Cantos Marianos
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CANTOS MARIANOS 1.-HIMNO A LA VIRGEN DEL CARMEN Virgen del Carmen Madre querida tuya es mi vida, vela por mí y cuando logre dejar este suelo llévame al cielo muy cerca de ti. Ave, Ave Madre del Carmelo (Bis) Virgen del Carmen, luz de mi vida me alumbre siempre hasta morir, de tus miradas fulgor perdurable que el mismo Cristo en ti encendió Virgen del Carmen dulce consuelo en tristes horas de cruel dolor a ti dirijo mis ojos llorosos porque en ti siempre la paz yo hallé. De ese tu Niño que nos sonríe, desde tus brazos encantador, de nuestras culpas alcánzanos Madre, santificante y dulce perdón. 2.-Salve, Salve Salve, Salve cantaba María, qué más pura que tú solo Dios y en el cielo una voz repetía: Más que tú solo Dios, solo Dios. Con torrente de luz que te inunda los Arcángeles besan tus pies, las estrellas tu frente circunda y hasta Dios complacido te ve. Pues llamándote, pura y sin mancha De rodillas los mundos están; Y tu espíritu arroba y ensancha, Tanta fe, tanto amor tan afán, ¡Ah! Bendito que el Señor en la tierra, pura y limpia te pudo formar, Como forma el diamante la cierra como cuaja las perlas el mar. Y al mirarte entre el ser y la nada Modulando tu cuerpo exclamó, Desde el seno será Inmaculado, Si del suyo nacer debo yo. Flores, flores las nubes derramen, De la Virgen sin mancha en honor Y su reina los cielos la llaman Y los hombres su madre y su amor. 3.-Del Carmen Bella Flor Dios te Salve María del Carmen bella flor Salve, esperanza mía Salva, raudal de amor(Bis) Subió una nubecilla del fondo de la mar vertió sobre el Carmelo, la lluvia torrencial, Tú Escapulario santo emblema de tu amor, que libra del infierno al pobre pecador. Sé nuestra protectora pedimos con fervor y danos oh Señora tu maternal favor. Tú eres nuestra esperanza consuelo del mortal pedimos que nos lleves al puerto celestial. Danos Madre querida tu gracia eficaz Y al fin de nuestra vida recíbanos en paz. 4 .-Te Aclamamos Te aclamamos, abogada Madre amada del Creador. Bella rosa purpurina, peregrina del amor, Flor preciosa trinitaria, pasionaria del dolor. Blanco lirio de belleza, de pureza sin rival, que perfuma con su escucha, la existencia del mortal. Y ese Niño que tú amabas, que cuidabas con ardor; ese Niño admirado fue llamado Redentor. Blanco lirio consagrado, salpicado de Jesús, con la sangre que brotará en el arca de la cruz. Flor de flores candorosa tierna rosa del Señor; que ostentaba la hechicera primavera del dolor. Madre amante brida a mi alma, Dulce calma de virtud; y protege Bondadosa a los hijos de tu amor. A la vista del Calvario, del sudario del pesar; ¡Ah! Cubierta suspirabas comenzabas a llorar. Contemplando Madre mía, la agonía de pasión se agobiaba, tristemente tu doliente corazón. 5 .-María Tú Eres Mi Madre María tú eres mi Madre, María tú eres mi amor, María Madre mía, yo te doy mi corazón. María, cuyo nombre es música más suave que el cántico del Ave, y que del agua el son. Tú nombre sea fuente do beba el alma mía, y halle la alegría mi pobre corazón. María, cuyo nombre, como conjuro santo ahuyenta con espanto la saña de Luzbel, escríbeme en el pecho tu nombre omnipotente, porque jamás intente aposentarse en él. María soberana, de cuantos el orbe encierra, rocío de la tierra, estrella de la mar, Tu nombre misterioso será el fanal tranquilo que alumbrará el asilo de mi terreno hogar. María, cuyo nombre la divinal justicia al pecador propicia se inclina a perdonar, tu nombre sea cuando la eternidad se abra la ultima palabra que exhale al expirar. 6 .- ¡Oh María! Oh María Madre mía, Oh consuelo del mortal, amparadme y guiadme a la patria celestial. Con el ángel de María, las grandezas celebrad, Transportados de alegría sus finezas publicad. Salve júbilo del cielo, del excelso dulce imán, salve hechizo de este suelo triunfadora de Satán. Quien a ti ferviente clama, Halla gloria en el pesar, Pues tu nombre luz derrama gozo y bálsamo sin par. De sus gracias tesorera, la nombró su Hacedor, con tal Madre y medianera, no temas pues pecador. Pues te llamo con fe viva, muestra oh Madre tu bondad, a mí vuelve compasiva esos tus ojos de piedad. Jardín valle de dulzuras, en mi pecho el Hacedor, en el broten flores puras, frutos de tu santo amor... Hijo fiel quisiera amarte y por ti Solo vivir y por premio de ensalzarte ensalzándote morir. 7 .- Gracias Madre Gracias Madre por tu presencia tu nos llevas a Jesús. Gracias Madre por tu silencio, tú estimulas nuestra fe. Gracias porque eres muy sencilla. gracias porque eres llena de gracia, gracias Madre gracias. Gracias por tu vida tan callada, gracias porque vives la palabra. Gracias Madre, gracias. Gracias por tu corazón abierto, ¿gracias por vivir un Sí constante, gracias, Madre gracias. Porque te abandonas en sus manos, Porque siempre vives la esperanza, Gracias, Madre gracias. Gracias porque tú sigues amando, ¿gracias porque tú vas actuando gracias, Madre gracias. Porque lo haces todo entre nosotros, Porque tú nos quiere como a hijos Gracias, Madre gracias. 8.- Santa María del Caminar a Dios Santa María del caminar a Dios Da ritmo al paso de cada día. Ritmo sencillo, acomodado A lo que puedo, a lo que soy, Sin ansias grandes que me superen Que me preocupen, o que me inquieten, Despacio andando contigo voy. Sin detenerse a medio camino buscando siempre con inquietud ante mi llaga viva ofendida con esperanza, con paz, con fe, sin que se apague nunca su luz. Y cuando llegue, el momento duro en que las cosas se ven oscuras que tu mirada me ayuden Virgen, a superarlas con sencillez y con pobreza en el corazón. 9.- María la Madre Buena Tantas cosas en la vida nos ofrece en plenitud y no son más que mentiras que desgastan la inquietud Tú has llenado mi existencia Al quererme de verdad, Yo quisiera, Madre buena Amarte más. En silencio escuchabas, la Palabra de Jesús y la hacías pan de vida meditando en tu interior la semilla que ha caído ya germina y está en flor con el corazón en fiesta cantaré. Ave María, Ave María (Bis) Desde que yo era muy niño has estado junto a mí y guiado de tu mano Aprendí a decir sí. Al calor de la esperanza, nunca se enfrió mofe, y en la noche más oscura fuiste luz. No me dejes Madre mía ven conmigo al caminar, quiero compartir mi vida y crear fraternidad. Muchas cosas en nosotros son el fruto de tu amor. La plegaria más sencilla cantaré. 10 .- Señora de la Paz Señora de la paz y de la libertad enséñanos a amar enséñanos a amar De nuestra tristeza libéranos con tu alegría de nuestras angustias libéranos con tu paz. De nuestros temores, Libéranos con tu esperanza Libéranos Señora de la paz. De nuestras miserias libéranos con tu riqueza de nuestra hambre libéranos con tu paz. Al alma sedienta libéranos con tu agua, libéranos, Señora de la paz De nuestro cansancio, libéranos con tu entrega; de nuestra soberbia, libéranos con tu humildad de nuestro egoísmo libéranos con tu entrega libéranos, Señora de la paz. 11 .- Venimos a Ti María Venimos a ti María Madre del alma, venimos a confiarte nuestra plegaria. Porque tú eres la Madre que escucha, porque tú eres la Madre que ama, porque tú eres la Madre que atiende y nunca nos falla. Tú eres la Madre buena que Siempre nos espera, firme como el camino y fiel como el amor. Tú eres la Madre buena que Siempre abre la puerta y un sitio Nos reserva junto a su corazón. Tú eres la Madre buena que A diario nos anima, siempre nos da consejo y ofrece su calor. Tú eres la Madre buena que siempre nos perdona, y todo lo disculpa y es toda comprensión. Tú eres la Madre que siempre se desvive, siempre su mano tiende y siempre da su amor. Tú eres la Madre buena que no olvida detalle, que nadie le ha fallado y es toda corazón. 12 .- TÚ ERES DEL SEÑOR Eres tan sencilla Como luz de amanecer, Eres tú María fortaleza de mi fe. Tú eres flor, eres del Señor Te dejas acariciar por su amor. Eres tan humilde como el vuelo de un gorrión. Eres tú María el regazo del amor. Tú eres flor, eres del Señor, Te dejas acariciar por su amor. Yo quiero estar en las manos del Señor como tú, para amar en las Manos del Señor como tú. (Bis) eres tan pequeña como el canto de mi voz, eres la grandeza de Aquel que te modeló. Tú eres flor, eres del Señor de Dejas acariciar por su amor. Eres tan hermosa, como el cielo, como el mar, eres tú María como el gozo del soñar. Tú eres flor, eres del Señor Te dejas acariciar por su amor. 13 .- MADRE DE DIOS Escuchaste la llamada del Señor, Aceptaste sin reserva su Palabra, Fuiste fiel en los momentos de alegría, Fuiste fuerte en los momentos de dolor. Comprendiste que el camino del amor, tiene flores, tiene rosas, tiene espinas, fecundaste con palabras de silencio, tus minutos de dolor e incomprensión. Madre de Dios, Madre de amor, haznos como tú, mensajeros de la nueva luz. Madre de Dios, Madre de amor, haznos comprender el dolor gozoso de la cruz. Te llenaste del Espíritu de Dios, para ver el horizonte de la vida, escogiste ser esclava y servidora porque así te lo dictaba el corazón.