IX Reunión Científica de la FEHM-UMA, Málaga 2009, ISBN: 978-84-931692-5-1,503-514

ESTRATEGIAS ASCENSO SOCIAL DE LA HIDALGUÍA ASTURIANA EN LOS SIGLOS EJEMPLO LOS ARGÜELLES

Juan Díaz Álvarez Universidad de

Esta comunicación se centra en el estudio de las diferentes estrategias de as­ censo social llevadas a cabo por tres familias de la hidalguía asturiana, con solar en el concejo de , a lo largo de los siglos XVI y XVII hasta llegar a la nobleza titulada en 1697. Nos referimos a los Arguelles de Meres, los Arguelles de Vega y los Arguelles de Celles. En los tres casos se observan un triunfo de sus pretensiones en determinadas épocas durante el periodo cronológico estudiado: el éxito social, los servicios a la Monarquía Hispánica, el desarrollo de interesantes carreras eclesiásti­ cas y civiles, llevaron a las tres familias a mantener un interesante prestigio dentro de su mismo grupo social en la región. Las fuentes utilizadas se centran principalmente en los archivos familiares de los linajes analizados. La documentación de los Meres y los Vega, dado que fueron dos familias que se unieron a lo largo del siglo XVIII conservan su documentación de forma conjunta en un estado óptimo y que, desde los inicios de la década de 1990, está depositada en el Archivo Histórico de la Universidad de Oviedo (A.H.U.O.), constituyendo el fondo: Archivo Argüelles-Meres (A.A.M.). Por su parte, la docu­ mentación referente a los Celles se conserva en el archivo de los marqueses de Santa Cruz de Marcenado, de cuyos fondos fotocopió un importante volumen el fallecido Padre Patac, siendo depositados posteriormente en el Archivo Municipal de Gijón (A.M.G.). La información la completamos con documentación procedente del Ar­ chivo General de Simancas (A.G.S.).

* * * La realidad política de las oligarquías municipales se manifestó a través del dominio político en tanto y cuanto formaron redes de actores, bien desde un punto

503 l de vista del parentesco, bien desde el punto de vista del padrinazgo . En este sentid siglo XVIII, cuando Carlos III introdujo ciertas reformas de tipo democrático en referido al caso ovetense, hay que tener en cuenta sobre todo las relaciones de am'o, municipios al crear los diputados y los personeros del común, por elección del IS- tad y de parentesco entre los diferentes miembros del grupo nobiliario oligarca de 1, Ciudad. Todo ello implicó una serie de confianzas y de servicios recíprocos2• a Los Argüelles tuvieron un destacado protagonismo en la ciudad ovetense. Va- Desde las postrimerías del siglo XV, a través de unas nuevas instrucciones de de sus miembros se destacaron durante la Baja Edad Media, en los reinados gobierno, dadas por los Reyes Católicos a través del corregidor Hernando de Veg a, de Enrique II, Juan II y Enrique IV; pero también en los acontecimientos políticos el gobierno urbano ovetense estuvo acaparado por un pequeño sector social, Com- J11unicipales ovetense en la transición de los siglos XV al XVI, formando parte de 5 puesto por ocho regidores, además de dos jueces (uno por el estado hidalgo y otro loS bandos que acapararon los Miranda y los Quirós . Del tronco de los Argüelles de por el pechero), a los que se sumaba un tercero por el estado eclesiástico, en CUyas las postrimerías de la Edad Media surgieron varios linajes, de los que se destacaron atribuciones carecía de voz y voto. Todos estos oficios fueron de carácter electivo tres instalados en tres parroquias del concejo de Siero, limítrofe con Oviedo, de las por espacio de un año. A pesar de ello, se alentaron los bandos y partidismos, además toman su nombre para identificarse; nos referimos a los Meres, los CeHes y los de sancionar el sistema de conceyu abiertu característico de la Edad Media. Esta Vega. De todas ellas, la que cobró más relevancia fue la de Meres, cuyos mayorazgos concepción de la vida política local vio su fin mediado el siglo XVI cuando se arbitró enlazaran con los Carrió, los Valdés o los Quirós. por Carlos V un proceso de enajenación de oficios municipales, por el que regimien_ Junto a las familias tradicionales en el consistorio ovetense, otras destacadas tos, escribanías o alferazgos fueron puestos a la venta, pudiendo ser comprados por en la región fueron acercándose a la capital del Principado de forma paulatina, lo 6 el mejor postor. Este proceso, que se prolongó hasta mediada la centuria ulterior. que fue fomentado con los continuos acrecentanúentos de oficios • En este contexto permitió a una misma persona adquirir varios oficios en un mismo o en diferentes vemos a los ArgüeHes, de los que podemos observar su devenir político en la ciudad concejos3. Ante la imposibilidad de ejercerlos al unísono se fomentó un sistema de durante los siglos XVI y XVII a través de la lectura de las actas municipales. Uno de clientelas a través de la renuncia del oficio. Todo ello significó la oligarquización y la los mejores indicadores para comprobar la participación de estos linajes en la polí• patrimonialización de la vida política municipal, pues los oficios - además de ser un tica municipal de la capital del Principado es su asistencia a las sesiones del consis­ bien más susceptible de compraventa entre particulares- pasaron a ser posesiones torio. Una de las sesiones de más afluencia fue en la que se hacían las elecciones de 4 que se incluyeron en los mayorazgos • El sistema se perpetuó hasta segunda mitad lajusticia (los 24 de junio de cada año, festividad de San Juan Bautista, en la iglesia ovetense de San Tirso). Junto a esta fecha se destacó la del 25 de junio en la que se hacía la elección de los examinadores de oficios, el15 de agosto en la que se elegían FARGAS PEÑARROCHA, M., "El estudio de las elites de poder desde la óptica de la familia, en la historio­ los alcaldes de hermandad; y, a partir de 1580, con la adquisición de varios señoríos grafía modernista actual. Análisis y perspectivas", Mélanges de la Casa de Velázquez, XXX-2, 1994, pp. 133 eclesiásticos por parte del concejo ovetense, el día 20 de junio fue el indicado para Y ss. 2 El estudio de estos aspectos tiene como denominador común el análisis de un grupo social concreto de la realizar las elecciones de las justicias y oficios que dirigirían las nuevas jurisdiccio­ sociedad introducida en las instituciones políticas, cuyas características y función rectora de la vida ciudadana nes de la ciudad: Llanera, Naranco, Paderni, Bendones y Cerdeño. condicionaron que sus miembros fueran integrantes del grupo social nobiliario y, por ende, formaran una Por tanto, la asistencia a estas sesiones se reveló imprescindible para los regi­ oligarquía política urbana. Para el caso asturiano el estudio de los gobiernos municipales y de las oligarquía urbanas no tiene una gran tradición -como pudiera suceder con el caso general de la Corona de Castiila-, dores ovetenses, pues suponía el despliegue de una serie de influencias, partidismos pero contamos con algunas aportaciones como las de CUARTAS RIVERO, M., Oviedo y el Principado de As­ y establecimiento de grupos fácticos. En este sentido, observamos a los Argüelles turias afinales de la Edad Media, Oviedo, 1983; MENÉNDEZ GONZÁLEZ, A, "La venta de oficios públicos en en los siglos XVI Y XVII", BIDEA, 109-110, 1983, pp. 489-515; 111, 1984, pp. 55-79; 112, 1984. pp. 677-707; BARREIRO MALLÓN, B., "Estructura municipal de Asturias en el siglo XVIII", en Actas del Coloquio Internacional Carlos UI y su siglo, Madrid, 1990, y "Concejos y señoríos asturianos en la Edad Mo­ concejil en el mismo grupo de familias. La renovación de este pequeño grupo político vino de la mano de los derna", en Historia de Asturias. IlI. Edad Moderna, Oviedo, 1991; PÉREZ DE CASTRO, R., Los regidores del nuevos compradores, así como de aquellas personas sobre las que se renunciaron los oficios para ser ejercidos a concejo de Gijón durante la Edad Moderna (siglos XVI-XIX), Oviedo, 1998; FAYA DÍAZ, M . A, "Gobierno en vez de sus titulares. municipal y venta de oficios en la Asturias de los siglos XVI Y XVII", Hispania, 213, 2003, pp. 75-136. Hacemos referencia muy sucinta a este respecto en DÍAZ ÁLVAREZ, J., "Los marqueses de Valdecarzana, 3 SANGRADOR Y VITORES, M., Historia de la administración de justicia y del antiguo gobierno del Pl'ÍnC'Í señores de vasallos en la Asturias del Antiguo Régimen (siglos XVI-XVIII)", Revista de Historia Moderna, pado, Gijón, 1989 (ed. fascímil, Oviedo, 1887), pp. 153 Y ss.; RUIZ DE LA PEÑA SOLAR, 1. l., Historia de 24,2006. Asturias. Bc!ia Edad Media, tomo 5, Salinas, 1978, pp. 119 y ss. Nos referimos a una serie de familias, caso de los Solís, los Carrió, los Carreño, los Ramírez de Jove, los Ar­ 4 El proceso de ventas supuso la perpetuación de los cargos, sobre todo a partir de 1614, lo que implicó la patd­ güelles o los Vigil (oriundos de los concejos de Avilés, de Carreño, de Gijón y de Siero); que, sin ser originarias monialización de los mismos en los linajes compradores. Este proceso de adquisición por parte de las familias del concejo ovetense, mantuvieron un importante peso político y económico dentro de la ciudad. (FAYA DÍAZ, con una larga tradición en los asuntos del municipio ovetense tuvo la finalidad de perpetuar el poder político MU. A, "Gobierno municipal y venta de oficios ... ", pp. 75-136).

504 505 como un linaje, que tras la enajenación de oficios, acceden relativamente tarde 1 .... nTIIG>'.LI. Villaviciosa y Llanera y en otros tan dispares como Aller, Avilés, Lena, l lO ayuntamiento ovetense. Efectivamente, el primer linaje en llegar es el de Mere: ponga, Grado, Salas y Pravia • Dos años antes a la fundación de Meres, Gonzalo documentándose su presencia a partir de 1581 con la persona de Pedro Argüelle~ de Arguelles de Noreña (de la Casa de Celles), hizo lo propio en 1540 a favor de 11 de Meres Carrió, si bien la adquisición del oficio es anterior, como veremos lUás SU primogénito Gonzalo de Argüelles de Celles , que enlazó, vía matrimonial, con abajo, participando de forma ininterrumpida en el periodo 1581-1604. Los Celles lo s Beatriz de Argüelles, hija de Pedro el Negro. A pesar de esta fundación, Gonzalo y 12 documentamos a partir de 1598 a través de varios personajes: Gonzalo Argüelles de doña Beatriz recibieron Licencia Real para crear nuevo mayorazgo en 1548 • Este Celles el Viejo, Toribio Argüelles de Celles el Soldado y su hijo Toribio. La Casa de mayorazgo fue ampliado por doña Beatriz en 1568 a través de una agregación tercio Vega es la última en acceder al regimiento ovetense, lo que observamos en 1609 en yquinto a favor del primogénito Julián de Argüelles, en los que se incluyen una serie l3 la persona de Diego Argüelles de Vega. de bienes localizados en el concejo de Sobrescobio . El patrimonio de los Celles, al En los tres casos estudiados observamos cómo el mayorazgo del linaje va igual que en el caso anterior estaba disperso en los concejos de Siero, , Lena, introduciendo a su heredero en la vida política. Pedro Argüelles de Meres Carrió Sobrescobio Y Gijón. El mayorazgo de la Casa de Vega fue fundado por Lope Argüe• compartió el regimiento con su hijo Pedro Argüelles Quiñones (fallecido antes que Hes Quirós y Miranda y doña María Estrada Herrera a través de manda testamentaria su padre) en el periodo 1587-1592. Por su parte Toribio Argüelles de Celles el Solda~ en 1573 14 de mejora de tercio y quinto a favor del primogénito del matrimonio, Juan do introdujo a su heredero a partir de 1612 y lo propio hizo el mayorazgo de la Casa de Argüelles, especificando los bienes asignados en los que se incluyeron las casas de Vega, Diego Argüelles de Vega, con su hijo, Toribio, a partir de 1616. Por otro principales en Vega de la familia 15, localizándose el grueso de las propiedades en el lado, a falta del mayorazgo y/o a causa de la minoría de edad del mismo, la familia concejo de Siero. Este mayorazgo fue ampliado de forma considerable por Diego Ar­ "renuncia" el oficio en otros miembros de la misma para que lo ejerzan hasta que el güelles Junco y su esposa doña Antonia Argüelles Quiñones (hija de Pedro Argüelles 16 mayorazgo quiera usarlo él o designe a otra persona, lo que podemos observar en el de Meres Carrió, señor de la Casa de Meres) en 1617 • 7 periodo 1571-1636 con los diferentes linajes estudiados • Como característica común a los mayorazgos asturianos, y particularmente a En otro orden de cosas, con el fin de consolidar sus patrimonios económicos; los que estamos citando se observa una tendencia a la dispersión patrimonial, 10 que la nobleza se acogió a su derecho de crear mayorazgo, verdadera institución de ca­ ocasionará no pocos problemas de administración y rentabilidad. Fue común que se rácter social y económica característica del Antiguo Régimen. A través de esta insti~ solicitaran en ocasiones permisos a la corona para intentar concentrar el patrimonio tución los bienes patrimoniales de la nobleza fueron transmitidos por vía hereditaria al hijo mayor y estaban sujetos a prohibición de enajenación y venta -para lo que se requería licencia real-, permaneciendo en la familia a perpetuidad. 10 Las posesiones de Grado, Corias y Pravia se refieren al patrimonio que incorporó Juan de Santirso Alvear en el De los tres linajes que analizamos observamos que el primero en preocuparse primer cuarto del siglo XVII, casado con la heredera de la Casa de Meres doña Ana Argüelles de Meres, como ya hemos expuesto más arriba. (AH.U.O., AAM., Cajas 4-13). por la creación de un patrimonio transmisible de forma inalienable son los Meres. 11 PATAC DE LAS TRAVIESAS, l M., "El marqués de Santa Cruz de Marcenado a través de su archivo", enAA Si bien la fundación data del año 1542 a través de manda testamentaria de Pedro VV.: El marqués de Santa Cruz de Marcenado 300 años después, Oviedo, 1985, p. 152. Argüelles de Meres el Negro, previamente, junto a su esposa, doña Teresa González 12 AM.G., P.M., Casas de Celles y Vigil, Caja 51: Facultad Real otorgada por Carlos V en Castejón de Empurias a 28 de octubre de 1548. de Cienfuegos reciben una Facultad Real para tal fundación firmada por Carlos 1 en l3 AM.G., P.M., Casas de Celles y Vigil, Caja 51: escritura de agregación de bienes dada en Celles a 25 de junio 8 La Coruña en 10 de mayo de 1520 • El patrimonio amayorazgado se localizó princi­ de 1568 ante García Argüelles. 9 14 AH.U.O., AAM., Caja 1, doc. 13: Testamento de Lope de Argüelles y doña María Estrada, ante Melchor de , palmente en el concejo de Sier0 además de los de Oviedo, Nava, Gijón, Langreo, Huergo, año de 1573. Sobre este documento vid. VIGIL GONZALES, M., ESQUIVEL, J. A y DÍAZ ÁLVA­ REZ, l, "Los Argüelles, A D. 1350 - A D. 1600: Ancestors of the Montes Vigi1 Family of New Mexico", en Herencia. The Quarterly Journal ofthe Hispanic Genealogical Research Center ofNew Mexico, 13, July 2005, 7 Para esta pequeña muestra de la participación de los Argüelles en el consistorio ovetense nos hemos basado en pp. 2-35. AM.O., C-9, Libro de Elecciones de Oficios (1571-1636). 15 En el documento se hace un recuento detallado de los bienes que incluyen el mayorazgo entre los que se 8 Este personaje recibió Facultad Real para crear mayorazgo junto con su esposa doña Teresa González de destacan: "la casa que al presente vivimos, con su cozina y más edificios, y la torre que está delante de ella; Cienfuegos en 10 de mayo de 1520 (AG.S., R.G.S., Caja 1520.05 y AH.U.O., AAM., Caja 1, doc. 2, n° 86) y el molino junto a la dicha casa, con los tres hórreos que están cabe a la dicha casa, con el ablanedo junto al configurando la escritura correspondiente en 20 de mayo del mismo año (AH.U.O., AAM., Caja 1, doc. 2, n° molino y el prado grande que está delante de la dicha casa con todos sus árboles, y los dos controzos, el uno 88). que está sobre la dicha casa, según está cerrado todo sobre sí, y el otro que está a la cavezera de dicho prado, y 9 Parroquias de Tiñana, Vega de Poja, Boves, Granda, Lieres, Noreña, Celles, Collado, Feleches, La Barreda, con todos los árboles plantados, frutales y no frutales, que están en este dicho pueblo de Vega y sus términos, Aramil, Valdesoto, Santa Marina, Vigil y Granda. (AH.U.O., AAM., Caja 4: Índice de escrituras de venta de con sus fayas y robles y castañales" (AH.U.O., AAM., Caja 1, doc. 13). la Casa de Meres). 16 AH.U.O., AAM., Caja 1, doc. 15, n° 60).

506 507 si estuviera muy disperso. En este sentido podemos apuntar como ejemplo el por cada mayorazgo, ya que lo más frecuente es la mejora vincular tras la muerte de la Casa de Celles. En 1641 don Gutierre de Argüelles, oidor de la Chancill / cada uno. El resto de los bienes libres son los que se reparten entre los legítimos de Valladolid, solicita en nombre del titular de la Casa, don Pedro de ArgüelIe efla berederos. El dinero, como veremos, se invierte; si bien también incluyen los bienes · b' . l' . s, la venta de CIertos lenes SItoS en e concejo de SobrescoblO, cuyas rentas suponen suntuarios: mobiliario, plata labrada, ~lhajas; pero también en bienes inmuebles y sólo 40 ducados y "por estar ocho leguas distantes del solar del dicho don Pedro 1 raíces, oficios municipales o ganado. Este despuntó como un negocio nada despre- mayor parte dellos se gastan en administración, mayormente por estar ala orilla' a ciable, dada su rentabilidad; se cedió en camuña o en aparcería, lo que supuso el rio los echa a perder y destruye a los frutos ( ... ) y si los dichos vienes se bendI'e ssel1 aprovechamiento del ex~edente agra;io campesin~ con mí~imos costes y grandes darian por ellos mas de dos milI ducados con los quales se podra comprar ha~ienda beneficios. Con frecuencIa se observo una ganadena extenSIva que aprovechaba los mas considerable en el solar del dicho don Pedro"17. rastrojos de los cultivos y luego los pastos de los montes. El sector ganadero va co­ Los orígenes patrimoniales de las familias estudiadas se caracterizaban por ser brando importancia, desde el siglo XVII, en los concejos de marina y en los valles endebles, por lo que hubieron de buscar otros modos de ampliar sus rentas. Una opci6n prelitorales con la estabulación20 . fue el aforamiento de bienes eclesiásticos a largo plazo con la finalidad de subarren_ Las inversiones en oficios enajenados representaron en ocasiones grandes su­ dados a corto plazo. Los Argüelles de Meres, a través de Pedro de Argüelles Meres el mas de dinero. Este es un aspecto que no hay que perder de vista a la hora de estudiar Negro contrataron en 1529 un foro con el monasterio de San Vicente por espacio de las oligarquías urbanas, pues en no pocas ocasiones prefieren la inversión en ello diez vidas. Las propiedades aforadas fueron la casa de la Noceda con sus tierras aunque suponga una hipoteca o ruina, dados los beneficios que podías acarreades, extramuros de la ciudad de Oviedo, y los bienes raíces que el monasterio pose~a en pues como miembros del consistorio siempre podían introducirse en alguna red y las parroquias sierenses de San Martín de Anes, San Juan de Celles, San Miguel de la poder decidir sobre los asuntos municipales en su favor. Ello provocó la formación Barreda, San Martín de Argüelles, Nuestra Señora de Tiñana y San Cosme de Bobesl~. de bandos partidistas que se enfrentaban. Hechos que se venían denunciando desde Parroquias que se circunscriben a las inmediaciones del solar del linaje. el inicio de las ventas, pero que hemos de ver como la pervivencia de los partidismos La realización de un contrato a tan largo plazo suscitó no pocos problemas del sistema electivo municipal con las reformas que vinieron haciendo desde las entre foristas y fareros, quienes recurrían a un sistema de subarriendo ventajoso, postrimerías de la Edad Media21 . promoviendo, además, mejoras de las propiedades, aumentando su valor y producti­ En este sentido, los Argüelles, originarios del concejo de Siero, comenzaron vidad, buscando la indemnización al final del contrato o el intento de apropiación de a comprar diversos oficios en su municipio natal. Para los Arguelles de Meres ello los bienes. De este modo, no fue extraño encontrarnos con pleitos por estas circuns­ supuso una constante lucha con otro linaje pujante del concejo: los Vigil, lo que les tancias. En este contexto vemos el enfrentamiento entre Pedro de Argüelles MereS causó no pocos pleitos por el control del ayuntamiento. En 1559 ambos linajes plei­ Carrió, mayorazgo de la Casa de Meres, con el citado monasterio benedictino ove­ tearon por la posesión de una escribanía, lo que conocemos por una Real Cédula que tense en 1569 a causa de los bienes que su abuelo había aforado en la parroquia de daba cien días de plazo a las partes para que cada parte probara sus afirmaciones22. San Martín de Anes cuarenta años antes 19. En la Asturias del Antiguo Régimen, el principal medio de riqueza de la no­ 20 BARREIRO MALLÓN, B., "La introducción de nuevos cultivos y la evolución de la ganadería en Asturias bleza fue la renta de la tierra; pero hemos de precisar que la percepción de esta renta durante la Edad Moderna", en Actas del Congreso de Historia Rural. Siglos XV-XIX, Madrid, 1984, pp. 287- fue desigual en los diferentes linajes. A ello hay que añadir la circunstancia de la 319. variabilidad del valor de la misma un año a otro al estar sujeta a los ciclos vitales 21 Así en una Cédula Real de 1544 con referencia a Asturias se lee: "Ya sabeis como siendo ynformado de los daños y inconvenientes y diferen<;ias que se siguen en algunos pueblos des tos reinos y soñorÍos de la corosna de agrarios, a la climatología y al precio del grano en el mercado. Castilla donde los ofi<;ios de regimiento heran cadañeros y añales espe<;ialmente al tiempo de las elecciones de Los bienes libres son los adquiridos en vida de cada mayorazgo y por tanto no los dichos ofi<;ios y que los dichos inconvenientes <;esaria haziendolos perpetuos como los ay en los otros pue­ blos de los dichos reinos hicimos perpetuos los dichos regimientos en algunos lugares des tos dichos nuestros forman parte de los bienes vinculados. En realidad, se trata de los beneficios logra- reinos y entre los otros donde criamos dichos ofi<;ios de regimientos fue essa villa y con<;ejo en la qual aviendo después parecido que conbiene a nuestro servicio y al bien dessa dicha villa y con<;ejo avernos criado como por la presente creamos otro ofi<;io de regimiento de manera que por todos sea nueve regimientos y hemos hecho merced del a Gonzalo de Hevia, vezino dessa dicha villa y con<;ejo por ende yo vos mando que useis y execráis 17 AG.S., Cámara de Castilla, lego 1.841, exp. 10. el dicho ofi<;io de regimiento que asi criamos de mas de los dichos ofi<;ios con el dicho Gonzalo de Hevia y con 18 AH.U.O., AAM., Caja 4: Índice de escrituras de venta de la Casa de Meres (mediados, siglo XVIII), fol. 2 las personas que después del sub<;ediere en el segund y de la manera que lo hazeis o deveis hazer con los oros El documento no nos indica cuál era la renta que debió de satisfacer la familia al monasterio. ocho regidores dessa dicha villa ... " AG.S., c.c., Libro de Relaciones n° 7, fol. 36 r. 19 Ibidem. 22 AH.U.O., AAM., Caja 47, doc. 8.

508 509 Con la venta de oficios municipales, la hidalguía comienza a intuir los beneficios ~f.. ... /-j{"'\IIJ", crecer más. Por ello, el enlace con familias prestigiosas fue un punto pueden tener en ello, al eliminarse el sistema electivo anual de regidores, por lo hllIU«J.~~----_.- en la creación de unas estrategias de ascenso social. En este sentido, los intentan introducirse en los regimientos de la más adecuada23. qUe Meres, a través del fundador de la Casa, Pedro el Negro, enlazó con la prestigiosa Las compras de oficios no se remiten sólo a los concejos oriundos de los ca Casa de la Rúa al haber casado con doña Teresa González de Cienfuegos31 , en una lll- fecha imprecisa pero que hay que localizar en la segunda década del siglo XVI. El prado re s , sino a aquellos en los que pudieran tener diversos intereses econól11ic os,' De este modo, los Meres compraron regimientos en los concejos de Oviedo, Aller riJJlogénito de ambos enlazó con la Casa de Carrió, cuyos miembros fueron regido­ Sarieg024. Diego Argüelles de Vega Junco (t 1635) además de comprar dos regidu_ ~es de la ciudad ovetense. Así, en 1543 se firma el matrimonial entre Lope Argüelles rías en Siero, lo hizo también en el concejo de Nava en donde adquirió una y dos en y doña Marquesa de Valdés (hija de Juan de Carrió y doña Leonor de Quirós)32. Cabranes25 . Además de regidurías y escribanías se compraron otros diversos oficios' Los Meres enlazaron en la segunda mitad del siglo XVI con dos de las más así, la Casa de Celles adquirió en 1597 la Alcaidía de Siero por 400 ducados26• ' ÍlIlportantes Casas nobiliarias asturianas: los Quirós y los Cienfuegos. En 1565 se oficios enajenados constituyeron todo un mercado no sólo para Corona, sino para efectuó el contrato matrimonial entre Pedro Argüelles de Meres, señor del coto de la particulares, pues pasaron a ser un bien más susceptible de compraventa. Efectiva_ Paranza, y doña Eufrasia de Estrada. La novia, además de aportar una pingüe dote mente, el regimiento que la Casa de Meres tenía en la ciudad ovetense no fue COlll­ (si tenemos en cuenta el bajo poder adquisitivo de la nobleza asturiana) de unos 850 prado directamente al rey, sino que se realizó entre Estébano Rodríguez de ArgüeUes ducados, permitió al linaje relacionarse con dos importantes familias, pues fue hija y Pedro Argüelles de Meres Carrió en 158227 . de doña María Velázquez de Cienfuegos33 y del capitán Lope de Estrada (pertene­ Los oficios desempeñados por esta hidalguía dentro de los municipios no sólo ciente al linaje de los Bernardo de Quirós), señor del coto de Olla niego y regidor de se 'refieren a regimientos y escribanías (comprados), sino también a otros de libre laciudad34. Este matrimonio relacionó, también -de forma virtual- con los Miran­ signación regia, pero promovidos por las familias, en función del poder e influencia da, pues una hermana de doña María, doña Leonor Ponce de León (t 1599), había que tuvieran, a instancias del corregimiento. Así, la Casa de Meres desempeñó en la casado con Lope de Miranda (t 1626), señor de la casa de Miranda. persona de Pedro Argüelles de Meres Carrió la capitanía del concejo de Siero y de los La falta de descendencia por línea de varón obligó a los anteriores a realizar "puertos de mar marítimos", título que se renueva de forma repetida en 1574, 1576 Y nuevas estrategias matrimoniales en la transición de los siglos XVI al XVII. La crisis 158628 . Con la formación de las milicias provinciales, la Casa de Meres desempeña­ que atravesó el Principado afectó casualmente a la familia. Pero, a su vez, supuso el ría el oficio de capitán del concejo de Siero en 1675 en la persona de Pedro Argüellcs ascenso de otra familia, los Cereceda. Éste fue un linaje hidalgo, procedente de la 29 Quiñones , sucediéndole en 1686 su hijo don Lope Argüelles Quiñones30. montaña cántabra, dedicada al arte de la cantería. Llegados a la Asturias de la prime­ Una vez configurados los patrimonios económicos y asentados en el ámbito rarnitad del siglo XVI, el personaje más destacado fue Juan de Cereceda el Viejo (t político local y regional, las diferentes familias de la oligarquía ovetense comenza­ 1568) que llegó a ser maestro de la fábrica de la catedral ovetense, puesto relevante ron una carrera por establecer matrimonios ventajosos que revirtieran en sí mismos que condicionaría al resto de maestros arquitectos que trabajaban en la región. La descendencia directa de este personaje, lejos de dedicarse al oficio familiar, fueron enfocados a otras actividades, relacionadas con el aspecto religioso y administrati­ 23 En 1561 Lope Argüelles de Meres estaba bajo la tutoría de su madre, la familia era titular de una regiduría vo. Así, una hija de Juan de Cereceda el Viejo y su esposa doña Catalina de Alvear, en Siero por lo que se hallaba vacante lo que animó a Pedro Díaz del Coto, vecino de la parroquia sirense de doña Juana de Alvear Cereceda, enlazó en primeras nupcias con un linaje hidalgo Valdesoto a sugerir que se le renunciara el oficio hasta que el menor tuviera la edad suficiente para ejercerlo. En tales casos se exigía al que recibiera el oficio firmara una escritura de confianza por la que se comprome­ del centro de la región: los Santirso. Un hijo de éstos, Juan de Santirso Alvear logró tía a devolver el oficio cuando la familia titular se lo pidiera, lo que se le sugirió a este pretendiente en 1565 matrimoniar con una de las hijas de Pedro Argüelles de Meres Carrió (t 1606) y doña (AH.D.O., AAM., Caja 47: doc. 10). 24 Ibidem, docs. 50 y 57. 25 Ibídem, Caja 1, doc. 15, n° 59 y 60. 26 Ibídem, Caja 47, doc. 69. 31 Este personaje fue hija del Rodrigo González de la Rúa (t c. 1529), contador de los Reyes Católicos y de Carlos 27 A Ibidem, Caja 47, cuad. l. V. Sobre este personaje vid. DRÍA RIÚ, J., Notas para la historia de Oviedo. El contador Rodrigo de la Rúa, 28 En la renovación del título del año 1586 se especifica: "atento la avilidad y suficiencia ( ... ) por ser persona de Oviedo, 1969 (sin paginar). las calidades y partes que conbiene al servis;io de Su Magestad y defensa de los puertos marítimos". Ibídem, 32 AH.U.O., AAM., Caja 3, doc. 2. doc. 23. 33 Esta dama asturiana fue hija de Gutierre González de Cienfuegos, señor de la Casa de Cienfuegos, y del coto 29 Ibídem, doc. 111. de Allande; y nieta de Rodrigo González de la Rúa, contador de los Reyes Católicos y Carlos V. 30 A Ibidem, cuad. 5. 34 AH.V.O., AAM., Caja 3, doc. 3.

510 511 María de Quiñones, doña Ana Argüelles Quiñones35 . El heredero y sus descend' ron con diversos linajes de los concejos de los alrededores. En cambio, las estrategias / . . lentes adoptanan el apellIdo materno dado el prestigio que tuvo a lo largo del siglo xv ' de los Celles son de un carácter diferente a los casos anteriores. Si bien desde la fun­ El devenir de la familia a lo largo de la ulterior centuria no resulta relev I. dación hasta los albores del siglo XVII se observa una tendencia al establecimiento ante ello se debe a la influencia de otros linajes de más prestigio que entran dentro d , de matrimonios que no se salen de la tónica general de la hidalguía regional, a partir / . e la escena po1 Itlca ovetense, como puedan ser los Quirós, los Miranda (desde un de Gonzalo de Argüelles de Celles (t 1622) se observa una tendencia a enfocar de vIsta· genera1 d e 1 P'nnclpa . d) o u otros lmaJes" menores que ven aumentar su punto las carreras de los segundones a la Iglesia. Efectivamente, el mismo Gonzalo, tras . 1 d /. / / / . Poder en este s;g o, caso e los Valdes-Carno, los Sohs, los Donga, los Malleza, los Vigil enviudar de su esposa, doña María Argüelles Quirós, opta por ingresar en religión, 36 39 los Ramlfez de Jove, los Valdés, o los Carreño verbigracia . Entre los descend' 1 obteniendo una canonjía en la catedral de Ovied0 . De sus hijos destacó sobrema­ . ' lentes de los Meres en el sIglo XVII se destacaron, en la segunda mitad de la centuria d nera uno, don Gutierre Argüelles de Celles (t Roma, c. 1650). Destinado a la carrera Antonio Argüelles de Meres y Valdés, quien siguió la carrera administrativa, y' t o~ eclesiástica, estudió en Valladolid y ostentó varios cargos y dignidades: Oidor de la . / d ' ras o btener vanas cate ras, fue creado Alcalde del Crimen de la Chancillería de V: II _ Real Chancillería de Valladolid, y Alcalde de la Sala de Hijosdalgos de la misma, d?lid (1679)37 Y ?idor de ~a misma (1683), Alcalde de Casa y Corte (1685), en l~~ además de ser Procurador y Vicario General del obispado de Á vila; llegando al cenit FIscal. del ConseJ~ de IndIas y consejero del mismo (1690). En 1693 fue nombrado de su carrera al desempeñar una auditoría en el tribunal de la Rota y la presidencia 40 consejero de CastIlla y en 1698 es nombrado su Presidente, siendo recompensada de la Real Chancillería de Granada . toda su carrera por Carlos 11 con el marquesado de La Paranza, previo vizcondado Gonzalo Argüelles de Celles, hermano del anterior, estuvo destinado a ser de Arenas38 . Este personaje murió sin descendencia directa y el hecho de que su her­ el titular del mayorazgo, casó con un miembro de la familia Valdés. La estrategia mano hubiere adoptado la carrera eclesiástica, llegando a desempeñar la titularidad seguida con su descendencia es muy peculiar. De los cinco hijos, nos resulta curio­ de la abadía de Santa María de Arbás, hizo que el mayorazgo de la familia pasara so que los varones fueran destinados a la carrera eclesiástica lo que no les impidió en 1718 a ser anexionada por la Casa de Vega de Poja, dado que una hermana de los desempeñar la titularidad del mayorazgo y establecer las alianzas que consideraran anteriores, doña Ana María Argüelles de Meres y Posada matrimonió con don Diego más adecuadas. El primogénito, don Francisco (t c. 1665), fue Deán del cabildo de Argüelles Estrada, señor de la Casa de Vega y regidor de Oviedo. A pesar de lo catedralicio ovetense, tras su muerte le sucede su hermano, don Pedro Argüelles de sobresaliente de la personalidad del último mayorazgo de la Casa de Meres, don Celles y Valdés, Deán del cabildo catedralicio de Santiago. De sus cuatro hermanas, Antonio Argüelles de Meres, 1 marqués de la Paranza, el linaje se hallaba en crisis destinó dos a la vida monástica (doña Antonia y doña Jacinta, profesas en el mo­ y con problemas económicos, lo que se agudizó con la ampliación y renovación del nasterio de San Pelayo de Oviedo) y a otras dos al matrimonio. A la menor la casó palacio familiar y construcción de la capilla de Santa Ana, anexa al anterior. Elfo con don Bernardo de Estrada, señor de la Casa de Nevares (concejo de Parres)41; a imposibilitó al nuevo mayorazgo a no poder afrontar el pago de la media annata y la mayor, la destinada a heredar el mayorazgo la casó con don Juan Alonso Navia 42 lanzas del título nobiliario del linaje, por lo que se perdió. Osario, caballero de Santiago y mayorazgo de la Casa de Anle0 . De este modo sen­ El devenir de los Argüelles de Vega fue diferente. El linaje no se destacó a dos mayorazgos serían heredados por don Juan Antonio Navia-Osorio Argüelles de grandes rasgos a lo largo del periodo estudiado. Los diferentes mayorazgos enlaza- Celles, caballero de Santiago, quien casaría en 1682 con doña Jacinta Antonia Vigil de la Rúa, heredera de las Casas de Vigil y de La Rúa, así como del marquesado de Santa Cruz de Marcenad043 . 35 GARCÍA CUETOS, M". P., Arquitectura en Asturias, 1500-1580. La dinastía de los Cerecedo Oviedo 1996 p. 128; DÍAZ ÁLVAREZ, J., La residencia nobiliaria en la Asturias de la Edad Moderna: el ca~'o de la.fallli!íc; Miranda- Valdecarzana, Memoria de Licenciatura inédita (Sección de Historia del Arte), Universidad de Ovie­ do, 2004, pp. 44 Y ss. 36 A este respecto hemos realizado ya un pequeño estudio sobre el proceso de renovación de la oligarquía política municipal ovetense focalizado en la transición de los siglos XVI al XVII en DÍAZ ÁLVAREZ, J., La l1ob/ez.a 39 NAVIA OSORIO CASTROPOL, L., La Casa de Navia: su historia y la de sus agregadas, Madrid, 2000, p. ovetense en el tránsito de los siglos XVI al XVII: poder económico y político, Memoria de Licenciatura inédita 317. (Sección de Historia), Universidad de Oviedo, 2004. 40 Ibidem. 37 En esta fecha don Antonio Argüelles de Meres y Valdés contaba con sólo veintiún años, este ascenso se explica 41 Ibídem, pp. 319 y ss. por la red clientelar asturiana en la que estaba inmerso al depender de los Queipo de Llano y los Valdés, linajes 42 A.H.A., Protocolos de Oviedo, Caja 7.156, fols. 53r-59v. que contaban con cierta tradición en la corte. (FAYARD, J., Los miembros del consejo de Castilla. /621-1746, 43 Sobre la evolución de la Casa de Vigil y la conjunción de estos mayorazgos en el siglo XVIII en la persona de Madrid, 1982, p. 49). don Álvaro Navia Osorio Vigil, vid. DÍAZ ÁLVAREZ, J., Ascenso de una Casa asturiana: los Vigil de Quiño­ 38 1bidem, pp. 147 y ss. nes, marqueses de Santa Cruz de Marcenado, Trabajo de Investigación inédito, Universidad de Oviedo, 2003.

512 513 El matrimonio no supuso, ni mucho menos, un aspecto baladí en las poy , esgnmldas, , por estas f aillllas,'1' A nte todo fue un contrato económico, que en no1hcas IX Reunión Científica de la FEHM-UMA, Málaga 2009, ISBN: 978-84-931692-5-1,515.528 cos casos supuso una auténtica sangría para ciertas familias sobre todo si ten~ po- " 'JanUn exceso de descendencIa fememna que habría que acomodar, bien vía matritn ' ' ~ l" F . onlal b len Vla re IgIOsa. ue SIempre la familia de la novia la que debía de aportar 1 ' '. ~. a dote a1 nuevo matnmomo, y a traves del estudIO de las capitulaciones matrimon' 1 . . . ~ ~. la es se eVIdenCIa lo que de transaccIOn econOilllca supuso el matrimonio. Pero si b' . ~ ~ . ' len es CIerto que la dote supoma un trauma econOilllCO para la familia de la novia . . '. , sucede LA DESAPARICIÓN DEL SE!lVICIO DOMÉSTICO EN todo lo con~rano para la famIlIa ~el novIO: las dotes constituyeron auténticos ba- LA GALICIA J\L TERMINO ANTIGUO lones de OXIgeno para las quebradIzas haciendas nobiliarias del Antiguo Ré . .. f 1 " gImen RE GIMEN caSI SIempre a tas de lIqUIdez. Por lo general las dotes no solían contener b' ' . ~. ~.' lenes Inmuebles y/o ralces, SInO que mas bIen estipulan joyas, alhajas, menaje de coc' Isidro Dubert ajuares, mobiliario variado, plata labrada y dinero. A cambio de la dote la In~, ~ . , nOVIa Universidade de Santiago debla renunCIar, frecuentemente, a sus legítimas paterna y materna, que eran cedidas al hermano futuro heredero del mayorazgo. En 1752 uno de cada diez habitantes de las pequeñas villas y ciudades de Ga­ * * * licia estaba empleado en el servicio doméstico. Por ejemplo, en Santiago lo estaba el 10.3% de su población total, en Lugo el 14.9%, en Ourense el 15.9% y en Monforte El éxito de las estrategias matrimoniales seguidas a lo largo del periodo estu­ de Lemas el 9.7%. Al término del siglo XIX estos porcentajes se habían reducido diado facilitó la anexión en los linajes estudiados entre si o por otros. Así, los Meres entre un 80 y un 95%, por lo que en 1889 o 1898 apenas si uno o dos de cada cien y los Vega se fusionaron en los albores del siglo XVIII, mientras que los Celles fue­ santiagueses, ourensanos o lucenses serían empadronados ya como sirvientes. Su ron englobados por un linaje llegado del occidente astur, en su interés por acercarse disminución numérica se produjo a la vez que la operada en los principales países a las posibilidades que suponía el asentamiento en la capital del Principado europeos del momento, donde en el curso de ese arco temporal tuvo lugar además referimos a los Navia-Osorio. , nos un franco proceso de modernización socioproductiva asociado a fenómenos tales Por otra parte, los tres linajes estudiados constituyeron puntos de referencia como la urbanización o la industrialización. De ellos habrían de derivarse importan­ dentro del grupo social nobiliario asturiano en determinadas épocas, gracias a los tes modificaciones en los tradicionales mercados de trabajo urbanos, la lógica de las diversos servicios prestados al gobierno de la monarquía hispánica de los siglos de migraciones campo-ciudad o la aparición de nuevas clases sociales. Lo realmente Oro. Los Meres se destacaron en la administración municipal a través de su gesti6n sorprendente es que en Galicia esa disminución numérica acaeció en un ámbito que e~ el ayuntamie~to ovetense en el siglo XVI. Los Vega, por su parte, a lo largo del sensu strictu no estuvo afectado por dichos fenómenos, visto que el fracaso de su SIglo XVII contInuaron con la herencia administrativa de los Meres (apellido que proceso industrializador era ya patente a la altura de 1830-1860 o que su porcentaje conservaron a lo largo de la centuria, dado el prestigio que tuvo) sirviendo en la de población urbana casi no había variado entre 1787 y 1900, manteniéndose en tor­ administración de la monarquía, de forma particular, en el Consejo de Castilla, sien­ l no a un 7-8% del total . Con todo, la desaparición del servicio doméstico acaeció a la do uno de sus miembros presidente del mismo y obteniendo en las postrimerías de par que el relativo crecimiento poblacional experimentado por las villas y ciudades su carrera un título nobiliario: el marquesado de la Paranza. Finalmente los CeHes gallegas. Y es que, en términos absolutos, entre finales del siglo XVIII y los inicios destacaron en la administración civil y en la eclesiástica, uno de sus miembros fue del XX enclaves del interior como Lugo, Ourense o Monforte triplicaron su número presidente de la Chancillería de Granada y otros desempeñaron cargos eclesiásticos de habitantes, mientras que en el occidente, Santiago de Compostela o las pequeñas de relevancia en diversos cabildos catedralicios.

CARMONA, J., El atraso industrial de Galicia. Auge y liquidación de las manufacturas textiles, 1750-1900, Barcelona, 1990, pp. 73 YSS., Y 191 YSS.; DUBERT, I., Del campo a la ciudad. Migraciones, Familia y Espacio Urbano en la historia de Galicia, 1708-1924, Vigo, 2001, pp. 59 Y ss.

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