POLITICA DE UNIDAD Nte. 156 - 13 de Julio de 1940 - 60 cénts. S E G U N D A EPOCA — AÑO IV

REDAC. Y ADM.: RONDA SAN PEDRO. 7. - TEL. 11482 AVISOS Y SUSCRIPCIONES: VERGARA, 3. - TEL. 22890

Por EUGENIO NADAL

K9ARR1D0S los mástiles por la ofensiva más ful- minante de la historia, arría sus maltrecha» banderas la Revolución Francesa en su propia Pa• tria. La voz digna del anciano Mariscal Pétain de• nunciando las causas de la tribuljción presente fue• ron un completo examen de conciencia de una nación que había olvidado hacía largo tiempo tan cristiano y necesario ejercicio. Encastillada tras parapetos de externa legalidad, habíase negado reíteradacrente Francia al examen de ÜU conducta y de la situz Jfn de Europa en los últimos años. Endurecida en rígidos formulismos democráticos, había sido incapaz de sor• ber el hálito juvenil de la Europa naciente. Ignoró U renovación que suponía el fascismo, cerróse a toda revisión de las injustas fronteras creadas en Versi- lles. Y trataba d« justificar su actitud con una fari saica ñdelidad a la letra, que mata — y dígalo, :.i no, ella misma, véticida y torpedeada por sus pru- pios aliados—. Fué el suyo egoísmo suicida por cie• go y enervante, por apegado a formas de vida y de pensamiento anquilosadas, inútiles, viejas. Francia, la F rancia democrática, radical-socialista, anticlerical, burguesa y sedentaria, que perdía progresivamente población y vrvia en el culto a fórmulas hueras de vida, daba la impresión de ser un país detenido en determinadas formas, ya incapaz de superarlas, y destinada a una lenta consunción por agolamicnfo de su vitalidad. La gran conmoción actual, replanteando todos los problemas a la luz de la verdad más dura, ha quebrado los polvorientos moldes y ha ímpuesli una ineludible revisión de valores. De tal modo que, por primera vez desde tiempo inmemorial, el mur- do. atónito, ha podido escuchar la voz contrita del primero de los franceses reconociendo los graves errores y fallas de su Patria. Extraordinario acon• tecimiento que nos da la medida de una catástrofe capaz de hendir el espeso muro del insoportable or• gullo francés. A estas horas Francia ha advertido el error de su fidelidad a los carcomidos principios liberales, y quizá comience a sospechar que, si quiere vivir, debe asimilar el empuje salvador de las ju• ventudes europeas. Quizá comience a comprender que no es ella la medida de todas las cosas. Y esta crisis espiritual, esta hora de duda y quebranto hará posible su rejuvenecimiento. Que para renovarse es preciso cierto grado de humildad. De este modo, la primera consecuencia de la victoria, alemana habrá sido la reincorporación de Francia a la normal evo• lución de los pueblos europeos.

Y, en efecto, insinúase ya la triza de posible» re• formas sociales y políticas decisivas, pero, sobre todo, de actividades más ¿.obles ante la vida. Un sentido de responsabilidad más hondo; un culto a los valores morales, una decisión de servir y de vivir cara a las realidades espirituales básicas. ¿Conseguirá, por ejemplo, la Francia que apenas se Los partes del Alio Mando del Ejército alemán insisten sobre la actuación de sus submarinos. La superioridad de esboza detener la disminución de sus habitantes? Se• efectivos de la floto inglesa ha sido contrarrestada gracias al arrojo de estos marinos alemanes. Ellos cuidan d« ría el síntoma definitivo de su resurgir. Mientras tan• afirmar que la supremacía marítima de Inglaterra es inferior a la que suponen las notas del Almirantazgo inglés to, de la acción de Pétain y Laval cabe sospechar una liquidación de la Tercera República y la irrevocable clausura del período histórico abierto en la reunión de los Estados Generales.

« « « U lis piolaai literlorei Los principios revolucionarios que los granaderos LOS DOMINIOS DE imperiales condujeron por toda Europa en la boca de sus fusiles, se han hundido a la fuerza de las Rita de armas de una revolución de sentido opuesto. La vieja IMPERIO BRITANIC Europa ha muerto cuando la juventud ha penetrado en la cuna y último baluarte de la democracia, l'n Acosía, hombre extraordinario — Hitler — ha liquidado en el fet c«« este titule el comentarte áe naestn rata continente la era que inició otro hombre genial: Na• poleón. Dos revoluciones, dos ejércitos, dos caudillos. JAIME RUIZ MANEN española Lo que nació en París en 1789 ha muerto con la entrada de los alemanes en París en 1940. También et estudio de A /-» r**»!* Inglaterra ha sido el catalizador de las dos revo• Reportaje de luciones. Su temor al poder de los países que las MIGUEL TORMO bailtiagO ÜC CUD engendraron derramó los ejércitos de Francia y Ale• sobre la ^esta de la escuadra española al mando del aln Federico de Madrid mania sobre el continente. Y con ellos, lo» principios raote Cerrera, durante ia guerra contra los Estados Unidos que defendían. Siflut en pió. 7 DESTINO EL MUNDO Y LA

Un recuerdo a la retroceder al Islam, que consti• sucesores de la doble monarquía tuía una unidad económica per• el odio a Austria y a Hungría, la Pequeña Entente fecta y que era una garantía de que más enérgicamente se opuso paz en una inmensa región de los La «Gran Rumania" ha pasado a la restauración de los Habsbur- Balcanes. Todo fué inútil. La con• a la historia. Después de haber go, tanto en Budapest como en signa era formal: Austria y Hun• cedido a los Soviets la Besarabia Viena. Pero como es fatal que en gría (debían separarse y quedar y la Bucovma del Norte, países de el Danubio debe existir una po• reducidos a dos países miserables. mayoría rumana, llega para este tencia fuerte, Alemania, cansada Una persona de la intimidad de país la hota de rendir cuentas a de aquel caos y de aquella agita• Clemenceau contaba a un amigo Hungría y a Bulgaria. Si las rei• ción, que también iba dirigida del cronista que el -Tigre» tenía vindicaciones rusas eran injustas, contra ella, anexionó un día Aus• un odio feroz a Austria y a Hun• no lo son, aunque se trate de re• tria y otro día el territorio checo gría y que no disimulaba que esas PROEZAS BRITANICAS giones que consiluyen un mosaico de los Sudetas y más tarde la dos naciones debían ser aniquila• de razas, las de Hungría y Bul• Bohemia entera. Una Austria-Hun• -Por fin hemos conseguido una victoria. das. Al preguntarle las causas de gría — afirmaba todo el mundo — -¿Contra quién? ese odio, Clemenceau no encon• de unos treinta millones de ha• traba otras que el catolicismo. Ese bitantes, un imperio austro-hún• -Contra la escuadra de nuestros aliados. odio de la masonería francesa, y garo viable, habría hecho imposi• de • la masonería continental en ble la anexión de Austria a Ale• general, era compartido por la ma• mania. Los que trataban de im• sonería y el protestantismo inglés. pedir la existencia de un bloque FRANCIA E INGLATERRA Checoeslovaquia convirtióse en austro-húngaro capaz de subsistir el interprete y en el vigilante per• fueron los principales artífices de (Viene de U página primera) petuo del pensamiento de la Coiv la Gran Alemania. ferencia de la Paz. Checoeslova• Parapetada tras el Canal de la Mancha, su inasequible insularidad obligó De toda esa construcción que quia — y tampoco esto es un tó• al genial curso a intentar el bloqueo continental. Los duminios de la Francia tomó la denominación serví! de pico — era una sucursal de la revolucionaria se hicieron desmesurados, gigantescos. Napoleón sucumbió a la Pequeña Entente poca cosa queda masonería francesa. Los presiden• postre, pero las raíces de ja revolución quedaban echadas en todos los pueblos en pie. Checoeslovaquia ha des• tes Masaryk y Benes eran anti• de Europa. es la consecuencia de las campañas imperiales. Hitler, vencida aparecido y la Gran Rumania que• cristianos. Senes llegó a ser uno dará reducida a una pequeña Ru• Polonia y asegurada la paz en el Este, ha tenido que ocupar enormes extensio• de los grandes astros de la ma• mania. Queda Yugoeslavia, mu• nes del Norte y Oeste europeos, para alcanzar todas las costas próximas a la sonería europea. En ocasión de un cho mejor construida que sus alia• Gran Bretaña y asegurarse la iniciativa en las operaciones — recuérdese, por homenaje que se le tributó poco das, pero actualmente sin amigos. ejemplo, la campaña de Noruega, destinada a garantizar la segundad tlel Reich antes de la guerra española, toda en el Norte, para tener las manos libres en el frente occidental —. Y con el nuestra prensa masónica, y tam• El "copenaguea- ritmo de sus-victorias han cundido por todas partes los conceptos nacionalistas garia. La primera exige la Tran- bién algún diario católico incauto, y autoritarios. silvania y la segunda la Dcbrud|a. publicó el retrato del señor Be• miento" de la es• Inglaterra, catalizador de las revoluciones continentales. Y, sin embargo, no Los tratados fueron tan injustos nes acompañado de un entusiasta cuadra francesa ha participado en ellas. Precisamente por esto fué capaz de dispararlas. Por para Hungría como para Bulgaria. ditirambo. ser ajena a ellas, aunque lo bastante próxima a sus intereses para excitarlas y Hungría, a la cual tanto debe la Fué Checoeslovaquia el alma de El golpe de fuerza de la escua• obligarlas a estallar. civilización y especialmente el la Pequeña Entente, la que ali• dra británica contra la escuadra Y no puede participar en las revoluciones de Europa, porque su especifico cristianismo, fué reducida a la in• mentó en los otros dos Estados francesa ha agudizado la querella modo de ser se lo impide. Pragmática, ignoró siempre los principios generales significancia, como Ausiria. Y Bul• — alma y razón de todo movimiento revolucionario — y se atuvo únicamente garia, si liega a reconquistar la en lo exterior a las necesidades de cada momento, y en lo interior a las cos• Oobrud|a, no cesará de pedir una tumbres y tradiciones. Nada más ajeno a los ingleses que combatir o padecer por salida al mar Egeo a expensas de ideas. Su historia política no presenta, en realidad, solución de continuidad algu• Grecia. En cambio eses mismos na, y no admite comparación con la de los pueblos continentales. tratados crearon una Rumania que sólo podía subsistir considerada Quizá esté en la base de tan fiel tradicionalismo y especial idiosincrasia la como un protectorado franco-bri• insularidad, que inmunizó pronto al pueblo británico contra las invasiones, que L tánico. creó unas condiciones especiales a su política, y debió darle una conciencia muy aguda de sus peculiaridades frente al continente. Los cuarenta kilómetros En estas horas trágicas para de mar que median entre Calais y Dover adquieren, desde este punto de vista, Rumania es imposible nj recordar toda su enorme trascendencia. Y el papel de Inglaterra, semejante y distinta a aquella Pequeña Entente de la Europa, su verdadero perfil; isleña, instintivamente hostil al continente — ayer cual formaban parte Checoeslova• por rapacidad, hoy por temor —, siente en general, muy poca solidaridad con «L quia, Yugoeslavia y Rumania. La Esta solidaridad que por la fuerza de la geografía y de lo» hechos históricos no política de la Pequeña Entente pueden menos que sentir los pueblos del continente. Siquiera sea la comunidad tenía tres objetivos, que pueden de la pelea, que siempre tuvo en Europa un sabor a riña de hermanos, a cosa resumirse en uno: impedir la res• de familia. tauración monárquica tanto en Austria como en Hungría, opo• Por esto, las grandes conmociones espirituales europeas terminan afectando nerse a la unión y mantener a a tudas sus naciones — reafirmando la unidad de Occidente —, mientras que esos dos ilustres países en estado rozan tan sólo en ta más material y exterior, sin afectar para nada a las jerar• de postración perpetua. Los tres Oficiales femeninos de la Escuela Naval británica realizando ejer• quías sociales, a las formas de vida y a su existencia, a la Gran Bretaña. Por países de la Pequeña Entente con• cicios de entrenamienfo, con deliciosa feminidad... esto también, en los momentos, cruciales, suele reaparecer, más o menos des• templaron con satisfacción, casi no nuda, la hostilidad entre la isla y el continente. Que. en definitiva, aosotro» los disimulada, cómo el hambre azo• europeos, podemos odiarnos, pero el odio es ya una forma de hermandad. taba a Austria y cómo la revolu• Mientras que los ingleses nos desprecian como a seres inferiores. Por ello nos ción bolchevique devoraba a Hun• son radicalmente extraños y. en las ocasiones decisivas, hostiles. gría. Np hubo piedad para nin• gún*--'de las dos. Tarde o tem• prano, también los puebles pagan sus grandes pecados. Viena y Bu• En su "Historia de Francia", ha dicho Jacques Bainville que la historia de su dapest representan en la historia Patria es una continua defensa contra el Este, apoyándose en Inglaterra, u contra de la civilización europea algo Inglaterra, con paz en el Este. ¿Se puede sospechar un viraje total de aquella más que Praga, Belgrado y Buca- a esta posición? Es prematuro afirmarlo. Pero a nosotros nos parecería más res». Eso puede afirmarse rotun• lógica esta actitud "continental" de Francia que la precedente. damente sin ánimo de ofender a esas tres ciudades. No es un tópico, sino una rea• lidad histórica, afirmar que el aplastamiento del Imperio Austro- Húngaro fué obra de la masone• ría. Austria y Hungría debían ser castigadas por el delito de ser ca• Vendo tólicas y campeones del catolicis• mo. Es cierto que todas las na• ciones cometen errores y también los cometió el Imperio austro-hún• CAMIONES DIESEL 10 TONELADAS EN garo, especialmente para con Ita• lia, su principal enemiga. Pero BUEN ESTADO. MARCAS ROCHET jamás en la historia de Europa otro imperio ha dirigido a hom• SCHNEIDER - LEYLAND - HENSCHEL bres de tantas razas diferentes con comprensión tan alta. Además, y esto es también innegable, la ad• ministración autro-húngara era mo• Razón: délica, verdad que reconocen aún los pueblos que han sido gober• 5. LARRA URI nados por la doble monirquía. La personalidad de M. Fierre Laval ocupa nuevamente, después del Durante la Conferencia de la prolongada ostracismo o que la sometieron el Frente Popular y sus Balmes, 56. prai. 2.a - Teléfono Í62S8 Paz no faltaron voces que hicie• adláteres, un puesto central en la politica francesa. Recogiendo los ron observar que si no existiera despajas de Francia que le legaron sus enemigas politices, el famo• BARCELONA el Imperio Austro-Húngaro sería sa hambre público de Auvarnia te dispone a rectificar toda la or• preciso inventarlo. Se hizo cons• ganización del Estado, para «vitar que puado repetirse al bochorno tar que el Imperio había hecho de lo situación actual DESTINO

POLITICA Calzados entre las dos naciones. Cuando Las disputas que el copena- Mr. Churchlll fué nombrado Pri• gueamiento» de la Sota francesa mer ministro, la prensa francesa ha suscitado entre los do; países recogió con emoción unas histo• merecen también otra reflexión. rias de la prensa británica según Cuando se rindió el Rey de Bél• las cuales el Primer ministro des• gica, los franceses le acusaron Piiiilhiliet ciende de Drake. el corsario. Que como traidor: cuando los france• Mr. Churchlll tiene algo de felino ses se han rendido ha habido un redo el mundo lo sabia, pero los momento de estupor en Inglate• franceses no podían sospechar si• rra. Pero al ver los ingleses que quiera que el gran zarpazo del des• los franceses habían rend do tam• Paielladas, 35 / cendiente de Drake arrebatara la bién su escuadra, prefiriendo con• m mayor parte de la ñota francesa. fiar en la caballerosidad alemana Teléfono 61 Dijoso también, cuando Mr. Chur• que en el resultado de la aventura La última moda, que llega de chlll llegó al poder, que la sim• que proponía Mr. Churchill, en• París. patía del pueblo británico a su tonces los franceses y el mariscal Primer ministro equivalía a reco• Pétain han sido acusados de trai• SITGES nocer que de lo que más carecen dores, igual que un vulgar Rey rían entre dos y tres mil metros, los políticos ingleses es de ima• de Bélgica, y perdone el lector la en medio de tormentas de nieve ginación. Realmente, la agresión frase. incesantes». Y continúa diciendo contra la escuadra de su vencida Mussolini: El primer sistema aliada es muy estilo Churchlll, El rey Leopoldo se rindió por Maginot alpino ha caído bajo el como lo fué el abordaje del "Alt- tres razones, según parece: por• asalto de la infantería italiana, en mark» y la decisión de minar las que consideraba que no era posi• una profundidad que oscila entre costas de Noruega, gesto que pro• ble resistir útilmente, porque cre• ocho y treinta y do» kilómetros». vocó el asalto alemán a la penín• yó que aun podía salvar algo y ••Italianos y extranjeros deben sula escandinava. Se ha dicho porque vió que los ing'eses no saber -todo esto. Cuatro veces re• también que si Mr. Churchill hu• habían hecho el esfuerzo de en• pite el Duce esta frase. "La ba• biera conducido la guerra desde el viar las tropas necesarias y que. talla fué dura y sangrienta. Los principio hubiéramos visto cosas en cambio, se ocupaban activa• miles de hombres puestos fuera de sensacionales, como por ejemplo mente en la evacuación de sus di• combate son testimonio de ello». el acto de ucopenagucar» la escua- visiones. Por iguales motivos, aun• La carta de Mussolini. Duce y que con ligeras variantes, el ge• primer mariscal de Italia, al prin• neral Weygand aconsejó al maris• cipe Humberto de Saboya. gene• cal Pétain que solicitara el armis• ral en jefe de los Grupos del ejér• ticio. cito del Oeste, tiene la grandeza Actualmente no hemos visto de una crónica antigua. Por si al• Fábrica de Calzado para Caballero que ningún diario francés intenta• gún día alguien insinuara que el ejército italiano permaneció con ra salvar el honor del Rey de Bél• Sen Sebasllín, 34 • SITGES • Teléfono 82 gica. Claro que Francia tiene aho• los brazos cruzados, ahí está la ra otras preocupaciones que el ho• carta del Duce al Príncipe. nor ajeno, aunque jamás olvidare• Va dirigida la carta no sólo al mos que incluso M. Maurras acu• príncipe Humberto, no sólo a los só de traición al hijo del Rey entusiastas del fascismo, sino tam• Alberto. Pero seguramente en es• bién a los antifascistas, a los que tos momentos millares de france• siempre han tenido un interés ses habrán pensado que el caso inexplicáble en disminuir las vic• del rey Leopoldo se parece al caso torias del ejército italiano, a esos de Francia. Ambas naciones, repi• mismos que cuando la conquista támoslo una vez más, se han ren• de Etiopía aseguraban que había dido porque Inglaterra no había empezado una guerra colonial que aún movilizado a sus hombres de duraría veinte años, y que cuan• veintiséis años. Firme en el siste• do la guerra terminó decían que ma de luchar hasta el último había sido un paseo militar. Du• francés. Inglaterra ha visto caer a rante la anterior guerra europea. TALLER DE CALZADO —¡El mapa de Europa, con las ese último francés. A consecuen• Italia derrotó netamente al ejérci• jitimas novedades de hoy! cia de este error, gracias a este to austro-húngaro. Las tropas im• espíritu comodón, ahora Inglaterra periales fueron dispersadas y en se ve obligada a luchar en su la acción del Vittorio Véneto em• dra italiana antes de que Italia propia casa. pezó a hundirse la alianza austro- entrara en guerra. Pero si exage• alemana. Más tarde, por odio al ran los que así nos pintan al Pri• fascismo, sus detractores empeza• mer ministro inglés, no parece ron a decir que Italia en nada ha• que nadie pueda imaginar que un bía contribuido a la victoria de los temperamento conservador y lega• «italianos y extran• aliados. La previsión de Mussoli• lista como el de Mr. Chamberlain jeros deben saber...» ni impedirá la repetición de la sea capaz de ordenar un golpe de maniobra. Ha habido sangre en fuerza como el realizado contra la La historia de la ofensiva del los Alpes, mucha sangre, la ba• escuadra francesa. El g°sto ese talla fué dura y sangrienta, y bajo remano ejército italiano en la frontera será muy estilo Churchlll y tam• francesa ha sido resumida por el empuje de las tropas italianas bién muy estilo británico, puesto Mussolini en la carta que ha diri• cayó el primer sistema de fortifi• que la historia naval inglesa está gido al príncipe de Piamonte fe• caciones francesas. llena de episodios de esta índole. licitándole por la victoria. En el Debemos, no obstante, reconocer La carta del Duce tiene otro as• momento en que el ejército italia• Calle Juan Tarrida, 15 • SITGES que si en la historia inglesa son pecto interesante. El documento no hundía la línea Maginot de los numerosos les golpes de esta na• es una entusiasta felicitación al Alpes. la atención del mundo con• turaleza, todo parece indicar que general que mandaba esas tropas. centrábase en el espectáculo del el pueblo británico carece de ima• Ese general es el Príncipe herede• rápido avance de las divisiones ginación. Si esto fuera exacto, lle• ro. Humberto de Saboya. El anti• alemanas por las llanuras de garíamos a la consecuencia de que fascismo había creado una leyen• Francia. Sin embargo, se luchaba los ingleses encumbran a los po• da alrededor del Príncipe del Pia• enérgicamente en los Alpes «en cos hombres de imaginación que monte. Era presentado como una una extensión de doscientos kiló• poseen. especie de San Jorge que tenía por metros y a unas alturas que va- misión libertar a Italia de la hidx.a fascista. Aseguraban los antifascis• FABRICA DE CALZADOS tas que el Príncipe era el primer anglofilo y el primer francófilo de Italia. Todo eso ha resultado una leyenda grotesca. El Príncipe here• dero ha sido el general en jefe de las tropas que han luchado victo• riosamente contra Francia. Esperaba el antifascismo que la Casa de Saboya y el fascismo se• J. IBAÑEZ rían los dos elementos de una guerra civil. La guerra civil ha• bría estallado fatalmente en Ita• lia si el fascismo no se hubiera echado en brazos de la Casa de Saboya y la monarquía en brazos del fascismo. Esa colaboración evi• tó la guerra civil, fundó el Impe• Espalter, 6 • SITGES • Teléfono 130 rio, ha conquistado Albania y ha ganado ahora la guerra contra —¿Cómo va el negocio? Francia. —Mal. No hay nadie que quiera dejarse proteger. ROMANO DESTINO

Hacia una nueva Francia •zier-RasÉ A poco que los inijlcMs persistan Einfritt en la resistencia y extremen los actos de desesperación, Francia saMri de la furííalscbíverbAj guerra fuerte y rejuvenecida y pronta a desempeñar un primer papel en h organización de la Nueva Europa. La dignidad con que ha aceptado la derro• ta y el odio que contra ella ha desen• cadenado su aliada de ayer, han hecho simpática la nación francesa a los ojos de los mismos adversarios que acaban de postrarla. DE ALIADOS A Tanto más cuanto ella misma s« está purgando de los elementos que precipitaron su catástrofe. Ya de años atrás. la expresión de "los buenos fran• ADVERSARIOS ceses'* tenía una significación propia, no aplicable a todas las naciones. Todo el mundo consideraba que habla otra JOHN: Pirece mentira... al cabo de glesa, aun preuindiendo de la reciente Francia que no podía considerarse re• sólo diez meses de guerri— derrota? ¿Quién ha impedida en 1919 presentada por los elementos que en- JEAN: Es lamentable, en efecto, que nos quedáramos en el Rin? Lloyd tor.ces gobernaban. La Francia verdade• pero a mi lo ocurrido me sorprende George. ¿Quién nos obligó en 1923 ra habla de ser cristiana y distinguida, menos que a usted. Cordiales, asi a evacuar el Rur? El Gobierno de y quienes la mandaban eran ateos y como cordiales, no habían sido nunca Londres. ¿Quién ha favorecido secre• perdularios. Nadie dudaba que la Fran• nuestras relaciones. Habíamos concer• tamente el rearme de Alemania, para cia auténtica vivía aún en algún lado, tado más bien un matrimonio por ra• mantener el "equilibrio"? Inglaterra. auwue su vida era una vida oscura. zones de Estado. Durante siglos ha• ¿Quién ha dejado de cumplir sus obli• Diríamos que esa Francia empieza a bíamos sido enemigos: enemigos acé• gaciones para con nosotros cuando el salir del sopor en que permaneció por rrimos. Reich Introdujo el servicio militar espado de un siglo. Y Europa entera obligatorio e invadió la Renania des• JOHN: No puedo negarlo, pero militarizada? Inglaterra. ¿Quién fa• parece alegrarse de la nueva aparición. nuestra hostilidad no se dirigía contra Europa entera, descontada Inglaterra, vorecía la formación del Frente Po• La radio inglesa prodiga durante estos últimos días toda clase de Francia, sino contra el país más po• por supuesto. Y con el resurgimiento pular en Francia? Inglaterra. ¿Quién fantásticas informaciones sobre los vejámenes que el Ejercito del deroso del Continente. de la Francia tradicional, resuciti la ha dejado de tomar las medidas ne• Reich hace sufrir a la población francesa de la zona ocupada. La también tradicional oposición a la ve• JEAN: Ya lo sí: sí es la eterna po• cesarias ante el peligro alemán? In• maniobra es típicamente frentepopulista y se reconoce el acento cina del otro lado del mar. La Francia lítica inglesa. Si Alemania fuese me• glaterra. A vosotros os debemos nues• de esta fauna política que abandonó su país paro continuar una que. olvidando su pasado, no sólo se nos fuerte y nosotros siguiéramos en tra debilidad. Y habéis elegido, para ciega político de partido, despreciando la voz del glorioso Maris- alió, sino que se sometió, se enfeudó a et Rin, Londres hubiera montado una precipitarnos en la guerra, el peor col de Francia que saco de los ruinas de su patria rescoldo para Inglaterra, ha «do enterrada en la ba• coalición contra nosotros, incluso con momento: cuando nosotros éramos más una futura reconstrucción. A este propósito sería oportuno recor• talla de París. Dios haga que no resu• el Reich. débiles que antes y los alemanes eran dar que la intransigencia gálica llegó en lo pasada guerra a ex• cite. Dios lo haga, en bien de Francia tremos que seguramente no habrán olvidado muchos alemanes. Su JOHN: Puede ser, mas no hablemos más poderosos que nunca. ¿Qué gra• misma y de la paz de Europa. titud os debemos? Ninguna... ciega arrogancia se expreso en este cartelón que los franceses de suposiciones, sino de lo pasado. colocaron en el Casino de Dusseldorf en el año 1918: 'Prohibi• Desde luego que no se ha hecho sino ¿Quién tiene la culpa de...? do para los alemanes". La historia tiene sus compensaciones. empezar. Todavía quedan en pie (dolos JEAN: Ya lo ha dicho el Mariscal ANDRES REVESZ que conviene derribar. El primero, el Pétaln: teníamos menos aliados, me• fantasmón de Herriot. uno de los pro• nos soldados, menos armamentos, me• pugna dores del Frente Popular, que se nos aviones- Y ustedes sólo nos han permite ahora el lujo de acusar a los enviado diez divisiones. "responsables". Pero, jes que hay en Francia un mayor responsable que el JOHN: Reconozco que somos algo tardos en ponernos en movimiento; Aníe el fin de la "Eníeníe Cordiale" propio Herriot. presidente de la Cámara de los Diputados? sin embargo, antes de firmar las seve• ras condiciones del armisticio, hubiera S muy difícil entender la alianza marina, indiscutiblemente superior. Asi lo bastante fuerte para tener veleida• sido preferible continuar la lucha en E franco-inglesa y su final desas• el imperio colonial francés se conver• des de independencia. Así, después de Africa, de acuerdo con el Imperio bri• troso, si no se parte de una realidad tía en un motivo de debilidad en vez la llamada Gran Guerra, en la cual El destino de Egipto tánico y contando con la ayuda mate• básica: Francia no es una gran po• de una fuerza: algo muy parecido, en Francia llevó ciertamente la peor par• rial de los Estados Unidos. tencia. suma, a los imperios holandés y bel• te, Inglaterra cuidó con gran habilidad El Nilo es la vida de Egipto. El país Pero no quiere decirse aquí que ga, que establecen una hipoteca poli- de que la paz dejara a Alemania lo que tiene en el Cairo su cabeza es un JEAN: Ya ha oído usted al maris• haya dejado de serlo el día que la tica en favor de la potencia domina• bastante hundida para ser inofensiva desierto, sin otras tierras cultivables cal Pétain: no puede colocar sus es• línea del Somme cedió ante el em• dora del mar. para Inglaterra y lo bastante fuerte que las que bordean a uno y otro lado peranzas fuera de Francia. puje alemán. No; aquel día y el 17 Los republicanos conservadores tu• para seguir siendo un espantajo cons• el poderoso río. En esa doble faja vi• JOHN: El mariscal es, efectivamen• de junio, en que pidió el armisticio, vieron una política de expansión co• tante para Francia; y a ésta la deja• ven los doce millones de almas que te, demasiado viejo para desplazarse. Francia perdió la "apariencia" de ban los tratados de paz suficientemen• constituyen la nación egipcia. Más allá lonial combinada con una alianza con Los hombres somos egocentristas y gran potencia que venia ostentando te satisfecha e intranquila para seguir de esas orillas, las arenas del desierto Rusia, a través de la cual vino la in• nos figuramos que lo que no podemos desde 1919, pero, en realidad, había se extienden ilimitadas. teligencia con Alemania; lo cual, en necesítando el apoyo inglés. hacer nosotros mismos es un gesto dejado de serlo en Sedán y Francfort definitiva, debía conducir a un bloque Algunos, sin embargo, vieron ya Tierras más fértiles que esas riberas irrealizable. El general Mangin solía y en el primer Versalles; aquél de continental virtualmente dirigido con• desde el principio lo que significaba del NUo, no las hay en todo el mundo. decir que Francia es una nación con principios de 1871, en que BUmarck. tra Inglaterra, con lo cual, además, la "Entente Cordiale". Maurras escri• Ellas hicieron el Egipto legendario de cien millones de almas, incluyendo en en la Galería de los Espejos, proclamó los franceses tropezaban en su expan• bía en 1905 estas clarividentes pala• tos faraones, y ellas han atraído en la nación a los indígenas de las co• el nuevo Imperio alemán. Un nuevo sión colonial. Pero el sistema se vino bras: "Pero si Inglaterra necesita nuestros días los más fuertes capitales. lonias. El Imperio francés no es tan poder continental auténtico y suficien• La fertilidad de las tierras del Nilo si• abajo con la subida de los radicales al nuestro ejército, no necesita precisa• sólo la metrópoli. En esto consistía su temente fuerte para tener una política gue aún creciendo. poder, y de su ministro de Negocios mente nuestra victoria. Bastará con fuerza, su belleza sugestiva. propia y rectora de la del continente Extranjeros. Delcassé, a consecuencia que nosotros entretengamos a Alema• Por si fuera poco todo ello, en el sustituía a Francia en el papel que JEAN: Supongamos que el Gobierno de la agitación del "affaire" Dreyfus: nia, atraigamos su esfuerzo sobre nues• Egipto se cortó esa vía mundial de im• durante mucho tiempo venía repre• francés estuviera en este momento en la expansión colonial que se estaba tras cabezas y desviemos sus golpes. portancia suma, que une los mares de sentando frente a Inglaterra. Desde Argelia. ¿En qué cambiaría la situa• realizando hasta entonces sin contar Lo que hay que evitar a toda costa es la India con los de Europa. La aper• entonces, hubo de representar el papel tura dal Canal de Suez constituyó una ción? ¿En qué forma podríamos con• con Inglaterra y aun contra Inglaterra, que el esfuerzo de Germania se dirija de "brillante segundo" para el cual se verdadera revolución en nuestros tiem• tinuar la lucha? ¿Dónde desembarca• se hizo desde aquel momento de acuer• hacia tas costas del mar y que Gui• la disputaban el Káiser, Inglaterra y pos. rían nuestras tropas? Porque hay que do con ella y con su autorización: llermo de Prusia imite a Guillermo de el Zar de Rusia; y su política tuvo renunciar a la Ilusión de que las gue• tratado de 1904 y consiguiente movi• Normandía o a Napoleón. Toda imi• Un país as!, parece dispuesto para diversas fluctuaciones, siguiendo siem• rras puedan ganarse con sólo la de• miento de la "Entente Cordiale". tación del campo de Boulogne. cual• ser rico y feliz. Y. sin embargo, nada pre U acción de las demás auténticas fensiva. Resistir, resistir... Lo mismo Francia recibía el refrendo de la "rei• quier reunión del "Gran Ejército" en más lejos de la realidad. Esa riqueza grandes potencias, a lo cual no podía decían los rojos españoles. Después de na de los mares" en su labor de ad• Kiel o en los antiguos puertos de la del suelo, y esa posición estratégica, sustraerse. son los elementos que tienen encadena• haber perdido la guerra en el continen• quisición de un imperio, a cambio de Hansa, debe ser desviado hacia el do el Egipto a las potencias extran• te, nuestros dos Imperios, por ricos Rusia era una auténtica gran po• convertirse en el soldado de Inglate• Oeste, hacia el Rin, hacia nosotros, jeras. que sean, no podían sino resistir de• tencia por su inmensidad. Alemania lo rra en el continente, con la esperanza como fué desviada hacia el Danubio de realizar así la anhelada "revanche". la fuerza que amenazaba a Douvres En una sola generación hemos visto trás de sus flotas- Resistir y organizar era por el número de sus hijos, por La vuelta estaba totalmente dada y en 1805. A pesar de sus desastres de sucederse en el país del Nilo las in• el bloqueo de toda Europa. De toda su dinamismo y espíritu de organiza• nacía una alianza que había de durar fluencias turca, francesa e inglesa, co• Europa, porque los alemanes comuni• ción extraordinarios. Inglaterra lo era, Elchingen, Ulxn y Austerlit», Austria, mo antiguamente se sucedieron las de can ya directamente con la Península sobre todo, por su imperio y por la cerca de cuarenta afios. aliada y subvencionada de Inglaterra, tantos pueblos, hasta llegar a los ára• Ibérica. flota que le permitía comunicarse con « * * contribuyó no poco, hace cien años, bes. Y aun parece que hayamos de pre• él con sus propios medios. Porque hay Pero esta alianza en que los france• a salvar a Inglaterra. Es el papel aus• senciar el ocaso del poderlo inglés. JOHN: En todo caso, esta solución que tener en cuenta, aquí, que el im• ses, en general, veían una inteligencia tríaco el que nos destina Inglaterra en hubiera sido mejor, más beneficiosa el siglo XX." ¿ Será para que le suceda otro nuevo perio colonial francés no convertía a de igual a igual, era. en realidad, un poder, o bien para que el Egipto con• para Francia, más honrosa para su la metrópoli en auténtica, gran poten• binomio cuya dirección estaba en Lon• Estas palabras, tan maravillosamen• siga por fm la anhelada independencia? reputación que la firma poco gallarda cia por una razón bien sencilla: por dres, que se contentaba otorgando me• te aleccionadoras, explican tanto 1914 La actitud de los egipcios mismos no de unas condiciones inaceptables. falta de una escuadra suficientemente nudas satisfacciones a la vanidad fran• como 1919, lo mismo 1939 que 1940. parece ser la del que espera, sino sim• JEAN: Comprendo vuestra amargu• fuerte su comunicación con la madre cesa para hacerle creer que Francia Mientras Francia pudo cumplir su pa• plemente la del que desea. Es un sue• ra, pero también vosotros debéis com• patria no era autónoma. Dependía de seguía siendo una auténtica gran po• pel en el continente, Inglaterra la ño demasiado bello en cuya realización prender la nuestra. ¿Qué beneficios la voluntad de Inglaterra, que en cual• tencia; siempre cuidando, naturalmen• conservó como aliada y aun le dió dú-Iase que ni los propios egipcios creen. hemos conseguido con la alianza In• quier momento podía cortarla con tu te, de que la aliada no llegara a ser pequeñas satisfacciones; en cuanto ha 5 eeeeuze sido impotente para detener al ene• migo de Inglaterra en su camino ha• cia el mar, ha perdido todo interés para los ingleses. No era un aliado de poder a poder, era un auxiliar que no ha cumplido el papel que se le había asignado; no hay por qué guardarle consideración de clase alguna.

« * « 7 ¿Cuál es el futuro de Francia? Con toda evidencia: seguir la suerte del continente. Y su actitud dependerá en gran parte de la futura paz, pues no cabe duda que un tratado que deje el menor resquemor posible sería muy conveniente para facilitar la necesaria colaboración europea, que es supuesto indispensable a una reorganización moral y económica del continente. Los geniales hombres políticos que dirigen el grupo vencedor no dejarán, segura• mente, de tener en cuenta estas nece• sidades una vez reparadas las injusti• cias de Versalles: tanto más cuanto que Francia no podrá ser nunca un peligro para una Alemania victoriosa, ni para una Italia que ha tomado de• cididamente el papel rector de la Eu• ropa latina, papel que hasta hace unos años Francia había desempeñado indu• dablemente. La relativa moderación del armisticio, cuyas cláusulas más du• ras estriban en las garantías que se toman para la guerra contra Inglate• rra, hace concebir, a este respecto, fundadas esperanzas.

El papel de la nueva Francia en la nueva Europa está bien determina• do: ocupar sin vanidades trasnocha• das ni ambiciones fuera de lugar y con Los dominios británicos son lo porción privilegiado del Imperio. Son también lo mejor reserva económica de Inglaterra. Como tan• el supuesto totalmente indispensable de tos otros productos, la riqueza ganadera es uno de los principales motivos de su importancia una auténtica regeneración interior, el E^iHiHsf LOS DOMINIOS DEL IMPERIO INGLES eso E N eilos dios en que aun los más fieles creyentes en el poder Si buscamos la población relativa general para todos los Do• En esta nueva Europa, en este blo• británico, admiten la posibilidad de la ocupación de la metró• minios, hallaremos que no llega a dos habitantes por kilómetro cua• que continental en que entrará des• poli inglesa, se oye decir mucho que, aun en ese caso, Inglaterra drado. pués del fracaso de su "Entente Cor- proseguirá la lucha en los "Dominios". Estas cifras bastan para comprender toda la tragedia de los Do• díale", Francia habrá de tener muy Al hablar expresamente de los "Dominios" y na de las colonias, minios el día en que no tengan asegurado su desarrollo dentro del presente dos realidades que ha desco• se quiere significar seguramente que de esas tierras privilegiadas marco del Imperio. Hasta ahora, unas leyes inmigratorios prohibiti• nocido hasta haora con inconcebible que obtuvieron de Londres la más amplía autonomía y el mejor vas para todas las razas y pueblos indeseables para los ingleses, ceguera: Italia y España. trato, puede esperar Inglaterra mayores sacrificios por la causa del aseguraban una lenta pero sana colonización de aquellas tierras. Las "hermanas latinas" no lo eran Imperio. En cuanto se rompa el dique del Imperio, ¿cómo contener el alud hasta 1940 más que en cuanto po• Veamos hasta qué punto son justificadas esas esperanzas, cuá• de los pueblos que buscan su expansión en los territorios ricos y des• dían soportar sacrificios, molestias y les son las fuerzas reales de los Dominios y cuál es el destino que poblados, entre los cuales se cuentan los principales Dominios? aun impertinencias. Fuera de esto, probablemente les espera en una posible desmembración del Imperio quien regía los pasos de Francia no inglés. Siguiendo los cálculos de Fischer, que son los menos optimistas era ningún sentimiento fraternal, sino Los dominios acaece ser aquellas partes del Imperio más pobladas de cuantos se han publicado con fundamento serio, la capacidad de el complejo de inferioridad y miedo de elementos europeos, y es ésta una razón que ha debido de in• población de los Dominios es como sigue: que la llevaba hacia "la gran amiga fluir en la concesión de un estatuto de privilegio. Pero si formen, Inglaterra". Esta una de las leccio• por decirlo asi, uno aristocracia dentro de las tierras que obedecen Unión Sudafricana 60.000.000 nes más importantes que debe apren• a la corona británica, no constituyen una parte importante de la Australia . . . 120.000.000 der Francia para vivir en la nueva población imperial, como puede verse en las siguientes cifras: 25.000.000 Europa; las tres grandes "hermanas Nueva Zelanda latinas" pueden ciertamente jugar un Unión Sudafricana 9.800.000 habitantes Canadá . . . . 150.000.000 papel, pero su centro familiar no será Australia 6.900.000 ciertamente París. Aunque — tampoco Nueva Zelanda 1.600.000 (De Terronova no tenemos datas.) en esto — nadie pretende hacer un Canadá 11.100.000 Trescientos cincuenta y cinco millones de almas pueden alimen• "super-Versalles", ni un Venilla al Tcrranova . 300.000 tar sin esfuerzo los Dominios, que actualmente no llegan a contar revés. treinta millones. La importancia suma de esta cues• Total . 29.700.000 habitantes tión de las "hermanas latinas" sube En el caso de una derrota inglesa, la "brítanizaeión" de los Do• de punto extraordinariamente si se Si consideramos que el Imperio Británico tiene, en cifras redon• minios queda, pues, comprometida. das, 500 millones de almas, veremos que la población de los Do• considera la necesidad imperiosa de Empecemos por recordar que, aparta de Terronova, ninguno de minios no llega a representar ni una sexta parte del total de los que en la nuera Europa que saldrá de los Dominios tiene una población auténticamente inglesa, aunque subditos ingleses. la guerra dirigida por el principio de los habitantes de origen inglés estén en ellos en mayor proporción Consideremos ahora si una población algo mayor que la espa• la hegemonía, se establezca un nuevo que en las demás tierras del Imperio. equilibrio. Equilibrio en el cual los ñola y desparramada por todos los continentes, sin llegar a consti• elementos latino y germánico ocupen, tuir ningún núcleo superior a la población de lo que fué Checoslo• En la Unión Sudafricana son europeos al 20 por ciento, y el cultural, moral y políticamente, el lu• vaquia, es capaz de constituir una fuerza suficiente para arrostrar resto, negros e hindúes. Y de ese 20 por ciento, sólo la mitad son gar que les corresponde en la forma• al poder que en seis semanas dió cuenta de Francia. ingleses, y la otra mitad boers (de origen holandas). ción y la existencia de nuestra civi• Por otro lado, sin poner en dudo la lealtad de los Dominios, lización. Y esta gran misión, a la que faltaríamos a la verdad si negásemos a sus habitantes todo deseo Francia ha faltado hasta ahora con de independencia, que podrió verse intensificado el dio en que se su pollüca de aprovechar la "herman• produjese la ocupación de la metrópoli. La compenetración actual, dad" para establecer un dominio, no que indudablemente existe (en mayor o menor grado), tiene uno está entre las maneras que la Realidad de sus más firmes fundamentos en la grandeza del Imperio. El impone ahora a los franceses. hecho no es nuevo, y lo historia nos enseña cómo los grandes Impe• rios se derrumbaron como costilla de naipes el dio en que llegó a SANTIAGO NADAL fallar el núcleo central que los presidia. Un gran porvenir espera a los Dominios ingleses el día de ma• ñana. Para na comprometer ese porvenir se aferraban todos al ré• gimen actualmente constituido, bajo el cual se desarrollaban pro• gresivamente. Ese mismo porvenir les hará desprenderse de todo compromiso con la metrópoli el dio en que el régimen inglés se de• Bombas rrumbe y pueda constituir un peligro seguir aferrado a sus ruinas. Para comprender las proporciones que el desarrollo de los Domi• nios puede llegar a asumir, tracemos el cuadro de la población re• SUCESORA DE lativa de todos ellos:

RAMON PUIGJANER Unión Sudafricano (1.223.854 km. - : 8 h. por km.2 Australia (7.703.850 • ) 0'9 " MeBéndezPelayo. 70 - Teltf. 79364 Nueva Zelanda (269.038 - ) 5 " Canadá (9.569.510 - ) 1 " BARCELONA Tcrranova (110.680 - ) Z " El Cabo de Buena Esperanza, vértice de los caminos africanos D&STJNXr- Precisiones sobre la cuestión de TransíMa L problema dt Transilvania. en ticas y fundaron en los valles monas• el mismo año, fueron evaluadas en E grado superior a cualquier otro terios católicos, al par que reducían a unos 1.472.000, la que representaba litigio territorial, envenena la atmos• la esclavitud a la gran mayoría de la un aumento del II por 100 sobre el fera de la política exterior de los as• población rumana anterior. A esta pri• censo anterior, mientras que los hún• tados balcinico-danubiano, privándolos mera oleada magiar siguieron otras va• garos habíanse acrecentado en el 82 de la estrecha colaboración que impo• rias en el transcurso del siglo XII. por 100. La imposibijídad de este au• nen las actuales circunstancias, ante la especialmente la de los sículos o "szek- menta salta a la vista, y más teniendo amenaza concreta del imperialismo so• lers", que se establecieran en grupos en cuenta que la rumana es una na• viético. En los pasados días, después compactas en el Sudeste, en la región ción más prolífica que la magiar. de la cesión forzosa de la Besarabia. elevada donde el arco de los Cárpatos Evidentemente — como luego se ha la tensión política entre Rumania y dobla bruscamente para enlazarse con demostrada comprobando el crecimien• Hungría, concretada en las aspiracio• los Alpes de Transilvania. Estos colo• to de la población magiar-sícula con la nes revisionistas de «ste último estada nizadores se diferenciaron tan conside• amgiar propia —. hay que reconocer en sobre las fronteras transilvánicas, ha rablemente de la población de idéntica los abultamientos del censo de 1910 aumentado de potencialidad. raza de los castillos y de la franja la intervención del estada y de las or• occidental transilvánica, que constitu• ganismos promagiarización de Tran• Ante la hora de las resoluciones, que yeron un tercer elemento — al lado de silvania. Por lo tanto, hay que pro• parece próxima, echemos un vistazo a los magiares propios y de los "vlaks" ceder con cierta suspicacia ante las la literatura geográfica, histórica, po• Uno visto de Toronto, en Conodó, uno de los más importantes o valacas — en la historia de la región. cifras dadas por el estado rumana en lítica y estadística escrita en torno a dominios de la Corona británica El cuarto núcleo fué el de los alema• el censo de 1930, de conformidad con la cuestión de Transilvania o Ardeal. nes, atraídos con fines militares y eco• cuyos resultados la población de Tran• Nada más confuso y contradictorio, no nómicas por los monarcas húngaros silvania se elevaría a 5.543.250 habi• sólo en lo puramente subjetivo, sino Australia es el más auténticamente inglés de los Dominios, aun• desde últimos del siglo XII; los cuales tantes, distribuidos de la siguiente for• en aquello que parece impasible mix• se distinguieron por ser los fundadores que no deja de contar 60.000 aborígenes, que ocupan vastísimo' ma: rumanos, 3.206.261 habitantes tificar. de las primeras ciudades de Tran• regiones del continente. En mayor proporción están los maoris en (57,9 por 100); magiares. 1.353.675 silvania. Este elemento recibió el nom• Nueva Zelanda, que son 83.000. (24,4 por 100): alemanes, 543.622 * o o bre genérico de "sajones", y a él se (9,8 por ciento), y judías, 178^ En el Canadá, la mitad de la población son de lengua inglesa, debe el denominativo con que la geo• Plantéase en primer lugar el pro• (3,2 par 100). Otras minarías, con un y la otra mitad de lengua francesa. Y habría que agregar todavía los grafía teutona designa a esta región: blema esencial del papel geográfico que total conjunta de 261.271 habitantes, reducidos grupos de pieles roías y esquimales, que suman 129.000. "Síebenbürgen", los siete castillos. cabe atribuir a Transilvania. Como es no tienen importancia. Todas esas tierras están, desde hace tiempo, amenazados de sabido, esta región forma un escalo- Contrariamente a esta teoría, los invasiones en maso: los hindúes han intentado siempre penetrar en namíento entre la llanura húngara y Prescindiendo de las cifras escue historiadores magiares sostienen que la Unión Sudafricana; los chinos y japoneses amenazan extenderse el eje cristalino de los Cárpatos, que tas, se revela en ambas estadísticas. por Australia y Nueva Zelanda; el Canadá seria tierra prometida en su sección meridional reciben el de europeos y asiáticos a poco que se abriesen los puertos. nombre de Alpes de Transilvania. La plataforma, de unos doscientos o seis- Esas tendencias exponsionistas de los razas que no caben ya ciento metros de altitud media, consta en sus límites no dejan de ejercer su influencia en los momentos en su mayor parte de terrenos tercia- actuales, en que el mundo empieza a conmoverse bajo lo amenaza ríos y cuaternarios, modelados por la de una revolución politice insospechada. Razón les sobra a los Do• erosión fluvial de los ríos y torrentes minios para preocuparse por el partido que les seo dable tomar. carpáticos en forma de pasaje de co• linas y cerros. Frente a la llanura por Una directiva común pora todos ellos no es posible, pues por donde circula el Tirza. la región tran- estar situados en tierras muy distantes entre si vienen a coer bajo silvanica se eleva en brusco murallón. influencias distintas. El Canadá y Terranova parecen tener asegu• constituido por el viejo macizo de rado un porvenir más occidental o "europeo", por la vecindad de Bihor. los Estados Unidos, que, caso de desaparecer la soberanía británica, sólo tolerarían unos tierras independientes o anexionadas a la Unión. La pendiente de Transilvania. des• La Unión Sudafricano, que ha sido siempre el Dominio más deseoso cendiendo de los Cárpatos al Aljolde. de independencia, podría quizá alcanzarla entrando dentro de la y el curso de los ríos, orientado en órbita alemana. En cambio Australia difícilmente podrá zafarse de general de Este a Oeste. facíliUn las la penetración amarillo. A no ser que los Estados Unidos, que tienen relaciones y los intercambios entre la periferia transilvánica y la depresión ya sus intereses en aquellos mares, se decidan a intervenir en ellos húngara. Esta ha sido una de las ra• más directamente, lo que crearía, cuando la guerra actual hubiera zones esgrimidas por los revisionistas acabado, el más pavoroso de los conflictos mundiales. magiares, que parten de la concepción Un gran Imperio como el inglés no puede desaparecer sin que de una unidad natural plena para la El paisaje de Transilvania le caracteriza por las blandas colinas el mundo entero sienta las conmociones consiguientes. Y conste que cuenca media del Danubio. Según ellos, hoy nos hemos limitado a tratar de los Dominios, dejando aparte la la linea de los Cárpatos es la frontera que la Geografía y la Historia han India y la inmensidad de las colonias propiamente dichas que Lon• la filiación daco-romana de Transilva-i la de 1910, húngara, y la de 1930 determinado ocupara el estado húnga• dres tiene esparcidas en todos los mares del mundo. nía es un mito, ya que la orden de rumana, un hecho concreto: la pobla• ro, y Transilvania, la rampa natural retirada dada por el emperador Au-\ ción rumana constituye el elemento que conduce a la muralla defensiva. rellano en el siglo III, fué ejecutada' predominante en Transilvania. Esta es JAIME RUIZ MANENT En cambio los tratadistas rumanos fielmente por el escasa elementa ofi• la conclusión recogida en todos loí sostienen una opinión contraria: la cial y colonizador — por otra parte, tratadas científicas de Geografía y P» Transilvania con los Cárpatos forman muy poco latino en sentido estricta — lítica Internacional. Ahora bien, el ele• un baluarte que se levanta sobre las enviada a la provincia por Roma. Los mento rumana, que forma una faj^ tres llanuras circundantes:' los valles PRODUCTOS rumanas, dicen las húngaras, son es- central casi ininterrumpida de Norte del Danubio, del Tisza y del Dniéster. lavanes, nómadas de los Balcanes me• a Sur, se halla bordeado por dos zonal Esta fortaleza, contra la que se han ridionales, que sólo ascendieron a de población magiar y alemana. La ét POLIBRILL venido a estrellar las invasiones de Transilvania a partir del siglo XIII. Occidente, lindando con Hungría ; Asia, ha sido, precisamente, el reducto Cuando la conquista magiar, la pobla• Yugoeslavia. presenta los grupos hún• providencial para la conservación de FEDERICO PARSÉ ción transilvánica estaba integrada por garos de las provincias de Salajiu J la nacionalidad rumana ante la ma• escasos núcleos, residuos de la época Bihor. y los "suabos" alemanes di rea desbordante de los pueblas de la de las grandes invasiones de pueblos. Arad y del Báñalo (esta oleada étni• estepa. Añaden, asimismo, que los Cár• Por lo tanto, los magiares basan su ca se produjo en el siglo XVIII). I patos no constituyen un limite natural, derecho histórico a la posesión de Oriente, rodeado por todas partes P- sino que forman el más estrecho es• Transilvania en el principio de "prior los rumanos, se dilata el islote rada labón entre las dos regiones rumanas tempore, prior jure", y remachan, de de los sículos, sumamente compacto esenciales: la Transilvania y los voi- Marfil esta manera, la función fronteriza Ini• nutrido (medio millón de magiares) vodados de Moldavia y Valaquia. El Nombre r e g i « 1 r a d o cial de los Cárpatos, en detrimento de contacta inmediato con los 237.661 estado rumano actual sería un "estada las tesis rumanas. "sajones" de la Transilvania histórici montañés encabalgado", cómo tantos Brasov, Tarnava-Mare, Harnava-Mici PARA EL CALZADO BLANCO que existen en el mapa política mun• Nasaud, Pagaras. EN TUBOS DE 45 Y 90 ORAMOS dial. « » O El misterio del desarrolla histórica Esta distribución tan particular ' Muralla o espina dorsal: asi puede de Transilvania desde el siglo III al los grupos raciales en Transilvania di Ripoll, 25, interior resumirse el dilema geográfico de la XIII —una de las grandes incógnitas ficulta todo intento de solución »i Transilvania, considerado desde el pun• de la crítica moderna — permite, pues, ble. Para ello seria preciso traslada BARCELONA to de vista subjetivo de rumanos y la construcción de hipótesis cuyas ba• a los sículos a las provincias occ magiares. Si ahora buscamos en los ses son poco firmes, tanto si se exa• dentales, reunir a los sajones alemán' hechos históricas la comprobación de minan desde su aspecto histórico co• con los suabos del Banato y lúe; una de las dos funciones, chocaremos mo desde el geográfico. Veamos si la concentrar a los rumanas en la Tra" con problemas insolubles. Los rumanas composición demográfica actual del Ar• silvania propia. Pero aun sería neci — tal es la tesis oficial y universitaria deal nos revela datos más concretas, sario despoblar las ciudades transil' Alquiler y f eiti tt toldos » en Rumania — son los descendientes aunque de nuevo advertimos que no nicas del elemento magiar, puesto W. Koreska laiss lapermeakltt directas de los dados romanizados en podemos librarnos en absoluto del ma- éste constituye el 40 por 100 de para cubrir mcroancíafl labarismo oficial en el manejo de las población total urbana, mientras d- Fébrlcn de cinta» trifcanegráficAs, los siglas I y II de nuestra Era. los pa pe Ir • carbón, cliché* «URYTY- J.G1RALT-MIRÓ. 8.1. cuales poseyeron continuamente el sue• estadísticas. los rumanos poseen una mayoría ap'J fE*, tintos pare efttilogTA6ca» y la de Transilvania. desde donde irra• tan te en los campas. CAS* CBATMAI ra BA.CILOXA uso general. Iln'a chine. lampo• diaron en todas direcciones: hacia el En 1867, el doctor Ficker. austríaca nes, pegamentos: •Koretc*!*. Oficinal jt ttUtrm: Ali Bty. 19» litoral del Mar Negro, los Balcanes y. por lo tanto, persona que puede* Con estas consideraciones silo ' Korcstn, Koifi», etc. TlUfomt ¡0941 reputarse como imparcial, atribula a mos hecho que apuntar la jravedi Euación Norte (IUKUIO) propios, el macizo de Wacedonia y el Encina. 6 - TeKIono 82260 Utlifont jof» Epiro y la Tesalia. A partir de prin• Transilvania 2.115.000 hablUntes. de suma del problema discutido entt BARCELONA (8) SI-CDRSAI-BS cipios del siglo XI. el Ardeal fué con• los cuales 573.000 eran magiares. Esta Hungría y Rumania. Las cuestiones ; Madríd-Lérid.. Valcacia-Culejóa quistada por los monarcas húngaros, última cifra, según el censo oficial orden cultural, agrario y económico ' DELEGACIÓN EN MADRID; (Navarra) -SaataBdcr.p.i.jM-Ca- quienes establecieron un sistema mili• húngara de 1910, ascendió a la de enconan todavía en grado mayor. Sen Oproplo. 88 - Telefono 33673 •etai iZarajcoza) - León - Málaga 918.000. sobre una población total de Delegaciones: Sevilla - Alicanl. tar defensiva en las fronteras carpá- 2.678.367 habitantes. Los rumanos, tn LORENZO GUILLE1 DESTINO SANTIAGO DE CUBA UANDO lord SaUsbury pronunció aquel célebre dis• curso en que se hablaba de las naciones moribun• das, Inglaterra contemplaba el mundo desde la más alti cúspide de su espléndido aislamiento. Poco antes. Su Gra• ciosa Majestad la reina Viclona Alejandrina I había mani• festado su esperanza de que muy pronto llegara a rogarse por ella a bordo de cien acorazados. Y poco después, bas• tó que un día de las dos pequeñas chimeneas laterales del • Majeshc», fondeado en Portsmouth, saliera un poco de humo, para que Francia, con la segunda escuadra de la época, se resignara a sufrir, sin lucha, la tremenda humi• llación de Fashoda. El Gobierno francés se asustó del «Majestic». El Go• bierno español, en trance parecido y reciente, no se había asustado del «/owd». Tal vez debió asustarse; pero, como dijo Sagasta, hubo que optar entre la guerra y el desho• nor. Y en casos así, para España ni ha habido, ni hay, ni puede haber dudas de ningún género. Y el } de julio de 1898, por la mañana, salió de San• tiago de Cuba la escuadra española. A bordo iban unos marinos que no cedían en nada a los mejores del mun• do. Y así resultó la salida una proeza digna de la fábula; como el viaje desde Cabo Verde había resultado una ma• ravilla de estrategia naval que asombró más que a nadie a los ingleses y a nuestros enemigos. El coníríw/m»rímíe (hay se diría vicealmirante) don Pas• cual Cervera y Topete, en sus admirables cartas, las más de ellas dirigidas a don Segismundo Bermejo, ministro de Manna que fué hasta la crisis parcial que se produjo des• pués de Cavite, había expuesto con sencillez de verdadero literato, con el más elevado patriotismo y demostrando su formidable competencia profesional, la verdadera situación de nuestra flota. Los yanquis supieron elegir bien el momen• to. Acababan de entrar en servicio las unidades que ha• bían de ser el núcleo de su futuro poderío marítimo. Y, en cambio, las pocas que teníamos se hallaban desperdi• gadas, y casi todas fuera de servicio. Dos de eüis, y las más importantes por cierto, el "Pelavo» y el -Carlos V», en puertos extranjeros. Aquél, con diez años de servicios, empezando su reforma en La Seyne. Este, arlillándose en El Havre. El «Alfonso X¡lh, inservible. El .Lepante, sin terminar. El «Cardenal Cisneros» y el -Princesa de Astunas*. atrasadísimos en su construcción. El -Catalu- ñam — lo hace constar Cervera en una carta dirigida a su primo Spottomo —, con diez años de grada y sin que se i-islumbrara la perspectiva de su botadura. El "Vizcaya» y el -Oquendo», fatigados de sus viajes a Nueva York y a la Habana, con los fondos sucios, y privados, por lo tan• to, de su andar. Hay que añadir la cuestión de los cie• rres de los cañones de 14 centímetros, que ya había cau• sado una catástrofe a bordo del -Infanta María Teresa*. Y la más chusca de los cañones de 254 milímetros que había de montar el «Cristóbal Co/on» en las torres de proa y popa. La casa constructora trataba de que admitiéra• mos dos que, según parece, habían ya disparado infinidad de veces. Cervera, con un buen sentido admirable, pedía que si, en realidad, no se encontraban otros, se admitie• ran, pues siempre era preferible hacer treinta o cuarenta disparos que no hacer ninguno. No se le hizo el menor caso; y cuando él; cuando el capitán de navio de primera El glorioso Almirante Cervera, Jefe de la Armada española que ante la aplastante superioridad material de la clase don fosé Paredes; cuando los capitanes de navio don escuadra norteamericana, sucumbió heroicamente en el mes de julio de 1898 en Santiago de Cuba. La victoria Joaquín Bustamante, don Víctor María Concas, don Juan de nuestros enemigos, que debian después someter a la peor opresión a las naciones hispanoamericanas, quedó Bautista Lazaga, don Emilio Díaz Moreu, don Antonio Hu• oscurecida por la lección de valor y abnegación de nuestros marinos íate y don Femando Villamil, se convencieron de que no había más remedio que ir al combate, al combate fueron. Primero, el estudio magistral y razonadísimo; luego la tra• cas estaba gravemente herido. No hubo más remedio que fenderse del -Oregon», que se le echaba encima, y em• vesía burlando a los rápidos cruceros auxiliares que infes• embarrancar. El -Almirante Oquendo* corrió igual suerte- barrancó, casi sin averias. Inmediatamente acudió Sampson, taban el Atlántico, y, al fin, el sacrificio consciente y se• Dice Concas que salió ya vencido, y que, sin embargo, ansioso de apresarlo. Pero para él estaba. Díaz Moreo ha• renamente aceptado. Naturalmente, pasó mucho tiempo maniobró de un modo asombroso, como si los disparos del bía dado orden de inundarlo. Y ponerlo a flote y empezar antes de que se les reconociera que hablán escrito con su enemigo fueran salvas inofensivas. Nuestros barcos, en su a hundirse, fué todo uno. Si los yanquis, no se hubieran sangre una de las más trillantes páginas de la Historia clase, no eran malos. Por la pericia de sus jefes y por la precipitado tanto, es posible que /sufrieran podido aprove• Naval; y los reproches, las insidias y las más repugnantes disciplina de su gente, constituían una verdadera escuadra. charlo o, por lo menos, tener con él un trofeo de su des• groserías llovieron sobre ellos y sobre la siempre incom' Pero a Jiesar de que por una estupenda orden mínistenol airada victoria. parahle Marina Real española. estaban clasijicados como «acorazados de segunda clase», ca• Tal fué el último canto del poema sublime que empezó recían en absoluto de condiciones para luchar contra ver- a escribir España el día 12 de Octubre de 1492. El com• Santiago de Cuba no tenía más defensas que algunos ca• daderos buques de línea. Ardiendo fueron üetados a la bate de Santiago de Cuba sobrepasa a las más fabulosas ñones de antecarga del siglo XVlll y los que a toda prisa costa: pero sus máquinas funcionaron hasta el último mo• hazañas de la antigüedad. En el de ¡as Malvinas, en 1914, Se sacaron del crucero «Reina Mercedes», convertido en mento. 5e logró un catorce por ciento de impactos- El ene• lucharon los alemanes como leones. Pero no hay que olvi• pontón. Algunos años más tarde dijo el general Luque. migo sólo logró un siete por ciento. dar que ¡a artillería del -Schamhorst, y del «Gneisenau., siendo ministro de la Guerra, que con sólo dos cañones de Fuera de combate el «Oquendo», y mientras el antiguo causó muchas y muy importantes averias al «Inflexible, y treinta y medio, la escuadra yanqui ni siquiera se hubie• yate «Corsair», propiedad de Pierpont Morgán, convertido al -Invincible,, no obstante ¡a abrumadora superioridad de ra acercado. Tampoco se acercó mucho a pesar de ha• en el aviso -Gloucester». cañoneaba, al amparo del «India• éstos sobre aquéllos. Así se concibe que se hundieran sin ber U n poco. Como que de haberse acercado, en plena na», a los destructores -Furor» y «Píuíón». que poco des• dejar de hacer fuego; que del -Schamhorst, no quedara ni bahía hubieran sido destruidos nuestros barcos. Estos, por pués se hundían, sostuvo el - Vizcaya- una lucha épica con un solo superviviente. Si los impactos que lograron nues• la especial disposición de la boca del puerto, tuvieron que el -¡owa», con el «Oregon», con el •Broofcl-yn» y con el tros buques no hubieran resultado absolutamente inefensi- salir uno a uno. El primero, como es natural, el «Infanta María Teresa*, que arbolaba la insignia de Cervera, y que ••New York,. A la desesperada, se arrancó sobre el -Brook- vos — los yanquis tuvieron un psuerto —, los marinos es• mandaba Concas, que actuaba además como iefe de Estado ¡yn» para tratar de hundirlo con el espolón. El «Broofelyn» pañoles ;amds hubieran pensado en irse a la costa. Pero Mayor de la escuadra, por haber muerto el día antes en dió una «espanta» como las que algunos años después hi• en ¡a situación en que llegaron a encontrarse, obrar de tierra el heroico Bustamante. Los dos cañones de 28 cen• ñeron célebre a Rafael Gómez el «Gallo». La prudencia se• otro modo hubiera sido condenar estúpida e inútslmente a tímetros y los seis de ¡4 que montaba, dispararon con guía siendo la principal cualidad guerrera de nuestros ven• morir en medio de ¡as llamas al resto de las dotaciones. energía y precisión, mientras él se convertía en único cedores. Ya no quedaba otra cosa ¿fue hacer sino imitar blanco de los doce de jj centímetroi y de los dos de ?o al «Infanta María Teresa, y al -Oquendo». Enlate mandó y medio que constituían la artillería principal de los aco• quemar la soberbia bandera de combate que al buque de Han pasado cuarenta y dos años del discurso de las na' razados yanquis «Indiana; -lowaa, mOregón* y «Texas». su mando había regalado la Diputación de Vizcaya. Y, en cienes moribundas. España vive. Y es dueña de aquel Tán• y de todos ¡os de J02 milímetros que reunían éstos y los seguida, a la costa. ger que no pudo ocupar ni en 1860 n» en 1912 por «I cruceros acorazados «Brooklyn* y tNew York-. Poco des• veto de Inglaterra. 5obre ésta se cierne la más tremenda pués de empezar el fuego, el -Infanta María Teresa, ar• Y aüá va toda la jauría contra el Cristóbal Colón,. Este amenaza que ha podido temer desde los tiempos de ¡a ¡n- día. SaHó el -Cristóbal Colón,, al cual molestaron poco ganaba terreno; pero de pronto agotó el combustible de vencibíe. ¿A qué nación se referia el insigne lord SaUs• los yanquis, seguros de alcanzarlo más tarde. Una avería buena calidad. Al emplear otro inferior, perdió marcha. Y bury, que en paz descanse} HIUÜIízó un tubo de vapor. Las bajas eran ya muchas. Con- como le faltaban los cañones que Cervera había aconsejado que se compraran aunque fueran defectuosos, no pudo de• MIGUEL TORMO DESTINO 8

CALENDARIO r SIN FECHAS ,%mmS Solsticio, lieslas oiayores Por JOSÉ PLA g ^ UANDO llega el solsticio de verano en nuestro país, se inicia el periodo de las fiestas mayores. La palabra solsticio viene del latin ("solis sta- tio") y significa el Instante en que el Sol alcanza su máxima declinación boreal o austral — ahora, solsticio de verano, la declinación boreal —. En esta época, el sol, variando muy lentamente su declinación, posee durante unos días casi la misma altura meridiana sobre el horizonte: está como pa• rado. "Solis statio". Son los días más largos del año. Todo esto no tendría la menor importancia — ya que la astronomía recrea• tiva no tiene más valor que el de corregir la pedantería y el orgullo huma• nos en las personas datadas del sentido del ridículo —, sí no fuera porque en este tiempo aparecen sobre nuestro horizonte inmediato estas cosas adorables que se llaman fiestas mayores. Las primeras fiestas se presentan encuadradas por estos fuegos solsticiales de San Juan y de San Pedro, de origen antiquí• simo, y que van desapareciendo de año en año de nuestros campos y de nuestras montañas, sin que la gente cambie su naturaleza esencial. Dentro de mil años o más, aparecerá un historiador dispuesto a lanzarse, a base de constatar la desaparición paulatina de estos fuegos, reputados paganos, por r las alegres vías de la Inducción y deducción históricas: "Cuando desaparecie• ron estos fuegos — dirá el historiador — la gente dió muestras de mayor sen• tido cristiano y moral. Esto es lo que puede afirmarse..." ¡Menudo historia• dor y menudas deducciones históricas! Sí, sí... ¡En eso estamos! Digo, pues, que aparecen por este tiempo las fiestas mayores, y en este país la primera que se nos viene a la mano es la de Palamós, que se celebra el día de San Juan. Suele ser una fiesta un poco ácida y rociada por los últimos chubascos de la primavera. Otros años suele estar Impregnada del más húmedo y fresco leveche que darse pueda. El mar en Palamós. la bahía, el pequeño puerto es algo tan maravilloso, de una tal suavidad de formas y de colores, de un tal ensimismamiento los días de calma y de una tal alga• rabía y libertad de espíritu los días de viento, que no creo pueda imagi• narse un mejor marco para una fiesta. Toda ella transcurre sobre la playa, a treinta metros de las aguas del puerto, ante el gran cielo de la bahía y las Hacia nuevas dulces líneas azules — violeta al atardecer — de los montes lejanos. Por la noche, el puerto silencioso y dormido, con los trémulos clavos de luces verdes y rojas y el vago tremolar de los faroles de los barcos, deja junto a la fiesta una zona de soledad y de misterio, propicia, aunque poco utilizada, a las fórmnlas cosas del amor y i las vaguedades del pensamiento humano. Hace años escribí algo sobre las fiestas mayores. Esta fiesta de Palamós. Esos marinos franceses asisten a a la que suelo Ir. de estar en el país, por la noche, a pasar un rato, me ha lo Santa Misa, a bordo de un puesto sobre la pista de todo un mundo de cosas jiasadas. Sintiéndola mu• buque de guerra. En sus ojos se cho, no he podido alcanzar las fiestas mayores cuando en los pueblos peque• retrata la melancolía que ante ños se celebraban en las casas particulares, la época de los ocho platos, los un hundimiento increíblemente bailes en la gran sala de la casa, los violines lánguidos y los miriñaques^ rápido de su patria se ha apode• Mis recuerdos no pasan, pues, de la época de las medias de seda negra. rado de la nación vecina. — Esos Todo en ellas sucede ya en la calle. El número de platos ha disminuido con• soldcdos, ocupados en la faena siderablemente. Los grandes oficios del santo patrón ya no son las impresio• de la siembra, en la zona de nantes óperas de Mercadante. con el almíbar de los violines alternando con guerra, no calcularían que antes los golpes tremebundos y oscuros de los fiscornos que llenaban a sobresaltar de que las cosechas fuesen en• a veces a los oficiantes hasta hacerles tropezar en la sintaxis latina. Incluso tradas, los tanques enemigos ho• el relleno, que aún se hace, ha perdido, con el azúcar racionado, bastante llarían el pan de Francia. — La encanto. El relleno es un plato que está tan íntimamente ligado con la vecino nación despreció un día la pompa floreal y frutera de la escultura barroca, que la destrucción Implacable aproximación franco-italiana que que ha sufrido el barroco eclesiástico ha puesto una sombra de tristeza, ha Laval propugnaba, y que hoy, fi• quitado oro y esplendor a este delicioso dulce de manzanas. En Palamós me nalmente, parece va a ser un he• convencí hace días de que los patos— el pato con nabos que se come en cho. ¡Cuántos sacríficios se ha• los resopones de las fiestas, propicios a la dialéctica y a la amistad — dejan brían evitado si la inteligencia mucho que desear. La gente continúa empeñada en alimentar las ocas y los entre Laval y Mussolini hubiese patos con estos caracoles pequeños y blanquecinos que en catalán se llaman sido sancionada, años atrás, por "joanets". Esta es una equivocación completa. Hace años, un eclesiástico el Parlamento francés! del país, hombre de poderosa inteligencia y de corazón virginal, me dijo: "No coma usted nunca ni oca ni pato alimentado con caracoles; su carne es dura y coriácea." ¡Cuánto me he acordado, en la vida, del consejo del eclesiástico! Ahora las fiestas mayores se concentran en el entoldado. Ver salir a una familia de su casa para ir a ocupar el palco número 187 de un entoldado no deja de ser un espectáculo impresionante. Ahora los entoldados son de una fastuosidad deslumbradora. Siempre he creído que lo que entienden las personas de imaginación por el país de las hadas es un entoldado. Estas estrias blancas y azules de las pareeds laterales, la profusión de luz, las :• alfombras, los espejos que tantas miradas han reflejado son incitantes de la fantasía humana. Y las chicas, tan jóvenes, ¡qué bellas están los días de fiesta mayor, sobre todo cuando reflejan en la cara y en el cuerpo un asomo de cansancio! En este asunto pasa una cosa muy singular: de joven uno suele aplicar a la belleza femenina una considerable cantidad de sentido ana• lítico. Pero cuando uno va entrando en años, este sentido desaparece y todas las chicas parecen igualmente guapas. A más años, a más experiencia de la vida, menos espíritu científico, menos capacidad para el análisis. Cuando asomé la cabeza por la puerta del entoldado — no me atreví a penetrar, porque ya se sabe que los viejos debemos dejar el sitio a los jóvenes — la música tocaba, con toda la finura de que los profesores eran capaces, el "J'attendraí", esta suave canción francesa que tanto se ha popu• larizado. La canción creaba una atmósfera de seda, las parejas bailaban con visible sedosidad, las familias que ocupaban los 204 palcos del entoldado se adormecían en la dulzura de las ondas sonoras. Era un ejercicio de suavidad general. Mientras se desarrolló este baile nadie me pisó los pies ni sufrí ningún empujón apreciable. Al baile siguiente, las cosas cambiaron y entra• mos en lo que constituye lo que podríamos llamar el aspecto inolvidable de los entoldados: los pisotones. Me pareció incluso que la luz tomaba un as• pecto más agrio y más rutilante. Salí y me fui a pasear por la playa. En el mar había una gran calma. Encendí un cigarrillo y miré al cielo. Las estrellas brillaban un poco cansadas dentro de la luminosidad lechosa y azulada. Esto son los grandes entoldados. Luego existen los reducidos y escuálidos entoldados de los pueblos pequeños, que en las noches de otoño, en la época de/ solsticio austral, parecen, de lejos, gusanos de luz y van unidos a los últimos grillos del año. DESTINO Preocupación en Inglaterra

Los "tommics" de Inglaterra ejer• cen un sevcrísimo control de lo población árabe de Paleitina, la que explica la tranquilidad, por lo menos externa, de este Man• dato en las horas más críticas del Imperio Británico.—Buena artille• ría antiaérea tiene Inglaterra, tal »ex la mejor del mundo. Pero de sobras se ha demostrado que las baterías solas no constituyen una defensa eficax, y la aviación de caxa flojea en Inglaterra, por lo menos en relación a la formida• ble fuerxa aérea del Reich. — En tanta imprevisión está pensando el taciturno Churchill al salir del Palacio de Buckingham, adonde no consigue llevar otras noticias que las de cotidianos desastres.

4, ••i ;íala victoria final Organixoción y disciplina, son dos palabras mágicas que explican mucha parte de los éxitos ale• manes. Ahí vemos a los tripu• lantes de un patrullero de van• guardia descansar en sus literas en las horas fuera de servicio. — Y en la segunda fotografía, unos soldados transportando una balsa neumática por un puente impro• visado g-enas abierto el camina por la artillería. — El planeador de la "Blitxkrieg", de la guerra- relámpago, Adolfo Hitler, sonríe satisfecho mientras escucha los partes de sus éxitos. Punto por punto se realizaron sus previsio• nes. Diríase que el mismo adver• sario se ha esforzado en que se cumplieran con exactitud mate• mática. Es un grande hombre y un hombre de suerte DESTINO 10

octubre, y formará parte de la Colec• LA SAETA ción de biografías noveladas y comen• SBCKETO tadas, de "Editorial Apolo". * » a EN EL AIRE Manuel Machado La misma editorial publicará en breve, formando parte de la "Biblio• pECUERDO DE GIBRALTAR. - So- teca Freya", una nueva versión es• bre la bahía - estaño y plata Z"1 ON carácter de homenaje se ha publicado este volumen, Cari Sandbury ha publicado un pañola del famoso "Viaje sentimental" calcinada —, espejo apenas de un cielo ^ "Poesía», que recoge opera omnia lyrica de Manuel Machado. For• extenso poema que canta la campaña de Laurence Sterne. anonadado y hueco, el Peñón alzaba tuna clara para el poeta y su obra. Se ofrece, en su conjunto glo• de Puerto Rico. En él dedica magní• * ' (T * su insólita giba. Algeciras. atrás, te• bal, el resultado de unos años de vida y experiencia. Desde 1890 a ficos elogios al valor y heroísmo de nia la blanca horizontalidad -- palomas 1940 media una densa etapa de la poesía española. Con el volumen los ejércitos españoles. El Instituto de Literaturas Clásicas en reposo — de las ciudades atricañaV. de Machado ésta se ilustra ya, cómodamente, en la intimidad de un « « * de la Facultad de Filosofía y Letras caso personal. Adquiere, pues, el libro, amplia resonancia histórica. Algeciras era, todavía, "folklore", des• Alvaro Cunqueiro, el gran poeta, ha de Buenos Aires ha comenzado a pu• Y conste, por otra parte, que no es Machado poeta que se garrado sueño, cuchillada de sangre blicar unos interesantes Anales extra• preste a un cotejo minucioso cíe las escuelas que privaron en estos comenzado la traducción de "Napo- sobre una blancura cálida, clemente ordinarios, debidos a excelentes plu• últimos decenios. Original, enteriza, su obra, repite siempre el mis' leáo". de otro gran poeta: Texeira de bajo los arquillos con geranios, durí• Pascoaes. Despertará seguramente mas dedicados por completo al estudio mo pasmo y gozo ante el mundo. de temas de la antigüedad latina. sima en la desolada, desértica intem• Sin embargo, en toda vida hay inevitables fluctuaciones que se enorme interés esta biografía de Na• perie de las plazoletas. ilustran con las corrientes de mo• poleón visto por el temperamento, re• * * * Al otro lado, Gibraltar con su aire da y las tendencias en uso. En la cio y sensible a un tiempo, del escri• El escritor argentino Roberto Le- colonizado, prisionero y extraño, con primera etapa de la obra de Ma• tor portugués. villier ha publicado en Buenos Aires, su espacio constreñido y aprovechado chado gravita inevitablemente el Dice Texeira, refiriéndose a ésta su una extensa biografía de don Francis• con pulcra avaricia, con su extranje- peso circunstancial, anecdótico, de última obra: "Trato a Napoleón como co de Toledo, el gran organizador del ridad. Asfalto y "policemen", lenguas lo que se ha llamado el modernis• ha tratado a San Pablo y a San Je• Perú. exóticas y biblias protestantes. He mo. Su GerineWos es una mues- rónimo; esto es. con toda la libertad Una editorial barcelonesa va a edi• aquí una tierra final, despersonaliza• ta típica. Paje decadente del co• de mí pensamiento, absolutamente li• tar una colección de antologías poé• lor de Uño, que se pasea junto a da: simple garita militar, sin flor ni bre de prejuicios o Intenciones polí• ticas, cuyo primer volumen estará de• los macizos de arrayanes del jar- fruto. ¿Son ingleses esos pobrecillos ticas y religiosas". dicado a Goethe y a los poetas de dílí medieval o, quizi mejor, me- Esta obra aparecerá seguramente en su generación. que andan por la calle? ¿Se escapa• dievalista. Es toda una época, y ron anoche, a gatas, de La Línea, de nos hace pensar en aquellas lán• Tarifa, de la Sierra de Cádiz? Nues• guidas mujeres que decoran al• tro cochero, el pobre, se siente, sin gún comedor de casa del nove• embargo, un subdito de John Bull. cientos y que fijó en innumerables Hay que oírle: ilustraciones, entre otros, Alejan• "Nosotro loh ingleze, zabuté, tene- dro de Riquer. Y no se detiene mo ahora mihmo una guarnición de ahí la sugestión de una época. Desfilan marquesas ochocentistas, LA MEJOR REINA DE ESPAÑA. Fi• esta obra tres interpretaciones de as• ecoceze que quita el hipo... ¡Zí, zeñó!" colombinas, pierrots, arlequines guración dramática en un prólogo y pectos esenciales del fenómeno estético El caballejo trota por el asfalto som• con sus pequeñas historias de llan• tres actos, en verso y en prosa. Por barroco en nuestras letras clásicas. breado de árboles raquíticos a lo lar• to y melancolía a la luz de la lu• Luis Rosales y Luis Felipe Vi• Condúcele a su punto de vista una go de las baterías de la defensa de na. Los últimos carnavales ofre- I van co. ingénita tendencia a la critica ideoló• tierra. En un mástil pende lacia, bajo cen su leyenda espectral. gica de los hechos culturales, cuya raíz No buscan los autores, y les aplau• la tarde caliginosa, una bandera defi• La etapa parisiense de Manuel Machado daría cuenta segura• espiritual trata siempre de captar bajo dimos por ello, llevar sólo a la escena nitivamente extraña. mente de este aspecto más accidental y europeizante de su obra. la apariencia de sus múltiples manifes• algdn momento importante, dinámico, Su silueta definitiva, empero, quedaría desdibujada si nos paráse• taciones concretas. teatral de la vida de la Reina Católica, mos en él. Lo más esencial de su espíritu salía a flote también sino Que nos dan en una serie de cua• Ampliamente estudiado el aspecto entre la maraña de lo momentáneamente decorativo. En uLa fiesta dros — con los que integran toda la AS SEIS PALMERAS DE LA PLA• nacional» nace ya su sensibilidad atenta por lo" netamente espa• obra — su visión de la personalidad L ZA REAL. - Una de estas noches ñol y castizo. No caemos en el espejismo del tema. Más profun• de Isabel, que se nos aclara al enten• el poeta Joaquín Romero Murube, con• damente, aludimos a un ímpetu y a un entusiasmo que no puede derla mujer completa, madre y cristia• servador del Alcázar de Sevilla y — tí• desvirtuar incluso aquella imagen del foulard soberbio que traiciona na. Muy madre: madre dolorosa, en tulo más alto — jardinero mayor de sus todavía al hombre de mundo que fué Machado. las desgracias de sus hijos de carne. jardines, me ha mostrado las seis pal• Madre en la entereza que frente a meras egregias, esbeltísimas, que deco• Después les caminos se aclaran y la poesía bifurcada del poe- ellas mantuvo para !a defensa de to• ran el final del jardincillo de la iz• ta — por un lado lo castizamente popular, por el otro lo culto dos. Madre en su felicidad, madre quierda - según se entra desde las servido en sonetos que describen un cuadro o una figura — se enraiza profundamente en su tierra y su vida. Toman nervio y también en su lucha dura y violenta Ramblas —de nuestra maravillosa Pla• sobre todo, gracia, palabras y estrofas. Da el tono de su poesía por el bien de su pueblo-hijo. za Real. Palmeras aéreas, empinadas la misma facilidad con que se logra la soldadura con una tradi• Deliciosamente ambientada la ficura sobre sí mismas, de una grácil auda• ción. Machado no llega a la voz más perenne de la tierra gracias de doña Isabel. Y por ello sólo, casi •55 cia, que se destacan por su elegancia a un esfuerzo intelectual y voluntarioso. Descubre esta voz en él decimos exactamente. Toda aquella Es• suprema y conmovedora, cielo arriba. y deja que aflore y se derrame abundantemente. Se vierte impura paña nos aparece en su variedad: da• y expresiva, sin complicaciones, espontánea, inmediatamente enar• Si nuestro Setecientos no supo dar• mas atormentadas por el amor-pecado, decida de sol y de vino. Por lo normal surge la primera estrofa con nos el obligado Jardín Botánico que gremios conocedores y amantes de su un impulso irrefrenable, muchas veces en contundente forma admi• su pasión ordenadora exigía, ha dejado trabajo, busca de Dios, antiguas ener• rativa o imperativa. acá y allá, en rincones exquisitos de gías dispersas unidas ya, charlas de nuestra ciudad, un plantel de plantas Una de las demostraciones que podrían ensayarse para eviden• soldados, ansia de la juventud... Se• exóticas, de árboles selectísimos. ciar hasta qué punto Machado halló en su propia sangre la voz ñalemos la actualización de la historia.^ de sus versos, podría servirse de su original entronque con lo po• en estos dos últimos puntos: ¡cuánto pular. Hemos visto en estos últimos tiempos de poesía afortuna• se parece García, en su ímpetu enamo• dos intentos para la revalorización de bs formas poéticas no rado, a los caballeros de nuestro tiem• XAMENES. - Bajo la canícula, el cultas. Se ha prodigado el romance y la canción. Pero, normal• po! Tan bien se despierta aquello, que Guillermo Díaz-Plaja, "Sagitario", E escolar se extenúa ante el gesto mente, estos esfuerzos, además del ingenio del vate, nacen de se engarzan en la obra como en su por F. Serra atento de los examinadores. Se dice una cierta reconstrucción erudita. Se prefiere, por ejemplo, el tono molde las poesías populares castellanas que los exámenes deben humanizarse, del romance más alambicado y barroco. Se parte de siglos algo que se insertan. Han conseguido hacer y acaso sea cierto. Pero dejad al buen remotos y si es verdad que el origen implica una mayor pureza, Luis Rosales y Luis Felipe Vivantos formal y técnico de la literatura ba• escolar con la impresión de que su obliga también a una cierta lejanía. Machado en cambio, en sus historia viva. rroca por otros autores, e! joven y examen es una dura lid, una prueba soleares, seguidillas, tonás, malagueñas, se basa sobre todo en lo fecundo ensayista ha intentado calar que halla modernamente en callejuelas y tascas andaluzas. Senti• en que su saber forcejea hasta ceñir En el estilo podríamos distinguir algo más hondo, adentrándose en el mos el XVIII y el XIX en sus coplas. No hay en ellas el más laureles. tres elementos: a veces un modo de estudio del estado de espíritu que pro• pequeño asomo de depuración libresca. Trabazón real, directa, de ¡La emoción de los exámenes! Es expresión hoy corriente; segundo: van• dujo nuestra literatura del XVII. Y lo un hombre que al tiempo de escribirlas, vivió sus coplas. guardismo moderado: niebla, subcons• la emoción que debe sellar a todos los ha hecho con la intuición y la capaci• El alma vasta, dilatada, de Machado, si logró excepcionales ciente, aunque cuidado y limpio, en gestos trascendentes de nuestra vida. dad de relacionar que caracterizan to• frutos en esta vena lírica y popular, conoce también la ilusión y las expresiones de sentimiento. Y, Hace unas semanas, unos alumnos de das sus producciones. el riesgo de otros temas. Existe una sucesiva polarización hacia finalmente, asimilación, no imitación, bachillerato eran requeridos por su Desarrolla en el primer ensayo di• todo — paisaje, patria, religión — que evidencia hasta qué punto de nuestros clásicos: versos hay fá• versos puntos de vista insinuados en profesor de Literatura para que, en la vida se confunde con la poesía. Todo es poesía. Posee excelen• cilmente atribuíbles a alguno de ellos. un ejercicio de redacción, explicasen te ojo para mirar y un estro abundante para cantar. Ciertos exclu• Cosa de maravilla. su libro sobre la poesía lírica española. la más fuerte emoción de su adoles• sivismos literarios hallarán seguramente en su obra un excesivo Rastrea, a través de ciertos autores La poesía baña toda la obra. Sur• cencia. Estos muchachos han vivido, abandono que en realidad no es sólo poético sino también tem• plenamente característicos, la descom• gen los eternos temas nuestros: Dios en su mayor parte, los azares de la peramental. Machado ha escrito que su voluntad se ha muerto en posición de los ideales "arquettpicos" y el Hombre, sueños, vida, amor. "En• guerra y de la revolución: saqueos, una nocbt de luna. Esta frase puede concretar lo más característico del Renacimiento por el despeñadero de tre el vivir y el soñar, está de Dios la Incendios, bombardeos, hambre... Sin de su obra: don fácil, sin depuraciones, pura efusión, abundancia lo individual, de lo intelectual y del pe• . presencia." embargo, el setenta por ciento de los frondosa que se excusa en una lozanía perenne. Pero si por lo simismo. Interesa, sobre todo, la escolares encabezaba su escrito con general la obra del poeta no nace de una fuerza de concentración, Escrita toda en un castellano que "radical disyunción" que establece excita al querer, ofrece "La mejor Rei• estos o parecidos términos: no falta en ella la profunda' nota intimista, como en "Morir, dor• entre el arte y sentimiento vital del na de España" un conjunto armóni• mir» o en la inolvidable cuarteta, de una indeterminación que corre Seiscientos y el del Quinientos. Cree• "Siempre recordaré con emoción la co. Pueden sus artífices sentir la sa• parejas con la de la mejor poesía alemana: mos que es éste un punto de historia jornada en que por primera vez fui tisfacción de la obra lograda. de nuestras letras que queda perfecta• llevado al Instituto para realizar mi J. C. mente ¡lustrado en la obra que co- examen de ingreso. El corazón me ba• Dichoso es el que olvida mentamos- tía con violencia..." el por qué del viaje, y en la estrella, en la flor, en el celaje, EL ESPIRITU DEL BARROCO, por El último ensayo creemos que es lo deja su alma prendida. Guillermo Díaz-Plaja. Editorial Apo• más agudo, completo y logrado de la^ JUAN TEIXIDOR lo. Barcelona. obra. Las consecuencias de aquel fa• SAGITARIO Guillermo Díaz-Plaja nos ofrece en tigado despego intelectual hacia IB 11 DESTINO

SALAS DE EXPOSICION posición del hombre renicentisla qu« 5C in»ináa en el primer ensayo, quedan ns immii LA PINACOTECA aquí plenamente explicadas. En saga• Con císima exploración recorre el autor, en EXPOSICION COLECTIVA (ACA• MARCOS Y GRADADOS su estilo acerado, plástico, dúctil, el A.i DEMIA DE BELLAS ARTES DE SA- Puto Gr»cU, i« -T«l<:oDO 1370» tránsito del interís por el tema y su BADELL). - En i\ transcurso d«l pre• BARCE LONA noblexa a la atención por la realidad g% 1 MJL'E espeso de brazos, piernas y tórax. Un sente «fio esti entidad cultural vallt- inmediata, por la manera Se «*r r«aB- sana ha celebrado varias exposiciones zado el tema. Es el trueque del ohieto O taller de escultor será siempre algo de aquelarre, de un relevante y positivo interés. por la técnica. Afcudísimas las obser• sobre todo si uno se pasea por la fronda extraña en una Ocupa, desde hace algunos años ya, Exposición vaciones sobre el áiiRulo desde el cual semioscuridad, cuando se confunden las cosw en un se ve a la mujer, desprovista ahora de limbo de aterciopeladas tonalidades. Las formas nítidas se la presidencia de este centro de arte de Pintura Moderna alusiones, "espectáculo concreto", y pierden bajo los lienzos fantasmales que las cubren. Adi• un distinguido y autentico amante de sobre los que llama "bodegones poéti- vinamos el esfuerzo de un sueño asomándose en el desbastado yeso. Implora la pintura, meritorio coleccionista e cos", y la explicación del significado en un rincón un brazo de ninfa que perdió su trato con el tronco. Se ríe impulsador delicado y tenaz en todo lo de lo obsceno en poesía. el cuerpo de bronce de un atleta de la confusa forma de un desnudo jhao- que con la pintura se relaciona. En dunado a medio quehacer. ¡Oh difícil y provisional Convivencia en espfta torno suyo y del escogido y simpático Finalmente, el autor va Uecando a SALA BUSQUETS de una soledad que se echa de menos ininterrumpidamente! Estos seres de grupo de amigos gue componen la ci• las últimas consecuencias de su estu• mármol, yeso o bronce, exigen mucho ámbito, dilatado espacio para su yida tada academia sabadellense hemos vis• Muebles. .Marco» dio, en el capítulo sobre "el arle de to organizarse, como decíamos antes, exiScctante y narcísista — para contemplarse en la tarde o en el estanque 7 Objeto» de Arto no llegar". "Toda postura barroca mi• un número variado de exposiciones, ra las volutas en que se desenvuelve, que los recoge amorosamente, Pero amontonados así, como falange informe, sacudidos por enigmáticos movimientos, presas de una especie de delirio co• entre las que recordamos, por su ex• los accidentes de su tránsito, con más trema importancia, la Exposición de Paseo de Gracia, 36 fervor que la meta a que sé deslina." lectivo que los petrificó, furiu- "ArtisUs de fin de siglo" y la lla• En esta actitud halla el autor la raíz sauicntc deben asoiuüraruus y mada de los "Hueve Pintores", com• del doble aspecto del barroquismo: la asustarnos. puesta de obras y de firmas contem• Dibujos seleccionados escenografía y el nihilisaio íntimo. Y Todos estos pensamientos se sitúa al fenómeno en la curva del pen• poráneas muy seleccionadas. habían apoderado de nuestro " _ samiento europeo en que asoma ya la Estos últimos días visitábamos en animo durante unos breves ins• Duda. Sólo que. como él indica, en los locales de la mencionada Acade• tantes. Pero el escultor Üu- Espafia, el "atroz nihilismo" de lo mia un variado y sugestivo conjunto uyacb — nuestro amable acuin- barroco se limita • lo humano y co• de pinturas y dibujos de artistas lo• pauante, poseeUor y creador de I V Galeriaf Layelanas rrobora la fe en lo sobrenatural. cales. cata casa de miedo —• corrió » Av. ¡at* Aaiosio. «i]-T«l. •>(•* En ti centro de la sala destacaba, Dfaz-Plaja ha conseguido en este en- las curuuas de los ampUos vea- por su pletórica calidad y por su aayo situar adecuadamente al barro• Unales y la lúa a raudales di- -— autoridad definitiva, por decirle así. quismo hteranu español en el momento »>po imaginaciones absuidas. oe- , Cuadros, Antigüe• de museo, una figura bellísima de del pensamimto europeo y captar su volvienUo a Us cosas sus limi• dades.Objetos para mujer con una niña junto a ella, en más honda entraña espiritual. Notable tes y su cotidiana normalidad. morado oscuro, en azules y en verdes regalos. Moldaras contribución la suya a la comprensión ¡Oh, que tonta cosa, y que be- dorados. Aunque reducidísima de pro• y Marcea de este fundamental fenómeno estático. ua, la luz! fodemos reanudar , porciones — se trata de un simple y otra vez, sin angustias, el hilo E. N. pequeño dibujo al lápiz plomo - consi• Oe nuestra conversación mtc- LA MANCHA DE DON QUIJOTE, por deramos como una obra quintaesen• rrumptda por el forcejeo de una Pablo Cavestany. Editorial Juven• ciada y perfecta, la cabecita de niña llave en la ceiradura, y por ios MARCOS CUADROS tud. Barcelona. 1940. — un precioso retrato familiar, sin du- , breves pasos a oscuras en da — que expone Marlet. Señalemos Siguiendo el mismo tono de breviario esta selva a primera vista in- también un irisado y sensible flore• de sus Ubros anteriores, "Los casados cu.uprensibic. Vemos ya sillones fl ro, de rosas té. de Mario de Vilato- imperfectos" y "El paraíso encon• amables, para scntaise en ellos. Las estatuas sonríen condescendientes y se bá; un bodegón de flores, claras y trado", Pablo Cavestany ha publicado recrean en-la atmóslera clara. Fueron hechas para esto: claridad, sol, aire rutilantes de color, de I. Plans; dos últimamente "La Mancha de Don Qui• fresco. Sin estas cosas no podrían existir. excelentes paisajes de Clapés; una fina SALA jote", amena disertación sobre los de• Empezamos a contemplarlas y • admirarlas. Obras grandes, ambi- naturaleza muerta de Vila Plana: unas beres del patriota, que puede tener ciosas, que hablan de lema» lardes recostada» en igoras o jardates medi- una gran eficacia. Cuenta para ello Ca• pinturas, francas de color, de Cas- Le.raneos. Duayach vive una tradición eterna que taladra a través de todos vestany con un dominio absoluto de tells: una marina, verdosa y azulada, los sistemas — arcaísmo a barroco — una oiisuia intención de serenidad, los recursos de up género que, si tuvo de Lloret, de Manuel Salas; un bode• GALERIA DB ARTB fersule, por otra parte, en su ooia aquella comprensión munumenul 4e la en siglos pasados momentos de gran gón de Cantó; un retrato de la se• escultura. Puede cultivar la tauagra exquisita; pero prefiere la fuente o el C. de Cíenlo, 323 esplendor, se había diluido moderna• ñorita Pía, por Molins de Mur, con monumento, con sus peanas y sus magn.licencias. # mente en insulsos epitomes que no per• un mantón encarnado, una faja verde Por u no proclamaran la uilinila serenidad de Dunyacb estas esculturas Exposición de Pintura dían nunca su carácter de asignatura y unas rosas; unos amplios paisajes suyas que contemplamos, s« cuidarían de eiío las propias palabras del artista, Moderna obligada y poco sentida. de Castells, de Raimundo Roca; unas lentas, pavés, circunspectas, casi tímidas. playas rocosas de Blanes, de Bedos; Exactamente encajada con el nuevo tiempo, este tipo de literatura reanuda —Después de una cantidad considerable de años, pasados en un cons• un nota y unos bodegones de Vila una gloriosa tradición literaria que tante UMVW»*» auviette que lodos los pasos se enderezan hacu el Maleras; varios rostros expresivos, di• dió nombres insignes a las letras his• mismo norte. Todo artista verdaderamente creador — o sea, que no se satis• bujados al lápiz carbón, por Mauricio Sólo sintonluodo la onda de pánicas. Precisamente en la obra de faga con un arte simplemente unitauvo — posee dos o tres ideas esenciales Espcdaler; unas ágiles y afinadas acua• RADIO RSPAÑA DH BAR• Cavestany se nota el esfuerzo para relas de L. Gómez y de Zamora... CELONA. tU 1, B. A. J. 13. que dan un sentido único a su obra desperdigada y varia. La multipUcidad encontrará la emlalún da tu restablecer una soldadura en mal hora üe lormas e inunciones no logra oscurecer esta premisa esencial del espíritu adrado: máximo luterés y rota. que se abre paso por camino» de consciencia o de subconsciencia. Me pre• CARLOS VALERO (LA PINACOTE• grau variedad caracterizan nuestras emisiones: llleram- Tono moral y noble, austero, pre• gunto muchas vece»: «qué he buscado yo con mí escultura? Y esta pregunta CA), - El artista consigue en esta ex• ra, historia, música, teatro, ocupación constante para levantar el es seguraineatc la más importante que podría hacerme usted mismo. Para posición interesarnos por la diversidad baile, Dioderulamo, deporte, nivel de unas vidas cuya trascenden• coateslarla se necesitaría una claridad de visión y de expresión que los actualidades: todo cnanto de sus temas y composiciones, por la pueda agradare Interesar al cia es obvia para lulos. Todo esto in• artistas poca» veces poseemos. gama simpática de color y por la railloyeme Kn susemlnlonus sinuado en claros apotegmas que ti amable sensación de ambiente qut en la B. A. J. 13 presenta dla- algunas veces pueden parecemos de rlanienta valioras y encuDi- —De todos modos, podría aventurar que he buscado siempre para mis ellos se trasluce. Se trata de una pin• una claridad meridiana, es porque no tura netamente concebida y pintada bradas colaboraciones. hemos perdido el incorregible defecto obras un haio de calma y de austeridad. Esto en lo más profundo. También Ko deje de «scncbarel miér• de darnos por enterados de todo sin he procurado revestirlas de ana elegancia que fuera, al mismo tiempo que de una manera clara, que nos atrae, coles 17. • las tl.'iO naesiro tener en cuenta que las mayores ver• espontánea, fruto de madurada reflexión. Todo esto sin perder nunca con• principalmente, por su gran franqueza Reporlajc de la Semana: dades se diferencian de las otras por• tacto con el natural. Nunca sofié para mis obras oirá trascendental inten• y por su optimismo colorístíco. ESPAÑA Bf« AFRICA que necesitan de una formulación in• ción que la que puede aflorar de su más simple presencia. Me molestan las Mencionemos, especialmente, su com• y el dia 18, a las U h. la exterioridades y las declamaciones en el arte. Si hubiera de citar alguna interrumpida para que no duerman de• posición de "San Ginés deis Agu- Pantasia Radiofónica obra que ejempliñcara mis mayores entusiasmos, pensaría en el San Juan masiado en el corazón de los hombres. dells" y "Mañana de primavera", don• II DB JULIO de Douateüo. La impresión que tuve la primera vez que lo vi persiste de vemos una figura femenina junto Asi, pues, nadie se atreverá a mo• todavía, y creo que no desaparecerá jamás. a un algibe pergolado; la tela llamada tejar de innecesario este breve y lim• "El barranco": unas arcillas agrisadas Radio Espaoi de Barcelona n. 2 pio manual de patriotas. Por otra par• —Uno de los más graves problemas que se plantea todo escultor que con unas raíces de árboles medio des• KMISORA B. A. J. IS te, los constantes aciertos de frase y 331.9 m. »04 Kcs. se estime es el de reducir la multiplicidad de la naturaleza a sus lineas cubiertas en los espacios vacíos de tie• de imagen concentran la atención, im• lombla tslndlos, 8 - Tel. 20751 posibilitando monotonía alguna. Se ob• más esenciales. AI recrear la naturaleza no podremos fijarnos con la misma rra; la silueta, simple y profunda, de vian cosas sabidas, pero siempre con atención en lo que es accesorio y en lo que es necesario. Los buenos artis• un "Carro debajo cubierto", pintada una gracia nueva y sintiendo el lati• tas se distinguen de los malos en esta tarea de simplificaci^ que aclara el con unas tonalidades cálidas ocrosas. do de la época, lo que impide que pue• mundo, reduciéndolo a su verdad más eterna. Si copiáramos íntegramente' lo Cinco o seis bodegones — una langos• Sastrería y Camlserii a mHi da confundirse esta obra con una re• que se presenta ante nuestros ojos, el resultado sería lamentable — ama• ta, en carmines violáceos; unos pe• construcción más o menos afortunada. sijo inarmónico de toda clase de valores, sin jerarquizacíón posible. De dazos recién cortados de merluza en todos modos, hay que distinguir la simplificación que proviene de un estudio una espumadera azul; unos meloco• Hemos aludido a la calidad del es• profundu, de la que es el resultado de la impotencia o de la ligereza. En tones, unos nísperos, unos fresones — tilo. En buena parte, la gracn de la estos últimos tiempos sufrimos la invasión de grandes espacios vacíos e completan esta notable exposición y le CASA BELETA obra estriba en esto: brillantes oposi• inútiles que se excusaban precisamente en una loa de la simplificación confieren el carácter especial que an• ciones, encadenamiento total, línea so• Pontanella, JO - Tel. I3Í52 a toda mafcha. Con ella se reducía al mundo de una manera grotesca y todas tes hemos apuntado. bria, pero sinuosa, como obliga toda BARCELONA demostración que pretende ser algo ri• las formas adquirían aire de cosa muerta o matemática. Simplificar no sig• gurosa. Completando esto, un vaho de nifica nunca perder contacto con la vida. Esto debe exigirse sicmpge en el arte. JOSE MARIA JUNOY emoción y de temblor. En algunos mo• COIV1f=WA -VEMXA mentos las frases pierden su aire di• —Con esta fe van pasando los años con sus triunfos y sus desalientos. de hierros y metales vlcjo-i, dáctico para convertirse en -inflamada Ticas, tabas, ejes, flejes, Nosotros, los escultores, tenemos una enorme desventaja en relación con los ¡H IXITO UITOIIU DI IMI chapas, elo. oración. Pero bien sabe todo el mundo pintores. Nuestro arte es difícil, no sólo para los que lo realizamos, sino que tsto tiene también su fuerza de• también para el público. Esto fatalmente nos aisla, nos deja solos, sin de El Frente de los Suspiros JOSE VI LA mostrativa cuando se trata de senti• issisdo ambiente. De todos modos, vaya usted a saber si esto no es a la tlasets: Psllart, m j 158 mientos tan altos como el que está en de la base de este libro. postre un beneficio para la calidad de nuestra obra. JAIME DB SALAS (justo i Pedro IV) • Teléf.» «4 J. T. BARCELONA • Por Un, literatura auténtica..«H J. T. DESTINO 12

La prolección será siempre néccU- ría. La pasta de papel nacional, por ECONOMIA la índole de las materias, por la me• Culíura militar La unidad en Sociedad nor facilidad en la recolección y trans• la producción papelera porte, será siempre más cara de lo Anónima que resultaba la pasta extranjera. la educación nacional NA recentísima disposición de No hay que espantarse aunque para U Hacienda sobre la introducción ello hayamos de renunciar a tener el del palmito de la zona marrogui, ha papel a los precios que se cotizaron NO dt los lints del arte educativo es la cultura (n sus distintos aspec• P a m i a s venido a realzar el interés que ofrecen antes. Si lo que se busca es el interés U tos: «noral. inteligencia, estética, religión, milicia, etc. los esfuerzos gue se realizan en diver• nacional, no cabe duda que al valorar Si repasamos la historia de la Pedagogía, observaremos que. según las sos puntos de España para conseguir con la nueva fabricación unas mate• épocas, los Estados han concedido una mayor Importancia a alguna o algunas Teléfono 51063 que nuestro país produzca toda la rias primas que tan poco valor alcan• de estas manifestaciones culturales, en detrimento de las demás. pasta de papel que necesita. zaron antes, el país saldría beneficioso. Esparta y Atenas trataban de lograr únicamente fieles y leales ciudada• En la mencionada Orden de Ha• CRISTAL nos dispuestos a sacrificarse ciegamente por el Estado, aun a trueque de Castillejos, 119 (S. M.) cienda se dice que los esfuerzos se deshacer incluso la familia. han visto coronados por el éxito, y Roma, en cambio, orientó la educación pública en el sentido moral de BARCELONA en realidad es así. Digamos, en honor exaltar los deberes civiles y familiares. NOTAS BREVES a la verdad, que para llegar a ello no En la Edad Media, por una parte la educación era casi completamente Comercio exterior suizo se ha inventado nada, y que todo lo religiosa y por otra —con las prácticas de la Caballería - tenia un matiz Xas importaciones suizas subieron que se ha hecho no ha sido sino lle• marcadamente individualista. MANUFACTURA DE CORREAS en el mes de mayo último a 201 mi• ARTICULOS DB CUERO var a la práctica una serie de planes, Posteriormente, en la Edad Moderna, se dibujan claramente dos tenden• llones de francos suizos, contra 162'7 PARA TRANSMISION Y ya antiguos, que no habían sido nunca cias: la universalista y la individualista, ligada esta última íntimamente con PARA LA INDUSTRIA millones en mayo de 1939 y 248f8 mi• realizables a causa de la competencia el intelectualismo. llones en abfil de 1940. extranjera. Finalmente, en lo que va de siglo, los principales países han orientado El balance del comercio exterior en Con la madera, el esparto, la paja, su cultura general en un sentido nacionalista y patriótico. mayo de este año arroja un saldo des• la caña, el palmito y otras plantas Esta cultura patriótica se entiende en la escuela moderna como la super- favorable de lll'S millones de fran• vegetales que España produce, hay excitación de la conciencia nacional en los ciudadanos, qo tan sólo para cos suizos, contra 46 millones en materia suficiente para que no haya• que se sientan llamados a defender espontáneamente la Patria en caso de 1939. Las importaciones desde enero mos de volver a la importación de peligro, sino también para impulsar durante la paz sus energías Intelectua• Dirección telcg. j teléf. a mayo de 1940 se elevaron a 1.063*4 CASAI.S, ARAGON, 247 pastas escandinavas. Varias fábricas les, artísticas, industriales, etc., en provecho de la Nación. millones de francos suizos, contra 702 de pasta funcionan ya. otras se están millones en los cinco ¡teneros mese" La educación patriótica ha de asentarse sobre la base de aquellas tradi• instalando y otras se instalarían si de 1939. La exportación subió a 55T6 ciones de grandeza que ponen de relieve el valor de una raza.. ARAGON, 246 hubiese seguridad de que en adelante millones en enero-mayo de este año, España en otros tiempos fué grande y poderosa, y precisamente en su Teléfono 81387 la producción nacional ha de verse contra 55S'7 millones en igual perío• época de esplendor la Ciencia florecía en la penumbra de los claustros y las protegida. do del año pasado. Armas y las Letras caminaban estrechamente unidas. Fué aquella época en BARCELONA que un sencillo monje que llegó a Cardenal, con el alma austera y sobria de un soldado, sentía nobles anhelos e ideales de Imperio, y una mujer, santa esposa y amantisima madre, regía Incomparablemente los destinos de su pue• blo en momentos de dificultad extrema. IMPRESIONES BURSATILES Abarca, pues, nuestra tradición gloriosa una cultura completa, formada ManulacturadeCübiertos por elementos morales, religiosos, intelectuales, artísticos, militares, etc., y FABRICACION DE CINTA, (2 a 5 de julio) por ello la educación nacional patriótica de la España de hoy, que marcha PLANCHA. BARRA. TUBO firme y decidida hacia su resurgimiento como potencia, debe orientarse en el DE ALPACA Y DE LATON L gran éxito de la Emisión de 4'50 por ciento, terminan a 45 por sentido de la amplia unidad de una cultura total. Y DE HILO DE COBRE E Obligaciones del Tesoro 3 por ciento, y las Cajas de Emisiones, pri• Esta unidad de cultura se refiere principalmente a la unidad de fines, ciento, libre de impuestos, con venci• mera serie, a 89, pedidas- pues es indudable que la complejidad del progreso en las distintas activida• Metales y Platería miento a ¿inco años, a la par, referido Mucho más tonificado que en sesio• des de la vida exige hoy, como nunca, una exquisita especialización; mas en nuestio número anterior, ha reper• nes precedentes se ha producida todo sobre esta especialización — y a ella nos referimos — debe campear el cutido tan favorablemente en el sector el grupo de valores de ferrocarriles, supremo interés nacional e ideal patrio. Ribera, s.s. de Fondos Públicos, que, apenas sale a alcanzando en conjunto precios consis• La cristalización actual de este ideal es la "Nación armada" como su• Fébrlco» en Barcelona y Sallenl la venta papel alguno, haciéndose di• tentes, por la impresión de que han prema aspiración, que no implica el mantenimiento constante del pueblo en ALPACA EXTRA BLANCA fícil ejecutar las constantes demandas de quedar beneficiados por el alza de armas y en pie de guerra, sino que supone desde tiempo de paz la existen• ALUMINIO que se reciben de la plaza y de pro• los carburantes, que hacen imprescin• METAL BLANCO cia de una solidaridad espiritual entre todos los ciudadanos merced a la que PLATEADO •PLAT1NGR. vincias, para conseguir el mayor ren• dible la utilización de trenes para el se sientan igualmente dispuestas a defender y sostener los derechos de la CAMPANAS. dimiento de las antiguas Deudas, ante transporte de viajeros y de mercan• CASCABELES Patria en caso preciso, sea con las armas sea con los demás medios materia• Y SIMILARES la gran afluencia de capitales que ofre• cías. Véanse los cambios de cierre: les y morales que hoy han de ponerse en juego. PELTRE €PALMERA. cen los elementos de la Economía Na• Norte segunda. 38'50 por ciento; Pam• HIERRO ESTASADO Naturalmente, esto exige una comunión en los fines educativos civiles y cional, que, ante la indiscutible solidez plonas, 40 por ciento; Almansas 4 por Dirección lelegrtflca:

FABRICA DE HILADOS Y TEJIOOS DE ALGO• DON Y^US MEZCLAS Caspa, 35-Teléfone 11226 - Barcelona DESTINO 14 ESPLENDOR Y DECADENCIA DE UNA SOBERANA DE LA ELEGANCIA DE LOS ESTADOS UNIDOS RITA DE AGOSTA, ESPAÑOLA

O mismo que en los países mo• res parecen dejarles franca entrada, ra. El Museo Metropolitano de Nueva necesitando escatimar el dinero, resis• res. abrumadores, pero irresistibles. L nárquicos, en las Repúblicas exis- pero es sólo una maniobra estratégi• York, 4* una de sus exhibiciones re• tirá a la tentación de fotografiarse Era Eva. Era una Eva que, desterrada Ic •ácciipre una aristocracia. Casi de- ca : saben que, en la mayor parte de trospectivas de ^tdumentaria. ha ex• con frecuencia? del Paraíso Terrenal, ha sabido cubrir biéramo* decir varias aristocracias, la los casos, no tardará el enemigo en puesto el guardarropa que dejó a su Acaso algún día se escriba una ex• de costosas alfombras el suelo que nacional y las provinciales o locales, perder armas y bagajes. Pero sí éste fallecimiento nuestra admirada cotn- ' tensa biografía de Rita Lydig. Bien debía ahora pisar. Era una Eva que. cuyas categorías y linea divisoria se• logra conservarlos y sobrevivir..., s* patriota, un vestuario que había per• la merece, no sólo por su rara perfec• de la fauna original, apenas si ha ría muy complicado establecer. le hace sítk», aunque sólo sea apa• manecido oculto y celosamente con• ción estética — se En un país tan vasto y heterogéneo rente y temporalmente. No son mu• servado durante un cuarto de siglo. consideraba que po• como los Estados t'nidos, las aristo• chos los intrusos que llegaron a la La Reina de la Elegancia de los co• seía, entre otros en• cracias tienen que presentar, aspecto, terrera generación. mienzos de siglo emerge hoy del cer• cantos, la espalda orígenes y manifestaciones muy diver• Es. pues, lógico y natural que la cano pasado corno un espectro, pero más admirable de sas. Forzosamente, las rivalidades en• "nobleza" neoyorquina, en defensa revestida de postuma y melancólica su época —sino tre unas y otras, las pretensiones a propia, no admita tampoco ingerencias gloria. "Las hijas de las madres que como condensación una arbitraria superioridad han de rc- extranjeras. Como novedad. como envidiaron tanto..." envidian hoy to• y síntesis del "eter• •ultar casi irreconciliables. Boston, en atracción momentánea, muy bien: la davía a la mujer que pudo acumular no femenino". Era Massachussels, y Virginia, con SUÍ sociedad de la gran metrópoli está dis• tantos tesoros de indumento, i Hay tan• una mujer kaleidos- reales orígenes ingleses; Filadelfia, con puesta a recibir y a obsequiar lo mis• to que podría utilizarse aún ahora! cóptea, polifacética sus laboriosos cuáqueros; Luisiana, con mo a 'príncipes y duques desterrados Como consecuencia inmediata de esa como una gema, y su ascendencia francesa e hispana; que a escritores y artistas reputados, Exposición, se ha hablado muchísimo como ésta siempre Florida y California, con sus timbres que a las celebridades científicas, po• de la señora Lydig. desconocida por radiante. Era una de nobleza española, no pueden jamás líticas, militares o financieras del mun• b nueva generación. Se discuten su mujer cuyo tacto y ceder uno a otro en cuestiones de do entero, por poco que sus modales personalidad, su vida, su belleza, su "esprit" convertía procedencia o prioridad. V no faltan sociales lo permitan. Y yá con las encanto, su exquisitez, su ingenio, sus en rendidos y sin• todavía otras zonas que blasonan las debidas distancias, como graciosa con• caprichos, su peculiar "chic", las ra• ceros amigos a hom• ' proezas de sus primeros exploradores, descendencia, acoge a veces i los zones todas que contribuyeron a po• bres del nível inte• como ocurre con Lasalle y el Caballe• aristócratas empobrecidos, a los in- ner en sus manos el imperial centro lectual de un Cle- ro de la Mothe Cadillac, en la región mflerados políticos o a otros persona- de la elegancia americana. Un cono• menceau, un Tar- de los Grandes Lagos, contigua al Ca• jillos extranjeros. Por supuesto, las cido escritor, Frank Crowninshield, U dieu, un Bergson, nadá. V Washington, capital de la Re• cualidades individuales de cada uno ha dedicado un sentido y evocador ar• que conservaron co• pública Norteamericana, posee, por su• disipan o confirman la benevolencia ticulo en un reciente numero de "Yo• rrespondencia con puesto, un selecto compendio de todas inicial. gue", revista muy familiar a no pocas ella durante aftos. las aristocracias del país, sensiblemen• Para las mujeres es mucho más re• damas españolas. Grandes devotos y te acrecido por las grandes figuras del milgada. Es rara la personalidad fe• Rita de Acosta había nacido en Ma• admiradores suyos mundo político, burocrát;cop judicial, menina extranjera que consigue en drid, pero sus padres solían residir en fueron también ar• militar, naval, etc., y sus cónyuges los salones de la "crema" neoyorqui• Nueva York, ciudad en la que ella tistas como Rodin, y descendientes. nos un puesto estable y permanente pasó casi toda su infancia, a excep• como Paderevsky, Sin embargo, Nueva York habrá sa• en primera fila. De hacerse alguna ción de un año en un convento fran• como Puccini. co• bido conservar su carácter distintivo excepción será a favor de una ingle• cés. La mayor y U mis bella de mo la Duse. la Ré- propio. A sus pergaminos de temprana sa, de una sajona... ¡Pero una latina! cuatro hermanas, a los dieciocho años jane e Yvette Guil- Montillo/ pañuelo, abanico... hasta los zapatos os• colonización holandesa pudo agregar el Sin embargo, hubo una española, contrajo matrimonio con un rico ame• bert. tentaba inserciones de encoje. El largo paraguas de brillo de su prosperidad nierrantiL Fa• una madrileña, que logró reinar en la ricano, Mr. William E. Dodge Stokes, Lejos de pensar la época lleva un puño de brillante montado sobre milias como las Vanderbilt o los Bel- alta sociedad neoyorquina. Y ellu no que tenía veinte más que ella. Se di• sólo en trapos, co• una vara de platino. El colgante que aparece en lo mont, por ejemplo, que pudieron con• sólo meteóricamente, sino durante un vorció pocos años después, pero en mo ocurre con, las foto os de costosos "brillantes negros" servar durante tres o cuatro genera• número de años... lo que pueden y 1902 se casó de nuevo con un bri• mujeres que deben ciones su posición social y su riqueza, suelen durar los triunfos femeninos. llante capitán de voluntarios. Philip sostener su prestigio de reinas de la conservado para su distracción el ca• constituyen un compacto núcleo que La que asi se impuso fué Rita de Lydig, hombre que reunía un exce• moda, gastó gran parte de su fortuna ballo, el perro, el gato y algunas aves; defiende el reducto de su prestigio Acosta y Hernández de Alba. Pero lente físico a una gran fortuna y po• en adquirir magníficos muebles y obras pero que convierte al resto de los ani• contra los constantes y feroces asaltos allí era llamada Rita Lydig. sición social. Pero también este ma• de arte, de diverso origen, pero siem• males, incluyendo a su falaz consejera de los millonarios, más o menos me- trimonio resultó poco feliz y hubo de pre de primer orden. Prueba de ello la serpiente, en sus proveedores de teóricos, que quisieran penetrar en la Una circunstancia ha venido a dar terminar en un divorcio. es que, después de su fallecimiento, ornamentos, Jorque, eso sí, era una social fortaleza. A veces, los defenso• súbito y destacador relieve a su figu• Eva que complementó la primitiva ho• Sola, independiente y rica. la señora se obtuvieron elevados precios por casi ja de parra hasta poseer un vestuario de Lydig se dedicó primero a viajar todas sus posesiones artísticas: una ta• para el que eran insuficientes las ho• por Europa. Estuvo en España y «a picería ñamenca se vendió en 40.000 jas de todos los árboles del edénico Rusia y aun vivió alguna temporada dólares; un plato hispanoárabe, en jardín. en París. El resto del tiempo continuó S.000. y otros objetos en proporción residiendo en su preciosa casa de Nue• Pero esa misma refinada Rita de Por ello, al permitirnos presentar a va York, siempre en la elegante opu• Acosta, que sabía sentir el arte y la Rita de Acosta como un ejemplar ul lencia, rayana en la prodigalidad, que música, que podía conversar v co• tratípico o sintético de su sexo, y a constituía el marco adecuado y casi rresponder inteligentemente con los pesar del apremio de espacio, hemos indispensable para su belleza y para grandes cerebros de su época, era ca• de procurar reintegrarnos en el favor su temperamento. paz igualmente de sumergirse en las ac de nuestras lectoras dedicando unos párrafos suplementarios a mencionar Pasados los años, ahita quizá de tividades mis opuestas. Así, a raíz de brevísima mente algo acerca del excep mundanales glorias o acobardada aca• su segundo matrimonio, tuvo una tem• cioual guardarropa que poseía la ame so por las íntimas revelaciones del es• porada en que le dió por los caballos. ricanizada madrileñita. Hay que su-' pejo, se fué apartando gradualmente Su esbelta figura se erguía graciosa• poner que centenares de vestidos, de la vida de sociedad; y retirada de mente sobre el alto pescante de un sombreros, zapatos, etc., fueron rega• ella casi enteramente estaba a su muer• ''mail coach" de cuatro caballos, a los lados casi nuevos en yida de la pró te, en octubre de 1929. que guiaba magistralmente por las con• diga y exigente portadora; y lo que Esta escueta nota biográfica sería gestionadas calles de Nueva York o quedó a su muerte era sólo una parle notoriamente insuficiente para dar una de París, o sobre la silla de un "pura de lo que utilizó o pensaba utilizar idea del supremo papel que desempeñó sangre", al que hacia saltar airosa• durante los últimos tiempos de su aquella madrileña en el mundo social mente en los coucursos hípicos. Más "reinado". neoyorquino de los primeros lustros tarde, en unión de otra de las más del presente siglo. Mucho mejor que encopetadas damas de la sociedad ame• Los zapatos, por ejemplo. ¿Qué mu• las palabras revelan el hechizo de su ricana, la plutocrática y exigente jer no se preocupa de ír lo mejor cal personalidad los retratos que de ella Mrs. O. U. Belmont. fué de las pri• zada posible? Rila de Acosta Lydic se conservan. Los mejores artistas de meras aristócratas americanas que pa• dejó más de 150 pares de zapatos su tiempo, los de mayor fama inter• trocinaron el movimiento en favor del Pero no quedaron así como así. En nacional como especialistas en traducir sufragio femenino. Igualmente se ocu• primer lugar, cada par había sido plásticamente no ya el rostro o la figu pó con ahinco en obras de carácter diseñado especialmente para ella por ra femenina, sino su idiusiherasia psi• social o benéfico, entre ellas una so• Yantourni, el encargado de la Sección cológica, encontraron en Rita de Acos• ciedad contra el uso de los estupefa• del Calzado Histórico en el Musco de ta inagotable fuente de inspiración. cientes. Y a temporadas, primero, y Cluny de París, Muchos de ellos están Testimonio irrefutable de la fascina- permanentemente después, en sus úl• confeccionados con raros y seculares -ción que debió tjercer aquella mujer timos años de vida, se dedicó de lleno brocados y terciopelos. Cada zapato o son los retratos que hicieron de ella el a las prácticas reGgiosas; abjuró el zapatilla está colocado en su horma, italiano Boldini — dos: uno que fué protestantismo, hizo penitencia por sus construida ésta de lígerísíma madera, adquirido por el Museo de Luxembur• divorcios (y hay que suponer que no ahuecada por dentro, para disminuii go y pasará al Louvre. y otro, hoy le faltarían luego frecuentes ofertas su peso, y llevando esculpido el nom ya en la colección del Barón Mauricio matrimoniales), y siguió devotamente bre de su poseedora: Rita. Cada par de Rothschild —. el español Zuloaga, los piadosos consejos de su director de calzado tiene su bolsa especial con el inglés Sargent, el francés Helleu (el espiritual, monseñor Lavelle. un número. Y numerados también es tán los baulitos especiales, hechos de de las inimitables "puntas secas") y Esta misma versatilidad la convier• piel de Rusia y forrados de terciopel" el americano Charles Dana Gibson. te en un arquetipo de feminidad. Como blanco, en que se guardaban y trans• uno de los mejores dibajantes a plu• se diría hoy. era una mujer "cíen por portaban; doce pares en cada baúl ma del mundo. EDo sin contar, natu• cien", con todos los encantos físicos Muchos de los pares expuestos no ha ralmente, las numerosísimas fotogra• y morales y todos los defectos de un lino de los retratos de Rito de Acostó que pintó Boldini. Se holla• brán sido llevados ni una sola vez- fías que de ella existían. ¿Qué mu• sexo, todos ellos quintaesenciados, in• ba últimamente en el Museo de Luxemburgo, pero debía posar al jer, sabiéndose bella y elegante, y no del Louvre explicables, intrigadores, trastornado- Pasando por alto los vestido» y U 15 DESTINO ropa interior, mencionaremos tan sólo la hubiesen mantenido lejos de su país la pasión que nuestra extraordinaria natal Estando ya muy enferma, su compatriota sentía por los encajes. hermana Mercedes que la cuidaba la ¡Son tan femeninos!... Poseía una es• incorporó un poco, a pesar del semi- pléndida colección de mantillas, algu• letargo de la paciente. Y al notar en nas de los siglos XIÍ. XIV y XV. ésta el calor de la fiebre en su fren• Usaba encajes en toda su ropa inte• te, le dió un poco de aire con un aba• rior; y en lo exterior, siempre que la nico, moda o el estilo los hacían siquiera —i Qué haces?-—preguntó Rita, sin tulerables. Basta mencionar que en fuerzas ya ni para abrir sus ojos... CRUCIGRAMAS GRAFOLOGIA HUMOR aquellos grandes ojos oscuros qué ha los últimos años había acumulado 87 1 Vi <• 5 6 7 8 Por NIGROM abrigos de terciopelo negro, que ape• bían esclavizado a tantos hombres. Problemas de la circulación PAÜRINITO. — Voluntad iría y ras si se diferenciaban uno de otro en —^Abanicarte un poco nada mis— despótica la suya. Le gusta imponerse las inserciones y adornos de encajp. contestó Mercedes. a los demás, que se dobleguen a us• Otra debilidad suya eran los abani• —¿Es con un abanico español?— ted. Un mucho de vulgaridad en su cos, de uso poco frecuente en los Es inquirió la enferma. 3 c iffliiir! concepto de la vida y en sus ideales. lados Unidos. Al morir, dejó la se• ...Rila de Acosta. emperatriz de la Amor al dinero y a los placeres ma• ñora de Lydig 73 de ellos, de encaje moda, reina de la'alegancia, voluble, teriales. Disimulo de carácter. En el en su mayoría. ¿Qué mujer en el versátil, caprichosa, femenina hasta la fondo, buenos sentimientos. Carece de mundo manejaba el abanico como la exageración, a pesar de su externo método. Buena memoria. Ligero or• española de hace unos lustros? Pre- barniz de americaniyno, murió cató• gullo. Sabe u»ar de prudencia. De• cuntad a nuestros abuelos, a nuestros lica y murió acordándose de su Patria. Horizontales: 1. Agitación del mar. masiado sincero, nene usted bastan• La circulación vista desde el padres... ¿No habría de perdonarla Aquel que ' • 2. Interjección española. Número. - tes defectos, pero si pone e»a volun• Y con abanicos terminaremos tam• perdonó a María de Magdala? 3. Adornos para las señoras. - 4. In• punto de vista del transeúnte... tad si ya al afán de corregirlos, le bién nuestra larga crónica. Corno ver• Y nosotros, sus paisanos, dediqué- terjección. Hogar. - 5. Animal salva• aseguro que ha de lograrlo. dadero "mot de la fin", en todas sus moste un tierno y postumo tributo de je. Madre (al revés). Piedra plana. acepciones, aprovecharemos la iiguien- simpatía. Sí algo en la vida de Rita - 6. Lo están quienes han trabajado ALDEBARAN. — Imposible que sea te anécdota del articulista americano: pudiera merecer nuestras censuras, re• con exceso. - 7. Animales útiles a la tildado de inconstante, puesto que su Parece ser que el latente amor que cordemos al gran florentino: industria. - 8. Trabajo corporal recio. carácter ñrme. su voluntad inquebran• Rita sentía por España se había re• Verticales: 1. Acostumbra a serlo table le hacen adoptar decisiones irre• avivado en los últimos años de su "Un bel morir tutta una vita onora..." la mujer española. - 2. Reptil quelo- vocables. Ama el dinero. Su gusto ar• existencia. Más de una Vez se lamentó nio. - 3. Lo hace el creyente. Alga tístico no ha sido debidamente culti• de frondas ñtameiitosas. • 4. Corona vado. La memoria es excelente. Di• d« que las circunstancias de su vida FEDERICO DE MADRID sagrada del Egipto, - 5. Personaje de simula sus sentimientos y manifiesta un cuadro de Goya. - 8. Gobernador, por ello generalmente lo que no sien• entre los árabes. Regalan. - 7. Im• te. Algo.de orgullo. La inteligencia es ...y desde el punto de vista del perativo de un verbo refacionado con buena, mas no ha rendido todo su conductor. Laboratorio y Oficina Je Farmacia los libros. • S. Parte del tejado. provecho. Imaginación rica. Cultura. Espiritual, lo que nu le impide a ve• SOLUCION AL NUMERO ces dar importancia a cosas materia• ANTERIOR les y aun dejarse dominar por ellas. MASERI. — Su gusto artístico está (UoUI bien cultivado, y hacen de usted una cía persona capaz de extasiarse ante una re HtsTAMn \ X^O^ J. FERRET manifestación del arte. Voluntad fir• H E BV A R•- me la suya, aunque en su contra he a i o de decirle que juzgo excesiva su obs• tinación. Inteligencia buena. Serenidad Y ROBERT y bizarría. Espiritual. Impenetrabilidad, guarda celosamente sus sentimientos. A C Espíritu filosófico. Dignidad. Sencillex. Director del Laboratorio Muy ligera ambición. Algo de disimu• lo, que proviene de aquel afán suyo Dr. J. FERRET DE QUEROL de no exponer su personalidad ante los extraños. Poca indulgencia. AJEDREZ LUX. — Orden en sus ideas, or• Saber jugar bien y correctamente den también en muchos actos de su las diez o doce primeras jugadas, es vida, mas carece de método y de eco• Parelladaa, 1 - SITGES - Teléfono 81 cosa sumamente útiL Saber desarro• nomía. Es el dinero para usted una llarse científicamente y no preocuparse fórmula precisa para vivir, y como a de los regak» más p menos hipócritas lal le acepta, sin amarle apasionada• —¿Tiene usted cartas para del enemigo, es lo que siempre con• mente. Serenidad. Actividad cerebral. mi? Lógica irrefutable. No se envanece de viene tener en cuenta. —¿A qué nombre? En la partida que publicamos a tus cualidades, ya que algunas in• Taller y almacén de muebles —Está escrito en el sobre. continuación se da un claro ejemplo de cluso las desconoce. Buena la íntelí- la manera de desarrollar un juetto. Rencia y los sentimientos. Espiritual, Gambito de dama en el sentido más exacto de la pala• bra. Sensibilidad acusada. Amante de Blancas: Negras: lo bello por instinto. Voluntad bue• Lasker Browell na, a veces de oposición. 1. P4D P4D PEPITO TERREMOTO. — Cultura Andrés Calis 2. P4AÜ C3AH muy rudimentaria. Carácter infantil, 3. PXP por k» que sus conceptos están llenos Sillerías - Cortinajes Mejor es C3AD o C3AR. de puerilidades. Ambición que con el 3 DXP tiempo se irá acrecentando. Simplici• Especialidad en mue• 4. C3AD D1D dad. Demasiado seguro de sí mismo, 5. P4R P3R cometerá en la vida algún error. Bue• bles estilo y modernos ti. C3AR A2R na memoria. Voluntad firme que le 7. A3D P$CD servirá de mucho para lograr sus as• 8. A4AR A2C piraciones. Demasiado económico; cui• 9. O—O O—O de de corregirse para no ser tildado Exposición y venta: Ripoll, 23 - Sagristans, 9 10. TIA P4A de avaro. Mejor era jugar antes CD2I>. MONADA. — Se patentiza en el (detrás del Banco de España) 11. PXP AXPA original estudiado una profunda des• 12. D2A P3TR Teléfono 18025 BARCELONA confianza que la inducirá sin duda a —¿Y si tu marido te pregunta Lo correcto era C3A. cometer más de un error. Maneras en de dónde han salido estas perlas? 13. T(1AR)ID C3A extremo diplomáticas. Bondad natu• Obsérvese el admirable desarrollo de ral. Demasiado obstinado. Carácter for• —Mi marido sabe muy bien las piezas blancas. mado, que tiene un mucho de pesi• que las perlas salen de las ostras. Talleres de Construcción 14. P3TD TIA mista e inflexible, y muy poco de in• Explotación gene• 15. D2R D1R dulgente y comprensivo. Gusto artísti• ral de trapos para de MAQUINARIA PA• 1S. P4CD A2R co bastante cultivado. Ligero nervio• RA FABRICAS DE 17. P5R C2D sismo. Un poco de vulgaridad en su las industrias pa• El juego de las negras es exlraordi- HARINAS Y TURBI• concepto de la vida, y excesiva con• pelera y textil nanamente restringido, fianza en sí mismo. NAS HIDRAULICAS 18. D4R P4A CABALLERO ANDANTE. — Infan- 19. PXP (al paso) TXP liUdad. Su carácter no está aún lor- 20. D7T-t- RIA mado y tiene un mucho de puérilida JUAN A causa del mal desarrollo de las des. Sensibilidad. Contra lo que indi• negras, sus piezas no pueden auxiliar ca, su imaginación es sumamente nor• CODIW f.} R. PÉ y Di. a su rey. mal. Desde luego, no es en absoluto 21. P5C CID orgulloso. Testarudez. Sentimientos in• 8DAO. L.TOA. Si 21... TXA, 22. A«C. mejorables, que resistirán muchas prue• INDEPENDENCIA, 46 22. .C5R CXC bas. Ligera ambición, que se acentua• TELÍFONO S1041 23. AXC . D4T rá con el tiempo. Espiritual^ mo. Eco- —¡Fuera de aquí! Almocárareo, 181-189-Tel. 5X131 24. AXT , AXA . nomía. Su inteligencia no es debida• BARCELONA 23. A6C Abandonan. mente cultivada. Gusto un poco vul• —No me empuje usted, que Dlr. tcleg. Juevaia - 111611011 c. s. gar. ya caeré sola. La guerra se ha extendido a todo el Norte y Este de Africa. Las vastas xanas desérticos juegan su papel en este conflicto, que no puede circunscribirse a las me• trópolis, yo que todos los naciones necesitan conservar intactas sus reservas coloniales. Por ello lo lucha entre Italia e Inglaterra en lo frontera de Libia con Egipto ha adquirido singular violencia. Las condiciones de esta guerra quedan reflejadas en esto torreta blindado de la vanguardia italiana en el frente de Libia

Lo curioso del caso es que Egipto no está en guerra con Italia, aunque sirvo o las tropas inglesas de base de operaciones. Lo tan cocoreada independencia de Egip• to ha sido atropellada por lo fuerza del Imperio británico, so pretexto de necesidades estratégicas. La ilusión de uno vida nocional independiente se ha visto dolo- rosamente burlado, a pesar de lo pasiva actitud del ejército egipcio, que se limita o entrenarse en previsión de posibles contingencias MUEBLES & DECORACION, S. A.

Pueríaferrísa, 13 Casablancas 8b!a. Canaletas, U MUEBLES P18I DESPACHOS. ESPECfiUBAD EN íl T1P* IHEHCIM Cupe, 45-Barcf lona José íataalo Primo de Uvera, S32 - Ttíéíssa 34342 - UMímk

N. A. G. S A. - Cssanova. 212-214. Barcelona "Edicmníl Destino' Ignacio Afnitl. dirtclor