[T1] Percepción del mundo, representación del mundo: el “realismo” de Claude Simon Lorena Panche Université Lumière Lyon 2, Francia
[email protected] Artículo de reflexión. Recibido: 03/09/14; aceptado: 25/11/14. [T2]El sujeto frente al mundo De forma similar a La modificación, de Michel Butor, y a La celosía, de Alain Robbe- Grillet, El viento, primera novela de Claude Simon publicada por la editorial Minuit, en 1957, fue calificada por la crítica como un texto “difícil” y “denso” que, debido a su complejidad en cuanto a la forma, representaba un verdadero desafío para el lector habituado a los códigos y las convenciones de la novela “tradicional”.1 Las oraciones largas y “enredadas”, las construcciones sintácticas complicadas, la ausencia de una estructura narrativa basada en la sucesión cronológica —y lógica— de los episodios, las descripciones interminables que interrumpen el flujo del relato, el carácter poco fiable de un narrador, que parece ignorar todo sobre el protagonista y su historia, son los rasgos constitutivos de un “formalismo” que, en principio, opondría de forma irreconciliable la obra de estos autores y la novela realista, concebida desde el siglo XIX como reflejo, como retrato fiel del mundo y de la sociedad. No obstante, esta búsqueda de nuevas formas de expresión, esta exploración audaz que emprendieron los “nuevos novelistas” de los límites y de las posibilidades del lenguaje narrativo, lejos de confinarlos al espacio de la pura abstracción o de conducirlos a los terrenos áridos de la simple experimentación formal vacía de todo contenido, los pone frente a la realidad física, palpable, frente a un mundo percibido a través de la consciencia y de la razón, pero, fundamentalmente, a través de los sentidos.