ECOS, Año 18, Número 1–2, 2015 Publicación de SIGNIS Cuba Asociación Católica Cubana para la Comunicación DIRECTOR EDICIÓN Gustavo Andújar Jorge Villa

CORRECCIÓN DISEÑO

Julio César Perea Giselle Aparicio

PRESENCIA ¾ SIGNIS Cuba en el Concurso Caraccol - Gina Preval…….4 ¾ El audiovisual en la Feria Internacional del Libro de Lima – Jorge Villa………………………………………………………...5

DOCUMENTOS ¾ Consejo del Papa Francisco a los jóvenes…..…………8 ¾ Marconi, la radio y la Santa Sede – Antonio Martínez..11 ¾ Memorias de Zatoichi en Cuba – J.A. García Borrero.13

PERSPECTIVAS ¾ Programa de fomento de la cultura audiovisual – J.A. García Borrero………………………………………..17 ¾ Mensajero de la Misericordia – Jorge Villa…………..20 ¾ Taller sobre la cultura audiovisual en Cuba – J.A. García Borrero……………………………………………….22

CRÍTICAS ¾ Loreak – P. Luis García Orso, S.J……………………25 ¾ Cuando la originalidad no alcanza – Jorge Villa……..26 ¾ La sal de la tierra – P. Luis García Orso, S.J…………28

REFLEXIONES ¾ Influencia de la música en el cine – Mario Naito……..29 ¾ Talentos para el futuro – Arístides O´Farrill……….....34

FESTIVALES ¾ XXXVII Festival Internacional del Nuevo Cine Latino- americano – Julio César Perea………………………38 ¾ Galas …………………………………………………40

EN EL RECUERDO ¾ Addio Laura – Arístides O´Farrill……………………50 ¾ Héctor Pérez Ramírez, leyenda de la radio cubana – An- tonio Martínez ………………………………………..52 ¾ Mario Monicelli – Arístides O´Farrill………………..53 ¾ Adiós a otra leyenda – Jorge Villa……………………62 ¾ El largo adiós – Julio César Perea……………………68

CLÁSICOS ¾ Las infieles – Julio César Perea……………………...98

SIGNIS CUBA PRESENTE EN EL XXXVII CONCURSO CARACOL 2015 Por Gina Preval

A comienzos de la década de 1990, la entonces OCIC Cuba, la filial cubana de la Organización Católica Internacional del Cine y el Audiovisual, OCIC, fue invitada por primera vez por la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), a conformar un jurado OCIC Cuba, para entregar un premio en el Concurso Caracol, el más importante evento competitivo del audiovisual cubano. Desde aquel momento OCIC Cuba creó entonces su premio Catedral, que en aquella primera edición otorgó premio solo en la categoría de radio. Muy pronto OCIC Cuba agrandó su espectro e incluyó también un premio de cine y televisión. Actualmente, SIGNIS Cuba, sucesora de OCIC Cuba, continuó con su presencia ininterrumpida, la labor comenzada por OCIC Cuba y asumió la entrega de los premios, premiación que gozan de un gran prestigio dentro del mencionado certamen.

Este año 2015 los premios Catedral, que otorga SIGNIS Cuba fueron, en la categoría de cine y TV, para La Emboscada, de Alejandro Gil, con mención para el teleplay Sacrificio de Joel Infante. Gil agradeció el galardón recibido y tuvo palabras de elogio para nuestra organización y su labor de promoción de valores en el audiovisual.

En radio fue premiada la emisión radial Para cuatro gatos, dirigida por José de La Luz Armas, correspondiente al programa No hacen falta alas, de Radio Progreso. De Armas, visiblemente emocionado, expresó sentirse muy honrado con este premio, dado que el objetivo del programa es enaltecer la belleza y enriquecer el espíritu. La puesta radial surgió de una idea de emigrados cubanos radicados en distintos países, que abogan por la unión y la fraternidad, y aprovechan la excepcional oportunidad que brinda el arte para hacerlo. Como expresara el realizador, “somos cubanos, estemos donde estemos”. LA XX FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRO DE LIMA, ALGO MÁS QUE UN EVENTO LITERARIO Por Jorge Villa

Después de diecisietes días de intensa labor, puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que la Feria Internacional del Libro de Lima es todo un acontecimiento cultural y una de las Ferias Internacionales en su modalidad, más importante de nuestra América.

La FIL es además un fenómeno comunicacional, con la presencia de varias culturas iguales y diferentes, en una constante interacción comunicativa, ya sea a través del libro, o de las imágenes o por medio de charlas y talleres, donde temas tan urgentes de nuestro mundo moderno, como lo es la protección del medio ambiente y la exaltación de valores universales por alcanzar un mundo mejor, estuvieron presentes

Teniendo como País Invitado de Honor a Francia, la muestra literaria de ese país fue grandiosa, donde destacaba la presencia de los ensayistas Alain Sicard y Daniel Lefort, responsables de publicaciones dedicadas a las obras poéticas de César Moro y Vallejo, respectivamente. Sin embargo la asistencia de otros países como Brasil, Colombia, Cuba, España, Estados Unidos, Italia, México, Nicaragua, República Popular China, Venezuela, etc., enriqueció la oferta literaria en temática e identidad cultural.

Como es habitual en este gran evento, se hizo recordación a aquellos grandes escritores que ya no están físicamente con nosotros, pero que su legado cultural sigue vigente. Manuel Puig, Eduardo Galeano y Pedro Lemebel, fueron algunas de las destacadas glorias literarias que fueron homenajeadas.

Como cada año, se hizo entrega del Premio Literario Cámara Peruana del Libro, que reconoce la labor literaria de un escritor peruano. Este galardón fue a las manos del destacado poeta, novelista y cronista, Abelardo Sánchez-León.

Sin embargo, lo que a mi modesto criterio, hace de la FIL algo más que un evento literario y que alcance proporciones de un íntegro evento cultural, son sus actividades colaterales. La realización del V Seminario Internacional para profesores, el VI Seminario Internacional de Bibliotecología y el I Encuentro de Editores, son muestras elocuentes del mismo.

También en esta XX edición, el Ministerio de Cultura llevó un programa de promoción de las lenguas autóctonas andinas y amazónicas, por medio de libros publicados en esas lenguas y paralelamente al mismo, fue presentada una muestra de cine amazónico, con la exhibición, entre otros, del documental de Héctor Gálvez Purús- Manú: Latitudes de la selva, un verdadero ejemplo de buen cine ecológico en la mejor tradición de Antonio Wong Reginfo, pionero del cine amazónico en Perú.

Con un lenguaje cinematográfico moderno y un ritmo adecuado, gracias a su eficaz edición y lograda fotografía, Purús-Manú: Latitudes de la selva, y los demás filmes de la muestra amazónica, hicieron también partícipe a la FIL en llevar un mensaje de concienciación sobre la necesidad de conservar nuestro entorno. Es sabido que a lo largo de los años, la problemática de la contaminación y destrucción del medio ambiente se ha intentado plantear desde múltiples perspectivas y soportes, buscando siempre causar un efecto modificador de la conducta humana sobre la necesidad de conservar nuestro entorno. Sin embargo, aunque ciertamente se han conseguido algunos progresos, todavía queda mucho camino por recorrer.

Uno de los medios que más se están empleando en los últimos tiempos para hacer llegar al público ideas medioambientales, es el cine. Recientemente SIGNIS América Latina y el Caribe (Asociación Católica de América Latina y el Caribe para la Comunicación) celebró en Río de Janeiro, Brasil, un Taller sobre Cine y Medio Ambiente, dado que el lenguaje cinematográfico tiene mucho de emocional, y tal vez esta vía sea más indicada que la racional a la hora de hablar directamente a la conciencia humana. Si a esto agregamos la interacción del audiovisual, como un evento presente en un entorno social y cultural como la Feria Internacional del Libro de Lima, los resultados a alcanzar pueden ser todavía mayores.

Hay que señalar que la muestra cinematográfica presente en la FIL abarcó otros títulos importantes sobre disímiles temas, como Insurgentes, de Jorge Sanjinés; La ley de la selva, de Fanny Pineau; ¿Qué desarrollo queremos?, de Marilory Quio; La amante del libertador, de Rocío Lladó; El libertador, de Alberto Arvelo; Anhelos de mujer, de Omar Inca y Mayra Espinoza, entre otras. También se hizo el Pre estreno de la película Sigo siendo de Javier Corcuera, que contó con las actuaciones de Susana Baca, Magaly Solier, Carlos Hayre y Sara Van, entre muchos más, y que debido a la gran aceptación que tuvo su exhibición, debió ser programada dos veces.

Como cierre de la muestra cinematográfica se exhibió el maravilloso documental italo argentino Francisco de Buenos Aires, la revolución de la igualdad, de Miguel Rodríguez Arias. Este filme fue el primer documental realizado para cine sobre la vida del Papa Francisco, desde su infancia hasta el presente. La película hace una exhaustiva investigación para dar respuesta al por qué de la elección por el Colegio Cardenalicio de un Papa latinoamericano en un mundo tan convulso como el actual. De igual forma nos trata de responder quien es el Cardenal Jorge Bergoglio para haber sido elegido Papa. No cabe la menor duda de que la exhibición del documental de Rodríguez Arias, constituyó realmente un cierre con broche de oro para la última jornada cinematográfica de la Feria Internacional del Libro de Lima.

SIGNIS Cuba estuvo presente por primera vez en la Feria Internacional del libro de Lima, invitada por la Cámara del Libro de ese país andino, representada por la revista ECOS. Esta invitación proporcionó no sólo la oportunidad de participar en las muestras cinematográficas anteriormente señaladas, sino intervenir además en talleres, coloquios e intercambios de experiencia con otras editoriales, publicaciones seriadas y delegaciones presentes en la cita cultural.

De grata recordación fue el encuentro con la delegación panameña y el interés de la misma en conocer el perfil y quehacer de la revista ECOS, interés mostrado también por los representantes del país anfitrión, México y la República Dominicana. Sin dudas algunas, la cita de Lima fue un punto importante de enriquecimiento cultural para todos los asistentes.

Consejo del Papa encuentro nos hizo recordar la responsabilidad de los medios de Francisco a los comunicación y explicó que no ve jóvenes televisión porque sentí “que esto no me hacía bien”. Por su importancia y vigencia, - “En los tiempos recientes vivimos reproducimos a continuación, con los medios y hemos leído en algunos fragmentos del encuentro ellos que usted no ve la TV. ¿Podría que el Papa Francisco sostuvo con explicarnos por qué?", fue una de los jóvenes en Sarajevo (Bosnia las tres preguntas planteadas al Herzegovina) en junio del 2015 y de Pontífice durante su encuentro con su entrevista en el viaje de regreso los jóvenes, última actividad de su a Roma. visita apostólica a Sarajevo.

Francisco, que dejó de lado el discurso oficial para que fuera

después difundido por la Iglesia local, recordó que "a mitad del año

90 he visto una noche, he sentido que esto (ver televisión) no me hacía bien, que me alienaba y por

tanto decidí desde entonces no verla más”. "Cuando he querido ver una buena película iba al Centro

Televisivo del Arzobispado (de "Yo soy antiguo, de la edad de Buenos Aires) y miraba ahí piedra, pero cuando vean que un solamente esa película, pero la programa de televisión no es bueno televisión me alienaba, me llevaba hagan como se hacía en la edad de fuera de mi y no me ayudaba”. piedra con los libros malos: se “Es verdad que yo soy antiguo, de la dejaban de lado”. Asimismo en ese edad de piedra", indicó. Dijo que

“entiendo que el tiempo ha cambiado y que nosotros vivimos en el tiempo de la imagen y esto es muy importante, sin embargo en el tiempo de la imagen se debe hacer lo mismo que se hacía en el tiempo de los libros, elegir las cosas que me hacen bien. Y aquí puedo decir Ante los jóvenes que lo escuchaban dos cosas: primero, la atentos, Francisco dijo que había responsabilidad de los centros también un tercer punto: "El punto televisivos, de hacer programas que de la mala fantasía que mata el hagan bien con los valores, que alma. Si usted que es joven y vive construyan la sociedad y nos lleven atado, pegado a la computadora, se adelante y no abajo. Y después, hace esclavo de la computadora, hacer programas que ayuden a entonces pierdes la libertad. Y si que los verdaderos valores se usted en el computer busca hagan más fuertes y nos preparen programas sucios, pierde la para la vida. Esta es la dignidad. Ver la TV, usar la responsabilidad de los centros computadora para las cosas televisivos. Segundo – añadió -, hay grandes, que nos hacen crecer, que saber elegir los programas; si siempre será provechoso, será yo veo que un programa no me bueno”. hace bien, me echa abajo los valores, que me hace ser vulgar y entrar en la vulgaridad, también en la porquería, debo cambiar el canal, como se hacía en mi edad de piedra, que cuando un libro era bueno uno lo leía, y cuando te hacía mal, no lo leías, lo tirabas.

Consumismo y relativismo son tienen esencialmente un perfil un cáncer hedonista, relativista, consumista”.

En el vuelo de regreso a Roma, el “El consumismo es un cáncer de la Papa concedió una rueda de prensa sociedad, y de esto hablaré en la donde profundizó este tema. próxima encíclica, que saldrá este Francisco dijo que muchos padres mes”. le cuentan, que si bien están con los hijos en la mesa, los jóvenes están conectados al celular “y en otro mundo”. "Es verdad que el lenguaje virtual es una realidad que no podemos negar y debemos llevarla por buen camino, porque es un progreso de la humanidad, pero cuando esto nos lleva fuera de la vida común, de la vida familiar, de la vida social (….) es una enfermedad psicológica”. Sobre el uso de las computadoras, el Papa dijo que "hay muchos padres muy preocupados que no permiten que haya computadora en las habitaciones de los niños. Las computadoras deben estar en una sala común de la casa. Estas son pequeñas ayudas de los padres que encuentran para evitar que los contenidos nocivos alcancen a sus Asimismo, denunció que en los hijos”. medios también se ven “cosas sucias que van desde la pornografía Fuente: ACI prensa hasta la semi pornografía, a los programas vacíos, sin palabras, por ejemplo, aquellos programas que Marconi, la radio y la Santa Sede

Por Antonio Martínez

in dudas uno de los inventos más importantes para el acercamiento y S hermanamiento de los humanos, en prácticamente todos los sectores, es la radio en sus dos vertientes esenciales: la radiodifusión y la radiocomunicación. Ambas permiten desde la transmisión de información, y cultura hasta salvar vidas y llevar el mensaje de Fe a los rincones más apartados de la tierra, pero, ¿cuánto debemos realmente a su inventor, el genio italiano Guglielmo -o Guillermo- Marconi, de padre italiano y madre irlandesa, nacido en Bolonia el 25 de abril de 1874?.

De niño Guglielmo sintió pasión por leer sobre física y química, aunque por padecimientos bronquiales no pudo estudiar de manera regular. Por tal motivo gran parte de su formación fue autodidacta, pero sin embargo, no olvidemos que fue el profesor de apellido Rosa, del Instituto Ferrini, quién descubrió las aptitudes del jovencito, instándolo a profundizar en sus estudios y experimentar, logrando que el joven Marconi, con sólo 20 años, fuera ya un verdadero hombre de ciencia y honrado con un Diploma de Honor universitario.

Su hallazgo capital parte de los estudios de Hertz sobre las ondas electromagnéticas irradiadas por un oscilador. De ahí tuvo la idea de la posibilidad de lanzar la palabra al espacio cubriendo distancias, estando siempre consciente de la importancia de este hecho. Así creó un incansable equipo de trabajo conformado por Alfonso, su hermano, Vornelli, un carpintero y Mignani, un campesino, quienes confiaron en todo momento en él.

Así tenemos que en 1894 el telégrafo inalámbrico se hace realidad en una demostración efectuada en el monte de Biellese. En 1899 ya era posible comunicarse por el invento de Marconi a través del Canal de la Mancha y ese mismo año, el 3 de marzo, lograr la primera misión como salvador de vidas humanas, al irse a pique el buque faro de East Goodwin a causa de una colisión con un vapor, y pedir auxilio por medio del telégrafo. Como dato curioso curioso se afirma que los supervivientes del Titanic, hundido el 14 de abril de 1912, agradecieron de todo corazón a Marconi por estar vivos gracias a su obra científico-técnica.

El 26 de abril de 1900 Marconi presenta un estudio relativo al control de ondas, forma actual de radiotransmisiòn. Asimismo en ese año erige una estación inalámbrica de larga distancia en Cornwall, Gran Bretaña y ya para 1916 crea el servicio público de radiotelefonía por mar y tierra, de continente a continente, quedando listas las condiciones para la radiodifusión.

Hombre de fe, Marconi tuvo siempre presente el crear una forma de comunicación y unión a distancia entre sus semejantes, sin importar lejanías físicas, naciones, ni grupos étnicos. Bajo esta convicción comienza su acercamiento a la Santa Sede y a trabajar estrechamente para la misma, pues entendía que la mejor forma de acercar a los pueblos, de hacer llegar un mansaje de amor, paz y esperanza, era poniendo a disposición de la iglesia un medio masivo de comunicación que transmitiera la Palabra de Dios. Fue así como el 12 de febrero de1931 inaugura la estación radio-telegráfica del Vaticano y pronuncia un breve discurso, exponiendo sus ideales y su obra. Seguidamente S.S. Pio XI envía, por primera vez en la historia de la humanidad, la bendición apostólica a través de la radio.

Inesperadamente, tras incesante y dinámico trabajo, este genio fallece el 20 de julio de 1937 en Roma, Italia, a causa de una angina de pecho, tras legarle a la humanidad un sistema de transmisión tan revolucionario como fundamental. Entre los numerosos honores que recibiera en vida debemos destacar el Premio Nobel de Física y el Grado de Presidente de la Academia de Ciencias Físicas de Italia.

Y hoy día vemos como los principios de sus estudios y trabajos se utilizan de las más diversas formas, incluso para la comunicación y obtención de datos, no solamente en la Tierra, sino también a distancias inimaginables en el cosmos, permitiéndonos conocer lo que ni la más avanzada ciencia-ficción soñó.

MEMORIAS DE ZATOICHI EN CUBA

Por Juan Antonio García Borrero

Hoy releía la entrevista que el cineasta cubano Manuel Pérez le concediera alguna vez al escritor y guionista Arturo Arango, y me quedé pensando en ese segmento donde habla del tristemente célebre Primer Congreso de Educación y Cultura celebrado en Cuba en 1971.

Como todos recordamos, este fue un Congreso donde se legitimó la cultura del compromiso, asociando ese compromiso no tanto a la vocación herética que hay en todo auténtico creador (que, según Sartre, es otra modalidad de compromiso), como a la adhesión acrítica a los postulados del poder político.

El consenso al que se llegó entonces, y que puede consultarse en la Declaración final del encuentro, sentó las bases de lo que hoy conocemos como “el quinquenio gris”, si bien no habría que creer que todos los creadores del período renunciaron al cuestionamiento y la indagación crítica más allá de la coyuntura. El propio ICAIC, que recibió el encargo expreso de multiplicar las películas de corte histórico que ayudasen a entender teleológicamente “los cien años de lucha” (1868- 1968) que por aquellas fechas se festejaban, propició la existencia de filmes todavía tan inquietantes como Una pelea cubana contra los demonios (1971) o La última cena (1976), ambas de Titón.

Sin embargo, no es recomendable interpretar el pasado como si se estuviese asistiendo a una sumatoria de fotos fijas. Detrás de esas instantáneas que llegan inertes a nosotros, detrás de los documentos y las películas, la vida cubana seguía fluyendo a partir de sus contradicciones internas. El ICAIC, por ejemplo, luego de una década de existencia conseguiría consolidar el liderazgo cultural gracias a un grupo de cintas (Memorias del subdesarrollo; Lucía; La primera carga al machete) que hablaban a favor de su autonomía creadora, pero en cambio, su política de exhibición no recibía igual cantidad de elogios. Dice Manuel Pérez en la entrevista:

“Recuerdo que cuando se anunció que se iba a celebrar el congreso, la dirección del ICAIC me llamó para pedirme que trabajara una ponencia que sería la que el organismo presentaría en el congreso. Yo hice la base, el borrador, y trabajé básicamente lo relativo a la política de exhibiciones, que era uno de los aspectos por los que el ICAIC estaba siendo atacado. Era como retomar la polémica del 63, lo que ahora en vez de Accatone o La dulce vida se trataba de películas como Nuevo en esta plaza o Ichi, el esgrimista ciego”.

Va a ser difícil que los jóvenes de ahora, interesados en entender los procesos culturales experimentados a lo largo de la Revolución, puedan captar con precisión qué significó para los espectadores de entonces las películas interpretadas por Marisol y Palomo Linares (Nuevo en esta plaza y Solo los dos), Julio Iglesias (La vida sigue igual) o Shintaro Katsu en el papel de Zatoichi, por citar algunos de los casos de popularidad cinematográfica más relevantes de nuestro país.

Como la historia de la recepción cinematográfica en Cuba ha sido escrita a partir de lo que los críticos seleccionan cada año como “las diez mejores películas exhibidas”, de esos relatos desaparecen por arte de magia todo lo que no responda a la excelsitud a la que el especialista aspira. Por ejemplo, hoy sabemos que en el año previo al Congreso los diez filmes más relevantes según la crítica fueron Antonio das Mortes (Brasil), de Glauber Rocha, Fuego,

mi muñeca (Checoslovaquia), de Milos Forman, Besos robados (Francia), de Francois Truffaut, Calcuta (Francia), de Louis Malle, Z (Argelia-Francia), de Costa-Gavras, El sirviente (Gran Bretaña), de Joseph Losey, La jauría humana (Estados Unidos), de Arthur Penn, El primer maestro (URSS), de Andrei Mijalkov Konchalovski, Todo para vender (Polonia), de Andrzej Wajda, y Diez mil soles (Hungría), de Ferenc Kósa. Pero, ¿cuáles fueron las más populares, las que el público cubano consumía con más fervor haciendo largas colas en los cines, y que, de guiarnos por Manuel Pérez, inquietaban a los delegados del Primer Congreso de Educación y Cultura?

Una investigación así está por hacerse entre nosotros, pero hay pistas, desde luego. Y las películas de Zatoichi, esas de las que sería muy raro encontrar alguna nota crítica en los periódicos de la época, están entre las que marcaron de un modo profundo el imaginario de los cinéfilos cubanos de los sesenta.

Confieso que el adulto que soy ahora no ha logrado borrar la memoria de aquel niño que jugaba con los otros de su edad en el callejón camagüeyano de Santa Ana, imitando las destrezas del gladiador japonés según había visto en filmes como Masajista Ichi, el fugitivo, Canción de Ichi, El esgrimista ciego y el experto en ajedrez, Reto a Ichi, Ichi samaritano, Espadachín se encuentra con su rival, o Zatoichi se encuentra con Yojimbo, por citar algunas que recuerdo por su título (y no tanto por lo que contaban, pues a esa edad uno no ve cine: lo sueña). Por eso, cuando hace como cuatro años el Festival de Cine de La Habana, junto a la Embajada de Japón en Cuba, exhibió tres de ellos (Zatoichi, el espadachín ciego; Zatoichi y Otane y ¡Pelea, Zatoichi, pelea!), decidí ir al reencuentro de ese personaje.

Y fue como encontrarse con un viejo amigo de la infancia.

Ignoro si a mis padres les alarmaba mi devoción de antaño por estas historias donde la violencia era medio y fin. Puedo respetar incluso la preocupación de los delegados del Congreso que entonces percibían un gran peligro para la formación de los niños, adolescentes y jóvenes que comenzábamos a vivir en esas fechas. Mas le agradezco al ICAIC me permitiera formar por cabeza propia un sistema crítico autónomo, al concederme la posibilidad de apreciar la grandeza de Rashomon o Harakiri, junto al misterio que emana de un cine “menor” (pero de culto) como el que se vive con las aventuras de Zatoichi, no en balde recuperado por Takeshi Kitano en el 2003.

El tema de la recepción audiovisual se ha complejizado, toda vez que las nuevas tecnologías han “democratizado” el consumo. Y lo pongo entre comillas, porque esa democracia del placer no alcanza a esconder la evidencia de que los contenidos suelen parecerse cada vez más. O lo que es lo mismo: no hay tal democracia.

Hoy, como ayer, la violencia sigue siendo un resorte importante en las narrativas audiovisuales. La diferencia estaría en que ahora hay un regreso al modelo de cine propuesto por Edison (consumo individual) en creciente rechazo al consumo colectivo postulado por los Lumiére. O sea, antes era Zatoichi en el cine, ahora es el anime en la laptop, pero en ambos casos, hay un espectador negociando fantasías con una pantalla. Y es eso lo que, al margen de nuestros gustos personales, deberíamos intentar entender: el espectador.

Programa de fomento de la cultura audiovisual

Por Juan Antonio García Borrero

róximos al “Primer Encuentro sobre Cultura Audiovisual y Tecnologías P Digitales” que estaremos celebrando en Camagüey los días 11 y 12 de febrero de 2016, he pensado muchas veces en la ayuda que con seguridad nos hubiese prestado Pablo Ramos, alguien cuyo legado todavía no ha sido lo suficientemente reconocido entre nosotros: estamos hablando del cubano que con más insistencia y profundidad pensó el problema del universo audiovisual de los niños latinoamericanos.

Recuerdo esa vez del año 2013, que llegamos a su oficina de la Casa del Festival en La Habana, con el objetivo de invitarlo al Taller Nacional de la Crítica Cinematográfica que se celebra en Camagüey, e iniciar lo que queríamos deviniera una larga alianza. El entusiasmo de Pablo fue inmediato, y entonces nos propuso impartir par de talleres dirigidos fundamentalmente a pedagogos. Porque para ambos nos quedaba claro algo: el cine podrá ser explicado por los críticos a los adultos, pero es preciso crear una base en las escuelas que desde edades tempranas nos enseñe a ver y distinguir esas formas y sonidos ya omnipresentes en nuestras vidas.

La inesperada muerte de Pablo Ramos dos meses después de asistir al Taller de Camagüey, frustró la posibilidad de que pudiésemos seguir trabajando en la idea de conformar un equipo multidisciplinario que, tomando como plataforma el audiovisual, permitiese elaborar estrategias para impactar en la comunidad infantil.

Lo primero que quedó claro para Pablo y todos los que asistimos a esos encuentros camagüeyanos es que necesitamos las alianzas. Muchos maestros que trabajan por su cuenta en las escuelas este asunto del audiovisual y su apreciación, confiesan tener pocos conocimientos de la historia del cine. A mí esto no me preocupa tanto (en definitiva, no son

especialistas en ese tema) como que todavía no tengan conciencia de que aquellos niños que educan llegan a la escuelas pre-formados sobre la base, no de una cultura literaria (como pudo ser la de los maestros), sino plenamente audiovisual. Dicho de otro modo: antes que los niños de ahora aprendan a leer con rigor las primeras historias infantiles, ya se han familiarizado con las tramas consumidas en los dibujos animados que transmite la televisión o se consumen con los contenidos y videojuegos alquilados en “el paquete”.

¿Cómo conectar entonces con estos niños que, sensorialmente, responden a estímulos desconocidos para sus maestros?, ¿cómo conseguir que la tarea del aprendizaje se convierta en algo realmente fructífero, y no en mera colección de lecciones impartidas por alguien que habla desde una “cumbre”, e impone de modo autoritario una tradición en teoría superior?

Lo primero que debemos lograr es imprimirle un carácter científico a aquellas acciones que decidamos emprender. Necesitamos pasar del impresionismo de buena voluntad, muchas veces saturado de un pesimismo que paraliza o una visión romántica que lo idealiza todo, al programa que descanse en los análisis profundos, veraces, los cuales permitirían establecer futuras políticas públicas, que es lo que necesitamos.

Para ello es imprescindible involucrar a las universidades, no solo con el fin de convertir a estos centros en espacios de operaciones con estudiantes de la educación superior, sino que los conocimientos que allí se gestionen, a su vez tengan un impacto real en las comunidades del territorio del cual forma parte la universidad.

En Camagüey tuvimos hace unos meses una buena experiencia con aquel encuentro internacional “ParticipAndo: Infancia y Ciudad”, organizado por la Universidad “Ignacio Agramonte” y la de Granada (España) justo en “La calle de los cines”, y que surgiera, según se leía en las bases, “de la necesidad de crear un espacio para la reflexión y el debate, encaminado a promover prácticas innovadoras en la concepción de la relación infancia- ciudad. Es nuestro objetivo primordial, mostrar a académicos e investigadores tanto nacionales como internacionales, los resultados e impactos de investigaciones multidisciplinarias que contribuyan a la meta

suprema de lograr que nuestros infantes sean incluidos en la concepción y funcionamiento de su entorno de vida”.

Atendiendo a esa experiencia acumulada, al talento existente en el seno de sus claustros, es que creemos que la presencia de la Universidad de Camagüey y de la Universidad de las Artes del territorio en este “Primer Encuentro sobre Cultura Audiovisual y Tecnologías Digitales” resulta crucial. Sobre todo porque si estamos pensando pasar de la fase puramente teórica o especulativa a la construcción de una comunidad de prácticas que tenga al consumo y lo digital en su centro, demandamos de esa mirada serena, desprejuiciada, e innovadora que solo se consigue a través de la postura científica. Es decir, debemos llegar a la práctica impregnados de esa seguridad temporal que concede lo científico cuando se examina un problema.

Aclaro que hablo de apelar a lo científico en el sentido que le concedía Jaspers, y no invocando a un falso status de seriedad que muchas veces apela a la teoría oscura y el lenguaje rebuscado, más para impresionar e intimidar a los oyentes que para encontrar la verdad del asunto que se investiga. Para Jaspers:

“Cientificidad significa saber qué es lo que se sabe y lo que no se sabe. Anticientífico es el saber dogmático. Ser científico quiere decir saber los fundamentos. No científico es aceptar las opiniones ya hechas. Científico es el saber que tiene conciencia de los límites del saber en cada caso; no científico es todo saber total como si se estuviera enterado de todo. Científico es crítica ilimitada y autocrítica, un ponerlo todo en cuestión que impulsa el conocimiento. No científico es el miedo que puede paralizar la duda. Científico es el proceso metódico que paso a paso y sobre la base de la experiencia lleva a la decisión. No científico es el jugar con múltiples opiniones y posibilidades, el parloteo”.

En el caso del consumo audiovisual en Cuba vinculado a las tecnologías digitales, todo está por investigar. Abrir nuestras mentes sin prejuicios, y poner nuestras preguntas en función de entender el fenómeno y crear (y no a la inversa: el fenómeno metido a la fuerza en el cajón donde viven nuestros prejuicios), será todo un desafío.

Quien no vive para servir no sirve para vivir

Por Jorge Villa

sta hermosa frase concluyó la primera homilía pronunciada por el Papa Francisco, en su histórica visita al pueblo cubano. En una multitudinaria E misa celebrada en la Plaza “José Martí” de La Habana, las palabras de su Santidad fueron un reflejo del objetivo de su vista apostólica a Cuba: misionero de la misericordia.

Su corta, pero fructífera estancia en el archipiélago cubano, se caracterizó en todo momento por un llamado a la cultura del encuentro, a servir a los más necesitados, al amor incondicional hacia el prójimo, a la necesidad del diálogo, a luchar todos unidos por lo que se tiene en común y las diferencias, las divergencias de cualquier índole, conversarlas, no pelearlas, porque las peleas conllevan a la confrontación y las confrontaciones terminan en batallas y las batallas desembocan en las guerras y el mundo está repleto de guerras y lo que necesitamos es la Paz.

El carisma del Santo Padre, su sencillez, su humildad, calaron profundamente en el cubano, fuera creyente o no. Era un denominador común en todas las comunidades donde iba su Santidad, observar a una enorme multitud, la cual, totalmente emocionada, no se cansaba de dar vivas a nuestro Papa Francisco. Su encuentro con los jóvenes, en las afueras del Centro Cultural Padre Félix Varela, sede de SIGNIS Cuba, en La Habana, fue de una alegría contagiosa, donde cientos de jóvenes de distintos credos, o de ninguno, se agruparon para escuchar al Papa, el cual fue interrumpido varias veces por fuertes ovaciones, cantos y vivas, a pesar de una tenaz lluvia, que no fue impedimento para el desarrollo feliz de este encuentro.

En su recorrido por el este del país, la acogida fue igualmente conmovedora. Su visita a la provincia de Holguín, que culminara con la bendición de la ciudad, desde lo alto de la Loma de la Cruz, arrancó emotivas lágrimas en los asistentes, mientras un coro de maravillosos niños entonaba una hermosísima canción con frases de José Martí, la cual glorifica al hijo de Dios que murió en la cruz.

De profunda emoción fue la visita que realizara el Papa al Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba, en la oriental provincia de Santiago de Cuba. Fue al santuario como un peregrino más, como va un humilde hijo al encuentro con su madre. Allí oró en silencio, depositó un hermosísimo ramo de flores y meditó largo rato, mientras un sepulcral silencio invadía la Basílica. El entorno del Santuario, la belleza del momento, se conjugaron en una unidad bendecida por el Espíritu Santo.

Su hermosísima visita a nuestro país, concluyó con el encuentro con la familia,

en la Catedral de Santiago de Cuba, donde se le entregó una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, para que fuera entregada a una familia cubana residente en Estados Unidos, como símbolo de una perspectiva de amor, de esperanza y de unidad, porque la Caridad nos une.

No sería justo terminar este artículo sin hacer referencia al buen trabajo realizado por la televisión cubana, la cual en todo momento reportó en vivo el acontecer de todas las actividades de su Santidad en nuestro país. Reconocimiento aparte para la acertada presencia del sacerdote Rolando Montes de Oca, quien con su interesante narrativa y perfecta dicción, relataba y describía, en un lenguaje accesible y comprensible para todo tipo de público, lo que iba aconteciendo, desde una mirada cristiana y católica. ¿POR QUÉ UN TALLER SOBRE CULTURA AUDIOVISUAL Y TECNOLOGÍAS DIGITALES?

Por Juan Antonio García Borrero

n una época como la nuestra, definida por Bauman como modernidad líquida, las instituciones están obligadas a jugar el papel Ede esponjas permanentes. Esto quiere decir, que están obligadas a hacer de lo poroso el mejor vehículo para alimentarse y absorber todo aquello que, más allá de sus predios, ya está conformando un impresionante universo de prácticas culturales. Es por eso que en este “Primer Encuentro sobre Cultura Audiovisual y Tecnologías Digitales” que celebraremos en Camagüey el 11 y 12 de febrero de 2016, será tan importante el Taller de Experiencias que convocaremos el segundo día.

Podríamos decir que dos observaciones, una de Sócrates y otra de Andre Gide, sustentan la necesidad de una acción como ésta. La del primero reza: “Háblame, para que yo te vea”; la del segundo: “todo está dicho, lo que como nadie atiende…”. Se trata entonces de construir una plataforma de creación donde sea posible escuchar y ver a los que ya están experimentando con estos asuntos en la ciudad, pero que permanecen en las sombras, convirtiendo al intercambio de ideas en un puente que, a su vez, nos conduzca a un punto donde se puedan ejecutar en la práctica propuestas innovadoras relacionadas con la producción y consumo cultural.

Como otras veces he apuntado, se trata de intervenir creativamente desde las instituciones en esos escenarios donde ya fluye de un modo informal ese consumo, un poco en el espíritu de aquel situacionismo que Debord y

compañía proponían en el pasado. Para este primer Taller de Experiencias serán importantes las contribuciones de entidades como la Facultad de informática de la Universidad de Camagüey, Unión de Informáticos de Cuba, el Joven Club, Citmatel, Etecsa, pero también la de aquellos “emprendedores” que, sin formar parte de institución alguna, ya han conseguido gestionar por su cuenta todo un sistema de consumo audiovisual.

Recuerdo que a raíz de aquel primer “Foro de Consumo Audiovisual en Cuba” celebrado en La Habana, cierta prensa (sobre todo extranjera) sugirió que aquella reunión intentaba construir modos de “liquidar el Paquete”. Esto siempre me pareció una simplificación bastante grosera de lo que en realidad nos llevó allí, que era: entender el fenómeno que existe al margen de las voluntades, filias y fobias de cada uno de los individuos que somos, y sobre esa base científica, impulsar la creatividad institucional en función de un bien público. Aclaro que no estoy legitimando “el Paquete” como práctica, sino intentando aprehender los resortes que permiten que el mismo funcione en nuestro contexto para que sea aprovechado su espíritu por las instituciones (no hay que imitar o liquidar “el paquete”, hay que superarlo creando algo nuevo).

Traigamos ese objetivo del Primer Foro al contexto más actual, y examinemos el escenario con esa vocación de esponja que mencionaba el principio: ahora mismo son incontables las redes inalámbricas informales que hay en los barrios incluso periféricos, y que permite que la práctica del videojuego se incremente cada vez más entre nosotros; por otro lado, “el paquete” sigue llegando con la misma puntualidad con que aparece el noticiero en nuestra televisión nacional.

Ese es el fenómeno real; ahora preguntémonos: si eso es lo que es, es decir, lo

real, ¿qué impide que nuestras bibliotecas públicas se propongan una red inalámbrica interna que permita interactuar a los lectores, del mismo modo que los muchachos juegan en sus barrios?, ¿cuál obstáculo insalvable frena para que las salas de cines aprovechen todos esos saberes y prácticas dispersas en función de sus respectivos encargos sociales?, ¿por qué hay que seguir creyendo que la aplicación de la modernidad tecnológica a nuestro universo cultural solo llegará si tenemos Internet de última generación?, ¿cuántas herramientas que ahora mismo tenemos en la mano estamos desaprovechando?

Me queda claro que el desafío en el que nos estamos involucrando tiene que ver más con lo espiritual que con lo material. Y eso lo hace el doble de arduo, en tanto es difícil cambiar a la misma velocidad con que se transforman las tecnologías digitales, una mentalidad acostumbrada durante tanto tiempo a lo analógico, a la planificación a largo tiempo, al control hipercentralizado. En este sentido, este Taller lo que intentará es concederle algo de visibilidad al mundo de la interacción creativa que actualmente está diseñando ese mundo en permanente construcción que habitamos ahora mismo, incluso en la Cuba actual.

En tal sentido, tendremos un marco teórico que, por el momento, nos permitirá orientar las preguntas que buscan resolver un problema. Por ejemplo, ¿será posible construir en Camagüey, concretamente en El Callejón de los Milagros, un espacio inteligente, es decir, interactivo y dinámico, a partir de las experiencias, el talento y los recursos que ya poseen el Joven Club, la Facultad de Informática, Etecsa, Citmatel, Unión de Informáticos de Cuba?, ¿un espacio donde la comunidad de camagüeyanos puedan encontrar alternativas culturales procedentes del sistema institucional, y que propicien el uso creativo de las tecnologías digitales?, ¿un espacio donde la tecnología esté pensada en función de los individuos, y no a la inversa?

En Camagüey, como en toda Cuba, hay un montón de gente que, pese a la precariedad del Internet, y la poca penetración que tiene en nuestros hábitos el uso innovador de lo digital, vienen demostrando gran capacidad a la hora de renovar y crear en estos universos. Inteligencias individuales existen de sobra. Hace falta ahora consolidar la inteligencia colectiva. Loreak (Flores) autopista, y su callado esposo dirige una excavadora desde otra cabina en la construcción; Tere, la suegra, se Por P. Luis García Orso, S.J. traga las amarguras y frustraciones de su mala relación con la nuera, pero a ne es una joven esposa que ha veces explota. Seres tristemente entrado en una menopausia encerrados en sí mismos, aislados en A anticipada, agravada por la su soledad, en su frustración, en su escasa comunicación con su silencio, a los que las flores harán que esposo. Entonces empieza a recibir salgan hacia los otros, hacia el cada semana un ramo de flores, en su encuentro, hacia la luz en sus vidas. casa, de un remitente anónimo, y entonces su rostro tímido se ilumina. El par de directores vascos, J.M Más adelante en la historia, las vidas Goenaga y J. Garaño, ha logrado un de Lourdes y de Tere, su suegra, guion lleno de sutileza y de humanidad también serán alteradas por las flores y lo ha vertido en un diseño que un desconocido deja en memoria cinematográfico casi perfecto en cada de alguien que fue parte importante de detalle, cada toma, cada tono emotivo sus vidas y ya no está. Tres mujeres a o musical, y en la actuación tan las que un ramo de flores semanal les sensible y auténtica del trío de mujeres hace encontrarse, les cambia la vida y protagonistas. Además la película les desata una lluvia de sentimientos, aprovecha al máximo la lluvia mientras que para las personas constante en el país vasco y el color cercanas a ellas “son sólo flores”, sin brillante de la vegetación, para ningún significado especial, o acaso ofrecernos una historia que parte del son motivo para investigar una mala corazón y es toda ella poesía de la vida intención. Las flores despertarán cotidiana: la poesía de las flores, la sentimientos dormidos, olvidados, lluvia, la carretera, un café, unas fotos. reprimidos, o no conocidos, que ahora Encontrarme o reencontrarme con el tendrán que aprender a vivir, a asimilar, otro me enfrenta al misterio de la a contar. Las flores expresan aquello reconciliación y a la curación de toda que no podemos expresar con palabras negatividad, hace que la vida renazca, o en que no bastan las palabras: las me abre a la luz y la esperanza. flores dicen cariño, gratitud, Encuentro conmigo y con los otros admiración, cercanía, recuerdo, nada sencillo; pero una casualidad, un reconciliación… Y estas tres mujeres accidente, una curiosidad, pueden necesitan expresarse y necesitan llevarme a los otros, y un ramo de compartir algo que rehaga sus vidas. flores puede crear el milagro.

En las tres vidas hay demasiada incomunicación, y su entorno nos lo expresará muy cinematográficamente: Ane pasa el día en una caseta que le sirve de oficina administrativa en un terreno de construcciones, su esposo se pega al televisor y apenas cruzan palabras; Lourdes trabaja en una cabina de cobro de peaje en la Cuando la originalidad no alcanza

Por Jorge Villa

e he es difícil escribir sobre la telenovela cubana actual sin remontarme al pasado, porque sin duda alguna, Cuba fue pionera de este género en América Latina. Desde los tiempos de la República, hasta la etapa posterior a 1959, la telenovela cubana fue y es un programa esperado por la familia cubana. Respetados realizadores, escritores, actores, actrices, han pasado por la telenovela cubana, con mayor o menor fortuna, pero donde el entretenimiento y una calidad adecuada, eran denominadores comunes, características que parecen haber olvidado los responsables de seleccionar y aprobar el material que será puesto en la pequeña pantalla.

Se extrañan las emisiones en ese espacio de éxitos similares a los de antaño e incluso del pasado reciente, como Doble juego de Rudy Mora, o Bajo el mismo sol de Jorge Padilla, pues las últimas entregas han dejado mucho que desear.

Después de Añorado encuentro, paso en falso de Maité Vera, y la malograda Tierras de fuego, un ridículo oeste a lo cubano, parecía que iba a suceder un renacimiento de la telenovela cubana con la emisión de La otra esquina, la cual sin ser una obra totalmente lograda, en comparación con las anteriores, era como un aguacero en un desolado desierto. Sin embargo todo fue un espejismo.

El espacio de la telenovela cubana presenta ahora una nueva obra de Maité Vera, quien con sus siempre historias de desamor, infelicidad y amores interraciales, vuelve a dar otro paso en falso, reafirmado el viejo refrán de que el hombre es el único ser que tropieza dos veces (varias veces diría yo) con la misma piedra. Esta obra no aporta nada nuevo, ni vislumbra un buen camino, volviendo abrir una misma interrogante: ¿es que no hay otros materiales que puedan ser seleccionados? ¿O es preferible apostar por la selección de una obra de un autor o autora conocida en el medio, aunque sus últimas propuestas hayan dejado bastante que desear?..

Desde su comienzo Cuando el amor no alcanza, se veía venir que era como un barco al cual le estaba entrando agua y que irremediablemente se iba a hundir. Los estigmas de racismo que todavía existen en nuestra sociedad, no se combaten con historias interraciales repletas de clichés y concesiones. Ese mal que persiste todavía, merece un tratamiento más digno y sin tapujo en la propuesta artística, sea cual sea el medio audiovisual de difusión de la misma. Si a esto se le agrega una puesta en escena deficiente, actuaciones estereotipadas y la ausencia de carisma en los protagonistas que llevan el peso de la trama, no cabe la menor duda que estamos en presencia de un desastre total.

Cubavisión debe plantearse el reto de llegar a lograr una calidad igual o superior a las propuestas provenientes de RTV Comercial, pues ya es hora de que sus entregas puedan lograr abrirse un camino en el mercado internacional y dejar de ser un niño de teta amarrado a un presupuesto estatal, situación que es insostenible económicamente para el país. La sal de la tierra

P. Luis García Orso, S.J.

l reconocido fotógrafo social Sebastiao Salgado (nacido en 1944, en Minas Gerais) ha sido testigo cercano de acontecimientos relevantes y dramáticos de la historia reciente en diversos puntos del planeta: hambrunas, desplazamiento de refugiados por la violencia y la E guerra, condiciones infrahumanas de trabajadores de minas o de pozos petroleros. Sus fotografías han conmocionado, emocionado y molestado; quizás a ninguno han dejado indiferente. Su hijo Juliano lo convenció de contar su vida y su obra en una película documental, apoyado por el afamado director de cine Wim Wenders. El resultado en intensos 110 minutos es La sal de la tierra.

El documental sigue el orden de la obra fotográfica, desde que el joven Sebastiao, recién casado con Léila, sale en 1969 de Brasil a Francia para hacer estudios especiales en Economía, y luego en 1974 cambia su trabajo de economista en fotógrafo autodidacta. Indígenas de los Andes y de Tarahumara y campesinos sin tierra del Nordeste de Brasil serán sus primeros amigos cercanos, conviviendo largamente entre ellos, aprendiendo a recoger el rostro y la fuerza moral que las personas le ofrecen. Después, como miembro de la organización Médicos sin Fronteras, Salgado irá a Etiopía y a Sudán, y los espectadores del filme empezaremos a conmovernos y llorar frente a tantos niños y mujeres muriendo de hambre. Llevados por Salgado, algo va sucediendo en nuestro interior que nos hermana con los más pobres de la tierra y que nos interpela por la desigualdad injusta y lacerante que vivimos en el mundo.

Pero la vergüenza y el dolor por el absurdo de la guerra y la violencia tocan extremos impensables cuando Salgado pasa los años 1993-1997 documentando la huida de Ruanda de los tutsis para escapar del salvaje asesinato por los hutus, el asentamiento de millones de personas en campos de refugiados en Zaire, y la muerte también por hambre y cólera. Sebastião mismo confesará sobre esta etapa de su vida: “Ya no creía en nada. No creía en la salvación de la especie humana. No podíamos sobrevivir así. No merecíamos vivir más...¿Cuántas veces tiré al suelo la cámara para llorar por lo que veía?”.

Salgado ha sentido, sufrido, palpitado con la condición humana, en su miseria y en su grandeza, en la vida y en la muerte. Y si un fotógrafo es alguien que “escribe y reescribe el mundo con luces y sombras”, si es un artista y un explorador, en medio de su desesperanzada crisis Salgado regresa a su tierra y su casa natal, abandonadas por la sequía. Como si oyera al Creador, se siente movido a replantar la tierra y hacerla fructificar, a redescubrir la belleza de la creación ahí donde el hombre no ha impuesto su violencia y su devastación. Génesis es este último proyecto, que el fotógrafo comparte con la humaniidad.

ntre mis primeros recuerdos y mis experiencias personales de la música en el cine, vienen a mi mente largometrajes de dibujos animados de Disney Ecomo Blanca Nieves y los siete enanitos y Alicia en el país de las Maravillas. Viendo algunas de estas cintas mencionadas, se me quedaban en la memoria los acordes de algunas melodías que se escuchaban en las bandas sonoras de los filmes, cuyos nombres pude conocer después. Así, del primer largometraje de Disney, llegué a silbar la tonadilla de Whistle while you work, o a disfrutar cada vez que oía en la radio a fines de los cincuenta la Marcha del Río Kwai, también conocida como Colonel Bogey, que ocupó lugares de preferencia en el hit parade de las estaciones radiales cubanas.

Pero no sólo las cintas visionadas en el cine y las bandas sonoras escuchadas en la radio, quedaron guardadas en mi memoria, sino también aquellas películas, que una y otra vez, eran pasadas por los canales de la televisión cubana, en espacios tan recordados como Cine del Hogar o Filmoteca.

La producción fílmica estadounidense predominante en la televisión era la de la compañía Warner Brothers, y de ese modo además de ir conociendo a las estrellas cinematográficas de esos estudios en su período de esplendor, fui topándome con nombres de compositores responsabilizados con la música de las películas. Uno de esos nombres que casi se repetían en la mayoría de las cintas Warner era el de Max

Steiner, a quien identificaba luego como autor de las partituras de filmes favoritos como Casablanca, La excéntrica (Now voyager), Belinda (Johnny Belinda), Las aventuras de Don Juan, Huracán de pasiones (Key Largo) o El tesoro de la Sierra Madre, que a menudo se repetían.

Pero más tarde, con el descubrimiento de los musicales de la MGM, de Gene Kelly y Stanley Donen, todo cambió, y me convertí en fan de Gene Kelly y Fred Astaire, disfrutando siempre de esos clásicos del cine. Como anécdota interesante de los clásicos musicales, mucha gente cree que la canción Singing in the rain fue compuesta originalmente para esa cinta de Kelly y Donen de 1952, cuando en realidad ya se escuchó en un filme a fines de los años veinte, casi en los inicios del cine sonoro.

A partir de 1960 y de acuerdo con la nueva política de exhibición cinematográfica, títulos como Débiles y poderosos (The High and the Mighty), Algo para recordar (An Affair to Remember), Angustias de un querer (Love is a Many Splendored Thing), Amor en la tarde (Love in the Afternoon), Melodía inmortal (The Eddy Duchin Story), Picnic, Verano de amor (A Summer Place) El túnel del amor, Problemas de alcoba (Pillow Talk), Su primer desengaño (Young at Heart), Las audaces (The Best of Everything) aparecían como cintas de relleno, y eran en cambio el verdadero centro de atracción para el público en esos años. Algunas de las mencionadas han sido “golpeadas” por el paso del tiempo, pero su s bandas sonoras han perdurado el paso del implacable.

Un hecho que me hizo poder apreciar aún más el valor de las partituras o bandas sonoras de los filmes, fue el préstamo que me hizo una condiscípula del preuniversitario, de un long playing o disco de larga duración (hoy denominado álbum) con temas de películas norteamericanas de los años 1959-1960 de la compañía

United Artists. Recuerdo que este se destacaba esencialmente por el contenido de los temas de las cintas Éxodo y El apartamento, aunque incluía además los de filmes como Lo que no se perdona (The Unforgiven), El Álamo, La que no quería morir (I Want to Live), Los magníficos siete y Feliz aniversario.

Precisamente en la primera mitad de la década de 1960, la llamada década prodigiosa, una de las películas más populares fue la checoslovaca Vals para un millón, que contó con un tema musical instrumental titulado Praga. En esta época otra cinta cuya banda sonora hizo furor fue la italiana La chica de la valija, de Valerio Zurlini, del cual se utilizara un tema para el popular programa radial Nocturno.

Con retraso de tres o cuatro años respecto a su estreno internacional se exhibió en Cuba La dulce vida, de Federico Fellini, cuya escena del strip tease de Nadia Gray, al compás de Patricia, de Pérez Prado, hizo que muchos adolescentes experimentaran su primera experiencia de erotismo en un filme en la gran pantalla.

La diversidad de países de procedencia de las películas estrenadas en Cuba durante los años sesenta del pasado siglo, me permitió conocer a otros compositores musicales, no solo norteamericanos, sino también europeos o asiáticos. De ese modo supe que aparte de grandes nombres del cine norteamericano como Dimiri Tiomkim, Miklos Rozsa, Alfred Newman, Elmer Bernstein, Bernard Hermann, Henry Mancini, había también un Nino Rota, un Francis Lai, un Masaru Sato, este último a quien descubrí en las partituras de Yojimbo y Los malos duermen bien. Pero pienso que en esos años la película que marcó a casi toda mi generación, en cuanto al poder dramático de la música, fue Los paraguas de Cherburgo, de Jacques Demy. Con la partitura de

Michel Legrand, Demy creó el milagro de trasmitir toda una serie de emociones a través de las notas de su ya legendaria obra musical. Imposible separar las imágenes de la cinta de Demy de la banda sonora de esta indudable obra maestra.

Los temas musicales realizados para los “Western”, en mi opinión las palmas se las lleva Jerome Moross con la banda sonora que creó para Horizontes de grandeza (The big country), partitura que nos trasmite la majestuosidad y la atmósfera con que está concebida la película. Paradójicamente ese año la misma no fue reconocida con el premio Oscar correspondiente en esa categoría, honor que recibió en cambio el filme El viejo y el mar, de quien seguramente nadie recuerda algún pasaje musical. Esta pifia en la selección de premios se presenta con frecuencia, no sólo en esa categoría, como muchos especialistas y aficionados conocen. Pero en determinados casos puede resultar sumamente injusto. Asimismo pudiéramos mencionar los ejemplos de los años 1959 en que la partitura de Ben Hur triunfó sobre la de Verano de amor, cuyo tema ya es todo un clásico de la discografía musical, o la de 1986, cuando la de Herbie Hancock para Round Midnight, de Bertrand Tavernier, derrotó a la que compuso Ennio Morricone para La misión, de Roland Joffé. No olvidemos que Morricone fue el autor de la música para los oestes espagueti de Leone, con Clint Eastwood, que nos hace identificar inmediatamente el ritmo de la cabalgata de jinetes en medio de una llanura o un desierto. Ennio Morriconne fue además un nombre muy familiar en los créditos de las películas italianas de aquellos años sesenta del pasado siglo exhibidas en Cuba. Fue, probablemente, uno de los compositores de música más conocidos por el público cinematográfico de las últimas cinco décadas.

Con respecto al cine cubano en mi opinión la mayoría de edad de la composición musical se alcanzó cuando Leo Brouwer compuso la banda sonora de Lucía, donde tuvo que emplear tres estilos diferentes para cada uno de los respectivos cuentos de

esta trilogía fílmica. En ese mismo año, 1968, en Cuba se estrenaron también Memorias del subdesarrollo y Las aventuras de Juan Quinquín, cuyas partituras también creó Brouwer, en las cuales demostró su capacidad expresiva para reflejar distintos tipos de géneros cinematográficos. No obstante el clímax de su inspiración creativa, a mi juicio, lo consiguió en Un día de noviembre, en donde considero compuso sus mejores temas musicales.

Para finalizar invito al lector a reflexionar en las siguientes preguntas: ¿Qué sería Vértigo, de Alfred Hitchcock, sin el tema musical introductorio de sus créditos? o ¿el de la escena de amor, que se retoma cuando James Stewart recrea a Kim Novak como a su antiguo amor muerto? o ¿Psicosis, sin las notas musicales que subrayan las puñaladas que sufre Janet Leigh en la secuencia de la ducha?.

TALENTOS PARA EL FUTURO: LA FALTA DE FIJADOR

Por Arístides O´Farrill

Según el destacado humorista cubano ya fallecido, Héctor Zumbado, uno de los defectos de nuestra idiosincrasia es la falta de “fijador”. Utilizaba el escritor esta metáfora para referirse a la inconsistencia del cubano promedio, al afán con que empezamos tantas cosas y poco a poco van feneciendo hasta quedar en nada. Ejemplos nos sobran, por desgracia a borbotones: desde los megaproyectos nacionales, de cariz socio- económicos que terminaron en menos que nada, hasta tantísimos proyectos institucionales, eclesiales, de negocios o personales que comienzan con gran ímpetu, con gran parlotearía y en demasiadas ocasiones mueren antes de nacer.

El taller Talentos para el futuro, que dentro del marco de la muestra joven, anualmente organiza de conjunto SIGNIS Cuba y la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano (1), a partir de la edición del 2010 ha mostrado una decaída motivada por una falta de “fijador”, no obstante la calidad habida en el evento del 2012.

Surgido en el año 2004, en un momento de cenit para la Muestra de jóvenes realizadores -hoy llamada muestra joven-. las primeras ediciones contaron con una amplia representación, tanto de los realizadores noveles seleccionados, como de los consagrados invitados al taller, para fungir como profesores. Entre ambos grupos se produjeron intensos y provechosos debates.

En la historia de los talleres, destaco a la edición de 2005 como una de las mejores, gracias a la participación del destacado realizador y teórico Enrique Colina, quien junto a los otros profesores escogidos y los jóvenes realizadores presentes, lograron una sabrosa interacción, pese al altercado de Colina con Susana Molina (2). A mi juicio por la calidad de las obras presentadas y la sagacidad e inteligencia de los jóvenes realizadores convocados, la mejor edición del taller sería el de 2007, donde se presentaron: Buscándote Habana, Alina Rodríguez, Model Town, Laimir Fano, Las camas solas, Sandra Gómez, Degeneración, Aram Vidal y 72 horas, Jeffrey Puente, obras que considero de lo mejor presentado a lo largo de estos años en la muestra. También valoro que esa edición del 2007 fue la mejor en lo tocante al apartado del documental. He sido espectador de todos los talleres desde sus inicios por lo que me parece puedo dar fe de su evolución - involución, pues a mi parecer, el “último gran taller” ocurrió en el año 2009, tanto por el nivel de las obras presentadas como por el foro. Fue un gran acierto escoger a dos jóvenes realizadores como conductores de los debates: el citado Laimir Fano y Rolando Rosabal (Rara Avis, 2008)

A partir de ese momento, hubo un punto de inflexión, tanto en lo ideo estético presentado, como en la calidad de las discusiones. Punto de inflexión que se supera en el año 2012, cuando se exhibe Camionero, Sebastián Miló, y se selecciona como profesor al desaparecido realizador Daniel Díaz Torres, quien con su acendrado carisma y humor natura, logró, junto al trabajo de Miló, conferirle estatura a este taller.

Lo más notable de los últimos años en relación a la desigual calidad del taller, ha sido la sensible ausencia de varios de los realizadores jóvenes convocados, resaltando en este aspecto negativo la edición de 2015. En esa edición no se pudo ni tan siquiera convocar a muchos de estos y hubo que reemplazarlos por otros, algunos con obras de menor calidad que la de los originalmente convocados.

Otro aspecto sensible de las últimas convocatorias, fue la imposibilidad de contar con profesores-realizadores de obras de buen nivel, pues en los últimos años solo ha sido estable la presencia de Aramis Acosta, un probado especialista de la animación y buen conocedor de toda la estética audiovisual, pero no exactamente un director de ficción o documental, perfil que siempre tuvieron los profesores de las primeras ediciones. A falta de realizadores con solidez en sus obras, han tomado su lugar otros de poco carisma para la intercomunicación y con escasas obras personales de gran relevancia. Este contratiempo ha sido suplido en parte por la participación en el debate de los propios jóvenes realizadores y la inclusión de figuras de prestigio dentro de la crítica nacional, como son los casos de Alberto Ramos -quien fungió como moderador de la edición de 2013- y de Mario Naito. A ellos se le han unido otros participantes sistemáticos u ocasionales, como es de destacar en el primer caso, la presencia y participación en el foro de Alquimia Peña, presidenta de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano y de Gustavo Andújar, presidente de SIGNIS Mundial y de SIGNIS Cuba. Con su presencia y apoyo, han logrado suplir la ausencia de Caridad Cumaná, fundadora del taller y habitual moderadora del mismo, hasta que decidió fijar residencia fuera de Cuba.

De este grupo de fallidos comunicadores, excluyo particularmente al realizador, músico y teórico Carlos León, quien acompañó a Acosta en la edición del 2015 e impuso su singular simpatía y jovialidad, que lo ha llevado a ser querido por tantos. Este accionar de León, junto a la inclusión a última hora del excelente documental Los amagos de Saturno de Rosario Alfonso Parodi, el cual provocó tanto elogios como un intenso debate, levantaron ostensiblemente una edición del taller que parecía condenada al fracaso. Contar en sucesivos talleres con la figura de León sería una ganancia para el mismo.

Otro aspecto y no menos importante, que afecta a la propia muestra joven, es la sensible pérdida de calidad que han experimentado varias de las obras en concurso. A esto hay que sumarle la salida del país de algunos realizadores que despuntaban como el relevo del cine y el audiovisual nacional. Los casos de los citados Fano, Vidal, Puente…, sus sucesores, salvo notorias excepciones, no han podido rellenar el vacío y esto ha ido en detrimento de la muestra y por ende del taller. Tal vez el afán de gigantismo que hemos tenido como país en demasiados renglones sociales, deportivos, políticos o culturales, el cual por desgracia todavía conservamos, habrá que aplacarlo también en lo tocante a la muestra joven, y en lugar de ofrecer una muestra anual mejor sería bienal, cómo ha sugerido Jorge Villa, aplicable, dicho sea de paso, a otros eventos audiovisuales como el premio Caracol de la UNEAC.

En general se puede afirmar que con todos sus altibajos, como tantas otras cosas en esta isla, tanto el taller como la muestra joven han logrado mantenerse, pero no se debe perder el afán por lograr la calidad y el entusiasmo de antaño, porque podría hacer peligrar la existencia de ambos eventos.

No tengo soluciones que sugerir a la vista, en el arte, en la creación artística, no las hay, lo que si constato es que la muestra joven y el taller talentos para el futuro pueden caer en crisis. Crisis, espero reversible. Dios lo permita. El tiempo dirá.

(1). Pese a ser un evento realizado dentro de la muestra joven y con el auspicio de una institución estatal como la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano, los organizadores de la muestra joven, hasta donde tengo información, jamás le han dado publicidad, no lo incluyen entre los diversos eventos colaterales que se organizan durante la fiesta del cine joven.

(2). La Molina presentó Jugando al Timeball, premio SIGNIS Cuba, en esa edición de 2005 de la muestra. Al hablar sobre su obra, la joven explicó que se había inspirado para su trabajo en los documentales cómico-sociales de Colina. Éste le espetó que había sido un craso error, pues sus documentales apenas habían servido para arreglar los males sociales que azotaron y azotan al país y por tanto el de ella tampoco cumpliría ninguna función. Mantengo la misma opinión que escribí al respecto hace diez años: El documental, aún con sus falencias estéticas, expone que precisamente al no solucionarse los problemas que evidenciaron la generación de documentalistas más temerarios, con Colina a la cabeza, la vida del cubano promedio se va disipando en una rutinaria pérdida de tiempo, en la que se le va yendo poco a poco la vida. XXXVII Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano

Por Julio César Perea

l último festival estuvo signado por algunas obras controvertidas en cuanto a temáticas, éticas y estéticas. Hubo en él comedias, filmes de acción, dramas, dramas sociales y E hasta melodramas. No obstante la diversidad de géneros y temáticas, también, como en ediciones anteriores, hubo distintas calidades. Pero por una cuestión de espacio, comentaré las que, a mi entender, merece la pena mencionar de las obras que fueron presentadas a concurso en ambos sentidos, positivos y negativos.

El Premio SIGNIS le fue asignado a la película brasileña Campo grande, con la que su realizadora Sandra Kunis, obtuvo el Coral a la mejor dirección, muy merecido además no sólo por su realización, sumado a su carácter social intrínseco, sino sobre todo, por la dirección de actores, en especial el del niño protagonista y todos sabemos lo difícil que resulta dirigir niños y que parezcan creíbles. Estamos en presencia de un drama sumamente humano, que nos narra los avatares de dos niños de unos ocho a diez años, que han sido supuestamente abandonados en la puerta de una mujer pequeño burguesa. Esta mujer tiene toda su vida resuelta, incluida una hija amorosa e inteligente, pero al mismo tiempo comprende que hay una zona vacía en sus sentimientos, y éstos van aflorando a partir de su relación con este niño tozudo, que cree inconmoviblemente, que su madre volverá para recogerlos. Un filme simplemente lleno de una suave ternura y un indudable canto al valor de la familia. Por la misma cuerda andaba La segunda madre, también de Brasil que, aunque profundizaba en un tema muy humano, lo hacía a través de una muy agradable comedia, que a veces hace reír y a veces sonreír, pero con las más legítimas armas.

El premio principal fue a las manos de El club un filme chileno dirigido por Pablo Larraín. Es un filme crudo, tal vez el más crudo de todos los presentados, en el cual nos encontramos con varios sacerdotes que han cometido pecados, en algunos casos capitales contra la moral de la iglesia católica, y que por tal razón han sido aislados en un chalet a orillas del mar. Un buen día ocurre un hecho muy violento y reciben la visita de un enviado del Vaticano el cual intentará desentrañar qué ocurrió realmente. En su relación con los cinco posibles culpables, va introduciéndose en un submundo que llega a provocarle un gran rechazo, y finalmente, resulta silenciado por la mujer que los custodia, una monja que aparentemente es la sirvienta del chalet que sirve de vivienda del “club”. Con un tema similar, pero no tan bien realizado, quedó El bosque de Karadima, también de un realizador chileno.

La luz incidente, de factura argentina, es un filme que impresiona sobre todo por una impecable fotografía en blanco y negro y en segundo término, por el drama interior que presenta. Es el relato de una mujer que queda viuda con hijos, de clase media superior y sus avatares para intentar enrumbar de nuevo su vida, la cual Influida por los que conviven a su alrededor, cede finalmente a la presión de los prejuicios, aún en contra de sus sentimientos. Simplemente, se deja llevar. Era también impresionante la actuación de la protagonista, Erica Rivas, que la mayor parte del metraje permanece en silencio, proyectando todo su drama con gestos y expresiones faciales y corporales que no precisan de diálogo alguno, y cumple con el axioma de que una sola imagen vale más que mil palabras.

Un monstruo de mil cabezas de procedencia mejicana, es un thriller que se mueve a toda velocidad a partir de una historia, que aunque habíamos visto mejor contada en John Q de Nick Cassavetes, fue llevada con un gran tiento dramático que llega a emocionar. Otra obra que valió la pena ver fue Eva no duerme a partir de los hechos reales que ocurrieron alrededor de la vida de Eva Perón. La historia centra la atención en el destino de su cadáver una vez muerta, desaparecido a lo largo de veinticinco años y todos los intereses que se movieron alrededor de estos hechos. El filme muestra con agudeza aquellos esfuerzos empeñados en borrarla y que no hubiera un lugar donde el público pudiera rendirle tributo y los que quisieron convertir su cadáver en bandera, con el fin de manipular a la opinión pública.

Merecen ser mencionadas por distintas razones, El clan de Pablo Trapero, de Argentina, debido a la depurada actuación de Guillermo Francella, que en mi opinión, merecía mejor el premio de actuación que el dúo mejicano al que le fue entregado por Te prometo anarquía; por la fotografía El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra, y NN del peruano Héctor Gálvez, por un guión muy bien hilvanado y que decae muy pocas veces.

De nuestro país, hubo una sola película que vi con gusto de principio a fin: El acompañante de Pavel Giroud que, confieso sinceramente, fue la que enfrenté con mayor recelo, pues la obra anterior de este realizador no me había causado una buena impresión, con excepción de algunos momentos de La edad de la peseta. El acompañante es una obra bastante redonda y si tiene algo discutiblemente objetable es que da la impresión de que va siguiendo los códigos del cine hollywoodense, como por ejemplo, una doctora que parece salida de Atrapado sin salida de Milos Forman. Uno de sus mejores aciertos fue la elección de un casting muy apropiado para cada uno de los personajes. Al menos, son creíbles.

El resto de las obras cubanas en concurso me parecieron inferiores, si bien las palmas se las lleva Vuelo prohibido de Rigoberto López, un filme pretencioso, pero aburrido, superficial, intentando ser profundo, y hasta a veces filosófico, y nos damos cuenta de lo realmente fallido del filme, en los últimos minutos, cuando vemos que Mario Balmaseda en menos de dos minutos se traga la película. La escena entre Mario Balmaseda y Manuel Portos es una clara rememoración de la que protagonizaran ambos en Se permuta, pero muy lejos de aquella.

De entre los cortos de ficción, el que causó una mejor impresión fue Épica de Eduardo del Llano, última entrega de la saga de Nicanor, más atrevida y más irreverente que las anteriores, pero igual de ingeniosa. En el resto, hubo algunas propuestas ingeniosas como El camino del agua del colombiano Carlos Felipe y en otra cuerda Masacre en San José de Edgar Nito, por su increíble nivel de violencia y debido a que se trata de un hecho real que estremeció la opinión pública de Méjico.

La organización fue excelente y se recibieron con beneplácito la participación de personalidades del cine de otras latitudes entre las cuales se encontraban Geraldine Chaplin, hija del gran genio, y Benicio del Toro, uno de los actores importantes del cine de hoy.

87ª Ceremonia de los premios Oscar

Película: Birdman, de Alejandro González Iñárritu Director: Alejandro González Iñárritu, por Birdman Actriz: Julianne Moore, por Still Alice Actor: Eddie Redmayne, por The Theory of Everything Actriz de reparto: Patricia Arqette, por Boyhood Actor de reparto: J.K. Simmons, por Whiplash Guión original: Alejandro González Iñárritu, Alexander Dinerlaris, Armando Bo Jr., por Birdman Guión adaptado: Graham Moore, por The Enigma de Edición de sonido: American Sniper Mezcla de sonido: Whiplash Música: Alexandre Desplat, por The Grand Budapest Hotel Canción original: John Legend y Common por Glory, de Selma Fotografía: Emmanuel Lubezki, por Birdman Edición: Tom Cross, por Whiplash Diseño de producción: Adam Stockhausen y Anna Pinnock, por The Grand Budapest Hotel Vestuario: Milena Canonero, por The Grand Budapest Hotel Maquillaje y peinados: Frances Hannon y Mark Coulier, por The Grand Budapest Hotel Efectos visuales: Paul Franklin, Andrew Lockley, Ian Hunter y Scott Fisher, por Interstellar Largometraje de animación: Big Hero 6, de Don Hall, Chris Williams y Rou Conli Cortometraje de animación: Feast, de Patrick Osborne y Kristina Reed Documental de largometraje: Citizenfour, de Laura Poitras, Mathilde Bonnefoy y Dirk Wilutsky Documental de cortometraje: Crisis Hotline: Veterans Press 1, de Ellen Goosenberg Kent y Dana Perry Corto de ficción: The Phone Call, de Mat Kirkby y James Lucas Película extranjera: Ida, de Pawel Pawlikowski (Polonia) Oscar Honorífico: Maureen O´Hara, Jean Claude Carriere y Hayao Miyazaki Premio Humanitario Jean Hersholt: Harry Belafonte

68° Festival Internacional de Cine de Cannes

Palma de oro: Dheepan, de Jacques Audiard (Francia/Canadá) Gran premio del jurado: Son of Saul, de László Nemes (Hungría) Premio a la realización: Hou Hsiao-Hsien, por The assasin (Taiwan) Premio del jurado: The Lobster, de Giorgos Lanthimos (Grecia/GB)

Premio de interpretación femenina: Emmanuelle Bercot por Mon roi y Rooney Mara, por Carol Premio de interpretación masculina: Vincent Lindon, por Le loi du marché. Premio al guión: Michel Franco, por Chronic Mejor película en Una cierta mirada: Hrútar, de Grímur Hákonarson Mejor película en Quincena de Realizadores: El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra (Colombia) Mejor película de la Semana de la Crítica: Paulina, de Santiago Mitre (Argentina) Palma de Oro de Honor: Agnes Varda Premio de la FIPRESCI Sección Oficial: Son of Saul, de László Nemes (Hungría) Premio de la FIPRESCI Sección Una cierta mirada: Masaan, de Neeraj Ghaywan (India) Premio de la FIPRESCI de la Semana de la Crítica: Paulina (La Patota), de Santiago Mitre (Argentina) Premio del Jurado Ecuménico: Mia Madre, de Nanni Moretti [Italia] Mención del Jurado Ecuménico: The Measure of a Man (La Loi du Marché), de Stéphane Brizé (Francia) Mención del Jurado Ecuménico: Taklub, de Brillante Mendoza [Filipinas]

72ª entrega de los Globos de Oro

Película Drama: Boyhood, de Richard Linklater Película comedia o musical: The Grand Budapest Hotel, de Wes Anderson Guión original: Alejandro González Iñárritu, Alexander Dinerlaris, Armando Bo Jr., por Birdman Guión: Spike Jonze, por Her Película extranjera: Ida, de Pawel Pawlikowski (Polonia) Película animada: How to Train Your Dragon 2, de Dean Deblois y Bonnie Arnold Mejor director: Richard Linklater, por Boyhood Actriz (drama): Julianne Moore, por Still Alice Actriz (comedia/musical): Amy Adams, por Big Eyes Actor (drama): Eddie Redmayne, por The Theory of Everything Actor (comedia/musical): Michael Keaton, por Birdman Actriz de reparto en película: Patricia Arqette, por Boyhood Actor de reparto en película: J.K. Simmons, por Whiplash Actriz de serie (drama): Ruth Wilson Actor de serie (drama): Kevin Spacey, por House of Cards Actor de serie (comedia): Jeffrey Tambor, por Transparent Actriz de serie (comedia): Gina Rodríguez, por Jane the Virgin Actriz de reparto en serie: Joanne Froggatt Actor de reparto en serie: Matthew Bomer, por The Normal Heart Actor en película para la televisión: , por Fargo Actriz en película para la televisión: Maggie Gyllenhaal, por The Honorauble Woman

Serie de televisión o película de televisión: Fargo Serie comedia: Transparent Banda sonora de película: Johann Johannsson, por The Theory of Everything Canción de película: John Legend y Common por Glory, de Selma Premio Cecil B. DeMille: George Clooney

65° Festival Internacional de Cine de Berlín

Oso de oro: Taxi, de Jafar Panahi (Irán) Gran Premio del Jurado: The Club (El club), de Pablo Larrain (Chile) Premio Alfred Bauer (Oso de Plata): Ixcanul Volcano, de Jayro Bustamante (Guatemala/Francia) Oso de plata al mejor actor: Tom Courtenay, por 45 Days Oso de plata a la mejor actriz: Charlotte Rampling, por 45 Days Oso de plata al mejor director: Radu Jude, por Aferim! (Rumanía/Bulgaria/República Checa) y Malgorzata Szumowska, por Body (Polonia) Oso de plata al mejor guión: Patricio Guzmán, por The Pearl Button (Chile/Francia/España) Premio a una sorprendente contribución artística en fotografía: Sturla Brandth Grøvlen, por Victoria (Alemania) y Sergey Mikhalchuk y Evgeniy Privin, por Under Electric Clouds (Rusia/Ucrania/Polonia) Premio de la FIPRESCI de la competición oficial: Taxi, de Jafar Panahi (Irán) Premio de la FIPRESCI de sección Panorama: A Minor Leap Down, Hamed Rajabi (Irán/Francia) Premio Ópera Prima: 600 Miles de Gabriel Ripstein (México) Pemio Teddy: Nasty Baby, de Sebastián Silva (USA) Premio del Jurado Ecuménico en competencia oficial: El boton de nácar (The Pearl Button), de Patricio Guzmán (Chile/Francia/España) Premio del Jurado Ecuménico en la muestra Panorama: Ned Rifle (Ned Rifle), de Hal Hartley (USA) Premio del Jurado Ecuménico de la muestra Forum: Histoire de Judas (Story of Judas), de Rabah Ameur-Zaimeche

68ª edición de los premios BAFTA

Película: Boyhood, de Richard Linklater Director: Richard Linklater, por Boyhood Actriz: Julianne Moore, por Still Alice Actor: Eddie Redmayne, por The Theory of Everything Actriz de reparto: Patricia Arqette, por Boyhood Actor de reparto: J.K. Simmons, por Whiplash

Guión original: Wes Anderson y Hugo Guinness, por The Grand Budapest Hotel Guión adaptado: Anthony McCarten, por The Theory of Everything Banda sonora: Thomas Curley, Ben Wilns y Graig Mann, por Whiplash Música: Alexandre Desplat, por The Grand Budapest Hotel Fotografía: Emmanuel Lubezki, por Birdman Edición: Tom Cross, por Rush Whiplash Diseño de producción: : Adam Stockhausen y Anna Pinnock, por The Grand Budapest Hotel Vestuario: Milena Canonero, por The Grand Budapest Hotel Maquillaje y peinado: Frances Hannon y Mark Coulier, por The Grand Budapest Hotel Efectos visuales: Paul Franklin, Andrew Lockley, Ian Hunter y Scott Fisher, por Interstellar Largometraje de animación: The Lego Movie, de Phil Lord y Christopher Miller Cortometraje de animación: The Bigger Picture, de Chris Hees, Daisy Jacobs y Jennifer Majka Corto de ficción: Boogaloo y Graham, de Brian J. Falconer, Michael Lennox y Ronan Blaney Película de habla no inglesa: Ida, de Pawel Pawlikowski (Polonia) Premio estrella naciente (otorgado por el público): Jack O´Connell Premio Honorífico: Mike Leigh Documental: Citizenfour, de Laura Poitras, Mathilde Bonnefoy y Dirk Wilutsky Mejor filme británico: The Theory of Everything Premio al director, guionista o productor británico novel: Stephen Beresford (Guionista) y David Livingstone (Productor), por Pride Premio a la Mayor contribución a la Cinematografía Británica: BBC Films

29ª Ceremonia de entrega de los premios Goya

Película: Marshland, de Alberto Rodríguez Director: Alberto Rodríguez, por Marshland Actriz: Bárbara Lennie, por Magical Girl Actor: Javier Gutiérrez, por Marshland Actriz de reparto: Carmen Machi, Spanish Affair Actor de reparto: Karra Elejalde, por Spanish Affair Actriz revelación: Nerea Barros, por Marshland Actor revelación: Dani Rovira, por Spanish Affair Guión original: Alberto Rodríguez y Rafael Cobos, por Marshland Guión adaptado: Javier Fesser, Claro García y Cristóbal Ruiz, por Mortadello y Filemón: Misión imposible Película hispanoamericana: Relatos salvajes, de Damián Szifrón (Argentina) Película europea: Ida, de Pawel Pawlikowski (Polonia) Mejor director novel: Carlos Marqués-Marcet, por 10,000 km

Banda sonora: Sergio Burmann, Marc Orts y Oriol Tarragó, por El niño Música: Julio de la Rosa, por Marshland Canción original: Niño sin miedo, de India Martínez, Riki Rivera y David Santisteban, del filme El niño Fotografía: Alex Catalán, por Marshland Edición: José M.G. Moyano, por Marshaland Dirección de producción: Edmond Roch y Toni Novella, por Marshland Dirección artística: Pepe Domínguez, por Marshland Vestuario: Fernando García, por Marshland Maquillaje y peluquería: Carmen Veignat , por Sherw´s Nest Efectos especiales: Raúl Romanillos y Guillermo Orbe, por El niño Largometraje de animación: Mortadello y Filemón: Misión imposible Largometraje documental: Paco de Lucía: La Búsqueda Cortometraje documental: Si estas paredes hablasen Corto de ficción: Café para llevar Cortometraje de animación: Juan y la nube

Premios César del Cine Francés

Película: Timbuktu, de Abderrahmane Sissako Director: Abderrahmane Sissako, por Timbuktu Actriz: Adèle Haenel, por Love at First Fight Actor: Pierre Niney, por Yves Saint Laurent Actriz de reparto: Kristen Stewart, por Clouds of Sils Maria Actor de reparto: Reda Kateb, por Hippocrate Actriz prometedora: Louane Emera, por – La Famille Bélier Actor prometedor: Kévin Azaïs, por Love at First Fight Guión original: Timbuktu, de Abderrahmane Sissako y Kessen Tall Guión adaptado: Diplomacy, de Cyril Gely y Volker Schlöndorff Película extranjera: Mommy, de Félix van Groeningen Ópera Prima: Love at First Fight, de Thomas Cailley Música: Amine Bouhafa, por Timbuktu Fotografía: Sofian El Fani, por Timbuktu Edición: Nadia Ben Rachid, por Timbuktu Dirección artística: Thierry Flamand, por Beauty and the Beast Vestuario: Anaïs Romand, por Yves Saint Laurent Sonido: Philippe Welsh, Roman Dymny y Thierry Delor, por Timbuktu Documental: The Salt of the Earth Animado: Minuscule: Valley of the Lost Ants Cortometraje: La femme de Río

72° Festival Internacional de Cine de Venecia

León de oro: Desde allá, de Lorenzo Vigas (Venezuela)

Gran Premio del Jurado: Anomalisa, de y Duke Johnson (Reino Unido). Premio especial del Jurado: Abluka, de Emin Alper. León de plata al mejor director: Pablo Trapero, por El clan Copa Volpi al mejor actor: Fabrice Luchini por L'hermine, de Christian Vincent. Copa Volpi a la mejor actriz: Valeria Molino, por Per amor vostro, de Giuseppe M. Gaudino. Premio al mejor guión: Christian Vincent, por L'hermine León de Oro por la obra de toda una vida: Thelma Schoonmaker y Frederick Wiseman Premio FIPRECI: Blood of My Blood (Sangue del mio sangue), de Marco Bellocchio (Italia) Premio de la FIPRECI (Sección Horizontes): Wednesday, May 9, de Vahid Jalilvand (Irán) Premio SIGNIS: Calibri Behemoth (Documental de China), de Zhao Liang Mención SIGNIS: The Wait (L’Attesa), de Piero Messina (Italia) Premio Marcello Mastroianni al mejor novel actor o actriz: Abraham Attah, por Beasts of No Nation, de Cary Fukunaga. Premio a la mejor opera prima: The Childhood of a Leader, de Bradley Corbett.

68ª edición del Festival Internacional de Cine de Locarno

Leopardo de oro: Right Now, Wrong Then, de Hong Sangsoo (Corea del Sur) Premio especial del jurado: Tikkun, de Avishai Sivan (Israel) Leopardo de plata a la mejor dirección: Andrzej Zulawski, por Cosmos (Francia/Portugal) Leopardo de plata a la mejor actriz: Tanaka Sachie, Kikuchi Hazuki, Mihara Maiko, Kawamura Rira, por Happy Hour, de Hamaguchi Ryusuke (Japón) Leopardo de plata al mejor actor: Jung Jae-Young, por Right Now, Wrong Then, de Hong Sangsoo (Corea del Sur) Leopardo para la mejor opera prima: Thithi, de Raam Reddy (India/USA/Canada) Premio FIPRESCI: Suite Armoricaine, de Pascale Breton (Francia)

Premio del Jurado Ecuménico: Paradise, de Sina Ataeian Dena (Iran/Alemania) Premio Semana de la Crítica: 15 Corners of the World, de Zuzanna Solakiewicz (Polonia-Alemania) y La mort du Dieu Serpent, de Damien Froidevaux (Francia). Leopardo de oro del certamen Cineastas del presente: Thithi, de Raam Reddy (India/USA/Canada) Premio especial del jurado del certamen Cineastas del presente: Dead Slow Ahead de Mauro Herce (España/Francia) Premio Europa Cinemas Label: Keeper, de Guillaume Senez (Bélgica/Suiza/Francia)

50° Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary

Gran Premio Globo de Cristal: Bob and the Trees, de Diego Ongaro (USA) Premio especial del jurado: Those Who Falls Have Wings, de Peter Brunner (Austria) Director: Visar Morina, por Babai (Alemania/Kosovo/Macedonia/Francia) Mención a la mejor dirección: Anca Damian, por The Magic Mountain (Rumanía/Francia/Polonia) y Ferdinando Cito Filomarino, por Antonia (Italia/Grecia) Actriz: Alena Miluhová, por Home Care (República Checa/Eslovenia) Actor: Krystof Hádek, por The Snake Brothers (República Checa) Gran Premio en documental: Mallory, de Helena Tiesúková (República Checa) Mención en documental: The Fatjer Tapes, de Albert Meisi (Austria) Documental de corta duración: White Death, de Roberto Collio (Chile) Mención en documental de corta duración: Women in Sink, de Iris Zaki (Reino Unido/Israel) Premio del público: Youth, de Paolo Sorrentino (Italia/Francia/Suiza/Reino Unido) Premio a la trayectoria artística: Iva Janzurová (República Checa) Globo de Cristal por su gran Contribución al mundo del cine: Richard Gere (USA) Premio del Jurado Ecuménico: Bob and the Trees, de Diego Ongaro (USA) Mención del Jurado Ecuménico: Song of Songs, de Eva Neymann (Ucrania) Premio de la FIPRESCI: Box, de Florin Servan (Rumania/Alemania/Francia)

63ª Festival Internacional de Cine de San Sebastián

Concha de oro a la mejor película: Runnar Runnarson (Islandia/Dinamarca/Croacia) Premio especial del Jurado: Lucille Hadzihalilovic, (Francia/Bélgica/España) Concha de plata a la mejor actriz: Yordanka Ariosa, por El Rey de La Habana (España/República Dominicana) Concha de plata al mejor director: Joachim

Lafosse, por The White Knights (Francia/Bélgica)

Concha de plata al mejor actor (Ex Aequo): Ricardo Darín y Javier Cámara por Truman (España/Argentina) Premio al Mejor Guion: Arnaud Larrieu y Jean-Marie Larrieu, por 21 Nights with Pattie (Francia) Mención especial: Federico Veiroj, por El apóstata (España/Uruguay/Francia) Premio a la Mejor Fotografía: Manu Dacosse, por Evolution (Francia/Bélgica/España) Premio Horizontes Latinos: Güeros, de Alonso Ruiz Palacios (México) Premio Kutxabank Nuevos Directores: Rudi Rosenberg, por The New Kid (Francia) Mención Kutxabank Nuevos Directores: Peter Gronlund, por Drifters (Suecia) Gran Premio FIPRESCI: El apóstata, de Federico Veiroj (España/Uruguay/Francia) Premio SIGNIS: Moira, de Levan Tutberidze (Georgia) Mención SIGNIS: When a Tree Falls, de Asier Altuna Iza (España) Premio película europea: Mountains May Depart, de Jia Zhang-Ke (China/Francia/Japón) Premio del público: Nuestra hermana pequeña, de Hirokazu Koreeda (Japón) Premio de la Juventud: Paulina, de Santiago Mitre (Argentina/Brasil/Francia) Premio Sebastiane: Freeheld, de Peter Sollett (USA) Premio TVE Otra Mirada: Paulina, de Santiago Mitre (Argentina/Brasil/Francia)

29º Festival Internacional de Mar del Plata

Astor de Oro a la Mejor Película: El abrazo de la serpiente, de Ciro Guerra (Colombia/Venezuela/Argentina) Astor de Plata al Mejor Director: Iván Ostrochovsky, por Koza (Eslovaquia/República Checa) Astor de Plata al Mejor Guion: Guillermo Calderón, Daniel Villalobos, Pablo Larraín, por El club, de Pablo Larraín (Chile) Astor de Plata a la Mejor Actriz: Erica Rivas, por La luz incidente, de Ariel Rotter (Argentina/Uruguay/Francia) Astor de Plata al Mejor Actor: Elenco masculino de actores de El club, de Pablo Larraín (Chile); Alfredo Castro, Roberto Farias, Jaime Vadell y Alejandro Goic Competencia Latinoamericana Mejor largometraje: Santa Teresa & Otras historias, de Nelson Carlo de Los Santos Arias (México/República Dominicana/Estados Unidos) Mejor cortometraje: Princesas, de Natural Arpajou (Argentina) Competencia Argentina Mejor largometraje: El movimiento, de Benjamin Naishtat (Argentina/Corea del Sur)

Mejor director de largometraje: Fernando Salem, por Cómo funcionan casi todas las cosas Mención especial: Los Cuerpos Dóciles, de Matías Scarvaci y Diego Gachassin Mejor Cortometraje: Fantástico, de Tomás Sposato Mejor Director de Cortometraje: Pablo Camaiti, por Gomorra Premio del público a la mejor película de la Competencia Internacional: Remember, de Atom Egoyan (Estados Unidos) Premio Honorífico Alfredo Alcón: Guillermo Francella Mejor película del Panorama Argentino: Parabellum, de Lukas Valenta Rinner (Argentina/Austria/Uruguay) Premio DAC Mejor director en Competencia: Matías Scarvaci y Diego Gachassin, por Los cuerpos dóciles Premio SIGNIS: Koza, de Ivan Ostrochovský (Eslovaquia/República Checa) Mención SIGNIS: El precio de un hombre, de Stéphane Brizé (Francia) Premio FIPRESCI: La luz incidente, de Ariel Rotter (Argentina/Uruguay/Francia) Premio Asociación de Cronistas Cinematográfico de la Argentina (ACCA) a la Mejor Película de la Competencia Internacional: La luz incidente, de Ariel Rotter (Argentina/Uruguay/Francia) Mención especial de la ACCA: La isla del viento, de Manuel Menchón (España)

37° Festival internacional del Nuevo Cine Latinoamericano

Primer Premio Coral: El Club, de Pablo Larraín (Chile) Mención del Jurado: La obra del siglo, de Carlos Enrique Machado Quintela (Cuba/Argentina/Alemania/Suiza) Premio Coral Especial del Jurado: Toro, de Neón de Gabriel Mascaro (Brasil/ Uruguay/Holanda) Premio Coral de Dirección: Sandra Kogut, por Campo Grande (Brasil/Francia) Premio Coral de Guión: Julio Hernández Cordón, por Te prometo anarquía (México/Alemania) Premio Coral de Actuación Masculina: Diego Calva y Eduardo Eliseo Martínez, por Te prometo anarquía (México/Alemania) Premio Coral de Actuación Femenina: Jana Raluy, por Un monstruo de mil cabezas (México) Premio Coral de Edición: Etienne Boussac, por El abrazo de la serpiente (Colombia/Venezuela/Argentina) Premio Coral de Música Original: Nascuy Linares, por El abrazo de la serpiente (Colombia/Venezuela/Argentina) Premio Coral de Banda Sonora: Alejandro de Icaza y Raúl Locatelli, por Yo (México/Canadá/Suiza/República Dominicana) Premio Coral de Fotografía: Guillermo Nieto, por La luz incidente (Argentina/ Francia/Uruguay)

Premio Coral de Dirección Artística: Ailí Chen, por La luz incidente (Argentina/ Francia/Uruguay) Premio Coral de Cortometraje: La nube, de Marcel Beltrán Fernández (Cuba) Mención del Jurado en cortometraje: Camino del agua, de Carlos Felipe Montoya (Colombia) Premio Coral de documental en largometraje: Casa Blanca, de Aleksandra Maciuszek (Cuba/México/Polonia) Premio Coral de documental en cortometraje: Tripido, de Mónica Moya (Colombia) Premio Especial del jurado en documental: La pasión de JL, de Carlos Nader (Brasil) Mención Especial del jurado en documental: Los impunes, de Agnès Gattegno (Francia) Primer Premio Coral de animación en mediometraje: Las aventuras de Juan Quin Quin, de Alexander Rodríguez González (Cuba) Premio Coral de animación en cortometraje: Los ases del corral, de Irving Sevilla García y Manuel Alejandro Báez Téllez (México) Premio Especial del jurado en animación: Guida, de Rosana Urbes (Brasil) Mejor Cartel: José Alberto Menéndez (Pepe Menéndez), por Cuba Libre (Cuba) Coral de guión inédito: El hilo rojo, de Arturo Infante (Cuba) Primer Premio Coral Ópera prima: Desde allá, de Lorenzo Vigas (Venezuela/ México) Premio Coral a la mejor contribución artística en Ópera prima: Manos sucias, de Josef Wladyka (Colombiana) Premio especial del jurado en Ópera prima: Magallanes, de Salvador del Solar (Perú/Argentina/Colombia/España) Premio SIGNIS: Campo Grande, de Sandra Kogut (Brasil/Francia)

Premio FIPRESCI: Paulina, de Santiago Mitre (Argentina/Brasil/Francia) Premio del público: El Clan, de Pablo Trapero (Argentina/España) Premio de Posproducción del Alba Cultural Nuestra América, Primera Copia: Sharing Stella, de Enrique Álvarez (Cuba/Colombia)

Nota: Agradecemos las colaboraciones de Juan José Rodríguez Menéndez, Antonio Mazón Robau y Francisco Antonio Martínez Hraste, sin las cuales no hubiera sido posible la realización de este artículo. Addio Laura

Por Arístides O´Farrill

a muerto Laura Antonelli, diva del cine italiano de los años 70- 80 del siglo pasado. La noticia resulta más triste cuando conocemos que Hterminó sus días aquejada de problemas mentales, luego de ser recogida de las calles por adicción a las drogas, a las que se enganchó luego de una pésima cirugía estética, que terminó por arruinar su ya entonces marchita belleza.

Doloroso final para quien fue una estrella del cine internacional y mito erótico en su etapa de esplendor, tal vez parte de los misteriosos acomodos de la vida o el destino: a quién se le da belleza y éxito, ¿se le quita el derecho a la felicidad, a una vida sosegada? o ¿ la maldición de la belleza?. Sólo Dios sabe.

Para las nuevas generaciones de cinéfilos este deceso puede resultarles indiferentes, hasta puede sorprenderles tanta admiración por la belleza de esta mujer, pues los tiempos cambian y los cánones estéticos con ellos. Para mi generación y la que nos precedió, la historia es bien diferente. De una larga lista de filmes en los que intervino, que ronda la treintena de títulos, nuestros puritanos censores nos dejaron ver primero Sin móvil aparente (Sans Mobile Aparent, Philppe Labro, 1971) y Los amantes del año 2 (Les Maríes de L´An Deux, Jean Paul Rappaneau, 1971), pero sus protagónicos en Divina criatura ( La Divina Creatura, Guiseppe Patroni, 1979) El inocente (L´inocente, Luchino Visconti, 1976) y en Cuentos de alcoba (Letti Salvagge, Luigi Zampa, 1979), fueron suficientes para que formara parte de nuestra educación sentimental y por eso sentimos, siento, su muerte. Por esta razón, gracias primero al VHS y luego a la era digital, hemos logrado pescar algunas de las películas en que ella intervino y se nos vedó verlas, aunque las más de las veces le damos la razón a los censores, no políticamente ni moralmente, sino por la estética.

La Antonelli nació en Yugoslavia en la región de Pula, hoy perteneciente a Croacia, comenzando su carrera en el cine italiano en 1969. Producto de su belleza la encasillaron rápidamente en papeles “sexy“, coincidiendo con un momento del cine italiano en el cual el erotismo era casi un subgénero. Su fama se elevó sobre todo gracias al protagónico de niñera en el filme Malicia (Malizia, Salvatore Samperi, 1973) donde combinó a la perfección sensualidad con inocencia, ayudada por sus bellos ojos que sin embargo traslucían tristeza, quizás una premonición de lo que sería su vida posteriormente. Ojos tristes, que el célebre realizador Luchino Visconti, utilizó muy bien para su canto de cisne en el cine con la citada El inocente, a mi juicio su obra más redonda. En este filme la Antonelli tiene la mejor actuación de su carrera, como una mujer elegante y bella, pero encorsetada y humillada por la aristocrática y sexista burguesía italiana decimonónica.

Otro breve, pero intenso papel, es el que interpreta en el filme Pasión de amor (Passione D´Amore, Ettore Scola, 1981) último filme donde ella intervino, visto comercialmente en Cuba, y donde vuelve a dar fe de su innegable talento. Pero el dinero y la taquilla mandan y su carrera se mantiene enfocada en filmes intranscendentes que explotan su desbordante sensualidad, aun cuando trabaja para realizadores de prestigio. Un ejemplo es la penosa La veneciana (La venexiana, 1986), obra bien baja del irregular realizador Mauro Bolognini, donde a la Antonelli se le nota sobrepeso, razón por la que al parecer acude al quirófano seis años más tarde, lo que da inicio a su calvario: adicción a las drogas, prisión, humillación pública y reclusión siquiátrica. Aunque logró salir de la institución mental, nunca volvió a ser la misma y perdió todo contacto con el mundo exterior. Dicen que en el ocaso de su vida no veía televisión ni cine, solo escuchaba una estación religiosa dedicada a María. Otro misterio de la vida: como el dolor nos puede acercar a Dios.

Laura, gracias por esos momentos que nos regalaste a los entonces púberes y no tan púberes. Aún recuerdo una foto tuya en que comparaban las curvaturas de tu cuerpo con el de una guitarra, foto que otro admirador tuyo me robó…

Estoy seguro que el buen Dios te perdonará tus excesos dentro y fuera de la pantalla. En un mundo que por desgracia transpira maldad de todo tipo: guerras, corrupción, zancadillas personales, envidias, desidia, marginación, terrorismo, fundamentalismo religioso… Él no va a tener en cuenta a una mujer que fue bella e hizo soñar a miles de hombres entre ellos a algunos de una extraña isla – que tal vez solo conociste por referencia- y por aquel entonces se encontraba en medio de la más feroz represión cultural que ha sufrido y que lleva por nombre Cuba; hombres que por cerca de 90 minutos o más, olvidaron sus penas.

Addio, Laura.

Héctor Pérez Ramírez: Leyenda de la radio cubana

Por Antonio Martínez

a radio cubana está de luto, Héctor Pérez Ramírez, uno de sus más talentosos directores, ha dejado de existir físicamente entre nosotros. LIndiscutible personalidad de la radio cubana, su talento, su quehacer artístico y ética profesional, lo han convertido en una leyenda del medio, especialmente para aquellos espacios los cuales dirigió por largo tiempo como La novela de las dos y La gran aventura de la humanidad.

Desde su más corta infancia estaba fascinado por la radio y era un fiel oyente de las transmisiones radiales de Temakún, el vengador errante, un espacio de aventuras muy popular que se transmitía por RHC Cadena Azul, en el lejano año de 1948.

Logró entrar al mundo artístico de la radio a mediados de la década de 1950 y desde entonces quedó por siempre atrapado por la magia de ese medio de comunicación. Su impronta en la radio cubana ha sido enorme, Mencionar los espacios para los cuales trabajó o las novelas que dirigió, sería realizar una lista de títulos enorme, la mayoría de ellos inolvidables. En una reciente conversación informal que sostuvo con nuestro editor, confesaba que en su larga carrera el momento de mayor emoción ocurrió cuando le propusieron dirigir el programa La gran aventura de la humanidad, porque ese programa había sido siempre su preferido, incluso antes de que se hubiese hecho de un nombre en el ámbito artístico.

Uno de sus últimos grandes éxitos, fue la puesta radial de La condesa descalza en La novela de las dos, basada en la vida de Ava Gardner y con libreto original de Pedro Urbezo. En las encuestas realizadas por las entidades correspondientes durante su transmisión, encabezaba la relación de los programas más escuchados.

Hombre de profunda fe cristiana, siempre estuvo presente en cuanta ceremonia católica requiriese su presencia como conductor o comunicador. Uno de sus últimas comparecencias públicas, y como un asistente más, fue en la entrega de la Orden Carlos Manuel de Céspedes a Gina Preval y Fina García Marruz en acto celebrado en el 2014 en la sala Walfredo Piñera del Centro Cultural Padre Félix Varela. El humanismo duro de orgias, que por igual acontecen, en el mundo de la alta burguesía Monicelli, el gran representados en el filme de Fellini. maestro semi olvidado Curiosamente, con menos ambivalencia que aquel filme, éste Por Arístides O´Farrill sugiere que la corrupción no es una problemática de una clase social n el año 2015 la Cinemateca sino del mal que anida en la de Cuba rindió un más que persona. Tan corrupta es la elite E merecido homenaje al burguesa como el proletariado, realizador italiano Mario Monicelli, pues el personaje interpretado por genio del cine italiano y uno de los Pierre Cressoy, es un arribista que mejores exponentes de la llamada chantajea a las damas de la alta comedia alla italiana (1). sociedad para lograr sus propósitos. Lo mismo sucede con el detective Monicelli (1915- 2010), está privado, quien lejos de cumplir con considerado como uno de los su deber profesional, lo que busca grandes realizadores del cine es sacarle lascas a su clientela. En cómico de esa etapa de oro del definitiva todos los personajes de cine italiano, sobre todo por el este filme, tanto los que representan clásico Los desconocidos de a la alta clase como la baja clase, siempre (Il solito ignotti, 1958). Sin se unen para aplastar al inocente, embargo gracias al citado ciclo de como ocurre al final de la película. la cinemateca cubana hemos Final, en el que la representación descubierto un Monicelli, ecléctico, del sacrificio del inocente, Mario de un registro bien amplio, que Monicelli muestra un cariz cristiano alternó con soltura el drama y la que acompañará a toda su comedia y en algunos casos fusionó filmografía, pese a declararse ambas modalidades genéricas. Sí agnóstico (2). bien se considera a la referida Los desconocidos de siempre como su Otro filme de Monicelli, que a mi primera obra maestra, sugiero juicio merece ser rescatado, es El remitirse a Las infieles (Las médico y el curandero/Il medico e infideles,1952), que tal vez pueda lo Strogone/ 1957, comedia social ser su real primera obra maestra. en la línea neorrealista, muy bien Filme, donde según Jorge Villa, con contada y con toques de humor el cual coincido plenamente, se que aún conservan frescura. Está adelanta a La dulce vida (La Dolce ubicada en un pueblucho rural Vita, 1959, Federico Fellini), en su sumamente atrasado y que narra el retrato mordaz, no exento de enfrentamiento entre un medico humanismo y compasión, de la vida profesional enviado al sitio - muy corrupta de la gran burguesía bien Marcello Mastroianni- y un romana: la secuencia de los curandero vividor embaucador- excesos en la fiesta privada que magnifico Vittorio de Sicca- que acontece en la gran mansión vive de trasquilar a sus crédulos burguesa, preanuncian a las vecinos. Como sucederá con otros filmes de Monicelli, la premisa es que buscan a toda costa huir del engañosa, pues de una película en conflicto bélico en que se ha apariencia cínica, logra una involucrado Italia, la I Guerra profundamente humana, pues en Mundial. esencia se trata de la redención de un farsante. Pues este hombre, falso Filme, en la que tras una serie de imaginativas peripecias, con las milagrero, en el fondo sólo un pobre diablo, al final logra un auténtico que Monicelli demuestra su caudal para construir situaciones y milagro: el propiciar el nacimiento de una nueva vida que estaba por personajes, sus protagonistas terminan convertidos en héroes a la perderse. Con un adecuado cierre, hermoso, melodramático y poético, fuerza. La cinta aunque deudora de ciertos filmes de Preston Sturges, en que curiosamente se alinea con el pensamiento pro- vida que particular: Salve el héroe victorioso (Hail the Conqueror Hero, 1944), defienden grupos cristianos hoy en día. logra su propia originalidad y expresa sin ambages su rechazo a En el crucial año de 1959, el mismo la guerra, cualquier guerra, aún las en el que ocurren tantos cambios llamadas “guerras justas” como buenos y malos para la humanidad, comúnmente se denominan a la y el mismo en que Fellini estrena su Primera y sobre todo a la Segunda Dulce vida y Micheangelo Guerra Mundial. En esto Monicelli se Antonioni estrena La aventura adelanta bastante, aunque con su (L´avventura), Monicelli entrega habitual discreción, a todo el cine antibélico del presente siglo (2), no a la manera del pacifismo tonto de las décadas del 60-70, sino a la conciencia de que en toda guerra o acto violento hay dosis de maldad, y que a los subalternos de siempre son a quienes les toca la una obra menos conocida y poco peor parte. publicitada, pero que al paso del Luego vendría el reconocimiento tiempo va a demostrar que es tan global que obtiene con Los buena como las dos citadas: me desconocidos de siempre (I Soliti refiero a La gran guerra (La Grande Ignoti, 1958). Esta película se Guerra), sátira decididamente adscribe a cierta tendencia que antibelicista, donde un par de alcanza visibilidad en el subgénero soldados pícaros, además de del cine criminal de esos años: “los cobardes, están estupendamente filmes de atracos o grandes interpretados por dos de los más golpes”, cuyos máximos exponentes grandes actores de todos los eran el filme norteamericano, Casta tiempos, Vittorio Gassman y Alberto de malditos (The Killing, Stanley Sordi. Ambos interpretan a los Kubrick, EE.UU. 1956) y la francesa picaros enrolados en el ejército, Rififi entre los hombres (Du Rififi Chez juntos construirse un refugio, una esperanza que les ayude a sentirse vivos y salir de la pesadilla en la que están sumidos, para luego percatarse que tanto ellos como el citado hampón, no son más que simples fracasados.

Tan ambiciosa como La gran guerra aunque no tan eficaz como aquella Les Hommes, 1954, Francia, Jules va Los compañeros (Il compani), Dassin). A diferencia de estos filmes, sutil y provocador cuestionamiento donde los protagonistas son tipos en clave de comedia, de las duros, hampones de mayor o primeras luchas sindicales de los menor cuantía, en el filme de comunistas y la izquierda en el Turín Monicelli la acción se centra en un de principios del siglo XX. Monicelli grupo de perdedores, fracasados, guionista de casi todas sus películas, desclasados, que intentan levantar- con una acendrada escritura, se sin éxito- sus ruinosas y rutinarias burla de la izquierda radical y su vidas. Aspectos que serán una pretensión de “hombre nuevo”, sin marca autoral del cine de Monicelli: contar con que el hombre de preferencia por lo simples, por los siempre persiste en sus ambiciones, perdedores, por los que no esperan anhelos y querencias, y estas nada, y resalte del espíritu humano características no son fáciles de que pese a todas las adversidades trastocar por ninguna ideología. de la vida, se mantiene aferrado a Otra característica del cine de una esperanza que tal vez nunca Monicelli es mostrar la estupidez del llegue…, la compasión ante seres género masculino, evidenciando humanos en el borde, a los que les que la gran venganza del género ha tocado ser cola o subalternos y femenino ha sido hacernos creer buscan afanosamente algo que les que somos los hegemónicos, el sexo demuestre que están vivos y no fuerte, cuando la realidad muchas caer en la gran tentación de la veces indica lo contrario. Así lo que hablan los teólogos cristianos. representa en un filme interesante Así son los personajes de la por su temática, pero vencido subvalorada comedia dramática: estéticamente por el paso del Llegaron los bribones (Risate Di tiempo, Casanova 60, 1965, irónica Goia/, 1960), sobre dos maduros auscultación del famoso seductor estafadores- excelentes como de mujeres homónimo, cuya siempre Totó y Anna Magnani- narración acá es trasladada a los quienes en decadencia biológica y liberales años 60 del pasado siglo maltratados por una continua lucha XX. por la supervivencia, son Otras dos comedias satíricas dirige acechados por un hampón de por esas fechas La armada Branca- poca monta, por lo que intentan con Romance popular, (Romanzo Popolare, 1974), un auténtico clásico de Monicelli, si lo logra y con creces. Un maduro y creído cuarentón, interpretado en horas muy altas por Ugo Tognazzi se enamora de una hermosísima cuasi adolescente- Ornella Muti con una leone (L´armata Brancaleone, 1966) belleza y sensualidad obscena- con a la que sigue una secuela, las previsibles consecuencias que el Brancaleone en las cruzadas ( paso del tiempo depara para estas Brancaleone alle crociate, 1970), parejas tan disparejas en edades. El otro rechazo a la guerra y en filme va derrumbando con humor y particular a las supuestas gloriosas sutileza la máscaras que se ha batallas de la Edad Media. Pero puesto este hombre ante la vida: ambos filmes vistos hoy en día liberal de izquierda, por tanto apenas dan gracia, culpa en convencido del derecho de las buena medida de la mujeres, para una vez su alma sobreactuación de Vittorio desnuda, quedar como el clásico Gassman, un magnifico actor como machista provinciano- lo cual he dicho, pero cuando era queda expuesto en una de las controlado por los directores, escenas antológicas de la comedia cuando no, como parece ser el italiana: el descubrimiento caso, payaso hasta el ridículo. progresivo del adulterio, narrado con un sentido del humor, que va Los años 70 del siglo XX, son de gran increscendo, en los breves planos convulsión socio- política para Italia: secuencias en que está narrado. corrupción, terrorismo, mafia, Pero aún más duro, le resulta radicalismo ideológico. Al parecer descubrir la dura verdad de que es preocupado por este estado de un hombre en declive biológico, al cosas. Monicelli dirige Queremos los cual, como a casi todos nos pasa al coroneles (Vogliamo I Colonelli, final, solo le queda aferrarse a 1972), donde sin abandonar el tono partidos caseros dominicales y satírico, lanza una advertencia visitar su pequeña hija. Este filme sobre la posibilidad de una ruptura donde la contagiosa música del orden democrático, en caso de compuesta por Enzo que la crisis que vive el país llegara a la ingobernabilidad, aupando entonces el populismo político afines a estas situaciones, tan en boga desde entonces, en no pocas regiones latinoamericanas.

Sí, Casanova 70, exponía pero no redondeaba “la victoria de la Jannacci, evoca pasado, nostalgia mujer” en la guerra de los sexos, y sirve como perfecto leif motiv para una agridulce reflexión sobre desde el punto de vista socio- la condición humana y ese paso político, y que una de las aristas que del inexorable, que convierte los afectaban al país eran los terroristas sueños en casi nada, hasta internos pertenecientes a una obligarnos a aferrarnos a pequeñas llamada izquierda radical. Estos cotidianidades infantiles, a las intentaban desestabilizar el país cuales en plena juventud, jamás mediante los atracos, atentados y pensábamos que volveríamos, secuestros, siendo el más notorio el como sucede en la elocuente, del primer ministro de la nación humana y hasta triste escena final. Aldo Moro, asesinado en 1978. En este enrarecido contexto Monicelli, Ante esta realidad imponderable se vuelve a adelantar a estos de la vida, se rebelan los trágicos hechos con la realización protagonistas de otro clásico, de Un burgués pequeño, pequeño Amigos míos (Amice Mei, 1975), (Un Borghese Piccolo, Piccolo, sobre el “peterpanismo” de un 1977), una cinta con una premisa y grupo de cuarentones que se un título “engañoso” , pues la niegan a crecer y asumir en misma comienza pareciendo una plenitud los compromisos que comedia social e irónica. Alberto presuponen les toque por su edad. Sordi- otra vez grande- interpreta a Pasan buena parte de su tiempo un italiano promedio que desea libre y parte del que no lo es para su único hijo, un joven poco también, gastándole bromas y despierto, una vida decente, que haciéndole travesuras a todo tipo se resume en un trabajo en la de incautos. A simple vista puede misma empresa en la que él labora. parecer una película cínica, pero Pero un trágico accidente, en el fondo es por enésima vez en vinculado al referido terrorismo el cine de Monicelli, un retrato sobre político, cambia radicalmente las perdedores, sobre gente que siente cosas, y a partir de ahí la película se que la vida se les va de las manos y inscribe en los filmes de “vigilantes” que ellos no van a sobresalir del tan famosos en aquella época, montón, no van a dejar de ser unos como las sagas norteamericanas de tantos anónimos en este mundo, de Harry el sucio (Dirty Harry 1971), por lo que se aferran a unos juegos o la de El vengador anónimo infantiles, como si ante la realidad (Death Wish, 1974), pero con esta de este mundo difícil y cruel, lo película Monicelli se aleja de toda mejor hubiera sido quedarse en la intención glamurosa, exponiendo infancia o no salir del útero con rudeza y sin afeites, la obsesión materno, y en consonancia actúan de un padre que busca en la como pillos jovenzuelos, aunque venganza, la única salida para tienen conciencia de que el tiempo aliviar el dolor de su esposa y el va en su contra… suyo, ambos pertenecientes ahora, Ya he tratado de advertir que la a una familia destrozada por el Italia de la década de 1970, era sinsentido de la violencia. bastante convulsa e inestable La misma insistencia en la familia de la mano de Sordi y el resto de machacada por el aluvión los que concibieron la escritura contracultural de las décadas de de la película. Me atrevo a 1960 y 1970, la encontramos en un advertir la mano de Sordi en su filme anterior Querido Michele rechazo al citado liberalismo (Caro Michele, 1976), cinta galo, impuesto en Roma por los bastante menor en la obra de invasores napoleónicos. La Monicelli: un guión que no logra captar la atención, personajes y representación de la obra de situaciones desdibujados… pero sí teatro snob- arty, dice más al ofrece una mirada bastante lúcida respecto que cualquier arenga, sobre los desajustes o cambios que además de ser una crítica vivió la familia italiana del velada de cierto seudo arte que momento, y como contribuyo a la han apañado los franceses a lo crisis de la institución familiar que se largo de su historia, y sufrió en Italia, Europa y buena obviamente, no solo ellos. En parte del resto del mundo. similar línea iría el rechazo, nada La década de 1980 alcanza a velado, a los desmanes que Monicelli en plena forma. siempre traen consigo las Primero realiza un clásico de la revoluciones, en este caso las comedia picaresca, El Marqués ejecuciones sumarias, fruto de del Grillo, Il Marchese del Grillo, decisiones judiciales arbitrarias. 1981, para el lucimiento del gran Por supuesto el toque Sordi Alberto Sordi, ubicando la debe estar presente por igual, a historia en la Roma del 1800 la gentileza con que es tratada asediada por el liberalismo la figura del papa Pío VII, francés, producto de la interpretado por el rostro amable revolución que sacudió a aquel de Paolo Stoppa. país. Monicelli crea otro De Monicelli, por su parte, puedo personaje a la medida de notar en el filme el retrato de la Alberto Sordi: un católico corrupción del clero de la pícaro, poco ortodoxo, vividor época, del verticalismo de la pero de buen corazón, quien iglesia católica, la situación de aquí además se reserva dos desventaja de amplias clases papeles. Tal vez una radiografía sociales subalternas ante el del propio Sordi o quizás del derroche obsceno de las capas propio Monicelli… La película hegemónicas. Otro rasgo sería cuenta con un guión a seis ese humor que a ratos pisa la manos que incluye a los propios crueldad, para luego retomar el Sordi y Monicelli y me es difícil lado humano; la admiración precisar cuánto en el filme es de erótica por el cuerpo desnudo la mano de Monicelli y cuanto femenino. El marqués de Grillo, tiene la indomabilidad de su espíritu y algunos problemas con el el valor supremo de la amistad. metraje, pero esto es salvado por las innumerables situaciones cómicas muy bien resueltas, junto a las inmensas posibilidades del incomparable Alberto Sordi. Y ese magnífico ser, que como he apuntado, puede remitirnos al Sordi real: católico, fiel al papa, romano hasta la medula, con ese costado de picardía, de Algo similar sucede con los heterodoxia. hombres de Esperamos que sea Al año siguiente dirige la niña (Speriamo che sia femmina, secuela de Amigos míos: Amigos 1986), otra buena película de míos (Amici miei atto II) (3), Monicelli, donde muestra a unos curiosamente más humana y por personajes masculinos bien momentos superior a su infantilizados, que han perdido antecesora. La idea original se toda brújula en la vida y son las mantiene intacta y esto, solo mujeres de la familia las que esto, le hace perder puntos con tienen que arrimar el hombro respecto a la antecesora. Pero para salvar a la misma. El título las situaciones en que se ven del filme expresa en plenitud su envueltos los personajes, la intención: para la complejidad aguda construcción de los de la vida, son las mujeres las mismos, unido a la madurez del que mejor suelen saber realizador, la tornan mucho más conducirse. Para este propósito redonda que la anterior. Por Monicelli reunió a un plantel de supuesto, el paso del tiempo, excelentes primeras damas del tanto en los personajes como en cine internacional: la noruega el propio Monicelli, dan una Liv Ullman, la francesa Catherine perspectiva más abarcadora y Deneuve y la italiana Stefania humanista de la fragilidad Sandrelli. Por cierto el filme humana. La cinta cierra con uno anticipa y supera con mucho a de los mejores finales de la la producción norteamericana historia del cine al respecto, lleno de similar temática: Magnolias de ternura y misericordia, en la de acero (Steel Magnolias, 1989, que si bien se representa el Herbert Ross). Por razones obvias inexorable deterioro biológico de la distribución internacional, del ser humano, exhibe por igual, es más conocida la producción abocado a usar la picaresca para norteña. sobrevivir. La cinta tiene excelentes momentos de humor: el personaje En la que nos ocupa, el complejo de Gassman repitiendo la eucaristía cuadro familiar que presenta, por hambre, o el personaje de parece que va a llevar a pique a Giancarlo Giannini, como peculiar una nutrida familia rural siervo de un majadero niño de la acomodada, pero el accionar nobleza, a mi gusto están entre los femenino logra poner las cosas en mejores. Otra vez la mujer sale muy su lugar. El filme cierra muy por lo bien parada: en este caso en el alto, con un hermoso plano segmento, en que el citado secuencia, en que todas las mujeres personaje de Giannini, junto al que involucradas en la trama se reúnen caracteriza el actor Enrico plácidamente y humildemente. Montesano, van a comprar una Actúan como si nada hubiera mujer, que se supone les dé pingues pasado, cuando en realidad son ganancias, y concluyen ellos ellas las que han salvado la trabajando para la fémina… situación en que sus hombres se han colocado y las situaron. Después de esta década de 1980, a mi juicio muy exitosa, todavía en la Todavía el talento le da para en década de 1990 logra dos buenas 1987, realizar otra comedia películas: Parenti serpenti, (1992), humanista, agridulce: Los picaros (I donde aborda una vez más, con un Picari), que como su nombre índica, tono entre ácido y compasivo, la se refiere a esos seres marginales, crisis de la institución familiar, y muchas veces bastardos y Queridísimos jodidisimos amigos, desclasados, surgidos en el (Cari fottutissimi amici, 1994), otra renacimiento, y que se distinguían desternillante y humana comedia, por vivir en los márgenes, sin sobre otro grupo de saltimbanquis, trabajar y de la estafa, lo que hoy que al estilo del cuento de los llamaríamos marginales. La mirada hermanos Grimm, Los músicos de de Monicelli es la de siempre, ni los Bremen, pero ubicados en la condena ni los idealiza, sino que desolada Italia de postguerra, con su habitual humor punzante, los intentan sobrevivir, mediante el coloca como seres en el límite, sin timo, sacándole lascas a la terrible futuro ni nada que esperar, que situación que vivió el país tras la viven el día a día, pues mañana no caída del régimen de Benito se sabe. Mussolini. Al igual que en otros filmes suyos, esta premisa puede parecer Los pícaros es una comedia una película desfachatada, pero redonda gracias a su guión, que otra vez nos encontramos con el sabe crear situaciones de risa a Monicelli humanista, pues estos partir de un elenco perfecto. En pícaros no son sino pobres diablos, particular destaca – aquí sí, sobrio y que además de “peterpanes”, contenido - Vittorio Gassman, como buscan la libertad absoluta, esa un noble arruinado que se ve que no se encuentra en este mundo. Su búsqueda cuesta caro y (1). Aun cuando los teóricos le dan nuestros antihéroes terminan fecha de nacimiento a esta singular escaldados, solo quedándoles el modalidad genérica en la recuerdo de los buenos momentos posguerra y de defunción en la vividos juntos. Por cierto, fiel a sus década de 1960, creo que entre líneas temáticas, Monicelli con los años 1970 y 1980 se continuaron sarcasmo muestra la fuerza de la realizando en Italia muy buenas y mujer, pues la única fémina clásicas comedias. integrante del grupo es la que solo consigue enderezar el camino y (2). Pese a su ideología, es fácil ver en su cine la raíz cristiana: su labrarse una perspectiva de vida. predilección por los últimos, los Sí el destacado olvidados de siempre, además de realizador John la intensa amistad que le unió al Huston ha sido actor y director católico Alberto llamado el Sordi, a quien dirigió en algunas de poeta del sus mejores películas. fracaso, Mario (3). La tendencia al cine antibélico Monicelli puede se remonta a los inicios del cine, ser llamado el siendo su primera obra maestra: La poeta de los gran ilusión (Grand Ilusion, Francia, fracasados, de los perdedores, de 1937, Jean Renoir). Esto se los subalternos de siempre. incrementa con el cine La “trágica“ muerte de Monicelli norteamericano de la década de parece sacada de una de sus 1950, pero hasta donde sé, nunca cintas, cuando con más de 90 años se había realizado con el nivel de y encamado en un hospital, decidió ironía de La Gran Guerra. Nunca quitarse la vida, arrojándose por la hasta entonces se había expuesto ventana del recinto hospitalario. el total fracaso que significa la guerra. Sólo Dios sabe que pasó por su cerebro en ese momento. (4). En Cuba se estrenó primero la secuela exhibida comercialmente Mucho hay que agradecerle a la en los cines cubanos en la década era digital y muy en particular a la de 1980. El original se estrenó cinemateca cubana, por este mucho después, por los años 2000, impagable ciclo, pues nos en el programa Historia del cine. devolvieron casi completa la obra de un gran maestro del cine, al que apenas conocimos los que sufrimos los desmanes de la época de la hegemonía estatal sobre la distribución cinematográfica, al parecer, y gracias a Dios, felizmente superada. ADIÓS A OTRA LEYENDA

Por Jorge Villa

e la llamada época dorada del cine norteamericano clásico contemporáneo, Maureen O´Hara, la musa de John Ford, nos ha dado D su adiós definitivo.

Nacida en Irlanda, un 17 de agosto de 1920, fue indudablemente una de las figuras más populares del cine norteamericano de las décadas de 1940 y 1950, la cual además de poseer una llamativa belleza, era indudablemente una talentosa actriz, capaz de salir igualmente airosa del cine de aventuras, como del melodrama o la comedia.

Sus primeros pasos en el arte fueron en el canto y en la danza, llegando a ser durante su juventud cantante de ópera en Irlanda, pero la actuación la motivaba, razón por la que rechaza ser cantante de ópera principal en el Abbey Theater, y parte hacia Londres para intentar una carrera como actriz. Asiste a un casting para una productora de cine inglesa, Elstree Studios, que al final resultó decepcionante para ella, ya que la producción no se realizó. Sin embargo, el malogrado casting cautivó al consagrado Charles Laughton (quien quedó impresionado por los ojos de O'Hara), y le ofreció un contrato de siete años con la productora Mayflower Pictures.

Su primera interpretación fue para la película Jamaica Inn (La Posada de Jamaica, 1939), dirigida por Alfred Hitchcock. Laughton, al ver los resultados de Jamaica Inn, quedó encantado porque buscaba una compañera femenina para un papel que él deseaba realizar en un film clásico. Para ello contactó con el productor inglés George H. Brown y le convenció para que le ofreciese a O'Hara un contrato con la RKO en los Estados Unidos. Finalmente, Maureen abordó el RMS Queen Mary rumbo a América acompañada de su madre.

Su siguiente película fue junto al mismo Laughton en 1939, en el papel de la gitana Esmeralda en la película The Hunchback of Notre Dame (El Jorobado de Nuestra Señora de París, William Dieterle). El papel de Cuasimodo fue magistralmente interpretado por Laughton, mientras que para O'Hara significó el trampolín para saltar a la fama. Contaba entonces con tan solo 19 años y se radicó en Hollywood. Su carrera ya estaba lanzada y mostró en sus actuaciones un temperamento fuerte y decidido, con una mezcla de sensatez y transparencia muy particular. Esta característica de su personalidad irlandesa, sumada a su notable apariencia, era una combinación muy atractiva para el público. En 1941, John Ford la selecciona para el film Qué verde era mi valle! (How Green Was my Valley), película ganadora de cinco Oscar de la Academia. Aunque O'Hara no estaba incluida en la nómina de candidatos, no pasó inadvertida, ya que la Fox compró el contrato de la artista a la RKO.

En 1942, actuó en el film The Black Swan (El Cisne negro, Henry King) junto a Tyrone Power y un emergente Anthony Quinn y apareció en otras del mismo corte, como Sinbad, the Sailor (Simbad el marino,1947, Richard Wallace), junto a Douglas Fairbanks, Jr.

El estudio aprovechó muy bien la belleza de Maureen y su amplia cabellera pelirroja, filmando varios filmes en glorioso technicolor para hacer resaltar ambos aspectos. Otros estudios utilizaron la misma estrategia, apareciendo para la compañía Universal International en los filmes Against All Flags (Contra todas las banderas, 1952, George Sherman), junto a Errol Flynn y Lady Godiva (Lady Godiva, Arthur Lubin), en 1955, junto a George Nader. Sus aptitudes atléticas y sus cualidades físicas, la hacían ideal para interpretar heroínas en los filmes de aventuras.

Es mítica su relación con el director John Ford y el actor John Wayne. Junto a ambos realizó las mejores películas de su carrera, de las cuales es quizás El hombre tranquilo, la más lograda, no obstante otros títulos tan importantes en la historia del cine, como Río Grande (Río Grande, 1950) y Wings of Eagle (Alas de águila, 1957). Su química con Wayne se traspasó al público, haciéndolos una pareja de cine muy valorada.

En su larga carrera artística, que sobrepasa los 60 años, realizó más de 50 filmes, actuando además en el teatro y la televisión. Para este último medio, destacan las producciones Mris. Miniver, junto a Leo Genn en 1970, La Caja de Navidad (1995), Taxi a Canadá (1998), Last Dance (2001).y particularmente el telefilm El potro rojo de 1973, junto a Henry Fonda. Sobre su actuación en este telefilm, la actriz Shirley Booth le envío una sincera carta donde le expresaba que la escena donde ella estaba con su hijo en lo alto de la escalera, era una de las mejores escenas que ella hubiese visto en una película.

Durante su carrera artística tuvo palabras de elogios para muchos de sus colegas, principalmente hacia John Wayne, Henry Fonda, John Garfield, Hayley Mills, John Candy y Natalie Wood. Sobre Natalie expresó que se sintió siempre unida sentimentalmente a ella desde que actuaron juntas en el filme Miracle on 34th Street (De ilusión también se vive, 1947, ) y que lloró mucho su muerte.

Visitó nuestro país para la filmación de Our Man in Havana (Nuestro hombre en La Habana, 1959, Carol Reed) en los primeros meses del triunfo revolucionario. Durante su estancia en Cuba quedó impresionada por la hospitalidad del cubano y la excelente música cubana, no obstante los días de convulsión histórica que vivía el país.

Estuvo casada con el productor de cine británico George H. Brown y con el director Will Price, quien la dirigiera en el film Trípoli de 1950. Su último filme para la gran pantalla fue en Only the Lonely (Mamá, ella y yo, Chris Columbus), realizada en 1991 junto a John Candy y Anthony Quinn. Sin embargo Maureen se mantuvo activa hasta el 2010 y en 2004 había publicado su autobiografía titulada Ella misma (This Himself)

Durante su trayectoria personal recibió varios reconocimientos y en 2015 recibió de manos de Liam Neesen y Clint Eastwood un Oscar Honorífico por su trayectoria artística.

Maureen O´Hara falleció el 24 de octubre de 2015 a los 95 años de edad.

FILMOGRAFÍA

Jamaica Inn/La posada maldita/Alfred Hitchcock/1939/Con: Charles Laugthon, Leslie Banks, Emlyn Williams

The Hunchback of Notre Dame/El jorobado de Nuestra Señora de París/William Dieterle/1939/Con: Charles Laugthon, Edmond O´Brien

A Bill of Divorcement/La sonata del loco//1940/Con: Herbert Marshall, Patrick Knowless, Adoplhe Menjou

Dance, Girl, Dance/Bailar es vivir/Dorothy Azner/1940/Con: Lucille Ball, Louis Hayward, Edward Brophy

They Met in Argentina/La profesora se divierte/Jack Lively y Leslie Goodwins/1941/Con: Fortunio Bosanova, Antonio Moreno, Gene Raymond, Antonio Vila

How Green Was My Valley/Que verde era mi valle!/John Ford/1941/Con: Walter Pidgeon, Donald Crisp, Sara Allgood, Roddy McDowall, Anna Lee, Barry Fitzgerald, John Loder

The Black Swan/El cisne negro/Henry King/1942/Con: Tyrone Power, George Sanders, Anthony Quinn, Thomas Mitchell

Ten Gentlemen from West Point/Diez caballeros/Henry Hathaway/1942/Con: Ward Bond, Laird Gregar

To the Shores of Tripoli/El honor a las armas/H. Bruce Humberstone/1942/Con: Randoplh Scott, John Payne, Elena Verdugo

The Fallen Sparrow/El beso traidor/Richard Wallace/1943/Con: John Garfield, Nestor Paiva

The Inmortal Sergeant/El sargento inmortal/John M. Stahl/1943/Con: Henry Fonda, Thomas Mitchell

This Land is Mine/Esta tierra es mía/Jean Renoir/1943/Con: Charles Laugthon, Kent Smith, George Sanders

Buffalo Bill/Buffalo Bill/William Wellman/1944/Con: Joel McCrea, Linda Darnell, Anthony Quinn

The Spanish Main/La ruta de los corsarios/Frank Borzage/1945/Con: Binnie Barnes, Paul Henreid

Do you Love Me?/Ámame/Gregory Ratoff/1946/Con: Betty Grable, Dick Haymes

Sentimental Journey/La jornada sentimental/Walter Lang/1946/Con: John Payne, Connie Marshall, William Bendix

The Foxes of Harrow/Débil es la carne/John M. Stahl/1947/Con: Rex Harrison, Vanessa Brown, Patricia Medina

The Homestretch/Tú volverás/H. Bruce Humberstone/1947/Con: Cornell Wilde

Miiracle on 34th Street/De ilusión también se vive/ George Seaton/1947/Con: John Payne, Natalie Wood, Edmund Gwen Sinbad the Sailor/Simbad el marino/Richard Wallace/1947/Con: Douglas Fairbanks Jr.

Sitting Pretty/Niñera ultimo modelo/Walter Lang/1948/Con: Clifton Webb, Robert Young, Cara Williams, John Russell

Bagdad/Bagdad/Charles W. Lamont/1949/Con: John Sutton, Jeff Corey

Father Was a Fullback/Las locuras de papá/John M. Stahl/1949/Con: Fred MacMurray, Natalie Wood, Thelma Ritter

The Forbidden Street/La calle prohibida/Jean Negulesco/1949/Con: Dana Andrews

A woman´s secret/Secreto fatal/Nicholas Ray/Con: Melvyn Douglas, Gloria Grahame, Victor Jory

Rio Grande/Río Grande/John Ford/1950/Con: John Wayne, Claude Jarman Jr.

Tripoli/Trípoli/Will Price/1950/Con: John Payne

Comanche Territory/Honor de raza/George Sherman/1950/Con: James Best

Flame of Araby/La favorita de Arabia/Charles W. Lamont/1951/Con: Jeff Chandler, Richard Egan

Against All Flags/Contra todas las banderas/George Sherman/1952/Con Errol Flynn, Anthony Quinn

The Quiet Man/El hombre tranquilo/John Ford/1952/Con: John Wayne, Ward Bond, Victor McLaglen, Barry Fitzgerald

The Redhead from Wyoming/La pelirroja y el vaquero/Lee Sholem/1952/Con: Jack Kelly

Kangaroo/La ley del látigo/Lewis Milestone/1952/Con: Peter Lawford

At Sword Point/La espada de D´Ártagnan/Lewis Allen/1952/Con: Cornell Wilde, Robert Douglas, Alan Hale

War Arrow/Palabra cumplida/George Sherman/1953/Con: Jeff Chandler, Susan Ball

Fire Over Africa/Fuego sobre África/Richard Sale/1954/Con: MacDonald Carey

Lady Godiva/Lady Godiva/Arthur Lubin/1955/Con: George Nader

The Magnificent Matador/El magnífico matador/Budd Boeticher/1955/Con: Anthony Quinn, Lola Albright The Long Grey Line/Cuna de Héroes/John Ford/1955/Con: Tyrone Power, Donald Crisp, Erin O´Brien-Moore

Everything But the Truth/Todo menos la verdad/Jerry Hopper/1956/Con: John Forsythe, Tim Hovey, Jeanette Nolan

Lisboa/Lisbon/Ray Milland/1956/Con: Ray Milland, Yvonne Furneaux, Claude Rains

The Wings of Eagle/Alas de águila/John Ford/1957/Con: John Wayne, Ward Bond

Our Man in Havana/Nuestro hombre en La Habana/Carol Reed/1960/Con: Alec Guinness, Burl Ives, Ernie Kovacs, Noel Coward, Jo Morrow

The Parent Trap/La trampa de los padres/David Swift/1961/Con: Brian Keith, Hayley Mills, Una Merkel

The Deadly Companions/En compañía de la muerte/Sam Peckinpah/1961/Con: Steve Cochran

Mr. Hobbs Takes a Vacation/Un optimista en vacaciones/Henry Koster/1962/Con: James Stewart, Fabian, Marie Wilson, Reginald Gardiner

McLintock!/El gran McLintock/Andrew McLaglen/1963/Con: John Wayne, Yvonne De Carlo, Stephanie Powers, Bruce Cabot

Spencer´s Mountain/Los nueve hermanos/Delmer Daves/1963/Con: Henry Fonda, Donald Crisp

The Battle of Villa Fiorita/La batalla de Villa Fiorita/Delmer Daves/1966/Con: Rossano Brazzi, Richard Todd, Olivia Hussey

The Rare Breed/Una dama entre vaqueros/Andrew McLaglen/1966/Con: James Stewart, Juliette Mills, Ben Johnson

How do I love thee?/Michael Gordon/1970/Con: Shelley Winters, Rosemary Forsythe, Don Beddoe

Big Jake/El gran Jake/George Sherman/1971/Con John Wayne, John Agar, Richard Boone, Bruce Cabot

Red Pony/El potro rojo/Robert Totten/1973/TVM/Con: Henry Fonda, Jack Elam

Only the Lonely/Mamá, ella y yo/Chris Columbus/1991/Con: John Candy, Anthony Quinn

Ninón Sevilla (85). Actriz, bailarina y vedette cubana.

Ninón Sevilla, uno de los mitos eróticos del cine latinoamericano del siglo XX, falleció el 1ro. de enero de 2015. Con ella se va la Reina de las Rumberas de la época de oro en el cine mexicano y desaparece también un modo de hacer sobre los escenarios, que quedó atrás en la mágica era de mambo y sensualidad, que ella contribuyó a edificar en la década de 1950. Sobre su fecha de nacimiento hay incongruencias, pero a raíz de su fallecimiento se le atribuye haber nacido en Batabanó, el 10 de noviembre de 1929, bajo el nombre de Neé Emelia Pérez Castellanos. Adoptó su nombre artístico en homenaje a la legendaria cortesana francesa Ninon de Lenclos y comenzó a bailar en centros nocturnos y cabarets de Cuba. Despertó verdadero furor por su escultural figura, sus rasgos felinos y sus excéntricos movimientos coreográficos sobre los escenarios. Del cabaret y los centros nocturnos saltó al Teatro Martí de La Habana, donde integró el coro de los comediantes cubanos que acompañaban a los humoristas Mimí Cal y Leopoldo Fernández en sus presentaciones.

Llega a México en 1940 para trabajar en el Teatro Lírico de la capital mexicana, con un elenco encabezado por la argentina Libertad Lamarque. El éxito de su número musical logró superar en aplausos a Lamarque, lo que le pavimentó el camino hacia la pantalla cinematográfica.

Debutó en el cine en Carita de cielo (1946), dirigida por José Díaz Morales y con María Elena Marqués, Antonio Badú y Pepe Guízar. Esto fue sólo el comienzo de una carrera de virtuosismo, musicalidad y derroche de erotismo. Después vendrían cintas de desigual calidad, pero siempre atractivas para el público. Entre ellas se destacan; Pecadora (1947), Revancha (1948), Perdida (1949), Aventurera (1949), Víctimas del pecado (1950) y Sensualidad (1950).

En la década de 1950 se suman otras del mismo corte, como Mujeres sacrificadas (1951), Llévame en tus brazos (1953), Club de señoritas (1955), Yambaó, de 1956 y filmada a todo color, Maratón de baile (1957) y Mujeres de fuego (1958). En 1955, cuando el entonces muy joven realizador François Truffaut comentó sobre su “descubrimiento” de Llévame en tus brazos, no pudo contener su fascinación por la vedette. “¿Baila Ninón por conquistar la gloria? De ninguna manera, nunca. Está muy claro que Ninón baila por placer”, escribió Truffaut en una olvidada crítica de cine. De ella, la gran Edith Piaf cuando visitó México, algunos periodistas le preguntaron que le gustaría conocer del país, sólo respondió: A Ninón Sevilla.

Tras el declive del cine musical mexicano, su figura se eclipsó y Ninón despareció de los escenarios. El último filme de su primera etapa cinematográfica fue la comedia musical española Zarzuela 1900.

Regresó a la gran pantalla con una memorable actuación en Noche de carnaval (1981), por la que ganó un Premio Ariel de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas.

Su regreso al cine la entusiasmó para vincularse al mundo de las telenovelas. Obtuvo destacados papeles en las emisiones de telenovelas muy populares de la época, pudiéndose nombrar: Rosa Salvaje (1987), junto a Verónica Castro, La usurpadora (1998), Rosalinda (1999), Tres Mujeres (1999), El precio de tu amor (2000), Entre el amor y el odio (2002) y Amarte es mi pecado (2004). En el medio de las telenovelas, Ninón dio origen a un nuevo "mito popular", al encarnar a mujeres alegres, humildes y de clases bajas. Al igual que figuras como Silvia Derbez, Meche Barba y Carmen Salinas, Ninón es un elemento indispensable en las tramas de vecindad de las telenovelas mexicanas.

Se mantuvo activa en el mundo de la televisión y el espectáculo hasta el 2013, cuando decidió hacer una pausa en su carrera artística. En 2009, fue galardonada con el premio Diosa de Plata "Dolores del Río" en reconocimiento a su trayectoria cinematográfica.

En 2012 Ninón Sevilla fue interpretada por la actriz Ariadna Pérez Mijares en la cinta biográfica El fantástico mundo de Juan Orol, dirigida por Sebastián del Amo. Posteriormente, en el 2014 recibió un homenaje por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas y la Cineteca Nacional por su contribución al arte cinematográfico.

Eduardo Rosillo (85). Locutor de la radio cubana.

Ángel Eduardo Rosillo Heredia, nacido el 20 de febrero de 1929 en La Maya, Alto Songo, Oriente, fue un insigne locutor de la radio en Cuba. Fue además uno de los más fieles defensores de la música popular en los programas Un Domingo con Rosillo y Alegrías de Sobremesa, de Radio Progreso, uno de los programas más longevos y exitosos de la radio cubana.

Desde temprana edad, descubrió que su vocación era la radio. Su andar radial comenzó el 20 de mayo de 1949, cuando la emisora de La Maya lanzó sus primeras palabras al espacio. Después fue locutor en CMKT de Las Tunas y en la CMKC y la CMKR de Santiago de Cuba.

En enero de 1958, como consecuencia de la persecución política, llegó a La Habana. Se le vio deambular por las emisoras y las publicitarias, donde el trabajo se circunscribía a la grabación de alguna mención comercial.

Había abandonado sus estudios universitarios en el tercer año de Derecho. Pero persistía, y ante la imposibilidad de alcanzar un micrófono radial lo encontró en un carro altoparlante para anunciar comerciales.

En 1959 comienza a trabajar en la emisora radial CMQ donde se había creado un espacio dedicado al tránsito. Un día el locutor del programa se encontraba indispuesto y el director le comentó que el programa no podría salir al aire, pidiéndole a Rosillo que fuera el locutor. Aceptó la responsabilidad y la radio nacional lo atrapó para siempre. En octubre de 1963 pasa la prueba para trabajar en Radio Progreso, su gran

sueño. Durante más de 50 años en esa emisora dejó su impronta en cuatro clásicos de la Radio Nacional que ocuparon los primeros lugares del rating: La discoteca popular; La discoteca del ayer; Un domingo con Rosillo y Alegrías de sobremesa.

Animador además del programa Un domingo con Rosillo, este locutor acuñó algunas frases que calaron entre los cubanos. Durante varias décadas su saludo alegre abría la revista Alegrías de Sobremesa, que muchos conocían como "Paco y Rita", por los dos personajes del sketch humorístico escrito por Alberto Luberta.

Entre sus galardones se encuentran el Premio Nacional de la Radio, Micrófono de Oro de la Feria de Cali, Colombia, Distinción Thomas Alba Edison, Distinción Félix Varela, Distinción por la Cultura Nacional y muchas otras,

Eduardo Rosillo falleció el 3 de enero de 2015.

Tadeusz Konwicki (88). Escritor y director polaco de cine.

Tadeusz Konwicki nació un 22 de junio de 1926 en Nowa Wilejka. Era además de escritor y director, miembro del Consejo del Idioma Polaco. Es mayormente conocido por dos novelas: The Polish Complex (1977) y A Minor Apocalypse (1979).

Fue uno de los principales impulsores del Realismo Social en la literatura polaca. Su primera novela fue Construction Site (de 1950, Przy Budowie), a la que la siguió la novela Power (1954, Władza) y From a Besieged City (1956, Z oblężonego miasta), la cual fue muy popular.

Para esta época Konwicki se convirtió en el jefe del Estudio Fílmico "Kadr" y se lo comienza a reconocer como uno de los más importantes miembros de la Escuela Polaca de Cine. Como realizador de cine es conocido por su película ganadora en el Festival de Venecia de 1958: The Last Day of Summer (Ostatni dzień lata, 1958). Otras realizaciones suyas fueron, All Souls' Day (Zaduszki, 1961), y sus obras maestras Salto (1962) y How Far Away, How Near (Jak daleko stąd, jak blisko, 1973).

Tadeusz Konwicki falleció el 7 de enero de 2015.

Rod Taylor (84). Actor norteamericano de cine y televisión.

Nacido como Rodney Stuart Taylor, en Sídney, Australia, el 11 de enero de 1930, fue un actor de cine australiano, que se convirtió en galán y estrella del cine clásico estadounidense de Hollywood en los años 1960, con filmes tan recordados como Los pájaros de Alfred Hitchcock. También en los años 1980, desarrolló una importante carrera en la televisión norteamericana

Su primer film fue la película australiana The Sturt Expedition en 1951 y luego siguió Long Silver. Pronto se trasladó a Estados Unidos en 1954 fichado por la Paramount, en busca del estrellato que no podía encontrar en su país. Apuesto y

bien parecido, en seguida obtuvo papeles de galán en producciones medianamente importantes, al principio en papeles secundarios, destacando su aparición en la película de George Stevens Gigante, donde figuraba en los títulos como Rodney Taylor.

Tuvo un papel relevante en la película de Banquete de boda (The Catered Affair; 1956), con Bette Davis y un papel más destacado en la superproducción de la Metro Goldwyn Mayer de 1957 El árbol de la vida (Raintree Country) de Edward Dmytryk. Al año siguiente, 1958, Taylor, trabajó en la película de Delbert Mann, Mesas separadas (Separate Tables), donde tiene un papel destacado dentro de una película coral que protagonizaban grandes estrellas. En 1960 protagonizó una de sus películas más famosas, La máquina del tiempo (The Time Machine), de George Pal, una producción de ciencia ficción de serie B, que adaptaba la novela de igual nombre.

En 1963 realizó su interpretación más recordada, como protagonista de Los pájaros (The Birds), de Alfred Hitchcock. En 1967 Richard Quine lo dirige en otra película coral, Hotel. También es destacable su actuación como protagonista en la película Zabrisckie Point, de Michelangelo Antonioni (1970). En 1973 realizó su último papel importante dentro de la gran pantalla, en la película Ladrones de trenes, de Burt Kennedy.

El estrellato que no pudo recuperar en el cine, se lo daría la televisión durante la década de 1980, en que protagonizó una serie sobre la Guerra fría titulada Mascarada. Desde entonces apareció en importantes series como estrella invitada y en algún cameo cinematográfico. En 1985 protagonizó, con Britt Ekland, una película rodada en España: Marbella, un golpe de cinco estrellas, donde participaron Fernando Fernán Gómez y Paco Rabal.

En su último papel, interpretó a Winston Churchill en la película Inglourious Basterds de Quentin Tarantino.

Rod Taylor falleció en Los Ángeles, California, el 7 de enero de 2015.

Francesco Rosi (92). Guionista y director italiano de cine.

Francesco Rosi nació en Nápoles, el 15 de noviembre de

1922.

Entró al mundo del cine como asistente de Luchino Visconti en La tierra tiembla de 1948 y debuta como director en el filme Camicie rosse, un proyecto que abandonó el director Goffredo Alessandrini en 1952. Su reconocimiento internacional llega en 1958 con la película La sfida (El desafío).

Durante la década de 1960, Rosi dirigió filmes que se centraban en temas controvertidos. Uno de estos fue Salvatore Giuliano, sobre el bandolero siciliano del mismo nombre, por el cual ganó el Oso de Plata a la mejor dirección en el Festival Internacional de Cine de Berlín en 1962.

Entre 1972 y 1976, Rosi dirigió tres filmes que son considerados sus obras más importantes: Il caso Mattei, el cual ganó la Palma de Oro en el Festival Internacional de Cine de Cannes de 1972, seguido por Lucky Luciano en 1974 y Cadaveri eccellenti en 1976.

La 58° edición del Festival Internacional de Cine de Berlín rindió homenaje a Rosi al exhibir 13 de sus películas en la sección de Homage, reservada a cineastas con logros y calidad mundial. Recibió un Oso de oro Honorífico el 14 de febrero de 2008.

Rosi murió el 10 de enero de 2015 a los 92 años.

Anita Ekberg (83). Modelo y actriz sueca de cine.

Nacida como Kerstin Anita Marianne Ekberg un 29 de septiembre de 1931. Fue una actriz que logró triunfar en el cine, principalmente en Italia y Estados Unidos.

Fue Miss Suecia en 1951 y compitió en el concurso de Miss Universo. No lo ganó, pero quedó entre las seis chicas finalistas, y de acuerdo a las normas del certamen recibió la opción de un contrato de starlette (estrella promesa) con la productora Universal Pictures. Su debut cinematográfico fue en la película Abbot and Costello go to Mars a principios de los años 50 del pasado siglo. Después intervino en dos comedias con el dúo Jerry Lewis y Dean Martin: Artistas y modelos (Artists and Models, Frank Tashlin, 1955) y Loco por Anita (Hollywood or Bust, Frank Tashlin, 1956).

Su primer papel como protagonista (junto a Robert Ryan y Rod Steiger) fue en Regreso de la eternidad (Back from the Eternity, John Farrow, 1956), pero fue en 1960 cuando interpretó su papel más recordado: Silvia, la rubia despampanante que toma un baño en la Fontana de Trevi en la película de Federico Fellini .

Estuvo casada con el actor británico Anthony Steel desde 1956 hasta 1959. De 1963 a 1975 fue la esposa del también actor Rik Van Nutter.

Anita Ekberg falleció en Roma, el 11 de enero de 2015.

Nélida Romero (88). Actriz argentina de cine, televisión y teatro.

Nacida en la ciudad bonaerense de Lanús, el 17 de enero de 1926, estudió baile y actuación. Inició su carrera en el medio teatral junto al compositor y director Enrique Santos Discépolo. A la edad de 18 años conoció al prestigioso director Carlos Schlieper, quien la insertó en la cinematografía en 1946 con un pequeño papel en Las tres ratas, protagonizada por Mecha Ortiz, Amelia Bence y María Duval. Luego, para la empresa Emelco, participó en 1947 en El retrato, éxito con Mirtha Legrand; y en ese mismo año realizó un papel más importante en Madame Bovary, junto a Mecha Ortiz. Considerada "la Martha Raye argentina", protagonizó El heroico Bonifacio, junto a Pepe Iglesias "El Zorro".

Dirigida por su esposo Carlos Schlieper, intervino desde mediados de la década de 1950 en comedias generalmente románticas. En 1957, con motivo de la muerte de Schlieper, se alejó de los medios hasta principios de la década siguiente, cuando actuó en Navidades en junio.

A partir de 1966 incursionó en varios ciclos televisivos, iniciándose en ¿Cuánto da usted por el conde?, por Canal 13. Después se especializó en teatro realizando alrededor de 70 piezas, como Goyescas, La noche de los ratones crueles, junto a Miguel Ángel Solá, entre otras. Integró asiduamente la compañía Cibrián-Campoy y compartió con Alberto Closas varios escenarios de España. En 1987, después de 30 años sin actividad en el cine, participó en La virgen gaucha y luego en un corto de 1993 titulado Mocoso malcriado, componiendo a la Tía Ñata. En el 2000 realizó su última aparición cinematográfica en ¿Quién está matando a los gorriones?, de Patricia Martín García.

En 2004 la Asociación Argentina de Actores la agasajó por su trayectoria artística. En 2011, recibió el premio Cóndor de Plata a la Trayectoria que entrega la Asociación de Cronistas Cinematográficos de la Argentina. Se retiró de la actuación y residió en la Casa del Teatro, un lugar que alberga a ancianos artistas.

Nélida Romero falleció el 14 de enero de 2015.

Aida Isalbe (64). Actriz cubana de teatro, cine, radio y televisión.

Nacida bajo el nombre de Aida Elisa Isalbe Díaz el 2 de diciembre de 1950, dedicó toda su vida al arte, desde que se graduara en la Escuela Provincial de Arte Dramático. Posteriormente pasa a integrar el elenco de actores del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) como actriz y locutora.

Recordada principalmente por sus actuaciones en el espacio Aventuras, donde participara en Los Mambises, El gran almirante y La Guerra de los Palmares, entre otras. También tuvo una destacada labor en telenovelas, como la muy recordada Sol de Batey.

Actuó durante muchos años en el programa costumbrista Detrás de la fachada, y en el inolvidable programa infantil A Jugar, del cual fue su conductora. Durante varios años fue locutora del Noticiero Nacional de la Televisión y de la Revista de la Mañana.

En la radio sus inicios fueron en la emisora Radio Liberación y dejó el recuerdo de su voz en otras emisoras de alcance nacional, hasta que se quedó en Radio Progreso en el popular espacio Alegrías de sobremesa, donde interpretaba al personaje de Bebita.

Aida Isalbe falleció el 14 de enero de 2015.

Raúl Pomares (80). Actor cubano de cine, teatro y televisión.

Nació el 17 de septiembre de 1934, en Omaja, Las Tunas.

De fuerte presencia escénica, incursionó con igual

suerte en la comedia como en el drama, llegando a ser una de las figuras más destacadas del hacer interpretativo de nuestro país.

Comenzó en la actuación en la década de 1950, como alumno de un curso de verano impartido por Francisco Morín, en la Universidad de Oriente. En esa etapa estudiantil descubrió a Stanislavsky y debuta como actor en la puesta de Las Aceitunas de Lope de Rueda y en El Viejo Celoso de Miguel de Cervantes.

A partir de 1959 forma parte del Conjunto Dramático de Oriente bajo la dirección de los argentinos, Jaime Swetinzky y Adolfo Gutkin. Posteriormente, a finales de la década de 1960 trabaja en el Canal Tele Rebelde en Santiago de Cuba y dirigió el Cabildo Teatral Guantánamo. En esa misma década comienza su larga filmografía en el cine cubano, con más de una veintena de títulos.

Su primera aparición en el cine fue en el filme La primera carga al machete, dirigido por Manuel Octavio Gómez. Volvería a trabajar con Manuel Octavio en Los días del agua y en Una mujer, un hombre, una ciudad. Se destacó bajo la dirección de Juan Carlos Tabío, en Plaff o Demasiado miedo a la vida.

Trabajó en varias Aventuras y telenovelas, entre éstas últimas: El naranjo del patio, dirigida por Xiomara Blanco; Salir de noche, bajo la dirección de Mirta González Perera; Al compás del Son, de Rolando Chiong; Oh, la Habana, de Charles Medina; Diana, de Rudy Mora; La otra esquina, (Ernesto Fiallo), etc. son algunas de sus teleseries, a las que habría que sumar decenas de unitarios y aventuras.

Pomares fue también un destacado docente en la Escuela de Instructores de Arte Raúl Delgado y en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños. .

Falleció el 19 de enero de 2015, en La Habana.

Marta Jiménez Oropesa (95). Actriz cubana de cine, radio y televisión.

Nació el 25 de noviembre de 1919. Toda una leyenda

de la radio cubana, especialmente por su personaje de Rita, del longevo programa humorístico de Radio Progreso Alegrías de sobremesa y su distintiva frase de: Qué gente, caballeros, qué gente.

Su primera aparición en un escenario fue con tan sólo 7 años, en el antiguo Teatro Nacional, hoy Gran Teatro de la Habana Alicia Alonso, en la ópera Madame Butterfly, haciendo del hijo de la madame. En el cine realiza su primer filme en 1939 en la película Chicharito alcalde, junto a un destacadísimo elenco de actores de aquella época. En 1959 participa en su segunda película, La vida comienza ahora, junto a Pedro Álvarez y Lilia Lazo.

En 1950 llega la televisión y pasa a formar parte del elenco de actores que integran CMQ-TV. Su versatilidad le permitió trabajar tanto en dramas como en comedias, alternando también su labor como animadora, locutora y presentadora. Sus apariciones en televisión a partir del año 1980 ya fueron más esporádicas. En el 2013 grabó, para la televisión cubana, uno de los programas de Cuando una mujer sobre la atención a la tercera edad.

Desde 1960 comienza a impartir cursos de actuación, voz y dicción, por toda la isla, lo mismo a nuevos actores como a actores que querían mejorar sus conocimientos, los cuales concluyen en el año 1996.

Desde la década de 1970 comienza su carrera como directora de programas radiales y dirige para distintas emisoras como Radio Rebelde, Radio Liberación, Radio Progreso, etc. colaborando con el mejoramiento de muchas emisoras de radio a lo largo de toda la isla.

Indudablemente la radio fue su medio ideal de comunicación con el público. Muchos guardarán en el recuerdo su actuación, junto al gran poeta e improvisador Joseito Fernández, en el polémico programa radial Suceso de hoy, que narraba la crónica roja de una jornada, a los acordes de la inmortal Guantanamera y con la métrica de las décimas. Otros la recordarán como Juana, la inseparable acompañante de Tarzán, en aquellas aventuras radiales que compartía con otro gran actor, Enrique Santiesteban.

Marta Jiménez Oropesa falleció en La Habana, el 21 de enero de 2015.

Demetrio González (87). Cantante y actor del cine mexicano.

Demetrio González nació en Asturias el 7 de octubre de 1927.Algún tiempo después llega a México con sus padres y hermanos, buscando refugio debido a la Guerra Civil Española.

Fue en un concurso de aficionados donde son descubiertas sus dotes de cantante. Y es ahí, en el programa “Joyas Líricas”, donde comenzó su carrera en la radio, en compañía de Pepita Embil y Plácido Domingo (padres del tenor Plácido Domingo). Gregorio Walestein le dio su primera oportunidad como actor de cine, comenzando así su carrera de actor en la película Camino de Guanajuato, al lado de José Alfredo Jiménez y Lola Beltrán.

En sus películas rancheras aparecía siempre con su inseparable caballo “El Dorado”. Después de su retiro del ambiente artístico, incursionó en el mundo de los negocios y se retiró a los 85 años de edad.

Falleció el 25 de enero de 2015 en Tepoztlán.

Lizabeth Scott (92). Actriz norteamericana de cine y televisión.

Emma Matzo, más conocida como Lizabeth Scott, nació el 29 de septiembre de 1922. Fue una de las mujeres fatales más emblemáticas del cine negro norteamericano de las décadas de 1940 y 1950.

Nacida en Scranton, estado de Pensilvania (EE UU), e hija de emigrantes rusos, estudió arte dramático en Nueva York donde adoptó el nombre artístico de Lizabeth Scott (a veces, también Liz Scott) y debutó en Broadway en 1942. Un año más tarde, sería contratada por la Warner Brothers y en 1946 obtiene su primer éxito cinematográfico con El extraño amor de Martha Ivers, dirigida por Lewis Milestone y coprotagonizada por Barbara Stanwyck, Van Heflin y un jovencísimo Kirk Douglas. Un año después, Scott protagonizó junto a Humphrey Bogart Maldita mujer, filmado por John Cromwell.

Lizabeth Scott, a pesar de poseer un personalísimo rostro, nunca llegó a ser una auténtica estrella de Hollywood y siempre fue la compañera de reparto de los galanes masculinos como Charlton Heston en Ciudad en sombras (1950), o junto a Jerry Lewis y Dean Martin en la comedia Muertos de miedo (1953) y con el rey del rock Elvis Presley en La mujer de nadie (1957). Durante la década de 1960 pasa a la pequeña pantalla protagonizando varias series de televisión.

Lizabeth Scott falleció el 31 de enero de 2015.

Loly Buján (75). Actriz, guionista y directora cubana de televisión y teatro.

Loly Buján, directora, guionista y asesora de conocidos programas de la televisión cubana, falleció el 4 de febrero de 2015 en Galicia, donde residía desde 1991.

Nacida en La Habana, el 2 de agosto de 1938 bajo el nombre de Dolores de los Ángeles Fernández Buján, dejó una fuerte impronta en la televisión cubana en programas dramáticos, entre ellos: Teatro ICRT, Grandes novelas, Maestros y Teatro testimonio. Dirigió y escribió durante cinco años el espacio semanal El Cuento. Trabajó también en programas musicales como Álbum de Cuba y los Concursos Adolfo Guzmán, e infantiles como Amigo y sus amiguitos y La alfombra mágica.

Fue además actriz y profesora. En los inicios de su carrera formó parte de las Brigadas Francisco Covarrubias, con las que representó Santa Juana de América. Integró los elencos de Radio Progreso y Radio Liberación. En televisión, actuó en programas dirigidos por Roberto Garriga, Sergio Nicols y Antonio Vázquez Gallo, quien le dio el protagónico femenino (Honorata de Wan Guld) en Las aventuras del Corsario Negro, junto a Frank Negro.

Impartió numerosos cursos de guión y dirección, análisis dramatúrgico y formación de camarógrafos y diseñadores de iluminación para la televisión cubana.

En 1991 viajó a España para hacerse cargo de la cátedra de televisión de la Escuela Superior de Imagen y Sonido de Benposta, Ourense. Con el apoyo de la Casa da Xuventude de Ourense, creó el Obradoiro de Teatro de Loly Buján, a través del cual

durante quince años impartió clases, formó a jóvenes promesas y montó obras del repertorio universal.

Celina González (86). Cantante cubana de radio, teatro, televisión y cine.

Nacida el 16 de marzo de 1929, Celina González Zamora saltó a la fama junto a Reutilio Domínguez, comprometidos ambos con la defensa del punto guajiro, la guaracha y la liturgia musical afrocubana.

Su infancia transcurrió en un ambiente campesino donde padres y hermanos acostumbraban a cantar en las fiestas familiares, impregnándose de las melodías y los ritmos escuchados en los guateques campesinos, para iniciar una carrera de triunfos notables y de gran popularidad.

Con Reutilio, su esposo de toda la vida, formó un dúo que escaló hacia el reconocimiento y la fama en Santiago de Cuba y todo el país a partir de 1947, cuando ambos debutaron en la emisora Cadena Oriental de Radio. Un año después, el célebre Ñico Saquito, rey de la guaracha, los llevó a La Habana y los presentó en la emisora Radio Cadena Suaritos.

Pero fue en la década dorada de los 50 del pasado siglo cuando el dúo alcanzó su verdadera plenitud artística y resonancia internacional. Los cantantes y su música irrumpieron en producciones cinematográficas como Rincón criollo (1950) y Bella la salvaje (1953); triunfaron en Nueva York y Latinoamérica e impusieron un sello de tradición en la televisión cubana, llenando los grandes cabarets del país, principalmente Tropicana. El dúo se separó en 1964, pero Celina continuó su carrera como solista, acompañada por los conjuntos Campo Alegre, Los Montunos y Los Pinares, y luego, a partir de 1980, unida a su hijo Bárbaro Reutilio, en el programa televisivo Palmas y Cañas.

En el 2001 fue nominada a un Grammy Latino por el álbum 50 años como una reina, grabado junto a su hijo Reutilio en 1999. En reconocimiento a su contribución artística y Cultural, la UNESCO la condecoró con la Medalla Picasso.

Con la muerte de Celina el 4 de febrero de 2015, desaparece una leyenda de la música popular, que puso en el canto y el corazón de varias generaciones temas emblemáticos como Yo soy el punto cubano y A Santa Bárbara.

Jorge Sassi (64) .Actor argentino de cine y televisión.

Jorge Alberto Sassi fue un actor y humorista argentino que nació un 17 de noviembre de 1950.

Inició su carrera a fines de los años 1960 como extra en el film Humo de marihuana, de Lucas Demare. En los años 1970 participó en varias películas interpretando personajes menores y en 1979 realiza su primera intervención en televisión en Novia de vacaciones. Participó en 30 películas, entre ellas Gente en Buenos Aires, La Mary, Gran Valor en la Facultad de Medicina, pero fueron sin duda alguna sus protagónicos en La Madre María (1974), junto a

Tita Merello, y No habrá más penas ni olvido (1985), las más recordadas y aplaudidas de su carrera. Para la televisión son notables sus intervenciones en los seriales Verano del 98 (1998), Los herederos del poder (1997) y Valientes (2009), ésta última exhibida en la televisión cubana con una gran aceptación.

En el teatro es recordado por su intervención en las obras Adriano VII y Luz de gas, junto a Dora Baret.

Jorge Sassi falleció el 9 de febrero de 2015.

Roger Hanin (89). Actor, director y escritor francés del cine, teatro y televisión.

Roger Hanin nació el 20 de octubre de 1925, en Argelia, como Roger Lévy.

Como actor trabajó bajo las órdenes de Jules Dassin en El que debe morir (1957) y de Jean Luc Goddard, en el clásico Sin aliento. También fue dirigido en 1960 por Luchino Visconti en Rocco y sus hermanos.

Uno de sus grandes triunfos como actor, fue su personaje del capitán Paolinelli, en el gran éxito de Dino Risi La marcha sobre Roma.

Con Claude Chabrol, Hanin co-escribió el guión de un par de películas de espías a mediados de la década de 1960, las cuales fueron dirigidas por el propio Chabrol y donde Hanin interpretaba al agente secreto "Le Tigre". Estos filmes fueron The Tiger (1964) y Our Agent Tiger (1965).

Estuvo ligado a la política por razones de familia durante la presidencia François Mitterrand, cuya esposa Danielle, era la hermana de la esposa de Hanin.

Hanin falleció el 11 de febrero de 2015, en París, a sus 89 años de edad.

Louis Jourdan (93). Actor francés del cine, teatro y televisión.

Louis Jourdan, nacido como Louis Robert Gendre en Marsella un 19 de junio de 1921, fue un actor francés, conocido por sus papeles en varias películas de Hollywood, incluyendo Gigi (1958) y Octopussy (1983).

Estudió actuación en la École Dramatique y mientras estudiaba empezó a actuar en el teatro profesional, donde llamó la atención del director Marc Allégret, quien lo contrató para trabajar como operador de cámara asistente en Entrée des Artistes (Entrada de los artistas). Posteriormente contrató a Jourdan en la que hubiera sido su primera película, Le Corsaire en 1939 junto a Charles Boyer, pero la filmación fue interrumpida por la Segunda Guerra Mundial y nunca se reanudó.

Como era demasiado joven para prestar servicio en el ejército fue contratado por Julien Duvivier junto con su hermano Pierre para aparecer en Untel père et fils (El corazón de una nación) en Roma. Esto fue interrumpido por la declaración de guerra

entre Francia e Italia; regresó a Francia, y pasó un año en una cuadrilla de trabajo. Ordenado para hacer películas de propaganda alemana, se negó y huyó para reunirse con su familia en la Francia libre. Allí empezó a hacer películas, diez películas en dos años.

Citado por el autor James McKay como la «personificación del continental suave», Jourdan fue visto en una película francesa por un cazatalentos de David O. Selznick, quien ofreció al actor un contrato de trabajo. Su primera película estadounidense fue The Paradine Case (Agonía de amor, 1948) de Selznick, un drama dirigido por Alfred Hitchcock y protagonizada por Gregory Peck y Alida Valli. En Hollywood, entabló amistad con varias estrellas que compartían su amor por el juego de croquet. Después de aparecer en Tres monedas en la fuente (Three Coins in the Fountain, Jean Negulesco, 1954), Jourdan hizo su debut en Broadway en el papel principal del drama de Billy Rose, El inmoralista. Ese mismo año debutó en la televisión norteamericana como el Inspector Beaumont en la serie Precinct. En 1956, apareció en la película El cisne junto con Grace Kelly y Alec Guinness, interpretando el papel del doctor Nicholas Agi.

Durante la década de 1950, Jourdan actuó en varias películas importantes, entre ellas La novia de todos (The Bride Is Too Much Beautiful, Marc Allégret, 1956) con Brigitte Bardot y Las audaces (The Best of Everything, Jean Negulesco, 1960), pero es mejor recordado como el Gastón de la versión cinematográfica de la novela corta de Colette, Gigi (Vincente Minnelli,1958), junto con Leslie Caron y Maurice Chevalier,.

En años posteriores, Jourdan también apareció en la televisión y en varias películas, pero sin duda alguna, en esta etapa de madurez, fue el personaje del villano Kamal Khan en la película de James Bond Octopussy.el más logrado.

En julio de 2010, Jourdan fue hecho Oficial de la Legión de Honor, la cual recibió acompañado de amigos, entre ellos Sidney Poitier y Kirk Douglas.

Jourdan tiene dos estrellas en el Paseo de la Fama de Hollywood y falleció el 14 de febrero de 2015 a la edad de 93 años.

Leonard Nimoy (83). Actor, escritor y director norteamericano.

Leonard Simon Nimoy nació en Boston, el 26 de marzo de 1931. Muy conocido en Cuba y en el resto de Hispanoamérica por su papel del Sr. Spock de Viaje a las Estrellas (Star Trek). Ha sido quizás el único de los actores del Star Trek original, junto con William Shatner, que ha sido capaz de mantener una vida artística coherente y fructífera al margen de la enorme sombra de la serie.

En 1952 fue reclutado por la Republic para trabajar en Zombies of the Stratosphere, un serial de 12 episodios; dos años más tarde, fue un soldado en La humanidad en peligro (Them!!), la obra maestra de Gordon Douglas.

En la década de 1960 se introdujo en el mundo de la televisión. Entre sus intervenciones más notorias se cuentan las que hizo en The Twilight Zone (1961), The Outer Limits (1964) y The Man from U.N.C.L.E (1964) episodio en el que coincidió con

William Shatner. También alternó en el cine con Yul Brynner en el western Catlow (El oro de nadie).

Ya bien entrados los años 1970, y sintiéndose encasillado, decide multiplicar las direcciones de su trabajo en nuevas formas de expresión artística: la teatral, la literaria, la fotográfica y la musical. De esta época es su famosa autobiografía: I Am Not Spock (1975).

Cuando se ofreció como director para la tercera entrega de Star Trek, algunos directivos de la Paramount mostraron cierta reticencia porque creían estar ante el típico capricho del actor-estrella; el gran éxito comercial del filme demostró la capacidad de Leonard para manejar el material de la franquicia, al punto que le ofrecieron repetir la experiencia en la cuarta película, que obtuvo aún mejores resultados de taquilla.

En 1982 participó en la serie Marco Polo del director Giuliano Montaldo. En los créditos de tal serie, figura como ayudante de director. En 1986, cayeron en manos del actor varios proyectos, de los cuales se decidió por la adaptación estadounidense de Tres hombres y un bebé, con Tom Selleck.

En el año 2002 anunció su retiro de la interpretación; sin embargo, actuó en el rodaje de la undécima entrega cinematográfica de Star Trek. Posteriormente participó como actor en la serie Fringe interpretando al doctor William Bell.

Leonard Nimoy falleció en Los Angeles, el 27 de febrero de 2015.

Gene Saks (93). Actor, director y productor norteamericano.

Gene Saks, nombre artístico de Jean Michael Saks, quien naciera en Nueva York, el 8 de noviembre de 1921.

En su formación como actor, asistió al Taller Dramático de La Nueva Escuela (The New School) en Nueva York, con el director alemán Erwin Piscator. Hizo su debut como actor en Broadway en el musical de Rodgers & Hammerstein, South Pacific en 1949. En el escenario también actuó en A Shot in the Dark, The Tenth Man y A Thousand Clowns, en el papel de Leo Herman, el cual repitió en la versión cinematográfica. Interpretó al hermano de Jack Lemmon en la adaptación cinematográfica de Prisionero de sí mismo y también apareció en Un pelo de tonto, película de 1994, protagonizada por Paul Newman.

Desde finales de los años cuarenta mantuvo una intensa colaboración con el dramaturgo , de quien dirigió varias obras teatrales, entre las que destacan: The Odd Couple (1965), California Suite (1976), Jake's Women (1982), Biloxi Blues (1985) y Broadway Bound (1986).

En el cine dirigió éxitos como Descalzos en el parque con Robert Redford y Jane Fonda, La extraña pareja con Jack Lemmon y Walter Matthau, Flor de cactus (con la que Goldie Hawn ganó el premio Oscar a la mejor actriz de reparto), Ante todo, mujer

(Mame), musical que ya había dirigido en los escenarios teatrales con Lucille Ball y su esposa Bea Arthur, etc.

Gene Saks falleció el 28 de marzo de 2015 y en 1991 fue incluido en el Salón de la fama del teatro norteamericano.

James Best (88). Actor, director y productor norteamericano.

Nacido como Jules Frankin Guy, en Kentucky, un 26 de julio de 1926, fue un actor, productor y director de cine y televisión. Además fue actor de voz y profesor estadounidense.

Sus primeros papeles para el cine fueron los siguientes: Sam en Orgullo de comanche, Cole Younger en Los asaltantes de Kansas, Frank Addison en Peggy, y Jerry Connell en Air Cadet.

Gana cierta notoriedad en el personaje de Joe Rakich en Forja de titanes (Steel Town, George Sherman, 1952) junto a Ann Sheridan. Esto le abre las puertas para trabajar bajo las órdenes de Edward Dmytryk en The Caine Mutiny (1954), junto a Humprey Bogart.

Participa como actor de reparto en producciones de relevancia como Al llegar la primavera (Come Next Spring, R.G. Springsteen, 1956), otra vez al lado de Ann Sheridan y Gaby (Curtis Bernhardt, 1957), junto a Leslie Caron. Como actor principal aparece en películas clase B, siendo su más notable interpretación la del psicópata del filme de Art Napoleón Compulsión de matar (Man on the Prowl, 1958). En su madurez intervino en los filmes Tres en un sofá (Jerry Lewis, 1966) y Sounder (Martin Ritt, 1972). En la televisión fue muy popular con la serie The Dukes of Hazzard, donde interpretó al Sheriff Rosco P. Coltrane, durante el período 1979 a 1985.

James Best falleció en Carolina del Norte el 6 de abril de 2015.

Manoel de Oliveira (106). Director portugués de cine.

Manoel Cândido Pinto de Oliveira nació en Oporto el 11 de diciembre de 1908. Era considerado como el cineasta más prestigioso de su país y el más conocido internacionalmente.

En los tiempos del cine mudo, Manoel de Oliveira hizo su primera aparición en pantalla como actor en una película de Rino Lupo, cineasta italiano. Continuó interpretando tras haber hecho sus primeras aproximaciones como director, y llegó a obtener un papel relevante en la segunda película sonora rodada en Portugal, A Canção de Lisboa. Luego, ya como director consumado, será rara la vez que no aparezca, al menos fugazmente, en sus filmes.

En 1931, dirigió su primer corto, Douro, faina fluvial, documental que dejaba patente la influencia que ejercían sobre él directores como Robert Flaherty y los documentales soviéticos. En 1942 dirigió Aniki Bobó, relato de una pandilla de chicos de las calles de Oporto, que es un largometraje directo, simple, vivo, que supuso un logro excepcional, sobre todo si se tiene en cuenta que fue anterior al neorrealismo italiano. En 1956 dirigió El pintor y la ciudad, película a partir de la cual su estética y su lenguaje fílmico

tomaron un rumbo distinto, minimizando la importancia del montaje y priorizando los planos largos y la puesta en escena más teatral.

La dictadura de Salazar cercenó su carrera, pero tras la recepción de Benilde, de 1975 (basada en la obra teatral de José Régio), va a empezar su reconocimiento internacional y su normalización en Portugal. Oliveira rodará con relativa facilidad y su producción se acelera con: Francisca (1981), basada en la novela de Agustina Bessa Luís; Visita (1982); Lisboa Cultural (1983), documental sobre una de las capitales de Europa; El zapato de raso (1985), basada en la larga pieza teatral de Paul Claudel, que recibe el León de Oro en el Festival de Venecia.

La siguiente década será asimismo vertiginosa. Hizo, entre otras, La Divina Comedia (1991); El día de la desesperación (1992), sobre el suicidio de su admirado escritor Camilo Castelo Branco; Inquietud (1998), que difunde tres relatos de escritores de diversas épocas y estilos; La carta (1999), basada en la obra central de Madame de La Fayette; Palabra y utopía (2000), sobre la vida y sermones barrocos del padre Antonio Vieira (1608-1697), gran prosista.

Continúa aún haciendo filmes en el siglo XXI, de los cuales se destacan Vuelvo a casa (2001), rodada en Francia, con guion suyo; Belle toujours (2006), breve réplica del Belle de jour de Luis Buñuel y Cristóbal Colón (2007). Ya centenario, realizó Singularidades de una chica rubia (2009), a partir de un cuento de Eça de Queiroz y El extraño caso de Angélica (2010). En la 69 Mostra de Venecia estrenó su film O Gebo e a Sombra, sobre un antecedente del Esperando a Godot de Samuel Beckett.

Recibió en 2002 el premio Mundial de las Artes, en una ceremonia celebrada en el Monasterio de la Valldigna, el 5 de octubre de 2002.

Manoel de Oliveira falleció el 2 de abril de 2015.

Elizabeth Wilson (94). Actriz norteamericana de cine y televisión.

Elizabeth Welter Wilson nació el 4 de abril de 1921.

Fue una de las actrices de carácter de más larga trayectoria en el cine norteamericano, manteniéndose vigente en los medios hasta el año 2011, año en que su salud comenzó a resquebrajarse y decidió retirarse.

Asistió a la Academia Americana de Arte Dramático en la ciudad de Nueva York, y estudió con Sanford Meisner en el Neighborhood Playhouse. Su primer crédito reconocido en el cine, fue en 1955 en la película de Joshua Logan Picnic.

Hizo algunos guiones para la pantalla grande, entre ellos Tormenta en el paraíso (Raw Wind in Eden, Richard Wilson, 1958) e Invitation to a Gunfigther (Richard Wilson, 1964)

De su extensa carrera, es muy recordada por su participación en el film El túnel del amor (Gene Kelly, 1957), pero particularmente importante fue su trabajo en Patterns (Fielder Cook, 1956), junto a Van Heflin, donde logró su única nominación al Oscar en la categoría de mejor actriz de reparto. Otros filmes importantes de su carrera fueron:

La diosa (John Cromwell, 1958); Feliz aniversario (David Miller, 1959); Los pájaros (Alfred Hitchcock, 1963); El graduado (Mike Nichols, 1967); Trampa 22 (Mike Nichols, 1970); 9 a 5 (Colin Higgins, 1980); La familia Adams (Barry Sonnenfeld, 1991), entre otras.

En 1987 es galardonada en la categoría de mejor actriz de reparto con un Premio Emmy por su labor en Nutcracker: Money, Madness & Murder

Elizabeth Wilson falleció el 9 de mayo de 2015.

Maya Plisétskaya (89). Bailarina y actriz rusa.

Maya Mijáilovna Plisétskaya, nacida como Maya Plisétskaya Messerer (en ruso Майя Михайловна Плисецкая) en Moscú el 20 de noviembre de 1925, constituyó, junto a Margot Fonteyn, Alicia Alonso e Yvette Chauviré, el conjunto de bailarinas más sobresalientes del siglo XX, siendo la prima ballerina assoluta de esa generación.

A los 3 años entró a la Escuela de Danza de Moscú, y a pesar del entorno agresivo, logró destacar, pues su padre, judío, había sido ejecutado por Stalin en 1938 y su madre, la actriz Rachel Messerer, judía también, deportada junto con su hermano. Bajo la influencia de sus tíos Asaf y Sulamith (Salomé) Messerer, bailarines del Tetaro Bolshoi, Maya entra a la compañía en 1943 y se convierte en primera bailarina con solo 18 años. Su carrera profesional comienza con la interpretación de La muerte del cisne.

Después de años de veto, emprendió giras internacionales. Visitó países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Italia (donde fue directora del Ballet de la Ópera de Roma), Argentina (Teatro Colón y en el Teatro Juan de Vera, de la ciudad de Corrientes) y en España (donde dirigió la Compañía Nacional de Danza), que le permitieron conocer y colaborar con grandes personalidades y obtener reconocimiento internacional en los más importantes teatros. En 1993 se le concedió la ciudadanía española.

Rompió el oficialismo soviético en la compañía danzaria incorporando danza moderna y trabajando con los coreógrafos Alberto Alonso, Maurice Béjart y Roland Petit, que crearon para ella algunos ballets como Carmen, Isadora y La rose malade.

Su impronta en el cine quedó en la filmación de algunas piezas de ballet, pero fundamentalmente, como actriz dramática, en la versión soviética del clásico Ana Karenina, con Tatiana Samoilova en el rol protagónico.

Maya Plisétskaya falleció en Múnich, el 2 de mayo de 2015.

Vicente Aranda (88). Director y guionista de cine español.

Vicente Aranda Ezquerra nació en Barcelona el 9 de noviembre de 1926.

Está ligado a la llamada Escuela de Barcelona, cuya refinada estética fue una novedad en el cine español. Fata Morgana (1966) es una de sus obras más representativas en esta corriente. Posteriormente abordó géneros más comerciales, de cine fantástico y cine erótico: Las crueles (1969), La novia ensangrentada (1972), Clara es el precio (1974). Después, con más rigor, trató la transexualidad en Cambio de sexo (1977) y La muchacha de las bragas de oro (1980), adaptación de la obra de Juan Marsé. Ambos filmes contribuyeron al despegue profesional de Victoria Abril.

A finales de los años 80 del pasado siglo, Aranda alcanzó sus mayores éxitos comerciales. En 1987-88 rodó dos filmes sobre el personaje de El Lute que lanzaron al estrellato a su protagonista Imanol Arias y alcanzaron buena acogida de crítica y público. Amantes (1991) fue tal vez el mayor triunfo de Aranda: causó sensación por su audaces escenas sexuales, ganó los dos principales premios Goya (mejor película y mejor director), así como el Oso de Plata a la mejor actriz en Berlín para Victoria Abril, y contribuyó a la consagración de unos jóvenes Maribel Verdú y Jorge Sanz. Por esta película recibió el Premio Goya al Mejor Director.

A principios de la década de 1990 Aranda rodó El amante bilingüe e Intruso. En 1994 le siguió La pasión turca y en 1996, Libertarias, sobre un grupo de mujeres anarquistas en plena revolución española, donde reúne uno de los mayores repartos del cine español: Ana Belén, Victoria Abril, Ariadna Gil, Loles León, Jorge Sanz, José Sancho, Miguel Bosé...

En 2001 llevó a la fama a Pilar López de Ayala en el papel principal de Juana La Loca (Premio Goya a la mejor interpretación femenina protagonista).

Vicente Aranda falleció en Madrid, el 26 de mayo de 2015.

Richard Johnson (88). Actor, productor y escritor británico.

Richard Johnson nació en Londres el 30 de julio de 1927. Protagonizó varias películas británicas de la década de 1960 y tuvo una prestigiosa carrera en el teatro. Su última aparición en el cine fue en la película El niño con el pijama de rayas.

Hizo sus primeras apariciones profesionales en el escenario con la compañía de John Gielgud y debutó en el cine en 1959, cuando apareció en la película Cuando hierve la sangre, junto a Frank Sinatra y Gina Lollobrigida.

Sus mayores éxitos como actor de cine llegaron con La casa encantada (1963), como Bulldog Drummond en 1967 y junto a Charlton Heston y Laurence Olivier en Kartum (1966). También apareció en varias películas italianas, siendo muy recordado en Cuba por su intervención en el filme La bruja en amor (Damiano Damiani, 1964).

Johnson fundó la compañía de producción británica, British United Artists (UBA) en 1981. Durante su permanencia en la UBA produjo las películas de Diario de la tortuga

(protagonizada por Glenda Jackson y Ben Kingsley, con un guion encargado a Harold Pinter) y La solitaria pasión de Judith Hearne, protagonizada por Maggie Smith y dirigida por Jack Clayton.

La carrera teatral de Johnson ha sido extensa y distinguida. Sus primeros trabajos en el teatro de Londres atrajo la atención del director del teatro conmemorativo de Shakespeare, apareciendo en varias producciones importantes en ese teatro a finales de 1950 y comienzos de 1960. En ese medio fueron notables sus éxitos como el Marco Antonio en Julio César y la del protagonista de la producción de Tony Richardson Pericles, príncipe de Tiro, en el año 1958.

En la década de 1960, actuó en un episodio de antología de la serie de TV The Alfred Hitchcock Hour, interpretando a un estafador que despluma a Fay Bainter y se le da su merecido por influencia del personaje de Geraldine Fitzgerald.

Estuvo casado con la actriz Kim Novak, con quien apareció en la película de 1965 Las aventuras amorosas de Moll Flanders.

Richard Johnson falleció en Londres el 5 de junio de 2015.

Christopher Lee (93). Actor británico de cine, teatro y televisión.

Sir Christopher Frank Carandini Lee nació en Londres el 27 de mayo de 1922.

En 1947 comenzó a aparecer en pequeñas obras de teatro y ópera, así como en programas de radio, donde su imponente voz comenzó a ser muy cotizada.

Debutó en el cine en 1948 con Corridor of Mirrors, dirigido por Terence Young. En el mismo año hizo de figurante en la versión de Hamlet dirigida por Laurence Olivier. Pese a que ni siquiera salió en los créditos, pues su papel era de un soldado que aparecía portando una lanza, le permitió conocer a un muy joven Peter Cushing, que interpretaba a Osric, y con quien establecería una profunda amistad. Tras otras pequeñas participaciones en películas y obras de teatro, como el filme La cautiva de Felipe II (1955) con Olivia de Havilland, consiguió un papel relevante en la La batalla del Río de la Plata, rodada en 1956 por Michael Powell y Emeric Pressburger.

Esta actuación le sirvió para conseguir un contrato con Hammer Productions, compañía que lo lanzaría al estrellato. Su primera película con Hammer, La maldición de Frankenstein, se estrenó en 1957 y fue su primer papel como protagonista principal, dando vida al monstruo creado por Mary Shelley y con Peter Cushing en el papel del barón Frankenstein.

En 1958 actuó con Boris Karloff en Corridors of Blood. Este papel sería el preludio de una larga trayectoria interpretando uno de los roles que para siempre lo caracterizarán:

el Conde Drácula. Ese mismo año se estrenó Drácula (también conocida como Horror of Dracula).

Sin embargo, el gran éxito comercial de estos filmes reforzó la colaboración de Lee con la productora y sobre todo con el director Terence Fisher. Bajo sus órdenes rodó tres nuevos títulos de éxito: La momia y El sabueso de los Baskerville en 1959, en la que posiblemente es la mejor película de la productora, interpretando a Sir Henry de Baskerville y con Cushing nuevamente, esta vez en el personaje de Sherlock Holmes y, posteriormente, Medusa en 1960.

La crítica no escatimó elogios para Lee por su interpretación de Kharis en La momia. Lo complejo de su rodaje, en el que debió soportar un gran peso por culpa de los vendajes, hizo que todos sus movimientos fuesen cuidadosamente pausados y metódicos, lo que dio gran fuerza interpretativa a su mirada. Debido a lo bien que se superaron estas dificultades, La momia está considerada una de las mejores interpretaciones del actor y la mejor producción de la compañía.

Aunque los años de la década de 1970 suponen el principio de la decadencia del cine de terror y de Lee, que había quedado completamente encasillado en el género, el actor aún retenía suficiente prestigio como para ser solicitado por genios como , quien le hizo interpretar a Mycroft en La vida privada de Sherlock Holmes (1970). Con esto se produce una curiosa anécdota, pues Lee fue el único actor que ha encarnado a Sherlock y a Mycroft Holmes en el cine.

Su consagración como actor en papeles de villano alcanzó una nueva cota por su relevante papel en otra gran superproducción, esta vez de la saga de James Bond, interpretado por Roger Moore, en El hombre de la pistola de oro encarnando al asesino a sueldo de origen español Francisco Scaramanga, uno de los más recordados rivales de 007. Más adelante dio vida al Conde de Rochefort en Los tres mosqueteros (1973), de Richard Lester. En esta época, llegó a trabajar con varias estrellas de Hollywood como Charlton Heston, Anthony Quinn, James Mason….

En 1998 acepta interpretar a Muhammad Ali Jinnah, fundador de Pakistán, en la película homónima Jinnah. pero su espectacular retorno a la gran pantalla lo recibe en 2001, cuando participa en la trilogía de El Señor de los Anillos dirigida por y en las que interpreta el papel del mago Saruman. La crítica no ahorraría elogios para su interpretación, que Lee justificaría reconociendo haber sido desde joven un enamorado de la obra de Tolkien y haber sentido una especial fascinación por la figura de Saruman.

Colaboró con proyectos musicales con bandas como Rhapsody of Fire y Manowar, además de haber iniciado una nueva carrera como músico con su propia banda de heavy/power metal sinfónico Christopher Lee Charlemagne en 2010. Ese año, recibió el premio Spirit of Metal en los Globos de Oro. En 2001 Lee fue nombrado caballero del Imperio Británico.

Christopher Lee Falleció en Londres el 7 de junio de 2015.

Ron Moody (91). Actor británico de cine, teatro y televisión.

Descendiente de lituanos y rusos, Ron Moody nació el 8 de enero de 1924 bajo el nombre de Ronald Moodnick. Era primo del director Laurence Moody y de la actriz Clare Lawrence.

Su formación educacional no estuvo asociada al arte, pues estudió en la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres, con el objetivo de convertirse en sociólogo. Posteriormente al comenzar la Segunda Guerra Mundial se alista en la Royal Air Force, convirtiéndose en técnico de radar.

Terminada la guerra realiza los más disímiles oficios hasta que se convence de que su verdadera vocación es la actuación. Debuta en el cine en 1959 en la película Norman el amante, una película de la serie Norman, que tenía como intérprete principal al comediante Norman Winsdor.

Posteriormente participaría en varios filmes, pero el verdadero triunfo y reconocimiento internacional le llegaría con el filme Oliver (Carol Reed, 1968), por el cual obtuviera una nominación al Oscar como Mejor Actor de Reparto y el Globo de Oro al Mejor Actor de Reparto en Comedia Musical.

Ron Moody murió el 11 de junio de 2015.

Magali Noel (82). Actriz y cantante francesa de cine.

Nació como Magali Noëlle Guiffray, en Esmirna, un 27 de junio de 1932.

Actuó principalmente para el cine francés e italiano, bajo la dirección de prestigiosos realizadores como Federico Fellini, Costa Gravas, René Clair, Jean Renoir y Jules Dassin.

Debutó como cantante de cabaret y se hace sentir en el cine durante la década de 1950, siendo uno de los rostros femeninos más célebres del cine francés de esa década, junto al de Francoise Arnoul, Brigitte Bardot y Martine Carol.

Su filmografía abarca más de 80 filmes y su primer éxito le llegó en 1956 de la mano de Jean Renoir, con la película Elena et les hommes (Las extrañas cosas de Paría), que le abrió un camino artístico muy ligado al cine italiano de Giorgio Simonelli, Luciano Emmero Giorgio Bianchi, y también con Constantin Costa-Gavras y Denis Parent, director en 2003 de su última película, Rien que du bonheur.

En Francia se le apreciaba especialmente por su carrera en paralelo como cantante, gracias en gran medida a la rompedora canción escrita por Boris Vian y compuesta por Alain Goraguer Fais-moi mal, Johnny (Hazme daño, Johnny). Durante más de tres décadas, Noël interpretó esa canción -que se considera precursora del rock and roll francés y cuya letra fue objeto de censura a mediados del pasado siglo- junto con el pianista Hervé Sellin.

Fue inmortalizada en la película Du Rififi chez les hommes (Rififi entre los hombres), de Jules Dassin. Federico Fellini la convocó para pequeños papeles en varias películas como La dolce vita y Satiricón, recordándosela en Amarcord como Gradisca.

Su carrera como actriz y cantante en televisión se prolongó hasta 2002.

Magali Noël falleció el 23 de junio de 2015.

Marujita Díaz (83). Actriz y cantante española de cine, teatro y televisión.

Nacida bajo el nombre de María del Dulce Nombre Díaz Ruiz, en Sevilla, un 27 de abril de 1932, fue una de las glorias del cine español de los años 1950 y 1960. Muy popular en el teatro, principalmente en la revista musical, dominaba con igual destreza la canción española, el tango o la canción moderna. Su voz excepcional le abre las puertas tanto del teatro como del cine.

Debutó en el teatro infantil a los 6 años, en una obra infantil, y a los 16 en la película La cigarra, de 1948, junto a Tony Leblanc. Le sigue El sueño de Andalucía, ambas del cine folclórico español.

Posteriormente logra un pequeño papel en Surcos (1951) obra maestra del cine español inspirada en el neorrealismo italiano. Participa en otros filmes de importancia, entre los cuales se encuentra El pescador de coplas y Puebla de las mujeres. Alcanzó sus mayores éxitos en el cine con películas como La casta Susana, Y después del cuplé o La Comparsita.

En la década de 1960 alterna el cine con la revista musical española, actividades que mantuvo hasta la década de 1980, obteniendo notables éxitos.

En televisión presentó en 1976 un programa dedicado al género de la revista titulado Música y estrellas y en radio colaboró entre 1988 y 1996 con Encarna Sánchez, en el espacio Directamente Encarna. Desde 2009 a 2014 colaboró esporádicamente en el programa Sálvame, del canal Tele 5.

Estuvo casada con el bailarín Antonio Gades y en 1999 durante un viaje a Cuba, conoció a quien sería su esposo hasta el día de su muerte.

Marujita Díaz falleció en Madrid, el 23 de junio del 2015.

Jacques Sernas (89). Actor francés de cine y televisión.

Nacido como Jokūbas Bernardas Šernas, en Lituania, el 30 de julio de 1925, logró realizar una carrera internacional importante, principalmente en la década de 1950. En Cuba es muy recordado por su participación en los filmes Elena de Troya (Helen of Troy, Robert Wise, 1955) y la inolvidable La dulce vida (La dolce vita, Federico Fellini, 1959).

Su madre lo trasladó a París cuando quedó huérfano de padre a la edad de un año. Durante la Segunda Guerra Mundial luchó junto a la resistencia y fue capturado por los nazis, siendo

enviado al campo de concentración Buchenwald, cerca de , Alemania.

Después de la guerra probó fortuna en el cine, siendo su primer filme Miroir, de 1946. A ese filme le continuaron otros, donde generalmente era el galán de la joven heroína. No obstante, en 1947, recibió el premio Nastro d´Argento al mejor actor por el fime Juventud Perdida. Posteriormente, al llegar a la madurez, fueron habituales sus personajes de carácter.

También trabajo para la televisión norteamericana, incluyendo el personaje principal del serial de la Warner Brothers de 1956 Man From 1997, junto a . Sus últimos trabajos incluyen el personaje del Cardenal Feltin en el serial biográfico realizado para la televisión italiana Pope John XXIII (2002) y como el embajador de la comedia Regina dei fiori (2005), película realizada también para la televisión italiana. En sus últimos 30 años de vida, Sernas vivió y trabajó para la televisión italiana, hasta su fallecimiento el 3 de julio de 2015.

Carlos Ruiz de la Tejera (82). Actor cubano del cine, teatro y televisión.

Nació el 4 de agosto de 1932 en La Habana. Fue un popular artista cubano, cuya versatilidad le ganó el respeto y la admiración del público y la crítica especializada.

Poseedor de un estilo único e irrepetible, creó disímiles personajes que hizo inolvidables; baste recordar su popularísimo profesor “Tarado Tallarín”. Sus recursos histriónicos, particularmente s u per fec ta dicción e inigualable mímica, hacían logran de inmediato una espontánea comunicación con el público.

Desde el año 1992 celebraba todos los meses su popular Peña de Carlos Ruiz de la Tejera en el Museo Napoleónico de La Habana, la cual se convertiría en una plaza cultural importante del país. En su peña, además de brindar su arte, se disfrutaba de la presencia de jóvenes talentos que abarcaban un amplio registro artístico en las distintas manifestaciones del arte.

En el teatro se le recuerda por su actuación del clásico cubano de Carlos Felipe De película, así como sus actuaciones con el Conjunto Nacional de Espectáculos.

Dejó su impronta en el cine cubano. Su filmografía, aunque no amplia, recoge títulos tan importantes como Las doce sillas, La muerte de un burócrata y Los sobrevivientes, todas bajo la dirección de Tomás Gutiérrez Alea. También filmó Tránsito, de Eduardo Manet y Son o no son, de Julio García Espinosa. Bajo la dirección del realizador francés Armand Gatti, filmó en la década de 1960 El otro Cristóbal.

Fallece el 3 de julio de 2015 en La Habana.

Omar Sharif (83). Actor egipcio de cine y televisión.

De ascendencia libanesa, nació bajo el nombre de Michel Dimitri Chalhoub, en

Alejandría, Reino de Egipto, el 10 de abril de 1932.

Inició su carrera artística en su país natal a los 22 años, convirtiéndose rápidamente en el galán de moda, pero el éxito internacional lo alcanza por su intervención en películas norteamericanas y británicas, principalmente en las que actuó bajo las órdenes de David Lean, Lawrence de Arabia (1962) y Doctor Zhivago (1965). Por estas películas recibió sendos premios Globos de Oro por Mejor actor de reparto en drama y Mejor actor en drama respectivamente. También obtuvo una nominación al Oscar como mejor actor de reparto en Lawrence de Arabia.

Establecido definitivamente en Hollywood, fue reclamado por directores del prestigio de John Frankenheimer, Richard Fleischer, Fred Zinnemann, Francesco Rosi, Anatole Litvak, , William Wyler y Anthony Mann.

Su afición por el juego y problemas con la ley, dañaron su carrera, pues en ocasiones el juego le interesó más que los rodajes comprometidos. No obstante en los últimos años su carrera tuvo un renacer, principalmente por su labor en el filme El señor Ibrahim y las flores del Corán (François Dupeyron, 2003), por la que recibió el Premio César del cine francés al mejor actor.

Omar Sharif falleció el 10 de julio de 2015.

Alina Rodríguez (63). Actriz cubana de cine, televisión, radio y teatro.

Alina Rodríguez, una de las más talentosas actrices cubanas de todos los tiempos, nació el 4 de octubre de 1951 en La Habana.

Procedente de una familia humilde, su tesón, talento y decisión, la hicieron decidirse por realizar una carrera artística, realizando sus estudios en el Instituto Superior de Arte y graduándose después en Licenciatura en Artes Escénicas en 1982.

Formó parte del prestigioso grupo teatral Teatro Estudio. Con esta agrupación artística dirigida por la inolvidable Raquel Revuelta, logró ganarse la admiración del público y la crítica teatral en el personaje central de la puesta En el parque, compartiendo honores con Adolfo Llauradó. Fueron muchas las obras teatrales en la que participó, pero su Lala, el personaje central de la obra de Héctor Quintero Contigo pan y cebolla, la dejó marcada para siempre. Otros éxitos teatrales en los que intervino fueron La boda, de Virgilio Piñera y Tartufo, de Moliere.

Para la televisión cubana actuó en innumerables programas y telenovelas. De ellas los más recordados son La séptima familia (1987) y su Justa de Tierra Brava (1996).

Para el cine trabajó bajó las órdenes de Daniel Díaz Torres en Otra mujer (1986), Juan Carlos Tabío en Lista de espera (2000) y de Juan Carlos Cremata, en la versión

fílmica de Contigo pan y cebolla (2014), entre otros, pero sin duda alguna sus dos personajes inolvidables para el cine cubano lo fueron su María Antonia (1990) del filme del mismo nombre realizado por Sergio Giral y su siempre recordada Carmela, del filme de Ernesto Daranas Conducta (2014). Por su actuación en El premio flaco, recibió en el 2011 el premio a la Mejor Actriz otorgado por la Asociación de Cronistas de Espectáculos de Nueva York.

Alina Rodríguez falleció en La Habana el 27 de julio de 2015.

Coleen Gray. (92) Actriz norteamericana del cine, televisión y teatro.

Nacida como Doris Bernice Jensen, el 23 de octubre de 1922 en Los Ángeles, empezó su carrera en el teatro en papeles principales de las producciones teatrales de Los Ángeles Letters to Lucerne y Brief Music. Estas presentaciones le permitieron lograr un contrato con la productora 20th Century Fox en 1944.

Después de interpretar un pequeño papel en el film musical State Fair (1945), se embarazó y brevemente dejó de trabajar. Regresa un año después como el interés amoroso del personaje interpretado por John Wayne en Río Rojo (1948). Posteriormente apareció en 2 películas del cine negro: The Kiss of Death como esposa del ex convicto Victor Mature y víctima de Richard Widmark, y en Nightmare Alley, como la esposa de Tyrone Power. Mantuvo una discreta carrera cinematográfica hasta 1960.

Desde la década de 1950, Gray apareció como estrella invitada en episodios de series de televisión tales como Four Star Playhouse, Maverick, Alfred Hitchcock Presents, Perry Mason, Mister Ed y Rawhide, entre otras. Su última aparición artística fue en 1985 en la película Cry from the Mountain.

Coleen Gray falleció el 3 de agosto de 2015.

Anna Kashfi (76). Actriz británica de cine.

Anna Kashfi, hija de padres británicos, nació en Darjeeling, India, el 30 de septiembre de 1934 bajo el nombre de Joan O'Callaghan.

Actuó en cine y televisión en los años 50 del pasado siglo y hasta principios de la década de 1960 con el nombre artístico de Anna Kashfi, simulando ser de etnia india, con el objetivo de aumentar el interés hacia ella por su supuesto exotismo. Participó en algunos filmes de relativa importancia como Cowboy (Delmer Daves, 1958) y Battle Hymn (Himno de batalla, Douglas Sirk, 1957), pero solo será recordada por ser la primera esposa del actor Marlon Brando. En 1960 publicó unas memorias sobre su relación con Brando tituladas Brando for Breakfast..

Anna Kashfi falleció el 21 de agosto de 2015.

Julián Pastor (71). Director, actor y guionista mexicano de cine.

Julián Pastor Llaneza nació en Ciudad de México el 18 de octubre de 1943.

Estudió cine en la Universidad del Sur de California, y también estudió actuación con grandes maestros como Seki Sano, Héctor Mendoza y Juan José Gurrola.

Debutó como actor profesional en 1962 en la puesta en escena de Los poseídos, donde también trabajó como ayudante del escenógrafo Roger Van Gunten. Fue locutor de Radio UNAM en 1964 y ese mismo año debutó en el cine en la película En este pueblo no hay ladrones, a la que le suman una extensa lista de películas entre las cuales se encuentran: Aquellos años, Principio y fin, El coronel no tiene quien le escriba y La virgen de la lujuria, entre muchas otras. En España actuó al lado de Lola Flores en Una Señora estupenda (1967) y en Puerto Rico en La Gran Fiesta (1985).

Como director debutó en 1970 con la película La justicia tiene doce años. Su trayectoria como director es igualmente extensa, la que incluye cintas como: El esperado amor desesperado, La Casta Divina, El Héroe desconocido, Las buenas costumbres y El tesoro de Clotilde. Fue nominado al Premio Ariel a Mejor Director por su trabajo en Morir de madrugadas y Los pequeños privilegios. Por esta última recibió el Gran Premio Coral en el II Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana de 1981.

Actuó y dirigio para varias obras teatrales. Como actor fueron relevantes sus interpretaciones en Los poseídos (1962) de Dostoyevsky) y Bajo el bosque blanco de Dylan Thomas (1967). Sus puestas en escena de Sin tetas no hay paraíso (2011), El Club de la mano amiga (2013) y El último encuentro (2015), fueron muy elogiadas por la crítica y con muy buena acogida de público.

Julián Pastor falleció el 24 de agosto de 2015.

Wes Craven (76). Director y guionista norteamericano de cine.

Nacido como Wesley Earl Craven en Cleveland el 2 de agosto de 1939, formó junto a David Cronenberg y John Carpenter una tríada esencial para entender el cine de terror actual. También es reconocido por plasmar del cómic al cine La cosa del pantano en dos películas.

Comenzó su carrera como director en la década de 1970, con películas de escasos medios y controvertidas imágenes, muy explícitas para la época, que le valió fama de director truculento. En los años 80 del pasado siglo escribió el guion de Nightmare on Elm Street y recorrió multitud de estudios y productoras buscando a alguien a quien le interesara el proyecto, siendo rechazado en multitud de ocasiones por parecer una película demasiado surrealista y sin credibilidad. Finalmente fue aceptada por la New Line Cinema y gracias a ello fue todo un éxito a nivel mundial y propició varias secuelas. Se hicieron siete películas diferentes de la serie Pesadilla en Elm Street

(nueve si se incluye el crossover Freddy vs Jason y el remake de 2010), pero sólo dos fueron dirigidas por Craven.

Entre los actores a los que ayudó a despegar su carrera cinematográfica figuran Johnny Depp (Pesadilla en Elm Street, 1984), Sharon Stone (Bendición mortal, 1981) y Bruce Willis (The Twilight Zone, 1985).

Wes Craven falleció en Californa el 30 de agosto de 2015.

Franco Interlenghi (83). Actor italiano de cine y televisión.

Franco Interlenghi nació en Roma el 29 de octubre de 1931.

Comenzó su carrera de actor en 1946 a los 14 años de edad, como protagonista de la película neorrealista El limpiabotas, de Vittorio De Sica. Durante su carrera trabajó con importantes directores, como Federico Fellini en I vitelloni (1953), Michelangelo Antonioni en I Vinti (1953), Roberto Rossellini en Il generale Della Rovere (1959), Mauro Bolognini en La notte brava (1959) y Luchino Visconti en su adaptación teatral de Muerte de un viajante. También actuó como actor de reparto en algunas coproducciones internacionales, entre ellas A Farewell to the Arms (Charles Vidor, 1958), donde compartió honores con Vittorio De Sica.

En 1955 se casó con la actriz Antonella Lualdi con quien se mantuvo unido hasta su fallecimiento. De su matrimonio con la Lualdi nacieron sus dos hijas, Stella y Antonellina Interlenghi, ambas actrices.

Franco Interlenghi falleció en Roma el 10 de septiembre de 2015.

John Guillermin (89). Actor, productor, director y escritor británico de cine.

John Guillermin nació en Londres el 11 de noviembre de 1925.

Con una larga carrera cinematográfica, se dedicó principalmente a dirigir superproducciones de acción y aventura. Entre sus largometrajes más famosos destacan The Towering Inferno (1974), King Kong (1976), Death in the Nile (1978) y King Kong 2 (1986). Por su dirección en Death in the Nile ganó el Galardón de Cine Británico del Evening Standard.

Desde los años 80 del pasado siglo, trabajó en proyectos mucho menos prestigiosos, y sus últimos trabajos fueron producciones efectistas de bajo presupuesto y largometrajes para televisión. También durante la década de 1950 dirigió quince episodios de la serie de televisión The Adventures of Aggie (Las aventuras de Aggie).

Estuvo casado con la actriz y escritora Maureen Conell. Falleció el 27 de septiembre de 2015.

Elena Lucena (101). Actriz y cantante argentina.

Nacida como María Elena Lucena en Buenos Aires el 25 de septiembre de 1914, inició su carrera en la radio como cancionista en la década de 1930 y alcanzó éxito a través de la caracterización de su personaje Chimbela, que más tarde fue representado en cine, teatro y televisión.

Su vasta carrera cinematográfica incluye aproximadamente cincuenta películas, entre las cuales destacan Elvira Fernández, vendedora de tienda (1942), Cinco besos (1946) y La Rubia Mireya (1948), por la cual fue distinguida como la Mejor Actriz Cómica de 1948. Durante los años de 1940, participó en filmes protagonizados por cómicos como Pepe Arias, Pepe Iglesias «El Zorro», Niní Gambier, Mirtha Legrand y Carlos Estrada.

Luego de presentarse en México, Cuba, Venezuela y España, en 1950 rodó Valentina para la empresa Lumiton , junto a Olga Zubarry. De sus otras labores cinematográficas se destaca Una noche cualquiera (1951), cuyos libretos fueron compaginados por Julio Porter. Fue acompañada por Pepe Arias, a quien había conocido durante un espectáculo revisteril. De sus últimas actuaciones cinematográficas, se destacó su participación en Joven, viuda y estanciera, a principios de los años 1970 y con el acompañamiento de Lolita Torres. En teatro reemplazó a Libertad Lamarque en Hello, Dolly! y personificó a la viuda de Larraín de Valenzuela en la comedia musical chilena La pérgola de las flores.

En 1997 rodó su penúltima película, Luna de octubre, de Henrique De Freitas Lima, que fue filmada en Brasil con el nombre de Lua de Outubro. En el mismo año integró el elenco teatral de Hay Ensayo Hoy bajo la dirección de Rodolfo Graziano quien ya había estrenado una versión con Lucena en 1983. En 1998, hizo una de sus últimas intervenciones teatrales con El conventillo de la Paloma, donde interpretó los tangos «Niño bien» y «Garufa».

En 2006 recibió el premio Cóndor de Plata a la Trayectoria en compañía de Jacques Arndt. En aquel año fue designada también Ciudadana ilustre de la Ciudad de Buenos Aires en el Salón Presidente Juan Domingo Perón de la Legislatura porteña. Durante 2009, condujo junto con Ana María Cores el programa radial Gente de teatro, donde interpretó a Chimbela nuevamente.

Además, con 95 años, filmó su última película, Dos hermanos, donde compuso dos personajes: a la madre y a la tía de Antonio Gasalla y Graciela Borges convirtiéndose así en una de las actrices más longevas en participar en un filme. Por Dos hermanos fue nominada en el rubro de Mejor Actriz de Reparto en los premios Cóndor de Plata. Si bien no recibió el premio, el público presente la ovacionó apenas comenzada la ceremonia.

En noviembre de 2011, Lucena, de 97 años, recibió la estatuilla Arcángel San Gabriel, entregada durante una ceremonia celebrada en el auditorio Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional.

Estuvo casada con el actor Julio Bianquet y falleció el 7 de octubre de 2015.

Joan Leslie (90). Actriz norteamericana de cine y televisión.

Nacida como Joan Agnes Theresa Sadie Brodel un 26 de enero de 1925 en Michigan, fue una de las actrices más versátiles del stock del estudio Warner Brothers de la década de 1940.

Durante la etapa de la Gran Depresión, Joan Leslie conjuntamente con sus dos hermanas, probaron fortuna en el teatro de las grandes variedades, junto a magos, cantantes, bailarines y músicos, aprovechando la gran educación artística que habían recibido, para poder ayudar al mantenimiento de la familia. Esto permitió que en 1936 Leslie llamara la atención de un busca talento del estudio Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) durante una actuación en Nueva York, recibiendo un contrato por seis meses. Su primera película fue Camille (La dama de las camelias, George Cukor, 1936), junto a Greta Garbo y Robert Taylor. También intervino en el filme Little Red Schoolhouse, junto a Mickey Rooney.

Su primer rol de importancia llegó con el filme Winter Carnival (Carnaval de invierno, Charles F. Riesner, 1939) al lado de Ann Sheridan, con quien compartió durante toda su vida una profunda amistad. Pero su gran oportunidad le llegó cuando firmó contrato en 1941 para la Warner Brothers. Aquí el estudió decidió cambiar su apellido Brodel por el de Leslie, para evitar confusión con el nombre de la actriz Joan Blondell, también en contrato por el estudio durante aquel tiempo.

Dos semanas después de firmar el contrato, ya Joan estaba trabajando bajo las órdenes de Raoul Walsh en High Sierra (Su último refugio). Posteriormente trabajaría al lado de Gary Cooper y bajo las órdenes de Howard Hawks en Seargent York (El sargento York) y junto a James Cagney en Yankee Doodley Dandy (Triunfo supremo, Michael Curtiz, 1942). En 1943 es dirigida por Vincent Sherman en una de sus mejores interpretaciones, otra vez al lado de Ida Lupino, en The Hard Way (Sombras de una mujer). Ese mismo año participa en Thanks to My Lucky Star (Gracias a mi buena estrella, David Butler, 1943), una producción que reunía a todo el elenco estelar del estudio, en breves escenas de canto o baile. Aquí compartió honores con Dennis Morgan, Eddie Cantor, Bette Davis, Ann Sheridan, Ida Lupino, Oliva de Havilland, Errol Flynn, Alexis Smith y otras figuras muy populares, Posteriormente la Warner Brothers repetiría la fórmula en Hollywood Canteen (La realidad de un sueño, Delmer Daves, 1944), pero los resultados taquilleros fueron menores a su predecesora. La historia contada era bastante irreal al hacer creerle al público que era posible que un simple soldado que asistiera a la Cantina de Hollywood (proyecto real creado por Bette Davis y John Garfield para recaudar fondos para la guerra), pudiera contraer compromiso formal con una estrella de cine, en este caso Joan Leslei, quien se interpretaba a sí misma en esta historia de ficción. No obstante las críticas desfavorables, la popularidad de Leslie se mantuvo y en 1946 la Motion Picture Herald, la galardona como la más prometedora estrella del mañana.

Al año siguiente, descontenta con los personajes que el estudio le brindaba, decide romper su contrato e iniciar una nueva carrera, pero la Warner Brothers jamás le perdonaría esa rebeldía y utilizó toda su influencia para que no fuera contratada por ningún estudio. Como resultado de esta situación se vio obligada a firmar un contrato para dos películas con la Eagle-Lion Films Studio, un estudio menor, productor de películas clase B. La primera de ellas fue Repeat Performance (1947), una película de cine negro, donde interpretaba a una actriz de Broadway. La otra se tituló Northwest Stampede (1948), donde actuaba junto a James Craig.

En 1952 firma un corto contrato con la Republic Picture, el estudio de bajo presupuesto por excelencia y especialista en la realización de oestes. Su primer filme fue Flight Nurse (1953), pero sus más notables películas para ese estudio fueron Jubilee Trail (1954) y Woman They Almost Lynched (1953). Su última película la realizó en 1956, irónicamente para el estudio donde comenzó su carrera, la Metro- Goldwyn-Mayer, The Revolt of Mamie Stover (1956), y precisamente bajo las órdenes de Raoul Walsh, quien la dirigiera en su primer gran éxito. No obstante se mantuvo activa en la televisión, medio para el cual actuó hasta 1991, después de aparecer en la película televisiva Fire in the Dark

Joan Leslie falleció en Los Angeles el 12 de octubre de 2015.

Keith Michell (86). Actor australiano de cine y televisión.

Keith Michell nació en Adelaida, Australia, el 1ro. de diciembre de 1928. Su inclinación por las artes comenzó desde su temprana juventud en su país natal, pero donde verdaderamente alcanzó reconocimiento internacional fue en Gran Bretaña, particularmente por sus actuaciones en televisión y cine como el rey Enrique VIII de Inglaterra.

Enseñó arte hasta que debutó en obras teatrales en su natal Adelaida en 1947 y luego actuó en Londres en 1951. Protagonizó varios musicales, incluyendo la producción de El hombre de La Mancha, en que interpretó el papel de Miguel de Cervantes y su creación ficcional, Don Quijote de La Mancha. En 1964, personificó a Robert Browning en el musical Robert and Elizabeth, junto a June Bronhill.

Actuó con el Teatro Shakespeare Memorial, y apareció en varias películas y en la televisión británica. En el cine será siempre recordado notablemente como el Rey Enrique VIII en The Six Wives of Henry VIII de 1970 y como Heathcliff en Cumbres Borrascosas. Para la televisión estadounidense actuó en varios seriales y programas, entre ellos Murder, She Wrote, junto a Angela Lansbury.

Michell estuvo casado con la actriz Jeanette Sterke y falleció el 20 de noviembre de 2015.

Gabriele Ferzetti (90). Actor italiano de cine, teatro y televisión.

Gabriele Ferzetti nació bajo el nombre de Pasquale Ferzetti en Roma, el 17 de marzo de 1925 y falleció en esa ciudad el 2 de diciembre de 2015.

Comenzó sus estudios de actuación en la Academia de Arte Dramático de Roma, pero

un incidente disciplinario causó su expulsión. No obstante su decisión de ser actor se impuso y logró el triunfo, convirtiéndose en uno de los actores italianos de más prestigio de las décadas de 1950 y 1960.

Actuó bajo las órdenes de prestigiosos directores como Michelangelo Antonioni en La aventura (L´avventura, 1960) y Las amigas (Amiche, 1955), Sergio Leone en Érase una vez en el oeste (Once Upon a Time in the West, 1968) y en La Biblia (The Bible, 1966). Para la televisión británica y norteamericana realizó varios filmes, siendo Divorce His, Divorce Her (Waris Hussein, 1972) junto a ElLizabeth Taylor y Richard Burton, una de las más destacadas. También tuvo una destacada carrera en el teatro.

Gabriele Ferzetti dio vida a Marc Ange Draco en la película Al servicio secreto de su majestad (On Her Majesty´s Secret Service, Peter Hunt, 1968) de la saga de James Bond. Fue ganador del Premio David de Donatello al mejor actor de reparto en esta película, no obstante en 1953 lo había obtenido como mejor actor principal por su actuación en La provinciana (La provinciale, Mario Soldati, 1953), junto a Gina Lollobrigida. Esta película se exhibió en Cuba en algunas ocasiones por la televisión con el título de La adúltera.

Robert Loggia (85). Actor norteamericano de cine y televisión.

Salvatore Loggia, más conocido como Robert Loggia nació en Nueva York el 3 de enero de 1930 y falleció en Los Angeles el 4 de diciembre de 2015.

Fue el actor de reparto por excelencia, logrando dos nominaciones al premio Emmy. La primera de ellas fue en 1990 por la serie Mancuso, FBI y en 2001 por Malcolm in the Middle. También obtuvo una nominación al Oscar en la categoría de mejor actor de reparto por su actuación en Al filo de la sospecha (Jagged Edge, Michael Daves, 1985).

Comenzó como conductor de radio y televisión en el Panamá Canal Zone. Su primera aparición destacada fue cuando interpretó a Elfego Baca, un abogado estadounidense en Walt Disney Anthology Televisión Series. Poco después, ya como actor principal, encarnó al proverbial ratero arrepentido en la serie de corta duración T.H.E. Cat. Otros trabajos suyos para la televisión incluyen las series Charlie's Angels, Columbo y Los Soprano, esta última muy popular en Cuba.

Por su trabajo en el cine, es recordado principalmente por sus intervenciones en El estigma del arroyo (Somebody Up There Likes Me, Robert Wise, 1956), filme en el cual debutó al lado de Paul Newman; Un oficial y un caballero (An Officer and a Gentleman, Taylor Hackford, 1982), Cara cortada (Scarface, Brian De Palma, 1983), El honor de los Prizzi´s (Prizzi's Honor, John Huston, 1985) y Big (Penny Marshall, 1988), por la cual ganó un Saturn Award al mejor actor de reparto.

Falleció el 4 de diciembre de 2015 en Los Ángeles. CLÁSICOS: LAS INFIELES

Por Julio César Perea

Mario Monicelli fue un realizador que comenzó su carrera, como tantos otros en la vieja Europa, como crítico de cine en diferentes publicaciones de su Italia natal. Unos pocos años más tarde, le llegaría el camino definitivo de la gloria, al convertirse en uno de los más sólidos realizadores europeos.

Luego de varios filmes que no habían logrado alcanzar la categoría de grandes éxitos comerciales, le llegan dos sonados triunfos como Los desconocidos de siempre (Il solito ignotti, 1958) y La gran guerra (La Grande Guerra, 1959), por lo que todos comienzan a asociar su nombre a la comedia negra, para la que indudablemente tenía un gran talento.

Sin embargo, en 1952 se había unido a Stefano Vanzini, conocido como Steno para el cine, para realizar esta cinta estremecedora, muy ligada al neorrealismo y con una denuncia terrible a la nueva y a la decadente alta sociedad italiana, donde la doble moral, la hipocresía y la imagen pública desembocan en un suicidio que, curiosamente, desde todos los ángulos, era un asesinato.

La historia gira alrededor de dos personas fundamentalmente: la hermosa Lilliana, que durante los primeros y durísimos años de la posguerra decide casarse con un funcionario inglés y escapar de la miseria y el hambre que la contienda ha dejado a su paso, y su antiguo novio Osvaldo, que había quedado como prisionero de guerra y regresa del frente, convertido en un canalla de la peor clase, tal vez como producto también de las consecuencias de la guerra. Ambos son atractivos y tienen una vida muy parecida, sólo distanciada por la posición social. Ella es muy desdichada en su matrimonio, y él también es muy desdichado en su miseria económica y en su frustración, pero ambos afrontan, cada uno a su manera, lo que la vida les ha puesto por delante.

La ambición de Osvaldo lo lleva a convertirse en un chantajista y en un manipulador de las mujeres que, producto del aburrimiento de sus vidas de alto presupuesto, sentían que era de buen gusto tener un amante y comienzan a ser víctimas de este voraz delincuente.

Lilliana recibe en su habitación a Osvaldo y éste le roba un collar muy valioso. Por tal razón es despedida Cesarina, la sirvienta, por el estirado esposo inglés. Es recomendada por ésta a una amiga de su círculo, donde otra de las víctimas de Osvaldo roba una cantidad de dinero de una de las invitadas en una fiesta ofrecida por la amiga de Liliana. La única nueva es Cesarina, la antigua sirvienta de Lilliana, y es conducida a la cárcel. Es acosada por la Policía y se suicida quemándose.

Lilliana, conmovida y avergonzada ante este hecho, quiere hacer justicia y presenta ante la ley a todas las mujeres perjudicadas por Osvaldo, pero ellas niegan el chantaje. El golpe final lo da el esposo inglés cuando declara que en su casa no hubo ningún robo y la justicia se niega a proseguir sin una prueba concreta de todas las maldades de Osvaldo. En un final de lo mejor y más inesperado que viera el cine italiano de la época, el inglés lleva a Lilliana a su auto y le dice que dada su posición no podía hacer otra cosa. Ella ve a Osvaldo salir de la comisaría satisfecho y dispuesto a seguir con su carrera criminal. Abre la guantera y le dispara tres veces. Cuando llega el comisario, ella le dice que ahora sí tiene pruebas concretas y que ya puede actuar. El filme termina ahí, pero ella sabe que todos tendrán que exponerse a confesar sus ruindades y cobardías públicamente. Lilliana hace justicia por su mano, pero con el fin de poner en el banquillo de los acusados a la alta sociedad, a los hipócritas y a los inmorales, que fueron los verdaderos asesinos de su sirvienta Cesarina.

El filme tiene un pulso muy firme a partir de un guión que fue gestado a prueba de todo, en el que colaboraron, aparte de ambos directores, los excelentes guionistas Ivo Perilli y Franco Brusatti. Es éticamente implacable, estéticamente impecable y nos muestra las entrañas de una Italia que no es la de las postales para turistas, sino con sus más purulentas y bajas pasiones. La escena donde Osvaldo narra la gran fiesta de la alta sociedad alrededor de una piscina, es de lo mejor filmado hasta ese momento sobre la decadencia en picada de la alta burguesía italiana, sólo superada posteriormente, por la incisiva dirección de Federico Fellini en su clásico de 1960 La dolce viita (La dulce vida).

Pero a todo eso se suman las extraordinarias actuaciones de un grupo de actores y actrices donde sobresalen la sueca May Britt, por entonces desconocida en Hollywood y antes de su boda con el cantante negro Sammy Davis jr., quien realiza, sin temor a equivocarme, la mejor actuación de su carrera. Junto a ella Pierre Cressoy y Anna Maria Ferrero, excelentes, aunque aparecen en la cinta otros nombres notables, como Gina Lollobrígida, puesta en el primer cartel injustamente, porque Britt es la verdadera protagonista. También actúan en jugosos mendrugos, la excelsa griega Irene Papas y la bellísima Marina Vlady, aunque en un pequeño personaje, no por eso menos importante.

Monicelli continuaría cosechando triunfos en su larga carrera cinematográfica, sobre todo en la comedia negra, pero sin dudas, Las infieles marcó un hito en su historia. Muy pocas veces logró otro drama tan crudo y estremecedor como éste.

Una película cubana del realizador Fernando Pérez

Basada en un guión original de Zuzel Monné, narra la historia de Luis, un joven que desde sus primeros años de vida le es imposible comunicarse por medio de las palabras o el lenguaje corporal.

Intérpretes: Jorge Perugorría, Isabel Santos, Laura de La Uz, Verónica Lynn y Carlos Enrique Almirante

Mención SIGNIS en el 36º Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano

SIGNIS RECOMIENDA

Del realizador Pawel Pawlikowsk (Polonia)

Un filme que invita a cada espectador a entrar en la verdad y la libertad de sus propias decisiones. Premio GOYA a la mejor película europea

Galardonada como mejor película extranjera en la entrega de los premios Globos de Oro, Oscar y Bafta