PDF Diario EL PAÍS
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SUMARIO Santiago Gamboa Babelia 913 Los libros que perdí HACE POCO MÁS de seis años, cuando pensaba en posibles temas para una columna de opinión que una revista co- lombiana tuvo la gentileza de ofrecerme, tuve que hacer un viaje a Barcelona, así que comenté el asunto con el escritor Roberto Bolaño, que por esos años escribía una EN PORTADA Juan Cruz 4 página en un diario chileno. Bolaño, que tenía rápidas y contundentes respuestas para todo, me dijo: “No te metas Günter Grass El premio Nobel alemán continúa con su autobiografía en un nuevo volumen titulado La caja de los en política, más bien escribe sobre los libros que has deseos. Después del escándalo provocado por la primera entrega, Pelando la cebolla, el autor de El tambor de hojalata perdido”. Fue lo que intenté hacer, grosso modo, pero explica en una entrevista las complicadas relaciones con sus propios hijos. Portada: autorretrato de Günter Grass siempre pensé que debía cumplir su propuesta a rajata- bla. El primer libro que perdí, muy lamentado a lo largo de IDA Y VUELTA Pisadas en la arcilla Antonio Muñoz Molina 7 los años, fue una edición en español, en la editorial Edha- sa, de Viaje al fin de la noche, de Louis-Ferdinand Céline. Francia Juan Gabriel Vásquez / José María Guelbenzu 8 Fue en una pensión de Lisboa, cuando era estudiante de filología y viajaba por Europa con un morral. Recuerdo Alatriste: el clásico, los clásicos Francisco Rico 10 sus tapas amarillas y una sensación de tristeza me oprime el corazón, pues lo adoraba, con sus páginas color hueso y RELECTURAS Un Bradbury perfecto Enrique-Vila Matas 12 la ilustración de la portada, que era el cuadro El grito, de Edvard Munch. Ese libro debe estar en algún lugar, en Entrevista con James Meek Juan Pedro Velázquez-Gaztelu 14 quién sabe qué perdida biblioteca, y hoy, veinte años después y a pesar de que lo tengo de muchas formas, en Un viejo gigante en un nuevo mundo Javier Valenzuela 17 español y en francés, sigo recordando esa vieja edición y a veces pienso que la verdadera novela, la que me provocó CRÓNICAS DE AMÉRICA LATINA Ibargüengoitia Sergio González Rodríguez 18 un aterrador cataclismo, fue ésa y sólo ésa. La que perdí. Pero sigamos con esta historia triste: mi edición de Junta- La esquina de un icono hispanoamericano Jordi Gracia 18 cadáveres de Onetti, en la vieja Seix Barral, desapareció en el compartimiento de un vagón de tren en Trieste. Me SILLÓN DE OREJAS La gloria del libro Manuel Rodríguez Rivero 19 faltaba por leer el capítulo final y tal vez por eso es un libro que nunca he acabado de leer, una especie de castigo ARTE Convergencias y divergencias pictóricas Francisco Calvo Serraller 22 impuesto. Me suele suceder con Onetti. Como si uno debiera merecer sus páginas o al menos guardarlas para LLAMADA EN ESPERA De viaje Estrella de Diego 22 un día muy especial, que en mi caso aún no ha llegado, o que no he merecido. ¿Y mi edición de El cuarteto de Alejan- dría, también de Edhasa, con su caja color ocre? La pérdi- El director Carlos Saura, en da sucedió hace más de diez años; claro que en este caso su casa de Collado Mediano tengo una hipótesis e incluso sospecho de alguien, pero (Madrid), estos días. sería prematuro hacer afirmaciones. Los comediantes, de Foto: Bernardo Pérez Graham Greene, en Suramericana, se mojó en el mar de Almería y quedó disuelto, con las letras desparramadas sobre la arena, mientras yo intentaba seducir (sin éxito) a una azafata de Scandinavian Airlines recitándole el princi- pio de Hambre, de Knut Hamsun: “Era el tiempo en que yo vagaba con el estómago vacío por Cristianía, esa ciu- dad singular que nadie puede abandonar sin llevarse im- presa su huella”, pero ella no sabía quién era Hamsun ni le interesaba, y además era islandesa. Maestros antiguos, de Thomas Bernhard, en Alianza Tres, se quedó en un hotel de Cartagena de Indias que luego quebró y en cuyo local, hoy, funciona una peluquería unisex que se llama Atrévete, pero yo añoro sus páginas, y aún recuerdo una frase durísima que dice: “La mayor parte de la gente es estúpida durante toda su vida porque admira”. Pero vol- viendo a Bolaño, ahora que me encuentro con la versión inglesa de su monumental 2666 en las vitrinas de todas las CINE Todos los mundos de Carlos Saura Rocío García 24 librerías de Nueva Delhi y a The Times of India dedicándo- le una página de elogios en su edición dominical, me digo PURO TEATRO El besugo infinito Marcos Ordóñez 26 que los mejores libros que perdí, los que todos los lectores perdimos, fueron aquellos que él debió escribir y no pudo LA VENTANILLA Asomar la cabeza David Trueba 27 en los muchos años que mereció vivir. Rulfo dijo que había escrito Pedro Páramo porque le faltaba en su biblio- teca, y así, en las bibliotecas de todos, quedará para siem- pre el vacío de esos libros extraordinarios, los libros de + .com Roberto Bolaño que no existirán ya nunca y con los cuales ̈ Lecturas Primeras páginas de los libros: La caja de los deseos, de Günter Grass; Los pintores de las cavernas, de sólo podremos soñar. ț Gregory Curtis; Las muertas, de Jorge Ibargüengoitia; Iniciamos nuestro descenso, de James Meek, y El mundo después de USA, de Fareed Zakaria. Santiago Gamboa (Bogotá, 1965) es autor, entre otros libros, de El síndrome de Ulises y Los impostores (Seix Barral). 2 EL PAÍS BABELIA 23.05.09 SUMARIO Michele Monina 915 Berlusconi, Babelia entonces y ahora EN 1993 Silvio Berlusconi, conocido por todos como el padre de la televisión comercial y del Milan estelar de Arrigo Sacchi, EN PORTADA J. Estefanía / C. Pérez / A. Bolaños / J. M. Guelbenzu / J. Cruz 4 decidió “bajar al campo”, fundando su movimiento político, Forza Italia. Lo hizo en mi ciudad natal, Ancona. Y lo hizo, Argumentos para una crisis “Cada vez que se genera una crisis tan extrema, los ciudadanos redescubren de claramente, porque sus referentes políticos, con Bettino Craxi forma aguda la necesidad de instituciones eficaces, la prioridad de lo colectivo, la importancia de estar bien gobernados, a la cabeza, habían sido barridos por la tormenta de Mani la significación de los servicios públicos, la centralidad de un Estado de bienestar lo más potente y eficaz que sea Pulite. Entonces yo era joven, y la música y el compromiso posible”. Varios títulos recientes y clásicos ilustran cómo “el temor a lo desconocido estimula el cambio de paradigma político ocupaban casi todos mis días. Cuando, de forma económico” y “el Estado vuelve a tener un lugar en el mundo”. Portada: trabajadores de la industria siderúrgica ciertamente sorprendente, Forza Italia obtuvo la mayoría de durante una manifestación el pasado 26 de mayo en Marsella. Foto: Associated Press / Claude Paris votos en las elecciones de la primavera de 1994, me sentí desasosegado, extranje- IDA Y VUELTA En el jardín de Sorolla Antonio Muñoz Molina 10 ro en mi casa. Era nor- mal, por tanto, que me EL LIBRO DE LA SEMANA Un encuentro, de Milan Kundera Ignacio Vidal-Folch 12 sumara a la gran mani- festación que los sindi- Pesquisas de la Guerra Civil J. Ernesto Ayala-Dip 14 catos organizaron en Roma para protestar Porque Dios no existe Jordi Gracia 15 contra alguien que que- ría transformar el país Ilustración de Raquel Marín en una empresa, usan- para Las tres preguntas (Ga- do la política para sus dir), de León Tolstói. negocios privados. Esta vez el fuego nació de esa manifestación. Ilustración de Soledad Calés. Casi todo lo que cuento en esta novela sucedió de verdad, aun- que la ficción se fundiera después con la crónica, mezclando las cartas sobre la mesa. Las ganas de reaccionar, el miedo al retorno del fascismo, la sombra del terrorismo, el vacío de mi generación: la de los jóvenes que no tienen futuro. En reali- dad, el libro lo escribí cuatro años después de esos hechos, cuando Berlusconi ya era para muchos un político, para algu- nos un estadista y para mí simplemente una pesada cruz que cargar, una vergüenza que exhibir en los viajes al extranjero, como la letra escarlata de Hawthorne (antes eran la Mafia y la pizza las que nos caracterizaban a los italianos, ahora lo son los cuernos que puso nuestro primer ministro en la cumbre del G-8). ESPECIAL INFANTIL Y JUVENIL I. de la Fuente / V. Fernández / E. Silió / M. Ovelar 16 Una vez colgada la guitarra, empecé a escribir novelas porque la palabra escrita me pareció más adecuada para ¡Qué alegría, qué tristeza! “Si los libros explican el mundo, no podían dejar de desentrañar las fotografiar mi tiempo. Y he seguido haciéndolo con el paso de emociones. Además de historias de ficción pura, los niños cuentan ya con ensayos elementales o relatos en los que los años. Años en los que la figura de Berlusconi parecía se filtra algún mensaje educativo a la carta”. oscurecerse, al haberse reunido la izquierda por primera vez en una coalición que tenía su estúpido punto fuerte en el SILLÓN DE OREJAS Fantasmas en la feria Manuel Rodríguez Rivero 21 antiberlusconismo. Hoy, en cambio, Italia es un país en manos de un ARTE Sentido y reverencia Ángela Molina 22 padre-patrón capaz de promulgar sin ninguna vergüen- za en los primeros cien días de su segundo Gobierno LLAMADA EN ESPERA La chica de ayer Estrella de Diego 24 leyes ad personam. De un líder ególatra que pone en el delicado puesto de ministro a una ex azafata de televi- MÚSICA La búsqueda de nuevas energías sonoras Javier Pérez Senz 25 sión, a quien ha declarado públicamente su amor.