Cuba, Los Gallegos Y El Che
Total Page:16
File Type:pdf, Size:1020Kb
CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 3 Cuba, los gallegos y el Che LOIS PÈREZ LEIRA Edita: Colección: de la CRÓNICAS EMIGRACIÓN CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 2 Edita: Grupo de Comunicación Galicia en el Mundo, S.L. C/ San Francisco, 57. 5º - 36202 Vigo (España) E-mail: [email protected] Colección: Crónicas de la Emigración Traducción: Gael dos Santos Vaamonde Maquetación: Graciela Alba Burgos y Héctor Silva I.S.B.N.: 978-84-922157-6-8 Depósito Legal: VG: 888-2008 Impreso en Obradoiro Gráfico, S.L. Polígono Industrial do Rebullón, 52D Mos - Pontevedra CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 5 Con la llegada masiva de inmigrantes europeos a América latina, a finales del siglo XIX, llegaban también las nuevas ideas del anar- quismo y del socialismo. Las recientes repúblicas emancipadas del colonialismo peninsular necesitan desarrollar sus fuerzas producti- vas y poblar sus vastos territorios. Fueron los inmigrantes gallegos e italianos los que se destacaron desde el punto de vista cuantitativo, pero también llegaron portugueses, alemanes, rusos, polacos etc. Algunos eran simples inmigrantes económicos; otros llegaban esca- pando de las guerras o por persecuciones políticas e incluso religio- sas. Galicia, en aquellas décadas de finales del siglo XIX, tenía uno de los índices más elevados de crecimiento demográfico. Desde la Castra y Doma del Reino de Galicia, nuestro país sufrió todo tipo de discriminaciones y humillaciones, que hicieron de una tierra rica, un puelo pobre. La estructura agraria minifundista de carácter medieval, donde los campesinos carecían de la propiedad de la tierra, no per- mitía una supervivencia digna, lo que provocó que la mayoría de la gente joven tuviese que emigrar. También serían las guerras colonia- listas las que determinaron que miles de jóvenes humildes huyesen de la muerte segura, mientras que los pudientes pagando podían evi- tarla. Los vínculos históricos con las ex colonias llevarían a cientos de nuestros paisanos a emigrar hacia Cuba, Puerto Rico, Argentina, Uruguay, Brasil, México y Venezuela. Con aquellos emigrantes tam- bién fueron llegando intelectuales que escaparon de la frustrada pri- mera República española de 1873. Con ellos llegaban las ideas del libre pensamiento, el republicanismo federal y las ideas de Marx y Bakunin. Adolfo Vázquez Gómez en Uruguay, Curros Enríquez en Cuba, Iglesias Pantín en Puerto Rico o Manuel Castro López en la Argentina, son algunos ejemplos de esta etapa. Fueron estos intelectuales o trabajadores concienciados, infludos por las ideas surgidas después de la revolución francesa, los que fun- daron periódicos y los primeros centros gallegos. Los recién llegados necesitaban auto-defenderse como grupo étni- co y también como clase social, por eso participan en las primeras luchas del movimiento obrero y la fundación de sindicatos y parti- dos de izquierda. Introdución Cuba, los gallegos y el Che 5 CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 6 Nuestra emigración, a diferencia de los vascos o canarios que se radicaron en el agro, se instaló en las ciudades. Se fue incorporando a la incipiente industria de estos países o en el área de servicios: hos- telería, peones de almacén, panaderías, chóferes, etc. También llegaron grandes contingentes de gallegos para la reali- zación de grandes obras públicas, como por ejemplo el Canal de Panamá, donde murieron a causa de las enfermedades tropicales varios miles de trabajadores gallegos. En Brasil trabajaron en la construcción del tren Madeira-Mamoré, dejando sus vidas centena- res de nuestros compatriotas. Las condiciones laborales y las enfer- medades tropicales diezmaban nuestros emigrantes. Las campañas publicitarias de las empresas de navegación y la necesidad de aque- llos Estados brasileños de poblar aquellas vastas geografías llevaban a muchos emigrantes a realizar aquella titánica odisea. Otro grupo importante de nuestros emigrantes se radicaron en Alto de la Serra, a 1.600 metros sobre la altitud del mar, una locali- dad que por aquellos años quedaba a una hora de viaje de la ciudad de São Paulo. La mayoría de nuestros paisanos que residían en esta aldea eran vecinos de Goián (Pontevedra) y trabajaban en el ferro- carril paulista construido por los ingleses. Algunos, más osados, trabajaron a finales del siglo XIX en el Amazonas en la extracción del caucho, en Manaos. Con la crisis de este producto muchos de aquellos trabajadores se trasladaron selva adentro por el río hasta el inexplorable Alto Amazonas en Iquitos. Así como tenemos trabajadores gallegos en casi todos los países latinoamericanos, existió también una corriente migratoria que des- pués de la primera Guerra Mundial se radicó en EEUU, trabajando en las grandes empresas metalúrgicas. Otros sectores laborales donde los gallegos fueron muy destaca- dos fue en la marina mercante de aquellos países que tenían barcos de bandera propia, fundamentalmente Argentina y EEUU. Introdución 6 Cuba, los gallegos y el Che CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 7 Sociedad Benéfica "Naturales de Galicia": la primera sociedad de emigrantes gallegos del mundo La historia del movimiento asociativo de la emigración gallega es uno de los grandes temas todavía por investigar. Tenemos referen- cias de que las primeras organizaciones de gallegos en América se fundaron a mediados del siglo XVIII. Éstas se denominaban natura- les del Reino de Galicia siendo las primeras: la de México en 1740, Buenos Aires en 1790, Veracruz en 1795 y La Habana en 1804. Esas entidades tenían un carácter religioso-benéfico y estaban vinculadas al culto de la figura de Santiago Apóstol. En la década de los 70, del siglo XIX, Cuba era el destino de miles de emigrantes gallegos que dejaban sus aldeas para probar suerte en la isla del caribe. La mayor parte de estos emigrantes provenían de las zonas nortes de las provincias de la Coruña y Lugo. La isla era entonces, junto con Filipinas, de las últimas colonias de un imperio que estaba en la más absoluta decadencia. Con los tradicionales emi- Francisco Loriga, presidente. José García Barbón, tesorero. Francisco Lamigueiro, vocal. Juan Álvarez Baldanedo, secretario. Introdución Cuba, los gallegos y el Che 7 CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 8 grantes también llegaban funcionarios del gobierno, militares, sacerdotes y empresarios. La necesidad de ir agrupando a los originarios de Galicia fue creando las condiciones para que se fundase la primera entidad gallega en la emigración. La mañana del 31 de diciembre de 1871 se juntaron en el Teatro Albisu varias docenas de gallegos para fundar la Sociedad de Beneficencia Naturales de Galicia. Días des- pués sus fundadores se reunieron el 11 de enero de 1872 para nombrar una comisión que sería la encargada de redactar los estatutos de ésta. El 21 de enero de ese mismo año se realizó en el Casino Español de La Habana, una asemblea donde fue aprobado por unanimidad el regla- mento de funcionamiento y su primera comi- sión directiva. La primera Junta de Gobierno Policarpo quedó constituida por Ambrosio Tomati, presidente; Juan Mas, Sanz. director; José García Barbón, tesorero; Joaquín Prieto Canal, secretario; doce concejales titulares y doce concejales suplentes. Los socios fundadores de esta institución fueron treinta y siete, entre los que figuraron también el impresor Francisco Armada y el camisero, Juan García Casariego, Policarpo Sanz, Juan Álvarez Baldoneo, Francisco Loriga Taboada, etc. Según nos cuenta el historiador Alberto Valín Fernández, entre los fundadores había varios miembros de la masonería gallega esta- blecidos en Cuba, y entre ellos, y que sepamos su pertenencia, podemos nombrar a García Barbón, simbólico Candas, que fue ini- ciado el 5 de diciembre de 1866, logrando el grado 5º el 31 de diciembre de 1866. Francisco Armada, simbólico Gutemberg, que en 1873 fue tesorero de la Logia Cosmopolita Nº 14 de la Gran Logia Simbólica del Gran Oriente de Colón. García Casariego, simbólico Artagnan, que fue miembro de la misma logia, siendo nombrado en 1876 secretario, archivero y guardasellos, fue iniciado Vista de la en 1868. bahía de La mayoría de los fundadores de la Benéfica Naturales de La Habana, Galicia eran emigrantes acomodados, muchos de los cuales estaban principios de adscritos filosóficamente al librepensamiento. Los sectores republi- siglo XX. Introdución 8 Cuba, los gallegos y el Che CHE 6.qxd 11/7/08 08:24 Página 9 canos liberales de finales del siglo pasado eran activos militantes de la masonería. Por eso se explica que fuesen los impulsores de un sin fin de iniciativas de carácter mutual como cultural y político. Tenemos que recordar que otro francmasón José Fontenla Leal, simbólico Murguía, fue el impulsor de la Asociación Iniciadora y Protectora de la Real Academia Gallega, siendo su primer presidente otro masón, Manuel Curros Enríquez. La nueva entidad tenía como objetivo según reza en sus estatutos, artículo 1º: "proteger a sus asociados y proporcionar socorro a los Naturales de Galicia y a sus asociados que se encuentren necesitados". La cuota mensual fue fijada en 0,50 centavos y de 1 peso a los mayores de 50 años. Una de las iniciativas tomadas por unanimidad fue el Manuel Curros Enríquez. nombramiento de Socios Honorarios recayendo esta designación en tres mujeres gallegas: Rosalía de Castro, Virginia Felicia Aubert y Juana María Vega. José Castro Chané. Según nos cuenta Xosé Neira Vilas: "El título corres- pondiente a Rosalía le fue entregado a Francisco Loriga, un coruñés que en ese momento era el presidente de la Sala de Audiencia de La Habana. Le encomendó esta ges- tión Alexandre Chao. Loriga le escribió a Rosalía el 30 de noviembre de 1873 anunciándole el envío de ese docu- mento, y le volvió a escribir el 14 de enero de 1874 expli- cándole que se había olvidado de mandarlo con la carta de noviembre, pues lo acababa de encontrar entre sus papeles".