ASTURIAS SIGLO XXI

CANDAMO Fresas y castañas para renovar el sabor de

FERMÍN RODRÍGUEZ RAFAEL MENÉNDEZ

El apacible valle medio bajo del Nalón acoge un atractivo territorio concejil, próximo a la ciudad, cuajado de valores que dan sabor a una forma de vivir Asturias, en la que puede cuajar una singular mezcla de calidad de vida y de ocupación dinámica del territorio. es guapo . Su paisaje es de vegas feraces y de lomas suaves. Cercano al área metropolitana, pocos kilómetros lo separan de Illas y Avilés, y de Grado y Oviedo. Poca distancia, pero aún demasiado tiempo dadas las característica de su red de comunicaciones: carreteras y ferrocarril. De nuevo nos encontramos con el mal endémico de nuestra red de carreteras: la falta de jerarquización y la ausencia de vías rápidas de conexión a los ejes principales de autovías, pues las mismas características tienen las carreteras principales que las secundarias, e incluso los accesos a las aldeas. El arreglo, hace pocos años de las vías principales entre Grado-Avilés, -Pravia y Grullos-Peñaflor refleja bien este problema .La situación del ferrocarril es aún peor, a la espera de su reconversión en un sistema metropolitano y su conexión con el aeropuerto. Como sucede en la ruralidad que se localiza al oeste del mundo metropolitano, nos encontramos con la pérdida de población, que continúa, algo atenuada, en los últimos años, apoyada en la escasez de los nacimientos y el envejecimiento de la población. Situación que, no por repetida deja de estar menos olvidada por parte de la administración y la opinión pública regional, tan universalista y tan despreocupada de su realidad rural asturiana. Candamo dispone de un poblamiento rural aún denso. Sus 11 parroquias se sitúan entre los 135 habitantes de Prahúa y los 367 de Ventosa. Su población se reparte en 50 aldeas, entre las que abundan las que pasan de cien habitantes, sobre todo en la ribera del Nalón, pero también en las partes más altas: Santoseso, San Román, , Llamero, , , Ventosa. La capital, Grullos, es un núcleo rural más, de 181 habitantes, que agrupa los escasos servicios asociados a su condición en un concejo de pequeñas dimensiones. Y cuya vocación de cooperación comarcal oscila entre la atracción de Grado, la vecindad de Pravia y la cercanía del mundo metropolitano (Avilés y Oviedo). Cuenta, además, con un movimiento asociativo vecinal fuerte, base fundamental para el dinamismo social y el desarrollo local. Como territorio de paisaje rural, la ganadería mantiene también una gran importancia. El fortísimo ajuste a la baja de la producción lechera da paso a leves crecimientos y una reorientación general hacia la producción cárnica. 244 explotaciones, de las que ya sólo 43 son de producción lechera, y 3.000 cabezas, que tras un leve descenso en la última década, hablan claro del empeño resistente de la ganadería, incluso en las proximidades del mundo urbano. El empleo se reparte de la forma habitual en los concejos rurales sin villa, entre la ganadería y los servicios, poco más de 200 empleos en cada sector, a los que la construcción aporta otro centenar. Muchos residentes se desplazan a trabajar en empresas de los concejos vecinos, lo que indica la posición fronteriza con los centros metropolitanos, a pesar de las difíciles comunicaciones. El lento proceso de integración en el área de influencia metropolitana se deja ver también en un aumento de las actividades de restauración y hostelería y de los movimientos laborales hacia otros municipios. También en el desarrollo de la función de parques metropolitanos de sus lomas, que adquiere su mayor dimensión en La Degollada pero que está presente en casi todo su territorio, como área de expansión y ocio de las poblaciones de los centros urbanos. Como en otros concejos es realmente difícil explicar la tendencia declinante de Candamo. Paisaje amable, de alta calidad residencial, servicios completos en centros comarcales y urbanos muy próximos, poblamiento rural no desfigurado por nuevos diseños urbanos y bien integrado en el paisaje, patrimonio histórico y cultural de primer orden, iniciativas de desarrollo rural… Sin embargo no termina de despegar, la población envejece, no se atrae a nuevos residentes, no hay apenas nacimientos y las aldeas languidecen, aguantando sobre la población que vive entre varias localidades y mantiene sus casas aquí. No obstante el volumen de su población, 2.351 habitantes, aún permite modificar la tendencia negativa. El futuro parece orientado al aprovechamiento de la proximidad metropolitana. ¿Para qué?. Para ofrecer posibilidades residenciales a volúmenes pequeños de población, pero grandes con relación a la población censada, que permitan rejuvenecer la pirámide demográfica. Lo que descansa en las nuevas posibilidades de movilidad laboral, comercial, de servicios y de ocio que otorgan las tecnologías de la comunicación y la mejora de la movilidad metropolitana, si de una vez se apuesta decididamente por un sistema ágil y multimodal de transporte metropolitano, que aproveche las infraestructuras existentes. Para ello, en Candamo y en toda Asturias, se debería reflexionar sobre los medios para poner en activo y permitir el crecimiento de un poblamiento rural basado en pequeñas aldeas de personalidad bien definida, en la que no caben grandes urbanizaciones regularizadoras e introductoras de geometrías, alineaciones y estéticas imposibles, propias del lado oscuro y feo del urbanismo contemporáneo, sino crecimientos ajustados a la estructura tradicional de las aldeas, para resituarlas como órganos vivos del poblamiento, en términos de igualdad, al menos, de calidad a los centros metropolitanos, renovando la forma tradicional de vivir Asturias. Figaredo,16 de noviembre de 2006