Senado de la Nación Secretaría Parlamentaria Dirección General de Publicaciones (S-2761/09) PROYECTO DE DECLARACIÓN El Senado de la Nación DECLARA: Su profundo pesar por el fallecimiento de la gran artista argentina Haydée Mercedes Sosa, ocurrido en la ciudad de Buenos Aires el día 4 de octubre de 2009. Samuel Cabanchik.- FUNDAMENTOS Señor Presidente: El pasado 4 de octubre de 2009 falleció en la ciudad de Buenos Aires nuestra querida y gran artista tucumana Haydée Mercedes Sosa. Su desaparición física conmueve a millones de argentinos que, desde que comenzara su carrera artística hace ya 60 años, encontraron en su voz la voz de nuestro pueblo. Voz que seguirá presente, “repartida en el aire siempre”, unida a otras voces, cantando juntos la libertad de nuestra patria. Mercedes “la Negra” Sosa no sólo ha sido una artista excepcional, dueña de un talento indiscutible aclamado tanto en nuestro país como en el exterior, sino también una gran persona, luchadora inagotable por los derechos humanos, la libertad y la igualdad. La honestidad, la humildad y la generosidad son sinónimos de su nombre, cuyo pronunciamiento ha de trascender la enorme tristeza de esta pérdida, para convertirse en agradecimiento y reconocimiento a Ella, nuestra Gran Cantora. Quizás por esas maravillosas casualidades del destino, Mercedes Sosa había nacido un 9 de julio de 1935. Su nacimiento puede entonces concebirse como una nueva celebración de nuestra Independencia, manifiesta en la grandeza que nuestra artista supo brindarle a nuestra música folklórica y a nuestra cultura en su totalidad. Admirada desde muy joven, Mercedes Sosa lanzó, en 1963, el Movimiento del Nuevo Cancionero, junto a su esposo, Armando Tejada Gómez, Tito Francia y otros artistas. Dicho movimiento fue conocido internacionalmente como el Movimiento de la Nueva Canción. Cabe destacar que la artista se mantendría fiel a lo largo de toda su carrera a los principios artísticos expuestos en el manifiesto fundacional del movimiento, lo que muestra su profundo compromiso social y artístico. Dos años más tarde, llegaría el momento de la primera gran consagración popular, en el marco del prestigioso Festival de Cosquín. Siguieron después numerosas participaciones y reconocimientos en los más variados escenarios de nuestro país, Latinoamérica y Europa. Participaciones en donde Mercedes le dio voz a numerosos compositores argentinos, como los tucumanos Pato Gentilini, el Chivo Valladares y Pepe Núñez, lo que la fue perfilando como una de las mejores folkloristas argentinas. Desde su triste y doloroso exilio, Mercedes Sosa siguió cantando a la libertad de nuestra patria, levantando su maravillosa voz sobre el silencio negro que tiñó nuestro país durante el golpe de Estado de 1976. Ni la represión, ni la prohibición de sus discos pudo callar a Nuestra Voz, que volvió a nuestro país en 1982, a fin de realizar una serie de conciertos históricos a sala repleta en el Teatro Ópera de Buenos Aires, los cuales se convirtieron en un acto cultural contra la dictadura, al mismo tiempo que renovara la música popular argentina, cantando junto con otros grandes artistas argentinos, como León Gieco y Charly García, entre otros. Su prolífica carrera la llevó a cantar en los más importantes escenarios del mundo, donde recibiera innumerables ovaciones, como la que aconteciera, por dar sólo dos ejemplos, en el Carnegie Hall o el Mogador de París. Además, supo compartir el escenario junto con extraordinarios artistas como Luciano Pavarotti y Andrea Bocelli, entre muchísimos otros. Su extensa discografía da cuenta del enorme talento de la artista, que supo interpretar, con su sólida y única voz de un maravilloso registro, los más diversos estilos musicales. Su profundidad y compromiso con la palabra y la música permitieron que “la Negra” imprimiera su sello personal a todo lo que hiciera. Lo que le mereció, como cabe esperarse, incontables distinciones y premios, entre los que se destacan el Gran Premio CAMU-UNESCO 1995, otorgado por el Consejo Argentino de la Música y por la Secretaría Regional para América Latina y el Caribe, el Premio del Consejo Internacional de la Música de la UNESCO, el Premio Martín Fierro 1994, el Premio de la UNIFEM (organismo de la Naciones Unidas que la distinguió por su labor en defensa de los derechos de la mujer), el Premio Konex de Platino 1995 a la Mejor Cantante de Folklore y el Premio Konex de Brillante a la Mejor Artista Popular de la década. Vale destacar también la obtención de los premios Grammy Latinos y Premios Gardel, entre tantos otros. En 2005, el Honorable Senado de la Nación la distinguió con el Premio Sarmiento en reconocimiento a su trayectoria artística, su compromiso social y su constante lucha en materia de Derechos Humanos; lo que sitúa al presente Proyecto de Declaración en la serie de homenajes realizados a nuestra gran artista, cuya voz ha sido, es y será siempre, un canto a la vida. Así, nuestra querida Mercedes Sosa estará siempre entre nosotros, fiel compañera y amiga de nuestras zambas cotidianas para no morir. Por lo que demos gracias a la vida por habérnosla dado: única y argentina. Gracias Mercedes, pues “estás y estarás. Transformada,/en todas las voces,/ en todas las manos,/ como al comienzo, que volverá.” Solicito a mis Pares que, por los motivos expuestos, me acompañen en el presente Proyecto de Declaración. Samuel Cabanchik.- .