Museo De La Solidaridad Chile: Fraternidad, Arte Y Política 1971-1973
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FRATERNIDAD ARTE POLITICA 1971 -1973 40 AÑOS MUSEO DE LA SOLIDARIDAD POR CHILE FRATERNIDAD, ARTE Y POLITICA 1971 -1973 4 INDICE Un Modelo Cultural Experimental para el Mundo, Claudia Zaldívar | 08 Una Bandera es una Trama, Carla Macchiavello | 28 El Ejercicio Crítico de la Libertad, Dore Ashton | 48 Tiempos de Solidaridad: Conversación con Dore Ashton | 546Colección Solidaridad: Gesto Político y Fraterno, Carla Miranda | 108 Catálogo Razonado Colección Museo de la Solidaridad (1971 – 1973) Envío Argentina | 140 Envío Brasil | 152 Envío Encuentro de Artistas Plásticos del Cono Sur | 152 Envío Cuba | 154 Envío Ecuador | 160 Envío España | 162 Envío Estados Unidos | 170 Envío Francia | 174 Envío Italia | 193 Envío México | 201 Envío Polonia | 246 Envío Uruguay | 247 Obras Sin Antecedentes de Procedencia | 259 Casos Especiales | 261 Obras del Museo de la Solidaridad en Otras Colecciones | 262 Envío Gran Bretaña | 270 Indice | 282 English Texts | 289 5 Carta de invitación a formar el Comite Internacional de Solidaridad Artistica con Chile Mario Pedrosa y Danilo Trelles Enero 1972 MUSEO DE LA SOLIDARIDAD SALVADOR ALLENDE UN MODELO CULTURAL EXPERIMENTAL PARA EL MUNDO claudia ZaldiVAR DIRECTORA MUSEO DE LA SOLIDARIDAD SALVADOR ALLENDE 8 40 AÑOS FRATERNIDAD, ARTE Y POLITICA El Museo de la Solidaridad se fundó en 1972, y a cuarenta años de su inaugu- ración celebramos su existencia con la exposición 40 años Museo de la Solidaridad por Chile: Fraternidad, Arte y Política. Es en ese contexto que hemos realizado esta publicación, que se centra en la primera etapa del Museo de la Solidaridad, que va de 1971 a 1973, desde el momento de su fundación, cuando se piensa y se ges- ta como un modelo artístico cultural único para el mundo, hasta el Golpe Militar en Chile, cuando el Museo se clausura, logrando rearmarse nuevamente en el ex- tranjero años después. Asimismo, presentamos un catálogo razonado inédito de la Colección Solidaridad, que corresponde a las obras donadas en estos años y que dan cuenta de uno de los aspectos más importantes de la historia de este Museo, el gesto solidario y sin precedentes de muchos de los artistas más connotados de la época. Esa matriz fundadora solo puede comprenderse por el momento político. En 1970 asumió la Presidencia de Chile Salvador Allende, el candidato de la Unidad Popular que se convirtió en el primer socialista en asumir el poder por vía electo- ral. Si bien en varios países de América Latina surgían dictaduras militares de corte derechista, el socialismo cubano aún era un modelo político viable y admirable en parte de un mundo dividido en dos bloques antagónicos. La ‘Vía Chilena al Socia- lismo’, entonces, fue observada y admirada. Es la razón por la cual los artistas que simpatizaban con la izquierda de la época donaron sus obras para un Museo que, junto con ser un gesto solidario de apoyo al gobierno de Allende, estaba además concebido para acercar el arte al pueblo, sacándolo de la exclusividad de las elites. El Museo de la Solidaridad surgió gracias a varias miradas visionarias. La idea fundacional se produjo en marzo de 1971 en el marco de la “Operación Verdad”, un encuentro de intelectuales y artistas internacionales invitados por el Presidente Allende para observar las transformaciones impulsadas por su gobierno. El crítico de arte español José María Moreno Galván y el senador italiano Carlo Levi lanzaron la iniciativa de promover en los medios artísticos europeos donaciones de obras de arte que permitieran al gobierno crear un museo para el pueblo de Chile, a través de una movilización solidaria de los artistas que lo apoyaban. El paso siguiente fue nombrar un Comité Ejecutivo, que quedó bajo la presidencia de Mario Pedrosa, destacado crítico de arte brasilero exiliado en Chile, quien fue el gran gestor, arti- culador y fundador del Museo de la Solidaridad. A pesar de que en 1972 el gobierno de Allende ya enfrentaba una fuerte oposi- ción interna, los planes para crear el Museo continuaron adelante. A finales de 1971 9 MUSEO DE LA SOLIDARIDAD SALVADOR ALLENDE se había constituido el Comité Internacional de Solidaridad Artística con Chile (CI- SAC)1, integrado por artistas, críticos de arte y directores de museos de diferentes capitales de Europa y América, confluyendo allí una red internacional de impor- tantes intelectuales que dejaron su impronta con distintas miradas y tendencias. Fue gracias a su capacidad visionaria, a sus contactos, a la amplitud de países que representaban, que este Museo se formó con éxito. Igual de visionario fue el Presidente Salvador Allende, quien creyó firmemente en este proyecto y supo comprender su envergadura histórica, posibilitando las condiciones institucionales para alojar la gestión del Museo en el Instituto de Arte Latinoamericano de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile (IAL). Así, José Balmes, director de la Escuela de Bellas Artes de esa Universidad, junto a Miguel Rojas Mix, director del IAL, pasaron a ser los coordinadores chilenos del Movi- miento de Solidaridad Artística con Chile, para respaldar la labor del CISAC. El Instituto de Arte Latinoamericano era el centro donde funcionaba el Comité Eje- cutivo, el que trabajó como ente legal del Museo hasta que éste se estableciera y co- ordinó el traslado de las obras al país, en conjunto con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. La inauguración del Museo de la Solidaridad se realizó el 17 de mayo de 1972 en el Museo de Arte Contemporáneo de la Quinta Normal, paralelamente al Encuentro de Artistas Plásticos del Cono Sur, organizado también por el IAL. En su discurso inau- gural, el Presidente Allende señaló: “Los artistas del mundo han sabido interpretar este sentido profundo del estilo chileno de lucha por la liberación nacional y, en un [1] Mario Pedrosa se refiere así a la formación gesto único en la trayectoria cultural, han decidido, espontáneamente, obsequiar del CISAC: “La primera resolución nuestra fue esta magnífica colección de obras maestras para el disfrute de ciudadanos de un le- que el Comité estuviera compuesto solamente por personalidades extranjeras. Las donacio- jano país que, de otro modo, difícilmente tendrían acceso a ella. ¿Cómo no sentir, al nes servirían para organizar un museo nuevo en un Chile nuevo. Así se destacaba la espon- par que una encendida emoción y una profunda gratitud, que hemos contraído un taneidad de la idea solidaria. Danilo Trelles solemne compromiso, la obligación de corresponder a esa solidaridad?”2. y yo, por no ser ciudadanos chilenos y estar radicados en Chile, pasamos a formar inme- diatamente el núcleo del Comité. De inmediato Al momento de su inauguración, ya estaban definidas las características que hicimos varias llamadas internacionales a debía tener este Museo: pertenecer al Estado, pero ser autónomo; debido a su obje- personalidades relevantes del mundo artístico para que se integraran al Comité. Consegui- tivo y filosofía únicos, no podía pasar a acrecentar el acervo artístico de otra insti- mos la adhesión entusiasta de quienes hoy tución. El Museo se debía mantener como un todo inseparable, en un lugar estable lo constituyen”. VIDAL, Virginia. “Museo de la Solidaridad no tiene precedentes”, en El Siglo, de exposición. Debía ser no solo artístico, ya que estaba sustentado en un ideal 12 de abril 1972, p.10.) político-ideológico y por tanto se debían buscar nuevos modelos culturales que [2] Catálogo de la Primera Inauguración del respondieran a los cambios históricos que se querían impulsar. Debía ser un Museo Museo de la Solidaridad. Santiago: Ed. Qui- mantú, 1972, pp. 1- 2. vivo, dinámico, al servicio del pueblo de Chile, con fines culturales y educativos, 10 40 AÑOS FRATERNIDAD, ARTE Y POLITICA de total participación y acceso a la comunidad. Como las donaciones eran para el pueblo de Chile, se debía constituir una fundación dirigida por sus representantes, por las organizaciones sociales. El Museo de la Solidaridad se proyectaba como el Museo de Arte Moderno y Experimental más importante de América Latina, representativo de una época his- tórica y que a futuro se seguiría incrementando con nuevas donaciones, que es, hasta hoy, la forma de adquisición del Museo. A 40 AÑos La exposición 40 Años Museo de la Solidaridad por Chile: Fraternidad, Arte y Polí- tica, se inauguró el 17 de mayo de 2012, para conmemorar la fundación del Museo e incluyó diferentes gestos de rescate de la historia. Se exhibieron más de 100 obras, que mostraron la diversidad y amplitud de la primera etapa de la colección (1971- 1973). Se recuperó una parte significativa de los archivos administrativos3 de esa época, lo que posibilitó realizar una investigación específica, mediante la cual se encontró, por ejemplo, un documento desconocido del artista brasileño Antonio Dias, en el que estipulaba la donación de una obra conceptual, que finalmente no pudo realizarse. Solo 40 años después, en mayo de 2012, esa obra, una gran bandera roja, se izó en la entrada del Museo de la Solidaridad Salvador Allende. 40 Años también representó un homenaje al grupo de fundadores del Museo, especialmente a Mario Pedrosa, quien pensó y desarrollo este nuevo modelo de museo con una amplia mirada ética y estética, incentivando, a su vez, la participa- ción y compromiso de una amplia red de colaboradores internacionales. Quisimos hacer gestos simbólicos, siendo uno de ellos la invitación a Dore Ashton, crítica de arte y miembro del CISAC, figura clave en la donación de obras desde Estados Unidos, quien no pudo asistir a la inauguración de 1972. La invitamos a conocer el Museo y a participar del proyecto 40 Años. En su entrevista testimonial, que es parte de esta publicación, Ashton resalta el significado político de la Colección. Sus memorias fueron compartidas por otros protagonistas de la historia del Museo: José Balmes, Lautaro Labbé, Pedro Mira, Guillermo Núñez, Virginia Vidal, Carmen Waugh, y María Eugenia Zamudio.