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Autor Jorge Marchini - Economista. Investigador especializado en desarrollo sectorial y comercio exterior. Profesor Titular de la Universidad de Buenos Aires, Facultad de Ciencias Económicas y CBC. Equipo Técnico Pablo Nuño - Lic. en Ciencias de la Comunicación. Analista de medios audiovisuales y difusión. Daniela Marchini - Socióloga. Analista de gestión e integración social de microemprendimientos productivos. Coordinación general Equipo Investigación OIC Fernando Arias Gabriel Mateu Andrés Rabinovich Gabriel Rotbaum Diseño Gráfico Julián Roldán Omar Grandoso Armado Agustina de la Plaza (para Masmédula) Edición y corrección de estilo Jimena Schere Para comentarios y sugerencias: [email protected] Un agradecimiento especial a las muchas personas que brindaron información, referencias y ayuda. Por supuesto, no son res- ponsables de los errores, omisiones o defectos que pueda tener este estudio. Han ayudado enormemente a la realización de este trabajo, entre otras: Maggie Cowan-Hughes, Christian Fabbri, Miguel Ángel Fernández, Ricardo García Blaya, Marcelo Fre- yre, Oscar García, Alejandro Guerín, María Huerta, Helena Marchini, Gustavo Margulis, Carolina Mouriño, Gustavo Mozzi, Agus- tín Neifert, Juan Sorbi, Julio Vallejo, Ricardo Vernazza, Francisco Zalduendo. De igual forma, a todos los entrevistados para este trabajo. A todos ellos gracias por su buena disposición y por transmitirnos sus conocimientos y amor por el tango. Índice Presentación Por Jorge Telerman 7 Introducción 11 El tango en la economía de la Ciudad de Buenos Aires 15 Tango y cambios económicos y sociales en un siglo 19 El tango de hoy: de la crisis al auge 27 Tango y significación económica relativa de sus actividades 35 La importancia central del turismo para el negocio del tango 38 Milongas y espectáculos de público mayoritariamente local 44 Clases de tango: la cuenta económica no es 2 X 6 Otros impactos económicos del tango: medios de difusión, discos, regalos y otros 8 Incidencia económica directa de actividades de tango (año 2006) 5 Tango y el negocio de la música por Internet 57 Imaginarios del siglo XXI en torno al futuro del tango 61 Derechos de autor y compositor: un largo debate con especial significación para el tango 67 Difusión del tango y políticas públicas 71 Anexo 1 - Entrevistas 77 Anexo 2 - Legislación vinculada 115 Anexo 3 – Guía de actividades y organizaciones del tango en la Ciudad de Buenos Aires 127 5 Presentación Pocas ciudades del mundo han creado un género musical virtualmente propio que las represente de un modo único. Buenos Aires en su relación con el tango es uno de los pocos ejemplos. Seguramente hay casos similares como los de Nueva Orleáns y el viejo jazz, o Río de Janeiro y el samba. El tango es para Buenos Aires un sonido y una subjetividad. Es una relación pasional, intensa, que alguna vez parece languidecer hasta que regresa renovada, abierta a nuevas pulsiones estéticas y generacionales. El tango, a lo largo de más de un siglo, ha mantenido su impronta en nuestra vivencia cotidiana y en nuestro imaginario e identidad cultural. En tiempos de globalización económica y cultural, las identidades culturales no sólo permiten afirmarnos en una historia cultural y afectiva que nos hace sentirnos enraizados en un lugar. Con frecuencia se convierten en un capital para proyec- tarse en ese mismo mundo, a menudo hastiado de uniformidades y estéticas repe- tidas. En el nuevo mapa global ha cambiado el lugar que se le asigna a las ciudades: pasan a ser el espacio por excelencia en el que se producen nuevas síntesis, enri- quecimientos y diálogos entre lo global y lo local. Ese proceso crea nuevos paradig- mas culturales, de pertenencia y de ciudadanía. Al mismo tiempo, el circuito cultu- ral parece darse cada vez en mayor grado entre grandes ciudades, en la medida en que son centros de producción y consumo cultural. El eje cultural ha permitido a algunas ciudades (Bogotá, Glasgow, Bilbao) una suerte de renacer de otro modo sobre su propia identidad renovada y fortalecida, y lograr gracias a ello un reposicionamiento económico -y hasta político- en sus paí- ses y frente al mundo. Se trata de procesos valiosos en los cuales la cultura y el conocimiento son los principales agentes de cambio y de un tipo de desarrollo que 7 El Tango en la Economía de la Ciudad de Buenos Aires como mínimo complementa, sino supera, los paradigmas de la ciudad de servicios o la ciudad postindustrial. Buenos Aires tiene una enorme ventaja comparativa en este nuevo escenario internacional: la riqueza cultural, el nivel de instrucción, la inteligencia social y el potencial creativo de su sociedad. Esos factores -que no siempre aparecen en las contabilidades económicas- le permiten a nuestra ciudad insertarse con contenidos propios y distintivos en las redes trasnacionales de la cultura y la comunicación. En ese contexto, el tango es un elemento que le infiere una fuerte personalidad a su territorio y por tanto le otorga una marca registrada notable. La renovada vitalidad del tango se expresa de distintas maneras en nuestra ciudad: en la multiplicación de milongas y academias de baile a las que concurren jóvenes y mayores, porteños y no porteños; en la diversificada oferta de espec- táculos y shows de tango fuertemente impulsados por el turismo receptivo, en los nuevos intérpretes que al mismo tiempo que le dan continuidad al género, le apor- tan nuevas estéticas. Esa fortaleza del tango en Buenos Aires surge de la iniciativa de los propios creadores, productores e intérpretes y de la inextinguible seducción que su música y su danza ejercen en los porteños y en numerosos visitantes de la ciudad. Desde el sector público hace tiempo que apostamos a estimular y acompañar ese pro- ceso a través de distintas políticas de promoción y difusión del género. En el marco de estas políticas, se desarrollan los ya consolidados Festival Buenos Aires Tango -en su novena edición- y los Campeonatos Metropolitanos y Mundial de Tango que se han instalado en la agenda internacional; o el sostenimiento de la Orquesta Escuela, que permite la transmisión generacional del arte de los viejos maestros a 8 los jóvenes intérpretes. Se suma también la permanencia de la radio FM 2 x de la Ciudad, que sostiene una programación dedicada totalmente al género y que man- tiene una presencia y una audiencia importantes. Las ciudades son hoy espacio de síntesis y articulación entre lo público y lo privado, son el territorio de necesario encuentro entre la actividad y la energía de sus actores sociales, creativos y productivos con una gestión pública que afirme y potencie aquel capital. El tango nos permite ejemplificar este fenómeno en la Ciu- dad de Buenos Aires: su auténtica vitalidad, que nace de la actividad privada, se ve fortalecida por políticas públicas que le dan proyección, al mismo tiempo que con- tribuyen a conservar el capital social, simbólico y económico generado por el tango para nuestra ciudad y sus habitantes. Jorge Telerman Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires 9 Introducción Algo más de un siglo ha transcurrido desde que el tango se desplazara de los lupanares y el varieté a las actuales academias de baile, los restaurantes del turismo internacional y el “bajo fondo” de las musicalizaciones electrónicas o digita- lizadas. Entre el arrabal de taitas y malevos de los Contursi y Villoldo, y el “salís de tu casa, en Arenales”, de los Ferrer y Piazzola, la filosofía y los sueños de muchas generaciones de argentinos, y en particular de los porteños (o de los rioplatenses, según los casos), encontraron en la música y en las letras del tango su otra cara, aquella que recreaba sus sueños y sentimientos y formaba parte de la identidad buscada. Prácticamente todas las industrias culturales argentinas se valieron del tango para enriquecer sus catálogos, crecer en los mercados y llevar la letra y la música “hecha sentimiento” a millones de personas en distintas partes del mundo. El país y su cultura fueron conocidos y reconocidos en el mundo gracias al tango como crea- ción simbólica y a la contribución de industrias que supieron transformar la intan- gibilidad de los contenidos musicales, en bienes y servicios tangibles, fueran éstos discos, películas, libros, revistas o programas televisivos. Cambiaron muchos nom- bres, experiencias y prácticas relacionadas con el tango, pero éste logró superar muchas y muy variadas contingencias, a tal nivel que hasta el propio Borges reco- nocería su capacidad de supervivencia cuando le recitaba a Piazzola: “Yo habré muerto y seguirás / orillando nuestra vida. / Buenos Aires no te olvida, / tango que fuiste y serás…” (Jorge Luis Borges, “Alguien le dice al tango”, 1965). A pesar de este reconocimiento local e internacional -reforzado con cientos de libros y publicaciones relacionadas con la historia del tango o de sus autores e intérpretes- poco o nada se ha hecho entre nosotros para investigar la incidencia 11 El Tango en la Economía de la Ciudad de Buenos Aires de este género musical en la economía, el empleo y en la vida social porteña. Tal vez se deba a que las investigaciones más habituales en materia de economía de las industrias culturales suelen privilegiar el tratamiento del conjunto de las mismas, o de alguna de ellas en particular, en aspectos relacionados con la producción y la comercialización de soportes, el empleo, las exportaciones o las políticas sectoria- les para confrontar sus datos con los de otras industrias, o bien con el PBI, la PEA y la balanza comercial, local o nacional. Entendemos por ello que la presente inves- tigación tiene casi un carácter inaugural. Desarrollada por Jorge Marchini, econo- mista -además de gran conocedor y amante de la música popular porteña- repre- senta sin duda -pese a las limitaciones que pueden ser propias en este tipo de aper- turas- una primera contribución al conocimiento integral (económico y cultural) de un tema que requiere de políticas y prácticas realmente superadoras.