La presidencia de Duhalde: Un gobierno de transición en la de 2002-2003

Lic. Di Rienzo Gloria A.* y Prof. Canciani Vivanco Verónica**

El gobierno de Duhalde estuvo caracterizado, paradójicamente, por aspectos que lo favorecieron al tiempo que expresaban su debilidad: la estrategia unificada del poder hegemónico para salvaguardar el sistema, dada la profundidad de la crisis; el acuerdo con los gobernadores de las provincias - con ambiciones presidenciales - 1 en el marco de un Partido Justicialista (PJ) inmerso en una sorda lucha por la dirección del Partido; y el espacio brindado a las ONG del establishment, a efectos de acordar políticas de corte social. El 2001, fue el año en que la ruptura institucional y socioeconómica alcanzó un punto máximo, como resultado de un proceso de larga data2, que se fue profundizando hacia fines de los noventa: los efectos de la liberalización de la economía – desocupación y exclusión social, corrupción política y judicial- y del alto grado de dependencia con la banca internacional, hicieron que la propuesta electoral de la Alianza (UCR-FREPASO) lograra el apoyo mayoritario del electorado. Pero el nuevo gobierno no modificó el rumbo menemista y aplicó un mayor ajuste que agravó la situación de los sectores populares. Se profundizó la recesión y con la medida del sumó la clase media al descontento y repudio generalizado. Esta crisis se sintetizó en la consigna Que se vayan todos. La desobediencia civil, no acató el Estado

* Prof. Adscripta Cátedra de Introducción a la Historia, Escuela de Historia, FFyH, UNC; prof. Adscripta investigadora en el CIFFyH – UNC; Tesista de Maestría, FCJySoc, UNLP; Investigadora adscripta en el Programa de Historia Política en CEA – UNC. ** Prof. Adscripta Cátedra de Introducción a la Historia, Escuela de Historia, FFyH- UNC; Prof. Adscripta investigadora en el CIFFyH – UNC; Investigadora adscripta en el Programa de Historia Política, CEA – UNC. 1 de Sitio impuesto por De la Rúa, y se extendió en efervescente movilización popular confluyendo distintos sectores sociales que se miraron entre sí, descubriendo intereses y objetivos comunes. Fueron los Tiempos extraordinarios.3 Un interrogante guía éste trabajo ¿cómo fue posible que al año de producirse una crisis de tal magnitud, el poder hegemónico logró restablecer y reencausar el orden político y social? Por ley de Acefalía, el 1 de enero de 2002 la Asamblea eligió a , quien asumió la Presidencia para completar el mandato de De la Rúa, hasta diciembre de 2003.4 Duhalde tuvo la responsabilidad de salvar el sistema: para ello debía retomar el control social y en lo económico, restablecer y regular el curso del sistema bancario, financiero y comercial. La lucha interna del PJ -situación que no se revirtió, por lo que las elecciones presidenciales de 2003 fueron una interna abierta-, coartó su aspiración presidencial.5 Inició su gestión anunciando “La Argentina está quebrada… fundida”. “[...] el 40% de nuestra población (vive) bajo la línea de pobreza [...] 15 millones de compatriotas no logran acceder a la canasta básica…”6 Estas cifras expresadas, diferían con los datos reales y oficiales. Caracterizar el país como “quebrado” y “fundido”, permitió abrir expectativas y adhesiones a las medidas de emergencia que tomó. Como “objetivos básicos” propuso “reconstruir la autoridad política e institucional; garantizar la paz y sentar las bases para el cambio del modelo económico y social”. Del primero de los objetivos dependerían los restantes. Lo cual indica la prioridad en materia de Estado en la coyuntura. Anunció un gobierno de unidad nacional “construido por sobre las banderías políticas” para la pacificación del país. Este anuncio tuvo institucionalidad. El nuevo gobierno fue una cuasi-coalición. Por primera vez en la historia, el peronismo, el radicalismo y lo que quedaba del Frepaso formaron una mayoría parlamentaria que tuvo su expresión en el gabinete. En diciembre de 2001, el FMI, el BID y el Banco Mundial suspendieron la ayuda a Argentina debido al incumplimiento de las metas fiscales y la cesación de pagos. Con una tasa de desempleo mayor al 20% y más de la mitad de la población en situación de pobreza e indigencia, el plan económico7 -del Ministro Lenicov y luego de Lavagna- estuvo basado en devaluar la moneda y pesificar la economía; bajar el desempleo; continuar con el congelamiento de los depósitos; flotar el tipo de cambio e implementar políticas fiscales y monetarias austeras. “Su estrategia fue pragmática: buscó ganar tiempo mientras encontraba el modo de apagar el incendio. La rebeldía en las calles le impuso límites muy precisos: el costo del ajuste no podía caer enteramente sobre los más pobres, de modo que Duhalde no tuvo más remedio que declarar la cesación temporal de pagos de la deuda externa y una `pesificación` de la economía que perjudicaba parcialmente a los bancos al tiempo que introducía `retenciones` por las que el Estado se

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quedaría con una parte de las ganancias de algunos sectores exportadores, especialmente los del agro. A todos les prometió que se trataba de políticas transitorias y que serían debidamente compensados en el futuro.”8 El FMI, presionaba al gobierno nacional y a las provincias con el objetivo de restaurar la confianza de los inversores y exigió ajustes adicionales, reducir el 60% de los déficits provinciales; eliminar las cuasimonedas; derogar la ley de subversión económica y objetar la ley de quiebras.9 El gobierno cumplió con las demandas del Fondo, afrontando costos políticos internos.10 Para presionar, Duhalde amenazó con renunciar y tras tensas tratativas firmó con los gobernadores el Acuerdo de los 14 Puntos, que permitió mantener las negociaciones con el FMI; reducir el recorte del 60% de los fondos coparticipable; mantener la paridad 1U$S = 3 $; y lograr el acuerdo para el salvataje bancario mediante el cual el gobierno nacional se hizo cargo de la deuda de los ahorristas (Plan Bonex, Decreto 494/02. Reordenamiento del sistema financiero. 12/03/02). La Nación, a cambio se hizo cargo del pago de las deudas públicas provinciales con el FMI. 11

Plan Jefes y Jefas de Hogar. ¿Derecho social al trabajo?

En el escenario de efervescencia y protesta social era ineludible buscar una solución paliativa a los miles de desocupados y excluidos.12 Una de las primeras medidas implementadas, fue declarar la Emergencia Pública en materia social, económica, administrativa, financiera y cambiaria.13 Las retenciones al sector agroexportador y los nuevos planes sociales, en la emergencia, fueron dos caras de la misma moneda. Ya desde la década del `90 a partir de la desocupación y exclusión de miles de trabajadores que implicó el desguace del Estado se impulsaron paliativos para contener las demandas sociales, frenar los conflictos y atender la pobreza.14 Se retomó la propuesta Dialogo Argentino15, cuya tarea fue elaborar el Plan Jefes y Jefas de Hogar Desocupados (PJyJHD) y el Programa de Emergencia Alimentaria, ambos destinados a los jefes de hogar desocupados y a familias en situación de pobreza. Además, se reflotó el Programa de Emergencia Laboral (PEL). 16 El PJyJHD contó con la sanción de dos decretos presidenciales, destinados a la reinserción laboral de la masa de desocupados17. La diferencia entre ambos decretos estuvo en el alcance del Programa. El primero declaró la Emergencia Ocupacional y la creación del PJyJHD; el segundo, instituyó el Derecho Familiar de Inclusión Social de alcance universal en el marco de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, obligándose el Estado a garantizar la protección integral de “todas las familias ” asegurando “un mínimo ingreso mensual”. No fue un programa dirigido a

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“los pobres” sino que puso el eje en el derecho social al trabajo e incluyó sujetos con pertenencias sociales y de clase diversas: pobres estructurales y “nuevos pobres” (NuPo). El órgano de aplicación fue el Ministerio de Trabajo de la Nación y se creó el Consejo Nacional de Administración, Ejecución y Control, que ejecutó el programa a través de municipios y consejos consultivos, lo cual permitió que diferentes organizaciones sociales administraran parte de los planes. A cambio de la ayuda económica de $150, los beneficiarios debían cumplir con una contraprestación laboral de veinte horas semanales. Esta contraprestación admitía la forma en capacitación, entre otras.18 Este subsidio y el salario mínimo legal vigente de $200, estaban por debajo de la línea de pobreza. La norma de creación no estipuló tope alguno en cuanto a fecha y cantidad de beneficiarios. Pero sólo accedieron al programa, los inscriptos antes del 17 de mayo. La pretensión de alcance universal del Programa, en la práctica no fue tal, puesto que por razones presupuestarias se cerró la posibilidad de inscripción. “Pese a su amplia escala, la cobertura del Plan solo alcanzaba al 25,4% del conjunto de los hogares pobres y al 42,3% del segmento de los hogares indigentes. En síntesis el 57,7% de los hogares indigentes quedó fuera del Plan”19. Se desprende que el objetivo de redistribución del ingreso, quedó en la categoría de un programa asistencial, más amplio que los anteriores, es verdad, pero con la impronta de ser un instrumento de disuasión y con dificultades de aplicación, derivadas del clientelismo. Como señala Adamovsky en referencia a la contribución de los sectores dominantes de la economía “Atemorizados por la rebelión, acreedores, banqueros y empresarios rurales tuvieron que dejar pasar estas medidas que jamás habrían aceptado en tiempos normales. De cualquier modo, los asalariados pusieron la mayor cuota del sacrificio con la pérdida del poder adquisitivo que trajo la pesificación.”20 El lanzamiento del PJyJHD, fue anunciado por Duhalde a través de Cadena Nacional el 3 de abril. El mensaje fue breve y destinado a los queridos argentinos y argentinas, a quienes les comunicaba “un anuncio muy importante sobre un tema que nos preocupa a todos” [...] “la brecha entre ricos y pobres que muestra la última encuesta [...] es la cara inhumana de un modelo económico de exclusión social” [...] “la Mesa de Diálogo Argentino, en coincidencia con mis convicciones, ha aconsejado la atención prioritaria de esta problemática” [...] “He tomado una decisión... crear el Derecho Familiar de Inclusión Social, cuyo primer paso es el Plan para Jefas y Jefes de Hogar (sic) desocupados que no cuentan con ningún tipo de ingreso” [...] “a ellos, a los más pobres, en nombre de todos los argentinos, comenzamos a tenderles una mano solidaria”, “no es un regalo, es un derecho [...] estamos creando un nuevo derecho.” Expresó el objetivo de que “más de un millón de hogares excluido [...] a más tardar el 15 de mayo” 21 estén incluidos en el Programa. Que la financiación se hará con “impuestos a las exportaciones, la eliminación de las jubilaciones de privilegio, la reducción de la burocracia administrativa y el costo de la política”. Alertó sobre posibles errores en su implementación, que serían corregidos, señalando que “a otros planes sociales los han desnaturalizado los sinvergüenzas que se aprovechan de los más humildes para su 4 propio beneficio”. Aseguró prontos resultados y que los mismos serán “los que nos ponen en el camino de una Argentina de pie y en paz”. ¿De pie? La situación social desesperante de más de la mitad de la población es nominada tema, y la fuente de conocimiento sobre este tema es la Encuesta Permanente de Hogares (EPH)22, desapareciendo en éste discurso público el alto grado de movilización popular y las agudas manifestaciones de la exclusión social, desnutrición y muerte infantil, familias comiendo de los basurales, desalojados viviendo en las calles y bajo los puentes. Tal vez este sea el sentido de establecer como receptor a un “ellos” “los más pobres” a quienes invisibiliza en su aspecto político protagónico-organizado para situarlos en meros receptores de la “mano solidaria” que “en nombre de todos los argentinos” les está ofreciendo, ignorando las causas. Hay que resaltar que por primera vez, tras la dictadura militar, los sectores populares retomaron un rol que había sido barrido con sangre y muerte, lo que significaba, ni más ni menos, la incidencia del pueblo y sus organizaciones en las decisiones políticas nacionales. Los fondos disponibles para instrumentar el PJyJHD, en su primera etapa, provinieron de retenciones a las exportaciones y del Tesoro Nacional. Duhalde reafirmó el aporte proveniente de las retenciones pero omitió la contribución del Tesoro Nacional y anunció la “eliminación de las jubilaciones de privilegio, reducción de la burocracia administrativa y el costo de la política”. No obstante, del análisis del cuerpo legal durante su gestión (47 leyes sancionadas por el Congreso y 489 decretos presidenciales), no surge ninguna medida en relación a estos tres enunciados para financiar el Programa.23 Lo real, es que el 13 de mayo de 2002 por decreto, se acordó con el BID reformular y redireccionar doce préstamos de dicha entidad a los fines de aplicarlos para “solventar los gastos que genera la ejecución del Plan de Emergencia Social”24 y hacia finales del mismo año, se modificó la distribución del Presupuesto General de la Administración Nacional para el Ejercicio 2002, para incrementar los créditos vigentes para la ejecución del PJyJHD.25 Duhalde estableció que los beneficiarios serían un millón de hogares y que para mayo no quedaría familia argentina sin ingresos. De acuerdo al Censo Nacional de Población 2001 (INDEC), la cantidad de habitantes era de 37.282.970, de los cuales 14.000.000 conformaban la Población Económicamente Activa (PEA). El desempleo llegaba a una tasa real del 30% promedio y el total de pobres al 53%, es decir más de 20.000.000 de habitantes en situación de desocupación, pobreza e indigencia. La cifra propuesta a cubrir por el “nuevo derecho” formulado, claramente distaba de las necesidades reales que no eran desconocidas. De acuerdo al análisis de la EPH para octubre de 2002 “el 57,5% de la población se encontraba por debajo de la línea de pobreza y el 27,5% era considerado indigente, lo que implicaba un aumento considerable con respecto a la anterior medición de mayo de 2002 en el peor momento de la crisis.”26 El Programa no solo no garantizó el Derecho de Inclusión Familiar, sino que con el correr de los meses, la situación se agravó.

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Movilización social. Prácticas y propuestas

El desguace del Estado y las privatizaciones modificaron estructuralmente el mercado del trabajo, así nacieron nuevas formas de lucha y organización, como el movimiento “producto de la organización de trabajadores despedidos y al margen de los sindicatos del sector”, 27 quienes ocupaban calles y rutas.28 El 28 de marzo de 2002 se constituyó el Bloque Piquetero Nacional (BPN)29 que adoptó un programa de lucha: cortes de ruta y movilización en todo el país, 30 difundido por los órganos de prensa de las organizaciones y los medios convencionales de la prensa en general. “Destapando una Argentina desprolija, oculta y molesta para los medios al servicio del poder, los irrumpieron en la escena nacional enrostrándole al sistema y a la sociedad la verdadera realidad de la pretendida `modernización y globalización`. Quizás sea por ello que, en poco menos de tres meses, los piquetes que cortan las rutas y sus protagonistas –los piqueteros- se han transformado de excepción en regla [...] madurando en propuestas, organización y proyección” 31 gestando una nueva identidad, restituyendo el tejido social mediante prácticas solidarias, con la asamblea como órgano rector.

A nivel sindical, la CGT que estaba dividida (un sector bajo la dirección de Daer y otro de Moyano) se mantuvo en la defensiva. En parte porque la pérdida de empleos no cesaba, generando temor en los trabajadores, y además porque evitaron crear problemas a Duhalde y a los empresarios. Por su parte, la CTA se ubicó en el centro de las movilizaciones por su presencia en el sector público, organizaciones multisectoriales y piqueteras. A través del Frente Nacional Contra la Pobreza (FRENAPO)32 venían de realizar una Consulta Popular a favor de un seguro de empleo de $380; asignación universal por hijo de $60 y jubilación mínima de $150 para quienes no tenían ese derecho, logrando 3.100.000 votos de aval. Pese a ello, ésta propuesta no tuvo eco, ni en la gestión de De La Rúa, ni con Duhalde y el Congreso en enero de 2002, cuando fue nuevamente presentada. Posteriormente para debatir y orientar políticas sociales, en julio de 2002, se realizó el “Foro para un Plan Nacional de Alimentación y Nutrición”.33 Así surgió el proyecto de ley “El Hambre más urgente” que, con el aval de 1.200.000 de firmas, se presentó en el Congreso y se sancionó la ley que dio vigencia al Programa de Nutrición y Alimentación Nacional.34 A diferencia de la propuesta del FRENAPO, el proyecto “El Hambre más Urgente” elaborado por sectores influyentes de la sociedad, no trató sobre redistribución social de la riqueza sino de derecho a la alimentación mientras dure la emergencia.35

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“Con Duhalde también”36

Cuestión de táctica y estrategia. Darío y Maxi

Luego del estallido de diciembre de 2001, surgieron espontáneamente asambleas populares de gran vitalidad. En ellas, se discutía sobre democracia directa, propuestas económicas para salir de la crisis, cuestionamientos al Estado, los políticos y el capitalismo. “Se respiraba una sensación de libertad recuperada y de que era posible inventar una nueva forma de vivir en la sociedad […] la sensación de que terminaba una época oscura y comenzaba un tiempo nuevo […] graficado por una vecina cuando dijo ‘para mí, recién ahora termina el Proceso’”.37 Estas experiencias de auto-organización y el descrédito de los partidos políticos tradicionales y las formas representativas, hacían peligrar la continuidad del sistema. La estrategia de los sectores dominantes, fue la defensa de las instituciones para la permanencia del sistema. A nivel táctico, se debía resolver dicho objetivo en dos frentes: timonear la economía y retomar el control social. “No se puede gobernar con asambleas […] la forma que tiene la ciudadanía de expresarse es con el voto.”38 En enero de 2002, las organizaciones piqueteras realizaron una manifestación hacia Plaza de Mayo, la que fue aplaudida por los asamblearios porteños que corearon “piquetes y cacerolas, la lucha es una sola”. Para el poder hegemónico no se podía gobernar con asambleas y la lucha no debía ser una sola, por lo que primó la inteligencia de ganar tiempo a la par de dividir, buscando romper los lazos de solidaridad y estigmatizar las luchas. Las movilizaciones continuaban en parte debido a las limitaciones del PJyJHD. A principios de junio y ante el anuncio de una nueva movilización, que se preveía masiva, el Jefe de Gabinete Atanasof reunió a funcionarios de gobierno, altos jefes de las fuerzas de seguridad y del poder judicial, para definir la “actitud de la Gendarmería Nacional, Prefectura Naval, Policía Federal y bonaerense” así como “la cobertura a su acción que tendrá la justicia a través de los jueces y los fiscales federales en las próximas acciones de piqueteros.”39 Posteriormente, en conferencia de prensa el 20 de junio, seis días antes de dicha movilización, Atanasof instalaba el clima que el gobierno necesitaba: ante una “suerte de guerra de unos contra los otros” se debía “proteger el derecho de las personas a su desplazamiento”. Por la mañana del 26 de junio, Atanasof afirmó que “los piquetes no hacen más que contribuir al caos” y que iban a “impedir los cortes cueste lo que cueste.” Consecuentemente, una protesta pacífica fue reprimida selectivamente con el saldo de dos manifestantes asesinados, Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, 30 heridos de bala y 160 detenidos. Episodio que se conoce como la Masacre de Avellaneda. 7

La operación de inteligencia en acción

Matzkin, leyó a la prensa un comunicado informando que “Las acciones que dejaron el trágico saldo de dos muertes, constituyen un plan de lucha organizado y sistemático, que puede llegar a amenazar y reemplazar la fórmula de consenso que la mayoría de los argentinos hemos elegido. Hay quienes prefieren el lenguaje de la violencia.” […] “Los disturbios que terminaron con dos muertos y varios heridos en Avellaneda fueron obra de elementos infiltrados en la protesta de piqueteros” […] “Se han visto agresiones con honda, con escopetas, armas y bombas molotov.” 40 A dos días de los asesinatos se difundió a través de los medios gráficos y televisivos, un supuesto plan de desestabilización del BPN, descubierto por la Secretaría de Seguridad Interior insistiendo en que los asesinatos fueron consecuencia de “infiltrados” y calificaron los hechos como “ataque organizado” del cual “la policía bonaerense se había defendido” […] “Hubo una organización, un grupo decidido a provocar el caos, la violencia y la muerte.”41 “Esto no tiene nada que ver con el 20 de diciembre y no va a recibir el apoyo de la población”.42 El gobierno acusó al MTR y a la Corriente Aníbal Verón como responsables de los muertos y heridos, y llamó a la población a contribuir con la investigación. Al discurso gubernamental, lo acompañó el mediático. A medida que se produjo la represión, desde presidencia dieron pautas de qué y cómo debía ser informado lo sucedido: que las muertes y heridos eran consecuencia de disputas entre piqueteros, magnificando la violencia ejercida por éstos.43 Clarín y La Nación, que contaron con el testimonio fotográfico de la represión, ocultaron las pruebas del accionar y fueron funcionales a los intereses del gobierno.44 En este sentido, Clarín tituló “La crisis causó dos nuevas muertes”. La subjetivación de la crisis como actor omnisciente, lavaba de culpas y cargos a las fuerzas represivas -las mismas que actuaron el 19 y 20 de diciembre- y a los responsables políticos de la decisión de asesinar a los luchadores sociales.45 La movilización popular corrió el velo de la mentira. Tras la difusión de la verdad, Duhalde hizo marcha atrás, declaró que “La familia argentina está de luto y desgraciadamente quienes deben custodiar el orden son los que cometieron esta atroz cacería”.46 Informó que la policía actuó con balas de goma, que se investigarían los hechos hasta las últimas consecuencias y que los manifestantes detenidos fueron liberados. Habló de “cacería atroz”, de “investigación” para deslindar su responsabilidad, endilgó los hechos a la Policía bonaerense sobre la cual no se tenía control “es muy difícil poner en caja a la […] bonaerense” y recordó la responsabilidad de dicha fuerza en el crimen de Cabezas.

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Hubo contrariedades entre presidencia y provincia. La bonaerense no es de jurisdicción de Nación, pero Solá se mantuvo en que también tenían informes de la planificación para provocar caos y que la policía se defendió. Hay que destacar, que las fuerzas represivas actuantes fueron Gendarmería Nacional, Policía Federal, Prefectura Naval y la bonaerense. Esto desmiente los deslindes de Duhalde y de Solá. Al mismo tiempo que anunciaban investigar los hechos –como si la represión hubiera sido producto de generación espontánea- mantuvieron el discurso para dividir a las fuerzas populares “El gobierno llama al diálogo a los piqueteros para frenar la violencia” “(hay que)… desterrar a los que generan violencia”47 Así se presenta la táctica gobernante tras los asesinatos. ¿De qué violencia se habla? ¿Quiénes son los sujetos violentos? ¿Quiénes son las víctimas? “Quienes quieren protestar están en su derecho, pero les pedimos que aíslen a los violentos y eviten perjudicar al resto de la población.”48 Cuando se habla de infiltrados se busca estigmatizar a determinados actores sociales que resultan inidentificables. Este mensaje perverso intenta producir varios efectos: el temor; la desconfianza entre los mismos sujetos sociales; amortizar el espíritu de lucha; generar divisiones; al mismo tiempo que disminuir la empatía del conjunto general de la sociedad en una coyuntura de lucha. La extrapolación de los infiltrados le permite al gobierno dialogar con algunos, con los buenos no con todos. La táctica queda expuesta: desarticular y desunir las organizaciones populares; introducir la brecha entre piquetes y cacerolas; promover la desconfianza creando el enemigo violento dentro del mismo pueblo, al cual se le pide, que lo identifique. Al igual que durante la última dictadura, se coloca la delación como valor y el supuesto objetivo de pacificación para reencauzar el sistema. “Como antídoto contra los impulsos a la solidaridad se inoculaba el miedo al otro…”49 Los asesinatos de Darío y Maxi, impactaron en la sociedad y el movimiento piquetero llamó a movilizarse para repudiar los crímenes, la represión y exigir justicia.50 La represión sufrida hizo modificar las consignas, dados los muertos y heridos los ejes de las demandas pasaron a ser la lucha por la justicia y la vida biológica, desplazando el sentido –que también es por la vida- político y social. El gobierno no solo contó con la prensa para desacreditar al movimiento piquetero. El dirigente de la FTV, D`Elía explicó los hechos: “Yo creo que ellos -MTD Aníbal Verón- arreglaron con el gobierno una represión de baja intensidad, o sea…ehh… `nosotros vamos al corte, ustedes nos tiran unos gases, nosotros nos vamos, los puteamos. A Ud., al gobierno le sirve porque puede explicar en Washington que tiene autoridad para disolver el conflicto social` y al Bloque… este, a los dirigentes estos, les servía porque les permite colocarse al centro de la escena política…y decir que era un gobierno represor, autoritario, que ellos eran los verdaderos piqueteros. Era un negocio,…un negocio…para ambos. ¿Por qué? … porque necesitaban muertos.”51

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D`Elía habla de negociación entre el MTD Aníbal Verón52 y el gobierno, y al evaluar los beneficios, uno de los sujetos no es el mismo, es el BPN. Deslizamiento semántico e intencional. El lenguaje no es inocente. El BPN había logrado articular movimientos y organizaciones a nivel nacional, con un programa reivindicativo y político. Era el actor social en el que confluían diversos sectores sociales, que junto al movimiento asambleario ponían en jaque al sistema, por lo tanto constituyó uno de los blancos hacia el cual dirigir la mira. De esta negociación, el beneficio es solo para el gobierno, el sistema. Pero ¿dónde está el beneficio del costo en vidas y sufrimiento del pueblo? Si hubo negocio fue entre D`Elía y Duhalde, ya que sus declaraciones coinciden en deslegitimar al BPN y su programa de lucha, para eliminarlos de la escena pública y anular su incidencia en la política. ¿Qué otro significado puede darse al relato oficial: infiltrados, enfrentamientos entre piqueteros, plan desestabilizador? Operación de inteligencia y táctica para desarticular el movimiento piquetero y su proyección e incidencia. “En todos lados la política repite su esquema: se victimiza a la población, se deja morir a una parte de ella y se sigue gobernando en su nombre.”53 Se deja morir… o se mata…

Coda

Duhalde, en conferencia de prensa en uno de sus mensajes dirigidos al país y a los organismos internacionales, había dejado claro que no se adelantarían las elecciones y que no avalaría ningún postulante del PJ, aseverando asimismo, que "la conflictividad social en la Argentina está bajando en forma abrupta.”54 Sin embargo, las luchas y cortes de ruta hacían prever que serían el doble de los realizados en 2001.55 Las medidas destinadas hacia los desocupados y excluidos, entre las cuales destacamos el PJYJHD aún con las limitaciones señaladas, sirvieron como paliativo ante la acuciante situación socio-económica en la emergencia. Situación que, por otra parte, fue el trasfondo de la profusa producción de leyes y decretos emitidos y sancionados durante el período. No obstante, a la semana de los asesinatos de Kosteki y Santillán, quedaría claro el significado de instaurar la pacificación, cueste lo que cueste. En un discurso de 3 minutos y medio, Duhalde anunció el adelanto del cronograma electoral y que no se postularía.56 Fue un anuncio destinado a descomprimir las tensiones económicas y sociales pagando el costo político por la represión y colocando en la agenda pública el tema electoral como único camino posible para la continuidad del régimen, aspirando – sobre todo- a otorgar al mismo, la legitimidad de la que adolecía.

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La operación de inteligencia y mediática, logró dividir el campo de lucha popular y apartando a la clase media. El poder político entendió que era el momento de atraparla en un proyecto electoral antes de que terminara buscando otros canales de protesta, convirtiéndola de hecho en aliada implícita del gobierno.57 La aparición tosca e incipiente de una corriente revolucionaria en busca del poder, aunque no comprendía a todo el movimiento piquetero y asambleario, marcaba la presencia de un discurso sublevado al interior de un conflicto social de envergadura. “Los partidos tradicionales llegaron a ésta última elección igual que el electorado: divididos y fragmentados.” 58 La crisis institucional esta vez, no fue protagonizada por militares, sino por la ciudadanía. La debilidad del gobierno, su paradoja, estuvo dada en lo mismo en que se apoyó: un mandato transitorio elegido por un Congreso cuestionado y ante la falta de credibilidad, una cuasi-coalición que cedió a las presiones del FMI. Cada crisis representa el momento propicio para el cambio. Esta no fue una crisis terminal del orden neoliberal, porque las fuerzas que lo sostienen se coaligaron para reciclarlo.

1 Durante 2002, quince gobernadores de provincia eran justicialistas, cinco eran provenientes del radicalismo y tres, representantes de partidos locales. El 24/04/02 se firmó el Acuerdo de los 14 Puntos con las provincias (Se abstuvieron y Santa Fe). Con éste Acuerdo, Duhalde logró el aval para aprobar la reforma de la ley de quiebras y la derogación de la ley de subversión económica, exigencias del FMI. 2 Este proceso comenzó con la dictadura de 1966 para favorecer la penetración de capitales extranjeros mediante la implementación de la Doctrina de Seguridad Nacional; se lo intentó continuar durante el tercer gobierno peronista y nuevamente fueron las Fuerzas Armadas en 1976, quienes mediante un ataque orgánico y sistemático logran el disciplinamiento de los trabajadores y demás sectores populares a los fines de implementar la dinámica actual del capitalismo, profundizada durante el gobierno peronista Menem-Duhalde. 3 Ezequiel ADAMOVSKY, Historia de la Clase Media Argentina, Buenos Aires, Planeta, 4º Edición, 2010, p. 456. 4 En poco más de una semana Argentina tuvo cinco presidentes. A De la Rúa lo sucedió, como presidente interino, Ramón Puerta, en su carácter de Presidente Provisional del Senado, porque no estaba cubierto el puesto de vicepresidente tras la renuncia de Carlos Alvarez. El 23 de diciembre la Asamblea Legislativa designó a Adolfo Rodríguez Saá. Pero éste renunció el 31 de diciembre, luego de que los gobernadores le retiraron el apoyo. Eduardo Caamaño, titular de la Cámara de Diputados, asumió la presidencia interinamente hasta que asumió Duhalde. 5 Duhalde expresó que el ejercicio del gobierno de transición “era incompatible con la pretensión de competir por una candidatura presidencial en el año 2003”. Discurso de Eduardo Duhalde ante la Asamblea Legislativa al iniciar su mandato como presidente provisional. 01/01/02 6 Discurso de Eduardo Duhalde op. cit. 7 En materia económica, acotamos el tema en virtud de nuestro objeto. Para ampliar remitimos, entre otros, a los siguientes autores: Julio GODIO Argentina: Luces y sombras en el primer año de transición: las mutaciones de la economía durante el gobierno de Duhalde, Buenos Aires, Biblos, 2003; M. NOVARO. Historia de la Argentina. 1955-2010, Buenos Aires, Siglo XXI, 2010, pp. 279-292; Julio SEVARES, “¿Por qué cayó la Argentina?”, Realidad Económica, Buenos Aires, Nº 188, 2002. Asimismo, los temas vinculados a la política exterior en la coyuntura, no serán analizados aquí. 11

8 E. ADAMOVSKY, Historia de la Clase Media… cit p.465. 9 Mediante la Ley de Subversión económica (20.840) se investigaba la fuga de capitales que violaban las restricciones bancarias del último año (corralito) Entre los investigados se encontraban altos ejecutivos de los principales bancos del país, incluso de bancos extranjeros tales como el Citibank y el Bank Boston. El FMI puso objeciones a la ley de quiebras argentina (24.522) afirmando que “no se puede esperar que la comunidad internacional apoye a la Argentina sin que esta adopte un marco que provea el balance apropiado entre los intereses de deudores y acreedores. Las objeciones del Fondo estaban dirigidas a 1º) un artículo que proveía a las entidades en quiebra protección por 180 días de los acreedores y 2º) otro artículo que otorgaba al deudor un período de 360 días para reestructurar la deuda. Alan B. CIBILS, Mark WEISBROT y Debayani KAR,“La Argentina desde la cesación de pagos: El FMI y la depresión”, Realidad Económica, Nº 192, 2002, Disponibles en http://www.iade.org.ar 10 Entre los cambios que se produjeron: renuncia el ministro de economía Remes Lenicov y es reemplazado por . Se alejó el Jefe de Gabinete, ; el ministro del Interior y el Ministro de Producción Ignacio de Mendiguren. Se incorpora como Jefe de Gabinete dejando el cargo de Ministro de Trabajo que fue asumido por Graciela Camaño. 11 Sin embargo, la rendición incondicional ante el FMI no resultó en un acuerdo sino que éste, incrementó sus demandas entre las cuales se encontraban: la restauración del orden social; adoptar un tipo de cambio libre; mayor caída de salarios; poner fin a los recursos de amparo que obligaban a los bancos a devolver los depósitos a sus dueños y aumentar las tarifas de los servicios privatizados en un 30 %. Por lo que los recortes en el gasto incluyeron una reducción del 10% en todos los rubros, del 30 % en el gasto de bienes y servicios y mantuvieron el recorte del 13% a las jubilaciones y salarios estatales; la pesificación de las deudas de las grandes empresas; la devaluación con el descontrolado aumento de los precios y el mantenimiento del `corralito` que impedía cualquier tipo de reactivación. En febrero de 2002 Duhalde accedió a garantizar la deuda de las provincias a cambio de la reducción de los fondos coparticipables y el compromiso de reducir los gastos provinciales. El presupuesto nacional redujo el gasto en un 15% y fijó una meta para el déficits fiscal de 3.000 millones de pesos. 12 De acuerdo a informes del INDEC el 53% de los argentinos vivían por debajo de la línea de pobreza, el 50% de la población estaba desempleada, el 83% de los niños que vivían en extrema pobreza, fundamentalmente en el Norte del país sufrían de desnutrición crónica o aguda. A esto hay que sumarle el fuerte aumento de los precios de los productos básicos, es decir los alimentos que subieron casi un 30% y la inflación promedio alcanzó el 20% entre abril de 2001 y abril de 2002. 13 Ley 25.561, 06/01/02. El objetivo de esta norma fue reactivar el funcionamiento de la economía, mejorar el nivel de empleo, reordenar el sistema financiero, bancario y del mercado de cambio. El plazo de vigencia de ésta ley se fijó hasta el 10/12/03 en coincidencia con la fecha de finalización del mandato de Duhalde. 14 La instrumentación del Diálogo Argentino se apoyó en el llamado que hacia los últimos meses del gobierno de De la Rúa hizo el Episcopado Argentino a través de la creación de la Mesa de Dialogo y que no tuvo eco durante el gobierno frepasista. El Episcopado ante la crisis de las dirigencias, la debilidad de los Partidos políticos y las cifras de pobreza extrema, desnutrición y desempleo, con el apoyo del PNUD elaboró un programa para atemperar los efectos de las políticas neoliberales y neutralizar las movilizaciones populares que se extendían amenazando la estabilidad política. Este Proyecto de la Iglesia y el PNUD, iban más allá de las tareas de caridad propios de la Iglesia. En total elaboraron 9 (nueve) extensos documentos de trabajo: Reforma política del Estado; Justicia; Salud; Educación; Sociolaboral; Consensos; además de Bases; Análisis, Evaluación y un Breviario explicativo. Recuperado en http://www.presidenciaduhalde.com.ar 15 El “Diálogo Argentino” fue anunciado por cadena nacional el 14 de enero de 2002. El Programa de Emergencia Alimentaria Nacional (Decreto P.E. Nº 108/02, 15/01/02) declaró la “Emergencia Alimentaria Nacional hasta el 31 de diciembre de 2002” (art.1) Se creó el Programa citado “destinado a la compra de alimentos, para la atención prioritaria de las necesidades básicas de la población de alta vulnerabilidad y en riesgo de subsistencia” (art. 2). Estableció que los sujetos de derecho son las personas que se encuentren por debajo de la “línea de pobreza. 16 El plan más importante durante el gobierno de Menem fue el Plan Trabajar. Durante la presidencia del Dr. de la Rúa se disminuyó el número de planes otorgados así como el monto de los subsidios. Durante su 12 mandato creó el Programa de Emergencia Laboral (PEL) para promover los consorcios productivos locales y el autoempleo productivo. 17 Las fuentes normativas fueron los decretos P.E Nº 165/02 (22/01/02) y Dto. P.E. 565/02 de 03/04/02. El financiamiento del PJyJHD estuvo dado en un principio por recursos propios, del Tesoro Nacional (para lo cual hubo que reformular el presupuesto anual) y los recursos devengados de las retenciones sobre las exportaciones. El sector agroexportador, en esta coyuntura de cuestionamiento al sistema, optó por resignar una pequeña porción de sus ganancias para preservar la paz social. En la segunda etapa del Programa, a principios del año 2003, el gobierno contó con ayuda del Banco Mundial. 18 Como contraprestación figuraban la participación en comedores comunitarios, “roperos” populares, bibliotecas barriales, comités, huertas (se articuló con el INTA el Programa Pro Huerta), trabajos en infraestructuras básicas en Villas de Emergencia y barrios humildes; tareas de mantenimiento en organismos públicos, a saber vinculados a la salud, educación entre otros. 19 Julio C. NEFFA, “El Plan Jefes y Jefas de Hogar Desocupados (PJyJHD). Análisis de sus características y objetivos .Fortalezas y debilidades”, Julio César NEFFA, Enrique DE LA GARZA TOLEDO, Leticia MUÑIZ TERRA (comp.), Trabajo, empleo, calificaciones profesionales, relaciones de trabajo e identidades laborales Vol. II, Buenos Aires, Clacso, 2009, pp. 281-347. Recuperado en www.biblioteca.clacso.edu.ar/ar/libros/coedicion/neffa2/15.pdf El autor además señala que cuando comenzó a ejecutarse el plan, el total de beneficiarios era alrededor de 500.000 personas y que en mayo de 2003 esta cifra se elevó a 1.990.735 personas, de las cuales 1.267.086 eran mujeres. 20 E. ADAMOVSKY, Historia de la Clase Media… cit p.465. 21 El resaltado en cursiva, nos pertenece. 22 La EPH es un programa nacional de producción permanente de indicadores sociales cuyo objetivo es conocer las características socio-económicas de la población. Es realizada en forma conjunta por el INDEC y las Direcciones Provinciales de Estadística (DPE). 23 No obstante, en esa perspectiva, sí tuvieron como objetivo impactar en la opinión general la donación del sueldo presidencial, mientras durare su mandato, para paliar las carencias de “vastos sectores de la población” (Decreto Nº 401/02; 28/02/02: estableció la donación de la remuneración presidencial, fijada en $ 3.000. Dicho monto debía ser girado automáticamente al Ministerio de Desarrollo Social). y la decisión aplicable a sus funcionarios jerárquicos de no percibir sueldo y beneficio previsional, debiendo optar por uno u otro (Decreto Nº 2288/02, 12/11/02, referido a elegir una de las dos opciones). 24 Decreto Nº 808/02, 13/05/2002. 25 Decreto Nº 2468/02; 03/12/02. 26 Julio C. NEFFA, “El Plan Jefes y Jefas de Hogar… cit. pp. 328-329. 27 Julio GODIO Argentina: Luces y sombras… cit. pp. 187-188. Estos movimientos desde 1990, surgieron heterogéneos en su composición interna. Los principales son Federación Tierra y Vivienda (FTV) dirigido por Luis D`Elía, cuya filiación política era Frente para el Cambio (Ex – Frepaso e integrante de CTA); Movimiento Barrios de Pie (Patria Libre); Corriente Clasista y Combativa (CCC, del Partido Comunista Revolucionario); como integrantes de del Bloque Piquetero Nacional: el Polo Obrero (Partido Obrero); Movimiento Teresa Rodríguez (MTR – Independientes de izquierda); Frente Único de Trabajadores Desocupados (Futrade – Partido Obrero); Movimiento Territorial de Liberación (MTL – Partido Comunista- FJC); Movimiento Independiente de Jubilados y Pensionados (MIJP – ex CCC, con lazos con Partido Obrero, MST y PTS); Agrupación Tendencia Clasista 29 de Mayo (Partido de la Liberación); Movimiento sin Trabajo Teresa Vive (MST); Corriente de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón (CTD). Cfr .La Nación 27/06/02, p 9. 28 Otra novedad fue la experiencia de las “fábricas recuperadas”. Ante la quiebra y abandono de diversas ramas de producción, por parte de las patronales, trabajadores y obreros tomaron el control de la producción y ganancias de fábricas. No se trata de una modalidad de cooperativismo clásico, sino que son gestiones más democráticas y cuyas utilidades en muchos de los casos, conllevan el principio del bien social hacia la 13 comunidad que pertenecen. Para profundizar en este tema, Cfr en Aiziczon, Fernando, (2009) Zanon. Una experiencia de lucha obrera, Coedición Ediciones Herramienta y Editorial El Fracaso. 29 Participaron el MTR, Polo Obrero, MTL, FTC y Nacional y delegaciones de Rosario, Córdoba, Salta, Chaco, Santa Fe, Gálvez, Villa Constitución y San Lorenzo y estuvieron ausentes el FTV y CCC. 30 El programa de acción bajo las consignas “Que se vayan todos” “Por un segundo argentinazo” propuso la unidad de los trabajadores ocupados y desocupados, no dar tregua al gobierno; impugnar las elecciones; aumento de emergencia de salarios, jubilaciones y subsidios, equivalente a una canasta familiar de emergencia, indexados con el costo de vida. Suspensión de desalojos y remates de viviendas; liberación de los presos sociales y políticos; no pago de la deuda externa y nacionalización de la banca y empresas fundamentales de la nación; devolución de depósitos a los pequeños ahorristas. 31 Isabel RAUBER, “Piquetes y piqueteros en la Argentina de la crisis. Cerrar el paso abriendo caminos”. Rebelión, 2002. Recuperado en http://www.rebelion.org/docs/4859.pdf 32 La Consulta se realizó entre el 14 y el 17/12/01. Los participantes del FRENAPO, además de la CTA fueron la Corriente Clasista Combativa, Alternativa por una República de Iguales, Federación Agraria Argentina; el Frente para el Cambio; el Polo Social; Federación Universitaria Argentina; varios organismos de derechos humanos, agrupaciones de izquierda, PyMES; intendentes de distintas regiones del país y cooperativas. Personalidades públicas nacionales como Victor De Gennaro (CTA); Marta Maffei (CTERA); Nora Cortiñas ; Estela Carlotto, Marta Pelloni; Elisa Carrió; Luis Ferinello; Alicia Castro; Horacio Vertbisky; Carlos Alonso; Luis Felipe Noé; León Ferrari; Rep; Anibal Cedrón; Ignacio Copani; León Gieco de los tantos. 33 El foro fue de carácter consultivo, organizado por el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales y con el auspicio de UNICEF. Contó con la activa participación y reconocimiento de diversas organizaciones de la sociedad civil, del ámbito académico y personalidades: Poder Ciudadano, el diario La Nación, la Mesa de Diálogo Argentino, el Grupo Sophia, Red Solidaria y muchas personas públicas en carácter individual para que con el mecanismo de Iniciativa Popular (art. 39 de la CN) el Congreso sancione una ley que hiciera obligatoria la alimentación de 2.300.000 niños menores de cinco años y de mujeres embarazadas en condiciones de pobreza. El proyecto que tuvo amplia difusión en los medios gráficos y televisivos, logró la adhesión de Cáritas, del Dialogo Argentino, varios centenares de particulares e institucionalmente, la Defensoría del Pueblo se pronunció a favor de su promulgación. 34 Los sujetos de derecho serán los niños de hasta 14 años, embarazadas, discapacitados y ancianos desde los 70 años en situación de pobreza, dejando al INDEC la determinación del índice que mide la línea de pobreza. Se asigna como organismos de aplicación al Ministerio de Salud y de Desarrollo Social de la Nación en forma conjunta. Para la coordinación del Programa se crea la Comisión Nacional de Nutrición y Alimentación integrada por representantes de los Ministerios de Salud, de Desarrollo Social y Medio Ambiente, de Educación, de Economía, Trabajo, Producción y de Organizaciones no gubernamentales acreditadas en el área. La reglamentación y la implementación del Programa le cupieron a la gestión de gobierno del presidente electo Néstor Kirchner. Ley 25.724. Publicada en el BO el 17/01/03. Reglamentada el 29/04/03. 35 La Emergencia Alimentaria Nacional fue uno de los primeros decretos firmados por el presidente Duhalde (Decreto 108/2002, 15/01/02 B.O). En él se declaró la Emergencia Alimentaria hasta el 31/12/2002. Cabe señalar que por ley 25.593 del 22/05/2002 el Congreso ratificó la Convención Interamericana sobre obligaciones alimentarias. Esta Convención fue celebrada en Montevideo el 15 de julio de 1989. Se refiere a que los Estados parte están obligados respecto a los menores en su calidad de tales y en su art. 4 establece que “toda persona tiene derecho a recibir alimento, sin distinción de nacionalidad, raza, sexo, religión, filiación, origen o situación migratoria o cualquier otra forma de discriminación”. 36 Así tituló Pagina 12 los sucesos en los cuales fueron asesinados Darío Santillán y Maximiliano Kosteki. Cfr. Página 12, 27/06/02, portada. 37 ADAMOVSKY. Historia de la Clase Media… cit. pp 456-457 38 Duhalde, La Nación, 11/03/02. 39 Según Informó la Agencia Infosic. http://www.argentinaarde.org.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=54&Itemid=2 14

40 El comunicado fue escrito por Alvarez. Recuperado: http://www.lafogata.org/05arg/arg1/ar1_0701.htm 41 La Nación, 28/06/02, p 10. El supuesto “plan de desestabilización y violencia”, no es otro que el Programa aprobado en el Congreso Nacional piquetero realizado en marzo de 2002 ya señalado en este trabajo y la solidaridad ante los obreros de Zanón. 42 La Nación, 27/06/02, p. 8. Declaraciones de Alfredo Atanasof. 43 Entrevista a Laura Vales, periodista de Página 12. Recuperado en “La Crisis causó 2 nuevas muertes” Documental de Patricio Escobar y Damián Finvarb (2006). Recuperado en http://www.cinenacional.com/pelicula/la-crisis-causo-2-nuevas-muertes 44 Pepe Mateos, fotógrafo de Clarín, logró registrar de manera completa la secuencia de los asesinatos y en las primeras horas de la tarde las entregó a la redacción del periódico. Asimismo registró la intimidación a testigos y la limpieza de los casquillos de balas. Cfr. en “La Crisis causó 2 nuevas muertes” op. cit. 45 El 17 de mayo de 2005 comenzó el juicio en el Tribunal Oral Nº7 de . Siete policías fueron condenados; el comisario inspector Alfredo Fanchiotti y el cabo Alejandro Acosta, fueron condenados a cadena perpetua. Félix Vega, Carlos Quevedo y Mario De la Fuente lo fueron a cuatro años de prisión por encubrimiento agravado, una de ellas de cumplimiento efectivo, el ex policía Gastón Sierra, a tres años por ese mismo delito, al igual que el también ex policía Lorenzo Colman a dos años de prisión. Por último el único civil enjuiciado, el ex policía Celestino Robledo recibió diez meses de prisión en suspenso por usurpación de títulos y honores. 46 Página 12, 29/06/02, p. 6 47 La Nación, 02/07/02, p. 1 48 Atanasof, La Nación, op.cit. 49 ADAMOVSKY. Historia de la Clase Media… cit., p 467 50 La Nación, 02/07/02. Portada. 51 Recuperado de: http://www.cadena-nacional.com/2012/06/20/luis-delia-sobre-el-asesinato-de-kosteki-y- santillan/ . Esta entrevista forma parte del documental “La crisis causó 2 muertes” cit. 52 Corriente en la que militaban Darío y Maxi. 53 Francisco FERRARA, Mas allá del corte de rutas. La lucha por una nueva subjetividad, Buenos Aires, La Rosa Blindada, 2003, p.13. 54 La Nación, 17 de junio de 2002. 55 Entre 1997 y 1998 se registraron en el país 191 cortes de ruta, cifra que aumentó a 766 entre 1999 y 2000, y que da un salto en 2001 pasando a 2.992. En el año 2002, del primero de enero al 26 de junio, estimulados por la crisis, se registraron 1.609 piquetes. Cfr. GODIO, Argentina. Luces y sombras… cit. pp 187 189. 56 Dicho cronograma previó elecciones internas abiertas para el PJ el 24 de noviembre –que no se hicieron-; se fijó el 30 de marzo la fecha para las elecciones presidenciales –los comicios fueron el 27 de abril- y que el candidato electo asumiría el 25 de mayo La Nación, 3/07/02, portada y p.7 57 No podemos desconocer que las agrupaciones de izquierda, no pudieron aportar al fortalecimiento de este “tiempo extraordinario” porque no supieron dejar de lado sus prácticas sectarias, principistas y divisionistas, llevando las mismas al interior de las asambleas barriales y a los movimientos piqueteros. Quedará para otro momento este análisis. 58 Orlando D`ADAMO, Virginia GARCÍA BEAUDOUX y Gabriel SALAVINSKY “Argentina: de la crisis del 2001 a un nuevo presidente”, ICONOS, Ecuador, Nº 17, 2003, pp 146-150.

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Fuentes  Constitución Nacional  Convención Interamericana sobre obligaciones alimentarias. Montevideo, 15 de julio de 1989.  INDEC  Censo Nacional 2001, INDEC  Ley 20.840, Ley de Subversión económica.  Ley 25.602. BO 20/06/02. Derogación de la ley de Subversión Económica.  Ley 24.522, 20/07/95 .Ley de Quiebras.  Ley N° 25.563, B.O. 15/2/2002. Reforma de la Ley de Quiebras.  Ley 25.561, 06/01/02. Ley de Emergencia Pública en materia social, económica, administrativa, financiera y cambiaria.  Ley 25.724. Publicada en el BO el 17/01/03. Reglamentada el 29/04/03. Ley de Emergencia Alimentaria Nacional  Ley 25.583, 11/04/02. Incorpora actividades formales y no formales en la ejecución de programas sociales.  Ley 25.593 del 22/05/2002 el Congreso ratificó la Convención Interamericana Sobre Obligaciones Alimentarias. 22/05/02.  Ley 25668, 23/10/02. Derogación de los regímenes especiales. Frena los fallos favorables que se iban acumulando en el gasto público.  Decreto 494/02, 12/03/02. Plan Bonex.  Decreto 165/02, 22/01/02 de Emergencia Ocupacional.  Decreto 565/02, 03/04/02. Plan Jefes y Jefas de Hogar Desocupados.  Decreto 401/02, 28/02/02. Donación de la remuneración presidencial  Decreto 2288/02, 12/11/02, Prohibición de cobro de salario y jubilación para funcionarios públicos jerárquicos.  Decreto Nº 808/02, 13/05/2002. Reformula y redirecciona 12 préstamos del BID para la Emergencia Social.  Decreto Nº 2468/02; 03/12/02. Modificación del Presupuesto Nacional para aplicar al PJyJHD  Decreto 108/2002, 15/01/02. Emergencia Alimentaria hasta el 31/12/2002.  Discursos Presidenciales de Eduardo Duhalde. Asamblea Legislativa, Cadena Nacional y prensa.  Dialogo Argentino, documentos: Introducción; Bases; Justicia; Reforma Política; Salud; Sociolaboral; Consensos; Evaluación PNUD y Breviario, en http://www.presidenciaduhalde.com.ar/system/contenido.php?id_cat=37

Webgrafía

 http://www.argentinaarde.org.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=54&Itemid=2

 http://www.lafogata.org/05arg/arg1/ar1_0701.htm

 http://www.telam.com.ar/nota/29593/26/05/02

 http://www.cadena-nacional.com/2012/06/20/luis-delia-sobre-el-asesinato-de-kosteki-y-santillan/.

 http://www.presidenciaduhalde.com.ar

 http://www.agenciacta.org/IMG/pdf/70260048-FRENAPO-folleto-1.pdf

 Documental La crisis causó 2 nuevas muertes. Los medios de comunicación en la Masacre de Avellaneda. Patricio Escobar y Damián Finvarb (2006). Recuperado en: http://www.cinenacional.com/pelicula/la-crisis-causo-2-nuevas-muertes

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