INTERFERENCIASECRETA PATRICIAVERDUGO

II.{TERFERENCIASECRETA

EDITORI AL ST] D AMERICANd Diseflo de portada: Patricio Andrade Dise6o interiorese imoresi6n:Andros Lrda

L" edici6n:aÉiosto 1998 2' edici6n: septiembre1998 l" edici6n:septiembre 1998 t senriembreI Q98 "drririn 5' -rlicrÂn senriemhrelQ98 6" edici6n:octubre 1998 7' edici6n:octubre 1998

O 1998 Editorial SudamericanaChilena SanraIsabel l2l5 - Providencia Fono: 27 4-6089 Santiagode rsBNN" 956-262-066-2

O Patncia Verdugo, 1998 lndice

Presentaci6n 9

Capftulo Uno: En el comienzo,una mentira 11

Capftulo Dos: A los puestosde mando 2g

Capftulo Tres: Tiempo de lealtad y de traici6n 45

Capitulo Cuatro:La conexidnque debi6 sersecfeta 7I

Capftulo Cinco: Allende no se rinde 10i Presentociôn

La cnanactôN que hoy tiene en sus manos es un docu- mento hist6rico de gran importancia y, por lo mismo, debe ser conocidopor todo ciudadanointeresado en el acontecerde su patria. La historia oficial se construye sobre la basede la versi6n que los vencedoresdesean legar a la posteridad. Pero esepropdsito se ve relativizadopor los esfuerzosde otros que relatanla historia de las victimas y los episo- dios que los victimarios quierenocultar. En eseesfuerzo participan historiadores,periodistas, artistas, editores y muchas otras personassensibilizadas por alg6n momen- to histdrico clave. En estecaso, un ciudadanopudo interferir y gra- bar, aI darsecuenta de la importancia de dicha interfe- Interferencia Secreta rencia, la comunicaci1n entre ios altos jefesde las Fuer- zas Armadas el martes 1 1 de septiembre de I97 3, dia del golpe militar que puso fin aI gobiernodel Presiden- te SalvadorAllende. Ahora tiene usted estagrabacidn en susmanos. Es- cucharlale permit rrâ sacarsus propias conclusiones. El contenidode las frases,el tono de las voces,el lenguaje que unos y otros utilizan develan sus personalidades, revelansus temores y sus iras, susestados de ânimo. La grabacrîn transcrita podrâ encontrarlaa partrr del capftulo cuarto, para que pueda seguirla palabra por palabra.Previo a la transcripcidn, en los tres pri- meros capitulos incorporé un relato de la gestacidndel golpe militar y de lo ocurrido en los escenariosdonde se movfa el PresidenteSalvador Allende en sus riltimas horasde vida. Al cumplirse un cuarto de siglo de estos aconteci- mientos que dieron un violento vuelcoal acontecerhis- tdrico de Chiie, tratar de reflexionar en torno a lo suce- dido esun deberciudadano. Se hace necesario hablarlo con los hijos y con los nietos.Abrir la mente y el cora- zôn parallegar al fondo de los hechos,reconociendo los sentimientospropios y tratando de comprenderlo que sentfanlos otros. Asi podremos,como pueblo, recono- cer las odiosidadesque permanecenemboscadas e inten- tar un honestorecorrido por el camino del perddn, con el compromiso de no repetir una tragediaque cost6tan- tas vidas y dolores.

PatriciaVerdugo Santiagode Chile, I99B

10 Capfruro uNo E,x pr coMIENZo,UNA MENTIRA EN ra EscuEraMItrr:an, ei Puesto Tres fue el encargado de conectara los otrospuntos de Ia red de comunicacidn montada paraeI dia clave del golpe de Estado.IJn error de disefrocomplic6 el sistemay oblig6, a riltima hora,a utrlizat ese Puesto Tres como conexi6n indirecta entre Ios altos oficialesgolpistas. Fue el puestode enlace. Estâ por versesi el error de diseflofue tal o si fue el resultadode un boicot. Tal posibilidad se abre a partir del hecho cierto de que el general , comandanteen jefedel Ejército,supo del golpe en mar- cha sôlo pocas horas antes. No estuvo en el origen del complot. Los golpistas desconfiabande é1,ya que habia sido nombradopor el PresidenteSalvador Allende, a fi' nesde agostode eseafro, Comandante en Jefe de la prin- cipal fuerzaarmada de Chile. Llevabamuy pocosdias en el cargo y su designaci6ns6lo pudo llevarsea cabo -en un momento de mâxima tensi6n- porque la informa-

r3 Interferencia Secreta ciôn de InteligenciaGubernamental le dio el visto bue- no: era un general de "coîfianza" para la izquierdista Unidad Popular,la coalici6nde socialistas,comunistas y otras fterzaslaicas y cristianasque llevd a Ia presiden- cia al doctor Allende en I97 0. -Todos creiamos que Pinochet se oponia al golpe -afftma el general de la Fuerza Ârrru (Fach) Nicanor Diaz Estrada,uno de los altos oficialesconjurados. Los golpistas, encabezadosen el Ejército por el generalSergio Arellano Stark, estabanrealmente com- plicadoscon Pinochet.A pesarde los recelos,decidie- ron -a ûltima hora- correr el riesgo de contar con el ComandanteenJefe del Ejército, de modo de evitar la divisidn entre las fuerzasarmadas y el consiguientecom- bate que rbaa costar muchas vidas y podrîa hacer abor- tar el golpe. La situaci6nen el Ejército era,objetivamente, de mâxima tensidn en esosdias. EI 2l de agosto,cerca de trescientasesposas de oficialesse habian apostadofrente ala casadel entoncescomandante en jefe, general Car- los Prats. Excusaoficial: entregaruna carta a su mujer donde se le rogaba interceder para que el gobierno no continuara "utrlizando" a sus maridos en tareasguber- namentales.Lectura polftica: las esposasde seisgenera- les y de muchos altos oficiales obedecfaninstrucciones de sus maridos, en una primera seôal de sublevaciln. Resultado: el alto mando se fracturd de hecho, el co- mandante en jefe se quebrô emocionalmente y no fue capazde ordenar el retiro de los generalessublevados.

t4 Capitill0 U na: En e/ cornienza.una nteuTirrt

Asf, el Presidentele aceptdla renuncraa PratseI23 de agosto."Un general que llora no estâ capacitadopara maîdar", explicd Allende a sus asesores.Y renunciaron paralelamentetres generalesde probadavocaci6n demo- crâtica: Guillermo Pickering, director de Institutos Militares; Mario Seprilveda,comandante en jefe de la SegundaDivisi6n; y Ervaldo Rodrfguez, iefede la mi- si6n militar en \ùTashington. Asf es como lleg6 el general Pinochet a la cabeza del Ejército, con el compromisode "sofocar"esa suble- vacidn en ciernes,lo que pasabapor sacarde las filas a los generalesque hicieron actuar a susesposas. Pero el lunes 27 de agostode I97 3, un sorpresivo giro en el discursode Pinochetante el alto mando mili- ar abri6 la posibilidad de que se sumara al golpe. Ese àîa, a puertas cerradas,habl6 de estrecharfilas tanto dentro del Ejércitocomo con lasotras ramas de iasFuer- zas Armadas.Y mencion6 la posibilidad de una "inter- vencidn militar" si las circunstanciaslo hacîan necesa- rio. Nada de esto trascendi6 pfrblicamente ni fue del conocimientodel gobierno. Pero habria sido recién el sâbadoB de septiembre cuando el general Pinochet se enterd del golpe en mar- chapan el martessiguiente.El general Arellano Stark ha dicho que llegd aIa casadel general Pinochet alrede- dor de las 20.30 horasde esesâbado B de septiembre,y que al decirseio"su reaccidnfue una mezcla de sorpresa y molestia. AI tomar concienciade que s6lo se requeria

1< L) Interferencra Secreta su adhesiôna una decisi6n ya tomad^, parecil abruma- do .' Mâs arin, cuando le dijo que el general , comandante en jefe de la Fuerza Aérea,estaba esperandosu llamado telef6nico,Pinochet "pidi6 unos minutos, asegurandoque luego lo haria. Por ahorane- cesitabareflexionar". Esa es la versi6n del generalArellano. El general Nicanor Dîaz Estrada, complotador por la Fuerza Aé- rea, dice que -esa misma noche del sâbadoB de sep- tiembre- el generalArellano le negdhaber hablado con Pinochet,argumentando un "no me atrevf". Por su par- te, el mismo generalPinochet no mencionaen sus me- morias haber habladocon Arellano esedfa. ZQuésucedid realmente? Las fuentesson poco fia- bles y los "recuerdos"se han acomodado,en los aôos siguientes,a la necesidadde perfilarsecomo "héroes" de estahistoria. Lo que sf fue cierto es que, esemismo sâbado8, el presidente Allende lleg6 a almorzar a Ia casade Miria Contreras,a quien todos llamaban "IaPayita", y se en- contrd con una sorpresa:lo esperabael generalCarlos Prats,ya despojadode su uniforme. De la privada con- versacidn,Allende sali6 con rostro preocupadoy pidi6 que se citara de urgencia a los generalesAugusto Pinochet y Orlando Urbina a la casapresidenc ial al dia siguiente,domingo P. El hechoes que el generalPinochet no secomunic6 con el general Leigh en las siguienteshoras del sâbado8

I6 Capitn/,' I'u ,: Et af ç,,11ja|7,'. ilnil \t/Lnlira y que teîîa por delanteesa reunidn de emergenciacon ei PresidenteAllende el domingo 9.Entretanto, en Val- parafso,los golpistas de la Armada -encabezadospor el almiranteJosé Toribio Merino- sereunfan el mismo sâ- bado B en la Academia ile Guerra. El almirante Carvajal les confirmd que en la Fuerza Aéreaestaba todo dispues- to, pero que el Ejército arin no confirmabasu adhesi6n. La discusidnse centrd en el peligro de una guerra civil prolongaday cruentasi el Ejército no seplegaba como un todo. La reunidn se suspendid,al atardecer,sin ponerle dîa ni hora al golpe. Pactaronjuntarse aI dîa siguiente, domingo 9, simulando una reuniôn social,en casadel almirante \ùfeberdespués de la misa en ia capilla naval. El almirante Carvajaltuvo que retirarseantes, ya que debfareunirse con los otros conspiradoresen Santia- go. Al salir, instruyd aI almirante Huidobro: el dia y la hora tenian que fijarseesa noche. PeroHuidobro, jefede la Infantefia de Marina, lle- 96 a su casasin tener dia ni hora en la mano. Y fue esa nochedel sâbado8 cuandoocurri6 un episodioclave, de aquellosque marcanel cursode la historia apaftlr de dos sereshumanos que pactandecir una mentira.2Huidobro decidi6, entonces,un movimiento audazen el tablero. lJn movimiento que desentramparaesta situaciôn de mâximo peligro. Porque cadahora que pasabaponia en mayor riesgoa los complotadores:estaba-n cometiendo un delito que podia costarlesmuchos aflos de cârcel.Pero no se lograba el "vamos" final, cada parte queria estar segurade que las otras estabanya decididas.

L1 lnterferencia Secreta

Huidobro hizo venir desdela capital, con carâcter urgente, al capitân de navio Ariel Gonzâlez, jefe de Inteligencia del Estado Mayor de la Defensa.Ya muy tarde en la noche,urdieron la mentira para la reuni6n dominicai con los almirantes.Sf, les dirian que ambos habfan ido esanoche a una reuni6n en Santiago,en la cual el Ejército y la FuerzaAétea habfan acordado que el golpe serfael martes 11 a las seisde la mafrana.Asf de simple. Como dos niôos que inventan una historia para conseguiralgo de sus padres.Sdlo que en estecaso no habîa puerilidad. Eran dos adultos que mentfan para gatrllat una accidn armadade gravesconsecuenclas. Y lleg6 la reuni6n tras la misa' Los almiranteses- cucharonel informe de Huidobro. Uno de ellospregun- tô a Merino si habîaparticipado de las conversaciones. Merino mir6 a Huidobro y éste,sin siquieraruborizar- se, pidi6 autoùzaciln parahacer ingresar ala salaal ca- pitân de navfo Ariel Gonzâ\e2.Nadie osd dudar de la palabra del jefe de Inteligencia. Vino entoncesla pre- gunta: lquién irîa a Santiagoa ultimar el acuerdopor parte de la Armada?Se le dieron plenospoderes al almi- rante Huidobro. Asi fue como Huidobro y Gonzâlez inicraron su corto viaje a la capttal, un viaje cuyos detalles hablan del nerviosismo de sus protagonistas.Ya tenhn temor de ser detenidos,por lo que planearondecir que iban a una excursidn de pesca.A poco andat,se dieron cuenta de que no llevabandinero niparapagat el peaje,asf como el almirante Huidobro habîa olvidado sus documentos

18 Capitrlo U no; En el conienza.ana nentira

de identificaciln. Y cuandovolvieron a la costa,agrega- ron otro punto al ftem de olvidos:no llevabanni un solo documentoque acreditarasu misidn. Y tuvieron que ir a casadel almirante Merino, de donde salieroncon un mensajemanuscrito. A esamisma hora, en la capitai, en Ia casapresi- dencialde calleTomâs Moro, sepresentaban ios genera- les Augusto Pinochet y Orlando lJrbina. El primero, Comandanteen Jefe del Ejército.El segundo,Inspector Generaldel Ejército. Ya erapasado el mediodia del do- mingo ! de septiembrede 1913. Esperaronunos minu- tos, ya que el Presidente estaba reunido con Luis Corvalân,secretario general del Partido Comunista. El Jefede Estado,luego, los recibida solas.Los datos que le habîaproporcionado el generalPrats, en la vispe- ra, justificaban esta reuni6n de emergencta. Habîa una subievacidnen marcha. Era inminente. Casi una hora después,tras despedira los generales,el Presidenteco- ment6 brevementelo acordadocon su amigo y asesor personal Vfctor Pey, un ingeniero catalânque lleg6 a Chile a bordo del Winnipeg,r.ras Ia guerracivil espafrola. ZQué sucediden esareuni6n? El Presidentepidi6 al Comandanteen Jefe del Ejército un plan de emergen- cia para coordinar la accidn de las tropas con la de los trabajadoresorganizados en los cordonesindustriales. Estabael antecedentedel ""del 29 de junio, esaabortada sublevaci6n del Regimiento Blindado No 2 en connivenciacon el ultraderechistamovimiento Pa- triay Libertad. Esavez,entre Iaacciln del Ejército y el

rg lnterferencia Secreta râpido movimiento de los trabajadoresorg^nrzados, el complot abort6 en pocashoras. El hecho es que el general Pinochet se retird tras darle al presidenteAllende la seguridadde que, aI dia siguiente, darîa las drdenespara que esa coordinaci6n operasede inmediato. Suscolaboradores coinciden en asegurarque el pre- sidente Allende confiaba en el profesionalismode las FuerzasArmadas, en su respetoa la Constituci6n,a lo que se denomin abala "doctrina Schneider" . ÉI repetir- siempre que habia respetadoa las FuerzasAtmadas, que se habfa ceflido estrictamente a los escalafonesal mo- mento de designar altosmandos e incluso,en situaci6n de peligro de la seguridad interior del pafs, los habia puestoen cargosministeriales. Cref a enla colaboraci6n cfvico-militar. Por otra parte, el conflicto polftico con la oposi- ci6n estaba-a su juicio- en la mesade una negociacidn posible.Justamente la semanaanterio r habîatenido una secretareuniôn con el presidentedel Partido Dem6crata Cristiano,senador Patricio Aylwin, en la casadel carde- nal Raril Silva Henrfquez. AIIîhabian pactado un prin- cipio de acuerdo y habîan nombrado a sendos"padri- nos" para dirimir el conflicto. El ex ministro Sergio Molina por el PDC y, Por la Presidencia,dos represen- tantes:el ministro del interior, CarlosBriones, para de- limitar las âreasprivada y estatal de la economia; y el asesorVfctor Pey paraacordar un mejor precio a los pro- ductos de la Compaflfa Manufacturera de Papelesy

20 Capitulo Uno: En e/ conienzo. una uentira

Cartones,la gran empresade Ia que dependfa el papei periddico de la prensa nacionaly que habia pasadoa ser un emblemaen ia luchapolftica de la propiedadprivada aefiîlsla propiedad estatal. Asf, todo indica que -esa tarde del domingo 9- el presidenteAllende tuvo un momento de alivio. Almor- z6 con su querida hermana Laura y luego fue al aero- puerto a buscara su esposay a su hija Isabel que volvian de México. En el trayectode regreso,le pidi6 al edecân aéreo-quien también regresabadel viaje- que lo acom- pafraraen el automdvil presidencial. -Me comentd que la situaci6nera preocupante, pero que ya habîavariasacciones en cursopara descomprimir el panorama. Y me habl6 del martes siguiente, el mar- tes 1 1, como un dfa claveporque harîasu propuestapara convocara un plebiscito. Seveia mâs tranquilo -recordô el comandanteSânchez. Ya en la casade avenida Tomâs Moro, comenz1 a bosquejar el discurso. Sus asesoreshabfan concordado en que la mejor ocasidnse daba el martes 1 1, en Ia ma- frana,durante el discurso que debia pronunci ar en Ia UniversidadTécnica del Estado. Entre el acuerdo con el senadorAylwin, lo conve- nido con el general Pinochet y el poner por escritosu convocatoriaa plebiscito,el Presidentedebi6 sentir ali- vio profundo esatarde dominical de fines de invierno. Pero mientras el presidenteAllende dabapasos cre- yendo que recorria un camino para resolverla crisis, el general Gustavo Leigh us6 el domingo para completar

2I Interferencia Secreta eI puzzledel compiot. El general Dîaz Estradalleg6 aIa casade su Comandanteen Jefe, llevandoun recadodel almirante Carvajal,y lo encontr6 en mangas de camisa dictando el texto de la proclamade la "Junta Militar". La escribîa, adaptando el lenguaje a Ia lerga legal, el auditorJulio Tapia Falk. Leigh teiefonedaCarvalal y de la conversaci6nsali6 su pr6ximo paso:ir de inmediato a hablar con Pinochet. Por su parte, el generalPinochet debi6 tener una tarde dominical cruzadapor la angustiosaincertidum- bre. Todo indica que observdlos preparativospara el cumpleaôosde su pequefrahilaJacqueline con aire au- sente. Acababade llegar al pinâculo de su carrera, ei Presidente de la Repriblica confiaba en él y, por otra parte, tenîaun alto mando en crisis y un grupo de gene- ralesgolpistas que apostabaaI triunfo, ya eî conniven- cia con las otras ramasde las FuerzasArmadas. De repenteson6 el timbre. Eran casilas cinco de la tarde. Y ahî estaba,frente a é1,el comandanteen jefe de la Fuerza Aérea,general Gustavo Leigh, sentado en el saloncito mientras afuerase escuchabael festeio infan- til. Frente a frente, dos hombres en ropas deportivas que -sumados- tenian la mayor parte del poderfo bélico de Chile. Leigh le coment6del discursodel senadorCar- los Altamirano esamafrana, en el Teatro Caupolicân, y de cômo habian llegado hastasu casaalgunos indigna- dos generalesde la Fach.Él lot habiacalmado-asegura- ba- diciendo "ya voy ^ hablar hoy mismo con Pinochet,

22 Ctpitul,t U no; Er e/ cotuienz,,. rtta nettira porque esro no da para mâs''. Asi, le habl6 del golpe como un hecho inevitable,con Lln tono de certezaque s6lo abria dos catninos:o te sumaso te apartas.Tû sa- brâs: pasadomafiana es el dfa clave. -Estaba en una posici6n muy tranquila, me escu- chô ei planteamientoen el sentidode que no le veiamos vuelta al asunto."lQué piensashacer tfr? Porquelo que esnosotros, no damosmâs. Creo que estamosen un punto en que, si no actuamos,ei pafsvaal caos",le dije -recor- dd mâs tarde el generalLeigh. Pinochet,mirando a Leigh fijamente,vacilaba. -1T,i has pensadoen que esto nos puede costar la vida a nosotrosy a muchos mâs?-dijo Pinochet son- deandoa Leigh.l Sf, el Jefe de la Fach lo habfa pensado y lo habfa asumido como costoposible. Son6 nuevamenteel tim- bre. Leigh mird su reloj y supo quiéneseran los visitan- tes.Estaba previsto que él llegarîaprimero y, momentos después,Lo harîan los almirantes Carvajaly Huidobro, secundadospor el capitân de navio Ariel Gonzâlez.Los "enviados" de la Armada. Traian el breve texto manus- crito que sellabaei complot pan eI martes 11, estable- ciendola hora.El almiranteJosé Toribio Merino, jefede la PrimeraZona Naval, lo habia escrito a partir del in- forme dado por Inteligenciade la Armada: el Ejército y IaFuerza Aéreaestaban listos para entrar en accidn con susComandantes en Jefe a la cabeza.f)ecia lo siguiente:

23 Interferencia Secreta

"9 de septiembrede I97 3 Gustavo y Augusto: Bajo mi palabn de honor, el dia H serâel 1i y la hora H 06.00. Si ustedesno pueden cumplir estafase con el total de las fuerzasque mandan en Santiago,ex- plfquenlo al reverso.El almirante Huidobro estâautori- zado para tratar y discutir cualquier tema con ustedes. Les saludacon esperanzay comprensidn, Merino". Ai reversode la hoja, se agregaba:"Gustavo: es la tiltima oportunidad.J.T.". Y mâs abajo:"Augusto: si no pones toda la fuerza de Santiago desde el primer momento, no viviremos para el futuro. Pepe". Y mâs abajo a6.n, para que no hubiera dudas respecto a qué hacer,el almirante JoséToribio Merino escribiô la pala- bra "conforme" y los nombres "Gustavo Leigh" y "A.Pinochet" que esperabanlas firmas para cerrar el cfrculo del pacto golpista. El Comandanteen Jefe de la Fuerza Aércafirm6 de inmediato. Pinochetvaci16. -Si estose filtra, puede sernosde gravesconsecuen- cias-dijo remarcandosus dudas.a El generalLeigh lo empuj6: -iDecidase, mi General, firme! Y Pinochet, finalmente, firmd y estamp6,ademâs, el timbre de la Comandanciaen Jefe. Faltaban sdlo treinta y seis horas parc el golpe de Estado. De ahf en adelante, cada hora fue de mâxima tensi6npara emitir drdenesy precisardetalles, sin aler- tar algobierno.El lunes 10, mientrasel presidenteAllen-

24 Capita/o Uu,': En c/ tqilririlzo. ilna ilt(il1tra de afinaba enLa Moneda el texto del discursopara con- vocara plebiscito,el generalPinochet buscd asegurar el tim6n del golpe. Hizo jurar a los generalesBrady, Benavides,Arellan o y Palacios,y al coronelPolloni, ante la espadade O'Higgins, el "padre de la paui^" cuyo nombre lleva la EscuelaMilitar. Y en su breve areflga, remarc6la posibilidad de morir en el combate.Si morfa o si no llegabaa su puestode mando alahora conveni- da, el generalOscar Bonilla debia hacersecatgo del Ejér- cito. Bonilla estabaentre los conjuradosoriginales, cuya voz cantantellevaba Arellano. Y en esecontexto, la 16- gica indica que el propio generalPinochet debi6 enfren- tar variosfantasmas aparte del de su propia muerte. ZQré hacer si el golpe fallaba? ZQué hacer si el golpe tenia éxito y luego lo sacabana éI del escenario,ya que no pertenecfaal grupo original de conjurados?En tal caso, Iafalla de "diseôo" en el sistemade comunicacionespudo ser provocada, de modo que un puesto de su confianza, el Puesto Tres, ubicado en la EscuelaMilitar, fuera el obligado enlacede todos las demâs"cabezas" del golpe, esemartes 11 de septiembre. El hecho es que el lunes 10 de septiembre fue de afanescastrenses. Pinochet dispuso en la mafrana,tras tomar juramento a los generales,que tropas de Los An- des y San Felipe -al norte de la capital- se movilizaran hacia Santiago al anochecer.Y almorzî con el Coman- dante en Jefe de la Fuerza Aéreaen el quinto piso del Ministerio de Defensa,en el pequeôo comedor anexo a

2t Interferencia Secreta su oficina. Junto a él estabanlos generalesAreliano, Brady y Benavides. Fue entoncescuando el generalLeigh le mostrô la proclama que tenia preparada.Ya la sordapugna por el poder comenzabaa colarseentre ellos,lo que se denota en las comunicacionesradiaies del dfa siguiente. Una larga pugna que term rnafia zanlândoseen favor del mâs fuerte,Pinochet y el Ejército,en julio de 1978. Mientras Pinochet leiael texto de la proclama,Leigh le relatabaque el generalCésar Mendoza -el conspira- dor con mâs rango por parte de Carabineros,tercera an- tigtedad- no habia firmado esamaôana, esperando que el documento tuvi eraIa firma del Comandante en Jefe del Ejército. Faltaban dieciséishoras para dar inicio al golpe de Estadoy ahîestaba sobre la mesael documento que daba origen a la Junta Militar. Firm6 Pinochet y en seguida lo hizo Leigh. Luego qued6 Ia frrma de Carvajal,en re- presentaciôndel almirante Merino. Y finalmente,a las cuatro de la tarde, firm6 el general Mendoza. Cuando el carabinero estamp6 su rfibrica, 2habrâ recordadola comida del sâbado8, en la Escuelade Cara- bineros? 2Habrâescuchado el eco de su propia voz al- zandola copa en honor del presidenteAllende y alaban- do su corajecomo estadistapara conducir a su pueblo por sendasde mayor justicia social?ZQué ideas y senti- mientos se le habrân cr'tzadoal general Mendoza coan- do firm6 el documento?Ya no hay cdmo saberlo.Lo rinico claroes que a lascuatro de la tarde del 10 de septiembre

26 I

I I ) Caphu/o Uno: En e/ cantienzo.ana nuntira I t de I9l3, a pocosmetros al sur del Palaciode La Mone- ' ' da, se complet6 el pacto golPista. ) ) I 1 ) t I : I ] I I I I

NoTas:

r Mris allâ del abitmo,Sergio Arellano I., Edirorial Proyeccitin. 2 El dia en qae ruuridAllende, Ignacio GonzâLezCamus, Editorial Cesoc. 3 El gtntral disidente,Florencia Varas, Editorial Aconcagua. 4 E/ gtrtrol disidente,Florencia Varas, Editorial Aconcagua'

27 Capiruro Dos A ros PUESTosDE MANDo Hacta FINESDEL INVIERNo, la nochees airn ftîa y caetem- prano sobreSantiago. En el aeropuertode Pudahuel,el canciller Clodomiro Almeyda volvfa desdeArgel y el edecân aéreodel Presidente,comandante Roberto Sân- chez,loesperaba enla losacon un recado ft aLa Mone- da de inmediato. El presidenteAllende debi6 haber ido a Argel a la ConferenciaCumbre de PaisesNo Alineados.Era el in- vitado estelarde los Jefesde Estadode cinco continen- tes. Pero la delicadasituaci6n interna lo hizo desistir. Mientras el canciller recorrîa la ciudad desde el poniente haciael centro, todo le parecianormal eseano- checerdel 10 de septiembre.La gente que esperaba microbuses,los trabajadoresque volvian a sus hogares, algunas filas frente a almacenesa los que habia llegado algûn producto escaso,los quioscosdonde los diarios voceabanen sustitulares el conflicto polftico creciente,

11 Interferencia Secreta ya que a esaaltura la prensaestaba claramente dividida entre la opositoray Ia oficialista. En la antesaiadel despachopresiciencial, el Canci- ller saludd al senadorradical Hugo Miranda y al lidet del Mapu Obrero y Campesino,Jaime Gazmuri. Lostres entraron luego a reunirsecon Allende. -Encontré al Presidentetranquilo y distendido, como si se hubiera sacadode encima un enormey pesa- do fardo -asegur6 luego Almeyda.l El inminente anuncio de plebiscito erala razônde eseestado de ânimo: "Nos dijo que el plebiscitoiba a al'iar la tensi6n politica. Y que, en esenuevo escena- rio, con las pasionesmâs temperadas,serfa posible reflexionar con calma y buscar una salida", record6 Almeyda. A esamisma hora,a pocosmetros del palaciopresi- dencial,el periodistaFederico Willoughby ultimaba los preparativos para que la radio Agricalttrra entrara en ac- ci6n, como cabecerade la cadena radial de las Fuerzas Armadas. El "coraz6n"de la radioemisoraya estabablin- dado con las planchasde fierro aportadaspor Asintel,la entidad que agrupa a los industriales metalrirgicos. Y mientrasel Presidenteabordaba el autom6vil para ir haciasu casa,a pocosmetros al sur de La Moneda -en el quinto piso del Ministerio de Defensa- el general Nicanor Dîaz Estradaentraba en acci6n.Ordend que la guardia del Ministerio estuvieraacuartelada en primer grado a parrft de las seisde la mafrana.Era el Subjefe del Estado Mayor de la Defensay nadie cuestiondsu orden. Capittt/o Dot; A /o: pttettot de nnndo

Al oriente de la capital, en el comedorde la resi- denciapresidencial, Hortensia Bussiy su hija Isabelre- lataban anécdotasde su viaje a México. El Presidente escuchabaatentamente a su mujer y a su hija, mientras atendiaa los tres invitados,el ministro del Interior,Car- los Briones, y sus asesoresAugusto Olivares y Joan Garcés.Casi al final de la comidallegd , ministro de Defensa.Una vez solos,los hombresse con- centraron en la reuni6n para analizareI cuadro polftico y dar el filtimo repasoal discurso que proponia la con- vocatoriaal plebiscito. El Presidenteseguia de buen ânimo. El cansancio senotaba s6lo en el gestode sacarselos anteojosde grueso marco, cerrar los ojos y frotar levemente los lacrimales con ei fndice y el pulgar de su mano derechaabierta. Cercade la medianochellegd el primer llamadode aier- ta. Aifredo Joignant, director de Investigaciones-poli- cfa civil-, informd al Ministro del Interior que la guar- nicidn de Santiagoestaba acuartelada. "Y no logramos saberla raz6n", agregô.La preguntapas6 al Ministro de Defensa.No, Letelier no estabainformado. -Llame y averigte -pidi6 el Presidentea Letelier, quien selevant6 para telefonearal generalHerman Brady, jefede la Guarnici6n de Santiago. -No, el general Brady no tiene idea.Ya a averiguar y quedéen llamarlo en quince minutos -inform6 luego el Ministro de Defensa. Brady debi6 ensayarvarias veces lo que lba a decir. Una palabrade mâs y podfa activar una alarmaque echa-

3) Inter[erencia Secreta rîa por tierra el complot. Tenia que mostrar un tono re- laiado, confiable. Lo hizo bien: informd que se habia ordenado un acuartelamiento de riltima hora y ia pro- teccidn militar a las gasolineras,en previsidnde desdr- denesal dîa siguiente. Ei segundollamado del Jefede la PolicfaCivil lle- gd pocosminutos después.El Intendentede Los Andes -di jo- necesitabahablar urgente con el Ministro del In- terior. iCuâI era esa urgencia? Briones lo averigud de inmediato: camionescon tropas,varios camiones, esta- ban saliendode los regimientos. -Tiene carade golpe -recuerda haberdicho Briones al terminar de informar al Presidentey los otros. A esaaltura, ya efi la madrugada del 11 de sep- tiembre, la reuni6n cambid de giro en la casapresiden- cial. Los llamados se sucediaî !, entre uno y otro, se hacian listas verbalesde los generalesy almirantes que pudieran estarimplicados en una sublevaciôn. Todo indica que no mencionaronentre los posibles complotadoresal almrranteJosé Toribio Merino, jefe de la primeraZona Naval, quien a esamisma hora estaba ya emitiendo el mensajecifrado desdesu oficina porte- fra en la Academia de Guerra. IJn mensaiede tres pala- bras, utilizando el nombre de la mâs popular de las al- gas chilenas:"Ejecucidn Plan Cochayuyo110600". El presidente Allende decidid archivar ios rumo- res. No mâs. "Hace mesesque no dormirfa si tuviera que atender cada rumor", recuerda haberle escuchado a4 Capitalo Dos: A /ospuestos de nnndo comentarsu asesorJoan Garcés. Y decidiô irsea dormir porque -agre96- "mafraflanos espefa un dîa duro".2 A las cuatro de la mafr.ana,por las vaciascalles de Santiago,el coronelJulio Polloni sedeslizaba en un ve- hfculo, recolectandoa los miembros de su equipo. Inge- nieros y radioperadoreselegidos para eiecutarel "Plan Silencio": desconectarIa comunicacidn telefdnica en puntos clavesy silenciarlas radioemisoras izquierdistas. A las cinco de la mafrana,llegd ala casapresiden- cial el llamado del generalJorge lJrrutia, subdirectorde Carabineros.Inform6 al Presidenteque tropas de la Ar- mada estaban movilizândosepor las callesde Valparafso. No habia raz6naparente que lo justificara. "Ya,ya... voy a tomar medidas,General, sfgame informando", contes- t6 el Presidente. Momentos mâs tarde, otro llamado del general Urrutia le inform6 que tropas del regimiento Maipo -en Valparaîso- estabansaliendo del cuartel. -iHaga cerrar Ia carretera Valparafso-Santiago! -fue la escuetaorden de Allende. El Presidente volvid a llamar aI general Brady y escuchdsu explicaci6n olfateandola mentira. A esamisma hora,en alta mat,Ia dianasonô en los altoparlantes de las navesde la Escuadra.Habîan zarpa- do hacia el norte la v(spera,para participar en la Opera- ci6n Unitas con las navesestadounidenses. Los marinos despertaron cuando ya venîan de regreso hacia el puer- to. En los crucerosPrat y 0'Higgins; en los destructores Cochrane,Blanco Encalada y Orella; y en el submarino

35 Interferencia Secreta

Sintpson,losoficiales comenzaron a dar vocesde mando. }Jab'z que alistar a Ia marineila para el golpe. En Santiago,Ia casapresidencial mantenia las luces encendidas.Los teléfonosseguian sonando. El Presiden- te pidi6 una comunicaci6ninmediata con el director de Carabineros,general José Maria Seprilveda, y le ordend re{orzarla guardia de La Moneda.Al ministro del Inte- rior le pidi6 trasladarsede inmediato al palacio.Con el generalAugusto Pinochet no pudo hablar."Mi General estâen la ducha",explic6 un ordena'nza.Lo mismo di je- ron en ia casadel almirante CarvalaL En la casadel generalOriando Urbina, nadie contestdel llamado. El Presidenteno estabaenterado de que Pinochetlo habfa enviado de emergenciaa Temuco, con la excusade in- vestigar un foco guerrillero en Neltume. Asf alej6 de SantiagoaI generallJrbina. Momentos antes de las seis de la mafrana,el viceaimirante Patricio Carvaialllegabaa su despachoen el Ministerio de Defensa.Ese dfa su oficina se transfor- mabaen su "puestode combate".Tras él lleg6 el generai I)îaz Estrada, de la Fuerza Aérea, y el general Sergio Nufro, del Ejército.Como en reguerode pdlvoraencen- dida, fueron llegando los oficiales y los civiles que ese dia debian actuar desdeese "puesto", situado a tan po- cos metros del Palaciode La Moneda. Civiles como el periodistaWilloughby, el abogadoSergio Arellano (hi jo del general),el comentaristapolftico Alvaro Puga... A las seisy media, eI capitânJoséMufroz -de Can- bineros- recibi6 la orden de presentarseen la casapresi-

16 Cajtita/,t Do.;; A /os puuto.ç de ntattda dencial.Vivia a pocosmetros, en la misma avenidaTo- mâs Moro, y estabaa cargode la guardia del Presidente. Cuandoingresd a lascasetas de vigilancia,los miembros del GAP ya comentabande ia sublevacidnde la Arma- da. GAP se denom inaba a la guardia personal del Pri- mer Mandatario,un coniunto de hombresleales a toda prueba que se form6 en la emergenciadel asesinatodel comandanteen jefedel Ejército,general René Schneider. Allende eraya,en octubrede 1970, el Presidenteelecto cuandola ultraderecharecurriô a esecrimen pararmpe- dir que asumierael Poder Ejecutivo. En esascircuns- tanciassurgi6 esteequipo "ideol6gico" de guardaespal- das,ya que todosmilitaban en partidos de izquierda.El "grupo de amigospersonales", como lo describidel pro- pio Allende priblicamente.Y de las letras inicialesde esadescripci6n naci6la sigla GAP. Una sigla que esedfa marcarîacon la muerte a Ia mayofia de sus miembros' Los teléfonosseguian al rojo en Tomâs Moro. Los asesoresGarcés y Olivares-que habian alojadoen la casa presidencial- marcaban nûmeros una y otfa vez. Otros aparatoshacîan repicar sus campanillas. El ministro de Defensa llama e informa que logrd encontrar al almi- rante Carvajalen el Ministerio de Defensa.Las cejas se levantaron en signo de intetrogaciln' eQué hacîa Car- vajal tan temprano en su oficina? A esa altuta, toda ex- plicacidn sobremovimiento de tropas oliaa mentira. El Presidentese cambi6 de ropa en pocosminutos. Pantaldn gris, chaquetade tweed,chaleco de cachemira gris de cuello alto. Una tenida informal que debi6 pa-

1l Inrerferencia Secreta recerleapn paru un dfa de emergencia.Un dia de traba- jo intenso,puertas adentro, hasta sofocar la rebeli6n. iLa sublevaciôn de quiénes, de cuântos, focalizadaen qué unidades? Todos se prepara'ronpara partir. -Nos vamosa La Moneda.Escoja el mejor camino, capitânMufloz -ordend al joven oficial con el que habfa entablado una relacidnde simpatia luego de tres afrosde "tfabajo" en comfin. Los automôvilesFiat 121 de color azul oscurosa- lieron efi caravana,mâs râpido que de costumbre, por avenidaTomâs Moro haciael norte. Nunca supieronque, desde unos cuantos metros hacia el sur, un oficial de Inteligencia observl Ia maniobra, activô su aparato de radio e informd al Ministerio de Defensade la salidadel Presidente.AIIâ, en el centrode Santiago,una vez ente- rado, el generalDîaz Estrada inspir6 hondo y exhald ai tiempo que decfa: "lAhora empiezaIaacci6nt" En La Moneda, la joven periodistaVer6nica Ahu- mada tecleabas6lo letras mayfisculasen la mâquina de su oficina del segundopiso. Preparabael informe de la prensadel dfa parael Presidente.Letras grandes y doble espaciopara que él pudiera leer con facilidad. Entre los diarios opositoresy oficialistasdestacaba el gran titular del comunista El Siglo.Utilizando un lenguaje bélico que no se compadecî.acon el contenido -alettar a los trabajadores sobre la posible sublevaciôn en marcha- titulaba "Todosa suspuestos de combate".

l8 Capita/o Dot: A /ot Puestasde nando

Sobreel escritoriode Ver6nicaAhumada,Ia pauta de las actividadespresidenciales del dfa. Once horas, IJniversidadTécnica del Estado:"Yo sabfaque esaerala actividad mâs importante del dia, que mi tareaprinci- paI eraconcentrar Ia atenci6n periodfstica en las pala- bras del Presidente, yà que convocatiaa un plebiscito. Pero muy tempfano, esa mafrana,un colega de Prensa Larina me avis6 que algo raro estabaocurriendo con la Marina en Valparafso.Asi que inicié el dîa sabiendoque rcnî,apor delante una jornada especial". Entre los amortiguados ruidos del personalde ser- vicio, que terminaba de asearoficinas y pasillos' escu- ch6 que alguien corriahacia su oficina. -Seôorita Verônica,iestân llegando unos tanques! -la alertl el mozo que cada mafranale servfa el primer café. Ella fue hasta los ventanalesdel frente norte y ob- serv6las tanquetas de Carabinerosque se apostabanal- rededorde La Moneda. "Igual que el 29 de junio", peo- s6.Tomô el citdfono y secomunicd con la casapresiden- cial. No, el Presidente acababade partir. Sf, claro, sabe- mos lo que estâpasando, le contestôun guardia del GAP' Ella imagind que tendrfan por delanteotro intento de sublevaci6ncomo el del 29 de junio. Se prepad anî- micamenrc para apoya;ral Presidente en un dfa âIgido' A esamisma hora, el Comandanteen Jefe del Ejér- cito ordenaba a su chofer que lo llevara al recinto mili- tar de Pefralolén.No tuvo de quien despedirseel gene- ral Pinochet, ya que en la vispera habîamovilizado a su

J9 Interfèrencia Secreta mujer y a sushijos menoresa la Escuelade Alta Monta- fra en Los Andes. Nunca se sabrâqué excusadio al co- mandante de dicho regimiento, coronel Renato Cantuarias,para que recibteraa su familia. Un manto de secretose tendi6, pocosdfas después del golpe mili- tar, sobreel acribillado cuerpo del coronelCantuarias, calificadocomo proclive al gobierno izquierdista."Lo trajeron presoal dia siguiente a la EscuelaMilitar y Ie dejaronun rev6lversobre la mesapara que sesuicidara", asegurdaôos despuésel general Nicanor Dîaz Estrada. Del "suicidio" todos dudan y nunca se supo qr-répasd realmentecon el coronelCantuarias. Quizâs porque ese dia se jugaba el todo o nada, qtizâs porque le rondabala muerte, necesit6de una des- pedida el generalPinochet. No busc6a su madre, dofra Avelina, mftico personajede quien rcnia la mzisfuerte dependenciaafectiva. Quizâs por no tenerlacon el alma pendientede un hilo todo el dia. Asi que orden6al cho- fer que se desviarapa'rapasar por ia casade su hijo ma- yor. Pocodespués, sigui6 al Comandode Pefralolén,don- de lleg6 con unos minutos de retraso.Al verlo llegar,el general Bonilla recuperd el aliento. Habia estado con- tando los segundos,a punto de tomar el mando, segrin las instruccionesacordadas. En el faldeoprecordillerano, a unos mil metros de altura, i.habrâvolteadoIa cabezael generalPinochet pafa mrtar hacia el centro de Santiago?2Se preguntd en qué exafia el Presidenteen esosmomentos?

40 Ctpita/r' Do.r; A l,t.çpaestr't de naudo

Los câlculosindican que Allende lleg6 al Palacio de La Monedaalrededor de las 7 .30 horas.Su "puestode mando" -en esa mafrana aciaga- ya estaba custodiado por tanquetasde Carabinerosy los transefintesobserva- ban con curiosidadel inusitadodespliegue policiai. De- cidi6 no entrar por la puerta lateralde Morandé 80, como erasu costumbre.Optô por la gnn puertaprincipal que da a calleMoneda y la guardia de Carabinerosse cuadr6 en saludomatinal. Quizâslo hizo para notificar,a quie- nes estuvieranobservando, que el Presidentede Chile habîallegado al PalacioGubernamental. O quizâsintuy6 que seriala riitima vez... -Lo vi cuandocomenz6 a subir por la escaleraprin- cipal, la de mârmol. Nos saludamosy me dijo: "ZQué haceaquf? Hoy no va a ser como el 29 de junio, estees un dia muy especial".Yo le argumenté que habia llega- do muy temprano y que mi deber era estarahf -recuer- da Verdnica Ahumada. Casi al mismo tiempo, por la puerta de Morandé 80, entr6 su secretario,Osvaldo Puccio, acompafrado de su hijo del mismo nombre,un estudiantede Derechode s6lo 20 afros.Al despachopresidencial lleg6 el llamado del jefedel Partido Socialista,senador . Ya estabareunido con la comisi6npolitica del partido, a pocascuadras del Palacio. Allende le inform6 que -se- grin los primeros datos- se trataba de una sublevaci6n de la Armada, que estabaaIa esperade un informe del ministro de Defensa.Altamirano le propuso dirigir las accionesdesde un lugar mâs seguro:"Le dije que el Pa-

4I Interferencia Secreta lacio de Gobierno me parecîade alto riesgo.Argumenté para tratar de convencerlo,pero Allende se negd rotun- damente". -iNo, no! El lugar del Presidentees el Palaciode -dijo La Moneda, lningrin otro! en un tono que no daba pie a discutir su palabra. Pocosmetros al sur, entre tanto, en el Ministerio de Defensa,se estabacumpliendo la orden dada por el generalDîaz Estrada:apresar al Ministro de Defensaape- nas cruzan la puerta de guardia. Orlando Letelier no sospech6del peligro al entrar y fue sorprendidopor el metâlico contactodel arma que le apunt6 en la espalda. De la detenci6n de Letelier no se enter6 el presi- denteAllende. Debi6 inferir que algo muy graveIe in-r- pedfa llegar a La Moneda o comunicarsecon é1.A su lado, en cambio, estabael director de Carabineros,ge- neral José Maria Sepfrlveda,y por lo tanto cteîa contar con la policia uniformadaparaenfrentar lo que viniera. Y los otros comandantesen jefe, 2dôndeestabani No se lograba ubicar a los generalesPinochet y Leigh. lEsta- ban detenidospor los sublevadoso estabaninvolucrados? 2Y el almirante Montero, d6nde estabael Comandante en Jefe de la Armada? Las preguntas se ctuzabanen el despachopresidencial y no habîa respuestas. De lo que habfa sucedidocon el almirante Montero tampocose enter6 nunca el Presidente.En su casasitua- da al orientede la capital,en calleSânchez Fontecilla, el Jefe de la Armada estabasitiado. Teléfonosdesconecta- dos, el motor de su auto no arnncaba, nuevoscandados

7) I I , Capital't Dot: A /r,.çptte:trr de nando I ) ) en su reia exterior y soldadosvigilando en la vereda' l ) Derrotadopof el estupor,Montero serindid ante la rea- I , lidad. I En el despachopresidencial, tres teléfonosestân ) ) directamenre comunicados con las radios hlagallanes, r Corporaci|ny Portales.Alas7.11 horasqued6 registrada la primera comunicaci6ndel Presidenrea la ciudadanfa a través de radio Corporacifn,Anunciô aI pafs que, segrin I los primeros informes, una sublevaci6nde la Armada )t rcîîa aislado el puerto de valparaiso. Pidi6 a los traba- jadoresque concurrierana suspuestos de trabajoy man- tuvieran la calma: "En todo caso, yo estoy aqui, en el palacio de Gobiefno, y me quedaré aquî defendiendoal gobierno que representopor la voluntad del pueblo"' Y dio instrucciones:"Lo que deseo,esencialmente, esque los trabajadoresesrén arentos, vigilantes, que evi- ten provocaciones.Como primera etapa, tenemos que ver la respuesta,que esperosea positiva, de los soldados de la patria, que han jurado defender el régimen esta- blecido". Minutos mâs tarde, un avi6n de la Fach sobrevol6 el sectorde colina y lanzô cohetespara destruir la ante- na transmisora de radio Corporaciîn.De paso, dafr6 Ia anrenade la derechistaradio Agricrtltura,lo que oblig6 a rfaspasarla cabecera raàia| golpista a Ia radio Mineria, En una segundaintervenci6n radial, el Presidente confirm6 la sublevaci6n de la Armada, asegurdque Ia capital estababajo control y reiter6 la instrucci6n de

43 Inrerferencia Secreta que los trabajadoresdebfan permaneceren sus puestos de trabajo. La capital, i.baiocontrol? La carenciade datos fide- dignos y la presenciadel iefe mâximo de Carabinerosen La Moneda provocaron la confusidn. Porque el general Sepûlveday su segundo,el generalUrrutia, tardaronun tiempo en comprobarque ya no tenian mando real so- bre la policia uniformada.Que hastalas tanquetasque rodeabanel palacio tenian instruccionesde "permane- cer pasivas".Que no estabanahî para defenderLa Mo- neda,mâs bien la tenfan sitiada.

lxioTas:

I Rttncurnlr0ctu rui uida, Clodomiro Almeyda, Las Edicronesdel Ornitorrinco. 2 Allende y la experienciachilena, Joan E. Garcés,Ediciones Bat.

44 r- L,,qpfrurorRES Ttplrpo DE LEALTADY DE TRAICION Er rtet'tposE ToRNA espeso cuando la muerte gira en las aspasde los helicôpterosmilitares. 2Qué fue primero? 1Qué fue después?No hubo câmarasque registrannla accidndel Presidenteen el riltimo dia de su mandato y en las riltimas horasde su vida. Los recuerdosde los tes- tigos sehilvanan con dificultad, bosquejandoun cuadro en que cadapincelada se torna mâs violenta al pasode los minutos. Allf estâ el Palaciode Gobierno, con las banderas flameandopor la brisa de septiembre.Sdlido en su gris masaencementada que ocupauna cuadracompleta. Sfm- bolo democrâtico que esedia entorn6 sus puertas -im- pidiendo el libre pasode los ciudadanospor suspatios- como anticipo de las libertades y derechosque serfan cercenadospor los bandosmilitares. Temprano llegô al Palacioel inspectorJuan Seoane Miranda, jefe de la seccidnPresidencia de la Repriblica

l1 a/ Interferetrcia Secreta de la Policfade Investigaciones,ia policfa civil chilena. En pocosminutos reunid a diecisietede sussubalternos -s6lo faltaron cuatro- y se reportd telefdnicamentecon su director,Alfredo Joignant, solicitandoinstrucciones. -lJsted sequeda ahf con el Presidentey lo defiende -fue la instrucci6nprecisa que le imparti6 Joignant' No, no imagin6 Seoaneentonces que la "defensa" pudiera ser tal. Nunca habia planeadodefender La Mo- nedade un ataquearmado. Ni siquieralo hizo después del abortado"tanq .etazo"del29 de junio de eseafro. Su gente contabacon las armas cortasy largasdispuestas por el servicio.Nada mâs. "Usted se queda ahf con el Presidentey 1odefien- de". La orden del director encaj6a la perfeccidnen el côdigo ético del policfa: " No lo dudé ni por un segun- do. Ahf estabael gobierno legaimenteconstituido que habiamos jurado defender. Lo mismo habiamos hecho casitres meses antes, para el tanquetazodel 29 de junio. Y esedia nos felicitaron", recorddSeoane después.l Comunicd la orden a sushombres, observ6 sus ros- tros parapesquisar temores y dudas.Ya los datosindica- ban que no serfaun nuevo "tanquetazo",que se trataba de una accrônarmada de mayor envergadura,quizâs era el golpe militar del que se comentabacomo inminente en todos los corrillos desdehacîa semanas. Quizâs. Pero Seoaney sus hombres no estabanahî para discutir- Eran detectives y su orden era defender al Presidentede la Repûblica y hacercumplir la iey.

48 Capitalo Tret; Tierulto de lea/tad 1' de traicidn

Casia la misma hora en que el edecânmilitar -te- niente coronel SergioBadiola- lleg6 al Palacio,el ede- cânaéreo se debatia en un silenciosoy desesperado"lqué hago, qué hago?" El comandanteRoberto Sânchezno Iograbareponerse de la gélida sorpresaque le habîadado el coronelEduardo Fornet en el Ministerio de Defensa. Lo habîa citado por teléfono, de urgencia, esamisma mafranay, sin mediar preâmbulos,le habîa comunicado que el golpe estabaen marchay su orden del dfa: "Tie- nes que ofrecerleal Presidenteun avi6n para d6nde él quiera irse, con su familia. En Cerrillos, hay un DC-6 esperando.Y tfr tienesque acompafrarlo.Decide tri cdmo selo dices.Si quieres,hazlo por teléfono",dijo el secre- tario del Comandante en Jefe de la Fuerza Aérca. El comandanteSânchez dice que respondi6con un "prefierodecirselo de frente". Qr. sali6,con el corazîn retumbândolefuerte en el pecho,y subi6 hastala ofici- na del generalGabriel van Schowen.Necesitaba confir- mar Ia orden, necesitabade una voz amiga que le di jera si era verdad o no lo que habfa escuchado.Si, no habfa error. "Cumpla la orden, comandante",le dijo el gene- nl. "A su orden", se cuadrd Sânchez.Dice que baj6 en buscade su viejo Chevrolet.Mird Ia hora,calcul6 que el Presidente estarîaarin en su casay decidid rr allâ.2Ad6n- de querrfairse? 1A BuenosAires, Lima o mâslejos? Dice que cruzd la ciudad de poniente a oriente, con las ideas entrecruzadasy la mano derechaque se turnaba entre la palancade cambios y la perilla de la radio para sintoni- zar noticias.Decidi6 pasarprimero por su casa.Sali6 de

49 Interferencia Secreta ahf con un malet(n conteniendo un poco de ropa de re- cambio. A pocas cuadrasde Tomâs Moro, supo por la radio que el Presidenteya estabaenLa Moneda.Mantu- vo el rumbo. Al llegar,pidi6 hablar con Hortensia Bussi, la PrimeraDama. Asegura el comandanteSânchez que el diâlogo fue breve. El mensajede Ia FuerzaAétea era escueto:"Decidf decirselo,sefrora Tencha, para que us- ted esté preparada", recuerda haber agregado.Ella Ie pidi6 que fuera a La Moneda de inmediato: "Digaselo usted mismo a Salvador". En la residenciade TomâsMoro, en cambio, nadie recuerdahaber visto al comandanteSânchez. Ni la Pri- mera Dama ni el asesorVictor Pey.Quien recuerdaha- ber atendido su llamado telef6nico a La Moneda es el asesor Joan Garcés, un llamado perentorio pata hablat s6lo con el Presidenre.2Y Allende le respondi6asi: -Sf...escucho...ldfgale al generalVan Schowenque el Presidentede Chile no arrancaen avi6n!...Y que él sepacomportarse como un soldado, que yo sabrécum- plir como Presidentede la Repriblica!...lEntendi6 bien?...Y usted,2qué hace ahi?... ha ido a informarse... bien, véngasede inmediato a La Moneda. 56lo un llamado desdeel extranjeropudo ctuzar las invisibles barrerasque rodeabanel despachopresiden- cial esa mafrana.Desde Buenos Aires, Ia voz de Ram6n Huidobro -embajador en Argentina- delatabasu inquie- tud ante las noticias que ya comenzabana difundir las agencias.Inquirid por los periodistasasesores del Presi- dente, Augusto Olivares o CarlosJorquera.

5n C"tpitilla Tru: Tiunpo de lealtad 1 de traici,in

-No, embajador,no estânpor acâ-le contestaron. Y de repenteel propio Presidentese puso al teléfo- no: -Se ha sublevadoIa Marina, Ram6n, y unos cuan- tos generalestraidores. Pero yo voy a pelear hasta la muerte. Déle un besoa Panchit^ v a usted. mi abrazo como siempre. Cuando el Presidentecort6 la comunicacrln, mird a su ministro de Educacidn-Edgardo Enrfquez- y le comentô: "Si yo tengo cinco amigos de verdad,éste es uno de ellos". El primer bando militar debi6 emitirse por la ca- dena radial derechistaa las 8.30 horas. El ajuste para cambiar la radioemisora que debfa encabezarla red golpista retras6esa emisi6n en doce minutos. Y fue la voz del tenientecoronel Roberto Guillard la que emergi6 desdeel quinto piso del Ministerio de Defensa. -Teniendo presente la gravisimacrisis socialy mo- ral por la que atraviesael pais -comenzd diciendo la voz de timbre grave que qued6 grabadade por vida en la memoria de millones de chilenos. Y sigui6 enumerando razoneshasta llegar al meo- llo: "El sefrorPresidente de la Rep(rblicadebe proceder a la inme diata entrega de su aito cargo a las Fuerzas Ar- madasy Carabinerosde Chile". En el Palaciode La Moneda,Iavoz del comandante Guillard parecîaun eco fantasmal que reconî.aoficinas y patios. Exigîa la renuncia del presidenteAllende. Or- denabala inmediata suspensi6nde toda actividad infor-

i1 Interferencia Secreta mativa por parte de radios,canales de televisi6ny pren- sa izquierdista. Si no acataban-se agregabaen abierta amenaza-"recibirân castigo aéreoy terrestre". Exhorta- ba a la poblacidn a quedarseencerrada en suscasas " a fin de evitar vfctimas inocentes". Y, finalmente, las firmas de los jefesdel complot: generalAugusto Pinochet,al- mirante JoséToribio Merino, generalGustavo Leigh y generalCésar Mendoza. E jército, Armada,Fuetza Aérea y Carabineros.Dos Comandantesen Jefeen ejercicio,el del Ejército y el de la FuerzaAétea. Dos que searrogaban en esemomento las jefaturas,en la Armada y Carabine- ros,descabezando a sus propios superiores' En La Moneda,un silenciode algunossegundos si- gui6 al primer bandomilitar. Un silencioque presagia- balatragedia. Un silencio que apretd las gargantasy los pufros. Y se retomd Ia acciln sabiendoque la democra- cray la vida misma estabanen juego. El Presidentepidi6 el teléfonoque lo conectabaa la radio. Por las ondas de radio Magallanesse difundi6 su refcefmensaje al pafs,en abiertodesafio a los golpistas. Y serefiriô directamentea la peticidn de renuncia:"No lo haré.Notifico ante el pafsla actitud increfblede sol- dados que faltan a su palabn y a su compromiso. Hago presentemi decisi6nirrevocable de seguir defendiendo a Chile en su prestigio,en su tradicidn, en su forma iu- rfdica, en su Constituci6n". El general Seprilveda,director general de Canbi- neros,pâlido al extremo, decidi6 moversepara intentar salvar su mando. Llam6, desde La Moneda, al general i2 Capitalo Tres:Tunpo Je lealtad I rlelaiciin

{Jrrutia -su. segundoen lalînea de mando- y le ordend presenrarsede inmediato. A los pocos minutos, tenia enfrentea Urrutia, acompafradode los generalesSalinas y Alvarez. -General, estamospuro tonteando-le dijo Urrutia al generalSepfilveda con gesto derrotado. Y para darle Ia raz6n, a esa misma hora el cetco policial de La Moneda comenz6a dar sefralesde su ubi- caciônen el conflicto. No, no estabaahî pataproteger al gobierno. Mâs bien estabapara asegurar el secuestrodel Presidentey sus colaboradoresdentro del Palacio.Se bloquearon todos ios accesosy hasta Beatriz Allende, la hiia del Presidente,debi6 botar una barrerapolicial, atre- metiendo con su automdvil, parupoder reunirse con su padre. 2Quién podfa entrar y quién podia salir del Pala- cio? La confusi6n llev6 a provocar escenasmuy violen- tas. Como cuando llegaron hasta el cerco policial dos vehfculosprovenientes de la casapresidencial. En el pe- quefio Renault blanco venîaMiria Contreras,IaPayita, y su hijo Enrique Ropert. En la camioneta,diez hom- bres del GAP encabezadospor su jefe, Domingo Blanco ("Bfuno"). Enterada de la emergencia, Ia Payita habia corrido para estar junto al Presidentey apoyarlo en su accionar. No s6lo era su secretariaprivada. Habî'a entre ellos un fuerte vfnculo emocional que se habia entretejido du- rante mâs de cinco aflos.Una relacidn que se habia se- llado en 19J0, cuandoella debi6 velar junto a su cama

t) Interferencia Secreta por casitres semanas. Porque siendo ya candidatopresl- dencial, Allende tuvo un preinfarto. De habersesabido la noticia, le habria costadola candidatura.56lo dos médicos,Gonzalo Seprilveday Oscar Soto, participaron de los cuidadosdel lider socialista.Comparti6 el secreto el senadorsocialista Carlos Altamirano. Asi, presintiendo la tragedia esa mafranade sep- tiembre, Ia Payita corrid desdesu casaen El Cafr.averal hasta la residencia presidencial de Tomâs Moro. Supo que el Presidente habîapartido a La Moneda y se qued6 en la guardia, sin entrat ala casa. 1Qué hacer?Finalmente decidi6 movrlizar a los diez hombres del GAP hacrael Palacio.Todo le indicaba que se debfa reforzar la guardia armada en torno al Presi- dente. Jamâsimagind que su decisi6n los conducirîa a la muerte. Por calle Moneda, los dos vehiculos se acer- caron a Morandé, donde fueron interceptados por los carabineros.Al ver que los miembros del GAP eranobli- gados abajar y comenzabanalevantar las manos,en se- fral de estardetenidos, la Payitacrey6que s6lo se trata- ba de una confusi6n. -Baja, hi jo, baja y diles que son del GAP -orden6 al joven Enrique Ropert. Enrique corri6, dejando abierta la puerta del Renault, y no alcanz6a balbuceardos palabrascuando recibid la orden de alzarlas manos también. ZQué estabapasando? La Payita baj6 del vehfculo y, entre gritos y tirones, tfat6 de retenera su hijo. No le fue posible. Los once j6venesentraron, manosen alto, al

>4 Capita/o Tres: Tiettpo de lea/tad 1 de traici|n edificio de la Intenden cia, al mismo tiempo que el in- -desde " tendenteJulio Stuardo el balc6n- gritaba: lSuel- ten a la guardia del Presidente!".No, el Intendenteya no tenfa mando sobrelos carabineros.Por algrin rato' en un toque surrealista en medio de la tragedia, Stuardo vociferaria ôrdenesdesde el balc6n. Ôrdenes que nadie acataba,desde un balc6n que era anticipo de su celdade prisioneropolftico. La Payrta forceied hasta liberarse y corriî por Morandé hasta el garcie presidencial.Se comunic6 con el Presidente. -Calma, mantén la calma, Paya. Sube y desde aquî arreglamosel asunto -la tranquiliz6 Allende. EIla cruz6 la calle y entrô al Palacio por la puerta de Morandé 80. En pocossegundos, el Presidentetenfa delante al generalSep(rlveda y le pidi6 que actuasepara conseguir la liberaci6n de Enrique Ropert y los diez hombres del GAP. No fue una orden. Ni el Presidente ni el general Seprilvedasabian qué poder real podrfa te- ner, a esaaltura, el tftulo oficial de General Director de Carabineros. LaPayitaintuyô que cadasegundo era clave.Lavida de su hijo de 20 afrosestaba en riesgo.Y Ia vida de otros drez jôvenesa los que aprcciaba. Ella los habfa traido hastaLa Moneda, ella debfa rescatarlos.Bajd las escale- ras corriendo y, a la pasada,forz6 al edecân naval pata acompaflarla a la Intendencia. No, el capitân de fragan Grez se negd a rcalizar cualquier gestiôn ante Carabine- ros y se volvi6 hacia el interior del Palacio.Ella, deses-

55 Interferencia Secreta

perada,retrocedi6 para buscar otro apoyo. El general Urrutia -segundo en el mando de Carabineros-accedid a realizarla gesti6n. Exigid ir solo. Y volvid derrotado pbcosminutos después:"Lo siento,pero ya no obedecen a mi general Seprilveda.56lo reciben drdenesdel gene- ral Mendoza". Nunca el general Mendoza aclar1qué 6rdenesim- pani6 en este caso. Y asi fue cdmo el joven Enrique Ropert y drezmiembros del GAP pasarona integrar las n6minasde los detenidosque desaparecieron. El presidenteAllende asisti6impotente a la angus- tia de su querida Paya. La calm6 como pudo y iuego ambos se sumergieron en las urgenciasque demandaba cadaminuto en el PalacioPresidencial, donde lealtades y traicionesse conjugaban como verbos de vida y de muerte. Ahi estaba,en el despacho,el ex ministro Anfbal Palma,un jovenradical al que todosllamaban "EI Pibe". Sorteandobarreras, en su pequefro Fiat 600, habfa lo- grado entrar al Palacio. -Presidente, lo escuchéen la radio diciendo que cada trabajador debe estar en su puesto de trabajo. Y como yo estoy cesante,le vine a pedir un puesto de tra- bajo aquf, al lado suyo... -Anfbal, yo sabiaque usted lba a estar-dijo el Pre- sidente al tiempo que Io abrazaba. Ahf estabael ministro de Educaci6n,don Edgardo Enriquez, quien le cuenta que mâs de trescientasfun-

)o Capiralo Tru: Tienpo de lealtad 1 de traiciin cionariasllegaron hasta sus puestosde trabaio, a pocos metros del Palacio,y se niegana retirarsea suscasas: -Dicen que quieren quedarsepara demostrarlesu lealtad, Presidente-termina aclarandocon voz solemne el respetableeducador. IJnos segundosde silenciomarcan la emocidnque el Presidentedebe contener. -Yaya con ellas,don Edgardo, y digalesa esascom- pafrerasque se tetiren, que les agradezcomttcho su ges- to, pero no deben exponerse... AI cruzar La Moneda, p^ra volver a su Ministerio, ubicado a poco mâs de una cuadradel palacio,Enrfquez encontr6al periodistaAugusto Olivaressemiarrodillado, tratando de armar una metralleta en el piso. La escena hablaba por si sola, mientras la amenazaya surcabael nublado cielo de la capital chilena,con su zumbido de turbinas y hélices. Don Edgardo se detuvo junto a Olivares por un momento, observandosu afân. "lHombre! ... estamos mal", exclam6 con su voz graye."Cuando un periodista estâarmando una metralleta esseflal de que no hay quien lo defienda", agreg6. Ahi estaba también su hija Isabel, quien habfa lo- grado cruzarel cercopolicial: "En el rostro de mi padre, advertf una mezcla de sorpresae incredulidad cuando me vio. Y percibi también su intima satisfaccidnpor tener cercaa sus dos hijas". Sentimientosencontrados los del Presidente.Necesitar de las hijas a su lado y ne* cesitarsaberlas a salvo,muy lejosde allf. "Si, deboreco-

t1 lnterferencia Secreta nocerque nuestrapresencia lo perturbabaprofundamen- te", recuerdaIsabel.i Los presentesy los ausentes.El Presidentedecidi6, a esaaltura, que el generalCarlos Prats debfaestar en La Moneda. Habrîa esperadoque el ex Comandanteen Jefe del Ejército lo llaman o se aparecierapor el palaciopor propia iniciativa. No fue asi. Ubicd a su asesorVfctor Pey en Ia casapresidencial. Cuatro dias antes,atendien- do la petici6n de Pratspor un lugar "seguro"para vivir por el momento, Allende traspasdla peticidn a Pey.El general en retiro fue trasladadoa un departamentoen el barrio alto de la capitaL Ahora habîa que ubicarlo con urgencia: -Victor, ve a buscat al generalPrats, que venga a La Moneda - pidi6 el Presidente. No pudo ser.Nadie contestabalos dos teléfonosde esedepartamento. Sin avisar,el general Prats se habia trasladadoa casade sus padres. En la radio Magallane-çse escuchôla proclama de la Central Ûnica de Trabajadores(CUT). A ocupar fâbr|- casy campos,exhortaba el locutor con voz firme. A pu- nr "eI golpe fascista".2Cômo, con qué?56lo sebuscaba repetir el efecto logrado para el "tanquetazo" del 29 de junio, donde casi250 empresasfueron ocupadaspor sus trabajadoresen sefial de repudio ciudadano. Minutos después,en la misma radio, emergid lavoz del Presidentepor cuarta vez. Y aIIî describiô lo que sucediaen La Moneda: "En estosmomentos, pasan los aviones.Es posible que nos acribillen. Pero que sepan t8 Capitulo Tru: Tietnpode lealtad 1 de traiciîn

que aquf estamos,por lo menos con nuestro ejemplo, que en estepafs hay hombresque sabencumplir con la obligaci6nque tienen"... Fue entoncescuando se recibiô el primer llamado del vicealmirante Patricio Carvajal en La Moneda. El detectiveQuintfn Romero lba cruzandouna oficina, cer- canaal despachopresidencial, cuando escuch6la cam- panilla y atendiô el teléfono.a -Habla el almirante Patricio Catvaial,p6ngame con el Presidente-dijo la voz en tono perentorio' Romero corrid al despachoy luego guiô al Presi- dente hasta eI aparato que habia quedado descolgado. Un tensosilencio cubrid al pequefrogrupo cuandoAllen- de tomô el teléfono.Sin que se le moviera ni un mriscu- lo en el rostro, escuchdla oferta de un avi6n para salir del pafs una vez que serindiera. Cuando Catvaialtermi- nd de hablar, lavoz del Presidentese solt6 como un elâs- tico, como un tiro de honda de David frente a Goliat, s6lo que en lugar de la piedra estabasu dignidad como Primer Mandatario. -lPero ustedesqué sehan crefdo,traidores de mier- da! ...iMétansesu avi6n por el culo! ... lUsted estâha- blando con el Presidentede la Repfrblica!... ;Y el Presi- dente elegido por el pueblo no se rinde! -gùt6 en el teléfono y colgô el auricular con aI fuetzaque rebotô en eI aparato. I Levant6 la mirada y ubic6 al detective Romero en- tre el grupo: I

59 I Inrerferencia Secreta

-No vuelvo a recibir llamadosde estetipo. No me los pasen-instruy6 con el tono aûn cargadode ira. Uno de los médicosobservd detenidamente el ros- tro del Presidente.Todo el equipo de facultativos -mâs de diez- habia acudido al llamado de emergenciaesa maflana. -El Presidente tenîa fibrilaci6n auricular paroxfs- tica, lo que produce arritmi a cardîaca.Y esopodia jugarle una mala pasadaen cualquiermomento. De hecho,su- cedi6 unas ttes vecesdurante su mandato y por eso te- nfamos cerca suyo, siempre, una especiede Unidad Coronariam6vil -recuerda el doctor Hernân Ruiz Pu- lido. No, el Presidenterecuperd la calma en pocos se- gundos ttas su accesode ira. Parecîainnecesario che- quear su pulso y su presidnarterial. Lo vieron incorpo- rarsecon ademân seguro,tomar el fusil Aka que se apo- yaba en el silidn y colgârseloal hombro. Los hombres del GAP se alistaron para seguirlo. Y asf, con el arma que en la empuôadura lucia una placa de bronce, con la leyenda "A Saluador,de su contpaîierode armas, Fidel Cas- trr", eI Presidentede Chile sali6 de su despachopara revistar las tropas de su defensa. Dieciocho detectives,armados s6lo para repelerun atentado abalazos.Una veintena de hombres del GAP. Un periodista que todavia no lograba saberc6mo se ar- maba una ametralladora.Algunos de sus ministros y colaboradoresmâs cercanos.Una decenade médicos.Su "compafiero de armas", Fidel Castro, habtîa dado por

60 Capitulo Tres: Tienpo de /ealtad 1, de traici6n perdida la batalla con sdlo observarel panorama. Para SalvadorAllende, la batalla estabapor comenz^r. Por- que no rba a oponer balascontra balas,ni cafronescon- tra cafrones.Iba a resistir premunido de su corajehuma- no, de su dignidad, de su consecuencia.No habfa gatillado armas para llegar a serJefe de Estado. Y habîa llegado a ser,en el mundo, el primer Presidentesocia- lista elegido democrâticamentepor su pueblo. Cabezaerguida, hombros derechosy firmes, gesto sereno.Asi lo encontrd el edecânaéreo, bajando por la escalerade mârmol, rodeadopor su guardia personai. -Comandante Sânchez...-diio el Presidentea modo de saludo. -Presidente, si a usted le parece, apodri.amosha- blar un momento? -inquirid el edecânque ocupabatam- bién el cafgo de Jefe de la Casa Militar en el palacio gubernamental. -Luego, comandante, luego. Espere,por favor, en Ia salade los edecanes-contestd Allende. Los edecanes.Parecî.a tan fuera de lugar la presen- cra allî de los tres altos oficiales,con sus uniformes del Ejército, la Armada y Ia Fuerza Aérearespectivamente. Uniformes ornadosde cordonesy entorchados.Los ede- canes:siempre de pie tras el Presidente,cubriéndole la espalda.Simbolo del respaldode las FuerzasArmadas al Poder Ejecutivo. Sfmbolo del sometimiento del poder militar al poder civil. ZQ"é hacîan esamafiana los ede- canesen el Palaciode La Moneda, mientras el primer bando militar se repetfauna y otravez por la radio?

OI lnterferencia Secreta

Ni ellos io sabian,salvo el comandanteSânchez que rcnîaque cumplir la misi6n encomendadapor la Fuerza Aérea:convencer al Presidentepara que partiera al exi- lio. Intercambiaroninformaciones los tresedecanes, en- cerradosen la sala contigua al despachopresidencial. Son6el cit6fono. El Presidentequeria hablar con ellos. Sânchez,Badiola y Grcz cnrzaronlos pocos metros con la sensaci6nde tener los minutos contados.Quizâs a al- guno se le cruz6 la idea de que podrian convertirse en rehenesen una negociacidncon riesgomortal. El Presidente,con gesto grave,lesindicd susasien- tos al tiempo que ocupabael sill6n a la derechade su escritorio.Acomod6 el fusil Aka a su lado. El coman- dante Sânchezobserv6 movimientos tras las cortinasque cubrfan las tres puertasde acceso.Entendi6 que podrfa tratarse de miembros de Ia guardiapersonal, quizâs alar madosporque el Presidenteestarfa a solascon tres uni- formados. -Los escucho-dijo Allende, paseandosu mirada por los tres edecanes. -Presidente, debo transmitirle el mensajede mi instituciôn.La Fuerza Aércadispuso un DC-6 para que usted ordene addnde ir. Obviamente el viaie incluye a su familia...y a la gente que ustedquiera llevar -dijo el comandanteSânchez, calculando por su cuenta y riesgo que el avi6npodia llevar a medio centenarde personasy articulando frasesque, para no humillar aI Presidente, soslayabanpalabrus como "rendici6n" o "derrota".

62 Capitula Tres: Tiuupo de lealtad y de traiciïn

-Presidente -intercedi6 el edecânnavaI, capitân de fragataJorge Grez-, si usted examina la situaci6n ten- drâ que estarde acuerdoen que es inûtil combatir con- tra aviones,tanques y caflones.No tiene sentido,Presi- dente... Allende le sostuvola mirada, sin pestafrearsiquie- ra. Los segundosde silencio parecîaneternos. -Presidente -intervino el comandanteBadiola. del Ejército-, creoque es importante que en esto... "Esto" era un golpe militar. Las palabrasno sepro- nunciaron. -...en esto,usted considereque las FuerzasArma- das estân unidas. Es una acci1n conjunta. Y visto asi, usted comprenderâque es inritil todo intento de oponer resistencia. Badiola baj6 Ia vista. No pudo resistir la mirada imperturbable del Presidente.Quizâs vislumbr6, enton- ces,que la resistenciade SalvadorAllende no secimen- tarîa sobrearmas. -Huy otro dato que acabode saber,Presidente. Se estâhablando de bombardearLa Moneda -agreg6 el co- mandante Sânchez. Pesea lo brutal de los mensajes,los tres edecanes observabanuna postura de amable subordinaci1n a la autoridad presidencial.Le hablabanen tono respetuoso, no habfa ni un dejo de ameîaza en sus voces.Estaban como en un limbo de neutralidad, como si el gesto ama- ble y las palabrasbien pronunciadaspudieran anestesiar la realidad y evitar Ia uagedia.

o, Interferencia Secreta

El Presidentelos escuchdhasta el final, sin hacerni un solo gesto. Y cuando estuvo claro que habian termi- nado de entregar los mensajes,habl6. Y habl6 con la claridad de la que ellos carec(an.Laclaûdad de quien no estâdispuesto a enmascararIa rcalidadni a tefrir de blan- co lo que ya comenzabaa ensangrentarse. -No, sefrores,no me voy ^ rendir. Asi que digan a sus Comandantesen Jefe que no me iré de aquf, que no me voy a entregar.Esa es mi respuesta.No me van a sacarvivo de aquî, aunque bombardeenLa Moneda. Y, miren, el ûltimo tiro me lo dispararéaqui -termin6 di- ciendo al tiempo que tomaba el fusil y apuntabaal pala- dar en su bocaabierta. Los tres edecanesse lo quedaronmirando, con Ia sorpresay el temor reflejadosen sus rostros.Se tendi6 un silencioespeso, dificil de rasgar. -Presidente, no, no puede ser -dice que intent6 argumentar el comandanteSânchez. La mano del Presidentese levant6, imponiendo si- lencio. Entoncesse escuch6Ia voz del edecânmilitar diciendo: " 2CuâIes nuestro destino ahota,Presidente?" De Ia muerte anunciada del Presidenteal puesto de destinaci6n siguiente de los edecanes.Eran dos ex- tremos opuestosde un mismo escenariodonde se me- dian las grandezasy baiezasde la conducta humana. -Salgan de aquf, porque aquf no puedo garantizar- les su seguridad,y vuelvan a sus instituciones.Es una orden -dijo el Presidente dando por terminada la reuni6n.

64 Capitulo Tres: Tieupo de lealtad 1 de traiciîn

Estir6 su mano paraestrechar las de ellos.Un gesto de alivio sedibujd en los rostrosde los uniformados.El comandanteSânchez dice que a él le dio un abrazo.Los acompafrdhasta la antesalay dio 6rdenes para que la guardia los dejara salir del palacio. Fue entoncescuando el Presidentedebi6 decidir que ya erahora de despedirse.Cada minuto tornaba mâs in- segura la posibilidad de que alguna radio leal pudiera transmitir su ûltimo mensaje a Ia ciudadanîa. Quizâs tom6 Iâpiz y papel para bosquejarun discurso.No, no habîa tiempo. Todo indica que supo que no tendrfa du- das acercade qué decir y cdmo decirlo. Abri6 la puerta hacia su sal6n privado y pidi6 un informe sobre las ra- dios que arin estabanen el aire. Las radios Corporaciîny Portaleshan sido bombardeadas.Hasta radio Magallanes y radio Sargento Candelaria estaban ya sufriendo interferencias,le di jeron. Se acomod6en su silldn y tom6 el teléfonoque lo conectabacon radio Magallanes.Ya pasabande las 9.1) de la mafr.ana.Carrasped para aclarar Ia voz y comenzî a hablar, con la profunda serenidadque sdlo podia darle la certezade haber traspasadola barrerade la muerte, del temor a la muerte. Habîa amado la vida como el que mâs. Habia venido a estemundo equipado con una pro- funda vocacidnpor ser feliz y goz^r del placer.Amaba la estéticaprofunda que sedaba en la pintura y en la mrisi- ca, en la buena mesa y en Ia buena ropa, en el perfecto cuadriculadode su tablero de ajedrez,en los ojos claros de la mujer amada,en la lealtad de su familia y sus ami-

o) lnterferencia Secreta gos. Y porque sabîaque estétrcay éuca conforman un mismo graî valor, se habia hecho socialistaaspirando a construir un mundo sin la fealdadde la injusticia y la violencia. Amaba la vida como el que mâs y ahoraestaba al borde de sacrificaila. Y su sacrificioera a plena concien- cia, en un acto libre que lo hacîa mâs libre arin. 2IJn avi6n para irseal exilio? 2Renunciaral cargocon la pis- tola en el pecho y con su renuncia ungir a un sucesor ilegitimo que barrerfacon libertadesciudadanas y dere- chos conquistados a lo largo de décadas?La oferta lo habia ofendido profundamente. Aceptarla eratraic t o narse y traicionar al pueblo que habia creido en su proyecto de socialismodemocrâtico. Aceptarla era traspasarles un poder moral del que siempre carecetîan. Dos palabrasdebieron resonarle por dentro: digni- dad y lealtad.Asi queria ser recordado:como un hom- bre digno que supo ser leal. De su corajedependfa ei selloestético-ético de esteacto final de su vida. La decr- si6n ya estabatomada: o lo mataba una bala golpista o se mataba él mismo. Muerto sacatîanal Presidentede La Moneda. Ahf estaba,respirando tranquilo y articulando cada palabra con cuidado. Miles y miles de discursoshabfa pronunciado en plazasy salasde su patria desde que' a los veintinueve afios,se presentdcomo candidatoa di- putado. Ahora tenia sesentay cinco aôos y éste era su ûltimo discurso.

66 Capitulo Tres: Tienpo de lealtad 1 de traiciîn

"Amigos mfos. Esta es la frltima oportunidad en que me pueda dirigir a ustedes.LaFuerzaAéreaha bom- bardeado las torres de radio PorTalesy radio Corporaciîn. Mis palabrasno tienen amargura,sino decepcidn,y se- rân ellasel castigo moral para los que han traicionado el juramentoque hicieron...soldados de Chile, Comandan- tes en Jefe titulares, el almirante Merino que se ha autodesignado,mâs el sefior Mendoza, general rastrero que s6lo ayer manifestarasu fidelidad y lealtad aI go- bierno, también se ha nominado Director General de Carabineros. "Ante estoshechos, s6lo me cabedecir a los traba' jadores:iyo no voy a renunciar!Colocado en un trânsito histdrico, pagarécon mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo Ia certezade que la semilla que entregâ- ramos a la concienciadigna de miles y miles de chile- nos, no podrâ ser segadadefinitivamente. "Tienen Ia fuerza.Podrân avasallarnos.Pero no se detienenlos procesossociales ni con el crimen... ni con la fuerza.La historia es nuestra y la hacenlos pueblos. "Trabajadoresde mi patria, quiero agradecerlesla lealtad que siempre tuvieron. La confianzaque deposi- taron en un hombre que sdlo fue intérprete de grandes anhelosde justicia. Que empefi6 su palabra en que res- petarîa la Constitucidn y Ia Iey,,y asî lo hizo. En este momento definitivo, el filtimo en que yo pueda dirigir- me a ustedes,quiero que aprovechenla lecci6n.El capi- tal forâneo,el imperialismo, unido aIa reaccidn,cred el clima para que las FuerzasArmadas rompieran su tra-

67 Interferencia Secreta

dicidn, la que les ensefraraSchneider y que reafirmarael comandante Ataya,,vfctimas del mismo sectorsocial que hoy estarâ en sus casas,esperando con mano aiena re- conquistarel poder para seguirdefendiendo sus granje- rîasy susprivilegios. "Me diri jo, sobretodo, a la modestamujer de nues- tra tierta-,aIa campesinaque crey6 en nosotros,a la obrera que trabaj6 mâs,a la madre que supo de nuestrapreocu- pacidn por los niflos. "Me diri jo a los profesionalesde la patria, a los pro- fesionalespatriotas, a los que hace dias estuvieron tra- bajando contra la sedicidnauspiciada por los Colegios profesionales,colegios de clasepara defender también las ventajasque una sociedadcapitalista da a unos po- cos. "Me diri jo a la juventud, a aquellosque cantaron, entregaronsu alegrfay su espfritu de lucha.Me dirijo al hombre de Chile, al obrero,al campesino,al intelectual, a aquellosque serânperseguidos... porque en nuestro pafs el fascismoya estuvo hace muchas horas presente, en los atentados terroristas, volando los puentes, cor- tando Ia Iînea fénea, destruyendo los oleoductos y los gasoductos,frente al silenciode los que tenfan la obli- gaciln de proceder:estaban comprometidos. La historia Ios juzgarâ. "seguramente radio Magallanes serâ acallada y eI metal tranquilo de mi voz no IlegaÉ a ustedes.No im- porta. Lo seguirân oyendo. Siempre estaréjunto a uste-

68 Capitulo Tru: Tieupa de lealtad 1 de traiciîn

des. Por lo menos, mi recuerdoserâ el de un hombre digno que fue leal a la lealtad de los trabajadores. "El pueblo debedefenderse, pero no sacrificarse.El pueblo no debe dejarse arrasar,ni acribillar; pero tam- poco puede humillarse. "Tnbajadores de mi patria: tengo fe en Chile y su destino.Superarân otros hombreseste momento gris y amargo, donde Ia traici1n pretende imponerse. Sigan ustedessabiendo que, mucho mâs temprano que tarde, de nuevo abrirân las grandesalamedas por donde paseel hombre libre, para construir una sociedadmejor. "iViva Chile! lViva el pueblo! lVivan los trabajado- res! Estasson mis frltimas palabrasy tengo Ia certezade que mi sacrificio no serâ en vano. Tengo Ia certezade que, por lo menos,serâ una leccidnmoral que castigarâ Ia felonîa,la cobardiay la r.nici6n" . Un sobrecogedorsilencio qued6 flotando en el aire cuandoel Presidentedio por finalizadosu discurso.El frltimo discurso. -Era como si hubiera estadopreparado para vivir ese momento. Estaba mâs entero que nadie, manejaba completamente la situaci6n. Seguia siendo el Presi- dente de la Repriblica -asegur6 después el inspector Seoane.5 -Yo estabasentado frente a é1.Y mientras lo escu- chaba, sentf que se me apret aba la gargante-y pensaba "qué grande es,qué granhombre es". Sentf una admira- ci6n tan grande que tuve ganasde llorar. El Presidente se despedîa, con una enterezay con una consecuencla

69 Incerferencia Secreta impresionantes.Ante nuestrosojos se transformabaen héroe.Cuando termind de hablar, nos levantamostodos y sehizo un silencioespeso y Iargo.Salimos de su despa- cho todos con él -recuerda el doctor Arturo lir6n.

Notas:

I "Asi muri6 Allende",M. Gonzâlez-P.Verdugo-M.O. Monckeberg, revistaAnâlisis (junio T987). 2 Allendey la experieaciacbilena, Joan E. Garcés,Ediciones Bat. I "Recuerdosdel l l de septiembrede j.973",IsabelAllende Bussi,

10 I'

:

I ) I l1 ;. \-/APITULO CUATRO La coNsxtôN QUEDEBIÔ sEn SEcRETA EN pr CortaNoo Mlrtran de Peflalolén,el general Au- gusto Pinochet tuvo el PuestoUno. En la Academiade Guerra de la Fuerza Aérca, el general Gustavo Leigh ocupd el Puesto Dos. El punto de enlacefue el Puesto Tres, ubicado en la EscuelaMilitar. El PuestoCinco se instald en el Ministerio de Defensa,a cargodel viceal- mirante Patricio Carvaial.Allf mismo estabael general Nicanor Dîaz Estrada (Fuerza Aérea).No apareceen la grabaciln el Puesto Cuatro. Claramente, a iuzgar pot las conversaciones,Carabineros no estabaen el mismo nivel de contacto ni de mando que el restode los conju- rados. En el Puesto Tres, EscuelaMilitar, vocesjdvenes son las que realizanlos "copiados"de enlace.Todo indi- ca que no tenian experiencia en el maneio radial para una emergenciacomo la de esedfa. De hecho,esas voces hacen varios comentarios que, como puede deducirse,

73 Int.rferenci,r Secrer.r no estabandestinados a una audiencia situada mâs all6 de la sala en la EscuelaN{ilitar. Al iniciarsela graba- ci6n, se oye uno de esoscomentarios:

Puesto Cinco (Ministerio de Defensa):Atenctôn, Puesto Uno, Puesto Uno, de Puesto Cinco. Adelante, cambio.

Puesto Tres (EscuelaMilitar): Puta, el Uno... hue- v6n histéricocon el QRT... claro...estân hablando los generales(otros silban).

Puesto IJno: ... cambio.

Puesto Cinco: Patricio necesitahablar con Augus- to, adelantecambio.

Puesto Uno: Conforme.

General Pinochet: Augusto, Augusto escuchan- do, Augusto escuchando...

Vicealmirante Carvaial: Creo que lo del suicidio era falso. Acabo de hablar con el edecânnaval, coman- dante Grez, quien me dice que ellos, los tres edecanes, sevan a retirar de La Moneda y sevienen haciael Minis- terio de Defensa.Le encarguéque instan aI jefe de Ca- rabinerosque rindieta sustropas porque iban a ser bom- bardeados.Asi que los carabinerosdeben salir de La

11, Capitu/o Cuatr,,: La c,txexiin qte debti .rer secreta

Moneda en estemomento. El generalBrady estâinfor- mado para que no se le disparea los militares que eva- cuen La Moneda.Cambio.

General Pinochet: Conforme, conforme.En este momento me llam6 Domfnguez, subsecretariode Mari- rrr.,y me decfaque fueran los tres Comandantesen Jefe a pedir rendici6n al Presidente. iYos saltisque este gallo eschueco! En consecuencia,ya saltisla cosa,si él quiere va aI Ministerio de Defensaa entregarsea los tres Co- mandantesen Jefe.

Vicealmirante Carvaial: Yo hablé personalmente I con é1.Le intimé rendicidn en nombre de los Coman- dantesen Jefe.Eh... conresrdcon una seriede garabatos no mâs.

General Pinochet: O sea,quiere decir que a las once, cuando lleguen los primeros pericos,uai a ver lo que va a pasar.1A las once en punto se bombardea!

Vicealmirante Carvaial: (cuando) se evacue La Moneda va a ser mâs fâcrl asaltaila.

General Pinochet: IJna vez bombardeaàala asal- tamos con el (Regimiento) Buin y con la Escuelade In- fanterîa. Hay que decirle a BradY.

Vicealmirante Carvajal: Conforme. Vamos a es- pefaf no mâs que evacue.nlos edecanesy los carabineros.

7t Interlerencia Secreta

General Pinochet: Conforme.

Vcealmirante Carvaial: Bien, afuera.

*** La inconfundible voz del generalAugusto Pinochet se escuchacon toda claridad en los parlantesde la radio que ha logrado interferir la comunicaci6nde los unifor- mados.Habla con el vicealmirantePatricio Carvaial,jefe del EstadoMayor de Ia Defensa,ubicado en el Puesto Cinco,Ministerio de Defensa.La comunicaci6nse inicia con la referenciaal suicidio del Presidente.Todo indica que alguno de los edecanesavis6 al Ministerio de De- fensade la decisidn presidencialy se crey6 que lo habia hecho tras el discursosolemne de despedida. La decisi6n de bombard earLa Moneda ya estâ to- mada. A las once en punto. Los que estânen el palacio ya fueron notificados.Cada uno debi6 iniciar procesos de reflexi6n respectode qué hacer.La vida misma estaba en juego.El dirigente socialistaHernân del Canto deci- di6 que ya erahora de completarsu misiôn. Su partido lo habfa enviado para pactarpersonalmente con el Pre- sidente las accionesa seguir. Ya llevabademasiado rato en el Palacio, la situaci6n se tornaba cadavez mâs peli- grosa y él se habîa quedado semiparalizado.2C6moes que el Presidenteno quiere recibir,en audienciapriva- da,al enviado del Partido Socialista?Decide acercarsey hablarle.No ve otro camino.

/b Caltitu/o Caatra: La conexiîn que debii ser tecreta

-Presidente,vengo de parte de Ia direcci6ndel par- tido a preguntarlequé hacemos,d6nde quiere que este- mos... El Presidentelo escucha,delatando en el gesto su profunda molestia. -No lo entiendo-respondi6 cortante. Del Canto balbuceanuevamente el mensaje,muy inc6modo, mientras el Presidentemantiene la barbilla en alto y la mrradainconmovible. -Yo sé cuâl es mi lugar y lo que tengo que hacer. Nunca antesme han pedido mi opini6n, lpor qué me ia piden ahora?IJstedes, que tanto han alardeado,deben saberlo que tienen que hacer.Yo he sabido,desde un comienzo, cuâl era mi deber -dijo Allende alzandola voz, paraser escuchado por sobreel ruido de los aviones que sobrevolabanel centro de Santiago.l Del Canto no supo qué argumentar. Las circuns- tanciasy el tono del Presidenteno dabanlugar mâs que al silencio espesoque puso punto final al brevfsimo en- cuentfo. ***

General Pinochet: O seaque carabinerosque es- tân en contactoson los leales.

Vicealmirante Carvaial: Los carabinerosque ro- deanson leales...

General Pinochet: ...aia nosotros! ?

71 lnterferencia Secreta

Vicealmirante Carvajal: ...se retiraron, pero to- davia no sabemosad6nde y si acasose han entregado a Mendozao si acasohuveron no mâs.

General Pinochet: O sea, iestâsola La Moneda ya? Estâsola La Moneda, o sea,no hay carabineros...i o to- davîaquedan adentro?

Vicealmirante Carvajal: (se interrumpe la comu- nicacidn)...tropas del Ejército ahora. Voy a verificarbien qué fuerzahay, tanto de Carabineroscomo de las Fuer- zas Armadas,alrededor de La Moneda, y te informo.

General Pinochet: Conforme, porque cuando se efect(reel bombardeo no puede haber nadie.

Vicealmirante Carvaial: Correcto. Yo voy a dar el visto bueno, entonces,antes de que se efectfreel bom- bardeo.

General Pinochet: Yo tengo la impresidn de que el sefrorSE (serefiere al PresidenteAllende como SE,Su Excelencia)se arranc1en las tanquetas.

Puesto Dos (Fuerza Aérea):Cinco, cinco,de dos. Cambio.

General Pinochet: ...lastanquetas hay que ubi- carlas.Y Mendoza, pregû.ntale,(no tienes contacto con éI?

78 Capitu/o Caatro; La conexi6n qae dubiô ter setreta

Vicealmirante Carvajal: No, pero en las tanquetas no, no huy6. Las tanquetasse habîan ido antesy yo, pos- reriormente,en persona,hablé por teléfonocon é1.

General Pinochet: Conforme,conforme, Enton- ceshay que impedir la salida.Y si sale,hay que tomarlo Dreso.

Vicealmirante Carvajal: Y también hablé poste- riormente con el EdecânNaval, quien me confirmd que Allende estâen La Moneda.

General Pinochet: Entonceshay que estar listo para ^cttrar sobre é1.Mris uale malar la perra 7 seacaba /a leua,vrejo.

Vicealmirante Carvaial: Exacto. Lo rinico que es- tamos esperandoes que salganlos edecanesy los carabi- nefos.

***

2A quién era leal la fuerzapolicial que rodeabael palacio?La duda del general Pinochet era la misma que habîan tenido en La Moneda.Junto al Presidenteestaba el General Director de Carabineros,quien también te- nia el c^rgo de Ministro de Tierrasy Colonizaci6n.Ahi estabatambién el general Urrutia, segundo en la lînea de mando. 2Quién habfa participado, entonces,en el complot golpista?Todo indica que fue el generalArturo

7g Interferencia Secreta

Yovane quien primero se sumd a las reunionesclandes- tinas. Y su ^ccioîar a\ert1al equipo de inteligencia po- lîtrca del gobierno. Hay testigosque aseguranhaber es- cuchado al presidenteAllende referirsea él como "el generalsedicioso" en las semanasprevias al golpe. 2C6mo es que Yovanesegufa en las filas de Carubr- nerospara el 11 de septiembre?Lo salv6el propio presi- dente Allende, con su decisidnde respetarel modo tfa- dicional de operar al interior de los cuerpos armados. Cuando le dijo aI generaldirector que los informes cali- ficabana Arturo Yovanecomo un "elemento peligroso", José Maria Seprilvedarespondid que se trataba de un error, que él mismo respondiapor el profesionalismode Yovane. Era el 22 de agosto de 1973. Sep(rlveda-por cautela- puso a Yovaneen un catgosin mando de tropa, comoJefe del Departamentode Servicios.Desde alli si- gui6 complotando Yovane. Cuando la hora final sefue acercando,Yovane sum6 a los generalesMendoza y Gallardo al complot. Necesi- taba de generalesmâs antiguos para asegurarel éxito, qr,reCarabineros no se dividiera y se plegara como un todo al golpe. Luego, eI 4 de septiembre,una semana antes,se le comunicd que debfapasar a retiro. 2Quéha- bia sucedido?Los informes de inteligenciapolftica rei- teraban el dato: los generalesYovane y Mendoza cami- naban en el lfmite de zonasturbias. El Presidente,ese dia, pidi6 el director subrogante-general Urrutia- que los pasaraa ambosa retiro. Pero Urrutia, quien asumi6 el mando cuando Seprilvedapasô a ser Ministro de Tie-

80 Capitu/o Caaîro: I-a conexi,in que debi,î ser secreta rras, defendid al general Mendoza. No, habh un error, no podia juzgarseasi como asi a Mendoza y cortarle la carrera.Acept6, en cambio, el retiro de Yovane para eI mes siguiente. Asf se llegd a la visperadel golpe, con la firma del general Mendoza como parte de la jefatura mâxima de la conspiraci6n.En la tarde del 10 de septiembre,Yovane arceglô con dos tenientes coroneleslos detallesde la operacidn. Se parti6 del supuesto de que el general Seprilveda estarîade parte del gobierno -era Ministro de Estado-y la clave,entonces, era secuesttat al general Urrutia. Como éste alojaba en el edificio llorantbllenA, de la instituci6n, porque su famrlia vivîa en Concep- ci6n, se ordend dejarlo "retenido" en su habitaci6na Ia maflana siguiente. Pero Urrutia sali6 de la pieza muy remprano,alertado por el aviso telef6nicodel prefecto de Valparafso:la Marina se habia sublevado. Fue asi como los generalesSepûlveda y Urrutia lle- garon hastael Palacio de La Moneda esedia, provocan- do la confusi6n acercade la "lealtad de Carabineros". Cuandoel presidenteAllende observd,desde una venta- na del segundo piso, el retiro de los carabinerosy las tanquetaspoliciales, ordend que sepresentara el general Sepfrlveda: -General, lpor qué se retiran las tropas de Carabi- neros,los tanquesy los buses? Seprilveda,muy nervioso,se acerca al ventanal,ob- servaunos segundosy balbucea: -No sé qué pasa,Presidente. Voy a informarme.

81 Interferencia Secreta

Cuandoregresa, pocos minutos después,su palidez se ha acentuado: -Presidente, me informan que se han tomado la Centralde Comunicaciones.Y lasunidades reciben des- de ahf las 6rdenespor radio. La verdad...la verdad es que el alto mando estâaislado. No sabequé hacer el Director General.El Presi- dente reacciona: -iPues mande hombrespara que recuperenla Cen- tral de Comunicaciones!... -No puedo,Presidente, no tengohombres suficien- tes. -2Con qué fuerzascuenta? -56lo con los que estânen la Direccidn General... -1Cuântos? -Cincuenta, mâs los oficiales. -Hâgalos venir aqui, lde inmediato! La ordendel Presidenteno pudo cumplirse.Y mien- trasLa Moneda iba quedandositiada, los altosjefes uni- formados trataban de comunicarse. ***

-Puesto Dos (Fach): Puestotres, de Puestol)os' Dos mensajespara el generalPinochet del generalLeigh. Habla general Martinez. Primero, estudiar posibilidad allanares tud ios radio Magallanes.Co nt i nfia transmi tie n- do. Cambio paraun entendidodel primer mensaje.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, ya.. QSL, mi General. Mi general Leigh para mi general

82 Capitu/o Caatra; La conexi,in qae delid ser secreta

Pinochet: estudiarposibilidad de allanamientoa radio Magallanespues arin estâtransmitiendo. Déme roger si estâcorrecto...

-General Pinochet (Puesto Uno): Conforme,es- cuchado,escuchado. Voy a darla orden.

-Puesto Tres: Ya, perfecto.2Me copi6 PuestoUno? ... PuestoUno, 2me copi6 a PuestoTres?

-Puesto IJno: Puesto Uno. Mi general Pinochet recibi6 una comunicaci6ndel generalLeigh.

-Puesto Ties: Ya, perfecto. Hay otra comunica- ci6n mâs. Asi que voy a pedirle altiro a PuestoDos que me la retransmita.Adelante, Puesto Dos, patzla segun- da comunicacidn.La primera ya la recibi6 mi general Pinochet.Adelante. cambio...

) t -Puesto Dos: Segundacomunicaci6n de Puesto I Dos a PuestoTres. Existe necesidadurgente emitir pro- clama junta de comandantesen jefe. Eh... déme su en- tendido para continuar.

-Puesto Tres: (Yoz de ayudanteque lee apuntesal lado del oficial a catgode Ia transmisidn:..."existe nece- sidad urgente de emitir proclama Comandantesen Jefe"...)Puesto Dos, aqui PuestoTres. Necesidad emitir proclama Cornandanteen Jefe. Es urgente. Déme roger si estâcorrecto...

83 Interferencia Secreta

-Puesto Dos: Comprendido y correcto'Junta de Comandantesen Iefe...

-Puesto Tres: ;Ah! (inentendible)

-Puesto Dos (Fach):..' debedecir, dos puntos' En su esencia, reiterarunidad absoluraFuerzas Armadas y Carabineros.Déme su comprendido.'.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto' Rei- teraf unidad absoluta FuerzasArmadas y carabineros. Esaes la referencia.Déme roger.

-Puesto Dos (Fach): Continria. Estas (inenten- dible) ... afinderrocargobierno marxista. Déme su com- prendido.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Estas lucharân hastalas ûltimas consecuenciascon el fin de derrocarel gobierno marxista.Déme roger..'

-Puesto Dos (Fach): Conforme' entendido' Con- tinÉo. Esto no es contra el pueblo. Es en defensadel pueblo democrâticode chile. Déme su compfendidopara continuaf...

-Puesto Tres (Escuela Militar): Perfecto' Esto no es contra el pueblo. Es para defenderal pueblo demo- crâtico.Déme roger...

84 Capita/o Cuatro: I'a conexi6n que del'ii set secreta

-Puesto Dos (Fach): Conforme' Contin(a' La m^yori^ de los obreros y la poblaci6n civil dan su res- paldototal a estemovimiento....

-Puesto Tres (Escuela Militar): ..QRX. .. la ma- yorîa (no entiendeel mensajeanotado por el ayudante, ésteacota "la mayorîa de obrerosy civilesdan respaldoa estemovimiento")La ... los obrerosciviles, la gtan ma- yofiadan respaldoa estemovimiento. Déme roger Puesto Dos.

-Puesto Dos (Fach): Ya, repito. Mayoria obreros y poblacidncivil dan respaldoa esremovimiento de las FuerzasArmadas...

-Puesto Tres (Escuela

-Puesto Dos (Fach): (démesu)..'comprendido'

-Puesto Tres (EscuelaMilitar): Mayoriadeobre- fos y poblacidncivil dan respaldoa esremovimiento militar. Démeroger.

-Puesto Dos (Fach): Conforme. Continfro' Exhor- rar a manrenefsea toda la poblacidncivil en suscasas o lugaresde trabajo. No salir a la calle. Déme su com- prendido y con esto concluiria...

-Puesto Tres (Escuela Militar): QRX...

8t Incerferencia Secrera

-Voces en el Puesto Tres de la EscuelaMilitar: ZQuécosa?...que la poblaci6n se mantenga... en susca- sasy lugaresde trabajo...instar.

-Puesto Tres: Instar a la poblaci6n que se man- tengz-en suscasas y suslugares de trabajo. Déme roger...

-Puesto Dos (Fach): Conforme.Instar a mante- nersea la poblacidn en sus casaso iugares de trabajo. Que no salgan aIa caIle.Terminado. Déme su conformi- dad.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto... Eh... (ayudantele repite lapalabra "instar") que no sal- gan a la calle. Estâ copiado perfectamente.Yo lo paso a PuestoUno. 2Quién lo firma esto?2Mi generalLeigh?

-Puesto Dos (Fach): GeneralLeigh.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Perfecto...

-Puesto Dos (Fach): Terminado.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Terminado...Va- mos a ver. PuestofJno, 2copiôa PuestoTres?

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): Puesto Tres, por favor repita. Repita la transmisi6ndel generalLeigh. Le escuchamos...

86 Capitu/o Cttatro; La conexi6n que debi6 ser secreta

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto. Mi general Leigh manifiesta lo siguiente. Necesidad de emitir proclamaJuntaComandantes enJefe. Déme roger hasta ahî...

-General Pinochet (interrumpe desde Puesto Uno): Y Director de Carabineros...aEntendido, enten- dido?...

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto.

-General Pinochet: Otra cosa...

-Puesto Tres (EscuelaMilitar): Si, digame...

-General Pinochet:... en la proclama lo siguien- te. Y recalcar que las FuerzasArmadas no estâncontra el pueblo, sino que estâncontra ia hambrunaque estaba sembrando el gobierno marxista del sefrorAllende... contra las colasque rodean...que rodeana todaslas ca- llesde Santiago...

-Puesto Tres (EscuelaMilitar): 2Esees Pinochet?

-General Pinochet (Puesto Uno): ... contra el hambre, contra la pobreza,contra la miseria, contra el sectarismoa que nos estaballevando el sefiorAllende, mientras él sesatis facîa confiestas y parrandasen Ia casa...

87 Interferencia Secreta

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya... Vamos a ver Puestouno, 2copiaa PuestoTres?

**8 La voz de los oficiales denota el impacto de haber escuchadola primera alocuci6npolitica del Comandan- te en Jefe del Ejército. En el tono del general Pinochet queda clan su de- cisiôn de asumir la iefaturamâxima. Los "socios"en el complot comienzana darsepor notificados."Habrâ que aclarareste asunto apenaspodamos. lNo habfamosque- dado en que la Junta Militar asumiael gobierno?2No habiamos acordadoturnarnos la jefatura mâxima? H.a- brâ que poner los puntos sobre las fes apenassalgamos de esto", fueron algunasde las preguntasque comenzôa hacerseel general Gustavo Leigh, comandante en jefe de la Fuerza Aérea. ***

-Puesto Tres (EscuelaMilitar): PuestoUno, 7co- pia a Puesto Tres?

-Puesto [Jno (Pefralolén-Ejército): Puesto Tres de PuestoUno. Indiqueme si copi6...

-Puesto Tres (Escuela Militar): 2Si lo copié?... Yo le estoy pasandoel mensajeque mand6 mi general Leigh. Dfgame si estâcorrecto. La necesidadde emitir proclama Comandantesen Jefe...Junta de Comandan- tes en Jefe y Director de Carabineros.Déme roger...

88 C.$itulr Cu.ttru: La ;,,u,xiiu qrt ,/,/,i,t )d J&t'(la

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): El general Pinochetestâ de acuerdo.La proclamadebe set ... indi- car que se ha firmado por los tres Comandantesen Jefe de las FuerzasArmadas, mâs el Director General de Ca- rabineros.Cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto. Es que aqui hay un problema.Mi generalLeigh manifiesta que mi general Pinochet haga esto y él me da las refe- renciasde los puntos que yo le voy a indicar a posterior. Déme roger...

-Puesto Uno (Pefialolén-Ejército): Dfgale que con... que el general Pinochet indica conforme...Ade- mâs, indfquele al general Leigh de parte del general Pinochetque estâconforme con los puntos, pero que se debe agregàr -p^r^ que haga Ia proposici6n completa, como referenciasiete- que se estâ luchando contra las colas,el hambre, la miseria,el sectarismo,la... y los ex- tranjerosque estabanasesinando a nuestragente. Cam- bio.

-Puesto Tres (Escuela Militar): Ya, perfecto,per- fecto...Vamos a ver PuestoDos, aqui PuestoTres. .. Pues- to Dos, Puesto Tres le llama.

-Puesto Dos (Fach): Puesto Tres, Puesto Tres, PuestoDos. Adelante.

89 Interfèrencia Secreta

-Puesto Tres (Escuela Militar): iBstâ mi general Leigh ahi?

-Puesto Dos (Fach): Afirmativo.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Mire, si usted io puede ubicar, digale que el general Pinochet recibi6 conforme, recibi6 conforme, el mensaje,el se- gundo mensajeque usted me transmitid. Pero que l-ray que agregar,que hay que agregarun punto siete...que selucha... que estemovimiento militar luchacontra las colas,la hambruna,la miseria,el sectarismo..'(ayudan- te le va dictando)...y extranjerosque intervienenaquf en nuestroterritorio. Déme roger.

-Puesto Dos (Fach): Conforme. Favor aclararst estaes una consultao lo. ... o lo ha dispuestoasf el seôor seneraiPinochet. Cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Momen- tito. Vamosa ver PuestoUno, aquf PuestoTres... Pues- to Uno.

-Puesto Uno (Pefralolén-Ej&cito): PuestoTres adelante.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Esto...les Lrnasugerencia de mi generalPinochet o hay que agre- garlo definitivamente?Déme roger.

90 Capita/o C//dtr0: La conexiin qte t/eL,i6ser tecreta

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): Mâs bien la ideade él (es)que seagregue a estaproclama que estâen elaboraci6n.Cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto.Vamos a ver, PuestoDos. 8h... mi generalmani- fiesta que es una idea que le agreguea la proclamaci1n que seva a dar.Déme roger.Cambio PuestoDos.

-Puesto Dos (Fach):Conforme. Insiste que esuna consulta.entonces. Cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto.QSL 2PuestoUno? PuestoUno, PuestoTres.

(En el puesto de radio de la EscuelaMilitar, se es- cucha una emisi6n radial y un oficial comenta que es una proclama del Gobierno)

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Puesto {-Ino,Puesto Tres. (Ayudante le corrige: "PuestoCinco llama"). PuestoCinco, PuestoTres.Puesto Cinco. Pues- to Tres.

-Puesto Cinco (Ministerio de Defensa): Aten- ci6n. PuestoCinco a PuestoTres. Adelante. cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Hay una brodcarting(broadcasting) al lado de la radio Agricultu-

91 Interferencia Secreta ra... (ayudantele indica que "mira, un poco mâs arrt- ba")... pirata,un poco mâs arriba,dando proclamasa la gente de la Unidad Popular.Déme roger.

-Puesto Cinco: PuestoCinco a PuestoTres. Repi- ta.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Hay una radio pinta, hay una radio pirata, un poco mâs arriba de la radio Agricultura, exhortandoa la poblaciôn de la Unidad Popular a defenderal gobierno y salir a las ca- lles.Déme roger...

-Puesto Cinco: Conforme,comprendido.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Asf que sintonizarla...

*** En el puestode enlace,un militar selimpiala narrz sonoramente.Se escucha un himno en la radio "pitata". Los uniformados ctuzan algunas palabras, mientras el Puesto Dos com renzaa l\amar desde la Academia de Guerra de la FuerzaA&ea. La conductaamateilr del Pues- to Tres podria explicarseporque cadetesu oficialesmuy jôvenesde la EscuelaMilitar se hayan hechocargo del puestode enlacemontado a riltima hora. Es una posibi- lidad. En todo caso, es notorio el contraste con el profesionalismode la Fachen lastransmisiones radiales.

92 Capittt/o Ctutro: La c,tncxi,t,nque de/tiô .rer sacreTa

Por otra parte, en el diâlogo que protagon;zaî -usando intermediarios- los Comandantesen Jefe del Ejército y de la Fterza Aérea,ya se observanlos prime- rosatisbos de la lucha por el poder.[Jna luchaque seiba a prolongar por casicinco afrosy que finalmente se acla- 16en favordel mâsfuerte -el generalPinochet- en julio de 1978. ***

-Puesto Dos (Fach):Tres de Dos...Tres, Tres de Dos.

-Puesto Tres: Adelante Dos, aquf Tres.

-Puesto Dos (Fach): Conforme,Gustavo da plena aprobaci6npunto sietegeneral Pinochet proclama. Cam- bio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto...Vamos a vet Puesto(Jno, aqui PuestoTres.

*** Vuelve ^ rernarla confusidn en el puesto de enlace. 2Quiénestâ ddnde? una voz sugiereque debi6 Ilamar a Puesto Dos. Se preguntan si tienen claro los puestos. "No, huev6n,a ver si me los dai en clave",dice un mili- tat. ***

93 Interfèrencia Secreta

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Puesto LJno,Puesto Tres.

-Puesto Uno (Pefialolén-Ejército): Aqui Puesto Uno, cambio.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Digale a mi generalPinochet, digale a mi generalPinochet, que mi general Leigh aprobd su idea y lo va a agregara Ia proclama. Déme roger.

-Puesto uno (Pefralolén-Ejército): Conforme, conforme.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Tres aqui... PuestoDos, aquf PuestoTres.

-Puesto Dos (Fach): Conforme PuestoTres, aquf Dos.

-Puesto Tres (EscuelaMilitar-enlace): Estâcon- forme, recibidoconforme Puesto IJno. Y le van a comu- nicar inmediatamentea mi general Pinochet. Déme foger.

-Puesto Dos (Fach): CorrformeTres. De parte de Gustavo, informarle a Augusto que diez pan las once quiere un comunicadocon é1.Cambio.

94 Capittt/o Caatra: La cqnexiin qae delst,iser secreta

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto. Diez para las once mi general Leigh quiere un co- municadocon mi generalPinochet. Déme roger...Puesto Dos, déme roger.

-Puesto Dos (Fach): ;Roger!,de Dos.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto.Adelante... Vamos a ver PuestoUno, aquf Puesto Tres....PuestoUno, aqui PuestoTres le llama... Puesto Uno, aqui PuestoTres le llama...Puesto uno, aqui Pues- to Tres le llama...(siguerepitiendo)

*** Mientras un bando militar exrgîarendici6n inme- diata,anunciando el bombardeode La Moneda alas once de la mafr,ana,el general Javier Palacios venîa avanzan- do desdeel sur con los tanquesdel BlindadosNo 2, los mismos de la fracasadaasonada del 29 de junio. El cerco de cafronesapunta hacia La Moneda, en tanto los aviones amenazan con vuelos rasantes.En el teléfono,el Presidenteescucha. El asesorJoan Garcés no sabecon quién habla.Cuando cuelga,lo oye decir: "En dos minutos mâs seremosatacados". Toma su fusil, se pone el cascoy saledel despachorâpidamente, dando ôrdenespara organizarla defensadel palacio.Resonaron entonceslos primeros disparos... ***

9t Interferencia Secreta

-Puesto Uno (Pefralol én-Ejército): Adelante.

-General Pinochet: Augusto para Patricio, ade- lantey cambio...Patricio, Patricio, se trata de lo siguien- te. Dime, leste caballerono ha reaccionadocon todo lo que se le ha hecho?

-Vicealmirante Carvaial: No, no ha reaccionado hastael momento.Acabo de hablarcon el EdecânNaval que viene llegando de allâ. Me dice que estâ defendida La Monedapor cincuentahombres del GAP. Losaproxi- madamentecuarenta o cincuenta carabinerosse estân retirando.Me dice el generalMendoza que él estâpro- curando que se retiren antesde seguir bombardeando. El EdecânNaval me dijo que el Presidenteanda con un fusil ametralladora,que tenî.atreinta tiros y que el rilti- mo tiro se lo iba a dispararen la cabeza.Ese es el ânimo en que estabahasta hace unos minutos atrâs.

-General Pinochet: Esasson no-balas (; ?)no mâs... Estehuev6n no se disparani una pastilla de goma.

'. -Vicealmirante Carvajal: Conforme, ije, je, j, (serfe)... El generalMendoza estâen contactocon noso- tros y estâ en contacto con el general Brady. Asf que toda la cosaestâ bien coordinadaahi.

-General Pinochet: Conforme. Yo, diez para las once, voy a dar la orden de bombardeo.En consecuen- e6 Capittt/o Ctatr,: La tr,nuiôt qae debii ser secreta

cia,a esahora las unidadestienen que replegarsemâs o menos dos cuadras(alrededor) de La Moneda. Ensegui- da, una vez que se replieguenva a iniciarse...alas once en punto seinicia el bombardeo.O seahay que meterse, prâcticamente,en zriones, donde sea,porque sepuede pasarla Aviaci1n y tocarle a las tropas nuestras.

-Vicealmirante Canajal: Exacto. Yo creo conve- niente decirleaI generalLeigh, entonces,de que en nin- gfin casoinicie el bombardeosin esperarsaber cômo estâ la situaci6n acâ.

-General Pinochet: Tiene que... la tropa nuestra ponerse un pafrueloblanco arriba para mostrar Ia Iî.nea mâs adelaotadaque tiene. Repito. A la tropa hay que recordarleque paramostrar la lfnea mâs adelantadatie- ne que ponerseun pafrueloblanco en la espaldapara que los aviadoreslo vean.Es un detalle que hay que recor- dar.

-Vicealmirante Cawajal: Le voy a comunicar eso al general Brady.

*** F,nLa Moneda,el Presidentel-ra decidido que s6lo permanezcanlos que quieran quedarse.Llama a los ge- neralesSepulveda y Urrutia. Dela en libertad de acci6n a Ia guardiapresidencial de Carabineros.No, a estaal- tura de los acontecimientosno tiene sentidocontar con

91 Interferencia Secreta defensoresa sueldo.Qt. sequeden , ^rriesgandola vida, sôlo los que creanque asf cumplen con su deber.Aquf ya no importan las jerarquiasy las6rdenes. Aquf estâen juego la conciencra.Los carabinerosdeciden abandonar el palacio. Sôlo el generalJosé Marîa SepÛrlvedase resis- tirâ, casihasta el final, a abandonaral Presidente. i,Y la casiveintena de detectivesque estabanen el Palacio?El Presidentehizo llamar aI inspectorJuan Seoanepara liberarlo de toda responsabilidad. -Estaba en el Sal6nToesca, sentado sobre una mesa grande.Me dijo que yo y mi gente estâbamosliberados y que pod(amosretirarnos. Insisti6 en que debfa infor- mar a mis hombres que estabanliberados. Cuando le clije que yo me quedaria,respondid aigo asi como que sabfaque esa sefiami decisi6n.No fue nadagrandilo- cuente-recuerda Seoane.2 El jefe de la secciônPresidencia de la RepLiblicade Investigacionesbaj6 a reunirsecon sus l-rombres.56lo qr-redabandieciséis en total.Uno habfadesertado. "Trans- miti el mensajea toda la dotacidny todosdecidieron quedarse.Todo fue muy simple, sin grandespalabras ni melodramas.Estâbamos cumpliendo con nuestrodeber", ^gfegaSeoane. -Me quedé porque era mi obligaci6n.Juré defen- der la ley hasta dar Ia vida si era necesario.2Con qué cara me habûa presentadofrente a mis hi jos si no lo hacîa?-asegur6 luego el detective David Garrido. -No, no éramos héroes. Tampoco querfamos inmolarnospor un idealpoiitico. Eramosservidores pfi-

9il Caltittt/,, Cuttra; La conexiôa qtrc debii su secreta blicoscon mucho miedo, pero con la ciaridadsuficiente para entenderque, si abandonâbamosnuestros puestos, éramosun fraude como policfas-di jo Juan Seoane. Si, actuaron como héroesen un momento clave. Vieron salir a los carabinerosy supieronque se queda- ban solosen la defensadel Palacio.Aun sumadosa los hombres del GAP, eraî muy pocos y con armamento menor frente al asedio.La l6gica de los detectivesncr recorri6 el camino de salvarel pellejo a cualquier pre- cio. Por alguna raz6n,estos policias de ropasciviles te- nian conciencia.Y unospensaron en la historiaque con- tarian a sus hijos, si sobrevivfan.Otros recordaronsu juramento de defenderla ley y al gobierno legalmente constituido. Dieciséisnombres que la historia debe re- cordar:JuanSeoane Miranda, Orlando del Pino Abarca, CarlosEspinoza Pérc2, Quintfn Romero Morân, David Garrido Gajardo,Eduardo Ellis Belmar,Pedro Valvercle Quifrones,Erasmo Torrealba Aliaga, f)ouglas Gallegos Todd, CarlosSan Mart in Z6niga, JoséSotomayo, Alu- mos, Juan Romero Morân, Luis Henrfquez Seguel, Reinaido Hernândez Tartfefro.Héctor Acosta Rey y Gustavo BasaureBarrera. Y mientraslos detectivesde La Monedadaban prue- ba de su entereza,en el cuartelcentral de Investigacio- nes ocurrfa lo contrario. JoanGarcés asegura que aqui fue donde ei presidenteAllende perdid la serenidadpor unos instantesy se dejd atr^par por la ira. Se recibi6 en La Moneda el llamado de Alfredo Joignant, director de Investieaciones.

99 Interferencra Secreta

-Presidente, y^ no hay nadaque se pueda hacer. Entregué el mando de Investigacionesal prefecto Carrascoy... -interrumpi6 -;2Qué?I 2Quehizo qué/ el Presiden- te. Los improperios subieron de tono, mientras los médicosobservaban al Presidente,temiendo un sfnco- pe. Un hombre de su confianza,a carélodel r-inicocuer- po armadoque no se habiasumado al golpe' abandona- ba su "puesto de combate" y dejabaa sus hombrescon un solocamino por delante:plegarse a la rebelitlncon- tra el gobierno. Esefue un momento inolvidablepara lclscletecti- vesque estabanen La Moneda:"Por un citrifononre lla- maron desdeei cuartel Generalde Investigaciones.Era el ayudantedel director,Carlos Bravo, para saberctimo seenconrraba el Presidente.Me dijo que el directorv el sr-rbdirectorhabfan abandonadosus puestos ,y clLle cluien hacîade cabezaera el prefecto inspector René Carrzrsco. Le pedf que le informarade nuestrasituacidn y nre lla- marade vuelta", recuerdaSeoane. Pocosminutos después,lleg6 el liamadodel mis- mo prefectoCarrasco: -Todo estâ perdido para ustedes.No hay vuelra' Recibf una instruccidn del Ministerio de Defensa,asf que digale ai Presidenteque la situaci6nla dominan los militares. Mire, dîgaleque hay que evitar un derrama- miento de sangreinr-itil, qr-re lo mejor que puede hacer

100 Ctpfttl,, (ttttrr: Ld .tn(xiilt qtrc deLii ser secreta esretirarse. Digale que yo hablo con ellosy consigouna tregua -dijo Carrascoa Seoane. En esemomento, la balaceraera intensa.Balas de todos los calibres, disparadaspor cafronesy ametralla- doras, destruian ventanales,muebles, cuadros, lâmpa- ras, paredes.Era un infierno de astillas,de humo, de estallidos. Guarecerseen oficinasy patios interioresfue la or- den. Lasgruesas paredes del ediflciogubernamental ase- guraban allf refugio. Por el momento. ***

-General Pinochet (Peffalolén): Augusto habla a Patricio,Augusto hablaa Patricio.Lo siguiente:me aca- ban de informar que piensa ^tacarcon brigadassocialis- tas el Ministerio de Defensael sefrorPresidente' Hay que estar listo para atàcar.Ya di las comunicaciones. Ahora hay que alertara la gente y tener a todo el mundo con las armasautomâticas en las ventanasy, enseguida, atacartambién a los francotiradoresque estânen los edi- ficios de enfrente.

-Vicealmirante Carvajal (Ministerio de Defen- sa): Sf, seestâ haciendo. Ya se tomaron medidas.

-General Pinochet (Pefralolén): Otra cosa.La ra- dio que estâtransmitiendo, las radiostienen que trans- mitir nuestroprograma y tienen qlle transmitir en ca- dena lo que estamoslanzando al erire,que no estamos

101 Interferencia Secreta atacandoal pueblo, estamosatacando ia los marxistas! que tenian dominado al pueblo y lo tenian hambreado.

-Vicealmirante Carvajal (Ministerio de Defen- sa):Correcto, sf... se estâenviando esa informaci6n que tû mandaste.Ya se entreg6a la radio ya...

-General Pinochet (Pefralolén):;Estân atacando los tanques?;Estâ la Escuelade Infanrcrî.a?iL\egl o no? ... iLIegl la Escuela de Infanterîa?

-Vicealmirante Carvajal (Ministerio de Defen- sa): La Escuelade Suboficiales...("con el comandante Canessa",le sopla un ayudante)...con el comandante Canessa...("la artilleria del Tacna",agrega el ayudan- te)...IaArtilleria del Tacna,mâs los Blindados.Los cara- binerosse retiraron de La Moneda.Los vimos salir de La Moneda.

-General Pinochet (Pefralolén):Mendoza controla los carabineros...

-Vicealmirante Carvajal (Ministerio de Defen- sa):Correcto, Mendoza controlalos carabineros.Me di jo que la Direccidn Generalde Carabineros,el edificio, lo tienen neutraiizado y lo van a dejar para el riltimo. No ha habido ninguna reacci6n,no han disparadonada des- de ei ... desdeel edificio.

L02 Capitnlr' Cuttro: Ld c,tnexiitt qae dehi'i ser secreta

-General Pinochet (Pefralolén):Conforme. Otra cosa,Patricio. A las onceen punto de la mafra,nahay que atacarLa Moneda, porque estegalio no se va a entre9ar'

-Vicealmirante Carvaial (Ministerio de Defen- sa): Se estâ atacandoya... Se estâ rodeando y atacando con... con... a ver...con bastantefmpetu. Asi que yo creo que pronto van a poder tomarla.

-General Pinochet (Pefralolén): Conforme' En seguida se saleal avi6n,viejo, y se despachaa/tiro.

-Vicealnirante Carvaial (Ministerio de Defen- sa):Ne ... negdla posibilidadde avi6n.

-General Pinochet (Pefralolén): iLa neg6?

-Vicealmirante Carvaial (Ministerio de Defen- sa): Pidi6 al EdecânMilitar que los Comandantesen Jefe concurrierana La Moneda.

-General Pinochet (Pefralolén): concurraal Ministerio de Defensa.

-Vicealmirante Carvaial (Ministerio de Defen- sa): ...concurriraqu( al Ministerio de Defensa.A lo me- ior.. .

-General Pinochet (interrumpe): 1Ya a concu- rrir élt ...iÉI va a concurrir?

103 I nrerferenci.r Secreta

-Vicealmirante Cawajal (Ministerio de Defen- sa):No, se neg6...

(apareceuna voz que complica el enlace)

-General Pinochet (Pefralolén): ... yo sabfa... (inentendible)...me dijo a mi como eragiienazo para...la idea es que si llega p'a/lci Io netis en el s6tano.

-Vicealmirante Carvaial: Sf ...

-General Pinochet: ...selo dijo. Asi que no, por ningrin motivo. Que vayaal Ministerio de Defensa.Ahi liegamos todos. Pero, ahora,ataque a La Moneda, lfuer- te!

l\ ottts: 1 Allende1' la experienciacbileua, Joan E. Garcés,Ediciones Bat. r "Asf muri6 Allende", Gonzâlez-Yerdugo-Monckeberg,revrsta Anrilisis(junio 1981)

r04 Capfruro crNco ArrENoE No sE RINDE Qur sr RINDA,que vaya al Ministerio de Defensa,que renuncie. El Presidenteya ha dicho su riltima palabra, la dijo en un discursodirigido a Chile entero,pero ellos no puedencreer que seacierto. "iAtaque a La Moneda,fuerte!" Es la orden del ge- neral Pinochet y se estâ cumpliendo. Del palacio res- ponden los que pueden responder. -Me pasaronuna metralleta. Y recuerdoque me la quedémirando, sin entenderqué podfa yo hacercon esa cosa.Pesaba muchfsimo y yo no tenfa Ia menor idea de c6mo hacerlafuncionar. Asi que la dejé en el suelo -recuerdael doctor Arturo Jir6n, ex Ministro de Salud' Pero el Presidentesi sabe c6mo funcionan las ar- mas. Y Iogra escabullirsede la protectora mirada de ia Payita, que lo sigue por donde va. Ella lo encuentra, momentosdespués, tendido en el piso de la oficinaveci- na aI despachopresidencial, disparando por el ventanal.

ï07 InterferencIaSccretJ

Le grtta, clamandopara que desistay seretire a un lugar mâs seguto.Él desoyesus rueÉlos. -Ahi lleg6 laPaya a pedirme que lurayudara. Y me deslicégateando por la piezahasta alcanzarsus tobillos y empecéa ialarlohaciaattâs.El seresistid, grit6 un par de garabatosy al ver que era yo quien lo tomaba,dijo: "Ah, erestir Jironcito".Y aceptdsalir de esaoficina cuan- do le dije que necesitâbamoshablar con é1 -relata el doctorJirdn. El ataque terrestreno da tregua. En el despacho presidencial,los defensoresdisparan por las ventanas, agazapândosecomo pueden para evitar ser heridos. Un tanque haceblanco y la granbala abre un boqueteen la pared. El detectiveQuintfn Romero estabaallf: -Nos arrinconamostodos, cayeron brasas y comen- zarona quemarselas alfombras.Fue terrible. El impac- to pas6por la ventanaque estabaabrerta.Gateando lle- gamos hasta donde se iniciaba el fuego y lo apagamos con cojines.En eseinstante, comenzô a sonarun teléfo- no. Nadie lo atendîa,ya que estâbamostodos parapeta- dos. Al final, de punta y codo, alcancéel aparato y Io levanté."Flabla Tencha,2con quién habl6?"Me identi- fiqué y la sefroradel Presidenteme pidi6 que la comu- nrca;raconsu esposo.Le expliquéque eraimposible, que disparaban."2D6nde estâSalvador? , preguntô. Y lue- go de explicarle la situacidn, en pocaspalabras claro' termind diciendo: "Yo voy a salir de Tomâs Moro. Co- muniqueselopor favory.. . cufdenmelomucho". No pude darleel recadoal Presidente,ya que poco despuésquedé aislado-recuerda Romero.

108 Capitttl,, Cirtc,'; Al/nde n,t se rinde

En la casapresidencial de TomâsMoro, ia Primera Dama ha aceptadola posibilidadde un ataqueinminen- te. Los helic6pterospasan a muy baja altura. Hasta un avi6n hace vuelos rasantes.El detectivea cargode su custodia,Jorge FuentesUbilla, la convenci6de salirpara buscarun refugio mâs seguro. Ella escoge la casadel economistaFelipe Herrera,ex presidentedel BancoIn- teramericanode Desarrollo(BID). EnLa Moneda, arrectael ataqueterrestre. Y el tic- tac de un invisible reloj parececontar los segundospara el anunciadoataque aéreo. El Presidentesabe que él debe morir, pero quiere salvarla vida de quieneslo rodean.Y los que estânallf quierencompartir el destinodel Presi- dente,acompafrarlo hasta el final, imaginandouna suer- te de milagro que permita a todos sobrevivir.Quizâs el milagro venga en las alasdel rumor que corre por los pasillosde La Moneda:el generalPrats viene con tropas desdeel norte. El Presidenteno seaferra a rumores.56lo sabeque los hechosmarcan tiempo de muerte. ;Cdmo romper la amarrade la lealtad y del afectoprofundo que tiene an- cladosjunto a éI a esoshombres y mujeres?2Qué hacer para convencerlos?El Presidentereclrfre a todos los ar- gumentosposibles. Decide reunirlos en el Sal6n Toescay hablarles' Comienzacon un breveanâlisis politico de lo que signi- 1 fica el golpe de Estadoen curso, triunfo de las fuerzas I reaccionariaspara anular el "honestointento que hemos ] hecho,en estostres afros, por darledignidad al pueblo".

109 Interferencia Secreta

No, lo que estâsucediendo aIlâafuera no es un episodio mâs en el dificil panoramaque ha debido enfrentar el gobierno de la Unidad Popular en estostres afros.No, no se equivoquen.Lo que estâsucediendo marcarâ con sangrela historia de Chile por muchos afros.Aqui se juegala vida o la muerte. "Sdlo deben quedarseaquf los que puedan y quieran combatir. Los que tengan algû'n impedimento paracombatir, deben abandonar de inme- diato La Moneda.Los finicosque tienen la obligaci6nde quedarseson ios miembros de mi escoltapersonal. iBstâ claro?No quiero mârtires.Escuchen bien, ino-quie-ro- mâr-ti-res!Pediré una treguay saldrân".Sigue argumen- tando, casiruega. Todos lo miran. Todos semiran cuan- do él termina de hablar. Nadie se mueve. ZQué hacer?Su hija Beatriz tiene mâs de siete me- sesde embanzo. Ya dos vecesle ha pedido que se vayay ella sigue ahi, inconmovible. -No, papâ,no insistas.Me voy a quedaracâ... Sigue ahf como estuvo los mil d(as de gobierno, trabajandoen la oficina vecina al despachode su padre. A su asesorJoan Garcés lo convencede salir con un argumento final: "... y, por riltimo, alguien tiene que contar lo que aquî ha pasado,y s6lo usted puede hacer- lo, 2no es cierto?" Los otros que escuchanasienten con el gesto.l ***

-Carv ajal: Aquf Patricio, adelante.

110 Capitu/o Cinco: Allende no serinde

-Pinochet: Patricio,habla Augusto. Dfme'.. el se- fiorAltamirano, el sefror...este otro... ehhh...Enrfquez... el otro sefror...2c6mo se llama? ... Palestro...y todos estosgallos, 2d6ndeestân metidos? ...;los han encon- trado o estân fondeados?

-Carvajal: No tengo informaciones de ddnde se encuentran.Voy a...

-Pinochet (interrumpe): Es convenientedarle la misi6n al servicio...al serviciode Investiga...al servicio de Inteligenciade las tresinstituciones para los ubiquen y los tomen presos.Estos gallos deben estarfondeados porque son verdaderasculebras...

-Carvajal: Conforme, conforme. Yo acabode'.. el comandante Badiola estâen contacto con La Moneda. Entonces,le va...le va a transmitir el ofrecimiento,este irltimo, de rendici6n. Me acabande informar de que habrîa intenciôn de parlamentar.

-Pinochet (interrumpe): Parlamentar significa que (inentendible)...No, tiene que ir a La Moneda él con una pequeffacantidad de gente...

-Carvajal (quien ha seguido hablando): .'. se re- tiraron, pero ahf...

-Pinochet (corrige su frase anterior): ...aI Mi- nisterio.al Ministerio...

111 Interferencia Secreta

-Cawajal (sigue hablando): ... que estabaofre- ciendoparlamentar...

-Pinochet (vuelve a interrumpir): Rendici6nin- condicional, nadade parlamentar...;Rendicidn incon- dicional!

-Carvajal: Bien, conforme.Rendici6n incondicio- naI y se le toma preso,ofreciéndole nada mâs que respe- tarle la vida, digamos.

-Pinochet: La vida y se le... su integridad fisicay en seguidase le va a despacharpara otra parte.

-Carvajal: Conforme. Ya... o seaque se mantiene el ofrecimientode sacarlodel pafs.

-Pinochet: Semantiene el ofrecimientode sacarlo del pafs...pero el avi6n secae, viejo, cuandovaya volan- do.

-Carvajal: Conforme, je, je (se rfe)... conforme. Vamos a procurar que prospereel parlamento.

*** Camina a pasofirme por la Galerî.ade los Presiden- tes. La balaceraen el exterior resuenapor los ventanales y puertasdestruidos. De repentese detiene y, junto con é1,los tres guardiaspersonales que Io acompaôan.Da

11) Capitulo Cincrt; A//ende na se tinde una mirada a los bustos que evocanIa historia pauia y que yacensobre los pedestales,inconmovibles, mientras el golpe de Estadose consuma. 2Yan a salvarseilesos los Presidentes?;Van a quedarseasi como asi mientrasLa Moneda es acribilladapor los cuatro costados? -lDestruyan ^ todosestos viejos de mierda! Sdlose salvan Balmaceday Aguirre Cerda. ;Sdlo ellos! Los otros... lal suelo!-dice Allende al tiempo que empuja con fuerzael busto de GonzâlezVidela. Los tres hombres del GAP cumplen la orden. Las cabezascaenal piso y sehacen afiicos. La quebraz6nanula, por unos instantes,el sonar de las balas.Y sale de Ia galerî.a,dejando atrâs s6lo al Presi- dente Balmaceda-quien se habfa suicidadocasi un si- gIo atrâs,tras el golpe de Estado que castig6 sus impe- tus revolucionarios-y al PresidenteAguirre Cerda,quien encabez1el gobierno del Frente Popular en 1938. ***

-Puesto Dos (Fuerza Aérea):Estado sitio, solici- to estadositio. Y toque de queda,y toque de quedaa las 18 horaslocal, a las 18 horaslocal. Firmado golf alcon get, firmado golf alcon get. Dîgame c6mo recibi6, cam- bio.

-Puesto Tres (EscuelaMilitar): Solicitoestado de sitio, solicito estadode sitio, y toque de queda,y toque de queda,a las 18.00,a las 18.00 horaslocal, horas lo- cal. Lo firma golf alcon fer, golf alcon fer, Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea.Déme roger.

*** rr3 Interferencia Secreta

El Presidentedecide jugarse a fondo para conven- cera las mujeres.Deben salir cuanto antes.Ordena que las reirnan.Sus hi jasBeatrrz e Isabel.Las periodistas Frida Modak, Verdnica Ahumada y Cecilia Tormo. La cubana Nancy Jullian, esposade Jaime Barrios,presidente del Banco Central. Una secretaria,la de Daniel Yetgata, subsecretariodel Interior. Una enfermeradel equipo médico.Y Miria Contreras,la Payita...

**t<

-Vicealmirante Carvaial: Augusto de Patricio, adelante.

-General Pinochet: Patricio,hay que hacer'..con- forme con toque de queda, conforme con el estado de sitio, pero hay que agregar algo. Se va a aplicar Ia Ley Marcial a toda personaque se le sorprendalcon armaso explosivos,va a serfusilado de inmediato! ... sin esperar juicios sumariosni sumari...

-Vicealmirante Carv ajal: Conforme. Ley Marc ial. .. esdecir, Estado de Sitio, toque de queday a todo el que se le sorprendacon armaso explosivosserâ ejecutado de inmediato.

-General Pinochet: ...LevMarcial.

n4 C/zpitill0 Cinco: A//ende na se rintle

*** "No me hagan las cosasmâs dificiles", argumenta el Presidenteante las mujeres.Los disparosy estallidos dificultan la audicidn.El cfrculo femenino se estrecha. "Deben salir y debensalir ahora,antes del bombar- deo. Estamos en comunicaci6n con el comandante Badiola,en el Ministerio de Defensa,y voy a pedir una tregua para que ustedespuedan salir" ***

-Vicealmirante Carvajal: Augusto, aqui Patricio...

-General Pinochet: Augusto habla a Patricio. Mira, Tomâs Moro se ha dejado de mano. Ahf hay un centro de comunicaciones.lLo habrân ocupadolos cara- bineros?

-Vicealmirante Carvaial: Los carabinerosestaban desocupandoTomâs Moro y entoncesse va a atacar.Se estâpidiendo a laFuerza Aércaque lo bombardee...

-General Pinochet (interrumpe): O sea,ha esta- do evacuadode carabineros...Me explico...

-Vicealmirante Carv aial: ... entoncesva a serbom- bardeado...

-General Pinochet: Me explico. A ver si entendi bien. Carabinerosva a evacuarTomâs Moro v laFuerza Aérca lo va a bombardear.

llt Interferencia Secreta

-Vicealmirante CarvalaI: Eso es correcto.

-General Pinochet: 2A qué hora?

-Vicealmirante Carvaial: En cuanto seaposible, se estândando las 6rdenes.

-General Pinochet: No te olvides que el primer objetivo es La Moneda,pues viejo.

-Vicealmirante Carvajal: Si, pero no esconvenien- te actuar en La Moneda con la Fuerza Aérca,pero sf en TomâsMoro. En La Moneda estamosesperando la veni- da del General de Carabinerosque va a ventr a parla- mentat acâ.

-General Pinochet: Conforme.

-Vicealmirante Carvaial: Se estâ esperandoeso. El comandanteBadiola es el hombre de enlacecon La Moneda a travésdel teléfono.

-General Pinochet: Ten cuidado con el sefrorPre- sidente, que es muy re cbueco,no dice nunca la verdad. Asi que hay que tener mucho cuidado con é1.

*** -Nos vaî a matar afuera,Presidente. Escuchelos balazos,escuche... Y entre morir en la calle y morir en

rr6 Capittl10 Cinco: AI/ende no se rinde

La Moneda, me quedo aqvî, con usted -argumenta la periodistaVer6nica Ahumada. Ét tu mira. Tiene poco mâs de veinticinco afros.Se ve menor afin, con su largo pelo lacio y negro. -No, no van a morir ni adentroni afuera.Ustedes van a vivir. Y usted,Ver6nica, acuérdese que tiene que escribir lo que aqui ha pasado.Ese es su compromiso. Vamos a esperarque cumplan con la tregua que prome- tieron. Y ahi saien... va a haber un jeep esperândolas afueta. El tono del Presidentees gfàve.No da lugar a dis- cusionesesta vez. Sus hijas se resisten."Mi hermanay yo tuvimos variosdiâlogos muy diffcilescon é1.Prime- ro nos pidi6, luego nos rogô y después,con desespera- ci6n, nosordenf salir ante nuestraresistencia", recuerda IsabelAllende.2 ***

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Pues- to Cinco, PuestoDos le Ilama. PuestoCinco, PuestoDos le llama, cambio.

-Puesto Cinco: Parael generalLeigh, generalDiaz paraeI generalLeigh. Cambio.

-Puesto Dos (Academiade Guerra Fach):Aqui generalLeigh paru generalDîaz,cambio.

-General Nicano r Dîaz Estrada (Puesto Cinco): Mi general, se trata de aguantar un poco el ataque a La

It7 Interferencia Secreta

Moneda porque se habl6 con el seftorTohâ y van a man- dar un parlamentario, van a mandar un parlamentario. Por lo tanto, que aguanteun poquitito. Yo lo llamo por este mismo medio una vez que tengamos clan la situa- ci6n, cambio.

-General Leigh: PuestoDos para...general Leigh parageneralDiaz. Esaes una maniobradilatoria. Esaes una maniobra dilatoria. Much...(secorta por irrupci6n de PuestoUno)

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): Puesto Tres de PuestoIJno, cambio.

-GeneralDîaz (Puesto Cinco): ... puedensalir los homb...lasmujeres y algunoshombres que quieranaban- donar La Moneda y, si no, vendria el general Seprilveda, de Carabineros.Si no hay un entendimientocon é1,pro- cederfamosal ataque de inmediato. Cambio. No mâs de diez minutos.

-General Leigh (Academia de Guerra Fach): Correcto.

***

El Presidentele pide al doctor Jir6n que interven- ga pafaconvencer a Beatriz. Fue su profesoren la Escue- la de Medicina y la joven lo respetaprofundamente. -La Tatr era una mujer de firmes conviccionesy adorabaa su padre.Querfa quedarsejunto a é1,sin me-

118 Capirulo Cinco: Allende na serinde dir los riesgosp^fa ellay su embafazo. Estabarranquila. Diria que estabatranquila-desesperada, sabia que la si- tuacidn era gravisima,que se corria riesgo de muerte y, a la vez, estabaserena -recuerda Jir6n. Habîa que recurrir aI mâximo poder de convicciôn' El médico cierralos ojos y evocalo que le dijo: -Mira, Tati, aqu( vas a ser mâs una molestia que una ayuda. Piénsalo un segundo y me vas a encontrar raz6n.Tienes un embarazode mâsde sietemeses, tienes que cuidat a r.û hijo, lqué vas a hacer aqui? Mira, nos van ^ bombard eaf, van a c^er bombas de verdad. No te podemos cuidar. Por favor, ândate.Ândate con las mu- jeres.Tu padre necesitaque te vayas... Beatriz lo mira fi jamente. Sabeque la vagedia estâ batiendo alas sobre el palacio. Cadabala de cafr.6nreafir- ma lo inevitable.No contesta.'. ***

-Puesto Cinco (Ministerio de Defensa): General Dîaz para General Pinochet, cambio.

-General Leigh (Academia de Guerra Fach): "' que estéen el aire listo para iniciar operaci6n.Comuni- que también que Tomâs Moro va a ser batido de treinta a cuafentaminutos, dentro de treinta a cuafentaminu- tos. Cambio.

-General Dîaz Estrada: Conforme, mi general' TomâsMo... ehhhh...Tomâs Moro va a set batido den- tro de treinta a cuatentaminutos. Cambio. rrg Interferencia Secreta

-General Leigh: Correcto.

-General Dîaz Estrada: Conforme, mi general. Termino de hablar.

*** -Presidente.Badiola al teléfonodesde el Ministe- rio de Defensa... Allende toma el auricular.Escucha. Y contestacon tono golpeado. -Mire, comandanteBadiola, iel Presidentede la Repriblicaatiende y recibeen La Moneda! ... 1Lequed6 claro?Transmita mi mensajetal cual. Si quieren hablar conmigo, ique venganacâl "El Presidentese mantuvo siempre entero, total- mente hicido. Controlabacada uno de susmovimientos y palabras.Estaba ^ cargode la situaci6n", recuerdael doctor Jir6n. ***

-General Pinochet (Pefialolén-Puesto Uno): Patricio,te hablaAugusto. lPatricio!... Dime si me es- cuchas,Patricio.

-Vcealmirante Carvajal (Ministerio de Defen- sa): Sf, escuchobien. Adelante.

-General Pinochet: Mira, estecabaliero lestâ ga- nando tiempo! ;Estamosdemostrândonos débiles noso- t20 Capitalo Cinca: Allende no se rinde

tros! iNo, no aceptesningûn parlamento!;El parlamen- to esdiâlogo! iRendici6n incondicional! ... Es bien cla- ro lo que te digo: ;rendici6nincondicional!... Si quiere viene é1,acompafrado de Seprilveda,al Ministerio, y se entrega.Si no, ivamosa bombardearcuanto antes! Dile...

-Vicealmirante Carvaial: Conforme. Le estamos dandodiez minutos de tiempo paraque...ehhh... salgan de La Moneda.Se le estâinformando que, en diez minu- tos mâs, se va a bombardear La Moneda. Yo estoy en conversaci6ncon JoséToh â. Me dice que estânademâs allâ Almeyda y Briones.Se le estâcomunicando que en diez minutos mâs...ya se le comunicd...que en diez minutos mâs se va a bombardearLa Moneda. Asf que tiene que hacer...rendirse incondicionalmente y, si no, sufrir las consecuencias.

-General Pinochet: Esosque me acabasde nom- brar tri, anlba de un avi6n y sevan de inmediato, viejo' A las doce estân volando pafa otfa parte.

-Vicealmirante Carvajal: Conforme, asî se va a I I transmitir. t I -General Pinochet: No podemos aparecercon debilidad de carâcrer,^ceptândole plazos y parlamento a estagente porque... ino podemosnosotros aceptar pla- zos ni parlamentos,que significa diâlogo, significa de- bilidad! Todo esemontdn dejeTones que hay ahî, el sefror

I2I lnterferencia Secreta

Tohâ,el otro sefrorAlmeyda, todos estosmugrientos que estabanechando a perder el pafs, hay que pescarlospre- sos...y el avi6nque tienesdispuesto tri, arribay sin ropa, con lo que tienenP'a fuera,viejo.

-Vicealmirante Carvaial:... esJosé Tohâ. Y él me dice que espereun momento para convenceral Presi- dente ("Estâ en el teléfono",le dice el ayudante)...

-General Pinochet: lNegativo!

-Vicealmirante Carvaial: ...estâen estemomento en el teléfono. Voy a hablar con é1.

-General Pinochet: ...tivo.

-Puesto Cinco: Conforme,mi General,conforme, mi General,quedamos en esperade su respuesta.Cam- bio.

*** Los ministros piden una reunidn con el Presidente. Ahi estânel cancillerClodomiro Almeyda; el ministro del Interior, Carlos Briones;el titular de Agricultura, Jaime Tohâ; el ministro SecretarioGeneral de Gobier- no, FernandoFlores, y el ex ministro de Defensa,José Tohâ. No, no han querido abandonat La Moneda pesea los reiteradospedidos del Presidente' Ahora quieren jugarse a fondo para tra:tarde salvar la vida del Presidente.Reunidn a puertascerradas. ;Sa-

t22 Capitulo Cinco: Allende no serinde lir, rendirse?Los argumentosemergen de uno y otro, tratando de convencerlo.El Presidente los hace callar con un gestoamable. Entiende sus esfuerzos.Han sido tan lealescomo parapermanecer aûn en La Moneda,balo el asediode un ataqueterrestre sin cuartel.Paraellos no tiene sino agradecimiento.No puede reprenderlospor su intento. Peroestân equivocados. No, el Presidentede Chile no se entrega ni se rinde. No. Es su frltima pala- bra. Los Ministros deciden irse hacia el sectorsur del palacio, donde estân las oficinas de la Cancilleria. Hay que buscarun espaciodonde poder discutir y reflexio- nf. **x

-General Pinochet: Gustavo, nosotros no pode- mos aparecercon debilidad de carâcter.Y es nefastodar plazosy aceptafparlamentos. iNefasto dar plazosy acep- tar parlamentos!El avi6n que tienes dispuesto tû para el Presidente,hay que ir a deiara todos estoscampeones que estândando vuelta... el Tohâ,el Almeyda, todoses- tos sefroresarriba del avi6n y mandarlos,los mandamos de un viaje ya sea...a cualquier punto que tfi consideres necesario...menos a Argentina. Adelante,cambio.

*** El bombardeoestâ retrasado. EnLa Moneda no sa- ben qué significa el retraso.2Serâ sdlo una bravatay no se atreverân ahacerlo?;Se podrâ bombardearel palacio

LZ) Interferencia Secreta sin destruir los edificiosa su alrededor?Y si el bombar- deo comienza,lqué lugares ofrecerânmâs resistencia?, 2d6ndeguarecerse? Unos hablan de subterrâneos,otros de galeriasinteriores. Unos prefieren obviar el tema y se concentranen contar los viveres,como si hubiera que resistirun largo asedio.2Tenemos agua, con cuântaco- mida se cuenta? ***

-Puesto Dos: General Diaz, aquf generai Leigh, cambio.

-GeneralDîaz Estrada: Mi General,en estosmo- mentossale del Ministerio un jeepa La Monedaa retirar seismujeres, seis mujeres. Serâ cuestidn de tresminutos paraque aguanteel ataque.Cambio.

-General Leigh (Academia de Guerra Fach): Déjense,déjense de laboresdilatorias y de mujeresy de j..p. ;Yo voy a atacarde inmediato! lCambio y termina- do!

-General Dîaz Estrada: Conforme.

*** -Tati, estavez no te lo pido. Te lo ordeno. Debes salir de inmediato. Me estâsimpidiendo actuar con li- bertad. Si me quieres ayttdar,tienes que salir de inme- diato. 1Yo necesito saber que tfi y tu hermana estâna

124 Capira/o Cinco: Al/ende no serinde salvo! Esa es la misidn que te doy: sacarde aqui a tu hermanay salir tûrcon esacriatura que llevasadentro. 2Entendiste?... Ella lo mira. Ét tu mira. Los ojos estânconectados, como siempretuvieron conectadassus almas desde que ella naci6.Él sabeque ella ha accedido,que no se resis- tirâ mâs.Laabrcza. No puede estrecharlafuerte, el abul- tado vientre lo impide. Al ofdo agregaotra misi6n, para sedar la despedrda:"Hay que contar aI mundo lo que aquf ha sucedido.Tfr debesayudar a hacerlo, hria". No hay tiempo paru mâs. Los segundoscorren en contra.Sf, Ias mujeres vana salir de inmediato.Hay que avisaral Ministerio de Defensa. ***

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Puesto IJno, PuestoTres.

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): Puesto Tres de PuestoUno. Adelante.

-Puesto Tres: 2Estâmi generalPinochet?

-Puesto IJno: Afirmativo.

-Puesto Tres: Dîgale a mi general Pinochet que mi generalLeigh manifiesta que correctoy que atacade inmediato La Moneda y Tomâs Moro con cuatro aviones de combate.Déme roger.

L2i Inter[erencia Secreta

-Puesto Uno: Recibido.Conforme.

-Puesto Tres: PuestoDos de PuestoTres...

-Puesto Dos: Aquf Pues...

-General Pinochet (interrumpe): Que esperenun momento, esperenun momento los avionesde La Mo- nedaporque vana salir lasmujeres, las hi jasentre ellas...

-Puesto Tres: Dos adelan...

-Puesto Uno: PuestoTres de PuestoUno. Cam- bio.

-Puesto Tres: Adelante Puesto Uno para Puesto Tres.

-Puesto Uno (Pe6alolén-Ei&cito): En lo que se refiere al ataque aéreo a La Moneda, que esperen un momento que van a salir seismujeres. La esperano debe ser superiora tres minutos.

*{<*

El Presidenteencabeza eI grupo de mujeresque baja por la escalerahacia la puerta lateral de Morendé 80. Ordend que todas balaran de inmediato. No se atteve a mirar atrâs:sabe que laPayita no estâen el Srupo' Sabe que si retrasala salida, para buscaila y hacerlasalir, los r26 Capita/o Cinco: A//ende no se rinde

riesgosson muy altos. El riesgo de que su hija Beartrz echepie ^trâs.El riesgode que se inicie el bombardeo. Abre la puerta y mirahacia afuera.Estira elbrazo y asoma su mano con el pafro blanco que alguien le ha pasado.Se escuchandrdenes militares. No hay balazos. -iYa, salgan, râpido! Corran hacia la Intendencia, aIlâ hay un jeep esperândolas-dice al tiempo que em- puja suavey firmemente a la primerahacra la vereda. Salen las seis. Beatriz e Isabel Allende. Ver6nica Ahumada, CeciliaTormo, Frida Modak, Nancy Jullian. No hay ningrin jeep esperândolasen la esquina.Se in- ternan unos metros por calle Moneda hacia el oriente. IJna voz les grita: "iAcâ, acâ, vengan!" Un periodista del diario opositor La Prensalas conducehacia ei subte- rrâneo.Vuelven a resonardisparos aislados. No hay mi- litares a la vista. Las tropas estân parapetadasaIa espera del bombardeo. ***

-Puesto Dos (Academiade Guerra Fach):Ade- lante,mi generalDîaz.

I -GeneralDîaz I Estrada: Comuniquele a mi Gene- l ral que las mujeressalieron. La Moneda estâlibre para atacar.Cambio.

***

LaPayita, 2d6nde se meti6 laPaya? El Presidente vuelve a subir la escalera,con el alivio profundo de sa-

127 Interfèrenc.iaSecreta ber a sus hijas a salvo. ;A salvo?Si, no se atreverâna l-racerleda6o a un grupo de mujeres. El comandante Badiolase comprometid a protegerlas.Pero, i.y laPaya? Cuando la vuelve a ver, ella estâhablando con Augusto Olivares y Osvaldo Puccio. Ahi al lado estâ el joven Puccio,sereno, de una madurezinimagible a susveinte afros,en actitud de ser el guardiân de su padre. ;Debi- mos hacerlosalir con las mujeres?Ya es muy tarde. El PresiCt'rflteSe acercaal grupo. Ella lo mira. No hay palabrasdr e>,-oiicaci6n.No son necesarias.Ahora Io urgente es buscarel lugar mâs seguropara protegerse del bombardeo. ***

-Puesto Dos: Mensaje para el sefror general Pinochetde parte del sefrorgeneral Leigh. El ataqueaéreo tiene una leve...unaleve demora.Serâ aproximadamen- te en quince minutos mâs, serâ aproximadamenteen quince minutos mâs. Déme un comprendido.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): Ya, per- fecto.Ataque aéreoa La Moneda tiene una pequefrade- mora, en quince minutos mâs se harâ efecto a Tomâs Moro y aLa Moneda. Roger.

-Puesto Dos: Correcto.

-Puesto Tres: Puesto Uno. Puesto Tres. Puesto Uno, PuestoTres. t28 Capita/o Cinco; Al/ende no se rinde

-Puesto Uno: Cambio.

-Puesto Tres: 2Estâmi generalPinochet?

-Puesto Uno: Afirmativo.

-Puesto Tres: Comunfquelea mi generalPinochet de parte de mi generalLeigh que ataqueaLa Moneda y Tomâs Moro tiene un pequeôoretraso y que en quince minutos mâs se haceefectivo. Déme roger.

-Puesto IJno: Recibido. Entendemosque el ata- que va a llevarsea efectoonce cuarenta.Interesa saber razônde la demora.Cambio.

-Puesto Tres: Ya, perfecto,momentito... (hablan entre ellos)...Puesto Dos, PuestoTres.

*Puesto Dos: PuestoTres, Puesto Dos. Prosiga.

-Puesto Tres: Ehhh, mi general Pinochet manr- fiestaque perfecto,pero que quiere sabermotivo de Ia... motivo del atraso.

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Con- forme, conforme.Qr. los aviones,que los avionesvie- nen de Concepcidn,vienen de Concepci6n,y tuvieron problemas de cargufo. Tuvieron problemas de carguio.

1)c) Interferencia Secreta

-Puesto Tres: Ya, perfecto...Puesto(Jno, Puesto Tres.

-Puesto IJno: PuestoUno.

-Puesto Tres: Comuniquele a mi generalPinochet que los avionesvienen de Concepcidny tuvieron pro- blemas de cargueo.Déme roger.

-Puesto Uno: Recibido. Fuera.

***

Problemasde "carguio".Quince minutos de retra- so por cargalcombustible. Los Hawker Hunter ya vienen surcandoel cielo desdeConcepci6n, ciudad ubicadaa 5 19 kil6metros al sur de la capital. Los rocketrestân pres- tos para ser disparados. ***

-Puesto Cinco: Atenciôn PuestoDos, aquf Puesto Cinco generalDîaz. Cambio.

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Con- forme, mi General. De orden dei seflorComandante en (Hawker Jefe,informaci6n sobredespegue hache-hache Hunter) Concepci6nes vital. Senecesita saber urgente' Cambio.

-General Dîaz Estrada (Puesto Cinco): Ruego repetir,ruego repetir.Cambio.

130 Caphulo Cinco:Allende no te rinde

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Mi general,de orden del seôorcomandante en jefe: infor- macidn sobredespegue hache-hache desde Concepci6n es vital. Se necesitasaber de inmediato. Cambio.

x**<

Quince minutos de retraso.No, la verdades que el retrasoes mayor. LaFuerza Aérease habia comprometi- do a bombardeara las once.Asi se notific ô aLa Moneda por teléfono. Asf se avisd al pafs por radio. Y ahora re- sulta que el bombardeoserâ a las I I.40, quizâs 1L45 horas.El generalPinochet estâ muy enojadoen su pues- to de mando. Enojo que tiene que contener.Estâ en manos de la Fuerza Aérea... Quizâs fue entonces cuando se le ocurriô que su Ejército debia tener su propio Comando de Aviaci6n. Fuerte y potente. Bajo su mando. ***

-Puesto IJno: PuestoCinco de PuestoUno.

-General Dîaz Estrada (Puesto Cinco): Llamo inmediatamente para allâ.

-Puesto Uno: En escucha.mi General.

-General Pinochet: ...ordenéa Brady que actuara con la artillefia con los... o sea,con los sin retroceso,y con Ianza-'ct/ele'.Porque estân atrasadosdiez minutos

I)L lnterferenciaSecreta ustedes.Porque si no estosgallos Yaoa haceralgunas." iya se estân formando pobladasen otras partes!

-General Dîaz Estrada (Puesto Cinco): Confor- me, mi General,le comunicoa la SegundaDivisidn..'

-General Pinochet (interrumpe): iEsaes mi de- cisi6n!

-General Dîaz Estrada (Puesto Cinco): ... y c^- fronessin retroceso.Cambio.

*** -Crei que lo del bombardeono eracierto, que eran puraspatrafras. Con todo el armamento que tenfan afue- ra, disparandoy disparando,y si ademâsnos cortaban el agûa,estâbamos acosados. El bombardeoestaba de mâs, no tenfamospoder de fuego parahaceruna real resisten- cia -recuerda el detectiveQuintin Romero.i lPauairas?En medio de la pesadilla de disparos, mâsvalîa abrirse a la posilidad de que lo peor fuera cier- to. ***

-GeneraI Dîaz Estrada (Puesto Cinco): ...pan comunicarleal sehorgeneral Pinochet que, en estemo- mento, se va a inrciar el fuego desdeArtilleria con los cafronessin retroceso,los caôonesde los tanques,para posteriormente avaîzar con Infantefia. Cambio.

r32 Capitulo Cinco: A/lende no se r"ittde

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército):General, el comandanteen jefedel Ejército, general Pinochet, indi- caque conforme,conforme.

-General Dîaz Estrada (Puesto Cinco): Que los Hauker Hr.rnterdeben estar sobre La Moneda un cuarto paralas doce,o seaen aproximadamenteen sieteminu- tos mâs.

-Puesto Uno: recibido. conforme.

-General Dîaz Estrada: Conforme, terminado.

***

;C6mo sacarde La Moneda a Marcra, la asistente del Subsecretariodel Interior, que se ha quedado reza- gada?Ella se niegaa salir y todo indica que el bombar- deo es inminente. El periodistaCarlos Jorquera recuer- da:4 -La llevé a la oficina de Puccio,en el segundopiso' donde creîa que podfa conectarmepor citdfono con el garale,a fin de que permitieran a Marcia rescatarmi auto. En el fondo, era un pretexto que habfamosinven- tado para convencerlade que tenfa una misi6n que cum- plir y abandonara,por fin,La Moneda. No alcanzôa discarel citdfono cuandopas6 un avi6n y cay6el primer rocket.Once horas,cincuenta y dos mi- nutos. "El remezdnnos bot6 al sueloy con Marcia roda- mos hasta el fondo de la pieza". Bajaron corriendo en

r33 InterferenciaSecreta

busca de un sdtano. Y alIî encontraron al Presidente, sereno,junto a otras personas.El periodistaJorquera estabasin aliento, entre la carreray el miedo. Resona- ron nuevosrlckets, haciendo temblar el s6tano.Allende estir6su mano y le dio un par de golpecitosalentadores ai periodista. -Nosotros no tenemosmiedo, f no, negro?-le dijo en tono familiar a su amigo de tantos afros. -Miedo no, Presidente...;lo que tengoes susto: es- toy cagadode susto! - respondid el periodista, tratando de sacarcoraje de su implacable sentido del humor. El detectiveDavid Garrido, en tanto, estabaen el segundopiso, en un pasillo, junto a tres de suscompa- freros.Oyeron acercarse,en vuelo rasante,a un Hawker Hunter. -Por esascosas de nifro chico le dije a Luis Henri- quez que contâramoshasta tres una vez que el avi6n pa- sara.Sentimos silbar la bomba que caydcasi justo arrlba de nosotros.Saltamos hasta la mitad de la escala.Cuan- do intenté ponerme de pie, me fui pan atrâs,me miré los zapatosy no tenfan tacos, la onda expansiva habîa arrancadolos tacos de mis zapatos.Quintfn Romero y José Sotomayor quedaron aisladosal otro lado, sin po- der regresar- relata David Garrido.t 1Qué hacer? Garrido y Henriquez saben que hay que salir de allf. Hay que escapar.lAd6nde? 2En qué lugar pueden estara salvo?No hay tiempo para pensar, los dos s6lo sabenque hay que salir. El fuego y el humo avanzan.

r34 Capitulo Cinco: Allende no serinde

-En un momento, pensamosen ba,arpor una esca- la de cara.colque dabaal comedordel primer piso. Cuan- do lo intentâbamos, cay6 una bomba en el reposteroy quedamos enredadosenrfe los fierros de la escalefa.Yo le grité: "inegro, negro,subamost" -agrega Garrido' se ha 2Subir?1C6mo subir? La punta de la escala desprendido,los fierros se balanceanpeligrosamente' Abaio, el humo cubre todo. Y el fuego crepita anun- ciando su avance. "Tuvimos que saltar para llegar nue- vamenteal segundopiso y buscarotra salida". -Estâbamos en el living que daba exactamenteso- bre la capilla -recuerda el detective Quintfn Romero- cuando sentimos pasar los avionesy, de repente' llega- ron las bombas. Fue algo muy sorpresivo.Se sinti6 el impacto sobre el techo, el destrozoy luego el polvo' mucho polvo. El fuego surgid de inmediato. Un rocket habîa perforado el techo. Esa zonaqued6 cortada y que- damos incomunicados. Tratamos de arrancar hacia las oficinas de la Primera Dama y sentimos que venfan de nuevo los aviones.Era desesperante,fbamos corriendo pof un pasillo.Alguien rompiô el vidrio de una oficina, paru abrir la puert a. Y entramoscorriendo a refugiarnos debajode los escritorios... En la Cancillerfa,los ministros Almeyda, Briones, refugia- Jaime y José Tohâ, Anibal Palma y otros estân dos en un subterrâneo,junto a las calderas. -Algunas bombas explotaron en el Patio de Los Naranjos,a pocosmerfos de donde nos encontrâbamos. Y luego presenciamosatdnitos c6mo la parte de La Mone-

115 Interferencra Secreta da donde se hallaban los recintos presidencialesse incendiaba y las llamas se extendfan por gr^n parte del costado norte del palacio -relat6 el canciller Al- meyda.6 -No sépor qué -recuerda el doctor Jft6n- nos que- damos en el pasillo del segundopiso. Todos sentados ahf, en el ala oriente de La Moneda, esperandoel bom- bardeo.Y cuando empezaroî a caerlas bombas,por lar- go ratonos quedamos sin movernos.Simplemente espe- rando. 2Esperandoqué? No sé. Esperandola muerte. Esperandoun milagro, no sé. Todo se remecfacon los rockets.En un momento dado, entre una y otra bomba, el Presidentelleg6 y se sentd entre nosotros.El ruido erainfernal... Cada uno de los dieciocho rocketsda en el blanco. Precisidnimpecable la de los pilotos. El esqueletodel centenarioedificio se convulsiona,se quiebra. Las co- Iumnasde humo comienzana elevarse,anunciando a los cuatro puntos cardinalesque la democracia chilena ago- niza. Humo, fuego. Gritos afuera.Gritos adentro. En el pasillo del ala oriente no hay bajas.Ningrin proyectil dio en esazonadondese guarecîanel Presidente,laPaytta y una veintenade suscolaboradores. Parece que el bom- bardeoha terminado. -lEsto va a ser una masacre!-dice una voz, tratan- do de contenerel pânico. -ZQué vamos a hacer ahora?-dice otra. -Esto se va a quemar entero -agfega una tercera voz. ri6 Captttlo Cincr,; A//ende nri k rinde

-aQué vamos ahacer,Presidente? Allende sabequé hacer.Se levanta y haceuna sefra a los que lo rodean.Lo siguen. Y se paîaperabajo una gran mesa,invitândolos con otra seflaa seguirlo. Ahi, tendidos en el suelo, balo la gruesa madera redonda, hablan. -Si cierro los ojos, veo tendidos a Jaime Barrios, Arsenio Poupin, Osvaldo Puccio y otros. Todos tendi- dos junto al Presidente.Hay estallidoscerca, que hacen diffcil escuchar.El aire estâenrarecido por el humo. Creo que entoncesse decide que Flores,Puccio y Yergarava- yanaI Ministerio de Defensaa parlamentar-recuerda el doctor Jft6n. Cada vez cuesta mâs respirar. Mr-.y adentro, el Presidentesiente alivio. Ha logrado que tres de susco- laboradoresacepten salir de La Moneda. Salvarcon vida a su gente es su riltima misi6n. ***

-General Pinochet: Habla Augusto a Patricio, habla Augusto a Patricio. Oy., dime cdmo va el ataque a La Moneda porque me tiene muy preocupado.

-Vicealmirante Carvaial: En La Moneda, han lla- mado por teléfono...ehhh... Flores,el ex ministro Flo- res...y Puccio,el secretariodel Presidente,manifestan- do su intenci6n de salir por la puerta de Morandé B0 para rendirse.Se les ha indicado que debenvenir... de- ben salir enarbolandoun trapo blanco para cesarel fue-

r31 Interfèrencia Secreta go. Esto sele ha comunicadoai generalBrady y al gene* ral Arellano.Ehhh... la ideaes nada de parlamentar,sino que tomarlospresos inmediatamente.

-General Pinochet: Conforme.Y otra cosa,Patri- cio, esinteresante que hay que tenerlelisto el avi6n que dice Leigh. Esta gente llega y ahî lni una cosa! ... se toman, se suben arcrbadel avi6n y parten, viejo... Con gran cantidad de escolta.

-Vicealmirante Carvaial: La idea serîa tomarlos presosno mâs por el momento, despuésse verâ si se les da avi6n u otra cosa,pero... por el momento, la idea es tomarlospresos.

-General Pinochet: ...arlos...Pero es que si los juz- gamos, les damos tiempo, pues.Y es conveniente...lo que creo...es motivo para que tengan una herramienta para alegar.Por riltimo, se les pueden levantar hastalas pobladaspara salvarlos... creoque lo mejor...consr-ilta- lo con Leigh... la opini1n mîa es que estoscaballeros se toman y se man... se mandan a deiara cualquier parte. Por riltimo, en el camino, los van tirando abaio.

(Risasen el Puesto Tres de enlace.Un oficial de la EscuelaMilitar comenta:"este es facbo, huevdn").

-Vicealmirante Carvaial: Bien, lo voy a consultar con Leigh.

138 Cttpita/a Cinco; A//ende no se rinde

-General Pinochet: Consriltalocon Leigh. Mi opi- ni6n es que sevayan, oye, porque o si no vamosa tener problemas después.En cambio, al ... aI salir, después controlamos la entrada. Es mâs fâcrI.

*** Ahf estânen la puerta de Morandé 80. El ministro FernandoFlores. El subsecretarioDaniel Yergara.El se- cretario privado del Presidente,Osvaldo Puccio, y su joven hijo del mismo nombre. Asoman un paôo blanco ala calle.Dos balazosper* foranla tela.No, no sepuede salir. ZQuéhacemos? Hay que llamar al Ministerio de Defensa. ***

-Vice almirante Car"vaial: Gus tavo, aquî Patri ci o.

-General Leigh: Aqui Gustavo paraPauicio. Cam- bio.

-Vicealmirante Carvaial Ehhh... Augusto me dice que a la gente que estâprocurando rendirse, que esFlo- res y el secretarioeste, Puccio, secretariode Allende, que traen un papel de Allende... (vocesdel PuestoTres dificultan la audicidn)...de darlesun avi6n paraque sal- gan del paîs,me pidiô que te consultaraa ti. Yo creo,de acuerdocon los asesoresque tengo acâ, que no es conve- niente sacarlosdel pais, sino que sencillamentetomar- los presosy posteriormentese decidirâ... si seles da avi6n o no.

r39 Inrerferencia Secreta

-General Leigh: Aquf PuestoDos paraPuesto Cin- co, Patricio.General Leigh. Yo soy de opinidn de sacar- lo del pafs. Yo prefiero sacarlo del pais cuanto antes. Objeto evitarproblemas que puedenderivarse posterior- mente. Yo tengo un DC-6 en Cerrillos, Grupo Dtez, a las6rdenes de é1.siempre que no me salgadel continen- te sudamericano.O a lo sumo podrfa llegar hastaMéxi- co. Peroyo creoque lo mejor esmandarlo cambiar afue- ra del pafs.Salvo que ustedesopinen lo contrario.Yo me sometoa la opinidn de mayoria.Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: No... ehh... Pinocl-ret, AugustoPinochet, es de la mismaopini6n, 2no? .'. esde ia misma opini6n...de sacarlodel pais.Asi que entien- do que esto serfaextensivo a la gente que estâ con é1, vale decir a Flores,a Puccioy algunosotros que lo plle- dan acompafrat.

-General Leigh: Aqui, de Gustavo para Patricio. Yo soyde opini6n de que Puccio muy bien, Pucciomuv bien y otros Ministros muy bien. Pero el sefrorFernan- do Flores,Vuscovic, Altamirano y todos esoscarajos. como Faivovich,iesos no subenal avi6n! Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: Conforme. Entonceslos tomariamospresos y ahî discriminariamos entre cuâl va al avi6n y cuâl no.

-General Leigh: Gustavo para Patricio. Esoes co- rrecto.Eso es cortecto.Cambio.

r40 C.lpitLlt Cinco; A//ende no .rerinde

-Vicealmirante Cawajal: Ya, conforme, vamos a actuar asfentonces. Gracias.

-General Leigh: Gracias.

-General Pinochet: A16, Patricio, lqué eslo dijo Leigh?

-Vicealmirante Carvaial: Leigh dijo que él con- cuerdacon tu opini6n, en sacara Allende, a su secreta- rio y... pero en ningrin casoque salganni Flores,ni Vuscovic,ni Altamirano...

-General Pinochet: Yo creo que Flores...Flores dejémoslo aquf adentro para itzgarlo. Aitamirano, para jtzgarIo.2Y cuâl era el otro?

-Vicealmirante Carvaial: 2Y cuâlesquedan pre- sosacâ?

-General Pinochet: Vuscovictambién... porque a esehay que juzgarlo, esees un carajoque cag6 el pais.

-Vicealmirante Carvaial: Vusco..

-General Pinochet (sigue): El sefrorAllende y el seôor...el otro,el Puccio,huy que tirarlos...;Vienen con aIgÉ,nmensaje? iYa se rindi6 Allende? 2C6mo es la cosa?...A16, Patricio, 7se rindid Allende?

MI Interferencia Secreta

-Vicealmirante Canajal: El secretario, este Puccio,dice que él va a salir con Floresy otra persona, con una cartade... de Allende. Entonces,se les va a de- cir que setienen...que no hay otra que serindan incon- dicionalmente.Se les va a tomar preso,entonces.

-General Pinochet: Conforme,pero ten cuidado con las famosascartas del sefrorAllende. Porque este gallo estâjugando, juega y sigue muflequeando.

-Vicealmirante Carvaial: Se les deja presos...

General Pinochet: Estâganando tiempo. Guârda- me la carta y tîralo altiro aI avi6n.

-Vicealmirante Carv aial: Conforme.

-General Pinochet: Mira, cuando vaya volando, leemos La catta.

-Vicealmirante Carv aial: Conforme.

-General Pinochet: El sefrorAllende estâg naî- do tiempo porque tiene... se estânarmando algunos... algunospoblados, eso se ha visto desdeel helicdptero. Por esaraz6n, estegallo estâ ganandotiempo.

-Vicealmirante Carvaial: Conforme.

r42 I I , Capitulo Cinco: A/lende na serixde I

-Vice almirante Carv ai aI (vo z dis tors io nad a p o r la transmisidn): disparando... entretantose sigue dis- parando,hasta que no salgancon banderablanca se les va a seguirdisparando...

-General Pinochet: ;Délen mâs gllaracahasta el final y que no se apagueel incendio,viejo!

-Vicealmirante Caruaial: Sf, porque ya las tropas estânpor entrat aLa Moneda.Asf que, en todo caso,van a serhechos prisioneros dentro de poco.

-General Pinochet: Conforme.

-Puesto Uno: Adelante Tres...

-Puesto Tres (EscuelaMilitar-enlace): Mi gene- ral Leigh deseaque le consulte a mi general Pinochet sobre resultado operativo militar Moneda. Adelante, cambio.

*Puesto Uno: PuestoTres de Uno. Estamosespe- rando antecedentes.De ahî, una vez que los tengamos, se los transmitiremos.Fuera.

**x Al oriente de la capital, un avi6n caza subs6nico F-80 parece rasgarlas nubes grises que al correr de esa mafranahan ido bajando, como si tuvieran un papel en el trâgico reparto del golpe de Estado.

r43 Interferencia Secreta

El sonidoes agudo, como silbido de un reptil alado que anunciamuerte. Se deja caerdesde el norte, con la lengua apuntandoa tierra.Fsssss... sale disparado el co- hete. Tres vecesse repite la maniobra.De la casapresi- dencial de TomâsMoro subela columna de humo gris. lEstân bombardeandola casade Allende! Los veci- nos de la comuna de Las Condesobservan boquiabier- tos, desdepatios y ventanas.Los niôos mâs pequeôos lloran, asustadospor el ruido y el estruendo.Ahi viene de nuevo el avi6n, por cuartavez,desde el sur. Fssss...el rockelsurca el cielo gris hacia el norte. No, el blanco ya no es la casapresidencial. 2A qué le estândisparando? La preguntase quedarâ sin respuesta. No habrâexplicaciones. ***

-General Pinochet: 2Cdmova el problemaMone- da?

-Vicealmirante Carvaial con el general Arellano. Seha hechoun cesedel fuegopara darles chance a que se rindan, van a salir por Morandé 80 Flores y Puccio. Le dije que las condicioneseran rendici6n in- condicional.La rinicagaranti^ que se le da es que se le va a respetarIa vida. Pero no le...no le... he dicho nada mâs de avi6n ni de ninguna otra cosa.

-General Pinochet: Conforme.Dime lo siguiente ahora...(fallaen la comunicaci6n)...caballero,el seôor Allende... r44 Capitult) Cinco: A/lnde tta se rittde

-Vicealmirante Canajal: ...para que posterior- mente decidala Iunta su destino.

(Puesto Tres -enlace- dificulta la audici6n con in- teriecciones).

-General Pinochet: Dime, 2y Allende?2Sali6 o no sali6?

-Vicealmirante Carvajal: No, no ha salido, pero lo que dice Floreses que quiere obtenerunas condicio- nesdecorosas para la entregade... de Allende.

-General Pinochet: lNo hay ninguna condici6n decorosa!lEse hijo de puta qué se ha imaginado,viejo! La6nica con...Io rinicoque le deseoes respetarle la vida y todavîahacemosmucho. No es...ninguna cosa.Y bien claro, Patricio, por favor.

-Vicealmirante Carvaial: No hay ninguna otra condici6n que esa.Se le respeta...

-General Pinochet (interrumpe): Sin condici6n. iQué vienen a poner condicionesdecorosas! ... lo frnico que no ha conocido es el decoro y viene ahoraa pedir.

-Vicealmirante Car:vajal Ya, conforme, asi con esasinstrucciones el ... el general Arellano va a mandar un oficial con una patrulla a tomarlos presos.

L4) lnrerferencia Secreta

-General Pinochet: Conforme, conforme...Oy., hay un problemaque es1o siguiente. 1A1o, Patricio! 2Me oyes,Patricio? A16, Patricio, 2me oyes?

-Vicealmirante Carvaial: Sf, te escucho bien. Adelante.

-General Pinochet: Lo siguiente. La embajada cubanaestâ rodeada porque dispararoncon una ametra- lladora.En consecuencia,hay que avisarleal embajador, llamar por teléfono y decirle lo siguiente. Dispararon sobrela tropa. En consecuencia,para evitar problemas internacionales,se servirâconsiderar que tienen de in- mediato un avi6n a disposici6n paraque semanden cam- biar para su pafs. Y rompemos relacionescon Cuba' Punto.

*{<*

Un vehiculo blind adoavanza por calle Morandé. Se detiene junto a la puer:.alarctal del palacio. Hay gritos y disparoscuando vuelve a asomarel trapo blanco. Esta vez cuatfo hombres, uno tfas otro, salen pafa eficara- marseal m6vil verde oliva. Parten en direcci6n al sur, al Ministerio de Defensa, dos cuadras hacia el sur' Ellos creen que van a parlamentar. Flores, Yergata, Puccio padre y Puccio hijo. No sabenque ya son prisioneros polfticos. ***

r46 Capitulo Cixco: Allende no serinde

-Vicealmirante Carvaial: Aqui estân actualmen- 'barnabâs' te Florescon Puccio y con Yetgara.Entonces, el secretarioPuccio este trae una seriede condicionesde Allende, que yo le dije que eran inaceptables.Pero lo que aquf los auditoresy todos los asesoreshan recomen- ! dado mucho es que no seriaconveniente... seria conve- I niente pensarmâs antesde darle la oportunidad de que Allende salgadel pais.Porque se dice. ..;.ah? ... seteme... de que este hombre se va a pasearpor todos los pafses socialistasdesprestigiândonos a nosotros.Asi que serfa mâs convenientedejarlo aquf...

-General Pinochet: Ya nos ha desprestigiadouna brutalidad este campe6n, iqué mâs nos va a despresti- giar!...quesiga no mâsen los pafsessocialistas, en otras partesno lo vanarecibir....;416, Patricio, Patricio! ;Me oyes?... Mira, no, si no sele puedeaceptar ninguna cosa' Hay que emba...huy que tirarlo p'a fuera no mâs, 1sies mâs problemâticotenerlo aquf adentro! ..' ;Déjalo que salga!

-General Leigh (interviene desde Puesto Dos): ...en los pafsessocialistas o marxistas,nos tendrfa sin cuidado.Pero si lo tenemosen el pais,va a set centrode atracci1n y un foco para las masas,que va a ser explota- do por (inentendible) que van a seguir operandoen Chi- le por un tiempo mâs o menos largo. Yo por esopref...

-General Pinochet (interrumpe): Mira, oye Pa- tricio, seriauna debilidad nuestra.'.(comunicaci6n se

L+t Interferencia Secreta dificulta)... Dime si les da mâs (inentendible)...tenerlo veinticuatro horas mâsacâ adentro.

-General Leigh (vuelve a intervenir en el diâ- logo Pinochet-Carvaial): Es inaceptable,entonces hay que procedera detenerlo.

-General Pinochet: Todos ustedesson muy civi- (voz les.1No entienden el problemamilitar, viejo! ... de un ayudantedice: "no quiere que salgapata afueraa des- prestigiaraI Ejército")...lMeoyes, Patricio?

-Vicealmirante Carvaial: Si, se oye bien. Enton- ces,vamos a procedera detenerlocon la condici6n de que se le respetarîaIa vida y se le permitftîa salir en el avi6n, é1y su familia.

-General Pinochet: Conforme, conforme, eso es lo que quiero yo.

-General Leigh (interviene nuevamente): Esoes coffecto.

-General Pinochet: Y de inmediato.

-General Leigh: Y que lo puedeacompaôar el se- flor Puccio, lo puede acompafiarel seflorPuccio.'.

-General Pinochet: ...porquetenemos oportuni- dad de desprestigiarlodespués nosotros ... de arfaîcar..' r48 Capitu/o Cinco;A//ende nc, se rinde

-Vcealmirante Carv aial: Ya, conforme.

-General Leigh: Ya, conforme.

-General Pinochet: Oye, y los otros dos sefrores que estânahî, icuâIesson? iBatnabâs,Flores y otro mâs?

-Vicealmirante Carvaial: Barnabâsy Flores estân aquf.

-General Pinochet: A esosgallos déjalospresos, oye.

-Vicealmirante Canajal: Los vamos a detener.

-General Pinochet: Conforme,conforme. Pero al sefrorAllende, que salgade inmediato.Cuando salga (inentendible).

*** Cuando se empezd a quemar el Sal6n Carrera, se rompid una vitri na y alguien rescatdel original de la Independencia de Chile, un pergamino firmado por O'Higgins, Zenteno y la primera Junta de Gobierno. -Recuerdo el momento en que alguien le pasa el pergamino al PresidenteAllende. Y él lo retuvo en su mano hastael final- recuerdael detective David Garri- do. Cadaminuto pareceuna eternidad. Respirar,respi- rar.Ya no hay rincôn donde buscaruna bocanada àe aire

r49 Inrerferencia Secreta libre del humo y las bombas lacrimdgenasque entraron por las ventanas.No hay mâscarasantigases para todos. Las pocasse pasande mano en mano, de boca en boca, parahallar alivio por algunos segundos.Pafros mojados cubren naricesy bocas,en un vano intento por evitar el sofocamiento.Los ojos enrojecidos,los rostrospâlidos y desencajados.La resistenciaha llegado al lfmite de las fuerzas. El periodistaJorquera busca una llave de agua.Se desliza hacia la cocina del primer piso, abre el cafrodel lavaplatos.Siente un ruido en la piezavecina. Un ruido raro.Abre la puerta. Y ahi estâAugusto Olivares,asesor y amigo del Presidente,director de prensade Televisi6n Nacional. Augusto OlivaresBecerra, a quien todos sus amigos decian "El Perro". Sentado,la metralleta entre las manos, agonizando... -1Sematd "El Perro",se mat6 "El Perro"!... Los gritos de Carlos Jorquera parecen aullidos de animal herido.Se imponen por sobrelas balas,por sobre el crujido de los maderosque ceden al fuego. Recorren el alaorientedel Palacio,se cuelan por salonesy oficinas humeantes.Paralizan por un instante a los sobrevivien- tes de La Moneda. -1Semat6 "El Perro",se mat6 "El Perro"!... Los médicos cotren. 2De d6nde salen los gritos? 1Aquf, aqui! , grita alguien. Llegan al primer piso, co- medor del personalde La Moneda. -Estaba en una silla. Lo bajamosal suelo.Le tomé Ia cabezay su sangremanch6 mi camisa.Estaba agoni-

1i0 Cdpitill() Cinca: Allende no se rinde zando.Se habia disparadoen la sien. Muri6 unos segun- dos después-recuerda el doctor )rr6n. El Presidente,IaPayita y otras personasobservan, en silencio, a pocos metros. "Presidente,estâ muerto' Ya no hay nadaque hacer", dice alguien. Silenciohoradado por las balasque siguenhacien- do blanco en el palacio.Un silencioque sdlo rompe, en esa habit aci6n, el llanto del "negro" Jorquera ante el cadâverde su amigo. El Presidenteno sacalos ojos del cuerpo inerte. -Nunca se me olvidarâsu carade angustia y triste- za al ver sin vida al amigo querido -record6 la Paytta mâs tarde, en el exilio. -Un minuto de silencio. Hagamos un minuto de -dice silencio.Que seanuesrfo homenaje el Presidente. Tras el silencio,salen del cuarto,cierran la puerta' La noticia de Ia muerte de Olivares se esparcecon el humo por el ala oriente del Palacio. 2Y ahon qué? "El Presidentedice que nos rendimos.Vamos a sa- lit".Lavoz secorre en el pasillo, entre tosesy carraspeos del grupo. Parecenfantasmas en medio de una niebla nauseabundaque oprime los pulmones. En la medida que se van enterando, lo buscancon la mirada para fastfearel gesroque confirme la noticia. Él asientecon cefroadusto. Ellos necesitancfeef que es cierto. Hasta laPayita parececreerlo' -Salimos todos ahora.Vamos a avisat que salimos todos. A ver, aver, ordenemosla salida.lDejen aquf las armas,todas las armas!La Payita primero...

ltl Interferencia Secreta

-2Y usted, Presidente? -Yo salgo al riltimo, no se preocupe. Una mâscara antrgasespasa de mano en mano. El Presidentellama a Eduardo Paredes. -Coco, entrégaleesto a IaPayita.;Cuidado, que es el Acta de Independencia! Él t. mueve para cumplir el encargo.LaPayrtalle- va puestala chaquetadel periodistaAugusto Olivares. Laha tomado, de junto al cadâver,para llevarla a manos de su mu jer, la actriz Mirella Latorre. La vrejachaqueta tiene los bolsillos llenos de libretas de apuntes,llaves, monedas.No quiere sacarnada. Quiere llevârselaintac- o a la viuda. Opta por enconderen una manga el perga- mino enrollado. Salir, salir. El fuego asomaya muy cerca,el humo se hacedenso. Moriremos ahogadosen humo. Hay que salir... -Yo no tenia mâscataantigases y, como me ahoga- ba mucho, el colega Douglas Gallegos y otros se saca- ban susmâscaras y me Ia pasabanpor algunos instantes. Era insoportable.Nos estâbamosahogando -recuerda el detectiveDavid Garrido. ***

-General Pinochet: Uno llamando a Cinco, Uno llamando a Cinco, Uno llamandoa Cinco. Adelante,cam- bio.

-Puesto Cinco: Estees Cinco, cambio.

rt2 Capitulo Cinco:Allende no serinde

-General Pinochet: Otra cosa.El almirante Car- vajal,es decir, Patricio... Augusto llama a Patricio,Au- gusto IIama a Patricio... Patricio, mira, mientras mâs luego esmejor. Que se vayael Presidentey con todoslos gallos que quieran acompafr.ailoa é1,menos esosque tû designasteque no se les podrfa mover porque se les va a juzgar...2Entiendes, Patricio?

-Vicealmirante Carvaial: Augusto, en estosmo- mentos, me avisaronpor teléfono de La Moneda que ce- saronel fuego porque se rinden sin condiciones.

-General Pinochet: Conforme, conforme.

-Vicealmirante Carvaial: Asi que...

-General Pinochet (interrumpe): De La Moneda aI avi6n...

-Vicealmirante Carvaial:... fuego y va a ir una patrulla militar a detenera la gente que se rinde.

-General Pinochet: De la Moneda aI aviôn.

-Vicealmirante Carvajal: Adelante, cambio.

-General Pinochet: Oye, de La Moneda al avi6n, viejo, no lo ... no lo hagan...no lo paseenmâs.Y fondeadito altiro para que no haya problemas.

r53 lnterferencia Secreta

-Vicealmirante Carvaial:Conforme, pero el avi6n seriapara éI y famrliaiexclusivamen-te! Nadie mâs'

-General Pinochet: Conforme,nadie mâs... iNin- g(rn GAP! No le vayana meter un GAP ahf, pues (risas de ayudantes)...A esoshay que juzgarlosa todos.

-Vicealmirante Carv aial: Conform e'

-General Pinochet: Y que lo lleven escoltadito porque nos lo pueden quitar.

-Vicealmirante Carv aial: Conforme.

-General Leigh (Puesto Dos): En estosmomen- tos deben estarpor llegar dos helicdpterosartillados que v^n ^ barrer los techosdonde estânlas ametralladorasen el Ministerio de ObrasPfiblicas y Bancodel Estado.Dos helic6pteros nuestrosvan a abrir fuego dentro de unos minutos. Segundo,te ruego que dejes detenido en el Ministerio de Defensade inmediatoa FernandoFlores y a Barnabâs.Que queden detenidosen el Ministerio' Y devuelvecomo emisariosolamente a Puccio,solamente a Puccio. Tercero,es convenienteproclamar... (se inte- rrumpe) al pafs...y su salida.Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: Tenemos a los tres de- tenidos aquî.

r54 Capitttlo Cinco:Allende no te rinde

-General Leigh : Conforme, es convenientepro- clamar alpais,proclamar al pafs...y los helicdpterosvan a seguir haciendofuego sobreel Ministerio de Obras, sin perjuicio de las tropas que estén abaioporque no tienen ningrin cuidado.Cambio.

-Vicealmirante Carv aial: Ya, conforme.

-Puesto Uno (Pefralolén-Ejército): Correcto,pero puntualizando que este ataque es solamentesobre los techosde los edificios antesindicados.... Correcto, nos interesa bâsicamentetambién la hora en que serfaeste ataque,para coordinarlo con la accidn tertestre.

-Puesto Tres (Escuela Militar-enlace): 2Me co- pi6 PuestoDos?

-General Leigh (Academia de Guerra Fach): PuestoDos bien escuchado,Puesto Dos bien escuchado. Informe aI generalPinochet, informe al generalPinochet que helic6ptero estâ por salir del Grupo Diez, helic6p- tero artillado va ahacerfuego sobrelos techos,sobre los techos de Obras Pfrblicas y Banco del Estado. Estima- mos de quince a veinte minutos, cambio.

-Puesto IJno (Pefralolén-Eiército): Conforme, recibido.

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Aquf PuestoDos para PuestoCinco. Habla Gustavo,cambio.

r55 Interferencia Secreta

-Vicealmirante Carvaial: Gustavo, de Patricio, aquf en...en el Comandode Guarnici6n,estiman de que serfaconveniente, antes de que sevaya Allende, exigirle que firme su renuncia.Ehhh... yo estoyde acuerdocon esa idea. Entretanto, estân saliendoen este momento, estânsaliendo por Morandé 80 algunaspersonas. Supo- nemos que estâ Allende entre ellos...Asi que por el momento los vamos a detener a todos y se redactailala renunciacorrespondiente. Solicito conformidad.

-General Leigh (Academia de Guerra Fach): Aquf generalLeigh paraPatricio. Conforme, conforme, si él voluntariamente lo hacey seallana. Para mî....para mi esees un detalle, para mî esees un detalle. Y los peruanos,cuando sali6 Belarinde,no lo consideraronpara nada. Pero si él la firma, conforme. Pero si se niega a firmada, ustedesiqûé van ^ hacer?Lo importante esque salgadel pais, a mi juicio. Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: Conforme. Vamos a pro- curar que firme la renuncia. Si no, posteriormentese enviaila ala... a Cerrillos para que salgaen el avi6n.

-General Leigh: Conforme, Patricio.

-Vicealmirante Carvaial: Yo creo que la salida del avi6n no va a poder sertan inmediata,si seIe estâdando la oportunidad que viaje con su familia. Porque en lle- gar Allende y en juntarse con su familia en Cerrillos,

t)o Caltitu/o Cinca: A//ende no se rinde me pareceque va a pasafpof lo menos una hofa. Ade- lante. cambio.

-General Leigh: Conforme, conforme.Yo encuen- tro que hay que poner horas tope, horas plazo, no nos venga a llegar la noche y tengamos dificultades. Yo le puedo poner un helic6pterode inmediato en la Escuela Militar para que embarque a toda su gente y los lleve al aeropuerto.Pero no nos fijemos mucho si, por riltimo, nos llega la hora de la oscuridad,este hombre subes6lo y sequed a Ia famrlia en Chile. Pero con esatroche y mocbe, pueden buscarla oscuridad parahacernos cualquiera ju- gada.Yo puedo poner un helicdPtero,en diez minutos puedo poner un helicdpteropresidencial en la Escueia Militar y ahi se embarca Ia famrlia o éI solo de inmedia- to. Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: Conforme. Yo creo que serfaconveniente disponerlo de todos modos porque, si no, se va a demorar mucho esto. 1Qué hora lfmite le podriamosfijar?

-General Leigh: Yo estimo, Patricio...yo estimo, Patricio, que hora tope para despegarcon él son las cua- tro de la tarde. Las cuatro de la tarde iy ni un minuto mâs! Cambio.

-Vicealmirante Carvaial: Perfectamente, asi lo vamos ahacer.Ehhh... terminado por mi parte.

rt7 Interferencia Secreta

-General Leigh: Mty bien, Patricio.

*** -Iba saliendo de los riltimos. Creo que me quedé atrâs-recuerda el doctor Jirôn- porque, a esaaltura, yo ya funcio nabaautomâticamente. Y como soy alto, siem- pre quedé atrâs,de los ûltimos, en las filas del colegio. No tengo otra raz6n para explicar por qué me quedé de los riltimos en esafila de personas... Estaba atrâs,muy cercadel Presidente.Ahi estaba también el doctor Patricio Guij6n, quien habîaretroce- dido parabuscar una mâscaraantigases.Y Enrique Huer- ta,el Intendentede Palacio.Y el detectiveDavid Garri- do. Nadie lo vio sentarseen el sillôn de terciopelorojo del llamado Sal6n Independencia. El doctor Guij6n dice que alcanzî a ver c6mo se movfa el cuerpo, en un espasmovertical. Subi6 y baj6. El doctor Jir6n dice que no escuchdel disparo. Se le mezc\l con la balacen que arreciaba en la calle. El de- tective Garrido dice que lo escuch6gùtar "lAllende no se rinde!". Todoscoinciden en que Enrique Huerta gri- t6 luego "1elPresidente ha muerto!" Eran lasdos y cuar- to de la tarde. -Entré y lo vi. La metralleta entre las piernas, la cabezadespedazada. Muerto. Vi a Enrique Huerta to- mar una metralleta y decir aIgo,muy alterado, algo asî como que iba a salir armado y disparandode La Mone- da. Alguien lo toma y lo calma. Hay instantesde confu- si6n. 56lo séque veo al doctor Patricio Guij6n, cabizba-

1t8 Capittt/r' Cinco: A//ende na se rinde jo, sentarseen un sill6n, cercadel Presidente.Yo estoy anonadado.Y no sé cdmo llego de nuevo a la fila que baja la escalera-recuerda el doctor Ji16n. "iEl Presidenteha muerto!". Lascuatro palabras se repiten escaleraabajo y llegan hastalos oidos de la Payita. En medio de la confusidn,ella s6lo sabeque deberetro- ceder y subir. Peidaflo a peldafio, subir y verlo. Estâ a punto de entrar al Sal6nIndependencia cuando un hom- bre del GAP se le cruzaenfrente y Ia detiene. -iNo, no! No puede entrar. El doctor no hubiera querido que lo viera asf-dice él en un tono mâs de rue- go que de mando. Ella se lo quedamirando con susojos claros,en un instantede silencioque pareceeterno y que encierratodo el dolor de la separaciôn.Es verdad,no hay error,él estâ muerto. El guardi ala toma por los hombros y la condu- ce escalerasabajo. Ella no puede ni quiere oponer resis- tencia. "iEl Presidenteha muerto!" Es lavoz que el doctor Jirdn siguesintiendo resonar en su interior mientraster- mina de bajar por la escalera,sale por la puerta de Morandé B0 y siente en su espalda eI culatazo que lo pone contra la pared. ***

-General Pinochet: 2Sali6Allende, ya sefue?

-Vicealmirante Carvaial: Estân saliendo algunas personas.Mandé a... apersonalde Inteligenciaa que me

rt9 Interferencia Secreta averigûaralos nombres de las personasprincipales que estân saliendode alIâ.

-General Pinochet: lEstân saliendopresos? ... ien calidadde detenidos?

-Vicealmirante Canaial: En calidad de deteni- dos estânsaiiendo, sf.

-General Pinochet: Oye, otra cosa,Patricio. Yo creo que tenemosque juntarnos los tres Comandantes enJefey el Director Generalde Carabineros,junto con... para hacer una declaracidnen conjunto, oye... Una vez que salgael se6orAllende fuera.

-Vicealmirante Carvajal: Sf... se va, se...estamos preparando la informacidn tan... p^ra darla tanto por telecomunicacionesmilitares como por una informaci6n radial, expresandoque seha rendido Allende y... lasotras personasque se rindan, las personasprincipales que se rindan.

-General Pinochet: Conforme.

-Vicealmirante Carvaial: Eh... Gustavo Leigh me di jo que lba a poner un helicdptero para traer a Ia famt' lia de Allende hasta Cerrillos, para que ahf tomen el avi6n y salganantes de las cuatro de la tarde.

160 Capitulo Cinco: Allende na serinde

-General Pinochet: Conforme,conforme. Después de las cuatro,yo creoque tipo cinco,cinco y media,Ia reuni6n de los Comandantesen Jefe y el Director de Ca- rabineros...Canal Treceviene paraacâ también (se re- fierea la estaci6nde televisidnde la UniversidadCat6- lica de Santiago).

*** Los disparosen la calle continûan. No los escucha el doctor Patricio Guijdn, quien seha quedadoinm6vil, con la vista fija en la alfombra, junto al cuerpo del Pre- sidente.Con la mâscaraantigases en la mano, el "Pachi" parece inmune al humo que transforma Ia sala en un espaciodonde el tiempo se ha detenido. El humo, en gruesascolumnas, asciendeal cielo desdeLa Moneda, desdela residenciapresidencial en la comuna de Las Condes,desde otros edificioscéntricos. Al gris de las nubes bajas y al rastro gris que sube en volutas desdelos edificios bombardeados,se suman mi- les y miles de hilos humeantescasi invisibles.En chi- meneasy tinas de bafio, en lavaplatosy rincones de pa- tio, se queman revistas,libros, libretas y papeles.No dejar rastro comprometedor.Es la orden silenciosaque sedan cientosde miles de ciudadanosal mismo tiempo. ***

General Leigh: Puesto Dos, Gustavo pan Par.ri- cio. Deseosaber c6mo vala gestidnpara embarcarloen

lol Interferencia Secreta la EscuelaMilitar y si me confirman,que pongan heli- cdpteroen la EscuelaMilitar. Cambio.

-Vicealmirante Carvajal: Ehhhh...ha salidode... de La Moneda una cantidad de gente, pero todavîa no me han confirmado si entre ellas estâAllende. Parece que no. Ehhh... Actuamente seestâ disparando intensa- mente, porque se estâreduciendo a ftancotiradoresque hay sobretodo el Ministerio de ObrasPriblicas. Asf que estânactuando los helicôpterosy estâactuando Ialnfan- rcria.En estemomento seacaba de producir un cesedel fuego. Esperoque ahora se pueda producir la salidade Allende.

-General Leigh: Puesto Dos para PuestoCinco. Van dos helicdpterosmâs artillados, van dos helic6p- teros mâs artillados, a abatir esos edificios. Yo voy a mandar de todasmaneras el helicdpteropresidencial de inmediato a la EscuelaMilitar. Me interesaque tfi le avisesa la EscuelaMilitar de que va a llegar el helic6p- tero y va a espe:tz;ahî hasta las cuatro, hora en que el Presidentedebe tomarlo. Si no llega a las cuatro, yo a esehelic6ptero lo retiro y el Presidentequeda preso esta noche.Cambio.

-Vicealmirante Carvaial:Ya, asique entiendo que a Allende habrîaque llevarlo no a Cerrillos,sino que de aqui a la EscuelaMilitar. Y allâ se juntarfa con su fami- Ira y parrifia a Cerrillos. r62 Capitu/o Cinco: A//ende na se rinde

***

Junto a la puerta de Morandé 80, los soldadosvan empujando a culatazosy golpes a los sobrevivientesde La Moneda. lManos en la nuca! Las drdenesmilitares resuenanen la calle. lPegadosa la pared, abranlas pier- nas! 1Râpido,râpido! Un soldadoexige alaPayita sacarsela chaquetade hombre. Obviamenteno essuya. Encuentra el pergami- no dentro de la manga. El inspector Seoane,que estâ muy cerca,escucha su grito. -iNo, soidado,no! Es el Acta de la Independencia, soldado,1no la rompa! -exclama Miria Contreras,a quien todos llamaban Paya o Payita. Ya estârota. Los trozos de pergamino caenaI suelo, a Ia vereda cubierta de vidrios rotos y cascotesde los muros. Ella selos quedamirando, pero tiene los ojosdel corazônpuestos en la puerta, en la esperaîzade que no seacierto, de que todo seauna pesadilla,de que él esté vivo arin. ***

-Vicealmirante Carvajal: ...y carabinerosallâ.

-General Pinochet: Primero un escuadrôncon ... con bombaslacrim6genas y el elementose despeja.No se aceptan por ningrin motivo grupos porque estamos en Estadode Sitio.

-Vicealmirante Carv aial: Conforme, conforme. Lo vamos a ordenar inmediatamente.

r63 Interferencia Secreta

-General Pinochet: Ya. Otra cosa,Patricio, otra cosa....iAl6, al6,Patricio!

-Vicealmirante Carvaial: Adelante, te escucho.

-General Pinochet: Mira, es conveniente tirar una...una proclamapor la radio. Que hay Estadode Si- tio, en consecuenciano se aceptanlos grupos. La gente tiene que andar en suscasas, porque se arriesgande que sean...sean... se encuentrenen un problema y puedan caerheridos. Y no hay sangrepara salvarlos.

-Vice alm irante Carv aial: Conforme, vamos a lan' zar Ia proclama por la radio.

-General Pinochet: Conforme.

*** Los obligaron a tendersesobre el pavimento. lMa- nos en la nuca,piernas separadas! 1No moverse!;Al pri- mefo que se mueva, lo mato! -Habîa soldados que pedfan permiso para matar- nos.Decian: "Mi teniente,deje que mate a estoscomu* nistas, les reviento la cabezaaqui mismo en la calle" -recuerda el inspectorSeoane.r -Quedé tendido al lado de Eduardo Paredes,médi- co, quien habîa sido director de Investigaciones.Lo re- cuerdo muy nftidamente porque éI trat6 de sacarseel carnéde identidad y pasârmeloa mi. De inmediato le empezaroûa pegar y, para hacerlo, se subieron arriba de r64 Capitalo Cinco: A/lende no serinde mi espalda.Ellos no sabfanquién era, lo hicieron s6lo porque se movia -telata el detective David Garrido. ***

-General Nicanor Dîaz Estrada (Fach):No. Mi general, estâLa Moneda totalmente rodeada,no hay posibilidadde que salganadie.

-General Pinochet: EI PresidenteAllende, iestâ metido ahî o ya se fug6? lsegufo que estâ el seflor Allende ahf?

-GeneralDîaz Estrada: Temo...temo que el Pre- sidenteestâ en La Moneda.O lo que quedade é1.Cam- bio.

-General Pinochet: Conforme.

-General Dîaz Estrada: Terminado.

*** Disparosaislados de francotiradoresponen en peli- gro a los soldadosen la vereda poniente de Morandé. lLevantarse,râpido, al frente, al frente! Los prisioneros se incorporan. iManos en la nuca! Ctuzar corriendo. Al- guien da drdenesen un tono distinto. Es un alto oficial de porte elegantey ademanesserenos que contrastancon la brutalidad de la soldadesca.Es el generalJavier PaIa- cios. ***

r6t Interferencia Secreta

-General Leigh: PuestoCinco, Nicanor Dîaz. Mr- si6n en TomâsMoro, terminada.Misidn en La Moneda estâterminada. Necesito que me informesqué estâha- ciendo ahorael Eiército. Cambio.

-GeneralDiaz Estrada: En estemomento , elE jér- cito ava...^vanza sobre La Moneda por los dos...por ei norte y por el sur, pr6ximo a IIegar... estoy esperando una informacidndetallada de si ya llegarona La Mone... a la puerta de La Moneda o no. Cambio.

-General Leigh: PuestoCinco de PuestoDos.Bien escuchado.Le ruego mantenerme un informe mâscom- pleto mâs adelante.Cambio.

-General Dîaz Estrada: Conforme, mi general, estoyesperando la respuestade la SegundaDivisi6n para poder informar en detalle a usted y al sefrorgeneral Pinochet que estâpreguntando lo mismo. Cambio.

-General Leigh: Conforme,Puesto Cinco de Puesto Dos.Envie bomberos, envie bomberos ai HospitalFach. Cambio.

-GeneralDîaz Estrada: Conforme, mi general,ie envio bomberos al Hospital Fach.

-General Leigh: Puesto Dos terminado.

-General Dîaz Estrada: Terminado.

r66 Capitalo Cinco: A/lende no se rinde

*** Se quema un pabelldn del Hospital de la Fuerza Aérea,ubicado en la avenida Las Condes. Ahi estâ Ia respuestapara el misterioso rlcket. Las nubes bajasque oprimen a Ia caprtal chilena, que parecenponerle una tapa oscura a Ia cuencarodeada de montaôas,le hicieron perder el rumbo al piloto del F-80. Ha disparadouna bomba contra el hospital de su propia instituci6n. Fuego,humo, destruccidny muerte: los gritos clamanpor auxilio. ***

-Vicealmirante Carvaial: Aquf Patricio, adelan- te.

-General Pinochet: Mira, Patricio, lo siguiente. Hay que \anzarun bando diciendo que no existegobier- no. El gobierno esgobierno militar. En consecuencia,la gente tiene que atenersea lo que diga el gobierno mili- tar. Porque hay gente que no quiere entregar sus pues- tos. Segundacosa, vamos a mandar un bando a ... te lo voy a hacerllegar aIIâ,pan .. que se refiere a los extran- jeros,que estânen posici6nilegal o bien que han ingre- sadoen forma ilegal, tienen que presentarsea las comi- sarfas...iA la prensa,no! ... Oy., aI6, aI6...Ninguna circulacidnde prensapor ei momento, viejo, 2ah? Ter- minado.

-Vicealmirante Carv ajal: Conforme

1 /- lo/ Interferencia Secreta

*** El generalJavierPalacios dalaorden. Los soldados entran a La Moneda. Tenidasde combate,armas en la mano y listas para disparat. Ante cadapuerta, un pelo- t6n se parapeta,la bota empuja la hoia /, tras unos se- gundos de cautela,se allanala habitacidn. El humo oscurecelos espacios.Los oficiales griran 6rdenes.El generalPalacios constata la destrucci6ndel bombardeo.Se ordena rescatar la espadade O'Higgins. Tras una puerta, sorpresivamenteasoma un hombre del GAP y dispara.Morir luchandodebi6 serlo que sepro- puso para esedfa. Decenasde balas prâcticamentedes- pedazansu cuerpo. El guardia del Presidentealcanzî a herir gravementea un sargento.Y también hiere al ge- neral Palacios.Es s6lo un rasgufro.Labala rebot6 en un cascoy roz6la mano del general. -General,tome mi pafruelomientras conseguimos una venda-dice ei tenienteArmando FernândezLarios. El general agradece.El teniente ie cubre la mano y sienteque, al fin, estâen un campode batallareal. Qui- zâs fue entoncescuando sepropuso ser un oficial mode- lo en los nuevos tiempos que nacian esedfa. Quizâs fue en esemomento cuandosu destinomarc6 el rumbo san- griento que lo llevafia a ser un agente criminal de la DINA. -;General,general, aqui, aqui! Los gritos llevan al general Palacioshacia una sala. Un soidadolo conduce,tres lo escoltan.Se abre ante él un cuadro inesperado.Ve primero al soldadoapuntando

168 Capitalo Circ,t: A/lende no se t'inde su metralleta hacra un hombre que estâ con las manos arrrba.Ve luego un cuerpo sentadoen un silldn rojo, con el crâîeo despedazado. -Dice que es el Presidente...que es Allende -bal- buceaun soldado. El generalPalacios no da créditoa lo que ve. Siente nâuseasante la escena.Las debe contener.Ahi estâ el arma,entre las piernasdel cadâver.2Serâel Presidente? Media cabezaha desaparecidoy todo indica que estâ desperdigadaentre los restossanguinolentos que seven en la paredy los muebles.Laparte que restaestâ cubier- ta de sangre,imposible de reconocer. -Y, usted, ;identifiquese! -Guij6n, soy el doctor PatricioGuij6n... -ZQué pas6aqui? -El Presidente...el Presidentese suicidd -dice él quedamente. -;Queda detenido mientras esto se aclaral Los soldadossacan a Guijôn de la sala.Y el general Palaciosse quedamirando el reloj que asomaen la mu- frecaizquierda del cadâver.Lo reconoce.Es el fino Gal- ga Cottltrcque una vez admirô en el brazo del Presiden- te. Saledel recinto y pide el equipo de radio portâtil. Llama a la comandanciade la guarnici6n,en el Ministe- rio de Defensa.Lo atiende el general Nufro. Informa en pocaspalabras, en tono seco:"Misi6n cumplida. Mone- da tomada.Presidente muerto". Corta la transmisidny observaal médico,pâlido y desencajado,que apenasse sostiene en pie. Le cree.Algo

r69 Interferencia Secreta le dice que estehombre es un médico que s6lo cumplfa con su deber.Como él cumple el suyo. Y sepone en su lugar por un instante. -Tranquilo, hombre, ttanquilo. Llame a su casay tranquilice a su gente.A ver, teniente,consigale un te- léfono... En esemomento, un soldadole avisaque lo llaman por la radio. En el Ministerio de Defensa,el vicealmirante Carvajalnecesita saber c6mo muri6 el Presidente.El generalPalacios le informa lo que sabe.Y secalla lo que siente."Allende cumpli6 con su deber.Eso no lo puede discutir nadie.Su gestofue un actode hombr(a,el de un valiente",declar6 aflos mâs tarde.S ***

-Vicealmirante Carvaial: Gustavo y Augusto, de Patricio. Hay una comunicaciôn,una informaci6n de personalde la Escuelade Infanteria, que estâya dentro de La Moneda.Por la posibilidadde interferencîa,lavoy a rransmitir en inglés. Theysay that Allende contittedsui- cideand is deadnota.8h... Diganme si entienden...

-General Pinochet: Entendido.

-General Leigh: Entendido perfectamente.Cam- bio.

-General Pinochet: Habla Augusto.

170 Capirulo Cinco: A//entle nrtse rinde

-Vicealmirante Canajal: Respecto al avi6n pan Ia famrli4 no tendrfa urgencia entonces esta medida. Entiendo que no tendrfa urgenciaen salir la familia in- mediatamente.

-General Pinochet: Que se...que lo echenen un caj6ny lo embarquenen un avi6n, viejo, junto con la famrha. Que el entierro lo hagan en otra parte, en Cuba ... vamosa tener una pelota-pafa el entierro. ;Si estega- llo hastapara morir tuvo problemas!

-Vcealmirante Carvajal: Conform e. La informa- ci6n esta...se va a mantenerreservada. entonces...

-General Pinochet (interrumpe): Conforme.

-Vicealmirante Carvajal: ...seva mantener reser- vada.

-General Pinochet: Vuelvo a decir, Patricio. El aviôn, échaloen un caj6n,se embala y se manda a ente- rrar a Cuba. AIIâ lo van a enterrar.

-Vcealmirante Carvajal: Gustavo, esperotu con- formidad. Tu comprensi6n.

-General Leigh: Patricio, todo entendido, todo entendido. Yo retiro helic6ptero y esperamosnoticias posteriores.Dime si se mantiene siempre la reunidn a las dieciochohoras Pefralolén. Cambio.

L7I Interferencia Secreta

-Vicealmirante Carvaial: Bien. Augusto, de Pa- tricio.

-General Pinochet: Te escucho.

-Vicealmirante Canaial: (Merino).'. informd que no alcanzaa llegar a las 17 .30 y solicita hacerla reunidn a las 18 horas.

-General Pinochet: Conforme,conforme.

-Vicealmirante Canaial: Conformidad...

*** Los sobrevivientesde La Moneda quedantendidos en la vereda,a los pies del edificio del Ministerio de ObrasPriblicas. Desde el suelo,con lasmanos en la nuca, el detectiveDavid Garrido ve c6mo seacerca un tanque por la calle.Escucha decir al oficial que seasoma por Ia torreta: "Permiso, mi general, patapasarle el tanque por la cabezaa estoshuevones". -Di vuelta la cabezapara ver a quién se dirigfa el oficial y vi al general Palacios,con su mano izquierda vendada y un fusil en la derecha.El tanque se movi6 y puso una oruga encima de la vereda.Cuando el tanque se puso en movimiento, la gente que estabaal interior del Ministerio de Obras Priblicas,que observabala ac- ci6n desde las ventanas,comenzd a grrtar, muy fuerte. Pareceque esosgritos detuvieron al tanque a escasos t]2 Capitttlo Cinco: A/lende nrt v rinr/e centimetros de nuestroscuerpos. Todo parecîauna pesa- dilla -recuerda el detectiveGarrido.e ***

-General Pinochet: ... esconveniente que consi- deremosque sepueden tener dos caminos. Un camino, que lo enterramosaquf en formasecreta. Y el otro,que lo echemosa enterrara Cuba,p'a otraparte.

-Vicealmirante Carvajal: Yo creo que esta medi- da podria ser ... podria mantenersela situaci6nen reser- va y ehhh...ver la medida que seva a tomar despuésde la reuni6n...en la reunidn de las 18 horas.

-General Pinochet: Conforme.conforme. Esto se mantieneen secfeto.

-Vicealmirante Carvajal: Bien, por mi parte, ter- minado.

-General Pinochet: Bien, lo mismo.

*** Frente a La Moneda, por calle Morandé, vuelve a arreciat el ataque contra los francotiradoresapostados sobre el Ministerio de Obras Pûblicas y el Banco del Estado.En vuelosrasantes, los helic6pterosdisparan. Los prisioneros,tendidos en la vereda,encogen sus cuerpos como si la postura pudiera disminuir el riesgo de ser

113 Interferencia Secreta alcanzadospor una bala. A los costados de la Payrta, Eduardo Paredesy Enrique Huerta decidenprotegerla. La cubren con suscuerpos. Un soldadoobserva el movi- miento de los prisioneros, se acercay le ordena a eIIa que se tienda mâs allâ, pegadaal edificio, paraproteger- se con la cornisa. -;Tâpesela can con las manos!-ordena el soldado, quizâsconmovido por su belleza. Allf estâella, encogidaen medio de la balacera,con el rostro baôadoen lâgrimas,cuando siente la bota que topa su costado. -A ver, usted,2quién es? -escucha preguntar a una voz conocida. Sedescubre el rostro.Tiene sobre sf al doctorJaime Puccio,dentista de La Moneday dei Ejército, primo del secretarioprivado del Presidente.Estâ con uniforme. Ella no contesj,. ÉI no insiste.No es necesario. -A ver, soldado, ayude a levantarsea esta mujer, -or- lestâherida! Llévelade inmediato aIa ambulancia denaPuccio. Ella y é1, sin decir palabra,saben que de ello de- pendesalvar con vida. ***

-Puesto Uno (Pefralolén-Ei&cito):...que salie- ron de La Moneday fueron...y estânen carâcterde pri- sioneros.Cambio.

-Puesto Cinco (Ministerio de Defensa): Voy a consultar.Un momentito, por favor...(interferencia)... r74 Cal,italo Cinco: A//erde nrt se rinde la informaci6n. Me dice Patricio que cuando tenga la informaci6n se lava a comunicarverbalmente.

-Puesto Uno: Y, a.acargo de quién?Cambio.

-Yoz: ...por cadamiembro de las FuerzasArmadas que sufran,que seanvfctimas de atentados,a cualquier hora o cualquier lugar, sefusilarân a cinco de los prisio- nerosmarxistas que seencuentran prisioneros. Cambio.

-Puesto Uno: ... que seprepare un boletfn conte- niendo estasideas. ;ah? Cambio.

-Yoz: Perfectamenteclaro. Gracias.

*** Entre los sobrevivientesde La Moneda,tendidos en la vereda,un hombre emite quejidos entre fuerteses- pasmos.Estâ vomitando. -iY a ése qué le pasa?'-inquiere el general Pala- cios. -Parece que tiene un ataque -vuelve diciendo el sargento que fue a indagar. -iUn médico! -ordena el general. Se levantanvarios de entre los prisioneros.Uno es elegido para examinar al hombre que se queja dolorosamente. -Peritonitis, general.parece que esuna peritonitis -informa luego.

17i Interferencia Secreta

El general ordenaque lo trasladena la ambulancia. -dice -General, lme permite? en voz alta el doctor Guij6n al comprobar la buena disposici6ndel alto ofi- cial. -Diga... -Como usted ya comprobd, aqui estamosvarios médicos que cumplfamos funciones sanitarias en La Moneda... -A ver, 2cuâlesson? ilevântense los médicos! Seponen de pie los doctoresOfrate, Arroyo, Quiroga y Ruiz. El generalordena que queden aparte,incluido Gui j6n, de pie contra la pared del palacio.Unos minu- tos despuéspide atenci6nmédica para su mano, que si- gue sangrando.El doctor Quiroga lo examina,curândo- lo con el botiqufn de primeros auxilios que trae un sol- dado.El generaldecide deiarlos en libertad de inmedia- to. El doctor Arroyo intercedepor sus colegasque no oyeron el llamado del general y siguen tendidos en la vereda, allâ aI frente. -General ,,huy otros médicos.Lo que pasaes que no escucharoncuando usted nos llam6... -A ver, 2cuâlesson? -Los doctoresSoto, Bartulin y Jft6n... -Llâmelos acâ... "Asf fue como nos salvamos.En mi caso,un oficial me reconocidcomo ex Ministro de Salud y el general Palaciosorden6 que me llevaranal Ministerio de Defen- sa.El doctor Guii6n qued6 detenido apartetambién, en su calidadde testigo claveen la muerte del Presidente.

176 Ctzpita/o Cinco: Al/ende no se rinde

El restode mis colegasdel equipo médico de La Moneda se fueron a sus casas",dice el doctor Jifin. Ahî al frente quedaron tendidos los doctoresEnri- que Klein, Enrique Paris y Eduardo Paredes.Eran mé- dicos, pero no estabanen La Moneda por su condicidn de tales.Quedarse les costdla vida. ***

-Puesto Uno (Pefialolén-Ejército): Dice el Co- mandante en Jefe lo siguiente.Es indispensableque, a la brevedadposible, los... los médicosjefes del Servicio de Sanidaddel Ejército, de la Armada y de Ia Fach,y el jefe del ServicioMédico de Carabineros,mâs el médico legista de Santiago hagan, ehh... certifiquen la causade la muerte del sefrorAllende, con el objeto de evitar que mâs adelantese nos pueda imputar, por los polfticos, a las Fuerzas Armadas de haber sido (se aclara garganta) las que provocaronsu fallecimiento. Esto interesaque seaa la brevedad y que (acIan g^rganta) usted se lo co- munique a las respectivasinstituciones. Diga si me ha entendido,adelante, cambio.

-Vicealmirante Carvajal: Conforme. Los médicos serfanlos directoresde Sanidadde las tres instituciones, mâs el médico legistadel Hospital Militar, entiendo.

-Puesto Uno: No, rectifico,rectifico. Los jefesdel servicio médico de cadainstituci6n y ademâsde Canbi- neros,y un quinto médico que seriael médico legistade

r77 Interferencia Secreta

Santiagopara que él dictamine la causadel fallecimien- to. En conjunto con los médicosmilitares. Qr. hagan un acta.

-Vicealmirante Carvaial: Conforme,comprendi- do, estâclaro.

-Puesto Uno: Perfecto.Interesa que estose haga a la brevedad.Terminado.

-Vicealmirante Caruaial: Bien, conforme, asi se va a hacet.

*** El inspectorPedro Espinoza y el subinspectorJulio Navarro -de la Brigada de Homicidios- reciben la or- den de partir a La Moneda. Deben llevar todos los ele- mentos para hacer un peritaje, incluido el experto planimetrista, un fotdgr afoy el perito balfstico' Un vehf- culo militar los lleva primero al Ministerio de Defensa. 56lo entoncesse enterande quién esel muerto. -Lo asesindun GAP -informa el general Brady. Cuando llegan a La Moneda, entran al "sitio del suceso"y recibenuna segunday contradictoriaversidn. -Se suicidô.Ustedes pueden comprobarlo -dice el generalPalacios, en el Sal6nIndependencia. 2Asesinato,suicidio? Ya estâ tomando fotografias Juan Enrique Lira, de El Mercurio.Los detectivesse com- portan profesionalmente,pero muy dentro no pueden

r78 Capitula Cinco:Allende no serinde dejar de conmocionarse:estân participando de un hecho histdrico y en sus manosestâ el establecerla verdadde lo ocurrido. Miden cadacentimetro. Anotan cadadetalle en su informe. Los bolsillos casi vacios.56lo una llave y un papelen blanco,con membretede la Presidencia.El fino reloj en la mufreca,contrastando con el pequefrocalen- dario de lata adosadoen la pulsera. Las dos vainillas estân muy cercadel cuerpo del Presidente.Tienen la sensibilidad endurecidapan tratar con cadâveresestos detectivesde la Be-ache.Esta vez algo se resquebraja en la invisible armadura. Cuando dan por terminada la tarea,el generalPa- lacios ordena que el cadâversea cubierto con un chal multicolor que han hallado en una oficina. La Moneda se estremececon los derrumbesmientras el cuerpodel Presidentees cargadopor los soldados,escaleras abajo. La ambulancia esperaparallevarlo al Hospital Militar. El subinspectorNavarro escribeel pârnfo final en su informe. "Causa probable de muerte: traumatismo encéfalocraneano por herida de bala de tipo suicida".

*8*

-Puesto [Jno: Correcto, representeeso al (inen- tendible)... , por favor.De parte del ComandanteenJefe, ademâsde las medidas que existen sobreradio y televi- si6n,ehhh... no seaceptan, repito, nin...publicaci6n de prensade ninguna especie.Y aquella que llegaraa salir,

17g lnterferencia Secreta ademâsde ser requisada,motivarâ la destrucci6nde las instalacionesen las que fue editada. Cambio... Ehhh, justamente el personal que vabaja allâ en PunToFinal. Todo el mundo ahi debeser detenido.Cambio.

-Puesto Uno: De la Junta Militar de Gobierno a los comandantesde guarniciôn, unidadesindependien- tes y autoridadesde las FuerzasArmadas y Carabineros. A partir de estemomento, procedetâna arrestara cual- quier dirigente polftico o gremiai y a cualquieraperso- na que no obedezca los bandos u 6rdenesemanadas de las autoridadesmilitares. Las personas que seanarresta- das serânsometidas a procesoy, en casoque se les sor- prenda con armasy/o explosivos,serân sometidas a los tribunalesmilitares en tiemposde guerra.Cambio.

-Puesto Tres: Recibido conforme,completo.

*** Ya las callesestân vacîasen Ia capital. Sôlo vehfcu- los militares semueven, lentamente Ia mayoria,en acti- tud de vigilancia. En la avenidaProvide ncia, a la alr.ttra de Los Leones,los vecinos observandesde las ventanas de los edificios.Hay mucho movimiento en la entrada del Hospital Militar. Seva formando el equipo de legistas ad hoc.Los directoresde Sanidad de los cuatro cuerpos uniformados. El doctor Mario Bdrquez, por la Ftetza Aérea;el doctor Miguel Versin, por la Armada; el doc- tor Luis Veloso,de Carabineros;y el médico JoséRodrf-

180 Capitulo Cinco: Allende no serinde gûez YéIiz, por el Ejército. Se agrega,por el Instituto Médico Legal, el doctor Tomâs Tobar. En la salade Otorrinolaringologîa,la autopsiadel Presidente va ^ comenzar.lH.uytensi6n en el ambiente. -Lo lamento, no estoy capacitadopara asistir.Es- peraréafuera-dice bruscamente el doctorJoséRodriguez Yéliz, del Ejército, y abandonala sala. Los demâscomprenden. Ya en la antesala,el doctor Rodrfguez ha comentadoque fue compafrerode Allende en la Escuelade Medicina. -Tiene un problema cardîaco -acota otro de los médicos. El doctor Tobar es el legista experto. Los demâs observan y colaboran s6lo cuando es necesario.La au- topsia se realizacasi en silencio. Sdlo el doctor Versin habla, de tanto en tanto, para comentar el buen estado ffsico del Presidente.No hay rastrosde su afecci1ncar- dîaca.Hfgado sano,corazîn fuerte. Se ordenan los exâ- menesde rigor. No habrâ rastroalguno de alcohol. ***

-Puesto IJno: (Pefialol én-Ejército): ...anteceden- tes sobrela situacidnde SalvadorAllende. Nos decfan de que lo habrian sacadode La Moneda. Enseguida,que- remossaber si ya los...de...los jefes de serviciosde sani- dad con el médico legistahicieron el reconocimientoy el actacorrespondiente. Enseguida,hay que tener cui- dado porque novaya a serque lo quieran llevar ala.-. a la morgu e para hacerlela autopsia y, enseguida,eso es

181 Interferencia Secreta peligrosfsimo porque no se vaya...esun antro de ex- tremistasy entoncesno vaya a ocurrir que se traten de robarseel cuerpo.Adelante, cambio, Nicanor.

-General Diaz Estrada: Mira, no te puedo decir si ya sali6 de La Moneda, pero delante de mi Brady, hace aproximadamenteuna hora y media, dio la orden de trasladarloen secreto,en ambulancia,aI FlospitalMili- tar. Y los iefesde sanidadde las tres FuerzasArmadas y Carabineros,mâs el médico legista,fueron citados al Hos- pital Militar para ejecutareI... el exameny elaborarel ^cta.Entiendo que esaacta tiene que traerlaaqul al Es- tado Mayor y no ha llegadotodavfa. Ehhh... creoque no han tenido tiempo de hacerel examen.En todo caso,el cuerpo va a quedar en el Hospital Militar hasta nueva orden. Cambio.

-Puesto IJno : Recibido conforme.Oye, Nicanor, hay que tomar las medidas de seguridad,dile a Herman Brady, de garantizar la absoluta seguridaddel Hospital Militar en ese caso.Y cuando tengas informacidn, por favor, la proporcionas p^ra acâ. Adelante, cambio, Nicanor.

-General Dîaz Estrada: Perfecto,perfectamente comprendido. Voy a tomar contacto con Brady inme- diatamente.Y una vezque tengaalguna nueva informa- ci6n. te llamo. Cambio.

-Puesto Uno : Gracias,Nicanor, terminado.

t82 Capitttlo Cinco: A/lende no se rinde

-GeneralDîaz Estrada: Gracias.Hasta luego.

-Puesto [Jno: ...ya.Conforme, déme lo que tenga hasta el momento a fin de tomar nota y despuésme lo completa.Cinco de Uno.

-Puesto Cinco: Conforme.Clodomiro Almeyda...

-Puesto Uno: A ver,momentito, momentito, dfc- teme lento.Cinco de Uno...

-Puesto Cinco: Orlando Budnevic, Edgardo Enriquez... Edgardo Enrîquez, Alfredo Joignant. '. Alfredo Joignant, Ignacio Lagno. . . Ignacio Lagno, Gast6n Pascales(Pascal)... Gastdn Pascales,Daniel Yetgata... Daniel Yergara,Eric Schnake...Eric Schnake...Vamos a ver si copi6 previamente,cambio.

-Puesto IJno: Vamos a ver, cinco de uno, he co- piado Almeyda, Orlando Bundevic...

-Puesto Cinco:... de la lista, de los que no estân en la lista: José Tohâ, JoséTohâ..' Jaime Tohâ, Jaime Tohâ...Anibal Palma, Anibal Palma...Carlos Briones, Carlos Briones... Jir6n, Jft6n, no se tiene nombre... Teplinski, Teplinski, tampoco se tiene el nombre... Puccio, Puccio... Flores,Flores... y Rolando Calderdn, Rolando Calder6n. Vamos a ver c6mo copi6. Adelante, cambio.

183 Interferencia Secreta

-Puesto lJno: Vamosa ver,Cinco de Uno. He co- piado José Tohâ, Jarme Tohâ, Anfbal Palma, Carlos Briones, Alfredo Jtr6n, Benjamfn Teplinski, Osvaldo Puccio...Floresy Calder6n.Fernando Flores y Calder6n. Cinco de Uno.

-Puesto Cinco (Ministerio de Defensa): Confor- me.

-Puesto Uno: Ya, entonces,queda atento, en cuan- to usted rcngaalguna novedadal respecto,me la comu- nica a fin de completar Ia lista. Cinco de Uno.

-Puesto Cinco: Cincopara Uno. Conforme.

-Puesto Uno: Cincode Uno.

*** Los sobrevivientesde La Moneda ya han sido con- ducidos al regimiento Tacna,comandado por el coronel "Nos Luis Joaqufn Ram îrez Pineda. hicieron bajar de rodillas y a culatazosen el patio del regimiento. Ahi habîados ametralladoraspunto 50 con los servidoreslis- tos para disparar.Nos pusieron a todos hincadosa unos veinte metros de las ametralladoras.Lleg6 entoncesun alto oficial. Despuéssupe que era el comandantedel re- gimiento, de apellido Ramirez. Gritaba como desafora- do para desalojaruna parte de atrâs, donde habîa unos camionesy unos soldados.;Salgan todos de ahi!, ;los lu4 Capittt/o Ciac0: A//ends n,t se rinde vamos a fusilar de inmediato!, gtitaba. Estabamuy mal ese comandante, muy fteta de sf", relat1 el detective David Garrido.e -Se armd un alboroto tremendoporque el coman- dante del Tacna qùerîa fusilarnos de inmediato. Daba gritos, drdenesy contra1rdenes.Gritaba que éramosunos desalmados,que le habfamos hecho frente al general Palaciosy lo habfamosherido, que habfa que fusilarnos de inmediato -record6 el detectiveQuintin Romero. No, no ios fusilaron eseanochecer. Les amaffaron con alambreslos tobillos y las mufrecasy asî,tendidos boca abajo, pasaron esa noche en las caballerizasdel Tacna. ***

-General Oscar Bonilla (Ejército): Nicanor, aquf... aqui Oscar.Aqui Oscarpara Nicanor. Adelante, cambio.

-GeneralDîaz Estrada (Fuerza Aérea): Adelan- te, Oscar.Adelante, Oscar.Ehhh...Nicanor en el fono. Adelante,cambio.

-General Oscar Bonilla: Mira, Nicanor, ehhh... Es necesarioque tfi analicesahi con ios auditores, aquî no tenemos ninguno, con el del Ejército, con el de la Fach,en fin, ojalâcon todoslos auditores,ehhh... si aca- so es convenienteiniciar una investigaci6npara deter- minar lascausas del fallecimientode estecaballero. Por-

18t Interferencia Secreta que, a lo mejor, lo mataron los GAP... y puedeser que a lo mejor despuésnos echenla culpa a nosotros...Y en estemomento) estamoshaciendo... se dispuso,como tri seguramentelo sabes,que los tres médicosjefes de ser- vicios de sanidad, y mâs el médico legista, hagan (inentendible)una autopsia...(inentendible). Entonces, en basea eso,habria que ver si procedehacer una inves- tigaciln. Porque como estânen estemomento todos los detenidos,listos para que puedan ser interrogados,en- toncesla investi gaci1nserïa bastante fâcil porque estân todoslos posibles inculpados en la mano...(inentendibie). Entonces,el problema es si acasocorresponderîa que la justicia militar lo haga.En segundolugar, si es conve- niente o no, en basea lo que digan ... ustedes.No sé si me he explicadobien. Adelante, cambio.

-General D îaz Estrada: Estâ perfectamente claro, perfectamenteclaro (interferenciaen el dial)...el direc- tor del Instituto Médico legal... los tres médicosjefes de servicioen el Hospital Militar. Y por lo demâs,tene- mos, como tri dicesmuy bien, en la mano los testigos, inclusoel médico personal,que presencidesto y ademâs di jo que este caballero habîa ingerido cantidadesnota- bles de alcohol en Ia mafrana.En todo caso, yo estoy esperandoque alguno de los comandantesen jefe apa- rezcapor acâ,para que uno de ellos, o los tres, dispon- ganla investigacidnporque, en todo caso,tenemos to- dos los testigosen la mano. No hay ningÛrnproblema al respecto.Cambio.

186 Capit/tltt Cinc,t: A/lende uo te rinde

-General Oscar Bonilla: Entendido, entendido. Pero lo que convendriaes ir adelantando.Es si procede una investigacidnde la justicia militar. Tener ya una opinidn técnicapara que puedan resolver,con los ante- cedentesdel caso,los Comandantesen Jefe. Entonces, este...este adelantamientodel trabajo seria interesan- te... ya echarlo a andar.Es cuestidn que los auditores se pongan a estudiarel caso.

-GeneralDîaz Estrada: Esoes correcto, eso es co- rrecto...(interferencia"adelante, cambio")... de forma,de manerade tenerlo listo cuando lleguen los Comandan- tes en Jefe con el almirante CarvalaI parc acâ. Cambio. ) ) -General Oscar Bonilla: Entendido,Nicanor, en- tendido. Muchas gracias.Terminado, fuera.

I ) -General Dîaz Estrada: Conforme, terminado, fuera.

*** A pesardel toque de queda -que comenzda las seis de la tarde- los habitantesde la poblacr6nLa Legua han decidido salir masivamente ala caIle.;Protestar, resis- tir? No hay respuestaclara, s6lo sabenque hay que ma- nifestar de alguna maîera su rechazoal golpe militar. Con lo que se teng^ a mano. Hay algunasarmas. Y hay muchas piedras.Labatalla desigual se desplie8^ por c^' lles y callejones. ***

187 Interferencia Secreta

-Puesto Cinco: ...siguiente informacidn. Ha...hace aproximadamenteuna hora partil piquete blindado ha- cia el lugar. Mayoresinformaciones se le darân una vez que se tengan. Lo ûrnicoque seriacomo informaci6n es que hace una hora sali6 un piquete blindado hacia allâ. El resto de las informacionesse la darfa ûna vez que las obtenga.Cambio.

-Yoz: Conforme, Cinco, seria tan amable de sefra- lar de d6nde sali6 el piquete blindado. Cambio.

-Puesto Cinco: No, frente a eso,no le podrfa de- cir, no le podrfa decir. Tendrfa que averiguarlo nueva- mente.Cambio.

-Yoz: Conforme, conforme.Esperamos el restode su informacionesy muchasgracias.

-Puesto Cinco: Muv bien, terminado.

-Puesto Dos (Academia de Guerra Fach): Tres de Dos.

-Puesto Tres (EscuelaMilitar-enlace): Adelante Dos.

-Puesto Dos: Conforme Tres. Favor informar COFA, favor informar COFA, qué medidas se estânto- mando respectoa situaci6nque estâsucediendo Parade-

188 C,tpitaloCitco: Al/eufu n,,se rinde ro Seis Santa Rosa, ParaderoSeis Santa Rosa. Fuerzas terrestresde la Fachy personalde Carabinerosestân sien- do copadospor grannrimero de personasarmadas. Cam- bio.

-Puesto Tres'. Ya, perfecto.Qué medidas se han tomado sobresituaci6n Paradero Seis Santa Rosa, ya que fuetzasterrestres aéteas y carabinerosestân siendo copa- dos por civiles. Déme roger...

-Puesto Dos: Eso es correcto.Comuniqueme su respuesta.Cambio.

-Puesto Tres: Perfecto.

(Vocesen puesto de enlace:"2De qué se trata?" "F{uy un problema, huev6n").

-Puesto Cinco: Atencidn PuestoDos. de Cinco. Cambio.

-Puesto Dos: AdelanteCinco, aqu(Dos. Adelante Cinco, aquî Dos.

-Puesto Cinco: Dos, relacionadocon la informa- ciôn que usted pidi6. Sobrelos datos...sobre el enfren- tamiento en ParaderoSeis de SantaRosa, se inform a ala COFA de que en estemomento partieron tanquespara allâ y refuerzosde la Escuelade Infanteria. Déme un comprendido,cambio.

189 Interferencia Secreta

-Puesto Dos: Recibido,perfectamente recibido en escucha.Terminado.

888 De La Legua saliô un "batall6n" de ciudadanospara reforzar la resistenciade los obreros en la planta de Madeco. lJn mensaierc lleg6 pidiendo refuerzos.En la marcha, se cruzaron con un batalldn de la Fach que pa- trullaba lazona. Los disparosy las Éfagasde metralleta resonaronen la zonasur de Santiago.Los cadâveresfue- ron quedandoabandonados en las calles. 2Cuântosmurieron esedfa? No hay cifras exactas. La Comisi6nde Verdady Reconciliaci6n,dieciocho afros mâs tarde,en 1991, establecidla muerte de quince uni- formados el dîa del golpe militar. Todos pertenecientes al Ejército y Carabineros.Otros diez uniformadosmu- rieron en enfrentamientosen las semanassiguientes, completandoun total de veinticinco bajasen el a6o I97 3. 2Y los civiles?No hay registro claro de los que murie- ron el mismo dfa del golpe.Los cuerposse amontonaron en la morgue, muchosfueron enterradoscomo N.N. en el cementerio y otros flotaron rîo abajo.Lo que sf pudo estabiecerla Comisi6n en su informe, llamado "Informe Rettig", esque un total de 1.823 civilesfueron asesina- dos el aflo 1973 tras el golpe de Estado. Agrega el informe oficial que "la mayor parte de las victimas correspondea menoresde treinta afrosy en no pocoscasos a menoresde veinte, habiéndoseconoci- do de algunassituaciones extremas que afectarona mu-

190 Capita/o Citco: A//tnde nc,se rinde chachosde catorceo quince afros,que murieron por ac- tos violatoriosde susderechos esenciales". Y anotaque el mismo 11 de septiembrecomenz1 con "la detenci6n y posteriordesaparicidn o muerte de algunasde las per- sonasque se encontrabanen el Palaciode La Moneda,o en algunosrecintos universitarios o industriales,como ocurri6 por ejemplo en la lJniversidadTécnica del Esta- do (hoy USACII) o enfâbricasde los denominadoscor- dones industriales, las que fueron alianadaspor efecti- vos militares,procediéndose a la detenci6nde lasperso- nasque se encontrabanen ellos". Los cadâveresde lasvictimas comenzaron,desde ese mismo dîa, a aparecerabandonados en las calles,en el rio Mapocho o en carreterascercanas a Santiago.Por las noches,personal del Instituto Médico Legal o del Ce- menterio General recogîancuerpos. En algunos casos, patrullas militares llevabandirectamente los cadâveres a la morgue. Centenaresde vfctimas no pudieron ser identificadaspor susfamiliares y fueron enterradascomo N.N. en el Patio 29 deICementerio General. Aôos des- pués, en dos ocasiones-como constat6 la Comisi6n Rettig- sedesenterraron cuerpos en forma masivadesde esePatio. La primeravez, se trasladaronlos restosa la fosa comrin del cementerro.La segunda,pese a existir una prohibici6n judicial dictada en 197B, se sacaron muchos cuerpos y se los llevô al crematorio para hacer desaparecertodo rastro. La mayor parte de las I.823 vfctimas del aflo 1973 correspondena fusilamientosmasivos realizados en re-

I9I Interferencia Secreta gimientos o en lugarescomo el PuenteBulnes, la Cues- ta Barriga, el trinel Lo Prado. A los detenidos en La Moneda,por ejemplo,los sacarondel Regimiento Tacna paraser fusilados en el campo militar de Peldehue.56lo lograron sobrevivir los detectives.En el Ministerio de Defensase practicaron torturas a losdetenidos el mismo dîa ll de septiembre.A la EscuelaMilitar llegaron Ios detenidosde "alto r^ngo" (ministros,subsecretarios, di- rigentes de partidos) y de ah( fueron trasladadosa un campo de concentraci6nen la isla Dawson,en el extre- mo australde Chile. "Me dirijo al hombre de Chile, al obrero,al campe- sino, al intelectual,a aquellosque serânperseguidos.'." En laspalabras de despedidadel PresidenteAllende hay una clarapremonicrôn. La persecuciôna los disidentes cobrd 3.197 muertos durante la dictadura militar que gobern6 entre los aôos 13-90. La mayor parte fueron obrerosy campesinos(14 .7 por ciento). Los restosdel PresidenteAllende compartieron,de alg6n modo, el mismo destino que gran parte de las vfc- timas. Tuvo una tumba semiclandestinapor casi dos décadas,después que el 12 de septiembresali6 en el atafid desdeel Hospital Militar. -Me ordenaron que me presentara al Hospital Mi- Irrar para retirar el cuerpo del Presidentey llevarlo al aeropuertode Los Cerrillos. Todos entend(anque yo de- bfa hacerlo.Y yo entendf lo mismo, erasu edecân-ase- gura el comandanteRoberto Sânchez. Toque de quedaen todo Chile. Sdlopatrullas mili- rafesse divisan en las callesy helicdptefosrastrean des-

r92 Capitulo Cinco: Allende no serinde de lo alto. Flamean las banderasen casasy departamen- tos de los que saludan con alegrfa el golpe militar. Al- gunos las ponen por temor. Donde no hay bandera,la sospechamatc^ con tinta invisible a los moradores.La delaci6n de los vecinos seria, para muchos, el primer peldafio para terminar en los campos de concentraci6n del EstadioNacional o el EstadioChile. Cuando el edecânaéreo llega a retiraf el cuerpo del Presidente,en la guardia del Hospital Militar le infor- man que sali6 hace pocos minutos, custodiado por tanquetasde Carabineros:"Ordené al chofer que avan- zaraIo mâs râpido posible. ibu-ot de uniforme, en un vehfculo de la Fuerza Aérea,pero no podiamos correr mucho aunque las calles estuvieran vacfas.Habia mu- chos controlesmilitares. En la Plazaltalia,los soldados me informaron de tanquetas que habîan pasado poco antes. Unas habîan seguido Alameda abajo. Otras ha- bfan doblado por Vicufra Mackenna hacia el sur. Opté por intentar alcanzaral segundo grupo. No pude"- En Ia pista de Los Cerrillos, el DC-3 estâcon los motores en marcha. No, el atarid del Presidenteaûn no ha llegado, le informan al edecân.Pocos minutos des- pués, apareceel sombrfo cortejo. Hace frio. O quizâs no tanto, pero el edecânrecuerda que sinti6 frio. No re- cuerda,en cambio, en qué vehiculo venia el féretro.56lo sabeque mird el atafrd y orden6 a los soldadosque ayu- daran a bajarlo para luego subirlo hasta el avi6n. Las tanquetasde Carabineroscustodiaban la operaciôn. Los minutos pasaban,algunos oficialesdec(an que sedebia despegarde inmediato y el comandanteSânchez

193 InterferenciaSecreta teîîa la vista fiia en el accesoa la pista. Ya estaban^lli, en silencio, grupo aparte, cabizbaios,los sobrinos Eduar- do y Patricio Grove, junto con un sobrino nieto de ape- nas diecisiete afros,Jaime Grove. Rodeaban a Laurfta Allende, la adoradahermana del Presidente.2Por qué no llegaba la Prim era Dama? -Temf cualquier cosa.Hice todo lo posible para calmar el apremio del piloto, tratando de ganartiempo para que la sefloraTencha pudiera llegar. Fue un inmen- so alivio verla ap^recef. Lamentablemente,las hi jas no pudieron llegar -relara el comandanteSânchez. -A mis hijas no les dieron salvoconductoy, por Io tanto, no podfan salir a Ia calle para trat^r de llegar al aeropuerto.Ese mismo dîa, en la tatde, Beauiz parti1 a Cuba. Fue el dia mâs triste de mi vida -recuerda Hor- tensiaBussi de Allende. Pegadosal fuselajegris, amarradospor cinturones a los estrechosasientos de recto respaldo,los dolientes se guardan el dolor muy adentro. El fuselajedel avi6n suena,durante el despegue,como si fuera a partirse en dos. Y ya en el aire, los crujidos del metal semejanla- mentos. Los lamentos que la famllia no emite en pre- senciade los uniformados.Frente a todos,en el piso, el ata6d. Y sobre el atarid, el multicolor chamanto que envolvid su cuerpo sangrante enLa Moneda. lC6mo es que esechal llegd hasta ahî? Hay objetos que se trans- forman en intocables, como si los alcanzatalo mâs re- c6ndito del temor alamuerte y al misterio del mâs aIIâ' Como si algo del Presidentese hubiera quedado atrapa-

194 Capirula Cinco:Allende na rerinde

do entre las hebras.Y el chal sigue aIIî, junto al cuerpo mutilado, pafa acompafiarloen la tumba. -Quiero estarsegura de que vamosa enterfata Sal- -dijo sa- vador. Quiero verlo la viuda cuando el féretro li6 del avi6n en la pista de la baseaérea de Quintero' -Imposible, estâterminantemente prohibido abrir el atarid -le contestdun oficial. -SefroraTencha, confie en mf. Yo 1ovi y esel Presi- dente -terci6 el edecânaéteo, mintiendo. "No podfa permitir que ella lo viera' Me habian dicho que la cabezaestaba destrozada, que la mitad su- perior de la cabezahabîa volado con los disparos' No podfa verlo", explica el comandanteSânchez. IJn carro funerario de la Armada y dos automdviles espefanen la pista. En un auto, la viuda, el edecânaéreo y Eduardo Grove. En el otro, Lauta Allende, Patricio y san- Jaime Grove. Recorrido râpido hastael cementerio ta Inés. en Vifla del Mar. Es la orden que recibieron los choferesdel mfnimo cortejo. -Las calles estabanvacfas. Ni un alma a la vista' Recuerdo haber visto que algunas venranasse abrîan, haber divisado algrin fosrro tras los vidrios. Nada mâs -dice la viuda. Los enterradoresesperan en la puerta y carganla urna sobre el carro metâlico de transporte. olor a sal y yodo del frio mar de chile Îlae Ia brisa que se levanta desdeel poniente. un olor que el Presidenteparecî.a sa- borear, en grandes bocanadas,cada vez que llegaba al ) PalacioPresidencial de cerro castillo. como si recono-

) ) rg5 ) lnterferencia Secreta

cieraen eseolor salino el aire de su primera inspiracron en el puerto de Valparaiso. Ahora, muy cercade su ciudad natal, el cortejo se detiene frente al sobrio mausoleo de la famrlia Grove. Es una tumba subterrâneacubierta por una lâpida de mârmol blanco. Ya estâabierta. No hay mâs que silen- cio como himno de despedida.El silenciolo dice todo. Cada uno escucha lo que debe escuchar. EI ataû'dbaja hastauno de los nichos y, al ser encajadopor los enterra- dores,se desliza con dificultad. Es un sonidohueco, son de muerte. Un puôado de tierra toma la viuda y Io lanza a Ia tumba. La hermana,los sobrinosy el edecânaéreo hacen lo mismo. Los uniformados a cargode la custodia obser- van en silencio. Hortensia Bussi camina unos pasosy coge unas pocasflores de la planta mâs cercana. -Qr. todos sepanque aquf yaceel Presidentecons- titucional de Chile -dice al tiempo que las lanza a la tumba. Sf, que todos sepan... ***

Notas: I Allendey la experienciacbilena, Joan E. Garcés,Ediciones Bat. 2 "Recuerdosdel 11 de septiembrede I9l3",Isabel AllendeBussi (El Pais, septiembre 1993) I "Asf muri6 Allende", Gonzâlez-Yerdugo-Monckeberg(Anâlisis, iu- nio 1987).

196 Cabitulo Cinco: Allende no serinde

4 El Ch;thoAllende, Carlos Jorquera, Ediciones Bat. t "Asf muri6 Allende", obra citada. 6 Rrrrrntotrr cln mi uida, Clodomiro Almeyda, Las Ediciones del Ornitorrinco. 7 "Asf muri6 Allende", obra citada 8 Revista Apti, seûembre1990. e "Asf muri6 Allende", obra citada.

r97 Estelibro setermin6 de imprimir en el mes de octubre en Andros Impresores ilillillJilt|[ffi[[il1