La resistencia bizantina y autóctona Uno de los aspectos más importantes, se hizo especialmente notable en el extremo clave para el éxito de las diversas campañas, fue más occidental -precisamente en la decisiva la heterogénea composición tribal de los ejércitos ciudad de Tánger, aún bajo poder imperial, conquistadores, dentro de los cuales se fomentó aunque los árabes también se habían visto siempre la incorporación de la población forzados a atender la amenaza de enemigos conquistada bajo liderazgo árabe. En el caso tan notables como los aunados bajo el gobierno africano, la relación entre árabes y beréberes de Kusayla8 y más tarde, de la Kahina, dentro de su ejército no ha sido lo suficientemente derrotada de forma definitiva en el 6989.

Imagen 3.- Diversas rutas de las expediciones de conquista.

6 Véase la inédita tesis de BEN ABBES, M., L’Afrique byzantine face à la conquête arabe: recherche sur le VIIe siècle en Afrique du nord, París 2004. Disponible en la Bibliothèque Centrale de l’I. N. P. 7 Véase LÉVI-PROVENÇAL, E., “ ‘U˙ba b. NÇfi‘ ”, en EI1 (Encyclopaedia of Islam =EI) y CHRISTIDES, V., “ ‘Ukba b. Näfi‘ ”, en EI2; Leiden, 2000, vol. X, 789-790, también MARÇAIS, G., “Sîdî ‘Uqba, Abû l- Muhâjir et Kusaila”, Cahiers de Tunisie 1 (1953) 11-17. 8 Sobre Kusayla véase: CAMPS, G., “De Masuna à Koceila. Les destinées de la Maurétanie aux VIe et VIIe siècles”, Histoire et Archéologie de l’Afrique du Nord. IIe Colloque International (= Bulletin archéologique du CTHS n.s. 19B), París, 1985, 322-323; TALBI, M., “Kusayla”, EI2, Leiden, 1986, vol. V, 517-518; MODÉRAN, Y., “Kusayla, l’Afrique et les Arabes“, en C. Briand-Ponsart (ed.), Identités et Cultures dans l’Algérie Antique, Rouen, 2005, 423-457; Id., s.v., Encyclopédie Berbère (=EB), XXVIIIXXIX, Aix-en-Provence, 2008, 4255-4264. 9 Véase MODÉRAN, Y., Les Maures et l’Afrique romaine (IVe-VIIe siècle), Rome 2003, 197-201; 751-756; 794-797; TALBI, M., “Un nouveau fragment de l’histoire de l’Occident musulman (62-196/682-812): L’épopée d’al-Kahina”, Cahiers de Tunisie XIX 73-74 (1971) 19-52; Id., “Al-Kahina”, EI2, Leiden, 1982, vol. V, 440-442; ROTH, N., “The Kahina: Legendary material in the accounts of the 'Jewish Berber Queen'”, The Maghreb Review, vol7 (1982) 5-6 y 122- 125; FANTAR, M., “La Kahina, reine des Berbères”, Reppal 3 (1987) 169-184; HANNOUM, A., Colonial Histories, Post-Colonial Memories. The Legend of the Kahina, a North African Heroine, Portsmouth, 2001.

30 Este desembarco, así como el que se produciría como refuerzo un año después -en junio del 712-, supuso un punto de inflexión en la historia peninsular. El reino godo, heredero y continuador de la tradición hispanorromana, se Aljaranda 81 (2011) mostró incapaz de frenar el avance del ejército musulmán debido a sus problemas internos. Hasta aquí los acontecimientos comúnmente aceptados por la historiografía, pero ¿qué ocurrió con el reparto de poder entre árabes y beréberes dentro del ejército musulmán?, ¿era en su totalidad un ejército converso?, ¿cuál fue la implicación de los poderes africanos en el paso de los musulmanes a la Península?, ¿cómo se mostró la población hispana, resistente o

aquiescente?, ¿y las autoridades visigodas?, ¿y XIII Centenario desembarco árabo-bereber su ejército?, ¿cuál era la situación socio-política del reino germánico?, etc.

Imagen 4.- Miniatura de Tarik.

El nuevo gobernador de Ifriqiya, Musà Este desembarco supuso un b. Nusayr10, un sirio converso cliente de los punto de inflexión en la Omeyas, se dirigió con un ejército muy diverso, historia peninsular compuesto por sirios, egipcios y beréberes, a Tánger. En el año 709 nombró gobernador de la ciudad a un beréber, Tariq b. Ziyad11 y tan sólo unos meses después, en julio del 710 autorizó una expedición comandada por otro de sus clientes beréberes, Tarif12. Éste, con medio millar No pretendemos, obviamente, darles respuesta de soldados, árabes y beréberes, en unas en este brevísimo trabajo, pues excede en todo pocas embarcaciones suministradas desde tierras a nuestra intención y posibilidades, pero sí, al africanas, habría realizado una expedición de menos, queremos recoger las muchas inquietudes tanteo del sur de Spania, durante la cual constató y reflexiones que dicho episodio y el estado seguramente la riqueza de la siempre fértil actual de su investigación nos suscitan. Bética y las posibilidades que dicho territorio podía ofrecer en el caso de realizar acciones más definitivas. Dichas acciones no tardaron en llegar. Problemas, metodologías y posibles Abierta de nuevo la temporada de navegación avances segura, en la primavera del 711, el gobernador A pesar de tratarse de un cambio extremadamente tangerino, Tariq, cruzó el Estrecho al frente de importante en la tradición político-social de unos 12.000 beréberes y unos 300 árabes, la Península, con substanciales consecuencias acuartelándose en Gibraltar (lugar que toma en su desarrollo posterior, los estudios dedicados probablemente su nombre del propio Tariq, Yâbal a los primeros momentos de la conquista no son 13 Tariq: la montaña de Tariq) . demasiado abundantes14. El principal escollo al

10 Véase LÉVI-PROVENÇAL, E., “Müsa b. Nusayr”, EI2, Leiden-New York, 1993, vol. VII, 643-644. 11 Véase MOLINA, L., “Tarik b. Ziyad”, EI2, Leiden, 2000, vol. V, 242-243. 12 Véase LÉVI-PROVENÇAL, E., “Tarif”, EI1, Leiden-Paris, 1934, vol. IV, 699. 13 Sobre la navegación del Estrecho durante la Antigüedad véase: BRAVO, S., “Aspectos náuticos de la travesía del estrecho de Gibraltar a través de la literatura periegética”, III Congreso de Historia de Andalucía, Córdoba 2003, 13-43. Véase también de carácter general: FERRER, B., El fin de la Antigüedad en el Mediterráneo Occidental (569-732). Navegación y comercio internacional marítimo: el marco jurídico-institucional (2003, Tesis inédita). 14 Véanse, por ejemplo (por orden alfabético): BARCELÓ, M., “Sobre algunos ‘fulus’ contemporáneos a la conquista de Hispania por los árabe-musulmanes”, Boletín de la Real Academia de Buenas Letras de Barcelona 34 (1971-1972) 33 42; CHALMETA, P., “De historia hispano-musulmana: reflexiones y perspectivas”, Revista de la Universidad de Madrid, vol. XX 79 129- 160; Invasión e islamización. La sumisión de Hispania y la formación de al-Andalus, Madrid, 1994; GARCÍA MORENO, L. A., “Ceuta y el

31 que hacer frente es la escasez de fuentes referidas etc.) no facilitan la labor, el trabajo aislado de a los siglos VII y VIII lo cual dificulta, de los diversos investigadores y especialistas manera ineludible a veces, la reconstrucción tampoco lo ha hecho. La Filología o filologías Aljaranda 81 (2011) histórica. -según la lengua a la que se consagran- se han ido replegando sobre sí mismas, perdiendo la perspectiva comparativa que el manejo fluido de varias lenguas podía ofrecer y la Historia, a su vez, separada cada vez más de la escuela filológica, ha perdido en gran parte también su La tradicional capacidad de análisis de las fuentes como base separación de las distintas etapas, para reconstruir un discurso histórico plausible. hacen de la época de la conquista un momento “de nadie” El tinte religioso y providencialista de las XIII Centenario desembarco árabo-bereber fuentes cristianas hace del relato histórico el resultado de un plan debido a la voluntad divina Dichas investigaciones muestran además una carencia esencial: la falta de contacto entre estudiosos del Mundo clásico y/o tardoantiguo, Asimismo cabría destacar que la medievalistas y arabistas.La tradicional aproximación a los diversos textos no se ha separación de las distintas etapas históricas como realizado de la misma forma dependiendo del objetos de investigación diferenciados y intermedio lingüístico en el que estos estuviesen cerrados y lo que es aún más grave, de las diversas escritos. La hermenéutica de las lenguas clásicas escuelas filológicas, hacen de la época de la -especialmente del latín y el griego- difiere conquista un momento “de nadie”, o mejor dicho, enormemente de la aplicada al árabe. Una de las “de todos y ninguno”. Si bien es cierto que consecuencias de esta distinta forma de trabajo las notables diferencias existentes -fonética, con ambos tipos de fuentes es la pérdida de escritura, construcción gramatical, etc.- entre las apreciación de la continuidad existente entre lenguas en uso por los grupos humanos algunas tradiciones historiográficas latinas, implicados en la conquista y las utilizadas por pero sobretodo griegas -propias del Oriente la historiografía posterior (latín, griego, árabe, helenístico-, y la historiografía árabe15.

Estrecho de Gibraltar durante la Antigüedad Tardía (siglos V-VIII)”, Congreso Internacional ‘El Estrecho de Gibraltar’ Ceuta 1987, I, Madrid 1988, 1095-1114; Id., “Los últimos tiempos del Reino Visigodo”, BRAH 189, 1992, 425-460; Id., “Bizantinos, ceutíes y la invasión islámica del 711”, Del Nilo al Guadalquivir, en prensa (RAH Madrid, 2011); GARCêA SANJUÁN, A., “Las causas de la conquista islámica de la Península ibérica según las crónicas medievales”, MEAH sección árabe, 53, 2004, 101-127; MANZANO MORENO, E., “Las fuentes árabes sobre la conquista de al-Andalus: una nueva interpretación”, Hispania, LIX/2, 202 389-432; MARTêNEZ ENAMORADO, V. y TORREMOCHA, A., “Monedas de la conquista: algunos feluses hallados en la ciudad de Algeciras”, Caetaria 3 (2000) 136-149; MOLINA, L., “Los Ajbar maymu‘a y la historiografía árabe sobre el período omeya en al-Andalus”, Al-Qantara: Revista de estudios árabes 10 fasc. 2 (1989) 513-542; SÁNCHEZ-ALBORNOZ, C., “Itinerario de la conquista de España por los musulmanes”, Cuadernos de Historia de España 10 (1948) 21-74; VALLVÉ BERMEJO, J., Nuevas ideas sobre la conquista árabe de España. Toponimia y onomástica, Madrid, 1989; VIGUERA MOLINS, M. J., “El establecimiento de los musulmanes en Spania - al-Andalus”, V Semana de estudios medievales: Nájera, 1 al 15 de agosto de 1994, coord. J. I. de la Iglesia Duarte, Nájera, 1995, 35-50, actualizado recientemente en: “22 crónicas árabes sobre la expansión por Al-Andalus”, Del Nilo al Ebro: I Estudios sobre la conquista islámica, coord. L. A. García Moreno - M. J. Viguera Molins, Alcalá de Henares 2010, 209-228. En esta misma obra, coordinada por nosotros, encontramos uno de sus tres grandes apartados dedicados a la Península tras la invasión (pp. 181-245). Véanse también en su totalidad los recientes números 10 y 11 de la revista Alqantir. 15 Véase: GARCÍA MORENO, L.A., “Historiografía andalusí e historiografía hispanolatina”, en prensa. Agradecemos al Dr. García Moreno que nos haya facilitado la lectura de este manuscrito, así como también el de: “Teodomiro de Orihuela y la invasión islámica”, también en prensa.

32 Aljaranda 81 (2011)

Imagen 5.- Batalla del Barbate, conocida por la de Guadalete. Año 711. (Cuadro de F. Mota). XIII Centenario desembarco árabo-bereber

De todas formas, y a pesar de la distinta bizantinoarábiga y la mozárabe del 754) y es metodología aplicada, la historiografía formulada e incluida en la historiografía cristiana grecolatina en sí misma presenta enormes con posterioridad18. En contraposición a la diferencias con respecto a la árabe. Mientras que corriente historiográfica cristiana, encontramos la primera, especialmente la latina, andaba las fuentes musulmanas, en las cuales la divinidad preocupada por ofrecer los acontecimientos de apenas juega papel alguno. La ausencia de una forma ordenada, atendiendo principalmente dimensión religiosa no puede sino extrañarnos al año en el que habían sucedido los distintos si tenemos en cuenta que la expansión islámica hechos, la árabe se centraba en ofrecer una relato debía tener como leitmotiv la difusión del mensaje dramatizante16. Como bien imaginará el lector, de Mahoma. esa manera de presentación de la información La historiografía musulmana ofrece, aun histórica en las crónicas latinas no está exenta sin estar exenta de algunos elementos de problemas de cronología absoluta y relativa legendarios19, un relato centrado principalmente que dificultan aún más su exégesis. Asimismo, en la actuación humana. A pesar de la el tinte religioso y providencialista de las fuentes diferencia entre unas y otras fuentes en lo referido cristianas hace del relato histórico que recogen, a la causalidad -divina o humana- de la el mero resultado de un plan debido a la voluntad conquista, resulta interesante sopesar la divina17. Dicho plan obedecía, segúnresponsabilidad las atribuida a sus distintos mismas, a los pecados cometidos por los godos, protagonistas, especialmente a los hijos de Witiza especialmente por sus monarcas, que durante y Rodrigo. En el caso de las fuentes cristianas, las últimas décadas habían derramado sangre de la culpabilización de los primeros va en aumento unos y otros con frecuencia, en una lucha hasta alcanzar la Baja Edad Media y se produce, parricida y fratricida por hacerse con la corona, de manera paralela, a la legitimación y el llamado «morbo gótico». El carácter ensalzamiento de la figura de Rodrigo. La ineludible de la decisión divina de castigar esa historiografía árabe también relaciona la caída conducta justificaría en sí mismo la derrota de de los godos con la actuación de los hijos de Witiza, los cristianos a manos de los conquistadores pero ofrece, a su vez, una visión negativa de Rodrigo árabes, pero curiosamente, y tal y como debido a su depravado comportamiento con la hija demuestra García Sanjuán, esa interpretación del conde Julián20. Podríamos afirmar, pues, que está ausente de las dos primeras crónicas (la mientras que los cristianos intentan salvar

16 Nos referimos a las primeras crónicas sobre la conquista, pues bien es cierto, que también encontramos otros textos a modo de anales. A este respecto puede verse la obra de MAILLO SALGADO F., De Historiografía Árabe, Madrid 2009. 17 Véase SÁNCHEZ SALOR, E., “El providencialismo en la historiografía cristiano-visigótica de España”, Anuario de Estudios Filológicos 5 (1982) 179-192. 18 Cf. GARCÍA SANJUÁN, “Las causas de la conquista islámica…” 104 y ss. 19 Sirva como ejemplo el relato de la Casa de los Cerrojos de Toledo (cf. HERNÁNDEZ JUBERÍAS, J., La Península imaginaria. Mitos y leyendas sobre al-Andalus, Madrid, 1996, 194 y ss.). 20 Si bien es cierto que la visión negativa y la traición del conde Julián están presentes ya en las primeras fuentes árabes, el episodio de la violación de su hija no figura en las dos primeras, haciendo su aparición, ya en el siglo IX, en el relato de Ibn ‘Abd al-Hakam (GARCÍA SANJUÁN, “Las causas de la conquista

33 del oprobio a una parte de la estirpe goda, llegada de los musulmanes, o mejor dicho de los fundamento de la futura Reconquista de al- beréberes, pues ésta era la composición Andalus, los musulmanes hacen recaer, sin mayoritaria del ejército, estuviera en relación ambages, toda la responsabilidad de la derrota directa con un llamamiento cursado desde la Aljaranda 81 (2011) de los peninsulares en la desunión y erróneas Península. La invasión musulmana del Magreb actuaciones de los nobles godos. Por tanto, parece parece haber supuesto un revulsivo para el que debamos seguir, al menos en lo referido a desarrollo del proceso de afianzamiento de los las causas de la conquista, los relatos beréberes que se encontraba ya en plena musulmanes, a priori no interesados en atribuir efervescencia, y sin los cuales la conquista no la responsabilidad de manera tendenciosa a hubiera sido posible. A favor de una fuerte política ninguno de los grupos de poder -partidarios de de pactos que uniera las poblaciones de uno y los herederos de Witiza21 o de Rodrigo-, pues otro lado del Estrecho estarían relatos tales como en definitiva, todos ellos habían resultado el de la entrega de la «Mesa de Salomón» a Tariq derrotados bajo sus armas. por nada menos que un sobrino de Rodrigo23, algo que sin dejar de formar parte de la historia legendaria de la conquista podríamos poner en XIII Centenario desembarco árabo-bereber relación con esa política. Otro de los asuntos cruciales de la conquista es el reparto de fuerzas entre los distintos elementos La historiografía musulmana del ejército conquistador: beréber y árabe. Independientemente del número de hombres de uno u ofrece, aun sin estar exenta de otro grupo que componía dicho ejército, queremos algunos elementos reflexionar mínimamente sobre el llamado “clientelismo legendarios, un relato centrado beréber”. Tarif y Tariq, principales artífices de la inicial conquista, aparecen en las fuentes como mawali, es principalmente en la actuación decir, como “clientes” beréberes. Y ante este humana

En todo caso, si algo parece claro es que los problemas sucesorios del último periodo del reino godo tuvieron mucha incidencia en su desenlace final. Tal vez, la ilegitimidad de Rodrigo, poco a poco omitida de las fuentes cristianas, dificultó su consolidación en el trono, especialmente cuando los hijos de Witiza alcanzaron edad suficiente para oponerse al gobierno y lograron el apoyo de parte de la nobleza goda. Asimismo, y teniendo en cuenta la tradicional política de pactos de la Antigüedad tardía, especialmente en el norte de África22, Imagen 6.- Fulus del Periodo Gobernadores (Al-andalus, 711 parece acertado suponer que, efectivamente, la - 756 d.C). Wikipedia.

islámica…” 121). Este episodio no aparece en las fuentes cristianas hasta el siglo XII, momento en el cual empiezan a amalgamarse ambas tradiciones historiográficas. Sobre este personaje acaba de aparecer: GOZALBES CRAVIOTO, E., “El Comes Iulianius (Conde Julián de Ceuta), entre la historia y la literatura”, Alqantir 11 ( 2011) 3-35. 21 Es interesante el relato sobre el pacto establecido entre los hijos de Witiza y los musulmanes, con él se comprometían a ayudarles a cambio de la garantía de conservar sus propiedades (v. Ibn al-Qutiyya, Historia de la conquista de España de Abenalcotía el cordobés, J. Ribera (ed. y trad.), Madrid, 1926: 1- 2//2-3; HERNÁNDEZ JUBERÍAS, J., La Península imaginaria…, 191; MANZANO MORENO, E., Conquistadores, emires y califas. Los Omeyas y la formación de al- Andalus, Barcelona, 2006, 44-45). 22 Sobre la importancia del elemento beréber como apoyo a las diversas facciones en conflicto en África, sirva como ejemplo: SÁNCHEZ MEDINA, E., “La población beréber de la Tripolitania durante la Antigüedad tardía”, Del Nilo al Guadalquivir, en prensa (RAH Madrid 2011). 23 Cf. HERNÁNDEZ JUBERÍAS, J., La Península imaginaria…, 208 y ss. Este relato aparece recogido en Ibn ‘Abd al-Hakam, Futuh Misr. The History of the Conquest of Egypt, North Africa and Spain, Ch. C. Torrey (ed.), New Haven, 1922, 207.

34 dato se nos plantean dos incógnitas, por un lado, pesar de estar unidos por un lazo de clientela (o en qué consistía exactamente “ser cliente”24 y walá) una fuerte diferenciación al menos en la por otro, de mayor complejidad aún, en qué conquista del futuro al-Andalus25. Al fin y al consistía “ser beréber”. Tradicionalmente cabo, los cargos de la administración local habían entendido como sumisión, el clientelismo bien permanecido en manos no árabes, pensemos, Aljaranda 81 (2011) pudiera ser una forma de pacto entre la autoridad por ejemplo, en Tariq, gobernador de Tánger. La musulmana y la autoridad local y no implicar, a segunda de las incógnitas, la “berberidad”, es aún más compleja de analizar. El estudio más completo sobre el África preislámica (ss. IVVIII), realizado por nuestro compañero, desgraciadamente desaparecido, Y. Modéran, se muestra a menudo ambiguo en la interpretación de los términos26. La pretendida continuidad entre mauri -tardoantiguos- y barabira -tras la conquista islámica- no es aceptada por todos los investigadores27, así como tampoco hay consenso acerca de lo que significaba en sí mismo “ser XIII Centenario desembarco árabo-bereber barbar”28. En relación con estos problemas interpretativos encontramos en las fuentes literarias los episodios referidos a los conflictos entre Tariq y Musà. El más que posible origen beréber de Tariq y su carácter de mawlà, ambos aspectos entendidos según la tradicional historiografía, dificultarían la comprensión de la totalidad de sus actuaciones y el enorme poder que parece haber ejercido en los momentos iniciales de la conquista. Tal vez por ello deban ser reconsiderados. Curiosamente, en esos primeros momentos, durante los cuales el apoyo de los nuevos musulmanes era crucial, es cuando surgen las desavenencias entre nuestros protagonistas. El enfrentamiento entre ambos hombres parece tener su primer reflejo en el episodio de la sustitución de una de las patas de la «Mesa de Salomón», algo que Tariq llevó a cabo ante la sospecha de futura traición de Musà. La Mesa no era más que una parte del abundante botín que Tariq consiguió en las primeras campañas peninsulares de la antigua Bética, lo cual despertó pronto la envidia y codicia de Musà. Éste decidió cruzar el Estrecho hacia la Península e ir en busca de Tariq, el cual Imagen 7.- Teodorico, rey godo. Museo del ejército. se encontraba cerca de la ciudad de Toledo. Al parecer, tras el encuentro, Tariq sufrió un severo castigo29 al que se sumó obviamente la

24 Véase FIERRO, M. I., “Mawali and muwalladun in al-Andalus (second/eighth-fourth/tenth centuries)”, M. Bernards - J. Nawas (eds.), Patronate and Patronage in Early and Classical Islam, vol.1, Leiden, 2005, 195-245; Ead., “Los mawali de `Abd al-Rahman I”, Al-Qantara, vol. XX (1999) 65-98. También OLIVER PÉREZ, D., “Sobre el significado de mawlà en la historia omeya de al-Andalus”, Al-Qantara XXII ( 2001) 321-344. 25 Sin embargo, sabemos que, aunque teóricamente los nuevos musulmanes deberían haber tenido “los mismo derechos y ventajas que los árabes, (…) la identificación entre Islam y arabismo fue tan fuerte en un principio que los árabes de raza mantuvieron a los neoconversos en una situación de inferior” (cf. MAÍLLO, F., Vocabulario de Historia árabe e islámica, 2ª ed. Madrid, 1999, 152). 26 MODÉRAN, Y., Les Maures…, 11. 27 Sirva como ejemplo, el recientísimo trabajo de Ramzi ROUIGHI, “The of the Arabs”, Studia Islamica, new series, 1, 2011, 67-101. 28 Sobre los beréberes de al-Andalus, DE FELIPE, H., Identidad y onomástica de los beréberes de al- Andalus, Madrid, 1997. 29 Azotes o presidio, según las distintas fuentes. Ibn ‘Abd al-Hakam (Torrey ed., 1922, 210), quien nos ofrece un relato detallado, afirma que al llegar la noticia del apresamiento al califa, éste mandó un

35 confiscación de las riquezas obtenidas durante Conclusión la conquista. Sin embargo, el califa, desde Muchos más son los aspectos que deberíamos Damasco, pareció tomar partido por Tariq. A abordar aquí, pero la extensión requerida nos lo impide. Sin embargo, no queremos terminar estas Aljaranda 81 (2011) partir de ese momento ambos hombres avanzarían páginas sin resaltar la necesidad de continuar juntos hacia el Norte. El posterior llamamiento líneas de investigación como las emprendidas califal de ambos hombres a Damasco posibilitó recientemente31 y a través de la cuales se pretende el desenlace de la historia, al descubrir el califa realizar un exhaustivo análisis comparativo de que Musà mentía cuando afirmaba que la Mesa la evolución de la historiografía árabe y cristiana, formaba parte del botín obtenido por él, pues sus formas de elaboración y transmisión, las sólo Tariq30 pudo explicar el cambio que había contaminaciones horizontales que pudieron producirse, las leyes propias de cada uno de los sufrido una de sus patas y demostrar así su géneros literarios, etc. Para ello la decidido protagonismo en las primeras multidisciplinariedad es imprescindible, así, conquistas. El estricto control de Damasco sobre resultan muy interesantes los resultados que la las acciones peninsulares y los conflictos surgidos arqueología puede ofrecernos en lo referido a la XIII Centenario desembarco árabo-bereber entre las distintas facciones implicadas, a pesar resistencia de las poblaciones conquistadas de lo legendario de este relato, ponen de durante los primeros momentos de llegada de los árabes a tierras europeas32. manifiesto las tensiones originales, tensiones Otro aspecto a nuestro parecer muy que darían lugar a distintas interpretaciones interesante y que no hemos podido ni siquiera historiográficas de la conquista en las cuales esbozar aquí, es la imagen que de lo “moro” se beréberes, árabes y autoridades damascenas, va a fraguar en la Península y cómo esa imagen jugaron papeles muy distintos. La progresiva condicionará la evolución del posterior desarrollo integración -dado su escasísimo número en histórico, especialmente en la Reconquista, relación al total peninsular con la población pero también la mentalidad española a lo largo de los siglos y hasta la actualidad, época en la hispana pareció diluir las tensiones y garantizar cual nuevos acontecimientos y conflictos traen un cierto equilibrio social que se consolidaría a desgraciadamente a veces los viejos clichés a principios del siglo X. nuestra mente.

Imagen 8.- El rey Don Rodrigo y Florinda. Año 710. (Cuadro de N. Méndez Bringa).

mensaje a Musà en el que le advertía: “Si lo golpeas, yo te golpearé a ti; si lo matas, yo mataré a tu hijo”. 30 Sobre la trascendencia del elemento beréber y la autoría de la conquista puede ser interesante la lectura del reciente trabajo de O. HERRERO SOTO, “Tariq b. Ziyad: las distintas visiones de un conquistador beréber según las fuentes medievales”, Biografías magrebíes. Identidades y grupos religiosos, sociales y políticos en el Magreb medieval. EOBA, M. Meouak (ed.) (en prensa). También de esta autora: “La arenga de Tariq b. Ziyad: un ejemplo de creación retórica en la Historiografía árabe”, Talia Dixit 5 (2010) 45-74. 31 Véase n. 2. En unos meses se publicará el segundo libro fruto del trabajo del proyecto: Del Nilo al Guadalquivir, RAH Madrid 2011. 32 Ph. Sénac -también miembro del equipo de investigación- demuestra la dureza de la conquista árabe y la notable resistencia de la población de la Narbonense (trabajo actualmente en prensa).

36 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Gumías árabes.

El paso del Estrecho:las fuentes

Enrique Gozalves Cravioto

Introducción razón, cuando en un lado y en otro de la frontera desarrollaron la narración e interpretación de lo que nte el episodio del año 711 los había pasado lo hicieron desde mentalidades diferentes. historiadores se encuentran con una Así para los cristianos lo que realmente tuvo A inmensa paradoja. importancia es que el mundo godo se había venido Acostumbrados para las Edades Antigua y abajo en la Península, y desde siempre fueron proclives Medieval a trabajar con un número muy a explicar este hecho a partir de la existencia de una limitado de documentos, respecto al hecho histórico que nos ocupa, el problema no es traición en las propias filas. Así primero recurrirán precisamente ese, sino más bien el contrario: a la actuación de los hijos de Witiza, que habrían el de la hiper-inflación de crónicas. conspirado abiertamente a favor de los árabes, quizás sin pretender el resultado final alcanzado. Más adelante tomarán de la historiografía árabe el trágico episodio Episodio histórico e historiografía del Conde Julián, personaje de todo un drama, de Ello fue así en principio por la enorme enorme potencia literaria como muestra el Romancero, trascendencia histórica que el episodio tuvo en y que explicaría el propio tránsito del Estrecho. Pero la Historia, por el hecho de que acabara con un por la parte islámica lo más destacable es que se va mundo, el de los visigodos en Spania, y diera a producir una proliferación de relatos, copiados unos inicio a un proceso histórico de muy largo alcance de otros, alterados con la introducción de elementos, en el mundo occidental. De forma independiente a cómo lo vivieran los contemporáneos de cuya realidad concreta tenemos muy escasas de los hechos, sí podemos deducir cómo lo garantías. Así pues, no son pocas sino excesivas las observaron en momentos posteriores. fuentes medievales, pero por su propio carácter de Así pues, el inicio de la conquista musulmana fuentes secundarias, rehechas según el estilo medieval de España significó con el tiempo para unos una (por ejemplo, en el proceso de intenciones y diálogos épica gloriosa, la de la incorporación de Al- de Rodrigo, Julián, Musa ibn Nusair o Taric ibn Andalus a “dar al-Islam”, y para otros el amargo Ziyad), resulta problemático concretar historia y trago de una derrota y retroceso, un desastre visto literatura. por el clérigo autor de la Crónica Mozárabe como Este es el problema ante el que la historiografía una de las mayores tragedias, comparable a las moderna se ha enfrentado a la hora de analizar el paso sufridas por Babilonia o por Jerusalén. La del Estrecho. Los mitos que rodeaban al personaje de discusión del concepto de Reconquista no puede llevar a negar la dinámica conquistadora del Julián, y a la propia tragedia de Rodrigo, ocasionaron Imperio Omeya, que había extendido ya su ya el escepticismo de José Antonio Conde, en su dominio por todo el Norte de África. Por esta Historia de la dominación de los árabes en

37 España (1820). Poco más tarde, Reynhart Dozy la excepción de la aportación de Joaquín Vallvé, escribía su Histoire des Musulmans d'Espagne, cuyas Nuevas ideas sobre la conquista árabe jusqu'à la conquéte de l'Andalousie par les de España (1989), trastoca todo el panorama de Almoravides,711-1110 (1861), en la que intentaba

Aljaranda 81 (2011) los hechos, con una reinterpretación a partir de poner orden en los testimonios, concluyendo que fuentes secundarias y tardías en muchos casos, el Conde Julián había sido el último gobernador pero que afecta al fondo del tema que nos ocupa, (exarci) bizantino de Ceuta, y que favoreció el pues el desembarco musulmán no se habría paso de las tropas beréberes en sus barcos desde producido en el Campo de Gibraltar sino en la plaza africana a Gibraltar. Cartagena. La contestación a este tipo de La historiografía española, a grandes planteamientos fue realizada por el citado Sánchez rasgos, ha seguido la misma visión con algunas Albornoz, en sus Estudios polémicos (1979), si variantes. Podemos mencionar al respecto la bien más adelante el propio Vallvé volvió sobre Historia de la invasión de los árabes en España la cuestión. (1892) de Eduardo de Saavedra, escrita sobre todo a partir de las fuentes árabes y deudora de Las fuentes más antiguas XIII Centenario desembarco árabo-bereber Dozy, y también sobre las fuentes cristianas analizadas en El rey Rodrigo en la literatura Ante los aditamentos de una cuestión, rellena de (1924) de Ramón Menéndez Pidal. elementos legendarios así como de versiones, nuestro juicio como historiadores es indicar la necesidad de una crítica textual, que priorice unas fuentes sobre las otras. Es cierto que, dadas las contradictorias visiones, este juicio no puede ser aceptado por todos, con lo que entra en discusión el criterio utilizado para priorizar. Más allá de que para realizar un estudio exhaustivo Las tropas que pasaron el se precisen más factores, a nuestro juicio el Estrecho fueron básicamente criterio fundamental a utilizar debe de ser el de la antigüedad de los testimonios. infantes El más antiguo de todos ellos es el de la Crónica Mozárabe del 754, elaborada por un cristiano cordobés con inmediata anterioridad a la proclamación del primer Omeya independiente en Al-Andalus. El autor indica muy de pasada que Musa ibn Nusair había enviado a Taric al frente de unos moros que hacían incursiones por el territorio, “[...] cum Mauros a Muze missos, Después realizó un análisis muy id est Taric Abuzara et ceteros, diu sibi completo, repleto de erudición, Claudio Sánchez Albornoz, en el volumen segundo de sus En torno al feudalismo, dedicado a Fuentes para la historia hispano-musulmana del siglo VIII (1942), que completó en el análisis de un artículo publicado en los Cuadernos de Historia de España (1948), titulado “Itinerario de la conquista de España por los árabes”, que consideró innegables los hechos: existencia del Conde Julián, el paso del Estrecho por parte de las tropas en sus barcos, desde su plaza de Ceuta a Gibraltar. Pero sobre todo Sánchez-Albornoz ya aclaraba un aspecto peculiar: las tropas que pasaron el Estrecho fueron básicamente infantes, e infantería sería lo que los beréberes-árabes confrontaron a jinetes (muy escasos) e infantes visigodos en la batalla de La Janda. Una visión que, por su carácter completo, con pequeñas variantes (nada exentas de interés, por cierto), nos han inspirado a todos los historiadores, que siguiendo todo el planteamiento derivado de las fuentes, hemos aceptado con matices las grandes ideas acerca del paso del Estrecho y la invasión islámica. Todo ello con Imagen 2.- Las aguas del Estrecho, escenario del paso árabo- bereber.

38 provinciam creditam incursantibus sumulque et tal forma que se creyó que se transformaban en plerasque civitates devastantibus [...]”; esta comerciantes. Todos estos soldados fueron así única alusión al paso de Taric se complementa introducidos poco a poco, y Taric, acompañado de con la referencia de que el rey Rodrigo marchó su entorno, pasó con el último destacamento [...]”. a los Transductinis promonturiis para luchar con Hemos recogido este texto por cuanto el Aljaranda 81 (2011) ellos, pero cayó en la batalla debido al abandono mismo es de una gran antigüedad, de tal forma que, de su ejército. aunque no pueda considerarse contemporáneo de Algunas indicaciones más encontramos los hechos, sí reproduce la versión árabe más antigua. en referencia al paso de Musa ibn Nusair, cuando En la misma ya encontramos algunos hechos que indica que en esa época devastaban Spania los van a introducirse en la tradición historiográfica: el expedicionarios, y Musa atravesó “per personaje de Julián, su pacto con los árabes para la Gaditanum fretum columnas Herculis travesía del Estrecho, un numeroso ejército (cifrado pertendentes”, y alude a continuación que la en 12.000 elementos) en el que la inmensa mayoría entrada del puerto (o del paso) se la sugería eran bereberes, paso en pequeños barcos que clabes in manu. Nos hallamos ante un pasaje de realizaban cabotaje entre ambas costas (comerciantes difícil interpretación, pero que estaría referido y pesqueros), viajes repetidos de esas pequeñas a la llave en la mano del “ídolo” o estatua humana embarcaciones. XIII Centenario desembarco árabo-bereber que remataba un monumento turriforme de Cádiz En el siglo IX tenemos otros escasos testimonios de época romana, la llamada “torre de Hércules”, árabes sobre el episodio de la conquista. Hacia el y cuya descripción recogen diversos geógrafos año 848 escribirá el persa Ibn Jurdadbih su obra árabes medievales. geográfica dedicada a la mención de los reinos En cualquier caso, dos aspectos se y los caminos. Sus datos son muy esquemáticos, deducen de esta observación a la fuente más pero resulta muy significativo que al tratar de antigua: prácticamente no hay acotaciones a las Ceuta, hablando en pasado (como reflejó en su circunstancias del paso del Estrecho por parte traducción Guillermo Gozalbes Busto), afirmaba de los árabes, y guarda un estricto silencio acerca que en la ciudad en el pasado había reinado de las características de los ejércitos en disputa. Julián. Su cita tan antigua, y el propio hecho de Así pues, no puede hablarse del problema de la que no precisara de mayor aclaración, indica que presencia de la caballería entre visigodos o Julián era bien conocido e identificado en el musulmanes. En la misma línea de escasos datos, mundo árabe de la primera mitad del siglo IX. con un carácter muy genérico, el paso del También para el siglo IX debemos citar Estrecho es mencionado hacia el año 790 por la obra de Ibn Habib, un granadino pero que parte del historiador franco Paulo Diacono, en aprendió sus datos en Oriente. Su relato está su Historia Langobardorum: “ [...] eo tempore repleto de magia: “Muza llegó a la costa argelina gens Sarracenorum in loco qui Septem dicitur (Tremecén) y ordenó capturar algún barco ex Africa transfretantes universam Spaniam cristiano; un viejo prisionero fue interrogado y invarerunt [...]”. Pocos datos en referencia a la éste realizó una descripción de quien “invasión” de “toda España” por los “sarracenos”, realizaría la conquista de al-Andalus [...]”. La señalando que se produjo a partir del paso del orden de Muza, con la descripción de la persona, Estrecho (transfretantes) desde el lugar que se coincidía con Taric, que llegó a un monte donde llama Septem, por tanto, desde Ceuta. concentró sus tropas. Parece evidente que el Entre las innumerables fuentes sobre la monte en cuestión debe tratarse de Gibraltar. En conquista islámica de España, y el paso del todo caso, quizás lo más importante del relato Estrecho, reproducimos inicialmente un de Ibn Habib es que ofrece las cifras testimonio recogido por Ibn Idari, que lo copia de 1700, para los que rodeaban a Taric, y de de un historiador egipcio de finales del siglo 12000 los bereberes que finalmente pasaron a VIII, llamado al-Waquidi: al-Andalus. “(El Califa) nombró a Musa ibn Nusair gobernador de Ifriquiyya (África), y a su vez Musa nombró para gobernar la zona de Tánger Fuentes posteriores a Taric. Éste se convirtió en vecino de Iulian En el siglo X la información sobre el paso del (Conde Julián) debido a su proximidad a “la Estrecho y la conquista árabe de al-Andalus se isla Verde”, y se puso en contacto con él. Ambos convierte en canónica, y en buena parte lo va a llegaron a un acuerdo e Iulian se comprometió hacer en función de las necesidades políticas del con hacer que él y sus tropas entraran en España. Estado Omeya de Córdoba (convertido en Taric, que tenía un ejército de 12.000 beréberes, Califato). En ello tendrá gran importancia, sin se decidió a realizar esta expedición después de duda, la magna obra histórica del cordobés al- recibir el permiso de Ibn Nusair. Para transportar Razi, y sobre todo de Ibn Hayyan. Así en la estas tropas Iulian empleó los barcos que visión de los hechos del segundo, recogida de practicaban el cabotaje entre ambas costas, de forma casi textual por al-Maqqari (autor magrebí

39 del siglo XVII), se menciona ya la expedición Finalmente, en el siglo XI el Ajbar previa de Tarif contra Tarifa (se precisa que con Machmúa recoge ya de forma definitiva la 400 infantes y 100 de caballería), la instigación versión más reiterada con el tiempo, que incluye de Julián para la invasión y paso del Estrecho, naturalmente el episodio literario de las relaciones Aljaranda 81 (2011) pero a continuación se ofrecen dos versiones: del rey Rodrigo con la hija de Julián, la venganza a). Sobre el ejército invasor, en un caso de Julián, el más lógico episodio de la incursión compuesto por 7.000 efectivos, de los que la previa contra Tarifa, así como el mandato de mayoría eran beréberes y libertos, en el otro, Muza a Tariq para que fuese a Al-Andalus con compuesto por 12.000 de los que prácticamente 7.000 musulmanes, que en su mayoría bereberes todos eran beréberes. y libertos, ya que eran escasísimos los árabes, y b) El paso en cuatro barcos, mientras en pasó en el año 92 en los cuatro barcos la segunda versión se indica que eran de mencionados, que eran los únicos disponibles, mercaderes. los cuáles fueron y vinieron con la infantería y c) El desembarco en Gibraltar en el mes la caballería que se iban reuniendo en un monte de agosto de 711, mientras en la segunda versión muy fuerte….. Muza le mandó 5.000 hombres, fue en abril. de forma que el ejército de Tariq llegaba hasta XIII Centenario desembarco árabo-bereber d) El paso constante de ida y vuelta de los 12.000 componentes. los mismos barcos hasta completar la totalidad Nos parece inútil continuar con la de las tropas. recopilación de las fuentes árabes posteriores y e) Se aclara que después del desembarco que añaden datos circunstanciales. Incluso en Tariq había reclamado a Muza más tropas, por ocasiones refieren los hechos de una forma más lo que le envió 5.000 soldados suplementarios, lógica y explicada, pero ello corresponde no a hasta constituir un total de 12.000 los invasores. una realidad básica, a datos que estuvieran en En el mismo siglo X otro autor andalusí, Ibn al- su fundamento documental, sino a la recreación Qutiyya (“el hijo de la Goda”) escribió otra o actualización por parte de los escritores. A Historia en la que incluye los episodios de la nuestro juicio, desde el siglo XI no tenemos ya conquista. Como bien ha indicado Gabriel fuentes de documentación, sino puramente Martínez-Gros el relato tiene sus propios “historiografía”. Ello incluye también a Ibn Idari, fundamentos, como son los de reflejar los un autor magrebí del siglo XIV, y cuya aportación méritos y servicios de la familia respecto a recoge una pluralidad de testimonios, que llevó la dinastía Omeya. Así el mérito principal a Sánchez- Albornoz a considerarla un auténtico habría estado en la “traición” de los hijos “cementerio de crónicas”. de Witiza, mientras Julián queda reducido a la categoría de un comerciante cristiano, que solía Fuentes cristianas llevar caballos y halcones desde Tánger. En el campo cristiano, haciendo abstracción de la Crónica Mozárabe de 754, de la que ya hemos tratado, así como de la débil referencia franca, las fuentes cristianas prácticamente dan un salto hasta los siglos IX y X, con la cronística del Reino de Asturias. Así en la Crónica Albeldense, fechada por ella misma en 883, lo único que se indica es que los musulmanes llamados por la traición, ocuparon Hispania, apoderándose de la monarquía de los godos, una parte de la cual la dominan tenazmente, aunque los cristianos les hacen la guerra de una forma constante, de día y de noche. Como puede verse, lo único de lo que se habla es de la traición, sin concretar la misma. En cualquier caso, tres décadas más adelante ya la Crónica de Alfonso III aclara la traición referida al señalar que al tercer año de reinado de Rodrigo, por causa del engaño de los hijos de Witiza, los sarracenos invadieron Hispania; menciona a continuación que Rodrigo marchó a la guerra con su ejército, pero atrapado por la traición de los witizanos, los guerreros abandonaron la batalla. Como puede observarse, las crónicas Imagen 3.- Representación gráfica de las fechas y trayectos de hispano-cristianas de los siglo IX y X están en las distintas incursiones magrebíes.

40 una línea determinada: desconocen los detalles, que los árabes “jamás invadieron España” (se ignoran la existencia del personaje de Don Julián, produjo una paulatina conversión al Islam como y atribuyen el episodio de la derrota a una traición, sucesión natural del Arrianismo), o el citado protagonizada por los hijos del rey Witiza. Pero Joaquín Vallvé, quien creyó que la invasión no ya en el siglo XI la Chronica Gotorum Pseudo- se produjo a través del Estrecho propiamente Aljaranda 81 (2011) Isidoriana presenta novedades importantes. Ya dicho, sino a partir de otros lugares diferentes en ella, por vez primera entre los cristianos, (Cádiz o Cartagena). No parece lógico, ni siquiera aparece el personaje de Don Julián, como Comite “serio” según la gran mayoría de los historiadores, Tingitana, y ya se recoge el episodio del ultraje establecer una especie de “conspiración” general de Rodrigo con su hija, la venganza del de las fuentes documentales para despistar o dramático personaje, el ofrecimiento de paso engañar. del Estrecho; de esta forma, se indica en el La expedición previa contra Tarifa, en el texto: ad insulam Tarif cum luliano veniens año 710, entra más en los datos de la lógica que inter Malacam et Leptam ascendit in montent, de la seguridad documental. La existencia de una qui usque hodie mons Tarech. La crónica avanzada, anterior al envío definitivo, es Pseudo-Isidoriana constituyó la elaboración de un coherente con el proceso de invasión de un “finisterre” absolutamente desconocido. Pero en XIII Centenario desembarco árabo-bereber lo que respecta a la documentación puede considerarse (interpretación) que alude a ella de forma harto confusa la Crónica Mozárabe de Finalmente, la Crónica 754, pero es silenciada por las fuentes árabes Silense, del siglo XII, (orientales) más antiguas. La incorporación de finaliza por enriquecer la expedición de Tarifa al relato del paso del los datos Estrecho y la invasión se produce desde el escrito de Arib, con toda la historiografía andalusí del siglo X. El personaje de Julián (comes Iulianus) ha sido discutido en su realidad histórica. Sin embargo, cosas distintas son la existencia del mozárabe, que integró los datos que estaban personaje en sí mismo, y su papel político más presentes desde hacía mucho tiempo en los o menos discutible, y la discutible realidad de escritos andalusíes. su imagen literaria. Dejando como legendaria la Finalmente, la Crónica Silense, del siglo historieta de las relaciones de Rodrigo, XII, finaliza por enriquecer los datos, pero todos lo cierto es que hay bastantes datos que prueban ellos ya tomados del impacto de las crónicas la historicidad de Julián como gobernante de andalusíes de los siglos X y XI. En este caso Septem (Ceuta). La realidad histórica del atribuye la agresión inicial a Rodrigo, que expulsó personaje viene probada por la existencia de sus de Yspaniis de una forma infamante a los hijos descendientes en Córdoba, las alusiones a él por de Witiza, que se coaligaron con Julián parte de geógrafos (Ibn Jurdadbih, al-Bakri), y (Tingitanam provintiam transfretantes, Iuliano también de crónicas bastante antiguas. comitti) y éste fue quien se encargó de Mauros Ceuta como lugar de paso es plenamente introducendo, et sibi et totius Ispanie regno coherente con su existencia, y el paso desde la perditum. Pero habla simplemente de que ciudad lo tenemos mencionado ya en el siglo Rodrigo, cuando se enteró de la invasión, llevó VIII por parte de Paulo Diácono. Problema su ejército, y después de un combate de siete diferente es el de su propia adscripción días, en el que los visigodos inicialmente ganaban, como bizantino, godo, autóctono ceutí cristiano se encontró con la derrota, la desbandada y el o beréber, si bien parece claro (aunque no seguro) hundimiento de su reino. que aceptaba la autoridad del rey visigodo. En lo que respecta a los barcos de transporte, las fuentes más antiguas son bastante La destilación del historiador determinantes al respecto: se trataba sólo de A partir de todo lo recogido el historiador debe cuatro barcos, de dimensiones no muy grandes, actuar y tomar partido, destilando de forma por lo que tuvieron que realizarse viajes adecuada la información. Por esta razón debemos constantes. Todos los datos indican que para el escapar de considerar las versiones conocidas paso era imprescindible la colaboración de Ceuta, como definitivas. Podemos deambular entre los lo que certifica el que los barcos únicos dos extremos, la de aquellos que han aceptado disponibles tenían su base en este puerto. Estos las descripciones de los hechos tal cual, así como datos seguros abren una incógnita menos resuelta, la de aquellos que han impugnado las fuentes; a saber, si los barcos correspondían realmente a entre estos últimos Ignacio Olagüe consideró los dromones de la base naval bizantina (todavía

41 existente en el siglo VII con seguridad), o eran Bibliografía barcos comerciales (sin la imposibilidad de - Tradicional que fueran las dos cosas al tiempo). En cualquier caso, los datos históricos reflejan que DOZY, R. : Histoire des musulmans d«Espagne jusqu«a Aljaranda 81 (2011) prácticamente era imprescindible la participación la conquête de l´Andalousie par les Almoravides (711- de Ceuta en el paso del Estrecho. 1110), Leyden (1861) Las tropas embarcadas en Ceuta fueron desembarcadas y concentradas en Gibraltar (el SAAVEDRA, E. : Estudio sobre la invasión de los Yebal Tariq o monte de Tariq). Con toda árabes en España, Madrid. (1892) probabilidad el propio hecho del desembarco venía motivado por las condiciones LEVI-PROVENÇAL, E. : España musulmana hasta defensivas del lugar, fácil para el ocultamiento, la caida del Califato Omeya de Córdoba, en a resguardo de ataques exteriores pues en aquel tiempo todavía constituía una especie de isla, MENÉNDEZ PIDAL, R.: Historia de España. IV, unida a tierra firme por un puente o trozo de Madrid. (1957) tierra muchísimo más angosto que en la

XIII Centenario desembarco árabo-bereber actualidad. SÁNCHEZ-ALBORNOZ, C. : En torno a los Las fuentes más antiguas insisten en el orígenes del feudalismo, Mendoza (2» ed., Buenos hecho de que estas tropas estaban compuestas Aires, 1977) (1942) por un total de 7.000 efectivos. Aunque resulte puramente especulativo, ello significa que si SÁNCHEZ-ALBORNOZ, C. : Estudios polémicos, cada barco trasladaba 100 guerreros tuvieron Madrid. (1979) - Visiones heterodoxas. que producirse unos 13 viajes de ida de cada uno de ellos en dirección Ceuta-Gibraltar, lo OLAGÚE, I. Les Arabes n«ont jamais envahi que significa que el transporte se realizó en un l«Espagne, Paris (traducción ampliada en La revolución mínimo de 15 días. Se haga la relación que se islámica en Occidente, Barcelona, 1974). (1969) quiera de cifras, los datos indican que el traslado pudo efectuarse no empleando en ningún caso más de un mes. VALLVÉ, J. : Nuevas ideas sobre la conquista árabe Las tropas trasladadas eran en su inmensa de España. Toponimia y onomástica, Madrid. (1989) mayoría beréberes. Y este propio hecho aclara - Estudios más recientes el propio problema de la caballería, puesto que en el siglo VII los bereberes apenas disponían COLLINS, R. : La conquista árabe, , Barcelona. de caballos (otra cosa eran los camellos). Los (1991) pp. 710-797 caballos eran reducidos sólo a los escasísimos mandos árabes, y la alusión al traslado CHALMETA, P. : Invasión e islamización: la sumisión de caballos (por ejemplo, en el episodio de Tarifa de Hispania y la formación de al-Andalus, Madrid. se cifran en 100) es muy tardía y exagerada. (1994) Sánchez- Albornoz, con muchos fundamentos, reflejó la conclusión de que la conquista de al- MARTÍNEZ-GROS, G. : “Le passage du détroit dans Andalus no se efectuó por parte de caballería, les récits de la conquête arabe de l´Espagne « , en Les sino por el contrario, por parte de un ejército de assises du pouvoir : temps medievaux, territoires infantes. Los propios relatos de la crónicas árabes, africaines, Saint Denis, (1994) pp. 19-30. sobre la batalla de La Janda, así como sobre otros episodios, permiten concluir que la MANZANO MORENO, E. : Conquistadores, Emires inmensa mayor parte de los combatientes (por y Califas. Los Omeyas y la formación de al-Andalus, ambas partes) eran infantes, por lo que la Barcelona.(2006) caballería no jugaba absolutamente ningún papel militar. BENEROSO, J. : “Acerca de la entrada de los No fue el de abril o agosto de 711 (la arabeberéberes en la península ibérica en el año 711: fecha es discutible), después del paso previo del hipótesis, ucronía y realidad histórica”, Almoraima, 710 hacia Tarifa, el único traslado de tropas. En 36, (2006) pp. 129-137. momentos cercanos, y ante la perspectiva de la batalla de La Janda, Tariq pidió a Muza nuevos SEGURA, W. : “Inicio de la invasión árabe de España. efectivos. Su jefe le correspondió con el envío Fuentes documentales”, Al-Qantir, 10. (2010) de otros 5.000 soldados, de nuevo la inmensa mayoría de ellos beréberes. Y al año siguiente, GOZALBES, E. : “El Comes Iulianus (Conde Julián en el 712, el propio Muza decidió pasar a Al- de Ceuta), entre la historia y la literatura”, Al-Qantir, Andalus, aunque en este caso aparentemente se ,11 (2011) pp. 3-35. embarcó no en Ceuta sino en Marsa Musa (en la costa del Estrecho, al Oeste), y desembarcó SEGURA, W. : “El comienzo de la conquista en Cádiz, como indica la mención de la estatua musulmana de España”, Al-Qantir, 11, (2011) pp. 92- característica de esa ciudad. 135.

42 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Escenario de la travesía y del desembarco en la actualidad.

¡Allah akbar! La conquista del paraíso.

Ángel J. Sáez Rodríguez

l temporal de Levante había por fin hacer saltar el cerrojo del país de los Rom, para amainado unos días atrás y parecía que abrir sus campos fecundos a quienes lo habían E la primavera iba a enseñorearse, otra vez, de seguir, con Musa ibn Nusayr a la cabeza. El del Estrecho. La pequeña flota de galeras gobernador yemení del norte de África, su señor, atravesaba el brazo de mar impulsada por una tenía ese privilegio. Como representante del brisa fresca. Conducía a una oleada de guerreros califa omeya de Damasco, Ulit (de verdadero bereberes que seguía los pasos de Tarif ibn Mallik, quien el año anterior había dirigido una nombre Al-Walid ibn ‘Abd al-Malik), hombre cabalgada contra las tierras del sur de Hispania extraordinario y digno sucesor del Profeta, quien tras tocar tierra en Tarifa y ahora volvía a formar había ya sometido la India, debilitado la Romanía, parte de la expedición arrasado Libia y subyugado toda la Mauritania,3 invasora. Había partido de Septem antes del alba, disponía de su suerte y de la de los suyos. cuando el sol aún no había coronado el Hacho, La expansión imparable de la verdad en busca de una tierra rica en agua, en pastos, predicada por Mahoma, ÁDios bendiga a su en tierras de cultivo y en ciudades. Una tierra Profeta, elegido de entre lo más puro de los que prometía aventuras y futuro para sus hijos. árabes!,4 así lo exigía. Sólo unas décadas atrás, Una tierra llena de infieles y de ganima, el botín que animaba las más férreas voluntades. la palabra liberadora de Allah no era alabada más Tariq ibn Ziyad, el Tuerto,1 aferrado a allá de los arenales arábigos, en las tierras una driza, encabezaba el último viaje de la fuerza sagradas de La Meca y Medina. Ahora, gracias invasora.2 En los montes grisáceos que seal fervor de sus seguidores, a la férrea voluntad adivinaban allí al Norte, entre la bruma marina, de los califas y al empuje piadoso de sus hijos, le esperaban la victoria, la fama y la gloria. Debía era invocada desde Oriente a Occidente, a todo

1 MENÉNDEZ PIDAL, R. Primera Crónica General de España (ed.), Vol, 1, Ed. Gredos, 1977, pp. 306-310. 2 ABD AL-HAKAM, Ibn Conquista de África del Norte y de España, E. Vidal Beltrán (trad. y notas), 1966, p. 42. 3 LÓPEZ PEREIRA, J. E. Crónica mozárabe de 754, (edic. y trad.), Ed. Anúbar, 1980, p. 67 y ss. 4 AL-SAQUNDI ABU-L-MALID ISMA’IL IBN MUHAMMAD, Elogio del Islam español (Risala Fi Fadl al-Andalus), E. García Gómez (trad.), Madrid, 1934, p. 118.

43 lo largo del Mediterráneo. Y pronto arrollaría a momento, puesto que las noticias eran favorables. los cristianos en sus tierras frías y lluviosas del Las tropas transportadas en los viajes de los días norte, desterrando de ídolos sus templos para anteriores habían desembarcado sin ningún siempre. Estaba seguro: tras las montañas Aljaranda 81 (2011) problema. El territorio parecía desierto, aparte transductinas5 le aguardaban la victoria, la fama y la gloria. Y, si la Fortuna le era esquiva, iría al de las embarcaciones que se movían entre el río encuentro de la muerte sin pesar, porque nada de Carteia y el fondeadero de la ciudad amiga lo haría volver sobre sus pasos. de Iulia Traducta, que los verdaderos creyentes La zona del Estrecho que había de cruzar llamaban al-Yazira al-Hadra. No se esperaba apenas si medía 130 estadios.6 Eran menos de ninguna reacción de los habitantes de esta ciudad, 17 millas náuticas las que lo separaba de las dependiente, como la de Septem, del conde playas bajas y arenosas que, más allá de Iulia Yulián.8 Este misterioso comes Iulianus Traducta, entre Carteia y el pilar de Herakles, era, sin duda, un cristiano relevante. Admitido le permitiría desplegar a sus fuerzas en orden de combate, organizar su caballería y tomar la por el rey Rodericus en su consejo privado iniciativa ante cualquier ataque de los cristianos. cuando visitó la capital del reino visigodo, había XIII Centenario desembarco árabo-bereber Con ese viento constante por la aleta de estribor quien decía que servía a dos señores: al tenían garantizado el crucero de 4 nudos y medio occidental de Toledo, el que tenía más cerca y a la hora, para tocar tierra mucho antes de cuya amistad y confianza le eran imprescindibles mediodía.7 Si el viento, siempre caprichoso en para mantener su autoridad a ambos lados del estas latitudes, no cambiaba. Y si los patronos Estrecho, y al oriental de Bizancio, el cruel de las embarcaciones afrontaban con diligencia Justiniano II. Pero esta historia más parece debida las complicadas y potentes corrientes de aquel mar. a sus detractores, que deseaban vincular su Pero no había de qué preocuparse por el imagen con la del tirano bizantino, alimentando una leyenda que parece inspirada en la época de

Imagen 2.- Detalle de un relieve donde aparece Justiniano II.

5 LÓPEZ PEREIRA, J. E. Crónica mozárabe de 754, (edic. y trad.), Ed. Anúbar, 1980, p. 67 y ss. 6 VELA TEJADA, José y GRACIA ARTAL, Jesús. Estrabón, Geografía, Libros V-VII, Editorial Gredos, p. 78, n. 179. 7 Sin emplear la propulsión a remo, las galeras podían mantener una velocidad media de 5’5 nudos por hora, algo más de 10 kilómetros a la hora, si su gran vela cuadra llevaba el viento de popa. Éste de Levante o del segundo cuadrante que traemos como protagonista en el paso de Tariq, por lo habitual en el estrecho de Gibraltar, no entra exactamente por la popa de los barcos dado el rumbo nor-noroeste que habían de seguir. Los diferentes tipos de galeras heredados del mundo clásico no admitían la navegación con mala mar, porque podían embarcar mucha agua y llegar a perderse. Asimismo, el viento de través, perpendicular al eje de la nave, hacía imposible su gobierno con la vela desplegada, lo que obligaba a arriarlas y propulsarse con los remos. Un nudo es la distancia recorrida de una milla náutica por hora, es decir, unos 1852 metros por hora. Véase CASSON Lionel, Speed Under Sail of Ancient Ships, New York University, en Transactions of the American Philological Association, Vol. 82, 1951, pp.136-148. Disponible desde Internet en: [con acceso el 05-12-2010]. 8 “Julián, gobernador de Algeciras, de Ceuta y otros lugares”, en Ibn el-Athir: Annales du Maghreb & de l’Espagne, E. Fagnan (trad. y notas), Typographie Adlophe Jourdan, Alger, 1898, p. 41.

44 la Recuperatio Imperii, cuando se instituyó la atraído suficientemente la atención del hombre Provincia de Spania con centro en Carthago para establecerse en ellas. Posiblemente por la Nova. Entonces, siglo y medio atrás, Justiniano mayor comodidad que ofrecían las tierras del

el Grande extendió el poder de Constantinopla otro lado de la bahía, más accesibles, con Aljaranda 81 (2011) hasta las Columnas de Herakles, quizás con el fondeaderos protegidos en las bocas de sus ríos deseo callado de realizar la conquista de la y con buenas tierras de cultivo a la mano. Los antigua Hispania. bereberes ya desembarcados harían tiempo, discretamente, hasta que Tariq llegase, confiando en que cualquier mirada curiosa hubiese confundido las embarcaciones que los habían traído con las que hacían el tránsito comercial cotidiano entre ambas orillas del Estrecho. No El viento le llegaba entre la debían fiarsede la calma aparente que reinaba en amura de estribor y la popa, la región, donde sabían podía haber tropas que hinchando la vela cuadrada, vigilasen la frontera sur de aquella convulsa Hispania, quizás alerta por la cabalgada del propio XIII Centenario desembarco árabo-bereber que empujaba tensa la Tarif ibn Mallik del año anterior. La incapacidad de Yulyán para rechazarla, como señor de la embarcación, como un caballo región de al-Yazira al-Hadra, parecía haber vigoroso atraído la atención de Toledo, mandando algunos contingentes de caballería que podían resultar demoledores si sorprendían a los musulmanes en plena operación de desembarco, en inferioridad numérica, desorganizados, mareados por la Ésta nunca se llevó a efecto y el proyecto travesía y con los caballos inquietos y bajando imperial quedaba demasiado lejos para que el de las naves. Todos estaban advertidos de que señor de Septem, de Iulia Traducta y de toda la esa quietud también podía ser sólo pronóstico región de al-Yazira al-Hadra siguiese al servicio de la llegada del grueso del ejército godo de de Bizancio. Pero si todo eso fuese cierto, Rodericus, empeñado todavía en la lucha con reflexionaba el caudillo bereber, en realidad los vascones en el norte, pero que acudiría a uña tendría tres compromisos, pues aparte de ese juego a dos bandas, entre Hispania y Bizancio, contaba con las obligaciones contraídas con Musa, su señor común. En virtud de las cuales conservaba, al menos, el control sobre su ciudad del monte Hacho. A pesar de la quietud que los primeros contingentes islamitas desembarcados habían encontrado en las costas peninsulares, las órdenes de Tariq eran determinantes. La vanguardia de su ejército había de buscar refugio en la escarpada ladera occidental del enorme peñón blancuzco que cerraba la bahía de al-Yazira al- Hadra por el Este. Era una montaña singular, completamente despoblada a pesar de la abundancia de cal para construcciones de su suelo, donde los navegantes fenicios habían hecho escala en tiempos remotos sólo para ofrecer sacrificios a sus dioses y gozar de favorables travesías. A salvo de temporales, monstruosas criaturas marinas y feroces piratas acechantes en las calas recónditas de su ruta hacia las Hespérides. Entre sus cortados poblados de pajarracos y bajo los tupidos acebuches, la vanguardia que mandaba Tarif debía aguardar su llegada, ya que no había ninguna fortaleza en aquel lugar que pudiera servirles de refugio o protección. Sus crestas eran, cuando las nubes no lo impedían, un magnífico oteadero de los Imagen 3.- Columnas de Herakles, hasta donde se extendía el poder mares y territorios circundantes, pero no habían de Constantinopla.

45 Aljaranda 81 (2011)

Ifriqiya XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 4.- Ifriqiya ocupaba aproximadamente el territorio que corresponde a la actual Túnez.

de caballo tan pronto tuviese noticia de la caballo vigoroso. La proa cabalgaba con amenaza islamita. Y, para entonces, él mismo entusiasmo sobre olas limpias, despuntadas en estaría al frente de sus tropas para demostrarles briznas de espuma, en un mar azul turquesa cada cómo luchaban los ágiles guerreros de las arenas, vez más brillante. Escuchaba sólo el crujido del los curtidos montañeses del Atlas y algunos fieros mástil, el gualdrapeo de la lona a ratos, cuando árabes que preferían la cimitarra a los mullidos la nave perdía brevemente el rumbo ideal, almohadones de sus palacios. rápidamente rectificado por los marinos de la Durante las últimas horas de la noche, ciudad norteafricana. en la costa de Septem, mientras la calma seguía Sentía náuseas. La inestable embarcación haciendo posible la navegación, Tariq había era el asiento más extraño que pudiera ofrecerse supervisado al resto de sus tropas y la carga de a un guerrero habituado al seco golpeteo de los los barcos que habían regresado a golpe de remo, cascos de su montura en terrenos polvorientos y viendo relevadas de inmediato sus tripulaciones. pedregosos, siempre atento a las rutas del Había impartido órdenes, recordado a sus comercio terrestre que recorrían el norte de África, de espaldas al mar. Sus compañeros de armas, lugartenientes las instrucciones para el momento bereberes recientemente convertidos a la fe de desembarcar y las acciones a ejecutar en todas verdadera, como él mismo, sufrían del mismo las situaciones que se pudiesen dar al pisar tierra modo la presencia inquietante del mar que los hispana, hasta contactar con los guerreros que rodeaba, amenazador, capaz de engullirlos los habían precedido en las anteriores travesías. repentinamente, sin previo aviso. A pesar de la Ya quedaba poco para alcanzar la otra quietud reinante, que arrancaba muecas burlonas orilla. Ahora, cuando la luz del día iba a la tripulación cada vez que alguno de ellos se despejando las tinieblas inquietantes, los rociones retorcía sobre la borda, entre arcadas inevitables de agua le salpicaba a veces el rostro. El y bufidos nerviosos de caballos encinchados.9 gusto salobre le causaba una incierta impresión. Tariq volvió a centrar su pensamiento en Era un sabor extraño para un beréber de las las horas próximas, que serían determinantes tierras altas a oriente de Ifriqiya, donde la sal para el éxito de la empresa que acometía. Enfrente era un bien preciado y el agua, escasa, era siempre no había grandes fortalezas que asaltar. Eso dulce. vendría más adelante, cuando enfilasen un valle El viento le llegaba entre la amura de inmenso, fértil, plagado de aldeas y ganados. estribor y la popa, hinchando la vela cuadrada, Las tierras que decían de Asido, de Xerez y de que empujaba tensa la embarcación, como un Hispalis, de Astigi, en la ruta hacia Corduba…

9 BENEROSO SANTOS, J. “La incursión de Tarif ibn Mallik en 710. Preludio de una invasión”, conferencia pronunciada en Tarifa el 23 de septiembre de 2010, con motivo de los actos conmemorativos del XIII centenario de la primera incursión árabe a España. Disponible desde Internet en: < http://www.tarifa2010.com/conferencia2.pdf > [con acceso el 08-12 2010].

46 Pero nada parecido en la región de imperio de Roma.11 Algunas empalizadas, Traducta. Estaban bien informados por la gente murallas decadentes y añorantes de tiempos de Yulyán. Los godos parecían ser gentes poco pasados y mejores, sin guarniciones militares amigas de la civilización urbana. Apenas si dignas de tal nombre y, por tanto, despreciables mantenían las ciudades que les fueron ocupando para una fuerza invasora como la que encabezaba Aljaranda 81 (2011) el líder musulmán. En el resto del territorio, algunos castra miserables, verdaderos nidos de águila inaccesibles; unos al-sajra encaramados a rocas de los que nada cabía temer. Con frecuencia, reconversiones de villae para A orillas del Estrecho sólo sobrevivir en tiempos tan convulsos como aquéllos. Pero era voluntad de Tariq que ninguna iba a encontrarse con el molestia se causase a los habitantes de esas oppidum de al-Yazirat Tarif tierras, que habían de acogerlos como libertadores del yugo visigodo. O, al menos, no convertirse

en sus enemigos, porque si las cosas venían mal XIII Centenario desembarco árabo-bereber dadas, aquella sería su vía de escape para alcanzar la costa norteafricana. Y, en plena retirada, ningún enemigo es pequeño. a los romanos 250 años atrás y las calzadas que recorrieron toda Hispania desaparecían lentamente entre el progreso de la vegetación y el abandono de los nuevos dirigentes. Tariq no quería dejarse invadir por la euforia que produce En el resto del territorio, el desprecio del enemigo, creyéndose superior. Sabía bien que era esa una mala consejera en algunos castra miserables, vísperas de la batalla, pero las noticias de los conflictos internos de los visigodos, sus verdaderos nidos de águila divisiones, su tardanza en extender el dominio inaccesibles sobre todo el territorio lo impulsaban a verse vencedor aún antes de haber formado sus huestes en orden de batalla. A orillas del Estrecho sólo iba a encontrarse con el oppidum de al-Yazirat Tarif, las murallas romanas de Traducta10 y las de Carteia. Nada cabía temer de ninguna de ellas. Tarifa, como otros minúsculos núcleos fortificados dispersos por todo el territorio, apenas Yazirat Tarif, quizás la punta o la si bastaría para ofrecer cobijo a sus moradores península de Tarifa, ocupaba un cerro a cuyos y a los campesinos de los alrededores. Esa era pies rompía el mar, con una isla delante. La punta la fórmula más común en un espacio sin grandes rocosa avanzada sobre el mar quedaba delimitada núcleos urbanos, que sufrían en toda Hispania por el norte por la depresión de un arroyo y, por la recesión que siguió a la desmembración del el sur, por el acantilado litoral.12 Este lugar,

10 Véanse JIMÉNEZ-CAMINO ÁLVAREZ, R. y BERNAL CASASOLA, Darío “Redescubriendo a Traducta. Reflexiones sobre su topografía urbana y su secuencia ocupacional (siglos I al VII), en Anales de Arqueología Cordobesa, Vol. 18, 2007. pp. 157-200 y JIMÉNEZ-CAMINO ÁLVAREZ ,R. y otros, “De Iulia Traducta a al-Yazirat al-Hadra. La Algeciras de los siglos VI al VIII a través de la excavación arqueológica de la calle Alexander Henderson, 19-21”, en Primer Congreso Internacional sobre “Espacios urbanos en el Occidente Mediterráneo (S. VI-VIII)”, Toledo, 2009, pp. 91-100. 11 Sobre la decadencia urbana en esta región desde el siglo IV, véase PRESEDO, F. “La decadencia de Carteia”, Habis, Vols. 18-19, Sevilla, 1987-1988. Hablan de la continuidad población algunos autores: RIPOLL, G. “Los hallazgos de época hispano-visigoda en la región del Estrecho de Gibraltar”, Actas Congreso Internacional El Estrecho de Gibraltar (Ceuta-1987), Vol. 1, UNED., Madrid, 1988, p. 1.130 y BERNAL CASASOLA , D. y LORENZO MARTÍNEZ, L. “La arqueología de época bizantina e hispano-visigoda en el Campo de Gibraltar. Primeros elementos para una síntesis”, Caetaria, Vol. 3, Algeciras, 2000, pp. 97-134. 12 Vallvé Bermejo propuso que el nombre de la ciudad procediera, precisamente, del vocablo árabe tarf, “punta”. VALLVÉ BERMEJO, J. Nuevas noticias sobre la conquista árabe de España. Toponimia y

47 perímetro rocoso, semejante a los muros de una ciudadela. Más allá de Tarifa, Baelo, abandonada casi dos siglos atrás, era un campo de ruinas que Aljaranda 81 (2011) tampoco requería atención militar. Sus piletas de salazones hacía mucho que no envolvían en salmuera los jugosos atunes que, periódicamente, entraban y salían del Mediterráneo. Ni preparaban las jugosas salsas que condimentaron las mesas más exquisitas del imperio de los romanos. Sus maltrechas columnatas, desbaratadas en mil piezas, sólo servían de cobijo a los cuervos y las alimañas del bosque, aunque algunos pobres pescadores malvivían entre ellas. Siguiendo la costa en sentido inverso, hacia el Atlántico, encontraría Baessippo. En la XIII Centenario desembarco árabo-bereber desembocadura del río de su nombre, no merecía más atención que la de recordar un embarcadero aprovechable en caso de retirada apresurada. O, mejor aún, como lugar en el que encontrar provisiones durante el inminente camino hacia el Oeste. Carteia, por su parte, había perdido tanto su pasada relevancia como el pulso del predominio regional a favor de Traducta.14 Sus murallas púnicas y romanas yacían desportilladas, Imagen 5.- Mellaria, situación geográfica (según Bonsor). apriscos apenas capaces de recoger los ganados y ponerlos al amparo de lobos y salteadores. La conocido como “isla de al-Andalus” hasta la decadencia de las rutas comerciales, el saqueo expedición de Tarif del año anterior, que le dio vándalo, las luchas de los visigodos para lograr su nuevo nombre, era un arsenal de los cristianos, la expulsión de los bizantinos, la extensión de la “desde el que zarpaban sus embarcaciones”.13 Ellos la llamaban Mellaria, pero ese nombre nada decía a los musulmanes y nunca lo usaban para designar el punto más meridional de Hispania. Sus endebles murallas no suponían Carteia, por su parte, amenaza alguna para los invasores, ni era su había perdido tanto intención atacarlas para encontrar poco más que su pasada relevancia un templo pagano. como el pulso del Tampoco había que prestar atención a predominio regional las islas del litoral, una frente a Tarifa y otra a favor de Traducta delante de al-Yazira al-Hadra. Se encontraban deshabitadas, sin construcciones, aunque sí tenían agua. Pero era difícil desembarcar en ellas por los escollos que las rodeaban y la cercana tierra firme era preferible para cualquier asentamiento con carácter permanente. La gente piratería y la sombra alargada de la vecina ciudad de la mar llamaba a ambas, por igual, isla de las del Nahr-Alaseli [río de la Miel] habían arrastrado Palomas, decían que por la espuma blanca que a la orgullosa Colonia Libertinorum Carteia a la las olas levantaban al estrellarse contra su postración que precede a la pérdida definitiva de las

onomástica, Madrid, 1989, pp. 46-58. 13 Ajbar Machmuâ. Colección de tradiciones. Crónica anónima del siglo XI, E. Lafuente Alcántara (trad. y notas), Real Academia de la Historia, 1867, p. 20, en TORREMOCHA SILVA, A. Fuentes para la historia medieval del Campo de Gibraltar (ss. VIII-XV), Los Pinos Distribución y Conservación, 2009, pp. 371- 372. 14 Hay autores que consideran que este trasiego de capitalidad regional no habría de ocurrir hasta después de la invasión. Véase MANZANO MORENO, E. Conquistadores, emires y califas. Los Omeyas y la formación de al-Andalus, Ed. Crítica, 2006, p. 261.

48 ciudades.15 Y sus habitantes tenían mucho que ganar con la implantación de un nuevo poder en la región que activara los reducidos circuitos comerciales de Hispania con la Mauritania Tingitana.16 Aljaranda 81 (2011) Iulia Traducta era el emporio decadente de los tiempos del esplendor romano en la región,17 todavía con edificios relevantes y alguna airosa torre descollando en sus murallas, con su zona portuaria de Portus Albus a orillas del río, aún restañando las heridas del paso de los vándalos. Cetaria, al Sur de esa doble ciudad, fue también lugar costero, industrial, alfarero y salazonero, cuyo nombre ya nadie recordaba, sin siquiera vestigios relevantes que reclamasen ser rescatados del olvido de los hombres.18 XIII Centenario desembarco árabo-bereber Barbésula y Borondo, más allá de la bahía, hacia Levante, camino de Salduba, languidecían como tantos otros lugares venidos a menos, entre alfares silenciosos y viviendas abandonadas y en ruinas. Pobres moradas de algunos pastores y de pescadores que no tenían otro lugar mejor al que marcharse a vivir.19 A espaldas de los recién llegados quedaba la ciudad de Septem, amurallada por los imperiales de Justiniano, sobre antiguos muros Imagen 6.- Ruínas de Carteia. que se decían romanos.20 Las defensas bizantinas

15 Carteia ya había padecido una crisis notable a mediados del s. I d.C. cuando César la pasó por las armas a causa de su apoyo a Pompeyo en la guerra civil que sostuvieron ambos. BRAVO JIMÉNEZ, S. Dinámicas de control ideológico y territorial en el estrecho de Gibraltar en épocas fenicia, púnica y romana, UNED, 2010, p. 264. Disponible desde Internet en: < http://e-spacio.uned.es/fez/eserv.php?pid=tesisuned:GeoHis-Sbravo&dsID=Documento.pdf > [con acceso el 01-04-2011]. 16 GÓMEZ DE AVELLANEDA SABIO, C. “La Carteya medieval y la fortaleza denominada ", Almoraima 17 (1997) 107-120; ROLDÁN GÓMEZ, L; BENDALA GALÁN, M.; BLÁNQUEZ PÉREZ, J.; MARTêNEZ LILLO, S. Carteia II, Cepsa, Junta de Andalucía, Madrid, 2003. 17 BERNAL CASASOLA, D. “Las industrias de salazón de época romana en Iulia Traducta (Algeciras, Cádiz). Espectaculares novedades arqueológicas”, Revista de Arqueología. 249 (2002). Argumento esencial para ubicar Traducta en la Villa Vieja de Algeciras es que, al norte del río de la Miel, los vestigios de la ciudad islámica más temprana, de época emiral, asientan directamente en el geológico, sin vestigios de ningún asentamiento romano. Véase SUÁREZ, J.; TOMASSETTI, J. M. y JIMÉNEZ-CAMINO, R. "Algeciras altomedieval. Secuencia arqueológica al norte del río de la Miel: del siglo IX al siglo X", Almoraima 33 (2006) 359- 390. Al sur del río se encuentra el complejo industrial de piletas de San Nicolás: BERNAL CASASOLA , D.; JIMÉNEZ-CAMINO, R.; LORENZO, L.; TORREMOCHA, A. y EXPÓSITO, J. A. “Las industrias de salazón de Traducta. Espectaculares hallazgos arqueológicos en la c/ San Nicolás 3-5 de Algeciras”, VII Jornadas de Historia del Campo de Gibraltar, Almoraima 29 (2003) 163-183 y JIMÉNEZ-CAMINO, R. y BERNAL CASASOLA, D. “Redescubriendo a Traducta. Reflexiones sobre su topografía urbana y su secuencia ocupacional (ss. I-VII)”, Anuario de Arqueología Cordobesa 18 ( 2007) 157-200. 18 PONSICH, M. Aceite de oliva y salazones de pescado. Factores geo-económicos de Bética y Tingitania, Universidad Complutense, Madrid, 1988, p. 187. 19 GÓMEZ ARROQUIA , Mª I. y otros, “El asentamiento romano de Borondo-Guadalquitón (San Roque, Cádiz): nuevos datos sobre el comercio de las salazones en el sur peninsular”, Almoraima 29 (2003) 151- 162. 20 Procopio de Cesarea menciona una muralla abandonada cuando llegan las tropas imperiales, tras haber sido descuidada por los vándalos. HITA RUIZ, J. M. y VILLADA PAREDES, F. “En torno a las murallas de Ceuta”, Actas de las I Jornadas de estudio sobre fortificaciones y memoria arqueológica del hallazgo de la muralla y puerta califal de Ceuta, Ceuta, 2004, p. 26.

49 habían protegido una base militar con 300 milites el país de los Rum. Como él mismo, que nada y una flota de dromones muchos años atrás,21 dejaba detrás y esperaba el mayor de los éxitos una potencia inimaginable en los tiempos que o, por el contrario, el final ignominioso a sus corrían, cuando Tariq debía emplear unos pocos días. Aljaranda 81 (2011) barcos para trasladar en muchos viajes a sus Los trazos de la costa de enfrente perdían tropas para atacar el país de los politeístas. Las su aspecto fantasmal y adquirían claridad, murallas de la ciudad norteafricana, bajo la atenta poco a poco. El sol hacía reverberar una montaña mirada de la fortificación en la cima del blanca, solitaria, a la derecha, escalonada Hacho como excelente observatorio del Estrecho, desde el mar hasta las crestas coronadas por una permanecían bien guarnecidas entonces por nube grisácea, mientras las proas enfilaban la las tropas de su aliado Yulyán. enorme ensenada rodeada de cerros preñados de color, de montes verdes y fragosos. XIII Centenario desembarco árabo-bereber Una fortificación en la cima del Hacho como excelente observatorio del Estrecho

Extraños estos cristianos del conde don Yulyán, pensaba Tariq. Conducían con diligencia a quienes debían considerar sus enemigos, los seguidores de Mahoma, para llevarlos a hacer la yihad a sus hermanos de Hispania. ¿Tan ambicioso era para traicionar a Imagen 7.-Navío árabe. los suyos? ¿O tal vez había de dar crédito a lo que se contaba, que el señor de Septem actuaba de esta manera por despecho? Que el rey de los Las naves avanzaban velocísimas. Playas cristianos le había violentado a Florinda,22 la blancas a lo largo de toda la costa, sobrevoladas hija que le mandara para ser educada en su corte por chillonas gaviotas. Alguna vaca, ramoneando de Toledo.23 Y que ahora buscaba venganza de en los cercanos prados, levantó curiosa la testa. la manera más cruel que había alcanzado a Arenales colorados, a la derecha, al pie de la imaginar, franqueando el paso del Estrecho al roca blanquísima, en llamativo contraste más enemigo llegado del Este, que venía impulsado allá de las olas que salpicaban entre los bajíos por una fe inquebrantable, por el hálito divino amenazantes. de la guerra justa. O quizás, más prosaicamente, Vio bajar desde aquella montaña a su del deseo de huir de sus vidas miserables en el vanguardia, impetuosos bereberes, impacientes paupérrimo territorio norteafricano para encontrar por entrar en acción después de su prolongada las riquezas sin cuento que se decía existían en inactividad en las inmediaciones de Septem al

21 HITA RUIZ , M. y VILLADA PAREDES, F.“De Septem Frates a Sabta”, Actas del II Congreso Internacional “La ciudad en al-Andalus y el Magreb”, Granada, 2002, p. 486. GOZALBES CRAVIOTO, E. “Huellas de la Antigüedad en la Ceuta Medieval”, en Ceuta en el Medievo: La ciudad en el universo árabe. II Jornadas de Historia de Ceuta, Ceuta, 2002, p. 28. 22 Al-Razi, Ahmad ibn Muhammad ibn Musa, Crónica del Moro Rasis, versión del Ajbar Muluk al-Andalus… romanzada para el rey don Dionis de Portugal hacia 1300 por Mohamad, alarife, y Gil Pérez, clérigo de don Perianes Porçel, Diego Catalán y Mª Soledad de Andrés (ed.), Gredos, 1974, p. 346. 23 “Relación de la conquista de España por Ibn Abd al-Hakam” en Ajbar Machmuâ. Colección de tradiciones. Crónica anónima del siglo XI, E. Lafuente Alcántara (trad. y notas), Real Academia de la Historia, 1867, p. 208.

50 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 8.- El paso de los árabo-bereberes a la conquista de la península Ibérica. (Biblioteca Nacional de Paris). finalizar su triunfal recorrido por las orillas del sobre sus pies justo antes del choque. sur del Mediterráneo. Cansados, también, de ÁAllah akbar! aguardar la llegada de Tariq. Con su lugarteniente La providencia está con Tariq y los suyos. al frente. La victoria fue tan breve como decisiva. Barcos varados en la arena; maniobras Los godos no habían calibrado sus fuerzas, o de desembarco, apresuradas; planchones desde las habían menospreciado. Ya ninguno podría la borda, bajando animales excitados, entre contarlo. Los musulmanes se repartieron sus soplidos de bestias y gruñidos de hombres, caballos, sus anillos y sus armas. La empresa renegando. ÁAlerta, los godos! comenzaba con los mejores augurios. Allí estaba el escuadrón del que habían Carteia no ofreció resistencia. Iulia oído hablar, surgiendo entre el polvo de su propia Traducta apenas hubiese tenido ocasión de estela, lejos, en el camino del puente de Carteia. hacerlo. Sombra de su anterior esplendor, sus Voces de mando de Tariq. Rigurosas, murallas tal vez hubiesen resistido un tiempo. imperativas. Se reúnen los invasores, forman las Sobre todo ante un oponente sin máquinas para haces. La caballería de hombres del norte se batirlas y asaltarlas, pero la mediación de Yulián acerca, pero pierde impulso con la proximidad. había previsto la capitulación pactada. Sus ¿Cansancio de las cabalgaduras por el exigente habitantes, que sufrían como la vecina Carteia arenal o ánimo decaído a la vista de un enemigo más numeroso del esperado? la decadencia de las rutas mercantiles, con sus La gente de Tariq aprieta las filas, a pie piletas para la conserva de pescados ya firme, con el flanco izquierdo apoyado en el desmochadas y los templos criando jaguarzos, mar. Las lanzas en ristre. Tensos todos y muchos garantizaban la vida y la hacienda. A cambio, su asustados, ¿por qué no? Más arriba, su arsenal sería controlado por los bereberes para caballería, hacia las dunas, caracoleando antes establecer un nexo estable con la otra orilla del de lanzarse en movimiento envolvente que Estrecho. Una vía de llegada de las tribus desbaratase la carga cansina que se aproxima. norteafricanas que se sintieran atraídas por la El sol, aunque ya alto, deslumbra al garantía de botín en la nueva y desconocida enemigo. Las galeras se retiran. No hay marcha frontera. Y la salvaguarda de una retirada atrás posible. La montura del caudillo se levanta garantizada.24 Por si las cosas se torciesen.

24 LÉVI-PROVENÇAL, E. España musulmana hasta la caída del Califato de Córdoba, 711-1031 de J.C., Historia de España, Vol. IV, Espasa-Calpe, Madrid, 1967, p. 13.

51 Pero no había tiempo para la holganza, Anotaciones del autor: pues todo estaba por hacer. El pequeño ejército, Los relatos de la invasión islámica de Hispania bien aprovisionado, hubo de tomar el camino del siglo VIII son tantos como numerosas son del interior, sin pausa. Poner rumbo al valle del las versiones que pueden encontrarse, Aljaranda 81 (2011) Betis, entre umbríos alcornocales, hacia especialmenteel para los primeros compases de la corazón de aquella parte del país y donde estaban misma. las tierras más ricas y las ciudades más atractivas. Con frecuencia han sido utilizadas con Dar al-Islam quedaba ahora a sus espaldas. Ante afán partidista, dependiendo de las hipótesis de ellos, tras los bujeos y los bosques infinitos, “la partida que se hayan querido respaldar con dichas casa de la guerra”, Dar al-Harb, sobre la que referencias cronísticas. Entre las múltiples los musulmanes tienen el derecho de expandirse interpretaciones de los acontecimientos que y la obligación de llevar la fe verdadera. Debía conducen al hundimiento de la Hispania visigótica buscar el mejor lugar para presentar combate a y al nacimiento de al-Andalus, deben atenderse los guerreros de Rodericus, que ya debían estar algunas singularidades: la proliferación de en camino. leyendas vinculadas a la irrupción norteafricana en la Península (canibalismo de los invasores, XIII Centenario desembarco árabo-bereber el ensueño de Tariq, la anciana de Algeciras, la casa de los cerrojos de Toledo, etc.),26 que

Algún pecado inconfesable debía arrastrar consigo ese monarca

Y, al poco, las avanzadillas dieron aviso de su llegada. Mucha gente, al parecer extenuada por una marcha apresurada desde el norte, atravesando toda Hispania. Caballería pesada poco hábil para esos rápidos traslados por el enorme lastre que transportaba. Y muchos peones agotados por la falta de descanso. Llegado el momento, Tariq, el Tuerto, volvió a encomendarse a su Dios, el único verdadero. Ironías de la vida, se decía. Ahí forma un rey con su ejército plagado de traidores. Sin saber Rodericus que los hijos de Witiza, el monarca anterior, nunca lo aceptarían en el trono de su padre. Aquí forman los muslimes, traídos por Yulyán, empujado a su vez por el comportamiento miserable de ese mismo rey Rodericus. Por el honor de su hija, por la memoria de Florinda, a la que ya siempre llamarán la qahba, la manceba.25 Pero algún pecado inconfesable debía arrastrar consigo ese monarca, cuando la sombra de la traición lo perseguía para hacerlo desaparecer, a él y a los suyos, de la faz de la Imagen 9.-Representación de una carga Visigoda. tierra. Para siempre.

25 “Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes documentales”, en SEGURA GONZÁLEZ, W. Monografías y Documentos sobre la Historia de Tarifa, (selección de textos y notas) Al Qantir 10 (2010) 2. 26 Todas estas leyendas en “Conquista de España por los árabes, según se refiere LAFUENTE Y ALCÁNTARA, E. en Al- Makkari 1 156 y ss.” en Ajbar Machmuâ (Colección de tradiciones. Crónica anónima del siglo XI), (trad. y ed.), Colección de obras arábigas de Historia y Geografía, Real Academia de la Historia, Madrid, 1867, Vol. 1, p. 171-208.

52 amplifican el carácter legendario de los hechos; la exageración en las cifras, sobre todo de tropas implicadas en combates, al objeto de exaltar el valor de las propias;27 la diferente credibilidad que suele concederse a las distintas Aljaranda 81 (2011) fuentes, valorándose especialmente las más cercanas a los hechos narrados y menos, en consecuencia, a las tardías, por más que entre estas recopilaciones tardomedievales puedan figurar tradiciones de alto interés. En este ejercicio de recreación histórico- literaria, hemos navegado entre muy diferentes versiones de los hechos, extrayendo elementos de algunas de ellas para ofrecer un relato verosímil que permitiese cumplir el encargo

recibido para contribuir a la conmemoración de XIII Centenario desembarco árabo-bereber este 1.300 aniversario de la invasión: ofrecer un panorama verídico de la situación de las defensas que las fuerzas de Tariq ibn Ziyad pudieron encontrar al pisar suelo andaluz. Para cada argumento de los empleados cabrá encontrarse algunas fuentes que lo respalden y otras tantas que lo contradigan, sin duda. La fecha de la invasión, en primavera28 o en otoño;29 el origen del propio Tariq, beréber30 o persa;31 el papel, el carácter y la relevancia de Julián,32 Yulyán,33 Urbano34 o comes Iulianus35… Dos siglos de historiografía permiten abundar ampliamente en estos temas. Quede aquí nuestra recreación de los hechos, a la luz de algunas de las fuentes y, sin Imagen 10.- Músicos, guerreros y portaestandartes de un ejército 36 poderlo evitar, a la sombra de otras. islámico (miniatura del "Maqamat" de Al-Hariri, s.XIII).

27 Tanto el Ajbar Machmuâ (ibídem) como Ibn al-Kardabus, Historia de al-Andalus, MAêLLO, F. (ed.), Ed. Akal, 1986, pp. 52-61, refieren los 12.000 hombres de Tariq frente a los 100.000 de Rodrigo, que son 70.000 para otros autores: ANTUÑA, MELCHOR , M. “Notas de Ibn Abi Riqac de las lecciones de ibn Habib acerca de la conquista de España por los árabes”, Cuadernos de Historia de España. 1-2 (1944) 248-268, en Al Qantir, Op. Cit., p. 19. 28 EL-ATHIR, Ibn Annales du Maghreb rt de l’Espagne, E. Fagnan (trad. y notas), Typographie Adlophe Jourdan, Argel, 1898, p. 43. 29 CONDE, J. A. Muhammad al Hammudi al-Idrisí, Descripción de España, (trad. y notas), Impr. Real, 1799, p. 34 y MAêLLO, F. Ibn al-Kardabus, Historia de al-Andalus, (ed.), Ed. Akal, 1986, pp. 52-61. 30 MOLINA, Luis. Dikr, Una descripción anónima de al-Andalus, (ed. y trad.), C.S.I.F., Vol. 2, Madrid, 1983, p. 106. 31 DOZY, R., Recherches sur l'histoire et la litérature de l'Espagne pendant le moyen age, Oriental Press, 1965, Vol. 1, p. 43. 32 Entre otras muchas fuentes, Ibn el-Athir: Annales du Maghreb & de l’Espagne, E. Fagnan (trad. y notas), Typographie Adlophe Jourdan, Alger, 1898, pp. 40-44. 33 RIVERA, J. Ibn al-Qutiyya, Historia de la conquista de España por Abenalcotía el Cordobés, (trad.), Real Academia de la Historia, 1926, p. 1-6 y Al-Nawayri, "Conquête e l'Afrique seteptrionale par les musulmans et histoire de ce pays sous les émirs arabes", en Ibn Khaldoun: Histoire des Berbères et des dynasties musulmanes de l’Afrique septentrionale, Barón de Slane (trad.), Librairie Orientaliste Paul Geuthner, 1978, tomo 1, p. 343-348. 34 LÓPEZ PEREIRA , J. E. Crónica mozárabe de 754,(edic. y trad.), Ed. Anúbar, 1980, p. 75. 35 SEGURA GONZÁLEZ, W. “La incursión de Tarif ibn Mallik en 710. Preludio de una invasión”, en Al Qantir. Monografías y Documentos sobre la Historia de Tarifa, (selección de textos y notas) 10 (2010) 4. Las opiniones más autorizadas sostienen que más que nombre propio, Yulyan sería “denominación del cargo que ostentaban los regidores del Estrecho, Comes Iulianus, del nombre de iulia Traducta (Algeciras)”. Véase HITA RUIZ, M. y VILLADA PAREDES, F. “Medina Sabta”, Historia de Ceuta. De los orígenes al año 2000 1 (2009) 209. 36 Una clarificadora perspectiva de los intereses que inspiraron el sentido de las crónicas islámicas en MANZANO MORENO, E. Op. Cit, p. 37 y ss.

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Imagen 1.- La costa de Tarifa fue uno de los escenarios de los desembarcos árabo-bereber. Foto A. Pérez Malumbres.

La aventura transfretana del 711 José Luis Gómez Barceló

Escribir sobre el medioevo es cosa harto fuentes cristianas identifican con Ilián, Iulianos, difícil, más aún para quien no es especialista Urbano o D. Julián3. E en la época. En nuestro caso y región, hay Existen discusiones sobre si Julián pudo que enfrentarse a las fuentes, unas veces en ser el señor de un comes iulianus, de un castellano, otras en portugués y muchas en árabe. territorio que abarcase ambas orillas, como Además, la apreciación de su carácter parecen insinuar Tahiri o García Moreno4, y que más literario y partidario que histórico, acaban podría confirmar la afirmación de Ibn Idari sobre de complicar el asunto, sin contar su haber sido Ilián, gobernador de la isla Verde5. distanciamiento del momento en el que Sin embargo, los intentos de hacer un mismo ocurrieron los hechos. personaje de quien se enfrenta a Musa ben Las fuentes cristianas y las islámicas Nusayr a finales del VII y quien pudiera morir cercano a la revuelta jariyí del 741 se hacen coinciden en que la aproximación de las tropas prácticamente imposibles. islámicas por el norte de Africa se produjo de La importancia de la Septon bizantina se forma lenta. Así también, se fechan los primeros había puesto de manifiesto con anterioridad contactos entre los omeyas y el Magrib al-Aqsa por la disposición que su bahía presentaba a la hacia el 681-682. hora de la reunión de tropas y flotas en sus Coinciden en esta teoría historiadores operaciones por la región. Así pues, no es extraño como Ahmed Tahiri1 o José Manuel Hita y que fuese elegida, de nuevo, para servir de Fernando Villada2. Lo que es más difícil, como estribo al puente imaginario que debía salvar el decían estos últimos, es saber si esos contactos Estrecho. se realizan ya con el personaje histórico que El historiador bizantino Procopio habla ejercía de Señor de Ceuta y Tánger, y que las de esa notabilidad de la población, en

1 TAHIRI, A. Rif Al-Magrib y Al-Andalus, Fundación El legado andalusí, Granada, 2007 pp. 24-25. 2 HITA RUIZ, J.M. y VILLADA PAREDES, F. “Medina Sabta” en Historia de Ceuta. De los orígenes al año 2000, Instituto de Estudios Ceutíes, Ceuta, 2009, t. I, pp. 208-212. 3 GOZALBES BUSTO, G. “De la Ceuta bizantina a la Ceuta islámica”, en Cuadernos del Archivo Municipal de Ceuta 6-7 (año III) 19-26. 4 GARCêA MORENO, L.A. “Ceuta y el Estrecho de Gibraltar durante la antigüedad tardía (siglos V-VIII)” en I Congreso nternacional El Estrecho de Gibraltar, Ceuta, 1987, t. I, pp. 1095-1114. 5 IBN IDARI AL MARRAKUSI, Historia de Al-Andalus, Málaga, 1999, p.18

54 interpretación del doctor Vallvé6: Uno el pacto del conde Urbano con Musa ben “En la región gaditana y en la segunda Nusayr. Dos el asalto de los beréberes a Ceuta, de las Columnas de Hércules, a mano derecha después de ocupar Tánger [...]”. del que viene del Océano al Mediterráneo, estuvo Desde este momento, y aunque don Julián en la costa africana una fortaleza llamada parece conservar el gobierno de la población, Aljaranda 81 (2011) Septem, que siglos atrás habían edificado los no lo es menos que se ve obligado a colaborar romanos. No se cuidaron los vándalos en rehacer en los planes de desembarco contra el reino la fortificación, desmantelada y arruinada por visigodo, participando en las razias que se realizan la pesadumbre del tiempo. Mas nuestro en la costa norte del Estrecho. Ibn Jaldún llegará emperador Justiniano la hizo restaurar y la dotó a decir que las tropas árabes no entraron en la de una guarnición conveniente. Allí también ciudad hasta la muerte de Julián8. Guillermo erigió, bajo la advocación de la Madre de Dios, Gozalbes da mucha importancia al hecho de que un templo considerable, confiando a su Ceuta quedó constituida en un lugar privilegiado protección el nuevo régimen político y su donde ni podían entrar los árabes ni mantener fortaleza inexpugnable para la hostilidad de guarnición. Un pacto que se cualesquiera gentes [...]”. firmó con la garantía mínima de la vida del A comienzos del siglo VIII las tropas de Conde y que no sólo se cumplió, sino que aparece XIII Centenario desembarco árabo-bereber Musa intentaron tomar Ceuta, pero sus férreas en diferentes fuentes como Al Maqqari, Ibn Al defensas, sin duda las que dejaron los bizantinos Atir o Ajbar Machmua. durante su reconstrucción, hicieron desistir a En esta última colección de crónicas, se los asaltantes, que optaron por dirigirse hacía habla de la conquista de Tarifa como una Tánger. Así lo leemos en la edición de Lafuente expedición previa al gran desembarco. Una Alcántara del Ajbar Machmua7. operación más importante que las razias Todo lo que viene después tiene dos ejecutadas hasta el momento, pero con el fin de lecturas: La primera, el hecho de que el explorar las posibilidades de la conquista que Gobernador de Ceuta va a abrir las puertas a los habría de llegar años después. omeyas, en un pacto que preservará vida y fe Se habla de una operación con cuatro de sus habitantes; la segunda, la traición del embarcaciones, trescientos infantes y cien de conde don Julián, bien por política de partidos, caballería –que para Ibn Idari son cuatrocientos bien por venganza ante la afrenta hecha a su hija y cien, respectivamente-, con los que se tomó a manos de don Rodrigo. Tarifa. Sólo con posterioridad a esta incursión, Si esto fuese historia, no dejaría de ser don Julián y Musa firmarían su pacto, según novelesco. Pero si es literatura, ocupa anota Lafuente Alcántara en su edición. demasiadas páginas en la historia. Lo cierto es Para el anónimo autor de Ajbar Machmua, la que el impulso de las tropas islámicas era operación nace de la iniciativa del propio don imparable, como lo iban a demostrar sus Julián, en lo que coincide Ibn Al-Kardabus9, conquistas posteriores, y que el gobernador sólo viéndose obligado a comandarla para tenía dos posibilidades: resistir hasta la muerte, demostrar su fiabilidad en las noticias que estaba o conseguir las mejores condiciones posibles en procurando. Este último dirá que, tras el éxito su rendición. Carlos Posac ha dicho, de la operación, Julián daría cuenta a Musa del frecuentemente, en sus conferencias, que todo mérito y valor de su acción. héroe en una parte de la frontera, es un traidor Fuera como fuera, el Conde de las en la otra, y viceversa. diversas fuentes, se nos antoja como un personaje Guillermo Gozalbes, tras la atenta lectura notable, cuya influencia en una y otra orilla había del trabajo del profesor Luis A. García ido decayendo. Su papel, de héroes para uno, Moreno, hablando del pacto firmado entre don de traidor para otros, no es más que una salida Julián y Musa ben Nusayr en el artículo práctica a un conflicto de poder, a una resistencia anteriormente mencionado, decía que : inútil a un poder emergente que, por buenas o “Ceuta nunca llegó a ser invadida por por malas, estaba llamado a dominar la región las fuerzas islámicas, y que su paso al dominio durante largo tiempo. Sin duda salvó las vidas árabe tuvo lugar de una manera precaria, aunque y haciendas de su pueblo y eso le hace, pacífica, muy poco antes de la gran objetivamente, un buen gobernante. El precio sublevación beréber encabezada por el aguador pagado, como en cualquier drama del siglo de Amysara. [Y continuaba diciendo]: Tenemos oro: la fama y la honra. dos puntos básicos para confirmar lo antedicho.

6 VALLVÉ BERMEJO, J. Nuevas ideas sobre la conquista árabe de España, toponimia y onomástica. Discurso leído en el acto de su recepción pública en la Real Academia de la Historia, Madrid 1989, p. 31. 7 LAFUENTE ALCÁNTARA, E. Ajbar Machmua, Colección de tradiciones. Crónica anónima del siglo XI, Madrid, 1867, p. 18. 8 IBN KHALDOUN.. Histoire des berbères et des dynasties musulmanes de l’Afrique septentrionale, Paris, 1925, t. I, pp 345-353. 9 IBN AL-KARDABUS. Historia del al-Andalus, Akal Bolsillo, Madrid 1993, 2ª edición.

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Imagen 1.- Antiguo grabado donde se representa la invasión árabo-bereber. Aproximación al desembarco beréber en Gibraltar el año 711.

Manuel López Fernández

Introducción secuencia de desembarcos hasta constituir un a invasión de los musulmanes en la ejército considerable. Península comenzó con el desembarco Se puede decir que la habilidad de los de un ejército beréber en Gibraltar jefes invasores y la tardía e insuficiente al mando del norteafricano Tarik ibn Ziyad. reacción de los invadidos hizo el resto. Las fuentes que seguimos y los trabajos de numerosos tratadistas apuntan a que fue una maniobra bien planificada, después de Antecedentes histórico-militares. varios intentos previos. Los islamistas, en un La invasión de la Hispania visigoda vino momento de pocos recursos navales en ambas precedida de la expansión del Islam por el norte orillas del Estrecho a consecuencia de variadas de África y de la misma cabe destacar la relativa causas, aprovecharon que los visigodos tenían rapidez con que se efectuó, aunque no por ello un escaso potencial terrestre en la zona, quedó exenta de momentos difíciles para los ocupados como estaban en una guerra civil. musulmanes. Dueños de Egipto al comienzo de Con anterioridad, la estrategia de los la cuarta década del siglo VII1, no fue hasta visigodos con respecto al peligro africano el año 670 cuando los árabes fundaron parecía basada en una defensa en profundidad Qayrawan2. En su avance hacia occidente a lo -más que en frenar pequeñas incursiones largo de la costa mediterránea el siguiente litorales-, seguros como estaban de su objetivo fue Cartago -la principal base naval potencial terrestre. Unas y otras circunstancias bizantina en la región3- ciudad que conquistaron hicieron posible que el pequeño grupo en año 695 y volvieron a perder un par de años más tarde para recuperarla definitivamente en trasportado desde África en el primer viaje, 4 sin caballería y fortificados en el Peñón, fuese el año 698 . Asentados en Túnez, los musulmanes iniciaron 5 reforzado con una continuada el asalto a las tierras del actual Marruecos en el

1 ˇ LADERO QUESADA, Miguel Ángel: Historia Universal. Edad Media. Editorial Vicens Vives, Barcelona, 2004, p. 170. En el año 640 montaron un campamento en lo que luego sería El Cairo y dos años más tarde se hicieron con Alejandría. 2 ˇ El origen de esta ciudad fue un campamento fundado por Uqba ibn Nafi. Véase esto en LIROLA DELGADO, Jorge: El poder naval de al-Andalus en la época de del Califato de Córdoba. Universidad de Granada, 1993, p. 65. 3 ˇ Ibídem, p. 66. 4 ˇ Ibídem, p. 66. También en WATT, Montgomery: Historia de la España islámica. Cambio 16. Madrid, 1992, p.10. 5 ˇ WATT, Montgomery: Historia de…, pp. 10 y 11.

56 año 700, derrotando a los ejércitos bereberes en de los medios navales y no desaprovecharon la el 7026. A partir de aquí muchos de los vencidos ocasión de utilizar éstos para atacar a sus rivales pasaron a formar parte de los ejércitos vencedores asentados en otras orillas de dicho mar, hasta el

mediante acuerdos y tratados, constituyendo en punto que en el año 655 fueron capaces de Aljaranda 81 (2011) el futuro el grueso de las fuerzas que habían de derrotar a los bizantinos en una batalla naval10. llegar hasta las orillas del Atlántico y cruzar Por otro lado, su asentamiento en Túnez y los después el estrecho de Gibraltar. ataques que desde aquí dirigieron sobre las islas Por la fecha antes señalada entra en occidentales del Mediterráneo, demuestran que escena Muza ibn Nusayr como delegado del dominaban las artes náuticas de la época; gobernador de Egipto en la provincia de Yfriqiya. A pesar de la importancia naval de Cartago, en el año 703 Muza termina el arsenal de Túnez7 y desde allí comienzan las expediciones marítimas sobre las islas del Mediterráneo occidental8;

Sicilia fue la primera en sufrir las consecuencias XIII Centenario desembarco árabo-bereber el año 704 y dos más tarde le tocaría el turno a No sorprende que la Crónica Cerdeña, para sufrir una nueva incursión en el de Alfonso III diga que en el año 707, fecha en que las naves musulmanas reinado de Wamba , también atacaron la isla de Mallorca en busca de botín. Para entonces ya había iniciado Muza los musulmanes intentaran su campaña terrestre contra el Magreb después invadir la Península de desligarse de la tutela del gobernador de Egipto, al recibir del califa al-Walid el nombramiento de gobernador de la provincia de Yfriqiya9. En el año 708 Muza alcanzaba las costas atlánticas con un ejército mayoritariamente beréber y sólo Ceuta (Septem) pudo resistirse a su dominio. Intentos que precedieron al desembarco del 711. utilizando éstas superaron las corrientes marinas El apartado anterior, aunque breve, habrá servido que en esta parte de ese mar se mueven de Este a Oeste a lo largo de la costa norteafricana, y para poner de manifiesto varias cosas: la rápida aprovecharon también los vientos dominantes expansión y dominio de los musulmanes en de la zona a pesar de que los mismos soplen aquí Yfriqiya y en el Magreb; la extinción aquí de la del Noroeste, o en dirección Norte- Sur. Por civilización latina en un tiempo muy corto; el tanto, es seguro que a principios del siglo VIII, ambiente militar reinante en la región y, sobre sus naves comerciales y de guerra surcaban el todo, la utilización del poder naval de Mediterráneo con los mismos medios y las los dirigentes árabes en los años que precedieron mismas técnicas que habían utilizado antes los a la invasión de la Península, a pesar de que en navegantes fenicios, griegos, cartagineses, sus orígenes las artes marineras fuesen algo romanos, vándalos y bizantinos. relativamente ajeno a la mayoría de ellos. Considerando lo que precede, no sorprende Parece meridianamente claro que su contacto que la Crónica de Alfonso III diga que en el reinado con los marinos del litoral Mediterráneo les había de Wamba (672-680), probablemente en el año 67511, llevado a valorar en su justa medida la capacidad los musulmanes intentaran invadir la Península siendo

6 ˇ LIROLA DELGADO: El poder naval …., p.66 7 ˇ Ibídem, p. 67. 8 ˇ Ibidem, p, 71. 9 ˇ CHALMETA, Pedro: Invasión e islamización. La sumisión de Hispania y la formación de al-Andalus- Editorial Mapfre, Madrid, 1992, p.100. También en WATT: Historia de…, p. 10. 10 ˇ LIROLA DELGADO: El poder naval…, p. 60. La batalla, llamada “de los Mástiles”, se dio en las costas de Licia, en la actual Turquía. 11 ˇ GÁRATE CÓRDOBA, José María: Historia del Ejército español. Servicio Histórico Militar. Madrid, 1981, tomo I, p. 328. También en LIROLA DELGADO: El poder naval…, p. 74 -75.

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Imagen 2.- Vista general del Peñón.

XIII Centenario desembarco árabo-bereber rechazados en un lugar impreciso; aunque poco Nafi viera menos arriesgado dirigir sus ataques después hubo otro intento posterior en tiempos hacia el interior del Magreb17. Sin embargo, la de Egica (697-702)12 -en este caso los invasores postura de Julián cambió diametralmente cuando fueron bizantinos- que en tierras levantinas fue Muza llegó a dominar la zona meridional del repelido por el duque Teodomiro. Teniendo en Estrecho y asentó sus fuerzas en Tánger, aunque cuenta esto último, debemos pensar que los recientemente el gobernador de Yfriqiya hubiera visigodos confiaban más en su capacidad militar fracasado frente a Ceuta a consecuencia de la terrestre que en la naval, y por ello no creemos resistencia opuesta por el citado Julián. desacertado decir, en sintonía con algunos Parece ésta una señal inequívoca de que tratadistas13, que por aquellos tiempos existía Muza carecía en aquellos momentos del poder por su parte un abandonado generalizado de la naval necesario para bloquear Ceuta y, menos construcción naval, debido tal vez a la falta de todavía, si ésta había recibido ayuda por mar recursos económicos en la Hacienda real14. desde la Península como dicen algunas fuentes En esta situación, el cruce del Estrecho musulmanas18. En esta situación el gobernador desde África no creemos que resultara un serio de Ifriqiya abandonó la zona del Estrecho y salió problema técnico para los mandos musulmanes para Qayrawan en el año 708 dejando en Tánger de haber tenido medios navales suficientes y a su liberto, Tariq ibn Ziyad, al mando de un contando, además, con el conocimiento que de ejército formado por bereberes. Todo apunta a la zona tenían los marineros de Tánger y Ceuta15. que este último siguió presionando a Julián La dificultad estribaba en las dudas mientras el duque Rodrigo -gobernador de la que planteaba a los posibles invasores el mantener Bética- temiendo un previsible salto de los el terreno ganado en la Península, dado el islamitas a su provincia, retiró su confianza al potencial militar terrestre de los visigodos; por conde Julián y le despojó de sus dominios en las ello no puede sorprender que en el 682 el jefe tierras del litoral norte del Estrecho19. Este agravio de las primeras oleadas árabes fuese convencido debió resultar definitivo para que Julián cambiara por el comes julianus –Julián en las crónicas de aliados a finales del año 709, viviendo todavía árabes y Urbano en la Crónica Mozárabe16- el rey visigodo Witiza20. Sin demora alguna, Julián que la empresa tenía sus dificultades y Uqba ibn inició una razia contra la costa visigoda del

12 ˇ GARCêA MORENO, Luis: Las invasiones, la ocupación de la Península y las etapas hacia la unificación. Historia de España Menéndez Pidal, dirigida por José María Jover Zamora. Editorial Espasa Calpe. Madrid, 2001, tomo III, p. 261. También en LIROLA: El poder naval…, p. 74 13 ˇ CERVERA PERY, José: El poder naval en los reinos hispánicos. Editorial San Martín. Madrid, 1992, p. 22. 14 ˇ Más detalles en GARCÍA MORENO, Luis: Las invasiones… p. 262. 15 ˇ GARCêA MORENO, Luis: Ceuta y el Estrecho de Gibraltar durante la Antigüedad tardía (siglos V-VIII). Actas del Congreso Internacional El Estrecho de Gibraltar. Madrid, 1988, pp. 1095-1114. 16 ˇ Ibídem, pp. 1.113-1.114. Estamos de acuerdo con la hipótesis de Enrique García Moreno, relativa a que Julián tenía por entonces el control del Estrecho y de sus litorales al señorear el triángulo Tánger- Ceuta- Julia Transducta. Más detalles sobre lo mismo en CHALMETA, Pedro: Invasión e islamización…, p. 114. 17 ˇ CHALMETA, Pedro: Invasión e islamización…, p. 116. 18 ˇ Esta situación queda recogida en los Ajbar. Véanse en la recopilación de fuentes hechas por SEGURA GONZÁLEZ, Wenceslao: Inicio de la invasión árabe de España. Fuentes documentales. Al-Qantir 10. Tarifa, 2010, documentos 11 y 12. También habla de ella al-Maqqari; podemos verlo en el documento nº 35 de la colección de fuentes documentales aquí citadas. 19 ˇ Las fuentes árabes, para explicar esta situación política, hablan de la leyenda de la Cava, hija de Julián, ultrajada por el mismo rey Rodrigo. 20 ˇ CHALMETA, Pedro: Invasión e islamización…, pp. 119-120.

58 Estrecho con ánimo de demostrar a sus nuevos es que, debiendo prolongarse esta incursión más socios políticos que la empresa era militarmente que la de Julián24, tampoco encontrara oposición factible21. Animados por el éxito de la misma, terrestre; la razón tal vez radique en que para se realizó otra provechosa incursión en julio del esas fechas las guarniciones de la Bética año 710 que tomó como base la isla de Tarifa22, estuvieran casi sin efectivos cuando el duque Aljaranda 81 (2011) e incluso hay historiadores que hablan de una Rodrigo tuvo que disputar a otros rivales políticos tercera en la misma zona a cargo de un su acceso al trono, ya fallecido el rey Witiza, a viejo beréber23 en la cual participan hasta mil comienzos del año 71025. hombres. Esta carencia de naves en ambas orillas del Estrecho resulta llamativa y en ella coincide la bibliografía a nuestro alcance; así lo parece El definitivo desembarco en Gibraltar cuando de las embarcaciones visigodas nadie Todos la historiografía, proceda del bando que habla y las que a su disposición tenían los proceda, coincide en que el asalto definitivo a musulmanes quedan reducidas a cuatro barcos la Península desde la orilla meridional del en manos de Julián. Puede que este número sea Estrecho se produjo en el año 711; relacionada simbólico, pero si tenemos en cuenta que la vida con la misma, trataremos de dar nuestra personal media de una embarcación de madera -como XIII Centenario desembarco árabo-bereber opinión sobre el desarrollo de la invasión definitiva apoyándonos en las fuentes y en trabajos de un variado número de tratadistas, cargando las tintas en matices de carácter militar. Entrando ya en materia, comenzaremos por tener en cuenta la situación en torno al Estrecho. Respecto a su orilla africana todas las fuentes apuntan a que había en ella un ejército respetable que carecía de medios navales para ser transportado a la Península y que Muza, además, se había retirado a Qayrawan donde sí tenía reservas de hombres y de embarcaciones con el potencial peligro que aquello significaba. No podemos admitir que los visigodos ignoraran estas circunstancias y tal vez para prevenir un posible desembarco en las costas levantinas -desdeñando la amenaza de Tánger y seguros de su potencial terrestre en caso de que se produjera algún incursión en pequeña escala por el Estrecho-, las naves de guerra disponibles en nuestra zona las retiraran hacia otro puerto del Mediterráneo –quizá Cartagonova (Cartagena)- todavía en tiempos del rey Witiza. Por esa razón creemos que cuando se produjo la incursión de Julián, a finales del 709, éste no encontró oposición naval alguna; ni la encontró Tarif ibn Malluk, cuando en julio del año 710 utilizó como base de operaciones la Imagen 3.- Witiza. Biblioteca Universidad de Oxford. isla de Tarifa. Lo llamativo en este último caso

21 Esta operación queda admitida en toda la bibliografía que manejamos. Algunos autores hablan que sólo duró un día. 22 ˇ Lo último que conocemos sobre la misma es el trabajo de BENEROSO SANTOS, José: La incursión de Tarif ibn Mallik en 710. Preludio de una invasión. Conferencia pronunciada en Tarifa con ocasión de la conmemoración del XIII centenario de la primera incursión árabe en España. El texto de esta conferencia ha llegado a nuestro poder por gentileza de su autor. 23 ˇ El caso es confuso ya que algunas fuentes musulmanas hacen coincidir a este viejo beréber, Abu Zarah, con Tarif ibn Malluk. Más detalles en CHALMETA, Pedro: Invasión e islamización…, p. 122. 24 ˇ No olvidemos que llevaba un centenar de caballos y el embarque de estos animales es más lento que el de las personas; por otro lado, el transporte de este número de animales necesitaría al menos cuatro barcos de la época. 25 ˇ Luis A. García Moreno habla hasta de un interregno mayor a seis meses en: “Los últimos tiempos del reino visigodo”. Boletín de la Real Academia de la Historia, CLXXXIX (1992) 432.

59 eran todas las de aquella época- rondaba entre a la escasez de barcos disponibles en Ceuta los ocho y diez años como mucho26 por la fatiga con capacidad para cruzar el Estrecho con ciertas y desarticulación del ensamblaje27, se hacía garantías, atendiendo a lo que señalan las fuentes necesario la llegada a los arsenales de abundante Aljaranda 81 (2011) musulmanas. material de este tipo para renovar la flota. Después de justificar la escasez de barcos Ahora bien, si la obtención de madera en la zona del Estrecho, debemos dedicar unas resinosa –la idónea para construir la obra viva líneas a la tipología de aquellas embarcaciones de las embarcaciones- ya resultaba difícil en que Julián puso a disposición de Tariq. Si éstas Yfriqiya, en Ceuta lo tenían realmente eran de guerra, diremos que la eslora de las complicado porque debían traerla de Sicilia28, mismas podía ser inferior a 30 metros si las de Hispania, o de la cordillera del Atlas29. De comparamos con las bizantinas de aquellos modo que si a partir de los últimos años tiempos; de la más caracterizada y larga de éstas, del siglo VII el reino visigodo descuidó la el dromón, nos dice Juan Vernet31 que tenían renovación de su flota por motivos político- poco calado, 40 metros de eslora, 7 de manga y XIII Centenario desembarco árabo-bereber económicos, la dependiente Ceuta pudo encontrar alcanzaba velocidades entre 5 y 6 nudos. El dromón era un navío con impulsión mixta -rémica y de vela- una sola cubierta donde se colocaban unos 50 remeros por borda y utilizaba vela cuadrada sobre un solo mástil32; fue el antecesor de las galeras y, como éstas, se utilizaron especialmente para la guerra dotándolos de castillos a proa y popa donde se solían colocar unos 50 hombres para combatir. Ahora bien, aunque ésta era la dotación de una nave de guerra, no correspondía su número con el de hombres que en ella podían transportarse en un trayecto corto como era el cruce del Estrecho; y menos todavía si tenemos en cuenta que los mismos Imagen 4.- Gibraltar, uno de los puntos del desembarco soldados expedicionarios podían remar en el árabo-bereber. trayecto de ida y la dotación de remeros podía quedar dificultades para el aprovisionamiento de madera reducida a la mitad en el viaje de vuelta33 al ser al no contar con bosques donde cortar árboles ayudados también por el impulso de las velas. Por con la suficiente envergadura para las partes tanto, no sería extraño que para la ocasión que estamos vitales de sus barcos de guerra y de comercio30. hablando cada embarcación tipo dromón pudiera Por tanto, puede que esta última sea la respuesta poner en tierra cerca de 100 hombres por viaje.

26 ˇ Conocemos el caso de un contrato en 1253 en el que la Orden de Santiago se obliga a renovar cada siete años una galera que le había sido donada por Alfonso X, en Sevilla. Véase nuestro trabajo: Pelay Pérez Correa. Historia y leyenda de un maestre santiaguista. Diputación de Badajoz. Badajoz, 2010, p. 594. 27 ˇ CASADO SOTO, José Luís: Construcción naval y navegación. En “Historia de la Ciencia y de la Técnica en la Corona de Castilla. Edad Media”. Junta de Castilla y León. Consejería de Educación y Cultura, 2002, p. 458. 28 ˇ Esta isla fue la fuente de suministro de madera para toda la costa norteafricana, tanto en tiempo de los bizantinos como de los árabes. 29 ˇ TURIENZO VEIGA, Gustavo: Observaciones sobre el comercio en al-Andalus. Universidad Complutense. Madrid, 2002, pp. 85-89. 30 ˇ Los bizantinos dominaban en Sicilia y los árabes le habían cortado el acceso a la cordillera del Atlas. Así las cosas el aprovisionamiento más lógico podía hacerse desde la Península, pero también cabe la posibilidad de que los visigodos no quisieran potenciar la capacidad naval de Ceuta estando rodeada de musulmanes; de aquí que prefirieran apoyarle, como lo hicieron, desde sus puertos en caso de peligro. 31 ˇ VERNET, Juan: El Islam en España. Editorial Mapfre. Madrid, 1993, p. 226. 32 ˇTYLER, Frank: Historia de la navegación a vela. Ultramar Editores. Barcelona, 2000, p.73. 33 ˇ En una embarcación sólo bogaba toda la tripulación en circunstancias especiales; generalmente solían hacerlo la mitad de los remeros mientras los otros descansaban.

60 Pero además de estas naves utilizadas especialmente para la guerra por su movilidad e independencia de los vientos, también existían embarcaciones comerciales más cortas y panzudas que al no emplear remeros tenían un Aljaranda 81 (2011) mayor velamen para aprovechar al máximo el viento reinante; pero estos barcos, al utilizar velas cuadradas34 no podían ceñir -navegar contra el viento-, necesitando que éste le soplara de popa o abierto de ésta unos ochenta grados35, casi de través. Esta impulsión lateral era gobernada por dos remos con mucha pala que llevaban en popa haciendo las veces de timón; así que no navegaban con todos los vientos, pero debían cruzar el Estrecho con cierta facilidad por soplar aquí vientos dominantes con dirección Este-Oeste. En estos barcos de vela, con mayor XIII Centenario desembarco árabo-bereber capacidad de carga por ser más anchos y más altos de borda - con mayor vaso- era donde normalmente se transportaban los caballos y la impedimenta o bagaje de los ejércitos, aunque también se emplearan otras veces para transportar hombres y en este caso el número de personas embarcadas podía ser ligeramente mayor que los embarcados en naves con remeros, Imagen 5.- Rodericus. Biblioteca Nacional de España. Reyes pero la rapidez del transporte dependía de la visigodos de Hispania. dirección e intensidad de los vientos. en las más grandes de este tipo podía ser mayor No se sabe con exactitud si los barcos utilizados el número de personas transportadas al utilizarse en la invasión del 711 fueron de guerra, la cubierta y la bodega. comerciales, o hubo de ambos tipos. Lo que sí nos parece seguro es que, dándose las condiciones Lo más probable es que la invasión del que se daban, el transporte del contingente militar año 711 se planeara sin transportar caballería en se hiciera con nula comodidad para los hombres sus primeros desembarcos y contando además tratándose de viajes relativamente cortos; por con la falta de reacción por parte de las más tanto, puede que los soldados –sin necesidad de cercanas guarniciones visigodas; eso sin olvidar caballería en estos momentos iniciales36- que en Ceuta se contaba con efectivos suficientes embarcaran en Ceuta utilizando los muelles de como para reforzar el contingente puesto en unos madera disponibles al efecto; sin embargo, en primeros momentos en la orilla norte del Estrecho. los lugares de desembarco se debió hacer Todo apunta a que la idea de maniobra era acercando las naves tanto como se pudo a las transportar el máximo de hombres posibles en playas y desde allí descender directamente a el viaje inicial y, una vez desembarcados, aguas con poco calado, o a tierra directamente hacerse fuertes en un punto de la costa para utilizando largas planchas de madera. Con los proteger la llegada de sucesivas oleadas medios navales descritos se podían transportar expedicionarias; todo ello hasta el momento que en cada viaje, considerando cuatro naves el contingente puesto en tierra tuviera la entidad tipo dromón, unos 400 hombres con el suficiente como para pasar a la ofensiva con armamento e impedimenta de éstos alojada en ciertas garantías, tal y como debió hacerse cuando las bodegas37. Si se utilizaron naves de carga, se utilizó como base la isla de Tarifa en el

34 ˇ La vela latina se introdujo en el Mediterráneo en el siglo IX. Así en MARTÍNEZ HIDALGO, José María: Las naves del Descubrimiento y sus hombres. Editorial Mapfre. Madrid, 1992, p. 24. 35 ˇ MANERA REGUEIRA, Enrique: La marina de Castilla. El buque en la Armada Española. Editorial Silex. Madrid, 1981, p. 25. TURIENZO VEIGA: Observaciones…, p. 104. 36 ˇ El embarque y desembarque de estos últimos era una tarea dificultosa, pero ya rancia en las técnicas militares por ser frecuente y muy antiguo el transporte de equinos; ganado al que previamente había que taparle los ojos antes de hacerlos subir o bajar por las pasarelas dispuestas al efecto. Pasarelas que conducían al interior de las naves a través de portones laterales, o bien a cubierta donde se encerraban en jaulones preparados para la ocasión. 37 ˇ Aunque el dromón tenía poco calado, debajo de la cubierta existía una bodega.

61 71038. Con respecto a las reservas no había en nuestros días. Existen abundantes indicios y problemas en el norte de África; considerando referencias40 para asegurar que esto era así, de el éxito de las expediciones precedentes, entre modo que la Roca estaba casi aislada y el tránsito

Aljaranda 81 (2011) las miembros de las tribus gomaras –antes entre ésta y el continente no debía ser fácil porque dependientes de Julián- debía existir gente el agua afloraría entre la arena formando lagunas suficiente para iniciar la operación, incentivada más o menos extensas rodeadas de cañaverales. por los botines obtenidos con anterioridad; por Así que con un mínimo esfuerzo por parte de los otro lado, Tariq contaba con un ejército que invasores se podía proteger, mediante amplias superaba los 12.000 hombres39 y parte de ellos zanjas41, el acceso a la zona de desembarco y a debían estar próximos a Ceuta; pero lo más las alturas del peñón, lugar éste a donde podían probable es que estos últimos efectivos no se efectuar la retirada en caso de un fracaso inicial. emplearan hasta que la cabeza de puente estuvo asegurada. Por ello creemos que Tariq no puso en conocimiento de Muza el comienzo de la

XIII Centenario desembarco árabo-bereber maniobra hasta que no se vio en serios aprietos, después de la tardía reacción visigoda. Así que contando con los medios suficientes para iniciar la operación y darle La Roca estaba casi continuidad en el tiempo si las circunstancias se aislada y el tránsito entre presentaban favorables, a los dirigentes de la ésta y el continente no operación -Tariq y Julián- sólo les quedaba elegir debía ser fácil el sitio donde instalar la cabeza de playa. Pero la elección era bien sencilla porque este último debía saber que había un punto en la costa norte del Estrecho que reunía las condiciones óptimas para una operación de este tipo, lugar que estaba relativamente cerca del lugar de embarque y, Según algunas fuentes, el primer sobre todo, era muy fácil de defender de un desembarco se hizo en los días finales del mes ataque proveniente de las fuerzas visigodas. Este de abril y no debe extrañar que de Ceuta se saliera punto era el peñón de Gibraltar; por ello parece de noche42 para aprovechar al máximo el efecto lógico que casi todas las fuentes musulmanas sorpresa. Los cuatrocientos o quinientos hombres coincidan en reconocerlo como el lugar donde desembarcados inicialmente en las playas situadas desembarcaron las fuerzas invasoras al mando a levante del Peñón, con las primeras luces del de Tariq, ni sorprende tampoco que el monte día, no emprendieron una rápida algara ni tomaron pasara a ser denominado desde entonces con el posesión de las alturas del mismo, sino que nombre de éste: Gabal Tariq (monte de Tarik). debieron organizar la defensa de la zona de Pero antes de continuar analizando los desembarco cavando las correspondientes zanjas primeros pasos que debieron darse al comienzo en el banco arenoso para dificultar los efectos de la invasión, debemos señalar que el banco de un posible ataque. Pero éste no debió arenoso –tómbolo- que une sierra Carbonera con producirse, tal vez porque no había preparados el Peñón debía ser forzosamente más estrecho y efectivos suficientes –no olvidemos que por menos elevado sobre el nivel del mar que lo es esas fechas el rey don Rodrigo estaba

38 ˇNo de otra manera se pudieron transportar 400 hombres y 100 caballos en cuatro naves. 39 ˇCHALMETA, Pedro: Invasión e islamización…, pp. 100 y 102. 40 ˇ En 1561 el banco arenoso tenía en las proximidades del Peñón poco más anchura que el alcance de una ballesta. Véase esto en Pedro de Medina: Crónica de los duques de Medina Sidonia. “Colección de documentos inéditos para la Historia de España”. Tomo XXXIX. Madrid, 1861, p. 127. 41 ˇ La defensa del lugar de desembarco mediante zanjas la utilizaron ya los romanos en el año 256 a.C. cuando trataron de llevar la guerra a las proximidades de Cartago. Véase en FERRERO, J. Albert: “Las campañas navales de la Primera Guerra Púnica”. Revista de Historia Naval 31 (1990) 35. 42 ˇ Sirva como referencia que Julio Cesar, en las dos ocasiones que desembarcó en Bretaña, salió de los puertos de la Galia a media noche la primera ocasión y al ponerse el sol en la segunda. Véase así en Guerra de las Galias. Editorial Gredos. Madrid, 1996, pp. 52 y 100.

62 combatiendo a los vascones43- o tal vez porque más que sobrado para transportar y poner en los visigodos pensaran que se trataba de una Gibraltar varios miles de hombres de guerra. algara parecida a las anteriores y creyeran Desde luego, los desembarcados en la primera conveniente organizarse y esperarlos a la vuelta

semana podían superar ligeramente el par de Aljaranda 81 (2011) en algún lugar favorable para derrotarlos44. Así millares de hombres y eran más que suficientes que mientras los desembarcados se aprestaban para apoderarse de Carteya, por entonces un a la defensa, los marineros debieron lugar con escasa entidad poblacional según emprender otro viaje para potenciar los efectivos demuestran las más recientes investigaciones desembarcados. Con los medios navales arqueológicas45. A medida que pasaban los utilizados antes, en unas doce horas –diez para días los expedicionarios pudieron acumular más cruzar en los viajes de ida y vuelta y dos para efectivos humanos46 y puede que la primera embarcar- un nuevo contingente de iguales proporciones que el precedente pudo ser puesto caballería llegara por entonces, al tener asegurada en Gibraltar. Con cerca de un millar de hombres la zona de desembarco y pastos a su alcance para situados en las arenas del Peñón, puestos a la alimentar los animales. En estas condiciones, no resulta sorprendente la derrota de Sancho en

defensiva detrás de fosos y con la posibilidad de XIII Centenario desembarco árabo-bereber retirada hasta las alturas de Gibraltar, se algún lugar cercano a Julia Traducta a fines de necesitaba un número tres veces superior para la primera decena del mes de mayo; a la victoria intentar desalojarlos de sus posiciones. Una campal de los musulmanes pudo seguir fuerza de tal magnitud no debía estar disponible la toma de Traducta para extender luego sus en las cercanías, ni siquiera en Medina movimientos por todo lo que hoy es el Campo Sidonia; así que cuando se reaccionó desde de Gibraltar. Las playas de la Bahía pudieron Sevilla, o tal vez desde Córdoba, y Sancho –al servir entonces para desembarcar oleadas que algunos historiadores hacen sobrino del rey expedicionarias más numerosas. El decisivo don Rodrigo- pudo alcanzar la zona de choque del Guadalete se vislumbraba en el desembarco, los invasores habían tenido tiempo horizonte.

Imagen 6.- Armas musulmanas. (museo de la Historia de Valencia).

43 ˇ Toda la bibliografía a nuestro alcance habla de esta circunstancia. 44 ˇ Muchas veces se conseguía la derrota de una algara cuando sus componentes regresaban cargados con el botín. 45 ˇ Esta es la opinión del arqueólogo de la Diputación Provincial, Salvador Bravo Jiménez, a quien agradecemos la amplia información que nos proporciona y que no podemos incluir aquí por limitaciones de espacio. 46 ˇ Tengamos en cuenta que a un promedio de 400 hombres por viaje y día, en la primera decena del mes de mayo se pudo transportar un contingente más que suficiente, que tuvo además la ventaja de elegir el campo de batalla, para derrotar al ejército de Sancho.

63 Aljaranda 81 (2011) XIII Centenario desembarco árabo-bereber

Imagen 1.- Grabado antiguo sobre una carga del ejército musulmán.

Comentarios a diversas cuestiones relativas a la invasión árabe del año 711

Joaquín Cestino

Introducción a primera crónica que se refiere a la Los combatientes beréberes. invasión árabe de la Hispania visigoda, La palabra berébere es una deformación del la crónica mozárabe, se escribió en el nombre latino barbarus que significa extranjero. año 754, es decir, 43 años después de la Así denominaban los romanos a los pueblos fecha, abril-mayo del 711, en que dio comienzo exteriores a sus fronteras. Los pueblos beréberes la invasión referida. están constituidos por varios diferentes grupos La segunda de las crónicas que relata la conquista árabe, la crónica de Ibn Abd al-Hakam, étnicos, y sus fronteras, en la antigüedad, llegaban se escribió hacia el año 860. al Niger por el sur, a Egipto por el Este y al Es evidente que fueron demasiados los Atlántico por el Oeste. En las zonas cercanas al años transcurridos entre los hechos ocurridos y estrecho de Gibraltar los beréberes senhayas su posterior narración. se encuentran al sur de Tánger y en el Fahs, los Sin duda por ello, esas crónicas, y las majmuda en la zona de Al Ksar es-Seguer, y los que después se escribieron – que en su mayor ghomárah en las cabilas de Anyera y el Hauz. parte repiten con pocas variantes lo dicho en las El idioma de los beréberes es una lengua primeras Ð no son ni extensas ni precisas en los más antigua que el latín y el árabe, y se la detalles de lo acaecido. Surgen por eso numerosas preguntas de difícil respuesta: ¿Cómo las fuerzas considera relacionada con las lenguas arcaicas invasoras, bajo el mando del walí de Tánger de Egipto y Abisinia, y con otras también muy llamado Tarik, compuestas en su mayor parte antiguas como las etrusca, minoica, euskara y por beréberes, pudieron derrotar al ejército guanche. Los beréberes son físicamente parecidos visigodo? ¿Cómo se hizo el traslado de esas a los europeos mediterráneos, y algunos de sus tropas a través del estrecho de Gibraltar? ¿Cómo tipos son de cabellos rubios y ojos azules. Eran aceptar que esos siete mil combatientes pudieran pastores nómadas aunque eventualmente se llegar en solo cuatro embarcaciones, como las convertían en ganaderos estables o agricultores crónicas señalan? ¿Cuáles, aparte del cerealistas. Las poblaciones beréberes siempre repetidamente citado Gibraltar, pudieron ser los puertos o lugares de desembarco? ¿Cómo trataron de mantener su autonomía frente a los eran las naves? ¿Cuáles las dificultades? pueblos invasores (romanos, vándalos, bizantinos Los párrafos que siguen tratan de o árabes). acercarse a esas cuestiones planteadas, y desean Es sabido que las poblaciones del norte esbozar, con todas las reservas que procedan, las de África se resistieron a las sucesivas oleadas posibles respuestas.

64 de la invasión árabe que se inició en la primera procedentes del Atlántico. Se alternan con mitad del siglo VII. Pueden recordarse las situaciones de predominio de vientos de levante, sublevaciones de Kusayla, en el año 687, y de fuertes y persistentes, que habitualmente la princesa Al-Kahina en el 689, que fueron producen temporales que llegan a impedir la finalmente dominadas. navegación. A partir del mes de mayo, y en los Aljaranda 81 (2011) Pero las tropas del emir Musa, entre los meses de verano, las condiciones climáticas se años 705 y 707, sometieron a los beréberes del modifican al desaparecer las altas presiones noroeste, tomaron Tánger, y llegaron a Tafilatet atlánticas. Las lluvias son escasas, los levantes y el Sus. amainan, y se impone un régimen de brisas de La citada ocupación del Tánger visigodo mar y de tierra. en el año 707 fue llevada a cabo por el general En principio, el viaje de 7.000 soldados y walí Tarik ibn Ziyad al frente de 2.000 soldados y un cierto número de caballos (crónica Ajbar árabes, 12.000 beréberes y 700 africanos de raza maymu’a del siglo XI), posiblemente unos mil, negra. parece imposible de realizar con sólo cuatro Puede pues aceptarse, respecto a la embarcaciones (citadas en casi todas las fuentes) posterior invasión del reino visigodo de Hispania, en un tiempo razonable y acorde con las que los 7.000 hombres, la mayor parte beréberes, circunstancias. XIII Centenario desembarco árabo-bereber que llegaron conducidos por Tarik en mayo de Sin embargo, podemos hacer algunas 711, cuatro años después de la toma de Tánger, conjeturas: se sabe que eran naves de comercio eran ya combatientes experimentados, adiestrados habitual entre las dos orillas del Estrecho, y disciplinados. conseguidas por el conde Julíán en Ceuta o en No puede olvidarse que en Tánger se la costa peninsular. Los marinos serían hombres abrieron entre 17 y 25 escuelas coránicas, y que expertos en atravesar el Estrecho en diferentes la conversión al Islam de la mayor parte de los situaciones de clima y de mar, y por otra rifeños probablemente se había producido ya en parte, la presencia de estas embarcaciones habría de años anteriores. ser frecuente - de día o de noche - en esas aguas. Debe También conviene recordar que a lo largo tenerse además en cuenta que las travesías se de la historia, los beréberes, fuertes y combativos, efectuaron en el mes de mayo, época del año en fueron contratados como soldados mercenarios que las condiciones meteorológicas mejoran. por las legiones cartaginesas y romanas. Los Corrientes, mareas, oleajes y vientos, eran sin franceses lo hicieron en el curso de las dos guerras duda asuntos bien conocidos para los marinos europeas del siglo XX, y en España estuvieron de la zona. presentes, en el llamado bando nacional, mientras Es posible suponer en consecuencia que duró la guerra civil del año 1936. se emplearon buques ligeros (no naves de guerra) de remos con uno o dos palos - fustas o galeras Ð que ya utilizaban la vela triangular o latina, adoptada por árabes y bizantinos desde finales Las embarcaciones. del siglo V. La índole de los barcos utilizados en las travesías, Aunque el timón central o de codaste y las condiciones en que estas se desarrollaron, aún no existía (se impuso a partir de finales del parece un asunto mucho más difícil de aclarar. siglo XIII), era común el uso de espadillas o Como se sabe, la navegación a través de timones dobles a cada costado. Con velas las aguas del estrecho de Gibraltar no está exenta triangulares - usuales en las galeras - era posible de dificultades. Existe una corriente superficial ceñir o navegar de bolina. desde el Atlántico al Mediterráneo - hasta Port Sabemos por Herodoto que las antiguas Said- con velocidad media de 2 a 2,5 nudos que naves fenicias o griegas a remo, empleaban dos suele aumentar con viento del Oeste. En los jornadas para navegar desde el monte Calpe intervalos de mareas entrantes esa velocidad (Gibraltar) hasta Tartessos (posiblemente puede llegar a los 4 o 4,5 nudos. Con mareas Trafalgar), distanciados unos 65 kilómetros. salientes, sin embargo, la corriente fluye con También se conoce que las naves cartaginesas lentitud o se detiene. Por otra parte, los llamados podían alcanzar una velocidad de hasta 8 nudos hileros de corrientes (producidos por el encuentro (14,8 km. por hora). de mareas y corrientes) aparecen inesperadamente Por ello, tal vez se podría deducir que en las proximidades de puntas o bancos. Estos embarcaciones como las indicadas serían capaces hervideros, a veces peligrosos, son frecuentes de realizar dos travesías diarias, relevando los en lugares como Trafalgar, la isla de Tarifa, los remeros, entre Ceuta y Gibraltar cuya separación Cabezos y la Perla, punta Europa, punta Carnero, es de 25 kilómetros. cabo Espartel y punta Al Boasa entre otros. Las fustas o galeras pueden suponerse En los meses de invierno las borrascas, con esloras de 16 a 20 metros, y con 15 remeros que traen lluvias importantes, entran al Estrecho a cada costado. Así, siguiendo con las conjeturas

65 y admitiendo que cada nave pudiera transportar seguramente habría despertado sospechas. No en cada viaje unos ochenta hombres, las cuatro así desde Ceuta. embarcaciones trasladarían 640 soldados al día b). El monte Calpe, Gibraltar, por su (dos viajes, uno de día y otro de noche). Se configuración, era sin duda el mejor lugar para Aljaranda 81 (2011) necesitarían por tanto unos once días para traer un desembarco poco visible de las naves. las tropas, a los que habría que añadir algunos Gibraltar, la segunda columna de días más para los caballos. Serían quince días, Hércules, remonta sus orígenes a los tiempos aproximadamente, los requeridos. mitológicos. Su primera denominación se cree que fue la de monte de Saturno, y más tarde fue la montaña Calpe. La palabra calpe, según algunos, era fenicia e indicaba altura. Según otros se trataba de una palabra de origen hebreo De hecho, llegaron en ese que significaba cavernoso. intervalo de En sus cuevas hoy denominadas Gorham tiempo otros 5.000 y Vanguard habitaron los neanderthalenses, y en la cueva llamada de San Miguel, elevada y con XIII Centenario desembarco árabo-bereber combatientes enviados por amplios espacios, existe un pequeño lago interior. Musa Las escarpadas cumbres de Gibraltar, que llegan a una altura máxima de 424 metros, se alinean de norte a sur a lo largo de unos 2 kilómetros. Estos elevados lugares, y las abundantes y rocosas La crónica de Ibn Qutayba del siglo IX laderas configuran un paisaje extremadamente cita seis o siete bajeles. Tal vez fueran más. abrupto e inexpugnable. Aunque parezca que fueron muchos días los Hay en Gibraltar varias calas bien empleados en las travesías, puede también protegidas (Cala Rosia, Camp Bay y Little Bay) considerarse que hubo tiempo, unos dos meses en su litoral de poniente, y debe señalarse que y medio (entre la primera arribada en Gibraltar, cualquier movimiento en las proximidades de y el día inicial de la batalla en la laguna de la punta Europa es difícilmente detectable desde Janda), para transportar holgadamente las tropas. cualquier punto de la costa o el interior. De hecho, llegaron en ese intervalo de Gibraltar, como se ha dicho, es tiempo otros 5.000 combatientes enviados por prácticamente inexpugnable, y las tropas Musa. transportadas por Tarik podrían hacer frente allí, concentradas en sus alturas y refugios, a cualquier ataque imprevisto. A esta hipotética defensa Los puntos de desembarco. contribuiría evidentemente la existencia del istmo Muchas de las crónicas antiguas se refieren al que separa la montaña de la península. desembarco junto a una elevada y escarpada En la impunidad del monte Calpe, las tropas de montaña. Otra fuente (la citada crónica de Ibn Tarik, en complicidad con las del conde Julián, Qutayba, escrita en el siglo IX) menciona una pudieron ultimar con tiempo todas las medidas montaña roja y sin vegetación. preparatorias para la campaña prevista de Pero en cualquier caso, aparecen con enfrentamientos armados. cierta claridad dos circunstancias: El posible mareo de los soldados como a). La más fácil travesía del Estrecho era la de consecuencia de las travesías no se considera Ceuta a la bahía de Algeciras, zonas ambas significativo si se tiene en cuenta que no debieron sujetas al gobierno del conde Julián y donde la producirse enfrentamientos o combates en los población le era afecta. Las embarcaciones de desembarcos, puesto que el conde Julián comercio a utilizar, conseguidas por Julián, controlaba la bahía de Algeciras. probablemente tenían su base en Ceuta. Puede Por eso, la pequeña resistencia a que se dudarse además de que la zona de Tarifa estuviera refieren algunas de las fuentes pudo ser el bajo el control del conde. posterior encuentro, quizás en algún lugar no Las costas visigodas del Estrecho, por la cercano, entre los hombres del conde Tudmir o proximidad de los conquistadores árabes en la Teodomiro enviados por el rey Rodrigo, y algunos otra orilla, quizás estaban entonces poco pobladas. destacamentos de Tarik desplazados para hacerles Además, no se conoce que en las fechas de la frente. invasión Algeciras y Tarifa existieran como tales. Admitido el desembarco inicial de Tarik Carteya y Mellaria habían sido destruidas por y sus tropas en el monte Calpe, tal como se los vándalos en el 409, y Baelo (Bolonia) tal vez recoge en diversas crónicas, es posible sin lo fue en el 429. embargo formular alguna hipótesis La partida de las naves desde el puerto complementaria. de Tánger, de donde procedían las tropas, Parece evidente que los árabes y sus

66 aliados, el conde Julián y los parientes de Witiza, solo podían lograr sus respectivos objetivos mediante la derrota y derrocamiento del rey Rodrigo. Y resulta también claro que esto solo sería posible tras los asedios y tomas de la ciudad Aljaranda 81 (2011) de Córdoba (capital de la Bética) y de Toledo (capital del estado visigodo). La simple observación del mapa físico de la Península Ibérica nos descubre de forma inmediata que la única vía posible de penetración de las tropas de Tarik hacia esos objetivos habría de ser a través del valle del Guadalquivir. Las sierras béticas y penibéticas eran obstáculos insalvables para un rápido avance por cualquier trayecto diferente.

De hecho, tras la victoria de los árabes XIII Centenario desembarco árabo-bereber y sus aliados en la batalla de la laguna de la Janda, los soldados de Tarik fueron conquistando sucesivamente las poblaciones de Medina Sidonia, Morón, Carmona, Sevilla, Écija y finalmente Córdoba y Toledo. Surge por tanto la hipótesis de que, una vez realizado el desembarco inicial en Gibraltar, lugar de fácil defensa, y dominada la situación en el entorno de la bahía, se produjeran nuevos desembarcos - durante los meses de junio y julio del 711- en los caladeros de Tarifa (lugar ya conocido por haber sido invadido y saqueado por Tarif ibn Mallik en julio del 710) o de la ensenada de Barbate. En estos desembarcos habrían llegado los 5.000 soldados enviados como refuerzo por el emir Musa. Además, conocida y demostrada la Imagen 2.- Busto de Muza en Tudela. penetración de las tropas árabes victoriosas por el valle del Guadalquivir, varios argumentos pueden apoyar esta idea de los desembarcos en Tarifa y Barbate: por un monte llamado después Yébel Tarik, 1.- El grueso de la tropas invasoras situado entre Ceuta y España. procedía de Tánger. Por los muchos años transcurridos entre 2.- El lugar donde acamparon las tropas los hechos y su relato, parece evidente que ambas árabes, previamente a la decisiva batalla contra crónicas y las que posteriormente se escribieron, las fuerzas del rey Rodrigo, fue la orilla sur de resultaron imprecisas, cuando no contradictorias, la laguna de la Janda, zona muy cercana y de respecto a los detalles de la invasión. Datos tales fácil comunicación con los indicados puertos o como el número de soldados y caballos caladeros naturales de Tarifa y Barbate. transportados, la clase y número de las 3.- La aceptación posible de lo expuesto embarcaciones utilizadas, los puertos de ayudaría a despejar los actuales puntos difíciles desembarco, la duración de las travesías y los y oscuros que se presentan al tratar de explicar días empleados, las fechas reales de cada satisfactoriamente la versión más aceptada de situación, etc. fueron obviados o reflejados solo que la invasión pudo realizarse por Gibraltar con de forma aproximada y poco fidedigna por tanto. solo cuatro embarcaciones de comercio. La deseada y rigurosa reconstrucción de la 4.- Es posible reforzar los supuestos invasión árabe de las tierras hispánicas en el año anteriores si se tiene en cuenta que la primera 711, un muy interesante y decisivo episodio de crónica que se refiere a la invasión árabe de la nuestra historia, puede decirse que no será Península – la llamada Crónica mozárabe – se empeño fácil. escribió en el año 754, pasados 43 años desde que los hechos ocurrieron. En la misma no se menciona ningún lugar de desembarco. J. Cestino es autor de los libros “ESTRECHO La siguiente crónica escrita en el año 860 por DE GIBRALTAR- Costas y Ciudades” y Ibn Abd al-Hakam describe el paso del Estrecho “EL ESTRECHO- Treinta siglos de Historia en Gibraltar, Tánger, Tarifa, Ceuta y Algeciras”

2 67 NÚMERO MONOGRÁFICO CONMEMORATIVO DEL XIII CENTENARIO DEL DESEMBARCO ÁRABO-BEREBER DEL 711

Cierro y ventana en M» Antonia Toledo, 12

CIERROS Y BALCONES AljarandaAljaranda Año XXI Núm. 81 Segundo Trimestre. Junio 2011