8 de julio de 2018 DomingoN° 2.690

Hay-on-Wye: HAITÍ EL PEQUEÑO Una noche GRAN FESTIVAL en el extraño POR DESCUBRIR hotel vudú EN GALES El lado menos conocido de LOS CABOS, EN MÉXICO

Al rescate del HOMBRE DE HIELO La desconocida historia de Louis Lliboutry, el padre de la glaciología moderna que comenzó explorando

lliboutry las montañas de en

los años 50 amilia f archivo ESTE EJEMPLAR ES GRATUITO Y CIRCULA SoLO PARA LOS SUSCRIPTORES DE EL MERCURIO. PROHIBIDA SU VENTA. EL EXPLORADOR de HIELO Entre 1951 y 1956 el físico y alpinista francés Louis Lliboutry exploró las montañas de los centrales y patagónicos para realizar los primeros mapas y estudios de los glaciares que había en Chile. Ese trabajo sentaría las bases de la glaciología moderna. Un reciente libro permite rescatar su historia y poner en valor una figura que, hasta ahora, permanecía en

el olvido. POR Sebastián Montalva Wainer.

or qué esta figura se perdió en el tiempo? Si uno le pregunta a “¿Pcualquier persona de esta facultad quién es Louis Lliboutry, yo diría que el 95 por ciento va a decir que no sabe”. Quien habla es Patricio Aceituno, Decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad Chile y miembro desde 1968 de esta casa de estu- OBRA. En 1955, dios. Es una mañana de marzo y Lliboutry publicó Nieves Aceituno está sentado en su oficina y Glaciares de Chile, la en el histórico edificio de la calle obra fundamental para Beaucheff, en . Frente a él, estudiar los glaciares de el periodista y escritor francés Marc nuestro país. En esta foto, Turrel, director de la revista Andes escalando en el . Magazine, sostiene un libro de tapa

©G.STROUVE gruesa entre sus manos, donde se ve  Domingo la foto de un hombre de mediana a dejarle –todos elaborados por el estatura que se afirma con pies y propio Lliboutry y donados por manos entre dos grandes pedazos su familia en Francia, para que se hielo y clava una picota en uno de conserven en esta universidad–, es ellos. Es Louis Lliboutry, el protago- una forma de recuperar la historia. nista de su libro Le Champollion des “Creo que hemos tenido una mirada EL EXPLORADOR Glaces (El Champollion de los Glaciares) poco generosa hacia el pasado”, dice que acaba de publicar en Francia Aceituno. “En esta facultad hay una y que hoy ha venido a entregar riqueza histórica y este es un buen personalmente al decano. ejemplo: Lliboutry hizo un trabajo Tras una larga investigación, excepcional, pero poca gente lo Turrel logró escribir la historia reconoce. Un aporte extraordinario de este geofísico francés que a que quedó en el olvido y que recién comienzos de los años 50 del siglo ahora está saliendo a flote”. pasado, justamente bajo el alero de esta universidad, realizó las primeras Hijo de padres franceses exploraciones y estudios de los gla- de origen catalán, Louis ciares de Chile, que hasta entonces Lliboutry nació en el nadie conocía. Antes del trabajo de 19 de febrero de 1922. Allí vivió Lliboutry, la glaciología ni siquiera hasta los 14 años, cuando tuvo que existía como ciencia; solo era una salir del país debido a la Guerra disciplina ligada a naturalistas y Civil y radicarse en , la geógrafos. tierra de sus padres. A los 18 años, clave. Lliboutry fue el primer “En Francia no existía”, dice durante la ocupación alemana de científico que explicó con Turrel, el principal investigador de París, ingresó a la Escuela Normal cálculos matemáticos por qué la vida y obra de Lliboutry, quien Superior y, en 1945, con 23 años, se movían los glaciares o cómo falleció en 2007. “Él era un físico alcanzó el grado de agregado en se formaban los penitentes. brillante. Fue el primer científico que física. Siempre fue un alumno Aquí, a los pies del Fitz Roy. explicó con cálculos matemáticos brillante, pero sus profesores por qué los glaciares se mueven o también fueron de lujo: uno de cómo se forman los penitentes (unas ellos, Louis Néel, años más tarde estructuras de hielo que ya habían recibiría el Nobel de Física. De sido observadas por hecho, fue él quien le ofreció el durante su viaje por Chile, y que cargo de profesor asistente en el los nativos atribuían al poder del laboratorio que tenía en , viento; Lliboutry descubrió que su ya que siempre lo consideró como

formación se debía a un complejo un colaborador sin igual. y

fenómeno de derretimiento y ra- En Grenoble, una ciudad en los outr diación infrarroja que estos mismos Alpes franceses, Lliboutry descubrió penitentes reemitían). En su época, el montañismo. Aunque sus pri- familia llib

esos asuntos eran auténticos enigmas meros pasos en el hielo los dio en vo chi

y él logró descifrarlos. Luego se llevó , durante una estadía en r todo ese conocimiento a Grenoble, la escuela de alta montaña de esa : a otos Francia, donde fundó el Laboratorio ciudad alpina: mientras caminaba f de Glaciología y Geofísica del sobre el glaciar de Bossons se dio Medio Ambiente (hoy llamado cuenta de que estaba “escalando como probar su hombría”. futuros profesores en el Pedagógico, Instituto de Geofísica del Medio sobre agua”. Su afición al alpinismo también que en esa época pertenecía a la Ambiente), el máximo referente Según explica Marc Turrel, su pa- lo convertiría en pionero: por esa universidad. a nivel mundial en el estudio de sión por la escalada fue una forma de época, prácticamente no había Lliboutry llegó en barco hasta glaciares. Lliboutry es el padre de demostrar que era valiente. “Durante científicos que además fuesen y luego cruzó en tren la glaciología moderna”. la ocupación, los alemanes exigían montañistas. desde Mendoza hacia Chile. Sería su El decano Patricio Aceituno dice a los franceses hacer una especie de Lliboutry no quiso seguir una primer encuentro con la majestuo- que solo vino a saber de Lliboutry servicio militar, pero él no quiso y carrera académica en Grenoble y, a sidad de los Andes. “Viajando desde muchos años después de ingresar a logró evitarlo con un certificado través, del Ministro de Relaciones Mendoza aparecen bruscamente esta facultad, tras una conversación falso”, cuenta. “No quería perder Exteriores de Francia, consiguió las montañas”, escribió en una de con el ex profesor y glaciólogo chi- sus estudios universitarios. Además, que fuera enviado para formar sus cartas, que se conservaban en leno Cedomir Marangunic, quien a diferencia de otros compañeros, él profesores en la Universidad de su casa de Grenoble. “Los Andes había conocido al francés durante nunca tomó un arma ni luchó contra Chile. El contacto en nuestro país son interminables. Valles desérticos una de sus regresos a Chile. Por eso, los alemanes. Solo había ayudado en fue el rector de entonces, Juan con escasos arbustos espinosos. ahora siente que este libro, junto los servicios de ambulancia. Siempre Gómez Millas, quien había viajado Gigantescas formas con colores con los mapas y documentos sobre se sintió un poco culpable por eso. a Europa con la misión de reclutar flameantes. Podemos percibir por los glaciares que Turrel ha venido Así que el montañismo para él fue maestros que vinieran para formar breves instantes la cara sur del Domingo  Aconcagua, muy empinada. Es un ÚNICOS. Lliboutry se fascinó señor muy grande, que recuerda al con los penitentes de hielo de Himalaya”. los Andes, que estudió en sitios A Santiago llegó en febrero de como el cerro Negro, cerca del 1951 y ya en marzo se encontraba glaciar Olivares, en Santiago. haciendo clases de física en el No existen en los Alpes. Pedagógico. Durante su tiempo libre, comenzó a hacer pequeñas salidas a los Andes centrales, y a fue uno de ellos. Si bien entró a la contactarse con los pocos montañistas Universidad de Chile en 1956, no locales que había por entonces en conoció personalmente a Lliboutry la capital, como Bión González o hasta varios años después. “Fue Luis Krahl. Pero en rigor, lo que mi libro de cabecera durante mis definitivamente gatilló su interés primeros años en la universidad”, por la exploración ocurrió al año dice Marangunic, citado por Marc siguiente, en 1952. Enterado de la de geología, como Erik Klohn y glaciares de nuestro país. La tirada Turrel en su reciente publicación. expedición del Club Alpino Francés Óscar González-Ferrán. Con ellos, fue de 3.000 ejemplares y nunca ha “Con mis amigos montañeros que intentaría subir por primera vez de hecho, exploró el glaciar más vuelto a editarse. Uno de los detalles revisábamos sus mapas toda vez el monte Fitz Roy en la , grande de toda esta zona, que ni notables de este libro son sus mapas que hacíamos planes para ascender Lliboutry postuló desde Chile y siquiera tenía nombre. Lliboutry lo desplegables, que Lliboutry elaboró las altas cumbres (...). Lliboutry fue aceptado como científico. En la bautizó Universidad, en homenaje con gran detalle y precisión. “Él se era nuestro superhombre capaz de época, toda esa zona apenas estaba a la casa de estudios que lo había basó en un conjunto de fotos aéreas alcanzar los más remotos rincones mapeada y, justamente, ese fue el traído a Chile y donde acababa de que el servicio norteamericano había de la alta cordillera, tenía muchos trabajo que Lliboutry realizó durante fundar la Escuela de Glaciología, tomado de los Andes en 1945”, medios (según nuestro estándar) y su estadía en el campo base. Si bien unidad académica que con el tiempo cuenta Turrel. “Eran imágenes sabía una enormidad. Aún conservo no alcanzó la cumbre –estuvo a 400 desapareció ya que, tras dejar el país, confidenciales que seguramente ese libro, ahora ajado por el tiempo metros de lograrlo–, hizo nuevos y nadie siguió con su trabajo. las debe haber tenido el Instituto y el manoseo, en mi oficina en precisos levantamientos topográficos “El glaciar estaba en un terreno Geográfico Militar. Lliboutry logró Santiago, donde suelo consultarlo de estas montañas y los glaciares privado de 100 mil hectáreas”, conseguirlas pues debe haber co- cuando escribo sobre las nieves y del Campo de Hielo Sur, que se cuenta Turrel. “Cuando llegó, pidió nocido a un oficial ahí. Esas fotos glaciares de Chile, y donde es ha- convertirían en herramientas funda- permiso para entrar y explicó que fueron tomadas desde cierto ángulo, bitual que mis colegas lo soliciten mentales para futuros exploradores era glaciólogo. ‘Glacio... ¿qué?’, le pero cuando había mucha nieve no para ver qué dijo Lliboutry muchos y aventureros. respondió el dueño. Entonces le dijo: se podía ver cómo era la forma de años atrás”. De vuelta en Santiago, se propuso ‘Usted tiene en su predio el glaciar los glaciares. Por eso, él tuvo que hacer lo mismo, pero esta vez en más grande de los Andes centrales’. ir a terreno a comprobarlo. Antes, Louis Lliboutry se fue de los glaciares de los Andes centrales, ¡Él ni siquiera lo sabía!”. los mapas de Chile eran muy im- Chile en 1956. Ya se había desde el Nevado Juncal, en la Región El resultado de todos estos viajes precisos, estaban llenos de errores. casado en Francia y quiso retomar de Valparaíso, hasta la cordillera de e investigaciones fue la publicación, Lliboutry hizo un levantamiento su vida en Grenoble. Allí comenzó San Fernando, de los que nada se en 1955, de Nieves y glaciares de cartográfico muy fidedigno, que a trabajar como profesor asociado sabía. No siempre iba solo: además Chile, un libro de casi 500 páginas luego sería usado por generaciones en la universidad de esa ciudad de montañistas locales y arrieros, que hasta hoy se considera la obra de glaciólogos”. y en 1958 fundó el Laboratorio también lo acompañaban alumnos fundamental para el estudio de los El chileno Cedomir Marangunic de Glaciología Alpina (más  Domingo El lado astronómico de Lliboutry a v Durante los cinco años al t n

o que estuvo en Chile, Louis Lliboutry no solo se dedi- ián m

st có a los glaciares. También ba

se trabajó en proyectos astro- nómicos pioneros para la OBRA. El periodista francés Marc época. Uno de ellos fue el Turrel y Patricio Aceituno, Decano diseño de un observatorio en de la Facultad de Ciencias Físicas y Cerro Colorado, en Santiago, Matemáticas de la Universidad de donde hoy funciona el centro Chile, con el libro sobre Lliboutry. de esquí. “El proyecto fue anunciado pero nunca se construyó, ya que la fami- escribía un artículo académico. lia Leatherbee compró los Tenía 85 años. terrenos para instalar un En los años siguientes, Turrel andarivel y crear el centro de se juntó varias veces con Claude, esquí”, dice Turrel. Lo que sí tarde llamado Laboratorio de La su esposa, y sus dos hijos, para se concretó fue El Infiernillo, Glaciología y Geofísica del Medio reconstruir toda esta historia. Su el primer laboratorio nacional Ambiente). En un principio, este experiencia libro, que está escrito en francés, lo dedicado a medir radiaciones se enfocaría en el estudio de los en los Andes publicó a comienzos de este año cósmicas, que comenzó a glaciares de los Alpes, pero luego chilenos de en la Universidad de Grenoble. A funcionar en 1958 cerca de se amplió a otras zonas del planeta, la ceremonia asistió Claude, quien Farellones. “Imagínate lo que como Groenlandia y Spitsbergen. Lliboutry fue clave ya estaba bastante enferma: falleció debe haber sido construir un Lliboutry viajó a algunos de esos para el desarrollo 15 días después. “Louis Lliboutry laboratorio a 4.300 metros lugares, pero se quedó mayormente de la glaciología a me había dicho que le gustaría de altura en esa época. Todas en Grenoble, dedicándose al trabajo que algún día yo pudiera publicar las estructuras de cemento y en laboratorio (fue su director nivel mundial. todos sus escritos, así que para mí metales había que llevarlos hasta 1983) y al desarrollo de esto era como una promesa –dice a lomo de mula”, dice Turrel. nuevos instrumentos científicos Turrel–. Era mucha información y El decano Patricio Aceituno para estudiar el comportamiento que habían sido creados allí, pudo no se podía publicar tal cual. Parte agrega: “Esa estructura toda- de los glaciares. estudiar la composición de las de ella está en este libro”. vía existe. Sabemos que está En 1964 publicó su fundamental burbujas de aire incluidas en nú- ¿Qué pasó con el laboratorio de donde hoy está la mina Los Tratado de Glaciología, una obra de dos cleos de hielo de la Antártica. Esta glaciología que había creado en la Bronces. Pero toda esa investi- volúmenes que sentó definitivamente investigación sería esencial para la Universidad de Chile? El decano gación se perdió en los 80. No las bases de esta nueva ciencia, que comprensión del cambio climático Patricio Aceituno no sabe en qué solo habría servido para medir había iniciado con sus trabajos de en la Tierra. momento desapareció. “Nunca radiaciones cósmicas, también exploración en Chile. En las décadas Tras recibir una serie de premios conocí a nadie que me dijera: ‘Yo para analizar los efectos de las siguientes, Lliboutry vendría varias y reconocimientos, como el de estuve con él’ y me quedé traba- radiaciones nucleares produci- veces a Latinoamérica, pero ya como Caballero de la Legión de Honor jando en glaciología. Hubo algu- das por las pruebas atómicas experto en glaciares: en 1970 fue en 1991 –la más importante de las nos profesores de geología, como que en esa época se estaban traído por el gobierno peruano y distinciones francesas– o el premio Cedomir Marangunic, que luego se realizando en el Pacífico”. la Unesco para analizar las causas y Seligman Crystal en 1993, que fueron de la universidad. Después consecuencias del fatídico terremoto entrega la Sociedad Internacional de Lliboutry, el tema de nieves y y aluvión que sepultó la ciudad de de Glaciología, Lliboutry se fue glaciares se empezó a desarrollar en país tiene muy pocos oceanógrafos Yungay, debido al desprendimiento retirando poco a poco de la vida el departamento de Ingeniería Civil, y muy pocos glaciólogos. En un del glaciar Huascarán, e incluso en científica. Marc Turrel lo contactó pero más ligado al tema de aguas. escenario que dice que va a haber los 90 estuvo de nuevo en Chile en 2001 y lo fue a ver a su casa en La glaciología hoy es una disciplina una disminución de los recursos como uno de los especialistas para Grenoble. “Pasé todo un día con él, de un puñadito de personas”. hídricos, los glaciares tienen un el tema de límites con Argentina conversando sobre su historia, sus Sin embargo, Aceituno está gran significado y jugarán un rol en Campos de Hielo Sur. años en Chile”, recuerda Turrel. “Al convencido de que este asunto cada vez más importante. Por eso, En todos esos años, además, su final del día me pasó sus memorias, debiera ser mucho más importante, creo que tener los documentos laboratorio en Grenoble se conso- una serie de escritos que él había considerando la gran cantidad de de Lliboutry abre una ventana a lidó como referente internacional llamado Los glaciares son mis hermanos. glaciares que existen en Chile. la historia y a ese rinconcito que para el estudio de los glaciares. De Todos esos archivos –textos, fotos, “¿Cómo es posible que nadie es la glaciología. Probablemente, hecho, fue uno de los científicos documentos– estaban en el entre- siguiera su senda?”, se pregunta el esto aumentará el interés de contratados por Lliboutry, el francés techo de su casa, en baúles”. decano. “Chile tiene dos realidades otros estudiantes por entrar a un Claude Lorius, quien, utilizando los En 2007, Lliboutry murió de de las cuales no se puede escapar: el campo que todavía tiene muchos instrumentos de sondeo profundo un infarto en su casa, mientras océano y la cordillera. Pero nuestro desafíos”. Domingo