Original Para Impresion
Total Page:16
File Type:pdf, Size:1020Kb
MEMORIA HISTÓRICA DE LAS INVESTIGACIONES PERIODO DICTADURAS 1964-1982 ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA CONTENIDO PRESENTACIÓN PROLOGO RESUMEN EJECUTIVO RESUMEN DEL CONTENIDO DE 7 TOMOS A. Contexto Histórico B. Libertades individuales C. Capítulo I Masacres Mineras D. Capítulo II Masacre de San Juan E. Capítulo III Masacre en la Universidad Gabriel René Moreno F. Capítulo IV Masacre del Valle G. Capítulo VI Masacre de Todos Santos H. Capítulo VII Masacre de la Harrington I. Ejecuciones Sumarias Asesinato durante la Guerrilla de Ñancahuazú J. Asesinatos, Desapariciones y ejecuciones en la Guerrilla de Teoponte K. Caso Marcelo Quiroga Santa Cruz L. Caso Carlos Flores Bedregal M. Asesinato Luis Espinal N. Caso Isaac Camacho O. Caso Andrés Selich – Joaquín Zenteno Anaya P. Conclusiones y Recomendaciones Ni olvido ni perdón 1 2 2 Ni olvido ni perdón 3 PRESENTACIÓN Cumpliendo el mandato de la Ley 879 promulgada por el Presidente Evo Morales Ayma (diciembre 23, 2016) y mandato del Pueblo boliviano. LA COMISION DE LA VERDAD DE BOLIVIA tiene el honor de presentar la Memoria Histórica que refleja las investigaciones y hallazgos de los hechos acontecidos del 4 de noviembre de 1964 al 10 de octubre de 1982 que atentaron contra la vida y los derechos del pueblo. Este trabajo tanto para los Comisionados como para el Equipo Técnico multidisciplinario significo horas, días, semanas y meses de búsqueda e, investigación, avances y retrocesos, alegrías y desencantos. Al constatar tanto odio a la vida y a los derechos humanos, surgieron las preguntas "Por qué tanta crueldad?" "Cuáles fueron los motivos para secuestrar, torturar y matar?" "Quien o quienes estuvieron detrás de esto?" La respuesta: El cumplimiento de las acciones represivas definidas por el “PLAN CONDOR" que se organizó y desarrolló en la década de los años '70 al '80 en el marco de la "DOCTRINA DE LA SEGURIDAD NACIONAL” elaborada por los ESTADOS UNIDOS DE NORTE AMERICA y ejecutada fielmente por regímenes militares dictatoriales de ARGENTINA, CHILE, PARAGUAY, URUGUAY Y BOLIVIA, además del BRASIL, PERU, ECUADOR, COLOMBIA y VENEZUELA que se sumaron progresiva y ágilmente. Al estudiar e investigar estos hechos, comprendimos la urgencia de ver la historia desde la dimensión política, que nos empuja a discutir su sentido mismo. Los planes elaborados en el Norte para América Latina estaban bajo el signo del subdesarrollo, que no solo vetaba el disfrutar los bienes materiales, las realizaciones personales de los actores locales, pero sobre todo del control de todas las acciones gubernamentales de los países del continente como parte de Ni olvido ni perdón 3 4 4 Ni olvido ni perdón Ni olvido ni perdón 5 PRÓLOGO La Comisión de la Verdad creada por ley 879 del 23 de diciembre de 2016, fue producto de largos años de luchas que los familiares de las víctimas sostuvieron desde el año 1970. La insistencia de ellos particularmente de madres, hermanas y esposas por el esclarecimiento de los hechos y encuentro de la verdad respecto del destino de las personas que, habiendo sido detenidas continuaban desaparecidas, asesinados bajo la figura de fugas, torturas o las decenas de asesinados en poblaciones mineras e indígenas. Bajo el pretexto de subversión el Ejército ejecutó de manera reiterada estas acciones durante todos los años de la dictadura a lo que se suma la lucha de las víctimas de torturas, persecuciones, destierros, y todo tipo de violaciones a los derechos individuales y colectivos que sufrió la población durante todo ese periodo. Fueron constantes las agresiones contra organizaciones sindicales, religiosas y universitarias, entre las que se remarcan el cierre de universidades y persecución, particularmente a docentes y estudiantes universitarios; las aprehensión a religiosos, religiosas y laicos; el seguimiento y detención de todo tipo de personas cuyo trabajo se encontrase relacionado con la población; la vigilancia permanente y mediante agentes civiles a maestros, mineros, activistas políticos de izquierda a la que se añadía la suspensión de garantías de reunión y organización. Todas estas acciones más las constantes amenazas, caracterizaron la forma de terror utilizados durante todos los años de las dictaduras. La Doctrina de la Seguridad Nacional planteada por los Estados Unidos dentro el contexto de la Guerra Fría, estuvo dirigida a modificar el rol o misión de las Fuerzas Armadas de los países, que de guardianes de la soberanía territorial pasaron a combatir a supuestos enemigos internos, identificados como las organizaciones, personas o movimientos populares que bajo sus acciones apoyasen las ideas del socialismo o el comunismo. Esta Doctrina alentó la organización del terrorífico Plan Cóndor organizado y articulado por las dictaduras de los países del Cono Sur: Chile, Argentina, 6 Ni olvido ni perdón 7 Uruguay y Bolivia, al que se sumó diligentemente la dictadura paraguaya y posteriormente otros países. El Plan Cóndor articuló las acciones de los gobiernos y mecanismos de inteligencia y represión de los 5 países, que más allá del intercambio de información de la denominada insurgencia, articuló una dinámica de acciones materiales de aparatos represivos en otros territorios, de manera tal que, en nuestro caso, Bolivia, significó la presencia de aparatos represivos particularmente argentino durante interrogatorios. Otra acción del Plan Cóndor era la entrega de activistas y personas incluyendo niños, por el aparato represivo boliviano a la Argentina y a Chile, sin que medie trámite legal alguno. Hoy muchos de ellos continúan aun desaparecidos. Cabe señalar que, en esos años, el secuestro por parte de los organismos represivos era una acción “normal” pues se permitía el traslado de activistas desde el Perú hasta la Argentina por territorio boliviano. Cabe resaltar de ese tiempo, el importante número de bolivianos apresados, asesinados y desaparecidos particularmente en la Argentina. El tiempo que duró el periodo de una débil democracia en Bolivia, después de la dictadura de Banzer, fue corto y plagado de agresiones, asesinatos y golpes de Estado, con resultados deplorables como la suspensión del juicio a Banzer, el asesinato a connotados políticos y activistas, apresamientos y persecuciones, que lastimosamente aún resuenan sus ecos hasta hace muy poco en nuestro país. Estos hechos y el interés de los sectores empresariales, grupos de poder y conservadores en el poder evitaron que las iniciativas de esclarecimiento de todos estos hechos fueran factibles de realizar hasta ahora. Es importante señalar que contrariamente a la historia de la búsqueda de la Verdad en Latinoamérica, Bolivia fue el primer país en constituir una organización encargada de investigar el destino de las personas de detenidas desaparecidas. Fue el Dr. Hernán Siles Suazo que a escasos días de asumir la presidencia en octubre de 1982 emitió el DS 19241 constituyendo la Comisión Nacional de Investigación de Ciudadanos Desaparecidos. Irónicamente, Bolivia Ni olvido ni perdón 7 8 es a la vez el último país en organizar una Comisión de la Verdad en el subcontinente. Es necesario indicar que Bolivia también se distinguió por ser el primer país que enjuició y castigó al menos uno de los dictadores, Luis García Meza y el grupo de actores bajo su mando. Sin embargo y contrariamente los juicios a los demás dictadores y represores no siguieron el mismo camino o empeño, quedándole hoy al Estado una enorme deuda moral con la historia y la población boliviana. El paradero de las decenas de desaparecidos, aún sigue sin conocerse, para angustia de sus familiares, y de los pocos que se lograron encontrar, los autores siguen sin ser enjuiciados. La posibilidad de alcanzar alguna reparación a las víctimas por la violencia política durante las dictaduras, fue alentada el año 2004 bajo una ley insuficiente y tramposa, puesto que las exigencias para ser incorporado en la lista de posibles beneficiarios eran complejas y hasta imposibles de resolver por la poca claridad en los procedimientos y calificación de las solicitudes. Esto generó injustas exclusiones de las listas a personas que evidentemente fueron víctimas de las dictaduras. Esa misma Ley 2640 del 11 de marzo de 2004, ordenó al Estado destinar solo un 20% de fuentes estatales, imposibilitando la posibilidad de cumplir al menos con el grupo calificado, con las consecuencias que hasta hoy persisten. Era absolutamente incompetente, plantear que sea la cooperación internacional, que se encargue de financiar el restante 80%. Los miembros de la Comisión de la Verdad, posesionados el 21 de agosto de 2017, después de 8 meses de aprobada la ley, lo hicieron con el siguiente Objeto “Esclarecer los asesinatos, desapariciones forzadas, torturas, detenciones arbitrarias y violencia sexual, entendidas como violaciones graves de derechos humanos, fundados en motivos políticos e ideológicos, acontecidos en Bolivia del 4 de noviembre de 1964 al 10 de octubre 1982”, a la vez que los objetivos fueron: “a) Revisar y analizar las condiciones geopolíticas, políticas, sociales, económicas y culturales en el marco de las cuales se dio lugar a la violación de 8 Ni olvido ni perdón 9 derechos humanos y la comisión de delitos de lesa humanidad contra la población boliviana, como aporte a la construcción de la memoria histórica. b) Contribuir al esclarecimiento de la verdad acerca de los casos de violaciones graves de derechos humanos, a fin de evitar la impunidad. c) Investigar y recabar información y documentación que permita establecer indicios de responsabilidades civiles y penales de los posibles autores intelectuales y materiales, instigadores, cómplices y encubridores en los casos de grave violación de derechos humanos, ocurridos dentro del periodo” antes indicado, 4 noviembre de 1964 al 10 de octubre 1982. d) Recomendar el diseño de políticas públicas de prevención y no repetición de violaciones graves de derechos humanos y las medidas de satisfacción a las víctimas, en el marco de la normativa interna, así como del derecho Internacional en materia de derechos humanos”. Los 24 meses de funcionamiento de la Comisión de la Verdad no estuvo exento de complicaciones burocráticas y financieras.