Año XLII Pamplona 24 de mayo de 1936 Núm. 987

earanc

ADMINISTRACIÓN ESTAFETA, 31 DE LA "BIBLIOTECA CATÓLICO PROPAGANDISTA» DIRECCIÓN NAVAS DE TOLOSA, 21, 2.° tzq

No se desalienten por ello los católicos, ni den entrada RECUERDOS DE ESPERANZA en su pecho al miedo que, además de ser estigma de co- bardes, es muy mal consejero en (as resoluciones de la vida... no se asusten, amilanándose ante la ola de perse* EL REY SANTO cución que nos anega; probaríamos con esto que nuestras ...Mayo: día 30: San Fernando, rey de España... almas se habían entibiado en la fe. Es ei agradecimiento la virtud más noble del corazón humano... Se había pegado al oro de (a fe de España y de! patrio» Los pueblos han sido grandes cuando han quemado en tismo de sus hijos mucha tierra de inmoralidad... mucha el airar de la Religión y de la Patria el incienso de la gra- de irreligión, y era necesario el crisol de la prue- titud y del reconocimiento, en honor de sus sabios, en glo- ba... y la prueba ha llegado... ¿quién lo duda?... en alas de rificación de sus reyes, en loor de sus santos... esos partido? políticos, enemigos de Dios y de su Iglesia, Ei vicio más degra- que no son más que dante de los hombres vientos de la masonería es el odio y el rencor... extranjera, convertidos Las naciones retro- en tempestad al cruzar gradan al primitivismo el cielo de nuestra Pa= salvaje cuando, por tria... ¡Bendita sea la odio a Dios y a ia Pa* prueba, si la prueba es tria, queman templos, del Cielo!... Bien veni* que son ¡a morada de do sea ef azote de A ti' los santos; destruyen ía, si eí azote es de monasterios y bibliote- Dios... ;.' cas de sabios, que son España saldrá puri- las fuentes del saber, y ficada de la prueba te- arrojan por los suelos rrible; no lo dudéis... las estatuas de los re- siempre, después de ia yes, que son el símbo- tempestad, a pareció, de- lo culminante de la Pa- Eello paisaje d.s nuestras montañas liciosa y radiante, la tria... - ,-~ '• ' *• calma... siempre eímás Desgraciadamente, en nuestra España querida, tan ad- dufce reír, como dice el adagio francés, es def que ríe ef mirada y gloriosa en épocas pasadas, ha permitido Dios úftimo... y, sobre todo, siempre ha tenido perfecto cum- nuestro Señor que se desencadene un huracán de odios a plimiento, como lo tendrá ahora, ía palabra de Dios que la Religión santa y a todo (o que con ella se relaciona, y nos dice: En verdad, en verdad os digo: vosotros fío* que arrastra, en sus ciegos torbellinos, muros de templos, raréis y pfañirét's, mientras ef mundo se regocijará; claustros de monasterios y galerías de colegios; astillas de pero vuestra tristeza se convertirá un día en afegría... sagrarios, de altares y de imágenes sagradas; libros de Yo os vofveré a visitar, y vuestro corazón se Bañará preciosas bibliotecas; monumentos de héroes de la Patria en gozoj gozo que nadie os podrá arreBatar...

Dicen que estos tiempos no son tiempos de enaltecer a los eternos enemigos de la paz y de la libertad de su los reyes y de ensalzar a las coronas... ¿y por qué, si ellos pueblo. ensalzaron nuestra veneranda Religión, con sus leyes y Para conseguir estos anhelos organizó y emprendió mu- sus virtudes, nosotros, los cristianos, no hemos de pagar- chas y activas campañas, en las cuales obtuvo tantas vic- les, at menos, con el tributo de nuestro agradecimiento?... torias como ciudades fueron por él cercadas... ¿Por qué, si eílos enaltecieron la Patria, con sus glorio- Blasón de sus conquistas fueron los reinos de Murcia, sas hazañas, nosotros no hemos de depositar en el pedes- Córdoba, Jaén y Sevilla; haciendo, además, tributarios su- tal de sus estatuas la flor de un patriótico recuerdo?... yos los de Valencia y Granada... Esmaltadas están ¡as más brillantes páginas de la histo- Sevilla, sobre todo, que fue el más bello florón de su ría de España con la figura gigante de reyes que, dirigien- corona, no fue conquistada sino a fuerza de valor y de do la hidalguía y el valor del pueblo español, fueron, al heroísmo, y como decía el piadoso monarca, a fuerza de mismo tiempo que su caudillo, su guía, su luz y su fa ayuda def Cieío y de fa especialprotección de San» ejemplo. ta María... Uno de éstos fue Fernando III el Santo, > ' T La bella ciudad del Guadalquivir se rindió sólo des- Antes... la Religión y la Patria, cosidas en fraternal pués de esfuerzos titánicos tan hazañosos que parecen in- abrazo, celebraban con entusiasmo santo la fiesta de este verosímiles... rey, que coincide con el 30 de mayo. Pero al fin fue conquistada por el rey cristiano; sus he- Hoy... en ese mismo día no ha dejado la Iglesia de con- raldos pudieron anunciar al mundo que el emirato de sagrar la liturgia de sus cultos a su dulce recuerdo... Abul-Asan ya no existía; que en lo más alto de los mina- y con razón: porque fue uno de los monarcas españo- retes ondeaba, gallardo, el pendón de Castilla; que la les que, puesta siempre su mirada y su intención en Jesu- Cruz salvadora había sustituido a la tan ridicula como cristo, , abrillantó el prestigio de su corona orgullosa Media luna, y que aquellas esbeltas mezquitas, con el lustre inmaculado de sus virtudes... manifestación fastuosa del talento artista de los orientales, En él vio nuestra Patria la encarnación... la personifica» no volverían a presenciar las fanáticas y groseras supersti= cíón de la fe heroica y del espíritu colonizador que, en ciones de los mahometanos, porque se habían convertido más hermosos días, la empujaron a la conquista del mundo. en templos del verdadero Dios... * # * En tantas batallas, jamás manchó su espada en sangre inocente, así como tampoco en la de los culpables sin Fue el rey-santo hijo de doña Berenguela, hermana de costarle abundantes lágrimas. la reina de Francia y madre de San Luis dona Blanca, y La oración y el ayuno eran la preparación para el com- ambas hermanas eran nietas de la princesa navarra doña bate, apretando el cilicio que llevaba debajo de su arma- Blanca, hija mayor del monarca de Navarra don García dura, y después del triunfo, su primer cuidado era dar el Restaurador. gracias rendidas al Dios de los Ejércitos. Sangre navarra, por tanto, corría por las venas de los El brillo del reinado de san Fernando no está solamen- dos santos primos Fernando y Luís, rey de Castilla y de te en haber ensanchado, dentro de la Península, los domi- León el primero y de Francia el segundo. nios de la nación española, sino también, y principalmente, La sangre de una virtuosa princesa que quiso ser ente- en haber fortalecido el espíritu de su pueblo por medio de rrada en Nájera, capital y corte, durante muchos años, la sabia unificación de las leyes. del antiguo reino de Navarra; moviéndole, acaso, esta ra- Comprendió que la unidad nacional era necesaria para zón de amor a su tierra- para elegir el panteón de sus ma- conservar las conquistas de reinos tan diferentes y para yores, donde espera la resurrección de la carne. gobernarlos con más acierto. A este fin preparó una le- Es notable el epitafio de su sarcófago que, traducido al gislación uniforme en todos sus dominios, traduciendo el castellano, dice así: TuerO'Juzgo y preparando así el camino del saber y AQUÍ yACE LA REINA DOÑA BLANCA: de la fama a su hijo don Alfonso X el Sabio. BLANCA EN EL NOMBRE: La desecación de terrenos pantanosos y la transforma- BLANCA y HERMOSA EN EL CUERPO: ción, colonización y cultivo de las yermas llanuras de PURA y CÁNDIDA EN EL ESPÍRITU: Castilla, ponen bien a las claras su amor paternal para las AGRACIADA EN EL ROSTRO ; . clases ínfimas de la sociedad y su anhelo constante por . ' y AGRADABLE EN LA CONDICIÓN: llevar a los hogares del jornalero y deí agricultor la hon- HONRA y ESPEJO DE LAS MUJERES: radez y el trabajo, y con ellos, como sus más legítimas FUE SU MARIDO DON SANCHO, fuentes, el pan, el bienestar y la salud... .••-•. HIJO DEL EMPERADOR: Los monumentos grandiosos que su mano benéfica y y ELLA DIGNA DE TAL ESPOSO. • ' protectora levantó en el suelo patrio, son, a través de las MURIÓ AL DAR A LUZ A SU HIJO. edades, otros tantos heraldos de su genio de artista y de sus recias virtudes cristianas... Mientras su egregia nieta, llamada también doña Blan- A san Fernando debemos, entre otros suntuosos monu- ca, teniendo en Francia a su hijo Luis en sus faldas, le mentos de arte, las catedrales de Toledo y de Burgos, decía: Quisiera más, Bijo mío, verte muerto en misBra' considerados como primorosas maravillas del arte arqui- zas, que saber Bas (fegado a cometer un pecado mor» tectónico de la Edad media... taC su hermana doña Berenguela educaba al príncipe Fer- Estos gigantescos poemas de piedra bordada son la más nando en los más puros principios y enseñanzas de nues- elocuente apología de la robusta fe de nuestros antepasa- tra Religión. dos. En las tracerías de sus ventanales, en las espigas de Por esto no es de extrañar que los ideales de toda la sus capiteles, en las molduras de sus archivólas, en las vida del príncipe fuesen libertar a la cristiandad de los jambas de sus arcos, en los broches de sus bóvedas, en la sectarios de Mahoma, que era lo mismo que domeñar a esbeltez y galanura de sus torres y de sus chapiteles, en LA AVALANCHA 147 sus naves y en sus claustros, están esculpidos los argu- Que por lance casual sobreviviera. mentos más concluyentes y expresivos de la verdad de la Yo creería en Tí. Religión Católica. Sí aun la bierba barriese el cataclismo, No pudíendo yo ver las maravillas No hay nada como estos monumentales relicarios de Que habían de brotar de sus semillas nuestra Fe y de nuestras glorias pretéritas, que haga re- En bella realidad, no en espejismo Ficticio y baladi; vivir el espíritu y el entusiasmo viril que animaba a la ra- Pero viese volar un simple insecto. za española cuando se desenvolvía al influjo de las auras Dotado de organismo prodigioso, Con su instinto sagaz, maravilloso, fortificantes de la Religión, y que mejor pregone, a través Tan completo, tan vivo y tan perfecto. de los siglos, la pujanza de! genio animado por la fe... Yo creerla en Ti. * * * Si hasta insectos y hierbas pereciesen, Tantos y tan consoladores recuerdos se agolpan a la !r^o quedando en el orbe ni aun abrojos Que en vano los buscasen ya mis ojos mente cuando retrotraemos nuestra mirada al reinado del Por mucbo que sus órbitas se abriesen rey san Fernando, y aun a otros muchos de la Edad me- Mirando aquí y allí; Pero viese una gota de agua clara dia, que, en medio de las tristezas que agobian a la gene- Cuya sola existencia es un misterio ración presente, nacen en el alma halagüeñas esperanzas Y un enigma su esencia y refrigerio. Con eso solamente me bastara para el porvenir: la protección, la tutela y la intercesión Para creer en Ti. valiosa de aquellos héroes de la Iglesia y de España nos Y si aun ni ésa quedase ya en el mundo, traen alientos para esperar seguros la resurrección de Si todo cuanto existe y ha existido nuestra aherrojada y decadente sociedad. Lo viese de repente destruido En el trágico caos más profundo, De esperar es que España, gangrenada por el virus de Rugiente junto a mí; la impiedad y del desenfreno, ante el espectáculo de des- Pero viese yo un átomo flotante. Preguntárale al punto: "¿Quién te trajo composición que ofrece al mundo civilizado, maldiciendo De la nada a tu ser?,, Y yo aquí abajo de la políiíca revolucionaria que la arrastra a su ruina, gritara de rodillas ai instante: vuelva pronto los ojos a los principios salvadores de la iDíos mío, creo en Ti! DANIEL CIGA Y MAYO Religión santa, la única que dispone de medios suficientes para resolver, con justicia y con amor, todos los proble- mas sociales y nacionales; la única que enseña los cami- nos seguros que conducen a las naciones y a los pueblos a la posesión de su legítimo bienestar y verdadera gran- deza,., Un gran remedio para la hora presente EL MAGISTRAL DE RONCESVALLES, o os propongo, amigos míos, que el tiempo que invertís en lamentar, recriminar, temer, alimentar odios y venganzas, lo empleéis en formar "decurias,, Ú£ "justos,, que aplaquen DIOS MIÓ, CREO EN TI! a Dios y muevan la Misericordia de su Co- razón a hacer nuevos milagros de salvación y pacifica- ción de España. Si una mano satánica encendiese De sacrilego fuego inmensa hoguera ¿Recordáis la promesa del Señor a Abraham, de no Que los libros sagrados consumiera destruir a la abominable Scdoma por amor a "diez jus- Y su texto divino destruyese tos,,, si los hubiese tenido? Por siempre para mi; Cierto que muchos pueblos de España tienen los diez Pero yo viera el sol que arde en el cielo. justos y más; pero, ¿todos? ¿la mayor parte? Cuando Los montes que descuellan entre brumas, Deí mar enfurecido ías espumas miro a mi lista de Sagrarios abandonados o mal acompa- Y las /¿ores sin fin que ofrece el sueio, ñados, y la veo tan larga, tan larga, ¡qué pena me cuesta Yo creería en Ti. decir que son muchas las parroquias que no llegan a los diez justos! Si Jesús está despreciado, ¿no va a haber Sí un rayo apocalíptico, tremendo, Destruyese de un golpe esos prodigios, egoísmos en los unos, y odios en los otros, y falta de Sin dejar sol ni mar, ni sus vestigios, justicia y de paz por todos los lados? Y ios montes saltasen con estruendo, Ved aquí las dos partes del remedio que propongo: Chocándose entre sí; 1.a, que el que esto lea, al punto haga el propósito de Pero viera yo en la árida ladera Que se había salvado, el día aciago. "meterse a justoB si no lo es, y a "más justo,, si ya lo Una hierba, tan solo, del estrago es, y 2.\ que se dedique con el máximo interés a bus- Caja de Ahorros Municipal Lleva SESENTA y CUATRO años recibiendo y administrando ahorros del país y tiene la garantía total y comprobada del Excmo. Ayuntamiento de Pamplona INTERESES QUE ABONA A LOS IMPONENTES * Libretas ordinarias a la vista 2*50 por 100 Imposiciones anuales 3*50 B „ Imposiciones semestrales 3'00 „ „ Cuentas corrientes a la vista 1*25 „ „ OFICINAS Raseo de Sarasate, núm. 5 148 LA AVALANCHA car o formar otros "nueve justos,, más, y con esta "De- subir a! cielo quiso dar a conocer a su gran amigo Agus* curia, de comprometidos o aspirantes a justos, presen- tín que tal felicidad es indescriptible. tarse, juntos o separados, cada día al Padre celestial, a ya io dijo bien expresivamente el Apóstol de las Gen- pedirle por el Corazón de su Hijo Jesús y por la inter- tes: que «ni el ojo vio, ni el oído escuchó, ni el corazón cesión de la Inmaculada Madre del Pilar, que salve al vislumbró lo que Dios tiene preparado para los que le pueblo más perdido y más en peligro de castigo de Es- aman». . _ . paña. ">''S Una bella respuesta Brindo la idea, en la forma que quieran, a los párro- Siendo el cielo el conjunto de todos los bienes y de to- cos, superiores y superioras de comunidades, presi- das las bienandanzas, resulta muy natural que Dios exija dentes de Acción Católica en sus cuatro ramas y de aso- ciertas condiciones para que pueda conseguirse un puesto ciaciones católicas, padres de familia, maestros, catequis- en él, porque no hay premio sin mérito, y porque Dios da- tas, "Marías, y a los grupos o tertulias de buenos rá a cada uno el pago a que se haga acreedor con sus amigos. obras, como nos dice repetidamente en el Santo Evange- Los adversarios se reirán de la eficacia de este reme- lio; en el cual también se nos advierte que el reino del cie- dio, ¡rían en buena hora, para descanso, siquiera, de los lo padece violencia y que no lo arrebatarán sino Jos que malos ratos que pasan y hacen pasar!; pero el demonio, se la hacen, teniendo a raya sus malos apetitos y sus pa- que entiende bien de estas cosas de espíritu, no sentirá siones rebeldes, y eso mismo nos inculca San Pablo, al ganas de reír ante esas decurias de almas serümente decir que «no será coronado sino el que legítimamente empeñadas en odiar todo pecado, grande y chico, y en peleare», y que «reinaremos en la gloria con El si prime- amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ro !e acompañamos en el padecer». sí mismo. Pero hay que advertir que lo que Dios pone por condi- Os afirmo, sin temor a equivocarme, y os empeño mi ción para admitirnos en el reino de la gloria, es decir, la palabra: un ejército formado por "decurias, de "justos,, guarda de los Mandamientos y obligaciones del estado, es o sea, de fieles cumplidores de *todosn sus deberes, lle- nada, absolutamente nada, en comparación de la magni- va en los pliegues de su bandera la victoria del orden, tud asombrosa de la recompensa; por ío cual dice San de la paz y de la dulce fraternidad cristiana. Pablo que no tienen que ver, ni valen un comino, los su- •fc MANUEL GONZÁLEZ frimientos de esta vida en relación a la futura gloria que Obispo de Patencia nos aguarda; y que las tribulaciones de este mundo son leves y momentáneas, y que, no obstante, producen un peso eterno de gloria. De aquí deduce el Beato Susón que, «cueste lo que costare, el cielo nunca será caro». EL CIELO EMPÍREO ¿Qué diremos, por tanto, de esa turbamulta de fielesqu e pretenden se íes dé el cielo gratis et amore? Esos tales quieren ir al cielo, como dice el Barón de Hervás, «sin Ir oí cielo es el anhelo del que vive y del que muere, llanto ni duelo»; quieren dos cielos, uno aquí, haciendo lo pero sin llanto ni dueío; que les viene en gana, y otro allá, en las regiones supra- todos quieren ir al cíelo, terrenas, lo cual es de todo punto imposible, pues, en ex» mas no por donde Dios quiere. presión muy celebrada de S. Pedro Crisólogo, «el que aquí (Barón de Hervás.) quiere divertirse con el diablo no podrá reinar con Cristo». UÉ poco nos acordamos de la Por eso los que están penetrados de estas verdades no eterna morada donde reside la fe- temen a nada con tal de ir al cielo; y al efecto es célebre licidad! Confesamos, en verdad, la respuesta que dos santos y sabios religiosos dieron a muy a menudo que este mundo es Enrique VIII, que quería hacerles apostatar de la religión un destierro, un valle de lágrimas, católica y abrazar el anglicanismo, bajo la amenaza de y así lo decimos siempre que re- arrojarlos al Támesis si lo rehusaban. citamos la Salve; pero lo decimos —Oiga el Emperador — le contestaron con serenidad como si fuéramos una placa de admirable,—nosotros lo que deseamos, ante todo y sobre fonógrafo, o el eco que material* todo, es ir al cielo, y lo mismo nos da ir por mar que por mente repite los conceptos del tierra, hombre. : Al «chíelo», al «chleío» y sin embargo, debiéramos te- He oído a un veterano de la guerra carlista, que durante nerle presente a cada paso, como ella se veía de vez en vez un sacerdote italiano, con un el verdadero desterrado le tiene a gran crucifijo, que recorría los campos de batalla sin ha- su patria; y por eso la Santa Igle- cer caso del silbido de las balas ni del estruendo de los sia pide a Dios en estos días, en que se conmemora su cañones; y cuando veía algún herido, corría a su lado, le Ascensión a los cielos, que nos conceda la gracia de vivir absolvía, y dándole a besar su gran crucifijo de plata, le con la mente en aquella venturosa región, ya que no po- decía al oído:—\K\cBiefo, al cfjieío! demos corporalmente por ahora. Pues esa debe ser también nuestra constante aspiración y a fe que bien merece ocupar todos nuestros pensa* y nuestra preocupación continua, la conquista del cíelo; mientos y afectos del alma un lugar tan sobresaliente y porque como advierte el insigne Sarda y Salvany, «no ha dichoso como éste, criado Dios la tierra para que la ames y sirvas, sino para • - Delicias celestiales que la huelles con tus pies». El erudito P. Ortúzar, tomándolo del Cat. en exempfes, Así han discurrido todos los santos, viviendo en el refiere que rogado San Agustín, por su amigo Severo, qui- mundo solamente con el cuerpo, porque el espíritu siem- so componer un tratado sobre los placeres del Cielo. Al pre andaba por las nubes, siendo su obsesión el cielo. efecto se retiró a su celda y tomó la pluma para escribir a A San Francisco de Asís, unos días antes de morir le San Jerónimo, a quien, según su costumbre, quería con- reveló el Señor que era de los predestinados para el cielo, sultar. De repente, dice el mismo San Agustín que una y esta noticia le causó tal regocijo, que no sabía lo que luz indefinible iluminó su aposento, donde a la vez se di- hacía y estaba fuera de sí, hasta tal punto que apenas ha- fundió un perfume de gran suavidad. Asombrado, y como blaba, sino tan solo de cuando en cuando estas palabras: fuera de sí, oyó una voz clara y armoniosa que le dijo: «Loado sea Dios»; n¡ se acordaba de comer, y lo que es —Agustín, ¿qué pretendes hacer? ¿Crees poder ence- más raro, ni de rezar el oficio divino. rrar en un vaso las aguas del mar? ¿Podrías contener la No era para menos; tenía razón el pobrecillo de Asís; Tierra en el puno de tu mano?.,. ¿Cómo podrás medir la esa es la verdadera lotería, esa es la sabiduría consumada. inmensidad? Aun allá decía nuestro Quevedo: «El mayor discreto Era la voz de San Jerónimo, que precisamente aquel es aquel que sabe labrarse el eterno bien.» mismo día había muerto en Befen, donde vivía, y que al EL PRIOR DE RONGESVALLES LA AVALANCHA 149

y conmemorándolos en seguida en Barcelona con los más RASGOS DE LA PATRIA brillantes festejos. En la época contemporánea, todos sabemos que doña Isabel II, nacida en 1830 y declarada mayor de edad en La soltería en las Casas Reales 1843, para que reinara constitucionalmente, contrajo ma- trimonio en 1846 con su primo don Francisco de Asís de N la temporada actual, la mirada Borbón; que don Alfonso XII, nacido en 1857 y procla- de los hombres se ha fijado con mado en Sagunto a fines del año 1874, se casó en 1878 preferencia en Eduardo VIII de con doña Mercedes de Orleans y Borbón; y que don Al- Inglaterra, no solo por tratarse del fonso XIII, nacido en 1886, entró a reinar, sin la regencia rey que acaba de subir al trono de su madre, en 1902, y celebró su boda con (a princesa de una de fas naciones más gran- de Inglaterra, doña Victoria de Batenberg, en 1906. des y poderosas del mundo, sino Contrayéndonos solamente a Navarra, y examinada por ser un solterón mayor de como más cierta la historia de su monarquía desde la cuarenta años, enamorado del ce- muerte de don García el Tembloso, al terminar el siglo X, libato, que ha hecho manifesta- hasta el año 1512, en el cual dejaron de reinar los últimos ciones muy interesantes, interpre- reyes privativos don Juan y doña Catalina, no encontra- tadas en general como demostra- mos sino un rey soltero, don Francisco Febo, debiendo tivas de su propósito de contraer advertir que éste, cuando fue llamado a ia sucesión de la matrimonio, razón por la cual la corona, sólo tenía doce años, y quince cuando le sorpren- curiosidad de las gentes se dirige dió la muerte, y aun así, dicen los historiadores que se a averiguar las princesas que pueden compartir el trono concenaba su enlace matrimonial con una princesa de de la Gran Bretaña con el gran monarca Eduardo VIH. Castilla sobrina de la reina de Portugal. La curiosidad referida tiene alguna justificación, porque De los demás reyes de Navarra que subieron al trono además de tratarse del rey más : t •• • ,'• 1 poderoso del mundo, resulta in- NAVARRA . dudable que en las familias rea* les, por su deseo de asegurar la sucesión, escasea muchísimo la soltería,, siendo rarísimos los ca- sos de monarcas que no se ha- yan casado antes de llegar a la mayoría de edad, abundando no poco los desposados con anterio- ridad a los veinte años de su vida. De manera que es difícil hallar casos como el de Eduardo VIII de Inglaterra, que ciñan la co- rona después de cumplir más de cuarenta años de edad sin estar ya casados bastantes años antes, resultando que si al reinar no hubieran contraído matrimonio, se han casado apenas llegaron a la edad exigida por los cáno- nes, por temprana que fuere, se- gún podríamos comprobar en la historia universal, y vamos a ver, para no dar al trabajo pro- porciones exageradas, limitándo- Campo de deportes y vista parcial de Vera de Bidasoa nos a examinar brevemente la historia patria. Foto. Antoni En la historia de la nación española, que debe princi- en estado de soltería se sabe que contrajeron matrimonio piar desde los Reyes Católicos Fernando e Isabel, no en- sin tardar mucho tiempo, como puede observarse en los contramos ningún monarca que perseverara en el celibato, expresados a continuación: , habiendo solo algunos que entraron a reinar siendo solte- El rey don Sancho el Mayor, que entró a reinar el año ros, pero para contraer matrimonio poco tiempo después mil, se casó al siguiente con doña Elvira o doña Mayor, de manejar el cetro. soberana de Castilla, como hija del conde don Sancho A don Felipe III le sorprendió la muerte de su padre Garcés y sucesora en dicho condado. Felipe II en estado de soltería; pero concertado su matri- El rey don García, llamado generalmente el de Nájera, monio con doña Margarita de Austria, se celebraron los entró a reinar en el año 1035 y casó en el de 1038 con do- desposorios en Ferrara, el día 13 de noviembre de 1598, y ña Estefanía, hija de los Condes de Barcelona. se ratificaron en Valencia el 18 de abril de 1599, festeján- El rey don Sancho el Noble, o el de Peñalén, entró a dose el acontecimiento, según es de suponer, con brillan- reinar en el año 1054 y se casó en 1068 con doña Placen- tes espectáculos de danzas, saraos, torneos, toros, arcos cia, pero hay quienes suponen que antes se unió en matri- de triunfo, mascaradas y otros. monio con doña Blanca, hija de Roberto, duque de Nor- D. Felipe IV falleció dejando a su hijo y sucesor, don man día. Carlos II el Hechizado, en la minoría de edad; pero, sin El rey don Alfonso I el Batallador entró a reinar en el tardar mucho, el rey pidió y obtuvo la mano de la prince- año 1104 y se casó en el de 1108 con doña Urraca, reina sa doña María Luisa de Borbón, celebrándose los despo- de Castilla, como hija y heredera de don Alfonso VI. sorios de ambos en París, el día 31 de agosto de 1Ó79, y ra- El rey don Sancho el Sabio entró a reinar en el año tificándose en Quintanapalla, cerca de Burgos, con gran 1150 y se casó en 1153 con la infanta doña Sancha de Cas- regocijo popular, el tS de noviembre de dicho año. tilla, hija de don Alfonso VII llamado el Emperador. Tampoco estaba casado don Felipe V cuando, en 1700, Al rey don Sancho el Fuerte se le considera general- vino a ceñir la corona de España; pero concertada su bo- mente como un caballero romántico, perpetuamente ena- da con doña María Luisa de Saboya, celebraron ambos morado, pero contrario al matrimonio desde la famosa sus desposorios en Tun'n, el día 11 de septiembre de 1701, aventura amorosa con la princesa mora; y sin embargo, ratificándolos en Fígueras el 3 de noviembre de dicho año confieso que, aunque yo no encuentro en la Historia da- 150 LA AVALANCHA tos o pruebas referentes al casamiento de dicho monarca, indiferentes que sean vuestros feligreses los iréis viendo hay que admitirlo como hecho cierto, puesto que así lo convertirse insensiblemente, como sucedió en París en dicen algunos historiadores y se desprende del epitafio que la parroquia de Nuestra Señora de las Victorias. afirma que en Roncesvalles yacen juntos don Sancho el El tercer catálogo sería el de los santos devotos de Fuerte y su esposa doña Clemencia. De manera que, se- Nuestra Señora. Y estad seguros que en él habían de fi- gún esto, el rey don Sancho el Fuerte fue casado. gurar todos ellos, porque todos ellos debieron su santi- La reina doña Juana I de Navarra celebró sus despo- dad a María. sorios con don Felipe el Hermoso, que fue rey de Fran- En la manera quizá menos artística, pero más sencilla, cia, siendo aun niña, en 1275. que tenían nuestros padres de escribir las vidas de los El rey don Luis Hutín se casó en 1307

FBMENINAS das a hacerlas ver lo peligroso de sus costumbres y el mal ejemplo que con ellas daban a sus hermanas meno- res, para las cuales todo lo que las mayores hacían era motivo de emulación y de envidia, y declaraba ingenua- lio toque de aíencíón a las madres cristianas mente su impotencia para dominar aquel estado de co- sas, sin dar al traste con la paz del hogar y con la felici- fr\\ W "W Z' P\\ ACE unos días, en ocasión en que dad de la familia; y ante semejante "desgracia,,, ¿qué re- departiendo con un grupo de se- medio le quedaba a ella sino transigir y "hacer la vista ñoras, amigas mías todas ellas, y gorda,, reservándose la misión de encomendar a Dios por lo tanto, conocedora de sus aquellos pedazos de su corazón que tantas lágrimas le ideas y sentimientos eminente- costaban? mente cristianos, tuve ocasión de Escuchaba yo asombrada las lamentaciones de aquella oír cómo una de ellas se lamen- madre que así claudicaba de los derechos que le fueron taba de su desgracia por no ha- conferidos por Dios, y me asombraba al pensar en que berle concedido el Señor ningún dos o tres chicuelas de quince a diez y ocho años hubie- hijo de su matrimonio; en tanto ran podido triunfar de aquel modo sobre algo tan santo otra, al parecer más afortunada, y tan respetable como es la autoridad paterna y e¡ respe- se lamentaba también por hallar- to y la sumisión que todo hijo viene obligado a ofrendar se en posesión de cinco, cuya a sus padres; y mientras en mi interior compadecía a la educación y formación moral "buena, señora, encontrando justificada la envidia con constituía para ella una pesada que consideraba la esterilidad de su amiga, gracias a lo cruz que en ocasiones le parecía cual se veía libre de compromisos y responsabilidades, insostenible. Aquellos criterios, tan opuestos, me suge- acudió-a mi mente el recuerdo de un incidente que tuvo rieron la idea de que en este mundo nadie está contento lugar hace unos años en una importante ciudad de Espa-

NAVARRA

—Vista parcial Foto. Ojanguren con lo que tiene, y desde luego hube de incluirme en el ña, en ocasión en que el Prelado de la diócesis congre- número de las excepciones, ya que por mi parte bendi- gó a un grupo de jóvenes cristianas para llamarnos la go a Dios por la porción que me tocó en suerte en el re- atención sobre la inmodestia del vestir, que entonces em- parto de sus misericordias, concediéndome la condición pezaba ya a despertar serias preocupaciones en quienes de "mero espectador, en la dificilísima empresa de cons- tienen la obligación de velar por la salvación de las al- tituir hoy día una familia en la que todo respire temor mas, con el celo y la caridad inagotable con que lo hacía de Dios y sumisión y respeto a sus leyes divinas. aquel sabio y virtuoso Pastor. Lamentábase la madre "desafortunada,,, de que sus Congregadas en su Palacio, y después de exponer en hijas le habían salido de un espíritu independiente, com- breves palabras el objeto de aquella reunión, a que— pletamente reñido con el que ella había tratado de incul- contrarrestando la influencia perniciosa de las costum- carles desde su niñez, y to atribuía, en gran parte, a la bres ultramodernas que, atentando contra la virtud tra- influencia de las amigas y al criterio exótico de una ins- dicional de la mujer española, habían venido a implantar titutriz extranjera, a la cual hubo de encomendar el per- modas reñidas por completo con la modestia y el pudor feccionamiento de su educación cuando salieron del co- de que aquélla había sido hasta el presente modelo aca- legio. bado—estableciéramos una verdadera cruzada en opo- Llenábanse de lágrimas los ojos de la buena señora sición a las mismas, venciendo el respeto humano, ene- cuando nos refería el tono insolente con que se rebela- migo el más temible de cuantos trabajan desde la som- ban contra sus indicaciones cuando estas iban encamina- bra para perder las almas de los que viven en el mundo. LA AVALANCHA 153

Oíamos todas ias palabras de Su Eminencia, con el salud y dinero, al capricho de una moda que muchas ve- respeto y veneración que aquéllas merecían, pero todas ces sólo sirve para ponerlas en ridículo ante aquellos callábamos, sin que ni una sola voz se levantara para mismos a quienes tratan de seducir bajo el influjo de sus ofrecerle la promesa de nuestra obediencia, en un arran- irresistibles encantos. ¡Ah! cuántas veces se sonrojarían que de sincera convicción, hasta que yo, impulsada qui- si oyeran el comentario que de ellas hacen los hombres! zás por la confianza que me inspiraba la presencia pa- ¿Pero qué es eso al lado de ¡a justicia de Dios que ame- ternal de aquei sabio, me permití argüir, tal vez con más naza a esas madres por no haber sabido guardar el pre- sinceridad que respeto: ¿y por qué, Eminentísimo Señor, cioso tesoro de las almas de esas hijas, que les fue entre- no llama V. E. a nuestras madres, para hablar con ellas gado en usufructo para hacerlo producir una rica y abun- del mismo modo que se ha dignado llamarnos a nos- dante cosecha de virtudes que transcendiera a cuantos otras? De mí puedo decir que nada llevo sobre mi per- les alcanzan de cerca y aun de lejos? Mas para ello era sona que no sea mi madre quien lo elija y disponga bajo preciso empezart desde un principio, una obra sostenida su vigilancia y autoridad, con lo que mal podría oponer- de sana formación, que en nada se parece a la que, en me a sus mandatos si fuera ella la que me prohibiera nuestros días, emprenden aquéllas, despertando la sen- vestir de otro modo que y dispuesto por sí sibilidad emotiva de las niñas, cuando apenas se inicia misma. en ellas el uso de razón, en esos cines depravados y co- Una leve sonrisa se dibujó en el rostro bondadoso dei rrompidos; en esas playas donde la inmoralidad alcanza Prelado, y después de unos instantes de silencio, añadió un máximo grado, y a las que acuden, para dejarse a ji-

Poto. Guílera con acenlo de tristeza: "Porque yo sé que si os conquisto roñes su inocencia; en esa prensa infantil donde la sátira a vosotras las conquisto a ellas también, mientras que si y el chiste chabacano y callejero van desgastando paula- fuera lo contrario, no sé si me atrevería a decir otro tinamente la delicadeza de sentimientos para dar lugar ianto.B al imperio del mal gusto en la expresión, en los modales, Entonces mis pocos años no me permitieron medir to- y sobre todo en el vestir, que copian de las artistas de do el alcance de aquella sabia contestación, pero andan- cine y de los héroes de la pantalla, a los que constituyen do el tiempo la vida se ha encargado de hacerme ver la en arbitros de sus propios destinos. Y yo me pregunto: razón que tenía cuando así hablaba, siendo ejemplo pal- ¿serán ésas, las madres de mañana, capaces de ¡levar a ca- pable de lo dicho el diálogo sostenido con mis amigas y bo una misión social y religiosa cuando la vida abra a su el fracaso de una de ellas ante la influencia externa del paso horizontes más amplios, no exentos de peligros y medio ambiente en aquellas hijas que Dios le había dado, gravísimas responsabilidades? Esas son las que luego representadas, como tantas otras, por el grupo de ¡oven- claudican fácilmente, y lloran al verse dominadas y ven- citas congregadas en torno ai Cardenal Ilundáin, que no cidas, para buscar refugio en la oración, convencidas de otro era el que en aquella memorable mañana nos reu- su inutilidad y de su fracaso. nió en su paiacio de Sevilla. ¡Madres, las que todavía estáis a tiempo de enmendar Más tarde, andando el tiempo, el problema se ha ido vuestros yerros! Acordaos de la frase que pronunció agudizando hasta el extremo de ser hoy punto menos Aisa, la madre de Boabdi! el Chico, último rey de Gra- que imposible ponerle remedio, si no se organiza para nada, ante el espectáculo de su aflicción, viendo perdido ello una verdadera liga de madres cristianas que se de- el reino que heredó de sus mayores: "Llora como niño cidan a dar la batalla definitiva contra la rebeldía de las lo que no has sabido defender como hombre.» No que- hijas que se obstinan en posponer a Cristo por Barra- ráis que nuestra Madre Santísima, la Virgen Inmaculada, bás, repitiendo aquel horrible grito de ¡crucifícale! ¡cru- os repita una frase parecida cuando, al comparecer ante cifícale!, que no otro es el que lanzan en su ciega incons- el tribunal del Juez supremo de vivos y muertos, tengáis ciencia, cuando todo lo sacrifican, decoro, pudor, estética, que rendir cuentas del sagrado depósito que tampoco su- LA AVALANCHA pistéis defender. Y no os imaginéis que con vuestra se- —Ya, ya—asintió el botellín—. ¿Cuántas jarras como veridad intransigente corréis el peligro de perder el amor tú hay en el cielo?... de vuestros hijos; lo que ocurre es que, conscientes ellos —Y genios de vinagre, ¿hay muchos? de vuestra debilidad, son los primeros en medir el alcan- —Desengañaos. La vid, mi abuela, y el racimo, mi pa- ce de vuestras fuerzas para ajustar a ellas el nivel de la dre, se enorgullecen de mí. Mis hermanos y yo esparci- estima y del respeto a que sois acreedoras. Pero no ce- mos por la tierra, en cubas y botellas, porrones y vasos, dáis al primer impulso; mirad que con los niños ocurre salud y contento. Sin nosotros, esto sería un cementerio... lo que con las medias de seda, que, cuando se escapa el —A muchos habéis llevado allí tu hermano y tú, y tu primer punto hay que atacarlo en seguida, porque si no, abuela y tu padre el racimo. ¡A cuántos no los remató ya sabéis hasta donde llega la carrerilla... un mal trago!.., MARIA LÓPEZ DE SAGREDO. —¿Otra vez, mata lengua? —Como que ni nacerías siquiera, a no ser por esta despreciada agua que lleva la humedad vital al cielo y al suelo... —¡Cuánto charloteas y bulles, agual —Por ti empezó la pelea; como siempre, vino... —Algo tendrá el agua cuando la bendicen... —Algo tendrá el vino... cuando le echan agua. El vinagre callaba; pero su acida condición le sugirió Luz, mantenimiento, medicina molestar a la silenciosa y prudente alcuza... —¿Qué dice a todo esto la de las narices larguiruchas? o el diálogo de los líquidos Siguió muda la alcuza... El vino, que todo lo hace cuestión persona!, provocó a la silente... os líquidos que se guardaban en la cocina de la —Esa es tonta. No dice nada, porque nada se le ocurre. heredad se contagiaron del afán de discusión Quiso mediar el agua de la jarra, porque aunque no que habían mostrado aquella noche capataces y era muy amiga ni devota del aceite, te parecía injusto gañanes, aparaceros y mozos, y cuando todos aquel grosero mal trato, y dijo: ellos desaparecieron, llegada la media noche, —Hacéis mai. Y tened cuidado. Si le hacéis hablar camino de sus lechos o de sus yacijas, queda- quedará, sin dar voces, encima, como acostumbra. Con- ron los líquidos susodichos en pleno debate, aunque su- migo, siempre que tropezamos, ocurre eso. Y tú, vinagre, jetos y dominados por sus respectivos continentes y va- ¿cómo no te has acostumbrado a hermanar con el aceite, sijas: el agua, en su jarra de cuatro picos; el vino, en un compañero tuyo en toda ensalada? porrón de vidrio; el vinagre, en un botellín, y el aceite, —Déjalos—la alcuza se decidió al cabo a decir—, dé- metido en su alcuza... A la discusión asistían, en silencio, jalos. Les gusta emplear el tiempo en conversación. Lo los pemiles, morcillas y somarros, expuestos al humo mejor es trabajar y servir. Yo poco puedo hablar, y me- del llar; los pimientos y mazorcas maizeñas, pendientes nos esta noche, que estoy casi vacía... Una parte de mi de las vigas renegridas y robustas del techo; los cobres aceite está ahí, en el candil, alumbrándonos a todos, a rebrillantes de la espetera y las sartenes y ollas... ¡Ahí... los que digan bien como a los que mal digan; con otro y el candil encendido, que todo lo alumbraba, y el gato chorreón se frieron las migas y los torreznos para la ga- que se encenizaba junto al rescoldo, sobre la piedra, aun ñanía, y lo que quedaba, sirvió para un emplasto en los tibia. males que sufre en las piernas... el viejo... padre... del Ya hemos dicho que allí estaba en un porrón el vino. amo... Ya lo veis... no puedo... hablar... Donde hay vino, nadie habla primero. Y decía, fanfarrón: Y la voz de la alcuza se extinguió casi, en efecto. —Mi hermano el blanco y yo revolvemos el mundo... Pero a todos había llegado la verdad del discurso de —Pues con todo—repuso la jarra,—más viejo es mi la modesta alcuza. mérito, porque en la redondez de la tierra antes se be- Compungida la jarra, dijo: bió agua que vino. Yo quito la sed... —El aceite, que es luz, mantenimiento y medicina, no —¿Y yo no?—objetó el vino. necesita gastarse en pregonar su propio valer, como —No, que la das y aumentas... El primero que te ca- nosotros. tó, quedóse como difunto... —Pues ¿qué hace?.,.. —Bien le estuvo, por borracho—argüyó, avinagrado, —¡Vale!—contestó el agua, clara y fresca, generosa- el botellín. mente. —Cállate, vinagre, que eres peor que el vino, porque El vino no se atrevió a replicar. eres el vino mismo cuando se pudre... El candil chisporroteó, con alegre y agradecido asenti- —Vamos, comadre... ¿Será su merced la única clara miento... aquí? ¡Vaya con el agua!... Y en la cocina quedó, señora y única, camino del ama- —No soy agria y mal hablada como tú. necer, la voz exacta y rotunda del reloj de pesas... —Yo decía que revuelvo al mundo. En vaso que yo —¡Tic tac...! ¡Tic tac!!... llene, van la amistad y la franqueza... Decía el vino... VÍCTOR ESPINOS —O la ira, y la vergüenza, y aun el crimen... —Yo hablaba del brindis... —Y yo del desafío... —¡Como no quieres ver más que lo malo, vinagre!... —Tú, en cambio, vino, eres hipócrita y escondes tus El pueblo trabajador en el Pilar intenciones... Empiezas haciendo reír... y luego armas al hermano contra el hermano... Leemos en el último número de nuestro estimado colega —¡Y pensar que somos de una casta! SíPifar de Zaragoza: —De ella reniego... «No que se trate de una peregrinación, ni mucho me- —¡Tu casta, vinagre, es la de que de ti reniegas! nos, aun cuando el número de obreros que durante el pa- —¡Cuidado, vino!... sado domingo hicieron acto de presencia en el templo de —¿Qué pasa, vinagre? Nuestra Señora del Pilar sobrepasó a! de muchas pere- —No seáis idiotas—interpuso la jarra, por sus cuatro grinaciones, sino por lo que significa de fe y de respeto a bocas, para acallar la disputa—. Un jarro de agua fría so- la excelsa Patrona de Aragón, nos parece oportuno con- bre las querellas. Es probado. Otro mérito que tengo... signar aquí lo ocurrido en Zaragoza. Sobre que conmigo se hace una obra de misericordia... »Se celebraba el mitin de clausura de una asamblea de —¡Otra que tal!—replicó el porrón de lo tinto.— El la C. N. T. Para asistir a él llegaron muchos miles de mérito será de quien la practique... obreros de toda España. LA AVALANCHA 155

• Son obreros a los que constantemente se predica el Una mañana, al llegar a la Redacción encontré a don odio y el desprecio hacia todo lo que tenga carácter más julio apenado, pensativo, paseándose a grandes pasos o menos religioso. por la habitación en que escribíamos. »A la verdad, no esperábamos nosotros que esos tra- —Hay que escribir un suelto, un artículo—exclamó, bajadores ni por curiosidad siquiera entraran en el templo. parándose delante de mí;—pero un artículo en que se ha- Mas no fue así. ble claro... Esto se pudre, esto se pervierte: anteayer un >Desde la mañana y durante todo el día, sin exceptuar asesinato, ayer un suicidio, cuando apenas hace un mes la horas del mitin, fue continuo el entrar y salir de los fo- hubo otro... ¡Molineda no es la Molineda de quince años rasteros en el Pilar; fue constante la pregunta para saber atrás! Es una enfermedad, una locura epidémica lo que cómo y dónde se adoraba la Sagrada Imagen; se llenó a se ha infiltrado en mis paisanos. Es la falta de fe, es la rebosar de velas la verja de la Santa Capilla; y las ven- obra demoledora de la Revolución, es la ola de la impie- dedoras de medalias y objetos del Pilar hicieron su agosto. dad que avanza... El vicio, la ambición, el lujo y esa an- »y hemos de hacer constar en elogio al pueblo traba- sia insólita de placeres que nos come vivos, son el fruto jador que, salvo unas pocas excepciones, muy pocas, de de la falta de fe y los causantes de esos suicidios: esto es- muchachos faltos de educación, los obreros que visitaron panta y avergüenza: hemos perdido el sentido moral, a Nuestra Señora del Pilar se comportaron con gran co- después de haber echado a la calle el sentido común. rrección, —¿Quién es el infeliz que se ha suicidado?—le pre- »Mucho daño han causado las propagandas deleté- gunté. reas en el alma casi infantil del pueblo, pero no han llega- —Miralia, su amigo Miralta. do todavía al extremo que sus jerífaltes desearan.» Sentí frío en el corazón, como si la hoja de un puñal me le hubiera atravesado. —Ahí está, muñéndose en una cama del hospital, atravesado el pecho de un tiro,—prosiguió D. julio.— Dicen que no ha muerto todavía; y sus amigos de Eí Aíarido, que mandan en el Hospital, le rodean, sin per- mitir que se le acerquen el sacerdote y las Hermanas. Oro y Escorias Morirá, y morirá como un perro, cuando quizá le ha Novela d« costumbres, original de conservado el Señor unas horas de vida para que se ÁNGEL RUIZ PABLO arrepienta. Dejé a D. Julio con la última frase en los labios y salí corriendo, sin temor al agua del cielo que caía sobre Moli- neda copiosa y fuerte, con ruido ensordecedor. Las ca- XXII lles parecían arroyos, y sólo por las aceras se podía dis- Meses después mi hermano se unía en santo matrimo- currir: el cielo, de color de plomo, arrojaba a raudales nio con su enamorada Águeda, y Anita y yo emprendía- el agua y cubría la ciudad con un inmenso manto de tris- mos los trabajos preliminares de fabricación de nuestro teza. nido, como decía D. Julio. El cual, viendo la inquebran- En el hospital salió a recibirme una Hermana de la Ca- table constancia de su sobrina, pidió para mí su mano a ridad. Le supliqué vivamente que me condujese a la ca- D. Manuel, luchó fieramente con la inquina que me te- ma que ocupaba Miralta. Me guio por un largo corredor, nia D.' Concha, y venció al fin, si bien no logró jamás al cabo del cual hallé una puerta entreabierta. "AquíB, que me aceptara de grado. me dijo la Hermana, y entré. Astilla y Lapuerta intenta- Transcurría mi vida placentera, feliz y en paz dichosa. ron detenerme; pero no les hice caso, y me dirigí resuel- Por las mañanas iba a Molineda, arreglábamos nuestro tamente al lecho en que yacía Miralta. Estaba vuelto de periódico D.Julio y yo, cortando de los del canje lo que cara a la pared del fondo, cerrados los ojos, y los robus- mejor nos parecía, escribiendo algo de nuestra cosecha, tos hombros descubiertos. Me acerqué para verle el ros- y examinando lo que nos ofrecían, de vez en cuando, los tro: estaba pálido, desencajado; de la boca le salía un h¡- colaboradores: poesías, sueltos y algún que otro artículo. lito de sangre, y respiraba penosamente. Le estreché una Después de comer, volvíamos a la Redacción, converti- mano y acerqué mi boca a su oído. da por las tardes en amenísima tertulia, y luego iba a ver —Miralta, amigo mío,—le dije con dulzura,—¿No me a mi Anita, a trazar con ella planes para el futuro estado conoce? matrimonial y concertarnos para la compra de cosas que Volvió la cabeza con gran trabajo, estrechó mi mano yo no entendía ni por el nombre: enseres de cocina, débilmente, quiso abrir los ojos, pero ya no pudo... Por adornos de salón y mil menudencias de la clase, todas sus cerrados párpados se deslizó una lagrima gruesa, ar- de aBsoíuta necesidad, al decir de Anita. diente, que fue a perderse en el fino vello de su barba. Estas horas pasadas a su lado, en conversaciones lle- Un hálito vaporoso, caldeado, me dio en el rostro, y nas de candorosas intimidades, han sido las más felices comprendí que la fiebre abrasaba las entrañas del herido. de mi vida: a cada instante me daban ocasión de descu- Estuve un rato con mi mano entre las suyas, que her- brir en aquella angelical mujer tesoros de ternura, de fe, vían, y me senté a su lado. Astilla y su compañero me de sólida piedad y sano criterio, que me hacían desear miraban con inquietud; yo rogaba al Señor que conce- la completa posesión de tanta hermosura y riqueza. Por diera un momento de lucidez al moribundo, y pudiese yo intuición conocía yo que la belleza del alma es lo único hablarle de su alma, de su pobre alma, que iba quizás de que llega a quedar enamorado el hombre, cuando pa- a perderse para siempre. sa el fuego de la juventud, cuando las canas surgen, (Concluirá.) cuando las penas y sinsabores y el cansancio de la vida marchitan y deshojan una a una las más gratas ilusiones, y ya no anhelaba el corazón sino descanso, paz, dulce consueto en el asilo de un corazón amante. Por la noche regresaba a Villarnuevo; a leer, a estu- /AESA REVUELTA diar pieza por pieza la divina fábrica de la Religión, a llorar a mis solas el tiempo perdido en los caminos del error, el tiempo aquel de mi adolescencia que transcu- En favor de Lfl ftWILANCHA.-De un esti- rrió para mí sin fe, sin esperanza, alejado de mis amigos mado suscriptor de nuestra revista hemos tenido de la niñez, solitario en mi propia casa, en donde todos la satisfacción de recibir un donativo de cien pe- creían y yo no. Y al pensar en el vacío de mi alma, abis- setas para atender a los gastos de LA AVALANCHA. mo insondable, que nada lograba llenar, exclamaba: "¡Dios mío, no permitáis que me extravíe en ese mar Con nuestro reconocimiento más sincero, pe- sin orillas, frío y horrible! ¡Señor, conservad mi fel. dimos a Dios recompense a nuestro caritativo do- naqte su interés por nuestra publicación, y que 156 LA AVALANCHA su ejemplo tenga muchos imitadores, para que po- Así es ¡a vida de miles y miles de personas. Suspendí- damos continuar en adelante, con creciente entu- das sobre el abismo del Infierno, viajan alegres por el mundo, entregadas al turismo del cine, del baile, del ne- siasmo, nuestra propaganda católica y navarra. gocio sucio, del placer prohibido, del robo... sin reflexio- nar que también el turismo tiene sus quiebras. Lo Exposición de Prensa Católica.—Al inaugurar" Alerta, cristianos, que nuestra vida está colgada de un (a el Pontífice, nuevamente señala el peligro comuniS' hito que puede cortarse en un momento, y que se cortará ta. — A las once de la mañana del día 12 las trompetas cuando menos pensemos. Que nos coja la muerte en gra- anunciaron la llegada del Santo Padre, y un entusiasmo cia para no caer en el Infierno; y para eso, huir de toda clamoroso le salió a recibir. Hace dos año que fue con- diversión y deporte en ei que peligre la gracia, en el que cebida la idea de celebrar en Roma esta Exposición, a la ofendamos a Dios. que ha dado ei Pontífice siempre desde el primer mo- 'mento su orientación paternal; eligióle organizadores, es- tudió sus planes y estimuló con frecuentes visitas a los obreros. El día 12, coincidiendo con su día onomástico, el San- BIBLIOGRAFÍA to Padre ha signado con su bendición la obra ya conclu- sa y ha tenido para los periodistas católicos de todo el mundo unas palabras de santa y sabia actualidad. Dolió- Vida de Nuestro Señor Josilcristo.—Expo- se el Santo Padre de la ausencia de Rusia y de Alema- sición histórica, crítica y apologética, por L. Cf. Filhón. Segunda nia, únicas que faltan en este concilio, y reclamó las al- edición Española.—Ediciones FAX, Plaza de Santo Domingo, 13. mas para que sean avisadas otra vez de los peligros que Apartado 8001, Madrid.—Cuatro tomos, 23 X 15 cms., 498, 370. amenazan nuestros días. Primero de todos ellos el peli- 602, 502 páginas; 40 pesetas. gro comunista, que se hace de muchas naciones. El San- Buena noticia para los aficionados a esta sublime materia— y de- to Padre nombró entonces a Rusta, Méjico, Uruguay, berían serlo todos los cristianos—la reedición de esta importante y Brasil y también a España, como vencidas unas y otras conocida obra. La Vida de Jesucristo por Fillión vuelve a las manos atormentadas naciones por la tentación comunista. Y ha- de los lectores tras algunos años de estar agotada. Recordaremos bló luego de la Iglesia y de los Estados y de la compla- aquellas particularidades que le son propias. cencia especial que merece la Obra Misionaría, de la Primero la exposición histórica. El autor, para reforzar el carácter Propagación de la Fe y de la Acción Católica y de los histórico de su exposición, se esmera en el ambiente y circunstan- deberes de paz que a todos nos alcanzan, cias en que el Salvador vivió y murió: la religión, condiciones socia- les de Palestina, su geografía, etc. Así comprendemos mucho mejor Interesante folleto.—Nuestro distinguido colega de las cualidades humanas de Jesús. Por eso Fillíón añade, entre la vi- Bilbao La Gaceta del Norte ha publicado un hermoso da oculta y la vida pública, un trabajo especial sobre la naturaleza Folleto, escrito en español e italiano, que presenta a la humana de Cristo. Exposición de Prensa Católica en Roma. Este folleto, La exposición crítica es cualidad necesaria en todo libro científico; adornado con preciosas fotografías, es una curiosa Me- y éste lo es. El autor ha hecho crítica «textual» para establecer en moria desde la fundación de La Gaceta del Norte, en su forma más pura el texto de los Evangelios; crítica «literaria» para 11 de octubre de 1901, donde se relatan las briosas cam- demostrar la autenticidad, integridad y credibilidad de los mismos; pañas de este periódico en defensa de la causa católica, critica «reai» para explicarlos lo mejor posible. No pueden conten- que tanto honran a nuestro querido colega bilbaíno. tarse los católicos instruidos con la fe del carbonero. La exposición apologética no podía faltar ante la violencia y con- tinuidad de los ataques contra los Evangelios y la persona de Jesús. Chistosísimo.— En el sorteo de la lotería nacional del El autor señala los ataques y los contesta; expone las objeciones día II del corriente mes de mayo ha sido favorecida la con el lenguaje mismo de los adversarios, y las persigue hasta sus simpática villa guipuzcoana de Azpeitia con el segundo últimos reductos. premio. Como resumen de este brevísimo comentario diremos quu el Job- Entre los favorecidos se halla un obrero parado, parti- jeto directo y principal de esta obra es la exposición científica de la dario furibundo del reparto de la propiedad. vida de Nuestro Señor Jesucristo. Ahora que ha sido agraciado con varios miles de pe- En Pamplona puede adquirirse esta importante obra en Ja Libre- setas, al ser interrogado cuándo comienza el reparto, pa- ría de D. Jesús García, Estafeta, 31. ra dar ejemplo, ha contestado muy satisfecho: — De eso ya hablaremos después; ahora voy a Bar- -. • * # # • celona. SI Joven observador, por el Dr. Tihamér Tóth,— No hace mucho dimos a conocer a los lectores cEI joven de carácter», Refranes de mayo.— Mayo há las apuestas, y abril obra del mismo autor, y ya nos ha llegado la segunda, «El joven ob- las lleva a cuestas. servador», de la que diremos algo. Mayo pardo, señal de buen año. Tiende este libro a demostrar la armonía entre la ciencia y la fe, Guarda el sayo para mayo. tema, como se ve, corriente en nuestra literatura; pero los libros del Agua de mayo mata gocho de un año. Dr. Tóth tienen un sello característico, y no conocemos otro que Toro y gallo, trucha y barbo, todo en mayo. muestre aqueHa armonía de manera más atrayente y amena, El capí- En buena hora vengas mayo, el mejor de todo el año. tulo primero, que titula el autor «Grandeza de Dios», es una escena en un campamento de seouts, y va describiendo el Dr. Tóth las El queso de mayo, "paB guardallo. Mayo come trigo y agosto bebe vino. grandezas del mundo sideral, las maravillas del instinto de los insec- Agua de mayo, para todo el año. tos, la vida de las plantas, nuestro propio paganismo, etc., etc., todo ello pleno de atractivo, de ciencia moderna, empapado de un aire sobrenatural que empuja al joven observador a mirar a la naturaleza También el turismo.—Al principio de este año, el como obra de Dios. trasbordador de Chamonix (Francia) al glacial de Bre- El capítulo segundo, «Fe y Ciencia», muestra una brillante corte vent, punto de reunión de los deportistas del hielo, sufrió de sabios modernos y notabilidades de todos los ramos, que así ates- una avería, quedando suspendido durante siete horas, sin tiguan su saber con sus profundos trabajos, como su fe con su ínti- poder avanzar ni retroceder, con gran desesperación de ma religiosidad. los cuarenta viajeros que llenaban los dos vagones. Los encantos que reúne este libro para los jóvenes lectores y el Veían a sus pies un abismo imponente. Colgados de provecho que les ha de hacer, lo juzgamos inmenso: es una obra de un cable eléctrico, sin poder recibir ayuda del exterior, tanto gusto como utilidad. esperaban angustiosos un desenlace fatal. Los momen- Publicada por «Ediciones Fax», Apartado 8001, Madrid, pueden tos se les hicieron horas. Por fortuna, pudo arreglarse la hecerse con ella nuestros lectores en la librería de don Jesús García, avería. Estafeta, 31, Pamplona, a 5 ptas, ejemplar. LA AVALANCHA 157

La reparación, de máquinas de escribir, Irradiar a Cristo. A los católicos militantes. P. Raúl con todos los secretos y recursos de la profesión. Por Mateo Marín Plus, S. J. —Libro oportunísimo en nuestros días, cuando en todas Burgos. Segunda edición, corregida, aumentada y con numerosos partes se organiza y se fomenta la Acción Católica. grabados intercalados en el texto. —El autor, conocidísimo en esta No se trata en él de exponer la técnica que hay que seguir, ni los especialidad, ha elaborado este libro que nada tiene que envidiar a métodos que hay que emplear, sino que, yendo más al fondo de las los más eficaces hechos en el extranjero. Dentro de la mayor conci- cosas, se determina qué cualidades de alma necesitan los apóstoles sión posible, expone con toda claridad los medios más modernos pa- de la Acción Católica para realizar el bien que pretenden. ra corregir los defectos de las máquinas de escribir. Si para influir en su tiempo y en el medio que le rodeaba quiso Empieza por una amena disertación sobre el invento y evolución Jesucristo bajar del cielo, encarnarse, sufrir y ser sepultado, a eso de la máquina de escribir. Y los sucesivos capítulos son: Partes de mismo deben disponerse ahora los apóstoles de Jesucristo. que se compone la máquina; Examen de la máquina para su repara- Editado por la conocida Librería Religiosa, de Barcelona, Aviñó, ción; Desmontaje; Limpieza a fondo; Engrase; Montaje y ajuste de 20, forma un bonito tomo que se halla de venta en las principales li- algunas partes importantes de diferentes máquinas; Reparación y brerías, a 3 ptas. _._... ajuste general; Instrucciones diversas; Examen de la máquina ya • * • '.":•. ~. '• . . reparada. : .- -, Fa-ra pa-dres y ma-es-tros. — Hemos recibido, co- Su utilidad queda patente para los mecánicos que deseen ampliar mo tipo de la Pedagogía francesa histórica, la cuarta monografía de sus conocimientos y para aquellos particulares que con gusto cuida- la colección titulada «Pa-ra pa-dres y ma-es-tros», que con tan lau- rían de la conservación y limpieza de sus máquinas, ya por no tener dable perseverancia viene publicando don Rufino Blanco y Sánchez. a la mano un técnico en la misma localidad, ya para prescindir ex- Este volumen esté dedicado a «Rollin y el Tratado de los Estudios», presamente, por cualquier razón, de los servicios de un profesional. y aparte de los méritos propios del citado pedagogo y de su «Trata- El autor ha podido poner con justicia, en la portada de su libro, do» magistral, hace plausible esta publicación la circunstancia de no que en él se encierran «todos los secretos y recursos.de la profesión». haberse traducido al castellano la obra de referencia, que lleva en Editada también por «Ediciones Fax», se vende esta obra al precio esta edición el retrato de Rollin y un extenso índice alfabético de de 15 ptas., en tela, en las principales librerías. materias. Precio del ejemplar, 1'75 ptas.

1 1

Paqueiaría, Sedas Quincalla, Mercería Hilos, Algodones HIJOS DE DOMINGO SÁEZ Pasamanería Lanas Petacas - Botonería, Bisutería - ^. , (Antigua Casa de Jacinto Sáez) \ ; V - Hules, Gestas - Geplllerfa Dugufsteria •'."--." "> '•,-'•'". .•».--'" Genaros de punto Artículos para flores Guaníes í Calceteros, 20, PAMPLONA y otros artículos r 1

ZAPATERÍA, 2O, PAMPLONA VELAS LITÚRGICAS PARA EL CULTO CALIDADES GARANTIZADAS MÁXIMA: Para las dos velas de !a Santa Misa y Cirio pascual. ; ,. . •. v*' •* -', NOTABLE: Para las demás velas del altar. Fabricadas según ío mandado por ios Rvmos. Prelados, intérpretes legítimos del Rescripto de la Sagrada Con- gregación de Ritos, fecha 14 de diciembre de 1904. PÍDANSE PRECIOS y MUESTRAS AL FABRICANTE* •''••' •• •• •'-'"'• CHOCOLATES - MANTEROLA - PAMPLONA

\ OBX3. "Cristo-Maestro,,, Roca y Ponsa, 6 y 8 ptas.; "La Masonería a! desnudo,,, Ferrari, 7'50; "Lo que es el Marxis- mo», González Rojas, 7; "Asesinos de España,, Mauricio Karl, 7; "El Patrono ejemplar,, Sisinio Nevares, 5; "Bajo el signo de !a revolución,, Salazar Alonso, 6; "El divorcio de Catalina de Aragón», Llanos Torriglia, 4; "Fascismo, Catolicismo y Monarquía,,, Marqués de Eliseda, 5; "Una fuente de energía,, Heredia, 5; "Regiona- lismo, (tomo 27 de "Obras de Vázquez de Mella,), 6; "El Problema religioso-social de España,, Pciró, 4; "El joven de carácier,, Tihamer Toth, 5; "Vida y doctrina de Jesucristo según los Evangelios concordados,, por el Cardenal Goma, 1*50 y 2,50; "Qué hay sobre el Infierno,, Martínez, 4; "El Estado corporativo,, Azpiazu, 7; "El Código social de Malinas,, 2; "El Estado moderno,, Pradera, 7; "La Escultura religiosa y Bellas Artes en Navarra,,, Biurrun, 12; "Los apologistas españoles (1830-1930),,, García de Castro, 5; "El Comunismo en Espa- ña,, Matorras, 3'50; "Monarquía,, Petrie, 5; "Normas morales de educación sexual, (niñez, pubertad, juven- tud), Schilgen, 5; "Cartas a un escéptico en materia de formas de gobierno,,, Pemán, 5. Librería de JBSÜS GARCÍA, Estafeta, 31

j\ PAMPLONA—I nprenta, Librería y Ceñir» Je suscripciones de Jesús García, calle de la Estafeta, número 31 159 LA AVALANCHA 3 a- =>o ¿QUIERE USTED CALZAR BIEN? lo más variado, elegante y económico Hijo de Quintín Ruiz de Gauna encontrará V en VITOHIA (Álava) o CASA REPARAZ FABRICANTES DE VELAS LITÚRGICAS Eslava, I» Ramplona Teléfono «43 Use lid. sn sus velas el "CflPIUL MU,, patentado o<= Academia de Oomorcio dirigida por CANDIDO IÑIGO, Destinado para el «Cupriol» 'CÁlcnlo mercantil. Contabilidad, Caligrafía, Mecanografía Documentación y Correspondencia mercantil (Producto contra el Míldíu) Calderería, 28, 2.° - PAMPLONA ••••••« CAJA DE AHORROS NAVARRA Con la garantía total e ilimitada de la Excma. Diputación Colaboradora del Instituto Nacional de Previsión

Libretas ordinarias a la vista, de 1 a 10.000 pesetas. 2'5O por 100 Imposiciones anuales . 3*5C „

Imposiciones semestrales . . . / .... 3*00 „ /

Cuentas corrientes a la vista 1'25 n

Seguros sociales-—Pensiones a los 65, 60 o 55 años, a capital cedido o a capital reservado. Rentas inmediatas.—Capitales herencia.—Dotes infantiles.—Homenajes a la vejez. Bonificaciones a los imponentes x OFIC 1 N A S: ~ ' v Central, en su nuevo edificio, Avenida de Carlos III (Nuevo Ensanche) AOIZ-ALSASUA—ARRIBA-ATALLO — CAPA- RROSO- CARCASTILLO- CASCANTE — CO- RELLA—ECHALAR-ELIZONDO - ESTELLA . IRURZUN —ISABA— LEIZA-LESACA— LO- . DOSA-LOS ARCOS-MARCILLA- SANGUE- - SA-SANTESTEBAN - TAFALLA - TUDELA L — — VIANA y VERA DE BIDASOA - —

DOODOOOOODOD aoooaaoaanoaaaaoaaoDaacoaooaaa

•oaoaaaaaooa aaoooo

RLAAflCEN DE GÉNEROS BLflNGOS Y GflMISERÍfl

SABANAS DE RENTERÍA Y LASARTE O MANTAS DE LANA Y DE ALGODÓN GÉNEROS DE PUNTO o JUEGOS DE CRISTIANAR o EQUIPOS PARA NOVIA o CAMISERÍA Y CORBATERÍA PARA CABALLERO -O