32 | Edición especial | 2014

Cada momento histórico tiene su correlato audiovisual: así como los 60 y 70 gestaron los documentales de denuncia al capitalismo y las dictaduras, los 80 fueron testigos de los films a favor de la redemocratización de las sociedades y los 90 de las manifestaciones contra el neoliberalismo. Hoy, los protagonistas son los nuevos líderes latinoamericanos. Relatos del presente Los presidentes de izquierda toman el poder y las salas por Javier Campo*

a cantidad y calidad de films La democracia sin protagonistas gran éxito sobre Castro se reavivó el ra este tipo de films, nada mejor que un documentales estrenados en En los ochenta se produjeron en Amé- interés de los cineastas fuera de la isla. proceso en marcha a documentar, como el siglo XXI con los princi- rica Latina más documentales políticos Dos de los ejemplos más representativos por ejemplo una campaña electoral (3): pales presidentes latinoame- que en el período previo a los golpes mi- han sido los textos de Manuel Vázquez Entreatos (João Moreira Salles, 2004) ricanos como protagonistas litares. La cifra se fue incrementando a Montalbán, Y Dios entró en La Habana y Cocalero (Alejandro Landes, 2007) Lno tiene parangón con los realizados medida que los realizadores adaptaron (1998), e Ignacio Ramonet, : constituyen registros de las campañas en ninguna otra época. No hubo una sus producciones al nuevo formato del Biografía a dos voces (2006) (2). de Lula y Evo que acompañan a quienes tendencia de documentales sobre los La figura de Fidel, dúctil cinemato- serán los presidentes de dos países muy presidentes de facto, aunque sí un mo- gráficamente hablando, se presentará diferentes en cuanto a recursos (4), he- vimiento amplio de films de denuncia Ha surgido un cine más ampliamente a un público no lati- cho visible desde los objetos presentes de las dictaduras. Tampoco se produ- noamericano gracias a la trilogía de Oli- en el encuadre: mientras que Lula viaja jeron películas sobre los presidentes dedicado a resaltar, ver Stone. Comandante (2003), el film en avión, Evo lo hace en camioneta. de las transiciones democráticas de los que abre la serie, muestra al protagonis- Una vez más, se hace pre- ochenta, aunque sí se estrenaron algu- escudriñar o ta descontracturado, aunque, como su- sente en este conjunto con South of the nos documentales que militaban a favor cede en los films sobre Allende y Perón, border (Al sur de la frontera, 2009). El de una redemocratización de las socie- exaltar las virtudes no se habla de su vida privada ni familiar. motivo principal del largometraje es ana- dades latinoamericanas. Y por último, de los gobiernos Sin adulaciones, el director, sobre todo lizar el papel cumplido por Estados Uni- prácticamente no hubo films sobre los en (2004), discute con dos en el subcontinente. Aunque en los jefes de Estado neoliberales, aunque sí progresistas de la el protagonista, a diferencia de Debray, últimos planos del film se abren esperan- se estrenaron algunos que criticaban Solanas o Getino, que se limitaban a es- zas en el nuevo presidente Barack Oba- las medidas de gobierno. Pero ahora, región. cucharlo. ma como “un nuevo Roosevelt”, según a partir de una nueva base social favo- afirmaba Hugo Chávez, recientes decla- rable a las nuevas políticas, ha surgido Los nuevos líderes raciones de Stone dan cuenta de que esas un cine dedicado a resaltar, escudriñar Pero más allá de Fidel, recientemente esperanzas no se cumplieron (5). o exaltar las virtudes de los gobiernos video: denuncias de las atrocidades co- se han producido documentales sobre En un lugar intermedio entre el mundo progresistas de la región. metidas por las dictaduras, recorridos distintos presidentes latinoamericanos del cine y el de la militancia se encuentran históricos que destacaron al régimen presentados en festivales, cines comer- Néstor Kirchner, la película (Paula de Lu- El compañero presidente democrático como la meta social más al- ciales y canales de televisión. Es decir, que, 2012) y NK (Adrián Caetano, 2013). Salvador Allende y Juan Domingo Perón ta y llamados de atención sobre las asig- no fueron películas realizadas para ser Ambos documentales fueron estrenados fueron los primeros presidentes prota- naturas pendientes de los gobiernos de proyectadas exclusivamente en los ac- comercialmente pero también utiliza- gonistas exclusivos de films latinoame- la transición. En esta tendencia, sin em- tos de gobierno o los medios de difusión dos por movimientos sociales y políticos ricanos con objetivos militantes. En Chi- bargo, los presidentes estaban ausentes. oficiales. El partido obrero que llevó kirchneristas como bandera identitaria o le, con producción de la empresa estatal Más allá de algunos segmentos en los al poder a Luiz Inácio Lula da Silva en fuente conmemorativa. Chile Films, se realizaron dos películas: que se les dedicaban algunas palabras, Brasil y el movimiento indígena que im- Por último, hay que mencionar la se- Compañero presidente (Miguel Littin, tanto benévolas como críticas, los presi- pulsó a Evo Morales en Bolivia, por ci- rie Presidentes de Latinoamérica reali- 1971, con Régis Debray como entrevista- dentes de la transición democrática no tar los casos más destacados, confluye- zada por Pablo Santangelo y Marcos Sa- dor) y El diálogo de América (Alvaro Co- tuvieron sus films. Habían asumido con ron en un movimiento documental re- cchetti para el canal público Encuentro, vacevich, 1972) (1). En Argentina, Fer- una gran aceptación popular, que en ge- vitalizado en América Latina: su eje es emitida a partir del 2010, porque resul- nando Solanas y Octavio Getino filmaron neral fue mermando a medida que las el registro directo de observación. Pa- ta relevante para completar el arco de en 1971 el díptico La revolución justicia- crisis económicas fueron estrechando representaciones audiovisuales de los lista y Actualización política y doctrinaria sus márgenes de maniobra, y los directo- presidentes sudamericanos. El agru- para la toma del poder. Luego de dirigir res prefirieron dedicarse a indagar en los pamiento da cuenta por sí mismo de la el film insignia de la militancia cinema- testimonios de los familiares de los des- explícita afinidad entre los diversos go- tográfica latinoamericana, La hora de los aparecidos, en los detenidos aparecidos biernos. Todos los presidentes, entre- hornos (1968), los realizadores se fueron y en los problemas generales de la época. vistados por Daniel Filmus, repiten que acercando al políglota movimiento pero- Y lo mismo sucedió en los 90. Los sus principales desafíos pasan por la re- nista igual que muchos jóvenes de su ge- presidentes que lideraron la avanzada cuperación de la soberanía y la justicia neración, en un camino que los llevó pau- neoliberal no fueron protagonistas de social, mientras desde la calle los entre- latinamente a Puerta de Hierro. los documentales críticos, aunque a co- vistados aprueban las políticas de “mi” Pero esta incursión en el terreno de mienzos del siglo XXI se estrenaron una gobierno. En este contexto de afinida- la representación favorable de los presi- gran cantidad de películas que analiza- des se da un contrapunto interesante dentes en los tempranos 70 era en reali- ron las políticas de desguace del Estado con el capítulo dedicado a Álvaro Uri- dad una anomalía. En general, los films aplicadas en la década anterior. be, lo que permite ubicar en imágenes el de intervención política no tenían como En suma: con escepticismo y cautela punto discordante, la antítesis del ima- protagonistas principales, y libres de crí- en los ochenta, con asco en los noven- ginario popular para la denominación ticas, a los líderes en el poder: casi siem- ta, los presidentes no merecieron los es- “presidente latinoamericano”. El co- pre batallaban contra ellos. Solo Allende, fuerzos de los documentalistas. lombiano habla en un lenguaje diferen- el primer presidente chileno que habla- te, repite “terrorismo” y “seguridad”, ba de revolución, y Perón, que por ese en- Siempre Fidel califica al marxismo como una “moda tonces recurría a todos los conceptos po- Más allá de coyunturas dictatoriales y ideológica” y no propone una pacifica- líticos, funcionaron como excepciones. transiciones democráticas, uno de los ción de su país sino por medio de la mi- Y en las dos décadas siguientes, el si- líderes mundiales más filmados es Fi- litarización. El de Uribe es el único ca- lencio. del Castro. Con la edición de libros de pítulo de la serie en el que se introducen | 33

entrevistas que contradicen el balance del presidente: familiares de secues- trados y madres de “falsos positivos” (personas asesinadas hechas pasar por guerrilleros). En su rol de entrevistador, Filmus expresa las diferencias con el resto de los presidentes a través de una pregunta: “¿Se siente incomprendido por los demás?”. Uribe, sin inmutarse, responde: “Me preocupo por ellos; el te- rrorismo no sabemos dónde estará ma- ñana”. El montaje indica la perspectiva de los realizadores con respecto al lugar que ocupa Uribe en el imaginario popu- lar: finaliza con soldados marchando.

Una coyuntura particular De las excepciones de los films militan- tes sobre Allende y Perón a los sistemáti- camente dedicados a Castro y los presi- dentes latinoamericanos en el siglo XXI, se percibe que la razón de ser de este ti- po de documentales proviene de senti- mientos populares ampliamente com- partidos. No sólo se trata de directores y productores que, con financiamiento público, filman películas que represen- tan las ideas de los líderes, sino de una Imagen del documental Entreatos de João Moreira Salles, 2004 decisión basada en el consenso que es- tos presidentes generan en sus socieda- mos diferentes, cada región, cada país. realizar la película Salvador Allende (2004). revista Cine Documental, Nº 1, 2010, http://revista. des. Aunque en general no fueron éxitos Pero nos complementamos”. Se trata, en 2. Manuel Vázquez Montalbán, Y Dios cinedocumental.com.ar/1/articulos_01.html de taquilla comparables con los tanques definitiva, de una unión original de mi- entró en La Habana, Aguilar, Madrid, 1998. 5. Mi amigo Hugo (Oliver Stone, 2013), film hollywoodenses, la venta de entradas o radas entre los pueblos, los gobiernos y Ignacio Ramonet, Fidel Castro: Biografia a producido por Telesur, es un desprendimiento el encendido de televisores no fue insig- las representaciones audiovisuales, au- dos voces, Debate, Buenos Aires, 2006. de aquel largometraje. Utilizando material nificante. Y, por otra parte, la prensa crí- sente en otros momentos. Los presiden- 3. Primary (Robert Drew, 1960) y 1974, une partie ya filmado en aquella ocasión, el documental de campagne (Raymond Depardon, 1974) han sido es complementado con entrevistas a quienes tica no los soslayó. Las palabras de Evo tes ya no sólo tienen quienes los apoyen los films prototípicos de este tipo de documentales rodearon al fallecido presidente de Venezuela. Morales en Presidentes de Latinoaméri- en la calle sino también quienes los fil- que han registrado las campañas de John Kennedy ca son elocuentes: “Está muy interesan- men y representen en las salas. g y Valery Giscard d’Estaing, respectivamente. te lo que vive Latinoamérica. Siento que 4. Para un análisis de los dos films véase Javier es la primera vez que se presentan estas 1. Más recientemente, en 2004, y en otro contexto, Campo, “El arte de la observación. Algunos *Director de la revista Cine Documental. democracias liberadoras. Siento que so- Patricio Guzmán recurrió a testimonios para documentales latinoamericanos recientes”, © Le Monde diplomatique, edición Cono Sur