Aquel Dolor Mundial Del 86 En Retrospectiva Martín Ligüera El
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publicación gratuita sobre la identidad del fútbol uruguayo MAYO/JUNIO 2016_EDICIÓN_10 - ISSN 2393-5995 Martín Ligüera Aquel dolor Martín Lasarte El futbolista que Mundial del 86 Las buenas piensa y hace en retrospectiva decisiones 1 DOPING POSITIVO LA CORNADA Me crié cerca de una Iglesia de los Santos de los Últimos Días, un lugar que me resultaba muy extraño, porque tenía un pincho gigante en vez de una cruz y porque parecía que sólo podían entrar personas excesivamente rubias que usaban casco para andar en bicicleta. “Los Mormones”, como se conoce al predio donde se ubica la Iglesia, tiene una pequeña y preciosa cancha de fútbol abierta: piso de pórtland lustrado, arcos de gruesos caños metálicos, espacio para cuadros de cinco jugadores y altos alambrados para evitar la pérdida de balones. Las rejas que separan al predio de la vereda son bajas y por eso, desde temprana edad, los niños del barrio invadíamos las instalaciones y pasábamos los sábados enteros jugando a la pelota. Rápidamente desarrollamos un acuerdo tácito con las autoridades de la iglesia: mientras no causáramos vandalismo y escucháramos como si nos interesaran las propuestas que nos hacían de asistir a los oficios religiosos, podíamos quedarnos. Cada tanto, es cierto, había zafra represiva y nos echaban, con el pretexto de que no formábamos parte de la comunidad, pero luego de dos o tres semanas volvíamos tímidamente y nadie nos molestaba. Cuando crecimos y nos hicimos adolescentes, trajimos un convidado de piedra que alteró para siempre nuestra Ilustración: Rodrigo López relación con las autoridades eclesiásticas y que me sirvió para cuestionar esa máxima de violencia significativos– hasta que un voluntarioso, era querendón, pero carecía de moral de que el deporte y la salud siempre día fuimos expulsados y no sólo no se nos todos los fundamentos técnicos, era lento, van de la mano. permitió volver nunca más –a fin de cuentas, torpe y tenía una preocupante incapacidad Más o menos para el año 2000, Los ya estábamos bastante grandes y a punto de para interpretar el lenguaje corporal tanto Mormones se había transformado en uno de retirarnos–, sino que además se restringió el de sus compañeros como de sus rivales los principales espacios de socialización de ingreso a las nuevas generaciones, al punto (nunca veía los pases obvios y perfectamente los varones adolescentes de Piriápolis. Los que, hoy día, pasar un sábado por la vereda podía comerse el amague de una tortuga). sábados circulaba mucha gente. Se hacían de la cancha produce honda tristeza, porque A todo esto, George sumaba una costumbre partidos a dos goles, para que los cuadros casi siempre está vacía. que potenciaba sus defectos a extremos rotaran y todo el mundo pudiera jugar, Sin embargo, antes de que eso inverosímiles: gustaba de entrar a la cancha pero si perdías era normal comerte una sucediera, conocí allí a George Riise, un bajo los efectos del cannabis. Un combo letal. hora esperando el siguiente turno. Y en esa jugador cuya triste historia quiero aprovechar Un día, durante una Semana de Turismo situación podía haber cuatro cuadros, o sea para contarles. Le decíamos George porque –que habrá sido del 2000 o 2001– cayó a veinte tipos. ¿Cómo matar el tiempo mientras se llamaba Jorge, y Riise porque se parecía al jugar un pinta que nadie conocía. Era un gurí tanto? Pateando alguna pelota que sobraba, futbolista noruego del mismo apellido que argentino que estaba de paseo, vio fútbol y conversando amablemente o drogándote. durante años hizo toda la banda izquierda quiso sumarse. Tendría doce o trece años, MAY- JUN 2016 MAY- Y es que a la sombra de un árbol que había jugando para el Liverpool de Inglaterra. máximo, y pese a que arrastraba un nivel de al lado de la cancha se juntaban aquellos George era un pésimo jugador de fútbol. agrande proporcional a su nacionalidad, la que querían consumir o adquirir productos Tal vez sólo era superado en ese aspecto por verdad es que jugaba muy bien. Decía que túnel alucinógenos y/o estimulantes –la mayoría El Rey León, un argentino de gran melena que estaba en las inferiores de Huracán. A veces de las veces faso; en pocas ocasiones, experimentaba, literalmente, pavor ante la me pregunto si no habrá sido un Pastore, merca– y poco a poco esa costumbre fue pelota, al punto de que su frase más conocida un De Federico, uno de esos media punta provocando roces con las autoridades dentro de la cancha era “no me la pases, a de estupenda técnica y liviandad que viene religiosas –pese a que nunca hubo hechos mí no, a mí no”. George, por el contrario, era sacando Huracán durante los últimos años. 2 George era un pésimo de maravillarse ante todos y cada uno de los túneles recibidos. Cuando terminó el Dónde se consigue o lee la revista Túnel jugador de fútbol. Tal vez partido, abandonó la cancha casi levitando y se tiró contra un muro a esperar que se le Gol al futuro. Estadio Centenario, Sala Franzini. solo era superado en ese Museo del Fútbol. Estadio Centenario. pasara el cuelgue. Socio Espectacular. 18 de Julio 1618 y Carlos Roxlo. El equipo de Pastore siguió ganando Gussi Libros. Yaro 1119 y Durazno. aspecto por El Rey León, un Libros de la Arena. Benito Blanco 962 y Avenida Brasil. partidos. Se mantuvo en cancha tanto El Yelmo de Mambrino. Gutiérrez Ruiz 1156 y argentino de gran melena tiempo que la pizarra dio la vuelta y volvió a Maldonado. tocarle el turno a George. Librería Las Hortensias. Chucarro y Massini. que experimentaba, Libros Libros. Br. Artigas 1825, Tres Cruces. Pastore agarró la pelota y una plancha Librería Papacito. 18 de Julio 1409 frente a la bajó como un martillo sobre una zona de Intendencia. literalmente, pavor ante la Librería Papacito. 18 de Julio 888 y Convención. su cuerpo que iba desde la ingle hasta la Librería La Lupa. Bacacay y Buenos Aires. pelota, al punto de que su rodilla. Es que George ya andaba por los Librería Lautréamont. Maldonado y Pablo de María. dieciocho años y era de patas grandes. El Pocitos Libros. Avenida Brasil 2561. Librería Luzgala. Avenida Lezica, Colón. frase más conocida dentro niño abandonó la cancha llorando y no volvió Librería Purpúrea. Plaza del Entrevero, Centro nunca más. Librería Abrazo. Gral. Flores 272 local 2, Colonia del de la cancha era “no me la Sacramento. Por supuesto que George fue Librería Babilonia. Tristán Narvaja 1591/1601 y pases, a mí no, a mí no”. reprendido por sus pares. En este tipo de Mercedes. partidos suele haber un amplio margen de Nueva Galería Libros. Tristán Narvaja 1536 y Colonia. Byblosur Libros. Magallanes 922. tolerancia para con los preadolescentes Librería Martín Fierro. Atlántida. pizarreros. Hasta que no les sale barba, no Librería Ganesha. Ciudad de Canelones. Pompona Libros. José Enrique Rodó 280, Ciudad de El hecho es que el botija entró a la se los puede lastimar. Además, es mal visto Canelones. cancha y si no fuera porque todavía era cometer faltas groseras cuando no hay un Librería ABC. Independencia 802, Florida. bastante chico –a esa edad, dos o tres años árbitro para penalizarlas. Pero George había Librería La Canasta. Sarandí 644, San José. Maca libros. Ciudad de Durazno. hacen gran diferencia– nos habría pintado la comprendido súbitamente, una vez libre de Helvecia Libros Café. Luis A. de Herrera 1020, Nueva cara a todos. La mayoría supimos controlarlo los efectos de las hierbas alucinógenas, que Helvecia. Biblioteca Facultad de Humanidades. Cantina Facultad con un poco de físico y carpeta. Pero George durante el partido anterior todo el mundo de Humanidades. no tuvo la misma suerte. se había reído de él, no con él, y no pensaba Biblioteca Alfredo Zitarrosa. Ciudad del Plata, km Como buen depredador, el niño permitir que esto volviera a suceder. 29,500, Av. Penino. Biblioteca Club Banco Hipotecario. Colonia 2189 y –a quien, por razones de comodidad, Ese día, Pastore aprendió una lección. Alejandro Beisso. llamaremos a partir de ahora Pastore– Un jugador de fútbol puede tener la técnica Centro Cultural de España. Rincón 629. Centro Cultural Florencio Sánchez. Grecia 3281, Cerro. detectó a la presa más fácil de la manada e y soberbia necesarias como para humillar Restorán y Parrillada Lo de Silverio. Rossell y Rius hizo con ella lo que quiso. En un partido a a sus rivales. Puede hacerlo a conciencia 1651, Villa Dolores. dos goles, que se resolvió en menos de diez –como Neymar–, sabiendo que gran parte Silex. Ciudad Vieja, Buenos Aires e Ituzaingó. Café & Bar. Uruguay y Minas, Cordón. minutos, le hizo ocho caños, incluyendo de los rivales no van a tolerar la exhibición Bar Andorra. Canelones 1302 y Aquiles Lanza, Centro. uno en el que Pastore, de cara al arco libre gratuita a expensas suyas y van a tratar Bar Maldonado. Maldonado y Barrios Amorim, Centro Don Basilio. Paysandú y Minas, Cordón. y con la posibilidad de hacer el gol que de golpearlo arteramente. Gracias a ello, Bar Palacio. Garibaldi y Tuyutí, Parque Batlle. daría por finalizado el partido, decidió no muchas veces, conseguirá dejar al rival con Bar La Toja. Rivera y Dolores Pereira Rossell, Villa convertirlo y esperar a que George viniera un jugador menos. Dolores. Bar Las Flores. Bulevar España 2051 y Blanes, Parque desesperado a marcarlo para tirársela de Lo que no puede hacer es quejarse si Rodó. suela y hacia atrás entre las piernas, a lo lo lastiman. En el fútbol se puede pegar. Eso Bar La Giralda. Bulevar Artigas 1597 esquina Canaro, Cordón. Riquelme. Lo particular de todo esto fue que es parte del juego, igual que la tarjeta roja Bar El Tuna.