Euclides Da Cunha
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PERFILES Tres grandes escritores brasileios Euclides da Cunha C UANDO se habla de la novela autenticamente americana y se olvi- da el sentido precursor que para ella signific6 Os sertoes, es evidente que se comete una injusticia. La obra maestra de Euclides da Cunha merece -y est' logrando, final y felizmente- la mis amplia difusi6n en todos los paises de America, pues ella represen- ta una fecha en la literatura del Brasil y del Continente. Es la novela americana por excelencia, que se nutre de reali- dad y que se enfrenta con la vida ispera, para decir, en palabras candentes, el dolor de las grandes soledades donde el hombre lucha con el medio agresivo y con la acritud de los instintos humanos. Es Os sertoes, pues, una obra ya clasica, que ningfin americano debe desconocer. Cuando Euclides la escribi6, no pens6 en el pii- blico ni tuvo afanes de pulcritud estilistica. La obra resiste el em- bate de los afios y crece gallardamente, porque esta palpitante de humanidad, de americanidad y de universalidad. Novela originalisima, de fuerza emotiva y plistica, que para muchos lectores constituye la revelaci6n de un nuevo mundo. Bien estructurada, magistralmente desarrollada, pese a su apariencia de opulento desorden, tiene a veces, en su construcci6n, algunos tonos 158 REVISTA IBEROAMERICANA recios y hasta violentos, que pueden evocar, en cierta manera, al Facundo de Sarmiento, con el que m.s de una vez ha sido comparada. Euclides da Cunha, que naci6 en el Estado de Rio de Janeiro, en 1866, realiz6 estudios en la Escuela Militar, estudios que -- en aquellos iltimos afios del Imperio- abandon6 por sus ideas tenaz- mente republicanas. Dedic6se a la ingenieria civil y asi lo vemos realizando obras de trascendencia en el Estado de San Paulo. El periodismo lo atrajo y fur su iniciaci6n en la creaci6n literaria. Espiritu timido y fuerte a la vez, cuando termin6 de escribir sus Sertoes, su obra gloriosa, dud6 en darla a la publicidad. Uno de los que mejor comprendieron y estimularon a Euclides fur el bar6n de Rio Branco, siendo ministro de Relaciones Exteriores. Con motivo de la demarcaci6n de limites entre Brasil y Pertl, confi6 a Da Cunha una misi6n exploradora al rio Purus. Al retornar a Rio, Euclides form6 parte de dicho Ministerio. Escribi6 otros li- bros: A margem da historia, Estudos e confrontos y dej6 una ge- nerosa labor dispersa en los peri6dicos. Su obra maestra es -lo re- petimos- Os sertoes, traducida al espafiol con el titulo de "Los ser- tones". En la obra total de Euclides da Cunha es f cil advertir, junto a su genio de creador, su cultura filos6fica y sociol6gica y su cono- cimiento de la psicologia del pueblo, cuyo lenguaje conocia y aplica- ba muy bien en sus piginas, resultando asi que la versi6n espafiola de ellas significa un trabajo, casi heroico, de investigaci6n e inter- pretaci6n. Euclides da Cunha falleci6 tragicamente en 1909. II Lima Barreto NACIDO en Rio de Janeiro en 1881, Alfonso Henriques de Lima Barreto dej6 una obra suficiente para valorarlo como uno de los mayores novelistas brasilefios y americanos. Su difusi6n es muy escasa fuera de su patria. Y aun en el Brasil, son especialmente los grandes escritores quienes mejor lo han comprendido. Desde muy temprano -desde los tiempos de sus estudios en la Escuela Politecnica-, Lima Barreto demostr6 viva afici6n por la lectura de grandes fil6sofos, especialmente Spencer, Kant y Comte, asi como por novelistas de la talla de Flaubert, Ega de Queiroz, Maupassant y Daudet. Y, sobre todo, conoci6 la vida, el panorama cotidiano de los destinos dolientes, de la humanidad Avida de se- renidad y de felicidad. Un libro suyo de cr6nicas, titulado Bagatelas, demuestra bien la agudeza y agilidad de su espiritu, su don de observaci6n finisima. Pero es sobre todo en sus novelas donde mejor se refleja su perso- nalidad vigorosa, sutil, originalisima. El fil6sofo brasilefio Jackson de Figueiredo afirm6 que "un libro de Lima Barreto es un libro de un maestro, porque en el novelar social contemporaneo sus obras estin en primera fila, siendo el primero de su generaci6n". Se ha discutido tan alto elogio, como tambien el que expres6 Antonio To- rres, calificando a Lima Barreto como "el inico novelista brasileiio de valor, el inico verdadero". Pero es indudable que, sin llegar a colocar su nombre en una cumbre solitaria, debese reconocerle, junto al valor intrinseco de su obra, cierto sentido precursor, no s6lo en su hondura social, sino tambien en algunas caracteristicas de su estilo, un tanto desorde- 160 REVISTA IB EROA M ERICAN A nado, pleno de vida y de nervio: estilo que precedi6 al que hoy va- loramos en la autentica novela americana, libre de pulimentos pre- ciosistas. Ademis de ese sentido precursor, hay que reconocer que ningfin novelista, en el Brasil, supo reflejar con tal eficacia las criticas a una sociedad llena de prejuicios y de defectos, de mise- rias y de ironias. Ese tono mordaz de su novelistica lo emparenta -algunas veces- con Huxley. En otras ocasiones, con Ernest He- mingway. Lima Barreto poseia en alto grado el don del analisis del es- piritu humano: su arte era a manera de un espejo que lograba cap- tar limpiamente las reacciones animicas, Y ello, unido a una tecnica sabia y a un gran acopio de detalles realistas. Es lkstima que sus obras esenciales no hayan sido traducidas todavia a nuestro, idioma, pues es este uno de los valores universales de America, y su obra va ganando, a medida que avanza el tiempo. Ahi estin, para de- mostrarlo, sus Recordagoes do escrivao Isaias Caminha, sus Histo- rias e sonhos, su Gonzaga de Sd. Lima Barreto falleci6 en 1922. III Graca Aranha p ERSONALIDAD de alta trascendencia en la literatura brasilefia de todos los tiempos, Jose Maria de Grata Aranha dej6 una obra riquisima, que le da, asimismo, puesto de primera fila en la litera- tura de toda America. Nacido en 1868 en San Luiz, capital del Estado de Maranhao, estudi6 derecho en la Facultad de Recife, donde fue discipulo del fil6sofo Tobias Barreto. La novela Chanaan, que Grata Aranha public6 en 1910, constituy6 la revelaci6n de un extraordinario tem- peramento, cuya vibraci6n vital se armonizaba con una serena hondu- ra conceptual. Y todo ello expresado en una prosa agil, personalisima, densa, sustancial. A travs de la generosa labor de este brasilefio, esas virtudes son constantes. Las hallamos en Malazarte, obra de profunda simbologia, que fue representada en Paris; en sus estu- dios acerca de Machado de Assis y de Joaquim Nabuco, en A esthe- tica da vida y, sobre todo, en la que consideramos su obra maestra: A viagem maravilhosa, novela que se ubica entre las mejores rea- lizaciones de su genero, en la literatura americana de nuestro siglo. A viagem maravilhosa, cuya primera edici6n fue publicada en 1928, es el prototipo de la novela moderna, rica de humanidad, en la que el enfoque realista se une a la matizaci6n psicol6gica; novela de gran fuerza descriptiva, emotiva y comunicativa, cuya plasticidad expresional armoniza con un suntuoso vuelo imaginativo. Grata Aranha poseia una vastisima cultura literaria, filos6fica y -sobre todo- humana. Era, por excelencia, el espiritu joven, de eterna y serena juventud. Asi lo hallamos en su lucha para re- mozar el espiritu de la Academia Brasilefia de Letras (lucha de la 162 RE VIS TA IEROAM ER IC ANA que habla su libro O Espirito Moderno) y asi lo evocamos, sobre todo, en su noble participaci6n en el tan interesante y fecundo movi- miento de renovaci6n est&tica del Brasil, expresado entre los afios de 1920 a 1922. Los nombres que deben quedar grabados al frente de esa no- ble lucha, junto al de Graga Aranha, son los de Mario y Oswaldo de Andrade, Ronald de Carvalho, Hector Villalobos, Tasso da Sil- veira, Andrade Muricy, Renato Almeida, Menotti del Picchia y otros. Ya en la poesia, ya en la novela, la misica o la critica, cada uno aportaba -como a fines del siglo xIx los simbolistas france- ses- su colaboraci6n, su creaci6n, su faceta necesaria para el con- junto. Y fur sobre todo la figura de Graga Aranha -de regreso de Europa y en pleno prestigio intelectual y moral- que reafirm6 e hizo triunfar aquella renovaci6n. Subrayemos tambien su brillante carrera diplomitica, en Euro- pa, donde consolid6 notablemente su excepcional cultura. Anterior- mente a su incorporaci6n al servicio diplomitico, habia ocupado la secretaria del tribunal de arbitraje encargado de dictaminar en las reclamaciones bolivianas acerca del Acre. Espiritu muy brasilefio y muy universal, creador, combativo, lirico y c6smico, desbordante, para Graga Aranha una novela era "todo el arte": misica, color, poesia, ensayo, y todo ello, en autin- tico clima literario y novelistico. Y rutilante de vida y de humanismo, en opulencia emocional, generosa de dinamismo, esencial. Gra;a Aranha falleci6 el 26 de enero de 1931, en Rio de Janeiro, la ciudad que tan bien conocia y en que tan magistralmente reflej6 en su mejor novela. GAST6N FIGUEIRA.