1 Ediciones RAP S. A. Talcahuano 638 2º Piso “D“ (C1013AAN) Ciudad de - Argentina Tels./Fax: 4374-0661/2/3 e-mail:[email protected] www.revistarap.com.ar

Queda hecho el depósito que establece la Ley 11.723

ISBN: 987-20261-6-5

IMPRESO EN LA ARGENTINA

Prohibida la reproducción total o parcial, por medios electrónicos o mecánicos, incluyendo fotocopia, grabación magnetofónica y cualquier sistema de almacenamiento de información sin autorización escrita del Editor.

2 ensayos

“Un recorrido crítico por el período formativo del Derecho constitucional argentino 1810-1827”

Alberto B. Bianchi

3 4 ÍNDICE

I. Presentación ...... 7

II. El ambiente intelectual en el Río de la Plata hacia 1810 ...... 9

a. Panorama general. b. , un activo secretario del Consulado. c. Mariano Moreno.

III. La Revolución de Mayo ...... 13 a. El Cabildo Abierto del 22 de mayo. b. Constitución de la . c. Circular del 27 de mayo. d. Fundación de La Gaceta. e. Dificultades políticas de la Junta.

IV. Aporte constitucional de la Revolución de Mayo ...... 21 a. Soberanía del pueblo. b. Sujeción a la ley. c. Federalismo d. Responsabilidad de los gobernantes. e. Independencia del Poder Judicial. f. Publicidad de los actos de gobierno. g. Legalidad en materia tributaria. h. Necesidad de una Constitución. i. El sistema electoral.

V. De la Junta Grande al Triunvirato ...... 23 a. Incorporación de los diputados provinciales. b. Creación de juntas provinciales. c. Expulsión de los morenistas. d. Reglamento de libertad de imprenta. e. Otros instrumentos legislativos. f. Regreso del partido porteño. Primera concentración del Ejecutivo: creación del Triunvirato y de la Junta Conservadora. g . Reglamento orgánico o de división de Poderes. h. El Estatuto Provisional de noviembre de 1811. i. Los decretos sobre seguridad individual y libertad de imprenta. j. Nuevo avance del porteñismo. Disolución de la Junta Conservadora y de las juntas provinciales. Expulsión de los disputados provinciales. k. Proyecto de Constitución monárquica de 1811. l. Modificación a la Real Ordenanza de Intendencias. m. La breve asamblea constituyente de abril de 1812.

5 VI. La Asamblea del Año XIII ...... 33 a. Panorama político a fines de 1812. Fracaso de una segunda asamblea constituyente y caída del Primer Triunvirato. b. Convocatoria e instalación de la Asamblea. c. Instrucciones de los diputados. d. Obra legislativa. e. Proyectos constitucionales. f. Segunda concentración del Poder Ejecutivo: creación del Directorio unipersonal. g. El proyecto monárquico. h. Clausura de la Asamblea.

VII. El Congreso de Tucumán ...... 47 a. Convocatoria. Estatuto Provisorio de 1815. b. Instalación del Congreso. c. Primeros pasos. d. La Declaración de la Independencia. e. La Bandera Nacional. f. Discusión sobre la forma de gobierno. La propuesta de una monarquía incaica. g. Traslado del Congreso a Buenos Aires. Estatuto Provisorio de noviembre de 1816. h. El Reglamento Provisorio de 1817. i. La Constitución de 1819.

VIII. La crisis de 1820. Caída del Directorio y cese del Congreso ...... 57

IX. El quinquenio 1820-1825. Ausencia de autoridad nacional y consolidación del sistema federal ...... 59 a. Semblanza general. b. Los acuerdos entre Buenos Aires y las provincias del Litoral celebrados en 1820. c. El frustrado Congreso de Córdoba y el Tratado del Cuadrilátero. d. Formación de las provincias argentinas. e. El gobierno de Martín Rodríguez en Buenos Aires. 1. La Junta de Representantes. 2. Supresión de los cabildos y reforma judicial. 3. Reformas económicas, culturales, militares y eclesiásticas. f. Primeros reconocimientos de la Independencia.

X. El Congreso Constituyente de 1824-1827 ...... 71 a. Convocatoria e instalación. b. La Ley Fundamental de 1825. c. Conflictos con las provincias y guerra con el Brasil. d. La Ley del Poder Ejecutivo Permanente y creación del Banco Nacional. e. Ley de Capitalización de la Ciudad de Buenos Aires. f. Discusión sobre el sistema de gobierno. Nuevos conflictos con las provincias. g. Descripción de la Constitución de 1826. h. Final abrupto de la aventura rivadaviana.

XI. Conclusiones sobre este período...... 83

6 I. PRESENTACIÓN

Este trabajo abarca los primeros diecisiete men institucional estable, el país queda sumi- años de vida constitucional argentina, de do constitucionalmente en un letargo del cual modo que corre desde la Revolución de tardará un cuarto de siglo en despertar. Mayo hasta la caída de Rivadavia en 1827, prolegómeno de la segunda disolución del Ninguno de estos tres congresos constitu- gobierno nacional que sucedería a la de 1820. yentes rindió sus frutos, pues el primero no Es el período formativo de nuestro Dere- alcanzó a sancionar una Constitución y los cho Constitucional pues se desarrollan en dos restantes si bien produjeron una Cons- él la Revolución que cortó los primeros la- titución, ésta resultó ser políticamente efí- zos con la metrópoli española y las tres pri- mera. meras experiencias constituyentes que tuvo Sin embargo, y pese a la singular ineficacia nuestro país: la Asamblea de 1813, el Con- de nuestras tres primeras asambleas cons- greso de Tucumán y el Congreso Rivadavia- tituyentes, estos años sirvieron para echar no de 1824. las bases del futuro Derecho constitucional A partir de allí y como consecuencia de los que se desarrollaría en la Argentina a partir fracasos constantes en consolidar un régi- de la Constitución de 1853.

7 8 II. EL AMBIENTE INTELECTUAL EN EL RÍO DE LA PLATA HACIA 1810

a. Panorama general Incluso quienes no estaban familiarizados con este idioma, recibían indirectamente la Ya me he referido en un trabajo anterior1 a influencia a través de los muchos escritores la crisis política experimentada por la mo- españoles y criollos que se movían en la narquía española a principios del siglo XIX, órbita de los filósofos franceses. Los inven- la cual constituye un antecedente directo tarios de algunas bibliotecas rioplatenses de la Revolución de Mayo, tal como lo fue prueban que en ellas figuraban numerosos de las revoluciones en los otros países his- autores franceses muchos de ellos inspira- panoamericanos, lo que me exime aquí de dores del movimiento de 1789. Entre ellos hacer una referencia a los antecedentes los más frecuentes son Rousseau y Voltaire, políticos de la Revolución de Mayo y su vin- sin perjuicio de Montesquieu y Raynal. culación con la caída de la monarquía espa- ñola bajo las tropas de Napoleón. Vale la pena Mariluz Urquijo hizo una prolija recopilación en cambio reseñar, siquiera brevemente, el de estas obras y señala que en la librería de ambiente intelectual que se respiraba en el Juan Baltasar Maciel, llamado por algunos “el Río de la Plata por aquella época, especial- maestro de la generación de Mayo”, figuran mente en Buenos Aires, pues completa el el Diccionario histórico y crítico de Pedro panorama de los años inmediatos anterio- Bayle, dos tomos de Rousseau, nueve tomos res a 1810. de Voltaire y otras varias obras prohibidas. El Obispo de Buenos Aires, Manuel Azamor Hacia 1810 la influencia intelectual francesa y Ramírez, poseía las obras de Voltaire y de en el Río de la Plata era notable. Empleando Montesquieu, un tomo de Rousseau, la His- una frase bastante poética, Félix Luna dice toria de América de Robertson y el Diccio- que los vientos filtraban por las rendijas de nario de Bayle. Voltaire vuelve a aparecer en los postigos coloniales las nuevas ideas ges- la bien provista biblioteca de Berois y hasta tadas en Francia.2 Parecería ser que la difu- en la del panadero Juan Antonio Grimau. sión del pensamiento galo se vio facilitada Pero de las bibliotecas conocidas, es la de pues el francés era el idioma extranjero más Francisco de Ortega la que posee mayor conocido por los habitantes del Virreinato. cantidad de volúmenes sugestivos: 28 tomos de la Enciclopedia, las Cartas Persas de Mon- 1 Bianchi, Alberto B. “Un apunte sobre la emancipación tesquieu, otros 4 tomos de Montesquieu, 40 y el Derecho Constitucional en América Latina”. El tomos de Voltaire y 7 tomos de El amigo de Derecho (diario especial de Derecho Constitucional), los hombres, del Marqués de Mirabeau. En 13 de agosto de 2003. 2 Luna, Félix. Mariano Moreno. Buenos Aires, Planeta, 1794 se establece una biblioteca pública en 2000, p. 29. el Convento de la Merced con los libros

9 donados por el escribano de la Audiencia dar en cambio un capítulo anterior de su Facundo de Prieto y Pulido y en ella volve- vida, relacionado con su actividad como Se- mos a encontrar L’ami des hommes del Mar- cretario del Consulado en la cual pudo ejer- qués de Mirabeau, las Cartas Persas y el Espí- cer su verdadera vocación, la de abogado. ritu de las Leyes de Montesquieu. Asimismo Belgrano, nació en Buenos Aires en 1770; las gacetas españolas que llegan al Plata in- había estudiado en la Universidad de Sala- cluyen con alguna frecuencia elogios o noti- manca, y concluyó sus estudios de abogado cias sobre los modernos filósofos, el Telégra- en 1793. Inmediatamente se orientó hacia fo Mercantil rebate a Montesquieu o cita a la economía política, penetrando en el co- Voltaire y a Rousseau entre los grandes hom- nocimiento de las obras de Quesnay, Geno- bres de Francia, Belgrano apoya pasajes de vesi, Galiani, Adam Smith, Sancho de Mon- sus escritos con una máxima del célebre cada, Francisco Martínez de Mata, Miguel economista Quesnay. Otra prueba del inte- Álvarez de Osorio, Bernardo Ward y Pe- rés que despierta la nueva filosofía es ofre- dro Ramírez de Campomanes, y publicó en cida por la presencia en las librerías porte- 1796 una obra que tradujo del francés a la ñas de las obras de los refutadores de esa que tituló Principios de la ciencia económico corriente como Bergier; Nonnotte o Fer- política tomado de la obra de Dupont de nando de Cevallos.3 Nemours Origine et progres d’une science De este ambiente surgieron dos figuras nouvelle. destacadas de nuestra historia inicial, Ma- Roberto H. Marfany ha efectuado un estu- nuel Belgrano y Mariano Moreno, a quienes dio detallado sobre su actuación como se- dedicaré algunos párrafos.4 cretario del Consulado cargo al que acce- dió en 1794.6 Señala allí que sus ideas y afa- nes de renovación y mejoramiento del es- b. Manuel Belgrano, un activo secreta- tado social del Virreinato chocaron, con los rio del Consulado intereses de los comerciantes españoles afin- No es esta la ocasión para recordar la he- cados en el monopolio de la metrópoli del roica aunque no siempre exitosa campaña cual obtenían amplios beneficios. Ello lo ins- militar de Manuel Belgrano en pos de afian- tó a llevar adelante una labor ejemplar que zar la Independencia.5 Me interesa recor- ha quedado reflejada en algunas de las Me- morias que preparó para el Consulado. Leyó la primera de ellas en la sesión del 15 de 3 Mariluz Urquijo, José M. “La Crisis del Régimen” en la junio de 1795, al iniciarse el segundo año de obra colectiva Historia Argentina, dirigida por Roberto vida de la institución, y mereció calurosa fe- Levillier, Buenos Aires, Plaza y Janés, 1968, T. II, Cap. 20, licitación de sus miembros. En ella se ocupó p. 1335, esp. 1346-1347. En adelante: Levillier. Historia Argentina. de los Medios generales de fomentar la agri- 4 Para la formación intelectual de los hombres de Mayo cultura, animar la industria, proteger el comer- véase: Romero Carranza, Ambrosio. “Bagaje doctrinal de cio de un país agricultor. Doctrinariamente los hombres de Mayo ¿Fue revolucionaria la doctrina de sigue a los fisiócratas para quienes la agri- Mayo?”, en la obra colectiva Las Ideas Políticas de Mayo. Buenos Aires, Bibliográfica Omeba, 1963, pp. 9-29. cultura era la base de la economía social, y 5 Una de las fuentes principales para este estudio es: Mitre, Bartolomé: Historia de Belgrano y de la 6 Marfany, Roberto H. “El Virreinato del Río de la Plata Independencia Argentina, 4ª edición, Buenos Aires, Félix y la Gobernación Intendencia de Buenos Aires”, en Lajouane editor, 1887. En adelante: Mitre. Historia de Levillier. Historia Argentina. T. II, Cap. 15, pp. 919-1031, Belgrano. esp. pp. 971-982.

10 en punto a las soluciones prácticas, adopta por el cultivo, de todo lo cual existían “mu- las mismas que aconsejaba Campomanes chos libros” donde aprenderlo, pero lo ig- para España y que las había expuesto en el noraban nuestros labradores, cuyos cono- Discurso sobre la educación popular y fomento cimientos eran empíricos y primitivos. Con- de los artesanos, y en el Discurso sobre el fo- sideró también indispensable la fundación mento de la industria popular, que corrían de una escuela de dibujo cuyo arte debía impresos, y las de Gaspar Melchor de Jove- poseer “todo menestral para perfeccionar- llanos en su Informe de la Sociedad Económi- se en su oficio: carpintero, cantero, borda- ca de Madrid al Real y Supremo Consejo de dor, sastre, herrero, y hasta los zapateros no Castilla en el expediente de Ley agraria. podrían cortar sus zapatos sin el ajuste y la perfección debida si no saben dibujar”, de- Después de reconocer la agricultura como biendo ser obligatorio ese aprendizaje y el destino natural del hombre, Belgrano pro- examen a los operarios o artesanos para pone en la Memoria un vasto plan de refor- ser maestros en su oficio. Y estimaba que mas a imitación de los citados autores es- no era menos útil ese conocimiento “al teó- pañoles. Señala la necesidad primordial de logo a quien le es indispensable algún estu- crear escuelas gratuitas de primeras letras dio de geografía”, y al agrimensor y al médi- en todas las ciudades y pueblos del Virrei- co para interpretar las láminas de los libros nato, a fin de desterrar el analfabetismo y la de anatomía; “en una palabra, debe ser este ociosidad de la niñez, que se observaba en conocimiento tan general que aún las muje- infinidad de familias con “hombres ociosos res lo debían tener para el mejor desempe- en quienes no se ve otra cosa que la miseria ño de sus labores”. y la desnudez.” Las niñas deberían ser ense- ñadas en “la doctrina cristiana, a leer, escri- También es motivo de su atención el co- bir, coser, bordar, etc., inspirándoles princi- mercio, que “no se reduce a comprar por palmente el amor al trabajo para separarlas diez y vender por veinte”, afirma Belgrano de la ociosidad, tan perjudicial o más en las en la Memoria, sino que es una “ciencia” que mujeres que en los hombres”. Con iguales requiere otros conocimientos que los de rudimentos de instrucción y educación ge- comprar y vender. Para alcanzarlos propo- neral, los niños podrían ir después a los ta- ne la creación de una escuela comercial di- lleres de los artesanos para aprender un vidida en tres ciclos: el primero con nocio- oficio. Y para combatir la ociosidad y la mi- nes de contabilidad, reglas de cambio, co- seria, establecer escuelas gratuitas de hilaza rrespondencia comercial, etcétera; el segun- de lana y algodón, para gente pobre y espe- do para enseñar la legislación sobre comer- cialmente para niñas y niños, separados por cio, navegación, seguros, y el tercero, con sexo. cursos de geografía económica y de econo- mía política. Subsidiariamente una escuela de Dentro de ese primer paso de mejoramien- náutica para enseñar el arte de la navega- to general de las costumbres, en función ción a todo el que quisiera ser patrón de educativa y social, propuso también la fun- embarcaciones o piloto de río. dación de una escuela de agricultura –su idea principal– para enseñar a los jóvenes hijos En esa Memoria, Belgrano expone también de labradores los principios básicos de la un programa total de realizaciones para siembra, del cultivo, de la cosecha, de la de- mejorar la economía y el estado social, con fensa contra las plagas, de la naturaleza y miras de largo alcance y con sentido docen- calidad de las tierras y su transformación te y educativo. Traza de una vez todo lo que

11 el Consulado podría hacer a través del tiem- la utilidad de erigir una escuela de comer- po para cumplir sus fines de junta de fo- cio para enseñar metódicamente esa cien- mento que le marcaba la ordenanza de crea- cia en todos los ramos. La Memoria de 1802 ción. estuvo referida al establecimiento de fábri- cas de curtiembre, aconsejándose en ella la En los años siguientes presentó sucesivas contratación de maestros traídos de Irlan- memorias en las cuales propuso una serie da y de Vizcaya. En la de 1808 volvió a insis- de medidas innovadoras. En la de 1797 por tir sobre el comercio interior. Belgrano ejer- ejemplo, se ocupó de la utilidad del cultivo ció sus funciones de Secretario del Consu- del lino y del cáñamo. En la de 1798, a cuya lado hasta 1810 cuando se incorporó como lectura asistió el Virrey, los miembros de la vocal de la Primera Junta de Gobierno. Real Audiencia y el Rector del Colegio de San Carlos, se preocupó por destacar la importancia de crear sociedades privadas c. Mariano Moreno para la promoción de la agricultura y del arte. Ese mismo año, también por iniciativa La segunda figura clave del despertar argen- de Belgrano se creó la Escuela de Náutica, tino en lo intelectual es Mariano Moreno. cuyo reglamento se encargó de redactar. En De su persona me he ocupado ya en otra 1799 la Memoria fue leída por Juan José ocasión de modo que también me remito a Castelli, secretario interino, y versó sobre ese trabajo.7

7 Bianchi, Alberto B. “Actualidad de Mariano Moreno”. El Derecho (Diario especial de Derecho Constitucional) en prensa.

12 III. LA REVOLUCIÓN DE MAYO

a. El Cabildo Abierto del 22 de mayo Sin dudas el Cabildo Abierto del 22 de mayo contiene el primer debate constitucional La caída de la Junta Central de Sevilla ocu- democráticamente realizado en suelo argen- rrida en enero de 1810 fue conocida en tino.12 Lamentablemente no se tomó la pre- Buenos Aires recién en mayo, luego de que visión de llevar un registro –oficial o parti- el día 14 arribara un buque británico proce- cular– de cuanto se dijo en él, de modo que dente de Río de Janeiro que traía la noticia los historiadores han ido reconstruyendo los del colapso del gobierno español.8 El Virrey discursos e intervenciones sobre la base de Cisneros recién oficializó la noticia –que ya memorias y demás documentos elaborados circulaba por todos lados– en un comuni- por quienes asistieron. Ello ha permitido cado emitido el día 189 e inmediatamente tener una versión bastante aproximada aun- el ambiente político, ya enrarecido por la que no absolutamente exacta de la polémi- vacilante situación política de la Península, ca trabada allí. No obstante es claro que el se pobló de versiones y actividad revolucio- centro de la discusión y lo que en definitiva naria.10 Surgió entonces la idea de convo- estuvo sometido a votación fue si debía per- car a un Cabildo Abierto en el cual se pu- mitirse la continuidad del Virrey o si por el diera debatir el curso de las decisiones que contrario era legítima la formación de un en el orden político debían tomarse.11 Fi- gobierno criollo en sustitución de las auto- nalmente la asamblea tuvo lugar el día 22. ridades españolas.13 Pese a las dificultades señaladas hay coincidencia en que la posi-

8 Un día antes había llegado a Montevideo la fragata Juan Paris, procedente de Gibraltar, que traía también 12 Si tomamos la población de Buenos Aires por la noticia publicada en gacetillas inglesas, cuya entonces, la convocatoria fue muy amplia, pues sobre confiscación fue ordenada por Cisneros. un total de 45.000 habitantes aproximadamente, se 9 Puede verse su texto en: San Martino de Dromi, Ma. enviaron 450 invitaciones, esto es un 1%, y concurrieron Laura. Documentos Constitucionales Argentinos. Buenos 251 personas. Finalmente se emitieron 224 votos. Aires, Ediciones Ciudad Argentina, 1994, p. 1781 y sigs. 13 La fórmula de la votación, propuesta por Antonio En adelante: San Martino de Dromi. Documentos. José de Escalada, fue la siguiente: “Si se ha de subrogar 10 Rayces, Federico. La Revolución de Mayo como otra autoridad a la Superior que obtiene el Antecedente Constitucional Argentino. Buenos Aires, Excelentísimo Señor Virrey dependiente de la Soberana Abeledo-Perrot, 1960, p. 54. que se ejerza legítimamente a nombre del señor Don 11 Uno de los interrogantes de esta parte de nuestra Fernando VII y en quién [...]” y que cada votante entrase historia ha sido quién tuvo originalmente la idea de a la sala de Acuerdos “a poner su voto cada uno por sí” convocar al Cabildo Abierto, ya que según las Memorias rubricándolo solamente. También habían propuesto de Saavedra la idea partió de él, mientras que el informe otras fórmulas Castelli y Leyva, pero fueron rechazadas de Cisneros atribuye al Virrey la iniciativa. Conf. Rayces, por ser la primera demasiado emancipadora y la p. 54. segunda por contrarrevolucionaria.

13 ción española fue defendida principalmente tivo –dijo– y no habiendo regencia no exis- por el obispo Benito Lue y Riega, y por Ma- te gobierno legal en España y el que se for- nuel Genaro Villota, un respetado abogado me no tiene jurisdicción en América. Faltan- y fiscal de la Real Audiencia. Del lado patrio- do el Rey y su representación –agregó– so- ta la tesis de la independencia fue defendida meterse a la autoridad española sería esta- por Juan José Castelli y Juan José Paso.14 blecer un vasallaje de vasallos sobre vasa- llos.” El general Pascual Ruiz Huidobro apo- Iniciado formalmente el acto por el actua- yó la opinión de Castelli e inmediatamente rio del Cabildo, tomó la palabra monseñor Manuel Villota se hizo cargo de la defensa Lue y Riega. Su exposición, más emotiva que de la posición española. Con indudable es- jurídica, sostuvo la necesidad de no innovar píritu de abogado no refutó directamente en absoluto. Según su criterio la situación en España no debía tener influencia alguna en las colonias americanas. Parece haber En sus claustros recibió la licenciatura en 1788, y dicho incluso, que los criollos recién podrían enseguida abrió un estudio en Buenos Aires. En 1796 tener un gobierno propio cuando ya no su primo Manuel Belgrano logró que lo nombraran quedara un solo español en América. Lue- Secretario interino del Consulado de Comercio, go del obispo Lue, tomó la palabra Juan José mientras durara su ausencia de un año debida a su deficiente estado de salud. Tres años más tarde Castelli Castelli y desarrolló una fundada tesis jurí- fue designado Regidor del Cabildo. Había contraído dica para sostener que las autoridades es- enlace con María Rosa Lynch (quien le dio seis hijos), pañolas entonces existentes no tenían au- cuando en 1801 colaboró en la fundación de la Sociedad toridad alguna para pretender extender su Patriótica, Literaria y Económica, también escribió en el 15 Seminario de Agricultura y en el Telégrafo Mercantil. Los gobierno en América. “Estando el rey cau- comienzos del siglo XIX ponían ya de relieve las polémicas políticas originadas en la situación española, y Castelli adhirió a la llamada corriente carlotista, la 14 Véase el desarrollo del debate en: Levene, Ricardo. La cual ante la ausencia de Fernando VII apoyaba los Revolución de Mayo y Mariano Moreno. Buenos Aires, derechos a gobernar en Buenos Aires de la infanta Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, 1921, T. II, p. Carlota Joaquina, hija del rey Carlos IV de España y 53 y sigs.; González Calderón, Juan A. Historia de la hermana de aquél, quien además estaba casada con el Organización Constitucional. Buenos Aires, Ed. Lajouane, príncipe portugués Juan de Braganza, regente del trono 1930, en adelante: González Calderón. Historia; Bidart de Portugal, residente en el Brasil. Por entonces fue Campos, Germán J. Historia Política y Constitucional arrestado en Montevideo un médico inglés, Diego Argentina, Buenos Aires, Ediar, 1976, T. I, pp. 28-36; Paroissien, en cuyo poder se encontró documentación Romero Carranza, Ambrosio, Rodríguez Varela, Alberto de Saturnino Rodríguez Peña instando a la urgente y Ventura, Eduardo: Historia Política y Constitucional coronación de la Infanta. Santiago de Liniers procesó a Argentina. Buenos Aires, A-Z editora, 1993. T. I, p. 209 y los principales complicados, desde Paroissien hasta sigs. (en adelante: Romero Carranza y otros. Historia). Rodríguez Peña, y Castelli asumió su defensa. En su 15 Esta misma tesis había sido sostenida ya por Castelli escrito –considerado como el antecedente jurídico de como abogado defensor de los Rodríguez Peña y del mayor relieve en la fundamentación posterior del doctor Paroissien, un médico inglés, en una causa Cabildo abierto del 22 de mayo de 1810– el hábil criminal que se les inició con motivo de haber defendido abogado señalaba que Paroissien no podía ser juzgado supuestamente la tesis del carlotismo. Juan José Antonio por las ideas de Rodríguez Peña. Al mismo tiempo Castelli Villarino había nacido en Buenos Aires el 19 de advertía que ni éste ni tampoco sus teorías eran julio de 1764, hijo de un médico veneciano, Ángel condenables: “[...] teniendo en cuenta que la necesidad Castelli Salomón, y de una porteña, María Josefa Villariño de la regencia de la Princesa procedía de sus derechos y González de Islas. El futuro vocal de la Junta de Mayo eventuales a la corona de España.” Desarrolló luego cursó sus primeros estudios en el Real Colegio argumentos filosóficos, jurídicos y políticos que fueron Convictorio Carolino y luego en Córdoba. Al regresar utilizados más tarde en el Cabildo Abierto, para justificar a la capital del Virreinato, muerto ya su padre, el joven el derecho del pueblo rioplatense a reasumir su Castelli decidió seguir la carrera de Derecho, soberanía, como consecuencia de la ausencia de trasladándose entonces a la Universidad de Chuquisaca. Fernando VII.

14 la tesis de Castelli, sino que argumentó há- Una vez computados los sufragios, los regi- bilmente sobre la falta de legitimidad del dores del Cabildo eligieron la Junta de Go- pueblo de Buenos Aires para arrogarse la bierno que sustituiría al Virrey. Allí en un úl- representación de todo el Virreinato. En este timo intento por preservar a Cisneros en estado entró en escena Juan José Paso quien el poder, la Junta elegida estaba presidida por replicó a Villota sosteniendo la teoría del éste, bien que sin el título de Virrey. El Ca- gestor de negocios, que permitía a Buenos bildo intentaba con ello un gobierno de coa- Aires –dada la urgencia de la situación– pres- lición integrado por representantes de las cindir de la conformidad de los restantes tres principales tendencias que existieron cabildos y declarar la caducidad del manda- en el Cabildo Abierto del 22 de mayo: dos to del Virrey. Si bien los historiadores no miembros del partido del Cabildo, o mode- se han puesto totalmente de acuerdo acer- rados, Sola e Incháurregui; dos revoluciona- ca de lo dicho por Paso, todo parece indicar rios, Saavedra y Castelli y el propio Virrey sin embargo que su posición estuvo ende- Cisneros. Sin embargo la situación no era rezada a justificar –bajo alguna forma jurídi- nada clara, pues un bando a la vez que infor- ca– la representación de Buenos Aires en la maba la constitución de la Junta, decía: “Ha emergencia.16 de presidir el referido Señor Excelentísimo virrey con voto en ella, conservando en lo Escuchadas las ponencias el asunto fue so- demás su renta, y las altas prerrogativas de metido a votación. Votó en primer lugar el su dignidad, mientras se erige la Junta Ge- obispo Lue y Riega; lo hizo después Ruiz neral del Virreinato”. Huidobro, por la cesación de Cisneros y se sucedieron luego varios votos favorables al La Junta así integrada juró el día 24 pero el Virrey hasta que Cornelio Saavedra emitió descontento popular con ella fue manifies- un voto claramente enderezado a la forma- to y no se hizo esperar, lo que provocó su ción de una junta de gobierno que suplanta- inmediata renuncia.18 ra a aquél. En su voto reside la fórmula ideo- lógica de la revolución de Mayo “[...] no que- de duda que es el pueblo el que confiere la b. Constitución de la Primera Junta autoridad o mando [...]”. Del recuento total La Revolución, jurídicamente fundada y po- surge que de las 251 personas que concu- líticamente producida el 22 de mayo, se con- rrieron, 225 votaron y 26 no lo hicieron. El sumó tres días después, cuando por orden Virrey obtuvo 61 votos en favor y 164 en del Cabildo y a petición del pueblo de Bue- contra.17 nos Aires se constituyó la Junta Provisional Gubernativa de las Provincias del Río de la Plata, más conocida como Primera Junta.19 16 La polémica histórica sobre la intervención de Paso puede verse en la obra de Vicente Fidel López, citada por Romero Carranza y otros. Historia. T. I, p. 215. 17 Votaron por la caducidad del mando del Virrey 49 18 Carlos Pueyrredón relata pormenorizadamente estos militares, 17 abogados, 18 eclesiásticos, 25 comerciantes, acontecimientos con apoyo en las actas del Cabildo. 26 vecinos, 10 alcaldes de barrios, 6 funcionarios, 4 médicos, Pueyrredón, Carlos A. “La Revolución del 25 de mayo 3 escribanos, 2 marinos, 2 alcaldes de la Santa Hermandad, de 1810” en Levillier. Historia Argentina. T. II, Cap. 21, esp. 1 Licenciado y 1 Catedrático. En favor del Virrey hubo 11 p. 1430-1434. militares, 15 funcionarios, 22 comerciantes, 6 eclesiásticos, 19 Es innegable que su nombre estuvo influido por el de 3 vecinos, 1 marino, 1 abogado y escribano, y 1 alcalde de las juntas que habían gobernado en España luego de la barrio. caída de la monarquía.

15 Su acto fundacional está claramente refleja- ca á nuestro Amado Soberano, el Señor do en el acta elaborada por el Cabildo el D. Fernando VII y sus legítimos sucesores, día 25 de mayo,20 de la cual surge: “[...] un y observar puntualmente las leyes del reino”. considerable número de vecinos, los coman- ❏ “Lo tercero, que luego que los referidos dantes y varios oficiales de los cuerpos vo- Señores presten el juramento, sean recono- luntarios de esta capital por sí y a nombre cidos por depositarios de la autoridad supe- del pueblo [...] habiendo reasumido la auto- rior del vireinato, por todas las corporacio- ridad y facultades que confirió [...] quiere nes de esta capital y su vecindario, respetan- que este Exmo. Cabildo proceda á hacer do y obedeciendo todas sus disposiciones, nueva eleccion e Vocales que hayan de cons- hasta la congregacion de la Junta general del tituir la Junta de Gobierno; y han de ser los vireinato; bajo las penas que imponen las le- Señores D. Cornelio de Saavedra, Presiden- yes á los contraventores”. te de dicha Junta, y Comandante general de Armas, el Dr. D. Juan José Castelli, el Dr. D. ❏ “Lo cuarto, que la Junta ha de nombrar Manuel Belgrano, D. Miguel Azcuenaga, Dr, quien deba ocupar cualquiera vacante por D. Manuel Alberti, D. Domingo Mateu, y D. renuncia, muerte, ausencia, enfermedad, ó , y Secretarios de ella los Docto- remoción”. res, D. Juan José Paso, y D. Mariano Moreno; ❏ “Lo quinto, que aunque se halla plenisi- cuya eleccion se deberá manifestar al pue- mamente satisfecho de la honrosa conduc- blo por medio de otro bando público [...] Y ta y buen procedimiento de los Señores los Señores, habiendo salido al balcon de mencionados, sin embargo, para satisfaccion estas casas capitulares, y oido que el pueblo del pueblo, se reserva tambien estar muy á ratificó por aclamacion el contenido de di- la mira de sus operaciones, y caso no espe- cho pedimento ó representacion, despues rado que faltasen á sus deberes, proceder á de haberse leido por mi en altas é inteligi- la deposicion con causa bastante y justifica- bles voces, acordaron que debian mandar y da, reasumiendo el Exmo. Cabildo, para este mandaban, se erigiese una nueva Junta de solo caso, la autoridad que le ha conferido Gobierno compuesta de los Señores expre- el pueblo”. sados en la representacion de que se ha hecho referencia, y [p. 48] en los mismos ❏ “Lo sexto, que la nueva Junta ha de celar términos a aparece, mientras se erige la Junta sobre el órden y la tranquilidad pública, y general del vireinato”. seguridad individual de todos los vecinos, haciéndosele, Como desde luego se le hace, A partir de allí el acta establece una serie responsable de lo contrario”. de disposiciones sobre el funcionamiento de la Junta: ❏ “Lo séptimo, que los referidos Señores, que componen la Junta provisoria, queden ❏ “Lo segundo que los Señores, que forman escluidos de egercer el poder judiciario, el la precedente corporacion; comparezcan sin cual se refundirá en la Real Audíencia, á quien pérdida de momentos en esta Sala Capitu- se pasarán todas las causas contenciosas que lar á prestar el juramento de usar bien y no sean de gobierno”. fielmente sus cargos, conservar la integri- dad de esta parte de los dominios de Améri- ❏ “Lo octavo, que esta misma Junta ha de publicar todos los dias primeros del mes, 20 Véase el acta en San Martino de Dromi. Documentos. un estado en que se dé razon de la adminis- Pp. 1842-1845. tracion de Real Hacienda”.

16 ❏ “Lo nono, que no pueda imponer contri- la Iglesia de San Nicolás, dos fuertes comer- buciones, ni gravámenes al pueblo ó sus ve- ciantes españoles, Domingo Matheu y Juan cinos, sin prévia consulta y conformidad de Larrea y cuatro abogados, Manuel Belgrano, este Exmo. Cabildo”. Juan José Castelli, Juan José Paso y Mariano Moreno. Al primero le fue confiada la Se- ❏ “Lo decimo, que los referidos Señores cretaría de Hacienda y al segundo la de despachen sin pérdida de tiempo órdenes Gobierno, Relaciones Exteriores y Guerra. circulares á los Gefes de lo interior y demas á quienes corresponda, encargándoles muy Tal como la calificó en su momento Barto- estrechamente, y bajo de responsabilidad, lomé Mitre, el acta del 25 de mayo suscrita hagan que los respectivos Cabildos de cada en el Cabildo de Buenos Aires, por medio uno convoquen por medio de esquelas la de la cual se formaliza la Primera Junta, cons- parte principal y mas sana del vecindario, tituyó: “la primera Constitución política que para que, formado un Congreso de solos tuvo el pueblo argentino”.22 Ya veremos más los que en aquella forma hubiesen sido lla- adelante que ella contiene en sí misma to- mados, elijan sus Representantes, y estos dos los elementos básicos de un sistema de hayan de reunirse á la mayor brevedad en gobierno establecido sobre bases republi- esta Capital para establecer la forma de go- canas. bierno que se considere mas conveniente”. ❏ “Lo undécimo, que elegido así el Repre- c. Circular del 27 de mayo sentante de cada ciudad ó villa, tanto los elec- tores como los individuos capitulares le Dos días después de instalada, la Primera otorguen poder en pública forma, que de- Junta emitió una circular en la cual muestra berán manifestar cuando ocurran á esta con bastante claridad las dos intenciones que Capital, á fin de que se verifique su cons- la animaban por entonces: 1) mantener fi- tancia; jurando en dicho poder no recono- delidad al rey Fernando VII y 2) convocar a cer otro soberano que al Sr. D. Fernando las restantes provincias del Virreinato para VII y sus legítimos sucesores, segun el ór- que se incorporaran al nuevo gobierno.23 den establecido por las leyes, y estar su- Dice esta extensa Circular en lo que aquí bordinado al gobierno que legitimamente interesa: “El pueblo de Buenos Aires, bien les represente”. cierto del estado lastimoso de los dominios Inmediatamente después se labró el Acta de europeos de S. M. C. el Sr. D. Fernando VII Instalación de la Junta que da cuenta del ju- [...] estimó desplegar la energía que siem- ramente de todos sus miembros.21 Quedó pre ha mostrado para interesar su lealtad, así constituido el primer gobierno argenti- celo y amor por la causa del Rey Fernando, no, con un órgano colegiado de nueve miem- removiendo los obstáculos que la descon- bros, presidido por Cornelio de Saavedra, fianza, incertidumbre y desunion de opinio- jefe indiscutido del Cuerpo de Patricios y nes podrian crear en el momento mas críti- con gran influencia sobre las demás fuerzas co que amenaza, tomando á la América des- armadas. Estaba acompañado por un militar, apercibida de la base sólida del gobierno que el coronel Miguel de Azcuénaga, un clérigo, pudiese determinar su suerte en el conti- el presbítero Manuel Alberti, cura rector de

22 Mitre. Historia de Belgrano. T. I, p. 345. 21 Ídem, pp. 1845-1847. 23 Ídem, pp. 1848-1851.

17 nente americano español [...] Asimismo im- tismo y fidelidad que tan heroicamente se porta que Vd. quede entendido, que los Di- ha desplegado: nunca es mayor que cuando putados han de irse incorporando en esta el choque de las opiniones pudiera envol- Junta conforme y por el órden de su llegada ver en tinieblas aquellos principios, que los á la capital, para que así se hagan de la parte grandes talentos puedan únicamente redu- de confianza pública que conviene el mejor cir a su primitiva claridad; y la Junta, a más servicio del Rey y gobierno de los pueblos; de incitar ahora generalmente a los sabios imponiéndose, con cuanta anticipacion con- de estas Provincias para que escriban sobre viene á la formación de la general, de los tan importantes objetos, los estimulará por graves asuntos que tocan al gobierno”. otros medios que les descubran la confian- za que ponen en sus luces y en su celo”. d. Fundación de La Gaceta El 7 de junio apareció el primer ejemplar en el cual Moreno escribió: “Nada se presenta Entre los primeros pasos de la Junta, uno de más magnífico a la consideración del hom- los más trascendentes en el orden intelec- bre filósofo que el espectáculo de un pue- tual fue la fundación de su diario oficial, la blo que elige sin tumultos personas que Gazeta de Buenos Ayres, dispuesta el 1º de merecen su confianza y a quienes encarga junio a instancia de Moreno, menos de una el cuidado de su gobierno. Buenos Ayres semana después de constituido el nuevo había dado una lección al mundo entero por gobierno. La orden de fundación emitida por la madurez y moderación con que en el con- la Junta ya es toda una declaración de prin- greso general se examinaron las grandes cipios: “El pueblo tiene derecho a saber la cuestiones que iban a decidir su suerte, y el conducta de sus representantes, y el honor feliz resultado de tan respetable asamblea de éstos se interesa en que todos conozcan produjo la augusta ceremonia del juramen- la execración con que miran aquellas reser- to solemne con que se estrecharon los vín- vas y misterios inventados por el poder para culos para la religiosa observancia de lo que cubrir los delitos [...] Para el logro de tan la pluralidad había sancionado. Dos tardes justos deseos ha resuelto la Junta que salga seguidas apenas bastaron para recibir los a luz un nuevo periódico semanal con el tí- votos de los funcionarios públicos e incor- tulo de Gazeta de Buenos Ayres, el cual, sin poraciones más respetables. El eclesiástico, tocar los objetos que tan dignamente se el regular, el militar, el togado, el empleado, desempeñan en el semanario de comercio, el vecino, todos concurrieron a jurar la fir- anuncie al público las noticias exteriores e meza y estabilidad de la nueva obra, por- interiores que deban mirarse con algún in- que todos reconocieron su justicia, confe- terés. En él se manifestarán igualmente las saron su necesidad y vieron el interés co- discusiones oficiales de la Junta con los de- mún íntimamente unido al particular de sus más Jefes y gobiernos, el estado de la Real personas”.24 Hacienda, las medidas económicas para su mejora y una franca comunicación de los 24 Y agregaba: “Las almas sensibles desfallecían con la motivos que influyan en sus principales pro- novedad de una impresión dulcísima, a que no estaban videncias abrirá la puerta a las advertencias acostumbradas, un numeroso cuadro de tropas en que desea de cualesquiera que pueda con- quienes la ternura ocupaba el lugar de la ferocidad que tribuir con sus luces a la seguridad del acier- las distinguió en los combates, la asistencia de los oficiales de la marina inglesa, y principales individuos to. La utilidad de los discursos de hombres de su comercio, el prelado de la Iglesia y jefes de todas ilustrados que sostengan y dirijan el patrio- las corporaciones públicas, alternando con los nuevos

18 e. Dificultades políticas de la Junta co acata a la Junta y, al igual que Montevideo, en Asunción se jura el 24 de julio fidelidad El primer inconveniente político de la Junta al Consejo de Regencia. Al mismo tiempo, fue la falta de reconocimiento de su autori- Bernardo de Velasco, gobernador de Para- dad en algunas provincias. Lo que pacífica- guay, inicia aprestos bélicos para luchar con- mente se había logrado con argumentos ju- tra Buenos Aires. El complot que en Asun- rídicos el 22 y 25 de mayo, se convirtió en- ción encabeza el doctor Pedro Somellera seguida en una lucha político militar en la es descubierto y los implicados son deste- cual las autoridades de Buenos Aires esta- rrados. ban francamente aisladas, lo que tarde o tem- prano llevó a la pérdida –para el futuro te- Incluso en Buenos Aires se expande la con- rritorio argentino– de dos provincias del trarrevolución. El Cabildo y la Audiencia ju- Virreinato: la Banda Oriental y Paraguay. El ran secretamente fidelidad al Consejo de 2 de junio una asamblea de vecinos de Mon- Regencia. Por ello, el 22 de junio, la Junta tevideo resuelve no reconocer al gobierno tiene que expulsar a los oidores y al virrey, de Buenos Aires y jura fidelidad al Consejo quienes son embarcados con destino a las de Regencia instalado en Cádiz. Poco des- islas Canarias. Pero el principal foco de re- pués una insurrección instigada por la Pri- sistencia se instaló en Córdoba, dentro del mera Junta y encabezada por Prudencio propio territorio argentino, donde el ex vi- Murgiondo y Juan Balbín de Vallejos, fracasa rrey Santiago de Liniers, encabezó una su- en Montevideo el 12 de julio. Los cabecillas blevación junto con el gobernador Gutié- son detenidos y remitidos a España. La Ban- rrez de la Concha y el obispo Orellana. Sor- da Oriental queda convertida así en un cen- do a las consideraciones que le hace Miguel tro contrarrevolucionario. Paraguay tampo- de Irigoyen, enviado por la Junta, Liniers emprende sus planes contrarrevolucionarios, lo que obliga al gobierno de Buenos Aires a enviar en el mes de julio una expedición comandada por Ortiz de Ocampo, secun- representantes del pueblo, y dando a éste desde los dado por Antonio González Balcarce, con balcones de las casas consistoriales una prueba nada orden de detener a Liniers y a sus principa- equívoca de la sinceridad de sus sentimientos; el estruendo de la artillería aumentando por las les seguidores y de reunir en Córdoba una aclamaciones y vivas de veinte mil espectadores; la salva asamblea de vecinos para elegir al represen- de los buques ingleses que celebraban una función que tante de Córdoba en la Junta. sus jefes estaban admirando; el conjunto de mil circunstancias que felizmente se agolpan en los sucesos Profundizando aún más su decisión, el 28 de grandes; todo producía la ternura, la confianza, las esperanzas, más seguras, y elevando las almas de los julio la Junta ordena el fusilamiento de los jóvenes, arrancaba lágrimas a los viejos, para quienes contrarrevolucionarios en el momento que dejó de ser terrible la muerte después de haber visto todos o cada uno de ellos sean pillados, lo un día tan glorioso. La fórmula del juramento fue la que tiene lugar un poco después. Ante el siguiente: ¿Juráis a Dios nuestro Señor y estos Santos Evangelios reconocer la Junta Provisional Gubernativa avance de las tropas de Buenos Aires, las de las Provincias del Río de la Plata a nombre del Sr. milicias de Liniers se dispersan sin combatir Fernando VII, y para guarda de sus augustos derechos y son rápidamente alcanzadas y detenidas. obedecer sus órdenes y decretos; y no atentar directa Ortiz de Ocampo vacila sin embargo en ni indirectamente contra su autoridad, propendiendo pública y privadamente a su seguridad y respeto? Todos cumplir la orden de fusilamiento pues en juraron; y todos morirán antes que quebranten la Córdoba surgen pedidos de clemencia que sagrada obligación que se han impuesto”. lo hacen dudar y, finalmente, decide remitir

19 a los prisioneros a Buenos Aires.25 Allí, la prisioneros hacia Buenos Aires y al día si- reacción de la Junta es tan inflexible como guiente, en el bosque de los Papagayos, cer- brutal y se envía a Castelli y a Nicolás Rodrí- ca de la Posta de Cabeza del Tigre, Córdo- guez Peña, escoltados por el coronel French ba, son ejecutados: Liniers y el gobernador y un grupo de soldados para proceder a la Gutiérrez, en presencia de Castelli; así se ejecución. El 25 de agosto, en Cruz Alta, Cas- consuma un acto de innecesaria y antijurí- telli alcanza a la tropa que conduce a los dica severidad.26

25 Córdoba entera pide entonces por la vida de los prisioneros. Entre los cordobeses que imploran ese perdón figura el deán Gregorio Funes, electo ya diputado por esa ciudad a la Junta de Buenos Aires, y el único de los que en la asamblea de notables convocada por el gobernador Gutiérrez de la Concha, había dictaminado en favor del reconocimiento del nuevo gobierno. Enterado por Vieytes de lo resuelto en Buenos Aires –según relata el mismo deán– “[...] no pude oír sin estremecerme una resolución tan cruel como impolítica, pues a mi juicio ella iba a dar a la revolución un carácter de atrocidad y de impiedad.” Su hermano Ambrosio Funes consigue que Ortiz de Ocampo no cumpla la sentencia, 26 La vida de Liniers y sus últimos momentos están condicionando este jefe militar su actitud a lo que relatados en la clásica obra de Paul Groussac. Santiago resuelva Vieytes, quien cediendo ante los argumentos de Liniers, Conde de Buenos Aires. Escrita en 1907. He del deán Funes dispone que la sentencia sea suspendida. consultado la edición de Elefante Blanco, Buenos Aires, Conf. Romero Carranza y otros. Historia. T. I, p. 251. 1998.

20 IV. APORTE CONSTITUCIONAL DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO

Salvo el fusilamiento de Liniers, que ensom- presten el juramento, sean reconocidos por brece al primer gobierno argentino, su apor- depositarios de la autoridad superior del te ha sido significativo y entre los muchos Virreinato, por todas las corporaciones de legados de la Primera Junta está el nacimien- esta capital y su vecindario, respetando y to de nuestro Derecho constitucional. Por obedeciendo todas sus disposiciones [...] ello, antes de cerrar el primer ciclo de nues- bajo las penas que imponen las leyes á los tra vida independiente, que concluye cuan- contraventores”. do en diciembre de 1810 llegan los disputa- dos de las provincias para constituir la lla- mada Junta Grande, creo que es necesario c. Federalismo hacer un alto en el relato para reflexionar Los gérmenes del sistema federal argentino sobre la contribución que este primer e in- están en la Circular del 27 de mayo cuando tenso año de vida independiente tuvo para dice: “[...] quede entendido, que los Diputa- nuestra disciplina, cuyos puntos básicos ya dos han de irse incorporando en esta Junta aparecen en el Cabildo Abierto del 22 y en conforme y por el órden de su llegada á la el acta del 25. capital, para que así se hagan de la parte de confianza pública que conviene el mejor ser- a. Soberanía del pueblo vicio del Rey y gobierno de los pueblos; im- poniéndose, con cuanta anticipacion convie- Ya en el Cabildo del 22 de mayo fue esta- ne á la formación de la general, de los gra- blecido el principio de la soberanía del pue- ves asuntos que tocan al gobierno.” blo. La proposición de Cornelio Saavedra, que impulsó los votos de todos los patrio- tas, expresaba: “[...] que no quede duda de d. Responsabilidad de los gobernantes que el pueblo es el que confiere la autori- dad o mando”. Además, el 25 el Cabildo En el acta del 25 se establece el principio de promulgó definitivamente el principio cuan- responsabilidad de los integrantes de la Jun- do confirmó la designación que el pueblo ta: “[...] aunque se halla plenísimamente sa- directamente había hecho de los miembros tisfecho de la honrosa conducta y buen pro- del nuevo gobierno. cedimiento de los Señores mencionados, sin embargo, para satisfacción del pueblo, se reserva también estar muy á la mira de sus b. Sujeción a la ley operaciones, y caso no esperado que falta- En el acta del 25 de mayo antes mencionada sen á sus deberes, proceder a la deposición se lee: “[...] luego que los referidos Señores con causa bastante y justificada, reasumien-

21 do el Exmo. Cabildo, para este solo caso, la “[...] que no pueda imponer contribuciones, autoridad que le ha conferido el pueblo”. ni gravámenes al pueblo ó sus vecinos, sin prévia consulta y conformidad de este Exmo. Luego se reafirma este principio “[...] que la Cabildo”. nueva Junta ha de celar sobre el orden y la tranquilidad pública, y seguridad individual de todos los vecinos, haciéndosele, como h. Necesidad de una Constitución desde luego se le hace, responsable de lo contrario”. La necesidad inmediata de una Constitución fue advertida tan pronto como el 25 de mayo, pues según el acta de ese día “[...] que e. Independencia del Poder Judicial los referidos Señores despachen sin pérdi- da de tiempo órdenes circulares á los Gefes También el acta del 25 dice: “[...] que los de lo interior y demás a quienes correspon- referidos Señores, que componen la Junta da, encargándoles muy estrechamente [...] provisoria, queden excluidos de ejercer el hagan que los respectivos Cabildos [...] con- poder judiciario, el cual se refundirá en la voquen [...] la parte principal y mas sana del Real Audiencia, a quien se pasarán todas vecindario, para que, formado un Congreso las causas contenciosas que no sean de go- [...] elijan sus Representantes, y estos hayan bierno”. de reunirse á la mayor brevedad en esta Capital para establecer la forma de gobier- f. Publicidad de los actos de gobierno no que se considere mas conveniente”. Una vez más el acta de instalación de la Jun- ta es paradigmática: “[...] que esta misma Jun- i. El sistema electoral ta ha de publicar todos los días primeros Para la organización del Congreso Consti- del mes, un estado en que se de razón de la tuyente que se convocaba en el acta del 25, administración de Real Hacienda”. sus miembros serían elegidos por “la parte principal y más sana del vecindario”. La elec- g. Legalidad en materia tributaria ción de los constituyentes anticipaba así el sistema del colegio electoral que luego se También este principio cardinal del gobier- emplearía en la Constitución de 1853 para no democrático aparece el 25 de mayo: la elección del Presidente y Vicepresidente.

22 V. DE LA JUNTA GRANDE AL TRIUNVIRATO

A fines de 1810 la Primera Junta decide am- y sus seguidores que veían en esta incorpo- pliar su integración con los disputados pro- ración el fortalecimiento del partido de vinciales. Esta desconcentración del poder y Saavedra y por ello pretendían que los di- el aumento cuantitativo de la Junta –conver- putados provinciales se congregaran en un tida así en la llamada Junta Grande– habrá de Congreso Constituyente, sin integrar espe- durar muy poco tiempo. Un año después el cíficamente el gobierno,28 a mediados de Triunvirato –una creación de la propia Jun- diciembre de 1810 se hallaba ya en Buenos ta– instigado por la ascendente figura de Ri- Aires una nutrida delegación de represen- vadavia, se encarga de disolver la llamada Jun- tantes de todos los puntos del país. El 18 la ta Conservadora (continuación de la Junta Junta se dispuso a tratar el asunto y ese Grande) y expulsa a los representantes del mismo día fueron incorporados nueve di- interior, generando así la división fatal entre putados;29 Así quedó constituida la llamada los argentinos que se prolongará ya sin re- Junta Grande. El mismo 18 de diciembre, medio a lo largo de toda nuestra historia. Moreno renuncia y se aleja de la Junta. No obstante ello, a lo largo de 1811 se de- sarrolla un período muy activo en materia b. Creación de juntas provinciales de legislación constitucional, que deja como saldo una serie de normas algunas muy va- Una vez constituida la Junta Grande se de- liosas en cuanto a los principios por ellas cidió establecer en la capital de cada pro- invocados, bien que de escasa aplicación vincia una junta similar a la de Buenos Aires. práctica dada la turbulencia de la situación Ello tuvo lugar por medio del Decreto emi- política general. a. Incorporación de los diputados pro- 28 Moreno afirmaba –no exento de razón– que un ór- vinciales gano colegiado de tal magnitud como el que se preten- día formar carecería de toda eficacia y los hechos pos- Como vimos, desde su misma instalación la teriores confirmaron sus temores, pues antes de un Primera Junta había adquirido el compro- año el órgano ejecutivo del gobierno se había concen- miso de incorporar al gobierno a los dispu- trado en un Triunvirato. 29 tados de las ciudades provinciales, recono- Fueron incorporados el Deán Gregorio Funes (Cór- doba); Manuel Felipe de Molina (Mendoza); José Gar- ciendo así el carácter provisional que ella cía de Cossio (Corrientes); Manuel Ignacio Molina (Tu- tuvo como órgano del primer gobierno pa- cumán); José Antonio Olmos (Catamarca); Juan Igna- trio.27 Pese a la tenaz oposición de Moreno cio de Gorriti (Salta); Francisco de Gurruchaga (Ju- juy); Juan Francisco Tarragona (Santa Fe); y José Julián 27 Véase la Circular del 27 de mayo, supra punto III.c. Pérez (Tarija).

23 tido el 10 de febrero de 1811, entre cuyos en el café de Marco, desde el cual se organi- fundamentos figuran frases tan profundas zaba una oposición a la labor de la Junta como esta: “Después de haberse ensayado Grande, en particular de Saavedra y su prin- un magistrado en cometer usurpaciones, es cipal colaborador el deán Funes. Esta activi- preciso hacerse absoluto para asegurar la dad tuvo un pico de tensión los días 5 y 6 impunidad. Del quebrantamiento de las le- de abril cuando se conoció una suerte de yes al despotismo el camino es corto. En- complot preparado por French. El movi- tonces los súbditos esclavos no tienen ni miento no pasó de ser una asonada sin con- patria, ni amor al bien público, y el estado secuencias y como medio de prevenirla los lánguido ofrece á todo enemigo una presa elementos leales a Saavedra encabezados facil.”30 Luego en su articulado, este regla- por Grigera, alcalde del Cabildo, convoca- mento establecía la creación en la capital de ron a un grupo de personas en la Plaza Ma- cada provincia, comprendida la de Charcas, yor frente al Cabildo, para apoyar al gobier- de una Junta compuesta de cinco individuos no. El movimiento, pese a su escasa impor- (Artículo 1º) en la cual residía in solidum toda tancia, fue reprimido con severidad y se dis- la autoridad del gobierno de la provincia y puso el alejamiento del gobierno de los prin- eran de su conocimiento todos los asuntos, cipales seguidores de Moreno. De tal suer- que por las leyes y ordenanzas pertenecen te French, Beruti, Posadas, Azcuénaga, Vieytes, al presidente, o al gobernador intendente; Larrea y Rodríguez Peña, fueron reemplaza- pero con entera subordinación a la Junta dos en la Junta por Chiclana, Alagón Gutie- Superior (Artículo 2º). Estas juntas estaban rrez y Campana. Se ordenó asimismo la con- encargadas de velar incesantemente por la finación de los complotados en varios luga- “[...] tranquilidad, seguridad y unión de los res del país (Patagones, Mendoza y Santa Fe). pueblos encargados a su cuidado, y en man- Así, de los nueve integrantes originarios de tener y fomentar el entusiasmo a favor de la Primera Junta, un año después sólo que- la causa común [...]” (Artículo 12). Se en- daban en el gobierno Saavedra, Paso y Ma- cargarían también de la instrucción de las theu31 . milicias (Artículo 13) y del reclutamiento de tropas (Artículo 15). No tenían el ejercicio de funciones jurisdiccionales (Artículo 16) d. Reglamento de libertad de im- y no podían estar integradas por eclesiásti- prenta cos seculares ó regulares (Artículo 19), ni Poco después de estos hechos, la Junta Gran- por oidores de la Real Audiencia de Char- de produjo el más importante de los docu- cas, o ministros de Real Hacienda (Artícu- mentos constitucionales sancionados bajo lo 20). su gobierno, el Reglamento de Libertad de Imprenta sancionado el 20 de abril de 1811. El Reglamento está precedido de una lumi- c. Expulsión de los morenistas nosa y extensa exposición de motivos re- Muerto Moreno en viaje hacia Inglaterra, en marzo de 1811, sus seguidores encolumna- dos detrás de Domingo French, se reunían 31 El movimiento del 5 y 6 de abril y sus consecuencias están relatados con abundancia de detalles en Núñez, Ignacio. “Noticias Históricas de la República Argenti- na” en Biblioteca de Mayo, edición ordenada por el Senado de la Nación, Buenos Aires, 1960. T. I., p. 247 30 San Martino de Dromi. Documentos. P. 1871 y sigs. y sigs.

24 dactada por el deán Gregorio Funes en la cia pública y buenas costumbres, serán cas- cual explica la necesidad del instrumento tigados con la pena de la ley (Artículo 4º), legal adoptado. tarea que es encomendada a los jueces res- pectivos (Artículo 5º). Se mantiene la cen- Comienza Funes exaltando la libertad de sura previa en materia de libros y escritos prensa y dice: “Es cosa averiguada, que sin la religiosos (Artículo 6º). libertad de prensa no puede haber libertad en pensar, y que las costumbres y conoci- El Reglamento, sin embargo, es contradicto- mientos siempre padecen notable atrazo. La rio pues luego establece: “Para asegurar la sagrada ley de propiedad, de que el hombre libertad de la imprenta, y contener al mis- es tan zeloso, igualmente se extiende á la mo tiempo su abuso, se nombrará una Junta plena posesion de su persona, de sus facul- Suprema de censura, que deberá residir cer- tades fisicas, de sus talentos, y de sus bie- ca del gobierno, compuesta de 5 individuos nes”. Ello no le impide señalar al mismo tiem- y a propuesta de ellos otra semejante en po los peligros del libertinaje periodístico cada capital de provincia, compuesta de 3” “Pero la libertad á que tiene derecho la pren- (Artículo 13). Estas juntas integradas por sa no es á favor del libertinage de pensar: es eclesiásticos y regulares tenían por objeto sí á favor de la ilustracion, y de aquel alve- “examinar las obras que se hayan denuncia- drio que debe gozar el hombre sobre el mas do al poder ejecutivo ó justicias respectivas, privilegiado de sus bienes. Es para que tenga y si la Junta Censoria de provincia juzgase, el mérito de haber pensado bien, y no para fundando su dictamen, que deben ser dete- que halle un indulto á sus errores [...] Redu- nidas, lo harán así los jueces, y recogerán cida pues la cosa á terminos mas precisos los ejemplares vendidos” (Artículo 15). debemos decir, que es debida la libertad de Como vemos bajo una aparente libertad de imprimir bajo la responsabilidad de la ley, y imprenta, el Reglamento preparado por el que no debe hallarse sometida a una licen- deán Funes en realidad era bastante restric- cia anticipada del gobierno.32 tivo, pues establecía un sistema de censura En su articulado el reglamento establecía: previa que ya había sido abolido por enton- “Todos los cuerpos y personas particulares ces en países como Gran Bretaña.33 de qualquier condición y estado”, tienen li- bertad de escribir, de imprimir, y publicar sus ideas políticas, sin necesidad de licencia, revi- e. Otros instrumentos legislativos sión, y aprobación anterior a la publicación, Además del Reglamento sobre libertad de salvo las restricciones y responsabilidades imprenta, la Junta Grande emitió durante su establecidas en el decreto (Artículo 1º), por corta vida política, dos instrumentos jurídi- lo tanto quedan abolidos todos los juzgados cos más de importancia: el Reglamento so- de imprentas, y la censura de las obras polí- bre Recursos de Segunda Suplicación del 21 ticas (Artículo 2º). Tampoco serán respon- de junio de 1811 y el Decreto de Libertad e sables los autores e impresores por el abu- Igualdad de los Indios, fechado el 1º de sep- so de esta libertad (Artículo 3º), pero los tiembre de ese año. El primero es una nor- libelos infamatorios, los escritos calumnio- ma de carácter procesal según la cual todos sos, los licenciosos, y contrarios a la decen-

33 Véase Bianchi, Alberto B. “Orígenes históricos de la 32 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 1877-1889. libertad de expresión”en La Ley 1995-C, 901.

25 los recursos, quejas o agravios por injusticia rándose. Celebrado este cabildo el 19 de notoria que antes se planteaban ante el Rey, septiembre, resultaron elegidos Paso y Chi- deberían ser dirigidos en lo sucesivo a la clana. También se decidió la creación de una Junta, quien “delegará su conocimiento a la Junta consultiva cuerpo para el cual fueron sala o sesión de justicia” que corresponda.34 elegidas personas completamente oposito- El segundo tiene el estilo del deán Funes: ras a la Junta Grande. comienza con una viva exhortación por la Asediada y presionada por sus opositores, libertad y dignidad de los indios: “Nada se el 23 de septiembre la Junta Grande emitió ha mirado con más horror desde los pri- el Bando de creación del Triunvirato y de la meros momentos de la instalación del ac- Junta Conservadora.37 El gobierno se divi- tual gobierno, como el estado miserable y día así en dos órganos diferentes. La rama abatido de la raza de los indios”, pero en la ejecutiva quedaba a cargo de un triunvirato práctica lo único que figura en la parte dis- integrado exclusivamente por elementos positiva es la exención del tributo que aqué- porteños, Feliciano Chiclana, Manueal de llos pagaban a la corona de España.35 Sarratea y Juan José Paso. Se designaron a su vez tres secretarios, Bernardino Rivada- via en la cartera de Guerra, José Julián Pé- f. Regreso del partido porteño. Prime- rez en la de gobierno y Vicente López en la ra concentración del Ejecutivo: crea- de Hacienda. Los diputados provinciales, a ción del Triunvirato y de la Junta Con- su vez, pasaron a formar parte de la llamada servadora Junta Conservadora (también llamada Cor- Desde los hechos de abril de 1811 la Junta poración) ante la cual serían responsables Grande comenzó a experimentar en su en- los miembros del Triunvirato. La Junta Con- torno político un clima poco favorable. Al servadora quedó encargada del Poder Le- confinamiento de personas influyentes, se gislativo. Esto prueba cabalmente que la sumaron el disgusto generado por los car- distancia existente entre porteños y pro- gos imputados a Belgrano por el fracaso de vincianos ya era tan profunda que cada la campaña del Paraguay36 y la derrota del grupo ocupaba un órgano diferente en el ejército en el Alto Perú en la batalla de Hua- gobierno. qui el 20 de junio ante el general Goyene- che. Hacia el mes de septiembre la situa- ción se puso más tensa y fue obligado a re- g. Reglamento orgánico o de división nunciar Joaquín Campana, secretario de la de Poderes Junta, quien además fue intimado a abando- Establecido el nuevo gobierno tal como lo nar Buenos Aires. Este primer triunfo del describe el Bando del 23 de septiembre, el grupo porteñista permitió a sus partidarios Triunvirato instó a la Junta a emitir una nor- exigir la reunión de un Cabildo Abierto para ma para establecer el funcionamiento del elegir diputados por Buenos Aires para el gobierno. En cumplimiento de ello el 22 de Congreso constituyente que estaba prepa-

37 Fue publicado en la La Gaceta del 25 de septiembre de 1811. Véase su texto en San Martino de Dromi. 34 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 1893-1897. Documentos. P. 1900. Puede consultarse también Sam- 35 Ídem, pp. 1897-1899. pay, Arturo Enrique. Las Constituciones de la Argentina, 36 La campaña está relatada en Mitre. Historia de Belgrano. (1810-1972). Buenos Aires, EUDEBA, 1975. P. 107. En Caps. XII, XIII, XIV y XVI. adelante: Sampay. Las Constituciones.

26 octubre la Junta Conservadora emitió un niobra tan hábil como ilegítima pues el Ca- Reglamento de Separación de Poderes, en bildo como cuerpo municipal carecía de el cual se establecían las funciones de los competencia para examinar lo decidido por tres Poderes del Estado. El texto, preparado un órgano nacional.39 Pero Rivadavia logró por el deán Funes, es elemental e incomple- su objetivo, el Cabildo y la Junta Consultiva to pero sienta algunos principios básicos. El reunidos en asamblea rechazaron el Regla- Poder Legislativo reside en la “Junta Con- mento y provocaron de hecho la caída de la servadora de la Soberanía del Señor D. Fer- Junta Conservadora que poco después se- nando VII” a quien le compete la declara- ría formalmente disuelta. Este primer movi- ción de guerra, la paz, la tregua, los tratados miento en su ascenso al poder del enton- de límites, la creación de impuestos y de ces secretario del Triunvirato, ha merecido nuevos tribunales. También nombra los la repulsa generalizada de todos los auto- miembros del Poder Ejecutivo por renuncia res,40 con excepción naturalmente de los o muerte de los que ejercen el cargo, previa rivadavianos a ultranza.41 consulta al Triunvirato. A este último le co- rresponde ejercer la función ejecutiva y den- tro de sus funciones figura la organización h. El Estatuto Provisional de noviem- de los ejércitos, la recaudación e inversión bre de 1811 de los fondos del Estado, el cumplimiento Luego de desbaratar el Reglamento elabo- de las leyes, la seguridad individual, etc. Se le rado por la Junta Conservadora, Rivadavia prohíbe el ejercicio de funciones judiciales, acometió la tarea de elaborar otra norma. con excepción de las causas de contraban- Nació así el Estatuto Provisional del 22 de do y de recaudación de derechos aduane- noviembre de 1811, dictado por el Triunvi- ros. El Triunvirato era responsable ante la rato. Se trata de un reglamento de nueve Junta Conservadora. Se preveía finalmente la existencia de un Poder Judicial, el que era 39 La Junta elevó una protesta formal pero carente de independiente y sería responsable por los eficacia ante el ímpetu del Triunvirato. Decía en un ofi- atentados que cometiera contra la libertad cio fechado el 28 de octubre: “Esto en realidad no es otra cosa que pretender se subrogue la fuerza respe- y seguridad de los súbditos. table de nuestra representación al juicio de un cuerpo parcial, aunque también respetable, pero que por las Una vez sancionado, el Reglamento fue re- leyes tiene señalados sus límites, y debilitar la influen- mitido al Triunvirato para su promulgación. cia sobre los asuntos de su primer interés. No Excmo. Éste advirtió inmediatamente el intento de Sr., la voluntad libre y espontánea de los que represen- la Junta por subordinarlo a su poder plas- tamos, no puede suplirse, ni reformarse por el parecer de una sola corporación dependiente, que ella misma mado en dos cláusulas: la de nombramiento ha elegido sus diputados, y les ha transmitido su po- de sus miembros y la de responsabilidad de der”. Véase: Sampay. Las Constituciones. P. 114. éstos ante la Junta. Ni lerdo ni perezoso el 40 Véase Levene, Ricardo. “Formación del Triunvirato” secretario Rivadavia encontró un medio de en Historia de la Nación Argentina. Buenos Aires, Acade- mia Nacional de la Historia, 1943. Vol. V, secc. 2ª , p. 390; eludir el problema. En lugar de promulgarlo Romero Carranza y otros. Historia. T. I, p. 272; López o rechazarlo, el Triunvirato instado por aquél, Rosas, José Rafael. Historia Constitucional Argentina. Bue- decidió enviar en consulta el Reglamento al nos Aires, Astrea, 1990. P. 140, 4ª edición. En adelante, Cabildo y a la Junta Consultiva.38 Una ma- López Rosas. Historia Constitucional. 41 Ricardo Piccirilli, por ejemplo, autor de una de las principales biografías existentes sobre Rivadavia, des- cribe el hecho sin hacer comentarios. Piccirilli, Ricar- 38 Recordemos que la Junta Consultiva, estaba integra- do. Rivadavia y su Tiempo. Buenos Aires, Peuser, 1943. da también por elementos porteños. T. I, pp. 174-175. En adelante: Piccirilli. Rivadavia.

27 artículos sin validez jurídica o constitucio- española. El Artículo 8º dice: “El gobierno se nal alguna, por medio del cual Rivadavia in- titulará Gobierno Superior de las Provin- tenta consolidar su poder. En sus fundamen- cias Unidas del Río de la Plata a nombre del tos invoca una inexistente representación Señor D. Fernando VII”. de Buenos Aires respecto de todos los pue- blos del interior y menciona la “necesidad urgente de concentrar el poder para salvar i. Los decretos sobre seguridad indivi- la patria”,42 a la par que señala los presun- dual y libertad de imprenta tos peligros que encerraba la tiranía de la Paralelamente con el Estatuto Provisional, Junta Conservadora.43 se sancionaron dos normas: el Decreto de Su articulado está cuidadosamente elabo- Seguridad Individual del 26 de octubre y el rado por el secretario del Triunvirato, pues de Libertad de Imprenta del 23 de noviem- los miembros de este cuerpo se renuevan bre. A diferencia del Estatuto estas dos nor- periódicamente cada seis meses,44 sin em- mas poseen un gran valor jurídico y sientan bargo nada se dice de los secretarios quie- los principios constitucionales básicos de la nes además suplirán las ausencias tempora- seguridad individual –especialmente en lo les (Artículo 1º). Asimismo le corresponde relativo al proceso penal– y de la libertad al gobierno “[...] adoptar cuantas medidas de expresión. crea necesarias para la defensa y salvación de la patria, según lo exija el imperio de la Según el primero de ellos “Ningún ciudada- necesidad y las circunstancias del momen- no puede ser penado, ni expatriado sin que to.” (Artículo 6º). Lo más valioso de este preceda forma de proceso y sentencia le- Estatuto es la mención a un congreso de las gal.” (Artículo 1º), ni “[...] arrestado sin prue- Provincias Unidas que deberá reunirse “[...] ba al menos semiplena, ó indicios vehemen- luego que lo permitan las circunstancias.” tes de crimen, que se harán constar en pro- (Artículo 3º). No obstante queda claro to- ceso informativo dentro de tres días peren- davía, a más de un año de producidos los torios.” (Artículo 2º). Tenemos aquí una pri- hechos de mayo, que el gobierno criollo, in- mera disposición legal que contempla el cluso éste propiciado por Rivadavia, no está hábeas corpus. Asimismo, “Para decretar el dispuesto aún a cortar lazos con la corona arresto de un ciudadano, pesquisa de sus papeles, ó embargo de bienes, se individuali- 42 “El Pueblo de Buenos Aires que en el beneplácito de zará en el decreto ú orden que se expida el las provincias á sus disposiciones anteriores ha recibi- nombre ó señales que distingan su persona, do el testimonio más lisonjero del alto aprecio que le y objetos sobre que deben ejecutarse las dispensan, como á capital del reyno y centro de nues- diligencias, tomando inventario que firmará tra revolución gloriosa, representa al gobierno por medio de su respetable ayuntamiento la necesidad ur- el reo, y dejándole copia autorizada para su gente de concentrar el poder, para salvar la patria en el resguardo.” (Artículo 3º) y “La casa de un apuro de tantos conflictos”, San Martino de Dromi. ciudadano es un sagrado, cuya violación es Documentos. P. 1909. un crimen; sólo en el caso de resistirse el reo 43 “Deseaba, sin embargo, el gobierno una forma que sujetando la fuerza á la razón y á la arbitrariedad de la refugiado a la convocación del juez, podrá ley tranquilizase el espíritu público resentido de la des- allanarse; su allanamiento se hará con la de- confianza de una tiranía interior.” San Martino de Dro- bida moderación y personalmente por el juez mi. Documentos. P. 1910. de la causa.” (Artículo 4º). Se dispone tam- 44 “Siendo la amovilidad de los que gobiernan el obstáculo más poderoso contra las tentativas de la arbitrariedad y bién que las cárceles son para seguridad, y la tiranía [...]”, empieza señalando esta norma. no para castigo de los reos (Artículo 6º).

28 El Decreto de Libertad de Imprenta, comien- que marca además el ocaso político de Cor- za señalando en su exposición de motivos: nelio Saavedra.45 “Tan natural como el pensamiento le es al El día 16 el Triunvirato, aprovechando una hombre la facultad de comunicar sus ideas. revuelta menor producida unos días antes Es esta una de aquellas pocas verdades que en el Regimiento de Patricios,46 ordenó la mas bien se siente que se demuestra”. Lue- expulsión de los disputados provinciales go dispone: “Todo hombre puede publicar poniendo fin así a la Junta Conservadora sus ideas libremente y sin previa censura. cuyo decreto de extinción formal fue sus- Las disposiciones contrarias á esta libertad crito ese mismo día.47 Una semana después, quedan sin efecto.” (Artículo 1º). Pero lue- el 23 de diciembre, se disponía la disolución go al igual que el Decreto anterior elabora- de las juntas provinciales.48 El Triunvirato, do por el deán Funes en abril de ese mismo bajo la impronta de Rivadavia, ponía la pie- año, esta norma se preocupa más por repri- dra inaugural del aislamiento en que viviría mir los abusos cometidos con la libertad de Buenos Aires en relación con el resto del expresión que de proteger la libertad mis- país hasta lograr la unidad nacional que ven- ma. Así, establece: “El abuso de esta libertad dría recién en 1860 con la primera reforma es un crimen” y legitima para denunciar el a la Constitución de 1853. abuso a todos los ciudadanos, si compro- mete la tranquilidad pública, la conservación de la religión católica, o la constitución del Estado (Artículo 2º). Crea luego una Junta 45 Luego de la derrota del Ejército del Norte en Hua- Protectora de la Libertad de Imprenta inte- qui, Saavedra en agosto de 1811 es comisionado por la grada por nueve miembros que tiene como Junta Grande para hacerse cargo del problema. Se ale- ja así de la sede del gobierno y los acontecimientos objeto determinar si se ha cometido o no posteriores; esto es la creación del Triunvirato y el as- un delito por medio de la prensa. Dispone censo de Rivadavia, lo toman en Salta. Posteriormente también el Decreto: “Las obras que tratan su mando en el Norte es reemplazado por Pueyrre- de religión no pueden imprimirse sin previa dón y el Regimiento de Patricios –su sede militar natu- ral– es entregado al mando de Belgrano, consumándo- censura del eclesiástico.” (Artículo 8º). se así su alejamiento de la escena política. Véase Ruiz Guiñazú, Enrique: El Presidente Saavedra y el Pueblo So- berano de 1810, Buenos Aires, Ángel Estrada y Cía., 1960, j. Nuevo avance del porteñismo. Diso- pp. 433-447. lución de la Junta Conservadora y de 46 El hecho ha pasado a la historia como “el motín de las juntas provinciales. Expulsión de los las trenzas” y tuvo lugar el 7 de diciembre luego de que Belgrano se hiciera cargo del Regimiento y orde- disputados provinciales nara a sus integrantes cortarse las trenzas que lleva- ban como distintivo tradicional. Ofuscados los oficia- Victorioso Rivadavia luego de desbaratar les por esta orden decidieron resistirla y se amotina- el Reglamento redactado por el deán Fu- ron siendo rápidamente reprimidos y severamente cas- nes e imponer su propio Estatuto, ya no se tigados. detuvo en su intento por imponer el pre- 47 El texto de la orden de disolución, publicado en La Gaceta del 17 de diciembre, pone de relieve el tenor dominio de la ciudad capital sobre los pue- del encono de Rivadavia con la Junta Conservadora a blos y ciudades del interior. Acto seguido quien acusa de tratar de imponer a los pueblos “[...] la impulsó la disolución de la Junta Conser- dura ley de obedecer una soberanía que no han cons- vadora y de las juntas provinciales y propi- tituido, tolerar una aristocracia detestable y servir a los caprichos del antiguo despotismo”. San Martino de ció la expulsión de los diputados provin- Dromi. Documentos. Pp. 1918-1921. ciales. Todo transcurrió muy rápidamente 48 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 1921-1923; en el curso del mes de diciembre de 1811, Sampay. Las Constituciones. Pp. 99-100.

29 k. Proyecto de Constitución monárqui- son los pueblos y sólo el ejecutivo en el ca de 1811 monarca” y además deja ver con toda clari- dad que sus autores, quienesquiera hayan En el curso de este ajetreado año 1811 y sido, estaban influidos por un fuerte espíri- dentro de su hipertrofia legislativa, fue ela- tu porteñista50 al punto que en una de las borado un proyecto de Constitución mo- notas adicionales del proyecto se alude al nárquica, cuya autoría y fecha exacta se des- “Tirano Saavedra”. conocen. Fue descubierto en el Archivo General de la Nación por el historiador uru- El articulado refleja algunos de estos princi- guayo Flavio García y luego publicado en pios. “El Poder Soberano legislativo reside Montevideo por el profesor Edmundo Na- en los pueblos [...] El Poder ejecutivo, esto rancio, también uruguayo.49 es, la ejecución de las leyes que los pueblos hubieren establecido por Voluntad general En su exposición de motivos, de innegable pertenece al monarca el Señor Don Fernan- influencia rousseauniana, –lo que sugiere una do.” (Artículo 1º). Luego en los artículos si- contradicción con el reconocimiento al po- guientes se establece un Gobierno Superior der de Fernando VII, como veremos ense- Ejecutivo, creándose un órgano colegiado de guida– señala: “El Estado es una persona cinco miembros denominado Tribunado que moral compuesta de muchos pueblos, cuya ejercerá su poder en nombre de Fernando vida consiste en la unión de sus miembros”. VII. Aparece luego alguna disposición valio- Luego dice: “[...] poder de los pueblos diri- sa como el principio de legalidad en materia gido por la Voluntad general es lo que se tributaria (Artículo 10º) y al mismo tiempo llama propiamente soberanía”, por ello “solo se dispone la abolición de todas las leyes de los pueblos deben ser autores de las leyes a Indias y las de Castilla (Artículo 15º). Final- que estén sujetos”. Dice también: “[...] en mente se declara que la religión católica es toda monarquía bien ordenada el Poder el culto único y verdadero y se declara ex- Soberano legislativo reside en la Nación, que cluida la tolerancia civil de otros cultos.51

l. Modificación a la Real Ordenanza de 49 Narancio, Edmundo. “Las ideas políticas en el Río de la Intendencias Plata a comienzos del siglo XIX” en Revista de la Facultad de Humanidades y Ciencias, Nº 14, Montevideo, 1955; En enero de 1812 el Triunvirato expidió un citado por Sampay. Las Constituciones. P. 101. 50 “La primera atención de una Constitución civil, es Reglamento para la Administración de Justi- 52 reglar el gobierno Ejecutivo, porque siendo arbitrario, cia, que estuvo seguido inmediatamente (en) breve será despótico y tirano como lo ha hecho de otro proyecto volcado en una extensa ver la experiencia en todos los tiempos y de ellos te- norma de más de cien artículos, por medio nemos ejemplos muy recientes. Poseídos de esta bre- vedad y obligados de la urgente necesidad han forma- de la cual se intentó una reforma a la Real do antes del Congreso los Diputados de las Provincias Ordenanza de Intendentes de Carlos III, san- una Constitución Provisoria en que olvidando su des- tino y abusando de la confianza pública exceden abier- ta y descaradamente sus deberes, usurpan sacrílega- mente el soberano poder legislativo de los Pueblos, se hacen superiores a ellos, se declaran incapaces de ser juzgados por el Superior Gobierno y aun por los mis- mos pueblos, se atribuyen Alteza y en una palabra so- 51 El proyecto puede verse en San Martino de Dromi, metiendo los pueblos se colocan en el Trono”. San Documentos. Pp. 1923-1932. Martino de Dromi. Documentos. P. 1924. 52 Ídem. Pp. 1933-1942.

30 cionada en 1782.53 Por este medio se in- vincias Unidas y cien ciudadanos, compon- tentaba recrear el sistema de intendencias drán la Asamblea. El Ayuntamiento será su como forma de gobierno en las provincias Presidente”. Luego en el Artículo 2º se dis- estableciéndose: “La Superintendencia o Alto ponía: “Los ciudadanos se elegirán de los de Gobierno en las cuatro causas de: justicia, esta capital y de los otros pueblos de las política, hacienda y guerra en todo el distri- Provincias que se hallaren aquí aunque sea to de las Provincias Unidas queda reserva- de paso”. Para asegurar más aún el predo- do a esta Superioridad, y los Intendentes que minio del Triunvirato, el Artículo 7º decía: se pongan para gobernarlas se reputarán “Solo el Gobierno puede convocar la Asam- como delegados de ellas”. Rivadavia, eviden- blea y deberá hacerlo una vez cada seis temente, pretendía dar nueva vida al siste- meses. La Asamblea no es una corporación ma francés llevado a España por los Borbo- permanente. En ella no se tratarán otros nes, para eliminar así cualquier autonomía negocios diferentes de aquellos para que ha local. El proyecto como vemos, constituía el sido convocada, ni podrá permanecer en eslabón inmediato siguiente a la disolución sesion mas término que el de ocho días, á de las juntas provinciales. no ser que el Gobierno juzgue conveniente prorrogarla. Pasado el término cuanto se actúe sin este requisito será nulo”. Asimis- m. La breve asamblea constituyente de mo el Triunvirato se reservaba el derecho abril de 1812 de intervenir en la asamblea, bajo lo previs- También a comienzos de 1812 el Triunvira- to en el Artículo 8º: “El Gobierno podrá asis- to decidió convocar a la asamblea constitu- tir á la Asamblea en los casos en que lo exija yente que imponía el Estatuto Provisional el interés mismo de los negocios que deben de noviembre del año anterior y lo hizo bajo resolverse, y en que su presencia no pueda el espíritu que animó todos sus actos, es comprometer la libertad de las votaciones; decir, dando a Buenos Aires una preeminen- en estos casos tendrá la presidencia”. cia absoluta en la composición del órgano constituyente. El reglamento de la asamblea Pese a lo bien que Rivadavia había calculado de fecha 19 de febrero,54 en su Artículo 1º, esta convocatoria, la asamblea resultó ser establecía: “El Ayuntamiento de esta capital, más independiente de criterio de lo que se los apoderados de las ciudades de las Pro- esperaba. Por ello su vida política duró ape- nas un día. El primer acto de la asamblea luego de constituirse el 5 de abril, fue elegir el reemplazante de Juan José Paso en el Triun- 53 La Real Ordenanza para el Establecimiento e Instruc- virato. Estaba previsto de antemano que la ción de Intendentes de Ejército y Provincia en el Virreinato de Buenos Aires, procuró establecer en América el sis- elección recayera en Juan Martín de Puey- tema que ya imperaba en España y que los borbones rredón, pero como éste se hallaba al frente habían importado de Francia, donde había dado exce- del Ejército del Norte, su reemplazante inte- lentes resultados en la tarea de afianzar el poder real y rino natural debía ser Rivadavia, el secretario centralizar la Administración. El texto de este extenso documento puede verse en San Martino de Dromi. Do- más antiguo. La asamblea eligió a Pueyrre- cumentos. Pp. 127-324. Asimismo su análisis ha sido efec- dón, pero como reemplazante de éste puso tuado en esta misma obra (pp. 35-112). También puede a José Díaz Vélez, con el evidente disgusto de verse: Zorraquín Becú, Ricardo: La organización política don Bernardino. Para colmo al día siguiente argentina en el período hispánico. Buenos Aires, Editorial Perrot, 1981. P. 243 y sigs., 4ª ed. volvió a atentar contra la voluntad rivada- 54 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2003-2007. viana y se proclamó soberana, sin parar

31 mientes en que su poder derivaba únicamen- un decreto en el cual la asunción de sobe- te del Triunvirato, es decir, de su activo se- ranía por parte de la asamblea fue declara- cretario. La disolución del cuerpo no se hizo da “nula ilegal y atentadora contra los dere- esperar y ese mismo 6 de abril fue emitido chos soberanos de los pueblos”.

32 VI. LA ASAMBLEA DEL AÑO XIII

Históricamente el siguiente paso de impor- Rivadavia, su personalismo e intransigencia, tancia en la vida constitucional argentina fue condujeron a la caída del Primer Triunvira- la asamblea general constituyente reunida to. A mediados de 1812 la oposición a éste en Buenos Aires entre enero de 1813 y ene- ya era creciente y estaba fogoneada desde ro de 1815. Conocida habitualmente como algunos círculos de pensamiento liberal Asamblea del Año XIII; no alcanzó a llevar como la Sociedad Patriótica liderada por adelante su cometido esencial, esto es, dic- Monteagudo56 y la Logia Lautaro, una enti- tar una Constitución, pero en cambio pro- dujo numerosas piezas legislativas de singu- 56 José Bernardo de Monteagudo es una figura curiosa, lar trascendencia.55 polifacética y en general poco conocida de nuestra his- toria. Revolucionario, político, periodista y hombre de gobierno y esencialmente un apasionado de la estirpe de Moreno y Castelli. Fue asimismo, uno de los más a. Panorama político a fines de 1812. activos colaboradores de la causa de Mayo. Nació en Fracaso de una segunda asamblea Tucumán en agosto de 1789; estudió derecho en la constituyente y caída del Primer Triun- Universidad de Chuquisaca y se graduó en junio de 1808, previa lectura de un trabajo “Sobre el origen de virato la sociedad y sus medios de mantenimiento”, todavía Al igual que la Junta Grande, el Triunvirato impregnado de sentimientos tradicionalistas. Luego se hizo lector asiduo de Raynal, Voltaire y los enciclope- que la sucedió apenas se mantuvo en el po- distas e intervino en el movimiento revolucionario de der un año. Si bien como órgano de gobier- Córdoba en 1809, por esta participación fue detenido. no sobrevivió hasta la creación del Directo- En 1810, se trasladó a Buenos Aires donde se afilió rio en enero de 1814, cuando se produce la enseguida a la causa revolucionaria. Participó de la ex- pedición al Norte y Castelli lo designa su secretario. segunda concentración del Poder Ejecutivo Después del desastre de Huaqui baja a Buenos Aires. –en este caso bajo una forma unipersonal– Más tarde se le pone al frente de La Gaceta; la dirige lo cierto es que este Primer Triunvirato y alternativamente con Vicente Pazos Silva, con quien con él el poder ejercido en esta etapa por choca a causa de su encendida fe republicana y de sus convicciones francamente emancipadoras, retomando Rivadavia, terminan en octubre de 1812 la antorcha de Mariano Moreno. En 1812 publica Már- cuando se designa el llamado Segundo Triun- tir, o Libre en cuyas páginas acentúa la propaganda en virato bajo cuyo gobierno se llevará a cabo favor de la inmediata proclamación de la independen- la Asamblea de 1813. cia. Funda la segunda Sociedad Patriótica y es miembro conspicuo de la Logia Lautaro. Pertenece activamente a la fracción morenista, orientada por Alvear. Mendoza 55 Uno de los trabajos más completos sobre esta Asam- lo designa su representante para la Asamblea de octu- blea es: Canter, Juan. “Asamblea General Constituyen- bre de 1812, pero al ser rechazado su diploma asume te del Año XIII” publicado en Historia de la Nación Ar- una actitud abiertamente opositora transformándose gentina. Academia Nacional de la Historia, Vol. 6, pri- en uno de los gestores de la revolución que derrumba mera sección, pp. 9-201. el Primer Triunvirato. Tiene una activa participación en

33 dad similar que nucleaba entre otros a José nes de septiembre. En ese ínterin fue im- de San Martín y a Carlos M. de Alvear, re- pugnada la representación de Monteagudo cién llegados de Londres. Todo ello se agi- como diputado por Mendoza, con lo cual el gantaba además con la inestable suerte de gobierno se ganó uno de sus más fogosos las tropas patriotas en sus sucesivos encuen- adversarios. Realizada la apertura de las se- tros con los ejércitos españoles en el Nor- siones el 6 de octubre, uno de los primeros te y las dificultades existente en la Banda actos fue el nombramiento de Pedro Me- Oriental, 57 sumados a la desastrosa campa- drano como integrante del Triunvirato en ña en el Paraguay.58 reemplazo de Sarratea. Su proximidad con Rivadavia exaltó los ánimos, los que se cal- El conflicto tuvo su pico entre junio y octu- dearon más aún cuando ante la renuncia de bre. En junio el Triunvirato59 convocó a una Chiclana fue designado Manuel Obligado. La nueva asamblea constituyente por medio de asamblea entonces desistió del nombramien- una circular remitida a los cabildos. Final- to de Medrano y designó en sustitución de mente, luego de algunas dificultades, el cuer- éste a Chorroarín, pero ya era tarde. La re- po estaba en condiciones de reunirse a fi- vuelta en contra del Triunvirato y de la asam- blea estaba en marcha y el 8 de octubre se la Asamblea del Año XIII y luego en el gobierno de produjo la caída.60 La asamblea fue suspen- Alvear cuando éste es designado Director Supremo y dida, fueron removidos los miembros del edita El Independiente. Al caer Alvear viaja a Europa. En Triunvirato y en su reemplazo se designa- 1818 San Martín lo designa auditor de guerra del Ejér- cito de los Andes. Fue el redactor del Acta de la Inde- ron tres nuevos integrantes, Juan José Paso pendencia de Chile y, tras la emancipación del Perú, se –que pasaba a integrar así por tercera vez hizo cargo de la cartera de Guerra y Marina. En 1822 el gobierno– Nicolás Rodríguez Peña y An- pasó a desempeñar la de Gobierno y Relaciones Exte- tonio Álvarez Jonte. riores. Adoptó benéficas disposiciones en el orden cul- tural, diplomático y militar pero en Lima hay muchos Puede verse entonces, que en el curso de descontentos con su actuación, a causa especialmente de las convicciones monárquicas que abraza con su 1812 dos asambleas constituyentes fracasa- acostumbrado ardor desde su regreso de Europa. Sus ron inmediatamente después de haberse opositores de tendencia republicana, aprovechando la constituido, como consecuencia de preten- ausencia de San Martín, quien fuera a celebrar su his- siones y aspiraciones personales e irreduc- tórica entrevista con Bolívar, realizan con éxito un movimiento subversivo y el Cabildo de la ciudad lo tibles en la lucha por la composición del remueve del cargo en julio de 1822 exigiéndosele su órgano ejecutivo. Un tercer intento, mucho salida del país. Se traslada a Quito donde permanece más exitoso, tendría lugar a comienzos de hasta 1824, fecha en que Bolívar le permitió retornar a 1813 cuando se reunió la asamblea que, junto Perú y es asesinado en Lima el 28 de enero de 1825. Una de las biografías más completas que se han escrito con la Revolución de Mayo y el Congreso en nuestro país es Vedia y Mitre, Mariano de. La Vida de de Tucumán, constituyen los tres hitos más Monteagudo. Buenos Aires, Ed. Guillermo Kraft Ltda., destacados de la historia constitucional ar- 1950. gentina desde 1810 hasta la Constitución de 57 Los altibajos de la campaña del Ejército del Norte y los problemas con la Banda Oriental, bajo el Triunvira- 1853. to, están relatados con mucha claridad en Abad de San- tillán, Diego. Historia Argentina. Buenos Aires, Tipográfi- 60 Los hechos en contra del Triunvirato se desencade- ca Editora Argentina, 2ª edición, 1981. T. I, pp. 461-486. naron también cuando se supo de la victoria de Bel- En adelante: Abad de Santillán. Historia Argentina. grano en la batalla de Tucumán. Se le había ordenado 58 Me remito a la cita efectuada en nota \h 36. replegarse hacia Córdoba y Belgrano, desoyendo la 59 En ese entonces integrado por Sarratea –cuyo pe- orden, fue a enfrentar a las fuerzas españolas y las ven- ríodo terminaba en octubre–, Pueyrredón y Chiclana ció. Todo ello aumentó el descrédito de un gobierno que renunciaría poco después. ya debilitado.

34 b. Convocatoria e instalación de la de general y constituyente– quedó estableci- Asamblea do que: 1) residía en la Asamblea la represen- tación y ejercicio de la soberanía de las pro- El nuevo Triunvirato surgido del golpe de vincias Unidas del Río de la Plata (Artículo octubre de 1812, tenía como principal ob- 1º); 2) las personas de los diputados eran in- jetivo convocar a una asamblea constituyen- violables, no podían ser arrestados ni juzga- te, la tercera que se convocaba en un mis- dos sino en los casos que la misma Asam- mo año. Ni lerdo ni perezoso, aquél emitió blea determinara (Artículo 4º)62 ; 3) el Po- el Decreto de convocatoria el 24 de octu- der Ejecutivo quedaría delegado interina- bre,61 en el cual se advierte por primera mente en el Triunvirato, el cual debía pres- vez la voluntad del gobierno de Buenos Ai- tar juramento de reconocimiento a la Asam- res de cortar lazos definitivos con la coro- blea como autoridad soberana (Artículos 5º na española. En efecto, dentro de los consi- y 6º)63 . Es de mencionar que el juramento derandos de este farragoso instrumento se prestado por los diputados en esta ocasión lee: “cuando el eterno cautiverio del Señor no incluyó el habitual deber de fidelidad a D. Fernando VII ha hecho desaparecer sus Fernando VII, de modo que la Asamblea se últimos derechos con los postreros debe- constituyó como una entidad totalmente res y esperanzas”. Bajo este y otros auspi- americana y plenamente soberana, siendo cios se determinó la forma en que se elegi- así el primer órgano de gobierno nacional rían los diputados para la Asamblea y quedó totalmente autónomo respecto de la coro- establecido que serían cuatro por Buenos na española. Poco después de su instalación, Aires y dos por cada capital de provincia el 27 de febrero de 1813, comenzó la publi- más un tercero por cada ciudad de su de- cación de El Redactor de la Asamblea, que fue pendencia, con excepción de Tucumán que uno de sus dos órganos oficiales, registro podía llevar hasta dos diputados. Si compa- de sus debates y de publicación de normas64 . ramos esta convocatoria con la de la asam- blea reunida a comienzos de 1812, el equili- brio entre la representación asignada a Bue- nos Aires y la que poseen las demás ciuda- 62 Luego, en el curso del año 1813, la Asamblea amplió des es mucho mayor. La lección había sido las normas relativas a sus diputados. Dispuso así que aprendida aunque como resultará de los éstos eran diputados de la nación sin perder la condi- ción de representantes de los pueblos que los habían acontecimientos posteriores los intentos elegido, reconociéndoles a éstos su poder de remo- centralistas y aislacionistas de Buenos Aires ción o revocación del mandato. También fue objeto de no estaban completamente erradicados. Muy una regulación más extensa la inviolabilidad de los di- por el contrario, estaban apenas aquietados putados y su exención de juzgamiento por las opinio- nes verbales o escritas manifestadas en el seno de la temporariamente. Asamblea. 63 Se nota la ausencia de Rivadavia en el poder, pues Tres meses después la Asamblea abría sus por estas mismas razones habían fracasado las convo- puertas quedando formalmente instalada catorias anteriores. por decreto del día 31 de enero de 1813, 64 La Academia Nacional de la Historia publicó en 1913 bajo la presidencia de Carlos M. de Alvear, la reimpresión facsimilar de esta publicación con pró- logo de José Luis Cantilo. La actual Academia se deno- con José Valentín Gómez e Hipólito Vieytes minaba entonces Junta de Historia y Numismática como secretarios. En esta norma –en la cual Americana. El Redactor llegó a tener 24 números que se designa a la Asamblea con los adjetivos alcanzaron 98 páginas. No está muy claro quien fue su autor. Algunos sostienen que se debe a Monteagudo, aunque se ha sostenido también que fue Fray Cayeta- 61 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2009-2015. no Rodríguez.

35 El otro órgano oficial de la Asamblea fue la sus sesiones las cuales nunca fueron reanu- Gaceta Ministerial del Gobierno de Buenos Ai- dadas.68 res, que dependía directamente del Triunvi- De tal forma se perdió en 1813 una opor- rato dirigido inicialmente por Manuel José tunidad que tardaría cuarenta años en pro- García65 . ducirse nuevamente. Sin embargo su obra Quedó así instalada la Asamblea del Año XIII, legislativa ha perdurado. Muchas de sus dis- primera convención constituyente formal posiciones continuaron vigentes y junto con que tuvo nuestro país. Sus sesiones tuvie- las dictadas en 1811 formaron el primer ron lugar en el tribunal del Consulado66 y cuerpo legislativo argentino de rango cons- comenzaron con gran vigor y energía, de lo titucional. Podría decirse entonces que si que da testimonio la numerosa y encomia- bien a más de tres años de producida la ble obra legislativa de sus primeros meses. Revolución no había sido dictada todavía una Después de los fracasos anteriores se da- Constitución formal y unificada, existía en ban en esta ocasión una serie de condicio- cambio una Constitución informal y disper- nes favorables que auguraban un final exito- sa en una serie de leyes que en conjunto so.67 Se abría en esta ocasión una excelente oportunidad para dictar el estatuto consti- 68 Leoncio Gianello ha dividido en cinco los períodos tucional que institucionalizara y diera forma en que trabajó la Asamblea. El primero, que es el más a la obra de la Revolución de Mayo. Sin em- fecundo en reformas institucionales, se inicia con su bargo, luego de varios meses de trabajo in- instalación el 31 de enero de 1813 y termina el miér- tenso, la Asamblea no alcanzó a dictar una coles 28 de septiembre de ese mismo año con la pri- mera suspensión de sus sesiones, al conocerse la llega- Constitución a pesar de los numerosos pro- da de refuerzos realistas a Montevideo. Este período yectos presentados y fue perdiendo gradual- se cierra con el mandato de internación de los espa- mente su impronta inicial, la cual se desva- ñoles europeos con excepción de los que hubieran neció final y completamente cuando en ene- obtenido la ciudadanía o que por la importancia de sus actividades estuvieran comprendidos en el artículo ro de 1815 sus sesiones fueron suspendidas quinto de la referida resolución. El segundo período es ante las noticias del envío al Río de la Plata muy breve y se inicia el 8 de octubre de 1813 para de un numeroso contingente de tropas es- terminar el 18 de noviembre de ese mismo año con la pañolas. Fernando VII había vuelto al trono sanción del Reglamento para la suspensión de sesio- nes, en el cual fue prevista la creación de una Comisión español luego de la caída de Napoleón y le- Permanente de cinco miembros. El tercer período, que gitimado por el Congreso de Viena, se dis- tuvo carácter extraordinario, comienza el 21 de enero ponía aparentemente a reconquistar sus de 1814, bajo la urgencia de concentrar el Poder Eje- dominios. La Asamblea que por entonces ya cutivo en una sola persona (Director Supremo). El cuar- to período va desde el jueves 25 al miércoles 31 de languidecía, dispuso suspender una vez más agosto de 1814, en convocación de sesiones extraor- dinarias urgida por el Director Posadas. En el intervalo 65 Abad de Santillán. Historia Argentina. T. I, p. 505. entre ambos se ha producido un hecho importantísi- 66 El predio que ocupaba el Consulado se hallaba ubi- mo: la capitulación de Montevideo, en la que tanto in- cado en lo que actualmente es la calle San Martín en- fluyera el triunfo de Brown en el combate naval del tre Bartolomé Mitre y Juan D. Perón. Buceo. Finalmente el quinto y último período empezó 67 En el plano militar, incluso, la suerte de la Revolución el 5 de enero de 1815 cuando la situación interna era se presentaba favorable. Concomitante con la reunión angustiosa. Su última sesión tuvo lugar el 26 de enero de la Asamblea, Belgrano había triunfado en Tucumán y de 1815. Después, sobrevinieron los acontecimientos avanzaba victorioso hacia el Alto Perú. San Martín, por que condujeron a la llamada Revolución Federal de 1815, su lado, había vencido a las tropas españolas en San que marcaron la caída de Alvear y la disolución de la Lorenzo (3 de febrero de 1813) y poco después Bel- Asamblea. Gianello, Leoncio. “Realidad y esperanza de grano derrotó nuevamente a las fuerzas españolas en la Asamblea del Año XIII”. Academia Nacional de la Salta. Historia, Boletín Nº XXXIV, segunda parte, p. 589 y sigs.

36 pueden ser consideradas el primer ordena- estas instrucciones, además de las orienta- miento institucional de nuestro país.69 les, hay otras ocho cuyos textos han podido ser conocidos. Ellas son las de Tucumán, Córdoba, Jujuy, San Luis, Buenos Aires, San- c. Instrucciones de los diputados to Domingo de Soriano y Potosí. Uno de los hechos que más ha trascendido No es del caso referirme a todas ellas pero a la cultura popular sobre la Asamblea de bien puede tomarse como ejemplo las Ins- 1813 son las instrucciones que Artigas y el trucciones de Tucumán, en las cuales Alber- Congreso de abril de 1813 les dieron a los to Padilla puso énfasis dado que propicia- diputados de la Banda Oriental.70 Asimismo ban la adopción del sistema norteamerica- es un clásico de la historia constitucional no.71 Estas instrucciones dadas a los diputa- rioplantese que estas instrucciones fueron dos don Nicolás Laguna y Juan R. Balcarce una de las causas del rechazo a los repre- en 3 de diciembre de 1812, consagraban la sentantes orientales. En realidad ello fue religión católica, pedían que la Asamblea se solamente un justificativo empleado por la constituyese fuera de Buenos Aires y seña- política centralista de la Asamblea, en parti- laban a sus diputados: “[...] que de ninguna cular de algunas facciones como la de Car- manera consintieran en la determinación de los de Alvear. Sin embargo las instrucciones independencia, porque a más de ser prema- orientales no fueron las únicas presentadas tura, nos traerá un torrente de males y con- ante la Asamblea. La mayoría de los diputa- tradicciones.”72 Asimismo en la cláusula 8ª dos que acudieron al llamado de Buenos decía: “Que para formar la Constitución Aires llegaron a la capital munidos de un provisional se tenga presente la de Norte mandato más o menos específico y no es América, para ver si con algunas modifica- extraño que anide allí una de las razones ciones es adaptable a nuestra situación lo- del fracaso de la Asamblea en dictar una cal y política.”, lo cual adelantaba un criterio Constitución, ya que en general expresaban que el Congreso de 1853 tendría especial- una voluntad autonómica de las provincias mente en cuenta. que chocaba con el centralismo de Buenos Aires. Por lo demás, no todas expresaban los mismos ideales o principios. Así por ejem- d. Obra legislativa plo algunas se oponían a la declaración de la Henchida de un auténtico espíritu liberal, la independencia (Jujuy, Tucumán) mientras que Asamblea produjo una serie de leyes que otras la requerían expresamente (Potosí, la transformaron las estructuras jurídicas de Banda Oriental). Lo cierto es que de todas la época, dando inicio formal a la lenta pero

69 La obra completa de la Asamblea puede verse en Ravignani, Emilio. Asambleas Constituyentes Argentinas. Buenos Aires, Jacobo Peuser Editores, 1937. T. I, pp. 3- 71 Padilla, Alberto G. “Aportes de Tucumán a la Orga- 104. En adelante: Ravignani. Asambleas. nización institucional” en Revista de la Junta de Estu- 70 Ya me he ocupado de estas Instrucciones en mi tra- dios Históricos de Tucumán, Nº 10, Diciembre de 2001, bajo citado en nota \h 1 adonde me remito. Sin perjui- pp. 69-80, esp. p. 70-71. Transcripción de la conferencia cio de ello un estudio pormenorizado de las Instruc- dada por el autor en 1963, en la Universidad de Tucumán. ciones del Año XIII puede verse en Demicheli, Alberto. 72 En este sentido las instrucciones de Tucumán eran Formación Constitucional Rioplatense. Montevideo, 1955, opuestas a las de la Banda Oriental cuyo primer ar- T. II, Caps. III, IV y V. En adelante: Demicheli. Formación tículo enfáticamente requería la declaración de la constitucional. independencia.

37 inexorable reestructuración de la sociedad hibidos asimismo, los mayorazgos79 y los tí- que tendría lugar en las décadas siguientes.73 tulos de nobleza.80 En el orden de la igualdad y la libertad indi- El 27 de febrero dictó un Estatuto81 por vidual, uno de los primeros –y más célebres– medio del cual reguló el funcionamiento del de sus actos fue la llamada “libertad de vien- Poder Ejecutivo ratificando con ello la dele- tres”. Cuarenta y ocho horas después de gación que había efectuado en el Triunvira- instalada, la Asamblea decretó que todos los to por Decreto del 31 de enero. De acuer- niños hijos de esclavos nacidos en el terri- do con este estatuto las funciones de aquel torio de las Provincias Unidas del Río de la órgano eran: Hacer ejecutar puntualmente Plata serían libres. Así, los hijos de esclavos las leyes y decretos soberanos; dictar los dejaban de arrastrar la condición de sus reglamentos y ordenanzas para la ejecución padres.74 Con igual espíritu, dos días des- de las leyes; administrar las rentas del Esta- pués, el 4 de febrero, se decretó la libertad do y ejercer la superintendencia de las fá- de todos los esclavos que fueran introduci- bricas de moneda; proveer a la seguridad dos en el territorio de las Provincias Uni- interior y defensa exterior de las Provincias das, los cuales quedaban libres por el sólo unidas; mantener las relaciones exteriores, hecho de ingresar al país.75 Con igual espí- conducir las negociaciones y hacer estipula- ritu en el mes de mayo, la Asamblea prohi- ciones preliminares, firmar y concluir los bió “[...] el detestable uso de los tormentos tratados de paz, alianza, y comercio; los de adoptados por una tirana legislación para el tregua, neutralidad, y otras convenciones; esclarecimiento de la verdad e investigación salvo las declaraciones de guerra, tratados de los crímenes”, ordenando además su de paz, alianza y comercio, que debían ser destrucción en un acto público.76 Asimismo propuestas, discutidas y decretadas por la dispuso el reconocimiento de todos los in- Asamblea constituyente; ejercer el mando dios como “hombres perfectamente libres del ejército, la armada y las milicias naciona- y en igualdad de derechos a todos los de- les; nombrar embajadores, cónsules y jue- más ciudadanos77 y se les reconocieron lue- ces menos los del “Supremo Poder Judicia- go los derechos electorales78 . Fueron pro- rio”; los generales, los secretarios de Esta- do, los oficiales de ejército y milicias nacio- 73 Además de la obra de Ravignani arriba citada, el tra- nales, y demás empleados del Estado. Asi- bajo legislativo de la Asamblea puede verse en San mismo podía suspender en caso de invasión Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2015-2165 y en o inminente peligro de ella, de sublevación Sampay. Las Constituciones. Pp. 125-159. u otro atentado grave contra la seguridad 74 Gaceta Ministerial de Buenos Aires del 5 de febrero de 1813. del Estado, el decreto de seguridad indivi- 75 El Redactor, Nº 5, 27 de marzo de 1813. Esta disposi- dual dando cuenta de ello a la Asamblea ción, sin embargo, fue limitada un año más tarde cuan- dentro del término de veinticuatro horas y do se aclaró que la libertad otorgada no se extendía a se le delegaba el poder de confirmar y re- los esclavos que se hubieran fugado de sus amos, o que hubieren sido introducidos por viajantes extranjeros vocar las sentencias de los consejos de gue- en calidad de sirvientes personales. Así la libertad con- rra. Por último se le acordaba una facultad cedida se mantenía para quienes hubieran ingresado al un tanto reñida con la división de Poderes país como fruto del comercio en violación de leyes pues podía “conocer y sentenciar por las prohibitivas del tráfico de esclavos. El Redactor Nº 19, 31 de enero de 1814. 76 El Redactor Nº 9, 29 de mayo de 1813. 79 El Redactor Nº 15, 21 de agosto de 1813. 77 El Redactor Nº 4, 20 de marzo de 1813. 80 El Redactor Nº 9, 29 de mayo de 1813. 78 El Redactor Nº 8, 8 de mayo de 1813. 81 El Redactor Nº 2, 6 de marzo de 1813.

38 leyes todas las causas civiles y criminales de de animar en lo posible por ahora la educa- todos los empleados menos los del Supre- ción de la juventud”;87 se dispuso también mo Poder Judicial, suspendiéndolos, y pri- que en las escuelas “de primeras letras” sus vándolos de los empleos en los casos nece- maestros accedieran al cargo mediante exa- sarios, y con arreglo á las leyes”. men,88 y fue aprobado el Plan de enseñanza de la Facultad Médica y Quirúrgica, presen- También fueron introducidas algunas refor- tado por Cosme Argerich. En lo relaciona- mas sustanciales en la administración de jus- do con la salud fueron secularizados los es- ticia. Fue suprimido el tribunal de la inquisi- tablecimientos hospitalarios que dependían ción82 y se dispuso que la Asamblea tendría de comunidades religiosas89 y se prohibió competencia para entender en el juicio de bautizar a los niños recién nacidos con agua residencia.83 Además se resolvió que las ape- helada para evitar el llamado “mal de los siete laciones que anteriormente se llevaban ante días”, una especie de espasmo producido por el Consejo de Indias, serían resueltas por la inmersión en agua fría. cámaras de apelaciones84 y posteriormente se dictó un Reglamento de Administración Se dictaron asimismo algunas medidas eco- de Justicia en el cual se dispuso la organiza- nómicas de importancia. Con fundamento ción de los tribunales de primera instancia, en que “La prosperidad y aumento de las que quedaban en manos de los alcaldes del riquezas territoriales debe ser el principal cabildo y de los de segunda instancia, donde objeto de un legislador”, se decretó que la la real audiencia fue sustituida por las cáma- extracción de harinas y granos fuera del país ras de apelaciones previstas allí, las cuales quedara absolutamente libre de todo dere- tenían asiento en Buenos Aires y en la Plata cho sin que pudiera recaer sobre ella prohi- y estaban constituidas por cinco miem- bición alguna90 ; se dictó asimismo un regla- bros.85 Antes de dictado este reglamento, la mento para el fomento de la minería91 y una Asamblea, con el propósito de “facilitar a ley para la extracción de oro y plata92 ; se los verdaderos pobres la prosecución de las creó también la primera moneda nacional, y instancias en que demanda justicia y que ésta se dispuso que se acuñara en oro y plata, no se haga de ningún modo ilusoria”, dispu- con una precisa descripción de su anverso y so que la “información de pobreza” se haría reverso.93 En materia de comercio se dis- ante los tribunales de primera instancia y puso que los comerciantes extranjeros de- no ante los tribunales superiores, aboliendo bían consignar sus mercaderías a nombre también la necesidad de repetirla ante el de comerciantes nacionales los que debían tribunal de alzada con ocasión del recurso de apelación, tal como mandaba la legisla- ción española.86 87 El Redactor Nº 13, 31 de julio de 1813. En materia de educación fueron unificados 88 El Redactor Nº 12, 17 de julio de 1813. el Colegio San Carlos y el Seminario “a fin 89 El Redactor Nº 3, 13 de marzo de 1813. 90 El Redactor Nº 5, 27 de marzo de 1813. 91 El Redactor Nº 7, 1 de mayo de 1813 y Nº 8, 8 de 82 El Redactor Nº 5, 27 de marzo de 1813. mayo de 1813. 83 El Redactor Nº 3, 13 de marzo de 1813. 92 El Redactor Nº 11, 26 de junio de 1813. 84 El Redactor Nº 6, 10 de abril de 1813. 93 En el anverso figuraba el sello de la Asamblea con 85 El Redactor Nº 16, 11 de septiembre de 1813. Véase una inscripción alrededor que decía Provincias del Río especialmente el Artículo 17 del Reglamento. Ravig- de la Plata y en el reverso había un sol en el centro y nani. Asambleas. T. I, p. 70. alrededor la frase “En Unión y Libertad”. El Redactor 86 El Redactor Nº 14, 14 de agosto de 1813. Nº 13, 31 de julio de 1813.

39 estar registrados a tal efecto en una ma- Provincias Unidas eran independientes de trícula que llevaría el Consulado.94 toda autoridad eclesiástica existente fuera de su territorio.100 Luego dispuso que las El empleo público fue objeto también de comunidades religiosas de las Provincias regulaciones. Así por ejemplo, una de las Unidas quedaban en libertad respecto de primeras medidas de la Asamblea fue la re- todos los prelados que estuvieran fuera del moción de los españoles de todos los em- territorio y dispuso que el Nuncio Apostó- pleos civiles, eclesiásticos y militares;95 tam- lico ante el gobierno español no tendría bién se dispuso poco después que en los autoridad en el país.101 ascensos para los empleos vacantes no se tendría en cuenta la antigüedad en el cargo Por último, pero no menos importante, la sino “la mayor aptitud o idoneidad” y el “va- Asamblea declaró que el 25 de mayo sería lor, celo patriótico, energía, firmeza y cons- fiesta cívica nacional y dispuso que la mar- tancia a favor de la causa de la libertad de cha patriótica elaborada por Vicente López las Provincias Unidas del Río de la Plata.”96 y Planes, fuera el Himno Nacional Argentino.102 Asimismo se abolió la perpetuidad de los oficios del concejo, los que pasaron a ser electivos.97 Se dispuso también que quienes e. Proyectos constitucionales hubieran sido privados de su empleo luego A diferencia de su obra legislativa, que como del 25 de mayo de 1810, pero conservaran vemos fue amplia, en el orden constitucio- todavía un sueldo, fueran privados de su nal la labor de la Asamblea fue nula, si de percepción.98 Se prohibió también a los es- dictar una Constitución formal se trata. En pañoles ejercer como escribanos si no ob- realidad podría decirse que muchas de las tenían la ciudadanía.99 leyes que sancionó tuvieron rango consti- Un capítulo significativo de la obra legislati- tucional y de hecho han sobrevivido hasta va de la Asamblea es el relativo a la organi- el presente. Sin ir más lejos la abolición de zación eclesiástica en donde se advierte un la esclavitud comenzada en 1813, terminó fuerte intento por romper lazos con las au- cuatro décadas más tarde cuando el Artícu- toridades de la Iglesia residentes en España. lo 15 de la Constitución de 1853 estableció: En primer lugar la Asamblea decretó que las “En la Confederación Argentina no hay es- clavos, los pocos que hoy existen quedan libres desde la jura de esta Constitución”. 94 El Redactor Nº 6, 10 de abril de 1813. Esta medida sin embargo fue suspendida en octubre de 1813. El Redac- Por ello no creo que su obra constitucional tor Nº 17, 23 de octubre de 1813. pueda ser considerada nula o inexistente. 95 El Redactor Nº 1, 27 de febrero de 1813. Más tarde, Sin embargo, la agitada vida de la Asamblea, en febrero, se admitió que los españoles pudieran ac- sujeta a la suerte de la Guerra de la Inde- ceder a empleos públicos si optaban por la ciudadanía naciónal, para lo cual debían “acreditar de un modo pendencia, no le permitió alcanzar la subli- fehaciente no solo una decidida adhesión a la sagrada mación de expedir una Constitución. causa de la libertad de la América desde la gloriosa revolución de esta provincias, sino el haber hecho es- fuerzos y servicios públicos e incontestables en su fo- 100 El Redactor Nº 10, 12 de junio de 1813. mento y defensa”. Gaceta Ministerial, número extraor- 101 El Redactor Nº 11, 26 de junio de 1813. dinario, 9 de febrero de 1813. 102 El Decreto que sería de fecha 14 de mayo de 1813, 96 El Redactor Nº 13, 31 de julio de 1813. no aparece en El Redactor, pero está recopilado en el 97 El Redactor Nº 10, 12 de junio de 1813. Registro Oficial de la República Argentina que comprende 98 Ídem. los documentos expedidos entre 1810 y 1873. Buenos 99 El Redactor Nº 6, 31 de abril de 1813. Aires, Imprenta de la República, 1879, Tomo I.

40 Vale la pena, no obstante, recordar los cin- histórica acerca de su origen, incluso los his- co proyectos que los historiadores registran toriadores han manejado dos copias dife- como presentados ante la Asamblea:103 1) rentes. Según explica Ravignani, que fue quien el que habría sido elaborado antes de la re- lo editó por primera vez, la copia que tuvo unión de la Asamblea y cuyo autor es des- en su poder estaba cortada en los bordes conocido;104 2) el proyecto de la comisión de modo que en algunas partes aparece in- especial designada por el Triunvirato;105 3) completo.109 Algunos años más tarde Seco el de la Sociedad Patriótica;106 4) el llamado Villalba publicó su texto completo indican- proyecto federal107 y 5) el que fue elabora- do el lugar en que se encontraba en la Bi- do en 1815 por Belgrano y Rivadavia, de blioteca Nacional.110 Este autor señala asi- carácter monárquico.108 De ellos los tres mismo que este fue el proyecto de la comi- primeros tenían carácter unitario ya que no sión interna de la Asamblea el cual habría mencionan, como principio, la autonomía sido elaborado tomando partes de los pro- provincial. El segundo y el tercero corres- yectos de la comisión oficial y de la Socie- ponden además a trabajos realizados por dad Patriótica. Según su criterio entonces, sendas comisiones, en el primer caso por la fecha que se atribuye al proyecto es erró- disposición oficial del Triunvirato y en el se- nea pues no habría sido confeccionado an- gundo a pedido de éste. El cuarto en cam- tes de reunirse la Asamblea sino durante el bio parecería ser un proyecto originado en curso de las sesiones. la Banda Oriental y el quinto es el fruto de Sin perjuicio de esta discusión en cuanto al las negociaciones llevadas en Europa por origen, el texto del documento hoy día tie- Belgrano y Rivadavia a fines de 1814 y prin- ne suficiente difusión a través de todas es- cipios de 1815 con el objeto de restaurar tas ediciones, de modo que me concentra- la monarquía borbónica ante las dificulta- ré en su articulado. Indica cuáles son las pro- des por las que atravesaba el gobierno de vincias que componen el territorio,111 y es- Buenos Aires, de lo cual me ocuparé por tablece el principio de la soberanía del pue- separado. blo. Con influencia netamente rousseaunia- El primer proyecto, un documento bastante na dice: “la ley es la voluntad general expre- extenso de más de ciento ochenta artícu- sada por la mayor parte de los ciudadanos” los, está fechado en Buenos Aires el 27 de y seguidamente establece el principio de le- febrero de 1813, y existe alguna confusión galidad que sería volcado luego en el Artí- culo 19 de la Constitución de 1853: “Nadie puede prohibir lo que la ley no prohíbe ni 103 Un estudio detenido de estos proyectos puede ver- está obligado a lo que la ley no obliga.” (Ar- se en: Demicheli. Formación Constitucional. Caps. VIII-XIV. tículo 3º). Posee un largo articulado sobre 104 Puede verse su texto en: Ravignani. Asambleas. T. VI, el régimen electoral112 que se repetirá lue- Segunda Parte, pp. 623-633 y en San Martino de Dro- mi. Documentos. Pp. 2055-2089. 105 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2089-2118; Sampay. Las Constituciones. Pp. 191-205. 109 Ravignani. Asambleas. T. VI, p. 623. 106 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2118-2141; 110 Seco Villalba, José Armando. Fuentes de la Constitución Sampay. Las Constituciones. Pp. 177-189. Argentina. Buenos Aires, Depalma, 1943, pp. 239-270. 107 Ravignani, T. VI, pp. 633-638; San Martino de Dromi. 111 Buenos Aires, Córdoba, Salta, Potosí, Charcas, Cocha- Documentos. Pp. 2142; Sampay. Las Constituciones. Pp. 167- bamba, La Paz, Cuyo y la Banda Oriental (Artículo 4º). 175. 112 Prevé un régimen de elección indirecta en el cual se 108 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2167-2173; detalla con bastante precisión el modo de elección de Sampay. Las Constituciones. Pp. 207-210. los electores.

41 go en ordenamientos posteriores y dispo- descripción de las provincias integrantes del ne asimismo que el órgano legislativo esta- territorio, en el establecimiento del culto rá previsto en dos salas, la del Senado y la católico como religión oficial, en el recono- de los representantes; regula el procedimien- cimiento de la soberanía del pueblo, en la to de sanción de las leyes y el órgano ejecu- organización del cuerpo legislativo, al que tivo al cual denomina Directorio se compo- llama congreso de las provincias, en el esta- ne de tres miembros asistidos por cuatro blecimiento de un Directorio de tres miem- Secretarios de Estado y elegidos por el ór- bros como Poder Ejecutivo, elegido también gano legislativo. Los jueces son inamovibles por el órgano legislativo, y en las disposicio- mientras dure su buena conducta; se esta- nes relativas al Poder Judicial. blece un Tribunal Supremo de Justicia para De los cinco proyectos, el más perfecto des- todo el Estado y que la administración de de el punto de vista de su redacción es el justicia es gratuita. Erige la religión Católica de la Sociedad Patriótica, elaborado por una como culto oficial y garantiza a todos los comisión presidida por Bernardo de Mon- “individuos de la Sociedad” que pueden “de- teagudo e integrada por Juan Larrea, Fran- dicarse libremente y sin límite alguno a to- cisco José Planes, Tomás Valle y Cosme Ar- dos los ramos de la cultura, industria y co- gerich, éste último reemplazado luego de su mercio que más convenga a sus intereses”. renuncia por Antonio Sáenz.116 Es un ex- Dispone por último la completa abolición tenso documento, que sigue el estilo de las del comercio de esclavos y prohíbe su in- constituciones francesas dictadas hasta ese troducción en el país. momento. Está distribuido en 22 capítulos Un poco más pulido que el anterior, pero donde la numeración de los artículos no es de muy similar factura, es el proyecto de la corrida de modo que se reinicia en cada comisión creada por el Triunvirato por un capítulo, como ocurrirá en proyectos pos- Decreto del 4 de noviembre de 1812, el cual teriores tales como los Estatutos de 1815 y fue difundido en 1849 merced a una edición 1816, en el Reglamento de 1817 y en la de Andrés Lamas publicada en Montevi- Constitución de 1819. Luego de establecer deo.113 Dicha comisión estuvo integrada por que las Provincias Unidas del Río de la Plata Gervasio de Posadas, Pedro J. Agrelo, Nico- constituyen una asociación general por me- lás Herrera, Valentín Gómez, Pedro Some- dio de sus legítimos representantes, deter- llera, Manuel García e Hipólito Vieytes.114 mina que los principales derechos del hom- Este proyecto, que no fue tratado por la bre son la vida, la honra, la libertad, la segu- Asamblea, es muy parecido al anterior en ridad, la igualdad y la propiedad y define cada muchos aspectos, de modo que no parece uno de ellos. Impone la religión católica extraño que hayan sido redactados por las como culto oficial, y si bien nadie puede ser mismas personas.115 Así, por ejemplo, en la perseguido por sus opiniones privadas en materia de religión, “deberán todos respe- 113 Lamas, Andrés. Colección de Memorias y Documentos tar el culto público y la religión santa del para la Historia y la Geografía de los Pueblos del Río de la Estado.” Las Provincias Unidas forman un Plata. Montevideo, 1849. T. I, pp. 150-169. Citado por estado indivisible que tiene cuatro potesta- varios autores, v. gr. Sampay. Las Constituciones. P. 191 y Demicheli. Formación Constitucional. T. I, p. 165. 114 Gaceta Ministerial de Buenos Aires, 13 de noviembre 116 El proyecto fue editado por el historiador Clemen- de 1812. te Fregeiro, en 1896, en una Revista mensual dirigida 115 Podría decirse incluso que se trata de dos versiones por Paul Groussac llamada La Biblioteca, citada por Sam- diferentes de un mismo trabajo. pay. Las Constituciones. P. 177.

42 des: la tuitiva, la legislativa, la ejecutiva y la aparecen disposiciones relativas a la seguri- judicial, a quienes se confían los tres Pode- dad individual y a la libertad de imprenta. res del Estado, los que nunca pueden ser También se prevé un régimen municipal en ejercidos por una sola autoridad pues “el las ciudades con más de dos mil habitantes. ejercicio de cada uno debe ser independien- Rudimentario y sin buen orden legislativo te y estar en diversas manos.” es el proyecto federal, el cual acusa una in- Regula el sistema electoral con el mismo fluencia evidente de la Constitución de los detalle que aparece en los proyectos ante- Estados Unidos. Fue publicado por primera riores y se ocupa luego de los Poderes del vez por Ravignani y, según entiende Demi- Estado, donde se advierte particularmente cheli, fue elaborado por el diputado orien- la influencia de la Constitución de los Esta- tal Felipe Santiago Cardozo.120 Empieza se- dos Unidos. El Poder Legislativo se pone en ñalando : “cada provincia retiene su sobera- manos de un Congreso compuesto por la nía” (Artículo 2º), lo que de suyo daba una Cámara de Representantes y por el Senado. idea de confederación más que de Estado El Poder Ejecutivo está encomendado a un federal; se corrobora luego cuando dice que Presidente117 el cual “ha de nacer de la libre las provincias “entran separadamente en una voluntad de los pueblos”; nótese que en los firme liga de amistad” (Artículo 3º). Luego otros proyectos era elegido por el órgano sin orden alguno se ocupa de los derechos legislativo. Se le acuerdan al ejecutivo algu- de los que huyen de una provincia a otra nas facultades tales como cuidar que se eje- (Artículos 4° y 5°), para regular enseguida cuten fielmente las leyes118 y se le prohíbe el Poder Legislativo al que organiza en dos avocarse al conocimiento de causas judicia- cámaras, la de representantes y el Senado les, en un anticipo de lo que sería luego el (Artículo 6º). De la Constitución norteame- Artículo 92 de la Constitución de 1853.119 ricana toma también que las leyes impositi- El Poder Judicial tiene como cabeza un ór- vas deben originarse en la cámara de repre- gano compuesto de nueve magistrados “que sentantes (Artículo 25). Encomienda las re- se escogerán de los más provectos de to- laciones exteriores a las Provincias Unidas das las provincias”; el juicio criminal se esta- y prohíbe que aquellas sean ejercidas indivi- blece por jurados (otra influencia norteame- dualmente por cada provincia (Artículos 27- ricana) y se establece también una sala de 35) y luego se ocupa de los poderes del apelaciones en cada provincia. El régimen Congreso, donde también se advierte la pre- unitario de gobierno es fortísimo pues como sencia del Artículo I de la Constitución de máxima autoridad de las provincias se insti- los Estados Unidos. El Poder Ejecutivo es tuye un Prefecto el cual es designado por el encargado a un Presidente que dura dos Presidente a propuesta en terna de la muni- años en el cargo, sin posibilidad de ser elegi- cipalidad cabecera de la provincia. Finalmente do (Artículo 40) y aparecen luego otras dis- posiciones propias de las enmiendas norte- 117 Se advierte aquí la influencia norteamericana, pues americanas, por ejemplo el derecho del pue- en todos los documentos anteriores el ejecutivo es blo a portar armas y la prohibición a que se pluripersonal y está encomendado a un Directorio. alojen soldados en casas particulares sin 118 Vuelve a notarse la influencia norteamericana ejerci- consentimiento de su dueño (Artículos 46 da por la llamada take care clause inserta en el Artículo II, sección 2 “... he shall take care that the laws be faithfu- y 47). En materia religiosa dice, en conso- lly executed”. 119 Luego con la reforma de 1860 pasaría a ser el 95 y luego de 1994 es el 109. 120 Demicheli. Formación Constitucional. T. II, p. 508.

43 nancia con la Primera Enmienda, que el Con- 26 del mismo mes121 , por medio de la cual greso no podrá establecer religión alguna, las funciones ejecutivas delegadas en el pero luego, en estilo local, establece que no Triunvirato por medio del decreto del 27 de podrá prohibir el libre ejercicio de la reli- febrero de 1813, pasaron a ser ejercidas por gión católica (Artículo 45). Consagra tam- una persona con el título de Director Supre- bién la inviolabilidad del domicilio y los do- mo quien duraría dos años en el cargo. Por cumentos privados y el non bis in idem en medio de esa misma norma fue creado tam- materia penal (Artículo 49). También reser- bién un Consejo de Estado, órgano de carác- va para las provincias el ejercicio de pode- ter consultivo integrado por nueve vocales. res no delegados a las provincias Unidas, con El nombramiento de Director supremo re- gran similitud a lo previsto en la Enmienda cayó en Gervasio Antonio de Posadas. Décima. Asímismo figura una cláusula sobre inmunidad jurisdiccional de las provincias, to- mada sin dudas de la Enmienda Undécima g. El proyecto monárquico (Artículo 53) y finalmente aparece la cláu- En agosto de ese mismo año los problemas sula de la “entera fé y crédito” (full faith and se habían agravado. Al avance español por el credit) que deben tener los actos celebra- norte se sumaba el conflicto con Artigas, dos en una provincia en el territorio de otra cuyos diputados habían sido rechazados por (Artículo 58), en una reproducción bastan- la Asamblea, de modo que se encontraba en te exacta del Artículo IV, sección 1 del texto plena lucha con el gobierno de Buenos Ai- norteamericano. No hay disposiciones rela- res y soliviantaba a las provincias del Litoral. tivas al Poder Judicial. El gobierno de Buenos Aires, entonces, no lograba controlar ni militar ni políticamente f. Segunda concentración del Poder los frentes norte y noreste. En el orden ex- Ejecutivo: creación del Directorio uni- terior Napoleón había abdicado el 20 de personal abril y los ingleses lo había internado en la isla de Elba. Antes de ello en diciembre de A comienzos de 1814 el gobierno surgido 1813 se había firmado el Tratado de Valençay, de la revolución de octubre de 1812, propi- por el cual Napoleón reconoció a Fernan- ciada por la Logia Lautaro y la Sociedad pa- do VII como rey de España, lo que le permi- triótica empezaba a dar muestras evidentes tió a este último regresar a su país en mar- de agotamiento político. Las tropas del Ejér- zo de 1814 e iniciar un gobierno absolutista cito del Norte al mando de Belgrano ha- que desconoció la Constitución de Cádiz bían sufrido hacia fines de 1813 dos derro- de 1812. Circulaban asimismo informes se- tas importantes en Vilcapugio (1 de octu- gún los cuales el rey restaurado en el trono bre) y Ayohuma (14 de noviembre) y la preparaba una poderosa flota para recon- Asamblea, que había perdido su impulso ini- quistar sus dominios en el Río de la Plata. cial y se encontraba dominada por faccio- nes internas animadas por el centralismo Todo ello presentaba un panorama som- porteño, no atinaba a sancionar la Consti- brío para el débil gobierno de Buenos Ai- tución. En esas circunstancias aquella deci- res al mando del Director Posadas, quien de reformar el órgano ejecutivo y sustituye no encontró nada mejor que gestar un plan el Triunvirato por un Directorio uniperso- que, de resultar exitoso, habría tirado por nal. Para ello dicta una ley fechada el 22 de enero de 1814 y ampliada poco después el 121 San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2157-2160.

44 la borda toda la obra de la Revolución. La hereditaria, reestablecía los títulos nobilia- idea –descabellada por donde se la mire– fue rios, creaba un Senado exclusivamente in- enviar representantes diplomáticos ante el tegrado por nobles y otorgaba al Rey la fa- ex rey Carlos IV, padre de Fernando VII, para cultad de nombrar a todos los jueces. Es ofrecerle constituir una monarquía en el Río evidente que semejante iniciativa sólo po- de la Plata poniendo en el trono de este día estar inspirada en la desazón de sus au- reino al infante Francisco de Paula hijo me- tores y en su falta de confianza en la capaci- nor de Carlos y hermano de Fernando. Con dad de organizar y mantener un gobierno tan insólito propósito fueron comisionados propio, lo que a esa altura, en el comienzo –por orden emitida el 29 de agosto por la del sexto año de la Revolución, era una po- Asamblea– Belgrano, Rivadavia y Sarratea, sibilidad que ya se insinuaba. con la misión de presentarse ante la corte de Londres, quien debía facilitar el encuen- tro con Carlos IV. Manuel García fue comi- h. Clausura de la Asamblea sionado a su vez para gestionar el apoyo de En enero de 1815 la situación de la Asam- la corte portuguesa.122 Inglaterra se hallaba blea y del Director Posadas se hizo insoste- por entonces en buena armonía con Fer- nible. Aquella suspendió sus sesiones el día nando VII y estaba preocupada además por 26, dejando como último legado un Mani- el retorno de Napoleón a Francia concreta- fiesto en el cual expuso la trágica hora por do en marzo de 1815. Ante la negativa de la la que atravesaba el gobierno.124 Posadas, por corte inglesa, los enviados de Buenos Aires su lado, renunció y en su reemplazo fue nom- tomaron contacto con el conde de Cabarrús brado Director su sobrino, Carlos de Al- quien actuó como intermediario ante Car- vear, el día 10. El nuevo mandatario duraría los IV a quien se le hizo llegar un memorial poco. En el orden doméstico promovió una sobre los hechos ocurridos desde 1810. fuerte persecución de sus opositores125 y Junto con ese memorial se le envió al ex en materia de política internacional se incli- monarca un proyecto de Constitución que nó ante la corte británica ofreciéndole un refleja hasta dónde el gobierno de Buenos vasallaje sin reparos.126 Al mismo tiempo se Aires y sus representantes estaban dispues- producía en Santa Fe una sublevación con- tos a retroceder en el plano institucional. No me voy a detener demasiado en la lec- tura de este proyecto que daba por tierra 124 Véase su texto en: Ravignani. Asambleas. T. I, pp. 103- con toda la labor de la Asamblea pues so- 104. 125 El 28 de marzo sancionó un decreto por medio del metía a las Provincias Unidas nuevamente al cual se imponía la pena de muerte a quienes atacaran poder español.123 Establecía una monarquía al gobierno, divulgaran noticias falsas, formaran conspi- raciones o a quienes conociendo su existencia no lo denunciaren. Conf. González Calderón. Historia. p. 69. 122 Allí en 1815 concretó una propuesta que le hizo 126 Esta negociación fue llevada adelante por Manuel llegar Alvear como sucesor de Posadas en el Directo- García que, como vimos, había sido enviado por la Asam- rio, por medio de la cual las Provincias del Río de la blea para negociar ante la corte portuguesa, por en- Plata ofrecían someterse a la corona británica. tonces radicada en Río de Janeiro. En esta ciudad, Gar- 123 El nuevo reino se denominaba “Reino Unido de la cía se entrevistó con lord Strangford, embajador de Plata, Perú y Chile”, de modo que los representantes Londres, y le entregó un pliego redactado por Alvear del gobierno de Buenos Aires se habían permitido tam- en el cual éste ofrecía someter las provincias Unidas al bién extender las fronteras de los presuntos dominios gobierno de la corona inglesa en términos que la his- del heredero de Carlos IV a dos territorios sobre los toria ha repudiado. Véase, por ejemplo, la crítica de que no tenía jurisdicción alguna. López Rosas. Historia Constitucional. Pp. 184-185.

45 tra Buenos Aires alentada por Artigas. El nalmente el 18 de abril, Alvear entrega el gobierno porteño entonces envía tropas mando militar al general Viamonte y el Ca- para sofocar el levantamiento y al frente de bildo, en posesión del poder, disuelve la una de las columnas se hallaba el coronel Asamblea y convoca a elecciones para ele- Ignacio Álvarez Thomas, un opositor a la gir un nuevo Director. Resulta electo José política de Alvear, quien se suma a los suble- Rondeau pero ante su ausencia ocupa inte- vados en Fontezuelas el 3 de abril. Esto pro- rinamente el cargo Álvarez Thomas. Asimis- voca la crisis final del breve gobierno de Al- mo, el Cabildo y los electores del Director vear quien se ve forzado a renunciar, si bien crean un nuevo cuerpo denominado Junta retiene el mando del ejército. Se reúne en- de Observación, integrada por Pedro Me- tonces –por última vez– la Asamblea para drano, Esteban Gazcón, Mariano Serrano, considerar la renuncia del Director, pero el Antonio Sáenz y Tomás de Anchorena. Como Cabildo aprovechando el descontrol de la suplentes fueron elegidos Domingo Zapiola situación, asume de hecho el gobierno. Fi- y Manuel Obligado.

46 VII. EL CONGRESO DE TUCUMÁN

El Congreso de Tucumán fue, luego de la de dos años, terminó haciéndolo fugazmen- Asamblea de 1813, la segunda reunión de te un órgano carente de toda representati- un cuerpo legislativo con finalidad constitu- vidad popular. Así un texto que por su ran- yente, convocado con participación de re- go y contenido bien podría ser considerado presentantes de las provincias. Reunido ini- la primera Constitución del período inde- cialmente en la Ciudad de Tucumán y trasla- pendiente, era el fruto de un gobierno en dado luego a Buenos Aires ha pasado a la crisis y de un cuerpo elegido por un órgano historia por haberse declarado a lo largo de municipal, el Cabildo. sus sesiones la independencia de nuestro país. A diferencia de su predecesora, el Con- La velocidad con que la flamante Junta de greso de Tucumán-Buenos Aires pudo com- Observación dictó el Estatuto impidió que pletar, si bien muy tardíamente, una obra éste fuera algo más que una mera recopila- constituyente coronada en la Constitución ción de textos ya existentes y anteriormente de 1819, cuya vigencia fue prácticamente sancionados. Su primera parte está tomada, inexistente como consecuencia de la rup- evidentemente, del proyecto constitucional tura entre Buenos Aires y el resto del país de la Sociedad Patriótica presentado ante la 127 producida en 1820. Asamblea de 1813. Dispone que los prin- cipales derechos del hombre son la vida, la honra, la libertad, la igualdad, la propiedad y a. Convocatoria. Estatuto Provisorio la seguridad128 y consagra la religión católi- de 1815 ca como culto oficial.129 Manifiesta luego que Terminada la Asamblea del Año XIII y cam- biado el Director Supremo, la Junta de Ob- 127 Según explica Galletti, la semejanza entre el proyec- servación como nuevo órgano legislativo to de la Sociedad Patriótica y el Estatuto de 1815 se creado de hecho por el Cabildo, dictó el 5 debe seguramente a la influencia de Sáenz, quien había intervenido en el primero e integraba asimismo la Jun- de mayo sin perder mucho tiempo, un Esta- ta de Observación. Por lo demás este historiador es tuto Provisional de rango constitucional. Este sumamente crítico del Estatuto y remarca su acentua- hecho es remarcable para entender muchos do centralismo. Galletti, Alfredo. Historia Constitucional aspectos de la historia argentina posterior. Argentina. La Plata, Librería Editora Platense, 1987, T. I, pp. 333-344. Lo que una Asamblea constituyente formal- 128 Cap. I, Artículo I. mente elegida fue incapaz de hacer en más 129 Secc. Primera, Cap. II, Artículo I.

47 el Poder Legislativo reside en los pueblos tuyente que debía celebrarse en la Ciudad originariamente, y que será ejercido por la de Tucumán.140 La cláusula no deja de ser Junta de Observación hasta la reunión del curiosa pues está insertada dentro de las Congreso General Constituyente.130 El Po- facultades del Director Supremo a quien se der Ejecutivo es encomendado a un Direc- le encomienda “Luego que se posesione del tor Supremo que dura un año en su car- cargo” a invitar “con particular esmero y go.131 Se le prohíbe intervenir en asuntos eficacia a todas las Ciudades y Villas de las judiciales132 y en cuanto el Poder Judicial Provincias interiores para el pronto nom- continúa en manos de los tribunales ya exis- bramiento de Diputados que hayan de for- tentes, es decir el Tribunal de Recursos Ex- mar la Constitución, los cuales deberán re- traordinarios de segunda suplicación, en las unirse en la ciudad del Tucumán para que Cámaras de Apelaciones y en los juzgados allí acuerden el lugar en que hayan de conti- inferiores.133 Se regulan con bastante deta- nuar sus sesiones”.141 lle una serie de normas electorales,134 y se prevén también disposiciones sobre el Ejér- b. Instalación del Congreso cito y la Armada.135 En cuanto a las provin- cias se prevé que el Gobernador será nom- Producida la convocatoria al Congreso, se brado por los electores provinciales con eligieron para representar a las diferentes comunicación al Cabildo de la ciudad capi- ciudades treinta diputados representantes tal de su residencia,136 lo cual le da un tinte de Buenos Aires, Córdoba, las provincias de federalista, que se insinúa también en la au- Cuyo y del Noroeste argentino142 que se torización a las provincias para levantar to- dos los establecimientos que fueran nece- 140 Si bien no está fundada la decisión de celebrar el con- sarios para promover la industria, las cien- greso en Tucumán, es evidente que el Estatuto de 1815, 137 cias y el arte. Se legisla finalmente sobre pretendía darle al futuro cuerpo constituyente un tinte la seguridad individual y la libertad de im- menos centralista y porteño, de modo que eligió como prenta.138 En cuanto a lo primero, las nor- sede una ciudad provincial, norteña y mediterránea, aleja- da de Buenos Aires y del Litoral donde la influencia de mas están tomadas sin dudas de los decre- Artigas y su lucha con el Directorio ya se hacía sentir. tos ya existentes y en relación con la liber- 141 Secc. Tercera, Cap. I, Artículo XXX. tad de imprenta el Primer Triunvirato pone 142 La representación ante el Congreso quedó integra- nuevamente en vigencia el Decreto del 26 da de la siguiente manera: Buenos Aires: fray Cayetano 139 Rodríguez, presbítero Antonio Sáenz, Tomás Manuel de de octubre de 1811. Anchorena, Juan José Paso, Esteban Agustín Gascón, De todo este documento bastante extenso, Pedro Medrano y José Darragueyra; Córdoba: canóni- go Miguel Calixto del Corro, José Antonio Cabrera, lo más trascendente fue la cláusula de con- Luis Jerónimo Salguero de Cabrera y Cabrera y Eduar- vocatoria a un Congreso General Consti- do Pérez Bulnes; San Juan: fray Justo Santa María de Oro y Narciso Laprida; Mendoza: Tomás Godoy Cruz y Agustín Maza; Santiago del Estero: Pedro León Gallo y 130 Secc. Segunda, artículo único. Pedro Francisco de Uriarte; Catamarca: presbítero José 131 Secc. Tercera, Cap. I, Artículos I y IV. Eusebio Colombres, canónigo Pedro Miguel Aráoz y 132 Cap. II, Artículo I. canónigo José Ignacio Thames; Salta: José Ignacio de 133 Secc. Cuarta, Cap. I, Artículo I. Gorriti y Mariano Boedo; La Rioja: presbítero Pedro 134 Secc. Quinta. Ignacio de Castro Barros; San Luis: Juan Martín de Pue- 135 Secc. Sexta. yrredón; Jujuy: Teodoro Sánchez de Bustamente; Char- 136 Secc. Quinta, Cap. V, Artículo I. cas: José Severo Malabia, José Mariano Serrano y pres- 137 Cap. Final, disposición novena. bítero Mariano Sánchez de Loria; Chichas (Alto Perú): 138 Secc. Séptima. José Andrés Pacheco de Melo; y Mizque (Alto Perú): 139 Véase supra punto V.i. Pedro Ignacio de Rivera. La personalidad de algunos de

48 fueron congregando en Tucumán desde co- sus miembros,145 la declaración de la inmu- mienzos de 1816. No tuvieron participación nidad de opinión de éstos146 y la adopción las provincias del Litoral que se encontra- de un reglamento.147 ban ya bajo la influencia de Artigas, quien había desconocido el Estatuto de 1815. La apertura formal de las sesiones tuvo lugar c. Primeros pasos el 24 de marzo de 1816, fecha en que que- Pero la instalación definitiva del Congreso dó instalado, bajo la presidencia de Pedro fue lenta. La situación militar era delicada y Medrano, el Congreso Soberano de las Pro- se había agravado aún más con la derrota vincias Unidas del Río de la Plata, “esperan- de las fuerzas nacionales en la batalla Sipe za de los pueblos libres”, como lo título su Sipe –en el curso de la campaña del Alto órgano oficial, El Redactor.143 Del mismo Perú– en octubre de 1815.148 El Congreso modo que la Asamblea de 1813, el Congre- tenía que lidiar entonces con una serie de so de 1816 también se proclamó soberano. problemas organizativos internos y exter- Ya desde el comienzo se advierte la fuerte nos. Entre los primeros la incorporación influencia religiosa. No sólo muchos de sus sucesiva de los diputados y en relación con diputados eran canónigos, sino que las re- los segundos las vicisitudes ocurridas en di- flexiones volcadas por Fray Cayetano Ro- ferentes provincias. Así por ejemplo el con- dríguez en El Redactor con motivo de la ins- flicto suscitado en Salta entre Güemes y talación dicen que ésta “consagra nuestra Rondeau,149 la necesidad de enviar suminis- madre la Iglesia a la memoria del adorable tros al Ejército del Norte150 y la insurrec- misterio de la Encarnación del Hijo de ción en La Rioja, producida en abril por ele- Dios.”144 En los días subsiguientes se pro- mentos artiguistas.151 En el curso de estos dujeron los pasos formales de todo inicio problemas renunció como Director Supre- de una asamblea legislativa, esto es la acre- mo Antonio González Balcarce y el 3 de ditación y aprobación de los diplomas de mayo el Congreso designó en su reemplazo a Juan Martín de Pueyrredón, quinto Direc- tor Supremo en cuatro años152 y el más fe- cundo, cuanto polémico, en su labor como ellos ha sido descrita, por diferentes autores, en una obra colectiva publicada en homenaje al sesquicente- nario del Congreso, titulada El Congreso de Tucumán, Seminario de Estudios de Historia Argentina. Buenos Ai- 145 Sesión del 26 de marzo, Raviganani. Asambleas. P. 186. res, Club de Lectores, 1966. P. 241 y sigs. 146 Sesión del 27 de marzo. Ídem, p. 187. 143 Como Asamblea del Año XIII, el Congreso de Tucu- 147 Sesión del 29 de marzo. Ídem, p. 187. mán tuvo su órgano oficial para la publicación de sus 148 Entre otros motivos, la batalla es muy recordada sesiones y además se le dio el mismo nombre, que como pues en ella perdió su brazo José María Paz, uno de los veremos luego se repite en otras instancias constitu- mejores militares de la historia argentina. cionales de la vida argentina. Señala Ravignani que los 149 Sesión del 27 de marzo. Rondeau y Güemes habían manuscritos de las actas del Congreso se han perdido tenido una disputa previa por la gobernación de Salta o por lo menos se hallan en manos desconocidas. Ra- pues el primero intentaba colocar al frente del gobier- vignani. Asambleas. T. I, p. 181, nota 1. Todas las sesiones no a José Antonio Fernández Cornejo. Esta disputa se del Congreso de Tucumán según fueron publicadas en agravó como consecuencia del ingreso en Salta de las El Redactor figuran publicadas en esta obra entre las fuerzas de Rondeau, derrotadas en Sipe-Sipe. pp. 181-473, pero se trata más bien de una crónica de 150 Sesión del 26 de abril. cada sesión en la cual no figuran los debates y las 151 Sesión del 30 de abril. discusiones habidas en el Congreso. 152 Recordemos que después del breve gobierno de 144 El Redactor Nº1, 1º de mayo de 1816. Ravignani. Asam- Alvear, éste fue sucedido por Ignacio Álvarez Thomas bleas. P. 181. y éste a su vez por González Balcarce.

49 titular del Poder Ejecutivo en tiempos deci- Su declaración fue decidida entonces en la sivos para la consolidación nacional. sesión del 9 de julio, bajo la presidencia que Narciso de Laprida ejercía desde el 1º de Pasados dos meses desde su instalación, el ese mes. En dicha ocasión, se decidió pre- Congreso parecía más bien abocado a una guntar a los diputados “si querían que las tarea propia de un poder legislativo ya cons- Provincias de la Unión fuesen una nación tituido que de una asamblea constituyente, libre e independiente” y la votación por el repitiendo así el error que se había cometi- sí fue unánime.157 El Congreso de Tucumán do en 1813, cuando la Asamblea no abordó su misión específica por dispersarse en la tarea del gobierno cotidiano. En ese estado 157 El Acta de la Independencia, del 9 de julio, jurada 153 tres diputados, Sánchez de Bustamente, luego el 21 de ese mes, dice: “En la benemérita y muy Gascón y Serrano, presentan ante el Con- digna ciudad de san [sic: S] Miguel del Tucumán á nueve greso una nota por medio de la cual inten- días del mes de Julio de mil ochocientos diez y seis, terminada la sesión ordinaria, el Congreso de las Pro- tan ordenar la labor a ser llevada a cabo y vincias Unidas continuó sus anteriores discusiones so- 154 proponen a tal fin diecisiete ítem. De és- bre el grande, augusto y sagrado objeto de la indepen- tos, hay cuatro que son particularmente dencia de los pueblos que lo forman. Era universal, cons- importantes desde el punto de vista de la tante y decidido el clamor del territorio entero por su emancipación solemne del poder despótico de los re- labor de un congreso constituyente: el des- yes de España. Los representantes, sin embargo, consa- linde de las facultades del Congreso; la dis- graron á tan arduo asunto toda la profundidad de sus cusión sobre la declaración de la indepen- talentos, la rectitud de sus intenciones é intereses que dencia; la discusión sobre la forma de go- demanda la sanción de la suerte suya, la de los pueblos representados, y la de toda la posteridad. A su término bierno y el proyecto de Constitución. Los fueron preguntados si querían que las provincias de la restantes parecen configurar más bien la Unión fuesen una nación libre é independiente de los agenda de un órgano legislativo ordinario.155 reyes de España y su metrópoli? Aclamaron primero, llenos del santo ardor de la justicia, y uno á uno suce- sivamente reiteraron su unánime y espontáneo decidi- do voto por la independencia del país, fijando en su d. La Declaración de la Independencia virtud la determinación siguiente: Nos los representantes de las Provincias Unidas de El mes de junio transcurrió sin mayor tras- Sud-América, reunidos en congreso general, invocan- 156 cendencia y en la sesión del 3 de julio se do al Eterno que preside el universo, en el nombre y analiza la nota presentada por Sánchez de por la autoridad de los pueblos que representamos, Bustamente, Gascón y Serrano, y el Con- protestando al cielo, á las nación es y hombres todos del globo la justicia, que regla nuestros votos, declara- greso somete a deliberación el orden en el mos solemnemente á la faz de la tierra, que es volun- cual serían tratados los puntos, decidiéndo- tad unánime é indubitable de estas provincias romper se que el primero de ellos, por su trascen- los violentos vínculos que las ligaban á los reyes de dencia, era la cuestión de la Independencia. España, recuperar los derechos de que fueron despo- jados, é investirse del alto carácter de nación libre é independiente del rey Fernando 7, sus sucesores y metrópoli. Quedar en consecuencia de hecho y de 153 Representante designado por Jujuy e incorporado derecho con amplio, y pleno poder para darse las for- en la sesión del 13 de mayo. mas, que exija la justicia, é impere el cúmulo de sus 154 Ravignani. Asambleas. T. I, pp. 214-215. actuales circunstancias. Todas, y cada una de ellas, así lo 155 Así por ejemplo la organización del Ejército y la Ar- publican y ratifican, comprometiéndose por nuestro mada; la creación de una Casa de Moneda; el arreglo medio al cumplimiento y sostén de esta su voluntad, de las rentas generales del Estado; la erección de esta- bajo el seguro y garantía de sus vidas, haberes y fama. blecimientos educativos; la creación de magistraturas; Comuníquese á quienes corresponda para su publica- la demarcación del territorio, etc. ción, y en obsequio del respeto que se debe á las na- 156 Ravignani. Asambleas. T. I, pp. 231. ciónes, detállense en un manifiesto los gravísimos fun-

50 había tomado la decisión que le permitió conclusión alguna en lo inmediato.159 El de- pasar con gloria a la historia argentina. bate –según concuerdan los historiado- res160 – habría comenzado antes de la De- claración de la Independencia, el día 6 de e. La Bandera Nacional julio, cuando en una sesión secreta (y de la cual por ende no hay actas) Manuel Belgra- Luego de la Declaración de la Independen- no, recién llegado de Europa, expuso ante el cia, el acto más importante del Congreso Congreso sobre la necesidad de establecer fue decretar el uso oficial de la Bandera en las Provincias Unidas el sistema monár- Nacional, lo que tuvo lugar por decreto quico. Estaba convencido de que la restau- emitido en la sesión del 25 de julio.158 ración de la legitimidad monárquica impuesta por el Congreso de Viena así lo aconsejaba. f. Discusión sobre la forma de gobier- Ya hemos visto que Belgrano adhería a la no. La propuesta de una monarquía idea monárquica desde su misión ante la incaica corte española, cuando propuso formar en las Provincias Unidas un reino español y El siguiente punto de importancia en orden coronar rey al príncipe Francisco de Paula, a sancionar una Constitución era la forma hijo menor de Carlos IV.161 En esta ocasión de gobierno que se adoptaría. El Congreso parece haber defendido una tesis similar en comenzó entonces este debate en el curso cuanto a la forma de gobierno, pero dife- del cual finalmente se dispersó sin llegar a rente en cuanto al legitimado para el trono. Su tesis ante el Congreso de Tucumán fue la de imponer una monarquía incaica, la cual damentos impulsivos de esta solemne declaración. Dada ante los ojos de la historia ha sonado siem- en la sala de sesiones; firmada de nuestra mano, sellada con el sello del congreso, y refrendada por nuestros pre descabellada, pero no lo debe haber sido diputados secretarios. -Francisco Narciso de Laprida- tanto en su época pues contó con varios presidente. - Mariano Boedo -vicepresidente”. Está pu- adherentes entre los congresales.162 blicada en El Redactor Nº 6; Ravignani. Asambleas. T. I, pp. 216-217. Efectivamente, muchos diputados del inte- 158 Ravignani. Asambleas. T. I, p. 238. La creación de la rior encontraron plausible la iniciativa. En- Bandera, hecho que debemos a Manuel Belgrano, estu- vo lleno de vicisitudes que ponen de manifiesto hasta tre ellos Acevedo en la sesión del 19 de ju- 163 qué punto fueron vacilantes los primeros años de nues- lio y luego Castro Barros en la del 31 del tra vida independiente. Belgrano, inicialmente, había lo- grado que el Triunvirato le autorizara el uso de la esca- rapela azul y blanca para distintivo de sus tropas. Luego 159 En efecto, antes de sancionar su obra constituyente de ello el 27 de febrero de 1812 en Rosario, en las definitiva, la Constitución de 1819, el Congreso sancio- barrancas del río Paraná, Belgrano enarboló la bandera nó dos estatutos provisorios en noviembre de 1816 y con los mismos colores. El Triunvirato sin embargo des- diciembre de 1817, que no reflejan en nada este debate. autorizó el acto pero Belgrano no llegó a enterarse 160 Tau Anzoátegui, Víctor. “Ideas políticas de Fray Justo pues había partido hacia el Alto Perú y en Jujuy volvió a Santa María de Oro”, en “El Congreso de Tucumán”, p. repetir la ceremonia que en este caso contó además 222; López Rosas. Historia Constitucional. P. 229; De San- con la bendición del canónigo Gorriti; además la ban- tillán. Historia Argentina. T. I, p. 549. dera fue colocada en los balcones del ayuntamiento. 161 Véase supra punto VI. g. Tiempo después enterado Belgrano de la prohibición 162 Quien se oponía al tratamiento de la cuestión so- decretada por el Triunvirato pidió disculpas y retiró la bre la forma de gobierno era Fray Justo Santa María de bandera. Esta resurgió no obstante cuatro años des- Oro, sosteniendo que antes de adoptar tal decisión pués en 1816 cuando el Congreso de Tucumán la de- era preciso consultar a los pueblos. Así lo expuso en la claró enseña oficial. Abad de Santillán. Historia Argentina. sesión del 15 de julio. Ravignani. Asambleas. T. I, p. 237. T. I, pp. 555-556. 163 Ídem, T. I, p. 237.

51 mismo mes en la cual hasta se propuso que de septiembre se hallaba en discusión un la capital tuviera sede en Cuzco.164 También Estatuto Provisorio que luego de varias dis- Thames, en la sesión del 5 de agosto, dio su cusiones fue aprobado en la sesión del 22 aprobación a la monarquía incaica, propues- de noviembre.168 Como vemos, una vez más ta que recibió en esta ocasión el rechazo de el Congreso en lugar de concentrarse en su Serrano, quien si bien no se oponía a la idea función constituyente específica perdió el monárquica, no creía en la necesidad de res- tiempo discutiendo un extenso documento taurar a los Incas en el trono de las Provin- provisorio, logrando tan sólo darle una legi- cias Unidas.165 Al día siguiente Tomás de An- timidad formal a lo sancionado un año y chorena expuso sobre los inconvenientes de medio antes por un cuerpo de facto. Para la monarquía.166 Una vez más eran los pue- colmo nunca llegó a tener vigencia pues al blos del interior en lucha con Buenos Aires ser remitido para su publicación al Direc- que ven en la monarquía incaica una forma tor Pueyrredón, éste le encontró reparos y de repeler el centralismo porteño. le hizo saber al Congreso en enero de 1817 que sería mejor suspender la impresión y Todo este debate sin embargo, no tendría publicación hasta tanto aquél estuviera re- solución de continuidad pues dos hechos lo unido en Buenos Aires. Finalmente el Con- interrumpieron. En primer lugar noticias lle- greso demoraría un año más en su reelabo- gadas desde Salta hicieron saber que tropas ración y daría como fruto el Reglamento españolas se aproximaban a Tucumán; en Provisorio de diciembre de 1817. segundo lugar el Congreso en lugar de con- tinuar con el tratamiento de la forma de gobierno, se abocó a estudiar una reforma h. El Reglamento Provisorio de 1817 al Estatuto de 1815 que llegaba desde Bue- nos Aires. Ya instalado en Buenos Aires el Congreso reabrió con gran solemnidad sus sesiones el 12 de mayo. La cuestión en debate enton- g. Traslado del Congreso a Buenos Ai- ces fue si correspondía sancionar directa- res. Estatuto Provisorio de noviembre mente una Constitución o si por el contra- de 1816 rio convenía poner en vigencia por el mo- mento un Estatuto provisorio.169 Es increí- En la sesión del 23 de septiembre se leye- ron una serie de comunicaciones provenien- 168 tes de Salta dando cuenta del avance de tro- Este Estatuto comenzó a gestarse varios meses an- tes cuando el Director Álvarez Thomas advirtió que el 167 pas españolas hacia Tucumán. Dos días Estatuto de 1815 lo dejaba a merced de la Junta de después, el 25, se decide trasladar el Con- Observación y del Cabildo de Buenos Aires. Por ello greso a Buenos Aires, hecho que recién se designó una comisión que integraron el déan Grego- consumará en enero de 1817. Ello impuso rio Funes, Manuel Antonio Castro, Luis Chorroarín, To- más Valle y Domingo Achega, con el objeto de revisar al Congreso un receso forzoso que termi- este documento. El proyecto reformado estaba con- nó el 19 de abril cuando reabrió sus sesio- cluido en marzo de 1816 y está precedido de una ex- nes en esa ciudad. Entretanto desde el 27 tensa exposición de motivos en la cual se ha advertido el estilo de Funes. Fue elevado al Congreso en abril de 1816. Colautti, Carlos E. Proyectos Constitucionales Pa- trios (1811-1816). Buenos Aires, Ediciones Culturales 164 Ídem, p. 239. Argentina, Secretaría de Cultura de la Presidencia de 165 Ídem, pp. 242-243. la Nación, 1983, pp. 55-57. 166 Ídem, p. 244. 169 Véase la sesión del 1º de agosto de 1817, Ravignani. 167 Ídem, p. 259. Asmbleas. T. I, p. 313.

52 ble que a esa altura de las circunstancias un Poder Ejecutivo,174 a quien se atribuyen Congreso reunido más de un año antes con amplias facultades, entre ellas vigilar el cum- el objeto de dictar una Constitución, toda- plimiento de las leyes y la recta administra- vía estuviera debatiendo ese punto y per- ción de justicia;175 la representación ante las diera el tiempo con el dictado de un Estatu- potencias extranjeras;176 la provisión de to- to provisorio. Sin embargo así fue. En la se- dos los cargos militares; la facultad de sus- sión del 11 de agosto parecía haberse deci- pender o trasladar a los magistrados y fun- dido por el dictado de la Constitución,170 cionarios públicos;177 la libre disposición de sin embargo un mes después, en la sesión los fondos públicos para los gastos de la del 12 de septiembre,171 comienza a estu- guerra de la independencia;178 etc. Como diar las reflexiones que le remitiera el Di- remate final de esta prolongada enumera- rector Pueyrredón sobre el Estatuto apro- ción de facultades, el Reglamento –como si bado en noviembre del año anterior. Y en fuera necesario– decía: “Las órdenes del ello estuvo ocupado el Congreso hasta el 3 Director Supremo del Estado serán exacta- de diciembre de ese año cuando fue apro- mente obedecidas en toda la extensión de bado el Reglamento Provisorio que rigió las Provincias.”179 El punto de mayor con- hasta la sanción de la Constitución de 1819. flicto con las provincias estaba dado con la facultad otorgada al Director Supremo de El Reglamento Provisorio de 1817 fue un nombrar los gobernadores a su arbitrio, los triunfo formal del Director Pueyrredón en cuales eran escogidos de “listas de perso- su lucha por imponerse a las provincias que nas elegibles de dentro o de fuera de la Pro- intentaban disgregarse de Buenos Aires por vincia, que todos los cabildos en el primer todos los medios.172 Está tomado en su con- mes de su elección formarán y remitirán.”180 texto general del Estatuto de 1815, que La poca importancia que el Reglamento daba como vimos se había inspirado a su vez en a los gobiernos provinciales está reflejada, el proyecto de Constitución de la Sociedad además, en su ubicación dentro del docu- Patriótica, lo que hizo perdurar un poco más mento, pues figuran como un Capítulo 4 la pluma de Monteagudo en el constitucio- dentro de la Sección Cuarta dedicada al nalismo nacional. Sin embargo su espíritu es Poder Judicial. más unitario que el de su predecesor. No se legisla específicamente sobre el Poder Le- El Reglamento de 1817 –que en su momen- gislativo, el cual permanece en cabeza del to fue objeto de amplia difusión en el ex- Congreso. Se deja constancia asimismo de tranjero181– rigió formalmente hasta la san- la vigencia de toda la legislación española ción de la Constitución de 1819, sin que las anterior a la Revolución, en la medida en provincias lo acataran. que aquélla no resulte incompatible con “la libertad e independencia de estas Provin- cias.”173 La figura central en este documen- 174 Sección Tercera, Cap. 1, Artículo 1º. 175 Ídem, Artículo 9º. to es el Director del Estado, encargado del 176 Ídem, Artículo 12. 177 Ídem, Artículos 23 y 26. 178 Ídem, Artículo 30. 179 Ídem, Artículo 35. 180 Sección Quinta, Cap. 1, Artículo 1º. 170 Ídem, p. 314. 181 Rivadavia, que se encontraba en París cuando el 171 Ídem, p. 321. Reglamento fue sancionado, lo difundió ampliamente 172 Véase López Rosas. Historia Constitucional. Pp. 240/247. logrando que se tradujera al francés, al inglés y al ale- 173 Sección Segunda, Capítulo Único, Artículo 2º. mán, Abad de Santillán. Op. cit. P. 552.

53 i. La Constitución de 1819 ble183 pero que en nada contemplaba la realidad política existente. En palabras de Tres años después de su instalación, el Con- González Calderón, fue una: “combinación greso comenzado en Tucumán y continua- teórica y arbitraria que lo mismo podía ser- do luego en Buenos Aires, dio postrer cum- vir para cualquier cosa.”184 plimiento al objeto específico de su convo- catoria y puso en vigencia el 22 de abril de De tono manifiestamente conservador, el 1819 una Constitución. “Obra de sofistas documento comienza con una profesión de bien intencionados que soñaban con la mo- fe católica, a la que se erige como religión narquía”, como la calificara en su momento del Estado y se le debe “la más eficaz y po- Bartolomé Mitre,182 la Constitución de l819, derosa protección” (Artículo I). Legisla lue- en cuya preparación se habían invertido go sobre el Poder Legislativo, el cual está treinta y seis meses de labor de un cuerpo divido en dos cámaras, la de senadores y la constituyente, nunca llegó a regir en la prác- de representantes y lo más saliente de todo tica y colapsó finalmente, junto con el go- ello, como siempre se ha destacado, es la bierno que la puso en vigencia, cuando en composición corporativa del Senado, que febrero de 1820, luego de la batalla de Ce- estaba integrado por un senador por cada peda, las fuerzas santafesinas y entrerrianas provincia, a los que se sumaban militares, de los caudillos Estanislao López y Francis- eclesiásticos, autoridades universitarias y el co Ramírez provocaron la caída de José Director del Estado una vez concluido su Rondeau, sexto y último Director Supremo, mandato. Quiere decir que el órgano en el designado en enero de 1820 como reem- cual las provincias debían estar representa- plazante de Pueyrredón. das en pie de igualdad, se integraba también con integrantes de diversas corporaciones Poco después de sancionado el Reglamento que en nada representaban los intereses de de 1817 se nombró una comisión para ela- aquéllas (Artículo X). En el Ejecutivo se borar una Constitución. Si bien el momen- mantiene la figura del Director del Estado, to político que vivía el Directorio de Bue- que no es elegido por electores sino que es nos Aires era poco propicio para encarar nombrado por ambas cámaras legislativas tal proyecto, como lo hizo notar Godoy reunidas (Artículo LVII). En la cabeza del Cruz, se avanzó no obstante en ese sentido. Poder Judicial se coloca una alta Corte de En agosto de 1818 fueron designados para Justicia, compuesta de siete miembros y dos integrar la comisión redactora los diputa- fiscales (Artículo XCII), un número que lue- dos Serrano, Zavaleta, Sánchez de Bustaman- go repetirá la Constitución de 1853 hasta te, Juan José Paso y Antonio Sáenz. Tomaron su reforma de 1860. Luego de enumerar los como fuente los proyectos constituciona- Poderes del Estado se ocupa, en la Sección les de 1813, el Estatuto de 1815, el Regla- mento de 1817, la Constitución francesa de 1791, la Constitución de los Estados Uni- dos y la Constitución española de Cádiz 183 El propio Joaquín V. González se encargó de des- de 1812. De todo ello surgió un texto do- tacar el alto nivel teórico de este documento. Tiene –decía– para la historia argentina el interés de ser tado de una técnica constitucional impeca- uno de los instrumentos escritos más perfectos del gobierno representativo republicano unitario que se ha ensayado en los países de América. González, Joa- quín V. Manual de la Constitución Argentina § 42, en: Obras Completas. Buenos Aires, 1935, T. III, p. 43. 182 Historia de Belgrano. T. III, p. 243. 184 Historia. P. 75.

54 V, de los derechos y garantías, lugar donde el cual cubría los aspectos no previstos por aparecen varias disposiciones que luego se- la Constitución. rán repetidas en la Constitución de 1853. El nuevo texto fue jurado en todas las pro- Así por ejemplo los Artículo CXI y CXII vincias menos en las del Litoral que no ha- fueron volcados luego en lo que todavía es bían participado del Congreso constituyen- el Artículo 19 de nuestra Constitución vi- te. No hace falta decir entonces que todo gente. Del mismo modo, la cláusula del Ar- ello acentuó más aún el recelo de los caudi- tículo CXVII sobre las cárceles, figura al fi- llos de Santa Fe y Entre Ríos, azuzados cons- nal del actual Artículo 18. tantemente por el de la Banda Oriental a Es curioso que una Constitución a cuyo pie quien la invasión portuguesa y el comporta- figuran las firmas de los representantes de miento del Directorio hacia ella le habían Catamarca,185 Córdoba,186 Jujuy,187 La Rio- dado motivos suficientes para el enfrenta- ja,188 Mendoza,189 San Luis,190 Santiago del miento. El gobierno de Buenos Aires pide Estero,191 Tucumán,192 las provincias del Alto entonces auxilio a San Martín para que fuer- Perú, esto es, Cochabamba,193 Charcas,194 zas de su expedición libertadora se unieran Chichas195 y Mizque196 y los de Buenos Ai- contra las provincias del Litoral. Pero aquél res197 los cuales, con excepción de las pro- se niega a poner su ejército a disposición vincias del Litoral, abarcaban por entonces de una lucha civil y esto sella la suerte del casi la totalidad del país, no haya contem- Directorio que ve esparcir la rebelión por plado una sola norma sobre el sistema de el resto de las provincias. Así, López y Ramí- gobierno provincial y la elección de sus go- rez no tardaron en consumar su avance de- bernadores. Resulta evidente así que, pese a finitivo contra Buenos Aires, materializado la integración federal del Congreso, éste finalmente en la batalla de Cepeda (1º de adoptó una Constitución para organizar tan febrero de 1820),198 donde la victoria de sólo el gobierno nacional, con olvido com- ambos caudillos sobre las fuerzas de Ron- pleto de la relación de éste con los de las deau, provocaron la crisis de 1820 y la diso- provincias. Esta cuestión seguía entonces lución del débil gobierno nacional. bajo lo dispuesto por el Reglamento de 1817,

185 Manuel Antonio Acevedo. 186 Alejo Villegas y Benito Lascano. 187 Teodoro Sánchez de Bustamante. 188 Pedro Ignacio de Castro Barros. 189 Tomás Godoy Cruz. 190 Domingo Guzmán. 191 Pedro León Gallo y Pedro Francisco Uriarte. 192 Gregorio Funes y José Miguel Díaz Vélez. 193 Pedro Carrasco. 194 José María Serrano, Jaime Zudañes y José Severo 198 Cepeda ha sido testigo de dos batallas importantes Malabia. en la historia argentina. La primera es ésta en la cual las 195 José Andrés Pacheco de Melo. fuerzas federales derrotaron a las unitarias. La segunda 196 Pedro Ignacio Rivera. tiene lugar el 23 de octubre de 1859 en donde el ejér- 197 Antonio Sáenz, Vicente López, Miguel de Azcuénaga, cito de Urquiza es derrotado por Buenos Aires, lo que Juan José Paso, Matías Patrón, Juan José Viamonte, y permite, luego del Pacto de San José de Flores, que Luis José Chorroarín. aquélla se integre con la Confederación.

55 56 VIII. LA CRISIS DE 1820. CAÍDA DEL DIRECTORIO Y CESE DEL CONGRESO

Escapa a los límites de este trabajo explicar, de recuperar las colonias americanas, puso con algún pormenor, los por qué de la lucha al gobierno de Buenos Aires ante la disyun- entre Buenos Aires y las provincias del Lito- tiva de tener que buscar aliados en las cor- ral que finaliza con la caída del Directorio. tes europeas victoriosas en su legitimidad Me remito para ello a las obras de historia después del Congreso de Viena. Ello sin argentina generales.199 Sin perjuicio de ello embargo traía nuevas complicaciones pues recordemos que el gobierno de Buenos Ai- España formaba parte también, mediante res, desde la Revolución de Mayo en adelan- nuevas alianzas a veces cambiantes, de la era te, había carecido de una política coherente posnapoleónica. en su relación con el resto de las provincias a las cuales había invitado a participar para luego expulsarlas o bien pretender impo- En este ir y venir sin rumbo, el gobierno del nerles sus condiciones. Todo ello en el mar- Directorio intentó primero acercarse, como co de los corsi e ricorsi de la lucha entre el ya vimos, al ex rey Carlos IV; luego Alvear, partido porteño y el del interior. A ello se mediante su ministro Manuel García, trans- agrega la prolongada guerra de la Indepen- mitió al gobierno británico, representado por dencia que desde la derrota de Huaqui en Lord Strangford, embajador inglés en Río de 1811 también presentaba altos y bajos per- Janeiro, una propuesta de sometimiento a la manentes sin definición categórica. corona que entonces ceñía el príncipe re- gente y futuro rey Jorge IV.200 A todo ello No menos inestable era la situación exte- deben agregarse la pretensión de estable- rior luego de la caída de Napoleón. Recor- cer una monarquía incaica, tesis que tuvo demos que el andamiaje jurídico y político varios adeptos en el Congreso de Tucumán, de la Revolución había estado montado so- como ya vimos y el proyecto de Pueyrre- bre la crisis del gobierno español luego de dón de apoyar a los portugueses en su inva- la invasión napoleónica, pero el retorno de sión de la Banda Oriental con tal de obte- Fernando VII al trono y su presunto intento ner su auxilio en la lucha contra España. Por

199 Sin perjuicio de ellas la cuestión, con una óptica fa- 200 Su padre, el rey Jorge III, se hallaba mentalmente vorable a los caudillos del Litoral, está relatada en Ló- afectado y había delegado el trono en su hijo quien pez Rosas. Historia Constitucional. Pp. 250-270. sería luego coronado en 1820.

57 último y como prueba del desconcierto ab- Lejos de invadir Buenos Aires, las fuerzas soluto en el cual se hallaba el gobierno ar- federales le propusieron un armisticio. A tal gentino por entonces, se llevó a cabo un fin y por iniciativa de Ramírez, se convocó cuarto intento monárquico, esta vez ante la un Cabildo Abierto que nombró un cuerpo corte francesa del rey Luis XVIII.201 de electores para elegir gobernador. Este cuerpo de doce electores fue denominado La batalla de Cepeda puso fin así a los pri- Junta de Representantes y su elección para meros diez años de gobiernos nacionales Gobernador recayó en Manuel de Sarratea independientes. Quedaba detrás de ella una el día 17 de febrero. En esa fecha también, década difícil en la cual el mayor y mejor se firmó en Luján el armisticio suscrito por saldo fue la declaración de la Independen- Miguel Soler en representación de Buenos cia. Pocos días después de la batalla, el 11 de Aires y por Ramírez y López representan- febrero, el Congreso instado por el Cabildo do a Entre Ríos y Santa Fe, respectivamen- de Buenos Aires le comunica a éste que ha te. A partir de esa fecha se inicia en la histo- decidido cesar en sus funciones y lo mismo ria argentina una nueva era signada por la hace también ese día el Director Rondeau, ausencia de un gobierno nacional que, salvo todo lo cual es comunicado al día siguiente la efímera presidencia de Rivadavia en 1826, a los gobiernos de Córdoba, Salta y Tucu- se prolonga hasta 1853 con la sanción de la mán y al Cabildo de Cuyo.202 Una vez más Constitución definitiva y la entrada en vigor esta vieja institución de la colonia, se pre- de las autoridades instituidas por ella. sentaba como un cuerpo dotado de autori- dad residual y permanente para tomar de- cisiones ante la crisis.

201 Luis XVIII era hermano del decapitado rey Luis XVI; había sobrevivido a la Revolución y fue reinstalado en el trono luego de la caída de Napoleón. Esta última tratativa monárquica del gobierno argentino comienza en el año 1818 cuando llega a Buenos Aires el coronel Le Moyne, enviado por el gobierno francés, quien le propone al Director Pueyrredón coronar aquí al du- que Luis Felipe de Orleáns. Con tal motivo se comisio- nó al canónigo José Valentín Gómez para entablar ne- gociaciones con el gobierno francés. De resultas de ellas fue propuesta la coronación de Carlos Luis de Borbón, duque de Luca, un príncipe de segundo orden incapaz y pusilánime. No obstante ello el Congreso, ya sancionada la Constitución de 1819, consideró esta propuesta en las sesiones secretas celebradas el 3 y el 12 de noviembre de ese año y se encomendó a Gó- mez continuar con el proyecto. Véase Ravignani. Asam- bleas. T. I, pp. 575-577 . 202 Véase San Martino de Dromi. Documentos. Pp. 2359- 2362.

58 IX. EL QUINQUENIO 1820-1825. AUSENCIA DE AUTORIDAD NACIONAL Y CONSOLIDACIÓN DEL SISTEMA FEDERAL

a. Semblanza general tre ellos se cuentan los celebrados entre Buenos Aires y las provincias del Litoral para Luego de la caída de las autoridades nacio- poner fin a la continua lucha habida entre nales, se inicia un quinquenio que cambiará ellas. profundamente el panorama político argen- tino. Aparecen en escena las provincias como Paralelamente hubo un intento fallido de lle- entidades autónomas, que tres décadas más var a cabo un congreso constituyente que tarde se reunirán para dar forma a la Cons- debía reunirse en Córdoba. En la provincia titución definitiva. Como causa y efecto de de Buenos Aires, luego de una crisis política este surgimiento, se suceden numerosos acuerdos suscritos por aquéllas entre sí en su calidad de estados prácticamente sobe- ranos. En estos acuerdos se mantiene la in- tado entre los diputados del gobierno de Salta y los tención de reunirse nuevamente bajo un del general Olañeta (20 de agosto de 1821); Acuerdo gobierno federal lo que da lugar al creci- entre Buenos Aires y Santa Fe (22 de agosto de 1821); Tratado entre el diputado del gobierno de Tucumán y miento de continuos lazos de unión inter- el de la Campaña (3 de septiembre de 1821); Tratado 203 provincial inexistentes hasta la fecha. En- de Alianza entre Tucumán y Santiago del Estero (19 de septiembre de 1821); Tratado del Cuadrilátero (15 al 25 de enero de 1822); Pacto de San Miguel de las Lagu- 203 Estos acuerdos en orden cronológico son: Tratado nas (22 de agosto de 1822); Convención entre los go- del Pilar (23 de febrero de 1820); Acta de Amistad y biernos de Entre Ríos y del Estado Cisplatino (11 de Unión entre Mendoza y San Juan (23 de marzo de 1820); diciembre de 1822); Tratado de unión entre Buenos Acuerdo de amistad y unión entre Mendoza y San Luis Aires y Santa Fe contra los bárbaros (3 de enero de (24 de marzo de 1820); Alianza ofensiva y defensiva 1823); Tratado entre Santa Fe y el Cabildo de Montevi- entre Corrientes, Misiones y la Banda Oriental (24 de deo contra los imperiales (13 de marzo de 1823); Con- abril de 1820); Bases para la paz entre Buenos Aires y vención de amistad y alianza entre Misiones y Entre Santa Fe (13 de julio de 1820); Tratado de Benegas (24 Ríos (12 de mayo de 1823); Acuerdo entre Santa Fe y de noviembre de 1820); Tratado entre el general Here- Entre Ríos contra los imperiales (4 de agosto de 1823); dia y diputados de Tucumán (3 de marzo de 1821); Tra- Convenio entre Santa Fe, Entre Ríos y la diputación de tado entre los jefes de las fuerzas de Santiago del Este- Montevideo contra los imperiales (4 de agosto de 1823); ro, Catamarca y Salta (12 de abril de 1821); Pacto de Convención entre Buenos Aires y Entre Ríos (9 de unión entre Mendoza, San Juan y San Luis (abril de 1821); noviembre de 1823); Convenio entre los gobernado- Tratado de paz y unión entre Tucumán y Santiago del res de Tucumán y Santiago del Estero (11 de mayo de Estero (5 de junio de 1821); Armisticio entre los jefes 1825). Puede vérselos en San Martino de Dromi. Docu- de Salta y el ejército realista (14 de julio de 1821); Tra- mentos. Pp. 1431-1481.

59 profunda,204 se suceden una serie de gobier- Sarratea de la Provincia de Buenos Aires, de nos de los cuales el de Martín Rodríguez la de Santa Fe, Estanislao López, y el de En- fue el más extenso y fructífero de todos. tre Ríos, Francisco Ramírez, el día 23 de Bajo esta gobernación entra nuevamente en Febrero del año del Señor 1820, con el fin escena quien con su deponer término a la guerra suscitada en- inconfundible estilo, mezcla de autócrata y tre dichas provincias, de proveer a la seguri- propulsor de la cultura y el progreso, lleva dad ulterior de ellas, y de concentrar sus adelante un congreso constituyente que fuerzas y recursos en un gobierno federal.” entre 1824 y 1826 pone en vigencia una Está escrito en doce artículos donde el pri- nueva Constitución de la cual surge como mero de ellos pone de manifiesto el intento Presidente. Se trata, sin embargo, de un nue- de las partes contratantes de organizar una vo y frustrado intento de someter las pro- federación a cuyo efecto se comprometen vincias al mando unitario de Buenos Aires a convocar una convención constituyente en que fracasa con la caída final de Rivadavia Santa Fe.205 Se dispone luego el cese de las en 1827 y preludia una nueva ausencia de la hostilidades y el retiro de las tropas santa- autoridad nacional que tardará más de un fesinas y entrerrianas de Buenos Aires, ha- cuarto de siglo en reaparecer. ciéndose un grave cargo a quienes usurpa- ron el mando de la Nación o burlaron las instrucciones de sus pueblos en el Congre- b. Los acuerdos entre Buenos Aires so (Artículo II)206 y se pide ayuda a Buenos y las provincias del Litoral celebra- dos en 1820 205 “Artículo I. Protestan las Altas Partes Contratantes, que el voto de la nación y muy en particular en las Me detendré en este acápite en los dos pri- provincias de su mando, respecto al sistema de gobier- meros de los tres acuerdos suscritos entre no que deba regirlas, se ha pronunciado a favor de la Buenos Aires y sus principales adversarias, federación, que de hecho admiten; pero que debiendo declararse por Diputados nombrados por la libre elec- las provincias del Litoral, como medio de ción de los pueblos, se someten á sus deliberaciones. A poner fin al enfrentamiento civil que había este fin, elegido que sea por cada provincia popular- dado por tierra con el Directorio. Ellos son mente su respectivo Representante, deberán los tres los de Pilar y Benegas los cuales –especial- reunirse en el Convento de San Lorenzo de la provin- cia de Santa Fe, á los sesenta días contados desde la mente el primero de ellos– marcan el final ratificación de esta convención. Y como están persua- de la influencia de Artigas en el Litoral ar- didos de que todas las provincias de la nación aspiran á gentino. la organización de un Gobierno central, se compro- mete cada una de por sí de dichas partes contratantes, El de Pilar constituye –según su propia in- á invitarlas y suplicarlas concurran con sus respectivos troducción– una “Convención hecha y con- Diputados para que acuerden cuanto pudiere conve- cluida entre los Gobernadores Manuel de nirles y convenga al bien general”. 206 “Artículo II. Allanados, como han sido, todos los obstáculos, que entorpecían la amistad y buena armo- 204 El pico de la crisis tuvo lugar el 20 de junio de 1820, nía entre las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y conocido como el día de los tres gobernadores, pues la Santa Fe, en una guerra cruel y sangrienta por la ambi- Junta de Representantes, dominada por elementos fa- ción y criminalidad de unos hombres que habían usur- vorables al Directorio, había logrado destituir a Sarra- pado el mando de la nación, ó burlado las instruccio- tea y poner en su lugar a Ildefonso Ramos Mejía quien nes de los pueblos que representaban en Congreso, asumió el 2 de mayo. Su gobierno dura muy poco y el cesarán las hostilidades desde hoy, retirándose las divi- 20 de junio, presionado por López, renuncia ante el siones beligerantes de Santa Fe y Entre Ríos á sus res- Cabildo de Buenos Aires. Asume entonces el general pectivas provincias”. Como consecuencia del cese de Soler, jefe del ejército porteño. Ese día además, como las hostilidades se les permite a los prisioneros de gue- bien sabemos, murió Manuel Belgrano. rra retronar a sus provincias (Artículo IX).

60 Aires para auxiliar a las otras dos provincias gobernador de Buenos Aires, lo cual consti- en su lucha contra el invasor portugués en tuye una nueva y singular contradicción de la Banda Oriental (Artículo III). Asimismo se la historia argentina. López, el vencedor de acuerda la navegabilidad de los ríos Paraná Cepeda y causante de la caída del Directo- y Uruguay (Artículo IV), el libre comercio rio, propone como gobernador al ex Direc- de armas (Artículo VIII) y se ordena enjui- tor Alvear, quien en 1815 estaba dispuesto a ciar a los miembros del Congreso acusados poner el territorio argentino bajo el gobier- de cometer crímenes contra la libertad de no británico.210 Para contrarrestar el inten- la Nación.207 Según dice González Calde- to de López, el Cabildo de Buenos Aires lla- rón el proceso fue iniciado y algunos ex ma a elecciones y surge de ellas el coronel congresistas llegaron a ser detenidos, pero Manuel Dorrego. López entonces, al mando recuperaron la libertad enseguida y el juicio de fuerzas superiores a las porteñas, pone finalmente no tuvo mayores consecuen- sitio a Buenos Aires. Dorrego intenta que- cias,208 pero de todos modos no deja de ser brar el cerco y tiene una primera victoria curioso que el Congreso a quien debemos en el Arroyo Pavón, pero es derrotado lue- la declaración de la Independencia, haya fi- go en la chacras del Gamonal el 2 de sep- nalizado de manera tan sombría y con sus tiembre. miembros en la cárcel.209 El acuerdo de Pi- Luego de algunos retardos y con la media- lar fue aprobado y ratificado por la Junta de ción de Córdoba, se firma un nuevo tratado Representantes de Buenos Aires al día si- de paz entre Buenos Aires y Santa Fe que guiente de su celebración. tiene lugar el 24 de noviembre de 1820, en El segundo de los tratados se firma el 24 de la estancia de Tiburcio Benegas –cerca del noviembre de 1820. Su origen es una nueva Arroyo del Medio– de donde toma su nom- lucha entre Buenos Aires y Santa Fe ocasio- bre. “Deseosos de tranzar las desavenencias nada por el intento de Estanislao López de desgraciadamente suscitadas, poniendo tér- nombrar a Carlos María de Alvear como mino á una guerra destructora entre pue- blos hermanos” –según comienza el acuer- 207 “Artículo VII. La deposición de la antecedente admi- do– se decidió que habría “paz, armonía y nistración ha sido la obra de la voluntad general por la buena correspondencia entre Buenos Aires, repetición de crímenes, con los que se comprometía la libertad de la nación, con otros excesos de una magni- Santa Fe y sus gobiernos, quedando aque- tud enorme; ella debe responder en juicio público ante llos y estos en el estado en que actualmen- el tribunal que al efecto se nombre; esta medida es te se hallan: sus respectivas reclamaciones y muy particularmente del interés de los jefes del Ejérci- derechos salvo ante el próximo Congreso to federal, que quieren justificarse de los motivos po- derosos que les impelieron a declarar la guerra contra Nacional” (Artículo I). También se compro- Buenos Aires en Noviembre del año próximo pasado, metieron a promover “eficazmente la re- y a conseguir con la libertad de la Provincia de Bue- unión del Congreso dentro de dos meses, nos-Aires la garantía más segura de las demás unidas”. remitiendo sus Diputados á la ciudad de 208 González Calderón. Historia. P. 88. 209 Desde su celda Teodoro Sánchez de Bustamante, Córdoba por ahora, hasta que en unidad eli- diputado por Jujuy escribió una carta que pone de jan el lugar de su residencia futura” (Artículo manifiesto su estado de ánimo en ese momento. Decía II). Luego se suceden una serie de cláusulas en ella, por ejemplo: “Los diputados (del Congreso de propias de un armisticio y se declara garante Tucumán) ya arrojados de sus puestos y reducidos al estado de nulidad, eran los indicados para divertir al del cumplimiento a “la Provincia mediadora pueblo y recibir sobre sí los furores de su indignación.” Esta carta está reproducida en Romero Carranza y otros. Historia. T. II, pp. 515-516. 210 Véase supra nota 122.

61 de Córdoba, cuya calidad ha sido aceptada, cha se entabló entonces. Ramírez resultó y en su virtud subscriben los Señores que la vencido y muerto en el encuentro de Río representan, que tanto han contribuido con Seco en julio de 1821. Esto motivó una alian- su oportuno influjo á realizarlo”. za entre el gobierno de Buenos Aires y el de Santa Fe sellado en el acuerdo del 22 de agosto de 1821, suscrito en San Nicolás, por c. El frustrado Congreso de Córdoba el cual impusieron a la vencida Entre Ríos la y el Tratado del Cuadrilátero independencia de Corrientes y Misiones. Además, el gobierno de Martín Rodríguez En el Tratado del Pilar, como vimos se fijaba logró colocar en la gobernación de Entre entre los compromisos el de reunir un Con- Ríos a Lucio Mansilla, porteño, de modo que greso constituyente en el Convento de San esta provincia quedó en línea con las direc- Lorenzo, en Santa Fe. Pero la mediación de tivas de Buenos Aires. Córdoba en Benegas, hizo que el goberna- dor Bustos cambiara la dirección del encuen- La suerte del Congreso de Córdoba estaba tro hacia su provincia. Esta nueva asamblea sellada y de ello se encargaron Buenos Ai- constituyente argentina no avanzó más allá res, Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes al fir- de sus pasos iniciales. Buenos Aires había mar el Tratado del Cuadrilátero el 25 de enviado a sus diputados con expresas ins- enero de 1822. Esta vez fue todo el Litoral y trucciones que en definitiva tendían a la frus- Buenos Aires los que se pusieron de acuer- tración del Congreso pues propiciaban el do para terminar con el Congreso cordo- régimen unitario211 y luego de algunas se- bés y lo hicieron en los términos que da siones preparatorias, la llegada de Rivadavia cuenta el Artículo 13 del Tratado: “No con- como secretario de gobierno de Martín siderando útil al estado de indigencia y de- Rodríguez, en julio de 1821, terminó de frus- vastación, en que están envueltas las pro- trar la convocatoria. Rivadavia se opuso des- vincias de Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes, de el comienzo y su prédica fue expuesta por dilatadas guerra civiles que han sopor- en el diario Argos que número tras número tado a costa de sangre, desembolsos, ruinas conspiraba en contra del Congreso. y sacrificios de todo género, su concurren- cia al diminuto congreso reunido en Cór- En el ínterin Francisco Ramírez, que tam- doba, menos conveniente a las circunstan- bién se oponía por motivos diferentes a la cias presentes nacionales, y a la de separar- reunión del Congreso, había creado la Re- se Buenos Aires única en regular aptitud pública Federal Entrerriana, constituida por respectiva para sostener los enormes gas- Entre Ríos, Corrientes y Misiones, desatan- tos de un congreso, sus empresas marciales, do con ello las preocupaciones de Santa Fe, y en sostén de su naciente autoridad; que- Córdoba y Buenos Aires.212 Una nueva lu- dan mutuamente ligadas á seguir 1a marcha política adoptada por aquella en el punto 211 Véase López Rosas. Historia Constitucional. Pp. 286- de no entrar en congreso por ahora, sin 288. 212 La figura de Ramírez había crecido luego de la derro- ta de Artigas. Este había sido expulsado de la Banda Oriental por los portugueses en 1820 y se trasladó a los confines de Corrientes. Artigas derrotado pidió re- Entre Ríos. Allí censuró a Ramírez por haber firmado el fugio al dictador paraguayo Gaspar Rodríguez de Fran- Tratado del Pilar sin su consentimiento y le exigió obe- cia, quien lo confinó hasta su muerte, en 1853, en la diencia. El caudillo entrerriano, lejos de subordinarse al villa de Caraguatí. Así terminó la influencia política de oriental, lo enfrentó venciéndolo y persiguiéndolo hasta Artigas, quien nunca regresó en vida a su país.

62 previamente reglarse, debiendo en conse- dobesa, atrajo la atención nuevamente so- cuencia la de Santa Fe retirar su diputado bre sí y fijó la posibilidad de que se convo- de Córdoba”. cara un nuevo congreso. “Si consiguiente a la marcha política que se adopta –dice el Véase que se alude al “diminuto” congreso Artículo 14– alguna de las provincias con- de Córdoba y se dice también que Buenos tratantes creyere después ser llegada la Aires es la única con capacidad para llevar oportunidad de instalarse el congreso ge- adelante una reunión de ese tipo. Es obvio neral, se harán entre sí las invitaciones co- que para conseguir esto Buenos Aires hizo rrespondientes.” Esta oportunidad fue se- concesiones,213 particularmente hacia Co- ñalada por Buenos Aires en 1824, como ya rrientes y Misiones,214 y ciertamente logró veremos. su objetivo pues desbarató la asamblea cor-

d. Formación de las provincias argen- 213 Así por ejemplo, “[...] Buenos Aires facilitará en cuanto lo permitan su estado y recursos, al armamento, muni- tinas ciones, y demás artículos de guerra a cualquiera de las Sin perjuicio de los acuerdos entre Buenos otras que los necesite y pida, cuyo importe de los ren- glones que se subministrasen, será satisfecho en la es- Aires y el Litoral, todas las provincias argen- pecie, modo y tiempo que contratasen los respectivos tinas tuvieron un surgimiento a partir de gobiernos, quedando á mas libre el comercio de, aque- 1820, bien que la formación de algunas de llos entre las cuatro provincias” (Artículo 7); 9. “Bue- ellas es posterior al quinquenio que estoy nos Aires por un principio de generosidad y buena correspondencia con el actual gobernador de Entre considerando aquí. Ríos y el de Corrientes, da por condonados, cedidos y En el Norte, Tucumán se había separado de cancelados cuantos cargos puede hacer, y reclamacio- nes justas por los enormes gastos que le obligó causar la Intendencia de Salta en 1814 y en sep- la temeraria invasión del finado Ramírez, consagrando tiembre de 1820 se dio la Constitución de gustoso todos sus sacrificios al inestimable ídolo de la la República de Tucumán. Santiago del Este- paz entre hermanos americanos unidos con tan inti- ro que dependía de la antigua gobernación mas, como sagradas relaciones, y esperando solo la paga de la gratitud á los esmeros que ha prodigado á su de Tucumán, se declaró autónoma el 25 de logro” (Artículo 9°). abril de 1820 como: “uno de los territorios 214 Dice el Artículo 10: “La provincia de Entre Ríos, unidos de la Confederación del Río de la devolverá á la de Corrientes todas las propiedades de Plata, sin reconocer más soberanía que la esta, ó de algunos particulares de la misma, que saca- das por D. Francisco Ramírez existen á la disposición del Congreso de los pueblos a reunirse”. del gobierno, y sea notorio pertenecerle, y solo en las Catamarca que también integraba la gober- que necesiten justificación, se producirá brevemente”. nación de Tucumán se declaró independien- Asimismo en el Artículo 11 se establece que “Todos te en 1821 con Nicolás Avellaneda y Tula los prisioneros correntinos de los que condujo de Co- rrientes, Ramírez, que se hallen sirviendo en alguna de como gobernador. Luego, en 1823, se dio un las provincias, ó que sin esta calidad estén de soldados, reglamento constitucional siguiendo las lí- serán restituidos á aquella siempre que ellos lo quie- neas del reglamento nacional de 1817. La ran voluntariamente”. Por medio del Artículo 15: “El Rioja se independizó de Córdoba en 1820 y territorio de Misiones queda libre para formarse su gobierno y para reclamar la protección de cualquiera desde 1821 a 1823 el gobierno pasó de las provincia de las contratantes” y finalmente en el Artí- manos de Nicolás Dávila a las de Juan Fa- culo 16 se dispone: “En consecuencia se devolverán cundo Quiroga, que impuso su voluntad en todas las propiedades que reclame (Misiones) en con- la provincia hasta su muerte en Barranca formidad a lo acordado en el Artículo 10, con respecto a Corrientes luego que haya nombrado legítimamente Yaco en 1835. Jujuy continuó dependiendo su gobierno”. de la Intendencia de Salta hasta 1836, en que

63 se constituyó en provincia autónoma por en ese estatuto se declaraba la ciudadanía acción del gobierno de Rosas. Tarija, por úl- de América para todos los nacidos en los timo, se perdió después del triunfo de Bolí- antiguos dominios españoles que residían en var y Sucre en Ayacucho (1824) y fue incor- la provincia, pero la naturalización de ex- porada a Bolivia. tranjeros se libraba a la competencia de la nación. Santa Fe, a su vez, fue gobernada por En Cuyo, San Juan y San Luis se independi- Estanislao López desde su designación por zan también y forman con Mendoza tres el Cabildo en julio de 1819 hasta 1838. Poco provincias autónomas en 1820. En 1825 se después de ser nombrado, en agosto de dicta en San Juan la llamada Carta de Mayo, 1819, dio a la Provincia un estatuto proviso- redactada por Salvador María del Carril. De rio bajo el cual el Gobernador ejercía fun- inspiración liberal definida, la Carta provo- ciones de todo tipo. Este estatuto contribu- có una asonada de clérigos que lograron yó a cimentar un gobierno de tipo patriar- derrocar a del Carril y desterrarlo con sus cal, no obstante lo cual la provincia se desa- ministros, legisladores y jueces, hasta que rrolló en relativa paz en medio de un esta- Félix Aldao, con la división auxiliar de los do general de guerra civil. Santa Fe sancio- Andes, repuso la Carta y las autoridades nó luego una verdadera Constitución en depuestas. San Luis, por su lado, dictó su 1841, con una declaración de derechos y reglamento provisorio en 1832. garantías y la división tripartita de los Po- En el Litoral, después de la muerte de Fran- deres. cisco Ramírez, Corrientes se declaró autó- Córdoba por su lado, al igual que Tucumán, noma y se dio un reglamento provisorio constituyó la República Federal de Córdo- constitucional que creaba los tres Poderes ba y un congreso presidido por Francisco del Estado, mantenía los cabildos, consagra- Bedoya sancionó su Constitución el 30 de ba derechos y garantías y limitaba la ciuda- enero de 1821, bajo el gobierno de Juan danía a los correntinos. El estatuto se modi- Bautista Bustos.215 Tanto la constitución de ficó en 1824 y en él se consagró la ciudada- Córdoba como la de Tucumán declaraban nía de los americanos y sustituyó los cabil- que eran provincias independientes, que la dos por un régimen municipal en el sentido soberanía residía en ellas, pero reconocían de la reforma rivadaviana. En entre Ríos, lue- la preexistencia del vínculo y de las autori- go de Francisco Ramírez gobernó su suce- dades nacionales. sor López Jordán, pero depuesto por el por- teño Lucio Mansilla. El 4 de marzo de 1823 el congreso de la provincia sancionó el es- e. El gobierno de Martín Rodríguez en tatuto constitucional provisorio, preparado Buenos Aires por Agrelo o por Casiano Calderón, en el que se declaraba que la provincia: “[...] es Buenos Aires, por su lado, al igual que el resto parte integrante de las Provincias Unidas del de las provincias, tiene en este período un Río de la Plata y forma con todas una sola gobierno propio e independiente de las de- nación conforme a las normas que fije el más. Se suceden en Buenos Aires durante Congreso general”. No habla de la religión este tiempo dos gobernadores, Martín Ro- del Estado, contrariamente a lo que habían hecho Catamarca, Córdoba, Corrientes, Tu- cumán, Santa Fe y San Luis; establecía las 215 El proyecto de Constitución había sido redacta- do por José Gregorio Baigorrí y José Norberto de máximas garantías individuales y colectivas; Allende.

64 dríguez (1820-1824) y Juan Gregorio de Las los hombres más influyentes de la provincia Heras (1824-1826). El primero de ellos lle- en ese momento. ga a la gobernación de Buenos Aires en for- Su ascendiente en el gobierno de Buenos ma interina, el 26 de septiembre de 1820 Aires nació cuando le fue encomendada, en cuando es designado por la Junta de Repre- junio de 1821, la redacción de una Consti- sentantes a instancias de Juan Manuel de Ro- tución para la provincia. A tal fin la Junta sas. Sofocados los elementos favorables al designó una comisión que integraron Riva- Directorio, con los auspicios del Cabildo y la davia, García y Paso. En lugar de redactar ayuda de Rosas y sus Colorados del Monte, una Constitución, esta comisión instó a la la Junta le otorgó luego el 6 de octubre, el Junta a incrementar formalmente sus facul- pleno de facultades para “atender a la salud tades y así se sancionó la ley del 3 de agosto del pueblo”. Finalmente, en marzo de 1821, de ese mismo año217 por medio de la cual es designado gobernador propietario. aquélla se declaró extraordinaria y consti- tuyente. Siguiendo instrucciones de la co- 1. La Junta de Representantes misión, dispuso asimismo duplicar el núme- ro de sus miembros, bien que sus servicios El gobierno de Rodríguez se entregó inme- fueron declarados honorarios. Poco después diatamente a una enérgica acción de gobier- el 11 de agosto dictó una ley electoral en la no. Contó para ello con dos hombres polé- cual estableció el sistema de elección de los micos pero talentosos. Manuel José García representantes218 y más tarde, por ley del 5 en la cartera de Hacienda y Bernardino Ri- de septiembre, se atribuyó facultades imposi- vadavia, incorporado al gobierno en julio de tivas exclusivas.219 Además de estas leyes, la 1821, en la de gobierno y relaciones exte- Junta de Representantes (llamada también Sala riores. Martín Rodríguez encabeza así un de Representantes) dictó, el 28 de noviembre gobierno que impulsó cambios en todos los de 1822, una ley regulando el sistema de re- órdenes. Algunos de ellos muy discutidos en novación de sus miembros220 y el 23 de di- su época, tal por ejemplo la reforma ecle- ciembre de 1823 otra en donde fijó el sistema siástica, o la eliminación de los cabildos, pero de elección del Gobernador y la duración de en general promotores del desarrollo. su mandato que estableció en tres años.221 Es conveniente señalar, sin embargo, que todo este plan de gobierno contó con el apoyo político y la aprobación legislativa for- 2. Supresión de los cabildos y reforma mal de un órgano de gobierno que, por lo judicial general, aparece oscurecido en su perspec- Cuatro meses después de haberse consa- tiva histórica por la figura de Rivadavia a grado “extraordinaria y constituyente” la quien se le endilga –según quien cuente la Junta, instada por Rivadavia, produjo uno de historia– todo lo malo o todo lo bueno de los hechos más nefastos del gobierno de cuanto ocurrió en Buenos Aires entre 1821 y 1824. Me refiero a la Junta de Represen- tantes, órgano legislativo de la provincia de Buenos Aires que nació, como vimos, de un 217 Véase el texto en San Martino de Dromi. Documen- tos., P. 590. Cabildo Abierto convocado luego de la ba- 218 Ídem, pp. 591-593. 216 talla de Cepeda y estuvo integrada por 219 Ídem, p. 594. 220 Ídem, p. 596. 216 Véase supra punto VIII. 221 Ídem, p. 597.

65 Martín Rodríguez: la supresión de los cabil- Junto con la supresión de los cabildos, la dos en la provincia de Buenos Aires. La cues- misma ley del 24 de diciembre de 1821 dis- tión se inició con un conflicto vecinal origi- puso una reforma judicial, tendiente a dis- nado con el cabildo de Luján el cual fue tribuir las funciones que hasta ese momen- aprovechado por Rivadavia para eliminar en to ejercían los cabildos. El poder judicial en forma general todos los cabildos de la pro- Buenos Aires pasó a tener una justicia ordi- vincia, incluido el de la ciudad de Buenos naria administrada por cinco jueces letra- Aires.222 Ello fue dispuesto por una ley san- dos (dos en la capital y tres en la campaña) cionada el 24 de diciembre de 1821 cuyo que se llamaban jueces de primera instancia. Artículo 1º lacónicamente dice: “Quedan Se preveía también el nombramiento de un suprimidos los cabildos hasta que la repre- letrado que actuaría como defensor oficial sentación crea oportuno establecer la ley y procurador y la creación de un juez de general de municipalidades.”223 paz en cada parroquia. Asimismo, las funcio- nes administrativas de policía (inspección de Con esta breve disposición legislativa, se eli- mercados y abastos) se encomendaban a un minaba una institución secular, única base jefe de policía, asistido por seis comisarios democrática del antiguo sistema colonial, que en la capital y ocho en la campaña. en las recurrentes crisis políticas experimen- tadas desde la Revolución había servido como último sostén de la legalidad y la con- tinuidad del gobierno y de la cual, en su 3. Reformas económicas, culturales, momento, el propio Rivadavia se habría ser- militares y eclesiásticas vido maliciosamente para neutralizar el Re- Excede en mucho las proporciones de este glamento Orgánico de la Junta Conserva- trabajo dedicarme al recuento, más o me- dora, cuando era secretario del Triunvirato nos detallado, de toda la obra de gobierno en 1811.224 Este ejemplo de centralismo llevada a cabo por el gobernador Martín político dado por el gobierno de Martín Rodríguez y sus secretarios Rivadavia y Gar- Rodríguez, fue imitado luego por varias pro- cía. Por ello haré una breve síntesis de sus vincias, que también suprimieron los cabil- perfiles generales marcados por el liberalis- dos en sus respectivas jurisdicciones.225 mo económico, el regalismo religioso, el cen- tralismo político y una franca promoción de 222 Sostuvo Rivadavia en ese momento que el cabildo la cultura y las artes. de Buenos Aires era: “[...] un establecimiento del mis- mo genero reglado por los mismos principios, y acaso El aspecto económico del gobierno estuvo más perjudicial que aquél (el de Luján) por la misma bajo las riendas de Manuel J. García, que pretendida importancia que progresivamente le habían comenzó a fines de 1821 por conocer y re- dado las habitudes, la preocupación y los funestos acon- gistrar el estado de la deuda pública en to- tecimientos de que había sabido aprovecharse”. Ello lo motivó –según dice José María Rosa– a emitir un de- das sus expresiones, creó el Gran Libro de creto el 1º de diciembre de 1821 por medio del cual el rentas y fondos públicos; dividió la adminis- cabildo de Buenos Aires fue privado de sus rentas. Rosa, tración de hacienda en tres reparticiones: José María. Historia Argentina. Buenos Aires, Juan C. Gran- contaduría general, receptoría y dirección da Editor, 1965, T. III, p. 334. 223 Véase el texto de la ley en San Martino de Dromi. de rentas y tesorería. Se estableció que nin- Documentos. P. 594. guna otra autoridad que la de los represen- 224 Véase supra punto V. g. tantes de la provincia de Buenos Aires po- 225 Mendoza, por ejemplo, lo llevó a cabo mediante una día establecer impuestos y contribuciones ley del 11 de mayo de 1825. San Martino de Dromi. Documentos. P. 1052. y ninguna autoridad, sin conocimiento y

66 aprobación de los representantes, podría virrey Vértiz y había sido auspiciado tam- ordenar sueldos, pensiones, gastos, etc. El bién por el Directorio bajo Pueyrredón. Ri- Gobierno se obligaba a presentar cada año vadavia lo puso formalmente en marcha fi- el presupuesto de gastos y recursos para el nalmente en 1821227 y el doctor Antonio año entrante y el balance de las inversiones Sáenz228 fue nombrado rector. Sáenz había del año anterior; se crearon los tribunales sido comisionado en 1816 para realizar los de cuentas, uno administrativo y el otro, for- estudios y gestiones preliminares y tenía ya mado por miembros de la legislatura, para elaborado el reglamento provisional. Asegu- estudiar las cuentas generales presentadas ró además la base económico financiera y por el Poder Ejecutivo. Se dictó también la distribuyó los departamentos de estudio en: Ley del Presupuesto general y se fundó el medicina, jurisprudencia, ciencias sagradas, Banco de Descuentos a mediados de 1822, matemáticas y ciencias preparatorias. La con un capital de un millón de pesos fuer- universidad se declaró inaugurada con toda tes, divididos en acciones de mil pesos, con pompa el 12 de agosto en el templo de San facultad para emitir billetes pagaderos al Ignacio. Antonio Sáenz pronunció el discur- portador y a la vista. so inaugural y Rivadavia respondió ofrecien- do la protección del gobierno.229 También fue obra de este gobierno el tan cuestionado empréstito tomado en Londres por intermedio de la Casa Baring y Cia., en 1824. Su producto debía emplearse en la 227 construcción del puerto de Buenos Aires, Martín Rodríguez y de Luca lo tenían todo dispues- to para la inauguración de la universidad, pero las con- en la dotación a la capital de aguas corrien- diciones creadas por la crisis de 1820 retardaron el tes y en la fundación de pueblos en la nueva acto inaugural. Entretanto fue incorporado al gobierno línea de frontera y tres ciudades en la costa Bernardino Rivadavia a quien tocó firmar, como Secre- sur. El mutuo, que nominalmente era de tario de Rodríguez, el edicto de la erección el 9 de agosto de 1821. Así, Antonio Sáenz fue el artesano de 1.000.000 de las cuales sólo se recibieron la obra impulsada fuertemente por Rivadavia. 570.000,226 fue dedicado durante la guerra 228 Sáenz había nacido en 1780, cursó estudios en Char- con el imperio del Brasil al descuento de cas, presidió la Academia de jurisprudencia y, como di- letras y comercio y formó parte luego del putado al Congreso de Tucumán, redactó el Manifiesto sobre el tratamiento y crueldades que han sufrido las Banco Nacional. Provincias Unidas de los españoles y motivó la decla- En materia cultural los avances fueron mu- ración de independencia; dictó en la universidad la cá- tedra de Derecho natural y de gentes. Murió en 1825. chos. Destaco especialmente la creación de 229 Inicialmente, para 1822, la universidad se componía la Universidad de Buenos Aires. Se trataba de los siguientes departamentos: a) de primeras letras, de un proyecto que venía ya de la época del que regía las escuelas primarias de la ciudad y la cam- paña; b) de estudios preparatorios, en el que se ense- ñaba latín, idiomas vivos, filosofía, ciencias físico mate- 226 Este empréstito fue el primero de todos los gran- máticas y economía política; c) de ciencias exactas, di- des endeudamientos públicos que ha tomado la Repú- bujo, química general, geometría descriptiva con sus blica Argentina y que han conformado su abultada deuda aplicaciones, de cálculo y mecánica, y física elemental y externa. Su valor real fue del 70% de su valor nominal astronomía; d) de medicina: instituciones médicas, insti- y de aquél se descontaron además 130.000 libras como tuciones quirúrgicas y clínica médica y quirúrgica; anticipo de intereses por dos años. De las 570.000 li- e) de jurisprudencia: Derecho civil, Derecho natural, y bras restantes sólo 96.000 llegaron en oro y las res- de gentes; f) de ciencias sagradas, cuyo funcionamiento tante en letras de tesorería. El empréstito recién fue se inició en 1824 por falta de alumnos anteriormente. terminado de pagar ochenta y cinco años después de Rivadavia hizo agregar la cátedra de economía política, haber sido contraído, bajo la presidencia de José Figue- que dictó desde 1823, José Pedro Agrelo, y la de Dere- roa Alcorta. cho civil a cargo de Pedro José Somellera.

67 Además de la creación de la Universidad de que San Martín se consagra a la formación Buenos Aires, a comienzos de 1822 se fun- del ejército de los Andes. En las huestes da la Sociedad Literaria de Buenos Aires, improvisadas, con mandos de poca experien- promovida por Julián Segundo de Agüero, cia militar, había deficiencias, abusos e indis- con intervención de Ignacio Núñez, Manuel ciplina. Proliferaban por lo demás, condeco- Moreno, Felipe Senillosa, Vicente López, Es- raciones no justificadas e inmerecidas. La teban de Luca, Santiago Wilde y otros. Se reforma militar se inició en 1816, por obra nombraron miembros correspondientes en de Pueyrredón, pero sobre todo después de las provincias y en el exterior, en Santiago la batalla de Cepeda, por los gobiernos de de Chile, Filadelfia, París. De ese ambiente Martín Rodríguez y de Juan Gregorio Las surgió El Argos de Buenos Aires, como conti- Heras, en la Provincia de Buenos Aires. La nuación del periódico homónimo publica- reforma de fondo se encaró en febrero de do en 1821 por Wilde y Núñez.230 Lo mis- 1822, con el objeto de moralizar y ordenar mo que la Sociedad de Beneficencia, en el el ejército.231 Se legisló también sobre ves- mundo femenino, con su objetivo educativo tuario y armamentos de las tropas. Las mili- y asistencial, la Sociedad Literaria y sus pu- cias de campaña mostraban indigencia y blicaciones fueron un exponente de las in- abandono, y el gobierno procuró elevar su quietudes y afanes de la minoría culta por- condición y su presentación. Se creó en 1822 teña, después de la crisis de 1820. el cuerpo de blandengues de la frontera y se sancionó la ley que creaba la milicia de Los cambios también alcanzaron el orden infantería, artillería y caballería de la Provin- militar y eclesiástico, terrenos donde el go- cia. La extensión de las fronteras exigía vigi- bierno de Martín Rodríguez, bajo la inspira- lancia permanente y éstas fueron extendi- ción de Rivadavia, encaró reformas impor- das por las expediciones de Martín Rodrí- tantes. En cuanto a la primera, desde la Re- guez, que llegaron hasta los campos de Tan- volución de Mayo, la guerra fue el estado dil, donde se formó el fortín Independencia. permanente del país en todos los frentes: el Se atendió también la formación de oficia- Alto Perú en el norte, la expedición san- les, su instrucción y preparación. martiniana por el oeste y la lucha civil entre Buenos Aires y las provincias del Litoral en La segunda reforma, operada en terreno el este. Ello absorbió las mejores fuerzas y eclesiástico, fue producto del regalismo ri- todos los recursos. Sin embargo, un ejército vadaviano y marcó en su momento una pro- propiamente dicho, a pesar del sentido de funda confrontación con la Iglesia católica, organización de Belgrano, no aparece hasta personificada en la enérgica reacción de dos

230 Los tres primeros redactores de la publicación fue- 231 “La reforma militar –decía el decreto correspon- ron Manuel Moreno, Ignacio Núñez y Esteban de Luca, diente– debía contraerse a tres objetos iguales en mag- y se inició el 19 de enero de 1822. Simultáneamente, la nitud, en exigencia y también en justicia. El primero era Sociedad Literaria publicó la revista mensual La Abeja el restablecimiento de la disciplina militar y corrección Argentina, científica y literaria, para vincular a los hom- de los abusos que habían contribuido a relajarla. El se- bres de pensamiento, una quincena de entregas. Se de- gundo era acordar entre los partidarios del viejo siste- dicaba “[...] a objetos políticos, científicos y de indus- ma y del nuevo, y en premio debido a grandes servicios tria, y contendrá además: traducciones selectas; los des- y a una inmensa conquista; pero de un modo digno del cubrimientos recientes de los pueblos civilizados; las pueblo que ha sentido más de una vez que sus esfuer- observaciones meteorológicas del país; las medidas zos y prudencia le han elevado a la dignidad de dar sobre la constitución de los años, de las estaciones y ejemplo. El tercero es organizar un ejército de conser- un resumen de las enfermedades de cada mes; un su- vación cual la seguridad y el orden de la provincia lo mario de los adelantamientos de la provincia”. exige”.

68 franciscanos: fray Cayetano Rodríguez y fray tione de dogma,235 sino que estuvo destina- Francisco de Paula Castañeda.232 Típico he- do a secularizar las órdenes religiosas y sus redero en este punto de la tradición bor- bienes, y a intervenir en la vida administrati- bónica, Rivadavia decidió introducir refor- va de los conventos.236 Entre otras disposi- mas organizativas en un clero que se halla- ciones fue suprimida la orden de los betle- ba muy dividido en cuanto a la Independen- mitas, fue eliminado el diezmo y el fuero cia. Así, mientras había curas criollos que la personal de los eclesiásticos. El seminario favorecían, los estamentos eclesiásticos más conciliar fue transformado en el Colegio conservadores se oponían a ella. A todo esto Nacional de Estudios Eclesiásticos y todos se sumaba que el Papa Pío VII, con fecha 30 los gastos que demandara el clero serían aten- de enero de 1816, había emitido la encíclica didos con el presupuesto del Estado. La dis- Etsi longissimo, en la cual exhortaba a los ca- tribución y organización de las jurisdicciones tólicos de Hispanoamérica a aplastar la se- eclesiásticas también quedaba a cargo del dición “que el hombre enemigo sembró en gobierno con intervención del obispado. esos países.” En ella incitaba asimismo a de- fender a “Nuestro Carísimo Hijo de Jesu- f. Primeros reconocimientos de la cristo, Fernando, Vuestro Rey Católico.” Independencia Naturalmente el elemento en disputa era el ejercicio del Regio Patronato que el rey Fer- Entre 1821 y 1824, tres naciones recono- nando VII pretendía continuar ejerciendo en cieron la Independencia declarada en 1816. América, el cual había sido reclamado por La primera de ellas fue Portugal, en abril de los gobiernos argentinos desde la Asamblea 1821, como medio de que nuestro país re- de 1813. Pues bien, Martín Rodríguez secun- conociera, a su vez, la anexión militar de la dado e inspirado por Rivadavia, encaró la Banda Oriental invadida por las fuerzas del reforma que se instrumentó formalmente general Carlos Federico Lecor. La comuni- mediante la ley sancionada por la Junta de cación, emitida por el rey de Portugal, es Representantes el 21 de diciembre de 1822, transmitida a Rivadavia por el ministro Fi- luego de acaloradas discusiones que se de- guereido el 28 de julio. Un año después, Ja- sarrollaron a lo largo de dieciocho sesiones. mes Monroe, Presidente de los Estados El movimiento –que curiosamente tuvo al- Unidos, propone al Congreso de su país el gunos colaboradores religiosos233 y también reconocimiento de nuestra independencia. oponentes laicos234 – no intervino en cues- Pese al desprecio que ya en aquella época sentían los Estados Unidos por Sud Améri- ca,237 Monroe entendía que este gesto era indispensable como medio de neutralizar la

232 También se opusieron los clérigos Mariano Medra- no y Castro Barros. 235 Rivadavia no era ateo ni agnóstico, por el contrario, 233 Uno de los principales colaboradores fue Mariano es considerado un creyente. Simplemente pretendía Zavaleta, Provisor de Buenos Aires. También de algún imponer un césaro-papismo típicamente borbónico. modo colaboraron el deán Gregorio Funes y los clé- 236 Con lujo de detalles, bien que bajo una óptica riva- rigos Chorroarín, Vidal, Argerich, Gorriti y Ocampo, daviana, la reforma está explicada en Piccirilli. Rivadavia entre otros. Ver Abad de Santillán. Historia Argentina. y su Tiempo. T. II, pp. 165-235. El texto de los dos pro- T. II, p. 123. yectos de ley (el del gobierno y el de la comisión de la 234 En contra de la reforma se manifestaron los diputa- Junta de Representantes) pueden verse en pp. 202-206. dos de la legislatura porteña (Junta de Representan- 237 Más adelante en las conclusiones de este trabajo, tes), Alejo Castex, José M. Díaz Velez, Tomás M. de An- citaré un párrafo escrito en la North American Review, chorena, Esteban A. Gascón y Pedro A. Somellera. que pone de manifiesto este sentimiento.

69 influencia europea en este continente. Así, ge IV para hacerlo, intentando destrabar con en 1823, el Congreso norteamericano re- ello las reticencias de su predecesor, el Du- conoció las independencias de la Argentina, que de Wellington, afirmado en la legitimi- Colombia, México, Chile y Perú. Le toca lue- dad monárquica del Congreso de Viena. Fi- go el turno a Gran Bretaña y es el primer nalmente, el Parlamento inglés reconoce la ministro George Canning, impulsado por independencia el 7 de febrero de 1824, con razones comerciales, quien insta al rey Jor- protesta de España.238

238 Antes de ello el gobierno inglés le había propuesto a Fernando VII que reconociera la independencia de sus ex colonias, a cambio de lo cual Gran Bretaña le garan- tizaba la posesión de Cuba. Obviamente el trato le pa- reció muy escaso al rey español quien lo declinó. El gobierno inglés entonces le hizo saber a España que no le consultaría en el futuro las decisiones que toma- ra en relación con sus ex colonias americanas.

70 X. EL CONGRESO CONSTITUYENTE DE 1824-1827

Desde el 6 de diciembre de 1624 hasta el cias para comunicar la decisión. Los repre- 18 de julio de 1827, estuvo reunido en Bue- sentantes serían elegidos por medio del sis- nos Aires el tercero de los congresos cons- tema establecido en la ley del 3 de agosto tituyentes que tuvo nuestro país en sus pri- de 1821239 y se fijó como sede la ciudad de meros diecisiete años de vida independien- Buenos Aires. Once meses después, en di- te. Con resultado similar al de su inmediato ciembre de 1824, ya bajo el gobierno de Juan anterior, el de 1824-1827 logró sancionar Gregorio de Las Heras,240 el Congreso Ge- también una efímera Constitución. Sin em- neral Constituyente de las Provincias Uni- bargo, una vez más la hostilidad entre Bue- das del Río de la Plata, abría sus sesiones nos Aires y las restantes provincias, perso- bajo la presidencia de Manuel Antonio de nificada ahora en la figura de Rivadavia y la Castro y sin la presencia física de Bernardi- “unidad de régimen”, esta vez proclamada no Rivadavia, quien se hallaba en Gran Bre- formalmente desde la nueva Carta, provo- taña desde julio. La representación propor- caron su rechazo y el derrumbe inmediato cional con base en la población, sumada a del flamante gobierno consumido en la fra- las dificultades de traslado por la escasez gua de una nueva revuelta provincial aviva- de medios y las distancias a recorrer por da además por la pérdida de la Banda Orien- caminos inseguros, dieron a Buenos Aires tal en manos del Brasil. Esta caída marca, una cantidad de diputados varias veces su- además, el alejamiento final de Rivadavia, fi- perior a la de cualquier otra provincia.241 gura central y hegemónica de todo este pro- ceso. b. La Ley Fundamental de 1825 Con la velocidad propia del entusiasmo ini- a. Convocatoria e instalación cial, el Congreso trató y aprobó en primer A comienzos de 1824, y luego de varios años de ausencia de autoridad nacional, comen- zó a gestarse la idea de convocar un nuevo 239 Véase supra punto IX.e.1. 240 congreso general constituyente. La idea era El mandato de Martín Rodríguez como gobernador expiró en mayo de 1824 y fue reemplzado por Las motorizada por Rivadavia, quien en febrero Heras, elegido por la Junta de Representantes, según lo de 1824 envió a la Junta de Representantes dispuesto por ley del 23 de diciembre de 1823. un proyecto de ley de convocatoria de un 241 De 33 diputados electos en el inicio del Congreso congreso nacional. La Ley fue sancionada sólo había 24 de los cuales un tercio eran de Buenos Aires. El diputado más anciano era el deán Gregorio rápidamente el 27 de febrero y desde Bue- Funes y Dalmacio Vélez Sarfield, futuro redactor del nos Aires partieron enviados a las provin- Código Civil, el más joven.

71 lugar la llamada Ley Fundamental. Su objeti- mezcla de debilidad y prudencia, se expli- vo era organizar provisoriamente el gobier- ca ante el enrarecido panorama que en- no nacional mientras se sancionara la Cons- frentaban sus relaciones con las provincias, titución. El proyecto de ley fue presentado según veremos en el punto siguiente. por el diputado correntino Francisco Acos- ta en diciembre de 1824 y se sancionó un mes más tarde, el 25 de enero de 1825. Se- c. Conflictos con las provincias y gún esta ley el Congreso se declaraba cons- guerra con el Brasil tituyente (Artículo 2º); las provincias conti- nuarían regidas por sus propias institucio- Siguiendo el mal ejemplo de sus dos pre- nes (Artículo 3º); la Constitución una vez decesores, el Congreso de 1824 en lugar sancionada debía ser aprobada por las pro- de concentrarse en su tarea específica, vincias (Artículo 6º) y el Poder Ejecutivo esto es sancionar una Constitución, se Nacional se encomendada provisoriamente dedicó en paralelo a la tarea cotidiana de al gobierno de Buenos Aires (Artículo 7º).242 gobernar, propia de un órgano legislativo ordinario. Muy pronto, consecuentemen- Pese a la sencillez formal de su articulado, te, se encontró envuelto en una serie de esta ley fue objeto de un primer y severo problemas que lo distrajeron del objeto enfrentamiento entre las tendencias unita- de su convocatoria y gestaron asimismo ria y federal que se debatían en el Congre- el rechazo a la Constitución que sancio- so. Por la primera se pronunciaron José Va- naría en 1826. Así por ejemplo, el 2 de fe- lentín Gómez y Castro Barros, entre otros, brero de 1825 se suscribió un Tratado de y la segunda fue defendida por Zavaleta, Fu- Amistad, Comercio y Navegación con nes y Gorriti. Al mismo tiempo diputados Gran Bretaña, que significó poner en la como Juan José Paso y Agüero, se oponían práctica el reconocimiento de la Indepen- directamente a la sanción de la Constitu- dencia. Este acuerdo, importante pues se ción por entender que el país no estaba pre- celebraba con la primera potencia mun- parado todavía para ese debate en la medi- dial de ese momento, introdujo sin em- da en que se hacía necesario que las provin- bargo algunos problemas en materia reli- cias se organizaran primero, para dar paso giosa pues aseguraba la libertad de culto luego a la organización nacional. y la tolerancia por ende a los súbditos in- En 1825 también, más precisamente en el gleses no católicos, lo cual provocó algu- mes de junio, fue sancionada una ley por nas reacciones en las provincias. medio de la cual el Congreso sometía en También se ganó el Congreso la enemistad consulta a las provincias las bases sobre del gobernador Bustos de Córdoba y gestó las cuales debía establecerse la futura así su rechazo a la futura constitución, cuan- Constitución.243 Sin perjuicio de ello, se do en los círculos porteños se criticó fuer- mantenía la obligación de someter a las temente su actitud de hacerse reelegir, en provincias el texto una vez aprobado por 1825, por un procedimiento contrario a las el Congreso. Esta actitud del Congreso, disposiciones vigentes. No menos tirante fue la situación con el caudillo riojano Facundo Quiroga con motivo de la explotación de las minas de Famatima. Durante el gobierno 242 Véase esta ley en: San Martino de Dromi. Documen- tos. P. 2363; Sampay. Las Constituciones. P. 303. de Martín Rodríguez, Rivadavia había pro- 243 San Martino de Dromi. Documentos. P. 2371. yectado entregar la explotación de esos ya-

72 cimientos a una empresa inglesa, en contra ciudad para luchar contra el gobierno lusi- de los intereses de Quiroga y de Rosas que tano. Se produjo entonces la epopeya de los tenían sus candidatos para ese cometido. 33 orientales, liderados por Juan Antonio Todo ello dio excusa a Quiroga para derro- Lavalleja, quienes sumaron nuevos refuerzos car al gobernador Dávila y adueñarse de La en territorio uruguayo y comenzaron a re- Rioja. En San Juan también se gestó un foco cibir apoyo militar y económico del gobier- de resistencia a Buenos Aires, cuando en no de Buenos Aires. No sólo ello, en agosto 1823 el gobernador Salvador María del Ca- de ese mismo año un congreso reunido en rril se dispuso a aplicar la reforma eclesiás- el pueblo de la Florida decide que la Banda tica de Rivadavia. Ello originó una revuelta Oriental se reincorpore al territorio de las organizada por un grupo de clérigos con Provincias Unidas y todo esto produce como apoyo militar y del Carril fue depuesto. Si respuesta la declaración de guerra del 10 bien fue luego reestablecido en el poder de diciembre. De modo pues que a todos con el auxilio militar de Félix Aldao y la sus conflictos internos, el Congreso suma- división auxiliar de los Andes, la situación ba ahora la atención de una guerra con un en esta provincia también era tensa. Para país vecino y poderoso.244 completar este panorama, que explica la adversa reacción que tuvieron las provin- cias cuando les fue presentada para su apro- d. La Ley del Poder Ejecutivo Perma- bación la Constitución de 1826, el gober- nente y creación del Banco Nacional nador Las Heras le encomendó a Grego- Luego de la Ley Fundamental, el segundo rio Aráoz de Lamadrid, que se hallaba en acto legislativo de trascendencia emanado Salta, la organización de las fuerzas milita- del Congreso, fue la sanción de la Ley de res en el norte para la guerra con el Brasil. creación del Poder Ejecutivo Permanente. Aráoz de Lamadrid se dirigió entonces a La necesidad fue planteada por el diputado Tucumán gobernado por Javier López, quien Bedoya de Córdoba en octubre de 1825 y había derrocado a Bernabé Aráoz y lo ha- la guerra con el Brasil fue una excelente bía hecho fusilar. López se negó a prestar oportunidad para el tratamiento del proyec- asistencia al gobierno de Buenos Aires en to, bajo el argumento de contar con una la guerra con el Brasil y Aráoz de Lamadrid autoridad ejecutiva nacional. Todo ello, por logró destituirlo y ponerse al frente del cierto, acarreaba paralelamente la necesi- gobierno tucumano. Todo ello provocó el dad de aportar fondos para su manteni- disgusto de los gobernadores Gutiérrez, de miento. Se dispuso entonces la creación de Catamarca, Ibarra de Santiago del Estero y un Banco Nacional, por medio de una ley Quiroga de La Rioja. bastante detallada245 y la contratación de un empréstito. Pero el mayor de los problemas fue el con- flicto armado con el Brasil con motivo de la liberación de la Banda Oriental, el cual se 244 Con motivo de la declaración de guerra, el Congre- prolongaría hasta 1828. Los portugueses so dictó las leyes de defensa del territorio naciónal y habían invadido en 1820 la Banda Oriental de organización de las milicias, ambas sancionadas el 2 convirtiéndola en la llamada Provincia Cis- de enero de 1826. San Martino de Dromi. Documentos. platina. La resistencia oriental se preparó Pp. 2376-2378; Ravignani. Asambleas. T. II, p. 618. 245 Ley del 28 de enero de 1826; San Martino de Dro- desde Buenos Aires con los emigrados, quie- mi. Documentos. Pp. 2378-2388; Ravignani. Asambleas. T. nes en abril de 1825 partieron desde esta II, pp. 546-550.

73 Una semana después de creado el Banco bierno a la aprobación de los mandata- Nacional, se dicta la Ley del Poder Ejecutivo rios locales, por el otro se designaba Pre- Permanente246 que será ejercido por una sidente a Rivadavia, figura harto resistida persona con el título de Presidente de las en el interior del país por sus drásticas Provincias Unidas del Río de la Plata247 y reformas y su estilo europeizante, poco cuya designación queda a cargo del Con- arraigado en las costumbres vernáculas. greso por simple mayoría. Su mandato du- rará el tiempo que fije la Constitución, to- mando como inicio del cómputo del perío- e. Ley de Capitalización de la Ciudad do el día de la toma de posesión. Ese mismo de Buenos Aires día se sanciona la Ley de Ministerios por Entronizado en la primera magistratura, don medio de la cual se crean cinco carteras: Bernardino continuó fiel a su estilo en este Gobierno, Negocios Extranjeros, Guerra, tercer paso por la vida política del país. Por Marina y Hacienda.248 Una vez más el Con- lo pronto eligió un gabinete de personas greso mezclaba su labor constituyente con altamente vinculadas a los cenáculos por- actos legislativos que en este caso tenían, teños. En Relaciones Exteriores fue desig- además, rango constitucional, lo que prueba nado Francisco de la Cruz, en Guerra y Ma- la influencia ejercida por el grupo porteño rina Carlos de Alvear, en Gobierno Julián S. en dicha convención. El gobernador Bustos de Agüero y en Hacienda Salvador M. del desde Córdoba, hace saber su rechazo a la Carril. No contento con ello, irritó a los ley por medio de una nota fechada el 30 de mandatarios provinciales con varias dispo- mayo. siciones salidas de su conspicuo centralis- Al día siguiente el Congreso designa Pre- mo que, por lo demás, estaban en contra sidente a Bernardino Rivadavia por una de la Ley Fundamental dictada un año an- abrumadora mayoría de treinta y cinco tes por ese mismo Congreso. El 15 de fe- votos contra tres,249 lo que prueba la fal- brero se dictó una ley que consolidaba la ta de conexión del Congreso con la reali- deuda pública interna, afectaba a su pago dad política de las provincias y la falta de todas las tierras de la Nación y prohibía su coherencia de sus decisiones. Así, mien- enajenación sin autorización especial. Ade- tras por un lado se intentaba que la Cons- más de nacionalizar las tierras públicas, puso titución obtuviera la aprobación de aqué- bajo su mando todas las fuerzas militares llas y se dictaba para ello una ley que obli- provinciales, lo que provocó la queja del gaba a someter las bases del futuro go- gobernador Las Heras, que fue desoída y por ley del 13 de marzo de 1826 puso a todas las aduanas exteriores bajo la admi- nistración de la Presidencia de la Repúbli- ca.250 No hace falta mencionar el grado de 246 Ley del 6 de febrero de 1826, sancionada por 30 votos a favor y 5 en contra. San Martino de Dromi. presión que todo ello agregaba al caldero Documentos. P. 2388. federal. 247 Esta es la primera vez que en nuestro país el titular del Poder Ejecutivo tiene el título de Presidente. La provincia de Buenos Aires fue una vícti- 248 San Martino de Dromi. Documentos. P. 2390. ma especial de este denodado intento por 249 En contra votaron los diputados López, Mena y Gorriti, quienes propusieron a Carlos de Alvear, Juan Antonio Lavalleja y Juan Antonio Álvarez de Arenales, respectivamente. Ravignani. Asambleas. T. II, p. 632. 250 San Martino de Dromi. Documentos. P. 2394.

74 crear un Estado centralizado antes de la san- gobernador Las Heras fue destituido y la ción de la Constitución. Concomitantemen- legislatura provincial disuelta.261 Rivadavia te con esta legislación que agitaba a los cau- había logrado así, convertirse también en dillos provinciales, Rivadavia envió al Con- gobernador de Buenos Aires.262 Un triun- greso el 9 de febrero de 1826 un proyecto fo breve y costoso. El Congreso había con- de ley por medio del cual se declaraba a sumido mucho tiempo y energías en deba- Buenos Aires Capital de la República Ar- tir una cuestión que bien podía esperar la gentina.251 Además se colocaba todo el te- sanción de la Constitución, que se demo- rritorio de esa provincia bajo la autoridad raba innecesariamente. nacional. El proyecto encendió, como es imaginable, un acalorado debate. Fue de- fendido por el ministro de gobierno Agüe- f. Discusión sobre el sistema de go- ro,252 a quien se sumaron Gallardo253 y bierno. Nuevos conflictos con las Mansilla.254 Lo objetaron en cambio los di- provincias putados Castro,255 Moreno,256 Funes,257 Antes de sancionar la Constitución, el Zavaleta258 y Vidal,259 entre otros. No obs- Congreso se internó en extensos y no tante, la mayoría rivadaviana finalmente se menos acalorados debates centrados, prin- impuso y la Ciudad de Buenos Aires fue cipalmente, en lo que finalmente fue el consagrada Capital de la República el 4 de Artículo 7º según el cual se adoptó el siste- marzo de 1826.260 La provincia de Buenos ma de la “unidad de régimen”. Este tema Aires, jurídicamente, desapareció y, para era el más candente y por ello la Comi- rematar el asunto, Rivadavia emitió un de- sión de Negocios Constitucionales,263 ur- creto por medio del cual ordenó el cese gida por Rivadavia, envió una consulta a de todas las autoridades provinciales. El las provincias sobre el carácter del go-

251 Decía en su comunicación al Congreso que “solo 261 Las Heras no se opuso. Pese a lo agraviante de la por este medio puede establecerse un gobierno regu- situación no enfrentó al gobierno naciónal y se mar- lar que empieze a obrar activamente en la organiza- chó rumbo a Chile. ción del Estado”, Ravignani. Asambleas. T. II, p. 696. 262 Poco después y estando en pleno tratamiento el 252 Véase su extensa exposición en Ravignani. Asambleas. proyecto de Constitución preparado por la comisión T. II, pp. 697-707. de Negocios Constitucionales, Rivadavia envía al Con- 253 Ídem, pp. 718-722. greso un proyecto de ley por medio del cual se inten- 254 Ídem, p. 732. taba dividir a Buenos Aires en dos provincias, la de Pa- 255 Ídem, p. 708. raná, al norte, con capital en San Nicolás y la del Sala- 256 Ídem, pp. 724-728. do, al sur, con capital en Chascomús. Véase Ravignani. 257 Ídem, p. 769. En su opinión el proyecto “[...] corta de Asambleas. T. III, p. 596. La disolución del Congreso im- un solo golpe de mano la cabeza de la Provincia de Bue- pidió que el proyecto pudiera ser aprobado, no obs- nos Aires, dejándola en un estado precario, la despoja de tante lo cual la Comisión de Negocios Constituciona- sus instituciones domésticas en el momento mismo en les se había expedido favorablemente el 4 de diciem- que ellas hacían toda su fuerza y decoro [...]”. bre de 1826. Ravignani. Asambleas. T. III. pp. 1171-1174. 258 Ídem, p. 819. Todo ello prueba que para Rivadavia eran más impor- 259 Según su opinión el proyecto resultaba “alarmante, tantes sus propios proyectos que la sanción misma de e inductivo de grandes trastornos del Estado” Ídem, la Constitución. pp. 716-717. 263 Integrada por José Valentín Gómez, Manuel Antonio 260 Ravignani. Asambleas. T. II, p. 876; San Martino de Dro- de Castro, Francisco Castellanos, Eduardo Pérez Bul- mi. Documentos. Pp. 2392. nes y Santiago Vázquez

75 bierno que debía establecerse, unitario o to, es uno de los defensores más enérgi- federal. Recibidas las respuestas, la Comi- cos del sistema federal. Finalmente el de- sión interpretó a su modo el sentir de bate concluye el día 5 de octubre de 1826, aquéllas y decidió que el mejor sistema con la victoria unitaria por cuarenta y un sería el “representativo, republicano y con- votos contra once.271 solidado en la unidad de régimen” y así lo El resto del articulado no ofrece mayores aconsejó en un extenso documento pre- cuestionamientos y el Congreso avanza sin sentado en la sesión del 14 de julio.264 tropiezos doctrinarios, pero ya en noviem- Luego, sometida la cuestión al Congreso, bre la situación política en las provincias éste lo discutió en las sesiones siguientes es insostenible. Quiroga después de ocu- y el 19 de julio fue aprobado.265 par parte de Tucumán, invade Catamarca Poco después, en la sesión del 1º de sep- y derroca al gobernador Gutiérrez, unita- tiembre, la Comisión puso a disposición rio y amigo de Aráoz de Lamadrid. En res- del Congreso el proyecto de Constitución puesta, Arenales, gobernador de Salta, en- redactado por ella.266 El tratamiento del vía al coronel Bedoya que pone en fuga a proyecto comenzó en la sesión del día 11. Quiroga y reinstala a Lamadrid en Tucu- Luego de aprobarse el proyecto en gene- mán, después de lo cual invade Santiago ral se pasó a discutir en detalle cada artí- del Estero y derroca a su gobernador Iba- culo.267 Fue objeto de tratamiento en pri- rra, pero éste vuelve enseguida al gobier- mer lugar el artículo de la religión del Es- no. Mientras tanto, Bustos, que no partici- tado. Fue aprobado así el Artículo 3º por pa directamente en esa guerra civil, es de medio del cual se sancionó como religión hecho quien coordina y mantiene la opo- oficial a la Católica Apostólica Romana “a sición federal al Congreso y al presidente la que se le prestará la más eficaz y deci- Rivadavia. Su provincia, si bien neutral en dida protección”,268 y otra en relación con todos esos conflictos provinciales, se los motivos de suspensión de la ciudada- apresta militarmente. La Legislatura decla- nía,269 se pasó en la sesión del 26 de sep- ra: “la provincia de Córdoba, empeñada en tiembre270 al tratamiento del controver- sostener su libertad y proteger la oprimi- tido Artículo 7º, único punto que fue ob- da en las demás provincias, ordena al Po- jeto de una verdadera controversia y que der Ejecutivo levante las tropas que crea sería el causante del fracaso de este in- necesarias a este objeto con arreglo al ca- tento. Los debates fueron profundos y al- pítulo del reglamento, y queda autorizado canzaron una jerarquía encomiable para para sus gastos.”272 la historia parlamentaria argentina, donde Una prueba más de la miopía política de Ri- Manuel Dorrego, porteño por nacimien- vadavia y sus seguidores la tenemos al com- probar que mientras los caudillos incendia-

264 Ravignani. Asambleas. T. III, pp. 213-218. 265 Ídem, pp. 251-263. 271 Ídem, pp. 791-960. 266 Ídem, pp. 496-509. 272 Peña, Roberto. “Contribución a la historia del dere- 267 Ídem, p. 590. cho patrio en Córdoba: labor institucional del gober- 268 Ídem, pp. 590-613. nador Bustos (1820-1829)” Revista del Instituto de His- 269 Ídem, pp. 613-781. toria del Derecho. Nro. 11, p.123, citado por Romero 270 Ídem, pp. 762-791. Carranza y otros. Historia. T. II, p. 739.

76 ban políticamente el mapa del país, el Con- confiasteis a su celo y patriotismo”. Ya greso debatía el armado de la relación ju- veremos enseguida cómo fueron recibi- rídica entre la Nación y las provincias a dos en las provincias los representantes partir del Artículo 7º, que finalmente se del Congreso portadores de la nueva concreta en los Artículos 131 y 132, los constitución. El 21 de diciembre fueron cuales como veremos en el punto siguien- tratadas cuestiones de detalle y finalmen- te resultaban inaceptables para las provin- te en la sesión del 24 de diciembre se dio cias que se convertían en meras divisio- por aprobada formalmente la Constitu- nes administrativas bajo el mando directo ción.277 La tercera asamblea argentina re- del Presidente. Asimismo en la sesión del unida desde la Revolución, había dado un 24 de noviembre se puso en discusión un fruto tan prolijo en lo académico como proyecto de ley orgánica para el régimen débil en lo político. Probablemente nin- y administración interior de las provin- guna Constitución anterior y posterior cias273 que fue aprobado al día siguiente.274 ha logrado la perfección técnica de ésta, Una vez más, antes de sancionar la Cons- que sólo regirá formalmente hasta el mes titución, el Congreso cometía el error de de julio del año siguiente. Casi tres años aprobar leyes hostiles a las provincias. Tam- de congreso constituyente habían dado bién se aprobó con gran rapidez una Ley un fruto que estaba muerto antes de del Olvido, propuesta por Gorriti y otra nacer. que elevaba a Tarija a la condición de Pro- vincia.275 g. Descripción de la Constitución de En la sesión del 1º de diciembre se leyó el 1826 texto de la Constitución como paso pre- vio a su sanción. Esta tuvo lugar finalmen- Mirando descriptivamente el texto de la te el día 5 de diciembre, sesión en la cual Constitución de 1826, puede verse que fue aprobado también el Manifiesto que está dividido en diez secciones y tiene un acompañaría el texto de la Constitución total de 191 artículos. La sección primera y que sería remitido a las provincias.276 se refiere a la Nación y su culto. La Na- Dando prueba una vez más de su falta de ción es para siempre libre e independien- noción sobre la crítica situación con aqué- te, no será jamás patrimonio de una per- llas, el Manifiesto comienza diciendo: “Pue- sona o familia. La religión es la católica blos gloriosos dignos de la mejor suerte, apostólica romana, a la que debe prestar- escuchad por primera vez la ingenua y se “la más eficaz y decidida protección, afectuosa voz de vuestros representantes. debiéndola respetar sus habitantes, sea Os dirigen la palabra para anunciaros que cuales fueren sus opiniones religiosas” han concluido su misión y para poneros (Artículo 3º). La sección segunda se refe- en vuestras manos el Sagrado encargo que ría a la ciudadanía. Por el Artículo 4º se establecía quiénes eran ciudadanos, por el

273 Ídem, p. 1160. 274 Ídem, p. 1163-1164. 275 Ídem, p. 1168. 277 Su texto aparece en Ravignani. Asambleas. T. III, 276 Ídem, p. 1175. pp. 1192-1202.

77 5º los casos de pérdida de la ciudadanía y ñado por un ciudadano con el título de por el 6º la suspensión de tales derechos.278 Presidente, con las mismas calidades exi- gidas para ser senador. Duraba cinco años En la sección tercera aparece el contro- vertido Artículo 7º sobre la forma de go- bierno. Luego de ello, la sección cuarta está dedicada al Poder Legislativo encomenda- servicio a sueldo (Artículos 10-16). El Senado esta- do a un Congreso compuesto por dos cá- ba compuesto por miembros nombrados por la ca- maras: la de representantes y la de sena- pital y las provincias, mediante el sistema de elec- dores y presenta un articulado que se re- ciones que se determina; deberían tener treinta y seis años cumplidos, nueve de ciudadanía, capital o producirá luego en 1853 con gran fideli- renta; habrían de durar nueve años en el cargo, re- 279 dad. El Poder Ejecutivo está desempe- novándose por tercios cada trieno. Correspondía al Senado juzgar en juicio público a los acusados por la sala de representantes. Ambas cámaras tenían atri- buciones comunes; estableciéndose en el Artículo 39 la interpelación parlamentaria. El Congreso po- seía atribuciones específicas: declarar la guerra, oí- 278 Eran ciudadanos: a) todos los hombres libres na- dos los motivos que expusiera el Ejecutivo; reco- cidos en su territorio y los hijos de éstos, donde- mendar, cuando lo estimare conveniente, la negocia- quiera que nazcan; b) los extranjeros que hubieron ción de la paz; fijar la fuerza de la línea de mar y combatido o combatieren en los ejércitos de mar o tierra en tiempo de paz y guerra; mandar construir tierra de la República; c) los extranjeros estableci- o equipar las escuadras nacionales; fijar cada año los dos en el país desde antes de 1816 (año de la inde- gastos generales, con presencia de los presupuestos pendencia) y que se inscribieran en el registro cívi- que presente el gobierno; recibir anualmente la cuen- co; d) los que se establecieran después de dicha fe- ta de inversión de los fondos públicos, examinarla y cha, que obtengan carta de ciudadanía. Los derechos aprobarla; establecer derechos de importación y ex- de la ciudadanía se perdían: a) por la aceptación de portación e imponer por un tiempo no mayor de empleos, distinciones o títulos de otras naciones sin dos años, contribuciones proporcionalmente igua- la autorización del Congreso; b) por sentencia que les en todo el territorio del estado; fijar la ley, valor, impusiera pena infamante, mientras no se obtuviera peso y tipo de moneda; establecer tribunales infe- rehabilitación conforme a la ley. Y se suspenden: a) riores y reglar las formas de los juicios; acordar am- por haber cumplido veinte años de edad, no siendo nistías; crear y suprimir empleos de toda clase; re- casado; b) por no saber leer ni escribir (condición glar el comercio interior y exterior: habilitar puer- que no tendría efecto hasta quince años de la fecha tos, elevar poblaciones al rango de villas, ciudades o de la aceptación de la Constitución); c) por la natu- provincias en los casos y calidades que la ley fije; ralización en otro país; d) por el estado de deudor formar planes generales de educación pública; acor- fallido declarado como tal ; e) por ser deudor del dar premios por servicios a la Nación; acordar a tesoro público legalmente ejecutado sin cumplir la autores e interventores privilegiados por tiempo de- deuda; f) por ser criado a sueldo, peón jornalero, terminado; hacer las demás ordenanzas y leyes de simple soldado de línea, notoriamente vago o legal- cualquier naturaleza que reclame el bien del Estado mente procesado en causa criminal, en que pueda y modificar, interpretar y abrogar las existentes (Ar- resultar pena corporal o infamante. Esta última dis- tículos 40-58). El capítulo V se refería a la formación posición era de carácter irritantemente aristocráti- y sanción de las leyes, que podían tener principio en co y había sido muy combatida por Dorrego quien cualquiera de las cámaras. Aprobado un proyecto por se opuso a que se insertara: “doméstico asalariado”. una cámara pasaba a la otra para que, discutido, lo Ravignani. Asambleas. T. III, p. 735 y sigs. aprobara o desechara, no pudiendo repetirse el re- 279 La primera se componía de diputados elegidos chazado en las sesiones del mismo año. Aprobados directamente a simple pluralidad de sufragios en pro- los ambas cámaras los proyectos pasarían al Ejecuti- porción de uno por quince mil habitantes o fracción vo que, si los suscribía o no los devolvía objetados que iguale el número de ocho mil. Para ser repre- en el término de diez días tendría, fuerza de ley; caso sentante el candidato debía tener siete años de ciu- contrario, al devolverlos, deberían ser reconsidera- dadanía antes de su nombramiento, veinticinco años dos por ambas Cámaras, con dos tercios de sufra- cumplidos, un capital, profesión, arte u oficio útil y gios de cada una mediante votaciones nominales (Ar- no debía ser dependiente del Poder Ejecutivo por tículos 59-67).

78 en el cargo y no podía ser reelecto en for- Una Alta Corte de Justicia, está a la cabe- ma inmediata. No se prevé la figura del za del Poder Judicial. La componen nueve vicepresidente, de modo que el presiden- jueces y dos fiscales,281 designados por el te del Senado lo reemplaza en caso de presidente con acuerdo del Senado, quie- ausencia y enfermedad o mientras se pro- nes deben ser letrados con ocho años de cede a una nueva elección por fallecimien- ejercicio y cuarenta de edad, con las de- to. Es elegido en forma indirecta median- más condiciones exigidas para ser sena- te junta de electores que votarían reuni- dor. Se le asigna una competencia origina- dos, requiriéndose dos terceras partes de ria (Artículo 118), inspirada indudablemen- votos; en caso de no obtenerse la mayo- te en el Artículo III, sección 2º de la Cons- ría se formaría una terna, reduciéndose titución de los Estados Unidos, pero con luego a dos y finalmente decidiría el pre- una amplitud mucho mayor de asuntos que sidente del Senado en caso de empate (Ar- los previstos en el texto norteamericano. tículos 73-80).280 Tiene también competencia apelada y, en una muestra más del regalismo rivadavia- no, se le otorgan facultades para exami- nar las bulas y los breves pontificios, por lo que puede dictaminar sobre su admi- 280 También aquí encontramos disposiciones que se sión o retención (Artículo 125). En esta repetirán con gran similitud en 1853, todo lo cual prue- misma línea se le atribuye facultad tam- ba que el único problema que ofrecía la Constitución rivadaviana era el del sistema unitario. El presidente bién para conocer en los recursos de fuer- era jefe de la administración general de la República, za de los tribunales eclesiásticos superio- publicaba y hacía ejecutar las leyes y decretos emana- res de la Capital (Artículo 126). dos del Congreso, convocaba a sesiones ordinarias y extraordinarias del Congreso, abría sus sesiones; era La sección séptima que también fue objeto jefe supremo de las fuerzas de mar y tierra, exclusiva- de controversia, trata de la administración mente encargado de su dirección en paz o en guerra, pero no podía mandar en persona el ejército, sin es- provincial. El gobernador de provincia es un pecial permiso del Congreso (Artículos 81-86). Ade- funcionario administrativo colocado bajo la más determinaba la guerra y la paz, firmaba los trata- inmediata dependencia del presidente, quien dos de paz, amistad, alianza y comercio, nombraba y lo designa a propuesta en terna del consejo destituía a los ministros secretarios de Estado y del despacho en general, designaba embajadores, minis- de administración para ejercer un mandato tros enviados y cónsules con aprobación del Senado, de tres años. No se prevé la existencia de expedía cartas de ciudadanía, ejercía el patronato. En legislaturas, sino de unos consejos de admi- todos los objetos y ramos de hacienda y policía, tenía nistración.282 Se prevén asimismo, tribuna- a su cargo la suprema inspección conforme con las leyes que los rigen; proveía los empleos, requería las informaciones que creyera convenientes a los funcio- narios y empleados; podía indultar penas capitales, proveer a consultas en casos de sentencias pronun- ciados por los juzgados militares (Artículos 81-100). Las resoluciones del presidente debían ser autoriza- 281 Igual que en el texto original de 1853. das por cinco ministros secretarios (de Gobierno, 282 Los Consejos de Administración, de filiación cen- Negocios Extranjeros, Guerra, Marina y Hacienda). Los tralista francesa, están pensados aquí como organis- ministros formaban el consejo de gobierno que asis- mos administrativos de fomento, política interior, tiría con sus dictámenes al presidente, aunque éste educación primaria, obras públicas y establecimien- no estaba obligado a sujetarse a ellos. Los ministros tos costeados y mantenidos por sus propias rentas no podían tomar determinaciones por sí solos y eran (Artículos 140 y 143). Se componen de un número responsables por su firma en concurrencia con el de personas no mayor de quince ni menor de siete, presidente (Artículos 102-109). elegidos popularmente por nombramiento directo

79 les superiores de justicia en las capitales de h. Final abrupto de la aventura rivada- provincia los cuales son creados por el Con- viana greso. Se componen de jueces letrados Fruto de la obstinación, la vanidad y la ce- nombrados por el presidente de la Repúbli- guera política de su inspirador, la Constitu- ca a propuesta en terna de la Alta Corte de ción de 1826 había abortado ya antes de Justicia (Artículos 137-139). Como puede nacer. La guerra civil con las provincias se verse, la provincia como entidad no tiene desataba otra vez y el gobierno nacional, con existencia propia y ninguna autonomía, los Rivadavia a la cabeza cayó a plomo en no- municipios también resultan inexistentes. El viembre de 1827 cuando se conoció la capi- consejo de administración es sólo un orga- tulación con el Brasil, último golpe de ola nismo de vecinos que se limitan a cuidar los que encalló una nave que había intentado intereses locales, aunque siempre depen- avanzar más rápido de lo que podía. No en diendo del Congreso nacional y del Presi- vano es clásica la expresión de Vicente Fidel dente.283 López: la aventura presidencial de Rivadavia. No me voy a detener demasiado en las dra- máticas como, por momentos, pintorescas peripecias que sufrieron los enviados del Congreso ante los gobernadores provincia- y funcionan en las capitales de provincia (Artículos les para que conocieran y aprobaran la 141 y 142). Acuerdan anualmente el presupuesto de gastos el cual es presentado al Presidente de la Re- Constitución. Son bien conocidas y los his- pública para su aprobación. Las rentas provinciales toriadores las han relatado en abundancia. provienen de impuestos directos, pues las contribu- Basta recordar solamente, como muestra de ciones indirectas pertenecen al tesoro nacional. Si la situación, el más notorio de estos acon- quedaba algún sobrante, una vez cubiertos los gas- tos de la provincia, el presupuesto se invierte en la tecimientos. Fue protagonizado por Manuel misma provincia, en obras que acordara el Consejo de Tezanos Pinto ante el gobernador Ibarra con consentimiento de la Legislatura nacional, la que de Santiago del Estero, quien con el eviden- aprueba o rechaza las cuentas que se le presentaran. te propósito de humillarlo, lo recibió semi- Los consejeros duran dos años en sus funciones y son reemplazados por mitades anualmente. No re- desnudo y le dio veinticuatro horas para ciben compensación por sus servicios y responden abandonar la provincia.284 Junto con Santia- por sus opiniones ante la censura pública (Artículos go del Estero, todas las provincias argenti- 150-157). nas rechazaron unánimemente la Constitu- 283 En la sección octava, bajo el título de “disposicio- nes generales” (Artículos 159-181), aparecen las de- ción, produciéndose aquí una nueva para- claraciones, derechos y garantías repitiéndose aquí doja de la historia argentina. La única que casi en forma textual la Constitución de 1819. Así acepta la Constitución es la Banda Orien- por ejemplo los habitantes del Estado están prote- gidos en el goce de su vida, reputación, libertad, se- guridad y propiedad; los hombres son iguales ante la ley y se reconoce la libertad de publicar las ideas sin censura previa. También se anticipa el texto del Artí- 284 Tezanos Pinto informa en una nota dirigida al Con- culo 19 de la Constitución de 1853, en los Artículos greso los resultados de su misión. Dice allí que fue re- 162 y 163. Asimismo se declaran las normas genera- cibido por el Gobernador Ibarra “[...] en una traje se- les referentes a lo que se denomina el debido pro- misalvaje, tomado de propósito para poner en ridículo ceso y las garantías de defensa en juicio. Se declara al soberano Congreso”. Luego dice que fue informado la inviolabilidad de la propiedad, la que debe ser in- de que debía abandonar la provincia en un término de demnizada en caso de expropiación y se prohíbe la veinticuatro horas “[...] lo que verificó antes que él confiscación de bienes, y se consagra el derecho a fuese cumplido”. Véase esta nota en Ravignani, Asam- peticionar a las autoridades. bleas. T. III, pp. 1389-1393.

80 tal,285 la tierra de Artigas, quien menos de terrestres y navales de febrero de ese año,286 dos meses después era abandonada a su la misión diplomática encabezada por Ma- suerte por el gobierno nacional, el cual ca- nuel J. García presionada por Gran Breta- pitulaba ante el Brasil y reconocía su domi- ña287 capituló, en mayo de 1827, reconocien- nio en esa –hasta entonces– provincia ar- do el dominio brasileño sobre la Banda gentina. Oriental, convertida ahora en Provincia Cis- No caben dudas entonces, de que la termi- plantina. Con tal motivo, García ha mereci- 288 nación de la guerra con el Brasil fue el re- do la repulsa constante de la historia. sultado lamentable del enfrentamiento de Rivadavia con los caudillos provinciales. El A pesar de que el Congreso el 25 de junio Ejército argentino había apoyado la gesta de rechaza lo acordado por García, la suerte de Lavalleja y los llamados Treinta y Tres Orien- Rivadavia estaba echada. Su renuncia se pro- tales enviando tropas y refuerzos a la Banda duce tres días después y el día 30 es acepta- Oriental en su lucha contra el invasor por- da por el Congreso por cuarenta y ocho vo- tugués. Sin embargo esas tropas y refuerzos tos contra dos.289 El 5 de julio el Congreso comenzaron a mermar luego de que las pro- elige Presidente a Vicente López y Planes y el vincias, en pugna con el gobierno de Rivada- 12 de agosto la provincia de Buenos Aires via, antepusieran sus intereses a los del país resurge institucionalmente al nombrarse su y privaran de apoyo a las tropas nacionales Junta de Representantes quien elige gober- en la contienda. La situación se hizo crítica nador a Manuel Dorrego. Pocos días después a comienzos de 1827 y pese a las victorias López renuncia y el Congreso se disuelve.

286 Me refiero a los combates de Ituzaingó y de Juncal, ocurridos respectivamente, el 27 y 8 de ese mes. 287 El gobierno inglés, siempre preocupado por su acti- vidad comercial, veía con desagrado la contienda y for- zó su terminación por intermedio de Lord Ponsonby a quien se había comisionado ante Buenos Aires para lograr la paz sobre la base del reconocimiento de la independencia de la Banda Oriental. Sin embargo, el emperador brasileño Pedro I, poseedor de un ejército más poderoso, no estaba dispuesto a reconocer tal in- dependencia, lo que finalmente produjo la capitulación argentina. 288 El tratado no sólo reconocía el dominio portugués en la Banda Oriental, sino que también obligaba al go- bierno argentino a indemnizar al Brasil por las pérdi- das sufridas en los combates de Ituzaingó y de Juncal. 289 Luego de su renuncia Rivadavia se dirigió a París. En 1834 intentó volver a su patria, pero le fue vedado el desembarco. Se estableció entonces en el Uruguay hasta 285 En la nota de aceptación se comunica al Congreso que en 1836 Oribe, por instigación de Rosas, lo deste- que la Constitución es “capaz de hacer la felicidad del rró a Santa Catalina (Brasil). Pasó luego a Cádiz, donde pueblo argentino, y encaminarlo hacia el elevado desti- llevó hasta su muerte una existencia al parecer mo- no a que se ha hecho acreedor por sus esfuerzos y desta. Murió solo y olvidado en 1845 y sus restos fue- sacrificios”. Ravignani. Asambleas. T. III, p. 1366. ron repatriados en 1857.

81 82 XI. CONCLUSIONES SOBRE ESTE PERÍODO

Para comprender a un país no hay nada tina que se ha trasladado recurrentemen- mejor que leer su historia y ciertamente el te a todas las épocas de nuestra historia. recorrido por los primeros años de nues- El segundo es la demora en que incurrie- tra vida independiente nos pone ante la cru- ron las tres primeras convenciones cons- da evidencia de que muchos de los males tituyentes en dar cumplimiento a su co- que sufrimos en la actualidad no son una metido, fruto de la típica incapacidad de creación contemporánea sino que ya tenían las asambleas legislativas argentinas de arraigo en los albores de nuestra vida in- poner medios y tiempos proporcionales dependiente. Sin ir más lejos, el problema a la consecución de los fines que se han de la deuda externa, que tanto aqueja nues- propuesto. El tercero, finalmente, es la más tra economía agobiada por constantes emi- absoluta desorientación política que por siones de bonos que se superponen unas a momentos se apodera de nuestros gober- otras sin solución de continuidad, nació en nantes. este período cuando en 1824 se tomó el empréstito de la compañía Baring, el cual Se ha escrito tanto sobre el primer fenó- fue pagado finalmente más de ochenta años meno que casi sería innecesario abordarlo después, bajo la presidencia de Figueroa Al- aquí, salvo para recordar que todos los fra- corta. Finalmente se abonó cinco veces su casos existentes han servido para demos- capital inicial. trar que ninguno de los dos bandos tenía ni tiene razón. Los caudillos del interior no Con el objeto de hacer una síntesis, veo estaban preparados para la vida indepen- en estos primeros diecisiete años, tres sín- diente y se hallaban más preocupados por tomas del fracaso. El primero y más iden- la conservación de sus propios feudos que tificable es la división entre Buenos Aires por la institución del país. Uno solo de ellos, y el resto del país, el cual por lo demás, Urquiza, lograría el milagro de la síntesis. nos acompañará para siempre y por ende Pero sería necesario un cuarto de siglo bajo debemos considerarlo parte inescindible el gobierno autoritario de Rosas para con- de nuestra realidad El enfrentamiento en- seguirlo. Del lado porteño, a su vez, exis- tre Moreno y Saavedra evidentemente no tieron estrellas talentosas, pero fugaces. fue casual. Fue, por el contrario, el antici- Deslumbrados con los modelos extranje- po de una división ontológica de la Argen- ros quisieron imponerlos a costa de la rea-

83 lidad y fracasaron. La historia ha probado más expeditiva fue la Convención de Fila- con creces que Rivadavia se adelantó a to- delfia en 1787. Se reunieron para dictar una dos y en todo. La sanción de la ley de fede- Constitución, se abocaron específicamen- ralización de Buenos Aires vendría final- te a esa tarea, no perdieron el objetivo, ni mente en 1880, el gobierno federal bajo la se distrajeron en el camino y en menos de Constitución de 1853 tendría el monopo- cinco meses habían concluido su tarea. En lio de las fuerzas armadas y del sistema contraste, las convenciones argentinas, lue- aduanero. Incluso nuestro país se llamaría go de un fogoso impulso inicial, comienzan finalmente República Argentina, como la lla- a languidecer y luego de pasado el primer mó por primera vez la Constitución de año quedan dominadas por la facción por- 1826. El drama de Rivadavia y el del país, es teña que finalmente logra una victoria pí- que todo lo quiso hacer con un notable rrica y efímera. Esta es, precisamente, la desprecio por el tiempo de gestación y segunda de las características que identifi- maduración que los procesos políticos irre- ca e iguala la Asamblea del año 1813 al mediablemente requieren. También es cier- Congreso de Tucumán y al Congreso riva- to –y esto ha sido señalado por Bonifacio daviano de 1824-1826. Todas comenzaron del Carril290 – que las diferencias entre uni- con un impecable espíritu federal y termi- tarios y federales no eran de fondo en cuan- naron bajo el dominio de los diputados de to al texto constitucional. La prueba está Buenos Aires. Las dos segundas, a su vez, en que los principales lineamientos de las producen sendos documentos técnica y constituciones de 1819 y 1826 sirvieron formalmente impecables, pero vacíos de luego de base para la de 1853, donde se realidad política. Reparemos además, en que encuentran volcados muchos artículos de al cabo de cada asamblea constituyente, las dos primeras. La única diferencia esen- sucede una crisis institucional, que en los cial era el régimen federal. Buenos Aires casos de los congresos de 1816 y 1824 quería un sistema unitario y las provincias produjo la disolución de las autoridades no estaban dispuestas a ceder su autono- nacionales. mía a los porteños. No es menos dramática la historia de las Tampoco es menor la pérdida del rumbo tres primeras asambleas constituyentes ar- que por momentos aparece en nuestros gentinas, donde se advierten a su vez dos primeros gobiernos, a quienes vemos tan- características manifiestas. Por un lado la to dispuestos a instalar un gobierno mo- pérdida del objetivo central de la convoca- nárquico, como a sumirse nuevamente en toria. Habían sido reunidas con el propósi- colonia sin importar si la metrópoli resul- to de dictar una Constitución y sin embar- taba ser española, inglesa o francesa. Un go se dedicaron al mismo tiempo a gober- año después de la Revolución, aparece el nar, envolviéndose así en los problemas co- primer proyecto de constitución monár- tidianos del día a día en la administración quica. A este primer intento se sucede el de un país. Véase qué diferente y cuánto que tuvo lugar sobre el final de la Asam- blea del año 1813, más exactamente en 1815, cuando el gobierno argentino esta- ba dispuesto a someterse al infante Fran- cisco de Paula, hijo del ex rey Carlos IV. 290 Del Carril, Bonifacio. Buenos Aires frente al País. Bue- La tercera oleada aparece en el seno del nos Aires, Ed. Huarpes S.A., 1946. 2ª edición, p. 166. Congreso de Tucumán cuando Manuel

84 Belgrano propuso la formación de una una fundada compatibilidad política con monarquía incaica. No olvidemos asimis- ellos. Venimos de diferentes orígenes, ha- mo que tres años más tarde, en 1819, ese blamos distintos idiomas, hemos sido cria- mismo Congreso llegó a considerar la dos en diferentes escuelas sociales y mo- posibilidad de someterse al dominio del rales, hemos sido gobernados por diferen- rey francés Luis XVIII. Por último, este de- tes leyes, profesamos religiones radical- rrotero por las cortes europeas tuvo un mente distintas. Si abrazáramos su causa último capítulo cuando, en 1820, el Direc- nos pedirían prestado nuestro dinero, da- tor Supremo Carlos de Alvear propuso a rían comisiones a nuestros corsarios y Lord Strangford –embajador británico en posiblemente otorgarían algunos privile- el Brasil– que nos gobernara el rey Jorge gios a nuestro comercio, si el temor a los IV de Inglaterra. Todo ello da una idea de ingleses no se los impide. Pero no actua- la total pérdida de norte político en que rían con nuestro espíritu, no seguirían había caído la Revolución a menos de cin- nuestro consejo, no podrían imitar nues- co años de producida. Entretanto las úni- tro ejemplo. No todos los tratados que cas constituciones que duraban no eran pudiésemos hacer, ni todos los comisio- precisamente las que sancionaban las nados que pudiéramos enviar, ni el dinero asambleas constituyentes sino las que pro- que pudiéramos prestarles, transformarían cedían de cuerpos mucho menos repre- a sus Pueyrredones y a sus Artigas en Ada- sentativos. Tal el caso, por ejemplo, del ms o Franklins, o a sus Bolívares en Was- Estatuto Provisorio de 1815 sancionado hingtons.”292 por la Junta de Observación, un cuerpo En síntesis, la historia constitucional argen- creado de hecho por el Cabildo, órgano tina de estos primeros diecisiete años pre- destinado al gobierno municipal. No en vano hacia 1820 los Estados Uni- dos despreciaban ya las ex colonias espa- ñolas y tenían para con ellas expresiones que pueden resultarnos irritantes, pero que al mismo tiempo deben ser motivo 292 “We have no concern with South America: we have de reflexión ya que hoy las seguimos es- no sympathy, we can have no well founded political 291 cuchando. En 1821 un artículo publica- sympathy with them. We are sprung from different do en The North American Review decía: “No stocks, we speak different languages, we have been tenemos interés en América del Sur. Ca- brought up in different social and moral schools, we have been governed by different codes of law, we pro- recemos de afinidad, no podemos tener fess radically different forms of religion. Should we espouse their cause, they would borrow our money and grant commissions to our privateers, and possi- bly extend some privileges to our trade, if the fear of the English, which bringeth a snare, did not prevent this. But they would not act, in our spirit, they would 291 Recordemos cuando en 2002 Paul O´Neill, Se- not follow our advice, they could not imitate our cretario del Tesoro de los Estados Unidos, sin pre- example. Not all the treaties we could make, nor the ocuparse mucho por la diplomacia decía a The Eco- commissioners we could send out, nor the money nomist que los argentinos “Han entrado y salido de they could lend them, would transform their Puey- crisis desde hace setenta años. No tienen una sola rredons and their Artigases, into Adamses or Franklins industria de exportación que valga la pena mencio- or their Bolivars into Washingtons”. The North Ameri- nar. Y parece que les gusta. Nadie los obligó a ser lo can Review, Art. XXIII, vol. XII, p. 433, Oliver Everett que son”. Publisher, Boston, 1821.

85 senta un país capaz de conocer rápidamen- si los miramos desde el punto de vista de te los nuevos modelos de entonces, la cu- los hechos. La sociedad colonial en 1810 no riosidad por investigarlos y la comprensión estaba preparada todavía para reunirse bajo de la necesidad de incorporarlos pero, al una Constitución y darse un gobierno esta- mismo tiempo, la más absoluta incapacidad ble. El virreinato consolidado bajo la autori- de encontrar los medios para llevar todo dad española, debía disgregarse primero para ello a la práctica. Ya la Revolución de Mayo que sus piezas se juntaran más tarde en una es un ejemplo típico de ello. Debe haber en nación, luego de haber perdido algunas de la historia pocas revoluciones tan pacíficas ellas en el camino.294 Los hombres de Bue- y tan jurídicas como la del Cabildo Abierto nos Aires querrán imponer su dominio a del 22 de mayo, donde un grupo de perso- todas las provincias y éstas se resistirán, es- nas se reúnen a debatir –como ciudadanos pecialmente las del Litoral, las que armarán griegos en el Ágora– los fundamentos jurí- una lucha civil con Buenos Aires. Al mismo dicos del recambio institucional. Tampoco tiempo se formarán repúblicas independien- es frecuente encontrar un gobernante como tes ocasionales, como fueron las de Tucu- Cisneros, que deja el poder tan pacíficamen- mán, Córdoba y Entre Ríos. Pero en medio te. Sin embargo este comienzo luminoso, de todo ello está el saldo positivo: la Revo- este triunfo inicial, se ve pronto malogrado lución de Mayo y su enorme caudal intelec- no tanto por la reacción de la metrópoli, tual, volcado y ampliado luego en los tres pues España invadida por las tropas de Na- congresos constituyentes que siguieron, fue poleón carecía de medios para reconquis- el germen de todo el desarrollo constitu- tar sus colonias, sino por las propias luchas cional posterior. internas, donde incluso el enfrentamiento Estos primeros diecisiete años son enton- entre las provincias del Litoral –acicateadas ces un buen espejo para mirar nuestra rea- por Artigas– y Buenos Aires fue un factor lidad actual y comprender que muchos de negativo en la consolidación de la guerra de los males que sufrimos no son coyunturales la Independencia.293 y que por ende no pueden ser abordados Podría decirse entonces que estos prime- por soluciones de tal especie. ros diecisiete años constituyen un fracaso

293 La Guerra de la Independencia finaliza en 1824 con dos victorias, la de Junín el 6 de agosto y la de Ayacu- cho, el 9 de diciembre de ese mismo año. Para enton- ces, sin embargo, el mando del ejército libertador ha- bía pasado de San Martín a Bolívar, luego de la entre- vista de Guayaquil y de éste último a Antonio José de 294 El Alto Perú, la Banda Oriental, y el Paraguay se con- Sucre. vertirán rápidamente en naciones independientes.

86