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FELIPE PAZOS y sus Contribuciones a y a América Latina

Estudios Especiales Número 1

Association for the Study of the Cuban Economy Washington, DC, 2001 ©2001 by the Association for the Study of the Cuban Economy (ASCE) All rights reserved. No part of this publication may be reproduced or transmitted in any form or by any means without the written permission of the Association for the Study of the Cuban Economy (ASCE). Printed and bound in the of America.

(ISBN 0-9729551-0-0)

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Information on availability of publications and book order forms are available at www.ascecuba.org. ÍNDICE

PRÓLOGO ...... 1

VIDA Y OBRA EN CUBA Felipe Pazos y Roque: Su Curriculum Vitae ...... 3 Raúl Shelton La Contribución de Felipe Pazos a la Economía Cubana...... 5 Gonzalo de la Pezuela La Dimensión Latinoamericana de los Estudios Cubanos de Pazos ...... 10 Jorge Salazar-Carrillo

CONFERENCIA MAGISTRAL Felipe Pazos y la Democracia en América Latina ...... 13 Jaime Lusinchi

CONTRIBUCIONES EN Y EN AMÉRICA LATINA El Horizonte Abierto de la Obra de Felipe Pazos ...... 16 José Tomás Esteves Arria Los Dioses No Mueren Jóvenes ...... 23 Miguel Rodríguez Felipe Pazos ...... 25 Nelson Ortiz Felipe Pazos, Inflación y Realidad en América Latina ...... 26 Eduardo Mayobre

APÉNDICES Problemas Económicos de Cuba en el Período de Transición ...... 29 Felipe Pazos Las Posibilidades Económicas de las Naciones Latinoamericanas y de Cuba ...... 37 Experiencias Personales, Familiares y Políticas sobre Felipe Pazos ...... 40 Coronel Ramón Barquin

SOBRE LOS AUTORES ...... 42

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PRÓLOGO

Nos honra inaugurar esta serie de Estudios Especiales de la Association for the Study of Cuban Economy (ASCE) con las presentaciones de una sesión extraordinaria de la Asociación que se llevó a acabo en el ámbito de la Décima Primera Reunión Anual de ASCE, celebrada del 2 al 4 de agosto de 2001 en el Hotel Biltmore, Coral Gables, Florida.

El objeto de la sesión extraordinaria de ASCE fue el honrar la memoria de Felipe Pazos y Roque, eminente eco- nomista cubano y latinoamericano, y reconocer algunos aspectos de su vida y contribuciones respecto a Cuba, Venezuela y América Latina. Los ponentes representan una amplia gama de personas con quienes Felipe estu- dió, trabajó y a quienes tuteló en su fecunda vida intelectual. También se presentaron testimonios personales, como el del Coronel Ramón Barquin, del cual se incluye un resumen en un apéndice.

Le agradecemos al ex-Presidente de Venezuela, Dr. Jaime Lusinchi, que nos haya honrado con sus palabras y con su presencia. Igual extendemos nuestro agradecimiento a otros colegas cubanos y venezolanos así como a numerosos miembros de la familia de Felipe quienes viajaron a Miami para participar en nuestro evento.

Felipe Pazos jugó un papel muy especial en ASCE. Cuando la organización se fundó en 1990, Felipe accedió a ser su Presidente Ex-Oficio, brindándole a la joven organización un punto de enlace con aquellos economistas profesionales que se formaron y trabajaron en la Cuba Republicana así como su prestigio como uno de los pen- sadores económicos más profundos de su generación. Felipe dictó la primera conferencia de la Cátedra Carlos F. Díaz Alejandro, establecida por ASCE para reconocer a otro desaparecido economista cubano de gran distin- ción discípulo de Felipe. Felipe también fue Presidente y fundador del Colegio de Economistas de Cuba y con- tinuó su relación con dicha institucióm en el exilio. Los editores hemos decido incluir la conferencia de Felipe dictada en diciembre de 1990 a la membresía de ASCE como un apéndice a esta monografía para destacar la constancia de Felipe en su pensamiento sobre Cuba y su futuro democrático y para resaltar la vigencia de su análisis y visión.

La agenda del desarrollo es compleja y para acometerla es necesario una visión de futuro que incluya no sola- mente la dimensión económica sino también los aspectos sociales, políticos y culturales. Por eso también hemos incluido en un apéndice una entrevista periodística publicada por el Diario las Américas en 1957, recientemente después del exilio de Felipe. En esa entrevista Felipe expresa su opinión sobre la problemática cubana de cómo dar empleo a medio millón de desocupados y a los 60.000 mil que llegaban a la edad de trabajar cada año en esa época y su pensamiento sobre la integración de las economías de América Latina. En un renglón dedicado a ex- plicar su pensamiento sobre la política económica que seguiría el nuevo gobierno en Cuba después del cambio de régimen, Felipe expresa que “Cuba tiene que seguir una política prudente pero firme y sostenida, dirigida al fomento de nuevas industrias para el mercado interior.” En este respecto es de notar que aunque recomendaba una política de sustitución de importaciones él llama la atención sobre “una política prudente.” Más importan- te, como señala en su excelente ensayo en este volumen el profesor José Tomás Esteves, Felipe — demostrando una absoluta sinceridad y honestidad intelectual, dando la cara — ofrece excelentes aclaratorias de porque fra- casa en la América Latina la política de sustitución de importaciones. Las ideas de Pazos en este sentido quedan resumidas en la siguiente cita, “fuimos menos sagaces que los economistas y gobernantes asiáticos, tanto como los del Japón, como los de Corea, Taiwán, Hong Kong y Malasia que percibieron claramente la posibilidad de exportar manufacturas desde los comienzos de su proceso de desarrollo.” Para concluir, Felipe Pazos fue para nosotros un profesor de economía, pero también un maestro de doctrina política. Como bien señala el ex-presidente de Venezuela Dr. Jaime Lusinchi en su ensayo, “conciliar democra- cia y desarrollo fue el acicate de su pensamiento.” Durante su vida profesional y pública Felipe Pazos demostró un esfuerzo y dedicación constante por alcanzar un desarrollo económico dinámico y sustentable, estabilidad de precios, reducir la pobreza, la desigualdad de oportunidades y consolidar las instituciones democráticas. Jorge Pérez-López y Carlos N. Quijano Editores Felipe Pazos y Roque: Su Curriculum Vitae Raúl Shelton

a preeminencia de Felipe Pazos en la historia de Cuba proviene de su amor a la Patria y su dimensión cultural, ya que contribuyó fundamentalmente al desarrollo cultural de L Cuba en lo económico y a la formación definitiva en el proceso de desarrollo político cubano a través de su labor como Presidente del Banco Nacional de Cuba. Felipe Pazos nació en 1912 y se fue desarrollando hasta llegar a ser un hombre de inagotable deseo de aprender. Tenía una gran curiosidad intelectual y una gran afición por los estudios de Economía. Estudió Leyes, llegando a graduarse de Derecho Civil en abril de 1937. Yo fui compañero de aula de Felipe Pazos en un curso de estudios nocturnos de tres años. Una concesión que se nos hacía por haber perdido años de estudio durante la dictadura de Machado, en que estuvo ce- rrado el recinto universitario. Esto se logró con la colaboración de los profesores que nos ofre- cían cursos que no eran de su especialidad. Por ejemplo, el Dr. Guerra López nos dió un curso de Economía Política; brillante, sobre el derecho como instrumento de justicia social. Felipe Pazos obtuvo el Premio Dolz, otorgado por sus altas calificaciones. Luego completó sus estudios económicos en Columbia University, en New York. Desde temprano se dedicó a los servicios públicos. Fue asesor de la Comisión de Fomento Na- cional (1941-42); Attaché Comercial de Cuba en Washington, en 1943; Delegado a la Confe- rencia de Agricultura y Alimentación en Hot Springs. Fue Jefe de la División Interamericana del Departamento de Investigaciones del Fondo Monetario Internacional en Washington. Delegado a la Conferencia de Bretton Woods; delegado suplente al Consejo Económico y So- cial de las Naciones Unidas; delegado cubano al Comité de Azúcar y Arroz del Consejo Mun- dial de Alimentos. Fue Fundador del Colegio de Economistas de Cuba y uno de sus Presiden- tes. En el aspecto docente, fue Profesor de Desarrollo Económico en la Universidad Santo Tomás de Villanueva; decano y profesor de la Escuela de Economía de la Universidad de Oriente. Pazos fue fundador del Banco Nacional de Cuba (1948-52), puesto al que renunció por no es- tar de acuerdo con el presidente Batista. Fue sustituído por el Dr. Martínez Sáenz. Pazos fue autor de varios libros y artículos en el campo económico, “El problema monetario de Cuba” en colaboración con el Dr. José Pérez Cubillas; “La economía cubana en el siglo XX”; “Desarrollo económico de la cultura latina”; “Desarrollo económico y estabilidad finan-

3 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

ciera”; “Inflación e inestabilidad de los cambios en la América Latina”; “Tésis del Movimiento 26 de Julio” con Regino Boti; “Desarrollo insuficiente y depauperación económica.” Además escribió gran número de ensayos y monografías en diferentes revistas de asuntos económicos.

Felipe Pazos subió a la , guarida de , donde se encontraba ya su hijo Javier. En febrero de 1957, Felipe Pazos y Javier lograron que , corresponsal del New York Times, entrevistara a Fidel Castro, desmintiendo la muerte de éste y dándole publicidad internacional.

En julio de 1957, Felipe Pazos y Raúl Chibás, firmaron, conjuntamente, un manifiesto, ase- gurando que la intención de la revolución era implantar la Constitución de 1940 que había sido abrogada después del golpe de Batista en 1952. Esto conllevaba la promesa de una prensa libre y elecciones para elegir presidente. A la publicación de este manifiesto, Pazos se vió forza- do a abandonar la Isla.

En enero de 1959, triunfante la revolución, fue nombrado el Dr. Manuel Urrutia Presidente de Cuba y Felipe Pazos, por segunda vez, fue nombrado Presidente del Banco Nacional.

El cambio de poderes en Cuba fue aceptado por los Estados Unidos con muestras de simpatía, pensado que ésta era una revolución tropical más; que correría su curso y languidecería hasta desaparecer. Nadie podía vislumbrar entonces que se convertiría en una revolución comunis- ta.

Los Estados Unidos estaban listos para darle al régimen revolucionario toda la ayuda que nece- sitara, todavía con la idea de que Castro no era comunista. Ese mismo pensamiento tuvo la Sociedad de Periodistas de los Estados Unidos, cuando en abril de 1959 invitó a Fidel Castro para que viajara a los Estados Unidos. Castro aceptó la invitación, acompañado de Rufo Ló- pez Fresquet, Ministro de Hacienda; Felipe Pazos, Presidente del Banco Nacional; Regino Bo- ti, Ministro de Economía y otras personalidades. Ellos habían preparado cuidadosamente di- versos planes para obtener la indispensable cooperación financiera norteamericana al desarrollo de Cuba. A última hora, Fidel Castro les prohibió que hicieran gestiones en ese sen- tido. Felipe Pazos, desilusionado por el arresto y encarcelamiento de , en octubre 23 del 1959, le manifestó al entonces Presidente Osvaldo Dorticós su deseo de renunciar. Su renuncia fue aceptada y para ocupar el puesto del Banco Nacional fue nombrado Ernesto “Che”Guevara. Felipe Pazos fue nombrado Embajador Extraordinario y Plenipotenciario en Europa, en enero de 1960, y se radicó en España.

En el mes de octubre de 1960 se completó prácticamente el ciclo de colectivización de la eco- nomía cubana, al decretarse la confiscación de todos los bancos, centrales azucareros y las más importantes empresas del país. En ese propio mes, los Estados Unidos se vieron en la obliga- ción de establecer un sistema de embargo sobre las exportaciones hacia Cuba con excepción de alimentos y medicinas. Guevara y otros dirigentes comunistas, viajaron a los países detrás de la Cortina de Hierro para “neutralizar las agresiones económicas del imperialismo norteamerica- no.” En enero de 1961 los Estados Unidos decidieron romper las relaciones diplomáticas con Cuba. Felipe Pazos expondría que “conforme a la mentalidad de las figuras dirigentes del régi- men, la idea de la colectivización total de la economía llevaba aparejada la terminación de los vínculos comerciales con las naciones de occidente y la subordinación plena de nuestro comer- cio exterior a las naciones del llamado Bloque Soviético.” Se rompían así los lazos geopolíticos que Pazos defendía.

4 Felipe Pazos y Roque: Su Curriculum Vitae

Posteriormente, fue a Puerto Rico con el Banco de Fomento a fines de 1960. En 1962, figuró entre los “nueve sabios” de la Alianza para el Progreso en Washington. En las últimas décadas, residió en Venezuela donde fue miembro de la junta directiva del Ban- co Central y asesor económico del presidente venezolano. En ese país, fue honrado con la Gran Cruz de la Orden de Francisco de Miranda, la mas alta condecoración que concede la nación, en reconocimiento de la labor desempeñada como Asesor del Banco Central de Vene- zuela, del Gobierno Nacional, y del Instituto Interamericano de Mercados de Capital. Ade- más fue nombrado “Académico de Ciencias Económicas.” Felipe Pazos, a lo largo de una fructífera vida, de un constante batallar, tanto en el campo in- telectual como en el ámbito social, trató de inculcar en el cubano, a través de los organismos públicos, lo importante que es, en lo económico, controlar los problemas monetarios para lle- var a los pueblos a la plena realización de las metas democráticas y establecer la estabilidad geopolítica. Falleció el 26 de febrero del 2001, en Venezuela, a los 88 años. Descanse en Paz.

5 La Contribución de Felipe Pazos a la Economía Cubana Gonzalo de la Pezuela1

us contribuciones fueron de muy variada naturaleza. Primeramente, con su dominio de la teoría económica y su capacidad demostrada para el análisis económico, realizó múlti- Sples estudios, informes y artículos en el campo del desarrollo económico, especialmente en una época en que en Cuba el estudio de la economía era bastante escaso e incipiente. Ade- más, tuvo la oportunidad y la dedicación de aplicar su preparación económica en su acendrada vocación de servicio público, que en las distintas oportunidades en que participó en funciones públicas nacionales lo hizo con reconocida efectividad y con acrisolada dignidad. Asimismo, con sus distintos aportes al pensamiento económico latinamericano y en las funciones variadas que desempeñó en organismos internacionales y países de América Latina tuvo un papel de primer orden en la formación del pensamiento económico y social de la región. Desde temprano en su vida, Pazos dió muestras de su vocación hacia el análisis económico y de su inquietud cubana. En 1940 y teniendo solamente 28 años de edad, pronunció una larga y brillante Conferencia sobre la Economía Cubana en el Siglo XIX. Por su especial interés voy a presentar un resumen de dicha Conferencia en la que comenzó haciendo una comparación analítica entre Arango y Parreño que en 1799 afirmaba “Cuba no tenía otra alternativa que, o perecer o poder vender su azúcar al extranjero” y lo que clamaba el Conde de Pozos Dulces en 1867 de que “a la sombra del sistema entronizado en el país había una agricultura brutal, de- vastadora, que a la par que esquilma el terreno, tritura generaciones de trabajadores y sepulta víctimas inmoladas a la insaciable codicia.” Ambos criterios, contradictorios o no, han definido el problema de Cuba en dicho siglo XIX. No hay duda de que las exportaciones son el estímulo primordial de nuestra economía, pero señala Pazos que si no hemos vencido hasta ahora las fuerzas de este destino histórico no ha sido solamente por incapacidad de los cubanos, sino por la fuerza avasalladora de la leyes eco- nómicas. Produciendo sobre bases de explotación, con esclavos primero y con siervos y brace- ros a jornal miserable después, la industria azucarera creó condiciones sociales en franca pugna con principios elementales de decoro y bienestar humanos. Una estructura económico-social injusta, en la que los beneficios de la producción van a una minoría de usufructuarios—la cla- se terrateniente cubana en el siglo XIX y las corporaciones extranjeras en las primeras tres dé-

1. El Dr. Gerardo Canet hizo contribuciones importantes a este trabajo.

3 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

cadas del Siglo XX. Afortunadamente, ese sistema de producción “plantacionista” no llegó a absorber del todo a la agricultura cubana ni en el siglo XIX ni a principios del siglo XX, ni la misma industria azucarera llegó nunca a ser el sistema de producción único, manteniéndose siempre a su lado el pequeño cultivador; el colono, vinculado al Central, pero conservando su dignidad humana y una relativa independencia. En la economía cubana, a través de su histo- ria, se mantuvieron ambos sistemas de producción, sin que ninguno de los dos lograra prevale- cer. La historia económica de Cuba en el siglo XIX es la historia del desarrollo de la industria azu- carera y de sus peligrosas implicaciones en el orden económico- social. Es la historia también de nuestro tránsito como colonia económica y política española a colonia comercial america- na. Desde el punto de vista económico, el siglo XIX puede dividirse en dos grandes períodos, separados por el quinquenio 1868-1873. Hasta esos años, la industria azucarera y la economía cubana, crecen con ritmo acelerado, a una tasa superior al de la economía mundial de aquella época. Cuba era una colonia sumamente próspera. De 1873 en adelante, por el contrario, la economía permanece estancada: caen los precios, la remolacha hace una gran competencia, la industria tiene que reorganizarse — en 1860 había 2,000 ingenios y en 1894 no había más que 400. La guerra de independencia devasta los campos cubanos, ya que los mambises tuvie- ron un éxito tremendo en destruir la economía de España en Cuba. Los dos períodos señalados tienen también un efecto económico-social: hasta el quinquenio 1868-1873 crece primero la esclavitud y comienza después la importación de semi-siervos chi- nos. Cuba progresa en esa época hacia la condición de mera factoría azucarera. Sólo la crisis que experimenta la industria en los quinquenios finales del siglo XIX, en que la industria re- trocede y las zafras son menores, no son ya necesarios más braceros que explotar. En virtud de esta crisis, la nacionalidad cubana se detuvo en su desintegración, porque son más importantes para la nación las formas de producción que adopte su economía y el nivel de vida y dignidad de su pueblo trabajador. No obstante, el desarrollo de la gran empresa azucarera y de la escla- vitud, Cuba en 1830 era fundamentalmente un país de pequeños agricultores, dedicada a pro- ducir principalmente para el abasto propio. En dicho año coexistían ambos sistemas en el país. Se saneó la hacienda pública, bajaron los impuestos y aumentaron las rentas. En esta época se fundaron la Sociedad Económica de Amigos del País y la Junta de Fomento. Se crean cátedras universitarias de Física, Química, Botánica, Filosofía y Economía Política, cuyo primer Profe- sor fué Justo Velez, que enseñaba la economía como una ciencia vigente, estudiando proble- mas reales y recomendando soluciones para Cuba. La Economía Política era entonces una ciencia arraigada a la realidad, que trataba de ofrecer un programa práctico que realizar. No debe extrañar que el economista Francisco de Arango y Parreño sea el profesional que llena este período de la historia cubana. Arango se mantuvo como español, porque ya era un hom- bre perfectamente formado cuando empezó a surgir y perfilarse nuestra nacionalidad. Fué es- clavista en los primeros años de su carrera porque era representante de una clase esclavista, pero se dió cuenta de los horrores y peligros que la esclavitud provocaba, y en 1832 en una re- presentación al Rey pidió la supresión total de la trata ilícita y la abolición de la esclavitud. Arango fué un verdadero estadista, y un hombre que por su esfuerzo hizo una contribución cuantiosa al bienestar material de Cuba. Felipe Pazos terminó su conferencia haciendo referencias a que la agricultura cubana de aque- lla época se basaba en la explotación social y a los peligros que ello representaba para nuestra nacionalidad. Esto fué denunciado por muchos cubanos de aquellos tiempos, pero ninguno

4 La Contribución de Felipe Pazos a la Economía Cubana vió con tanta claridad el problema, ni comprendió su abominable trascendencia como Fran- cisco de Frías y Jacott, Conde de Pozos Dulces, verdadero precursor del ideario de José Martí, porque la Cuba que quisimos y seguiremos queriendo, es la patria de productores indepen- dientes y dignos, y propietarios de sus instrumentos y medios de producción.

En medio de múltiples funciones y cargos económicos desempeñados en Cuba, Pazos en 1944 participó como Asesor de la Delegación de Cuba a la Conferencia Monetaria de las Naciones Unidas, en Bretton Woods, N.H., en donde se fundaron el Fondo Monetario Internacional y el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, lo que le proporcionó una experiencia básica en ambas instituciones.

Posteriormente, a partir de 1948 le correspondió colaborar en la preparación de la Ley que creó el Banco Nacional de Cuba y ser su primer Presidente. Así, durante 4 años organizó nues- tro banco central como organismo autónomo con personal ejecutivo y técnico de altas califica- ciones, seleccionado mediante concurso-oposición, lo cual era una novedad en aquella época. La creación y funcionamiento adecuado del Banco Nacional tuvo una trascendencia especial, ya que Cuba desde la instauración de la República en 1902 carecía de un sistema bancario propio.

El Banco Nacional tenía por objeto centralizar las reservas monetarias; supervisar y regular el crédito; crear y retener medios de pago; actuar como Agente Financiero y Consejero Econó- mico del Estado; y ejercer en relación con la banca privada, las funciones que se le confiaren y actuar como cámara de compensación. Del capital del Banco, 51% correspondía al Estado y el resto sería aportado por los bancos comerciales y de ahorro. La dirección del Banco estaba en manos de la Asamblea de Accionistas, de su Consejo de Dirección y del Presidente de la enti- dad.

Asimismo, desde el comienzo del Banco Nacional, Felipe Pazos designó una Comisión para redactar el proyecto de Ley creando el Banco de Fomento Agrícola e Industrial de Cuba (BANFAIC), cuya ley fué aprobada por el Congreso en 1950. Su funcionamiento como orga- nismo de fomento fué sumamente exitoso, y es importante destacar que el BANFAIC fué en toda Latinoamérica la única institución de crédito agrícola estatal que emitía valores sin la ga- rantía del Estado, siendo dichos valores rápidamente adquiridos en el mercado. Otra carácte- rística especial del BANFAIC era que extendía a todos los tipos de explotaciones agrícolas e in- dustriales el concepto jurídico de “unidad de producción” eliminando la necesidad de ofrecer el inmueble como garantía de los créditos recibidos. El BANFAIC tenía como principal obje- tivo facilitar crédito a agricultores de escasos recursos o dedicados a cultivos considerados como demasiado riesgosos y a empresarios industriales que se decidiesen a instalar nuevas in- dustrias, contribuyendo a un más diversificado desarrollo de las actividades productivas.

Este proceso de creación y fortalecimiento institucional, fué afectado en Cuba el 10 de marzo de 1952 (3 meses antes de elecciones) por un Golpe de Estado que interrumpió el ritmo cons- titucional que se desarrollaba en el país. Felipe Pazos renunció a sus funciones de Presidente del Banco Nacional, mostrando una actitud cívica y como protesta a la violación de las leyes nacionales.

Con posterioridad, Pazos se incorporó como Economista al Banco Internacional de Recons- trucción y Fomento, pasando después a ser Director de Investigaciones del Centro de Estu- dios Monetarios, asesor de algunas empresas cubanas como Minería Occidental Bosch y el

5 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

Banco Continental Cubano y Director de la Escuela de Economía de la Universidad de Oriente. En 1955 pronunció una Conferencia en el Club de Leones de la Habana, sobre Li- neamientos de una Política de Desarrollo Económico, que tuvo especial impacto. En dicha Conferencia señaló que una política de desarrollo debe ser de carácter integral, que tome en cuenta elementos sociales, políticos, éticos y culturales, a fin de movilizarlos adecuadamente. Asimismo, cuando el capital es un factor escaso y existen condiciones atractivas para las em- presas extranjeras, debe dárseles facilidades para que vengan a invertir, lo que es una forma de fomentar la expansión de la producción y el empleo de mano de obra. A tal efecto, a veces es necesario promover en forma selectiva políticas proteccionistas mediante barreras arancelarias o cambiarias, que es la fórmula clásica utilizada. Un aspecto básico a tener en cuenta es la di- mensión del mercado disponible para determinada producción. En relación con las circunstancias específicas de la economía cubana de aquella época, recordó que la Misión Truslow del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento que visitó el país en años anteriores, no recomendó medidas concretas a adoptar, sino mas bien una “estra- tegia” general. Pazos lo atribuyó a que esta Misión se desconcertó al encontrar un país en que no faltaban las facilidades básicas de transporte, comunicaciones y que las técnicas de produc- ción y distribución tenían cierto desarrollo, no escaseaban el capital y el crédito, y sus habitan- tes no carecían de energía y natural ambición; esto se debía, señaló, a que Cuba no era un país subdesarrollado, sino más bien un país imperfectamente desarrollado, cuyo crecimiento estaba disminuyendo al presentarse dificultades en la industria básica que era la azucarera. A este res- pecto, Pazos señaló la necesidad de fomentar producciones nuevas, nuevos cultivos, nuevas ex- plotaciones mineras y nuevas industrias manufactureras. Asimismo, indicó que una política de fomento de producciones nuevas tiene que plantearse y resolver el problema de la falta de em- presarios y técnicos; para ello, además de promover medidas para inducir a firmas extranjeras a establecerse en el país, debe estimular la contratación de técnicos cubanos y extranjeros para preparar proyectos adecuados, y preparación de técnicos cubanos, mediante la creación de Es- cuelas de Ingeniería Química, Ingeniería Mecánica e Ingeniería de Minas en nuestras Univer- sidades y concesión de becas para estudios en el extranjero. Por otra parte, la combinación de la iniciativa estatal vigorosa en la selección de las industrias a desarrollar con una política arancelaria moderada, debe superar al principio las dificultades originadas en la falta de suficientes empresarios. Resumiendo, para superar el mecanismo de creación de nuevas líneas productivas, sugirió una política basada en los lineamientos siguien- tes: (1) acción intensiva del Estado dirigida a suplementar la iniciativa de los empresarios pri- vados; (2) protección arancelaria moderada y selectiva; (3) amplio programa de experimenta- ción sobre el aprovechamiento industrial de nuestras materias primas y subproductos; y (4) amplio programa de educación tecnológica. En enero de 1959 volvió a la Presidencia del Banco Nacional, más que nada en base a su pres- tigio técnico, y ya en febrero de ese primer año de la Revolución de Castro produjo un Infor- me sobre la Situación Monetaria de Cuba y Recomendaciones sobre Política Económica Na- cional. En dicho Informe, Pazos, reconociendo la existencia de una crisis en las reservas monetarias, recomienda el establecimiento transitorio de un sistema de control de los cobros y pagos internacionales. Sin embargo, no serían aplicadas restricciones a las utilidades del capital extranjero invertido en Cuba, ya que sería política del Banco Nacional no desalentar en forma alguna la continuación de la inversiones privadas en el país. Asimismo, hace constar Pazos en su informe, que si existen dificultades para mantener la paridad cambiaria, se disponen de ac-

6 La Contribución de Felipe Pazos a la Economía Cubana tivos suficientes internacionales para mantener la estabilidad del peso cubano. Al propio tiem- po, recomienda que se gestionen créditos con el Banco Mundial y el Banco de Exportación e Importación de Estados Unidos, para el financiamiento de obras y proyectos básicos que per- mitan acelerar el desarrollo económico nacional. La única forma de obtener un equilibrio ver- dadero en la balanza de pagos, agrega el Informe, es aumentando la producción nacional. Este Informe revela que Pazos deseaba influir a que Cuba se mantuviera dentro de los parámetros de la economía de mercado y del mundo occidental. Posteriormente, en noviembre de 1959, Pazos abandonó la Presidencia del Banco Nacional. Al crearse la llamada Alianza para el Progreso, a propuesta de la Organización de Estados Americanos (OEA), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Comisión Económica para la América Latina (CEPAL), se aprobó en 1962 la designación de la Nómina de los Nue- ve Expertos, prevista en la Carta de Punta del Este. Felipe Pazos fué designado para integrar dicha Nómina, cuyas principales funciones colectivas eran: definir normas para la presenta- ción y evaluación de planes de desarrollo por parte de los países de América Latina miembros de la OEA; cooperar con los gobiernos en las labores de revisión de los programas; realizar es- tudios para el cumplimiento de los propósitos de la Alianza; cooperar con los diversos organis- mos financieros cuya colaboración era esencial; y otras labores complementarias. La importan- cia de estas funciones, y la alta jerarquía intelectual que tuvieron los otros miembros de la Nómina designados, permite aceptar el alto nivel de reconocimiento que se otorgaba a Pazos por estos organismos interamericanos. Pazos permaneció en estas funciones por aproximada- mente 4 años. Posteriormente, permaneció en Washington D.C. ejerciendo funciones de asesoriamiento a distintos países de América Latina, incorporándose después al BID como Economista. En el desempeño de esta función en octubre de 1974, poco antes de su traslado a residir en Vene- zuela para trabajar en el Banco Central, Pazos preparó un Informe sobre el desarrollo y la su- butilización de la mano de obra en República Dominicana. En dicho trabajo se revela no sólo su capacidad usual de análisis técnico sobre el tema, sino su pensamiento en favor de la mayor utilización de la mano de obra y en la formulación de un programa a corto plazo para reducir el desempleo y el sub-empleo, para mejorar la vida social y cultural de la población, lo que re- conoció que era una tarea difícil pero no imposible. Para concluir, debemos señalar que Felipe Pazos fué un economista liberal que no obstante que tenía un dominio completo de la teoría económica, era más bien un técnico en política económica. Tuvo una demostrada voluntad de servicio público y una acendrada integridad. Un hombre de su talento y su fino sentido de la oportunidad, no puede menos que inspirar mientras vive, y después en la Historia, el respeto y la admiración de sus compatriotas y de los seres humanos de buena voluntad. En última instancia fué un verdadero patriota.

7 La Dimensión Latinoamericana de los Estudios Cubanos de Pazos Jorge Salazar-Carrillo

n la historia económica de Cuba, caracterizada por numerosas lagunas, se ha sumergi- do la primera gran obra del Dr. Felipe Pazos. Su título: El Problema Monetario de E Cuba (Imprenta La Verónica, La Habana, 1940). Aunque es cierto que el Dr. José Pérez Cubillas aparece como su autor principal, ello sin duda se debe a su categoría ya esta- blecida como professor de la Universidad de la Habana en la cátedra de Hacienda Pública. Por tanto, fue profesor de Felipe (y posteriormente mío) en la materia. Acabado de graduar de nuestra querida Alma Mater, y regresando recién de cursar estudios en Columbia Univer- sity, becado por la Universidad de la Habana como uno de los primeros expedientes en la Es- cuela de Derecho, el libro constituye uno de los pininos del Dr. Pazos. Es una anécdota familiar que al regresar a La Habana en 1939 el Dr. Pazos se topó con una devaluación del certificado de plata cubano con respecto al dólar, ambos circulando moneta- riamente en Cuba desde 1934, que era claramente excesiva. Su esposa Sara, que no sabía de economía, pero tenía agudeza mental y sentido común (según Jardiel Poncela el menos co- mún de los sentidos), conminó a Felipe a escribir sobre el tema, arguyendo que si no daba una explicación al intríngulis, nadie en Cuba creería que la economía que había estudidado en New York servía para algo. Y así lo hizo Felipe, con una serie de artículos en El Mundo, diario de La Habana, que precedieron al libro. Para apreciar la importancia de la monografía, baste recordar que la publicación fue auspicia- da por el Colegio de Abogados de Cuba, y sus deliberaciones y recomendaciones (entre ellas la creación del Banco Nacional de Cuba) fue aprobada por su membresía. El informe se ele- vó a la Presidencia de la República.

Los conceptos keynesianos1 vertidos por Felipe Pazos en este libro recuerdan los que más tar- de utilizó en el famoso modelo Pazos-Simonsen de inflación (Trimestre Económico 1963 y Challenge 1977). Recuerdo cuando discutimos el modelo en Caracas, después de conocerlo muy bien, pues en mi cátedra de economía latinoamericana en Georgetown University, Feli- pe era el invitado a la rigueur en el tema de inflación, emocionado casi me gritaba que las hi-

1. Inclusive en el analisis de la especulación contra el certificado de plata de Cuba se usa el término expectativas en inglés (expectations) por lo novedoso del mismo.

3 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

perinflaciones se paran solas. Curioso que lo mismo aconteció con la especulación a favor del dólar en Cuba (y con los tulipanes también). Debemos reconocer que es claro que Felipe co- nocía el intríngulis microeconómico que había parado de súbito las hiperinflaciones de la pos- guerra de los años 1920 en varios países de Europa (siendo Alemania el más conocido). Así que dominaba la teoría monetaria clásica de Pigou, Cassel, Bresciani-Turroni y otros. Final- mente debemos apuntar que este libro aporta notablemente a un libro clásico de las economías de exportación, The Monetary Problems of an Export Economy, escrito por Henry Wallich hacia finales de los 1940, y que se refería fundamentalmente a Cuba. Pazos y Wallich mantuvieron una amistad que reverdecieron cuando contribuyeron sendos trabajos a una conferencia orga- nizada por el Departamento de Economía de Florida International University a mediados de los ochenta.

Otro tema que Felipe Pazos estudiara fué el impacto de la inversión extranjera en Cuba. En sus trabajos sobre el tema se preocupaba por la independencia económica del país. Los estadis- tas de los años treinta de los países en vías de desarrollo reclamaban no tan sólo la independen- cia política, sino también la económica. La anterior había estado llegando a plazos desde prin- cipios del siglo XIX (Haití o La Española, siendo la primera en 1791) a las colonias de América Latina y el Caribe, Asia y Africa. Pero la ulterior no se había logrado en ninguna ins- tancia terminado el primer tercio del siglo XX.

Pazos en los años treinta, y hasta la Segunda Guerra Mundial, mostraba su preocupación por el dominio extranjero en Cuba de la infraestructura, las finanzas y el azúcar.2 Ello incide clara- mente sobre una genuina independencia política. Por lo tanto Felipe fue un propulsor de la cubanización de estos sectores a través de la compra por la empresa privada nacional o alterna- tivamente por una mayor participación en el mercado de los negocios cubanos. Esto comenzó a ocurrir hacia principios de los años cuarenta, y ya en los años cincuenta los cubanos contro- laban mayoritariamente las finanzas y el azúcar, y habían aumentado significativamente su porcentaje del negocio en estos sectores.

Los ensayos del Dr. Pazos sobre la inversión extranjera en Cuba fueron: “La Banca en Cuba” y “Lineamientos de una Política de Desarrollo Económico” en Felipe Pazos, Medio Siglo de Po- lítica Económica Latinoamericana, Tomo III, Academia Nacional de Ciencias Económicas, Caracas, 1992. Estos inspiraron una serie de artículos sobre la inversión extranjera en la Amé- rica Latina, el último siendo “New Directions of Foreign Investment in Developing Coun- tries” en Antonio Jorge y Jorge Salazar-Carrillo, eds., The Latin American Debt, St. Martin’s Press, New York, 1992.

La posición meridiana de Pazos en cuanto a la inversión extranjera en Cuba es que tuvo una participación excesiva en la economía. Esto comprometía no tan solo la independencia econó- mica de la Isla, sino también la política. Por ello fue favorable a la nacionalización de los acti- vos foráneos en Cuba, pero a través de la adquisición de los mismos en forma ordenada y pau- latina por los empresarios cubanos. También criticaba la estructura de la inversión directa del exterior, considerando su dominio de la infraestructura, de las finanzas y del principal produc- to de exportación patrio, una concentración perniciosa para el desarrollo económico de la Isla.

2. En reuniones privadas con el Dr. Justo Carrillo, el Dr. Pelipe Pazos favorecía la compra por Cuba de las refine- rías de azúcar americanas, para aumentar la baja participación del refino en sus ventas azucareras

4 La Dimensión Latinoamericana de los Estudios Cubanos de Pazos

Podemos decir que la clase capitalista de Cuba obviamente estaba de acuerdo, pues para prin- cipios de los años cincuenta ya el azúcar y la banca estaban mayoritariamente en manos cuba- nas, a través de adquisiciones y expansión de los intereses domésticos. Y con la creación del Banco Nacional de Cuba, el dólar perdió su fuerza liberatoria de pagos, que había siempre te- nido en la etapa republicana, y que se había acendrado a finales de 1914 con la prescripción de la circulación de los centenes españoles y los luises franceses.

Esta posición fue trasladada a la América Latina en su famoso artículo “Inversiones Públicas versus Inversiones Privadas Extranjeras en las Regiones Subdesarrolladas,” presentado en la Conferencia de Río de Janeiro de la International Economic Association en Julio de 1957, y después publicada en Economic Development in por la Asociación, en 1958.3 El Dr. Pazos mantuvo en ese artículo, inspirado en sus experiencias cubanas, lo que después re- presentó la experiencia real de la inversión extranjera latinoamericana: la misma debe ser muy minoritaria dentro de la inversión total (a lo más el 20%) y debe concentrarse en sectores avanzados (manufactura y servicios). Sus responsabilidades como uno de los miembros del Comité de Nueve Sabios de la Alianza para el Progreso de Latinoamerica durante una buena parte de la década de los sesenta, lo llevaron a enfatizar estos puntos para la América Latina como un todo.4

Finalmente el tema cubano de la industrialización de la Isla, tuvo también un impacto sobre su muy leída obra latinamericana, que además él difundiera personalmente en las importantes posiciones relacionadas con Latinoamérica que ejerciera en el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, el CEMLA (Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos con sede en México), la Alianza para el Progreso y el Banco Interamericano de Desarrollo. El artículo cen- tral de Pazos al respecto fue publicado durante su estadía en México en 1954, acogido en la re- vista Humanismo en octubre de 1954, y se intitula “Dificultades y Posibilidades de una Políti- ca de Industrialización en Cuba.” Sin embargo este artículo está basado en una conferencia que Felipe dictara con anterioridad en Cuba, en la Sociedad Económica de Amigos del País.

Felipe Pazos muestra en este artículo su firme creencia en la industrialización diversificada. Considera que en la Cuba de los cincuenta el número de sectores industriales en producción es todavía insignificante, que la clase empresarial es potencialamente dinámica. Se preocupa de la competenecia de la industria americana, pujante en colocar sus productos a muy bajos pre- cios en la Isla. Establece a la política laboral de protección de empleos como un obstáculo serio a la expansión industrial. Y no se desalienta por el tamaño del mercado, claramente suficiente para la industria ligera, pero que además aseguraría al inversionista eficiente, que pueda com- petir en un gran número de industrias.5 Aboga por una protección arancelaria para estimular el crecimiento de industrias técnicamente modernas que la necesiten en sólo pequeña medida.

3. El Profesor Howard Ellis, co-editor de este libro, fue profesor mío en Berkeley, y tenía este artículo en su lista de lecturas sobre políticas de desarrollo económico. 4. Es relevante recordar que durante estos años se produce el escándalo del proyecto Camelot, sobre la ingerencia de los inversionistas extranjeros en el cobre chileno, en los asuntos internos de Chile. 5. Pazos estima el ingreso nacional de Cuba en esa época en $2,000 millones, mayor que el de Nueva Zelandia y algún que otro país nórdico, que el de Chile, y sólo 35% inferior al de Colombia. En cuanto a México, lo sitúa como dos y media veces el tamaño del mercado de Cuba. Estos dos últimos países con poblaciones mucho más grandes.

5 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

Esta opinión esta aguijoneada por la inestabilidad y falta de crecimiento de la principal indus- tria de exportación de Cuba, y por la protección y subsidio al azúcar por parte de los países avanzados. Similar es la posición que coetáneamente suscribe Prebisch, ya que la estabilidad de las exportaciones cubanas del dulce, que Pazos deja claro anhelaría en cualquier circunstancia (inclusive para apuntalar una mayor producción industrial), requería una disminución del precio de oferta del país más allá de los aumentos en los volúmenes de venta. Esta inelasticidad de la demanda y el deterioro de los términos de intercambio (en términos de productos e in- gresos) recuerda la tésis de Prebisch en su artículo de marzo de 1952 en el American Economic Review, explayando la exposición que hiciera en diciembre de 1951 en la reunión anual de la American Economic Association. Dado que el costo promedio de la producción de azúcar en los años cincuenta era algo superior a cinco centavos la libra, esta política probablemente hu- biera necesitado de subsidios. Estas ideas fueron recogidas un poco más tarde por Pazos en su artículo “La Protección Aran- celaria como Política de Desarrollo Económico,” publicado en el Trimestre Económico (del que por cierto participaba en su Comité Editorial) de octubre-diciembre de 1958. En este artículo, al igual que en el de inflación que mencionamos supra, Felipe es el primer economista latino- americano en utilizar modelos dinámicos (aunque aun simples), en este caso de comercio in- ternacional y protección arancelaria6 los cuales anticipan las técnicas de programación que lue- go enfatizará la CEPAL por un tiempo.7 La postrera contribución del Dr. Pazos al tema que iniciara con sus estudios referente a Cuba, la deja plasmada en su conferencia en Miami (Flo- rida International University) titulada “Protection, Price Structure and Export Growth,” en Antonio Jorge y Jorge Salazar-Carrillo, Price Policies and Economic Growth, Greenwood-Prae- ger, London, 1997.

6. Es más, sus primeros modelos aparecen en “Desarrollo Económico y Estabilidad Financiera” presentado a la III Reunión de Técnicos de Bancos Centrales del Continente Americano (a la que también asiste Filipinas) en La Ha- bana, y publicado en marzo-abril de 1952 (IMF Staff Papers, 1953 en inglés). 7. El reconocimiento de Felipe Pazos como el mejor economista latinoamericano de sus tiempos quedó implícita- mente establecido cuando Trimestre Económico, la mejor revista latinoamericana en economía, le comisionó que hi- ciera en 1983, el recuento de “Cincuenta Años de Pensamiento Económico en la América Latina” (Trimestre Económico, octubre-diciembre, 1983).

6 FELIPE PAZOS Y LA DEMOCRACIA EN AMÉRICA LATINA

Jaime Lusinchi

Comienzo necesariamente por agradecer a los Direc- Esa fue la realidad en la cual le tocó vivir, luchar y tivos de ASCE—esta prestigiosa Institución que pensar a Felipe Pazos. Ante ella, tuvo claridad para agrupa a tantas figuras de proyección continental— percibir sus rasgos sobresalientes y reaccionar con lu- la posibilidad de compartir el homenaje—tan mere- cidez, para proponer valores que fueran capaces de cido como oportuno—a Don Felipe Pazos; compro- superarla. La democracia, el desarrollo y la justicia so- metidos como hemos estado siempre con las luchas cial, fueron los objetivos que sirvieron de hilo con- por la libertad, la democracia y el progreso equilibra- ductor a su actividad, a lo largo de más de ocho déca- do. Lo agradecemos, asumiendo con toda modestia el das. A lo que habría que añadir la honestidad, que le nombre de Venezuela, de la América Latina y del era consubstancial y que bien podríamos considerar concepto de Democracia Social, que ha servido de hasta como una forma de ser. norte a nuestras luchas; habida cuenta de cuanto de- bemos todos a Don Felipe: el Pensador, Luchador y Con estas aspiraciones como guía, Felipe Pazos se Maestro, que vivió en función de esas ideas y que convirtió en uno de los primeros y más destacados tanto aportara a la causa común. miembros de una generación que se propuso darle una nueva fisonomía a las sociedades latinoamerica- Así, diremos, que durante casi todo el siglo veinte y nas y que ayudó a transformarlas a lo largo del propio en casi todas sus latitudes, la América Latina se carac- siglo veinte. Los objetivos eran claramente políticos; terizó por el predominio de regímenes autoritarios y pero en su caso, los medios e instrumentos fueron de dictaduras militares irrespetuosas del Estado de predominantemente intelectuales. Se trataba de una Derecho y de los Derechos Humanos. Una tradición toma de conciencia sobre la propia realidad; sobre sus caudillista y personalista, heredada del siglo diecinue- carencias y posibilidades. Y de la necesidad de actuar ve y que no termina de desaparecer, se conjugó con la en consecuencia. debilidad de las instituciones, las imposiciones impe- riales, el desconcierto provocado por las dos guerras El trasfondo ético de su actuar, le condujo a adoptar mundiales y, posteriormente, los determinismos de la posiciones claramente definidas respecto a los hechos guerra fría. y realidades que sucedían en el Continente. La pro- moción y defensa de la democracia y de los derechos Además de la fragilidad institucional, nuestro Conti- humanos constituyó para El un tema central. Las nente se significó por el atraso en sus modalidades de ejerció con admirable entusiasmo y ponderación. No producción y su dependencia económica de unas po- transigió jamás ante el atropello, pero tampoco se cas materias primas y de productos agropecuarios dejó llevar por los cantos de sirena de las soluciones destinados a la exportación hacia los grandes centros mágicas y repentinas, que llevaron a muchos de sus industriales. El atraso estuvo acompañado de una in- compañeros de generación al desvarío. justa distribución de la riqueza, que aún hoy día nos señala como la región de mayores disparidades en el Ayudó a la construcción de la democracia en Cuba, mundo. hasta donde le fue posible y, luego, decidió acompa-

13 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

ñar a la democracia latinoamericana en donde existía. bor como Miembro del Comité de los Nueve de la Porque nunca olvidó que su compromiso era con Alianza para el Progreso. Cabe hacer notar, que en la América Latina. Y así, cuando en los años setenta la concepción de la Alianza para el Progreso, participó democracia menguaba en nuestra región y eran pocos activamente. los países en los cuales podía hablarse de soberanía Su mayor influencia en América Latina, sin embargo, popular, recaló en Venezuela, uno de los pocos ejem- estuvo en que fue miembro activo—con personali- plos democráticos que entonces existían en nuestro dad propia—del grupo de hombres que forjó un Continente. pensamiento económico latinoamericano. Junto a En Venezuela, ejerció durante un cuarto de siglo un personalidades como Raúl Prebisch, Víctor Urquidi, magisterio y una influencia considerables. Ya era para Javier Márquez, Felipe Herrera, Celso Furtado y los entonces, un intelectual respetado y ponderado inter- venezolanos Manuel Pérez Guerrero y José Antonio nacionalmente. Sin embargo, fue a través de una la- Mayobre, conformó un cuerpo de doctrina en la cual bor callada y humilde, que dejó su impronta en quie- el desarrollo y la justicia social constituyeron el cen- nes manejaron la economía venezolana durante las tro principal del análisis y las preocupaciones. Las dos décadas siguientes. En este magisterio tuvo el doctrinas diseñadas por ellos, tuvieron alcance mun- apoyo de su hijo, Javier Pazos, quien fue un líder en- dial y sirvieron para comenzar a entender las necesi- tre los jóvenes economistas venezolanos de esa época. dades de los países en desarrollo.

Desde la posición de Asesor y Director del Banco En el caso de Felipe Pazos, destacó su manera de en- Central de Venezuela, no solo influyó en las políticas frentar la realidad latinoamericana; siendo su campo adoptadas y criticó muchas de ellas; sino que conti- de acción especializada la economía, particularmente nuó con su tarea intelectual, exponiendo ideas y for- en los campos monetario y financiero. Como expre- mando discípulos que han ocupado destacadas posi- sara alguna vez el propio Felipe Pazos, los economis- ciones y liderazgo en nuestro país. Fue un hombre tas de América Latina no podían darse el lujo de ex- polémico. Pero de una polémica amistosa, que unía a plorar nuevas teorías económicas, sino que debían la expresión categórica de sus ideas, la amabilidad del aplicar y adaptar las existentes para transformar la verdadero Maestro. realidad que enfrentaban, y que sólo en aquellos casos en los cuales dichas teorías fueran patentemente insu- Fue miembro de la Academia de Ciencias Económi- ficientes, debían explorar nuevos caminos. No obs- cas y realizó numerosas publicaciones sobre Venezue- tante, a pesar de que no intentaron ser originales, la y América Latina, las cuales aumentaron su extensa crearon un pensamiento original, un pensamiento obra y fueron recogidas en los libros: Política de Desa- propio de América Latina y sobre América Latina, rrollo Económico, del Banco Central de Venezuela y que hizo escuela y que desarrollaron nuevas genera- Medio Siglo de Política Económica Latinoamericana, ciones de economistas, entre las cuales cabe señalar— de la Academia Nacional de Ciencias Económicas. entre otros—a dos discípulos de Pazos: Juan Noyola y Carlos Díaz-Alejandro. En América Latina su obra fue igualmente extensa y fructífera. Desde organismos internacionales como el Dentro de la generación a la cual me refiero, Felipe Fondo Monetario Internacional, el Centro de Estu- Pazos destacó por el equilibrio de sus posiciones. dios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA) y el Como su pensamiento provenía del estudio y de la Banco Interamericano de Desarrollo, contribuyó al reflexión profunda, fue ajeno a los extremismos de desarrollo institucional económico y financiero de di- cualquier signo. No lo sedujeron los malabarismos versos países e influyó en destacados economistas de teóricos ni las exhortaciones a alcanzar el desarrollo las nuevas generaciones. Con visión crítica, pero con por medio de la fuerza o de políticas fantasiosas. Así realismo, participó en la construcción de las relacio- como no se resignó a una paz y una estabilidad caren- nes financieras entre América Latina y los Estados tes de justicia social, o que se dejaran pasar las opor- Unidos de América, particularmente mediante su la- tunidades de progreso. Mucho menos le agradaron

14 Felipe Pazos y la Democracia en América Latina las tentaciones totalitarias de algunos exponentes del no, venezolano y latinoamericano—que constituye neoliberalismo. uno de los mejores ejemplos del intelectual latino- americano del siglo veinte comprometido con su Conciliar democracia y desarrollo fue el acicate de su pueblo y con la democracia. pensamiento. Sus áreas de preocupación, que él mis- mo consideraba excesivamente amplias, fueron: el El Doctor Felipe Pazos fue, en resumen, el prototipo empleo, el comercio y la integración latinoamericana. del hombre de bien y del creador organizado. Sensa- Pero su preferencia estuvo centrada en los asuntos tez, prudencia, austeridad, sensibilidad social y una monetarios, cambiarios y financieros, incluyendo los gran visión de largo plazo, fueron rasgos inmanentes casos especiales de inflación y deuda. Porque nunca en la personalidad de Don Felipe, como cariñosa- pudo abandonar su vocación de banquero central, mente lo llamáramos en Venezuela. Fue un hombre que ya había ejercido con brillantez en Cuba. cabal, que puso como límite a todas las actuaciones de su vida la integridad de sus principios y que nunca Estas últimas áreas de estudio, que algunos de sus cedió ni claudicó en sustentarlos; no vacilando en sa- compañeros de generación miraban con recelo o crificar posiciones, bienestar y tranquilidad personal como propias de conservadores, le exigieron un es- en todas las circunstancias y situaciones en las cuales fuerzo especial para hacer compatibles el realismo y le tocara actuar; que tal fue claro para cuantos le co- las aspiraciones de justicia; porque siempre mantuvo nocieran. en mente un pensamiento de Bertrand Russell, que cita en su ensayo sobre “Cincuenta Años de Pensa- Allá en la tierra común, que ahora se ha quedado con miento Económico en la América Latina,” que así di- El, siempre le tuvimos como un venezolano más, que ce: “A lo largo de su historia, la filosofía ha consistido se incorporó a lo nuestro como ciudadano integral y en dos componentes poco armoniosamente combina- que en función tal, sirviera a los mejores intereses del dos entre sí: por una parte, una teoría sobre la natura- País, de su Cuba mortificante que tanto amara y de la leza del mundo, y por la otra, una doctrina ética o América Latina, en la cual creyó y creemos todos no- política sobre cómo debemos vivir. La falta de clara sotros existencialmente. separación entre uno y otro componente, ha sido Por éso, no sólo compartimos emocionados—lo fuente de mucha confusión en el pensar.” repito—este merecido homenaje a Don Felipe Pazos, Con rigor, trató de evitar esta confusión y asumió sino que lo agradecemos como venezolanos, invocan- frontalmente el desafío de estudiar y proponer políti- do los servicios eminentes y generosos que prestara a cas, para que el mundo financiero contribuyera al de- nuestro País. sarrollo y para que su mal manejo no condujera a la Y finalmente, en lo íntimo personal, permítanme inestabilidad o la debacle. Observó desprejuiciada- agradecer a ASCE la invitación a este homenaje a mente una realidad que no siempre era estimulante o Don Felipe; porque me han hecho compartir un acto agradable, y buscó extraer de ella lecciones que per- de justicia histórica y ello enaltece; porque al estar mitieran mantener y profundizar los principios éticos aquí, he tenido la oportunidad de reafirmar mi com- fundamentales y que contribuyeran al bienestar so- promiso ideológico con los principios de la democra- cial. cia social, que El sostuviera a todo evento; y porque al invocar su memoria junto a ustedes, he fortalecido En varias oportunidades no fue suficientemente com- mi fe en una América Latina unida, democrática, li- prendido por sus contemporáneos, lo que le costó el bre y justiciera, equilibradamente desarrollada, que exilio y, a veces, el aislamiento. Pero esto no minó su tenga en la historia por venir, la presencia trascenden- entusiasmo ni redujo su rigor. Por ello, considero un te que bien puede y bien merece; que en ello esta pre- privilegio que agradezco, poder decir estas breves pa- cisamente el mensaje imperecedero de Don Felipe labras sobre Felipe Pazos; seguro como estoy, de que Pazos. con el tiempo se hará cada vez mayor justicia al lega- do de ese verdadero Maestro—genuinamente cuba- Gracias a todos.

15 EL HORIZONTE ABIERTO DE LA OBRA DE FELIPE PAZOS

José Tomás Esteves Arria

Recuerdo hace algunos años, me sorprendí— so que aconteció a pocos metros de él. Más tarde ve- positivamente, por supuesto—cuando supe que mi ría preocupado desde lo alto en el hotel donde se alo- padre, Héctor Esteves Llamozas, estaba trabajando jaba, como ardía la ciudad, para en los días con el doctor Felipe Pazos, en la asesoría económica subsiguientes preparar un programa de ayuda a Co- de la Presidencia del Banco Central de Venezuela. lombia a través de un nuevo organismo financiero in- Este hecho originaba la oportunidad de que en las ternacional el cual estaba representando en ese mo- ocasiones cuando iba a visitar a mi padre, cometía la mento. Total una vida caleidoscópica, en donde pequeña travesura de ponerme a discutir con el doc- pasaban personajes rutilantes como John F. Kenne- tor Pazos, a pesar de las diferencias de edad y forma- dy,1 Winston Churchill, John Maynard Keynes, Ró- ción, pero al final de esas discusiones surgiría una mulo Betancourt, y otros de menor im- amistad que se fortaleció enormemente. Sobre todo portancia. después de la muerte de mi progenitor. Así de esta Así mismo, trabajó y/o tuvo la oportunidad de deba- manera, casi todos los jueves, almorzábamos en com- tir ideas con teóricos de la talla de Paul Rosenstein- pañía del economista Nicolás González Heredia, o Rodan, Celso Furtado, Michael Kalecki, Jorge Mars- Eduardo Mayobre, y otras personalidades que usual- hall, Robert Mundell (Premio Nobel de Economía), mente invitábamos para compartir la sobremesa. y Henry Wallich, entre otros. Efectivamente, en esas charlas muy informales, se pa- Este era mi personaje y gran amigo: alguien que esta- saba fácilmente de la macroeconomía a la política lo- ba ¡íntimamente incrustado en la Historia! cal, a la situación bancaria, etc. Incluso se repasaba la PAZOS Y LA CEPAL historia de América Latina, en donde nuestro amigo En nuestras charlas sobre la macroeconomía y la polí- Pazos, contaba sus momentos de triunfo en la revolu- tica económica, siempre resurgía el tema de la CE- ción cubana, para luego entrar en unas difíciles rela- PAL. ciones con Fidel Castro, que acabarían por su rompi- miento con la revolución. Así mismo, nuestro Por supuesto, Pazos había sido el fundador del depar- personaje inolvidable pasaba recuento durante esas tamento de economía latinoamericana del Fondo amenas charlas de su amistad con dos grandes perso- Monetario Internacional, allí conocería a Robert Tri- najes de la historia cubana como lo habían sido Prío ffin uno de los más afamados asesores internacionales Socarrás y Raúl Chibás. De igual forma, nos relataría de banca central, quien le mencionaría el nombre del en varias ocasiones, que se encontraba en Bogotá en doctor Raúl Prebisch como uno de los mejores eco- el momento preciso cuando mataron a Gaitán, suce- nomistas latinoamericanos. Efectivamente, Raúl Pre-

1. Felipe Pazos fue miembro del Comité de expertos de la Alianza para el Progreso, institución inspirada bajo la administración Kenne- dy para contrapesar la influencia de la revolución castrista, y concentrar la ayuda norteamericana al desarrollo.

16 El Horizonte Abierto de la Obra de Felipe Pazos bisch, Felipe Pazos, Carlos Sanz de Santa María, Feli- sustitución de importaciones, los latinoamericanos pe Herrera y el venezolano José Antonio Mayobre no creían que en la industrialización en sus fases ini- constituyeron la conocida escuela de pensamiento ciales no podían exportar manufacturas. Y que lo económico vinculada a la Comisión Económica para mismo pensaban los principales economistas norte- la América Latina de las Naciones Unidas, mejor co- americanos y europeos. Pero ni uno ni otros tuvieron nocida por sus siglas CEPAL. A esta escuela se le en- en cuenta factores tales como: dilga de haber promovido altos niveles de proteccio- nismo en América Latina que luego impidieron un • Las manufacturas representan variados productos crecimiento sostenido del comercio exterior en la re- con insumos diversos y con costos relativos muy gión. Dentro de este ambiente de ideas, el doctor Pa- diferentes dependiendo de las mezclas de factores zos independientemente de Prebisch, escribiría “La de producción. protección arancelaria como política de desarrollo” en El Trimestre Económico octubre-diciembre 1958, • Las exportaciones hacen posible instalar plantas donde recomendaba el proteccionismo industrial de tamaño óptimo con una capacidad de produc- como forma de impulsar el crecimiento económico. ción mayor de la que puede absorber el mercado A este respecto al fracasar años más tarde la política nacional. de sustitución de importaciones, muy valientemente • Las exportaciones permiten la especialización y el doctor Pazos dio la cara, ofreciendo una excelente aclaratoria: ésta, la mayor eficiencia.

Los absurdamente altos niveles de protección aplica- Dijo Pazos, “fuimos menos sagaces que los economis- dos en nuestros países no tienen justificación alguna, tas y gobernantes asiáticos, tanto como los de Japón y resulta muy difícil explicar cómo y porqué, los esta- como los de Corea, Taiwan, Hong Kong, y Malasia blecieron nuestros gobernantes, y cómo y porqué los que percibieron claramente la posibilidad de exportar ignoramos o aprobamos implícitamente los funciona- manufacturas desde los comienzos de su proceso de rios técnicos, nacionales e internacionales, incluso los desarrollo” (op. cit. p. 253). del Fondo Monetario y el Banco Mundial. La explica- ción podría estar en que siendo la protección contra- Felipe Pazos, nunca estuvo de acuerdo en que el éxito ria a los principios teóricos del comercio internacio- de los países asiáticos se debiese al fruto de la libertad nal, pero considerada necesaria para industrializar un económica. En este contexto, citaba nada menos a país, los funcionarios nacionales e internacionales res- que a Jeffrey Sachs que la política económica de los ponsables de promover el desarrollo adoptamos la países asiáticos había estado signada por un interven- conducta de ignorar enteramente el hecho de que los cionismo gubernamental, en donde hasta se había gobiernos estaban aplicando una política de protec- ción y, consiguientemente, de ignorar también los ni- impedido el acceso de capital extranjero en sectores 3 veles de los derechos arancelarios, sin entrar a investi- clave. gar si éstos eran adecuados, excesivos o absurdos.2 Adicionalmente, nuestro estudioso de la economía y Creo que no hemos visto jamás una absoluta sinceri- primer Presidente del Banco Nacional de Cuba, en dad y honestidad intelectual como la que nos revela este trabajo que hemos citado varias veces, ofreció al- el párrafo anterior. En otras líneas de este trabajo, Pa- gunas recomendaciones para acelerar el crecimiento zos nos enseñaría que cuando se adoptó la política de de las exportaciones de manufacturas entre éstas:

2. Felipe Pazos, “La crisis latinoamericana” en Medio siglo de política económica, Caracas, Academia Nacional de Ciencias Económicas, (T. I), 1991, p. 250. 3. Esto lo estamos diciendo puesto que recientemente se acaba de publicar un libro en donde se trata durísimo a Raúl Prebisch (Caída y auge de América Latina, de Carlos Rossi, Editorial Panapo, 2001), y se lanzan grandes alabanzas a los países asiáticos como Taiwan, Corea del Sur, Malasia, y Hong Kong.

17 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

(a) mantengan tipos de cambio estables ligeramente cionario, Pazos comprueba ciertos retrasos entre los subvaluados, para lo cual tienen que frenar la infla- precios. El primero de ellos, es el de la tasa de cam- ción; (b) promuevan una más estrecha cooperación bio. Efectivamente, cuando la tasa de inflación es me- entre trabajadores y empresarios; (c) reduzcan el nivel nor que la internacional, entonces, las autoridades de protección arancelaria a niveles relativamente ba- monetarias deben ajustar el tipo de cambio para evi- jos, por ejemplo 20 por ciento; (d) examinen el rol tar la disminución de las reservas, para ello han em- que pueden jugar las empresas extranjeras en la expor- pleado los célebres “crawling peg,” y además conge- tación de manufacturas y discutan con ellas progra- lan tarifas de servicios públicos, precios de alimentos, mas al respecto; (e) apliquen rigurosos controles de calidad; (f) simplifiquen los trámites a la exportación, materias primas, y combustibles. especialmente la devolución de los derechos arancela- Estas prácticas temporalmente han contenido las pre- rios e impuestos internos pagados por los insumos; (g) siones inflacionarias por el lado de los costos, pero aumenten y faciliten el crédito a la exportación; y (h) tienden a desalentar la producción de los productos y estudien cuidadosamente qué clases de manufacturas servicios controlados o han hecho aumentar el gasto tienen mayores posibilidades de exportación y qué ti- público respondiendo a los subsidios otorgados, o han pos de ayuda necesitan (op. cit. p. 259). causado ambos efectos al mismo tiempo y ulterior- Dentro de este orden de ideas nos llama la atención mente han generado el negativo efecto de sujetar a la que todavía los gobiernos insistan en mantener una economía a los impactos periódicos de grandes reajus- moneda sobrevaluada [recomendación (a)]. La reco- tes en costos y precios esenciales (p. 26, traducción nuestra). mendación (c) ha sido seguida puesto que en la ac- tualidad únicamente tienen elevados aranceles las im- También Pazos descubre una relación negativa entre portaciones de vehículos automotores. Pero, sin crecimiento e inflación, ¡buena advertencia— embargo, aun continúa el problema del retraso en la decimos nosotros—a quienes creen que la inflación devolución de los impuestos aduaneros en las expor- trae crecimiento económico! De esta manera, nos ex- taciones no tradicionales. plica en su excelente manual:

PREOCUPACIÓN POR LA INFLACIÓN La correlación negativa que existe entre tasas de creci- Otro tema en el cual indagó nuestro desaparecido miento y tasas de inflación significa que los precios no amigo y mentor, fue el problema de la inflación cró- solamente suben cuando la capacidad económica está nica en América Latina.4 siendo totalmente utilizada sino también—y a una tasa más rápida—cuando la producción cae y hay una Durante los años cincuenta a setenta en países como capacidad ociosa. Dado que la inflación de demanda Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, experimentaron usualmente se le asocia con expansión real e inflación una inflación muy difícil de abatir, que dio pábulo a de costos con contracción real (la cual puede indicar numerosos estudios y análisis. Así, nuestro autor revi- escaseces sectoriales), los cambios de producción hacia sando ampliamente la bibliografía internacional so- arriba y abajo indican que la naturaleza de la inflación se transmuta frecuentemente de empuje de demanda bre inflación e hiperinflación, acota que estos países a de empuje de costos o escaseces sectoriales (op. cit., estaban experimentando una inflación a ritmo inter- p. 37). medio entre los países de baja inflación (Estados Uni- dos, Alemania, Gran Bretaña, etc.), y los que experi- Otro atractivo hallazgo que nos hace nuestro investi- mentaron fuertes hiperinflaciones tales como gador es que en un ambiente inflacionario la compra Alemania (1923), Austria (1921-23), Grecia (1945), de acciones ni siquiera sirve como protección ante la etc. Dentro de estos países con largo historial infla- escalada de los precios. Por ello, nos dice:

4. Las ideas de Pazos en relación a este fenómenos se encuentran básicamente en un libro publicado en español y en inglés (nosotros es- tamos consultando la versión en inglés) titulado Chronic Inflation in Latin America, editado por Praeger Publishers, New York, 1972. Todas las citas que hagamos sobre el problema de la inflación se referirán a esta edición.

18 El Horizonte Abierto de la Obra de Felipe Pazos

La causa inmediata de la debilidad es la práctica em- ajuste se da cuando se publica el índice de precios al pleada por las empresas de distribuir una fuerte pro- consumidor, pero como existe un retardo de dos me- porción de sus dividendos en acciones y únicamente ses en su publicación, rápidamente será reemplazado una pequeña fracción en efectivo. Esta práctica tiene por otro. “El más conocido y más al día de todos los el doble efecto depresivo de reducir el rendimiento en posibles indicadores en América Latina es la cotiza- efectivo de las acciones e incrementar su oferta en el ción de una moneda extranjera, generalmente el dó- mercado, dado que muchas de las acciones distribuí- lar USA” (p. 93). Así la reducción de los intervalos a das como dividendos son vendidas por accionistas ur- su más corta expresión y el ajuste de los salarios a la gidos de efectivo (op. cit., p. 123). cotización del dólar proporcionan a la hiperinflación Pero quizá el mayor aporte que hizo Pazos a la teoría una mecánica completamente distinta a la de la infla- económica sobre la inflación, ha sido el mecanismo ción intermedia. Puesto que desaparecen aquí todos de ajuste de los salarios nominales y reales ante las va- los retrasos o anticipaciones a la inflación. Las presio- riaciones de precios.5 En efecto, a medida en que los nes inflacionarias no son acumuladas ni llevadas al si- precios van aumentando los salarios reales se van de- guiente período como ocurre en las inflaciones inter- teriorando, pero luego cuando se va a renovar el con- medias. Se genera todo un sistema flexible de valores, trato de trabajo los trabajadores exigen un incremen- precios, tasas de cambio, sueldos, etc. Hasta que llega to en los salarios nominales que compense el poder un momento en que la inflación alcanza su máxima de compra perdido por la inflación. Pero como la in- expresión y se derrumba; así sucedió en Alemania flación ha reducido el salario real de equilibrio, la (1923) cuando en febrero la tasa de inflación llegó a vuelta al nivel real anterior equivale a un sobreajuste un 143% para luego en marzo caer a un 13%. que empuja los precios hacia arriba otra vez. Este pa- ECONOMISTA LATINOAMERICANO pel de los contratos laborales (o colectivos) como es- tabilizadores de la tasa de inflación se debilita cuando Fue economista latinoamericano, no por haber naci- el alza de los precios va más rápido que el año en que do en Cuba y haberse nacionalizado venezolano, sino tiene vigencia el contrato y no es posible entonces la por haber sentido a América Latina como una sola espera de la culminación del mismo. Pazos estima en patria, orientando políticas económicas desde el Fon- un 40% de tasa mensual de inflación, que sería el do Monetario Internacional, desde el Banco Intera- punto en el cual la inflación desvía este mecanismo mericano de Desarrollo y desde otros foros y asesorías estabilizador obligando a los sindicatos a no esperar el que brillante y honestamente brindó. En este aspecto, vencimiento del contrato laboral. en un trabajo sobre cincuenta años de pensamiento económico en América Latina6 nos explicaba cuál de- En el proceso que conduce de la inflación intermedia bía ser el papel del economista latinoamericano: a la hiperinflación, este proceso se genera de la si- La ciencia económica en la América Latina ha tenido guiente forma: cuando la tasa de inflación se acerca a a todo lo largo de estos 50 años, y aún sigue teniendo, los límites de la tolerancia, la mayoría de los sindica- un carácter pragmático: la función de nuestros econo- tos exigen aumentos salariales antes que se venzan sus mistas no es descubrir nuevos principios generales contratos colectivos. Y los empresarios se los otorgan. sino aplicar los existentes al análisis de nuestra reali- Estos aumentos impulsan las expectativas inflaciona- dad concreta y a la formulación de las medidas nece- rias y traen una mayor reducción en el período de sarias para mejorarla. Sólo cuando la ciencia extranje- ajustes entre precios y costos. En un principio el re- ra no suministra los instrumentos intelectuales

5. Rudiger Dornbusch ha reconocido este aporte a la teoría económica denominándolo el efecto Pazos-Simonsen, en donde el ajuste de salarios reales y precios toma la forma de dientes de sierra. Vid. Inflation, exchanges rates and stabilization, Essays in International Finan- ce, Princeton University, New Jersey, 1986. 6. Felipe Pazos, “Cincuenta años de pensamiento económico en la América Latina,” en Medio siglo de política económica, Caracas, Aca- demia Nacional de Ciencias Económicas, (T. III), 1991.

19 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

adecuados para nuestros propósitos—como ocurrió que la producción industrial se había incrementado con la teoría del desarrollo en los años que siguieron a en Cuba en un 46%, y pronosticando Noyola que la la terminación de la II Guerra Mundial o con la teoría economía cubana crecería de un 10 al 14%. En una de la inflación, a fines de los años cincuenta y durante parte de su afilada y acertada réplica, Pazos llegó a ex- la década de los sesenta—podemos permitirnos el clamar: lujo de dedicar parte de nuestro tiempo a especular sobre principios generales (p.1227) ¿Cómo es posible desarrollar una tasa de crecimiento del 10 al 14% anual con una economía totalmente Más adelante en este trabajo, Pazos, resalta la labor de desorganizada; con una escasez absoluta de profesio- los economistas latinoamericanos que en los distintos nales universitarios, que han salido en su inmensa ma- países labraron una política durante la Gran Depre- yoría del país y que las universidades cubanas, en fase sión relativamente exitosa. Citando a Díaz-Alejan- aguda de radicalismo revolucionario, no están hacien- dro, nos revela que entre 1929 y 1933 la economía do nada por sustituir, y con un equipo capital, cons- norteamericana se contrajo en un 30,5% pero la de truído en un 80 o 90% en los Estados Unidos, que no México disminuyó un 10,3% y la Argentina (tan sen- puede mantenerse y repararse con partes y piezas fa- sible a los cambios en la economía mundial, decimos bricadas en la Unión Soviética o en Checoslovaquia? nosotros) se contrajo apenas en un 9,9%, mientras (p.1197) que la economía del Brasil se había expandido en un Con el estallido de la crisis de la deuda externa en 2,6% y la de Colombia en un 9,9%. 1982, se produjo prácticamente un paro en el ritmo de crecimiento económico de los países de América Con la revolución cubana, tan “cargada de un poten- Latina. Ante este problema la tribulación del doctor cial de emociones tan alto,“ utilizando sus mismas Pazos, se hizo sentir en un magnífico trabajo cuyo tí- palabras, Felipe Pazos, se desligó de ella, apenas vio tulo de por sí llamaba a la reflexión: “¿Qué modifica- que la dictadura desplazaba a la democracia y el tota- ciones a su política económica deben hacer los países litarismo era el método para dirigir la economía de de la América Latina?” En este soberbio trabajo nues- Cuba, muy distinto a lo que él consideraba que debía tro académico muestra su inquietud ante los daños ser una economía de mercado aunque controlada. económicos que la deuda externa estaba provocando Durante un breve lapso volvió a presidir el Banco en América Latina. A este respecto él calcula que los Nacional de Cuba, para luego renunciar y ser nom- países latinoamericanos habían disminuido sus im- brado en su lugar nada menos que el “Che” Guevara. portaciones en 170.510 millones de dólares en los Nuestro estudioso del desarrollo, sería nombrado por años 1982-95, y además una reducción en los benefi- breve tiempo Embajador de Cuba para asuntos eco- cios de las inversiones extranjeras en el área de 7.000 nómicos internacionales, renunciando muy pronto millones de dólares. Así demostraba fehacientemente para más nunca volver a su amada patria. En el trans- que no solamente afectaba la crisis de la deuda a los curso de estos acontecimientos, escribió un artículo países de la región sino a los países industrializados. publicado originalmente en la revista El Trimestre Económico,7 mediante el cual criticaba muy sensata- De modo pues, a juicio de nuestro analista, la reanu- mente a dos artículos publicados en la misma revista dación del crecimiento económico en América Latina (julio-septiembre 1961) por dos autores de renom- pasaba por la resolución del problema de la deuda ex- bre: Paul A. Baran y Juan F. Noyola, quienes habían terna,8 pero aun así, los países latinoamericanos esta- hecho una cantidad de elogios y ditirambos al proce- ban obligados a exportar para reemplazar los recursos so revolucionario cubano. Diciendo entre otras cosas, que antes provenían de préstamos externos. Y dentro

7. Felipe Pazos, “Comentarios a dos artículos sobre la revolución cubana,” en Medio siglo de política económica, Caracas, Academia Na- cional de Ciencias Económicas, (T. III), 1991. 8. En la actualidad a través del plan Brady, y de una recuperación económica en la región (en especial México y Argentina), el problema de la deuda externa ya no reviste de tanta gravedad.

20 El Horizonte Abierto de la Obra de Felipe Pazos de esta demarcha, los países de América Latina ten- 10. Integración económica: dar la más alta prioridad drían que hacer los siguientes cambios en sus políti- al aumento del comercio con los países de la re- cas económicas: gión mediante la celebración de nuevos conve- nios multilaterales o bilaterales; 1. Política de sustitución de importaciones: requie- re un cambio radical aunque sin necesidad de ha- 11. Relaciones laborales: mantener plenamente los cer una reducción general de aranceles, ni de ce- derechos de los trabajadores pero persuadir a las rrar industrias, ni de aumentar el desempleo; organizaciones sindicales a modificar su psicolo- gía, en el sentido de una colaboración más estre- 2. Asistencia financiera y técnica a las empresas: es cha con las empresas, para dar mayor capacidad más necesaria que nunca para hacerlas más efi- competitiva a la lucha contra la inflación; cientes y ayudarlas a exportar; 12. Educación, salubridad, seguridad social y vivien- 3. Ampliación de la infraestructura: debe obvia- da: elevar el rendimiento de los recursos dedica- mente continuarse, dirigiéndola a facilitar la ex- dos a estos objetivos. portación; 13. Programación y coordinación de la acción del 4. Contratación de préstamos externos: ¿dónde, Estado: continuar los estudios sobre necesidades cuándo, cómo?;9 y disponibilidad de recursos, y estrechar la coor- dinación de la actividad de los distintos departa- 5. Inversión extranjera: promoverla y dirigirla a la mentos del gobierno (p.189).10 creación o ampliación de empresas exportadoras de manufacturas; El objetivo de estas recomendaciones—según nues- tro investigador—no es otro que el hacer que la re- 6. Gravamen fiscal a las exportaciones tradicionales: gión entre de lleno a exportar, sin provocar grandes darles estímulos y reducirles impuestos para re- traumas a sus diversas economías, y de proporcionar- cuperar mercados; le un mayor impulso a la iniciativa privada, sin re- nunciar a la acción del Estado destinada a lograr ma- 7. Promoción preferente de empresas privadas: sí, y yores niveles de desarrollo con una mejor además facilitar su desarrollo mediante la simpli- distribución del ingreso. ficación de ordenanzas administrativas y la elimi- nación de regulaciones económicas innecesarias; A MODO DE DESPEDIDA 8. Operación de empresas por el Estado: aumentar Quizá el mayor mérito de los trabajos de nuestro eco- al máximo la eficiencia de las que se considere nomista latinoamericano por excelencia, consista en políticamente necesario conservar como públi- la sencillez de su estilo y amenidad pedagógica, que cas y transferir al sector privado las restantes; entusiasma a leerlo aun a quienes no compartíamos algunas de sus tésis. En efecto, con la intrusión de la 9. Política antiinflacionaria: intensificar los estudios econometría y nuevas técnicas estadísticas, los econo- sobre el mecanismo de la inflación y aprovechar mistas han transformado a la ciencia económica en la experiencia de los programas que se aplican en una especie de lenguaje únicamente para iniciados, la Argentina y el Brasil; con un esoterismo que llega a niveles indescifrables.

9. Para el año en que Pazos redactó estas líneas, América Latina estaba excluída de los mercados finacieros internacionales, pero el autor de este obituario tiene la impresión de que América Latina ha regresado a los mercados de capitales internacionales; por cierto que Vene- zuela es el único país que ha reducido su deuda externa. 10. Felipe Pazos, “¿Qué modificaciones a su política económica deben hacer los países de la América Latina?” en Medio siglo de política económica, Caracas, Academia Nacional de Ciencias Económicas, (T. I), 1991.

21 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

A este respecto, Arnold Harberger11 en una conferen- Como ser pensante, el doctor Felipe Pazos se caracte- cia ante la Universidad Católica Pontificia de Chile, rizaría por ser un maestro—especie de privat- alertaba sobre este problema, en donde los nuevos dozent—libre de personas como Carlos Díaz-Alejan- economistas están más preocupados en conocer nue- dro (autor brillante con cuyo nombre se bautizó una vas técnicas econométricas para aplicarlas en varios cátedra fundacional en la Universidad de Harvard), temas y luego plasmarlas en revistas académicas. Los de Cristina Rodríguez, de Miguel Rodríguez, de nuevos expertos descuidan la experticia bibliográfica Eduardo Mayobre, y del que escribe estas líneas que y el conocimiento institucional. le encantaba acercarse a su persona para recibir expe- riencia y conocimientos como de pocos. Nuestro estudioso de la realidad económica latinoa- Como corolario a esta descripción un poco limitada mericana, jamás cayó en esa tentación. Escribió para de la extraordinaria carrera del doctor Felipe Pazos, ser entendido por los políticos, los profesores y los es- queremos resaltar que siempre se mantuvo apegado a tudiantes. Sus modelos eran sencillos, y alejados de las reglas, a la pulcritud en sus procedimientos. Du- supuestos irreales. Así por ejemplo, fue uno de los rante su Presidencia del Banco Nacional de Cuba, lo primeros en darse cuenta de la complejidad de la for- mantuvo alejado de las malsanas prácticas que lleva- mación de las tasas de interés en una economía abier- ron a la decadencia al Estado cubano, hecho que ha ta como la venezolana.12 Alertó también sobre el pro- sido reconocido incluso internacionalmente. Prácti- blema de una adecuada tributación que hiciese camente, se retiró de la vida activa como asesor del innecesario devaluaciones con fines fiscales en la eco- Banco Central de Venezuela y miembro de la Acade- nomía venezolana.13 En fin escribió sobre política mia Nacional de Ciencias Económicas cuando la sa- monetaria, banca y finanzas, además de sus queridos lud se le había deteriorado tanto que no le era posible temas sobre la integración latinoamericana, todos re- seguir investigando y alertando sobre los problemas cogidos en esta obra de la cual hemos extraído las ci- económicos de Venezuela y de América Latina. Al fi- tas y acotaciones, titulada Medio siglo de política eco- nal deberíamos decir del doctor Felipe Pazos como nómica latinoamericana, obra magnífica cuya lectura diría Douglas MacArthur de él mismo: “un viejo sol- la recomendamos en su totalidad. dado no se retira simplemente se desvanece.”

11. Arnold Harberger, The Economist and the Real World, San Francisco, International Center for Economic Growth, 1989. 12. Felipe Pazos, “Repercusiones en Venezuela del aumento de las tasas de interés” en Medio siglo de política económica, Caracas, Acade- mia Nacional de Ciencias Económicas, (T. II), 1991, pp. 725-756. 13. Felipe Pazos, “Necesidad de sustituir los ingresos públicos provenientes de las devaluaciones por una tributación fiscal regular” en Medio siglo de política económica, Caracas, Academia Nacional de Ciencias Económicas, (T. II), 1991, pp, 817-822.

22 LOS DIOSES NO MUEREN JÓVENES

Miguel Rodríguez

Hace 15 años recibí una llamada de Felipe Pazos, en A raíz del golpe de estado de Batista, en 1952, renun- la cual me comunicaba el prematuro fallecimiento cia y eventualmente va al exilio, en donde se convier- del más grande economista latinoamericano de su ge- te en una de las figuras democráticas de mayor presti- neración: Carlos Díaz-Alejandro. En medio de una gio. En una asamblea, en 1958, el Movimiento 26 de emoción incontenible, Felipe—que quería a Carlos Julio en el exilio (el brazo político de los insurgentes como a un hijo—me informó de las circunstancias de la Sierra Maestra) lo aclama como el primer presi- de la muerte de nuestro entrañable amigo, y concluyó dente de la Cuba revolucionaria. No acepta, pero con el comentario: “Los dioses mueren jóvenes.” No apoya decididamente a la revolución que cree demo- siempre. Hace casi 6 meses murió en Puerto Ordaz, a crática. El recién inaugurado gobierno de Fidel Cas- la avanzada edad de 88 años, el propio Felipe Pazos, tro lo designa nuevamente presidente del Banco Na- una de las figuras prominentes de América Latina en cional, de donde tiene que salir casi de inmediato el siglo XX. cuando el gobierno se declara comunista y, en un acto de barbarie típica de esos regímenes, lo reempla- El destino quiso que los dos economistas más impor- za por la singular figura del Che Guevara. tantes de Hispanoamérica del último medio siglo fueran estos dos cubanos, que no pudieron contribuir En el exilio nuevamente, trabaja para la Alianza para al proceso de desarrollo de su país debido a la aciaga el Progreso y el Banco Interamericano de Desarrollo, circunstancia política que rodea a Cuba desde hace hasta que en 1975 sus grandes amigos José Antonio más de 40 años. El exilio, sin embargo, permitió que Mayobre y Héctor Hurtado lo invitan a trabajar en el ambos fueran figuras internacionales de enorme im- Banco Central de Venezuela. Aquí, en Venezuela, va portancia. En el caso de Felipe, tuvimos la suerte de a encontrar su segunda patria. El 2 de febrero de que se hiciera venezolano y que viviera y trabajara en 1989, el presidente Carlos Andrés Pérez—en uno de nuestro país en los últimos 25 años. sus primeros actos administrativos—lo designa como su director en el Banco Central de Venezuela (por lo Desde muy joven, Felipe Pazos se destacó como uno cual me correspondió el honor y el privilegio de tra- de los más brillantes economistas del continente. bajar con él en ese directorio durante 3 años). Doctorado en derecho y economía en las universida- des de La Habana y Columbia, se convirtió en uno Felipe Pazos fue sin duda un hombre de acción, de- de los contribuyentes esenciales de la Conferencia de voto del servicio público al que dedicó toda su vida. Bretton Woods, en la cual se crearon el Banco Mun- Sin embargo, será recordado por generaciones de dial y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Lue- profesionales y académicos de la economía y de la go de trabajar un par de años en el staff del recién historia por su prolífica obra escrita que abarca un creado FMI, regresa a Cuba a fines de los años 40 a amplio abanico que va de la teoría pura al análisis his- organizar la creación del Banco Nacional, del cual fue tórico. Felipe fue uno de los más creativos teóricos su primer presidente. del desarrollo económico, la sustitución de importa-

23 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina ciones, el comercio internacional y de la dinámica de una de esas figuras clásicas de antaño que conjugaban la inflación y de la hiperinflación, y uno de los analis- la inteligencia, brillantez y creatividad, con la hono- tas más sólidos del proceso de desarrollo latinoameri- rabilidad, el amor a su familia y una excepcional con- cano en el siglo pasado. Su libro Inflación crónica en dición humana. Los hombres de excepción, los dioses América Latina es un clásico en la teoría de la infla- como él afirmara en su sentida evocación de Carlos ción y contiene uno de los análisis más originales y Díaz-Alejandro, cuando les corresponde morir, pare- exhaustivos de los procesos inflacionarios de América ciera que no mueren jamás. Al contrario, en medio Latina, e hiperinflacionarios de los países de Europa de estos tiempos de graves dificultades para Venezue- Central luego de la Primera Guerra Mundial. la, Cuba y América Latina, los valores que él repre- Con su muerte se nos fue físicamente un extraordina- senta serán los que nos permitan avanzar en la gran rio latinoamericano, cubano y venezolano. Felipe fue tarea de nuestra recuperación.

24 FELIPE PAZOS

Nelson Ortiz

Felipe Pazos fue parte de la historia económica no El número de homenajes y tributos que Pazos recibió sólo de América Latina sino también de la economía mientras vivió fueron muchos. Entre los que quisié- internacional, aparte, obviamente, de su Cuba natal y ramos recordar está el libro Ensayos en honor a Felipe de su Venezuela adoptiva, a partir de mediados de los Pazos, publicado por el Fondo de Cultura Económica años setenta. En efecto, Pazos fue uno de los arqui- y editado a mediados de los años 70 por 3 de los más tectos del sistema monetario internacional—aún vi- importantes economistas latinoamericanos del mo- gente en buena medida—que resultó de la célebre mento: Carlos Díaz-Alejandro, Simón Teitel y Víctor conferencia de Bretton Woods, en 1944. Asimismo, Tockman. había tenido la suerte de compartir con el célebre Luego tenemos que en 1992 el Banco Mundial orga- John Maynard Keynes en las reuniones preparatorias nizó un seminario en Washington en honor al doctor a ésta que se llevaron a cabo meses antes en Atlantic Pazos, con la participación de lo más granado del City. mundo académico latinoamericano y mundial. Allí estaban, entre otros, Ana Schwartz, coautora con En 1961, cuando el presidente Kennedy lanza su ini- Milton Friedman del libro Historia monetaria de los ciativa de Alianza para el Progreso, Pazos fue seleccio- Estados Unidos, y Rudy Dornbusch. Este último ha- nado como uno de los llamados nueve sabios que lo bía bautizado con el nombre efecto “Pazos-Simon- asesoraban en este esfuerzo por acelerar los niveles de sen” unos aportes teóricos que en materia de infla- desarrollo de América Latina. ción ambos habían explicado por separado.

Keynes, Kennedy, Churchill, Fidel Castro, Nicolás Pocas cosas recuerdo que lo alegraran y llenaran tanto Kaldor, Robert Triffin, Raúl Prebich, Paul Rosens- como ver su nombre citado en los libros de texto de tein-Rodan, Henry Wallich, Ernesto Che Guevara, macroeconomía de Dornbusch. Igualmente, otro ho- , formaron parte de la cotidiani- menaje que lo conmovió fue compartir con su hijo dad de Pazos. Su prestigio nacional e internacional Javier que bautizaran con ambos nombres la bibliote- era tal que a fines de 1959, cuando rompe con Fidel y ca del Instituto Latinoamericano de Mercado de Ca- es sustituido por el Che Guevara en la presidencia del pitales. Banco Central de Cuba, es nombrado embajador es- Es muy posible que en poco tiempo el nombre de Fe- pecial ante Europa Occidental como un mecanismo lipe Pazos quede en el olvido, más allá del importante que le permitió separarse del régimen sin generar rui- contingente de discípulos y afectos que deja. No obs- do. Esta suerte no la tendrían otros detractores de la tante, no su obra y sus contribuciones al progreso de Revolución. esta América Latina que amó con tanta pasión.

25 FELIPE PAZOS, INFLACIÓN Y REALIDAD EN AMÉRICA LATINA

Eduardo Mayobre

La inflación fue uno de los fenómenos y áreas de es- te años transcurridos desde aquella fecha; aunque tudio que ocupó la atención preferente de Felipe Pa- tampoco ha sido refutada, ni substituída por otra me- zos. Además de los recogidos en las recopilaciones de jor.” En 1991 expresa que “analizo con una nueva sus obras, en 1949 escribe en la American Economic confianza mis viejas ideas sobre inflación, debido al Review un artículo sobre inflación e inestabilidad apoyo recibido por el Profesor Dornbusch.” En efec- cambiaria en América Latina y en 1995 publica un to, en diversas oportunidades este destacado econo- ensayo sobre la inflación en Venezuela. También mista citó favorablemente las ideas de Pazos, al punto constituyó uno de los campos en que hizo mayores de que en 1988 se refirió al “mecanismo Pazos-Si- contribuciones teóricas. Le preocupaba en particular monsen” en uno de sus libros. el caso de América Latina. La región mostraba desde la década de los cincuenta y hasta mediados de los Aquí no puedo dejar de contar una anécdota que me años noventa tasas de inflación consistentemente más comentó Don Felipe Pazos y que ilustra lo azaroso altas que las de otras regiones y mucho mayores que que puede ser el rumbo de las ideas. En un seminario, las de los países industrializados. se le acercó un joven profesor y le preguntó si acaso él era el famoso Pazos autor de un influyente libro sobre Ni las teorías ortodoxas ni las estructuralistas, nacidas la inflación. Don Felipe creyó que le estaban toman- en América Latina, parecían poder dar cuenta del ori- do el pelo y le contestó: “Me llamo Felipe Pazos y he gen y comportamiento del alza de los precios. Menos escrito un libro sobre el tema. Pero ni soy famoso ni aun permitían deducir políticas coherentes que ayu- el libro ha tenido influencia alguna.” El Profesor era daran a combatirla. Por ello dedicó muchos trabajos Dornbusch, quien desde entonces ha difundido am- a analizar la inflación en nuestro continente y a des- pliamente ideas que durante casi un cuarto de siglo cubrir las peculiaridades de lo que llamó la “inflación no habían tenido mayor repercusión. crónica,” característica de la mayoría de los países de la región. El mecanismo, según trata de resumir el propio Pazos (pero que tiene muchas mas facetas e implicaciones) Sus trabajos lograron una expresión acabada en el li- es el siguiente: “Los precios de bienes y servicios suje- bro Inflación crónica en América Latina, publicado en tos a contratos anuales o multianuales, que se mantie- 1972. Como explicaba el propio autor en 1985: nen estables durante la duración del contrato, suben “Cuando expuse por primera vez, en 1965, la des- de un golpe en la fecha de su renovación, transmi- cripción del mecanismo de la inflación crónica, que tiendo las presiones inflacionarias acumuladas entre descifra el misterio de la estanflación (que ocurría ya el comienzo y el final del contrato. El aumento de en los países del Cono Sur, pero no en el resto del precio al renovarse el contrato es, en gran medida, in- mundo y que no se conocía todavía por ese nombre), dependiente de las expectativas sobre la tasa de infla- creí que la explicación sería generalmente aceptada, ción futura, porque aunque todos los contratantes es- pero no lo fue entonces, ni lo ha sido en los casi vein- perasen una perfecta estabilidad de precios en el

26 Felipe Pazos, Inflación y Realidad en América Latina futuro previsible, los trabajadores, en el caso de los también el caso de cambios en los marcos institucio- contratos laborales, y los dueños de inmuebles, en el nales. caso de los arrendamientos, querrían recuperar el in- Antes de hacerlo habría que preguntarse si acaso to- greso real que tenían al comenzar el contrato. El ob- davía es relevante ocuparse de los problemas de infla- jeto de los aumentos es recuperar pérdidas pasadas, ción crónica en América Latina. En los años ochenta en mucho mayor medida que cubrir anticipadamente en un buen número de países de la región la inflación pérdidas futuras.” De esta forma “se mantienen y se crónica derivó hacia la hiperinflación y en los noven- transmiten a través del tiempo las presiones alcistas ta, particularmente en su segunda mitad, el mayor lo- en las inflaciones crónicas.” gro de la región fue el descenso continuo de las tasas El desarrollo y aplicación que realiza Pazos de este de inflación. Ambos fenómenos estaban previstos, mecanismo se refiere particularmente a los contratos como posibilidad, en las teorías de Pazos, lo que au- laborales. Pero la formulación general de la teoría mentaría su interés. Pero la percepción generalizada contempla el efecto de otro tipo de contratos, como de que la inflación es un problema prácticamente su- pueden ser los arrendamientos, los préstamos y las ta- perado, o en todo caso no apremiante, en la región sas de interés. pudiera hacer pensar que no se trata de un área de atención prioritaria. La importancia de los contratos, y de las formas que Al respecto un libro reciente de la CEPAL en el cual adoptan, indica que el autor le confiere importancia a se evalúa el desempeño de la región durante la última la realidad y las modalidades institucionales en las década, afirma lo siguiente: “la tasa media de infla- cuales se verifican las relaciones económicas. En este ción regional declinó en forma notable y sostenida en sentido se aparta de la ortodoxia académica prevale- la década de 1990, de más de 1.000% en 1990 a sólo ciente en la época en que fueron escritos y se adelan- 10% en los últimos tres años. No alcanzó a cifras de ta, en su propia manera, a la creciente importancia dos dígitos en más de la mitad de los países de la re- que le han venido confiriendo los economistas al gión. (....). Con ello, se dio un paso decisivo hacia el marco institucional. Quizás esto pueda explicar por- fin de un largo y traumático proceso inflacionario, qué las teorías de Pazos fueron tratadas con indiferen- que es uno de los logros más relevantes del desempe- cia durante un cuarto de siglo. A lo que habría que ño económico regional en el decenio.” Pero agrega agregar que a ello contribuyó el hecho de que se aleja- una nota de cautela: los “rebrotes inflacionarios ran de los extremos que para la época de su publica- muestran que a pesar de los progresos logrados, aun ción dominaban el debate. es difícil que la inflación se mantenga baja y estable en el conjunto de la región.” Actualmente me he planteado, junto con Francisco García Palacios, un trabajo que intenta, en una pri- En este sentido se debe tomar en consideración que mera aproximación, explorar los aspectos institucio- “En el pasado, los países subdesarrollados contaban nales que influyen en el alza de precios y que fueron con capitales extranjeros para complementar sus bajas indicados, pero no desarrollados por Pazos. Aspira tasas de ahorro y no tenían que sacrificar el consumo beneficiarse del desarrollo que el autor formuló res- para acelerar el desarrollo. Lamentablemente, sin em- pecto a los contratos de trabajo. Y espera mantener el bargo, América Latina no puede contar con influjos rigor objetivo que para hacerlo mantuvo éste. Esto es, de capital significativos en el futuro inmediato y debe aproximarse al marco institucional desprejuiciada- o reducir el consumo desde sus ya bajos niveles o re- mente y desprovistos de afanes normativos. ducir la inversión, con la consecuente desaceleración del desarrollo y la industrialización. O ambos. La de- Cabe señalar también que para el desarrollo de su cisión es difícil de tomar y más difícil aun de instru- teoría Felipe Pazos hizo el supuesto de un marco ins- mentar. Pero la disyuntiva es realizar dicha reducción titucional dado (las formas de contratación laboral). de una manera ordenada o hacerlo a través de la infla- En contraste, en el trabajo se intentará considerar ción y la depreciación cambiaria.” Esto último nos lo

27 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina dice o nos lo decía, Felipe Pazos en 1949, en el ensa- En el trabajo sobre la inflación en Venezuela, de yo anteriormente citado. Pero es perfectamente apli- 1995, ya citado, Felipe Pazos afirma que una política cable a la situación de principios del siglo veintiuno. de restricción financiera “adoptada a tiempo, firme e Ilustra, además, un dilema secular que Pazos trajo a inteligente, puede impedir que se desarrolle una espi- colación en un trabajo de 1990 dedicado a la memo- ral de precios y salarios.” (Esto lo dijo a propósito de ria de Raúl Prebisch, en el que hablaba del “dilema las exitosas políticas antiinflacionarios adoptadas en entre inflación y restricción monetaria.” Se refería en Venezuela a principios de la década de los sesenta.) esa oportunidad a la inflación como “el problema que De manera que el logro de menores tasas de inflación tenemos que resolver para aliviar el sufrimiento de obtenido durante la década de los noventa no puede millones de seres humanos, para hacer posible que se despreciarse aunque persista el dilema entre inflación reanude el desarrollo de nuestros países y para resca- tar el prestigio de nuestra profesión.” y estancamiento. Por ello abordar el tema de la infla- ción en las actuales circunstancias no parece fuera de El problema en gran medida se ha resuelto. Pero para lugar. Impedir que los mecanismos de la inflación resolverlo se ha descuidado “el sufrimiento de millo- crónica se reactiven, cuando vuelven a estar presentes nes de seres humanos.” De tal manera que el dilema las condiciones objetivas para su reaparición no es un aun está presente. Por lo que el estudio de la inflación no es un tema ocioso, pues su supuesta superación ha tema de segunda importancia. Resignarse a que la lu- significado caer en un extremo del dilema que conlle- cha contra la inflación sea sinónimo de recesión o es- va el estancamiento y la falta de desarrollo. Argentina tancamiento representaría una aceptación de la de- es el mejor testigo. rrota.

28 APÉNDICE I PROBLEMAS ECONÓMICOS DE CUBA EN EL PERÍODO DE TRANSICIÓN

Felipe Pazos1

Agradezco mucho a Roger Betancourt y a todos los del cambio. Los economistas cubanos no hemos exa- miembros de esta Asociación, a la mayor parte de los minado con suficiente detenimiento los problemas cuales me unen viejos lazos de afecto, haberme pedi- de transición al nuevo régimen, ni las políticas nece- do inaugurar la cátedra Carlos Díaz Alejandro, lo que sarias para resolverlos, por considerar que estos pro- para mi constituye un gran honor y una enorme sa- blemas y estas políticas dependerán de las circunstan- tisfacción dada la gran amistad que tuve con Carlos, cias en que se produzca la caída de Castro, por lo que quien me hacía el altísimo honor de considerarse mi son difíciles si no imposibles de preveer; pero ese ra- discípulo. No puedo vanagloriarme publicamente de zonamiento es solo parcialmente válido, porque los un hecho del que no hay mas constancia que mi pala- problemas y las políticas de transición serán muy si- bra, pero a ustedes si puedo decirles que uno de mis milares cualesquiera que sean las circunstancias en grandes orgullos intelectuales es haber sido considera- que esta ocurra. Los problemas de la transición serán do como maestro por un profesor de Minnessota, de mas difíciles si el cambio de regimen requiere una lu- Yale y de Columbia, que poco tiempo antes de morir cha larga y cruenta, que dañe gravemente el aparato había sido designado para ocupar una Cátedra Fun- productivo; pero los problemas de cómo realizar la dacional en Harvard. privatización de las empresas y retornar a una econo- mía de mercado, de qué orientación dar a nuestro co- Desgraciadamente, no está aquí Carlos para ayudar- mercio exterior y de como evitar la caída de la pro- nos a pensar sobre los problemas de Cuba que vamos ducción en los primeros meses, así como los de la a discutir hoy, y que tendremos que seguir discutien- probable insuficiencia de la ayuda externa y de la casi do hasta que se produzca el cambio; o, para hablar inevitable emergencia de déficits fiscales en los pri- más propiamente, que tendremos que seguir discu- meros tiempos, serían basicamente de igual naturale- tiendo antes del cambio, durante el cambio y después za; porque pueden y deben ser estudiados.

1. Nota de los Editores: Esta versión de la conferencia ha sido tomada de la memoria de la Primera Reunión Anual de ASCE, publicada como Cuba in Transition (Miami: Association for the Study of the Cuban Economy and Florida International University, 1991). Un panel en la décimo primera reunión de ASCE en el 2001 analizó la vigencia de los planteamientos de Pazos sobre la transición cubana. Véase, René A. Monserrat, “‘El decálogo’ de Felipe Pazos, ASCE y el impasse cubano-americano”; Ernesto Hernádez-Catá, “Felipe Pa- zos on Cuba’s Transition: 10 Years Later”; Roger R. Betancourt, “Felipe Pazos, Institutions and a Retrospective View of ‘Problemas Económicos de Cuba en el Período de Transición’”; Jorge F. Pérez-López, “ Pazos’ Economic Problems of Cuba During the Transition: Return Migration of Skilled Persons and Professionals”; Matías F. Travieso-Díaz, “Some Issues Raised by Felipe Pazos on Foreign In- vestment in Cuba During Its Transition to a Free-Market Society”; Efrén Córdova, “Pazos on Cuban Economic Development,” all in Cuba in Transition—Volume 11 (Washington: Association for the Study of the Cuban Economy, 2001).

29 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

Debemos tener en cuenta, desde luego, que las políti- social y cultural con nuestros hermanos que perma- cas del período de transición serán diferentes si son necieron en Cuba, que podría crear graves obstáculos aplicadas por una junta militar formada por oficiales a la completa y absoluta reunificación patriótica de del actual ejército, que con toda probabilidad resta- todos los cubanos. Además, los exilados no podemos blecerían mas gradualmente un régimen de libre em- abandonar súbitamente nuestras actividades actua- presa que un gobierno de ex-exiliados (la palabra es les. Estos ejemplos muestran, creo yo, que debemos fea pero suena muy grata al oído); y que tendrían diferenciar entre las políticas básicas que deberemos también una actitud de defensa de los actuales diri- aplicar una vez que superemos los problemas de tran- gentes civiles, no permitiendo que estos fuesen subs- sición, y las medidas temporales que tendremos que tituídos en forma masiva por recién llegados del exte- adoptar inicialmente. Repitiendo lo dicho hace unos rior. momentos, en este intercambio de ideas me concen- traré en las medidas de transición, y no entraré a dis- Hace ocho o diez meses hablé en Puerto Rico sobre cutir las políticas posteriores. estos problemas y sobre las medidas que podrían adoptarse para resolverlos o atenuar su gravedad. Al IMPORTANCIA DE ANALIZAR LOS hacer este examen, expresé preferencia por algunas PROBLEMAS DE TRANSICIÓN políticas; pero no fué mi intención entonces, como Creo sumamente importante que comprendamos no lo es ahora, formular un programa económico claramente los problemas de transición y que nos para Cuba democrática, sino definir con la mayor pongamos de acuerdo en las medidas que deberemos claridad posible los problemas a que tendremos que aplicar para resolverlos; y una vez que nos pongamos hacer frente. Mi propósito es analizar con el máximo de acuerdo, será necesario convencer a las naciones cuidado la situación en que se encontrará Cuba a la industriales y a las instituciones internacionales de la caída de Castro, que será una situación llena de com- necesidad de apoyar esas medidas a fin de facilitar la plejos problemas que requerirá un programa especial transición y, lo que es más importante, acelerar su ad- de transición, en el que en algunos aspectos no sería venimiento. Cuando comencé a preparar las notas posible o aconsejable aplicar las políticas de carácter para esta charla, no pensaba que el análisis de los pro- permanente que deberán adoptarse una vez que esté blemas de transición pudiera contribuir en forma al- normalizada la economía. Por ejemplo, para acelerar guna a acelerar el momento en que ésta se produjera; nuestro desarrollo deberemos estimular y facilitar la pero ahora sí creo que podrá contribuir, y contribuir inversión extranjera, pero si los desequilibrios de la en forma decisiva. Me explicaré. Tengo la convicción transición provocan una fuerte depreciación del peso, de que la inmensa mayoría, si no la totalidad, de los con la consiguiente caída en el valor de todos los acti- miembros del ejército de Cuba está en total desacuer- vos cubanos en términos de moneda extranjera, la li- do con la locura--más grave que la descrita en ningún bre entrada de capital implicaría regalar la riqueza de texto de Psiquiatría--de hacer de Cuba el último bas- Cuba a los nuevos inversionistas. Otro ejemplo: des- tión del comunismo internacional, y de condenar al pués de restablecida la normalidad deberemos adop- hambre a nuestra población en una lucha irremisible- tar un régimen arancelario de derechos muy bajos, mente perdida de antemano: los militares cubanos pero el establecimiento de ese régimen antes de ree- son hombres inteligentes que no pueden estar de quipar nuestra industria y restablecer la voluntad de acuerdo con políticas absurdas, sin sentido ni lógica. trabajo de nuestra población, significaría inundarnos Pero, además, yo tengo fe en que aman a su patria y de importaciones y desequilibrar gravemente nuestra que quisieran devolverle la paz, la tranquilidad y la balanza de pagos. Un ejemplo más: Cuba tendrá que prosperidad a Cuba, y la felicidad a todos los cuba- reincorporar a su economía a los empresarios, admi- nos. Estoy convencido de que estos hombres toma- nistradores, ingenieros y profesionales de todo tipo rían el poder si no temiesen que las naciones indus- que están hoy en el exilio, pero esta reincorporación triales se abstendrían de reconocer la Junta Militar deberá ser hecha gradualmente porque, si se realizase que ellos instaurasen, y que las instituciones financie- en forma masiva, provocaría un choque económico, ras internacionales se negarían a conceder préstamo

30 Problemas Económicos de Cuba en el Período de Transición alguno a la Junta, lo que provocaría el rápido derro- RECONVERSIÓN DE LA ECONOMÍA camiento de ésta y, posiblemente, la condena a pri- ESTATAL A UNA ECONOMÍA DE MERCADO sión de sus miembros por haber apoyado el régimen El primero y más importante de los problemas a que comunista. Tenemos que estar plenamente conscien- tendremos que hacer frente será la reconversión de la tes de esta situación y hacer todo lo que esté a nuestro economía estatal a un sistema de empresas privadas alcance para disipar todo temor de esta naturaleza en que compitan libremente en el mercado. Este objeti- los oficiales del ejército. Cuando lo logremos, habre- vo puede lograrse mediante la aplicación conjunta o mos acelerado el advenimiento del período de transi- alternativa de las políticas siguientes: ción. a. devolución de las propiedades confiscadas; Pero terminemos este largo prólogo y entremos de lleno en el tema de esta conferencia, que es examinar b. venta a subasta de las unidades productivas a los problemas que confrontará Cuba a la caída del ré- postores cubanos o extranjeros; gimen actual que, debo adelantarles, no serán nada c. distribución de la totalidad o de una parte de la fáciles. propiedad de las unidades productivas entre los ENUMERACIÓN DE PROBLEMAS trabajadores de cada unidad; y Al producirse el cambio, Cuba tendrá que hacer fren- d. distribución de la totalidad o de una parte de la te a graves y complejos problemas, los más importan- propiedad de las unidades productivas entre toda tes de los cuales serán los siguientes: la población del país. 1. Reconversión de la economía estatal a una eco- La devolución de las propiedades confiscadas sería nomía de mercado. aparentemente la forma obvia de regresar a la empre- 2. Orientación del comercio exterior. sa privada y a la economía de mercado; pero no sería un proceso fácil de realizar rápidamente porque re- 3. Bajo nivel de ingresos, déficit fiscal y desequili- querirá la identificación y evaluación de las propieda- brio externo. des confiscadas, los títulos de sucesión de los herede- 4. Realineación de precios para ajustarlos a los cos- ros, etc., todo lo cual implicaría un proceso que tos. tomaría tiempo. Esto plantearía también la cuestión de si deben, o no, ser devueltas sus propiedades a las 5. Inflación. empresas extranjeras, que han recuperado sus pérdi- 6. Restablecimiento del espíritu de trabajo. das, o una parte de ellas, deduciéndolas de sus im- puestos. ¿Deben esas propiedades ser devueltas a las 7. Creación o reorganización de las instituciones re- empresas o a los gobiernos que les dedujeron impues- queridas para el funcionamiento eficiente de un tos? sistema de libre empresa. Estas dificultades parecen indicar que la indemniza- 8. Atracción de capital privado extranjero; y ción a los propietarios confiscados debe ser hecha en 9. Reincorporación a la economía cubana de los bonos del Estado. empresarios, administradores, ingenieros y profe- Una segunda vía sería poner en venta las unidades sionales de toda clase actualmente en el exilio. productivas en subastas que se realicen en el período La reincorporación de los exilados no es un proble- más breve posible, a las que se invitarían postores cu- ma, sino una solución, pero una solución que tiene banos y extranjeros. Este procedimiento tendría, sin que ser aplicada con gran cuidado, porque de ese cui- embargo, el inconveniente del bajísimo precio que dado dependerá la pronta reunificación de todos los probablemente sería obtenido, lo que transferiría a cubanos y la rápida reconstrucción de nuestra econo- los compradores la propiedad de la economía cubana mía. por una pequeña compensación.

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El tercer método se aplicaría distribuyendo entre los entre un 1.5 y un 2.0 por ciento del producto bruto, trabajadores de cada unidad de un 50 o un 70 por y los pagos de la deuda con la Unión Soviética y con ciento de la propiedad de la unidad respectiva, reser- los bancos de Europa y de Japón, que pueden repre- vándose el Estado el remanente a fin de intervenir en sentar otro tanto; pero, lo que es mas grave, la econo- la administración de las empresas en caso de que los mía cubana estará afectada también por la desorgani- trabajadores no las manejasen bien. zación que provoca inevitablemente un cambio de régimen, que en nuestro caso sería especialmente in- El cuarto método, muy similar al tercero, tiene el tensa, por lo que deberemos hacer todos los esfuerzos propósito de convertir en propietarios no solamente a que estén a nuestro alcance por reducirla al mínimo. los trabajadores de las unidades privatizadas, sino Además el déficit de balance de pagos será tanto ma- también a los de los servicios de gobierno, hospitales, yor cuanto mas rápidamente decidamos acelerar el escuelas públicas, etc; pero su aplicación sería com- reequipamiento y reconstrucción de nuestra econo- plicada y difícil. mía. COMERCIO EXTERIOR No es posible predecir el nivel a que habrá caído el En años recientes, Cuba ha exportado alrededor de 4 ingreso real cuando se produzca el cambio, ni el de millones de toneladas de azúcar a la Unión Soviética los desequilibrios internos y externos que experimen- y a los países de Europa Oriental, y alrededor de 2 tará la economía en los primeros tiempos; pero pode- millones de toneladas a la Comunidad Económica mos esperar que la caída en el nivel de ingreso será Europea. Al sobrevenir la liberación, los Estados Uni- muy fuerte y que los déficit serán superiores a la dos no podrían comprar de inmediato, ni en el curso cuantía de la ayuda externa. Si nos atenemos a los de varios años, todo el azúcar que está siendo ahora pronunciamientos recientes de Fidel Castro, el ingre- vendida al área soviética, ni siquiera una parte signifi- so caerá a los niveles de una economía agraria primi- cativa de esa cantidad, porque ello implicaría reducir tiva, caída que será progresivamente más profunda en su producción doméstica y los suministros que ahora la medida en que se prolongue la actual situación. A reciben de Filipinas y de países de América Latina; esto se añadirá, como digo antes, la pérdida del subsi- pero como la Unión Soviética continuará necesitan- dio soviético, el servicio de la deuda y la inevitable do todo ese azúcar, o una gran parte del mismo, po- desorganización del cambio de régimen. Según vimos dríamos continuar vendiéndosela, bien en forma di- antes, las dos primeras causas tendrán un efecto con- recta, o bien en forma indirecta a través de junto equivalente a un 3.0 o 4.0 por ciento del pro- corredores, aunque desde luego a precios del mercado ducto que será, sin embargo, insignificante compara- mundial. do con la reducción de 20.0 o 30.0 por ciento del Nuestro problema de comercio exterior no será, por producto anterior a la crisis que provocara la dismi- consiguiente, la cantidad de azúcar que podremos ex- nución de suministros procedentes de Europa Orien- portar, sino el menor ingreso que recibiremos por esa tal y de la Unión Soviética. Pero no podemos ignorar exportación. la última de las causas mencionadas de reducción del producto, porque la desorganización económica pro- BAJO NIVEL DE INGRESO, DÉFICIT FISCAL vocada por el cambio de un sistema comunista a uno Y DESEQUILIBRIO EXTERNO de libre empresa puede ser muy grave. Cuando se produzca el cambio, Cuba estará en una situación crítica, con bajo nivel de ingresos, déficit Todas las unidades del producción de Cuba, con la fiscal y balanza de pagos desequilibrada, debido a los sola excepción de las fincas pequeñas, están en la ac- efectos acumulados de tres décadas de ineficiencia co- tualidad dirigidas por funcionarios del Gobierno, munista, agravados por los problemas de la etapa fi- muchos de los cuales son miembros del Partido Co- nal del régimen, que mientras mas se prolongue mas munista. Dada esta situación, el derrocamiento del crítica hará la situación. A esto habrá que sumar la régimen implicaría que en un gran número de em- pérdida del subsidio soviético, que ha representado presas los trabajadores se rebelarían contra los direc-

32 Problemas Económicos de Cuba en el Período de Transición tores y gerentes, con la consiguiente desorganización mente nuestro país al volver al sistema de empresa de la producción. Si a este proceso de rebeldía espon- privada. Cuba deberá luchar denodadamente por ob- tánea se sumase una política sistemática del nuevo tener la máxima ayuda posible de esas naciones, ba- Gobierno de destitución de los directores de empre- sando su solicitud en el enorme valor político para sa, el resultado sería una caída vertical de la produc- Occidente que tendría el rápido éxito económico de ción. una nación al regresar al sistema capitalista. Dada la gran importancia política de ese éxito, es posible que Debe recordarse que aún en los países capitalistas, Cuba reciba una cantidad relativamente alta de ayu- donde la producción está en manos de empresarios da, pero dificilmente ésta alcanzará las enormes cifras privados y de gerentes políticamente neutros, las re- que se requerirán. En todo caso, no sería realista pla- voluciones políticas provocan caídas en la producción near sobre la base de que Cuba recibirá toda la ayuda y en el ingreso. La caída sería probablemente mucho necesaria. más fuerte en Cuba, donde los gerentes de las unida- des de producción son funcionarios públicos y presu- REALINEACIÓN DE PRECIOS CON COSTOS miblemente corresponsables de los errores y abusos La reconversión de la economía estatal en un sistema del régimen. Este es un problema del que debemos de empresas independientes, que guien la cantidad y estar plenamente conscientes y al que tendremos que composición de los bienes que produzcan por las se- dedicar nuestra máxima atención. ñales que reciban del mercado, hará que los precios y costos sean realineados por las unidades de produc- Pero olvidemos momentáneamente el peligro de la ción tan pronto éstas sean privatizadas o, aún antes desorganización económica provocada por el cambio de serlo, reciban autorización para decidir las canti- de régimen y volvamos a las estimaciones. Cuando dades que produzcan y precios que cobren, por lo comience el período de transición, el producto nacio- que la realineación de precios y costos no será, en nal podrá estar 30.0 o 40.0 por ciento por debajo de principio, un problema para el gobierno, pero si lo su nivel de los últimos años "normales" del período será la probable disminución de los salarios reales que comunista y el desequilibrio potencial de los pagos resultará del aumento de los precios de los bienes y internacionales podrá ser también de 30.0 o 40.0 por servicios de consumo popular en mayor medida que ciento de las exportaciones "normales," es decir, po- los precios de los bienes y servicios de más alta cali- drá tener una cuantía de US$1.500 a US$2.000 mi- dad. Yo no conozco la estructura de precios relativos llones. en Cuba, pero supongo que, al igual que en los de- Las cifras que acabo de mencionar son estimaciones más países comunistas, los bienes-salarios sean vendi- gruesas que tienen el sólo propósito de cuantificar, si- dos por un valor inferior a su costo, mientras ocurra quiera sea burdamente, mi criterio de que los proble- lo contrario en el caso de los bienes no esenciales. Si mas serán sumamente graves, y de apoyar mi creencia este es el sistema prevaleciente en Cuba, la realinea- de que el desequilibrio potencial de balanza de pagos ción reduciría los salarios reales, en adición a la re- durante los años iniciales del período de transición ducción que estos probablemente experimentarán será casi seguramente muy superior a la ayuda que re- como consecuencia de las disminuciones en la pro- cibamos; y digo desequilibrio potencial, porque en la ducción nacional y en los suministros importados, medida en que no haya financiamiento el déficit no que en una sección anterior hemos previsto. Debe- se materializará aunque si creará todas las presiones, mos tener en cuenta el probable efecto depresivo de distorsiones y desequilibrios que provoca un déficit la realineación sobre los salarios, a fin de contrarres- potencial no financiado. tarlo, en la medida de lo posible, mediante un siste- ma temporal de subsidios e impuestos de consumo. Al volver al régimen democrático, Cuba debería reci- Hago esta advertencia no solamente porque debemos bir préstamos masivos de los Estados Unidos, de los tratar de evitar que los salarios reales se deterioren en países de Europa Occidental y del Japón, cuyo interés mayor medida que la inevitable, sino porque tenemos económico y político estaría en que triunfase plena- que hacer todo lo que esté a nuestro alcance para pre-

33 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina venir la inflación, que es un peligro que nos amenaza pecialmente a los que no pudieron salir de Cuba, ya seriamente. que los que salimos recobramos hace mucho tiempo nuestra libertad y, gracias a nuestro trabajo, hemos INFLACIÓN alcanzado un nivel de ingreso más alto del que tenía- En una sección anterior expresé la opinión de que al mos antes. A este respecto, debo manifestar a ustedes caer el régimen comunista la economía cubana se en- que favorezco decididamente el plan de distribuir un contrará en una situación crítica, con un bajo nivel 70 por ciento de la propiedad de cada empresa entre de producción, con déficit fiscal y con desequilibrio sus trabajadores. en la balanza de pagos; y estimé en forma muy tenta- tiva que el producto nacional podría estar un 30.0 o ORGANIZACIÓN O REORGANIZACIÓN DE 40.0 por ciento por debajo de su nivel de los últimos LAS INSTITUCIONES REQUERIDAS PARA EL años "normales" del período comunista, y que el des- FUNCIONAMIENTO EFICIENTE DE UN equilibrio potencial de balanza de pagos sería proba- SISTEMA DE LIBRE EMPRESA blemente superior a la ayuda externa que podríamos El funcionamiento de una economía de mercado re- esperar. En esos cálculos tentativos no hice estima- quiere los servicios de instituciones auxiliares de dis- ción alguna del posible monto del déficit fiscal debi- tintos tipos--bancos, compañias de seguro, bolsas de do a dos razones: una, la dificultad del cálculo y otra, valores, lonjas de comercio, casas de corretaje, etc.-- más importante, que el déficit dependerá de la políti- que ayuden a las empresas a financiar su capital de ca que adopte el Gobierno: de la fuerza de voluntad trabajo, a asegurarse contra riesgos, a aumentar su ca- que tenga para absorber solo una parte del desempleo pital accionario y a vender sus productos, por lo que y dejar desocupados durante uno o dos años a un nú- será necesario crear o traer del extranjero institucio- mero considerable de trabajadores, y en la pobreza a nes de este tipo, pero esto no ofrecerá dificultad algu- un número considerable de familias, a fin de evitar na, porque en el exilio hay personas preparadas en to- que se desate la inflación; que se desate una inflación das estas actividades, que podrían volver a Cuba que daría empleo momentáneo solo a un número pe- como técnicos individuales, o llevar sucursales o queño de trabajadores adicionales; pero que en unos agencias de las empresas que poseen; y, además por- pocos meses se convertiría en hiperinflación y crearía que Cuba podría abrir las puertas a empresas extran- un volumen de desocupación mucho mayor y difi- jeras que operan en estas actividades. cultaría gravemente nuestra reconstrucción. Dada la inexistencia en Cuba de entidades de servi- Desearía estar equivocado, pero creo que el peligro de cios comerciales y financieros--excepto, desde luego, inflación--de hiperinflación--es sumamente alto y el Banco Nacional que presta estos servicios para las que tendremos que hacer esfuerzos cuasi-heroicos empresas del Estado--y dado el hecho de que estas para evitar esa gravísima amenaza. Evitar la inflación empresas no irán a comprar activos a precios ínfimos, galopante obligará al Gobierno a señalarse un progra- sino a movilizar ahorro nacional y traer recursos de ma de reconstrucción más modesto, a reducir el volu- afuera, será altamente aconsejable abrirles de par en men de obras públicas para dar empleo, y a disminuir par las puertas de nuestra economía. a niveles muy bajos el subsidio a los desocupados, pe- ATRACCIÓN DE INVERSIÓN DIRECTA ro, a mi juicio, el peligro es evidente y tenemos que EXTRANJERA evitarlo. Repitiendo una afirmación hecha al principio de esta RESTABLECIMIENTO DEL ESPIRITU DE conferencia, Cuba deberá estimular y facilitar la en- TRABAJO trada de capital extranjero a fin de acelerar su desa- La nueva Cuba tendrá que restablecer el espiritu de rrollo económico, pero en las primeras fases del pe- trabajo de la población y demostrar que la reconver- ríodo de transición será necesario establecer algunas sión a una economía de mercado no se ha hecho para regulaciones a la entrada de capital si, como es proba- devolver sus propiedades a los exilados, sino para ha- ble, la economía experimenta desequilibrios que pro- cer libres, felices y prósperos a todos los cubanos, es- voquen una caída en el valor de los activos cubanos

34 Problemas Económicos de Cuba en el Período de Transición en términos de la moneda de otros países. De ocurrir exilados, serán los factores básicos de la reconstruc- ésto, autorizar la libre entrada de capital sería vender ción de la economía cubana. activos cubanos a precios muy bajos a compradores de afuera: sería regalar nuestra riqueza al extranjero. REINCORPORACIÓN A LA ECONOMÍA DE LOS EMPRESARIOS, ADMINISTRADORES, Si en las primeras fases del período de transición la INGENIEROS Y PROFESIONALES DE TODAS baja en el valor de los activos fuese moderada, ésta es- CLASES EN EL EXILIO timularía la entrada de capital foráneo, lo que elevaría Al igual que en la sección anterior, debo comenzar de nuevo ese valor, al propio tiempo que haría crecer ésta repitiendo conceptos ya enunciados: Cuba ten- la producción y el ingreso real, por lo que la pérdida drá que reincorporar a su economía a los empresarios, que sufriría la economía del país al vender activos por administradores, ingenieros y profesionales de todo algo menos de su valor estaría compensada por el ma- tipo que están hoy en el exilio, pero esta reincorpora- yor crecimiento económico; pero si la caída del valor ción deberá ser hecha gradualmente porque, si se rea- de los activos nacionales fuese profunda, no podría lizase en forma masiva, provocaría un choque econó- permitirse su venta a un precio irrisorio. El problema mico, social y cultural con nuestros hermanos que es difícil, pero si se presenta habrá que afrontarlo con permanecieron en Cuba, que podría crear graves obs- inteligencia y firmeza. táculos a la completa y absoluta reunificación patrió- tica de todos los cubanos. No puedo decir a ustedes, porque no he pensado con suficiente detenimiento en el problema, cuales debe- El problema no será tal vez grave porque el grueso de rían ser las reglas para canalizar las entradas de capital los exilados está compuesto por funcionarios y em- en los primeros tiempos, pero si puedo indicarles pleados que no abandonarán sus puestos para ir a un que, a mi juicio, estas deberían orientarse en la direc- país en crisis. El problema estará mas bien en los em- ción de abrir las puertas al capital que venga a au- presarios y capitalistas cubanos que quieran ir a ad- mentar la producción de bienes y servicios, y cerrarlas quirir unidades agrícolas, mineras o industriales, para al que pretenda entrar con el solo propósito de adqui- modernizarlas y ampliarlas; para ponerlas a producir rir activos ya existentes. Este criterio no resuelve ente- y a rendir dividendos. Como vimos en la sección an- ramente el problema, porque las inversiones dirigidas terior, tenemos que pensar en las normas que debe- a aumentar la producción necesitan adquirir activos rán regular estas inversiones. ya existentes--terrenos, edificios ya construídos--pero nos ayuda a decidir en sentido afirmativo o negativo, CONCLUSIONES según la mayor importancia de uno u otro propósito. Siguiendo el mismo orden en que las he expuesto, podría resumir mis ideas y preocupaciones sobre el El caso más difícil, y también el que habrá que afron- período de transición de la siguiente manera: tar con mas frecuencia, será el del inversionista ex- tranjero que desea adquirir una industria nacional en 1. La forma más aconsejable de reconvertir la eco- operación, o una participación en su propiedad, para nomía estatal a un sistema de libre empresa sería modernizarla y ampliarla, ya que no será fácil deter- distribuir una parte considerable de la propiedad minar que proporción del capital ampliado de la em- de cada unidad productiva entre sus trabajado- presa deberán recibir los nuevos inversionistas y que res. La indemnización a los propietarios consfis- proporción deberán mantener los antiguos propieta- cados podría hacerse en bonos de valor garantiza- rios (que en caso de Cuba en el futuro próximo serían do contra la inflación. el Estado o los trabajadores). Este es un problema que tenemos que resolver, de una manera u otra, porque 2. El mercado principal para las exportaciones du- su solución nos dará el criterio que deberemos aplicar rante algunos años seguirá siendo la Unión So- a la inversión en Cuba del capital cubano en el exilio viética, a la que se vendería el azúcar directamen- que, conjuntamente con el regreso de los técnicos te o a través de terceros países.

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3. Puede preverse un período de bajos niveles de 9. El regreso a Cuba de los empresarios, administra- producción e ingreso real, y fuertes desequilibrios dores y técnicos que están en el exilio deberá ha- fiscales y cambiarios, probablemente superiores a cerse en forma gradual a fin de evitar choques la ayuda externa que se reciba. con los actuales dirigentes de la economía cuba- na. 4. Dados los desequilibrios fiscales y cambiarios previsibles y el grave riesgo de inflación que ellos Las ideas desarrolladas a lo largo de esta conferencia, comportan, deberá procederse con gran cuidado que acabo de resumir, son solo opiniones personales en la aplicación de las políticas para realinear pre- que espero puedan servir a ustedes como agenda para cios y costos. analizar y discutir los problemas que pueden presen- tarse en el período de transición, y las medidas alter- 5. Existe grave riesgo de inflación que será necesario nativas que deban aplicarse para resolverlos o ate- evitar aplicando políticas económicas y financie- nuarlos. Creo que la utilidad de esta exposición está ras sumamente rigurosas, aún al costo de debili- en haber diferenciado las medidas de transición de las tar la lucha contra el desempleo y hacer mas len- políticas que deberán adoptarse una vez que se nor- to el programa de reconstrucción. malice la economía, y, demás, en haber hecho un ca- tálogo relativamente completo de los problemas que, 6. Será necesario revivir el espiritu de trabajo, ador- a mi juicio, podrán presentarse. mecido por el comunismo, y levantar la moral de los obreros y empleados, para lo cual sería acon- Temo que mi análisis haya estado demasiado influído sejable aplicar el plan de distribuir entre los tra- por la experiencia de los países de Europa Oriental, y bajadores una alta proporción de la propiedad de que haya presentado los problemas de Cuba con una las empresas. gravedad mayor de la que realmente tendrán; pero creo preferible que seamos precavidos a que los pro- 7. Será necesario crear, reorganizar o traer del ex- blemas nos agarren por sorpresa. No debemos igno- tranjero las instituciones financieras y comercia- rar que confrontaremos problemas, pero tenemos que les necesarias para el buen funcionamiento de un estar seguros de que los superaremos. Tenemos que régimen de libre empresa. tener fe en que trabajando hombro con hombro los cubanos de adentro y los que estamos temporalmente 8. Deberá estimularse y facilitarse la inversión de afuera reconstruiremos una patria unida, libre, pró- capital extranjero, pero en las fases iniciales del pera y feliz; una patria que volverá a ser orgullo de sus período de transición la entrada deberá regularse hijos, de América y del mundo. a fin de evitar la venta a precios muy bajos de la riqueza del país; y Diciembre 12, 1990

36 APÉNDICE II LAS POSIBILIDADES ECONÓMICAS DE LAS NACIONES LATINOAMERICANAS Y DE CUBA1

¿Qué perspectivas ve usted a los Mercados Regionales su desarrollo en forma complementaria, y no compe- en la América Latina? titiva, con los otros países. En esta forma, las nuevas industrias contarán con el mercado de toda la Améri- De inmediato no soy optimista sobre la posibilidad ca Central, y no de sólo un país. Muchas industrias, de integrar nuestras economías nacionales en varios que no podrían crearse si tuviesen que servir sólo el mercados regionales – Caribe, Centro América, Río mercado nacional de uno o dos millones de habitan- de La Plata, Cuenca del Pacífico, etc. – o, menos aún, tes, podrán establecerse, porque podrán contar con en un sólo gran mercado latinoamericano; pero yo un mercado de diez millones de consumidores. creo que esta integración o, si Ud. prefiere, coordina- ción de nuestras economías nacionales en unidades ¿Cómo se coordinaría el régimen de intercambio de mayores, es altamente conveniente para nuestros divisas y de pagos multilaterales para establecer los pueblos y debemos de hacer todos los esfuerzos que mercados inter-regionales? sean necesarios para lograrla. La tarea no es fácil debido a las diferencias en el nivel Esto no ofrecería dificultades serias. Si se coordina el de salarios y condiciones de trabajo entre los distintos comercio, el régimen de pagos es relativamente senci- países, y a los intereses de industrias particulares que llo de coordinar. La Unión de Pagos Europea ofrece resultarían dañados por la integración de los merca- un buen modelo de coordinación de pagos multilate- dos. Pero los países de la América Central nos están rales en países con regímenes monetarios y cambia- señalando el camino a seguir. rios muy diversos. Lo que es necesario tener en cuen- ta a este respecto es, que la celebración de un Bajo la dirección técnica de la Comisión Económica convenio de unión de pagos entre varios países, re- para la América Latina, los países de la América Cen- quiere la preexistencia de un volumen grande de co- tral están coordinando el desarrollo futuro de sus eco- mercio entre países. Los estudios realizados por la nomías sin lesionar las industrias y cultivos ya esta- Comisión Económica para la América Latina y por el blecidos. Fondo Monetario Internacional, sobre la posibilidad En esa tarea de coordinación hacia el futuro, los paí- y conveniencia de organizar una Unión de Pagos La- ses se comprometen a no elevar los aranceles para las tinoamericana, demostraron que el exiguo volumen industrias ya existentes en los otros países participan- de comercio que realizan los países latinoamericanos tes, o que se proyecta establecer en ellos, y así, pla- entre sí no ameritaba el establecimiento de esta nean un desarrollo coordinado. Cada país orientará Unión.

1. Nota de los Editores: Esta entrevista apareció en el Diario las Américas, Miami, Florida, en 1957, bajo el título “Analiza el Dr. Felipe Pazos las Posibilidades Económicas de las Naciones Latinoamericanas en General y de Cuba.” Pazos fue entrevistado por Carlos N. Quijano.

37 Felipe Pazos y sus Contribuciones a Cuba y a América Latina

¿Afectaría el Mercado Común Europeo el comercio dad económica, y de ingreso de la economía cubana. exterior latinoamericano? Lo que es de lamentar es que esa elevación de ingreso no se esté aprovechando plenamente en la industriali- Puede afectarlo. Si la economía europea y mundial zación del país, por razón de la ineficiencia adminis- mantienen un rápido ritmo de expansión, el mercado trativa del actual régimen, en el que el peculado ha al- europeo no reduciría el comercio de exportación lati- canzado los más altos niveles de nuestra historia, y noamericana; pero si la economía europea no se ex- por razón del estado de guerra civil que desangra el pande con suficiente rapidez, entonces la unión co- país. Con un gobierno honrado y capaz, que tuviese mercial europea reduciría las exportaciones el respaldo de las grandes mayorías del pueblo, y una latinoamericanas. situación de paz, el alza en el mercado azucarero hu- Es necesario por consiguiente que Latinoamérica in- biese podido aprovecharse para realizar inmensos tensifique su comercio intra-regional, tanto por las progresos en la consolidación de nuestra economía. ventajas que esto tiene en sí mismo, es decir, porque permitiría una industrialización más rápida y eficien- ¿Está la política económica del 26 de julio inspirada te, como para compensar los perjuicios potenciales por un pensamiento nacionalista? que pueden derivarse de la intensificación del comer- cio de las naciones europeas entre sí, y con sus colo- Indudablemente. En el mundo actual todas las nacio- nias y dependencias. nes están siguiendo una política fuertemente nacio- nalista, en el sentido de proteger y fomentar sus pro- ¿Se ha negado el gobierno cubano a que la Comisión ducciones internas, aunque éstas sean menos Económica para la América Latina haga un estudio eficientes y tengan un mayor costo que los artículos económico del país? que puedan importarse de otras naciones. Cuba es, No conozco si se ha negado o no, pero lo cierto es de hecho, una víctima de los derechos aduanales y que la CEPAL ha hecho estudios de programación en restricciones cuantitativas que imponen otros países a Chile, Brasil, México, Honduras y Venezuela hasta nuestro azúcar y nuestro tabaco. Si las demás nacio- ahora, que sepamos, no se planea ningún estudio so- nes del mundo siguieran una política económica bre Cuba. Es de suponer que si el Gobierno de Cuba abierta e internacionalista, Cuba debería también se- hubiera invitado a la CEPAL a hacer un estudio, éste guir una política internacionalista: pero en un mun- ya se habría hecho. La realización de estos estudios do de economías cerradas, Cuba no puede subsistir por la CEPAL supone la intención de los gobiernos como el único país de economía abierta. que lo solicitan, de tecnificar y racionalizar la progra- Cuba no puede dar empleo a su medio millón de des- mación del desarrollo. ocupados, ni a los 60.000 jóvenes que llegan anual- El hecho de que el gobierno de Cuba no haya invita- mente a la edad de trabajar, aumentando su produc- do a la CEPAL a hacer este estudio, muestra su falta ción de azúcar y tabaco, porque el resto del mundo de interés por llevar adelante un plan de desarrollo no estaría dispuesto a absorber esa producción anual. técnicamente adecuado. Es más, dada la importancia Consiguientemente, para elevar su Ingreso Nacional de la economía cubana, y el gran interés que presen- y dar empleo a sus desocupados, Cuba tiene que ele- tan sus problemas, es posible suponer que la CEPAL var su producción para el mercado interior; y para lo- haya ofrecido sus servicios para hacer ese estudio, y grarlo tiene que aplicar una política nacionalista ra- que el ofrecimiento no le haya sido aceptado. cional. Cuba debe fomentar intensamente su turismo y también su producción de minerales, y de todo artí- ¿Produciría la recuperación de la economía cubana, el culo que ofrezca perspectivas de venta en el mercado aumento del ingreso derivado de la exportación azu- internacional. Pero esto no bastaría para absorber el carera del año 1957? desempleo, ni para dar un mejor equilibrio a la eco- El alza en el precio del azúcar y en el volumen de ven- nomía cubana. Para lograr estos objetivos, Cuba tie- tas al mercado mundial, ha elevado el nivel de activi- ne que seguir una política prudente, pero firme y sos-

38 Las Posibilidades Económicas de las Naciones Latinoamericanas y de Cuba tenida, dirigida al fomento de nuevas industrias para Cuba debe de dar toda clase de facilidades al capital el mercado interior. extranjero, pero al propio tiempo fomentar y estimu- lar las inversiones de capital nacional, para que este ¿Qué política seguirá respecto al capital extranjero? sea el elemento principal de su desarrollo futuro. Para desarrollar su economía al ritmo más rápido po- sible y absorber el desempleo en el más breve tiempo, ¿Qué criterio tiene Ud. sobre el sabotaje como arma Cuba necesita la ayuda del capital extranjero (tanto política, y especialmente sobre la anunciada destruc- en forma de préstamos, como de inversiones direc- ción de la próxima zafra azucarera? tas), pero el Estado y empresarios cubanos, no pue- He dedicado mi carrera a fomentar el incremento de den abandonar sus esfuerzos, esperando que el capital la riqueza en Cuba, y no a destruirla. Daría gustoso extranjero lo haga todo. Tanto como desde el punto mi vida por lograr que la democracia se reestableciese de vista económico, como desde el punto de vista so- en Cuba antes del comienzo de la próxima zafra, a fin ciológico, el desarrollo de la economía de un país de evitar que la desaparición en la lucha por el dere- debe ser realizado, fundamentalmente, por el esfuer- cho a la vida y a la libertad lleve a nuestra juventud a zo de la propia nación. Cuba necesita invertir su aho- la destrucción de nuestra principal fuente de ingre- rro interno en su propio desarrollo, y crear una fuerte sos. Sería un nuevo y gravísimo daño que nos infligi- clase de empresarios, administradores y tecnólogos ría la dictadura, que, a más de estar segando la flor de cubanos. Si el desarrollo futuro se realiza por capital nuestra juventud, vendría a destruir nuestra riqueza. extranjero, con administradores y técnicos extranje- ros, las utilidades de ese capital y los sueldos de esos El Dr. Felipe Pazos, actualmente en el exilio polí- administradores y tecnólogos, tenderán a salir del tico en la ciudad de Miami, ha ocupado los si- país, y no a reinvertirse en nuevos desarrollos; ade- guientes cargos: Presidente del Banco Nacional de más, la opinión publica tendería a identificar la pro- Cuba; funcionario del Fondo Monetario Interna- piedad de los negocios con una bandera extranjera, y cional y del Banco Mundial. En la actualidad es a pensar que el único factor de producción nacional Decano de la Facultad de Economía de la Univer- es el trabajo. Esa idea tendería a debilitar el régimen sidad de Oriente, Cuba y Consejero Económico de propiedad privada y libre empresa. Resumiendo: del Banco Continental Cubano.

39 APÉNDICE III EXPERIENCIAS PERSONALES, FAMILIARES Y POLÍTICAS SOBRE FELIPE PAZOS1

Coronel Ramón Barquin

El Coronel Ramón Barquin se siente como uno de conversando de cuáles eran los oficiales de confianza los cubanos privilegiados que conoció y compartió que se podrían ir preparando por si había que dar un con Felipe Pazos. contra golpe para devolver a Cuba un Gobierno civil y democrático, se abrió una discusión de economía La primera vez que el Coronel supo de Felipe Pazos entre los presentes, especialmente entre Justo Carri- fue cuando le propusieron fundar en el ejército de llo, conocido anteriormente, y Felipe Pazos. De esta Cuba una Escuela Superior de Guerra, después de manera el Coronel comienza a conocerlo más pro- haber hecho un curso de Planeamiento Estratégico en fundamente. el Pentágono. Al comenzar a buscar profesores para la Escuela entre los recomendados estaba Felipe Pazos, Para el Coronel Barquin, Justo Carrillo era un hom- pero en ese momento éste no se encontraba en Cuba. bre concreto, tenía una visión isleña, insular y le inte- Un grupo de profesores muy distinguidos de la Uni- resaba saber cuantos recursos había para el desarrollo versidad de la Habana, como Portell Vilá, Ramón In- agropecuario, para la flota pesquera y otros sectores fiesta, Rafael García Bárcena, Roberto Agramonte, de la economía. Por el contrario, Felipe Pazos le daba fueron docentes y enseñaron política y democracia a la impresión de ser una persona mas pausada, no tan los altos oficiales del ejército en Cuba, quienes venían emotiva, con una visión más analítica y global: “No casi todos del cuartel después del golpe del 4 de sep- estaba mirando para adentro sino para afuera.” tiembre de 1933. La próxima vez que el Coronel Barquin entabló rela- El Coronel Barquin no volvió a saber más de Felipe ciones con Felipe Pazos fue cuando ya estaba en el Pazos hasta que estando en Washington, luego del poder Fidel Castro, el cual invitó al Coronel a incor- golpe de Batista el 10 de marzo de 1952, el Dr. Fer- porarse a la Revolución como Secretario de Guerra, nando Leiva, médico pediatra, lo cita debido a que para organizar los tribunales revolucionarios. Pero el un grupo de personas deseaban conversar con el Co- Coronel no aceptó. Como consecuencia fue invitado ronel. Dentro de este grupo estaba Felipe Pazos. Esta a salir del país. fue la primera ocasión que el Coronel tuvo contacto Dos o tres días antes de salir del país, el 1ro de mayo directo con Felipe Pazos. de 1959, Justo Carrillo lo invita a una despedida. En El Coronel Barquin recuerda muy bien a Felipe Pa- ésta se encontraban Rufo López-Fresquet, Manolo zos porque en aquella oportunidad cuando se estaba Méndez, y Felipe Pazos. A ellos les interesaba cono-

1. Resumen de las palabras pronunciadas por el Coronel Ramón Barquin durante la inauguración de la Conferencia.

40 Experiencias Personales, Familiares y políticas sobre Felipe Pazos cer la opinión que el Coronel tenía sobre Fidel Cas- Después de esa reunión marchó a Europa y en el año tro y la Revolución. 1960 se encuentra de nuevo con Felipe Pazos y man- tuvieron una relación cercana. “A mí me luce mas como un Perón o un Mussolini que otra cosa porque no deja hablar. Me hizo una Felipe Pazos, según la opinión del Coronel Barquin, pregunta y cuando le iba a contestar me vino una ca- era un patriarca dentro de la zona de la economía. Se tarata de palabras. Yo no creo que Fidel Castro sea comunista, pero si creo que Raúl y el Che lo son. Me le miraba con respeto, admiración y cierta venera- luce que Fidel no tiene el perfil psicológico para ser ción. comunista. Generalmente son gentes comprometidas con su ideal, pero son personas muy desinteresadas, “Por eso yo me siento tan agradecido de haberlo co- que sacrifican familia y que sacrifican todo y Fidel no nocido y haber participado con él. Y le doy gracias a me luce un tipo desprendido, generoso y desinteresa- Justo Carrillo por haberme dado la oportunidad de do. Me luce más bien un tipo fascista.” conocer, compartir y trabajar con Felipe Pazos.”

41 SOBRE LOS AUTORES

Coronel Ramón M. Barquin tuvo una distinguida donde ocupó importantes posiciones desde 1961 has- carrera militar. Fue profesor de Historia Militar y de ta su retiro en 1985. Hasta 1960 representó al Banco Estrategia y Director de la Escuela Superior de Gue- Nacional de Cuba en Washington. También ejerció rra de Cuba. Agregado militar en Washington, D.C. como economista en el Banco de Fomento Agrícola e y delegado de Cuba ante la Junta Inter-Americana de Industrial de Cuba por 6 años y fue profesor de la Es- Defensa. Autor de varios libros de historia militar. cuela de Economía de la Universidad de Villanueva en La Habana. José Tomás Esteves Arria hizo estudios de economía en la Universidad Católica “Andrés Bello” en Vene- Miguel Rodríguez fue Ministro de Planificación en zuela. Ha sido asesor del Consejo de Economía Na- Venezuela de 1989 a 1992 y Presidente del Banco cional de Venezuela y por cerca de 20 años enseñó Central de Venezuela en 1992. En estos momentos se historia económica, doctrinas económicas y teoría desempeña como profesor universitario. monetaria en la Universidad Santa María en Vene- zuela. Ha escrito numerosos libros, entre ellos Temas Jorge Salazar-Carrillo es profesor y jefe del Departa- de Banca y Seguros, Historia Económica Mundial y Ve- mento de Economía de Florida International Univer- nezolana, y Diccionario Razonado de Economía. sity (FIU). También ha sido profesor de economía en Georgetown University, coordinador interino del Jaime Lusinchi fue presidente de Venuezuela de programa ECIEL y Jefe de Misión del PNUD en Rio 1984 a 1989. de Janeiro de 1973 a 1979.

Eduardo Mayobre es Director de Relaciones Econó- Raúl M. Shelton fue profesor de la Universidad Ca- micas del SELA. Ha sido también Vice Ministro de tólica Santo Tomás de Villanueva en La Habana. Ac- Finanzas de Venezuela y Director Ejecutivo del Fon- tualmente es Profesor Emérito de St. Thomas Uni- do Monetario Internacional y del Banco Mundial. versity, Miami, Florida. Autor de varios libros Nelson Ortiz es Presidente de la Bolsa de Valores de publicados sobre asuntos históricos y económicos. Caracas. También ha sido representante de Venezue- Carlos Rafael Silva es Presidente de la Academia de la ante los instituciones financieras internacionales y Ciencias Económicas de Venezuela. Ha sido Presi- ha trabajado en el Banco Central de Venezuela. dent del Banco Central de Venezula, Ministro de Gonzalo de la Pezuela fue uno de los miembros Educación de Venezuela, y Presidente del Fondo de fundadores del Banco Interamericano de Desarrollo, Inversión de Venezuela.

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