primal scream [luego de dos años de silencio lanzan su nuevo trabajo] 54_ [oscar jalil]

“AHORA tenemos un sonido Primal Scream”, señaló como armoniquista en el blues electrónico “The Lord Is entusiasmado el cantante Bobby Gillespie poco después My Shotgun”. “Todos somos fans de Led Zeppelin. Lo de finalizar las mezclas para Evil Heat, el flamante trabajo llamamos para tocar una línea de armónica y aceptó casi de una de las bandas más irregulares del rock británico sin pensarlo. Es un tipo muy formal, un caballero. Para moderno. Es sabido que los Primal Scream pueden nosotros Plant no es un icono, sino un tipo de sorprender con una obra maestra y luego volver a las Birmingham que ama la música”, reveló Young. En la profundidades de la involución. Pero esta vez tienen versión del clásico “Some Velvet Morning”, la modelo dinamita en sus bolsillos: éste disco continúa la línea de Kate Moss canta junto a Gillespie, un dueto con dosis de riesgo iniciada en Screamadelica (1991) y con Vanishing glamour y efectos tóxicos que cuenta con la producción er mb nu Point (1997) como digno sucesor. “La mitad del álbum del legendario Giorgio Moroder. Y cierra el rubro ck e tra m corresponde a esta extraña música electrónica y colaboraciones Jim Reid, uno de los líderes de The Jesus na ck psicodélica, y la otra mitad parece ser una especie de & Mary Chain y ex camarada de Bobbie. tra rock & roll blanco, frenético y explosivo, realmente una música anárquica en cuanto a forma, enloquecida y con Sin llegar a la cima alcanzada en Screamadeliaca, lo n mucha energía. Muy sarcástica, muy desordenada, como nuevo de Primal Scream vuelve a poner en práctica ese Su ing debería ser el rock and roll”. concepto multiestilístico que cambió el rumbo de la orn f M música de los años noventa. A partir de las líneas oblicuas t O Hi ep r Evil Heat destila esa sustancia prepotente que perdura de “Deep Hit Of Mornig Sun”, un pop psicodélico con De ife uc después de la primera escucha. Luego del giro hacia la huellas de la Costa Oeste, se declara la posibilidad de s L 1 . is 66 0 M hn oscuridad electro-punk de Exterminator (2000), Primal brillar. Acto seguido, “Miss Lucifer” pone de manifiesto el ba 2. uto Scream se embarcó en la gira más intensa que haya vigor electrónico y la enorme destreza compositiva para 0 A t n oi gu conocido el grupo. “El tour fue tremendo y había que crear un hit sexual. La apuesta sube con “Autobahh 66”, 3. etr ot 0 D Sh aprovecharlo. Nos sentíamos poderosos. Terminamos la un clásico absoluto, algo así como si los The Beatles My 4. ise Is 0 R rd gira y pensamos qué hacer. Sacando un disco tan pronto, fueran hipnotizados por Kraftwerk. En esa misma Lo 5. he ing hemos evitado la presión, del grupo y de afuera”, explicó frecuencia surge en “Detroit”, más rock electrónico para 0 T orn . y t M el veterano guitarrista Robert Young en una reciente las masas, y “Rise”, una canción de protesta que merece 6 Cit lve 0 Ve entrevista. Esa energía acumulada se percibe en buena un párrafo aparte. Originalmente concebida como “Bomb . e 7 om 0 S ly parte del disco, en donde conviven la malicia de The Pentagon”, el tema tuvo que cambiar su nombre por l X ark 8 . ul r D k) Exterminator con los colores lisérgicos de Screamadelica. razones obvias; el propio Mani Mounfield se encargó de 0 Sk ne ac an s Tr En once canciones, Primal Scream administra lo mejor de aclarar el incidente: “La canción fue escrita cuatro meses 9. Sc ue us 0 A Bl on ce (B su pasado para seguir en carrera, sin por ello resignar ni antes del 11 de Septiembre. En realidad, no tenemos . pa e D 10 S nc un ápice del concepto que va de la anarquía a la nada en contra de la gente de Estados Unidos, pero sí en sta 1. ub experimentación. El resultado incluye tracks violentos, contra de George Bush Jr. El nombre de la canción es lo 1 S . piezas psicodélicas, himnos combativos y una furia poco de menos. Ahora triunfa el rock blando y corporativo, así 12 usual en tipos que ya bordean los cuarenta. que la gente debería estar encantada de que exista un grupo que dice las cosas que piensa”. Leyendo los créditos del álbum, es posible imaginar a Primal Scream como una nave futurista tripulada por Con estos condimentos y por varias razones más -el punks desquiciados. A los nombres conocidos de minimalismo rabioso de “Skull X”, la oferta glam presente Gillespie, Young, Andrew Innes, Martin Duffy y el bajista en “City” o la sinfonía robótica de “A Scanner Darkly”-, el de The Stone Roses, el inefable Gary Mani Mounfiled, hay séptimo álbum de los escoceses acaricia el sucio que agregar la participación de Kevin Shields de My esplendor que sólo puede imponer un grupo obsesionado Bloody Valentine y Andrew Weatherall -director musical de con las señales del instinto. Y eso se nota. Mientras tanto, gran parte de Screamadelica-. Bobbie Gillespie no se cansa de repetir su máxima del A la lista de invitados de Evil Heat se agrega Robert Plant momento: “Necesitamos un nuevo punk”.

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