Historia De Valparaíso a Través De La Literatura (1900- 1960)
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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE VALPARAÍSO Facultad de Filosofía y Educación Instituto de Historia Historia de Valparaíso a Través de la Literatura (1900- 1960) Tesis Para Optar al Grado de Licenciado en Historia y Título de Profesor de Historia y Geografía Por : Lucía Lara Pérez - Daniela Orellana Briceño Profesor Guía: Eduardo Cavieres F. Julio, 2001 AGRADECIMIENTOS Agradecemos a quienes permanecieron a nuestro lado, apoyándonos en cada etapa de la elaboración de esta tesis: nuestras familias, amigos más cercanos y por supuesto, a nuestro profesor guía, Sr. Eduardo Cavieres. Damos un agradecimiento especial al Gobierno Regional por el incentivo entregado para realizar esta investigación a través del Programa de Financiamiento de Tesis de interés regional otorgado por el FNDR, organismo que dentro de tantos proyectos presentados, nuestra “Historia de Valparaíso a través de la Literatura. 1900 - 1960 ”, logró ser uno de los favorecidos. LUCÍA Y DANIELA RESUMEN El objetivo de esta tesis es rescatar parte de la historia de Valparaíso a través de la literatura existente en la época, siendo ésta testimonio y realidad que refleja aspectos de la vida cotidiana que caracterizaron a esta ciudad entre 1900 y 1960. INTRODUCCION “Es imposible que yo oiga hablar de Valparaíso sin poner oído alerto, sin despertarme enteramente. Valparaíso es para mi la significación de grandes cosas. Es como un pozo donde yo me lanzara de cabeza, reconfortante, delicioso. Tiene para mi un gran prestigio y una claridad, como que representa el sitio de mis primeros sueños y mis primeras esperanzas”.1 Existen diversas formas de abarcar una obra literaria. Algunos leen esperando encontrar una historia romántica, otros pretenden entretenerse con una divertida aventura; los que tienen alma lírica esperan caer bajo la magia de bellos poemas; también hay quienes buscan encontrar algo de historia en los relatos que se narran, como es el caso de descripciones de lugares o de diversos ambientes en donde la imaginación vuela en manos de personajes cargados de emociones. Pero, ¿por qué la literatura? “El Valor de la literatura: carácter documento, estudio o análisis sobre el momento social focalizado por el autor”.2 Una manera de expresar el sentir de una persona acerca de alguien o de algo se manifiesta en las letras. Cada persona lleva en sí a un poeta que desea desahogar todo 1 DELANO, Luis Enrique. Una ventana en Playa Ancha: En Relatos no contenidos en libros 1929-1936. Escrito en Madrid. Edit. Zig-Zag. Santiago. 2ª Edición. 1968. 2 PROMIS, José. La novela chilena del último siglo. Editorial La Noria. Santiago, 1993. Pág. 10. aquel pensamiento o sentimiento que lo envuelve. Pues bien, al escribir toda esta forma de sentir sobre vivencias y anhelos del autor de ciertas líneas, queda tangible ese testimonio sobre aquello que presenció, que sintió en un momento determinado y que luego trata de transmitir bajo la estilización de palabras, pasando a ser ésta una obra literaria. Ahora bien, la literatura como corriente artística cumple una función humanizadora, más aún si se considera como un reflejo de la mentalidad de una época. En el fondo, la literatura ha pasado a ser básicamente descriptiva según el período que se estudie. Es el caso de la tendencia Naturalista 3, que contiene una gran veta descriptiva sin dejar de lado aspectos valóricos, procurando crear en el lector una reacción consciente frente a la problemática que contiene la obra. La Literatura es una expresión de la sociedad, los narradores neoclásicos convirtieron la novela en una narración que enseñaba a conocer la sociedad, ayudaba a corregir sus errores y colaboraba en la enseñanza y propagación de las virtudes necesarias para la marcha del progreso.4 Hoy en día vemos que el significado de ésta descansa, básicamente, en el ámbito de la novela. Sin embargo, no sólo este estilo de escribir es literatura, sino también 3 Dentro de la tendencia o corriente literaria denominada Naturalista, predominante en el siglo XIX y en las primeras décadas del siglo XX, se encuentran la corriente Criollista y la del Imaginismo. Esta última surge en contraposición a la Escuela Criollista. 4 PROMIS, José. Op. Cit. Pág. 11. los poemas, los simples cuentos o las revistas que le han dedicado un espacio para que los lectores aporten con sus creaciones de esta índole. A lo largo de los años, la literatura se ha desarrollado bajo corrientes que han caracterizado a autores y sus obras, que a la vez han conformado tendencias según la realidad que se quiera retratar. En el caso de Chile, las tendencias que han predominado han surgido según las necesidades de los narradores de obras, los cuales siempre se han basado en la realidad que se vive en el momento, ya sea económica, política o bien, en los aspectos sociales de una sociedad que se ha comportado de diferente modo, según la época. Es así que “la Novela naturalista que se imponía a comienzos de siglo, es una novela literaria con utilidad social específica: Colaborar al mejor conocimiento y a la corrección de los errores y desequilibrios humanos y sociales que el novelista describiría sobre la realidad de sus lectores.” 5 Leer una obra literaria propiamente tal no es tarea fácil para nadie. Menos aún para quienes pretendemos reconocer aspectos históricos con la finalidad de entregarlos para el conocimiento público y así valorar el patrimonio cultural de un determinado lugar. Es complejo definir en una tesis todos los rasgos que nos puedan retratar una cantidad determinada de libros, para luego estudiar y analizar su contenido. Por ello, la simplicidad del relato debe ser un factor primordial al momento de producir una obra que 5 Ibídem. Pág. 9. tenga por objetivo llegar a toda persona, ya sea niños, jóvenes y adultos de distinto nivel socio- económico. Sin duda, es una motivación escribir sobre aquello que se considera esencial para que los lectores puedan captar el sentimiento con que una obra literaria fue hecha, y para tratar de transmitir, como señalábamos anteriormente, lo propio del autor en cuanto a su forma de expresar inquietudes o críticas. Asimismo, debe ser meta de toda persona que elabora una obra, el que los demás entiendan y comprendan a través del lenguaje simple, lo concerniente a los temas que se van a plantear. “Al abrir las páginas de una novela naturalista, los lectores sabían que iban a encontrar una imagen de ellos mismos descrita con todas sus debilidades, sus vicios, y sin ninguna conmiseración”.6 Es por eso, que esta tesis de pre-grado tiene por objeto, así como lo hicieron los autores de la época que estudiamos(1900-1960), retratar fundamentalmente una realidad social y económica - sin caer en especificaciones técnicas literarias ni propias de la historia, como datos o fechas - y señalar los aspectos generales que nos transmite la literatura estudiada que abarca la realidad porteña en el período ya aludido, pero desde un lenguaje común y comprensible para todo el que lea estas líneas, puesto que lo que vamos a describir a continuación, es parte de la vida cotidiana de antaño acaecida en este puerto mágico de Valparaíso. A la vez, también, reflejar las caras que presentaba esta ciudad en cuanto a la estructura social que evidenciaba marcadas diferencias socio- económicas, pues aquellos con más poder adquisitivo vivían cómodamente, mientras, los migrantes desde zonas rurales, los empleados y la mano de obra, se instalaban y aglutinaban en la periferia, en los cerros; viviendo de manera miserable y sin las condiciones básicas de salubridad ni alcantarillado. 6 Ibídem., Pág. 13. Encontramos así, dentro de la amplia gama de obras literarias, aquellas que han retratado a Valparaíso entre 1900 y 1960, que fueron escritas por autores que vivieron esa experiencia de conocer aspectos de esta ciudad, ya sea como visitante o como un habitante permanente de este “Viejo Pancho”, que tanto entregó a nativos y extranjeros residentes. Ahora bien, considerar la literatura como fuente histórica es una idea ya planteada por diversos autores. Muchas fueron las polémicas al respecto, por el hecho de la objetividad y veracidad de ésta. Muchos escribieron acerca de algún lugar o ambiente, pero las dudas existentes acerca de la validez de esos relatos mantuvieron en ascuas a todo aquel dedicado a estudiar obras que no manifestaran claramente el realismo de las narraciones que sirvieran como testimonio para reflejar la vida, sociedad o mentalidad de un período definido. Por eso, el contrastar lo expresado en la literatura de una época específica con ciertos lugares, por ejemplo, que aún permanecen en la actualidad, conociendo además su historia particular, tenemos como resultado la veracidad de esta producción literaria para considerarla como fuente histórica de una época, dilema que por lo demás, vamos a dilucidar a medida que avancemos en este trabajo. No todo puede considerarse fuente histórica. “Es público y notorio que los hechos históricos son el fundamento de todas las construcciones históricas, pero el investigador se entera de esos hechos no de un modo directo, sino a través de la fuente histórica”.7 Teniendo en cuenta esta afirmación, vemos que hoy en día se ha intensificado el interés por la problemática del estudio teórico de las fuentes. Así, en el sentido más amplio de la palabra, puede ser fuente histórica todo lo que nos proporciona el material para la reconstrucción de la vida histórica. Sin embargo, 7 PLASENCIA, Adelaida. Metodología de la investigación histórica. Ediciones Quinto Sol, S.A., Zacatecas, México D.F., Pág. 155. al respecto también existen ciertos obstáculos para lograr este objetivo, como por ejemplo, que una opinión pública no siempre puede ser considerada como fuente histórica de una época, porque el hecho de que forme parte de la experiencia de una persona que narra pasa a desvirtuar muchas veces el verdadero sentido de un hecho determinado, generando la problemática de la objetividad o subjetividad del relato.