Los Peces Del Río Morichal Largo, Estados Monagas Y Anzoátegui, Cuenca Del Río Orinoco, Venezuela
Total Page:16
File Type:pdf, Size:1020Kb
Memoria de la Fundación La Salle de Ciencias Naturales 2003 (“2001”), 156: 5-118 Los peces del río Morichal Largo, estados Monagas y Anzoátegui, Cuenca del río Orinoco, Venezuela María Esther Antonio Cabré y Carlos A. Lasso A. Resumen. Se estudiaron diferentes aspectos taxonómicos sobre la ictiofauna del río Morichal Largo, un tributario del río Orinoco en la región de los llanos orientales de Venezuela. Se presenta una lista de especies e información sobre la diagnosis, coloración (en vivo y ejemplares preservados) y estatus taxonómico de cada una de ellas. Finalmente, se incluyen algunos comentarios ecológicos y bio- geográficos de las comunidades estudiadas. Se identificaron 109 especies agrupadas en nueve órdenes y 29 familias, lo que sitúa al río Morichal Largo como el segundo río de morichal más diverso de la cuenca del Orinoco. Los dos órdenes con el mayor número de especies fueron los Characiformes (47 especies) y Siluriformes (28 especies). Los microcarácidos del género Bryconops, Pristella, Moenkhausia, Hemigrammus e Hyphessobrycon, fueron los grupos más abundantes y ampliamente distribuidos en la cuenca. Las comunidades de morichal muestran una composición íctica muy particular, relacionada con variables fisicoquímicas del agua (aguas claras y ácidas de baja conduc- tividad), con la diversidad espacial, partición del hábitat, aporte de material alóctono, disponibilidad de nichos y depredación. Desde el punto de vista biogeográfico, las comunidades de peces del río Morichal Largo están más relacionadas con la ictiofauna del Escudo Guayanés que con la fauna íctica de la porción sur y oeste de los llanos venezolanos. Palabras clave. Peces dulceacuícolas. Morichales. Río Morichal Largo. Orinoco. Venezuela. Fish fauna of the Morichal Largo River, Orinoco Basin, Eastern Llanos of Venezuela. Key words. Freshwater fishes. Palm swamp river. Río Morichal Largo. Orinoco. Venezuela. Abstract. Several aspects related to the taxonomy of the fish fauna of the Morichal Largo River, Orinoco Basin, Eastern Llanos of Venezuela, are studied in this paper. A list of the species found in the area is presented together with information on the diagnosis, coloration (live and preserved) and the taxonomic status of the species. Comments are included on the ecology and biogeography of the fish communities. The fish fauna is represented by 109 species from 9 orders and 29 families. The Morichal Largo River is the second most diverse palm swamp river (locally known as morichales) of the Orinoco Drainage in Venezuela. The most represented orders were the Characiformes (47 species) and the Siluriformes (28 species). The most abundant and widely distributed groups were the small characids, especially species of the Bryconops, Pristella, Moenkhausia, Hemigrammus and Hyphessobrycon. The characteristic composition of the fish communities of the palm swamp rivers is related to the chemical composition of the waters (clear, acidic and low conductivity), spatial diversity, habitat partitioning, diverse alochtonous material, niche availability, and predation. The ichthyofauna of the Morichal Largo River is more closely related to the Guyana Shield than to the fish fauna of the Venezuelan plains (llanos) which borders this drainage to the west and south. 6 Peces del río Morichal Largo, Venezuela Introducción Venezuela es junto con Brasil y Perú, uno de los países de mayor riqueza ictiológica continental de Suramérica. Posterior al clásico trabajo de Mago (1970) sobre los peces de Venezuela, donde se listaron cerca de 500 especies de agua dulce, ha ocurrido un rápido incremento en el conocimiento de nuestra ictiofauna tanto dulceacuícola como estuarina. Como resultado Taphorn et al. (1997) señalan 1060 especies de agua dulce, cifra que aún dista de la realidad ya que permanecen muchas áreas por explorar e inventariar, además de los problemas taxonómicos típicos de la ictiofauna neotropical. La cuenca del Orinoco es la más extensa del país con aproximadamente 981.000 km2, de los cuales unos 643.000 corresponden a Venezuela, lo que representa el 70,5% del territorio nacional (Mago 1970). En esta cuenca encontramos una gran variedad de ecosistemas acuáticos que van desde ríos de montaña en los Andes hasta enormes planicies inundables deltaicas con un mosaico de hábitats impresionante. La estacionalidad climática junto con esta heterogeneidad espacial han contribuído a la diversificación de la ictiofauna. Diversos ambientes acuáticos con características fisicoquímicas distintas y tipos de aguas bien diferenciadas (negras, claras y blancas) sensu Sioli (1975) y Vegas-Villarrubia et al. (1988), albergan una fauna acuática prácticamente desconocida. Tenemos además de los ríos de montaña y estuarios en los dos extremos de la cuenca, numerosos cuerpos de agua como los ríos de llanura aluvial en los llanos centro occidentales, ríos de aguas negras del Escudo Guayanés y grandes extensiones inundables. En estas dos regiones, encontramos también un ecosistema muy característico denominado morichal, el cual se caracteriza por la presencia de la palma moriche (Mauritia flexuosa), asociada a ejes de drenaje o cursos de agua perma- nentes, donde hay un flujo continuo de materiales y de energía entre esta comunidad y la acuática vecina (González 1987). Sin embargo, es en los llanos orientales donde estos ambientes también conocidos como “Aguajales” en Perú, “Buritiales” en Brasil y “Curiches” en Bolivia, alcanzan su máxima expresión. Ejemplo de esto es el río Morichal Largo, objeto del presente trabajo. Este río junto con los ríos Yabo, Tigre y Uracoa, constituyen la red fluvial más importante del sur de los estados Monagas y Anzoátegui. En esta región de los llanos orientales se han realizado previamente diversos trabajos relativos a la ictiofauna: ríos Morichal Largo, Yabo y Uracoa (FLASA 1981, Pérez 1984); ríos Caris, Pao, Atapirire y Moquete (Machado-Allison et al. 1984, González 1987). Más recientemente Marrero et al. (1997) sintetizan la información referente a la distribución y algunos aspectos ecológicos de la ictiofauna de parte de los morichales del oriente del país. El trabajo que hoy presentamos se inició en 1983 y culminó con la realización del Trabajo Especial de Grado del primer autor en 1985. Desde esa fecha hasta el presente, han ocurrido numerosos cambios en la taxonomía de los diferentes grupos de peces además de nuevas incorporaciones tanto a la ictiofauna del río Morichal Mem. Fund. La Salle de Cienc. Nat. 156 7 Largo como de Venezuela, por lo que nuestro objetivo fundamental ha sido la actualización de dicho listado. Este trabajo es de carácter estrictamente taxonómico y los objetivos específicos incluyen la elaboración de las diagnosis de las especies registradas, acompañado, cuando consideramos necesario, de una discusión detallada del estatus de la especie además de la descripción ocasional del dimorfismo sexual y patrones de coloración en vida, caracteres de gran utilidad y considerados en muy pocos trabajos. Adicionalmente se presenta una breve reseña ecológica y una discusión relativa a la biodiversidad del río Morichal Largo en el contexto de ambientes similares de la cuenca del Orinoco. Área de Estudio El río Morichal Largo con una longitud aproximada de 200 km lineales y un ancho máximo de 20,5 m, pertenece a la cuenca del río Orinoco y se encuentra ubicado al sur de los estados Anzoátegui y Monagas entre los 9°30’-8°25’N y 63°45’- 62°20’0 (Figura 1). Nace en la Mesa Morichal Largo y sus cabeceras se encuentran a una altura aproximada de 160 m s.n.m. y a 5 km al este del Paraje Morón en la carretera El Tigre-Ciudad Bolívar. Desemboca en el Caño Mánamo, estableciendo los límites geográficos entre el estado Monagas y el estado Delta Amacuro. Este río junto con el Yabo y el Tigre constituyen los principales afluentes de las zonas de alma- cenamiento hídrico subterráneo del sur del estado Monagas (Pérez-Hernández 1983). El clima predominante en la zona es del tipo cálido lluvioso, con una temperatura ambiente promedio entre los 26° y 30 °C, y con una humedad relativa del 82%. Durante el período de estudio (abril, 1983-febrero 1984), la estación lluviosa se extendió de mayo a diciembre y la seca de enero hasta abril. También se observó un desfase de aproximadamente un mes en cuanto a los picos de lluvias y los máximos niveles del río. La temperatura del agua presentó un valor promedio de 27,3 °C (Colmenares- Peraza 1985, Sánchez et al. 1985). Los valores de oxígeno disuelto variaron entre 4l,4% de la saturación máxima en sus cabeceras (Estación 1, Figura 1), hasta un 81% en los puntos de mayor caudal. Los valores de pH variaron entre 4,6 y 6,6; correspondiendo los valores extremos a los meses de octubre y febrero, respectivamente. La conductividad presentó poca variabilidad estacional y longitudinal, 15 y 30 µs/cm en el primer tramo del río (estaciones 2, 3, 4 y 6, Figura 1), aumentando en el resto de las estaciones hasta 65 µs/cm, que corresponde al mes de febrero (pico de sequía). Pérez-Hernández (1983) sostiene que la fuente más importante de humedad para los morichales corresponde a la precipitación, la cual se distribuye en diversas fracciones que van a la superficie del canal contribuyendo directamente al flujo del mismo. Así mismo, la infiltración es un factor importante en la recarga del sistema, representando aproximadamente el 30% de la precipitación medial anual. En cuanto a la evaporación, Bermejo (1980) reporta valores de 1 500 mm/año. Éstos provienen de los almacenamientos hídricos superficiales o de la humedad existente en el suelo, ya sea por evaporación desde el cuerpo de agua como por 8 Peces del río Morichal Largo, Venezuela transpiración y evapotranspiración de las plantas y el suelo, respectivamente (Pérez- Hernández 1983). Las características arriba mencionadas, sumadas a la ausencia de áreas imper- meables de importancia en estas regiones y las bajas pendientes, determinan que las márgenes del río presenten zonas de saturación permanentes, cuyo ancho fluctúa con la estacionalidad. Estas zonas incrementan el tiempo de contacto entre las aguas, el suelo y los componentes alóctonos y autóctonos del sistema (Colmenares-Peraza 1985).