El Color Como Recurso Expresivo: Análisis De Las Series De Televisión Mad Men Y Breaking Bad
Total Page:16
File Type:pdf, Size:1020Kb
UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID FACULTAD DE CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN SECCIÓN DEPARTAMENTAL DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL TESIS DOCTORAL El color como recurso expresivo: Análisis de las series de televisión Mad Men y Breaking Bad MEMORIA PARA OPTAR AL GRADO DE DOCTOR PRESENTADA POR Mercedes García Navas DIRECTOR Francisco García García Madrid, 2016 © Mercedes García Navas, 2016 UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID FACULTAD DE CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN Sección Departamental de Comunicación Audiovisual El color como recurso expresivo: Análisis de las series de televisión Mad Men y Breaking Bad Dirigido por el profesor Francisco García García Memoria presentada por Mercedes García Navas Para aspirar al grado de DOCTOR Madrid, septiembre 2015 Copyright © 2015 por Mercedes García Navas & “El color como recurso expresivo: análisis de las series de televisión Mad Men y Breaking Bad” Mercedes García Navas. Todos los derechos reservados. Gracias a los que me ayudaron a seguir en tierra enfrentándome a las páginas en blanco, cuando quería volar y perderme en nuevos proyectos. Gracias por enseñarme que todo lleva su tiempo. La presente investigación tiene como objetivo reconocer y aprender a utilizar el color en el medio audiovisual, es decir, conocer sus cualidades, técnicas y estrategias para, de esta forma, dar justa dimensión a su gran capacidad expresiva. El mirar y, posteriormente, observar permite saber el tipo de atmósferas que son necesarias para sugerir determinados estados. Estas atmósferas se generan gracias a los elementos que las componen, cada uno de ellos con sus formas, colores, ubicación en el espacio, más la interrelación global entre ellos. La composición visual se da a partir del conjunto de elementos distribuidos en el espacio. Que se ven “envueltos” con la luz planteada. Toda esta suma, es la que consigue expresar una emoción por parte del creador y, si se sabe “leer”, una correcta interpretación por parte del espectador. Esta “alfabetización visual” establece nexos entre el creador y el receptor, lo que lleva a unos y otros a un mayor conocimiento en la utilización de las reglas. Ello permite reforzar el texto narrativo, que “se articula en dos niveles: la historia —lo narrado, el qué— y el discurso —el modo de narrarlo, el cómo—, es decir, el plano del contenido y el plano de la expresión” (García, F., 2011, p.12). El creador de la obra audiovisual guía al espectador por los caminos de la historia que está desarrollando, mientras que el espectador, al saber “leer”, puede conocer el camino por donde tiene que transitar para disfrutarlo y entenderlo en su totalidad. Comprender la información que proporciona el color parecería innato al ser humano del siglo XXI, dominado por un entorno netamente visual. Pero no es así. Por lo tanto, si se aprende a conocer los parámetros sobre los que se desarrolla la información que se presenta visualmente, se conseguirá hacer más eficaz la comunicación, a la vez que se fomentará la creatividad, por un lado, y el disfrute visual, por otro. En términos teóricos, este estudio permitió, a partir de la revisión de bibliografía relativa al color (principalmente asociada a la pintura), ayudar a fortalecer conocimientos que antes eran desarrollados intuitivamente. Estos conocimientos pueden ser perfectamente traspasados al mundo audiovisual, específicamente al cine y a la televisión. El trabajo, con su modelo de análisis establecido para el uso del color, puede servir para evaluar otro tipo de piezas audiovisuales, tales como un spot publicitario o un video clip. En la actualidad no existen herramientas formales de este tipo, refiriéndose a nivel de instrumentos. Por lo que, al sistematizarlas, la utilización del color se puede planificar o pre-producir para conseguir ciertas sensaciones o emociones. En esta investigación se analizaron una serie de frames1 de dos series inscritas en la llamada “tercera edad dorada de la televisión”, que han tenido gran impacto en los espectadores y que poseen un minucioso cuidado en el sustrato de lo visual: Mad Men, serie ambientada en la década de los sesenta, y Breaking Bad, serie ubicada geográficamente en Albuquerque, Nuevo México. Ambas presentan un tratamiento de las gamas cromáticas diferente. Y si la primera se basa en el color histórico, al hacer referencia a una determinada época, la segunda se basa en el color simbólico, donde cada color utilizado en el vestuario y en el decorado tiene un determinado simbolismo dependiendo del personaje o la situación. Los objetivos generales plantean, en las series citadas, el desarrollo de un modelo evaluativo sobre la utilización del color. Para este método de análisis se desarrolló una herramienta con un conjunto de elementos o indicadores que participan del lenguaje audiovisual y que determinan la utilización del color, relacionándolo y/o correlacionándolo directamente con él. En los objetivos específicos se buscó describir el uso del color desde la interioridad del relato y como apoyo al guión, tanto del color sólido o pigmento—que es el de los objetos y del decorado—, como del color atmosférico o color luz—el que 1En todo el trabajo se hablará de frame, término en inglés que se traduce por “fotograma”. Es cada una de las imágenes que, al ser proyectadas secuencialmente en la pantalla, dan sensación de movimiento. envuelve el espacio—. Esto permite identificar los elementos que ayudan a la trasmisión de las sensaciones y emociones a los espectadores de las series de televisión. Con esta información, la hipótesis elaborada plantea que el color funciona como elemento narrativo y es transmisor de sensaciones en los espectadores de series de ficción, motivo por el cual es importante conocer sus reglas, características y simbología para una buena utilización y mejor lectura. El tipo de investigación que se realiza para este trabajo es principalmente de carácter cualitativo, específicamente de tipo exploratorio descriptivo, con técnicas para la recogida y análisis de datos. A nivel de producto, se entrega un cuestionario de análisis del color para frames, el cual pretende aproximarse a la utilización del color y a la relación que se establece con los otros elementos del lenguaje audiovisual. Además, se desarrolla un análisis cuantitativo que permite, a través de la propuesta de análisis de los frames seleccionados, determinar, a grandes rasgos, la utilización del color. En términos prácticos, se realiza un análisis en cuanto a la frecuencia de determinados elementos que aparecen, traduciendo estos posteriormente a porcentajes. Esta herramienta analiza de manera separada los elementos que componen este sistema. Para el modelo propuesto, el frame elegido pertenece a una secuencia específica, y se revisará desde la triple perspectiva del color, de la narrativa y de la distribución en el espacio. Para ello, se tiene en cuenta una batería de categorías que engloban aspectos tan dispares como la temperatura de color, el color atmosférico y el color sólido; el color pictórico, el histórico, el psicológico y el simbólico; el color y sus sensaciones/emociones; el color dominante y el color tónico; la gama cromática y sus propiedades; los colores fríos y calientes; los colores primarios, secundarios y terciarios, la emoción cromática, los colores armónicos y los contrastes, entre otros. Para ello, se debe observar el frame e identificar a los personajes, objetos, símbolos y colores; las actitudes de los personajes y su localización en el espacio, así como la de los objetos que les rodean. Se debe ser capaz de reconocer las gamas cromáticas y la intención del director. En resumen, se debe poder profundizar a partir de una primera lectura. Para realizar la selección de los frames, se buscaron aquellos que tuviesen una atmósfera donde se apreciasen volúmenes claros de mayor información, y aquellos en los que los actores contasen con un vestuario definido para apreciar la relación de estos con el fondo. Se designaron los frames de plano suficientemente abierto, para poder visualizar a los actores y su relación con el entorno. A su vez, fue decisivo que tales frames funcionales permitieran un fácil reconocimiento del acting del elenco. Para ello, era necesario que no participasen más de tres personajes en el plano, buscando siempre la diferenciación y sencilla localización de los elementos. El trabajo realizado ha permitido profundizar en las características del color y enumerar sus reglas. De esta forma, conociendo y controlando estos elementos, se podrán aplicar tanto al análisis de cualquier conjunto de frames, tanto en la mejora de la lectura por parte del espectador, como para un mejor uso a nivel creativo, consiguiendo una buena composición que logre ser atractiva visualmente a la vez que perfectamente comprensible. A lo largo de este análisis se afianza la premisa de que el color se encuentra presente en todo, y de que es necesario entenderlo. Está presente a lo largo de la historia de las manifestaciones humanas, ya que ninguna composición es al azar. Ni en la pintura, ni en la fotografía, ni en el audiovisual, ya sea consciente o inconscientemente. Al reconocer la importancia del uso del color, se hace necesario, a nivel de la creación, el trabajo desarrollado en preproducción, que permite que todo elemento y color ubicado en el espacio escénico tenga una justificación, un motivo, que debe estar “reglado” para apoyar el relato. Este minucioso trabajo de preparación sirve al creador o a los departamentos técnicos que trabajan con la visualidad (dirección de fotografía, dirección de arte, diseño de vestuario y maquillaje/peluquería) para reforzar lo que quieren contar y para entender cómo lo quieren hacer. Y también al espectador, que se convierte en un receptor capaz de recabar la información necesaria para un buen visionado. Aprender a “leer” y “sentir” el color tendrá como consecuencia espectadores más conscientes de lo que ven en el frame y creadores capaces de manejar mayor información en beneficio de su obra. El resultado de todo este trabajo se reconoce en sus conclusiones.