Els dijous del Clàssic | 21 de novembre de 2019 | Sessió única: 21.30 h The Willd Bunch 50è aniversari.USA Cineclub , 1969

Sinopsi

Un grup de veterans atracadors de bancs que viuen al marge de la llei i que actuen a la frontera entre els Estats Units i Mèxic, es troben acorralats per uns caçadors de recompenses i per l'exèrcit mexicà

Fitxa artística Sam Peckinpah es un director fun- descarnada. Para ello, frente a la William Holden ...... Pike damental para analizar la violencia aparente fosilización a la que habían Ernest Borgnine ...... Dutch en el cine norteamericano. Y Grupo llegado géneros como el musical y el Robert Ryan ...... Thornton salvaje es probablemente su obra western, Peckinpah se aferra a él en Edmond O'Brien ...... Sykes maestra y la síntesis de su reflexión sus alientos agónicos, mientras el sobre el hombre y la construcción de castillo de los grandes estudios se su identidad como un ser funda- derrumbaba. Peckinpah niega cons- mentalmente agresivo y hostil con el tantemente la épica característica prójimo. En todo caso, una concep- del western clásico, ésta llega final- ción más próxima a Hobbes que a mente en un final elegíaco, que co- Fitxa tècnica Rousseau. mo no puede ser de otra manera, Guió ...... Walon Green está basado en una cruenta carni- i Sam Peckinpah 1969 no era un año para ser espe- cería. Se acabaron los finales felices. Productor ...... Phil Feldman cialmente optimista viviendo en Música ...... original Jerry Fielding Norteamérica. La guerra de Vietnam De ahí que la plástica del film parez- Fotografia ..... en su virulenta sangría, los crímenes ca descuidada, con un montaje y Muntatge ...... Lou Lombardo perpetrados el año anterior a Martin unos barridos que afean la imagen, Vestuari ...... James R. Silke Luther King o a Robert F. Kennedy, amén de unos zooms que evidencian Durada ...... 145 minuts pocos años después del magnicidio una visión "sucia", inmediata, vivaz País ...... EEUU que sufrieron en la misma década, y la música ya no adorna las escenas no inducían a albergar ilusiones por feroces. No hay tiempo para la el futuro. En todo caso, certificaba contemplación pasiva de la belleza. que la sociedad y el hombre, por Aunque eso no sea óbice para mucho idealismo de la revolución extraer un lirismo del polvo y de la contracultural de los hippies, no mugre, remitiendo a la época funda- lucía un estado de pacificación. cional de la nación. Un estado de depredadores, donde la ruindad Sam Peckinpah desgrana su ira y reina en un panorama anímico teje una ficción rabiosamente preña- putrefacto corrompido y anegado da de violencia. Una violencia poro- por una desoladora pobreza que sa, sucia, profundamente cínica y inunda el paisaje. Quizás por ello suele referenciarse Coppola o Chinatown (Roman a un régimen autárquico. Aunque este film como uno de los grandes Polanski, 1974). eso no le resulte incompatible con westerns crepusculares de la histo- su avidez por el oro o en mostrár- ria del cine. Como en Sin perdón Y es que aunque la violencia inunde noslo como un hombre misógino en (Unforgiven, Clint Eastwood, el entramado narrativo, viene a de- su arrebato de celos cuando mata a 1992), éste sí, un exquisito cadáver finirse fuertemente politizada. Le Teresa por flirtear con el general. Al muy cuidado formalmente, nuestro sirve a Peckinpah para establecer- fin y al cabo, ella con sus armas (el grupo salvaje son unos pistoleros nos su discurso que no se basa en sexo) hace lo mismo que él con su viejos, cansados y agriados. Unos un ámbito individual o social. No, pistola. personajes que están llegando al lo que nos indica es que la colectivi- ocaso de sus vidas. Un último golpe dad humana está instalada en un Si en México la autoridad a la que y quién sabe si con él, por fin ciclo de constreñida violencia que combaten nuestros renegados per- podrán retirarse. Se acabó la época inunda todos los ámbitos. Habla- sonajes apátridas viene simbolizada de grandes gestas, los tiempos del mos pues de un carácter estructu- por el general Mapache, es curioso héroe y de un maniqueísmo reduc- ral, que está entre nosotros, dando que en los Estados Unidos, la auto- cionista e irreal. forma a la subjetividad en todo su ridad no sea el gobierno norteame- ciclo evolutivo. Y responsabilizán- ricano. Ya que viene determinada En el fin de los idealismos, no es dose por tanto del ordenamiento de por la empresa del ferrocarril, casual que estemos ante un largo- la vida social. Por ello, la película se símbolo del poder económico del metraje fronterizo, que ubica su abre con la escena de los niños que sistema capitalista. Asimismo, a acción entre Estados Unidos y se divierten arrojando unos escor- través de su película, también México. Y sin olvidarnos del hecho piones a una marabunta de hormi- muestra su afecto por los mexica- de que es una realización que actúa gas. El odio y la crueldad ya hacen nos del pueblo que luchan contra el como un largometraje bisagra entre acto de aparición desde la infancia. despotismo del general Mapache, el viejo y el nuevo Hollywood. En Y como al inicio del film, también muy en sintonía por los alzamien- Grupo salvaje se advierten signos en la matanza final, veremos de tos revolucionarios que se dieron formales de un cine posmoderno, forma fugaz a un niño disparando. en Sudamérica en la década de los en su caracterización de sus perso- 60. najes y en sus aspectos estéticos Las autoridades que aparecen fuera que rompen las concepciones clási- de los protagonistas, son igual de ¿Violencia? Sí, pero con una base cas de la puesta en escena. Pero amorales, ambiciosos y corruptos ideológica que hace del film uno de Peckinpah en una oleada de nostal- que nuestros antihéroes que sólo los mejores westerns que he podido gia por el género, se revuelve como saben actuar con agresividad por- ver. Sea lo que sea en lo que me fije, una anguila ante un marco, que si que el tiempo no les ha dado lugar todo está llamado a triunfar. De por él fuese, todavía no debe morir. para otra opción. Los personajes se obligado visionado para entender muestran ambiguos y solo se mue- unos años que se nos han atestigua- No es extraño que directores poste- ven por la codicia y por un indivi- do como la última época dorada de riores realizasen ejercicios de nos- dualismo extremo, signo del capita- Hollywood (1967-1977). talgia similares, recodificando las lismo más feroz. De todos ellos, el http:// constantes en una actualización autor parece mostrar debilidad por www.elespectadorimaginario.com/ adaptada a los nuevos tiempos. Son el personaje de Ángel. Es el único pages/febrero-2010/criticas/grupo- claros ejemplos: El Padrino (The que se aferra a unos ideales, en este salvaje.php Godfather, 1972) de Francis Ford caso, revolucionarios, de oposición

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