Imágenes Y Símbolos En Marbella Durante El Franquismo. Su Continuidad En El Tiempo Presente
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ISSN: 0212-5099 DOI: https://doi.org/10.24310/BAETICA.2018.v0i38.5330 IMÁGENES Y SÍMBOLOS EN MARBELLA DURANTE EL FRANQUISMO. SU CONTINUIDAD EN EL TIEMPO PRESENTE ANA MARÍA RUBIA OSORIO* UNIVERSIDAD DE MÁLAGA RESUMEN Los muertos del bando sublevado en la guerra civil fueron protagonistas de la exaltación de la victoria en la guerra a través de la realización de una serie de actos conmemorativos insertos en la promulgación de una memoria colectiva y selectiva, propiciada por el Régimen, prácticamente desde la fi nalización de la contienda como se demuestra con los cambios de nominación en el callejero local, aparición de cruces en lugares destacados de ciudades y pueblos como Marbella que siguen presentes en la actualidad o la compensación económica a los familiares de los muertos en el “bando nacional”. PALABRAS CLAVE: Franquismo, callejero local, cruces, memoria colectiva, víctimas *[email protected] © Baetica. Estudios Historia Moderna y Contemporánea, 38, 2018, 249-272. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Málaga. Departamento de Historia Moderna y Contemporánea ISSN: 0212-5099 DOI: https://doi.org/10.24310/BAETICA.2018.v0i38.5330 IMAGES AND SYMBOLS IN MARBELLA DURING THE FRANCO REGIMEN. ITS CONTINUITY IN THE PRESENT TIME ANA MARÍA RUBIA OSORIO* UNIVERSIDAD DE MÁLAGA ABSTRACT The dead of the rebellious side in the civil war were protagonists of the exaltation of the victory in the war through the realization of a series of commemorative acts inserted in the promulgation of a collective and selective memory, propitiated by the Regime, practically from the fi nalization of the contest as shown by the changes of nomination in the local street, appearance of crosses in prominent places of cities and towns like Marbella that are still present today or fi nancial compensation to the relatives of the dead in the “ national side”. KEYWORDS: Francoism, local street, crosses, collective memory, victims *[email protected] © Baetica. Estudios Historia Moderna y Contemporánea, 38, 2018, 249-272. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Málaga. Departamento de Historia Moderna y Contemporánea Imágenes y símbolos en Marbella durante el franquismo... 251 1. INTRODUCCIÓN Tras la fi nalización de la guerra civil, inmediatamente los vencedores de la misma comenzaron a poner en práctica una “exaltación de la victoria” a partir del objetivo común de engrandecimiento y culto a sus “caídos”. Como nos afi rman José L. Ledesma y Javier Rodrigo “la legitimidad de la Nueva España provino de su Victoria en la Santa Cruzada de Liberación, y los guardianes de esa legitimidad eran sus muertos”1. Al mismo tiempo se ensalzaba otro objetivo de por sí opuesto al anterior, enterrar la memoria de los fallecidos en el bando republicano y condenar al ostracismo social y económico a sus familiares. Durante toda la Dictadura franquista las úni- cas víctimas de la contienda civil homenajeadas y cuyos familiares fueron “premiados” económicamente por la pérdida de sus vidas en combate fueron los “caídos por Dios y por la Patria” en la guerra civil y los fallecidos de la División Azul en las campañas de la URSS. Los muertos en el bando vencedor se convirtieron rápidamente en los “mártires de la guerra”, produciéndose lo que Emilio Gentile ha denomi- nado una “sacralización de la política fascista”, tanto su ideología como su estilo, presentan características de una religión política, y se produce cuando la política adquiere una característica religiosa propia, convirtiéndose el fascismo en una de las religiones políticas del siglo XX, concibiendo a sus militantes como personas que deben entregarse totalmente a la nación, incluida la vida si fuera necesario. Se moviliza a las masas a través de mitos, ritos y símbolos2. Esta sacralización de la política para Emilio Gentile consiste en la transferencia de ritos, creencias, liturgias y simbologías cristianas a la polí- tica, muy presentes en el fascismo italiano. “La politización de lo sagrado” hace posible un modelo de caudillaje basado en la providencia divina3. Es una característica de los regímenes totalitarios y aunque el franquismo es considerado por los historiadores más autoritario que totalitario, podemos encontrar ciertos aspectos de esta sacralización. Especialmente en el culto que se le concedió a los muertos en el “bando nacional” durante la guerra civil y la posguerra, refl ejando su máxima expresión en la presencia de cruces a la entrada de las iglesias con placas conmemorativas de los falle- cidos en la guerra por el bando sublevado. Culto que perduró prácticamente 1. J. L. LEDESMA y J. RODRIGO (2006), 236. 2. E. GENTILE (2004), 57-68. 3. Ibidem, 180. © Baetica. Estudios Historia Moderna y Contemporánea, 38, 2018, 249-272. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Málaga. Departamento de Historia Moderna y Contemporánea 252 ANA MARÍA RUBIA OSORIO hasta la muerte de Franco y que hemos estudiado en el presente trabajo dentro del ámbito local de una entidad urbana, Marbella4, que como la inmensa mayoría de las ciudades españolas siguió esta línea impuesta por el Nuevo Estado de reconocimiento perpetuo de la pérdida de estas vidas por la “causa nacional”. En España ya encontramos muestras de esta sacralización de la política desde los primeros meses de la guerra civil, cuando el obispo de Salamanca Pla y Deniel, en su carta pastoral de 30 de septiembre de 1936 titulada Las dos ciudades, ofi cializa la adhesión de la Iglesia española a la sublevación del golpe de Estado del 18 de julio, califi cándola como “Cruzada”5. El acuerdo y mutuo apoyo entre la Iglesia y el Estado franquista, se pueden apreciar igualmente en la Carta colectiva del episcopado español de 1 de julio de 1937, fi rmada por casi todos los obispos españoles y cuyo promotor fue el cardenal Isidro Gomá, arzobispo de Toledo6. La Iglesia católica mostró todo su apoyo a los sublevados durante la guerra afi anzando su privilegiada situación durante el franquismo y extendió la categoría de “mártir” a los fallecidos en el “bando nacional”. Esta simbiosis político-religiosa se convirtió rápidamente en elemento de cohesión entre los apoyos del Nuevo Estado. Este posicionamiento del Régimen franquista dio lugar a la “construcción de una imagen degradada y negativa del vencido, que justifi caba la exclusión política y la marginación de los partidarios de la Segunda República durante el confl icto”7. El eterno dolor por los muertos “nacionales” en la guerra tuvo otra conmemoración simbólica mediante el cambio de nominación del callejero local con los nombres de los fallecidos locales en la contienda, sin duda cabe, del bando vencedor. El fi n último será idéntico a la “sacralización” de las cruces de recuerdo y homenaje, pero sin este carácter sacro, con esta medida se pretendía dar protagonismo indefi nido en el tiempo a estas personas fallecidas y fomentar el recuerdo de sus muertes. 4. El presente estudio se incluye en el programa de trabajo del Grupo de Investigación de la Junta de Andalucía “Historia del Tiempo Presente” (HUM608) de la Universidad de Málaga. 5. G. DI FEBO (2004), 83-85. A. ELORZA (2004), 71. 6. La carta-denuncia responde a las numerosas críticas por parte de los sectores católicos europeos a la postura de la Iglesia católica ante el bombardeo de Guernica y el asesi- nato de dieciséis sacerdotes vascos, así como el exilio de cientos de ellos. G. DI FEBO (2012). 7. M. A. DEL ARCO BLANCO (2014), 176. © Baetica. Estudios Historia Moderna y Contemporánea, 38, 2018, 249-272. Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Málaga. Departamento de Historia Moderna y Contemporánea Imágenes y símbolos en Marbella durante el franquismo... 253 Tras la promulgación de la Ley de Memoria Histórica8, las huellas del recuerdo de los vencedores de la guerra que aún persisten en ciudades españolas, se nos muestran como una cuestión susceptible que aviva viejos recuerdos y sentimientos encontrados en la sociedad actual de nuestro país. A la realización y pervivencia de esas huellas, que aún hoy día podemos observar en la ciudad de Marbella, hemos dedicado el presente artículo mediante un estudio de esta simbología franquista en calles y plazas de la localidad, así como de las compensaciones económicas recibidas por los familiares de “las víctimas nacionales” en la guerra y de los fallecidos divisionarios locales en la URSS. Trabajamos fuentes documentales primarias principalmente el Archivo Histórico Municipal de Marbella (AHMMb) y el Archivo Histórico Pro- vincial de Málaga (AHPM), así como fuentes secundarias sobre el tema mencionado. Nuestro fi n último con este trabajo de investigación nos lleva a hacer una profunda refl exión sobre la supervivencia de estos símbolos en una entidad urbana como Marbella, convertida en importante foco de turismo nacional e internacional, en la que a pesar de existir una Ley que establece normas para la desaparición de esta simbología franquista, estos símbolos siguen presentes en la actualidad. 2. MEMORIA A LAS “VÍCTIMAS NACIONALES” EN MARBELLA Muy pronto las autoridades franquistas comprendieron la importancia de monopolizar los espacios públicos para la feliz consecución de uno de sus principales objetivos tras la clausura de la contienda, mantener la “memoria colectiva de la victoria” para la posterioridad. Calles y plazas pasaron a tener el nombre de víctimas locales o nacionales, prácticamente desde que eran tomadas por las tropas sublevadas, extendiéndose aún más tras la fi nalización de la guerra y en los años inmediatos del primer fran- quismo. La atmósfera de “perpetuo duelo” por los fallecidos “nacionales” debía de permanecer intacta en el transcurso del tiempo. A nivel local, uno de los primeros actos de exaltación para el recuerdo de los “fallecidos en combate por el bando sublevado” fue el cambio de nombre del callejero, temprano en el ámbito cronológico, produciéndose el día de la constitución de la primera Comisión Gestora, el 18 de enero de 1937, al día siguiente de la toma de Marbella por las tropas sublevadas.