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PAULA CAUTIVA (Ambassador) con­ trasta la Imagen falsa de la Argentina que se llevan los turistas norteamerica­ nos con la verdadera Imagen que éstos nunca llegan a ver. Su argumento se apo­ ya en la mentira que argentinos intere­ sados ofrecen de su patria. Para agasajar a los turistas norteamericanos y sonsacar­ les no sólo dólares sino ventajosos con­ tratos. lea muestran un mundo hecho de estancias "tipleas” , con fiestas criollas más o menos pre-fabricadas, y con mu­ chachas fáciles que son las mismas "call- glrs” que los turistas tienen en su casa pero suficientemente metamorfoseadas por las necesidades de la farsa. Hay un personaje (Dulllo Marzio) que es un ar­ gentino que regresa a su patria después de quince años de ausencia y al que toda eBta mentira Impresiona desagradable­ mente. En la farsa ve comprometidas a la Paula del titulo (Susana Freyre) y su abuelo (Orestes Caviglla). quienes prestan su estancia "La Cautiva”, para fines de explotación turística. En el cuadro tam­ bién entra la reciente situación política argentina y los golpes militares que ame­ nizan desde hace 33 años la vida demo­ crática de la vecina república. Con esta película, retorna a la direc­ ción cinematográfica que, desde Sábado a la noche, cine (1960) no dirigía nada. Para la generación de Jóve­ Susana Freyre, Duilio Marzio. nes realizadores argentinos que ha empe­ zado a hacerse conocer en estos últimos — Sábado de noche, cine (1960), sobre Importante este nuevo titulo que ahora años y que Incluyen a Simón Feldman, una idea de David Viñas, con Alda Luz y presenta Arles Cinematográfica, la com­ Fernando Birri, David José Kohon, José Domingo Alzugaray; película frustrada a pañía responsable de los mejores films de Martínez Suárez, Rodolfo Kuhn y Manuel pesar de sus interesantes apuntes de am­ Ayala. Antln, tanto Ayala como Leopoldo Torre biente. Para Paula Cautiva, Ayala ha ido a bus­ Nilsson pueden ser considerados precur­ Los cargos que caracterizan a la pro­ car' su tema en un cuento de Beatriz sores. Ambos han hecho posible con sus ducción más Importante de Ayala son Guido, La representación. Desde algunos obras la transición de un cine puramen­ precisamente los de una adhesión apa­ puntos de vista, el tema de Paula Cautiva te comercial hacia un cine de pretensio­ sionada a la realidad argentina, esa rea­ parece vincularse con el de la novela más nes creadoras y hasta polémicas como el lidad que el cine de la vecina orilla ha­ importante de Beatriz Guido, Fin de fies­ que caracteriza la producción argentina bla eludido durante tanto tiempo. En ta, que llevó al cine su esposo y colabo­ de estos' últimos años. Menos conocida en buena parte, esa orientación se debe a rador habitual, . el exterior y menos aplaudida que la de sus relaciones con David Viñas, uno de Como en Fin de fiesta, esta película de Torre Nilsson, la obra de Ayala es sin em­ los más famosos e Iracundos parricidas Ayala muestra la decadencia de una Ar­ bargo considerable. que irrumpió en , en víspe­ gentina, el crepúsculo de toda una clase, Nacido en 1920, Fernando Ayala tiene ras de la calda de Perón, con artículos terrateniente, reducida aquí a proporcio­ en su haber dos cortometrajes (El trasan­ apasionados contra la historia oficial, la nar solaz turístico a los norteamericanos. dino del Norte, 1949; Vuelo 300, 1950) y literatura de la oligarquía, el culto de Hay una suerte de elegía Implícita. Pero algunos films de argumento que le han Borges y de Mallea, y que intentó fundar hay también una denuncia, que estaba valido la consideración del público y la una nueva estimativa literaria (en parte en la novela Fin de fiesta (en que se critica: inspirada en Sartre) sobre la base de no­ llegaba a aludir a Perón) pero que fue — Ayer fue primavera (1955), con Ro­ velas más apocalípticas que literarias. omitida del film. En cierto sentido pa­ berto ‘ Escalada y Analia Gadé, de ento­ Mientras estuvo en contacto con Ayala, rece como si la colaboración de Beatriz nación romántica pero sin cursilería; Viñas Inventó y escribió libretos en que Guido con Ayala le hubiera permitido ex­ — Los tallos amargos (1956), sobre no­ se expresaba su orientación renovadora. presar cosas que el clima algo enrarecido vela de Adolfo Jasca, con Carlos Cores y Posteriormente se separó de Ayala y su y morboso de su marido le impide ma­ Alda Luz, menos lograda que la anterior; última novela (Dar la cara, 1963) ha sido nifestar. —Una viuda difícil (1957), sobre la co­ llevada al cine por Martínez Suárez. medla de Conrado Nalé Roxlo, con Alba Como Paula Cautiva se atreve también Araova y Alfredo Alcón; compromiso con Al separarse de Viñas (ya en la última a mostrar en sus imágenes e l ' clima de la fantasía ajena; película el libreto fue escrito por otros), inseguridad democrática que configuran — El .jefe (1958), sobre un cuento de Fernando Ayala pareció atravesar una fa­ los sucesivos golpes militares que han David Viñas, con Alberto de Mendoza y se de desconcierto, provocada sin duda ocurrido recientemente en Argentina, Dulllo Marzio; 6U primera película real- por el escaso éxito de Sábado de noche, fuerzas oscuras se movieron para Impedir ,mente comprometida con la realidad ar­ cine. De los varios proyectos que regis­ su exhibición. Felizmente, los últimos gentina. una de las más valientes que se tra Tomás Eloy Martínez en su interesan­ acontecimientos políticos argentinos han han hecho sobre la psicología de la pa­ te estudio de 1961 (Las leyes del juego, permitido su exhibición en Buenos Aires, tota; sobre una novela de Manuel Peyrou; Fies­ donde ha tenido mucho éxito de público, — El candidato (1959), sobre un ar­ ta de Sumamao, con libreto del novelista y ahora en Montevideo. Por todos estos gumento de David Viñas, con Alberto paraguayo Augusto Roa Bastos; Bodas de antecedentes, la película ha despertado Csndeau y Dulllo Marzio. también de In­ cristal, sobre una novela homónima de aquí un justificado interés. tención comprometida aunque menos lo­ Sulvlna Bullrlch) ninguno pasó de la eta­ grada qué la anterior; pa preliminar. Por eso mismo resulta tan . (Apuntes de E.R.RI.)