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FACULTAD DE EDUCACIÓN Y HUMANIDADES DEPARTAMENTO DE CIENCIAS SOCIALES PEGAGOGIA EN HISTORIA Y GEOGRAFÍA

“Pánico Moral, los discursos de la derecha respecto al Frente Popular 1936 - 1941” Memoria para optar al titulo de Profesor de Educación Media en Historia y

Geografía

PROFESOR GUIA: Dr. Mauricio Rojas Gómez

PROFESOR INFORMANTE: Dr. Marco León León. ALUMNOS: Sergio Godoy Mora Sebastian Lizana Bilbao

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Índice

Página. Introducción……………………………………………………… 4

Planteamiento del Problema…………………………………… 6

Marco Teórico o de Referencia………………………………... 8

Hipótesis………………………………………………………….. 18

Objetivo General………………………………………………… 19

Objetivos Específicos…………………………………………… 19

Metodología……………………………………………………… 20

Capitulo I: “Frente Popular: Desde Moscú a Chile”...... 21 Contexto Internacional……………………………………………………… 21 Antecedentes del Partido Radical…………………………………………. 25 Antecedentes del Partido Comunista……………………………………... 27 Antecedentes del Partido Socialista………………………………………. 28 Frente Popular Chileno “Conformación”…………………………………. 29 Muerte de Ugalde…………………………………………………………… 30 El Frente Popular llega al Palacio de la Moneda………………………… 36 Gobierno del Frente Popular ……………………………………………… 38 Desfragmentación del Frente Popular……………………………………. 39

CAPITULO II: ¿Derecha o Derechas? Situación política del 43 conservadurismo chileno……………………………………….. Derecha Tradicional………………………………………………………… 45 Partido Conservador………………………………………………………... 48 Partido Liberal……………………………………………………………….. 50 Movimiento Nacional Socialista Chileno (MNS)…………………………. 41 5 de Septiembre de 1938, Los Acontecimientos………………………… 55 Falange Nacional……………………………………………………………. 60 Primeros pasos del social cristianismo en Chile………………………… 61 Falange Nacional en Chile…………………………………………………. 64

CAPITULO III: “Las Derechas y sus discursos”……………… 68 1936 No Izquierdas ni menos Frente Popular en Chile…………………. 68 1937 A cerrar el paso……………………………………………………….. 76

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1938 Frente Popular es igual a suicidio 77 nacional………………………………………………………………………. 1939 el Nacionalsocialismo escrito irrumpe……………………………… 84 1940 Hora de balances…………………………………………………….. 94 1941 Se revitaliza la Moral del Pueblo……………………………………. 99

Conclusión……………………………………………………….. 103

Fuentes y Bibliografía………………………………………….. 106

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Introducción

Esta investigación tiene como eje central de estudio la llegada, implantación y reacciones que generó el Frente Popular, en Chile. Que abarca desde el año 1936 a 1941, periodo en el cual se unieron los Partidos Radical, Comunista y Socialista. Desde sus inicios hasta su quiebre se analizará la importancia de los discursos esgrimidos desde la derecha en contra del Frente Popular.

Gran parte de la Historia de America Latina se ha desarrollado bajo el sesgo y control de los principales poderes económicos, políticos y sociales de cada país, siendo estos integrantes de la gran Familia Derechistas tradicional conservadora, la cual esta compuesta por las principales familias de la elite nacional. Al respecto tomando como base los mas importantes trabajos tanto de Chile como del resto de América, sobre las Derechas, intentaremos explicar el comportamiento del caso de Chile en el período 1936 – 1941, en gran parte debido a que es 1936 donde se materializa la idea de conformar un frente único de acción con base integral de los partidos de Izquierda y burgueses, hasta el año 1941, que es donde se termina el gobierno de Don , símbolo representativo de la victoria del Frente Popular en Chile

Desde comienzos del siglo XIX, la sociedad chilena experimenta grandes cambios sociales y económicos, que derivan en la adopción de nuevas ideologías políticas europeas, que adquirirán gran fuerza y revuelo. La llamada “cuestión social” era un tema que debía tener soluciones concretas y eficaces, al respecto los antiguos y nuevos partidos políticos intentaban resolver esta verdadera espina social que aquejaba al Chile de la época.

Es así como nacen los Partidos que componen el Frente, el Radical nace en 1863, creado por miembros del ala extrema del Partido Liberal. El Partido Comunista de Chile tiene sus orígenes en el Partido Obrero Socialista (POS), fundado el 4 de junio de 1912, y posteriormente el 2 de enero de 1922 es fundado

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el Partido Comunista de Chile (PCCh), el joven Partido Socialistas nace oficialmente en 1933, pero tiene su base en varios grupos anteriores. Los postulados principales de estos partidos era la representatividad popular y sus demandas. Principalmente el partido comunista y el socialista tienen continuos roces, debido a que varios puntos de sus mensajes iban dirigidos a la clase trabajadora obrera del país, y se peleaban el derecho a representar de mejor manera sus demandas y representatividad.

Bajo un clima político donde se comenzaban a delinear las derechas y las Izquierdas, el panorama que los enfrentaba tenia un punto en común, es que ambos tenían como bandera de lucha el detener el avance de la ideología opuesta.

Es dentro de estas expectativas que la investigación trata de abordar principalmente la contextualización de la época, abordando la formación, el posterior desarrollo y termino del Frente Popular en Chile. También busca dilucidar la posición y matices que toma el sector de la derecha con respecto a la visión que tiene sobre esta nueva fuerza política. Y un análisis empírico de los discursos que esgrime la derecha en contra del Frente Popular, usando la teoría del Pánico Moral como referente de estudio.

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Planteamiento del Problema.

El siglo XX, es un periodo marcado por la gran cantidad de cambios a nivel mundial, se producen grandes enfrentamientos, los que marcan el devenir de la sociedad contemporánea en todo ámbito, junto a esto el nacimiento de nuevas ideologías totalitarias post primera guerra mundial, que tendrán gran auge a nivel planetario. Además que después de la segunda guerra mundial surge una polarización del mundo. Chile no es la excepción, desde comienzos de siglo ya se empieza a experimentar movimientos sociales que comenzaron a marcar el andar de la sociedad del siglo XX. Ciertos fenómenos poblacionales (como la explosión demográfica, las migraciones del campo a la ciudad y las migraciones a otros países) ayudaron a explicar los profundos cambios ocurridos en América Latina y Chile1. Estos cambios se expresaron muchas veces en reacciones violentas, las cuales tuvieron en muchas ocasiones trágicas repercusiones. El país comienza a tomar dos direcciones políticas, conocidas como la Izquierda y la Derecha, los términos de referencia espacial derecha e izquierda aparecen por primera vez en el lenguaje político en la Roma clásica: entonces una forma rápida de votar en el Senado a favor o en contra de una propuesta consistía en que los votantes se agrupaban a la derecha de la mesa si estaban a favor y a la izquierda si estaban en contra. Pero es desde la Revolución Francesa en adelante que se recurre a los conceptos de derecha e izquierda para ordenar el conjunto del campo político2. La Izquierda se asocia principalmente a las clases obreras y proletarias, clases de más escasos recursos. La Derecha por su parte es asociada a las clases dirigentes del país, clases más acaudaladas y con una larga tradición política y empresarial.

Entre el 22 de junio y el 12 de julio de 1921, se celebra en Moscú, la III Internacional Comunista. Esta llama a la formación de frentes populares para

1 Armando De Ramón; Historia de Chile, Desde la invasión incaica hasta nuestros días (1500- 2000), Ed. Catalonia, 2003, , Chile, p. 140. 2 Sofía Correa Sutil; Con las Riendas del Poder: la derecha chilena en el siglo XX, Editorial Sudamericana, 2004, Santiago de Chile, p 19.

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detener el avance del Fascismo y el Totalitarismo. En Chile, el fracaso del proyecto de en la representación y materialización del proyecto social de los trabajadores, además de las nuevas tendencias ideológicas que vienen desde afuera, ayudaron a darle una particularidad al proceso, por el cual los partidos chilenos de tendencia izquierdista, más el partido Radical se agrupan en el llamado Frente Popular, el cual se levanta como el representativo de las masas más desposeídas de nuestro país. Este Frente tiene una gran acogida hacia el año 1938, llegando al poder con Don Pedro Aguirre Cerda a la cabeza. El triunfo de los Frentes Populares (1938-1947) significo un reemplazo de los partidos políticos oligárquicos en el gobierno por nuevos personajes y grupos profesionales y técnicos (e ideológicos), que pertenecían en muchos casos a las capas medias y abrigaban los ideales desarrollistas y mesocráticos de los años treinta y cuarenta3. Estos acontecimientos provocaron la respuesta de los distintos sectores agrupado o denominados como la Derecha, los cuales eran los principales gobernantes que había tenido la historia del país.

Bajo el prisma de la historia social, y utilizando el concepto de “pánico moral”, entendido como una reacción de un grupo de la sociedad en base a la percepción falsa o exagerada de algún comportamiento o grupo social, se busca analizar la respuesta que presentan las derechas chilenas con la formación del Frente Popular y la llegada al poder. Para lograr así poder distinguir la reacciones de las derechas en la sociedad a través de los años 1936 y 1941, como etapa de formación y disolución del Frente Popular.

3Gabriel Salazar y Julio Pinto; Historia Contemporánea de Chile, Vol. II, Actores, identidad y movimiento, LOM ediciones, 1999,Santiago, Chile, p. 41.

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Marco Teórico o de Referencia

En las dos ultimas décadas ha habido un gran crecimiento de los trabajos investigativos que aborden temáticas dedicadas a las instituciones de control social en America Latina y Chile, debido a que nos brindan valiosa información acerca de las estrategias seguidas por la elite, las clases dominantes o partidos políticos, en su afán por imponer una sociedad y modelos de ciudadano normales, con un alto poder regulador del cual se valieron los Estados Nacionales de la región para cumplir su objetivo de materializar sus visiones. En estos estudios que nutren la historiografía social latinoamericana se intenta diversificar el campo de estudio, hasta entonces centrada en actores más clásicos, como trabajadores y campesinos4.

Al respecto, nuestra investigación utiliza el concepto sociológico para analizar el periodo de la Historia Chilena que comprende los años 1936- 1941 llamado pánico moral. Es así como El sociólogo Stanley Cohen es el autor que utiliza el concepto de pánico moral5 para analizar a los Mod and rockers de Inglaterra y su impacto en la sociedad de la época, en cuanto al estilo de música que preferían, el estilo de ropa, looks, entre otros.

Cohen señala que las sociedades, están propensas, en un momento u otro, a periodos de pánico moral. En su acepción del termino expone que una condición, episodio, persona o grupo de personas emergen para convertirse, en una amenaza social que afectan a los valores y los intereses sociales; su naturaleza se presenta en una forma estilizada y estereotipada por los medios de comunicación, y las barricadas morales son controladas por editores, obispos,

4 Maria Silvia di Liscia, Ernesto Bohoslavsky; Instituciones y Formas de Control Social en America Latina 1840 – 1940, Prometeo, 2005, Buenoa Aires, Argentina, p. 9. 5 Stanley Cohen; Folk Devils and Moral Panics: The Creation of the Mods and Rockers, Third Edition, MacGibbon and Kee, Londres, Inglaterra, p. 28. En Mauricio Rojas; “Pánico moral, control social y culturas normativas en la Provincia de Concepción a mediados del siglo XIX”.p. 39.

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políticos y gente de pensamiento de derecha6. Los expertos socialmente acreditados acostumbran a pronunciar sus diagnósticos y soluciones. En ocasiones el pánico pasa y se olvida, excepto en el Folclore y la memoria colectiva, en otros momentos tienen repercusiones mas serias, y que duran mas tiempo y pueden provocar incluso cambios en las políticas legales y sociales e, incluso en las formas en que la sociedad se concibe a si misma, denotándose la importancia del estudio de estos episodios.

En esta misma dirección es que El estudio del Dr. Mauricio Rojas, es uno de los pioneros en Chile en analizar un periodo de la historia desde el concepto de Pánico Moral, al respecto nos entrega una investigación que ahonda en una de las expresiones que adquirió el manejo del poder al interior de la Provincia de Concepción de mediados del siglo XIX. En este periodo la Iglesia ejerció una gran influencia en la sociedad latinoamericana, y Chile por cierto no es la excepción, es así como se persigue demostrar las formas de control social asumidas por la jerarquía de la Iglesia y las autoridades civiles conservadoras de la época, además de las percepciones y actitudes evidenciadas por los llamados subalternos (base eclesiástica, resto de la población).

Nos aporta una línea investigativa a seguir debido a que el autor plantea que la construcción del discurso elitario de la época, claramente conservador, utilizado principalmente por la alta jerarquía eclesiástica, adopto una visión catastrofista del comportamiento de la comunidad, lo que se enmarca en el concepto sociológico llamado pánico moral. Principalmente esta postura se debió a la perdida de control social7 y de descrédito del mensaje difundido por la Iglesia8, la cual ante la necesidad de recuperar el control de la sociedad, desplegó

6 Stanley Cohen; Folk Devils and Moral Panics: The Creation of the Mods and Rockers, Third Edition, MacGibbon and Kee, Londres, Inglaterra, p. 1. 7 Mauricio Rojas; Pánico moral, control social y culturas normativas en la Provincia de Concepción a mediados del siglo XIX. En Ernesto Bohoslavsky, Milton Godoy; Conspiración estatal, orden oligárquico y respuestas sociales (Argentina y Chile, 1840-1930), Prometeo, 2010, Buenos Aires, Argentina, pp. 37-63. 8 Para el estudio de la posición de la Iglesia frente a la perdida de influencia en Chile ver: Ricardo Krebs, el pensamiento de la Iglesia frente a la laicización del Estado en Chile 1875-1885. En

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un discurso moralizador y revitalizador de la sociedad chilena, y condeno con discursos catastrofistas aquellos que lo cuestionaban.

Cristian Buchrucker, trabaja el tema de los componentes antidemocráticos, en las culturas políticas de lo que suele denominarse “Cono Sur” (Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Paraguay y Bolivia). El autor define como antidemocrático a una cultura política (conjunto de actitudes, ideas y valores sistematizados en ideologías) cuando sus componentes principales constituyen impugnaciones explícitas a la democracia u obstáculos indirectos para la aceptación de un sistema caracterizado por la competencia electoral basada en el sufragio universal, la pluralidad de partidos y la garantía constitucional del nivel de libertades civiles y políticas que resulta necesario para la vigencia de los mencionados rasgos de competitividad y participación9. Explica que la identidad nacional, como la cristalización de imágenes ampliamente compartidas por muchos ciudadanos acerca del pasado histórico y su relevancia actual para proyectos colectivos y lealtades institucionales del presente, es el principal camino para el estudio de las culturas políticas de una sociedad.

En el acontecer histórico que ha vivido America Latina, ha sufrido un accidentado camino democrático, definiendo como rol importante dentro de este camino a la referencia Ibérica de la región. Define un enfoque primordialista en el cual se encuentran dos vertientes: a) la que continúa la argumentación del progresismo liberal del siglo XIX, poniendo en la picota el legado autoritario que habría dejado esa época y b) la interpretación neoconservadora que concibe la tradición ibérica –“autoritaria y corporativa” – como una realidad duradera, distinta a la democracia, pero que sería viable y acaparable aún a fines del siglo XX. Como una concepción legitimadora, con una identidad nacional constructiva y

Catolicismo y Laicismo, Santiago, 1981. En Mario Góngora, Ensayo Histórico sobre la noción de Estado en Chile, en los siglos XIX y XX. Santiago, Editorial Universitaria, 4° Edición, 199 2, p. 51. 9 Cristian Buchrucker; Identidades nacionales y cultura política antidemocrática. Trayectorias históricas del Cono Sur en el siglo XX, ponencia en el Congreso “La construcción de las identidades nacionales en el mundo hispánico. Ideas, lenguajes políticos e imaginarios culturales”, 2003, Valencia, España.

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evolutiva, en la cual dominan los poderes electivos ante las instituciones castrenses10.

Dentro del análisis, se toma el primer periodo de estudio, el cual es el que abarca las fechas de investigación, y hace un análisis de Chile. Lo nombra como un país que vivió tempranamente la organización y el activismo sindical y político, proceso que en la segunda década del siglo marcó el inicio del fin de la República oligárquica. Un impulso para combinar las demandas democratizadoras de las clases medias con el reformismo social llevó a la presidencia de Arturo Alessandri (1920-24). Con todo, en el Partido Nacional siguió siendo fuerte la posición liberal- conservadora (semejante a la argentina de la época), según la cual se identificaba “la clase terrateniente” con “la libertad efectiva, el orden y la autoridad” y se catalogaba el reformismo como un “serio peligro socialista”.11

En esta época en el país no alcanzo a haber un intervensionismo militar definitivo, y desde 1932 en adelante, comienza a haber una tolerancia política, la cual desemboca en la creación del Frente Popular. No es sorprendente que al terminar esta etapa Chile apareciese ante los ojos del mundo como uno de los pocos lugares de América Latina en donde los procesos de cambio se encarrilaban en los cauces del reformismo democrático, en notable contraste con las trayectorias argentina y brasileña.12

Otro importante estudio del Dr. Ernesto Bohoslavsky En el libro El complot patagónico. Nacionalismo, mitos conspirativos y violencia en el Sur de Argentina y Chile (siglos XIX y XX), específicamente en el Capitulo 2, expone la situación de la política chilena durante el periodo próximo a la elección presidencial de 1920,

10 Cristian Buchrucker; Op. Cit., en esta temática Buchrucker, hace un resumen de las ideologías que contemplan las culturas antidemocráticas. 11 Cristian Buchrucker; Ibídem., ver un representante de esta corriente: Edward Vives, Alberto, La organización política de Chile, Santiago, Ed. del Pacífico, 1943, pp.11 y 136. 12 Cristian Buchrucker; Identidades nacionales y cultura política antidemocrática. Trayectorias históricas del Cono Sur en el siglo XX, ponencia en el Congreso “La construcción de las identidades nacionales en el mundo hispánico. Ideas, lenguajes políticos e imaginarios culturales”, 2003, Valencia, España

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Arturo Alessandri es el candidato que plantea por primera vez abiertamente la existencia de la “cuestión social” en Chile y las respectivas reformas político- sociales que debiesen hacerse para atenuarla. En este sentido el gobierno, la derecha, y los sectores dirigentes del país, crearon y difundieron un imaginario conspirativo anticomunista y antialessandrista por todo el territorio nacional.13 Mientras que en el extremo sur a raíz de esta conflagración propagandística motivó y justificó una brutal ola represiva sobre el movimiento obrero y en especifico sobre la Federación Obrera de Magallanes (FOM).

Principalmente el autor se esmera por presentarnos el importante peso de la ideología, creencias, mitos y percepciones de los grupos conservadores y de extrema derecha y así como también la alta capacidad por parte de estos grupos de adaptarse a sus tiempos y modificar los discursos conspirativos para de esta manera obtener mayor adhesión social.

Enfocándonos en los textos que analizan las temáticas de la derecha en Chile En el libro escrito por Sofía Correa Sutil, Con las Riendas del Poder: la derecha chilena en el siglo XX, encontramos una caracterización de la derecha aguda y certera, la cual ha sido decisiva en el desarrollo de nuestro país y de la cual se conoce muy poco debido a un desinterés generalizado por estudiar este grupo político, el cual ha tenido enorme trascendencia en la organización del estado chileno, quizás en parte por la poca simpatía que despierta.

Los términos derecha e izquierda, aparecen en el lenguaje político en la Roma Clásica, pero no es sino hasta la Revolución Francesa en donde los términos se ocupan con una significancia moderna para ordenar el campo político,

13 Ernesto Bohoslavsky, 2009. La conspiración inca-masónica-bolchevique, Movimiento obrero, ideologías y represión en la Patagonia (1915-20). En El complot patagónico. Nacionalismo, mitos conspirativos y violencia en el sur de Argentina y Chile (siglos XIX y XX), Prometeo Libros, Buenos Aires, cap. 2.

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cuya forma de diferenciación política se mantuvo en las legislaturas europeas del siglo XIX14. Norberto Bobbio en Derecha e Izquierda: razones y significancia de una distinción política, establece que esta diferenciación se trata de una metáfora, cuyo origen es totalmente casual y el cual persiste hasta la actualidad.

Una idea sintética del pensamiento de Bobbio acerca de la derecha acerca de la percepción de la realidad, es que percibe las desigualdades como un fenómeno natural y que por lo tanto no pueden ser eliminadas. Existen teóricos del pensamiento político, que sitúan la diferenciación entre ambas posturas se da por la adhesión a la libertad (izquierda) y el autoritarismo basado en la tradición (derecha), etc.

José Luis Romero en El pensamiento político de la derecha latinoamericana, al respecto establece que desde una mirada política la derecha se identifica más bien con el autoritarismo ejercido para impedir el cambio, pero adjuntando la dimensión socioeconómica para entender a cabalidad la idea. Este sistema autoritario es también abrazado por sectores medios y por sectores populares, los cuales ven en esta ideología el freno de las ideas revolucionarias que cambien en demasía el normal desarrollo de una sociedad en la cual se encuentran. Gran cantidad de autores coinciden en que principalmente estas elites que conforman las derechas en Latinoamérica tienen su origen en las elites rurales del periodo Colonial.

La derecha en Chile, claramente esta se encuentra cohesionada bajo un discurso en común. Entre los que componen este grupo político existen lazos de parentesco, amistad, tradiciones y gustos15. La diferencia sustancial entre el Partido Conservador y el Partido Liberal es de carácter doctrinario, y lo anterior

14 Sofía Correa Sutil; Op. Cit., p. 19 15 Mario Góngora; Ensayo Histórico sobre la noción de Estado en Chile, en los siglos XIX y XX, Editorial Universitaria, 4° Edición, 1992, Santiago , Chile pp 48-50. en esta obra se entrega una caracterización de la elite chilena de finales del siglo XIX, en donde se nombran las principales familias de la época, como cambia y diversifica su actividad económica y la incorporación del elemento extranjero en sus filas.

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radica en que el primero defiende los intereses y postulados de la Iglesia Católica, mientras el segundo adopta una postura mas bien secularizante y de establecer un control estatal sobre la Iglesia Católica y así de esta manera disminuir la influencia en la sociedad, característica también destacada por Paul Drake en su libro Socialismo y populismo en Chile. Estos partidos ejercen durante todo el siglo XIX y en las dos primeras décadas del siglo XX un control incontrarrestable del poder político.

Esta derecha chilena nos expone la autora se encuentra unida por lazos de parentesco y económico lo cual la presenta como un cuerpo compacto y aislado, con respecto al resto de la sociedad. Correa Sutil establece que fue la gran crisis de 1929, la que además de un descalabro económico provocó un fuerte cuestionamiento acerca de la democracia Liberal y del Capitalismo. El socialismo se volvió atractivo para los sectores medios e intelectuales y adquirió nuevas fuerzas el corporativismo16, el cual fue incorporado por el Partido Nacional Socialista a su proyecto de país.

Cuando el frente popular triunfaba y llegaba al poder, la posición cerrada en un inicio hacia el Gobierno de Aguirre Cerda por parte de la Derecha, fue evolucionando hacia una táctica de negociación, acuerdos y cooptación de los políticos reformadores17, en este sentido desde el poder Legislativo analizo las distintos impulsos progresistas del gobierno frente populista, tratando de minimizar los efectos para sus intereses, todo esto bajo una estela de redes clientelísticas en la arena política del siglo XX. La derecha mostró en este periodo un apego y defensa del sistema democrático, debido a que descarto la violencia como forma valida para acceder al gobierno, a diferencia de lo que ocurría en el resto de Latinoamérica.

16 Mario Góngora; Op. Cit.,p.40. al respecto existen varios tipos de división al momento de estudiar a las familias de la elite chilena. 17 Mario Góngora; Ibídem p. 70

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Al respecto Tomas Moulian ofrece una división en el análisis de la trayectoria política chilena particular, que se dio entre 1938 y 1973, señalando que cuando la predominancia de un grupo económico no se refleja en el ambito político, no tienen capacidad de dirigencia debe desarrollar capacidad de contención, al respecto se distinguen tres formas: la defensiva, la represiva y la integrativa18.

Tenemos que Verónica Valdivia, en “El nacionalismo chileno en los años del frente popular (1938-1952)”, hace referencia a la existencia de dos sectores en el derecha chilena, el primero esta asociado al mercantilismo, y es este sector se encontrarían los dos principales partidos, o sea, los Liberales y los Conservadores. El segundo sector identificado en la derecha, y por lo demás trabajado por la autora, corresponde a una derecha ideológica, identificada en un primer momento por el nacionalismo y posteriormente por el fascismo.

La experiencia socialista de junio de 1932, representó un gran temor dentro de las elites criollas, tanto como a la burguesía industrial-financiera naciente y los profesionales, debido a un desgaste partidario, y las nuevas tendencias nacientes como lo fueron el Nacionalismo y el Socialismo, las cuales romperían el statu quo imperante.

Relacionado con lo establecido por Cohen, y que se da durante la elección presidencial de 1938 , La sensación de inseguridad y temor que éste provocó a la derecha tradicional y a algunos sectores del ejército, creó un clima de fuerte antagonismo cuando ambas facciones – la desplazada del poder y la recién ascendida- decidieron defender sus posiciones19. Este nuevo cambio dentro de la política, presupone nuevamente un cambio dentro de los movimientos nacionalistas del país. El MNS desaparece, y de este movimiento nacen el Partido Nacional Fascista, y el Frente Nacional Chileno. Facciones de la Milicias

18 Tomas Moulian; Fracturas. De Pedro Aguirre Cerda a (1938-1973). LOM ediciones, 2006, Santiago Chile, p. 12. 19 Tomas Moulian; Op. cit. p. 10.

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Republicanas pasan a formar el Movimiento Nacionalista de Chile. Los tres pretendían ser fuerzas revolucionarias para lograr su objetivo de renacer el sentido de nacionalidad entre los chilenos, fuertemente amagado con la influencia comunista en el gobierno del Frente Popular. Ello a su juicio era producto de la decadencia que sufría el sentido de chilenidad con la notoria presencia extranjera- especialmente la judía-, produciendo una intensa crisis espiritual, reflejada en la degradación que afectaba a las instituciones nacionales, el relajamiento de la moral y de la disciplina.20

En el libro de José Díaz Nieva, Chile: De la Falange Nacional a la Democracia Cristiana, realiza un exhaustivo análisis acerca de la evolución que tuvieron las ideas social cristianas en Chile y específicamente en el capitulo I denominado El Origen del Movimiento Social-Cristiano en Chile, se presenta de manera periódica los hechos y antecedentes de la Falange Nacional, algunos autores señalan que el movimiento social-cristiano nace desde el momento en que se instala la Iglesia Católica en el inicio del periodo de la Conquista, al respecto el padre Fidel Araneda Bravo señala que “en Chile los obispos y el clero han participado en la vida política para defender los derechos del hombre, verbigracia, durante la Conquista y la Colonia actuaron en la política a fin de amparar a los indios de la crueldad de los conquistadores y encomenderos21”, por lo que se puede deducir que la Iglesia adopto una postura en America de ayuda a los mas desposeídos y postergados.

Al igual que Correa Sutil establece que es a partir de la denominada cuestión del sacristán nacen en Chile los primeros partidos políticos propiamente tal y con una estructura delimitada moderna. También el autor coincide en la afirmación de que inicialmente el conservadurismo chileno en sus inicios no contaba con un programa político claro y preciso. Advierte que en el seno de la

20 Tomas Moulian; Ibídem. p. 14. 21 Fidel Araneda Bravo; El clero en el acontecer político chileno 1935-1960, Ed. Emisión, 1987, Santiago de Chile, p.19. En Díaz Nieva, José; Chile: De la Falange Nacional a la Democracia Cristiana, Universidad Nacional de Educación a Distancia, 2001, Madrid, p. 25.

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Derecha chilena, específicamente en el Partido Conservador existían fuertes lazos con la Iglesia Católica, ya sean dogmáticos como de parentesco sanguíneo.

Es a finales del siglo XIX cuando se comienza a hacer explicita la preocupación por parte de un sector de la derecha chilena por la llamada Cuestión Social. Al respecto la opinión de Jorge Cash, conservador de la época, sintetiza la opinión y sentir de muchos al establecer que las propuestas sociales expuestas por el abogado Juan Enrique Concha, acerca de la economía social y la cuestión Obrera, deben ser entendidas como parte de un deber cristiano… como la obligación que tiene un católico de corregir las injusticias22, el alcance de corrección era limitado ya que se remitía solamente a las situaciones que tuvieran solución inmediata.

Identificamos a la Falange Nacional de acuerdo con el autor como un partido de base Conservadora, que desde la inquietud de la juventud se comenzó a independizar y a elaborar una propuesta seria y católica de la sociedad chilena.

Una importante fuente de consulta para el siglo XX, es la Historia contemporánea de Chile, de autoria de Gabriel Salazar y Julio Pinto, los cuales abordan la historia de Chile del periodo tomando en cuenta a los sectores populares y su participación en el ámbito político, social y económico de nuestro país23. Se abordan los ejes temáticos de la construcción de Estado en Chile y como fueron interviniendo los distintos actores políticos y sociales.

22 Jorge Cash Molina; Bosquejo de una Historia, Copygraph, 1986, Santiago de Chile, pag. 64. En José Diaz Nieva; Op. cit, p. 33.

23 Gabriel Salazar y Julio Pinto; Historia contemporánea de Chile I. Estado, legitimidad, ciudadanía. LOM ediciones, 1999, Santiago, Chile.

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Hipótesis

La situación de descrédito social y político del frete popular chileno entre los años 1936 y 1941, se habría debido, entre otros factores a los discursos de pánico moral esgrimidos por las derechas chilenas en ese periodo.

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Objetivo General

-Analizar el contenido de “Pánico Moral” en el discurso de las derechas chilenas hacia la política del Frente Popular.

Objetivos Específicos

-Caracterizar los sectores de la derecha chilena.

-Distinguir la propaganda desplegada por los principales medios escritos de las derechas de la época.

-Identificar los argumentos de descrédito empleados por las derechas chilenas en el periodo de 1936 – 1941, hacia el Frente Popular.

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Metodología

Esta investigación se hará bajo un método de investigación cualitativa y un enfoque metodológico exploratorio, donde se relataran los acontecimientos que van sucediendo de acuerdo al problema planteado, a través de un trabajo descriptivo y analítico. En lo que concierne a los instrumentos de obtención de información, se utilizarán principalmente fuentes de la época tales como la utilización de recursos periodísticos como diarios, revistas, etc., este tipo de bibliografía nos dará principalmente la información requerida sobre los discursos esgrimidos por las derechas en Chile, en los años del principio del Frente Popular. También, se trabajará con bibliografía orientada al proceso histórico, para obtener una contextualización del tema. Otro tipo de bibliografía ocupada ira relacionada con el tema conceptual, lo cual nos dará un marco referencial sobre el tema, en este conjunto bibliográfico, abordaremos principalmente el tema de las derechas chilenas, y también el tema sociológico, correspondiente al concepto de Pánico Moral. El objetivo es adoptar una amplia base conceptual referente al tema, para lograr así realizar en análisis adecuado de las fuentes primarias, con respecto al tema. El análisis del trabajo se realizará, tomando el periodo y haciendo un análisis de la época, con lo cual posteriormente se ocuparan las fuentes primarias para demostrar el Pánico Moral que difunden las derechas chilenas en la sociedad. Con respecto a la metodología de análisis, se van a sistematizar y se registrará un patrón común que nos permita realizar un análisis de la causa.

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Capitulo I: “Frente Popular: Desde Moscú a Chile”

Contexto Internacional

La conformación del Frente Popular en nuestro país correspondió a un hecho que presentó varias particularidades debido a las singularidades de intereses que presentaban los partidos que lo conformaron. La puesta en marcha de las directrices emanadas por Moscú en Chile corrió por cuenta de peruanos, españoles, italianos, etc., debido a sus experiencias previas en sus países y a un anhelo de internacionalizar lo más rápido posible el movimiento promovido por el Partido Comunista, los cuales se enfrentaron a una tradición republicana y democrática bastante más arraigada que en otros lugares del mundo, teniendo que cambiar las estrategias políticas para así no descuidar la meta que era conquistar el poder del Estado, y así ejercer y representar los derechos de los obreros y trabajadores.

La Internacional Comunista nace en repudio de la II Socialista, tildándolos de memoria frágil con respecto a la revolución que promovían ambos en los inicios, y de haberse acoplado a los intereses de la burguesía. Principalmente el quiebre que marca el alejamiento entre comunistas y socialistas radica en que los últimos adoptaron paulatinamente en primer lugar la democracia parlamentaria como única manera de llegar al gobierno y desde allí generar los cambios políticos, económicos y sociales. En segundo punto acogieron el sindicalismo reivindicacionalista, el cual tenía como fin el progreso económico de la clase trabajadora obrera, dejando de lado al quiebre coyuntural y caótico del capitalismo, y un tercer punto importante las libertades públicas, tales como, de pensamiento, religiosa, prensa, asociación, etc., las cuales a juicio de comunistas retardaban el proceso revolucionario del proletariado24.

24Gonzalo Vial; Historia de Chile v 5, Ed. Zig Zag, 2006, Santiago de Chile. p 433.

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En 1919 se celebró el primer congreso de la III Internacional, presidida por el político ruso Zinóviev. En esta se aprobó un programa que exigía una disciplina férrea de los militantes respecto a su partido nacional y a la dirección de la Komintern. Se aceptaba el Comunismo como vía para acabar con el Estado Burgués. De esta forma la III Internacional acentuó la división del movimiento socialista internacional, que acabó escindiéndose en dos tendencias: los Socialistas, que defendían la reforma del sistema capitalista aceptando los mecanismos de las democracias parlamentarias; y los Comunistas, quienes eran partidarios de la revolución armada y de la democracia proletaria, adheridos a la III Internacional25.

La principal tarea de la Internacional Comunista en América Latina es definida en los documentos del año 1921 como: propaganda, difusión de la información mutua, “dirección y control” de los Partidos Comunistas existentes, acercamiento de los “núcleos comunistas” a la Internacional en los países como Chile y promoción de “organizaciones proletarias y semi-proletarias” susceptibles de ser acercados a Komintern en el resto del continente26.

Las raíces de los primeros intentos por dar un cambio en las políticas de acción como frente de oposición las podemos rastrear en el Partido Comunista internacional, el cual organizado en la III internacional Comunista, sancionó en su V congreso de 1924 una nueva especificación a su político de Frente Único, que implementaba desde 1921, en el marco de la confrontación “ clase contra clase” y que tendía a lograr la unidad de acción con otros partidos marxista, en especial con socialistas y socialdemócratas27. Esta nueva orientación tenía como fin radicalizar la postura en las políticas de acción, llamando a construir un Frente

25Miguel Angel Toro; La Komintern y su Proyección Mundial, 1919-1943. 2007, memoria para optar al título de Profesor en Educación Media en Historia Y Geografía. Chillan. Universidad del Bio Bio, Pág. 7. 26 Olga Ulianova; Primeros contactos entre el partido comunista de Chile y komintern, en cuadernos de Historia, XVIII 1998, pag. 233, en Miguel Angel Toro; La Komintern y su Proyección Mundial, 1919-1943. 2007, memoria para optar al titulo de Profesor en Educación Media en Historia Y Geografía. Chillan. Universidad del Bio Bio, Pág. 9. 27 Pedro Milos; Frente Popular en Chile. Su configuración: 1935-1938, Lom Ediciones, 2008, Santiago, Chile, Pág.27.

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Único “desde abajo”. Con ello se buscaba que los trabajadores socialistas desconocieran a sus dirigentes y se sumaran, en los hechos, a los partidos comunistas. Se prohibía terminantemente, en consecuencia, el establecimiento del Frente Único “por arriba”28.

Siguiendo con el cambio de la política del partido el VI Congreso de la Internacional Comunista realizado en 1828, diagnostico que el capitalismo se encontraba próximo a una “fase de decadencia definitiva”, por lo cual se debía reforzar la unidad clasista en cada país en torno a los partidos comunistas, y la unidad internacional en torno a la URSS.

En enero de 1933, Hitler se convirtió en el Primer canciller de Alemania, produciéndose una gran popularidad y rápido avance de las ideas totalitarias y fascistas. La respuesta de la Komintern se produjo un año y medio después de que Hitler asumiera como canciller, cuando en agosto de 1935, el VII Congreso de la Komintern, que reunió en Moscú a delegados de sesenta y cinco partidos comunistas del mundo, quienes tomaron la decisión de llevar adelante una nueva política, en respuesta a la amenaza latente del creciente poderío fascista, que recibió el nombre de Frente Popular. Los comunistas debían dejar de atacar a los partidos socialistas y burgueses y buscar una alianza con ellos para combatir al fascismo29.

El militante comunista Georgi Dimitrov, fue un personaje importante en el vuelco de las políticas adoptadas por la Komintern, las cuales fueron confeccionadas por él. Dimitrov fue uno de los acusados por Alemania del incendio del Reichstag, debido a una brillante y valiente autodefensa fue absuelto y expulsado, impresionado Stalin de la capacidad del búlgaro lo invita a hacerse

28Carlos Bascuñan. “La estrategia política para la formación de Frentes Populares”, Revista Estudios Sociales, C.P.U., Nº33, 1982, p.74 en Pedro Milos; op cit., p. 27. 29 Mariana Aylwin y otros; Chile en el siglo XX, Planeta, 2002, Santiago de Chile. pp. 139-143.

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cargo y dirigir la Komintern. Principalmente proponía un vuelco en las relaciones entre ambos grupos políticos dejando de lado acusaciones y odiosidades, hacer frente en común al creciente poderío del fascismo y trabajar por el buen entendimiento y relaciones entre la izquierda y los partidos de centro mundial.

El concepto de Frente Popular tuvo su génesis en Francia, en donde Socialistas y Comunistas se unen bajo un conglomerado político común para hacer frente en al creciente poderío Fascista. En julio de 1934 es cuando ambos suscriben el tan anhelado pacto de unidad y acción política. A fines de ese año se plantea la posibilidad de extender la composición política del frente a los sectores de izquierda de clase media, Maurice Thorez jefe del partido comunista francés amplia su concepción inicial acerca la idea de conformar un frente amplio de izquierdas y entiende que la única manera de enfrentar y derrotar a la nueva fuerza política creciente es aunando discursos y planteamientos. A finales de este convulsionado año la directiva de la Internacional decide aprobar el camino trazado por el Partido Comunista francés como política mundial.

En junio de 1935 los socialistas aceptan incorporarse al frente, y al igual que sucedió en Chile, los radicales demoraron la decisión, debido a que al interior del universo de los militantes existía una fuerte división entre aquellos que apoyaban y rechazaban la incorporación del partido a este conglomerado político, entre otros motivos debido al rechazo y desconfianza que generaba la presencia comunista.

Es así como se comienza a gestionar el acuerdo del Frente Popular español, el cual se oficializa a comienzos de 1936, llegando rápidamente al gobierno. Luego de que se oficializara la estrategia de Frente Popular en el VII Congreso de la III Internacional en 1935, el comunismo chileno adoptó una actitud moderada, adecuándose a la realidad nacional, facilitando su relación con sectores de centro e izquierda. De este modo el frente identificó su programa con los intereses pluriclasistas, el cual le brindaba modernización económica en vez de una acción subversiva.

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Para entender de mejor manera e incorporar la situación de los tres partidos involucrados en el Frente Popular la caracterización de Pedro Milos es clara y precisa30, y utilizaremos una adaptación de ella, y que constituye una introducción clara y necesaria al proceso de conformación del Frente Popular.

Antecedentes del Partido Radical

En el periodo inmediatamente posterior a su fundación, ocurrida en 1863, el Partido Radical se fue identificando, progresivamente, con los intereses objetivos de los nuevos sectores emergentes. Esto se observará con mucha mayor claridad en los programas de sus Convenciones de 1888 y de 1899 que en su práctica política. En los hechos para la elite radical los conflictos centrales siguieron siendo, por varios años, las relaciones entre Estado-Iglesia y la reforma Constitucional, que mayormente no sufrió modificaciones sustanciales durante el siglo XIX, de no ser por las llamadas leyes laicas y el acortamiento del periodo presidencial durante la década del 70, debido a que finalmente la rígida y autoritaria constitución de 1833 les sirvió a los liberales del periodo para conservar un estado que cuente con un alto respeto hacia las instituciones y una alta sacralización de la ley por parte de la población.

Los elementos sustanciales de las convenciones señaladas fueron la lucha por la educación, la libertad de sufragio, la moralidad administrativa y la igualdad para las mujeres. El Partido Radical comenzaba a representar los cambios sociales y políticos que se producirían en el país.

En la tercera convención radical de 1906 se comienzan a dar dos puntos de vista en lo relativo a buscar “el bien de la masa social”, sustentadas por Enrique McIver y Valentín Letelier, los cuales diferían en los medios para conseguirlo. El primero abogaba por la fuerza individual, en la ilustración y energía del espíritu y

30 Pedro Milos; Ibídem, pp. 19-28.

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en el convencimiento del poder de la voluntad, mientras que Letelier interviniendo la ley y la autoridad.

Los Radicales ya no eran aquel grupo de políticos locales que se reunía en torno a la figura de Matta; eran la expresión de cambio al interior del sistema político parlamentario que operaba desde 1891. De allí que años más tarde, Arturo Alessandri recibiera, en 1920, el apoyo del Partido Radical, lo que le permitió llegar a la presidencia de la república.

Las intervenciones militares de 1924 y 1925 debido a la agitación social, produjeron un retroceso y un corte drástico del movimiento popular que se venía produciendo de fines del siglo XIX, cortando de raíz las reivindicaciones levantadas por los trabajadores y los sectores medios. El fracaso del proyecto de Alessandri trajo consigo una crisis interna en el radicalismo chileno. La crisis económica, política y social que afecto al país en la década del 20 sumado al gobierno autoritario de de Carlos Ibáñez del Campo, fueron produciendo una mayor polarización de la sociedad chilena de la época. El partido Radical también sufrió esta polarización debido a que el fracaso de Alessandri colocó en evidencia que los partidos de clase media no podían o no querían aplicar las reformas prometidas31. Con esto el radicalismo ve agudizados sus conflictos internos, lo que produjo que algunos sectores decidieron volcarse decididamente hacia los partidos obreros, abandonando las filas radicales.

En la declaración de principios de la convención Radical de 1931 se aprecia un giro de replantear sus postulados, constataba la crisis del régimen capitalista, ante lo cual planteaba la necesidad de su reemplazo por un régimen colectivista y solidario, postulaba para ello un proceso evolutivo de cambios; reconocía la lucha de clases como un mal inevitable, propugnaba la organización sindical como

31 John Petras; Política y fuerzas sociales en el desarrollo chileno, ed. Amorrortu, 1969, Buenos Aires, Argentina, p.113 en Pedro Milos; Frente Popular en Chile. Su configuración: 1935-1938, Lom Ediciones, 2008, Santiago, Chile, p. 19-28.

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medio para obtener la libertad económica de los trabajadores y rechazaba cualquier tipo de dictadura.

Antecedentes del Partido Comunista

La creación del PC de Chille se inscribe en la evolución del movimiento obrero chileno desde fines del siglo XIX. La división del Partido Demócrata, fundado en 1887, da paso a la creación del Partido Obrero Socialista (POS), fundado por Emilio Recabarren. En diciembre de 1920, en el congreso realizado en Valparaíso, el POS decide toma las primeras decisiones relacionadas a transformarse en un partido vinculado al movimiento comunista internacional, acá es donde se resolvió a autorizar al Comité Ejecutivo Nacional para gestionar el ingreso del partido a la tercera Internacional, lo cual se materializa en enero de1922 en donde se declaró oficialmente fundado el Partido Comunista de Chile. La dilación de las reformas ampliamente esperadas y el recurso a la represión bajo el gobierno de Alessandri, se generalizó luego bajo el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo. En marzo de 1927 el PC fue puesto fuera de la ley y su prensa y sus dirigentes sufrieron fuerte apremio de la policía y la prisión.

Es en la década del 20 y principios del 30, el PC sufre una reformulación que en palabras de Ramírez Necochea se pensaba que la “revolución social” era inminente y que “establecer el régimen socialista era cuestión de levantar la combatividad del proletariado para instaurar un gobierno obrero de un solo golpe, en una sola batalla”, estas palabras se contextualizar en un ambiente de profunda crisis que vivía el país y de profundo antagonismo entre la clase dirigente.

Los lineamientos políticos que orientan la actividad del PC desde el año 1935 hasta 1973, Ramírez Necochea destaca los siguientes: uno , para llegar a la revolución socialista, era necesario “ cumplir con una serie de etapas previas”; dos, el nuevo objetivo político debía ser “ la revolución democrática burguesa”, que implicaba luchar “contra el imperialismo, por la reforma agraria y por la

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democratización efectiva del poder político”, tres, “el partido debía fortalecerse como vanguardia del proletariado” y contribuir a la “unidad de la clase obrera”, implementando la consigna del Frente Único; y cuatro, para el logro de los objetivos anteriormente mencionados, el partido debía “abandonar su posición de aislamiento y su estrecho sectarismo”, incorporar a los campesinos y “ a las grandes masas populares” , así como establecer las debidas conexiones con otros sectores sociales que tenían o podían tener algún punto de coincidencia con sus planteamientos32.

Antecedentes del Partido Socialista

En la década del 20 se asiste a una gradual apertura del sistema político chileno. En la medida en que la crisis afecto el sistema predominante, se propicio un periodo de fuerte readecuaciones sociales, políticas y económicas, es en este contexto donde las ideas socialistas buscarían, con el concurso de nuevos actores sociales, una nueva expresión política. Diversos hechos políticos dan cuenta de esta nueva realidad, entre ellos, se pueden destacar tres: la caída de Carlos Ibáñez, la República Socialista y las elecciones presidenciales de 1932.

Existían ya desde 1931, distintos grupos, núcleos y pequeños partidos que giraban en torno a la idea del socialismo científico, aunque sin límites muy definidos y claros en cuanto a doctrinas y programas. En efecto los grupos que en 1933 dieron origen al Partido Socialista expresaban los principales cambios ocurridos, a nivel social y político, entre los sectores populares y medios radicalizados. En este sentido los cuatro principales grupos socialistas en este periodo fuero: Nueva Acción Pública, Partido Socialista Marxista, Orden Socialista y Acción Revolucionaria Socialista. La experiencia de la República Socialista fue probablemente la razón determinante que llevo a la unificación de los distintos grupos socialistas de Chile33. En palabras del profesor Luis Zúñiga, uno de los

32 Hernán Ramírez Necochea; Origen y formación del Partido Comunista de Chile, Ed. Austral, 1965, Santiago, Chile, p. 297. 33 Pedro Milos, op. cit., p. 24.

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principales conductores del PS en sus años iniciales, “el Partido Socialista chileno nace como el partido del pueblo”34.

Enmarcándonos en las reivindicaciones de los sectores trabajadores y que proyectaba altos niveles de organización, el PS se concebía a sí mismo como una fuerza de vanguardia que permitía sobrepasar la etapa de la defensa activa de las libertades democráticas para pasar a la ofensiva revolucionaria. Para el cumplimiento de estos objetivos, el PS impulso en diciembre de 1934, la creación del Block de Izquierdas, compuesto por el partido Radical Socialista, por el Partido Democrático, por la izquierda comunista y por los propios socialistas.

Frente Popular Chileno “Conformación”

La creación del Frente Popular correspondió al cambio en las posturas de las ideologías de los Partidos que lo conformaron, en este sentido el Partido Radical representaba el partido de centro de esta coalición, el cual establecía la balanza que permitió crear un equilibrio político que les valió posteriormente cumplir la meta, la cual era que el candidato del frente alcanzara la presidencia, ocurrió de forma bastante apretada. La senda a instaurar este Frente estuvo marcada por varias coyunturas que marcaron la consolidación de la unión política, a este respecto tras el fallecimiento del senador radical Pedro León Ugalde ocurrida en julio de 1935, se sucedieron varios acontecimientos sociales y políticos que llevaron a la necesidad de concretar una alianza de las fuerzas opositoras al gobierno de Arturo Alessandri, lo cual se esperaba que se definiera en torno a la idea de un Frente Popular, idea emanada del VII congreso de la III internacional comunista en 1935, el cual principalmente abogaba por agrupar a todos los partidos de izquierda en un frente único de acción popular con una fuerte base social y que apuntara a derrotar a los gobiernos de corte derechistas y

34 Julio Cesar Jobet; El Partido Socialista de Chile tomo 1, ed. Prensa Latinoamericana S.A, 1971, Santiago de Chile, p. 39.

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conservadores y que prosiguieran seguir salvaguardando los intereses de la elite del país

Muerte de Ugalde

Un punto importante a analizar dentro del proceso de conformación del Frente Popular fue la muerte del Senador León Ugalde, ocurrida el 6 de julio de 193535, constituye una proyección social y política inesperada en el sentido de convertirse en un hecho que condujo las distintas tendencias de izquierda y de oposición presentes en la sociedad de la época, lo que culminará siete meses después, con la proposición concreta de un Frente Popular en Chile.

La vida política de Ugalde se desarrolló intensamente en torno a los ejes de la transformación de la sociedad chilena en un ángulo de mayor libertad, justicia y bienestar para los sectores más desposeídos del país. En este sentido y basado en una vida profundamente desarrollado bajo los preceptos de rectitud y probidad política, la muerte generó un profundo pesar en los políticos de la época de todas las tendencias. Fue un activo opositor del segunda opositor del gobierno de Alesssandri, fue el principal mentor de la izquierda de Chile, la cual el principal antecedente para la creación del block de izquierda. En el periódico la hora se retrata en parte la vida política de Ugalde:

“Arrastraba del siglo pasado un amor casi frenético por la libertad y un sentido filosófico de la acción que ya no se observa en ninguno de los políticos actuales. Pero Pedro León Ugalde no era propiamente político. Era ante todo un revolucionario y un revolucionario a la manera un poco pretérita de la barricada y de la aventura valiente… (…) En este país de gentes frías y escépticas, Pedro León Ugalde dicto, indudablemente, una cátedra de romanticismo…”36

35 Pedro Milos; Ibidem, p. 30. 36 “La Hora”, Santiago, 7 de Julio de 1935, editorial “Pedro León Ugalde”.

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Las principales consecuencias de la muerte de Ugalde, en primer lugar podemos establecer que ayudo a abrir paso a iniciativas concretas de aglutinar las fuerzas de izquierda bajo un solo concepto para hacer frente de mejor manera al gobierno de Alessandri. La segunda fue la agudización del conflicto que se estaba llevando a cabo entre el gobierno y la oposición a raíz del problema de las libertades públicas, la reactivación de las protestas se produjo el 7 de Julio en el cementerio ya que las personas que presenciaban el acto de despedida de Ugalde fueron reprimidas violentamente, lo que sumado al componente social le dio más fuerza a este nueva etapa de la oposición.

La elección del candidato del sucesor de Ugalde en el senado, en la que triunfa el candidato oficialista genera una crítica fuerte por parte de los partidos de izquierda hacia el resultado electoral, el cual despertó una actitud y necesidad de unidad al interior de la izquierda.

Los años del segundo periodo presidencial transcurrieron bajo varios desordenes por parte de los sindicatos, trabajadores y partidos de oposición, a este respecto Simon Collier establece que el mayor logro que obtuvo Alessandri en la década de 1930 fue el haber restaurado la estabilidad al interior del estado recurriendo ocasionalmente al uso de los poderes excepcionales37. Durante este periodo se sucedieron varias refriegas entre elementos del partido Nacional Socialista, fundado en Abril de 1932, y generalmente con sus pares socialistas, los nacistas chilenos van a jugar un papel impensado en la elección de Pedro Aguirre Cerda. La gran huelga de 1936 realizada por los empleados de los ferrocarriles causó gran revuelo en la opinión pública y demostró a la vez el gran poderío de organización y de adherencia de los trabajadores. Con la creación de la Confederación de Trabajadores de Chile (CTCH), se aumenta el poder de organización sindical de los trabajadores a nivel nacional, en la cual predominaban elementos comunistas y socialistas en los puestos directivos, convirtiéndose en un enclave de poder popular bastante fuerte.

37 Simon Collier, Historia de Chile 1808-1994, Ed. Cambridge, 1999, Cambrigde Uk, p. 202.

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Cuando en 1935 se gesta esta unión entre comunistas y socialistas en el llamado block de izquierda activada por la repercusión que produjo la muerte de Ugalde, el cual proponía trabajar en común acuerdo en contra del gobierno de Alessandi y así construir una oposición con mayor solidez y capacidad de logros. En este sentido el PS dejó de lado las consideraciones y opinión que tenía acerca de la II Internacional, la cual la tildaba de conciliadora y reformista; y a la Internacional la rechazaba por su sectarismo exclusivista y su marcada dependencia del Partido Comunista Ruso38. Respecto a lo anterior los comunistas, ya habían dejado de lado su postura intransigente, y los ataques a los socialistas y plantearon una posición reconciliadora con los demás partidos de izquierda y con los burgueses progresistas de centro.

Con respecto a la participación del Partido Radical en el block y en un posible frente de partidos de izquierda, el llamado que se le hace es claro:

“Con todo se ha logrado hasta la fecha que el Partido Radical, haciendo abstracción de cuestiones electorales secundarias, llegue con el block de Izquierda a un pacto político sobre la base de un común Programa social y económico. ¿Por qué?, sencillamente, porque los elementos derechistas del Partido Radical no lo han querido.

Es saber, pues, del Partido Radical (…) demostrar que el ingresar definitivamente a la oposición, quiera marchar unido, bajo un programa común, con los partidos de Izquierda”39

La aprobación por parte del gobierno del estado de sitio en abril de 1936 provoco la adhesión del Partido Radical al block de izquierda, naciendo así el tan anhelado Frente Popular, coalición que buscaba derrotar el gobierno, y cuyo

38Julio Cesar Jobet; op. cit, p. 45. 39 “La Opinión”, Santiago, 26 de Julio de 1935.

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programa expuso Justiniano Sotomayor en el parlamento en mayo de 193640. Lo anterior no fue impedimento para que un sector del Partido Radical entrara a compartir responsabilidades ministeriales en el gobierno de Alessandri, lo cual deja de manifiesto el carácter de partido de centro que se adecua a las circunstancias y que por sobre todo protegió la unidad al interior del partido41.

En esos momentos el radicalismo se preguntaba si debía apoyar a mantener el orden establecido o si el camino debiese ser un “Frente Popular genuino, contra los liberticidas, contra el imperialismo económico extranjero y sus cómplices de la oligarquía nacional y contra la miseria material y moral del pueblo chileno o debe ser un Frente Popular, insípido, al estilo, por ejemplo, de la antigua alianza liberal, transaccionista, trunco y contemporizador”42.

A pesar de la vacilaciones iniciales y después de escuchar las voces al interior del partido, el ambiente se fue propiciando y al respecto un diario de la época titulaba “Consolidado el Frente Popular, con la nueva delegación del radicalismo leal”43, en donde el Radical Pedro Alfonso asumía la presidencia del Comité Ejecutivo del Frente Popular, es en estos meses en donde se comienza a apreciar la influencia y predominio de los radicales al interior del Frente, en donde ellos estaban a ser llamados a ser la cabeza central. Es en este ambiente en donde se conocen voces emanadas principalmente de la derecha de la época, relacionadas a una posible salida y un pacto secreto para retirar al partido del Frente Popular en el más corto tiempo posible, es a este respecto que el diario la Opinión en una de sus portadas, reitera y remarca el apoyo del radicalismo hacia el Frente popular, “ Adhesión y Lealtad al Frente Popular, reiteran las asambleas radicales de Santiago”, al respecto se reunieron las Asambleas Radicales de Santiago para debatir en torno al apoyo hacia el Frente Popular y fijar pautas de

40Fernando Silva; “Un contrapunto de medio siglo: Democracia Liberal y Estatismo Democrático 1924-1970”, en Historia de Chile, Editorial Universitaria, 1976, Santiago, p. 946. 41 Pedro Milos; Frente Popular en Chile. Su configuración: 1935-1938, Lom Ediciones, 2008, Santiago, Chile, pp. 314-317. 42 Dario Poblete y Alfredo, Bravo; Historia del Partido Radical y del Frente Popular, imp. La Republica, 1936, Santiago de Chile, p. 52. 43 “La Opinión”, Santiago, 11 de Octubre de 1936.

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trabajo, al respecto el voto aprobado fue el siguiente: “ Agotado el debate político planteado por la asamblea Provincial Radical de Santiago a raíz del ingreso del Partido al Gobierno acuerda: 1º_ Reiterar su completa adhesión y lealtad al Frente Popular; 2º_Prestar su completa adhesión a sus ministros en el Gobierno siempre que cumplan con las finalidades impuestas por el Partido y por el Frente Popular; y 3º_ Pedir a nuestros dirigentes, señores, Aguirre Cerda y Álamos Barros, una documentada declaración por la prensa exponiendo que no existe pacto secreto alguno con los partidos de derecha”44. Asimismo el diputado Radical, y uno de los mentores del ingreso del Partido Radical al Frente, don Justiniano Sotomayor aclarando que el partido Radical no ha sido, no es, ni será jamás UN? traidor45.

Un apronte inicial electoral del Frente Popular se dio en 1936 en la elección extraordinaria por Cautín y Bio Bio en donde triunfo el candidato del frente el radical Cristóbal Sáenz por sobre el candidato del gobierno. Oficialmente los dirigentes del Partido Radical aceptaron unirse al frente en junio de1936, aunque la decisión fue ratificada en la convención nacional del Partido Radical el 15 de mayo de 1937. La reciente CTCH también fue incorporada, en gran medida para reforzar la fuerza electoral del frente.

De las elecciones parlamentarias, diputados y senadores, de 1937 arrojaron mayoría para los partidos oficialistas de gobierno y subieron sus números con respecto a la de 1932, por su parte el Frente Popular bajaron los radicales de 34 a 29 y se aprecia un alza de los socialistas de 6 a 19 y los comunistas con 6 electos. En tanto que en el Senado la tónica se mantiene con mayoría para los partidos oficialistas, baja para los radicales y un alza y buena presencia de socialistas y comunistas.

El programa de acción del Frente Popular quedo delineado en torno a tres ejes o consignas de carácter basal y fundamental que finalmente corresponde los

44 “La Opinión” op.cit, 45 “La Opinión” Ibidem

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puntos cardinales de acción del Frente: primero, se debe trabajar contra la opresión y por la restauración de las libertades democráticas, segundo, se debe luchar en contra del imperialismo y por la efectividad de Chile para los chilenos y tercero, en contra la miseria material e intelectual del pueblo y por la realización de una justicia socioeconómica moderna para las clases medias y obrera46.

En abril de 1938 se realizaron por ambos bandos las convenciones que darían a luz el candidato presidencial que representaría a cada coalición. Al interior del Frente Popular después de varias de ellas se elige a Pedro Aguirre Cerda, abogado y profesor que concitó la aprobación de la mayoría de los sectores. Por su parte la convención liberal-conservadora eligió al hombre fuerte Gustavo Ross, el cual concitaba resistencia en todos los sectores debido a su proceder en el gobierno de Alessandri y por su ideología, era conocido con el apodo de ministro del hambre. Al respecto estos dos contendientes ponen de manifiesto la polarización social que caracterizaba al sistema partidista chileno de la época, esto se ve reflejado en los logos de campaña de ambos, el Frente Popular decía ” Pan, techo y abrigo”, mientras que el de Ross “Orden y Trabajo”47.

La aparición de un tercer candidato hizo más complejo el cuadro político, el general Carlos Ibáñez del Campo, quien había regresado a Chile en 1937, sus seguidores, organizados en junio de 1938 como la alianza Popular Libertadora, atrajeron a una buena cantidad de disidentes socialistas y recibieron el apoyo de los jóvenes nacistas de Chile, el 4 de septiembre se efectuó la proclamación de Ibáñez, y el día 5 de Septiembre un grupo de nacistas se tomaron la Universidad de Chile y de los pisos superiores de la Caja de Seguro Obligatorio. Los amotinados asesinaron a un carabinero y se atrincheraron en el séptimo piso, por lo cual las fuerzas del ejército debieron actuar, resultando fusilados los 61 jóvenes

46 Ejes surgidos de la reunión celebrada el 26 de marzo de 1936 en las salas del diario “La Opinión”. En, Dario Poblete, A. Bravo, Historia; op. cit, pp 78-80. 47 Sofía Correa, Alfredo Jocelyn Holt y Manuel Vicuña; Historia del siglo XX chileno, Ed. Sudamericana, 2001, Santiago de Chile, p. 125.

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que se rindieron, lo cual genero consternación y división en la opinión pública48. Esta impactante masacre dio un vuelco final e inesperado en la carrera presidencial, debido a que Ibáñez retiró su candidatura y llamó a sus seguidores a votar por el candidato del Frente Popular, debido a su antipatía por Alessandri. El 25 de octubre de 1938 se llevó la elección presidencial, la cual arrojo una reñida competencia voto a voto la cual se resolvió al final del proceso, lo cual se tradujo en un democrático triunfo bastante estrecho de los partidos de izquierda y burgueses progresistas. Es en este sentido que resulta paradójico y resalta otra particularidad del Frente Popular chileno, que es el hecho de que gracias al hecho del Seguro Obrero se bajó la candidatura de Ibáñez y se propició la victoria de Aguirre Cerda, indirectamente la acción de los jóvenes nacistas propiciaron el triunfo de los partidos de izquierda, de ideología totalmente opuesta, una particularidad mas del proceso político chileno, el Frente de Izquierda antifascista alcanza el número de votos deseados gracias a los electores seguidores de la ideología nazista.

El Frente Popular llega al Palacio de la Moneda.

Si bien, en las elecciones de 1938, no fue la primera vez que participó el Frente Popular, pero fue la más importante, debido a que estás representan en gran medida un quiebre a la tradicional oligarquía chilena y da paso al gobierno de un nuevo sector político, conformado por los partidos de centro e izquierda. Por primera vez las facciones de izquierda llegaban al poder, producto de lo exitoso que fue el frente popular. El triunfo de los Frentes Populares (1938-1947) significó un reemplazo de los partidos políticos oligárquicos en el gobierno por nuevos personajes y grupos profesionales y técnicos (e ideológicos), que pertenecían en muchos casos a las capas medias y abrigaban los ideales desarrollistas y mesocráticos de los años treinta y cuarenta. Sin embargo, al hablar de la constitución de grupos o clases dominantes específicamente para este periodo,

48 Para tratar en profundidad la matanza del seguro obrero consultar Droguett, C.; Los asesinados del Seguro Obrero: crónica, Santiago de Chile, Ed. Ercilla, 1942. disponible en www.memoriachilena.cl

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puede caerse en la desviación de juzgar la estructura global del poder de las clases dominantes sólo por su incidencia en lo político49. Esto reafirma que el poder no lo perdió la derecha, sino que hubo solo un cambio de dirigentes, esto se ve corroborado en que la derecha no bajo de un 47% de representación en la arena parlamentaria, y que muchas de las decisiones fueron durante el gobierno del Frente Popular, más bien de centro en vez de decisiones de izquierda, así se evitó la lucha clasista.

Algunos autores, con mucha razón a mi juicio, atribuyen a la presencia del partido Radical en estas combinaciones políticas la causa de la gran moderación adoptada por el Frente Popular Chileno, haciendo el rol de mediador y “amortiguando” el impacto de las demandas de los partidos de clase obrera.50

Hacia 1938, el panorama político, presenta dos grandes facciones que luchan por alcanzar la victoria en las elecciones. Por un lado, el Frente Popular, el cual erige como candidato a Pedro Aguirre Cerda. Este pertenece al Partido Radical, y desciende de una familia de agricultores, provenientes de Pocuro, cerca de Los Andes. Si bien Pedro Aguirre Cerda, en un principio no aprueba la integración del Partido Radical al Frente Popular, en el año 1938, acepta la nominación a la candidatura por esta coalición. Por el otro bando, se encuentra Gustavo Ross Santa María, perteneciente al partido Liberal, y ministro de hacienda de Alessandri. Si bien estas dos fuerzas que se enfrentan, está en una lucha muy pareja. También se encuentra como tercer candidato a Carlos Ibáñez del Campo, pero estalló la sublevación de partidarios enfervorizados del incipiente partido nazis en Santiago que terminó con la Matanza del Seguro Obrero. Este hecho eliminó las posibilidades de Ibáñez, causando su renuncia a la candidatura, llamando a sus partidarios al apoyo del Frente Popular.

49 Gabriel Salazar y Julio Pinto; Historia Contemporánea de Chile, Vol. II… op. cit. p. 41. 50 Armando De Ramón; op. cit. p. 144.

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Las elecciones se llevaron a cabo el 25 de octubre de 1938, las cuales tuvieron como resultado: Pedro Aguirre Cerda con 222.720 votos con un 50,2%; Gustavo Ross Santa María 218.609 votos con un 49,2%; Carlos Ibáñez de Campo 112 votos con 0%; Blancos y nulos 2.559 votos con 0,07%; Abstención 169.737 con un 27,5%.51 Con lo cual el 24 de diciembre de 1938, el Frente Popular llega al palacio de la Moneda.

Gobierno del Frente Popular

El gobierno de Pedro Aguirre Cerda, no fue del todo fácil, debido a que tuvo que enfrentar una gran cantidad de problemas. Al año de gobierno, ya había enfrentado el terremoto de 1939 y el Ariostazo, que fue un intento de golpe dirigido por la derecha y que involucraba al mismísimo Carlos Ibáñez del Campo. En el plano político no fue diferente, debido a que hubo de hacer frente también a dificultades ocasionadas por socialistas y comunistas. Estos, que no quisieron aceptar cargos ministeriales, se transformaron en críticos del Frente popular tras la concertación del pacto Hitler-Stalin, y encarnizados adversarios de los socialistas por el control sindical.52

En el plan de gobierno se fomentó la educación, a través de la creación de escuelas y fomentando la carrera de pedagogía, un ejemplo claro de esto, es el slogan del gobierno, “gobernar es educar”, lo que refleja el carácter del presidente. Otro ejemplo es el discurso del 21 de mayo de 1939: "Para que la enseñanza pueda cumplir su misión social con toda amplitud es necesario que sea: gratuita, única, obligatoria y laica. Gratuita, a fin de que todos los niños puedan beneficiarse de la cultura, sin otras restricciones que las que se deriven de su propia naturaleza; única, en el sentido de que todas las clases chilenas unifiquen su pensamiento y su acción dentro de las mismas aulas escolares; obligatoria, pues es deber del Estado dar a todos los miembros de la sociedad el mínimo de

51 Gonzalo Izquierdo; Historia de Chile, tomo III, Ed. Andrés Bello, 1990, Santiago, Chile, p. 57. 52 Sergio Villalobos; Historia de Chile, tomo 4, Ed. Universitaria, 1995, Santiago, Chile, p. 849.

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preparación requerido por la comunidad para la vida cívica y social; laica, con el fin de garantizar la libertad de conciencia y hacer que nada perturbe el espíritu del niño durante el periodo formativo".53

Otro punto del gobierno fue el fomento a la producción, creando la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO), la cual tenía por objetivo promover la industrialización del país.

Desfragmentación del frente popular

El frente popular, al ser un conglomerado político que englobaba a diversos partidos políticos, (izquierda y centro) presentó desde un principio problemas para su correcto funcionamiento, un ejemplo claro de esto es lo que ocurrió el 16 de septiembre de 1936, cuando aparece en el diario “frente popular” la existencia de un pacto secreto para romper con el frente. Este sería un pacto negociado entre la derecha y los señores Luis Álamos Barros, Octavio Señoret y Pedro Aguirre Cerda, (estos tres del partido radical). Para dentro de cuarenta días romper con el Frente Popular54. Esta información es desmentida por el radicalismo y se le adjudica a rumores que sembraba la derecha para crear pugna dentro del frente.

Todo esto refleja la trascendencia que presentaba el nuevo pacto político de centro–izquierda y la importancia que le prestaba el sector de la derecha nacional, ya que veía, que las masas populares se agrandaban en torno de posturas realistas y cercanas, no era tan solo populismo, sino era una opción válida, lo que incomodaba a la derecha y a la clase acomodada del país.

Al asumir la presidencia en 1938 don Pedro Aguirre Cerda, este forma su gabinete ministerial con una mayoría radical y tres ministros de estado socialistas estos fueron Salvador Allende G. en Salud, Oscar Schnake V. en Fomento y

53 Pedro Aguirre Cerda, Discurso 21 de mayo de 1939. 54 “Frente Popular”, Santiago, miércoles 16 de septiembre de 1936

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Obras Públicas y Rolando Merino R. en Tierras y Colonización55. Esta parte es clave en las causas de la ruptura del frente popular, ya que, Los socialistas integrados al gobierno a través de los ministerios hacían grandes esfuerzos para que aplicara el programa de gobierno del Frente Popular sin poderlo lograr, al no contar con el apoyo de los sectores más conservadores del gobierno. La inaplicabilidad en una parte sustantiva del programa frentista, debido entre otras cosas, al terremoto de Chillán el 24 de abril de 1939 y a la crisis en los mercados internacionales, por efecto de la Segunda Guerra Mundial, comprometía significativamente los destinos del Partido Socialista dentro del frente popular y por ende del block de izquierda en sí. Dentro del PS un sector liderado por Cesar Godoy y Natalino Berman, generan una intransigente oposición anti-frentista la que se robustecía, no obstante, les faltó la fuerza suficiente para bajarle el perfil al colaboracionismo ministerial de los pro-frentistas de su partido. Por lo tanto prefirieron retirarse de su partido y formar el Partido Socialista de los Trabajadores. Esto ocurrió después de concluido el VI Congreso General Ordinario del PS, efectuado en Diciembre 193956.

Así comenzaban las rupturas dentro de los mismos partidos del frente popular, jugando en contra de la armonía y normal funcionamiento del block oficialista. Pero la gota que rebaso el vaso en el final del frente popular y por ende de un proceso que vivieron los partidos de centro izquierda y los movimientos populares, por primera vez en la historia republicana, fue la pugna entre socialistas y comunistas la que se ahondo en el transcurso del gobierno.

Dentro del partido socialista, la posición anticomunista prevalece, encarnada en el ministro de fomento Oscar Schnake, en donde el mismo partido llega a dividirse, (tal como se lo muestra con anterioridad) en dos corrientes, la de

55Angelica Godoy Salgado; Antecedentes sobre la historia del Partido Socialista de Chile, Departamento Nacional de Educación Política, Partido Socialista de Chile, 1992 , Santiago de Chile, p. 4 56Alejandro Concha. y Julio Maltés.; Historia de Chile, Ediciones Mataquito, 1996, Santiago de Chile, pp. 451 - 452

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Schnake, (frentista) y la línea inconformista con la política de gobierno y cercanía a las ideas comunistas.

Lo que al partido socialista le molesto e incomodo desatando la ira de éste, es que el partido comunista se valía de los designios de la Tercera Internacional Comunista y por ende de las políticas estalinistas. Para el Partido Socialista, el Partido Comunista nada tenía que hacer en el Frente Popular después de la firma del Pacto de Acero entre Hitler y Stalin. Pues se suponía que el Frente Popular es por antonomasia la oposición al nazismo57. En el siguiente fragmento extraído de un documento que se encuentra en una compilación que efectúo Alejandro Witker sobre el partido socialista, se aprecia lo anteriormente tratado:

“La política internacional del Partido Socialista ha sido combatida por los comunistas, recurriendo a la difamación y a la calumnia. Por no aceptar las consignas de la Tercera Internacional, derivadas del pacto nazi-soviético, y por luchar abiertamente contra el fascismo y el nazismo, se ha pretendido acusarnos de defensores del imperialismo norteamericano. Los mismos que el año 1930 enaltecían la personalidad de Roosevelt, destacándola como el más genuino personero de la democracia de América, hoy, después del entendimiento entre Alemania y la U.R.S.S., se han entregado a la más franca de las provocaciones contra un Gobierno, con el cual el nuestro necesita mantener relaciones económicas y de paz”58. En el mismo documento anterior del partido socialista se plantea con más detención las causas de la disolución del frente popular. En el siguiente fragmento se presentan algunos detalles:

“Durante mucho tiempo, el Partido Socialista trato en vano de reajustar la disciplina, la unidad y la solidaridad de los partidos del Frente Popular. Tropezó con deslealtades de algunos grupos y con la obcecada resistencia del Partido Comunista.

57 Angélica Godoy Salgado, op. cit., p. 4 58Alejandro Witker,; Historia documental del PSCH. 1933 – 1993 signos de identidad, Documento los comunistas y el frente popular 1940, p. 286

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Día a día, se han ido ahondado las dificultades en el seno del Frente Popular, los partidos han observado entre si una política de rivalidades y recelos que estaba muy lejos de fortalecerla unidad. No ha existido jamás una verdadera unidad en el Frente Popular. El Partido Comunista, adherido a la Tercera Internacional, ha sido el más fuerte obstáculo para que se pudiera sellar la verdadera unión de las fuerzas de izquierda”59. Los detalles que se desprenden en este fragmento nos muestran de forma resumida lo que sucedía en ese momento en las relaciones de los socialistas con el frente popular, pero específicamente entre el socialismo y el comunismo.

El partido socialista plantea rivalidades entre partidos, están se manifiestan en el apoyo de las masas trabajadoras. También se presenta que dentro del frente nunca ha habido unidad, lo que demuestra que los intereses partidistas sopesaron sobre los intereses del conglomerado de gobierno y por último se muestra al partido Comunista como un obstáculo, por su adhesión a la Tercera Internacional, ya que, no tiene independencia y se vale de los designios y posturas de esta institución.

Producto de todas estas causas planteadas por el comité central del partido socialista el 15 de diciembre de 1940 el Partido Socialista rompió con el Frente Popular y por ende queda sellada la disolución del frente popular, que más adelante se confirma con el repentino deceso del ente conciliador y representativo de la llegada del frente al gobierno, el presidente de la república Don Pedro Aguirre Cerda en 194160.

59 Alejandro Witker.; op.cit., p. 285 60 Angélica Godoy Salgado, Ibídem, p. 5

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CAPITULO II: ¿Derecha o Derechas? Situación política del conservadurismo chileno

Para hablar de Derecha en Chile en la época de estudio, hablamos de un sector político amplio y diverso. Históricamente los principales partidos que están ligados a esta facción política, han sido los dirigentes del país dentro de la vida republicana. Pero cuando hablamos de Derecha, ¿a que nos referimos?, ¿Qué es la Derecha?, ¿Cómo surge? y fundamentalmente ¿Cómo se presenta la Derecha en esta época?, Estos factores son fundamentales para lograr entender la situación de este sector político durante los años de 1936 a 1942.

Habitualmente usamos el termino Derecha para referirnos a un sector político, pero, ¿qué entendemos por derecha?. Para Sandra McGree Deust, en su libro Las Derechas; La extrema derecha en la Argentina, el Brasil y Chile., dice, “no es sencillo definirla, ya que es un concepto más nebuloso que el de izquierda, que por lo general se organiza sobre la base de principios explícitos. En cambio, Roger Eatwell describió a la derecha como “una variedad de respuestas a la izquierda”. Yo modificaría este enunciado señalando que la derecha se consolida en relación a las tendencias políticas igualitarias y libertadoras del momento cualesquiera que sean éstas- y a otros factores que a su juicio socavan el orden social y económico”61. Esta definición, es un poco amplia, y resalta a la derecha como una reacción establecida debido a la Izquierda, sin dar un sustento teórico a esta tendencia. Cristian Buchrucker, en su libro Las Derechas en el ascenso y caída de la segunda guerra fría, señala, “En un trabajo clásico de Ernst Nolte señalo que generalmente la derecha es considerada como la expresión política del conservadurismo. Es decir que el conservadurismo puramente literario o filosófico es también concebible, más allá de la existencia de grupos políticos

61Sandra McGree Deust; Las Derechas: La extrema derecha en la Argentina, el Brasil y Chile, 1890 – 1939, 1ª ed., Universidad Nacional de Quilmes,2005, Buenos Aires Argentina p. 21.

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organizados.”62Si bien, esta definición nos ofrece un nuevo ámbito incluyendo al conservadurismo dentro del concepto, tampoco ofrece una total claridad del término. José Romero, pionero en los estudios de las derechas en Latinoamérica, dice que, “no se trata, en efecto, de un partido, sino de una conjunción de grupos que coinciden en una actitud política”63. Por ultimo, hemos recogido la definición que nos da Norberto Bobbio en la cual define a la derecha como: “Hoy, por extensión, la derecha es el partido del conservadurismo en general y esta constituida, por lo tanto, por quien se considera satisfecho del presente, por quien se empeña en el mantenimiento del orden actual por que en él ocupa o cree ocupar, posiciones de privilegio que no pretende abandonar y por quien lucha directamente por una restauración del orden pasado del cual espera obtener situaciones de ventaja. Una derecha, es decir una tendencia conservadora, existe así en toda organización política, económica, social y cultural, aun en las más progresistas. Es evidente también que la derecha es diferente según el tiempo y el lugar, en cuanto que el progreso histórico implica un cambio tanto en los intereses a defender como en sus defensores.”64Bobbio, en este concepto utiliza variadas vertientes complementando las visiones entregadas anteriormente en un solo concepto, podemos observar que lleva el concepto al tema de la temporalidad, lo cual nos hace ver que la derecha no es una sola, sino que varía o cambia dependiendo de la situación, ósea un concepto moldeable por los grupos conservadores.

Ahora bien, la derecha, como concepto nace en Roma, en el senado, cuando se hacía una votación, la forma rápida de aprobar era ubicándose a la derecha del senado y la forma de desaprobar era ubicándose a la izquierda. Pero es desde la Revolución Francesa en adelante que se recurre a los conceptos de derecha e izquierda para ordenar el conjunto del campo político. Inicialmente caracterizaron a quienes, en los Estados Generales de 1789, se sentaron a la

62 Cristian Buchrucker; Las derechas en el ascenso y caída de la segunda guerra fría”, EDIUNC ( Editorial de la Universidad Nacional de Cuyo), 1991, Mendoza, Argentina, p. 7 63 José Romero; El pensamiento político de la derecha Latinoamericana, Editorial Paidos, 1970, Buenos Aires, Argentina, p.23. 64 Bobbio, Norberto; Diccionario de Política, Vol. 1, Siglo Veintiuno Editores, 1988, España, p. 507.

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derecha y a la izquierda del rey, la nobleza, y el tercer estado, respectivamente; y esta forma de diferenciación política continuo en las legislaturas europeas del siglo XIX para caracterizar a quienes se sentaron a la izquierda o derecha del presidente”65. Así la evolución política de este concepto se ocupa para denominar hoy a las posturas conservadoras.

“A primer vista se advierte que la expresión “derecha” corresponde a una actitud política muy general en la que pueden coincidir grupos sociales y políticos diversos y que se definen fundamentalmente por sus opuestos”66. Para analizar la época que corresponde de 1936 a 1942, la derecha chilena no se presenta como un bloque, lo que hace la existencia de varios grupos, debido a que ninguna de estos grupos se siente representada con las otras o en su defecto no actúan en conjunto. Durante la época del Frente Popular, podemos distinguir a tres tipos de derechas. El primero hace referencia a la derecha tradicional, esta derecha esta compuesta por los principales partidos, como lo son el Partido Conservador y el Partido Liberal, ambos ligados principalmente al mercantilismo. Como segunda tendencia, hemos distinguido a una derecha ligada a las tendencias ideológicas provenientes de Europa, como lo son el Fascismo y el Nazismo. Y por ultimo, la tercera derecha, nace desde las entrañas del conservadurismo, con un grupo de jóvenes que busca un cambio social, lo cual desemboca en la Falange Nacional.

Derecha Tradicional

Esta facción de la derecha se encuentra constituida por los partidos Liberal y Conservador. Estos dos partidos provienen de una elite decimonónica, que hasta las elecciones de 1938, siempre estuvieron en el poder. La larga tradición de estos partidos proviene desde los comienzos de la vida republicana, ya que estos provienen de los partidos Pipiolo y Pelucón, que si bien en un principio fueron fervientes rivales, pasaron a pertenecer al mismo sector político. Sofía Correa, se

65 Sofía Correa Sutil; Con las riendas… p.19. 66 José Romero; op.cit., pp.23 – 24.

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refiere a la derecha tradicional como, “la clase dirigente, tradicional y abierta a la vez, que ejerció un control indisputado del poder político durante todo el siglo XIX y en las primeras dos décadas del siglo XX”67.

La larga trayectoria política de estos partidos consolidados a través de la historia de nuestro país, sufre un revés con los albores del siglo XX se advierte una serie de cambios sociales, ideológicos y económicos, que hará que en la década de los años 30 pierda fuerza importante, de hecho “fue, en efecto, la Gran Crisis de 1929 la que no sólo trastornó el sistema económico, sino que también produjo un cuestionamiento de la democracia liberal y del capitalismo. El socialismo se volvió atractivo para los sectores medios e intelectuales y adquirió bríos asimismo el corporativismo”68. Bien queda reflejada esta situación, hacia 1936, con el nacimiento del Frente Popular, que fue quien prontamente se hizo del poder en el año 1938, ofreciendo una nueva alternativa ideológica. “A esta derrota, Alberto Edwards, lo llamara la “derrota del patriciado”, a causa de los grandes cambios sucedidos a partir de 1920”69. Gabriel Salazar, se refiere al tema diciendo: “El llamado “Periodo Parlamentario” comienza con una elite triunfante que derroto al “tozudo” Presidente Balmaceda, según la expresión de Sergio Villalobos. Por fin liberada de las restricciones del autoritarismo presidencialista, ésta se vio casi inmediatamente sumida en la más profunda crisis de legitimidad y representatividad que había vivido desde los inicios de la era republicana”. “Independientemente de las caracterizaciones o explicaciones ofrecidas, todo indica que en el tránsito del siglo XIX al XX la elite dirigente enfrentó una crisis de legitimidad y predominio político, y por extensión, pareció hacer posible un cambio de la sociedad en su conjunto. En verdad, era su modelo de país, era su práctica como clase hegemónica la que estaba fallando. Durante casi un siglo, o al menos desde 1830 a 1850 en adelante, la oligarquía liberal, conservadora en lo político, libertaria en las luchas congresistas habían logrado mantener su poder sin

67 Sofía Correa; op.cit., p38. 68 Sofía Correa; Ibídem. P 40. 69Armando De Ramón; Ibídem, p 144.

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contrariedades. Las luchas políticas habían sido principalmente sus luchas internas: frente a los intentos de otros grupos, se habían unido en la represión”.70

En la década de 1930, predominan las nuevas alternativas políticas, ya sean las socialistas, comunistas, radicales entre otras. “Solo al comenzar la década de 1930, cuando la intervención de los militares había arremetido en medio del conflicto político, y cuando las corrientes socialistas adquirieron relevancia, la elite tradicional fue desafiada en su manejo indisputado del poder. Entonces, por primera vez, los partidos se dividieron en derechas e izquierdas, utilizando el plural para señalar una diversidad al interior de cada campo”71. A este nuevo panorama del cual la derecha se enfrenta a estas nuevas tendencias ideológicas y como se ha nombrado anteriormente la pérdida hegemónica del poder, es que comienza en una restructuración interna para poder afrontar los nuevos retos. Armando De Ramón, se refiere como un “reajuste que tuvo mucho más que ver con la estructura de las organizaciones patronales, por lo que no tocó el fondo de sus valores y actitudes. No se trató de un cambio de viejos hábitos dado que los partidos tradicionales – Conservador y Liberal – mantuvieron su estilo y sus viejos vínculos clientelísticos gracias a que pudieron conservar su votación en los sectores rurales”72.

Presagio éste, de un siglo que no pasaría inadvertido, debido a la aparición de nuevas fuerzas políticas. Dejando a la derecha en un estado de alternancia del poder:“el modelo parisino ya no es más que un recuerdo del pasado”73.

70 Gabriel Salazar; Historia Contemporánea de Chile II, Actores, Identidad y movimiento, LOM ediciones, 1999, Santiago, pp. 38 - 40. 71Sofía Correa Sutil; Con las Riendas del Poder: la derecha chilena en el siglo XX, Editorial Sudamericana, 2004, Santiago de Chile, p. 40 72 Armando De Ramón; Op.cit., pp. 144 – 145. 73 Gabriel Salazar y Julio Pinto; Historia Contemporánea de Chile II, Actores… ,Ibídem, p.42. Con esta frase hace referencia al cambio que sufre la derecha, en especial en los conservadores, dice: “El nuevo oligarca, en cambio, a menudo no reunía esas condiciones. Las nuevas burguesías industriales y comerciales que se integran a partir del ocaso del gobierno oligárquico tradicional acusan el aire de los tiempos.”, más adelante hace referencia a la sociedad femenina diciendo; “Sus esposas y sus hijas ya no son damas caritativas, vestidas de negro y dedicadas a las labores piadosas; la beneficencia es principalmente un asunto del Estado. Algunas se vuelven incluso feministas, artistas e intelectuales, y escandalizan a sus ascendientes con sus nuevos discursos y

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Partido Conservador

El origen del Partido Conservador está dado por los pelucones, que asimismo, se proclamaban como un sector conservador dentro de los orígenes republicanos, y apegados a las doctrinas eclesiásticas. Así lo deja ver Sofía Correa, que deja en claro: “El partido Conservador tuvo como propósito defender los intereses de la iglesia y evitar la promulgación de leyes secularizantes. Aunque sus dirigentes no eran miembros del clero, los Conservadores seguían estrictamente las directrices emanadas desde la jerarquía eclesiástica”74. Su rígida postura católica forma parte principal de su doctrina, además de una jerarquía vertical que la evidencia. “El partido conservador fue influido por un sector del ultramontanismo francés, y se dirigió paulatinamente hacia la defensa organizada de los valores católicos, lo que despertó inevitables resistencias”75. En sus inicios, estuvieron en los llamados los tres primeros decenios al poder: en los gobiernos de Prieto, Bulnes y Montt, periodo en el cual se estableció la constitución de 1933. “Si bien Portales inicia y mantiene un sistema gubernativo al margen de todo partido político, su acción, en verdad, contribuye a fortificar especialmente el Partido Conservador que se siente desde entonces portador de su concepción política y que en los años siguientes contribuye a defender”76.

La relativa tranquilidad que representa el siglo XIX, se ve interrumpida, por los problemas anteriormente vistos, lo cual crea un profundo reto para los conservadores. Y si bien a esto se le agrega que la Iglesia hace un cambio, tomando una política más social con la publicación de la Encíclica Rerum Novarum. Esto produce la desligación de un grupo de jóvenes conservadores, ya que el partido no complace sus inquietudes y conforman más tarde la Falange

actividades, como es el caso de la escritora Iris, de la poetisa Teresa Wilms Montt y de la escultora Rebeca Matte. Los “modos de ser” de la elite decimonónica, como los llamaría un historiador de las mentalidades, ya no son hegemónicos.” 74 Sofía Correa: Con las riendas…, op.cit, p. 39. 75 Sergio Villalobos; Historia de Chile, tomo 4, Editorial universitaria, décimo cuarta edición, 1995, Santiago, Chile, p.690. 76 German Urzúa Valenzuela; Los Partidos Políticos Chilenos, Las fuerzas políticas, Editorial Jurídica de Chile, 1968, Santiago, Chile, p. 29.

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Nacional. En 1921 la Convención del Partido Conservador declaró que su aspiración era desarrollar el “orden social cristiano”, basado en la “cooperación armónica” de todas las fuerzas sociales para realizar el bien común, en el derecho de propiedad y en el de asociación, recomendando la “adquisición de la pequeña propiedad urbana y rural” para los pobres y la lucha contra el alcoholismo”77.

Hacia 1925, “Los desafíos más importantes que debió encarar el Partido Conservador durante esa década fueron la aceptación del régimen presidencial, que consagro la Constitución del 25 y la adecuación a la independencia paulatina de la iglesia, que se hará más patente en los años posteriores. La nueva carta constitucional es resistida por el Partido Conservador. La constitución de 1833 está enraizada en el alma conservadora y se considera un modelo de sabiduría política. Sólo basta con hacerle algunas reformas para evitar los vicios políticos existentes, lo cual refleja claramente una actitud conservadora”78.

Para la década del 30’, el gran problema que tuvo que enfrentar la derecha fue la dimisión de un grupo joven del partido Conservador, que buscaban hacer tareas más sociales, los cuales conformaron la Falange Nacional. Frente a esto, queda demostrado que el Partido Conservador no supo afrontar los problemas sociales que le había presentado el siglo XX.

En el año 1941, el partido realiza una convención en Valparaíso, con el fin de reformular el actuar y hacer conciencia de los hechos sucedidos que les pusieron en la oposición. Uno de los discursos dice:

“Graves y trascendentales sucesos han ocurrido desde la última convención del año 1937. Encontró esa Convención al Partido formando parte de la combinación que, después de ocho años de trastornos políticos y financieros y de

77 Salazar, Gabriel; Historia Contemporánea de Chile I, Estado…, op. cit., p.222. 78 Teresa Pereira; El Partido Conservador 1930 – 1965 Ideas, Figuras y Actitudes, Fundación Mario Góngora, 1ª ed., 1994, Santiago Chile, p. 33.

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gobiernos producidos al margen de nuestra Carta Fundamental, había logrado restablecer en el país el orden constitucional, mejorar nuestras finanzas, equilibrar los presupuestos, terminar con la cesantía, mejorar y estabilizar el valor de la moneda e inspirar la confianza tan necesaria en un país, para el desenvolvimiento y progreso de las actividades nacionales.

En cambio, ahora, la presente Convención nos encuentra colocados en la oposición, después que una pequeñísima mayoría en el resultado de las urnas de la elección presidencial de 1938 y el obligado retiro de las reclamaciones electorales de nuestro candidato, permitió la asunción al poder del personero del Frente Popular.”79

Partido Liberal

El nacimiento del Partido Liberal, tiene directa referencia con las ideas influenciadas de Francia en la revolución de 1848, las cuales tuvieron su repercusión en Chile. Sin duda, Francisco Bilbao y Santiago Arcos, con la fundación del primero de la Sociedad de la Igualdad, y de José Victorino Lastarria, fueron los grandes ideólogos del Partido Liberal. “El partido Liberal, en cambio, congregaba a aquellos miembros de la elite que aspiraban a disminuir la influencia del catolicismo en la vida social y cultural del país; eran por lo tanto promotores de una legislación secularizante a la vez que pretendían mantener el control estatal sobre la iglesia, propio del régimen regalista colonial.”80

Dentro de los grandes logros de este partido podemos encontrar que en el régimen de Don Domingo Santa María, se promulgan las leyes de cementerios laicos, registro civil y matrimonio civil. También hacia 1891, se ven enfrentados en una profunda división, debido al apoyo a Balmaceda, lo que hace evidente el quiebre partidario, debido a las diferentes tendencias que comienza a mostrar. Si

79 Convención del Partido Conservador, 1941, p. 27. 80 Sofía Correa; Con las riendas…, Ibídem, p. 39.

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bien dentro de la derecha podemos observar al Partido Liberal como el partido más popular de los dos, es en la década del 30 cuando saca su figura promisoria, Gustavo Ross Santa María, quien es el ministro de finanzas de Arturo Alessandri y que es consagrado como candidato a la presidencia en 1938. Si bien esta candidatura cuenta con un gran apoyo, los estrechos márgenes con los que pierde, debido al apoyo que presta a ultima hora el General Carlos Ibáñez de Campo al Frente Popular, y en especifico a Pedro Aguirre Cerda, hacen catapultar los intereses de la derecha, dejando así por primera vez el poder en manos de otra alternativa.

También el partido cae en una reformulación, debido a los acontecimientos ocurridos, así en el año 1939, se realiza la séptima Convención del Partido Liberal, en Santiago, dentro de los discursos podemos ver: “La campaña de 1938, perdida por escaso margen de votos, no es un acontecimiento que signifique agotamiento de las fuerzas vitales del liberalismo. Fue sólo uno de los múltiples y transitorios accidentes que pueden ocurrir a las Democracias en las contiendas cívicas a que las llama el interés público. Los Partidos viven mucho más que estas alternativas de la voluntad popular y sobrado tiempo tienen para reconquistar el terreno perdido y para inclinar nuevamente a su favor la simpatía de la opinión”.81

Movimiento Nacional Socialista Chileno (MNS)

El término nacional socialismo posee muchos significados y variadas connotaciones, una definición clara y precisa acerca del término es la siguiente:

“En su forma mas genérica es usado desde hace mas de un siglo por variados movimientos e ideologías políticas que propugnan y difunden un tipo de socialismo diferente del socialismo Internacionalista y marxista, o que son contrarios al mismo”82.

81 7ª Convención del Partido Liberal 1939, p. 54. 82 Bobbio, Norberto; Diccionario de Política, Siglo XXI editores, 1988, Quinta ed. en español, España, pág. 1092.

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La definición anterior engloba a cabalidad los postulados del MNS chileno en su ideario político en lo que concierne a su posición y opinión de la Izquierda tanto nacional como global. A esto podríamos sumar una fuerte crítica y oposición al sistema de partidos imperante en la época.

La historiografía chilena en general, especialmente la de izquierda le ha restado importancia a la trascendencia política que tuvo este movimiento en tan pocos años, en particular al hecho ocurrido el 5 de Septiembre de 1938, el cual fue decisivo en la elección presidencial del mismo año.

En el plano de la política de derecha los grupos nacionalistas vinculados al pensamiento autoritario con raíces nazistas, eran marginales dentro de una derecha chilena que había adherido explícita y abiertamente al ideario Liberal y que rechazaba los regimenes dictatoriales, aunque varios militantes del Partido Conservador aprobaran diversas acciones del MNS chileno. La derecha oligárquica en general fue escéptica frente al nacionalismo y se mantuvo distante de él en términos ideológico – políticos.83

La ideología del MNS puede resumirse en tres puntos84: 1) un racionalismo antiliberal y anticomunista; 2) la primacía de lo político reflejado en un deseo de cambiar las estructuras políticas, principalmente los partidos y 3) la intención de mejorar el sistema económico, implantando un Corporativismo de Estado. Todo esto bajo la supervisión y aplicación liderada por “El Jefe”, el cual encarnaba los máximos ideales de rectitud, inteligencia y moralidad. En términos de religión el nacismo chileno reconoció al cristianismo como la religión “oficial”.

83 Verónica Valdivia Ortiz de Zarate; Nacionales y Gremialistas: El parto de la nueva Derecha Política chilena 1964-1973, LOM ediciones, 2008, Santiago, Chile, p. 86 84Mario Sznajder; El Nacionalsocialismo chileno de los años treinta, Revista Mapocho n° 32, 1992, p. 174.

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El MNS de Chile fue fundado en Santiago el 5 de Abril de 193285, en una reunión celebrada en las oficinas del abogado Jorge González von Marées, el líder indiscutido del nacismo chileno, conjuntamente con Carlos Keller, el ideólogo del movimiento, Gustavo Vargas, Felipe Laso, Eduardo Undurraga, Emilio Aldunate, Francisco Infante, Mauricio Mena y Raúl Valdivieso, varios de ellos con ascendencia alemana directa86.

El MNS chileno lideraba las ideas de un socialismo económico, a la manera del socialismo “prusiano” de Spengler87. Un socialismo nacional, que buscaba corregir las debilidades del individualismo liberal, los nacis88 chilenos anhelaban convertirse en una tercera opción de Gobierno, constituyeron un pequeño pero importante actor en la evolución de la estabilidad política del país.

Principalmente como una manera de estrechar lazos y de cimentar una influencia mayor de Alemania en Sudamérica y Chile89, además de compartir puntos ideológicos en común, El MNS recibió inicialmente un apoyo material y logístico del partido Nazista alemán en Chile, nacido en 193290. Las relaciones entre el NSDAP (Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán) chileno y el MNS, fueron pasajeras a causa de la intención del Partido Nazista chileno de controlar y hegemonizar el nacismo chileno.

Uno de los puntos fuertes del movimiento fue la propaganda para exponer sus ideas y planteamientos a la comunidad, en julio de 1932, habían comenzado con la publicación de una hoja semanal en el Periódico El Imparcial, y en abril de 1933 editaron Trabajo, que aparecía una vez por semana en un comienzo, dos veces por semana desde Abril de 1935 y diariamente desde Abril

85 Marcus Klein; La matanza del Seguro Obrero (5 de Septiembre de 1938), Globo editores, 2008, Santiago de Chile, p. 33. 86 Mario Sznajder; op. cit., p.169. 87 Cristián Garay; El Partido Agrario Laborista, Ed. Andrés Bello, 1990, Santiago de Chile, p. 33. 88 El hecho de escribir nacis con c remarca el origen criollo del movimiento. 89 Para encontrar un detallado panorama de la penetración Nazi en Chile ver Víctor Farias; Los nazis en Chile, Ed Seix Barral, Barcelona España, 2000. 90 Raffaele Nocera; Chile y la Guerra 1935-1943, LOM ediciones, 2006, Santiago de Chile, p. 53.

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de 193691. En ambos medios de comunicación los nacis cultivaron un lenguaje violento, que era inusual para la época.

Las tropas de asalto uniformadas del MNS aparecen en 1933, irrumpen en la calle, como una reacción ante la pujanza de la clase obrera92, para hacer frentes a socialistas y comunistas, en donde se aprecia la inspiración del modelo fascista italiano y alemán para organizarse paramilitarmente y efectuar acciones violentistas como una manera de legitimar su postura e ideología93.

El incidente que caracterizó el actuar y que alcanzó mayor notoriedad y cobertura periodística, antes del 5 de septiembre de 1938, fue el incidente en la estación de trenes de Rancagua el 15 de Noviembre de 193694, en donde se enfrentaron un grupo de nacistas que iba a bordo del tren, el cual disparo a un grupo de personas que se manifestaban en su contra. A raíz del incidente el parlamento aprobó La Ley de Seguridad Interior del Estado, la cual rechazaba cualquier ideología antidemocrática que intentara imponerse a través del uso de la fuerza.

Desde su fundación poco a poco comienzan a engrosar el número de militantes, principalmente en el sur del país. En Octubre de 1933 se efectúa una asamblea en Chillán, y el 8 y 9 de Diciembre de 1934, se celebra en Concepción la Convención Nacional Socialista95.

En cuanto al rendimiento del MNS en las urnas, en las elecciones parlamentarias de 1934 resultaron electos tres diputados nacistas, González von Marées por Santiago, Fernando Guarello por Valparaíso y Gustavo Vargas por Temuco. En las elecciones municipales de 1935, obtuvieron 6.000 votos a nivel

91 Eva Goldschmidt; Huyendo del Infierno Nazi. La inmigración Judío-alemana hacia Chile en los años treinta, Ril editores, 2008, Santiago de Chile, p. 162. 92 Julio Cesar Jobet; Ensayo critico del Desarrollo Económico Social de Chile, Ed Universitaria, 1955, Santiago de Chile, p. 195. 93 SergioVillalobos; Chile y su Historia, Ed. Universitaria, 2003, Santiago de Chile, p. 366. 94 Eva Goldschmidt; op.cit., p. 164. 95 Mario Sznajder; Ibídem., p. 171.

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nacional, pudiendo elegir a dos candidatos para el consejo municipal de Angol y Temuco. En las elecciones municipales de abril de 1938, los nacistas lograron la elección de 29 regidores. Esto demuestra la pequeña fuerza que adquirió el nacismo chileno en tan poco tiempo.

El camino político recorrido desde su fundación se ve abruptamente interrumpido por el intento de golpe por parte de un grupo de camaradas nacistas la mañana del 5 de Septiembre de 1938, el cual estaba respaldado por un plan minuciosamente diseñado. A partir de este hecho el MNS chileno pierde fuerza y se divide, sus líderes pierden credibilidad, y a pesar de seguir existiendo no lo hace de la forma inicial. Se produce un cuestionamiento al interior de las filas nacistas por el desenlace de los hechos y el actuar de sus camaradas, especialmente de González von Marées.

Esto hecho constituye un acontecimiento con una trascendencia directa en las elecciones presidenciales, constituyendo una particularidad importante en la historia de Chile que es necesario analizar en detalle.

5 de Septiembre de 1938, Los Acontecimientos

El día 5 de septiembre en santiago de Chile amaneció todo tranquilo, nada hacia presagiar los acontecimientos que trastocarían el acontecer nacional96. Informes de la embajada británica de fines de agosto señalaban la posibilidad de que el General Ibáñez del Campo recurriera a concretar un golpe de estado durante los días venideros.

La marcha de la victoria, como es conocida la marcha que congregó a los adherentes de la nueva fuerza política, la Alianza Popular Libertadora, que lideraba el ex dictador Gral. Carlos Ibáñez del Campo. En ella marcharon por las

96 Un exhaustivo análisis de los hechos y sus repercusiones, con análisis de diarios y discursos de los principales involucrados de la época los expone Marta Infante; Testigos del treinta y ocho, Ed Andrés Bello, Santiago de Chile, 1972.

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calles céntricas de Santiago hombres y mujeres como muestra de apoyo y del poder electoral que tenia Ibáñez del Campo, el numero de personas que realmente desfilo esa jornada difieren, se tiene registro de que fueron alrededor de 10 mil principalmente traídas de provincia, el diario La Opinión informaba que alrededor de 80 mil personas habían participado en “la mas grande de las concentraciones políticas que se han efectuado”97. Esta demostración no preocupaba mucho al presidente Alessandri, el cual le restó importancia. Para el líder del Movimiento Nacional Socialista, Jorge González von Marées, fue una importante demostración de la población que apoyaba las ideas de Ibáñez, pero que en nada afectaba el plan de tomar el poder.

El hecho de elegir el día 5 de septiembre como el indicado para llevar a cabo el plan, tienen que ver tal como lo plantea Klein, como de un alto significado histórico, debido a que se conmemoraba el 14° anive rsario de la reunión de Alessandri con la junta militar, después de la cual lo llevó a renunciar en el primer periodo presidencial. Otra explicación más practica, nos hace mención al poco tiempo que tenía, el líder nacista chileno, debido a que pesaba sobre él una condena de un año y medio de privación de libertad, por los hechos ocurridos en la inauguración del Congreso, en la cual González interrumpió la sesión a tiros.

Principalmente el plan de los nacis chilenos se dividía en dos partes, una civil y otra militar. La preparación se realizó por separado, la parte militar estaba a cargo del coronel en retiro Caupolicán Clavel, el cual tenía la misión de contactar a las guarniciones de todo el país, pero principalmente de Santiago y sus alrededores, esta parte del plan era de suma importancia ya que constituiría la base y apoyo para concretar de forma real y efectiva lo deseado, constituía el respaldo que necesitaba González para atacar al gobierno. La parte civil estaba en manos del mismo González, el jefe como lo llamaban sus seguidores, en conjunto con Oscar Jiménez Pinochet y César Parada, ambos de 23 años y lideres del Grupo Nacista Universitario. La tarea de los civiles en el plan era crear y provocar

97 Marcus Klein; op. cit., p. 18.

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un clima de inseguridad y confusión, lo que seria aprovechado por las unidades militares insurrectas para aplacar la situación y tomar el poder ante la incapacidad del gobierno por mantener el orden interno de la nación. Para lograr este objetivo se tendría que interrumpir las líneas telefónicas y el suministro eléctrico. Otra arista del plan que debía desarrollarse en paralelo, era la ocupación por parte de dos grupos de alrededor de 60 nacistas del edificio de la sede Central de la Universidad de Chile y la Caja del seguro Obrero Obligatorio, debido a que ambos brindaban una optima arquitectura para defenderlos y resistir de la fuerzas que lo desalojarían.

El MNS no contaba con una cantidad de seguidores que le permitieran concertar ataques en variados puntos del país y principalmente de Santiago, es por eso que focalizaron sus ataques. Analizando la estructura del plan se observa que los nacistas ocuparían un lugar secundario, y que la mayor parte la fuerza del objetivo para lograr el éxito o el fracaso dependía de las Fuerzas Armadas98, lo cual condicionó el desarrollo de los hechos, y además puso en un escenario de extrema dependencia a los golpistas.

El desencadenamiento de los involucrados en el intento golpista fue dispar, algunos militantes fueron arrestados antes de cumplir con sus misiones o simplemente no llevaron a cabo la totalidad de la misión por distintos factores. El militante Oscar Jiménez fue uno de los pocos que realizó su misión en su totalidad, la que consistía en tomarse las dependencias de radio Hucke, y transmitir el mensaje del comienzo de la revolución, el cual era la señal de alerta para que los militares iniciaran su parte del plan. La estéril reacción de los militares comprometidos con el plan, es una situación que no tiene una explicación satisfactoria.

Gran parte de los civiles involucrados en la operación lograron cumplir en gran parte sus objetivos. Un punto en contra que marcó su destino fue la nula

98 Marcus Klein; Ibídem, p. 22

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comunicación entre los grupos apostados en los edificios y González, el cual estableció su cuartel de mando en Providencia en la casa de Enrique Zorrilla.

Alessandri ante los inminentes hechos de golpismo, citó a una reunión a los más altos miembros de la oficialidad de las Fuerzas Armadas y de la policía, los cuales eran leales al presidente. Un batallón del Regimiento Tacna tomó posición en frente de la Universidad de Chile, los amotinados reaccionaron con aplausos al ver el despliegue de las tropas militares, debido a que estaban convencidos que los tan esperados refuerzos habían llegado. Ante dos descargas de proyectil a la entrada del lugar, estas emociones se esfumaron, y rápidamente los nacistas se rindieron, ante la desigualdad de fuerzas en combate. 36 nacistas finalmente fueron arrestados, y seis o siete resultaron muertos, quedando una nebulosa de la manera en que habían fallecido, si fue por los cañonazos, si cayeron en combate o si fueron ejecutados al rendirse99.

En el Seguro Obrero la situación se mantenía en combate a carabineros y nacistas. A la llegada de unidades del regimiento Buin, la reacción de los nacistas se repitió, alegría por la llegada de los refuerzos, en este caso las unidades militares no recurrieron al ataque directo de artillería. La táctica utilizada fue desmoronarlos moralmente al exhibir a sus camaradas apresados y sometidos a distintos maltratos. La negociación duró varios minutos debido a que no existía consenso mayoritario entre los amotinados acerca de los caminos a seguir, además de que guardaban la esperanza de que los tan esperados refuerzos llegaran finalmente. A las cuatro de la tarde todo había terminado. Solo cuatro nacistas sobrevivieron a la masacre. Los jóvenes nacistas pensaban en que su acción de no tener los resultados esperados enfrentaría el camino del fracaso en prisión para luego enfrentar a la justicia chilena por conspiración, pero en ninguno de los casos pensaban en que morirían en la intentona, salvo algunos casos. Según las cifras,

99 Marcus Klein; La matanza del Seguro Obrero (5 de Septiembre de 1938), Globo editores, 2008, Santiago de Chile, p. 27.

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51 o 52 nacistas fueron asesinados a sangre fría, sumándose a la triste cifra 4 civiles que nada tuvieron que ver con la conspiración, tuvieron la mala suerte de verse envueltos en el tumulto de jóvenes nacistas que dirigía Carabineros, desde la Universidad de Chile al edificio del Seguro Obrero, 4 nacistas fueron los que lograron sobrevivir.100

Varias consecuencias trajo la matanza del seguro Obrero al acontecer político social de Chile, muchos de ellos sin intención, y que nada tenían que ver con el plan inicial. Uno de ellos fue el desprestigio político que sufrieron algunos políticos y por consiguiente el cambio negativo de su imagen pública. El presidente Alessandri es uno de elloS?, debido a que debió justificar y respaldar el actuar de las fuerzas de orden y seguridad para mantener la democracia en Chile, y justificar las acciones y decisiones tomadas ese día con motivo de las acciones perpetradas por los jóvenes nacis.

Otro personaje que vio su imagen y credibilidad resentida a raíz de los sucesos del 5 de septiembre fue González von Marèes, el jefe, el cual fue duramente criticado por tener un papel secundario en los hechos, mientras sus camaradas eran detenidos y asesinados, él se encontraba alejado del peligro en una casa de Providencia. Es en este año donde comienza su descenso político como líder dentro del grupo nacista chileno, al interior del mismo surgen voces que le enrostraban y reprochaban su actuar con respecto a los hechos y criticaban y ponían en tela de juicio su liderazgo, un grupo de militantes del grupo formó un conglomerado nuevo de corta vida. Es así como los ideales nacis chilenos en su extinción como grupo político de acción propositiva e ideológica finalmente “fomentaron la causa de la democracia liberal en Chile en los años 30”101.

100 Marcus Klein; Op. cit., p. 28 101 Mario Sznajder, “A Case of Non-European Fascim: Chilean Nacional Socialism”, journal of Contemporary History, vol.28, Nº2 (1993), p.287; Alliende González, El Jefe, p. 116 (“comienzo”) en Marcus Klein; Ibídem., p. 30.

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Falange Nacional

La sociedad chilena y la occidental por cierto, están fuertemente influidas por el cristianismo, la doctrina y el mensaje de la Iglesia Católica, el cual ha influido tanto en la esfera social y política de nuestro país.

La Iglesia Católica en Chile ha contado con la protección y respeto de los partidos de derecha, los cuales cuentan con una formación conservadora tradicional y viven de acuerdo a esta doctrina. Principalmente esta doctrina esta regida por dos premisas, la primera dice relación con la concepción del ser humano como un ser individual y único, en el cual se reflejan los elementos y valores mas sagrados y divinos. Ante esta situación la obligación y misión del individuo es poner en práctica estos elementos y valores y así construir una sociedad de acuerdo a las enseñanzas y concepción cristiana.

La segunda premisa tiene que ver con el alto contenido social que posee la doctrina cristiana, en la cual deben primar los valores tales como la caridad, empatía, igualdad, amor al prójimo, honestidad, justicia social, etc. Ejemplos y enseñanzas acerca de cómo ser un buen cristiano y así construir una realidad donde prime la justicia social se encuentran en los diferentes textos y escrituras sagradas. Principalmente el descontento de los jóvenes cristianos de derecha residía en el hecho de que consideraban que no se estaban aplicando de manera directa y efectiva estas premisas.

Un tema de trasfondo mundial se puede apreciar a finales del siglo XIX, en donde la Iglesia Católica se pronuncia con respecto a la Revolución Industrial y sus consecuencias, las nuevas ideologías y doctrinas surgidas, las cuales planteaban la necesidad imperiosa de buscar un sistema Económico y político que disminuyera las desigualdades existentes. Durante este periodo se aprecia una

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gradual perdida de influencia del catolicismo en general en las esferas directas de las personas y de las naciones, lo que no escapa a la realidad chilena.

Primeros pasos del social cristianismo en Chile

El pensamiento social cristiano se desarrolló en una primera instancia durante la Colonia, en la cual sus principales preocupaciones eran la defensa y la protección de los indígenas del territorio americano, con la emancipación criolla, y la posterior creación y consolidación de la nación y estado de Chile, se cambia el objeto de preocupación por la defensa de las clases más desposeídas.

Indisolublemente el origen de la Falange Nacional se encuentra enraizado con el Partido Conservador, debido a que éste se abanderizó como representante y protector de la Iglesia Católica frente a la figura estatal102. Gran parte de los ciudadanos de derecha se reconocen como cristianos y ven a la Iglesia Católica Apostólica Romana su institución guía. Principalmente los altos cargos eclesiásticos son ocupados por integrantes de las principales familias chilenas.

Uno de los puntos que cambia la visión y postura de los Conservadores, especialmente de sus jóvenes es la publicación de la Encíclica Rerum Novarum, promulgada el 15 de Mayo de 1891, la cual cambia el enfoque de acción y marca a muchas generaciones de jóvenes.

Uno de los principales impulsores de las primeras agrupaciones demócratas cristianas en Chile fue Bartolomé Palacios, el cual consideraba necesario crear una sociedad en donde se viviera realmente en igualdad y fraternidad.

102 José Díaz Nieva; Chile: De la Falange Nacional a la Democracia Cristiana, Universidad Nacional de Educación a Distancia, 2001, Madrid, p. 26.

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El Partido Conservador debía no sólo estar alineado con las principales familias del país, sino también su tarea era proponer un programa de acción que contemplara e incorporara a las clases populares.

Con un profundo sentido de ayudar a organizar al obrero, nace en 1855, por iniciativa de los conservadores Hilario Fuentes e Ignacio González Eyzaguirre, la primera organización obrera, llamada Sociedad Obrera de San José. En 1878 es fundada la Sociedad Católica de Obreros de Santa Ana, por Abdón Cifuentes y Rafael Ángel Jara. Paulatinamente se fueron creando varias organizaciones obreras de carácter cristiano, conjuntamente de un apoyo educativo a los obreros en donde se les enseñaba la doctrina católica.

La creación de la Gran Federación Obrera de Chile, más conocida como FOCH, fue la materialización de elementos del partido Conservador, entre ellos el abogado Pablo Marin, la cual nace como apoyo al obrero y sus familias, bajo los puntos de previsión social, educación y acción sindical. Esta organización paradojalmente se constituyó como la cuna del Partido Comunista, debido a la entrada de sectores izquierdistas, principalmente del Partido Obrero Socialista.

Los antecedentes de la Falange Nacional los podemos encontrar en primer lugar en el Partido Popular, creado en 1920, el cual fue la primera apuesta por crear una organización católica independiente del Partido Conservador, el cual fue impulsado por Bartolomé Palacios.

Con la desaparición del Partido Popular en 1925, aparece el grupo católico llamado Germen hacia el año 1928. Este grupo apolítico y de postura anti- conservadora nace y se desarrolla bajo la figura importante del carismático Clotario Blest. La acción de este grupo se dirigió al campo social y económico, bajo las enseñanzas del evangelio, que por su carácter progresista se puso en una situación de ruptura con el tradicionalismo político religioso que éste representó y

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adhirió circunstancialmente a los modelos corporativistas, intentando crear al igual que el MNS una tercera vía política dentro del espectro político nacional.

En la década del treinta paso a ser parte, entre otras organizaciones, del Partido Social Sindicalista, fundado en 1932, el cual aspiraba a una regeneración del orden político, económico, social y cultural del país. Propugnaba un profundo rechazo a la economía liberal imperante, la cual era la responsable de los males que aquejaban a la sociedad de la época.

La fundación del Partido Corporativo Popular en 1934, constituye el último intento por crear un movimiento de base social cristiana, independiente del alero conservador103, el cual tuvo una corta duración. Durante los años treinta se sucedieron varios grupos de jóvenes católicos, unos con mas trascendencia y poder de adhesión que otros, como lo fueron la Liga Social, creada en 1931, y la Asociación Nacional de Estudiantes de Acción Católica (ANEC), fundada en 1915.

En 1933 se celebra en Roma un congreso de todas las agrupaciones juveniles y universitarias de Iberoamérica dependientes de la Acción Católica, a la cual asistieron los jóvenes chilenos Eduardo Frei y Manuel Garretón. Este viaje a Europa por países como Italia, Francia, Bélgica, entre otros marcó profundamente a ambos jóvenes, en donde se empaparon de manera directa de las experiencias social cristianas europeas, conocieron el pensamiento cristiano de diversos autores de manera directa y el corporativismo estatal de Mussolini.

Durante el periodo los dirigentes del Partido Conservador ven con recelo y preocupación el aumento de estos proyectos autónomos a las directrices conservadoras, por lo cual comienzan a idear vías de captación hacia el Partido Conservador, con un mensaje y programa más cercano a las inquietudes de los jóvenes católicos.

103 José Díaz Nieva; op. cit., pp. 43-44.

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Durante Octubre de 1935, se celebró la Gran Concentración Nacional de la Juventud del Partido Conservador, donde se llamaba a incorporarse al Partido conservador a los jóvenes católicos militantes en organizaciones independientes. De esta convención surge el Movimiento Nacional de la Juventud Conservadora (MNJC), cuyos principales dirigentes eran Garretón y Frei.

En 1937, con una base amplia del MNJC nace la Falange Nacional, con elementos propios y basados en lo trabajado en el MNJC. Este nueva entidad, tenía como modelo a su par española, y tomó de ella varios elementos de la organización estructural.

Falange Nacional en Chile

El nacimiento del movimiento llamado Falange Nacional se enmarca en la década de 1930, y como ya vimos las agrupaciones antecesoras tenían un punto en común que eran las nuevas doctrinas sociales de la Iglesia, conjuntamente con la influencia de los pensadores franceses, los cuales le habían dado una nueva lectura y un nuevo rol a la acción social cristiana. La cual iba más allá de realizar acciones de beneficencia y de ayuda a la comunidad, si no que estaban pensando en un proyecto de país nuevo, que eliminara gran parte de las desigualdades existentes, apoyados por la idea del corporativismo y de un nuevo rol de los cristianos como actores de una realidad.

Estos nuevos jóvenes entre los cuales destacan Bernardo Leighton, Manuel Garretón, Eduardo Frei, entre otros, estaban dispuestos a poner en práctica las nuevas ideas sociales cristianas, ya que en gran parte sentían que el Partido Conservador no las ponía en practica y no estaba dispuesto a realizar cambios para poder materializarlas. Al igual que el MNS adopta una postura apartidista.

Existió una profunda identificación de la Iglesia Católica con el Partido Conservador a partir de la segunda mitad del siglo XIX, lo cual cambia a través

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de los años, como es el caso del obispo Manuel Larrain el cual se sentía alejado de la derecha chilena, debido al pensamiento económico y social, este es uno de los puntos de conflicto entre los conservadores y las nuevas generaciones.

La falange fue un grupo de jóvenes cristianos, que motivados por la Acción Católica, entraron en 1932 al Partido Conservador. Al interior del partido fueron adquiriendo mayor autonomía hasta que se separan en 1938, y formaron uno nuevo uno nuevo con el nombre de Falange Nacional104. Posterior a la separación del partido conservador la Falange se ve enfrentada a la necesidad de redefinir105 y replantear su organización y postulados.

En 1935 en una concentración de la Juventud Conservadora, entre el 11 y el 13 de Octubre, en el Teatro Princesa de Santiago, nació la Falange Nacional106, con una cierta influencia de la Falange Española, que luego se transformaría en la Democracia Cristiana107. Palabras de Agustín Gumucio: “Ahí se produce una crisis en el Partido Conservador que fue el nacimiento de un nombre que en España no se entiende, que se puede llamar Falange Nacional, porque Falange en España es lo peor. Pero se llamaba así porque uno de nuestros dirigentes se le ocurrió la idea de la Falange griega108”. Desde un comienzo se observa una distancia entre el Partido Conservador y la Falange Nacional, un documento de la época lo clarifica:

"A la honorable Junta Ejecutiva del Partido Conservador, se informa de los móviles que han impulsado la organización de la Juventud Conservadora

104 José Aldunate; Crónica de una Iglesia Liberadora, LOM ediciones, 2000, Santiago de Chile, p. 26. 105 Alberto Cardemil; El camino de la Utopia: Alessandri, Frei, Allende Pensamiento y Obra, Ed Andrés Bello, 1997, Santiago de Chile, p. 131. 106 Emilio Filippi; La Clase Política Chilena, Pehuén editores limitada, 2006, Santiago de Chile, p. 94. 107 Bernardino Bravo; Historia de las Instituciones Políticas de Chile e Hispanoamérica, ed. Andrés Bello, 1986, Santiago de Chile, p. 313. 108 David Fernández; Historia Oral de la Iglesia Católica en Santiago de Chile desde el Concilio Vaticano II hasta el golpe militar de 1973, Universidad de Cádiz, 1996, España, p. 146.

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Los dirigentes del Partido vieron con simpatía esta iniciativa, y le prestaron su más decidido apoyo.

Es indudable que la obra del movimiento ha sido beneficiosa por la propaganda que ha realizado, por su penetración en la clase media y obrera, y porque ha contribuido eficazmente a alejar a la juventud del nazismo. Pero por otra parte, muchas de sus actividades han dado margen a que aparezca en el partido un profundo divorcio, que en realidad no existe entre sus elementos jóvenes y los que tienen su dirección y control, situación que ha venido a agravarse con la actitud que el movimiento ha asumido ante el problema presidencial.”109

Según autoridades del Partido Conservador el errado camino que estaba tomando la Falange se debía en primer lugar al errado concepto de autonomía, la inclusión de elementos extraños al partido. A las reuniones y sesiones de la Falange pueden ingresar conservadores y no conservadores, lo cual viola los artículos 1° y 2° del estatuto fundamental, los cua les establecen la militancia conservadora para asistir a dichos encuentros y acatar la autoridad de la Junta Máxima. La peligrosa concomitancia izquierdista de los principales dirigentes de la Falange con dirigentes socialistas, trostkistas y leninistas.

El peligroso concepto del orden social cristiano, el cual se alejaba de lo establecido por la junta. La juventud conservadora mostró una evolución influida por la nueva generación de jóvenes católicos influidos por la doctrina social de la Iglesia, basadas en las encíclicas Rerum Novarum y Quadragessimo Anno, conjuntamente con la recepción del pensamiento católico francés, especialmente de Jaques Maritain110.

109 Folleto Falange Nacional// Partido Conservador, Imprenta Lackintong y Cía., 1938, Santiago de Chile, p. 7. 110 Silvia Castillo; Inserción del Partido Falange Nacional en el Sistema Político Chileno 1939-1948, tesis para optar al grado de Licenciado en Historia, 1991, Universidad Católica de Chile, Santiago, p. 35

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Del discurso de Manuel Garretón, pronunciado por radio el 29 de Agosto de 1936:

“La Juventud Conservadora no se confunde con el Partido Conservador: marcha a su lado…”111. También el discurso de Fernando Durán, pronunciado en la concentración de Valparaíso, el 12 de Octubre de 1939, con respecto al nacimiento de la Falange: “Es una idea nacida en el seno del Partido Conservador, pero distinta de él en su táctica y en su finalidad”112.

Los jóvenes tenían muy claro la diferencia ideológica que tenían con el Partido Conservador. Comenzaron a trabajar con la población de manera directa, con lo cual tuvieron acceso al mundo obrero de Chile. Al mantener el nombre como partido, también mantuvo el logotipo del movimiento, que es una flecha cruzada por dos barras, que tiene como significado la irrupción de un nuevo orden que se aleja de los movimientos de derecha e izquierda113.

En este nuevo periodo de la Falange, la organización se vuelve más cercana y directa con la población, con una serie de nuevos centros falangistas, departamentos entre otros, intentando conservar y aumentar la aceptación y adhesión de la población al partido.

111 Folleto Falange Nacional… op. cit., p. 26. 112 Folleto Falange Nacional…Ibídem. 113 Silvia Castillo; op. cit., p. 45

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CAPITULO III: “Las Derechas y sus discursos”

Entendiendo el enfoque de Stanley Cohen, el cual asevera que las sociedades pasan por periodos de pánico moral, algunos más acentuados que otros. Durante el periodo 1936-1941, se aprecia un alto contenido de éste en los medios de comunicación, principalmente de derecha, los cuales mediante discursos altamente catastrofistas, moralizadores y nacionalistas, buscaban sembrar el descrédito e inaplicabilidad del modelo del Frente Popular en Chile.

El pánico moral en la época de estudio, no se presenta como una constante continua. Este tipo de contracampaña se ha manifestado cíclicamente, es decir, que cada ciertas fechas sensibles y principalmente de contingencia política, aparecen estas acciones de parte de las derechas en contra del Frente Popular. Por ende el pánico moral, va a estar representado por campañas que se difunden principalmente en diarios y periódicos, como una forma de abarcar mayor cantidad de público que tenga acceso a la información ofrecida

De esta manera si quisiéramos identificar los periodos, tenemos que empezar con la formación del Frente Popular en el primer semestre de 1936, para después pasar al periodo de la campaña presidencial de don Pedro Aguirre Cerda en 1938, en especial la etapa correspondiente a los meses de Septiembre y Octubre, el año 1940 que marca la salida del socialismo del proyecto gubernamental, y el año 1941, donde fallece Pedro Aguirre Cerda, y esta marcado por los balances hechos por la oposición.

1936 No Izquierdas ni menos Frente Popular en Chile

“El Partido Radical no es dueño del porvenir y será supeditado por el marxismo que se asila”, así titula el Diario El Mercurio, el día martes 1 de Septiembre de 1936, usando este titulo para hacer un análisis del discurso del Diputado Morales Beltrami, para hablar del Frente Popular en Chile y en otros

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países, principalmente en España. Por más no decir, esta frase es bastante decidora, ya que ve venir la importancia que más tarde tomara la coalición de radicales y comunistas, asolados por el temor que provoca que el partido comunista participe de estos movimientos por su carácter revolucionario. Después dice el artículo:

“España es una de las victimas del desarrollo de este plan revolucionario y la crisis que hoy allí se agita no es una rebelión militar, sino un esfuerzo nacional para expeler el virus marxista. Es el pueblo español que defiende, con las armas en la mano, el santo ideal de su existencia y de su nacionalidad. Es la norma del Derecho que ha sido conculcada por una Constitución despótica. El Frente Popular chileno es idéntico al de España. Uno y otro actúan en un medio social parecido. Agrega que no obstante el desmentido anticipado de Agaña, la subversión social se produjo, y no la pudo controlar el Gobierno, por que era importante para dominar en las calles. Termina evocando la divina Providencia para que en Chile no pase algo parecido y echen por tierra las instituciones patrias (aplausos)”.

Es importante destacar el carácter que se le da al Frente Popular en España, como revolucionario y que hay un esfuerzo nacional para expulsar o terminar con el marxismo, dejando en claro que el mismo pueblo se defiende de ello con armas en la mano. Es importante destacar esto debido a que se hace directamente un paralelo con Chile, y deja claro que también puede pasar en esta nación debido a que como dice claramente hay condiciones similares. El último párrafo muestra directamente el pánico moral que tratan de infundir en la sociedad, pidiendo a la divina providencia que no ocurra algo parecido a lo que sucede en Europa, como si fuera algo evidente.

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Desde un comienzo el movimiento de las juventudes de Derecha se pronunció e identifico como un movimiento autónomo claramente diferenciado de los demás partidos políticos chilenos, incluso marcaba diferencia con los partidos de Derecha.

“No existe unión con comunistas Hemos aceptado conversar con nuestros adversarios pero es totalmente falsa la noticia de un entendimiento expreso o tácito con ellos. Para luchar con nuestros adversarios no necesitamos pactar con nadie”114.

Molestia causo en los dirigentes social cristianos, las diversas noticias aparecidas en distintos medios capitalinos que aseguraban un común acuerdo con distintos dirigentes de partidos de Izquierda posterior a una reunión, en el ambiente de chismografía pequeña en que se mueve la politiquería chilena, se hace difícil hacer política de forma civilizada y seria aseguraban.

Si bien es cierto el malentendido fue aclarado por los dirigentes falangistas, de paso aclaran su posición con respecto a la reunión sostenida, que en ningún caso será pactar con grupos con ideas tan opuestas a lo defendido por los falangistas, además de la confianza en triunfar de manera individual, debido a los profundos ideales cristianos que los sustentan.

Sin una vacilación, sin una claudicación, sin una sola componenda115 crearemos en Chile un espíritu nuevo, y un nuevo orden político y social. Más absurdo aún resulta la noticia cuando es habido un pacto con comunistas. Nosotros somos adversarios decididos del

114 “El Lircay”, Santiago, 5 diciembre de 1936 115 Arreglo o transacción censurable o de carácter inmoral.

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error comunista y los únicos que los atacamos real y profundamente por medio de la exaltación de los valores de patria y de justicia social, que desviará a las masas de la vía de Moscú.

Principalmente se desmarcan de los demás movimientos anticomunistas por creer en los cambios por el peso de la palabra y las ideas, no teniendo en cuenta, bajo ninguna situación la violencia, ni menos la revolución social, para conseguir cambiar la realidad, esa es la misión histórica para la cual están dispuestos a trabajar.

Mientras otros grupos se debaten en la pequeñez de la politiquería personalista, que no sabe de ideas sino de agitar las pasiones, nosotros luchamos con fé infinita en la sagrada perennidad de nuestra causa. Por todas partes del país vamos sembrando ideas, despertando las energías espirituales, multiplicando el idealismo de la juventud de la Patria. Poco más de un año de rudo batallar, sin una sólida convicción doctrinaria, nos permiten mirar con tranquilidad el porvenir de una nueva causa que es el porvenir de la Patria. ¡Juventud chilena adelante!.

LA LUCHA CONTRA EL COMUNISMO

La posición que se debe adoptar frente a esta ideología, es en primera parte no desconocerla, después combatir la propaganda que despliega con información certera y veraz con respecto a las reales intenciones de los comunistas. Uno de los puntos en donde se esta armando esta revolución es el los establecimientos educacionales, en donde se está preparando para una revolución futura a los colegiados. La misión concreta de la falange es hacer frente a todas estas intenciones y realidades, con un patriotismo enraizado y confiando en la

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ideología socialcristiana, no es el tiempo de las soluciones simplistas que dan muchos ciudadanos.

El problema del comunismo, que es la encarnación del materialismo absoluto y la consecuencia lógica de los errores liberales, debe ser abordado en su total amplitud para ser resuelto, hay que considerarlo en todos sus aspectos: moral, intelectual, social, político y económico. Y hay que ir al fondo de la cuestión para extirparlo de raíz.

Sobre las sociedades contemporáneas se cierne en esta época el símbolo de la hoz y el martillo como castigo supremo por pecados largo tiempo acumulados.

Ante la regresión a la barbarie, que es el comunismo, ni cómoda cobardía ni histéricas actitudes que a nada conducen. Con voluntad viril hay que combatir el mal en todos los terrenos.

Se afirma al comunismo como uno de los peores males que ha debido enfrentar la humanidad, adoptar esta ideología significa retroceder en el tiempo, es el castigo terrenal que sufren las sociedades, y que debe ser combatido abiertamente para no seguir decayendo socialmente.

Un singular y explicito titular nos dice:

La farsa del Frente Popular Los frentes populares no significan justicia social sino demagogia y anarquía116

116 “El Lircay”, Santiago, 6 de diciembre 1936

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Los falangistas definen el Frente Popular como:

Conglomerado heterogéneo, sin ningún vínculo sólido que le dé consistencia; formado por elementos que abarcan desde los burgueses radicales – que se las dan de avanzados y tienen miedo aún de los mas elementales reformas sociales – hasta los demagogos del marxismo, no es capaz un Frente Popular de dar solución a los múltiples problemas que hoy se plantean en la sociedad.

El triunfo de los llamados frentes populares es el primer paso, el preludio, de la anarquía y de la tiranía bolchevique.

Según la óptica falangista, el adoptar la ideología comunista significará que la sociedad chilena se verá envuelta en un clima de desorden y tiranía, en gran parte debido a las experiencias europeas en Francia y España, las cuales no terminaron de la mejor manera. Aseverar la inaplicabilidad del sistema en Chile sin siquiera haberse puesto en marcha, revela en parte el miedo político ante el creciente apoyo de los sectores populares y los trabajadores hacia los ideales frentistas.

La juventud de derecha cristiana desea una total aplicación de las necesarias reformas sociales en Chile, por lo cual desconfía de los partidos que propugnan esta temática como base de su discurso, debido en gran parte a que representan caminos que no han logrado cumplir lo prometido.

Nosotros combatimos el Frente Popular, no por que tenemos a las reformas sociales. Lo combatimos justamente porque queremos realizar el pleno imperio de la justicia social, comenzar una nueva ordenación de la vida colectiva. Para nosotros el programa social del radicalismo decadente y

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burgués es totalmente anticuado y reaccionario. No se diga, pues, que combatimos porque tenemos a la obra de la justicia social a la obra de redención proletaria que el Frente Popular se basa para conquistar adeptos entre las masas populares que sufren miserias y son engañadas por los demagogos.

Y lo combatimos también porque pretende dividir a los chilenos en bandos irreconciliables y arrastrar a la Patria a una lucha enconada y fratricida.

El discurso es repetitivo ante la idea de una guerra civil entre comunistas, fascistas y ciudadanos que defienden la democracia y la libertad. Los falangistas ven en estas promesas más demagogia barata que en nada contribuye a la real solución de los problemas sociales que aquejan a Chile.

Un tema recurrente que se le critico a la gente de Izquierda fue el concepto de libertad democrática que aceptaban y defendían, y el que realmente aplicaban en la práctica, que según el agudo análisis falangista no correspondía bajo ningún punto al aplicado:

Izquierdismo y libertad No tienen autoridad moral para hablar de libertad los que propician la dictadura del proletariado o han servido a las tiranías117.

Una profunda crítica hacia los reales postulados del Frente Popular se realiza en el artículo, el cual deslinda una serie de dobles discursos en las verdaderas intenciones del conglomerado de Izquierda. La idea principal que desarrollan es que no pueden concebir que la Izquierda defienda la libertad

117 “El Lircay”, Santiago, 12 diciembre de 1936

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democrática como base para el desarrollo de las sociedades, siendo que el marxismo tiene como uno de sus máximos postulados llegar al estadio social de la dictadura del Proletariado. Siendo este punto entendido por los falangistas como ilegitimo, defender la libertad, abrazarla y propugnarla, para luego desecharla y oprimirla, parece ser la verdadera intención frentista.

Una de las principales figuras de la Falange Nacional Ricardo Boizard realizó un amplio análisis de la contingencia nacional y respondiendo en parte a los dichos del diputado liberal señor Dusaillant con respecto al nacismo. Boizard hizo ver en el discurso que el movimiento falangista era el principal obstáculo para frenar al comunismo, y por cierto era la vía para la tan ansiada renovación nacional, que era esperada por muchos.

“Estoy seguro de que el comunismo y el socialismo, mañana caerán arrasados por los principios de verdad que la juventud de mi partido encarna. Nosotros perseguimos algo así como la liquidación de ese viejo conflicto entre el ideal de justicia y el ideal de libertad. Nosotros queremos colocarnos en el medio: entre los que pretenden sacrificar la libertad por la justicia y los que pretenden sacrificar la justicia por la libertad. Nosotros pretendemos que la soberanía suba al poder a través de los gremios y de las corporaciones.”118

La Falange Nacional, y por cierto el pensamiento socialcristiano chileno, defendió un modelo corporativista para el Estado, en el que las organizaciones de los trabajadores tuvieran un papel importante, aportando con el sentir de los

118 Los principios de la Juventud Conservadora arrasarán con el Comunismo, corresponde al título del artículo de análisis del discurso pronunciado por Ricardo Boizard en la Cámara de Diputados, aparecido en el Diario El Lircay el 19 de Diciembre de 1936, p. 5.

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obreros. En lo que respecta a la economía y la riqueza en Chile los falangistas propugnan lo siguiente:

Nosotros admitimos que es necesario ir a la liberación económica del país, sin destruir, como lo pretenden las izquierdas, mediante leyes sociales injustas, la riqueza chilena, ni dar cabida, como lo pretenden muchas veces algunos reaccionarios recalcitrantes, a la acumulación excesiva e injusta de esa misma riqueza.

Esta inquietud de ordenar la economía nacional es una preocupación importante, pero esa renovación que se pretende llevar a cabo no debe ser tan radical como los modelos de izquierda, no se pretende en ahondar en cambios radicales, si no mas bien atender las necesidades próximas de la sociedad, no tocando en demasía a las principales familias de Chile.

“La juventud conservadora pretende ir por encima del estado liberal, por encima del estado nacista, por encima del estado comunista a la integración, a la definición de la democracia que es el ideal social cristiano.”

La consigna apartidista mantuvo un sesgo hacia los postulados de los nuevos y tradicionales partidos chilenos, que en gran medida no ofrecían reales soluciones para mejorar la situación social de la época.

1937 A cerrar el paso

Cerremos el paso al Frente Popular119, con este significativo y llamativo titulo, los falangistas hacen un llamado a todos los ciudadanos bien intencionados de Chile, a no apoyar al Frente Popular en las elecciones del 7 de Marzo próximo.

119 “El Lircay”, Santiago, 20 de febrero de 1937

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El frente Popular no ofrece una nueva política y justicia social afirman, si no más bien traen consigo un manto de revolución y anarquía, escenario ideal para instaurar la dictadura del proletariado. A Chile le espera un final realmente funesto si llegan a triunfar:

Su triunfo llevaría a Chile al desorden a una mayor dispersión de las fuerzas espirituales de la nación y a la ruina de las actividades toda de la economía, con la consumiente miseria pero los chilenos de todas las clases sociales.

Tal terrible panorama debe remediarse con una acción directa y decidida por parte de la población, la cual debe materializarse en las elecciones venideras, las que constituyen el escenario ideal para demostrar el rechazo del pueblo chileno.

Hay que cerrar el paso al Frente Popular, no para servir a intereses contrarios a los de las clases populares – como se pretende hacer creer – no para mantener situaciones de injusticia; no para hacer política de grupos o de círculos: hay que cerrar el paso al Frente Popular para evitar a Chile el desorden y la revolución de España y la desmoralización y desintegración de Francia.

1938 Frente Popular igual a suicidio nacional

Con motivo de la elección de los pre-candidatos de la derecha, en pleno debate político, la juventud conservadora se pronuncia al respecto, y se dirige a los Presidentes de los centros de todo el país, el principal órgano escrito falangista titula:

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“Ni IBAÑEZ ni ROSS pueden encarnar la solución nacional que propiciamos”120

Desde un principio los falangistas no comprometieron su apoyo al candidato derechista que corría con ventaja, GustavoRoss, el cual encarnaba el tradicionalismo y continuación de un proyecto político que ya estaba agotado, según la juventud derechista, además de no tomar en cuenta de manera clara los postulados emanados desde la Iglesia. Consideraban que la figura de Ross no lograba concitar la unanimidad al interior del conglomerado oficialista, lo cual le restaba credibilidad y solides, no concitaba la unión de otro grupo fuera de la derecha, además de concitar una alineación de los partidos de oposición en contra de su figura, al respecto señalaban:

“Partido Rossista” actuando al margen de la constitución normal del Partido Conservador, hace obra divisionista”. “Triunfará una derecha con sentido social”.

Ese era unos de los fines de los falangistas, creían necesario que existiese un candidato que concitara la unión total de toda la Derecha a su alrededor, situación que no lograba Ross.

El creciente momento que vivía la juventud conservadora, debía complementarse con un trabajo ideológico fuerte, el cual sentaría las bases sociales para la aplicación del nuevo orden social cristiano, para lo cual todos los jóvenes que adhirieran y militaran en las filas, debían realizar un esforzado trabajo de difusión, todo esto siempre bajo la disciplina y los postulados del partido Conservador, en ningún caso fuera de éste. La situación nacional debe mejorar en virtud de los preceptos cristianos, y las ideologías que desconocen la Fe y su

120 “El Lircay”, Santiago, 29 de Enero de 1938, pág. 4 y 5.

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fuerza deben ser combatidas con energía, de lo contrario la decadencia y la perdida del alma nacional es inminente.

Si bien es cierto la figura de Ibáñez es respetada, calificándolo como un hombre sano y bien intencionado, su gran impedimento para ser tomado en cuenta nuevamente como aspirante a la Moneda es que carece por completo de condiciones de gobernante, como lo demostró en su periodo anterior. Carece de toda orientación o formación doctrinaria, pero más que nada se observa esta desorientación intelectual del señor Ibáñez, en que jamás ha sabido distinguir lo vital de lo secundario en un problema. Por estas razones, según los falangistas, Ibáñez estaría en incapacidad de ser nuevamente Jefe de Gobierno, los errores cometidos anteriormente no fueron olvidados por gran parte de los chilenos.

A inicios de 1938 los pre candidatos por los cuales trabajarían los falangistas eran: Jorge Matte Gormáz, Máximo Valdés Fontecilla, Guillermo Edwards Matte, Jaime Larraín García Moreno y Francisco Garcés Gana. Estos eran los hombres que encarnaban más fielmente los ideales cristianos, al interior de la filas de la derecha.

A medida que se acercaba la tan esperada elección presidencial crecían los análisis de uno y otro bando, el Lircay a mediados de año titulaba:

Las Ambiciones y las RENCILLAS dividen profundamente a la Izquierda. Grupos heterogéneos que a nada responden.- Dos candidatos que no son candidatos.- El pueblo defraudado.121

La Falange advierte que el conglomerado de Izquierda se encuentra profundamente dispersa, debido a las particularidades de visiones que la

121 “El Lircay”, Santiago, 16 de Junio de 1938

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componen, llenas de ambiciones personales, constantes roces entre los partidos que lo integran, que a la larga no ofrecen la debida seriedad que se merece el pueblo de Chile. El Frente Popular no está siendo capaz de captar y canalizar de buena manera el sentir social, en contraposición, la candidatura de Ross va creciendo con el pasar de los días, con lo cual se va cimentando la victoria derechista.

Uno de los principales diputados críticos del accionar del Gobierno, el diputado Sr. Ricardo Boizard, el 12 de Noviembre de 1940 a través de un discurso pronunciado en la Cámara de Diputados, analizo la gestión del Frente Popular, revisando las promesas incumplidas y el alza del costo de la vida durante los últimos meses.

Las palabras vertidas en Osorno por el presidente Aguirre Cerda, causaron desilusión y desconcierto, no es posible cumplir con el programa del Frente Popular, porque una mayoría adversa en el Congreso se lo impide, causaron un hondo cuestionamiento al curso de la política llevada a cabo por los frentistas.

Acusa abiertamente una nula disposición de crear un equipo de trabajo que cobije a todos los sectores políticos del poder Legislativo, que permita llevar a cabo el programa de manera eficaz y concreta, al respecto señala:

En los primeros meses del actual Gobierno hubo un solo hombre de la Izquierda que persiguió este objetivo. Fue el diputado Juan B. Rossetti, cuya acción encontró eco inmediato y desinteresado en nuestras filas. Se trataba de formar un block parlamentario dirigido a la aprobación de numerosas reformas sustanciales que permitieran al Presidente de la Republica cumplir lo prometido.

El diputado no entiende a cabalidad la reacción posterior del Gobierno, el cual procede a clausurar el Congreso, en parte debido al costo económico en que

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se incurriría para cumplir el programa o miedo político frente a esta alineación, lo que es verdaderamente cierto es que se ahondó la división partidista en la arena nacional.

También, hacia las elecciones de 1938, El Mercurio, publica artículos donde trata de llegar al sector de los comerciantes minoristas, en este deja claro la opción a tomar:

“Y ahora hablemos claro, señores “industriales y comerciantes de la izquierda”. Ustedes buscan el concurso del comercio minorista para incrementar las filas de los partidarios del señor Aguirre. Ustedes necesitan el concurso de este gremio. Lo necesitan desesperadamente. Muy bien. Llámenlo, atráiganlo por otros medios; pero no tengan la osadía de decirle que sus intereses están ligados al triunfo del Frente Popular, porque esto no sólo no es efectivo, sino que resulta una verdadera aberración. Los intereses del comercio minorista están estrechamente vinculados a un régimen de orden, de paz y de justicia, como el organismo humano al aire. Decir lo contrario es mistificar, engañar, falsear una realidad que surge clara e incontestablemente”.122

En el artículo se deja una ver una latente oposición hacia el Frente Popular, para convencer de votar a los comerciantes minoristas, dejando en claro que la elección de este sector sería una verdadera aberración. También deja ver entre líneas que la elección de Pedro Aguirre Cerda, esta vinculada al desorden, a la inestabilidad y a la injusticia.

122 “El Mercurio”, Santiago, 7 de Septiembre de 1938.

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De otra forma se deja entrever que se hace una campaña de pánico moral indirecto, en donde sin atacar en forma directa al Frente Popular, se deja entrever de forma maliciosa su voluntad. Así podemos ver como el día Sábado 8 de Octubre de 1938 el Diario La Nación publica un articulo que habla sobre la campaña de don Gustavo Ross, en la bajada del titular dice: “Con gran entusiasmo y la absoluta conciencia de la responsabilidad del momento político las fuerzas sanas afrontan la elección”. Aquí se deja ver a la derecha como una fuerza sana, y su oposición queda como una fuerza insana o una fuerza negativa. El mismo diario, el dia Sábado 15 de Octubre de 1938, para otro artículo que habla sobre la campaña de don Gustavo Ross, titula: “El triunfo de las fuerzas que desean el orden y el trabajo sobre las que se oponen al régimen democrático significará para el país la elección de Sr. Gustavo Ross Santa María”. Nuevamente se deja entrever que el Frente Popular es un reflejo de desorden y atenta contra el régimen democrático. Cabe concluir que son fechas sensibles, debido a la proximidad de la elección presidencial.

“¿CONVIENE ENTREGAR EL GOBIERNO A LA LUCHA ARMADA ENTRE COMUNISTAS Y FASCISTAS?”. Así titula este artículo en el Diario La Nación, el día Martes 18 de Octubre de 1938, previo a las elecciones presidenciales, dejando en claro el grave problema que se enfrentaría al ser electo el candidato del Frente Popular. Queda en claro las intenciones de este diario, de provocar temor en la sociedad con respecto del sector frentista. Más adelante prosigue:

“En todos los países existen elementos de demolición que, en las horas propicias, se unen y conciertan para un plan común de ataque contra la organización social. Entre nosotros, pugnan contra la democracia y contra la tranquilidad pública y privada, el comunismo y el fascismo. No es, pues, tan extraño, que hoy se den la mano”.

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Cuestiona la unión entre comunistas y fascistas, como un plan que altera el orden social y la tranquilidad pública, dejando entrever como una amenaza el apoyo al sector frentista. Más adelante continua:

”Esta alianza de comunistas y fascistas, de frentistas y dictatoriales es bien determinante: indica que elementos sin ningún principio respetable, agrupados únicamente por la ambición local del Poder, pretenden trepar por cualquier medio al Gobierno, aunque al día siguiente tuvieran que ametrallarse entre ellos mismos, por la disputa del botín”

También parte del pánico que se provoca es la inestabilidad que tienen ambos sectores del Frente Popular, dejando en claro que son grupos antagónicos y que en cualquier momento se disputaran el poder. Continúa con un ataque al candidato del Frente:

“Aguirre comía en Barcelona entre los generalotes de la dictadura de Primo de Rivera, y en Paris tuvo una secretaria izquierdista, Aguirre al son que le tocan baila. Es el prototipo del oportunista, sin convicciones sólidas”

Cuestionan los principios de don Pedro Aguirre Cerda, catalogándolo de un oportunista sin convicciones, tratando de quitar fuerza a su nombre, y dejando bien en claro que es una persona que se vende al mejor postor. Para concluir el artículo, dice:

“Con estas últimas actuaciones del Frente Popular, del fascismo y el ibañismo, queda aclarado el problema electoral. Para la ciudadanía se presenta esta interrogante: ¿Conviene a las instituciones, al orden, a la tranquilidad social y política

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del país, entregar el Gobierno a la lucha armada entre comunistas y fascistas?”123.

Después de todo el argumento es lógica la respuesta que se tendría a la ultima interrogante, es claro también la visión que tiene el diario y la importancia que le dan al infundir pánico dentro de la sociedad con la elección del Frente Popular, además que es una fecha sensible debido a que pronto serían las elecciones.

1939 el Nacionalsocialismo escrito irrumpe

El principal medio de difusión escrito de los nacis chilenos fue La Patria, la cual exhibía en su portada el lema “Chile ante todo”. Su Director fue el Sr. Osvaldo Gatica, y fue fundado el 2 de Junio de 1939, por la cúpula directiva del MNS.

El Nacismo chileno posterior al incidente del 5 de Septiembre, fue seguido con recelo por las autoridades, debido a que si bien es cierto, habían perdido fuerza y credibilidad, seguían siendo un grupo al cual debían tener en cuenta. Su constante trabajo de difusión a través de diarios, folletos y presencia en la calle lo demostraban.

En el artículo escrito por Marco Aurelio, se describe la importancia de la aceptación de una acusación al ministro del Interior de la época don Pedro Enrique Alfonso, el cual en gran medida habría atentado en contra de la Libertad de prensa, uno de los elementos fundamentales para que una Democracia sea reconocida como tal. La importancia de que la acusación haya sido acogida en primera instancia por la Cámara de Diputados, marca un antes y un después en la defensa de una democracia sana y robusta, ya que a lo largo de los años precedentes, se había hecho normal que este tipo de acusaciones no llegaran a

123 “La Nación”, Santiago, Martes 18 de Octubre de 1938.

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instancias avanzadas y se desecharan rápidamente, lo cual era percibido por la mayoría nacional. El trasfondo de la acusación se resume en la actitud del ministro el cual es sindicado de:

“Entrabar el pensamiento de una democracia en su mas amplia expresión, como es la libertad de prensa, es sencillamente ahogarla. Quitarle su fuerza, privarla del aliento que la vivifica, es sumirla en el abismo a cuya sombra prosperan los mas funestos gérmenes de corrupción, abusos y arbitrariedades, creando como lógica consecuencia, el advenimiento de los gobiernos de fuerza que son en definitiva su inevitable resultado.”124

Ciertamente uno de los principios en los cuales se cimenta una democracia sana y robusta, es el asumir y permitir distintos puntos de vista en lo que respecta al modo de dirigir el Estado, lo cual era defendido ahora por los nacis chilenos.

Desde el bando de la oposición el artículo toma una real importancia debido a que denuncia y hace ver el peligro que corre la democracia chilena ante una inminente censura a la prensa, debido a que no es el camino para hacer frente a las opiniones divergentes a la oficial. Un pasaje del escrito denota una profunda crítica hacia el Gobierno del Presidente Aguirre Cerda y a su gestión:

“Ninguna democracia puede, si quiere merecer tal nombre, permitir que se atente en lo más mínimo contra esa preciosa garantía, contra ese sagrado derecho, porque es el medio de que dispone todo pueblo para su legitima defensa. Y nunca más que ahora es indispensable mantener incólume ese

124 “La Patria”, Santiago, 2 de Junio de 1939

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principio ya que las bondades de los gobiernos de frentes populares son bastantes dudosos y discutibles. Fracasados en Francia Y México, se han revelado absolutamente incapaces para la acertada gestión gubernativa.”

Es contradictorio que desde las filas del Nacionalsocialismo Chileno, varios meses después del fatídico 5 de Septiembre de 1938, en donde se tomó un camino violentista cuyo fin era acceder al poder, saltándose todos los pasos democráticos establecidos, se cambie a un discurso completamente opuesto, el cual hecha mano a recapacitar en torno a vivir en democracia y la importancia de cuidar su salud. Más bien es un discurso que se adecua a la realidad que vive el debilitado MNS, el cual no da paso ni espera nada bueno del gobierno del Frente Popular, y además augura un futuro oscuro y nefasto.

En éste sentido se recurre al discurso nacionalista en que se califica de valiente y “patriótica” la senda seguida por la Cámara de Diputados, al acoger la acusación en contra del ministro, además se esboza la importancia de asumir una labor fiscalizadora por parte de los partidos que quedaron al margen del Gobierno, debido a que de no ser así el país debería estar preparado para lo que se acerca y espera que ocurra.

La necesidad de legitimarse es bien entendida por los nacis, los cuales a través de su periódico dan a conocer su ideología, programa, y responden artículos que los ningunean. Tal es el caso del artículo ¿Existe Fascismo en Chile?125, escrito por Mario Nieto Serrano, resume en su primer párrafo el contenido de éste: En un artículo aparecido en el diario “El Imparcial” y firmado por un señor Lucio Caro, destinado a demostrar la incongruencia y absurdez de los “Frentes Populares”, de pasada pretende negar la existencia del Fascismo en Chile y

125 “La Patria”, Santiago, 2 de Junio de 1939.

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se da el lujo, además, de ridiculizar si se quiere al Jefe del Partido Nacional Fascista, señor Olivares, haciéndolo aparecer como “el único fascista militante”.

El artículo de Lucio Caro cargado con una profunda dosis de sátira principalmente hacia el “líder” y al movimiento Nacional Fascista en sí, provocó obviamente una rápida respuesta por parte de los nacis chilenos a través de Nieto Serrano. Sostener que el Nacional Socialismo posee solamente más que un adherente es una ofensa que no tiene parangón, debido a que oficialmente el número de militantes asciende a 2800, los cuales cuentan con una seria y gran organización celular en las distintas ciudades de Chile. Principalmente compuesto por jóvenes chilenos, sostienen que adhieren a este, movimiento en gran medida porque “ni la bullada democracia de hoy, ni la que ayer nos rigió, podrá salvar a Chile del tremendo flagelo que roe sus entrañas”, naturalmente esta nueva vía de crecimiento nacional que rompe con los vicios de ayer y hoy es la nueva alternativa ofrecida por el MNS.

Al hacerse mención acerca de la ubicación de estos miembros del MNS y de su paradero, debido a que muchos sostienen “¿dónde están los militantes fascistas que no se ven?”, Nieto responde enérgicamente a que estas “Tonteses”, no hacen mas que ahondar en una profunda desinformación de la población, ya que los militantes aludidos se encuentran trabajando concienzudamente en la Organización del Partido, juntando fuerza para salir a defender la dignidad de Chile, ya que muchas personas que se dicen defensores de la democracia y de la buena salud política del país, no se arriesgan más allá de sus escritorios y se remiten solamente a utilizar palabrería hueca o confeccionar artículos insulsos, que en nada contribuyen al estado Nacional.

Los fascistas chilenos no consideran la división de la arena política en Derechas e Izquierdas, por considerarla absurda y artificial. Sostienen que existen dos campos claramente delineados, y son: el de la Patria y el de la Antipatria, el

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de la civilización y la barbarie. En resumen, el dilema de hoy es: Fascismo o Marxismo, tal cual, no más acepciones que en nada contribuyen a aclarar la interrogante política.

Este el mensaje que pretendió dar el Partido a la sociedad chilena, ante el cual ningún ciudadano puede estar ajeno, debido a la importancia de proteger lo nacional y por supuesto la integridad de la Patria, ante los ataques extranjeros que nada tienen que ver con la realidad de Chile. Un punto muy controvertido defendido por los nacis es el ataque al sufragio universal, el cual es, según su óptica:

La aberración mayor que ha podido caber en la cabeza humana. Y menos en la “democracia” de hoy, sostenida por comunistas, socialistas y otros de su misma especie, que auspician la negación de todo mínimo de derecho lícito otorgado al hombre.

Tal cuestionable afirmación, es contradictoria e inaceptable para cualquier régimen democrático, y constituye uno de los fundamentos propios del totalitarismo, en donde solamente algunos acceden a las decisiones y la gran mayoría acata y ejecuta. Nieto serrano cierra la respuesta del funesto articulo de Caro, con una suerte de arenga , y preparándose para lo venidero:

¡Que la lucha por venir va a ser dura, eso lo sabemos todos los que saludamos el advenimientote una Patria nueva con el brazo derecho extendido hacia el cielo. Y, precisamente, porque sabemos que las horas que se acercan serán bravas y difíciles, es que militamos con orgullo en las filas del Partido Nacional Fascista, y estamos ciertos también, que nuestras legiones redimirán a Chile, porque el fascista confía junto con

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las fuerzas de su ser , en la potencialidad imbatible de su FE y de su ideal!”.126

Los mensajes de acción directa se multiplican en las distintas ediciones de La Patria, uno de esos mensajes se leían de la siguiente manera:

Chileno Despierta! Los tiempos que corremos no son como para entretenernos en discusiones más o menos filosóficas. Son tiempos de acción inmediata. La salud de la Republica exige el máximun de sacrificio de todos los chilenos. Se trata de atajar y derrotar a las hordas rojas enemigas de toda civilización.

La hostilidad hacia el marxismo era entendido como una guerra abierta, en donde los chilenos debían tomar parte activa en el conflicto. Se incitaba a creer a los lectores que la irrupción de un ejército rojo estaba pronta a venir, y que de no alinearse del lado “civilizado”, se era parte de un bando que atentaba en contra de todas las normas políticas, morales y sociales de Occidente.

Una constante también fueron los mensajes con alto contenido nacionalista y que resaltaban la importancia y la grandeza de la Patria por sobre todas las cosas, además de la valentía de los hombres correctos que debían cumplir con su deber nacional:

Las Nacionalidades las forjan Los valientes. Los cobardes, Las sepultan. Si es desgraciado un hombre Sin Patria, es más una Patria

126 el articulo del señor Mario Nieto Serrano, fue enviado el día 6 de Mayo, para su publicación en “El Imparcial”, cuyo diario no lo publicó.

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Sin HOMBRES.

“EL FRENTE POPULAR NOS LLEVARA a la RUINA”. Así titula el Diario La Patria, en su portada el día 1 de agosto de 1939. Este diario de tendencia nacional fascista, titula este articulo así, una vez que ya ha salido del gobierno, por disputas internas. Hace un anuncio catastrófico de la dirección del gobierno, provocando el miedo y el rechazo del sector Frentista.

Un articulo altamente fatalista, El derrumbe de las Democracias127, firmado con las iniciales M.A.A., este trozo periodístico contiene un mensaje altamente catastrófico y pesimista en relación a la realidad nacional de la época.

Es cosa cierta y sabida que asistimos a la etapa final del derrumbe de la “DEMOCRACIA”, que durante años, en su nombre se cometieron los más alevosos atentados contra la Patria y la sociedad.

La introducción es clara y contundente, arrojando un pronóstico final fúnebre en relación al sistema democrático nacional, debido a la llegada del Frente Popular al Gobierno. Una vez más recobra importancia las vejaciones políticas cometidas durante largos años en contra de la Patria, los cuales deben ser denunciados y corregidos.

Éste estado de pesimismo que se quiere transmitir se complementa con una idea desarrollada de lucha entre viejos y nuevos principios que rigen el destino de las sociedades. Es a lo largo de esta lucha, según los nacis, que se ha agudizado una anarquía política, sobre todo en los países en los cuales no se ha llegado a una correcta decisión del panorama social adecuado.

127 “La Patria”, Santiago, 12 de Agosto de 1939, pagina 4.

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Se sostiene que los partidos políticos tradicionales, no han contribuido en nada a la solución de los problemas reales de cada nación, y que sumidos en una honda corrupción, solamente replican el infectado sistema gubernamental imperante. El sistema Liberal esta en crisis, y entre sus principales causantes y culpables están los comunistas y los judíos.

“Las predicciones y los planes de los judíos que dieron forma a “LOS PROTOCOLOS DE LOS SABIOS DE SIÓN”, se comienzan a cumplir. De ahí la creación de los FRENTES POPULARES, caballos de Troya del comunismo, para ir a la cristalización de los nefastos planes del dadaísmo Internacional. Y los FRENTES POPULARES, creados por la inteligencia judía tiende a sepultar a la tan decantada democracia, con las mismas armas que ella brinda. Y una de estas armas, es la mentira organizada que la democracia liberal vino alentando para mejor medio con que satisfacer los apetitos de los menos, de los más inmorales, de los más incapaces, en una palabra, de los rufianes y traficantes de la política.”

La mentira internacional organizada es el arma que destruyó las democracias en países en los cuales los Frentes Populares habían logrado posicionarse en el poder, tal es el caso de Francia y España, en los cuales la decadencia fue notoria. A modo concluyente se señala:

Los FRENTES POPULARES es la última consecuencia nefasta de la democracia liberal, y es la prueba más contundente que afirma el principio Fascista que sostiene el individualismo lleva consigo el germen de su propia destrucción.

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El liberalismo fue nefasto, según el autor, para las democracias en donde se aplicado. Principalmente donde se ejecutó el sistema de Frentes Populares, los cuáles han contribuido al funeral de los valores que rigen las sociedades, finalmente y a modo de cierre del discurso naci catastrofista, la última frase resume con gran contenido esta situación:

La democracia ha muerto, la han sepultado los propios cuervos que ella crió

Unos de los hechos que grafica la creciente tensión entre el Gobierno del Frente Popular y el Partido Nacional Fascista, fue la orden de impedir la Concentración Fascista Nacional, que debía realizarse el domingo 19 de Noviembre en el teatro Victoria de Santiago. Al respecto en la Portada del periódico se titula:

CAMINO a la DICTADURA La libertad no existe en Chile Por orden del Gobierno se impide concentración Fascista--- ¡COMIENZA LA PERSECUSION!128

Esta actividad tenia una gran importancia para los nacis, debido a que por una parte se haría demostración del real poder de convocación del Partido, el cual tenia información de una gran adhesión y expectación ante el evento, especialmente de Valparaíso, Talca, Concepción y Valdivia. Era una instancia para además conocer la línea doctrinaria, propósitos y programas a desarrollar.

La cancelación del permiso por parte de las autoridades generó un profundo malestar al interior de las filas del Partido, debido a que se pasaba a llevar el derecho a reunirse libremente como Partido, el sentir naci lo palpita como una

128 “La Patria”, Santiago, 18 de Noviembre de 1939.

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directa persecución por parte del entonces ministro del Interior Sr. Pedro Alfonso, quien era sindicado como un personaje con un discurso de doble lectura, en gran parte por que anteriormente el Sr. Alfonso se erigía como furioso defensor de las libertades públicas, y ahora un censurador de la Libertad democrática.

El semanario La Patria comenzar a publicar información con anterioridad a la cita, lo cual fue aprovechado por socialistas, comunistas y radicales para comenzar una amplia campaña de difamación, la cual tenia como fin asfixiar al único movimiento nacionalista existente en Chile, a través de los principales órganos de jauría izquierdista: “EL FRENTE POPULAR, “LA HORA” Y “LA CRITICA”, especialmente, se lanzaron con furia sin igual, a la tarea indicada por los amos de las nefastas Internacionales judaica, marxista y masónica.

El hecho constituye una falta ciertamente a la Libertad al interior de Chile, debido a que el joven Partido Nacional Fascista operaba dentro de la legalidad establecida por la constitución, y esta negación del permiso de la concentración del teatro Victoria, puede deberse en gran medida debido a los recientes hechos ocurridos el 5 de Septiembre de 1938, además de que los nacis chilenos propugnaban y creían fervientemente en la guerra entre el Fascismo y el Marxismo, siendo la violencia uno de los principales móviles para lograr sus objetivos. El nacismo chileno transito siempre entre lo ilegal y lo legal dentro del sistema democrático.

A pesar de seguir los conductos regulares para obtener el permiso, los máximos dirigentes del partido no tuvieron respuestas positivas que les permitiera realizar su actividad de manera tranquila y legal. En el n°24 se cierra la portada con la frase victoriosa: ¡Solo el Fascismo salvará a Chile! Lo cual refleja la confianza por revertir la situación nacional, que ellos consideraban de decadente y amoral.

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1940 Hora de balances

Al momento de hacer balances pasado un año de la administración de Pedro Aguirre Cerda, los falangistas adoptan una posición bastante crítica, el titulo de un articulo lo refleja: El fracaso del Frente Popular no debe hacer perder el pueblo sus esperanzas129, revela una reprobación total de la gestión gubernamental, debido a que sienten que ya pasados varios meses en el poder no han realizados los cambios prometidos, y la situación de los mas desposeídos no ha variado. La capacidad de soñar con una realidad mas justa y mejor no debe desaparecer, al contrario debe ser el motor que mueva a los ciudadanos a cambiar la situación actual por la que todos esperan.

Categóricamente señalan:

Ha fracasado el Frente Popular, pero el pueblo de Chile no debe ni puede perder sus esperanzas. Nuestra patria tiene inmensas posibilidades. Tiene derecho a salir de su estado actual para que todos los chilenos vivan más dignamente, vivan mejor moral y materialmente. Hay que reforzar las esperanzas del pueblo. Hay que aumentar sus energías morales. Para eso está de pie la Falange Nacional. Lo que otros han sido incapaces de hacer, lo haremos nosotros junto a lo mas sano que haya en todos los sectores del país.

El partido comunista comenzó a elevar su popularidad y adhesión en la clase trabajadora con el pasar de los años, clase a la cual iban también dirigida la atención de la Falange Nacional, la que en un comienzo se caracterizo por su trabajo en sindicatos lo cual se extendía además a sus familias. La irrupción en este terreno por razones obvias no fue mirado con buenos ojos por los dirigentes

129 Diario El Lircay, Primera semana de marzo de 1940.

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falangistas los cuales veían además una desunión al interior del conglomerado derechista

Al respecto un singular artículo nos revela el sentir anteriormente descrito. Con el titulo: “El comunismo contra la patria: solo la voluntad revolucionaria, creadora y constructiva del pueblo de Chile podrá vencer el peligro bolchevista. Un derechismo hueco es incapaz de luchar y de vencer”130, se intenta hacer hincapié en el peligro que constituye el Partido Comunista y la pasividad de un Gobierno sumido en un desconcierto total.

Al servicio de consignas y de intereses internacionales, contrarios al interés es la patria y del pueblo de Chile, defensor de las contradicciones de la Rusia Soviética y de su política imperialista, constituye el Partido Comunista uno de los más graves peligros para nuestra nacionalidad, y para el sentido cristiano que es su fundamento. Peligro que nosotros señalamos en toda su desnudez, peligro contra el cual combatimos con energía, peligro que no puede ser conjurado por una política que se proponga la “defensa del orden”, “la confianza del capital”, y demás lugares comunes derechistas, que a nadie convencen, sino por una política social seria y profunda, que termine con desigualdades irritantes en la vida económica que lleve a las masas populares la justicia social que necesitan y que con toda razón piden y exigen.

Al Partido Comunista no le interesa la solución de los problemas sociales. Por el contrario, sabe que mientras más duras sean las condiciones de la vida de la masa trabajadora más propicio será el ambiente para preparar su táctica y su

130 “El Lircay”, Santiago, Segunda semana de junio de 1940.

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acción sovietizante. Tampoco le interesan, ni le pueden interesar, ni la democracia ni la ley.

El constante discurso de descrédito se hace notorio y punzante, el Frente Popular y los partidos que lo componen, por una parte son parte del viejo modelo y no ofrecen ninguna solución real al estado nacional, por otro lado los partidos de Izquierda solo preocupados de instaurar la revolución y la anarquía, no constituyen un real esfuerzo por engrandecer la Patria, ni formar personas que trabajen para engrandecer la sociedad, sino más bien persiguen con discursos fingidos de justicia social, la implantación de la dictadura del Proletariado. La voz reprobadora de los Partidos Liberal y Conservador a la gestión del Gobierno del Frente Popular se hizo sentir con fuerza el año 1940 a través de la publicación de un folleto llamado ¿Por qué nos abstenemos?, el cual está basado en artículos de prensa, declaraciones y por sobre todo en discursos pronunciados en el Senado por los principales dirigentes de la Derecha chilena, todos referidos a la elección del 17 de Noviembre para llenar la vacante senatorial de Valparaíso y Aconcagua.

Un gran contenido de “pánico moral” contienen las páginas, las cuales intentan reflejar una vez más el mensaje directo con una alta dosis de desprestigio y fuertemente catastrofista, acerca de la realidad chilena. El proceso electivo que debía desarrollarse con plena tranquilidad de acuerdo a la consolidada tradición cívica lograda por Chile, no fue sino más que una nueva demostración de una honda división entre oficialismo y oposición.

Un relato que grafica de sobremanera lo vivido ese día de ejercicio político, descrito por la oposición es el siguiente: “las turbas aleccionadas por los agentes comunistas, dominaba la calle, implantando desde las primeras horas, un clima de terror que hizo imposible la concurrencia a las urnas de miles de ciudadanos que deseaban sufragar por nuestro

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candidato. A otros muchos se les obligó, con amenazas y golpes, a cambiar su voto, arrebatándoles violentamente el del señor Matte, exigiéndoles, por la fuerza que sufragaran por el candidato de los comunistas”. Es por esta razón que los partidos de Derecha acordaron, después de varias e intensas reuniones de las Juntas Directivas, la abstinencia electoral y el retiro de los candidatos a Senadores y Diputados del año 1941.

Debido a los acontecimientos y de la manera en que los presentan la derecha tradicional chilena, más bien el proceso se trató de un batalla en desigualdad de condiciones, por una parte los grupos de extrema Izquierda tuvieron libre albedrío para realizar todo tipos de desmanes y de amedentramiento a los votantes, por su parte grupos de nacis que llegaron a votar y a fiscalizar el proceso en las distintas ciudades eran revisados celosamente por personal de carabineros, los cuales requisaban todo tipo de armamentos que portaban. El espíritu derechista ampliamente autoproclamado como apegado a la tradición democrática no puede exponer la vida de nuestros correligionarios y simpatizantes, contra una turba armada y ensordecida, el discurso además de presenta características confrontacionales y de una real guerra entre comunismo y democracia, presenta además fuertes tintes fúnebres, lo cual queda de manifiesto con la frase “ la Democracia agoniza en nuestro país ante el embate de la horda comunista”131.

Los discursos que aparecen, y que fueron pronunciados en la Cámara de Senadores, tienen como eje central el clima criticar lo vivido en las elecciones del Domingo 17 de Noviembre, las cuales arrojan importantes lecturas del futuro nacional. En una primera instancia el discurso de don Eduardo Moore Montero, ahonda en la temática de lo que significó la pasada elección, en donde se vió claramente que es imposible actuar políticamente dentro de las normas fijadas por el Frente Popular. Denuncia la preparación de un ambiente de Terror, en donde el

131 ¿Por qué nos abstenemos?, Partido Conservador/Partido Liberal, Santiago, 1940, pág 4.

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fin principal de los elementos agitadores con la masa votante es exaltarlos y llevarlos a la vía violentista, todo esto utilizando los principales medios de comunicación oficialistas, los cuales en ningún momento sufrieron cortes o censura, según afirma Moore. El senador declara que alrededor de las 9:30 de la mañana se comenzaron a congregar las turbas izquierdistas comunistas y elementos de la Confederación de Trabajadores de Chile(C.T.CH) de Santiago, los cuales se dispersaron e hicieron presente en los Andes, Cabildo, Chincolco, Putaendo, Ocoa, Petorca, Nogales, Limache, Villa Alemana, Viña del Mar y Valparaíso, lugares en los cuales se sucedieron variados conflictos, agresiones y persecución de los votantes y de los principales personajes políticos de oposición. Don Fernando Aldunate Errázuriz, Presidente del Partido Conservador, es aun categórico: “el Domingo pasado ha sido un día de duelo para el país, porque ha quedado definitivamente sepultado nuestro régimen democrático de Gobierno”132, el mensaje de la oposición era claro en sostener que la situación democrática chilena estaba muerta, el gran y casi religioso respeto hacia la tradición cívica alcanzada el ultimo tiempo, se desvanecía bajo el Gobierno Frentista, en gran parte por permitir la violencia como base legítima de triunfo.

Los discursos de Don Horacio Walker Larrain133 y de Don Manuel Garretón134, insisten en la misma línea argumentativa de “pánico moral”, los cuales con frases como asistimos a la agonía del Régimen Democrático, ahondan en una realidad creada y maquillada la cual genera alarma y sorpresa en la población.

Principalmente existe un eje conductor en los argumentos y hechos presentados por los honorables, exposición del clima de violencia en que se desarrolló el proceso eleccionario, en gran parte apoyado por el oficialismo y el Gobierno en particular, los cuales han sido los grande culpables de la situación de decadencia política y civil en que se encuentra el país, ya que al interior del conglomerado frentistas se desenvuelve el elemento comunista, personajes que no ayudan en

132 ¿Por qué nos obtenemos?...Op. cit., p. 31. 133 Ex presidente del Partido Conservador y Senador por Santiago. 134 Presidente de la Falange Nacional.

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nada al engrandecimiento de la Patria, incluyendo valores amorales e individualistas, lo que corrompe enormemente a la sociedad al sembrar la división y avalar la violencia en la arena política. Son por estos motivos que los partidos de Derecha no desean participar de un futuro proceso de elecciones de 1941, debido a que el panorama es altamente adverso, señalando que “va a ser mucho más violenta, más trágica y más intolerable”135. Los discursos pronunciados buscaban poner una alarma catastrofista de la realidad nacional próxima, la cual fue acompañada con descalificaciones y descrédito hacia principalmente el Partido Comunista, blanco de los dardos en la exposición de los hechos por los distintos senadores citados.

1941 Se revitaliza la Moral del Pueblo.

HA PASADO LA HORA DEL EGOISMO Y de la supremacía partidista Dice el Jefe del Nacismo en un manifiesto al país136

El noveno aniversario del MNS es tomado como la instancia precisa para hacer un balance de la labor desarrollada por los nacis chilenos, los alcances de su programa doctrinario, de paso criticar al sistema político y el Gobierno del Frente Popular mediante un discurso catastrófico.

¡Nunca fue mas tétrico el horizonte nacional que en estos instantes!. ¡Nunca se observó más manifiesta la mueca de la decepción en los labios de todos los chilenos de buena voluntad!.

135 ¿Por qué nos abstenemos? Ibidem., pág. 28 136 “La Patria”, Santiago, 9 de Abril de 1941

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Al cumplir el Nacismo nueve años de existencia encuentra nuestra patria mas asediada que nunca por los enemigos de la chilenidad que, recurriendo a todos los medios, quieren entronizar en nuestro país concepciones materialistas e ideologías perversas que están reñidas con el sentimiento nacional. Asistimos chilenos a una hora crucial en el proceso histórico de Chile. La democracia, lo que hasta ayer por tal se entendió, es un cadáver que sólo los politiqueros de profesión no quieren reconocer porque ese reconocimiento les significaría el derrumbe del andamiaje que les permitió ocultar hasta hoy su incapacidad y abierta inmoralidad.

El discurso nacista continua siendo catastrófico y abierto a la confrontación en contra de lo que ellos consideran justo e ideal. Afirman que los chilenos que adoptan ideologías europeas especialmente marxista y socialista, no son buenos chilenos, debido a que éstas ahondan en un acentuado individualismo, mortal para cualquier democracia y nación.

El sufragio universal, es un ambiente mangoneado por comunistas y masones; envenenado criminalmente por estos enemigos de todas las patrias, es una ironía y una utopia que jamás podrá reflejar el sentir y la voluntad de la ciudadanía consciente.

Continúan sosteniendo que el sufragio universal no es un reflejo fidedigno de la voluntad de la sociedad, debido a que muchas personas son altamente influenciables, en parte a su ingreso socioeconómico y nivel educacional. En este punto se puede ver claramente el pensamiento elitista de la doctrina, los que poseen sangre pura, dinero y poder deben regir y tomar las decisiones de las sociedades.

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Resulta bastante anecdótico y contradictorio el ataque y reprobación de las ideologías extranjeras por parte del MNS, siendo que las ideologías en que basan su concepción de la realidad, tiene su origen en Italia y Alemania, las cuales se desarrollaron en un panorama histórico y sociocultural completamente distinto al chileno, lo que constituye una particularidad del movimiento.

El partido ya en baja insiste en su discurso, siendo ellos parte del sistema parlamentario y partidista nacional, en criticar abiertamente estos sistemas, grandes culpables de los males que han aquejado a Chile durante su vida Republicana, lo que queda graficado por el contenido de las palabras y la descripción de ellas, insistiendo en que si no se pone atajo a esta situación un destino fatal y caótico envolverá a Chile y al ciudadano bien intencionado.

Derechas e Izquierdas son conceptos estériles e incompletos que no tiene asidero en la realidad nacional. En la actualidad existe una sola y honda división: la de los chilenos y la de los antichilenos. Imperativo fatal de Patria o anti Patria. Ni las Izquierdas corrompidas ni las derechas caducas podrán salvar el decoro de Chile; lograr que cada hombre viva como hombre, ni podrá engendrar una conciencia nacional basada en el sacrificio y el deber. Son inútiles los “FRENTES” de cualquiera característica y denominación para lograr la resurrección de una nacionalidad que, antes que nada, necesita disciplina y virilidad combativa. ¡No se logró la independencia de Chile con retórica ni con agrupamiento de individuos, sino con sacrificios, con sangre, nacida de una Fe en su Ideal superior! Solo una entidad estructurada en un sólido y macizo concepto espiritual salvará a Chile del desastre final y definitivo.

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Ha pasado la hora del egoísmo y de la supremacía de partidos, pues éstos han demostrado su inutilidad y la gravedad del presente, el incierto porvenir que se avecina exigen que esta hora sea de acción enérgica e inmediata.

La tarea principal del MNS es hacer frente a estas ideologías extranjeras, trabajar para que las personas y los ciudadanos bien intencionados y críticos de la realidad nacional. Es importante que entiendan la necesidad de aunar fuerzas para resistir los embates de las “hordas rojas”, construir un Chile que trabaje por Chile, en donde el comienzo es limpiar el país del “infeccioso germen comunista”. La idea de engrandecer La Patria es nombrada a menudo y constituye el fin ultimo de los nacis, los jóvenes chilenos deben entender que la única solución para mejorar la ya alicaída situación política-social y romper con las viejas estructuras establecidas que estancan el desarrollo nacional, es adherir al ideario Fascista.

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Conclusión

La irrupción y consolidación de la ideología y partidos de Izquierda provocó un notorio malestar en las derechas chilenas (tradicional, socialcristiana y nacionalista), las cuales vieron peligrar la hegemonía ejercida desde la creación de la República, ante lo cual debían reaccionar mediante información y discursos dados a conocer en varios medios escritos de la época y en el Senado. Nuestra hipótesis de trabajo queda comprobada totalmente, debido a que la derecha chilena reaccionó con un discurso muchas veces desplegando un fuerte contenido de descrédito, con una alta dosis de decadencia que afectaría a todas las esferas de la sociedad, en caso de adopción de las nuevas ideologías de Izquierda, las cuales a su juicio no correspondían a la sociedad chilena, constituyendo una seria tergiversación de la realidad objetiva. Se logró imponer por varios años la idea de que la aplicabilidad de la ideología Socialista y por sobre todo la Comunista no era factible para la sociedad, las mejores y cambios planteados por ellas era un tema que las clases dirigentes no estaban dispuestas a tranzar tan fácilmente.

A través de los distintos discursos y sus contenidos catastrofistas se trató y se logró dejar la percepción a la población de que realmente lo que se venia era una guerra entre la Democracia y la Barbarie, entre los buenos ciudadanos y las hostiles hordas rojas, las cuales propugnaban valores fuertemente cuestionables.

Uno de los logros que se materializó a través de los distintos discursos y artículos de prensa, fue satanizar y estigmatizar al Partido Comunista, como el partido de los enemigos de la Patria, del cual no se podía esperar nada bueno y constructivo., percepción que aún se tiene en algunos sectores de la sociedad.

Darse cuenta de que en un principio la organización y concientización de los trabajadores chilenos corrió por cuenta de jóvenes de derecha, lugar que posteriormente ocupó los partidos de Izquierda, es un punto a tener en cuenta, debido a que obviamente fue una situación que molestó y preocupo a los

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dirigentes derechistas, que veían con recelo la irrupción de estos nuevos grupos en esferas anteriormente controladas por su mensaje. Calificar al elemento de Izquierda como un elemento subversivo y violento fue uno de los mensajes derechistas que aún tiene repercusión.

Entender a la clase dirigente de nuestro país es una tarea necesaria, la cual permite entender de mejor manera los distintos procesos históricos de Chile, y tener en cuenta el comportamiento que han tenido durante los años de Historia nacional. Caracterizar a estos grupos, nos permitió darnos cuenta que durante el periodo estudiado, el Partido Conservador y Liberal, ambos con una amplia tradición partidista, diferían en temas netamente de influencia eclesiástica en la política, pero sin embargo eran capaces de reconocerse y actuar como un bloque compacto y aislado. El caso de los jóvenes conservadores de la época, corresponde un caso particular, debido a que muchas aristas de su ideología, contenían un fuerte contenido de justicia social y de un discurso revolucionario y critico de la realidad que vivía Chile en ese entonces. El Movimiento Nacional Socialista constituye un caso particular de fascismo y nacismo entremezclados, la creencia de poder cambiar el gobierno bajo estos preceptos, los llevo en muchos casos a utilizar la vía armamentista, lo cual los hizo equivocar el rumbo, lo que provocó la decadencia del movimiento.

La matanza del seguro obrero, debe ser un hecho re evaluado por la Historia nacional, debido a que tuvo enorme repercusión en las elecciones presidenciales de 1938, revisar el actuar del Gobierno y las Fuerzas Armadas en el hecho es primordial para devolverles reconocimiento a los jóvenes asesinados en el intento golpista, que equivocados o no en sus postulados y actuar, no merecían el fina que tuvieron.

Sorprende la capacidad crítica de la Falange Nacional hacia incluso el partido del cual nacieron, principalmente debido a que consideraban que todo buen cristiano, debía regirse por la doctrina social ejercida por Cristo para

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desenvolverse en todo ámbito. La política llevada a cabo por el Partido Nacional, nunca convenció a estos jóvenes, los cuales a pesar de varios esfuerzos, no tuvieron más salida que formar un grupo independiente de la dirección de los Conservadores.

El análisis de los discursos principalmente de los Diarios el Mercurio, La Nación, el Lircay y La Patria, nos permitió identificar a estos diarios y periódicos como las principales fuentes de expresión del pensamiento Derechista en Chile. El mensaje dado a conocer contenía varios puntos dilucidados. La inaplicabilidad del modelo Frentista era argumentado con los casos recientes de España e Italia, los cuales no tuvieron el éxito esperado, lo cual hacia pensar que sucedería lo mismo en nuestro país. El marxismo no era bienvenido como ideología que tuviera acceso al poder, en porte porque alentaba el individualismo en las personas, desechaba la Religión como base de un futuro Estado, contenía un discurso de justicia Social irreal, y por sobre todo se valía de la democracia para llegar a un estado de tiranía y dictadura, atentando contra la libertad y la democracia republicana.

Los dardos del discurso derechista iba dirigido a figuras izquierdistas, cuestionan su actuar y dichos, además un punto continuo de ataque fueron los partidos que componían el Frente Popular, los cuales eran sindicados como falsos representantes de la clase trabajadora, y en el caso del partido Radical como cúpula de los mandatos de las logias masónicas y judías chilenas. Principalmente el contenido del discurso de pánico moral, era un discurso cargado a las frases fúnebres, apocalípticas, pesimistas y catastróficas, acerca del futuro cercano y de la realidad nacional, en cuanto se dieran cabida al Frente Popular en la política chilena. También en sus líneas se podía apreciar un alto contenido moralizador y nacionalista, usaban en gran medida la Patria como enferma que había que sanar y cuidar ante las hordas rojas que se aproximaban.

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Tesis de Grado: • Toro Bustos, Miguel Alejandro; La Komintern y su Proyección Mundial, 1919-1943. 2007, memoria para optar al título de Profesor en Educación Media en Historia Y Geografía. Chillan. Universidad del Bio Bio. • Silvia Castillo; Inserción del Partido Falange Nacional en el Sistema Político Chileno 1939-1948, tesis para optar al grado de Licenciado en Historia, Universidad Católica de Chile, Santiago, 1991.

Conferencias: • Buchrucker, Cristian; Identidades nacionales y cultura política antidemocrática. Trayectorias históricas del Cono Sur en el siglo XX, ponencia en el Congreso “La construcción de las identidades nacionales en el mundo hispánico. Ideas, lenguajes políticos e imaginarios culturales”, Valencia, 2002.

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