Trabajos De Reconstrucción Del Antiguo Chozo De Miraflores En Tordehumos, Valladolid

Construcción con Tierra Tecnología y arquitectura

Congresos de Arquitectura de Tierra en Cuenca de Campos 2010/2011.

Coordinadores: Félix Jové Sandoval, José Luis Sáinz Guerra.

ISBN: 978-84-694-8107-3 D.L.: VA673-2011 Impreso en España Septiembre de 2011

Publicación online.

Para citar este artículo:

PAHÍNO RODRÍGUEZ, Luis Antonio, JOVÉ SANDOVAL, Félix; MUÑOZ DE LA CALLE, David; DíAZ- PINÉS, Fernando. “Trabajos de reconstrucción del antiguo chozo de Miraflores en Tordehumos, Valladolid. Recuperación del patrimonio vernáculo”. En: Construcción con tierra. Tecnología y Arquitectura . Congresos de arquitectura de tierra en Cuenca de Campos 2010/2011. [online]. Valladolid: Cátedra Juan de Villanueva. Universidad de Valladolid. 2011. P. 421-430. Disponible en internet: http://www5.uva.es/grupotierra/publicaciones/digital/libro2011/2011_9788469481073_p421- 430_pahino.pdf

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TRABAJOS DE RECONSTRUCCIÓN DEL ANTIGUO CHOZO DE MIRAFLORES EN TORDEHUMOS, VALLADOLID. RECUPERACIÓN DEL PATRIMONIO VERNÁCULO

VIII Congreso de Tierra en Cuenca de Campos, Valladolid, 2011

Luis Pahíno*, Arquitecto Félix Jové, Dr. Arquitecto David Muñoz de la Calle, Arquitecto Fernando Díaz-Pinés Mateo, Dr. Arquitecto

Universidad de Valladolid, UVA. España E.T.S. de Arquitectura.

PALABRAS CLAVE: reconstrucción, chozo, piedra

Resumen nados guarda-viñas, a las zonas cerealistas, para que los pastores pudieran protegerse de El chozo es una de las manifestaciones más las inclemencias del tiempo y para guardar los primitivas de las construcciones llevadas a aperos y utensilios de labranza en las eras; cabo en el medio rural. En la actualidad, debi- incluso también en las zonas huertanas. Su do a procesos como la mecanización excesiva tipología y formalización es amplia y de lo más de la agricultura y a la modernización de las variopinta, utilizando para su construcción ma- explotaciones ganaderas, han desaparecido teriales sencillos como piedra, adobe, madera gran parte de ellos, aunque todavía hoy po- y techumbres de paja, tierra y barro. demos encontrar algunos ejemplos, aunque escasos, de estas pequeñas construcciones Alguna de estas casetas llama la atención por populares. su construcción, ya que sólo se ha utilizado piedra, y cuentan además con cúpula y planta En su origen nacieron como “casetos” vincula- circular. Otros, los chozos vinculados a la ac- dos a la trashumancia en las cañadas; unidos tividad ganadera, poseen pequeños corrales a los viñedos, como es el caso de los denomi- que lo circundan. Hoy los chozos se integran

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CONSTRUCCIÓN CON TIERRA.

Figura 1. Chozo existente en el municipio de Peña- Figura 2. Chozo existente en el municipio de Mon- ﬂ or de Hornija. Valladolid. (Foto: los autores). tealegre de Campos. Valladolid. (Foto: los autores).

en el paisaje de las rutas de senderismo, en bles o inmuebles, relacionados con la econo- aquellas que coinciden con cañadas, corde- mía y los procesos productivos e industriales les e itinerarios relacionados con la trashu- del pasado que se consideren de interés de mancia. acuerdo a la defi nición que la Ley de Patrimo- nio Cultural de Castilla y León incluye en su Gracias al trabajo de documentación realizado artículo 1.2. sobre algunos chozos de pastor existentes y a la iniciativa del Ayuntamiento de Tordehumos Características constructivas generales (Valladolid) se ha llevado a cabo la recons- trucción del conocido como “chozo de mirafl o- Los chozos de pastor son pequeñas construc- res”. Este chozo, enteramente construido en ciones abovedadas, de planta circular, por lo piedra, se encontraba totalmente destruido, general exentas. Construidas con piedras se- encontrándose sus piedras amontonadas en cas sin elaborar, en ocasiones acompañadas la escombrera municipal. Actualmente, pode- de barro, con nulos o escasos vanos y de muy mos verlo recuperado para que perdure en la reducidas dimensiones. memoria de los habitantes del municipio. El material utilizado para su construcción Introducción es la piedra, recogida de la tierra o de can- teras (afl oramientos rocosos del terreno) lo Los chozos de pastor forman parte del patri- más próximas a la zona de construcción del monio etnológico de Castilla y León. Efectiva- chozo. Aunque en la mayoría de los chozos mente, forman parte de este patrimonio los predomina la pizarra, las construcciones pue- lugares y los bienes muebles e inmuebles, así den combinar diferentes tipos de piedras en como todas las actividades, conocimientos, función del lugar que han de ocupar, de los prácticas, trabajos y manifestaciones cultura- empujes y cargas que han de soportar y sus les transmitidos oralmente que sean expresio- resistencias. nes simbólicas o signifi cativas de costumbres tradicionales o diversas formas de vida en las Son abundantes aquellos chozos en los que que se reconozca un colectivo, o que consti- se combinan las lajas de pizarras con piedras tuyan un elemento de vinculación o relación desiguales que dan a los paramentos una social originarios o tradicionalmente desarro- composición horizontal. Las rocas más gran- llados en el territorio de la Comunidad Autóno- des y alargadas suelen colocarse en la base ma de Castilla y León. como sostén del edifi cio, en las cubiertas abovedadas y en los perímetros interiores y ex- Se consideran incluidos en el patrimonio etno- teriores de los muros, si en la zona hubiera lógico de Castilla y León aquellos bienes mue- losas de granito estas se reservan para los

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Figura 3. Muro de un chozo de pastor parcialmente Figura 4. Imagen un chozo de pastor en el munici- destruido en el municipio de Villalba de los Alcores. pio de Villalba de los Alcores. Valladolid. (Foto: los Valladolid. (Foto: los autores). autores).

dinteles y jambas de las puertas. En ciertas ra no superior a los 80 cm. En este caso las condiciones puede utilizarse también el barro dimensiones aproximadas del hueco de la para recibir las piedras e impermeabilizar la puerta son de unos 60 x 60 cm. En ocasiones cubierta ﬁ nal. existen vanos exteriores de reducidas dimensiones o interiores, como hornacinas, para co- Los muros de los chozos suelen seguir una locar algunos objetos. pauta de proporcionalidad clara, a más altura y anchura de la cubierta, más altura y anchura Además de la puerta es usual que exista otra en las paredes. El grosor de las paredes de apertura en el centro de la cúpula. Este agu- mampostería oscila en torno a los 60 cm. Los jero sirve para dar luz al interior y como salida paramentos internos y externos dejan de ser de humo. Dicha apertura puede cerrarse con paralelos a partir de cierta altura (aproxima- una gran piedra que se retira o coloca según damente un metro) y comienzan a ser conver- el interés de los ocupantes. gentes posibilitando el inicio de la falsa cúpula. A veces se colocan bancos o poyos de piedra, La total estabilidad de la estructura de los con lajas grandes de pizarra o granito tanto en chozos de pastor depende en gran medida el interior como en el exterior del chozo para del manejo y sabiduría en la colocación de las el descanso de sus usuarios. hileras de piedra por parte de los maestros pedreros. La escasa diﬁ cultad técnica y la re- Los chozos utilizan un sistema de cierre de su ducida tecnología aplicada no implican que el cubierta mediante aproximación de hileras de sistema en global no requiera cierta compleji- piedras, dando lugar a una falsa cúpula. Es dad y sabiduría empírica. usual que se recubra exteriormente por una capa de tierra o barro que impermeabiliza la Aunque por norma general y dependiendo construcción y la protege de agentes climato- del tipo de terreno en el que se asientan, lógicos como la lluvia y el viento. Los tamaños los chozos carecen de cimentación, se sue- de estas falsas cúpulas se sitúan entre los 3 y le ejecutar una preparación inicial del suelo los 9 metros de diámetro. aplanando y marcando la primera hilera de piedras. La solidez constructiva de los chozos viene acrecentada por la falta de ventanas en sus Luego se suceden las hiladas hasta levantar paramentos, en la que sólo aparece una pe- el círculo de piedras al metro de altura aproxi- queña puerta de acceso rectangular. El hueco madamente. En ese momento, la tendencia de la puerta está sostenido por un dintel de a la convergencia de los paramentos y la ten- una gran laja de piedra. La altura suele ser dencia a cerrar el hueco de la construcción inferior a la altura media humana. Y la anchu- poco a poco se hace evidente.

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Figura 5. Imágenes de algunos chozos existentes en la provincia de Valladolid. De izquierda a derecha y de arriba abajo: Chozo en Villalba de los Alcores, Chozo en Montealegre de Campos, Chozo en Peñaﬂ or de Hornija y Chozo en Villalba de los Alcores. (Fotos: los autores).

Cuando la altura del muro es proporcional a la zona geográﬁ ca denominada como “Tierra la anchura del mismo y el dintel de la puerta de Campos”, al norte de la provincia de Valla- está trabado, la cornisa marcará el inicio del dolid. (Figura 5). cerramiento por aproximación de hileras de piedra, para ello se utilizan lajas más alar- El Proyecto de Reconstrucción gadas, lo cual permite ir cerrando la falsa cúpula. En primer lugar abordamos el trabajo con una fase teórica, en la que se llevó a cabo un pro- El último hueco central puede cerrarse o abrir- ceso de búsqueda de información sobre la an- se a voluntad. A continuación se suele recubrir tigua construcción y recopilación de fotogra- con tierra o barro, con lo que se logra un ex- fías históricas del chozo original, encontrando celente aislamiento. Por último se procede a alguna imagen antigua de su estado primige- limpiar el muro por dentro y se procede a una nio y varias imágenes más recientes donde tarea más minuciosa de colocación de piedras la construcción se encontraba parcialmente diminutas o “ripiado” entre los huecos dejados arruinada. (Figura 6). por las piedras mayores. El chozo de Miraﬂ ores, en su origen de pro- Algunos Ejemplos piedad particular, se encontraba en las es- tribaciones de los Montes Torozos, en el tér- Se muestran a continuación algunas imáge- mino municipal de Tordehumos, provincia de nes de chozos existentes en la actualidad en Valladolid. Este chozo, construido con piedra

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Figura 6. Conjunto de imágenes históricas del chozo de Miraﬂ ores durante su proceso de derrumbamiento. (Fotos: Ayuntamiento de Tordehumos).

seca, sin argamasa, de planta más o menos El proceso de ruina y destrucción del chozo, cuadrada y acabado cónico, se erguía entre que se muestra perfectamente documentado los campos del municipio junto a un par de en el conjunto de imágenes anteriores, siguió almendros solitarios. avanzando progresivamente a lo largo del tiempo hasta llegar a su total desaparición, Su función a lo largo del tiempo ha sido va- encontrándose al inicio de este trabajo de riada, desde punto de vigía de los majuelos reconstrucción muchas de las piedras que lo existentes hace muchos años en esa zona, componían en la escombrera municipal de la hasta refugio para pastores, agricultores y localidad de Tordehumos. (Figura 7). cazadores en las últimas décadas en las que se disfruto de su uso antes de que fuera de- Como punto de partida al proceso de recons- rruido. Poco a poco, el tiempo y la falta de trucción se elaboró un levantamiento gráﬁ co utilidad han hecho que este bien, pertene- aproximado del estado original del mismo, ciente al patrimonio de todos, haya muerto que sirviera como base o guía para llevar a en una escombrera sin poder remediarlo. En cabo la construcción del nuevo chozo. (Figura el término de Tordehumos, éste era el último 8). Sin embargo y como se irá explicando a de los chozos de estas características, sin lo largo del proceso constructivo, la carencia embargo aún quedan restos de otros tipos de mano de obra especializada y la desapa- de chozos construidos enteramente en barro rición de la ﬁ gura de los pedreros, hará más en la zona de las eras, junto al casco urbano complejo el nuevo proceso de construcción del municipio. del chozo, y será necesario el uso de medios

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CONSTRUCCIÓN CON TIERRA.

por lo tanto hubo que ejecutar, previamente a las labores de reconstrucción del chozo, una losa de hormigón armado que sirviera como cimentación del mismo y evitara la posibili- dad de hundimiento, este fue el primer punto de contradicción con las técnicas constructivas de los chozos de pastor en la antigüe- dad, ya que como hemos dicho anteriormente, carecían de cimentación, apoyándose directamente sobre el terreno ligeramente compactado.

En la imagen de la ﬁ gura 9 se observa perfec- Figura 7. Piedras que conformaban el chozo de tamente el comienzo del proceso de recons- Miraﬂ ores en la escombrera del Municipio. (Foto: trucción del chozo, el acopio de piedra inicial Ayuntamiento de Tordehumos). y las primeras hiladas sobre la losa de cimen- tación de hormigón armado que sirve como base al nuevo chozo.

En las primeras hiladas de piedra se siguen auxiliares modernos (andamiajes, cimbras…) las pautas de la construcción tradicional de para completar su reconstrucción con éxito. los mismos, es decir, se colocan dos hojas paralelas con las piedras más grandes y se Como punto de ubicación del nuevo chozo se va rellenando el espacio entre ellas con res- eligió un entorno periférico cercano al muni- tos de piedras o piedras más pequeñas para cipio, en la zona de la antigua barrera, que conformar sus muros. (Figura 10). con el paso del tiempo había terminado por convertirse en una escombrera y que recien- En el proceso inicial de selección y acopio de temente se le había transformado para confe- piedras, se encontró una similar a la que ser- rirle el uso de nuevo parque público, y cuyas vía como dintel del antiguo, que será utilizada calles perimetrales se habían urbanizado re- también como dintel del nuevo chozo. cientemente. Hasta llegar a la altura de colocación del dintel En un primer momento, el lugar elegido para del hueco de paso hacía el interior del chozo la reconstrucción del chozo de Miraﬂ ores se prosigue con el mismo sistema constructi- parecía idóneo, sin embargo, el terreno exis- vo (dos hojas de piedras grandes al interior y tente estaba constituido a base de rellenos, exterior y relleno intermedio), comenzando a

Figura 8. Planta y alzado del chozo de Miraﬂ ores. (Créditos: L. Pahíno).

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Figura 9. Comienzo del proceso de reconstrucción Figura 10. Composición de los muros del nuevo del chozo. (Foto: los autores). chozo. (Foto: los autores).

Figura 11. Dintel del nuevo chozo. (Foto: los autores). Figura 12. Primera parte ejecutada del proceso de reconstrucción del chozo. (Foto: los autores).

desplomar hacía el interior ligeramente cada que garantiza una correcta geometría del hilada de piedra para ir consiguiendo la forma resultado final. ﬁ nal de cúpula por aproximación de hiladas. (Figura 11). Por tanto una vez alcanzado el nivel del dintel del hueco de paso, de unos 90 cm. de altura, Las únicas piedras cualiﬁ cadas en la cons- se detiene la construcción y se obtienen las trucción del chozo son el dintel y las jambas dimensiones para la construcción de la cimbra de la puerta, para las que se utilizan piedras de madera mientras se continua con las labo- más cuadradas. (Figura 12). res de acopio de piedra para proseguir con la construcción. Durante las visitas de obra realizadas, y valorando la dificultad que suponía para Como hemos dicho anteriormente, en el pro- los nuevos operarios el manejo y coloca- ceso de construcción tradicional nunca, o en ción de la piedra con las técnicas cons- muy raras ocasiones, se utilizaban cimbras de tructivas antiguas, se decide optar por la madera para realizar la falsa cúpula sino que colocación en el interior de la construcción la formación de la cúpula se conseguía a base de una cimbra de madera que sirva como de ir reduciendo ligeramente el diámetro de guía para la construcción de los muros del cada hilada de piedras, aproximándolas hacía chozo y permita construir la falsa cúpula de el interior, sin embargo, este proceso no es piedra de un modo más seguro, a la vez fácil de llevar a cabo si no es por una mano

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Figura 13. Cimbra de madera colocada en el inte- Figura 14. Cimbra de madera colocada en el interior del nuevo chozo. (Foto: los autores). rior del nuevo chozo. (Foto: los autores).

Figura 15. Finalización de la construcción del Chozo. Figura 16. Chozo acabado, donde se observa su (Foto: los autores). integración en el entorno del municipio y su relación con el paisaje. (Foto: los autores).

de obra especializada, por lo que el uso de la zando piedras cada vez de un menor tamaño, cimbra se hizo casi inevitable. y comprobando la estabilidad de la estructura de la cimbra después de colocar cada nueva La imagen de la ﬁ gura 14 resume todos los hilada de piedra. pasos ejecutados en el proceso de construc- ción hasta el momento de la colocación de la Dada la altura que se va alcanzando, se hace cimbra de madera, la losa de hormigón arma- inevitable la utilización de medios auxiliares do como base o cimentación, las hiladas de (andamios y apeos) para seguir con su pro- piedra hasta la altura del dintel del hueco de ceso constructivo. Una vez colocados estos paso, ya colocado, y la cimbra de madera en el medios auxiliares, se continúa con las hiladas interior. La construcción del chozo se retoma de piedra superiores, cuajando la cimbra con a partir de este punto cubriendo la cimbra con tableros de madera que sirven como base de tableros de madera aglomerados y colocando apoyo a las piedras de las últimas hiladas. las siguientes hiladas de piedra siguiendo la directriz marcada por la propia cimbra. El uso de la cimbra facilita en gran medida la colocación de las hiladas superiores, por lo que Desde este punto se prosigue con la ejecución a partir de aquí el proceso de reconstrucción del régimen de hiladas de piedra, eso sí, utili- fue mucho más rápido que en el comienzo.

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Figura 17. Chozo acabado, donde se observa su integración en el entorno del municipio y su relación con el paisaje. (Foto: los autores).

El proceso de construcción continuó sin nove- vara a cabo la ejecución siguiendo las pautas dad hasta su conclusión, el día 21 de febrero de construcción tradicionales de los chozos de 2011. de pastor construidos en “piedra seca”.

Todo el proceso ha sido ampliamente docu- También se han puesto de manifi esto la des- mentado fotográfi camente en cada una de las aparición de las técnicas constructivas anti- visitas realizadas durante su proceso de cons- guas y los ofi cios tradicionales, hecho que ha trucción; recogiéndose aquí solo una pequeña signifi cado una complejidad añadida al proce- parte de ellas. so de construcción así como un cierto grado de insatisfacción al no haber sido capaces de Como refl exión fi nal a todo el proceso, pode- ejecutar la reconstrucción del chozo de modo mos decir que se han cumplido parcialmen- similar al que fue construido en origen. te los objetivos planteados. Efectivamente el chozo se ha reconstruido en su totalidad y perdurará en la memoria de los habitantes del municipio, sin embargo en su construcción se ha puesto de manifi esto la carencia en la actualidad de mano de obra cualifi cada que lle-

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Bibliografía

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Notas

* Luis Antonio Pahíno Rodríguez, Arquitecto. David Muñoz de la Calle, Arquitecto. Becario de la Becario de la Fundación de Patrimonio Histórico Fundación de Patrimonio Histórico de Castilla y León, de Castilla y León, 6º convocatoria de Becas de In- 5º convocatoria de Becas de Investigación sobre Pa- vestigación sobre Patrimonio Cultural (2009-2011). trimonio Cultural (2008-2010), titular de la Beca de Investigación Cabero.

Félix Jové Sandoval, Dr. Arquitecto. Profesor Ti- Fernando Díaz-Pinés Mateo, Dr. Arquitecto. Profe- tular de Construcciones Arquitectónicas ETS Ar- sor Titular de Proyectos Arquitectónicos. ETS Arqui- quitectura. Universidad de Valladolid. Director del tectura. Universidad de Valladolid. Grupo-TIERRA.UVa.

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