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Revista Geológica de América Central ISSN: 0256-7024 [email protected] Universidad de Costa Rica Costa Rica Alvarado, Guillermo E. GEOLOGÍA DE LA HOJA FORTUNA, ALAJUELA, COSTA RICA Revista Geológica de América Central, núm. 41, 2009, pp. 117-122 Universidad de Costa Rica San José, Costa Rica Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=45437348010 Cómo citar el artículo Número completo Sistema de Información Científica Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto Revista Geológica de América Central, 41: 117-122, 2009 ISSN: 0256-7024 GEOLOGÍA DE LA HOJA FORTUNA, ALAJUELA, COSTA RICA GEOLOGY OF THE Fortuna QUADRANGLE, ALAJUELA, Costa RICA Guillermo E. Alvarado Escuela Centroamericana de Geología, UCR Instituto Costarricense de Electricidad, ICE [email protected] (Recibido: 12/02/08; aceptado: 12/12/09) INTRODUCCIÓN por 1988. La interpretación fotogeológica se con- cluyó a modo de borrador realizando una gira El primer mapa geomorfológico de la Hoja junto con los estudiantes para comprobación de Fortuna (1:500000) fue realizado por Bravo campo. En vista de la falta de facilidades para pu- (1982) como parte de su tesis de licenciatura. blicar mapas en ese entonces y dada la existencia Sin embargo, dicho mapa delimitaba una serie de de otras prioridades, dicho mapa nunca salió a abanicos aluviales cuya morfología en forma de la luz pública. Alvarado (1984) realizó un reco- cono (abanico) no visualiza ni en el campo ni en nocimiento petrográfico. Muchos años después, las fotografías aéreas, aparte de otros detalles. No en 1995 el ICE estuvo interesado en investigar obstante, en contraposición, Bravo mostraba otros varias alternativas de proyectos hidroeléctricos aspectos que hasta el momento la literatura geoló- a lo largo del río Peñas Blancas, por lo que el gica no le había prestado atención. Es por ello que autor puso a disposición dicho mapa con mejoras un nuevo mapa fue iniciado por el autor del pre- que a lo largo de los años se le fueron insertando. sente trabajo junto con un grupo de estudiantes del El mapa fue incorporado y utilizado como base Departamento de Geografía (Escuela de Historia y regional en el estudio de Madrigal et al. (1995). Geografía) mientras impartía un curso de Mapeo Mientras se continuaban las investigaciones para Geológico y Geomorfológico para geógrafos allá el proyecto Peñas Blancas, alternativa 5, varios ALVARADO, G.E., 2009: Geología de la hoja Fortuna, Alajuela, Costa Rica.- Rev. Geól. Amér. Central, 41: 117-122. 118 REVISTA GEOLÓGICA DE AMÉRICA CENTRAL geólogos estuvieron involucrados en las investi- GRUPO AGUACATE (FM. GRIFO ALTO) gaciones locales y regionales. Entre ellos, Juan Rafael Vargas realizó investigaciones geológicas Litología: Constituye el basamento local en y fotogeológicas para el proyecto Peñas Blancas y el área de estudio. Está constituido por coladas de para el prospecto geotérmico Poco Sol en la mis- lava (andesitas augíticas) y rocas volcaniclásticas ma zona de estudio, cuyo trabajo cristalizó en un de diversos tipos (brechas polimícticas, autobre- informe interno y en su tesis de maestría (Vargas, chas de lavas, tobas, etc.), algunas de ellas con 2002). Previamente, ya Castillo (1967) e ICE- fuerte alteración propilítica y argilítica. ENEL (1988) habían estudiado el área de Poco Localidades: Buenos afloramientos se observan Sol y alrededores, como sitios de interés geológi- en los alrededores del puente sobre el río Peñas Blancas. co, para azufre y geotermia, respectivamente. Edad: Aunque no existen dataciones radiomé- Otros estudios igualmente detallados pero tricas en el área de estudio de esta unidad, sin embar- focalizados, son los volcanes Arenal y Chato se go, con base en dataciones inéditas realizadas en sec- publicaron entre finales de los ochentas del siglo tores aledaños, se pueden asumir una edad Pliocena, pasado e inicios del siglo XXI (Borgia et al., 1988; dado que infrayace a la Formación Monteverde. Alvarado 2003; Soto & Alvarado, 2006; y referen- cias allí citadas). Gran parte de lo acá presentado sobre el detalle geológico del Arenal y alrededo- FORMACIÓN MONTEVERDE res, está basado en estos últimos estudios, remi- tiendo al lector a las fuentes principales si desea Litología: La Fm. Monteverde ha sido reco- profundizar. De igual modo, el presente trabajo nocida en el área de estudio por formar platafor- es una contribución al proyecto: “Estratigrafía y mas de lavas, frescas, de composición basáltica tectónica de áreas claves de Costa Rica”, número hasta andesítica. 830-A5-047, de la Vicerrectoría de Investigación Localidades: Los alfloramientos mejor estu- de la Universidad de Costa Rica. diados hasta ahora se ubican en los caminos que La zona es de topografía muy abrupta, con va- conducen a los proyectos hidroeléctricos de Peñas lles en “V”, algunos muy profundos y con laderas Blancas y Poco Sol, así como la laguna Poco Sol. de fuerte pendiente, como por ejemplo el del río Edad: Las dataciones radimétricas suminis- Peñas Blancas. La laguna Poco Sol (789 m s.n.m.) tran un rango entre 2,1 y 1 Ma (Alvarado et al., se localiza en las cercanías de San Miguel de La 1992; Gillot et al., 1994). Tigra, en San Carlos. Posee un diámetro de unos Antecedentes: Chaves & Sáenz (1974) lo 200 m y una profundidad de 11,5 m (Armoudlian describen por primera vez. y De Morales, 1994). Esta laguna podría ocupar el lugar de un “antiguo” cráter de explosión, o en su defecto podría tratarse de una laguna de represa- DOMOS CERROS LOS PERDIDOS miento por un deslizamiento (Alvarado, 1984). El cerro Pocosol, ubicado más al sur, los Antecedentes: Se trata de un grupo de re- cerros Los Perdidos y los volcanes Chato y lictos volcánicos (Sáenz, 1971), circundados por Arenal, son aparatos eruptivos orientados en di- una estructura caldérica (Bravo, 1982). Cubren rección NNW-SSE, lo que sugiere la existencia una superficie de aproximadamente 50 km2. de una zona de debilidad cortical y de una mi- Localidad: Los cerros Los Perdidos (1019, gración de los focos eruptivos hacia el noroeste 1330 y 1370 m s.n.m.) se ubican a unos 7 km al (Alvarado, 1984). En la zona existen otros apa- suroeste de La Fortuna, en San Carlos, dentro de ratos volcánicos antiguos muy desfigurados por la caldera del mismo nombre. Están cubiertos de los agentes erosivos. selva virgen. Revista Geológica de América Central, 41: 117-122, 2009 / ISSN: 0256-7024 ALVARADO: Geología de la hoja Fortuna, Alajuela, Costa Rica 119 Litología: Varios domos de andesitas con TEFRAS INDIFERENCIADAS DEL CHATO hornblenda se ubican en el interior de la caldera. Y DEL ARENAL Edad: La edad de los domos se sitúa en unos 90 000 años, indicativo de un vulcanismo Consisten en depósitos pobremente definidos geológicamente no muy antiguo predecesor del y locales de tobas de caída y de flujo, cuya sínte- vulcanismo del volcán Chato que inició su ac- sis de detalles es presentada por Soto y Alvarado tividad eruptiva unos 40 000 años atrás (Gillot (2007). Sobre los flancos del Chato y área veci- et al., 1994). nas se observan bombas y tobas presublimente asociados a este volcán. Troncos de madera car- bonizados colectadas entre el Chato y Chatito y LAVAS DEL VOLCÁN CHATO sobre el flanco sureste de la Espina incluídas entre flujos de piroclastos, aportan edades de 1550+50 Se reconocieron cuatro subunidades lávicas en y de 1560+120 A.C. Borgia et al. (1988) sugie- el volcán Chato: Chato Inferior, Medio, Superior ren que la última actividad freatomagmática del y la de los domos Chatito-Espina. Consisten en Chato aconteció hace unos 1550-100 años A.C. andesitas y andesitas basálticas con uno a dos pi- roxenos, ricas en alúmina (19%) y muy pobres en potasio. El contenido SiO2 incrementa de un 52% ROCAS Y SEDIMENTOS EPICLÁSTICOS en la subunidad Cb a 53% en la Cm y 55,5% (pro- DEL CUATERNARIO medio). La morfología de los cuerpos andesíticos de Chatito y la Espina, con su apariencia masiva y Consiste en depósitos aluviales, laháricos, con brechas lávicas de derrumbe laterales, sugiere lacustres y coluviales, localmente interestratifica- que esta unidad fue emplazada con forma de do- dos con tobas y lavas, superficialmente alterados mos (Borgia et al., 1988). a suelos rojizos y pardo-anaranjados (lateritiza- dos), constituyendo el pie de monte del extremo oriental de la cordillera de Tilarán. Existe una LAVAS DEL VOLCÁN ARENAL unidad con un espesor máximo de unos 70 m de depósitos epiclásticos, originados por la remoción Las lavas del Arenal fueron divididas en va- volcaniclástica-sedimentaria de las formaciones rias subunidades, de más antiguas a más jóvenes: previamente volcánicas descritas. Se distingue Arenal Inferior, Arenal 4, 3, 2 (A y B; siendo A por presentar una matriz no litificada, con una el campo de lavas eruptado primero y a una cota fracción importante de arcillas cafés. Asimismo, topográfica inferior), y la del presente periodo en muchas partes presenta alteración hidrotermal. efusivo A1 (A entre 1968 y 1973, y B entre 1974 Esta unidad presenta variaciones texturales impor- y el presente). Los flujos de lava son de composi- tantes entre un afloramiento y otro. Los mecanismos ción andesítico-basálticos alumínicos, pobres, en de depósito, según se puede inferir de las distintas potasio, con un contenido en sílice muy uniforme litofacies, son: remoción en masa (deslizamientos (54-55%), excepto para las lavas más antiguas. de diversas dimensiones) y como debris flows (alu- Las lavas A4 y A2 son ricas en alúmina y con re- viones y lahares). Las texturas que presenta esta lativa más matriz (57%) mientras que las lavas de unidad tienen variaciones según el mecanismo de Arenal Inferior, A3 y A1 con menos alumínicas depósito que haya predominado durante su em- pero ricas en cumulados de plagioclasa (36%) y plazamiento; no obstante, en su mayoría se pre- fenocristales de piroxenos (12%) con típica textu- senta como una brecha gruesa, con clastos angu- ra porfírica-granular y menor (50%) porcentaje de lares, de diámetros que varían desde decimétricos matriz (Borgia et al., 1988).